Caso 2: Aumento de la diversidad de edades en el lugar de trabajo.
Durante el siglo pasado, la edad promedio de la fuerza laboral se ha incrementado de manera continua gracias a que la ciencia médica ha estado aumentando la longevidad la vitalidad. !l segmento laboral con maor crecimiento son son los individuos maores de "" a#os. $nve $nvest stig igac acio ione nes s médi médica cas s est% est%n n e&plo &plora rand ndo o técn técnic icas as que que podr podr'a 'an n e&ten tender la vida humana ana a los los ()) a#os o m%s. %s. Asim simismo smo, la combi combinac naci*n i*n de los plan planes es de jubil jubilaci aci*n *n con con prest prestaci acion ones es de+nid de+nidas as hacen hacen que que mucho muchos s indi individ viduo uos s contin continen en labor laboran ando do,, mucho mucho tiemp tiempo o después de la edad de la jubilaci*n tradicional. -or desg desgra raci cia, a, los los trab trabaj ajad ador ores es mao maorres enfr enfren enta tan n dive divers rsas as acti actitu tude des s disc discri rimi mina nato tori rias as en el luga lugarr de trab trabaj ajo o. n grup grupo o de investigadores revis* m%s de ()) publicaciones sobre la discriminaci*n por edad, con el objetivo de determinar cu%les estereotipos eran m%s comunes comunes en los diferente diferentes s estudios estudios,, encontr encontr* * que los estereoti estereotipos pos se#al se#alab aban an que que el desem desempe pe#o #o labor laboral al dismi disminu nue e confo conform rme e la edad edad avanza, en contraposici*n a la evidencia emp'rica que se present* antes en este cap'tulo, la cual indica que pr%cticamente no e&iste una relaci*n entre la edad el desempe#o de las tareas. /os estereotipos también sugieren que los trabajadores maores son menos adaptables, menos 0e&ibles menos capaces de aprender nuevos conceptos. -or otro lado, las investigaciones sugieren que los adultos maores son capaces de aprender de adaptarse a nuevas situaciones, cuando se les brinda el conte&to adecuado. /as /as orga organi niza zaci cion ones es pued pueden en toma tomarr medi medida das s para para limi limita tarr la discriminaci*n por edad garantizar que los empleados sean tratados de forma justa, sin importar la edad que tengan. 1uchas de las técnicas que se utilizan para evitar la discriminaci*n por edad se derivan de pr%cticas administrativas acertadas, que son relevantes para todos los empleados: establecer e&pectativas claras para el desempe#o, enfrentar los problemas de manera directa, comunicarse frecuentemente con los traba trabajad jador ores, es, seguir seguir pol'ti pol'ticas cas proc proced edimi imien entos tos clar claros os de manera manera consistente. !n particular, los e&pertos e&pertos en administraci*n se#alan que la clar clarid idad ad la cons consis iste tenc ncia ia sirv sirven en para para gara garant ntiz izar ar que que todo todos s los los empleados reciban el mismo trabajo, sin importar su edad.
( 3Cu%les cambios cambios en las relaciones relaciones laborales laborales podr'an podr'an ocurrir ocurrir conforme conforme la poblaci*n envejece4
2 3Cree usted que un aumento en la diversidad de la edad provocar% nuevos desaf'os para los gerentes4, 35ué tipo de desaf'os cree que ser%n los m%s dif'ciles4 6 3C*mo pueden las organizaciones manejar las diferencias relacionadas con la discriminaci*n por edad en el lugar de trabajo4 7 35ué tipo de pol'ticas generar'an discriminaci*n por edad4, 3C*mo podr'an modi+carse para eliminar tales problemas4
!l elemento integrador por e&celencia en la sociedad moderna es el trabajo, del cual emanan el prestigio social, los ingresos econ*micos, el nivel de vida, buena parte de las relaciones sociales de los grupos de pertenencia otros referentes b%sicos para la vida la identidad de las personas. !l retiro o el abandono de+nitivo de la actividad econ*mica, como transici*n social que marca el paso a la vejez, es un evento que, en el mejor de los casos, vive un proceso de institucionalizaci*n parcial en 1é&ico. -ara una minor'a, el retiro del trabajo con la protecci*n de una pensi*n es un evento posible, en tanto que la gran maor'a, ante la necesidad de obtener ingresos para costear su subsistencia, se ve obligada a seguir en la actividad econ*mica mientras sus fuerzas capacidades se lo permiten. !sta ltima e&periencia e&plica las altas tasas de participaci*n laboral después de los 8" a#os establece los rasgos de un calendario tard'o con alta dispersi*n del retiro en 1é&ico, con una edad media de 89.7 a#os un rango intercuartil de apro&imadamente 2) a#os. arde o temprano, si primero no sobreviene la muerte, la vejez impone fatalmente el retiro del trabajo, convirtiendo a los adultos maores en personas totalmente dependientes de los sistemas de transferencia. Cada sociedad dispone de mecanismos de redistribuci*n de recursos que ponen de mani+esto los escenarios de vida a los cuales se enfrentan los adultos maores, quienes subsisten a sea de contribuciones suministradas por el !stado, de recursos provenientes de sus hogares redes sociales familiares de apoo, de sus ahorros e inversiones acumuladas o bien de la caridad pblica. ales opciones no son e&cluentes, por lo que es mu frecuente la combinaci*n de varias.
C;<=!C!!?!C$1$!<; Debemos recordar que muchas de nuestras instituciones econ*micas sociales han estado fundadas en una realidad f%ctica que todav'a mantiene su vigencia: el nmero de ni#os adolescentes es signi+cativamente maor que el de adultos maores. =in embargo, en el a#o 2)") esta composici*n se ver% profundamente alterada. !n consecuencia, el envejecimiento las respuestas sociales que desencadene dar%n lugar a profundos cambios en nuestra manera de ser de pensar: hombres mujeres de todas las edades tendr%n que adaptarse a los nuevos ritmos de la vida social, a las cambiantes
percepciones del curso de vida a las normas e&pectativas sociales emergentes relacionadas con la edad. ambién trastocar% los arreglos residenciales domésticos, las relaciones sociales familiares, as' como las relaciones de género e intergeneracionales. ;tros muchos %mbitos de nuestra vida cotidiana también se ver%n alterados. Cambiar%n los estilos de vida, los patrones de consumo las pautas de alimentaci*n@ proliferar%n las organizaciones grupos dedicados a proteger promover el ejercicio de los derechos de los adultos maores@ aumentar%, de manera signi+cativa, la demanda de mu diversos bienes de algunos servicios especializados@ se abrir%n numerosas oportunidades laborales para los integrantes de la tercera edad@ se alterar% la conformaci*n del espacio urbano surgir%n colonias o barrios con grandes concentraciones de ancianos@ se modi+car%n los espacios internos de las viviendas para hacerlos m%s funcionales a las necesidades de los adultos maores@ se transformar%n las caracter'sticas modalidades del transporte urbano@ abundar%n las rampas en las esquinas de las calles, se pondr% maor atenci*n en el equipamiento de nuestras ciudades para facilitar la movilidad de este segmento de la poblaci*n. !n la industria manufacturera, a no se necesitar%n tantas f%bricas de pa#ales, de juguetes de ropa para ni#os, pero se requerir%n muchas m%s unidades fabriles orientadas a atender las mltiples necesidades domésticas, nutricionales de movilidad de los adultos maores. !n los servicios, disminuir% la demanda de guarder'as, de escuelas de educaci*n b%sica de establecimientos obstétricos pedi%tricos, aumentar% la de hospitales, asilos, albergues servicios de recreaci*n para ancianos, as' como la de geriatras especialistas en la atenci*n de la vejez. =eguramente, los adultos maores se organizar%n presionar%n para que los nuevos arreglos institucionales re0ejen las nuevas pautas de demandas necesidades. /a propia recomposici*n del electorado lo propiciar%: si en la actualidad los adultos maores representan alrededor de B de la poblaci*n en edad de votar, 6) a#os m%s tarde su peso relativo ascender% a m%s de (B en el a#o 2)"), se elevar% a 6)B. !n consecuencia, las agendas del -oder !jecutivo de las c%maras, as' como las plataformas de las organizaciones sociales los partidos, buscar%n adaptarse a esta nueva realidad demogr%+ca , por tanto, la atenci*n de la vejez adquirir% innegable importancia pol'tica.
/a profundidad del cambio pol'tico cultural determinar% si, en el futuro, seremos capaces de con+gurar una nueva ética social una nueva econom'a moral del ciclo de vida de la vejez. !n este proceso debemos aspirar, como pueblo como personas, a envejecer bien, para lo cual resulta indispensable no s*lo seguir agregando a#os a la vida, sino también vida a los a#os. !l envejecimiento demogr%+co se convertir% en un desaf'o formidable que tendr%n que enfrentar de manera conjunta sociedad gobierno. !n el nuevo siglo ser% necesario multiplicar los esfuerzos sociales con el +n de prever sus consecuencias rami+caciones, conocer los costos bene+cios que acompa#an a este proceso, dise#ar ambiciosas propuestas legislativas poner en marcha programas institucionales imaginativos e+cientes.