Título original: Théorie du Bloom © La Fabrique Éditions, 2000 © De la traducción: Mónica Silvia asi !evisión: "ulio Día# $ %arolina Meloni © &ditorial Melusina, S'L', 200( )))'*elusina'co* Dise+o gr-ico: David .arriga
/ueda rigurosa*ente ro1ibida, sin la autori#ación de los titulares del %o$rig1t, bao las sanciones establecidas en las le$es, la reroducción total o arcial de esta obra or cualquier *edio o rocedi*iento, co*rendidos la rerogra-ía $ el trata*iento in-or*tico $ la distribución de ee*lares de ella *ediante alquiler o r3sta*o 4blicos'
Deósito legal: 567895(6200( isbn: ;69<;27;606( Printed in Spain
%=!T= =L &D>T?! @arís, 2; de novie*bre de 7999 &sti*ado &ric: =dunta encontrars la nueva versión de Hombres-máquinas, Hombres-máquinas, instrucciones de uso, a*liada con creces e i*resa aarte' =unque lo are#ca no se trata de un libro sino de un virus editorial. &l Libro, en la *edida en que se situaba -rente al lector de l a *is*a -or*a que el Sueto clsico ante sus se*eantes, -ingiendo ser una entidad co*leta y una cerrada autosu-iciencia, es, al igual que la -igura clsica del ABo*breC, una -or*a *uerta' &l -in de una institución se vive sie*re co*o el -in de una ilusión' &s entonces cuando aarece el contenido de verdad en virtud del cual conte*la*os esa cosa asada co*o una *entira' /ue, *s all de su asecto de clausura, los grandes libros nunca 1a$an deado de ser aquello que lograba crear una co*unidad, que, dic1o de otro *odo, el Libro 1a$a tenido sie*re su eistencia fuera de s, es un 1ec1o en su*a sólo ad*itido en -ec1as recientes' @arece incluso que en alguna art artee de la rive rive !auche !auche del Sena todavía aca*a cierta tribu, una co*unidad del Libro, que encuentra en esta doctrina todos los ele*entos de una 1ereía' Tu eeriencia te er*itir constatar que el -in del Libro no signi-ica su brutal desaarición de la circulación social sino, or el contrario, su roli-eración absoluta' La abundancia cuantitativa del Libro es sólo un asecto *s de su actual vocación or la nadaE otros dos son el con su*o de balneario $ la destrucción destrucción de las ediciones' ediciones' &n esta -ase todavía 1a$ libros, es cierto, ero sólo eisten ara albergar la acción corrosiva de los >!GS &D>T?!>=L&S' &l virus editorial e"pone el rinciio de inco*letitud, inco*letitud, la insu-iciencia -unda*ental que se 1alla en la base del obeto ublicado' Se -iltra a trav3s de las *enciones *s elícitas, de las indicaciones rcticas *s groseras Hdirección, contacto, contacto, etc'H con el -in de reali#ar la comunidad que le falta, la co*unidad a4n virtual de sus verdaderos lectores' De gole, sit4a al lector en una osición de la que no uede retirarse, o donde, en todo caso, esa retirada ya no puede ser neutral. Delineare*os, er-ilare*os $ recisare*os la Teora del Bloom en este sentido' '''' %ordial*ente,
"unius Fre$
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$l Sr. Bloom observaba curiosa y cordialmente cordialmente la fle"ible forma ne!ra. Pareca tan ntida% el brillo de su piel lustrosa, el bot&n blanco ba'o la cola, las verdes pupilas luminosas. (on las manos sobre las rodillas se inclin& hacia ella. H)*eche para la minina+ H)rrau+ Para que lue!o di!an que no son inteli!entes. $n $ n tienden lo que decimos mucho me'or de lo que nosotros los entendemos a ellos.
"a*es "o$ce' /lises
A estas horas e !a noche
Los grandes vigías 1an *uerto' Sin duda, G? los 1a *atado' &l d3bil reslandor de su terquedad solitaria inco*odaba ecesiva*ente a los artidarios del sue+o' =l *enos eso cree*os adivinar nosotros, los que llega*os tan tarde, debido a la turbación que todavía suscita su no*bre en deter*inados *o*entos' %ualquier 1uella viva de lo que 1icieron $ -ueron 1a sido borrada, arece ser, or la obstinación *aníaca del resenti*iento' Final*ente, este *undo sólo 1a conservado de ellos un u+ado de i*genes *uertas que ni*ba con la indecente satis-acción de 1aber vencido a aquellos que, sin e*bargo, eran *eores que 3l' I aquí esta*os, 1u3r-anos 1u3r-anos de toda grande#a, entregados entregados a un *undo de 1ielo, sin sin lu# alguna que se+ale el 1ori#onte' uestras reguntas deben er*anecer sin resuesta, aseguran los *s vieos, ero desu3s reconocen que a esar de todo 01unca hubo noche tan ne!ra para la inteli!encia2. "Qui#n eres rea!mente$
La bella ca*i+a nevada se desli#a rida*ente or la ventana' &l tra$ecto entre ' $ !', que antigua*ente duraba una se*ana, se recorrer a1ora en oco tie*o' Desde 1ace *enos de una 1ora, no eres *s que un ocuante de un asiento cualquiera de uno de los veinte vagones id3nticos de este tren de alta velocidad' La disosición regular $, sin duda, óti*a de las butacas se etiende en la ar*onía abstracta de una tenue lu# de neón' &l tren sigue sus railes, $ en ese vagón tan er-ecta*ente austado a la idea de orden arece co*o si la realidad 1u*ana *is*a siguiera railes invisibles' Gna indi-erencia saludable $ cort3s 1abita el esacio que te se ara de la *uer que ocua el asiento de al lado' Durante el viae, ninguno de vosotros tendr la necesidad suer-lua de dirigirse la alabra $, *enos a4n, de entablar una conversación' &llo tendría a erturbar tu distracción $, en tu vecina, el estudio alicado de la rensa -e*enina JAcó*o seducir sutil*ente a un 1o*breC, Aligar soft2, Aregalos con sentido2, AKes el 1o*bre de tu vidaC, AKqui3n eres !&=LM&T&C, etc'' %uando suene su *óvil, la oven ta*oco creer necesario levantarse: 034i!a5... espera, 3c&mo5, )que no estás ah+... 3te estás quedando conmi!o5... mira, llevo tres fines de semana car!ando con los cros, traba'o toda la semana y apenas ten!o tiempo para vivir, entonces... no, no y no, no puedo... arré!latelas t6 s&lo, no es mi problema... cada cual con su vida, que ya has 'odido bastante la ma... 3cuántas veces ten!o que repetrtelo5)este fin de se mana me voy con 7ér8me, y ni una palabra más+... 3ah s5, 3c&mo5 3(on el pequeo, que me dará el da lloriqueando y pre!untando por su padre52... )porque eres su padre+... no hay discusi&n que val!a... me importa un huevo, este fin de semana te quedas con ellos... peor para ella, haberte buscado una más transi!ente... te lo advierto, si no hay nadie, los de'o con la portera... s, s que soy ra#onable... pues eso, adi&s.2 La escena se reite en toda su banalidad' &s una nueva evidencia' =l rinciio irru*e co*o una bo-etada, brutal*ente, ero seguro que durante a+os nos 1e*os rearado ara el *o*ento, convirti3ndonos unos ara otros, escruulosa*ente, en er-ectos etra+os: eistencias blancas, resen resencia ciass indi-e indi-eren rentes tes,, incons inconsist istent entes' es' =de* =de*s, s, esta esta situac situación ión no se 1aría 1aría evide evidente nte si no estuvi3s estuvi3se*os e*os absolu absoluta ta e ntima ntimamen mente te su*idos en ese etra+a*iento' Ba sido reciso que el
$l Sr. Bloom observaba curiosa y cordialmente cordialmente la fle"ible forma ne!ra. Pareca tan ntida% el brillo de su piel lustrosa, el bot&n blanco ba'o la cola, las verdes pupilas luminosas. (on las manos sobre las rodillas se inclin& hacia ella. H)*eche para la minina+ H)rrau+ Para que lue!o di!an que no son inteli!entes. $n $ n tienden lo que decimos mucho me'or de lo que nosotros los entendemos a ellos.
"a*es "o$ce' /lises
A estas horas e !a noche
Los grandes vigías 1an *uerto' Sin duda, G? los 1a *atado' &l d3bil reslandor de su terquedad solitaria inco*odaba ecesiva*ente a los artidarios del sue+o' =l *enos eso cree*os adivinar nosotros, los que llega*os tan tarde, debido a la turbación que todavía suscita su no*bre en deter*inados *o*entos' %ualquier 1uella viva de lo que 1icieron $ -ueron 1a sido borrada, arece ser, or la obstinación *aníaca del resenti*iento' Final*ente, este *undo sólo 1a conservado de ellos un u+ado de i*genes *uertas que ni*ba con la indecente satis-acción de 1aber vencido a aquellos que, sin e*bargo, eran *eores que 3l' I aquí esta*os, 1u3r-anos 1u3r-anos de toda grande#a, entregados entregados a un *undo de 1ielo, sin sin lu# alguna que se+ale el 1ori#onte' uestras reguntas deben er*anecer sin resuesta, aseguran los *s vieos, ero desu3s reconocen que a esar de todo 01unca hubo noche tan ne!ra para la inteli!encia2. "Qui#n eres rea!mente$
La bella ca*i+a nevada se desli#a rida*ente or la ventana' &l tra$ecto entre ' $ !', que antigua*ente duraba una se*ana, se recorrer a1ora en oco tie*o' Desde 1ace *enos de una 1ora, no eres *s que un ocuante de un asiento cualquiera de uno de los veinte vagones id3nticos de este tren de alta velocidad' La disosición regular $, sin duda, óti*a de las butacas se etiende en la ar*onía abstracta de una tenue lu# de neón' &l tren sigue sus railes, $ en ese vagón tan er-ecta*ente austado a la idea de orden arece co*o si la realidad 1u*ana *is*a siguiera railes invisibles' Gna indi-erencia saludable $ cort3s 1abita el esacio que te se ara de la *uer que ocua el asiento de al lado' Durante el viae, ninguno de vosotros tendr la necesidad suer-lua de dirigirse la alabra $, *enos a4n, de entablar una conversación' &llo tendría a erturbar tu distracción $, en tu vecina, el estudio alicado de la rensa -e*enina JAcó*o seducir sutil*ente a un 1o*breC, Aligar soft2, Aregalos con sentido2, AKes el 1o*bre de tu vidaC, AKqui3n eres !&=LM&T&C, etc'' %uando suene su *óvil, la oven ta*oco creer necesario levantarse: 034i!a5... espera, 3c&mo5, )que no estás ah+... 3te estás quedando conmi!o5... mira, llevo tres fines de semana car!ando con los cros, traba'o toda la semana y apenas ten!o tiempo para vivir, entonces... no, no y no, no puedo... arré!latelas t6 s&lo, no es mi problema... cada cual con su vida, que ya has 'odido bastante la ma... 3cuántas veces ten!o que repetrtelo5)este fin de se mana me voy con 7ér8me, y ni una palabra más+... 3ah s5, 3c&mo5 3(on el pequeo, que me dará el da lloriqueando y pre!untando por su padre52... )porque eres su padre+... no hay discusi&n que val!a... me importa un huevo, este fin de semana te quedas con ellos... peor para ella, haberte buscado una más transi!ente... te lo advierto, si no hay nadie, los de'o con la portera... s, s que soy ra#onable... pues eso, adi&s.2 La escena se reite en toda su banalidad' &s una nueva evidencia' =l rinciio irru*e co*o una bo-etada, brutal*ente, ero seguro que durante a+os nos 1e*os rearado ara el *o*ento, convirti3ndonos unos ara otros, escruulosa*ente, en er-ectos etra+os: eistencias blancas, resen resencia ciass indi-e indi-eren rentes tes,, incons inconsist istent entes' es' =de* =de*s, s, esta esta situac situación ión no se 1aría 1aría evide evidente nte si no estuvi3s estuvi3se*os e*os absolu absoluta ta e ntima ntimamen mente te su*idos en ese etra+a*iento' Ba sido reciso que el
etra+a*iento llegue a ser ta*bi3n la clave de nuestra relación con nosotros *is*os, que desde cualquier unto de vista sea*os Bloom. sea*os Bloom. Si también encontra*os al Nloo* en los libros, es orque, ara e*e#ar, cada cual $a6sie*re se 1a cru#ado con 3l en la calle $ desu3s, *s tarde, en sí *is*o' Lo uno con-ir*a lo otro' Gn día cualquiera resta*os una atención *s descarnada de lo 1abitual al silencio colectivo en un vagó vagón n de *etro etro $ nos nos inva invade de,, tras tras la disi disi*u *ula laci ción ón co* co*art artid idaa de las las cost costu* u*br bres es conte*orneas, un estre*eci*iento estre*eci*iento ro-undo, un terror ri*igenio abierto a todas las sosec1as' Olti*o 1o*bre, 1o*bre de la calle, 1o*bre de la *ultitud, 1o*bre de las *asas, 1o*bre6*asa, así es co*o en un rinciio G? nos 1abía resentado al Nloo*: co*o el triste roducto del tie*o de las *ultitudes, co*o el 1io catastró-ico de la era industrial $ del -in de todos los 1ec1i#os' @ero entre esas designaciones, ta*bi3n 1alla*os ese estre*eci*iento' G? se estre*ece ante el infinito misterio del hombre com6n. %ada cual resiente que tras el teatro de sus atributos se esconde una potencia pura9 pura9 una otencia ura que supuestamente todos 1e*os ignorado' /ueda /ueda la inevit inevitabl ablee inquie inquietu tud d que que cree* cree*os os aacig aaciguar uar eigi3 eigi3ndo ndonos nos unos unos a otros otros la riguro rigurosa sa ausencia de sí, ignorando esta otencia com6n que, or ser anóni*a, se 1a vuelto incali-icable' &l Nloo* es el no*bre de ese anoni*ato' %air&s
= esar de la etre*a con-usión que reina en su suer-icie, $ qui#s recisa*ente or ello, nuestro tie*o es de naturale#a mesiánica. De este *odo, es reciso co*render que distinciones *u$ antiguas se borran, $ que las divisiones *ilenarias son a su ve# divididas' La 3oca queda reducida a una realidad 4nica, rincial, $ a la distracci&n de distracci&n de esta realidad' De -or*a cada ve# *s notable, las no6sociedades conte*orneas, esas -icciones i*erativas, se dividen sin resto posible en arias $ advenedi#os' =1ora bien, los advenedi#os sólo son arias que 1an traiciona traicionado do su condición, condición, que querrían querrían olvidarla olvidarla a toda costa, costa, ero a los que 3sta siempre ter*ina or atraar de nuevo' Ta*bi3n odría decirse, siguiendo otra división, que en estos tie* tie*os os $a no quedan quedan *s que desocu desocuado adoss y agitadosE los agitados sólo son, en resu*idas cuentas, cuentas, desocuados desocuados que tratan de disimular disimular su desocuación esencial' K=caso la b4squeda de Asensa Asensaci cione oness -uerte -uertesC sC o de Avivir Avivir intens intensa*e a*ente nteC, C, que que arece arece ser la ra#ón ra#ón vital vital de tantos tantos deseserados, logra distraerles de la tonalidad a-ectiva -unda*ental que les 1abita: el tedio La con-usión reinante es el desliegue lanetario de todas esas falsas antinomias9 sin e*bargo, a artir de ellas sale a la lu# nuestra verdad central: que so*os los inquilinos de una eistencia eiliada eiliada en un *undo *undo que es un desiertoE desiertoE que 1e*os sido arro'ados arro'ados a este *undo, sin *isión alguna que cu*lir, sin lugar asignado ni -iliación reconocible, abandonados' /ue so*os tan poco y, a la ve#, $a esta*os de más. La verdadera olítica, la olítica e"tática co*ien#a aquí' %on una risa brutal $ envolvente' %on una risa que desh deshac acee todo el pathos que que re#u* re#u*aa de los suues suuestos tos roble roble*as *as de Adese* Adese*le leoC, oC, Ain*igraciónC, Ain*igraciónC, ArecariedadC $ A*arginaciónC' o eis iste el problema social del del dese dese* *le leo, o, sino sino sólo sólo el hech hechoo meta metaf fsi sico co de nuestr nuestraa desocupaci&n. o eist eistee el problema social de la in*i in*igr grac ació ión, n, sino sino sólo sólo el hecho hecho metaf metafsic sicoo de nuestra e"tran'era. o eiste la cuesti&n social de la recariedad o de la *arginación, sino esta realidad eistencial ineorable: que esta*os co*leta*ente solos, solos para diarla ante la muerte, que todos so*os, desde la eternidad, seres finitos.
/ue cada cual u#gue qu3 ocurre aquí con los asuntos serios o con la distracción social' La 3oc 3ocaa que que co*i co*ien en#a #a en 797; 797;,, cuan cuando do la ilus ilusi& i&n n de los Atie* Atie*os os *odern *odernosC osC ter*in ter*inaa de desco*onerse $ la *eta-ísica ter*ina de reali#arse, ve reali#arse, ve có*o lo ontológico e*erge 1istórica*ente en estado uro $ a todos los niveles' Se*eantes levanta*ientos levanta*ientos tectónicos de la verdad se roducen en esos raros *o*entos en que la *entira de las civili#aciones se des*orona' uestro tie*o entra en una curiosa conunción con la decadencia de la &dad Media $ los ri*eros siglos gnósticos de nuestr nuestraa era, era, or ee*lo ee*lo'' La *is*a *is*a Stimmun! Stimmun! se eresaba allí, $ con el *is*o radicalis*o: -initu -initud, d, erdic erdición ión,, seara searació ción' n' Los Atie* Atie*os os *oder *odernos nosC C y el ?cci ?ccide dent ntee cris cristi tian anoo nacieron revia*ente a tales a-lora*ientos, por a-lora*ientos, por reacci&n. = la lu# de este arentesco $a no ode*os to*ar la tonalidad a-ectiva que 1abría do*inado al siglo veinte or un si*le A*alestar de la civili#aciónC' o se trata aquí de ninguna disosición subetiva, de ninguna roensión caric1osa a la deseseran#a o a la la*entación' &sta tonalidad es, or el contrario, el dato *s evidente de nuestra 3oca, el dato que G? intenta reri*ir sin tregua, en cada o-ensiva' o es que los 1o*bres 1a$an erdido negativa*ente Asus re-erentesC, sino que positivamente se han transformado en Bloom. &L NL??M &S &L =FL?!=M>&T? F>=L D& L? ?!>.>=!>?
&n lo sucesivo $ or doquier no 1abr *s que Nloo* $ la huida del Nloo*' :a no vea porvenir ante él, y el pasado, a pesar de todos sus esfuer#os por encontrarlo e"plicable, e"plicable, le resultaba resultaba al!o incomprensible. *as 'ustificaciones 'ustificaciones se hacan hacan aicos, y el sentimiento de placer pareca a!otarse con los das. *os via'es y las las lar!as marchas, marchas, que antao le causaban un !oce misterioso, se haban vuelto e"traamente odiosos. ...$n cualquier rinc&n del mundo, no se senta realmente sin patria ni tampoco nte!ra y naturalmente en casa. (uánto le hubiera !ustado ser un or!anillero, o un mendi!o, o un lisiado, y as tener una ra#&n para implorar la piedad y la caridad de los hombres, pero a6n deseaba con mayor ansia morir. 1o estaba muerto, y sin embar!o... ...muerto, ni pobre hasta el punto de mendi!ar, y sin embar!o era completamente un mendi!o, mas no mendi!aba9 incluso entonces, se vesta todava con ele!ancia, haca a6n, incluso entonces, sus reverencias, como un fastidioso hábito, deca frases que le indi!naban, indi!naban, le horrori#aban. ;ué atro# le pareca su propia vida, su falsa alma, qué muerto su miserable cuerpo, qué e"trao el mundo entero, qué vacos los movimientos, las cosas y los acontecimientos que lo rodeaban. !obert Palser, Pequeos Palser, Pequeos ensayos ensayos
Stimmun'
*os 1o*bres de
@uesto que la Stimmun! es el Acó*oC donde cada ser es co*o es, la tonalidad no es lo inestable, lo -ugitivo, lo si*le*ente subetivo, sino *s bien aquello que, co*o origen, da a cada ser consistencia y posibilidad. &l Nloo* es la Stimmun! en $ a artir de la cual nos co*rende*os en el instante resente, aquello sin lo cual estas alabras sólo serían una sucesión de -one*as est4idos' Bistórica*ente, el Nloo* no*bra una Stimmun! oco co*4n: la corresondiente al *o*ento en que el sueto se retira del *undo $ el *undo del sueto, cuando el $o $ lo real se encuentran de ronto susendidos $, tal ve#, abolidos' @or esta ra#ón, el Nloo* es la Stimmun! general donde no aparecen más que Stimmun!, donde se *ani-iesta co*o tal el ri*ado de la Stimmun! sobre cualquier otra realidad' &n la *edida en que ella $a6sie*re i*regna los instru*entos concetuales *ediante los cuales G? odría retender atraarla, la Stimmun!, aunque sensible, no uede ser aresada e inseccionada, circunscrita o anali#ada Aobetiva*enteC' La reresentación que ode*os tener de ella es, en el *eor de los casos, la Figura que le corresonde, la Figura en cuanto potencia humana de confi!uraci&n de mundos. %on esta AteoríaC se aunta ues a una Stimmun!, ero a trav3s de la osesión de una Figura' &l Nloo* no*bra tanto la 1u*anidad esectral, etraviada, soberana*ente vacante, que $a no accede a ning4n otro contenido, co*o ta*bi3n la Stimmun! donde e6iste, el ente creuscular ara el que $a no 1a$ realidad ni $o sino tan sólo luralidad de Stimmun!. (unus est )abu!a
@uesto que el Nloo* es aqu3l que $a no logra salir clara*ente del conteto in*ediato que lo envuelve, su *irada es la de un 1o*bre que no reconoce. Todo -lu$e bao su e-ecto $ todo se ierde en la -luctuación sin consecuencias de las relaciones obetivas, donde la vida se eeri*enta negativa*ente, en la indi-erencia, la i*ersonalidad $ la -alta de atributos' $l Bloom vive en el Bloom.
= nuestro alrededor se etiende un *undo etri-icado, un *undo de cosas en el que -igura*os nosotros *is*os, con nuestro $o, nuestros gestos $ qui#s incluso nuestros senti*ientos, co*o *eras cosas' ada uede ertenecernos eclusiva*ente en se*eante aisae de *uerte' %ada ve# nos arece*os *s al eiliado, que nunca est co*leta*ente seguro de co*render lo que ocurre a su alrededor' = esar del gigantesco desosei*iento, del inelicable desa*aro que 1a co*en#ado a a-ectar a todo lo que es, el *ecanis*o universal contin4a funcionando con nor*alidad' Baci3ndonos olvidar nuestro aisla*iento' &n este ruinoso i*erio eretua*ente re novado no 1a$ lugar donde oda*os encontrar re-ugioE la deserción a nosotros *is*os ta*oco es un recurso -actible' os ve*os abandonados, sin que *edie decisión osible, a una -initud sin lí*ites, euestos sobre la entera suer-icie de nuestro ser' &l Nloo* es ues ese 1o*bre al que $a nada uede roteger de la trivialidad del *undo' Gn día, una *ente sensata llegó a esta conclusión: 0$n efecto, el Bloom es el hombre alienado2. @ues noE el Nloo* es el 1o*bre que se 1a con-undido 1asta tal unto con su alienación que sería absurdo querer seararlos' Qngeles vacíos, criaturas sin creador, *3diu*s sin *ensae, ca*ina*os or el abis*o' uestra *arc1a, que bien odría 1aberse detenido a$er, o 1ace a+os, $a no tiene ra#ón de ser e ignora cualquier necesidad salvo la de su contingencia' &s una erran#a que nos lleva desde lo *is*o a lo *is*o a trav3s de los senderos de lo >d3ntico: dondequiera que va$a*os, lleva*os en nosotros *is*os el desierto del que so*os el er*ita+o' I si algunos días ode*os a-ir*ar sole*ne*ente, co*o =gria de ettes1ei*, ser Ael universo enteroC, o *s ingenua*ente, co*o %ravan, ser Atodas las cosas, todos los 1o*bres $ todos los ani*alesC, es orque en todo no ve*os *s que la ada que tan lena *ente so*os' @ero esa ada es lo absoluta*ente real' Frente a ella, todo lo que eiste se vuelve -antas*al'
R U o 1a$ nada *s inelicable ara el Nloo* que esos hombres del =nti!uo >é!imen que intentan articiar lena e in*ediata*ente en la vida, $ que a cada aso e1iben el -ir*e senti*iento de 1aberla encarnado, a-ir*ando su eistencia $ su continuidad' &n cuanto a nosotros, desde el *o*ento en que intenta*os eistir, dondequiera que busque*os no 1alla*os ese $o *aci#o, esa substancia roia que uno nos resta tan generosa*ente' =sí co*o $a no 1a$ ninguna eticidad ar*ónica que ueda dar consistencia a la ilusión de un $o Aaut3nticoC, del *is*o *odo se 1a disiado todo lo que odría 1acer creer en la univocidad de la vida o en la -or*al ositividad del *undo' &n verdad, de nuestro Asentido de lo realC tan sólo queda una *odalidad li*itada de ese Asentido de lo osible que es la -acultad de ensar todo lo que Vta*bi3nV odría ser, $ la de no conceder a todo lo que es *s i*ortancia que a lo que no esC JMusil, $l Hombre sin atributos?. Nao la ocuación *ercantilista, la verdad más concreta sobre cualquier cosa es la de su in-inita sustituibilidad' Todas las situaciones en las que nos encontra*os co*ro*etidos llevan igual*ente el sello in-inita*ente reetido de un irrevocable Aco*o siC' %olabora*os en el *anteni*iento de una AsociedadC como si no erteneci3ra*os a ella, concebirnos el *undo como si nosotros *is*os no ocura*os en 3l una osición deter*inada, $ continua*os enveeciendo como si debi3ra*os seguir siendo sie*re óvenes' &n ocas alabras: vivi*os como si $a estuvi3se*os *uertos' HI cierta*ente 3sta es la aradoa *s dolorosa de la eistencia del Nloo*: va no sabe escuc1ar a su cuero vivo, a su locua# -isiología' Ta*oco cuando uno a cada instante intenta 1acer que se signi-iquen seual*ente' Ia se trate del cuero de *uer o de 1o*bre, o incluso de un cuero de -or*as indiscernibles, la carne del Nloo* esta a4n aresada or la seuación no sensual que la atraviesa' @ero esta seuación o*niresente $ a la ve# 'amás vivida no es *s que el origen de un su-ri*iento sordo $ ersistente,
co*o el que eeri*entan los a*utados or el *ie*bro erdido' De a1í el carcter esencial*ente esectral, el aura siniestra de la ornogra-ía conte*ornea de *asas: no es sino la resencia de una ausencia' &n el *undo entera*ente se*ioti#ado del Nloo*, un -alo $ una vagina sólo son signos que re*iten a otra cosa, a un re-erente que $a nadie encuentra en una realidad que no cesa de desvanecerse' La carne del Nloo* es triste $ carece de *isterio' o es el seo lo que debe*os reinventar: vivi*os $a entre los esco*bros de la seualidad, nuestro cuero *is*o es su vestigio' &l Nloo*, anquilosado en una ineorable -ase re64ber, no es caa# trans-or*ar los roles seuados que por defecto 1a 1eredado de las sociedades tradicionales' De este *odo, Nloo* *ac1os $ Nloo* 1e*bras rosiguen así la *is*a dan#a cansina, al rit*o de los vieos estribillos de las seuaciones clsicas' @ero sus gestos se quiebran' Su dan#a resulta -or#ada' Troie#an' Da lsti*a verlos'H %o*o cosa entre las cosas, el Nloo* er*anece -uera de todo, en un abandono id3ntico al de su universo' &st solo en cualquier co*a+ía $ desnudo en cualquier circunstancia' =1í es donde se encuentra, en la ignorancia cansada de sí *is*a, de sus deseos $ del *undo, donde, día tras día, la vida descuenta el rosario de su ausencia' Todos los contenidos vividos se interca*bian en 3l de -or*a indi-erente, al albur de una suerte de turis*o eistencial' Be*os desarendido el goce, al igual que 1e*os desarendido el su-ri*iento, nos 1e*os vuelto anal-abetos en el lano de las e*ociones $ sólo ercibi*os sus ecos di-ractados' ada interesa a nuestros oos vagos, ta*oco la desdic1a' /ui#s el desastre radique -inal*ente en no 1allar en arte alguna el sost3n de la duda o de la certe#a' @ara el ser que siente que su vida ende de un 1ilo *u$ -ino, la libertad adquiere un sentido tan inco*leto $ 4lti*o que $a no uede serle retirada: es la libertad ara asear en el -uturo cierto sentido de la inutilidad teatral del todo, una *anera ter*inal de ser esectador del *undo e incluso de sí *is*o' &n el eterno do*ingo de su eistencia, el inter3s del Nloo* carece sie*re de obetoE or este *otivo, es el hombre sin interés. =quí, el desinterés, entendido co*o que no logra*os ser i*ortantes ante nuestros roios oos, ero ta*bi3n en el sentido de que la categoría burguesa del inter3s $a no uede dar cuenta estricta*ente de ninguno de nuestros actos, $a no es una eresión de idealis*o individual, sino un -enó*eno de *asas' (on toda se!uridad, el hombre es al!o que ha sido superado. Todos aquellos que admiraban sus virtudes han perecido Ha causa de ellas. Todo lo que ha!o y pienso no es más que una uestra de mis posibilidades. $l hombre es mucho más !eneral que su vida y sus actos. $stá preparado para más eventualidades de las que puede conocer. . Teste dice% is posibilidades no me abandonan 'amás. al3r$, onsieur Teste
*+aa cua! es e! ms etra.o /ara sí mismo
La eeriencia -unda*ental del Nloo* es la de su roia trascendencia resecto de sí *is*o, ero esta eeriencia, aunque suene bien, es ante todo la de una i*otencia, la de un absoluto su-ri*iento' Sea cual -uere la esti*a que quisi3ra*os conservar de nosotros *is*os, no somos suetos, entidades co*letas, autrquicas $ soberanas, ni siquiera bao ura*ento de -idelidad' os *ove*os en un esacio entera*ente cuadriculado, entera*ente ocupado9 de un lado, or el §culo, del otro, or el Niooder' I lo terrible de esta cuadrícula, de esta ocuación, es que no ode*os rebelarnos con un gesto de-initivo de rutura contra la su*isión que a*bos nos eigenE sólo nos es dado adaptarnos a las circunstancias estraté!icamente.
&l r3gi*en de oder en el que vivi*os no se arece en nada al que tal ve# 1a$a tenido vigencia en las *onarquías ad*inistrativas, $ cu$o caduco conceto 1a sido 1asta 3ocas recientes, es decir, en el seno *is*o de las de*ocracias bioolíticas, el 4nico ene*igo reconocido or los *ovi*ientos revolucionarios, a saber, el de un *ecanis*o de obstaculi#ación $ de coerción ura*ente reresivo' La -or*a conte*ornea de la do*inación es, or el contrario, esencial*ente productiva. @or una arte, rige todas las manifestaciones de nuestra eistencia Jel §culoE or otra, ad*inistra las condiciones de 3sta Jel Niooder' &l §culo es el oder que quiere que 1abl3is, que quiere que seis al!uien. &l Niooder es un oder ben3volo, tan solícito co*o el astor con su gre$E es el oder que quiere la salvación de sus s4bditos, el oder que quiere que viváis. =tena#ados or un control a la ve# totali#ador e individuali#ante, e*aredados en una doble coacción que nos aniquila con el *is*o gesto que nos 1ace eistir, la *a$oría de nosotros adota una esecie de olítica de la desaarición, esto es, -ingir la *uerte interior $, co*o el Beree ante el .ran >nquisidor, guardar silencio' =l sustraer $ sustraerse a cualquier ositividad, esos esectros 1urtan a un oder roductivo aquello sobre lo cual odría eercerse' Su deseo de no vivir es todo lo que sus -uer#as ueden ooner a un oder que retende hacerles vivir. De esta guisa er*anecen en el Nloo*, donde general*ente se ocultan' =sí que el Nloo* signi-ica lo siguiente: que no nos ertenece*os, que este *undo no es nuestro *undo' /ue no sólo nos 1ace -rente en su totalidad, sino que 1asta en sus detalles *s rói*os nos es etra+o' &ste etra+a*iento sería agradable si udiera i*licar a riori una eterioridad entre 3l $ nosotros' @ero no es así' uestro etra+a*iento resecto del *undo consiste en que el etra+o está en nosotros, en que nos volve*os regular*ente etra+os a nosotros *is*os en el *undo de la *ercancía autoritaria' &l círculo de situaciones en el que -or#osa*ente observa*os nuestra -or*a de actuar, donde conte*la*os la acción de un $o en el cual no nos reconoce*os, se estrec1a $ nos asedia incluso en aquello que la sociedad burguesa todavía lla*aba la Ainti*idadC' &l ?tro nos posee. &s ese cuero disociado, un si*le arte-acto eri-3rico en *anos del NiooderE es nuestro deseo bruto de sobrevivir dentro de la intolerable red de *in4sculas sueciones, de resiones granuladas, el deseo que nos encorseta cada ve# *sE es el conunto de clculos, 1u*illaciones, *e#quindades, el conunto de tácticas que debemos deslegar' &s toda la *ecnica obetiva a la que obedece*os interior*ente' &L ?T!? &S L= &%??MW= & ?S?T!?S
&l Nloo* ta*bi3n signi-ica lo siguiente: que cada cual sabe de sí que no es 3l *is*o' =unque *o*entnea*ente, delante de cualquiera $ a *enudo en el anoni*ato, oda*os tener la i*resión contraria, en el -ondo acaso conserva*os el senti*iento de una eistencia inaut3ntica, de una vida -acticia' La resencia interior del ?tro se ad1iere a todos los niveles de nuestra conciencia: es una ligera $ constante 3rdida de ser, una desecación rogresiva, una eque+a *uerte distribuida incesante*ente' = esar de todo, insisti*os en asu*ir la 1iótesis eterior de nuestra roia identidad, representamos la co*edia del sueto' Gna esecie de vergXen#a se su*a a ese desgarra*iento $ crece con 3l' &ntonces, ensa$a*os la evasión, nos ro$ecta*os cada ve# *s violenta*ente 1acia a-uera, lo *s leos osible de esa esantosa tensión interior' &s reciso disi*ularlo, ad1erirnos a nuestra AidentidadC social, seguir siendo etra+os a nuestro etra+a*iento: B=%&! G NG& @=@&L, ante las ruinas' $sa mentira habita cada uno de nuestros !estos.
Be aquí lo esencial' Ia no es tie*o de 1acer literatura con las distintas co*binaciones del desastre' Basta a1ora, se 1a escrito de*asiado $ no se 1a ensado bastante acerca del Nloo*' ns rea!issimum
$l Ptolemaico, *irando dentro de sí, sólo encontraba Ados -enó*enos: la sociología $ el vacíoC' &s reciso artir, no de lo que cree*os ser Hla sociologíaH, sino de aquello que ínti*a*ente eeri*enta*os co*o carencia, que es la cosa *s real, el ens realissimum. &l Nloo* no signi-ica
que sea*os Hcon resecto del sueto clsico $ de su soberbia su-icienciaH suetos de-icientesE antes bien, revela que en la base de la eistencia 1u*ana 1a$ un rinciio de inco*letitud, una radical insu-iciencia' So*os recisa*ente esta deficiencia, que puede, si le lace, elegir ara sí la máscara del sueto' &n verdad, no so*os nada, nada salvo la nada alrededor de la cual gira el re*olino de nuestras ideas $ eeriencias, nuestras *iserias $ sensaciones' &s cierto que so*os el ee vacío de ese o#o sin aredes, ee que no eiste or sí *is*o, sino sólo orque todo círculo osee un centro' @ero esta de-iciencia desa*arada se co*rende a sí *is*a co*o la 4lti*a ositividad, así eresada: S?I &L >T&!M&D>=!>? &T!& L? /G& S?I I L? /G& ? S?I'
&l Nloo* es e-ectiva*ente ese inter*ediario, ero un inter*ediario pasivo, el testi!o de su roia desubetivación, de su inter*inable devenir6otro' &l Nloo* oculta esa di-erencia originaria, la de saber que no so*os lo que so*os, que ning4n redicado uede agotar nuestra otencia' La inco*letitud es el *odo de ser de todo lo que se *antiene en contacto con la otencia, la -or*a de eistencia de todo lo que est consagrado al devenir.
! hu#s/e ms in2uietante
@uesto que el Nloo* es el vacío de cualquier deter*inación substancial, es or ello *is*o el 1u3sed *s inquietante del 1o*bre, es quien de si*le invitado se 1a convertido en due+o de la casa' Desde que se 1a aloado en nosotros, nos encontra*os ridícula*ente ataviados con un ser *era*ente indu*entario' Baga*os lo que 1aga*os ara recuerar una substancialidad, 3sta nos contin4a areciendo algo contingente e inesencial resecto de nosotros *is*os' &l Nloo* no*bra ues la nueva desnude# sin edad, la desnude# roia*ente 1u*ana que desaarece bao los atributos que orta, que recede a cualquier -or*a $ la 1ace osible' $l Bloom es la 1ada enmascarada, ra#ón or la cual sería absurdo celebrar su aarición en la 1istoria co*o el naci*iento de un tio 1u*ano articularE el 1o*bre sin atributos no es un deter*inado atributo de 1o*bre, sino or el contrario el hombre en cuanto hombre, la reali#ación -inal de la esencia 1u*ana gen3rica, que es recisa*ente rivación de esencia, ura eosición $ ura disonibilidad: larva. La re4blica burguesa uede actarse de 1aber o-recido la ri*era traducción 1istórica de envergadura $, -inal*ente, el *odelo de este 3tasis controlado' &n ella, de *anera in3dita, la eistencia del 1o*bre en cuanto ser singular se encuentra formalmente searada de su eistencia en cuanto *ie*bro de la co*unidad' =sí, en la re4blica burguesa, a1í donde el 1o*bre es un sueto reconocido $ verdadero se le abstrae de cualquier atributo roio, es una -igura sin realidad, un AciudadanoCE $ a1í donde, ante sus roios oos $ los oos de los de*s, asa or ser un sueto real, en su eistencia cotidiana, es una -igura sin verdad, un AindividuoC' La edad clsica 1a lanteado de este *odo los rinciios cu$a alicación 1an 1ec1o del 1o*bre lo que conoce*os, a saber, el agregado de una doble nada: or un lado, la del Aconsu*idorC, ese intocable, $ or el otro, la del AciudadanoC, esa irrisoria abstracción de la i*otencia' Sin e*bargo, en la *is*a *edida en que el §culo $ el Niooder se er-eccionan, la aariencia $ las condiciones ele*entales de nuestra eistencia adquieren un grado de autono*ía, el *undo se alea cada ve# *s de los 1o*bres $ se vuelve etra+o, el Nloo* se encierra en sí *is*o, se 1ace *s ro-undo $ reconoce su soberanía -rente a la obetividad' Se va desrendiendo de *anera cada ve# *s indolora de sus deter*inaciones sociales, de su AidentidadC, $ se consolida, *s all de toda e-ectividad, co*o ura -uer#a de negación'
La condición de e"ilio de los 1o*bres $ de su *undo co*4n en lo irreresentable coincide con la situación de clandestinidad e"istencial que les toca en suerte en el §culo' &sa condición *ani-iesta la absoluta singularidad de cada to*o social co*o lo absoluta*ente cualquiera, $ su ura di-erencia co*o una ura nada' %on toda seguridad, tal $ co*o reitera incansable*ente el §culo, el Nloo* no es positivamente nada. Las interretaciones sólo di-ieren en cuanto al sentido de esa AnadaC' $l :o tiene un contenido que él distin!ue de s, pues él es la pura ne!atividad o el acto de escindirse9 es conciencia. $se contenido en su diferencia también es el :o, ya que es el acto de suprimirse a s mismo, o esa misma pura ne!atividad que es :o.
Begel, @enomenolo!a del $spritu
H=lcan#ado este unto, las *entes sanas 1abrn concluido la i*osibilidad constitutiva de cualquier Ateoría del Nloo*C $, co*o es lógico, continuarn su ca*ino' Los *s astutos soltarn un aralogis*o del tio: Ael Nloo* no es nadaE a1ora bien, nada uede decirse de la nada, or lo tanto, nada uede decirse del Nloo*, /&DC, $ cierta*ente la*entarn 1aber abandonado or un *o*ento su cautivador Aanlisis cientí-ico del ca*o intelectual -ranc3sC' @ara los que a esar del evidente absurdo de nuestras alabras contin4en le$endo, ser reciso que no ierdan de vista en ning4n *o*ento el carcter vacilante de cualquier discurso sobre el Nloo*' Tratar sobre la ositividad 1u*ana de la ura nada no dea otra oción que eoner co*o atributo la *s er-ecta -alta de atributos, $ co*o substancia, la insubstancialidad *s radical, a riesgo de ter*inar dando un rostro a lo invisible' Gn discurso así, si no quiere traicionar a su obeto, deber 1acerlo e*erger ara, oco desu3s, dearlo desaarecer nueva*ente, et sic in infinitum.H Pe2ue.a cr&nica e! esastre
=unque el Nloo* sea la osibilidad -unda*ental que el 1o*bre nunca dea de contener, la osibilidad real de la osibilidad, ra#ón or cual 1a sido descrito, eeri*entado $ racticado *uc1as veces en el curso de los siglos Htanto or los gnósticos de los ri*eros siglos de nuestra era co*o or los 1erees de -inales de la &dad Media J1er*anos del Libre6&síritu, cabalistas o *ísticos renanos, tanto or los budistas co*o ta*bi3n or los (oquillardsH, el Nloo* sólo aarece en el seno del roceso 1istórico co*o -igura do*inante con el acaba*iento de la *eta-ísica, en el §culo' La generación que vislu*bró a trav3s de sus te*estades de acero el rostro de la .orgona, la generación del eresionis*o, del -uturis*o, del constructivis*o, del dadaís*o $ *s tarde del surrealis*o, -ue la ri*era en soortar en bloque este terrible secreto' Se eeri*entó entonces al!o cu$a radicalidad, cu$a -uer#a abrasadora no encontró ni tan siquiera en el v3rtigo de los a+os 20 una eresión conveniente. Toda la 1istoria de este siglo uede interretarse co*o una serie de reacciones contra lo que en ese *o*ento se vislu*bró' I todavía esta*os in*ersos en ello. @ues desde 797; no es, co*o G? 1a odido eresar, que Alas civili#acionesC se sean A*ortalesC, sino que la civili#a ci&n mercantilista, tal $ co*o se 1a roagado desde el ?ccidente al resto del *undo, es la que se sabe moribunda. &n realidad, 1ace *s de un siglo Hde -or*a su*aria, desde la irradiación si*bolistaH que el Nloo* es el A13roeC casi eclusivo de toda la literatura, desde el Sengle de "arr$ al Plume de Mic1au, desde el roio @essoa a $l Hombre sin atributos, desde Nartleb$ a Ya-Za' =quí o*itire*os, sin duda, $l $"tran'ero-de6%a*us y el 1ouveau >oman, que dea*os ara los estudiantes de bac1illerato' =unque 1a$a sido abordado reco#*ente or el oven LuZ[cs, no es
sino en 7928, con el tratado Ser y Tiempo, cuando se trans-or*a real*ente, bao los 1araos transarentes del 4asein, en el no6sueto central de la -iloso-ía' @or otra arte, eisten sobradas ra#ones ara ver en el vulgar eistencialis*o -ranc3s, que se i*uso *s tarde $ de -or*a *s ro-unda de lo que su breve *oda 1i#o i*aginar, el ri*er ensa*iento ara uso eclusivo de los Nloo*' Durante *uc1o tie*o, G? 1a odido ignorar, conte*lndola co*o -enó*eno simplemente literario, co*o eageración puramente filos&fica, la evidencia *asiva del Nloo* en todas esas *ani-estaciones' @or lo de*s, G? todavía se a-ana en elloE relaa el a*biente' I es que, de aso, u G? quisiera olvidar aquello de lo que G? es polticamente conte*orneo, olvidar que el Nloo* surge en la literatura desde el *o*ento *is*o en que la literatura, co*o institución, se disloca, $ en la -iloso-ía, desde el *o*ento en que la -iloso-ía, como ré!imen de verdad, se derru*ba' &n otras alabras, cuando al3r$ escribe: Aeeri*entaba con un a*argo $ etra+o lacer la si*licidad de nuestra condición estadística' La cantidad de los individuos absorbía toda *i singularidad $ *e volvía indistinto e indiscernibleC, no a+ade un obeto sule*entario a la venerable conte*lación de la &st3tica: eresa polticamente lo que signi-ica ser un cuero *s en el conglo*erado de una poblaci&n dirigida or el Niooder' 3esarrai'o
%ada desarrollo de la sociedad *ercantilista eige la destrucción de cierta -or*a de in*ediate#, la searación lucrativa en una relaci&n de aquello que estaba unido' &s esta escisión lo que la *ercancía viene luego a investir, lo que *ediati#a $ de lo que saca rovec1o, er-ilando día tras día la utoía de un *undo en el que cada 1o*bre estaría, en todas las cosas, euesto al si*le *ercado' Mar 1a sabido describir ad*irable*ente las ri*eras -ases de este roceso, aunque sólo desde el rud1o*esco unto de vista de la econo*ía: ALa disolución de todos los roductos $ de todas las actividades en valor de interca*bioC, escribe en los Arundrisse, Asuone la desco*osición de todas las relaciones de deendencia ersonales -iadas J1istóricas en el seno de la roducción, así co*o la sueción universal de los roductores entre sí' ''' La deendencia universal de los individuos indi-erentes entre sí constitu$e su vínculo social' &se vínculo social se eresa en el valor de interca*bioC' &s total*ente absurdo considerar los estragos ersistentes que roduce cualquier ad1esión 1istórica, así co*o los de cualquier co*unidad orgnica, co*o un vicio co$untural de la sociedad *ercantilista, estragos que, es de suoner, la buena $ re-or*ista voluntad de los 1o*bres querría rearar' &l desarraigo de todas las cosas, la searación en -rag*entos est3riles de cada totalidad viva $ la autono*i#ación de 3stos en el seno del circuito del valor son la esencia *is*a de la *ercancía, el rinciio $ el -in de su *ovi*iento' &l carcter alta*ente contagioso de esta lógica abstracta cobra en los 1o*bres la -or*a de una verdadera Aen-er*edad de desarraigoC, que i*ele a los desarraigados a lan#arse a una actividad sie*re tendiente a desarraigar Ha *enudo, or *edio de los *3todos *s violentosH a aquellos que todavía no lo estn o que lo estn sólo en arte: quien está desarrai!ado desarrai!a. Le corresonde a nuestra 3oca el dudoso *3rito de 1aber etre*ado la -ebrilidad roli-erante $ *ultitudinaria de ese Acarcter destructorC' Some4here out o) the 4or!
A\Sed co*o transe4ntes]C $van!elio de Tomás
Nao el e-ecto de la irrución de la *ercancía en el conunto de las relaciones 1u*anas, el Nloo* aarece a la ve# co*o causa $ e-ecto de la liquidación de todo ethos substancial' Él *is*o es el hombre sin substancialidad, el 1o*bre que se 1a vuelto realmente abstracto or 1aber sido e-ectiva*ente searado de cualquier *edio, desoseído de cualquier ertenencia $ *s tarde arroado a la erran#a' Ta*bi3n lo conoce*os co*o ese ser indi-erenciado Aque en ninguna arte se siente en casaC, co*o esa *ónada que no ertenece a ninguna co*unidad, en un *undo Aque sólo engendra to*os6 JBegel' atural*ente, ad*itir la universalidad del estatuto de aria, de nuestro
estatuto de aria, i*licaría 1acer el duelo or el eceso de con-ortables *entiras, tanto ara aquellos que retenden integrarse en esta AsociedadC co*o ara aquellos que se integran en ella con la retensión de criticarla' La -a*osa doctrina de las Anuevas6clases6*ediasC o, alternativa*ente, de Ala6gran6clase6*ediaC se corresonde desde 1ace *edio siglo con la negación de nuestra bloo*itud, con su dis-ra#' G? quisiera así recuerar en t3r*inos de clase social la disoluci&n consumada de todas las clases sociales. @ues el Nloo* es tanto el neo6burgu3s de 1o$ en día, que ec1a de *enos desconsolada*ente la seguridad burguesa, co*o ta*bi3n el roletario, que $a no est resaldado or los vestigios de un roletariado' &n 4lti*a instancia, es el eque+o burgu3s lanetario, el 1u3r-ano de una clase que a*s eistió' De 1ec1o, así co*o el individuo -ue el resultado de la desco*osición de la co*unidad, el Nloo* es el resultado de la desco*osición del individuo o, ara ser *s recisos, de la ficci&n del individuo Jel individuo burgu3s sólo 1a eistido en las autoistas, donde todavía 1a$ accidentes' @ero nos equivocaría*os sobre la radicalidad humana que reresenta el Nloo* si lo i*aginra*os co*o la clase tradicional del AdesarraigadoC' &l su-ri*iento al que eone todo aego verdadero 1a adquirido unas roorciones tan des*esuradas que $a nadie uede er*itirse la nostal!ia de un origenE ara sobrevivir, -ue reciso erradicarlo en sí' =de*s, el Nloo* es *s bien el hombre sin races, el 1o*bre que se siente en el eilio co*o en casa, que se 1a arraigado en la ausencia de lugar, $ ara quien el desarraigo $a no evoca el destierro, sino, or el contrario, la nor*alidad' o es que 1a$a erdido el *undo, sino que 1a tenido que dear atrs el !usto por el mundo. a /#ria e !a e/eriencia
%o*o Stimmun! constatable, co*o tonalidad a-ectiva deter*inada, el Nloo* se vincula con la etre*a abstracción de las condiciones de eistencia -oradas or el §culo' La concreción *s de*ente $, al *is*o tie*o, *s característica del ethos esectacular sigue siendo, a escala lanetaria, la *etróoli' /ue el Nloo* sea esencial*ente el 1o*bre de la *etróoli no i*lica en *odo alguno que sea osible, or naci*iento o or elección, sustraerse a esta condición, ues la roia *etróoli carece de afuera% la etensión de su *etstasis olari#a incluso los territorios que no ocua, es decir, su ausencia los deter*ina en todos sus aspectos. &l rasgo do*inante del ethos esectacular6*etroolitano es la pérdida de la e"periencia, cu$o sínto*a *s elocuente es, sin duda alguna, la -or*ación de la categoría *is*a de AeerienciaC, en el sentido restringido de que se tienen 0e"periencias2 Jseuales, deortivas, ro-esionales, artísticas, senti*entales, l4dicas, etc'' Todo en el Nloo* deriva de esta 3rdida o es su sinóni*o' &n el seno del §culo, co*o en el de la *etróoli, los 1o*bres nunca tienen la eeriencia de aconteci*ientos concretos sino tan sólo de convenciones, de reglas, de una segunda naturale#a entera*ente si*boli#ada, entera*ente construida' !eina a1í una escisión radical entre la insigni-icancia de la vida cotidiana, deno*inada ArivadaC, donde nada ocurre, $ la trascendencia de una 1istoria congelada en una es-era, deno*inada A4blicaC, a la que nadie tiene acceso' @ero ve*os de -or*a cada ve# *s clara que todo ello rocede de la 1istoria asada' La searación entre las -or*as sin vida del §culo $ la Avida sin -or*aC del Nloo*, con su aburrida *onotonía $ su silenciosa sed de nada, cede el lugar en nu*erosos untos a la indistinción' La 3rdida de la eeriencia 1a alcan#ado -inal*ente el grado de generalidad necesario ara interretarse co*o eeriencia originaria, co*o e"periencia de la e"periencia como tal, co*o clara disosición a la Meta-ísica %rítica' (on el desarrollo colosal de la técnica, una especie totalmente nueva de pobre#a se ha abatido sobre los hombres ... 34e qué vale hoy toda la herencia cultural si nin!una e"periencia nos une a ella5 $n el si!lo pasado, la horrible me#colan#a de estilos y de visiones del mundo mostraba,
con absoluta claridad, adonde conduce, en ese ámbito, la hipocresa o la felona, )como para que no consideremos honesto confesar nuestra miseria+ Por consi!uiente, confesémoslo% esta pobre#a de la e"periencia no es s&lo pobre#a de las e"periencias privadas, sino pobre#a de las e"periencias humanas. 3Sera entonces una especie de nueva barbarie5 $n efecto. 1osotros lo declaramos con el fin de introducir un nuevo concepto, un concepto positivo de barbarie. Pues 3adonde conduce la pobre#a en e"periencias al bárbaro5 *e conduce... ...a comen#ar por el comien#o, a retomar las cosas desde el inicio, a arre!lárselas con poco, a construir con lo poco que tiene y, al hacerlo, no mirar ni a derecha ni a i#quierda ... 1os hemos empobrecido. Hemos sacrificado, peda#o a peda#o, la herencia de la humanidad, y a menudo la hemos empeado por la centésima parte de su valor, con el fin de recibir a cambio la calderilla de 0lo actual2 ... *a humanidad se prepara para sobrevivir, si es preciso, a la cultura. : lo esencial es que lo hace riendo. $s muy posible que en al!6n lu!ar esa risa emita un sonido bárbaro. uy bien. 3=caso el individuo no puede ceder de ve# en cuando un poco de humanidad a las masas, que se lo devolverán un da con los intereses del capital y los intereses de los intereses5
Palter Nena*in, $"periencia y pobre#a
as metr&/o!is e !a se/araci&n
Las *etróolis se distinguen de cualquier otra gran -or*ación 1u*ana, en ri*er lugar, orque son lugares en donde la *a$or roi*idad, $ a *enudo la *a$or ro*iscuidad, coincide con el *a$or etra+a*iento' unca se 1abía visto reunido se*eante n4*ero de 1o*bres, ero ta*oco estuvieron nunca 1asta tal unto searados' &l 1o*bre eeri*enta en la *etróoli, de -or*a estricta, su condición negativa' La -initud, la soledad $ la eosición, que son las tres coordenadas -unda*entales de esta condición, teen el decorado de la eistencia de cada cual en el seno de la gran ciudadE no el decorado -io, sino el decorado *óvil, el *iscelneo decorado de la gran ciudad *erced al cual los 1o*bres ueden soortar la -ría 1edionde# de sus no6lugares' &l moderno de la *etróoli -or*a aquí, tanto en su intensidad co*o en la etensión nu*3rica de sus legiones, un tio bastante notable del Nloo*: su -racción i*erialista' &l moderno es el Nloo* que se roone al *undo co*o -or*a de vida de-endible, $ ara ello se obliga a una estricta discilina de *entiras'
%onsu*idor -inal de la eistencia, a-ectado or una incredulidad de-initiva resecto a los 1o*bres no *enos que al lenguae, el moderno vive en el 1ori#onte de una inter*inable eeri*entación sobre s mismo. Ba deli*itado el volu*en de su ser $ 1a decidido no abandonarlo nunca, salvo ara asegurar la autoro*oción de su esterilidad' Ba ree*la#ado así el vacío de la eeriencia or la eeriencia del vacío, a la esera de la aventura ara la que sie*re est rearado, ero que nunca llega, ues todos los guiones osibles 1an sido $a escritos' @asando del 3tasis a la dececión, la *ultitud solitaria de los modernos $a6sie*re desaarecidos, $a6sie*re olvidados, rosigue su deriva co*o una balsa de suicidas, erdida en un oc3ano deresionista de i*genes $ abstracciones' o tiene nada que trans*itir, salvo las -ór*ulas convenidas de goces que no -ueron $ una vida sin obeto en una nada a*ueblada' La *etróoli aarece, ade*s, co*o el lugar roicio ara la rivalidad *i*3tica, la desolada ero continua celebración del A-etic1is*o de la eque+a di-erenciaC' G? reresenta cada a+o la tragico*edia de la searación: cuanto *s aislados estn los 1o*bres *s se arecen, cuanto *s se arecen *s se detestan $ cuanto *s se detestan *s se aíslan' I cuando los 1o*bres $a no ueden reconocerse entre sí co*o artícies de la edi-icación de un *undo co*4n, todo concurre entonces ara catali#ar una reacción en cadena, una -isión colectiva' Basta qu3 etre*o la 3rdida de la eeriencia $ la 3rdida de la co*unidad son una sola $ *is*a cosa vista desde ngulos di-erentes, esa es la ense+an#a de la *etróoli' Sin e*bargo debe*os considerar Ha contraelo de la nostalgia que cierto ro*anticis*o se co*lace en cultivar incluso entre sus adversariosH que no 1a eistido, que a*s eistió una co*unidad en una 3oca anterior a la nuestra' I no se trata de dos a-ir*aciones contradictorias' Desde este lado del Nloo*, del lado de Ala searación consu*adaC, del lado del abandono sin reservas que nos caracteri#a, del lado ues de la total devastación de todo ethos substancial, cualquier Aco*unidadC sólo odía ser un 1u*us de -alsedades H-alsedad de la ertenencia a una clase, a una nación, a un *edioH $ una -uente de li*itaciónE de no ser or ello no habra sido aniquilada. Sólo una alienación radical de lo %o*4n 1a odido 1acer brotar lo %o*4n original, de tal *odo que la soledad, la -initud $ la eosición, es decir, el 4nico vínculo verdadero entre los 1o*bres, aarecen ta*bi3n co*o el 4nico vínculo posible entre ellos' Lo que uno cali-ica 1o$ de Aco*unidadC, abra#ando el asado de un vista#o, 1a co*artido evidente*ente ese %o*4n originario, ero de *anera reversible al ser segundo' @or ello nos corresonde a nosotros tener or ve# ri*era la eeriencia de la co*unidad verdadera, basada en la asunci&n de la separaci&n, de la e"posici&n y de la finitud. = se*ean#a del Nloo*, la *etróoli *ateriali#a, al igual que la 3rdida integral de la co*unidad, la in-inita posibilidad de su resurgi*iento' *a elucidaci&n de las posibilidades que nuestro tiempo contiene depende e"clusivamente de la consideraci&n de la fi!ura del Bloom. Su irrupci&n hist&rica determina para 0nuestro partido2 la necesidad de una completa refundaci&n, tanto en la teora como en la práctica. (ualquier análisis y cualquier acci&n que no lo tuviera totalmente en cuenta se condenaran a eterni#ar el e"ilio presente. Pues el Bloom, al no ser una individualidad, no se de'a caracteri#ar por nada de lo que dice, hace o manifiesta. Para él, cada instante es un instante de decisi&n. 1o posee nin!6n atributo estable. Por más insistente que sea su repetici&n, nin!6n hábito es susceptible de conferirle ser. 1ada se adhiere a él y él no se adhiere a nada de lo que...
''' parece suyo, ni siquiera a la 0sociedad2 que quisiera apoyarse en él. Para arro'ar al!unas luces sobre este tiempo, hay que considerar que, por un lado, está la masa de los Bloom y, por otro, la masa de los actos. Toda verdad se deriva de esto. Una 'enea!o'ía e !a consciencia e! 6!oom
Nartleb$ es un e*leado de o-icina' La di-usión, in1erente al §culo, de un trabao intelectual de *asas en el que el do*inio de un conunto de conoci*ientos convencionales equivale a una co*etencia eclusiva, est evidente*ente relacionada con la -or*a de conciencia roia del Nloo*' Tanto *s orque, -uera de las situaciones en las que el saber abstracto redo*ina sobre todos los *edios vitales, -uera del sue+o organi#ado de un *undo entera*ente roducido co*o signo, la eeriencia del Nloo* a*s alcan#a la -or*a de un continuum vivido al que 3l *is*o odría su*arse, sino que asu*e *s bien el asecto de una serie de traumatismos inasi*ilables' De a1í que 1a$a debido crearse un órgano de rotección contra el desarraigo que a*ena#a con las corrientes $ las discordancias del *edio eterior: en lugar de reaccionar ante ese des arraigo con su sensibilidad, el Nloo* reacciona esencial*ente con el intelecto, cu$a reonderancia síquica se ve asegurada or la intensi-icación de la conciencia, a su ve# roducida or el desarraigo' =sí, la reacción ante esos -enó*enos se oculta en el *enos sensible de los órganos síquicos, en aqu3l que *s se seara de las ro-undidades del ser' Su ura conciencia es ues lo 4nico que el Nloo* logra reconocer co*o su$o, ero es una conciencia que se 1a vuelto autóno*a con resecto de la vida, que $a no la ali*enta, sino que sólo la observa $ se etingue en su aisla*iento' &l Nloo* no uede -or*ar arte del *undo interna*ente' unca entra en 3l, salvo olvidndose de sí *is*o' @or eso resenta una disosición tan articular a la distracción, al dé'a-vu, al clic13 $, sobre todo, una atro-ia de la *e*oria que lo con-ina en un eterno resente' @or eso ta*bi3n es esecial*ente sensible a la *4sica, que tan sólo uede o-recerle sensaciones abstractas Jconvendría evocar aquí la velocidad $ los deortes de Adesli#a*ientoC, que ta*bi3n son goces bloo*escos, ero aquí la abstracci&n misma se da como sensaci&n?. Todo lo que el Nloo* vive, 1ace $ siente le resulta eterior' I cuando *uere, lo 1ace co*o un ni+o, co*o alguien que no 1a arendido nada' %on el Nloo*, la relación de consu*o se 1a etendido a la totalidad de la eistencia, así co*o a la totalidad de lo eistente' La roaganda *ercantilista 1a triun-ado sobre 3l de -or*a tan radical que concibe su *undo no co*o el -ruto de una larga 1istoria, sino del *is*o *odo que el ri*itivo concibe la selva: co*o su *edio natural' Muc1as cosas se aclaran si lo considera*os desde este ngulo, ues el Nloo* es sin duda un ri*itivo, ero un primitivo abstracto. Nasta con resu*ir en una -ór*ula el estado rovisional de la cuestión: el Bloom es la eterna adolescencia de la humanidad. a su/eraci&n e !a )i'ura e! trabaaor /or !a e! 6!oom
Las recientes *utaciones de los *odos de roducción en el seno del caitalis*o tardío 1an oerado a*lia*ente en el sentido de la bloo*i-icación universal' &l eríodo del asalariado clásico, que -inali#ó a co*ien#os de los a+os 80, $a 1abía aortado una gran contribución' &l trabao asalariado, estatutario $ errquico 1abía sustituido lenta*ente a la totalidad de las otras -or*as de ertenencia social, en articular, a todos los *odos de vida orgnicos tradicionales' &s entonces cuando se inicia ta*bi3n la disociación del 1o*bre singular $ de su ser6social: co*o cualquier oder $a era funcional, a saber, delegado del anoni*ato, cada AIoC que intentaba a-ir*arse tan sólo a-ir*aba su anoni*ato' @ero aunque en el asalariado clsico $a no quedase *s que oder rivado de sueto $
sueto rivado de oder, cabía la osibilidad, en ra#ón de una relativa estabilidad del e*leo $ de cierta rigide# en las erarquías, de *ovili#ar a la totalidad subetiva de un gran n4*ero de 1o*bres' = artir de los a+os 80, la relativa garantía de estabilidad en el e*leo, que 1abía er*itido a la sociedad *ercantilista i*onerse -rente a una -or*ación social, el orden tradicional, cu$a rincial virtud estaba constituida recisa*ente or esa *is*a garantía de estabilidad, ierde con la aniquilación del adversario su ra#ón de ser' Se inicia entonces un roceso de -leibili#ación de la roducción $ de creciente recariedad de los elotados, eríodo en el que a4n nos encontra*os $ que, a día de 1o$, no 1a alcan#ado todavía su unto crítico' Bace $a casi tres d3cadas que el *undo industriali#ado 1a entrado en una -ase de involución autotó*ica, des*antelando aso a aso al asalariado clsico y propulsándose a partir de ese desmantelamiento. =sisti*os desde entonces a la abolici&n de la sociedad salarial en el campo mismo de la sociedad salarial, es decir, en el seno de las relaciones de do*inación que ella *is*a dirige' A&l trabao dea aquí de cu*lir su -unción de oderoso sustituto de un teido 3tico obetivo, $a no ocua el lugar de las -or*as tradicionales de eticidad, or otra arte vacías $ disueltas desde 1ace *uc1o tie*oC J@aolo irno, portunismo, cinismo y terror?. Todas las antallas inter*ediarias que eistían entre Ael individuo ato*i#a doC, roietario de su *era A-uer#a de trabaoC, $ el *ercado donde debía venderla, 1an sido liquidadas, quedando cada cual co*leta*ente aislado -rente a la alastante totalidad social autóno*a' Desde entonces, nada uede i*edir que las -or*as de roducción lla*adas Aost6-ordistasC se generalicen, $ con ellas la -leibilidad, la reducción de los stocs, la *ovilidad, el 0pro'ect mana!ement2 $ Alas tareas a*liadasC ara Atrabaadores oli-ac3ticosC' =1ora bien, se*eante organi#ación del trabao, cu$a e-icacia se -unda en la inconstancia, la Aautono*íaC $ el oortunis*o de los roductores, tiene el *3rito de i*osibilitar cualquier identi-icación del 1o*bre con su -unción social, es decir, en otros t3r*inos, de ser alta*ente generadora de Nloo*' De la 1ostilidad general 1acia el trabao asalriado, que en todos los aíses industriali#ados se *ani-estó desu3s del 5, rocede el acta de naci*iento de la actual organi#ación roductiva, que 1a elegido esta hostilidad co*o -unda*ento' =sí, *ientras que sus *ercancías6claves Hlas *ercancías culturalesH nacen de una actividad que es etra+a al *arco li*itado del asalariado, su oti*alidad total se basa en la astucia de cada cual, es decir, en la indi-erencia e incluso en la reulsión que los 1o*bres eeri*entan resecto de su actividad' La utoía actual del caital consiste en una sociedad que etrae la totalidad de la lusvalía de un -enó*eno generali#ado de AicarescaC' %o*o ve*os, incluso la roia alienación del trabao ha sido puesta a traba'ar. &n este conteto se esbo#a una mar!inalidad de las masas, donde la AeclusiónC no es, co*o G? querría 1acernos entender, un desclasarse co$untural de una deter*inada -racción de la oblación, sino la relaci&n fundamental que cada cual mantiene con su propia participaci&n en la vida social y, ante todo, la del roductor con su roducción' =quí el trabao dea de con-undirse con el 1o*bre co*o deter*inación en una articularidadE los Nloo* $a sólo lo erciben co*o una -or*a contingente de la oresión social generali#ada' &l aro no es *s que la concreción visible del etra+a*iento de cada cual ante su roia eistencia en el *undo de la *ercancía autoritaria' &ntonces el Nloo* aarece ta*bi3n co*o el roducto de la desco*osición cuantitativa $ cualitativa de la sociedad salarial' &l es la 1u*anidad que corresonde a las *odalidades de roducción de una sociedad que se 1a vuelto definitivamente asocial, con la que ninguno de sus *ie*bros se siente ligado en *odo alguno' Su destino -iado es adatarse sin tregua a un entorno en eretua con*oción, esto es, el arendi#ae de su eilio en este *undo, donde no obstante debe hacer ver que articia, aunque verdadera*ente nadie ueda articiar' @ero *s all de todas sus *entiras obligadas, el Nloo* se descubre oco a oco co*o el hombre de la no-participaci&n, co*o la criatura de la no-pertenencia. = *edida que se consu*a la crisis de la sociedad industrial, la -igura lívida del Nloo* irru*e a trav3s de la a*litud titnica del Trabaador' ! muno e !a mercancía autoritaria
A= latiga#os se lleva el ganado a astarC Berclito Se da en la do*inación H$ con este t3r*ino 1onesta*ente no uede entenderse *s que la relación de complicidad si*bólica*ente *ediada entre do*inantes $ do*inadosH, de -or*a roorcional a la autono*ía que los Nloo* van adquiriendo resecto de su asignación social, la necesidad estrat3gica de nuevas eigencias, de nuevas su'eciones. Mantener la *ercancía co*o *ediación central en todos los *bitos eige así la tutela de bloques cada ve# *s grandes del ser 1u*ano' Desde esta ersectiva, 1a$ que observar la etre*a diligencia del §culo a la 1ora de descargar al Nloo* de la esada obligación de ser, con qu3 ronta solicitud se 1a ocuado tanto de su educación co*o de la de-inición del a*lio abanico de ersonalidades aroiadas ara deter*inados uestos $, or 4lti*o, có*o 1a sabido etender su in-luencia a la totalidad de lo decible, de lo visible $ de los códigos desde los que se constru$en todas las relaciones $ todas las identidades' &l desarrollo del Niooder desde el siglo ^>>>, cu$o salto cualitativo viene *arcado or la Movili#ación Total de 797;, sólo se co*rende en estrec1a relación con lo anterior' La tutela del 1o*bre co*o ser vivo en el seno de las de*ocracias bioolíticas, la alicación de la -uer#a social de integración sobre el propio cuerpo y la gestión cada ve# *s oresiva de las condiciones de nuestra eistencia constitu$en la r3lica de la do*inación a la desinte!raci&n de la individualidad, a la desaarición del sueto en el Nloo*' =l 1ec1o de que la do*inación haya perdido terreno. &l carcter roductivo del oder que circula or el *undo de la *ercancía autoritaria queda ilustrado, entre otras cosas, en la -or*a en que e'erce el control de los co*orta*ientos: la *a$oría de las veces, ara asegurar el *anteni*iento del orden $ con el -in de que se reseten las nor*as abstractas todavía vigentes, bastar con do*inar la distribución del esacio 4blico, la disosición del decorado $ la organi#ación *aterial de las in-raestructurasE todo ello se conseguir *ediante el si*le oder de coerción que la *asa anóni*a eerce sobre cada uno de sus elementos. &n una calle del centro de la ciudad, en un asillo del *etro o entre un equio de colaboradores, la er-ección del disositivo de vigilancia reside recisa*ente en la ausencia de vi!ilantes. &l control anótico es tanto *s e-ica# or cuanto carece de rostro' = -in de cuentas, no le i*orta en absoluto si sus subditos lo rec1a#an o lo acetan, con tal de que e"teriormente se so*etan' (i!itariaci&n e! esastre, concentraci&n e !a ominaci&n
Desde 797;, la do*inación *ercantilista sólo 1a sabido resonder a la *agnitud de su desastre a gole de Movili#aciones Totales' @retende contener el -luo desbordante de sus contradicciones *ediante un estado de ececión, a veces *ani-iesto, a veces latente, ero en de-initiva permanente. La ri*era de estas contradicciones se debe a que su desarrollo eige, en un *is*o *ovi*iento, la roducción de osibilidades cada ve# *s a*lias $ la ro1ibición general de su actuali#ación' La do*inación *ercantilista debe ues roducir, al *is*o tie*o que una sobreabundancia de *edios, la sobreabundancia de terror necesaria ara que nadie se sirva de ellos' &l Nloo* es el 1o*bre de este terror, quien lo in-unde $ quien lo su-re: el colaborador. &l eríodo reciente, durante el cual bruscas crisis del control 1an retendido so*eter a sectores enteros del eistente bao un i*erativo categórico de transarencia $ segui*iento escruuloso, viene *arcado or un rido *ovi*iento de concentraci&n de la dominaci&n.
Sólo una *inoría de subetividades con-or*es, de las cuales G? requiere una nueva -usión entre la vida $ el trabao, la ersonalidad $ la -unción, es cootada ara los uestos vitales, cada ve# *s escasos' La -or*ación de se*eante guardia retoriana del caital, cu$os ele*entos, contraria*ente a la gran *asa de los asalariados, no son interca*biables, articia en esta concentración de la do*inación, indisociable de una *ilitari#ación del desastre' Los suernu*erarios, or su arte, se dedican esencial*ente a ocuparse los unos de los otros, a desoarse *utua*ente de su desocuación, actividad que verdadera*ente requiere aut3nticos es-uer#os' Llegado el *o*ento de la reestructuración general de la do*inación, el Nloo* se encuentra acorralado or todas artes $ en todosE es tanto el desocuado co*o el etranero o el aría' @or ello debe ca*u-larse detrs de toda esa -acticidad, ues el Bloom es la fi!ura de lo civil en el seno de la universal militari#aci&n del desastre. a ma!a substancia!ia
ATodo aquello que sois, lo sois a trav3s de *íE todo aquello que so$, lo so$ sólo a trav3s de vosotrosC Bitler &l Nloo* vive aterrori#ado $, ante todo, aterrori#ado or ser reconocido co*o Nloo*' @arece co*o si el in-ierno *i*3tico en el que nos as-iia*os -uera considerado de -or*a unni*e re-erible al encuentro con uno *is*o' &l Niooder se organi#a cada ve# *s visible*ente co*o una econo*ía dirigida de subetivaciones $ de re6subetivaciones' &l -ebril entusias*o or la roducción industrial de its de ersonalidad, identidades desec1ables $ de*s naturale#as 1ist3ricas arece ineluctable' &n lugar de considerar su vacío central, los 1o*bres, en su *a$oría, retroceden ante el v3rtigo de una ausencia total de propiedad, de una indeter*inación radical $, or consiguiente, en el -ondo retroceden ta*bi3n ante la ci*a de su libertad' @re-ieren incluso seultarse en la *ala substancialidad, 1acia donde, cierta*ente, todo les e*ua' @ode*os rever có*o descubrirn, en el recodo de una deresión larvada de -or*a desigual, tal o cual raí# enterrada, tal o cual ertenencia esontnea, tal o cual inco*bustible atributo' Franc3s, *arginal, *uer, artista, 1o*oseual, bretón, ciudadano, bo*bero, *usul*n, budista o aradoE todo sirve si les er*ite berrear de un *odo u otro, aradeando 1acia el in-inito, el *ilagroso A I? S?I '''C' /u3 *s da qu3 articularidad vacía $ consu*ible, qu3 *s da qu3 ael social ueda convenirles, ues sólo se trata de conurar su roia nada' I co*o esas -or*as, rearadas $a ara su consu*o rido, carecen de toda vida orgnica, nunca tardan en volver tranquila*ente al siste*a general de interca*bio $ de equivalencia *ercantilista que los re-lea $ conduce' La *ala substancialidad signi-ica, en -in, que G? 1a deado en consigna toda su substancia en el §culo $ que 3ste dese*e+a la -unción de ethos universal ara la co*unidad celeste de los esectadores' @ero or una astucia cruel ello no 1ace sino acelerar a4n *s el roceso de des*orona*iento de las -or*as de eistencia substanciales' =l son de las identidades *uertas, de las que sucesiva*ente se sirve el 1o*bre de la *ala substancialidad, se desliega ineorable*ente su irresolución ri*era' Lo que debería en*ascarar una - alta de individualidad no sólo -racasa, sino que llega a acrecentar la labilidad que subsistía en ella' &l Nloo* triun-a en ri*er lugar sobre aquellos que lo re1u$en' ! 6!oom es !a rea!ia /ositi9a e !a 2ue a9isa e! im/erio e! simu!acro
&s in4til asirar a la substancialidad en el seno del §culo' = -in de cuentas, no 1a$ nada *enos aut3ntico ni *s sosec1oso que la AautenticidadC' Todo lo que se sirve de un nombre propio o retende ad1erírselo sólo uede ser usuración o necedad' >*oniendo a cada singularidad viviente que se considere co*o articular, es decir, desde un unto de vista -or*al $ eterior a sí *is*a, el §culo la desgarra interna*ente, introduce en ella una desigualdad, una di-erencia' >*one al $o que se considere 3l *is*o co*o obeto, que se rei-ique, que se are1enda a sí *is*o como otro. La conciencia se encuentra or ello e*uada a una -uga sin tregua, a una escisión eretua aguioneada or el i*erativo, ara quien se niega a dearse vencer or una a# *ortal, de desrenderse de cualquier substancia' =l alicar a todas las *ani-estaciones de la vida su in-atigable trabao de deno*inación $, or a1í, de inquieta re-leividad, el §culo arranca continua*ente al *undo de su in*ediate#' &n otras alabras, roduce el Nloo* $ lo reroduce: la chusma que se conoce co*o chusma $a no es chusma, es un Nloo* que interpreta el papel de chusma. Muc1as cosas lla*adas con no*bres *ilenarios 1an deado de eistir desde 1ace *uc1o tie*o' o necesita*os neologis*os ara ree*la#ar los t3r*inos antiguos: basta con sustituirlos or el uni-or*e*ente ANloo*C' Ia no eiste, or ee*lo, esa realidad retendida*ente substancial lla*ada A-a*iliaC' i siquiera quedan adres, *adres, 1ios o 1er*anasE sólo quedan Nloo* que interretan a la -a*ilia, al adre, a la *adre, al 1io o a la 1er*ana' =si*is*o, se encontrarn en la actualidad ocos -ilóso-os, artistas o escritores, ues ara ese tio de aeles $a sólo quedan Nloo* que roducen *ercancías culturales $ adotan las oses re-erenciales que convienen a su osición' @ara col*o, 1asta los ca*esinos 1an ter*inado or convertirse en int3rretes de ca*esinos' & incluso arece ser que resulta *s rentable' &n el r3gi*en resente de cosas se nos ro1íbe identi-icarnos de *odo erdurable con alg4n contenido articular, salvo con el movimiento de ale'arnos de cada uno de ellos. $l hombre es lo indestructible que puede ser infinitamente destruido Nlanc1ot *o Cndestructible es uno9 es enteramente cada hombre, y todos lo tienen en com6n. $s el inalterable cemento que une a los hombres para siempre. Ya-Za $sta noche del mundo, esta nada vaca que lo contiene todo en su simplicidad abstracta esta forma de la pura inquietud... Begel
Sua cui2ue /ersona
Saber si algo, en la realidad resente, es *scara o no es una cuestión que carece de i*ortancia' !esulta si*le*ente grotesco retender establecerse de este lado del §culo, del lado de un
*odo de revelación en el que cualquier cosa se *ani-iesta de tal *odo que su aariencia se vuelve autóno*a, es decir, máscara. Su dis-ra# es en cuanto disfra# la verdad del Nloo*, es decir, que detrás no hay nada, o *s bien H$ ello abre 1ori#ontes, or otra arte, *s i*ertinentesH que detrs reside la 1ada, esto es, la otencia' /ue la *scara constitu$a la -or*a de aarición general en la universal co*edia, de la cual sólo los tartu-os creen a4n escaar, no signi-ica que $a no eista la verdad, sino que 3sta se 1a convertido en algo sutil $ un#ante' La -igura del Nloo* encuentra su eresión *s alta $ al *is*o tie*o *s desreciable en el Alenguae de la adulaciónC, equívoco que no da lugar ni al gi*oteo ni al regocio, sino tan sólo a la gresca' A=quí el Sí *is*o ve que su certe#a de sí, co*o tal, es la cosa *s vacía de esenciaE ve que su ura ersonalidad es la absoluta i*ersonalidad' &l esíritu de su gratitud es or consiguiente tanto el senti*iento de esta ro-unda ab$ección co*o el de la *s ro-unda revuelta' @ues el uro Io se ve a sí *is*o en el eterior de sí $ desgarradoE en este desgarra*iento todo lo que tiene continuidad $ universalidad, lo que se lla*a le$, bien, derec1o, es desintegrado de gole $ lan#ado al abis*o'C JBegel, @enomenolo!a del espritu? &l reino del dis-ra# sie*re recede de cerca al ocaso de un reino' Sería un error 1acer inclinar la *scara del lado de la do*inación, uesto que 3sta sie*re se 1a sentido a*ena#ada or la noc1e, el salvais*o $ la i*ersonalidad que la irrución de la *scara one en escena. Lo malo del §culo consiste *s bien en que los rostros se 1an etri-icado 1asta volverse se*eantes a *scaras, $ que una instancia central se 1a erigido en duea y seora de las metamorfosis. Los vivos son los que sabrn dearse convencer or las alabras del loco que, te*bloroso, rocla*aba: AFeli# aqu3l a quien el asco ante los rostros vacíos $ satis-ec1os *ueve a to*ar la decisión de cubrirse con una *scara: ser el ri*ero en descubrir la ebriedad tor*entosa de todo lo que baila con la *uerte sobre la catarata del tie*o'C *a a!ienaci&n es tambi#n !a a!ienaci&n e sí misma
Begel
Bistórica*ente, en la -igura del Nloo* la alienación de lo %o*4n alcan#a su grado de intensidad *i*a' o es tan -cil i*aginarse 1asta qu3 unto la eistencia del 1o*bre, en cuanto ser singular, $ su eistencia, en cuanto ser social, 1an debido aparentemente volverse etra+as entre sí ara que a4n les sea osible 1ablar de Avínculo socialC, es decir, are1ender su ser6en6co*4n co*o algo obetivo, eterior $ ouesto' Gna verdadera línea del -rente asa or el *is*ísi*o centro del Nloo* $ deter*ina su neutralidad esqui#oide' La *ilitari#ación del desastre se escuc1a co*o la 4lti*a con*inación al Nloo* ara que to*e artido: tendr que asu*ir de *anera incondicional cualquier ael social, cualquier servidu*bre, o *orir de 1a*bre' os las ve*os aquí con una clase de *edida de urgencia, adotada co*4n*ente or los regí*enes en situación deseserada, que sólo er*ite ocultar el Nloo*, ero no suri*irlo' I sin e*bargo, de *o*ento les resulta su-iciente' Lo esencial es que la *irada que con te*la el *undo seg4n el *odo eterior del §culo ueda asegurar que G? nunca 1a visto nada se*eante de este lado de los @irineos HAKerdón Kun qu3 KKKun Nloo*CH, que eso es tan sólo la qui*era de un *eta-ísico $, ade*s, crítico' Lo 4nico que i*orta es que la *ala -e ueda convertirse en una buena conciencia, $ que 3sta ueda oonernos sus inverosí*iles *arc1a*os' @or otra arte, Kcó*o aarecer como tal en el §culo quien, or eigencia de uno, 1a sido desoado de cualquier aariencia &l destino del Nloo* es ser visible sólo en la *edida en que articia de la *ala substancialidad, en la *edida, ues, en que reniega del Nloo*'
Toda la radicalidad de la -igura del Nloo* reside en que la alternativa ante la que se encuentra er*anente*ente o-rece de un lado lo *eor $, del otro, lo eor, sin que le sea accesible la #ona de transición entre a*bos' &l Nloo* es el n4cleo neutro que ilu*ina la relación de analogía entre el unto *s alto $ el *s bao' Su -alta de inter3s uede constituir una insigne aertura al á!ape o, or el contrario, el deseo de -uncionar 4nica*ente co*o engranae en una e*resa tecnocrtica de eter*inio, or ee*lo' Del *is*o *odo, la ausencia de ersonalidad uede re-igurar la sueración de la ersonalidad clsica etri-icada, ero ta*bi3n la contradicción ter*inal del moderno *etroolitano' &iste el Ame ne fre!oC del -ascis*o $ eiste el Ame ne fre!oC del insurrecto' &iste la banalidad del *al $ eiste la banalidad del bien. @ero, en las circunstancias de la do*inación, la banalidad del Nloo* se *ani-iesta sie*re co*o banalidad del *al' =sí, ara el siglo ^^, el Nloo* 1abr sido &ic1*ann *uc1o *s que &lser 7E &ic1*ann, de quien Banna1 =rendt a-ir*aba: Aera evidente ara todos que no era un V*onstruoVC $ Ano se odía dear de ensar que era un payasoC. o 1a$, dic1o sea de aso, nin!una di-erencia de naturale#a entre &ic1*ann, identi-icado sin resto con su -unción cri*inal, $ el moderno, que al no oder asu*ir su no6ertenencia -unda*ental a este *undo ni las consecuencias de una situación de eilio, se aboca al consu*o -ren3tico de los si!nos de ertenencia, a los que esta sociedad one un recio *u$ alto' @ero la banalidad del *al rosera real*ente cuando G? 1abla or todas artes de Aecono*íaC' Surge cuando los 1o*bres atribu$en cualquier tio de vasallae a la AnecesidadC $ se consuelan diciendo: Aodría*os estar eorC, Aesto es lo que nos 1a tocado vivirC o Acualquier trabao es dignoC' =1í co*ien#a la etre*a desdic1a, cuando el aego a la suervivencia ree*la#a todos los aegos' &l aego aarece al desnudo' Sin *s obeto que 3l *is*o' >n-ierno' ! hombre interior
La ura eterioridad de las condiciones de eistencia constitu$e ta*bi3n la ilusión de la ura interioridad' &l Nloo* es ese ser que 1a recogido en sí *is*o el vacío que le rodea' &ulsado de cualquier lugar roio, él mismo 1a devenido un lugar' Desterrado del *undo, se 1a hecho *undo' o en vano, @ablo, los gnósticos $ *s tarde los *ísticos cristianos distinguieron entre el 1o*bre interior $ el 1o*bre eterior, uesto que en el Nloo* esta searación acontece hist&ricamente. La condición *arginal de los que, se*eantes al 1o*bre interior de !usbrocZ el =d*irable, se sienten A*s inclinados 1acia el adentro que 1acia el a-ueraC, $ viven Aen cualquier sitio $ en *edio de quien sea, en las ro-undidades de la soledad ''' a resguardo de la *ultilicidad, a resguardo de los lugares, a resguardo de los 1o*bresC, se 1a vuelto desde entonces la condición com6n. I sin e*bargo, ocos son aquellos que la 1an eeri*entado positivamente, aquellos que 1an tenido la -uer#a de quererla. @essoa: A@ara crear*e, *e 1e destruidoE *e 1e eteriori#ado de tal *odo dentro de *í *is*o que en *i interior $a sólo eisto eterior*ente' So$ el escenario viviente or donde asan diversos actores reresentando distintos aeles'C
1 &lser, Nloo* Aee*larC en *uc1os sentidos, eretró un atentado con bo*ba contra Bitler el de novie*bre de 79<9
sólo orque lo consideraba Aun *al 1o*breC' Si este atentado -racasó -ue debido a una aso*brosa *ala suerte' Gn segundo in-ortunio tan inverosí*il co*o el ri*ero quiso que, durante su 1uida, -uera detenido en la -rontera sui#a' unca -ue u#gado por ese cri*en, ero lo *antuvieron detenido en diversos ca*os, bao el estatuto 4nico de @DhrerssonderhEftlin! Jrisionero ececional del FX1rer' &l roceso de &ic1*ann, el de un Nloo* que se escinde a sí *is*o en un sueto de derec1o $ en un 1o*bre real, interior, verdadero Hretendiendo así no 1aber sido el sueto de sus actosH, *uestra *u$ bien la i*osibilidad de 'u#!ar al Nloo*, es decir, de are1enderlo con los t3r*inos, o seg4n los rinciios, del derec1o'
@ero, si or a1ora el Nloo* sólo se ase*ea a ese 1o*bre interior, or lo general sólo ocurre de *anera negativa' &l 1abitculo inesencial de su ersonalidad no entra+a *s que el senti*iento de verse arrastrado en una caída sin -in 1acia un esacio sub$acente, oscuro $ envolvente, co*o si se reciitara sin cesar, des*oronndose, en sí *is*o' .ota a gota, co*o erlas de sudor, su ser re#u*a, -lu$e $ se desborda' Su interioridad es cada ve# *enos un esacio o una substancia, $ cada ve# *s un umbral $ su trnsito' De a1í ta*bi3n que el Nloo* sea en el -ondo un espritu libre, $a que es un esíritu vacío' *Quien2uiera 2ue e esta manera hubiere sa!io e sí mismo ser /ro/iamente e9ue!to a sí mismo
Maestro &cZ1art
La AesenciaC ettica del Nloo* se enuncia de este *odo: & T?D? L? /G& ÉL &S, &L NL??M &STQ @/$>= 4$ SF.
Nao el i*erio del Niooder $ de la @ublicidad autóno*a Hla tiranía del G?H, la estructura ettica de la eistencia 1u*ana se *ani-iesta bao la -or*a de un estado esqui#oide generali#ado' Desde este *o*ento, cada cual distingue entre su Averdadero $oC, uro, desaegado de cualquier *ani-estación obetivable, $ el siste*a de su A-also $oC, social, interretado, -or#ado, inaut3ntico' &n cada una de sus deter*inaciones Hen su cuero, en sus AatributosC, en sus gestos, en su lenguaeH, el Nloo* advierte que sale, que ha salido de sí' I contempla esta salida' I 3l es la erran#a entre esos atributos, en esa conte*lación' Su devenir es un devenir6etra+o' &n su 3oca, León Nlo$ 1abía co*arado al caitalista con el *ístico' *a San!re de los pobres dedica varias ginas a una interretación bastante libre del Acarcter -etic1ista de la *ercancíaC: Aeste dinero no es *s que la -igura visible de la sangre de %risto circulando or todo su cueroC, Aleos de a*arlo or los goces *ateriales de los que se riva, _el avaro` lo adora con toda su al*a, co*o los Santos adoran al Dios que 1ace de su enitencia un deber $ de su *artirio la gloria' Lo adora or los que no lo adoran, su-re en lugar de aqu3llos que no quieren su-rir or el dinero' \Los avaros son *ísticos] Todo lo que 1acen tiene or obeto co*lacer a un in visible Dios cu$o si*ulacro visible, tan laboriosa*ente buscado, los ceba con torturas e igno*iniaC' Si el caitalista se ase*ea al *ístico or su actividad, el Nloo* se ase*ea or su pasividad. I, de 1ec1o, nada es *s si*ilar a la situación eistencial del Nloo* que el desape!o de los *ísticos' Su conciencia rei-icada lo dota de una -ir*e roensión a la conte*lación, *ientras que su indi-erencia se corresonde con ese Austo desaego que no es otra cosa que la in*ovilidad del esíritu -rente a cualquier vicisitud de a*or o su-ri*iento, de 1onor, vergXen#a o ultraeC' Basta quedar co*leta*ente anquilosado' Final*ente, el Nloo* 1ace ensar en el Dios del Maestro &cZ1art, un Dios de-inido co*o Ael que no tiene no*bre, la negación de todos los no*bres, lo que a*s tuvo no*breC, co*o la ura nada ara quien todas las cosas son nada' &n su er-ección, la alienación del Nloo* recobra la alienación originaria' %L?P
/n da. /n da, qui#ás pronto. /n da, levaré el ancla que retiene mi navo ale'ado de los mares.
(on el tipo de valor necesario para ser nada y nada, más que nada, abandonaré todo lo que me resultaba cercano ntimamente li!ado. *o cortaré, lo derribaré, lo romperé, lo arro'aré. 4e una arcada, 0sin sentirlo2, vomitaré mi miserable pudor, mis miserables ataduras y cadenas. /na ve# e"tirpado el mal de ser al!uien, beberé otra ve# del profundo manantial. ... ''' = base de hacer el ridculo, de ser indi!no G3qué es la indi!nidad5?, fra!mentándome, vaciándome, mediante una total disipaci&n-burla-pur!aci&n, e"pulsaré de m la forma que creamos tan bien su'eta, compuesta, coordinada, adecuada a mi entorno y a mis seme'antes, tan di!nos, tan di!nos mis seme'antes. >educido a una humildad catastr&fica, a una postraci&n perfecta, como despué de un intenso pavor. 4evuelto a la fuer#a a mi ran!o real, al ran!o nfimo del que i!noro qué idea-ambici&n me haba hecho abandonar. =niquilado el or!ullo, la estima. ... ... Perdido en un lu!ar le'ano Go qui#á no?, sin nombre, sin identidad. (*1 , derribando con la burla, con la carca'ada, con lo !rotesco, la incon!ruente idea que me haba hecho de mi importancia. e sumer!iré. Sin recursos, en el infinito-espritu que subyace abierto a todos, abierto yo mismo a un nuevo e increble roco a fuer#a de ser nadie a ras de todo... ridculo... Benri Mic1au, Pinturas +om/artamos !a /obrea, no !a miseria;
Seg4n el Maestro &cZ1art, el 1o*bre obre es aquel que: Ano quiere nada, no sabe nada $ no tiene nadaC' =bsoluta*ente desoseído, desoado de todo, silenciosa*ente etra+o a su *undo, ignorante tanto de sí *is*o co*o de aquello que le rodea, el Nloo* desliega en el cora#ón del roceso 1istórico, $ en toda su lenitud, la a*litud roia*ente *eta-ísica del conceto de pobre#a. Lo cierto es que -ue necesaria toda la vulgaridad esesa de una 3oca en que la econo*ía sustitu$ó a la *eta-ísica ara 1acer de la obre#a una noción econó*ica Ja1ora que esta 3oca toca a su -in, de nuevo se evidencia que lo contrario de la obre#a no es la rique#a, sino la *iseria, $ que
de las tres sólo la obre#a tiene el sentido de una er-ección' La obre#a designa el estado de quien puede servirse de todo sin tener nada roio, $ la *iseria, el estado de quien no puede servirse de nada, $a sea orque tiene de*asiado, orque carece de tiempo o orque carece de co*unidad' =sí, toda la quietud burguesa, la lenitud doméstica $ la -a*iliar in*anencia del *undo sensible que la idea de rique#a 1a odido acarrear a trav3s de la 1istoria es algo que el Nloo* uede areciar gracias a la nostalgia o a la si*ulación, ero nunca vivir' %on 3l, la -elicidad se 1a trans-or*ado en una idea *u$ viea, $ no sólo en &uroa' o sólo se 1a erdido todo inter3s $ todo ethos sino, ta*bi3n $ al *is*o tie*o, la osibilidad de un valor de uso' &l Nloo* co*rende 4nica*ente el lenguae sobrenatural del valor de interca*bio' Dirige 1acia el *undo una *irada sin ver nada, salvo la nada del valor' Sus roios deseos sólo estn re-eridos a ausencias $ abstracciones, entre las cuales el culo de la "ovencita no es la *enor 2' >ncluso cuando aarente*ente el Nloo* quiere, no dea de no querer, ues quiere en vacío, quiere el vacío' Ésta es la ra#ón or la cual la rique#a se 1a vuelto, en el *undo de la *ercancía autoritaria, una cosa grotesca e inco*rensible, una -or*a saturada de la *iseria' La rique#a, de a1ora en adelante, es lo que os osee, aquello or lo que G? os sueta' A'a/<
&l Nloo* es un 1o*bre en el que todo se 1a sociali#ado, ero sociali#ado en cuanto privado. ada es *s eclusiva*ente co*4n que su lla*ada A-elicidad individualC' &l Nloo* es cualquiera, incluso en el deseo de singulari#arse' &n 3l se 1a abolido efectivamente toda di-erencia substancial con los otros 1o*bres' Sólo queda una ura di-erencia sin contenido' I todo aunta, en el *undo de la *ercancía autoritaria, a *antener esta ura di-erencia, que es una searación ura' =sí, el Nloo* resonde todavía a un no*bre, ero ese no*bre $a no signi-ica nada' Todos los *alentendidos resecto del Nloo* se deben a la ro-undidad de la *irada con la cual se nos er*ite ea*inarlo' @ero los que se llevan la al*a de la ceguera son los soci&lo!os que, co*o %astoriadis, 1ablan de Areliegue sobre la es-era rivadaC, sin recisar que esta *is*a es-era 1a sido completamente sociali#ada. &n el otro etre*o, encontra*os a los que se 1an desli#ado 1acia el interior del Nloo*' Todos los relatos que traen de vuelta se arecen, de una u otra -or*a, a la eeriencia que el narrador de onsieur Teste tiene cuando descubre el A1ogarC de su ersonae: A"a*s 1e tenido con *a$or claridad la i*resión de lo cualquiera' &ra una vivienda cualquiera, anloga al unto cualquiera de los teore*as J$ qui#s de igual utilidad' Mi an-itrión eistía en el interior *s general'C' &l Nloo* es, ues, ese ser que eiste Aen el interior *s generalC' Sólo en las circunstancias $ lugares en que el e-ecto de §culo se encuentra te*oral*ente susendido, se desvela la verdad *s ínti*a del Nloo*: que, en realidad, est en el a!apI. Se*eante susensión se roduce de *anera ee*lar en la insurrección, ero ta*bi3n cuando nos dirigi*os 1acia un desconocido en las calles de la *etróoli, o sea, a -in de cuentas, allí donde los 1o*bres deben reconocerse *s all de toda eseci-icación co*o 1o*bres, co*o seres searados, -initos $ euestos' &ntonces no es raro ver a er-ectos desconocidos eercer con nosotros su co*4n 1u*anidad al rotegernos de un eligro, o-recernos un aquete $ no ese 4nico cigarrillo que 1abía*os solicitado o al erder Hguindonos 1asta la dirección que buscba*osH un cuarto de 1ora de ese tie*o que, or otro lado, cuentan con tanta avaricia' Se*eantes -enó*enos no ueden u#garse en *odo alguno desde una interretación clsica de la etnología del don $ del contra6don, co*o ueda serlo, or el contrario, cierta sociabilidad de ca-3' &n dic1os -enó*enos no 1a$ erarquía alguna en uego' o se busca la gloria' Tan sólo uede rendir cuentas de ellos la 3tica del don infinito, conocida en la tradición cristiana, esecial*ente la - ranciscana, con el no*bre de a!apI. &l a!apI -or*a arte de la situación eistencial del 1o*bre que en los 4lti*os a+os 1a sido informado or la sociedad *ercantilista, $ que lo 1a redisuesto a este estado, volvi3ndole 1asta 2 &ncontra*os en el ri*er n4*ero de Tiqqun los Premiers matériau" pour une théorie de la 7eune-@ille.
tal unto etra+o a sí *is*o $ a sus deseos' = esar de todos los signos contrarios $ or *s inquietante que ueda arecer, esta sociedad est incubando una grave in-ección de voluntariado' iradlo, lo habéis convertido en este hombre putrefacto, amarillento, lo más parecido a eso que creais que era por naturale#a% un desecho, un desperdicio9 lo habéis lo!rado. Pues bien, os diremos al!o que debera de'aros tiesos si 0el error2 pudiera matar% habéis permitido que se convierta en el hombre más reali#ado, el más se!uro de sus poderes, de los recursos de su conciencia y del alcance de sus actos, en el más fuerte. ... 4isfrutáis ante este desecho que se mantiene en pie ante vuestra mirada, pero es a vosotros a quienes han robado, 'odido hasta la médula. s muestran s&lo los for6nculos, *as lla!as, las !rises calaveras, la lepra, y s&lo creéis en la lepra. (ada ve# estáis más perdidas, \"a )o1l], tenamos ra#&n, ... ''' a )o1l, alles Sc1eisse] Juestra conciencia está tranquila. 0 Tenamos ra#&n, )basta con mirarlos+2 1os hemos burlado de vosotros, como nadie lo haba hecho. s hemos llevado hasta el e"tremo de vuestro error. 1o os desen!aaremos, podéis estar tranquilos. s conduciremos hasta el e"tremo de vuestra barbarie. 1os de'aremos llevar hasta la muerte, y veréis c&mo revienta la !entu#a. 1o esperamos ya la liberaci&n de los cuerpos, ni tampoco contamos con su resurrecci&n para tener ra#&n. =hora es cuando, vivos pero desechos, nuestras ra#ones triunfan. $sciena, no puede comprobarse. Pero tenemos ra#&n, porque no tenéis la menor oportunidad de percataros, ha!áis lo que... ''' ha!áis. 1o s&lo la ra#&n está de nuestro lado, sino que somos la ra#&n que habéis condenado a una e"istencia clandestina. 4e tal manera que ya no podemos ni tan siquiera inclinarnos ante los aparentes triunfos. (omprended bien esto% habéis actuado de tal modo que la ra#&n se ha transformado en conciencia. Habéis rehecho la unidad del hombre. Habéis fabricado la conciencia irreductible. =l habernos condenado, ya nunca podréis lo!rar que estemos a la ve# en vuestro lu!ar y en nuestra piel. =qu, nunca, nadie lle!ará a ser para s mismo su propio S.S. !obert =ntel*e, *a especie humana
* Sé diferente, sé tú mismo
Jublicidad de roa interior
@or *uc1as ra#ones, la sociedad *ercantilista no uede rescindir del Nloo*' &l ingreso e-ectivo en las reresentaciones esectaculares, conocido con el no*bre de Aconsu*oC, est total*ente condicionado or la rivalidad *i*3tica: el Nloo* se ve e*uado a ella or su nada in terior' &l uicio tirnico de G? sería obeto de burla universal si AserC no signi-icara en el §culo Aser di-erenteC, o al *enos es-or#arse en conseguirlo' =sí ues no es tanto, tal $ co*o se+alara el bueno de Si**el, que Ala acentuación de la ersona se reali#a or *edio de cierto rasgo de i*ersonalidadC, sino *s bien que la acentuación de la i*ersonalidad sería i*osible sin cierto traba'o de la ersona' atural*ente, lo que se re-uer#a con la originalidad que G? resta al Nloo* no es nunca la singularidad de 3ste, sino el roio G? o, dic1o de otra *anera, la *ala substancialidad' Todo reconoci*iento en el §culo no es *s que reconoci*iento del §culo' @ues bien, sin el Nloo* la *ercancía no sería *s que un rinciio ura*ente -or*al, rivado de todo contacto con el devenir' I 4ou! /re)er not to
=si*is*o, es cierto que el Nloo* lleva en sí la ruina de la sociedad *ercantilista' Descubri*os en 3l ese carcter a*bivalente, ese sello que llevan todas las realidades a trav3s de las cuales se *ani-iesta la superaci&n de la sociedad mercantilista en su propio terreno. &n el curso de esta disolución, son los ci*ientos, abandonados $a desde 1ace tie*o, $ no los grandes edi-icios de la suerestructura, los que su-ren la ri*era o-ensiva' Lo invisible recede a lo visible, e i*ercetible*ente el *undo ca*bia de -unda*ento' &l Nloo* no declara la abolición de aquello cu$o -in trae aareado, sola*ente lo vacía de signi-icación $ lo reduce al estado de si*le vestigio, a la esera de su de*olición' &n este sentido, es osible a-ir*ar que la con*oción *eta-ísica de la que es sinóni*o es algo $a asado, ero que la *a$or arte de sus consecuencias est a4n or venir' %on el Nloo*, que carece en sí de la inti*idad que -undaba la roiedad rivada, 3sta 1a erdido toda su substancia: Keiste a4n algo propio o, a fortiori, roia*ente rivado La roiedad rivada subsiste aquí sólo de *anera e*írica, co*o abstracción *uerta que lanea or enci*a de una realidad que se le escaa de -or*a cada ve# *s visible' &l Nloo* no one en tela de uicio el derec1o, lo destituye. &n e-ecto, Kcó*o no iba a. encontrarse el derec1o de-initiva*ente rescrito or ese ser que no es un sueto, cu$os actos no rovienen de ersonalidad alguna, $ cu$os co*orta*ientos no son $a tributarios de las categorías burguesas de inter3s $ de *otivación, ni de las de asión o resonsabilidad =nte el Nloo*, ues, el derec1o ierde cualquier tio de co*etencia ara i*artir usticia H Kqu3 uede signi-icar la usticia ara un ser indi-erenteH' =enas nada, aunque G? ueda contar con el estricto terror olicial, ues en el *undo de lo sie*re6igual no nos udri*os *uc1o *s en la crcel que en el %lub M3diterran3e: la vida est or doquier id3ntica*ente ausente' De a1í que ara la do*inación sea tan i*ortante que las crceles se conviertan de -or*a notoria en lugares de tortura rolongada' @ero ara el Nloo*, la econo*ía $, or ende, cualquier noción de utilidad, de cr3dito o de racionalidad instru*ental es algo $a asado' o 1a$ que buscar en otra arte la ra#ón de la reconstitución lani-icada $ 4blica de un lumpenproletariat en todos los aíses del caitalis*o tardío: *ediante la abruta $ te*ible a*ena#a del 1a*bre se trata, en 4lti*a instancia, de disuadir al Nloo* ara que no se abandone a su desaego esencial' @ues, desde el unto de vista econó*ico,
este A1o*bre no6rcticoC JMusil es un roductor desastrosa*ente tore, ade*s de un consu*idor total*ente irresonsable' Su roio egoís*o es declinante: es un e!osmo sin e!o. Si el Nloo* no 1a odido dear de socavar los -unda*entos de la olítica clsica, es en arte or de-ecto: no 1a$ *s equivalencia i*aginable en el seno de lo universal que la elección senatorial entre las ratas Hcada rata es, con el *is*o e inalienable derec1o, un reresentante de su esecie, primus inter paresH ero ta*bi3n en arte or eceso, orque el Nloo* se *ueve esontnea*ente dentro de lo irreresentable, que es 3l *is*o' KI qu3 ensar, -inal*ente, de las reocuaciones que este 1io ingrato causa al §culo, donde todos los ersonaes $ todos los aeles se desli#an en un *ur*ullo: C Kould prefer not to Ti22un
A@ara los desiertos, 1a$ un *undo 4nico $ co*4n, *ientras que entre los que duer*en, cada cual se desvía 1acia el su$o roioC Berclito &l Tiqqun va al -ondo de las cosas' =4n se encuentra atravesando el urgatorio' Se ocua de sus asuntos con *3todo' &l Tiqqun es la 4nica conceción ad*isible de la revolución' o la que es preciso eserar, $ *enos a4n la que se puede rearar, sino la que se cumple seg4n su ulsación invisible en una te*oralidad interior a la 1istoria' &l Tiqqun no es un unto deter*inable, aroi*ada*ente a corto la#o, en el -uturo Jaunque ta*bi3n lo sea, sino *s bien el A*ovi*iento real que abole el estado de cosas eistenteC' &l Tiqqun está ya siempre aqu, es decir, no es sino el proceso de la manifestaci&n de lo que es, $ que co*orta, ade*s, la anulaci&n de lo que no es' La -rgil ositividad de este *undo se debe recisa*ente a que no es nada, nada *s que la suspensi&n del Tiqqun. &sta susensión eocal se est co*en#ando a 1acer sentir or doquier' &s incluso lo 4nico verdadera*ente sensible que queda' &l Nloo* -or*a arte del Tiqqun. @recisa*ente orque es el 1o*bre del ni1ilis*o consu*ado, su destino consiste en oerar la salida del ni1ilis*o o erecer' La intuición del roletariado en Mar auntaba a esto *is*o, ero torcía su tra$ectoria ante el blanco' =sí, en *a Cdeolo!a alemana uede leerse: AFrente a las -uer#as roductivas se $ergue la *a$oría de los individuos a quienes se 1a desoado de estas -uer#as $ que, desoseídos así de toda la substancia real de su vida, se 1an vuelto seres abstractos, ero que, recisa*ente or esta *is*a ra#ón, estn en condiciones de entablar relaciones entre sí en cuanto individuos'C @ero el Nloo*, recisa*ente en la *edida en que no es un individuo, es caa# de entablar relaciones con sus se*eantes' &l individuo lleva en su enga+osa integridad, de *anera atvica, la reresión de la co*unicación o la necesidad de su -acticidad' La aertura ettica del 1o*bre, $ esecial*ente del Nloo*, ese Io que es un uno, ese uno que es un Io, es usta*ente aquello contra lo cual se inventó la -icción del individuo' &l Nloo* no eeri*enta la -initud articular o de una deter*inada searación, sino la -initud $ la searación ontológicas co*unes a todos los 1o*bres' =de*s, el Nloo* no est solo *s que en apariencia, ues no es el 4nico que est solo, todos los 1o*bres tienen en com6n esta soledad' ive co*o un etranero en su aís, sin eistir $ al *argen de todo, ero todos los Nloo* 1abitan 'untos la atria del &ilio' Todos los Nloo* ertenecen indistinta*ente a un *is*o *undo que es el olvido del *undo' =sí ues, lo %o*4n est alienado, ero sólo en apariencia, $a que est ta*bi3n alienado en cuanto (om6n Jla alienación de lo %o*4n sólo designa el 1ec1o or el cual aquello que les es co*4n aparece ante los 1o*bres co*o algo articular, roio, rivado'
I este %o*4n surgido de la alienación de lo %o*4n, $ que 3sta con-or*a, no es sino lo %o*4n verdadero $ 4nico entre los 1o*bres, su alienación originaria: -initud, soledad, eosiciónE a1í, lo *s ínti*o se con-unde con lo *s general, $ lo *s ArivadoC es lo *eor co*artido' He pasado entre ellos como un e"tran'ero, pero nin!uno de ellos vio que lo fuera. He vivido entre ellos como espa, pero nadie Hni siquiera yoH sospech& que lo fuese. Todos me crean uno de ellos% nadie saba que en mi nacimiento se dio el cambia#o. =s fui seme'ante a los otros sin nin!6n parecido, hermano de cada cual sin pertenecer a nin!una familia. :o vena de pases prodi!iosos, de paisa'es más bellos que la vida, pero nunca evoqué esos pases. is pasos eran seme'antes a los suyos, sobre el entarimado o sobre las baldosas, pero mi cora#&n se hallaba le'os, aun latiendo muy cerca, amo ficticio de un cuerpo e"iliado y e"tran'ero... ...1adie me ha conocido realmente tras esa máscara de la similitud, e incluso nadie supo que llevaba una máscara, porque nadie saba que este mundo es de seres enmascarados. 1adie ha ima!inado nunca que a mi lado haba siempre al!uien más, que a fin de cuentas era yo. Siempre se me crey& idéntico a m mismo. Nernardo Soares, $l libro del desasosie!o "T= te has 9isto cuano bebes$
ASe dice que est *uerto ara el *undo orque no le lace nada de lo terrestreC Maestro &cZ1art Tal $ co*o G? adivina sin di-icultad, se est -raguando en la do*inación *ercantilista una osibilidad catastr&fica cu$a actuali#ación i*orta conurar or todos los *edios: que el Nloo* quiera aquello que 3l es, que se rearoie de su i*roiedad' &sta AsociedadC, es decir, el conunto de las situaciones que ella autori#a, a nada le te*e tanto co*o al Nloo*, ese A1o*bre *aldito que carece de ocuaciones, senti*ientos, ataduras, roiedad o no*bre alguno en osesiónC Jetc1aiev' La sociedad debe considerarse, 1asta en sus *s *íseros detalles, co*o un -or*idable disositivo *ontado con el roósito eclusivo de eterni#ar la condición del Nloo*, que es una condición de doloroso e"ilio. &n ri*era instancia, la diversión no es *s que la poltica adatada a este -in: eterni#ar la condición del Nloo* co*ien#a or distraerlo' Luego, co*o en aluvión, le sigue la acuciante necesidad de contener cualquier *ani-estación del surti*iento general, lo que eige un control cada ve# *s absoluto de la aariencia, $ *aquillar sus e-ectos de*asiado visiblesE todo ello obedece a la in-lación des*esurada del Niooder' =sí ues, en la con-usión reinante el cuerpo reresenta, a escala gen3rica, el 4lti*o int3rrete de la irreductibilidad 1u*ana a la alienación' = trav3s de sus en-er*edades $ dis-unciones, $ sólo a
trav3s de ellas, la eigencia del conoci*iento de sí contin4a siendo ara cada cual una realidad in*ediata' &sta AsociedadC no 1abría declarado se*eante guerra a ultran#a al su-ri*iento del Nloo* si 3ste no constitu$era en sí *is*o $ en todos sus asectos una acusación intolerable al i*erio de la ositividad, si no llevara consigo una urgente revocación de cualquier ilusión de articiar en su -lorida in*anencia' Mantener en la cotidianeidad el e*leo de reresentaciones $ categorías inoerantes desde 1ace tie*o, i*oner eriódica*ente versiones e-í*eras ero restauradas de los lugares *s trillados de la *oral burguesa, conservar *s all de la evidencia redoblada de su -alsedad $ de su caducidad las tristes ilusiones de la A*odernidadCE 1e aquí otros tantos caítulos del esado trabao eigido ara eretuar la searación de los 1o*bres' G? decide de ante*ano lo que es co*rensible $ lo que, or ser inco*rensible, debe rec1a#arse' &l Nloo* $ su 3tasis son inco*rensibles: deben ser rec1a#ados' La obre#a del Nloo* ta*bi3n est declarada te*a intratable or la @ublicidad alienada Jes cierto que el caitalis*o 1a 1ec1o todo lo osible ara que la obre#a sea en su seno id3ntica a la *iseria, dado que la roiedad de una cosa sie*re 1a sido esencial*ente el derecho de privar a los otros de su uso?. >ncluso G? est disuesto, ara que el Nloo* er*ane#ca en la ver!Den#a de su obre#a, a er*itirle que se subetive en dic1a vergXen#a' &l eecutivo -rustrado encontrar así en la anolia de escritores de *oda algo con que identi-icarse, algo que le tranquilice: sí, el 1o*bre ab$ecto est a unto de volverse una -or*a de vida 1onorable' ?tra oción consiste en volcarse al budis*o Hesa reugnante $ sórdida esiritualidad de acotilla ara asalariados deri*idosH que $a se 1a ercatado de lo ecesivo de su a*bición de ense+ar a sus -ieles *aravillados $ est4idos el eligroso arte de c1aotear en su roia nulidad' Desde el unto de vista de la do*inación, resulta de su*a i*ortancia que nunca nos recono#ca*os tras los rasgos del Nloo*, que no aare#ca*os ante nosotros *is*os $ ante los otros co*o obetos oacos $ aterradores' @or si acaso, G? le resta al Nloo* ideas, deseos $ una subetividad' G? le surte con todo lo necesario ara que siga siendo el 1o*bre *udo en cu$a boca el §culo one las alabras que quiere oír' = G? ta*oco le reugna dirigir al 1o*bre contra sí *is*o, volver contra 3l su roia i*ersonalidad, ersoni-icndolo recisa*ente co*o Ala sociedadC, Ala genteC o incluso Ael ciudadano *edioC' Todo ello converge en una con*inación social cada ve# *s desorbitada a Aser uno *is*oC, es decir, *ediante estrictas asignaciones a residir en cada una de las identidades reconocidas or la @ublicidad autóno*a' @aralela*ente, los rocesos de subetivación $ de des6subetivación se vuelven cada ve# *s violentos, $ el control que eercen, cada ve# *s *ili*3trico' I co*o ese control no uede -uncionar sino en una estricta econo*ía del tie*o, en una sincronía, el Nloo* se ve de a1ora en adelante regular*ente e1ortado a sentirse AorgullosoC de esto o de aquello, orgullosos de ser ga$ o tecno, *oro, negro o chusma. Sea lo que -uere, es reciso que el Nloo* sea algo, cualquier cosa antes que nada' (ane, Thece!, Phares
=dorno eseculó en Prismas que Alos 1o*bres que no eistiesen *s que ara el rói*o, siendo así el #8on polition absoluto, sin duda alguna 1abrían erdido su identidad, ero al *is*o tie*o escaarían de los dictados de la autoconservación que asegura la co1esión del *eor de los *undos, así co*o la del vieo *undo' La interca*biabilidad total destruiría la substancia de la do*inación $ sería ro*etedora de libertadC' &ntretanto, el §culo 1a arovec1ado todas las ocasiones ara co*robar la veracidad de estas coneturas, ero ta*bi3n se 1a encargado de -rustrar con 3ito esa incongruente ro*esa de libertad' atural*ente, todo esto no odía suceder sin endureci*ientos, $ así el *undo de la *ercancía, en el eercicio de su dictadura, necesaria*ente se 1a vuelto cada ve# *s i*lacable' De AcrisisC a ArecueracionesC $ de ArecueracionesC a AderesionesC, desde 797; la vida en el §culo no 1a cesado de 1acerse cada día *s so-ocante' Gn cli*a de terror 1a co*en#ado a aloarse en todas las *iradas, incluso en los resuntos entusias*os oulares' La consigna lanetaria de AtransarenciaC elícita tanto ese a*biente de guerra er*anente librada contra la oacidad del Nloo*, co*o el carcter rorrogado de la eistencia resultante' %o*o ri*era resuesta a esta situación, se etiende entre los Nloo*, al *is*o tie*o que el gusto or el anoni*ato $ cierta descon-ian#a resecto de la visibilidad, el odio 1acia las cosas. Gna
1ostilidad *eta-ísica dirigida 1acia lo eistente a*ena#a con estallar en cualquier *o*ento $ en cualquier circunstancia' &n el origen de esta inestabilidad se encuentra un desorden, un desorden que roviene de la -uer#a no e*leada, de una negatividad que no uede er*anecer eterna*ente sin uso, so ena de destruir fsicamente a quien la eeri*enta' Frecuente*ente, esta negatividad er*anece *uda, aunque su contención se *ani-ieste co*4n*ente co*o una -or*ali#ación 1ist3rica de todas las relaciones 1u*anas' @ero $a alcan#a*os la #ona crítica en la que lo reri*ido vuelve a aarecer, $ lo 1ace con des*esura' Gna *asa cada ve# *s co*acta de crí*enes $ de e"traos actos, caracteri#ados or AviolenciasC $ destrucciones Asin *óvil aarenteC, asedia diaria*ente a las de*ocracias bioolíticas Jgeneral*ente, el §culo lla*a AviolenciaC a todo aquello que retende do*inar *ediante la -uer#a, a aquello contra lo cual quisiera *ani-estar toda su arbitrariedadE esta categoría sólo tiene valide# en el seno del *odo de revelación *ercantilista, ella *is*a sin valide#, que 1iostasía sie*re el *edio en relación al -in, es decir, el acto *is*o en detri*ento de su signi-icación in*anente' >ncaa# de revenirlos $ *enos a4n de co*renderlos, la do*inación *ercantilista declara estar decidida a no er*itir se*eantes atentados al control social de los co*orta*ientos' I entonces 1ace oír sus 1abituales -an-arronadas sobre la video6vigilancia $ la Atolerancia ceroC, la reresión de los Asalvais*osC $ el Asenti*iento de inseguridadCE \co*o si el vigilante no debiera asi*is*o ser vigilado], \co*o si el Asenti*iento de inseguridadC no le corresondiera ontol&!icamente al Nloo*] %uando un carcelero socialista encu*brado en la burocracia de cualquier sindicato de *aestros aoneses ea*ina a los eque+os Nloo*, se inquieta diciendo: A&l -enó*eno es tanto *s reocuante cuanto que los autores de estos actos de violencia son a *enudo ni+os sin 1istoria' =ntes se identi-icaba al ni+o roble*ticoE actual*ente, la *a$oría de ellos no se rebela, ero tiende a 1uir de la escuela' I si se les rerende, la reacción es desroorcionada: estallanC G*eonde, ueves 75 de abril de 799' =quí est en *arc1a una dial3ctica in-ernal que quiere que se*eantes AelosionesC se vuelvan Hal *is*o tie*o que se ver acentuado el carcter *asivo $ siste*tico del control necesario ara su revenciónH cada ve# *s -recuentes, *s -ortuitas $ *s -eroces' &s un 1ec1o constatable $ oco discutido: la violencia de la de-lagración crece con el eceso de con-ina*iento' &n el Nloo*, la do*inación que 1ace varios siglos 1abía u#gado conveniente i*oner la econo*ía co*o moral, con la creencia de que el co*ercio volvería dóciles a los 1o*bres, revisibles e ino-ensivos, ve que su ro$ecto se trans-or*a en su contrario: en los 1ec1os, resulta que el homo oeconomicus, en su er-ección, es ta*bi3n quien vuelve caduca la econo*íaE $ la 1ace caducar orque, al rivarla de cualquier substancia, la 1a vuelto absolutamente imprevisible. o ode*os obviarlo, al 1o*bre sin contenido le resulta tre*enda*ente di-ícil contenerse' ! enemi'o incon)esab!e
$n qué sentido cualquier Bloom es, en cuanto Bloom, un a!ente del Partido Cma!inario =nte este ene*igo desconocido Jtal $ co*o uede 1ablarse de un Soldado Desconocido, es decir, de un soldado conocido or todos co*o desconocido, singulari#ado co*o un cualquiera Hsin no*bre, sin rostro, sin eoe$a roia, que no se arece a nada, ero que est en todas artes ca*u-lado en el orden de la osibilidadH la inquietud roducida or la do*inación tiende de -or*a cada ve# *s clara 1acia la aranoia' @or otra arte, considerada -ría*ente, la costu*bre que la do*inación 1a adquirido de die#*ar sus roias -ilas, or lo que ueda ocurrir, es un esectculo *s bien có*ico' Ba$ algo ob'etivamente terrorfico en ese triste cuarentón que 1asta el *o*ento de la *atan#a 1a sido el *s nor*al, el *s si*le, el *s insigni-icante de los 1o*bres *edios' unca se le 1a oído declarar su odio 1acía la -a*ilia, al trabao o 1acia su barrio eque+o6burgu3s, 1asta que una *adrugada se levanta, se asea, se desa$una Hsu *uer, su 1ia $ su 1io a4n duer*enH carga su -usil de ca#a $, discreta*ente, les levanta a los tres la taa de los sesos' =nte los ueces, así co*o ante la tortura, el Nloo* nada dir sobre los *otivos de su cri*en' &n arte orque la soberanía no
entiende de ra#ones, ero ta*bi3n orque resiente que, en el -ondo, la eor atrocidad que uede in-ligir a esta AsociedadC es dear su cri*en sin elicación' De este *odo, el Nloo* 1a logrado introducir en todos los esíritus la on#o+osa certe#a de que en cada 1o*bre 1a$ un ene*igo latente de la civili#ación que dor*ita' ?bvia*ente, su 4nico -in es devastar este *undo, ues a1í se 1alla su destino, ero nunca lo dir uesto que su estrategia consiste en roducir el desastre $, a su alrededor, el silencio. *Puesto 2ue !o 2ue e! crimen > !a !ocura obeti9an es !a ausencia e una /atria trascenenta!?
LuZ[cs, Teora de la novela
= *edida que las devastadas -or*as en las que retenden contenernos estrec1an su tiranía, etra+os sucesos lla*an la atención' &l amo se introduce en el seno *is*o de las sociedades *s avan#adas, bao -or*as ineseradas, cargado de un nuevo sentido' &n los territorios ad*inistrados or la @ublicidad autóno*a, se*eantes -enó*enos de desintegración son esas ocas cosas que onen al descubierto el verdadero estado del *undo, el puro escándalo de las cosas. =l *is*o tie*o que revelan las líneas de -uer#a que recorren el reino de lo inerte, *uestran las osibilidades del *undo que 1abita*os' !a#ón or la cual nos arecen, incluso en su distancia, tan -a*iliares' Las 1uellas de sangre que dean tras de sí *arcan los 4lti*os asos del 1o*bre que co*etió el error de querer evadirse a solas, del terror gris en el que, tan enosa*ente, se encontraba reso' uestra disosición ara concebirlo *ide la vitalidad que nos queda' Los vivos son aquellos que co*renden por s mismos que cuando el *iedo $ la su*isión alcan#an en el Nloo* su se*blante -inal de *iedo $ su*isión absolutos Huesto que no tienen obetoH, la liberación de este *iedo $ de esta su*isión rocla*a la liberación, igual*ente absoluta, de cualquier *iedo $ de cualquier su*isión' Llegado a este unto, quien indistinta*ente te*ía a cualquier cosa ya no uede te*erle a nada. Ms all de los etre*os ra*os de la alienación, 1a$ una #ona clara $ aacible en la que el 1o*bre se 1a vuelto incaa# de eeri*entar interés alguno or su propia vida, ni siquiera un atisbo de aego or su entorno' %ualquier libertad resente o -utura que -uera aena, de una u otra *anera, a este desaego, a esta ataraia, no odría aenas sino balbucear los rinciios de una servidu*bre *s moderna. os /oseíos /or !a naa
A>* sorr$' LiZe S1aZeseare sa$s, .ood )o*bs 1at1 borne bad sonsC' &ric Barris, *ittleton, 20 de abril de 7999 =nte el 1undi*iento de todo, ocas salidas quedan' &tende*os el bra#o, ero no encuentra a nadie' G? 1a aleado el *undo de nuestro contacto, G? lo 1a uesto -uera de nuestro alcance' @ocos Nloo* logran resistir la des*esura de esta resión' La o*niresencia de las troas de ocuación de la *ercancía y la severidad de su estado de e*ergencia condenan a corto la#o la *a$or arte de los ro$ectos de libertad' =si*is*o, a1í donde el orden arece sólida*ente establecido, la negatividad re-iere volverse contra sí *is*a, $a sea co*o en-er*edad, su-ri*iento o servidu*bre -uriosa' Ba$, sin e*bargo, casos inesti*ables en los que seres aislados to*an la iniciativa, sin eseran#a ni estrategia alguna, de abrir una brec1a en el curso ordenado del desastre' &n ellos, el Nloo* se libera violenta*ente de la resi!naci&n en la que G? quisiera 1acerle languidecer ara sie*re' I uesto que el 4nico instinto que uede educar a esta aulladora resencia de la nada es el de la destrucción, el gusto or lo Total*ente ?tro reviste el asecto del cri*enE se veri-ica en la indi-erencia aasionada que su autor logra *antener -rente a su acto'
&llo se *ani-iesta de la -or*a *s espectacular en el n4*ero creciente de Nloo*, tanto grandes co*o eque+os, que ansían, a -alta de algo *eor, deleitarse con el acto surrealista *s sencillo' !ecorde*os: Ael acto surrealista *s sencillo consiste en baar a la calle e*u+ando una istola $ disarar al a#ar, *ientras se ueda, contra la *ultitud' /uien no 1a$a tenido deseos, al *enos una ve#, de acabar de esta *anera con el eque+o siste*a de envileci*iento $ de cretini#ación vigente, tiene su lugar bien reservado entre esa *ultitud, con las trias a la altura del ca+ónC JNretón' !ecorde*os ta*bi3n que esta inclinación, co*o *uc1as otras cosas, no 1a deado de ser entre los surrealistas una teoría sin rctica, al igual que su rctica conte*ornea carece, en la *a$oría de los casos, de teoría' &stas eruciones individuales, condenadas a *ultilicarse, constitu$en otras tantas lla*adas a la deserción $ a la -raternidad ara los que a4n no 1an cedido al sue+o cibern3tico' La libertad que a-ir*an no es la de un 1o*bre articular, disuesto ara un -in deter*inado, sino la de cada cual, la del g3nero: un sólo 1o*bre basta ara atestiguar que la libertad no 1a desaarecido a4n' &l §culo no uede *etaboli#ar esos dardos cargados con tanto veneno' @uede dar cuenta de ellos, ero nunca desoarlos or co*leto de su n4cleo inelicable, indecible $ esantoso' Son los Beau" Aestes de este tie*o, una -or*a $a desenga+ada de la roaganda -ctica, cu$o *utis*o ideológico no 1ace *s que incre*entar su carcter inquietante $ oscura*ente *eta-ísico' Paraoas e !a soberanía
&n el §culo, el oder se encuentra or doquier, es decir, todas las relaciones son en 4lti*a instancia relaciones de do*inación' @or esta ra#ón, ade*s, nadie uede ser soberano' &s un *undo obetivo en donde cada cual debe so*eterse en ri*er lugar ara desu3s, a su ve#, so*eter' ivir de acuerdo con la asiración -unda*ental del 1o*bre a la soberanía es aquí i*osible, salvo or un instante, salvo *ediante un !esto. /uien no cesa de ugar con la vida necesita el gesto, con el -in de que su vida se vuelva *s real que un *ero uego orientado en cualquier dirección' &n el *undo de la *ercancía, que es el *undo de la reversibilidad generali#ada, donde todas las cosas se con-unden $ se trans-or*an unas en otras, donde todo es a*biguo, transitorio, *o*entneo, *e#colan#a, sólo el gesto corta. !ecorta, con el gole de su necesaria brutalidad, el insoluble Adesu3sC de su AantesC, que con esar G? deber reconocer co*o definitivo. &l gesto es acontecimiento. =bre una 1erida en el caos del *undo $ clava en sus ro-undidades sus cascotes de univocidad' Se trata de -iar ro-unda*ente en la di-erencia las cosas que se u#gan di-erentes, de tal *odo que aquello que las seara bao ning4n conceto ueda borrarse a*s' Si 1a$ algo del Nloo* que contraría a la do*inación es constatar que, incluso desoseído de todo, el 1o*bre disone a4n, en su desnude#, de una incoercible -acultad *eta-ísica ara el reudio: la de dar *uerte, tanto a lo otros co*o a sí *is*o' La *uerte, cada ve# que ocurre, abre un boquete vergon#oso en el teido bioolítico' &l ni1ilis*o consu*ado que, en realidad, lo 4nico que 1a consu*ado es la disolución de toda alteridad en una in*anencia circular ili*itada, sie*re su-re a1í una derrota: en contacto con la *uerte, la vida dea s4bita*ente de ser evidente' &l deber de decisi&n que sanciona a cualquier eistencia roia*ente 1u*ana sie*re se 1a relacionado con el acerca*iento a este abis*o' La vísera del día de *ar#o de 799 en que *asacró a cuatro Nloo*6escolares $ a un Nloo*6 ro-esor, el eque+o Mitc1ell "o1nson declaraba ante sus co*a+eros incr3dulos: AMa+ana, decidir3 qui3n vivir $ qui3n *orirC' &sta*os aquí tan leos del erostratis*o de un Fierre !ivire co*o de la 1isteria -ascista' o 1a$ nada *s i*resionante en los in-or*es de las *atan#as de un Yiland YinZel o de un =lain ?reiller que el -río control que tienen de sí *is*os, que el desaego vertical resecto del *undo' AIa no es nada ersonalC, decía =lain ?reiller al eecutar a su *adre' Ba$ algo serena*ente suicida al a-ir*ar con tanto alo*o una no6articiación, una indi-erencia $ un rec1a#o al su-ri*iento' = *enudo, el §culo to*a estos gestos co*o reteto ara 1ablar de actos AgratuitosC H cali-icativo gen3rico que le sirve ara ocultar las -inalidades que no quiere co*render, arovec1ando la ocasión er-ecta ara reavivar una de las -alsas antino*ias -avoritas del
utilitaris*o burgu3sH cuando, en realidad, no resonden ni al odio ni a ra#ón alguna' @ara convencerse de ello, basta con ver los cinco vídeos que los A*onstruos de LittletonC -il*aron lani-icando su oeración' Su rogra*a aarece sin ning4n *isterio: Aa*os a desencadenar una revolución, la revolución de los desoseídosC' =quí, el odio *is*o est indi-erenciado, eento de cualquier ersonalidad' La *uerte entra en lo universal del *is*o *odo que sale de lo universal, sin cólera' o es nuestra intención otorgar a se*eantes actos ninguna signi-icación revolucionaria, ni siquiera con-erirles un carcter ee*lar' Se trata *s bien de entender aquello cu$a -atalidad eresan, y co*renderlo ara así sondear las ro-undidades del Nloo*' /uienquiera que siga este ca*ino co*render que el Nloo* no es =D= , ero que esta =D= es la nada de la soberanía, el vacío de la otencia ura' La contradicción entre, or una arte, el aisla*iento, la aatía, la i*otencia y la insensibilidad del Nloo* $, or otra, su in-leible necesidad de soberanía no uede sino acarrear *s gestos co*o 3stos, absurdos $ 1o*icidas, ero ineluctables $ reales' Lo i*ortante es que en el -uturo sea*os acogerlos en los t3r*inos ustos' @or ee*lo, los de C!itur. AGno de los actos del universo se acaba de co*eter aquí' ada *s, sólo quedaba el solo, -in de alabra $ gesto unidos H sola la vela del ser, or lo que todo 1a sido' @rueba'C 01o soy 1=4=2% esta parodia de la afirmaci&n es la 6ltima palabra de la sub'etividad soberana, liberada del imperio que quiso Ho debi& deH darse sobre las cosas... pues sé que en el fondo soy esta e"istencia sub'etiva y sin contenido. .eorges Nataille, *a Soberana a #/oca e !a cu!/abi!ia abso!uta
o 1a sido dada a los 1o*bres la oción de no co*batir, sino sólo la elección del ca*o de batalla' La neutralidad no es nada neutralE sin duda alguna es el *s sanguinario de todos los ca*os' @or suuesto, el Nloo*, tanto el que abre -uego co*o el que sucu*be ante 3l, es inocente' Desu3s de todo, Kacaso no es nada *s que un ersonae secundario de la -arsa central K=caso eligió vivir en este *undo, cu$a eretuación es el resultado de una totalidad social autóno*a, un *undo que cada día le arece *s etraterrestre K/u3 odría 1acer este liliutiense erdido ante el Leviatn de la *ercancía, salvo 1ablar el lenguae del ocuante esectacular, co*er de la *ano del Niooder $ articiar a su *anera en la roducción $ en la reroducción del 1orror &l Nloo* desearía oder are1enderse co*o un etra+o, eterior a sí *is*o' @ero *ediante este tio de de-ensa no 1ace sino con-esar que en su mismidad es la fracci&n de s que vela por la alienaci&n del resto de su ser. =enas i*orta que no ueda considerarse al Nloo* resonsable de ninguno de sus actos: no or ello es *enos resonsable de su irresonsabilidad, contra la cual a cada instante se le insta a ronunciarse' @uesto que 1a consentido, al *enos negativa*ente, en ser tan sólo el redicado de su roia eistencia, ob'etivamente -or*a arte de la do*inación, $ su roia inocencia es la culabilidad er-ecta' &l 1o*bre del ni1ilis*o consu*ado Hel 1o*bre del AKara qu3 serviríaC, que aco*a+a al de AK$ $o qu3 uedo 1acerCH se equivoca al creerse virgen de cualquier -alta orque no haya hecho nada y orque *uc1os otros est3n en la *is*a situación que 3l' &l §culo sugiere que los 1o*bres de nuestro tie*o artician igual*ente en un cri*en inaelable, $ conviene regular*ente que el 1o*icida era Aun 1o*bre co*4nC, un Aalu*no co*o los otrosC' @ero se niega a reconocerlo co*o un hecho metafsica% así lo 1e*os co*rendido en el caso de los oerarios de las c*aras de gas de =usc1)it#, cu$o *iedo a la resonsabilidad no sólo
era *s -uerte que la conciencia sino que, en deter*inadas circunstancias, era *s -uerte que el *iedo a la *uerte' &n un *undo de esclavos sin a*os, en un *undo de colaboradores, en un *undo do*inado or una verdadera tiranía de la servidu*bre, el acto surrealista *s sencillo est regido nada *enos que or el antiguo deber de tiranicidio' @omo sacer
AGn día u otro, las bo*bas co*ien#an a caer ara que las gentes sean al -in aquello que se niegan a ad*itir, a saber, que las alabras tienen un sentido *eta-ísico'C Nrice @arain, *Lembarras du choi" Los oseídos or la nada comien#an a revelar las consecuencias de su condición de Nloo*' De este *odo, la eonen al vacío: el Nloo* es sacer en el sentido que lo entiende .iorgio =ga*ben, es decir, en el sentido de una criatura que no encuentra su lugar en derec1o alguno, que no uede ser u#gada ni condenada or los 1o*bres, ero que cualquiera uede *atar sin or ello co*eter un cri*en' &l Nloo* es sacer en la *edida eacta en que se sabe oseído or la nuda vida, del *is*o *odo que el musulmán de los ca*os de concentración es el si*le testigo de su roio devenir6 in1u*ano' La insigni-icancia $ el anoni*ato, la searación $ el etra+a*iento no son circunstancias o3ticas que ciertas subetividades inclinadas a la *elancolía tienden a eagerar: el alcance de la situación eistencial así caracteri#ada, la del Nloo*, es total, y ante todo poltico. Sacer es cualquiera que care#ca de comunidad. o ser nada, no oder llegar a ser reconocido o resentarse co*o la ura individualidad no6olítica basta ara 1acer de cualquier 1o*bre un ser cu$a desaarición no sea ininscribible' @or inagotables que sean las letanías de la *isericordia H la*entos eternos, etc'H, se*eante *uerte ocurre en lo irrisorio, en lo indi-erente $ no concierne a -in de cuentas *s que a quien desaarece, es decir, siguiendo esta lógica, a nadie' =nloga a su vida entera*ente rivada, la *uerte del Nloo* es un no6aconteci*iento de tal cari# que cada cual uede suri*irlo' @or ello, las rotestas de quienes con vo# queu*brosa cla*an que las vícti*as de Yiland YinZel no A*erecían *orirC, son inacetables, ues ta*oco merecan vivir, no haban alcan#ado la esfera del mérito. =l er*anecer a1í, en *anos del Niooder, eran *uertos que vivían a *erced de cualquier decisión soberana, la del &stado o la del asesino' Banna1 =rendt: Ao ser *s que un es3ci*en de una esecie ani*al lla*ada Bo*bre: eso es lo que les ocurre a quienes 1an erdido cualquier cualidad olítica di-erenciada $ se 1an trans-or*ado tan sólo en seres 1u*anos ''' La 3rdida de los derec1os 1u*anos sobreviene cuando una ersona se vuelve un ser 1u*ano en general Hsin ro-esión, sin ciudadanía, sin oinión, sin actos con los que identi-icarse $ articulari#arseH $ aarece co*o di-erente en general, sin reresentar nada *s que su roia $ absoluta individualidad 4nica, la cual, en ausencia de un *undo co*4n donde ueda eresarse $ sobre el que ueda intervenir, ierde toda signi-icación'C G$l Cmperialismo?. &l eilio del Nloo* tiene un estatuto *eta-ísico, es decir, es e-ectivo en todos los *bitos' &resa su situación real, resecto de la cual su situación le!al est eenta de verdad' /ue ueda ser abatido sin la *enor usti-icación co*o un erro or un desconocido, o que, si*3trica*ente $ sin re*ordi*iento alguno, sea caa# de asesinar a AinocentesC, no son acciones que incu*ban a cualquier instancia udicial' Sólo los esíritus in-luenciables $ suersticiosos ueden dearse llevar or la creencia de que un veredicto de cadena eretua o un roceso en regla bastan ara arroar tales 1ec1os a los li*bos de lo nulo $ sin valor' = lo su*o, la do*inación uede er*itirse certi-icar la condición del Nloo*, declarando, or ee*lo, un estado de ececión aenas en*ascaradoE tal es el caso de &stados Gnidos, que en 7995 adotó una le$ lla*ada AantiterroristaC que er*ite la detención de Asosec1ososC, basada en in-or*es secretos, sin cargo de acusación ni lí*ite de duración' Ba$ cierto riesgo -ísico en ser *eta-ísica*ente nulo' Sin duda reviendo las brillantes
eventualidades que se*eante nulidad reara, se adotó, el 7( de octubre de 798 en la sede de la Gnesco, la *u$ consecuente Declaración Gniversal de los Derec1os del =ni*al, que estiula, en su artículo <, que: A7 Hing4n ani*al debe ser so*etido a *alos tratos o a actos crueles' 2 HSi el sacri-icio de un ani*al es necesario, 3ste debe ser instantneo, indoloro $ en ning4n caso roducir angustia' < H&l ani*al *uerto debe ser tratado con resetoC'
*Tu non sei morta, ma seismarrita Anima nostra che si ti !amenti?
Dante, (onvivio
/ue la bondad del Nloo* a4n deba eresarse en algunos lugares *ediante el cri*en, indica que la línea est cerca, ero que a4n no 1a sido -ranqueada' &n las #onas gobernadas or el ni1ilis*o agoni#ante, donde a4n -altan los -ines ero se disone $a de una suerabundancia de *edios, la bondad es una osesión *ística' =1í, el deseo de una libertad incondicional conduce a singulares -or*ulaciones $ resta a las alabras un valor lleno de aradoas' LuZ[cs: ALa bondad es salvae $ carece de iedad, es ciega e i*rudente' &n el al*a del bondadoso se borra cada contenido sicológico, cada causa $ cada e-ecto' Su al*a es un c1eque en blanco donde el destino escribe su *andato absurdo' I ese *andato se eecuta ciega*ente, de -or*a te*eraria $ desiadada' /ue esta i*osibilidad se convierta en acto, esta ceguera en ilu*inación, que esta crueldad se trans-or*e en bondad: esto es el *ilagro, esto es la gracia'C G4e la pobre#a de espritu?. &stas eruciones, al *is*o tie*o que atestiguan una i*osibilidad, anuncian con su au*ento el ascenso del curso del tie*o' La inquietud universal, que tiende a subordinar cantidades cada ve# *a$ores de 1ec1os cada ve# *s ín-i*os, lleva 1asta la incandescencia, en cada 1o*bre, la necesidad de la decisi&n. =quellos ara quienes esta necesidad signi-ica su aniquilación 1ablan $a de aocalisis, *ientras que la *a$oría se resigna a vivir en la i*otencia de los laceres ab$ectos de los 4lti*os días' Sólo quienes conocen el sentido que otorgarn a la catstro-e conservan la cal*a y la recisión de sus *ovi*ientos' &l rango de un esíritu se reconoce or el g3nero $ las roorciones del nico al que se abandona' &s una *arca que vale no sólo 3tica $ *eta-ísica*ente, sino ta*bi3n en la rais, en el tie*o' etc3tera' Pero el mundo en el que nacemos es un mundo en !uerra en el que cualquier deslumbramiento obedece a la afilada verdad que divide entre ami!os y enemi!os. *a desi!naci&n del frente participa del paso de la lnea, pero no la supera. S&lo el combate puede hacerlo. 1o tanto porque llama a la !rande#a, sino porque es la e"periencia de la comunidad más profunda, la que ro#a permanentemente la aniquilaci&n y s&lo se mide en la e"trema pro"imidad del ries!o. Jivir 'untos en el cora#&n del desierto, con la misma resoluci&n de no reconciliarse con él, esa es la prueba, esa es la lu#. etc3tera' '''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''''' La teoría no es del ensa*iento, cierta cantidad coagulada, *anu-acturada, de ensa*iento' La teoría
es un estado, un estado de estupefacci&n. Teoría del Nloo*
donde el Nloo* no es el ob'eto de la teoría donde la teoría no es sino la actividad *s -a*iliar, la tendencia espontánea de una criatura esencial*ente te&rica, de un Nloo*' La teoría ? T>&& F>' De a1í, la necesidad de @?&!L& F>, decididamente.
Lasitud de la alabra
K/u3 es la salida del Nloo* La asunci&n del Nloo*, or ee*lo' HGno no se libera verdadera*ente de algo, salvo rearoindose de aquello de lo que se libera'H K/u3 es la asunci&n del Nloo* &l uso de la situación *eta-ísica así de-inida: la rctica de sí co*o tricster. o luc1ar contra el estado esqui#oide do*inante, contra nuestro estado esqui#oide, sino partir de ah, usarlo co*o ura -acultad de subetivación $ de desubetivación, co*o atitud ara la eeri*entación' !o*er con la antigua angustia del AKqui3n so$ real*enteC, en bene-icio del conoci*iento de *i situación y de su uso osible' o sobrevivir en la in*anencia constante de una *ilagrosa salida, no creer -or#osa*ente en el o-icio que se tiene, en las *entiras que se dicen, sino partir de ah, entrar en contacto con otros agentes del %o*it3 >nvisible Ha trav3s de Tiqqun, or ee*loH $ silenciosa*ente coordinar un sabotae con estilo' Desaegarse de su desaego *ediante una rctica consciente $ estrat3gica del desdobla*iento de sí' & !G@TG!= @!>M&!? >T&!>?! %? &L MGD?
&l %o*it3 >nvisible: una sociedad abiertamente secreta una consiración 4blica una instancia de subetivación anóni*a, cu$o no*bre est or doquier $ su sede en ninguna arte, la olaridad eeri*ental6revolucionaria del @artido >*aginario' &l %o*it3 >nvisible: no una or!ani#aci&n revolucionaria, sino un nivel suerior de la realidad, un territorio *eta6-ísico de secesión que adquiere la a*litud de un *undo,
el espacio de 'ue!o cu$a creación ositiva es lo 6nico que uede cu*lir la gran *igración -uera del *undo de la econo*ía' &S G= F>%%> /G& B= G<? !&=L L= !&=L>D=D
Todos los allendes adonde odría*os 1uir 1an sido eli*inados, sólo ode*os desertar al interior de la situación, recuerando nuestra no6ertenencia -unda*ental al teido bioolítico *ediante una articiación en un lano *s ínti*o, $ or ende inasignable' la co*unidad estrat3gica del %o*it3 >nvisible, donde se tra*a una in-iltración de la sociedad a todos los niveles' &sta deserción es una transfi!uraci&n. &l %o*it3 >nvisible Hel esacio concreto or donde circulan nuestros atentados, nuestros escritos, nuestros gestos, nuestras alabras, nuestros encuentros, nuestros aconteci*ientos: nuestra deserciónH trans-igura la totalidad de los co*ro*isos que 1abía*os asu*ido, de las AalienacionesC que 1abía*os soortado, en una estrate!ia de infiltraci&n. &l ?tro dea de oseernos: incluso, su osesión se invierte, ierde intensidad' !ecobra*os el acto, en una relación no6rescrita a nuestra otencia' G =%%&S? D& S&.GD? .!=D? = L= &^@&!>&%>=
La eeri*entación: práctica de la libertad, práctica de la desocuación, se oone a la conceción de un roceso de e*anciación distinto de la eistencia de los 1o*bres, devuelve a sus uitres todos los doctos proyectos de liberación' a o/osici&n, su autoria, su m#too no se istin'uen e !a e/eriencia?
Cr hasta el fin de las posibilidades que mi situación contiene. La eeri*entación revolucionaria La eeri*entación colectiva6revolucionaria La colectividad revolucionaria-e"perimental reali#a la asunción de la -initud, de la searación $ de
la eosición co*o coordenadas etticas de la eistencia' La vida de quien sabe que su aariencia $ su esencia son id3nticas entre sí, ero no id3nticas a él, $ no uede estar en el *undo sin recordar que 3l no es del *undo, no uede adatarse a una co*unidad que sería la si*le distracción que su soledad oone a la *uerte, Hbailando, recisa*ente, con la muerte, con el tie*o que lo *ataH &S &^@&!>M&T=%>'
&l lenguae, alabra $ gesto, es la casa co*4n de los que no tienen un lugar' &l vínculo de los que no ueden con-or*arse con la *entira de una ertenencia, de un suelo, de un naci*iento' La estancia en la disersión $ el eilio' La co*unicación que da fe de nuestra searación esencial' ADesde el *o*ento en que 1e*os 1ablado, debe*os atenernos lo *s osible a aquello que 1e*os dic1o, ara que las cosas no queden en el aire, las alabras or un lado, nosotros or el otro, $ el re*ordi*iento de las searaciones'C &ste teto es un acto' &l rotocolo de una eeri*entación que se abre entre desertores' 3isimu!aamente, abanona !as )i!as Ahora
/í!o'o a !a eici&n ita!iana e !a Teoría del Bloom Bmaro e C00DB
uestra 4nica reocuación es el co*unis*o' o 1a$ nada previo al co*unis*o' Los que cre$eron lo contrario, a -uer#a de erseguir la -inalidad, #o#obraron con cueros $ bienes en la acu*ulación de *edios' &l co*unis*o no es otra *anera de distribuir las rique#as, de organi#ar la roducción o de ad*inistrar la sociedad' &l co*unis*o es una disosición 3ticaE una disosición a dearse a-ectar, en contacto con otros seres, or lo que nos es co*4n' Gna disosición a compartir lo com6n. &l Aotro estadoC de Musil se le arece *uc1o *s que la G!SS de "ruc1ov' @odría decirse que el roceso de valori#ación caitalista libera a los 1o*bres de las trabas de la tradición Jde las redes de las costu*bres, de los usos -a*iliares, de los lugares $ vínculos que otorgan a cada cual su consistenciaE o, ta*bi3n, que los arranca de sus *undos ara 1acerles trabaar, deseda#ando a su ve# estos *undos ara venderlos en tro#os al or *enor' &n a*bos casos el resultado es el Nloo*, y en 3l 1a$ una ro*esa de co*unis*o' @ues con el Nloo* queda al descubierto la roia estructura ettica de la resencia 1u*ana, la ura disonibilidad ara dearse a-ectar' &sta ro*esa es todo lo que G? constante*ente retende conurar' Su *aniobra consiste, co*o resultado de la coalición entre el §culo $ el Niooder, en reducir lo com6n a lo vul!ar. De 1ec1o, G? querría convertir al Nloo* en una -or*a6de6vida estabili#ada' Todos los disositivos i*eriales artician de alg4n *odo en esta e*resa' Se trata de *antener al Nloo* en el Nloo*' De 1acer deleitable 1asta la 3rdida de cualquier contacto vital, de todo aego' Se trata de atro-iar cualquier atisbo de sensibilidad 3tica' &*lea*os este t3r*ino: A3ticaC' %on 3l, no re*iti*os nunca a un conunto de recetos -or*ulables, de reglas a observar o de códigos or establecer' &l t3r*ino A3ticaC designa en nuestra *anera de 1ablar todo lo que tiene que ver con las formas-de-vida. Éticas del -uturo o de la -ragilidad, bio3ticas o co*ercio 3tico: se nos roonen todo tio de eseculaciones, a *odo de i*otentes alternativas -rente al reino de la ura -uer#a olicial, que se auto6rocla*an A3ticasC' o tiene ning4n sentido' o eiste 3tica -or*al osible' Sólo eiste el uego que las -or*as6de6vida *antienen entre sí $ los rotocolos de eeri*entación que a artir de ellas constru$en local*ente la tra*a' &l 4blico italiano, que no udo tener entre sus *anos ni Tiqqun M ni Tiqqun N, se interrogar con ra#ón acerca del sentido del t3r*ino ATiqqunC que aarece donde G? 1ubiera eserado el no*bre de un autor' Tiqqun, ara co*en#ar, no es un autor, ni singular ni colectivo' La insistencia con la que uno 1a querido *itigar, en >talia, cada rese+a de los Premien matériau" pour une théorie de la 7eune-@ille, alegando que eran el roducto de esa esecie -olclórica -eli#*ente etinguida HAun gruo de intelectuales arisinosCH, dice bastante de los da+os que acarrea la -icción6autor: neutrali#ar cualquier verdad que tenga consecuencias para m, asignndole un roietario' Tiqqun no es un gruo, en absoluto' Tiqqun es un medio, un *edio ara constituir en3rgica*ente una posici&n. &sta osición se concreta 1o$ en una doble secesión: en ri*er lugar, secesión del roceso de elotación social, de lo que en Tiqqun M a4n se lla*aba A*undo de la *ercancía autoritariaC, $ que uede deno*inarse ta*bi3n Ai*erioCE desu3s, secesión de toda la esterilidad que se deriva de una si*le oposici&n al i*erio, incluso de la etra6arla*entaria, secesión ues de la i#quierda. &st claro que, aquí, AsecesiónC tiene *enos el sentido de un Arec1a#o rctico a co*unicarC que el de una disosición a -or*as de co*unicación tan intensas que arrancan al ene*igo, allí donde se establecen, la *a$or arte de sus -uer#as'
@or el *o*ento, sólo los estragos del ANlacZ NlocC $ la cooeración *aterial de algunas granas co*unistas eresan p6blicamente se*eante osición' I lo 1acen tal $ co*o Tiqqun aarece: anóni*a*ente' @ues lo roio de cualquier osición verdadera es el anoni*ato' %on nuestros escritos $ acciones intenta*os desla#ar el lano de -eno*enalidad olítica, el lano de lo que colectiva*ente est ad*itido co*o hecho, ues es el lugar donde uede ocurrir algo decisivo, desde donde, or ee*lo, se deter*inan las a*istades $ las ene*istades' Deci*os que Ala unidad 1u*ana ele*ental no es el cuerpo H el individuo H , sino la -or*a6de6vidaC <' /ue la cuestión olítica por e"celencia no consiste en -or*ar un cuero social a artir de una *ultitud de cueros individuales, sino en elaborar, a-inar, co*lei#ar el uego entre la *ultilicidad de -or*as6 de6vida' %ada -or*a6de6vida 1ace eistir cierta *odalidad del ser' %uando las cosas aarecen ante la "ovencita como accesorios, el trabaador las to*a como 1erra*ientas, $ el guerrero como ar*as' i que decir tiene que, en este *ovi*iento, la 7ovencita *is*a se vuelve accesorio, el trabaador 1erra*ienta $ el guerrero ar*a ura' &n cuanto al Nloo*, eeri*enta todo como nada. o -altaron discusiones en el asado acerca de si la nada es o no una *odalidad del ser' =-ir*a*os que lo olítico es un deter*inado grado de intensidad en el uego de las -or*as6de6 vida, $ que el co*unis*o consiste en la elaboración de ese uego' &laboración que se eeri*enta cada ve# que *undos sensible*ente distintos co*ien#an a co*unicarse entre sí, aun si se en-rentan' e*os có*o el i*erio es eacta*ente lo ouesto: el lugar en el que el alasta*iento de los *undos, unos *s tarde que otros, unos contra otros Hsu des*orona*iento er*anenteH, convierte el aisla*iento de cada uno de ellos en la condición de su reservación' Desde la Teora del Bloom 1asta (omment faire5, la *a$or arte de nuestros es-uer#os teóricos se dirigen a *ani-estar la evidencia de las -or*as6de6vida' Gna de las rinciales debilidades del ensa*iento revolucionario actual consiste en 1aber sido incaa# de are1ender las -or*as6de6 vida' >ncluso cierto *aris*o 1a 1ec1o de ello una cuestión de 1onor' =1ora bien, sólo colocndose en el terreno 3tico, en el terreno de la constitución de los di-erentes *undos sensibles, odr el ensa*iento revolucionario trans-or*arse en una -uer#a *aterial' &l etra+o *aras*o olítico en el que se consu*e >talia desde 1ace una d3cada roviene en su totalidad de esa incaacidad' G? se agota denunciando la to*a del oder or un nuevo tio de dictador, or un 1o*bre, Nerlusconi, cuando se trata *s bien de la apropiaci&n de lo social por una forma-de-vida% el e*resario' ada *enos ersonal que Nerlusconi $, or consiguiente, nada *s contagioso' ada *s contagioso que ese rag*atis*o desin1ibido, que esa vulgaridad bonac1ona ;, que ese autoritaris*o in-antil $ esa anestesia del sentido 1istórico' ada *s contagioso que ese cinis*o, ese oortunis*o, ese *iedo' A?ortunis*o, cinis*o, *iedoC: así caracteri#a @aolo irno la Stimmun! de las A*ultitudesC' @ero de este *odo, identi-ica *s bien la tonalidad a-ectiva de los propios ne!ristas, al *enos desde su disociación 1istórica' Ta*bi3n se+ala la ra#ón or la cual los Desobedientes son tan -antstica*ente incaaces de ooner algo, lo que sea, a Nerlusconi: debido a su si*ilar in*ersión en el continuum 3tico del empresariado, en la ad*inistración del aís o en el A*ovi*iento de los *ovi*ientosC' &n de-initiva, 1a$ algo de Nerlusconi 1asta en un %asarini' G? nos dir que sólo en el ensa*iento reaccionario se tratan se*eantes cosas polticamente% iet#sc1e, "Xnger, &vola, Du*3#il, Lasc1, Sengler, .u3non' &n e-ecto, todos estos autores, entre otros, 1an reali#ado el diagnóstico del Nloo*' Mas lo roio del ensa*iento reaccionario consiste en describir lo que es, ero a condición de o*itir la potencia que trabaa lo real' @odr ver el Nloo*, no su a*bivalencia' @odr ver su -atalidad, no el aura de otencia que lo ni*ba' @odr ver el 3 A>ntroduction [ la guerre civileC, en Tiqqun N.
4 &ste triun-o de la vulgaridad indica có*o 1a sido recibida en >talia, en la *a$oría de los casos, la edición de Premiers
matérian" pour une théorie de la 7eune-@ille Jentre gui+os indecentes $ llana co*lacencia' @or el contrario, G? no 1a tardado en 1acer la crónica de la recoilación de tetos *asteri#ados, ublicada or los arendices a e*resarios de 4erive =pprodi bao el est4ido titulo de *a comunitO terribile. &s cierto que nosotros trata*os te*as *enos accesibles al ni1ilis*o del go#o, co*o la construcción del @artido'
des*orona*iento, no lo que one al descubierto' =l -in $ al cabo, su realis*o le inclina necesaria*ente a dear escaar la realidad del Nloo*' =dverti*os que nadie uede usar el t3r*ino ANloo*C co*o signo de desrecio' G? uede 1acer des-ilar a oc1o *illones de ersonas Aor la de*ocracia $ contra el terroris*oC' G? logra catar la atención de un aís con el 4lti*o dra*a con$ugal de algunos -a*osos' @ero no
consegui*os -renar la roli-eración de arquitecturas 1ostiles en la *etróoli, que es donde transcurren nuestros días' o logra*os levantarnos contra el goteo de su-ri*iento cotidiano, el que G? nos inocula en la vida asalariada or *edio de gestos ín-i*os, de -ingidas connivencias $ de erarquías intangibles' o consegui*os cantar la ri*era estro-a de las letanías de las a*arguras que nos atraviesan' &s co*o si nos -altara la suer-icie donde todo esto odría inscribirse' %o*o si el terreno en el que udi3ra*os librar la batalla se escurriera constante*ente bao nuestros ies' G? logra aartar de un rev3s lo esencial de los reroc1es que debe*os 1acerle a las condiciones de eistencia actuales: es un roble*a AsicológicoC, AsubetivoC, AeistencialC' &s *eta-ísica' De esta -or*a, G? quiere dar a entender ante todo que este asunto no es poltico ni, or consiguiente, suscetible de una solución colectiva' =-ir*a*os, or el contrario, que todo aquello que tiene que ver con el uego de las -or*as6de6vida es suscetible de una elaboración colectiva, $ que a1í, donde ese uego se eeri*enta con su-ri*iento, reside una intensidad que lo convierte de entrada en algo olítico' Trabaa*os or la constitución de una -uer#a colectiva, de tal *odo que el enunciado A\Muerte al Nloo*]C o A\=bao la "ovencita]C baste ara usti-icar varios días de revuelta' Desu3s de todo, algunos llegan a dina*itar laboratorios orque allí se *altrata a los ani*ales o a estrellarse contra un Porld Trade %erner orque los estadounidenses son in-ieles' Bablba*os en Tiqqun M de @arado >*aginario, de terror gris, de saceri#ación de los Nloo*, de *ilitari#ación del desastre, del *undo de la *ercancía autoritaria' Bo$ se ve *eor, a la lu# de los 4lti*os eisodios de la guerra civil *undial, lo que entendía*os con todo ello' uestra osición, que todavía uede arecer *inoritaria, o delirante, o cierta*ente etra6terrestre, no tiene intención de continuar si3ndolo' Si los sociólogos co*ien#an a 1ablar del sentido de la vida, $ uno de ellos, ade*s trotsZista, incluso llega a escribir: A&l yo $ el nosotros se ven envueltos en una borrasca que odría -inal*ente 1acer volar en eda#os tanto al individuo co*o a la sociedad $ dear ca*o libre a la NarbarieC J1a$ que recisar que se trata de un trotsZista que pretende haber ledo a Ben'amin?, es orque se*eante osición se disone a entrar en uego, 1istórica*ente' ?ccidente debería te*er la insurrección que crece en su seno, al igual que la vo# de Ya-Za aareció ara resquebraar la novela clsica' ALa sueración, se 1a dic1o, rocede sie*re de otra arteC' La salida del Nloo* no ser social' La sociedad $a no uede ser resuuesta' Todo debe ser lanteado' !elanteado' os encontra*os al co*ien#o de un roceso de reco*osición revolucionaria que durar qui#s una generación, ero que ser *s rico que todo aquello que lo 1a recedido, orque lo que se e"i!e a1ora es a-rontar la totalidad de los roble*as deados en susenso durante *uc1o tie*o' = este resecto, no ode*os sino reco*en dar al 4blico italiano la lectura de cieno *lamamiento que ronto, seg4n tene*os entendido, se dar a conocer'