ESTIMULACIÓN DEL EQUILIBRIO: EL TRAMPOLÍN PARA UNA MEJOR EDUCACIÓN 24 03 2010
Algo tan sencillo como un mini trampolín en las salas de clases puede hacer la diferencia en el rendimiento de los niños que sufren del denominado “déficit atencional”; este simple aparato estimula la concentración y mejora el rendimiento escolar. Esta fue una de muchas interesantes enseñanzas que entregó a profesores del Instituto Alemán de Frutillar, el destacado Terapeuta ocupacional y especialista en Dislexia y Discalculía, Frieder Haas, quien estuvo recientemente en la región. El especialista realizó un taller de dos días en este importante establecimiento educacional compartiendo con sus profesores técnicas para el diagnóstico de una de las patologías más comunes que afectan a los niños de hoy, conocidos popularmente como “hiperkinéticos”, quienes dentro de sus síntomas principales sufren de una constante intranquilidad motora, problemas problemas de atención, atención, bajo control control de sus emociones, emociones, además de de problemas problemas para relacionarse socialmente, entre otros. Para atender a este problema, Frieder Haas, aplica una la terapia basada en el Dyslexia Research Center de Austria, conocida como Terapia de Educación Sensorial, la cual “trata de desarrollar los sentidos y relacionarlos el uno con el otro”, el académico explica que “nosotros conocemos los cinco famosos sentidos pero en en realidad tenemos tenemos más, ya que tenemos tenemos la la piel como como sentido sentido y el más importante importante de todos, el sentido del equilibrio”. Haas destaca la importancia del sentido del equilibrio por su rol fundamental en la vida cotidiana ya que es aquel que entrega información referencial básica al cerebro por ejemplo de orientación, “ya que el equilibrio ayuda a percibir lo que está arriba o abajo, a la izquierda o la derecha, e incluso para caminar o estar sentado”. Según el terapeuta ocupacional, mucho de los problemas relacionados con el déficit atencional se producen a que, en el caso de los niños, su cerebelo concentra la información priorizando la estabilidad del cuerpo y ocupa parte de la capacidad cerebral en esto, reduciendo, en consecuencia que el menor pueda utilizar eficientemente dicha capacidad en atender los contenidos que son enseñados en las salas de clases. De acuerdo a Frieder Haas, la forma de tratar esta limitante es por medio de la estimulación sensorial a través de juegos y movimientos, lo que ayuda a que los pequeños
puedan adaptar su capacidad perceptora. Para ello, uno de los trabajos realizados por el terapeuta implica la estimulación del equilibrio utilizando un mini trampolín, sencillo instrumento que puede ayudar a un niño a mejorar su concentración. “mi visión para el futuro es que en cada colegio en Chile tenga un mini trampolín en la sala de clases para aquellos niños que prestan poca atención ya que haciendo una breve rutina, les ayudará a volver a tomar atención”, indicó. Este tipo de terapias cobra especial relevancia en la actualidad debido a que los menores tienen formas de entretenimiento muy pasivas, dado principalmente por la televisión, consolas de juego o computadoras. Realidad muy diferente a lo que vivieron los niños de hace 50 años “hoy los niños saben sólo 2 juegos de movimiento, si lo comparamos que hace medio siglo los chicos conocían 100 juegos de movimiento” puntualizó. Y agrega que “es por eso que promuevo que en los colegios se hagan movimientos en forma dirigida ya que cada 10 minutos se pueden aplicar dinámicas de movimiento de sólo 30 segundos, lo que ayudará a los niños seguir tomando atención en sus clases”. Otro de los consejos para estimular la concentración, es tomando agua fría, ya que “aumenta la atención, concentración y rendimiento hasta en un 17%”.
Para la directora del establecimiento, Adriana Teuber, el “objetivo es contar con una herramienta más para ayudar a los niños en la sala de clases para que se concentren” y es parte de la estrategia del centro educacional por mejorar aspectos complementarios a la excelencia académica. La apoderada Alejandra Flores valoró la capacitación de los profesores indicando que “es claro que si nuestros sentidos no están percibiendo en un 100% no habrá armonía en la comprensión, coordinación y concentración de nuestros hijos. Esta experiencia les dará mayores herramientas para lograr una mejor entrega y entendimiento de los contenidos de materias apoyándose en ejercicios físicos y evitando los tan conocidos medicamentos que suelen recetar para lograr concentración”.