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SACHA INCHI. INVESTIGACIÓN SOBRE LAS CONDICIONES PARA EL RECONOCIMIENTO DE LA INDICACIÓN... Book · October 2013 CITATION
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Federico Antonioli
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Centro de Invesgación Educación y Desarrollo - CIED Fundación Terre des Hommes Italia
Esta publicación no hubiera sido posible sin el apoyo moral y técnico de Belén Garví Medina, Elisa Dallatana, Mauro Morbello, Alfonso Aire Untveros, Cecilia Cisneros Orna, Paola Marín Sanz, Pablo Pampa Huanca, Salvador Peña Guerra y Barbara Lohnmeier.
SACHA INCHI. INVESTIGACIÓN SOBRE LAS CONDICIONES PARA EL RECONOCIMIENTO DE LA INDICACIÓN GEOGRÁFICA EN EL PERÚ © Federico Antonioliy Filippo Arni, Università degli Studi di Parma, Centro Universitario per la Cooperazione Italiana - CUCI, Terre des Hommes Italia Derechos de Edición Reservada Centro de Invesgación Educación y Desarrollo - CIED Jr. Risso Nº 289 2do. Piso, Dpto. B - Lince, Perú Teléfono: (511) 4710395 Email:
[email protected] Página Web: www.ciedperu.org Correo electrónico:
[email protected] lippo.ar
[email protected] [email protected] [email protected] Página web: www.terredeshommes.it www.unipr.it Este documento ha sido Impreso por el proyecto ‘Sacha Inchi - Perú’ Gracias al nanciamiento de: • Cooperazione Italiana allo Sviluppo • Fundación Terre des Hommes Italia • Università degli Studi di Parma En colaboración con Centro de Invesgación Educación y Desarrollo - CIED Equipo responsable de la publicación: Federico Antonioli Filippo Arni Colaboradores: Sergio Rojas Montoya Pedro Zarate Lázaro Iván Leonardo Vadillo Mercado Dñ, daamaó dó a:
Aldo Gonzales Alzamora Celular: 9558 59104 Email:
[email protected] Impresión: Taller, Jr. Moquegua 318 A Lima 1 - Perú Prohibida la reproducción total o parcial sin la autorización expresa del editor Hecho el Depósito Legal Ley Nº 26905 en la Biblioteca Nacional del Perú Nº 2013-15631 Registro ISBN Nº 978-612-46554-0-1 Primera Edición: 1,000 ejemplares Octubre 2013
PRESENTACIÓN La presente publicación muestra los resultados obtenidos en el proyecto ‘Sacha Inchi Perú’, que ha tenido como principal objevo de conocer más detenidamente muchos aspectos relevantes para analizar la viabilidad de un reconocimiento del aceite de sacha inchi como producto con Indicación Geográca, además de ofrecer posibles alternavas para solucionar los obstáculos relevados y explotar el potencial que el culvo de sacha inchi puede proporcionar al desarrollo rural en el Perú. El proyecto ha sido el resultado del esfuerzo conjunto entre el Centro Universitario de Cooperación Internacional (CUCI) de la Università degli Studi di Parma-Italia, a través de Departamento de Economía Agroalimentaria, el Organismo de Cooperación Internacional Terre des Hommes-Italia (Tdh-Italia), el Centro de Invesgación, Educación y Desarrollo (CIED) y ha sido ejecutado gracias al conanciamiento de la Cooperación Italiana al Desarrollo. La idea del proyecto nace como consecuencia de los avances originados por el trabajo realizado por la ONG CIED a parr del año 2005, consolidados desde el 2007 por la colaboración con Tdh-Italia con el aporte de la Fundación Cariplo, ejecutando proyectos a favor de culvos de café orgánico y sacha inchi en la Selva Central del Perú. La nalidad de las intervenciones que se vienen implementando hasta la fecha ha sido de contribuir a la conservación de los recursos naturales y defender la diversidad biológica promoviendo modelos de desarrollo territorial sostenible insertando, de manera complementaria al mono culvo de café, productos no convencionales tales como el sacha inchi. Gracias a las intervenciones de CIED y Tdh-Italia el sacha inchi está siendo culvado, transformado y comercializado por grupos organizados de mujeres que viven en las comunidades rurales de la micro cuenca de Quimiriki, Distrito de Pichanki en la provincia de Chanchamayo. Las experiencias que CIED y Tdh-Italia han desarrollados durante estos años con el sacha inchi han conrmado las bondades del producto, que ene calidades nutricionales indiscubles en consideración de las cuales los proyectos no solo han promovido una producción para la venta afuera de las comunidades rurales, sino también un consumo directo en favor de la población local, de manera parcular de parte de los niños. Sin embargo justamente el avance obtenido en el trabajo con el sacha inchi ha evidenciado la necesidad de invesgar más sobre sus caracteríscas no solo sicas, sino también culturales y antropológicas relacionadas con sus usos tradicionales, de los cuales todavía se conoce muy poco. Asimismo surgieron otras inquietudes referidas a la idendad, es decir al origen territorial del producto, debido a su extensión en diferentes áreas geográcas y países de America lana, que nos conlleva a la existencia de diferentes pos de Sacha(s) Inchi(s). En este sendo nos interesaba conrmar si era posible reconocer una idendad geográca de origen peruana al sacha inchi y si, en este caso, en el Perú se daban las condiciones necesarias y exisan procedimientos adecuados para reconocer esta idencación. El aclarar todas estas inquietudes fue el movo principal que nos empujó a contactar la Universidad de Parma, especícamente el Departamento de Economía Agroalimentaria dirigido por el Dr. Filippo Arni, experto en Indicaciones Geográcas y uno de los autores de la guía Uniendo personas, territorios y productos. Guía para fomentar la calidad vinculada al origen y las indicaciones geográcas sostenibles, editada por la FAO en 2010.
La Universidad de Parma a través de su ocina de cooperación (CUCI), demostró total disponibilidad y gracias al co-nanciamiento de la Cooperación al Desarrollo del Gobierno de Italia podemos disponer de los resultados de la invesgación que serán presentados a connuación. El trabajo, realizado por el invesgador Federico Antonioli de la Universidad de Parma, en colaboración con el Ingeniero Agrónomo Pedro Zarate Lázaro, el antropólogo Iván Vadillo Mercado bajo la supervisión del profesor Filippo Arni, aclaran muchos de los aspectos sobre sacha inchi que hasta el momento habían sido poco considerados, entre los cuales que efecvamente existen varias especies en diferentes territorios de Perú y Lanoamérica, la mayoría de las cuales enen poco y en algunos casos ningún estudio cienco sobre su caracterización toquímica. Asimismo el estudio ha permido conocer más detenidamente los actores que parcipan, de forma directa e indirecta, en la cadena de producción-distribución y la relación que existe entre ellos, evidenciando algunos cuellos de botella, principalmente relacionados con una fragmentación de la oferta, la instabilidad de los volúmenes de producción y del precio de la semilla. Se ha abarcado también, en este caso práccamente por primera vez, un análisis antropológico del uso y conocimiento de poblaciones navas sobre sacha inchi y la revisión histórico-bibliográca de textos anguos realizada de manera sistemáca sobre el tema. Todo este trabajo ha permido entender mejor el vínculo existente entre el territorio (Perú) y la calidad que presenta el producto. El estudio nos conrma que el sacha inchi ene grandes potencialidades evidenciando sin embargo problemas de denición del territorio de origen, que se suman a la ausencia de estudios comparavos entre producciones procedentes de diferentes lugares y especies. Estas condiciones no permiten- a la fecha - denir de manera coherente si existen variabilidades internas y de calidad entre especies, haciendo dicil establecer una indicación geográca especíca. Agradeciendo de manera muy sincera el esfuerzo realizado por la Universidad de Parma y el apoyo recibido de la Cooperación al Desarrollo del Gobierno de Italia, nuestra esperanza es que este documento pueda transformarse en un insumo úl para permir la construcción de sinergias entre diferentes actores interesados en establecer y promover condiciones oportunas y coherentes para que de manera efecva el sacha inchi, o algunas de sus especies, puedan ser reconocidas como producto con una idendad especica de Perú.
Mauro Morbello Representante Fundación Terre des hommes-Italia
Alfonso Aire Presidente Ejecuvo Centro de Invesgación, Educación y Desarrollo
ÍNDICE INTRODUCCIÓN ...................................................................................................................... 09 NOTA TÉCNICA ........................................................................................................................ 13 1. IDENTIFICACIÓN DEL PRODUCTO .............................................................................. 17 1.1 DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA ........................................................................................ 17 1.2 CARACTERÍSTICAS BIOLÓGICAS Y AGRONÓMICAS DEL SACHA INCHI .......................... 19 Condiciones edafoclimácas ........................................................................................ 20 Ciclo fenológico ............................................................................................................ 21 Manejo agronómico ..................................................................................................... 21 1.3 COMPOSICIÓN QUÍMICA DE LA SEMILLA DE SACHA INCHI .......................................... 24 1.4 EL ACEITE DE SACHA INCHI .......................................................................................... 24 Metodología de extracción del aceite .......................................................................... 30 1.5 DIFERENCIAS ENTRE ESPECIES: EL CASO DE LA PLUKENETIA HUAYLLABAMBANA ........................................................ 31 1.6 LA TORTA PROTEICA DEL SACHA INCHI ........................................................................ 32 1.7 DIVERSIFICACIÓN EN LA TRASFORMACIÓN FINAL DEL SACHA INCHI. PRODUCTOS PRINCIPALES Y PRODUCTOS SECUNDARIOS ............................................ 35
2. LA CADENA PRODUCTIVA DEL SACHA INCHI. LOS ACTORES Y SUS RELACIONES .............................................................................. 39 2.1 LOS ACTORES DE LA CADENA: CARACTERÍSTICAS Y RELACIONES ................................ 40 2.2 LA CADENA DE VALOR DEL ACEITE DE SACHA INCHI .................................................... 49
3. LA HISTORIA DEL SACHA INCHI EN EL TERRITORIO PERUANO ......................... 55 3.1 RESEÑA HISTÓRICA SOBRE LOS USOS DEL SACHA INCHI .............................................. 55 3.2 LA VISIÓN DE LOS ACTORES EN EL RECONOCIMIENTO DEL SACHA INCHI COMO IG ......................................................................................... 62
4. REQUISITOS PARA EL RECONOCIMIENTO DEL PRODUCTO COMO IG ............ 69 4.1 LA TIPICIDAD TERRITORIAL ........................................................................................... 69 El territorio .................................................................................................................. 69 El ‘saber-hacer’ local y la colecvidad ........................................................................ 72 La calidad especíca ..................................................................................................... 73 4.2 LA IMPORTANCIA DEL SACHA INCHI PARA EL DESARROLLO DE LAS ÁREAS RURALES. EL PILAR ECONÓMICO, SOCIAL Y AMBIENTAL ........................... 75 4.3 LA REPUTACIÓN ........................................................................................................... 77 4.4 EL MERCADO ................................................................................................................ 82 4.5 INSTRUMENTOS LEGALES ÚTILES PARA LA PROTECCIÓN DEL PRODUCTO ................... 85 Sistemas sui generis ..................................................................................................... 85 Sistema de marca ......................................................................................................... 88 4.6 LAS POLÍTICAS PÚBLICAS .............................................................................................. 91 4.7 EL SACHA INCHI COMO CONOCIMIENTO TRADICIONAL .............................................. 93
CONCLUSIONES ...................................................................................................................... 103 BIBLIOGRAFÍA ......................................................................................................................... 105 ANEXO........................................................................................................................................ 121
Introducción
INTRODUCCIÓN El objevo de la siguiente publicación es desarrollar un estudio de facbilidad sobre el reconocimiento del aceite de sacha inchi como Indicación Geográca de Perú. El marco teórico sobre el que se basó esta invesgación hace referencia a la Guía FAO y SINER-GI: Uniendo personas, territorios y productos. Guía para fomentar la calidad vinculada al origen y las indica-
, editado en 2009. El reconocimiento del estado de ‘Indicación Geográca’ signica la presencia de un vínculo entre el producto y el territorio de producción, explicado a través de una relación que dena cómo su calidad especíca se deba a los recursos territoriales, ya sean humanos (saber-hacer locales, normalmente tácitos) o naturales (pos de suelos, clima, variedades o razas endémicas, etc.). Las IG son propiedad de la colecvidad y no de un solo individuo, debido a que es el territorio en su conjunto el que parcipa en su producción y determina su calidad. Este reconocimiento acvaría el ‘Círculo Virtuoso de la Calidad’, el cual intervendría a diferentes niveles promoviendo el territorio de producción en su conjunto. A nivel económico, permiría alcanzar precios de mercado más altos, gracias a la cercación de un producto único que contaría con una calidad especíca y una reputación posiva. Esto comportaría, a su vez, la reducción de la asimetría informava entre productores y consumidores, ya que estos úlmos estarían dispuestos a pagar dicho servicio con un price premium. Para que su producción fuese sostenible a largo plazo, los benecios generados deberían ser repardos de forma equitava entre los diferentes actores. En segundo lugar, la reputación del producto podría acvar otras dinámicas económicas posivas como el desarrollo de acvidades vinculadas al producto (turismo, gastronomía, etc.), el aumento de la ocupación en las acvidades relacionadas con él y la valorización de otros productos del territorio. A nivel social, podría desalentar el abandono de territorios rurales y fortalecer el sendo de pertenencia e idendad de los actores involucrados, los cuales, en la mayoría de los casos, se encuentran en zonas marginales. Finalmente, a nivel ambiental, podría inuir posivamente sobre el mantenimiento del paisaje y, en general, a la protección del ambiente. Para que los benecios de la IG se reiterasen a largo plazo, sería necesario que los recursos ambientales empleados en su producción fuesen renovables, desalentando el uso de productos y práccas dañinas para su calidad y su imagen. Además, cuando se trata de recuperar especies vegetales y animales no convencionales, se produce un efecto posivo sobre la biodiversidad. Asimismo, los productos con IG gozan del amparo legal del nombre geográco en todos los países adheridos a la Organización Mundial del Comercio (OMC), impidiendo su usurpación a través de imitaciones que pueden resultar fraudulentas para los consumidores. En el siguiente trabajo se analizan las condiciones descritas para el aceite de sacha inchi, intentando denir la situación actual y real en la que se encuentra dicho producto, subrayando las potencialidades y oportunidades que ofrece, así como los límites y obstáculos que amenazan la facbilidad de su reconocimiento. En el primer capítulo se describen el producto, sus caracteríscas y su calidad, diferenciándolo de los demás productos similares.
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Se detalla la distribución geográca de la especie P. V L. (la más común de la que se extrae el aceite), así como de las otras especies pertenecientes a la misma familia, destacando la escasez y, en algunos casos, la total ausencia de estudios ciencos sobre su caracterización toquímica y su amplia distribución en todo el Sur de América. También se describen brevemente las condiciones edafoclimácas del culvo, el ciclo fenológico y el manejo agronómico, detallando los datos sobre su producción. Además, se proporciona una descripción de la semilla de Pk L. y su caracterización química, subrayando la importancia de su contenido en proteínas y aminoácidos esenciales. Igualmente, se comparan los datos recogidos con los requerimientos nutricionales señalados por la FAO y la OMS, lo cual permite tener una primera idea del potencial nutricional de esta planta. Con respecto al aceite, se detallan sus caracteríscas químicas, haciendo énfasis en los elevados niveles de ácido linolénico (ω-3) que conene; un ácido esencial necesario para el organismo pero que no puede ser sintezado por el mismo y, consecuentemente, debe ser asumido a través de los alimentos. Estos ácidos grasos son importantes para la prevención de algunas enfermedades, por lo que la asunción de ω-3 resulta un gran aliado de la dieta alimencia. Seguidamente, se comparan sus propiedades con las de los demás aceites (con una atención especial al aceite de linaza y de pescado, por poseer caracteríscas similares al aceite de sacha inchi) bajo diferentes aspectos, como: la proporción entre ω-6 : ω-3, importante para la síntesis en EPA y DHA, el contenido en ácidos grasos insaturados y polinsaturados, la presencia de tocoferoles y la oxidación del producto, el sabor y el olor, el peligro de contaminantes, y el impacto ambiental de la producción del aceite. En este caso también se compara su caracterización nutricional con la recomendada por el Instuto de Medicina (IOM), conrmado la importancia de su asunción para la dieta alimencia. Por otra parte, se describe el método de extracción de este aceite a través del prensado en frío y se confronta con la extracción mediante solventes químicos, mostrando el impacto de ambos sobre la calidad del producto nal. Este capítulo concluye armando que el aceite de sacha inchi presenta una calidad especíca que lo diferencia de otros productos similares como el aceite de linaza o pescado. Se subraya, además, la ausencia de estudios de caracterización química de las otras especies de Pk halladas, con los que se podrían individuar las diferencias existentes entre las diferentes especies. Esta carencia supone un primer límite para el reconocimiento de esta planta como IG. En el segundo capítulo, se describen todos los actores que parcipan de forma directa e indirecta, dentro o fuera del territorio, en la cadena de producción y las relaciones que existen entre ellos. Se presta una parcular atención a los eslabones agrícolas y de trasformación industrial, debido a su importancia en la determinación de la calidad del producto nal. La mayor parte de la producción nacional se concentra en la región de San Marn, donde la cadena se encuentra más formalizada y organizada, y cuenta con una producción agrícola de aproximadamente dos mil hectáreas. Respecto a los agricultores, estos se caracterizan principalmente por carecer de una visión de mercado y por basar su economía en la supervivencia y autosuciencia, consumiendo aquello que culvan. La discrepancia existente entre la visión de los agricultores y la de las empresas, las cuales poseen una visión de mercado más globalizada, hace nacer muchas dicultades entre estos dos colecvos. Además, se destaca la ausencia de una consciencia acerca de las caracteríscas y potencialidades del producto, así como
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Introducción
de una verdadera tradición en su uso por parte de estos actores locales. Como consecuencia de esto, el sacha inchi parece ser percibido como un producto estándar, debido a que su culvo no depende de las tradiciones culturales, sino, más bien, de la mera valuación económica. También se destaca la falta de organización de los productores agrícolas, la cual provoca una fragmentación en la oferta de semilla, volviendo inestable el volumen y el precio de la materia prima, que conllevan a altos costos de transacción. Asimismo, la ausencia de organizaciones colecvas hace que este grupo de actores no siempre muestre el nivel de responsabilidad requerido llegando, en algunas ocasiones, a no cumplir con los acuerdos contractuales rmados con las empresas. La ausencia de una organización de productores obstaculiza la negociación de las condiciones contractuales (que normalmente son establecidas por las empresas) y su concienciación con respecto al producto, impidiendo la correcta implementación de estrategias colecvas. Con relación a las empresas, se describen los dos grandes bloques que encontramos en el territorio y las relaciones establecidas entre ellas. El primer grupo está constuido por aquellas que se encuentran en San Marn y que parcipan conjuntamente en la Mesa Técnica de sacha inchi, cuyo objevo primordial es fomentar la cooperación impidiendo fenómenos de compeción y especulación del precio, además de establecer las directrices comunes de desarrollo del producto; el segundo grupo está representado por el resto de empresas presentes en Perú, ubicadas en su mayoría en Lima. De la misma manera, se describe el papel de facilitadores que podrían desarrollar las instuciones nacionales e internacionales, públicas o privadas, como ONGs, Universidades, centros de invesgación, para intentar solucionar los cuellos de botella y la integración de toda la cadena. La naturaleza de las IG como ‘bien colecvo’ exige una cierta condición de armonía entre los diferentes actores que componen la cadena, pudiendo, de esta forma, comparr los mismos objevos y administrar de manera más ecaz la IG obtenida. El tercer capítulo se centra en la historia del sacha inchi, a través de una revisión que abarca desde los relatos elaborados durante las expediciones realizadas por los españoles y franciscanos a diversos lugares de la Amazonía, hasta la literatura más reciente, para llegar a la conclusión de que la información disponible no es suciente para determinar si esta planta ha sido efecvamente usada y conocida por culturas ancestrales. También se relatan las entrevistas realizadas a pobladores de comunidades navas que enen contacto con esta planta (Lamas, Asháninka, Shipibo, entre otras), a través de las cuales se reitera la dicultad de armar que se trata de un culvo tradicional arraigado a las culturas locales. Si bien, en algunos casos las personas entrevistadas alegan conocer la planta desde hace generaciones y usar el aceite y las semillas tanto de forma medicinal como para la alimentación, este hecho no sustentaría la existencia de un vínculo determinante entre el territorio y el producto. Su culvo y las práccas de manejo agronómico parecen estar más relacionadas a la promoción que le dieron las empresas privadas a este culvo, que a una acvidad tradicional desarrollada a lo largo del empo. Esta ausencia de tradición implica, al mismo empo, la falta de un saber-hacer local que podría ser determinante para la calidad del producto, limitando su reconocimiento como IG. Por úlmo, se destaca el grado de voluntad que presentan los actores de la cadena en el reconocimiento de este producto como ‘Indicación Geográca’, destacando la escasa información y conocimiento que poseen acerca de este instrumento, lo que supondría la puesta en marcha de acvidades de sensibilización y concienciación dirigidas, principalmente, a los actores del eslabón agrícola. En el cuarto y úlmo capítulo, se presenta un análisis general sobre la condición del aceite de sacha inchi para ser reconocido como IG, en relación con los elementos descritos en los capítulos anteriores y a
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
la literatura internacional que aborda este tema. Respecto a la picidad del producto, en primer lugar se hace frente al problema de la denición del territorio de producción. El aceite se extrae de la semilla de sacha inchi mediante el prensado en frío, cuyo método puede ser fácilmente reproducible en otros países productores de esta planta. Este hecho plantea un problema en la denición de su calidad especíca y su unicidad. Pero a pesar de la inscripción del sacha inchi como Patrimonio Natural Peruano con la Ley 28477 de 200 5, en Mayo de 2013 la Resolución N. 1577 de la Comunidad Andina dispuso los “ S Inchi de origen y procedencia de Ecuador” , con lo que se expandió aún más el área de procedencia de la materia prima. Se destaca la ausencia de estudios comparavos entre aceites procedentes de diferentes lugares y especies, impidiendo denir la existencia de cierta variabilidad interna, es decir, si la calidad especíca realmente cambia en función al territorio de producción y a la especie ulizada. Asimismo, se carece de estudios que denan de qué forma los factores ambientales podrían inuir sobre la calidad del producto. Con referencia al saber-hacer local, es decir, a la incidencia del factor humano sobre la calidad del producto, se acentúa la falta de una tradición en su culvo y en su trasformación, la cual se reitera en la necesidad de asistencia técnica para el manejo agronómico por parte de los agricultores y en la inexistente producción de aceite de sacha inchi por parte de las comunidades navas, lo que supone un obstáculo para el estado de IG. Sobre la reputación del producto, esta ha sido medida mediante las transacciones comerciales, analizando los datos de los úlmos cinco años con respecto a la exportación de productos a base de sacha inchi bajo diferentes formatos de presentación, haciendo énfasis en la exportación del aceite. El aumento verginoso del volumen de venta y la subida del precio en los mercados internacionales, subraya la existencia de cierta reputación, aunque no se puede denir con certeza el grado en el que su origen como producto peruano incide sobre la imagen del mismo. Además, se detallan datos estadíscos sobre volumen y valor de exportación, describiendo la situación general del mercado del aceite de sacha inchi y de otros productos, lo que destaca un potencial económico interesante. En la parte nal del capítulo, se detallan los diferentes instrumentos legales úles para el reconocimiento de la IG, especicando tanto las ventajas como los inconvenientes de cada uno de ellos. En el caso de su reconocimiento como Denominación de Origen peruana, el débil vínculo del sacha inchi con el territorio peruano, debido principalmente a la escasez de información histórica y de estudios ciencos comparavos, hace que, por el momento, sea dicil su reconocimiento. Además de todos los problemas expuestos, también se encuentran diversos límites burocrácos y administravos, que supondrían largos empos de actuación y altos costos económicos. Al mismo empo, se subraya el gran potencial que posee Perú para que cumpla con las condiciones requeridas para el reconocimiento del aceite de sacha inchi como IG, sobre todo gracias a los avances ciencos, producvos y tecnológicos que este país sigue desarrollando con referencia al producto. Para nalizar, se describen otros instrumentos alternavos tales como las Marcas de Cercación y Colecvas y el ‘Conocimiento Tradicional’, que representan una poderosa herramienta para la valorización y protección de los productos.
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Nota Técnica
NOTA TÉCNICA En el presente trabajo se ha ulizado la metodología FAO descrita en el documento Uniendo perso, y . Gí y cas sostenibles, FAO 20101. Dicho documento proporcionó el principal instrumento para la realización del análisis de las condiciones requeridas para el reconocimiento del aceite de sacha inchi como Indicación Geográca, permiendo destacar los límites así como las potencialidades que la situación actual de dicho producto presenta. Asimismo, se ulizó la herramienta de idencación en línea de Calidad&Origen 2, la cual facilitó la idencación del vínculo entre el producto y el territorio de producción, resaltando las fortalezas y las debilidades para establecer el Círculo Virtuoso de la Calidad 3.
El documento es descargable al siguiente enlace: hp://www.fao.org/docrep/013/i1760s/i1760s00.htm Para más información visitar el siguiente enlace: hp://www.foodquality-origin.org/ 3 Véase el anexo para la presentación de los resultados de la herramienta. 1 2
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Identificación del Producto
1. IDENTIFICACIÓN DEL PRODUCTO El sacha inchi (Pk L) es una planta trepadora y rastreadora, hermafrodita, semi-leñosa y perenne, perteneciente a la familia Euphorbiaceae, cuyo nombre cienco viene dado por su descubridor, el naturalista Linneo, quién la catalogó por primera vez en 1753 en la Amazonía Peruana. A esta planta se le atribuyen otros nombres: sacha inchic, maní del inca, maní del monte, inca peanut, sacha maní, sacha inche, fragariopsis, N`gart (FAO), supua (Bolivia) 13 amauebe, amui-o (vocablo huitoto), sacha yachi, sacha yuchi, sacha yuchiqui, yuchi (vocablo cashibo), sampannankii, suwaa 5; sacha inchik 4. El sacha inchi no fue conocido con anterioridad en Perú. No fue sino hasta el año 1980 que se dio a conocer de manera cienca a través de los estudios realizados por la Universidad de Cornell (USA) sobre el contenido graso y proteico de la semilla de Pk L. y se desarrolló nuevo interés por el culvo, debido a su alto contenido en aceite (48%) y en proteínas (29%) ( Hamaker et al, 1992). A parr de ese momento se desarrollaron otros muchos estudios, principalmente relacionados con los productos derivados de la transformación de las almendras de sacha inchi, generalmente aceite y torta. Pascual G. y M. Mejía (2000) destacaron en el aceite crudo de sacha inchi el alto contenido en ácido linolénico-Omega 3 (43.75%) y el de ácido linoleico-Omega 6 (36.99%). El omega-3 concuerda con el omega-3 (45.2%) reportado por Hamaker et al 1992. La presencia de omega-3 (ácido linolénico) en el aceite de sacha inchi lo convierte en una de las fuentes vegetales más ricas en dicho ácido graso esencial, representando un válido complemento al aceite de pescado que conene 30% de Omega-3 (EPA/DHA). Por otro lado, la invesgación llevada a cabo por Sathe S.L. 2002, conrma la relevante candad y calidad de las proteínas contenidas en la torta de sacha inchi. En general, dichas proteínas conenen todos los aminoácidos esenciales requeridos por el hombre. Además, cuenta con la proteína Albumina, hasta un 96%, que hace que su digesbilidad sea bastante alta. A la luz de los resultados ciencos sobre ácidos grasos esenciales (Omega-3 y O mega-6) y sobre aminoácidos esenciales que hacen referencia a las caracteríscas del sacha inchi, Perú empezó a desarrollar, aproximadamente en el año 2000, una cultura industrial entorno a esta planta, conviréndose en el principal país productor y exportador de derivados de la misma. Asimismo, se cuenta con una bibliograa bastante amplia y variada acerca de los diferentes aspectos de este culvo. Este documento centra su atención principalmente sobre el aceite de sacha inchi, debido a que este producto presenta unas caracteríscas disnvas y únicas sobre Omega-3 (ω-3) que le otorgan un potencial nutricional y comercial signicavo.
1.1 DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA El género Pk comprende 19 especies que pertenecen a la sub-familia Acalyphoideae, de las cuales 12 se encuentran en Lanoamérica (Cuadro 1), 6 en África y Madagascar y 1 en Asia (Gillespie, 1993; Gillespie y Armbruster, 1997; Gillespie 2002; Gillespie, 2007). En América del Sur, la presencia de Pk L., ha sido registrado en la Amazonía Peruana, Bolivia y las Indias Occidentales (Macbride, 1951). En Perú, la especie P. L. está siendo culvada a gran escala en la región de San Marn, a lo largo de la cuenca del Huallaga hasta Yurimaguas, en el Alto Mayo, Sub Cuenca de Cumbaza y en áreas del Sector Lamas-
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U : S I , disponible en el siguiente enlace: hp://perubiodiverso.pe/assets/Uso-historico_sacha-inchi.pdf 17
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Shanusi. Según fuentes no ociales, han sido sembradas de 150 0 a 2000 hectáreas, en las cuales se produce entre el 50% y el 90% de sacha inchi a nivel nacional. Culvos de Pk L. se encuentran en Madre de Dios, Huánuco, Oxapampa, Rodríguez de Mendoza, Cuenca del Ucayali (Pucallpa, Contamaná y Requena), en Putumayo, Iquitos y Caballococha. Además, en Cusco, Junín, Cerro de Pasco, Puno, Piura, etc., también se vienen culvando pequeñas parcelas de este culvo. En los úlmos años Colombia 5 y Ecuador 6 también desarrollaron iniciavas de culvo de sacha inchi, “pro z S M” , como arman algunos empresarios y técnicos. La especie P. L. también, se culva en Anllas Menores, Surinam, Venezuela y Brasil. Existe una importante iniciava de culvo de la especie P. y en la región de Amazonas, donde el FIP (Fondo Italo Peruano), promovió, implementó y fortaleció dos proyectos de culvo de esta nueva especie, junto a otras endades públicas y privadas, llegando a sembrar 400 hectáreas 7. Se cuenta con evidencia sobre el culvo de sacha inchi de la especie P. en San Marn y Loreto, P. polyadonia en Amazonas y Loreto, y P. yy en Loreto, Huánuco y Madre de Dios.
Cuadro 1. Distribución del género Plukenea Laaméa
GÉNERO PLUKENETIA Especie
Distribución
Perú
Brachybotrya
Brasil, Ecuador, Bolivia
Huánuco, Loreto, Madre de Dios
Huayllabambana**
Perú
Amazonas
Lehmanniana
Colombia, Ecuador
-
Lorestensis*
Bolivia, Brasil, Venezuela, Guyana, Colomb ia
Loreto, San Marn
Mulglandulosa
Venezuela
-
Penninervia
Belice, Costa Rica, Guatemala, México, Nicaragua, Venezuela
-
Polyadenia*
Guyana, Venezuela, Ecuador, Brasil, Bolivia
Amazonas, Loreto
Serrata
Brasil
-
Spellata
México, Panamá, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Nicaragua
-
Supraglandulosa*
Guayana Francesa, Brasil, Surinam
-
Verrucosa*
Guyana, Brasil, Surinam
-
Volubilis*
Anllas Menores, Surinam, Venezuela, Colombia, Ecuador, Brasil, Bolivia
Amazonas, Loreto, Cusco, Junín, Madre de Dios, San Marn
Fuente: Gillespie, 1993; *Gillespie y Armbruster, 1997;**Bussman et al, 2009.
En Mayo de 2013, se aprobó la resolución Andina 1577, la cual dene los parámetros tosanitarios que regulan la importación de grano de sacha inchi procedentes de Ecuador 8, expandiendo el área de procedencia de la semilla y, en consecuencia, de la materia prima. 5 6
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18
Véase el documental disponible en el siguiente enlace: hp://www.caminoalagro.com/programas/aceite-sacha-inchi Véase la comunicación ocial del MAGAP de Ecuador: hp://www.agricultura.gob.ec/magap-dicto-curso-sobre-culvo-y-comercializacion-del-sacha-inchi/ Para mayor información consultar el sio web: hp://www.fondoitaloperuano.org/proyectos-y-estadiscas
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1.2 CARACTERÍSTICAS BIOLÓGICAS Y AGRONÓMICAS DEL SACHA INCHI En estos úlmos años se ha avanzado mucho en la invesgación cienca del sacha inchi (principalmente de la especie P. L.), gracias al interés de Perú y a los esfuerzos de los instutos nacionales de invesgación agraria como el INIA (Instuto Nacional de Innovación Agraria) y el IIAP (Instuto de Invesgación de la Amazonía Peruana). En la actualidad, el sacha inchi no cuenta con una variedad de semilla cercada que le otorgue unas caracteríscas estables y especícas. Su población se caracteriza por más de 50 ecopos (Cachique, 2006), esto signica que una misma especie en ambientes diferentes ene una expresión fenopica disnta por la interacción de los genes con el medio ambiente. Desde 1985, el INIA junto con otras instuciones públicas y privadas, trabaja en la mejora de las técnicas de producción, manejo agronómico y material genéco en el territorio de San Marn, y cuenta con un banco de germoplasma único en el mundo, con accesiones recolectadas de todo el territorio peruano, de la Amazonía Brasileña y de diversos territorios colindantes con Perú. En colaboración con el IIAP se está avanzando en el mejoramiento genéco, teniendo como objevo para el 2015/2016 la presentación de una variedad cercada de Pk L. “ y F; y y ” , como explican algunos técnicos de estas instuciones. Además de la especie P. L., se han encontrado otras 4 especies de Pk en Perú pertenecientes a la misma sub-familia de Ay: P. yy, P. , P. y y P. y (Gilliespie, 1993; Bussman et al, 2009). Estas especies, además de diferenciarse por su morfología, es posible que se diferencien también por su composición química, como se pudo vericar en el caso de la variedad P. y. Pero, desgraciadamente aún no existen estudios de caracterización química de las demás especies halladas en estado silvestre.
Cuadro 2. Taxonomía de la Plukenea volubilis Linneo PLUKENETIA VOLUBILIS LINNEO
Reino
Plantae
División
Magnoliophyta (Angiospermae)
Clase
Magnoliopsida (Dycoledo nae)
Orden
Malpighiales
Familia
Euphorbiaceae
Subfamilia
Acalyphoideae
Tribu
Plukeneeae
Género
Plukenea
Especie
P. volubilis
Fuente: INIA, 2006; McBride, 1951; Gillespie 1993 y 2007; elaborado por el autor.
El sacha inchi es una oleaginosa perteneciente a la familia Euphorbiaceae, que en Perú es reconocida por presentar 61 géneros y 323 especies (Brako&Zarucchi; Ulloa Ulloa et al., 20 04) 9. Es una planta trepadora, voluble, semileñosa de altura indeterminada, ya que puede llegar a alcanzar la altura de la planta que la soporta.
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Texto completo de la Resolución: hp://intranet.comunidadandina.org/Documentos/Gacetas/Gace2195.pdf Ibídem nota 1 19
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Sus hojas son alternas, de color verde oscuro y de forma oval-elípca, aseruladas y pinninervias, de 9-16 cm de largo y 6-10 cm de ancho. Su ápice es punagudo y su base es plana o semi-arriñonada, con peciolos de 2 a 6 cm de largo. Es una planta hermafrodita, de manera que se pueden apreciar las pequeñas ores masculinas, blanquecinas y dispuestas en racimos; en cambio, las femeninas se encuentran en la base del racimo y ubicadas lateralmente de una a dos ores. Es una especie alógama y por este movo es muy frecuente la polinización cruzada. Su propagación normal es por semillas, aunque en la Estación Experimental de Tarapoto lograron realizar la propagación por estacas, asexualmente. Sus frutos son en forma de cápsulas, que miden de 3 a 5 cm de diámetro y normalmente con 4 lóbulos, aunque pueden presentar también 5 lóbulos, dentro de los cuales se encuentran 4 semillas. Las cápsulas son de color verde y cuando maduran se vuelven marrón negruzco. Las semillas son de forma ovalada, de color marrón oscuro, con nervaduras notorias de 1,3 a 2,1 cm de diámetro según el ecopo, de 7 a 8 mm de espesor y de 0,8 a 1,4 g de peso, ligeramente abultadas en el centro y aplastadas hacia los bordes. En las semillas se encuentran los coledones en forma de almendras, cubiertas por una na película blanca. Las almendras son la materia prima para la producción de aceite (Manco E., 2006).
Condiciones edafoclimáticas El sacha inchi se desarrolla a una altud de entre 30 y 2000 m.s.n.m. Es decir, se puede encontrar en forma silvestre o culvada en zonas de Selva Alta y Selva Baja, aunque en estos úlmos años se han iniciado experiencias de culvo en la costa. El clima apto para su crecimiento es tropical o sub-tropical, con temperaturas de 10 a 26°C, que es pico de la Amazonía. Algunas invesgaciones señalan que las altas temperaturas aumentan la reproducción de los nematodos, ocasionando una mayor infestación. A temperaturas bajas, las plantas crecen sin mayores problemas. A una temperatura media de 26°C y una humedad relava del 78%, se observan plantas práccamente libres de enfermedades. Las temperaturas por encima de la máxima de 36°C ocasionan la caída de las ores y los frutos recién formados, se producen frutos pequeños. Cuanto más alta es la temperatura entre siembra y cosecha, más corto es el ciclo vegetavo de pre-producción. Respecto a la humedad, esta no debe de ser muy alta, pero sí permanente y distribuida de manera uniforme durante todo el año. La planta no tolera la sequía, ya que podría producirse la caída de las ores y de los frutos en crecimiento. La presencia de humedad alta y fuertes precipitaciones favorecen el desarrollo de enfermedades fungosas (Fusaryum, Antracnosis, Botritys, entre otros) en tallo, raíces, ores y frutos. El sacha inchi necesita una elevada candad de luz, ya que la sombra hace que disminuya su producción de ores y frutos. También requiere gran candad de agua para evitar un crecimiento lento. Sin embargo, un exceso de la misma en un suelo pesado incrementa el daño por enfermedad fungosa, a pesar de que puede disminuir la población de nematodos por falta de oxígeno. Para un mejor rendimiento de la planta, el agua debería distribuirse de manera uniforme durante todo el año (850-1000 mm). Los suelos más adecuados para su ópmo desarrollo son los francos de textura media, mientras que no se recomienda suelos arenosos (más del 60% de arena) ni arcillosos (más del 50% de arcilla). Los suelos pesados
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reenen la humedad, y en el caso de que presenten una excesiva humedad, podrían surgir problemas de enfermedades. Tampoco son favorables suelos muy ácidos, de pH entre 4,5 y 6. La planta crece mejor en suelos francos o aluviales planos, con un pH entre 5,5 y 6,5, ricos en materia orgánica. Prospera en ‘shapumbales’ ( P aquilinum) secos y húmedos y en ‘cashuchales’ ( Imperata brasiliensis). Suelos con textura franca son ideales, pero el culvo también se adapta bien a suelos de textura franco arcilloso, franco arenoso y franco limoso.
Ciclo fenológico La semilla de sacha inchi germina de 14 a 16 días después de la siembra, en caso de siembra directa, mientras que tarda de 11 a 14 días en el caso de siembra indirecta, en almácigo. En este caso las semillas se guardan en vivero donde las plantas completan su desarrollo antes de ir a campo denivo (un promedio de 2 8 a 32 días). El trasplante se realiza de 30-45 días desde el almácigo y antes de la aparición de las guías, las cuales aparecen normalmente después de 48-50 días de la siembra o de 20-41 días después del trasplante a campo denivo. La planta inicia la fase de oración de 88 a 135 días después de la siembra, seguida por la fase de fruccación (de 122 a 168 días después de la siembra) y nalmente ene lugar la cosecha de 180 hasta 220 días después. En el caso de trasplante, el ciclo fenológico puede resultar un poco más largo: la planta comienza a orecer de 86 a 139 días después del trasplante, frucca a los 119-182 días y se puede cosechar a los 202 hasta 249 días una vez nalizado el trasplante (Manco, 2006).
Manejo agronómico La época ópma de siembra (directa o indirecta), es entre octubre y enero. En terrenos bajo riego se siembra en los meses de menor o escasa precipitación (mayo - agosto). No debe realizarse siembra directa en los meses de enero a marzo, debido a un riesgo de pudrición de las semillas por el exceso de precipitación pluvial, debido a que la planta no puede tolerar más de 72 horas de inundación. La candad de semillas es alrededor de 1 kg por hectárea, más o menos 850 semillas, colocando de 2 a 3 semillas por ‘golpe’ o pocito de siembra a una profundidad de 2-3 cm. Las densidades de siembra probadas son: 1,111 plantas/hectárea (3m x 3m), y 1,333 plantas/hectárea (2,5m x 3,0m), observándose un incremento de 15% de rendimiento en la úlma densidad de siembra en relación a la primera. Llevando un buen manejo del culvo y ulizando un distanciamientos de 3m x 2m, se lograrían 1666 plantas/hectárea (Manco, 2008). Las semillas no deben ser almacenadas más de 60 días, ya que pueden perder su viabilidad registrando un menor porcentaje de germinación (60%), debido a los aceites contenidos, los cuales se degradan fácilmente (Manco, 2008). El sacha inchi se puede culvar en monoculvo o asociado. En el caso de monoculvo se ulizan tutores muertos (normalmente estacas o postes de madera, preferiblemente los de quinilla por su mayor resistencia) y espalderas de alambre galvanizado (normalmente Nº14), facilitando las fases de poda y cosecha, reduciendo la mano de obra y obteniéndose un mayor rendimiento por hectárea. Los postes se colocan a una profundidad entre 0,70-0,80 m y a una distancia entre ellos de 3m x 3m, pudiéndose también colocarse a un distanciamiento de 6m x 3m, dependiendo de la resistencia del alambre ulizado. Normalmente las hileras de alambre son tres: la primera colocada entre 0,8-0,9 m del suelo, la segunda a 0,40 m de la primera y la tercera a 0,40 m de la segunda, pudiendo ser esta úlma hilera de alambre galvanizado Nº10. Para sostener el sistema de tutoraje se emplean templadores, es decir, postes que se colocan inclinados y
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sujetos al suelo con piedras y alambre Nº 10, a una profundidad de 0,8-0,9 m (Manco, 2008). En algunos casos, los agricultores emplean hilos de nylon o plásco para ahorrar, con escasos resultados. En un sistema de tutoraje vivo se pueden ulizar estacas de Erythrina, especie de rápido crecimiento y alimento para animales como cuyes y conejos. Es una leguminosa y, como tal, es capaz de jar nitrógeno atmosférico en el suelo. También son adecuados árboles forestales de rápido crecimiento, como las especies Bolaina, Oropel, Ciruelo y el Cedro rosado de la India. La siembra del tutor vivo se realiza a una profundidad de 0,30-0,50 cm, mientras que las semillas de sacha inchi, así como los plantones, deben sembrarse a una distancia entre 0,100,15 m del tutor (Manco, 2008). Los inconvenientes del sistema con tutores vivos son la competencia por los recursos que se establece entre el tutor mismo y la planta de sacha inchi, además de aumentar la candad de trabajo para la poda, para impedir que el tutor crezca demasiado (llevando a dicultades en fase de cosecha) y que el follaje ocasione demasiada sombra a la planta de sacha inchi. En el caso de , el sacha inchi se asocia con culvos de ‘pan llevar’ como el frijol, soya, maíz, yuca, algodón, plátano, papaya y otros frutales y especies forestales, pues esta planta en su hábitat natural está rodeado por otras de po perenne (Manco, 2008). La asociación con más culvos permite una mayor sostenibilidad económica al agricultor, que puede contar con una oferta de productos más diferenciada. Muchos agricultores navos ulizan los culvos asociados como tutores (por ejemplo papaya o plátano), sembrando el sa cha inchi cerca de la planta para que pueda trepar. Otros, al contrario, no ulizan ningún po de tutor, dejando que el sacha inchi se desarrolle como un arbusto, aunque disminuya notablemente su rendimiento. También, con un sistema de tutoraje en espalderas pico del monoculvo, entre las hileras se puede asociar con culvos de porte pequeño y de desarrollo corto como frijoles, maní, etc. (Manco, 2008). Es importante resaltar que los culvos de cobertura permiten el incremento de la ferlidad del suelo y la reducción de las malezas y, como consecuencia, disminuyen los costos de deshierbe, la candad de agua ulizada para dicho culvo y se reducen, también, las plagas y enfermedades. Estos culvos pueden ser leguminosas comesbles o fabáceas ulizadas para forraje como C, Desmodium y otros (Manco, 2008). El sacha inchi se puede establecer en terrenos planos, ondulados o en las laderas. A pesar de que esta planta se dena como un culvo rúsco, la preparación del terreno no es tarea fácil. Tradicionalmente, los agricultores navos realizan el rozo, la tumba y la quema. Este úlmo resulta ser muy negavo porque destruye la materia orgánica del suelo, los nutrientes y, en consecuencia, afecta a sus propiedades sicas, químicas y biológicas, facilitando la erosión hídrica. Asimismo, el culvo necesita de un deshierbe de 2 a 3 veces por año, realizado de forma manual. Con los culvos de cobertura se pueden disminuir los problemas de las malezas. La aplicación del riego normalmente depende de la época de lluvias. Por este movo es importante un correcto manejo agronómico. Otra tarea fundamental en el culvo es la poda. Esta labor es indispensable para “obtener plantas bien con formadas, fuertes, vigorosas, con ramas armoniosamente distribuidas en el tutor, lo que permite obtener buenas
, j z, y ” (Manco, 2006). En un sistema de tutores vivos la poda será más frecuente. La ferlización es preferencialmente de po orgánico, debido al hecho que los agricultores de las zonas rurales no cuentan con dinero suciente para la compra de productos químicos. Además, desde un punto de vista ambiental, la producción orgánica es necesaria para su sostenibilidad a largo plazo.
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El control biológico es otra fase fundamental para que el culvo sea viable y sostenible en el empo. Como todas las plantas, el sacha inchi sufre ataques de diferentes insectos y problemas tosanitarios, aunque las amenazas principales que afectan a esta planta y amenazan su sostenibilidad económica son los nematodos del nudo Meloidogyne y el hongo Fusarium sp. Los nematodos son organismos mulcelulares microscópicos que dañan las raíces de la planta, causando heridas y afectando su capacidad de absorción de agua (Manco, 2008). El sacha inchi resulta ser muy suscepble al Meloidogyne incognita, el cual causa nódulos en las raíces. La acción de los nematodos facilita la entrada del hongo Fusarium sp. a través de las heridas ocasionadas. Este, a su vez, causa marchitez, impidiendo el paso de los nutrientes y del agua, llevando en la casi totalidad de los casos a la muerte de la planta. Se pueden emplear productos orgánicos bionemacidas y biofungicidas para controlar este complejo nematodo-hongo, además de realizar un análisis del suelo antes de la siembra de sacha inchi. Los terrenos que hospedan culvos de café están infectados por los nematodos; de hecho, ese culvo es tolerante al Meloidogyne, el cual no ocasiona la muerte de la planta, sino una reducción de la producción. Debido a que muchos agricultores no praccan ningún po de control para los nematodos y a la existencia de una supercie enorme de culvos de café, esta amenaza puede resolverse con el mejoramiento genéco, que actualmente se está desarrollando por parte de instutos de invesgación nacionales. El sacha inchi, según Manco (2008), puede sufrir ataques de otras plagas como cortadores de tallo, comedores de hojas, minadores de hojas, comedores de frutos y raspado de tallo, y enfermedades como hipertroa y otras causadas por alteraciones siológicas (temperaturas, luz, humedad, acidez del suelo, nutrientes, etc.) (Manco, 2008). El sacha inchi está listo para cosechar a los 6-7 meses de la siembra directa. En el caso de siembra indirecta hay que esperar hasta 8-10 meses después del trasplante en campo denivo. Una vez terminada la primera cosecha hay que recoger las cápsulas cada 20-25 días (CIED, 2008). Es una tarea manual que consiste en recolectar los frutos maduros directamente de la planta en canastas, evitando recoger las semillas que ya hayan sido expulsadas de las cápsulas, ya que se trata de frutos dehiscentes y podrían estar contaminados y dañar todo el lote producido. La época de mayor rendimiento es entre noviembre y mayo, mientras que se reduce entre junio y octubre, temporada caracterizada por lluvias escasas. Después de la cosecha, las cápsulas se secan y trillan de manera natural. La acción del sol hace que los frutos se abran solos o en caso de que no se llegue a abrir, este proceso facilita la acción de decapsulado, además de quitar la humedad residual de las semillas. Una vez quitada la primera corteza se procede con el descascarado de las semillas contenidas en las cápsulas, para sacar las almendras. Estas tareas pueden ser manuales o mecánicas, esta úlma con la ayuda de equipos industriales y semi-industriales que normalmente son fabricados por los ingenieros que trabajan en las mismas empresas o por ingenieros especializados. El almacenamiento debe de realizarse en sacos de polipropileno de 50 kg, en ambientes secos y no muy luminosos, normalmente sobre parihuelas para evitar el contacto con el s uelo. Es preferible que se almacenen las semillas con cáscara para evitar alteraciones de las almendras. El proceso de descascarado será nalizado en la planta procesadora. Al nal de las operaciones se obtendrá alrededor de 45-48% de cáscara y 52-55 % de semilla seca (Manco E., 2008; CIED, 2008). En cuanto al rendimiento, este puede variar entre 250 y 1800 kg de semillas por hectárea, dependiendo de la forma de culvo (monoculvo o asociado), del grado de tecnología aplicado (rúsco, con tutores muertos, tutores vivos, con o sin espaldera) y de los ecopos (Perúbiodiverso, 2009; Manco E., 2008; CIED 2008). Estos datos han sido calculados sobre parcelas demostravas. En las entrevistas realizadas a lo largo del trabajo, algunos emprendedores aseguraron que el culvo puede alcanzar entre las tres y cuatro toneladas de frutos por hectárea. En algunas publicaciones se arma que el rendimiento de una hectárea de sacha inchi puede llegar hasta tres toneladas10, en contraste a otros datos ociales que se presentan en la Cuadro 3.
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Generalmente, la planta se caracteriza por un rendimiento bajo el primer año, que se incrementa con el empo hasta llegar al cuarto o quinto año de culvo, después del cual la producción se reduce de forma importante, por lo que se sugiere volver a sembrar.
Cuadro 3. Rendimiento Kg./Ha. de Plukenea volubilis L. ú p d a d maj aóm d v
CULTIVO CON TUTORES VIVOS SIN ESPALDERAS (KG/HA) Año 1
Año 2
Año 3
Año 4
Año 5
250
1.000
1.200
1.200
1.200
CULTIVO CON TUTORES VIVOS CON ESPALDERAS (KG/HA) Año 1
Año 2
Año 3
Año 4
Año 5
400
1.300
1.600
1.600
1.500
CULTIVO CON TUTORES MUERTOS CON ESPALDERAS (KG/HA) Año 1
Año 2
Año 3
Año 4
Año 5
500
1.500
1.800
1.800
1.800
F: Púbdv, 2009.
1.3 COMPOSICIÓN QUÍMICA DE LA SEMILLA DE SACHA INCHI Dada la existencia de muchos ecopos y la inexistencia de variedades cercadas, la composición química de la semilla de sacha inchi puede variar según el territorio de origen y los factores ambientales que la afectan. Varios trabajos se han reportado a parr de 1980 respecto a Pk L. Los primeros estudios de la Universidad de Cornell (USA) en 1980, reejan que la semilla de sacha inchi conene una elevada proporción de aceite (49%) y de proteínas (33%) (citado por Hamaker et al, 1992). Hamaker et al, (1992) indican diferentes contenidos para el sacha inchi: 54% de aceite y 27% de proteínas. Otros trabajos muestran como en algunos ecopos el contenido de proteínas puede llegar a 42% (MerinoZagarra et al, 2008).
1.4 EL ACEITE DE SACHA INCHI De las semillas se obene el aceite de sacha inchi rico en ácidos grasos esenciales Omega-3 y Omega-6 (ω-3 y ω-6), que lo convierten en un nuevo producto con mucho potencial en el mercado nacional e internacional respecvamente. De hecho, el mercado de los productos naturales experimentó en los úlmos años un alza extraordinaria, debido, sobre todo, a la disponibilidad de información que permió a la opinión pública incrementar su conocimiento sobre las propiedades de los alimentos y sus consecuencias sobre la salud, repercuendo de este modo en sus dietas alimencias. El Cuadro 4 muestra el contenido de ácidos grasos saturados, mono y Poliinsaturados del aceite de sacha inchi versus el aceite de otras oleaginosas.
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V M B P Mj O S Ik. INCAGRO 2009.
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Se señalan las siguientes caracteríscas: - El sacha inchi conene 54% de aceite, valor más alto que en las otras oleaginosas, excepto la linaza que rinde 58% de aceite. - El aceite de sacha inchi muestra un nivel de ácidos grasos insaturados (no saturados) de 91,6%, el más elevado en relación a los otros aceites, incluyendo el aceite de linaza. - El aceite de sacha inchi alcanza una concentración de ácidos grasos esenciales: ácido linoleico y ácido alfa linolenico de 82%, la más alta respecto a los otros aceites considerados. Se observa que el aceite de maní y el de girasol no conenen ácido alfa linolénico. - El contenido de Omega-3 (ácido linolénico) en el aceite de sacha inchi es de 45,2%, mientras que el de Omega-6 (ácido linoleico) alcanza a 36,8%. Está comprobado que estos ácidos grasos esenciales de las familias ω -3 y ω -6 son importantes para la prevención de enfermedades cardíacas, hipertensión, además de desarrollar una función hipocolesterolémica (Simopoulos 1991, Follega-Romero et al, 2009). Otros benecios que aportan los ácidos grasos Omega-3, son la prevención de problemas de reumasmo, artris, cáncer e infecciones virales (Fernandes et al, 19 93; mencionado por Guillén et al, 2003). Asimismo, resulta úl para combar la arritmia, las inamaciones, disminuir los triglicéridos y la agregación de plaquetas, la viscosidad de la sa ngre y el brinógeno, pues reduce las probabilidades de trombosis (Simopoulos, 1991, Coblijin et al, 2009). En las fases embrionaria y de lactancia, el rol de los ω-6 y ω-3 es fundamental, ya que forman parte de las membranas celulares, especialmente del sistema nervioso, y su acción es necesaria para el normal desarrollo de las funciones visiva y neurológica; aunque en ello aparentemente es excepcional el DHA (Ácido docosahexaenoico), Omega-3 cuya función es indispensable para la formación y el buen desarrollo del cerebro. Se han encontrado bajos valores de DHA en sujetos que sufren enfermedades neurodegeneravas como el Alzheimer (Coblijin et al, 2009). Este ácido graso esencial junto con el EPA (Ácido eicosapentaenóico), son el resultado en parte, de la conversión de los PUFAs ω-3 llevada a cabo por las enzimas Δ-5 y Δ-6 desaturasas (Simopoulos, 1991).
Cuadro 4. Contenido de ácidos grasos saturados, mono y poliinsaturados en el sacha inchi y en las principales oleaginosas
CONTENIDO DE ÁCIDOS GRASOS EN LAS PRINCIPALES OLEAGINOSAS Ácidos Grasos
Sacha Inchi
Soya
Aceite Total
54
19
Maní
Algodón
Linaza¹
Girasol
16
,,,
48
45
Saturados Palmíco
4,5
10,5
12
18,7
8,6
7,5
Esteárico
3,2
3,2
2,2
2,4
3,3
5,3
No Saturados Oléico
9,6
22,3
41,3
18,7
15,8
29,3
Linoléico
36,8
54,5
36,8
57,5
14,2
57,9
Linolénico
45,2
8,3
0
0,5
57,5
0
Monosaturados Poliinsaturados Insaturados Saturados
9,6 82 91,6 7,7
22,3 62,8 85,1 13,7
41,3 36,8 78,1 14,2
18,7 58 76,7 21,1
15,8 71,7 87,5 11,9
29,3 57,9 87,2 12,8
Fuente: Citado por Halmaker et al, 1993. Tomado de Bodwell y Hopkins 1985. ¹Tomado por Carter, 1993
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Se recomienda en las dietas de humanos una “ ω-6: ω-3 5 : 1 10 : 1” , aunque una proporción de 1 : 1 a 4 : 1 se considera ópma por la OMS/FAO (2010). Dicha proporción en el aceite de sacha inchi es de 0,75 : 1. Contrariamente, la proporción ω -6 : ω -3 es alta en otros aceites (soya 7:1, oliva 11:1, girasol 6:1), y el aceite de Linaza cuenta con una proporción ω - 6 : ω - 3 baja de 0, 3 : 1 (Caballido et al, 2010 citado por M. Do Prado et al, 2011). Esta proporción ω - 6 : ω - 3 es importante debido a que ambos ácidos grasos esenciales compiten por las enzimas Δ-5 y Δ-6 desaturasas (Simopoulos, 1991). Algunos estudios demuestran que la dieta alimencia del hombre en el periodo Paleolíco era más equilibrada en el rao ω-6 : ω-3, y la ingesta de ácidos grasos saturados era mucho menor (Simopoulos, 1991). Alrededor del 80% de la dieta de nuestros ancestros se centraba en el consumo de vegetales, muchos de los cuales presentaban altos contenidos en PUFAs (nueces y otros), y solo el 20% constuía el consumo de productos de origen animal. Dada la vida salvaje y costumbres alimencias de estos animales, su carne resultaba más rica en PUFAs que la carne del ganado que se consume hoy día, debido a que este es alimentado a base de semillas ricas en ω-6 y pobres en ω-3 (Eaton y Conner, 1990; Simopoulos, 1991). La revolución y evolución de la industria alimentaria y de la agricultura en los úlmos 150 años, ha transformado de manera consistente el modo de consumo del ser humano, llevándolo a adquirir unas costumbres alimencias irregulares que son las causas de muchas de las enfermedades que sufren actualmente, como los problemas cardiovasculares, la hipertensión, el cáncer, la diabetes, etc. Asimismo, el rao entre ω-6 : ω-3 ha cambiado, enriqueciendo los contenidos del ácido graso esencial ω-6. Los ácidos grasos esenciales ω-3 siempre han formado parte notable de la dieta alimencia del ser humano y en estos úlmos años, se destaca su importancia para el mantenimiento de un buen estado de salud (Simopoulos, 1991). Los aceites vegetales más consumidos actualmente en Occidente, como el aceite de soya o el de girasol, conenen porcentajes muy altos de ω -6 (respecvamente 54 y 57,9%), lo que ha desequilibrado el rao entre ω-6 : ω-3 en los seres humanos, pasando de 8 : 1 a 20 : 1 (Coblijin et al, 2009). Por el contrario, los estudios sobre los comportamientos alimencios (Kamei, Ki, Kawagoshi y Kawai, 2002; Ambring et al, 2006; mencionados por Rubio-Rodríguez et al, 2010) demuestran que las personas que siguen una dieta alimencia Mediterránea o Japonesa presentan un ópmo rao ω-6 : ω-3 de 2 : 1, mientras que en las personas pertenecientes al grupo ‘Fast Food’ ese mismo rao, completamente desbalanceado, resultó ser 25 : 1. De todos modos, se reconoce la dicultad de cambiar el eslo alimencio de una población entera, por ello los alimentos enriquecidos con ω-3 podrían resultar una alternava de ω -6 : ω -3 equilibrada ( Rubio-Rodríguez et al, 2010). Por otro lado, el aceite de pescado conene ácidos grasos esenciales Omega-3: EPA y DHA. Sin embargo, el aceite de sacha inchi cuenta con un elevado contenido de ácido linolénico ω -3, cuya cadena puede s er alargada y converda en EPA y DHA (Calder et al, 2005 y 2009 citado por M. Do Prado et al, 2011 y Follega-Romero et al, 2009), aunque solo el 8-10% y 1-4% de ácido linolénico ω -3 se convierten en EPA y DHA respecvamente, y cuyo rendimiento viene condicionado por el género y el estado psicológico del sujeto (p.e. en la fase de embarazo las mujeres sintezan más candades de DHA) (Williams y Burdge, 2006). La OMS/FAO (2010) recomiendan que la dieta incluya la ingesta de EPA y DHA en candades, respecvamente de 0,5-1,8 g por día (Kris-Etherona et al, 2009 y Calder et al, 2009; mencionados por Vanegas-Calderón et al, 2010). El requerimiento ópmo de ácido linolénico (ω -3) es de 2 g por día ( Gebauer et al, 2006), lo que reitera la importancia del consumo de aceite de sacha inchi en la dieta alimencia, sobre todo en aquellos sujetos que consumen pescado, resultando decientes sus niveles en EPA y DHA (Follega-Romero et al, 2009). Además, el aceite de sacha inchi queda libre de sabores desagradables como los que caracterizan el aceite de pescado (M. Do Prado et al, 2011) y su producción y consumo es potencialmente más sostenible. En los úlmos años, el aceite de pescado ha sido sobre-consumido, disminuyendo los recursos piscícolas aptos para su producción. Por otro lado, el rápido desarrollo de la acuicultura, también ha incrementado la sobreexplotación de los recursos marinos debido a que los peces en las pisifactorías son alimentados con dietas que conenen aceites marinos ricos en PUFAs extraídos de especies marinas como las anguilas, lo que ha causado
26
Identificación del Producto
una rápida disminución de estas especies en la red alimencia y, en consecuencia, compromete peligrosamente la estabilidad de los ecosistemas (Vanegas-Calerón et al, 2009). Asimismo, los altos costos jos para la extracción y el procesamiento del aceite de pescado son altos, y la acumulación de contaminantes orgánicos como PBCs, dióxina y metales pesados como cobre o mercurio en los peces, pueden causar efectos negavos sobre la salud humana (Rubio-Rodríguez et al, 2010). En el mundo, la producción de aceite de pescado (fuente de Omega-3, EPA y DHA para humanos) ha llegado a su pico máximo y está estancada hace más de 20 años. Es decir, la pesca extracva es la misma desde hace más de 20 años. Casi paralelamente, la acuacultura o piscicultura connental connúa expandiéndose a ritmo exponencial, lo mismo que sus necesidades de aceite marino para elaborar los alimentos balanceados de peces. En ese escenario, la cadena producva de aceite de sacha inchi ene el reto de atender preferencialmente la demanda de aceite de sacha inchi (fuente de ácido linolénico ω-3) de toda la población humana, de más de 7000 millones de habitantes. Por tal movo se incluyen los cuadros 5 y 6, que , por un lado, muestran los requerimientos diarios de ácido linolenico ω-3 para humanos y, por otro lado, señalan las candades diarias de aceite de sacha inchi para sasfacer la demanda del ácido ácido graso esencial ω-3. Cuadro 5. Requerimientos diarios de ácidos grasos esenciales (g por día)
REQUERIMIENTOS DIARIOS DE ÁCIDOS GRASOS ESENCIALES (G POR DÍA) ω-6 PUFAs Género
Edad 7 - 12 meses
0 - 6 meses
H+M
4,4
4,6
Ácido Linoléico 1-3 años
4-8 años
9-13 años
14-18 años
19-30 años
31-50 años
51-70 años
>70 años
H
7
10
12
16
17
17
14
14
M
7
10
10
11
12
12
11
11
M Preñadas
-
-
-
13
13
13
-
-
M Lactación
-
-
-
13
13
13
-
-
ω-3 PUFAs Género
Edad 7 - 12 meses
0 - 6 meses
H+M
0,5
0,5
Ácido Alfa-Linolénico 1-3 años
4-8 años
9-13 años
14-18 años
19-30 años
31-50 años
51-70 años
>70 años
H
0,7
0,9
1,2
1,6
1,6
1,6
1,6
1,6
M
0,7
0,9
1
1,1
1,1
1,1
1,1
1,1
M Preñadas
-
-
-
1,4
1,4
1,4
-
-
M Lactación
-
-
-
1,3
1,3
1,3
-
-
F: I Md, 2005. Eabad p a
27
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Cad 6. Cadad daa d a d aha h paa a aaó d
los requerimientos de PUFAs (g por día)*
CANTIDAD DIARIAS DE ACEITE DE SACHA INCHI PARA LA SATISFACCIÓN DE LOS REQUERIMIENTOS DE PUFAS (G POR DÍA)* ω-6 PUFAs Género
Edad
H+M
0 - 6 meses
7 - 12 meses
9,17
9,58
Ácido Linoléico 1-3 años
4-8 años
9-13 años
14-18 años
19-30 años
31-50 años
51-70 años
>70 años
H
19,44
27,78
33,33
44,44
47,22
47,22
38,89
38,89
M
14,58
20,83
20,83
22,92
25,00
25,00
22,92
22,92
M Preñadas
-
-
-
36,11
36,11
36,11
-
-
M Lactación
-
-
-
36,11
36,11
36,11
-
-
ω-3 PUFAs Género
Edad 7 - 12 meses
0 - 6 meses
H+M
0,5
0,5
Ácido Alfa-Linolénico 1-3 años
4-8 años
9-13 años
14-18 años
19-30 años
31-50 años
51-70 años
>70 años
H
1,46
1,88
2,50
3,33
3,33
3,33
3,33
3,33
M
1,46
1,88
2,08
2,29
2,29
2,29
2,29
2,29
M Preñadas
-
-
-
2,29
2,92
2,92
-
-
M Lactación
-
-
-
2,71
2,71
2,71
-
-
F: I Md, 2005; abad p a
*Calculado sobre aceite de Sacha Inchi con un contenido de 48% de alfa-linolénico y 36% de linoléico
Follega-Romero et al (2009) destacan (Cuadro 7) que los α-tocoferoles y carotenos no están presentes en el aceite de sacha inchi, mientras que aparecen altos contenidos de γ-tocoferol y δ-tocoferol que dan una mayor resistencia a la oxidación, ya que los anoxidantes más acvos en los lipídos son γ > δ > β > α-tocoferoles (Schmidt y Pokorný, 2005; mencionado por Folega-Romero et al, 2009). Bondioli et al (2006), determinaron el nivel de tocoferoles en 2,26 g/kg con una parción de 63,3% de α-tocoferol y 36,7% de β+γ-tocoferoles. Cad 7. Cadad d a d aha h
TOCOFEROLES (g/kg) α-tocoferol
0
γ-tocoferol
1,14
δ-tocoferol
1,25
Total
2,39
F: Fa-Rm a, 2009.
28
Identificación del Producto
Para obviar a los problemas causados por la oxidación de los ácidos grasos (malos olores y sabores debido a la rancidez), se pueden encapsular candades pequeñas de los aceites que incluyen altos contenidos de PUFAs, como ya se hizo con el sacha inchi y el aceite de pescado; (Matsuno y Adachi, 1993; mencionado por Rubio-Rodríguez et al, 2010). El material de revesmiento es normalmente constuido por una membrana derivada de las grasas animales, aunque se están llevando a cabo estudios y experimentaciones para el empleo de grasas vegetales. El Cuadro 8 ofrece los datos sobre el valor de peróxidos (PV) del aceite de sacha inchi versus el de linaza. El valor de peróxido indica la candad de oxígeno en 1 Kg. de aceite. Cuanto más alto resulte el contenido de este, más alta será la probabilidad de que ese aceite se oxide y enrancie. En el estudio de Maurer et al (2012), se expusieron cuatro aceites vegetales a una temperatura de 65° C durante 20 días, para medir su grado de oxidación a través del índice de peróxido. Debido al alto contenido en ácidos grasos poliinsaturados, que son más inestables con respecto a los saturados y monoinsaturados, el aceite de sacha inchi y el de linaza presentaron una inestabilidad a la oxidación más alta. El aceite de girasol resultó ser el más resistente a la oxidación, gracias a su mayor contenido de ácidos grasos saturados y monoinsaturados.
Cad 8. Cmpaaó d PV, d d d a vó d PV p da d amaam dv a va PV (valor peróxido meq/kg)
Saturados %
Maíz
1
13,7
30,5
Girasol
4
6,5
Linaza
9,06
Sacha Inchi
3,4
Aceite
Monoinsat. Poliinsat. % %
Almacén (valor PV/días) 5
10
15
20
54,7
4,5
42,3
82,6
111,4
77,9
15,4
21,2
41,5
54,9
71,7
9,4
22,1
64,8
42,5
69,7
78,6
81,6
7,4
10
80,9
64,3
89,7
101,4 101,4
Fuente: Maurer et al, 2012.
Merino-Zegarra et al (2008), en un estudio realizado sobre 9 accesiones de sacha inchi, analizaron varios aceites obtenidos de diferentes accesiones y evidenciaron que el índice de peróxido variaba enormemente entre ellos (de 0,29 a 4,70 meq Oxígeno/Kg). También es signicavo el límite máximo de peróxido establecido por el Consejo Oleícola Internaonal (2003) que es de 15 meq Oxigeno/kg de aceite (mencionado por MerinoZagarra et al, 2008). Guérrez et al (2011) analizaron la caracterización del aceite de sacha inchi (Cuadro 9), encontrando una densidad relavamente elevada respecto a la de las otras oleaginosas (maíz, algodón, soya, y otros), como consecuencia del alto grado de insaturación del aceite. El índice de refracción (que se dene como la razón de la velocidad de la luz en el vacío con respecto a la velocidad de la luz en el aceite evaluado) en el aceite de sacha inchi también resultó ser más alto en comparación a lo medido en otros aceites (girasol, maíz y soya) pues este índice se incrementa al aumentar los dobles enlaces presentes en la composición química de la sustancia. Los índices de Saponicación y de Lodo miden la no saturación de un aceite, y en el aceite de sacha inchi sus valores resultan ser elevados. Por el contrario, Folega-Romero (2009) presentaron unos índices de Lodo y Saponicación ligeramente más altos, de 198 y 193, respecvamente.
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Asimismo, la viscosidad del aceite de sacha inchi resulta ser alta, consecuencia del alto contenido en ácidos grasos insaturados. Una vez más, es importante señalar la diversidad de valores que puede asumir el sacha inchi dependiendo del ecopo analizado y de las variables ambientales que incidieron en su desarrollo.
Cad 9.Ppdad -qma d a d aha h
ACEITE DE SACHA INCHI Componente
Valor
Índice de Lodo (g I2/100g)
193,1
Índice de Saponificación (mg KOH/g)
185,2
Índice de Refracción a 25ºC
1.479
Densidad a 25ºC (g/cm³) Viscosidad a 20ºC
0,9187 35,4
F: Géz a, 2011.
Metodología de extracción del aceite La metodología de extracción del aceite de sacha inchi más común, es el prensado en frío. Este sistema consiste en prensar una candad de semillas sin producir calor, debido a que las altas temperaturas llevan a la oxidación de los PUFAs reduciendo su contenido en el producto nal. Normalmente, las prensas son diseñadas y fabricadas por las mismas empresas productoras, aunque existen ingenieros mecánicos que se dedican a la fabricación de maquinaria apta para su procesamiento. En general, para la obtención de un litro de aceite de sacha inchi son necesarios 5 kg de semilla, aunque esta proporción puede variar entre 4:1 y 6:1. El inconveniente de la extracción mediante prensado en frío es la baja candad de aceite que se produce (80%). Al contrario, el uso de solventes como el Héxano, permite extraer casi el 100% de aceite. Sin embargo, este úlmo método de extracción signicaría una disminución de la concentración de PUFAs en el producto nal por la oxidación de los mismos, como consecuencia de las altas temperaturas generadas en el proceso. Además, llevaría a la contaminación del aceite, debido a que los solventes ulizados en dicho proceso son tóxicos e inamables y los residuos de estos compuestos no pueden ser separados completamente del producto obtenido (FolegaRomero et al, 2009; M. Do Prado et al, 2011). Actualmente, se está ensayando con técnicas alternavas de extracción que no comprometan la calidad del aceite trasformado. Folega-Romero et al, y Do Prado et al 2011, emplearon técnicas de extracción con dióxido de carbono (no es tóxico ni inamable, es más barato y se puede recuperar fácilmente del aceite obtenido que es aproximadamente del 99%), alcanzando los mismos resultados que en las técnicas de extracción con Héxano, pero evitaron los inconvenientes más destacados de esas técnicas. Finalmente, se puede armar que el aceite de sacha inchi es un producto con una calidad especíca que lo diferencia de otros productos similares como el aceite de linaza y de pescado. No presenta problemas relacionados con la sobreexplotación de los recursos ulizados en su trasformación, al contrario, es úl para la mejora de la biodiversidad y la reforestación, y supone una rica fuente de alimentación.
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Identificación del Producto
G 1. Pdó d d a d aha h
Materia Prima: Semilla de Sacha Inchi
Snacks
(5 Kg. de semillas)
(Tostado, confitado,turrón, chocolate, etc.)
Prensado en frío
Torta de Sacha Inchi (3,5 - 4 Kg.)
Consumo Alimen�cio
Consumo Animal
(Harinas, galletas, integradores alimentarios, carnes vegetales, etc.)
(Ganado, Pescado, Avícola)
Aceite de Sacha Inchi
(1 litro)
Consumo alimen�cio
Industria cosmé�ca
Fuente: Elaborado por el autor
1.5 DIFERENCIAS ENTRE ESPECIES: EL CASO DE LA PLUKENETIA
HUAYLLABAMBANA
En los úlmos años se han descubierto otras especies de Pk, no solamente en Perú, sino también en otras partes del mundo. Todavía faltan estudios ciencos especícos sobre las propiedades y la caracterización química de estas otras especies, por lo que aún no se puede establecer si existen diferencias signicavas con la especie P. L . Se han desarrollado estudios sobre una de estas nuevas especies, la Pk y, endémica de la región Amazonas, en Perú. Esta especie parece que solo se desarrolla en el hábitat de esta región amazónica peruana en la cual fue hallada, en las provincia de Rodríguez de Mendoza, Bogará y Chachapoyas (mencionado por Bussmann et al, 2009). Es una especie que presenta unas cápsulas y unas semillas más grandes de las que caracterizan la especie P. L. Además de caracteríscas taxonómicas diferentes, resultan interesantes los contenidos en ácidos grasos Omega-3 determinados por INASA según el método ISO 5509-2000, que pueden llegar a 60%, frente al 48-50% de la especie P. L. (Alvarado-Perúbiodiverso, 2008). De hecho, esta diferencia se encuentra también en la Norma Técnica Peruana 151.400, la cual describe los requisitos del aceite de sacha inchi y disngue entre el aceite procedente de la especie P. L. y el procedente de la especie P. y, otorgando al segundo unos valores mínimos más altos en contenido de ALA (NTP 151.400, INDECOPI 2009).
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
La P. y es una especie endémica, que para su buen desarrollo necesita de factores ambientales diferentes a los de la especie P. L. Esta especie, como se indicó con anterioridad, se encuentra en la región de Amazonas por encima de los 1600 m.s.n.m., y se ha demostrado que su culvo por debajo de esta altud y en un ambiente diferente, como puede ser el de San Marn, no dio resultados sasfactorios (escasa producción, frutos pequeños y muerte de la planta). De todos modos, estas diferencias entre-especies plantean un interrogante importante sobre la calidad y las cualidades de los aceites que se producen a parr de ellas, y sugieren un desarrollo más exhausvo de pruebas ciencas. El Cuadro 10 es muestra las diferencias entre P. L. y P. y. Resulta interesante destacar que el aceite de P. y conene 58% de ácido linolénico ω-3, superior al de P. L. de 45,2%.
Cuadro 10. Comparación entre el aceite procedente de la especie Plukenea volubilis L. y la Plukenea huayllabambana
COMPARACIÓN ENTRE EL ACEITE PROCEDENTE DE LA ESPECIE P. VOLUBILIS L. Y P. HUAYLLABAMBANA Ácidos Grasos
P. Volubilis L.
P. Huayllabambana*
Saturados Palmíco
4,5
4,7
Esteárico
3,2
1,8
No Saturados Oléico
9,6
8
Linoléico
36,8
27,2
Linolénico Monosaturados
45,2
58
9,6
8
Poliinsaturados
82
85,2
Insaturados
91,6
93,2
Saturados
7,7
6,5
F: Hamak a, 1992; *INASA - Pbdv, 2008.
1.6 LA TORTA PROTEICA DE SACHA INCHI El contenido de proteínas de la semilla de Pk L. fue de 27 a 33% según lo reportado por Hamaker et al (1992). Dicho contenido de proteínas es similar al de otras semillas oleaginosas y, en algunas ocasiones, puede resultar ligeramente mayor. Es importante subrayar la presencia en esta semilla (Cuadro 11) de aminoácidos esenciales. Es decir, de aquellos que el cuerpo no sinteza por sí mismo y necesita que estén presentes en la dieta a través de proteínas de las almendras.
32
Identificación del Producto
Los niveles de lisina y leucina en el sacha inchi son menores respecto a la proteína de Soya. Sin embargo, son mayores en relación a las otras oleaginosas. También aporta aminoácidos azufrados como la meonina + cisteína, que generalmente se encuentran en bajas candades en las oleaginosas; y, la treonina, triptófano y rosina están presentes en grandes candades en comparación con las otras semillas. El contenido de fanilalanina es relavamente bajo (Hamaker et al, 1992). Comparados con el modelo FAO/ONU/OMS (indicado para todas las franjas de edad, exceptuando a aquella de los bebés) la proteína contenida en las semillas de P. L., en el caso de ser completamente digerida, solo estaría en décit de lisina y leucina. Según Sathe et al (2002) la proteína albumina de sacha inchi conene todos los aminoácidos esenciales y representa el 31% del total de proteína en la semilla (Cuadro 12). Comparando los valores de aminoácidos con los sugeridos por la FAO y OMS se puede vericar que solo en el caso de la hisdina (aminoácido esencial para los bebés y niños de edad inferior a dos años) la albumina no cumple con los montos requeridos por las dos instuciones internacionales. Sin embargo, se puede armar que la albúmina es una proteína completa que cumple con los requerimientos de aminoácidos esenciales en adultos. Además, se trata de una proteína altamente digerible (Sathe et al, 2002) La proteína, cuando se digiere bien, puede contribuir a la necesidad diaria de proteína en adultos, que es de 0,66 g/kg al día (OMS, 2007).
Cuadro 11. Comparación del contenido de aminoácidos esenciales entre diferentes semillas y adad mdada p FAO/ONU/OMS
AMINOÁCIDOS mg/100g
Sacha Inchi
Total Proteínas
27
Soya Maní Algodón Girasol 28
23
33
FAO/ONU/OMS
24
-
Esenciales His�dina Isoleucina Leucina Lisina Me�onina Cisteína Met+Cis Fenilalanina Tirosina Fen+Tir Treonina Triptófano Valina Total Aminoácidos esencial
26 50 64 43 12 25 37 24 55 79 43 29 40 411
25
24
27
33
19
45
34
33
43
28
78
64
59
64
66
64
35
44
36
58
13
12
13
19
-
13
13
16
15
-
26
25
29
34
25
49
50
52
45
-
31
39
29
19
-
80
89
81
64
63
39
26
33
37
34
13
10
13
14
11
48
42
46
51
35
418
349
365
366
-
Fuente: Hamaker et al, 1992
33
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Cuadro 12. Contenido de aminoácidos esenciales de la albumina y adad mdada p FAO/OMS
AMINOÁCIDOS
mg/100g de proteínas Albumina
FAO/OMS
Hisdina*
1
1,9
Arginina
8,5
-
Treonina*
5,7
3,4
Tirosina*
5,8
-
Valina*
6,2
3,5
Meonina*
1,4
-
Cisteína*
4,3
-
Met+Cis+*
5,7
2,5
Isoleucina*
5,0
2,5
Leucina*
7,9
6,6
Fen+Tir*
6,7
6,3
Fenilalalina*
0,9
-
Lisina*
7,2
5,8
Triptófano*
4,4
1,1
Esenciales/Total (%)
47,61
-
Fuente: Sathe et al, 2002; * Aminoácidos Esenciales
Guérrez et al (2011) analizaron proteínas, grasas, carbohidratos y minerales en un ecopo de semilla perteneciente a la especie P. L. procedente de Florencia (Caquetá, Colombia) como se detalla en el Cuadro 13. Según este cuadro, el contenido de humedad de 3,3% es aceptable (rango ópmo 0-13%) para el apropiado almacenamiento y procesamiento de la semilla de sacha inchi sin que exista degradación de triglicéridos (James, 1995; citado por Guérrez et al, 2011). El valor de 30% de carbohidratos totales es relavamente bajo, debido a los altos contenidos de aceite crudo (42%) y de proteína (24,7%). El aporte calórico de la semilla de sacha inchi calculado a través del contenido de grasa, proteína y carbohidratos es de 576 Kcal/100 g. En consecuencia, consumiendo 140-200 g de semilla al día se alcanza el valor de energía recomendado por FAO, es decir 800-1200 kcal por día (FAO, 1973). Además, la semilla de sacha inchi conene candades importantes de algunos minerales esenciales para la dieta humana, como pueden ser el magnesio, el calcio y el zinc (Guérrez et al, 2011). La composición química de la semilla puede variar según el tratamiento que se le dé en pos-cosecha, su almacenamiento, la temporada de recolección, la variedad del ecopo y según los territorios de crecimiento. Es decir, depende de las condiciones edafoclimácas ( Merino-Zegarra et al, 2008).
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Identificación del Producto
Cuadro 13. Componentes de la semilla de sacha inchi
SEMILLA SACHA INCHI Componente
Valor %
Humedad
3,3 ± 0.3
Grasa
42 ± 1.1
Proteína
24,7 ± 0.5
Ceniza
4 ± 0.7
Carbohidratos
30 ± 0.6
mg/100g de proteínas K
5563,5 ± 6.4
Mg
3210 ± 21.2
Ca
2406 ± 7.1
Z
103,5 ± 8.9
Fe
49 ± 1.1
Na
15,4 ± 0.5
Cu
12,9 ± 0.3
F: Géz a, 2011
1.7 DIVERSIFICACIÓN EN LA TRASFORMACIÓN FINAL DEL SACHA INCHI. PRODUCTOS PRINCIPALES Y PRODUCTOS SECUNDARIOS El potencial económico de esta planta se ve acentuado tanto por la variedad de s us usos nales como por los valiosos sub-productos derivados del aceite. El aceite de sacha inchi es vendido como alimento, como medicina natural y como insumo para la producción de cosmécos (cremas para la piel, manos, cara, anarrugas, champú, jabón, etc.). El sector alimencio y sobre todo el cosméco, resultan ser los más interesados en esta planta. El contenido de ω-3 y tocoferoles no solo es importante a nivel alimencio, sino también para el cuidado personal. El aceite de sacha inchi aplicado a productos cosmécos, proporciona funciones de fotoprotección de la piel a los rayos UV, protección contra eritema y edema, y función humectante y anoxidante (Thiele et al, 2005). En algunos casos, el sacha inchi es también ulizado como alimento para el ganado, principalmente para pollos, gallinas, cerdos y peces. Este es el caso de la torta o pasta de sacha inchi, subproducto resultante de la extracción del aceite de las almendras o semillas y que incluye un alto contenido en proteínas. Esta torta se vende a otras empresas del rubro alimentario que la ulizan como ingrediente en la elaboración de las raciones para animales. También puede ser ulizada como enriquecedor de Omega-3 de alimentos como la leche o de dietas de gallinas de postura, raciones de pollos, cerdos, para producir huevos y carne con Omega-3. Otros productos derivados son los snacks, mucho má s rentables que el propio aceite, ya que no necesitan una compleja elaboración. Su preparación consiste en el tostado, normalmente con la misma maquinaria con la que se tuesta el café, aunque la velocidad de revolución debe de ser más baja para no romper las semillas; luego el salado o contado y, nalmente, el envasado. Está claro que las propiedades químicas de los productos obtenidos son muy diferentes. Por ejemplo, en el caso de los snacks es muy dicil encontrar niveles altos de Omegas, así como de tocoferoles (anoxidantes), puesto que ambos elementos enden a disminuir cuando son somedos a altas temperaturas.
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La cadena productiva del sacha inchi
2. LA CADENA PRODUCTIVA DEL SACHA INCHI La estructura de la cadena de suministro del aceite de sacha inchi está representada en el Gráco 2, y hace referencia a la situación actual en San Marn. Actualmente, se trata del área geográca más representava de este culvo. En esta región se concentran el mayor número de empresas trasformadoras, productores agrícolas e instutos de invesgación agraria. Además, existe un creciente interés de gran parte de la colecvidad local hacia este culvo. Este sistema local creado en los úlmos años, puede ser presentado como un claro ejemplo de para otros territorios potenciales, debido a que están naciendo iniciavas relacionadas con el Sacha Inchi en otras regiones de Perú como Loreto, Junín y Ucayali. Frente a una demanda internacional que connúa a crecer de forma exponencial, la constución de nuevas redes locales soportadas por empresas e instuciones públicas y privadas, llevaría a sasfacer las necesidades de las demandas del mercado (empo, candad y calidad), acvando procesos territoriales posivos para la economía rural. No obstante, la cadena presenta algunas debilidades que necesitarían ser corregidas para que esta pudiese llegar a ser inclusiva y equitava.
G 2. A q papa p d aó d va d aha h
Universidades y Laboratorios Internacionales
Universidad y Laboratorios UNSM, UNALM, UPCH, UNMSM etc.
Restauramtes locales
Territorio Instuciones y Programas INIA, IIAP, Gobiernos Regionales, ICT, Promperú, MINAG, PDRS, Perubiodiverso, etc.
Empresa de Servicios: - Descapsulado - Prensado - Envasado (botellas o granel)
Agricultor
Instuciones Internacionales IICA, GTZ, SECO, CAN, FIP, MAE Italia, etc.
ONG’s Terre des Hommes, CIED, SEPAR, DESCO, OXFAM, etc.
Acopiador
Empresa
GDO (Wong, Metro, Plaza Vea, etc.) y Pequeños Distribuidores
Consumidor local
Distribuidores/ Empresas Intenacionales Consumidor Internacional
CADENA DE VALOR
Fuente: Tomado de FAO, 2010; elaborado por el autor.
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
El Cuadro 14 muestra la pología de los actores según su posición (interna o externa) respecto a la cadena de valor y al territorio. Los actores internos a la cadena de valor son aquellos que parcipan en la formación del precio nal del producto. Estos pueden ubicarse dentro del territorio de producción o fuera, como en el caso de empresas extranjeras comercializadoras y trasformadoras que adquieren el aceite trasformado y lo venden directamente o lo ulizan como insumo para la producción de otros productos.
Cad 14. Caaa d a d a ada d m CADENA DE VALOR
O I R O T I R R E
Interno
Externo
Agricultores
Restaurantes
Acopiadores
Ins�tuciones y Programas
Empresas
Fabricantes de Maquinarias
Consumidores
ONGs Peruanas
Distribuidores Nacionales
Universidades y Laboratorios
o n r e t n I
Proveedores de insumos
T
o n r e t x E
Empresas Extranjeras
ONGs Internacionales
Distribuidores Internacionales
Ins�tuciones Internacionales
Consumidores Internacionales
Univerdidades Extranjeras Centros de Inves�gación Extranjeros
Fuente: Elaborado por el autor.
Los actores internos al territorio que no parcipan en la creación de valor, son aquellos que pueden tener papel de facilitadores, como las ONGs o las instuciones gubernamentales, los centros de invesgación como las Universidades y laboratorios, aquellos que fabrican las maquinarias úles para la producción, los proveedores de insumos agrícolas y los restaurantes. Los actores externos en ambos parámetros, son normalmente idencados como facilitadores y centros de invesgación.
2.1 LOS ACTORES DE LA CADENA: CARACTERÍSTICAS Y RELACIONES a. ACOPIADORES: Los acopiadores son sujetos que se dedican a agrupar la producción de diversos agricultores de la zona en la que se encuentran, además de hacer una primera selección y limpieza de las semillas decapsuladas. Muchas empresas consideran fundamental la labor de esta gura. Efecvamente, debido al mal estado de la mayoría de las carreteras, a la falta de medios de comunicación y a la existencia de una alta fragmentación de la producción entre los centenares de pequeños agricultores esparcidos por amplios territorios salvajes, la labor de estos sujetos se revela esencial. Los acopiadores generalmente enen sus negocios en el centro de los pueblos, tarea que facilita la venta de semillas a los compradores. Normalmente ganan entre 0,3 y 0,4 dólares11 por kg de semilla respecto al precio de compra. Algunos de los fallos de mercado del sacha inchi que se produjeron, fueron consecuencia del comportamiento de estos actores que intentaban aumentar sus propias ganancias ulizando su posición, pues poseían información de la cual carecían los otros dos eslabones de la cadena (agricultores y empresas).Esta 11
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El po de tasa de cambio USD/PEN ulizado en el presente documento, hace referencia a la media del mismo a lo largo del año 2012, igual a 2,6. Fuente: www.sbs.gob.pe
La cadena productiva del sacha inchi
asimetría informava les permia aumentar el precio de venta de la unidad de semilla a las empresas y, en otros casos, disminuir el precio de venta a los agricultores, permiéndoles obtener ganancias más altas. Asimismo, esta gura incrementa su importancia en la cadena cuando las empresas que requieren de sus servicios se encuentran ubicadas fuera del territorio de producción. Sin embargo, aquellas que se hallan dentro de estos territorios, normalmente integran la gura del acopiador dentro de las mismas o, en algunos casos, cuentan con culvos propios y agricultores asociados. b. AGRICULTORES: Se trata generalmente de pequeños productores que pueden contar con parcelas muy pequeñas, que van aproximadamente de un cuarto hasta cuatro hectáreas. La mayoría de ellos son habitantes de las comunidades navas de la selva alta y baja. Estos agricultores se caracterizan principalmente por carecer de una visión de mercado y por basar su economía en la supervivencia y autosuciencia, consumiendo aquello que culvan. La confrontación entre la visión de los agricultores y la de las empresas, las cuales poseen una visión de mercado más globalizada, hace nacer muchas dicultades entre ellos. Dichas dicultades se centran, principalmente, en las relaciones que se establecen entre estos dos colecvos y en la elaboración de los contratos de suministro de semillas, debido a que las empresas deben enfrentarse a un mercado moderno y respetar sus requerimientos, centrados especialmente en los empos y en las candades que demandan esos mercados. Debido a estas discrepancias surgió un clima de desconanza entre estos dos grupos, como consecuencia de las acciones de los agricultores, los cuales presentaban una connua disposición a no respetar los contratos espulados con las empresas. Algunas de las acciones llevadas a cabo por los agricultores y por las que no se respetaban dichos contratos fueron, en primer lugar, el abandono del culvo de sacha inchi por otro más rentable; y en segundo lugar, la venta de partes importantes o la totalidad de la cosecha a otros compradores “ S ” , como declararon la mayoría de los gerentes de las empresas que fueron entrevistadas. Como señalan algunos emprendedores, la falta de un espíritu asociavo entre los mismos agricultores hace empeorar aún más la situación, obstaculizando la creación de un sendo de responsabilidad. Este colecvo carece de una organización sólida con la cual desarrollar un sendo de pertenencia a una comunidad o grupo, que podría liderar el proceso de producción agrícola y poner en pie un sistema de control que sancionase a todos aquellos que no respetasen los términos establecidos en los contratos. Además, la fragmentación y dispersión de la oferta diculta los procesos de integración y organización vercal de la cadena. Dichos procesos, llevarían a una estabilidad y organización en la oferta de materia prima, con una consecuente disminución de los costos de transacción y un aumento de la rentabilidad en ambas fases, la agrícola y de trasformación. La desorganización de este eslabón condiciona enormemente los precios de producción del aceite, ya que su precio llegó en 2012 a 5,5 dólares el kg, frente a un precio medio de 2 dólares el kg en el mismo período. El incremento del precio fomentó su culvo, aumentando el número de agricultores y re-estableciendo el precio a los niveles anteriores. El personal técnico del IIAP arma que, hasta la fecha, en San Marn puede “ 2000 táreas de sacha inchi” , distribuidas en 1000 pequeños productores que culvan de 0,5 a 4 hectáreas de esta planta. Asimismo, esta región puede contar aproximadamente con 48 Comités, con un promedio de 20 productores cada uno, los cuales trabajan con las empresas del territorio a través de contratos formales e informales. En la totalidad de los casos, los agricultores reciben asesoría técnica de las empresas y de instuciones como IIAP, GTZ, INIA, entre otras. Esto se debe, principalmente, a que no se trata de un culvo generalizado entre las comunidades. Además, son las mismas empresas las que les proveen de semillas mejoradas, generalmente procedentes del INIA e IIAP. En algunas ocasiones, también les proporcionan la maquinaria necesaria para el decapsulado de las semillas, y se encargan de los costos de cercación de los culvos,
41
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
normalmente de la cercación orgánica. La red instucional de San Marn organiza encuentros entre agricultores (el úlmo que se celebró fue el III Encuentro Regional de los Productores de Sacha Inchi), escuelas de capacitación, talleres y ferias regionales de alimentación. En esta región, según los datos de la DRASAM (Dirección Regional Agraria San Marn), en 2011 exisan 16 Organizaciones de productores de sacha inchi, con un total de 361 socios acvos, es decir, un promedio de 22 productores por comité, donde cada socio acvo de media culvaba 0,5 hectáreas de esta planta. Mientras que la supercie sembrada ascendía a 518 hectáreas, la supercie de producción resultaba ser de 157 hectáreas, es decir, un 30% del total. En ese año se cerraron 40 acuerdos comerciales entre empresas y organizaciones de productores (DRASAM, 2011) 12. La formación, en la mayoría de los casos, fue fomentada por las mismas empresas, con ayuda de facilitadores internacionales como GIZ y SECO, y de instuciones nacionales como GORESAM a través de proyectos y programas como Perúbiodiverso y PDRS. En el territorio de Lamas (San Marn), se encuentra la sede de la Cooperava Oro Verde, la cual organiza a los agricultores que se dedican al culvo de diferentes productos agrícolas (en su mayoría café y cacao, pero también miel, panela y aceite de sacha inchi) y les proporciona asesoramiento técnico. Esta cooperava posee los equipos necesarios para la fase de transformación, añadiendo valor a los productos, que posteriormente son comercializados tanto a nivel nacional como internacional. Con los años, Oro Verde ha conseguido diferenciar sus productos a través de la obtención de varias cercaciones (Orgánica, Fair Trade, Rainforest Alliance, UTZ, entre otras) y recientemente empezó a trabajar con el sacha inchi, diversicando la producción agrícola de algunos productores y comercializando el producto bajo la marca ‘Ecoline’, de la empresa local Shananna. Hasta el momento “ 30 S I ” , según una declaración del Gerente D. Sandro Aquino. La presencia de organizaciones de productores estructuradas permiría un mayor uso de las tecnologías de manejo agronómico, mejorando la calidad y producvidad de los culvos, a través de una relación estable con empresas y centros de invesgación. Los culvos de esta planta son, en su mayoría, impulsados desde arriba según el concepto top-down, probablemente debido a una escasa e incipiente idencación de los colecvos territoriales con dicho culvo. Además, la evolución de los precios de las agrícolas y de otros productos oriundos13 como el café o el cacao, condicionan su producción, debido a que un mayor rendimiento económico de estas hace que el sacha inchi sea abandonado. Según Perúbiodiverso (2009) y DRASAM (2011), el costo de producción agrícola de un kilogramo de semilla varía entre 1 y 1,3 dólares, mientras que su precio de venta a las empresas es de 2,3 dólares el kg, es decir, el precio ‘refugio’ que se estableció en la mayoría de los convenios entre las empresas y los agricultores. De todos modos, la falta de una organización horizontal del eslabón agrícola no permite la negociación de las condiciones según los intereses de los actores que la representan. Es necesaria la intermediación de facilitadores independientes que conserven y aseguren los intereses de este eslabón, que debería ser el más interesado en la acvación del círculo virtuoso de la calidad. Esta ausencia se enfaza, sobre todo, en la toma de decisiones. En ninguna de las tres Normas Técnicas Peruanas (NTP) redactadas, aparece la parcipación de asociaciones de agricultores. Asimismo, la reciente promulgación de la resolución 1577 de la Comunidad Andina 14 representa un desao para la promoción del culvo en Perú y para su reconocimiento como IG. Esta resolución tendrá un efecto negavo para los agricultores, disminuyendo el precio de la materia prima a través de una mayor compevidad agrícola. La principal amenaza es la descentralización del culvo y la pérdida de su incipiente carácter colecvo. La caída del precio podría llevar al abandono de su producción, como sucedió la primera vez que se promocionó el culvo de esta planta, en 2005, donde el precio de venta se encontraba por debajo de su costo de producción (entre 0,30 y 0,60 dólares el kg, según el valor de cambio medio de 2005). Véase el siguiente enlace: hp://www.agrodrasam.gob.pe/sites/default/les/Informaci%C3%B3nSachainchik.pdf C : ://www..//161410/ ----z----------/ 14 Véase el siguiente enlace: hp://intranet.comunidadandina.org/Documentos/Gacetas/Gace2195.pdf 12 13
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La cadena productiva del sacha inchi
c. EMPRESAS: Según el SIICEX (Sistema Integrado de Información de Comercio Exterior) 15, hasta la fecha existen más de cien empresas que trabajan con sacha inchi, de las cuales el 70% son exportadoras, lo que reeja que el mercado de este producto es principalmente internacional, debido, entre otras cosas, a su alto precio de venta (SIICEX 2013). Como se muestra en la Cuadro 15, las mayores empresas que trabajan con Sacha Inchi son MYPEs, a excepción de Unique, empresa líder en el mercado de cosmécos.
Cad 15. Ppa mpa mazada mazada d pd abad a ba d aha h
PRINCIPALES EMPRESAS COMERCIALIZADORAS DE SACHA INCHI Empresa
Nº de trabajadores
3QP
2
AGROINDUSTRIA OSHO
23
AGROINDUSTRIAS AGROINDUSTRIAS AMAZÓNICAS
7
AMAZON HEALTH PRODUCT
22
BLAMAC
4
ECOANDINO
90
EL CACHIQUE
10
OLIVOS DEL SUR
76
PEBANI
6
RODA SELVA
10
SHANANTINA
11
UNIQUE
2.807
Fuente: SUNAT, SUNAT, 2012-2013
Recientemente, Recientemente, las empresas han iniciado a ofrecer contratos a los productores, estableciendo un precio mínimo (o refugio) de compra de la semilla, de aproximadamente 2,3 dólares el kg. Como se señaló con anterioridad, en 2012, el precio de esta llegó a alcanzar los 5,4 dólares el kg, más del doble del precio refugio establecido, establecido, debido principalmente a la escasez de materia prima. El gerente de una de las 6 empresas que conformaban la Mesa Técnica en 2012, explica que este órgano negocia el precio de compra de la semilla junto al “ S Inchi” , aunque no se ha encontrado información acerca de esta gura en ningún documento ocial. Cada empresa trabaja con algunos comités, dependiendo de la zona y de las capacidades de producción Para prevenir los problemas de la uctuación de precio y candad, algunas empresas comenzaron a instalar culvos propios para así asegurarse un abastecimiento connuo de semilla a un precio compevo y estable. Esta acción, a su vez, les permiría controlar la producción, el manejo agronómico, la introducción de innovaciones tecnológicas, la experimentación con nuevas accesiones y especies, y la estandarización de la calidad para cumplir con los requerimientos del mercado en materia de calidad, candad y empo de entrega. Además, los problemas de uctuación llevaron a este colecvo a deslocalizar la producción de materia prima, importando semillas de los países colindantes como “C, E y B” , B” , como arma el presidente de una importante empresa.
15
Véase el siguiente enlace: hp://www.siicex.gob.pe hp://www.siicex.gob.pe 43
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica Geográfica en el Perú
La mayoría de las empresas no se dedican únicamente a la producción de aceite de sacha inchi y de sus derivados, sino que cuentan con una amplia cartera de productos creados a base de diferentes vegetales locales como harinas, bebidas, cápsulas, aceites vegetales, snacks, cosmécos, etc. Casi todas ellas cuentan con diversas cercaciones como USDA Organic, EU Organic, Fair Trade, Rainforest Alliance, entre otras, añadiendo, de esta forma, valor y calidad a los productos que comercializan. Respecto a las empresas peruanas que comercializan productos a base de sacha inchi, se puede observar una división de las mismas en dos grandes bloques. En el primer bloque encontramos a las empresas productoras dentro de la región de San Marn, donde se concentra la mayor producción de sacha inchi, que según la Mesa Técnica Técnica comprende “ 80% P” , con más de 1500 productores, ya sea organizados en Comités y Asociaciones o, por el contrario, no organizados. Asimismo, en esta región se puede encontrar la única cadena de suministro organizada, constuida por pequeñas asociaciones o comités de agricultores que trabajan conjuntamente conjuntamente con las empresas presentes en la región, y donde estas han zonicado el territorio, es decir, controlan una parte de la zona reduciendo así los conictos entre empresas debidos al abastecimiento de semillas. En 2011 eran cinco las empresas en esta región que contaban con acuerdos comerciales formales y con comités de productores (DRASAM, 2013)16. Estos actores privados junto con otros de carácter público, forman parte de la Mesa Técnica de Sacha Inchi, un importante organismo colegial donde se toman decisiones acerca del culvo y su desarrollo. La constución de dicha instución ofrece un buen ejemplo de acción colecva territorial, señal de la existencia de un sistema local de producción agroindustrial que puede contar con una red de relaciones muy estrechas entre los diferentes diferentes actores. Como se mencionó precedentemente, la falta de una organización regional de agricultores impide la representación de sus intereses en las decisiones tomadas por dicha mesa. Entre las empresas Sanmarnenses parece exisr un alto nivel de cooperación e intercambio de información y tecnología. Hay que subrayar la presencia en el territorio de Amazon Health Product y de Agroindustrias Amazónicas, las cuales se repareron el mercado internacional con más del 50% del total de exportación en el año 201217. Sin embargo, Agroindustrias Amazónicas actualmente no forma parte de esta Mesa Técnica. Esta empresa es una de la más representava representava el culvo de sacha inchi, ya que ha logrado desarrollar en menos de 15 años un mercado internacional de este aceite. A diferencia del resto, solo se dedica a la trasformación de productos elaborados a base de sacha inchi (aceite, harina proteica, snacks), y está en contacto con unidades agrícolas y trasformadoras en Ecuador y Colombia. También ene relaciones comerciales con Estados Unidos, Japón y Europa,y principalmente con Francia. Fue en este país donde ganó en 2004 la Medalla de Oro al Mejor Aceite Extra-Virgen en el Concurso Mundial de Aceites Comesbles de París, reconocimiento que dio al producto más visibilidad y lo lanzó al comercio mundial. Ha sido la primera y, hasta la fecha, la única empresa que logró superar el escollo del mercado europeo representado por el ‘Aceite de Inca Inchik’ (Diciembre 2012). 2012 ). Novel Food , para el producto ‘Aceite Como arma el mismo gerente, el objevo de su empresa es “ z 15 ” , en confrontación a los 21 dólares por litro que de media reciben las empresas. Esta estrategia compeva basada en el precio, hace vislumbrar una perspecva orientada a la estandarización de la calidad y a la disminución de costos de producción. Probablemente, esto podría llevarse a cabo a través de la deslocalización de la producción agrícola en aquellos lugares que pudiesen proporcionar más estabilidad y organización de la oferta, así como recurrir a economías de escala, lo cual necesita de un mayor volumen de materia prima y en candades estables. El segundo bloque está formado por aquellas empresas que no se encuentran ubicadas dentro del territorio de San Marn, algunas de las cuales sí que parcipan en la toma de decisiones más importantes, como la elaboración de Normas Técnicas Peruanas (NTP) a través del Comité Técnico de Sacha Inchi que ene carácter nacional 18, pero no forman parte de la Mesa Técnica. Parece exisr una relación tensa y Ibídem nota 8 Véase el siguiente siguiente enlace: hp://www.siicex.gob.pe/siicex/ hp://www .siicex.gob.pe/siicex/apb/ReporteProd apb/ReporteProducto.aspx?psect ucto.aspx?psector=1025&preporte=p or=1025&preporte=prodemprvolu&pvalor=1 rodemprvolu&pvalor=1945 945 18 Véase la presentación disponible disponible al siguiente enlace: hp://www.siicex.gob.pe/siicex/ hp://www .siicex.gob.pe/siicex/resources/calidad/ resources/calidad/ 431471990rad3 431471990rad304B4.pdf 04B4.pdf 16 17
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La cadena productiva del sacha inchi
compeva entre los grupos que conforman estos dos grandes bloques. Según los tesmonios recogidos, el costo de producción de un litro de aceite alcanza de 12 a 15 dólares aproximadamente, “pudiendo llegar a 20 dólares según el precio de la semilla” como arma un empresario. Para la producción de un litro son necesarios cerca de 5 kg de granos de sacha inchi. El precio de venta al por mayor varía entre 20 y 24 dólares, dependiendo del formato de presentación del producto; en el caso de botellas de 250 ml su precio de venta varía entre 6 y 7 dólares, mientras que 200 litros a granel pueden llegar a costar 21 dólares el litro. Del proceso de extracción queda la torta, constuida por los restos de las semillas una vez que han sido prensadas. Su precio de venta al por mayor es de 2 dólares el kg, kg , y se obenen entre dos y tres kg de torta por litro de aceite extraído. Es evidente que las empresas ubicadas en el territorio de San Marn enen menores costos de búsqueda y recolección de materia prima que aquellas que no se encuentran dentro de esta región. Además, cuentan con más información sobre el volumen de producción agrícola, debido al contacto codiano con los agricultores y con las comunidades productoras. De entre todas las empresas peruanas que comercializan con sacha inchi podemos disnguir dos pos: 1) Empresas trasformadora trasformadora y comercializadoras: comercializadoras: se trata trata de todas aquellas empresas empresas que compran semillas semillas a los acopiadores, directamente directamente a los agricultores o que enen culvos propios. Igualmente, procesan y venden el aceite con marca propia o a granel, como insumo o producto terminado. Son normalmente pequeñas y medianas empresas que cuentan con su propia planta de extracción y con la maquinaria necesaria para la transformación transformación del producto (desde las descapsuladoras hasta la envasadora); envasadora); generalmente proporcionan proporcionan servicios industriales a todas aquellas empresas que tercerizan tercerizan los procesos de producción. En algunas ocasiones, puede que estas empresas compren directamente un volumen de aceite como insumo para la producción de derivados (cápsulas, cosmécos, integradores, etc.). 2) Empresas comercializadoras: comercializadoras: este grupo está representado representado por empresas que compran el aceite que producen otras unidades empresariales y, posteriormente, posteriormente, lo comercializan bajo su propia marca, como ocurre con la mayoría de las empresas distribuidoras de productos naturales. Entre estos dos pos, existen empresas, en su mayoría MYPEs, que se dedican a la compra de semillas para luego tercerizar la extracción del aceite, apoyándose en otras empresas trasformadoras y pagando un tanto por litro de aceite producido o por kg de semillas trabajadas, de media “1,50 dólares por litro de aceite extraído”, extraído”, como indica el gerente de una empresa comercializadora. En general, parece que las empresas se decantan más por una diferenciación de sus productos a través de las cercaciones (principalmente por aquellas de comercio justo y producción orgánica) y por la competencia en los precios mediante la reducción de los costos de producción.
Imagen 1. Ejemplos de marcas de productos a base de sacha inchi
Fuente: Elaborado por el autor 45
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Aunque en la mayoría de los casos las empresas nacionales presenten el producto como ancestral y navo de la Amazonía Peruana, por el momento no existen otros países productores que reclamen el origen del sacha inchi como propio, aunque estén aumentando los tentavos de fraude dentro del territorio nacional, debido a la existencia de productos que no respetan las NTP. La creciente valorización del sacha inchi en su conjunto, no tardará mucho en hacer brotar otras iniciavas producvas en diferentes países tropicales, cuya situación podría empujar, en un futuro, a un mayor interés por la implementación de herramientas de protección internacional como el reconocimiento IG. Por el momento, el establecimiento de las NTP permite la normalización de la calidad del producto, su control y un sistema de sanción, reduciendo los riesgos de fraude dentro de los connes nacionales.
d. DISTRIBUIDORES NACIONALES: La Grande Distribución Organizada (GDO) peruana (Wong, Plaza Vea, Metro, etc.) resulta un actor “im prescindible” para la comercialización del aceite de sacha inchi, como arma el gerente de una importante empresa relacionada con el sacha inchi. En Lima se concentra la mayoría de la población, con casi 9 millones de personas registradas en 2012, es decir, el 29% del total del país (INEI, 2012); por lo tanto, resulta ser el mercado nacional más importante para los productos elaborados a base de sacha inchi. El volumen de venta de las GDO en Perú sigue creciendo, ganando un poder de contratación similar al europeo. Los dos grandes grupos, Cencosud (Wong y Metro) y Supermercados Peruanos S.A. (Plaza Vea, Vivanda, Mass y Economax) representan los mayores distribuidores de Perú. Este actor compra a las empresas lotes de botellas de 250 ml de aceite por un precio aproximado de 6-7 dólares el litro. El precio de venta al consumidor se encuentra, normalmente, entre los 9 y 1 0 dólares, es decir, que su precio aumenta en un 35%. Generalmente las empresas suelen pagar a las grandes supercies por el derecho a estar en sus estantes. El costo comprende el 25% sobre la facturación del lote vendido por dicho establecimiento.
e. RESTAURANTES LOCALES: Algunos restaurantes de la región de San Marn ofrecen platos picos elaborados con productos a base de sacha inchi. Se trata de una iniciava muy interesante e importante para la promoción de este producto bajo un perl comercial o de consumo, y principalmente va dirigido a la colecvidad local. Su inclusión en platos picos y gourmet por parte de chefs internacionales podría fomentar su idencación con el territorio, como sucedió en el caso del z T de Marruecos19.
f. CONSUMIDORES: El principal mercado de venta de aceite de sacha inchi, tanto para consumo alimencio como insumo para cosmécos, es el internacional, sobre todo Japón, Canadá, Estados Unidos y Europa. El consumo nacional y el conocimiento de los consumidores acerca de este producto están en auge. Actualmente, el sacha inchi se puede encontrar en las estanterías de todos los grandes distribuidores nacionales, no solo como aceite, sino también en forma de snacks, salsas, y mezclado con otros productos como ají, queso, etc.
g. FABRICANTES DE MAQUINARIAS: Existen fabricantes nacionales de maquinaria especíca para la trasformación del sacha inchi 20, pero también existe la posibilidad de adaptar equipos de extracción en frío de otros aceites vegetales como el de oliva, procedentes de países como España e Italia. 19
20
46
Véase estudio de caso 1 en: U P, T y P. Gí y . FAO, 2010. Véanse los sios web: hp://www.sachainchimaquinarias.com/ y hp://negavimdelperu.com/Negavim/5/Extraccion%20de%20Aceite.htm
La cadena productiva del sacha inchi
h. ONGs NACIONALES E INTERNACIONALES: El desempeño de estas organizaciones a lo largo de los años en relación al sacha inchi fue importante. A connuación se presentan claros ejemplos de iniciavas emprendidas por algunas organizaciones no gubernamentales, las cuales junto a otras instuciones, asumen un papel de facilitadores en los procesos de sensibilización de los productores agrícolas. Desde 2007, Terre des Hommes-Italia y CIED-Perú vienen desarrollando proyectos en la Cuenca del Quimiriki, donde producen, trasforman y comercializan este culvo, a través del proyecto “Producción y comercio justo de café orgánico y sacha inchi de la Cuenca de Quimiriki - Perú” con el apoyo de la fundación CARIPLO y Slow Food, llegando a parcipar en el Salón Internacional del Sabor y Tierra Madre. Lograron constuir una cooperava llamada L T, formada por mujeres, las cuales, gracias al apoyo de estas organizaciones, llevan a cabo todo el proceso de trasformación del sacha inchi. Oxfam y Separ, en 200921, trabajaron en otro proyecto de valorización de este culvo como fuente de ingreso para las comunidades peruanas Asháninka. Les proveyeron con equipos de transformación que son ulizados, en la actualidad, por indígenas de la zona para la producción de aceite de sacha inchi y para el tostado de las semillas, aunque se trata de una producción escasa y muy fragmentada. DESCO, ONG peruana, también desarrolló un proyecto con este culvo en Oxapampa, el cual no obtuvo los resultados esperados y fue abandonado. La organización VIS, promueve el culvo y trasformación de sacha inchi en la región de Loreto 22.
i. INSTITUCIONES INTERNACIONALES: La presencia de instuciones internacionales ha sido fundamental para el desarrollo de la cadena de sacha inchi, sobre todo en San Marn. A través de diversos acuerdos con endades nacionales, estos facilitadores han promovido, construido y organizado el sistema agroindustrial de dicho culvo en esta región. El Proyecto Perúbiodiverso “ y C Sz - SECO y C A D - GIZ, MINCETUR, MINAM y P, y P N P B P – PNPB. C y ñ , y B í, y z y . E, , y ” (Biocomercio, 2013). Este proyecto se apoya en el desarrollo de estudios ciencos, la organización de talleres y escuelas de campo para los productores, la inclusión del producto tanto en ferias nacionales como internacionales y, nalmente, en la estrategia de comercialización y valorización. Además, forma parte de la Mesa Técnica de Sacha Inchi. Otra iniciava destacable es el Programa Desarrollo Rural Sostenible (PDRS). Se trata de un programa establecido por la GIZ y por otras instuciones peruanas, y promovido por el Ministerio Federal de Cooperación Económica y Desarrollo de Alemania (PDRS, 2013). Su objevo es la mejora de los medios de vida de la población rural de Perú “mediante un manejo sostenible de los recursos naturales” , a través del “fortale y í ” (PDRS, 2013). San Marn es una de las zonas de interés del programa y, consecuentemente, también lo es la cadena de valor de sacha inchi. El FIP, Fondo Italo-Peruano, forma parte de la Cooperación Italiana y desarrolló dos proyectos relacionados con el sacha inchi: “Mejora de ingresos de pequeños agricultores - hombres y mujeres - jefes de familia de 11 distritos de Rodríguez de Mendoza con la producción de Sacha Inchi”, nalizado en 2010, y “Mejoramiento de la calidad de vida de la población de 3 distritos ubicados en el ámbito del VR AE a través de la instalación y comercialización de los culvos de Sacha Inchi y cacao” nalizado en 2011 (FIP, 2013).
21 22
Véase el arculo disponible en hp://www.oxfamamerica.org/arcles/looking-to-sacha-inchi-for-their-future Véase el sio web: hp://www.volint.it/vis/per%C3%B9-il-vis-promuove-lo-sviluppo-sostenibile-del-popolo-achuar 47
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Los recursos técnicos y económicos que estas instuciones proporcionan, así como la capacidad de intermediación con otras endades y de resolución de conictos internos de la cadena, son instrumentos fundamentales para el desarrollo equilibrado de la misma. En San Marn, su acción resultó fundamental para el desarrollo de una cadena de valor, sobre todo por los esfuerzos implementados para organizar a los productores y para estabilizar aún más la producción agrícola. Estas endades pueden supervisar los procesos internos de la cadena como la distribución equitava del valor, el fortalecimiento de los eslabones más débiles y la organización de la oferta. Resulta muy importante el papel que podrían desarrollar en la implementación y registro de marcas colecvas, así como de Denominaciones de Origen o Indicación Geográca. En ambos casos, se necesitarían endades para liderar estos procesos en las primeras fases de su desarrollo. Durante el año 2012, se realizaron muchas acvidades relacionadas con el sacha inchi, entre las cuales se destacan los acuerdos comerciales que se establecieron entre productores y empresas, la innovación técnica, la invesgación cienca (como la redacción del dossier necesario para el Novel Food Europeo) y la organización de productores a través de talleres, reuniones, etc. 23
j.
INSTITUCIONES NACIONALES:
Junto a las demás instuciones internacionales, aquellas peruanas desarrollan una función esencial en la organización de la cadena proporcionando asistencia técnica en disntas áreas de trabajo como la invesgación cienca o la comercialización. Algunas de las instuciones nacionales más destacadas son INDECOPI, que se encarga del registro de marcas y evaluación de solicitudes de DO; el MINAG-Ministerio de Agricultura, a través de AGRORURAL (Programa de Desarrollo Producvo Agrario Rural), AGROIDEAS, “ y , y í ñ y y ” (AGROIDEAS, 2012), SENASA (Servicio Nacional de Sanidad Agraria) y AGROBANCO “ ” (AGROBANCO, 2013); SIERRA EXPORTADORA, “O P Ej P Cj M, y j S y va” (SIERRA EXPORTADORA, 2013); PROMPERÚ (Comisión de Promoción del Perú para la Exportación y el Turismo); los Gobiernos Regionales, como por ejemplo GORESAM en el caso del sistema de producción de San Marn. En la actualidad, el sacha inchi cuenta con una producción fragmentada en todo el territorio nacional: Madre de Dios, Huánuco, Oxapampa, San Marn, Rodríguez de Mendoza, Cuenca del Ucayali (Pucallpa, Contamana y Requena), Putumayo y los alrededores de Iquitos, y Caballococha, que es reconocida por el Comité Técnico Nacional de Sacha Inchi. Este comité está compuesto por 26 unidades (12 empresas, 8 instutos técnicos entre los cuales GIZ, INIA, IIAP, Universidades, Laboratorios y Cercadoras, y 6 endades del Sector Consumo como Promperú, DIRCETUR, Gobierno Regional San Marn Desarrollo Económico, SENASA, INS, DRASAM) cuyas tareas se explican en las NTP sobre producción y trasformación de sacha inchi, que enen como objevo mejorar y armonizar el nivel de calidad de los productos ofertados en el mercado. A medio y largo plazo, el Comité marcó como objevo la “integración de la cadena de sacha inchi z Jí, C, L, P, Az, S M, Uy y Madre de Dios” 24.
Sin embargo, la principal fuente de producción, trasformación e invesgación de este culvo se encuentra en la región de San Marn, donde cuentan con un sistema producvo local organizado. Respecto a la situación actual del sacha inchi en el territorio nacional, esta se ve afectada por fenómenos de ‘regionalismos’, los cuales enden a crear cierta competencia entre los diferentes territorios. Esta 23
24
48
Véase estudio de caso 1 en:U P, T y P. Gí y . FAO, 2010. Véase el siguiente enlace: hp://perubiodiverso.pe/assets/Informe-anual-PBD-2012.pdf
La cadena productiva del sacha inchi
compevidad podría suponer, en un futuro, un gran obstáculo para este culvo y su reconocimiento como IG, debido a que se requiere cierta cooperación a nivel nacional entre todos los eslabones de la cadena. Hasta la fecha, el Comité Técnico de Sacha elaboró y publicó tres Normas Técnicas Peruanas sobre el sacha inchi: NTP 151.400 “Aceite de Sacha Inchi. Requisitos” en 2009, NTP 151.401 “Aceite de Sacha Inchi. Buenas práccas de manufactura” en 2012 y NTP 151.402 “Sacha Inchi. Buenas práccas agrícolas para el culvo” en 2012.
k. CENTROS DE INVESTIGACIÓN Y UNIVERSIDADES: La diversidad de especies existentes, la necesidad de mejora del manejo del culvo y la búsqueda de una estabilidad genéca para la denición de una calidad estándar, destacan la importancia de estos actores. Su tarea es fundamental para la denición de una calidad especíca del sacha inchi. La Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM), fue la primera universidad peruana en interesarse en esta planta a nivel académico, gracias a los esfuerzos del D. Rojas. INIA, IIAP, la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), s on algunos ejemplos de instutos de invesgación y universidades acvos a lo largo de la cadena.
l. PROOVEDORES: La constante evolución de la cadena del sacha inchi hace nacer nuevas empresas proveedoras de insumos, desde las materias primas agrícolas hasta los envases. En este úlmo caso, hay que subrayar que hasta hace unos años las botellas de vidrio oscuras necesarias para la conservación del aceite se producían en Chile. Sin embargo, en la actualidad existen algunas empresas peruanas que se dedican a la fabricación de estas botellas.
m. DISTRIBUIDORES Y EMPRESAS INTERNACIONALES: Estos actores externos son los principales desnatarios del aceite de sacha inchi. Se trata de intermediarios comerciales y empresas trasformadoras y comercializadoras del sector alimentario, cosméco y farmacéuco. Al igual que ocurre en el caso de las empresas nacionales, estos actores pueden ejercer una función comercializadora o de uso del aceite como insumo para otros productos. En los mercados internacionales el aceite de sacha inchi se puede encontrar por 25-30 dólares en formatos de 250 ml, es decir, entre 100 y 120 dólares el litro. En el sector cosméco, el aceite de sacha inchi es ulizado para la composición de varios productos, los cuales presentan un precio de mercado mucho mayor respecto a otros productos que usan este aceite con nes alimencios.
2.2 LA CADENA DE VALOR DEL ACEITE DE SACHA INCHI En la cadena de valor del aceite de Sacha Inchi se pueden disnguir dos sub-cadenas diferentes: una que hace referencia al mercado nacional y otra al internacional. En los Cuadros 16 y 17, se puede apreciar como el precio por unidad en el extranjero, dobla su valor con respecto al precio del mercado nacional. En relación al mercado nacional, es importante señalar la forma en la que la Grande Distribución Organizada (GDO) genera, respecto a los demás eslabones, una mayor proporción de valor añadido, aunque no aporte ninguna trasformación sica al producto.
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Sin embargo, el valor nal en los mercados internacionales incluye también los gastos soportados para su exportación de Perú, el ete y los costos de importación al país de desno.
Cad 16. Cada d va aa p 1 d a d aha h dóa
CADENA DE VALOR DE 1 LITRO DE ACEITE (DÓLARES) Actor
Precio de venta
Valor añadido
Cota de par�cipación en la construcción del valor
Agricultor (5kg. de semillas)*
11,5
11,5
28,8%
Acopiador (5kg. de semillas)*
13,5
2
5,0%
Empresa**
21-26
7,5 - 12,5
18,8% - 31,2%
GDO***(*)
40
14
35,0%
(*)E va añadd ha d aad b p d mpa d 26 dóa .
*Se tomó como referencia el precio por kilo de semilla mayormente contratado entre empresas y agricultores (2,3 dólares). **Se tomó como referencia el precio medio de venta al por mayor de 1 litro de aceite a granel de un frasco de 250 ml. mulplicado por cuatro. ***E p p ha d aad mpad p md a p m d a d 250 m. p a.
Cad 17. Cada d va aa d 1 d a d aha h dóa
CADENA DE VALOR DE 1 LITRO DE ACEITE (DÓLARES) Actor
Precio de venta
Valor añadido
Cota de par�cipación en la construcción del valor
Agricultor (5kg. de semillas)*
11,5
11,5
11,5%
Acopiador (5kg. de semillas)*
13,5
2
2,0%
Empresa**
21
7,5
7,5%
Distribución Internacional***(*)
100
79
79,0%
(*)E va añadd ha d aad b p d mpa d 26 dóa .
*Se tomó como referencia el precio por kilo de semilla mayormente contratado entre empresas y agricultores (2,3 dólares). **S mó m a p md d va a p ma d 1 d a a a. ***E p p ha d aad mpad p md a p m d a d 250 m da p a.
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La historia del sacha inchi en el territorio peruano
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La historia del sacha inchi en el territorio peruano
3. LA HISTORIA DEL SACHA INCHI EN EL TERRITORIO PERUANO 3.1 RESEÑA HISTÓRICA SOBRE LOS USOS DEL SACHA INCHI La Pk L (perteneciente a la familia de las Euphorbiaceae) no posee una denominación común o ‘vulgar’ que la idenque de forma simultánea en los países donde se produce (Perú, Ecuador, Colombia, Bolivia y Brasil). En el caso de Perú, el término más difundido, y en cierto modo generalizado, es el de ‘Sacha Inchi’, derivado de dos palabras quechuas: ‘sacha’ que signica silvestre, bosque, entre otros vocablos, e ‘inchi’, cuyo término hace referencia al maní. Las primeras referencias sobre sacha inchi en la época pre-inca se circunscriben a algunas alusiones de probables culvos de esta semilla en la civilización Caral: “[...] Azí P, 3000 ñ [...]. A C” (Antúnez de Mayolo, 1981). De conrmarse, el sacha inchi que por sus caracteríscas edafoclimácas es oriunda de la Amazonía, podría haber sido posteriormente adaptado al litoral por la civilización Caral 25. Antúnez de Mayolo (1981) cita al respecto: “[...] un indicador de la facilidad de su aclimatación, lo da el hecho que haya crecido en nuestro jardín en Lima, así como haber soportado el frío del invierno pasado, sin embargo ha sido
j ” , lo que fortalece la sospecha de que esta planta podría, en antaño, hallarse también en territorios de costa. La frecuente cita de huacos tomórcos moches y chimú 26 que representan al fruto del sacha inchi, lleva a considerar la categorización elaborada por Brack y Bringas (2004) sobre la domescación prehispánica de vegetales y animales: “Cz T ( ñ 1000 .C.): z j y . S y, íz, j , (I .) (Ay, E, A) y semillas” .
Lo mencionado precedentemente permite plantear la existencia de circuitos comerciales (previos a la expansión incaica, a mediados del siglo XV de nuestra era) entre civilizaciones costeñas o del litoral como los chimú con los chachapoyas, los cuales habitan en la ceja de selva o selva alta. Pero no existe información acerca de los waris, cultura de los Andes sureños, que pudieron haber tenido algún contacto con los antepasados de la actual etnia matsiguenga (actual regiones de Puno y Madre de Dios); o los chupaychos (Huánuco) quienes pudieron haber tenido relaciones económicas y culturales con los shipibo-conibo; así como tampoco de los wankas (Junín) que habitaban muy próximos a los actuales descendientes de los asháninkas. Se plantean estas probabilidades dada la cercanía geográca entre las civilizaciones mencionadas, lo cual implicaría intercambio de productos, acvidad muy difundida en la etapa prehispánica. Todo esto se remite al hecho de que las etnias ubicadas en la Amazonía peruana (chachapoyas, matsiguenga, shipibo-conibo, asháninkas) pudieron conocer y usar el sacha inchi. Es durante la expansión quechua (inca) en plena formación del Tahuannsuyu, entre 1425 y 1522 d.C. aproximadamente, que se enen nocias de incursiones en el Ansuyo, como denominaban a la Amazonía. De acuerdo a esto, algunas publicaciones actuales se reeren al sa cha inchi como el ‘maní del Ansuyo’ 27. En el año 1461, durante el reinado de Pachacutec, el príncipe Túpac Yupanqui conquista a los chachapoyas, hecho que les permió acceder a muchos productos amazónicos, como cita Rostworowski (2004): “Los recursos humanos
El complejo ceremonial de Caral (2500 a 1600 a.C.), ubicado a orillas del río Supe en la región Lima, revela complejidad en el uso del espacio dado que sus usuarios y habitantes desarrollaron un programa permanente de remodelación de edicaciones, se le denomina ‘Ciudad Sagrada’ por el papel protagónico en la vida y acvidades económicas y polícas del valle de Supe. Makowski, (2004). 26 Los moche se desarrollaron en la costa norte peruana (actuales regiones de La Libertad y Lambayeque) entre los años 200 y 600 d.C., caracterizado como un estado regional, marcado por cambios tecnológicos y la decoración cerámica que plasma con gran realismo la vida y cosmovisión moche. Se cree que los moches desaparecieron a causa de un Fenómeno del Niño de grandes dimensiones que arrasó la costa norte peruana y sur ecuatoriana. Los chimú se desarrollaron en la misma zona que ocuparon los moches, entre los años de 1350 y 1460(d.C.); se caracterizaron como reino o señorío opulento, combaente y expansivo (ocuparon zonas de las actuales regiones de Tumbes y Cajamarca). Desarrollaron la orfebrería, siendo de muy alta calidad e inuyente; fueron conquistados por el Inca Tupac Yupanqui y anexados al naciente Tahuannsuyo. (Makowski, 2004; Rostworowski, 2006; Del Busto 2006). 27 M IX, X, XI E N P E P. 2004 - 2005 - 2006, (2007) 25
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
y y . E y z con acceso a productos del bosque tropical que eran vitales para los incas, tales como la coca, la miel, diferentes
y , , , , y ” . Es de imaginar que esta zona permió a los quechuas el acceso al sacha inchi. Es importante citar a los quechua-lamistas, emplazados en la actual región de San Marn, parte considerada como Ansuyo durante el Tahuannsuyo y los cuales son los productores y consumidores más conocidos en la actualidad. Esta etnia se supone descendiente de los chancas, cultura surandina que se enfrentó a los quechuas y tuvo que huir a dicha zona debido al avance incaico. Carhuapoma (2009), plantea una sugerente hipótesis donde explica que la forma de estrella del fruto del sacha inchi podría haber inspirado en el diseño de una de las armas ofensivas incaicas: “se pueden encontrar registros de su origen peruano en las culturas preincas nororientales, mediante representaciones de su fruto en huacos, y I, ‘’ ‘z’. E G P, -
, z y z ” . La llegada de los españoles en el siglo XVI y el período de conquista de Lano América no ofrece ninguna información acerca del sacha inchi. No obstante, la multud de exploraciones llevadas a cabo en la Amazonía en los siglos XVI y XVII 28, permieron el descubrimiento de muchas plantas y árboles navos (cacao, tabaco, yuca, achiote, entre otros), el sacha inchi no despertó el interés de los exploradores y misioneros católicos, que fueron los mayores invesgadores de la época. De todas maneras, es probable que muestras de esta euforbiácea fueran enviadas a Europa para su estudio y clasicación, obteniendo su nombre cienco en el siglo XVIII como Pk L . Dicho nombre le fue otorgado por el sueco Carl von Linné en la segunda edición de su obra S Ptarum en 1763: “PLUKENETIA. . Pk , , . P. . 47. . 226. Sj , . R. . I. . 194. . 79. / 2. H I. C . F , . R M ; F . F Ey Pk. y. I76 . 4. ( ), ”. Traducción: “PLUKENETIA. . Pk , y j , . P. . 47. . 226. Sj , . R. . I. . 194. . 79. / 2. H I. C . F z, y . R y M ; F í. F E Pk. y. I76 . 4. ( ), ” En el año 1780 se edita nuevamente la obra de Linné, con el nombre de Sy P (Edio Novissima), donde en referencia a la descripción de Pk V L. se adiciona el concepto de “supra albus ” ( ) . De acuerdo a Antúnez de Mayolo (1981), MacBride hace alusión a los botánicos españoles Hipólito Ruíz y José Pavón, quienes habrían clasicado al sacha inchi “[...] P. ”, j 28
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Se revisó: Cobo, B., (1964). H N M, 1653; B, F. M., (1989). L C F A Uy, 1686; Maroni P., (1988). N Mñ (1738). R PP. A. Z y J. M (1735 - 1740); Gonzales Agüeros, F. P., (1786). D O S F C P FIDE S R S Mí O; Sobreviela, F. M.y Unanue, H., (1963). H C y M, 1790; Izaguirre, P. Fr. B., (2007). H M F P, 1922.
La historia del sacha inchi en el territorio peruano
F P C (1798) y R H V Ry P y C 29. Concretamente, dicha nomenclatura es atribuible al botánico suizo Johannes Müller Argoviensis: “[...] í P. M. A.” (Atúnez de Mayolo, 1981). Otro nombre usado para denir al sacha inchi es ‘Sj ’ , tal como describe el naturalista holandés Georg Everhard Rumphius, en su obra póstuma Herbarium Amboinense (1741) que se enfoca en la ora de la isla indonesia de Amboinia, cuyo espacio geográco tropical se asemeja a la Amazonía. “In Rumphii Auctuario Ua - Pela seu Sajor Baguala ocurrit.
Q Sj , , . F , P-L U , , U, , , , , , S, . Flores ex parvis componuntur racemis, in quibus nil nisi parva viridia apparent capitula, quae sefe aperiunt
, , , , , A S . U R , R , , L , quidam vero fructus in tria tantum dividuntur segmenta.
I B R , U-P, U-T, U-T: A & Sj-M . I , ; C , , , j C lympha coctum.”
Traducción: “In Rumphii Auctuario Ua - Pela seu Sajor Baguala ocurrit.
E Sj , y . Hj , j O , j O, , y , , , , y S, mente dulce.
Pñ , z , puntas, poseyendo una semilla dentro, cubierto de una especie de arcilla, y se pueden ver crecer el fruto , y, A S y. C R í, y -
, , L y , y . C R B 30 , U-P, U-T, U-T & Sj-M. Lz , ; A , , j y C y”. La descripción del Sj se ajusta a las caracteríscas del sacha inchi, que puede signicar su presencia en el territorio asiáco además de ser consumido por la población local, como demuestran los nombres navos citados por Rumphius, con el prejo ‘Ua’.
29
30
Editado por Jaime Jaramillo-Arango en 1952 con el tulo: R H V z Ry P y C B D. H Ríz ñ 1777 1788, y M. Distrito de Amboina (Rees, 1819). 57
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
El mismo nombre Sj se encuentra también en el D U Mè M T G (T Cè). (1863): “PLUKENETIA VOLUBILIS , L. A ’I, ù Sj B (R,
A., I, . 69), E. D C ’ (E, 263). D ’I , ’ , , ê . C à L Pk, , auteur de l´Almagesta, etc.”
Traducción: “PLUKENETIA VOLUBILIS, L. A I, Sj B (R, A., I, . 69), y E. D C í (E, 263). E I , , j , de plato agradable y delicado.”
De acuerdo a la obra mencionada arriba, el Sj B es culvado en el subconnente indio donde sus hojas son consumidas con leche de coco. Asimismo, la misma denición se encuentra en la obra O By del botánico y zoólogo británico Burne (1835) “Pk , Sj R, E. I I , , -k, . A D C . I Ay P. ”; y : “Pk , Sj R, E . E I , y j , y . D D C . E Ay j P. ”. De acuerdo a esta denición, el mismo Burne (1835), Rees (1819) 31, y la Wernerian Natural History Society (1923)32 arman que esta planta fue confundida por la especie P. L., mientras que en la actualidad es reconocida como P. C . En 1892, el Diconnaire de Botanique del botánico francés Henri-Ernest Baillon alude nuevamente al Sj baguala, citando solamente su sinonimia: “ SAJOR BAGUALA (RUMPH.). L Pk L. SAJORE . N. Fç (LAMK) Pk L. SAJORIUM (., G., S., III, 98). Sy Pk L.”
Atúnez de Mayolo (1981) cita otros nombres: “[...] Pk L. [...] ñ A, A, By, C, F, Hy, Pk, P, Sj y V”. En el Perú de los siglos XVIII y XIX, llama la atención que el sacha inchi no haya tenido repercusión alguna en naturalistas y médicos como Antonio Raimondi e Hipólito Unanue, o en exploradores como Balthasar Marnez de Compagnon, quien sondeó el litoral, los andes y la ceja de selva norperuana 33. En el siglo XX, el botánico alemán Augusto Weberbauer también realizó invesgaciones en el territorio peruano y publicó en 1911 la obra D Pzw A Gzü D 34, ampliándose y traduciéndose en 1945 como: E M V A P, sin hacer ninguna referencia al sacha inchi.
31 32 33
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58
T Cyæ:O, U Dy A, S, L, V 27. M W N Hy Sy, V 5, P 2. Se revisó: Sobreviela, F. M. y Unanue H. H C y M (1963), 1790. Raimondi A. E P, 1965. Raimondi A. 50 L , 1955. Marnez De Compañon B. Tj P, 1991. En su traducción al castellano: L A .
La historia del sacha inchi en el territorio peruano
Según Antúnez de Mayolo (1981), a principios del siglo XX se hallaron otras especies de Pk L.: “P MB, í , S M, L y H, P, P. yy [...], P. [...] y P. y [...]. E B P. [...], í P. y [...]. P B P. [...] y P. [...], P. [...]. L P. [...] C, í E Pk. L Gy () P. [...], í ñ P. [...] P. . S Vz P. [...]”. En 1931, el naturalista peruano Fortunato Herrera publicó su C y P , donde cita el primer nombre navo o vernáculo que se ene del sacha inchi: “SACHA YUCHI (Will.).- Plukenea volubilis L. / N.E. del Perú / Euphorbiaceae SACHA YUCHIQUI (Will.).- Plukenea volubilis L. / N.E. del Perú / Euphorbiaceae” Francis MacBride también citó este nombre “[...] Pk , ‘ y’ y ‘ y’ W (1936:561)” (Atúnez de Mayolo, 1981). También hace una descripción de la Pk V L. y, cita los lugares donde esta se culva, aportando el nombre de ‘amui-o’, en su F P. Vol. XIII: “ Plukenea volubilis L. S. P. 1192.1753; 14. P. M. A. L 34: 157. 1865.
Y , y ; 2-6 . ; , y y , y , 7-13 . , 5-10.5 . w, , , ( y y), , ; 9 . w 1 w 5 . , w 6-12 w, 5-w, 3 . ; 20-24; , 1.5 . , y w y 18-25 . ; 3.5 . w, 18 . , 4 y -w, y 15 . .-I, P, 1.. (w ). F.M. N. 7111 (P. ). S M: S R, W 7731 (. M). Jjí, K 3845; 3901 (. Sy).-L: My, K 634; K & S 29927 (. M). I, W 8123 (. M). F K 2056 (. Sy). N Mz, M 6470 (. Sy). Y, P 2210. W y, Rz & P (y, P. ). B; W I. ‘Sacha Yuchiqui’ , ‘sacha yuchi’ (both Wi), ‘amui-o’ (K, H)”. (MB, 1951).
Traducción: “Plukenea volubilis L. S. P. 1192.1753; 14. P. M. A. L 34: 157. 1865. P j , ; 2-6 . ; j , , , 7-13 . , 5-10.5 . , jz , j, (), , ; 9 . 1 5 . , j 6-12 , 5 , 3 . ; 20-24; , 1.5 . , 18-25 . ; 3.5 . , 18 . , 4 , 15 . .-I, P, 1.. ( y ). F.M. N. 7111 (P. ).
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
S M: S R, W 7731 (. M). Jjí, K 3845; 3901 (. Sy).-L: My, K 634; K & S 29927 (. M). I, W 8123 (. M). F K 2056 (. Sy). C Mz, M 6470 (. Sy). Y, P 2210. S z, Rz & P (y, P. ). B; I O. ‘S Y’, ‘ y’ ( W), ‘-’ (K, H).” MacBride no cita a la Pk L. bajo el término ‘sacha inchi’, lo que podría rearmar que este es un nombre moderno o adaptado en estos úlmos 35 años. La obra de MacBride F P, data de 1951, y es el primer documento encontrado en el que se usa dicho término: “S I: A D H ñ T, z , y ‘P P’, , í. P y í () ‘í ’. B I. L, J E E T, í í M A í, pero que nunca se le había hecho saber los resultados, reiteradamente solicitados”.35
Es a parr de mediados del siglo XX que se enen los primeros estudios sobre el uso y las propiedades del sacha inchi. Antúnez de Mayolo es el impulsor, marcando un hito con su obra L N A P (1981). En su trabajo menciona el nombre ‘sacha inchic’, describiendo el lugar y las modalidades de consumo del mismo, incluyendo también la citación del botanista Soukup que en 1970 idencó el uso de la planta: “[...] j (1976) (Az 1978), S M (P), í ‘ ’, ‘í ’ y/ ‘í ’ ‘í’ (A L., L), ‘’ (Az 1978) , z . A Sk (1970:286) í ‘ ’ y j . L Sk (1980: ), Pk L., Euphorbiaceae [...]”.
Reriéndose a los nombres navos, Antúnez de Mayolo (1981) cita a MacBride y a Klug “[...] que halló la designación de ‘amui-o’ entre las tribus huitotos”. El autor reconoce la novedad de estos nombres e indica el tér-
- : “[...] , esta planta deberíamos denominar en lo sucesivo como ‘amui-o’, tanto por corresponder a la designación que le otorgaron los descubridores de sus propiedades, como porque la designación de ‘sacha inchic’ o ‘sacha yuchiqui’ son nombres recientes impuestos por los quechuas [...]” , de los cuales, con mucha probabilidad, procede el actual
nombre de sacha inchi. En su arculo U N A ‘O’ Eí N (1978), Antúnez de Mayolo describe el descubrimiento del sacha inchi durante su viaje a San Marn, subrayando el conocimiento indígena acerca de esta planta, su uso y sus propiedades: “[...] ñ T, z , y ‘P P’, , í. P y í () ‘í ’. B I. L, J E E T, í í M A í mico, pero que nunca se le había hecho s aber los resultados, reiteradamente solicitados. No nos llama la atención
, y ñ í , , [...]. E I. L, , y z z P. D, j , y z sabiduría del vilipendiado tecnólogo quechua” .
Citado en U N A ‘O’ Eí N . En el diario La Prensa del 26 de Diciembre de 1978, pág. 10
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La historia del sacha inchi en el territorio peruano
Asimismo, en dicha obra se reportan los resultados del análisis efectuado a las semillas de Pk Vlubilis L., destacando su potencial alimencio: “[...] 32.5% ; 5% y 62.5% . D 47.5 . E 31.1% . E , y alta calidad que se presta para la extracción de aceite y que puede ser procesada en speller sin necesidad de sol-
í y . E y w, í y y producción de aceite. Empero, el mejor empleo de su pasta residual requiere de un previo descascarado. [...] las
í , í z . S , y j z z , z, y j y . A , y j 68.4% í ( ). E j O y R-R (80-700 ) Azí í ()” . Con esta citación, se destaca el conocimiento de las comunidades indígenas acerca del sacha inchi. Al mismo empo, se señala la dicultad encontrada por los conocimientos indígenas para integrarse en la sociedad peruana, debido principalmente a su idiosincrasia y a los obstáculos impuestos por las propias instuciones nacionales. Precedentemente, el Centro de Invesgaciones para el Desarrollo Rural de la Amazonía Peruana (CIDRAP) explicó cómo el consumo y uso domésco del sacha inchi entre los navos amazónicos era relavamente extenso: “L My, Cy, C, H, S, Y, B Ak, z y z (CIDRAP 1983). L í Sy, C, A, C D y B z y y j y y (CIDRAP 1985). L í: S, A, A, A, A, Cy (), Y, S, H, M, C j (), M, Ak , My, Q S M, Q T, ., y y ‘’, í. L Y, C (), S, Cy j , (CIDRAP 1976)” 36. Esta cita fue ulizada también para desalentar los tentavos de patente de procesos de transformación de sacha inchi por parte de Francia. 37, debido a que se demuestra un conocimiento previo de dichos procesos por parte de las comunidades navas. Carhuapoma (2009), cita a Brack y Soukup, los cuales aclaran el uso del sacha inchi: “E z S M, z ñ , y sea cocida o tostada en la preparación de diversos platos como inchicapi, ají de sacha inchi, cutacho, mantequilla , , , ; j -
j , y (Bk, 1999; Sk, 1987)”. A, Az My (1981) : “[...] oleaginosas ricas en lípidos como el sacha-inchi [...]”.
Respecto al uso medicinal, Carhuapoma (2009) arma que “en diferentes regiones de la selva peruana, las j z , ‘’ (O M, A) z y j (A ., 2004)”. Al respecto, Vega (2011) también describe su uso medicinal en las comunidades: “[...] las semillas macha z y j , j (C, 2009). L y, , , y z y j z . T , y . (C, 2009)” .
Citado en C S I D C. Colegio Nacional Pucharini. Véase el apartado 4.1 para más detalles.
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Asimismo dicho aceite presenta otros usos, como el domésco: “[...] y ”. 38 De acuerdo al IIAP (2009), que cita a Carhuapoma, según el cual son muchas las etnias que hacen uso común del sacha inchi: “E , ñ í y, , , , k, j y, G Pj, , , , , , , , cashibo, amuesha, candoshi, secoya, yagua, huambisa, Arabela, achual, arahuaca, sharanahua, aguaruna, que-
S M, , , Jí y Pz; j mujer indígena”.
La Comisión Nacional contra la Biopiratería cita a la publicación Especies vegetales promisorias de los países C A B (1992), proporcionando otro tesmonio de su uso como medicinal o cosméco: “las y, y, , , , y y - í z - z Pk y z y j ”. 39 En la década de los ochenta, empiezan a surgir un gran interés y estudios ciencos acerca del sacha inchi, el más conocido es el desarrollado por la Universidad de Cornell en 1980 (Basurto, 2009). A nivel nacional, la Universidad Nacional Agraria La Molina (UNALM) fue la primera instución en realizalizar estudios ciencos acerca de este culvo, y en la actualidad, siguen invesgando de manera acva sobre el tema 40. En la década de los noventa, sin embargo los estudios llevados a cabo fueron más puntuales, lo que probablemente impulsó iniciavas de producción industrial. En el año 1994 aparece un documento con los resultados de una invesgación llevada a cabo por diversos especialistas “[...] A z y í , y (M, 2010)”, “[...] y y y ración en la agroindustria” 41. Asimismo dos años más tarde, en 1996, Gloria Arévalo publica E C S I (Pk L.) Azí, y : “[...] z ‘ ’ ‘í ’ (Pk L.) y , í , ñz [...]. E , , , [...]”.
3.2 LA VISIÓN DE LOS ACTORES EN EL RECONOCIMIENTO DEL SACHA INCHI COMO IG Durante el proyecto de invesgación precedente a la elaboración de este documento, se realizaron entrevistas a los actores involucrados en la cadena, lo que permió conocer la visión de los mismos acerca del culvo y de sus productos derivados, así como del proceso de reconocimiento como Indicación Geográca de Perú. Se visitaron los territorios de San Marn (Tarapoto, Lamas, Aviación y Moyobamba), Ucayali (Pucallpa, provincia de Coronel Porllo, distritos de Callería, Yarinacocha y Campo Verde), Junín (La Merced, Pichanaki, Primavera, Pucharini, Sapo, Río Negro, San Marn de Pangoa), Pasco (Oxapampa y Villa Rica) y Lima. En estos lugares se realizaron entrevistas a empresas trasformadoras y comercializadoras, a agricultores de comunidades navas y a instuciones públicas y privadas con carácter cienco y jurídico. Las entrevistas realizadas al eslabón agrícola permieron esclarecer el grado de conocimiento que este grupo posee acerca del culvo y su uso. Se reveló un total desconocimiento de algunos de ellos sobre el uso de este Ibidem nota 1. Caso C F SAS (hp://www.biopirateria.gob.pe/caso9.htm) y Caso ‘Greentech SA’ (://www.../8.) 40 Véase el apartado 4.1 para más detalles 41 hp://www.sidalc.net/cgibin/wxis.exe/?IsisScript=GREYLIT.xis&method=post&formato=2&candad=1& expresión=mfn=006940 38 39
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La historia del sacha inchi en el territorio peruano
recurso, probablemente debido al meszaje con otras culturas y a la pérdida de información de las tradiciones navas. En cambio, otros pobladores de las comunidades armaron conocer y usar la planta desde hace empo. El presidente de la Asociación de Productores de Sacha Inchi, Allima Muro, arma que “no fue sembrado 6 7 ñ , y í z trece plantas para el autoabastecimiento. Era consumido en la alimentación convencional de los lamas en platos
jí , y (íz ) y í semilla” . También parece poseer conocimientos acerca de las propiedades de esta planta ya que arma que “in í z y ” , y con respecto a su uso histórico maniesta que “siempre fue conocido con este nombre y consumido desde mucho antes, tres o cuatro generaciones atrás”.
Igualmente, el presidente de la planta de extracción de aceite de Pucharini (Junín), descendente Asháninka, arma: “ í í , y ñ y z” , lo que señala un uso y conocimiento de las generaciones pasadas 42. Una mujer descendiente de la etnía cocama, de la provincia de Coronel Porllo, Ucayali, narra que sus abuelos “í ( ‘’), y z morras con leche o con plátanos raspados y hervidos” . Lamentablemente no recuerda el nombre que le daban. Otra mujer de Coronel Porllo, descendiente de pobladores Lamas, cuenta que su madre “í 20 y 30 ” . Usaban las almendras para “ z dos” (tostados o asados), y extraían el aceite “moliendo las semillas y preparábamos con él tacaco con plátano” (plátano sancochado y aplastado). Otro poblador de la Comunidad Nava San Francisco de Yarinacocha (Ucayali), de etnía cashibo-cacataibo, indicó que antes del interés que las empresas locales mostraron en los úlmos años, “el sacha inchi no tenía y , ñ contra el colesterol. Era conocido con el mismo nombre y los ancianos obtenían de él el aceite, mediante la cocción y el molido, para aliviar dolores de espalda” , no aduciendo al consumo alimencio del mismo.
Es también importante destacar como algunos pobladores de las mismas comunidades navas y otros pobladores no pertenecientes a estas, arman que cuando las empresas empezaron a promover su culvo entre los agricultores “ z ” , como explica un poblador de la comunidad Santa Clara, descendente de los cashibo-cacataibo. Asimismo, algunos agricultores de Lamas arman “ venderlo a las empresas locales” y que preeren “ í z ” , debido a que este úlmo es un recurso ‘nuevo’ para ellos. El presidente de la Asociación Inin Raon Tetai Shipibobo, de la misma comunidad nava de San Francisco de Yarinacocha, arma que “ y ”. En general, entre las comunidades navas y demás productores, resulta poco extendida y conocida la forma de consumir el Sacha Inchi como aceite. Es importante señalar que todas las asociaciones de productores han sido constuidas en los úlmos años; además, reciben asesoramiento técnico de las empresas y, en muchos casos, les proveen de semillas mejoradas. Respecto a la posibilidad de reconocer el sacha inchi como Indicación Geográca a través de la Denominación de Origen peruana, la mayoría de los agricultores armaron no conocer este instrumento, aunque valoraban otras cercaciones como la ‘orgánica’ y ‘comercio justo’. La Cooperava Oro Verde de San Marn, que recientemente empezó a sembrar Sacha Inchi (aproximadamente treinta hectáreas), fue el único actor de este eslabón que conocía el tema de la Denominación de Origen en Perú. De esta forma, se destaca una vez más como la organización de pequeños agricultores puede fortalecer el intercambio de información y la concienciación de los actores.
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Los síntomas descritos hacen referencia al consumo de la semilla en crudo. 63
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Con respecto a las empresas, se individuaron dos patrones de respuesta. En primer lugar, aquellas ubicadas en San Marn y que forman parte de la Mesa Técnica, las cuales armaron “no tener interés e nel proyecto”, debido a la “redundancia del estudio” y al no poder proporcionar información “ í z o distribuida”.
Al contrario, las empresas ubicadas en Lima parecían poseer más interés en el reconocimiento del aceite de sacha inchi como Indicación Geográca, aunque mencionaron problemas como “la falta de cohesión entre la totalidad de las empresas” y la falta de conanza entre las mismas empresas y los productores agrícolas. Al hablar de Indicación Geográca y Denominación de Origen de Perú y abarcando más de una región productora, surgen dicultades como los ‘regionalismos’, sobre todo por parte de las empresas sanmarnienses. Incluso un funcionario del Gobierno Regional de San Marn arma que “ S M z z y . P í I G” . Es evidente como este po de posiciones excluyen a los demás territorios productores de sacha inchi y a los actores que se ubican en ellos. Respecto a la Mesa Técnica, diferentes empresas (también las que forman parte de la misma Mesa) alegan que “muchas veces no funciona correctamente, aunque busque que sus asociados no compitan respecto a mercados y proveedores, además de impedir la especulación de los precios de la materia prima. Es una propuesta
” , haciendo de este modo vislumbrar algunos recelos entre los actores de este eslabón. Es interesante y claricadora la visión de consultoras legales y sujetos involucrados directamente en el reconocimiento de dos DO Peruanas 43. En primer lugar, se destaca la críca hacia la tularidad del estado sobre las DO otorgadas. Esta armación se reitera en el caso de la ‘Chirimoya de Cumbe’, donde el pueblo que le da nombre a este producto (actual tular de la marca colecva que lleva dicho nombre geográco) rehusó la oferta de reconocer la Chirimoya que producen como DO, debido a que el tular de dicho reconocimiento sería el estado y no el pueblo 44. Tanto los actores territoriales como las consultoras legales están de acuerdo en armar que “el estado no apoya económicamente en ninguna fase del trámite de reconocimiento, y tampoco en las sucesivas fases como la
DO. L í y D O ( í- , , .), ( , , , .) y ( y ). E y ”. Además, es importante aclarar que el término ‘reputación’ incluido en la denición de DO no se encuentra, generalmente, relacionado con la misma, como se puede deducir en el Arreglo de Lisboa (art.2) y en el reglamento europeo 510/2006 (art. 2.1, apartado a). Más bien, dicho término es aplicable cuando se habla de Indicaciones Geográcas, como se detalla en el art. 22.1 del ADPIC y en el art. 2.1 apartado b del reglamento europeo 510/2006 45. Una vez completados y entregados los estudios requeridos, debe de s er constuido el ‘Consejo Regulador’, es decir, una asociación sin nes de lucro que administre la futura DO y autorice el uso del nombre geográco. Los trámites son largos y complicados, además, se debe “ Cj j j ” . Otras dicultades residen en la misma conformación de los Consejos, debido a que existen normas no escritas sobre su composición en términos de productores primarios, trasformadores y comercializadores. “L j z DO” , explica una de las personas que llevó a cabo el reconocimiento de una de las ocho DO de Perú “pero hasta que , z INDECOPI y j -
Para un análisis técnico de la legislación sobre Denominaciones de Origen en Perú véase el capítulo 4. Véase el caso Cy C: , disponible al siguiente enlace: hp://www.wipo.int/sme/es/case_studies/chirimoya.htm 45 Para un análisis más detallado de estos dos instrumentos véase el capítulo 4. 43 44
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La historia del sacha inchi en el territorio peruano
, y ” . Esta armación se congura como una amenaza a la reputación del producto, debido a que la ausencia de una endad que controle la calidad de los lotes producidos puede facilitar comportamientos desleales. El mismo INDECOPI al hablar sobre la posibilidad de reconocer el sacha inchi como una DO inter-regional, armó que el proceso podría resultar muy problemáco y alargarse demasiado en el empo, desalentando la iniciava. De igual forma, una consultora legal denió las DO como “demasiado complicadas” , y sugirió en su lugar el registro de una Marca Colecva o de Cercación, debido a que estos otros instrumentos son también muy úles para el reconocimiento de una Indicación Geográca, pero presentan requisitos menos estrictos que aquellos requeridos por la Denominación de Origen. Las entrevistas llevadas a cabo esbozan la visión general de los actores que están dentro de la cadena hacia el sacha inchi y de sus productos derivados. La colecvidad que lo produce no parece tener un vínculo cultural importante con el culvo y menos aún con el aceite. No obstante los tesmonios lleven a la conclusión de que esta planta fue conocida en la anguedad, dicho conocimiento parece no haber evolucionado, y por lo tanto se trataría de un ‘hecho cultural’. Asimismo, a lo largo del empo no ha sido construida una calidad especíca del producto, la cual se forma por la interacción de los factores territoriales, entre los que se destaca el saber-hacer de la colecvidad 46. Con respecto al reconocimiento como DO, se han encontrado diferentes dicultades de po administravo y burocráco relacionadas tanto con el marco jurídico como con la instución encargada de los trámites. Además, este instrumento ene entre sus múlples objevos aquel de diferenciar los productos agrícolas de los estándares, permiendo a pequeños productores de zonas marginales comper en los mercados. Es denida como una herramienta que puede fomentar el desarrollo rural a través de la valorización no solo de un producto, sino también del territorio en su conjunto. En este sendo, no parece eciente obstaculizar el proceso con una barrera económica que pueda desalentar y alejar a los sujetos directos e interesados en este instrumento, como los pobladores de las áreas rurales peruanas. Esta debería ser una herramienta promovida y apoyada por el estado, el cual tendría que contribuir de manera más contundente y acva en el proceso de reconocimiento.
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Véase el Capítulo 4 para mayores detalles respecto a la incidencia del factor humano en la calidad especíca de un producto con Indicación Geográca
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Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
4. REQUISITOS PARA EL RECONOCIMIENTO DEL PRODUCTO COMO INDICACIÓN GEOGRÁFICA Para que un producto sea reconocido como Indicación Geográca (IG), además de presentar una calidad especíca debe demostrar un cierto vínculo con el territorio en el que se produce. La INAO (2009) dene el vínculo como “ j z j” con el territorio. Como muchos expertos señalan 47, para la IG no es necesario demostrar la existencia de un vínculo estrecho y determinante entre el producto y el territorio de producción, como sí ocurre en el caso de una Denominación de Origen (DO). Más bien “ j IG y a su origen y no determinada por él” (FAO, 2009). Es pues, un vínculo que puede ser “ ” (Champredonde et al, 2012) y procedente de diferentes grados de interacción entre el factor humano y los recursos naturales locales. Por este movo, es importante que la colecvidad territorial se idenque con el producto, haciendo de él un rasgo caracterísco de su idendad. En lo relavo al anclaje territorial y a la , cuando se habla del primer concepto se hace referencia a la “ -y - comunidad local” (Champredonde M., 2011), mientras que en el caso de la picidad, esta es el resultado de la “ í territoriales” (Champredonde et al, FAO 2012). Por lo tanto, por lo que respecta a la Idencación Geográca, no se trata de productos caracterizados por un anclaje territorial sino por su . En cuanto al concepto de í mencionado anteriormente, este hace referencia a la denición otorgada por la Guía FAO y SINER-GI 2010, que la dene como “ j í [...] ”, , “ cierta unicidad” (Champredonde et al, 2012). Esta calidad se conforma por una calidad objevable denida como aquella que es “ , í y í” (Muchnik y Champredonde, 2010), como por ejemplo la candad de ácidos grasos esenciales en el aceite; y una j, que es aquella que “se relaciona con el rol de los valores simbólicos asociados a la producción, elaboración y consumo del producto” (Champredonde et al, 2012). Estos factores descritos arriba, otorgan al producto una unicidad que lo rinde irreproducible y que viene denida por una calidad especíca construida a través de la interacción con la colecvidad territorial, que a su vez conere al producto una cierta picidad. Este sistema de construcción de la calidad hace que los productos vinculados a su origen geográco puedan gozar de un price premium (premio de precio) por parte de los consumidores, en respuesta a unos servicios ofrecidos que reducen la asimetría informava en el momento de su adquisición y encarnan unos valores intangibles valorizados por el consumidor (Arni et al, 2010). A connuación se analiza la situación del aceite de sacha inchi y su potencial reconocimiento como producto IG, evaluando los factores determinantes que se describen precedentemente.
4.1 LA TIPICIDAD El territorio Como se menciona en la primera parte de este documento, existen muchos arculos ciencos que a lo largo de los años han descrito como esta planta se encuentra, en estado silvestre, en varios lugares tropicales, sobre todo de América Lana (Ilustración 1), bajo diferentes especies. Véase la G D D D’ A D’ (A.O.C./A.O.P.), FAO 2009; y O I G-D O, FAO 2012.
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Iaó 2. Dbó d aha h Laaméa
Fuente: Elaborado por el autor
IIustración 3. Distribución del sacha inchi en Perú
Fuente: Elaborado por el autor
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Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
No se trata, pues, de un recurso endémico especíco del territorio peruano. Las condiciones edafoclimácas bajo las que se desarrolla el sacha inchi son similares en un territorio mucho más amplio, y su naturaleza silvestre hace pensar que sea una planta ‘común’ en toda la Selva Amazónica. El intento de dos empresas francesas de patentar el aceite y la producción de cosmécos de sacha inchi 48, aceleró la inscripción de esta planta al patrimonio natural de Perú bajo la ley N. 28477 de 2005 49, subrayando un interés y una voluntad políca y pública de protegerlo como recurso propio. En Ecuador, el MAGAP (Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca) “[...] dictó un seminario ‘C y Cz S I, Azí” , donde, “[...] explicó que el P , , í y ” 50. Técnicos agrónomos peruanos con conocimientos del culvo, fueron llamados a este país para proporcionar asesoramiento técnico y para monitorear el desarrollo de los culvos instalados. En Colombia, a través de un programa televisivo conocido como C, se mostraron instalaciones del culvo en este país, montadas gracias a la inversión y asesoramiento técnico de Agroindustrias Amazónicas 51. Además, existe un estudio de las Universidades Colombianas del Tolima y Lérida (Castaño et al, 2012), en el cual se aprecia la similitud entre los resultados del sacha inchi culvado en Colombia y el culvado en Perú. En Mayo de 2013, la Resolución N. 1577 de la Comunidad Andina “ R 035/11/AG/SENASA/DSV P R S N S y F” 52 , “a través de S I y de Ecuador” 53. Este es el resultado más elocuente de la exclusión del eslabón agrícola de la cadena de valor y de las toma de decisiones. Esta resolución amplía la cuenca de procedencia de la materia prima para la producción de aceite y otros derivados de sacha inchi, insertando, de este modo, a un nuevo compedor en la producción agrícola. Esta podría ser una respuesta a la inestabilidad de la oferta en términos de candad y precio, la cual amenazaría la producción agrícola peruana, que se enfrentaría, muy probablemente, a una competencia basada en el precio. Igualmente, esta podría ser la primera pauta hacia el reconocimiento de una Indicación Geográca trasnacional . La dicultad de trazar la historia del producto, la falta de una tradición local de manejo y extracción de aceite, y la distribución del sacha inchi por diferentes países del trópico, plantean demasiadas dudas para un reconocimiento de dicho producto como ‘peruano’. La aceptación de materia prima procedente de un tercer país por parte de las mismas autoridades públicas peruanas, hace surgir la idea de que actualmente no existe intención políca para valorizar el producto a nivel nacional a través de su reconocimiento como G I (Indicación Geográca), aunque esté protegido como Patrimonio Natural Peruano. Sin embargo, esto no excluye la posibilidad de reconocer el aceite como una IG que abarque más de un país. Los países involucrados en su producción agrícola y trasformación industrial hacen parte, directa o como observadores, de la Comunidad Andina, situación que resulta favorable en el caso que se propiciasen iniciavas en ese sendo. Para este n, es importante determinar si la incipiente producción agrícola de sacha inchi en otros países procede de semillas mejoradas por los actores peruanos.
Ibidem nota 39. Véase el siguiente enlace: hp://www.wipo.int/wipolex/es/text.jsp?le_id= 202262#LinkTarget_50 50 Véase el siguiente enlace: hp://www.agricultura.gob.ec/magap-dicto-curso-sobre-culvo-y-comercializacion-del-sacha-inchi/ 51 Véase el siguiente enlace: hp://www.caminoalagro.com/programas/aceite-sacha-inchi/ 52 Véase el siguiente enlace: hp://faolex.fao.org 53 Véase el siguiente enlace: hp://intranet. comunidadandina.org/Documentos/Gacetas/Gace2195.pdf 48 49
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
E ab-ha a a vdad Las tecnologías de culvo y de extracción del aceite no proceden de un s aber-hacer local o artesanal transmido de generación en generación desde épocas anguas. Se trata de un proceso industrial que se desarrolló a lo largo de los úlmos diez años, desde el momento en el que se descubrieron las propiedades del sacha inchi y de su aceite. La falta de un ‘paragón’ o de un ‘binomio’ artesanal-industrial entre manejos agronómicos o entre metodologías de trasformación, fortalece la sospecha de que, incluso en épocas anguas, el interés hacia el culvo de sacha inchi no era relevante. Esta escasa o inexistente incidencia del factor humano, hace más dicil la determinación de una picidad territorial que normalmente se produce, transcurrido un periodo de empo, a través del intercambio de saberes y práccas tácitas que hacen parte de la colecvidad territorial en la cual s e produce dicho bien (Champredonde et al, 2012). La información histórica sobre el sacha inchi, y su uso y consumo en épocas anguas, es muy escasa y confusa. Hasta la fecha, solo se cuenta con tesmonios escritos que aseguran su uso en algunas comunidades navas de la selva peruana, pero no existen pruebas concretas sobre ninguna tradición alimencia o cultural ligada a esta planta 54. De todos modos, el consumo del sacha inchi y de su aceite solamente constuye un factor de anclaje terri/ , es decir, “perteneciente a la masa de hechos culturales” , y no un factor de , que signica la “ y ” (Champredonde, 2011). Sin un saber-hacer colecvo o una tradición que haya desarrollado saberes tácitos, los métodos de producción y trasformación son ‘recetas’ fácilmente reproducibles por los territorios limítrofes, lo cual limita la especicidad y picidad del producto. Al mismo empo, la falta de un anclaje con la colecvidad territorial perjudica el círculo virtuoso de la calidad que una IG pone en marcha. La idencación de los actores con el producto es la base sobre la cual se rige el entero proceso de calicación, debido a que serán ellos mismos quienes administrarán el producto y se beneciarán de él. Respecto al proceso de valorización e industrialización del sacha inchi, este no fue impulsado desde la base, es decir, no fue promovido por las comunidades productoras, sino que la iniciava surgió de las instuciones gubernamentales y de las empresas. Aunque se puedan apreciar acciones colecvas (como la constución de la Mesa Técnica de Sacha Inchi en San Marn o el Comité Técnico de Sacha Inchi a nivel nacional), estas nunca se se han caracterizado por la acva parcipación de su primer eslabón, los productores agrícolas, los cuales no cuentan con fuertes organizaciones que los representen en los momentos de la toma de decisiones y contratación del precio del producto. Sin embargo, a nivel nacional la cadena no está integrada. Muchas veces las unidades agrícolas se encuentran lejos de las unidades producvas, obstaculizando, de esta manera, la formación de sistemas producvos localizados e integrados. A pesar de la acvación de procesos producvos en diferentes lugares, es la región de San Marn el centro de producción, decisión e innovación del sacha inchi. Aquí, las empresas parecen tener un buen nivel de cooperación entre ellas a través de la Mesa Técnica, donde junto a otras instuciones (centros de invesgación agraria, universidades nacionales, instuciones gubernamentales, instuciones internacionales), intercambian información y diseñan las futuras líneas de invesgación y estrategia para el culvo y su trasformación. La relación entre el sistema producvo de algunas empresas de San Marn y las otras empresas nacionales, no siempre es buena. En algunas ocasiones, entre ellas predominan fenómenos de competencia en lugar de fenómenos de cooperación e integración. La ausencia de concienciación acerca del producto y de sus caracteríscas y potencialidades entre los actores del eslabón agrícola, además de su exclusión en las dinámicas de la toma de decisiones, representan un obstáculo importante para la integración de la cadena. El cumplimiento de esta condición es imprescindible para el establecimiento de objevos comunes y para el desarrollo de un conocimiento técnico y económico general, úl para concrezar la capacidad de gesón de toda la cadena, la cual deberá administrar la futura IG, no solo bajo el perl de la calidad, sino también en las fases de comercialización y distribuición del valor.
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Véase el Capítulo 3 para más detalles sobre su uso histórico.
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Estas circunstancias resultan desalentadoras para la integración de la cadena a nivel nacional, disminuyendo en la mayoría de los casos la compevidad, y ralenzando los procesos de innovación y valorización del producto.
La adad pa Aunque todo lo mencionado anteriormente hace referencia a la existencia de una debilidad entre el vínculo producto-territorio, es importante destacar los avances ciencos y tecnológicos de los úlmos años llevados a cabo por las instuciones peruanas y las empresas privadas. Perú fue el primer país en domescar e industrializar este culvo, a través del desarrollo de algunos estudios ciencos y poniendo en marcha un proceso de comercialización y valorización de carácter internacional. Es, hasta la fecha, el único país que puede contar con un volumen de exportación signicavo y con un constante crecimiento, tanto de candad como de valor. Esto signica que existe un reconocimiento por parte del mercado (consumidor) sobre su calidad especíca, que diferencia el producto frente a otros similares, permiéndole construir una reputación posiva. Pero el principal problema reside en que la tecnología ulizada para su culvo y su transformación es fácilmente transferible y reproducible, al no tratarse de un producto artesanal que no cuenta con un saber-hacer local arraigado y tácito, sino que se trata más bien de un producto ‘nuevo’. En este punto, es importante volver a subrayar la existencia de diferentes especies de sacha inchi, cuyas caracteríscas son todavía desconocidas; como ocurre en el caso de la P. y, la cual podría presentar cualidades iguales o cualitavamente superiores a la especie P. L. Es por ello que deberían ser estudiadas con más detenimiento, con el n de determinar las diferencias existentes y su inclusión-exclusión en los procesos de trasformación y en la construcción de la calidad. No obstante el producto cuente con cierta reputación internacional vinculada a una calidad objeva y sub jeva especíca en relación a otros aceites compedores, no están aún denidas las caracteríscas de los aceites procedentes de los diferentes territorios peruanos. Dada la variabilidad de los factores ambientales y la variedad de ecopos de sacha inchi existentes, no se puede excluir la posibilidad de que haya diferencias entre ellos. Los avances ciencos en el mejoramiento genéco permirán, entre 2015 y 2016, el uso de una variedad cercada, que será la primera en el mundo. Esto podría facilitar la obtención de una picidad territorial, ya que “ y ” (FAO, 2010). El me joramiento genéco forma parte del patrimonio colecvo, representa un saber-hacer local que interactúa con el medio geográco, representando la “ ” (Champredonde et al, 2012). Este hecho supondría un importante fortalecimiento del vínculo producto-territorio. Como indica la Guía FAO SINER-GI (2010): “[...] í. V z y í í y ” . El mejoramiento genéco conlleva la creación de variedades aptas para desarrollarse en un territorio especíco. Comprende, de este modo, una cierta variabilidad interna, pero deniendo la existencia de “í comunes a la producción de un determinado territorio” .
Dichas caracteríscas llevan a la idencación de un ‘aire de familia’, otorgándoles a los productos aquella especicidad y unicidad que los rinden picos (Champredonde et al, 2012). Asimismo, es importante que la nueva variedad no debilite la variabilidad genéca de los ecopos que se hallan en el territorio, produciendo así una estandarización que podría llevar a la pérdida de la picidad buscada. El mejoramiento genéco debería implementarse en cada uno de los territorios de producción, para no perder la variabilidad genéca y poder producir variedades aptas a cada ambiente, respetando siempre sus caracteríscas. De esta manera, se conservaría una variabilidad interna y se desarrollaría el ‘aire de familia’ en relación con la calidad mencionado anteriormente.
73
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
En el caso del aceite de sacha inchi procedente de la especie P. L., se estaría frente a un producto que aún no se caracteriza por tener una picidad territorial. Esta es denida por Casabianca y otros (2006) como “ j : y ” . Sin embargo, es un producto que cuenta con unas caracteríscas especícas que lo disnguen de otros aceites compedores, como por ejemplo los aceite de pescado y de linaza. No obstante, son escasas las diferencias que se presentan cuando la materia prima para su elaboración procede de diversos lugares fuera del territorio peruano, como Ecuador o Colombia. La falta de estudios ciencos comparavos entre especies halladas en diferentes lugares tropicales, hace dicil la comparación de las cualidades del producto y de sus diferencias, impidiendo evaluar cuáles son los factores ambientales que inciden sobre la calidad y las cualidades de las semillas de sacha inchi y del aceite que le es extraído, impidiendo la denición de í intra-territorios y obstaculizando el camino hacia una picidad territorial. Por lo tanto, los interrogantes que se plantean son varios y determinantes. En primer lugar, es necesario aclarar cuáles son las caracteríscas especícas intra-especie e intra-territorios de producción; además, es fundamental conocer el vínculo que este recurso ene con el territorio a través de estudios históricos y antropológicos puntuales y profundizados; nalmente, se debería determinar si la producción incipiente fuera de Perú procede de semillas que han sido mejoradas a lo largo de los años en este mismo territorio. Estas consideraciones representan un el reejo de la situación del sacha inchi como producto vinculado al origen, es decir, una situación todavía en dilucidación, caracterizada por el fortalecimiento de su vínculo con el territorio peruano y en búsqueda de una denición clara de su calidad especíca y de su picidad. El territorio, en su conjunto, está determinado por el ser humano a través de las acciones que este desarrolla a lo largo del empo con el n de adaptar sus métodos de producción y necesidades a su entorno, basándose siempre en el patrimonio cultural y cienco. Por este movo, los recursos territoriales y el producto pertenecen a la colecvidad (Vandecandelare et al, FAO 2010). Es fundamental el papel que podrían llegar a desempeñar las ONGs y determinadas organizaciones internacionales y nacionales (FAO, IICA, OMS, Perúbiodiverso, etc.) en la labor de sensibilizar a la colecvidad sobre la importancia de este producto como un alimento a incluir en las dietas alimencias locales y como producto identario, construyendo una unión entre las personas y los productos locales. La parcipación acva de la colecvidad es fundamental para su inclusión en los procesos de decisión y para una distribución equitava del valor creado. G 3. L m d a pdad Calidad Específica:
En construcción (mejoramiento gené�co)
Cultura:
Débil. Falta de tradición produc�va y de un saber-hacer tácito
Tipicidad:“[...]significa que el producto no solo es específico, sino que también es único gracias a la combinación de factores humanos y naturales de producción vinculados al territorio, [...] no pueden producirse en otra parte” (Vandecandelaire et al, FAO 2010).En construcción.
Fuente: Champredonde, 2010. Elaborado por el autor.
74
Territorio:
En construcción. A la espera de definir una especificidad)
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Volviendo a la cuesón de las otras especies de sacha inchi encontradas, en el caso de la P. y bana su reconocimiento como producto vinculado al origen sería más simple. Se trata de una especie endémica que solo se encontró en una zona especíca de Perú, en la región de Amazonas, y que presenta caracteríscas químicas diferentes a la P. L., ya que conene niveles más altos de Omega-3 (NTP 151.400; Tabla 2.b, INDECOPI 2009), que le coneren unicidad y picidad. En una experiencia llevada a cabo en la región de San Marn, intentaron instalar culvos de esta especie, pero no dio los resultados esperados debido a que la producción fue muy escasa y la calidad de los frutos muy baja (pequeño tamaño de los de los frutos y bajo contenido en aceite). La debilidad en el desarrollo del sacha inchi como producto pico vinculado a un origen peruano reside en los métodos de manejo agronómico y de extracción del aceite, los cuales resultan fácilmente transferibles. Como arman las mismas instuciones de invesgación de la cadena (IIAP), el camino hacia la denición de una calidad especíca es todavía largo. Es importante señalar la escasez de información cienca acerca de la incidencia de los recursos territoriales en la calidad, tanto de la materia prima como del aceite: “[...] , j . E z j j , í y ”. 55
4.2 LA IMPORTANCIA DEL SACHA INCHI PARA EL DESARROLLO DE LAS ÁREAS RURALES. EL PILAR ECONÓMICO, SOCIAL Y AMBIENTAL Perú es un país que en estos úlmos años está disfrutando de un rápido crecimiento económico. No obstante aún perduren fenómenos de pobreza, marginación social, inseguridad e insalubridad alimentaria, y una fuerte desigualdad en la distribución de la riqueza. Las áreas rurales se caracterizan por: un alto porcentaje de subnutrición, sobre todo de los niños; la falta de servicios esenciales; los fenómenos de marginación social de los navos, especialmente de las mujeres, que son marginadas también por los propios componentes de la comunidad; y por la inseguridad económica debida a la inestabilidad de los precios de las í, cuya producción se concentra en estas áreas rurales. Según el úlmo informe técnico del INEI: E Pz M 2007-2012, el gasto promedio per cápita mensual a nivel nacional en 2012, fue de 592,5 soles (227,8 dólares). En las zonas urbanas esta suma resulta ser mayor al promedio nacional, con 686,6 soles (264 dólares), mientras que en las zonas rurales es de 313,7 soles (120,7 dólares). Según el ámbito geográco, la sierra y la selva presentan valores muy similares, de 465,4 y 463,4 soles mensuales (178,7 y 178,2 dólares) respecvamente, mientras que en la costa el gasto promedio mensual resulta ser de 700,5 soles (269,4 dólares). En el año 2012, el 41,1% del gasto per cápita igual a 243,4 soles (93,6 dólares), se desnó, primordialmente, a los alimentos; mientras que al cuidado de la salud se dedicó el 8,7%, es decir, 51,8 Soles (19,9 dólares). Como dene el INEI, el porcentaje de personas que viven en situación de pobreza en Perú pasó de 27,8% en 2011, a 25,8% en 2012, por lo que se considera que 7,8 millones de personas se encuentran aún en esta situación. El valor de la línea de pobreza para el año 2012 es de 284 soles per cápita mensual (109 dólares), y constuye el valor mínimo necesario que requiere una persona para sasfacer sus necesidades alimentarias y no alimentarias. La pobreza en el área rural bajó 3,1 puntos porcentuales al pasar de 56,1% de 2011 al 53% de 2012, mientras que la pobreza en el área urbana pasó de 18% al 16,6%. La sierra y la selva representan las dos áreas donde la incidencia de pobreza es mayor, aunque exisese una reducción porcentual mayor en el 2011, de respecvamente 3,0% y 2,7%. La incidencia de pobreza en la sierra en 2012 resultó ser del 38%, mientras que en la selva fue del 32,5%. 55
Véase el siguiente enlace: hp://diariovoces.com.pe/6539/iiap-realiza-estudios-y-requerimientos-nutricionales-de-sacha-inchi). 75
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Un pobre extremo es aquel cuyo gasto se encuentra por debajo de 151 soles mensuales (58 dólares), “el valor de los alimentos de una canasta socialmente aceptada necesaria para cubrir un mínimo de requerimientos de energía” (INEI, 2013). El valor de dicha canasta alimentaria en el litoral asciende a 165 soles (63,5 dólares), en
la sierra es de 131 soles (50,4 dólares) y en la selva corresponde a 142 soles (54,6 dólares). En cambio, la pobreza extrema en términos porcentuales representa el 6% de la población. En el año 2012 los mayores niveles de pobreza extrema se presentaron en las áreas rurales con un 19,7%, mientras que en el área urbana solo alcanzó el 1,4% 56. Por todo ello, el sacha inchi y su potencial comercial representaría una posible opción viable para la diversicación de las ganancias de los agricultores, debido a que al trabajar con esta planta podrían contar con un culvo a los 9 meses, que les proporcionaría cosechas cada 15-20 días, aliviando así la falta de entradas ocasionadas por la estacionalidad de otros culvos. Además, serían sasfechas sus necesidades básicas de nutrición, pues esta franja de la población no cuenta con los recursos económicos y culturales sucientes para acceder a los alimentos básicos e indispensables para que la familia lleve una dieta sana. En el período 2011-2012, FAO esmó que el porcentaje de subnutrición en Perú era del 11,2%, a diferencia del 8% de América Lana y Caribe. Igualmente, la malnutrición infanl representa un grave problema en este país. En 2008 se esmó que el 28,2% de los niños de edad inferior a 5 años padecía de raquismo y el 4,5% estaba por debajo de su peso, según la FAO. Teniendo en cuenta que los datos descritos no disnguen entre áreas rurales marginales y áreas urbanas, existe un margen entre su representación estadísca y la realidad en esas zonas subdesarrolladas. Al respecto, el Ministerio de Agricultura peruano arma que, en 2009, la desnutrición infanl en el área rural ascendía al 40,3% (MINAG, 2011). Las estadíscas relavas a la importación y exportación nacionales proporcionadas por Promperú y FAOSTAT para el periódo 2010/2011, arman que Perú es importador neto de los aceites de soya, girasol, linaza y oliva, productos similares al aceite de sacha inchi, lo que signica que su culvo y extracción de aceite podría disminuir la dependencia de las importaciones. Con respecto al aceite de pescado, otro producto similar, Perú es uno de los mayores productores a nivel mundial (Cuadro 18).
Cad 18 Baaza ma d a ma a d Saha Ih 2010
PRODUCTO
AÑO
EXP-IMP (TONELADAS)
Aceite de Linaza
2011
-45
Aceite de Oliva
2011
-145
Aceite de Soja
2011
-287.000
Aceite de Pescado*
2010
252.142
Fuente: SIICEX y FAOSTAT. Elaboración personal del autor *Fuente: WITTS, Elaborado por Promperú.
Además, según la plataforma FAOSTAT, en 2011 Perú importó 79 mil toneladas de soya, destacando su dependencia alimencia a este cereal y cuyos precios al consumo se encuentran en auge 57. Igualmente, es importante recordar que durante el proceso de extracción del aceite de sacha inchi se elabora también la ‘torta’, la cual es una importante fuente de proteínas y puede representar un sustuto de la soya 58. Asimismo, la importación de torta de soya en Perú era aproximadamente de 1 milión de toneladas en 2011 (FAOSTAT, 2013). En 2012, en valores absolutos, 3 millones de personas sufrían desnutrición, es decir, más del 10% del total de la población. Además, entre el requerimiento mínimo de calorías diario y su real distribución exisa una asimetría de 0,88
Informe Técnico: E Pz 2007-2012, INEI 2013. Disponible al siguiente enlace: hp://www.inei.gob.pe/DocumentosPublicos/Pobreza_InformeTecnico2013.pdf 57 Véase el arculo de La República en el siguiente enlace: hp://www.larepublica.pe/19-08-2012/alza-internacional-del-trigo-maiz-y-soya-impacta-en-peru 58 Véase el Capítulo 1 para más detalle. 56
76
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
kilocalorías (FAOSTAT, 2012). En este contexto, este culvo podría ejercer un papel posivo, gracias a que su contenido en ácidos grasos esenciales, vitaminas y proteínas es muy signicavo. Asimismo, la valorización de este producto otorgaría a las comunidades una mayor estabilidad económica en las áreas rurales, por lo que podrían disminuir los fenómenos de migración hacia las ciudades, conservando así la idendad cultural de los territorios y de las mismas comunidades. También, se favorecería la ocupación y el cuidado de los suelos y la protección de la Selva Amazónica, la cual está siendo devastada, cada vez más rápido, por las industrias mineras y madereras. Como se señaló anteriormente, la condición de la mujer dentro de las comunidades es, por lo general, muy dicil. Con el desarrollo de nuevas acvidades económicas se podría rescatar el papel de estas en las comunidades, creando nuevas dinámicas de trabajo gracias a las cuales elevar su autoesma. Un claro ejemplo de ello puede encontrarse en la comunidad de Primavera, región de Junín. En esta pequeña aldea de la selva central, perteneciente a la provincia de Pichanaki (Chanchamayo), se localiza una pequeña cooperava formada únicamente por mujeres que culvan y elaboran productos a base de sacha inchi, vendiendo su producción en los mercados y ferias locales, además de ofrecer una rica cocina tradicional local que combinan con este producto. El círculo virtuoso de la calidad fomenta las visitas a las áreas rurales, marcando las pautas para el desarrollo de otras acvidades económicas locales como el turismo y la restauración. De esta manera, se fortalece el espíritu emprendedor de estas zonas y los pobladores de las comunidades incrementan su autoesma. El paisaje y los recursos naturales locales se convierten en ventajas que pueden ser incrementadas y añaden valor al territorio. Bajo el perl ambiental, el culvo de sacha inchi necesita de un manejo con un bajo impacto ambiental. Se ulizan tutores muertos (postes de madera) y, cuando existe la posibilidad, hileras de alambre que pueden ser reulizadas o, en úlmo término, vendidas. En el caso de culvo con tutores vivos, normalmente Erythrina, no existe impacto ambiental, debido a que esta planta enriquece el paisaje y los suelos, y combate la deforestación. No se deben ulizar abonos o tratamientos tosanitarios químicos. En primer lugar, por las caracteríscas intrínsecas, ya que se trata de un mercado de productos naturales y saludables donde el consumidor valoriza mucho el respeto del medio ambiente y, también, porque deberían ser excluidos en el futuro pliego de condiciones para asegurar la preservación de los paisajes y, en general, de la comarca donde se culva el sacha inchi. Otra prácca muy común entre los agricultores de las comunidades, y que supone un gran impacto ambiental, es la quema de culvos, acción que debería ser controlada por las autoridades pernentes, ya que a través de ella se empobrecen los suelos, se arruina el paisaje y se modica el ecosistema de la zona. Otro benecio resultante de este culvo es el valor que añade a la biodiversidad, la cual se está perdiendo a causa de los culvos intensivos como el café y el cacao, que crecen en el mismo hábitat que el sacha inchi. Además, es una planta que puede desarrollarse en asociación con otras especies vegetales, como árboles forestales úles para la reforestación, culvos de ‘panllevar’ como el frijol, y también, frutales como el plátano y la papaya, entre otros.
4.3 LA REPUTACIÓN Los datos disponibles sobre la exportación de productos derivados de sacha inchi en el período 2008-2012, describen la reputación que el nombre de este producto ha logrado en estos úlmos años. Según Sunat y Promperú (Cuadro 19 y Cuadro 20), en este período de empo el volumen de exportación aumentó, en general, del 293%, que en valores absolutos variaría de las casi 53 toneladas de 2008 a las 207 toneladas en 2012. En estos 4 años el producto logró introducirse en 17 nuevos países con 12 toneladas de producto, que signicaría una media de poco más de 1 tonelada por cada nuevo mercado. Países como Bélgica, Australia, Canadá, Estados Unidos, Japón, Nueva Zelanda y España aumentaron su importación, diferenciando el portafolio de clientes de las empresas exportadoras, anteriormente concentradas únicamente en algunos países como Estados Unidos, Francia y Japón, que sumaban más del 60 % de la exportación total.
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Cuadro 19. Volumen de la exportación de producto elaborado a base sacha inchi en el período 20 08-2012
VOLUMEN DE EXPORTACIÓN POR MERCADO (TONELADAS) País
2008
2012
% su total 2012
% su total 2008
Canadá
4,3
76,4
36,9%
8,2%
Estados Unidos
17,0
44,1
21,3%
32,3%
Japón
9,2
27,8
13,4%
17,4%
Francia
12,4
13,6
6,6%
23,5%
España
1,3
13,3
6,4%
2,5%
México
3,8
8,7
4,2%
7,3%
Bélgica
0,4
6,5
3,1%
0,8%
Australia
0,0
5,0
2,4%
0,0%
Corea del Sur (República de Corea)
0,0
1,9
0,9%
0,0%
Suiza
1,1
1,6
0,8%
2,0%
Nueva Zelanda
0,0
1,1
0,5%
0,0%
Hong Kong
0,0
1,0
0,5%
0,0%
China
0,0
0,4
0,2%
0,0%
Total
52,7
207,3
100,0%
100,0%
Fuente: SUNAT y Promperú; elaborado por el autor.
El valor de exportación en su conjunto, conoció un auge signicavo en 2012. Dicho incremento se apreció en el aumento del precio medio por kg, que se elevó de los 12 dólares el kg a más de 15, lo que signicó un aumento del 29 %. Los mismos países que mostraron un mayor incremento en el volumen de importación fueron aquellos que registraron un mayor crecimiento del valor de importación, lo que señala un aumento de la reputación del producto y su valoración por parte de los consumidores. Cuadro 20. Valor de la exportación de producto elaborado a base sacha inchi en el período 20 08-2012
VALOR DE LA EXPORTACIÓN POR MERCADO (1000 DÓLARES) País
2008
2012
% su total 2012
% su total 2008
Canadá
37,1
1.022,3
32,3%
5,9%
Japón
105,4
473,6
14,9%
16,9%
España
33,3
433,7
13,7%
5,3%
Estados Unidos
194,4
431,8
13,6%
31,1%
Francia
149,5
257,0
8,1%
23,9%
México
53,6
152,5
4,8%
8.6%
Bélgica
6,3
133,1
4,2%
1,0%
Australia
0,00
59,7
1,9%
0,0%
Suiza
11,7
37,0
1,2%
1,9%
Corea del Sur (República de Corea)
0,00
33,1
1,0%
0,0%
Hong Kong
0,00
27,0
0,9%
0,0%
Nueva Zelanda
0,00
11,2
0,4%
0,0%
China
0,00
6,1
0,2%
0,0%
Total
625.342,35
3.168.285,43
100,0%
100,0%
Fuente: Sunat y Promperú; elaborado por el autor.
78
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Resulta interesante analizar la variación de volumen y valor de los productos exportados en relación con formato que presentan. En general, todos los productos a base de sacha inchi han sido valorados posivamente por los consumidores y, en el Gráco 4, se puede observar el aumento en porcentajes del precio medio por cada formato de presentación del producto.
G 4. Vaaó % d p p ma d paó d pd (2008-2012)
VARIACIÓN % DEL PRECIO POR FORMATO DE PRESENTACIÓN DEL PRODUCTO (2008-2012) 500.0 % 450.0 % 400.0 % 350.0 % 300.0 % 250.0 % 200.0 % 150.0 % 100.0 % 50.0 % 0.0 %
i t e e A c
s c o l a � u é p s m á s C C o
a s t r O
o l v o P
l a l i m S e
k s d o c a a s t S n T o
l a t T o
Fuente: Sunat y Promperú; elaborado por el autor.
Además, el aceite aumentó en un 45 % su precio medio e incrementó su volumen de exportación, lo que muestra un reconocimiento de la calidad del producto que hace que el consumidor esté dispuesto a pagar más en confrontación con otros aceites compedores. Respecto al volumen de exportación, en el período considerado anteriormente se incrementó en un 116%, es decir, en 35 toneladas más exportadas en 2012, aunque su peso sobre el total de la exportación hubiese disminuido debido, sobre todo, al aumento exponencial de otros formatos de presentación. El valor de la exportación de aceite también se incrementó, como se deduce del aumento de su precio por kg, que pasa de 12 a 18 dólares, como explica el Gráco 5.
79
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
G 5. Evó d va a xpaó d a d aha h (2008-2012)
1,400.00
1,200.00
S E R A L Ó D E D S E L I
1,000.00
M
800.00
600.00
400.00
200.00
0.00 2008
2009
2010
2011
2012
Fuente: Sunat y Promperú, elaborado por el autor.
G 6. Evó d vm a xpaó d a d aha h (2008-2012)
80.0 70.0 60.0 S A D A L E N O
T
50.0 40.0 30.0 20.0 10.0 0.0 2008
2009
Fuente: Sunat y Promperú, elaborado por el autor.
80
2010
2011
2012
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Con respecto a los aceites similares, el precio medio por kg de estos productos se encuentra muy por debajo del precio que alcanzó en 2012 el aceite de sacha inchi. Es importante subrayar que los productos similares, en la mayoría de los casos, se comportan como , mientras que el sacha inchi se congura más como un producto apto para nichos de mercado.
Cuadro 21. Precio medio por kg de los aceites similares al de sacha inchi
PRECIO MEDIO POR KG DE ACEITES SIMILARES PRODUCTO
Exportación 2010 Precio Medio ($kg)
Importación 2010 Precio Medio ($kg)
Estado de Perú en el comercio internacional
Aceite de Linaza
-
2,14
Importador
Aceite de Oliva
1,53
0,92
Importador
Aceite de Soja
4,49
3,41
Importador
Aceite de Hígado de Pescado
1,08
-
Exportador
Fuente: SIICEX y FAO.; elaborado por el autor
La denición de ‘reputación’ dada por Bérard l. y Marchenay P. (2007) disnguen entre notoriedad y reputación. Según ellos, la “ ”, mientras que “la reputación se relaciona al [...], , z” . La calidad del aceite, tanto en el aspecto objevo (contenido en AGE y sobre todo en ALA) como en el sujevo (la procedencia de áreas rurales amazónicas, su carácter natural y el impacto posivo que puede tener sobre la biodiversidad y el medio-ambiente en general), parecen jugar un papel importante para el establecimiento de una reputación posiva del producto. Al mismo empo, con relación a su origen geográco, serían necesarios estudios de mercado que midiesen el nivel de conocimiento del consumidor sobre su origen peruano y la importancia que le otorgan. De hecho, no se conoce cuanto incida sobre la reputación el hecho de que se trate de un producto de origen peruano. Puede que el ser oriundo de la ‘Amazonía’, entendida como ambiente natural, y sin especicar el país de procedencia, juegue un papel determinante en la construcción de una reputación posiva. Con referencia a esto, es importante señalar que el aceite de sacha inchi procedente de Perú obtuvo a parr del 2004, varios premios y reconocimientos internacionales en diferentes países: Medalla de Oro como “Mejor Aceite del Mundo”, AVPA (Paris, 2007); “Oil of theWorld”, WEO (Paris, 2004-2006); SIAL of France, 2004; ANUGA, (Germany, 2005)59. El art. 22.1 del ADPIC explica que “ ginario del territorio de un Miembro o de una región o localidad de ese territorio, cuando determinada calidad,
, í ” . Debe entonces exisr un “ [...] ” (INAO, 2009). Como indican Champredonde et al (2012), la reputación “ j IG” aunque “en sí misma no necesariamente aseguraría el carácter [...] í ” . El reciente lanzamiento al mercado internacional de aceite de sacha inchi procedente de varios países, pone en duda la especicad de la producción peruana, debido a los estudios que comparan las cualidades de estos aceites con diferentes orígenes geográcos, los cuales no demuestran ninguna especicidad entre ellos.
59
véase el siguiente enlace: hp://www.agemanagementsupplements.com/organic_oil_inca_inchi.html
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Por otro lado, es conveniente considerar que la calidad de los ‘nuevos’ aceites no está someda a los mismos parámetros ulizados hasta la fecha por el aceite peruano, amenazando, de esta forma, el nivel de conanza que éste logró establecer con el consumidor. De ser así, este sería un caso de imitación del producto y de fraude al consumidor, situación que podría acelerar el interés hacia el reconocimiento como IG.
4.4 EL MERCADO El mercado de los productos a base de sacha inchi es dinámico y en expansión. Además, cuenta con la apertura de nuevos mercados y el consiguiente acceso a sus respecvos nichos, lo que podría proporcionar premios de precios y rentas muy favorables a los actores de la cadena. En 2012, el 66% del volumen de exportación de productos a base sacha inchi (Gráco 7), se asentó sobre tres empresas que contaban con unidades trasformadoras en San Marn. De estas tres, dos de ellas, Amazon Health Products y Agroindustrias Amazónicas, concentraban el 56% del total exportado con un volumen de exportación de 116 toneladas. Mientras que Agroindustrias Amazónicas es una empresa especializada, principalmente, en la producción de aceite de sacha inchi, Amazon Health Products cuenta con una cartera de productos bastante diferenciada. La tercera empresa con relación al volumen de exportación, con un 10% del total (21 toneladas), es Agroindustrias Osho. Estos datos indican una concentración importante entre las dos empresas líderes citadas anteriormente. Estas enen un volumen de producción más elevado, es decir, cuentan con una economía de escala que les permite reducir los precios de venta. El poder de mercado que ambas concentran es suciente para que puedan inuir sobre los precios de la materia prima.
G 7. Vm d xpaó p mpa 2012
Amazon Health Pr. Agroind. Amazónicas Agroind. Osho Andinoindustrias SAC Alinap Natural Perú Roda Selva Agroind. Blamac Fda Sudamérica Otros
Fuente: Sunat y Promperú; elaborado por el autor.
La reputación posiva del aceite de sacha inchi, que fue el primer producto trasformado y comercializado con éxito, se ha reejado a lo largo de los años en los demás productos derivados, como demuestran los datos sobre volumen y valor de exportación de cada formato de presentación (Cuadro 22 y 23).
82
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Cuadro 22. Volumen de exportación por formato de producto (2008-201 2) VOLUMEN DE EXPORTACIÓN POR FORMATO DE PRESENTACIÓN EN TONELADAS Producto
2008
2012
% su total 2012
% su total 2008
Aceite
32,6
70,3
33,9%
61,8%
Otros formatos
19,6
60,7
29,3%
37,1%
Polvo
0,5
44,2
21,3%
1,0%
Snacks
0,00
15,3
7,4%
0,0%
Tosatado
0,02
14,7
7,1%
0,0%
Cápsulas
0,01
1,5
0,7%
0,0%
Semilla
0,00
0,5
0,3%
0,0%
Cosméco
0,00
0,09
0,0%
0,0%
Total
52,7
207,3
100,0%
100,0%
Fuente: Sunat y Promperú; elaborado por el autor.
De media, los derivados de esta planta aumentaron su volumen de exportación en 293% entre 2008 y 2012, y en parcular el polvo, la semilla tostada y las cápsulas de aceite, cuyos formatos de presentación suman alrededor del 35% del total exportado en 2012, en oposición al 1 % del año 2008. Este aumento hizo que el peso del comercio del aceite se redujese del 60% al 45%. En cambio, el rubro otros formatos representa el 30% del total del volumen exportado.
Cuadro 23. Valor de exportación por formato de producto (2008-2012 )
VALOR DE LA EXPORTACIÓN POR FORMATO DE PRESENTACIÓN (MILES DE $) Producto
2008
2012
% su total 2012
% su total 2008
Aceite
406,4
1.275,3
40,3%
65,0%
Otros formatos
216,1
1.057,0
33,4%
34,6%
Polvo
2,5
371,4
11,7%
0,4%
Tosatado
0,15
206,5
6,5%
0,0%
Snacks
0,00
200,7
6,3%
0,0%
Cápsulas
0,08
52,3
1,7%
0,0%
Cosméco
0,00
2,9
0,1%
0,0%
Semilla
0,00
2,4
0,1%
0,0%
Total
625,3
3.168,3
100,0%
100,0%
Fuente: Sunat y Promperu, elaborado por el autor.
Respecto al valor de la exportación en su conjunto, el aceite es el formato de presentación que más relevancia ene, con el 40% del valor total. Le sigue con el 33% otros formatos, y con el 12% el polvo de sacha inchi. La semilla tostada y los snacks representan, cada uno, alrededor del 6% del total.
83
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
G 8. Evó d vm d xpaó d pd abad a ba aha h (2008-2012)
250
200
S A D A L E N O
T
150
100
50
0 2008
2009
2010
2011
2012
Fuente: Sunat y Promperu, elaborado por el autor.
G 9. Evó d va d xpaó d pd abad a ba aha h (2008-2012)
3,500
3,000
2,500 S A D A L E N O
T
2,000
1,500
1,000
500
0 2008
Fuente: Sunat y Promperú; elaborado por el autor
84
2009
2010
2011
2012
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Las cápsulas de aceite fue el formato que más se valoró en el período de 2008-2012; en cambio, el aceite fue el producto que menos aumentó su precio medio, debido a que en 2008 ya contaba con un precio medio alto en comparación con otros productos similares. Cuadro 24. Precio medio en dólares por kg según el formato de presentación (2008-2012) PRECIO MEDIO EN DÓLARES POR KG SEGÚN EL FORMATO DE PRESENTACIÓN Producto
Precio medio 2012
Precio medio 2008
Var % precio
Cápsulas
35,44
6,46
448,7%
Cosméco
28,50
0,00
-
Aceite
18,13
12,47
45,4%
Otros
17,42
11,05
57,7%
Tosatado
14,09
8,45
66,7%
Snacks
13,08
0,00
-
Polvo
8,41
4,68
79,6%
Semilla
4,57
0,00
-
Total
15,29
11,86
28,9%
Fuente: Sunat y Promperú; elaborado por el autor.
Hasta la fecha, Perú es el mayor productor y comercializador de sacha inchi y de sus derivados, aunque incipientes iniciavas están brotando en los países colindantes como Ecuador, Colombia y Brasil. Aunque el volumen de producción y comercialización de estos países resulta aún bajo, no tardarán en desarrollarse iniciavas producvas signicavas en estos lugares, debido a la creciente demanda internacional y a los altos precios relavos a sus derivados.
4.5 INSTRUMENTOS LEGALES ÚTILES PARA LA PROTECCIÓN DEL PRODUCTO Sistema sui generis Perú forma parte de la Comunidad Andina (CAN) que está constuida, además, por Colombia, Bolivia y Ecuador, y se dene como “ í j z , y , , y cana” . Funciona “como un estado” a través del Sistema Andino de Integración. Este sistema está compuesto por el Consejo Presidencial Andino, el Consejo Andino de Ministros de Relaciones Exteriores, la Comisión, el Parlamento Andino, la Secretaría General, el Tribunal Andino de Juscia, el Fondo Lanoamericano de Reservas y la Corporación Andina del Fomento (Instuciones nancieras) (CAN, 2010). La CAN se ocupa, entre otras acciones, de acvidades e instancias relavas a los Derechos de Propiedad Industrial, cuya Decisión Andina 486 del 1 Diciembre de 2000 establece el Régimen Común sobre Propiedad Industrial. El Titulo XII de dicha Decisión trata las “Disposiciones Relavas a las Indicaciones Geográcas”, y en su Capítulo I “De las Denominaciones de Origen”, del arculo 201 al 220, se puede denir un sistema sui generis para la protección y reconocimiento de productos vinculados a su origen geográco. En el D.L. 1075 se aprueban las “Disposiciones Complementarias a la Decisión 486” (derogando el precedente D.L. 823 de 1996, “Ley de Propiedad Industrial”) (OMPI, 2013 ), no modicando la denición y la metodo-
85
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
logía de reconocimiento de una DO descritas por la CAN, sino que más bien especica la Titularidad del Estado Peruano sobre las DO (art. 88 D.L. 1075), la inclusión en la solicitud de registro de la cercación de cumplimiento con las NTP de referencia (art. 91, apartado ‘g’ D.L. 1075) y el desempeño del Estado en el fomento del reconocimiento de las DO registradas en países extranjeros (art. 94 D.L. 1075). En su arculo 201, la Decisión 486 dene las Denominaciones de Origen cuando “[...] una indicación geo í, , [...] z , z y y , í , factores naturales y humanos”.
Se trata de la misma denición otorgada por el art. 2 del Arreglo de Lisboa relavo a la “Protección de las Denominaciones de Origen y su Registro Internacional”, con excepción del término ‘reputación’, el cual no gura en la denición que aparece en dicho arreglo. El D.L. 1075 de Perú no da denición de la misma, remiendo a la Decisión Andina 486. Los documentos a presentarse para su solicitud están descritos en el art. 91 del D.L. 1075. Se destacan los puntos ‘e’ y ‘f’, respecvamente, de dicho arculo: “[…] , . S z z; […] í de origen, incluyendo sus componentes, métodos de producción o elaboración y factores de vínculo con el área
; z y z”. Los sujetos que pueden presentar dicha solicitud están representados por aquellos que “[…] directamente , ; […] z […]” , como aparece denido en el art. 207 de la D.A. 486. Serán estos mismos actores los que deberán cargar con los costos relavos a la comprobación de la existencia de un vínculo entre el producto y su territorio de producción, a través de estudios ciencos desarrollados por endades ocialmente reconocidas. Como se describió en el capítulo anterior, estos costos pueden alcanzar cifras muy elevadas, lo que podría constuir una barrera de acceso a este instrumento por parte de algunos grupos de actores locales. Además, en su Título X “Disposiciones relavas a Denominaciones de Origen”, el D.L. 1075 especica en su art. 88 la tularidad del Estado Peruano sobre Denominaciones de Origen y la facultad de este para conceder autorizaciones de uso. Este arculo supone otra barrera para el desarrollo de este instrumento, debido a que los solicitantes de la DO aspiran a ser los tulares y los que otorguen las autorizaciones de uso del nombre geográco en cuesón. Igualmente, es importante señalar que INDECOPI no parcipa económicamente en ninguna de las fases de reconocimiento y, en la mayoría de los casos, los solicitantes enen la necesidad de contratar una asesoría legal para cumplir con los requisitos, lo que supone un costo elevado para contratar este servicio. Otro paso importante relavo a la DO es la constución del ‘Consejo Regulador’ (CR). No obstante en el D.L. 1075 no existan referencias legales con relación a esta gura, su formación es fundamental e imprenscindible en dicho proceso. Respecto al art. 208 de la D.A. 486 “[…] z , í establecen las normas nacionales” . En el caso peruano, es la Ley 28331 “Ley Marco de los Consejos Reguladores de Denominaciones de Origen” de 2004 la que establece “[…] y Cj R D O, origen cuya protección ha sido declarada” (art.1).
86
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Como aparece denido en su art. 2, una vez otorgado el reconocimiento como DO, “[…] z Cj R” , aunque su formación puede ser elaborada contemporáneamente al trámite de reconocimiento. Dichos Consejos Reguladores se encuentran denidos en el art. 3 como “[…] z […] y j […] j D O […]. E o jurídicas que directamente se dediquen a la extracción, producción y elaboración del producto o los productos
[…]. A, y con los productos cuya denominación haya quedado protegida. Los representantes del sector privado deberán
yí A. L z A C […] z blecidas […]”.
Según el art. 4, los CR deben elaborar un Estatuto y en el art. 11 se describen sus funciones: “[…] formular R […], , y y , N T , , z y z […]; y j […]; con capacidad jurídica en la representación y defensa de los intereses generales de la denominación de origen
[…]; j O S D INDECOPI […]; […]; z y […]; z y , í (, í, , ) y , […]; y […]”. A CR “ z , O S D INDECOPI”. En el art. 20 se puede apreciar una protección fuerte hacia las DO en Perú: “será considerado una infracción y ñ , , y ” , al igual que se establece en el art. 3 del Arreglo de Lisboa. Como se mencionó en el capítulo 3, son muchas las crícas recibidas por parte de consultorías legales y de los mismos solicitantes sobre la dicultad de conformación de dichos Consejos Reguladores. Los parámetros requeridos no están claramente denidos y los empos de autorización para su funcionamiento son largos. Asimismo, todos los costos que deben sostenerse, como por ejemplo la constución del laboratorio donde se analizarían los lotes de producción, están a cargo de los solicitantes. Sin este consejo, la DO dicilmente puede ulizarse y, además, su ausencia pone en peligro los requisitos fundamentales de dicho instrumento, es decir, la calidad y el origen. Las solicitudes para el reconocimiento de un producto como DO deben probar el vínculo de este con el territorio de procedencia, el cual determina su picidad y unicidad, aunque las razones para probar dicho vínculo no pueden ser solamente atribuibles a su procedencia geográca, como ocurre en el caso de una IG, sino, que más bien, son determinadas por ella (INAO 2009). El concepto de Indicación Geográca engloba al de las Denominaciones de Origen, que presentan un vínculo más estrecho con el territorio del cual procede el producto. El sistema de reconocimiento Europeo de productos vinculados a su origen (DOP e IGP), explica de forma muy clara la diferencia entre las IG y las DO 60. En el caso de una DOP, todas las fases de producción, desde la materia prima hasta el envasado, se deben llevar a cabo en el territorio de origen, mientras que para los productos amparados con IGP es suciente que solo una de las fases de procesamiento tenga lugar en el medio geográco de origen.
60
Véase Reg. CE 510/2006, art. 2 apartado 1, punto ‘a’. y punto ‘b’.
87
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
El Arreglo de Lisboa (del cual Perú forma parte desde 2005, OMPI 2013) dene las DO en el art. 2 como bienes “[...] y í , factores naturales y los factores humanos” . La diferencia sustancial reside en dos elementos: la reputación, que en el caso de una DO no es elemento suciente (ni se encuentra dentro de su denición) para su reconocimiento; y el vínculo producto-territorio, más fuerte en el caso de DO, mientras que en una IG resulta ser más débil, ya que una sola caracterísca puede resultar suciente para que se le otorgue el estatus de IG. Actualmente el aceite de sacha inchi no está preparado para ser reconocido como un producto con DO, debido a que su picidad y su vínculo con el territorio están en proceso de construcción. Por este movo los esfuerzos para proteger este producto deberían dirigirse hacia otras herramientas de valorización y protección, como por ejemplo la Marca Colecva o la Marca de Cercación. La misma Decisión Andina 486, regula en su Título VIII la Marca Colecva, denida en el art. 180 como “ í y j ”.
Sistema de marca Como ocurre en el caso de la DO, el D.L. 1075 aprueba algunas disposiciones complementarias a dicha Decisión, por lo que una Marca Colecva “S j 180 D 486, [...] , , , í ” (Título XI, art. 77), asociando claramente esta herramienta a la valorización de productos vinculados a su origen. Como declara el art. 181 de la Decisión 486: “Las asociaciones de productores, fabricantes, prestadores de , z , , ” , cuya solicitud “ ñ [...], y y z ” (art. 182 D.A. 486), deniendo a aquellos individuos que pueden solicitar el registro de dicha marca y los requisitos a presentar. Con referencia a la Marca de Cercación, el art. 185 de la D.A. 486, Título IX, la dene como: “un signo y í ” ; denición integrada en el art. 80 Título XIII del D.L. 1075, el cual “S j 185 D 486 [...], , , , í ” , reiterando lo dispuesto en la Marca Colecva. Las diferencias entre estos dos signos disnvos residen en diferentes aspectos. En primer lugar, los solicitantes del registro de una Marca Colecva pueden ser “ , o un organismo estatal, regional o internacional” (art. 186, D.A. 486), el cual “ z persona cuyo producto o servicio cumpla las condiciones establecidas en el reglamento de uso de la marca” pero, con respecto a la marca colecva, “no podrá usarse en relación con productos o servicios producidos, prestados z ” (art. 188 D.A. 486). Sin embargo, el uso de la Marca de Cercación, no solo no restringe a los miembros de la asociación que la solicitó, como ocurre en el caso de la Marca Colecva, sino que también puede hacer uso de ella cualquier sujeto que cumpla con los requisitos establecidos. Además, la imposibilidad del tular de la Marca Colecva para ulizarla en la promoción de productos propios, determina un carácter más ‘imparcial’ frente a la evaluación de las solicitudes.
61
88
Véase el siguiente enlace web: hp://aplicaciones.indecopi.gob.pe/Mulmedias/DSD/fscommand/pdfm1/7_marc.pdf
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
En segundo lugar, la solicitud para obtener una Marca Colecva deberá presentarse acompañada de: “el [...] j [...] í z ; y j í y z ” (art. 187 D.A. 486). La Marca Colecva “z , í ” (INDECOPI, 2013)61, lo que permite la consolidación de un cierto nivel de conanza en el consumidor, que depende también de la reputación del tular, el cual cerca que el producto reúne caracteríscas disnvas. Mientras que el objevo de una Marca Colecva es: “indicar la condición de miembro de una asociación o , í, y/ , . ” ; el de una Marca de Cercación es: “ , í, y/ ción, etc.” (Vandecandelaere et al, 2010) según un reglamento de uso que describa las caracteríscas, origen o calidad especícas y la metodología de control para que este producto sea respetado. Tanto la Marca Colecva como la de Cercación pueden ser ulizados junto a otras marcas privadas. Ambos instrumentos resultan úles para proporcionar un amparo legal al nombre geográco, como por ejemplo “Aceite de Sacha Inchi - Perú” o similares, ya que una vez registrada en el país de origen, pueden ser registradas en los demás países que se adhieren a la OMC como productos con Indicación Geográca, según el art. 22 de los ADPIC. Este organismo es el que se encarga de establecer la responsabilidad y obligación de cada Miembro para interponer los medios legales e impedir, tanto que el consumidor sea inducido a error (en cuanto al origen geográco del producto), como la existencia de comportamientos de competencia desleal 62. En ambos casos, debería implementarse una estrategia inclusiva y transparente donde los productos fuesen trazables por parte del consumidor, estableciendo un Reglamento de Uso compardo no solo por los miembros de la asociación tular, sino también por todos los actores involucrados. Con respecto a la tularidad, la asociación a constuirse debería abarcar el mayor número de actores posibles, representando los intereses de todos ellos. Sería aconsejable la parcipación de organizaciones internacionales y nacionales para conferir conanza a las marcas y garanzar una cierta imparcialidad, sobre todo en el caso de las Marcas Colecvas. De todos modos, estos dos instrumentos se encuentran sujetos al régimen de marca, lo que signica que pueden ser vendidos o trasferidos a voluntad de su tular. Por lo tanto, sería importante que el tular fuese un sujeto sin interés por vender la marca creada, como por ejemplo organismos públicos (Ayuntamiento, Municipalidad, Ministerios, etc.). Los requisitos de calidad establecidos actúan también como barrera de entrada, según s u grado de especicación (procedencia de la materia prima, ulizo de una variedad genéca, productores agrícolas reconocidos por la asociación tular etc.). Actualmente, el aceite de sacha inchi cuenta con tres NTP que regulan la producción de materia prima (NTP 151.402 “Buenas Práccas para el Culvo”), los requisitos del producto (NTP 151.400 “Requisitos”) y el proceso de trasformación (NTP 151.401 “Buenas Práccas de Manufactura”). La elaboración de las NTP indica un incipiente proceso colecvo de homogenización de la calidad del producto. A través de dichos documentos es posible empezar a redactar un esquema de Pliego de Condiciones que pueda servir para calicar el producto y reconocerlo como IG, aunque son muchos los parámetros que todavía no están denidos y necesitan de una acción colecva para su determinación. A connuación (Cuadro 25), se propone un ejemplo de pliego de condiciones a seguir, a parr de la información ya elaborada en las tres NTP, las cuales normalizan la producción de aceite de sacha inchi en Perú. El primer requisito fundamental en su elaboración, es la parcipación de todos los actores involucrados en la cadena, debido a que es a ellos a quienes pertenece el producto, por ser un patrimonio colecvo territorial.
62
Véase el apartado 2 del art. 22 de los ADPIC de 1995, WTO 2013 89
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Cuadro 25. Esquema de pliego de condiciones PROPUESTA DE PLIEGO DE CONDICIONES
COMENTARIOS
Nombre del producto protegido con Indicación Geográfica
No se encuentra definido
Descripción del producto y sus caracterís�cas específicas (Especie(s) de Plukene�a admi�da(s), sus caracterís�cas sico-químicas y taxonómicas, la(s) caracterís�ca(s) al consumo y sico-químicas del aceite)
En la NTP 151.400 “Aceite de Sacha Inchi. Requisitos”, se encuentran definidas las caracterís�cas fisico-químicas del aceite procedente de dos especies . Hay que definir las caracterís�cas al consumo, las especies u�lizables y las caracterís�cas de su aceite.
Área geográfica de procedencia de la materia prima y área geográfica de trasformación
No se encuentra definido
EL VÍNCULO ENTRE EL PRODUCTO Y EL ORIGEN GEOGRÁFICO Los factores naturales: describir cómo los recursos naturales del territorio (especies, suelos, clima, etc.) inciden sobre la calidad del producto
Indicar la(s) especie(s) de Plukene�a a la(s) cual(es) se hace referencia y la(s) variedad(es) a usarse
Solo dos especies se u�lizan por el momento y la NTP 151.402 “Buenas prác�cas agrícolas para el Sacha Inchi (P. volubilis L.)” solo hace referencia a una de ellas.
Especificar las condiciones ambientales ú�les para el cul�vo
En la NTP 151.402 se encuentran detalladas las condiciones ambientales ú�les para su desarrollo
Describir cuales factores que inciden sobre la calidad de la materia prima
No se encuentra definido
Excluir la posibilidad de uso de productos químicos para garan�zar la preservación del medio-ambiente y de los recursos empleados en el proceso
En la NTP 151.402 se permite el uso de productos químicos, según los límites impuestos por las leyes nacionales
Los factores humanos: describir como los recursos humanos contribuyen y contribuyeron a la definición de una calidad específica del producto
90
Descripción de la(s) metodología(s) de manejo agronómico tradicional(es) y moderna(s) y cómo inciden sobre la calidad del producto
Existen diferentes metodologías de manejo modernas descritas en varios manuales, y en qué manera estas pueden incidir sobre la calidad final del producto. No existen metodologías tradicionales. En la NTP 151.402 “Buenas prác�cas agrícolas para el Sacha Inchi (P. volubilis L.)” se describen, de forma superficial, algunas ac�vidades de manejo.
Descripción de la(s) metodología(s) de extracción del aceite, moderna(s) y tradicional(es), y cómo inciden sobre la calidad del producto
En la NTP 151.401 “Buenas prác�cas de manufactura” se describe el proceso de extracción del aceite de forma superficial. Los métodos tradicionales puede que exis�eran en algunas comunidades na�vas, pero no se ha encontrado, hasta la fecha, ninguna metodología de producción de �po artesanal
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Mejoramiento gené�co: describir la(s) caracterís�ca(s) de la(s) variedad(es) gené�ca(s) obtenida(s) y su incidencia sobre la calidad del producto
No se encuentra definido
La reputación del producto (análisis de mercado, estadís�cas, encuestas a consumidores, par�cipación en ferias y referencias directas al producto que expliquen la existencia de cierta reputación)
El producto ganó diferentes premios en ferias internacionales, y el auge de volumen y precio que conoció en los úl�mos años es señal de que existe una reputación. No existen estudios puntuales.
SISTEMA DE CONTROL Y TRAZABILIDAD
Describir el funcionamiento del sistema de control de los productores para garan�zar la procedencia de la materia prima y el respeto tanto del Pliego de Condiciones como de los parámetros cualita�vos (establecer estrategias de auto-control, a través de organismos externos, establecer un registro de los productores, etc.)
No se encuentra definido
Establecer cómo y quién llevará el control de calidad del producto
No se encuentra definido
Fuente: FAO, 2010; elaborado por el autor
4.6 LAS POLÍTICAS PÚBLICAS Además de proporcionar un marco jurídico apto para la protección de las IG, las Polícas Públicas pueden representar un instrumento úl para facilitar la “creación de las condiciones favorables para aprovechar el potencial de los productos IG” . Por lo tanto, se hace referencia a una políca IG cuando abarca todas las fases del proceso de valorización y constución, contribuyendo a maximizar los benecios y minimizar los efectos negavos (Vandecandelaere et al, 2010). Es importante recordar que las Polícas Públicas no deben sustuir la acción de los actores, por lo que, en algunas ocasiones, una acción indirecta puede resultar más ecaz. A connuación, en el Cuadro 26 se detalla, por fases, cuales son las acvidades a desarrollar según el objevo políco y cuales necesitan ser mejoradas o empleadas.
91
Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Cad 26. Ejmp d m d pa pb mdda FASE
N Ó I C A C I F I T N E D
I
N Ó I C A C I F I L A
C
N Ó I C A Z I L A I C R E M O
C
N Ó I C C U D O R P E
R
OBJETIVO POLITICO
MEDIDAS ADOPTADAS
- Aumentar la concienciación de los actores
- Ac�vidades para aumentar el conocimiento de los agricultores acerca del cul�vo - Apoyo a la organización de las empresas - Cons�tución de la Mesa Técnica de Sacha Inchi y del Comité Técnico de Sacha Inchi
- Apoyo técnico para la iden�ficación cultural del producto (estudios históricos, antropológicos, sociales); - Ampliar las medidas adoptadas a las otras áreas aptas para su producción; - Cons�tución de una Mesa Técnica inclusiva y de carácter nacional
- Aumentar el conocimiento de las funciones de los recursos locales específicos
- Realización de estudios para analizar los recursos locales específicos
- Profundizar los estudios cienficos para el análisis de los recursos específicos (especies, variedades, suelos, clima, etc.) - Aumentar el apoyo económico y técnico a la inves�gación cienfica
- Integrar el producto en los sistemas de protección de la biodiversidad y conservación del medio-ambiente
- Tener en cuenta el vínculo con el ecosistema como uno de los criterios de especificidad (Perúbiodiverso)
- Fomentar el vínculo con el territorio local para evitar deslocalización de la ac�vidad agrícola - Considerar criterios ambientales en la definición del Pliego de Condiciones y en las NTP relacionadas
-Aumentar el conocimiento de la sociedad sobre el concepto IG
- Promover campañas nacionales de información sobre las IG (INDECOPI)
- Aumentar las ac�vidades de promoción de las IG - Aumentar la disponibilidad de información, cuan�ta�va y cualita�vamente
- Permi�r la par�cipación de todas la categorías de los actores
- Crear foros de debate local - Fomentar la creación de grupos de actores locales
- Proporcionar información (técnica y económica) a todos los actores de la cadena y aumentar el acceso a la información - Crear foros de debate a nivel nacional - Disminuir la fragmentación de los actores más débiles y fomentar la cons�tución de grupos locales fuertes
-
Aumentar el conocimiento acerca del sistema IG y los instrumentos jurídicos ú�les para su protección y valorización
- Organizar cursos de capacitación (INDECOPI) - Dar instrucciones sobre el método de solicitar protección para la IG (INDECOPI)
- Proporcionar información precisa sobre los sistemas de protección de las IG
- Prestar apoyo a inicia�vas locales
- Apoyo en la organizaciónde espcacios de aprendizaje y discusión
- Fomentar las inicia�vas locales de reconocimiento de las IG a través de un apoyo económico y técnico - Simplificar el trámite de solicitud para una IG
- Estudiar los obstáculos para la comercialización de la cadena de producción IG
- Estudios económicos de las principales barreras existentes en los diferentes mercados
- Establecer programas de financiación para la realización de inversiones estructurales e inmateriales - Prestar apoyo económico y técnico a las organizaciones IG para su administración
- Respaldar inicia�vas conjuntas
- Favorecer inicia�vas de promoción colec�vas coherentes con los valores del producto
- Favorecer el reconocimiento de los productos IG por los consumidores
- Promover un logo�po o sello nacional para los productos IG
- Facilitar la evaluación del impacto de la ges�ón de IG en términos económico, social y ambiental
- Facilitar y apoyar estudios de impacto - Definir prác�cas más sostenibles - Facilitar el control de los requisitos
- Facilitar la u�lización de la IG por, cada vez ,más actores
- Elaboración de programas de apoyo financiero para quiénes deseen u�lizar la IG - Fortalecer los actores más débiles y marginados (información, apoyo técnico y económico) - Aumentar programas des�nados a la facilitación de inclusión de actores en la cadena
- Reforzar el valor agregado
- Promoción del turismo basado en los recursos locales (creación de i�nerarios, ferias, etc.) - Facilitar la implementación de sinergias entre diferentes actores (turismo, restauración, etc.)
- Aumentar la par�cipación de la comunidad local en el producto
- Organización de ferias y otros eventos relacionados con el producto en el territorio de producción
- Respaldar la distribución equita�va de beneficios
- Promover el establecimiento de asociaciones y organizaciones profesionales para es�mular negociaciones justas y eficaces - Velar por que se otorgue a los actores más marginados el mismo acceso a la información, asistencia técnica y económica
- Fomentar acuerdos de cooperación en la cadena
F: Adapad d FAO, 2010 (mad p Ma B, 2008).
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MEDIDAS NECESARIAS
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
4.7 EL SACHA INCHI COMO CONOCIMIENTO TRADICIONAL Otra manera de valorizar el sacha inchi y remunerar a los actores de la cadena, es su reconocimiento como recurso biológico vinculado a los conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas. En Perú, las Comunidades Navas Amazónicas registradas en el año 2007, alcanzaron los 332975 habitantes, cifra que representó el 1,21% de la población censada del país. En total existen 1786 Comunidades Indígenas y 52 pueblos étnicos 63. Según un estudio de CEPAL, la población indígena de Perú, en su conjunto, representa el 25% de la población total, con 6,5 millones de personas, resultando ser el tercer país de América Lana en cuanto a población indígena (CEPAL/CELADE, 2010). El Tratado de Cooperación Amazónica, a través de un documento sobre B y S P Ií Azí, describe de la siguiente forma la situación de la población indígena: “[...] cual í z, í, y a las graves y permanentes presiones ejercidas por la expansión de las sociedades nacionales que, a través de la
í , í z . Az, z y ; z í , nes de una población acorralada por la modernidad, la enfermedad y la violencia” 64.
Como dispone la Constución de Perú de 1993 en su arculo 189, “L C C y N y jí. S z, j y y , í y , y . L , . E E C C y N” . La capacidad de las comunidades, a lo largo del empo, de innovar, domescar, mejorar y usar los recursos naturales para la alimentación y la medicina natural, ha sido ampliamente reconocida como fuente de saber y prácca fundamental para el bienestar y el desarrollo de la sociedad de hoy día (Ruiz, 2006). En este apartado se hará referencia al término recursos biológicos, según la denición otorgada por el art. 2 del Convenio sobre Biodiversidad, por el cual “ , , , ” , donde los ‘recursos genécos’ vienen denidos en este mismo art. 2 como “ ” 65. Alrededor de los años 80, en los debates para la implementación del ITPGRFA, se inició la discusión sobre el concepto de Derechos del Agricultor que, entre otros temas, hace referencia al aporte intelectual indígena asociado a la conservación, mantenimiento y desarrollo de los recursos togenécos. Con la Resolución FAO 5/89, se establecieron formalmente los Derechos del Agricultor denidos como “derechos derivados del reconocimiento z z ñ ( y ) , y ” (Ruiz, 2006). Actualmente, el I Ty P G R F A , que entró en vigor en el año 2004 congurándose como un instrumento jurídico internacional vinculante, reconoce los Derechos del Agricultor, los cuales: “deben ser implementados a nivel nacional y que sus contenidos están asociados a CT, j y y í y ” (Ruiz, 2006). El Tratado se compone de 116 partes contratantes, constuido por 115 países y la Unión Europea. En su preámbulo el tratado arma “que la contribución pasada, presente y futura de los agricultores de todas las regiones del mundo, y , , j y y D ” . Del mismo modo, en el art. 1.1 dene sus objevos: 63 64 65
Cí S G É Azí P, INEI 2007. T C Az. B y S P Ií Azí (1995) El texto integral del CBD es disponible en el siguiente enlace: hp://www.cbd.int/convenon/text/
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
“ y z y y j y z í C Diversidad Biológica, para una agricultura sostenible y la seguridad alimentaria” , y arma en su art. 1.2: “estos j T Oz N U A y A y C D B” . Asimismo, el art. 9 trata sobre los Derechos del Agricultor, y establece que “L P C nocen la enorme contribución que han aportado y siguen aportando las comunidades locales e indígenas y los
, y , y y alimentaria y agrícola en el mundo entero”, y por ende “[...] acuerdan que la responsabilidad de hacer realidad
D y . [...] P C [...] y D , [...] , [...] [...] , , y z ” 66. Sucesivamente, a principios de los noventa, otro instrumento internacional comenzó a pactarse y debarse, el C D B (CBD). En su preámbulo reconoce “[...] la estrecha y tradicional y í , y z , y y z ” , y dene sus objevos en el art. 1: “[...] , z y j y z , mediante, entre otras cosas, un acceso adecuado a esos recursos y una transferencia apropiada de las tecno-
í , y í, í ” 67. El Convenio entró en vigor en 1993 y hasta la fecha cuenta con 193 países suscriptores (UICN, 2013). Como describe Ruiz (2006), el Convenio cambió el paradigma de los recursos biológicos, gracias al cual pasó de ser , a reconocer el derecho de los Estados sobre los recursos naturales que les pertenecen, permiéndoles regular el acceso a dichos recursos y bajo qué condiciones. En su art. 8(j), el CBD cita: “C , , y , y í y ñ y z y , y , y , y z , y ” , reconociendo la importancia de los Conocimientos Tradicionales (CT) bajo el perl social, cultural y ecológico, estableciendo que deben de ser promovidos, mantenidos y desarrollados con la parcipación directa de las mismas comunidades y su consenmiento fundamentado previo al acceso a los recursos, y su parcipación equitava en los benecios derivados de s u uso (Ruiz, 2006). En el año 1998, durante la Cuarta Conferencia de las Partes del CBD en Braslava, se formó el Grupo de Trabajo ad hoc de Composición Abierta sobre el Arculo 8(j), en el que parciparon acvamente representantes de pueblos indígenas de diversos lugares del mundo, destacando la “necesidad de reconocer un vínculo esencial y CT y jí CT” (Ruiz, 2006). Actualmente, otro grupo de trabajo relevante que debate la mulplicidad de temas sobre los CT, es el Comité Intergubernamental de la OMPI sobre Propiedad Intelectual y Recursos Genécos, Conocimientos Tradi66
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T y . El texto completo está disponible en el siguiente enlace: p://p.fao.org/docrep/fao/011/i0510s/i0510s.pdf C D B, ONU (1992). Disponible el texto integral en el siguiente enlace: hp://www.cbd.int/doc/legal/cbd-es.pdf
Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
cionales y Folklore. Este Comité dene los CT como “[...] conocimientos dinámicos y en constante evolución, que , y y y, , z, , , y zj ” (OMPI, 2013). La misma OMPI, en el documento WIPO/GRTKF/IC/7/9 hace referencia a los CT como “[...] los conocimientos que: se generan, conservan y transmiten en un contexto tradicional; se asocian claramente a la cultura o a una comunidad tradicional o indígena que los conserva y los transmite de una generación a otra; están vinculados a una comunidad local o indígena que se considera como custodio o depositaria de esos conocimientos y asume la responsabilidad cultural al respecto, o sea la obligación de preservar esos conocimientos, consciente de que la apropiación indebida o el uso degradante de e sos conocimientos sería perjudicial u ofensivo; esta relación puede
D ; : , , y ; y munidad de origen como conocimientos tradicionales “ (OMPI, 2004). Es también interesante tomar como referencia “los componentes de los conocimientos tradicionales” 68 que proporciona Ruiz M. (2002), tomado de UNEP/CBD/COP3 (1996): a. Ta kw hw vad a a daó, aazaó pvó d ma, p é:
i. ii. iii. iv. v. vi.
conocimiento tradicional sobre ecosistemas locales conocimiento tradicional sobre la función del ecosistema conocimiento tradicional sobre territorios y hábitats taxonomía tradicional y avanzada usos, tradicionales y actuales conocimiento tradicional de tecnologías para determinar la especie y la categoría del recurso genécos y su evolución a través del empo vii. técnicas tradicionales para la comunicación y transmisión de información b. Ta appada paa a vaó d:
i.
conocimiento y tecnologías tradicionales para la conservación in situ
. Ta paa dad d a bdvdad mp:
i. ii. iii. iv.
usos espirituales y culturales técnicas tradicionales de producción de medicamentos tratamientos de los recursos naturales con el uso de conocimientos y tecnología autóctonos metodologías para evaluar la diversidad biológica, incluso valores no económicos (de existencia) y valores écos, religiosos, espirituales.
En deniva, como expresa la OMPI a través del Comité Intergubernamental sobre Propiedad Intelectual y Recursos Genécos, Conocimientos Tradicionales y Folklore: “[...] CBD [...] y , T I , [...] y y y ” (OMPI, 2004). Otra organización internacional relevante es la Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales (UPOV), cuya misión es “ y z ” . Dicha organización fue establecida en 1961 por el C I P O V (Convenio de la UPOV), que “y z ” , ofreciendo “protección al obtentor de una nueva variedad vegetal, en forma de ‘derecho de obtentor’, si la variedad cumple las condiciones establecidas” , es decir, que “ , , y , y por una denominación apropiada” (OMPI, 2004).
68
Véase el siguiente enlace: hp://www.bvsde.paho.org/bvsacd/cd16/generis.pdf
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica en el Perú
Hoy día, dicho convenio está constuido por 71 países miembros y noca que “los Estados y ciertas orz C UPOV A 1991 C” (UPOV, 2013). Se cita a los CT y a los recursos biológicos en los ADPIC, en su art. 27.3 (b) el cual establece la posibilidad de excluir del sistema de patentes “las plantas y los animales excepto los microorganismos, y los procedimientos esencialmente biológicos para la producción de plantas o animales, que no sean procedimientos no biológicos o
. S , M , z y [...]” . De todos modos, el sistema de patente no parece ser adecuado para la protección de un derecho, que en la mayoría de los casos, resulta tener carácter colecvo y no debería ser alienado. Además, no s e hace referencia a los tratados internacionales vigentes en materia de CT y Diversidad Biológica. A nivel de reparción de los benecios asociados al uso de los CT, en 2010 entró en vigor el Protocolo de Nagoya sobre el A R G y P J y E B D Uz C D B , el cual hace referencia a uno de los tres objevos denidos por el CBD en su art. 1. Este instrumento ene como objevo: “[...] establecer un marco internacional jurídicamente y ABS 69 a nivel regional, nacional y local” (UICN, 2013), y actualmente cuenta con 92 rmas y 19 racaciones 70. Los benecios a los cuales se reere dicho Protocolo son de po monetario y no-monetario, y aparecen denidos en el Anexo del mismo. En este contexto, la CAN promulgó en 1993 la Decisión n. 345 de “Régimen Común de Protección a los Derechos de los Obtentores de Variedades Vegetales” y en 1996 la Decisión 391 de “Régimen Común sobre Acceso a los Recursos Genécos”. La Decisión 345 hace referencia al C UPOV mencionado anteriormente, como se deduce en su art. 1(a) donde describe el objeto de la Decisión: “ y z C O” . En su art. 4 señala el término crear como “[...] la obtención de una nueva variedad mediante la aplicación j ” 71. El debate que siguió, como muestra Ruiz (2002), se centró en la protección que se otorgaría a dichas variedades, las cuales se verían afectadas por “cierta forma de conocimiento asociada más bien a patrones occidentales y modernos, excluyéndose de esa ma-
y , y í comunidades indígenas”. Aunque el art. 4 se mantuvo, los expertos indican que “ z , [...] . S , í z requisitos nada impediría que estas variedades sean protegidas” .
La preocupación de la CAN por los CT, dio como resultado la promulgación de la Decisión 391 de 1996. En las consideraciones de esta decisión, se señala que “[...] , y z í , y í, y ”, y connua “[...] es necesario reconocer la contribución histórica de las comunidades indígenas, afroamericanas y locales a la diversidad
, y y z í que dicha contribución genera” y “[...]que existe una estrecha interdependencia de las comunidades indígenas, afroamericanas y locales con los recursos biológicos que debe fortalecerse, en función de la conservación de la
y y y Pí M” 72, reconociendo, de este modo, la importancia de los CT así como de su desarrollo, protección y remuneración.
Acceso y parcipación en los benecios en su sigla en inglés. Véase el siguiente enlace: hp://www.cbd.int/abs/nagoya-protocol/signatories/default.shtml 71 El texto integral de l a Decisión es disponible al siguiente enlace: hp://www.wipo.int/wipolex/es/text.jsp?le_id=223071 72 El texto integral de la Decisión mencionada está disponible al siguiente enlace: hp://www.wipo.int/wipolex/es/text.jsp?le_id=223520 69 70
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Requisitos para el reconocimiento del producto como Indicación Geográfica
Es importante subrayar la denición que la Decisión 391 otorga al componente intangible: “ [...] todo conoci, , , , , í ” . Asimismo, precisa la posibilidad de contener, además de un componente tangible o material (el recurso biológico en sí), un componente intangible asociado al mismo recurso. Sin embargo, este componente intangible no solo se reere a CT, sino también a otros conocimientos como puede ser el cienco, mientras que “lo importante hubiera sido incidir en el componente intangible desde el punto de vista de los conocimientos, innovaciones
y í -y í - propiedad intelectual” (Ruiz, 2002). Dicha Decisión es, de todos modos, una importante iniciava sobre el tema de los CT y los recursos biológicos a ellos vinculados, no solo en el contexto lanoamericano, sino también a nivel mundial. En su art. 2 se describen los objevos de la misma: “[...] Pí M y , [...] j y [...], y y y , de comunidades indígenas, afroamericanas o locales; [...] promover la conservación de la diversidad biológica y z , [...] y -
, y , y y [...] Pí M”. El art. 5 hace referencia a uno de los principios fundamentales que inspiraron el CBD, es decir, la soberanía de los Estados acerca de sus recursos y su autoridad para disponer las condiciones de acceso, uso y distribución del los benecios, estableciendo que: “L Pí M j í y y [...]. L y z y , Pí M, y C D B y D”. El art. 6 establece que: “L y [...] , Pí M í , N E [...] , bargables [...]” . En este caso es importante mencionar que el sacha inchi en su especie P. volubilis L. fue reconocido como Patrimonio Natural del Perú con Ley 28477 de 200 5. Con respecto a los CT, en el art. 7 la Decisión establece que los países miembros “reconocen y valoran los derechos y la facultad para decidir de las comunidades indígenas, afroamericanas y locales, sobre sus conoci-
, y y ” , reconociendo dichos derechos y la facultad de regular su protección y uso por parte de terceros. Aunque estos mismos derechos no aparecen descritos, es posible que se reeran al derecho de ser protegidos bajo un régimen nacional, el cual debería proporcionar la descripción de los mismos (Ruiz, 2002). Finalmente, se deben destacar las dicultades a las que los países andinos se enfrentan en el momento de ejecutar un régimen de acceso y reparción de los benecios, no obstante haya pasado más de una década desde la entrada en vigor de la Decisión 391. Ruiz (2008) señala que esas dicultades se deben a la complejidad de los procedimientos administravos, los cuales cuentan con demasiados instrumentos contractuales y con “una ”. A esto se le añade la falta de “ y ” , haciendo de los costos de transacción una barrera dicil de superar. Sin embargo, a pesar de esta situación, que puede parecer desalentadora, la Decisión 391 sigue siendo la clave para “z y í y procesos reguladores en los contextos nacionales, regionales e internacionales” 73.
A nivel de CAN, resulta úl mencionar la Decisión 486 sobre la “Propiedad Industrial del 2000”, la cual está dirigida a la incorporación de los ADPIC en el territorio, incorporando también la diversidad biológica y los CT, dos 73
Una lectura críca de la Decisión 391 de la Comunidad Andina y su puesta en prácca en relación con el Tratado Internacional. Ruiz, 2008. El texto completo está disponible en el siguiente enlace: hp://www.planreaty.org/sites/default/les/rna_136_147.pdf
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica Geográfica en el Perú
temas que en los ADPIC no aparecen desarrollados correctamente, debido a la resistencia que presentan los países industrializados ante ellos (Ruiz, 2006). Con respecto al arculo 3 de la Decisión 486 (Del Patrimonio Biológico y Genéco y de los Conocimientos Tradicionales) este establece que: “[...] Pí M la protección conferida a los elementos de la propiedad industrial se concederá salvaguardando y respetando su
y , í í, . E , de material obtenido de dicho patrimonio o dichos conocimientos estará supeditada a que ese material haya sido adquirido de conformidad con el ordenamiento jurídico internacional, comunitario y nacional” , subrayando como
la concesión de derechos de propiedad no debe afectar al patrimonio biológico de la Nación o a los Conocimientos Tradicionales. Tradicionales. Este mismo art. 3 señala que: “[...] Pí M y í, - , ” , ” , que como indica Ruiz (2006), “implica un reconocimiento de los Gobiernos del aporte intelectual indígena y para lo cual eventualmente deberán desarrollarse mecanismo de protección” . Finalmente, dicho arculo establece que: “[...] las disposiciones de la presente Decisión se aplicaran e interpretarán de manera que no contravenga a las esta-
D 39, [...]” , [...]” , vinculando directamente el sistema de patentes con el del acceso a los recursos biológicos vinculados a los CT (Ruiz, 2006). Rescpecto a la situación nacional de Perú, es importante subrayar la promulgación de la Ley 28216, “Ley de Protección al Acceso a la Diversidad Biológica Peruana y los Conocimientos Colecvos de los Pueblos Indígenas” de 2004, por la que se establece la constución de una Comisión Nacional de Prevención de la Biopiratería asociada al uso irregular e ilegal de recursos genécos y CT, CT, que impidió el registro de dos patentes relacionadas 74 con el sacha inchi . Esta Ley dene biopiratería como “[...] y z y í , z y C D B y . E , propiedad sobre productos que incorporan estos elementos obtenidos ilegalmente o en algunos casos mediante la invocación de los mismos” 75.
La Ley 27811 “Ley que Establece el Régimen de Protección de los Conocimientos Colecvos de los Pueblos Indígenas Vinculados a los Recursos Biológicos”, Biológicos”, fue promulgada en el año 2002 y, en su art. 3 establece “un régimen es í í ” ” . Los objevos de esta Ley se encuentran descritos en su art. 5: “[...] promover el respeto, la protección, la , y í, [...] j y z , [...] z í, [...] í P, y ” . En su art. 1, dicha ley establece que: “El Estado peruano reconoce el derecho y la facultad de los pueblos y í ” , reconociendo la importancia de los CT y, de forma implícita, los derechos de las comunidades indígenas a las que pertenecen esos CT. CT. En el art. 2, la Ley proporciona algunas deniciones, dos de las cuales resultan signicavas. En el apartado (a) dene el término P Ií como Ií como “[...] E , , y . E éstos se incluye a los pueblos en aislamiento voluntario voluntario o no contactados, así como a las comunidades campesinas
y [...]” ; y en el apartado (b) se denen los C C “ y transgeneracional desarrollado por los pueblos y comunidades indígenas respecto a las propiedades, usos y ca-
í ” . Aquel ‘componente intangible’ intangible’ al que se reere la Decisión Andina 391, abarca esta denición de CT y los describe como conocimientos que “ , (Ruiz, 2006). diferente a desarrollos estrictamente individuales” (Ruiz, Ibídem nota 39 El Texto integral integral de la Ley está disponible en el siguiente enlace: hp://www.wipo.int/wipolex/ hp://www.wipo.int/wipolex/es/text.jsp?le_id=1796 es/text.jsp?le_id=179602 02
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Los art. 6 y 7 establecen, las condiciones de acceso a los recursos a través del C I P (CIP) P (CIP) y, en el caso de comercialización, la suscripción de un contrato de licencia de uso de los conocimientos donde se establezcan las condiciones de ulizo de los CT y los términos de distribución justa y equitava de los benecios derivados de dicho uso. El CIP viene denido por el art. 2 (c) como una “[...] z [...] z í , formidad con las normas por ellos reconocidas [...]” , por lo que serán las organizaciones representavas las que tendrán la facultad de suscribir el CIP, CIP, y no las comunidades en sí. El art. 8 establece que: “S j 10% , , z F D P Ií [...]. L j y [...]” , [...]” , estableciendo el valor mínimo a desnarse a las comunidades involucradas en el contrato contrato de licencia espulado. El art. 10 describe la naturaleza colecva de los conocimientos tradicionales, determinando que dichos conocimientos pueden pertenecen a más de una comunidad y reconoce, al mismo empo, eventuales costumbres que forman parte del derecho consuetudinario de las comunidades involucradas. El arculo mencionado, además, establece que: “[...] j í y . P varios pueblos indígenas. Estos derechos son independientes de aquellos que puedan generarse al interior de los
í y y ” . El art. 11 señala que los CT “[...] forman parte del patrimonio cultural de los pueblos indígenas” , y el art. 12 constuye que al formar parte de dicho patrimonio “[...] los derechos de los pueblos indígenas sobre sus conoci ” . El art. 13 trata sobre los CT que están en el dominio público, situación que se realiza “cuando haya sido accesible a personas ajenas a los pueblos indígenas, a través de medios de comunicación masiva, tales como publica, , í vamente fuera del ámbito de los pueblos y comunidades indígenas. En los casos en que estos conocimientos hayan 20 ñ, j , -
, z , F D P Ií [...]” . [...]” . Este arculo concede a los pueblos indígenas la posibilidad de exigir parte de los benecios derivados del uso de CT, aunque estos sean de dominio público. La temporalidad temporalidad de 20 años es denida por Ruiz (2006) como “absolutamente discrecional” , y es el límite temporal, hacia atrás, para que las comunidades involucradas puedan exigir una compensación por el uso de su CT. El Título VI de la presente Ley, Ley, determina las modalidades de registro y solicitud así como la inscripción de los CT en los Registros propiamente creados (Registro Nacional Público, Registro Registro Nacional Condencial y Registros Locales). El Título VII describe, del mismo modo, las modalidades de solicitud y registro de los contratos de licencia, mientras que el Título VIII dispone los requisitos para la cancelación de un registro de CT. CT. Con respecto al Fondo para el Desarrollo de los Pueblos P ueblos Indígenas, según lo señalado por el art. 37 se creó “[...] j í y y . E F z í , , y ” El art.38, establece las modalidades de acceso a dicho fondo por lo que: “[...] í F D P Ií z y y , y C A z z dor” . Dicho Comité está conformado, según el art. 39 “[...] 5 í, y 2 C N P A, Az y A [...]”, [...]”, ñ ñ “ “ C C z, z, , , í y ” .
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Sacha Inchi. Investigación sobre las condiciones para el reconocimiento de la Indicación Geográfica Geográfica en el Perú
Con respecto a la protección del CT registrado, el art. 42 dispone que este “[...] estará protegido contra la , y ” , ” , tal como se dispone para los secretos industriales, y aplica los mecanismo relavos a la competencia desleal (Ruiz, 2006). Al mismo empo, el art. 44 dispone de la inversión de la carga de prueba, estableciendo que: “[...] la carga de la prueba recaerá en el denunciado” .
Otros instrumentos legales relacionados con los CT en Perú están representados por la Ley N° 29316 de 2009, la cual “, y A P y E A” , la Ley N° 26839 de 1997 “sobre la Conservación y Aprovechamiento Sostenible de la Diversidad Biológica”, la Ley 27308 “Ley Forestal y de Fauna Silvestre de 2000, el Decreto Supremo 014-2001-AG, Reglamento de la Ley Forestal y de Fauna Silvestre de 2001, el Decreto Supremo 003-2009-MINAM que establece el reglamento de la Decisión 391 de 2009, y el Decreto Supremo 0382001-AG, Reglamento de la Ley de Áreas Naturales Protegidas de 2001, el Decreto Legislavo 1075, que aprueba Disposiciones Complementarias a la Decisión 486 (Régimen Común sobre Propiedad Industrial) 76. Finalmente, según lo elaborado en este apartado, a partado, el registro del sacha inchi como Conocimiento TradicioTradicional, puede ser considerado como una alternava válida a las diversas dicultades del reconocimiento del mismo como Indicación Geográca. Al mismo empo, se deberían destacar los diferentes problemas implícitos a esta posibilidad, aunque se debería hacer de forma general y no profundizada, no siendo este el n de la labor desarrollada. En primer lugar, se tendrían que denir los CT relavos al recurso analizado y las comunidades indígenas originarias de dichos CT. Estas deberían ser involucradas acvamente en el proceso de denición y registros de los CT, lo que impondría una acvidad de sensibilización y concienciación previa para que puediesen parcipar de manera posiva y real. En segundo lugar, habría que mediar entre las partes para la espulación de los contratos de licencia y el porcentaje a desnarse a las comunidades involucradas. Dado el potencial comercial de este recurso en ambos campos, tanto el alimencio como el cosméco, el establecimiento de la cota de ventas a desnarse a las comunidades, resulta de fundamental importancia. El reconocimiento del sacha inchi como recurso vinculado a unos CT de las comunidades indígenas peruanas permiría la reparción de los benecios, incluso los que proceden de iniciavas de otros países. Por este movo, es importante el apoyo de las organizaciones internacionales indígenas y de foros de debate regionales, nacionales e internacionales.
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Véase el siguiente enlace: hp://www.biopirateria.gob.pe/Manual.pdf hp://www.biopirateria.gob.pe/Manual.pdf
Conclusión
CONCLUSIÓN El presente trabajo se ha centrado, principalmente, en el estudio de las condiciones existentes para reconocer el aceite de sacha inchi como un producto con IG, es decir, un derecho de propiedad intelectual con carácter colecvo perteneciente a un determinado territorio y a su colecvidad, reconociéndolo como un producto propio. La función de esta herramienta es proporcionar una tutela legal sobre un derecho de propiedad intelectual, para crear un valor y un mayor benecio económico en las transacciones comerciales. El círculo virtuoso que se desata como consecuencia del reconocimiento de este instrumento, permite la acvación de dinámicas económicas, sociales y ambientales posivas que interesan a todo el territorio en su conjunto, abarcando también acvidades externas a la cadena de la IG. El Arreglo de Lisboa (1958) fue el primer acuerdo de carácter internacional en otorgar a los productos vinculados al origen geográco un reconocimiento y un nivel de tutela aceptables, pero a pesar de la existencia de este arreglo, la IG no empezó a cobrar una mayor importancia hasta la década de los noventa. En 1992, la Unión Europea (UE) desarrolló una políca puntual sobre las IG y dispuso una pauta importante que hizo de esta herramienta un objeto de estudio mundial. Su importancia creció con el empo gracias a organizaciones como la OMPI y la OMC, las cuales iniciaron a favorecer y promover el uso de esta herramienta, fundamentalmente para el desarrollo de los Países en Vía de Desarrollo (PVD). Con el empo, surgió una especie de ‘moda’ en el uso de las IG, que mulplicó las iniciavas por parte de diferentes países para el reconocimiento de productos ‘picos’ territoriales, aunque en muchos casos estos no reunían las condiciones para su implementación. Recientemente, la FAO, a través de su programa sobre la calidad especíca vinculada al origen (Origen&Calidad), ha empezado a considerar los productos tradicionales con calidad especíca como elementos acvos úles para la lucha contra la inseguridad alimentaria y que favorecen el desarrollo socio-económico de las áreas marginales. La comunidad cienca internacional, al mismo empo, considera y debate con un creciente énfasis las posibilidades de desarrollo y las problemácas que proceden de polícas basa das en las IG. En el caso del aceite de sacha inchi, se relevó un potencial posivo para su reconocimiento como IG, a pesar de tratarse de un proceso a largo plazo con diversos obstáculos a los cuales hacer frente. El primer límite encontrado, es la ausencia de una concienciación acerca de las caracteríscas generales del producto por parte de todos los actores de la cadena, cuya presencia constuye una condición básica e imprescindible para que dicho producto comience su proceso de reconocimiento. A lo largo de toda la cadena producva, todos los actores involucrados directamente en su elaboración deben senrse parte del mismo, para que de esa forma se desarrolle un sendo colecvo que facilite la denición de objevos comunes y la ‘construcción’ de una calidad que respete los diferentes intereses. Además, una cadena integrada permiría el desarrollo de un conocimiento de po técnico-económico, con el cual adquirir una capacidad de gesón imprescindible para su administración durante todo el proceso y en las sucesivas fases de comercialización y sostenibilidad. Este primer obstáculo se podría superar con el apoyo de facilitadores (instuciones públicas y privadas, tanto nacionales como internacionales) mediante acvidades dirigidas a una integración total de la misma. La fragmentación de los productores de materia prima se podría resolver mediante la creación de una organización de agricultores de carácter nacional, que cuidase de sus intereses y los
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representase a través de la parcipación en las toma de decisiones. Dicha organización debería estar constuida por los representantes de las organizaciones territoriales, de esta forma se incluiría a este eslabón en la toma de decisiones y se fortalecería el sendo de idendad con el producto, integrándolos, a su vez, en la cadena. En segundo lugar, es importante profundizar en el tema de las invesgaciones sobre los aspectos culturales y ciencos del producto. Son estrictamente necesarios estudios de caracterización toquímica de las diversas especies de Pk halladas en diferentes territorios, para que se pudiese denir la calidad especíca del producto dentro de la gran variedad de caracteríscas, es decir, denir ese ‘aire de familia’ respetando la variabilidad del mismo. Al mismo empo, es indispensable el desarrollo de estudios de comparación entre aceites procedentes de diferentes territorios tanto nacionales como internacionales. De esta manera se podrían denir los factores territoriales que inciden sobre la calidad especíca del producto y su unicidad respecto a un territorio de producción bien denido. No se descarta la posibilidad de reconocer el aceite de sacha inchi como una IG de carácter transnacional, abarcando otros países de la CAN. De ser este el caso, habría que tener en consideración las dicultades logíscas y de representación de los intereses de los actores con diferentes nacionalidades. Otro instrumento úl para la valorización y tutela del sacha inchi a nivel internacional, sería el reconocimiento como CT vinculado a las comunidades navas. Se trata de una herramienta diferente a la IG, pero como sucede en el caso de esta, debería elaborarse un estudio puntual que deniese sus límites y potencialidades. Los CT se tomaron en consideración por su carácter colecvo y porque proporcionan a las comunidades navas un derecho sobre sus propios conocimientos, a parr de los cuales pueden generar benecios monetarios y no monetarios úles para su desarrollo y el de su territorio. Sería necesaria la constución de una mesa de trabajo donde se involucrasen todos los actores de la cadena, que sirviese de base para la construcción de una visión común hacia y para el producto, y que estuviese mediada por los intereses que cada actor representa, proporcionando a cada uno de ellos un espacio de discusión. Dicha mesa podría ir profundizando en los estudios ciencos, económicos e históricos que se necesitarían para aclarar las condiciones del sacha inchi y la determinación de su picidad. Además, a través de esta dinámica colecva se facilitaría la denición de los parámetros del pliego de condiciones; se establecería un lugar de discusión, sobre todo, para la reparción de los costos y de los benecios de forma equitava; y se permiría el establecimiento de los objevos. Es fundamental la implicación por parte de instuciones públicas, privadas y académicas, con carácter nacional e internacional, que podrían contribuir con recursos técnico-económicos al desarrollo de las acvidades mencionadas a través de una acción de mediación y apoyo, debido a que se tratan de dinámicas que impulsan el desarrollo local, congurándose como acciones de valorización y mejora de un bien público. Solamente una cadena integrada que cuente con una idendad bien denida y comparda por todos los actores, puede desatar aquellas dinámicas colecvas indispensables para la denición de un producto exitoso, capaz de acvar acciones territoriales posivas que determinan un desarrollo local ecaz.
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Anexo
ANEXO RESULTADOS DE LA WEBTOOL CALIDAD&ORIGEN PARA EL PRODUCTO ACEITE DE SACHA INCHI RESULTADO PROCEDENTE DE LA PRIMERA ENCUESTA Análisis
Es un producto relavamente nuevo en la región y su reputación está en proceso de creación. Para demostrar el vínculo con el terruño, habrá que relacionar el producto con otros campos de estudio, en parcular el conocimiento local y los recursos naturales. El producto formó parte de la cultura local en algún momento, representando un patrimonio cultural al menos para algunos productores. La evolución de las práccas de producción/elaboración y de consumo puede conducir a una pérdida de la especicidad. Podría ser importante sensibilizar a la población s obre este riesgo e intensicar la promoción de la cultura local en relación al producto. La especicidad del producto está vinculada a una o más caracteríscas relacionadas con acvos inmateriales que permiten diferenciarlo de otros productos, siempre y cuando el consumidor sea capaz de percibir tal especicidad. El riesgo de pérdida de valor para los productores es alto si alguno de sus compedores comienza a producir productos similares fuera de la región. Emprender acciones para: aumentar la sensibilización de los consumidores sobre el valor inmaterial especíco, incrementar la búsqueda para idencar las caracteríscas medibles y denir las especicaciones para poder proteger el nombre y por tanto, mantener la producción en la región a largo plazo. Puesto que el producto no está relacionado con un saber local especíco, el vínculo con el territorio puede que sea muy débil, a no ser que una invesgación más profunda permita idencar las práccas agrícolas especícas o los métodos de procesamiento relacionados. Por el contrario, puede que sí que exista un vínculo con los ingredientes, el material o la reputación especíca asociada con el origen. Es dicil transmir la inuencia que enen las condiciones naturales en la calidad especíca dentro del área geográca debido a la incoherencia que presentan dichas condiciones. La juscación del vínculo con el origen se basará en otros elementos relavos a las condiciones locales, que desempeñen un rol más intenso (por ejemplo, una raza animal/ una variedad vegetal especíca / un conocimiento tradicional local) y la reputación. Considere también la pernencia de denir el área de producción de tal modo que las condiciones naturales sean consistentes. No es fácil demostrar el vínculo entre las condiciones naturales y el producto nal. Aunque todavía no existe un claro acuerdo sobre el establecimiento de un vínculo entre el producto y su origen geográco, hay que profundizar y extender el campo de estudio sobre otras dimensiones relacionadas con el área de producción. Puede ser interesante considerar los estudios ciencos sobre el tema y llevar a cabo entrevistas con los actores involucrados. El producto hace uso de una o más variedades que son endémicas y verdaderamente locales, reforzando decisivamente su vínculo con el área de producción. Si todos los productores no hacen uso de éstas, habrá que estudiar cuáles son los pros y contras de imponer su uso. Puede dar lugar a conictos de intereses entre los productores que no las usan habitualmente, y estos deben ser cuidadosamente sopesados. Habrá que tomar precauciones y no disminuir demasiado la diversidad genéca en poblaciones en peligro.
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Vínculo con el origen
Se verica un vínculo entre el producto y su origen. No obstante, el vínculo con el terruño en su dimensión sica (vínculo con los recursos naturales) no es muy fuerte. Por esta razón, es importante describir bien el vínculo con los recursos naturales y los factores humanos para juscar el vínculo con el terruño. Cualquier mención en el pliego de condiciones va a aumentar las posibilidades de éxito desde el punto de vista del desarrollo sostenible.
RESULTADO PROCEDENTE DE LA SEGUNDA ENCUESTA Análisis
Algunos actores han realizado reexiones sobre la posibilidad de promover la creación de valor de un producto de origen para fortalecer el desarrollo local. Pero los actores involucrados no están al corriente de casos exitosos ni saben cómo proceder. Existe la necesidad de informar / concienciar. Esto puede hacerse a través del iniciador, tanto de la región como externo a ella. La proporción de empleos locales es relavamente importante. El efecto sobre la economía local será tangible; especialmente si el valor agregado es alto. Cuanto más se benecie la idendad regional del desarrollo del producto IG -en aspectos como el turismo y un mayor atracvo de la región en sendo amplio-, mayores serán las sinergias y el apoyo de las autoridades locales. El grupo de agricultores es muy heterogéneo. Su movilización será dicil y crucial, especialmente si las visiones no convergen hacia una visión común del desarrollo del producto. La heterogeneidad del grupo y la segmentación en los niveles de los acuerdos en estrategias futuras pueden representar un gran desao para la gobernanza de la acción colecva. Antes de abordar la estrategia del círculo virtuoso para el producto es necesario evaluar si, a largo plazo, los esfuerzos que se realicen para unicar sus puntos de vista serán compensados con benecios sucientes. La reducción del nivel de heterogeneidad a través de la organización puede ser lograda tanto por la limitación del acceso de productores que divergen fuertemente del grupo central, como por la provisión de incenvos a los miembros para la unicación de sus estrategias. Los sistemas de producción son homogéneos entre los agricultores. Esto facilitará la denición de las práccas agrícolas que se establezcan para el producto una vez que este ya haya sido cualicado (por ejemplo, mediante la elaboración del pliego de condiciones) . Este es un factor favorable en la fase de calicación de la estrategia del círculo virtuoso. Los procesadores son en su mayoría empresas de tamaño medio. Si enen un fuerte interés y muestran un benecio potencial, su rme compromiso sería el factor clave de éxito para la dinámica del círculo virtuoso. De hecho, enen algunas capacidades de inversión que podrían desarrollar el volumen de producción. Por lo tanto, realmente pueden ser ellos los conductores del proceso. Es muy importante que se involucren desde el inicio del proceso de otorgar calidad al producto. De lo contrario, pueden ser muy reacios a hacer esfuerzos y adoptar los requisitos en una etapa posterior. Los fabricantes / elaboradores están diversicados, y el producto no es el más relevante en sus negocios. La movilización puede ser lenta y esto debe tenerse en consideración en esta etapa. Se requerirán grandes esfuerzos en la facilitación. En el grupo de los procesadores existen diferencias en su comportamiento estratégico. Con el n de tener una buena movilización, es necesario contratar a un facilitador para unicar sus puntos de vista en torno a los puntos estratégicos de la convergencia. Este importante paso no debe ser descuidado antes de iniciar otras medidas en la estrategia de un círculo virtuoso.
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Los actores nales, tales como minoristas y exportadores, enen un papel destacado en la estrategia de mercado. Considere la posibilidad de hacer alianza con un grupo mayor de interesados con el n de obtener más apoyo en la realización de la estrategia del círculo virtuoso. Para la s ostenibilidad del proceso, es importante contar con todos los actores involucrados, en parcular los productores o procesadores, así se podrán evitar nuevos conictos de interés. Si los obstáculos son muchos, considere formas innovadoras para que parcipen, como realizar proyectos conjuntos de promoción. Considere la posibilidad de analizar el reparto del valor a lo largo de la cadena, con el n de idencar las debilidades y fortalezas. Los actores públicos locales -como las administraciones locales (municipios) y/o instuciones de invesgación juegan un rol importante en el proceso. Es muy importante que estén involucrados: pueden contribuir al anclaje del producto con la estrategia territorial; o funcionar como facilitadores para la comunicación y como apoyo a las instuciones nacionales. Esto es parcularmente relevante en la fase de reproducción y en el reconocimiento de los componentes que constuyen los bienes públicos. Por otra parte, los centros de invesgación y los expertos pueden llevar a cabo los estudios necesarios, que son esenciales para las etapas de idencación y calicación, y la redacción del pliego de condiciones. El nombre del producto se usa para diferentes productos en el área de producción. Un proceso de calicación y protección, así como un proceso de cercación podría beneciar a todo el grupo de productores y consumidores. La armonización de las condiciones de producción y calidad del producto constuyen bases sólidas para construir una imagen de producto, una ‘promesa’ al consumidor. Las acciones actuales de comunicación y propaganda son signicavas. Esto es muy posivo para el éxito de la estrategia del círculo virtuoso. Los impactos serán mayores si el mar keng colecvo se coordina con el markeng individual de las empresas. Esta coordinación de acciones y esfuerzos siempre será úl. Si fuera posible, habría que considerar también la posibilidad de desarrollar una estrategia promocional de ‘cesta de bienes’, que combine varios productos y servicios de la región. La reputación del producto es valiosa para los consumidores; valor que merece ser protegido. Además, le da una garana de que el nombre del producto no es genérico. Sin embargo, si el nombre no se uliza exclusivamente para designar un producto originario de la zona geográca, es necesario realizar una encuesta sobre una muestra representava de consumidores a efectos de probar que existe tal reputación. Puede resultar dicil alcanzar un aumento en el volumen de producción debido a la disponibilidad de recursos u otros limitantes (riesgo de sobrexplotación, disminución de la calidad, escasez de mano de obra, etc.). En algunos casos el apoyo público ya es importante y un incremento en los ingresos podría ser impulsado por un aumento de los precios y el crecimiento de un nicho de mercado (en el caso de que no exista). Sin embargo si la producción actual se ve limitada en volumen y no puede ser aumentada, los benecios de aplicar una estrategia del círculo virtuoso pueden ser limitados a nivel económico y en tal caso, resultará más conveniente enfocar el objevo en una estrategia social o cultural, como la conservación de recursos naturales y de tradiciones culturales o el impulso de aquellos productos que tengan un signicado simbólico importante para la idendad local o nacional. Es predecible que el desarrollo del producto más facble sea a través de la reducción de costos. Esto puede estar relacionado con la incorporación de innovación en procesos de elaboración o práccas de producción. En este contexto, es importante no modicar demasiado las práccas, de modo que puedan causar un cambio extremo en el producto nal. Si fuera posible, considere también una mejora en la calidad a través del proceso y/o un aumento del volumen de producto. El turismo se encuentra bien desarrollado en la región. Vienen turistas de todo el mundo. Hay oportunidades para impulsar la venta a través de la venta directa a turistas. La arculación entre los eventos turíscos y la campaña de promoción del producto es una buena base. H ay buenas perspecvas de desarrollo. Se podrían desplegar estrategias de exportación enlazadas a la procedencia de los turistas si en paralelo se pudieran desarrollar canales de distribución apropiados.
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El producto accede fácilmente a los canales de distribución. La acvación del círculo virtuoso se verá facilitada por la colaboración de los comerciantes. El desarrollo del potencial dependerá de la posibilidad de incorporar nuevos canales de distribución, como las exportaciones. El mercado de referencia, en el cual el producto está posicionado, está en crecimiento. Los consumidores aprecian el producto debido a que cumple con las actuales tendencias de sus preferencias. Esto conduce al desarrollo, ya que los esfuerzos en la promoción de ventas serán muy efecvos y no muy costosos. La acvación del círculo virtuoso se verá beneciada por estas condiciones favorables. Hay que tener cuidado en no disminuir la calidad o sobreexplotar los recursos naturales como consecuencia del incremento de los volúmenes de venta. Así mismo, considere la posibilidad de abrir o intensicar otros canales de distribución, como mercados urbanos o de turistas, distribución mayorista, etc. Hay oportunidades favorables en los mercados de exportación. Las acciones de promoción y markeng serán muy efecvas y contribuirán a la difusión del producto en el extranjero. Adicionalmente, considere nuevas oportunidades como el desarrollo del comercio justo o de nichos de mercado. Los mercados de nostalgia, dirigidos a comunidades de inmigrantes son también un canal de distribución rentable: el origen geográco de los productos desempeña un rol importante y simbólico en la preservación de su idendad étnica y en el mantenimiento de un fuerte vínculo con su herencia cultural fuera de casa. En cualquier caso, tenga cuidado con que el aumento de los volúmenes de venta no acarree una disminución en la calidad o una sobreexplotación de los recursos naturales. Considere también el impacto en el precio para la población local y mantenga el equilibrio de los intereses entre el desarrollo del mercado y el acceso al producto a un precio razonable para la población local. Si el producto goza de una reputación establecida y el vínculo con su origen (factores naturales y/o humanos) está bien juscado, es muy urgente mantener el nombre y desarrollar una promoción dirigida a los consumidores para evitar la pérdida de valor debido a la competencia desleal. Los recursos naturales son protegidos fuerte y claramente por los sistemas producvos vinculados al producto. Este hecho deende los impactos medioambientales posivos mediante un esfuerzo colecvo de promoción del producto. Mientras esas práccas, si contribuyen a la calidad especíca, se mencionen en el pliego de condiciones, se prevendrán riesgos de desviación cuando la demanda del producto sea mayor. Supuestamente, los sistemas de producción agrícola protegen los paisajes y/o los bosques navos. Deberían incluirse las buenas práccas concernidas cuando se relacionan a la calidad especica dentro del pliego de especicaciones para intensicar el impacto del desarrollo del producto dentro de su paisaje, y evitar su deterioro/depredación. Esto ayudaría también a realzar el impacto de la estrategia del círculo virtuoso en el cambio climáco. La sensibilidad de los consumidores frente a la conservación del paisaje está en aumento y tal contribución puede aumentar la imagen posiva del producto frente a los consumidores. El sistema de producción agrícola relacionado con el producto protege algunas especies silvestres / razas. Deberían incluirse buenas práccas relavas a la conservación en el pliego de condiciones con el n de aumentar sus efectos protectores y evitar desvíos. La proporción de supercie que se ve afectada por la producción de la materia prima es baja. Por lo tanto, será dicil argumentar y comunicar el efecto sobre la erra. Sin embargo, si el producto añade valor a las explotaciones agrícolas (por ejemplo: azafrán, culvos especiales, plantas medicinales, etc.), el apoyo a los ingresos de las familias involucradas va a ser muy importante, y esto tendrá un efecto posivo para la agricultura en la región. Los sistemas de producción relacionados con el producto protegen un ecosistema parcular y frágil. Este factor incrementa el impacto ambiental potencial de la acvación del círculo virtuoso. El fortalecimiento de esta acción puede suponer la clasicación de los ecosistemas frágiles por las autoridades competentes nacionales o internacionales, entre ellas la UNESCO (Programa MAB), la UICN (Programa de Gesón de los Ecosistemas) y la FAO (Sistemas Importantes del Patrimonio Mundial SIPAM). Hay grandes benecios en la combinación del círculo vir-
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tuoso de calidad con las acciones de conservación del paisaje, reconociendo y valorizando el rol de las acvidades humanas en la conservación de los recursos naturales. Los sistemas connúan usando práccas tradicionales sostenibles, lo cual es muy posivo para la conservación de los recursos naturales y para reforzar la calidad especíca del producto en términos de acvos subjevos. Estos elementos son importantes para las especicaciones y se deberían comunicar a los consumidores. Puede ser que algunas práccas agrícolas deban ser modernizadas para mejorar las condiciones de trabajo, de calidad o de eciencia. En tal caso, es importante asegurar que las innovaciones van a seguir conservando los recursos y manteniendo la calidad especíca. Se usa un lenguaje local especíco conocido por todos para designar el producto o sus práccas vinculadas. Esto representa un acvo cultural anclado a un área geográca, lo cual representa también un indicador socioecológico de una fuerte idendad local que puede ser movilizada para apoyar la estrategia del círculo virtuoso. Simultáneamente, la conservación y la promoción del producto se basan en la conservación y valorización del lenguaje local y de su diversidad social asociada. Hay muchos productos con calidad vinculada al origen y con una estrategia de iniciava conjunta basada en la imagen que otorga el territorio (cesta de bienes y servicios), la cual beneciará a todos los actores involucrados desde la producción hasta el sector turísco. Debe denirse una estrategia territorial, lo cual requiere un enfoque parcipavo y una coordinación de todos los actores locales, tanto del sector público como del privado. Al unirse a recursos nancieros de promoción, pueden aparecer nuevos mercados objevo y el consumo local se puede desarrollar a través del turismo. De esta forma se abren nuevas perspecvas para el desarrollo. Antes de inverr recursos, es necesario evaluar los costes y benecios esperados de la acción conjunta. La calidad especíca del producto y el conocimiento especíco vinculado a la producción corren el riesgo de desaparecer a causa de la falta de mecanismos de transmisión a las nuevas generaciones; tanto formales como informales. Es de suprema importancia idencar y describir estos conocimientos y tradiciones de una manera formal y promocionarlo o difundirlo con el n de no perderlos. También se aconseja la elaboración de un pliego de condiciones como manera de formalización. Se deben tomar medidas para asegurar la viabilidad económica de los sistemas de producción y la atracción por parte de las generaciones más jóvenes, conciliando así tradición e innovación. La comunidad local puede idencar y pensar una manera parcipava mediante la cual se mantengan las modalidades para conservar su patrimonio, considerándolo como una bandera del mismo. No se pueden idencar tradiciones culinarias relacionadas con el producto. La producción puede ser reciente o estar enfocada a mercados externos al territorio. En tal caso, este aspecto de cultura local no puede ser acvado mediante el círculo virtuoso. Puede que estas tradiciones se hayan perdido a lo largo del empo mediante cambios en la dieta local. En tal caso, podría ser interesante pensar en los benecios de reintegrar el producto en la dieta para destacar la diversidad culinaria y redescubrir el patrimonio local contribuyendo al desarrollo del producto y a su promoción. La región ene una acvidad económica que no depende del producto. Será dicil aislar el impacto del círculo virtuoso en la región del de los otros factores de crecimiento. Sin embargo, los aspectos posivos de esta situación son múlples, tales como la facilidad de encontrar actores dispuestos a inverr en la fabricación del producto. El trabajo vinculado a esta cadena de valor cumple alguna de las condiciones de decencia que pueden ser mejoradas con el n de alcanzar condiciones sociales sostenibles que pueden suponer un motor importante a largo plazo para la seguridad alimentaria y de nutrición, reduciendo las desigualdades y adoptando un crecimiento sostenible. Mediante la valorización del producto cuya calidad está ligada al origen puede ser la oportunidad ideal para mejorar las condiciones de trabajo y beneciarse del incremento de la producvidad como resultado de unas condiciones decentes de trabajo y una mejor imagen del producto y su territorio. De hecho, los consumidores están tomando cada vez más conciencia sobre las condiciones laborales empleadas en el producto consumido. La reputación del producto se puede ver dañada si este se relaciona con trabajo infanl o malas condiciones laborales. Por el contrario, la reputación se puede ver beneciada gracias a una conducta de buenas condiciones laborales
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La contribución de las mujeres, de los pobres y / o de otros grupos desaventajados no es valorada a pesar de formar parte de los procesos de producción o de la cadena de valor. Los benecios sociales obtenidos de acvar un círculo vicioso de calidad son ópmos, mientras que la sostenibilidad del sistema global no se benecia de los conocimientos especícos de estos grupos. Se pueden dar efectos negavos sobre la imagen del producto y sobre su reputación, como resultado del boicot realizado por los consumidores concernidos por razones écas; para el caso de la calidad ligada al origen, la percepción del consumidor es esencial. La exclusión de los procesos de toma de decisiones y de la valorización se pueden enfocar con las siguientes acciones (no exhausvas): promocionar la capacidad de desarrollo y la acción colecva de los grupos vulnerables, (de tal forma que ellos tengan voz y representación); involucrar a los representantes de los grupos vulnerables en los programas de desarrollo en relación con la acvación del círculo virtuoso; apoyo a las tecnologías que ahorran trabajo y servicios sociales que reducen las limitaciones de empo de las mujeres debido a las tareas doméscas y del cuidado, mientras se respetan las práccas tradicionales y los conocimientos práccos. Promover los servicios de guardería para facilitar la parcipación de las mujeres en reuniones, evitando así el empleo de niñas como trabajadoras del hogar en vez de estar recibiendo una educación. Existe un logo, una equeta, un envase parcular o una forma disnva reconocible por muchos consumidores, tanto locales como de otras zonas. Estos signos disnvos pueden ser protegidos y controlados legalmente con el n proteger a los productores y a los consumidores de posibles engaños. De esta forma, los consumidores podrán expresar sus preferencias ante productos con garana. En cualquier caso, el éxito de la estrategia del círculo virtuoso se verá facilitado mediante una políca fuerte de comercialización, incluida la promoción que se debería llevar a cabo con una adecuada idencación visual y una comunicación acerca de las cualidades de dicho producto. La cercación aumentará la conanza de los consumidores y reforzará la fase de la remuneración del círculo virtuoso. Puesto que hacer que el pliego de condiciones sea público y accesible para todos los consumidores, aumentará la conanza en estos. Algunas partes interesadas ya llevan a cabo la trazabilidad del producto, pero no todas. Determinar las fases a lo largo de la cadena de valor en las que no se puede rastrear el producto y brindar orientación a las partes interesadas relacionadas sobre el mantenimiento de registros (tenga en cuenta que las materias primas agrupadas podrían no ser rastreables completamente más allá de un determinado punto de la cadena de valor). Poder rastrear el producto a lo largo de toda la cadena de valor facilitará la aplicación y el control de conformidad con el pliego de condiciones y aumentará de ese modo la conanza de los consumidores en el producto.
Motor y Perfil Territorial
Socioculturales
Crecimiento
En el diagrama se idencan una serie de potencialidades de desarrollo que se agrupan en cuatro motores (desarrollo territorial, crecimiento económico, patrimonio socio-cultural, preservación de los recursos naturales) los cuales representan lógicas de desarrollo para el círculo virtuoso de la calidad en el origen. El producto puede ser descrito en términos de la importancia potencial de cada uno de estas cuatro lógicas, que le otorgan un p determinado, representado por el diagrama de radar
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