Pensamiento de Taborda sobre la educación Ante todo, Taborda crítica los “ideales” de la pedagogía “ofcial” (la pedagogía de Sarmiento, el normalismo-positivista y el ideario del entenario!, centrados en lo "ue #l llama “idoneidad” y “nacionalismo”, "ue sirven a los intereses dominantes de la burguesía en cada etapa$ %as grandes estrategias educativas adoptadas adoptadas por las políticas políticas escolares escolares argentinas, argentinas, se basan en esos ideales de idoneidad y nacionalismo, "ue son los impuestos por el capitalismo occidental$ Al sostenerse desde los sectores dominantes estos ideales, se escamotean las pr&cti pr&ctica cas s cultura culturales les,, entre entre ellas ellas el 'ec'o 'ec'o educat educativo ivo comuna comunall "ue "ue Tabord aborda a rast rastrrea en la 'ist 'istor oria ia de las las comu comuna nas s arge argent ntin inas as$$ )sos )sos idea ideale les s est& est&n n *undam *undament entado ados s en una pedago pedagogía gía someti sometida da a los design designios ios del proye proyecto cto políti político co 'egemó 'egemónic nico, o, con*or con*ormad mada a por un minuci minucioso oso y poder poderoso oso andami andamia+e a+e institucional y por la recurrencia de un “discurso del orden” político educativo$ Taborda Taborda menciona "ue en el libro escrito “)ducación Popular”, en donde Sarmiento eplica la transición lenta y penosa de un modo de ser a otro modo de ser, la 'istoria de la escuela es re*erida como una epresión sociológica, presidida casi siempre por un criterio estadístico y no al acontecer educativo en las diversas *ormas en "ue se cumple como acto de índole espiritual ra.ón por la cual esa labor, aun a'í donde se presenta a'incada en la compresión de la obra de Sarmiento, resbala sobre la superfcie del *enómeno sin penetrar en su esencia$ omo omo aconte acontecer cer pecul peculiar iarmen mente te educat educativo ivo,, la escuel escuela a se defne defne como como una relación de docente y docendo movida por un propósito de ense/ar en vista de un momento teleológico "ue es el ideal y aun cuando, de ordinario, se da en su especifcid especifcidad, ad, en la organi.ació organi.ación n escolar, escolar, se da tambi#n “en el anc'o seno del pueblo”, en las distintas *ormas "ue asume la realidad social y "ue integran y estructuran una colectividad en cada uno de sus momento 'istóricos$ Por Por otro otro lado, lado, Taborda aborda mencio menciona na "ue, "ue, el autod autodict ictism ismo o es un concep concepto to en etrema relativo toda ve. "ue todo aprendi.a+e supone el bien cultural con la voluntad voluntad educativa mediante mediante la cual aspira a imponerse imponerse como bien cultural y, +unto a la bien cultural la presencia docente del portador de ese bien, sea la comunidad como guardiana de la cultura, sea la persona real y concreta del educador "ue lo encarna$ Taborda Taborda se cuestiona, si la docencia de la colonia, en la cual se plasmó la personalidad de Sarmiento y como la de tantos próceres "ue participaron con sing singul ular ar ef efca caci cia a en los los acon aconte teci cimi mien ento tos s de la inde indepe pend nden enci cia a y en la organi.ación nacional, 0si la reacción contra el orden docente respondió al deli delibe bera rado do desig esigni nio o de una una supl suplan anta taci ción ón radi radica call de las las orie orient ntac acio ione nes s pedagógicas del genio nativo o *ue un sesgo inmanente del espirito vern&culo determinado por las nuevas condiciones 'istóricas1
%a primera respuesta es, dice Taborda, naturalmente la "ue surge por si sola de estado de cosas creado por la insurrección de 2324 en la cual decididos a liberarnos del dominio espa/ol se da comien.o a la negación de todo lo espa/ol$ %a educación comunal *ue declarada insufciente para lograr las fnalidades prometidas al nuevo orden nacido de la revolución por el espíritu del tiempo "ue ganaba las conciencias y concitaba las voluntades a las tareas de la organi.ación nacional$ )stas ra.ones educativas est&n consignadas en la obra de sarmiento, )ducación Popular, el libro del ideario del orden docente "ue reempla.o al orden docente comunal, con el proceso sociológico en cuya virtud las comunas de origen se insertaron en el ordenamiento político de la sociedad argentina$ %as consecuencias pedagógicas epuestas a'í no diferen en lo esencial de las ideas consagradas, en 5rancia, por la obra legislativa posterior a 2637, en per*ecta consonancia con el pensamiento impregnado de floso*ía cartesiana$ Por lo consiguiente, responden a la consideración "ue resuelve la tarea escolar en un proceso calculado para *ormar el tipo de 'ombre destinado a vivir y a reali.ar la estructura política de la democracia ecualitaria$ %a comparación de los programas de las escuelas del silabario con los programas de las escuelas de 5rancia 'abía inculcado al espíritu de su autor la conciencia de las enormes desventa+as de la educación comunal en los t#rminos de una conclusión pedagógica tan evidente "ue, dando *&cil pabilo a su +uicio, notoriamente imbuido de la idea del progresismo, sobre el atraso intelectual y la incapacidad industrial "ue despu#s de 'aber reducido a )spa/a a “una colonia en el seno de la )uropa misma”, 'abía 'ec'o de los estados suramericanos una ra.a "ue fgura en los 8ltimas líneas de los pueblos civili.ados$ 9e esta *orma, se olvidó la escuela provinciana alabada como un dec'ado de per*ección para dar pre*erencia a la escuela atiborrada de ciencia 'ec'a, medida y dosada, y perdió de vista la fliación espiritual de a"uellos e+emplares 'umanos cuyas fguran discurren con los relieves de un *riso antiguo por las p&ginas de :ecuerdos de Provincia, fguras recalcadas, 'oy m&s "ue nunca, por las sobrias perspectivas de una mundo sin dimensiones 'umanas, para dar pre*erencia al tipo del 'ombre de utilidad y de la ganancia concebido por el individualismo y ealtado por la epi*anía eitosa y brillante de la era capitalista$ )ducación Popular se limitó, a la ense/an.a aprecia como instrumento de luc'a y por eso es "ue, volviendo sobre el orden docente de la comuna "ue se reducía a la aplicación concreta de las escasas disciplinas "ue le o*reciera la cultura coet&nea, confrió rango y valor educativo, con precipitada avide. a todos los productos decantados, desde comien.os de siglo, por los estudios de la "uímica, de la *ísica, de la biología, de las ciencias naturales en general y de la t#cnica aplicada a la producción y a la industria$ Sa8l Taborda, en sus obras “re;eiones sobre el ideal político de Am#rica, 5acundo y Tiempo vivo” trato temas correspondientes a la tradición, a su defnición de lo *acundico, a su perspectiva sobre los valores, la moral, y el urbanismo estos *ueron retomados y dirigidos a la cuestión pedagógica, en la
"ue incluyo los problemas vinculados con el logro de la autonomía del nic'o, del adolescente, del +oven la critica a las universidades nacionales y a todo el sistema educativo, la de*ensa de la coeducación, etc$ Tambi#n para desplegar su cuestionamiento basado en la literatura universal y nuevamente, en distintos pensadores del idealismo, en tono a la *amilia, los con;ictos adolescentes y +uveniles, etc "ue se condensaron en sus investigaciones pedagógicas$ Taborda cuestionó *uertemente al positivismo en tanto concepción muy presente en las universidades latinoamericanas y tambi#n lo cuestionó en el modelo eperimental de las universidades norteamericanas pensadas en torno a la suma de actividades con m8ltiples *acultades y escuelas aneas, en las "ue se estudió de todo, pero con fnes pr&cticos$
%egitimo la especulación en torno a la tradición, como un compromiso ineludible "ue debía acompa/ar la critica a )uropa y la reubicación de Am#rica como *uente de nuevos valores$ %o "ue llamo la “revuelta +uvenil” a su +uicio era, muc'o m&s "ue epresión de un con+unto de demandas en torno a la universidad, síntoma de con;ictos manifestos en todo el mundo occidental$ )stos ponían en cuestión modelos de autoridad, del docente, del padre, de las elites políticas etc$ 5amilia y relaciones entre padres e 'i+os, cuestión pedagógica y sistema educativo, modelo de democracia y parlamentarismo, *ueron materia de una deconstrucción capa. de conmover los cimientos de los valores consagrados