Una Mente Brillante
Una mente brillante es una película del año 2001 dirigida por Ron Howard y basada en el libro del mismo nombre, de Sylvia Nasar. Antes de comenzar con el ensayo es importante destacar la actuación de los dos protagonistas, Russell Crowe y Jennifer Connelly (En sus personajes del Dr. Nash y Alicia su esposa).
La película comienza en 1947, cuando un joven estudiante, Nash (Rusell Crowe) ingresa en la universidad de Princentone, una de las universidades de ciencia teórica pura del siglo. Jhon Nash tiene ideas grandiosas, sin embargo es una persona con carácter excéntrico, genial, solitario y agresivo, además de alguna que otra rareza, como su obsesión por encontrar una idea completamente original y sus escasas habilidades sociales. Durante la película se muestra al Dr. John Nash como un estudiante 100% enfocado a sus estudios, siempre desarrollando nuevas teorías, experimentándolas y tratando de probarlas. Algo importante de mencionar es su relación con su mejor amigo Charles, el cuál es producto de sus alucinaciones y su enfermedad de esquizofrenia, la cual le fue detectada en su vida adulta.
John Nash es un estudiante magnifico y se especializa en el área de matemáticas con la línea de investigación en teoría de juegos, el es autor de la fórmula „equilibrio de Nash‟ y esto le da la pauta para obtener su grado de doctorado y tener una graduación con honores, además esto le permite obtener un puesto de profesor en el centro de investigación MIT. Durante la Guerra Fría trabaja también para el Ministerio de Defensa, como descifrador de mensajes soviéticos, es en esta parte donde comienza a crear otro personaje, producto de su enfermedad, este personaje es un agente de gobierno llamado agente Parker, con el cuál desarrolla una serie de sucesos peligrosos trabajando para los servicios secretos, con el objetivo de descifrar códigos de posibles ataca por parte del gobierno Ruso.
Unos años después, el profesor Nash está en la cumbre, tiene prestigio como profesor, además de que comienza a compartir tiempo con una de sus alumnas llamada Alicia, de la cual se enamora y posteriormente se casa, para formar una familia. Es en esta etapa cuando se hacen evidentes los síntomas de padecer esquizofrenia. Para su esposa quien siempre había creído las historias del profesor Nash tomar conciencia de su enfermedad fue doloroso y generó confusión y preocupación. Cuando a John se le presenta la evidencia de la irrealidad de tales personajes, su frustración y enojo se detonaron y trató hasta lo último de probar su realidad, al no poder probar estos hechos comienza a sentirse frustrado, confundido y trata de auto dañarse. Su esposa siente una carga, y
comienza a pensar en dejarlo, por su propio bien y el de su hijo. Pero su amor por el profesor Nash, la hace recapacitar y luchar junto a él, en contra de su enfermedad. El Profesor Nash es tratado de su enfermedad y con medicamentos y tratamiento médico no hay alucinaciones, sin embargo se da cuenta que las medicinas lo imposibilitaban para trabajar, cuidar el bebé y satisfacer a su esposa. Algo muy interesante que menciona en uno de sus diálogos, es la siguiente frase “los medicamentos no son mejor que estar loco”, por ello dejar la medicina es una gran tentación y propone a su psiquiatra dejarlas, dando como solución que él puede controlar esas alucinaciones con fuerza mental y de voluntad, el psiquiatra rechaza su idea ya que la esquizofrenia es una enfermedad degenerativa y si no hay medicamento las fantasías ganan.
Posteriormente el profesor Nash pierde su trabajo en la universidad y cuando sale del hospital, bajo tratamiento, se reintegra a la universidad para continuar con sus investigaciones. Finalmente, se muestra al profesor Nash anciano, cuando en 1994 recibió el Premio Nobel de Economía, sin embargo las alucinaciones que tiene de su amigo Charles, la sobrinita de éste, Marcy, y el agente de gobierno, Parker sobreviven, sin embargo aprende a contralarlas y llevar una vida junto a su esposa Alice y su familia.
Alma Rocio Morales Varela