Martin-Barbero, Jesus - Procesos de comunicación y matrices de cultura

PROCESOS PROCE SOS DE COMUNICA COMUNICACIÓN CIÓN Y MATRICES DE CULTURA ITINERARIO PARA SALIR DE LA RAZÓN DUALISTA Jesús Martín-Barbero Martín-Barbero

FELAFACS GG Ediciones G. Gili, S.A. de C.V. México, Naucalpan 53050 Valle de Bravo, 21. Tel. 560 60 11, 08029 Barcelona Rosellón, 87-89 Tel. 322 81 61, 28006 Madrid Alcántara, 21. Tel. 401 17 02 1064 Buenos Aires Cochabamba 154-158. Tel. 361 99 98, Bogotá Diagonal 45 Nº 16 B-11. Tel. 245 67 60, Mackenna, 462, Tel. 222 45 67. Santiago de Chile Vicuña Mackenna,

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(Con el auspicio de WACC)

© Ediciones G. Gili, S.A. de C.V. Esta obra se edita según contrato de coedición entre Ediciones G, Gili, S.A. de C.V., de México y la Federación Latinoamericana de Facultades de Comunicación Social.  Ninguna parte de esta publicación, publicación, incluido el diseño de la cubierta, puede reproducir reproducirse, se, almacenar almacenarse se o transmitirse transmitirse en en forma alguna, alguna, ni tampoco por medio alguno, sea éste eléctrico, químico, mecánico, óptico óptico de grabación grabación o de fotocopia, fotocopia, sin la previa previa autorización autorización escrita escrita por parte de la l a Editor Ed itorial. ial. Impreso en México - Printed in México I.S.B.N. 968-887-118-4 Impreso en: Impresora Azteca, S. de R.L. Av. Poniente 140, No. 681-1 Col. Industrial Vallejo La edición consta de 2,000 ejemplares más sobrantes para reposición.

ÍNDICE Introducción I. Lugar de parti da: El debate l atinoamericano en el inicio de los años setenta setenta 1. Implicaciones de la teoría en el proceso de dominación 2. Claves Claves teóricas teóricas en el proces proceso o de apropiac apropiación ión 3. Producción Producción teórica teórica y producció producción n de sentido sentido II. De la transparencia del mensaje a la opacidad de los discur discursos sos massmediación ción 1. Presupuestos a una teoría del discurso de la massmedia 2. Prensa: la forma-mito del discurso de la información 3. Televisión: la forma-mito del discurso del espectáculo 4. Cine: Cine: las parad paradojas ojas del del ver/lee ver/leer  r  III. De lo popular folklorizado al espesor masivo de lo urbano 1. Retos a la investigación de comunicación en América Latina 2. Prácticas Prácticas de la comunic comunicación ación en la cultura cultura popular  popular  3. Memoria Memoria e imaginario imaginario en en el relato relato popular  popular  transnac nacion ionale aless 4. Comunicación, puebl o y cultura en el tiempo de las trans 5. Procesos de comunicación comunicación popular y enseñanza de la comun comunicació icación n IV. De la comunicación como asunto de medios a la cultura como espacio de identidades 1. Pueblo y masa en la cultura: de los debates y los combates 2. Nuevas tecnologías, tecnologías, resistencia resistencia e identidad identidad 3. Innovación Innovación tecnológica tecnológica y transformació transformación n cultural cultural 4. Televisi Televisión, ón, cultura cultura y región región V. La cultura como mediación: comunicación, política y educación Procedencia de los textos

"Hay momentos en la vida en los que la cuestión de saber si se puede pensar distinto de como se piensa y percibir distinto de como se ve es indispensable para seguir reflexionando. Ironía de los esfuerzos que hacemos para cambiar nuestro modo de ver: creíamos alejarnos y nos encontramos en la vertical de nosotros mismos. El viaje rejuveneció las cosas y envejeció la relación con uno mismo."

M. Foucault

Introducción Hacer un libro a partir de textos escritos a lo largo de diez años, con el fin de re-trazar una trayectoria de investigación y reflexión en el campo de la comunicación/cultura: así me fue formulada la amistosa solicitud que se halla en el origen de este libro y ese es el objetivo objeti vo de estas páginas. páginas . Pero antes de hablar  de este libro debo decir una palabra sobre los textos de que está hecho, de lo cargados que están algunos algunos puestos puestos que a través través de ellos, ellos, desde desde ellos, ellos, he mante mantenid nido o comuni comunicac cación ión con gentes gentes bien distintas distintas y distantes de nuestro nuest ro largo "s ub"-continent ub"-co ntinent e. Extraño Extra ño campo éste de de la comunicac comunicación ión en América Latina, en el que los problemas tienen que ver con sofisticadas tecnologías pero en el que el flujo de las informaciones sobre su estudio sigue pasando, tanto o más que por los libros y las revistas,  por la la "cultura "cultura oral" oral" de de los encuentro encuentros, s, de los seminario seminarioss y por esa otra, otra, también también oral a su manera, manera, que es la de las canas. Debo referirme pues a los textos textos porque agruparlos, ponerlos ponerlos uno tras de otro, es es en cierta manera manera ponerlos en  serie robándol robándoles es algo de su propia vida. vida. Sé de no pocos pocos que, que, aunque aunque  publicados  publicados en revistas revistas y libros libros colectivos, colectivos, le han llegado llegado a la mayoría mayoría de la gente gente multicop multicopiado iadoss a mime mimeóg ógra rafo fo o fotoco fotocopiad piados, os, con las señas señas de una lectur lecturaa anteri anterior or en sus márg márgen enes es y en los subraya subrayados. dos. Y en alguna forma forma ese proceso de comunicación "vivido" "vivido" por los textos debería poder  incorporarse, explicitarse ahora. ahora. Me temo sin embargo embargo que esa explicitación explicitación exigiría exigiría otro libro que deberé escribir escribir algún día: día: un libro sobre las lecturas. Dada la imposibilidad de hacer a un tiempo los "dos" libros que me hubiera gustado hacer, hago al menos justicia confesando que en más de una ocasión la distancia de un texto a otro pasó secreta pero decisivamente por aquellas lecturas que me ayudaron a descubrir lo que en la distancia había de trayecto: ése del cual rastreará las trazas este libro. El lugar de partida se halla en una reflexión elaborada entre 1975 y 1977 –publicada a comienzos de 1978- sobre los logros e impases de la investigación latinoamericana en comunicación de masas. De esa reflexión se recogen aquí dos cuestiones: contra qué se luchaba y de qué herramientas se disponía. disponía. Se trata de la lucha que por esos años en Latinoamérica libra n las ciencias so cial es  –a la s que qu e reci re cién én se in corp co rpor or aba ab a el "c ampo am po"" de la comunicación- contra la fascinación cientificista cientificista de un funcionalismo funcionalismo omnipresente pero también contra la inercia de una dogmática dogmática y una escolástica marxistas. Lo que de esa lucha es aún hoy rescatable es que se apunta ya, aunque borrosamente, al lugar  desde donde el positivismo hegemoniza: la separación, el distanciamiento entre el contenido de lo que vivimos y la forma legitimada legitimada de lo conocible, conocible, y la operación operación de seducción que aún sobre sus más encarni e ncarnizados zados adversarios advers arios aquél ejerce. ejerce. En cuanto cuanto a las herram herramientas ientas teóricas teóricas de ese ese momento momento –  materialismo histórico y semiología estructuralista- se trata de ubicarlas tanto en su capacidad de  producción –lo que una concepción totalizante del proceso social y un análisis de la dimensión significante significante de las prácticas hacen pensable- como de reproducción: la inercia que conduce a reducir la trama del sentido a “superestructura” o a suplantar el análisis por una jerga semiótica convirtiendo las herramientas herramientas en “objetos” “objetos” de fe o de fascinada complacencia. complace ncia. El tono bel igerante de esa reflexión habla –más allá de los acentos personales del que escribe- de la manera en que el estudio de de la comunicación comunicación en esos esos años asume el discurso discurso de la denuncia y se articula a él como a su "forma" de decir la toma toma de posición posición:: si la comuni comunicaci cación ón es escena escenario rio privileg privilegiado iado de la dominación, su abordaje como campo de estudio impli ca plantearse de de qué lado se está. El lado negativo estuvo en que la asunción de la denuncia condujo a una excesiva generalización de los  problemas –que tornaba difícil el reconocimiento de la peculiaridad peculiarida d de las situacionessituaci ones- y a una sensibilizaci sensibi lización ón apocalíptica apocalíptic a que unidimensionalizó el el sentido de las prácticas. Pero quizás fue ese el costo que hubo de pagarse por empezar a hacer pensable, pensable, desbrozable desbrozable al menos, menos, la trama de dominio que sostiene y carga en estos países el campo de la comunicación. El  primer desplazamiento —de desplazamiento  —de la transparencia transparencia del mensaje a la opacidad de los discursos— se sitúa aún dentro del mismo recorte de campo que realiza la propuesta de partida: el objeto de estu estudi dio o siguen siguen siendo siendo los medios medios,, es desd desdee ello elloss que que se orga organi niza za y es pensada la comunic comunicació ación. n. Lo que empiez empiezaa a cambiar cambiar es el horizonte de problemas en que los medios aparec aparecen en al romper romperse se con la inerci inerciaa teóric teóricaa del del model modelo o acepta aceptado do por por el análi análisis sis crític crítico o e intr introduc oducir ir articulaciones nuevas. Ello exige que antes de pasar al anál análisi isiss hagam hagamos os una una

reflexión reflexió n sobre los presupuestos. presupuestos . Allí apunta el texto introductorio buscando buscando reubicar la propuesta que viene de la teoría teoría del discurso discurso al interior interior del debate debate filosófico filosófico en el que la búsqueda búsqueda de la interdisciplinariedad deja de ser una estratagema puramente técnica –cómo hacer converger las varias disciplinas- para pasar a plantearnos la cuestión de fondo: cómo abordar la cuestión del sentido sin que el abordaje lingüístico la positivice, esto es, la neutralice, y sin que su articulación a las cuestiones cuestiones del poder y del deseo la carguen en tal modo que la fatalicen. fatalicen. Esa reubicac reubicación ión  permitirá  permitir á romper con una concepción concepció n de ideolog ide ología ía demas iado iad o deudora deud ora de aquella aque lla idea de mensaje según la cual la forma transparenta el contenido, contenido, con lo que analizar ideológic ideológicamen amente te el discur discurso so de un medio medio se reducí reducíaa a constatar constatar la manipula manipulación ción reconstr reconstruye uyendo ndo la fórmula. fórmula. Ahora la cuestión ideológica se incorpora al análisis de la trama discursiva del poder que poder  que opera en las complicid complicidades ades del deseo controlando controlando,, esto es, fijando límites, ritualizando dispositivos, dispositivos, excluyendo zonas de lo decible. De los tres tres textos textos analí analític ticos os que que se inclu incluy yen, los dos prim primero eross inve investi stiga gan n el proc proceso eso de constitución de la forma que la sociedad mercantil "imprime" al discurso dominante: la  forma forma mito en el discurs discurso o de prensa prensa y la  forma-rito en el de televis televisión. ión. La construcción construcción de su forma forma cubre cubre en la prensa un largo recorrido recorrido histórico histórico que, arrancando de la información información requerida ya desde el siglo XVII por los flujos del mercado, halla su "razón" en la doctrina liberal del s.XIX sobre sobre los derechos derechos de la opinión opinión pública pública y su modelo modelo actual en la positivista positivista búsqueda búsqueda de la objetividad, búsqueda convertida en obsesión y escisión —entre lo serio y lo sensacional— con las que el mito nos asegura el orden del mund mundo o cada día. Otros son los caminos caminos por los que la televisión llega a su forma, forma, y a los que nos da acceso básico básico la antropología antropología.. Puesto que que es de representación que allí se trata y por tanto tanto de máscaras, máscaras, de imágenes imágenes y magia. El medio que nos instala "definitivamente" en la actualidad, que "acercándolo" todo lo contemporaniza, saca su fuerza sin embargo de la magia del ver y del tiempo del ciclo, ciclo, y la repetición repetición.. Es haciéndo haciéndose se rito como como la televis televisión ión enchuf enchufaa la vida a la escena escena donde donde transcurre transcurre el espectácu espectáculo: lo: esa danza del objeto que es la publicidad, de cuya rentabilidad y eficacia la televisión vive. El tercer texto analítico aborda el cine en un punto crucial: la oposición entre lo que ahí se da a ver y ver  y lo que el análisis permite leer . Apoyado en un concepto concepto de relato relato que conecta la ficción ficción con la historia, la lectura del film Chinatown  permitirá sacar a flote las articulaciones de la topografía narrativa con una topología política que se deja leer en el juego de trayectos que atraviesa el ver  horadando su evidencia aunque sin suprimir el placer. Segundo desplazamiento: de lo popular folklorizado al espesor masivo de lo urbano. urbano. La verdadera verdadera ruptura empieza empieza aquí. Ahora ya no se trata trata de ampliar ampliar el esquema esquema o de llenar llenar sus huecos huecos sino sino de situarse situarse a otro nivel: el de la sensación sensación de desencue desencuentro ntro entre el trabajo trabajo teórico teórico y la experienc experiencia ia social. Pues ni el desenmascaramie desenmascaramiento nto de la ideología ideología que estructura estructura los mensajes mensajes ni la puesta al descubie descubierto rto de los circuitos circuitos y las tramas de poder poder que articulan articulan los medios medios nos han asomado asomado a la experiencia, el modo modo en que que la gent gentee perc percib ibe, e, sient sientee y vive vive los los proc proceso esoss de comu comuni nicac cación ión que que investigamos. investigamos. Un desencuentro desencuentro especialmente especialmente significativo en países países en los que ni la comunicación comunicación soci social alm mente ente rele releva vant ntee tien tienee su luga lugarr únic único o en los los medi medios os ni lo que que pasa pasa por por ello elloss pued puedee ser  ser  com compren prendi dido do por por fuera fuera del espacio espacio socio-cultu socio-cultural ral desde el que los medios medios son perc percib ibid idos os,, mirados, mirados, escuchados o leídos. Comienza Comienza así una búsqueda que me alejará alejará del territorio territorio acotado por  las las discip disciplin linas as que que estudian la comunicación comunicación y me pondrá en contacto con otros territorios territorios y otros saberes —históricos, antropológicos, estéticos— desde los que se irá gestando una forma otra de de pensar pensar la comunicación. comunicación. Y en medio medio de esa búsqueda búsqueda una "experiencia" "experiencia" particular me ayudó a formular globalmente el trabajo de investigación investigación.. Intrigado Intrigado por por el éxito éxito de un un film mexicano titulado La titulado  La ley del monte que estaba barriendo todos los records de taquilla en la ciudad de Calí decidí con algunos compañeros ir a verlo. En un día entre-semana, en la sesión de la tarde, la sala de cine, situada en el sector popular del centro de la ciudad, estaba llena y más de hombres que de mujeres. mujeres. A los pocos pocos minutos de proyección proyección nuestro nuestro aburrimie aburrimiento nto —el de mis compañer compañeros os  profesores  profesores y el mío— era tan grande que comenzamos a exteriorizarlo exteriorizarlo con co n risas. ris as. El film fil m era tan elementalmente melodramático, su conten contenido ido tan explícit explícitame amente nte reacc reaccion ionar ario io y su lengua lenguaje je cinematográfico cinematográfico tan torpe torpe que sólo en clave cómica era soportable. soportable. La gente que nos rodeaba por  el contrario contrario estaba estaba tan metida en el film y tan emocionada que las interferencias producidas por  nuestras risas y nuestros comentarios les indignaron indignaron y quisieron quisieron sacarnos sacarno s de la sala. sa la. Avergonza Aver gonzado do

 por lo sucedido, suce dido, durante duran te el resto rest o de la proyección proyec ción me dediqué dedi qué a observar obse rvar esos rostros rost ros de hombres emocionados hasta las lágrimas, ¡viviendo ¡ viviendo el drama drama con con un place r tan gra nde! A lo que experimenté experimenté ese día me he atrevi atrevido do a llama llamarlo rlo un "esca "escalo lofr frío ío epistem epistemol ológ ógico ico"" que que me acompañó durante varios meses en forma de pregunta obsesiva: ¿qué tenía que ver la película que yo vi con la que vieron ellos?, ¿qué relación podía existir entre lo que a ellos les producía tanta emoción y a nosotros tanto aburrimiento?, ¿qué veían ellos que yo yo no vi? Y entonces, ¿de qué les  podía servir la "lectura ideológica" que nosotros nosotros hacíamos, hacíamos, en el caso de que fuéramos capaces de traducirla a su lenguaje, si esa lectura lo sería siempre de la película que nosotros vimos y no de la que ellos vieron? Claro que era una una película película alienante alienante pero, por por encima encima y por debajo debajo de eso, en algún sentido, ella afirmab afirmaba a lo popula popular, r, esto esto es moviliz movilizab abaa un imaginari imaginario o y conectab conectabaa con una sensibilidad tan diferente diferente de la nuestra de intelectuales. Una intuición comenzó así a tomar cuerpo emborronando viejas claridades y certezas: ¿y si en nuestro rech rechaz azo o a la cultu cultura ra de masa no hubiera hubiera solamente solamente la crítica crítica a la alienación alienación que ella cobija cobija sino también también el asco hacia hacia esa otra otra sensibilidad sensibilidad,, hacia esa otra experiencia cultural? ¿No estaríamos con demasiada frecuencia enmascarando nuestros gustos de clase tras de las etiquetas políticas con las que rechazamos la cultura masiva, cuando es a la clase que goza esos productos culturales, a su experiencia experiencia vital otra, "vulgar" "vulgar" y escandalosa a la que ese rechazo va dirigido? Al mismo tiempo había también también que preguntarse por qué las clases populares invierten, como dice Dufrenne, su deseo y extraen placer placer de esa cultura cultura que les niega niega como sujetos. sujetos. Al ritmo de esa reflexión la intuición se fue tornando idea y proyecto: era necesario mirar el proceso entero de la comunicación masiva desde ese otro lugar que es lo popular, había que comenzar a pensar de otra manera las relaciones de lo  popular con con lo masivo masivo.. Por más más desprestig desprestigiado iado que que estuvier estuvieraa —y en el mundo mundo académ académico ico lo estaba— estaba—,,  por más oportunist oportunistaa y demagógico demagógico que ese término término parecier pareciera, a, necesitáb necesitábamo amoss pensar pensar lo popular popular en  primer lugar lugar como como revulsivo revulsivo contra contra las seguridades seguridades que que nos proporcion proporcionaban aban las teorías teorías formales; formales; y en en segundo lugar estábamos descubriendo que las relaciones de lo masivo a lo popular quizá no eran sólo de negación negación sino también también de mediación. mediación. Que lo masivo niega lo popular en la medida en que escamotea y disfraza las diferencias sociales conflictivas, las que vienen de las clases, de las razas, de las etnias, etc.; y en ese sentido lo masivo no es más que la tramposa imagen de sí mismas que las masas masas populares populares deben interiorizar para que cotidianamente cotidianamente sea legitimada la dominación que la  burguesía ejerce. Pero lo masivo es en otro sentido sentido mediación histórica de lo popular, de sus aspiraciones aspiraciones y sus formas de lucha, de su visibilidad social, de una nueva socialidad socialidad que que se expresa expresa a través través de transfor transformacio maciones nes de las expectativas de vida y del gusto de las la s clases populares. Los textos que aquí se recogen para dar cuenta de ese desplazamiento explicitan algunos momentos de su desarrollo alternando los textos de reflexión —uno abordando sobre todo la cuestión del desde dónde hacemos investigación, el otro desplegando el proyecto en las tres direcciones en que se abren las relaciones de lo popular a lo masivo— con los trabajos de análisis: sobre prácticas cotidianas de comuni comunicaci cación ón en mercad mercados os y cemente cementerios rios,, sobre sobre las transfo transforma rmacion ciones es históri históricas cas de los relatos relatos  populares.  populares. El quinto quinto texto, texto, una entrevis entrevista, ta, sitúa sitúa el proyecto proyecto en relación relación a los usos políticos y al espacio académico. El tercer desplazamiento —de desplazamiento  —de la comunicación comunicación como asunto de medios medios a la cultura cultura como como espacio espacio de iden identi tida dade des— s— es aqué aquéll en que estamo estamoss y que podríam podríamos os caract caracteri erizar zar por el esfuer esfuerzo zo en hace hacer  r  explícita la redefinición general del campo de estudio de la comunicación contenida en la ruptura que introduce lo popular . Pues en el campo de la comunicación lo popular señala no un "objeto" sino un lugar desde el que repensar los procesos, ese lugar desde el que salen a flote flote los conflictos conflictos que articula articula la cultura. cultura. Pero la relación relación comunicació comunicación/cu n/cultura ltura desde lo popular popular sólo se abre abre camino camino estallando estallando dualismos dualismos a derecha e izquierd izquierda. a. El dualismo que "ilustradamente" opone lo culto a lo  popular como como sinónimo sinónimo de inculto, inculto, es decir decir el que le niega a lo popular popular la posibilidad posibilidad misma de ser  espacio espacio produc productor tor de cultura. cultura. O aquél otro dualismo a partir del cual rescatar lo popular popular implica automáticam automáticamente ente condenar condenar lo masivo, masivo, y viceversa viceversa:: para criticar criticar lo masivo masivo necesita necesita idealiza idealizarr lo  popular  popular convir convirtiénd tiéndolo olo en en el lugar lugar en sí de la horizonta horizontalidad lidad y la recipro reciprocidad cidad.. Y un tercer tercer dualismo dualismo en fin, aquél que ha mantenido durante años separados, en la teoría y en las políticas, las cuestiones de la comunicació comunicación n y la cultura. cultura. Desde la derecha, porque el ámbito de la comunicación comunicación masiva masiva puede ser a lo sumo sumo espacio espacio de circula circulació ción n —divulg —divulgación/v ación/vulga ulgarizac rización— ión— pero nunca nunca de creación creación o

 producción cultural; cultural; desde la izquierda, izquierda, porque al hablar hablar de "imperialismo "imperialismo cultural" lo que que en verdad verdad estaba en juego juego eran eran menos menos procesos procesos de cultura cul tura que qu e de reproducción re producción ideológica. ideológic a. Ahora lo que se busca es rehacer conceptualmente el campo de la comunicación viendo en ésta una modalidad constitutiva de las dinámicas de la/s cultura/s, visión a partir de la cual el sentido de las  prácticas  prácticas comunicativas comunicativas es referido referido más que a los medios, medios, a los movimiento movimientoss sociales sociales mediante mediante una  puesta  puesta en en historia historia de esa relación. relación. Es claro claro que este este desplazamie desplazamiento nto no obedece sólo a deslizamientos internos del propio campo sino a un movimiento general en las ciencias sociales de reencuentro con lo cultural  en cuant cuanto o dimens dimensión ión y dinám dinámica ica,, esto esto es en cuanto cuanto medi mediaci ación ón que que artic articul ulaa tanto tanto las las solidaridades solidaridades políticas como los conflictos conflictos sociales. sociales. Si en los estudios estudios de comunicació comunicación n ese reencuentro cuentro apenas comienza comienza,, hay sin embargo embargo ya buenos buenos síntomas síntomas de la profun profunda da renovación renovación que implica tanto a la hora de pensar las innovaciones tecnológicas como las anacronías políticas anacronías políticas.. Los textos que conforman conforman esta última parte son de dos tipos. Una puesta en historia historia de los los debates en torno a la cultura/comunicación cultura/comunicación y de la relación entre desarrollo tecnológico tecnológico y modelos modelos políticos. políticos. Y una una refl reflex exió ión n sobr sobree la cris crisis is de las las iden identi tida dade dess cult cultur ural ales es,, prim primer ero o en rela relaci ción ón a la transnacionalización tecnológica, y después al reflotamiento de la cuestión regional y los modelos d televisión. televisión. El último texto, una entrevista dialogada dialogada con dos investigadores investigadores brasileños, brasileños, recoge una apretada apretada síntesis del del trayecto y del nuevo mapa. Y es por las rutas abiertas desde es nuevo mapa mapa por  donde se arriesga un libro que está a punto de salir a la luz pública cuando estoy terminando esta introducción, su titulo dice a la vez el relevo y el enlace con el itinerario aquí trazado: de los medios a las mediaciones. Cali, mayo de 1987

I. Lugar de de partida: partida: El debate latinoameric latinoamericano ano en el inicio de los años setenta "El sistema: la computadora alarma al banquero que alerta al embajador que cena con el general que emplaza al Presidente que intima al ministro que amenaza al director general que humilla al gerente que grita al jefe que prepotea al empleado que desprecia al obrero que maltrata a la mujer  que golpea golpea al hijo que patea al perro".

E. Galeano

"La máscara que cubre el rostro, naturalmente, sonríe. Pero tras la facha fachada da de naciona nacionalism lismo o casi histérico de los teledifusores locales –que condimentan con enormes cucharadas de folklore y de  patriotismo todos los manjares que preparanpreparan- hay en cambio cambio una labor de antinacionalism antinacionalismo o sistemático que llena los cuatro quintos del espacio que media entre el himno nacional de apertura y el himno nacional de clausura de los programas".

A. Pasquali La reflexión que desde América Latina se hace sobre los procesos de comunicación masiva en los años setenta es bien bien particular. Al tratar de pensar la práctica comunicativa como huella y cifra cifra del esquema global de dominación se encontrará cercada tanto teórica como políticamente, debiendo oponer entonces entonces su provision provisionalid alidad ad y su impureza impureza a la pseudo madurez madurez y la coherencia coherencia puramente puramente form formal al de la teor teoría ía domi dominan nante, te, explici explicitan tando do su toma toma de posició posición n frente frente a las proclam proclamas as de neutralidad. neutralidad. Pero los textos que trabajan la ruptura ruptura son pocos frente a la ingente cantidad cantidad de los otros, los que en forma sofisticada o descarada traducen, o simplemente cantan las maravillas de la teoría oficial. La ruptura, es decir el rechazo y la búsqueda, da lugar a una escritura escritura apasionada apasionada,, fragmentada, reflejo de la situación, la posición y la urgencia. Partir Partir de aquí aquí signif significa ica empezar empezar por narrar narrar la lucide lucidez, z, la de esas pocas ideas-fuerza ideas-fuerza que han servido de base bas e para agrietar y empezara desmontar desmontar el edificio edificio desde el que que se vivía y se miraba; miraba; las 1 que han posibilitado romper las anteojeras y comenzara ver, a extrañarse, a asombrarse y a llamar a las cosas por por su nombre. nombre. A comprender comprender que las teorías también tienen dueños dueños y que por tanto hablan por y trabajan para su amo. Moraleja: criticar la teoría teoría dominante dominante es enfren enfrentar tar aquello aquello que racionaliza. racionaliza. Con todas las consecuencias, empezando por esa impureza de que que se "carga" e l trabajo teórico no como un añadido sino c omo su entrañ entraña. a. El debat debatee latinoa latinoame merica ricano no sobre sobre la la comunicación masiva ha puesto en claro eso, no tanto con la claridad de su discurso cuanto con la fuerz fuerzaa que que le da la expe experie rienc ncia ia histór histórica ica de la que emerge emerge y la brutalid brutalidad ad del choque choque que representa. La otra cara es la imposibil imposibilidad idad de meter el aconteci acontecimie miento nto en la estructura, estructura, en los esquemas esquemas del modelo oficial. Las preguntas son otras. Y son precisamente precisamente esas preguntas, las que horadando horadando el empirismo y la seguridad que da la tautología, han puesto al descubierto las trampas: la falsa autonomía de que se dota a la problemática de la comunicación tanto en la versión cientifista como en la culturalista; la falsa eficacia desde la que se intenta explicar el "subdesarrollo" por la falta de comunicació comunicación; n; la ilusió ilusión n de iguald igualdad, ad, de democr democraci acia, a, con que el esquem esquemaa oficia oficiall envuelve las relaciones emisor-receptor, y el escamoteo de las condiciones de producción, es decir  de las condicione condicioness históricas históricas de dominación. dominación. En últimas la trampa es solo una: la que supone el intento intento de explicar explicar los procesos procesos de comunicació comunicación n por fuera de los conflictos conflictos históricos históricos que los engendr engendran, an, los los dinamiz dinamizan an y los cargan de sentido. Es evidente que la lucidez no ha estado en decir eso sino en la forma como se ha ligado al proceso de liberación, en decirlo desde el cerco y el aplastam aplastamient iento, o, y desde desde el proyecto global en que se implica. La originalidad no ha estado en las palabras sino en aquello de que hablan. La teoría critica que se ha ido esbo esbozan zando do no busca busca compet competir ir en el mercado mercado de las originalidades originalidades sino algo muy distinto: denunciar y dar armas, desperta despertarr y trazar trazar estrategia estrategias: s: que lo importa importante nte es no perder perder de vista el carácter histórico y estructural de los procesos, que la dimensión dimensión ideológ ideológica ica de los mensajes mensajes es únicamente únicamente legible legible desde desde aquellos, aquellos, y que tanto esa dimensió dimensión n como como la trama trama mercant mercantil il de los "medios" hay que mirarla siempre articulada a las condiciones condiciones de producción de una existencia dominada. 1

Tomo la expresión de un texto pionero en el balance, el de Luis Ramiro Beltran: La Beltran:  La investigaci investigación ón en comunicació comunicación n en  Latinoamérica  Latinoamérica:: ¿indagaci ¿indagación ón con anteojeras?, mimeo, Caracas, 1976

Como Como toda toda teoría teoría viva, viva, la reflex reflexión ión crítica crítica latino latinoame americ ricana ana sobre sobre la comuni comunicac cación ión está está atravesada, tensionada tensionada por contradicciones múltiples . AI no ser un juego de espejos sino una  prá cti ca, su índic índ icee de verdad ver dad,, su fuerz fue rza, a, no res ide tanto tan to en su vali dez lógica lógi ca como en su capa capacid cidad ad de cons constr trui uirr lo real. real. Y las huellas huellas que ese trabajo trabajo de "lo real" deja en la reflexión dan cuenta, en negativo, negativo, del esfuerzo esfuerzo por romper el cerco y de la incide incidenci nciaa de las condiciones de producción sobre el producto. Ello hace hace necesario necesario tratar tratar de ver hasta hasta qué qué  punto la ruptura lo ha sido, sid o, las complic comp licida idades des que quizá quiz á fueron fue ron ineludi ine ludible bless en un momento mo mento  pero cuyo ocultamie ocult amiento nto lastra last ra definiti defi nitivamen vamente te el avance. avanc e. Sin que ello ell o signi s ignifiq fique ue colocar colo carse se por  fuera o por encima de las tensiones que dinamizan el trabajo, sino el esfuerzo por desblocar,  por desplaz des plazar ar algunos alg unos ejes, eje s, y por rompe r con cierto cier to esquema esq uematis tismo mo –técnica/ –téc nica/ideo ideologí logía, a,  base/su  base /superes perestruc tructura tura,, etc.etc. - que tuvo su eficacia eficaci a pero que hoy puede estarse estars e convirtiendo convirti endo en una forma d e eludi r el movi mient o de la hi stor ia. Y el esf uerzo también también por acallar acallar la griterí griteríaa de de los teórico teóricoss de la informac información ión y de los massmediólogos empiristas y pragmáticos cuyo "ruido" nos está volviendo sordos a la palabra que puja por abrirse camino desde el silencio de los dominados.

1. Implicaciones Implicacione s de la teoría en el proceso de dominación dominación El sentido sentido y el alcance de la investigación investigación latinoamericana latinoamericana sobre la comunica comunicación ción masiva, masiva, la lectura lectura que ella realiza realiza de la teoría oficial y sus impases, remiten a una "nueva conciencia" del  proceso histórico históri co latinoamericano latinoa mericano que hace posible la tematización temati zación del problema de la depend dependenc encia ia cultura cultural, l, y en particul particular ar el de la producció producción n de conocimi conocimientos, entos, más allá de una consid considera eración ción que lo reduzc reduzcaa a mero mero problem problemaa de importa importación ción pero más allá allá tambié también n de su reducción a mera reproducción. reproducción. Las raíces de la dependencia dependencia cultural están en la propia propia historia y no afuera, afuera, se halla en esa "cultura del silencio y de la sumisión" que los trabajos trabajos de P. Freir Freire, e, 2 de D. Ribe Ribeir iro o y de F. Fanó Fanón n nos nos han han perm permit itid ido o empe empeza zarr a comp compre rend nder  er  , esto esto es en la interioriz interiorización ación del colonial colonialism ismo o y su objetivac objetivación ión en las relaciones relaciones sociales. sociales. Es esa misma concienc conciencia ia la que ha posibili posibilitado tado desenma desenmascara scararr lo que las "nec "necesi esidad dades" es" tecno tecnológ lógica icass de comunicación significan, más allá de su aspecto económico, como rearticulación, deformaciónimposición de una socialidad que sint onice y funcione con los requerimient requerimientos os del desarrollo. desarrollo. El  prestigio y la va lidez de la teoría oficial se oficial  se insertan ahí, beneficiándose de la hipoteca que lastra al  pensamiento  pensa miento latinoameri latin oamericano cano y racionaliza raciona lizando ndo la dominación dominaci ón cultural, esto es convirtiendo el  pasado, la "historia", "his toria", en razón raz ón total tot al de ser para pa ra el presente prese nte y el futuro. fut uro. De esa mistificación se despega lenta, difícilmente, reescribiendo la historia general y las historias regionales de la filosofía 3, de las ciencias ciencias sociales4, mostrando cómo la falta de un pensamiento crítico crítico y la fácil deriva deriva hacia el dogmatismo dogmatismo se corresponde corresponden: n: "El método aparece como un recetario artificial y abstracto acerca de las formas del conocimiento social y los resultados de su aplicación aplicación como como una dogmática. dogmática. El liberalismo liberalismo llegó a América América Latina como una dogmática —  como un elenco de valores intocables— intocables— pero el marxismo marxismo también. Así se configuró configuró el fenómeno de la transf transform ormaci ación ón de un pensam pensamien iento to crític crítico o en una una esco escolá lást stic icaa de izqu izquie ierd rda" a"5. La dependencia no estriba entonces en la asunción de la teoría como creen aún los defensores de un nacionalism nacionalismo o trasnocha trasnochado. do. Lo dependiente dependiente es la concepció concepción n misma misma de la ciencia ciencia,, del trabajo trabajo científico, científico, y de su función en la sociedad. sociedad. Y aún más la dependencia dependencia trabaja en la interiorización interiorización de la división social del trabajo trabajo a nivel internacional internacional según la cual estos países p aíses no pueden permitirse permitir se el lujo de hacer hacer ciencia, ciencia, con aplicar la que hacen los otros están cumpliend cumpliendo o su papel en la historia. historia. La "fuga de cerebros" cerebros" no es explicable explicable por el solo factor factor de una mejor remuneración remuneración económica o las mejores posibilidades en laboratorios, investigación, etc., es necesario incluir la fascin fascinaci ación ón que ejerce ejerce lo cientí científic fico, o, la creen creencia cia en la cienci cienciaa como como "valor "valor universal", universal", como como 2

P. Freiré, La Freiré, La pedagogía pedagogía del oprimido, oprimido, Montevideo, 1970; D. Ribeiro, Configuraciones histórico-culturales de los  pueblos americanos. La Habana 1971; F. Fanón,  Los condenados de la ti erra, México, 1965. 3 S. Bondy, ¿Existe una filosofía de nuestra América? México, 1970. 4 E. Veron, Conducta, estructura y comunicación, en especial los capitules: "Ideología y sociología" y "Las ideologías están entre nosotros", Buenos Aires, 1965. 5 García, "¿Puede existir una ciencia social latinoamericana?", en  Rev. Chasqui  No. 1, p. 34. Chasqui No.

desinteresado servicio a la humanidad por encima de cualquier diferencia o conflicto histórico. Atadas Atadas por sus privil privilegi egios os y encand encandila iladas das por la mitolo mitología gía de lo científ científico ico las élites de poder  poder  latinoame latinoamerican ricanas as no han tenido tenido el menor menor inconven inconvenient ientee en renunciar renunciar a produc producir ir la ciencia y la tecnología que sus países necesitaban favoreciendo incluso el éxodo de los científicos hacia las verdaderas "patrias de la ciencia". En poco pocoss cam campos pos del del sabe saberr la fasc fascin inac ació ión n de lo cien cientí tífi fico co es tan tan viva viva como como en el de la comunicación. comunicación. Y es mucho lo que tiene que ver con ello ello la incomprensión incomprensión y la violencia de los ataq ataque uess con con que que fue fue recib recibid idaa la crít crítica ica.. “Al “Al rehu rehusar sar conf conform ormar arse se con con apreh aprehend ender er la comunicación como un mero objeto de observación y al proyectarla en el movimiento de un  proceso,  proces o, el investigador invest igador enjuicia enju icia la posic p osición ión que la burguesía burgue sía le asign a signaa a la práctica práct ica científica, científi ca, y 6  por ende e nde impugna i mpugna su propio estatus" . Porque la proyección en el proceso desmantela la pureza de lo teórico dejando al descubierto el proyecto político-económico que la teoría racionaliza  paradójica  paradó jicamente mente naturalizán natura lizándolo dolo y universalizán univers alizán-dolo. -dolo. Lo que los críticos crítico s latinoamericanos latinoa mericanos empezaron empezaron a señalar señalar era algo que los empresarios s abían de sobra pero que la teoría, su "efecto "efecto de cientificidad", venía a borrar y escamotear: el origen político y hasta comercial de las categorías categorías y de los objetos de ese saber. El desarrollo desarrollo tanto tecnológico tecnológico como "lingüístic "lingüístico" o" de los mass-media, que se inicia en los Estados Unidos al concluir la primera guerra mundial, está directamente directamente vinculado a la necesidad que tiene el gobierno gobierno de homogenizar las masas en torno al consen consenso so que implic implicaba aba el proces proceso o bélico bélico.. La posterior posterior decepció decepción n de esas masas masas al tener  conocimiento conocimiento de las manipulacion manipulaciones es de que habían sido objeto no restó la menor fuerza a la curiosida curiosidad d y la fascinación fascinación de de que se habían habían cargado cargado los Medios. Medios. Y al deseo de los políticos por  conocer conocer la influencia influencia que sobre la población habían tenido sus campañas mass-mediatizadas se incorporó el de los industriales y comerciantes por incre mentar la eficacia eficacia de la publicidad. publicidad. El medi medio o y el discur discurso so son el mism mismo o se trate trate de los candi candida datos tos de turno turno,, de fabr fabrica icante ntess de automóv automóviles iles,, de planific planificado adores res de la defensa defensa o del comerc comercio io exterior exterior.. La "cienci "ciencia" a" de las comu comuni nica caci cion ones es nace nace cont contro rola lada da y orie orient ntad adaa a perf perfec ecci cion onar ar y perp perpet etua uarr "el "el esti estilo lo norteam norteameric ericano ano de democra democracia cia". ". Los Los posib posibles les efectos efectos negativ negativos os de los los Medio Medioss como como la "degradación "degradación de la cultura" no son más que disfunciones que el propio sistema se encargará de funcionalizar. ¿Qué tipo de sociedad sociedad albergó albergó los primeros primeros experimento experimentoss científico científicoss sobre la comunicac comunicación ión masiva?, se pregunta L. R. Beltran, y responde: "¿Se trataba de una sociedad infeliz, agobiada  por la pobreza, pobrez a, los conflictos confli ctos sociales socia les y la inestabili inest abilidad? dad? En absoluto, absolu to, se trataba trata ba de una sociedad próspera, feliz. Una sociedad en que que la individualidad predominaba predominaba sobre lo colectivo, la competencia era más deter minante que l a cooperación y la eficacia eficacia económ económica ica y la sabidurí sabiduríaa tecnológica tenían más más importancia que el desenvolvimiento desenvolvimiento cultural cultural y la justicia social. Era una sociedad a punto de convertirse en el imperio económico 'más poderoso e influyente del mundo" 7 . La impronta de la teoría teoría sociológica sociológica matriz sobre los métodos métodos de investigación investigación ha sido lúcidam lúcidament entee descrita descrita por Mattela Mattelart rt en sus crítica críticass a la "Comm "Communic unicatio ation n Research Research"" 8: desplazamiento del centro de gravedad de la problemática del Medio de comunicación a la  psicología de los receptores, reducción del criterio de pertenencia de lo investigable al contenido mani manifi fies esto to de los los mensa ensaje jess —úni —único co cont conten enid ido o dete detect ctab able le empí empíri ricam camen ente te y anal analiz izab able le estadí estadísti sticam camente— ente— fragmentación fragmentación por tanto del mensaje en unidades unidades cuya única relación  provien  prov ienee de la sumatori suma tori a. Pero si el método recorta así las posibilidades de lo investigable —las técnicas de encuesta para la medición de los efectos no son sino la contracara de los análisis de contenido— es porque la teoría que lo engendra y alimenta, el empirismo sociológico, responde perfectamente a una concepción de la objetividad científica como neutralización de la operación de conocimiento, y a un objetivo fáctico: fáctico: el mantenim mantenimiento iento del statu quo exigido exigido por los requeri requerimie mientos ntos del mercado. mercado. Es en la articulación de esos dos "obstáculos" que se encuentra el sustrato epistemológico del método y su carácter terapéutico: "El hecho de que el sistema salga virgen de dudas pone su marca al

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A. Mattelart, La Mattelart,  La comuni cación masi va en el proceso de liberació n,  p. 23. L. R. Beltran, Premisas, Beltran, Premisas, objetos y métodos foráneos en la investigación investigación sobre comunicación en Latinoamérica,  p. 9. 8 Mattelart, Medios Mattelart, Medios de comunicac 37-82.. comunicación: ión: mito burgués burgués vs. lucha lucha de clases, clases,  pp. 37-82 7

conjunto de las técnicas empleadas, las cuales se convierten así en instrumentos de ajuste del sistema, y quedan destinadas a suprimir los puntos críticos que ponen en peligro el equilibrio social" 9. La conclusión tenía que ser radical: cambiar de perspectiva exige no sólo cambiar de método, ya que una aproxim aproximació ación n críti crítica ca al fenóm fenómeno eno de la comun comunica icació ción n masiv masivaa no puede puede ahorr ahorrar arse se el cuestio cuestionam namient iento o de la matriz matriz epistemol epistemológic ógico-t o-teóri eórica ca de esa "ciencia". "ciencia". Lo metodol metodológico ógico no es autónomo, su coherencia coher encia lógica es parte del proyecto proyecto teórico, de una particular particular concepción concepción del objeto a  partir  partir de la cual cual ciertos ciertos problemas problemas son formi formidables dables y abordabl es y otros o tros no. La coartada del cientifismo consiste precisamente en proporcionar al investigador la oportunidad ilusoria de sentirse presente en el proceso proceso social pero sin necesidad necesidad de tomar posición, posición, sin asumir  opción alguna. alguna. Frente a esa ilusión, que sin duda puede funcionar funcionar psicológicam psicológicamente ente pero que que la realidad social tira por tierra, tierra, la ruptura ruptura teórica teórica implica exigencias exigencias concretas concretas a nivel nivel del proyecto proyecto  político  político que guía la investigaci investigación ón como proyecto proyecto general general de transform transformación ación de la realidad  invesíigable. invesíigable. Y eso eso tiene tiene incidencia incidencia sobre sobre los métodos métodos y sobre los objetos. Pero no es sobre los los objetos y los métodos que se opta directa, inmediatamente, sino sobre el proyecto histórico que los mediatiz mediatizaa y dota dota de sentido sentido y de eficacia eficacia.. Sin caer en la trampa trampa contra contraria, ria, la de un politicism politicismo o reductor que intenta intenta suplantar el trabajo teórico teórico con agitación política. La propuesta crítica consiste consiste en asumir que "sólo es 'científico', elaborador de una verdad, un método que surja de una situación histórico-polít histórico-política ica determinada y que verifique verifique sus conclusiones conclusiones en una práctica social acorde con las  proposicio  proposiciones nes históri histórico-po co-política líticass en las que que se pretende pretende inscribi inscribirla rlas" s"10.

2. Claves teóricas en el proceso de apropiac apropiació ión n "El rasgo que debe diferenciar el enfoque de la comunicación de las perspectivas originadas en l os p aís es cen tra les es la concepció concepción n totalizad totalizadora ora del proceso proceso comun comunicacio icacional. nal. En otras otras  palabra s, se trata de concebi r la comunica ción en todos sus niveles de funcionamiento f uncionamiento como un aspecto del proceso proceso productivo general de la s ociedad". CIESPAL, documento de la reunión de Costa Rica .

El empirismo sociológico sociológico fragmenta fragmenta lo social. Y cada fragmento fragmento se autonomiza, autonomiza, se autoregula, tiene dinámica di námica y eficacia propias. propias. Esa fragmentación fragmentación,, por una parte, parte, fundamenta fundamenta la creencia en la la todopoderosa influencia de los fenómenos de comunicación por fuera de la diferencia de contextos sociales en que se produzcan, y por otra posibilita esa pseudo historia de los Medios en la que las técnicas serían serían el determinan determinante te último de los los procesos sociales. El espiritualismo culturalista culturalista y el  pragmatismo  pragmatismo tecnológico se complementan. complementan. Para el culturalismo "los hombres hombres actúan por lo que saben" o sea que el fundamento último último de la acción humana humana está en la formación formación que se posee. Aislables del proceso social global los procesos de producción y consumo de información "tienen aspectos sociales". Lo social sería extrínseco extrínseco.. Sólo que esa abstracción es demasiado "concreta": la racionalización perfecta de los mecanismos que una determinada determinada forma de sociedad le impone a la comunicación, comunicación, racionalización racionalización de la forma de comunicac comunicación ión dominante. dominante. Forma Forma de comunicaci comunicación ón que corresp correspond ondee a un modo modo de produc producir  ir  cultura, cultura, a un modo modo de producción producción de la vida toda. El esquema de Lasswell 11: quién—dice qué—   por qué canal—a canal —a quién—con quién— con qué efectos, efect os, (que no es tan original original como suele creerse pues el esquema esquema de ese esquema esquema se encuentr encuentraa ya en Aristóteles Aristóteles a propósito propósito de la comunicac comunicación ión retóric retórica) a) traduce bien a su pesar, a pesar de sus pretensiones de exhaustividad, la parcialidad absoluta de la  perspectiva  perspectiva en que se enmarca, enmarca, la del modelo de comunicación comunicación que la realidad realidad histórica histórica que lo alimenta alimenta nos impone impone como único. único. Y en su mecanic mecanicista ista simplici simplicidad dad,, como como escribe escribe Beltran Beltran,, nos describe describe la verticalid verticalidad ad y unidireccional unidireccionalidad idad de la comunicación imperante imperante a través de los medios medios 12 masivos en los que el emisor manda emisor manda a través de un canal ‘neutro’ sobre un receptor  mudo . 9

 Ibídem.  p. 52. H. Schmucler, "La investigación sobre comunicación masiva", en Comunicación Comunicación y Cul tura  No. 4, p. 5 11 L. Lasswell, The Estructure and Fundían of Communicationin Society,  New York, 1948. 12 Sobre la "per versión" que s upone la reducción de la comunicación a transmisión unidireccional unidireccional de información, información, ver  A. Pasquali: "Sobre algunas algunas implicaciones implicaciones dialécticas entre información y cultura de masas".  Revista nacional de cultura. Caracas, 1970. 10

La mitificación de la tecnología tecnología es la otra cara del esquema, la que torna visible su origen. Desde ella los fenómeno fenómenoss de comun comunicació icación, n, reducidos reducidos a su componen componente te técnico, técnico, son también también "abstraí "abstraídos dos", ", segregados del proceso socio-histórico. La crítica no le niega a McLuhan el valor de sus intuiciones ni el aporte que sus observaciones hacen sobre la especificidad de cada Medio 13. Pero aparte de que esa especificidad no es rescatable por aislamiento sino por su articulación a los procesos socioeconómicos en que los Medios se producen, lo que la crítica rechaza radicalmente es la pretensión de erigir erigir al componen componente te técnico en único determinante histórico, "al trasponer el cambio tecnológico al dominio social se hace una transposición tan falsa y reaccionaria como la que hacían los darwnistas sociales del del siglo pasado al aplicar a la historia las leyes de la biología" 14. Lo que las dos "abstraccion "abstracciones" es" describen describen es la fetichización fetichización del fenómeno fenómeno y del Medio que unas determinadas determinadas relacione relacioness sociales producen. Versión actualizada actualiza da de las "fuerzas natura les", al elevar  elevar  de manera indiferenciada al rango de causalidad social al Medio lo que se borra es toda huella de estratifica estratificación ción social y de conflicto. conflicto. De ahí que esa versión exija como correlatos correlatos sociológicos sociológicos los concep conceptos tos de "socie "sociedad dad de masas", masas", "opinió "opinión n públi pública" ca",, etc. etc. Y en torno torno al fetiche fetiche se genera generará rá la mitología capaz de alimentarlo y sostenerlo, toda una serie de modelos normativos de la cohesión y la estabilidad estabilidad,, una retórica retórica del cambio cambio que impida impida cualquier cualquier transformación transformación real, una participac participación ión ilusor ilusoria ia en los aconteci acontecimi miento entoss a través través de la mera mera inform informació ación n o del consu consumo mo de los objetos objetos  publicit  publicitados ados.. Los sociólog sociólogos os funciona funcionalistas listas consta constatan tan algo algo de esto. esto. Pero Pero más allá de los los lamento lamentoss que esos sociólogos profieren lo que la crítica desmonta es la incapacidad de esa teoría para explicar los nexos que articulan la retórica y la mitología massmediática a la lógica del mercado y ésta con la estructura global de producción. Articulación al "todo social" entendido no como como entidad homogénea homogénea y equilib equilibrad radaa -—idea -—idealism lismo o de la estruc estructur turaa parson parsonian iana— a— sino sino como como proces proceso o desgar desgarrad rado o por  contradicciones y conflictos de intereses antagónicos.

 — Estr E struct uctura ura mercan mer canti till de d e los l os medios med ios Mattelar Mattelartt y Biedma Biedma desarro desarrollan llan una reflexi reflexión ón que desglosa desglosa la riqueza riqueza del concepto concepto de "forma "forma merca mercancí ncía". a". Para Para Mattel Mattelart art el punt punto o de part partid idaa es el proc proces eso o de fetic fetichi hiza zació ción n del del medi medio o de comunicación en cuanto actuante, metamorfoseador de las relaciones sociales en cosas, en naturaleza. Con dos consecu consecuenci encias as fundam fundamenta entales: les: ocultar ocultar el proceso proceso de produc producción ción,, de elabor elaboració ación n de los mensa mensajes jes y dotar dotar al Medio Medio de una fuerza fuerza mágica mágica que no es sino sino el valor valor que adqui adquiere ere desde una relaci relación ón social social reifica reificada da y traspuest traspuestaa a él. El proceso de comunicac comunicación, ión, en cuanto cuanto proceso de intercambio, prolonga y densifica el mecanismo productivo general "así la distancia entre emisor y receptor receptor es una mera reproducción reproducción del espacio que media entre productor productor y consumidor" consumidor" 15. Y la  pasividad  pasividad asignada asignada e interiorizada interiorizada por parte del receptor receptor no es sino un aspecto de la enajenación enajenación social de la que participan participan los dos polos del proceso. El producto-m producto-mensaje ensaje que el receptor consume lleva ya inscrito en su acabamiento la "marca de fábrica", su carácter mercantil como huella y modelo a la vez del verticalismo y el autoritarismo autoritarismo general general que rige las relaciones relaciones sociales. Esa marca es la que determina determina la forma forma misma misma de su recepción. Marca que es un lenguaje represivo, coaccionador pero no en forma explícita explícita sino disimulada, disimulada, lenguaje lenguaje hipnotizante hipnotizante que está en la base del discurso ritual y autoritario con el que una clase encierra, claustra, recorta y controla el mundo como un orden, una legitimidad inapelable. inapelable. La expresión más eficiente y clara es el lenguaje publicitario, ese lenguaje que transforma transforma sistemáticamente sistemáticamente las ideas y las cosas reduciéndolas reduciéndolas a su forma mercantil mercantil al operativizar  operativizar  todo todo lo que que toca toca desde desde el ángu ángulo lo exacto exacto de la poses posesió ión. n. Y ello ello a trav través és de un proce proceso so de semantización en el que los juegos de las palabras, las hipérboles, los procedimientos de adjetivación, inocenta inocentan n el proceso proceso pero sin poder ocultar ocultar del todo la "marca "marca de fábrica fábrica", ", esa ideolog ideología ía que se empeña en zanjar semánticamente las diferencias sociales a la vez que las ensancha. El otro, el lengua lenguaje je de la noticia, noticia, el de la "objeti "objetivid vidad" ad" del acontecimie acontecimiento nto no está menos conformado por la forma mercancía. La forma-diario, forma-diario, al presentarse presentarse y ser consumida consumida como el "reflejo fiel de los acontecim acontecimientos" ientos" está trabajand trabajando o en la misma misma línea de lo publicitario. publ icitario. Todo el proceso proces o de elaboración, de selección, de fragmentación es escamoteado por la  forma en que que está construido. Esa  primera  primera “lectura” “lectura” que la clase propietari propietariaa de los diario diarioss y las agenci agencias as realiza realiza sobre el acontece acontecerr es 13

M. McLuhan, La McLuhan,  La co mprensi ón de los me dios. México, 1969. L. Acosta, Penetració Acosta,  Penetració n cultural del imper ialismo en Amé rica Lati na.  p. 46. 15 A. Mattelart,. La Mattelart,. La comunic ación masi va en el proceso de liberación,  p. 74. 14

"olvidada", "olvidada", descartada. Y lo que el receptor lee es consumido como si esa lectura lectura de clase clase qué es la la escritura escritura del diario no existiera. existiera. Pero el proceso real actúa, actúa, penetra penetra en las conductas conductas de la otra clase en formas concretas concretas dé valores, de normas, de intereses. El ejemplo ejemplo más brutal es el de la “crónica roja" esa “pág “página ina socia sociall de la clase clase explotada" como certeramente certeramente la llama J. M. Martínez, Martínez, y que  presentada como el espejo de la clase trabajadora convierte la opinión que la burguesía tiene de esa clase en la "opinión pública", pública", de toda la sociedad sociedad.. Es así como “la burguesí burguesíaa se apropia apropia del del 16 acontecer diario y le da la forma de sus intereses" no sólo económicos, sino ideológicos. Los que conver convertid tidos os en lengua lenguaje je oficia oficiall de la inform informaci ación ón contro controlan lan los intent intentos os de ruptur ruptura, a, los conten contenido idoss de la "prensa "prensa popular" popular" al controla controlarr tanto la forma forma de su producción como la de su lectura. lectura. Es ahí, y no en el mero cont contro roll de la propi propied edad ad econó económi mica ca de los Medio Medios, s, que la "libertad "liber tad de prensa" revela su falacia radical. Biedma ha visto claro: si el lenguaje lenguaje mismo mismo de la prensa es part partee del del dom dominio inio ideo ideoló lógi gico co de la burgue burguesía sía “la prensa prensa popula popularr no puede puede usar usar la lengua lengua establecida, establecida, sus palabras le escapan de su control". Si la burguesía ha llegado a imponer su lenguaje como el lenguaje de los medios no ha sido por  arte de magia sino por otro "arte", el del control de la propiedad, el del monopolio económico de los Medios. Desde el momento momento de su nacimiento nacimiento ha tenido una conciencia conciencia muy clara del papel que los Medi Medios os iban iban a juga jugar, r, "que "que la fusió fusión n de la fuer fuerza za econ económ ómica ica y del del cont contro roll de info inform rmació ación, n, fabricación de imágenes, formación de la opinión pública, llámese .como se quiera, llegaría a ser la nueva quintaesencia del poder nacional e internacional" 17, que los Medios iban a posibilitar posibilitar nuevas y sofisticadas, más penetrantes formas de coloniaje a través de las cuales la dominación dejaría de ser  sufrida sufrida como como una opresión opresión para ser recibi recibida da como como una alianza alianza que convier convierte te al dominador dominador en libertador. libertador. Ahora todo será en la libertad: libertad: de palabra palabra,, de empresa, empresa, de comerci comercio. o. Como Como muestra muestra Schiller, Schiller, las declarac declaracione ioness de los preside presidentes ntes norteamer norteamerican icanos os de la post-gue post-guerra rra sobre la libertad de  palabra y de opinión terminan terminan siempre en declaracio declaraciones nes sobre la libertad libertad de empresa empresa y de circulación circulación de las mercancías. mercancías. La libertad de las comunicacion comunicaciones es se tradujo así en un "paso de gigante" gigante" en la liberación y expansión de los mercados norteamericanos. Es la exis existe tenc ncia ia y el desa desarr rrol ollo lo de la econ econom omía ía mism isma de merca ercado do,, y sobr sobree todo todo de la norteamericana, la que está en juego en el proceso de expansión y comercialización de los Medios como lo demuestran los estudios sobre la importancia financiera de las comunicaciones masivas en la reconversión de la industria de guerra y sobre la expansión de la publicidad 18. Y es esa presión de la industria y del del comercio la que que se "objetiva" en las formas y contenidos de los mensajes. Renunciar a anexionar anexionar no es renunciar a controlar. controlar. América Latina Latina comienza comienza a conocer el espesor del control no sólo ideológ ideológico ico sino económ económico ico que los grande grandess medios representan. Los datos aportados por  19 Kaplum sobre radio y TV , por Schenkel sobre la concentración de la propiedad de los Medios en Argentina, Chile, Colombia, .México y Perú 20 y por Mattelart sobre los satélites educativos 21 hablan mejor que cualquier otra lectura sobre la trama y el poder mercantil de los medios masivos.

 — Tram T ramaa ideo i deológ lógica ica de los mensaj men sajes es El carácter estructural de los procesos de comunicación masiva y el entramado mercantil de los medios van a encontrar en la problemática de lo ideológico ideológico un campo estratégico de convergencia  para el análisis. análisis. Y no hay pretensió pretensión n en afirmar afirmar que esa problemát problemática ica va a recibir recibir de la crítica crítica latinoamericana uno de los desarrollos más sagaces tanto a nivel de su configuración teórica como en sus posibilidades posibilidades de aplicación a la investigación investigación de problemas particulares. En el año 1967 se realizó en Buenos Aires un simposio sobre "teoría de la comunicación y modelos lingüísticos en ciencias sociales" coordinado por E. Veron y en el que ese autor presentó un texto que constituye el punto de partida de la nueva perspectiva. pers pectiva. En ese texto, texto, a la vez teórico teórico y práctico, práctico, puesto 16

P. Biedma , Comunica ción de ma sas y revol ución socia lista,  p. 226. H. I. Schiller, Comunicación Comunicación de masas e imperialismo yanqui,  p. 11. 18 A Mattelart, "Hacia la financiación de los aparatos ideológicos del 'Estado multinacional", en Comunicación y cultura. No. cultura.  No. 4, pp. 73 -117. 19 M. Kaplum,  Radi o. TV y cultu c ultu ra en Améri A méri ca L atina. ati na. Quito, 1975. 20 P. Schenkei, "La estructura de poder de los medios de comunicación en cinco países latinoamericanos" en Comunicación y cambio social,  pp. 13- 56. 21 Mattelart, Agresi Mattelart,  Agresi ón des de el espacio , Buenos Aires, 1973. 17

que ofrece ofrece la aplicación aplicación del modelo modelo elaborado al análisis análisis del discurso discurso de prensa, prensa, Veron recoge y explíc explícita ita una una serie serie de de propu propuest estas as que que en form formaa menos men os elaborada elabo rada aparecen apare cen ya en una compil ación ació n 22 de textos public publicada ada con el título título Conducta, estructura y comunicación . Desde esos primeros primeros textos lo que se configura es la posibilidad de sacar la problemática ideológica del marco clásico de la sociología sociología del conocimiento conocimiento —que —que identificaba identificaba lo ideológico ideológico con las represent aciones y por  tanto con la problemática de la conciencia y de los sujetos— para inscribirla en el espacio de la comunicación a través del concepto de  significa  significación ción como dimensión de los hechos sociales. Es todo el campo de la  superestructura  superestructura el que necesita ser repensado a la luz de los nuevos procesos histór histórico icoss que la comun comunica icació ción n masiv masivaa confi configu gura ra así como de la ruptura ruptura que la lingüística lingüística estructural opera en el espacio de las ciencias sociales. sociales. Lo que en últimas es necesario necesario abandonar  abandonar  es una concepción concepción mecanicista de lo social que reduce la s uperestructura uperestructura a puro reflejo de la base económica, y una concepción idealista —por más materialista que se proclame— que subjetiviza el  proceso  proceso ideológic ideológico o en términos términos de contenido contenidoss de conciencia conciencia.. Según Según la nueva nueva perspect perspectiva iva,, lo ideológi ideológico co trabaja trabaja en el ámbito ámbito de los procesos procesos y sistemas sistemas de codifi codificac cación ión de de la reali realidad dad y esos esos sistemas de codificación "no son meras excrecencias de las condic condicion iones es mater material iales es sino sino todo todo lo contra contrario rio:: consti constituy tuyen en una una dime dimens nsió ión n cent centra rall de las las condiciones materiales mismas, puesto que determinan la significación de las conductas sociales y las condiciones condiciones materiales materiales no son otra cosa que relaciones relaciones sociales" sociales"23. Frente Frente a una tradición tradición  pertinaz,  pertinaz, en la que que el positivismo positivismo se da la mano man o con una extend ext endida ida vulgar vul gariz izaci aci ón del marxi mar xismo smo,, Veron sostiene que la significación no es nada subjetivo y que la distinc inción ión infraestructura/sup infraestructura/superestructu erestructura ra ni coincide ni correspond correspondee con la oposici oposición ón objetivo objetivo/sub /subjeti jetivo. vo. Mattelar Mattelartt por su parte parte desenmasc desenmascara ara esa misma tradició tradición n que como un obstácul obstáculo o impide impide la justa valoración de la problemática de la comunicación por parte de ciertos sectores de izquierda a los que la herencia here ncia mecanici mecanicista sta de un "marxism "marxismo o ventrílocuo" ventrílocuo" incapaci incapacita ta para comprender comprender el lugar  capital capital que lo ideológic ideológico o ocupa en un proceso proceso revolucionario: "quizá sea en esta separación capciosa entre poder material y poder ideológico, infraestructura y factores superestruc superestructura turales, les, donde radica la piedra de toque de las polémicas que no han dejado y no dejarán de presentarse a  propósito  propósito de nuestro enfoque sobre el lugar que ocupa la comunicación comunicación de masa en la lucha de 24 clases" . La ideología trabaja en el terreno de lo inintencional, es decir no consciente ni voluntario. El modelo sociol sociolog ogista ista es tan insuficien insuficiente te como como el psicologi psicologista sta para dar cuenta cuenta del funcionam funcionamiento iento de los fenómenos fenómenos ideológicos. Ni pura manifestación manifestación de intereses intereses de grupo ni manifestación de tensiones o frustr frustraci acione oness de la person personali alidad dad.. Veron: Veron: "La ideologí ideologíaa es el modo modo natura naturall de existenc existencia ia de la 25 dimensión significativa de los sistemas de relaciones sociales" . Mattelart: "se trata de un estado que los individuos individuos viven como una naturaleza naturaleza social y que se impone impone a ellos por un modo de producción producció n 26 que impregna todas las relaciones sociales" . Si el modo de producción en cuanto sistema de relaciones sociales es lo que determina la forma de operar operar de lo ideoló ideológic gico, o, lo que el análisi análisiss persig persigue ue entonc entonces es es su princi principio pio organiza organizativ tivo, o, su organización organización estructural estructural.. Y ese principio principio organizador organizador o esa estructura es precisamente lo que no aparece, lo que no es manifiesto, lo que no es accesible ni a la conciencia de los individuos ni a las técnic técnicas as del análisis análisis de conten contenido ido.. Esa estructu estructura ra se ubica a otro nivel: "latente", "segundo", "segundo", "connotativo "connotativo". ". A ese nivel cualquier mensaje, cualquier cualquier discurso, cualquier texto está trabajado trabajado  por lo ideológico y es susceptible por tanto de una lectura ideológica, lo mismo el discurso político que la revista de modas, el noticiero noticiero de TV que el texto científico científico.. Lo ideológico ideológico deja de ser un adjetivo adjetivo atribuible atribuible a cierto cierto tipo de discursos —atribución que automáticamente negativizaba ese tipo de discurs discursos os peyoriz peyorizándo ándolos los por relació relación n a los científi científicos cos según según la vieja vieja dicotom dicotomía ía positiv positivista ista remozada por Althusser— para ser definido como un nivel de organización de lo semántico, un "nivel de sign signifi ifica cació ción" n" prese present ntee en cualqu cualquier ier tipo tipo de discu discurso rso,, y cuy cuyo modo modo de oper operar ares es el de los los mecanismos de selección y combinación que la lingüística estructural ha descubierto como las dos 22

E. Veron, "Ideología y comunicación de masas", en  Lenguaje  Lenguaje y comun comunica icación ción,,  pp. 133133-19 190. 0. E. Veron, Conducta, estructura y comunicación,  p. 270. 24 A. Mattelart, La Mattelart, La comunicación masiva en el proceso de liberación,  p. 12. 25 E. Veron, Ibídem, Veron,  Ibídem,  p. 271 . 26 A. Mattelart, Ibíd Mattelart,  Ibíd em,  p. 3 5. 23

operacione operacioness que dan lugar a los dos tipos básicos de relac relación ión a través través de los cuales cuales se reali realiza za la significación. significación. El modo modo de operar da la clave para el nuevo modo de análisis: lo que se buscará ya no serán serán las "categorí "categorías" as" clasificat clasificatori orias as de palabras palabras y las cantidades cantidades representativas representativas sino las reglas semánticas que rigen la organización latente de los mensajes, o mejor las reglas semánticas a partir de las cuales se generan las proposiciones, los mensajes. Ahora bien, si cualquier tipo de mensaje es susceptible de una lectura ideológica, la especificidad y la efic eficac acia ia de esa esa lect lectur uraa depe depend ndee por por ente entero ro de su capa capaci cida dad d de vinc vincul ular ar las las estru estruct ctur uras as de significació significación n descubiertas descubiertas con "los procesos de conflicto conflicto a nivel nivel de la socieda sociedad d global global"" (Veron) (Veron).. Este será sin duda el punto más crítico del método. Y no porque teóricamente teóricamente no sea claro, claro, o porque sea discutido en sí mismo. mismo. Su problematicidad problematicidad proviene, proviene, por una parte, de la articulación de este concepto concepto de ideología ideología con la propues propuesta ta de Marx sobre sobre la dominación dominación de clase clase en lo ideológ ideológico. ico. Punto que en su forma más fecunda, para el momento y aunque no exenta de dificultades, fue  planteado por por Mattelart Mattelart en en La ideolo ideología gía de la domina dominació ción n en una socieda sociedad d depe dependi ndient entee y cuyo resumen  podría  podría ser el siguien siguiente: te: investig investigar ar la red semán semántica, tica, la estructura significante en el plano ideológico, ideológico, es investigar el principio de organización a partir del cual una clase construye su discurso y a través del cual cual convi convier erte te en proy proyect ecto o común común su proye proyecto cto partic particula ular, r, enmasc enmascara arando ndo su domina dominació ción n al 27 desvincular ese proyecto de las relaciones sociales de producción que lo sustentan . Por otra otra parte la  problemat  problematicidad icidad del método método reside reside en la tentación, en el peligro formalista que subyace al análisis estructur estructural, al, en su tendencia tendencia a encerrar encerrar los textos y a hacer del principio principio de "inmanencia "inmanencia"" no un momento momento táctico táctico del proceso proceso de invest investig igaci ación ón sino sino su clave clave,, con con la consig consiguie uient ntee dificu dificulta ltad d para para establ establece ecerr las relacion relaciones es del texto con su "conte "contexto xto"" histór histórico ico-soc -social, ial, con lo que la huida huida del empirismo resultaría en una nueva forma de idealis mo. Es ese punto el que va a convertir convertir al análisis análisis estructura estructurall en foco de una polémica —marxismo vs. estru estruct ctur urali alism smo— o— cuyas cuyas cara característ cterísticas icas en América América Latina van a ser muy especiales especiales dada la inciden incidencia cia directa directa que las luchas luchas políticas, políticas, la presión presión de los acontecimientos y la urgencia de  propuest  propu estas as práctica prác ticass van a tener tene r sobre el campo teórico empujándolo hacia las dogmatizaciones, dogmatizaciones, las vulgarizac vulgarizaciones iones y los los oportunismo oportunismos. s. Lo que sí es induda indudable ble es que la convergencia convergenc ia del análisis análisi s estructura estructurall con el análisis que sobre la dependencia se estaba realizando realizando en América Latina  posibili tó no sólo un tipo de denuncia nuevo sino que abrió el campo campo de las comunicac comunicaciones iones 28 masivas a un nuevo tipo de investigación . Y a través de de esas investigaciones, investigaciones, en muchos muchos casos inconclusas, "cargadas", deficientes, se fue haciendo inteligible, concreta e impugnable la compleja red de la dominación dominación cultural. No sólo el trasvase de los modelos , la imposición de los valores y las pautas de vida sino la deformación radical a que es ; sometida la existencia social de estos  pueblos. Y se s e empezó e mpezó a sospechar sospechar de los "benefic "beneficios" ios" y la democrati democratización zación que que las comunicac comunicaciones iones masivas aportan. Y se empezó a enfrentar el proyecto político que sustenta al desarrollo desarrol lo tecnológico sea a nivel nivel rural rural o educativo. Y hasta hubo gobiernos que declararon persona no grata grata al Pato Pato Donald y decretaron movilización general contra la invasión por satélite.

3. Producción teórica y producción de sentido sentido "Si no se retiene sino el momento material, es decir el simple cambio de la mercancía por el oro se deja escapar lo que había que ver, es decir, l o que se produce con la forma. Es necesario considera considerarr el proceso proceso entero entero del lado de la forma, forma, del cambio-de cambio-de forma que mediatiza el cambio material en la sociedad". Marx

"No es posible comparar el trabajo del sueño y el pensamiento de la vigilia. El trabajo del sueño no  piensa  piensa ni calcul calcula, a, en forma forma general lo que hace es transformar". transformar".

Freud

27

A. Mattelart. La Mattelart. La ideología de la dominación dominación en una una sociedad sociedad dependiente dependiente  pp 44-54. 44-54. El más completo trabajo de organización bibli ográfica sobre el cambio de perspectiv perspectivaa en la investigació investigación n de comunicación masiva se halla en el ya citado texto de L. R. Beltran:  La investigació investigación n en comunica comunicación ción en Latinoamérica Latinoamérica:: ¿indagación con anteojeras? Ver tamb también ién la bibliog bibliografí rafíaa recogid recogidaa en el el No. 1 de la revi sta LENG UAJE S, Buenos Buen os Aires, Air es, 1974. 28

En la cons constr truc ucci ción ón de una una teor teoría ía crít crítica ica de los los proc proces esos os de comunic comunicació ación n la semiolog semiología ía ha comenzado a jugar un papel clave entre entre los investig investigadore adoress latinoameri latinoamericanos canos.. Pero los los facilismos y los slogans amenazan ya con convertir la propuesta semiológica en una nueva dogmática que permita escapar hacia los textos huyendo de la historia, cuando de lo que se trata es de la travesía por aquel "repensado" que constituye el sentido de la producción tanto en la producción del sentido como del sinsentido.

 — Las La s tramp t rampas as de d e la sospecha sospe cha Hace ti empo la sospecha inició s u trabajo. Freud mina la concien conciencia cia,, Nietzs Nietzsche che la volu volunta ntad dy Marx la "realidad", la historia. historia. La sospecha siguió hasta invadir invadir los signos, hasta que sea el discurso sobre el discurso discurso el sospechado. sospechado. Se acabó la la inocencia: el ojo no ve lo que cre e ver, el lenguaje no no dice lo que dice, el sujeto no es más que diferencia lograda con objetos, y el objeto ya no es lo que está ahí sin más, más, porqu porquee lo que es, es menos menos que lo que significa sig nifica y el significar. signi ficar... .. Todo empezó sin embargo embargo más más atrás, cuando cuando el saber y el celebrar se separaron. separaron. Cuando Cuando se rompió rompió el uno y unas unas cosas cosas empeza empezaron ron a repres represen entar tar a otras, otras, y unos unos homb hombres res a vivir vivir de los otros. otros. Estam Estamos os recogiendo lo sembrado: la paradoja del progreso-fracaso de un pensar que idiotiza porque en lugar de hacer verdad falsea, falsea, la paradoja paradoja de lo clar claroo-os oscu curo ro.. Nues Nuestr traa época época es el fin fin de la evidencia, evidencia, o del disfraz disfraz que da seguridad. El fin de la imposible i mposible humanidad que soñara Occidente tantos siglos. El fin del logos griego y la repartición burguesa de las ciencias —que allí nacía— y de todas las bien ordenadas, claras y distintas reparticiones: hasta aquí la política, allí la economía, más acá el arte, detrás la ética, esto es filosofía, esto otro ciencia, la materia es distinta de la forma, la práctica nada tiene que ver con la teoría, esto es la tierra, aquello el cielo, estos los buenos y los otro otross los malos. malos. Vivim Vivimos os —o asistim asistimos— os— al nacimiento, nacimiento, o mejor mejor a la fundació fundación, n, de una nueva episteme, o en todo caso a la disolución de la vieja. La sospecha ha cumplido. El problema es que todo esto lo leemos, lo hemos leído, lo seguim seguimos os leyendo leyendo.. Es la sospech sospechaa escrita-leída. escrita-leída. Escrita por unos y leída por otros. De todas formas, el círculo: la sospec ha que mina los signos trabaja trabaja desde ellos, contra ellos ellos y con ellos. ellos. Las palabras-s palabras-sospe ospecha cha siguen siguen siendo siendo  palabras.  palabras. Y existe un terrorismo terrorismo de las palabras, incluidas las palabras-sospecha. Resultado: el retorno de las dicotomías, el retorno de la evidencia. La sospecha sospec ha que en lugar de fecundar esteriliza, esteril iza, que en lugar de producir, consume. Portadoras de la nueva verdad, salvadoras, las nuevas palabras palabras se cargan con la magia del fetiche. Máxime cuando cuando esas palabras han nacido y crecido bien lejos, lejos, cuando no se han vivido los dolores de su generación y nos llegan ya hechas, todas li mpias y brillantes, tantas tantas veces veces ya ya muertas. muertas. Los cadáve cadáveres res han sido uno de los más grandes fetiches de la his toria. Que nadie se confunda. confunda. No estamos convocando convocando a ningún trasnochado nacionalismo, nacionalismo, a ninguna ninguna nostalgi nost algiaa ni purismo. puris mo. Estamos sospechando de las modas modas y los slogans. Estamos sospechando de las de las modas modas y los slogans. slogans. Porque Porque nada hay más contrario contrario a la ciencia —ni más parecido— parecido— que las  palabras  palabras hac hacien iendo do las las vec veces es de de conc concep eptos tos,, los los slog slogans ans suplie supliend ndo o al difíc difícil il y largo largo proceso proceso de conocer. conocer. Ni estamos estamos oponiendo oponiendo el leer al escribir. escribir. Estamos Estamos intentando intentando plantear plantear un problema, problema, el de una lecturaescritur escrituraa consum consumo, o, y la necesidad necesidad de una lectura-e lectura-escri scritur turaa producción. producción. Es el problema de una universidad-mercado, es la necesidad necesidad de una universidad-fáb universidad-fábrica. rica. Las palabras pueden pueden chocar, no importa. Lo importante es el problema problema y la necesidad que encierra. Romper Romper con la lectur lecturaa o escrit escritura ura-co -consu nsumo mo es romper romper con la ilusió ilusión n de la inmedi inmediate atez, z, de la transparencia, transpare ncia, y con una concepción concep ción de las teorías en cuanto objetos mágicos. En la construcción construcción de esas ruptur rupturas as está empeña empeñada da actualme actualmente nte la semiolog semiología. ía. Porque más acá y más allá del espacio teórico que la semiología inaugura —las prácticas significantes— está el debate que su irrupción  plantea a las ciencias sociales. El proceso de articulación de los modelos —lingüístico, económico,  psicoanalítico-— que está en e n la base de su propia constitución en cuanto ciencia, sólo es posible a  partir de una crítica, de un auto-análisis de los modelos modelos mismos. mismos. Porque Porque no se trata de buscar  buscar  analogías analogías entre lo" lingüístic lingüístico o y lo económico económico,, entre lo económico económico y lo sicoanalític sicoanalítico. o. Las analogías analogía s abund abundan, an, son demasiad demasiado o fácile fáciles. s. Porque Porque en última últimass todo todo queda queda igual: igual: las relacio relaciones nes son  puramente  puramen te externas. extern as. Desde una perspectiva de compartimientos estancos sólo queda la amalgama amalgama y el mecanicismo causalista. De ahí que la constitución de la semiología semiología aparezca como como amenaza a no  pocas seguridades seguridades y cert ezas. eza s. Su trabaj tra bajo o sobre sobr e el signo, sig no, o mejor mejo r sobre sobr e el trabajo de los signos,

es de plena crítica radical de la mercantilización de las teorías, de los discursos científicos en su  pretendida  pretendida auto-validez. auto-validez. Plantear la pluralidad de niveles que, como pluralidad de formas de trabajo significante, laboran cualqui cualquier er tipo de texto texto es romper romper a la vez vez el espejism espejismo o de la refer referenc encia ia inmedia inmediata ta y unívo unívoca ca a la "realidad" "realidad" —empirismo— —empirismo— y la ilusión de revelar revelar la oculta totalidad de sentido que el discurso realiza —  ideali idealismo smo—. —. El alcanc alcancee epistem epistemoló ológico gico de la semiol semiologí ogíaa apena apenass comien comienza za a ser compre comprendid ndido. o. Porque desde una concepción dogmatizante de lo científico es imposible aceptar esa irrupción que  pone en tela tela de juici juicio o tanto tanto la propied propiedad ad priva privada da que que ejerc ejercee cada cada cienc ciencia ia sobre sobre su objeto objeto teóric teórico o como como la coherencia puramente lógica que auto-valida el discurso. Todo trasvase de conceptos además del peligro de extrapolación corre el riesgo de arreglar la realidad. El riesgo riesgo lo ha corrid corrido o la semiolog semiología ía en lo que se ha llamado su primera primera fundación fundación a partir partir de un modelo lingüístico dominante y acrítico. Pero a tiempo se se cayó cayó en cuenta. cuenta. Y paradójicam paradójicamente ente es en el momento momento en que se rompe rompe con el fácil fácil "todo "todo es lengu lenguaje aje"" que que un antis antisem emiotic ioticism ismo o larvad larvado o o declarado declarado comie comienza nza a funciona funcionar. r. Porque Porque —habrá que repetirlo— repeti rlo— una cosa es trabajar con c on analogías y otra muy distinta es desfondar la pretensión teórica poniendo al descubierto el trabajo ideológico que penetra los textos, cualquier clase de textos, controlándolos. Plantear la lectura como actividad, como trabajo, como proceso de producción significante sólo es  posible  posible si las diversas diversas "escrituras", "escrituras", sean científicas, científicas, literarias literarias o artísticas, artísticas, son asumidas asumidas en su hacerse, en su transformarse permanente. La fetichización de lo teórico teórico no es sino un ejemplo ejemplo de esa negación negación al proceso, de esa ocultación de las condiciones de producción, o de esa afirmación de "lo que son las cosas" que que tiene su raíz en el positivismo positivismo más vulgar. Desde ese cielo de los "valores" "valores" que simulan cambiar para que todo siga igual es desde el que nos llueven las palabras-tabú con su aptitud para resolver los problemas sin plantearlos, con su carga de pereza mental disimulada malamente tras una retórica que nada produce por más moderna o radical que suene. La semiología también también ha secretado su retórica, retórica, y son justas muchas muchas reticencias en la medida en que sospechan sospechan de la moda. Pero lo que en últimas causa tanto alarido y tanta confusión es otra cosa; es el intento de trabajo teórico, la  producción teórica que la semiología exige. ¿Y no será por eso que la semiología semiología exaspera? exaspera? ¿O será que las teorías teorías son plantas plantas que sólo crecen en las metrópolis metrópolis y que nuestra nuestra tarea —según la división internacional del trabajo— es aplicarlas?

 — La L a dest d esterr errito itoria riali lizac zación ión y sus s us escánd esc ándalo aloss Lo que más exaspera a las "mentes claras" es —dicen— ese revolverle economía a la lingüística o  psicoanális  psicoanálisis is a la la econom economía. ía. Chocan expresiones como "economía del deseo", "producción deseante", "productividad del texto", "lenguaje "lenguaje de la mercancía" mercancía",, "semántic "semánticaa del deseo", "terrorism "terrorismo o del código". código". Habiendo Habiendo hecho hecho la crítica al uso consumista de esas expresiones intentemos calar en su rechazo. La semiología no se agota en la vigilancia epistemológica, e inaugura un espacio de conocimiento que más que un objeto nuevo es un viejo objeto problematizado en su evidencia o en los aspectos sobre los que la evidencia sigue trabajándolo. trabajándolo. No es la semiología la que ha operado la universal semantización de nuestra nuestra sociedad sociedad ni la que viene viene a revolver revolver unas cosas cosas con otras. otras. Antes de ser   problema teórico, el trabajo de los signos es un problema "social"; es en la realidad, que la economía, el deseo y el lenguaje están revueltos. Lo que sí hace la semiología es abatir abatir fronteras para hacer hacer posib posible le la emerg emergen encia cia de una una prob problem lemáti ática ca que, que, o ha sido sido sólo sólo rozada rozada,, o no había había sido sido aprehendida en su especificidad: la producción significante abordada hasta hace muy poco de una manera mística mística o crasamente crasamente empírica. empírica. La irrupción de esa problemática en el campo teórico va a afectar a todas las ciencias que de cerca o de lejos tienen que ver con el proceso de la producción y el intercambio intercambio de signos, signos, es decir, a las ciencias sociales sociales en su conjunto. La respuesta espontánea o calculada de esas ciencias ha sido la normal, normal, erigir sus fronteras fronteras y defender su feudo, e intentar inte ntar alargar  sus soluciones soluciones para para darle cobijo cobijo al intruso. Sin caer en cuenta, o sin querer admitir, admitir, que son sus  propios presupuestos los que quedan afectados por la nueva problemática. problemática. Problemática que, repetimos, no ha inventado la semiología pero cuya emergencia a nivel teórico intenta hacer posible.

Pero son demasiados fetiches a enfrentar, desde la privatización del inconsciente o la reducción funcionalista funcionalista del Edipo en psicoanáli psicoanálisis sis a la pseudopseudo-dial dialéctic écticaa con que es trabajada trabajada la metáfora infraestructura-superestructuraa en tanto discurso "marxista". infraestructura-superestructur Las ciencias sociales tienen poca experiencia de crisis. Su desarrollo –pese a la permanente polémica entre entre posit positivi ivism smo o y dialéc dialéctic ticaa- no ha conoc conocido ido los sobres sobresalt altos os que han conoci conocido do las cienc ciencias ias "naturales" ante las problemáticas de la relatividad o la indeterminación. Las ciencias sociales apenas salen de su debate con las ciencias ciencias naturales naturales por el derecho derecho a llamarse llamarse ciencias, ciencias, de su complejo de inferior inferioridad idad.. De ahí en gran gran parte la defens defensaa a ultran ultranza za de lo logra logrado do por por cada una. una. Pero Pero demasiado demasiado cercanas, demasiado "comprometida "comprometidas" s" con los cambios cambios que trabajan a su objeto objeto,, su validez depende de su capacidad capacidad de no dejarse rebasar por la "realidad". "realidad". Y es esa realidad, la historia, la que mueve el terreno y replantea el estatuto y la territorialización de los objetos. Esa desterrito desterritoriali rializació zación n está afectando afectando al estatuto estatuto mismo de la cientif cientificid icidad ad con que desde desde hace hace tiempo se viene trabajando. trabajando. La cientificidad cientificidad ya no puede ser concebida concebida como una característica característica inmanente a un tipo de discurso o de texto, sino como una relación entre texto y contexto, entre el discurso llamado científico y sus condiciones sociales sociales de producción producción y recepción. Definitivamente la cientificidad cientificidad no es una propiedad propiedad de las fórmula fórmulas. s. Y si la semiología incomoda no es por abrirse campo campo como como una cienc ciencia ia más, más, al lado lado de las otra otras, s, sino sino por por esa subv subvers ersión ión que que intro introdu duce cen n expresiones como las anotadas al comienzo del parágrafo, por el trabajo de desestructuración y reartic rear ticulac ulación ión que q ue marcan. Porque lo que se inaugura inaugura más más que una nueva ciencia es una forma forma nueva de trabajo, más que un nombre o un adjetivo es un adverbio: trabajar "semiológicamente" objetos tradicionalmente adscritos a la sociología, a la antropología, a la economía, al psicoanálisis o a la arquitectura. No es el "objeto" en el sentido clásico lo que definirá definirá el método método sino una problemátic problemáticaa explicable, explicable, asible, investigable desde un método entendido no como un recetario recetario de técnicas técnicas sino como una forma compleja compleja —epistemológica, —epistemológica, lógica y semántica— semántica— de apropiación apropiación de esa parcela de realidad. Quizá el antecedente que nos hace comprensible la subversión teórica que estamos planteando sea la "matesis universalis"  universalis" con con que Galileo Galileo inaugura inaugura la perspecti perspectiva va renacenti renacentista sta de la ciencia. ciencia. Lo que se abre paso en el Renacimiento no es tanto una ciencia nueva —la física— sino una nueva forma de ente entend nder er lo lo cien cientí tífico: fico: trabajar "matemáticamente" los fenómenos. De ahí que —resp —respet etan ando do todas las diferencias— nos atrevemos a prolongar la fórmula galileana: si la naturaleza naturaleza está "escrita" matemáticamente, matemáticamente, la sociedad, la historia lo están semióticamente. semióticamente. La fórmula tiene tiene sentido sentido si la la relación naturaleza-histori naturaleza-historiaa es leída desde una perspectiva dialéctica, desde la que la oposición ciencias naturales/ciencias naturales/ciencias sociales queda sin piso. Porque la naturaleza es ya historia y la matemá matemática tica no es sino un modo modo de trabajar trabajar los signos, una de las prácticas significantes.

 — Comunicación y significación significaci ón Uno de los territorios que más directamente se ha visto afectado por la emergencia de la nueva  problemática  problemática es el del del estudio de los procesos procesos masivos masivos de comunicació comunicación. n. Hasta hace poco las recetas estaban claras de parte y parte. Del lado “positivista”, reducción reducción de los procesos de comunicació comunicación na su dime dimens nsión ión pragm pragmátic ático-t o-técn écnica ica:: neutra neutralida lidad d ideoló ideológica gica,, causali causalidad dad teóric teórica, a, efecto efectoss social sociales es fatalmente benéficos, esto es, expanden "la cultura" llevando sus "beneficios" hasta los grupos más marginados marginados de la sociedad, sociedad, incitan a la participación, participación, democratizan democratizan aceleradamente la sociedad. Del lado "marxista", "marxista", reducción reducción a la dimensió dimensión n ideológic ideológica-ne a-negativ gativa: a: instrume instrumentos ntos de reprodu reproducción cción ideológica de la clase dominante no son sino reflejo de la infraestructura económica a la que sirven fatalmente fatalmente alienando a las masas. Con una aclaración aclaración,, y es que si los medios son lo que son y hacen lo que hacen es porque están en manos manos de la clase dominante, pero cuando cambien de manos entonces sí que que estarán al servicio del pueblo. pueblo. El problema es de uso. El funcionalismo-instrumentalista que atraviesa sosteniendo ambas posiciones comienza a ponerse en claro. Y lo que ese funcionalismo oculta, impide pensar, es precisamente el trabajo específico que se produce produce en los procesos procesos masivos masivos de comunicación, comunicación, trabajo que tanto la noción de "técnica" como esa noción noción de "ideolog "ideología" ía" escamote escamotean. an. Porque Porque en ambos ambos los proceso procesoss son reducido reducidoss a los los "instrumentos", a las herramientas (y tan herramienta es, desde esas posiciones, la técnica como la ideología) y sus "efectos", y en ambos herramientas y efectos son inocentados fatalmente, ya sea a

través del idealismo positivista que escinde lo social en compartimientos incontaminados, o de un ideali idealismo smo pseudo pseudo dialéctico dialéctico que sigue sigue soñand soñando o con el valor valor de uso soterrad soterrado o bajo bajo el valor valor de cambio. En últimas lo que que no se quiere ver o se olvida es que lo "mercantil" no es algo que les pase a las cosas sino s ino a las relaciones sociales, y que la "forma mercancía" de la comunicación comunicación masiva, masiva, donde ella ella se inscrib inscribe, e, es en las condic condicion iones es mismas mismas de producci producción ón del todo todo social social.. Porque Porque el valor de cambio no es algo exterior, posterior, añadido al producto sino la forma misma de su producción. Y entonces lo que pasa en la comunicación masiva no es el simple reflejo funcional funcional y fatal fatal de lo que  pasa en otra otra parte, parte, esa otra otra parte parte como como instancia instancia separada separada y todo poderosa poderosa es es una entidad entidad tan metafísica metafísica como como la idea platónica platónica.. Y de lo que se trata trata en los proceso procesoss llam llamad ados os de comun comunic icac ació ión, n, de información, culturales o como se quiera, es de la producción histórica-social de la significación y no de una mera mera reproducc reproducción. ión. Significa Significación ción que que posee una materialidad histórica concreta y una forma no añadida, ni refleja refleja,, sino la que se produce produce desde una determinad determinadaa racion racionalid alidad, ad, la de la mercanc mercancía ía en nuestra nuestra socieda sociedad d que domina domina conform conformando ando tanto los objetos como los mensajes  porque lo que codifica y domina son las relaciones sociales. Si la semiología ha concentrado una gran parte de su trabajo en el campo de los procesos de comunicación no es porque el tema esté de moda sino porque la problemática que en él emerge es históricamente un espacio estratégico para pensar las contradicciones desde las que se produce y reproduce nuestra nuestra sociedad. sociedad. Cierto que hay un idealismo del signo que reduce los procesos sociales sociales a  juegos  juegos de estruc estructura tura.. Pero Pero no es de eso que que aquí aquí se trata sino de la posibil posibilidad idad de desmon desmontar tar cualquier  cualquier   proceso  proceso de producció producción. n. Y de lo que se trata trata en esa lógica es de las operacion operaciones es y los mecanismo mecanismoss sociales a través de los cuales se engendran las significaciones desde las que los grupos, las clases, las formaciones sociales viven su experiencia histórica, tanto su trabajo como los lenguajes con que dan cuenta de él. La problemátic problemáticaa que la semiología semiología hace emerger emerger incomoda incomoda de lado y lado. Porque replantea replantea los esquemas oficiales. Tanto el esquema laswelliano laswelliano de la fuente-emisor-m fuente-emisor-mensaje-recepto ensaje-receptor-destinatario r-destinatario que en su "inocente" lineariedad nos quiere hacer creer que todos los actores del proceso están a la misma altura, en igualdad de condiciones, condiciones, ocultando ocultando la dominación dominación que el emisor ejerce desde el código como fuente de poder: "porque lo que es omitido en la estrechez de la moderna teoría de la información es que no puede hablarse de código sin que este sea ya el código del Otro; así que es de otra cosa de lo que se trata en el mensaje ya que es en él que el sujeto se constituye constituye y entonces entonces es del otro que el sujeto recibe recibe el mensaje mensaje mismo que él él emite" (Lacan). (Lacan). Como el esquema infraestructurasuperestruc superestructura/p tura/produc roducciónción-refle reflejo jo que, convertido en dogma, moraliza los procesos idealizando los "sujetos colectivos" (tanto los dominantes como los dominados) a los que dota de una conciencia y una voluntad voluntad a las que dócil dócilme mente nte respo respond nderá erán n las herramie herramienta ntass que que la "histo "historia ria"" pone pone en sus sus manos: "No pudiendo concebirlos como un nuevo potencial de fuerzas productivas, los medios, el dominio dominio de los los signos signos y la comunicación, se convierte en un misterio social para la 'izquierda' 'izquierda' que se debate debate entre entre la fasci fascina naci ción ón y el desp desprec recio: io: (... (...)) cons consec ecue uenc ncia ia del del idea ideali lism smo o nostá nostálg lgic ico o de lo inf infrae raestru struct ctur ural al y su alerg alergia ia teóric teóricaa a todo todo lo que que no es produ producci cción ón 'mate 'materia rial' l' y trab trabaj ajo o 'productivo'" (Baudrillard). Es curioso que ambas posiciones coincidan en seguir defendiendo la palabra "información" como nombre para par a los procesos proce sos de comunicación masiva. Y con la "información" es toda toda la mitología de de la "objetividad" "objetividad" con la que se estrellan. estrellan. Y frente a la la que la manida noción de "manipulación" "manipulaci ón" no hace sino emborronar emborronar de psicologismo psicologismo todo el problema. problema. Pseudoconcepto Pseudoconcepto de "manipulación" "manipulación" en el que curiosamente curiosamente coinciden ambas posiciones. posiciones. Porque sólo si el lenguaje, cualquier cualquier lenguaje, hablado, hablado, escrito, audiovisual, es pensado como espacio de un trabajo social cuyas condiciones son ocultadas  por ciertas operaciones operaciones de ese mismo trabajo, sólo entonces el mito estalla. Porque entonces entonces no son las "subjet "subjetivi ividad dades" es",, las buenas buenas o malas malas intencio intenciones nes,, las artima artimañas ñas del emisor lo que queda al descubierto sino la racionalidad codi codifi fica cant ntee de un sistem sistemaa que que se objeti objetiva va,, ese ese sí, sí, en forma formass y estructuras estructura s de significación que conforman cualquier tipo de mensaje. Y si las informaciones informaciones alienan no es porque "engañen", no es porque "detrás" está el informador de pervertida conciencia que quiere engañar, engañar, sino porque las informacio informaciones nes están trabajadas por el mismo mismo código código desde el que se  produce la publicidad publicidad de los misiles misiles o los los cosméticos cosméticos.. El sujeto sujeto no habita habita en en la concien conciencia cia sino sino en ese ese "inconsciente" desde el que el código trabaja tanto las necesidades que el mercado vocifera como los

deseos deseos que pujan por desborda desbordar, r, por estallar los márgene márgeness con que el cuerpo social controla controla,, domestica, codifica codifica la libido. libido. La racionalidad es la misma.

*** Retomemos Retomemos la sospecha. sospecha. Y retomémosla retomémosla en su punto crucial: crucial: la sospecha que mina las palabras.  Nunca antes el lenguaje fue objeto de tanto estudio. Porque nunca antes fue tan socialmente  problema.  problema. Normalmente Normalmente el lenguaje se disuelve disuelve en la operación misma a la que "sirve". Hablado Hablado o escrito escrito el lenguaje se da como herramienta. herramienta. ¿Qué pasó entonces entonces para que se cargara cargara de la densidad que hoy hoy tiene? tiene? ¿Por qué qué perdió perdió su humilde humilde carácter carácter de de herramie herramienta? nta? Porque Porque nunca nunca lo fue. fue. Al disolverse, al ocultarse, lo que el lenguaje lenguaje oculta oculta es su trabajo. Frente Frente a los que repiten día a día que la técnica es neutra, que la técnica es limpia, inocente, que lo malo es el uso..., uso..., la sospecha sospecha repite: repite: la técni técnica ca traba trabaja ja y nos trabaja, trabaja, la técnica técnica nos usa. usa. He ahí la razón razón práctica práctica y teórica teórica por la que es impos imposibl iblee seguir seguir estud estudian iando do el lengua lenguaje je corno corno puro puro medio medio de comun comunica icació ción n y es neces necesar ario io investigarlo como trabajo clave de la producción significante. significant e. He ahí por qué planteábamos al inicio el problema del consumo de palabras, de la lectura-escritura consumo y un ejemplo de ese trabajar  semiológicamente semiológicamente adscrito a la lingüística. Si la sospecha es crucial en este punto es porque estamos est amos criticando al lenguaje lenguaje con con lenguaje. lenguaje. Porque todo consu consumo mo es una forma forma de producción y toda producción producción una forma de consumo. consumo. Y esto no es  jugar a la confusión, como pensarán las mentes claras, esto no es jugar "con" las palabras palabras sino descubr descubrir ir cómo cómo ellas ellas juegan juegan y sus contrad contradicc iccione iones, s, desmitif desmitificar icarlas las para para impedir impedir que se tornen tornen absolutas. absolutas. Porque Porque sólo si en ellas labora un proceso proceso de contradicción permitirán hablar de las otras contradi contradiccion cciones. es. El lenguaje no habita otro mundo mundo que el nuestro nuestro y es de ese mundo mundo impuro impuro y conflic conflictivo tivo que están hechas hechas las palabras. palabras. Sólo entonces entonces será posible posible compre comprender nder la pseudo pseudo  producción  producción de tantas tantas producciones. producciones. Porque en las teorías teorías pasa algo parecido parecido a lo que sucede en esas fábricas que se limitan a ensamblar. Bucear Bucear en el estatut estatuto o de lo teóric teórico o es ingrato ingrato y difícil difícil.. Irrem Irremediab ediablem lemente ente se nos acusará acusará de teoricistas. teoricistas. Tanto más fácilmente fácilmente cuando la tradición es de pura aplicación aplicación o de repetición repetición llana y simple. simple. Pero exigirle exigirle a la Universidad Universidad producció producción n teórica no puede hacerse hacerse sin poner en crisis el estatuto estat uto que lo científic cie ntífico o posee en en su interior. ¿Habrá que recordar recordar lo escrito? escrito? La cientificidad cientificidad no es una propiedad de las fórmulas o los textos sino una relación con ese irreductible irreductible "exterior" "exterior" que es lo social. Porque producir producir ciencia ciencia es produci producirr conflictos, conflictos, no hay más más que leer leer la historia. ¡Extraña fábrica!

II. De la transparencia del mensaje a la opacidad de los discursos Primero fue la operación de desbroce y de señalamiento de un lugar estratégico para el análisis social. Pero la misma necesidad de acotar, de deslindar el nuevo campo, de defender su especificidad, unido a la precariedad teórica y metodológica —los préstamos y las extrapolaciones— llevaron en no  pocos casos a pretender la comprensión de los procesos de comunicación/signifi cación cació n desde aquella "autonomía de la lengua" que la operación saussuriana le planteara a la lingüística como condición para convertirse convertirse en ciencia. Romper con esa ilusión inmanentista inmanentista ha exigido comenz comenzar  ar  a explicitar las relaciones de articulación del análisis de los discursos con los otros dos niveles articulación ión reside, reside, de una una parte, parte, en mirar las básicos del proceso social de la massmediación. massmediación . Esa articulac condiciones sociales de producción no como variables exteriores a los procesos de sentido sino como como constitut constitutivas ivas de esos proceso procesos. s. Y viceve viceversa, rsa, no hay economía economía que escape escape a la dimensión dimensión significante. Desde esa perspectiva se hace hace superar tanto una concepción concepción instrumentalista instrumentalista para la que los los medios medios en en sí mismos no tendrían espesor ni materialidad histórica, como aquel la idealist i dealistaa concepción concepción de los discursos discursos para la que las luchas luchas sociales sociales acaban reducid reducidas as a luchas luchas entre discursos. De otra parte, parte, comienza comienza a abrirse abrirse camino camino el estudio estudio de una “gramática” “gramática” del consumo: los modos de ver como formas de lectura inserta inserta en la textura textura misma misma del discurso. discurso. Los cuatro cuatro textos que siguen dan cuenta, así sea de manera incipiente, incipiente, de esa otra “dob “doble le articulación”. articulac ión”.

1. Presupuestos Pres upuestos a una teoría crítica c rítica del discurs discursoo de la massm massmediaci ediación ón Es necesar necesario io comenz comenzar ar por aclarar aclarar de qué se trata. trata. Y decir, decir, en primer primer lugar, lugar, que no se trata de explicar el acontecimiento por palabras palabras ni de reducir reducir la comunicación comunicación a lenguaje lenguaje.. No se trata de reducir la historia al discurso, sino de leer el discurso, el discurso de los medios masivos en este caso, como acontecimiento. acontecimiento. Ya que el discurso, como como ha escrito Foucault, "no es simplemente aquello aquello que traduce las luchas o los sistemas de dominación, sino aquello por lo que y por medio de lo cual se lucha, lucha, aquel poder poder del que quiere uno adueñarse". adueñarse". Quizá sólo entonces entonces podamos comenzar comenzar a comprender en profundidad, el proceso de dominación que viene del monopolio de la palabra, la gestación de esa "cultura del silencio" que ya Martí denunciaba en  Nuestra América. América. Esa misma misma cultura que Paulo Freiré en su  Pedagogía  Pedagogía del oprimido articula explícitamente explícitamente al discurso del Poder, "poder de los señores de la tierra, de los gobernadores gobernadores de los capitanes, capitanes, de los virreyes. virreyes. Vivimos Vivimos nuestro nuestro perío período do colonia coloniall casi siempr siempree impedidos de crecer, crecer , impedido i mpedidoss de hablar". hablar ". Es esa misma cultura de la sumisión y del silencio la que transformada, con otras formas, continúa moldeando la vida y dominando dominando la existencia desde esos nuevos procesos procesos de "comunicación" en los que la palabra sigue estando de un lado y el silencio del otro, en los que, mejor que nunca, se ha logrado logrado hacernos hacernos sentir como liberación liberación lo que nos esclaviza. esclaviza. Sobre Sobre ese discurso discurso que continúa continúa escamoteando la historia, haciendo aceptable la impostura y saqueando los sueños es sobre el que trabaj trabajaa lo que sigue. sigue. De eso se trata trata.. Y la teoría teoría no es entonc entonces es más que que una herramienta herramienta para desmontar la estructura y el proceso en que se constituye ese discurso, para que deje de ser algo extraño, mágico, algo que no sabemos sabemos de donde viene o cómo cómo actúa. Para que comprendamos comprenda mos que si nos moldea y nos oprime es desde dentro, desde la complicidad que con él mantiene nuestro sistema cultural y nuestro imaginario; esa tupida red de mitos antiguos y modernos de la que estamos hechos, esa trama trama de imágenes desde la que trabajamos trabajamos y deseamos. deseamos. Porque es ella, esa red, esa trama, la materia prima de que está hecho el discurso de la massmediación, la materia prima con que el Poder fabrica su discurso. Pero entendámonos: no se trata del discurso que pronuncia el Poder, ni de la semántica oficial oficial de los  políticos,  políticos, sino de ese otro discurso que trabaja cualquier cualquier materia significante visual o sonora, cuyo anál análisi isiss cons consist istee en descu descubr brir ir las opera operaci cion ones es a trav través és de las cuales se constituye y realiza el control. cont rol. Un anál a nálisi isiss que qu e consiste en oponer oponer lo que habla habla en en el discurso contra lo que que dice. dice. Lo que en él se habla, esto es los conflictos sociales, políticos, económicos, económicos, libidina libidinales. les. Contra Contra lo que dice, dice, esto es la retórica de la felicidad, del del bienestar, de la libertad, de la paz, paz, etc. Oponer lo que habla en el discurso discurso de la massme massmediac diación ión a lo que dice es descubrir descubrir lo que censura censura y niega, niega, lo que impide impide

nombrar, pero contra lo que no tiene más remedio remedio que actuar. De esa manera la negación negación que opera opera resulta resulta siendo afirm afirmación ación de lo negado. negado. Y lo que es negado fundamentalmente fundamentalmente son los gritos de ese otro, los que proviene provienen n del silencio silencio de los "recepto "receptores" res",, mejor mejor dicho de los dominados, y que lo obli obliga gan n a exce excede ders rse, e, a perd perder er el contr control ol,, a recurrir recurrir a una retóric retóricaa que lo expone expone y lo torna torna vulnerable. La teoría que buscamos no es pues aquélla que, atrapada en la infancia del discurso, padece la ilusión de una autonomía falaz que le lleva a pretender explicar los procesos de la comunicación masiva por  fuera de los conflictos conflictos históricos históricos que los engendran y los cargan de sentido. Sino aquélla otra capaz de articular la investigación sobre el discurso a la de sus condiciones de producción, de circulación y consumo. Es decir, una teoría que comience a establecer relaciones no mecánicas entre los diferentes niveles del proceso comunicativo: de la producción de los discursos con el régimen de propiedad de los medios, con los diferentes tipos de relación que con ellos establecen los aparatos de estado, y con las modalidades de decodificación y replica de los distintos grupos sociales a los mensajes recibidos. Pero eso exige replantear no sólo las respuestas que durante cierto tiempo tiempo nos hemos venido dando, sino incluso las preguntas desde las que interrogamos y formulamos los problemas.

 — El discurso discurs o como espacio de prácticas p rácticas En el campo campo de la invest investiga igació ción n de los discurso discursoss las nuevas nuevas pregunta preguntass comienza comienzan n por exigir exigir un replanteamiento de la perspectiva aportada por la lingüística y la semiología, y más concretamente de la reducción del discurso de la comunicación a relaciones de significación, de lengua, de estructura. Porque lo que esa reducción impide pensar es el hacerse del discurso y su trabajo, y por ende su inserción en el proceso proceso histó histórico rico y la inserción inserción en él del sujeto pulsional. No se trata de desconocer ahora el aporte de la semiolingüística al permitir romper con una concepción de lo ideológico que lo reducía a "ide "ideas as", ", a "rep "repre rese sent ntac acio ione nes" s".. Es indu induda dabl blee que que la conc concep epci ción ón saus saussu suri rian anaa dé la unidad unidad significante-significado obligó a plantearse de alguna manera manera la materia materialid lidad ad signifi significan cante te de los  procesos,  procesos, y que su concepto concepto de "valor" "valor" lingüíst lingüístico ico permitió permitió romper romper con la mecánica mecánica positivista. A lo que que me refie refiero ro es a la la imposib imposibilida ilidad d de reduci reducirr el discur discurso so a lo l o lingüí l ingüístic stico. o. El planteami plant eamiento ento tiene como base una doble sospecha bien antigua: la de que el lenguaje no dice lo que dice, y la de que el decir no se limita al habla; que el lenguaje dice más, mucho más de lo que cree decir, y que muchas cosas hablan aunque no sean lenguaje. lenguaje. Modernamente Modernamente,, los "maestros" han llevado la sospecha más lejos, han hecho de ella un modo de lectura de la profundidad; o mejor, de los "bajos fondos" fondos" del lenguaje y los discursos. Marx a propósito propósito de la moneda moneda y la mercancía, Freud con respecto a los síntomas histéricos, los lapsus y los sueños, Nietzsche sobre las máscaras de la la civil civiliza izació ción n y la moral. En últimas, es la lectura del trabajo ocultado, de la interpre interpretació tación n velad veladaa que es cada signo signo,, de la interpre interpretac tación ión que que imponen las palabras, de la violencia que hacen a las cosas mientras se encubren bajo el manto inocente de la designación o de la referencia, de la signifi sign ificaci cación. ón. En e se mismo tono de lectur lectura, a, Barthé Barthéss se ha atre atrevid vido o a escribi escribirr hace hace poco: poco: "no vemos el poder que hay en la lengua porque olvidamos que toda lengua es una clasificación, y que toda clasifi cl asificación cación oprime op rime menos por lo que no permite permite decir que por lo que obliga a decir". Si el disc discur urso so es poder lo es porque produce, y pr oduce porque en él hay mater materia ia y hay hay trab trabajo ajo,, y no sólo signos, estructuras de significación. Frente al idealismo —discurso sin materia, sin objeto-—, frente al materialismo —discurso sin sujeto  —, planteamos planteamos el discurso-práctica: discurso-práctica: lugar en que la lengua se carga y es cargada de historia y de  pulsión. Y no nos estamos refiriendo al discurso "literario" sino al discurso discurso de los medios medios masivos. masivos. Lo que implica romper con esa reciente mitología de la Escritura que, oponiendo tajantemente el "lenguaje de la comunicación" al "texto poético" hace de éste el lugar de la producción, producción, reduciendo aquél al de la mera reproducción y el sucio comercio. Claro que hay diferencias, pero también equivalencias. Y ubicando el trabajo y la producción del lado de la "escritura" se sigue anclados en la misma trampa: la palabr palabra, a, el lenguaj lenguaje, e, los discurso discursoss de la comuni comunicaci cación ón son conden condenado adoss como como mera, mera, pasiva pasiva transmisión transmisión de la información. información. Y así se reintroduce la coartada que consiste en inocentar el discurso de la comunicación, comunicación, ahora ahora ya no desde la mitología mitología positiva positiva de la neutralidad neut ralidad sino desde su aparente apa rente

contrario. contrari o. Frente a ello, nuestra propuesta propuesta es que al "hundir" "hundir" el discurso masivo masivo en el espesor espesor de las las mate aterias rias y los los cuer cuerp pos, os, y al hace hacerr emer emerg ger sus sus bajo ajos fondos, fondos, con lo que nos topamos verda derame nte es con la histor historia, ia, la hist histor oria ia hecha hecha discu discurso rso del del poder poder y del deseo. deseo. No de un  poder y un deseo abstractos sino de esos bien concretos que amordazan y luchan en la cotidianidad de nuestras masas latinoamericanas.

 — La cuestión cue stión del Poder Pod er Las ciencias del lenguaje —como todas las ciencias— parcelan parce lan y dividen. dividen. Y esa parcelación, parcelación, que es exigencia de la "objetividad", es ya ya una forma de control, de domesticación, domestica ción, de neutralización. neutraliza ción. No lo afirmo afirmo en forma forma de lamento lamento sino de simple simple constata constatació ción. n. Y, converti convertida dass en difere diferenci ncias, as, las contradicciones contradicciones son sistematizadas sistematizadas y los conflictos funcionalizado funcionalizados. s. A propósito del lenguaje y los discu discurso rsoss esto esto se traduce traduce en la "incapa "incapacid cidad" ad" de las ciencias ciencias para abordar abordar el problema problema de la relación del discurso al Poder. Poder. El poder poder es algo oscuro, oscuro, algo que que escapa escapa a los esquemas. esquemas. De ahí que hayan sido los poetas y los filósofos los que se han atrevido a abordar la relación del discurso al  poder, y el poder poder que es es el discur discurso. so. Para los los filósofo filósofoss poder poder y discurs discurso o se imbrican imbrican en el problema problema de la verdad: verdad: ese problema problema-nud -nudo o que disfraz disfrazaa y traduce traduce,, desde desde los presocráti presocráticos cos,, el problem problemaa de la relación del del saber con la organización organización de la ciudad, de la Polis. Para los poetas, poder poder y discurso se articulan desde la materialidad misma del lenguaje visto como trabajo, potencia, transformación, cuerpo y placer. Nadie como como los poetas poetas —  poiesis  poiesis es un hacer— sabe lo práctico que es el lenguaje, de la práctica de poder que en él habita y que desde él se ejerce. El discurso es poder, lugar de una lucha específica por el poder. poder. Y esa lucha lucha form formaa parte parte de sus condiciones de producción y de circulación. De manera que estudiar las reglas de engendramiento de lo discursivo es estudiar reglas y relaciones de poder. Es decir, no se trata sólo de que el poder utilice el disc discur urso so com como arma, arma, como como sofism sofisma, a, como como chanta chantaje, je, sino sino de que que el discu discurso rso form formaa part partee constitutiva de esa trama de violencia, de control y de lucha que constituye constituye la práctica práctica del poder. poder. A cualquier cualquier nivel, nivel, desde el dominio familiar y el de la escuela hasta el nivel del poder del Estado. La mejor prueba de d e ello es que el poder ha reclamado reclamado siempre el control control del lenguaje lenguaje y los discursos. discursos. No hay sociedad, sociedad, por pequeña que sea, que no reglamente reglamente la producción y distribución de los discursos. Toda palabra tiene —o puede, tener— tener— "consecuen "consecuencias cias sociales" sociales" y desde ese momento momento el qué, el; quién, el cómo y el con qué, todo el dispositivo discursivo, será objeto de una cuidadosa y constante regula regulació ción n social. social. La regulaci regulación ón de los lenguaj lenguajes es y de los discurs discursos os es una de las claves claves de la organ organiza izació ción n y el "equ "equili ilibr brio" io" de las las socied sociedad ades. es. Lo cual está directa directame mente nte ligado ligado a la legitimación legitimación de la dominación que posibilita posibilita ese "equilibrio" y esa organización. organización. De manera que a su vez el discurso aparece como un espacio social en que se fundamenta toda una serie de  jerarquizac  jerar quizaciones iones en la organizació organi zación n de la autoridad. autori dad. No cualquiera cualqu iera tiene derecho derech o a hablar, habla r, no todos pueden pueden hablar de todo. todo. Hay quienes quienes hablan no para decir decir algo, sino simplemente para garantizar su derecho derecho a hablar y demostrarlo. demostrarlo. Por ejemplo, dado que la posibilidad de mandar, de dar órdenes, exige una relación jerárquica, una autoridad, se pueden dar órdenes con el único objetivo objetivo de afirmar afirmar que que se se posee posee la autoridad. Lo mismo con el interrogar. Como cualquiera no puede puede hacer cualquier tipo de preguntas, preguntas, preguntar preguntar sobre determinadas cuestiones no significa interés alguno alguno por por las respuestas respuestas sino la afirmaci ón del derec ho a inte rrogar. Procedimientos de control, de exclusión, de ritualización de los discursos que atraviesan de  parte  part e a parte la comuni c omunicaci cación ón mas iva, iva , los l os disposi dis positiv tivos os de la l a massme ma ssmedia diación ción.. Pensado así, como práctica, el discurso se carga de volumen histórico. histórico. Ya no es es simplemen simplemente te algo algo que está ahí y que después después,, artific artificiosa iosamen mente, te, hay que tratar tratar de insertar insertar en la histor historia. ia. Porque las prácticas, y entre ellas las discursivas, son aquello en que la historia se hace y se deshace, deshace, avanza avanza o retrocede. retrocede. Pero el discurso discurso se entreteje entreteje a la historia sobre sobre todo haciéndol haciéndolaa acepta aceptable ble.. Y de un modo especial especial en los tiempos tiempos de "crisis" "crisis" como el nuestro, nuestro, cuando los discurs discursos os partici participan pan masiva masivamen mente te en esa forma forma de control control profund o que consis te en hacer  que los pueblos, las masas, acep acepte ten n como como respi respira rabl blee lo que les les asfi asfixi xia. a. J. P. Fay Faye ha investig investigado ado la transformación de los discursos en tiempo de Mussolini y Hitler. Y ha sacado sacado a flote flote las form formas as en que la corrup corrupció ción n de los discurs os penetró los acontecimientos haciendo aceptable la impostura impostura para millones millones de hombres. Cómo en el juego de la circulación circulación de los relatos se fue construyendo ese "cambio de forma", esa reescritura de la historia que

convergió en dos sintagm sintagmas as aparente aparentemen mente te inofens inofensivo ivos: s: "nacion "nacionalal-soci socialis alismo" mo" y "estad "estadoototalitar totalitario". io". Y cómo cómo esa esa “trans-formación “trans-formación”” que que legiti legitima ma y hace hace acepta aceptable ble la impos impostur turaa se efectuó efectuó no sólo a través través y desde los discursos "políticos" "políticos" sino también en los filosóficos, filosóficos, en los literarios, en los jurídicos, en el de la biología, y en el discurso de la ficción tanto como en el histórico. histórico. Todos participaron participaron en la producción producción y circulación del "mensaje" "mensaje" fascista y nazi,  porque  por que todos trabajar trab ajaron on desde el mismo código códi go de poder. poder . La frase fras e con que Faye cierra cier ra la  primera  prime ra parte part e de su investig inve stigación ación explícit expl ícitaa el objetivo, objeti vo, lo que verdaderament verdad eramentee importa al analizar los discursos: “que el relato que da cuenta de la manera como se hizo aceptable la opresión inicia la liberación”.

 — La cuest cue stió ión n del d el deseo des eo Si la cuestión del poder mina la falsa neutralidad del discurso —la que resulta de un mero tratamiento lógico-formal— la cuestión cuestión del deseo deseo lleva más lejos al minar minar la mascara mascarada da de la "objet "objetivi ividad dad"" del del lengua lenguaje je sin sujeto sujeto.. La primera primera tesis sobre sobre Feuerbac Feuerbach h reprocha reprocha al viejo viejo materialismo haberse enredado en el objeto dejando dejando que sea el idealismo idealismo el que desarrolle desarrolle la cuesti cuestión ón del del sujet sujeto, o, el aspe aspect cto o activ activo o y subj subjet etiv ivo o de lo real real,, refo reforz rzan ando do así la dicoto dicotomí míaa sujeto/objeto con con la dicotomía dicotomía actividad/pasividad. Y, sin embargo, el marxismo marxismo vulgar, y aun otros menos vulgare vulgares, s, moderno modernoss e intelect intelectuale uales, s, siguen siguen reprodu reproducien ciendo do la vieja vieja dicotomí dicotomíaa al concebir las prácticas sin sujeto, la historia sin acontecimientos y la ideología sin proceso, libidinalmente muda y aséptica. Es el psicoanálisis el que ha planteado la cuestión del deseo, el que se ha atrevido a plantear la cuestión cuestión del sujeto. Pero, atención, atención, porque porque si el psicoanálisis psicoanálisis aporta aporta a la construcción construcción de una teor teoría ía del del disc discur urso so,, y del del disc discur urso so masiv masivo o en part partic icul ular ar,, es por por haber haber descub descubier ierto to en la constitu constitución ción misma del sujeto sujeto humano —en su capacidad capacidad de asumirse asumirse y nombrarse nombrarse como "yo"— la trama conflictual de lo social. social. Lo que el psicoanálisis aporta fundamentalmente fundamentalmente a una teoría del discurso masivo es su afirmación de que el deseo está radicalmente articulado a la ley de lo " simbólico, al discurso discurso de la cultura. cultura. Y que ésa relación relación no es es algo que venga a añadirse a un sujeto ya ya constituido, sino que forma parte de su constitución. Que lo simbólico, la cultura, forma parte de las condiciones de existencia y de trabajo del sujeto humano. humano. Entonces Entonces la relación del sujeto al deseo y la relación del sujeto al trabajo no son exteriores la una a la otra, es en la imbricació imbricación n de ellas que el sujeto se constituye, constituye, es de su tensión, de su contradicción de lo que está hecho el sujeto. Porque no es desde afuera como lo social reprime, domestica y explota los deseos. El imaginario es ya social. social . Si no, ¿cómo explicar explicar que siendo siendo el el deseo salvaje salvaje sea programabl programable, e, que siendo siendo anticálculo sea comercializable, transformable en necesidad de cosas y en voluntad de aparecer? Lo que tiene que ser repensado entonces es la cuestión que ha estado en la base de una gran  parte  part e de las investig inve stigacio aciones nes sobre Medios masivos: la cuestión de la ideología. ideología . Es necesar necesario io repl replan antea tearr un concep concepto to de ideolo ideología gía que que ha servid servido o al manten mantenimi imient ento o de la oposic oposición ión funcio funcional nalist istaa entre entre inform informaci ación ón y signif significa icació ción, n, entre entre conoci conocimie miento nto y deseo, deseo, entre entre el imaginario imaginario y lo real. Si el "yo" "yo" no es más que re-con re-conocim ocimient iento, o, si el "yo" "yo" es la clave clave de la ideo ideolog logía ía,, se impo impone ne aver averigu iguar ar por por esa matri matrizz del del yo que que es el imaginario, ese lugar de emergencia y trabajo trabaj o del deseo. Se impone i mpone repensar repensar la relació relación n del imagina imaginario rio a lo real, real, no ya como como a un exterior, exterior, no como una ilusión ilusión que se disiparía disiparía al contacto contacto con lo real. El psicoanálisis nos ha demostrado que el imaginario es parte integrante integrante de lo real puesto que es parte constitutiva constitutiva de la materia materia misma del sentido que lo real tiene para los hombres. hombres. Lo cual implica implica que que la presencia presencia del imaginario en el discurso discurso no es sólo a manera de huésped, huésped, de tema o de contenido. contenido. El imaginario no es sólo aquello de que trata un discurso sino aquello de lo que está hecho. Estamos cansados de oír y leer que la ideología está en el lenguaje, pero la mayoría de las veces el modo en que la ideología habita el lenguaje es pensado a la manera del huésped o de la contaminación. Y bien, si la ideología ideología habita habita el lenguaje lenguaje lo es en forma más "primaria" —en el sentido en que Freud habla de escena y procesos primarios— y fundamental: porque el proceso de simbolización, en cuanto codificador originario, es ya un proceso de fetichización que nos trabaja aun antes de que haya "lengua". "lengua". Antes de que sea codificado codificado por la lengua lengua en palabras-signos, palabras-signos, lo simbólico —la ley, la

cultura, el súper yo— ya ha moldeado moldeado el deseo humano inscribiendo sus rasgos en el imaginario. Lo cual implica que el espacio que pone en movimiento la pulsión y el deseo no es un espacio aparte, asocial. Desde Freud Freud sabemos que que el deseo es social social y antisocial, antisocial, nunca a-social. a-social. La pulsión pulsión no es mero instinto sino trabajo del cuerpo, cuerpo, de un cuerpo moldeado por la historia. Y el inconsciente, según Freud, Freud, tiene tiene poco que ver con la propiedad privada que el burgués va a exhibir ante el psiquiatra. psiquiatra. El inconsciente inconsciente es la "huella" del cuerpo, cuerpo, y en el cuerpo cuerpo del desplaza desplazami miento ento,, de la escisión escisión,, de la dislocación y el compromiso que para los sujetos entraña la presión y el control que toda sociedad impone al deseo. Con el inconsciente Freud descubre el papel del discurso como mediación a través de la cual el hombre hombre se arranca arranca a la substancialidad substancialidad y la i nmediatez de lo biológico. Y, acercándonos más al discurso masivo, es toda la problemática del mal llamado "receptor" la que comienza a poder ser planteada por fuera del funcionalismo de "los efectos" y el moralismo de la "resignación del esclavo". La pista nos la da la pregunta de Freud acerca acerca de la contradicción contradicción que vive el "histérico", quien a la vez quiere y no quiere curarse, la pregunta sobre la complicidad del enfermo con su enfermedad enfermedad.. Pregunta Pregunta que podemos podemos traducir así: ¿qué en el dominado dominado trabaja a favor del dominador? dominador? ¿Poniendo ¿Poniendo en juego qué contradiccion contradicciones es la dominación es también actividad y no mera  pasividad en el dominado? dominado? O la traducción traducción que hacen Deleuze y Guattari: Guattari: "¿por qué soportan los hombres hombres desde desde siglos siglos la explota explotación ción,, la humillació humillación, n, la esclavitud, esclavitud, hasta el punto de 'quererla' 'quererla' no sólo para los demás sino sino para sí mism mismos? os?"" Lo que hace hace claro claro esas esas pregu pregunt ntas as es que que sólo sólo si la opres opresión ión es de algun algunaa maner maneraa activi actividad dad del del oprim oprimido ido solo solo si se desm desmon onta ta la comp complic licid idad ad del del domina dominado do con su dominac dominación ión será posible posible romper romper con el vertica verticalism lismo o populis populista ta y comprend comprender  er  realmente realmente que la liberación liberación es problema del oprimido oprimido que es en él donde encuentran las claves de su liberación. La cuestión cuestión del deseo nos posibil posibilita ita plantearno plantearnoss eso. eso. Y comprend comprender er entonces entonces —con todas las consecuencias que ello implica— que el imaginario colectivo es la materia prima con que los medios masivos trabajan, y que en ese discurso de la massmediación el deseo de las masas es amordazado, explotado y vuelto contra ellas.

2. Prensa: la forma-mito del discurso de la información "El público puede creer que hay varios periódicos, pero en definitiva definitiva solo hay uno. Cada cual cual tiene en blanco blanco,, en rojo rojo o en azul la noticia que le envía Mr. Havas".

Balzac

"Si compramos cada día nuestro diario no es sólo para estar informados, es también porque el orden del diario diario (el mito) mito) se hace cargo del desorden del mundo".

O. Burgelin La forma forma que el diario diario impone impone al mundo mundo es la forma forma que nos lo hace consumible: consumible: esa "marca de fábrica" fábrica" con que la racionalidad racionalidad de la lógica mercantil mercantil marca marca la producc producción ión y la circulació circulación n de las noticia noticias. s. Desde Desde su origen origen el dispositiv dispositivo o moderno moderno de la información información estuvo conformado conformado por la expa expans nsió ión n del del merc mercad ado, o, de tal tal mane manera ra que que el proc proces eso o de prod produc ucci ción ón de las las noti notici cias as —la —la transformación de la noticia en producto industrial— se halla en relación indisoluble con el proceso de transformación en "noticia" del modelo modelo industrial de producción producción.. Es en el proceso de circulación circulación donde la necesidad necesidad que la producción tiene tiene de información toma la forma de prensa periódica. Puesto que es en el proceso proceso de circulació circulación n que el valor  se realiza, realiza, y el intercam intercambio bio es tanto más rentable cuanto cuanto más ágil, pues el tiempo es oro. El capital capital tuvo muy pronto necesidad necesidad de informac información ión  permanente sobre todos aquellos fenómenos fenómenos o aspectos de la vida social que incidieran o pudieran pudieran incidir sobre los flujos del mercado, sobre su ritmo. ritmo. Desde los primeros primeros periódicos periódicos (semanarios) (semanarios) de Amberes (1620) (1620),, de Londres Londres (1621), (1621), de París (163l) o de Boston Boston (1690), (1690), sobre el tema militar o  político el comercio comercio imprime imprime su marca, marca, inicia la imposición imposición de su forma. forma. Y de otro lado, la información misma comienza muy pronto a convertirse en objeto de cálculo económico, en actividad económic económicaa "autónom "autónoma". a". Los historiador historiadores es tienden tienden con frecuenc frecuencia ia a separa separarr tajantem tajantemente ente la información información auxiliar de la economía economía de la que es considerada "informac "información ión social". Y sin embargo las dicotomías dicotomías son en este caso aun aun más engañosas. No sólo porque, como como veremos, el proyecto  político liberal liberal que racionaliza racionaliza el desarrollo de la prensa es insepar inseparable able de la organ organizac ización ión económ económica ica

del libre cambio 29, sino sino porque porque es al ritmo del desarr desarrollo ollo de las relacione relacioness de mercado mercado y de sus exigencias —división especializada del trabajo, organización de la temporalidad social, organización  periódica de los correos— que la prensa va adquiriendo adquiriendo su forma. Que durante los años de gestación de la "gran prensa" prens a" será primordialmente primordialment e política. política. En los grandes grandes debates debates políticos políticos del del siglo siglo XVII XVIIII y XIX XIX la prens prensaa se forja forja como como eleme elemento nto fundam fundament ental al de consol consolida idació ción n y avanc avancee de la ideologí ideologíaa liberal liberal y progresis progresista, ta, hasta hasta hacer hacer de la prensa prensa uno de los enclave enclavess más preciad preciados os de la 30 democracia . Portadora Portadora del racionalismo racionalismo de las luces, luces, de la liberación liberación religioso-política, religioso-política, la gran  prensa jugó un papel sin duda fundamental en la lucha lucha contra contra los rezagos rezagos institucion institucionales ales del feudalismo, a la vez que proclamaba, desde su propia hechura, las ventajas del nuevo orden social, del nuevo modo modo de convivir convivir regido regido por la libertad y la tolerancia toleranci a del libre cambio y del laissez faire. faire. Rous Rouson onia iana na,, la doct doctri rina na libe libera rall sobr sobree la pren prensa sa part partee de que que la buen buenaa info inform rmac ació ión n tien tiende de naturalmente a derrotar a la mala, siempre y cuando sea posible el libre juego de la competencia, esto es que cada cual publique publique lo que que quiera y cada cual cual compre la información que desee. desee. Como en el  plano económico, económico, aquí también la salvación salvación proviene proviene de la libertad que representa representa la iniciativa iniciativa  privada  privada frente frente a la coacción coacción e imposición imposición que representa representa la autoridad-estado. autoridad-estado. En manos de la autoridad la información información se transforma automáticamente en propaganda. propaganda. Sólo dejada en manos de los particulares particular es la información es libre y por tanto t anto veraz. Como Como anota anota Burge Burgelin lin 31, desde el punto de vista de de la oferta oferta la doctrina doctrina liberal es una teoría crítica: crítica: sin libertad, la verdad no es posible. posible. Pero desde el punto punto de vista de la la demanda, demanda, la teoría es pragmática: para que la buena información supere la mala es necesario necesario que la demanda demanda la trate mejor mejor que a la mala. Se cree en la tendencia tendencia natural del hombre hacia lo buen bueno o pero esa bon bondad debe ser "ayudada" "ayudada" haciendo que la buena in fo rmac rm ac ió n —McLuh —McLuhan an verá después después en la publici publicidad dad la más "buena "buena"" de las inform informacio aciones—  nes—  disfrute de de algunas ventajas ventajas en el mercado. mercado. La traducción actual de la vieja doctrina doctrina liberal, que aparece sistematizada y sustentada por primera vez en  El Aeropagi Aeropagita ta (Para (Para la liber libertad tad de impr imprimir imir sin autorización ni censura) —el censura)  —el folleto folleto con con que en 1644 John Milton se enfrenta al parlamento inglés  por haber suprimido suprimido la libertad libertad de imprenta— imprenta— ha perdido perdido la ingenuidad ingenuidad pero sigue defendiendo defendiendo una libertad de circulación de bienes y noticias pretendidamente al margen de las leyes de la producción y  por encima encima de las contradi contradiccio cciones nes y los conflicto conflictoss sociales sociales.. La relación vendedor-comprador vendedor-comprador,, disfrazada de relación intersubjetiva entre emisor y receptor, enmascara las relaciones sociales de  producción que marcan al discurso de prensa. En la neutralidad  del proceso informativo tal y como la plantea plantea el modelo modelo liberal "el mercado mercado aparece aparece como como una realidad realidad indetermin indeterminada, ada, como condición de la sociedad y no como producto de relaciones relaciones económicas económicas precisas. precisas. De igual manera manera la comunicación de noticias, el mercado de la información, se describe como necesidad consustancial de un hombre ahistórico" 32. Es la forma la forma del mito suplantando la historia historia e imponiendo imponiendo un sentido. Es la forma-mercancía vaciando lo real de su substancia de trabajo y abstrayéndolo, cifrándolo como valor valor para el mercad mercado. o. Es toda esa operac operación ión la que desap desapar arece ece tras la mamp mampara ara de la libre libre competen competencia cia como único único lugar lugar en que los hechos hechos hablan, hablan, dicen su verdad verdad objetiva objetiva y univer universal. sal... .. verdad sin "ruido", "ruido", verdad sin contexto, exactamente la del mito.

 — Info I nforma rmarr es dar forma form a ¡Los hechos! hechos!,, he ahí el gran gran disfraz disfraz con que que la prensa prensa disimula disimula la forma-mercancía forma-merc ancía de su s u discurso. di scurso. Pero he ahí también también su punto punto más vulnerable. La competencia informativa, informativ a, cuando es algo más que una simple mascarada, prueba bien claramente que el sentido de los hechos es aquél de que se "cargan" en los diferentes relatos, que los hechos no hablan sino convertidos en noticia, esto es puestos en discursos. La prensa demuestra cada día que el sentido no existe sin la forma y que que toda formajes formajes una imposici imposición ón de sentido. sentido. No hay formas formas neutras ni universa universales. les. Hoy la ideología ideología es no sólo la forma sino la materia prima dé la información, ya que de prensa política en su gestación, la que hoy tenemos es ante todo prensa prensa publicitaria. publicitaria. El proceso de concentrac concentración ión 33 y monopolización de la palabra de  prensa comenzó comenzó hace años años y parece parece inconten incontenible. ible. Bajo los efecto efectoss de una verdad verdadera era aplana aplanadora dora que se 29

F. Terrou, "Libertad de publicación y libertad de empresa", en  La información información pp. 42 42 y ss. ss. Ver tambi también: én: J. Habermas Habermas,,  Historia  Historia y crítica crítica de la opinión opinión pública, pública, en especial el capitulo III. 30 N. Will, Essa Will, Essais is sur sur la presse presse et le capital, capital, en espec especial ial el capitu capitulo lo II, II, "Grandeur "Grandeur et et decad ence de la polít ique", pp. 63-69. 31 O. Burguelin, La Burguelin,  La comunicación de masas,  p. 70. 32 H. Schmucler, "Dependencia y política en la prensa argentina", en Comunicación v cambio social , social , p. 227.

sirve sirve del bloqu bloqueo eo a las fuent fuentes es de finan financia ciami mien ento, to, y hasta hasta del sabotaje directo, han ido siendo destruid destruidas as o absorbid absorbidas as monto montones nes de pequeñ pequeñas as empre empresas sas de prens prensaa e inclus incluso o empre empresas sas nada nada  pequeñas.  pequeñas. Tanto la voz que emite e mite desde las agencias internacionales como la que traduce en cada diario es cada cada día más monótona. A partir de los años treinta el número de diarios y revistas fue fue reducido en casi un 35 por ciento. ciento. Francia pasó de 415 diarios en 1892 a 203 en 1946. En Suecia desde 1947 ha desap desapare arecid cido o un periódi periódico co de cada tres. tres. En Italia Italia del 46 al 73 el número número de  periódicos había bajado de 140 a 87. El proceso es aún más claro en los Estados Unidos donde donde el número de diarios pasó entre 1914 y 1967 de 2580 a 1710, mientras el tiraje global aumentaba de 22 millones y medio a 60 millones en ese mismo período. período. Sólo en Nueva York se pasa de 25 diarios a  principios de siglo sigl o a 4 en 1967. Y el número de diari d iarios os dominados domin ados por cadena cadenass pasa pasa entr entree 1909 1909 y 1960 1960 de 62 a 560. 560. Los diarios diarios y revis revistas tas desaparecidos desapare cidos no son so n todos todo s "pequeños "pe queños", ", han ha n desapare des aparecido cido en los últimos últimos años diarios diarios como el 'Chicago Times' y el "World Telegram', y revistas como 'Colliers' y 'Colliers' y 'Look’ . En ese proceso de acaparamiento y enmudecimiento enmudecimiento de la prensa prensa el "proceso técnico" ha servido servido en más de una ocasión de justificación, de coartada. coartada. Ya la introducción del linotipo trajo consigo no sólo un ahorro de tiempo sino una economía de funciones que posibilitó una "administración" más ágil y eficaz. La introducción de teletipo y la computadora computadora transforman transforman no sólo las posibilidades cuantitativas y cualitativas de la composición sino la forma entera de la  producción  producción posibilitando posibilitando que sea la organización organización de empresa empresa a nivel nivel mundial mundial la que se uniform uniformee y adecue a las nuevas exigencias de la lógica mercantil. Concentra Concentración ción de empresas, empresas, extinción extinción de diarios, diarios, uniformación uniformación de contenidos, contenidos, todo ello es regulado regula do por p or el imperio imperi o de la publicidad publicidad,, de la que la inmensa inmensa mayoría mayoría de los diarios diarios dependen dependen para subsistir subsist ir en una medida que oscila entre el 50 5 0 y el 70 por ciento. ciento. Pero la depende dependencia ncia de la la prensa prensa con relación relación a la publicidad publicidad no es sólo problema cuantitativo, de financiación y número de páginas o cantidad de espacio ocupado en permanente desplazamiento de la información, sino cualitativo ya que la prensa va tomando cada día más  su forma. forma. La publicidad pone pone el modelo frente frente al al cual cual la diferencia entre información y propaganda, entre noticia y opinión, tiende a convertirse en mera retórica. Si la publicidad compra (vende, hace vender) la prensa, n o es para dejar a los polític políticos os que la haga hagan n sino para para que que cubran cubran la voz voz que que viene de los grandes monopolios económicos. La información publicitaria se convierte, con el papel, en la materia prima de una prensa cada día más directamente directamente dominada dominada por el discurso discurso de la mercancía. mercancía. "Los publicistas publicistas tienen razón al decir que ello elloss hace hacen n información ya que la publicidad es la verdad revelada de la info inform rmac ació ión, n, el 34 discurso de la mercancía" . Es él el que desde el diario asume el desorden del mundo, nos lo explica, explica , le pon e coherencia, lo transforma en orden. Los "hechos" son lo que dice el el discurs discurso o de  prensa, pero lo que en él habla es distinto, distinto, ya que en últimas "la escritura de prensa es el trabajo que consiste en hacer concordar la noticia con el mito" 35. Y no sólo concorda concordar, r, ya que lo que el "público" cons consum umee es esa amalg amalgam ama, a, o mejor mejor esa esa equi equiva vale lenc ncia ia entr entree la hist histor oria ia y el suce suceso so,, entr entree el acontecimiento acontecimiento y el espectáculo, espectáculo, entre entre la información información y la propaganda. propaganda. Contra lo que nada pueden las difere diferenci ncias as de tono tono entre entre la aust auster erid idad ad del del lengu lenguaj ajee noti notici cios oso o y el colo colori rido do del del leng lengua uaje je  publicitario.  publicitario. Las diferencias diferencias de tono forman forman parte de de la misma estrategia estrategia discur discursiva. siva. Marcuse ha realizado reali zado un análisis básico del proceso de "funcionaliz "funcionalizaci ación" ón" del del lenguaje lenguaje,, en el que se describen describen no pocos pocos rasgos rasgos del discurso de prensa. prensa. Por ejemplo sobre sobre el argot, sobre sobre el cliché, en el que "la tensión entre apariencia y realidad, entre hecho y agente, entre sustancia y atributo tiende a desaparecer (...). El lenguaje tiende a expresar y auspiciar la inmediata identificación entre razón y hecho, verdad y verdad establecida, esencia y existencia, la cosa y su función" 36 . ¿A cuál de los dos tonos ton os caracteriza caracteriza lo afirmad afirmado o por Marcuse? Marcuse? ¿O es qué acaso acaso los dos dos no forman parte de ese ese discurso de la "administración total" que es el que nos "ordena" e induce a aceptar, a actuar, a comprar?, ese en que la sintaxis comprime la frase evitando cualquier tensión, en el que el análisis funciona bajo fórmulas mágicas, y en el que reina la tautología como un rito que inmuniza contra las cont contradiccion radicciones. es. De poco sirve que la gente diga no "creer" en ese discur discurso so si es desd desdee él 33

Sobre el proceso de concentración de la prensa, ver: J. Beneyto, Conocimiento de la información,  p, 125 y ss; y el ya citado de F. Terrou, p. 61 y ss. 34 N. Will, op. cit. p. cit.  p. 217. 35 O. Buguelin, op. cit. p. cit. p. 144. 36 H. Marcuse, El Marcuse, El hombre unidimensional ,  p. 105.

que que actú actúaa y ve el mund mundo, o, si es a su trav través és que que el acon aconte tece cerr del del mund mundo o signi signifi fica ca y que que esa significación es consumida. La conversión del lenguaje de de la política en el de la publicidad publicidad expresa "el grado en que la dominación y la administración han dejado de ser funciones separadas e independientes en la sociedad tecnológica" tecnológica"37. Como parte parte de ese discurso discurso la jerga proporciona jerga  proporciona una cierta base al estilo informativo, me refiero a esas "fórmulas" mediante las cuales las palabras se ponen a significa significarr independie independientem ntemente ente tanto tanto del contexto contexto como del contenido. contenido. Los contextos son siempre particulares, parciales, temporales; son las formas, o mejor las fórmulas de la jerga las que introducen introducen la pretensión pretensión de la universalidad, universalidad, de estar estar por por encima encima del espac es pac io y el tie mpo. mpo . Las fórmulas son "limpias" con la pureza que proporciona proporciona la nueva religión religión secularizada secularizada de la "objetividad". La conversión de la forma en fórmula es la operación operación mediante la cual se plasma, plasma, se hace lenguaje la exigencia que el consumo plantea en términos de público-masa: la operación de conformización, de banalización, de despolitización. Info Inform rmar ar es dar dar form forma. a. Y esa esa form formaa está está sin duda duda marca marcada da por la tecnol tecnolog ogía ía y el "form "formato ato"" (McLuhan) pero sobre todo por el modelo histórico que rige la organización de la comunicación, que regula regula el espaci espacio o real real de la inform informaci ación. ón. Frente Frente a las diferenc diferencias, ias, cultural culturales, es, frente a la  persistencia  persistencia de modos modos de producción producción "atrasados", "atrasados", frente frente al nacionalism nacionalismo o con que los diarios diarios tiñen sus sus  páginas hay un modelo que se ha ¡do imponiendo, dominando. Es el modelo model o que F. Colombo Colo mbo denomina horizontal  y que se caracter caracteriza iza por la contención contención del poder del Estado Estado de parte de la socied sociedad ad civil y la expansión expansión de la esfera esfera pública pública,, pero pero tambié también n por su identificación identificación con los intereses de la producción y del intercambio. intercambio. La noticia, convertid convertidaa en producto y mercancía, mercancía, adquiere el carácter sagrado de ésta, quedando así dotada del derecho a invadir cualquier esfera desde el Estado a la familia, "ampliando progresivamente la definición de público, absorbiendo y atenuando en ella las diferencias o contradicciones de clase y deteniéndose tan solo en el límite extremo de la tolerancia media del público más amplio posible" 38. Es el mism mismo o modelo modelo al al que corresponde la expansión y el consumo del espacio urbano, es el "espacio mental urbano": el de las grand grandes es conce concentr ntraci acione oness someti sometidas das a un incesa incesante nte bombard bombardeo eo de inform informaci ación. ón. A ese tipo "horizontal" de comunicación, cuyo paradigma es la norteamericana, corresponde también un tipo especial de discurso construido sobre dos grandes equivalencias: la de la palabra con la cosa y la de lo común común con con lo públi público. co. En la primera primera Marcuse Marcuse ve la huella clara de la l a exigenc e xigencia ia comerci c omercial, al, la operativizaci operativización ón que unidi unidime mensi nsiona onaliz lizaa y funci funciona onaliz lizaa el lengua lenguaje je popu popular lar,, coloqu coloquial ial.. En la segunda, lo que se realiza es la supresión de los lenguajes diferenciales (de clase o de oficio). oficio). El lenguaje público no puede ser sino el "común", el de todos, ese que representa, en una sociedad de libre cambio, la defensa cont ra el que viene de arriba, el de la imposición autoritaria. Y en esa tupida red de comunicación, de información, de lenguaje común, hay algo que se torna cada día más difíc difícil, il, casi casi imposi imposible ble:: es el manten mantenimi imiento ento o la recuperación recuper ación de la identida d cultural c ultural de cada c ada grupo o el recono reconocim cimien iento to de la clase. clase. Ese discurso discurso "común" "común" es sobre sobre todo el discu discurso rso de los Medios, el que la "comunicación" impone a los consumidores como  su lenguaje. Aunque mucho más eficaz desde la radio o la televisión ese lenguaje empezó con la prensa y no ha dejado de modelarla. Existe Existe otro otro model modelo o de inform informació ación n que corres correspon ponde de a un modo modo de soci social alid idad ad en rápi rápida da descomposición, descomposición, modo aún existente en los pueblos latinos y sobre todo entre el campesinado. campesinado. Por  oposición al anterior, Colombo lo llama vertical, y se caracteriza por una conformación polarizada entre Estado y familia, las dos instancias que el modelo horizontal descarta como "autoridades" en función de la única que aquel modelo reconoce como fuente válida de información: el "libre cambio cambio". ". En el segund segundo o mode modelo lo se trata trata de una socie socieda dad d much mucho o meno menoss homo homogé géne nea, a, más más fuertemente fragmentada y sometida a poderosas presiones tanto políticas políticas como religiosas. religiosas. En este tipo de sociedad, el espacio real de la información es el que emerge entre las presiones del estado y la familia familia,, doble doble censur censuraa de la inform informació ación, n, doble doble limi limita taci ción ón de la capa capaci cida dad d y la libe libert rtad ad de informaci información: ón: la instituciona institucionall de "arriba" y la de la esfera de la "intimidad". "intimidad". No se trata de la familia fa milia en cuanto célula de producción (organizada en torno a la propiedad y que es de donde extrae su valor valor el mode modelo lo opue opuesto sto), ), sino sino de la famili familiaa en cuan cuanto to insta instanc ncia ia moral moral,, garan garantiz tizad ador oraa del del mantenimiento de unos valores espirituales, de la familia en cuanto espacio de ejercicio de la autoridad paterna. p aterna. Se trata entonces entonces de una una sociedad sociedad en la que aún aún prevalece prevalece lo político político sobre sobre lo 37

 Ibid.  p. 123 . F. Colombo. La Colombo.  La realidad como espectáculo,  p. 54. espectáculo, p.

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económico, en la que el espacio de la producción y el intercambio no ha invadido aún la totalidad de lo social y en la que, frente al espacio público (el de la información que es el de la producción) se alza con sus valores y sus ritos exorcizantes el de lo familiar. Es este espacio el que elevado a rango de lo general sustenta el valor símbolo de la Patria, del Padre autoridad de autoridades y garantía de toda identidad. En este modelo la noticia política es aún la que vertebra el flujo y la organización de la información. información. Prototipo del discurso autoritario, cerrado y asertivo asertivo,, afirmació afirmación n de principio principioss y defensa defensa de valore valores, s, exactame exactamente nte el discurso discurso contrario contrario al de la comunica comunicación ción mercantil, mercantil, al del intercambio intercambio y la tolerancia. tolerancia. Discurso que al identificar identificar Estado y Patria reduce al mínimo el espacio de lo público público en cuanto cuanto espacio de libre juego político. político. Y junto al discurso político autoritario autoritario se ubica ubica ese otro discurso discurso familiar familiar que representa representa lo apolítico apolítico,, lo no público, público, la zona de lo privadoneutral y del abstencionismo, es decir el discurso en que el control moral se transforma en control  político.  polític o. Confor Conformad madaa aún en no poca poca medida medida según según el modelo modelo vertica vertical, l, la socieda sociedad d y la comuni comunicaci cación ón latinoamer latinoamericana icana se ven sin embargo embargo sometidas a una presión brutal de parte del modelo "horizontal" de la productividad y el intercambio. Y esquizofrénica, como su sociedad, la prensa latinoamericana latinoa mericana refleja, como ningún otro Medio, las tensiones tensiones y los bandazos bandazos que le impone impone un proceso en el que la  presión de la estructura mercantil deja de lado con frecuencia la "forma" horizontal horizontal del intercambio y la información para tomar la forma vertical de la dictadura. Ambigüedad y paradoja permanente de una prensa fascinada en general por el modelo norteamericano pero enfrentada cotidianamente al modelo de sociedad al que pertenece y a los vaivenes de la política que la obligan a servir a sus amos.  No deja de haber gritos en contra y no faltan los hombres que se arriesgan a alzar su voz siempre siempre que pueden pueden y por cualquie cualquierr resquic resquicio, io, pero a nivel nivel de la "forma", "forma", de la tendencia tendencia dominante, dominante, las diferencias diferencias son de de tono y no afectan más que a la jerga.

 — De D e cómo có mo el acontec acon tecim imient ientoo se convier con vierte te en narración-leyenda La noticia es el eje del discurso informativo, esto es, de aquel discurso que se define por la función referen referencial. cial. ¿Cuál ¿Cuál es entonces entonces el referente referente-tipo -tipo de ese ese discurso? discurso? La respuesta respuesta de los manuales manuales no admite dudas: el acontecimiento. Planteémonos pues la problemática problemática del acontecimiento, acontecimiento, tratemos tratemos de indagar en el proceso, en la práctica social, qué operaciones están a la base del "realismo mítico de esas narraciones donde el acontecimiento es a la vez respetado punto por punto y construido de cabo a rabo" 39, de ese discurso en el que la historia se convierte en suceso. Dura Durant ntee sigl siglos os,, y aún aún hoy hoy para para cier cierta tass soci socied edad ades es "tra "tradi dicio cional nales es"" como como las campe campesin sinas, as, los los acontecimientos son escasos. En realidad los únicos acontecimientos verdaderos verdaderos suelen ser aquellos que introducen brutalmente el desequilibrio rompiendo la inercia de la vida: catástrofes, calamidades climá climática ticas, s, avalar avalares es demog demográf ráfico icos. s. La fuent fuentee prim primord ordial ial de aconte acontecim cimien ientos tos es entonc entonces es la naturaleza naturaleza y más bien poco la historia. Y en la medida en que el acontecim acontecimiento iento viene viene a romper el orden, a introducir lo nuevo, lo desconocido, será objeto de conjuros, de ritos que lo controlen, que eliminen su poder corr corrosivo osivo de la estabilidad y el equilibrio. equilibrio. En nuestro mundo tecnificado tecnificado y urbano  por el contrario contrario el acontecimiento acontecimiento se inscribe inscribe en una gigantesca paradoja: paradoja: multiplicado multiplicado al infinito infinito por  por  el dispositivo dispositivo de la massmedi massmediación ación es a la vez exorcizado, amordazado, neutralizado al ser integrado en el sistema sistema de la informa información ción,, al ser apresado apresado en la red de las "equival "equivalencia encias". s". Mientras Mientras las ciencias, incluidas las sociales, niegan el acontecimiento —el estructuralismo lo expulsa de la ciencia y el historicismo lo asimila como un elemento desintegrándolo— los Medios lo exaltan, lo potencian, sino es que lo fabrican fabrican,, en cantida cantidades des directa directame mente nte propor proporcion cionale aless a la demand demandaa que han sabido sabido inocular inocular sobre el mercado. mercado. Parecería Parecería que uno de los derechos fundamentales fundamentales de todo ciudadano, en las sociedade sociedadess "democrát "democráticas" icas" es el de poder poder consumi consumirr acontecim acontecimiento ientoss como como consume consume agua o electricidad, lo cual implica que éstos sean producidos en cantidades industriales. ¿Qué entender por acontecimiento?, ¿qué lo caracteriza hoy? 40 En primer lugar, la imprevisibilidad , que es su grado, grado, su tasa tasa de valor informativo. informativo. Tanto más acontecimiento acontecimiento cuanto más raro, cuanto cuanto más extraño. Ahora bien como esa "rareza", "rareza", esa infrecuencia, infrecuencia, es una variable dependiente, dependiente, resulta 39

V. Morin. Tratamiento periodístico de la información,  p. 139. La revista francesa Communication dedicó por entero el No. 18 (1972) a la problemática del acontecimiento desde la  biología, la historia, la teoría de la información, el psicoanálisis. 40

que las coordenadas en que se inscribe lo acontecible-noticiable no son las absolutas de la naturaleza sino las relativas relativas de la cultura. cultura. La presencia presencia de un televiso televisorr en una perdida perdida aldea de indígen indígenas as african africanos os es tan aconteci acontecimie miento nto como su ausencia ausencia en un hogar hogar de clase clase media americana. americana. Y lo mismo sucede con los acontecimientos acontecimientos "naturales": un temblor de tierra es acontecimiento en ciertos  países, en muchos de Latinoamérica Latinoamérica su frecuencia anula su valor informativo. informativo. Tanto la la probabilid probabilidad ad como como la improba improbabil bilida idad d absoluta absolutass sólo sólo existen en la abstracción abstracción matemática. matemática. El resto de las alternativas desde las que se "mide" el acontecimiento son siempre sociales, culturales, culturales, forman forman parte 41 del universo de lo verosími verosímill , relativo relativo tanto espacial como temporalmente. Es más, la ampliación moderna de lo verosímil juega un papel tan grande en la inflación del acontecimiento que las líneas de demarcación real/fi cción., son cada día más más tenues. tenues. Y la noticia se alimenta precisamente de eso, de un verosímil verosímil que que es a la vez "peor "peor que falso" falso" y más más real que lo real. Lo noticiable —lo decible en  prensa— se recorta sobre lo verosímil verosímil del  género,  género, sobre el juego de tolerancia y de censura no en cuanto instancia de hecho —"noticia es lo que un director director decide que salga salga en su periódico" periódico" 42 — sino en cuanto estructura estructura lógica. Lo verosímil verosímil es tanto la fuente primordial primordial de lo noticioso como su más recóndita censura. censura. Más allá de un un cierto umbral umbral la prensa prensa perdería su identidad. identidad. Pero sin olvidar  olvidar  que la censura funciona más y mejor sobre el acto de enunciación, sobre sus formas, que sobre el enunciad enunciado. o. La improbabil improbabilidad idad sobre sobre la que se gesta el aconte acontecim cimien iento to es un problem problemaa de convención convención y de discurso. discurso. El cine no trabaja trabaja el mismo verosímil verosímil que la prensa, ni el diario que la revista femenina, no juegan con las mismas reglas, que son las reglas desde las que el espectador o el lector mira o lee. La probabilidad probabilidad o improbabilidad improbabilidad de algo no reside en la naturaleza intrínseca del hecho, no es problema de esencia sino de existencia, de código y de práctica social. Una segunda característica es la implicación, el grado de implicación, que es el número y el tipo, la cantidad cantidad y la calidad de personas personas concernidas por el acontecimiento. acontecimiento. Y aquí también la noticia es eficaz en cuanto capaz de ampliar hasta los límites de lo verosímil la tasa de implicación. implicación. Bien sea dire direct ctaa o indi indire rect ctam amen ente te,, de una una vez vez o por por etap etapas as.. Bien Bien sea sea esta establ blec ecie iend ndo o rela relaci ciones ones,, concatenaciones concatenaciones de "persona a persona", persona", o de persona a hecho hecho y de un hech hecho o a otro otro hecho. hecho. La invest investiga igació ción n period periodísti ística ca posibi posibilita lita un tipo de suspenso suspenso que es fundam fundamenta entall para para el discurs discurso o informa informativo. tivo. Al no entregar entregar de una vez la inteligibilid inteligibilidad, ad, el sentido sentido del acontecimi acontecimiento, ento, abre la  puerta al entrecruzamiento de cadenas cadenas de causalidad causalidad entre tipos de de hechos y de agentes agentes que potencia potencia el acontecimiento haciéndole concernir a personas que no el hecho sino la noticia viene a implicar. Así el circuito del mercado informativo revela su circularidad especular: es acontecimiento no aquello que pasó a tales personas sino aquello aquello en que pueden pueden partic participa ipar, r, desde desde la noticia noticia,, el máximo máximo de lectores. Y para eso se necesita no un "gran hecho" sino algo simplemente interesante, esto es capaz de interesar, de poner en movimiento todas aquellas virtualidades —radicalmente imaginarias— de  participac  participación ión que que posibilitan posibilitan al al ciudadano ciudadano medio medio sentirse sentirse afectado, afectado, trastocado en su rutina, asistiendo a la emer emerge genc ncia ia de lo nuev nuevo. o. Y como como la impli implica cació ción n es conc concate atena nació ción, n, hay hay perso persona nass —   precisamente  precisamente los personajes— personajes— que cualquier cualquier cosa que les acontezca puede convertirse en acontecimiento: la caída del cabello de una artista, el resfriado del señor presidente o el divorcio del deportista. Una vez convertido en personaje la implicación funciona automáticamente y en todas sus direcciones. La tercera característica no es nombrable directa mente, ya que es la la que nos nos señala señala el revé revéss del acontecimiento acontecimiento moderno, moderno, su paradoja: acontecimiento hoy es lo que vive en y de la noticia. Ahora  bien, transfo transformad rmado o en noticia noticia el acontecim acontecimiento iento salé de de la historia para entrar en la "banalidad", para insertarse en el ciclo del consumo, para integrarse en el ritmo y el valor de la cultura de masas. La noticia del  acontec acontecimie imiento nto se separa separa de él, como el signo de la función, función, hasta oponérsele, oponérsele, hasta negarlo vaciándolo de lo que tenía de acontecer, de novedad, desamordazándolo en su capacidad de subversión,  sustituyéndolo. La sola cantidad cantidad es ya una forma de neutralización neutralización.. Claro que como como alguien dijo el olvido es necesario a la vida, pero con las noticias lo que se produce no es olvido sino otra cosa: el desgaste en la capacidad de ver lo nuevo, de percibirlo, de admirarse, de dejarse realmente afectar, y el reforzamiento en la creencia de que este orden, el de los acontecimientos 41

El "universo de verosimilitud" tal y como aquí lo entendemos puede ser estudiado a partir del concepto de “conciencia posible" trabajado por L. Goldman: "L'importance du concept de conscience possible pour la communication", en La en  La creation culturel le dans la socíetè moderne,  pp. 7-24. 42 M. V. Chamley,  Pe rio di sm o i nfo rm ati vo p., 65 .

 programa  prog ramados dos y maqui ma quilla llados dos,, es e s el e l único únic o mundo mundo posible. Empezamos Empezamos a comprender comprender el el sentido que que tiene y la lógica a que responde la inmensa redundancia en que se basa la industria y el mercado de la informac información: ión: los Medios Medios no son indepe independ ndien ientes tes del aconte acontecim cimien iento to sino sino su condició condición. n. La redundancia intrínseca al sistema tiende por sí misma a producir lo sensacional y a alimentar la necesid necesidad ad de de acont acontecim ecimient ientos. os. No es es que los Medios los inventen — el fantas ma del moral ismo es correlato del fetiche de la objetividad— sino que los detectan y los dramatizan: los  producen.  producen . Y como cualquier otra industria necesita asegurar el ritmo de la producción, lo que implica controlar controlar tanto la oferta como como la demanda y una buena reserva reserva de "materia prima". "Las mismas industrias de la información crean las celebridades tautológicas según el principio del best-seller o del hit: hit: libros libros,, objetos objetos o person personas as que son son conocid conocidos os por lo conocidos que son. Los media transforman así en noticia su propia acción de dar a conocer, creando celebridades basadas en su... notoriedad, gente famosa por su fama" 43. La industria sabe que los dispositivos dispositivos técnicos forman parte del discurs discurso, o, son parte de su forma, forma, tanto tanto más más que que de su mater materia, ia, con la consiguiente consiguiente especialización especialización de los diversos diversos medios medios en diversos tipos de información. No puede producir lo mismo la radio que la la prensa, prensa, ni la prens prensaa que la televisión. Y esto no sólo por la diversidad diversidad de los públicos públicos sino de las materias significantes, significantes, y sobre todo por la diferente temporalidad social desde social  desde la que que trabaja cada uno. Y esa temporalidad tiene qué ver ver con él ritmo ritmo "de lo verosímil en cada tipo de discurso y con el ritmo de s u consumo comercial. Mientras la radio vive de la insta ntánea, transfor transforman mando do en gesto gesto esa esa palab palabra ra que que sin sin ella no sería más que un poco de aire; mientras la TV inserta —en vivo y en directo— la historia en el tiempo del rito y en el espacio del espectáculo, la prensa inserta el acontecimiento en el tiempo y el espac espacio io de una cierta reflexión, reflexión, de la confrontació confrontación n de testimonios, testimonios, del lento descubri descubrirr de los secretos, y de la apelación a ese saber desde el que su escritura diaria o semanal, significa, se hace realmente inteligible. inteligible. Se trate de Watergate Watergate o del secuestro secuestro político político de un avión, el relato de  prensa  pre nsa moviliz movi lizaa los grandes gra ndes princip pri ncipios ios,, la dicotomía dicoto mía de buenos y malos, alimenta aliment a el suspenso suspe nso con con docu docume ment ntos os,, con con conf confid iden enci cias as,, con con inte interr rrog ogan ante tess a la opin opinió ión n públ pública, ica, expand expandee la "implicación" hasta que saturada estalle o se disu disuel elva va.. La especializac especialización ión informat informativa iva de los Medios Medios no significa en modo alguno aislamiento. aislamiento. Ya hace mucho tiempo que la prensa abandonó sus celos celos de la radio o la televisión. televisión. La especialización especialización es coope cooperac ración ión,, una una repar repartic tición ión de tarea tareas, s, de func funcio iones nes.. Desde Desde su forma, forma, el discurso discurso de prensa prensa "traduce" los logros de otros Medios así como los otros han aprovechado la experiencia secular de la prensa. De la radio, la prensa aprendió aprendió pronto pronto a extender extender la gama de los l os tonos, tanto en el plano "material" de los tipos de letra, de la composición, de la titulación y subtitulación, etc., como en el de la "textura" de la prosa: desde ese tono  serio con el que trata de diferenciarse de los demás medi medios, os, y sus moda modalid lidad ades: es: grav grave, e, respe respetu tuos oso, o, mora moralis lista ta;; a esos esos otro otross más más "agr "agres esivo ivos" s":: el dramático, dramáti co, el paternal, paternal , el ce remonioso y hasta hast a el fes tivo y seductor seductor.. Del cine, cine, la prensa prensa tradujo tradujo no pocos secretos: la necesidad de dar "movimiento" a la página, es decir, cargar o desplazar el  pes o de una notic not icia ia a otra, otr a, utili uti lizar zar los tiemp ti empos os —los —l os espacios— muertos, encuadrar "saltando" de una una página página a otra, otra, y encuadrar por planos: organizar la página de forma que la composi composición ción sitúe ciertas noticias en "primer plano" y otras en un plano tan general que se confundan con "el fo ndo" de l periódico. Con la TV, la prensa mantiene una relación bien par partic ticula ular. r. De un lado el desafío desafío de lo icónico: icónico: más fotos, mejor técnica técnica tanto en la toma toma como como en la impresi impresión, ón, el convenc convencimi imiento ento de que "una imagen vale más que mil palabras" palabras" y por tanto a más imagen imagen más más información y mayor mayor objetividad. Pero paradójicamente a más más imagen también más imaginario, más más espectáculo, espectáculo, menos menos seriedad. De ahí que los "serios" como "Le Monde" sigan a pura letra, sin una foto. Pero la presencia pres encia de imagen imag en no está solo en la fotografía fotografía o el dibujo, sino en ese tipo de relato relato que para hacer vivo y vivible el acontecimiento, para dotarlo de autenticidad, lo vierte al "lenguaje de los hechos hechos..." ..." que que es el del drama, drama, o la novela novela policíaca. “Si el telégrafo telégrafo acortó la frase, la radio acortó el boletín de noticias y la televisión inyectó en el periodismo el modo interrogativo” 44 que economiza espacio dramatizando dramatizando el tiempo. Y los esfuerzos por hacer más gráfico el mensaje son s on en  parte una forma de hacer frente al "ruido", pero por otra revelan la contaminación o la respuesta — 

43 44

X. Rubert de Ventos, La Ventos,  La es tét ica y s us he rejía re jía p. s, 37 2. M. McLuhan,  La co mp re ns ión ió n de lo s me dios di ,osp. 265.

desde desde donde donde mire— al desafió desafió de lo icónico, icónico, a la "liberació "liberación" n" de imagen imagen que que ha realiz realizad ado o la televisión. O mejor, mejor, la publicidad. Llegamos así a ubicarnos en el centro de la problemática que plantea la noticia: la transformación del aconte acontecim cimien iento to en "suces "suceso" o",, su vacia vaciado do de espeso espesorr histó históri rico co y su llena llenado do,, su "carg "carga" a" de sensacionalidad sensacionalidad y espectacularidad. La realidad propone —¡qu —¡quie ien n va a dud dudar arlo lo!— !— per pero o el imagina imaginario rio dispo dispone. ne. Un imagin imaginario ario colectivo colectivo cuya dominante dominante es el imaginario comercial. Lo que estarn estarnos os plante planteand ando o es la "confu "confusió sión" n" entre entre aconte acontecim cimien iento to y suceso suceso,, del del uno uno con el otro, otro, mediante la cual "toda la información, histórica, política, política, cultural es recibida bajo bajo la misma forma, a la vez anodina y milagrosa del suceso (fait divers), toda la información es actualizada, es decir  dramatizada sobre el modo espectacular.  El suceso suceso no es pues pues una catego categoría ría entre entre otras otras sino sino la 45 categoría cardinal de nuestro pensamiento mágico, de nuestra mitología" mitología " . Académ Académicam icamente ente la distinción sería neta: el acontecimiento es lo que pertenece por naturaleza a una de las categorías  bien claramente cl aramente delimitadas delimitad as por la razón histórica históric a —lo político, lo social, lo científico, lo literario, literario, lo internacional, lo nacional, lo local, etc.— y por tanto lo inscrito en alguna de las rúbricas del diario; el suceso sería lo contrario: lo inclasificable desde el punto de vista de la historia, aquello en que el azar azar,, la casualidad casualidad se confunde con la causalidad. Lo que quiero plantear, con Baud Baudrill rillard ard,, no es que no haya diferencias sino que la “forma" en que el acontecimiento es  producid  producido o por la noticia noticia y consumido  por los lectores lect ores es la del suces o. Que para hacer hace r vendible ven dible y consumible el acontecimiento el diario inocula en el relato todo un imaginario de masa que es precisamente la sust sustan anci ciaa del del suce suceso: so: "su dram drama, a, su magia magia,, su miste misterio rio,, su extra extrañe ñeza za,, su poesía, poesía, su carác carácter  ter  tragicóm tragicómico, ico, su poder poder de compensa compensación ción y de identifi identificac cación, ión, el sentimi sentimiento ento de fatalid fatalidad ad que lo 46 habilita, su lujo y su gratuidad" . En una cotidianidad tan rutinaria y anodina como a la que nos fuerza la equivalencia mercantil lo que el suceso suceso aporta aporta es lo que tiene de aberrante y eso es lo que tiene de aso mbroso y de apetecible. apetecible. En la medida en que es inexplicable, misterioso, el suceso nos arranca a la superficialidad plana de la racionali racionalidad dad ambiente. ambiente. Es como un agujero por por el que conectar con otro mundo: mundo: maravilloso, mundo mundo de los enigma enigmas. s. El suceso es el cuent cuento o marav maravill illoso oso de nuestr nuestras as industri industriali alizad zadas as y democráticas sociedades. sociedades. Mientras Mientras tanto, los que hacen la política política de la información y los que la teorizan teorizan sigue siguen n "obsesio "obsesionado nados" s" con la objetividad, con la autenticidad, con l a verdad. Como si el suceso fuera menos cierto que el acontecimiento... como si no fuera la massmediación la que los ha tornado inseparab inseparables. les. Reportajes, documentos, documentos, testimonios, fotos-shock: fotos-shock: la noticia se ha tornado tornado más verdadera que la verdad misma, la imagen más real que lo real. Como en las leyendas. Sólo que ahora "lo "lo maravilloso" se ha secularizado. Se fue la religión pero nos quedó quedó el mito: mito: la cienci cienciaa y la técnica convertidas en fuente inagotable de maravillas, de nuevas fantasías y de nuevos "fantasmas". Que se parecen parecen mucho a los antiguos. La única diferencia de fondo fo ndo es que hoy h oy más que soñar, s oñar, lo que hacemos es consum consumir ir los sueños sueños que nos fabrican fabrican los directore directoress de ese inmenso show que llaman informa información ción.. Porque Porque no hay aconteci acontecimie miento nto sino dramatizad dramatizado o sobre una escena pública. pública. En un mundo cada día más agrio y serio es quizá la única fiesta permitida, la fiesta de la masa, tan llena de ilusión como de frustración, tan programada y artificial como todo el resto de vida consumida.

3. Televisión: la forma-rito del discurso del espectáculo "Los cuerpos se mueven todos al mismo vaivén, los rostros llevan todos la misma máscara y las voces producen producen el mismo grito. Al ver en todas las caras la imagen imagen del deseo y al oír de todas las  bocas la prueba de su certez a, cada uno se siente unido, sin resist encia posibl e, a la convicción común".

M. Mauss En el texto del del que proviene proviene esa cita Mauss Mauss se refiere refiere a un rito de las tribus t ribus de Nueva Guinea que tiene tiene luga lugarr duran durante te la la noche noche mientras los hombres cazan o guerrean. Lo que interes a al antropó antropólogo logo es el circuito circuito,, el espacio espacio particular particular que el rito produce: produce: las mujere mujeress al danzar  danzar  mantien mantienen en en alto los sables sables parti participa cipando ndo así en l a guerra que hac en los maridos . La cree ncia 45 46

J. Baudrillard, La Baudrillard,  La soc íeté de cons omation ,  p. 31, el subrayado s ubrayado es mío . R. Barthés. "Estructura del suceso", en Ensayos en  Ensayos críticos, críti cos,  p. 226 .

no es exterior exterior al rito, hay una relación relación circular circular entre entre creencia creencia y rito: "La creencia se impone  porq  po rq ue la soci so ci edad ed ad gest ge st ic ul a y ésta és ta gesticula gesticu la debido debi do a la l a creencia cree ncia mágica" mági ca" 47, que no es la mera suma de las las creencias individuales individuales sino la magia que el grupo grupo entero tiene como suya. Para la antropolog antropología ía el rito es un acto ligado fuertemente a la "vida doméstica", doméstica", a lo cotidiano, y en cuan cuanto to fuen fuente te y rece recept ptác ácul ulo o de magia agia estr estrec echa hame ment ntee vinc vincul ulad ado o al fenó fenóm meno eno de la representación: a la capacidad que tienen los gestos y los objetos de ponerse en relación con las "ideas "ideas"" y con las otras otras perso personas nas,, de trabar trabar relacion relaciones es entre entre éstas, éstas, relacion relaciones es que viven y se expresan expresan en imágenes imágenes de paz, de amor, amor, de seducción, seducción, de tem temor, or, propi propied edad ad,, etc. etc. Las Las imágenes funcionan obedeciendo leyes como la de contigüidad o de contagio, según la cual una  parte vale va le por el todo:. tod o:.,"l ,"los os diente die ntes, s, el sudor, sud or, las uñas, uña s, los cabell cab ell os repre re pre sent se ntan an ínte ín tegr grame ame nte nt e 48 a la persona de tal manera que por medio de éstos se puede actuar directamente sobre ella" . O en el otro senti do: todo lo que está en c ontacto inmediato con la perso persona na,, como como los los ves vestid tidos os,, la huella huella de su cuerpo, cuerpo, los objetos objetos de que hace uso, quedan asimilados a partes del cuerpo y trasmiten trasmiten su fuerza. fuerza. Paralela Paralela hay otra otra ley, ley, la de  similitud  según según la cual cual lo semejante evoca y actúa sobre lo  semeja  sem ejante nte.. La imag imagen en es a la cosa cosa lo que que la parte parte al todo todo.. La relac relación ión abstrac abstracta ta se hace hace concreta concreta en su función función.. Lo que hace que con frecuenc frecuencia ia la imag imagen en se se transforme en símbolo y actúe hasta hacer "ver y sentir el viento realmente encerrado en la botella o anudado en los nudos". El otro rasgo fundamental de todo rito es la repetición: regulación del tiempo y marca sobre la acción acción.. La repet repetici ición ón tiene tiene su fuerza en remitir remitir por ambos ambos lados, lados, en anudar anudar el pasado pasado y el futu futuro ro,, en evoc evocar ar a la vez vez que que anti antici cipa pa.. Pero Pero desd desdee una una iner inerci ciaa que que carg cargaa la acció acción, n, estereotipándola. estereotipándola. Los gestos rituales tienen tienen la "forma" de la relación que los engendra: concretos y a la vez abstractos, gestos-modelo, gestos de modelo, al mismo tiempo, individuales individuales y genéricos. La inercia del rito es algo de lo que éste vive y contra lo que lucha a su manera, el milagro del ciclo en que lo nuevo es viejo pero lo viejo es nuevo: transformación transformación del tiempo lineal, irreversible, irreversible, en la perenne restaurac restauración ión de todo lo gastado, de todo desgaste. De ahí su diferencia radical con la costumbre. costumbre. El rito es una acción acción que no se agota en sí misma, misma, en su inmediatez, inmediatez, en su utilidad inmediata: inmediata: "la costumbre costumbre de llevar tal o cual vestimenta vestimenta no podría ser calificada de ritual más que cuando sume un significado que va más allá de la sola necesidad de vestirse vestirse (...) El rito es un acto cuya eficacia real presunta no se agota en el encadenamiento empírico de causas y efectos" 49. Y de ahí entonces su parentesco con el teatro pues pues todo rito es en sí mismo una puesta puesta en escena. escena. Y toda puesta en escena es un "dar a ver", en el fuerte sentido que tiene en castellano "dar a luz", esto es hacer ver , y eso es lo que nombra la palabra espectáculo. espectáculo. Porque Porque el espectáculo espectáculo no lo definen, no lo configuran, sus contenidos sino esa voluntad recíproca de ver que es voluntad de dramatización, necesidad de representación que forma parte de la sustancia misma de lo social: la teatralización teatralización constante constante de la vida colectiva. "Es como si no pudiéramos captar el sentido de los comportamientos más más que en el momento en que se teatralizan. teatralizan. La sexualidad, sexualidad, la muerte, muerte, el intercambio intercambio económico económico o estético, el trabajo, todo es manifestado, manifestado, todo es jugado. jugado. El hombre es 50 la única especie dramática" , esto es, que se siente mirada y que se da a ver, capaz de desdoblar  la vida y de vivir de imágenes.

 —Figuras del mundo y equivalencia en imágenes El tiempo en que el intercambio se autonomiza, se separa del resto y se convierte en economía es el mismo mismo en que el el trabajo trabajo es separado separado de sí mismo y representado por el capital. Y el capital desarrollándose por sí mismo, como una esfera autónoma de "vida", engendra la mercancía como "valor" abstraído, separado del trabajo, de la relación humana que fundaba el intercambio. Separada, la economía representa al resto, a todo lo demás, de la misma "forma" que la mercancía valoriza valoriza todo. O mejor veámoslo veámoslo del revés: la mercancía mercancía convierte convierte todo en espectáculo espectáculo de sí misma, de un sí misma que al no poder ser nombrado deja en suspenso el movimiento: la imagen se autonomiza autonomiza no remitiendo más que a su propia danza... a su espectáculo. Pero atención atención,, “el “el 47

M. Mauss, Sociología y antropología,  p. 142.  Ibídem.  p. 87. 49 J. Cazeneuve, Sociología del rito.  p. 18. 50 J. Davignaud, Spectacle et societè,  p. 17. 48

espectáculo no es un conjunto de imágenes sino una relación social mediatizada por imágenes ”51, como como la merca mercancía ncía es es una relación social mediatizada por objetos. Y de esa doble mediación es que la massmediación saca su fuerza y su poder: no mera técnica de difusión de imágenes sino materialización materialización significante significante de un determinado modo de intercambio, o mejor de un determinado modo de producir el intercambio y la socialidad, aquél en que la economía separada se convierte en la fuente fuente de de la forma y del valor. El espectáculo no es mero resultado sino la  forma del discurso discurso de la televisión: la equivalencia equivalencia en imágenes (signos) de la historia del mundo —sean noticieros, telenovelas, telenovelas, o deportivos— y de la la figuración figuración de los objetos, o sea de la publicidad. publicidad. Es esa equivalencia equivalencia la que el telespecta telespectador  dor  consume. consume. Sobre la tela de fondo de la publicidad, publicidad, sobre ese permanent permanentee ritual en el que las tensiones y los conflictos se adelgazan y desaparecen, sobre esa danza incesante del objeto, las vici vicisi situ tude dess de nuest nuestro ro mund mundo, o, los los acon acontec tecim imien iento toss por por más más fuer fuertes tes,, desco desconc ncer erta tant ntes es y subversivos que sean, quedan neutralizados. neutralizados. La guerra y la miseria, el dolor y la muerte, todo todo es codifi codificad cado o y valora valorado do según según el ritmo ritmo y el valor valor de los objetos. Y entonces entonces hecho consumible. consumible. Aun más, presos en la red de las equivalen equivalencias cias,, que el montaje global global de la jornada jornada televisiva traza, el dolor o la muerte pasan a convertirse en ocasión, en pretexto para que el objeto dance ante nuestros ojos. Condensado: un detergente nos "regala" la imagen de una masacre de negros negros en Sudáfrica, el detergente detergente abre y cierra la escena. escena. Esa es la percepción del mundo mundo que impone el espectáculo-consumo y del que vive de una manera especial la TV, ya que en ella como en ninguna ninguna otra, la imagen imagen garantiz garantizaa la realidad realidad,, puesto puesto que nos la hace ver, ver, y no sólo sólo como como dosifica dosificación ción sino sino articul articulació ación n constitutiva. Ya que lo que el discurso de la TV realiza es la  puesta en escena e scena de un mundo recortable recortabl e y mirable en espectácu e spectácu lo: un mundo hecho a la imagen de la mercanc mercancía. ía. “Es la sustanci sustanciaa de un mundo filtrado filtrado y reinterpretad reinterpretado o según ese código a la 52 vez técnico y legendario, la que consumimos” . Mientras tanto muchos investigadores de la TV siguen obsesionados con el problema de los "efectos" benéficos o dañinos, sobre si aumenta o hace bajar la tasa de violencia, de agresividad, de obscenidad, obscenidad, etc. Y tanto las teorías como como las estadísticas estadísticas han demostrado la razón que tiene cada posición con tanta certeza como la contraria. contraria. Behaviorista Behavioristass empedernidos, empedernidos, la inmensa inmensa mayoría de esos investigadores siguen empeñados en buscar efectos directos y coherentes sobre el comportamiento, sin comprender que la eficacia del ritual y el espectáculo no es atrapable ni medib medible le según según el esquem esquemaa de causa/ causa/efe efecto cto o de estímu estímulo/ lo/resp respue uest sta. a. Pues Pues como como lo demuestra tanto la investigación no empirista como la práctica "el discurso sobre el nexo directo y el efecto inmediato no es relevante y sólo lleva a cómodas y genéricas peticiones de  principi  prin cipio" o" 53. El problema a afrontar es de qué modo cambia cambia la relaci relación ón de los los usuarios usuarios con con lo real y la l a experiencia de los; hechos por por el contacto contacto continuo continuo con la represen representación. tación. Pero entonces lo que hay que interrogar no es un "efecto" sino la nueva percepción del mundo que engendra la espect espectacu acular lariza ización ción:: esa sensación sensación de llenura llenura en el vacío, vacío, esa reducció reducción n de tensi tensión ón,, esa esa sensación de partici de partici pación que engendra la satisfacción de ver.

 —Del telever t elever y sus interferenci inte rferencias as Lo que en su ver el tele-vidente tele-vidente no ve es que que la "sed filmada" filmada" es ya una reflexión sobre la sed. Lo que que no pued puedee ver, ver, y se le esca escapa pa,, es la "tas "tasaa de plus plusva valí líaa figu figura rati tiva va"" 54 produ producid cidaa por la desaparición del instrumento y del proceso de trabajo. Sabemos que ese proceso, por por más rápido,  por más corto que sea el tiempo en que se realice, cubre una gama de operaciones tecnodiscursivas discursivas de selección, de combinación, combinación, de ajuste, de montaje. montaje. Que lo que se ve en la pantalla pantalla es el punt punto o final final del comple complejo jo proceso proceso de emitir. emitir. Proces Proceso o que que en su esquem esquemaa eleme elementa ntall comprende un trabajo, en varias instancias, instancias, de selección, selección, de montaje, montaje, de construcció construcción n y por tanto ta nto de interpretación interpretación,, de reflexión, reflexión, que se produce aun en la torna directa directa y simultánea. Lo que vemos en la pantalla son imágenes imágenes que resultan de otro ver ver que lee y escribe "para nosotros". nosotros". Y este ver, el que fabrica las imágenes, es bastante menos el del ojo —conciencia— del camarógrafo 51

G. Debord, La Debord,  La soc íetè du spec tacle.  p. 10, el subr ayado e s mío. J. Baudrillard, La Baudrillard,  La socíetè de consomation.  p. 190. 53 F. Colombo, Televisión: la realidad como espectáculo, p. 69. 54 J. L. Schefer, "La imagen: el sentido investido", en Análi en  Análisis  p. 272 272.. sis de de las imágenes, imágenes, p. 52

o del director director que el del dispositivo dispositivo social, ideológico, ideológico, que en cuanto conjunto conjunto de reglas, en cuanto código, materializa el proceso de producción que regula el proceso de emisión. Ese proceso no se agota en lo que queda "detrás" de la pantalla, se prolonga y "realiza" en la  pantalla encendida como; espacio socio-psicológico, como temporalidad reguladora de lo cotidia cotidiano, no, y como como objeto objeto-rit -ritual ual "prend "prendaa de recono reconocim cimien iento, to, de integ integrac ración ión,, de legit legitim imida idad d 55 social" . Entendi Entendido do así el proceso proceso de emisión, emisión, creo posib posible le afirmar afirmar que es en él que la TV se diferencia de los otros medios y fundamentalmente del cine: diferencias que van desde las sociotécnicas —pequeña pantalla frente a la grande, espacio privado frente a público, sala con luz a sala oscura—, oscura—, a las psicológicas psicológicas que las anteriores anteriores entrañan —atención —atención flotante frente a atención atención fija, concentraci concentración ón interior frente a la impuesta impuesta desde el exterior, exterior, sensación de espontaneid espontaneidad ad frente a sensación de artificio, etc.—, y a las diferencias de "programación" especialmente en cuanto al tipo de "géneros" que son mayoritarios mayoritarios en un medio o en el otro, como por ejemplo la presencia en la TV de géneros no narrativos 56. Todo ello produce un proceso específico de  participación de parte del tele-vidente, de implicación. implicación. De suyo la comunicación visual disminuye la vigilancia del espectador, las imágenes "aspiran" al que las mira. mira. En el caso de la TV la falta de un entorno entorno ritual, su ubicación ubicación en el ámbito ámbito de lo familiar-cotidiano, refuerza esa situación y actitud de no recelo, recelo, de "simpatía". Puesto que forma  parte de la familia, la pantalla encendida e ncendida pierde todo carácter de agresor y se convierte en la gran compañera, compañera, esa de cuya fidelidad fidelidad es de las pocas que puede estar uno seguro hoy. hoy. La "invasión" "invasión" que la pequeña pantalla produce, la dominación que impone, son sentidas como liberación por el tele-espectador habitual. Las encuestas han demostrado que que para millones de personas personas en el mundo mundo entero la televisión es sentida tan necesaria como la droga en un drogadicto y tan cotidiana y cercana cercana como un amigo. Toda la exigencia exigencia de concentración, concentración, de entrega, entrega, se produce desde el "interior": "interior": tanto del objeto-apa objeto-aparato rato como de los sujetos. Ninguna Ninguna ceremonia, ceremonia, ninguna presión presión exterior. Pero entonces, a diferencia de la radio que puede acompañar "desde fuera", como como fondo a otras actividades, la TV exige "estar con ella", como como dice McLuhan. Te acompaña, te es fiel sólo en la medida en que te le dedicas. dedicas. Es del mismo modo que que opera el espectáculo: espectáculo: si no te dejas arrebatar permanecerás "fuera de onda" en todos los sentidos de la expresión. Creemos jugar con ella pero es la TV la que juega con nosotro nosotros. s. Nos damos damos el pretexto de estar con con el mundo para  poder estar est ar con ella, como en el rito de Nueva Guinea con el pretexto de la guerra las mujeres se entre entrega gan n a la danz danza. a. Y no hay ningu ninguna na cont contra radi dicc cción ión entre entre esta esta afir afirma mació ción n y las las hech hechas as anteriorme anteriormente. nte. También También los contenidos contenidos de que está hecho el "suceso" "suceso" pertenecen pertenecen al mundo y sin embargo, el suceso nos saca de él. De igual forma en el espectáculo la mediación se espesa hasta constituir ella misma la verdadera experiencia: el placer de jugar acaba siendo más importante que aquello a que se juega. La magia magia del ver, ver, la coinci coinciden dencia cia de imagen imagen,, visión visión y presenc presenciali ialidad dad pone pone en movim movimien iento to mecan mecanism ismos os de simbol simboliza ización ción,, "una "una tupida tupida red de hábito hábitoss mentale mentaless y de residu residuos os cultur culturale aless  profundos, (…) de sistemas y subsistemas culturales yacentes debajo de los instrumentos expresi expresivos vos norma normales les de las cultur culturas as domina dominantes ntes"" 57 que que no pued pueden en deja dejarr de inte interf rfer erir ir en la signif significac icación ión de todo todo el fenóm fenómeno eno.. Por debajo debajo del funcion funcionam amien iento to de la cultur culturaa "masiva "masiva", ", atrave atravesánd sándolo olo e interf interfirié iriéndo ndolo lo consta constante ntemen mente, te, la “cultur “culturaa pobre” pobre” traza traza su propio propio sender sendero o transformando el sentido de las expresiones y de los contenidos. contenidos. Y ese proceso es en cierta medida la revancha del modo oprimido de percepción sobre el que le domina y amenaza con hacerlo desaparecer desaparecer.. A través de ese "ruido", "ruido", que los emisores emisores sienten y quisieran quisieran a toda costa hacer  desaparecer, lo que queda de la la otra cultura, de la oprimida, oprimida, habla, intenta hablar. El problema es que la gritería de los massmediólogos pragmáticos nos ha vuelto sordos a la palabra que se alza desde el silencio de nuestras culturas culturas pobres. Estas culturas hablan un idioma idioma que desconocemos casi por completo y para cuyo aprendizaje nuestro sofisticado instrumental es con frecuencia más un obstáculo que una ayuda. a yuda.

 —De las imágenes al imaginario 55

J. Baudrillard, en Los en  Los objetos, obje tos,  p. 65. C. Metz, Langage Metz, Langage et et cinema, pp. cinema, pp. 170-180. 170-180. 57 F. Colombo, op. cit. p. cit.  p. 87. 56

El "lugar" desde donde trabaja trabaja la publicidad es estratégico. No sólo por lo que atestigua atestigua el capital económico invertido en ella anualmente sino porque en la publicidad y con ella, nuestra sociedad construye y reconstruye día a día la imagen desde la que se mira y nos hace mirarnos a cada uno, un imaginario desde el que se trabaja y se desea. Aparentemente la "publicidad no tendría que ver más que con los objetos, y su tarea se limitaría a inform informar ar sobre ellos. ellos. Su razón de ser residiría residiría en servir servir de puente puente entre entre la produc producció ción n y el consumo: consumo: que los consumidores consumidores estén enterados enterados de lo que se produce. produce. Pero de ser así ¿para qué todo el descomunal despliegue, despliegue, el lujo de imágenes y de retórica? La respuesta del publicista publicista y la del crítico economicista economicista coinciden: por la competencia del mercado. mercado. Al haber varios "productos" "productos" de un mismo objeto cada marca se ve obligada a luchar y se las ingenia como puede para atraer la atención y vencer a las otras, o sea vender más. La publicidad no tendría que que ver mas que con los los objetos. objetos. Y sólo de refilón —por aquello aquello de ayudarles a elegir— tendría tendría que ver con los sujetos. Fue esta fábula la que durante mucho tiempo mantuvo a la publicidad fuera del ámbito de lo investigable investigable a no ser para y por publicistas. publicistas. Hasta que se sospechó sospechó que con ese juego se estaba estaba  jugando a otra cosa. Que más que informar sobre los objetos la publicidad in-forma los objetos, objetos, esto es, les da forma social. Pues con aquello con lo que que la publicidad trabaja, "su materia prima, prima, son las necesidades y los deseos de los hombres, sus ambiciones y sus frustraciones, esas relaciones relaciones que los los hacen hacen "sujeto "sujetos". s". Y todo ello elaborado elaborado industria industrialmen lmente te a imagen imagen y semejanza de su  produc  pro ductor tor y su s u modo mo do de produc pro ducció ción. n. Según ese modo la feli cidad ho y se lla ma BIENES TAR y confort. confort. Palabritas Palabritas que encierran encierran y encarnan para los secularizados secularizados hombres del siglo XX el viejo sueño de la salvación. Puesto que la tierra es nuestro cielo solo el Bienestar nos hace comprobable y medible la felicidad, una felicidad "objetiva", esto es echa de objetos cuya cantidad .y calidad son  signo inequívoco de la nueva y democrática democrática felicidad. Porque no hay bienestar bienestar sino del indi individ viduo. uo. Es el el correl correlato ato inevitable inevitable de de una felicid felicidad ad objetiva: objetiva: todos iguales ante los objetos. ¡El individuo es el hombre real! Ahí remite remite la "estruc "estructur turaa profunda" profunda" de la publicid publicidad: ad: al proceso proceso en el que los objetos objetos  sustituyen a los sujetos —su trabajo y su deseo, su vida— e instituyen un espacio de imágenes, de razones, razones, de máscaras, máscaras, un espacio de reconocimiento reconocimiento y desconocimiento. desconocimiento. Aspirados, absorbidos  por las imágenes, imágene s, digeridos digeri dos por las másc aras ar as , co mo en la pi eza ez a te atra at ra l de O' Ne il , lo s individu os se recon reconoc ocen en,, esto esto es se identi identifi fican can,, se sienten sienten sujetos sujetos,, en la medid medidaa en que se diferencian por objetos. objetos. Y presos en ese movimiento movimiento circular se sient en libres, c reen escapar  así a la dominación estructural. ¡Esclavos en el trabajo pero libres en el consumo! Como Como el trabajo al desposeer solidariza, así el consumo al reali zar la posesió posesión, n, individu individualiza aliza.. El trabajo trabajo engendra un movimiento movimiento dé conocimiento y de lucha, identifica las clases. El consumo genera un movimie movimiento nto de recono reconocim cimiento iento y de replie repliegue gue hacia hacia la identidad del individuo. Y es en ese repliegue donde se  sueña  sue ña libre. No mientras mientras duerme, duerme, sino mientras mientras vigila. vigila. "Tenga el coraje coraje de sus sueños" grita tramposamente la publicidad. Para analizar analizar la publicid publicidad ad televisiva televisiva se necesita necesita una lectura ínter ínter textual. textual. Porque Porque aquí es imposible analizar adecuadamente su retórica retórica desvinculada desvinculada de los textos textos que enmarca enmarca o en los que se inscr inscrib ibe. e. Una Una lectu lectura ra que que deja dejara ra por por fuer fueraa esa esa inte intert rtex extu tual alid idad ad dejar dejaría ía por fuera fuera  pre cis ament ame ntee lo tel evi sivo. si vo. No es lo mis mo encont enc ont rar se un anunci anu nci o public pub lic itari it ari o a la vuelt vue ltaa de una pá gina que "cortando" el movimiento movimiento de la imagen. imagen. Para el análisis de la publici publicidad dad impresa impresa el tiempo tiempo no cuenta, cuenta, en la de televisi televisión ón el tiempo tiempo es fundamen fundamental, tal, tanto por lo que respecta respecta a la duración duración del spot —la const constric ricció ción n económ económica ica transf transform ormada ada en exige exigenci nciaa de carácter carácter estétic estético o y de ritmo— ritmo— como a la manera manera en que el spot se inserta en el tiempo de la emisión y en la temporalidad de la narración . El "texto" publicitario, tal y como aparece en la inmensa inmensa mayoría mayoría de las televisione televisioness del mundo mundo y especialme especialmente nte en el modelo elaborado por  los EE.UU., funciona como encuadre encu adre del discurso televisivo, televisivo, esto es, como guía de lectura ubicada en relación no al plano manifiesto de los contenidos, de los programas, sino "a ciertas operaciones semánticas semánticas profundas profundas que subya subyacen cen al conjun conjunto to del discur discurso" so"58. En ese ese plano plano la dime dimensió nsión n metalingüística del texto publicitario no "nombra" evidentemente al programa que le sigue o al interior del cual aparece, pero no deja de tener ciertas relaciones con él, puesto que en ese texto resid residee el "prog "program rama" a" que que nos nos remite remite al ámbit ámbito o finan financie ciero ro y al de la organ organiza izació ción n de la 58

E. Veron, "Acerca de la constitución del discurso burgués en la prensa semanal", en  Rev. Chasqui. No. Chasqui.  No. 4, p. 9 1.

tempora temporalida lidad d televisi televisiva va —mañana —mañana,, medio medio día, día, tarde, tarde, media media tarde, tarde, noche— noche— que reglame reglamenta nta el “precio” “precio” de la emisión del texto texto y el "valor" del program programa. a. En un muestreo efectuado efectuado sobre el canal nacional colombiano colombiano pudimos comprobar la existencia de relaciones relaciones entre el tipo de horario de emisión, el tipo de programa y de objeto publicitado publicitado —de uso familiar, de uso personal, personal, de  promoción social, de servicios etc.; o bien referentes al ocio, a la higiene y la belleza, a la alimentación, etc.— como de texto publicitario: dibujo fijo o animado, película de estudio o "al natural", tipos de voces, de músicas o de efectos sonoros, e incluso ciertas diferencias en la calidad estética. Las constantes descubiertas no operan desde luego según una relación de fatalidad (causa/efecto)  pero sí configuran y dejan entrever algunos rasgos y algunas operaciones de eso que llamamos "eficacia "eficacia del ritual", ritual", que mezcla mezcla y entreteje entreteje factores factores visualizables visualizables y contabilizables contabilizables con otros que sólo es posib posible le atisbar atisbar y nombrar. Diríamos que la relación del texto publicitario al discurso discurso televisivo opera por “referencia anafórica": no hay identificadores identificadores explícitos explícitos sino coopresencia y contextualidad contextualidad y siempre con la "ayuda" "ayuda" de una enorme redundancia. Con ésta queremos señalar  la “carga “carga"" de public publicida idad d en su relaci relación ón a la capa capaci cida dad d de resis resisten tenci ciaa del del prog progra rama ma y del del espectador. espectador. El espacio más más denso en ese sentido es el de algunos noticiero noticieross que, a la cantidad de spots que cortan la emisión, añaden toda la publicidad que lo atraviesa de múltiples maneras:  publicida  publi cidad d —foto — foto fija— del producto que patrocina el programa y sobre la que éste se abre, y que qu e  permanece  perma nece .a la vista vist a durante duran te la mayoría mayorí a del tiempo, tiempo , salvo salv o cuando c uando la cámara enfoca otras fotos fijas de productos productos que patrocinan patrocinan noticias por secciones como las deportivas, deportivas, las internacion internacionales, ales, las económicas; además estas secciones se inician con una frase del locutor que dice más o menos: “la marca tal les ofrece ofrece las noticias tales". tales". El "encuadre" se convierte así en travesía travesí a que permite al imaginario comercial navegar, a través del ver, hasta los bajos fondos en los que la demanda demanda de inform informació ación, n, de entre entreten tenció ción n o de cultur cultura, a, es atrapa atrapada da y moldeada moldeada por la oferta comerci al. El espect esp ect ácul o n os ratifi rat ifi ca en la llamada llamada a no no salir del estadi estadio o del espejo espejo:: el del del reconocim reconocimiento iento en en y  por las la s imágenesimá genes-objet objetos. os.

4. Cine: las paradojas del ver/leer Llamar lectura a la manera de a bordar un film es de hecho paradójico paradójico.. Un film film se ve ve y se oye, oye, ¡es evidente evidente!! Pero es es precisamente precisamente contra esta evidencia que escribo, contra la pretensión vieja y nueva de equiparar el conocer al ver, a la aprehensión inmediata del objeto, a la transparencia del sentido que que se da porque está está ahí, al alcance del del ojo y del oído. oído. Plantear el film como objeto de lectura es romper con una larga tradición de crítica cinematográfica deudora de una epistemología  positivista ya sea en su vertiente idealista o empirista. Leer un film sólo es posible si el film es abordado como texto o escritura, y esto sólo es posible mediante un trabajo, unas operaciones que transforman transforman el objeto mismo, su estatuto en cuanto objeto de conocimiento. conocimiento. La lectura aparece entonces como el polo correspondiente al otro, al de la escritura, y ambos como actividad, como traba trabajo, jo, como como proces proceso o de prod produc ucció ción n signif significa icante nte.. Sólo Sólo a una una conce concepc pción ión del arte arte como como "expresión" de la genialidad del autor o de la inspiración de las musas puede corresponder esa actitud especial, pasiva, del ojo que simplemente ve porque todo está ahí y el oficio del crítico es recoger lo que un ojo fundamentalm fundamentalmente ente neutro percibe. A eso lo llaman "objetividad" "objetividad" todos los  positivistas del mundo, y el sentido senti do común que tiene mucho de ello también. también. Y la evidencia evidencia se torna torna así criterio criterio del conocer conocer impidiendo impidiendo de raíz el replanteamiento replanteamiento de sus mismos presupuestos. Porque claro claro está que que los tiene. tiene. Pero la clave clave del positiv positivismo ismo es ocultarlos. ocultarlos. Frente a la evidencia evidencia sólo queda entonces la aceptación o el cinismo. cinismo. Mi punto Mi  punto de vista es otro, radicalmente radicalmente distinto: e l que plantea el conocer como proceso complejo, fatigoso, difícil, problemático, como un trabajo. Y pone sobre sobre la mesa las cartas boca arriba, los presupuestos.

 — La acción acc ión del relato El análisi análisiss del film como como "mensa "mensaje" je" tiene tiene una larga tradició tradición n que encontró encontró modernam modernamente ente su conceptualización en las teorías de la comunicación comunicación inspiradas en Saussure Saussure y Jakobson. Ha sido necesaria la intervención crítica de Metz para romper con el idealismo y el expresismo subyacente a esa categoría correspondiente a la llamada totalidad del sentido y a los análisis análisis de contenid contenido. o. El análisis del cine como práctica significante era imposible mientras fuera estudiado desde una

 perspectiva de la comunicación comunicac ión que ignoraba o ponía entre paréntesis paréntes is la producción significante específica específica de lo fílmico fílmico.. El mismo mismo Metz en sus primeros primeros trabajos intentó transplantar al cine las categorías saussurianas, camino que debió abandonar para dar entrada a una red de conceptos menos simples y reductores: "los films no son mensajes sino textos, ya que cada film comporta varios código códigoss y otros otros tantos tantos mensaje mensajes" s" (Lenguaje y Cine,  pág. 67). El paso del análisis del mensaje al análisis del texto corresponde a lo que E. Veron ha llamado el paso de la primera a la segunda segunda semiolo semiología: gía: esto es, la ruptura ruptura con el modelo modelo específi específicam camente ente lingüísti lingüístico co en cuanto cuanto modelo modelo único, único, aunque aunque conservand conservando o algunos algunos concept conceptos os que instrum instrumenta entalmen lmente te siguen siguen siendo siendo válidos. válidos. La categoría categoría de mensaje, mensaje, subsidiari subsidiariaa de una teoría teoría del lenguaje lenguaje oral con una sola dimensión, deja el paso a una teoría del texto con múltiples dimensiones semiológicas, es decir en la que cada cada texto reenvía reenvía a una pluralidad de estructuras, estructuras, o está abierto a una plural pluralida idad d de sistematizacio sistematizaciones. nes. Escribe Escribe Metz:  Los sistemas textuales propios propios de los diferentes diferentes films, de los diferentes cineastas, de los diferentes géneros, juegan en el cine un rol considerable, algunos de ellos  poseen  poseen tanta autonomía y cohesión como el lenguaje lenguaje cinematog cinematográfi ráfico co mismo, mismo, (op. cit. pág cit.  pág.. 111). La super superac ación ión del del "imperiali "imperialismo smo lingüístico" lingüístico" ha permitido permitido por otro lado romper con una concepción  puramente lingüística del fenómeno narrativo. Hablar de narración cinematográfica deja de significar entonces la referencia a un código código específico para convertirse convertirse en un nivel de análisis en e n el que convergen y desde el que pueden ser trabajadas diversas isotopías que atraviesan el film de una  punta a la otra. El relato ya no es más el campo de lo anecdótico, anecdót ico, de los "contenidos", "cont enidos", sino un nivel nivel específi específico co de trabajo trabajo de los significan significantes: tes: "la palabra narración es el único término común a la  problemáti ca de la historia y a la problemática problemática de la ficción" escribe P. Faye (Liítérature et  ideologies, pág. ideologies, pág. 199). 199). La narración es es una forma de producción. Su estatuto no es en modo alguno el de la anécdota, sino el de una operación de transformación, de cambio de forma, entendida ésta no como ese componente idealistamente separable de la materia sino como el trabajo de la mate ria misma, mis ma, cambio cambio de forma que mediatiza mediatiza todo todo cambio material material (P. Faye: Faye: Théorie du Récit ,  pág. 20 y ss.). La narración es una acción o mejor un conjunto de acciones. Lo que a propósito del cine significa que la forma relato es el conjunto de operaciones que trabajan el conjunto de las materias significantes fílmicas, sean imágenes, sonidos o colores. El análisis de la narratividad o del relato es sin duda uno de los capítulos más avanzados de la semiolo semiología. gía. Sobre Sobre todo en lo que concie concierne rne al relato relato literar literario, io, el análisi análisiss actual actual ofrece ofrece una multiplicidad de modelos. Para nuestro ejercicio vamos a seguir uno de los más elementales, el modelo actancial mítico propuesto por Greimas: D es ti n a d o r

→

Op o ne n t e

→

↑

Ob j et o →

De st i n a t a ri o

S u j et o ←

Ay u d a n t e

El modelo está por entero centrado sobre el objeto del deseo perseguido por el sujeto, y situado, como objeto de comunicación entre el destinador y el destinatario, estando el deseo del sujeto, por   su parte modulado en proyecciones de ayudante y oponente (A. J. Greimas, Semántica Estructural ,  pág. 276). Alguien (Sujeto) desea-busca algo (objeto) cuyo dueño (Destinador) lo tiene destinado para alguien (Destinatario), en esa búsqueda alguien (Ayudante) colabora con el Sujeto, mientras que alguien (Oponente) obstaculiza la búsqueda y por tanto la satisfacción del deseo. Apartándonos un tanto de Greimas proponemos que las relaciones de estructura entre los actantes sean las siguientes:

relaciones de deseo: deseo: relaciones de poder :

Sujeto - Objeto Destinador - Destinatario Destinador

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Sujeto relaciones de mediación entre Poder - Oponente Deseo Ayudante

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El esquema se complica casi siempre al ser aplicado, no sólo por la ausencia de algún actante sino sobre todo todo por la acumulación acumulación de funciones funciones en un mismo actante. actante. Dado el carácter carácter de ejercicio metodológico de lo que sigue no preten pretendem demos os que las estruc estructur turas as propue propuestas stas sean sean las únicas únicas  posibles. En últimas no es el detalle de cada micro-estructura actancial el que nos interesa (…)