SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA DE LA C O LEC C IÓ N CO C O M PE PEND NDIIO S
LITERATURA
ÍNDICE
Editorial
Teoría literaria ............................................................ .............................
Las iguras literarias.............................................................. ................. Literaturas orientales ................................................................. ............
2
Literaturas occidentales occidentales de la Edad Edad Antigua .......................................
3
Literatura romana: Siglo de Augusto ..................................................... Literatura medieval .................................................................... ............
5
Literatura moderna ................................................................................ Literatura del siglo XIX ............................................................. .............. Literatura del siglo XX ............................................................... .............
6
Literatura española ................................................................... .............
6
El Siglo de Oro español ....................................................................... .. El Neoclasicismo español .................................................................... El Romanticismo español ..................................................................... . Literatura española del siglo XX ........................................................... Literatura hispanoamericana ................................................................
8
Literatura peruana ...................................................................... ...........
9
Ejercicios propuestos ........................................................................... 11
Librería: A v. Ga G a rc ila so
d e la Ve Vega ga 978, Li Lima Telf.: 424-6563
ÍNDICE
Editorial
Teoría literaria ............................................................ .............................
Las iguras literarias.............................................................. ................. Literaturas orientales ................................................................. ............
2
Literaturas occidentales occidentales de la Edad Edad Antigua .......................................
3
Literatura romana: Siglo de Augusto ..................................................... Literatura medieval .................................................................... ............
5
Literatura moderna ................................................................................ Literatura del siglo XIX ............................................................. .............. Literatura del siglo XX ............................................................... .............
6
Literatura española ................................................................... .............
6
El Siglo de Oro español ....................................................................... .. El Neoclasicismo español .................................................................... El Romanticismo español ..................................................................... . Literatura española del siglo XX ........................................................... Literatura hispanoamericana ................................................................
8
Literatura peruana ...................................................................... ...........
9
Ejercicios propuestos ........................................................................... 11
Librería: A v. Ga G a rc ila so
d e la Ve Vega ga 978, Li Lima Telf.: 424-6563
LITERATURA
3
COLECCIÓN
Editorial
Indispensables compendios teórico-prácticos, con una didáctica moderna aplicada a todos los cursos que el postulante debe dominar.
OMPENDIOS
Nivel: Intermedio
Compendio de Aritmética Fondo Editorial Papel periódico 17 × 24 cm
Compendio de Biología
Compendio de Física
Compendio de Química
Fondo Editorial Papel periódico 17 × 24 cm
Fondo Editorial Papel periódico 17 × 24 cm
Fondo Editorial Papel periódico 17 × 24 cm
Compendio de Historia del Perú
Compendio de Historia Universal
Fondo Editorial Papel periódico 17 × 24 cm
Fondo Editorial Papel periódico 17 × 24 cm
Compendio de Anatomía Compendio de Álgebra Compendio de Economía y Educación Cívica Compendio de Filosofía y Lógica Compendio de Geografía Compendio de Geometría Compendio de Raz. Matemat. Compendio de Raz. Verbal Compendio de Literatura Librería: Compendio de Trigonometría Compendio de Psicología
Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial Fondo Editorial
Compendio de Lengua Fondo Editorial Papel periódico 17 × 24 cm
A v. Ga G a rc ila so d e la Ve Veg ga 978, Lim Lima a Te lf.: 42 424-6 -65 563 www.ed .edit itor orials ialsa anmar nmarc c os. os.c c om
4
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
TEORÍA LITERARIA
ARTE Y LITERATURA
•
La lírica Se caracteriza por ser la manifestación del yo
La palabra arte arte,, aun cuando suele designar procedimientos habituales (“arte de hablar correctamente”, “arte de tallar la piedra”), en la vida cultural se
poético del autor. Generalmente encuentra su mejor expresión en la poesía escrita en verso,
aunque también hay ejemplos en prosa lírica,
reere a la actividad espiritual por medio de la cual el hombre crea obras con un n estético.
como la del conocido libro de Juan Ramón Jiyo . Existe una lírica subjetiva, ménez: Platero y yo. es decir, la que ofrece directamente la presen-
Editorial
Literatura (del latín litterae, Literatura litterae, ‘letras’) es, pues, el arte que tiene por instrumento expresivo a la palabra. Obra literaria es la creación artística expresada en palabras, aun cuando no se haya escrito, sino propagado de boca en boca. Literatura alude, además, al conjunto de obras literarias de un país, época o género; así podemos hablar de “li teratura griega”, “literatura medieval” o “literatura
cia del poeta; pero también existe una lírica objetiva, aquella que se muestra más observadora del mundo exterior.
•
Corresponde a la literatura escrita para ser
escenicada, es decir, para constituir obras de
épica”.
LOS GÉNEROS LITERARIOS Los géneros literarios son, más que formas deter minadas y obligatorias, las actitudes actitudes básicas básicas que el escritor adopta ante un tema. Estas pueden ser la lírica lírica,, la épica épica,, la narrativa narrativa y y la dramática dramática.. Las líneas que separan una manifestación literaria de otra no son tajantes. Un dramaturgo puede intercalar en su pieza teatral un poema, así como un narrador puede detenerse en la actuación dialogada de las emociones de los personajes,
por ejemplo. Un género tan amplio como el de la novela admite prácticamente la intercalación de cualquier otro: poemas, discursos, diálogos, etc. Por eso, cuando señalemos que el diálogo es ca-
La dramática (teatro)
teatro representadas en un escenario por actores bajo la supervisión de un director.
•
El ensayo Más dirigido a la razón que a las emociones, el ensayo propone la presentación y la defensa de ideas o planteamientos de opinión acerca de un tema dado. A diferencia de los textos
cientícos o no literarios, el ensayo adopta una clara actitud estética y de belleza artística como uno de sus nes fundamentales. Verso y prosa: Los conceptos de género que hemos mencionado son independientes de las formas prosa y verso. Esto se ve claramente si decimos que, aunque la mayoría de las obras narrativas en
racterístico del teatro (género dramático) y que la
la actualidad se escriben en prosa, también existen poemas narrativos –como, por ejemplo, los épicos
narración de hechos es característica de la novela o del cuento, debe entenderse que estamos re -
cantares de gesta, que narran hazañas de guerreros
riéndonos a características generales. Existen, sin
existen y existieron en el mundo antiguo y en la edad
embargo, obras literarias especialmente difíciles
de clasicar dentro de este nada rígido esquema (el caso de La Celestina, por ejemplo, cuya clasi cación dentro de un género determinado –¿teatro o novela?– se hace muy difícil). Para acercarnos a la literatura, esta clasicación de géneros resulta
heroicos–; que, aunque hoy resultan poco usuales, moderna; y que, aunque la lírica y el verso parecen indisolublemente ligados, es posible encontrar notables ejemplos de lírica en un texto escrito en prosa.
LA LÍRICA
muy útil, siempre y cuando recordemos que no es
inexible ni absoluta.
LA LÍRICA Y POESÍA
•
La épica o narrativa
Poesía lírica es la que mejor expresa los senti-
Se caracteriza por el predominio del relato, de la presentación de hechos, de sucesos y acciones; por esta razón está ligada al tiempo. Com bina la descripción del ambiente y de la acción,
mientos, imaginaciones y pensamientos del autor;
y la denición de los personajes. La épica se da tanto en verso como en prosa.
es la manifestación de su mundo interno y, por
tanto, el género poético más subjetivo y personal. El carácter subjetivo de la poesía lírica no equivale siempre, sin embargo, a un individualismo exclusivista: el poeta, como miembro integrante de
G a rc ila so d e la Ve Veg ga 978, Lim Lima a Te lf.: 42 424-6 -65 563 Librería: A v. Ga www.ed .edit itor orials ialsa anmar nmarc c os. os.c c om
LITERATURA
una comunidad humana –religiosa, nacional o de cualquier otro tipo– puede interpretar sentimientos colectivos. La lírica encuentra su mejor expresión en la poesía. La brevedad y la musicalidad del verso coinciden con el mundo de la sensibilidad de la lírica. in embargo, es necesario rearmar que no toda poesía es lírica. Existe prosa lírica, aun cuando no es mayoritario su cultivo. La brevedad del verso presta especial relieve a la concentración y a la interioridad, mientras que en la uidez y la continuicontinui dad de la prosa los sentimientos parecen quedar más diluidos. Prosa lírica es la de Valle Inclán, de Miró, de Martín Adán en La casa de cartón, la de écquer en sus Leyendas.
5
Oda losóca o moral: El moral: El poeta puede exaltar un determinado tipo de vida, ciertos valores morales. las odas que recogen estos temas temas y que reexioreexionan en relación con los grandes temas del hombre frente a su existencia se las ha llamado losócas o morales. Un ejemplo de este tipo de oda en nuestra literatura es la famosa “Oda a la vida retirada”, de Fray Luis de León.
Editorial
PRINCIPALES PRINCIP ALES ESPECIES LÍRICAS o trataremos aquí de ofrecer una clasicación de todas las especies líricas posibles; intentaremos dar un panorama nutrido de aquellas que se han mantenido como las especies líricas clásicas y que, incluso, siguen desarrollándose hasta la actualidad. ecordemos que la clasicación de especies lírilíri cas está hecha sobre la base de la intención, tono y temas tratados por el poeta. La oda: Es una composición lírica de larga y pres-
tigiosa tradición. Fue cultivada por los griegos y más tarde revivida por los poetas del Renacimiento. Puede tocar varios temas (religioso, amoroso, moral, etc.) y, asimismo, puede usar distintos metros. Pero, sea cual fuere el metro o tema tratado, la oda se caracteriza por expresar entusiasmo, el cual puede ser exaltado o sereno. Oda sagrada sagrada o relig iosa: Las alabanzas a Dios, a
los bienes recibidos de Él, son el tema principal de las odas religiosas. Tanto en los poetas místicos, renacentistas, como Fray Luis de León o San Juan de la Cruz, como en la Biblia, podemos encontrar ejemplos notables de este tipo de oda. Oda heroica o pindárica: La oda heroica recibe
el nombre de su creador, el poeta griego Píndaro, que compuso odas en honor a los vencedores de los antiguos Juegos Olímpicos. Aunque en gran medida los poetas han cantado los hechos heroicos o guerreros, también existen odas a otras concon quistas del hombre en el terreno de la ciencia o del espíritu. Un ejemplo latinoamericano de este tipo de oda es la oda “A la victoria de Junín”, del poeta nacido en Guayaquil osé oaquín lmedo.
Oda amorosa: En este tipo de composiciones el
poeta canta su pasión amorosa. Existen numerosos poemas amorosos, todos ellos de muy distinta naturaleza: algunos cantan al amor perdido, al despechado, al no correspondido; los hay melan melan-cólicos, desesperados, dolorosos. dolorosos. La oda amorosa, sin embargo, le canta a un amor feliz, triunfante, a su gozo y a su pasión encendida. Ejemplos de este tipo de odas los encontramos en el libro Razón de amor , de Pedro Salinas.
Oda festiva o anacreóntica: anacreóntica: En contraste con otras composiciones que hasta ahora hemos visto, la oda festiva tiene un carácter más super cial. Su propósito es cantar los placeres sensuales, los goces cotidianos de la vida. Este tipo de oda fue cultivado por el poeta griego Anacreonte y, luego, poco desarrollada en la literatura en castellano, hasta el siglo XX. En el XVI, Baltasar del Alcázar, poeta español, compuso un ejemplo interesante de este tipo de poema: “Cena jocosa”. jocos a”. El sigl siglo o pasad pasadoo Las odas elementales, de Pablo Neruda, fueron un ejemplo arquetípico del desarrollo de la oda anacreóntica en la modernidad. La elegía: Llamamos elegía a toda composición lí-
rica dedicada a cantar la pérdida de un ser querido o algn dolor profundo. on célebres las Coplas a la muerte de Don Rodrigo , de Jorge Manrique. Una de las elegidas más notables de nuestra literatura es la escrita por Federico García Lorca, el Llanto por Ignacio Sánchez Mejía . La canción: Esta canción: Esta especie lírica se asemeja mucho a la oda en su contenido e intención; pero preere los versos de arte menor (menos de ocho sílabas por verso), es más breve y generalmente tierna, dulce, melódica. e la época medieval tenemos hermosos ejemplos, entre ellos las Cantigas del rey Alfonso X el Sabio, escritas en gallego en loor de la Virgen. Un ejemplo moderno de canción son las tres canciones del poema “Breve follaje”, de Javier Sologuren, en su poemario Regalo de lo profundo.
G a rc ila so d e la Ve Veg ga 978, Lim Lima a Te lf.: 42 424-6 -65 563 Librería: A v. Ga www.ed .edit itor orials ialsa anmar nmarc c os. os.c c om
6
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
anción Una sola se eleva ajena a la memoria; en playas del crepúsculo desfallece una ola. Una ola me trae tu corazón de lejos surcando resplandores de su inviolable fuego.
El madrigal: Recibe este nombre la especie lírica que expresa breve y espontáneamente sentimientos amorosos. En nuestra literatura es clásico ejemplo de madrigal el del poeta español renacentista Gutierre de Cetina, delicado e ingenioso. La epístola: Es esta una composición dirigida directamente, con el tono y a l a manera de una cara, a un “destinatario”. Notable ejemplo de este tipo
Editorial Una ola nos lanza en la noche embriagados; y en nuestro beso toma color y forma un astro.
La endecha: Es una composición breve, triste, melancólica. No expresa un dolor profundo como la elegía, pero sí sentimientos pesarosos, la soledad, la nostalgia, el vacío. Ejemplo de esta especie lírica es el poema anónimo del siglo XV a la muerte
de Guillén Peraza, uno de los conquistadores de Islas Canarias.
de versicación es el poema “Espaa, aparta de mí este cáliz”, de César allejo, de su poemario homónimo.
El himno: Composición solemne destinada al canto que expresa sentimientos o ideales religiosos, patrióticos, guerreros, políticos, etc., de una colectividad. En Grecia sobresalen los himnos atribuidos a Homero, y entre los latinos el “Carmen Saeculare de Horacio” (carmen ( carmen en latín signica canto).
El epigrama: Es un poema breve, ingenioso, que se emplea para exponer un pensamiento satírico. Bajo el título de Proverbios y cantares, cantares, el poeta Antonio Machado nos ha dejado una serie de epigramas, de los que mostramos un ejemplo:
Llorad, las damas, Si Dios os vala: Guillén Peraza Quedó en La Palma,
Todo necio confunde valor y precio. El ojo que ves no es ojo porque tú lo veas es ojo porque te ve.
La for marchita De la su cara. No eres Palma, Eres retama, Eres ciprés De triste rama, Eres desdicha, Desdicha mala. Guillén Peraza, Guillén Peraza: ¿Dó está tu escudo? ¿Dó está tu lanza? Todo lo acaba La mala andanza. La égloga: Es un tipo lírico de poema que tuvo gran auge en el Renacimiento español. Se caracteriza por poner los sentimientos del poeta en boca de personajes pastoriles que discurren en escenarios de hermosa y comprensiva naturaleza. Dentro
ESPECIES LÍRICAS Oda sagrada
Oda heroica
Tema: Religioso
Tema: Grandes hazañas “Epinicios”
“Noche oscura del alma”
Píndaro
San Juan
Oda amorosa
Oda festiva
Tema: Morales
Tema: La relación amorosa “Oda 1” de Razón
Tema: Placer cotidiano “Cena joccosa” jo Baltasar de Alcázar
y refexivos “Oda a la vida
retirada”
Fray Luis
de la Cruz Elegía Tema: Lamento
Oda
losóca
de amor
de León
Endecha
Tema: Nostalgia
É g lo g a Tema: Pastoril
Pedro Salinas M a d ri g a l Tema: Am A moro roso so Tono: Espontáneo
E p í s to l a Tipo: Verso en forma de carta
y breve Coplas a la muerte de mi padre Jorge Manrique
“La tarde”
“Madrigal”
Javier
Gutierre
“Égloga 1” Garcilaso Sologuren de la Vega
de nuestra literatura son famosas las tres églogas
Canción Tono: Dulce y melancólico
escritas por el poeta español Garcilaso de la Vega en el siglo XVI.
“Cantigas” Alfonso X el Sabio
de Cetina
“Epístola moral a Fabio” Andrés Fernández de Andrada
Ep i g r am a
Hi m n o
Tono: Satírico
Tipo: Breve
Tono: Solemne, destinado al canto
Proverbios y cantares Ant oni o Machad o
“Himno a la alegría” Friedrich Schiller
Tipo: Breve
G a rc ila so d e la Ve Veg ga 978, Lim Lima a Te lf.: 42 424-6 -65 563 Librería: A v. Ga www.ed .edit itor orials ialsa anmar nmarc c os. os.c c om
LITERATURA ¡RECUERDE!
L La palabra literatura es un derivado del térmi no latino litterae, que signica instrucción, sa ber relacionado con el arte de escribir y leer,
o también gramática, alfabeto, instrucción, etc. Este fue, hasta el siglo XVIII, el contenido y el
explicaciones sobre el fenómeno literario; aunque debemos recordar que en esta época no existía el concepto de literatura ni el de teoría literaria. Ambos nombres son de aparición muy posterior.
La teoría literaria, a través de un largo recorri-
Editorial
concepto de lo que signicaba literatura. espués, el concepto se unicó y adquirió la forma que nosotros percibimos actualmente, ligada a las prácticas verbales. Sin embargo, es
conveniente armar que los hechos que incluye
este concepto son hechos que cada sociedad en determinadas circunstancias reformula. La literatura, entendida como un concepto abierto, incluye prácticas tan disímiles como el testimonio o la crónica periodística, además de novelas y poemas. Ejemplos: Nueva corónica y buen gobierno de Felipe Guamán Poma de
yala; los testimonios de igoberta ench; la autobiografía de Gregorio Condori amani; las crónicas periodísticas de osé artí; Cien años de soledad de Gabriel García árquez; o Trilce de César allejo. La literatura es un hecho cultural muy comple jo, tan complejo como es la misma comunicación humana. Funciona en el interior de un con-
texto sociocultural. ambién se hace presente
el proceso de la comunicación, notándose la coexistencia de autor, obra y receptor, que se relacionan entre sí dentro de un sistema comunicativo. Incluye más elementos, como puede observarse en el esquema: 4) CONTEXTO (mundo representado) 1) EMISOR(ES)
2) MENSAJE
(autores o creadores) (signifcado de la obra)
do histórico, se ha convertido en la disciplina que estudia y trata de explicar los temas y problemas esenciales del arte literario. Por eso
se dice que es la más losóca y especulativa.
Pero no busca decir cómo debe ser la literatura (aunque en algunas etapas de su historia tuvo esa tentación), sino cómo es la literatura. Tam-
bién estudia las características de la creación
artística, propone modelos explicativos de la producción, recepción y circulación de la obra. Además, acude al auxilio de disciplinas que le ayuden a entender la literatura en todas sus
dimensiones (estética, losóca, psicológica, lingüística, sociológica, etc.).
Crítica lit eraria
Enjuicia y valora las obras literarias. Para realizar su labor de enjuiciamiento, el crítico analiza las obras literarias utilizando métodos apropiados según la naturaleza artística de estas. Historia literaria
Da cuenta de la evolución, interrelación o eventual desaparición de las literaturas en el mundo, aunque puedan conservarse y apreciarse textos y obras de ellas, como ocurre con las antiguas literaturas griega y latina, que corresponden a sociedades y culturas ya extinguidas. La historia universal de la literatura
3) RECEPTORES
está, pues, obligada a conocer la génesis y las
(oyentes o lectores)
relaciones entre todas las literaturas de todas
5) CÓDIGO (lengua o idioma) 6) MEDIO O CANAL (escritura u oralidad)
O LO Para describir, explicar y valorar los textos y los procesos culturales que los enmarcan, es necesario conocer la teoría, crítica e historia literarias.
eora literaria
las épocas y regiones del mundo. Pero esta es más una aspiración que una realidad. Además de esta historia de alcance universal, existen historias más especicas y concretas que es tudian, por ejemplo, el proceso de la literatura española, de la literatura rusa, de la alemana, etc., desde sus orígenes hasta la actualidad,
pasando por determinadas etapas. ambién pueden hacerse historias que sigan la evolu-
ción de movimientos literarios especícos (por
Nació en la Grecia antigua como parte de los
ejemplo: historia del romanticismo europeo o historia del modernismo hispanoamericano)
Este último escribió un tratado, denominado Poética, en el que elabora las primeras
(historia de la novela peruana o del cuento argentino, etc.).
sistemas losócos de Platón y ristóteles.
o la historia de un género o especie literarios
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
7
8
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
LA ÉPICA POESÍA ÉPICA La palabra epos significa en griego ‘narración’. Poesía épica es la que narra las hazaas de h é -
roes históricos o legendarios; por ello, se llama también poesía heroica. e ha dicho que es la
Especies épicas 1. Las epopeyas tradicionales. Los creado-
res de este tipo de poesía épica eran poetas errantes que cantaban o recitaban sus obras en los palacios de los nobles o en las plazas públicas de las villas. Estos poetas se llamaban en Grecia aedas y rapsodas, y en los pueblos latinos de Europa, durante la Edad Media, juglares. No expresaban sentimientos exclusivamente suyos, sino propios también de la co lectividad y su nombre es, generalmente, desconocido (anónimo). Sus creaciones pasaban
Editorial
poesía de lo objetivo y exterior del poeta, pero este nunca procede con absoluta objetividad,
ya que de ordinario celebra héroes de su pueblo
o religión, y el amor que les profesa, así como el odio que siente hacia sus enemigos se refle ja en el modo de pintar a unos y otros. Además, hay ocasiones en que la trama sirve para manifestar ideas y conceptos personales del universo, como ocurre en los poemas alegóricos o filosóficos.
El poema épico está provisto de un argumento, es decir, de una sucesión de hechos relacionados en-
tre sí. Podemos preguntarnos “de qué se trata” un poema épico, a diferencia del poema lírico, en el que no existe acción argumental. Las partes que se acostumbra a distinguir en la acción son exposición, nudo y desenlace. En la exposición o planteamiento se da a conocer el punto de partida de la historia y los antecedentes necesarios para que los lectores u oyentes puedan seguirla. El nudo es la parte central de la acción. En el desenlace la acción se resuelve y
llega a su n. unto con la acción principal pued e haber otras secundarias que la complementen.
La gura en torno a la cual gira el poema, su héroe supremo, se llama protagonista. Es fre cuente que a este héroe se le proponga un anta gonista, personaje de mayor relieve en el bando contrario.
Epopeya es voz equivalente de “poema épico”. Como las grandes epopeyas ofrecen una visión amplia de la vida, costumbres, sentimientos y creencias de los pueblos y épocas a que per tenecen, se ha señalado al Ramayana y el Mahabharata indios, la Ilíada homéricos, la Divina Comedia de Dante y los cantares de gesta medievales como representativos de los tres ciclos o civilizaciones que se distinguían en la historia universal: los poemas indios condensaban la cultura oriental; los de omero, la civilización clási -
ca griega; el de ante y los cantares medie vales, la civilización cristiana en formación durante la Edad Media.
de unas generaciones a otras, modicándose constantemente. Muchas veces las gentes aprendían fragmentos de las obras y a su vez introducían variantes y suprimían o añadían versos.
En la Edad Media, con las invasiones, surgen nuevas epopeyas nacionales. Cada país importante de esa nueva Europa elaboró su propia epopeya histórica como referente de identidad colectiva. La epopeya castellana, que es la más reciente de todas, tomó por asunto leyendas referentes a los primitivos condes castellanos, la muerte de los infantes de Lara, las luchas fratricidas entre los hijos de Fernando I, acabadas con la muerte de Sancho II en Zambra, los hechos del Cid y de Bernardo del Carpio, etc.
En la poesía épica tradicional, el lenguaje estaba salpicado de fórmulas rituales, gratas a los poetas y a su auditorio. Había una fraseología consagrada: en el Cantar del mio Cid, el dolor de la separación entre familiares se indica siempre con la comparación “assis parten unos de otros como la ua de la carne”; la mayor proe za del guerrero es que en el combate la sangre del enemigo gotee hasta el codo: “por el cobdo
ayuso la sangre destellando”; etc. uy típicos son los epítetos épicos, adjetivos o frases em pleadas sistemáticamente para caracterizar a un personaje o con propósito ornamental: en el Mio Cid, el héroe es llamado “la barba bellida” o “el que en buena hora ciñó espada”. 2. Poemas épico-cult os. Las epopeyas tradicionales son la expresión más antigua y genuina
de la inspiración épica. Los poemas narrativos cultos surgen más tarde, bien imitándolas, bien tratando de competir con ellas. Lo primero ocurrió en la Antigüedad clásica, donde el ejemplo de Homero suscitó la emulación de poetas
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
LITERATURA
9
griegos tardíos y, sobre todo, de poetas latinos que pretendían proveer a Roma de la gran crea-
relatos de milagros y vidas de santos, como los
ción épica de la que en un principio carecían.
de Berceo. En el Renacimiento, la narración religiosa adoptó la forma del poema heroico clásico; así es La Cristíada, de Fray Diego de Hojeda (1570-1615), que se inspira en la Pasión de Jesucristo. Más tarde aparece en Inglaterra el famoso poema bíblico El paraíso perdido, de John Milton (1608-1674), obra de grandeza excepcional y profundidad extraordinaria, que acierta plenamente en la difícil pintura del mundo celeste e infernal.
La competencia castellana se dio cuando los poetas del mester de clerecía, con aire de superioridad, pretendieron disputar el terreno a los juglares.
poemas épicos religiosos del riojano Gonzalo
Editorial
Los poemas épicos cultos están compuestos
de ordinario para la lectura, no para el canto. Su asunto no necesita guardar relación con las leyendas que constituyen la base de la epopeya tradicional. on obras más reexi vamente elaboradas que las tradicionales. En
los poemas cultos se maniesta mucho más la personalidad del autor. Por su asunto pueden distinguirse los poemas heroicos, caballeres-
cos, religiosos, alegóricos y losócos, aparte de los que agruparemos como poemas épicos menores. Poemas heroico s y c aballerescos: Son más cercanos al espíritu de la epopeya tradicional, pero no nacen al calor de la necesidad de mi-
ticación propia de las sociedades primitivas, sino impulsadas por el sentimiento nacionalista o con pretensiones de erudición. El modelo clásico de poema heroico fue La Eneida, del poeta latino Virgilio. Por otro lado, La Farsalia,
del cordobés Lucano, es un ejemplo de poema heroico escrito por un ibérico. El poema caballeresco apareció en Europa en el siglo XII, al extenderse las leyendas bretonas como El rey Artús y los caballeros de la mesa redonda. La obra maestra del poema caballeresco renacentista fue Orlando furioso, del poeta italiano Ludovico Ariosto. Entre las imitaciones castellanas de Ariosto descuella el Bernardo, de Bernardo de Balbuena (15681625), que mezcla la vieja leyenda nacional de caballería con elementos del Orlando. El romanticismo (siglo XIX), en forma muy distinta de la de los poemas clásicos, acertó al crear obras de gran alcance inspiradas en los viejos asuntos tradicionales, como El moro expósito, del uque de ivas; y la Leyenda del Cid, de don osé orrilla.
oemas reliiosos aleóricos losócos: La poesía épica no ha servido nicamente para celebrar hechos de héroes legendarios o históricos, sino que ha tratado también asun tos religiosos. En la Edad Media abundan los
Los poemas alegóricos son aquellos que contienen en su acción un importante sentido sim-
bólico; el asunto y el carácter de las obras son, por lo demás, muy varios. El extraordinario poema religiosolosóco la Divina Comedia, de Dante Alighieri (1265-1321), es ejemplo
suciente de este tipo de poesía épica en una variante especíca. La exposición poética de doctrinas losócas puede hacerse directa mente, como veremos al tratar los poemas didácticos, o mediante personajes y acción en que se planteen fundamentales problemas relativos a la humanidad y el universo, como el Fausto, del alemán Goethe (1749-1832), obra
maestra del género. tro poema losóco de relevancia es el del espaol osé de Espron ceda (1808-1842): El diablo mundo. Poemas épicos menores: Alrededor de los largos cantos de las epopeyas heroicas y sa-
gradas, existen los poemas épicos breves. El poeta latino Ovidio reunió en sus largas Metamorfosis un gran número de leyendas mitológicas. En el Renacimiento muchas de ellas fue-
ron tratadas en brillantes relatos poéticos, casi siempre breves, como la Fábula de Polifemo y Galatea, de Góngora y Argote. Otras veces el poema de asunto mitológico es, como la Circe de Lope de Vega, más ambicioso y extenso. Con el romanticismo alcanzó gran desarrollo la leyenda, breve poema de ambiente misterioso o sobrenatural, cuyo asunto o bien está basado en tradiciones preexistentes o bien, a imitación de ellas, es producto de la imaginación del
poeta. Célebres son las leyendas de orrilla: A buen juez mejor testigo, Margarita la Tornera y El capitán Montoya ; la de Espronceda: El estudiante de Salamanca; y las de écquer, en prosa: Los ojos verdes y Maese Pérez, el organista.
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
10
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
Los poemas épicoburlescos, adoptando el tono solemne de la poesía heroica, tratan
asuntos insignicantes o ridículos; es decir, son parodias o imitaciones risibles de los poemas heroicos. La Batracomiomaquia, durante mucho tiempo atribuida a Homero, canta la lu-
cha sostenida entre las ranas y los ratones; la Gatomaquia, de Lope de Vega, pinta las rivalidades entre los gatos Marramaquiz y Micifuz, enamorados de Zapaquilda, hermoso ejemplar de la feminidad gatuna.
dio origen, más tarde, a la novela de caballería. Era esta una larga narración de las aventuras de un caballero. En realidad, la novela de caballería no podría ser incluida dentro de nuestra concepción de la narrativa moderna, pues precisamente ella
comparte las características del tradicional héroe épico. El valiente e invencible caballero no vacilaba
Editorial LA NARRATIVA
LA NARRACIÓN Y LA ÉPICA arrar es el arte de la épica. Pero este género, con el cambio de los tiempos, ha sufrido una profunda alteración. La nueva concepción de la persona humana, la aceptación de su temporalidad, la renovada importancia del contorno social, el descubrimiento de la relatividad de la percepción y de los valores
han quebrado denitivamente la perspectiva mítica de la épica tradicional. us personajes arquetípi cos, sobrehumanos, denitivamente superiores a su mundo, ajenos al desarrollo y mutaciones que ocurren con el paso del tiempo, son reemplazados
por otro tipo de “héroes”, que son testimonio de la aventura del vivir humano. Este ha sido el importante giro operado en la Edad Moderna, gracias al nacimiento de la novela española con el animoso Lazarillo de Tormes y, más propiamente, con el Quijote, de Miguel de Cervantes Saavedra. Cumplido aquel primer vuelco, quedaron abiertas las puertas a todas las posteriores posibilidades que la novela ha gozado hasta nuestros días. La narrativa moderna es versión ya maestra y fe-
cunda del antiguo género épico. En esta nueva orientación se inscriben la novela y el relato, y tam-
bién se incluyen en ella la leyenda, la tradición, la fábula y la crónica. La novela: Es la presentación de un mundo real, histórico (en estos casos, una reconstrucción) o imaginario, y de un conjunto de personajes que, dentro de ese mundo, van realizando su vida, es decir, creando su personalidad y su propia historia. La novela de caballería: El gusto por los relatos de hazañas, despertado por los cantares de gesta,
nunca, era capaz de salir ileso de cientos de batallas y poseía ungüentos milagrosos capaces de permitirle sanar instantáneamente de sus heridas o inclusive de volver a pegarle miembros, o si fuera necesario hasta la cabeza, perdida en combate. No envejecía jamás ni mermaba su gloria. Estas novelas gozaron de gran popularidad en Europa (siglos XIV-XVI). Fueron notables el Amadís de Gaula (escrito por García odríguez de ontalvo); Palmerín de Inglaterra; y Tirante el Blanco. La novela pic aresca: La vida de Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades es un breve e ingenioso libro que narra la angustiosa y aventurera vida de una pobre criatura, Lázaro, quien tiene
como primer ocio el de servir de guía a un ciego, de donde se consagró su nombre (“lazarillo”) para todos los que cumplen con esta función. Por primera vez, la narrativa ofrece como protagonista a un ser humilde, hijo de padres de dudosa
reputación, cuya vida mísera e insignicante invita a penetrar. La hazaa de este antihéroe no consis te en otra cosa que en una desgarrada lucha por la vida, por el pan de cada día. El Lazarillo dio origen no solo a todo el género de la
novela, sino también a uno en particular: la novela picaresca. Este tipo de novela se caracteriza por tener un personaje principal que narra la historia en primera persona. Este personaje es siempre joven y pobre. Para ganarse la vida sirve de criado. A lo largo de la novela, el protagonista va perdiendo su inicial ingenuidad y va cargándose de cierto cinismo, que constituye una acusación contra los falsos valores que la sociedad le brinda como paradigma. Este tipo de novela, esencialmente hispánica, llegó a inuir también en la literatura europea. La vida del Buscón llamado don Pablos, de Quevedo; Guzmán de Alfarache, de ateo lemán; La pícara Justina, de López de Ubeda; y El periquillo Sarniento, considerada la primera novela hispanoamericana del mexicano Fernández de Lizardi, son algunas de sus muchas muestras.
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
LITERATURA
11
La novela istórica: Como su nombre lo indica,
La novela sicolóica: En este tipo de nove-
tiene por tema hechos históricos. El modo como los aprovecha puede variar. Algunas novelas históricas relatan hechos reales ocurridos a personajes verdaderos. El autor solo utiliza su fantasía para hacer descripciones y los diálogos. Otras novelas históricas, en cambio, no se interesan por narrar la biografía de personajes o la crónica de hechos
la, los hechos, los acontecimientos, pierden im-
portancia, imponiéndose sobre ellos el mundo interior de los sentimientos, deseos y conictos emocionales de los personajes. Son, por lo tanto, novelas en las que hay poca acción, en las que no ocurren muchas cosas, pero en las que la intensidad del mundo interno de cada personaje es descrito con minuciosidad. Grandes ejemplos de este tipo de novela son Madame Bovary, de Gustave laubert; Crimen y castigo y Los hermanos Karamazov, de íodor ostoievsi; y En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust. En España podríamos mencionar La tía Tula o Niebla, de Unamuno.
Editorial
reales. u interés radica en presentar el ambiente en el que sucedieron hechos históricos y recons-
truirlos, modicándolos, mezclando la realidad con la imaginación.
El gran iniciador de este género fue el escritor bri -
tánico Walter Scott, autor de Ivanhoe y de Quentin Durward. A este tipo de novela histórica pertenecen los Episodios nacionales, de enito Pérez Galdós. A esta misma especie pertenecen las novelas Guerra y paz, del ruso Lev olstói; Yo, el Supremo, del paraguayo ugusto oa astos; o Conversación en La Catedral, del peruano Mario Vargas Llosa. La novela realista: nes del siglo , la nove -
la cobró auge y popularidad. En esta época surgió el concepto de la novela realista, cuyo propósito
era reejar con el máximo de delidad posible la vida real. Se abandonaron los temas históricos y se dejó de lado lo fantástico e irreal. Los novelistas desarrollaron una gran capacidad de observación y la novela se cargó de descripciones minuciosas.
En este género destacan los novelistas franceses onoré de alzac y tendhal (seud. de enry e yle), así como los británicos Charles Dickens y William M. Thackeray. En España, los grandes re-
presentantes de esta novela fueron Pérez Galdós y Emilia Pardo Bazán. A la vertiente de este tipo de novela, que se interesó en retratar las costumbres y vida de una determinada región, se le llamó novela costumbrista. Ejemplo de este tipo de novela realista-costumbrista es Sotileza y Peña arriba, del espaol osé María Pereda.
La novela indigenista: La realidad del indígena
hispanoamericano –su opresión, su miseria, sus costumbres, su carácter y modo de vida– ha sido el tema alrededor del cual ha nacido una importante y vigorosa corriente novelística moderna: la hispanoamericana. En sus inicios, la novela indigenista (o,
en esa época, indianista) pecaba al simplicar los problemas, al idealizar al indio, al que consideraba
como un tipo (masicado) y no como individuo. los novelistas Ciro Alegría (peruano) y Jorge Icaza (ecuatoriano) les debemos los primeros logros en la novela indigenista, suponiendo la superación de los personajes e historias arquetípicas de los primeros intentos novelísticos en este campo. La cima llegaría a la novelística del peruano osé a ría Arguedas, que dio complejidad a la realidad e identidad del indio peruano, elevándolo moralmente por encima de aquellos que, por occidentales, se sentían superiores. Novelas indigenistas contemporáneas son Balún Canán, de la mexicana Rosario Castellanos; o Redoble por Rancas, del peruano Manuel Scorza. La novela de hoy: Existen muchísimos más “ti-
pos” de novela, sobre todo en la actualidad; sin embargo, hemos querido señalar solo los más importantes. La novela contemporánea, por lo ge-
A la vertiente de la novela realista que se preocupó por las situaciones de pobreza e injusticia que sucedían en la realidad, expresando ese mundo con particular crudeza, se le llamó novela neutralista. El gran novelista de esta vertiente es el fran-
neral, escapa a clasicaciones rígidas o, incluso, a la simple clasicación. Los adjetivos de novelas “poéticas”, “surrealista”, “policial”, “de ciencia c -
cés mile ola. En Espaa, un representante de
diosos literarios que designan la clasicación de
este tipo de novela realista-naturalista es Vicente Blasco Ibáñez, con sus libros Cañas y barro y La barraca.
novelas más aceptada, usada por nosotros únicamente como una manera inicial de acercarse a la novela.
ción” o “simbólica”, por ejemplo, suelen obedecer a la percepción de un grupo de críticos y estu-
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
12
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
El cuento: El cuento es la presentación de un he-
pregunta por qué no es lo mismo la leyenda que
cho o anécdota a través de la cual se maniesta
un cuento fantástico, podemos aclarar las diferencias. En el cuento fantástico, lo extraordinario se da como natural, como algo que no puede explicarse, pero que es reconocido como extraordinario en un ámbito que, perdido en el tiempo, se asienta entre lo dudoso y lo posible. Además de esto, la leyenda cuenta un acontecimiento que se supone ha tenido un gran impacto entre quienes han tenido noticias de él y cuyo recuerdo ha perdurado, for mando parte de la historia colectiva de un pueblo de una región.
la personalidad del protagonista o se revela una situación inconfundible. El cuento (o relato) se diferencia de la novela por su menor extensión y complejidad. Por lo demás, comparten las mismas características.
Editorial
El relato fue cultivado desde muy antiguo, mucho antes que la novela. Entre ellos destacan los con juntos de cuentos El Decamerón, del italiano Boccaccio (); o los Cuentos de Canterbury, de Geoffrey Chaucer (1340-1400). En España se publicaron varias colecciones, muchas de estas inspiradas por narraciones árabes. Entre ellas destaca Libro de los exemplos del conde Lucanor et de Patronio, escrito por el infante don Juan Manuel. Durante el siglo XIX, el relato fue revolucionado por tres grandes autores que dieron las pautas para lo que luego se llamaría el cuento contemporáneo:
el norteamericano Edgar llan Poe, el francés Guy de aupassant y el ruso ntón Chéjov. Ellos sen tarían las bases técnicas de intensidad temática y argumental que haría del cuento la especie narrativa de mayor concentración emocional. La variedad temática que permite el cuento lo
hace campo fértil para todo tipo de exploración. Una variedad que cobró gran interés es la del cuento fantástico, el cuento que se centra en una
anécdota en la que interviene algn elemento que no puede ser explicado por medios racionales, pero que se torna real dentro del mundo relatado en el cuento. Maestros de este tipo de cuentos han sido, desde Poe y el alemán Ernst Theodor Amadeus Hoffmann, los argentinos Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares. Un ejemplo peruano de autor de cuentos fantásticos es Clemente Palma.
El cuento de misterio y el policial, también fun dados por Poe, son otros tipos de relato o narración breve que han tenido gran desarrollo. En la literatura hispanoamericana, han destacado los cuentos de temática urbana. Ejemplo de estos cuentistas son el peruano Julio Ramón Ribeyro, el uruguayo Juan Carlos Onetti, el argentino Roberto Arlt, el cubano Guillermo Cabrera Infante, entre otros. La leyenda: Es una narración breve que se caracteriza por relatar un hecho ocurrido en el pasado lejano y en el cual se alienta lo sobrenatural. Si se
La leyenda fue la forma narrativa predilecta del romanticismo. En español, por ejemplo, tenemos las
leyendas en prosa de Gustavo . écquer. La tradición: Como la leyenda, narra hechos del pasado. Se diferencia de aquella en que los hechos narrados no necesitan estar vinculados con lo sobrenatural y pueden ser una sencilla anéc -
dota. Es característica de la tradición la gracia; en el caso especíco de su creador, icardo Palma, reina en las tradiciones mucho de sátira ligera y
de ironía. Para dar más “sabor de época”, Palma crea un pintoresco lenguaje salpicado de dichos y
refranes y de términos desusados que hacen an más amena y grata la lectura.
La crónica: Es un tipo de narración que se basa en el testimonio de hechos que han ocurrido y de los cuales el autor no ha sido testigo presencial o ha tenido noticia cercana. La crónica se acerca
mucho a la historia, pero su carácter subjetivo –y muchas veces reconstructor de la realidad– lo ha convertido en una especie narrativa que se inscribe en la creatividad del autor, pero sobre la base de la realidad. Ejemplo de este tipo de narración ha sido casi toda la literatura escrita en el periodo de conquista americana por los europeos. Cronistas españoles, como Pedro Cieza de León con su Crónica del Perú, o peruanos, como Garcilaso de la Vega (el Inca), son muestra brillante de esta especie narrativa.
EL DRAMA EL TEATRO El drama es uno de los géneros literarios básicos. Su destino es, sin embargo, muy distinto del de los otros géneros. Una obra dramática es aquella con -
cebida para ser escenicada por tres actores frente a un público.
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
LITERATURA
director de un coro del siglo VI a. C., creó el drama al separar en un ditirambo el papel del personaje principal del resto del coro: él hablaba y el coro respondía. Según Aristóteles, desde ese hecho solo había que dar un pequeño paso hacia la evolución del drama como forma independiente con la incorporación de otros actores y personajes. Pero el desarrollo espontáneo hacia el drama trágico, un género muy elaborado y sin precedentes, es difícil de documentar.
El teatro es, esencialmente, acción, despliegue de acción en presencia –presente temporal– del pblico. Aun cuando una obra dramática puede ser leída, en la interacción entre la obra escenicada y el pblico se consigue el n esencial del teatro. La traedia Floreció en el siglo V a. C., en Grecia, con autores como Esquilo, Sófocles y Eurípides. Las obras son solemnes, escritas en verso y estructuradas en escenas (episodios) entre personajes (nunca hay más de tres actores hablando en una escena) e intervenciones del coro en forma de canciones (odas). Las historias están basadas en su mayoría en mitos o antiguos relatos, aunque el objetivo no fuera simplemente volver a contar esas historias (sobre las que los poetas se tomaban frecuentes libertades), sino hacer consideraciones sobre el carácter de los personajes, el papel de la humanidad en el mundo y las consecuencias de las acciones individuales. Por lo general, eran obras de poca acción y los hechos se relataban a través de diálogos y canciones del coro.
13
Editorial
Las obras se representaban en festivales en honor a ionisos; entre estos festivales se en contraban el Gran Dionisos de Atenas, en primavera; el ionisíaco ural, en invierno; y la Lenaea, también en invierno tras el ural. eleccionaban las obras de tres poetas para su representación. Aparte de tres obras trágicas (una trilogía), cada poeta tenía que presentar una sátira y una farsa, a menudo atrevida parodia sobre los dioses y sus mitos. rama El término drama viene de la palabra griega que signica hacer, y por esa razón se asocia normalmente a la idea de acción. En términos generales, se entiende por drama una historia que narra los acontecimientos vitales de una serie de personajes. Los primeros datos documentados de literatura dramática son del siglo a. C.; la primera obra crítica sobre la literatura y el teatro es Poética (330 a. C.), de Aristóteles. Él sostenía que la tragedia griega se desarrolló a partir del ditirambo, himnos corales en honor del dios Dionisos, que no solamente lo alababan, sino que a menudo contaban una historia. Según la tradición, Thespis, el
C.
Comedia
Se desarrolló hacia la mitad del siglo V a. C. Las comedias más antiguas que se conservan son las de Aristófanes. Tienen una estructura muy cuidada derivada de los antiguos ritos de fertilidad. Su comicidad consistía en una mezcla de ataques satíricos a personalidades públicas del momento, atrevidos chistes escatológicos y parodias aparentemente sacrílegas de los dioses. Para el siglo IV a. C., la comedia había sustituido a la tragedia como forma dominante. Con la expansión de la cultura griega a raíz de las conquistas de Alejandro III el Magno, las comedias literarias y basadas en tópicos, así como las tragedias losócas, pasaron a ser poco apropiadas y dejaron paso a un tipo de comedia local, muy abundante, llamada nueva. El misántropo es la única obra completa que se conserva de Menandro, el gran autor de comedias nuevas. La trama gira alrededor de una complicación o situación que tiene que ver con amor, dinero, problemas familiares y similares. Los personajes son típicos e identicables, ti pos socialmente simples, como el padre miserable o la suegra molesta.
EL ENSAYO Es el género literario que cabalga entre el análisis racional y la creación artística. El n funda mental del ensayo es expresar el análisis o la reexión del autor en relación con un tema deter minado, sin dejar de lado la belleza de la palabra y el valor estético de lo escrito. Género creado por el autor francés renacentista ichel de on taigne, con la publicación de la obra que le diera nombre al género, Ensayos , en 1580. Estos textos testimoniaban la actividad, los movimientos y los descubrimientos de su propio ser y de la relación de este con los otros y con el mundo. Hasta
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
14
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
su muerte, Montaigne no dejaría de dedicarse a estas piezas, reveladoras de su integridad y un continuo esfuerzo de autoconocimiento. Como testimonia su nombre, los Ensayos , ajenos a dogmatismos, connotan una actitud intelectual centrada en el planteamiento de preguntas y el intento de responder a ellas. Montaigne examina en estas páginas numerosos aspectos de la vida y la realidad de la diversidad de la educación, la anatomía o los habitantes del Nuevo Mundo. Tras la primera entrega de los Ensayos en 1580, autores ulteriores como Rousseau, Montesquieu o Diderot le han rendido tributo como uno de los pioneros del neoclasicismo, que se impregnaría
escritor. Generalmente, en estos casos, el autor utiliza sus experiencias personales y las re-
exiones desprendidas de ellas para utilizarlas en el análisis de su ensayo. Un ejemplo claro de este tipo de ensayo es el conocido Del sentimiento trágico de la vida, de Miguel de Unamuno; o Memoria y vida, de Henri Bergson.
Editorial
tanto de la reexión losóca y de la creación artística reexiva circunscrita al interior de la na turaleza del ensayo.
claremos que el ensayo dista del tratado losóco en que este ltimo no tiene n estético alguno. El ensayo mantiene una libertad mayor y se permite
ser un n en sí mismo. La reexión en torno a un tema es su eje central, pero a partir de este centro el ensayo se convierte, como toda entidad literaria, en dueo de sus propios nes. Es decir, el ensa -
yo puede tratar un tema especíco y reexionar sobre este –por ejemplo, sobre la poética de un autor especíco–, pero tiene la libertad de utilizar un lenguaje poético o narrativo que lo acerquen al género que está analizando, proveyéndole al texto de una dimensión diferente y permitiéndose otros enfoques, prohibidos al texto puramente cientíco o losóco. ablar de especies ensayísticas es an polémico, pero podríamos diferenciar, en zonas temáticas, las actitudes literarias del ensayo de acuerdo con el objeto de su tratamiento.
nsao literario o artstico Es aquel que reexiona sobre un tema literario, una obra artística, una corriente literaria o un sistema artístico. Es decir, utiliza la literatura (el ensayo) para el análisis de la misma literatura (sus mecanismos de funcionamiento, su importancia, sus ejes) o de una obra de arte en general. Un ejemplo notable de este tipo de ensayo es Poesía y literatura, de Juan Ramón iménez; o El espectador , de osé rtega y Gasset.
nsao reeivo Es el ensayo que reexiona sobre un tema vital, muy cercano al ser humano y al “yo” del
nsao losóco
Esta especie ensayística bordea los límites del
tratado losóco, llegando, incluso, a losofar y a reexionar en torno a las grandes pregun tas de la losofía, pero con una libertad y un respeto por las formas literarias (el lenguaje y el tratamiento del tema) que le son ajenas al
“lósofo puro”. Un excelente ejemplo de este tipo de ensayo es La rebelión de las masas, de
osé rtega y Gasset. nsao oltico Este tipo de ensayística analiza los lineamientos del poder, en determinada tendencia, dentro de un contexto político. Aquello que le interesa analizar al ensayista político son los movimientos y el sistema en que se desarrolla la mecánica del poder en un sistema político determinado (República, Monarquía Constitucional, Protectorado, etc.). Un connotado ejemplo de esta especie ensayística son los 7 ensayos de interpretación de la realidad peruana, de osé Carlos ariátegui.
nsao istórico En el ensayo histórico, el autor enfoca una problemática dentro de la estructura histórica de un país, una región, un continente, etc. A diferencia de un tratado histórico, en el ensayo la opinión personal (fundamentada, claro está) se permite. Ejemplo claro y notable de este tipo de ensayo es el Ensayo sobre las costumbres
(), del francés neoclásico oltaire, donde repasa la historia de la humanidad desde la caída del Imperio romano.
EL PERIODISMO Uno de los géneros paraliterarios más conocidos es el periodismo. Este género, relacionado con la literatura, pero no totalmente inserto en los nes que la literatura persigue, trabaja la palabra con libertad artística, pero con el n ideal de la informa -
ción por encima de otros, que también considera (estética, reexión, etc.), pero que la literatura asu me con mayor énfasis.
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
LITERATURA
El periodismo mezcla esta necesidad de informar (es decir, proporcionar datos) con la formación de opinión, que puede darse tanto por consecuencia de los datos emitidos como por la reexión de la página editorial o de los colabora dores ensayísticos. No es extraño encontrar, en un diario serio, ensayos (o breves artículos ensa-
Nota:
•
Horacio: destacado poeta latino, considerado “el más heleno de todos los romanos”.
•
Plauto y Terencio son los más destacados exponentes de la comedia latina de los orígenes.
Editorial
yísticos) que reexionan sobre una problemática de actualidad o sobre un tema especíco, inserto en la clasicación ya dada del ensayo (político, literario, artístico, etc.).
tros géneros paraliterarios, como la oratoria o la historia, comparten también algunos nes lite rarios, como el uso de la palabra como medio de expresión, pero se distancian en el objetivo más enraizado en la literatura: la creación.
•
“alicio y emoroso” es una égloga de Garcilaso de la Vega.
•
En la producción lírica de las obras de Fray Luis de León, destacan sobre todo las Odas.
•
La escuela salmantina se caracteriza por un profundo sentimiento religioso, una búsqueda de lo puro, lo natural, lo espontáneo y un lenguaje sobrio y sencillo.
•
ray Luis de León lideró la escuela poéti ca denominada “escuela salmantina”.
Fray Luis de León
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
15
16
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
LAS FIGURAS LITERARIAS
Sabemos que el lenguaje puede apelar tanto a la razón como a la imaginación y emotividad. Cuando
solamente interesan datos o hechos –es el caso muchas veces de las exposiciones cientícas–, el lenguaje es más bien analítico y desprovisto, por lo general, de connotaciones. En la literatura
–así como en la comunicación familiar y afectiva–,
todas las lenguas: la creación de palabras que reproducen el ruido o sonido propio de aquello que nombra. Por supuesto que el uso literario de l a onomatopeya no se limita a la mera identidad entre la palabra y el objeto (tictac = sonido del reloj) del lenguaje diario, sino que puede ser una elaboración más compleja. El verso de San Juan de la Cruz nos muestra con la repetición de la sílaba “que” el balbuceo al que alude:
Editorial
muchas veces el lenguaje se aparta de lo estrictamente analítico e intervienen las connotaciones
gurativas y emotivas.
ambién es sabido que el lenguaje literario pue de nutrirse del vocabulario común. No está de más insistir en que no es abundancia de modi-
Un no sé qué que quedan balbuceando. San Juan de la Cruz
caciones, adjetivos, adverbios, rebuscamiento de una frase, etc., lo que crea el lenguaje literario. Es la capacidad del autor de seleccionar
La solícita abeja susurrando. Garcilaso
el término preciso, que puede ser tanto el más
La rima
acostumbrado (“Convida a dulce sueño, aquel manso río”, de Garcilaso) como el menos usual, pero que reconocemos como exacto: “La ciudad se desgarraba en suburbios” (Borges) o “En la mano borrosa le vieron un denso cigarrillo” (J. M. Oviedo).
El diccionario de ucrot y odorov dene la rima como “una repetición sonora que sobreviene al nal del verso”. Es una denición bastante precisa, pero... ¿desde dónde debemos empezar a buscar
Por la manera desde la cual se modica el lengua je, podemos clasicar las guras literarias en tres tipos básicos: guras de sonido, de sentido, y de dicción.
esa repetición? Vamos a descubrirlo. A esta coincidencia de todas las vocales y todas las consonantes de dos o más versos a partir de la última vocal acentuada se le conoce como rima consonante o perfecta. Aquí tienes otro par de ejemplos, ambos de Manuel González Prada, de esta clase de rima:
FIGURAS DE SONIDO Las guras de sonido se caracterizan por una com -
Estatua de sal
binación original de sonidos para producir efectos especiales.
ao mi i f o a tropical estío, te vas. No volverán tus melodías jamás. Castiga el Ángel la maldita voluntad del que mira atrás, y la estatua no resucita jamás. Dolorida de no haber sido, Lázaro, lo que serás, la Juventud dice al Olvido: “¡Jamás!”
literación Consiste en la repetición del mismo sonido o de
sonidos semejantes, con un n de sugerencia. o confundir con la cacofonía, que es un defecto. La aliteración es una virtud.
En el silencio solo se escuchaba Un susurro de abejas que sonaba. Garcilaso
La fama infame del famoso Atrida. Lope de Vega
Bajo el ala aleve del leve abanico. ubén arío Onomatopeya Al hablar de la formación de las palabras se señala a la onomatopeya como fenómeno común a
Manuel González Prada
Pero también existen casos de rima en que lo ni co que coinciden son las vocales. Observa, por ejemplo, los dos últimos versos de cada una de las cinco estrofas de este poema de
osé aría Eguren:
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
LITERATURA
Sin luz de plata en sus copas los árboles han crecido, y un horizonte de perros ladra muy lejos del río.
Los reyes rojos Desde la aurora combaten dos reyes rojos, con lanza de oro. Por verde bosque y en los purpurinos cerros vibra su ceño.
17
FIGURAS DE SENTIDO acen desde la modicación yo combinación ori -
Editorial Falcones reyes batallan en lejanías de oro azulinas.
Por la luz cadmio, airadas se ven pequeñas sus formas negras.
ginal y expresiva del sentido de las palabras y de las frases. Símil
Comparación explícita de dos elementos inicialmente no implicados. Ejemplo: Como un globo morado aparecía la hermosa luna del poeta.
Viene la noche
A. Machado
rm comat oco los reyes rojos.
Metáfora
primera vista, parece no haber rima; pero si ob -
denticación entre dos elementos, inicialmente
servas con atención la primera estrofa, descubrirás que en “rojos” y en “oro” coinciden la vocal “o”. Lo mismo sucede con la segunda estrofa, con “cerro” y “ceño” (e-o), la tercera (i-a), la cuarta (e-a) y la quinta (o-o).
diferentes, de manera que sustituyen un elemento real (expreso o implícito), por otro imaginario que tiene relación de analogía (no de similitud) con el real.
Estamos ante una rima asonante o imperfecta. En la rima asonante coinciden solo las vocales (a partir de la última vocal acentuada, no lo olvides), así que no hay que preocuparse por las consonantes, como en la rima perfecta.
Nuestras vidas son los ríos que van a dar a la mar que es el morir.
Revisa el inicio de La caaa i , romance de Federico García Lorca, en donde solo riman, de manera asonante, los versos impares (i-o):
La casada inel Y que yo me la llevé al río creyendo que era mozuela, pero tenía marido. Fue la noche de Santiago y casi por compromiso. Se apagaron los faroles y se encendieron los grillos. En las últimas esquinas toqué sus pechos dormidos, y se me abrieron de pronto como ramos de jacintos. El almidón de su enagua me sonaba en el oído, como una pieza de seda rasgada por diez cuchillos.
Ejemplo:
Manrique
Metonimia
ustitución de un término propio por otro que se encuentra con él en una relación real (causal, temporal, espacial, funcional...). Ejemplo: Madrid, corazón de España,
at co o r Si ayer la sangre le hervía hoy con más calor le hierve.
FIGURAS DE DICCIÓN Son construidas al amparo de la libertad que po-
see el autor para modicar el ritmo y la expresión del lenguaje yendo en contra de leyes o hábitos gramaticales. Hipérbaton Figura de posición en que se rompe la disposición regular de modo que el predicado aparezca antes que el núcleo, o el sujeto aparezca
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com
18
SEPARATA TEÓRICO-PRÁCTICA
intercalado en el predicado, o el predicado se encuentre intercalado en el sujeto. Es una inversión sintáctica, donde se altera el orden lógico. De este pues formidable de la tierra Bostezo, el melancólico vacío. Góngora
Ejemplo: Si el Rey no muere el Reino muere.
oncatenación Al principio de dos o más unidades se repite el último elemento de la precedente.
Editorial
(El vacío melancólico de este formidable bostezo de la tierra)
nfora
Ejemplo:
Ideas sin palabras, palabras sin sentido; cadencias que no tienen ni ritmo ni compás. écquer
Repetición de una o diversas palabras al comienzo de una serie de oraciones para enfatizarla. Ejemplo:
etrcano Lo han dicho el pinar y el viento, lo ha dicho la luna de oro, lo ha dicho el humo y el eco. . . iménez
Epífora
nversión de una frase que modica su sentido. Ejemplo: ¿No ha de haber un espíritu valiente? ¿Siempre se ha de sentir lo que se dice? ¿Nunca se ha de decir lo que se siente?
Consiste en repetir una o más palabras al nal de dos o más cláusulas, versos o estrofas. Ejemplo:
Quevedo
Sinécdoque
Consiste en la sustitución de una expresión se-
Amado sea el niño que cae y aún llora y el hombre que ha caído y ya no llora. Vallejo
Polisíndeton
mánticamente más amplia (todo, plural, género) por otra semánticamente más restringida (parte,
singular, especie), o al revés. Ejemplo: Sevilla a voces me llama el Burlador, y el mayor gusto que en mí puede haber es burlar a una mujer y dejalla sin honor.
Repetición de conjunciones innecesarias para el sentido de la expresión. Ejemplo: Ven, que quiero matar o amar o morir o darte todo.
Tirso de Molina
sndeton
nttesis
Figura opuesta al polisíndeton. Consiste en una agrupación verbal sin conjunciones de elementos coordinados.
Es la contraposición de dos ideas opuestas. En otras palabras, consiste en contraponer dos ex-
Ejemplo:
presiones que tienen signicados contrarios, como ocurre en este magníco poema de González Prada:
Los niños de blanco juegan, chillan, sudan, llegan: ¡... nenaaa! . . iménez Calambur
Repetición de dos o más palabras en agrupación
diferente con cambio de signicado.
l amor Si eres un bien arrebatado al cielo, ¿Por qué las dudas, el gemido, el l lanto,
La coaa torcor rato Las turbias noches de febril desvelo? Si eres un mal en el terrestre suelo, ¿Por qué los goces, la sonrisa, el canto,
Librería: Av. Garcilaso de la Vega 978, Lima Telf.: 424-6563 www.editorialsanmarcos.com