EL SALÓN DE CLASE COMO SISTEMA SOCIAL: ALGUNAS DE SUS FUNCIONES DENTRO DE LA SOCIEDAD NORTEAMERICANA Talcot Parsons
En este ensayo se trata hacer un análisis general del salón de clases en primaria y secundaria como un sistema social, y de la relación que existe entre su estructura y su función primaria dentro de la sociedad como agente socializador y asignador de papeles. El problema: la socialización y la selección El principal se centra en un doble problema: 1. El modo en que la clase funciona para que los alumnos internalicen compromisos y habilidades necesarias para sus futuros roles de adultos. 2. Cómo funciona para establecer la asignación de estos recursos humanos dentro de la estructura de roles de la sociedad adulta. Desde un punto de vista funcional, el salón de clases puede estudiarse como agencia socializadora (puede considerarse como la principal) que entrena personales individuales para adecuarlas motivacional y técnicamente al desempeño de roles de adulto. Funciones socializadoras pueden definirse como el desarrollo en que los individuos adquieren los compromisos y habilidades que constituyen los prerrequisitos para el futuro desempeño de sus roles. Dentro de dichos compromisos se pueden encontrar dos componentes: 1. Conservar los valores más fundamentales de la sociedad. 2. Desempeñar un tipo específico e rol dentro de la estructura social. Las habilidades también tienen dos componentes: 1. Competencia o capacidad para realizar tareas correspondientes a roles individuales. 2. La “responsabilidad del rol”, la capacidad para adecuarse a lo que los demás consideran corresponde al comportamiento interpersonal, propio del desempeño de dichos roles. El salón de clase desde el punto de vista de la SOCIEDAD es una agencia de asignación de “poder humano”; en la sociedad norteamericana hay una relación cada vez más estrecha entre nivel de estatus social y académico, que a su vez se relacionan con el nivel de empleo que se puede alcanzar. Interesa conocer, qué de lo que sucede en el aula, es lo que establece la diferencia entre los miembros de una generación para que unos asistan a la universidad y otros no. Las pruebas indican que el más importante criterio de selección se base en el registro del desempeño en la escuela primaria, evaluado por maestros y directores. Se puede decir en términos generales que el inicio de proceso de selección se da por medio de la actuación diferencial en la escuela primaria, y que este, se confirma en la secundaria.
Hay pruebas que el proceso de selección es genuinamente distributivo. En el resultado influyen factores adscritos (en este caso, estatus socioeconómico de la familia del alumno) y adquiridos (la oportunidad al logro basado en su capacidad individual). -
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El principal proceso de diferenciación la selección que se efectúa en la escuela primaria gira en torno a un solo eje: el desempeño. Esta diferenciación va desembocando en el nivel de educación media superior en la disyuntiva en los que irán y no irán a la universidad. Se puede decir que el factor predispuesto más importante con el que el niño ingresa a la escuela es su grado de independencia – el grado de autosuficiencia respecto a la guía que han de darle los adultos. La familia es la colectividad dentro de la que se modela la estructura de estatus básica en términos de posición biológica. En ella existen diferencias de actuación que se premian o castigan, fomentando la formación de un carácter diferencial. Sin embargo, estas diferencias no reciben la sanción de un estatus social institucionalizado. La escuela es el primero de los agentes socializadores que institucionaliza la diferenciación de estatus sobre bases no biológicas. La estructura del salón de clases de primaria Todas las instituciones norteamericanas se inscriben dentro de un marco bien delimitado. Los primeros tres grados de escuela primaria, las clases son dadas por un profesor titular, ocasionalmente otros profesores enseñan materias especiales. La clase se compone de 25 alumnos en promedio, de la misma edad, que provienen del vecindario o colonia. La diferenciación estructural principal se va estableciendo poco a poco en torno al desempeño. Factores básicos de la situación que permiten que la diferenciación se establezca en torno a un eje principal y único: 1. En principio, edad y antecedentes familiares de los concursantes son iguales, el vecindario es mucho más homogéneo que la sociedad 2. Se impone una serie de tareas comunes indiferenciadas, comparadas con la mayoría de las tareas de otras áreas. La situación escolar se parece mucho más a una competencia que la mayoría de las situaciones en las que hay que presentar algún rol. 3. Se presenta una división extrema entre la igualdad inicial de los alumnos y el maestro único, que representa el mundo adulto. 4. Se da un proceso de evaluación relativamente sistemático. Desde el punto de vista del alumno constituye un premio o castigo a una conducta pasada. Desde el punto de vista del sistema escolar, que actúa como agencia de asignación, es una de las bases para seleccionar el estatus que en el futuro se ocupará en la sociedad. Al interpretar este modelo estructural no debemos perder de vista dos condiciones importantes: 1. Las variantes de los procedimientos de la clase misma y de su organización formal. 2. La más importante de estas variantes es la que existe entre escuelas relativamente tradicionales y las relativamente progresistas.
La naturaleza del buen desempeño escolar ¿Cómo debe ser el “buen desempeño” que se espera de los niños en la primaria? Se puede resumir diciendo que comprende los tipos de comportamiento que son apropiados a la situación de la escuela, por un lado, lo que los adultos creen que son importantes por sí mismos. Esta caracterización contiene dos componentes principales: 1. Cognoscitivo puro: aprendizaje, información, habilidades, marcos de referencia, etc. que se asocian al conocimiento empírico y a la habilidad tecnológica. 2. El segundo componente es el que de un modo muy amplio puede llamarse “moral”; participación civil y responsable dentro de la comunidad escolar. Estos dos componentes en la escuela primaria no están claramente diferenciados el uno del otro; se evalúa al alumno en términos generales y vagos; el buen alumno se define según una fusión del componente moral y el cognoscitivo, dando más peso a uno que a otro. La relación de la familia y del grupo de iguales con la clase El niño en edad escolar vive en el hogar paterno y sigue dependiendo mucho, sin embargo pasa varias horas lejos de casa, sometido a una disciplina y un sistema de recompensas independiente al de sus padres. Su independencia va en aumento poco a poco, no obstante es común el problema de dependencia-independencia de naturaleza emocional. Al mismo tiempo aumenta sus relaciones con otros chicos de su misma edad sin que los adultos vigilen muy de cerca. Son notables dos características sociológicas de los grupos de iguales de esta edad: 1. La fluidez de sus fronteras, con ciertos niños cambiando de una a otra asociación – “asociación voluntaria”. 2. La separación tajante del grupo por sexos, motivado más por los propios niños que por los adultos Estos dos rasgos indican la función psicológica de la asociación con los iguales, donde estos se pueden ver como un campo para ejercitar la independencia del control de los adultos y por el otro proporciona al niño aceptación y aprobación que no sea de adultos. Es inevitable que los cimientos motivacionales del carácter se construyan por medio de la identificación con los padres, pero, buena parte del desempeño del papel del individuo adulto se efectuará entre persona del mismo estatus o de un estatus muy parecido. En la escuela el maestro se define institucionalmente por la superioridad de su conocimiento del currículum de materias y por su responsabilidad como buen ciudadano de la escuela. Después de la familia, es la escuela donde se dan los primeros pasos decisivos para la socialización, así que parece razonable imaginar que la figura de la maestra está caracterizada por una combinación de semejanzas y desemejanzas con la figura paterna. Sin embargo, no está entregada a los niños, sino que juega un papel ocupacional.
Al hacer este paralelo entre la clase de primaria y la familia, también es significativo que normalmente el maestro sea mujer; la maestra establece la continuidad con el papel de la madre. Sin embargo, es necesario que la maestra no sea una madre para sus alumnos, sino que insista en las normas universales y en la recompensa diferencial y el buen desempeño. Debe ser el agente que provoque la “diferenciación” en la clase y la legitime. La socialización y la selección en la escuela elemental Para concluir con esta discusión de la clase primaria, algo hay que decir de las condiciones fundamentales d este proceso que, simultáneamente consiste en: 1. La emancipación del niño de la liga emocional primaria que lo ata a su familia. 2. La internalización de determinado nivel de normas y valores sociales, que es como dar otro paso lejos de su familia. 3. La diferenciación de la clase escolar en términos de desempeño real y valoración diferencial del desempeño. 4. Desde el punto de vista de la sociedad, la selección y colocación de los recursos humanos en el sistema de roles de los adultos Básicamente, pues, la clase de primaria es la encarnación viva del valor fundamental de Norteamérica, como es la igualdad de oportunidades, ya que valoriza tanto la igualdad inicial como el desempeño diferencial. Como segunda condición, el rigor de este modelo de valorización debe suavizarse, considerando las dificultades y necesidades del niño. En tercer lugar, debe haber un proceso de “premiación selectiva” del comportamiento que se está valorando. Este proceso es la fuente ara la diferenciación por clases a lo largo del eje del desempeño. La última de las condiciones es que esta diferenciación inicial tiende a establecer un sistema de estatus en la clase, en el cual los resultados inmediatos del trabajo y toda una serie de influencias convergen para consolidar diferentes expectativas que pueden definirse como “los niveles de aspiración” de los niños. Para el individuo se desintegra la antigua identificación familiar y poco a poco se va formando una nueva identificación, proporcionando la estructura de primer orden de la identidad del niño, aparte de la identidad que se le atribuye originalmente como hija o hijo de alguien. Inevitablemente su estatus personal está en función directa de la posición que alcanza, primero en la clase formal y luego en la estructura del grupo de iguales informal. La diferenciación de la clase a lo largo del eje del desempeño inevitablemente es fuente de tensión, a que confiere más gratificaciones y privilegios a un contingente que a otro del mismo sistema. Se ha observado que la tendencia general ha sido la del rápido ascenso del estatus académico de la población. En comparación con lo que se esperaba en el pasado, a cada nueva generación aumenta la presión por logara un mayor nivel, y que esto frecuentemente se asocia con las ambiciones que tienen los padres por los hijos.