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NOGALES, SONORA A 26 DE MAYO DEL 2013
INSTITUTO NACIONAL DE ESTUDIOS SINDICALES Y DE ADMINISTRACIÓN PÚBLICA DE LA F.S.T.S.E. LICENCIATURA EN DERECHO BUROCRATICO PROBLEMAS SOCIOECONÓMICOS DE MÉXICO 3º CUATRIMESTRE TEMA V EL PROYECTO ECONÓMICO NEOLIBERAL TEMA VI EL SEXENIO DE CARLOS SALINAS DE GORTARI
EQUIPO # 3 CESAR BARRON ARMANDO CASTRO ANTONIO SOBARZO MARCELA SOBARZO RICARDO LAGUNES FIDEL TEJEDA
CESAR
TEMA V.- EL PROYECTO ECONÓMICO NEOLIBERAL 5.1.- PLAN NACIONAL DE DESARROLLO 1983-1988 5.2.- CAMBIO ESTRUCTURAL Y MODERNIDAD 5.3.- PROGRAMA INMEDIATO DE REORGANIZACIÓN ECONOMICA La crisis que afrontó el régimen que inició el sexenio de Miguel de la Madrid, a finales de 1982, era de proporciones aun mayores que las de 1976. El erario público estaba exhausto y había una enorme fuga de capital. Las sucesivas devaluaciones habían hundido al peso. El nuevo presidente, en su discurso de toma de posesión, reco noció los errores y excesos del anterior régimen y prometió una renovación moral, al mismo tiempo anunció un programa de emergencia para reordenar la economía en sus aspectos coyunturales y e structurales. Los propósitos y nuevas directivas se plasmaron en un nuevo Plan Nacional de Desarrollo que sustituyó al Plan Global. El Ejecutivo Miguel de la Madrid Hurtado (MMH) determinó que el Estado debía integrar un Sistema Nacional de Planeación Democrática, el cual fue co ncebido como: "un conjunto armado de relaciones fundamentales, que establecen las dependencias y entidades del Sec tor Público entre sí, con las organizaciones de los difere ntes grupos sociales y con las autoridades de las entidades federativas, a fin de efectuar acciones de común acuerdo. Comprende mecanismos de participación en una estructura institucional. A su cargo se encontraron las diferentes etapas de la planificación económica: formulación, instrumentación, control y evaluación. Plan Nacional de Desarrollo 1983-1988. En el marco de la re forma económica, se presenta a la Nación el nuevo Plan Nacional de Desarrollo 1983-1988, en los términos fijados por una nueva Ley de Planeación. El Plan es fundamentalmente cualitativo y fija orientaciones generales. Contempla cuatro objetivos fundamentales: 1. Conservar y fortalecer las instituciones democráticas. 2. Vencer la crisis. 3. Recuperar la capacidad de crecimiento. 4. Iniciar los cambios cualitativos que requiere el país en sus estructuras económicas, políticas y sociales.
La estrategia enfatiza simultáneamente el combate a la inflación y la protección del empleo, teniendo como rasgo el combate de las m anifestaciones, a la vez que de las raíces de la crisis. Su contenido apunta a recobrar la capacidad de c recimiento y a mejorar la calidad del desarrollo, a través de dos líneas fundamentales de acción: la reordenación económica y e l cambio estructural. La primera, de reordenación económica, tiene básicamente tres propósitos: abatir la inflación y la inestabilidad cambiaria; proteger el empleo, la planta productiva y el consumo básico; y re cuperar el dinamismo del crecimiento sobre bases diferentes. La segunda, el cambio estructural, se precisa en seis orientaciones generales: resaltar los aspectos sociales y distributivos del crecimiento; reorientar y modernizar el aparato productivo y distributivo; descentralizar las actividades productivas y el bienestar social; adecuar las modalidades de financiamiento a las prioridades del desarrollo; preservar, movilizar y proyectar el potencial de desarrollo nacional; fortalecer la rectoría del Estado, impulsar el sector social y alentar el sector privado. Cumplimientos e incumplimientos de los objetivos Como objetivo político puede decirse que se logró e vitar un estallido social que pusiera en riesgo la estabilidad del sistema. En lo referente a la crisis, fue un rotundo fracaso; no solo no hubo mejoría, sino que se agravaron los problemas económicos. Pero también es justo señalar que las altas tasas de interés internacional por servicio de la deuda, así como fluctuaciones a la baja del precio del petróleo, contribuyeron a disminuir el flujo de divisas y a la reducción del erario y los ingresos públicos. A ello hay que añadir que el terremoto que devastó a una parte de la ciudad de México, en septiembre de 1985, dejó un legado de problemas de toda índole. Las mismas coyunturas y problemáticas también fueron factor para que no se lograra crecer económicamente, registrándose incluso una caída en la producción. En el cambio estructural se logró llevarlo al cabo en el tamaño y la cobertura del sector público, compactando el aparato gubernamental, y liquidando y vendiendo entidades.
ARMANDO
5.4.- LOS CAMBIOS ESTRUCTURALES. Durante la presidencia de Miguel de La Madrid el país enfrentó una severa crisis económica que fue la conjunción de factores internos y de condiciones internacionales difíciles. Financieramente el país estaba en 1982 en bancarrota. México en ese año casi no tenía reservas internacionales, había una inflación desbordada, déficit fiscal alto,
economía petrolizada, desconfianza de la inversión nacional e internacional, endeudamiento excesivo. Lo que hizo el gobierno de Miguel de la Madrid fue llevar a cabo una política austera y al mismo tiempo realizar cambios fundamentales para hacer más eficaces a los sectores público y privado. Se protegió a la planta productiva y se crearon 2 millones de nuevos empleos. Al finalizar el gobierno se instrumentó el Pacto de Solidaridad Económica para estabilizar la economía del país, bajando la inflación de manera notable. Con ello, el gobierno del Presidente Salinas pudo realizar la recuperación económica. De la Madrid convocó el Pacto de Solidaridad Económica que encauzó las aguas al convocar a los factores de la producción para trabajar juntos y salir adelante. Fue el Pacto una demostración de que cuando la realidad se impone de manera negativa hay que modificar las teorías y modelos con un pragmatismo concertado. El Pacto abrió las opciones para evitar el deterioro productivo que padecíamos. En el gobierno de Miguel de la Madrid, en el año de 1983, durante los cambios estructurales en medio del estancamiento económico, se redujo el tamaño y la complejidad del sector público y se abrió la economía a la competencia del exterior, la reducción de entidades públicas fue casi simbólica. Se eliminó aquellas que ponían menos problemas en el cual marco el movimiento del cambio. De la Madrid redujo en su sexenio, de un total de 1155 entidades públicas a 412; la más importante fue Fundidora Monterrey, empresa paraestatal que estaba en bancarrota y con enormes problemas financieros y tecnológicos. Miguel de la Madrid, reprivatizó también los bancos, que en el sexenio anterior habían sido nacionalizados.
Los cambios contenidos en los Planes o Programas de Ajuste Estructural son las siguientes: 1.-Reforma del Estado. (La tesis del "Achicamiento" o Estado Mínimo) 2. Privatización de Empresas y Servicios Públicos. 3. Desregulación (liberación) de las Economías. 4. Eliminación o disminución de las Políticas Sociales y Privatización de la Seguridad Social (Previdencia Social). 5. Flexibilización de las leyes laborales y sociales y de las condiciones de trabajo (tercerización).
6. Nuevas Políticas Fiscales y Tributarias. 7. Nuevas Políticas Monetarias y Financieras. 8. Apertura económica (Inserción en el proceso de globalización) 9. Modernización (Reconversión) de los Aparatos Productivos Nacionales. 10. Integración económica en base a la firma de Convenios o Tratados de Libre Comercio, por ejemplo TLC: USA/MÉXICO/CANADÁ.
5.4.1 TRANSFORMACIÓN DE LA PLANTA PRODUCTIVA Los meses finales del año de l988 coincidieron con cambios profundos en el sistema económico y político mundial, el reformismo salinista se enmarcó en este proceso internacional, sus reformas se orientaron a eliminar las barreras para hacer más competitiva la economía del país.
5.4.2 EFICIENTAR LA ECONOMÍA La firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, TLC, transformó para siempre la fisonomía de la economía mexicana, pues los países son más eficientes si se especializan en producir aquello en lo que son mejores y después intercambian parte de su producción por aquello cuya producción les resulta muy costosa. La continuación de la reprivatización de entidades y empresas estatales iniciada por Miguel de la Madrid, fue otra reforma fundamental, el gobierno de Carlos Salinas, quien además decretó la privatización de las aerolíneas más grandes del país, de teléfonos (Telmex), de la Minería Cananea, de tres acereras y de algunas plantas de CONASUPO, entre otras más.
EMMANUEL 5.4.3 DESARROLLAR UN SECTOR EXPORTADOR El 12 de agosto de 1992, el secretario de comercio y fomento industrial Jaime Serra junto con los representantes de Canadá y de EE.UU. concluyeron las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Los tres países confirmaban su compromiso de promover el empleo y el crecimiento económico en la región de América del norte a través de la expansión del comercio y de las oportunidades de inversión. Se comprometieron además a
proteger el medio ambiente y a mejorar las condiciones de trabajo en los 3 países (Canadá- EE.UU.-México), promoviendo el desarrollo sostenible y haciendo cada día más efectivos los derechos laborales. Según el equipo de Carlos Salinas de Gortari, el tratado de libre comercio abriría a México un gran mercado para exportación de mercancías, además del acceso a tecnologías y medios de producción modernos y eficaces, también esto se incrementaría los flujos de inversión extranjera que impulsaría el desarrollo del país, y al elevar el nivel del empleo disminuirá la migración hacia los Estados Unidos. Los efectos del TLCAN han sido desiguales, pues las empresas transnacionales que operan en el país y las empresas nacionales que lograron dirigir su producción hacia el mercado extranjero se han visto altamente favorecidas, pero como no son muchas estas empresas que están en condiciones de exportar, con la apertura del mercado a las importaciones han entrado a México multitud de productos de mayor calidad y menor precio, provocando el quiebre de las pequeñas y medianas empresas en la industria y la ruina de los campesinos cuando se empezaron a importar productos agropecuarios, intensificándose la emigración de trabajadores del campo mexicano hacia los campos estadounidenses.
5.4.4 SANEAMIENTO DE LAS FINANZAS PÚBLICAS Proceso que consiste en fortalecer los Ingresos públicos y contener el ritmo de Crecimiento excesivo de los Gastos, a fin de reducir el Déficit del Sector Público. El saneamiento financiero tiene como elementos centrales por el lado del Ingreso: la reforma fiscal, y el ajuste en los Precios y tarifas de los Bienes y servicios públicos; y en caso del Gasto: la racionalización, el control, la disciplina presupuestaria y el saneamiento de las finanzas de las empresas paraestatales.
5.5.- DIAGNOSTICO Y OBJETIVOS DE LA POLÍTICA NEOLIBERAL. El neoliberalismo es la expresión ideológica de un modelo teórico económico, el modelo neoclásico, que considera la mínima o casi nula intervención del Estado en la economía, ya que el mercado es el mejor instrumento para asignar eficientemente los recursos de la sociedad. A partir de aquí se deriva toda una serie de políticas económicas que favorezcan al libre mercado:
Privatización de empresas públicas o paraestatales. Eliminación de los impuestos a mercancías y capitales extranjeros. Flexibilización laboral (desaparición de sindicatos y topes salariales). Recortes al gasto público (cobertura muy limitada de seguridad social, educación, poca inversión en infraestructura, eliminación de subsidios). Desregulación financiera. Apertura comercial de los mercados.
La estabilidad macroeconómica como el principal objetivo de la economía.
El neoliberalismo emerge en el mundo en la década de los setentas; es una doctrina que retoma ciertos postulados del liberalismo económico que surgió en Inglaterra en el siglo XVIII (de ahí la palabra neoliberalismo), con la finalidad de suprimir restricciones aun feudales al comercio y a la producción. Dicho sistema procuraba la existencia del intercambio de trabajo por un salario, la libre formación de la riqueza y que ésta pudiera ser convertida fácilmente en capital. Desde el principio, pugnó por los mercados abiertos, la privatización de propiedades comunales y la limitada participación del Estado en la economía. Conforme el capitalismo se fue desarrollando durante el siglo XIX, la doctrina liberal fue cobrando mayor relevancia; el campesinado feudal fue convirtiéndose en proletariado industrial, se dieron los procesos de acumulación y desarrollo tecnológico que posteriormente permitirían arribar al gran parte aguas de la historia: la revolución industrial, con la consiguiente formación de las dos grandes clases antagónicas -proletariado y burguesía-. Parecía que el liberalismo estaba dando resultados, al menos para la parte de la población económicamente más favorecida. Es con la crisis del ’29 que se le pone fin a este modelo económico y se evalúan
sus grandes fallas. Cabe destacar que la doctrina liberal siempre tuvo acérrimos detractores; así mismo es muy importante señalar que en los últimos países en formarse como desarrollados -Estados Unidos, Alemania, Japón, Rusia- no fue la filosofía liberal la que orientó su proceso de industrialización, sino que se favorecieron las políticas proteccionistas orientadas a que el Estado regulara la actividad económica, mismas que permitirían el arribo de estos países a un estadío de desarrollo. Es con otra gran crisis, la del ’72, que resurgen las id eas de establecer un nuevo
orden liberal en el mundo; así nace el neoliberalismo. Es importante destacar que esta nueva ideología tiene impactos muy disímiles entre el las naciones según su grado de desarrollo; esto nos debe prestar especial interés, ya que de ahí se deriva una explicación del porqué ha resultado un modelo tan devastador para la economía mexicana. Durante el sexenio de José López Portillo (1976-1982), el gobierno mexicano apostó por el petróleo para impulsar el crecimiento económico del país y superar un problema crónico de endeudamiento gubernamental. Pero hubo un elemento que jugó en contra: la caída de los precios del petróleo. Para el sexenio de Miguel de la Madrid (1982-1988), México ya no pudo hacer frente a la deuda y es así que, a punto de declararse en moratoria de pagos, permitió la intervención del Fondo Monetario Internacional; este hecho abrió el proceso de ajuste macroeconómico en el país que implementó de lleno la serie de políticas que podríamos llamar neoliberales. Estas medidas, que a continuación enlistaremos, se recrudecerán en los sexenios siguientes.
El salario mínimo pierde su poder adquisitivo en un 44.9% sólo durante el sexenio de Miguel de la Madrid, seguido de otro 46.5% para el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, y continúa con una clara tendencia a la baja. • Los recortes en el gasto público o, lo que es lo mismo, la inversión pública, se
redujeron de 12.4% del PIB en 1981 a 4.9% en 1988 y a 2.5% en 2002. Se dejó de invertir en fomento agrícola, manufacturero y en el sector energético al reducirse la inversión pública en estos sectores de 11.9% del PIB en 1981 a 8.7% en 1988 y a 3.7% en 2002. Todo esto para dar paso al mercado y que éste, bajo el estandarte de la liberalización, se hiciera cargo de la economía mexicana. • En 1982 había 1155 paraestatales en las siguientes actividades: petróleo,
petroquímica básica, minería, electricidad, telefonía, comunicaciones, ferrocarriles, transportación aérea, química, automotores, acero, azúcar, bienes de consumo duradero, banca, comercio, entre otros. En conjunto aportaban el 18.5% al PIB y daban casi un millón de empleos (10% del empleo total del país). Al terminar el sexenio de Miguel de la Madrid ya solo quedaban 412 y actualmente suman 196, en su mayoría servicios. Se gún un artículo de la página “Animal Político”1, más de la mitad de los mexicanos que aparecen en la lista de los hombres más ricos del mundo en la revista Forbes, son o fueron accionistas de paraestatales (basta el ejemplo del hombre más rico del mundo, Carlos Slim, que le debe toda su fortuna a haber sido beneficiado con la concesión de TELMEX). El propio Ernesto Zedillo, quien durante su sexenio privatizó Ferrocarriles Nacionales de México, pasó a ser uno de los directivos de Union Pacific Railroad al término de su gobierno. • La firma del TLC en 1994 ha creado en la economía mexicana el fantasma del
campo que tantos migrantes expulsa año con año, y que tiene a tantas personas en pobreza alimentaria (pobreza extrema según el Banco Mundial). Entre 1993 y 1999, las importaciones de maíz crecieron 3 mil por ciento, al pasar de 152 mil toneladas a 5.4 millones de toneladas; así mismo los cultivos de frijol, soya y trigo han caído significativamente. El propio Banco Mundial ha advertido que el sector agropecuario nacional no está en condiciones de competir en el mercado debido a que, a lo largo de 20 años, ha sido objeto de políticas sin resultados positivos. México carece de soberanía alimentaria, teniendo que importar el 42% de los alimentos que se consumen en el país; se estima que dichas importaciones aumentarán al 60% al término del sexenio de Felipe Calderón. En México, el modelo neoliberal ha significado el desmantelamiento de la economía nacional y la pauperización del nivel de vida; esto en sí mismo ya es mucho decir, ya que de aquí se derivan la mayoría de los problemas que aquejan al país. El mismo fenómeno de la economía criminal expresada en el crecimiento del narcotráfico es resultado de un campo abandonado, así como de un campesino vulnerado por la pobreza y que se encuentra en la total indefensión. Suponiendo que la estrategia para acabar con este tipo de actividad ilícita es bienintencionada, es decir, que no hay intereses de ningún otro tipo, ha resultado la decisión más equivocada, ya que nos arroja un saldo de aproximadamente 60,000 muertos y un país donde la actividad económica productiva se ve
amenazada por la delincuencia organizada. El mismo país donde el libre tránsito por las carreteras nacionales se convierte en un acto verdaderamente temerario, y donde la soberanía nacional es cada vez más vulnerada por la intervención – disfrazada de cooperación- de los Estados Unidos. Otro devastador resultado de la falta de oportunidades en nuestro país es la migración, exagerada por un mal planteamiento del TLC que jamás aprobó el capítulo de libertad de tránsito de mano de obra. La gran paradoja de la migración es que Estados Unidos y Canadá, al establecer un orden neoliberal, crean a los migrantes que buscan una mejor vida en sus territorios. El desempleo, la caída del salario real, la pérdida de condiciones de trabajo dignas, son resultado de una política laboral que desprotege a la fuerza de trabajo en favor de la competencia y la reducción de costos, esto representa un gran conflicto para la clase trabajadora ya que depende del salario como medio de vida. En conclusión, México ha experimentado el neoliberalismo como una serie de eventos que han impactado de manera negativa a la economía y a la sociedad. Es necesario reconsiderar el papel que juega el Estado en dicha economía, un rol que en países de Europa, por ejemplo, se ha votado por una participación más amplia que ponga orden al caos que el mercado anárquico y voraz creó desde la década de los ’80. En México también debe darse un cambio de rumbo, aquí hace falta instaurar un modelo que permita un desarrollo del país incluyente, que esté enfocado a crear y mejorar el empleo, que exista una mejor educación y que invierta en su propio progreso. Es momento de parar el saqueo de recursos nacionales, que pueden ser utilizados para las necesidades propias de éste país y que no vayan a parar a las cuentas bancarias de las empresas y los hombres ya enriquecidos. Es momento de que salgamos del caos en el que hemos estado sumergidos durante casi 30 años.
ANTONIO
5.6 Diagnóstico de la Crisis: El neoliberalismo en México comienza con el gobierno de Miguel de la Madrid Hurtado.( Presidente de México del 1 de diciembre de 1982 al 30 de noviembre de 1988) Cobra impulso con el ingreso al GATT de México. (General Agreement on Tariffs and Trade (en español, conocido como Acuerdo General sobre Comercio y Aranceles). Alcanza su apogeo cuando se firma el TLCAN( tratado de Libre Comercio de América del Norte) durante el gobierno de Salinas de Gortari. Con el TLCAN firmado y la popularidad y credibilidad que Salinas había ganado, las expectativas de México eran muy altas, la baja inflación y la estabilidad –
“supuesta”- económica, nos hizo creer que saldríamos del subdesarrollo, que el auge económico estaba cerca, incluso muchos afirmaban que “México estaba a punto de convertirse en un país de primer mundo”.
La realidad pinto diferente, se vivió una crisis como nunca se había visto el peso se devaluó, la deuda externa creció y ni rastro de las expectativas que se tenían.
5.7 La filosofía y Propósitos del Neoliberalismo: El neoliberalismo es el movimiento basado en el liberalismo, mediante el cual se le concede al Estado un limitado poder de intervención en los asuntos jurídicos y económicos de un país. Dicho modelo liberalista se fundamenta principalmente en la hegemonización de las políticas económicas y sociales por medio del capital. Además, va unido a lo que se denomina `globalización', aunque teóricamente son dos cosas distintas, en la práctica, resulta difícil separar ambos aspectos. Todos sus esfuerzos van dirigidos a toda una visión unitaria del mundo a nivel económico, ecológico, político, social, cultural, religioso y a nivel represivo (militarpoliciaco). Cuando se analiza el complejo problema del neoliberalismo, precisamente hacemos uso de la filosofía, para integrarle principalmente con la economía, la sociedad, la política, el estado, el derecho nacional e internacional, la axiología y la moral. Sus puntos clave son: A Nivel Económico El Neoliberalismo se caracteriza por la utilización de un mercado libre que según dicho modelo actúa como una institución perfecta, capaz de generar por sí misma un crecimiento armónico y equilibrado, con la condición de que no se intervenga en él. Desde la perspectiva neoliberalista, dicho mercado posee suficientes y perfectos mecanismos para auto-regularse. La ley de la oferta y la demanda es uno de estos mecanismos que se rigen por si mismos sin la necesidad de algún intervención “artificial”.
La estrategia neoliberalista abarca varios puntos, tales como: La privatización: intentado eliminar las deficiencias de las empresas públicas con el objetivo de proponer un mayor interés de desarrollo productivo. El sector privado llega a ser el dominante. Restaurar los precios de mercado en las utilidades: intentando estimular a los productores a animarse producir mas. La liberación total del comercio exterior. La configuración de un sistema jurídico: que proteja y garantice eficazmente la propiedad y los beneficios del esfuerzo empresarial, con cargas fiscales escasas.
Reducción del Estado: buscando disminuir su intervención en los medios de producción, con la única finalidad de cumplir las “reglas del juego”.
CARLOS SALINAS DE GORTARI Es un economista mexicano que ocupó la presidencia de México del 1 de diciembre de 1988 al 30 de noviembre de 1994.
6.1.- EL PLAN NACIONAL DE DESARROLLO 1989-1994. SU DIAGNOSTICO, OBJETIVOS Y PROYECCIONES MACROECONÓMICAS. 1.- Defensa de la soberanía y promoción de los intereses de México en el mundo. 2.-Ampliación de la vida democrática. 3.- Recuperación económica con estabilidad de precios. 4.- El mejoramiento productivo del nivel de vida de la población. 5.-Promoción en el exterior del desarrollo del país. 6.-Promoción de los derechos e intereses de los mexicanos en el exterior. 7.-Cooperación internacional. 8.-Hacer de la cultura nacional elemento de reafirmación 9.-Promoción de la imagen de México en el mundo. Modernización del Campo; Aprovechamiento del Agua; Modernización de la Pesca; Ciencia y Modernización Tecnológica; Modernización Industrial y del Comercio Exterior; Modernización de la Infraestructura del Transporte; Modernización del Transporte; Modernización de las Telecomunicaciones; Modernización Energética; Modernización de la Minería; Modernización del Turismo; Modernización de la Empresa Pública, y Financiamiento del Desarrollo
MARCE
6.2.- EL CONTENIDO DE LA REFORMA SALINISTA DEL ESTADO En el sexenio de Salinas hubo una importante reforma al Estado, esta reforma significa básicamente tres cosas: 1) El desmantelamiento del intervencionismo estatal en la economía; EJEMPLOS: Privatización de las empresas públicas. Reforma del artículo 27 (Agraria)
TLC
2) La sustitución de “Estado propietario” por el “Estado promotor”, EJEMPLO: Apoyo a la pequeña y mediana empresa. 3) El surgimiento del “Estado solidario”. EJEMPLO: Programa Solidaridad.
Como Luis Aguilar ha resaltado, dos líneas de razonamiento estuvieron detrás de esta reforma. Por un lado, Salinas argumenta que la propiedad y el excesivo intervencionismo llevó a la mala administración de empresas y programas. Por el otro, arguye que un Estado muy grande es incapaz de atender sus objetivos más importantes, esto es, sus funciones sociales y nacionalistas.
6.2.1 EL PROCESO DE PRIVATIZACIÓN DE LAS EMPRESAS PÚBLICAS. 1) En cuanto a que se desmanteló el intervencionismo estatal en la economía a través de una privatización y desregulación sustanciales: privatizó la mayoría de las grandes empresas, así como los bancos. En este sentido se privatizó Teléfonos de México, las dos principales líneas áureas y el canal estatal de televisión (entre otras compañías). Pemex, no fue privatizado, pero fue reorganizado. Entre diciembre de 1982 y diciembre de 1988, el número de empresas públicas pasó de 1, 155 a 646. En diciembre de 1992 eran sólo 217. La inversión pública total pasó de 8% del PIC en 1982 a 3.6% en 1992. Con esta nueva concepción se privatizaron grandes empresas que formaban parte del sector público, terminando así con el concepto de “Economía Mixta “entre los
casos más destacados se encuentran: Dina, Aeroméxico y Mexicana de Aviación que se vendieron en 1989; Industrias Conasupo “Liconsa “y la compañía minera
Cananea en 1990., Partes de fertilizantes mexicanos ( Fertimex ). Siderúrgica Lázaro Cárdenas, las Truchas ( Sicartsa), Altos Hornos de México (Ahmsa) y un paquete accionario de Teléfonos de México en 1991, mientras que el maíz Industrializado Conasupo (Niconsa) y los canales 7 y 13 de televisión, juntos con algunas salas de cine se vendieron en 1993. Para conducir todos los procesos de privatización se creó una unidad especie de subsecretaria en la secretaría de hacienda y crédito público.
Salinas rompió con varias tradiciones, primero cambió el artículo 27 constitucional, permitiendo la venta, renta y compra de tierra ejidal. El artículo 27 de la constitución, que establecía las bases de la legislación agraria. Unos de los más
importantes legados de la revolución mexicana y de gobiernos como el de Lázaro Cárdenas fue el reparto masivo de tierras, antes agrupadas en grandes haciendas. Gran parte de esas tierras se transformaron en ejidos: tierras que el campesino podía usufructuar en propiedad pero que no podía rentar o vender. Esto tenía como objetivo evitar que se formara de nuevo grandes latifundios. Sin embargo el campesino era y no era dueño de sus tierras puesto que tenía trabajarlas pero no podía ser nada con ellas, salvo heredarlas a sus hijos, frecuentemente en parcelas más pequeñas. Fuera de los bancos agrícolas del gobierno como Banrural, nadie estaba dispuesto a otorgar financiamiento al campo. Los cambios al artículo 27 implantados en 1992, modificaron esa situación: ahora el ejidatario tenía la opción de mantenerse en ese mismo estatus, con las reglas anteriores o bien convertirse en el dueño absoluto de sus tierras, con capacidad para venderlas o rentarlas. A partir de ese momento se inicio un esfuerzo masivo por escriturar esas tierras a nombre de los respectivos ejidatarios que deseaban convertirse en propietarios o bien confirmar el estatus de los ejidos. Con esta reforma se esperaba que la agricultura tuviera un impulso, pues finalmente se establecerían los derechos de propiedad de la tierra que habían constituido un gran conflicto por siglos.
Segundo, limitó dramáticamente los controles de precios. Tercero, eliminó algunas restricciones importantes para el transporte de carga nacional. Cuarto, redujo las restricciones de la inversión externa y del mercado financiero. Quinto, además de la eliminación de exenciones fiscales y subsidios a empresas realizada en el sexenio De la Madrid. Sexto, Salinas abrió la economía a la competencia extranjera, como es bien sabido, en 1991 Salinas inició negociaciones para un Tratado de Libre comercio de América del Norte (TLCAN), revirtiendo una larga tradición antiEstados Unidos. El TLCAN parece haber sido el resultado de la constatación por parte del Presidente de que, sin dicho acuerdo, México nunca podría obtener el flujo de capital necesario para financiar el enorme déficit comercial asociado a un mayor crecimiento, para no hablar de la necesidad social y de infraestructura. En los primeros 18 meses del TLCAN, México atrajo entre 22 y 27 billones de dólares. Para algunos, éste es el mayor éxito de Salinas de Gortari. El TLC entró en vigor en enero de 1994.
2) Un segundo aspecto de la reforma de Estado Salinista es el paso del “Estado propietario” al “Estado promotor”. Esto ha significado básicamente limitar los
programas estatales industriales a áreas específicas (por ejemplo la automotriz), exportaciones, productividad, así como pequeñas y medianas empresas (las cuales presuntamente crean la mayoría de los nuevos empleos). En ese sentido, por ejemplo, el principal banco de desarrollo, Nacional Financiera (antes concentrado en apoyar a las paraestatales), como algunos bancos regionales, fueron reorientados hacia las pequeñas y medianas empresas. El programa de pequeñas empresas ha sido ampliamente difundido. La creación del Sistema de Ahorro para el Retiro en 1992 representó un importante impulso al ahorro interno y en esa medida a los créditos.
6.2.2. EL PROGRAMA NACIONAL DE SOLIDARIDAD 3) El tercer aspecto de la reforma de Salinas es el surgimiento del “Estado solidario”. Desde 1989 Salinas ha implementado un “programa de solidaridad” (Prona sol), el
cual contempla una amplia variedad de programas, pero ha estado dirigido en gran medida a apoyar las obras públicas en las zonas más pobres (alrededor de 50% de los recursos ejercidos de 1989 a 1992). El programa ha significado mayores esfuerzos y precisión en la política social. El resultado de las elecciones de Julio de 1998 había mostrado la profunda insatisfacción de millones de personas por el desgaste que había significado la crisis económica. Por ello, desde su discurso de toma de posesión el presidente Salinas anunció la creación del Programa Nacional de Solidaridad (Pronasol). Si bien este programa no represento estrictamente un cambio estructural en la economía, si afecto profundamente la forma de canalizar el apoyo gubernamental a actividades productivas y sociales, con amplia participación de la sociedad. A partir de 1989 se dedicaron más recursos al Pronasol, que llegó a abarcar toda clase de rubros para ayudar a los sectores menos privilegiados de la sociedad: desde el educativo hasta la salud, pasando por la provisión de productos y servicios básicos, como la electricidad y algunos alimentos. Entre las características más importantes del programa, y una diferencia con respecto a los establecidos anteriormente, es que buscaba una participación activa de aquellos que resultaban beneficiados, ya que asignando recursos o bien siendo parte directa del proceso. Con esto se pretendía evitar que se hiciera una asignación burocrática de los recursos y de los recursos y que, desde un escritorio en la ciudad de México, se tomara una decisión que no tenía nada que ver con la realidad del lugar que se le daría el apoyo.
FIDEL PROBLEMAS SOCIOECONOMICOS DE MEXICO TEMA 6. El sexenio de Carlos Salinas de Gortari.(1989-1994) 6.1.3 APERTURA COMERCIAL.
La apertura comercial se concretó en gran parte por la necesidad del flujo de inversión extranjera directa; se convirtió en área prioritaria para el sexenio. La justificación del gobierno fue que el mercado nacional era competitivo por lo tanto la inversión foránea no tendría tantas utilidades y poromovería la calidad de sus artículos. Se veía además a este tipo de financiamiento como el complemento perfecto para la inversión nacional. Se preveía la escasa competitividad de las empresas nacionales por que se afirmó que el capital externo sería fundamental para debutar con éxito en los mercados internacionales. Trámites simplificados, fluidez, creación de leyes fueron los incentivos que creó el gobierno para que ésta llegara sin reparo. El gobierno, del mismo modo, creó apoyos indirectos como bases de información sobre proyectos y oportunidades de inversión. El inversionista nacional, se decía, contaría con diversas fuentes de financiamiento y coinvertiría con el gobierno, además de ser simplificados los trámites. La Secretaría de Hacienda y la Comisión Bancaria y de Valores tenían planeado hacer reformas para autorizar la entrada de capital al mercado bursátil mexicano. Los programas sectoriales sufrieron transformaciones con la participación activa de los sectores productivos. Fueron impulsados procesos legales antimonopólicos con el afán de proteger un poco a los pequeños empresarios, sobre este mismo contexto, se eliminaron un poco los obstáculos a la operación de este tipo de empresas y también fueron reducidos los trámites y servicios aduaneros.
El curso de la política económica durante el sexenio salinista se manejó en base a los lineamientos expuestos en el plan anterior. Era una versión formal de la tradición de planeación global económica que dio inicio con la administración de José López Portillo (aunque con contenido radicalmente diferente a versiones anteriores). El saldo de esta estrategia global de arquitectura social ha sido negativa. Los resultados no han coincidido con las metas originales. La explicación de esta incongruencia no es fácil, pero se puede reducir a un factor: la imposibilidad de incorporar todas las variables dinámicas y desconocidas que afectan el desarrollo de una sociedad. Otro aspecto relevante de la reforma fue la apertura comercial. El medio ambiente cambiante y la actitud para competir en una forma eficiente no solamente a nivel nacional sino también internacional, dieron paso a la decisión de abrir la economía mexicana y crear un Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos y Canadá.
6.2.3.1 TRATADO DE LIBRE COMERCIO CON AMERICA DEL NORTE TLC.
Así, se establece que los gobiernos de los Estados Unidos Mexicanos (México), de Canadá y de los Estados Unidos de América (Estados Unidos), acordaron la firma del Tratado de Libre Comercio con los siguientes propósitos:
✓
Reafirmar los lazos especiales de amistad y cooperación entre sus naciones.
Crear un mercado más extenso y seguro para los bienes y los servicios producidos en sus territorios. ✓
Reducir las distorsiones en el comercio; establecer reglas claras y de beneficio mutuo para su intercambio comercial. ✓
Desarrollar sus respectivos derechos y obligaciones derivados del Acuerdo General sobre Aranceles Aduaneros y Comercio. ✓
✓
Fortalecer la competitividad de sus empresas en los mercados mundiales.
Alentar la innovación y la creatividad y fomentar el comercio de bienes y servicios que estén protegidos por derechos de propiedad intelectual. ✓
Crear nuevas oportunidades de empleo, mejorar las condiciones laborales y los niveles de vida en sus respectivos territorios. ✓
Promover el desarrollo sostenible; reforzar la elaboración y la aplicación de leyes y reglamentos en materia ambiental. ✓
Se comenzó a negociar a fin de facilitar el comercio entre México y sus vecinos del norte, Estados Unidos y Canadá. En diciembre de 1992, el Tratado de Libre Comercio Norteamericano (TLC) fue firmado por los presidentes Salinas de Gortari, George Bush y por el Primer Ministro canadiense, Brian Mulroney. Este acuerdo entró en vigor en enero de 1994, tras ser aprobado por las cámaras legislativas de los tres países firmantes. Ante esta apertura comercial con el exterior, el gobierno salinista propuso la exención de los tres últimos ceros de la moneda nacional, con el objetivo de que el cambio monetario se facilitara en la conversión a moneda extranjera. Y es así, como el peso, cambia su nombre a nuevo peso, sólo hasta que la ciudadanía se acostumbrara a su uso La nueva moneda entró en circulación al mismo tiempo que el TLC, es decir el 1º de enero de 1994.
6.3 EL SECTOR EXTERNO Y LA POLITICA CAMBIARIA. Antecedentes del comercio exterior en México 1980-1994
Se analizan las coyunturas económicas (según por el periodo presidencial: Miguel de la Madrid Hurtado, 1982-1988 y Carlos Salinas de Gortari, 1988-1994), haciendo también referencia de manera general a las distintas aplicaciones de la política monetaria que fueron efectuadas por el Banco de México, así como los cambios estructurales sucitados en las variaciones del tipo de cambio, nivel de inflación, tasa de interés (CETES a 28 días), Producto Interno Bruto (PIB), reser vas internacionales, entre otros. También se describen los antecedentes del comercio exterior de México de manera global de 19802000, con base al proceso de globalización que se ha dado durante ese periodo, incidiendo así en importantes cambios en la economía mundial, pasando de ser un país altamente proteccionista con una producción destinada al mercado interno, hasta convertirse en un país con una intensa apertura comercial. Por lo que el mercado internacional ha cobrado gran relevancia en lo que se refiere a transacciones comerciales de mercancías, servicios y capitales. Además se indican los cambios estructurales en el comercio exterior de México y sus efectos sobre el comportamiento de la balanza comercial total. Posteriormente el análisis de este capítulo aterriza finalmente con la descripción del comportamiento de la balanza comercial del sector manufacturero y la importancia que este ha desarrollado en el desempeño económico del sector externo y económico de México, así como el análisis del comportamiento de las 13 principales ramas de la actividad de la industria manufacturera de exportación e importación, destacando de esta manera las actividades de mayor participación
RICARDO
6.4.- Los efectos de la política cambiaria y de la apertura comercial. 6.5.- El asesinato del candidato oficial a la presidencia de la república 6.6.- Repercusiones socioeconómicas del magnicidio. “La política de cambios en México y sus efectos”
1980-1995 LOS EFECTOS DE LA POLÍTICA CAMBIARIA Y DE LA APERTURA COMERCIAL La política de apertura comercial instrumentada en nuestro país ha deteriorado la planta productiva nacional, y con la apertura comercial y la política cambiaría se ha dinamizado el sector externo pero sin efectos positivos para el grueso de los productores nacionales. La política cambiaría ha sido capaz de aportar a la contención de la inflación pero a su vez ha generado fuertes desequilibrios en el sector externo. Existe una dependencia excesiva con la economía norteamericana que impide un desarrollo más dinámico y diversificado de la economía mexicana. La política cambiaría de libre flotación ha tenido un efecto contrario al buscado, ya que al fortalecerse el tipo de cambio, se generan las condiciones para que se presenten déficits recurrentes en la cuenta corriente de la balanza de pagos. Si realmente deseamos erradicar las crisis financieras y las macro devaluaciones traumáticas, es necesario pasar a una política cambiaria que no sea regida por prejuicios políticos, cuyo objetivo prioritario no sea contribuir a la estabilización a ultranza de los precios internos, sino contribuir –como instrumento principal- al equilibrio sostenible de las cuentas externas y, en su momento, a la permanente competitividad agregada de la planta productiva mexicana. Dicho tipo de cambio de equilibrio debe ser adoptado como piso cambiario. Manteniendo en general el régimen de flotación, el Banco de México debe evitar – simplemente comprando dólares y fortaleciendo de paso su reserva de divisas que
el precio del dólar baje del piso de equilibrio cambiario, ajustando este piso periódicamente conforme a la diferencia entre las tasas de inflación mexicana y estadounidense. De una falla crucial que presentaba el modelo económico precedente al neoliberal, el sustitutivo de importaciones, por lo menos durante la última fase de su vigencia, consistente en el insuficiente fomento del sector exportador, pasamos bajo el modelo neoliberal un error inverso mucho más grave que el anterior: el descuido y sacrificio de la economía interna que involucra a la inmensa mayoría de los mexicanos. Es necesario recuperar la sensatez y adoptar una estrategia económica pragmática que, sin descuidar el sector exportador, sino al contrario promoviéndolo y fomentando resueltamente su creciente integración y articulación con el resto de la economía nacional, atienda eficazmente el desarrollo del mercado interno y de la planta productiva que lo abastece. Se trata de desplegar una política comercial pragmática, es decir, de racionalizar la apertura comercial, subordinándola a una política industrial que estimule el desarrollo armónico del aparato productivo nacional, elevando su articulación interna y aminorando las desigualdades de su desarrollo, impulsando preferentemente las ramas con mayores efectos multiplicadores sobre la producción, la inversión física, el empleo y el ingreso nacional. Nuestro país debe aplicar una política comercial activa, utilizando al máximo los márgenes de libertad contenidos en los acuerdo comerciales (principalmente el TLCAN), en términos de aranceles, normas técnicas, salvaguardas y disposiciones contra prácticas desleales de comercio, de manera que la política comercial de México sea por lo menos similar a la que realmente aplican nuestros principales socios comerciales. En los últimos veinte años se inició y se profundizó la liberalización comercial en México, acompañándose el proceso por crisis recurrentes en la balanza de pagos y por grandes devaluaciones. Estos problemas generalmente han aparecido después de fuertes procesos de apreciación de nuestra moneda, que han
implicado el abaratamiento de nuestras importaciones y el encarecimiento de las exportaciones. El tipo de cambio permite restablecer los equilibrios del sector externo, por lo que han sido precisamente las políticas cambiarias las que van marcando la pauta de la economía mexicana una vez iniciada la apertura comercial. La economía mexicana se ha vuelto cada vez menos competitiva , debido entre
otras cosas a la aplicación de una ineficiente política cambiaria aplicada en los últimos años. En el período presidencial de Carlos Salinas (1988-1994) se utilizó al tipo de cambio como mecanismo para controlar la inflación. El objetivo se consiguió, pero
a costa de generar un desequilibrio externo de tal magnitud que a finales de 1994 dio lugar a una devaluación de resultados desastrosos. La crisis que se generó a
partir de entonces, resultante de la instrumentación de una política cambiaría equivocada, hizo que se redujera la actividad económica como nunca antes, pero la subvaluación que siguió a las devaluaciones de diciembre de 1994 y la primera mitad de 1995, contribuyó a corregir drásticamente el desequilibrio externo. Durante el sexenio de Ernesto Zedillo (1994-2000), se abandonó el sistema de bandas y a partir de entonces se adoptó una política cambiaría de libre flotación, de tal manera que la paridad práctica y teóricamente se determina por la oferta y demanda.
No cabe duda que de alguna manera el proceso de apertura comercial que ha vivido nuestro país en los últimos 20 años ha servido para impulsar las exportaciones mexicanas. Pero es cierto también que la política cambiaría ha frenado las exportaciones, en la medida que la apertura también incentivó las importaciones, que con el impulso de una política cambiaría que nos favorece han crecido más aceleradamente que las ventas externas. Con ello el desequilibrio comercial ha crecido. Se pasó del llamado Pacto de Solidaridad Económica, decretado en diciembre de 1987, a una estrategia macroeconómica de mediano plazo que erigió la estabilización de los precios en su objetivo a ultranza, utilizando la paridad peso / dólar como ancla nominal de la inflación.
De hecho la hipótesis neoliberal, según la cual a mayor apertura comercial corresponderá un mayor crecimiento económico, un mayor coeficiente de inversión física, una mayor generación de empleos mejor remunerados y, por tanto, mayores niveles de bienestar social, ha sido rotundamente desmentida en la práctica. El sector exportador se ha convertido cada vez más, bajo el modelo
neoliberal, en una economía de enclave, desarticulada del resto de la economía nacional, al crecer vertiginosamente el componente importado de la producción y exportación manufacturera. Para el desarrollo de este proyecto se entenderá por política cambiaria al conjunto de medidas que toman las autoridades monetarias del país para definir los términos de la relación peso / dólar. En el mismo sentido, la política cambiaria y la
política de tipo de cambio serán consideradas sinónimos.
Preguntas tópicas
¿Cuáles han sido las medidas de política cambiaria que han instrumentado en México durante el periodo 1980-2000?
¿Cuáles han sido las razones para que se hayan instrumentado las diferentes políticas cambiarias durante el periodo 1980-2000?
¿Qué relación existe entre la política cambiaria y el sector externo y cuál ha sido la expresión concreta de esta relación, en México durante el periodo 1980-2000?
¿Cuáles son los problemas estructurales de la economía mexicana, que impiden que el riesgo devaluatorio desaparezca?
¿Cuáles son los elementos que explican la desvinculación del sector externo con el resto del aparato productivo nacional?
Objetivos del tema burocrático:
Establecer el grado de relación
existente entre la política cambiaria
instrumentada en México y el comportamiento del sector externo durante el periodo 1980-2000.
Contrastar la validez empírica de los planteamientos neoclásicos en el sentido de que las crisis de balanza de pagos son fundamentalmente fenómenos monetarios. Hacer una prospectiva del comportamiento de la Balanza de Pagos en el
futuro inmediato a partir de la instrumentación de la política cambiaria de libre flotación.
EL ASESINATO DEL CANDIDATO OFICIAL A LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA MEXICANA El PRI es el partido que ha gobernado a México desde 1929. Con tendencias históricas izquierdistas-populistas, el PRI se ha caracterizado por ser más grande y poderoso y por sobrevivir a los líderes que a través de los años han gobernado al país. Al finalizar el sexenio de De la Madrid (1982-1988), éste nombro a Carlos Salinas de Gortari (educado en política pública en la Universidad de Harvard) como su candidato sucesor. Esto soprendió a algunos y molestó a muchos. Cuauhtemoc Cárdenas, hijo del presidente Lázaro Cárdenas (1934-1940) --quien se caracterizó por políticas populistas e izquierdistas. En 1993 se firmó el tratado de libre comercio con Estados Unidos y Canadá, evento en el que había cifrado casi todas las expectativas de triunfo el presidente Salinas. Hasta ese momento, el sexenio de Salinas se había caracterizado por
una continua, lenta pero decidida apertura democrática en el país, donde el antiguo frente cardenista (ahora Partido Revolucionario Democrático -PRD) y el derechista PAN encontraban más y más espacio político para accionar, aunque muchos dudaban que esto valiera de algo, porque el poder hegemónico del PRI aun parecía seguro. Después de la firma de NAFTA, el presidente Salinas eligió al que sería el candidato oficial del PRI. Había tres candidatos favoritos: el ministro de economía, L. Aspe, un neo-liberal, tecnócrata eficiente pero carente de carisma. Manuel Camacho Solís, ex alcalde (Regente les dicen allí) del Distrito Federal, una gran personalidad pública, hombre honesto, muy hábil políticamente, gran negociador y quien fácilmente encontraría apoyo entre la gente que en 1988 apoyó a Cárdenas. Y después estaba Luis Donaldo Colosio, un hombre joven, 44 años, de origen humilde, de un estado norteño que había logrado conseguir becas para estudiar en Monterrey, obtuvo un post-grado en UPENN, luego trabajo en Austria, fue amigo y asesor de Salinas por varios años, trabajó en su campaña en 1988 y luego fue ministro de bienestar social. Con cierto carisma (ayudado por su origen humilde y su preocupación aparentemente sincera por los más pobres) y conocimiento técnico, Colosio era como el candidato de consenso dentro del propio PRI, con él no ganaban ni los nuevos tecnócratas ni los populistas tradicionales. Y así, en noviembre Colosio fue electo el candidato oficial del PRI. Camacho, muy molesto con la decisión, expresó públicamente su molestia, acto inusitado en un PRI donde la lealtad al partido prima por sobre todo. Y llegó el 1 de enero de 1994. Todo hacía prever que el último año de Salinas sería el más tranquilo del sexenio. NAFTA había sido firmada, las expectativas eran altas y la economía estaba creciendo con la inflación bajo control. Era casi evidente que el PRI arrasaría en las elecciones de agosto del 94, y que esta vez ni siquiera se necesitaría el fraude. Ahora se ganaba, aun contando los votos. Pero el 1 de enero el Frente Zapatista de Liberación Nacional, un grupo armado en el sureño estado de Chiapas, se alzó en armas y tomó tres poblados,
declarando sus intenciones de avanzar hasta la capital para deponer al presidente Salinas. El ejército rápidamente recuperó las ciudades y el EZLN volvió a las montañas, a replegarse. Hubo denuncias de abuso y maltrato de parte del ejército, pero en general el alzamiento no pasó a mayores, hubo poco más de 100 muertos en todos los enfrentamientos. Pero las acciones del EZLN hicieron evidente que algo andaba mal, que si bien es cierto se habían logrado avances, había todavía un sector muy grande del país que no estaba recibiendo los beneficios de los avances económicos. El EZLN fue como el llamado de conciencia a todo un país que se consideraba como entrando al club de los grandes y que quería no ver la pobreza y la miseria. Y esto no porque el EZLN tuviera gran apoyo popular (porque nunca lo tuvo, a lo más tuvo simpatía en tanto se entendía como llamado de conciencia), sino porque hizo que los mexicanos despertaran de un sueño mágico y volvieran a la realidad. El presidente Salinas, que veía su sexenio enturbiado por las acciones guerrilleras, nombró a Manuel Camacho, el gran negociador, el político, como enviado del gobierno para negociar con la guerrilla. De pronto y aunque las conversaciones avanzaban lentas (pero efectivamente ponían coto a las acciones guerrilleras que de por si bien podían ser controladas por el ejército que ya los tenía replegados en las montañas), Camacho fue el centro de atención mucho más que Colosio. Camacho era el que hablaba de la unidad nacional, de la necesidad de reformas, de que había muchas cosas que mejorar en el país. Era Camacho, y no Colosio el centro de atención. Muchos especularon que Camacho quería buscar un acuerdo amplio con el PRD de Cárdenas para que el PRD decidiera apoyarlo a él y no a Cárdenas (o bien que Cárdenas renunciara voluntariamente a su candidatura) y así con las fuerzas que Camacho atraería del PRI y las fuerzas del PRD, el control hegemónico del PRI podría llegar a su fin. Serían como las fuerzas democráticas del PRI más el PRD luchando juntos contra Colosio y los Priistas tradicionales.
Pero Camacho, dijo que no, que no creía que eso fuera posible. Y pocos creían en realidad que Cárdenas renunciaría a su candidatura. Ya se hablaba de 4 candidatos importantes, el del PAN (Fernández), el del PRD (Cárdenas), el del PRI (Colosio) y Camacho, el independiente. Así las cosas, podría ganar o Camacho o Colosio (pues la candidatura de Cárdenas y Fernández se verían disminuidas con la presencia de dos centristas), lo que aseguraba, de una forma muy sui generis, el triunfo del PRI, aunque Camacho no fuera PRI propiamente tal. Y luego, vino lo inesperado. Un muchacho aparentemente sin conexiones con ningún actor político nacional, atentó exitosamente contra la vida de Luis Donaldo Colosio, el candidato oficial del PRI, hiriéndolo mortalmente en la ciudad de Tijuana, estado de Baja California mientras Colosio realizaba una gira de campaña. Ahora México entero está de luto. La violencia de los últimos tiempos (que incluye las acciones del frente, algunas bombas en diferentes ciudades y el secuestro de uno de los banqueros más importantes del país) ha llegado a su clímax. Cárdenas dijo que suspendía su campaña, Fernández, del PAN, dijo lo mismo. Octavio Paz habló de un magnicidio y llamó a México a unirse por la paz y el respeto al derecho ajeno. El país vivió climas de tensión e incertidumbre. Los restos de Colosio fueron enterrados en su ciudad natal un viernes al mediodía. Pocos días después, el presidente Salinas tuvo que anunciar al nuevo candidato presidencial del PRI. Existían algunos problemas, muchos presidenciables estaban trabajando con el gobierno, por lo que su candidatura no era posible (por restricciones legales --no pueden trabajar para el gobierno después del plazo de cierre de inscripciones--), tal es el caso de Aspe. No es así el caso de Camacho, quien oficialmente no trabaja para el gobierno. Pero habiendo Camacho polemizado con Colosio durante las semanas previas y habiendo sido Colosio el preferido originalmente, es poco probable que dado el trágico fin de Colosio, Salinas escoja a Camacho como el candidato oficial. Muchos dicen que es el candidato natural, pero es tan natural su candidatura que
la muerte de Colosio le viene a Camacho como anillo al dedo. Y un Camacho presidente tendría el fantasma de la muerte de Colosio rondando por el palacio presidencial por todo el sexenio. Más aún, dadas las polémicas de Camacho con el PRI, sería muy extraño que ahora el PRI lo eligiera oficialmente como su candidato. Los ojos expertos apuntaban en otra dirección, en un colaborador de la campaña de Colosio, más amigo de Salinas que de Colosio, pero un hombre leal al partido, Ernesto Zedillo. Pero la política en México es y será impredecible. Y tampoco corresponde hablar de sucesores mientras en ese tiempo los restos de Colosio aún descansaban en un hospital de Tijuana. REPERCUSIONES SOCIOECONÓMICAS DEL MAGNICIDIO Luis Donaldo Colosio Murrieta fue asesinado el 23 de marzo de 1994 en Lomas Taurinas, Tijuana. Se encontraba haciendo campaña como candidato del PRI por la Presidencia de la República. Mario Aburto fue condenado como el asesino de Colosio. ¿El costo político?, alto sin duda, ¿Fue realmente por la conciencia ciudadana? O fue el poder mediático bien utilizado, ¿Una mercadotecnia política?, ¿Qué fue lo que realmente hizo lo que parecía imposible? El orden construido a partir de 1983, bautizado en 1992 por el entonces presidente de la República, Carlos Salinas de Gortari, como Liberal Social, tuvo como uno de sus efectos más perversos la edificación de un poder subterráneo, al que denominamos Centro Oculto del Poder, que terminó por exacerbar hasta el límite las contradicciones que minaban desde 1983 la coherencia institucional de la clase política. El Centro Oculto del Poder no resistió el reclamo político de la élite ni el cuestionamiento armado del más desprotegido sector de la sociedad mexicana. Se quebró, y su caída desestabilizó el otrora inamovible sistema político mexicano, a tal punto que, desde el inicio del mandato de Ernesto Zedillo Ponce de León, la nueva administración mostró como nunca en casi medio siglo de gobiernos "revolucionarios " y dos sexenios de gobiernos "modernizantes", una patente incapacidad para dirigir el país. Las aparentes soluciones al quiebre financiero de diciembre, los devastadores efectos de un desarticulado aparato
productivo sobre los niveles de vida de la población, los inquietantes movimientos al interior del Poder Ejecutivo, los cada vez más riesgosos conflictos poselectorales y el pasmo institucional hacia el justo reclamo de amplios sectores sociales, son en buena medida expresión concentrada de una lucha política entre grupos diversos de un poder hoy fragmentado que, en el capricho por alcanzar su interés inmediato, orillan al país a un estado de ingobernabilidad. A inicios de 1995 mencionamos que al llegar Ernesto Zedillo a la presidencia de la República, el clima político se tornaba cada vez más amenazante e incierto para el gobierno, para la paz social y para la soberanía nacional. La herencia del salinismo se había convertido en un enorme fardo de problemas no resueltos: una clase política dividida y enfrentada, un movimiento guerrillero con señalada influencia nacional, un estado de la República, Chiapas, al borde de la guerra civil, violentos conflictos poselectorales y una súbita devaluación del peso que en pocas semanas desestabilizó económicamente al país. En el mes de marzo de 1994, el entonces candidato a la presidencia del PRI, Luis Donaldo Colosio, propuso una reforma política de fondo del PRI y del Estado. A los pocos días fue asesinado. En el mes de septiembre del mismo año, el presidente electo, Ernesto Zedillo, retoma las propuestas de Colosio y logra un consenso entre los partidos para impulsar la reforma política del Estado. Otra vez el crimen vuelve a frustrar las intenciones de cambio en el sistema político mexicano, el recién nombrado secretario general del PRI y líder de su partido en el Congreso, José Francisco Ruiz Massieu, es asesinado.