³Mirada introspectiva Bajo Sinuana de la guerra de los mil días´ Estudiantes: Ana Inés López Ramírez Edinson Andrés Burgos Arroyo Jonathan Alexander Gamarra Graffe Docente asesor: José Ignacio Trucco Durango D urango Colegio: Liceo Politécnico del Sinú Privado Mixto Grado 11 Barrio remolino Santa Cruz de Lorica- Córdoba (4) 7738060
[email protected] Contacto: Lida Ramírez Morales
[email protected]
³Mirada introspectiva Bajo Sinuana de la guerra de los mil días´ Indudablemente de los hechos trascendentales decisivos en la historia colombiana ha sido la guerra de los mil días (1899-1902), producto de un conflicto armado y político entre los partidos tradicionales liberal y conservador, quienes pretendían alcanzar el poder absoluto de la nación colombiana y consolidarse como la principal fuerza política del gobierno, es así como este conflicto conlleva a una inestabilidad de carácter económico, social y cultural articulada a confrontaciones políticas y situaciones de guerra, llevando al país a la recesión más grande hasta entonces vivida. Dicho conflicto se desarrollo en el gobierno del presidente Manuel Antonio Sanclemente, quien tuvo que ser sustituido por el vicepresidente de la época José Manuel Marroquín debido a que su avanzada edad le impidió seguir en el mando. El nuevo presidente intento instaurar y establecer reformas que favorecieran tanto a los conservadores como a los liberales, a pesar de ser conservador nacionalista, tal suceso no le agrado al anterior presidente de la república y regresa nuevamente al poder. Ante esta situación los liberales comprendieron que sería imposible lograr acuerdos pacifistas, es así como el país se ve inmerso en una disputa de poder, ocasionándose disturbios y rebeliones en todo el país, la guerra cada día era más inhumana, atroz y sanguinaria; creando así una división entre población civil y
conformando luego
grupos simpatizantes. Por un lado algunos
pobladores se comprometían de un modo más fanático, mientras otra parte de la población se hallaba impresionada por la beligerancia, la producción económica comenzó a descender y por ende la economía nacional fue cayendo en una recesión casi irreversible. A causa de este panorama el gobierno nacional se hallaba ante una crisis política, social, cultural y económica sin precedentes; como sus jefes políticos pertenecían a la hegemonía conservadora frente a la encrucijada de financiamiento del conflicto, dieron la orden a los agentes económicos de emitir grandes volúmenes de dinero. Esta decisión conlleva al país a un desequilibrio económico ¿Que sucede cuando hay mayor circulación de dinero que productos en la economía nacional? La demanda estaría por encima de la oferta, lo que se traduce en inflación, si bien la inflación es un aumento persistente y sustancial a nivel
general de los precios de todo tipo de bienes y servicios a través del tiempo, ¿Cómo comprender, cuándo se presenta una inflación? Se habla de inflación cuando se da un incremento en la mayoría de los precios en la producción de un país, y no por el aumento aislado o provisional de un solo producto o de un conjunto de productos. La inflación presentada en esta época condujo a que la moneda se devaluara, esto indica que una persona con su ingreso no podía adquirir la misma cantidad de bienes y servicios que solía obtener antes de la guerra; la población se vió afectada con el alza de los precios principalmente de la canasta familiar, debido a la poca oferta de productos que había en el mercado, por esta razón, el gobierno intervino estableciendo precios mínimos y precios máximos para cada producto, con el fin de controlar la inflación, esta medida no favoreció a los productores de la tierra ya que la inflación era constante y no obtenían ganancias, quienes tomaron la determinación de frenar o disminuir la producción. Un ejemplo puntual de las consecuencias de la inflación de la época es el caso de un campesino cordobés llamado Felipe Antonio Segura Negrete, quien pese hacer un hombre trabajador y dedicado al manejo de una pequeña parcela denominada ³El Platanal´ ubicada en la vereda ³Bajo Blanco´ a orillas del río Sinú. Aproximadamente entre los años 1899 y 1902, para ese entonces el señor Segura Negrete requería de un medio transporte que le permitiera trasladar sus productos hasta la plaza de mercado de Santa Cruz de Lorica, la cual limitaba con su pequeña parcela, es así como surge la necesidad de adquirir una Bestia de carga, sin percatarse que esta adquisición lo haría víctima de una tasa de inflación de 398.9%, producto de la confrontación política nacional. El 30 de abril de 1901 Felipe Antonio Segura Negrete toma la decisión. Y se acerca a la finca de un gran terrateniente conocido como el señor Gregorio López para la adquisición del animal, tal fue su sorpresa al darse por enterado que el valor de su futuro medio de transporte era de $1.000.000, sin embargo, prefería conseguirlo a tan elevado precio, antes de verse obligado a dejar de producir. Día tras día, mes tras mes, año tras año el dueño del burro más costoso en la historia del país cultivaba sus tierras, regaba los campos, y al llegar el tiempo de recolección de la cosecha llevaba sus productos tales como yuca, maíz, ñame, habichuela, ají, mango, guayaba, berenjena, limón y piña por todos los escondrijos del departamento de
Córdoba; atravesando lugares pintorescos como Chinú, Chimá, San Andrés de Sotavento, Tuchín, Purísima de la Concepción, San Bernardo del Viento, San Nicolás de Bari, Las Flores y Cotocá. Felipe Antonio Segura Negrete se había convertido en un símbolo para todo el departamento, tal vez porque independientemente de la crisis política, él debía seguir con su curso normal de vida y no entrar en el sofisma ³Estamos en guerra, no hay producción´. Para el año 1904, el burro se devaluó. Se convirtió en todo un personaje, ya era famoso y no precisamente por su existencia en plena guerra de los mil días, sino por su alto valor al que fue adquirido, era recordado de una manera coloquial como ³el burro del millón de pesos´, la gente se mofaba al verlo circular por las calles de la ciudad y del pueblo. El dueño lo cuidaba como un gran tesoro debido a que este le costo mucho y no valía la pena venderlo porque su costo en ese momento era casi de 10 veces menor al que fue comprado. La anécdota del ³burro del millón de pesos´ se esparció rápidamente por todo el país, hasta llegar a la casa presidencial, exactamente a oídos del presidente Rafael Reyes Prieto, quien se asombró causándole gran curiosidad este episodio ya que a través de la gesta se podía evidenciar hasta que punto la inflación afecto de gran manera al sector agrícola, por tal razón decide ir el mismo hasta la vereda de ³Bajo Blanco´ a conocer personalmente a el famoso ³burro del millón de pesos´. El presidente llego a la parcela ³El Platanal´ para dialogar con el señor Felipe Antonio Segura y comprender de manera más clara la simbología del burro frente al País porque reflejaba una de las peores crisis que ha afrontado Colombia, entender esto le condujo a pensar en unas series de estrategias para poder estabilizar nuevamente la economía. Con el anterior ejemplo se hace sencillo comprender y analizar en qué consistió la inflación evidenciada en la guerra de los mil días, como se esparció a lo largo del territorio colombiano, de qué manera afecto a cada uno de los habitantes del país, cómo enfrentaban los campesinos la terrible situación, qué medidas tomaba el gobierno, en qué forma intervino en el control de los precios en la economía, además permite vislumbrar la
dinámica del libre juego de la oferta y la demanda, en qué forma se sumerge la violencia en la vida de los seres humanos y llegando a ser parte de la conflagración sin ser conscientes del impacto de la misma en la sociedad y que poco a poco nos envuelve en un incremento descontrolado de los precios en los bienes que demanda la población. Dado el escenario social, político y económico presentado en la guerra de los mil días surgieron medidas económicas para controlar la economía e instaurar una institución responsable que mantuviera la credibilidad monetaria nacional; es así como en 1923, bajo el gobierno de Pedro Nel Ospina se contrató una misión internacional para asesorar el proceso de modernización de las finanzas públicas. Esta misión fue conocida como Kemmerer, como resultado de esta misión se promulgo la ley 25 de 1923, en la que se autorizaba el gobierno nacional para crear el Banco de la República. Esta entidad se le otorgó en forma exclusiva la facultad de emitir monedas y además se le dio la facultad de ser prestamista de última instancia, administrador de las reservas nacionales y banquero del gobierno nacional. Es clara la responsabilidad del Banco de la república en el modelo económico para controlar la inflación en el país, la cual, no sólo afecta al gobierno, sino también se afectan todos los ciudadanos de manera desfavorable, ya que se disminuye la capacidad adquisitiva de una persona, generando pérdida de confianza en la moneda que circula en el mercado, permitiendo incrementar los ingresos de una persona de manera paralela al ritmo de crecimiento de los precios para que exista un equilibrio económico; en términos comparativos, hace algunos años un estudiante en el bajo Sinú con solo $700 adquiría una gaseosa y una bolsa de papas, en cambio, en actualmente para que este estudiante pueda comprar ambos productos requiere mínimo de $2000; esta situación permite establecer parámetros para comprender como a medida de los años la población ha perdido poder adquisitivo. Haciendo un análisis de la situación actual con lo acaecido en la época de la guerra de los mil días, el Banco de la República debió tomar medidas económicas trascendentales para lograr de manera gradual controlar la inflación, dicha estrategia se denomina inflación objetivo. Esta estrategia consiste en comunicarle explícitamente al
público que la meta de mantener una inflación baja y estable; de esta manera, se publica una meta formal de inflación con el objetivo de anclar las expectativas de inflación en la población. La idea que yace detrás de esta estrategia es que si se mantienen en el público expectativas de una tasa de inflación baja, es probable que estas afecten el comportamiento de los agentes económicos y que en la realidad los precios aumenten en una cifra cercana a la que se propone el Banco de la República. La junta directiva del Banco de la República ha establecido que la meta de inflación a largo plazo es un rango entre 2% y 4%. La guerra de los mil días suscitó fenómenos bipartidistas, favoreciendo la desigualdad social, política y económica principales causas que desataron un conflicto en el país, dejando huellas imborrables en la sociedad colombiana, siendo las guerras y la inequidad una constante en las naciones latinoamericanas con menor desarrollo y Colombia no ha sido ajena a estas realidades. Podemos decir entonces parodiando al escritor Eduardo Galeano en su texto ³las venas abiertas de América Latina´ que seguimos siendo pobres porque es rico el suelo que pisamos. De hecho no solo países como Colombia se ha enfrentado a este tipo de situaciones pero de cierto modo ha sido esta Nación una de las mas reincidentes en el tema de la guerra fría de los últimos días, donde los administradores del Estado se pelean constantemente por intereses individualistas que en nada benefician el desarrollo de una verdadera Nación, y a causa de este hecho muy probablemente se levantan fuerzas y organizaciones al margen de la ley en la lucha por intereses similares, desatando una crisis política, económica, social y cultural de gran impacto que sólo afecta a la población civil, desmejorando considerablemente la calidad de vida y por tanto obstruyendo el desarrollo de la sociedad.
³Y que aquellas anécdotas con las que se sucita la risa permanecerán viva en los corazones y en la memoria de cada colombiano que al leer estas recónditas palabras a pesar de toda el costal de conflictos que ha cargado desde tiempos remotos Colombia, se sientan cada vez más orgulloso de su tierra.´
Basados en los documentos ³LA HISTORIA BANCO DE LA REPÚBLICA´, ³LA INFLACIÓN OBJETIVO´ y ³LA INFLACIÓN´ de la guía escolar N°2: el dinero y la política monetaria/Banco de la República. Departamento de comunicación, institucional, Mauricio Reina, Sandra Zuluaga, Marcela Rozo; ilustradores Rubén Romero, Gabriel Pulido. - Bogotá: Banco de la República. Departamento de comunicación institucional, 2006. Y anécdotas Bajo Sinuana de la guerra de los mil días.
