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Estereotipos sociales y medios de comunicación masiva El estereotipo es una representación repetida que convierte algo complejo en sencillo. Es un proceso reduccionista que suele distorsionar lo que representa, porque opera en él un proceso de selección, categorización y generalización donde se hace énfasis en algunos elementos en detrimento de otros. Es decir,
es un sentido construido a partir de la selección de ciertos elementos y/o aspectos de un tema u objeto. Los estereotipos son conceptos elaborados por un grupo , a partir de lo que un grupo piense de otro o de otros. Sirven para generar marcos de referencia, de conocimiento sobre el mundo que nos rodea y son una forma de orientar nuestras percepciones. Por lo tanto, los estereotipos ayudan a organizan nuestro
pensamiento. Ahora bien, el problema radica en que, generalmente, los estereotipos se construyen como producto de la perspectiva de un sector dominante de la sociedad , que tiene poder para hacer que sus visiones acerca de otros grupos termine siendo aceptada como representativa de lo “real”, y defina tanto lo que ese grupo es
como lo que debe ser. Es por esto que la fuerza del estereotipo se mide en relación directa con el grado en que éste es percibido como representación válida de la realidad. A partir de ahí, se difunde y se autoreproduce. Los estereotipos tienen éxito cuando se vuelven "naturales" , pasando a formar parte del sentido común, ocultando tanto los juicios de valor que emiten y sobre los cuales se construyeron, como el hecho de que fue un grupo determinado el que le dio origen. Es decir, los estereotipos porque los sentidos que un grupo realiza respecto de otro se imponen sobre muchos otros sentidos y perspectivas posibles , y se confunden con “lo real”. Asimismo, la credibilidad que se le otorga a los estereotipos construidos y su uso social frecuente –en las
formas de pensar, hablar, referenciar/nos y hacer chistes-, refuerzan su persistencia. También, los estereotipos tienen éxito porque permiten pensar las cosas sin demasiado esfuerzo y sin necesidad de explicitar ni problematizar las ideas preconcebidas en las que se fundan. En síntesis, los estereotipos “funcionan” porque, al ser impuestos y reforzados cotidianamente, son
fácilmente reconocibles para todos y hacen la comunicación más dinámica. Pero es precisamente por esto que son una forma más de violencia simbólica tanto para quienes la ejercen como para quienes la sufren, ya que los estereotipos se aceptan como expre siones de lo “real”, acordadas y naturalizadas sin previa reflexión.
Los estereotipos y los medios de comunicación Para responder cómo surgen y cómo se utilizan los estereotipos , debemos recuperar su dimensión social y el rol de los medios de comunicación. Los medios de comunicación son mediadores y fuentes de conocimiento de los otros o de lo otro, es decir, de aquello que no podemos conocer por experiencia propia, de manera directa. Si tenemos en cuenta que los estereotipos condicionan nuestras percepciones porque un grupo logra imponer, mediante su repetición, unos sentidos por sobre otros, podemos comprender por qué los medios de comunicación son un factor clave en el refuerzo y difusión de dichos estereotipos: el gran alcance y capacidad de difusión que poseen, hace que determinadas representaciones circulen con mayor frecuencia que otras y, por lo tanto, se conviertan en estereotipos.
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De hecho, hay estudios que demuestran que la reiteración de imágenes totalmente construidas (representaciones), favorece el aprendizaje de determinadas visiones sobre aquello que nos rodea; tanto de lo que no conocemos como también de aquello que sí conocemos y con lo que sí tenemos contacto directo. Basta repetir y multiplicar una imagen hasta el infinito para que comenzamos a creer que es verdadera: y los medios son una herramienta muy poderosa para lograrlo. El uso de los estereotipos en los medios de comunicación también se relaciona con la lógica de mercado que regula el funcionamiento de los mismos: cuanto más amplio (y diverso) sea el público al que se desee llegar, más homogénea deberá ser la información, más superficiales sus contenidos y las formas de emitirlos. Esto se logra eliminando cualquier aspecto o dato que pueda complejizar la lectura de lo narrado y esquivando las contradicciones, para asegurar una rápida lectura interpretativa por parte del público, sin equívocos. Por ejemplo, para lograr el éxito de una telenovela, se necesita el rápido reconocimiento de los personajes: los estereotipos, en estos casos, funcionan como atajos.
¿Cómo se construye un estereotipo? Lo primero es identificar determinada condición social de un grupo y realizar sobre ella un juicio de valor, que puede ser negativo o positivo . Luego, hay que proponer una idea acerca de ese grupo que sea homogénea, que niega cualquier contradicción y omita todas las singularidades. De esta manera, se invierten los efectos de una determinada condición/situación social (por ej. las dificultades de algunas personas para
acceder a la educación en contextos de pobreza) y se los transforma en su esencia (“Todas las personas pobres son analfabetas”). De esta manera, se ocultan l as condiciones materiales que hacen que un grupo pertenezca a
determinada situación social, y entonces, los atributos que se le otorgan a ese grupo aparecen como
la causa
de esa condición social.
¿Cuáles son los riesgos del uso de estereotipos? Los estereotipos construyen imágenes que impactan sobre la identidad social, y estas representaciones influyen en las relaciones que se establecen entre los grupos y las personas. De esta manera surgen los estigmas y prejuicios, la discriminación, el racismo y las prácticas de exclusión. Si consideramos que los estereotipos son la representación colectiva/social de los otros, o lo otro, estaremos asumiendo una actitud prejuiciosa frente a los mismos. El estereotipo siempre representa la posición relativa de un grupo en un determinado campo, y el lugar de poder de un grupo dominante sobre otros. Cada vez que un grupo dominante se encuentre/sienta amenazado su lugar de poder, construirá y/o reforzará una visión estereotipada sobre el grupo amenazante. Los estereotipos organizan nuestra forma de conocimiento y, al mismo tiempo, limitan nuestro modo de
ver el mundo. A diferencia de lo que parece, expresan imaginarios sociales y no condiciones o características reales.
Bibliografía consultada: Cora E. Gamarnik. Estereotipos sociales y medios de comunicación: un círculo vicioso. Univ. de Buenos Aires.
