TÉCNICAS SUPRESIVAS EN TERAPIA GESTALT RESUMEN Hugo Almada Mireles TeorÃa y Método en Terapia Gestalt
• El continuum del darse cuenta -para la zona interna-. - No es sÃ!lo una técnica, es un modelo de vida: el ideal de permanecer en el presente o de la conciencia zen. - Su objetivo es rastrear la apariciÃ!n de la â"œestructura del carácterâ", el cÃ!mo evita el paciente vivenciarse a sà mismo. Es una forma de pedirle que suprima sus juegos habituales, que abandone el â"œhablar acerca deâ", o el manipular y que vivencia su verdadera experiencia. - Perls pedÃa a sus pacientes que comenzaran con: â "œAhora me doy cuentaâ"$â" • La concentraciÃ!n en la zona interna. - El paciente trata de dejar el pensamiento y sentir su cuerpo, dándose cuenta de la sensaciÃ!n más fuerte que aparece a su conciencia. La vivencia de la zona interna implica posibilitar el contacto con el sà mismo, sin la interferencia del como si o del juego de roles. El objetivo es lograr que aparezca la figura, la emociÃ!n no expresada o la escena correspondiente a la situaciÃ!n inconclusa. ¿CÃ!mo se trabaja?   + Sentado, recto, respiraciÃ!n más profunda.   + Que se concentre en la sensaciÃ!n corporal que va apareciendo. Se le pueden dar ejemplos.   + Que siga a la sensacià !n y ponga su atenciÃ!n en ella. Sin S in etiquetar, sÃ!lo sentir.   + Si aparece algún pensamiento, que suavemente lo deje ir. ir.   + Si aparece otra sensaciÃ!n, que siga a esta nueva sensacià !n, siempre que sea la dominante.   + Conforme avanza el ejercicio, se le pide que atienda a cualquier molestia o sensaciÃ!n no placentera que aparezca.   + Si aparecen dos sensaciones, que escoja la que implica una molestia mayor. mayor.   + Al tener la sensaciÃ!n clara, se le pide que se fije en la escena que â"œapareceâ", que â"œemergeâ", (el noumen). ESTO ES SUFICIENTE PARA EL TRABAJO.   + Con personas que tienen más experiencia se les puede preguntar: ¿Cuántos años tienes?â"$con la misma sensaciÃ!n busque una escena e scena anterior, anterior, que
aparezca ligadaâ"$modelar una respiraciÃ!n más rápida y más profundaâ "$detener la respiraciÃ!n, preguntar ¿DÃ!nde estás ahora? ¿Cuántos años tienes? Cuando el paciente ya muestra un sÃntoma en la sesià !n -p.e. dolor de cabeza, gastritis, etc.- nos ahorramos la fase del darse cuenta de la sensacià !n y pasamos a la concentraciÃ!n en el sÃntoma y esperando a que emerja la figura o escena relacionada. No hay que olvidar que el sÃntoma es un mal arreglo entre la emocià !n que busca emerger y que corresponde al sà mismo, y la introyecciÃ!n que la detiene. Cuando el sÃntoma aparece, la divisiÃ!n -que no es polaridad- ya está en superficie, por lo que toca concentrarnos en ella. •
Otra forma de trabajo consiste en, una vez que ha emergido la sensaciÃ!n, elaborar su significado emocional como propone Kepner:   + Ya Ya clarificada la sensaciÃ!n, se le pide al paciente que le dé forma. Completa la frase â"œes como siâ "$â"   + A continuaciÃ!n se le pide que asuma la responsabilidad: â"œYo  me estoyâ"$â"   + Y que se dé cuenta del motivo: â"œYo me estoyâ "$paraâ"$â" A menudo el paciente no ve para qué lo hace. Hay que tener paciencia para esperar la figura real.   + Luego se pasa a la expresiÃ!n o completar el ejercicio con otra frase: â"œYo me estoy haciendoâ"$paraâ"$, a costa deâ "$â", lo que permite darse cuenta del costo que para la propia salud y la propia vida tiene lo que nos estamos haciendo.   + Pasar a la expresiÃ!n y a la resoluciÃ!n de la situaciÃ!n inconclusa, completando el ciclo. • La visualizaciÃ!n Pedimos al paciente â"œcierre sus ojos y observe cualquier imagen que aparezca en su mente, que visualice algoâ". La mente inconsciente trabaja mejor con imágenes y trascendemos el discurso verbal que nos mantiene en el â "œcomo siâ" o el juego de roles. La imagen se trabaja básicamente de la misma forma que un sueño, revivenciando en presente los distintos personajes y contenidos. El conflicto principal representa polaridades correctas: P.e.: P.e.: Yo-otro Yo-otro (persona o elemento), dos mujeres en conflicto, pueden ser dos partes polares mÃas. Perls llama a este permitir el flujo y la formaciÃ!n de las imágenes sin interferir, interferir, el â"œvacÃo Fértilâ". • La concentraciÃ!n y la visualizaciÃ!n: estrategias más que técnicas Cuando el paciente llega a la sesià !n, básicamente:
  + Podemos trabajar con lo que qu e nos comenta. Escogemos la figura, vamos a la la sensaciÃ!n -como criterio de verdad- para corroborar o corregir. corregir. O bien, podemos avanzar ya en el ciclo, cuando la sensacià !n y la emociÃ!n corresponden a lo real y están suficientemente energetizadas.   + Podemos partir desde el cuerpo, ya sea desde el sÃntoma o desde la sensaciÃ!n dominante.   + Podemos ir al trabajo de sueños o de una visualizacià !n o imagen. Tanto esto como definir si con lo que emerge vamos al ciclo de autorregulaciÃ!n, o a un trabajo de polaridades, o si debemos antes deshacer la introyecciÃ!n, la proyecciÃ!n o la retroflexiÃ!n, para poder entonces sà avanzar en el ciclo, son cosas que el terapeuta elige, de las que debe darse cuenta para saber qué está haciendo en la sesiÃ!n. Esta es la estrategia. • La frustraciÃ!n Es toda accià !n dirigida a detener la evitaciÃ!n, a cubrir o evitar la vivencia directa, a cuidar su autoconcepto. El terapeuta debe disuadir cualquier acciÃ!n que impide la autorrealizaciÃ!n (la neurosis) del paciente, y estimular exhibiciones del sà mismo esencial que el paciente está tratando de encontrar. encontrar. Por ejemplo:   + Proporcionar situaciones no estructuradas que obligan al paciente a responsabilizarse. â"œSiento ganas de pararme y rugir a todos ustedesâ ". â"œVeo que no estás haciendo esoâ".   + Evitar contestar las preguntas del paciente y pedirle que lo convierta en afirmaciÃ!n.   + No responder a las solicitudes de apoyo y orientaciÃ!n. â"œUsted sabeâ", â"œusted dÃgameâ", â"œusted qué opinaâ".   + La ironÃa usada con cuidado ante las quejas o los intentos de manipulaciÃ!n. â"œÂ¡Pobrecito!â"$de verdad que debes sufrir mucho, tú que eres tan buenoâ".   + Negarse a seguir el rollo. â"œNo te entiendoâ". El objetivo de la frustraciÃ!n es permitir que emerja la emociÃ!n, luego aparecerá la figura. â"œSÃ, tu marido hace eso. Pero en realidad, ¿cuál es tu sentimiento?â". • SelecciÃ!n de preguntas dirigidas al sà mismo Dice Perls: â"œSi el terapeuta se viera limitado en su trabajo a hacer solamente tres preguntas, eventualmente tendrÃa éxito con todos, menos los más perturbados de sus pacientesâ". (El Enfoque Guestáltico). Estas tres preguntas son reformulaciones de la afirmaciÃ!n â"œAhora me doy cuentaâ ", a saber:Â
  + â"œÂ¿Qué estás haciendo?â"   + â"œÂ¿Qué es lo que sientes?â". Busca el contacto con la sensacià !n o traer a la conciencia la zona interna.   + â"œÂ¿Qué es lo que quieres?â ". Busca hacer consciente el significado de acciones o comportamientos de los que al parecer no estamos siendo conscientes. PodrÃamos agregar dos más:   + â"œÂ¿Qué estás evitando?â". Es otra formulacià !n de â"œÂ¿Qué temes?â".   + â"œÂ¿Qué es lo que esperas?â". Estas preguntas estimulan el autoapoyo aut oapoyo y la responsabilidad. - Si el terapeuta no pregunta bien provoca respuestas de â"œechar rolloâ". - Otras preguntas dirigidas al Sà mismo:   + Que nos permiten conectar la sensacià !n: ¿y dÃ!nde la sientes?. O bien describirla: ¿cÃ!mo es la sensacià !n? ¿y cÃ!mo es esaâ"$?   + Que nos permiten aclarar la emocià !n: ¿y cà !mo es tu tristeza?. O profundizarla: ¿y qué es lo que más te duele? O ¿qué es lo que más te molesta?   + Que nos ayudan a formar la figura: ¿De qué es tu tristeza? En realidad, ¿con quién estás enojada? ¿Y a quién te gustarÃa golper? Ese nudo ¿para qué esta ahÃ? - Las preguntas dirigidas al Sà mismo son en realidad al mismo tiempo técnicas supresivas y expresivas.