FUNDAMENTOS DE LA DIGNIDAD HUMANA
Juan Louvier Calderón
2004
INTRODUCCIÓN A raíz del sacudimiento de las conciencias provocado por las atrocidades que la humanidad vivió en la década de los años cuarenta del siglo XX, el tema de la dignidad de la persona humana brincó a los primeros planos en el inte interrés de las per erso sona nass y lo loss pueb puebllos os.. Al fina finali liza zarr la egund egunda a !uerra !uerra "undia "undial, l, la consta constatac tación ión de la terrib terrible le realidad vivida en los campos de concentración erigidos por el régimen nazi, donde la dignidad humana fue brutalmente violada, llevó a la #rganización de las $aciones %nidas a promulgar en &'() la *+eclaración %niversal de los +erechos umanos-. n el pri prime merr /c /con onsi side derrando ando00 del del 1re2 e2mb mbul ulo o de dich dicha a *+eclaración- se dice3 /4onsiderando que la libertad, la 5usticia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e inalienables de todos los miembros de la fami famili lia a huma humana na.0 .0 1os oste teri rior orme ment nte e hace hace nuev nuevam amen ente te alusión a la dignidad humana en varios de sus artículos3 /todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad...0 dignidad...0 6Art. &78 /...la satisfacción de los derechos econ ec onóm ómic icos os,, so soci cial ales es y cult cultur ural ales es indi indisp spen ensa sabl bles es a su dignidad..0 dignidad..0 6Art. 998, /una remuneración... que le asegure, a sí como a su familia, una e:istencia conforme a la 2
dignidad huma humana na.. ..00 6Art 6Art.9 .9;8 ;8.. 1er ero o curio curiosa same ment nte e en ninguna parte la +eclaración señala < y mucho menos e:plica= cu2l es el fundamento de tal dignidad. on muchos otros los documentos, pactos inte interrnaci nacion onal ales es,, co cons nsti titu tuci cion ones es,, etc, etc, que que se seña ñala lan n a la dignidad humana como punto b2sico de referencia, como el valor y medida de leyes y normas. & in embargo, a pesar de hacer notar la importancia y trascendencia de la dign dignid idad ad huma humana na,, al igua iguall que que la *+ecl +eclar arac ació iónn- de la #$%, #$%, la gran gran ma may yor oría ía de eso soss docu docume ment ntos os tamp tampoc oco o indi indiccan cu2l cu2l es el funda undame ment nto o de la dign dignid idad ad del del se serr humano. >er2 que la dignidad de la persona es un valor entendido que no requiere mayores e:plicaciones? i es así, entonces >por qué nos encontramos con el hecho de que después de la +eclaración de &'() las violaciones a la dignidad humana le5os de haber dism dismin inui uido do si sigu guen en si sien endo do un hech hecho o co cons nsta tant nte e en la lass soci so cied edad ades es co cont ntem empo por2 r2ne neas as?? 1ar arec ecie iera ra,, pues pues,, que que la alusión a la dignidad ha tomado m2s una categoría cercana a la demagogia que a la de principio de principio inamovible inamovible y b2sico sobre el cual cimentar realmente la conducta y convivencia entre los hombres y entre las naciones. i no se e:plica *en qué- se fundamenta la dignidad, difícilmente se entender2 *porqué- debe ser respetada. s pues sumamente importante dilucidar cuales son los fundamentos de la dignidad, qué es y en qué consiste. @as respuestas permiten iluminar tanto a la ética y la 1 Por ejemplo, la Ley Fundamental de la República Federal Alemana, Alemana, promulgada el 23 de mayo de 1949, fija como regla de conducta a la dignidad humana y la declara “intangible” para sujetar a los poderes públicos a su respeto y proteccin!
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moral, como a los ordenamientos 5urídicos. @a relevancia que ha alcanzado éste tema en los ltimos años, ha llevado a varios filósofos y 5uristas contempor2neos a abordarlo desde puntos de vista y perspectivas diferentes. "uchos de ellos nos dan respuestas sólidas y contundentesB pero también no falta quien niegue la e:istencia de fundamentos, afirmando que es una ilusión indagar sobre ellos. in pretender disminuir un 2pice el valor de las refle:iones de unos y otros 6an de quienes niegan la e:istencia de fundamentos8, es conveniente señalar que desgraciadamente los aportes de todos ellos a un tema tan importante, han quedado solo entre unos pocos estudiosos, siendo desconocidos por la mayoría de la genteB principalmente ello ocurre porque el lengua5e filosófico=5urídico no es del todo comprensible al comn de las personas, y la densidad de los te:tos hace que an personas sinceramente interesadas en esta cuestión desistan r2pidamente de su lectura. 4on el presente traba5o no pretendo ser original, y mucho menos pretendo aportar refle:iones nuevas o diferentesB simplemente me propongo el reto de resumir y señalar de forma un poco m2s sencilla, las refle:iones y respuestas que grandes pensadores de nuestro tiempo han dado a los fundamentos de la dignidad de la persona humana.
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4A1CD%@# 1EF"E# DIGNIDAD Y CONDICIÓN DE PERSONA
El concepto de dignidad. i buscamos la palabra *dignidad- en dos de los diccionarios m2s reconocidos =el +iccionario nciclopédico spasa y en el de la nciclopedia Grit2nica= nos encontramos que ambos dicen pr2cticamente lo mismo3 /+ignidadHH4alidad de dignoHH :celencia, realceHH !ravedad y decoro de las personas en la manera de comportarseHH 4argo o empeño honorífico y de autoridad0. @o anterior casi nada nos dice sobre la importancia del concepto. "2s breve pero m2s til a nuestro propósito, es lo que esos diccionarios refieren sobre la palabra *digno-3 /que merece algo0. ste /merecer algo0, aunque sea sumamente vago e insuficiente, apunta ya hacia aquella noción de calidad superior que Iant señalaba3 /@o que tiene un precio puede ser sustituido por cualquier cosa equivalenteB lo que es superior a todo precio y, que por tanto, no permite equivalencia alguna, tiene una dignidad.09 4iertamente por dignidad debemos entender un valor superior que no tiene precio. Ahora bien en el caso del ser humano >tiene él una calidad, un valor que lo haga 2 "icola #bbagnano! Diccionario de Filosofía. $d! %ondo de &ultura $conmica, '()ico! *egunda edicin en espa+ol, 199, p! 324! -&fr! .! /ant! Fundamentación para una metafísica de las costumbres. #! 00
superior? y >superior a qué? J si es así >en qué consiste esa superioridad? Kamos a tratar de responder a estos interrogantes iniciales. 1or el simple hecho de haber recibido el ser como humano, cada persona tiene *de por sí- y no dependiente de factores e:ternos, cualidades esenciales que no poseen las piedras, las plantas o los animalesB es decir, tiene el valor de ser persona. /4on la palabra *valor- deseamos indicar una realidad positiva e intrínsecamente importante, capaz de proveer el fundamento para una motivación significativa. @os valores 6...8 son datos cualitativos encontrables en la e:periencia.0; >se *valor de ser persona- es superior a todo precio y no permite alguna equivalencia? i es así, por el simple hecho de *ser-, cada persona ser2 valiosa 6digna8 por sí misma y /merecer2 algo03 el respeto a lo que *es-. @a dignidad humana no depender2 entonces de algo e:trínseco a la persona, como serían las costumbres, las leyes, los gobernantes o las opiniones. 1ara confirmar el valor de la persona humana y la dignidad intrínseca correspondiente, vamos a realizar un breve an2lisis sobre la e:periencia que todos tenemos de nuestras cualidades específicasB es decir, de lo que nos distingue.
¿Porqué el ser huano es superior a los de!s entes" @os seres humanos tenemos muchas cosas en comn con los dem2s *entes- que e:isten en el mundo visible. 3 odrigo uerra 5pe6! Afirmar a la persona por sí misma. $d! &omisin "acional de los 7erechos 8umanos! '()ico, 23, p!1!
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Al igual que las piedras, nuestro cuerpo también est2 compuesto por innumerables elementos tales como hierro, calcio, fósforo, agua, etcB no en balde el mismo origen sem2ntico de la palabra *hombre- es *humus-, *tierra-. 1ero el hombre es superior a las piedras pues no sólo e:iste, sino que adem2s tiene vidaB al igual que las plantas, nace, crece, se reproduce y muere. in embargo el hombre es superior a las plantas en cuanto que la vida biológica humana adem2s de vegetativa es sensitivaB al igual que los animales tenemos instintos 6de conservación y se:ual8 y *sentimos-, pues poseemos sentidos 6vista, olfato, tacto, oído y gusto8 de los cuales carecen los vegetales. J sin bien muchos animales nos superan en la capacidad de alguno de los sentidos 6por e5emplo, los perros nos superan en mucho en oído y olfato, y las 2guilas en vista8 la característica del hombre es tener los sentidos equilibrados 6la vista en los perros es muy deficiente, y las 2guilas lo son en el olfato y tacto8. Algunos animales también nos superan en muchas capacidades físicas3 las aves pueden volar, y el hombre noB generalmente los cuadrpedos corren mucho m2s r2pido y mayores distancias que los atletas m2s destacadosB la resistencia de los animales a las inclemencias del tiempo es notoriamente superior a la de los hombres. n el orden físico=material pareciera pues que el ser humano no tiene ninguna superioridad con respecto a los animales. in embargo, cualquier ser humano es muy superior a cualquier animalB es m2s, e:iste un abismo infranqueable para el animal. se abismo es el espíritu, 0
elemento substancial *no=material- del ser humano y del cual el animal carece totalmente. >J cómo podemos saber que el hombre es también espíritu? 1or sus manifestaciones3 si el ser humano es capaz de *manifestar- realidades que no son materiales, es porque él debe tener un principio igualmente inmaterial. @os seres carentes de espíritu no pueden manifestar realidades *no materiales-, como son la inteligencia, la libertad y el amor, pues /nadie puede dar lo que no tiene0. l espíritu se manifiesta primero y antes que nada por la conciencia. l hombre tiene conciencia de sí mismo, e:iste y sabe que existe, el animal no. /Al menos yo sé que soy y solamente el hombre es capaz de este acto de conocimiento del acto de e:istir. +ecir que el hombre es capaz de un acto por el cual conoce su propio acto de existir , equivale a afirmar que el hombre tiene, ante todo, conciencia del serB es decir, cierto conocimiento del propio acto de ser.0 ( Adem2s de la conciencia, el espíritu se hace plenamente manifiesto por la inteligencia, es decir, la facultad de descubrir la realidad, facultad que a su vez /ilumina a la facultad argumentativa 6la razón8 que discurre ba5o su luz0 L i la inteligencia fuera una realidad material, no sería posible poner una *distancia- entre ella y los ob5etos que conoce /de donde se sigue que, o la naturaleza del acto que pone al ser como ob5eto es espiritual o seme5ante acto originario 5am2s podría acontecerB en 4 #lberto &aturelli! Reflexiones para una filosofía cristiana de la educación. $d! ;ni
cuyo caso, el hombre 5am2s podría haber pensado 6...8/in embargo, la conciencia de ser...no es una suerte de conciencia angélica, sino que conlleva la evidencia 6inmediata8 de la propia corporalidad 6...8 l hombre no es ni cuerpo, ni espíritu puros, sino la unidad plena de ambos.0M on también espirituales la libertad y el amor, cualidades íntimamente humanas las cuales abordaremos m2s adelante. Así, lo propio del hombre, lo que hace hombre al hombre, no es su realidad material y sus capacidades físicas, sino su realidad espiritual y sus capacidades no materiales. 1or ello negar el espíritu es negar al hombre...y a su dignidad. /$o se equivoca el hombre al afirmar su superioridad sobre el universo material y al considerarse no ya como partícula de la naturaleza o como elemento anónimo de la ciudad terrena. 1or su interioridad es, en efecto, superior al universo entero.0N +esde luego que tal *interioridad- no se refiere a lo /interior0 de nuestro cuerpo, como es el caso de nuestro estómago o la médula de nuestros huesos, sino a esa realidad íntimamente interna que nos permite decir *yo soy-B realidad del todo evidente porque todos la e:perimentamos. /@a persona, en cuanto su5eto, se distingue de los animales, aun de los m2s perfectos, por su interioridad, en la que se concentra una vida que le es propia, su vida interior. $o cabe decir lo mismo de los animales, : .b=dem, p! 1: 0 &oncilio >aticano ..! Gaudium et Spes. 14,2!
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aunque sus organismos estén sometidos a procesos bio= fisiológicos parecidos, y ligados a una constitución m2s o menos apro:imada a la de los hombres 6...8 n el hombre, el conocimiento y el deseo adquieren un car2cter espiritual y contribuyen de este modo a la formación de una verdadera vida interior, fenómeno ine:istente en los animales. @a vida interior es la vida espiritual.0) /An al hablar propiamente de *mi cuerpo- del que *yo estoy consciente- que *me pertenece- es pertinente siempre hablar de un centro desde el cual esto se e:perimenta y se dice. ste centro es interior y no puede e:plicarse cabalmente sin reconocer su dimensión incorpórea. n efecto, la naturaleza de este *dentro- incluye lo corpóreo aunque no lo agota. +efinitivamente la e:istencia de fenómenos como el pensamiento, la libertad, el amor, la alegría y otros muchos, no est2n contenidos en el espacio como lo est2n la e:tensión de un cuerpo, su peso, su color, etc. l pensamiento, por e5emplo, no puede ser medido como los cuerpos 6...8 "2s an, mientras que los cuerpos al moverse cambian en el lugar y en el tiempo, el elemento incorpóreo de la interioridad puede cambiar en el tiempo
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sta *interioridad- la formula #rtega y !asset pregunt2ndose />qué es nuestra vida, mi vida?0 y contestando /sería inocente y una incongruencia responder a ésta pregunta con definiciones de la biología y hablar de células, de funciones som2ticas, de digestión, de sistema nervioso, etc 6...8 @a vida no es lo que pasa en mis células, como no lo es lo que pasa en mis astros.0&O
Estructura del #er $uano *4uerpo y alma- o *espíritu y materia-, son las formas del lengua5e comn para referirse a la estructura del ser humanoB sin embargo no son pocos los que niegan la e:istencia del alma o espíritu, y no aceptan m2s realidad que la materia. /1or supuesto, la e:istencia del alma humana escapa al conocimiento de nuestros sentidos. A ella llegamos por el razonamiento, de modo que su presencia en la actividad humana es innegable y su manifestación en el mundo no la pueden hacer callar sino los pre5uicios y la superstición. "2s an, lo que constituye al hombre, =en su ser hombre=, *es principalmente el alma-, que *pertenece a una categoría de ser esencialmente distinta de la materia y superior a ella-.0 && n efecto, es poco inteligente negar la e:istencia del alma porque no la podamos pesar o medir, como sí lo podemos hacer con las realidades materiales. An m2s, 1 Aos( @rtega y asset! Obras ompletas. $d! #lian6a $ditorial, 'adrid, 199, >.. 413! 11 $duardo ubianes! La !ersona "umana. e
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si el espíritu pudiera ser captado por los sentidos e:ternos y lo pudiéramos pesar y medir, entonces no sería espíritu. in embargo su e:istencia real es tan evidente que an para negar su e:istencia es necesario tener esa realidad *no material- propia del ser humano, porque tal negación no la puede hacer la piedra, la planta o el animal. ólo un ser inteligente
alteridad, aunque todo eso pertenece o puede pertenecer a la persona3 yo e:isto, yo pienso, yo obro, yo padezco, yo nací, yo moriré 6...8 Dambién dan pie a que a la persona humana se la pueda calificar por cada uno de esos elementos integrantes 6...8 y decir que el hombre es corporal, que es espiritual, que es libre, que es responsable, que es social, que es político, que es religioso 6...8 1ero lo que no es correcto es reducir la metafísica a biología.0 &9 4omo en el ser humano se dan cita desde los elementos m2s humildes de la materia hasta el espíritu que puede conocer y amar, no es sencillo ni f2cil percibir y comprender su estructura substancial, pues es obvio que la persona no es un mero amontonamiento de partes. Kamos a señalar =cuando menos en sus rasgos m2s generales= la unidad substancial que constituye al ser humano. /@a substancia individual, en su definición m2s estricta, se predica de una íntima totalidad...y se hace e:tensiva a todos los modos y grados de vida, sean modos espirituales o materiales, sean niveles de vida vegetativa, sensitiva, racional o puramente espiritual.0&; @os variados y diferentes elementos, capacidades y niveles de vida est2n en íntima relación, y aunque puedan ictorino odr=gue6! #structura metafísica de la persona $umana. eerbo, 'adrid, "B 20, septiembre 199, p! 9C91 13 'iguel Dngel 'irabella! #l mundo natural y el mundo $umano. $d! $7;&#, Euenos #ires! 1990, p! 4C41
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el hombre no siente el hambre como la siente un caballo, porque el hombre es consciente de tener hambre. /@o que se entiende por vida sensorial merece ser distinguida de la actividad sensorial puramente animal que el hombre jamás podrá tener , inserta como est2 en la racionalidad. 1or tanto la primera refle:ión acerca de los sentidos e:ternos consiste en decir que se trata de funciones naturales, instaladas en los sistemas sensoriales, pero ordenados y preordenados a la intimidad consciente por la presencia condicionante de la racionalidad. Dales potencias corporales tienen necesariamente ob5etos e:ternos a si mismas y por ello puede decirse, por e5emplo, que el hombre no ve sino con el o5o y por el o5o, pero el o5o no ve, el que ve es el sujeto que se instala en la intimidad de la visión.0 &( 1or la armonía de sus partes y por la finura de sus capacidades, el cuerpo humano, adem2s de estético, es un prodigio admirable de eficiencia en su acciónB la mano del hombre puede lo mismo tomar una piedra o una estaca, que un pincel o un bisturí. 1ero el cuerpo humano es mucho m2s que eso, pues es el único medio que permite a la persona manifestar su interioridad. @os pensamientos, decisiones, sentimientos de la persona, sólo pueden ser manifestados por medio de las palabras, los gestos o las l2grimasB es decir, por medio de la corporeidad. $i puramente biológico
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Capacidades del esp%ritu huano& la inteligencia iendo el hombre un espíritu encarnado, en todo lo que es propiamente humano participan tanto el cuerpo como el espíritu. Dal es el caso de la capacidad que tiene el hombre de conocer la realidad, en la cual primeramente intervienen los sentidos e:ternos formados por un sin nmero de msculos y nervios, así como el cerebro, centro receptor, sensorial y motor. 1ero todos esos elementos materiales=corporales no son quienes conocenB quien conoce es la persona en su potencia espiritual a través de ellos. l +r. Pohn 4. ccles, 1remio $óbel en "edicina por sus investigaciones sobre el cerebro humano, dice al respecto lo siguiente3 /1ara nuestra vida personal como individuos conscientes, el cerebro es necesario, pero no suficiente. n relación con los procesos cerebrales del mundo *uno- 6los msculos, nervios, etc, de la corporeidad, 8 est2 el mundo *dos- de la percepción consciente, el cual incluye un yo personal en la intimidad de mi ser 6...8 l componente de nuestra e:istencia en el mundo *dos- 6el yo consciente8 es de naturaleza inmaterial...0&M sa *no materialidad- o interioridad espiritual, es corroborada por otros científicos connotados. l mismo +r. ccles cita3 /Qilder 1enfield, el gran neurólogo y neorociru5ano, escribió en un libro publicado poco antes de su muerte3 *la base física de la mente es la actividad del cerebro que en cada individuo acompaña a la 1: Aohn &! $ccles! #l cerebro y la mente. $d! 8erder, Earcelona! 194, p!101C 103 -las cursi
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actividad de su espíritu 6...8 l espíritu es el hombre que conocemos, y debe tener continuidad a través de períodos de sueño y de coma-.0&N #tro gran científico, el +r. Pordi 4ervós, quien fue catedr2tico y +irector del Fnstituto de $europatología de la %niversidad @ibre de Gerlín, dice3 /$o basta la biología y la bioquímica cerebral, y mucho menos su fisiología, para e:plicar la inteligencia 6...8 1ara los biólogos y bioquímicos 6la fuerza intelectual8 nos llega de algo inaprensible y a5eno al propio cerebro 6...8 @a e:plicación biológica y bioquímica de la cerebrización del cerebro es que no hay ninguna ley física, ni biológica, ni bioquímica, que e:plique la inteligencia humana.0&) /@a inteligencia se manifiesta, ante todo, como un hecho 6el hecho de ser inteligente8, luego por actos intelectuales y ambos dos suponen la e:istencia de la inteligencia como potencia de abstraer, es decir, de leer dentro de la realidad 6intus legere8. J abstracción 6 de abtrahere, separar8 no es otra cosa que la capacidad de considerar en un ob5eto un aspecto prescindiendo de otros. +e ahí que digo que algo que me pongo en la cabeza para protegerme del sol se llame *sombrero-, prescindiendo del color, tamaño, figura, etc., de cada sombrero particular.0&' 4onfundir el cerebro con la inteligencia es seme5ante a confundir el violín con la msicaB ambos se implican mutuamente, pero no son lo mismo. l materialismo cree que el violín es la msica. /Doda forma de 10 .b=dem, p! 10 1 $ntre
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concepción materialista de la inteligencia, desconoce en primer lugar, la inmaterialidad del ob5eto conocido por el entendimiento y en segundo lugar, tropieza con la dificultad de e:plicar cómo, desde esa intimidad consciente, el su5eto se conoce a sí mismo en una total introspección refle:iva09O @a inteligencia es pues una realidad espiritual, y no material. 1ara referirnos a ella, en el lengua5e cotidiano empleamos como sinónimos las palabras *entendimiento- y *razón-, porque ambas se refieren a la capacidad de conocimiento que tiene el espíritu humanoB sin embargo en sentido estricto, tales palabras no son sinónimas. /+ebe distinguirse el entendimiento de la razón 6intellectus y ratio8. l entendimiento es intuitivo 6conciencia de ser y del ser8B la razón, en cambio, es *discursiva-.09& ntendimiento y razón hacen posible que el hombre pueda conocer los fenómenos e ir m2s all2 de ellos, y alcanzar la realidad inteligible con auténtica certeza. 1or la inteligencia el hombre no es sólo el ser que se pregunta por el ser, sino que es capaz de buscar
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definir al ser humano como /animal racional0, lo cual es correcto. in embargo es muy importante destacar que /@a racionalidad no se predica del hombre como un simple ad5etivo, ad5unto a su animalidad, sino como definición esencial del acto de naturaleza que la persona asume y conduce. 1or tanto la racionalidad es una forma de inteligencia, no la m2s perfecta, gracias a la cual podemos establecer una relación intencional con el mundo 6...8 @a racionalidad ha demostrado ser un modo eficiente de conocimiento, tanto en el seno de los datos de la e:periencia sensible, como en los datos de la e:periencia metafísica que, como primera e:periencia, se ubica antes, durante y después de toda otra forma de e:periencia material o espiritual 6...8 la racionalidad dignifica al hombre y 5erarquiza su presencia ante el mundo natural, cuando logra superar el acontecer sensible que lo manifiesta y llega a lo inteligible que lo define, quebrando el oscuro materialismo que pretendía enclaustrarlo.099
Capacidades del esp%ritu huano& la li'ertad #tra de las evidentísimas manifestaciones del espíritu humano y de su e:traordinaria dignidad es la libertad, la cual permite al hombre ser el artífice de su propio perfeccionamiento. A diferencia de los animales, cuyo actuar se guía e:clusivamente por los instintos, el actuar del ser humano no es meramente instintivo sino *intencional-B l acto humano es primero una operación de la inteligencia 6que razona y 5uzga las opciones que 22 'iguel Dngel 'irabella! @p! &it, p! :2!
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se presentan8 y después una operación de la voluntad que mueve hacia el bien presentado por la razón. /l movimiento de la voluntad es imposible si el conocimiento intelectual no la precede 6...8 l 5uicio es, sin duda alguna, acto de la razón, no de la voluntad. i la libertad, por tanto, reside en la voluntad, que es por su misma naturaleza un apetito obediente a la razón, síguese que la libertad, lo mismo que la voluntad, tiene por ob5eto un bien conforme a la razón0. 9; sa relación intrínseca entre inteligencia y voluntad on 8ildebrand! %tica. $diciones $ncuentro, 1990,p!1 -las cursi
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s así obvio que la elección del mal no corresponde a la esencia de la libertad, sino a un mal uso de la facultad de elegirB y a eso se le llama libertina5e, el cual aniquila la libertad. /ay dos concepciones de la libertad humana3 libertad para elegir los medios conducentes a los fines establecidos por la propia naturaleza humanaB o libertad para determinar los fines del hombre, eliminando el fundamento de la naturaleza. @a libertad de los medios es el 2mbito adecuado para el desarrollo de la convivencia humana. @a libertad para determinar por sí los fines de la e:istencia es la anarquía universal, en que cada uno querr2 ser superior a sus seme5antes hasta culminar en la victoria del m2s fuerte, instaurando la tiranía, natural desembocadura de toda anarquía.09N $o debemos olvidar que la naturaleza humana no es obra del hombreB la naturaleza humana ha sido dada al hombre. 1or eso puede *elegir los medios-, pero no *determinar los fines- de su propia naturaleza. @a naturaleza que ha sido dada al hombre no es *perfectasino *perfectible-, y requiere que sea el mismo hombre quien la perfeccione y complemente. /sta unidad substancial de materia y espíritu, de cuerpo y alma, que es el hombre, no est2 acabada, perfeccionada, terminada 6...8 1orque hay naturalezas perfectas, como +ios y como la piedra, que han agotado en el acto que les es propio, su condición divina y de piedra. n cambio, hay naturalezas como la de la planta y la del hombre, que son perfectibles, pues su acto inicial no agota todas sus potencias 6...8 1ero cada esencia, cada 20 Pedro $nriGue EaGuero 5a6cano! La Globali&ación y el Derec$o 'atural de las 'aciones. $n La mundiali&ación en la realidad ar(entina. $diciones del &opista! &rdoba 21, p! 11! -las cursi
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naturaleza, actualiza sus potencias segn sea su modo de ser. l hombre es libreB su perfeccionamiento ser2, pues, libre.0 9) J esta es precisamente una de las mayores razones que podemos señalar para e:plicar la grandeza de la dignidad humana3 el que cada ser humano ha recibido =5unto con el ser= la formidable responsabilidad de tener en sus propias manos la tarea de su realización en plenitud. l ser humano se sabe libre y también se siente libre, pero solo ser2 verdaderamente libre cuando actúe ordenado a esa responsabilidad, y no cuando se comporte como animal. @a libertad es pues un *medioy no un *fin-. l hombre *no es- libertad, *tienelibertad, y la tiene para algo, para perfeccionarseB no para todo, porque entonces se autodestruye. 1ara comprender m2s plenamente la libertad humana, es sumamente importante recordar que el actuar del hombre se lleva a cabo en distintos niveles interrelacionados 6físico, psíquico, metafísico8, y que por tanto es v2lido distinguir la libertad segn sea el nivel donde se realiza la acción. +e éste modo podemos distinguir la libertad *física- de la *psíquica- y de la *metafísica-, sin olvidar la interrelación e:istente entre todas ellasB interrelación que nos permite hablar de la libertad humana como una sola. @a libertad *física- en el ser humano es ya algo totalmente distinto al mero movimiento de los animales. obre este ltimo, en el lengua5e comn hablamos 2 .b=dem, p! 12
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impropiamente de un animal /en libertad0 para referirnos a un animal en su estado natural y diferenciarlo de un animal que est2 /en cautiverio0. 1ero esa /libertad0 no es tal, puesto que el animal se encuentra siempre fatalmente sometido a las leyes del instinto y no tiene posibilidad de elegir. 1or e5emplo, los patos /en libertad0 no eligen emigrar en invierno un año al este, y otro al oeste. @levados e:clusivamente por su instinto, cada año vuelan nicamente al sur y siempre e:actamente a los mismos /santuarios naturales0 donde pueden sobrevivir. l hombre, en cambio, es el nico ser que teniendo en forma simult2nea sed y agua, puede elegir no beber. @a libertad física /es la primera y m2s elemental forma de libertad, la del poder hacer tal cosa, de estarme en un lugar, de andar de un lado a otro. 1uede ser que el hombre no tenga plena libertad física o la haya perdido por mltiples razones3 carencias específicas, limitaciones biogenéticas, accidentes físicos, enfermedades, encarcelamiento 6...8 la libertad física es limitada y limitable físicamente. @uego no es absoluta sino limitada, relativa y subordinada a muchos factores a5enos a la voluntad del su5eto. 4onocer nuestra situación de vivientes sensibles, aceptar el hecho de no tener alas para volar, sufrir la pérdida de una capacidad motriz, padecer una enfermedad neurológica o ser encarcelado por una falta 5urídica, representan distintos momentos en lo que nos consta lo limitada y limitable que es nuestra libertad física.09' 29 'iguel Dngel 'irabella! @p! &it, p 13!
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@uego y por encima de la esfera biológica, el ser humano tiene una dimensión psíquica que permite a la persona saberse distinta y ob5etivar lo e:terno a ella. Dambién es en ésta dimensión donde se realiza la vida afectiva de la persona. sa intimidad refle:iva conduce a la persona a una actividad intencional, por la cual se pregunta y conoce el bien moral. J la posibilidad de actuar o no en consecuencia 6intención que hace al acto humano moral o inmoral 8 hace evidente la libertad psíquica. /@lamamos libertad psíquica a la capacidad de querer o no querer algo, de adherir o no adherir, de querer esto o aquello. sta segunda forma de libertad también es limitada y limitable en su orden 6est2 limitada por el bien del mismo modo como la inteligencia lo est2 por la verdad8. n la vida afectiva, los sentimientos, emociones y pasiones pueden ser gobernados, ordenados, soportados, reprimidos pero no suprimidos. e hace evidente, entonces, que la libertad psíquica est2 preordenada y limitada psíquicamente. 1ero sucede también que es limitable por padecimientos psicop2ticos, por h2bitos viciosos adquiridos o por condicionamientos socio=culturales negativos 6...8 la persona humana se sabe libre por su capacidad de autodeterminarse, pero como se ve, dentro de ciertos límites0.;O 4omo la libertad no es un fin en sí misma 6si lo fuera sería solo una palabra vacía, demagógica, y carecería de sentido8, donde alcanza su razón de ser es precisamente 3 .b=dem!
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en la consecución de su finalidad, que no es otro sino la plena realización de la persona humana. J como el ser humano no se agota en su corporeidad, es en el nivel metafísico donde la libertad se manifiesta en toda su grandeza. /1odemos definir la libertad metafísica como *la posibilidad que tiene y postula para sí todo hombre, de poder hacer aquello que debe, segn su naturaleza, en vistas a un ideal trascendente y perfectivo-. Así entendida, la libertad metafísica pasa a ser un título de perfección ontológica, e:igencia de un su5eto inteligente que pretende alcanzar, en la 5usticia de sus actos, la mayor perfección operativa que le otorgue un estado de permanente felicidad.0;&
Capacidades del esp%ritu huano& el aor l espíritu no tiene *partes- sino *potencias- o *facultades-. /ntre las facultades hay una cohesión e interdependencia en virtud del alma de la cual emanan las potencias. Ante todo e inmediatamente, la inteligencia y la voluntad, luego la cogitativa, la memoria, la imaginación...0;9 +e las potencias del espíritu humano hemos visto ya =aunque sea someramente= la inteligencia y la libertad. in pretender restar un 2pice a la importancia que ellas tienen, debemos destacar que la potencia m2s e:celsa del espíritu, la potencia que m2s lo dignifica y califica, es la capacidad de amar. +e hecho, el sentido último de la inteligencia y de la libertad es hacer posible el !mor , ya que sólo se ama lo que se conoce y se valora, y sólo un ser libre puede dar y aceptar amor. 1ero ni la 31 .b=dem, p! 139! 32 #lberto &aturelli! @p! &it, Reflexiones para...p!190
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inteligencia ni la libertad solas llevan al ser humano a realización en plenitudB se puede tener muchos conocimientos y pocas limitaciones, pero sin amor son m2s fuente de degradación que de realización. @a plenitud humana sólo se alcanza en el Amor 6con mayscula8, es decir, en la fuerza del espíritu que lleva a la persona a salir de sí misma para buscar el bien de otra persona. @a persona es un ser en relación, y por esa razón la persona se despliega y se realiza en comunión 6comn= unión8 con otras. @os vínculos de una verdadera comunión no pueden reducirse a las meras relaciones e:ternas y funcionales, las cuales encontramos también en las abe5as, las hormigas y otros animales. @os vínculos auténticos de comunión son relaciones que surgen de un reconocimiento mutuo de la dignidad de cada quien, y que se construyen lo mismo en el plano afectivo, que en el intelectual y en el pr2ctico. l Amor no es pues sólo un concepto abstracto, sino la realidad m2s profundamente humanaB el Amor establece la relación m2s grande y noble de las personas entre sí. l ser humano es capaz de amar porque es persona, es decir, una substancia individual, singular, que tiene conciencia de que es ella misma y no otra, por lo cual puede percibir a otra semejante y relacionarse con ella. l Amor sólo es posible entre personas y no entre piedras, plantas o animales. s en el Amor donde el valor y dignidad de la persona humana aparece con m2s fuerza, por lo que también es aquí donde la misma palabra *persona- adquiere su mayor relevancia frente 2
a la palabra *individuo-. /l término *persona- se ha escogido para subrayar que el hombre no se de5a encerrar en la noción *individuo de la especie-, que hay en él algo m2s, una plenitud y una perfección de ser particulares, que no se pueden e:presar m2s que empleando la palabra *persona-.0;; uperando su etimología 6la m2scara que usaban los actores en el teatro griego y que amplificaba su voz8, la palabra /*persona- ha pasado a significar *dignidad- e incluye dos cosas3 autonomía en el ser, y espiritualidad. J ambas se realizan en un su5eto singular, nico, e:istente 6...8 @a persona significa el su5eto singular en su profunda y total realidad, la misma que designa el pronombre personal *yo-, *tu-.0;( i el *yo- surge de la conciencia de ser uno mismo, el *tu- surge del percibir a quien es *seme5ante- a mi, pero que no es *yo-, y cuyo bien debo procurar. l refr2n popular que dice /el amor es ciego0 no es correcto, pues por lo general obedece a una visión miope que reduce la relación entre un hombre y una mu5er solo a la dimensión de lo sensible 6romanticismo8. 1ero el Amor no es e:clusivo de la relación hombre= mu5er, pues es e:tensivo a cualquier relación interpersonal 6padres e hi5os, hermanos, amigos, etc.8 y superando el aspecto físico, permite descubrir lo que realmente hay de valioso en la persona amada. "2s all2 del aspecto físico y de los sentimientos que, siendo importantes, nunca de5ar2n de ser secundarios pues siempre ser2n como la c2scara de la cebolla, mirar al 33 /arol ?ojtyla! @p! &it, p!14 34 #belardo 5obato! !ersona "umana. #rt=culo publicado en la reertebracin! "B! 20, p! 2:C20
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pró5imo con amor es descubrir su verdadero valor y dignidad. 4on toda razón Eomano !uardini decía que s"lo el amor nos permite ver a otro tal como es. +esgraciadamente con demasiada frecuencia también reducimos el Amor 62gape8 a un mero *querer- 6eros8, y de esa reducción surgen las confusiones. l !mor 62gape8 busca el bien para otroB el querer 6eros8 busca el bien para uno mismo. 1or eso es legítimo querer las *cosas- que me pueden proporcionar algn bienB pero una persona no es una cosa, y por lo mismo nunca ser2 correcto tratar a una persona como cosa. 1or tanto, el *querer- a una persona sólo ser2 correcto si tal *querer- es previamente gobernado por el Amor, pues él evitar2 que se trate a la otra persona como ob5eto, como cosa. /"anuel Iant formuló este principio elemental del orden moral en el imperativo3 *#bra de tal suerte que t no trates nunca a la persona de otro simplemente como un medio, sino siempre, al mismo tiempo, como el fin de tu acción-. A la luz de estas consideraciones, el principio personalista ordena3 4ada vez que en tu conducta una persona es el ob5eto de tu acción, no olvides que no has de tratarla solamente como un medio, como un instrumento, sino ten en cuenta del hecho que ella misma tiene, o por lo menos debería tener, su propio fin. Así formulado, este principio se encuentra a la base de toda libertad bien entendida, y sobre todo de la libertad de conciencia.0;L 3 /arol ?ojtyla! @p!&it, p! 22
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(alor a'soluto de cada ser huano /Dienen razón los p25aros cuando atacan a picotazos, hasta la sangre, al p25aro que no es como los otros, porque aquí la especie es superior a los individuos singulares. @os p25aros son todos p25aros, ni m2s ni menos. n cambio, el destino de los hombres no es ser *como los otros-, sino tener cada uno su propia particularidad.0;M n efecto, $apoleón, Kivaldi y $eRton tuvieron en comn la naturaleza humana que los hizo ser hombresB pero lo que hizo que $apoleón fuera $apoleón, Kivaldi fuera Kivaldi, y $eRton fuera $eRton, sólo pudieron tenerlo cada uno de ellos. @o mismo ocurre con cada uno de nosotros3 mi *yo- no es intercambiable con nadie. /An cuando e:istan muchas personas, cada persona e:iste como si ella fuera la nica. Keamos esto con m2s cuidado3 cuando considero a un individuo
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en función de la persona como tal. @a persona es irreductible a su dimensión cuantificable. $ingn agregado de personas vale m2s, es m2s, *cuenta m2sque una sola.0;N n efectoB personas son los hombres reales que e:isten, uno por uno, y no el hombre tomado en abstractoB y cada persona, una por una, posee por el simple hecho de que ya *es-, una dignidad tan e:celsa que debe ser afirmada por sí misma y no por otra cosa. /Así es como a partir del descubrimiento de la dignidad como principio es posible formular una norma primaria para la acción, la norma personalista de la acción3 persona est aff affirma irmand nda a prop proper er se seiipsam psam$, $, %hay %hay que que afir afirma marr a la persona por sí misma%, misma%, nunca hay que usarla como medio.0;) @o que que co cons nsti titu tuye ye la si sing ngul ular ariidad dad abso absolu luta ta de cada ada persona no es nicamente la individualidad que hace que nadie pueda vivir por otro, ni alimentarse o dormir por por otr otro 6lo 6lo que que tamb tambié ién n oc ocur urrre en la indi indivi vidu dual alid idad ad animal8, sino el hecho de que el alma espiritual de cada persona persona subsiste en sí misma y por sí misma. misma . /@a persona incluye una totalidad en el ser, una realidad completa, a la que nada le falta, y por ello queda ter terminada en sí misma y constituye un individuo, distinto de los dem2s y clausurado en sí mismo 6...8 1or ello la persona resulta un ser singular, bien distinto de los dem2s, incomunicable en el ser real que le pertenece.0;' 30 odrigo uerra, @p! &it, p! 91C93 3 .b=dem, p! 14! 39 #belardo 5obato, @p! &it, p! 34!
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n este sentido es muy importante hacer notar que, por paradó5ico que parezca, el punto de partida de toda comu co muni nica caci ción ón es prec precis isam amen ente te la inco incomu muni nica cabi bili lida dad d onto ontoló lógi gica ca de la pers person ona, a, pues pues,, co como mo e:pli :plica ca el +r. +r. 4aturelli, /reconocemos que el problema de la comunicación supone, por un lado, alguien que es capaz de comuni comunicar car=se =se y, por otro, otro, alguien a quien comunico 6...8 6...8 e dice dice incomu incomunic nicabi abilid lidad ad ontoló ontológic gica a porque porque,, en ese plano, la persona no es la otra ni lo otro, tiene sus prop propio ioss lími límite tess me meta tafí físi sico cosB sB co como mo si di5 di5ér éram amos os que que 1edro, como tal, no es 1ablo 6...8 1edro y 1ablo son inco incomu muni nica cabl bles es.. +e ahí ahí que que haya haya adel adelan anta tado do que, que, si e:ist :iste e al algu guna na co comu muni nica caci ción ón,, se ser2 r2 a part partir ir de aque aquell lla a incomunicación ontológica que es su fundamento. n efecto, la persona, en cuanto individualidad intr intran ansf sfer erib ible le,, e:pr :pres esa a su prop propia ia unidad inte interrna que que evidencia evidencia su distinci"n de distinci"n de los dem2s. "2s an3 mientras la persona sea m2s una, una, ser2 m2s distinta, distinta, m2s sí misma y no=otra.0(O Dal realidad nos hace ver porqué en algunas Dal circunstancias, como en la realización de un traba5o, de una función, se puede sustituir a a una persona por otra, pero no es posible reemplazarlaB reemplazables son las cosas, no las personas. personas. /4ualquiera sea la disposición natural que posea, la persona no es un haber psico= físico, ni tampoco sus facultades superiores en funciones inte intenc ncio iona nale les, s, si sino no una una e:ist :isten enci cia a nove novedo dosa sa,, nic nica a e irrepetible, asomada desde su propia conciencia de ser, al mundo acontecido. s precisamente en ese estarse 4 #lberto &aturelli! @p! &it! Reflexiones para.... p! :0C:!
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inte intenc ncio iona nall ante ante el mund mundo, o, que la perso persona na human humana a rec ecup upe era la co cons nsta tanc ncia ia de su prop propiia dign dignid idad ad co como mo su5eto subsistente ante, con y sobre toda otra e:istencia temporal.0(& @a singularidad absoluta de cada persona, su car2cter irrepetible, incomunicable y subsistente del ser personal, confiere una mayor dimensión a la dignidad personal.
Dignidad ontol)gica * Dignidad oral 1odemos ahora responder a los interrogantes que nos plan plante team amos os inic inicia ialm lmen ente te.. >Die >Diene ne el se serr huma humano no una una calidad que lo haga superior? @a respuesta es contundenteB si, realmente el ser humano tiene intr intrín ínse seca came ment nte e una una ca cali lida dad d supe superi rior or.. J, >sup >super erio iorr a qué? A los dem2s seres de los reinos mineral, vegetal y animal animal.. >n qué qué consis consiste te esa esa superio superiorid ridad? ad? n que que la persona humana, adem2s de e:istir y vivir, sabe que e:iste y busca saber para qué viveB en que es libre para auto=realizarse y auto=determinarseB en que cada uno es nico e irrepetibleB y sobre todo, en que es capaz de amar. @a dignidad humana es realmente sostén de lo humano, y por ello debe ser respetada a toda costa, so pena de deshumanizar al mundo. 1or tanto podemos afirmar con absoluta certeza que la dignidad humana es inconmensurableB que el ser humano es invaluable y no tiene precio. sta dignidad es *ontológica-, lo cual quiere decir que la posee cada ser humano por el simple hecho de serlo, inde indepe pend ndie ient ntem eme ente nte de cual cualqu quie ierra de sus sus prop propia iass características siempre accidentales, como pueden ser 41 'iguel Dngel 'irabella! @p! &it, p! 4
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la raza, la estatura, el color de piel, las habilidades y capacidades físicas o mentales, o el uso que haga de ellas. +onde hay un ser humano hay dignidad *ontológica- e:celsa, la cual tiene las siguientes características3 s gratuita, pues nadie hizo nada para merecerlaB nos fue dada con el ser. s inmutable, no cambiaB no la podemos acrecentar ni disminuir, siempre ser2 la misma. s igual en cada personaB la dignidad ontológica la posee en el mismo grado lo mismo el ser humano recién concebido que el 5oven o el anciano, el hombre m2s virtuoso que el criminal m2s despiadado. in embargo, como ya lo hemos visto, por naturaleza la persona humana es *perfectible- y est2 ordenada a desarrollarse y perfeccionarse a sí misma por medio de su inteligencia y libertad. acíamos notar que esta responsabilidad constituye una de las grandes notas de la dignidad *ontológica-. 1recisamente porque el ser humano es libre, necesariamente cada persona cumplir2 en distinto grado con su responsabilidad de auto= perfección, por lo que a su dignidad *ontológica6gratuita, igual e inmutable8 podr2 agregar una dignidad de otras características3 una *dignidad moral-. A diferencia de la ontológica, la *dignidad moral- no es gratuita, no est2 dada, inicia /de cero0 en cada uno y deber2 ser conquistada poco a poco y no sin esfuerzoB cambia, pues lo mismo puede crecer que disminuir e incluso desaparecerB es diferente en cada persona, pues depende del uso que cada quien haga de su libertad. s en el orden moral donde podemos hablar de diferencias en la dignidad de la persona, porque sólo moralmente es 32
diferente el valor que e:iste entre un hombre de bien y un criminal, entre una persona traba5adora y un vago consuetudinario, entre un ser auténticamente libre y un esclavo de sí mismo. /l hombre est2 llamado al desarrollo de su ser mediante el uso de la libertad. J para ello se le ha dotado de una estructura congruente a su destino, es un ser racional, inteligente y volente, capaz del bien y del mal. %na de las dimensiones constitutivas del ser humano es la dimensión moral, la condición ética. +ebido a ello se habla en el hombre de un *sentido moral- 6...8 l hombre es un ser moral por su condición de ser libre, porque es capaz de dirigirse por si solo al fin.0(9 J es precisamente por su condición de ser libre, que que el homb hombrre es ca capa pazz de prom promov over er y res espe peta tarr la dignidad de *los otros- y la suya propia, o bien es capaz de aten atenta tarr co cont ntra ra el ella la,, si sin n ol olvi vida darr que que nadi nadie e pued puede e atropellar la dignidad de otro sin lastimar a su vez su propia dignidad. 1odemos concluir el presente capítulo afirmando ndo categóricamente que el ser humano no es un ob5eto, una cosa igual a otras cosasB que cada persona, en cualquier tiempo, lugar y circunstancia, tiene un valor intrínseco, digno por el simple hecho de ser, y que esa dignidad 6ontológica8 debe ser reconocida y respetada por todos desde el inicio de la vida de la persona en el seno materno hasta su natural e:tinción. ste respeto al esta es tatu tuto to onto ontoló lógi gico co de la pers person ona a human umana a obli obliga ga a todos, independientemente de las convicciones 42 #belardo 5obato! #l *sentido moral+ en situación de peli(ro en la cultura contempor,nea. eertebracin! >ertebracin! "B! 3, p!4
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políticas, ideológicas o religiosas que se profesen. Dal es el mínimo que debe respetarse y respetarse y exigirse, exigirse, si queremos que la convivencia entre los hombres y los pueblos sea realmente %"A$A.
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C+P,TU-O #EUNDO FUNDAMENTO DE LOS DERECHOS HUMANOS Y FUNDAMENTO DE LA DIGNIDAD
Antes de abordar este tema es imprescindible esta es tabl ble ece cerr la dis isti tinc nció ión n entr entre e dign dignid idad ad y der derec echo hoss humanos, porque si bien son dos realidades íntimamente ligadas, no son lo mismo. @a dignidad es una realidad anterior a a los derechos. Aunque en forma muy deficiente, la +eclaración %niversal de los +erechos umanos proclamada por la #$% en &'() hace esta distinción en su /pre2mbulo0 al decir3 /4onsiderando que la libertad, la 5usticia y la paz en el mundo tienen por base el reconocimiento de la dignidad intrínseca *y- de los derechos iguales e inalienables de la familia humana,0. n base a esta distinción abordaremos primero el tema del fundamento de los derechos humanos, y posteriormente el del fundamento de la dignidad. @a terrible e:periencia del pasado reciente hace del todo evid eviden ente te la enor enorme me impo import rtan anci cia a y tras trasce cend nden enci cia a que que tiene el tema del fundamento y respeto de los derechos huma humano nos. s. in in em emba barrgo, co con n dema demasi siad ada a frec frecue uenc ncia ia el tema es abordado con una gran superficialidad, y lo que 3
es an peor, entre quienes han buscado fundamentar los derechos humanos nos encontramos con pensadores /como $orberto Gobbio 6quien8 afirmar2 en &'M( de manera particularmente contundente que es una *ilusión- indagar el fundamento de los derechos humanos 6...8 para Gobbio toda bsqueda de fundamento es infundada.0(; l drama que producen posiciones como ésta es que negando los fundamentos, se termina 5ugando con el ser humano. Fgualmente es necesario mencionar que algunas corrientes de pensamiento sí ofrecen respuestas, pero estas son inconsistentes o cuando menos insuficientes. J el m2s elemental sentido comn nos lleva a afirmar que algo de tanta importancia no puede fundamentarse en algo vago e impreciso.
/undaentos que no lo son @a corriente de pensamiento m2s difundida en el mundo occidental sobre el fundamento de los derechos humanos sostiene que éstos tienen su origen en *el consenso universal-, es decir, /en la opinión de todos0, lo cual quiere decir que los derechos del ser humano provienen de la opinión de otros hombres. sa concepción, propia del positivismo 5urídico, se difundió ampliamente tras la +eclaración de los +erechos del ombre y del 4iudadano, durante la Eevolución Srancesa de &N)', que en su artículo se:to señalaba3 /@a @ey es la e:presión de la voluntad general0. n la 43 odrigo uerra! @p! &it, p!10
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actualidad esta versión es sostenida por algunos pensadores *postmodernos- como PTrgen abermas. 1ero de ser cierta esta versión no tendría sentido preguntarse si determinado derecho corresponde a la dignidad del ser humano, pues desde tal /fundamento0 no sería posible hablar estrictamente de derechos *humanos-, sino solo de derechos *opinables- y por tanto relativos y sobre todo, *revocables-. +e hecho, aceptar que el fundamento de los derechos humanos es el consenso o la voluntad general
El 0undaento en el 1Derecho natural2 44 Auan >allet de oitysolo! #sbo&o de una metodolo(ía de los derec$os $umanos. >erbo "B! 31 1, p.19
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n el lengua5e comn la palabra *derecho- es equívoca, pues tiene diferentes significadosB por e5emplo, se toma como sinónimo de *directo- 6ir derecho a un lugar8, o bien como lo contrario a *torcido- 6un 2rbol que creció derecho8. 1ero el sentido que nos interesa es el referido al 2mbito 5urídico, es decir, el 2mbito de las relaciones entre los seres humanos. n éste sentido la palabra *derecho- designa al orden social justo& por lo mismo, el derecho ser2 un fenómeno estrictamente humano. /4uando hablamos de derecho hacemos referencia a un orden, esto es, a una disposición determinada de las personas en sociedad 6situaciones y relaciones 5urídicas8 y a la conducta social. 4omo todo orden, el derecho e:ige la regla o medida de ese orden, es decir, la ley. l derecho, sin embargo, no se confunde con la ley, que es sólo su norma o regla ordenadora.0(L Aunque sólo es posible hablar de *derecho- cuando hay relaciones entre personas, no todas las relaciones humanas son ob5eto del derecho, sino nicamente aquellas que tienen car2cter de obligatoriedad. /l derecho se refiere a relaciones sociales de 5usticia, esto es, que abarca y se circunscribe a aquellas leyes y a aquellas relaciones sociales que tienen por ob5eto lo mío, lo tuyo, lo suyo, aquello le es debido obligatoriamente al hombre porque de un modo u otro es suyo. @a idea de 5usticia es inseparable de la idea de debitum 6lo debido a otro8B el derecho ser2, pues, aquel orden social que tenga por ob5eto lo debido a otro.0(M 4 'iguel *ancho .6Guierdo y Aaol! ., p!33! 4: .b=dem, p!3:C30
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4onforme a lo anterior, y siendo *la ley- /la regla o medida0 del orden social, y en cuanto e:isten leyes *puestas- por el hombre y leyes *dadas- al hombre, en el derecho nos encontramos con dos vertientes3 el *positivo- y el *natural-. /Al con5unto de los componentes del derecho puestos por el hombre lo llamamos derecho positivoB y al con5unto de los componentes del derecho que tienen su origen en la naturaleza, ha recibido comnmente el nombre de derecho natural.0(N 1or tanto resulta claro que3 /derecho natural ser2 aquella parte del orden 5urídico que proviene de la naturaleza del hombre.0() l derecho natural se revela así como verdadero fundamento de los *derechos humanos-. 4iertamente ello no elimina la necesidad de una legislación positiva *5usta- que defienda y promueva los derechos vitales de la persona, lo cual obliga a la autoridad política correspondiente a legislar conforme a sus propias normas y procedimientos. 1ero /es importante no confundir el fundamento político de un procedimiento orientado a la actividad legislativa con el fundamento real de los derechos de la persona como tal.0(' /@os derechos humanos, como algo que *concierne- al hombre, sólo pueden formularse sobre la base de lo que el hombre *es-. ólo el previo conocimiento acerca del ser y la esencia del hombre abre la posibilidad de definir sus derechos vitales.0LO J como el hombre *es- una unidad de cuerpo y espíritu y no un mero 40 .b=dem, p! 42 4 .b=dem, p!3 49 odrigo uerra! @p! &it, p! 190 8elmut IhielicHe! #sencia del "ombre. $d! Eiblioteca 8erder! Earcelona, 19, p! 42
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amontonamiento de partes, una concepción integral de la persona humana es indispensable para una correcta formulación de los derechos humanos. n ésta perspectiva integral nos encontramos con la corriente de pensamiento que accede y aglutina los primeros principios de la ley natural, proyect2ndolos a la realidad de la naturaleza humana y sus relaciones. /l paradigma de ésta concepción se halla en anto Dom2s de Aquino, aunque no empleara la e:presión *derecho- para designar su contenido en sentido sub5etivo. 1artiendo de los primeros principios de la ley natural, correspondientes a nuestras primeras inclinaciones naturales y racionales, se proyectan sus conclusiones, pró:imas y remotas, con5ug2ndolas, en recíproca interacción, con la consideración de lo 5usto, en cada caso, ex ipsa natura rei y secundum aliquid quod ex ipsa conseguitur 6de la naturaleza misma de las cosas y lo que de ellas se sigue8.0L& /anto Dom2s señala tres grandes principios sintetizadores de los derechos naturales, segn se refieran dichos principios a todos los seresB o solamente a los seres con vidaB o sola y e:clusivamente al hombre 6...8 ay un principio comn a todo ente y es el de auto= conservación. Dodo ser resiste a su destrucción, desde la piedra al vegetalB desde el animal al hombre. +e allí surge un primer derecho natural, que corresponde a la realidad misma del ser humano, y es el derecho a la vida. +e este derecho derivan numerosos derechos, 1 .b=dem!
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tales como a la integridad física, a la salud, al traba5o, a la propiedad, etc. ay un segundo principio comn tan sólo a los vivientes y es el de perpetuación de la especie. +e allí surge un segundo derecho natural, y es el derecho a la familia, del cual derivan numerosos derechos, tales como el de contraer matrimonio, tener hi5os, educarlos, etc. ay un tercer principio e:clusivo del ser humano, en el universo sensible en que vivimos. J es el principio de la libertad. +e él deriva el tercer derecho natural y es el derecho a la libertad, del cual derivan numerosos derechos, tales como el de la libertad de conciencia, de e:presión, de culto, de prensa, de asociación, de reunión, de participación política, etc.0L9 stos *primeros principios- de la ley natural que se manifiestan en las inclinaciones del ser humano 6a la conservación, a la procreación y a la libertad8 son pues un fundamento sólido e inamovible de los derechos humanos. s por medio de 5uicios comparativos como la razón efecta el paso de esos principios a los denominados derechos humanos, independientemente del lengua5e que se use para e:presarlos. 1ero así como los primeros principios dan su fundamento a tales derechos, también les ponen límites, los cuales, le5os de debilitarlos, los fortalecen al hacerlos reales y operativos. / s necesario concebir estos derechos en su 5usto significado. l derecho a la libertad, por e5emplo, no 2 Pedro $nriGue EaGuero 5a6cano! La Globali&ación y el Derec$o natural de las 'aciones! p! 13C14!
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incluye evidentemente el derecho al mal moral, como si se pudiese reclamar, entre otros, el derecho a suprimir la vida humana, como en el caso del aborto, o el derecho para usar substancias nocivas para sí o para los dem2s. +el mismo modo, no se debería tratar de los derechos del hombre sin tener en cuenta también sus deberes correlativos, que traducen con precisión su propia responsabilidad y su respeto de los derechos de los dem2s y de la comunidad. l con5unto de los derechos del hombre corresponde efectivamente a la sustancia de la dignidad del ser humano, comprendido en su integridad y no reducido a una sola dimensión.0L;
O'3eciones al Derecho natural @as principales ob5eciones que se hacen al +erecho natural provienen de aquellos que dan un significado parcial e insuficiente del concepto de *naturaleza-. Dambién provienen de considerar que la aceptación de los postulados del derecho natural, conduce a una paralización al progreso y desarrollo que el hombre puede alcanzar por medio de sus realizacionesB así se toma lo *natural- y *artificial- como mutuamente e:cluyentes. /oy est2 de moda rebelarse contra el derecho natural, despreciarlo. ay que darse cuenta de por qué sucede esto. 1ienso que el hombre que espont2neamente rechaza el derecho natural pretende defender la especificidad de la actividad humana, la realidad presentada por los actos de la persona.0L( Analicemos estas dos ob5eciones. 3 Auan Pablo ..! Alocución al uerpo Diplom,tico. 14 de enero de 19! 4 /arol ?ojtyla! -i isión del $ombre. $d! Palabra! 'adrid, 1990, p! 33!
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1or lo que se refiere a la concepción parcial del concepto de *naturaleza-, /sin duda ser2 el significado que atribuyen a esta noción los fenomenalistas, pero quiz2 también los fenomenólogos. e puede decir que, desde su punto de vista, la naturaleza es como el su5eto de una actualización instintiva. Diene, por tanto, un significado m2s estricto y limitado.0LL %n e5emplo de lo anterior sería el del crecimiento del cuerpo de la persona segn las leyes biológicas, pues dicho crecimiento 6actualización8 ocurre *en- la persona, pero no es obra *de- la persona. /n cambio, la naturaleza, en sentido por así decir tradicional, en el sentido metafísico, es la esencia de una determinada cosa, tomada como origen de toda actualización 6...8 n este sentido, la naturaleza est2 integrada en la persona. Goecio, y con él toda la escuela tomista, da esta definición de la persona3 persona est rationalis naturae individua substantia 6persona es la substancia individual de naturaleza racional8 @a definición del derecho natural es3 est participatio legis aeternae in rationali creatura 6la participación de la ley eterna en la criatura racional8 6...8 $o hay duda de que al ser racional le corresponde un ordenamiento racional. A partir de estas afirmaciones elementales se ve que el derecho contiene no tanto una arbitraria in5erencia de la razón sub5etiva en el mundo ob5etivo, sino m2s bien una orientación fundamental hacia un ordenamiento ob5etivo. e trata, por tanto, de un orden de valores.0LM
.b=dem, p! 34 : .b=dem! p! 30
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@o anterior significa que, siendo el hombre /de naturaleza racional0, en lo que al hombre respecta, lo natural en él es actuar conforme a la razón. /Ahora bien, el hombre acta en virtud de la razón, y la razón est2 abierta *a muchas cosas-, puede *tener diferentes concepciones sobre el bien-. 1recisamente por eso, el *caso normal- o lo que se da regularmente 6por e5emplo, el alto índice de abortos o de asaltos8 no es un criterio decisivo para determinar lo bueno y natural. ino al revés3 sólo el conocimiento del bien mismo nos puede revelar qué es lo peculiar del hombre, lo normal y por tanto también natural para él, y en qué consiste, por tanto, la perfección correspondiente a la naturaleza humana 6...8 l concepto *naturaleza humana- no es..el concepto de un mero fenómeno natural 6como el ciclo de las estaciones8 o de una mera teleología 6intención final8 de la naturaleza, sino que incluye en sí mismo la función ordenadora y normativa de la razón. @a *naturaleza humana- sólo es allí donde la razón perteneciente a esa naturaleza ha ordenado lo meramente natural de conformidad con la razón 6...8 1or paradó5ico que parezca3 para saber qué es la *naturaleza humana-, o para interpretarla adecuadamente, tenemos que conocer antes lo *bueno para el hombre-0LN 1or lo que se refiere al aparente conflicto entre lo *natural- y lo *artificial- éste tiene su origen en la defensa de una libertad mal entendidaB en una libertad ideologizada y por tanto, concebida como ilimitada, por lo cual se percibe a lo natural como una /amenaza0 a la 0 'artin honheimer! La perspectia de la moral. $d! ialp! 'adrid, 2, p!193C194
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libertad. /i la consideramos 6a la libertad8 como no determinada en absoluto, como una independencia total, como ausencia de cualquier limitación, entonces, en esa definición, est2 contenida, obviamente, la e:clusión de cualquier derecho natural.0L) 4iertamente, como ya señalamos en el primer capítulo al tocar el tema de las capacidades del espíritu humano, la libertad es una de los mayores dones que tiene la persona humana. 1ero cuando algo se absolutiza, se desfonda y se pervierteB y cuanto mayor valor tiene aquello que se absolutiza y se pervierte, mayor ser2 el daño que provoca. 1or ello absolutizar la libertad no sólo destruye la libertad real, sino que abre la puerta de par en par a todo tipo de violaciones contra el orden natural y contra la dignidad del ser humano, como lo ha demostrado hasta la saciedad la historia reciente. Vnicamente los hombres, en cuanto dotados de inteligencia y de libertad tienen la capacidad de tales violaciones. @os animales 5am2s han atentado ni podr2n atentar contra la naturaleza, como tampoco 5am2s podr2n defenderla y cultivarla. /1ero volvamos a la diferencia entre lo artificial y lo natural 6...8 Siguras geométricas de dos dimensiones y los motores de combustión interna son artificios...Artificial es aquello cuyo origen est2 en la inteligencia 6humana8 por contraposición a lo puramente natural, que es lo dado por el nacimiento 6...8 l microscopio y el altavoz son instrumentos que potencian las capacidades de los sentidos 6...8 @levemos el caso al /arol ?ojtyla! @p! &it, p! 39
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e:tremo3 volar en una c2psula espacial. l metabolismo humano se trastorna gravemente cuando vive fuera de la atmósfera. $uestro organismo requiere de la gravedad terrestre. Kia5ar al espacio implica llevar a nuestro cuerpo m2s all2 de su naturaleza física. n aras de la ciencia, la $AA coloca todo tipo de *muletas- y *prótesis- a los astronautas. 1oco les importa si el planeta tierra es el h2bitat natural del ser humano 6...8 "e llama la atención que esto no sea considerado contra naturam, sino solo *artificial-. i entendemos *natural- como lo *dado-, todo ob5eto artificial es no= natural. @a neoescol2stica apunta, sin embargo, que lo natural es la teleología 6propósito o intenciónB final de un trayecto8 y no el puro factum 6hecho8. @os aparatos de la c2psula espacial no atentan contra la naturaleza, pues se adecuan a unas tendencias igualmente naturales.0L' l aparente conflicto entre libertad y +erecho natural desaparecer2 en el momento en que la libertad y la razón humanas sean apreciadas en todo su valor, pero subordinadas racional y libremente a la ley naturalB ley que el hombre no legisló, pero que de su acatamiento o no, depende el respeto a los derechos de las personas. 4omo acertadamente señalaba Puan 1ablo FF, el rechazo a la ley natural produce dos serios problemas3 por una parte /la difusión entre los creyentes de una moral fideísta0, y por otra, /falta una referencia ob5etiva para las legislaciones, que a menudo se basan solamente en el consenso social, haciendo cada vez m2s difícil el que 9 8(ctor Jagal! 'aturale&a y creación/ la falacia naturalista y la 0tica aristot0lica. 5ibro #nual del .*$$! '()ico! 23! >ol! 2 "B , p! 3C4!
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se pueda llegar a un fundamento ético comn a toda la humanidad.0MO
El Derecho natural& 0undaento suficiente para los derechos huanos4 pero insuficiente para la dignidad huana +ebemos distinguir < y distinguir no es separar= entre la dignidad que surge de lo que el hombre *es-, de los derechos inherentes a esa misma dignidad. +e esta distinción 6de la cual ya hablamos en el inicio del presente capítulo8 surge una pregunta3 >los derechos humanos y la dignidad tienen el mismo fundamento o se fundamentan en algo diferente? 4omo ya hemos visto, el derecho natural proporciona el fundamento suficiente a los derechos humanos, y su acatamiento garantiza el respeto de los mismos. 1ero >también el derecho natural es suficiente fundamento para la dignidad de la persona humana? Aunque el derecho natural en cuanto *derecho- tiene por ob5eto /lo debido a otro0, y por tanto obliga al cumplimiento de las *leyes- inscritas en la naturaleza del hombre 6y por eso es suficiente para fundamentar los derechos humanos8, la dignidad trasciende a las mismas leyes naturales y por ello es que el derecho natural
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humana no es nicamente una superioridad dentro de un mismo orden, sino que es una superioridad basada en un orden distinto. /@a realidad es que la persona es esencialmente distinta de los animales y de las cosas y que, incluso en aquellas dimensiones en las que pueden parecer m2s similares, como las físicas o sensibles, difieren profundamente. @a sensibilidad humana, por e5emplo, no es una sensibilidad animal que, en un cierto instante, cuando llega al nivel de lo espiritual, se hace humanaB es humana desde el origen, por su misma constitución. J lo mismo ocurre con la tendencialidad y los deseos. on cualidades distintas de las de los animales desde el principio, puesto que éstos se rigen por el instinto mientras que el hombre se rige en un marco de inteligencia y libertad que opera ya desde la infancia.0 M& "ientras que un cachorro de león solo podr2 llegar a ser un león, un niño podr2 llegar a ser un científico o un poeta, un militar o un médico, un artista o un técnico, un santo o un criminal. sa capacidad que tiene el ser humano de, en cierto modo hacerse a sí mismo a partir de lo que se le ha dado, revela sin lugar a dudas que efectivamente /la persona es esencialmente distinta de los animales y de las cosas0. Así pues, es evidente la distinción entre *dignidad- y los *derechos- inherentes a ella. Dal distinción hace igualmente evidente que es la dignidad humana el fundamento, ya no meramente suficiente sino pleno de :1 Auan 'anuel Eurgos! #l !ersonalismo. $d! Palabra! 'adrid 2, p!11
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los derechos humanos. 1ero esto significa que el fundamento de la dignidad de la persona humana tampoco lo encontramos en el derecho naturalB luego hay que buscarlo en otro lado. +ebemos insistir en la importancia de fundamentar la dignidad del hombre, pues de lo contrario tarde o temprano se terminar2 5ugando con el ser humano. J si para fundamentar los derechos humanos eliminamos los supuestos fundamentos del consenso, del positivismo 5urídico etc, con mayor razón debemos desecharlos como fundamentos de la dignidad.
Otros hori5ontes de '6squeda n un horizonte encerrado en el 2mbito de lo físico, la mirada clavada al suelo no nos permitir2 encontrar el fundamento de la dignidad humana, por la sencilla razón de que ésta no es físicaB no de=pende de la naturaleza física de la persona. @a dignidad humana no depende de la salud, fuerza, raza, cultura etc, de la personaB la tienen lo mismo personas débiles o fuertes, sanas o enfermas, niños o ancianos, instruidos o analfabetas. s necesario pues levantar la mirada a un horizonte que está más allá de lo físicoB es decir, al horizonte metafísico. 1ara ello es necesario eliminar primero los pre5uicios que, a lo largo de los dos ltimos siglos, impuso la mentalidad positivista y cientificistaB mentalidad que ha llevado a un verdadero /eclipse de lo humano0. /@a causa pró:ima de esta mentalidad la podemos encontrar en el tremendo é:ito alcanzado por la ciencia e:perimental. n efecto, los numerosos logros de la 49
ciencia en campos como la física, la medicina, la biología, etc., llevaron a una enorme valoración del método e:perimental, del conocimiento científico y de las realidades físicas. Srente a las oscuridades que presentaban las ciencias humanas, las 5ergas ininteligibles de los filósofos idealistas y la continua discusión de lo que parecía ya sólidamente establecido, la ciencia e:perimental aparecía como un saber seguro, preciso, acumulativo y con unas repercusiones pr2cticas increíbles e inesperadas 6teléfono, luz eléctrica, automóvil, aviación, etc.8 Dodo esto llevó a muchos a pensar que el método científico era el único método de conocimiento v2lido y, yendo m2s all2, que las únicas dimensiones que realmente existían eran las físicas y materiales 6...8 e empezó a considerar que los aspectos de la realidad que quedaban fuera del alcance de este método eran entidades ficticias, inventadas por la inteligencia del hombre, y que no tenían una e:istencia auténtica. @a teoría de la evolución supuso un apoyo importante para esta visión puesto que < en su versión radical= afirmaba que el hombre no era m2s que un producto de la evolución a partir de elementos materiales simples de car2cter físico 6...8 $o había en el hombre, por tanto, una dimensión espiritual ni capacidades espirituales, sino habilidades con origen en una realidad material m2s evolucionada que en las plantas y los animales. sta versión radical de la teoría de la evolución condu5o, por otro lado, a un descrédito de la religión, puesto que *e:plicaba- de modo científico realidades que para la
religión tenían origen sagrado. @a religión aparecía así como un intento por parte del hombre de 5ustificar su propia ignorancia.0M9 l resultado de esa mentalidad cientificista y positivista fue que
:2 .b=dem, p!13C14! :3 &itado por "ancy Pearcey en ?orld 'aga6ine! 13 de 'ar6o 2! :4 AacGues 'aritain! Los derec$os del $ombre. $d! Palabra! 'adrid, 21, p!14
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C+P,TU-O TERCERO EL HORIZONTE METAFÍSICO DE LA DIGNIDAD HUMANA
Iportancia de la realidad eta0%sica 2
in duda la 4apilla i:tina, esa e:traordinaria obra de arte que es visitada cada día por cientos de personas, est2 hecha de piedra, yeso y pinturaB pero si los guías de turistas quisieran e:plicarla exclusivamente en base a los datos físico=químicos de sus componentes serían tachados, cuando menos, de idiotas. 1orque la 4apilla es mucho m2s que piedra, yeso y pinturaB y la misma técnica que se usó para pintarla, siendo algo importante, tampoco permitiría e:plicarla. 1ara comprender y e:plicar plenamente la 4apilla i:tina es totalmente necesario ir más allá de lo físico y adentrarnos en el espíritu que impulsó a su creador 6en éste caso "iguel Wngel8 a pintar lo que pintó. +icho de otro modo, para e:plicar cabalmente la 4apilla i:tina es necesario ir al horizonte metafísico. !uardando la distancia que e:iste entre una obra de arte =por genial que sea= y el ser humano, an2logamente podemos afirmar que es absurdo pretender comprender y e:plicar al hombre mediante el an2lisis de sus componentes físicos. J en el caso de la dignidad de la persona humana, ni siquiera el an2lisis de sus cualidades espirituales es suficiente, pues la dignidad no de=pende de ellas. @a inteligencia y la voluntad son cualidades espirituales que posee cada ser humano, aunque sea en potencia 6como en el caso de los recién nacidos8, pero estas cualidades sufren modificaciones, se desarrollan m2s en unos que en otros, y si de ellas dependiera la dignidad *ontológicatendríamos que afirmar que ésta es igual a la dignidad *moral-'( y que también se desarrolla o se pierde, lo : &fr! &ap=tulo primero!
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cual abriría las puertas para /5ustificar0 la eliminación de niños, enfermos, ancianos, analfabetas, flo5os, etc. @a dignidad humana es *ontológica- precisamente en el ser de la persona en cuanto tal, por lo que la ontología de sus facultades, tanto físicas como espirituales, es secundaria. 1or ello, del mismo modo que podemos afirmar que una persona es m2s 5oven que otra, m2s alta que otra, m2s sana que otra, podemos también decir que una persona es m2s inteligente que otra, que una tiene m2s voluntad que otra, que ha aprovechado me5or sus dones que otraB pero lo que no podemos afirmar es que alguna tenga m2s dignidad que otra sin atentar contra la misma dignidad. +icho de otra forma, la dignidad no es *posterior- al ser, sino *dada- a la persona desde el momento en que ésta *es- y, por tanto, no es *producto- de alguna *evolución-. @o anterior nos lleva necesariamente a una alternativa que no es posible evitar3 o el hombre es un ser *creado-, o efectivamente la dignidad humana es solo una ilusión carente de cualquier fundamento. sta ltima alternativa, por m2s que se le disfrace como /racional0, es despiadadamente inhumana, y la e:periencia del siglo XX ha demostrado las terribles consecuencias a las que conduce. 1or otra parte es del todo evidente que /nadie puede e:istir antes de haber e:istidoB de donde se sigue que la contingencia de todo ente e:ige la e:istencia de la 4ausa que le confiere el ser como tal 6...8 4ausa incausada del acto de ser en el ente. J tal es +ios. 6...8 +ecir que +ios no e:iste, solamente puede *decirse-, ya que el solo hecho de 4
poderlo *decir- es consecuencia del originario descubrimiento del ser en el ente...@uego, solamente se puede ser ateo porque e:iste +ios.0'' l gran pensador y humanista francés !abriel "arcel advierte3 /a partir del momento en que el propio hombre niega que él sea un ser creado, le asecha un doble peligro3 por un lado, se ver2 arrastrado < y esto es e:actamente lo que constatamos en el e:istencialismo de artre= a otorgarse a sí mismo una especie de aseidad caricaturesca, es decir, a considerarse como un ser que se hace a sí mismo y que no es sino lo que se haceB puesto que no e:iste nadie que pueda colmarlo, no e:iste siquiera un don que pueda serle hechoB un ser tal se presenta como profundamente incapaz de recibir. 1ero, desde otro punto de vista, y ligado a ello, el hombre se ver2 igualmente arrastrado a considerarse como una especie de deshecho de un cosmos por añadidura impensable como tal < de suerte que le veremos, a la vez y por las mismas razones, e:altarse y despreciarse desmesuradamente=.0') ueda pues por analizar la alternativa de la creación, la cual nos conduce a un escenario muy diferente. /i introducimos la variable creación en la antropología, el panorama cambia 6...8 sta antropología *creaturalno pone el acento en la racionalidad ni en la capacidad de dominar los instintos. @a raíz de la dignidad del ser humano radica en su capacidad de dirigirse a +ios, esto es, de su libertad. l ser humano es digno porque es amado por +ios y porque él es capaz de amar a +ios. *a :: #lberto &aturelli! @p! &it! Reflexiones para... p! 23! :0 abriel 'arcel! Los $ombres contra lo $umano. $d! &aparrs $ditores, 'adrid, 21, p! :
iniciativa es divina+ creando al ser humano a su imagen y semejanza lo ha hecho capax ei 6capaz de +ios8. @a estructura ontológica, la naturaleza, es secundaria. l nervio de nuestra dignidad es que +ios nos ama. 1or eso, porque +ios nos ama, es irrelevante si somos geniales o torpes, carpinteros o políticos, comerciantes o filósofos 6...8 sta condición creatural y no la ontología de las facultades racionales es el fundamento de la dignidad.0'- n este escenario *creatural-, el hombre es digno porque es amado por Aquel espíritu infinitamente perfecto que e:iste por sí mismo, y de quien todos recibimos la e:istenciaB y la grandeza de las acciones humanas radica en que el hombre puede corresponder al amor de +ios y a la ley que Yl nos ha dado. obre esto mismo el cardenal Poseph Eatzinger escribe3 /@a vida humana est2 ba5o una protección especial de +ios, porque cada hombre, por pobre o rico que sea, ya esté sano, ya enfermo, sea intil o provechoso, nacido o nonato, enfermo incurable o rebosante de vida...,porque cada hombre lleva el aliento de +ios, cada uno es imagen de +ios. Ysta es la razón m2s profunda de la inviolabilidad de la dignidad humana, y en ella se funda, en fin de cuentas, toda la civilización. Allí donde el hombre no es considerado como estando ba5o la protección de +ios, y llevando en si mismo su aliento, se empieza a considerarlo segn su valor utilitario. s el comienzo de la barbarie, que pisotea la dignidad del hombre.0'
: 8(ctor Jagal! @p! &it, p! 9C9 -5as cursialencia, 21, p! :3! &itado por 8! Jagal! @p! &it, p!9
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@a condición creatural del mundo 6y del ser humano8 es accesible desde la lógica de un razonamiento riguroso sobre realidades tales como3 el orden inscrito en la naturaleza 6porque no hay orden sin una inteligencia ordenadora8B o las condiciones de contingencia que tienen todos los seres del universo 6todos tienen un inicio, duran un tiempo y desaparecen8, desde los hombres hasta los planetas y las gala:ias.)/ l +r. Qilliam 1hillips al recibir el premio $obel de física en &''N /no tuvo reparo en agradecer a +ios el habernos dado un universo tan hermoso e interesante, digno de ser e:plorado.0)0 in embargo éste método 6camino8 se recorre con mucha dificultad, y con frecuencia deriva en errores como el *panteísmo- 6todo es dios8 que confunde la creación con el 4reador, o el *deísmo- que concibe a un creador impersonal, frío y despreocupado de su obra a la que simplemente dio /la patada inicial0. #tro camino =m2s f2cil y seguro= es el de la Eevelación, la cual no es sino la manifestación que +ios ha hecho a los hombres en forma e:traordinaria de algunas verdades necesarias y convenientes para el bien del género humano, mismas que se encuentran recopiladas en la agrada scritura. s en éste camino donde la Deología nos descubre dimensiones insospechadas a la mera razón sobre la grandeza de la dignidad humana. +esde la perspectiva teológica podremos hablar de una dignidad *natural- y de una dignidad an mucho mayor3 la dignidad *sobrenatural-. 0 ;na de las formas en Gue la #stronom=a moderna clasifica a las estrellas es por el color Gue “delata” su duracinK blancas las mLs recientesM amarillas las intermediasM roji6as las Gue estLn cerca de su e)tincin! 5a teor=a del “Eig Eang” Gue busca e)plicar el origen el ;ni
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-a dignidad 1natural2 de la persona en la perspecti7a teol)gica @o mismo la religión Pudía que las Fglesias 1rotestantes y la Fglesia 4atólica, coinciden en señalar que el primer y más importante aporte de la Eevelación sobre la dignidad del ser humano, es el hecho de haber sido creado /a imagen y seme5anza0 del mismo 4reador. s en el primer libro del Antiguo Destamento, el @ibro del !énesis, donde se afirma3 /1re" ios al hombre a imagen suya& a imagen de ios le cre", los cre" var"n y hembra0 6!n. &, 9N8 >ué significa y qué importancia tiene esta afirmación? @a Deología atribuye a +ios todas las perfecciones en toda su plenitud, y por ello afirma que es *infinitamente sabio-, *infinitamente poderoso-, *infinitamente bueno- etc. Adem2s e:plica que en cuanto 4reador, no ha recibido el ser de nadie sino que Yl *es- por sí mismo, y que los atributos de bondad, sabiduría, omnipotencia los posee en forma *absoluta- y no *participada-. 1ues bien, en la perspectiva de la Eevelación, cada ser humano, uno por uno, ha sido creado /a imagen y seme5anza0 de ese er que es poder, sabiduría y bondad infinitos, lo cual le confiere una dignidad e:traordinariamente mayor a la que podemos deducir de la mera ontología de sus facultades. Aunque generalmente las palabras /Fmagen y seme5anza0 se toman como sinónimos 6por lo que pareciera que hubiesen sido empleados para ratificar el
hecho8, en el conte:to del relato bíblico una y otra tienen un sentido de complemento y no de sinónimo3 imagen es regalo& semejanza es tarea. *Fmagen- se entiende en el sentido de que la naturaleza espiritual del hombre tiene también los atributos de inteligencia y libre voluntad que +ios tiene, aunque en el hombre no *por sí mismo- sino por regalo, por *participación- del er de +ios. n cambio la *seme5anza- se refiere a un proceso en el cual el hombre, ser perfectible, tiene la tarea de irse *aseme52ndose- cada vez m2s a +ios, quien es la 1erfección misma. /l hombre, criatura intermedia entre los seres que son sólo espirituales y los que son sólo materiales, ocupa el primer puesto en la realidad sensible. n sentido propio sólo él es seme5anza e imagen de +ios, aunque no perfecta sino imperfecta. @a seme5anza es gradual y est2 en relación con el grado de participación y, por tanto, de perfección. 1rimeramente todas las cosas se aseme5an a +ios de un modo generalísimo, en cuanto sencillamente *son-B en segundo lugar, en cuanto *viven-B y en tercero, en cuanto *entienden-. ntre las criaturas mundanas, sólo en el hombre, dotado de inteligencia, acta el supremo grado de participación, y goza de una verdadera seme5anza específica. ólo el hombre, por tanto, puede decirse verdaderamente imagen de +ios y no sólo vestigio, como lo son los dem2s seres. 1uede decirse que en esta antropología teológica el hombre es el centro y vértice del mundo natural 6...8 el hombre, la criatura privilegiada de +ios y verdadera imagen suya, no puede ser entendida en su 9
estructura ontológica a no ser en relaci"n a +ios mismo.0 N9 1or tanto la dignidad del hombre proviene de la relaci"n 4reador=creatura y no de las facultades con las que el hombre ha sido dotado. +icho de otro modo, el hombre es un ser racional y libre porque así lo ha querido el Amor de +ios que lo creó, y no amado porque es racional y libre. /l hombre es imagen de +ios también por la voluntad, esto es, en cuanto que, dotado de libre albedrío y con potestad sobre sus actos, es principio de sus operaciones 6...8 1ero su inmensa obra cognoscitiva y operativa no tiene como fin aseme5arse a sus seme5antes o al mundo, sino el aseme5arse progresivamente, y siempre imperfectamente, a +ios a través del e5ercicio del entendimiento, cuyo ob5eto es la verdadB y del e5ercicio de la libertad, cuyo ob5eto es el bien.0N; @a segunda aportación de la Deología 5udeo=cristiana sobre la dignidad *natural- de la persona humana, también est2 tomada del @ibro del !énesis3 el hombre es /señor de todo el mundo0. l relato de la creación del hombre dice que, una vez creado el hombre, +ios le dio una tarea3 /1reced y multiplicaos, y henchid la tierra y ense#oreaos de ella, y dominad a los peces del mar, y a las aves del cielo, y a todos los animales que se mueven sobre la tierra0 6!n.&,9)8.
02 'ichele %ederico *ciacca! #l !rincipio de reación) !articipación y Analo(ía. $n la re
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stas palabras no sólo indican que el hombre es *señor de todo el mundo- 6enseñoreaos, dominad8, sino que toda la creación fue hecha *para- el hombre, y por tanto, es ante el hombre donde todo lo creado toma sentido. l %niverso entero sin el hombre, sería una realidad vacía, absurda, sin razón de ser. specialmente en estos tiempos de e:altación de la técnica y la economía, la implicación de esta nota de la dignidad humana e:traída de la agrada scritura adquiere gran relevancia3 las cosas son para el hombre, y nunca el hombre para las cosas. @a tercera aportación se desprende de las dos primeras3 el hombre es digno porque est2 *llamado- a participar eternamente de la misma vida de +ios. Dodo el %niverso ha sido creado para que el hombre, *imagen- de +ios, se sirva de las cosas y pueda alcanzar la plenitud de la *seme5anza- con el 4reador, lo cual sólo es posible en +ios mismo. @uego, el destino del hombre, de todos los hombres es
de modo misterioso, por la fuerza del fin que arrastra como el amor, sino porque él, su5eto libre, necesita cooperar con quien le ha dado la libertad para decidir por donde volver.0 N( stas aportaciones teológicas no son una especie de /agregados0 circunstanciales al ser humano que dependan de convicciones religiosas, sino fundamentos esenciales de la persona, de todas las personas, las cuales =independientemente de que sean o no aceptadas= son las bases m2s sólidas e inamovibles de la dignidad *natural- que tiene cada hombre, sea éste creyente o no. 1or tanto estos fundamentos se circunscriben en la dignidad *ontológica- y tienen sus mismas características3 son gratuitos, inmutables e iguales en todo ser nacido de mu5er.
-a dignidad 1so'renatural2 & de 1iagen2 a 1hi3o2 ablar de dignidad *sobrenatural- es hablar de un orden que est2 por encima, es decir, *sobre- lo meramente natural. s hablar de un orden que presupone lo natural, no para negarlo o destruirlo, sino para trascenderlo y elevarlo. ste orden no es posible deducirlo por medios científicos, pues como e:plica el +r. 4aturelli, /$o hay en la naturaleza del hombre ningn elemento que e:i5a o postule, pró:ima o remotamente, el orden sobrenatural. @a elevación a este orden 6a esta dignidad8 es un favor de +ios totalmente gratuito, que rebasa y trasciende infinitamente las e:igencias de la naturaleza.0NL 04 #belardo 5obato! #l ristianismo y la !romoción de la Di(nidad "umana. $n 1ertebración "B 4, p! 4: -las cursi
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n efecto, es exclusivamente en la 1alabra de Pesucristo recogida en los evangelios, donde podemos conocer la e:istencia de una dignidad infinitamente superior a la ya en sí e:celsa dignidad *natural- del ser humano3 la dignidad de ser *hi5os de +ios-. Dal dignidad es un regalo que Pesucristo da al hombre con su ncarnación, "uerte y Eesurrección. /n el misterio de 4risto, +ios ba5a hasta el abismo del ser humano para restaurar desde dentro su dignidad0.NM @a dignidad *sobrenaturales pues también gratuita, pero a diferencia de la natural, aunque es para todos no es comn a todos, ya que requiere ser libremente aceptada y muchos la rechazan, tal como dice en sus primeros p2rrafos el vangelio segn an Puan3 / 3ino a su propia casa, y los suyos no lo recibieron. 4ero a todos los que le recibieron, que son los que creen en su nombre, les dio poder llegar a ser hijos de ios.0 6Pn.&,&&=&98 /Dodo hombre est2 predestinado a conformarse con el i5o, con Pesucristo, y, por esa vía, deificarse, dar la m2:ima medida de lo humano. @os 1adres griegos y la teología oriental han desarrollado ese proceso ascendente del hombre por la gracia como una cierta *deificatio- del hombre. ólo +ios puede deificar. Al hombre se le pide que colabore con la acción de +ios hasta lograr conformarse con la imagen de Pesucristo. Ysta es la tarea del hombre, lograr la conformación con Pesucristo, con su misterio, con su vida, su muerte, su resurrección.0 NN J la primera e imprescindible acción que el hombre debe hacer para colaborar con la acción de 0: &$5#'! Documento de !uebla. "B! 3 00 #belardo 5obato! @p! &it! #l ristianismo....p! !
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+ios es aceptar ser bautizado, pues la vida sobrenatural se otorga con el acramento del bautismo, el cual hace nacer al hombre a la vida de la gracia3 /5l que crea y sea bautizado se salvará& el que no crea se condenará0 6"c.&M,&M8 l nuevo *nacimiento- que proporciona el bautismo también requiere *crecimiento-B por eso, adem2s del bautismo, Pesucristo instituyó otros seis sacramentos. Al requerir del concurso de la libertad humana, la dignidad *sobrenatural- tiene también la característica de ser cambianteB es decir, en cada persona puede acrecentarse o disminuir. Aunque el bautismo /imprime car2cter0 6otorga para siempre a quien lo recibe la condición de hijo de +ios8 y otorga virtudes para crecer y perseverar, no elimina la libertad. er fiel o no a la gracia =con sus correspondientes consecuencias en cada caso= es decisión de cada persona. l hi5o puede renegar de su padre e incluso cometer /parricidio0, pero no de5a de ser hi5o. /l hombre se ha entendido a sí mismo como *homo viator-. 1orque si por un lado es un ser que viene a la e:istencia, bien constituido en sus líneas esenciales, bien ensamblado en sus componentes de espíritu y materia, con su altísima dignidad de ser imagen de +ios, ser personal desde el primer instante, por otro se advierte como ser en camino, con un potencial escondido en su interior, que debe desplegarse en el tiempo y en el espacio, como semilla que germina y crece, como caminante que sigue paso a paso la senda de la vida a través de sus actos en constante relación :4
consigo mismo y con el mundo 6...8 l hombre, en la medida en que crece, se dirige hacia la plenitud de sí mismo 6...8 desde su ser personal prorrumpe en actos libres, y a través de ellos consigue nutrirse en cuerpo y alma. Así crece, da su medida, se realiza o se pierde.0N) n aparente contradicción con la idea que señal2bamos en el primer capítulo y que dice3 /por dignidad debemos entender un valor superior que no tiene precio0, en la dignidad *sobrenatural- nos encontramos que si hay un *precio-. 1ero es un /precio0 de valor infinito que ningn ser humano puede pagarB sin embargo nos encontramos con el hecho de que Alguien ya lo pagó por nosotros3 /fuisteis rescatados, no con oro o plata, cosas corruptibles. 6ino con la sangre preciosa de 1risto0 6&1.&,&)=&'8. 1or tanto, cada bautizado vale la sangre de 4risto. Dal es la dignidad *sobrenatural- del cristiano.
-a dignidad huana en el 8agisterio de la Iglesia Cat)lica. specialmente en los ltimos tiempos, el "agisterio de la Fglesia ha reiterado continuamente el deber de respetar la dignidad de la persona humana. Dal insistencia se ha debido m2s que por un interés teórico para profundizar en un concepto de tanta importancia, en la necesidad de mover a la defensa de la dignidad humana ante la creciente mentalidad de desprecio a las personasB mentalidad que desgraciadamente se ha traducido en un sin nmero de hechos cada vez m2s abominables y generalizados como 5am2s se había tenido noticia3 privación de la libertad a pueblos enteros, 0 #belardo 5obato! @p! &it! #l Sentido -oral...p!!
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campos de e:terminio, legalización del homicidio de bebés, secuestros, terrorismo, etc. %n apretado resumen de las proclamas del "agisterio de la Fglesia sobre este tema es el siguiente3
De #.#. -e)n 9III3 = /A $adie le est2 permitido violar impunemente la dignidad humana, de la que el mismo +ios dispone con gran reverencia, ni ponerle trabas en la marcha hacia su perfeccionamiento.0N' = /@a libertad, don e:celente de la $aturaleza, propio y e:clusivo de los seres racionales, confiere al hombre la dignidad de estar en manos de su propio albedrío y de ser dueño de sus acciones. 1ero lo m2s importante en esta dignidad es el modo de su e5ercicio, porque del uso de la libertad nacen los mayores bienes y los mayores males.0)O
De #.#. P%o 9II& = /uien desea que la estrella de la paz aparezca y se detenga sobre la sociedad, contribuya por su parte a devolver a la persona humana la dignidad que +ios le concedió desde el principio.0)& = n cuanto a la dignidad humana /el varón y la mu5er son absolutamente iguales0.)9 09 5en F...! $nc! Rerum 'oarum. 3! -191 5en F...! $nc! Libertas. 1! -1 1 P=o F..! adiomensaje de "a
::
= n un mundo sin +ios /la sociedad no es m2s que una enorme m2quina, cuyo orden es meramente aparente, porque ya no es el orden de la vida, del espíritu, de la libertad, de la paz. 4omo en una m2quina, su actividad se e5ercita materialmente, destruyendo así la dignidad y la libertad humana.0); = /@a dignidad de la persona humana e:ige, pues, normalmente, como fundamento natural para vivir, el derecho al uso de los bienes de la tierra, al cual corresponde la obligación fundamental de otorgar a todos, en cuanto sea posible, un propiedad privada.0)( = /@as normas debidas de la libertad y de la dignidad humana...constituyen el fundamento y la firmeza de la convivencia civil.0)L
De #.#. :uan 99III& = /1or grande que llegue a ser el progreso técnico y económico, ni la 5usticia ni la paz podr2n e:istir en la tierra, mientras los hombres no tengan conciencia de la dignidad que poseen como seres creados por +ios y elevados a la filiación divina.0)M = /Eesulta e:traña la negación que algunos hacen del car2cter natural del derecho de propiedad 6...8 6ya que8 constituye, adem2s, un medio eficiente para garantizar la dignidad de la persona humana.0)N 3 P=o F..! adiomensaje La Decimater&a. 4! -192 4 P=o F.., adiomensaje on Sempre. 2:! -1942 P=o F..! $nc! 1ixdum 1obis. 1! -194 : Auan FF...! $nc! -ater et -a(istra. 21! -19:1 0 .b=dem, 3!
:0
Del Concilio (aticano II & = /4uanto atenta contra la vida
&onstitucin Gaudium et Spes. 20! -19: 9 .b=dem! 21! 9 .b=dem! 2!
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= /@a razón m2s alta de la dignidad humana consiste en la vocación del hombre a la unión con +ios.0'& = /$o hay ley humana que pueda garantizar la dignidad personal y la libertad del hombre con la seguridad que comunica el vangelio de 4risto, confiado a la Fglesia. l vangelio enuncia y proclama la libertad de los hi5os de +ios, rechaza todas las esclavitudes, que derivan, en ltima instancia, del pecado 6cf. Eom.),&(=&N8B respeta santamente la dignidad de la conciencia y su libre decisiónB advierte sin cesar que todo talento humano debe redundar en servicio de +ios y de la humanidadB encomienda, finalmente, a todos a la caridad de todos.0'9
De #.#. :uan Pa'lo II & = /@o que constituye la trama 6...8 de toda la doctrina social de la Fglesia, es la correcta concepción de la persona humana y de su valor nico, porque *el hombre...en la tierra es la sola criatura que +ios ha querido por sí misma-. n él ha impreso su imagen y seme5anza, confiriéndole una dignidad incomparable 6...8 n efecto, aparte de los derechos que el hombre adquiere por su propio traba5o, hay otros derechos que no proceden de ninguna obra realizada por él, sino de su dignidad esencial de persona.0'; = /n ambientes intensamente ideologizados, donde posturas partidistas ofuscaban la conciencia de la 91 .b=dem! 19 92 .b=dem! 41! 93 Auan Pablo ..! $nc! entesimus Annus. 11! -1991
:9
comn dignidad humana, la Fglesia ha afirmado con sencillez y energía que todo hombre
94 .b=dem, 22! 9 .b=dem, 30! 9: .b=dem, 44! 90 Auan Pablo ..! -ensa2e de la 4ornada -undial de la !a&. 1999!"B! 2 9 Auan Pablo ..! $nc! 1eritatis Splendor ! 1! -1993
0
= @os mandamientos /prohíben siempre y en todo caso el comportamiento y los actos incompatibles con la dignidad personal de cada hombre.0'' = /Doda la sociedad debe respetar, defender y promover la dignidad de cada persona humana, en todo momento y condición de su vida.0&OO = /Eespeto a la dignidad humana, a la dignidad de cada hombre, mu5er y niño, a la dignidad que posee todo ser humano no porque le haya sido ad5udicada por los otros hombres, sino porque la ha recibido de +ios.0&O&
C+P,TU-O CU+RTO DESVALORIZACIÓN DE LA PERSONA HUMANA
99 .b=dem, 99! 1 Auan Pablo ..! $nc! #an(elium 1itae. 1! -199 11 Auan Pablo ..! Alocución al !residente de 5enya! 0 de mayo de 19!
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in la menor duda, una de las causas que m2s han influido en el fomento de la espiral de violaciones a los derechos humanos, es la relativización de la persona, la cual se traduce obviamente en una desvalorización de la mismaB de ahí al desprecio de la dignidad humana no hay sino un pequeño paso, el cual es muy f2cil de dar. i el hombre es solo una cosa, un mero /recurso0 que adem2s es abundante y f2cilmente sustituible, >porqué respetar a las personas concretas con las que nos cruzamos en la vida, sobre todo aquellas que por alguna razón nos desagradan o que, de alguna manera, pueden significarnos una molestia? i a ello le agregamos la propensión al mal con el que nacemos todos los seres humanos =propensión que el mundo moderno ha acentuado significativamente= tenemos elementos suficientes para e:plicarnos el porqué del incremento de las violaciones a los derechos humanos. n este sentido es muy importante comprender cómo ha sido el proceso que ha conducido a esa relativizaci"n del valor trascendente de la persona humana. on los nombres de tres científicos los que indican las etapas de ese proceso3 $icol2s 4opérnico, 4harles +arRin y igmud Sreud. 1ero, salvo el caso de Sreud 6quien se vanagloriaba de haber infringido al hombre su /tercera humillación08, no han sido ellos los responsables de la degradación del valor de la personaB los responsables han sido algunos de sus seguidores y divulgadores quienes, movidos por intereses ideológicos, forzaron la interpretación de las legítimas teorías científicas para apurar conclusiones e:tra=científicas. sas conclusiones 02
e:tra=científicas son las que han propiciado desvalorización gradual del ser humano.
la
@a primera /humillación0 fue la que desplazó el *lugarde habitación del hombre como *centro- del %niverso, para hacer de la Dierra sólo un planeta m2s 64opérnico8. @a segunda /humillación0 fue el evolucionismo 6+arRin8, que privó al hombre de su particular privilegio de haber sido especialmente creado, releg2ndole a descendiente de los simios, lo que le llevó a contemplarse sólo como un animal m2s en la larga lista de la evoluciónB de la amiba al hombre no habría sino una diferencia de grado. J la tercera /humillación0 segn Sreud, se debía a que él había demostrado al hombre /que no son ni él mismo ni su libre albedrío los que gobiernan la casa de su persona, sino que ese dominio corresponde a un comple5o de impulsos inconscientes.0&O9
-a priera huillaci)n& el heliocentriso $icol2s 4opérnico nació en la 1rusia 1olaca en &(N;, estudió matem2ticas y medicina en la %niversidad de 4racovia y +erecho 4anónico en la %niversidad de Golonia. Sue 4anónigo de la 4atedral de Srauenberg, ciudad donde murió en &L(;. u interés en la astronomía le llevó a realizar estudios que publicó en &L;OB en ellos rescató la teoría heliocéntrica 6es la tierra la que gira alrededor del sol8 propuesta en la antigTedad por los pitagóricos, pero ahora sustentada sobre bases m2s científicas. @a teoría heliocéntrica contradecía el sistema geocéntrico 6es el ol el que gira alrededor de la 12 8elmut IhielicHe! @p! &it, p!43
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Dierra8 que era la teoría comnmente aceptada, porque conforme a lo que ordinariamente e:perimentamos por nuestros sentidos, *parece- que la Dierra est2 quieta y es el ol y los planetas quienes se mueven. 1osteriormente amplió los estudios sobre su teoría, y los dio a conocer en su obra e revolutionibus or bium coelestium, dedicada al 1apa 1aulo FFF y publicada pocos meses antes de su muerte ocurrida en &L(;. 4abe destacar que 1opérnico nunca pretendi" 7humillar8 al hombre, y que él en lo personal nunca tuvo problema alguno por e:poner la entonces controvertida teoría heliocéntrica. @os problemas aparecieron setenta años después, con el célebre caso de 9alileo, y el libro de 4opérnico fue entonces incluido por la Fglesia en el /índice0 de libros prohibidos 6decreto del L de marzo de &M&M8, porque el heliocentrismo *parecía- que ponía en entredicho algunos te:tos bíblicos, como el curso del sol descrito en la oración de Posué. 1ero !alileo tampoco pretendió /humillar0 al hombre, ni contradecir los te:tos bíblicosB por el contrario, buscó m2s bien conciliar sus teorías científicas con la agrada scritura, y eso fue lo que le causó problemas con las autoridades eclesi2sticas. n el primer proceso que le siguió el Dribunal del anto #ficio 6Fnquisición8 en &M&M /!alileo argumentó bastante bien como teólogo, subrayando que la Giblia no pretende enseñarnos ciencia, y se acomoda a los conocimientos 6científicos8 de cada momento, e incluso mostró que en la Dradición
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de la Fglesia se encontraban precedentes que permitían utilizar argumentos como los que él proponía.0&O; n esos tiempos la ciencia e:perimental se encontraba en estado embrionario y no disponía de los medios adecuados para comprobar la teoría heliocéntrica, la cual era vista casi por todos como un absurdo, pues contradecía la e:periencia sensible que nos hace ver al sol moviéndose. l cardenal Eoberto Gelarmino le había escrito a !alileo que utilizara el heliocentrismo sólo como una hipótesis científica sin meterse con argumentos teológicos, pero !alileo no hizo caso de éste conse5o y queriendo conciliar la hipótesis de 4opérnico con la Giblia, abordó cuestiones teológicas. se actuar de !alileo fue contraproducente3 /en una época de fuertes polémicas teológicas entre católicos y protestantes, estaba muy mal visto que un profano pretendiera dar lecciones a los teólogos, proponiendo adem2s novedades un tanto e:trañas.0&O( l resultado fue que @a Fnquisición incluyó en /el Cndice0 el libro de 4opérnicoB señaló que el heliocentrismo era una teoría *falsa- 6pero nunca la calificó como *herética-, pues el geocentrismo nunca fue dogma de fe8 y le prohibió a !alileo seguirla defendiendo. !alileo obedeció, pero estaba convencido que el decreto de &M&M se basaba en un equívoco y que cuando se pudiera demostrar la teoría heliocéntrica se podría hacer un esc2ndalo aprovechable por los adversarios de la Fglesia 6y se puede decir que tuvo /boca de profeta08, por lo que trató de solucionar ese equívoco. 13 NNN!aciprensa!comOcontro
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"ientras tanto !alileo perfeccionó el telescopio inventado por el holandés @ippershey que ampliaba solo tres veces los ob5etos observados, logrando ampliarlos treinta y dos veces. 4on su telescopio 6instalado en la residencia del cardenal Gandim8 !alileo descubrió los satélites de Ppiter y las manchas solares. Gasado en estos descubrimientos y en el hecho de que el cardenal Garberini =su amigo y admirador= fue elegido umo 1ontífice 6tomó el nombre de %rbano KFFF8, !alileo decidió retomar la difusión del heliocentrismo. @o hizo escribiendo una obra escrita como un *di2logo- 6y así lo tituló8 entre tres persona5es, uno de los cuales llamado implicio sostenía el geocentrismo, mientras que otro, alviati, defendía el heliocentrismoB obviamente implicio perdía todas las discusiones. 4on el permiso eclesi2stico del "aestro del agrado 1alacio Sray $iccolo Eiccardi, el iálogo fue impreso en Slorencia en &M;9. n ese tiempo uropa estaba convulsionada por la /!uerra de los Dreinta Años0 que enfrentó a las naciones católicas con las protestantes, y el 1apa %rbano KFFF /se veía especialmente obligado a evitar cualquier cosa que pudiera interpretarse como no defender la fe católica de modo suficientemente claro.0&OL sta situación fue aprovechada por varios adversarios personales a quienes !alileo, con su pluma mordaz, había ridiculizado en varias ocasionesB ellos denunciaron que el iálogo contenía afirmaciones heréticas. %rbano KFFF nombró una *comisión- que 1 .b=dem!
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e:aminara el te:to, la cual dictaminó que el asunto fuera enviado al Dribunal del anto #ficio. @a Fnquisición citó a !alileo para que se presentara en Eoma ante ese tribunal durante el mes de octubre de &M;9, pero debido a su precaria salud, !alileo se presentó hasta febrero de &M;;. +urante todo el proceso, !alileo vivió en la casa del emba5ador de Slorencia, e:cepto &N días en que estuvo alo5ado en las habitaciones del fiscal de la Fnquisición. n su defensa, !alileo argumentó recta intención y e:hibió la carta del cardenal GelarminoB sin embargo, el 99 de 5unio el Dribunal dio su sentencia3 lo conminó a ab5urar de su posición sobre el movimiento de la Dierra, lo condenó a prisión y prohibió su iálogo. se mismo día !alileo ab5uró delante de la 4ongregación, pero el 1apa conmutó la pena de c2rcel por la de arresto en la confortable Killa "edici, en la que estuvo confinado nicamente doce días, pues el M de 5ulio se le permitió regresar a su casa en la ciudad de iena. n diciembre se trasladó de su casa en iena a otra también de su propiedad situada en las afueras de Slorencia, donde vivió hasta su muerte ocurrida en &M(9B sus restos fueron depositados en la iglesia de anta 4roce en Slorencia. n ningn documento de la época aparece la famosa frase / y sin embargo se mueve0 que supuestamente !alileo pronunció tras su ab5uraciónB / y sin embargo0 alguien la puso en sus labios cien años después. $o hay duda de que en el caso de !alileo las autoridades de la Fglesia se e:tralimitaron en sus atribuciones, pero de ningn modo 00
esto significa que la pretensión de la Fglesia fuera /mantener a la gente en la ignorancia0, ni que ésta sea /enemiga de la ciencia0, como algunos dolosamente afirman. @a teoría heliocéntrica no tuvo evidencia plena sino varias décadas después cuando, en &MN', Fsaac $eRton pudo comprobar la /ley de la gravitación universal0. Dal comprobación dio la razón a !alileo y también permitió el surgimiento de la física modernaB pero el problema no se encuentra en el progreso de la ciencia sino en el hecho de que, con la comprobación del heliocentrismo, muchos hayan pretendido /humillar0 al hombre haciéndolo ver sólo como /una mota de polvo en medio de una polvareda0. in embargo no debemos perder de vista que la dignidad del ser humano no radica en la posici"n que guarden los planetas. $o de5a de ser significativo que en el final del siglo XX la ciencia física halla elaborado el /principio antrópico0 &OM el cual dice3 /Aunque nuestra situación en el %niverso no es necesariamente central, es necesariamente privilegiada en algn grado0. l físico Pohn A. Qheeler e:plica3 /$o es nicamente que el hombre esté adaptado al universo. l universo est2 adaptado al hombre. >Fmagina un universo en el cual una u otra de las constantes físicas fundamentales sin dimensiones se alterase en un pequeño porcenta5e en uno u otro sentido? n tal universo el hombre nunca hubiera e:istido. ste es el punto central del principio 1: Propuesto por el f=sico Erandon &arter durante los trabajos de la ;nin #stronmica .nternacional en 1904, y retomado por *tephen 8aNHing en su li bro "istoria del 6iempo7 Del bi( ban( a l os a(u2eros ne(ros. $d! &r=tica, Earcelona 19!
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antrópico.0 1or su parte, tephen aRUing lo formula así3 /Kemos el universo de la forma que es, porque si fuera diferente no estaríamos aquí para observarlo0. l hecho de que el planeta Dierra no sea el centro *físico- del %niverso, pero sí el punto en el cual que han dado cita tantas variables fundamentales que ha hecho posible la vida= y especialmente la vida humana= >no es un privilegio que rebasa en mucho la centralidad física? ntonces >dónde queda la supuesta /humillación0 copernicana que 4opérnico 5am2s pretendió inflingir al hombre?
-a segunda huillaci)n& el e7olucioniso 4harles +arRin 6&)O'=&))9 8 es el persona5e m2s conocido en torno a la teoría del evolucionismo, al grado que muchos toman como sinónimos las palabras *darRinismo- y *evolucionismo-. in embargo +arRin no fue el autor de la hipótesis evolucionista, pues varios hombres de ciencia como Qilliam Qells, Eobert 4hambers y !eoffrey aint ilarie, le precedieron en ella. 1ero la e:plicación sistematizada que +arRin hizo en sus obras 5l :rigen de las 5species 6&)L'8 y 5l :rigen del ;ombre 6&)N&8 fue la m2s acabada y sugerente, por lo que se le situó como el me5or e:ponente de la teoría evolucionista. 1osteriormente !eorges @ouis Guffon y Dhomas enry u:ley la difundieron con é:ito por todo el mundo. 1ero a diferencia de la teoría heliocéntrica que en relativamente poco tiempo fue plenamente comprobada, la hipótesis del evolucionismo ha 09
encontrado en el desarrollo científico m2s ob5eciones que elementos de comprobación, lo cual no ha sido obst2culo para que se difunda como si la evolución fuera un hecho plenamente comprobado. l +r. Pordi 4ervós, +irector del Fnstituto de $europatología de la %niversidad de Gerlín afirmaba en &')93 /@a teoría evolucionista ha quedado sin demostrar y casi ningn hombre de ciencia la sostiene ya.0&ON l +r. 4olm 1atterson, investigador del "useo Grit2nico de istoria $atural, señaló en una conferencia dictada el L de noviembre de &')& en el "useo Americano de istoria $atural de la ciudad de $ueva JorU&O), que la hipótesis evolucionista es m2s una cuestión de fe que de conocimiento científico, pues /parte de intuiciones no verificables ni directa ni indirectamente0. /.@. Qashburn, profesor de Antropología física en la %niversidad de 4alifornia 6GerUeley8, hace notar que *la mayoría de los problemas referentes a la evolución humana siguen sin resolverse- y que *nuestras ideas sobre la evolución humana se basan en datos a veces muy poco fidedignos-.0&O' Al margen de su inconsistencia científica, el evolucionismo ha sido usado como /arma0 ideológica para descalificar y ridiculizar el relato bíblico sobre la creación y así /humillar0 al hombre3 éste no procede de +ios sino de los primates. J fueron especialmente las iglesias protestantes de los stados %nidos quienes /recogieron el guante0 aceptando la incompatibilidad entre *evolucionismo- y *creacionismo-. in embargo el 10 $ntre
"agisterio de la Fglesia 4atólica sí considera compatible el evolucionismo con la fe. l 1apa 1ío XFF escribió3 /l "agisterio de la Fglesia no prohíbe 6...8 la doctrina del evolucionismo, en cuanto busca el origen del cuerpo humano en una materia viva y pree:istente
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responden a cuestiones totalmente distintas y pertenecen a niveles totalmente diferentes de la realidad y del conocimiento 6...8 la evolución presupone algo que cambia y se desarrolla, la creación muestra por qué y para qué e:iste eso que puede cambiar y evolucionar. :pres2ndolo de otro modo3 que un ser es creado significa que ha recibido su realidad por la eficiencia radical de otro, bien en un estadio definitivo, bien en un estadio potencial con capacidad de evolucionarB y el evolucionismo precisa 6aunque no lo ha podido demostrar8 que lo ha recibido en un estadio potencial.0&&9 4omo salta a la vista, el evolucionismo en sí mismo no constituye ninguna /humillación0 al ser humano. @a pretendida /humillación0 proviene de la miope y malintencionada visión ideológica del materialismo biologista 6como el de Pean 1iaget8 que intenta reducir lo humano a lo biológico. J esa visión =segn la cual no hay diferencia esencial entre la amiba y el hombre= es la que prevalece en no pocos programas escolares y medios de comunicación, con el lamentable resultado de la desvalorización de la persona humana. 1odemos afirmar sin la menor duda, que esa mentalidad del materialismo evolucionista fue precisamente una de las principales causas 6no la nica8, que llevó a la ideología nazi a cometer los /actos de barbarie ultra5antes para la conciencia de la humanidad0 denunciados en el 1re2mbulo de la +eclaración de la #$%. i la persona humana no es sino el /producto0 m2s 112 $duardo ubianes! La !ersona "umana. #rt=culo publicado en e
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desarrollado del proceso evolutivo, y en ese proceso 5uega un papel primordial la ley de la /selección natural0, >porqué no eliminar a las /razas inferiores0 a fin de que la /raza superior0 pueda imprimir sus características a la humanidad futura? @a eliminación de /los inferiores0 sería simplemente una *ayuda- a la /selección natural0. @os siniestros nombres de decenas de campos de concentración como GuchenRald, +achau, AuschRitz, y las atrocidades inhumanas cometidas en ellos, son ya ampliamente conocidasB pero esos hechos corresponderían solo a una parte del proceso de /ayuda0 a la /selección natural03 el de la eliminación de los supuestamente /inferiores0. n cambio es casi desconocido lo que los nazis hicieron respecto a la otra parte del proceso, es decir, la que corresponde a la /ayuda0 a la /raza superior0. Pacques +elarue, un policía profesional francés, e:=cautivo de los nazis, y quien dedicó diez años de su vida a investigar la organización y métodos empleados por la temible !estapo 6la 1olicía 1olítica nazi8, nos habla de esta parte desconocida del proceso de ayuda a la selección natural3 /l sistema de immler 6Iurt einrich immler, Pefe de la !estapo8 obtendr2 su remate con la creación del *ebensborn
de estas uniones, fruto de una eugenesia dirigida, debían pertenecer al stado, y su educación sería asumida en escuelas especiales. Deóricamente estaban destinados a formar la primera generación del nazi puro, moldeado ya en embrión. l hundimiento del régimen no permitió a los nazis llevar m2s le5os esta e:periencia. $o obstante, ya habían nacido unos cincuenta mil niños de esta especie de sementales. u nivel intelectual es actualmente inferior, y de una manera notoria, al nivel medio. 1resentan un porcenta5e de débiles mentales cuatro o cinco veces m2s elevado que el normal. @os eugenesistas nazis ignoraban 6...8 6que8 la ideología y la biología no pueden reemplazar al amor maternal.0&&;
-a tercera huillaci)n& el 0reudiso +espués de haber reducido al hombre solo a su esfera biológica, la siguiente /humillación0 consistió en eliminar la diferencia cualitativa incluso en lo biol"gico entre el hombre y los animales, y reducirlo a un mero mano5o de energías instintivas, predominantemente se:uales. 4omo apunt2bamos anteriormente, el autor de esta /tercera humillación0 fue igmund Sreud, a quien se le llama /el padre del psicoan2lisis.0 igmund Sreud 6&)LM=&';'8 nació en la ciudad de Sreiberg, "oravia, cuando esta región pertenecía al Fmperio Austro=ngaro. iendo muy niño su familia se trasladó a vivir a Kiena
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profesión de médico en la especialidad de psiquiatría, lo que le llevó a buscar la causa de las enfermedades psíquicas, especialmente la neurosis. us refle:iones culminaron en el desarrollo de su /teoría sobre el inconsciente0, misma que revolucionó tanto la psiquiatría como la psicología. egn la teoría de Sreud, la represi"n de los instintos, especialmente el se:ual, es la causa de la neurosis, entendiendo como *represión- el desplazamiento de la energía instintiva 6la líbido8 desde la zona de la conciencia hasta el inconsciente, donde queda arrinconada. /@a temprana se:ualidad infantil, que al comienzo aparece difusa y sin limitaciones
Paspers dice que Sreud ve /a menudo con e:traordinaria agudeza lo que surge por la represión de la se:ualidad, pero que 5am2s se pregunta acerca de lo que surge con la represión del espíritu0.&&L J lo que ocurre con la represión del espíritu es la pérdida del sentido de la vidaB es decir, la cancelación de lo específicamente humano. @a /humillación0 que Sreud se 5actaba de haber propinado al hombre con su /psicología sin alma0 llevó al e:tremo la desvalorización del ser humano, pues como afirma DhielicUe, /6"lo se puede calificar de perversi"n el que iHtor $! %ranHl! #l "ombre en busca de sentido. $d! 8erder, Earcelona, 1991, p!10 11 Por la condicin de jud=os de ambos, tras la ane)in de #ustria al Iercer eich en 193, %reud huy a 5ondres, donde muri en 1939, mientras Gue %ranHl fue eniHtor %ranHl muri en >iena en 1990 a los 92 a+os de edad! 119 >iHtor %ranHl, @p! &it, p! 19
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de las mayores perversiones posibles acerca de la imagen del hombre. l mismo SranUl detalla algunas de las consecuencias de la pérdida del sentido de la vida y el inevitable vacío e:istencial que tal pérdida acarrea3 /...el vacío e:istencial se manifiesta enmascarado con diversas caretas y disfraces. A veces la frustración de la voluntad de sentido se compensa mediante una voluntad de poder, en la que cabe su e:presión m2s primitiva3 la voluntad de tener dinero. n otros casos, en que la voluntad de sentido se frustra, viene a ocupar su lugar la voluntad de placer. Ysta es la razón de que la frustración e:istencial suele manifestarse en forma de compensación se:ual y así, en los casos de vacío e:istencial, podemos observar que la libido se:ual se vuelve agresiva.0&9O 1or su parte, el psicoan2lisis freudiano se convirtió en /alguien que habla m2s all2 de una conciencia humana, una especie de perfecto y aséptico ciru5ano de la intimidad de otro, munido 6dotado8 de una propia y consagrada salud mental que, a su vez, un otro se encargó de confirmarla. s así como 6...8 se pretende señalar como contaminadas todas las ciencias humanas e incluso el mismo lengua5e, para terminar reduciendo todo conocimiento acerca del hombre al conocimiento neurológico, psiqui2trico y psicológico que se tenga de él 6...8 sta visión parcializada del hombre 6...8 ha llevado a considerar a la salud humana como sinónimo de salud biológica, y a la salud psíquica como una anhelada 12 .b=dem, p! 1:
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situación de asepsia anticontaminante respecto de los mitos religiosos, de las éticas culpógenas, de los convencionalismos sociales. ste *saludable- viviente humano 6...8 es, en verdad, un monstruo psicópata capaz de obrar con todo sadismo y e5ecutar todo tipo de violencia contra aquello que sea considerado opuesto a sus designios liberadores.0&9& l panse:ualismo freudiano ha sido factor destacado en el incremento de violaciones de car2cter se:ual, que son también violaciones a los derechos humanos. 1ero también la teoría freudiana, que ve en el padre a un ser negativo, a un ser en rivalidad con su hi5o, un ser abusivo que se impone mediante preceptos y castigos, ha sido un factor importante en la pérdida de la imagen del padre, con las funestas consecuencias que el célebre psicoanalista y profesor de la %niversidad de Drieste, 4laudio Eisé, describe en su m2s reciente libro3 >l 4adre, l?assente inaccettabile 6l 1adre, el ausente inaceptable8. &99 +ice el +r. Eisé que en la primera fase de la vida somos totalmente dependientes de nuestra madre, quien atiende todas nuestras necesidades primarias. n cambio, la imagen del padre surge con el despertar de la conciencia, y es la que transmite la identidad y el sentido de pertenencia, es decir, con todo lo que tiene que ver con el sentido de la vida. @o normal es que tanto la imagen de la madre como la del padre se den al hi5o simult2neamente, y éste reciba un influ5o armonizado y equilibrado. 1ero la peculiaridad de la atmósfera 121 'iguel Dngel 'irabella! @p! &it, p! :0 122 $di6ione *an Paolo, oma, 22!
educativa que se fue generando a lo largo del siglo pasado, 6con la significativa contribución del freudismo8 fue la de ir eliminando *la figura del padre- con los siguientes resultados3 l modelo dominante, desequilibrado y sin armonía es un modelo fundado sobre el interés y el principio del placer, lo cual implica necesariamente un bloqueo de la maduración personal. $adie sabe quién es realmente, ni mucho menos para qué viveB es el modelo del *eterno adolescente- que claudica de sus deberes y responsabilidades, pero que sabe e:igir muy bien sus derechos. sta din2mica
adónde se me quiere llevar y adónde quiero ir. st2, por consiguiente, íntimamente ligada a la cuestión del sentido.0 &9; @a cancelación del sentido convierte a la persona humana en un ser *sin sentido-, lo que lleva a ver la vida
123 8elmut IhielicHe! @p! &it, p! 4:3!
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C+P,TU-O ;UINTO LA ESPIRAL DE VIOLACIONES A LOS DERECHOS HUMANOS
Positi7iso 3ur%dico * derechos huanos l &) de octubre de &'(L, en la ciudad alemana de $Tremberg dieron inicio los célebres /5uicios0 a veintidós líderes nazis que habían sido capturados tras el derrumbe del Dercer Eeich. @os cargos que enfrentaban los acusados fueron cuatro3 &.= 4rímenes contra la paz 9.= 4rímenes contra la humanidad ;.= 4rímenes de guerra (.=1or conspiración para cometer los actos criminales anteriormente señalados. %n Dribunal "ilitar Fnternacional conformado por cuatro 5ueces 6un estadounidense, un soviético, un inglés y un francés8 presidieron las 9&M sesiones de los 5uicios, y el &7 de octubre de &'(M, el Dribunal emitió su veredicto3 tres acusados fueron absueltos, cuatro fueron condenados a penas entre &O y 9O años de prisión, tres 91
fueron condenados a cadena perpetua, y doce fueron condenados a muerte. 1ero desde la primera sesión todos los acusados se declararon inocentes alegando, sin e:cepción, que habían actuado conforme a las leyes vigentes en Alemania y siempre /obedeciendo órdenes0. 1or su parte los 5ueces y fiscales no podían remitirse a alguna ley *positiva-&9( que aquellos criminales hubieran violadoB salvo en el cargo de /crímenes de guerra0 donde la /4onvención de !inebra0 señalaba algunas leyes sobre la guerra que deberían acatar los beligerantes. @uego entonces los líderes nazis que ordenaron el brutal e:terminio de millones de seres humanos >estaban 5urídicamente libres de castigo, o, como alegaron, eran incluso inocentes? /l principio 5urídico penal *nulla poena sine lege- 6no hay pena sin ley8 amenazaba con poner en tela de 5uicio la competencia 5udicial del proceso de $Tremberg. +e hecho no e:istía ningn código en que estuvieran prohibidos el genocidio, la eutanasia para los *tarados mentales- y los * pogroms- contra los 5udíos 6...8 J fue precisamente esta necesidad 5urídica concreta la que suscitó el problema de si no e:istirían unas leyes eternas y no escritas
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son ya vigentes cuando se perpetra la acción, de tal modo que ciertamente conservan su valor siempre y en todo tiempo. n cierto modo se trata ahí de unos a:iomas 6principios evidentes8 de la humanidad, a los que se opondrían los crímenes contra esa misma humanidad. J ésa fue, en efecto, la clave con que el tribunal de $Tremberg 5ustificó su competencia para castigar los crímenes cometidos.0&9L n un intento de llenar tan evidente *laguna- del derecho positivo internacional, el &O de diciembre de &'() la #rganización de las $aciones %nidas proclamó la /eclaraci"n @niversal de los erechos ;umanos0. 1ero la *+eclaración- de la #$% no estaba *creando- o *inventando- los derechos humanos proclamadosB simplemente los estaba *reconociendo- ya que =como tuvieron que aceptar los fiscales de $Tremberg= e:isten ciertas leyes fundamentales...que conservan su valor en todo tiempo y lugar. @os /Puicios de $Tremeberg0 evidenciaron pues al *positivismo 5urídico-B es decir, la filosofía 5urídica que *reduce- el derecho nicamente a las leyes positivas y se niega a reconocer la e:istencia de las leyes *naturales-, las cuales dan origen al *derecho natural-. /ans Ielsen 6&))&=&'N;8 es sin dudas el pensador contempor2neo que m2s significativamente abandera el iuspositivismo, 6o positivismo 5urídico8 es decir, la teoría que busca presentar al derecho como una estructura formal que se e:plica como 5urídica desde sí misma sin acudir a elementos sociales empíricos, comprensiones 12 8elmut IhielicHe! @p! &it, p! 4C41!
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éticas o creencias religiosas.0&9M iguiendo la lógica del positivismo, los criminales 5uzgados en $Tremberg por la eliminación de millones de personas, eran inocentes.
Priero 1de'eres2< después 1derechos2 @a relación de una persona con otra u otras, constituye la esencia del +erechoB sin embargo, para poder hablar de *derechos- es necesario hablar primero de *deberes-, pues en toda relación humana por cada derecho que se pueda señalar, e:iste previamente un deber correlativo que es necesario satisfacer. 1or e5emplo3 el padre de familia tiene el deber de educar a sus hi5os, y de ese deber deriva el derecho de educarlosB el traba5ador tiene el deber de traba5ar, y de ese deber deriva el derecho de cobrar su salario. s el cumplimiento de los deberes lo que hace que los derechos sean una realidad y no una palabra vacía. @o anterior no quiere decir que necesariamente sea el mismo su5eto quien deba primero cumplir un deber para adquirir su derecho correlativoB esa obligación puede perfectamente recaer en otro o en otros. 1odemos ver esto en el caso de los /derechos de los niños0 y la gran difusión que se hace de ellos3 derecho a vivir saludablemente, derecho a ser educados, derecho a ser respetados etc. @a difusión y publicidad de los /derechos de los niños0 contrasta fuertemente con su incumplimiento. 1or e5emplo, es un hecho innegable que cada día son m2s los niños que viven en la calle careciendo de atención médica, de educación, de 12: odrigo uerra! @p! &it, p! 1: -las cursi
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respeto etc. +e nada sirve proclamar a los cuatro vientos que los niños /tienen derechos0, mientras nadie recuerde a los adultos 6 padres, maestros, vecinos, autoridades etc.8 los *deberes- que tienen con respecto a los niños. i hay tantos *niños de la calle- que viven en condiciones no solo indignas, sino adem2s terriblemente in5ustas con su condición de *niños-, es porque por cada uno de ellos hay algunos adultos 6principalmente sus padres8 que no han cumplido con su deber de alimentarlos, educarlos, respetarlos, etc. /@a actual escuela inglesa analítica del lengua5e mantiene abierto un proceso de acusación a la e:presión moderna de los derechos del hombre, a los que califica de vacíos de sentido. ablar de derecho 6right 8 , dicen que no tiene sentido sino cuando esta palabra corresponde a una obligación 6a duty 8 efectivamente sancionada. 1or eso califica de mal construido el lengua5e de los derechos del hombre 6human rights talA 8.0&9N /1oseer un derecho sólo tiene significación concreta si e:iste por lo menos una persona física o moral susceptible de violar ese derecho o que tiene el deber de satisfacerlo. ablar de los derechos de Eobinson 4rusoe en su isla no tendría ninguna significación concreta. ste solitario hubiese estado contento de haber encontrado un manual de cultivos o de cría de ganado, pero no habría sabido qué hacer con la +eclaración de derechos del hombre. Bo se puede, pues, hablar de derechos propiamente dichos si no 120 Auan >allet de oytisolo! #sbo&o de una metodolo(ía de los derec$os $umanos. >erbo, 'adrid, "B 311, p 21
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existe por lo menos una persona física o moral que tenga el deber de satisfacerlos o de respetarlos. i nos colocamos en el punto de vista de la lógica abstracta, decir que el hombre tiene derecho a la propiedad o decir que tiene el deber de no robar es lo mismo. @os siete mandamientos de la @ey de +ios con respecto al pró5imo podrían haber sido enunciados de la manera equivalente3 =@os padres tienen derecho de ser honrados y asistidos por sus hi5os. <l hombre tiene derecho a la vida.
12 'ichel 'artin! #l fracaso de los derec$os del $ombre. >erbo, 'adrid! "B 1, p 13:C13
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n efectoB en la /+eclaración de los derechos del ombre y del 4iudadano0 proclamada por la *Asamblea $acional- durante la Eevolución Srancesa 6&N)'8, no hay m2s referencia a un *deber- que el señalado en el artículo &;, donde indica el *deber- de contribuir al sostenimiento de la fuerza pblica y de los gastos del gobierno. J en la /+eclaración %niversal de los +erechos umanos0 proclamada por la Asamblea !eneral de las $aciones %nidas en &'(), encontramos también la ausencia de un señalamiento sobre los deberes correspondientes a los derechos proclamados, con la e:cepción de dos vagas referencias3 /Dodos los seres humanos...*deben- comportarse fraternalmente los unos con los otros0 6Art.&78, y /Doda persona tiene *deberes- 6no indica cu2les8 respecto a la comunidad0 6Art.9'=&8. @a omisión del señalamiento de los *deberes- es especialmente grave en todo lo referente a la dignidad de la persona humana. /videntemente cuando afirmamos que la dignidad de la persona *es inviolableno queremos decir que no pueda ser violada sino que no debe ser nunca violada. 4uando decimos que las personas poseen derechos frente a otras personas, podemos descubrir, si nos fi5amos con atención, que esto significa que las personas tienen deberes para con los *otros como yo-. @a e:periencia del *deber- se funda sobre el *reconocimiento- de la persona del *otro- como su5eto con dignidad.0&9'
129 odrigo uerra! @p! &it, p! 149
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=re7e panoraa hist)rico>3ur%dico de los derechos huanos n el siglo KFFF antes de 4risto, el griego esíodo tuvo que enfrentar la violencia brutal de su hermano, holgaz2n y sin escrpulos, pero que supo sobornar a los 5ueces para apoderarse de toda la herencia de sus padres. esíodo compuso una obra poética 6*os trabajos y los días8 en la que, por el anhelo de liberarse de la in5usticia, se preguntaba por un ordenamiento fundamental del universo que permitiera medir la perversión del derecho positivo, es decir, de las leyes legisladas por los hombres. J aunque el lengua5e de los derechos humanos fue desconocido por la antigTedad griega, vislumbró la e:istencia del derecho natural. 1osteriormente Aristóteles analizó el derecho y afirmó que éste es una relaci"n, una proporción entre las personas que tienen, por un lado, una comn naturaleza, y por otra, puestos desiguales en cada grupo social. /istóricamente, el contenido de algunos de los hoy que hoy denominamos derechos humanos 6...8 se reclamaban y muchas veces se obtenían para grupos concretos de hombres, en su respectivo conte:to histórico 6...8 que eran consignados en cartas o fueros 6...8 +e este tipo fueron3 el contenido del ncleo constitucional de los %satges de Garcelona, proclamados a fines de la primera mitad del siglo XFFB las garantizadas por Alfonso FX en las primeras cortes de 4astilla y @eón, en &&))B la 4arta "agna inglesa, comprometida por Puan in Dierra con sus baronesB la constitución pactada 9
por 1edro el !rande con las cortes de Garcelona en &9); 6...8 Derminológicamente, en estas cartas o fueros 6...8 no se proclamaban derechos de los sbditos sino deberes del rey.0&;O 1or lo que se refiere al +erecho Eomano, éste señala que /la concepción cl2sica de la rerum natura 6las cosas naturales8 era considerada en la divinarum et humanarum rerum notitiae 6el conocimiento de las cosas divinas y humanas8, previa para la iusti et iniusti scientia 6ciencia de lo 5usto y de lo in5usto8, conforme la definición de la 5urisprudencia que nos ha sido transmitida por %lpiano 6ig. &,&,&O,&8.0&;& +urante las primeras décadas de la e:ploración y conquista de América, la denuncia que los misioneros hicieron a la 4orona spañola de los abusos cometidos contra los naturales por muchos conquistadores, suscitó en spaña un debate teológico=5urídico del cual, ba5o el nombre de /+erecho de !entes0 surgió el erecho >nternacional 4úblico. Sueron los teólogos de la %niversidad de alamanca 6especialmente Srancisco de Kitoria8 quienes, defendiendo puntualmente la dignidad humana de los indígenas, formularon los contenidos b2sicos de muchos de los hoy llamados derechos humanos. /ubo algunas voces confundidas que negaron humanidad al indígena, pero prevaleció ampliamente al respecto, la racionalidad y la evidencia que reconocía en cada indio a un ser humano, y por lo tanto, a una persona a un centro unitario de derechos y deberes 6...8 1or eso, Srancisco de Kitoria, que tiene el mérito de ser 13 Auan >allet de oytisolo! @p! &it, p!1C1: 131 .b=dem, p!29
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un admirable sintetizador de las polémicas posiciones de la época, cierra la cuestión diciendo puntualmente que los espa#oles son pr"jimos de los indios. 1or lo tanto, los indios son pró5imos de los españoles3 todos comparten la comn condición de tener la misma naturaleza corporal=espiritual del hombre.0&;9 1osteriormente, la ideología liberal, a partir del *Cill of Dights- proclamado el &; de febrero de &M)' y de una concepción marcadamente individualista del ser humano, empezó a hablar de los derechos humanos ba5o el término de /garantías individuales0. sta ideología influyó notablemente en la 1onstituci"n de los 5stados @nidos de !mérica, promulgada el &N de mayo de &N)N, pero sobre todo se hizo presente en el documento m2s famoso e influyente surgido de la Flustración3 la eclaraci"n de los erechos del ;ombre y del 1iudadano, promulgado por la *Asamblea $acionalfrancesa el 9M de agosto de &N)'. A éste documento se debe la generalización del término *derechos del hombre-. Sinalmente, y como lo hemos ya señalado, la violación sistem2tica a la dignidad de millones de seres humanos y los horrores cometidos en uropa por el régimen nazi, llevó a la Asamblea !eneral de las $aciones %nidas a proclamar, el &O de diciembre de &'(), la *eclaraci"n @niversal de los erechos ;umanos-, la cual se compone de un pre2mbulo y treinta artículos. Aunque la *+eclaración- de la #$% ha sido un desmentido al *positivismo 5urídico- que ha de5ado de 132 Pedro $nriGue EaGuero 5a6cano! 1itoria y las 'aciones 9nidas. eol .., 1993!
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lado a la 5usticia, no tiene obligatoriedad 5urídicaB esa es, entre otras, una de las razones no sólo de su incumplimiento sino del hecho que, desde &'(), los mismos crímenes del régimen nazi hayan sido superados en nmero y crueldad.
#ituaci)n de los derechos huanos en /rancia después de la Declaraci)n de ?@AB l pre2mbulo de la +eclaración francesa de &N)' decía que el propósito de la misma era /que las aspiraciones futuras de los ciudadanos...puedan tender siempre a mantener...la felicidad general.0 Fndependientemente de lo acertado o no de los derechos proclamados, a lo largo de sus diecisiete artículos no e:iste ninguna referencia a las obligaciones y deberes que =ciudadanos y gobierno= debieran cumplir para mantener no ya /la felicidad0, sino las condiciones mínimas que hicieran posible un verdadero respeto a la dignidad de los franceses. @a /época del terror0 que ensangrentó a Srancia, fue inaugurada proclamando los /derechos del hombre y del ciudadano0. 1ero la mitificación rom2ntica que se ha hecho de la Eevolución Srancesa ha minimizado =cuando no ignorado totalmente= el terror revolucionario, planeado y dirigido por el /4omité de alud 1blica0 conformado por la misma *Asamblea $acional-. @a /época del terror0 produ5o en pocas semanas m2s de cuarenta mil victimas, despo5ó in5ustamente de sus bienes a muchos otros, y obligó a miles m2s a huir de su nación.
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/l artículo &O de la +eclaración de &N)' declaraba que nadie debía ser molestado por sus opiniones, aun religiosas. Dres años no habían transcurrido que se empezó a guillotinar a los que eran sospechosos de no ser republicanos. Al año siguiente se e5ecutó a los que *no haciendo nada contra la libertad, no habían, sin embargo, hecho nada por ella- 6ley de los sospechosos del &N de septiembre de &N';8. @os *grandes antepasados- empezaron entonces a guillotinarse entre ellos.0&;; Así, el hecho concreto es que, mientras la Asamblea proclamaba los *derechos del hombre-, las cabezas cercenadas de miles de seres humanos 6 hombres y mu5eresB nobles y plebeyos, e incluso revolucionariosB con fortuna o sin ellaB culpables e inocentes8 eran mostradas pblicamente y paseadas en picas a una multitud que se regoci5aba con ese sangriento espect2culo.
#ituaci)n de los derechos huanos en el undo después de la Declaraci)n de ?BA @os resultados obtenidos tras la +eclaración de la #$% no han sido diferentes, con la salvedad de que la +eclaración de &N)' estaba circunscrita a Srancia, y la de la de &'() dice abarcar a /los pueblos de las $aciones %nidas0. l hecho concreto es que las violaciones a los derechos proclamados ya no se contaron en miles sino en millones. @a +eclaración @niversal de la #$% dice en su pre2mbulo que /los stados "iembros se han comprometido a asegurar, en cooperación con la #rganización de las $aciones %nidas, 133 'ichel 'artin! @p! &it, p! 133!
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el respeto universal y efectivo a los derechos y libertades fundamentales del hombre0. 1ero la %nión oviética, uno de los cuatro /stados "iembros0 m2s influyentes 6esos que hasta la fecha tienen /derecho de veto0 y un asiento vitalicio en el 4onse5o de eguridad8, desde &'&N había establecido la violación sistem2tica de todos y cada uno de los derechos proclamados. @e5os de dar marcha atr2s, a partir de &'() el dictador Posé talin e:tendió las violaciones sistemáticas de los derechos humanos a todos los pueblos que cayeron ba5o el dominio de la %E. l *!%@A!-&;( superó incluso el nmero de víctimas y ve5aciones de los campos de e:terminio nazis, pues cerca de treinta millones de personas perecieron en esas prisiones políticas cuya e:istencia negaban las autoridades soviéticas. Ale:ander ol5enitzyn =teniente del 5ército soviético durante la egunda guerra mundial= estuvo ocho años 6de &'() a &'LM8 confinado en uno de esos campos que /no e:istían0. u e:periencia la relata en su libro /Archipiélago !ulag0, el cual le mereció el 1remio $óbel de literatura de &'NO. n esa obra ol5enitzyn narra las condiciones inhumanas y las torturas que vio y sufrió, así como los crímenes que llevaron a la antigua %nión oviética a superar con creces los /actos de barbarie ultra5antes para la conciencia de la humanidad0 denunciados por la #$% en la +eclaración de &'().
134 ;5# son las siglas en ruso para la “7ireccin eneral de &os de &oncentracin”!
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@a e:tensión de esos /actos de barbarie ultra5ante0 a uropa oriental, 4hina, 4uba y el udeste asi2tico, ha sido motivo de innumerables investigacionesB una de las m2s recientes y ampliamente documentada est2 plasmada en una obra redactada por seis investigadores provenientes de distintos ambientes.&;L s impresionante el nmero de víctimas que produ5eron las ve5aciones de esos regímenes3 )O millones en 4hina, 9 millones en 4amboya, etc, pero la frialdad de los nmeros difícilmente revela la inhumanidad vivida por tantos pueblos en la segunda mitad del siglo XX. Ale:ander ol5enitzyn escribe al respecto3 /Así, pues, son muchos los fusilados3 miles al principio, cientos de miles después. +ividimos, multiplicamos, nos lamentamos, maldecimos. J, sin embargo, se trata de nmeros, de cifras que estremecen, que aterrorizan, que se olvidan m2s tarde. 1ero si alguna vez los familiares de los fusilados llevaran a una editorial las fotografías de todos los a5usticiados y la editorial hiciera con ellas un 2lbum fotogr2fico, varios volmenes de ellos, entonces, podríamos, al pasar una ho5a detr2s de otra, obtener de la ltima mirada de los o5os cerrados para siempre, algo muy til para los que hemos continuado con vida. sta lectura, casi sin letras, grabaría huellas eternas en nuestros corazones.0&;M in embargo, la violación a los derechos humanos no ha sido prerrogativa e:clusiva de los regímenes mar:istas. Aunque en nmero mucho menor, también regímenes 13 *t(phane &ourtois, "icolas ?erth, Aean 5ouis Pann(, #ndr6ej Pac6HosHi, /arel EartoseH y Aean 5ouis 'argolin! #l Libro 'e(ro del omunismo, $ditado en castellano por $spasaCPlaneta en 199! 13: #le)ander *oljenit6yn! asi sin letras. de mar6o de 23! NNN!lainsignia!orgO23Omar6oOcul13!htm
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latinoamericanos llamados /de derecha0 han realizado muchas violaciones y atrocidades en nombre de una política llamada /de seguridad nacional0, la cual surgió en los años setenta como reacción ante la acción de los grupos guerrilleros Z que igualmente cometían innumerables violaciones a los mismos derechos[ #tros regímenes que también en forma sistem2tica han cometido un gran nmero de violaciones a los derechos humanos, son los que surgieron en varias naciones africanas tras el fin del colonialismo europeo en ese 4ontinente. Gaste recordar el inhumano régimen en %ganda del brutal dictador Fdi Amín 6sobre el que pesaron incluso acusaciones de canibalismo8, causante de m2s de medio millón de víctimas en el periodo comprendido entre &'N& y &'N'. J en no pocas de las naciones democr2ticas del llamado /primer mundo0, el derecho humano m2s b2sico e inalienable que es *el derecho a la vida- es violado cotidianamente ba5o el amparo de las mismas autoridades civiles, pues en varias de esas naciones hoy se han proclamado /leyes0 que han hecho /legal0 el aborto. +esde luego que quienes han legalizado el aborto y quienes propugnan por su e:tensión, se niegan a aceptar que abortar sea un homicidio, a pesar de la evidencia de la ciencia que hoy puede saber si un embrión de una semana es varón o mu5er. 1ara 5ustificar el aborto, sus promotores alegan que no hay un ser humano hasta que el óvulo fecundado no haya anidado en el teroB o que no hay un ser humano mientras el cerebro no esté formadoB o hasta que no tenga figura humanaB o hasta que no sea dado a luzB o.... l hecho es 1
que quienes promueven el aborto se abrogan el /derecho0 de determinar arbitrariamente cuando un ser humano es humano, y cuando no lo es. /ste nuevo ser 6el embrión humano8 no es la simple suma de los códigos genéticos de los padres. s un ser con un proyecto y un programa nuevos, que nunca antes ha e:istido y no se repetir2 5am2s. ste programa genético
1:
tenemos, se me hizo cada vez m2s claro el hecho ineludible que el feto es uno de nosotros, uno de nuestra comunidad, una vida, una vida que debe protegerse 6...8 s la revelación m2s importante y creo que a través de los años 6...8 se convertir2 en el factor m2s importante para detener la matanza.0&;) +esde &')& el +r. $athanson traba5a para revertir las inicuas leyes que legalizan el asesinato de bebés, pues como él afirma3 /*a ciencia médica me dice ahora que el feto es un persona humana. ramáticamente tengo que reconocer que el feto no es un trozo de carne& es un paciente.0 4uando spaña estaba por votar las leyes que hoy permiten el aborto en esa nación, el célebre agnóstico y biólogo francés Pean Eostand afirmó en "adrid3 /:iste un ser humano desde la fecundación del óvulo. l hombre, todo entero, est2 en el óvulo fecundado. st2, todo entero, con todas sus potencialidades...1or lo tanto, todo aborto es sin duda un pequeño asesinato. sta sociedad e:purgada, m2s robusta, m2s saludable y m2s agradable de contemplar, esta sociedad en la cual la piedad no tendr2 lugar, esta sociedad sin deshechos, sin rebabas, donde los normales y los fuertes se beneficiar2n de todos los recursos que hasta ahora se han prodigado para los anormales y los débiles, esta sociedad que reviviría en spaña y haría felices a los discípulos de $ietzsche, no estoy seguro de que an pudiera merecer el nombre de sociedad humana.0
13 &onferencia publicada en 7@&#, "B! 93, abril 193, p! 19C2!
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@a *legalización del aborto- por el derecho positivo de muchas naciones no elimina el hecho que el aborto sea ob5etivamente un homicidio cometido contra el ser humano m2s indefenso, y con las agravantes de una total premeditación, alevosía y venta5a. 1aradó5icamente hoy la #rganización de las $aciones %nidas, que nació para defender el derecho a la vida, se ha convertido en uno de los principales promotores del aborto en el mundo ba5o el eufemismo de /salud reproductiva0. 1odemos tomar como un resumen de la situación actual de los derechos humanos, el mensa5e que, con motivo del XXK aniversario de la +eclaración de la #$%, Puan 1ablo FF dirigiera el &O de diciembre de &'N)3 /%no se ve obligado a constatar divergencias...entre las significativas declaraciones de las $aciones %nidas y el aumento masivo, a veces, de violaciones de derechos humanos en todos los sectores de la sociedad y del mundo...>uién puede negar que hoy en día hay personas individuales y poderes civiles que violan impunemente derechos fundamentales de la persona humana, tales como el derecho a nacer, el derecho a la vida, el derecho a la procreación responsable, al traba5o, a la paz, a la libertad y a la 5usticia social? 0
Deseos leg%tios * 0alsos derechos. Adem2s del silencio sobre los deberes, el lengua5e usado en la +eclaración de la #$% de &'(), aunque no llega a la tontería de prometer el aseguramiento de /la felicidad0 como lo hizo la +eclaración francesa de &N)', favorece la ambigTedad sobre los derechos, lo cual conduce a proclamar falsos derechos que, en su 1
consecuencia m2s dram2tica, ha llevado a muchos a exigir como /derechos0 actos que son contrarios a los verdaderos derechos, como es el caso de los supuestos /derechos0 al aborto, a la homose:ualidad y a la eutanasia. %n e5emplo de la ambigTedad del lengua5e de la +eclaración de la #$% es su artículo 9L que dice3 /Doda persona tiene derecho a un nivel de vida suficiente para asegurar su salud, su bienestar , de él y de su familia...0 iendo lo anterior del todo deseable, al respecto surgen varios cuestionamientos3 >qué es un nivel de vida suficiente y cu2l su bienestar? >el bienestar de un habitante del amazonas y de uno de la estepa siberiana les llevar2 a e:igir su /derecho0 al aire acondicionado o a la calefacción? /Algunas necesidades del hombre son imperativas, tales como comer, vestirse, tener alo5amiento, etc. 6u satisfacci"n es un derecho. 1ero la satisfacción de otras necesidades es solamente deseable. 4iertamente, la satisfacción de estas necesidades puede, a menudo, ser reclamada legítimamente, pero no en nombre del derecho. 1ero como el progreso técnico ha dado posibilidades, desconocidas antes, para satisfacer ciertas necesidades 6y ha creado bastantes m2s8, resulta que, ba5o la influencia de almas generosas o demagógicas, se ha reclamado como derecho la satisfacción de necesidades, muchas de las cuales no podían ni siquiera sospechar nuestros padres 6...8 s evidente que cuando se multiplican los derechos, transformando ciertas satisfacciones en derechos, se 19
crea poco a poco una confusión entre los derechos y las necesidades. e abre así la vía a una escalada de reivindicaciones ilimitadas 6...8 Dodos los días, o casi todos, se oye reivindicar nuevos derechos 6...8 @os msicos han pedido que sea precisado el *derecho a la cultura- inscrito en la +eclaración de la #$%, indicando que este derecho comprenda también el derecho a la instrucción musical.0&;' /4uando se reivindican derechos que ningn particular ni empresa tienen la posibilidad de satisfacer, entonces los reivindicantes se dirigen lógicamente hacia la ociedad, hacia el stado, al que ahora se considera como una providencia capaz 6no se sabe cómo8 de satisfacer todas las necesidades 6...8 el stado sería responsable de todo y suministraría todo 6...8 @a e:periencia 6de setenta años de socialismo en la mitad del planeta8 enseña que una sociedad así 6no llega a otra cosa8 que a una generalización de la miseria y la violación institucionalizada de todos los derechos del hombre proclamados por la #$%.0&(O in embargo y a pesar de ello, no debemos olvidar < como acertadamente señala "ichel Killey= que /los derechos humanos son *operativos-, que son tiles a los abogados de e:celentes causas, que protegen de los abusos del gobierno y de la arbitrariedad del *derecho positivo-. i fuera posible borrarlos de nuestro vocabulario, sería necesario reemplazarlos por otra
139 'ichel 'artin! @p! cit, p! 139C14 14 .b=dem, p! 14C141
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e:presión menos inadecuada. Fgnoramos cual. se es nuestro problema.0&(&
¿Porqué el undo contepor!neo 7i7e una espiral de 7iolaciones a los derechos huanos" @os pre2mbulos de la +eclaración de &N)' y de la +eclaración de &'(), coinciden ambos en señalar que la causa principal de las violaciones se encuentra en /la ignorancia0 que el hombre tiene de sus derechos. 1ero esta razón es falsa e incluso ridículaB si fuera cierta podríamos decir3 los actos de barbarie cometidos en los campos de concentración nazis se debieron a que los 5udíos ignoraban que tenían derecho a vivir y a ser respetados. Fgualmente podríamos decir que si los cubanos no pueden salir de su 1aís si no es arriesgando la vida en fr2giles balsas, es porque ignoran que tienen derecho /a salir de cualquier país, incluso el propio...0, como lo proclama el artículo &; de la +eclaración de la #$%. s obvio que la causa de la violación de los derechos humanos y /los actos de barbarie ultra5ante0 que ha vivido la humanidad es otra muy diferente. Dras cada violación cometida e:iste un /alguien0, una persona, que no ignora los derechos sino que desprecia la dignidad de los otros. J aunque la propensión al mal con el que todos los hombres nacemos es la causa primera del desprecio por la dignidad, ésta propensión ha sido 141 &itado por Auan >allet de oitysolo! @p!&it, p! 23!
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acentuada
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4A1CD%@# XD# URGENCIA DE EDIFICAR UNA CULTURA DE RESPETO A LA DIGNIDAD HUMANA
-a anticultura del desprecio 4omo ya lo hemos venido apuntando, la m2s dram2tica herencia que el siglo XX hizo a los tiempos subsiguientes consistió en el desprecio a la dignidad humanaB desprecio manifestado en la violación sistem2tica de los derechos humanos de millones de personas. ste hecho evidentísimo contrasta fuertemente con el legítimo y e:traordinario progreso científico y tecnológico alcanzado en ese mismo siglo. l balance de esta parado5a es tan sencillo como terrible3 el progreso material no hizo m2s humana la vida de las personas y las sociedades, sino todo lo contrarioB y ello no por culpa del progreso de la ciencia y la técnica sino porque ese desarrollo, le5os de ser acompañado de un progreso espiritual, fue simult2neo a la negación del espíritu y el olvido de +ios. $unca como en el siglo XX se hizo tan evidente que el desprecio a +ios, m2s temprano que tarde, se 113
transmuta en desprecio a la dignidad humana. /$o hay que maravillarse de que el desarrollo de la sociedad, los grandes descubrimientos de la ciencia, de la técnica, de la inform2tica, si no van acompañados de un auténtico sentido religioso, reduzcan al hombre a la nada, a un nmero del con5unto, a un esclavo.00EF @os horrores del siglo XX no se circunscribieron e:clusivamente a la aniquilación de millones de seres humanos en las acciones bélicas como el bombardeo indiscriminado de ciudades durante las guerras mundialesB an m2s grave fueron tantos hechos de desprecio premeditado a la dignidad. sto es lo que !abriel "arcel llama /las técnicas del envilecimiento0 sobre las cuales escribe3 /en sentido estricto, entiendo por técnicas de envilecimiento el con5unto de procedimientos llevados a cabo deliberadamente para atacar y destruir, en individuos que pertenecen a una categoría determinada, el respeto que de sí mismos pueden tener y, ello, a fin de trasformarlos poco a poco en un deshecho que se aprehende a sí mismo como tal y al que, a fin de cuentas, no le queda sino desesperar de sí mismo, no sólo intelectualmente, sino vitalmente.00EG @o anterior pudiera parecer una e:ageración, pero desgraciadamente no es así, como lo prueban algunos testimonios que el propio "arcel cita3 /@os alemanes, escribe la ra. Pacqueline Eichet a propósito de EavensbrucU, 6un campo de concentración8 intentaban envilecernos por todos los medios. :plotaban todas las 142 Paul Poupard! Dios y la libertad. $d! $7.&$P! >alencia, 1990, p! 24! 143 abriel 'arcel! @p! &it, p!44
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cobardías, e:citaban todas las envidias y suscitaban todos los odios. ra necesario esforzarse día a día para conservar la propia integridad moral 6...8 +espués de haber dado horribles detalles sobre cómo habían sido las letrinas en el campo de AuschRitz, la ra. @eRinsUa escribe3 *Z J entonces comprendí[ 4omprendí que no era desorden ni falta de organización, sino que, muy al contrario, lo que había presidido la instalación del campo era una idea bien madurada, consciente. e nos había condenado a perecer en nuestra propia suciedad, a ahogarnos en el lodo, en nuestros e:crementosB se pretendía reba5ar, humillar en nosotros la dignidad humana, borrar de nosotros toda huella de humanidad, convertirnos en bestias salva5es, inspirarnos el horror y el desprecio de nosotros mismos y de nuestro entorno6...8 4on perfecto conocimiento de causa, a los seres humanos se les inoculaba el bacilo de la depravación 6...8 1ero lo que sigue de52ndonos confusos es pensar en los innumerables agentes de e5ecución que, a pesar de todo, se han necesitado para hacer realidad esa idea. 1or añadidura, sabemos de sobra...que esos agentes de e5ecución no eran todos, ni con mucho, de raza alemana.00EE 4iertamente el empleo de esas /técnicas0 no fue un hecho aislado y limitado al régimen nazi, sino que, como una epidemia, de un modo u otro brotaron y se generalizaron por muchas partesB incluso hubo quienes se adelantaron a los nazis. KiUtor IravchenUo, un alto funcionario de la industria militar soviética, denunció en &'(M las técnicas que en la %nión oviética se 144 .b=dem, p! 4
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emplearon sistem2ticamente contra todos los traba5adores. ntre ellas estaban3 el /sta5anovismo0 que imponía altísimas cuotas de producción y que permitía al régimen acusar de /saboteador0 a quienes no las cumplíanB el /libro de traba5o0 que registraba hasta un retardo involuntario del traba5ador y que para él constituía una cadena invisible imposible de romperB etc. Dodo ello acompañado de la obligación de alabar pblicamente estas técnicas /como prueba del crecimiento de la clase traba5adora0. +ice IravchenUo3 /las víctimas no sólo debían aceptar sus cadenas *voluntariamente-, sino que adem2s debían hacerlo *con entusiasmo-. $o era suficiente que aguantaran el azote, era preciso que besaran la correa o que gritaran Z hurra Z 0 0E( 4on cuanta razón !abriel "arcel afirma3 /emos partido de lo que en las técnicas de envilecimiento hay de m2s deliberado y m2s sistem2tico, del ob5eto de estas técnicas3 envilecer una categoría de seres= y esto, a lo o5os de los mismos seres. s f2cil ver que el recurso a seme5antes técnicas sólo es posible en un mundo en el que los valores universales son sistem2ticamente pisoteadosB y no nos entretengamos en pensar aquí en el bien en sí, en la verdad en sí 6...8 sino en esos mismos valores tomados en su alcance referencial, es decir, en cuanto confieren a la e:istencia humana su dignidad, la dignidad propia de toda e:istencia humana. n este orden de cosas, y lo destacaré de pasada, me parece totalmente imposible negarle a $ietzche 6se refiere a su tesis *+ios ha muerto-8 una responsabilidad al menos 14 >iHtor /raol! .., p! 4:!
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indirecta en los horrores cuyos testigos hemos sido y an somos. 00E' 1or un entendible pero no 5ustificable deseo de olvidar, muchos piensan que esas situaciones son cosa del pasado, aunque este sea reciente. 1ero no es asíB las causas que provocaron los horrores del siglo que acaba de concluir no solo siguen vigentes, sino que incluso se han visto acrecentadas por un factor que, si bien no es nuevo, se había mantenido siempre marginal en la vida de las sociedades, pero hoy es preponderante en ellas. se /nuevo0 factor es la indiferencia.
-a aena5a de la indi0erencia @os antiguos griegos, especialmente los estoicos, daban distintos significados a la indiferencia 6llamada también adi2fora8, como sería el caso de /todo aquello respecto de lo cual no se siente deseo ni repulsión, por e5emplo, el hecho de que los cabellos de la cabeza o las estrellas se encuentren en nmeros pares0 0E) 1ero trasladada a cuestiones m2s vitales e importantes, como serían los de 5usticia o in5usticia, bondad o maldad, verdad o mentira, la in=diferencia se convierte en una gravísima amenaza. /@a anti=cultura m2s amenazante hoy es la indiferencia frente al declive de la libertad 6...8 *el m2s grave desastre que puede amenazar a un pueblo no es la humillación militar, es la indiferencia de sus miembros a la forma de su porvenir-.00E-
14: abriel 'arcel! @p! &it, p! 9 140 "icola #bbagnano! Diccionario de filosofía. $d! %ondo de &ultura $conmico! '()ico, 199! p! 22 14 Paul Poupard! @p! &it, p! 24C2!
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n cualquier tema revestido de alguna importancia, la in=diferencia, el no=diferenciar, ser2 signo de estupidez, pues como acertadamente e:plica "ichel S. iacca, la estupidez consiste en no reconocer límites3 / ólo el hombre es estpido porque sólo el hombre es inteligente. $o hay en sentido propio una estupidez del cuerpo y de los sentidos, y no hay animales estpidos 6...8 +onde est2 el límite, allí est2 el signo de la inteligenciaB donde el límite es negado, est2 el signo de la estupidez3 del lado de la inteligencia est2n la cultura y los sentimientos m2s altos, del otro, la incultura y las pasiones m2s ba5as00E n efecto, no hay animales estpidos ni piedras estpidasB sólo el ser inteligente puede ser estpido, y lo ser2 en la misma medida en que no sepa reconocer límites, y no en la medida de su ignorancia. /@a estupidez no se ha de confundir con la *ignorancia-, que es el *no saber- o el *no tener ciencia-B m2s an, la conciencia de nuestra ignorancia es inteligencia madura y vigilante, es *docta- y también *sabiaignorancia, ya que es *doctrina- profunda el *conocer que no se sabe-, y es *sabiduría- auténtica el reconocer tanta ignorancia y obrar en consecuencia 6...8 @a estupidez no puede llamarse ignorancia incluso porque no ve y no comprende porque no quiere, *montada- como est2 por la malicia.00(/ +esde luego que sería estpido pretender construir un aeroplano bas2ndose en las ciencias médicas y no en las físicas, o pretender investigar la vida de los 149 'iguel %! *ciacca! #l oscurecimiento de la inteli(encia. $d! $7@*! 'adrid, 1903, p! 34 1 .b=dem, p! 9
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microbios con un telescopio. #bviamente en casos así el fracaso sería inmediato y obligaría a diferenciar los límites de cada ciencia y de cada instrumento. 1ero referida a realidades tan vitalmente humanas como lo es el sentido de la vida o la dignidad, la indiferencia ciertamente tendr2 una gran dosis de *malicia- y las consecuencias ser2n siempre funestas. l fracaso no quedar2 en un aparato o un microbio sino en la convivencia entre los seres humanos. Adem2s de ser una manifestación de un espíritu profundamente egoísta, la indiferencia sobre la dignidad de la persona humana fatalmente se convierte en una actitud de desprecio al pró5imo3 me es indiferente si e:iste o no, si tiene o no que comer, si est2 sano o enfermo, etc. @a indiferencia desestabiliza peor que el odio. Suera de su propio egoísmo, al indiferente nada importante le interesaB todo le vale lo mismo porque para él nada vale. Dal es la *malicia- de la estupidez que señala ciacca. sta in=diferencia es alimentada especialmente por la manipulación ideológica del evolucionismo de corte materialista, manipulación que incluye un bombardeo incesante de ideas tales como la *inteligencia de los animales-, *el derecho de los animales-, e incluso *la liberación de los animales-. Así se busca anular la diferencia abismal que e:iste entre el hombre y la bestia. 1ero éste absurdo no es nicamente frente al animalB la in=diferencia llega hoy también con respecto al hombre y la m2quina. !abriel "arcel advierte3 /l #ccidente ha creado una sociedad seme5ante a la 119
m2quina. #bliga a los hombres a vivir en el seno de esta sociedad y a adaptarse a las leyes de la m2quina. 4uando los hombres se parezcan a las m2quinas hasta el punto de identificarse con ellas, entonces no quedar2 ya hombre sobre la tierra.0 0(0 in duda, la anticultura de la indiferencia ha sentado sus reales en las sociedades contempor2neas.
Conclusi)n Eevertir el proceso del /eclipse de lo humano0 es hoy, quiz2, el problema m2s urgente que enfrentan las sociedades en el inicio del tercer milenio, y para ello es indispensable fomentar el desarrollo de una verdadera cultura de respeto a la dignidad de la persona humana. n la construcción de esta cultura tiene especial relieve la obligación de afirmar las diferencias entre el hombre y los dem2s seres. $o debemos olvidar que la tentación originaria a nuestros primeros padres consistió, precisamente, en pretender eliminar la diferencia entre ellos y +ios3 /seréis como dioses0 6!n. ;,L8. l hombre no es +ios ni 2ngel, pero tampoco bestia ni m2quinaB el hombre es hombre, nada m2s y nada menos. @a cultura del respeto requiere también del reconocimiento de los principios del derecho natural, ya que /una concepción auténtica del derecho natural, entendido como tutela de la eminente e inalienable dignidad de todo ser humano, es garantía de igualdad y da contenido verdadero a los *derechos del hombre-.00(F @os elementos ob5etivos de la ley natural 11 abriel 'arcel! @p! &it, p! 102! 12 Auan Pablo ..! Discurso a los participantes en la 1:: asamblea (eneral de la Academia pontificia para la ida. 5 Q@sser
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6siempre al alcance de toda recta razón8 deben estar en la base de las leyes positivas, pues cuando /el derecho posi positi tivo vo.. .... toma toma del del der derec echo ho natu naturral sus sus pri princip ncipio ioss fundam fundament entale ales.. s...se .se pueden pueden ela elabor borar ar normas normas 5urídi 5urídicas cas equitativas, evitando así que estas ltimas sean pura arbitrariedad o simple abuso de autoridad.00(G @a vigencia del derecho natural en un 5usto y verdadero *estado de derecho- dar2 un mínimo de garantías para que la dignidad humana de cada persona sea respetada. in embargo poniendo los pies sobre la tierra, y en base a la e:peri perien enci cia a vivi vivida da en el lti ltimo mo si sigl glo, o, pode podemo moss afirmar categóricamente que la eliminación de la indiferencia y la afirmación de la vigencia del derecho natur natural al,, a pesa pesarr de la impo import rtan anci cia a que que revis eviste ten n no es suficiente. suficiente. l problema es de tal gravedad que requiere de un remedio en profundidad y realmente eficaz. ste remedio es nicamente el retorno a ios. ios. /ntonces se reencontrar2 de nuevo que la grandeza del hombre no est2 en la miserable autonomía de un enano que se proclama nico señor, sino en el hecho de que su ser de5a de5a tran transp spar aren enta tarr la m2 m2ss al alta ta sa sabi bidu durí ría, a, la ver erda dad d misma. misma. ntonces se pondr2 de manifiesto que el hombre es tanto m2s grande en cuanto m2s crece en él la ca capa paci cida dad d de pone ponerrse a la es escu cuch cha a del del prof profu undo ndo mensa5e de la creación, del mensa5e del 4reador.0 0(E
13 Auan Pablo ..! -ensa2e con ocasión del s0ptimo centenario de la muerte de San :o "0lory. 13 de mayo de 23 14 Aoseph at6inger! at6inger! Dificultades ante la fe en la #uropa de $oy. e
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,NDICE Introducci)n..................................p. Cap%tulo priero...........................p. +F!$F+A+ J 4#$+F4F\$ + 1E#$A l concepto de dignidad >1or qué el ser humano es superior a los dem2s entes? structura del ser humano 4apacidades del espíritu humano3 la inteligencia 4apacidades del espíritu humano3 la libertad 4apacidades del espíritu humano3 el amor Kalor absoluto de cada ser humano +ignidad ontológica y dignidad moral Cap%tulo segundo.......................... p. S%$+A"$D# + @# +E4# %"A$# J S%$+A"$D# + @A +F!$F+A+ Sundamentos que no lo son l fundamento en el +erecho natural #b5eciones al +erecho natural l +er +erec echo ho natu natura ral, l, fund fundam amen ento to sufi sufici cien ente te para para lo loss der derechos chos huma humano nos, s, e insu insufi fici cien ente te para para la dign dignid idad ad humana #tros horizontes de bsqueda Cap%tulo tercero............................ p. 122
@ #EF]#$D #EF]#$D "DASCF4# "DASCF4# + @A +F!$F+A+ %"A$A Fmportancia de la realidad metafísica @a dignidad natural de la persona en la perspectiva teológica @a dignidad sobrenatural3 de imagen a hi5o @a dignidad humana en la +octrina ocial de la Fglesia
Cap%tulo cuarto..............................p. +KA@#EF]A4F\$ + @A 1E#$A %"A$A @a primera humillación3 el heliocentrismo @a segunda humillación3 el evolucionismo @a tercera humillación3 el freudismo Cap%tulo quinto.............................p. @A 1FEA@ + KF#@A4F#$ A @# +E4# %"A$# 1ositivismo 1ositivismo 5urídico y derechos humanos 1rimero deberesB después derechos Gre Greve pano panora ram ma hist histór óric ico= o=5u 5urí rídi dico co de lo loss der derechos chos humanos ituación de los derechos humanos en Srancia después de la +eclaración de &N)' ituación de los derechos humanos en el "undo después de la +eclaración de &'() +eseos legítimos y falsos derechos >1orqué el mundo vive una espiral de violaciones a los derechos humanos? Cap%tulo seto............................p. B %E!$4FA + +FSF4AE %$A 4%@D%EA + E1D# A @A +F!$F+A+ %"A$A @a anticultura del desprecio 123
@a amenaza de la indiferencia 4onclusión
GFG@F#!EASCA
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