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1) La temática del libro se centra en la explicación del mal como propensión psicológica en todos los seres humanos. A través de un doble análisis, de casos concretos por un lado y teoría por el otro, el autor se propone demostrar por qué las personas hacen el mal, y a su vez brindar posibles soluciones para combatirlo. 2) John Kekes es un filósofo estadounidense estadounidense nacido en Hungría. Desarrolla su actividad como profesor Emérito de Filosofía en la Universidad de Albany, Nueva York. Recibió su doctorado, en la disciplina nombrada, de la Universidad Nacional Australiana. Su ideolo gía política es conservadora, sobre lo cual ha escrito diversos libros. Sus trabajos más destacados se centran en la ética, como por ejemplo La ejemplo La moralidad del Pluralismo (Princeton Pluralismo (Princeton University Press, 1996), El 1996), El arte de la Vida (Cornell University Press, 2005) o Disfrutar o Disfrutar (Oxford University Press, 2005), entre varios otros trabajos. En Las En Las raíces del Mal, puede Mal, puede observarse cómo el autor busca crear conciencia sobre diversos aspectos que permitirían mejorar a las sociedades. 3)
Las palabras clave que seleccioné son las siguientes:
Raíces del mal: el trabajo del autor se centra en explicar cuál es el origen del mal en el ser humano, por lo que estas palabras podrían sintetizar la totalidad de la obra.
Propensiones psicológicas: el autor considera a este tipo de propensiones como los elementos básicos de la psicología moral de las personas. Ellas son la fuente del daño serio a personas inocentes cuando el proceso psicológico que realiza el hacedor del mal se encuentra viciado.
Ideales: esta palabra clave puede resumir la fuente del mal en los casos que analiza el autor, quien sostiene que son el centro de la responsabilidad. Si bien, como dice Kekes, tener ideales no significa que se desarrollará el mal en las personas, en los casos c asos analizados fueron los ideales religiosos, políticos, patrióticos o personales los que desencadenaron las tragedias.
Tipos ideales: Kekes utiliza cuatro tipos ideales teóricos para po der explicar distintos elementos que conducen al accionar maligno. A su vez, el autor aclara que solo sirven para la explicación teórica, ya que cada hecho puede tener elementos de varios tipos distintos. En definitiva, cada hecho es específico y no puede ser encasillado dentro de un tipo. Los mismos son las causas externo-pasivas, externo-activas, interno-pasivas e interno-activas.
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PREGUNTAS
¿Cuáles son las causas que el autor sostiene que pueden motivar al ser humano a realizar acciones malignas?
¿Qué motivos impulsaron a los sujetos de la primer parte de la obra a accionar de la forma que lo hicieron?
¿Cómo puede llegar a combatirse la maldad en las sociedades según el autor? 1
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PUNTO 5 El libro sobre el cual se centra este trabajo es “Las raíces del mal”. La cuestión que plantea John Kekes, autor de la obra, es cuál es el motivo de la maldad en el hombre. A modo de introducción, la hipótesis que propone el
filósofo ante el problema es que existen propensiones psicológicas que, siendo comunes a toda psicología humana (por ejemplo, llevar una vida con sentido, necesidad de amor, resentimiento hacia la injusticia, temor de lo desconocido, etc.), pueden motivar a los “hacedores del mal”, como los llama Kekes. Los hechos que analiza el autor son conocidos por la mayoría de los integrantes de las sociedades, por lo que son reconocidos como malos por cualquier tipo de ideología o punto de vista, sea religioso o político. La definición del mal que realiza el autor es todo daño grave, excesivo, malévolo y moralmente inexcusable, causado por seres humanos a otros seres humanos. A partir de este concepto se puede analizar los casos concretos utilizados en la obra para ejemplificar. En primer lugar, el autor sostiene que la fe de cualquier religión existente, puede ser llevada por un camino erróneo que desencadene hechos malignos tomando como ejemplo la cruzada albigense de 1240. En segundo lugar, Kekes dice que la ideología puede ser una causa del mal si las circunstancias lo favorecen y si ese pensamiento no respeta la razón y la moral, ejemplificando con el reinado de terror de Robespierre luego de la Revolución Francesa de 1789. En tercer lugar, el filósofo analiza el rol de la ambición, diciendo que no es maligna intrínsecamente, pero es peligrosa si gobierna y domina la vida de las personas. El ejemplo para esta causa es el del comandante nazi Franz Stangl, que dirigió el campo de concentración de Treblinka, implementando las cámaras de gas de forma tan “eficiente” como para conseguir ascensos dentro de la estructura política naz i. La cuarta causa que describe Kekes es la envidia causada por la incapacidad propia de una persona ante el éxito ajeno. El caso que utiliza el autor para ejemplificar es el de Charles Manson, quien organizó y perpetró con un grupo de seguidores suyos dos crímenes que implicaron el asesinato de d os familias con saña y odio. La causa: envidia por el éxito y la frustración de Manson por no triunfar en la vida. En quinto lugar, se trata la dictadura argentina de la década de 1976, en la que la causa fuente de los asesinatos, secuestros y torturas fue el “honor” y la ceguera en busca de proteger a la patria contra la amenaza de los enemigos subversivos. En este caso, la política del terrorismo de Estado que aplicaron las Fuerzas Armadas Argentina fue injustificada por el exceso. Por último, Kekes desarrolla la causa del aburrimiento como fuente d el mal. El ejemplo analizado es el de John Allen, un psicópata que buscaba estímulos para sobrellevar el aburrimiento y la falta de emoción en su vida mediante la delincuencia (vandalismo, robos, golpizas y daño s graves a otras personas). Es por esto que el capítulo que lo trata se titula “ Desencanto con la vida común”. En la segunda parte del libro, el autor desarrolla una serie de temas teóricos que sirven como camino al entendimiento del mal. Principalmente, sostiene que en los casos analizados, existe un aprovechamiento de los ideales en juego. Es por ello que la fe muchas veces rechaza a la razón, la ideología demoniza a los adversarios, el honor toma al desacuerdo como un insulto o la ambición no repara en los medios utilizables para alcanzar el éxito. El objetivo de toda sociedad es la protección de sus individuos. Es por ello que para brindar una solución al problema des mal, Kekes sostiene que son necesarias diversas condiciones. Por un lado, internas y por otro, externas. Una posibilidad de las condiciones internas es el desarrollo de una imaginación moral , que permita a los sujetos valorar otros estilos de vida y comprender las con secuencias de su accionar. A su vez, las condiciones externas favorables a la sociedad serían la creación de prohibiciones para fijar límites y proteger la seguridad física de las personas, o como dice el autor, la “decencia elemental” y por otro lado, la implementación de justos castigos a todo aquel que rompa las reglas y evada las prohibiciones con fines malignos. 2
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PUNTO 6
La obra que se seleccionó para este trabajo es un convincente análisis sobre las causas del mal en los seres humanos. Lo que lo hace más interesante es el análisis de los casos concretos de la primer parte, que p ermiten comprender de forma clara y precisa, cuales son las principales causas para el autor. Hay utilización de marcos teóricos filosóficos, sociológicos, políticos y jurídicos, pero no un lenguaje sumamente técnico, por lo que la lectura del libro es amena y de fácil comprensión. Existen pocos pasajes del libro ambiguos o difíciles de entender. La crudeza de los relatos, el detalle de las masacres y los hechos analizados, son herramientas que permiten conectarse con la gravedad y la seriedad del tema. Si no hubiese habido tantos datos fácticos, y se hubiesen analizado los hechos de otra forma, estimo que no se podría llegar a entender qué es realmente el mal para Kekes. Algunos datos teóricos fueron un poco confusos debido a que el autor no utilizó especificidad, sino que, a mi parecer, intentó explicar con palabras más coloquiales conceptos que necesitaban ser explicados con teoría. La segunda parte del libro presenta una explicación clara sobre las condiciones que abren el camino a los hechos malignos. A su vez analiza qué es la razón, la moralidad, la responsabilidad y la intención, elementos a mi entender de suma importancia para la comprensión de la idea planteada. A su vez, los hechos pueden provocar la reflexión personal a todo lector, ya que la distancia entre algunos y la cercanía entre otros resaltan un patrón histórico que se repite en toda la historia de la humanidad. No es necesario ir muchos años en el pasado, ya que hoy en día hay muchísimos focos del mal diseminados por todo el mundo: las políticas capitalistas que buscan el beneficio de los poderosos, las guerras en varios países, los maltratos del día a día en los hogares, trabajos, escuelas. En definitiva, “Las raíces del mal” es una obra con una problemática clara y una hipótesis comprensible que a lo largo del libro es descripta y desarrollada de forma precisa.
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