Reseña: Carne y Piedra, Richard Sennett, Alianza Alianza editorial, Madrid, 1997, págs., !. Richard Sennett, es un sociólogo e historiador norteamericano vinculado a la llamada escuela filosófica del pragmatismo, y a las Universidades de Chicago y Harv Harvar ard d dond donde e obtu obtuvo vo su doct doctor orad ado. o. Entr Entre e sus sus obra obras s se encu encuen entra tran: n: La corrosión del carácter: las consecuencias personales del trabajo en el nuevo capitalismo, capitalismo, !!"# La cultura del nuevo capitalismo, capitalismo , !!$# y El artesano, artesano, !!%. El libro &ue se rese'a tuvo su primera versión en el a'o (%%# en la traducción al espa'ol, y en su introducción el autor nos indica &ue ) Carne y Piedra es Piedra es una hist histor oria ia de la ciud ciudad ad cont contad ada a a trav trav*s *s de la e+pe e+perie rienc ncia ia corp corpor oral al de las las pers person onas as sien siendo do el sent sentid ido o &ue &ue el auto autorr invo involu lucr cra a en cada cada una una de sus sus refle+iones. El libro se encuentra estructurado en tres partes con un n-mero de die cap/tulos, finaliando con la conclusión# adem0s de otros apartes como son las notas, la bibliograf/a, el /ndice anal/tico, y una serie de im0genes &ue conf confor orma man n el con1 con1un unto to del del te+t te+to. o. Con Con resp respec ecto to al t/tu t/tulo lo Carn Carne e y Pied Piedra ra,, enco encont ntra ramo mos s una una rela relaci ción ón dire direct cta a al tras traseg egar ar del del homb hombre re en el espa espaci cio o geog geogr0 r0fic fico o y sus sus vinc vincul ulac acio ione nes s con con el ento entorn rno, o, el cuer cuerpo po inme inmers rso o en los los avances y fracasos de la humanidad, y sobre todo su poder para construir ciudad ciudades es y adapt adaptarl arlas as a su vida vida cotidi cotidiana ana en relaci relación ón al amor, amor, el odio, odio, la convivencia grupal e individual, la familia, la pol/tica, la alimentación, el aseo etc., desde la 2tenas de 3ericles, hasta la 4e5 6or7 6or7 del Siglo 88. 9a erudición de Sennett hace posible identificar su apego a las disciplinas de las Ciencias Sociales, para dilucidar su pes&uisa a trav*s de la evolución del hombre en diversas *pocas y lugares. 9a e+posición &ue realia el autor, esta dirigida de una forma transversal, mostr0ndonos como la sociedad en lo &ue especifica como inmediato en la historia, se va constituyendo como e1e de importancia para transformar algunos espacios y sus relaciones, en uniones o rupturas transgresoras frente a las caracter/sticas sociales anteriores. En ese orden de ideas, diversas acciones de lo seres humanos entran en ese espectro de unión o ruptura: movimientos pol/ticos y sociales, guerras, descubrimientos, avan avance ces s de la cienc iencia ia,, entr entre e otra otras, s, las las cual cuales es nutr nutren en los los espa espaci cios os de representación humana caracteriados por la ciudad enmarcada en diversas disposiciones y cambios. 9a primera parte titulada Los poderes de la voz y la vista, vista , recrea los momentos trascendentales en &ue recia, y su ciudad 2tenas, entrega una organiación de la ciudad determinada por la importancia de la palabra, la discusión, y el argu argume ment nto, o, adem adem0s 0s por por la nece necesi sida dad d de embe embell llec ecer er y e+hi e+hibi birr el cuer cuerpo po masculino en medio del arte, la pol/tica y la sociedad en general, es decir, el cuerpo como veneración y e+altación de la humanidad. 3ara el caso de Roma, Sennet nos presenta la e+altación de las im0genes y lo visual en el entorno social, pol/tico y cultural de una ciudad encumbrada como centro de poder e imperio dominante, en este caso la Roma del emperador 2driano, e+plicando como la obsesión por las formas geom*tricas con respecto a la disposición sim*trica de la anatom/a humana, dio como resultado una planificación de la ciudad imperial.
;gualmente, hay una identificación sobre las formas en &ue los romanos del periodo estudiado, asumen un imaginario en dirección a lo gr0fico, por e1emplo, en los e+perimentos llevados a cabo en la planificación de las diversas ciudades dominadas, repitiendo el prototipo romano buscando mantener su es&uema mental en las regiones subyugadas, es decir, llevando el imperio a los con&uistados con todo su alter ego. 3or otro lado, la geometr/a del espacio de la ciudad romana transmit/a disciplina al ordenar los movimientos corporales y al comunicar la e+igencia de la mirada, la subordinación y la credibilidad. ios, y a la necesidad de separarse de la vida mundana a trav*s de la mortificación del cuerpo, entre otras cosas, para ganar la ?gracia divina? y obtener la vida eterna, toda una caracteriación relevante &ue posibilita al lector sumergirse en esos or/genes del cristianismo y sus imbricadas relaciones con un imperio decadente en medio de una tradición &ue involucraba muchas acciones de la cotidianidad, siempre e+presadas en medio de un sistema urbano impuesto ba1o la privacidad y lo p-blico en medio de las ciudades. 9a segunda parte titulada impulso del corazón, e+pone los diversos movimientos y cambios asumidos por las sociedades en la Edad @edia con el avance del cristianismo y el auge de las econom/as generadas por los artesanos y por el comercio, actividades para ese entonces m0s dignificadas, ya &ue en la antigAedad, principalmente en recia y Roma, eran consideradas inferiores. Caracteriando al ciudadano medieval al enc-mbralo como un ser económico, mientras &ue el )antiguo, su antecesor, era hombre pol/tico. Se privilegia en este an0lisis de Sennett el movimiento ligado a la relevante actividad y a la e+pansión de la violencia cotidiana en las ciudades y de las guerras &ue afectaban, ante todo, a los pobladores campesinos, un mundo de cambios &ue se reubicaba en ciudades reci*n construidas. 9os fenómenos e+puestos est0n ligados con el movimiento en el cuerpo humano, prototipo &ue toma auge en esa *poca a ra/ de las publicaciones realiadas por aleno y por >e @ondeville, las cuales indican, de una u otra manera, la distribución y movilidad de los calores y los fluidos. 9as sociedades concretas ob1eto de estudio en esta parte del te+to son durante la 2lta Edad @edia y el inicio del Renacimiento, y Biena, en este -ltimo per/odo. 9a impresión &ue de1a las dos primeras partes de Carne y Piedra, es la de una recopilación minuciosa de las actividades de la humanidad a trav*s de sus v/nculos con la ciudad como espacio de sus encuentros culturales, comerciales, económicos, familiares, pol/ticos, y de ocio. oda una caracteriación &ue posibilita entender los or/genes del sentido organiativo del hombre con el entorno y las necesidades &ue all/ surgen en dos rasgos distintivos &ue se atraviesan en cada uno de los apuntes del autor: el cuerpo y la ciudad. >esde el presente, podemos asumir una postura &ue nos ayuda a entender como nos ubicamos en nuestro entorno y ba1o &ue dispositivos nos movemos, en acciones &ue involucran nuestro cuerpo y un espacio urbano como la ciudad# en la cotidiana relación con los dem0s y en el intrincado
camino de los cruces cotidianos e+presados en el apartamento &ue habitamos, la calle &ue caminamos, el traba1o &ue realiamos, los alimentos &ue comemos, entre muchas otras actividades diarias# es decir, el cuerpo en función del encuentro con otros cuerpos, teniendo como escenario la urbe, en pocas palabras, la carne y la piedra en comunión directa. En conclusión, una agradable lectura de encuentro con el pasado corporal en el marco de la humanidad con sus civiliaciones m0s importantes, un recorrido -nico &ue nos transporta en flash bac7, al mundo vivido ba1o los acomodamientos de un cuerpo estudiado y amado, en orden a la transformación sistem0tica de un espacio p-blico representado en nuestro espacio habitacional socialmente construido. 9a tercera parte titulada arterias y venas, es una analog/a del descubrimiento de Dilliam Harvey con respecto a la circulación de la sangre, y a los avances ar&uitectónicos de las ciudades en aspectos mercantiles y sociales, usando ese avance m*dico en consonancia con la vitalidad del espacio habitado, de ah/ &ue al d/a de hoy en nuestras ciudades, todav/a utilicemos el termino arteria, para referirnos a un espacio de circulación libre y sin taponamientos, por e1emplo es particular &ue escuchemos )las principales arterias de la ciudad se encuentren blo&ueadas por raones diversas concernientes a los taponamientos vehiculares. 3ero tambi*n esa concepción de la nueva ciudad se vinculaba con el nacimiento del capitalismo moderno en la obra de 2dam Smith La Riqueza de las Naciones, &uien seg-n Sennett fue el primero &ue capto la dirección en la &ue llevar/an los descubrimientos de Harvey por&ue supuso &ue el mercado libre de traba1o y de bienes operaba de una manera muy seme1ante a al circulación de la sangre por el cuerpo y con unas consecuencias revitaliadoras muy similares p.$FG. ;nteresante igualmente la refle+ión dirigida a una ciudad &ue respira, donde los )h0bitos sucios de un sector de la población, en este caso el campesinado, era una constante, la refle+ión se dirige a la nueva ciencia del cuerpo &ue le daba importancia a la piel y su limpiea, ya &ue por sus poros la sangre circulaba como s/ntoma de sanidad. En las pr0cticas corporales relacionadas en el te+to =orines y heces=, se representaba el cuerpo y su cuidado par el bienestar, donde un individuo como el campesino representaba un mal e1emplo, y el m*dico, ubicado en la ciudad, el escogido para ense'ar las buenas pr0cticas, las cuales fueron surgiendo en aspectos tan sencillos como la aparición del papel desechable para limpiarse el ano despu*s de e+cretar. Como afirma Sennett, )los campesinos y los m*dicos eran literalmente incapaces de comunicarse en un mundo com-n de representaciones del cuerpo y sus peripecias p. (G. 9as necesidades de un cuerpo saludable, vinculado al entorno de una ciudad cambiante, tra1o consigo cambios en las formas de vestir en el Siglo 8B;;;: m0s ba'o, menos suciedad, piel limpia, en una ciudad &ue respira. Una de las conclusiones a las &ue llega el autor, a propósito de esa relación entre cuerpo sano y ciudad limpia, es &ue los planificadores ilustrados deseaban &ue la ciudad, ya en su dise'o, funcionara como un cuerpo sano, fluyendo libremente y disfrutando de una piel limpia p.G, inspirados por la mec0nica sangu/nea )pensaban &ue si el movimiento se blo&ueaba en alg-n punto de la ciudad, el cuerpo colectivo sufr/a una crisis circulatoria como la &ue
e+perimenta el cuerpo individual durante un ata&ue en el &ue se obtura un arteria p.IG, ah/ la clave de la met0fora. Es una constante en el te+to &ue Sennett proponga una serie de e1emplos a propósito de los cambios urban/sticos, por e1emplo Dashington y los planes de homas Jefferson, eorge Dashington y 3ierre Charles 9KEnfant, este -ltimo, ingeniero unido a la causa Revolucionaria &ue independiar0 esta colonia de la Corona Lrit0nica, y propusiera para esta ciudad un plano de l/neas de puntos, diferente al de cuadricula romana propuesta inicialmente# creando lo &ue llamó un gran pulmón en seme1ana al estilo parisino de la plaa de 9u/s 8B. Con respecto al estilo de las ciudades en su organiación urbana, e+plicado ba1o el te+to cl0sico de 2dam Smith La Riqueza de las Naciones y el e1emplo de la fabrica de alfileres# y por otro lado oethe y su libro Viaje por talia, en perspectiva de las ciudades &ue deb/an operar por principios circulatorios con arterias y pulmones y un centro, nos lleva a la conclusión &ue las bases intelectuales fueron importantes para vincular ideas y transformar espacios a trav*s de la e+periencia, en este caso desde dos refle+iones diferentes, una enmarcada en la econom/a, la otra con un estilo literario dirigida a un p-blico especial, netamente letrado, y en -ltimas vinculado a las transformaciones sociales, pol/ticas, económicas, culturales y urban/sticas. Sennet dedica una parte de su investigación a analiar los influ1os de la Revolución
hasta los medios de comunicación, donde el desplaamiento y otras acciones de la vida cotidiana estaban inmersos.
