GRUPO NO. 8 LAS TENDENCIAS ACTUALES EN LA SOCIOLOGÍA Funcionalismo estructural: auge y decadencia Los años cuarenta y cincuenta constituyeron, paradójicamente, los años de mayor apogeo del funcionalismo estructural y el comienzo de su decadencia. Durante esos años, Parsons produjo una serie de trabajos que exponían con claridad su cambio de orientación desde la teoría de la acción al funcionalismo estructural. Sin embargo, en el preciso momento en el que alcanzaba hegemonía teórica, el funcionalismo estructural comenzó a ser objeto de múltiples críticas que se intensificaron durante los años sesenta y setenta. La teoría estructural-funcional de la estratificación de Davis y Moore se vio atacada desde el principio, y las críticas persisten hasta nuestros días. Por lo demás, una serie de críticas más generales recibieron mayor reconocimiento dentro de la disciplina. C. Wright Milis atacó a Parsons en 1959, y también lo hicieron David Lockwood (1956), Alvin Gouldner e Irving Horowitz. Durante los años cincuenta, estos ataques se consideraron poco más que «incursiones guerrilleras», pero a medida que la sociología avanzaba en la década de los sesenta se evidenciaba el peligro que corría el predominio del funcionalismo estructural. George Huaco (1986) vinculó el nacimiento y la decadencia del funcionalismo estructural a la posición que ocupaba la sociedad estadounidense en el mundo. Cuando a partir de 1945 Estados Unidos se situó en una posición mundial dominante, el funcionalismo estructural alcanzó la hegemonía dentro de la sociología. El funcionalismo estructural apoyó esta posición mundial en dos sentidos. Primero, la idea estructural-funcional de que «toda pauta tiene consecuencias que contribuyen a la preservación y la supervivencia del sistema» era «simplemente una celebración de los Estados Unidos y de su hegemonía mundial» (Huaco, 1986: 52). Segundo, su perspectiva del equilibrio (el mejor cambio social era no cambiar) sintonizaba bien con los intereses de los Estados Unidos, que entonces constituía «el imperio más rico y más poderoso del mundo». La decadencia de la posición dominante de los EEUU durante los años setenta coincide en el tiempo con la pérdida de hegemonía del funcionalismo estructural en la teoría sociológica.
Cambio social, corrientes intelectuales y la primera sociología estadounidense Roscoe Hinkle (1980) Y Ellsworth Fuhrman (1980) subrayan en sus estudios sobre la fundación de la teoría sociológica estadounidense diversos contextos básicos de los que surgió esa teoría. De crucial importancia fueron los cambios sociales que se produjeron en la sociedad estadounidense tras la Guerra Civil. Factores implicados en el desarrollo de la teoría sociológica europea; como la industrialización y la urbanización estuvieron también profundamente implicados en el desarrollo de la teoría en Estados Unidos. Para Fuhrman, los primeros sociólogos estadounidenses pensaban que la industrialización tenía aspectos positivos, pero también eran plenamente conscientes de sus peligros. Aunque estos primeros sociólogos se sintieron atraídos por las ideas sobre los peligros de la industrialización que generaban el movimiento obrero y los grupos socialistas, no eran partidarios de cambiar radicalmente la sociedad. Arthur Widich y Stanford Lyman (1985) han defendido recientemente la profunda influencia que ejerció el cristianismo, especialmente el protestantismo, en la aparición de la sociología en los Estados Unidos. Desde su punto de vista, los sociólogos estadounidenses conservaban la preocupación protestante por salvar el mundo, y simplemente substituyeron un lenguaje (la religión) por otro (la ciencia). Afirman estos autores que «Desde 1854, cuando aparecieron los primeros escritos de sociología en los Estados Unidos, hasta el estallido de la Primera Guerra Mundial, la sociología ha representado una respuesta moral e intelectual a los problemas de la vida y el pensamiento, de las instituciones y los credos de los estadounidenses» (Vidich y Lyman, 1985: 1). Los sociólogos se esforzaban por definir, estudiar e intentar resolver estos problemas sociales. Mientras que el sacerdote trabajaba dentro de la religión para intentar mejorar al conjunto de las personas y a la misma religión, el sociólogo realizaba la misma tarea dentro de la sociedad. Dadas sus raíces y sus paralelismos religiosos, la inmensa mayoría de los sociólogos no desafiaron la legitimidad básica de la sociedad. Otro factor importante en la fundación de la sociología estadounidense analizado por Hinkle y Fuhrrnan se deriva de la emergencia simultánea de las profesiones académicas (entre ellas la sociología) y del sistema universitario moderno en los Estados Unidos de finales del decenio de 1800. En Europa el sistema universitario se había establecido bastante antes del nacimiento de la sociología. Mientras la sociología encontró dificultades para establecerse en Europa, en los Estados Unidos le resultó más fácil debido a su nuevo y más fluido sistema universitario.
Otro de los factores se refiere, por último, a la influencia de una teoría europea bien establecida en la teoría sociológica estadounidense. En muy buena medida, fueron los teóricos europeos los creadores de teoría sociológica, mientras los estadounidenses demostraban una gran capacidad para apoyarse en esos fundamentos. Spencer y Comte fueron los autores europeos más importantes para los americanos. Simmel adquirió cierta importancia durante los primeros años, pero la influencia de Durkheim, Weber y Marx no surtió efecto hasta varios años después. Es interesante e instructivo analizar la historia de las ideas de Herbert Spencer para ilustrar la influencia de la teoría europea temprana sobre la sociología estadounidense.
La Escuela de Chicago: En 1892, Albion Small fundó el primer departamento de sociología de la Universidad de Chicago. Este departamento se convirtió en el primer centro importante de la sociología estadounidense, y de teoría sociológica en particular. La primera teoría sociológica estadounidense contribuyó a la racionalización de la explotación, el imperialismo nacional e internacional y la desigualdad social. Al fin y al cabo, el liberalismo político de los primeros sociólogos tuvo implicaciones muy conservadoras. La obra intelectual de Small tiene menos significado contemporáneo que el importante papel que desempeñó en la institucionalización de la sociología en los Estados Unidos. Albion Small actuó en pro de la creación de un departamento en la Universidad de Chicago, que terminaría por convertirse en el centro de la disciplina en los Estados Unidos durante muchos años. En 1894 Small colaboró en el primer manual de sociología. En 1895 fundó el American Journal of Sociology, revista que hasta nuestros días ha constituido una fuerza dominante de la disciplina. En 1905, Small fundó con otros la American Sociological Society la asociación profesional por excelencia de los sociólogos estadounidenses hasta nuestros días, más tarde denominada American Sociological Association (A.S.A). El primer departamento de Chicago presenta varias características distintivas. Por un lado, tuvo una estrecha conexión con la religión (Vidich y Lyman, 1985). Algunos de sus miembros eran sacerdotes e hijos de sacerdotes. Small, por ejemplo, creía que «la meta última de la sociología debía ser esencialmente cristiana». Esta creencia condujo a la idea de que la sociología debía ocuparse de la reforma social, combinada con la de que la sociología debía tener un carácter científico. En la populosa ciudad de Chicago, que entonces acusaba los efectos, tanto positivos como negativos, de la urbanización y de la industrialización, se practicó una sociología científica con el punto de mira en la mejora social.
George Herbert Mead: El pensador más importante vinculado a la Escuela de Chicago y al interaccionismo simbólico no fue un sociólogo, sino un filósofo llamado George Herbert Mead. Mead impartió cursos de psicología social en el departamento de filosofía a los que asistieron muchos estudiantes licenciados en sociología. Sus ideas influyeron profundamente en un sinnúmero de ellos. Estos estudiantes reunieron los apuntes tomados en las clases de Mead y publicaron un volumen póstumo con su nombre. La obra Mind, Setf, and Society (Espíritu, persona y sociedad) llevó sus ideas desde el reino de lo oral a la tradición escrita. Muy leído hasta nuestros días, este volumen constituye el principal pilar intelectual del interaccionismo simbólico. Es preciso analizar las ideas de Mead en el contexto del conductismo psicológico. A Mead le impresionó esta orientación y aceptaba muchos de sus principios. Adoptó su enfoque sobre el actor y su conducta. Consideraba sensata la preocupación del conductista por las recompensas y los costes que entrañaban las conductas de los actores. Lo que inquietaba a Mead era que el conductismo no iba lo suficientemente lejos. Es decir, no contemplaba seriamente la conciencia, ya que mantenía la idea de que no era susceptible de un estudio científico. Mead disentía vehementemente de este punto de vista y se afanó por extender los principios del conductismo al análisis de la «mente». La postura de Mead prometía una concepción más científica de la conciencia mediante la ampliación de los principios y métodos altamente científicos del conductismo psicológico. Mead legó a la sociología estadounidense una teoría que se oponía frontalmente a las teorías fundamentalmente societales propuestas por los principales teóricos europeos: Marx Weber, Durkheim, Comte y Spencer. La única excepción era Simmel. Así, el interaccionismo simbólico se desarrolló en muy buena medida a partir del interés de Simmel por la acción y la interacción y del de Mead por la conciencia. Pero esta idea nos lleva a detectar una debilidad de la obra de Mead y del interaccionismo simbólico en general, en los niveles social y cultural.
A continuación mencionaremos algunas de las teorías derivadas de la Escuela de Chicago que corresponden a las tendencias actuales en sociología.
EL INTERACCIONISMO SIMBÓLICO Aunque el origen del interaccionismo simbólico se le atribuye a George Herbert Mead, el término fue acuñado por Herbert Blumer en 1938. Sus postulados contienen los principios de una nueva filosofía (el pragmatismo), un nuevo objeto de estudio (la interacción) y una modalidad investigativa que, al margen del positivismo dominante, sienta las bases de la metodología cualitativa. El Interaccionismo simbólico es una ciencia interpretativa, una teoría psicológica y social, que trata de representar y comprender el proceso de creación y asignación de significados al mundo de la realidad vivida, esto es, a la comprensión de actores particulares, en lugares particulares, en situaciones particulares y en tiempos particulares (Schwandt, 1994). Se da aquí una gran similitud con el significado que Weber y Dilthey dan al término Verstehen (comprensión). Según Williams (1999), el interaccionismo simbólico se puede considerar como la escuela más influyente y exitosa de sociología interpretativa, si este éxito lo evaluamos por el volumen de trabajos empíricos publicados y por la integración de la teoría y el método. Se privilegia la acción como interacción comunicativa, como proceso interpersonal y al mismo tiempo autorreflexivo. El interaccionismo se presenta como una alternativa al paradigma estructural funcionalista dominante hasta ese momento en la sociología norteamericana. El interaccionismo simbólico se propone explicar la interacción en el individuo y en los grupos, y esta explicación se construye desde una perspectiva evolutiva, es decir, histórica. Hay una génesis que da cuenta del pasaje del organismo biológico al sujeto social. Este paradigma conserva una negativa a conceder importancia a cualquier cosa que no sea la interacción interpersonal: la insistencia en que los individuos son reflexivos y actúan, por tanto, conciente o inteligentemente. Mead sostiene que la sociedad es interacción. El cambio social se funda en la interacción. La sociedad funciona como un equipo. Cada uno aporta su desarrollo personal para el progreso de la sociedad (beneficio comunitario).
PRINCIPIOS BÁSICOS
Algunos interaccionistas simbólicos se esforzaron por enumerar los principios básicos de la teoría, que son lo siguientes:
1. A diferencia de los animales inferiores, los seres humanos están dotados de capacidad de pensamiento. 2. La capacidad de pensamiento está modelada por la interacción social.
3. En la interacción social las personas aprenden los significados y los símbolos que les permiten ejercer su capacidad de pensamiento distintivamente humana.
4. Los significados y los símbolos permiten a las personas actuar e interactuar de una manera distintivamente humana.
5. Las personas son capaces de modificar o alterar los significados y los símbolos que usan en la acción y la interacción sobre la base de su interpretación de la situación.
6. Las personas son capaces de introducir estas modificaciones y alteraciones debidos, en parte, a su capacidad para interactuar consigo mismas, lo que les permite examinar los posibles cursos de acción, y valorar sus ventajas y desventajas relativas para luego elegir uno.
7. Las pautas entretejidas de acción e interacción constituyen los grupos y las sociedades.
SOCIOLOGÍA FENOMENOLÓGICA DE ALFRED SCHÜTZ Intersubjetividad: Busca respuesta a preguntas como ¿Cómo conocemos otras mentes?, ya que es común a todos. La intersubjetividad existe en el “presente vivido” debido a que compartimos el mismo tiempo y espacio con otros.A Schütz no le interesaba la interacción física de las personas, sino el modo en que se comprenden sus conciencias. Tipificaciones y Recetas: Cualquier situación que se da en el mundo de la vida cotidiana, una acción viene determinada “por un tipo constituido de experiencias anteriores”, las tipificaciones ignoran los rasgos individuales y particulares, se centran sólo en características genéricas y homogéneas. Cuando llamamos a algo por su nombre estamos tipificando, siempre hacemos uso del lenguaje y nos sirve para dar sentido al mundo real, por ende las tipificaciones existen en la sociedad, las personas las adquieren y almacenan a través de la socialización durante toda su vida, estas se derivan de las sociedad y son socialmente aprobadas. Schütz habla de recetas al analizar las tipificaciones y utiliza ambos
términos como sinónimos, estas tienen relación con las situaciones mientras que las tipificaciones se refieren a las personas, las recetas son utilizadas para controlar las situaciones en que las personas se encuentran cada día, hábitos culturales. El mundo de la vida: Es la denominación a la intersubjetividad, el uso de tipificaciones y recetas, es cuando las personas actúan con “actitud natural”, las personas dan por sentado que este mundo existe y no dudan de su realidad hasta que surgen situaciones problemáticas. Características básicas del mundo de la vida: 1. Tensión especial de la conciencia o “estado alerta” donde se presta “plena atención a la vida y sus requisitos”. 2. No hay duda de la existencia de este
mundo, 3. Es en el mundo de la vida donde las
personas trabajan, 4. Forma específica de experimentar el propio self, 5. El mundo de la vida se caracteriza por una forma específica de socialidad que implica el “mundo intersubjetivo común de la comunicación y la acción social”, 6. El mundo de la vida existe una perspectiva específica del tiempo que implica la intersección del flujo del tiempo personal y del flujo temporal de la sociedad. Componentes privadas del conocimiento: Los elementos culturales varían de unos individuos a otros según las experiencias personales y no forman parte del mundo de la vida. Reinos de la realidad social: Schütz identificó cuatro reinos diferentes de la realidad social, 1. umwelt, reino de la realidad social directamente experimentada, 2. mitwelt, reino de la realidad social indirectamente experimentada, 3. folgewelt, reino de los sucesores y 4. vorwelt, reino de los predecesores. Folgewelt y Vorwelt. El futuro (folgewelt) es un mundo libre e indeterminado, el científico social puede anticipar el futuro sólo de una manera general y no resulta posible describirlo en detalle. El pasado (vorwelt) es más susceptible del análisis por el científico social, la acción de los que vivieron en el pasado está totalmente definida porque las acciones ya han ocurrido. Umwelt, son las relaciones-nosotros ya que tienen un alto grado de intimidad, va determinado según los actores estés familiarizados con las biografías personales de otros, es una relación cara a cara. Mitwelt, relaciones-Ellos aspecto del mundo social en que las personas tratan sólo con personas tipo o con grandes estructuras sociales en lugar de relacionares con actores reales. Las personas coexisten en el mismo tiempo y espacio. Conciencia: Schutz se centra en la intersubjetividad, el mundo de la vida, en las relaciones-nosotros y las relaciones-ellos, y no constituía un centro de interés ya que la creía poco importante en el mundo cotidiano.
LA ETNOMETODOLOGÍA La etnometodología es una corriente sociológica surgida en los años sesenta a través de los trabajos de Harold Garfinkel. Se basa en el supuesto de que todos los seres humanos tienen un sentido práctico con el cual adecúan las normas de acuerdo con una racionalidad práctica que utilizan en la vida cotidiana. En términos más sencillos, se trata de una perspectiva sociológica que toma en cuenta los métodos que los seres humanos utilizan en su vida diaria para sentarse, ir al trabajo, tomar decisiones, entablar una conversación con los otros. Asimismo, y a diferencia del Estructural-funcionalismo de Parsons, los actos del ser humano están en un primer plano, dejando, a las normas, leyes y demás, en un segundo, lo que induce a que los actos de los seres humanos son los encargados de transformar las leyes de acuerdo al contexto en el que viven; es decir, "las personas son activos ejecutores y productores de la sociedad a la que pertenecen" (Rosana Guber 2001). Es por ello que ha sido considerada una teoría micro e, incluso, una teoría radical dado su individualismo extremo, el uso de la etnografía y la falta de una teoría que explique cómo surgen los fenómenos estructurales de la sociedad. Los estudios etnometodológicos regularmente apelan al uso de métodos como la entrevista, la grabación y registro etnográficos, y algunas innovaciones que implican la interacción del investigador con grupos sociales específicos.
TEORÍA DEL INTERCAMBIO Y SOCIOLOGÍA CONDUCTISTA La teoría del intercambio y la sociología conductista son ambas teorías sociológicas atípicas. Lo que las hace atípicas es su orientación micro social y el hecho de tener sus raíces en teorías que se encuentran al margen de la sociología. La principal fuente de estas teorías es la psicología, específicamente el conductismo de B.F. Skinner. Nos ocuparemos principalmente de esta influencia y del modo en que da forma a las dos teorías. El conductismo constituye el hilo conductor que une la teoría del intercambio y la sociología conductista y lo que nos permite analizarlas juntas. Mientras la sociología conductista permanece en estado de pureza respecto de la influencia del conductismo psicológico, la teoría del intercambio tiene otra fuente cuya importancia ha aumentado recientemente. Analizaremos el modo en que George Homans, el principal teórico del intercambio, integró esta teoría en su enfoque fundamentalmente conductista.
SOCIOLOGÍA CONDUCTISTA
La sociología conductista, también denominada la «ciencia de la conducta», representa un esfuerzo por aplicar los principios del conductismo psicológico a cuestiones sociológicas. El sociólogo conductista se ocupa de la relación entre los efectos de la conducta de un actor sobre el entorno y su influencia sobre la conducta posterior del actor. Las aplicaciones de la sociología conductista -por ejemplo, para la modificación de la conducta- la alejan de otras teorías sociológicas, entre ellas la teoría del intercambio. Sí bien hay ejemplos como el de la escuela de las relaciones humanas en sociología industrial, cuyo objetivo es manipular procesos grupales con el fin de aumentar la productividad de los trabajadores, la sociología conductista tiene un carácter práctico y aplicado más marcado que cualquier otra teoría sociológica. El análisis anterior hace referencia a la modificación intencional y planeada de la conducta. Sin embargo, la mayoría de las modificaciones de la conducta se produce de manera no intencionada. Es decir, las personas emprenden cotidianamente acciones que modifican la conducta de otras personas.
LA TEORÍA DEL INTERCAMBIO La teoría del intercambio constituye un esfuerzo por fusionar los principios del conductismo con otras ideas y aplicar el producto resultante a las preocupaciones de los sociólogos. Aunque la teoría del intercambio existe hace muchos años. La teoría del intercambio de Homans puede considerarse, al menos en parte, como una reacción contra el paradigma de los hechos sociales y sus teorías sociológicas, sobre todo contra el funcionalismo estructural. A continuación veremos algunas definiciones del autor. Homans (1969) se enfrentó a los funcionalistas estructurales atacando directa y abiertamente la obra de Emile Durkheim, Homans admitía la idea de Durkheim de que durante la interacción emergían nuevos fenómenos. Juzgaba aceptable esta idea para los conductistas sociales, Homans adoptó la postura de que no se requiere ninguna proposición nueva aparte de las que se refieren a la conducta individual. Afirmó que «todos los ejemplos normales de fenómenos sociales emergentes pueden explicarse fácil y rápidamente partiendo de proposiciones psicológicas. La sociedad desempeña diversos papeles en el proceso de intercambio. Allí donde hay escasez, la sociedad debe intervenir para proporcionar reglas de conducta apropiadas que impidan la conducta humana destructiva. El deseo de Homans era explicar el desarrollo de la maquinaria mecánica en la industria textil y explicar así la
Revolución Industrial mediante el principio psicológico de que las personas suelen emprender acciones que aumentan sus recompensas.
TEORÍA DE LOS SISTEMAS La teoría de los sistemas apareció a mediados de la década de los setentas, llegando a su punto culminante con la obra “la sociología y la moderna teoría del sistema” de Walter Buckley. Se deriva de las ciencias duras, considerando tanto las entidades orgánicas como las mecánicas en términos de sistemas. Esta teoría ve a la sociedad como un enorme sistema constituido por una serie de partes interrelacionadas. Es necesario examinar la relación entre las partes, así como las relaciones entre el sistema y otros sistemas sociales. También se estudian las entradas que penetran en el sistema social, el modo en que la sociedad procesa esas entradas y los productos resultantes, durante la época de los setentas los sociólogos se sintieron atraídos por esta teoría, el funcionalismo estructural era objeto de numerosas criticas y parecía que esta era sus sucesora, para los sociólogos interesados en fomentar la sociología científica, pero no llego a florecer apenas se trabajo con ella teórica o empíricamente. En la publicación del libro de Buckley, Robert Lilienfeld en 1978 realiza una crítica a la teoría del sistema denunciando sus deficiencias sus pretensiones científicas su ideología implícitamente conservadora, en los últimos años esta teoría experimenta un renacimiento modesto en la obra de Archer y Bailey. INFLUENCIA DE LA TEORÍA MARXISTA Durante los últimos años de la década de los sesentas, la teoría Marxista comenzó finalmente a penetrar significativamente en las teorías sociológicas en los Estados Unidos, las razones que explican esto son: La teoría dominante, (funcionalismo estructural) era objeto de numerosas críticas, por ser muy conservadoras 1. La Sociología radical de Mills, y la teoría del conflicto estas establecieron las bases para el desarrollo de la teoría marxista.
2. En los sesentas se caracterizó por la protesta negra, el renacimiento feminista, los movimientos estudiantiles, la protesta contra la guerra de Vietnam, muchos sociólogos jóvenes se formaron en este ambiente atraídos por las ideas radicales, al principio llama la denominaron sociología radical pero esta también presento numerosos puntos flacos comparada con la teoría marxista.
Desde entonces los sociólogos vuelven a la obra original de Marx con el fin de encontrar ideas útiles para el desarrollo de una sociología marxista. TEORÍA FEMINISTA La última rama del pensamiento social radical lo constituye la Teoría feminista contemporánea, en 1920 este movimiento logra en los Estados Unidos el derecho del voto para las mujeres, 55 años después se les reconocería este derecho a los negros. Los tres factores que contribuyeron a desencadenar una nueva oleada feminista son: El clima general del pensamiento; la rabia de las activistas que se unieron en contra de la guerra y en pro de los derechos humanos; y la revuelta estudiantil para encontrarse con las actitudes sexistas de los hombres radicales y liberales que participan en esos movimientos. La experiencia de prejuicio y discriminación que sufrían las mujeres a medida que se incorporaban masivamente al trabajo asalariado y la educación superior, por esas razones, continuó expandiéndose durante los años sesenta y ochenta convirtiéndose en un fenómeno internacional.
CONCLUSIONES El interaccionismo simbólico es una de la orientaciones metodológicas que comparten las ideas básicas del proceso hermenéutico, o interpretativo. Trata de comprender el proceso de asignación de símbolos con significado al lenguaje hablado o escrito y al comportamiento en la interacción social.
La
ideología fundamental del interaccionismo simbólico, tanto teorética como metodológica, fue estructurada por Herbert Blumer con su amplia influencia, a través de la docencia, en las universidades de Chicago y Berkeley.
En las distintas nuevas teorías, vemos que surgen a partir de los años setenta, cobrando significativamente importancia en los nuevos estudios sociológicos, en estas épocas las manifestaciones masivas, la oposición a la guerra de Vietnam, los movimientos de grupos en contra del racismo las actitudes sexistas y el deseo de libertad, crearon nuevas tendencias en los modos de pensar y actuar en la sociedades muchas de estas dan inicio en los Estados Unidos para luego expandirse a el resto de los países como es Guatemala y toda Latinoamérica.
Se pudo observar que existieron diferentes opiniones de expositores de la sociología, algunos no tan conformes acerca del manejo de la teoría del intercambio, y sin embargo les cambiaron algunas funciones, entre los principales expositores que no estaba de acuerdo fue George Homans, quien criticó las explicaciones macro de la conducta social desarrolladas por pensadores como Durkheim, Parsons y Lévi Strauss. En efecto, su meta era explicar la conducta social en términos de principios psicológicos, es decir, del conductismo. Creía que podían utilizarse los principios psicológicos para explicar no solo la conducta individual, sino también las estructuras sociales y el cambio social. Pero, sin embargo a él también lo criticaron, quienes trabajan en el paradigma de los hechos sociales por ignorar las grandes estructuras. Y por parte de los que operan en el paradigma de la definición social por ignorar los procesos mentales.
BIBLIOGRAFÍA
Ritzer, George. Teoría Sociológica Contemporánea. McGraw-Hill, México, 1997. Rodríguez Bornaetxea, F.: "Etnometodología", en Reyes, R. (dir.) (2009): Diccionario crítico de Ciencias Sociales. Madrid / México, Plaza y Valdés editores. Schwandt, T.A., Constructivist, interpretivist approaches to human inquiry, en Denzin y Lincoln, 1994.