DISEÑO GRAFICO EN BRASIL
El diseño es un lenguaje directamente comprometido con la idea de industria y de sistema, y Brasil ha tenido condiciones de desarrollarlo a partir de los años 50 aproximadamente, es decir, dos décadas después de las primeras obras arquitectónicas modernistas y algunos años antes de la instalación de la industria automovilística en el país. El origen del diseño en Brasil está ligado a algunos europeos que trajeron el racionalismo al país y lo introdujeron en el curso organizado por P.M. Bardi en el Museo de Arte de São Paulo. Durante bastante tiempo, la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de São Paulo fue el gran núcleo de Diseño Industrial y Comunicación Visual - hasta que, en 1962, estas disciplinas se convierten en materias casi tan importantes como las de Edificación y Urbanismo. A partir de la década de los años 60, comenzaron a licenciarse los primeros diseñadores en Rio de Janeiro, en la Escuela Superior de Diseño Industrial, primera institución total y exclusivamente dedicada a la disciplina. d isciplina. La enseñanza de Diseño Industrial y Comunicación Visual se extendió principalmente a partir de la década de los 70, cuando los gobiernos militares fomentaron la apertura de escuelas superiores. Hoy, funcionan en el país más de 40 facultades, la mayoría de ellas de un modo extremadamente precario. ¿Cuál es el motivo de esta situación? En definitiva, el país necesitaba diseñadores industriales para su producción y realizó una implantación industrial masiva en los años 50 y 60. Pero si esto es cierto, no lo es menos que el gran proyecto nacional que pensaba en la sociedad y en la población como un todo (y de ahí la necesidad de que crear trabajo, comida, educación, salud y vivienda para todos) sucumbió en 1964, quedando postergado para los años 70 el comienzo de la modernización del país. En esta época comienza en el mundo el proceso de globalización, cabiendo a Brasil el suministro de materia prima bruta. En la actualidad, se crea poco, se copia mucho, se importa mucho. Acompañando estas características de la economía brasileña, la comunicación visual tiene un desempeño extremadamente tímido hasta los años 80. La "racionalización" era la gran palabra de orden y Alexandre Wollner su líder; ahora la palabra de orden es la "creación": el diseño, el espíritu publicitario, el desorden, la inclinación, el azar y, en los últimos años, el ordenador - santo creador y salvador de los carentes de talento- se usan indiscriminadamente. Las brechas que han permitido el desarrollo del diseño brasileño se pusieron de manifiesto principalmente en el diseño de mobiliario. Ya en las décadas de los años 20 y 30, John Graz, artista plástico en su s u esencia y que perteneció pertenec ió al movimiento modernista, diseñó numerosos muebles, con influencia del art decó, que son hasta hoy presentados casi como únicos de esta época. Él era de los pocos, es cierto, que tenía la intención de estar en el instante histórico, al igual
que el diseñador de muebles e industria Joaquim Tenreiro que, desde los años 40, desempeña una importante función en Rio de Janeiro. El origen del diseño gráfico brasileño puede determinarse por medio de los pioneros Aloisio Sergio Magalhaes y Alexandre Wollner. En 1962 se inauguró en Río de Janeiro la primera Escuela Superior de diseño Industrial, la cual ha contado con profesores de altísimo nivel como GuiBonsieppe. Aloísio Sergio Magalhães
fue uno de los más importantes diseñadores gráficos brasileños del siglo XX. Aunque fue formado en derecho, trabajó siempre inclinado hacia las artes: pintura, grabado, artes visuales. Trayectoria Además de diseñador, fue Secretario General del Ministerio de Educación de Brasil. También fue uno de los fundadores de la ESDI (Escola Superior de Desenho Industrial), que es la primera escuela de diseño de nivel superior en Brasil y América Latina, establecida en 1962. El modelo seguido por la ESDI era el de la escuela de Ulm, una escuela alemana de diseño que duró solamente diez años, que promovía fundamentalmente el diseño proyectual y tenía una visión extremadamente orientada al funcionalismo. A partir de 1975, la ESDI forma parte de la Universidade do Estado do Rio de Janeiro, se localiza en Lapa (Río de Janeiro) iniciando en el año 2005 su curso de magíster en diseño. Fue profesor de la ya mencionada escuela durante sus primeros años, donde uno de sus principales aportes fue ofrecer una orientación del diseño alternativa a la alemana, presentando una tendencia de diseño integrado, sin distinción entre diseño gráfico y diseño industrial, gracias a lo cual los alumnos egresaban con ambas capacidades. Fue miembro fundador de O Gráfico Amador, revista privada establecida en Recife en mayo de 1954 que permaneció activa hasta 1961, y en la cual participó junto a jóvenes artistas e intelectuales pernambucanos. Esta organización contemplaba trabajos de muy alta calidad de diseñadores gráficos brasileños, trabajando en conjunto con poetas y otro tipo de artistas. Presentó grandes creaciones tipográficas y de artes plásticas. En su libro sobre O Gráfico Amador, Guilherme Cunha Lima dice que las experiencias en diseño gráfico del grupo tuvieron un papel importante en los orígenes de la tipografía moderna brasileña. Aloísio Magalhães montó en Río de Janeiro una oficina de diseño gráfico que produjo valiosos trabajos de identidades visuales y logotipos de compañías como Petrobrás, Souza Cruz, Embratur, Unibanco, Xerox, Universidade de Brasília, Banco Nacional, União de Bancos Brasileiros, Banco do Estado de São Paulo, Grupo Brascan, Companhia Souza Cruz, Secretaria de Turismo do Estado da
Guanabara, Fundação Bienal de São Paulo, el símbolo del IV Centenário do Rio de Janeiro, el símbolo conmemorativo del Sesquicentenário da Independência y muchos otros trabajos. Una de sus obras más importantes fue la creación del estándar monetario brasileño de los Cruzeiros, ocupándose de todo lo que tenía que ver con el diseño gráfico y la identidad visual de la divisa brasileña. Introdujo imágenes de simetría a los billetes únicas en el mundo y también diseñó las caras de las monedas que entrarían en circulación, buscando siempre comunicar mediante las imágenes plasmadas ideas que intentan resumir eventos históricos o rasgos de la identidad brasileña. Trabajó mucho con mosaicos regulares, los cuales fueron uno de sus favoritos modos de expresión artística y contribuyó en numerosas obras con la Oficina Cerâmica Francisco Brennand, que se dedicaba a la producción de esculturas y de cerámicas en Pernambuco. La motivación de este gran diseñador siempre fue acentuar en sus obras la búsqueda y preservación de una identidad cultural brasileña, sea en el área que fuera, jamás dejó de lado sus raíces y su intento de contribuir a su país. Alexandre Wollner (1928)
Es el más antiguo diseñador gráfico en actividad en el país: actúa en este campo desde 1951, cuando participó en el curso de Comunicación Visual en el Instituto de Arte Contemporáneo del Masp. Completó su formación en la Escuela Superior de la Forma de Ulm, Alemania, adonde fue invitado en 1954 por el entonces rector Max Bill y recomendado por Geraldo de Barros. Entre 1955 y 1958, realizó prácticas en el estudio de Otl Aicher en Ulm, habiendo participado en la implantación de los proyectos de Braun, Lufthansa y Herman Miller. De vuelta a São Paulo, abrió en 1958 el Forminform, pionero estudio de diseño, con Geraldo de Barros y Rubem Martins. Desde 1962, actúa a través de la Dicv Designo e fue consultor de la SAO desde 1980, división de diseño de la agencia de publicidad DPZ.
Wollner tiene en su currículum proyectos para innumerables e importantes empresas brasileñas (foto), en todos los campos de lo que él llama "diseño visual", incluyendo sistemas de señalización, diseño editorial, líneas de embalaje y cartelería. Su área de especialidad, sin embargo, son los programas de identidad visual, que realiza con gran rigor metodológico, resultando precisos manuales de uso técnico para la implementación de los programas. Desarrolla gran actividad también en investigaciones en el campo de la tipografía, arte concreto y computación gráfica. Participó en la creación de Esdi, de la cual
fue el primer responsable y coordinador del Departamento de Comunicación Visual. Entre 1969 y 1970, fue consultor del Ayuntamiento de São Paulo. Presidió la Asociación Brasileña de Diseño Industrial (ABDI) en dos gestiones: 1970-72 y 1973-74. La tipografía llega tarde a Brasil, a pesar de esto el establecimiento de las sucursales de las grandes agencias de publicidad americanas, que coincide con el primer gran desarrollo industrial y mercantil del Brasil, permite la introducción de las más modernas formas de producción industrial, con lo que los brasileños aprenden a diseñar anuncios publicitarios en 1940.