Egipto Babilonia y Egipto eran estados esclavistas. Se empleaba el trabajo de los esclavos para construir instalaciones de riego, pirámides, templos y palacios. Hacia finales del milenio IV y comienzos del III a de n. e., el desarrollo de las relaciones esclavistas llega en estos países a su fase superior. El germinar del pensamiento filosófico en babilonia y Egipto se vincula, de un lado, con los primeros pasos de la ciencia – astronomía, cosmología, matemáticas, etc. – y, de otro, con la mitología. La filosofía no se había constituido aun como forma particular de la conciencia social. El desarrollo económico necesitaba nuevos conocimientos y su empleo práctico. “La necesidad
de calcular los periodos de las alternativas del Nilo – señala Marx – dio origen a la astronomía egipcia y, con ella, al predominio de la casta sacerdotal como árbitro de la agricultura”. La
economía precisaba un calendario exacto basado en la observación de la Luna, el Sol y las estrellas. Todo esto fue acrecentando los conocimientos científicos. Los matemáticos babilonios dieron principio al álgebra y la geometría, averiguaron un medio aproximado de extracción de raíces cuadradas y de solución de las ecuaciones de segundo grado. Los babilonios inventaron el “sistema de posición” sexagesimal de cálculo escrito, del cual parte el moderno computo del
tiempo (1 hora = 60 minutos y 1 minuto = 60 segundos). babilonios , como la de los demás pueblos del oriente antiguo, es La cosmovisión de los babilonios, inseparable de la mitología, primer intento de comprendes los fenómenos de la naturaleza. En ello desempeñó gran papel la clase sacerdotal, que propagaba las creencias de los dioses (teogonía) se convierten en explicación religiosa del origen del mundo (cosmología) los astros eran no sólo un medio de cálculo del tiempo y de predicción astronómico, sino también fuerzas creadoras del mundo y con influjo permanente sobre él. El dios – Luna era para los babilonios el principal; las estrellas, deidades que alumbraban sólo de noche; el Sol, la fuerza que extinguía el resplandor de las luces celestiales y, por lo tanto, fuente de las tinieblas, fuerza del mundo subterráneo, y portador de la muerte. La Luna moría, pero su resurrección resurrección la tornaba símbolo de una vida eterna, inextinguible. En el mito explicativo del Universo, a pugna entre el bien y el mal se representaría con el paso del tiempo como la victoria de la luz sobre las tinieblas. El dios de
la luz es exaltado como poderosa fuerza moral gobernadora del mundo. La cosmovisión astral dio pie al desarrollo de la astrología, creencia en la aptitud de los astros para influir directamente sobre la sociedad y el hombre. Al desarrollarse la esclavitud y cobrar asperezas las relaciones sociales aparecen en babilonia obras que, sobre romper con la mitología, contienen gérmenes de un pensamiento ateo. El escrito más notable de este género es el DIALOGO DEL SEÑOR Y EL ESCLAVO “sobre el sentido de la vida”, en el cual se critican los dogmas religiosos y se emite que es necio cumplir
las prescripciones de la religión, hacer sacrificios a los dioses y tener esperanza en una recompensa en el mundo de ultratumbas. El surgimiento de la cultura egipcia – una de las más antiguas del mudo – data de finales del IV milenio a. de n. e., esto es, del periodo de formación del régimen esclavista. La economía egipcia se basaba en la agricultura de regadío y la ganadería, por lo que alcanzaron considerable desarrollo el arte de la construcción, la elaboración de la piedra, la alfarería, así como la astronomía, la aritmética y la geometría, ciencias al servicio directo de una economía en desarrollo. La instauración de calendario solar tenía un importante alcance práctico. El historiador griego Herodoto testimonia que fueron los egipcios los que determinaron la duración del año en 365 ¼ días. Conquistas supremas de la geometría egipcia fueron de cálculo de la razón de la longitud de una circunferencia al diámetro, que se representa por la letra griega π, la
formula exacta para el cálculo del volumen de la pirámide truncada de base cuadrada y del área de los triángulos, rectángulos, trapecios y círculos. En las escuelas egipcias se empleaba un método particular de cálculo que presuponía la existencia de ciertos conocimientos teóricos. En la evolución del pensamiento egipcio se puede rastrear el camino que conduce de la religión a la interpretación filosófica de los mitos. Con el transcurso del tiempo se deposita en ellos un sentido ya no religioso, sino filosófico, que al principio no tenía y que obedece tanto a un nivel más elevado de los conocimientos científicos como al endurecimiento de la lucha entre los esclavos y los esclavistas, entre las capas acomodadas de los ciudadanos libres, que hacia el II milenio a. de n. e. se segregan de la masa general de la población, y la antigua nobleza esclavista. Aparecen escritos que ponen en duda las creencias religiosas en “ una vida eterna
ultramundana” y que, frente a las concepciones de la vieja nobleza esclavista, con su desdén por el trabajo y prédica de una existencia en el más allá, hablan de la posibilidad de acomodar la vida en este mundo. Así en “El cantar del arpista , obra clásica de la literatura antigua egipcia, ”
se afirma que no ha habido ni un solo muerto que retornara para hablar del reino de ultratumba. La razón y los sentidos tampoco pueden decir nada de él. Por lo tanto no hay fundamento para creer en la existencia de otro mundo que no sea el terrenal. El inmenso alcance para la historia del pensamiento humano tiene este libro, consiste en que por primera vez suena en él con gran rectitud y fuerza lógica el aserto de que, en vez de cifrar esperanzas en una vida de ultratumba, hay que arreglar “nuestros asuntos en la tierra”.
En otro escrito posterior se critica la doctrina religiosa de la inmortalidad del alma. Después de la muerte – dice – “el hombre desaparece y su cuerpo se transforma en barro”. El que desee inmortalizar su nombre no deberá confiar en el más allá, sino en sus obras. En el papiro “Dialogo de un decepcionado con su alma se pone en duda la justicia del régimen vigente, ”
en el que prima la “violencia”, “expolian” por doquier, “son crueles los corazones y el hombre arrebata las cosas a su propio hermano”
Los agudos conflictos sociales que desembocan a menudo en resueltas contra los faraones y la nobleza esclavista dieron lugar a las primeras máximas políticas compendiadoras de las ideas de las clases dominantes. Una de ellas dicen sin recato: “Doblega a la muchedumbre. Aniquila su ímpetu”. Estas máximas, alentadas por un odio profundo a las masas populares, presentan el
régimen político de la esclavitud como un sistema eterno instaurado por Dios y exento de toda modificación. Este examen sumario de la historia del nacimiento del pensar filosófico en Babilonia y Egipto muestra la existencia de los primeros brotes del pensamiento filosófico y social en los pueblos del Oriente antiguo. Los escritos egipcios plantean ya, aun en forma ingenua, el problema del fundamento material de los fenómenos naturales. En ellos se mencionan el agua fría como origen de todos los seres vivos, y el aire que llena el espacio y “se halla en todas las cosas”. Sin embargo, el pensamiento filosófico en Babilonia y Egipto el nivel que caracteriza a países esclavistas más desarrollados. Con todo, las incipientes concepciones
espontáneamente
materialista y ateas de egipcios y babilonios ejercieron cierta influencia sobre el desarrollo de la ciencia y del pensamiento materialista en el mundo antiguo. Como afirma Plutarco: el filósofo griego, Tales aprendió de los egipcios la idea del agua como causa primordial y principio de todas las cosas.
BABILONIA En el año 2882 AC aparece en el sur de Mesopotamia la ciudad de Babilonia como una instalación fortificada. La ciudad propiamente dicha ocupa una extensión aproximada a un polígono de 18 Km. de lado. Los babilonios se dedicaban a la agricultura y al comercio, lucharon por largo tiempo contra los asirios y los dominaron, pero los asirios en el 669 a.C. dirigidos por el rey Asurbanipal, destruyeron Babilonia. Los estudios de los restos de la antigua Babilonia han hecho suponer que esta ciudad poseyó numerosos edificios de gran altura construidos con ladrillos. Dichos edificios tenían, probablemente, carácter religioso y su gran altura permitía a los sacerdotes intentar ponerse en contacto directo con las divinidades. Las casas, de tres o cuatro plantas, se encuentran en calles rectas, dispuestas paralelas o perpendiculares al río. Cada una de las calles se conduce al Éufrates, desembocan en una puerta de la muralla de sus orillas. Podemos distinguir tres grandes períodos referidos a las distintas denominaciones que llevaron a la cúspide del Imperio Babilónico: el período sumerio-acadio (hacia 3000-2340 a.C.), el Primer Imperio Babilónico, que alcanzó su plenitud en el reinado de Hammurabi (1728-1686 a. C.), y el tercer período, bajo dominación asiría (1340-612 a. C.).
Código
de
Hammurabi
Código de Hammurabi, recopilación de leyes y edictos auspiciada por Hammurabi, rey de Babilonia, que constituye el primer código conocido de la Historia. Una copia del mismo, esculpida en un bloque de piedra negra de dos metros de alto, fue encontrada por un equipo de
arqueólogos franceses en Susa, Irak, en el invierno de 1901-1902. El bloque, roto en tres pedazos, ha sido restaurado y se encuentra hoy en el Museo del Louvre de París. El origen divino del Derecho escrito se representa en la piedra por un bajo relieve en el que el rey aparece recibiendo el código del dios Sol, Shamash (o Samas), divinidad asociada en la tradición local con la idea de justicia. El Código está compuesto por columnas horizontales en escritura cuneiforme: 16 columnas en el anverso y 28 en el reverso. El texto comienza con un prólogo que explica los cultos religiosos de Babilonia y Asiría. Más que un código en el estricto sentido, parece que los 28 párrafos de que consta el Código de Hammurabi componen una serie de enmiendas al Derecho común de Babilonia. Comienza con una guía de procedimientos legales, imposición de penas por acusaciones injustificadas, falso testimonio y errores judiciales. A continuación se recogen disposiciones sobre el derecho de propiedad, préstamos, depósitos, deudas, propiedad doméstica y derechos familiares. Los artículos sobre daños personales indican que ya en aquellos tiempos existían penas por práctica médica incorrecta, así como por daños causados por negligencia en actividades diversas. Así mismo, en el código se fijan los precios de diferentes tipos de servicios en no pocas ramas del comercio. El Código de Hammurabi no contiene normas jurídicas acerca de temas religiosos. Las bases del Derecho penal derivan del principio, común entre los pueblos semitas, del "ojo por ojo". La protección del Código se ofrece a todas las clases sociales babilónicas: el Derecho protege a débiles y menesterosos, mujeres, niños o esclavos contra la injusticia de ricos y poderosos. Sorprende la consideración que recibe el individuo en el Código, teniendo en cuenta la época en que fue promulgado, y constituye un documento excepcional para conocer cómo era la justicia en tiempos de Hammurabi. Finaliza con un epílogo que glorifica la ingente labor realizada por Hammurabi para conseguir la paz, con una explícita referencia a que el monarca fue llamado por los dioses para que "la causa de la justicia prevalezca en el mundo, para destruir al malvado y al perverso". Describe además las leyes como medio para que "la tierra disfrute de un gobierno estable y buenas reglas", que se dicen escritas en un pilar para que "el fuerte no pueda oprimir al débil, y la justicia acompañe a la viuda y al huérfano". Hammurabi aconseja al oprimido con estas enérgicas y sonoras palabras : "que el oprimido que tenga una causa verdadera venga a presencia de mi estatua, a mí como rey de la justicia, y
que lea en voz alta la inscripción y escuche mis preciosas palabras para que le lleven claridad y entendimiento a su causa, para que su corazón encuentre alivio".
Ejemplo del código de Hammurabi:
"Si un hombre golpea a otro libre en una disputa y le causa una herida, aquel hombre jurará "Aseguro que no lo golpeé adrede" y pagará el médico"
"Si un hombre ha ejercido el bandidaje y se le encuentra, será condenado a muerte."
"Si un hombre ha acusado a otro hombre y le ha atribuido un asesinato y éste no ha sido probado en su contra, su acusador será condenado a muerte."
"Si un hombre ha reventado el ojo de un hombre libre, se le reventará un ojo."
"Si revienta el ojo de un muskenun, pagará una mina de plata."
"Si ha reventado el ojo de un esclavo de un hombre libre, pagará la mitad de su
precio
(del
precio
del
esclavo)".
Sería durante el reinado de Nabucodonosor cuando Babilonia se convirtió en centro del mundo, simbolizada por la mítica Torre de Babel, hasta la conquista Persa, con la que se inició el Período de decadencia.
EGIPTO La cultura del antiguo Egipto se conforma a partir de la forma de vida, costumbres y tradiciones existentes en la sociedad egipcia de la antigüedad. Se inició en el neolítico y evoluciono a lo largo de 3.000 años, hasta la época romana, cuando prácticamente desapareció al adoptar del imperio romano, y sobre todo las costumbres cristianas. La historia del antiguo Egipto como estado unificado comienza en el neolítico, hacia el 3150 a.c, y se divide en tres imperios con periodos intermedios de dominación por gobernantes extranjeros y conflictos internos.
El imperio antiguo (2700- 2200 a. c.) se caracterizó por el florecimiento de las artes y la construcción de inmensas pirámides. El imperio medio (2050- 1800 a. c.) tras una etapa de descentralización, Egipto conoció un periodo de esplendor en su economía. El imperio nuevo (1567-1085 a. c.) la monarquía egipcia alcanzo su edad dorada conquistando a los pueblos vecinos y expandiendo sus dominios bajo la dirección de los faraones de la dinastía XVIII. La decadencia del imperio faraónico comenzó hacia los 1075 a.c, a raíz de diversas incursiones de ejércitos de otros pueblos. A pesar de esto la cultura egipcia mantuvo sus características fundamentales hasta la dominación romana, influyendo en todo el mediterráneo occidental. La civilización egipcia Se desarrolló a lo largo del Río Nilo en el Este de África a partir del tercer milenio antes de Cristo. Disfrutó de un gobierno teocrático: se creía que el Faraón era el hijo del Dios más importante. La gran importancia de la religión y el respeto a la muerte, existentes entre los Egipcios, originaron un arte de cánones muy estrictos que se aprecia esencialmente en los templos y las tumbas. Los seres humanos que ocuparon el valle del Nilo y se instalaron en él para formar posteriormente el pueblo egipcio, se encontraban agrupados en clanes o NOMOS. Estos clanes se establecieron a lo largo del valle, sobre las dos laderas del río. Cada uno tenía su propio gobierno de tipo monárquico y patria lineal, su religión era totémica. Estos clanes mantuvieron estrechas relaciones entre sí, obligados para mantener el territorio a salvo de los desbordamientos del río, pues esta defensa sólo podía ser realizada con el apoyo de todas las comunidades, no tardaron mucho tiempo para que se formara un estado unificando a todos los Nomos, pero antes los clanes se agruparon en dos grandes reinos formando así lo que hoy se denomina el alto y bajo Egipto. En ocasiones, los grandes textos religiosos insinúan una teoría política imbricada en los mitos de fundación, en el origen de los dioses cosmogónicos y las plegarias del culto, habida cuenta de que el sistema terrestre de gobierno pretendió constituirse como una emanación o proyección de un sistema extraterreno de jerarquías divinas. El principal atributo de la realeza Faraónica es el Schent o corona de todo Egipto, formado por una combinación de los emblemas del alto y bajo Egipto, como consecuencia de la unión
política, la religión en Egipto se unifica, y de la misma manera en que el jefe del clan dominante se impone a todo el reino, el dios totémico de ese clan del primer Dios para todos los demás clanes. El alto Egipto reconoce este carácter al Nomo del Halcón (Horus) y el bajo Egipto al clan de la Serpiente (Ureus). Se atribuye a Nermel (Narmel) la unificación de los Nomos. Narmel También es el fundador de la primera Dinastía, ostentando ya el Título de Señor de las dos tierras (alto y bajo Egipto), un sucesor de Narmel (mina o menes) funda la primera ciudad llamada Menfis, pero en realidad este nombre es griego, pues su nombre real es HERKAPTAH, QUE SIGNIFICA: HER-
CIUDAD
KA-
QUE
CENTRO
TIENE
RELACIÓN
CON
PTAH- LA DIVINIDAD DE LA CIUDAD EL FARAÓN En Egipto, el faraón era simultáneamente el hijo o el mismo dios Ra, antiguo dios de las primeros nómadas, y Hathor, que se inició como un dios vacuno y progresivamente concentró poderes celestiales y terrestres. Los clanes totémicos que formaron los Nomos egipcios estuvieron organizados bajo el sistema de propiedad común, sin reconocer otra propiedad privada que la de los objetos de uso personal. Tal carácter se mantuvo casi sin solución de continuidad bajo las primeras dinastías. Cuando se produjo la unificación total de los clanes y la concentración del poder político en el FARAÓN, la propiedad de las cosas pasó a pertenecer a este último, que tuvo en sus manos la economía de toda
la
nación.
El
trabajo
individual
de
cada
persona
le
pertenecía.
La división del trabajo numeroso, bajo una organización económica centralizada, dio origen a la formación de clases sociales. Al lado del Faraón se situaban los visires o ministros, encargados de la administración central, quienes
actuaban
siempre
en
nombre
del
Faraón
o
monarca
respectivo.
Se da un hecho clave cuando los sacerdotes atestiguan que Soser (Faraón de las Primeras Dinastías) nació procedente de Rá, entonces el estado se vuelve en una unidad teocrática algunos creen que en Egipto se formó un estado cuasi feudal, pues los campesinos eran esclavizados también en las tierras del clero llamándoles esclavos de Dios. Dado este carácter teocrático, se identificaba al Faraón con la divinidad, los sacerdotes eran en realidad funcionarios públicos, cuidaban los tesoros y los archivos oficiales.
A partir de la dinastía XVIII comienza la expansión del estado para llegar a convertirse en un imperio, donde comienza a ser importante el ejército que en su mayoría estaba formado por extranjeros, negros y libios. Este sistema económico-político fue transformándose de manera gradual. Los monarcas de las cuadres tuvieron a su cargo la propiedad privada de la tierra dentro de su jurisdicción y los sacerdotes se convirtieron en depositarios de tierras y de los tesoros depositados en sus templos. Así se fue debilitando el poder y prestigio del monarca, a favor del prestigio de mercaderes e industriales, favorecidos por el aumento de la población. Hacia el año 2160 A.C. se inició una campaña de unificación que logro su objetivo en el año 2000 A.C. con el triunfo de los príncipes de Tebas, fundadores de la dinastía XII y reorganizando todo Egipto bajo un sistema diseñado para que el Faraón dictara la ley, y a la vez esté sometido a ella, y para evitar posteriores desordenes, y protegerse de peligros externos, se creó un ejército numeroso.
RELIGION La religión egipcia, plasmada en la mitología, es un conjunto de creencias que impregnaban toda la vida egipcia, desde la época predinástica hasta la llegada del Cristianismo y del Islam en las etapas greco-romanas y árabe. Eran dirigidos por sacerdotes, y el uso de la magia y los hechizos son dudosos. El templo era un lugar sagrado en donde solamente se admitía a los sacerdotes y sacerdotisas, aunque en las celebraciones importantes el pueblo era admitido en el patio. La existencia de momias y pirámides fuera de Egipto, indica que las creencias y los valores de las culturas prehistóricas se transmitieron de una u otra forma por el camino de la seda. La naturaleza religiosa de la civilización egipcia influenció su contribución a las artes. Muchas de las grandes obras del Egipto antiguo representan dioses, diosas, y faraones, considerados divinos. El arte está caracterizado por la idea del orden y la simetría. Aunque el análisis del cabello de momias del Imperio Medio ha revelado evidencias de una dieta estable, las momias de circa 3200 a. C. muestran señales de anemia y desórdenes hemolíticos, síntomas del envenenamiento por metales pesados. Los compuestos de cobre, plomo, mercurio, y arsénico que fueron utilizados en pigmentos, tintes y maquillaje de la época pudieron haber causado el envenenamiento, especialmente entre la clase acomodada.
LA CULTURA LIGADA AL CONCEPTO DE MUERTE El culto a los muertos define en gran medida a la gran arquitectura desarrollada en Egipto. Su principal exponente lo constituye la pirámide de Keops, una de las tres grandes pirámides de Gizeh, considerada como una de las 7 maravillas del mundo antiguo y que atestigua, desde sus casi cinco milenios de existencia, el inmenso poder de los faraones y la ingente capacidad de una sociedad que contó con un gran nivel de desarrollo tecnológico y social. La principal característica de la arquitectura egipcia fue la monumentalidad de sus construcciones, dedicadas a propiciar el tránsito del espíritu de los difuntos hacia el más allá. En Egipto se hace difícil plantear cómo se entendía la vida comunitaria, cuáles eran las necesidades de la misma y cuáles las soluciones aportadas; más que hablar de pueblos o de ciudades de los vivos, es pertinente hacerlo de las ciudades de los muertos o, en todo caso, de las casas de los dioses. La arquitectura en Egipto halla su máxima expresión con las enormes pirámides, construidas como mausoleos de los faraones, y con los templos funerarios, en los que se purificaba al rey difunto y que constituían el núcleo de la religión egipcia. El extraordinario desarrollo de las técnicas arquitectónicas, así como el enorme poder de organización necesaria para su construcción, sitúan a las grandes realizaciones egipcias entre los principales hitos de la historia del arte universal. Arquitectura religiosa Junto a las pirámides, los grandes templos funerarios son las realizaciones más destacadas de la arquitectura egipcia. Estas imponentes edificaciones han convertido en célebres, lugares como Luxor, Karnak o Abú Simbel. Las tumbas no eran más que el estadio final del rito funerario egipcio. Antes de ser depositado en su morada eterna, el cuerpo del rey tenía que ser sometido a un complejo ritual destinado a convertir un hombre mortal en un dios inmortal. La tipología de los templos funerarios no sé estableció propiamente hasta la IV dinastía en las construcciones de Gizeh, si bien ya se levantaron en los complejos de las pirámides de Meidum y Dahsur. De la IV dinastía, el mejor conservado es el templo del valle de Kefrén, descubierto en 1853 por Mariette. La planta del recinto es aproximadamente cuadrada, con dos entradas, correspondientes al Alto y Bajo Egipto, en el lado oriental. El templo egipcio semeja un verdadero microcosmos. Es la densificación de la naturaleza terrestre y de la celeste. Sus columnas en forma de palmeras se alzan hacia la bóveda celeste que es la cubierta. En ésta se representa el
cielo azul poblado de constelaciones y por los dioses zodiacales y estelares que navegan por el universo. El Imperio Antiguo. La definición de lo que sería la estatuaria egipcia no se produjo propiamente hasta la III Dinastía. El reinado de Zoser no solo marca un hito arquitectónico, supone, más en el rostro que él aún esquemático tratamiento del cuerpo, una resolución formal que se aleja de las blandas formas tinitas. Este tipo alcanza en el Imperio Antiguo su expresión más apurada en la estatua entronizada de Kefrén. En el conjunto funerario de Mikerinos encontramos una de las más bellas. Esta, muestra al rey en posición avanzada con respecto al plano-soporte, acompañado por la diosa Hathor y una figura femenina que representa el domo denominado del Perro Negro. Para muchos, estas figuras constituyen la primera aparición de la belleza femenina. El Imperio Medio surge tras ese período de confusión, y con él se intenta recuperar el modo de hacer de las dinastías que pueden considerarse clásicas. La escultura de la época de Kefrén y de Mikerinos se convirtió en modelo de un academicismo que perduraría a lo largo de esta etapa. Los egipcios poseyeron la noción primigenia del juicio final, codificada siglos después por el cristianismo. Osiris aparece con una balanza en las manos frente al alma de un difunto. Se han encontrado tumbas sin nombre porque la identidad fue borrada por los desmerecimientos acumulados en su fase terrestre, interpretando el juicio final de Osiris.
ANEXOS
Nabucodonosor
MAPA DE EGIPTO
POBLACION DE EGIPTO
FARAON
PIRAMIDE
BIBLIOGRAFIA: http://www.filosofia.org/aut/004/hf102.pdf http://html.rincondelvago.com/pensamiento-social-y-politico-de-oriente.html