Una Nueva Generación de Triunfadores Capitulo 1: Triunfador es quien reconoce que ha nacido para llegar a la cima. Hay que entender que el destino nadie lo puede modificar, pero hay que entender que el destino no es aquello que está por venir. Nadie puede predecir el futuro, pero todos los podemos inventar. ¿Qué es el destino? Es un determinante circunstancial fuera fuera de nuestro control. Ej: huracán, terremoto, tornado, etc. El futuro en cambio, si lo podemos modificar, lo que está por venir, lo podemos modificar y modelar, lo cual significa que de acuerdo con lo que se quiera ser y adonde llegar cada uno de nosotros puede hacer de su porvenir lo que quiera. Los jóvenes tienen que entender que el porvenir, ese enorme camino que tienen por delante, es producto de nuestro propio diseño, porque es precisamente el porvenir lo que si podemos manejar. Si la gran cualidad del ser humano es aprender, esta cualidad está presente, más que en nadie, en los jóvenes. Jóvenes son todos los que poseen humildad de espíritu. La vida es para triunfar… la vida es para confiar en nosotros mismos… a pesar de todas las limitaciones, el ser humano puede ser un autentico triunfador. Cada quien es responsable de su propia circunstancia. El ser humano no es víctima de la circunstancia… circunstancia… él crea su propia circunstancia. En la vida ¡lo más importante importante no es competir, lo único importante en la vida es triunfar! La diferencia entre un triunfador y un perdedor es que éste siempre dice: “Casi -casi lo logre”, y el triunfador afirma: “Lo hice”. Para ser triunfadores debemos descubrir y reconocer su talento; todos los seres humanos tenemos un talento especial que sobrepasa a todos los demás y debemos descubrirlo. En esta vida, para triunfar, hay que ser un pez grande en una pecera pequeña. Los que trascienden son los que logran ser, no los que más logran tener. Lo más difícil y fundamental para vivir plenamente es “ser lo que quieres ser”, y se tiene que luchar contra viento y marea para lograr lo que se desea ser. Capítulo II: Triunfador es quien ante el fracaso se agiganta y se desafía más allá de sus limitaciones. ¿Qué es el éxito? Es lograr lo que deseamos, tanto en el orden material o físico como en el orden intelectual o espiritual. Si alcanzo lo que deseo, eso es éxito. Si cumplo mis anhelos… es éxito.
¿Qué es el fracaso? Fracaso no significa derrota: significa simplemente que todavía no hemos tenido éxito. Fracaso no significa estupidez, sino el camino para acumular la sabiduría necesaria para triunfar. ¿Qué significa entonces el fracaso? Es una lección, una oportunidad para aprender, una piedra con la que no debemos volver a tropezar. Aprendamos que cada vez que escuchamos algo debemos preguntarnos: ¿y esto en qué lo puedo aplicar? El secreto para aprender mediante la tecnología de lo obvio se llama humildad; si no tenemos humildad, jamás vamos a aprender de los triunfadores. ¿Qué es la envidia? Es el grado máximo de admiración deformada. Lo único que garantiza la evolución del hombre es su capacidad de cambio. En esta vida no se necesita valor para morir, se necesita valor para vivir. Recuerden que en esta vida hay que ser astutos para hacer los cambios; no se trata de aventarse como imbécil, hay que ser hábil para lograr consolidar los cambios que realicemos. ¿Qué es la derrota? Es la salida de los cobardes. Cada fracaso nos va acercando más al éxito, porque el fracaso nos dice cuales son las puertas equivocadas y nos obliga a buscar y encontrar la puerta adecuada. El conocimiento es de quien lo aplica, no de quien lo crea. El único misterio que nunca vamos a descubrir es la dimensión de nuestra ignorancia. Y muchas personas, con lo poco que saben, creen que lo saben todo. ¿Cuál es la fórmula para el cambio? Es muy simple siembre una acción, persevere con disciplina durante tres semanas y en ese momento se convertirá en habito, el habito se volverá una nueva costumbre y la costumbre generara una nueva cultura, que a su vez hará surgir un proyecto de vida. Aristóteles decía: “La excelencia es un hábito”. Capítulo III: Triunfador es quien se compromete en cada acción que realiza y, sin titubeos se entrega con todas sus potencialidades. El presente es resultado lógico del pasado y el futuro será resultado del presente, si quiero cambiar mi futuro, el momento de invertir es ahora, el cambio es ahora; si se lamenta en el presente jamás va a tener un buen futuro. Tenemos que aprender a vivir intensamente el presente… lo único eterno es el presente. Triunfador es quien se compromete en cada acción que realiza, y esto significa que cada acción debemos realizarla dando lo mejor de nosotros mismos sin limitación alguna.
El gran secreto para triunfar es el esfuerzo, que garantiza obtener lo que deseamos. Anhelamos una vida sin esfuerzo, ligera y veloz. Entramos a la era de la posmodernidad: la era del hombre moderno que quiere todo sin esfuerzo. La circunstancia ideal para triunfar no se da nunca; hay que crearla. La voluntad también es el gran secreto. En la virtud está la propia recompensa; si se pone virtud a la vida, la fortuna llegará; la virtud nunca se da por vencida, definitivamente el que posee virtud lo posee todo. Voluntad y tenacidad: son esencia de los triunfadores. Capítulo IV: Triunfado es quien vive intensamente el espíritu de Excelencia y lo refleja excediéndose positivamente en todas la acciones que realiza. Excelencia viene de exceso. La excelencia es progreso cuando nos excedemos positivamente. Para triunfar hay que ser excelso, es decir, hay que excederse en todo: a cambio de uno , demos tres. La perfección siempre es un cumulo de pequeños d etalles… pero la perfección jamás será un pequeño detalle. ¡Trato mata todo! Si queremos ser excelentes tenemos que aceptar el concepto del buen trato, sobre todo hacia la gente más cercana a nosotros. Lo que esté dispuesto a darle a la vida, la propia vida nos lo dará. Capitulo V: Triunfador es quien no contabiliza sus pérdidas, pues siempre arriesga todo para lograr el éxito. Los triunfadores no están dispuestos a recordar el pasado; obviamente no lo pueden borrar, pero se comprometen con ellos mismos a olvidarlo; aprenden lo que tienen que aprender de él y lo archivan para siempre. Existen dos tipos de seres humanos: los que triunfan y los que nunca fracasan. Los que nunca han fracasado es porque nunca ha intentado triunfar, nunca se atrevieron a lograr nada, por eso nunca han fracasado. El mundo no es para los cobardes; el mundo está hecho para los audaces. En la vida, ya sea que se pierda, se gane o se empate, lo importante es que se entregue todo con un solo objetivo; triunfar.
Lo importante en la vida es “intentarlo”: intentar muchas cosas, aunque solo algunas nos salgan bien. Lo importante es buscar caminos una y otra vez hasta que encontremos el sendero del triunfo. En la vida hay momentos en los cuales es todo o nada, y tenemos que elegir ir por todo, arriesgándonos; esos son los momentos estelares. Una forma inteligente, racional es aprender a arriesgar y apostar fuerte; si queremos ganar mucho, tenemos que apostar mucho. Si queremos ser grandes ganadores tenemos que aprender a ser grandes apostadores. Capítulo VI: Triunfador es quien reconoce la aportación de todos aquellos que lo ayudaron a llegar a la cumbre.
