“Año del Buen Servicio Servicio al al ciudadano” ciudadano” UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN MARTIN
Facultad de Derecho y Ciencias Políticas Escuela Profesional de Derecho y Ciencias Políticas
Asignatura: Derecho Constitucional I Trabajo: Análisis del caso Magaly Medina Docente: Abog. Dra. Grethel Silva Huamantumba Alumno: Gabriel Chipoco Flores Ciclo Académico: III Semestre Académico: 2017 – II
Introducción
El caso Magaly medina fue uno de los más sonados en su momento, dado que no había ningún antecedente sobre este tipo de juicios hacia ninguna conductora, claro está la sra medina en todo momento quiso alegar que su fuente era de primera mano y que lo que decía era verdad, sim embargo el tiro le salió por la culata y la historia termino como todos sabemos. En este análisis tratare de ver y comprender los artículos que se utilizó, tanto de la Constitución Política del Perú como el código penal, para hacer efectiva la pena privativa de la libertad interpuesta a Magaly Medina por el delito de difamación
ANALISIS DE LA SENTENCIA DEL CASO MAGALY MEDINA
El periodismo en nuestro medio carece de “veracidad”. La crisis periodística está no sola en el ámbito deportivo, sino también en el periodismo en general. La fuente de información se ha dejado de lado, es decir no se prioriza si la fuente tiene un buen sustento para afirmar algo. Se juega mucho con la confianza que los medios tienen con sus trabajadores de su empresa.
El caso de la conductora Magaly Medina y el jugador Paolo Guerrero t uvo mucha repercusión en nuestro medio. Magaly publicó en su revista una foto del jugador de la selección saliendo de un hotel acompañado de una modelo en horas de la madrugada. Se suponía que Paolo debería de estar concentrado junto a sus compañeros de equipo para el próximo partido de las Clasificatorias, sustentaba la conductora. Esto no terminó aquí, Paolo salió a desmentir esta foto que publicaron, sobre todo por la hora que salía en aquella imagen de él. Así empezaría esta novela.
Era el tema de todos los días, la gente no sabía quién decía la verdad y quien mentía. La conductora creía mucho en su equipo periodístico pese a que eran cuestionados. Y claro ella no podía desconfiar de sus reporteros porque siempre trabajó con ellos y hacían que Magaly se vea como la “Reyna de los ampays”.
Paolo guerrero denunció este hecho por difamación, pidiendo que se investigue a todo el equipo periodístico de Magaly, en la que también estaba involucrado su productor Ney Guerrero. Este caso fue a peores, se llegó a una conclusión luego de las investigaciones hechas por la justicia de nuestro país. El equipo de la conductora alteró la fecha de la foto en la que sale Paolo. Con esto el jugador nacional salió airoso y fuera de todas las críticas que recibía de todos lados.
Magaly Medina y su productor Ney Guerrero fueron encarcelados en un penal por difamación al jugador peruano. Esta noticia se convirtió en algo inimaginable por la gente, ver a una conductora de televisión en prisión.
Si bien es cierto que los medios dicen o publican la fuente, creo que lo que olvidó Magaly en este caso fue verificar si su propia fuente era confiable. Con esto la conductora perdió la ética periodística. O quizás ya la había perdido.
Al final y cuando volvió a su programa luego de pasar mese en la cárcel, Magaly tuvo que pedir las disculpas del caso y la rectificación en su revista. Hecho que también disgustó un poco por la forma en que lo hizo. El Derecho al honor: si eres personalidad pública entonces, aguántate nomás!
El caballito de batalla de los periodistas y de todo aquel que tiene la posibilidad de expresarse mediante un medio de comunicación es “si eres un personaje público, sea del ambiente político, deportivo o de la farándula, estás sometido a la fiscalización de la sociedad”, no importando si dentro de ‘dicha fiscalización’ se cometen excesos en las expresiones o acciones o, peor aún, se realizan afirmaciones sin que las mismas sean completamente exactas. Ello conlleva a pensar que para algunas personas la “dizque fama”, es un arma de doble filo, pues por un lado puede dar algunos beneficios pero por otro, puede acarrear estar sometido a afirmaciones o críticas excesivas que puedan estar colindando con una vulneración del derecho al honor.
A todo ello ¿Por qué Paolo Guerrero mencionaba a todos los medios de comunicación que se había masillado su honor con las afirmaciones que había realizado Magaly Medina en su programa? ¿Magaly realmente habría cometido un exceso en sus declaraciones como para afirmar que vulneró el derecho al honor de Paolo Guerrero?
Para responder las preguntas del párrafo precedente simplemente se puede hacer un análisis de lo que es el derecho al honor. Veamos. Si entendemos, que el derecho al honor es el derecho que tiene toda persona a su buena imagen, nombre y reputación, siendo que, por el hecho de ser un ser humano, se tiene derecho a ser respetado dentro de la sociedad, y que el mismo es un derecho personalísimo, entonces se puede decir que Paolo Guerrero, al igual que el resto de seres humanos, es titular de dicho derecho. Asimismo, si entendemos, como señala la mayoría de la doctrina e incluso el Tribunal Constitucional[1] que, dicho derecho “forma parte del elenco de derechos fundamentales protegidos por el inciso 7) del artículo 2º de la Constitución, y está estrechamente vinculado con la dignidad de la persona; su objeto es proteger a su titular contra el escarnecimiento o la humillación, ante sí o ante los demás, e incluso frente al ejercicio arbitrario de las libertades de expresión o información, puesto que la información que se comunique, en ningún caso puede resultar injuriosa o despectiva”, entonces podría afirmarse que, las afirmaciones que realizó la conductora Magaly Medina en su programa, respecto a la conducta de Paolo Guerrero habrían vulnerado su derecho al honor.
Mencionamos sólo las afirmaciones de la conductora y no las fotos, puesto que si bien las mismas son las que dieron origen a todo el rosario de chismes y
portadas de revistas y que el querellante tomó como argumento principal al interponer la querella, tanto la jueza que conoció el caso en primera instancia como el que escribe, consideramos que son las afirmaciones que realizó la conductora sobre el caso las que al final hacen que la balanza se incline a favor de Paolo Guerrero y que la manden a ella a prisión.
Da la ligera impresión que algunos medios de comunicación cuando tocan el tema sólo giran en torno a que la condena de prisión efectiva por haber tomado unas fotos es excesiva. El que escribe piensa distinto, no por el tema de que sea o no excesiva la condena (lo cual requeriría otr o análisis), sino más bien por los hechos que habría cometido y que son los que determinan su condena., puesto que decir irresponsable, mentiroso, que defrauda al público (entre otras cosas) e incluso, romper una carta notarial en donde se solicita la rectificación[2] en plena grabación del programa de espectáculos, es lo que en buena cuenta da sustento a la querella interpuesta por el jugador del Hamburgo.
Consideró que una cosa es que se haya podido ampayar a Paolo Guerrero fuera de la concentración y publicar las fotos en una revista y otra es que, para publicitar la revista (tal como lo hizo la conductora de televisión), se haya tenido que utilizar una serie de adjetivos contra el ciudadano a fin de generar la expectativa en el público que ve el programa y que posteriormente se plasmó en la compra masiva de la revista. En ese orden de ideas, Magaly Medina, quien es la que promocionó la Revista en su programa de televisión, sabía que las fotos no generaban la suficiente certeza de la hora en que se habrían tomado (y que al final de cuentas fueron un factor determinante en el proceso penal), pero aun así siguió de forma “cuasi temeraria” con las afirmaciones en contra del jugador, tanto en la etapa previa al proceso como en el transcurso del mismo, con lo cual se podría llegar a señalar que, en ningún momento, cruzó por su mente que, el realizar dichas afirmaciones estaría vulnerando algún tipo de derecho y es que, aunque duela admitirlo, Magaly Medina como personaje público es reflejo de una parte del pensamiento de la sociedad peruana.
En las siguientes líneas nombrare los artículos que se utilizó en el caso y analizare algunos de ellos:
PRIMERO: el artículo 2°, inciso 7° de la Constitución Política del Perú señala que
toda persona tiene derecho al honor y a la buena reputación. SEGUNDO: Articulo 132, último párrafo del Código Penal que contempla el delito
de difamación a través de los medio de libro, prensa y otro medio de comunicación social, una noticia con la cual se le atribuye a una persona un hecho, cualidad o conducta que pueda perjudicar su honor o reputación. TERCERO: El honor como bien jurídico no puede menoscabarse a consecuencia
de la libertad de información, no por expresarse libremente se tiene que mancillar necesariamente el honor. CUARTO: Ha quedado plenamente acreditada la intención y animo por parte de
la querellada Magaly Jesús Medina Vela de mancillar el honor del querellante José Paolo Guerrero Gonzales. QUINTO: Estamos ante una opinión eminentemente dolosa por parte de Magaly
Medina y Ney Guerrero, los mismos que tuvieron la oportunidad de rectificarse de la noticia propalada por los medios de comunicación por que el accionante Paolo Guerrero les remitió una carta notarial y la antes mencionada Magaly Medina la rompió ante cámaras, lo que definitivamente evidencia el ánimo y voluntad de mancillar el honor del sujeto pasivo (Paolo Guerrero). SEXTO: La pena impuesta tiene función preventiva, protectora y resocializadora,
y debe ser proporcional y coherente a la responsabilidad en el hecho. SEPTIMO: Con la sentencia es un mensaje judicial preventivo para los
periodistas que abusan de la libertad de expresión a fin de que respeten el honor de las personas
Conclusión Quiero concluir haciendo una observación sobre este caso, el delito que cometió la señora Magaly Medina es el delito de difamación, que según el artículo 132° del Código Penal, este debe ser penado con pena privativa de la libertad no mayor de dos años y con treinta a ciento veinte días-multa. Como ya lo menciones no se le condeno al tiempo que demanda en si este tipo de delito, ya que a la mencionada solo se le condenó a 5 meses de prisión efectiva, quizás siendo favorecida por los jueces al ser una figura pública, reflejándose esto último en la sentencia ya mencionada.
