Taller I: Estructura de la Comunicación Discursiva y Funciones del Lenguaje
Emilio Cerezo. Basado en el Cap. II de la Introducción a la Lógica de Irving Copi. (4 horas) 1. LAS TRES FUNCIONES BASICAS DEL LENGUAJE En toda situación comunicativa hay como mínimo un emisor que envía uno o más mensajes a por lo menos un receptor. Quien tiene la iniciativa comunicativa es el emisor, por esto, él es quien fija la meta de su discurso: la función de todo mensaje la define el emisor; así ella depende de la intención del emisor. a) Función Informativa (o Referencial).- Es la función que tienen las frases con las que el emisor pretende indicar datos acerca de la realidad. realidad. Solo el discurso discurso informativo es verdadero verdadero o falso, falso, pues nada más él es usado para describir hechos o sucesos del mundo o para razonar acerca de él. La ciencia nos ofrece los ejemplos más claros de discurso informativo: descripciones, narraciones, comparaciones, opiniones, críticas objetivas, explicaciones, razonamientos. Una frase con función informativa es una proposición. b) Función Emotiva (o Expresiva).- La poseen las frases con las que el emisor quiere comunicar sus sentimientos. El mejor ejemplo de lenguaje en que predominan las emociones es la poesía. El poeta no busca expresar conocimiento sino actitudes subjetivas. Pero no todo lenguaje emotivo es poético. Expresamos pena, entusiasmo, pasión, admiración, temor...; es decir sentimientos, emociones, u otros estados de ánimo. Para juzgar una frase emotiva se trata de apreciar si corresponde o no a lo que el emisor siente en su interior; según eso se dice que ella es una expresión sincera y auténtica y por lo tanto, valiosa; o insincera, inauténtica, es decir, basura teatral. Así pues, el discurso discurso expresivo expresivo no es verdadero ni ni falso. Por ej., “El estudiante cuyo goce del soneto de Keats, Primera ojeada al Homero de Chapman Chapman lo siente empañado por su conocimiento histórico lector de poesía”. de que fue Balboa y no Cortés quien descubrió el Océano Pacífico es un pobre lector de Aquí pobre lector indica indica una actitud del d el autor de esta frase sobre el tema. Algunos poemas, a más de expresar afectividad, tienen un contenido informativo, una crítica de la vida; tienen un uso mixto o una función múltiple, mixta. Toda expresión de la intimidad subjetiva tiene dos componentes: i) Cuando una persona se maldice a sí misma o escribe poemas que no muestra a nadie o cuando ora en soledad, su lenguaje expresa o revela su actitud pero no está destinado a despertar una actitud similar en algún otro. ii) Cuando un orador insta a su auditorio, un enamorado corteja a su amada, una multitud vitorea a su equipo, el lenguaje pretende despertar las mismas actitudes en sus oyentes. El discurso expresivo se usa entonces, ya sea para manifestar los sentimientos propios o para despertarlos en otras personas. Por supuesto, puede ser usado simultáneamente para ambos fines. c) Función Directiva (o conativa).- Es la función que poseen las frases con cuales que el emisor busca influir en la conducta del receptor: es decir, originar, animar (o impedir) una acción manifiesta de éste; por ejemplo: órdenes, pedidos, solicitudes, consejos, recomendaciones, ruegos, súplicas, la oración religiosa a un ser superior y aun las preguntas que piden una respuesta (no las preguntas retóricas que, bajo el ropaje de una interrogación, en realidad buscan informar algo). El lenguaje directivo busca lograr resultados. Podemos disentir acerca de si una orden ha sido o no, debe ser o no obedecida; si es o no pertinente al contexto. El discurso directivo tiene cualidades similares a la verdad o falsedad del informativo: las de ser (respecto a la situación en que se emiten) razonables, adecuadas. o bien no razonables, inadecuadas. Estos problemas han de resolverse fuera del ámbito de la lógica. 2. EL DISCURSO QUE CUMPLE FUNCIÓN MÚLTIPLE (MIXTA) Un poema, una apología y una diatriba son básicamente expresivos; un sermón y una arenga militar suelen ser directivos; un tratado científico, informativo. No obstante, casi todos los usos ordenarios del lenguaje son mixtos, y la comunicación efectiva exige una combinación de funciones. Las acciones son el resultado de deseos y creencias. Los deseos son un tipo especial de actitudes. Las acciones pueden ser provocadas instigando las actitudes apropiadas y comunicando la información pertinente. Por ej., cuando sus oyentes son filántropos, usted puede hacer que q ue contribuyan con un aporte apo rte económico, informándoles de la efectividad de la ONG que usted dirige en el cumplimiento de los ,
1
resultados benéficos deseados. En tal caso, el uso del lenguaje será en última instancia directivo, pues su propósito es provocar una cierta acción. Pero, también se puede lograr que los oyentes actúen de la manera deseada, despertando en ellos un sentimiento o emoción altruista; y el lenguaje que usted use para lograr su fin será expresivo: así ese discurso tendrá un uso mixto, pues funcionará a la vez expresiva y directivamente. Se han distinguido otras funciones del lenguaje a más de las tres señaladas. Quizá la más importante es la ceremonial: saludos, discursos, documentos de estado, ritos de culto; usos que pueden considerarse mezclas de discurso expresivo y directivo, más que un nuevo género. Por ej., la charla en reuniones sociales, que sirven para manifestar y estimular la buena voluntad y la sociabilidad. El lenguaje de la ceremonia busca destacar la solemnidad de la ocasión.
Tabla con las Funciones del Lenguaje. http://www.rinconcastellano.com/tl/func_leng.html Funciones Expresiva (o Emotiva)
Elemento sobre El Que Se Centra Emisor
Contenido U Objetivo Comunicación de la subjetividad personal: sentimientos, emociones
Expresión lingüística o Marca Exclamaciones, interjecciones, interrogaciones. Lenguaje
Clases de Escritos y Lenguajes Especializados
Textos científicos. Documentos. Informes.
Cartas Personales. Diarios.
Representativa (Informativa o Referencial)
Realidad, mensaje (su contenido)
Comunicación objetiva: información
Apelativa (Directiva o Conativa)
Receptor
Comunicación para persuadir al oyente y que éste responda. Influir su
Oraciones enunciativas. Lenguaje denotativo. Imperativos. Vocativos. Afectivos
Fática
Canal
Comunicación, mantener o restablecer la relación entre hablante y oyente
Frases hechas. Interjecciones. Palabras Clave.
Aparece en textos conversacionales.
Poética
Mensaje (forma)
Comunicación que cuida la belleza del mensaje
Poesía y prosa literaria (poemas, novelas, teatro)
Metaiinaüística
Código
Comunicación para aclarar o explicar el lenguaje
Figuras literarias. Lenguaje connotativo. Oraciones enunciativas. Lenguaje denotativo
Lenguaje publicitario. Lenguaje político: discursos, mítines.
Ciencias lingüísticas.
3. LAS FORMAS DEL DISCURSO Por su forma gramatical, las oraciones se dividen en 4 categorías: formas declarativas, interrogativas, imperativas y exclamativas. Estas no pueden ser confundidas con las afirmaciones, las preguntas, las órdenes y las exclamaciones; a pesar de que estaríamos tentados a identificar la forma con la función, y así a simplificar la comunicación, pues podríamos conocer el uso o la función implícitos de un pasaje solo por su forma. Por ej., “pasé un momento muy agradable en su fiesta” es una oración decla rativa, pero su función no tiene por qué ser informativa, puede ser de tipo ceremonial o expresivo. “Me gustaría tomar un poco de café”, dirigida al
camarero que está tras la barra de un bar, no será tomada por él como un mero informe. La forma declarativa no es una indicación segura de que una oración cumple una función informativa. Las oraciones declarativas valen para formular todo tipo de discurso; y lo mismo otras formas de oraciones; como la interrogativa-. “¿No ves que vamos a llegar tarde?”, que pu ede ser una orden de apresurarse o un modo indirecto de dar información. Una frase que gramaticalmente es imperativa, como el comienzo de los documentos oficiales: “Sepan todos por la presente...”, puede no ser una orden, sino más bien un discurso informativo y expresivo. La forma exclamativa “¡Dios Santo, es tarde!” puede comunicar en realidad una orden de apresurarse; la oración “Que hermoso anillo”, proferida por una joven ante un amigo que la corteja, al pasar por la vidriera
de una joyería, puede funcionar más directiva que emotivamente. 2
Cada función de un pasaje debe juzgarse por su criterio adecuado. Sólo una frase que posea una función informativa puede ser estimada como verdadera o falsa. Si cumple una función expresiva, como sincera o insincera, valiosa o de otra manera. Para apreciar o juzgar un pasaje dado es necesario conocer la función o funciones que pretende desempeñar, que dependen de la intención del emisor del mensaje. La estructura gramatical de un pasaje suele suministrar un indicio de su función, mas no hay ninguna conexión necesaria entre ambas. Tampoco hay una relación estricta entre la función y el contenido (= lo que, en apariencia, afirma el pasaje). Ya vimos que la función de un pasaje es la que el emisor intenta darle. Respecto a un pasaje aislado, a menudo es difícil decir cuál es la función primordial que pretende llenar; el contexto (o situación) es decisivo para hallar la respuesta. Hay que distinguir entre la proposición que una frase informativa formula (denotación) y lo que su enunciación revela acerca de la persona que la profiere o la escribe (una de tantas connotaciones posibles). Por ej., la frase Está lloviendo indica que quien la emite cree que está lloviendo. Habitualmente, proferir una orden revela los deseos del que la profiere y, en circunstancias apropiadas, afirmar que uno tiene tal o cual deseo equivale a dar una orden. Soltar una exclamación de alegría pone en evidencia que quien la profirió está alegre. Así pues, no hay ninguna receta, ninguna prueba mecánica aplicable al lenguaje en general, para el propósito de distinguir el discurso informativo y demostrativo de otros tipos de discurso. 4. PALABRAS EMOTIVAS Para que una oración formule una proposición, sus palabras deben tener un significado cognoscitivo, referido a objetos o sucesos y a sus propiedades. Mas, si expresa una actitud o sentimiento, casi siempre algunas de sus palabras tienen un impacto emotivo. Entre los significados literal y emotivo de una palabra existe gran independencia. Por ej., las expresiones burócrata (negativa), empleado del gobierno (neutra) y servidor público (positiva) tienen significados literales casi idénticos, pero sus significados emotivos (entre paréntesis) son del todo distintos. Un mismo hecho u objeto denotado puede describirse con palabras que tienen impactos emotivos muy distintos por ej., los proveedores de conservas de caballa venden muchas más unidades de su producto desde que lo llaman atún. El lenguaje posee una dinámica propia, independiente de los hechos que describe. Ciertas actividades fisiológicas relativas a la reproducción y a la evacuación intestinal pueden describirse de manera neutra, usando un vocabulario médico, sin ofender al gusto más delicado; pero todos esos términos tienen ciertos sinónimos cuyo uso choca hasta a los oyentes más curtidos. Toda palabra puede adquirir un significado emotivo por asociación, pero no es necesario que esta asociación se produzca directamente con el objeto denotado por la palabra por ej., el filósofo Bertrand Russell hizo una ilustrativa broma, basada en el contraste entre el significado literal y el emotivo, al conjugar un verbo irregular como: “Yo soy firme; tú eres obstinado; el es un tonto cabeza dura.” Luego, el periódico londinense New Statesman and Nation abrió un concurso de estas conjugaciones irregulares y, entre las ganadoras, figuraban las siguientes: - Yo soy exigente, tú eres melindroso; ella es una vieja loca. - Estoy justamente indignado; tú estas fastidiado; él está haciendo un escándalo por una tontería. - Yo lo he reconsiderado; tú has cambiado de opinión; él ha retirado su palabra. La belleza de la fr ase poética: “Sobre la fenestra brillaba en pleno la luna invernal y lanzaba cálidos gules sobre el claro seno de Madeline”, surge de la elección apropiada de palabras con colorido emocional, y se esfuma si se reemplaza estas por otras palabras más neutras: “Sobre la ventana brillaba la luna llena del invierno y hacía marcas rojas sobre el tórax incoloro de Juana.” Estas líneas tienen la misma significación
objetiva, pero se ha destruido su significación emotiva. 5. EL DISCURSO EMOTIVAMENTE NEUTRO Mientras que el lenguaje emotivo es uno de los núcleos del lenguaje poético, de modo que cuando a la mayoría de las poesías se las “traduce” a lenguaje neutro pierden gran parte de su valor artístico y el resultado suelen ser frases planas, insípidas. Por otro lado, el lenguaje neutro (el que no expresa
afectividad) es valioso cuando el objetivo de nuestro discurso es la verdad de los hechos. Cuando estamos 3
tratando de informarnos acerca de lo que realmente sucede o de seguir un argumento, las distracciones pueden ser fatales -y la emoción es una distracción poderosa. Las pasiones tienden a obnubilar la razón, esta verdad se refleja en el uso de expresiones o términos tan "desapasionados" u "objetivos" como sea posible. Por lo tanto, cuando estamos intentando describir, clasificar, explicar los hechos o argumentar acerca de ellos de una manera objetiva e imparcial, referimos a ellos con términos apasionados es un obstáculo más que una ayuda. En economía, por ejemplo, es un serio problema decidir si un determinado grado de control gubernamental tendrá un efecto positivo o negativo sobre la eficiencia o productividad. Tomar decisiones sobre política económica será más difícil si el problema se explica mediante términos emotivamente coloridos como "interferencia burocrática" o "libertinaje irresponsable". En cualquier otra ciencia o en filosofía, los significados cargados de afectividad pueden producir efectos similares. En su ensayo "El dilema del determimsmo", William James defiende su deseo de evitar abordar directamente el problema de la 'libertad' sobre la base de que "sus asociaciones eulogísticas han... oscurecido todo el resto de su significado". Correctamente, él prefiere discutir el punto usando las palabras" determimsmo" e "indeterminismo" porque, afirma, "su sonido frío y matemático no tiene asociaciones sentimentales que puedan obstaculizar de antemano nuestros objetivos”.
El lenguaje emotivo no tiene nada de anómalo, ni lo tiene el lenguaje no emotivo o neutro. Tampoco las almohadas o los martillos tienen nada de malo. Todo esto es cierto; pero no quiere decir que vayamos a tener éxito si tratamos de clavar clavos con almohadas, o que podamos sentimos cómodos si tratamos de dormir apoyando nuestras cabezas sobre martillos. En consecuencia, el uso de estereotipos debe desaprobarse, porque las reacciones emocionales que ellos agitan se interponen en la apreciación objetiva de los hechos a los cuales se refieren. Este peligro es familiar para quienes elaboran consultas de opinión pública, como la Gallup o Roper. He aquí un ejemplo de la incidencia de la emotividad en la investigación: se tomó 2 grupos de personas de muestras prácticamente idénticas. El tema se refería a la utilidad de radioemisiones para el extranjero hechas por el Depto. de Estado de USA. Al grupo A se le pidió que optará entre 3 alternativas, una de las cuales era: “algunos creen conveniente explicar nuestro punto de vista, al mismo tiempo que se dan noticias.” Los que respondían SI constituían el
42,8%. Al grupo B se le formuló la pre gunta, pero de otro modo: “algunos creen conveniente incluir un poco de propaganda, al mismo tiempo que se dan noticias”. La respuesta por el SI se redujo casi a la mitad: el
24,7%. En este ejemplo se ve cómo afecta a las opiniones una palabra con resonancias afectivas. No todas las diferencias emotivas son independientes de sus significados descriptivos: algunas derivan directamente de éstos. Las diferencias que hay en nuestras actitudes hacia la educación y el adoctrinamiento, por ejemplo, se basan en diferencias reales entre las dos actividades. Si nuestro interés es de carácter científico, debemos: tanto evitar el lenguaje expresivo, como cultivar términos sin emotividad, o lo más neutro posibles. Por esto, en las ciencias físico-químicas, los términos noble y bajo para caracterizar metales han sido desplazados. El lenguaje emotivo no es en sí malo; pero cuando se busca información, hay que elegir palabras cuyos significados emotivos no nos distraigan o impidan considerar adecuadamente lo que describen. El uso descuidado del lenguaje en los argumentos da a menudo origen a falacias. Nota aclaratoria, previa al abordaje de los ejercicios que vienen a continuación. Para realizar con solvencia el oficio de analista de textos, es importante... Detectar qué tipo de discurso se presenta en el pasaje; ejemplos: (1) una única afirmación, enumeración, descripción, narración o relato, opinión, explicación, razonamiento;
(2)
pregunta, orden, directriz, recomendación, receta (u otra lista de pasos que indica un
procedimiento), sermón, arenga, consejo, petición, solicitud, ruego...; ataque, diatriba, ironía, sátira, sarcasmo, burla, insulto, chiste, alabanza, apología, felicitación... (3) 4
- En discursos de tipo (2) suele predominar la función directiva, con frecuencia unida a razones justificadoras; - y en los de tipo (3), la función emotiva; pero no necesariamente: por ejemplo, las preguntas retóricas son falsas preguntas, pues, en realidad, no reclaman una respuesta, sino que dan información bajo forma interrogativa. - Con todo, lo más difícil suele ser juzgar los discursos de tipo (1), ya que, si bien muchas veces cumplirán una función informativa, cuando incluyen gran cantidad de emotividad, es bueno “traducirlos” a lenguaje emotivamente neutro, de modo que: si, en volumen, el resultado es la mitad o menos del original, sin duda predomina en este la función emotiva; pero si el resultado es un 60% del original o más, éste posee función informativa. Ojo con el caso de las metáforas; pues hay algunas tan ricas que, al traducirlas a una expresión carente de emotividad, tienen un volumen de información expresa que es incluso mayor que el de la frase metafórica; sin embargo, otras están llenas de figuras literarias que al reducirlas a información “en limpio”, se achican enormemente. En estos casos, y en general cuando un discurso está plagado de palabrería, lugares comunes, u obviedades (tautologías), en él predomina la función emotiva y, por lo tanto, no debiera aparecer en ningún texto que aspire a presentarse como académico o científico. Pero, antes de metemos en el trabajo de someter a la lupa un escrito, hay que tener en cuenta que este análisis textual tiene como finalidad el fomentar en cada estudiante la primera condición necesaria para lograr algo de conciencia crítica: dado un texto, saber identificar los significados que EL OTRO, es decir, su autor/a ha puesto en él. En esta tarea se debe evitar, tanto la proyección de mis deseos o concepciones sobre cómo debiera haber sido ese texto como el adelantar una crítica mía prematura del mismo . Debemos entender bien el punto de vista ajeno, asumir de entrada una actitud de respeto a las intenciones y a la producción intelectual ajena (incluso la del enemigo intelectual), no solo por razones éticas, sino incluso en aras del rigor científico. Pues en toda polémica, si queremos que posea un mínimo nivel de seriedad, debemos conocer a fondo, y con el mínimo de sesgo posible, aquella postura que queremos analizar con intención crítica. Quien no tiene esta actitud inicial de tomar distancia del objeto de análisis, para captarlo -dentro de lo posible- de modo imparcial, ya ha estropeado las bases de un diálogo humana y académicamente sano. Su crítica será inevitablemente infundada. La falacia que corresponde a esta perversión del d iálogo se llama el hombre de paja (straw man, en inglés); ella consiste en “quemar vivo”, y en ausencia, no al pensamiento
del otro, sino a la imagen, ordinariamente burda y caricaturesca, que, según mis intereses teóricos o prácticos, he formado de las concepciones de mi contendiente. La destreza consistente en discriminar bien en un discurso los componentes afectivos de los puramente informativos (funciones emotiva e informativa; lenguaje emotivo y neutro) es la mejor herramienta mental para acceder a esa distancia “objetiva” (ideal similar al de la aspiración a LA VERDAD, por ser ambos imposibles de alcanzar con plenitud) que debe anteceder a la crítica intelectual. Pero existen complicaciones adicionales. Un puro análisis (intra-)textual es incompleto, pues para comprender a cabalidad un discurso debemos referirlo al contexto cultural e histórico (circunstancias socio-espacio-temporales) en el q ue fue producido. Elementos de este análisis contextual deben ser las circunstancias vitales: familiares, laborales, ideológicas, religiosas... del autor/a del texto que, sin duda, nos ofrecen pistas para entender mucho mejor los entretelones de sus ideas. Una parte privilegiada de esta investigación extra-textual, por su significado especial, recibe un nombre específico: el análisis intertextual. Y es que todos los escritos del mundo (aun los diarios íntimos de los poetas más solipsistas) tejen redes referenciales que pueden ser muy variadas (alusiones, préstamos de ideas, controversias, ahondamientos o añadiduras a una que otra línea de investigación...) con discursos preexistentes. La exploración de estas huellas y trazos, sobre todo semánticos, solo pueden llevarlo a cabo con éxito los especialistas en cierta disciplina científica, literaria o filosófica. Una vez efectuada esta complicada labor de sabueso intelectual, recién el analista textual está en capacidad de emprender una crítica seria y auténticamente científica -en el campo de que se trate.
5
DEBER I. EJERCICIOS (Irving Copi Introd. a la Lógica. Cap. II: Usos del lenguaje, pp. 58-64 y 72-75 1.- Indique la función que predomina en el párrafo: “De las muchas falsedades q ue ellos dicen, una me sorprende en especial: su afirmación de que debéis estar alerta y no permitir que os engañe la fuerza de mi elocuencia. Decir esto, cuando están seguros de que serán descubiertos tan pronto como abra mis labios y pruebe que soy algo más que un hablador, me parece la mayor de las desvergüenzas, a menos que por la fuerza de la elocuencia entiendan la fuerza de la verdad; pues si esto es lo que quieren decir, admito que soy elocuente. ¡Pero de qué modo tan diferente al de ellos!” (Platón, Apología) 2 - Dar tres conjugaciones de verbos irregulares en las que la misma actividad reciba una descripción
laudatoria en la 1ra persona, otra neutra en la 2da y otra denigratoria en la tercera. 3.- Elegir un pasaje de un escrito muy emotivo y traducirlo a un lenguaje puramente informativo, en el que las significaciones expresivas queden reducidas al mínimo.
II. En cada pasaje lingüístico , ¿qué función del lenguaje predomina con mayor probabilidad? 1.- Una guerra civil es como el calor de una -fiebre; pero una guerra extranjera es como el calor del ejercicio y sirve para mantener el cuerpo en salud. FRANCIS BACON, Ensayos 2.- Después de la libertad y la justicia, viene en importancia la educación popular, sin la cual no puede mantenerse de manera permanente ninguna libertad y ninguna justicia. JAMES A. GARFIELD 3.- La educación es fatal para quien quiera que tenga una chispa de sentimientos artísticos. La educación debe estar limitada a los empleados de oficina, y aun a ellos los lleva a la bebida. ¿Aprenderá el mundo alguna vez que nunca aprendemos nada que ya no sepamos de antemano? GEORGE MOORE, Confesiones de un joven 4.- El lenguaje es el arsenal del espíritu humano y contiene al mismo tiempo los trofeos de su pasado y las armas de sus futuras conquistas. SAMUEL TAYLOR COLERIDGE 5.- El lenguaje, el lenguaje humano, a fin de cuentas, apenas es mejor que el graznido y el cacareo de las aves de corral, y otras manifestaciones de la naturaleza bruta... a veces no tan adecuada. NATHANIEL HAWTHORNE, Cuaderno americano 6.- ¡El lenguaje! La sangre del alma, señor, en la cual corren nuestros pensamientos y de la cual surgen. OLIVER WENDELL HOLMES, El profesor durante el desayuno 7.- Los malos obreros, que constituyen la mayoría de los operarios en muchas ramas de la industria, son decididamente de la opinión de que los malos trabajadores deben recibir los mismos salarios que los buenos. JOHN STUART MILL, Sobre la libertad 8.- La guerra es la mayor maldición que pueda afligir a la humanidad; destruye la religión, destruye los Estados, destruye la familia. Cualquier flagelo es preferible a ella. Martín Lutero, Charlas de sobremesa 9.- Un periodista sólo puede mirar a un político de una manera: desde abajo. Frank H. SIMONDS 10.-Debemos mantenemos todos juntos o seguramente nos colgarán a todos separadamente. BENJAMTN FRANKLIN, (a los otros firmantes de la Declaración de la Independencia) 11.- Comprendo muy bien el respeto de la humanidad por la guerra, porque ésta interrumpe el estancamiento chino de la sociedad y demuestra los méritos personales de todos los hombres. RALPH WALDO EMERSON, El conservador 12.- La paz eterna es un sueño y ni siquiera un sueno hermoso. La guerra es una parte del orden del 6
mundo establecido por Dios. En ella se desarrollan las más grandes virtudes del hombre: el valor, la abnegación, el sentido del deber y el autosacrificio. Sin la guerra, el mundo se hundiría en el materialismo. HELMUTH VON MOLTKE 13.- La guerra aplasta Con su talón sangriento toda justicia, toda felicidad y todo lo que es similar a Dios en el hombre, En nuestra época no puede haber paz que no sea honorable; por tanto no puede haber guerra no que no sea deshonrosa. CHARLES SUMMER 14.- Creo que en la actualidad la guerra produce más bien que mal.
JOHN RUSK1N
15.- Un poco de filosofía inclina el espíritu del hombre al ateísmo; pero la profundización de la filosofía lo lleva a la religión. FRANCIS BACON, Ensayos 16.- La creencia en la existencia de Dios, es tan infundada como inútil. El mundo nunca será feliz hasta que el ateísmo no sea universal. J. O. LA METTRIE, L'Homme Machina 17.- Casi todos los ateos conocidos han sido hombres de conducta sumamente relajada y vil. J. P. SMITH, Enseñanzas sobre la teología cristiana 18.- El hombre investiga con escrupuloso cuidado el carácter y la ascendencia de sus caballos, vacas y perros antes de aparearlos; pero cuando se trata de su propio matrimonio, rara vez o nunca tiene tal cuidado. CHARLES DARWTN, El origen del hombre 19.- La historia de la ballena que se tragó a Jonás (si bien una ballena es bastante grande como para poder hacer eso) linda mucho con lo maravilloso; pero se habría acercado más a la idea de milagro si Jonás se hubiera tragado a la ballena. THOMAS PAINE, La Edad de la Razón 20.- La guerra tiene el profundo significado de que por ella se mantiene la salud ética de las naciones y se descartan sus objetivos finitos. Y así como los vientos que barren el océano impiden la corrupción que resultaría de su calma perfecta, así también la guerra protege el pueblo de la corrupción que le engendraría una paz permanente. GEORG HEGEL, Filosofía del derecho 21.- Tienes ante ti una desdichada alternativa, Elizabeth. Desde el día de hoy deberás ser una extraña para uno de tus padres. Tu madre no volverá a verte si no te casas con el señor Collins, y yo no volveré a verte si lo haces. JANE AUSTEN, Orgullo y prejuicio 22.- De este hombre Pickwick es poco lo que diré, el tema presenta pocos atractivos; y yo, caballeros, no soy la persona, ni sois vosotros, caballeros, los hombres que se deleiten en la contemplación de una repugnante carencia de corazón Y una sistemática villanía. CHARLES DICKENS, Papeles de Pickwic 23.- Elogiáis a los hombres que agasajaban a los ciudadanos y satisfacían sus deseos, y la gente dice que ellos han dado grandeza a la ciudad, sin ver que la situación atrofiada y ulcerada del Estado debe atribuirse a esos viejos estadistas; pues ellos han llenado la ciudad de puertos, diques, murallas, rentas y todo lo demás, pero no han dejado cabida para la justicia y la templanza. PLATÓN, Gorgias
7