UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MACHALA UNIDAD ACADÉMICA DE CIENCIAS AGROPECUARIAS MEDICINA VETERINARIA Y ZOOTECNIA
TEMA:
ACTINOBACILOSIS BOVINA ESTUDIANTES:
Bermeo Gonzabay Christian Javier DOCENTE:
Dra. Lorena Zapata ASIGNATURA:
ANATOMÍA PATOLÓGICA ESPECIAL CICLO:
CUARTO “A” DIURNO AÑO:
2017 – 2018 2018
EL ORO – MACHALA MACHALA- ECUADOR
INTRODUCCIÓN. Es una enfermedad crónica, infectocontagiosa causada por una bacteria llamada Actinobacillus lignieresii que ataca principalmente al ganado bovino y ocasionalmente a los ovinos, equinos, porcinos y caninos, es una causa de enfermedad poco habitual en los pollos (Manual Merck de veterinaria, 2007). Es una enfermedad de distribución mundial y de aparición esporádica, aunque cuando hay factores predisponentes pueden aparecer brotes epidémicos. En nuestra ganadería son pocos los datos registrados, aunque hay encuestas epidemiológicas que en la provincia de Buenos Aires la ubican con una prevalencia del 0,5-20% (Dubarry J. et al., 2004). Producen lesiones granulomatosas en la boca, más frecuentemente en los ganglios regionales y en la lengua. Los estudios de matadero sugieren que las infecciones subclínicas son frecuentes y han permitido encontrar pequeños granulomas actinobacilares en los ganglios linfáticos que drenan la cabeza y en cerca del 3% de las lenguas de los animales sacrificados (Radostits O. M. et al., 2002). La morbilidad puede llegar al 23%. Vulgarmente se la denomina lengua de palo, lengua de madera o lengua leñosa. Este trabajo tiene como objetivo, sistematizar información sobre la actinobacilosis Bovina obtenida a través de distintas fuentes bibliográficas para la obtención de nuevo conocimiento académico de carácter científico. Conocer los factores que afectan al animal para la aparición de dicha enfermedad. Analizar cada uno de los síntomas y signos para el buen trato y cuidado del animal.
Índice de Contenido
INTRODUCCIÓN. ...................................................................................................................... 2 1.
ACTINOBACILOSIS BOVINA ....................................................................................... 4
1.1. Agente etiológico ................................................................................................................... 4 1.2. Fuente de infección y transmisión .......................................................................................... 4 1.3. Implicaciones zoonoticas ....................................................................................................... 4 1.4. Patogenia ................................................................................................................................ 5 1.5. Lesiones .................................................................................................................................. 5 1.5.1. Lesiones macroscópicas ...................................................................................................... 5 1.5.2. Lesiones microscópicas. ...................................................................................................... 6 1.6. Signos clínicos ....................................................................................................................... 6 1.7. Diagnostico ............................................................................................................................ 7 1.8.Diagnostico diferencial ........................................................................................................... 7 1.9.Tratamiento ............................................................................................................................. 7 1.10.Control ................................................................................................................................... 9 1.11. ¿qué situaciones favorecen la aparición de actinobacilosis? ................................................ 9 1.11.1. ¿qué hacemos cuando aparece un animal con la sintomatología de la enfermedad? ........ 9
2. CONCLUSIÓN: ...........................................................................................................11 3. ANEXOS: ..................................................................................................................... 12 4. BIBLIOGRAFÍA Y WEBGRAFIA. .............................................................................. 13
1. ACTINOBACILOSIS BOVINA
1.1.
AGENTE ETIOLÓGICO
El agente causal de esta enfermedad es una bacteria gram negativa del género Actinobacillus lignieresii, perteneciente a la familia pasteurellaceae. Son inmóviles, anaerobios facultativos, no esporulan, algunos pueden ser capsulados. Microscópicamente se alternan las formas bacilares con cocoides, algunos pueden llegar a tener forma filamentosa. Crecen en agar Mc Conkey o agar sangre a 37° C. Tienen metabolismo fermentativo. Son oxidasa positivo y tienen exigentes requerimientos de crecimiento. Presenta cápsula, LPS y enzimas proteolíticas como factores de patogenicidad.
1.2.
FUENTE DE INFECCIÓN Y TRANSMISIÓN
Actinobacillus lignieresii habitualmente vive en la cavidad bucal y el rumen de los rumiantes. Es un germen sensible a influencias ambientales ordinarias y no sobrevive mas de cinco días en el heno o la paja. La infección de los tejidos blandos es consecuencia de la lesión de la mucosa bucal (Radostits O. M. et al., 2002). La transmisión se produce por la ingestión de alimentos contaminados por las secreciones de animales enfermos. La presencia de lesiones en la mucosa oral facilita el ingreso del microorganismo. El material alimenticio áspero o fibroso es una de las principales causas de lesión de la mucosa oral, facilitando la aparición oportunista del Actinobacillus.
1.3.
IMPLICACIONES ZOONOTICAS
Actinobacillus lignieresii raras veces se asocia con una enfermedad humana, pero ha sido aislada de heridas producidas por mordiscos de equinos o rumiantes (Radostits O. M. et al., 2002).
1.4.
PATOGENIA
La infección oral por el microorganismo produce una reacción inflamatoria aguda con la subsiguiente aparición de lesiones granulomatosas que se necrosan y supuran, expulsando el pus hacia el exterior. El compromiso lingual dificulta la aprehensión y la masticación de los alimentos.
1.5.
LESIONES
1.5.1. Lesiones Macroscópicas Las lesiones se ubican en los tejidos blandos, principalmente en la lengua; se corresponden con una inflamación crónica granulomatosa, con necrosis licuefactiva central y concreciones de color amarillo (drusas) de 1 mm de diámetro (más pequeñas que las de la actinomicosis) (Fuente: www.fmvz.unam.mx - www.es.scribd.com). En la vaca, la infección se presenta sobre todo por ulceración o lesiones penetrantes en el surco lingual, lesiones penetrantes en el vértice y laceraciones a los lados de la lengua provocadas por los dientes. También pueden presentarse granulomas de actinobacilosis en sitios atípicos en las vacas, como los ollares, los párpados o el pliegue yugular, tras la infección de lesiones traumáticas provocadas por enganches nasales o venopunción en la yugular. También se han registrado infecciones iatrogénicas de incisión quirúrgica. Igualmente hay casos de infección de las mejillas con engrosamiento facial bilateral (Radostits O. M. et al., 2002). El microorganismo puede causar lesiones piogranulomatosas en tejidos blandos de la cabeza, cuello, extremidades y, ocasionalmente, en los pulmones, pleura, ubres y tejido subcutáneo. Causa infecciones localizadas y se puede propagar a otros tejidos a través de la vía linfática. El pus de los abscesos puede contener microcolonias rodeadas de espículas de fosfato cálcico y tener la apariencia de gránulos de azufre (Manual Merck de veterinaria, 2007). También pueden aparecer focos viscerales de lesiones granulomatosas, principalmente en el tubo digestivo, cuando este está afectado se produce una interferencia en los movimientos de la rumia y la digestión, lo q acompaña a las dificultades para la prehensión, produciéndose una inanición parcial. Raras veces se localiza en otros órganos.
1.5.2. Lesiones Microscópicas. Las lesiones pueden representar un cultivo puro de actinibacillus lignieresii o estar acompañadas de otros gérmenes piógenos (Radostits O. M. et al., 2002).
1.6.
SIGNOS CLÍNICOS
El comienzo de la enfermedad suele ser agudo, los animales afectados no pueden comer durante 48 horas. Se observa salivación intensa con sialorrea y movimientos masticatorios como si hubiera un cuerpo extraño. Se observa la lengua inflamada y dura con punta normal, la manipulación de esta produce dolor y movimientos de defensa. En los lados de la lengua se puede apreciar la presencia de nódulos y úlceras, también se pueden observar lesiones ulcerosas en el borde anterior del dorso. En las últimas etapas de la inflamación aguda, esta es reemplazada por tejido fibroso, quedando la lengua arrugada e inmóvil, provocando grandes dificultades para la prehensión de los alimentos. La anorexia puede llegar a ser total por esta causa. También se produce linfadenitis, a veces independientemente de las lesiones linguales. Puede haber hipertrofia visible y palpable de ganglios parotideos y submaxilares. Se forman engrosamientos locales de consistencia firme, que a menudo se rompen y supuran un pus poco espeso e inodoro. La curación es lenta y son frecuentes las recaídas. El engrosamiento de los ganglios retrofaringeos interfiere en la deglución y provoca una respiración con ronquido intenso (Radostits O. M. et al., 2002).. Es frecuente la aparición de tumefacciones locales duras que se abren expulsando pus de color claro e inodoro (Fuente: www.fmvz.unam.mx). En bovinos, además, puede darse actinobacilosis cutánea sin compromiso lingual, con formación de úlceras purulentas o formación de nódulos de hasta 15 cm de diámetro. En ovinos no hay compromiso lingual, las lesiones son de tipo cutánea a nivel del maxilar inferior, cara y boca, comprometiendo los labios, la nariz y hasta el esternón (Fuente: www.es.scribd.com).
1.7.
DIAGNOSTICO
Se recoge pus, el cual por lo general contiene gránulos de azufre, los cuales consisten, en el examen macroscópico, en rosetas en forma de maza con una masa central formada por bacterias. Esta lesión no es patognomónica de Actinobacillus lignieresii ya que también puede encontrarse en el exudado purulento de granulomas relacionados con actinomices bovis, pseudomona aeruginosa y staphylococcus aureus, para confirmar la presencia de Actinobacillus lignieresii se aconseja realizar un frotis (Radostits O. M. et al., 2002). Si hay gránulos el pus se lava quedándose con los gránulos, se colocan en un portaobjetos, se maceran y se tiñen con gram. También se pueden cultivar en agar Mc Conkey o agar sangre a 37° C y también en caldo tioglicolato. El Actinobacillus lignieressi es no hemolítico y lactosa positivo. Por lo general, a los bovinos que poseen esta enfermedad no se les realiza necropsia. En los cortes teñidos de tejido enfermo son visibles las típicas colonias de mazas. El cultivo de material procedente de estas lesiones suele permitir la detección de la bacteria (Radostits O. M. et al., 2002).
1.8.
DIAGNOSTICO DIFERENCIAL
El diagnóstico diferencial más importante es con actinomicosis, enfermedad que produce osteomielitis en los huesos de la cara, especialmente a nivel de los maxilares. La salivación, masticación y anorexia de la forma lingual puede parecerse a la etapa inicial de la rabia o al cuadro de cuerpos extraños bucales. Cuerpos extraños en la boca, como huesos o palos atascados entre los molares pueden dar un cuadro q a distancia tienen cierto parecido pero q la revisación del animal permite identificarlos fácilmente. La tuberculosis también debe ser tenida en cuenta a la hora de realizar el diagnóstico diferencial.
1.9.
TRATAMIENTO
Los yoduros son el tratamiento típico para esta enfermedad, por lo general, le respuesta es inmediata y permanente. Los estudios de laboratorio sugieren q estos fármacos tienen
poco efecto bactericida frente a Actinobacillus lignieresii y que las sulfamidas son mas eficaces. Es probable que los yoduros actúen reduciendo la intensidad de la reacción fibrosa. Se pueden suministrar por vía oral o intravenosa. El yoduro de potasio por vía oral se administra a razón de 6-10 g/día durante 7-10 días, en solución, representa para el ganado vacuno un tratamiento de larga duración, pero eficaz, y debe continuarse hasta que aparezcan signos de intoxicación (yodismo), caracterizado por lagrimeo, anorexia, tos, secreción nasal seromucosa y piel con escamas similares a la caspa. El yoduro de sodio puede ser administrado por vía intravenosa en solución al 10% en una sola dosis. Por lo general basta con una sola tanda de yoduro de potasio o una sola inyección de yoduro de sodio para las lesiones de los tejidos blandos, ya q los signos agudos de actinobacilosis desaparecen a las 24 – 48 horas del tratamiento, En el caso de las lesiones óseas se precisa por lo menos una tanda mas, pero preferentemente con un intervalo de 10 a 14 días. Algunos animales presentan trastornos generales, con inquietud, disnea, taquicardia y tambaleos durante el tratamiento con yoduro de sodio. En los tratamientos con yuduro de sodio en vacas con una preñez avanzada pueden producirse abortos (aunque esto es poco frecuente, debe advertirse al productor sobre esta posibilidad). Las inyecciones subcutáneas de yoduro de sodio ocasionan una intensa irritación y una hinchazón local inmediata; la irritación desaparece al cabo de unas horas, pero la hinchazón permanece durante varios días. El tratamiento de los granulomas se hace por debridamiento y enucleación, acompañada de terápia con yoduros. En cuanto a los antibióticos, el Actinobacillus lignieresii es sensible a estreptomicina, tetraciclinas, tilmicosín y eritromicina. También se utilizan ampliamente las sulfamidas, penicilinas y otros antibióticos de amplio espectro (Radostits O. M. et al., 2002). Las sulfamidas sulfapiridinas y sulfatiazol proporcionan curaciones rápidas. El debridamiento quirúrgico también puede ser útil como tratamiento (Manual Merck de veterinaria, 2007).
Cabe destacar que tanto la enfermedad como el tratamiento son dolorosos y estresantes para el animal, por lo que se debe practicar un buen manejo.
1.10. CONTROL La mejor manera de limitar la diseminación de la enfermedad consiste en un tratamiento rápido de los animales infectados y en evitar la contaminación de los pastos y los lugares donde habitan los animales.
Examinar de inmediato a los animales con problemas bucales.
Aislar a los animales enfermos para su tratamiento.
Identificar factores predisponentes.
No intentar tratamientos en lesiones osificadas. El desecho es la mejor alternativa.
1.11. ¿Qué situaciones favorecen la aparición de actinobacilosis? Las secreciones con la bacteria son la principal fuente de transmisión de la enfermedad, contaminando pasturas y otras fuentes de alimentos como comederos, bebederos y saleros. En este sentido, los casos de actinobacilosis suelen estar asociados al pastoreo de rastrojos como los de arroz o sorgo, campos con pastos duros así como el consumo de alimentos muy fibrosos, la que suelen producir lesiones en la boca (Fuente: producciónanimal.com.ar). Se han registrado brotes en novillos alimentados con heno muy seco, grueso y con troncos. En las regiones con deficiencia de cobre, en el ganado bovino se observa una mayor prevalencia (Radostits O. M. et al., 2002). Cabe destacar que esta enfermedad afecta principalmente a animales jóvenes, debido a que la muda de dientes es un factor de riesgo importante y opera como una puerta de entrada para el microorganismo (Fuente: producción-animal.com.ar).
1.11.1. ¿Qué hacemos cuando aparece un animal con la sintomatología de la enfermedad? A pesar de que algunos casos son de relativo fácil diagnóstico, es importante consultar con un veterinario, de manera q se puedan detectar los animales en las etapas tempranas de la infección, buscando con esto dos objetivos principales: Por un lado establecer cuanto
antes un tratamiento para los animales afectados y por otro, aislar lo más posible a los enfermos, como forma de minimizar la contaminación ambiental y evitar la infección del resto del lote. La afectación exclusiva de los ganglios linfáticos en la forma ganglionar, puede necesitar un examen más profundo del caso y descartar otras enfermedades como por ejemplo tuberculosis (Fuente: producción-animal.com.ar).
2. CONCLUSIÓN: Luego de realizar este trabajo, se puede arribar a la conclusión de que si bien la actinobacilosis bovina es una enfermedad no muy frecuente, con una morbilidad relativamente baja y una mortalidad prácticamente nula, puede ocasionar problemas por ser una enfermedad infecciosa que puede diseminarse entre animales expuestos a factores predisponentes, causando problemas de sanidad y también problemas económicos que pueden llegar a ser importantes si no se toman medidas a tiempo. Para no tener problemas con esta enfermedad, al igual que con las demás enfermedades de los bovinos, es fundamental practicar un buen manejo, erradicando los factores de riesgo y tratando a tiempo a los animales enfermos.
3. ANEXOS:
1 Presencia
de signos en la lengua
2 Corte longitudinal de la musculatura de la lengua con lesiones
3 Lesiones en el Paladar inferior del bovino
4. BIBLIOGRAFÍA Y WEBGRAFIA.
Alejandro Saravia. “Lengua de palo en vacunos”. Sitio argentino de
producción animal. http://www.produccionanimal.com.ar/sanidad_intoxicaciones_metabolicos/infec ciosas/bovinos_en_general/110-lengua_palo.pdf
Dubarry, J.; Alvarez, A. R.; Errea, A.; María, A.; Vera, O.; Vespoli Pucheu, V.; Galeano, M. F..Actinomicosis y actinobacilosis: Una causa frecuente de lesiones granulomatosas en los bovinos del departamento Maracó de la provincia de La Pampa, República Argentina.
http://www.produccionanimal.com.ar/sanidad_intoxicaciones_metabolicos/infec ciosas/bovinos_en_general/18-Actinomicosis_y_Actinobacilosis.pdf. Año 2004.
Guillermo Quinteros Cornejo. Libro de enfermedades infecciosas en veterinaria. Actinobacilosis, Lengua de palo.
http://es.scribd.com/doc/20575568/55/ACTINOBACILOSIS-LENGUA-DE PALO.
Magnano G.G.; Caminos J.M.; Costamagna F.; Giraudo J.A.; Macias A.F.; Mació M.N.; Schleef N.; Schneider M.O.; Sticotti E.. Actinobacilosis en un engorde de bovinos. Sitio Argentino de producción animal.
http://www.produccionanimal.com.ar/sanidad_intoxicaciones_metabolicos/infec ciosas/bovinos_invernada_en_general/02-actinobacilosis.pdf.
Manual Merck de veterinaria. Volumen I. Sexta edición. Océano/Centrum. 2007.
Otto M. Radostits, Clive C. gay, Douglas C. Blood, Kenneth W. Hinchcliff. Tratado de las enfermedades del ganado bovino, ovino, porcino, caprino y equino. Vol. I. Novena edición. Mc Graw-Hill. Interamericana. 2002.
Ramón Gasque Gómez. Enciclopedia Bovina. Facultad de medicina veterinaria y zootecnia – UNAM. Actinobacilosis.
http://www.fmvz.unam.mx/fmvz/e_bovina/04Actinobacilosis.pdf. Año 2008.
Ruffinatti, Horacio Ariel. Médico veterinario. Tres Lomas, Provincia de Buenos Aires.