El juicio estético, edit. Books, Michaud Yves Introducción El libro trata sobre cuestiones de la defnición de arte y la naturaleza de la experiencia estética. El arte constituye su aspecto !s esencial. "e podr#a decir $ue el arte en %eneral &est! bien incluso cuando no est! bien bien' ' ("tanley )onen* +os c!nones art#sticos se han reducido en debates acerca de criterios estéticos, si desaparición o disparidad y sobre el valor del arte iso. +os interro%antes se han prolon%ado en un dia%nostico pesiista de la desaparición de los criterios estéticos o valor del arte coo tal. Este razonaiento dicta $ue el arte puede ser cual$uier cosa, todo vale (por$ue no hay criterios estéticos*, el arte es nulo. Explicado con una conclusión popular el arte se ha acabado, ha desaparecido.. El arte ya no desaparecido n o son las bellas artes y una época de la cultura se ha terinado. +o $ue constata es la proli-eración de -oras y experiencias art#sticas $ue por no ser &elevadas' o &refnadas' y no estar or%anizadas en un &sistea de las artes' arcan el capo de lo estético. )e arte ahora carente de coherencia y or%anización, las di-erencias de valor subsisten pero sin $ue pueda soetérselas a una escala %eneral. o hay rezón para $ue el pluraliso $ue heos de tener en cuenta para ser feles a los hechos $ue desebo$ue en relativiso del &todo vale'
Capítulo I +a experiencia estética a través del prisa de la odernidad. +a situación posoderna se caracteriza por la pérdida de la credibilid credibilidad ad de la historia del arte de los si%los /0/ y //. "e caracteriza !s por la desaparición de la idea isa de una historia en benefcio de las historias y de los desarrollos locales. Esta situación deja de reaparecer en el pluraliso de las pr!cticas y de los valores. 1oy es claro $ue todo o casi todo es posible y coexiste siult!neaente del arte de la elite predeterinante !s elaborado. Esta diversidad abre paso en el presente y en el interior de la cultura. +a irada tabién se abre sobre una diversidad %eo%r!fca $ue en parte -ue reconocida pero tabién tabién al reconocida en el useo ia%inario Malraux y de al%unos artistas en $uerer hacer pro%resar en todas partes arte oderno. )e repente resulta $ue soos uy ricos o uy pobres ante una variedad de obras y experiencias $ue nos hacen hacen dudar se%2n sea el caso. caso. +o $ue se ha convenido en llaar &el undo del arte continua pretendiendo unifcar esta diversidad y construir un concepto de arte contepor!neo toarse en serio esta situación de diversidad bajo la condición de una unidad &estética' exi%e una cr#tica de car!cter absoluto y univoco del juicio estético.
I. +a psicolo%#a social nos ense3a al%o sobre las experiencias estéticas a partir del oento en el $ue con sus étodos en la elucidación del n2cleo estable de las experiencias estéticas del individuo. +a historia del arte uestra $ue las pr!cticas llaadas art#sticas, cuales$uiera $ue sean sus variaciones siepre son pr!cticas $ue obedecen re%las !s o enos expl#cita, 4odifcadas en un canon a partir de las cuales podeos evaluar la excelencia de las producciones. El valor $ue le da la sociedad y la época condiciona su recepción estética. o solo se trata de entender las cualidades -#sicas exclusivaente ($ue a veces las tiene y a veces no* una obra producida por un oviiento, %rupo o escuela defne un abanico de ras%os. 5na vez aportadas estas precisiones resulta !s evidente $ue las cualidades en cuestión pueden ser uy distintas. 0%ualente el car!cter onuental de una obra, es decir de -uncionar coo talis!n o eoria ocupa un lu%ar uy iportante. 4ual$uier obra sobre vidas y leyendas de artistas enciona cualidades de la pr!ctica ocasional de una actividad el car!cter irre-renable o copulsivo con la $ue -ue llevada a cabo. Estas cualidades no se encuentran en todas las obras pero no son tapoco cualidades dispersas ni siepre incopatibles. +a historia de las escuelas y de los aprendizajes uestra $ue esas cualidades art#sticas son objeto de una transisión coherente y de una constante elaboración $ue las desarrolla las enri$uece y odifca. El arte es una actividad codifcada cuyo códi%o est! continuaente en proceso de elaboración. II. si entendeos la diensión de la experiencia estética, es posible ponerla en relación con estas cualidades art#sticas de dos aneras 6. 5na hipótesis de una experiencia estética es la contrapartida de ciertas cualidades art#sticas. o se trata !s $ue de reafras la existencia de nuestros %ustos est!n causados por las cualidades de los objetos. 7. 8or otra parte una vez puesta esta correspondencia de principio entre experiencia estética y cualidades art#sticas del objeto el proceso de -oración del juicio estético consiste en aprender a hacer corresponder una relación adecuada a las cualidades adecuadas. III. esta 2ltia observación arca una de nuestras principales difcultades $ue en la situación del pluraliso vivios. +a puesta en relación de una experiencia estética y de las cualidades art#sticas, es una proble!tica. )efnidas por un canon se tiene la sensación de $ue ya no se puede con-rontar una diversidad con otra. )os re9exiones pueden atizar esta difcultad 6. El pro%raa de una investi%ación fna de las diversas respuestas estéticas a la diversidad de obras. 7. las personas se interesan por aspectos uy di-erentes. 5nos valoran la otivación del artista ientras $ue otros se interesan por los rastros históricos o por el éxito técnico.
IV. si se $uiere enri$uecer de nuevo estos datos y darles la concreción de una experiencia estética no &en %eneral' sino hecha ante un objeto deterinado, $ue el receptor desde soeterse a las condiciones de aprendizaje. VI. la situación posoderna produce las condiciones de un an!lisis de las obras y de los juicios coloc!ndolos ante la diversidad de las cualidades art#sticas, de la diversidad de las experiencias estéticas y de la diversidad de sus condiciones de elaboración. &una %ran desorientación' es as# la condición de una claridad y una lucidez nuevas.
Capitulo II 4riterios estéticos &4uando teneos $ue hablar de juicios estéticos no encontraos esas palabras para nada, sino una palabra usada coo un %esto acopa3ado a una actividad coplicada. (El juicio es un %esto $ue acopa3a a una vasta estructura de acciones no expresadas por un 2nico juicio.*' +. :itt%enstein. I. 5n criterio estético deber#a, pues, ser lo $ue nos perite distin%uir las producciones art#sticas, hacer la elección entre ellas. 4onstatar $ue no hay criterios estéticos si%nifca $ue ya no hay edios para hacer distinciones. Enc#as estéticas es inensa y siepre lo ha sido. Esta diversidad va desde las experiencias de eoción sublie hasta los estreeciientos oent!neos o superfciales. +a situación &noral' es $ue cada uno pretende siepre juz%ar perentoriaente lo $ue vale y lo son tan variables coo las experiencias y los individuos $ue juz%an. ;odo el undo pretende ser buen juez, todo el undo est! se%uro de su %usto. +os juicios son todos tabién cate%óricos, pero son al iso tiepo plurales. "e pueden adoptar tres posiciones o tres -oras posibles de reacción, de de-ensa o evasión 6. se reconoce esta diversidad inensa de los objetos y los juicios, pero para anularla en nobre de un verdadero doinio de la estética $ue escapar#a a la con-usión. 4onsiste en salvarse del abi%arraiento, de la coplejidad y del desorden de la experiencia por el retorno a posiciones estables $ue est!n justifcadas sea por el curso de posiciones estables $ue est!n justifcadas sea por el curso de la historia del arte, sea por las predilecciones del %usto o por el ar%uento de autoridad $ue nace del consenso de un edio $ue se considera iluinado.
7. se reconoce $ue las experiencias son tan diversas $ue han lle%ado a ser inconensurables y $ue todo interro%ante acerca de la naturaleza de la estética es en adelante vana. <. una tercera actitud consiste en pensar $ue debe haber al%2n v#nculo entre experiencias uy di-erentes pero a enudo tan seejantes y conexas $ue la pluralidad, $ue puede ser objeto de una aproxiación razonada, incluso si ésta no disolver! a a$uélla.
+a priera posición es una -alsa de-ensa $ue no nos ueve del do%atiso cl!sico, consiste en presuponer un doinio de objetos o una -ora de experiencia estética. +a se%unda posición no es teórica y lo asue. 4ada cual tiene sus %ustos, lo $ue no es necesariaente alo para los %ustos, a -alta de dejar su capo a la re9exión estética. =hondando en la tercera posición si la experiencia estética tiene una diversidad, esa diversidad no est! enos soetida a criterios $ue la or%anizan. >4u!les son esos criterios y cóo operan? II. previaente hay $ue deterinar las condiciones o las constricciones a las $ue dicha posición debe responder. +a idea a$u# es !s odesta, a saber 6. @ue todo huano tiene derecho tiene experiencias estéticas, cual$uiera $ue sea el nivel, el refnaiento supuesto, la aparente pobreza, la banalidad estereotipada o la sutileza $uintaesenciada. Ese principio no es incopatible con la idea de $ue esta suerte de experiencia pueda necesitar una atención especial o una iniciación. 7. @ue la experiencia estética e susceptible de %rados en escala de apreciación y refnaiento. Es una idea $ue concuerda con la de la atención y la iniciación re$ueridas, $ue pueden, por su parte, tener %rados. +as apreciaciones realizadas en las experiencias estéticas son relativas le corresponden, en %eneral, doinios de objeto adecuados en cuya experiencia el individuo -oras sus odos de aprehensión. <. Ainalente la teor#a propuesta debe de respetar el len%uaje real de los juicios estéticos. III. &el jue%o de la evaluación' las expresiones utilizadas exi%en el conociiento de un #nio de len%uaje técnico copartido por los adiradores, a lo $ue el espectador es llaado a unirse desde el oento $ue epieza a coprender el jue%o de la evaluación. +os criterios sirven para descubrir los objetos, para a%ruparlos en clases y celebrarlos ediante el ses%o de un len%uaje $ue los iniciados tienen $ue copartir. +os ras%os re%istrados sirven para cate%orizar las obras, acercarlas a otras, inscribirlas en las continuidades o las -ailias, suscitar coparaciones. "e trata siepre tabién de subrayar los puntos $ue erecen atención.
+as di-erencias de %rado en dichas experiencias. El car!cter relativo de las apreciaciones. El uso de enunciados coplejos e incluso uy técnicos $ue hay $ue saber coprender o utilizar para entrar en el jue%o de la valoración.
+o iportante es tener conociiento y las palabras para decirlo y podaos entrar en el jue%o de enunciados $ue lo dicen. +o cual nos conduce directaente a exainar la naturaleza del juicio estético. IV. El enunciado del juicio estético es a la ves &personal e inscrito en un jue%o de len%uaje copartido.' 8ero en sus enunciados por suyos $ue sean, no existen !s $ue un len%uaje ha la vez especializado y copartido. +as ideas $ue resultan !s -recuentes a propósito de esto $ue son &sisteas de counicación' y $ue dependen de odalidades de aprendizaje siepre particulares se%2n los objetos y los contextos. "e puede sostener entonces $ue un juicio estético -ora parte de un jue%o de len%uaje de evaluación y counicación. +a invención y elaboración se hace a través de las interrelaciones en curso de las cuales se ensayan, se adoptan o rechazan nuevas re%las de uso. 4uando los criterios son estables, pura y sipleente se aplican. )e ah# el -recuente sentiiento en al%unos de estar desnudos, de no saber $ué decir, de &$uedarse coo un idiota' ante las obras para las cuales no tiene palabras y no saben ju%ar el jue%o, de ah# tabién los entusiasos de los novicios o los estereotipos de los aprendices cuando descubren un jue%o de len%uaje $ue les perite decir lo $ue sienten, elaborar su sentiiento, expresarlo y -orarlo. +a entrada en el jue%o de len%uaje es pura y siple iitación, era asun ción de clichés y aneras de hablar ya hechas. V. El error esta de hecho del lado de los pesiistas tiene $ue ver con $ue si%uen $ueriendo considerar esta diversidad de criterios en el arco de un jue%o de len%uaje 2nico coo se ha dicho, hacen de la diversidad y de la disparidad de criterios la defnición paradójica de un arte defnido. Y sin ebar%o esta respuesta no les convencer!, y por dos r azones 6. por un lado pre%untan cóo pueden acoodarse en esta pluralidad, coo es posible orientarse en esta -ailia tan heteróclita y tan coplicada de jue%os de len%uaje estéticos. 7. 8or otro lado, dir!n de nuevo $ue $uerr#an disponer criterios $ue peritan saber $ue son verdaderaente las cualidades estéticas de las obras a las $ue se aplican. =ndan en la b2s$ueda de criterios $ue ten%an un -undaento inre, $ue la cosa en cuestión sea el objeto o la sensibilidad del espectador. VI. =lcance de los criterios. :itt%enstein introduce la distinción entre criterios y s#ntoas $ue son clave para la cuestión del alcance de los criterios, la expone del si%uiente odo
&>4óo sabes $ue tal o cual cosa es el caso?', respondeos a veces dando criterios y a veces dando s#ntoas. )enoino &s#ntoa' a un -enóeno cuya experiencia nos ha ense3ado $ue coincid#a de un odo u otro con el -enóeno $ue es nuestro criterio de defnición. Es di-#cil hacer la distinción entre el -enóeno utilizado coo criterio de defnición y el s#ntoa $ue lo acopa3a uy a anudo ele%ios el criterio de defnición ediante una decisión arbitraria. o
o o
+os criterios son especifcaciones $ue ponen (se%2n conven%a* individuos o %rupos para juz%ar $ue al%o tiene un estatuto o un valor particular. 8eriten identifcar al%o coo &un caso de'. son odos de entendiiento en la counicación para hacer distinciones y poderlas justifcar si se presenta el caso.
;eor#a socioló%ica de los undos del arte los conceptos de jue%os de len%uaje y de criterios dan cuenta del -uncionaiento del discurso estético ientras $ue los -actores sociales dan cuenta, por su parte, de la contin%encia de los di-erentes discursos y de su pluralidad. En este aprendizaje utuo se ajustan aneras de hablar y aneras de sentir. "aber hablar condiciona saber sentir, o !s bien ello viene a ser lo iso. 1ue en su ensayo sobre la nora del %usto el aprendizaje y el ejercicio desarrollan y afnan la delicadeza del sentiiento. 4iertas convenciones convierten a un s#ntoa en criterio de defnición. 5n relativiso no basta para hacer desaparecer la idea de $ue se trata de al%o !s $ue de convenciones de apreciación y de $ue ser#a preciso poder dar una interpretación al enos !s -uerte de los criterios. +os criterios tienen una -uerza $ue va !s all! de la convención. Existe un -reno al deslizaiento hacia la convención el odo en $ue coprendeos el sentido de las palabras $ue por defnición epleaos en el len%uaje. "on ellos los $ue nos periten aplicar conceptos y por lo tanto conocer $ue al%o sea al%o lo $ue de %olpe sit2a la noción de juicio en la base de nuestro conociiento, un conociiento $ue consiste en aplicar los conceptos de un len%uaje a las cosas de un undo. :itt%enstein dice en uchas ocasiones $ue la apreciación estética en el arco de un jue%o de len%uaje exi%e la descripción de toda una cultura en toda su coplejidad. Esta inserción del jue%o de len%uaje estético en la cultura y en el conjunto de los ras%os de una -ora de vida es uy pro-unda. "i hay convención esta inte%ra de en realidad convenciones parciales y locales. uestras apreciaciones estéticas hunden sus ra#ces hasta raifcaciones pro-undad de nuestras -oras de vida y de cultura y tocan nuestros odos de coprensión !s vitales.