UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÓN A DISTANCIA
NOMBRE APELLIDOS CALLE POBLACIÓN PROVINCIA C.P
EVALUACIÓN DE IMPACTO AMBIENTAL I PRUEBA DE EVALUACIÓN CONTINUA 1 : REPOBLACIÓN EN EUSKADI
PRÁCTICA 1. DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO 1.a El proceso de repoblación 1.a.1 Definiciones Definiciones En primer lugar establecemos un acuerdo semántico sobre la terminología a usar, basándonos en la bibliografía aportada por el equipo docente y en la vigente Ley de Montes: •
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Especie forestal: forestal: especie especie arbórea, arbórea, arbustiva, arbustiva, de matorral matorral o herbácea que no sea de uso exclusivo en la agricultura. Repoblación Repoblación forestal: técnica de s elvicultura consistente consistente en la introducción introducción de de especies forestales en un terreno mediante siembra o plantación Forestación: repoblación repoblación de un t erreno que era agrícola agrícola o estaba estaba dedicado dedicado a ot ros usos no forestales. Reforestación, Reforestación, reintroducción reintroducción de es pecies forestales forestales en t errenos que estuvieron poblados forestalmente hasta épocas recientes, pero que quedaron rasos a causa de talas, incendios, vendavales, plagas, enfermedades enfermedades u otros motivos. Rodal de repoblación: repoblación: superficie de características homogéneas, homogéneas, susceptible susceptible de de tener tener un único objetivo preferente para su repoblación, permitiendo el desarrollo de l a misma siguiendo una única técnica de ejecución. Especie dominante: son las especies que definen la fisonomía de la agrupación
PRÁCTICA 1. DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO 1.a El proceso de repoblación 1.a.1 Definiciones Definiciones En primer lugar establecemos un acuerdo semántico sobre la terminología a usar, basándonos en la bibliografía aportada por el equipo docente y en la vigente Ley de Montes: •
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Especie forestal: forestal: especie especie arbórea, arbórea, arbustiva, arbustiva, de matorral matorral o herbácea que no sea de uso exclusivo en la agricultura. Repoblación Repoblación forestal: técnica de s elvicultura consistente consistente en la introducción introducción de de especies forestales en un terreno mediante siembra o plantación Forestación: repoblación repoblación de un t erreno que era agrícola agrícola o estaba estaba dedicado dedicado a ot ros usos no forestales. Reforestación, Reforestación, reintroducción reintroducción de es pecies forestales forestales en t errenos que estuvieron poblados forestalmente hasta épocas recientes, pero que quedaron rasos a causa de talas, incendios, vendavales, plagas, enfermedades enfermedades u otros motivos. Rodal de repoblación: repoblación: superficie de características homogéneas, homogéneas, susceptible susceptible de de tener tener un único objetivo preferente para su repoblación, permitiendo el desarrollo de l a misma siguiendo una única técnica de ejecución. Especie dominante: son las especies que definen la fisonomía de la agrupación
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Elegir la especie o especies a introducir. Establecer Establece r la densidad de introducción. introducción . Decidir el tratamiento tratamiento de la vegetación preexistente preexistente y el acondicionami acondicionamiento ento del terreno. Precisar el modo y método concreto de implantación, sea por siembra o plantación. Determinar los elementos elementos complementario complementarioss necesarios necesarios para para la protección y posterior posterior explotación de la masa repoblada. Decidir los los cuidados que se consideran consideran beneficiosos o i mprescindibles mprescindibles para el desarrollo de la masa repoblada.
1.a.4 Fases de las repoblaciones Las fases típicas del desarrollo ejecutivo de una repoblación son las siguientes. •
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Tratamiento de de la vegetación existente y acondicionamiento acondicionamiento del terreno: aunque aunque son son objetivos distintos, pueden converger en una misma operación. Preparación de las semillas/plantones semillas/plantones e implantación: la primera primera se puede considerar o no i ncluida en el proyecto, ya que el abastecimiento del material se puede externalizar, siempre que se cumpla con las condiciones exigibles para permitir su implantación. Cuidados culturales posteriores: posteriores: los los más relevantes relevantes en el éxito de la repoblación son la reposición de marras, la instalación de protectores, el riego, las binas y escardas, el control de la vegetación y el acotamiento al pastoreo
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Biológicos: fitosociológicos, de competencia con la vegetación natural, de existencia de simbiontes y de riesgos biológicos por herbívoros, plagas o enfermedades. Económicos: directos, indirectos y tecnológicos.
El proceso de selección se puede estructurar en tres fases, relacionadas cada una de ellas con diferentes factores de diagnóstico. De este modo, la primera fase abarcaría los factores ecológicos, la segunda los factores biológicos y la tercera los factores económicos. La adaptación de es ta forma de pr oceder en l a elección de especies al procedimiento general de s elección de alternativas, de c ualquier decisión estratégica de un proyecto de obra, implica el desarrollo de tres etapas: i) identificación de al ternativas, supone seleccionar las especies compatibles con las características ecológicas del rodal a r epoblar, cruzando información entre las características del medio físico y biótico del rodal con la descripción autoecológica de las especies. ii) evaluación de al ternativas, tanto para creación de m asas con una única especie dominante exclusiva, o bi en de m asas mixtas con especies intercalares. Se aplican una serie de criterios o atributos que estén en relación con los objetivos definidos en el proyecto y sean acordes al régimen de explotación y de perturbaciones al que está sometido el rodal o rodales a repoblar, siendo el régimen de explotación una perturbación más del sistema. Estos criterios son variados: ecofisiológicos, económicos, culturales, de di versidad, faunísticos, paisajísticos, de respuesta a las perturbaciones, selvícolas o sociales.
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Mecanizados: ejecutados por un tractor provisto de aperos de diferente tipo, como la desbrozadora de cadenas. Combinados: desarrollados a l a vez que los procedimientos de ac ondicionamiento del terreno, como las gradas de discos. Mediante productos herbicidas.
1.c.2 Acondicionamiento del terreno El acondicionamiento del terreno busca la modificación y mullido del suelo, pudiendo afectar solo a los puntos donde se van a colocar las plantas, a las líneas que los unen, o a toda la superficie. Su profundidad oscila entre las bajas –hasta unos 20 cm-, media –hasta unos 40 cm- y alta –hasta unos 60 cm-, pudiendo implicar o no la inversión de horizontes del perfil del suelo. Los métodos de ejecución pueden ser: •
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Manuales: ejecutados por trabajadores con herramientas de ahoyado y excavación, como palas o azadas, o ahoyadoras manuales. Mecanizados: ejecutados por máquinas tractoras equipadas con aperos de diferente tipo, como ahoyadoras, cazos, arados, subsoladores u otras.
1.c.3 Implantación La implantación por siembra suele ser menos frecuente que por plantación. Es una opción interesante aplicable a lugares de difícil acceso, cuando se persiguen elevadas densidades o cuando la plantación no es tá recomendada; también cuando como tras un i ncendio, es
Esta implantación se puede desarrollar previamente, simultáneamente o a pos teriori de l a implantación de la vegetación. 1.c.5 Tratamientos posteriores Se desarrollan en los años posteriores a la implantación, para asegurar el éxito de la misma. Los principales son los siguientes: •
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Reposición de marras, consistente en la sustitución de plantas muertas en los años inmediatos a l a plantación; el método operativo será siempre manual, aunque la plantación original se haya hecho mecanizada o s imultanea a la preparación del suelo. Control de l a vegetación -herbácea fundamentalmente- que se puede desarrollar entre las plantas y entrar en competencia con la misma. Puede consistir en escardas manuales, binas o gradeos, disposición de protectores horizontales o aplicación de herbicidas. Instalación de pr otectores verticales individuales, como tubos invernaderos, perforados, de malla u otros. Riegos mediante tractor con cisterna. Podas de guiado. Tratamientos fitosanitarios
2.a Necesidad de la repoblación. Como se explica en el apartado 1.a.2, de acuerdo al tipo de beneficios que se busquen con
De acuerdo también al PFV, las formaciones arbóreas genuinamente naturales del territorio son los Robledales Mesotrofos, Robledales Oligotrofos, Robledales de Quercus petraea, Marojales , Hayedos, Quejigares, Encinares Cantábricos, Encinares Mediterráneos o Carrascales, Pinares De Pinus sylvestris, y por último las Alisedas, Olmedas y Choperas.
Siendo importante mantener los ecotipos radicados en l a C.A.P.V, de acuerdo a s u plan forestal, se deben m antener una s uperficie forestal mínima por especie y ecotipo en u n régimen selvícola que permita la máxima diversidad genética y que facilite realizar frecuentes abastecimientos de germoplasma. Esto se puede conseguir mediante la repoblación. También se plantea en dicho plan la necesidad de r epoblar las márgenes de l os cauces naturales –continuos o discontinuos- y de ciertos caminos y cañadas por su función como corredores ecológicos. Otros motivos para la repoblación serían los de densificación o enriquecimiento de masas que presentan espesura fuertemente defectivas, o en la restauración de formaciones forestales hayan sufrido incendios recientes. Por último, y como ya se ha mencionado en el punto 1.b.1, la repoblación podría tener su origen en las medidas compensatorias de otros proyectos previos.
2.b Localización de las repoblaciones Como hemos comentado en el punto anterior, el objetivo más plausible de una r epoblación
PRÁCTICA 2. LEGISLACIÓN APLICABLE En este apartado solo se comenta la legislación comunitaria cuando no exista la legislación correspondiente de t rasposición al ordenamiento jurídico español. Por otra parte solo se comenta la legislación estatal cuando no exista la correspondiente legislación suplementaria en el ámbito de la CAPV o de las Diputaciones Forales. Donde no se mencione expresamente el ámbito, las normas serán europeas (directivas) y estatales (leyes y reales decretos). Solo se comenta la legislación relativa a l os factores directamente afectados por la repoblación, cuando en dichas normas se regulen expresamente las propias actividades de repoblación o de or denación de us os del territorio, condicionando la localización o el desarrollo de las mismas. Siguiendo este criterio, no se ha revisado la legislación relativa a clima, calidad del aire, ruido, contaminación, residuos… Obviamente la normativa de ur banismo excluye las categorías de s uelos urbanos y urbanizables como ámbitos de l as actividades de repoblación. Especial interés tiene determinar las categorías de pr otección y la limitación de ac tividades en l os suelos no urbanizables, recogidos en la legislación territorial y sectorial. También se comentan los planes que, en el desarrollo de l as normas correspondientes, concretan sus medidas y condicionan las actividades de repoblación.
2.1 Legislación relativa al procedimiento de EIA Directiva 2011/92/UE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 13 de diciembre de 2011,
En su artículo 2).establece los siguientes instrumentos de ordenación territorial, que constituyen referentes a desarrollar por las figuras de planeamiento general y especial previstas en la legislación sobre régimen del suelo, que habrán de ajustarse a las determinaciones contenidas en aquéllos: a) Las Directrices de Ordenación Territorial (DOT): constituyen el marco referencial para la formulación de los instrumentos de ordenación territorial y urbana. b) Planes Territoriales Parciales (PTP): desarrollan las DOT en las áreas o zonas supramunicipales que éstas delimiten (Ámbitos Funcionales), concretando para cada una de ellas los criterios específicos de ordenación que las Directrices establezcan. c) Planes Territoriales Sectoriales (PTS): son aquellos planes con incidencia territorial que elaboren los Departamentos del Gobierno Vasco, garantizando su correcta inserción en el marco territorial definido por las DOT y de los PTP.
LEY 2/2006, de 30 de junio, de Suelo y Urbanismo, de la CAPV. Decreto 28/1997, de 11 de febrero, por el que se aprueban definitivamente las Directrices de Ordenación Territori al de la Comunidad Au tónom a del País Vasco.
Las DOT, en su artículo 4, discretizan el territorio de la CAPV en 15 Ámbitos Funcionales para su ordenación mediante los Planes Territoriales Parciales. Los Ámbitos Funcionales definidos en este Decreto y que cubren la hoja 63 del MTN50 son tres: 6. Área Funcional de Eibar. 7. Área Funcional de Gernika-Markina
- Protección de Aguas Superficiales
Decreto 32/2006, de 21 de febrero, por el que se aprueba definitivamente el Plan Territorial Parcial del Área Funcional de Zarautz-Azpeitia (Urola Costa). Acuerdo Foral del Consejo de Gobierno de 27 de diciembre de 2011, para la aprobación inicial del Plan Territorial Parcial del Área Funcional de Gernika-Markina Decreto 86/2005, de 12 de abril, por el que se aprueba definitivamente el Plan Territorial Parcial del Área Funcional de Eibar (Bajo Deba).
2.3 Legislación relativa a conservación del medio natural. LEY 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad. Ley 16/1994, de Cons ervación de la Naturaleza del País Vasco .
Define 3 categorías de protección: -
Parque natural.
-
Biotopo protegido.
-
Árbol singular.
Ley 2/2013, de 10 de octubre, de modificación de la Ley 16/1994, de 30 de junio, de Conservación de la Naturaleza del País Vasco. Ley 3/1998, de 27 de febrero, General de Protección del Medio Ambiente del País Vasco.
-
Forestal monte-ralo
-
Pastos montanos
-
Pastos montanos-roquedos.
Además se incluye la categoría de Mejora Ambiental: Se trata de zonas degradadas, con escaso suelo o c on grandes muestras de er osión actual, en las que hay que realizar con la mayor brevedad posible labores de mejora y restauración del ecosistema con el fin de evitar que continúe la pérdida del recurso. El desarrollo de estas labores de restauración requiere de la elaboración de un proyecto específico para cada caso, en el que se contemplarán y garantizarán aspectos como el uso de especies autóctonas, garantía de origen y genética de las semillas, selección de especies en función del terreno, etc.
BIZKAIA Norma Foral 3/94, de 2 de junio, de Montes y Administración de Espacios Naturales Protegidos, publicada el 28 de junio. Norma Foral 3/2007, de 20 de marzo, de modificación de la Norma Foral 3/1994, de 2 de junio (B.O.B. 28/03/07)
En su artículo 8 clasifica los montes y áreas forestales, por razón de sus cualidades, en montes protectores, montes de especial protección y otros montes.
Norma Foral 11/97, de 14 de octubre, de Régimen específico de diversas especies forestales autóctonas, publicada el 31 de octubre. En su artículo 14 establece que la Diputación Foral podrá declarar la repoblación obligatoria de
2.2 Legislación relativa a aguas y régimen hidrológico. En la legislación relativa al agua no se regulan aspectos relativos a las repoblaciones de las cuencas. La ley de referencia es la “Ley 1/2006, de 23 de junio, de Aguas” de la CPVA. Decreto 231/2012, de 3 0 de oc tubre, de modificación del Decreto por el que se aprueba definitivamente el Plan Territorial Sectorial de Zonas Húmedas de la Comunidad Autónoma del País Vasco. Decreto 455/1999, de 28 de diciembre, por el que se aprueba definitivamente el Plan Territorial Sectorial de Ordenación de Márgenes de R íos y Arroyos de la Comunidad Autónoma del País Vasco (vertiente mediterránea). Decreto 415/1998, de 22 de diciembre, por el que se aprueba definitivamente el Plan Territorial Sectorial de Ordenación de Márgenes de R íos y Arroyos de la Comunidad Autónoma del País Vasco (vertiente cantábrica).
2.3 Legislación relativa a conservación de la geodiversidad. Al igual que en el caso del agua, no se regulan aspectos específicos de las repoblaciones. La ley de referencia es la “Ley 7/1990, de 3 de julio, de Patrimonio Cultural Vasco ”.
Práctica 3. El inventario ambiental 3.1 Criterios de exclusión 3.1.1 Justificación Los criterios de exclusión establecidos se aplican ordenadamente a cada unidad hasta que esta se descarta, recogiendo en una tabla cual ha sido el criterio aplicado para cada unidad –con independencia de que en una misma unidad podrían concurrir más de un criterio, y que en alguna de ellas esa concurrencia justifica la exclusión por el efecto acumulado de más de un criterio sobre la mayor parte de la superficie de la unidad-. El valor de r eferencia de exclusión -50% para los criterios geográficos y de ur banización, 30% para el de pr otección ambiental- son convencionales, y podrían ser más elevados – aunque con estos valores permiten reducir las unidades a un número manejable, sin por ello desvirtuar la función didáctica de la PED-. Es por este motivo que se han incluido y aplicado también los criterios de exclusión por protección ambiental. 3.1.2 Criterios de exclusión geográficos Cuando la unidad correspondiente está ocupada en m ás del 50% por el mar, playa o acantilados, o por los cauces de ríos y otras masas de agua continentales. Con este criterio se han eliminado directamente las unidades 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 33, 34, 45, 46, 47, . 3.1.3 Criterios de de exclusión por urbanización
-
Área de i nterés geológico-geomorfológico del Poljé de A izarna-Akua: unidades 100, 117, 118 y 135.
3.2 Inventario 3.2.1 Introducción El ámbito de estudio se circunscribe a la hoja nº63 del Mapa Topográfico Nacional 1:50000. Esta hoja comprende dos provincias y los siguientes municipios: Bizkaia: en l a parte occidental de l a hoja se encuentran comprendidos los municipios de Ondarroa, Berriatua, Etxebarria y Ermua, y solo parcialmente Arratxu, Markina-Xemein y Mallabia. Gipuzkoa: en la parte central y oriental de la hoja se encuentran comprendidos los municipios de Mutriku, Deba, Zumaia, Getaria, Aizarnazabal, Mendaro, Elgoibar, Zestoa y solo parcialmente, Eibar, Soraluze, Azkoitia, Azpeitia, Errezil y Aia. A continuación se describen los factores ambientales que condicionan en mayor medida la ubicación de la actividad de repoblación. 3.2.2 Variables climáticas El clima es de t ipo oceánico, templado-fresco, caracterizado por temperaturas moderadas con escasa oscilación térmica anual y abundantes precipitaciones, bien distribuidas a l o largo del año, aunque de menor cuantía en los meses estivales.
Del servidor de la Diputación Foral de Gipuzkoa se ha obtenido un mapa de isoyetas que permite diferenciar las distintas zonas –al contrario del mapa correspondiente al servidor del MAGRAMA-. Este mapa se refiere a los años 2001-2002 y su nivel de pr ecisión es bajo, pero consideramos importante incluirlo para favorecer la función didáctica de la PED. Los intervalos registrados mediante este mapa en e l ámbito de es tudio son 1.000-1.100 mm, 1.100-1.200 mm, 1.200-1.300 mm y 1.300-1.400 mm. 3.2.3 Variables fisiográficas El ámbito de estudio ofrece una topografía enormemente accidentada, en la que montañas, sierras, colinas y valles se suceden sin dar ocasión a las llanuras: sólo es posible encontrar algunas depresiones de cierta entidad en sectores muy concretos del litoral, y apenas una pequeña parte del total de la superficie ofrece una pendiente inferior al 12%. El mapa de pendientes se obtiene del servidor del MAGRAMA, con cuatro intervalos en el ámbito de estudio: 0-3%, 3-12%, 12-20%, 20-35%. Sin embargo no son tierras altas, la mitad del territorio está por debajo de los 300 m, y la altimetría no supera los 1.000 m en ningún punto del ámbito de estudio, salvo en el alto de Erlo (1.030 m), en el municipio de Azpeitia, que constituye el techo en el ámbito de estudio. El mapa de altitudes es de elaboración propia, a partir de las curvas de nivel del MTN50 – consiguiendo una mejor definición que con el servidor del MAGRAMA-, con cinco intervalos en el ámbito de estudio: 0-200 m, 200-300 m, 300-600 m, 600-900 m, 900-1200 m. Los valles de los ríos principales –Artibai, Deba y Urola- discurren en dirección NNE-SSW,
-
El resto de la hoja corresponde a los materiales más antiguos, del Cretácico inferior limos calcáreos y calizas recifales, y del Cenomaniense argilitas, areniscas y conglomerados cuarcíticos.
A pesar de la variedad litológica del territorio, los suelos ofrecen cierta homogeneidad. Ello es debido a la abundante presencia de precipitaciones que lavan los suelos dejando en superficies un horizonte particularmente ácido. Por otro lado, la secular presencia de bosque de frondosas con su aportación en materia orgánica contribuye también a borrar las diferencias. Son suelos jóvenes, de perfiles poco evolucionados y horizontes no bien diferenciados ya que la intensa erosión a que se ven sometidos por la configuración del terreno en formas de pendientes acusadas no permite procesos de c onstitución suficientemente largos. Hay un ar rastre de regolita y suelos que terminan en la formación de depósitos de ladera, mezcla de roca meteorizada y suelo, de gran interés para el aprovechamiento agrícola. En conjunto se pueden diferenciar cuatro grandes grupos o tipos de suelos:
-
La Tierra Parda Húmeda, se ha desarrollado sobre materiales silíceos o en rocas pobres de carbonatos, y se caracteriza por presentar suelos de tipo AC o AR (poco desarrollados en profundidad), con un humus ácido, desaturados en bases ya sea por lavado o por la acidez de la roca madre originaria.
-
Por el contrario, sobre los materiales calizo margosos se ha desarrollado Terra Fusca.
-
Sobre las calizas supraurgonianas y urgonianas predomina la Tierra Parda Caliza de regiones húmedas y Parda Podsolizada, ya que las fuertes pendientes de este área
por el haya, más resistente a las bajas temperaturas pero muy exigente también respecto a la humedad. Los hayedos pertenecen a series de vegetación propias de zonas montanas (altitudes entre 600650 y 1600-1700 metros de altitud) pero la elevada pluviosidad de esta región hace que esta serie alcance niveles altitudinales muy bajos, generalmente entre 400-500 metros de al titud; incluso dominando a partir de l os 300metros. El haya, cuando la disponibilidad de agua es suficiente, desplaza a l as demás especies debido a s u estrategia excluyente que c onsiste en proyectar una intensa sombra y en adelantar la foliación. Muy raras veces el haya comparte su espacio con otras especies arbóreas como algún roble albar (Quercus petraea), algún abedul (Betula celtiberica) o algún serbal de cazadores (Sorbus aucuparia). Como degradación subespontánea de estas especies arbóreas aparece la landa atlántica compuesta de matorrales y plantas herbáceas entre las que destacan el brezo (Erica), tojos, argomas, aulagas y helechal. La intensa y continuada acción antrópica ha transformado de manera particularmente notable estas formaciones espontáneas o s ubespontáneas dejándolas reducidas a ex tensiones de escasa entidad. Los robledales fueron replegándose sistemáticamente a medida que aumentaba el número de explotaciones agrícolas, de caseríos, desarrollándose por vertientes y laderas o eran convertidos en pastizales para el aprovechamiento ganadero. Desde el siglo XIX y con una intensidad particularmente creciente en las décadas de los 70 y 80, han adquirido un gran desarrollo las coníferas y especialmente el pino insigne (Pinus radiata) hasta llegar a ser la especie arbórea de mayor dominio en el territorio, llegando a cubrir incluso antiguas tierras de labor. Ha sido el árbol preferido en las repoblaciones, tanto desde organismos
Práctica 4. La aptitud del territorio 4.1 Planteamiento de base Con los antecedentes establecidos en l a normativa y a par tir de l os planes sectoriales correspondientes, un planteamiento verosímil de una r epoblación sería una de c arácter protector, promovida por una Diputación Foral en un monte público, en un terreno clasificado en la categoría de “ Mejora Ambiental”. La superficie a r epoblar sería lo suficientemente extensa como para exigir una preparación del terreno por medios mecanizados. Para establecer la valoración de los factores ambientales inventariados en cada unidad, nos podemos referir a una r epoblación genérica o podem os enfocar más los valores si establecemos una especie concreta como objeto de la repoblación. De las especies autóctonas dominantes en el ámbito, es el Haya –con carácter de dominante exclusiva- la que tiene un rango de caracteres culturales más restrictivos, lo que la hace ser una buena elección. Así, podremos establecer los criterios de v aloración y coeficientes de ponderación de l os factores ajustándose a los datos del monográfico del INIA “Descripción de l os caracteres culturales de l as principales especies forestales de España” para la especie “Fagus sylvatica”: ESTACIÓN Altitud: 900 -1.600
Esta variable está muy relacionada con las variables climáticas, con los usos del suelo y en menor medida con las pendientes. Se establecen cuatro intervalos en el ámbito de estudio: 0-200 m, 200-300 m, 300-600 m, 600-900 m, 900-1200 m. Las hayas en el ámbito de estudio se encuentran normalmente a partir de los 300 m, siendo más propicio la localización con las mayores alturas, y sin descartar completamente el tramo 200-300 m. Por eso se dan las siguientes puntuaciones: 0→0-200 m 1→ 200-300 2→300-600 m 3→600-900 m 4→ 900-1200 m En cuanto al coeficiente de ponderación es de 8 –sobre 10-, por la importancia de la altitud en la distribución de la vegetación, aunque existen otros factores que consideramos igual de importantes. 4.2.3 Orientación Las hayas son especies de temperamento débil y por ello la orientación más ventajosa es la norte y la más desfavorable es la sur, con las siguientes clases y valores:
4→ 20%
Al igual que el anterior también es un factor importante para la distribución de las especies, su importancia en el ámbito de estudio como factor discriminante –por las mismas razones esgrimidas con la Temperatura media– también ha de ser baja, con un coeficiente de ponderación de 2 sobre 10, porque los valores recogidos dentro del valor establecido para la Estación del haya. Además los datos de l os que disponemos ofrecen también un rango de v ariación muy escaso, con solo dos intervalos. Estos son los valores: 0→ 1→ 2→ 2< tmmf <4 3→4→ 4< tmmf <6 4.2.8 Precipitación media anual El haya es una es pecie higrófila que necesitan abundantes precipitaciones, con unos mínimos a satisfacer durante el periodo estival, con esta condición su ámbito de distribución puede ampliarse a zonas de menor altitud. Por este motivo en el caso del ámbito de estudio son incluso admisibles precipitaciones por encima de las recogidas para la Estación –según
Las hayas son acidófilas pero no son calcífugas. Los tres tipos de suelos detectados no son igualmente favorables a las frondosas, siendo mejores las tierras pardas húmedas que las terras fuscas, y estas que las pardas calizas y podsolizadas. Sin embargo el estado del suelo puede v ariar mucho localmente y en función de ot ras variables –principalmente la cubierta vegetal, la erosión actuante- por lo que el valor del coeficiente es el más bajo, 1 sobre 10, debido a su escaso poder discriminativo. Los suelos aluviales y coluviales tienen una presencia marginal y son improductivos o vinculados a la agricultura. 0→ Suelos aluviales y coluviales 1→Tierra Parda Caliza y Parda Podsolizada 2→ Terra Fusca 3→4→ Tierra Parda Húmeda 4.2.11 Usos del suelo Los usos preexistentes son variables dependientes de la altitud, orientación, pendiente, y en menor medida de l a tipología edáfica, por lo que el valor de s u coeficiente no l o consideramos tan elevado, y también porque en general no será un valor uniforme en cada unidad sino que habrá unidades mixtas. Sin embargo su valor es alto por la dificultades
6
INVENTARIO AMBIENTAL y MATRIZ DE VALORACIÓN EXCLUSIÓN INICIAL Cp
s o c i f á r g o e G . t i r C
o l e u s l e d s o s u e d s o i r e t i r C
X
l a t n e i b m a n ó i c c e t o r p e d s o i r e t i r C
0,167
S I S I L A N A . D U
d u t i t l A
0,188
n ó i c a t n e i r O
r o l a V
0,125
r o l a V
e t n e i d n e P
0,063
r o l a V
a i d e m a r u t a r e p m e T
0,083
r o l a V
a m i x á m a r u t a r e p m e T
0,042
r o l a V
a m i n í m a r u t a r e p m e T
0,083
r o l a V
s a d a l e h e d o d o i r e p l e d n ó i c a r u D
0,104
r o l a V
0,021
s e n o i c a t i p i c e r P
r o l a V
0,125
a c i f á d e a í g o l o p i T
r o l a V
Cp
o l e u s l e d s o s U
N Ó I C
r o l a V
L A T O T
1
A C I F I S A L C E R
S I S I L A N A . D U
1
2
0-200 m
0
S
0
3-12%
2
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.100-1.200 mm
2
3
0-200 m
0
N
4
3-12%
2
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.100-1.200 mm
2
Tierras Pardas Caliza y Podsolizada Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
1 1
Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
3
0,0
2
3
0,0
3
X
4
4
X
5
5
X
6
6
X
7
7
X
8
8
X
9
9
X
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10
X
11
11
X
12
12
X
13
13
X
14
14
X
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15
X
16
16
X
17
17
18
0-200 m
0
SE
1
3-12%
2
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
19
0-200 m
0
E
2
3-12%
2
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
X
20
X
21
Tierra Parda Húmeda Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
4 1
Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
3
0,0
18
3
0,0
19 20 21
Forestal: coníferas y 0-200 m
0
0,0
X
58
58
59
X
60
59 0-200 m
0
NE
3
3-12%
2
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.100-1.200 mm
2
Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
1
Pastizales y prados naturales
1
60
0,0
61
X
61
62
0-200 m
0
E
2
3-12%
2
12-14 ºC
2
20-24 ºC
4
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.100-1.200 mm
2
63
0-200 m
0
S
0
3-12%
2
12-14 ºC
2
20-24 ºC
4
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.000-1.100 mm
1
Tierras Pardas Caliza y Podsolizada Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
1 1
Pastizales y prados naturales Pastizales y prados naturales
1
0,0
62
1
0,0
63
X
64
64
X
65
65
X
66
66
X
67
67
X
68
68
X
69
69
X
70
70
71
200-300 m
1
SW
1
3-12%
2
10-12 ºC
4
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
Forestal: frondosas
2
1,8
Baja
71
72
300-600 m
2
E
2
3-12%
2
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
Forestal: frondosas
2
2,4
Baja
72
73
300-600 m
2
N
4
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
Forestal: frondosas
2
2,9
ALTA
73
X
74
74
X
75
75
76
X
X
76
77
300-600 m
2
SW
1
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
4-5 meses
2
1.100-1.200 mm
2
78
300-600 m
2
NE
3
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.100-1.200 mm
2
Tierras Pardas Caliza y Podsolizada Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
1
Pastizal-matorral y matorral. Pastizal-matorral y matorral.
4
Pastizales y prados naturales
1
4
2,5
Media
77
4
2,8
ALTA
78
79 80
79 0-200 m
0
E
2
3-12%
2
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.100-1.200 mm
2
Tierra Parda Húmeda
1
80
0,0
X
81
81
X
82
82
X
83
83
84
200-300 m
1
NW
3
3-12%
2
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
3-4 meses
4
1.000-1.100 mm
1
Terra Fusca
2
85
0-200 m
0
SE
1
3-12%
2
12-14 ºC
2
20-24 ºC
4
4-6 ºC
4
3-4 meses
4
1.100-1.200 mm
2
Terra Fusca
2
86
300-600 m
2
NE
3
3-12%
2
10-12 ºC
4
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
87
200-300 m
1
NE
3
3-12%
2
10-12 ºC
4
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
88
0-200 m
0
NE
3
3-12%
2
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
Pastizal-matorral y matorral. Forestal: frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Pastizales y prados naturales Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
4
2,4
2
0,0
3
2,5
Media
86
1
2,1
Baja
87
3
0,0
Baja
84 85
88
124
200-300 m
1
NE
3
12-20%
3
10-12 ºC
4
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Terra Fusca
2
Pastizal-matorral y matorral.
4
2,5
Media
125
X
X
125
126
0-200 m
0
NE
3
3-12%
2
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
4-5 meses
2
1.200-1.300 mm
3
127
300-600 m
2
NE
3
12-20%
3
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
600-900 m
3
3
Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
1
Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
1
Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
4
3
0,0
3
2,4
126 Baja
128 129
X
130
X
131 132
SW
1
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
20-35%
4
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.100-1.200 mm
2
Tierra Parda Húmeda
4
133
0-200 m
0
W
2
12-20%
3
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.100-1.200 mm
2
Tierra Parda Húmeda
4
134
200-300 m
1
SW
1
3-12%
2
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.100-1.200 mm
2
Tierra Parda Húmeda
4
136 2
SE
1
3-12%
2
10-12 ºC
4
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
6-7 meses
0
1.200-1.300 mm
3
Terra Fusca
2
138
600-900 m
3
N
4
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
6-7 meses
0
1.200-1.300 mm
3
Terra Fusca
2
X
140 141
Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
3
2,5
3
0,0
3
1,9
Media
132 133
Baja
Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
134
3
0,0
137
3
0,0
138 139 140
200-300 m
1
NE
3
12-20%
3
10-12 ºC
4
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
3
2,5
Media
142
X
129
136 300-600 m
139
Media
135
137
X
2,5
131 NW
135
3
130
1
X
127 128
200-300 m
X
124
141 142
143
200-300 m
1
SE
1
12-20%
3
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Terra Fusca
2
144
300-600 m
2
NE
3
12-20%
3
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
145
300-600 m
2
SW
1
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
146
3
SW
1
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
5-6 meses
1
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda Tierras Pardas Caliza y Podsolizada
4
600-900 m
1
Pastizales y prados naturales Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
1
1,7
Baja
143
3
2,5
Media
144
3
2,4
Baja
145
3
2,5
Media
146
X
147
147
X
148
148
X
149
149
150
200-300 m
1
E
2
20-35%
4
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
151
300-600 m
2
SW
1
12-20%
3
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
2-4 ºC
2
4-5 meses
2
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
152
300-600 m
2
NE
3
12-20%
3
12-14 ºC
2
24-28 ºC
2
4-6 ºC
4
4-5 meses
2
1.200-1.300 mm
3
Tierra Parda Húmeda
4
153
300-600 m
2
SE
1
12-20%
3
10-12 ºC
4
20-24 ºC
4
2-4 ºC
2
2
1.300-1.400 mm
4
Tierra Parda Húmeda
4
Pastizal-matorral y matorral. Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas Forestal: coníferas y asoc. con frondosas
4
2,6
Media
150
3
2,2
Baja
151
3
2,7
ALTA
152
3
2,6
Media
153
4.4 Determinación de intervalos de reclasificación y clasificación final. Tras el cálculo de la suma ponderada de los valores de todas las unidades, obtenemos que el valor más alto es de 3,0, por lo cual podríamos pensar en establecer directamente tres intervalos de igual amplitud: 0-1, 1-2 y 2-3. Sin embargo la media de los valores es 2,4, por lo cual llegaríamos a la conclusión de que la aptitud de la mayor parte de las unidades es alta. Tras la aplicación de los valores hay 25 unidades que se han excluido –al ser 0 el valor de alguno de los elementos de dichas unidades-, por lo cual tan solo quedan 70 unidades sin excluir. Estableciendo un rango aproximado de un 10% para las unidades de aptitud alta, y un 30% para las de aptitud media obtenemos los siguientes intervalos: Aptitud Baja para los valores menores o iguales que 2,4. Son 41 unidades. Aptitud Media para los valores entre 2,5 y 2,6, ambos incluidos. Corresponden a 2 1 unidades: 35, 52, 77, 86, 91, 94, 112, 116, 120, 124, 129, 132, 141, 144, 146, 150, 153, 172, 175, 179, 187. Aptitud Alta para los valores iguales o mayores que 2,7. Corresponden a 8 unidades, que son las siguientes: 73, 78, 95, 105, 152, 163, 170, 186.
4.5 Mapa de aptitud.
ANEXO DE MAPAS
Se muestran a continuación los mapas que se han elaborado como paso previo al Inventario Ambiental.