Rosas, un caudillo por excelencia: Como consecuencia de la Revolución de Mayo, se había destruido parte importante del orden administrativo colonial, por ello en la mayoría de los casos, sobre todo Bs.As, para imponer su supremacía apelaría a la fuera militar, lo!rando de esta manera imponer su poder ante los dem"s territorios, con la utiliación de las denominadas milicias urbanas. #e esta manera, se lle!o a un importante proceso de militariación de la sociedad, d"ndose $ste, sobre todo en las onas rurales, en donde los !auchos, peones de estancias y al!unos aborí!enes, formarían las milicias rurales de los !randes imperios !anaderos, siendo la principal fuera militar con la %ue contaban los !randes terratenientes para defenderse sobre todo de las constantes incursiones de los aborí!enes en las onas de frontera y de las !uerras civiles continuas sobre todo durante el periodo de las !uerras de independencia. Así, alrededor del patrón de la estancia se nucleaban numerosas masas, resaltando de esta manera el lidera!o del mismo, %uien como &efe militar al mando de esas multitudes, desempe'aba un papel preponderante en la conducción y dirección de las mismas (estas milicias como consecuencia de su ordenamiento irre!ular y de sus t"cticas a la hora de atacar se denominarían montoneras), sur!iendo de esta manera a la sombra de dichos movimientos la fi!ura del caudillo. *ara desarrollar un informe sobre estas fi!uras, hemos decido tomar a +uan Manuel de Rosas, %uien es considerado por sus contempor"neos como una fi!ura representante del proceso de caudillismo, $l se consolida con dicho título en los a'os -/, en donde el papel de la estancia crece abruptamente y &unto con el, el papel del patrón y el de sus !auchos. 0s menester pre!untarnos %u$ estaba aconteciendo en el país en esos a'os, Ar!entina vista desde la actualidad funcionaba como un ap$ndice económico de 1ran Breta'a, ya %ue era productora de materias primas y a partir de esas !anancias importaba manufacturas, es decir, %ue en esos momentos se desarrollaba un tipo de economía %ue denominaremos de demanda2 esta situación es la %ue repercutió en el crecimiento de las estancias en donde se criaba principalmente !anado, %ue como sostuvimos anteriormente seria destinado al mercado externo. Como consecuencia de este proceso el poder del estanciero crece abruptamente y el poder del 0stado se ve cada ve mas debilitado, esto es lo %ue acontecía en la d$cada de -/, en donde Buenos Aires se veía arrebata por diversos conflictos internos, diversos !rupos armados amenaaban el orden y por consi!uiente el desarrollo económico, por lo %ue se vieron afectados los poderosos estancieros, %uienes eli!ieron como representante de sus intereses a +uan Manuel de Rosas. 3le!ados a este punto, es propicio fundamentar la elección del caudillo propiamente dicho, Rosas fue ele!ido con el fin de desarrollar la idea de líder %ue en su nombre se condice, por el poder político %ue el mismo había alcanado, por su relación con las masas y en 4ltimo orden de cosas para lo!rar explicar las diferentes visiones %ue tenia la sociedad sobre este tipo de persona&es2 para la !ente culta los caudillos eran ídolos de la peonada, salva&es, crueles por naturalea y mataban por instinto2 mientras %ue para la !ente del pueblo eran personas de admiración, respeto y temor.
Una vida unida a la Estancia
+uan Manuel de Rosas había nacido en Bs.As en al a'o 567, y provenía de una familia destacada de propietarios rurales del sur bonaerense. 8iendo a4n menor de edad su familia le había encomendado el cuidado de la estancia 90l Rincón de 3ópe la cual había pertenecido a su abuelo, por otro lado tambi$n se había encar!ado como administrador de la hacienda de sus primos los Anchorena. #e esta manera, desde muy pe%ue'o se había desempe'ado en los traba&os rurales, lle!ando incluso a de&ar sus estudios para traba&ar como administrador en las haciendas antes nombradas2 así Rosas viviría muchos a'os consa!rado a la explotación !anadera, sobre todo, primeramente en el establecimiento de sus padres y lue!o en otras estancias. #ebido a su actividad rural, Rosas había desarrollado la mayor parte de su vida le&os de los combates por la independencia y de los tumultos de la revolución, dedicando su actividad directamente hacia la !estión de sus intereses siendo su persona atraída ínte!ramente por la vida campestre. Como patrón de estancia, aprendió a traba&ar y a mandar con la sola observación de la vida misma, los peones, las tribus aborí!enes, y los reba'os le fueron mostrando todo lo propio de la naturalea, con la constante lucha por la supervivencia, los instintos, las defensas, las precauciones, las cosas provechosas y los peli!ros evitables2 mediante la observación de la realidad %ue lo circundaba aprendió a extraer las normas necesarias y eficaces para vencer. #e esta manera, compendió, para si mismo, m"ximas elaboradas a partir de su propia experiencia, %ue lue!o implementaría en su estancia2 or!aniaría la explotación rural con m$todo y minuciosidad ri!urosa imponiendo una dura disciplina a su personal2 aplicando con ri!or sus mandatos y casti!ando cruelmente las infracciones. Como estanciero lo!ro seducir al personal de sus propiedades, a los !auchos va!abundos, a los peones hol!aanes y a los aborí!enes rebeldes. Con su estilo de mando y con la implantación de su 9Re!lamento de estancias, or!anió sus bastos dominios, imponiendo el r$!imen militar, ya %ue la amenaa permanente de la invasión de los aborí!enes lo obli!aba a estar siempre alerta para la lucha defensiva, vali$ndose tambi$n de la diplomacia para tratar a las tribus, y para poder pactar con ellas, lle!ando a concertar alianas y procurar a'a!aas, de manera %ue lo!ro conocer de tal forma la cultura y la len!ua abori!en %ue incluso lle!aría a escribir un diccionario pampa. Con su accionar, Rosas, comenó a formarse una reputación, de manera %ue en toda la campa'a del sur, particularmente, se obedecía m"s una orden suya %ue la de un !obierno. 3a estancia, en sus tiempos, constituía un dilatado se'orío: extensos dominios, reba'os numerosísimos, peones militariados, traba&os rudos y !uerra contra los indí!enas. Allí, el patrón era caudillo, !obernante, diplom"tico y !uerrero2 debía comprender a los paisanos e interpretar su alma para dominarlos, administrar hasta la extrema pe%ue'e para obtener el mayor provecho de la explotación, y observar profundamente a las !entes y a los !anados. #e esta manera su lar!a estadía en el campo conse!uiría subyu!ar y seducir a los campesinos, mientras sus contempor"neos luchaban por la independencia, y se debatían en la ciudad, enardecidos por la pasión política. Al i!ual %ue Rosas, habitaban la campa'a de Bs. As distintos elementos %ue tenían cada uno un car"cter peculiar. 3os estancieros, %ue eran los propietarios de las !randes extensiones dentro de la línea de fronteras, constituían una ruda aristocracia basada en el dominio territorial, %ue en la realidad, era similar a la feudal ya %ue e&ercía un patronato sobre la población de la llanura, constituida mayormente por chacareros y vecinos de las !uardias %ue se a!rupaban alrededor del fortín, %uienes se colocaban ba&o la protección de $stos a fin de no ser victimas de persecuciones y de la miseria. *ara los primeros, Rosas constituía un e&emplo del verdadero hacendado %ue sabia mane&ar, y tratar con las masas populares del "mbito rural, lo!rando extraer el m"ximo provecho en sus
explotaciones (haciendas), mientras para los se!undos, es decir para todos a%u$llos %ue se encontraban ba&o su protección, sean sus peones, o a%u$llos aborí!enes y !auchos con los cuales ne!ociaba, Rosas constituía una especie de protector, elev"ndose sobre ellos con una autoridad paternalista2 de este modo, dice ;bar!uren 93os chacareros y los !auchos miraron, en $l al patrón por excelencia: fu$ su protector, su padre, su &ue, y hasta su verdu!o cuando aplicaba su inexorable &usticia. *ero esta &usticia era respetada, por%ue existía entre la !ente la convicción de %ue se premiaba lo bueno, lo %ue hacía admitir sin protesta al!una el casti!o al malo, por mas cruel %ue fuera.#e esta manera, como hemos dicho antes, Rosas fue for&ando una reputación %ue se extendería a lo lar!o y a lo ancho de la *ampa incluso lle!ando hasta el fondo del desierto.
uilmes %ue se dedicaría a la explotación !anadera(para la exportación de carne salada, sobre todo)y al saladero de pescado, compitiendo en materia de !anancias con el !remio de abastecedores de Bs. A8, por lo %ue se desataría un conflicto entre los saladeros, acus"ndolos por la escase de carne, cuando esta tuviera lu!ar. 3a sociedad en la %ue participaba Rosas se encar!o sobre todo de la cría de !anado a !ran escala y a la compra de campos ampliando de esta manera el patrimonio de sus miembros, así fundarían la estancia 9los Cerrillos, el m"s poderoso feudo pampeano de +uan Manuel de Rosas. 0n estos tiempos, se coexistía en un continuo ambiente de inse!uridad debido al clamor revolucionario comenado en -/ y se!uido en - con la desi!nación de asambleas revolucionarias (*rimera +unta de 1obierno, &unta 1rande, *rimer triunvirato) y con la consi!uiente lucha por cortar los laos %ue unían a estas tierras con la monar%uía espa'ola. =odo esto provocaba una atmósfera de in%uietud e inse!uridad, como ya se ha dicho, %ue se destacaba especialmente en las ciudades ya %ue era allí en donde circulaban ante todo las nuevas ideas y en donde desembarcaban las noticias %ue lle!aban de las dem"s costas, por el mar. Rosas al no ser muy amante de la vida en la ciudad, solo partía hacia ella ante al!una necesidad, ya %ue prefería la vida en la estancia en donde todo era orden y en donde su palabra era la ley %ue todos obedecían, lo %ue le daba la posibilidad de sentirse respetado y reconocido por los dem"s habitantes de la campa'a2 esto no ocurría en la ciudad en donde ante el tumulto $l no era m"s %ue un hombre entre los dem"s pasando desapercibido. Rosas: sus comienzos en la política:
campa'a, de esta manera en -6, presentaría un proyecto de fomento, de policía y de defensa de la pampa. #urante el a'o -/ las provincias ar!entinas se or!aniaron en estados republicanos, independientes entre si, pero %ue reconocían la subsistencia del vinculo nacional. 0ste se expresaba a trav$s de la aspiración a reor!aniar el 0stado nacional en un futuro próximo, reuni$ndose todos los pueblos en una federación. Mientras tanto, el federalismo, era solo una ideolo!ía %ue se materialiaba en la i!ualdad de derechos y de trato entre las diversas provincias. Como fórmula política y &urídica, el federalismo, constituía una novedad en el país importada de los 0stados @nidos de Am$rica. *ero no solo $ste influiría en las tendencias políticas y económicas %ue se desarrollarían en el país , ya %ue por otro lado en dicho periodo, la Ar!entina se hallaba inserta en el mercado mundial, %ue estaba claramente dividido como consecuencia del acaecimiento de la revolución industrial2 así países centrales como ;n!laterra, rancia y 0spa'a lo!rarían un desarrollo tan importante %ue obtendrían el control del mercado, subordinando los países perif$ricos su producción a la demanda de dichas potencias. 0n el plano político, la idea !eneral %ue se estaba extendiendo en toda 0uropa era la del 9liberalismo, la cual establecía la implantación de una 9Constitución, como con&unto de normas y leyes fundamentales %ue obli!aran por i!ual a !obernantes y !obernados. 0sta nueva visión del mundo se hallaba basada en un fuerte optimismo y en una poderosa fe en el pro!reso material %ue permitiría la industrialiación, es así %ue durante este si!lo en 0uropa se da el triunfo de la bur!uesía y por tanto el fin de la sociedad feudal %ue limitaba el pro!reso social de los hombres. 0stas ideas liberales, tambi$n lle!aron a Am$rica y fueron recibidas por muchos de los %ue pretendían romper de una ve y para siempre con a%uellos laos coloniales %ue a4n los su&etaban. 0s por ello, %ue en nuestro país muchos de los intelectuales %ue lucharon por construir un estado nacional pu!naban por la realiación de una Constitución acional %ue amparara a todos los habitantes y no simplemente a al!unos sectores. 3le!ados a esta instancia es preciso referirnos a la ideolo!ía de Rosas en lo referente a la forma de !obierno, las ideas %ue dominaban su pensar, lo llevarían a despreciar el desorden %ue se destacaba en la $poca de la revolución, $l no concebía el !obierno en manos de muchos y de una asamblea formada por 9lo!ístas y dema!o!os(por 9anar%uistas como $l los llamaba)2 solo creía posible la dirección del 0stado conducida por un poder e&ecutivo unipersonal y fuerte(esta idea es muy importante para tener en cuenta como concibe al !obierno y como esas ideas se plasmaron o no durante su estadía como !obernador de Bs.As). Ba&o el contexto antes enunciado, en Ar!entina, el vocero m"ximo de los estancieros bonaerenses defensores del federalismo, era el comandante Rosas, %uien por entonces era el mayor propietario de tierras en la provincia, vinculado a la industria del saladero. 0l $xito de sus ne!ocios, su presti!io personal y el hecho de mandar una fuera militar lo se'alaban como tal. Conocía los intereses de los diri!entes porte'os, %ue coincidían en buena medida con los suyos propios. 3a anar%uía de los 4ltimos meses era el peor enemi!o de unos y otros. 3as clases propietarias de la provincia ansiaban pa y orden. 0n el caso de Rosas, ello se unía a una vocación personal por el orden, desple!ado en sus establecimientos rurales y en su fuera miliciana. 3a solución para estos n4cleos sociales consistía en un !obierno fuerte. Anchorena propuso a Rosas dos candidatos: Ramos Me&ía y Martín Rodrí!ue. Rosas eli!ió a Rodrí!ue, y su elección decidió la candidatura y la aliana de la ciudad con la campa'a2 lo %ue le permitió lle!ar a alcanar el !obierno de Buenos Aires. 0n este tiempo la expansión !anadera tra&o una necesidad creciente de tierras, %ue se obtuvieron corriendo la frontera con los indí!enas %ue se había establecido en el si!lo D;;;. #ebiendo de esta manera, el actual !obernador, Martín Rodrí!ue, tomar ciertas
medidas, %ue %uedarían esboadas en el denominado tratado de 9fraternidad y se!uridad reciprocas acordado con un !rupo de aborí!enes, reconoci$ndoles el territorio de mas haya de la frontera. 3ue!o de dicho acuerdo, y a consecuencia de un malón producido en el territorio de 8alto, el !obernador emprendió medidas %ue contradecían lo expuesto en su tratado, atacando a los aborí!enes. Rosas, aliado de la campa'a anteriormente expuesta, no compartió el accionar de Rodrí!ue, al considerarlo impropio. Ea %ue $l sostenía %ue los aborí!enes no eran responsables de los ata%ues, pero $stos al verse amenaados por el tipo de política emprendida, se sublevan arrasando cuanta estancia se cruara en su camino2 vi$ndose afectada en primera instancia una de las estancias de Rosas, %uien perdería miles de cabeas de !anado, por lo cual, intervendría como mediador para alcanar la pa perdida. #espu$s de lo!rado su cometido pediría el retiro de su función para no verse comprometido en una política con la %ue no acordaba. Crisis: Guerra externa e interna
y con&untamente, las montoneras federales comandadas por Rosas y #orre!o se enfrentaron a los unitarios de 3avalle2 las fueras del federalismo serian vencidas y #orre!o %uien no deseaba emprender una retirada seria apresado y fusilado por orden del !eneral 3avalle. 0ste hecho a!ravaría aun m"s la situación del país desatando el descontento en una !ran parte de la población. 0l enfrentamiento entre los unitarios y los federales se desataría a4n m"s san!riento, y 3avalle %uien !obernaría de facto, se encontraría abandonado por la mayoría de las fueras unitarias %uienes comenarían a ale&arse de $l, al mismo tiempo %ue su !obierno se vería amenaado por la oposición de los federales. Ante esta situación 3avalle se ve obli!ado a pactar, por lo cual en -6 firmaría el pacto de Ca'uelas, fi&ando el cese de hostilidades con las fueras federales comandadas por Rosas, al mismo tiempo %ue se establecería la elección de una c"mara de representantes encar!ados de la desi!nación de un !obernador, al cual ambos &efes prestarían obediencia. 0n este mismo a'o, ambas partes filmarían un nuevo acuerdo, el armisticio de Barracas, nombrando !obernador provisorio de Bs. As al !eneral Diamonte, con 9facultades extraordinarias %ue se consideren necesarias para la conservación de la tran%uilidad p4blica HIJ 9. =erminado el !obierno interino de Diamonte, la le!islatura, buscaba un hombre fuerte, capa de hacer frente a la profunda crisis por la %ue atravesaban las *rovincias @nidas, como resultado de la profunda anar%uía y desestabiliación %ue había acaecido a partir de las !uerras de independencia y de las continuas !uerras civiles2 ante los hombres %ue inte!raban la +unta de Representantes, se presentaba +uan Manuel de Rosas, como ese hombre serio, de traba&o y de acción capa de restaurar las leyes tan trans!redidas desde la Revolución de Mayo. *or ello en diciembre de -6, la le!islatura decide desi!nar a Rosas como !obernador de la *rovincia de Buenos Aires, otor!"ndole las famosas 9acultades 0xtraordinarias, teniendo la se!uridad de %ue como 9Restaurador de las 3eyes (como lo condecoraron oficialmente), Rosas, no admitiría infracciones a las mismas, tal y como en sus estancias no aceptaba ter!iversación a sus re!lamentos camperos. Análisis crítico sobre las gobernaciones de Rosas:
Analicemos la actitud política de Rosas con respecto a la 1obernación de #orre!o, una ve derrotados en avarro, $ste decide tomar una posición distante pero a su ve y esto se puede observar en diversos escritos, el entiende %ue si bien #orre!o no es un hombre %ue conviene al !obierno, si tiene el apoyo de los pobres de la ciudad y la campa'a e incluso de los %ue tienen posibilidades económicas2 situación %ue no coincidía con la realidad política de 3avalle ya %ue sólo lo acompa'aba una fracción de la bur!uesía comercial de la ciudad. #e este modo, lo!ramos entender las ideas %ue !uiaban su accionar, vemos de esta manera %ue $l estaba a favor de la corriente federalista, se oponía a la influencia extran&era y a las reformas liberales amparadas por la tendencia unitaria, en la %ue militaba el 1eneral 3avalle, %uien ocupaba en esos tiempos el car!o de !obernador de Buenos Aires. Kste fue apartado del poder por Rosas tras la batalla de *uente de M"r%ue, lue!o de al!unos meses firmaron una tre!ua, y en ese mismo a'o (-6) Rosas fue nombrado !obernador de Buenos Aires. 0l sistema político, %ue de ahora en mas emprendería, seria coherente con su posición socioL económica, buscaría el disciplinamiento de la mano de obra y de la provincia ya %ue se!4n $l, el orden social era fundamental para mantener la producción a!raria e indispensable para la prosperidad de la provincia. Rosas y los hacendados de la poderosa $lite terrateniente, %uerían ponerle fin a los conflictos %ue devastaban al país, pero los 4ltimos desconfiaban del accionar de las clases ba&as y el !obernador necesitaba el apoyo de las mismas2 ante esta situación de %uerer lo!rar la pacificación, impondría leyes, por medio de las cuales, intentaría acrecentar el control social decidiendo por consi!uiente, !obernar sin facultades
extraordinarias, para %ue nadie pon!a en duda su poder. 0l discurso político mane&ado por el !obernador, tenia car"cter republicano (defendía la publicidad de los actos de !obierno, el sufra!io2 etc.), pero a su ve se contradecía por%ue $ste persona&e incurría en la eliminación del debate popular acerca de los temas políticos (en t$rminos !lobales diríamos %ue no le !ustaba ser criticado). *ero mas haya de esta visión, de Rosas, %ue demostraba su accionar2 es preciso remitirnos a lo %ue estaba aconteciendo en el país en el periodo de -7/, las provincias estarían !obernadas por unitarios, y fueron estos %uienes emprendieron pactos interprovinciales cuyo ob&etivo era la defensa y ofensa de sus territorios, %ue lue!o %uedarían conformadas con el nombre de 3i!a del ;nterior , Rosas ante esta diver!encia decide !anar las provincias %ue se unen !eo!r"ficamente a Buenos Aires (0ntre ríos, 8anta fe, Corrientes) ,conformando de este modo la 3i!a del 3itoral. #espu$s de al!unos a'os de enfrentamiento y de pactos, el !obernador de Buenos Aires consi!uió %ue todas las provincias adhirieran al *acto ederal, lle!ando a tomar de este modo el car"cter e importancia de una constitución2 %uedando conformada como consecuencia de las uniones de las provincias al pacto federal la 9Confederación Ar!entina. 3le!ados a este punto, es necesario pre!untarnos por la relación existente entre Rosas y un actor social importantísimo de la $poca como lo son los aborí!enes (%uienes poseían !ran cantidad de territorios y fuera para la defensa de cual%uier país), se destaca en $l una relación ambivalente ya %ue en pocas palabras se puede decir, %ue los usó y los defendió, dependiendo del rol %ue $ste tomara ya sea como estanciero, militar, diplom"tico o !obernante2 había diferentes medidas políticas se!4n si los nativos fueran aliados o ami!os, en una primera etapa (durante su primer !obierno) la prioridad era la lucha contra 3a 3i!a del ;nterior por lo %ue resolvió instalar a l os aborí!enes ami!os en las provincias del interior de Buenos Aires , lue!o si!uió una etapa del ne!ocio pacífico, despu$s, por 4ltimo y como consecuencia de la militariación de la sociedad muchos !rupos pasaron a formar parte del denominado e&$rcito rosista. =erminado el primer período de !obierno de Rosas (!estionado por tres a'os), en -7, los federales 9doctrinarios deciden dele!ar nuevamente el poder en $l, pero sin la otor!ación de las denominadas 9acultades 0xtraordinarias, esto incidió en %ue $ste no aceptara el car!o. 0l nuevo !obernador seria Balcarce, Rosas emprendería una campa'a militar en contra de los aborí!enes y lo!raría tener como aliados a propietarios de los campos bonaerenses2 mientras tanto, en Buenos Aires acontecería la propa!ación de la a!itación opositora %ue seria denominada 93a Maorca (Asociada a la Rev.3ibert) %ue estaría encar!ada de difundir el terror entre los adversarios políticos. 0l papel principal de la Revolución libertadora, seria instalar el terror en a%uellos defensores de la oposición, persuadiendo a la sociedad de la necesidad de un !obernador como lo fue Rosas, %uien tuvo la oportunidad de lle!ar nuevamente al car!o, lue!o del asesinato del caudillo federal +uan acundo >uiro!a. M"s all" de haber perdido un poderoso aliado, esta situación le permitió conse!uir la obtención de las facultades extraordinarias, la suma del poder p4blico, y un período de !obierno durante cinco a'os2 a partir de este se!undo mandato instauraría un nuevo tipo de le!itimidad, la autoriación masiva para actuar (ya %ue $l consideraba importante la expresión de la mayoría en forma directa por%ue de este modo se manifestaba el consenso de la población),el tipo de pensamiento %ue $ste incurría cuando se hablaba de la or!aniación constitucional tenían %ue ver preferentemente con las sesiones del con!reso, la residencia del !obierno y por 4ltimo sostenía la creación de un !obierno !eneral. 3as medidas encausadas en la sociedad durante la $poca de Rosas, tendían a fomentar el orden, por lo cual, $ste, emprendería medidas de control sobre el ciudadano, para ello hio elaborar listas de los habitantes, catalo!"ndolos se!4n su adhesión (en unitarios o federales), la condición sociocultural implicaba diferencias en las obli!aciones (las mas duras para los pobres). Con respecto a la política llevada a cabo con los extran&eros se
puede decir %ue $ste no emprendió una persecución de los mismos y tampoco alentó la inmi!ración. Con respecto a su política económica, se habla de %ue en las onas cercanas a la ciudad de Buenos Aires, tenía lu!ar la actividad diversificada, muchos criticaban su política de no fomentar el cruamiento de animales, acus"ndolo de ne!arse al pro!reso, pero había %uienes destacaban su voluntad por racionaliar la explotación !anadera. 0l comercio interno (entre provincias) era limitado por las deficiencias de los caminos y los primitivos medios de transporte, en el caso particular de Buenos Aires, era fundamental para ella el comercio exterior, ya %ue importaba productos textiles, alimentos, elementos suntuarios, etc. 3os artículos de exportación eran en su mayoría vacunos, habiendo tomado, lue!o, !ran impulso la venta de lana, esto %uiere decir, %ue la mas !ananciosa era la provincia %ue tenia el control de la aduana y del puerto (Bs.As)2 durante la !obernación de Rosas el valor de las importaciones se duplicaría y el de las exportaciones lle!aría a triplicarse, lo cual si!nificaría mayor crecimiento y poderío económico. *ara prote!er dicho desarrollo, en -7F, se sanciona la 3ey de aduanas, mediante la cual se prote!ían las producciones nacionales, es decir, %ue se deberían pa!ar impuestos dependiendo del producto2 esta ley favoreció las manufacturas del interior pero tambi$n como consecuencia de la vi!encia de un 4nico puerto y el cierre de los ríos, las provincias del litoral se vieron en desventa&a, con respecto a la provincia %ue si lo poseía. #esde Bs.As, Rosas controlaba la situación política de todo el interior. 0n esta re!ión la política económica porte'a de exclusividad comercial nunca había sido bien recibida, lo %ue produciría una reacción de $stas onas (provincias del litoral) en contra del !obierno de Bs.As2 %uienes en pocos a'os lo!rarían conformar un e&$rcito y conse!uirían la colaboración de los países vecinos (Brasil y @ru!uay) para enfrentarse con Rosas en la Batalla de Caseros, en donde dicho !obierno lle!aría a su fin. A modo de cierre:
Concluyendo, a modo de síntesis, podríamos decir %ue hacia -6, +uan Manuel de Rosas, sería ele!ido !obernador de Bs.As, siendo alentado por su impronta y su carisma de líder caudillo. #urante su !obierno se lo!raría el denominado 9*acto ederal (aliana entre Bs.As, Corrientes y 8anta e) en el cual se acordaría, %ue en cuanto se dieran las condiciones idóneas, se constituiría un !obierno federal, for&"ndose un fuerte compromiso militar para la defensa de posibles ata%ues unitarios2 esto 4ltimo, permitiría vencer, por e&emplo, al !eneral +os$ Maria *a y terminar con la etapa de anar%uía. Ea en su primer mandato, Rosas, lo!raría instaurar el orden y pacificar la provincia de Bs.As. *ara continuar con esta labor, solicitaría entonces, las denominadas 9acultades 0xtraordinarias, si$ndole $stas ne!adas, por lo %ue $ste, se resistiría a aceptar el car!o en tanto no se las otor!asen, de esta manera, el !obierno recaería en manos de diversos !obernantes (Balcarce y Diamonte). 3ue!o del asesinato del caudillo acundo >uiro!a, Rosas reasumiría el !obierno, $sta ve con las anheladas 9acultades 0xtraordinarias, durando en dicho car!o, entre los a'os -7 y -F. #urante $ste periodo, Rosas debería hacer frente a los blo%ueos acaecidos en el puerto de Bs.As, llevados a cabo por la flota francesa e in!lesa. *or las acciones llevadas a cabo durante su !obierno Rosas, lle!o a ser considerado por muchos de sus contempor"neos como un dictador o un d$spota sin escr4pulos2 frente a estas tendencias antirrosistas, destacadas en persona&es como: @r%uia, Mitre, 8armiento, Avellaneda y Roca2 se encontrarían, en contraposición %uienes lo !lorificaban considerando &usto su accionar. 3le!ados a este punto, nos parece necesario remarcar %ue la mayoría de $stos persona&es, %ue lo criticaban, una ve %ue lo!raron conse!uir un
car!o en el !obierno, no aplicarían medidas destinadas a modificar a%uellas cuestiones %ue consideraban inaceptables durante el !obierno de Rosas. *or otro lado, retomando las políticas emprendidas por este caudillo durante su !obernación, nos parece importante destacar, %ue si bien en la mayoría de los an"lisis %ue se efect4an sobre el !obierno de Rosas se remarca fundamentalmente el papel de las cruentas !uerras civiles entre los unitarios y los federales, hechos %ue sin duda son destacados y %ue deben de tenerse en cuenta, tambi$n, en nuestro an"lisis consideramos %ue es necesario destacar, por otro lado, el accionar %ue tuvo Rosas durante su estadía en el !obierno, tanto en lo referente a la implementación de políticas en materia económica y social, y no tan solo política, la cual puede ser considerada errónea o no2 ya %ue han sido muy importantes dichas medidas tomadas por $l, medidas, al!unas de ellas, como por e&emplo las referentes a tener en cuenta a las masas populares por medio de la explicitación y defensa de sus intereses2 ya %ue no muchos de sus antecesores, por no decir nin!uno, hasta ese momento, había lle!ado a concebir la importancia de implementar dicha política, lo cual podría explicar el hecho por el cual Rosas, como caudillo y como !obernante, poseería sobre todo un !ran apoyo de parte de los sectores populares tanto del "mbito rural como del "mbito urbano, al mismo tiempo %ue se podría explicar el hecho de por%ue en un cierto momento las elites %ue lo habían apoyado proclam"ndolo como 90l Restaurador de las 3eyes lle!aran a opon$rsele al considerar amenaados sus intereses. 0stas políticas sociales emprendidas por Rosas, podrían tener a nuestro entender una doble lectura ya %ue: por un lado creemos %ue la consideración %ue tuvo en su primer !obierno por las clases populares puede deberse al hecho de %ue mediante su acción como hacendado había establecido fuertes y estrechos laos de unión y respeto para con los sectores populares rurales (peones, aborí!enes, etc.) lo cual lo moviliaba a velar por la defensa de sus intereses2 mientras %ue por otro lado, creemos, %ue la ad%uisición de las facultades extraordinarias fueron determinando nuevas acciones políticas %ue ya no solo tenían en cuenta los intereses de los sectores populares sino %ue lo %ue prevalecía eran los intereses económicos de a%uella provincia %ue $l !obernaba2 es decir, %ue las acciones emprendidas en su !obierno estaban !uiadas a mantener el orden y desarrollar el pro!reso, circunstancias %ue lo llevaban a mantenerse en una situación ambivalente2 por%ue $l consideraba %ue su política seria emprendida solo si se llevaba a cabo el consenso entre ambos !rupos, ya %ue tener en contra a las masas populares(su fuera militar) o a la aristocracia si!nificaría el fin de su !estión.