Heinrich Daath

ASTROLOGÍA MÉDICA

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HEINRIC HEINRICH H DAATH DA ATH

 ASTROL  A STROLOGÍA OGÍA MÉDICA

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Todo está en el Universo, en el que, algunos hombres han hallado la dicha, mientras que otros soportan crueles enfermedades. enfermedades.

GOWER

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Todo está en el Universo, en el que, algunos hombres han hallado la dicha, mientras que otros soportan crueles enfermedades. enfermedades.

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1. LOS ELEMENTOS BÁSICOS Las bases de todas nuestras investigaciones descansan en el círculo zodiacal y en los cuer-pos planetarios: Aries Tauro Géminis

Cáncer Leo Virgo

Libra Escorpión Sagitario Sagitario

Capricornio Acuario Piscis

Éstos se hallan divididos en: Cardinales: Aries, Cáncer, Libra y Capricornio. Fijos: Tauro, Leo, Escorpión y Acuario. Comunes: Géminis, Virgo, Sagitario y Piscis. Fuego: Aries, Leo y Sagitario. Tierra: Tauro, Virgo y Capricornio. Aire: Géminis, Libra y Acuario. Agua: Cáncer, Escorpión y Piscis.

En primer lugar, existe una analogía, simpatía o comunión entre cada división zodiacal y una determinada zona del cuerpo. Su localización es amplia aunque marcadamente definida. El niño, en la matriz, es un epítome del duodenario zodiacal. Al nacer, las divisiones celestes ya vienen determinadas. En lo sucesivo, todos los atributos de tales divisiones están comprendidos dentro del cuerpo que se convierte en un exponente del Zodíaco. Este Zodíaco, el macrocosmos, está concentrado en el microcosmos de la humanidad. Gracias al conocimiento de esta analogía existente, es posible en astrología, relacionar los efectos de uno en términos del otro o viceversa para deducir leyes y hacer predicciones, aunque estas últimas no son hechas hasta que, en el tema natal, no se han hallado varias pruebas que lo confirmen. Las áreas mencionadas del cuerpo se resumen de este modo: Aries, la cabeza; Tauro, el cuello; Géminis, los brazos y pulmones; Cáncer, la cavidad torácica y los pechos; Leo, el corazón y la espalda; Virgo, el abdomen y la región umbilical; Libra, los riñones y la región lumbar; Escorpión, los genitales; Sagitario, las caderas y los muslos; Capricornio, las rodillas; Acuario, las piernas y tobillos; Piscis, los pies y dedos de los mismos. Debe saberse que el orden seguido por estas zonas sigue la progresión de los signos del Zodíaco. Si las articulaciones del cuerpo fuesen lo suficientemente flexibles como para permitir que todo el cuerpo se curvara hacia atrás, hasta permitir que los pies llegaran a la cabeza, la analogía sería perfecta; o de otro modo, si se suponiera al Zodíaco como algo que se pudiera recortar o partir a través de cada signo para allanarlo luego, su forma podría imitar al organismo humano. En este caso, la cabeza es el comienzo de esta secuencia y los pies el final. En el Kalapurusha, o el Gran Señor del Universo, estos signos son Aries y Piscis y, naturalmente, su situación en el firmamento es de continuidad: uno después del otro debido a esta disposición circular. 4

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Los cuerpos planetarios viajan a través de los signos del Zodíaco y, por las alteraciones que producen, provocan cambios armónicos en el organismo y en la mente, o bien desórdenes de todo tipo. Cada planeta también está íntimamente vinculado con uno o más signos del Zodíaco, demostrando una afinidad natural a través de los mismos. Así, el Sol tiene afinidad con Leo; la Luna, con Cáncer; Mercurio, con Giéminis y Virgo; Venus, con Tauro y Libra; Marte, con Aries y Escorpión; Júpiter, con Sagitario; Saturno, con Capricornio; Urano, con Acuario; y Neptuno, con Piscis; siendo éstos los respectivos swakshetras, domicilios de los planetas citados. Pero los planetas también tienen atributos específicos. Los que aquí nos conciernen son detallados del siguiente modo: Sol  Luna  Mercurio  Venus  Neptuno  Marte   Júpiter  Saturno  Urano 

Vital Nutritiva Nervioso Linfática Comatoso Inflamatorio Pletórico Crónico Espasmódico

Aunque de origen tenemos algo más que el alfabeto de la Astrología Médica, éste aparece como si sólo pudieran extraerse del mismo algunas palabras o alguna frase. Por ejemplo, si decimos Marte en Aries, fácilmente podremos deducir mucho acerca de la persona en cuyo horóscopo ocurre esta circunstancia: temperamento altamente excitable, superactividad del cerebro, riesgo de fiebres cerebrales. Otro ejemplo sería Urano en Cáncer: calambres en el estómago, sería un enjuiciamiento rápido. Con Mercurio presente en Aries podríamos diagnosticar: neuralgia facial; con Venus en Acuario: venas varicosas, etcétera. Tales diagnósticos no se basan sobre un programa de estudio que nos prometa una lectura fácil y correcta para que pueda ser aceptada como válida, y esto se demostrará en las páginas siguientes, aunque tampoco significa que debamos inhibirnos o sentirnos temerosos frente una prosecución metódica e imparcial del tema a estudiar.

2. REGENCIAS ANATÓMICAS DE LOS SIGNOS Aries Este signo representa la cabeza, con todos los actos y reacciones de esta región anatómica. Aunque sólo se trata de una división aproximada, el cráneo y la cara se hallan igualmente comprendidos en su dominio. Significa energía, impulso mental externo, base de la actividad corporal a través de un exceso de energía o fuerza de vida, inquietud, variabalidad. De naturaleza caliente y seca, estéril e inflamatoria. 5

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Huesos principales: Este signo rige los del cráneo y la cara. No obstante, los huesos nasales están bajo el dominio de Escorpión. Músculos: Incluidos los frontales, occipitales, elevadores y depresores de las mandíbulas, cigomáticos, temporales, bucinadores. Arterias: Carótidas internas y temporales. Venas: Cefálica. Influencia mórbida: Se muestra en la epilepsia, dolores de cabeza, varias clases de enfermedades eruptivas que afectan la cabeza y la cara, alopecia, fiebres cerebrales, vértigo, neuralgia, congestiones cerebrales, encefalitis.

Tauro Este signo significa soporte, conexión, resistencia. Las partes anatómicas comprendidas bajo su gobierno son: el cuello, el oído y la faringe, incluyendo las trompas de Eustaquio, la úvula, las amígdalas, la parte superior del esófago, el paladar, las glándulas tiroides, las parótidas y las cuerdas vocales. La zona de Tauro comienza debajo de la porción occipital del cráneo, por detrás, y bajo la mandíbula inferior, por delante. El cerebelo y la base del cerebro están bajo la dependencia de Tauro. Huesos principales: Este signo domina todas las vértebras cervicales. Músculos: Esterno-frioides, mastoides, trapecio, esterno-mastoideo, estilofaríngeo, esplénico, largo, escaleno, biventres, cervical, cervicis espinal. Arterias: Carótida externa y arteria «basilar». Venas: Occipitales, yugulares, y las que se corresponden con las glándulas tiroides. Influencia mórbida: Difteria, dolores de garganta, bocio, lobanillo, angina, crup, hinchazones glandulares del cuello, paperas, apoplegía, sofocaciones, angina gangrenosa, escrófula, laringitis, pólipos, abscesos, estrangulación.

Géminis Este signo representa flexibilidad, dispersión, sensación, sutileza y comunicación. Está asociado con las manos, los nervios y pulmones (incluyendo la tráquea y los bronquios). Los nativos de Géminis están sujetos, en gran manera, a diversos tipos de enfermedades nerviosas. Su dominio externo comienza en los hombros y abarca enteramente los brazos y manos, desde la clavícula hasta las falanges de los dedos. Es probable que rija alguna otra parte del cuerpo no mencionada, pero como es un signo aún desconocido, no sabemos cuál. La oxigenación de la sangre es una función principal del tercer signo. I,a glándula timo y los capilares también están gobernados por Géminis. Huesos principales: Clavícula, escápula, húmero, radio, cubito, huesos del carpo y metacarpo, costillas superiores. Músculos: Deltoides, bíceps, supinator del radio, subclavio, tríceps, serrato menor, pectorales, palmares. Arterias: Subclavia, braquial, bronquial derecha e izquierda, intercostales, radiales, cubitales. Venas: Pulmonares, basílicas, subclavias, acigos, venas del limo y mediastino. 6

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Influencia mórbida: Bronquitis, consunción pulmonar, enfermedades nerviosas, neumonía, pleuresía, fractura de los brazos.

Cáncer La influencia de este signo da un carácter nutritivo y fructífero. Su cualidad es húmeda, receptiva, transformadora, oculta y metamórfica, pero contiene escasa vitalidad. Actúa sobre el estómago y los procesos de quimificación. Los movimientos peristálticos del estómago están gobernados por Cáncer, y los a antiperistálticos por el signo opuesto, Capricornio. Fue por esta razón (aunque se cree que no lo sabían bien), que los astrólogos de la antigüedad aseguraban que los medicamentos no debían ser tomados cuando la Luna ocupaba esta última parte del duodenario. Náuseas y vómitos se asocian, generalmente, con el signo de Capricornio. Cáncer gobierna toda la cavidad torácica (en sentido general), el pecho, las axilas, la región epigástrica, los senos, los conductos torácicos, el páncreas, y el territorio de los ovarios. Huesos principales: Esternón, cartílago intercostal y parte de las costillas. Músculos: Diafragma, intercostales. Arterias: Axilares, diafragmáticas, mediastinas posteriores y arterias esofágicas. Venas: Diafragmática, gástrica, gastro-epiploica, mamarias. Influencia mórbida: Trastornos digestivos, catarro gástrico, hidropesía, toses, cáncer, cardiopatías, eructos, dipsomanía, caquexia, clorosis.

Leo Leo representa el corazón físico del organismo. Significa la potencia vital, el calor, la vehemencia, el intercambio y la generación. «Sol et horno generant hominem»; por este motivo el signo solar y el equivalente a la Casa quinta de la carta natal conciernen a la descendencia. La columna vertebral, la médula espinal y los nervios espirales están bajo la dependencia de este signo. La esfera de Leo es, pues, vital, extensiva y bien asentada. Huesos principales: Vértebras dorsales. Músculos: Largos y anchos dorsales, los transversales, las interespinales. Arterias: Aorta, coronarias anterior y posterior. Venas: Vena cava y coronarias. Influencia mórbida: Enfermedades del corazón en sus varias formas, palpitaciones, síncope, fiebres, meningitis espinal, átaxia locomotriz, aneurismo, angina de pecho.

Virgo Es el segundo signo de los comunes y sus cualidades son más bien nerviosas y estériles. Está asociado con los intestinos, especialmente con el duodeno, yeyuno e fleo. Virgo sin embargo concierne a la quilificación, del mismo modo que Cáncer a la quimificación. 7

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Absorción y asimilación, selección y utilización son las funciones de Virgo. La preparación y absorción del quilo son, con suma frecuencia, funciones obstaculizadas en las personas pertenecientes a este signo, o en los que tienen uno de los luminares afligidos en Virgo. Gran afinidad con la higiene, la dieta y la sanidad. Otras regiones bajo el gobierno de este signo son el mesenterio, el peritoneo, el bazo y el sistema nervioso simpático. Músculos: Oblicuo y transverso del abdomen, recto piramidal, diafragma (junto con Cáncer). Arterias: Gástrica, mesentéricas superior e inferior. Venas: Porta, hepática, umbilical, intestinal. Influencia mórbida: Cólicos, disentería, diarrea, fiebre entérica, cólera, trastornos de la digestión intestinal (neuralgia del intestino).

Libra Es el tercer signo cardinal, representa equilibrio, destilación, sublimación, filtración. Las partes gobernadas son: la región lumbar en general y los riñones en particular. La palabra griega para los riñones, nephros, parece provenir de un verbo griego que significa: desplegarse, extenderse como la lluvia. Los riñones expulsan o destilan la orina de las papilas dentro de la pelvis renal. Los antiguos alquimistas simbolizaban o sublimaban las materias bajo el influjo de Libra, de modo que Mercurio en Libra es el Mercurio sublimado. El signo de Libra se sobreentiende como sublimare o sublimar. Huesos principales: Columna lumbar. Músculos: Cuadrado lumbar, sacrolumbares. Arterias: Suprarrenal, renal, lumbar. Venas: Renal, lumbar. Influencia mórbida: Nefritis, enfermedad de Bright, neuralgia de los riñones, supresión de orina, falso iscuria.

Escorpión Escorpión representa la procreación, readaptación y concierne a todo lo relativo a la reproducción de los procesos vitales. Ejerce un dominio especial sobre los órganos sexuales. Las partes principales que rige son: la pelvis renal, la vejiga, los uréteres, la uretra, los conductos excretores del testículo, las glándulas de Cowper, la próstata, la región ilíaca de las ingles, la bilis, el recto, la curvatura sigmoidea del colón (probablemente, todo el colon), el mesocolon. Frecuentemente las enfermedades de Escorpión implican la espalda, el corazón y la garganta. Castración (Escorpión), afecciones de la voz (Tauro). Las glándulas parótidas (Tauro) con frecuencia son afectadas sinónimamente con ciertas enfermedades de Escorpión, tales como los bubones. La exantema crónica de la garganta, enfermedades de las fosas nasales (Tauro), comúnmente acompañadas de sífilis (Escorpión). Hay que distinguir entre la influencia de Libra y Escorpión en ciertas enfermedades. Un trastorno aparente de Libra puede haber sido provocado por Escorpión. Por ejemplo: 8

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la supresión de orina y retención de la misma son dos casos diferentes: la primera es una enfermedad de Libra, que ocurre cuando los riñones, por alguna razón, no segregan la orina; la última es escorpiniana. La orina, debidamente segregada por los riñones, es retenida por alguna causa en la vejiga. El autor ha encontrado la regencia de las partes gobernadas por Libra y Escorpión, representadas en el diagrama de la figura 1. Las arenillas y los cálculos renales pueden ser debidos más a Escorpión que a Libra, ya que es en la pelvis del riñón donde le forman los cálculos, parte que pertenece al gobierno de Escorpión. A

A

Figura 1 La letra A de la figura 1 representa los ríñones. La parte sombreada representa la sustancia medular y cortical. Esta región pertenece a Libra. La parte blanca es la cavidad de la pelvis, dominada por Escorpión. Los restantes órganos que se muestran son: C los uréteres; B la vejiga; y D la uretra; todos éstos regidos por Escorpión. Huesos principales: Tuberosidad del Isquión, anillo pélvico, sínfisis púbica. Músculos: Cremasteres, esfínteres y elevadores del ano, erectores del pene y del clítoris, esfínteres de la vejiga. Arterias: Ilíaca interna. Venas: Espermática, mesentérica, cólica, hemorroidal. Influencia mórbida: Arenillas, piedras, roturas, fístulas, almorranas, priapismo, escorbuto, gonorrea, leucorrea, desórdenes catameniales, vaginitis, uretriris, sífilis, afecciones del cordón espermático, de la ingle, etcétera.

Sagitario Sagitario representa la extensión de las facultades sensitivas por el significado de transferencia de lugar a lugar. En comparación, Géminis sólo alcanza con las manos y por tanto, tiene una relativa y limitada esfera de acción y sensación. El noveno signo se identifica con 9

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el sistema locomotor de la cadera y del muslo. Siendo uno de los signos comunes, posee algún dominio sobre los pulmones y los nervios. Un rasgo característico de Sagitario es su especial facilidad en producir heridas con armas de fuego y padecer caídas o lesiones producidas por caballos. Huesos principales: íleo, fémur, vértebras coxígeas y sacras. Músculos: Psoas ilíaco, pectíneo, sartóreo, recto, cuadríceps, glúteos (formando las nalgas). Arterias: Ilíaca externa, femoral, sacra. Venas: Sacra, ilíacas. Influencia mórbida: Ciática, entérica, reumatismo, coxalgia, fracturas femorales de la cadera, gota.

Capricornio Capricornio significa limitación, induración, nucleolación, servitud y frugalidad. Es de naturaleza fría, seca y estéril. Así como Cáncer gobierna las superficies mucosas internas, Capricornio actúa sobre el organismo exterior, especialmente sobre la epidermis. Las articulaciones también están bajo su regencia, especialmente las de la rodilla. Huesos principales: Rótula. Músculos: Ligamento rotuliano, poplíteo. Arterias: Ilíaca externa, poplítea. Venas: Poplítea, safena externa. Influencia mórbida: Enfermedades de la piel, reumatismo articular, gota, histeria, luxación de la cabeza de la tibia, urticaria, impétigo, pruritos, eccema, lepra, sinovitis.

Acuario El último de los signos fijos regula la eliminación del ácido carbónico del cuerpo y de sus productos. Tiene una considerable influencia sobre la sangre y su circulación, especialmente cuando se producen trastornos mórbidos, envenenamientos de la sangre, oxigenación incompleta. Gobierna las piernas, las pantorrillas y los tobillos. Huesos principales: Tibia y peroné, maleólos interno y externo. Músculos: Tibial, peroneo, tendón de Aquiles, soleo. Arterias: Tibial. Venas: Safena interna. Influencia mórbida: Luxaciones y roturas de los tobillos, hidropesía cardíaca, anemia, tobillos hinchados, calambres, debilidad cardíaca, enfermedades espasmódicas y nerviosas, envenenamiento de la sangre.

Piscis

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Piscis es húmedo, linfático, plástico, tórpido, frío, y tiene una especial acción relajante y reblandecedora sobre los tejidos que producen derrames de flema y mocos. Afecta a los pulmones con procesos consuntivos cuando el Sol está presente en este signo. Los que tienen la Luna en Piscis generalmente cogen resfriados y enfriamientos con tendencia a atacar los pulmones. Los pies y los dedos de los pies están gobernados por Piscis. La matriz y los órganos sexuales están influenciados por él, pero más particularmente cuando se produce una infección sifilítica. Músculos: Extensor corto y flexor corto de los dedos del pie, abductores del dedo gordo y del pequeño, flexor corto del dedo gordo, flexores accesorios de los dedos. Arterias: Plantares interna y externa, tarsal, metatarsal. Venas: Todas las del pie. Influencia mórbida: Descargas mucosas, gonorrea, gota, juanetes, deformaciones de los pies y de los dedos de los pies, fríos y cólicos producidos por pies fríos, hidropesía, reblandecimiento del tejido glandular, alcoholismo, derrame de humores.

3. PRINCIPIOS PLANETARIOS Y SUS INFLUENCIAS Aunque hemos ascendido un peldaño más en nuestros conocimientos, todavía no se han solucionado nuestras dificultades. La lista de enfermedades dadas en el capítulo precedente es solamente un corolario ordenado por zonas. Aunque la presentación anterior es correcta y ajustada, debido a que los agentes incipientes o los causantes de desórdenes mórbidos en el organismo pueden ser de varios grados de fuerza y efecto, deberemos fijarnos en otros factores para que nos ayuden en el análisis. Por este motivo, es evidente que una enfermedad inflamatoria y congestiva puede manifestarse en un mismo órgano del cuerpo en épocas diferentes. Esto es posible tanto en el caso de un temperamento nervioso como en el de uno pletórico, y todavía no nos hemos adentrado en la interpretación. Los cuerpos planetarios proporcionan los datos necesarios, y es de mayor importancia el comprender exactamente cómo operan y qué realizan, por lo que será necesario consagrar las páginas siguientes a la interpretación de su influencia, desde el especial punto de vista a que se refiere nuestro estudio. En primer lugar estudiaremos el Sol «el líder, jefe o gobernante en el orden de los luminares, la mente del mundo y el organismo fundamental», tal como Cicerón escribe en su Somnium Scipionis. Significa la mayor fuerza vital existente en la naturaleza. Rige el quinto signo de Leo, que concierne al origen de las cosas. Su cualidad es vivificante y de soporte. Caliente, seco, constructivo, muscular, dador de vida, depende mucho de su condición y posición en el horóscopo y, en gran medida, este luminar nos da mucha información acerca de la historia estructural, hereditaria, psicológica y vital. En el organismo, el carácter de su huella participa de lo ardiente, febril, inflamatorio y cardíaco. Efectivamente, el corazón está directamente gobernado por el Sol. De la misma forma como el Sol está en el centro del sistema solar, también el corazón es el centro motor del cuerpo. Es cor coeli y sol corporis. El Sol poco afligido puede convertirse, en una carta natal, en la mayor de las vitalidades, en la energía más potente y recuperativa, en la más segura protección contra las enfer11

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medades, perdurando su influencia a través de los años. Es el I bengeist, corresponde al Jiva hindú, al Monad, al Prana teosófico, y al  Archoeus o Spiritus Vitae de Paracelso. Se puede objetar que todo esto es muy simbólico y, mientras la mayoría de la gente estaría dispuesta a admitir los poderes del Sol, dador de vida por sus manifestaciones de calor y luz, sin embargo, no lo admitirían como mediador directo en el sentido expuesto más arriba. Aquí se explica, de una vez por todas, que no estamos tratando con símbolos sino con actividades, que no se establecen alusiones metafóricas sino que se glosa sobre fuerzas importantes perfectamente susceptibles de demostraciones prácticas que servirán de guía en nuestras investigaciones.

El Sol El Sol que en sánskrito es el Dwadasatna, la doceava alma (refiriéndose a los doce signos del Zodíaco), el Grahapathi, el Señor de los Planetas, y el Bharta Amara Joytishan, Señor de todos los Devatas, o el Dios de las Fuerzas, es el factor esencial en nuestra vida consciente. Su energía está muy mal representada en la electricidad porque esta es, más bien, un reflejo de Urano. El Sol es alma de la sustancia física, conteniendo en él todas las formas de manifestación. Es la representación de las fuerzas ocultas, y el dirigente y centro motor del Universo. Es el sativa guna, energía vital, calidum innatum, calor vital. Complejo en la calidad de sus rayos, se especializa a través del círculo planetario por su reflexión y refracción. Y así como en la gama expectral se oculta el blanco, también los rayos planetarios se combinan con el orbe solar. Por tanto, estos atributos comprendidos en él cumplen una ilusión de intercambio y renovación de fuerzas, de conservacíon de la materia, de circulación.

El sol en: El Sistema Solar: concierne a la radiación de fuerzas y la absorción en su esfera de los residuos desvitalizados. El Sistema animal o célula vegetal: concierne al núcleo. La figura humana: al corazón, la circulación de la sangre, la vitalidad. En el mundo humano: concierne a la circulación de la moneda, el comercio. Además de esto, el luminar mayor está vinculado con los ojos, entre los escritores sánscritos, Chaksu (ojos) fue sinónimo del Sol, Para los hindúes es el karma sakshi, testigo que ve todos los actos. En efecto, ambos luminares influyen en ciertas enfermedades y malformaciones de «las ventanas del alma», pero el Sol se refiere principalmente a los defectos estructurales, y la Luna a los lacrimales y algunos defectos de adaptación del ojo, como la miopía, la presbicia, etcétera.

La Luna: Es el medio de enlace, la conductora y distribuidora, y debido a su recorrido activo a través del círculo zodiacal rápidamente toma fuerzas magnéticas provenientes de otros planetas al paso que se van formando y deshaciendo los aspectos. Con la misma rapidez que se aleja, va produciendo cambios, actuando como un expulsivo, como un agente alterante y limpiador. Es la mumia evestrum de Paracelso. La persona lunar es, en ocasiones, 12

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errante, inquieta, variable, móvil, inconstante. Así pues, en su recorrido, nuestro satélite se torna químicamente convertible, integral, oculto, metamórfico y asimilativo. Es el receptor y el condicionador. Por ende, la Luna está íntimamente aliada con el estómago, la matriz y los senos. Y debido a su influencia peculiar importa, muy especialmente, a las natividades femeninas. Así como Leo y el Sol se identifican con lo masculino, lo eléctrico, positivo o activo, de igual modo Cáncer y la Luna se conectan con lo femenino, magnético, negativo o pasivo. El uno es caliente y vital, la otra es esencialmente húmeda; el uno es el esperma, la otra la matriz. Las serosidades y superficies mucosas se hallan también bajo el dominio de la Luna, así como los linfáticos y lactéales. En abstracto, los luminares significan: Sol, Espíritu; Luna, Materia. El primero es la realidad esencial —noúmeno—, eternamente existente; la segunda, la ilusión, el maya, la experiencia transitoria, la decadencia orgánica. Por lo que resultan dos series de expresiones planetarias: la solar y la lunar. La forma clama siempre el dictamen de la Luna, la cual implica vinculo material, esclavitud de la carne, destino. Figuradamente, la Luna puede ser considerada como una especie de alambique en el cual los procesos de fermentación y desmposición se llevan a cabo. Las sustancias regidas por la luna son extremadamente expuestas a fermentaciones y putrefacciones. Por ejemplo, las coles, las setas, etcétera, crecen con asombrosa celeridad (por la noche); tienen mucha consistencia pero escasa vitalidad o fuerza, y fermentan o se pudren con mayor rapidez. Estas sustancias pertenecen al temperamento linfático dentro del mundo vegetal. La Luna tiene un dominio especial sobre el estómago y el tubo digestivo, la masa cerebral, los senos, los sistemas linfático y lacteal y el aparato lacrimal; también, en términos generales, sobre los fluidos del cuerpo.

Mercurio Mercurio, el spiritus de Paracelso, tiene algo de artífice de la escena pues adquiere varias formas según los aspectos que recibe. Este planeta tiene carácter conectador y mediador, transitorio y reflector, distribuidor y coordinador. La función específica de Mercurio está en conexión con los nervios. Géminis, así como su regente Mercurio, indican este rasgo. Por este motivo, este signo y su Casa correspondiente significan, en el mundo, los medios de comunicación y el transporte: tren, carretera, telégrafo, correspondencia, etc. Así pues, en el cuerpo físico se halla representado por las ramificaciones del tejido nervioso. El aspecto externo del planeta es poco significativo, sin embargo su influencia es la más importante desde el punto de vista psicológico. Aunque el movimiento y la fuerza muscular son regidos por Marte, la incitación es, evidentemente, debida a la actividad nerviosa. Los movimientos nerviosos no sólo dependen de la nutrición, sino también de un control efectivo. Las intensivas formas de contracciones musculares llamadas espasmos, son el resultado directo del sistema nervioso, regidos por la octava de Mercurio: el planeta Urano. Bajo el dominio de Mercurio se encuentren el sistema nervioso, las facultades mentales, la respiración, las manos y la lengua. Ambos, la Luna y Mercurio, gobiernan la sustancia cerebral y sus funciones. Su aflicción en un tema natal indica una argumentación deficiente o una mentalidad desequilibrada, aumentando la demencia si los maléficos dominan el tema. Es quizás una de las condiciones más fáciles de detectar en un horóscopo y una de las preguntas más asequibles de encontrar respuesta. 13

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Venus Venus, la adech y Esencia de Adán, de Paracelso, es de cualidad templada, húmeda y relajante, sedante, fértil y constructiva. Pero con malos aspectos y asociada con otros cuerpos tiene el poder de afectar adversamente el organismo. Generalmente, producirá relajación, pérdida de los estímulos, emisión de fluidos vitales, etcétera. El planeta rige el sistema venoso, los riñones, la garganta y, en las mujeres , los ovarios. También tiene tendencia a producir hinchazones glandulares.

Marte Es el planeta «guerrero», en hindú el Rudhira (sangre roja). Lohitanga (de complexión rojiza), Bhumisutra «el hijo de la Tierra», es el que sigue en el orden planetario. Es la terrible esfera roja de la Tierra (Cicerón), el Hor Tos (el planeta magullado) de los egipcios, y el símbolo de la fuerza y el valor. Tensión, calor, acción eruptiva, son los términos asociados con este planeta. Es el agente impulsor e incitante, el causante del síntoma patológico inflamatorio. La Casa y signo ocupados por Marte son siempre centros de actividad, energía y acrecentamiento, por lo que llega a ser muy importante en todos los aspectos. Marte significa calor concentrado en contraste con la dispersión solar. Gobierna, específicamente, los tejidos musculares, los órganos sexuales, la hiél, la nariz y la fibrina de la sangre.

 Júpiter  Júpiter, «espléndida estrella, benéfica y afortunada para la raza humana», según los términos de Cicerón, es junto con Venus, un agente afable y protector. Sus atributos son la conservación, la elaboración y preservación de la vida, la garantía de templanza y abundancia. Hace algunos años un escritor demostró, en el  Journal of the Statistical Society, que existía una conexión entre la fluctuación del nivel anual de mortalidad y la posición de  Júpiter. Esto concuerda perfectamente con el significado astrológico del planeta. Pero cuando esta stelia errans está afligida, puede ejercer una poderosa influencia creando cambios morbosos en la sangre y causando también acumulaciones en el mismo fluido, o en forma de plétora, hinchazones localizadas, sarcoma adiposa, y bajo ciertas circunstancias incluso los cánceres, pancreático, de pecho, lardáceo, o de otro tipo. Se refiere especialmente a todos aquellos desórdenes que se caracterizan por un exceso de azúcar o de albúmina en la orina: el hígado es el centro más importante de la actividad jupiteriana (el almacén de glicógeno), pero también domina, muy marcadamente, el sistema arterial, del mismo modo que Venus rige el sistema venoso. Similarmente la deposición de grasa en el organismo está regida en gran parte por Júpiter. La grasa incita al hígado a aumentar sus secreciones. Frecuentemente el planeta actúa a través de su signo opuesto, Géminis, sobre los pulmones, así como este último también opera a través de Sagitario (el uso excesivo de medicamentos regidos por Mercurio ocasiona el embotamiento del hígado). La formación de sustancias residuales provenientes de los tejidos puede ser un ejemplo en la producción de urea y ácido úrico, ambos formados en el hígado, sin embargo la sedimentación es debida a Saturno.

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Saturno Saturno, el corpus limbus de Paracelso. Su naturaleza es seca, frígida e introvertida. La acción de este planeta se basa en la contracción (endurecimiento), represión, obstrucción y atrofia de los tejidos y sus funciones. Es la negación de Marte. Su manifiesta tendencia es la retención, cristalización y depositación de sustancias que, de otro modo, serían expulsadas del cuerpo por medio de la excreción. Cuando se realizan estas cristalizaciones y retenciones, dan lugar a la presencia de cálculos o arenillas en la orina, entre otras cosas, o si no, engendra sarro, la gota, endurecimiento y deformidad de alguna región local, atrofia muscular que afecta a los miembros en forma de artritis reumática, endurecimiento de la membrana sinovial, etcétera, porque el principio de Saturno es la limitación. Su dominio comprende la piel y el esqueleto óseo, pues son los factores que definen la estructura corporal. También rige las articulaciones, y muy especialmente las rodillas, aunque su gobierno también se extiende a los órganos auditivos y la bilis. Saturno predispone a las enfermedades crónicas y profundamente arraigadas. Cuando el planeta aspecta desfavorablemente al orbe solar, las enfermedades de la médula espinal son el resultado frecuente. Poco puede decirse de Urano y Neptuno , aunque en las paginas siguientes se estudiarán algunos vislumbres de su acción. Son los responsables de las manifestaciones más oscuras y mórbidas, por lo que estos planetas no son fáciles de clasificar. La lista siguiente nos servirá para dar una ligera idea de las Clases de enfermedades, según los planetas: Sol: Fiebres, corazón, trastornos de la espina dorsal, afecciones biliosas, desórdenes oculares —coroiditis, oftalmia, glaucoma, queratitis, cataratas, iritis—, desmayos. Luna: Hidropesía, clorosis, edema, vómitos, hidrocefalia, escrofulismo, tumores y abscesos, defectos visuales (miopía, en Aries, conjuntivitis), enfermedades femeninas, resfriados, catarros, mucosidades, serosidades, menstruaciones periódicas y derrames, desarreglos fluidicos, locura intermitente, afecciones del estómago, vértigo, epilepsia, enfermedades periódicas. Mercurio: Desórdenes nerviosos, enfermedades mentales y respiratorias, impedimentos del habla, dolores de cabeza, ansiedad. Venus: Enfermedades del cuello y la garganta, tonsilas inflamadas, quistes, hinchazones, difteria, desórdenes renales, sífilis, enfermedades motivadas por una vida licenciosa, laxitud de los tejidos musculares. Marte: Inflamaciones y fiebres agudas, operaciones quirúrgicas, heridas por quemaduras, desórdenes nasales, musculares y genitales, hemorragias, fístula, ruptura de los vasos sanguíneos, enfermedades infecciosas y contagiosas en sentido general.  Júpiter: Desórdenes de la sangre, desarreglos del hígado, estados pletóricos del cuerpo o parte del mismo, enfermedades dentales, pleuresía, forúnculos, abcesos.

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Saturno:  Enfermedades rebeldes y crónicas, traumatismo, gota, bronquitis, parálisis, sordera, hipocondría, desórdenes cutáneos, fiebres intermitentes, resfriados, consunciones, gangrena, mortificación, atrofia, caries, enfermedades espinales. Urano:  Trastornos por espasmos, roturas, rigidez, convulsiones, calambres, conmociones, hipo, sobresaltos. Neptuno: Enfermedades confusas que tienen un origen más psíquico que físico; pero también el estado de coma, letargo, cataforesis, catalepsia, envenenamiento, obsesión, sonambulismo, éxtasis. Muerte o malos hábitos del cuerpo por el uso de drogas (opio, morfina), estupor, tifomanía, confusión de ideas somnolencia, alucinaciones, estado de trance.

Brevemente, los signos patológicos que destacan en cada tu accion son: Sol: Aumento de la vitalidad, hiperemia. Luna: Clorosis, derrames fluidicos, edema, sangre diluida, resudaciones de fluidos a través de las paredes venosas, vómitos, infiltración del suero, deficiencia de glóbulos rojos. Mercurio: Acción refleja, irritación del simpático, neurastenia, agitación mental, respiración acelerada, inquietud, temblores, delirio. Venus: Laxitud de las fibras, desplazamientos mecánicos, cambios en el proceso de la nutrición, quistes y formación de tumores cavernosos, escape de los fluidos vitales, plétora asténica. Marte:  Inflamación, aumento de la sensibilidad motriz, ex-n, distensión, expansión, distribución de la sangre.  Júpiter: Desórdenes circulatorios, cambios en las partículas de la sangre, dilatación pletórica, degeneración grasosa, plenitud vascular produciendo un aumento de los latidos en las arterias carótidas, hemorragias, apoplegía, azúcar en la sangre, plétora esténica. Saturno: Depresión, disminución de las secreciones, contracción de los tejidos, depósitos, endurecimiento, espesamiento de la cutícula y de las paredes celulares, disminución de la sensibilidad, escasa vitalidad. Urano:  Espasmos, rigidez, paroxismo, contorsiones, fracturas, nutrición pervertida. Neptuno: Catalepsia, coma, analgesia.

4. ACCIÓN BIODINÁMICA DE LOS PLANETAS La acción biodinámica de los diferentes planetas puede, en alguna medida, ser expresada en forma diafragmática. «Cuando el Oculto de los Ocultos deseó revelarse a Sí Mismo...», dice el Zohar «... primeramente, hizo un simple punto; el Infinito fúe conocido en su totalidad y no difundió ninguna luz las allá de este punto luminoso y, de pronto, estalló la visión... Supongamos que el asunto primordial, el discutible Fenicio, está representado por este punto, en el centro del círculo o sea, el símbolo que utilizamos para significar el Sol. Si tomamos este símbolo para representar la esfera de cada fuerza planetaria, descubriremos las siguientes concepciones: 16

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La acción solar es expansiva, expandiente y circunferencial, desde el vigor potencial escondido en el punto, la fuerza se irradia concéntricamente en círculos de influencia, ampliándose continuamente. Esto se demuestra en la figura 2: Figura 2

Es la expresión de vida, de infinidad, de continuidad y ampliación de la experiencia. La acción lunar es fluidica, de caudal, de reflujo, ondeante, mutacional, periódica. Significa los balanceos oscilatorios tal y como existen en toda la naturaleza, aunque principalmente sólo son detectables entre los fluidos. Presentamos su gráfica en la figura 3. Mercurio es el trémolo, el vibrante, el no descanso, la nota principal o subtónica de la escala musical que pide aquel refugio de descanso, de tonicidad. Es nervioso, vibrante, excitable, sutil, en movimiento continuo como el disco ciliado de un rotífero. Lo representamos así en la figura 4.

Figura 3

Figura 4

Venus aporta un movimiento-vórtice o rotacional y, es interesante notar que el mismo Haeckel insistió firmemente en que este movimiento existía entre las moléculas del huevo. Entonces también presenta el fenómeno de gemación, tal como se ve en muchas formas inferiores de la vida vegetal y animal, donde la reproducción de las especies es llevada a cabo mediante procesos de germinación del lado de una simple célula, constituyendo el brote finalmente desprendido, un organismo completo en todos los aspectos, como el padre. Así no parecerá extraño recordar que Venus se identifica especialmente con el ovario y el óvulo. La esfera de influencia del planeta se extiende hacia aquellos desórdenes atendidos por quistes, glandulares y abultamientos o hinchazones en puntos determinados. Tales crecimientos no malignos como los acefalocísticos, son totalmente separados de las estructuras donde ocurren, y tienen un poder de reproducción por gemación, desarrollándose los jóvenes entre las capas del quiste padre. La acción venusiana puede representarse como en la figura 5, que ilustra la progresión de los vórtices biodinámicos de un extremo de la célula al otro, finalmente brotando como una gema separada. Después de la energía viene la reacción, es decir, la relajación que será representada por el óvulo (también por la típica forma del huevo). Venus es un factor notorio en la relajación del tejido. La acción de Marte es centrífuga (Marte vicissim ad circumferetiam a centro protendit), desde un centro hacia fuera; pero aunque hay una afinidad entre este planeta y el Sol, la fuerza marciana no es circunferencial, no es un proceso estable de expansión concéntrica, como por ejemplo, el ensanchamiento por anillos circundantes que sigue al acto de tirar una piedra dentro de un estanque, sino que se trata de una expulsión violenta a lo largo de las líneas de los radios, como se indica en la figura 6.

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Figura 5

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Figura 6

Es rubefaciente, llevando la sangre a la superficie y por tanto, enrojecedor e inflamante. Como hemos resumido, es de cualidad positiva, aguda, excesiva, inflamatoria, enérgica, destructiva y antagónica, ya que es una de las fuerzas más potentes con las que debemos contar; mientras que, desde luego, debe entenderse como sintomático de las fiebres agudas y enfermedades inflamatorias, choques violentos y heridas al organismo, ya sean de carácter quirúrgico o similares.  Júpiter es, en cierto modo, parecido a Venus, pues ambos se refieren a los procesos de nutrición, conservación y afesis. A Júpiter pertenece el almacenamiento de varias sustancias de la célula, la reserva, filtración, selección y transformación. La forma particular de reproducción de las células, en Venus, es la gemación. En Júpiter, el proceso de reproducción de células es por división de la simple célula. Por la continua interposición de septa y el progresivo crecimiento de una célula individual, así construida, tendrá lugar una ampliación gradual de la totalidad del cenobio, hasta que, finalmente, resulta la ruptura de los tegumentos comunes. En el cuerpo humano,  Júpiter favorece las condiciones de plétora y adiposidad. El siguiente orden es Saturno. Aquí tenemos una fuerza diametralmente opuesta a Marte: o sea, una centrípeta que continuamente conduce desde una circunferencia a un centro a través de las líneas de los radios, virtute petius a circumferentia ad centrum omnia redigente (figura 7). La acción es contractiva, cristalizante, ligante, restrictiva, consolidante, conduciendo la sangre hacia dentro y, así, produciendo resfriados, mortificación —lo que Marte permite, Saturno lo niega—. El uno es rápido, el otro lento; Marte intenso, Saturno restringido, ambos son como agudo y crónico, calor y frío. Los dos diagramas que se muestran en las figuras 6 y 7, respectivamente, representan muy bien sus varias acciones. Además de ser radiactivo, Urano exhibe acción excéntrica, espasmódica y tangencial. Como es la octava expresión de Mercurio, las vibraciones se sucederán a lo largo de líneas similares, pero las ondas no serán ni continuas ni redondeadas (figura 8). Su competencia es la neurálgica, la productora de shock, la eléctrica, espasmódica y explosiva.

Figura 7

Figura 8 18

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Neptuno muestra distintos movimientos ameboides, nebulosos y, si bien tiene afinidad con Venus y su octava, es más relajante, evasivo y proteico. Cambia rápidamente de forma (no me refiero al planeta en sí), y a veces puede parecer sin forma y amorfo. Así como Venus tiene relación con el proceso de reproducción de células por gemación y Júpiter por simple división, a Neptuno le pertenece el desarrollo de la célula (independientemente de otras células) en el fluido plástico, el titoblastema. Si miramos atrás y comparamos las varias características se observará que los planetas pueden relacionarse en grupos: Energía vital: Sol, Marte. Natural y expulsiva : Luna Mental: Mercurio, Urano Nutritiva: Venus, Júpiter, Neptuno Retentiva: Saturno

O también: Energía vital: Sol Fluidica, purificadora: Luna Constructora de tejido nervioso: Mercurio, Urano Celular: Luna, Venus, Júpiter, Neptuno Fibrosa: Marte Cartalaginosa: Saturno

El Sol representará la fuerza constructiva de energía, ardor y fuerza de vida. La Luna significará la nutrición, especialmente, actuando a través de los fluidos vitales. Mercurio y Urano, el sistema nervioso. Venus, Júpiter y Neptuno, las funciones de transformación, conservación y almacenamiento. Marte, la energía muscular y destructiva. Saturno, la acción retractiva, retentiva y escibalosa.

5. CÓMO CRISTALIZAN LOS PLANETAS EN LA VIDA ORGÁNICA E INORGÁNICA

El Sol no es solamente la fuerza vital del Universo que lo Ilumina, sino que contiene en sí todos los poderes y cualidades específicas de los otros planetas. Cada uno de estos últimos abstrae ciertas propiedades de la cabeza-fuente, transmitiéndolas en formas modificadas a nuestra esfera terrenal y, sin duda, a los restantes cuerpos del sistema solar. Solum namque coelum est ignis; reliqua dicuntur ígnita.

El método por el cual se lleva a cabo esta selección o intercambio de corrientes estelares no nos concierne aquí. Según los autores sánscritos, Graha Shakti o la energía planetaria, es principalmente enviada a la Tierra en forma de Vidyut Shkti o energía solar. Dadas las clasificaciones de estos nueve centros (Sol, Luna, Mercurio, Venus, Marte,  Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno) los caracteres individuales y típicos de su influencia, en realidad no son difíciles de seguir y descubrir a través de la vida orgánica e inorgánica. Debemos recordar que los planetas no solo actúan a través de nosotros mismos sino también sobre la totalidad de la naturaleza animada e inanimada. Están implicadas muchas formas de materia y espíritu, y la reacción asumirá apariencias variadas y diversas, pero 19

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los trazos esenciales e intrínsecos nunca se borrarán. Cada planeta tendrá que funcionar in materia crassa, in media, y in tennissima, y debemos estar preparados para reconocer la gema por el brillo de su pulido. Tomemos a Marte: las formas básicas de la acción marcial son centrífugas, inflamatorias, intensivas y punzantes. En el organismo humano aparecerá y reaparecerá bajo aspectos tales como energía muscular, combatividad mental, tozudez, enojo, pasión insistente y deseo, acción, aumento de glóbulos rojos, fiebres, heridas, enfermedades agudas —en medicina es el tónico adecuadamente representado por el metal hierro que es gobernado por este planeta—. De temperamento colérico; atmosféricamente indica calor y tormentas violentas; en minerología es el hierro; su color es el rojo; profesionalmente es el soldado, cirujano, carnicero y operario con herramientas afiladas; en geometría es el ángulo. Veamos ahora a Saturno. Esta fuerza cristaliza mineralógicamente como grafito, carbón, roca; en fisiología como hueso, tendón, cartilago; temperamentalmente como melancolía, egoísmo; en patología, como depresión, abatimiento, desvitalización; atmosféricamente como escarcha, nieve; su color es el negro; geométricamente es el cubo. Puede hacerse un análisis más o menos extenso de la siguiente forma: SOL Cualidades

calor Vital Expansión

Fisiología

Físico

Generador de calor Combustión Corazón Circulación

Oro Comercio

Patológico

Abstracto

Fiebroso

Ardiente

Síncope Activo Hemorragia Dinámico Nutrición Superfluo Plétora

Apasionado Generoso

Signo: Leo. Mental: Fuerza, estabilidad, voluntad, perseverancia. Temperamento: Bilioso. Drogas típicas: Aurum, camomila, helianthus. Plantas típicas: Euphrasia officinalis. Angallis arvensis. Sanguisorba officinalis. Ligusticum Scoticum. Angélica Sylvestris. Echium vulgare. Potentilla tormentilla. Hypericum androsaemum. Colchicum autumnale. Drosera rotundifolia.  Juniperus communis. Centaurea nigra. Chelidonium majus. Petasites vulgaris. Fraxinus excelsior. Sinapis nigra y alba. Caléndula officinalis. Rosmarinus officinalis. Anthemis nobilis.

Propiedades terapéuticas: Sudorífico, cardíaco, anticaquexia. Principio: Constructividad. Metales, minerales: Oro, carbúnculo, jacinto, crisálida.

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LUNA Cualida Fisiología Físico des Secretor Lágrimas Agua Humedades Mutación de fluidos Inundaciones Dilución Receptiva Matriz Semilla-Tierra recepción de semen Estómago

Generadora Fecundación

Humus

Mutacional Inspiración Mareas Instintos animales Fermentación Movimiento Decadencia Relajante Sedentario Humedadcálida Pacífica Inercia Madre

Patológico

Abstracto

Secreciones fluidicas Hidropesía Enfermedad de fácil adquisición

Emocional

Transudación

Instintiva

Épocas críticas Disolución

Secuencial

Atonicidad

Apatía

Flaccida

Sedativo e Noche induciente al sueño

Signo: Cáncer. Mental: Temerosa, imaginativa. Temperamento: Linfática. Drogas típicas: Argentum, coloquíntida, parietaria, agárico. I Plantas típicas: Muchas de las Sauces. Brassicae. Lemnae. Saxifrages y Lactacas. Ophioglossum vulgatum. Stellaria media. Salvia vervenaca. Nasturnium officinale. Portulaca olecaceae. Cucurbito pepo. Mercurialis Annua. Acanstus mollis. Convolvulus coeruleus. Geranium triste.

Propiedades terapéuticas: Emética, alternativa, atenuante. Principio: Cambio, armonía, receptividad. Metales y minerales: Plata, piedra de la Luna, aluminio, selenita, marcasita, esmeralda.

 

MERCURIO

Cualidades

Fisiología

Conectivo

Nervios

Sutil

Relativo

Físico

Patológico

Abstracto

Movimiento   Neurasténico Volición   Inquieto Respiración Aire Asmático Aliento   Bronquial   Respiración   estertórea Tacto Textura Excitación refleja

Sensación Inteligente Comprensivo Irritabilidad

Signos: Géminis y Virgo. 21

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Temperamento: Nervioso. Mental: Sutil, inteligente, ingenioso, gracioso, persuasivo, inquieto . Drogas típicas: Mercurio, petroselinunum, avena, calomel, podofilina. Plantas típicas: Saabiosa succisa. Apium graveolens. Artemisia abrotanum. Petroselinum sativum. Pastinaca sativa. Parietaria officinalis. Satureia hortensis. Origanum vulgare. Cynoglossum officinalis. Lavandula vera. Convallaria majalis. Glycerrhiza glabra y echinata. Anethum graveolens. Inula helenium. Foeniculum vulgare. Teucrium scorodonia. Corylus avellana. Marrubium vulgare. Daucus carota. Calamintha officinalis. Carum carni. Nephrodium, filix mas.

Propiedades terapéuticas: Nervios, transformable, cefálico. Principio: Razón. Metal: Mercurio.

  Cualidades   Relajante   Superflua

VENUS Fisiología

Físico Patológico

Papila renal

Filtración   Exósmosis Res Venerae Humedad   atmosférica excesiva

Abstracto

  Remisión Laxitud Aburrimiento   Erótica Hinchazones   Fecunda   Quistes

Signos: Tauro, Libra Mental: Artística, sociable, amorosa. Temperamento: Linfático. Drogas típicas: Guprum, pulsatilla. Plantas típicas: Bunium Flexuosum. Achillea ptarmica. Verbena officinalis. Saponaria officinalis. Oxalis acetosella. Sonchus arvensis. Meum athamanticum. Dipsacus sylvestris. Sanícula Europea. Prunella vulgaris. Senecio Jacobaea. Sécale cereale. Prímula veris. Ligustrum vulgare. Obione portulacoides. Plantago major. Nepeta cataría. Mentha pulegium. Galium cruciatum. Leonorus cardiaca. Sibthorpia Europaea. Althaea officinalis. Lithospermun arvense. Nepeta glechoma. Alnus  glutinosa. Rubus fructicosus. Ajuga reptans. Arctium lappa. Vrunus cerasus. Tussilago fárfara. Bellis perennis. Eryngium maritimum. Matricaria Parthenium. Scrophularia nodosa y aquatica.

Propiedades terapéuticas: Emoliente, antinefrítica, vomitiva, diurética. Principio: Sexo, amor, deseo. Metal: Cobre.

  Cualidades Fisiología

MARTE Físico

Patológico

Abstracto

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Ampliador

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Muscular

Acción a Hipertrofiado través de las Incrementador   Robusto demandas de sustento  Evolución Calentador Calórico Combustión Eruptivo  de rocas Febril   ígneas Inflamatorio Aumento de la temperatura rurbulento Cabeza Fulminación   Exaltación Explosivos Eretismo Guerra Fibras tónicas Acción sobrefortalecidas volcánica Histérico Energético Hemoglobina Hierro Tónico

Excesivo

Colérico Violento

Frenético Belicoso

Vigoroso

Signos: Aries y Escorpión. Temperamento: Colérico. Mental: Animoso, peleador, imprudente, enérgico, impetuoso, antagonístico. Drogas típicas: Preparaciones a base de hierro y acero, tónicos, arsénico, chinchona, nuez vómica, árnica, brionia, zarzaparrilla, sulfuro, estricnina, polvo de cantárida. Plantas típicas:  Artemisia absinthium. Lapidum Iberis y latifolium. Ajuga Chamae piys.Cochlearia armoracia. Rheum rhaponticum y undulatum. Juniperus sabina. Centaurea calcipitra. Crataegus oxyacantha. Cratiola officinalis. Humulus lupulus. Rubia tinctorum. Bryonia dioica

(esta raíz, fresca, es muy útil en cataplasmas, como resolvente y discutiente contra tumores duros y edematosos, congestión de la sangre por heridas externas, isquiones y otros dolores reumáticos), Peucedanum Ostruthium. Aurum maculatum. Urtica urena, dioica y pilulifera. Allium sativum. Carduus benedic tus. Ranunculus aquatilis. Geranium Robertianum

(«Nuestro huésped, en Carlisle, acostumbraba a tener trastornos originados por cálculos, y el mejor remedio para aliviarle era la decocción de Geranium Robertianum». Ray's Remains, publicado por Scott, 1760) y Columbinum, varias especies de Linum. Sisymbrium Sophia. Ulex Europaeus. Gentiana lútea. Valeriana officinalis. Berberís vulgaris. Ocymum basilicum.

Propiedades terapéuticas. Estimulante, tónico, rubefaciente, costroso, cáustico, vesicante, afrodisíaco, resolutivo. Principio. Energía, cólera, expansión, inflamación. Metales y minerales. Hierro, sulfuro, cinabrio, roca ígnea.

 JÚPITER Cualid ades Respaldante

Fisiología

Nutrición molecular

Físico

Hidrocarbonatos Azúcar

Patológico

Plenitud vacular

Abstracto

Generosidad

Vis conservatrix

Sanguíneo Enriquecimient o de la sangre

Desbordamiento Alteración de Optimismo fluvial Partículas rojas sangre 23

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Agregativo

Desarrollo de las células

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Nubes Trueno

Apoplético Esténico Plétora

Gula

Signo: Sagitario Mental: Moderado, justo. Temperamento: Sanguíneo.  Drogas típicas: Stannum. Eupatonium. Menta. Iridin. Plantas típicas: Fumitoria officinalis. Salvia. Crithmum maritimum. Clochlearia officinalis y anglica. Hyssopus cincinalis. Sompervivum tecrorum. Luchas caninus y islandicus. Marchantía  polymorpha. Acer campestre. Scolopendrium vulgare. Dianthus Caryophyllus. Ficus carica. Melilotus officinalis. Clochorium endiia. Tric-licum repens. Lapsana communis. Taraxacum densleonis. Tanacetum vulgare. Potentilla raptana. Castanea vasc. Chaerophylium sativum. Borago officinalis. Vaccinium inyrtillus. Betónica officinallis. Beta vulgaria. Agrimonia eupatoria. Asperagus officinalis. Smyrnium olusatrum. Saccharum officinarum. Asclepias vince toxicum. Pulmonaria officinalis. Melissa officinalis. Geum urbanum.

Propiedades terapéuticas: Alexifármaco, antiespasmódico, analéptico, balsámico, vermífugo, emoliente. Principio: Preservación (conservación). Metal: Estaño.

SATURNO Cualidades Frío

Acumulativo

Fisiología

Físico

Patológico

Abstracto

Bajo-calórico

Hielo

Circulación

Antipático

Fecal Materia escilaboso

Petrificante

Carente

Huesos Tendones Ligamentos Dientes Malnutrición Condición de hambre

Deshecho de metales Ceniza Residuos de la calcinación Carbono Hollín Cloaca Piedras Rocas Petrificaciones Minas Plagas Soledades Desiertos

obstruida Congestión antidinámica Depósitos de ácido úrico Gota Reumatismo Cálculos Arenillas Tuberculoso

Codicioso

Osificación

Avaricia

Atrofia Mortificación

Pobreza

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Signo: Capricornio. Temperamento: Nervioso, melancólico. Mental: Antipático, sombrío, laborioso, reservado, terco. Drogas típicas: Plomo, acónito, belladona, antimonio, salicilato de soda, Belleborus, Hiosciamo, Conium, Rhus Toxicodendron, Verbascum, cáñamo indio, ácido hidrociánico. Propiedades terapéuticas: Astringente, sedante, refrigerante, estíptico, antiflogístico, antipirético, febrífugo. Principio: Limitación, cristalización, resistencia. Metales y minerales: Plomo, grafito, plombagina, estratos inferiores.

URANO Cualidades Fisiología Vibrante

Aura

Físico Radiactividad Magnetismo terrestre Hidroeléctrico

Patológico

Abstracto

Telepático

Intuitivo

Signo: Acuario. Mental: Excéntrico, original. Temperamental: Nervioso. Drogas típicas: Éter, aceite de cucaracha; también aire comprimido y gases. Propiedades terapéuticas: Eléctrico, vibracional. Principio: Intuición. Mehiles y minerales: Uranio, pechblenda, toro, radio, poIonio, actinio, uranita, calcolita, piedra imán, ámbar, laca.

NEPTUNO Cualida des Solitario

Fisiología

Físico

Patológico

Apéndice

Fuerza ódica

Analgesia

vermiforme

Atrofia del proceso por cesación de función Pérdida de coesión de partes Disipación de energía funcional Clarividencia

Abstracto

Semi- espiritual Oculto Supra material Enfermo-acuoso

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Signo: Piscis. Temperamento: Linfático. Mental: Psíquico, inspirado, imaginativo, romántico. Drogas típicas: Opios, narcóticos, papaveráceas. Propiedades terapéuticas: Analgésico, anodino, sugestivo, hipnótico, soporífero. Principio: Involución. Metales y minerales: Potasio, y sustancias tales como espuma de mar, ámbar gris.

6. TONICIDAD, ATONICIDAD Y PERVERSIÓN Un horóscopo normal sería el resultado de un equilibrio propio y apto entre los planetas, o sea, un equilibrio que no Admitiese la preponderancia de uno sobre el otro. Cada uno Mercería una actividad sin detrimento de ninguno de los restantes, pero éste nunca es el caso. Siempre existe algún tipo de tensión. Puede decirse que cada cuerpo planetario funciona de tres formas distintas. Según su posición y aspectos, la fuerza de un planeta puede verse más impulsada de lo normal; éste sería su lado técnico. También, su fuerza o influencia puede ser dominada o suprimida a niveles inferiores a los normales: acción atónica. Una tercera posibilidad es cuando experimenta un cambio antinatural o perversión. En otras palabras, en un esquema de natividad individual, un planeta puede dar un exceso de energía, una insuficiencia, o puede permutar su influencia. Supongamos, por ejemplo, que un hombre tiene un Marte débil en su carta natal. Ello indicará una falta de poder musculatura o poco control sobre los músculos, flaccidez, evacuaciones involuntarias. Si Marte es demasiado potente, se instalan fiebres, malaria, hemorragia, hay acción inflamatoria, desórdenes de viruela, y se alcanzan unas altas temperaturas. Si la naturaleza de Marte es parcialmente confabulada y entremezclada con otros cuerpos, pero particularmente con Urano, Saturno, y Neptuno, produce fístulas, crecimientos mórbidos, degeneración fibrosa, hemorroides, priapismos, etcétera. Otro ejemplo: la acción tonificadora de Venus se manifestará con un exceso venéreo, mientras que la acción atónica indica esterilidad, perversión y amoralidad; y de forma similar, con los demás planetas. Pero además, cada planeta es intrínsicamente tónico o atónico, eléctrico o magnético, positivo o negativo. Los positivos son: Sol, Marte, Júpiter y Urano. Los negativos: Luna, Venus, Saturno y Neptuno. Mercurio es intercambiable. TÓNICOS Sol: Hiperémico. Marte: Hipertrofiado, agudo, de incremento, exerción, aumentante.  Júpiter: Plétora, esténico. Urano: Perversión, crítica, ruptura. ATÓNICOS Luna: Anémica. Saturno: Atrofiado, paralítico, caquéctico, ataxativo, reductor. Venus: Plétora asténica. 26

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Neptuno: Atrofia de proceso, disolución. VARIABLE Mercurio: Receptor, reflector, amalgamador.

Un cuerpo átono o negativo puede tener su naturaleza parcialmente transmutada por configuración con un cuerpo tónico o positivo. En un grado inferior, un cuerpo tónico puede tener alguna de sus fuerzas positivas destruidas por la proximidad de un atónico, pero no puede llegar a estar totalmente subordinado a él. Cada planeta imparte un tipo especial de enfermedad a un órgano, pero se modifica, cambia o disfraza por la recepción de aspectos cruzados con otros planetas. De la combinación de planeta, signo, aspecto y Casa podemos inferir los desórdenes estructurales y funcionales.

7. SINOPSIS ZODIACAL-PLANETARIA DE LAS ENFERMEDADES TÍPICAS Esta sinopsis sirve solamente como ayuda en el diagnóstico. La dificultad de enmarcar leyes invariables y universal-mente aplicables es debida a que existen innumerables combinaciones entre planetas y signos. Algunos desórdenes se hallarán repetidos bajo dos o más cabezales por razones fácilmente comprensibles. El trabajo de las combinaciones posibles y sus consiguientes deducciones o resultados probables será un asunto de criterio individual. También existen causas y efectos inmediatos y fundamentales, cuya consideración abre un amplio abanico de posibilidades a la especulación e investigación, pero en este aspecto, la astrología es defectiva, es decir, nos fijamos en los resultados de la enfermedad más que en la causa primigenia; en dónde se localiza más que en el factor causante y excitante. En primer lugar, las enfermedades deberían distinguirse por sus causas, no por sus efectos. Por ejemplo, en los casos como piedras en la vejiga, producidas por deposición de ácido úrico, la condición de la sangre debería ocupar un lugar privilegiado en nuestras primeras atenciones. Igualmente en el caso de la diabetes: nuestra atención debería concentrarse en Júpiter situado en Escorpión o Libra. También debe recordarse que las enfermedades más graves serán consecuentes con las de aflicciones planetarias más severas. No todas las personas con Marte situado en Cáncer sufrirán de gastritis. La intensidad de la dolencia dependerá del poder de los aspectos, de las configuraciones y de otras impresiones de las influencias celestes. SOL EN: Aries. Dolor de cabeza, hiperemia orgánica, apoplegía, afasia, meningitis cerebral, fiebre cerebral. Tauro. Anginas, difteria, catarro nasal, pólipo. Géminis. Escorbuto, bronquitis, desórdenes nerviosos, pleuresía, hiperemia de pulmones. Cáncer. Dispepsia, hidropesía, desórdenes del tórax. 27

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Leo. Dolencias del corazón, enfermedades de la espalda y espinales, fiebres agudas. Virgo. Diarrea, dolencias por mala asimilación. Libra. Enfermedades del riñón, erupciones de la piel. Escorpión. Cálculos, fístula, enfermedades de los órganos reproductores, nariz y garganta, apendicitis. Sagitario. Ciática, parálisis, problemas nerviosos y de los pulmones, hiperestesia. Capricornio. Reumatismo, desórdenes cutáneos. Acuario. Desórdenes sanguíneos, circulación pobre, corazón hidrópico, asfixia, envenenamiento por gas ácido carbónico, dilatación cardíaca (mineros de pizarra), enfermedad de los buzos. Piscis. Afecciones urinarias, uterinas, pulmonares y nerviosas. LUNA EN: Aries. Vista débil, tensión de ojos, dolor de cabeza, migraña, insomnio, catarro, alopecia. Tauro. Anginas, garganta hinchada, garganta relajada, úlceras añosas, desórdenes oculares. Géminis. Edema pulmonar, neumonía catarral, aneurismo varicoso. Cáncer. Tendencia hidrópica, inclinación a «llenarse de carnes» rápidamente, mareos, tímpanos, carcinoma. Leo. Desmayos, convulsiones, afecciones en el corazón. Virgo. Flojedad de los intestinos, hinchazones abdominales y tumores, neumonía tífica, hidrótorax. Libra. Varios desórdenes de los riñones. Escorpión. Hidrocele (vaginitis crónica serosa), dolencias genito-urinarias, aneurismo hernial. Sagitario. Gota, desórdenes nerviosos, afecciones isquiáticas. Capricornio. Erupciones de piel, afecciones sino viales. Acuario. Venas varicosas, úlceras, extremidades inferiores, envenenamiento de la sangre, afecciones de los ojos. Piscis. Alcoholismo, tejidos relajados, resfriados, pulmones débiles, ataxia locomotora. MERCURIO EN: Aries. Dolores de cabeza procedentes de tensiones nerviosas, vértigo, desorden cerebral, astigmatismo, neuralgia, deliro frénico. Tauro. Ronquera, tos, dificultad en tragar por pérdida de control nervioso, laringitis. Piscis. Hidrotórax, quiste hidátides, complicaciones de pulmón e hígado. SATURNO EN: Aries. Catarro, sordera, dolor de muelas, resfriados y escalofríos, anemia cerebral, apatía, parálisis, dolor reumático de cabeza, síncope cerebral. Tauro. Consunción (tuberculosis) de laringe, escorbuto, flema en la garganta, coriza, pérdida de voz, sofocaciones, gangrena de angina, encías pútridas, difteria.

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Géminis. Reumatismo de brazos, manos y hombros, consunción de pulmones, ictericia negra, dislocación de brazos y hombros, bronquitis crónica, temblores nerviosos, fibrosis de pulmones, disnea. Cáncer. Asma, consunción, ruidos en el pecho, fiebres intermitentes, pérdida del apetito, dispepsia, náuseas, gastritis crónica, anemia, cáncer de pecho y axila, eructos, diplomanía, clorosis. Leo. Atrofia y acción muscular débil del corazón, espalda débil, malformaciones espinales, síncopes, ictericia, ataxia locomotora, gota en el corazón. Virgo. Tisis abdominal, estreñimiento, gripes, desarreglos de digestión intestinal, mala nutrición, hígado lento. Libra. Enfermedad de Bright, sangre corrompida, eólico renal, esterilidad, supresión de orina. Escorpión. Angurria, retención de orina, gota, fístula, parálisis, almorranas, arenilla, piedras, supresión menstrual, caries del cartílago de la nariz. Sagitario. Gota, ciática, enfermedad de la articulación de la cadera, dislocación de la articulación de la cadera. Capricornio. Reumatismo (mayormente articular), enfermedades de la piel, heridas en la rodilla. Acuario. Calambres, anemia, tobillos débiles y con torceduras, pie zambo por la contracción del tendón de Aquiles, astenia, curvatura espinal, caries en la espina, comprensión y esclerosis de la médula espinal, esclerosis arterial. Piscis. Escrófula, raquitismo, consunción, gota, úlceras de pies. Urano

Es responsable de los ataques repentinos de enfermedad —calambres, espasmos, rupturas, explosiones, shocks eléctricos y otros, acción exagerada. En Aries o en Casa I, produce neuralgias agudas, dolores y punzadas en la cabeza; en Géminis, asma espasmódica; en Cáncer, calambres de estómago; en Leo, suspensión de la acción del corazón; en Escorpión, espasmos de la vejiga; y así con los otros signos. Neptuno

Tiene dominio sobre ciertas oscuras y vagas enfermedades, especialmente cuando su origen es más psíquico que físico, tal como se explicó anteriormente. Afligido, inducirá al hábito de tomar drogas, tales como narcóticos, hipnóticos, opios. También es sintomático de envenenamiento.

8. LAS CASAS VI Y VIII La Casa VI de una carta astrológica ha gobernado desde siempre las enfermedades en un sentido amplio, y la Casa VIII, la forma de morir. Esto és completamente cierto; pero sólo es digno de considerarse si estas Casas están ocupadas por la presencia de planetas. El diagnóstico basado solamente en los regentes de estas Casas es fútil. Wilson escribe: «La 29

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causa por la cual el Ascendente opera sobre la constitución humana es desconocida, pero la experiencia prueba que ello tiene efectos válidos. No es tan claro que el ángulo oeste tenga la misma influencia, y menos todavía que la Casa sexta pueda ser el lugar por el cual podamos juzgar las enfermedades». Hasta cierto punto, cada una de las cuatro Casas cadentes del horóscopo se identifica con la enfermedad. Los signos comunes o los equivalentes a estas divisiones, son los más débiles del Zodíaco. Pero aquí ignoraremos los signos tercero y noveno porque la interpretación de las enfermedades pertenecientes a estos signos está fuera del ámbito de un manual como éste. La Casa VI es la que vamos a observar con su signo, Virgo. Ello nos lleva a un hecho importante: el poder de la mente sobre el cuerpo, y viceversa. Mercurio, regente mental, es el propietario del signo. «Las enfermedades del cuerpo actúan a través del principio vital sobre la mente, y por otro lado, las enfermedades de la mente actúan a través del mismo medio sobre el cuerpo.» Según nuestros conocimientos, éstas son las únicas veces en las cuales la materia y el espíritu se encuentran y actúan uno sobre el otro; en todos los demás casos que conocemos, la materia actúa solamente sobre la materia, y el espíritu sobre el mismo espíritu. Cuando los luminares ocupan esta parte del horóscopo la energía y la vitalidad se ven disminuidas, coincidiendo con una salud crónicamente mala y unos poderes recuperativos deficientes. Claro que también deben intervenir los rayos maléficos dirigidos a los cuerpos citados. En estos casos, el mal es mucho más intenso. Puede significar la enfermedad incurable o el defecto estructural, y aunque los defectos congénitos dependen de una época anterior al nacimiento real o debido a un paro en el desarrollo fetal, existen ciertos vínculos entre el momento de nacer y la posición de las estrellas en aquella época. Las indicaciones no son siempre satisfactorias pero puede decirse que las Casas VI y XII son, a menudo, fuertemente evidentes por la razón de que una o ambas luminarias están allí, unidas a otros planetas. En las deformidades del cuerpo, tales como jorobas, enanismo, etcétera, especialmente cuando van acompañadas de mentes retrasadas o poco desarrolladas, frecuentemente se observan las siguientes posiciones: 1. Tauro, Escorpión o Capricornio en el Ascendente; 2. Los luminares en las Casas VI o XII; 3. Una asociación muy unida entre los maléficos Marte, Saturno y Urano, especialmente, por conjunción y oposición y en signos fijos; 4. Sus cuerpos o rayos van dirigidos sobre las cúspides de las Casas y, VI o XII; 5. Lo mismo, pero aplicado al grado del Ascendente. 6. Muchos planetas en Virgo y en las Casas VI o XII. Vean algunos ejemplos: Ejemplo 1. Masculino. Nace el 11 de agosto de 1874, a las 9 h. p.m. Lat. 530 Norte. Long. 0o  12' Oeste. Deficiente mental, curvatura de espina de Pott, cianosis (surgiendo de la parti-ción entre los lados derecho e izquierdo del corazón, que están incompletos); figura distorsionada, casi un cíclope. En esta carta, tenemos como mínimo siete cuerpos en signos fijos, las luminarias, en Casa VI, fuertemente presionadas por los rayos de Marte, Saturno, Urano, Venus y Júpiter. Mercurio está dañado por la proximidad de Marte y forma Paralelo de declinación con Saturno. Dos maléficos están conjuntos en Casa V y reciben la oposición de un tercero: Saturno. Los signos del corazón y de la espina dorsal, Leo y Acuario, son prominentes y tienen significados para la cianosis y la curvatura de la espalda.

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 Ejemplo 1

Ejemplo 2. Femenino. Nace el 27 de agosto de 1889, a las 9 h. p.m. Lat. 50° 44' Norte. Long. 10 50' Oeste. Enana, jorobada, sin cabello ni dientes. No puede hablar ni es posible que aprenda nada. Tiene poca o ninguna memoria. Boca grande, rasgos toscos, parecidos a los animales. Varios hermanos o hermanas, todos normales. En este caso, Tauro está en el Ascendente. El Sol, la Luna, Mercurio y Urano ocupan la Casa VI, los tres primeros planetas en Virgo. Marte y Saturno forman conjunción en la Casa V.

 Ejemplo 2

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Ejemplo 3. Femenino. Nace el 19 de octubre de 1875, a las 6 h. p.m. Lat 50° 44' Norte. Long. Io 50' Oeste. Una enana de 1,20 metros de altura aproximada, no es jorobada, pero su mente es la de una niña de siete u ocho años. Ha tenido un hijo ilegítimo de medida normal. Tauro se eleva otra vez. El Sol, Mercurio, Venus y Júpiter están en la Casa VI. Urano está en la Casa V, opuesto a Saturno, y ambos cuerpos forman cuadraturas a Mercurio. La mayoría de planetas se hallan en signos fijos.

 Ejemplo 3

Ejemplo 4. Femenino. Nace el 4 de septiembre de 1880, a las 7 h. p.m. Lat. 51° 28' Norte. Long. 0o 18' Oeste. Nace con deficiencia mental (idiotez), quizás hereditaria. La parte posterior del cerebro no se ha desarrollado. Seis planetas, incluyendo los luminares, se hallan en la Casa VI, en el signo de Virgo. Estos ejemplos servirán de estudio y comparación. Una serie completa de casos notablemente similares pueden darse aquí, pero los temas de teratología, acondroplasía, y otros son totalmente secundarios en nuestro esquema actual.

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 Ejemplo 4

Los ejemplos anteriores se presentan meramente para ilustrar una fase de la influencia de la Casa VI. No obstante, tales asociaciones como Marte en conjunción u oposición a Saturno, Saturno en oposición a Urano, etcétera, en cualquier parte que se hallen en el horóscopo, tienden a producir deformidad, ya sea congénita o adquirida. La Casa XII debería ser especialmente observada en los casos de enfermedades que piden aislamiento, hospitalización o asilo. Los planetas en Casa VIII generalmente indicarán el carácter de la muerte. Marte y Urano causan muertes súbitas y violentas. Con Saturno, la enfermedad es crónica, lenta, la muerte suele demorarse y se produce por debilitación, asfixia, ahogo, etcétera. Pero mucho dependerá del signo ocupado por el planeta, que deberemos analizarlo con gran discernimiento.

9. LAS TRIPLICIDADES Y CUADRUPLICADADES El Zodíaco se divide en cuatro divisiones tripartitas, las cuales son análogas en cualidades y constitución: el trígono de Fuego, compuesto por los signos de Aries, Leo y Sagitario; el trígono de Tierra, abrazando los signos de Tauro, Virgo y Capricornio; un trígono de Aire, con Géminis, Libra y Acuario; y un trígono de Agua, con los signos de Cáncer, Escorpión y Piscis. Estas cuatro cualidades se han llamado elementales, pero no es correcto porque tanto el Agua como la Tierra y el Aire son sustancias. Podemos considerar estas cuatro sustancias como cualidades que se interpretan así: Fuego Individual. Las aspiraciones espirituales. Tierra Físico. Temporal. Propagativo. 33

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Aire Relativo. Conectivo. Agua Mutacional. Terminal. Transformativo.

Los signos de Fuego tienen relación con el calor vital y el espíritu. Los signos de Tierra, con la estructura ósea, las sales, tierras, minerales, concreciones del sistema. Los signos de Aire, con los gases, los espacios intercelulares, arterias, venas y capilares. Los signos de Agua con los fluidos: Cáncer con la leche, fermentos tales como los mismos jugos gástricos, tialina, diastase pancreático, saliva; jugos medulares, quimo, albúmina; Escorpión, con los fluidos excrementicios: orina, sudor, menstruación; Piscis, con los mocos, sueros pleural, peritoneal y sinovial, mucosidad intestinal. Estas consideraciones son generales, pero debe entenderse que el carácter particular de un fluido depende de los gobiernos planetarios. No obstante, la Luna rige todos los fluidos, aunque hasta ahora su dominio real es sobre las disoluciones neutras, el básico y blando humor que constituye un medio a través del cual ciertas sustancias pueden actuar y reaccionar y pueden ser transportadas a las diferentes partes del cuerpo disolviéndose, resolviéndose y siendo expulsadas si es necesario. Un ejemplo es el caso de la leche. Aquí tenemos una de las formaciones más completas de la nutrición. En primer lugar, su base es el agua (Luna), luego los constituyentes grasos (Júpiter), la caseína y sustancias extractivas (Sol), y por último las sales (Saturno). La futilidad de que un líquido compuesto como la leche sea solamente regido por la Luna es aparente. Pero cuando obramos así es porque nos damos cuenta de que la cualidad fluídica básica es el principal punto de vista de observación y no la manera particular de operar o reactivar. En el hombre, los cuatro trígonos celestes también cristalizan en los cuatro temperamentos básicos. El temperamento sanguíneo está representado por el trígono de aire y el planeta Júpiter; el colérico o bilioso, por el de fuego y los planetas Sol y Marte; el nervioso, por el trígono de tierra y los planetas Mercurio, Saturno y Urano; y el linfático, por el acuoso y los planetas Luna, Venus y Neptuno. El médico ya conoce las características propias de cada clase de enfermedad y tiene cierta habilidad para reconocer cada tipo caracterológico, así como sus hábitos fisiológicos y las capacidades mentales de cada uno. No se puede confundir fácilmente al inquieto neurasténico, precipitado, agitado y de ademanes vivos, propio del temperamento nervioso, con predisposición a los desórdenes nerviosos; ni tampoco, la naturaleza excitable, temeraria y ardorosa del colérico, con sus afecciones biliosas e inflamatorias que le son propias; o al anémico pálido, lángido, de pulso débil y letárgico, propio del pituitario o linfático, cuya tendencia es la hidropesía, la deficiencia de glóbulos rojos de la sangre y su inherente disposición a las enfermedades serosas, de tono y de acción vascular. Finalmente, tampoco debe confundirse al sanguíneo, con su circulación activa de naturaleza jovial, de cuerpo rollizo, complexión refinada, y con predisposiciones a las diátesis hemorrágicas. Pero estas aclaraciones sólo pueden obtenerse después de haber estudiado el significado de cada trígono. El temperamento se define al nacer la persona, y afecta a todos los campos de la misma, no sólo en el aspecto fisiológico sino en cada departamento de la vida. Por ejemplo, en la vocación profesional cada grupo se comporta como sigue: Sanguíneo: activo, industrial; Bilioso: activo, político, militar; Nervioso: artístico, imaginativo, estudioso; Linfático: científico, contemplativo, emocional, plástico. Los temperamentos sanguíneos y biliosos actúan; los nerviosos y linfáticos piensan y sienten.

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Todavía tenemos que hacer una última división del duodenario, en la cual obtendremos series de tres cuadrantes que se denominan: Cardinales o Móviles (Aries, Cáncer, Libra y Capricornio); Fijos o Estables (Tauro, Leo, Escorpión y Acuario); y Mutables o Comunes (Géminis, Virgo, Sagitario y Piscis). Esta distribución corresponde a la Trinidad hindú. Aries es el Brahma, motor, transformador, creador, dirigente; luego le sigue Tauro, el Vishnu, el protector, algo que es fijo y lo hace permanente; sigue Géminis, Iswara, el destructor, cambio desde un estado previo de fijeza. Llegamos al siguiente: Cáncer, el segundo signo cardinal y el inicio de una nueva trinidad, se nos aparece como el Chara. Los signos Cardinales o Móviles son: (Sthira) Vishnúicos y los Comunes o Mutables: (Dwiswabhava) doble naturaleza. Los signos Cardinales marcan los equinoccios y los solsticios del Sol. En una carta natal equivalen a las Casas angulares, I, IV, VII y X, implicando preeminencia, poder, elevación. Los signos Fijos equivalen a las Casas sucedentes, implican soporte, conservación, solidaridad. Los Mutables se identifican con las Casas cadentes y significan sumisión, mediación, mutación. Así vemos que las personas nacidas bajo los signos Cardinales, o que tienen muchos planetas en ellos, poseen un ansia de publicidad y se inclinan hacia oficios públicos o políticos. Los nacidos bajo signos Fijos poseen más gravedad, lastre y placidez, gravitando en las posiciones donde sean necesarias la firmeza, la estabilidad y la mutabilidad. Por su parte los regidos por signos Comunes son menos deseosos de prominencia, o si lo son, encuentran dificultades para conseguir la realización de tales ambiciones, aman los caminos tranquilos, sirviendo y actuando como mediadores entre los otros dos y, generalmente, obedeciendo más que dominando. Así se da por sentado que el poder y grado de acción enfermiza mostrará una caída desde los signos Cardinales a los Comunes, ya que la intensidad de la enfermedad se asociará con los signos Móviles, y su remisión, con los signos Mutables. Brevemente, la necesidad de considerar este orden particular estriba en el hecho de que las influencias recíprocas prevalecen entre los miembros de estas tres divisiones. Son: Mental (Cardinales), Vital (Fijos), y Motor (Mutables). Los signos Mutables o Comunes se pueden clasificar como los coordinadores simpáticos o las membranas principales de los signos Cardinales; y los signos Fijos son el motor generador de aquéllos. En cada trígono viene representado el cuaternario. Por ejemplo, en el trígono de Fuego, Aries pertenece a lo mental, Leo a lo vital, y Sagitario a lo motor. Tenemos que encontrar, a través de estas correlaciones y simpatías tan frecuentes, las deducciones horoscópicas de las tendencias enfermizas, pues esta forma es la más rápida de obtener una apreciación de los agentes internos que causan anomalías. Los tres grandes aspectos en los efectos patológicos son la conjunción, cuadratura y oposición. Se relacionan entre sí a través del mismo signo, el próximo inmediato de la misma cuadruplicidad, y el signo diametralmente opuesto. En los tres casos se hallan implicados los cuatro signos de una misma cuadruplicidad. En la figura 1 de la página siguiente, se supone que tomamos al signo Cardinal de Aries como punto de partida —siendo Cáncer, el signo Cardinal que le sigue, y Capricornio el que le precede, mientras que la oposición viene desde el signo Cardinal Libra—. Se relacionan como: Aries (conjunción), a la derecha (Capricornio) y a la izquierda (Cáncer), formando cuadraturas, y (Libra) oposición. Los cuatro signos se complementan en una suerte de mutuo cautiverio.

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La astrología hindú nos habla de los aspectos opuestos como «visión completa», porque los puntos concernientes, cuando se distancian 180 grados, se «miran»; los rayos de los dos cuerpos caen totalmente uno encima del otro. La cuadratura es llamada «tres cuartos de visión», no obstante, para el caso de Marte, se supone que es «visión completa». La conjunción no es, realmente, un aspecto, sino una posición, expresada a menudo como «corporal». De esta relación se sucede una colaboración de las partes o un intercambio de fuerzas. Debe observarse que cuando los signos Cardinales son los principales actuantes, las enfermedades de la cabeza, estómago, ríñones y piel son causa principal, aunque el signo de Aries no contenga planeta alguno. Cuando los signos Fijos están ocupados, las enfermedades principales se darán en el corazón, garganta, espalda y órganos reproductores; y en los signos Mutables las afecciones tendrán lugar preferentemente en el sistema respiratorio, nervios e intestinos. Aunque las enfermedades suelen presentarse en este orden, no obstante, ningún signo pierde su valor distintivo.

10. SIMPATÍAS Y ANTIPATÍAS PLANETARIAS En este capítulo vamos a considerar las propiedades fundamentales de los planetas, desde el ventajoso punto de vista primum calidum. Calor y frío se relacionan con seco y húmedo y, a pesar de la costumbre de referirse a ellos como cualidades elementales, no es una definición verdadera. Cada cuerpo celeste difiere de los otros en la mezcla de calor y frío con seco y húmedo. Las proporciones se descubren observando la afinidad que tienen con las materias sublunares. Se pueden expresar como se indica a continuación, usando el signo (+) para denotar un grado intenso, y el signo (-) para una carencia. (+) Sol  Júpiter Saturno

Caliente Caliente Frío

(-) y seco y húmedo y seco

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Luna Mercurio Venus Marte Urano

Neptuno

(-) Fría Frío Cálida Caliente

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(+) y húmeda y seco (convertible por aspecto) y húmeda y seco

(+) Frío

(+) y seco

(-) Cálido

(-) y húmedo

No obstante, esto sólo es válido como planteamiento, pues Ptolomeo y muchos otros después de él informan que el Sol posee calor y sequedad moderados; la Luna es húmeda y un poco cálida; Mercurio es indiferente a la humedad y a la sequedad, predominando a veces una y a veces otra, pero en conjunto es más bien seco; Venus es templada, difiriendo de Júpiter en que este último se inclina más hacia lo cálido que hacia lo húmedo y Venus es más húmeda que cálida; Marte es caliente, seco y ardoroso; Júpiter es moderadamente cálido y húmedo; Saturno es frío y seco pero participa más de la primera cualidad que de la última. El calor se expresa como expansión, vitalidad; el frío como contracción, cristalización y concreción; lo seco como radiación, irritación; lo húmedo como relajación, movilidad, plasticidad. Las mezclas producen resultados acordes. Por ejemplo, la alianza entre la Luna y Marte será equivalente al Agua y Fuego. Cada uno se esforzará en subyugar al otro, el resultado será la ebullición, la evaporación, el humo, la conversión en estados aeriformes en último caso. En el organismo humano significará actividad mental efervescente, despliegue de sensaciones coléricas, fuerza cerebral dispersa o disipada, condiciones eruptivas. Por otro lado, existe una afinidad entre Mercurio y Saturno; ambos poseen cualidades similares a pesar de suposiciones contrarias. Venus simpatiza con Neptuno por la misma razón, y también con Júpiter y la Luna. El frío lunar no es el de Saturno, tiene una condición neutral y su propósito general es el de atemperar. Para deducir el carácter de las fuerzas resultantes en varias esferas de la actividad, supondremos a Marte en conjunción a otro cuerpo. Primero con Júpiter. Ambos presentan puntos parecidos en su misma naturaleza caliente. Pero Júpiter aporta cierta humedad y Marte es seco, y en el cuadro anterior, la sequedad se muestra en grado mayor que la humedad. Podemos ilustrar esta acción parecida al procedimiento del calor que desprenden sustancias tales como engomados, bálsamos, resinas, azúcar y parecidos. Primeramente se forma la unión, acompañada de evaporación y espesación, hasta que el con junto de la humedad se aparta; el residuo sólido acaba carbonizándose. Pero si es Saturno el que toma el lugar de Júpiter, la acción de los dos se representará como si un trozo de piedra fuese sometida al fuego. En este caso, la fusión no se produce, la piedra estalla partiéndose en mil trozos. El frío saturnino y el calor marcial son los extremos del positivo y el negativo. Incluso su acción dinámica es demasiado diferenciada para reconciliarse una con la otra. En el dominio de la enfermedad, Marte con Júpiter incrementa la consistencia del tejido adiposo y la conexión fibrosa. Marte con Saturno produce fracturas compuestas, temperaturas extremas que suben rápidamente, dispersiones violentas. La acción puede 37

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compararse a la contienda de partes en un quebrantamiento o choque: unas partes se oponen a las otras, el resultado es una catástrofe. La combinación de dos cuerpos planetarios cuyas propiedades determinativas son el calor —como el Sol y Marte— abarcará aquellas enfermedades en que estén complicados los síntomas febriles e inflamatorios. Al contrario, cuando los atributos están en conflicto, como en el caso de Sol y Saturno, se reduce la acción de cada uno. La acción inflamatoria solar será de carácter crónico. La fuerza saturnina favorece el debilitamiento de la influencia solar. Un par de planetas cuyas naturalezas sean frías y secas, como las de Saturno y Mercurio, serán los responsables de la nerviosidad y la sagacidad mental. Cuando predomina lo seco sobre lo frío, como en el caso de Mercurio y Urano, indica rapidez de pensamiento, exuberancia de ideas, talante tangencial y métodos de expresión correlativos. Y así sucesivamente. Un contraste típico es el que se produce entre Marte y Saturno. Y como estos dos cuerpos son tan importantes en la producción de lesiones y desarreglos fisiológicos, debemos hacer una más amplia revisión en adición a la que ya hemos adelantado. Del mismo modo que Marte entona, Saturno deprime. Cardan dice que «Saturno causa largas enfermedades; Mercurio varias; la Luna las que vuelven después de un tiempo, tales como vértigo, epilepsia; Júpiter y el Sol, enfermedades cortas, pero Marte causa las más agudas de todas». Los dos cuerpos aquí particularizados, son «aneretas» o destructivos de vida, pero por muy diferentes caminos. Representan el calor extremo (el calor solar especializado a través de Marte, y en realidad más intenso); y el frío extremo. La fuerza del calor es la expansión o materia de vida; la fuerza del frío o gravedad es la contracción o muerte. Sus colores específicos son el rojo y el azul respectivamente. Las plantas sensibles como la mimosa crecen diez o doce veces más altas bajo los efectos de un vidrio rojo que de otro de color azul. En efecto, las plantas criadas con ayuda de vidrios azules presentan un crecimiento débil y aturdido. El hombre melancólico, sujeto a las mismas condiciones, siente que su espíritu crece bajo la influencia de los rayos rojos, mientras que el tipo violento y arrebatado se calma bajo la influencia del azul. Un Marte lunático será violento, el individuo saturnino será hipocondríaco. La timidez y depresión son saturninas. En este caso su actuación es restringida, completamente opuesta a la acción marcial franca y expansiva. Marte no da filósofos pero sí hombres de impulso y acción. El tímido Saturno induce a la meditación y al análisis. El temperamento del filósofo y del científico es saturnino, por contra, el pionero enérgico y aventurado es marcial. En el hombre intelectual y sedentario existe una gran influencia de Saturno y poca de Marte, o dicho de otra manera, mucha audacia especulativa pero poco valor práctico y físico. Mucha sabiduría pero carencia de rapidez, de perseverancia mental y penetración, con temor a la multitud (agorafobia) y desagrado hacia la actividad física. En el individuo saturnino, la conciencia mental es grande y tiene un lugar de prioridad, en el marcial domina el instinto animal. El uno tiene una sangre acuosa y clara, el otro densa, fluida, vital, que no conduce a la meditación ni a la inspiración, sino a la excitación y terminación. Para entender esta antítesis y sacar correctas consecuencias sólo es necesario comparar varios horóscopos de filósofos y científicos con otros de hombres luchadores y de acción. A Marte se le atribuyen los casos determinativos de la sangre por la aplicación de estímulos. El calor producirá un derrame de sangre a la superficie, mocos o lágrimas, aromas, tanto en la nariz como en los ojos; en las glándulas salivares, alimentos o en los vasos secretorios se formarán purgativos para los intestinos, y diuréticos para los ríñones. Asimismo nos brinda el tratamiento terapéutico de la enfermedad con remedios antipá38

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ticos —bajo el principio contraria contraríis curantur —. Como ejemplo de un medicamento tónico y típico, el hierro es un remedio bajo el dominio de Marte, requerido por la sangre en los casos de carencia de tono, depresión o debilidad del sistema muscular. En los desórdenes por flojedad, flaccidez, cronicidad que proceden de debilidad, caquexia, hipocondría, en resumen, enfermedades saturninas, el hierro es un remedio abastecedor. Actúa activando la circulación, elevando el pulso, aumentando los glóbulos rojos de la sangre y promoviendo las secreciones. Por otro lado, el antimonio, o droga saturnina, opera reduciendo las fiebres e inflamaciones, que es una acción marcial. Es un contraestimulante, disminuyendo la excitabilidad del sistema vascular, y por tanto neutralizando las condiciones inflamatorias. Además, advierte de lo que ocurre por la introducción de plomo (Saturno, en forma de sales) dentro del cuerpo. Se suceden exactamente los efectos opuestos producidos por el hierro (Marte), estreñimiento, cólico, temblores y debilidad de los nervios, contracciones de los miembros, parálisis, atrofia, gota, etcétera. Todos estos desórdenes son saturninos. Pero casi como un último recurso, se ha dado una preparación de plomo (tintura saturnina) para restringir las transpiraciones colicuativas en las fiebres tísicas y hécticas. Externamente se usa el azúcar de plomo como astrictivo, en forma de colirio para las inflamaciones de los ojos, cuyos ingredientes principales son los ungüentos y linimentos para erupciones cutáneas, escoriaciones, úlceras, etcétera, y en forma de inyecciones para restringir las gonorreas. Los remedios saturninos perjudican, en cierto modo, al sistema nervioso, el cual está considerablemente influido por este planeta. También, el proceso del resfriado como causa de enfermedad — debido al constreñimiento de los vasos sanguíneos de la superficie y extremidades, hecho que empuja la sangre al interior y produce congestiones internas—, es diametralmente opuesto al procedimiento de Marte, en que el calor es la causa principal: las venas y el cutis, los cuales se contraen con el frío (Saturno), se relajan con el calor (Marte). Una hemorragia (Marte) requerirá un astringente (Saturno). Una inflamación o una excitación muscular de los centros nerviosos (Marte) necesita un antiflogístico (Saturno). Deficiencias de la circulación en un miembro (Saturno) piden aplicaciones estimulantes y fricciones, o quizás, tratamiento interno de estricnina o cantárida (Marte). Las afecciones como la neuralgia, que dependen de una circulación deficiente (Saturno), son curadas con tónicos (Marte). El poder excesivo de voluntad (Marte) requerirá antimonio, frío en la cabeza (Saturno). Así sucesivamente. El lado terapéutico de la Astrología es muchísimo más amplio, pero para seguir el curso de lo expuesto aquí ya es suficiente. Paracelso ya escribió: «La simpatía entre dos planetas, tan frecuente de observar, es una muestra de la subordinación de los elementos a través de los varios canales de expresión y de las corrientes constantes de influencias que son recíprocas entre los planetas relacionados. Cada metal y cada planeta posee ciertas cualidades que puede atraer influencias planetarias que le son congruentes, y si conocemos las influencias de las estrellas, el significado de las conjunciones de los planetas y las cualidades de los medicamentos, podremos saber qué remedios debemos aplicar para atraer determinada influencia que pueda actuar beneficiosamente sobre el enfermo ». Algunas drogas o medicamentos son «simples» y podrán encontrarse en el Capítulo 5,  junto con las fuerzas planetarias que se hallan aliadas o les corresponden. Esto es lo máximo que puede hacerse en la senda de la «materia médica» y en lo que a estos capítulos se refiere. Hasta ahora, los aspectos y combinaciones de planetas han sido, principalmente, los concernientes entre los luminares y el Ascendente y algún cuerpo más. No obstante, los aspectos formados entre los propios planetas ejercen influencias específicas. Éstos tendrán 39

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que ser calibrados por la luz de la información que ha sido previamente impartida. Sin embargo, los efectos de los dos planetas que acabamos de estudiar pueden ser brevemente resumidos. Con la palabra «con» el planeta forma una conjunción u otro aspecto, como la cuadratura, pero no incluye el trígono: MARTE CON: Sol. Acrecienta la susceptibilidad de la acción febril, inflamatoria e hiperémica. Altas temperaturas, pulso acelerado, voluntad de poder excesivo. Luna. Menstruaciones copiosas, pirosis, eructos y náusea biliosa, fiebres exantemáticas, acción eruptiva. Mercurio. Irritación del sistema nervioso (excitabilidad, logorrea) como signos patógenos. Inflamación nerviosa, eretismo de los centros nerviosos, diarrea biliosa, neuroma, sed. Venus. Orina abundante, secreciones excesivas, irritaciones renales, fibroma, flebitis, ninfomanía (en mujeres).  Júpiter. Lipoma, artritis, exudaciones fibrinosas, tumor esteatoso, sarcoma adiposa, inflamación esténica. Saturno. Cálculos biliares, inflamación de las articulaciones, malformaciones, fracturas, acondroplasia, según cual sea el planeta dominante. Urano. Dolores y calambres por funciones excitomotoras exaltadas, excitamiento muscular involuntario, acción hiperquinésica, desgarros y rupturas. Neptuno. Fenómenos referentes a causas psíquicas. SATURNO CON: Sol. Defectos locomotores y espinales, escasa vitalidad, parálisis, corazón y centros espinales afectados, rigidez, enfermedades del poder voluntario, lesiones en la columna, en la espina, enfermedades estructurales del corazón, enfermedades profundamente arraigadas. Luna. Anemia, pecho estrecho, caquéctico, funciones sensoriales impares, congestiones encefálicas e intropulsoras, maduración y ablandamiento de los tubérculos. Mercurio. Secreción deficiente del mocus en la membrana respiratoria, entumecimiento de los nervios. Venus. Orina altamente cargada, cálculos urinarios, supresión de la orina. Marte. Cálculos biliares, inflamación de las articulaciones, malformaciones, fracturas, acondroplasia, según el planeta dominante.  Júpiter. Condroma (tumor fibrocartilaginoso), hígado perezoso, inflamación congestiva con Júpiter influyendo. Urano. Contorsión y rigidez de los miembros, compresión de los órganos, contracciones y estrechamiento. Neptuno. Oscuro y psíquico.

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11. EVALUACIÓN DE LA FUERZA PLANETARIA EN UN HORÓSCOPO DETERMINADO Aunque podemos estar íntimamente familiarizados con las virtudes intrínsecas de los componentes del Sistema Solar, su conocimiento solamente nos será útil en una dirección limitada. Tendremos que ir extrayendo de entre las múltiples y posibles influencias para, finalmente, ajustamos y ser rigurosos en el significado global del esquema. El astrólogo debe considerar cuáles son los aspectos que incrementan, avivan o disminuyen las energías mórbidas, así como la valoración de las posiciones planetarias en los puntos de la carta natal. Las influencias planetarias dentro de las jerarquías ya fueron estudiadas en el Capítulo 7. En el sloka (aforismo) 38 del clásico  Jataka Parijata, se citan seis clases de fuerzas: Drihbalam Sthanabalam Nisagikabalam Cheshtabalam Dikbalam Kalabalam

Fuerza del aspecto Fuerza de posición Fuerza natural Fuerza de movimiento Fuerza direccional Fuerza temporal

Como ejemplo de la aplicación de estos argumentos tomaremos la fuerza por posición (Sthanabalam) de un planeta. Las siguientes posiciones deben ser consideradas juntamente con las otras: 1. Atchi Ucha 2. Ucha 3. Mulatrikona 4. Svakshetra 5. Atimira 6. Mitra 7. Sama 8. Satru 9. Atisatru 10. Muda 11. Nicha 12. Atimicha

Exaltación máxima Exaltación Casa especial de poder Su propia casa Casa muy amiga Casa amiga Casa neutral Casa enemiga Casa muy enemiga Combusto Casa de debilidad Casa de máxima debilidad

Estas concepciones son de proporciones demasiado colosales para nuestras mentes occidentales pero presentan cierta analogía con lo que se expone a continuación. Antes de hacer un juicio tendremos que considerar: 1) la fuerza de los aspectos; 2) la fuerza de la

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posición mundana; 3) la fuerza natural; 4) la fuerza de movimiento y 5) la fuerza direccional. 1. Fuerza de los aspectos

Se entiende que el lector está familiarizado con el significado de los aspectos. Nosotros emplearemos los siguientes:  

Oposición 180°  

Maléficos

Quincuncio 150°

Cuadratura 90°

Variables

Paralelo de declinación // o P.   Benéficos Trígono  120°

Semicuadratura 45° Conjunción c Sextil 60°

Los paralelos y conjunciones son, en general, buenos aspectos cuando se forman entre planetas benignos, y malos en caso contrario. A primera vista parece inconcebible que agentes malignos, como Marte y Saturno, o benignos, como Venus y Júpiter, puedan modificar sus cualidades según su posición y distancia en grados, de manera que la influencia de los dos primeros planetas pueda tornarse constructiva en vez de destructiva, y la influencia de los últimos produzca el efecto contrario. Ésta es una de las objeciones precisadas por Plotino: «El hecho de que un planeta cambiase su naturaleza por la simple variación de la posición o del aspecto era tan contrario a lo que acontecía en la esfera sublunar, que si se razonaba analógicamente no podía admitirse como cierto. La inestabilidad existente entre los planetas, puede ser calibrada para cada variación según la forma de un aspecto, acompañada también por un cambio en sus influencias, así lo afirman los astrólogos». En el libro tercero de Las Eneadas, el autor precisa que «a los planetas les está adjudicado el cambiar su significado, por su modificación en su curso y por su situación en los ángulos o cadencias. Pero lo más importante que afirman los astrólogos es que algunos de los planetas son benéficos y otros maléficos. No obstante, estos últimos actúan frecuentemente como los dotados con las virtudes de los primeros, mientras que los benéficos actúan, a veces, como maléficos. Amplían esto diciendo que cuando los planetas están en aspecto de reciprocidad actúan en un sentido, y cuando no se aspectan mutuamente producen efectos en el otro. Finalmente, un planeta aspectado por un benéfico concede el bien, pero puede cambiar súbitamente cuando transfiere este aspecto a otro planeta. Asimismo, afirman que los planetas cambian de comportamiento de acuerdo con los cambios de aspectos entre los planetas, ya sea por una conjunción u otra forma de influencia». En realidad, los planetas no cambian su naturaleza al variar de posición o de configuración, tal como se afirma, ni tampoco son unos «buenos» y otros «malos». Lo que o42

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curre es una nueva polarización o resurgimiento de la energía de sus rayos. Marte es siempre Marte; nunca exhibe las cualidades de Saturno ni se presenta como este último — frío, gravidez, concreción—. Marte no puede contradecirse a sí mismo al recibir los rayos de otro cuerpo a través de aspectos maléficos, incluso aunque se trate de planetas benéficos. Es necesario que aceptemos a las estrellas como maléficas y benéficas, y admitamos también que existe, entre ellas, una capacidad inherente para mezclar y transferir sus influencias. Teóricamente, la explicación no es difícil, pero aquí estamos tratando con hechos. No obstante, supongamos que cada influencia, por separado, tiene una función potencial de dos fases: (a) un metabolismo constructivo o fuerza viva, y (b) un catabolismo destructivo o fuerza viva. La primera se manifestará bajo la serie de aspectos basados en el triángulo, la última, por los planetas basados en el cuadrado. El trígono del Sol con Marte dará lo mejor, la influencia marcial en su forma constructiva, beneficiando directamente al género humano. De ello resultará vigor del cuerpo, actividad, gran energía, voluntad firme, fuerza de carácter, habilidad para dirigir, controlar y construir cualquier acción con decisión, coraje y rapidez. No obstante, el Sol en cuadratura a Marte presenta el otro lado de la moneda. Aquí también hay actividad, energía, fuerza de carácter, pero la naturaleza de la persona poseerá los rasgos oscuros de los planetas (cólera, violencia pasional, carácter vengativo). Será una acción destructiva en lugar de constructiva, se enardecerá en vez de producir una cordialidad amable, y proporcionará todas las condiciones necesarias para una acción inflamatoria y febril. En ambos casos, la fuerza de los planetas se manifestará a través del Sol, siendo ambos cuerpos productores positivos, eléctricos y calóricos. Es fácil de comprender que las enfermedades serán agudas, violentas, febriles, desmedidas, acerbas e inflamatorias. Tales lesiones y dolencias irán acompañadas de pérdidas de sangre, operaciones quirúrgicas, heridas con herramientas afiladas, disparos, quemaduras, escaldaduras. Estos perjuicios procederán de actos temerarios Princ.palmente motivados por el propio nativo, pudiendo variar, según las condiciones del con junto del horóscopo, desde heridas por accidente hasta el suicidio o el asesinato. Para que esto último suceda deben asociarse oíros muchos factores desestabilizadores y que posibiliten esta predisposición mórbida. Los aspectos a los ángulos que ejercen una mayor influencia son: la conjunción, el paralelo de declinación, la cuadratura y la oposición. La conjunción no es tan desequilibrada como la cuadratura o la oposición, mientras que el trígono entre Marte y el Sol, antes mencionado, es totalmente constructivo y goza de los mejores atributos de Marte. Por otro lado, la cuadratura y la oposición son aspectos totalmente destructivos. La conjunción posee, en gran medida, ambas capacidades y funcionará según la ocasión; cuando está ayudada por otras influencias benéficas no debe ser temida. Tanto si el aspecto es inmóvil o carece de ayuda, la balanza siempre se inclinará hacia el lado negativo. Es evidente que cuanto mayor sea el número de malos aspectos que reciban los luminares será más acentuada también la predisposición a los desequilibrios orgánicos, mientras que cuando los cuerpos maléficos aspectan gravemente a los ángulos los desórdenes tendrán un carácter más profundo. Cuando se conocen las características planetarias también puede reconocerse la diátesis, en líneas generales, naturalmente. Es decir, si deducimos que se trata de una aflicción saturnina, entendemos que puede tratarse de: susceptibilidad ante los resfriados, desórdenes de carácter crónico, tediosos, destructivos, corruptivos, obstructivos. Cuando la aflicción proviene de Urano indica enfermedades nerviosas, espasmódicas, neurálgicas. Si se trata de Marte, causará dolencias inflamatorias, febriles, agudas, contagiosas, violentas y repentinas. Y así sucesivamente. 43

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Pero estas expresiones definidas no significan una circunstancia invariable. Se comprende que puede prevalecer una mezcla de varias fuerzas, y que la dificultad estriba en el desenredo de las mismas. Ésta es la diferencia entre un átomo elemental y una molécula compuesta. En la combinación de los átomos, la explicación usualmente admitida por la química está basada en la suposición de que cada átomo tiene un cierto y definido número de enlaces o polos, análogos a los del imán. Esta cualidad es conocida como valente, y un átomo puede ser bivalente. Si pensamos que el sistema planetario se comporta de forma similar (simplemente como una concepción meramente ilustrativa), tomaremos a los planetas como átomos y sus valencias estarán representadas por los aspectos. Si un horóscopo fuera confrontado con un esquema de aspectos solares como el siguiente: Sol cuadratura a Saturno, semicuadratura a Neptuno, conjunción a Urano, oposición a Marte, obtendríamos una valencia cuadrivalente para el Sol como la que presentamos aquí:

y, si al mismo tiempo Marte aspecta a Saturno; Mercurio, Marte y Saturno; y Urano, Neptuno; estas ulteriores complicaciones serían indicadas por otro vínculo, así:

2. Fuerza de la posición mundana

Esta fuerza depende del carácter de la división del esquema en el cual cada planeta tiene su posición. Indudablemente, los ángulos son puntos preeminentes, y la acción de los cuerpos que ocupan el Ascendente, el Descendente, el  Médium Coeli y el Imum Coeli se acentúa notablemente. Hay otras dos Casas que tienen especial importancia en las enfermedades: las Casas VI y XII, pero ya se trató de su influencia en el Capítulo 8. Las Casas III y IX son también importantes, ya que conciernen a las condiciones mentales y espirituales del 44

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individuo, las cuales son, a la vez, responsables de las acciones reflejas a nivel físico. Por último, un planeta es tanto más poderoso cuanto, en la carta natal, más elevada sea su posición mundana con respecto a sus asociados. Debe tenerse en cuenta que las doce divisiones mundanas, los «templos», regiones o mansiones, conocidos comúnmente como las Doce Casas, son equivalentes a las del Zodíaco celeste. Son las significadoras de los signos. La Casa 1 (ver el ejemplo 5, pág. 110) tiene un significado similar al del primer signo de Aries; la Casa II, con Tauro; la Casa III, con Géminis; etcétera. Sin embargo, desde el punto de vista fisiológico, sus poderes son menos amplios, excepto en los ángulos. El Este se corresponde con Aries, el Norte con Cáncer, el Oeste con Libra y el Sur con Capricornio. Pero el primer ángulo citado, el Ascendente, es el de mayor importancia y la actividad de un planeta maléfico presente en él siempre está muy sujeta a encontrar una salida mórbida en el plano material. El resto de las otras Casas no ofrece pruebas fundamentales, a menos que una aglomeración de planetas convierta aquella Casa en importante. Por ejemplo, supongamos que en el tema radical la Casa V estuviera fuertemente habitada: el corazón y la espalda se resentirían, aunque el signo cardíaco de Leo estuviera desocupado. Esta determinación sería más evidente y acentuada si el signo que contiene la aflicción en Casa V fuese de cualidad fija. Del mismo modo, una sobrecarga de planetas en Casa II repercutiría en la garganta; en Casa III, en los pulmones, los nervios, brazos y manos; en Casa IV, en el estómago; etcétera. 3. Fuerza natural

La fuerza natural se origina por la simpatía o antipatía que existe entre los planetas y los signos que éstos ocupan. Los planetas tienen más fuerza cuando están en sus propios domicilios, los cuales son sumamente compatibles con su naturaleza intrínseca. Pero cuando ocupan signos con los que no existe afinidad causarán desorganización. Por ejemplo, un planeta ígneo estaría fuera de su elemento en los signos de Agua, mientras que un planeta húmedo, como la Luna, no estaría dispuesto a colaborar favorablemente con los signos de Fuego. Y aquí se puede introducir una doctrina no observada por los astrólogos modernos pero que, sin embargo, muestra una fase de la actividad planetaria debida al intercambio. En muchos casos esto resulta de una importancia considerable y, de otro modo, no permitiría una explicación, juzgándose como un comportamiento irregular. Me refiero a la recepción planetaria entre los signos. Esto sucede cuando una pareja de cuerpos ocupan, cada uno, el domicilio del otro. Si Marte está en Cáncer y la Luna en Aries, entonces existe la recepción mutua. Este ejemplo es de muy mal augurio. Cada planeta está usurpando el domicilio natural del otro, y ninguno de ellos tiene afinidad con el signo que habita. Pero el asunto no termina aquí. Su utilidad estriba en la aplicación individual y explica muchas irregularidades aparentes. Tomemos las influencias Sol-Saturno. Se manifestarán tres formas de aleación: la influencia del aspecto, el Sol en Capricornio y Saturno en Leo. La tabla siguiente nos muestra, a simple vista, las recepciones entre las luminarias y las Casas:

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SOL Aries, Escorpión Tauro, Libra Géminis, Virgo Sol en Leo Cáncer Sagitario Capricornio Acuario Piscis LUNA Aries, Escorpión

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 Marte Venus  Mercurio Luna  Júpiter  Saturno Urano Neptuno  Marte

Venus Tauro, Libra  Mercurio Luna Géminis, Virgo Sol en Cáncer Leo   Júpiter    Sagitario Saturno Capricornio Urano Acuario Neptuno Piscis

4. Fuerza de movimiento

Bajo este título se incluyen: (a) la posición real y longitudinal de cualquier planeta, (b) su retrogradación, (c) su actitud estacionaria. En su progresión zodiacal, el recorrido diario de un planeta varía dentro de ciertos límites y, en consecuencia, cuando el curso es lento, la aplicación y fuerza de los aspectos es más débil y favorece el incremento de desarreglos en el organismo humano. El recorrido diario medio de los planetas es el siguiente: Neptuno, 1/2 minuto; Urano, algo menos que 1 minuto; Saturno, 2 minutos; Júpiter, 5 minutos; Marte, 33' 28"; Sol, Mercurio y Venus, 59'; Luna, 13°10'. El recorrido es rápido o lento según exceda o no alcance este promedio. La retrogradación, a pesar de ser un fenómeno aparente, puede producir varios trastornos. Implicará interrupciones en la secuencia y solución de continuidad, del mismo modo, un planeta directo da continuidad y secuencia de progresión. El autor ha observado que Júpiter retrógrado, en gran medida, está falto de su poder protector y carece de apoyo cuando se forman direcciones adversas. La posición estacionaria de un planeta indica constancia y duración de los efectos. No obstante, los cuerpos ensanchan su esfera de influencia según sea la garantía de su naturaleza intrínseca: benéfica o maléfica. Wilson nos dice: «No sería fácil demostrar por qué el recorrido diario de un planeta, de moción rápida o lenta, directo o retrógrado, puede alterar su influencia, cuya conducta depende totalmente del poder de atracción». En resumen, la fuerza del movimiento es un factor incierto.

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5. Fuerza direccional

El poder de los planetas se refuerza entre sí por los aspectos que se forman después de nacer. Los cuerpos se van desplazando, siguiendo su curso a través del Zodíaco y de las Casas del horóscopo, efectuándose nuevas disposiciones y mezclas de sus rayos, con la consiguiente y rápida respuesta en el organismo humano. Las «direcciones» indicarán la clase y época de la enfermedad, pero ésta solamente se consumará cuando la carta natal así lo indique (dato muy importante de recordar). La fuerza de las direcciones depende de la combinación de los aspectos, de las posiciones mundanas, zodiacales. Existe la «hexis» o el hábito permanente y la diátesis o la condición transitoria. La «hexis» viene indicada en el tema radical, la diátesis por las direcciones. Si las disposiciones transitorias concuerdan con las permanentes, la alteración prevista es más exacta y pronunciada. Es decir, si en el horóscopo radical existe una influencia marcial de carácter maléfico, el nativo responderá rápidamente a las direcciones de Marte y sufrirá o sucumbirá a las enfermedades inflamatorias, agudas o febriles, estará sujeto al padecimiento y violencia de las intervenciones quirúrgicas. Si se trata de una influencia saturnina, la predisposición tiende hacia los estados irónicos y caquécticos. Así sucesivamente.

12. APLICACIÓN Hemos observado que los planetas, bajo ciertas circunstancias, actúan como enemigos del género humano, y entre los mismos, algunos son más virulentos que otros. Efectivamente, mientras juzgamos un contingente como «afético» o protector y amante de la vida, al otro lo juzgamos j uzgamos como «anereta» o destructor de la vida. Los planetas «aneretas» (Marte, Saturno, Urano) son los factores más imperativos en las causas de enfermedad y muerte (los otros cuerpos no son inofensivos cuando sus vibraciones se ven alteradas por los aspectos conflictivos conflictivos si bien, bajo estas condiciones, no alcanzan el grado de gravedad de los otros planetas mencionados). También hemos observado que existen tres centros vitales (Sol, Luna y Ascendente). Ptolemo dictó unas divisiones particulares del ambiente «prorrogativo» o punto «afético», y cuando este lugar estaba ocupado por uno de los luminares, se constituía dador de vida, o de muerte si tenía lugar una aflicción mediante las direcciones progresadas. Pero sus métodos para decidir esta cuestión eran demasiado arbitrarios y, en la actualidad, su práctica no resulta de gran actividad. Antes de determinar una enfermedad a través de un horóscopo deben hacerse las siguientes investigaciones: investigaciones: 1. Evaluar de qué modo y en qué grado se hallan afligidos afligidos o protegidos los tres puntos aféticos: el Sol, la Luna y el Ascendente. 2. El tipo de energía que radian los cuerpos cuerpos aflictores. aflictores. 3. La fuerza de estos cuerpos. 4. El significado significado de las Casas y signos ocupados. ocupados. 5. Las aflicciones aflicciones mutuas entre planetas, planetas, sin la participación participación de los tres puntos clave: Sol, Luna y Ascendente. 47

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Distribución del esquema

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Es obvio que para cada planeta habrá unos puntos estáticos y otros motores. Los pri-meros estarán representados por su grado de longitud y posición en un signo, los últimos, por los aspectos que se han formado. Pero la dirección del aspecto debe hallarse por la distribución de la fuerza en el esquema de los planetas y su vinculación con la cúspide del Ascendente, de otro modo las influencias parecerían diseminadas sin ningún resultado concreto en el organismo humano, esto se refiere a los aspectos y signos. Veamos el esquema del ejemplo 5.

Ejemplo 5. Niño

Nace el 4 de julio de 1906, a las 8 h. 40' GMT. Lat. 52° 30' Norte. Long. 95° Este. Declinaciones SO 22° 57' 57' N LU 18° 26' S ME 20° 09' 09' N

VE 17° 17° 40' 40' N MA 23° 35' N JU 22° 58' 58' N o SA 7 41' S UR 23° 37' S NE 22° 11' N Aquí, al observar los esquemas esquemas subsiguientes a la carta natal natal vemos, vemos, en en primer lugar, una preponderancia a la actividad catabólica destructiva, auxiliada, en su lado opuesto, por los planetas Venus, Júpiter y Saturno. Por la mediación de estos últimos, la vida será más larga y el sistema gozará de más poder recuperativo. Pero, aunque el nativo puede parecer robusto, en realidad, es de constitución delicada, pues los luminares, además de hallarse afligidos por «separatim», también están implicados desfavorablemente por aspectos de quincuncio. En el siguiente esquema se puede observar que las tres clases peores de energía destructora operan a través del cuerpo y también que estos puntos tienen la 49

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energía necesaria para sacar a relucir esta fuerza. Primeramente, vemos que con Marte en su posición estática de Cáncer y sus polos cinético catabólicos también en Cáncer, Capricornio y Sagitario, la distribución de la energía se reparte a través del Sol y Neptuno, Urano y la Luna, respectivamente en estos signos. Esto nos muestra una intensa acción marcial. En segundo lugar, Saturno estático en Piscis, la energía cinética a través de Sagitario (Luna) y Leo (Venus). Es una influencia coagulante, deprimente y cacéctica. Finalmente Urano desde Capricornio lanza rayos a Cáncer (Sol, Neptuno) y Leo (Mercurio) —agente quebrantador y desviado—. Así, mientras el Sol sufre por las radiaciones de Marte y Urano, la Luna recibe las energías de Marte y Saturno, estando el primero elevado por encima del segundo. Esto implica que existe mucha fuerza en desequilibrio que causará trastornos periódicos. En efecto, el organismo tendrá que soportar, en su mayor parte, los desarreglos causados por tensiones desviadas. La fuerza de vida forzosamente tendrá que burbujear debido al grado de intensidad dinámica que acaba cercando la propia destrucción. La acción solar y marcial en Cáncer no sólo producirá gran irritabilidad en el estómago y dificultad en retener los alimentos, sino también hemorragias y gastritis agudas. Neptuno y Urano, estando también ambos implicados, indican complicaciones complicaciones y confusiones, actividades pervertidas que provienen de crecimientos mórbidos posiblemente cancerosos. Deberían tomarse precauciones con miras a unas posibles fiebres o malaria. Planetas en los Signos

El esquema que aquí aquí se acompaña compara y contrasta contrasta la posición posición de los planetas planetas en cada una de las Casas y signos, respectivamente. Se presagian enfermedades de los nervios y pulmones; (Luna en Sagitario en oposición aproximada a Júpiter en Gé^ minis). También se padecerá pleura y neuralgia intercostal. Hay un exceso de actividad en el estómago, pulmones y nervios, siendo éstos los grandes focos o centros de enfermedad. La muerte será violenta debido a la aflicción de los luminares por los cuerpos «aneretas».

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13. EJEMPLOS Este espacio sólo aporta algunos de los ejemplos más característicos, aunque los primeros, anteriormente citados, presentaban malformaciones irregulares en el físico. Difteria

Es una enfermedad aguda, infecciosa, asociada a una sudoración membranosa en la superficie mucosa. Ejemplo: garganta, amígdalas, faringe. Principalmente, se identifica con los signos fijos, pero especialmente con Tauro y Escorpión. También, en los casos de aislamiento o reclusión en hospitales, la Casa XII es prominente, conteniendo uno de los luminares u otro planeta afligido. Generalmente, la Luna se halla afligida por Saturno y el Sol por Venus. Ejemplo 6. Femenino. Nace el 4 de noviembre de 1895, a las 7 h. 30' a.m. Londres. Escorpión asciende con Marte, Saturno, Sol y Urano (una terrible aflicción). Mercurio está cerca de la cúspide de la Casa XII, y Marte también está presente en ella. El Sol en conjunción a Saturno, Marte y Urano. La Luna afligida por un quincuncio de Marte. El ominoso estado puede ser apreciado ojeando el diagrama de la página siguiente que muestra las Casas XII y I. La niña murió el 4 de noviembre de 1896.

Ejemplo 6

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ASC. 16º 03 Escorpio

Ejemplo 7. Masculino. Nace el 26 de abril de 1894, a las 6 h. 45' a.m. Lat. 51° 30' Norte. Long. 0o 40' Este. El Sol en Tauro en Casa XII, opuesto a Urano, aplicando una cuadratura a Marte y una semicuadratura a Venus. La Luna, en Casa VIII, en cuadratura a Saturno y Mercurio. Tres planeas ocupan signos fijos y tres ocupan Casas fijas.

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Ejemplo 8

Ejemplo 8. Masculino. Nace el 12 de octubre de 1897, a las 8 h. 45' a.m. Peckham. Lat. 51° 30' Norte. Long. 0o 40' Este. Aquí también se hallan implicados los signos de Tauro y Escorpión. El Sol está en Casa XII y la Luna se halla gravemente afligida en Casa VII (ver el esquema que se acompaña).

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Ejemplo 9. Femenino. Nace el 27 de octubre de 1891, a las 6 h. 40' p.m. Lat. 40° 00' Norte. Long. 85° 12' Oeste. Aquí tenemos a Escorpión proporcionando habitáculo al Sol, Mercurio, Venus y Urano; la Luna en Virgo en cuadratura a Neptuno y en oposición a Júpiter. Pero el Ascendente (0o 36' Acuario) recibe la cuadratura del Sol, Mercurio y Urano, y de los maléficos Marte y Saturno que ocupan la Casa VIII, la Casa que corresponde al signo de Escorpión. La niña murió cuando el Sol y Mercurio completaron la cuadratura (o formó cuadratura exacta) con el grado del Ascendente. En el esquema se ve la relación que existe entre el Ascendente y los factores aspectantes. De lo expuesto se deduce que la predisposición a las enfermedades de difteria y escarlatina se identifican con los signos de Tauro y Escorpión. 54

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Tuberculosis de la articulación coxofemoral

Aflicción de Saturno en Sagitario, ya sea por la presencia del planeta, o a través de los rayos del Sol u otro cuerpo importante; Marte suele formar aspecto. Siguen dos ejemplos característicos:

Ejemplo 10

Ejemplo 10. Masculino. Nace el 4 de diciembre de 1868, a las 2 h. 20' a.m. Lat. 41° 52' Norte. Long. 87° 35' Oeste. El Sol y Saturno, unidos en Sagitario, Marte aplica una cuadratura al orbe solar y el Sol en quincuncio a Urano.

Ejemplo 11

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Ejemplo 11. Femenino. Nace el 22 de noviembre de 1853 a las 5 h. 40' p.m. Lat. 53° 23' Norte. Long. 10' 12" Oeste. El Sol y Mercurio están presentes en Sagitario, afligidos en Casa VI. El Sol está opuesto a Saturno, en cuadratura a Neptuno y Marte, y en semicuadratura a Venus; Júpiter recibe un quincuncio de Saturno. Este caso también presenta espina bífida. Observen la Luna en Leo, mal aspectada por Urano y Venus, aplicando una cuadratura a Saturno. Convulsiones

Los factores que promueven las convulsiones consisten en (a) un número importante de planetas en signos fijos; (b) la Luna, y generalmente Mercurio, recibiendo rayos maléficos de Saturno y Urano; (c) la presencia de los cuatro planetas mencionados en los signos fijos. En los casos graves cuyo resultado es la muerte, los aspectos son más fuertes.

Ejemplo 12

Ejemplo 12. Femenino. Nace el 16 de enero de 1896, a las 3 h. 05' p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. O1  06" Oeste. Murió el 11 de noviembre 1896. Aquí tenemos seis planetas en signos fijos. La Luna y Mercurio en Acuario forman cuadratura con Saturno y Urano en Escorpión y opuestos a Júpiter en Leo. También padeció el garrotillo y la difteria.

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Ejemplo 13

Ejemplo 13. Femenino. Nace el 22 de enero de 1899, a las 9 h 00' a.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 00° 06' Oeste. Seis planetas presentes en los signos que afectan los pulmones (Géminis, Sagitario). La Luna, en Géminis y junto a Neptuno, recibe la oposición de Saturno, Urano y Venus. El Sol está afligido por una semicuadratura de Saturno, la cuadratura de  Júpiter y la oposición de Marte. La niña murió el 28 de marzo de 1899 de una congestión pulmonar con convulsiones.

Ejemplo 14

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Ejemplo 14. Femenino. Nace el 25 de noviembre de 1894, a las 9 h. 45' a.m. Lat. 51° 31' Norte. Long 00° 06' Oeste. Murió en junio de 1895. Cuatro planetas en el signo fijo de Escorpión: Luna, Mercurio, Saturno y Urano, en aflicción mutua y recibiendo un quincuncio de Neptuno.

Enfermedades y accidentes en los ojos En general, los luminares se afligen mutuamente. Uno de ellos suele ascender en el horizonte, mientras que Marte y Saturno lanzan aspectos maléficos. En este sentido, los peores signos para los luminares son: Aries, Cáncer, Tauro, Capricornio, Leo y Acuario — Tauro y Acuario son especialmente constantes—. Es casi seguro que existe padecimiento en los ojos cuando la Luna se halla afligida en estos dos últimos signos. Si los aflictores son Urano, Saturno y Marte, y la Luna está presente en Casa I, IV o VII, menguando su luz, esto significa frecuentemente la ceguera total. Marte causa ceguera por fuego, explosión, tiro de fusil, relámpago, heridas, viruela; Saturno por resfriados, cataratas, nubes en los ojos; Mercurio por vista cansada debida al exceso de lectura, esfuerzo mental, etc. El Sol afligido en el Ascendente está expuesto a sufrir cataratas.

Ejemplo 15

Ejemplo 15. Femenino. Nace el 9 de julio de 1884, a las 4 h. 26' a.m. Lat.52° 28' Norte. Long. 00° 7' Oeste. Este tema muestra al Sol elevándose, opuesto a la Luna menguante en Casa VIL Los signos implicados son Cáncer y Capricornio, con cuatro planetas presentes, y el Ascendente. Miopía extrema y astigmatismo.

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Ejemplo 16

Ejemplo 16. Femenino. Nace el 13 de julio de 1853, al mediodía. Se desconoce el lugar. Ceguera. La Luna se eleva en Libra, en cuadratura al Sol que culminan en Cáncer. La Luna está fuertemente afligida por la sexquicuadratura de Saturno y el quincuncio de Urano, desde Tauro.

Ejemplo 17

Ejemplo 17. Masculino. Nace el 27 de junio de 1887, a las 10 h. 40' a.m. Lat. 50° 44' 59

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Heinrich Daath

Norte. Long. 01° 50' Oeste. La Luna se eleva al final del signo de Virgo, en cuadratura a Marte y el Sol, y aplicando una conjunción a Urano. Miopía.

Ejemplo 18

Ejemplo 18. Masculino. Nace el 12 de septiembre de 1875, a las 5 h. 00' p.m. Lat. 45° 00' Norte. Long. 0o 12' Este. La Luna, en Acuario, se eleva en conjunción a Saturno y en oposición a Urano, situado en Leo. El Sol está en Casa VIL Ceguera de nacimiento. Casos en los cuales uno o ambos luminares están presentes y afligidos en el signo de Tauro

Ejemplo 19

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Heinrich Daath

Ejemplo 19. Masculino. Nace el 22 de enero de 1888, a las 4 h. 30' p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 6' Oeste. Se quedó ciego.

Ejemplo 20

Ejemplo 20. Masculino. Nace el 16 de diciembre de 1850, a I h. 00' a.m. Lat. 52° 29' Norte. Long. 0o 54' Oeste, Birminghan. Miopía, estrabismo.

Ejemplo 21

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Ejemplo 21. Masculino. Nace el 12 de agosto de 1849, a las 7 h. 30' a.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 06' Oeste. Miopía.

Ejemplo 22

Ejemplo 22. Masculino. Nace el 13 de agosto de 1850, a las 5 h. 04' a.m. Londres. Es la natividad del poeta Phipli Bourke. A los cuatro años de edad se le desarrolló una incipiente catarata sobreviniéndole una inflamación. Gradualmente, la visión fue empeorando hasta que, al final se quedó ciego. El Sol se eleva en Leo y recibe las cuadraturas mundanas (por Casas, no zodiacales) de la Luna y de Urano, y la semicuadratura mundana de Marte. La Luna, en oposición a Urano desde Tauro, también está en paralelo de declinación con Saturno. Cálculos en los ríñones y la vejiga

La arenilla y los cálculos son el resultado de la cristalización y deposición de sustancias sólidas por la orina y, generalmente, se deben a la acción saturnina. Por esta razón las personas afectadas suelen tener un carácter melancólico e hipocondríaco. En el Capítulo 2 se cita que los ríñones están gobernados por el signo de Libra, pero la pelvis del riñón está regida por Escorpión. Y precisamente es, en la pelvis, donde se forman los cálculos. Ejemplo 23. Masculino. Nace el 21 de abril de 1822, a las 7 h. 00' p.m. Lat. 51° 00' Norte. Long. 0o 07' Oeste. El Ascendente está en el primer grado de Escorpión, y el Sol, Luna, Saturno y Júpiter, cerca de la cúspide de la Casa VII, formando conjunción. Ambos luminares reciben una semicuadratura de Venus y este planeta a su vez aspecta en semicuadratura a Saturno. Como no hay planetas presentes en Escorpión, la influencia parece venir reflejada desde Tauro. Estos dos signos invierten sus acciones, como ya se ha citado anteriormente. Ver las posiciones del esquema: este caso de cálculo en el riñon sólo es una forma de manifestación de carácter secundario. La zona específica taurina, la 62

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garganta, acogió la mayor parte del mal. Las manifestaciones resultantes fueron: difteria, parálisis bulbar y, a edad temprana, anginas y afecciones menores de la garganta.

Ejemplo 23

 

Asc.

Ejemplo 24. Femenino. Nace el 18 de marzo de 1852, a las 10 h. 30' p.m. Lat. 52° 30' Norte. Long. Io  18' Oeste. El tema muestra el Ascendente a 13° 30' de Escorpión, con  Júpiter retrógrado en el mismo signo, aunque libre de aflicciones. Venus, Saturno y Urano  juntos en Tauro, en Casa VI. Exceptuando estos aspectos, el horóscopo está muy poco afligido. En este caso el diagnóstico de la enfermedad parece muy difícil, pero resulta muy significativo considerarlo como en el anterior ejemplo. En las afecciones de riñon, generalmente, Venus se asocia con Saturno.

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Ejemplo 25

Ejemplo 25. Masculino. Nace el 7 de noviembre de 1866, a las 4 h. 30' p.m. Lat. 51° 22' Norte. Long. 0o 06' Oeste. Piedras en la vejiga. Estrechez de la uretra. Dispepsia. El corazón y la espalda afectados. Aquí, Escorpión asume su pleno dominio. El Ascendente se eleva con el último decanato de Tauro, y el Sol, Luna y Saturno forman conjunción en Escorpión, cerca de la cúspide de la Casa VII (de hecho, todavía están presentes en Casa VI). Inflamación crónica del intestino, diarrea crónica, tuberculosis aguda

Ejemplo 26

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Ejemplo 26. Masculino. Nace el 5 de septiembre de 1864, a medianoche, Lat. 51° 22' Norte. Long. 0o 06' Oeste. Esta natividad nos revela abundantes causas de enfermedades específicas. Nos servirá para presentar las aflicciones principales a través del esquema. Las líneas de conexión indican los malos aspectos. La línea punteada indica malos aspectos aunque no totalmente completados. Los planetas en paréntesis lanzan sus aspectos desde otros signos. Hernia escrotal, arenilla, diarrea, angina de pecho, dolores neurálgicos en la cabeza, trastornos de riñón y de espalda

Ejemplo 27

Ejemplo 27. Masculino. Nace el 5 de noviembre de 1855, a las 4 h 45' p.m. Lat. 52° 28' Norte. Long. 0o 07' Oeste. Urano se eleva en Tauro. Es una indicación muy corriente de dolores punzantes en la cabeza (de origen oscuro). Sol y Mercurio conjuntos en Casa VI, en Escorpión, (escroto, vejiga), el luminar está afectado por una sexquicuadratura de Saturno, una semicuadratura de la Luna (también en Casa VI), y una oposición de Urano. Venus en Casa VI, en Libra, en cuadratura a Saturno. La hernia escrotal fue debida a la fuerza uraniana; la arenilla a la influencia saturnina; la angina al predominio de los signos fijos y por la ocupación de las Casas fijas: Júpiter y Neptuno en Casa XI, Marte en Casa V, Saturno en Casa II. Los problemas del riñon provienen de Venus en Libra, en cuadratura a Saturno. Los dos luminares se hallan afligidos en Casa VI. El nativo es un enfermo crónico.

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Bronquitis crónica, epitelioma de la nariz (operación)

Ejemplo 28

Ejemplo 28. Masculino. Nace el 21 de junio de 1826, a 1 h. 05' a.m. Lat. 52° 28' Norte. Long. 0o 07' Oeste. Para esta afección bronquial, el horóscopo presenta fuertes aflicciones en el sector referido a los pulmones, intensificándose su acción por la ocupación planetaria de la Casa III (equivalente al tercer signo zodiacal). La enfermedad, de carácter crónico, viene indicada por Saturno. El epitelioma (fue causa de muerte) viene señalado por Marte, angular, en Escorpión (nariz), que forma oposición al Ascendente, y por consiguiente, actúa con mucha fuerza. La acción pervertida de la Luna en Capricornio (conjunta a Urano y Neptuno), signo relacionado con los tejidos epiteliales, debe ser remarcada. Bronquitis, excrecencias tumorosas en la cabeza

Ejemplo 29

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Ejemplo 29. Masculino. Nace el 25 de mayo de 1846, a las 0 h. 05' p.m. Lat. 53° 00' Norte. Long. 0o 10' Oeste. El estado de bronquitis viene señalado por el Sol y la Luna con juntos en Géminis, en cuadratura a Saturno en Piscis. Para la tumoración observamos a Venus en Aries, junto a Urano, en cuadratura a Marte, desde Cáncer. Gastritis, extirpación de las amígdalas

Ejemplo 30

Ejemplo 30. Femenino . Nace el 23 de octubre de 1866, a las 0 h. 40' p.m. Lat. 52° 28' Norte. Long. 0o 07' Oeste. Marte en Casa VII, angular, acción cinética hacia el Sol al final de Libra, casi entrando en Escorpión. La garganta está regida por un signo fijo, por reflejo desde Tauro. Gran irritabilidad del estómago. Gastritis. Actividad marcial y uraniana en Cáncer. Mal de Brigth (Nefritis)

Una aguda y crónica descamación nefrítica que se ve reforzada por una asociación adversa entre Venus y Saturno. Pero como estas enfermedades no son debidas realmente a una condición renal mórbida, las posiciones horoscópicas tampoco muestran la energía estática o la influencia de Libra. No tenemos suficientes datos para determinar unas bases satisfactorias pero podemos establecer lo siguiente: 1) Venus en mal aspecto con Saturno, 2) Venus en mal aspecto con Júpiter, 3) el Sol en mal aspecto con Júpiter, 4) la Luna presente en Cáncer, Escorpión o Piscis, 5) un signo fijo elevándose en el Ascendente. La importancia de los signos fijos estriba en que las condiciones desfavorables de Venus y  Júpiter no son condiciones suficientemente fuertes y negativas.

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Ejemplo 31

Ejemplo 31. Femenino . Nace el 17 de abril de 1878, a las 0 h. 35' p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 06' Oeste. Nefritis (complicaciones). El vínculo es tal como viene indicado en el esquema. Un signo fijo asciende (Leo con Urano). La Luna ocupa un signo fijo (Escorpión). Seis planetas y el Ascendente están presentes en signos fijos.

Ejemplo 32

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Ejemplo 32. Masculino. Nace el 9 de agosto de 1836, a las 12 h. 00' p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o  06' Oeste. La neumonía está indicada, principalmente, por Marte en Géminis. La dispepsia por la Luna y Venus (afligida por Saturno) en Cáncer. La alburrimia nos viene dada por estas correspondencias: Venus y Júpiter en cuadratura con Saturno,  Júpiter en oposición a Neptuno, Luna en Cáncer, signos fijos prominentes con cuatro planetas presentes en ellos, Escorpión asciende y Saturno está casi en la misma cúspide del Ascendente. Nefritis, neumonía, dispepsia.

Ejemplo 33

Ejemplo 33. Femenino. Nace el 4 de enero de 1884, a 1 h. 15' p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o  06' Oeste. La carta muestra a Venus en oposición a Júpiter y en paralelo de declinación con Saturno, Mercurio y Marte. También aplica una oposición a Marte. Marte,  Júpiter, Saturno, Urano, Neptuno y Plutón son retrógrados. La Luna está mal aspectada en Piscis. Los signos fijos están ocupados por seis planetas. Saturno está cerca de la cúspide del Ascendente. Casa XII

Ejemplo 34

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Kjemplo 34. Masculino. Nace el 25 de octubre de 1833, a las 8 h. 15' a.m. Lat. 44° 50' Norte. Long. 0o 34' Oeste. La tarta muestra al Sol en oposición a Júpiter, Luna opuesta a Venus, Venus en conjunción a Saturno (en el signo renal) y en quincuncio a Júpiter. Este último planeta está en la cúspide de la Casa VI, retrógrado y afligido por los aspectos de Saturno y Marte. Cinco planetas ocupan signos fijos, y uno de ellos se eleva en el Ascendente. La Luna está en Piscis. Este ejemplo también es un caso de difteria, escarlatina y cirrosis de riñón. Para la difteria, sirven los datos anteriormente citados. Vean las relaciones que muestra el esquema. Trastornos mentales, ego exagerado

Los regentes mentales, Luna y Mercurio, suelen hallarse afligidos y generalmente en aspecto mutuo. Cierto que existen muchas formas de desequilibrios mentales. Los lunáticos violentos tendrán a Marte como el agente provocador; los hipocondríacos a Saturno. También existen aquellos individuos que durante la mayor parte de su vida exhiben una brillantez semejante a la de los genios, particularmente en el orden de las matemáticas, donde es fundamental poseer una mente sutil y rápida. La acción responsable y primordial es la asociación de Marte con Mercurio, especialmente por el aspecto de conjunción u oposición. Muchos matemáticos rápidos, ajedrecistas, inventores, genios de la mecánica, excéntricos, tienen planetas en ambas Casas III y IX y en uno de los ángulos. Gérard de Nerval, el poeta y escritor, tenía Marte en conjunción con Mercurio, pero también opuesto a Saturno. Se suicidó en un acto de locura. Morphy, un famoso jugador de ajedrez, tenía Mercurio en cuadratura a Marte y Urano. Rethel, el pintor germano de frescos, tenía la Luna en oposición a Marte, y Mercurio en oposición a Urano.

Ejemplo 35

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Ejemplo 35. Masculino. George Bidder, un joven famoso por su rapidez en la realización de los cálculos. Nació el 14 de junio de 1806, a las 3 h. 45' a.m. Lat. 51°31' Norte. Long. 0o  06' Oeste. Marte acaba de separarse de la Luna (en Tauro) y se acerca a Mercurio contagiándolo de su impulso; Saturno y Urano en conjunción aspectan en trígono al Sol; Venus en Tauro forma trígono con Júpiter, en Capricornio. Tauro es un signo especialmente vinculado con las habilidades matemáticas. Venas varicosas en las piernas

Generalmente, esto sucede cuando Venus o la Luna (o ambas) están más o menos afligidas en Acuario, especialmente por Marte.

Ejemplo 36

Ejemplo 36. Femenino. Nace el 1 de enero de 1985, a medianoche. Lat. 52° 28' Norte. Long. 0o 07' Oeste. La Luna y Venus ocupan Acuario. La primera está en paralelo de declinación con Saturno y aplica una cuadratura a Marte. Venus recibe una semicuadratura de Neptuno.

Ejemplo 37

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Kjemplo 37. Femenino. Nace el 21 de febrero de 1826, a las 10 h. a.m. Lat. 52° 28' Norte. Long. 0o 07" Oeste. Venus y Mercurio en Acuario y en la cúspide de Casa XI (Casa correspondiente al signo de Acuario). Ambos planetas se oponen a la Luna. Marte forma cuadratura con todos ellos. Consunción pulmonar (Tisis)

Uno o ambos luminares ocupan un signo común y una Casa cadente, especialmente la VI o la XII. Existe una aflicción generalizada en las Casas y en los signos comunes. Saturno y Marte suelen formar malos aspectos con los luminares. En muchas ocasiones existen planetas afligidos en Acuario, principalmente en los casos de consunción y congestión pulmonar.

Ejemplo 38

Ejemplo 38. Masculino. Nace el 15 de marzo de 1863, a las 7 h. 55' p.m. Lat. 55° 52' Norte. Long. 4o 18' Oeste. El Sol en Piscis y en la cúspide de la Casa VI, una posición muy frecuente en los casos de tisis. Sol en paralelo de declinación a Saturno, en cuadratura a Urano, en quincuncio a Júpiter, y casi en conjunción a Neptuno. Marte y Urano ocupan el significativo signo de Géminis. Saturno ya entró en la Casa XII. A los 26 años, cuando este planeta formó paralelo de declinación exacta con el Sol radical y el Sol aspectaba en semicuadratura a Marte radical, el nativo murió.

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Ejemplo 39

Ejemplo 39. Masculino. Nace el 12 de marzo de 1864, a las 8 h. 30' a.m. Lat. 52° 40' Norte. Long. 1o 20' Oeste. El Sol también está en Piscis, pero esta vez en la cúspide de Casa XII. También forma paralelo de declinación con Saturno, cuadratura con Urano en Géminis, y se acerca a la conjunción de Neptuno. La garganta también se ve afectada. La Luna en Casa XII, en Tauro, recibe los malos aspectos de Neptuno, Venus, Júpiter y Saturno.

Ejemplo 40

Ejemplo 40. Masculino. Nace el 6 de diciembre de 1858, a las 9 h 00' a.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 06' Oeste. En este caso el Sol está cerca de la cúspide de la Casa XII, en 73

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Sagitario, en oposición a Urano en Géminis, aplicando una cuadratura a Neptuno en Piscis, y recibe una semicuadratura de Marte. La Luna, en Sagitario, está muy afligida por su cuadratura con Neptuno y su oposición a Júpiter en Casa VI.

Ejemplo 41

Ejemplo 41. Masculino. Nace el 16 de agosto de 1850, a 1 h. 30' a.m. Lat. 53° 30' Norte. Long. 0o 10' Oeste. La Luna, en un signo común (Sagitario), está en la cúspide de la Casa VI, en sexquicuadratura a Saturno y en cuadratura a Neptuno y Mercurio. El Sol está en la cúspide de Casa III, en Leo. Marte, en conjunción a Júpiter, en Virgo. Cinco planetas en signos comunes.

Ejemplo 42

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Ejemplo 42. Femenino. Nace el 21 de enero de 1855, a las 3 h. 00' p.m. Lat. 54° 40' Norte. Long. 0o 05' Oeste. Neumonía, después de un resfriado. La curación fue demorada por una degeneración en el tejido pulmonar, convirtiéndose en un foco tuberculoso disperso en los pulmones. Muchas complicaciones. Insuficiencia cardíaca degenerando finalmente en hidropesía. La Luna, en la cúspide de la Casa X, junto a Neptuno en Piscis, en cuadratura a Saturno en Géminis situado en Casa XII. El Sol en Acuario forma paralelo de declinación con Saturno. Cinco planetas en Acuario. Un caso interesante

Ejemplo 43

Ejemplo 43. Esta natividad ofrece un estudio muy interesante. No sabemos el lugar exacto de nacimiento. Nació el 4 de octubre de 1834, a las 8 h 40' a.m., cerca de Londres. Amputación del pulgar, a los 7 años de edad. Escarlatina, en otoño del año 1852. Fiebres gástricas, en 1859. Golpe o caída con rotura, en diciembre de 1860. Amputación de la nariz, en marzo de 1862. Encefalitis, en marzo de 1866. Rotura del brazo, en febrero de 1869. Fiebre, en julio de 1873.

14. INDICIOS DE UNA VIDA CORTA

Generalmente, los indicios de una muerte prematura son fácilmente observables para el astrólogo. Debido a que el promedio de casos que conocemos es reducido, el riesgo de 75

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una interpretación errónea o de que el caso sea pasado por alto es grande, puesto que estas excepciones requieren unos conocimientos más amplios de los habituales. Evidentemente, los niños padecerán las malas influencias planetarias con mayor severidad que los mayores, es decir, las enfermedades mórbidas se desarrollarán con más facilidad en los niños propensos a ellas cuando los tránsitos y las direcciones maléficas lo indiquen. La duración de la vida siempre será juzgada según el efecto de los planetas en su recorrido posterior al nacimiento y los aspectos que van formando. La vejez o senilidad también presenta un paralelismo con la época de la infancia, aunque los efectos estelares son de orden diferente puesto que, desde el nacimiento, el cuerpo sufre alteraciones con los años: las fibras más pequeñas se van endureciendo, los diminutos vasos sanguíneos se convierten en fibras sólidas. Todo tiende a la contracción, a la sequedad y a la inmovilidad. La efectividad saturnina se va apoderando del cuerpo. Cuando el Sol está afligido por Saturno la vitalidad se reduce y, aunque este testimonio no sea una garantía de muerte prematura, supondrá un peligro en la edad temprana. Es importante precisar la exactitud del aspecto formado y si es de carácter aplicativo o separativo. Si el aspecto es aplicativo y casi exacto, el peligro se acentúa. En las progresiones o direcciones, como se explicará luego, cuando un cuerpo planetario atraviesa la cúspide de una Casa angular, especialmente el Ascendente, la vitalidad inferida por el Sol o la Luna decae y pueden esperarse consecuencias irreparables. También debemos tener presente que algunos signos son de constitución más débil que otros, y las personas nacidas cuando éstos ascienden o están ocupados por el Sol tienen menor vitalidad y son más susceptibles a los efectos mórbidos de las acciones planetarias que las personas nacidas bajo el dominio de signos fuertes y resistentes. Los signos débiles son: Cáncer, Capricornio y Piscis. En general, los signos comunes son menos robustos que los fijos. La época más crítica es cuando se forma la Luna Nueva, y antes de que se forme la conjunción de los dos luminares. Gran parte de la mortalidad infantil tiene lugar con la Luna menguante. La constitución débil se agudiza con esta posición y actúa con mayor severidad a través del organismo. El siguiente ejemplo está tomado de  Astrologer Magazine and Philosophical Miscellany, de octubre de 1793. Aquí se da mucha importancia a la parte de la Fortuna y al «Hyleg».

Ejemplo 44

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Ejemplo 44. Femenino. Hannah Parnel. Nace el 12 de marzo de 1793, a las 0 h. a.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 06' Oeste. El escritor comenta: «Levanté esta carta natal cuando la niña tenía unas tres semanas de edad. Informé a sus tutores que solamente viviría medio año o menos. A pesar de los muchos cuidados que le prodigaron sus padres, la niña no llegó a vivir los tres meses. Murió el primer día de junio». A la Luna sólo le faltan tres grados para completar la conjunción con el Sol. El Sol, la Luna y Mercurio forman conjunción en un signo débil. Júpiter y Mercurio están muy cerca de la cúspide de las Casas I y IV, respectivamente. El Sol forma un paralelo de declinación con Marte y una semicuadratura con Venus. Aquí se reúnen tres testimonios de los anunciados anteriormente como los causantes de la muerte a edad temprana: 1) la Luna aplica una conjunción al Sol; 2) el Sol (también la Luna y Mercurio) ocupa un signo de escasa vitalidad (Piscis), además de estar afligido; 3 o dos planetas son angulares, muy cerca de sus cúspides. Un caso parecido es el siguiente. Desconocemos con precisión la longitud y latitud natales.

Ejemplo 45

Ejemplo 45. Femenino. Nace el 16 de enero de 1828, a las 10 h. 40' p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 06 Oeste. Murió en el mes de agosto del mismo año. 1) La Luna aplica una conjunción al Sol, faltando sólo 1 o 08' para ser exacta; 2) el Sol se halla afligido en un signo de poca vitalidad, Capricornio, y 6 planetas ocupan signos de escasa vitalidad; 3) varios planetas se hallan cerca de los ánguos, Saturno culminando.

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Conformación dramática de malos aspectos

Ejemplo 46

Ejemplo 46. Masculino. Nace el 22 de diciembre de 1870, a las 0 h. a.m. Lat. 39° 57' Norte. Long. 75° 09' Oeste. Nacimiento prematuro. Nació seis semanas antes. Meningitis espinal. Murió el 1 de enero de 1872. 1) La Luna aplicando la conjunción al Sol; 2) el Sol afligido en signo de escasa vitalidad, Capricornio, junto con otros tres cuerpos presentes en el signo; 3) Neptuno culmina cerca de la cúspide del Mediocielo; 4) observen la grave aflicción de los luminares, motivo suficiente para negar toda posibilidad de vida.

Ejemplo 47

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Ejemplo 47. Femenino. Nace el 7 de marzo de 1894, a las 2 h. p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 06' Oeste, cerca de Canterbury. Murió en otoño del mismo año. 1) La Luna aplica una conjunción al Sol; 2) el Sol y la Luna se hallan afligidos por un paralelo de declinación de Saturno y una cuadratura de Neptuno; 3) el Sol, la Luna y Mercurio ocupan un signo de escasa vitalidad, Piscis; 4) Saturno se halla cerca de la cúspide de la Casa IV. Muerte de un niño después de haber vivido doce horas

Ejemplo 48

Ejemplo 48. Masculino. Christopher Turnen Nace el 28 de marzo de 1903, a 1 h. p.m. Lat. 51° 31' Norte. Long. 0o 06' Oeste, en Starbeck. Murió al día siguiente por asfixia debida al nacimiento prematuro. Los luminares se hallan fuertemente afligidos por la oposición de Marte, la cuadratura de Neptuno y la implicación de Saturno. Además, Urano y Neptuno lanzan sendas cuadraturas a la Luna. Saturno está opuesto al Ascendente (en Acuario = asfixia). Probablemente, la hora de nacimiento fue un poco más temprana, cuando Saturno formaba conjunción exacta con la cúspide occidental. La Luna aplica conjunción al Sol.

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Ejemplo 49

Ejemplo 49. Masculino. Nace el 12 de octubre de 1890, a las 9 h. 32' a.m., hora local. Lat. 52° 28' Norte. Long. 0 o 07' Oeste. Murió repentinamente, en enero de 1891. Fue causa de una investigación judicial. 1) La Luna aplica una conjunción al Sol, aunque la distancia entre los dos luminares es considerable; 2) el Sol se halla afligido por los aspectos de Marte, Urano y Venus; 3) Saturno transita la cúspide del Mediocielo.

Arcos de Dirección

Cuando los cuerpos planetarios se hallan cerca de una cúspide angular y además existen indicios de una corta vida, el arco de dirección de esta cúspide es importante. Generalmente indicará la fecha de la muerte. Por ejemplo, en el ejemplo 49, el Arco de Dirección es de un poco más de 0 o  14'. La proporción es de 1o de arco = un año, o 15' = 3 meses. Para determinar esto decimos: Ascensión Recta del planeta Saturno = 164° 27' Ascensión Recta del Mediocielo = - 164° 13'   --------------------Arco Dirección = MC. conjunción Saturno 0o 14'

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Ejemplo 50

Ejemplo 50. Femenino. Nace el 1 de septiembre de 1894, a las 9 h. 18' a.m. hora local. Lat 52° 28' Norte. Long. 07' Oeste. La aflicción de este horóscopo se basa en los tres centros: Sol, Luna y Ascendente. Vemos que el Sol forma conjunción con Mercurio (ambos afligidos por la semicuadratura del maléfico Saturno y la cuadratura de Neptuno). La Luna, en conjunción separativa con el Sol, forma cuadratura con Júpiter, y semicuadratura con Venus. Saturno está en la cúspide del Ascendente. La niña murió el 29 de octubre de 1895 de consunción. Nótese la aflicción de los signos pulmonares. Si calculamos el arco de Saturno (en longitud eclíptica) para su conjunción con el Ascendente obtendremos el tiempo de terminus vitae. En la proporción de 1 grado de arco = un año, y 5 minutos = un mes, se obtiene la fecha de la muerte.

Ejemplo 51

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Ejemplo 51. Masculino. Nace el 26 de julio de 1895, a las 9 h 45 1 a.m. hora local. Lat 52° 28' Norte. Long. 07' Oeste. El Sol se halla afligido por la semicuadratura de Neptuno y Venus, y por la cuadratura de Saturno. La Luna está junto a la cúspide de la Casa I, en semicuadratura con Urano. Por esta última posición podría esperarse cierta conexión peculiar relacionada con la cabeza. En efecto, existía una curiosa malformación en el cráneo: una depresión longitudinal, blanda, acuosa, con excrecencias hemisféricas en la parte central y en ambos lados. Este niño murió en abril de 1896, de una bronquitis complicada con sarrampión.

Ejemplo 52

Ejemplo 52. Masculino. Nace el 15 de marzo de 1898, a las 3 h. 50 p.m. Lat. 52° 28' Norte. Long., 0o 07' Oeste. Consunción. Murió el 18 de noviembre de 1899. Nótese que no menos de seis planetas ocupan los signos pulmonares y que los luminares se afligen mutuamente por el aspecto de cuadratura. El Sol está situado en la Casa VIII, referida a la muerte. I factor tiempo, períodos planetarios, años climatéricos

Ciertos períodos planetarios influyen muy marcadamente en la duración de la vida. Así, el que va desde el nacimiento hasta los cuatro años de edad está regido por la Luna. Desde el nacimiento hasta los 4 años rige Desde los 4 años hasta los 10 años rige Desde los 18 años hasta los 37 años rige Desde los 37 años hasta los 52 años rige Desde los 52 años hasta los 64 años, rige Desde los 64 años hasta el final, rige

la Luna Venus el Sol Marte Júpiter Saturno

Las deducciones son obvias. Durante el período lunar las direcciones adversas de la Luna serán marcadamente peligrosas; las de Marte lo serán durante el período marcial; las de Saturno, durante el período saturnino; etcétera. 82

ASTROLOGÍA MÉDICA

Heinrich Daath

También deberemos tener en cuenta los años climatéricos. Tales épocas son innegablemente desastrosas para el equilibrio orgánico, especialmente cuando las direcciones adversas tienen más fuerza. El diagrama de los períodos planetarios climatéricos (figura pág. 169) muestra las épocas críticas relacionadas con la Luna y los planetas. En este diagrama los «tres años señalados y diez» de los salmistas están representados como el arco del semicírculo, indicando las líneas radiales el tiempo de finalización de una influencia planetaria y el inicio de la siguiente. Los diez segmentos dividen el arco en secciones o períodos de siete años, los cuales tienen un doble significado en relación con la vida. Primero, el planeta Urano completa el ciclo de ochenta y cuatro años, o un signo cada siete años, y por eso va tomando posiciones de semisextil, sextil, cuadratura, trígono, etcétera, cada siete años después del nacimiento, con respecto a su longitud radical. Segundo, y quizá esto sea lo más importante con relación directa a la salud: el efecto de la progresión de los planetas después de nacer se conoce como el «horóscopo progresado» y en él se ha demostrado que el movimiento de los planetas después del nacimiento afecta al nativo de forma que cada día transcurrido equivale a un año de vida. Por eso, los Cuartos Lunares, tan importantes en la economía animal, tienen lugar más o menos cada siete días, así que fácilmente podemos ver cómo la vida se va conformando en los correspondientes períodos de siete años, los cuales son de la mayor importancia en la vida del hombre. Los períodos planetarios climatéricos 37

Y aquí parece oportuno mencionar que cada mes lunar simboliza todo el círculo — nacer para morir, generación para la fructificación y el decaimiento—. En consecuencia, cada mes se produce una renovación y dispersión de fuerza: bios. Aunque la influencia sólo es pronunciadamente aparente en las formas más fluidas de la materia, en realidad afecta a todos los grados de la materia. Existe una marea en los fluidos del cuerpo, del mismo modo que existe en los océanos: un período de actividad y otro de reposo, una sístole y una diástole, una época para la preparación, para el desarrollo, la perfección y la desintegración. Todo ello viene representado en las fases lunares. La luna nueva implica desintegración, muerte, preparación para un nuevo ciclo. Es la decadencia, el nitya pralaya, la sístole. El cuarto creciente concierne al desarrollo orgánico y la revitalización de las funciones y fluidos. 83