AllterNatura A salud
La publicación sobre bienestar y soluciones alternativas de salud
Wifi,, 4G, blu Wifi lueetoo tooth th… … así nos afectan
¿ � Qué le ocurre a nuestro cuerpo cuando utilizamos el teléfono móvil, el inalámbrico o nos conectamos a la red wifi o por bluetooth? ¿Qué pasa si vivimos cerca de una antena de repetición? Alertados por algunos testimonios, hemos querido indagar más sobre este tema. (pág.2)
Nº 9/Agosto 2016
>sumario 2
Wifi, 4G, bluetooth… así nos afectan
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Antibióticos: efectos secundarios hasta un año después de tomarlos
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Cáncer infantil: la genética por sí sola no tiene la culpa
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5 señales que indican que le falta potasio
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Comer carne: ¿es tan malo como dicen?
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Alzhéimer y priones: la relación se va despejando
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¡Olvídese de la menopausia!
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Reina de los prados: la madre de la aspirina
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Estiramientos: las posturas adecuadas
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Encuentro con Laure Péroz: “¿No le convendría ir a psicoterapia?”
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Una historia de invidentes
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Libros y Agenda
>editorial
Ecología: los extremos nunca son buenos
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Julien Jul ien nte la creciente preocupación por los problemas de Venes V enesson son contaminación, todo el mundo ofrece consejos para una mejor conservación del planeta. En el campo de la nutrición, cada vez es más habitual leer que sólo hay un camino posible, el veganismo, que excluye el consumo de productos animales o derivados, tanto por razones éticas como por ser una forma de conservar la propia salud y la del planeta. Lo cierto es que la ganadería resulta catastróca para el medio ambiente: las vacas emiten grandes cantidades de gases de efecto invernadero y se requieren ingentes cantidades de agua y cereales que bien podrían utilizarse para alimentar a miles de personas. ¿Es esta una realidad cientícamente demostrada? Por supuesto que sí, pero también es una visión demasiado simplista, ya que el tema de la ecología es mucho más amplio y complejo. Por ejemplo, unos investigadores de la Universidad de Pensilvania (Estados Unidos), han señalado que si tenemos en cuenta todos los datos y sobre todo el aporte calórico (se necesitan 800 g de repollo para tener el mismo aporte de energía nutritiva que se obtendrían con 100 g de carne), el cultivo de verduras y de cereales generan más gases de efecto invernadero… ¡que la ganadería! Entonces, ¿qué debemos pensar? Lo que está claro es que la verdad nunca se encuentra en los extremos. La carne no tiene la culpa de todos los males. Puede ser buena para la salud y al mismo mismo tiempo tiempo cancerígena cancerígena,, y así así lo veremos veremos en el artículo artículo especial sobre los mitos que rodean a la carne.
>hiperfrecuencias
Wifi, 4G Wifi, 4G,, bl blue ueto toot oth… h… así nos afectan ¿Qué le ocurre a nuestro cuerpo cuando utilizamos el teléfono móvil, el inalámbrico o nos conectamos a la red wifi o por bluetooth bluetooth?? ¿Qué pasa si vivimos vivimos cerca de una una antena de repetición? Alertados por algunos testimonios, hemos querido indagar más sobre este tema.
minal y las migrañas y la fatiga desaparecieron de inmediato. Alertado por esta experiencia, un profesor de electrotécnica se dio cuenta de que él también sufría migrañas y mucha fatiga los días que daba clase en una sala en la que su cabeza se encontraba a menos de dos metros de la terminal del teléfono inalámbrico…
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UNA EPIDEMIA ALARMANTE ALARMAN TE
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ebrero de 2015. Acababa de dar una conferencia sobre una técnica para reducir el estrés y una señora de unos 60 años de edad que conocía mis trabajos periodísticos vino a mi encuentro. “Tenía la costumbre de ver la televisión cada noche con el teléfono móvil encendido sobre la rodilla derecha. Así lo hice durante meses” , me explicó. “ Poco después me descubrieron un cáncer justo en ese sitio, sobre la rodilla. Me he curado, pero no puedo dejar de preguntármelo… ¿usted cree que tiene relación? ”
¿Se trataba de un caso aislado? Como precisamente me encontraba investigando este tema, decidí adquirir un TES 92, un aparato para medir hiperfrecuencias de una forma semiprofesional. El primer sitio en el que hice el experimento fue el instituto de formación profesional en el que imparto algunas clases. Enseguida detecté la presencia de campos electromagnéticos más altos que otros en un radio de cinco metros desde la terminal de transmisión telefónica inalámbrica. Interesados por lo que estaba haciendo, varios profesores y trabajadores me pidieron conocer sus niveles de exposición. Eran de lo más variado. Mientras hablaban por el móvil, algunos estaban expuestos a frecuencias que no superaban los 300
milivoltios. Otros se veían afectados por radiaciones de 15, 20, o incluso más de 30 voltios por metro, según el modelo de móvil que utilizaran. La mayoría decía no sentir nada, pero algunos sí admitieron que sentían molestias. Por ejemplo, una persona sufría migrañas y fatiga anormal desde que habían instalado una antena de repetición de teléfono inalámbrico a dos metros de su despacho. Estaba sometida continuamente a unos campos comprendidos entre los 400 y los 800 milivoltios. Poca cosa, según las normas y recomendaciones ociales, pero el administrador del instituto accedió a desactivar la ter-
Las primeras constataciones de efectos perjudiciales perjudic iales de las hiperfrecuencias se remontan a la Guerra Fría
Necesitaba saber más sobre el tema. ¿Estaban documentadas desde el punto de vista cientíco esta clase de manifestaciones? Con un primer vistazo enseguida me di cuenta de que la literatura abunda en este campo. Las primeras constataciones de efectos perjudiciales de las hiperfrecuencias se remontan a la Guerra Fría. En aquella época los americanos habían detectado una epidemia alarmante de enfermedades neurológicas graves, múltiples casos de cáncer y leucemias entre el personal de la embajada de Estados Unidos en Moscú. El profesor de epidemiología John Goldsmith fue consultado sobre este tema y descubrió la causa de este misterioso mal (1): esas personas se encontraban sometidas de manera crónica a unas microondas de baja potencia que procedían de dispositivos instalados por los rusos para espiar las conversaciones de los embajadores. Según John Goldsmith, las hiperfrecuencias utilizadas por los rusos tenían una intensidad media comprendida entre los 1,2 y los 3 voltios por metro, un nivel de emisión más bajo que el que afecta a algunos vecinos de antenas de repetición en la actualidad (ver el recuadro).
1.Goldsmith, J.R. Radiofrequency Epidemiology, Epidemiology, Environmental Health Perspectives, Vol Vol 105, at 1585, Supp 6, Tabl Tablee 8, Dec (1997).
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Salud Alter AlterNatura Natura / Agosto Agosto 2016
Las hiperfrecuencias en las tecnologías radar se utilizan desde hace mucho tiempo, por lo que sus efectos están bien documentados en la literatura militar. militar. El general en jefe Edgar Evrard, médico del ejército del aire belga, los detallaba en 1975 en su recopilación de medicina aeronáutica y espacial(2). Aparte de los efectos macrotérmicos, es decir, las quemaduras asociadas a potencias superiores a 200 voltios por metro, el autor mencionaba la existencia de efectos microtérmicos, trastornos del oído interno, del sistema nervioso, del aparato genital, de la visión o de la termorregulación en relación con unas potencias inferiores de entre 1 y 20 voltios por metro. Edgar Evrard mencionaba como más per judicial la manifestación de efectos atérmicos comprobada por investigadores soviéticos a raíz de unos estudios epidemiológicos llevados a cabo con obreros y técnicos de electrónica. Los rusos habían observado entre su personal problemas de distonía neurovegetativa, que se traducían en particular en zumbidos en el oído, pulsaciones en el cráneo, cráne o, fatiga, cefaleas, astenia, irritabilidad, insomnio y arritmia cardíaca, así
de estudios especícos”,
expone Pierre Le Ruz, presidente del Criirem (el Centro de Investigación e Información Independiente sobre la Radiación Electromagnética, por sus siglas en francés). “ Efectiva-
como alteraciones en el electrocardiograma y el electroencefalograma, hiperactividad en la glándula tiroides, etc.
UNOS EFECTOS SIMILARES A LOS DEL DEL ESTRÉS ESTRÉS AGUDO Varios experimentos de laboratorio conrmaron la existencia de alteraalteraciones de los sistemas neurovegetatineu rovegetativo y endocrino, así como trastornos del comportamiento, en animales expuestos a hiperfrecuencias de baja potencia. Posteriormente, estos trastornos se observaron también fuera del laboratorio. “ Los perros guardianes utilizados para vigilar enclaves militares, expuestos a las radiaciones de los radares, fueron objeto
¿ A qué nivel niveles es estamo estamoss expuestos?
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uropa no cuenta con ninguna norma de protección para las personas, aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Consejo de Europa (Resolución 1815) recomienden no superar los 0,6 voltios por metro, manteniendo un objetivo nal de de 0,2 v/m. A consecuencia de esto los expertos observan habitualmente unos niveles muy superiores: “en gran cantidad de administraciones, el Criirem ha
medido unos niveles de exposición e xposición crónicos de 3 a 20 voltios vo ltios por metro, incluso más altos cerca de antenas de repetición”, tal y como conrma Pierre Le Ruz. “ La exposición actual actual de algunas poblacion poblaciones es suele alcanzar alcanzar niveles considerados considerados patógenos patóge nos en varios estudios, estudios, ya sea por su proximidad proximidad a una antena antena o por el uso )”. abusivo del teléfono móvil (de más de 3 a 4 horas diarias )”.
mente, desarrollaban trastornos del comportamiento, agresividad o abatimiento. Los análisis de sangre mostraban unos niveles de adrenalina y noradrenalina sobreelevados en relación a los valores normales, como si se encontraran en una situación de mucho estrés, así como unos niveles bajos de corticosterona (la hormona del estrés equivalente al cortisol humano), dejando entrever un agotamiento de las glándulas suprarrenales”.
El conjunto de estos trastornos y patologías fue agrupado bajo el término “síndrome de las microondas”. En la antigua URSS y en los países del Este este síndrome estaba reconocido como enfermedad profesional y daba derecho a una pensión de invalidez. Basándose en datos epidemiológicos, los rusos habían establecido unas normas de seguridad para su personal mucho más estrictas que los americanos. De esta manera, mientras estos últimos establecían una norma superior a 61 voltios por metro (0,001 W/cm2 ) para las zonas de descanso, los países soviéticos imponían el límite máximo de 6,1 voltios por metro (0,000 01 W/cm 2 ) en los casos de exposición permanente. Siguiendo la estela de los militares, los investigadores del campo civil también mostraron su preocupación por la toxicidad de las microondas y los estudios al respecto se han multiplicado desde los años 80. La Organización Internacional del Trabajo (OIT), organismo de la ONU con sede en Ginebra, publicaba en 1980 un informe sobre las hiperfrecuencias(3) en el que concluía
2. Précis de médecine aéronautique et spatiale (Recopilación de medicina aeronáutica y espacial), Edgar Evrad, Éditions Maloines 1975. Capítulo 23: Pathologies professionnelles du personnel chargé de la sécurité et de la circulation aérienne (Patologías profesionales del personal encargado de la seguridad y circulación aérea).
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>hiperfrecuencias que “también los efectos observados como
numerosas referencias(7) cómo los campos electromagnéticos débiles ocasionaban fugas de iones calcio de las membranas celulares, haciéndolas porosas y provocando rupturas de las hebras de ADN, lo que favorece los trastornos metabólicos y el cáncer. cáncer.
probables deben ser considerados peligrosos para la salud de los seres humanos”. El
informe indicaba también que esos efectos “se corresponden con los observados en los experimentos con animales ”.
En 2002, el profesor Pierre Aubineau, director de investigación del Centro Nacional de Investigación Cientíca de Burdeos (CNRS, por sus siglas en francés) y especialista en circulación sanguínea del cerebro, realizó mediante neuroimaginería -neurociencia computerizada que permite obtener información estructural y funcional del cerebro- un estudio del cerebro de ratas sometidas a estas microondas en unas condiciones que reproducían el uso humano del teléfono móvil(4). Resultado: la barrera hematoencefálica (barrera sangre-cerebro) estaba alterada y de jaba pasar al cerebro cerebro moléculas moléculas que, salvo que se sufriera una patología especíca, nunca deberían haber llellegado ahí. “ Aquell Aquellas as personas personas a las que les les duele la cabeza cuando utilizan el teléfono móvil deberían tomárselo en serio”, avisaba el investigador. “ Podrí Podríaa signi signicar car una permeabilización permeabiliz ación de los vasos sangu sanguíneos íneos intracraneales y, si este fenómeno tiene lugar, lugar, no podemos excluir, a largo plazo, la aparición de patologías inducidas indirectamente por la posib posible le penetra penetración ción de sustancia sustanciass tóxitóxicas a través de ese tejido sensible”.
UN ADOLESCENTE VÍCTIMA VÍCTI MA DEL ALZHÉIMER ALZHÉIMER ¿Qué ocurre a largo plazo? En una entrevista en la emisora francesa Radio Courtoisie en 2013, Dominique Belpomme, profesor oncólogo especialista en causas ambientales del cáncer y problemas de hiper-
sensibilidad electromagnética, mencionaba el caso de un adolescente que había desarrollado alzhéimer después de haber dormido con el móvil encendido debajo de la almohada durante seis meses… Según este investigador y profesional médico, las hiperfrecuencias pueden perfectamente provocar alzhéimer y párkinson. En 2012 las preocupaciones del profesor Aubineau sobre la barrera hematoencefálica ya habían sido conrmadas por un equipo de ininvestigadores dirigido por el profesor Berislav Zlokovic, especialista en enfermedades neurodegenerativas en la Universidad del Sur de California. Con ayuda de un técnico de IRM (Imagen por Resonancia Magnética), el equipo determinó que la enfermedad de Alzheimer estaba efectivamente asociada con un defecto de permeabilidad de la barrera hematoencefálica(5). El informe Reex(6) señaló en 2004 la ruptura de las hebras de ADN sencillas y dobles cuando los niveles de exposición a las hiperfrecuencias sobrepasaban un voltio por metro, conclusiones que nunca fueron contrastadas. Por su parte, el profesor del Imperial College de Londres Andrew Goldworthy demostró en 2007 en un artículo con
En 2009, un informe de la AFFSET(8) basado en 3.500 publicaciones cientícas informaba de un trastorno de la apoptosis (la muerte programada de las células más antiguas o deterioradas, necesaria para la homeostasis), la fagocitosis (la digestión de elementos perturbadores), así como la secreción de proteínas del estrés bajo los efectos de las hiperfrecuencias. En 2010, otro metaanálisis de diez estudios(9) publicados en revistas cientícas determinó que 8 de cada 10 investigaciones ponían de relieve una prevalencia de trastornos del comportamiento perjudiciales o la aparición de cáncer entre las personas que vivían a menos de 500 metros de alguna antena de repetición. También en 2010, el estudio Inter phone(10) destacaba un mayor riesgo de glioma, una forma grave de tumor cerebral especíco, entre los usuarios que dedicaban más tiempo al teléfono móvil. Basándose en ese mayor riesgo de sufrir un glioma, la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer de la OMS catalogó en 2011 los campos electromagnéticos como potencialmente cancerígenos para el hombre. Y apoyándose en estos y otros estudios, estud ios, el informe Bio Initiative 2007-2012, un metanálisis de 1.500 investigaciones independientes, llegaba a la
3. Opuscule 57: Sécurité, hygiène e t médecine du travail: La protection des travailleurs contre les rayonnements à fréquences radio-électriques et à hyperfréquences (Seguridad, higiene y medicina del trabajo: La protección protección de los trabajadores frente a las radiaciones radiaciones de frecuencias Radioeléctricas e hiperfrecuencias). hiperfrecuencias). 4. Universidad de Burdeos 2: Les micro-ondes des téléphones portables altèrent la circulation sanguine cérébrale (Las microondas de los teléfonos móviles alteran la circulación de la sangre en el cerebro). http://www-sig.enst.fr/comobio/ http://www-sig.enst.fr/comobio/ (Sciences et Avenir décembre 2002 p. 28). 5. Sciences et Avenir marzo 2015 p.76. 6. Reex Study: Risk Evaluation of Potential Environmental Environmental Hazards from Low Frequency Electromagnetic Field Exposure Using Sensitive i n vitro Methods. http://www.itis.ethz.ch/ http://www.itis.ethz.ch/ assets/Downloads/Papers-Repor assets/Downloads/ Papers-Reports/Reports ts/Reports/REFLEXFinal-Repor /REFLEXFinal-Report171104.pdf t171104.pdf 7. The Biological eects of weak electromagnetic elds: http://www.hese-project.org/hese-uk/en/papers/go http://www.hese-project.org/hese-uk/en/papers/goldsworthy_b ldsworthy_bio_weak_em_07.pdf io_weak_em_07.pdf Goldsworthy JR. Epidemiological evievidence of radiofrequency radiation (microwave) (microwave) eects on health in military military,, broadcasting, and occupational studies, Intl J Occ and Env Health, 1:47-57, 1995. http://www http://www.radiation .radiation-research.org/goldsworthy research.org/ goldsworthy_bio_weak_em_07.pdf _bio_weak_em_07.pdf.. Dr Dr.. Goldsmith’s warning on health and fertility: http://omega.twoday.net/stories/1755556/ http://omega.twoday.net/stories/1755556/ 8. Aset: Las radiofrecuencias; Dictamen de la Agencia francesa de seguridad sanitaria del ambiente del trabajo. 9. Antenas de repetición: Conrmación epidemiológica de riesgo sanitario. Occupational environment environment Health, Revue scientique à comité de lecture Vol.16, Vol.16, N°3, juil/sept 2010. www.jjoeh.com www.jjoeh.com 10. The Interphone Study Group: Brain tumour risk in relation to mobile telephone use/ International Journal of Epidemiology 2010 ;1 – 20 doi: 10.1093/fje. dyq079
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conclusión de que sí existe un riesgo potencial asociado a las hiperfrecuencias de desarrollar alzhéimer. Pero esta lista, extensa aunque no exhaustiva, no explica realmente de qué manera afectan las hiperfrecuencias a nuestro organismo…
¿CÓMO NOS AFECTAN LAS HIPERFRECUENCIAS REALMENTE? Joseph Kirschvink, profesor de biología y geología del Instituto de Tecnología de California, fue quien a partir de 1980 detalló cómo afectan las hiperfrecuencias al cuerpo humano. Este investigador consiguió aislar en el tejido cerebral humano un mineral altamente magnético: la magnetita. Presente en forma de cristales que también reciben el nombre de magnetosomas, este mineral se localiza principalmente en la parte supercial del cuerpo -la dermis y la epidermis- a la altura de la cabeza, el pecho y los brazos. Pero los magnetosomas no son exclusivos del ser humano. En el mundo animal parece que sobre todo los cetáceos y las abejas lo utilizan para ubicarse mediante resonancia con el campo magnético terrestre. Algunos peces depredadores como el siluro lo utilizan continuamente para localizar a sus presas en aguas turbulentas. Aunque el hombre no cuenta con este poder de geolocalización, sigue siendo sensible a los campos electromagnéticos. Principalmente bajo el efecto de las hiperfrecuencias de baja intensidad, cerca de una antena de repetición o mientras se utiliza una red wi o un teléfono inalámbrico, por ejemplo, los magnetosomas empiezan a vibrar, estimulando la membrana celular que los envuelve. Como consecuencia inmediata ésta se despolariza, enviando una señal al cerebro medio, al hipotálamo y al cerebro Salud AlterNatura / Agosto 2016
límbico -un sistema formado por varias estructuras cerebrales que gestionan las respuestas siológicas a eses tímulos emocionales-. Esta señal no se reconoce y por tanto se considera un mensaje de alerta, así que esas tres áreas del cerebro ordenan una respuesta hormonal idéntica a la que permite hacer frente a una agresión: una mayor secreción de adrenalina y noradrena noradrenalina, lina, dos hormonas que permiten plantar cara a un peligro puntual. Esto es exactamente lo mismo que se observaba en los perros expuestos a ondas de radar…
do en revistas de comités de lectura por la falta de expertos lo suciensucientemente especializados como para comprobar su validez. En cambio, estas hipótesis están completamente en sintonía con los descubrimientos de Hans Selye, médico endocrino austrocanadiense y “padre” del “síndrome general de adaptación al estrés”. Dicho de otra manera: ahoahora más que nunca, en este mundo hiperconectado, interesaría poder regular el estrés.
Al mismo tiempo, los leucocitos encargados de la respuesta inmunitaria se descontrolan y aumenta la secreción de cortisol, la hormona del estrés. Si la señal persiste duran-
En cualquier caso, dentro de este marco amenazante asoma un rayo de esperanza. Las tecnologías inalámbricas podrían funcionar perfectamente a potencias mucho más ba jas que las las que actualment actualmentee se utilizan, tal y como ya se ha hecho en algunos ayuntamientos en los que el gobierno local y los expertos se han asociado para alejar de los vecinos el peligro de las antenas de repetición. Mientras usted espera a que en su localidad se lleve a cabo una iniciativa similar, la primera medida que debe tomar es hacer lo mismo que uno de mis amigos: hace tres semanas desterró el teléfono inalámbrico de su casa, sustituyéndolo por un buen teléfono jo de los de antes. Después desconectó el wi del ordenador y del router. router. Dos semanas más tarde ya se siente más relajado y animado, y eso que él no se consideraba una persona estresada. Yo he ido aún más lejos: utilizo el teléfono móvil sólo para emergencias y, mientras tanto, lo mantengo alejado de mí, incluso apagado, y nunca lo utilizo en movimiento. Además de proporcionar una sensación de libertad y preservar mi propia salud, este gesto contribu ye a limitar la contaminación contaminación de los que viven al lado de las antenas de repetición.
te mucho tiempo y el organismo no consigue desactivarla, la secreción suprarrenal de cortisol se agota, lo que se traduce en un decaimiento. Al igual que los perros del ejército, los individuos sometidos a hiperfrecuencias pueden presentar signos de agitación o, por el contrario, de fatiga extrema. Según el doctor Joseph Kirschvink, esta aplicación de la siología del estrés podría explicar el conjunto de efectos constatados por la epidemiología cuando existe una exposición crónica a las radiaciones de tecnologías inalámbricas, como por ejemplo los tumores cerebrales y la leucemia. El estudio de los magnetosomas y de su papel siológico apela a competencias poco comunes y no ha sido de momento publica-
UN RAYO RAYO DE ESPERANZA
Emmanuel Duquoc 5
Antibióticos: efectos secundarios An hasta un año después de tomarlos �
MODIFICACIÓN DE LOS GENES
L
En el estudio de mBio, los investigadores de Ámsterdam pusieron de maniesto que los efectos de un tratamiento con antibióticos son intensos. Tanto, Tanto, que hasta llegan ll egan a modicar los genes de las bacterias. De esta manera, pudieron constatar que cada vez que se toman antibióticos el genoma de las bacterias cambia. En concreto, los genes responsables de la resistencia a los antibióticos se multiplican en el intestino.
Los antibióticos revolucionaron la historia de la medicina al hacer frente a infecciones bacterianas potencialmente mortales. Sin embargo, aunque ya se sabía que tenían efectos negativos a corto plazo, unos investigadores acaban de descubrir que también los hay a largo plazo. os antibióticos alteran la ora intestinal. Esto es algo que ya se sabía, pero ¿quién podía imaginarse que un simple tratamiento con este tipo de medicamentos podía llegar a afectar al organismo hasta un año después? Esta es la conclusión a la que ha llegado un estudio de mBio, publicación médica norteamericana especializada en microbiología(1). Los autores, de la Universidad de Ámsterdam, tomaron muestras de saliva y heces a 66 personas antes de que les suministraran antibióticos o placebo, y también varias veces después de haberlos tomado. ¿Sus resultados? Las bacterias concentradas en la saliva resistían bien a los antibióticos, pero esto no ocurría con las que se encontraban en la ora intestinal, algunas de cucu yas cepas seguían siendo anormalmente escasas transcurrido un año. ¿Cómo se explica esto?
dimentaria: como sólo existen cuatro mecanismos de acción diferente, pero en el organismo hay decenas de moléculas distintas, el antibiótico que se toma no va a afectar a una sola bacteria sino a varias decenas de ellas. Esto es lo que ocurre con el tubo digestivo, que contiene un gran número de bac-
LA FLORA INTESTINAL ALTERADA
Hasta ahora se pensaba que los efectos secundarios de los antibióticos eran, sobre todo, a corto plazo (diarreas y dolor abdominal durante el tratamiento), pero la realidad es que las consecuencias son mucho más graves.
Aunque los antibióticos son medicamentos modernos, lo cierto es que tienen una forma de actuar muy ru-
terias diferentes y, aunque un tratamiento con antibióticos tiene un claro efecto sobre las bacterias patógenas que se desean eliminar, también lo tiene sobre otras que son beneciosas.
De forma paralela demostraron que, al menos durante un año después de haber tomado antibióticos, el número de “bacterias buenas” productoras de butirato se reducía considerablemente. El butirato es un ácido graso que producen esas bacterias “buenas” a partir de la bra de la fruta y de la verdura, y que dese desempeña mpeña un pape papell muy destacado para mantener la buena salud intestinal. Sobre todo permite reducir la permeabilidad del intestino, lo cual nos protege de enfermedades inamatorias y autoin autoinmun munes. es.
LOS ANTIBIÓTICOS ENGORDAN A LOS ANIMALES… ¡Y A LAS PERSONAS! En las granjas industriales se consumen muchísimos medicamentos de este tipo no sólo para cuidar a los animales, sino sobre todo porque tienen un efecto inesperado en ellos: ¡les engordan! Los ganaderos pueden
1. Egija Zaura, Bernd W. Brandt, M. Joost Teixeira de Mattos, Mark J. Buijs, Martien P. M. Caspers, Mamun-Ur Rashid, Andrej Weintraub, Carl Erik Nord, Ann Savell, Yanmin Hu, Antony R. Coates, Mike Hubank, David A. Spratt, Michael Wilson, Bart J. F. Keijser, Wim Crielaard. Same Exposure but Two Radically Dierent Responses to Antibiotics: Antibiotics: Resilience of the Salivary Microbiome versus Long-Term Microbial Shifts in Feces. mBio.01693-15. 6:6 e01693-15.
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• La impermeabilidad intestinal , afectada por los antibióticos, modimodi ca el modo en que los nutrientes son absorbidos tras la digestión, haciendo que sean más nutritivos en idénticas cantidades. • Los antibióticos acaban con algunas bacterias intestinales que provocan la sensación de saciedad, favoreciendo la aparición de trastornos del apetito, lo que trae consigo un aumento de peso.
así vender animales más grandes y, por tanto, a un mejor precio. Estos efectos secundarios se detectaron inicialmente en los animales, pero también están presentes en las personas. En septiembre de 2014, un estudio conrmó que los bebés que siguen un tratamiento de antibióticos antes de cumplir los 5 meses, tienen un 19% más de probabilidades de sufrir obesidad en la edad adulta; porcenporcentaje que desciende hasta un 14% si el tratamiento tiene lugar entre los 6 y los 11 meses de edad.
Una flora intestinal deteriorada, sobre todo por los antibióticos, favorece la obesidad
En 2006 unos investigadores de la Washington University (Saint Louis, Estados Unidos), señalaron la relación existente entre ora alterada y aumenaumento de peso mediante un experimento muy interesante: transrieron la mimicrobiota de ratones obesos a ratones sin microbiota (es decir, que acababan de nacer). El resultado fue que los ratones engordaron mucho más rápido llevando la misma alimentación(4). En conclusión, hoy en día sabemos que una ora intestinal deteriorada, sobre todo por los antibióticos, favorece la obesidad(5)(6) y la aparición de enfermedades metabólicas como la diabetes, pero también de problemas
Pero lo más preocupantes es que si el bebé ha seguido al menos 4 tratamientos con antibióticos antes de cumplir los 2 años, su riesgo de obesidad aumenta… ¡hasta un 29%(2)! Estas conclusiones fueron corroboradas por un estudio realizado recientemente entre más de 160.000 niños, donde se comprobó que el 20% de los niños que habían seguido 7 tratamientos o más con antibióticos antes de la adolescencia, a los 15 años pesaban de media 1,3 kg más que el resto(3). Para explicar a qué se debe este aumento de peso los investigadores han identicado dos mecanismos: With Early Childhood Obesity. JAMA Pediatr. 2014;168(11):1063-1069. 2. Bailey L, Forrest CB, Zhang P, Richards TM, Livshits A, DeRusso PA. Association of Antibiotics in Infancy With 3. Schwartz BS, Pollak J, Bailey-Davis L, Hirsch AG, Cosgrove Cosgrove SE, Nau C, Kress AM, Glass TA, Bandeen-Roche Bandeen-Roche K. Antibiotic use and childhood body mass mass index trajectory. Int J Obes (Lond). 2015 Oct 21. 4. Turnbaugh PJ, Ley RE, Mahowald MA, Magrini V, Mardis ER, Gordon JI. An obesity-associated gut microbiome microbiome with increased capacity for energy energy harvest . Nature. 2006 Dec 21;444(7122):1027-31. with metabolic markers. Nature. 29 agosto 2013. 5. Emmanuelle Le Chatelier et al. Richness of human gut microbiome correlates with 6. Aurélie Cotillard et al. Dietary intervention impact on gut microbial gene richness richness. Nature. 29 agosto 2013.
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>antibióticos Prebióticos, probióticos y simbióticos • Los prebióticos (por ejemplo, las bras solubles) favorecen y estiestimulan el crecimiento de las bacterias útiles de la microbiota. • Los probióticos son bacterias vivas que transitan por el tubo digestivo en coexistencia con la microbiota. • Los simbióticos son una combinación de bras solubles con probióticos, adecuados para mantener la salud intestinal. cardiovasculares, hepáticos e incluso del cáncer.
vocados por virus, por lo que tomar antibióticos no sirve para nada.
QUÉ HACER SI NO TENEMOS ELECCIÓN
Y en el caso de que tenga que tomar antibióticos, es imprescindible reforzar la ora intestinal mientras dure el tratamiento. Se trata de aportar una gran cantidad de bacterias “buenas” al intestino para que la destrucción causada por los medicamentos no permita que las bacterias patógenas “tomen el poder”. Los productos y bebidas fermentados (kér, yogur, yogur, chucrut) suelen ser
Lo primero que hay que hacer para evitar los efectos secundarios de estos medicamentos es, sencillamente, limitar al máximo su consumo; es decir, recurrir a ellos solamente en caso de una infección bacteriana probada. La mayoría de los catarros (aunque sean graves) y episodios gripales están pro-
En el caso de que tenga que tomar antibióticos, es impresci imprescindible ndible reforzar la flora intestinal mientras dure el tratamiento muy populares en este sentido, pero su ecacia es insuciente porque aportan una cantidad demasiado escasa de bacterias, siendo además las cepas muy similares. Lo ideal es tomar un suplemento alimenticio de probióticos o me jor aún, un simbiótico: probióticos acompañados de prebióticos que alimentan a estos últimos para favorecer su proliferación. Magali Walkowicz y Julien Venesson Venesson
>news Cáncer infantil: la genética por sí sola no tiene la culpa Un estudio demuestra que los niños con cáncer fueron expuestos a sustancias cancerígenas durante la fase embrionaria.
E
l número de niños que desarrolla cáncer -leucemias, linfomas y tumores cerebrales- antes de los 14 años en Europa ha aumentado un 1% al año desde 1950 -es decir, hoy estaríamos hablando de un incremento del 65% desde esa fecha-. Para tratar de explicar este fenómeno, un equipo internacional de investigadores ha estudiado en estos niños el vínculo existente entre genética, contaminantes y embarazo. El análisis de los cordones umbilicales demostró que qu e los niños que desarrollaron un cáncer a una edad
temprana estuvieron más expuestos a sustancias cancerígenas durante la embriogénesis. Dichas sustancias procedían en su mayoría de la alimentación de la madre y desencadenarían el e l cáncer por sí solas o junto a factores genéticos que predisponen a ello. Las sustancias tóxicas más comúnmente relacionadas con estos tipos de cáncer infantil proceden prinprin cipalmente de los peces depredadores (atún, pez espada, etc.), los productos lácteos grasos, gr asos, los fritos, los alimentos a la parrilla y los productos industriales en general (precocinados, sobre todo).
Fuente: Kleinjans J, Botsivali M, Kogevinas M and al. Fetal exposure to dietary carcinogens and risk of childhood cancer: what the New Ge neris project tells us. BMJ. 2015 Aug 28;351:h4501.
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5 señales que indican que le falta potasio Este mineral interviene en numerosas funciones vitales del organismo, por lo que se debería evitar la mínima carencia. Sin embargo, tener déficit de potasio es algo habitual y sus manifestaciones muy frecuentes. Se lo explicamos aquí. �
E
l potasio, molécula aislada en 1807 por el químico inglés Sir Humphry Davy, es un mineral esencial para la vida, hasta tal punto que un décit un décit mínimo trastoca el funcionamiento del organismo por completo. Y si nos jamos más de cerca todavía, vemos que también está relacionado con la gran mayoría de problemas de salud contemporáneos.
¿POR QUÉ SU DÉFICIT ALTERA TANTO TANTO EL ORGANISMO? Existen cuatro grandes razones: • Porque el potasio es un electrolito que conduce la electricidad en el organismo. Se aloja principalmente en las células y actúa en estrecha colaboración con el sodio, otro electrolito que se sitúa sobre todo fuera de ellas. Estas diferencias de concentración entre los dos, cada uno en una parte de la célula, permiten el impulso nervioso, elemento clave de la comunicación celular, el pensamiento, la contracción muscular y, por tanto, del movimiento y la respiración. Cualquier carencia, del tipo que sea, altera todas estas funciones. • Porque su poder alcalinizante resulta fundamental a la hora de
contrarrestar los nefastos efectos de la alimentación moderna, tan acidicante. Esto lo convierte en un actor decisivo en la lucha contra uno de los grandes males de nuestra época: la acidosis metabómetabólica (un trastorno en el equilibrio ácido-base caracterizado por un aumento de la acidez en el plasma sanguíneo) y sus consecuencias (osteoporosis y cáncer, especialmente). • Porque participa en el mantenimiento de un buen equilibrio de los líquidos del organismo. En estrecha colaboración con el sodio, regula el nivel de hidratación de las células y la sangre. En caso de décit de popotasio, el sodio, encargado de retener los líquidos, haría aumentar el tamaño de las células, que ya no podrían funcionar, y el volumen plas-
El potasio es un electrolito que conduce la electricidad en el organismo
mático, que los vasos sanguíneos ya no podrían contener. • Porque es cofactor de los procesos metabólicos en el organismo, como la síntesis de proteínas necesarias para la correcta composición corporal, así como de todas las funciones del organismo y el metabolismo de los glúcidos, que representan el principal alimento de las células. Como demostración del benecio esencial que supone el potasio, un estudio de 2014 que analizó el impacto del consumo de potasio en la salud de mujeres de entre 50 y 79 años señaló que unos buenos aportes de este mineral están asociados con una reducción del 10% del riesgo de fallecimiento por cualquier causa(1).
CÓMO SABER SI LE FALTA POTASIO La hipopotasemia, que indica una concentración plasmática de potasio <3,5 mmol/l (es decir, una carencia notable), es algo inusual, pero no ocurre lo mismo con el décit lili gero (>3,5 mmol/l). Los siguientes síntomas ponen de maniesto una falta de potasio en el organismo, ya sea más o menos destacada: 1. La hipertensión arterial (HTA), ya que cualquie cualquierr descenso de los niveles de potasio, por pequeño que sea, conlleva por lo general un au-
1. Potassium Intake and Risk of Stroke in Women with Hypertension and Nonhypertension in the Women’s Women’s Health Initiative, A. Seth, S. Wassertheil-Smolle et coll. Stroke, 5 Sept. 2014.
Salud AlterNatura / Agosto 2016
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