PROGRAMA DE INTERVENCIÓN PARA CORREGIR ERRORES DE OMISIÓN EN UN NIÑO DE 7 AÑOS QUE PRESENTA DISLALIA FUNCIONAL. De Fairman (1999), de manera general define el lenguaje como la capacidad de comunicación, el cual implica la posibilidad de operar en un plano superior mediante conceptos, abstracciones o generalizaciones; utilizar la memoria lógica, el razonamiento y el juicio; aplicar la imaginación creativa y resolver situaciones en un plano abstracto; operar con símbolos (números, letras, códigos); descubrir, deducir, inventar, especular, etc. Su desarrollo está ligado a la evolución neuropsicológica y su elaboración es progresiva, siguiendo procesos muy complejos que aún no están totalmente dilucidados. Los mismos dependen del grado de maduración y de la fisiología del organismo por una parte, y del ambiente sociocultural, por la otra. El lenguaje es el contenido de lo que se habla, escribe, lee o comprende, también puede ser transmitido por medio de gestos, como en el caso del lenguaje corporal o del lenguaje de señas. Se clasifica en dos áreas: receptivo y expresivo. La habilidad para comprender el habla o los gestos de otra persona se llama lenguaje receptivo, en suma, la habilidad para crear un mensaje hablado que otros puedan comprender se denomina lenguaje expresivo (Mc Aleer, 2002). El lenguaje es una conducta de comunicación simbólica sumamente diferenciada. Para adquirir un desarrollo normal necesita de un conjunto de órganos con suficiente capacidad para: a) Registrar información externa e interna. b) Procesar dicha información. c) Conservar este registro para poder volver a utilizar esta información en una futura situación idéntica. d) Producir una respuesta motora de acuerdo con el estímulo procedente de dicha información. e) Registrar el éxito o fracaso de la acción motora. f) Transformar y procesar este registro. g) Acumular los registros disponibles. El lenguaje es un proceso sumamente complejo sobre el que aún se sigue discutiendo en lo que respecta a su origen, evolución, desarrollo y alcances. Es el conjunto de la lengua y el habla. La lengua está constituida por un sistema de signos distintos que corresponden a ideas distintas. A su vez, el signo establece la relación entre un concepto (lo que pensamos) y una imagen acústica (lo que decimos) pero no es la denominación de cosa alguna. Esto explica porque la lengua no es una nomenclatura. Sausure denomina al concepto “significado” y a la imagen acústica “significante” (De Fairman, 1999).
Por su parte, el habla es el uso de la lengua que hace cada individuo con miras a la comunicación. O sea, que es la utilización de la lengua por sus hablantes. Constituye la expresión oral de la lengua y el lenguaje (De Fairman, 1999; Mc Aleer, 2002).
González (2003) Menciona que el habla sigue una serie de etapas, en las que el niño va incrementando paulatinamente su vocabulario; la primera etapa o de pre-habla, también puede denominarse como prelingüística o preverbal y está constituida como sigue: a) Hasta los 3 meses, desde el punto de vista comunicacional el sitio es verbalmente silencioso. b) A partir de los 3 meses rompe el silencio y aparecen las vocales. En este momento hasta los dos años de vida tiene lugar el periodo llamado crítico (desde el punto de vista cerebral) en el que se produce un proceso de interconexión, modificaciones histoquímicas y proliferación del tejido glial y vascular. c) A los 6 meses aparecen las consonantes. d) De los 9 a los 12 meses surge el silabeo o ecolalia fisiológica o ecoismo. En la siguiente etapa, llamada propiamente lingüística, se inicia la palabra y se divide en dos periodos: el locutorio y el delocutivo. El primero se extiende a partir del primer año de vida y cada palabra corresponde a una emoción. El segundo se lleva a cabo, a partir de los dos años y el lenguaje adquiere objetividad; en el primer periodo usa las mismas palabras para situaciones diferentes y diferentes palabras para iguales situaciones. En el segundo periodo adquiere y emplea diferencialmente los elementos de una frase, dando comienzo a la significación (González, 2003). EDAD 12 a 15 meses. 15 a 18 meses. 2 años. 2 años, 6 meses. 3 años. 4 años. 5 años. 6 años.
CANTIDAD Y CALIDAD DEL VOCABULARIO Alrededor de 15 palabras. Puede existir leve disminución de vocabulario. 200 a 300 palabras, comprende ordenes sencillas, aparición ocasional de los pronombres (a los 2 años). Uso del plural y pretérito. 900 a 1,000 palabras. Habla en tercera persona. 1, 500 palabras. 2, 500 a 4, 000 palabras. 14, 000 palabras, Normalización articulatoria de la palabra.
Tabla 1. Muestra la evolución cuantitativa y cualitativa del vocabulario de los 12 meses a los 6 años (González, 2003 ).
Hasta este punto se ha presentado todo lo referente a la evolución del lenguaje normal, sin embargo, cabe mencionar que éste puede presentar diversas alteraciones (de la articulación, de la fluidez verbal, de la voz y del lenguaje) cuyas realizaciones están determinadas por múltiples componentes, de forma particular se podrían agrupar en: a) variables endógenas, y b) variables exógenas (Gallardo y Gallego, 1995).
Principalmente la información presentada en el presente, girará en torno a la articulación. González (2003) menciona que ésta en los fonemas suele ser normal a los 6-7 años, de manera más particular afirma que la normalización fonemática comienza con las vocales, que se regularizan con su articulación cerca de los tres y medio años; su atraso exige inexorablemente un estudio auditivo. Dentro del campo consonántico se normalizan en primer lugar las consonantes labiales: P; B; M alrededor de los 3 años; luego las linguodentales: D, T; las alveolares: N y las palatales: K, J entre los 3 y medio y 4 años; las labiodentales: F a los 5 años: las linguo alveolares: R, RR, N, L, a los 6 años; las dentales: S, Z entre los 6 y 7 años, siendo a partir de los 7 años en los que el niño normaliza adecuadamente su articulación., aunque existe quienes lo hacen entre uno y dos años antes. El concepto de dislalia corresponde al trastorno en la articulación de los fonemas, o bien por ausencia o alteración de algunos sonidos concretos o por la sustitución de éstos por otros de forma improcedente. Se trata, pues, de una incapacidad para pronunciar o formar correctamente ciertos fonemas o grupos de fonemas. La dislalia puede alterar a cualquier consonante o vocal. Así, puede referirse el defecto a un solo fonema o a varios en un número indeterminado, o afectar tan sólo a la asociación de consonantes, cuando éstas aparecen unidas en una sola sílaba, omitiendo en este caso una de ellas (González, 2003; Pascual, 1999). La dislalia, según Puyuelo y Rondal (2003) se puede clasificar según los siguientes criterios: a) En función del fonema implicado en el error (En ésta la alteración del fonema se denomina mediante el signo que tiene en el alfabeto griego y se agrega el sufijo ismo, cuando un sonido es sustituido por otro se antepone “para”).
DENOMINACIÓN Betecismo Joticismo Sigmatismo Rotacismo Gammacismo Lambdacismo Deltacismo Mitacismo Lotacismo Yeísmo Ceseo (1) y Seseo (2) Chinoísmo Hotentonismo
FONEMA IMPLICADO Defecto de la P, B Defecto de la X Alteración en la articulación de las consonantes sibilantes. Dificultades en la articulación de la R Articulación defectuosa de la G Articulación de la L en vez de la LL Articulación de la D en vez de la T En las bilabiales En la J Articulación de la Y en lugar ded la LL (1)Articulación dela Z en lugar de la S; (2) Articulación dela S en lugar de la Z Sustitución de la R por la L Defecto de la articulación de todos los fonemas.
Tabla 2. Muestra la clasificación delas dislalias en función del fonema implicado (González, 2003; Puyuelo y Rondal, 2003)
b) En función del número de errores y su persistencia (Se divide en dislalia simple y dislalia múltiple, correspondiendo la primera a aquellos casos en los que solo se ve afectado un fonema, siendo el error constante y consistente en registros y contextos diversos; mientras que en la segunda, los fonemas afectados son varios y consistentes). c) En función del nivel lingüístico implicado. Se clasifica en dislalias fonológicas, fonéticas y mixtas; en las primeras el sistema fonológico no está organizado o elaborado de forma correcta y completa, o bien, todavía no se han adquirido algunos fonemas; las segundas se pueden situar en dos niveles: 1.-dificultades en el nivel de representación de los planes de articulación. A pesar de que el sistema fonético estaría bien construido o en proceso de adquisición, el niño todavía no ha elaborado unos planes para la articulación de algunos fonemas; 2.-Dificultades en el nivel de realización de los planes de articulación, o nivel de articulación propiamente dicho; finalmente, las terceras, son aquellas que más se presentan y suelen existir problemas fonológicos y fonéticos que se combinan e incluso llegan a solapar (Puyuelo y Rondal, 2003). d) En función de la etiología: Las dislalias pueden clasificarse en función de su patogénesis, es decir, en función de las causas que las origina: d1) Dislalia evolutiva: Es aquella que se manifiesta a través de la evolución estándar del lenguaje. No es una dislalia patológica, sino que normalmente se produce como consecuencia de la inmadurez neurológica y cognitiva propia de la edad del niño. Acostumbra a resolverse espontáneamente. d2) Dislalia auidiógena: Este tipo de dislalia está asociada a un déficit de audición, la “hipoacusia en mayor o menor grado impide la adquisición y el desarrollo del lenguaje,
dificulta el aprendizaje de conocimientos escolares, trastorna la afectividad y altera el comportamiento social”.
d3) Dislalia orgánica. Esta asociada a trastornos o malformaciones orofaciales (como son las disglosias), lesiones en el Sistema Nervioso Central (como son las disartrias), etc (Gallardo y Gallego, 1995; Pascual, 1999; Puyuelo y Rondal, 2003). d4) Dislalia funcional. Pascual (1999) menciona que es un defecto en el desarrollo de la articulación del lenguaje, por una función anómala de los órganos periféricos sin que existan trastornos o modificaciones orgánicas en el sujeto, sino tan solo una incapacidad funcional. Puede darse en cualquier fonema, pero lo más frecuente es la sustitución, omisión o deformación de la r, k, l, s, z y ch.
El niño puede saber que articula mal y él quisiera corregirse y trata de imitarnos, pero sus órganos no obedecen con la facilidad que él desea y no encuentra el movimiento concreto que debe realizar para pronunciar el sonido correctamente. En otras ocasiones, aunque la dificultad sea la misma, el niño no percibe su defecto por la fijación que tiene del mismo, no pudiendo distinguir las articulaciones que emite bien y las que emite mal. Tipos de errores en la dislalia funcional: a) Sustitución: Es el error de articulación en que un sonido es reemplazado por otro. El niño se siente incapaz de pronunciar una articulación correcta y en su lugar emite otra que le resulta más fácil y asequible, se puede dar por la dificultad en que percibe o discrimina auditivamente, en este caso el niño percibe el fonema, no de forma correcta, sino tal como él lo emite, la sustitución puede darse al principio, en medio o al final de la palabra. b) Omisión: En este error, el niño salva su dificultad articulatoria omitiendo el fonema que no sabe pronunciar, sin ser sustituido por ningún otro. c) Inserción: El niño intercala el sonido junto con otro que no corresponde a la palabra pronunciada, sin conseguir con ello salvar la dificultad. d) Distorsión: es aquel que se da en forma incorrecta o deformada, su articulación se lleva a cabo de forma aproximada a la correcta, sin llegar a serlo (Pascual, 1999). Por otra parte, Gallardo y Gallego (1995), afirman que es necesario llevar a cabo una evaluación con la finalidad de encontrar algún trastorno del lenguaje (en el presente caso: la articulación), la cual nos va a permitir delimitar nuestros objetivos, y a posteriori nos permitirá tomar decisiones para intervenir adecuadamente. Al respecto, sugiere que uno de los modelos desde los cuales se puede llevar a cabo dicha intervención, es a partir del conductual, el cual se basa en el empleo de los principios experimentales de la psicología del comportamiento y cuyas técnicas van dirigidas a la modificación de alteraciones en la conducta (del lenguaje en este caso). Dentro de esta línea, cabe destacar la eficacia del modelado o aprendizaje por observación como técnica infalible para producir resultados terapéuticos y educativos tan diversos como la eliminación de deficiencias conductuales. El empleo de la técnica consiste en colocar al cliente frente a una persona que demuestra las conductas que aquél tiene que aprender (Kendall y Norton-Ford, 1988; Phares y Trull, 1999). Phares y Trull (1999) dentro de ésta técnica mencionan dos modalidades: El modelamiento participativo (en el cual el paciente observa al terapeuta o modelo ejecutando la conducta) y la participación guiada, para nuestro fin, cabe mencionar únicamente la primera, pues la segunda se emplea para otros fines. El principio operativo para que una respuesta aumente su probabilidad de ocurrencia se denomina estimulo reforzante, de esta manera, un refuerzo se puede definir como un acontecimiento ambiental que sigue a una respuesta y que aumenta su frecuencia. Existen varias clases de refuerzos, para el presente me limitaré únicamente a explicar aquel denominado social, el cual se refiere a diversas conductas realizadas por otras personas
dentro de un contexto social y que resultan agradables para persona cuya conducta queremos fortalecer, la alabanza específica es muy eficaz para aumentar la conducta a la que sigue. Dicha alabanza se centra en el comportamiento concreto que queremos incrementar. Los refuerzos sociales tienen ciertas ventajas sobre otros elementos reforzadores: pueden otorgarse con facilidad inmediatamente después de que ocurra una conducta en situaciones individuales o de grupo, las personas no suelen saciarse muy pronto con esta clase de refuerzos, pero lo que es más importante, los reforzadores sociales son naturales en situaciones sociales, por lo tanto pueden emplearse como reforzadores en muchos programas de refuerzo (Caballo, 1991). Por último, cabe mencionar que es imprescindible conocer y detectar precozmente posibles problemas en la articulación en aquellos niños que padecen dislalia, para intervenir inmediatamente, pues si no se detectan a tiempo, o si no se les concede la suficiente importancia, pueden afectar los procesos de enseñanza y aprendizaje, debido a la demanda de una competencia lingüística que el niño no posee.
DESCRIPCIÓN DEL PROBLEMA La colecta de información de los datos del niño se llevó a cabo mediante un diagnóstico que comenzó por una anamnésis personal y familiar: Datos personales 1.- Filiación: Nombre del niño: Oscar Nava Olmero. Edad del niño: 7 años. Dirección: Avenida principal los manantiales, Nicolás Romero, Edo. de México. Nombre del Padre: Gerardo Nava. Nombre de la Madre: Lucía Olmero. Número de hermanos: 1 Lugar que ocupa entre ellos: el 2º. 2.- Historia personal: - Historia del defecto que presenta: Oscar presenta Dislalia; por la cantidad de fonemas alterados dislalia simple; y por el tipo de error: Oscar presenta Omisión de las consonantes d y t . Este trastorno en la articulación fue percibido conforme transcurría su edad, puesto que no ha podido nunca pronunciar tales consonantes. -Circunstancias del embarazo y del parto: El embarazo no presento problemas, y el parto fue natural y a término. -Enfermedades sufridas por el niño: En el transcurso de la vida del niño no se presentaron enfermedades de mayor complicación, tampoco traumatismos o disminuciones percibidas en su audición. - Desarrollo del lenguaje: El niño comenzó a balbucear aproximadamente a los 7 meses, sus primeras palabras son aquellas correspondientes a la de niños de su edad cronológica. Evaluación del lenguaje repetido Primero se llevo a cabo la evaluación del lenguaje repetido, para lo cual se hizo uso de la lista de palabras que aparecen en el anexo 1, esto con la finalidad de detectar aquellos fonemas en los que presentaba problema.
Evaluación del lenguaje espontáneo. Según la literatura, muchas veces, no solo basta con evaluar con base al lenguaje repetido, pues en ocasiones, el niño aparenta no presentar ningún problema de articulación, cuando en su habla espontánea sí, razón por lo cual consideré, entablar conversación con él, con la finalidad de encontrar otro tipo de alteraciones en la articulación, y a la vez confirmar aquellos que mostró en el lenguaje repetido. Diagnóstico En el niño sólo existe una incapacidad funcional para la articulación de los fonemas t y d, según la evaluación del lenguaje espontáneo y el repetido, asimismo, pareciera ser que el niño no percibe los movimientos que debe llevar a cabo para la adecuada pronunciación de dichos fonemas. Por lo tanto, podríamos hablar en este caso de una dislalia funcional, pues recordemos que el niño, no presentó enfermedad de algún tipo que implicará lesión o trastorno orgánico, además según la anamnésis, el nacimiento de Oscar fue a término y de forma natural. Como dato adicional, cabe mencionar que los padres mencionaron que antes de que naciera el hermano menor de Oscar, ellos como trabajaban, tenían que dejarlo a cargo de una “comadre”, estando a su tutela de los 2 años a los 3 y medio, este dato final, apoya el dato
de que en realidad se trata de una dislalia funcional, pues según la literatura, la ausencia de cercanía de los padres y el ambiente afectivo normal, contribuye a que se presente esta modalidad de la dislalia.
ESTRATEGIA O PROGRAMA DE INTERVENCIÓN. FASE I (corrección de los fonemas omitidos) Objetivo General: Corregir e incorporar en el lenguaje espontáneo de un niño dislálico de 7 años 2 fonemas omitidos. Objetivo específico 1: Que Oscar articule correctamente el fonema t mediante imitación y reforzamiento social contingente. Materiales: 2 sillas y un espejo. Actividades: Tanto el terapeuta como el niño se sentarán el uno enfrente del otro. El primero modelará al niño la forma correcta en que debe pronunciar la letra t , indicándole el lugar donde debe poner la punta de su lengua, posteriormente lo incitará a pronunciar dicha letra, para lo cual, el terapeuta tomará un espejo y le pedirá que se observe en él, realizando los movimientos bucales para la pronunciación del fonema. Es muy importante que el terapeuta a cada intento aproximado que el niño haga a la letra en cuestión le refuerce socialmente, es decir, le diga frases como: ¡muy bien Oscar!, ¡bien!, etc. Objetivo específico 2: Que Oscar mediante imitación y reforzamiento social contingente articule correctamente el fonema t . Materiales: 2 sillas y un espejo. Actividades: Las actividades llevadas a cabo para cumplir este objetivo, serán las mismas que se hicieron en el objetivo específico 1, la diferencia radicará, en que el terapeuta ahora hará énfasis en la forma de articular el fonema d . Nota: Se trabajará la actividad durante 5 días (Cada sesión deberá ser de 1 hora), para cada uno de los fonemas, al término de la cual se espera su aprendizaje.
FASE II (Incorporación de los fonemas al lenguaje espontáneo) Objetivo específico 3 Que Oscar incorpore a su lenguaje espontáneo el fonema t mediante modelamiento y reforzamiento social. Materiales: Libro de cuentos, tarjetas impresas con dibujos, cuyo nombre contenga la letra t (por ejemplo: una taza, unas tijeras, una botella, etc.), 2 sillas y una mesa pequeña. Actividad 1a: Nota: Para llevar a cabo esta actividad es imprescindible que Oscar haya aprendido a articular el fonema t . El terapeuta colocará las tarjetas impresas en la mesa y le solicitará al niño que se siente en una de las sillas, de tal manera que las tarjetas queden a su disposición, por su parte el terapeuta se sentará enfrente del niño. El terapeuta tomará una de las tarjetas y le preguntará a Oscar ¿Qué es esto?, si el niño no pronuncia correctamente la palabra, el terapeuta modelará la pronunciación de forma lenta. Al igual que en la FASE I, si el niño pronuncia la palabra de manera aproximada a como debiera ser, le serán dichas frases como: ¡bien Oscar!, ¡Muy bien Oscar!, etc. Esta actividad se llevará a cabo con cada una de las tarjetas con las que se cuente, la idea consiste en que el niño comience a emitir aquellas palabras que contienen el fonema en cuestión, con la finalidad de incorporarlo a su lenguaje espontáneo. Actividad 2a: Al igual que en la actividad 1 las sillas y la mesa se distribuirán de manera semejante, la diferencia estribará en que en lugar de tarjetas impresas, habrá un libro de cuentos. El terapeuta le dirá al niño “te voy a contar un cuento, quiero que pongas atención, porque después tu me lo vas a contar a mí”, posteriormente, se lo leerá y le solicitará que ahora él
se lo cuente, durante esta actividad, el terapeuta estará atento a todas aquellas palabras que el niño pueda emitir con el fonema t implícito, si el niño lo omite, el terapeuta llamará la atención a este acto, modelando de forma adecuada y lenta la forma en que se debe pronunciar la palabra, aquellas ejecuciones aproximadas o correctas serán reforzadas socialmente. Esta actividad se llevará a cabo durante 5 días en los que cada sesión durará 1 hora, el terapeuta llevara a cabo la actividad 1 durante dos días, y en los siguientes 3 la actividad 2, es importante que a partir de este momento el terapeuta haga saber a los padres, sobre las
actividades, pues en casa, ellos trabajarán de manera similar a como lo hace el terapeuta, para una correcta generalización de la articulación. Objetivo específico 4: Que Oscar incorpore a su lenguaje espontáneo el fonema d mediante modelamiento y reforzamiento social. Materiales: Libro de cuentos, tarjetas impresas con dibujos, cuyo nombre contenga la letra d (por ejemplo: un dulce, un disco, un dominó, etc.), 2 sillas y una mesa pequeña. Actividad 1b: Nota: Al igual que en el objetivo específico 3, para llevar a cabo esta actividad es indispensable que Oscar haya aprendido a articular el fonema d . El terapeuta colocará las tarjetas impresas en la mesa y le solicitará al niño que se siente en una de las sillas, de tal manera que las tarjetas queden a su disposición, por su parte el terapeuta se sentará enfrente del niño. El terapeuta tomará una de las tarjetas y le preguntará a Oscar ¿Qué es esto?, si el niño no pronuncia correctamente la palabra, el terapeuta modelará la pronunciación de forma lenta. Al igual que en la FASE I, si el niño pronuncia la palabra de manera aproximada a como debiera ser, le serán dichas frases como: ¡bien Oscar!, ¡Muy bien Oscar!, etc. Esta actividad se llevará a cabo con cada una de las tarjetas con las que se cuente, la idea, al igual que en el objetivo específico 3 consiste en que el niño comience a emitir aquellas palabras que contienen el fonema en cuestión, con la finalidad de incorporarlo a su lenguaje espontáneo. Actividad 2b: En este apartado se llevarán a cabo las mismas actividades que se presentaron en la actividad 2a, objetivo específico 3. Esta actividad se llevará a cabo durante 5 días en los que cada sesión durará 1 hora, el terapeuta llevara a cabo la actividad 1 durante dos días, y en los siguientes 3 la actividad 2, es importante que a partir de este momento el terapeuta haga saber a los padres, sobre las actividades, pues en casa, ellos trabajarán de manera similar a como lo hace el terapeuta, para una correcta generalización de la articulación.
JUSTIFICACIÓN Es conveniente llevar a cabo la intervención empleando la técnica de modelamiento o aprendizaje por observación para remediar la dislalia, pues como se mencionó en la introducción es un procedimiento adecuado para el aprendizaje de conductas ausentes, además de que, quizá el niño puede saber que articula mal y trata de corregirse, más sus esfuerzos son magros, pues en realidad no sabe como es que se tienen que llevar a cabo los movimientos bucales, ni en que posición se deben colocar sus componentes, o por el otro, quizá el niño no perciba su defecto, por lo cual tendría que implementarse el aprendizaje para la correcta articulación. Además, cabe mencionar que si el niño no supera este tipo de dificultades, persistiendo más allá, podría acarrear consecuencias negativas en pro de su desarrollo. Por su parte, para que una respuesta aumente su probabilidad de ocurrencia, necesita ser reforzada, por lo cual el empleo de reforzamiento social (cuyas ventajas se mencionan en la introducción) podría ser un estímulo para que la articulación de los fonemas omitidos en Oscar aumenten su tasa de respuesta. Finalmente, respecto al tiempo de aplicación del programa, realmente consideré de forma arbitraria de aplicación, pues en realidad, espero que con las técnicas aparezcan los fonemas omitidos y su incorporación al lenguaje espontáneo.
REFERENCIAS Caballo, V. (1991) Manual de técnicas de terapia y modificación de conducta. Editorial Siglo XXI. Pp.96-101. De Fairman, S. (1999) Trastornos en la comunicación oral: Foneauidiología para docentes, estudiantes y padres. Editorial Mabel N. Stavico de Accomo.Pp. 47-67. Gallardo, R. J. y Gallego, O. J. (1995) Alteraciones en el lenguaje oral. En: R Bautista (1995) Necesidades educativas especiales. España. Ediciones Aljibe. Cap. Pp. 85-112. González, J. N. (2003) Alteraciones del habla en la infancia: Aspectos clínicos. Editorial Médica panamericana.Pp. 1-16, 75-86. Kendall, P. y Norton-Ford, J. (1988) Intervenciones con individuos: terapias conductual, cognoscitiva y cognoscitiva-conductual. En: Psicología clínica. Perspectivas científicas y profesionales. México: Limusa.Pp. 557-602. Mc Aleer, P. (2002) Cómo ayudar a los niños con problemas de lenguaje y auditivos. Editorial Aguilar.Pp. 25-30. Pascual, P. (1999) La dislalia. Ciencias de la Educación Preescolar y Especial. Pp.27-57. Phares, E. y Trull, T. (1999) Terapia conductual y perspectivas cognitivo-conductuales. En: Psicología clínica. Conceptos, Métodos y Práctica. Pp.379-408. Puyuelo, M. y Rondal, J. A. (2003) Manual de desarrollo y alteraciones del lenguaje: Aspectos evolutivos y patología en le niño y en el adulto. Editorial Masson. Pp.323-331.
ANEXO 1 Fonema a: Manzana-ama Fonema e: nene-ele Fonema i: isa-lima Fonema o: oso-ojo Fonema u: uña-mula Fonema b: bebé-bueno Fonema t: taza-tela-tijera-torero-tulipan-ataque-botella-pitillo-patoso-titulo-gastar-atenciónMatilde-atormenta-tumbado. Fonema d: Dame-deja-dice-dominó-ducha-nadaba-madera-medida-pisado-maduro-danzaamodesto-disco-adorno-dulce-dadme-bebed. Fonema k: curva-cálculo Fonema g: gato-rogar Fonema f: fama-afila Fonema z: zapato-escozor Fonema s: sapo-resumen Fonema y: yema-payaso Fonema j: jabalí-mujer Fonema ch: chaqueta-echar Fonema m: mesa-camino Fonema n: navaja-llanura Fonema ñ: leña-español Fonema l: liso-melón Fonema ll: llama-pellizco Fonema r: caramelo-marino Fonema rr: rata-barril
UNIVERSIDAD NACIONAL AUTÓNOMA DE MEXICO FACULTAD DE ESTUDIOS SUPERIORES CAMPUS IZTACALA
PROGRAMA DE INTERVENCIÓN PARA CORREGIR ERRORES DE OMISIÓN EN UN NIÑO DE 7 AÑOS QUE PRESENTA DISLALIA FUNCIONAL. EDUCACIÓN ESPECIAL Y REHABILITACIÓN TEÓRICA II
NOMBRE DEL ALUMNO: ROJAS MENDOZA DAVID