”
“
Año de la Inversión Inversión para el Desarrollo Rural Rural y la Seguridad Alimentaria Alimentaria
INFORME: LIBRO, SOMOS MÁS QUE FIESTA Y SIESTA DE ROLANDO ARELLANO CURSO Seminario III DOCENTE DAVID OMAR FERNANDO CASUSOL MORALES Estudiante:
Mendoza León, Anthony
CICLO X
INTRODUCCIÓN Todo lo que conocemos acerca de nuestra cultura y nuestra realidad es producto de los que se nos ha enseñado y mostrado desde una perspectiva, que casi en su totalidad, no es la nuestra, es decir que nuestra percepción de nosotros mismos es una imposición de aquellos que nos han estudiado siempre exteriormente, véase la historia, los datos geográficos, la cultura en los medios, etc. Arellano en su libro “Somos más que fiesta y siesta”, rompe con esa percep ción que tenemos desmintiendo doce mito s que nos estereotipan y nos muestra una “realidad más nuestra” mostrándonos las ventajas que creíamos no tener y formando un concepto nuevo de nosotros mismos.
1. Mito 1 América Latina no existe Esta es una idea muy arraigada en el mundo entero, esa de que América Latina no es más que un conglomerado de países sin ninguna otra característica en común más que la de ser países pobres pertenecientes al continente americano. Arellano nos muestra que América Latina es una de las regiones más homogéneas que existen y por consiguiente más homogénea que Europa y Asia por que los países que la componen comparten características culturales muy similares entre sí como el idioma (aquí predominan solo dos mientras que en Europa más de veinte), la religión (aquí predomina solo una, la católica) y una historia en común con antepasados y sucesos históricos similares que además ocurrieron casi al mismo tiempo (nótese las independencias y los militarismos). Aquí cabe contrastar estas “Diferencia” ¿Qué es más parecido? Un español y un Griego o un
mexicano y un peruano
2. Mito 2 América Latina es Pequeña Es un hecho bastante interesante y es que resulta que se tiende a subestimar la extensión del territorio latinoamericano porque estamos acostumbrados a usar un poco preciso mapamundi de Mercador, que al poner a Europa casi al centro deforma la percepción del tamaño de los paises Utilizando uno más objetivo vemos como América Latina tiene un tamaño considerablemente mayor con respecto a otras regiones del mundo. Esta observación se refuerza con los datos estadísticos de las extensiones territoriales en el mundo.
Extensión Territorial 12000000 9596961
10000000
8514877
8000000 6000000 4000000 2000000
1285000
1138914
505370
643801
243610
España
Francia
Reino Unido
51100
283561
Brasil Colombia Costa Rica
Ecuador
0 China
Peru
3. Mito 3 América Latina es rural Luego se toca el concepto de que América Latina es un región predominantemente rural por que la imagen o estereotipo que se tiene del latino es la de un campesino sobreviviendo de lo que produce su tierra y que la mayoría de países solo tiene una ciudad importante basado en el modelo demográfico de Francia y al cual se nos impuso. Arellano aquí muestra cifras que muestran que en el último medio siglo América Latina ha pasado de ser sema rural a ser más urbana que Europa y Asia con un 79% de su población viviendo en las ciudades gracias a las migraciones internas.
4. América Latina está sobre poblada El siguiente mito nos dice que América Latina es una región sobrepoblada por que las tasas de fecundidad en nuestra región son muy altas lo que en parte explica nuestro subdesarrollo ya que hay muchas personas para pocos recursos y a la vez alimenta el estereotipo de una familia latina pobre y muy numerosa. Esta percepción pudo haber sido valida muchas décadas atrás pero en la actualidad gracias a la educación y los programas de control la tasa de fecundidad en nuestra región ha disminuido dramáticamente en las últimas décadas, siendo ahora menor a la tasa promedio mundial y situándose alrededor de dos hijos por mujer. Por otra parte, los países latinos tienen una baja densidad poblacional, similar a la de EEUU y muy por debajo de los niveles de Europa y Asia.
5. América Latina tiene muy poca población Esta concepción apoya en la idea de que América Latina, comparada con China o EE.UU. no es atractiva para los inversionistas por tener pocos habitantes o ser un mercado “pequeño”.
Arellano nos Expone que América Latina tiene un enorme potencial ya que en el futuro se beneficiara de un “bono poblacional” (hoy hay muchos jóvenes y pocos ancianos lo que en un futuro nos hará altamente productivos) a diferencia de Europa en donde progresivamente irán sufriendo por la creciente falta de mano de obra y el envejecimiento de su población
Estas cifras fueron extraídas del fondo poblacional de las naciones unidas, Nótese que mientras Europa tiene una población joven (15 – 24 años de edad) de 12.8 millones américa latina cuenta con un población joven de 109 millones los cuales serán la futura fuerza económica.
6. América Latina es machista Esta idea viene del concepto de hombre latino que se tiene y se refuerza con los erróneos métodos para medir la participación activa de la mujer, los cuales son válidos para los países europeos y Norteamérica pero no para latino américa (la diferencia de ingresos, tasa de maternidad, la participación laboral, etc.) Para rebatir esta idea se muestran datos y cifras que nos dicen que casi la mitad de la PEA en el Perú está compuesta por mujeres en la actualidad y que hay tantas mujeres como hombres con educación secundaria o superior. A demás de esto se señala un hecho muy interesante y es que según estudios anteriormente realizados dentro de América Latina, en una familia “machista” (en donde la
mujer se encarga de la casa mientras que el marido trabaja afuera) la mujer, aparentemente, tiene mayor poder de decisión sobre cómo se gasta el dinero ya que ella decide sobre varios aspectos del gasto como la comida, los artefactos y la ropa) mientras que el hombre solo decide sobre pocos pero importantes aspectos como el de la banca.
7. Los latinoamericanos son flojos Es cierto que el estereotipo del latino flojo y alegre que solo va de fiesta en fiesta está muy extendido alrededor del mundo y aquí Arellano nos da a entender que esto se debe, en parte, a mediciones que no toman en cuenta las diferencias entre el costo de vida de los países y que como resultado los países desarrollados salen favorecidos y al hecho de que el sector informal, de que es bastante extendido en los países pobres no es tomado en cuenta a la hora de determinar cuánto ha producido un país. Esto tiene sentido ya que si uno usa estadísticas más realistas (como el “PBI real” o el “PBI.PPA per-cápita” en donde se eliminan las distorsiones generadas por el costo de vida en Europa y américa latina) se aprecia que América Latina no esta tan detrás de los países desarrollados como se cree y que si se toma en cuenta la importancia del sector informal en nuestras economías, la brecha entre los países desarrollados y nuestra región se reduce aún más.
8. La mezcla cultural de América Latina explica su subdesarrollo El mito a continuación hace alusión a una percepción bastante extendida tanto fuera como dentro de nuestra región y esta nos dice que debido a nuestro mestizaje racial y cultural somos menos desarrollados que nuestros vecinos del norte (Estados Unidos y Canadá). Más aun, también se dice que los países latinos con menor mestizaje son los más desarrollados como es el caso de Chile y Argentina. Este mito no tiene ningún sustento ya que la realidad como las nuevas clases sociales emergentes, permiten un crecimiento económico.
9. Los latinoamericanos son poco educados El siguiente “mito” hace alusión al hecho de que los latinos estudian menos que sus pares de los
países desarrollados y según las cifras que expone el libro, a pesar de algunos sesgos de medición que suelen tener estas, los latinos están relegados en este aspecto (los latinos tienen menos años de escolaridad en promedio que sus pares de los países ricos) aunque esto está cambiando para bien ya que cada vez aumentan los años esperados de escolaridad en la región (hoy se espera que los niños estudien muchas más horas que sus padres o hermanos mayores). Arellano propone analizar también el “analfabetismo funcional” (nos dice si una persona entiend e o no lo que lee) y resulta que muchos países desarrollados se comportan tan mal o peor en este aspecto que los países latinos como es el caso de Italia.
10. América latina no es democrática Se tiende a pensar que nuestra región no es democrática por las décadas de caudillismo político, cortos periodos democráticos e innumerables dictaduras que han azotado a cada país de nuestra región y los libros de historia parecen reforzar esta del estereotipo del “gobierno bananero”. Sin embargo, Arellano señala que en los últimos años esto ha venido cambiando para bien y que en la actualidad, sorprende saber que a excepción de Cuba y Venezuela, toda la región, aparentemente, vive en democracia. Si bien hay muchos gobiernos de izquierda, estos han ido moderándose permitiendo ser democráticos.
11. América Latina tiene mucha desigualdad económica El siguiente mito nos dice que existe mucha desigualdad económica en América Latina estadística como el coeficiente de desigualdad de Gini y la diferencia entre los niveles de pobreza urbana y rural refuerzan esta idea. A demás, como consecuencia de esta marcada desigualdad se tiende a pensar que en América Latina no existe una clase media - característica típica de los países pobres o que esta es muy reducida; es decir, nuestra sociedad con respecto a la distribución de la riqueza tiene una forma piramidal mientras que en los países desarrollados esta tiene la forma de un
rombo (los inversionistas prefieren a los países con una amplia clase media) Arellano demuestra que la clase media en América Latina ha crecido considerablemente a tal punto de que en la actualidad y por lo menos en las zonas urbanas, las sociedades tienen ya la forma de un rombo, (con pocos ricos, pocos pobres y muchas personas con ingresos medios) lo que nos pone casi a la par de la forma que tiene la distribución de la riqueza en los países ricos.
12. América Latina es muy pobre América Latina siendo el 85.1% de la población posee solo el 36% de la riqueza mundial mientras que los países desarrollados, siendo tan solo 14.9% poseen el 64% de la riqueza. Es decir, somos inmensamente pobres Pero la realidad muestra lo contrario pues no lo somos en la magnitud que muestran estas cifras ya que estas se elaboraron usando el “PBI nominal” que no toma en cuenta
el costo de vida o nivel de precios de los países. Si usamos en cambio, mediciones más exactas como el “PBI real” o el “PBI.PPA”, obtenemos
resultados más realistas que nos siguen indicando que los latinos somos pobres pero no tanto como se piensa. Pero hay otros factores que afectan nuestra percepción sobre cuán pobre es un latino Arellano nos dice que estos van desde el hecho de que ni el sector informal (enorme en América Latina y pequeño en países desarrollados) ni la producción para el autoconsumo son medidos en el PBI a que el trabajo de la mujer dentro de la casa tampoco es tomado en cuenta para su elaboración. Por estas razones Arellano sugiere usar indicadores “más realistas” como el Índice de desarrollo humano que corrobora la idea de que los latinos si bien no estamos en las mismas buenas condiciones que la de los países desarrollados, tampoco estamos tan mal como uno podría suponer.
CONCLUSIÓN Arellano nos dibuja un panorama optimista partiendo de cifras reales en el cual tenemos más oportunidades para nuestro desarrollo. También es un reflexión para dos puntos importantes el primero que debemos comenzar aprender y escudriñar nuestra propia realidad con nuestros propios métodos una cultura más “ Latino centrista” y segundo que es hora de explotar nuestra propia riqueza y dejar que nos la sigan extrayendo.
