er de *$crates. Gtra manera de entender ese ínc#lo es como #na interr#pci$n, ;#e es lo ;#e 3ace la filosofía feminista m>s inc#lada al psicoan>lisis. "n este sentido, el ínc#lo ;#e p#ede tener la escrit#ra de m#jeres en relaci$n a la filosofía se asemeja m>s a las fi-#ras de la interferencia, del corte, de la interr#pci$n de lo #niersal. "sta relaci$n de interr#pci$n p#ede descri%irse como #n no l#-ar de la fi-#raci$n de las m#jeres en el espacio de la filosofía, tal & como lo 3ace '#ce ri-ara& en &sp*culo de la otra mu)er . De otra parte, se p#ede pensar esa interr#pci$n o interferencia m>s %ien como #n l#-ar para c#estionar el orden de la diferencia se<#al, a la manera de H#dit3 6#tler en er de *$crates. Gtra manera de entender ese ínc#lo es como #na interr#pci$n, ;#e es lo ;#e 3ace la filosofía feminista m>s inc#lada al psicoan>lisis. "n este sentido, el ínc#lo ;#e p#ede tener la escrit#ra de m#jeres en relaci$n a la filosofía se asemeja m>s a las fi-#ras de la interferencia, del corte, de la interr#pci$n de lo #niersal. "sta relaci$n de interr#pci$n p#ede descri%irse como #n no l#-ar de la fi-#raci$n de las m#jeres en el espacio de la filosofía, tal & como lo 3ace '#ce ri-ara& en &sp*culo de la otra mu)er . De otra parte, se p#ede pensar esa interr#pci$n o interferencia m>s %ien como #n l#-ar para c#estionar el orden de la diferencia se<#al, a la manera de H#dit3 6#tler en
86 8 6 c%mo la filosofía ha descrito a las mu)eres.
o%serar ;#e este ra:onamiento no se da sin cierta inclinaci$n, sin #n determinado moimiento ;#e de#ele a las m#jeres al ori-en, al espacio de lo propio, de lo nat#ral.
86 8 6 esto en qu* espacio lo 'i'iste. &n qu* espacio se dio esta discusi%n en tu caso personal. &n la uni'ersidad donde esta"as estudiando, por e)emplo, participa"as en ciertos grupos políticos donde se discutía esto.
8o, este rec3a:o rec3a:o es político, político, pero tam%ién es #n rec3a:o rec3a:o a niel de prod#cci$n de conocimiento. conocimiento. C#ando tB mencionas i:;#ierda tiendes a pensar esta i:;#ierda como #na i:;#ierda moimientista o como #na i:;#ierda de aparatos2partido. ero tam%ién 3a& #na i:;#ierda ;#e se desarrolla a #n niel epistemol$-ico, en el >m%ito de la prod#cci$n de conocimiento. omemos omemos por ejemplo a la 3istoria social. "s principalmente en el espacio de representaci$n 3istorio-r>fico de la 3istoria social donde encontramos las descripciones m>s esenciali:adas de las m#jeres. C#estionar esas descripciones implica propiciar políticas ;#e interfieran en el >m%ito de la ?representaci$n. "n ese sentido, c#ando adertía en esa entreista de las resistencias de la i:;#ierda al feminismo, pensa%a en las resistencias secretadas secretadas desde el aparato #niersitario de sa%er.
87as 8 7as dicho tam"i*n que te interesa el límite entre la filosofía y la no8filosofía, que te interesa lo que puede incorporar temáticas y o")etos distintos a los can%nicos, y que una escena del 0ed%n 9Jantipa e:pulsada de la escena de muerte de 5%crates; no es una an*cdota, sino que mucho más, c%mo se ha construido la historia de la filosofía y qu* es lo que se espera de ella, desde tu punto de 'ista, actualmente.
8"s la relaci$n ;#e se p#ede esta%lecer esta%lecer entre filosofía filosofía & diferencia de los los se
86 8 6 c%mo la filosofía ha descrito a las mu)eres.
8+a& dos fi-#ras en la filosofía, ;#e las rastrea '#ce '#ce ri-ara&= #na tiene tiene ;#e er con la 3isteria, 3isteria, ;#e es otro nom%re para la ?caerna en lat$n & otra con la 3Ira, fi-#ra de recept>c#lo o matri:. "sas son las fi-#ras con las ;#e la filosofía 3a%it#almente 3a descrito a las m#jeres. "n este sentido, la pre-#nta ;#e se 3ace '#ce ri-ara& es c#>l es la fi-#raci$n para las m#jeres desde esta metaf$rica ;#e aporta la filosofíaE 'a a#sencia, es s# resp#esta. De a3í ;#e ri-ara& crea necesario insistir en la diferencia se<#al. *in em%ar-o, otra perspectia tiende m>s %ien a c#estionar lo ;#e est> en la %ase de esa metaf$rica, ;#e es la propia diferencia se<#al entendida en el %inomio de lo masc#linoJfemenino. +a%ría ;#e c#estionar, entonces, a la diferencia se<#al como #na ordenaci$n oc#lta, silente, del orden de la filosofía & proponer otras fi-#ras para la representaci$n de las m#jeres o para la escrit#ra de esas m#jeres. "ste -esto ;#e podríamos llamar propio de #na ?antifilosofía, este ínc#lo entre centro & mar-en, entre tradici$n & alteraci$n, entre filosofía & feminismo es ina#-#rado por *imone de 6ea#oir en &l segundo se:o. se:o.
86 8 6 cuál es tu posici%n dentro de esa discusi%n.
8 A mí me parece ;#e es necesario e
8 + prop%sito prop%sito de posiciones, 'i que en una entre'ista entre'ista decías tam"i*n tam"i*n que te acomoda"a acomoda"a una posici%n afín afín a una =política del duelo> del feminismo, podrías desarrollar más esta idea.
8 Claro, en ese sentido sentido de c#estionar esa política afirmatia afirmatia del feminismo. feminismo. Desarrollar, por el contrario, #na pr>ctica feminista ;#e se descri%e en la pérdida del o%jeto del ?feminismo. "n este sentido, el feminismo siempre implicaría #na política de la definici$n, propio de #na %Bs;#eda incesante, m>s ;#e #na política de la afirmaci$n de la anterioridad del c#erpo de las m#jeres.
86 8 6 el duelo.
8 "l d#elo en el sentido sentido de esa pérdida. Descri%ir #na política política del feminismo feminismo siempre conllea conllea la afirmaci$n de la pérdida de ese o%jeto de deseo ;#e parece constit#ir a toda política feminista. feminista.
87e 8 7e con'ersado con otros fil%sofos y fil%sofas so"re el desconocimient desconocimiento o que e:iste entre los estudiantes de filosofía de autores chilenos de te:tos filos%ficos, por el predominio de programas de estudio europei4antes! -u* lugar crees que ocupa Julieta Kirkood entre los pensadores chilenos. De"iera formar parte de los
programas de estudio filos%ficos.
86#eno, el te
87as dicho que el feminismo tiene una relaci%n conflicti'a y oposicional con la uni'ersidad, que tiene la 'ocaci%n de =aca"ar con el orden e:istente>, c%mo con)ugas eso con tu propia e:periencia como profesora uni'ersitaria, en la que formas parte de un sistema, pu"licas artículos inde:ados, postulas a 0ondecyt, etc!.
8Claro, es ;#e allí donde se esta%lece #na política específica. "n ese ínc#lo con la instit#ci$n de%es esta%lecer #na política de interenci$n del orden de la prod#cci$n de conocimientos en la disciplina, en la ela%oraci$n de pro&ectos, en la inesti-aci$n. "s a3í donde de%es incorporar #n o%jeto no preisto a la 3ora de pensar la filosofía o de escri%ir #n artíc#lo. "s #n ejercicio ;#e se instala en #na polémica, en #n conflicto.
8Pero tam"i*n, para lograr que eso sea pu"licado o sea tomado en cuenta, de"e asumir ciertas l%gicas enunciati'as para poder ser escuchado dentro de ese mismo campo, porque si fuera un te:to completamente disidente con un esquema dado, qui4ás no sería aceptado o no sería acogido como un proyecto 'ia"le!
8'a política se de%e pensar siempre en #n do%le moimiento. *e podría decir ;#e en C3ile este do%le moimiento 3a dado l#-ar a dos formas & pr>cticas. Una de esos moimientos es -enerado por cierto rep#%licanismo de "stado, la premisa de éste es 3acer efectia la promesa de la i-#aldad. *in em%ar-o, este ideario se 3a desarrollado, parad$jicamente, o %ien como #na democracia e
política no necesariamente cal:a con el marco de la incorporaci$n por ejemplo, no se conj#-a con el marco ni de los pro&ectos de inesti-aci$n ni con el espacio de las disciplinas ;#e de%en s# orden & aance al rep#%licanismo estatal. , sin em%ar-o, este rep#%licanismo poético, ;#e es #n rep#%licanismo de las letras, de la ima-en, de las acciones artísticas %#sca otras maneras, otros formatos & otras formas de interenir ese espacio de la i-#aldad. "sta política de la alteraci$n no intenta -enerar #n di>lo-o en ese espacio del rep#%licanismo estatal al ;#e pertenece cierto feminismo de la acci$n afirmatia. 'a relaci$n ;#e &o p#edo esta%lecer con las pr>cticas feministas rep#%licanas estatales es de #na interenci$n crítica.
8Pero ocurre.
8*e de%e allí tam%ién interenir, con todo el ries-o ;#e implica esa interenci$n. 'a sordera, ;#e tB se@alas, es posi%le, se de%e contar con esa sordera.
8&n ese sentido, he 'isto que hay ciertas diferencias políticas con los estudios de g*nero, no sería posi"le una acci%n con)unta entre la gente que se dedica a los estudios de g*nero 3que has criticado por no alterar el orden de la producci%n de conocimiento dentro de la uni'ersidad3 y el discurso feminista.
8C#ando tB dices ?est#dios de -énero, el pro%lema no es con la -ente, sino ;#e es con la nominaci$n. *iempre esta política del feminismo tiene ;#e er con #na política de la nominaci$n. olítica ;#e constit#&e pr>cticas. 'a pre-#nta, si ;#ieres, es de ;#é manera estos conceptos comien:an a -enerar pr>cticas. C#>l es el pro%lema con el concepto de -éneroE "n principio, se podría adertir ;#e a;#el concepto de -énero ;#e nos remite al espacio de la m#ltiplicidad, o al c#estionamiento de la diferencia o del %inomio de lo masc#lino & lo femenino, 3a sido reificado en el espacio de la #niersidad principalmente como #na política de m#jeres. "sa es la primera distancia. or ;#é a los est#dios de m#jeres se les llama est#dios de -éneroE or ;#é c#ando se dice política de -énero se est> 3a%lando de m#jeresE A3í est> el pro%lema & mi distancia con los est#dios de -énero. !i preoc#paci$n est> m>s %ien centrada en el c#estionamiento de la met>fora de la diferencia de los se
8-u* relaci%n se puede esta"lecer entre arte y feminismo sin que el arte pierda su autonomía y especificidad, sin que se transforme en un medio pasi'o de trasladar mensa)es.
8"l escenario de las artes is#ales de los a@os 70 en adelante est> afectado por a;#ello de la post2 a#tonomía, donde los límites del arte son los ;#e empie:an a c#estionarse en la medida ;#e se introd#cen pr>cticas & o%jetos no necesariamente descritos desde la 3istoria del arte el c#estionamiento de la 3istoria del arte lo ;#e 3ace tam%ién es c#estionar los límites de ese espacio del arte, ;#e de los a@os 70 en adelante empie:a a ser conflict#ado no solo por las pr>cticas artísticas de las m#jeres o feministas, sino ;#e precisamente por la intromisi$n de lo cotidiano. *i a ese conte
dar a ese pro%lema, es ;#e estaríamos en el escenario de la post2a#tonomía del arte, donde esa especificidad ;#e se sala-#arda%a desde la 3istoria del arte comien:a a dil#irse o a c#estionarse. "se conte
8 + prop%sito de tu li"ro so"re la rep$"lica masculina, sigue 'igente el =feminismo maternal> que seg$n has planteado se inaugura en
8"ste feminismo maternal, lo ;#e lo descri%e, es esa idea de la m#jer asociada a la protecci$n, al espacio priado, pero tam%ién a cierta eficiencia, la eficiencia de la incorporaci$n a traés de #n cierto orden esta%lecido ;#e inc#la a las m#jeres o las descri%e en el espacio pB%lico en tanto madres. A prop$sito de estas c#estiones, nos podríamos pre-#ntar si esa eficiencia todaía si-#e siendo parte del orden político de las m#jeres, si las m#jeres todaía al in-resar al espacio pB%lico rec#rren a la eficiencia del disc#rso feminista materno. *i pensamos c$mo las m#jeres en el espacio de la representaci$n política as#men el espacio de la isi%ilidad, nos damos c#enta ;#e efectiamente todaía esa eficiencia si-#e dando res#ltado. or ejemplo, c#ando se descri%e a al-#nas de las m#jeres ;#e participan en política como ?la 3ija de= la 3ija del -eneral, la 3ija del e< residenteM, aBn 3o& la descripci$n de las m#jeres ?;#e importan en la escena pB%lica se inc#la a la esfera priada. "sta descripci$n de las m#jeres es parte del dispositio del feminismo materno li%eral esta%lecido en C3ile a comien:os del si-lo NN.
86 en el caso preciso de ?achelet, crees que eso funcion% así. @ es un a'ance, por así decirlo, si es que se pudiera poner en esos t*rminos, o un cam"io, dentro de la forma de conce"ir las mu)eres dentro del espacio p$"lico.
8O#e !ic3elle 6ac3elet as#ma como presidenta de C3ile es #n c#estionamiento al orden rep#%licano ;#e se define #niersal, pero se partic#lari:a masc#linamente. 'a pre-#nta es si la pr>ctica política de !ic3elle 6ac3elet -enera #na transformaci$n del orden de la representaci$n de las m#jeres. Una resp#esta, la resp#esta m>s optimista, p#ede decir ;#e sí, ;#e el solo 3ec3o de ;#e #na m#jer oc#pe ese l#-ar -enera #na transformaci$n de la representaci$n de las m#jeres en el espacio pB%lico, esa es la tesis defendida por las te$ricas de la política de la presencia con #na saledad= toda política de la presencia de%e ir tam%ién acompa@ada de mecanismos & procedimientos ;#e a&an en direcci$n de la transformaci$n de la política representacional, por ejemplo, paridad, c#otas, c#pos. 'o ;#e no 3a oc#rrido en C3ile, por lo menos no oc#rri$ en el primer -o%ierno de 6ac3elet. *e instala la paridad, pero s$lo como #na política para %#scar cierto efecto sin em%ar-o, no se esta%lece como #na le& ;#e %#s;#e alterar la representaci$n política= no se esta%lecen le&es de c#otas, tampoco 3a& #na le& de c#pos, ;#e n#eamente se est> intentando esta%lecer. "st> por erse si este tipo de transformaci$n oc#rrir> o no en este se-#ndo -o%ierno de 6ac3elet.
8
8!>s m#jeres implicaría #na trasformaci$nE 'a resp#esta sería, si somos confiadas, sí, cam%iaría si somos desconfiadas, no, no cam%iaría= m>s m#jeres lo ;#e 3arían sería reprod#cir cierto orden tradicional de las m#jeres en el espacio político, en la medida ;#e los temas ;#e transersali:an a la política de m#jeres, desde las m#jeres de i:;#ierda 3asta las m#jeres de derec3a, son temas inc#lados a la reprod#cci$n, a la infancia, al c#idado. "n ese sentido, m>s m#jeres en el espacio político lo ;#e a a 3acer es afian:ar & reificar #n orden de si-nificaci$n de las m#jeres inc#lados al orden de lo materno. Carole ateman descri%e este dilema como el dilema de !ar& Pollstonecraft= si las m#jeres ;#ieren in-resar al espacio pB%lico, lo de%en 3acer en tanto 3om%res si e
8 + prop%sito del espacio uni'ersitario, Valentina ?ulo me decía que ha"ía ciertas dificultades para las mu)eres, que era un espacio, especialmente el de la filosofía, muy masculino, en ciertos modos de ha"lar, en ciertos tipos de con'ersaciones, c%mo ha sido tu e:periencia al respecto.
86#eno, a3í n#eamente es mejor remitirnos a pr>cticas & no a s#jetos, a c$mo se -eneran las pr>cticas de la filosofía en C3ile. *i pensamos en c$mo se descri%e la filosofía en C3ile, nos amos a dar c#enta ;#e esta escrit#ra tiene ;#e er con cierto orden de lo #niersal, de lo di#rno. Una filosofía del día, se podría decir, en la ;#e los c#erpos no son pertinentes. "sta inisi%ilidad de los c#erpos en la escrit#ra de la filosofía no ;#iere decir ;#e la filosofía no esté siempre escri%iendo, narrando, #n c#erpo, esta es s# paradoja. "ste c#erpo es descrito desde la met>fora de la diferencia se<#al asi-nado roles, f#nciones, oc#paciones & tiempos. De a3í la a#sencia, la incomodidad & la impertinencia de las m#jeres en la filosofía. ransformar e interr#mpir ese orden ne#tro & #niersalista pero ;#e, sin em%ar-o, reprod#ce #na & otra e: #na ordenaci$n 3eterose<#al, no implica, desde mi perspectia escri%ir la filosofía en ?femenino sino ;#e c#estionar la propia ordenaci$n de la diferencias de los se
8Pero eso es lo importante, la 'isi"ilidad de hom"res y mu)eres. (e acuerdo que leía un artículo de Nelly Richard, en uno de los li"ros de la colecci%n de Palinodia que diriges, a prop%sito de la escrituraB no s* si la cito "ien, pero me parece que decía que no era necesariamente una cuesti%n de 'isi"ilidad de la mu)er o el hom"re, sino que más "ien de un tipo de escritura femenina y un tipo de escritura masculina, que podían ser predominantes! &lla asocia"a a lo masculino, lo uni'ersal, lo fi)o y lo femenino más a lo a"ierto a cuestionarse a sí mismo! Ponía como e)emplo la poesía de Juan #uis (artíne4 y de otros hom"res que podían representar "ien, por así decirlo, un discurso =femenino>! -u* piensas t$ de eso.
8"s ;#e c#ando despla:as el pro%lema al l#-ar de la representaci$n, %ajo el %inomio de lo masc#lino & lo femenino, donde no 3a& c#erpos ;#e importen, la pre-#nta si-#e estando allí, ;#é oc#rre con la e
86 ha"lando de filosofía y mu)eres o diferencia se:ual importa el se:o en la filosofía. 0rases como =pienso, luego e:isto>, no podrían ha"er sido dichas por un hom"re o una mu)er indistintamente.
8"n &l segundo se:o, *imone de 6ea#oir se plantea esta misma pre-#nta. "s decir, se interro-a & e
8=6o he sa"ido siempre, mirando las luchas femeninas, que la mu)er es el peor enemigo de la mu)er> decía Ca"riela (istral, a prop%sito de algunas pol*micas inter'enciones que hi4o y por las que fue atacada por otras mu)eres, =entre las mu)eres toda'ía no se aprende a discutir sin odio y sin in)urias>, dice tam"i*n, qu* opinas de esas afirmaciones.
8O#e tam%ién 3a%ría ;#e mati:ar la misma afirmaci$n de Qa%riela !istral, p#esto ;#e, por ejemplo, si tB lees +cci%n femenina, ;#e es #na reista ;#e se p#%lica en 19// & ;#e es el aparato del artido Cíico Femenino, el primer partido político de m#jeres, #no de los mandatos ;#e esta%lece desde la editorial de esta reista, es encomendar al residente Alessandri ;#e se realicen todas las -estiones necesarias para ;#e Qa%riela
!istral oc#pe los l#-ares de isi%ilidad ;#e merecía. de a3í en m>s esa reista de m#jeres se conierte, #n poco, en plataforma política de Qa%riela !istral. "n ese sentido, ella tiene #na relaci$n importante con las políticas de m#jeres en esos a@os, no es simplemente #n ejercicio de rialidad, sino ;#e tam%ién 3a& #n -r#po de m#jeres ;#e an a apo&ar desde ese aparato & otros a Qa%riela !istral. Gtro elemento de esa afirmaci$n es la e
86 tu tra"a)o ha tenido que 'er con eso. Porque has pu"licado dos li"ros historiográficos, so"re distintos momentos del feminismo chileno!
8*í, con el prop$sito de c#estionar esa 3istorio-rafía nacional donde o %ien las m#jeres son inisi%ili:adas o %ien son descritas en tanto e
8#eyendo a (istral, a Julieta Kirkood o a 5imone de ?eau'oir, por poner e)emplos muy distintos de autoras ligadas de una u otra forma al feminismo, pienso en el uso del lengua)e te%rico que autoras como Nelly Richard o t$ misma, ha"lando )ustamente de Kirkood, utili4an! &s una decisi%n política. Por qu* se opta por un ha"la, me da la impresi%n, más mediada por categorías te%ricas que no son de fácil acceso a un p$"lico lector más amplio, como si lo pueden ser, pienso, la misma (istral o Kirkood.
86#eno, pero depende de ;#é te
8Pero en el caso de Julieta Kirkood, por e)emplo, que sí hace refle:i%n, tiene un estilo muy distinto a ciertas escrituras feministas de hoy, que están más recargadas por un uso del lengua)e más mediado, por así decirloB lo que he leído de Julieta Kirkood me parece menos mediado, sin de)ar de ser refle:i'o, entonces esa es la pregunta, por el uso del lengua)e, es una decisi%n, una necesidad.
8"s ;#e c#ando se lee a H#lieta irKLood, #no dice= %#eno, parece ser #n te
8<%mo ha sido tu e:periencia dirigiendo la colecci%n +rchi'o 0eminista de la editorial Palinodia.
8"sa es #na política de interr#pci$n, #na política ;#e no %#sca trad#cirse al espacio de la instit#cionalidad, sino m>s %ien c#estionar el orden de la prod#cci$n de conocimiento intencionadamente, con te
8No e:istía antes de esta colecci%n un espacio seme)ante, no.
8o. or eso es #n -esto intencionado, de interenir la prod#cci$n de conocimiento, sospec3ando de la claridad, de los sentidos compartidos & de la ?com#nica%ilidad, introd#ciendo #na opacidad, #na :ona -ris.
86 c%mo ha sido la recepci%n de esta colecci%n.
8Creo ;#e el cat>lo-o de la colecci$n 3a lo-rado interenir distintos espacios. a con los seis a@os ;#e llea la colecci$n Arc3io feminista, pienso ;#e ésta 3a empe:ado a -enerar di>lo-os cr#:ados entre filosofía, 3istoria, política & arte en distintos espacios en América 'atina.
8&n qu* estás tra"a)ando actualmente.
8 "ste a@o ten-o pensado p#%licar dos li%ros, #no es &l desorden de la democracia! Partidos políticos en
85aldrán por Palinodia.
8*í, los dos por alinodia.
86 para terminar, cuál es tu posici%n, como feminista, frente a la actual discusi%n so"re el a"orto.
8'a maternidad for:ada no s$lo reprod#ce #na sociedad desi-#al sino ;#e nie-a a las m#jeres dos de los conceptos %>sicos de la política moderna= la i-#aldad & la a#tonomía. 'a imposi%ilidad de decidir so%re n#estros propios c#erpos no s$lo nos e
Porunf emi ni s mos i nmuj er es Textos extraídos del libro “Por un feminismo sin mujeres” -que tensionó los modos tradicionales de pensar el feminismo- recoge discusiones realizadas en Chile por teóricas acti!istas " artistas en torno a post-feminismo " localizaciones de la teoría
queer #
Puede leerse completo en http://www.bibliotecafragmentada.org/wp-
content/uploads/2012/09/Por-un-Feminismo-sin-Mujeres-!"#.pdf
$a contrapr%ctica como t%ctica a lo heteronormati!o Por Patricia Espinosa H.
%a primera &e' (ue le) el t)tulo de esta con&ocatoria me (ued* pensando en lo pro&ocati&o (ue resultaba afirmar un feminismo sin mujeres. #)+ es pro&ocati&o , comparto tal pro&ocacin+ pero habr)a (ue eplicar (ue se trata d e asumir un desmontaje del t*rmino mujer+ embadurnado por el esencialismo heteronormati&o. stamos en un espacio uni&ersitario , me pregunto si el feminismo ha sido ms bien tolerado (ue asumido s el espacio uni&ersitario un lugar donde se ha anulado el seismo+ la di&isin masculino/ femenino+ el control del cuerpo de las mujeres+ la &iolencia material , simblica sobre nuestros cuerpos Pues no+ como sucede+ en general+ en toda nuestra sociedad. 3ueda demostrado (ue la teor)a , el acceso al conocimiento no son suficientes para cambiar las cabe'as pensantes del templo del saber. #i bien el feminismo ha logrado+ en nuestro pa)s+ cierta legitimacin terica+ no ha conseguido consolidarse a ni&el de nuestros/as alumnas. 4ace un par de semanas ante un relato con un protagonista ga,+ una alumna del 5aller (ue dicto dijo 6este maricn7. 8 son demasiado fuerte+ etremadamente &iolento+ me re&ol&i la guata+ como (ue se me &ino un &mito (ue tu&e (ue con&ertir en discurso rabioso , en parte triste. Por(ue tres aos en la !ni&ersidad de hile no han ser&ido para generar una apertura intelectual (ue desmonte la eclusin ni menos el binarismo gen*rico. 8 esto es consecuencia de los acad*micos , de la institucionalidad. Por(ue la uni&ersidad parece haber esenciali'ado el binarismo h*tero/homo. %a uni&ersidad parece haber amurallado el d iscurso sobre g*nero a los departamentos de estudios de g*nero+ dejando el resto del territorio entregado a un neofascismo. %a uni&ersidad es ho, un campo de lucha para desmontar el aparataje androc*ntrico. ;n ho, nos &emos epuestos/ epuestas a conductas de mobbing+ ninguneo+ eclusin de los lugares de toma de decisiones. %as prcticas de acti&ismo feminista muchas &eces se &en insertas en la retrica de la tolerancia. 5*rmino (ue funciona como una ms de las estrategias de control de la alteridad. l poder determina (ui*nes son , cmo son los otros+ disea estrategias para representar al otro en tanto amena'a , fijarlo+ acotarlo a un lugar (ue no genere peligro. %os diferentes al o rden social son clasificados , tolerados. Mientras los tolerados arman un lugar+ una tribu+ un ghetto a la cual no cual(uiera puede pertenecer. ul ser el rito de iniciacin me pregunto una , otra &e' s (ue los tolerantes no toleran %a #ra. < no me tolera %a tolerancia da entrada a todos los p untos de &ista+ los comunistas , los fascistas+ la derecha , la i'(uierda+ el blanco , el negro+ los (ue estn en pro de las armas , en contra de estas+ los h*teros , los ga,s. 8 si corro el riesgo de ser tildada como intolerante frente a la misoginia+ la homofobia+ el racismo+ la discriminacin social+ la desigualdad econmica , el poder empresarial en su democracia de simulacro: lo ser*.
%os sujetos (ue intentan desautori'ar un sistema androc*ntrico corren el se&ero riesgo de asumir la fijacin (ue el p oder les determina. s decir+ me ra,an la cancha , me creo el cuento. %a estrategia de dominacin no debe ser internali'ada. Por(ue asumir el lugar prefijado es asumir la seriali'acin (ue (uita sorpresa+ (ue tran(uili'a al poder (ue ha logrado indi&iduali'ar , al mismo tiempo marginali'ar la diferencia de sus actores= una di&ersidad cultural+ seual+ gen*rica+ (ue no deba ser aceptada al des-raciali'arse+ , al desseuali'arse. #er el otro+ es ser la parte maldita del sistema+ el negro+ la tortillera >Preciado?+ el maricn+ la i'(uierdosa/so+ la negra chana+ el negro flaite+ el residuo del sistema , por tanto de la @nstitucin. %a esenciali'acin del otro+ nos est de&astando. 8 me pregunto: por (u* no romper con tal esenciali'acin+ desbarrancar con la tolerancia en tanto aguantar-soportar lo (ue resulta molesto Mientras nos hacemos los lesos/lesas+ asumimos con indiferencia tener nuestro pe(ueo lugar como si fuera una migaja= por(ue la @nstitucin pareciera decir: o te conformas con las migajas o te eilio. %a indif erencia se nos monta , es mejor cuidar el pellejo (ue dar aullidos. merge as) la desmemoria de nuestra propia historia. trs la pasin+ la rabia+ las ganas de cambiar el mundo+ el compromiso+ el a&an'ar sin transar+ el debate+ la confrontacin por(ue sencillamente se ha eliminado al otro rebelde (ue conten)amos. Me toleran/ los tolero , muere el dilogo. 5oleran para reprimir+ suena raro pero es as). #e aguanta para simulacrar en la m edida de lo posible+ un estado di&erso. %a dictadura amplific la binari'acin masculino/femenino+ familia/heteroseualidad , la oncertacin le sigui las aguas con fer&or dentro de la consolidacin de las pol)ticas neoliberales. l cuerpo del consenso (ue instal la oncertacin+ se centr en la familia como dice Alga Brau: 6hiperrepresentada7 >Cera Fajardo+ Mar)a ntonieta. "isponible en:http://www.alterinfos.org/spip.phparticleDEG2 %a contraprctica como tctica a lo heteronormati&o? l pensamiento heterocentrado no slo nos ha gobernado sino (ue nos gobierna. 8 si de teori'ar se trata+ el feminismo se ha binari'ado entre la diferencia o la igualdad. Hue&amente un parcito: (ueremos ser iguales o (ueremos (ue nos respeten nuestra diferencia de ra'a+ g*nero+ clase. Apto por ambo s polos del binarismo. l sujeto mujer heteroseuali'ado la lle&a como r*gimen pol)tico de control. %os discursos regulatorios constru,en cuerpos desde lo normal o lo des&iado >otro binarismo?. %a respuesta a esta prctica de control ser la contraprctica= una lgica tendiente a desestabili'ar el binario+ la definicin del sujeto Ien este caso Mujer- a partir de un ejercicio de empoderamiento discursi&o p;blico , pri&ado. #e tratar)a entonces+ de descomponer los marcos (ue nos atrapan >Jutler? como mujeres con significante pol)tico+ ,endo ms all del g*nero de matri' heteroseual. se ir ms all+ implica una actuacin reiterada , obligatoria en funcin de unas normas sociales (ue nos eceden+ (ue nos sanciona , eclu,en. Kepresentar ms all del binario+ ms all del g*nero+ ms all del seo= todo es una construccin social , nuestro deber
ser deconstruir cotidianamente los formatos cannicos de seo/g*nero por(ue no ha, una sola forma de significar hombre o mujerL1. #i el feminismo no se desliga de la categor)a jur)dica de representar la mujer seguir la hegemon)a de lo creado por el uni&ersal masculino. Komper la facticidad de lo anatmico de un seo+ negar la &inculacin de un cuerpo a la espera de un g*nero+ recha'ar la continuidad entre seo+ g*nero+ prctica seual , deseo. %a negacin nos lle&a a la nocin de un g*nero por hacer en el territorio de lo cotidiano , durante el tra,ecto &ital de cada sujeto/sujeta. 3ue no somos solo un ;tero+ ni una &agina+ ni menstruacin+ ni madres+ ni trabajadoras (ue e(uilibran lo dom*stico con lo laboral+ sino (ue somos agentes discursi&os+ productoras de disrupcin , (uiero enfati'ar (ue es el espacio cotidiano+ es en el callejeo+ en nuestro mundo laboral+ donde debemos hacernos cargo de toda la mierda esenciali'adora , castradora del uni&ersal androc*ntrico en(uistado tambi*n en las propias cabe'as de muchas mujeres.
&iga “queer” con la lengua afuera' (obre las confusiones del debate latinoamericano Por Felipe Rivas
n enero de 200D+ me encontraba junto a otro acti&ista de !"# en una mesa informati&a (ue el olecti&o hab)a preparado en el 5eatro Ho&edades+ mientras se desarrollaba el cuarto ncuentro %*sbico de rtes >%5?L2 . %legando la tarde+ cuando ,a nos preparbamos para desarmar el stand+ se acercaron dos estudiantes lesbianas gringas mirando con desd*n nuestros sticNers+ m ientras hojeaban un ejemplar de re&ista 5orcida+ pro,ecto (ue hab)a sido publicado unos meses antes+ en no&iembre de 200O. 3u* es IPreguntaron-. !na re&ista de estudios 6cuir7 L. -tin* a responder+ usando la palabra en ingl*s para (ue las gringas entendieran-. mo IKeplicaron-. 6uir7. s de teor)a 6cuir7 I%es aclar*-
6uir7 -Kepitieron ellas+ mirndose intrigadas- 3u* es 6cuir7 s 6cuir7+ 6cuir7+ como el insulto homofbico+ o como 6raro7 en ingl*s. esas alturas+ ,a estaba angustiado. 6uir7+ 6cuier7+ 6cuiar7. Kepet)a gesticulando , alterando los modos de pronunciacin+ intu,endo (ue el problema pod)a estar radicado ah). "e pronto las gringas se miraron , eclamaron: h... 6(ueer7+ 6(ueer7. "ici*ndolo de una manera (ue nunca hab)a o)do en mis con&ersaciones con acti&istas , tericos de %atinoam*rica.
)# &elimitando “lo queer” en *m+rica $atina
l presente teto pretende temati'ar los di&ersos nudos problemticos (ue plantea el establecimiento de lo (ueer como referente mo d*lico , parmetro de lectura de las prcticas , discursos cr)ticos en los sectores de la periferia seual latinoamericana+ espec)ficamente a ra)' del surgimiento de una intensa , reciente escena de la "isidencia #eual en hile (ue &incula las prcticas pol)ticas+ est*ticas , cr)ticas a tra&*s de no&edosos formatos (ue han irrumpido en el espacio p;blico+ la dimensin cultural , el discurso pol)tico organi'ati&o local. n los ;ltimos aos+ han surgido , se han consolidado una serie de propuestas reflei&as , pol)ticas en m*rica %atina (ue establecen relaciones ambi&alentes con las nociones 6(ueer7 norteamericanas. "e la misma forma+ una serie de publicaciones+ algunas de ellas locales aun(ue la ma,or)a articuladas desde centros metropolitanos en !!+ han in&itado a refleionar acerca del modo en (ue se lle&a a cabo esta relacin de 6lo (ueer7 con las prcticas locales del #ur+ las influencias uni , bidireccionales+ las relecturas+ las diseminaciones , contaminaciones+ los recha'os+ las resistencias+ etc. l inter*s especial (ue estos tetos han puesto en el problema de 6los efectos pol)tico-culturales de la traduccin del ( ueer en m*rica %atina7 LG+ instalan la e&idencia de una generali'acin de una cierta conciencia (ue &e en la instalacin de lo (ueer en 4ispanoam*rica+ un asunto particularmente problemtico. %os tetos (ue han anali'ado los problemas de recepcin del fenmeno 6(ueer7 en contetos hispanoamericanos+ han in&ocado recurrentemente el sintagma 6lo (ueer7+ como modo de epresin de la serie de aspectos (ue comporta su uso en castellano. l sintagma 6lo (ueer7 conjuga el art)culo neutro lo+ con la palabra anglfona (ueer+ produciendo la sustanti&acin de un t*rmino (ue+ en ingl*s+ se constitu, primariamente en un adjeti&o+ , ms recientemente en un &erbo >to (ueer?. %a &ersin anglfona de 6lo (ueer7+ ser)a ms propiamente el reciente t*rmino 6(ueerness7+ (ue denotar)a algo as) como 6el carcter de (ueer7 LO
%os efectos gramaticales (ue le ocurrir)an a un adjeti&o al ser antecedido por el art)culo 6lo7 son+ en primer lugar+ su sustanti&acin , en segundo+ la neutrali'acin o indeterminacin d e su g*nero , cantidad. %a indeterminacin gramatical de 6lo (ueer7 en castellano+ determina la imposibilidad de referirse a un particular espec)fico. Podemos preguntar 63u* es lo (ueer7+ pero no ul es lo (ueer+ por(ue las reglas del lenguaje nos lo impiden. %o (ue me interesa sealar es (ue esa &aguedad gramatical del sintagma 6lo (ueer7 funciona como metfora lingQ)stica de la indeterminacin , co nfusin anal)tica (ue sub,ace en los tetos , publicaciones (ue se han abocado a 6p ensar lo (ueer en m*rica %atina7. s frecuente a la hora de e&aluar peligros o pronosticar posibilidades futuras+ (ue bajo el concepto ambiguo de 6lo (ueer7+ se etrapolen o superpongan meros problemas LD de traduccin literal de una palabra+ a conflictos en la produccin de saberes Horte/#ur+ o a la delimitacin de prcticas pol)ticas locales. n un ensa,o particularmente elocuente+ Jrad pps+ acad*mico de la !ni&ersidad de 4ar&ard+ critica la circulacin del t*rmino (ueer en contetos de habla hispana debido a (ue su 6peso7 lingQ)stico slo es &erificable en el marco anglfono donde la palabra tu&o una historia: la significacin injuriosa , homofbica (ue luego fue reapropiada , sub&ertida como modo de afirmacin pol)ticaLE. %a renuencia a enunciar la palabra (ueer en habla hispana+ por la p*rdida de esa fuer'a pol)tica I(ue es e&identemente contetual-+ se etiende ms adelante en su teto a la enunciacin del concepto teor)a ( ueer argumentando (ue 6en casi todo eamen de teor)a (ueer se debe incluir una definicin de la palabra (ueer7. n este punto+ lo (ue parece ser p roblemtico para pps consiste ahora en el hecho (ue determinadas producciones locali'adas en %atinoam*rica o spaa+ relati&as a posiciones cr)ticas de la seualidad+ se nombren a s) mismas como teor)a (ueer+ debido a (ue ese t)tulo no slo no se entiende+ sino (ue adems enturbia su po sicin de pensamiento cr)tico+ contenido en el gesto radical del nombre. Pero ms adelante confiesa (ue su objeti&o es adems el de contrarrestar posiciones como las de Michael Rarner+ defensor Iseg;n *lI de la 6globali'acin de la teor)a (ueer7. pps ahora reconoce considerar 6dainaS la aplicacin de la teor)a (ueerS a cual(uier sociedad (ue no sea ma,oritariamente anglfona7. n este punto opera un cambio de enfo(ue: no es lo mismo el problema nominal consistente en (ue ciertas pro ducciones locales se ubi(uen bajo el t)tulo de 6teor)a (ueer7+ (ue el conflicto (ue significa 6la aplicacin de la teor)a (ueer a cual(uier sociedad (ue no sea ma,oritariamente anglfona7. l primer problema denuncia un mero snobismo acad*mico+ (ue podr)a solucionarse con el uso de otros nombres. l segundo problema en cambio+ no tiene relacin con el t)tulo 6teor)a (ueer7+ sino con la (ueer theor, transformada en teor)a (ueer+ es decir+ una sospecha acerca de la circulacin de ciertas producciones de saber+ determinados tetos , paradigmas interpretati&os producidos en !! , eportados a ni&el global. l asunto se compleji'a a;n ms en su argumentacin+ cuando termina afirmando generalistamente (ue los usos de 6lo (ueer7 Itodos ellosI son problemticos en cual(uier sociedad de habla hispana. las tres posibilidades anteriormente descritas+ se suma ahora bajo
la ambigQedad de 6lo (ueer7+ las connotaciones pol)ticas del t*rmino+ espec)ficamente las (ue se refieren a prcticas organi'adas enmarcadas en la agenda de ciertos colecti&os , grupos >en cruce tambi*n con el arte?. n prim er lugar+ nue&amente la cuestin nominal: (ue ciertos grupos ocupen el t*rmino como modo de autodenominacin pol)tica 6,o so, (ueer7+ con&encidos con&encidos de la supuesta radicalidad de ese gesto. 8 al mismo tiempo+ la pol)tica (ueer como una serie de prcticas presentadas como modelos de sub&ersin a la heteronormati&idad >talleres drag Ning+ prcticas postporno+ s/m+ etc.?. Para contrarrestar este panorama+ me gustar)a aclarar , delimitar la eistencia entonces de+ al menos+ tres aspectos diferenciales de 6lo (ueer en m*rica %atina7. n primer lugar+ 6lo (ueer7 refiere a la importacin f on*tica de un t*rmino+ (ue+ en su literalidad enunciati&a+ surge en contetos angloparlantes. l acto de enunciacin del t*rm ino (ueer en espacios lingQ)sticos de habla hispana implica una descontetuali'acin+ (ue es la base de una serie de problemas de traduccin+ no slo por la falta de un t*rmino e(ui&alente al castellano I, en rigor por todo ejercicio de traduccin-+ sino sobretodo por la p*rdida del 6conteto performati&o7+ la historia pol)tica del t*rmino+ (ue es propia de la palabra anglosajona (ueer. n segundo lugar+ 6lo (ueer7 como sinnimo de teor)a (ueer (ueer++ refiere al significante de un corpus cr)tico o terico+ o al menos de una bibliograf)a+ no totalmente articulado , siempre abierto a nue&as formas de desarrollo+ (ue ha &enido a plantear Ien t*rminos generales- una cr)tica a la estabili'acin de las identidades esencialistas , naturali'adas del seo+ el g*nero , el deseo+ junto con una lectura del poder en cla&e de 6matri' heteroseual7 o 6sistema heteronormati&o7. heteronormati&o7. stas teor)as se pueden reconocer a &eces como (ueer (ueer++ o como posfeministas+ posg*nero+ posidentitarias+ de "isidencia #eual+ etc. n tercer lugar+ 6lo (ueer7 refiere a una posicin de resistencia , locali'acin estrat*gica frente a procesos de normali'acin de lo ga, , lo l*sbico tanto en las lgicas del sistema neoliberal >mercado ga,?+ como en la institucionali'acin de un discurso estatal multiculturalista (ue promue&e pol)ticas antidiscriminatorias , de tolerancia+ sin cuestionar sus bases epistemolgicas heteroseistas. #e trata de 6lo (ueer7 entonces+ como una resistencia pol)tica frente a las lgicas de lo (ue denomino 6homoseualidad de stado7.
,# &iga “queer” con la lengua afuera
n su art)culo introductorio al libro 5eor)a 3ueer: pol)ticas bolleras+ maricas+ trans+ mesti'as+ "a&id rdoba eplica (ue la decisin de utili'ar el t*rmino (ueer en el t)tulo+ est basado en dos ra'ones principales: en primer lugar por(ue es un t*rmino (ue ,a ha sido de alg;n modo recepcionado , aceptado en el conteto de ciertos espacios acad*micos , acti&istas espaoles ,+ en segundo lugar+ por(ue usarlo implica un g esto de 6etranjer)a7 (ue solidari'a con las comunidades anglosajonas+ donde esas pol)ticas se han desarrollado con ma,or fuer'a+ 6, a la
&e' nos sit;a en una posicin de etraamiento+ de una cierta eterioridad respecto de nuestra cultura nacional+ en la cual somos/estamos eiliados7 LT LT.. %as argumentaciones (ue se epresan a fa&or del uso de la palabra (ueer en la produccin pro duccin terica espaola o latinoamericana+ celebran la generalidad no identitaria del t*rm ino: su reconocida capacidad de representar una serie de identidades ab,ectas (ue eceden las categor)as de lo ga, , lo l*sbico. fecti&amente (ueer no slo es un insulto homofbico+ sino adems un t*rmino (ue logra sealar todo lo (ue no se ajusta con los parmetros normati&os >cual(uiera (ue estos sean?. #in embargo+ en esa descripcin de las potencialidades semnticas de (ueer+ se ha elaborado una retrica (ue nos muestra a la p alabra inglesa como si fuera mejor (ue cual(uiera de las (ue habla hispana posee. 3ueer 3ueer++ desde este punto de &ista+ & ista+ se presenta como una 6super-word7. %a palabra (ueer entendida como una 6superword7 funciona hegemnicamente ubicndose primero en superioridad lingQ)stica con relacin a cual(uier t*rmino hispnico+ pues significa ms cosas , de mejor manera= es una 6democratic word7+ puesto (ue todas las subjeti&idades ab,ectas pueden estar contenidas en ella. n segundo lugar opera a tra&*s de una especie de 6hegemon)a de la inteligibilidad (ueer7+ ( ueer7+ (ue la con&ierte en modelo referencial de todos los t*rminos (ue se usan para significarla en castellano. Por ejemplo+ desde su aparicin en el marco de los debates acad*micos latinoamericanos+ cual(uier acto de utili'acin afirmati&a de un t*rmino injurioso+ ser interpretado inmediata e irremediablemente como un intento de traduccin o reapropiacin de 6lo (ueer en contetos latinoamericanos7. 63ueer es un insulto. #us e(ui&alentes en espaol espaol ms comunes son marica+ bollera+ tortillera7. s)+ palabras como 6marica7 o 6tortillera7+ de ahora en adelante siempre sern una mera traduccin de 6(ueer7+ t*rminos referidos a o enmascarados en su mbito de significacin. n un sentido similar+ en la entre&ista reali'ada al escritor Uuan Pablo #utherland en abril de este ao+ Vimena 5orres auti&o pregunta: 6Por (u* utili'as el t*rmino anglo (ueer para tus anlisis !sarlo en ingl*s (uiere decir algo ms (ue marica Kesp: l decirlo+ esa persona se normali'a pues marca de facto una diferencia , ubica al otro en la anormalidad. %o (ueer (uiere desmontar ese ejercicio de fijacin , a modo de pro&ocacin asume un marica en primera persona. s decir: so, marica antes (ue el otro me lo diga+ , frente a la estabilidad normati&a del ga, es una pro&ocacin , no espera la aceptacin de los otros7 L9 L9 %a respuesta de #utherland es curiosa: se limita a eplicar el modo en (ue opera la performati&idad al ubicar al destinatario del insulto homofbico en el lugar de lo ab,ecto+ eludiendo el problema de la traduccin contenido en el sentido de la p regunta. n la respuesta de #utherland+ (ueer , marica son t*rminos absolutamente e(ui&alentes+ a tal punto (ue pueden ser intercambiados sin producir alteraciones en su intencin d e significado. %o (ue este tipo de posiciones pasan por alto al asumir esta 6hegemon)a de la inteligibilidad (ueer7 es su complicidad con una interpretacin acad*mica (ue en su consagracin terica del
gesto performati&o contenido en el uso pol)tico de la palabra (ueer (ueer++ cre la ilusin de (ue las formas de apropiacin afirmati&a de la injuria homofbica fueron in&entadas en Horteam*rica , luego eportadas al resto del mundo (ue las asumi de manera entusiasta. %o cierto es (ue el uso afirmati&o , pardico de la injuria homofbica ha sido parte de las prcticas homoseuales , lesbianas Ial menos de Accidente o en los lugares donde opera el insulto homofbico- mucho antes (ue la teor)a (ueer otorgara densidad interpretati&a a la producti&idad preformati&a de ese gesto+ como formas Isi se (uiere- m;ltiples+ de las llamadas 6estrategias del d*bil7.
L1 Fausto-#terling L1 Fausto-#terling considera (ue eisten hasta un total de cinco seos: hombre= mujer= herms >nacidas/os con un o&ario , un test)culo?= m erms >nacidos con test)culos pero tambi*n con indicios de genitales femeninos?= , ferms >nacidos con o&arios pero con algunos aspectos de la genitalidad masculina?. n http://www.forumlibertas.com/frontend/forumlibertas/noticia. phpidWnoticiaX129TYidWseccionXT
L2 %5 L2 %5 es la sigla del ncuentro %*sbico de 5o 5odas das %as rtes. %a acti&idad fue organi'ada por la re&ista on line l*sbica 6Kompiendoelsilencio.cl7. n sus &ersiones 2 , >200G , 200O+ respecti&amente?+ cont con la co-organi'acin de la !"#.
L %a L %a escritura de la palabra 6(ueer7 como 6cuir7+ hace alusin en %atinoam*rica al modo en (ue suena ese t*rmino+ a su presencia fon*tica en nuestras hablas castellanas. l mismo tiempo+ esa forma de escritura+ se ha planteado como un modo de cr)tica , resistencia a la importacin de t*rminos sin considerar sus contetos , tra,ectorias pol)ticas. Cer %pe'+ Miguel , "a&is+ Fernando: 6Micropol)ticas uir: 5ransmariconi'ando 5ransmariconi'ando el #ur7 presentacin editorial del HZ 99 de Ke&ista Kamona de artes &isuales en rgentina. Pg. T , 9. abril 2010. se n;mero cuenta con un completo dossier sobre prcticas est*ticas , disidencia seual en el mapa actual sudamericano.
LG #utherland+ Uuan Pablo. Hacin Marica: prcticas culturales , cr)tica acti&ista+ #antiago+ Kipio+ 2009+ pg. 1-1.
LO #eg;n Uusto Fernnde' %pe' 6%as peculiares caracter)sticas de la forma in&ariable lo han producido numerosas pol*micas acerca d e su estado gramatical >art)culo o pronombre?+ as) como sobre cul es su rasgo definitorio frente a las formas el+ la+ los+ las >el carcter neutro o el no contable? o sobre cuntas clases de lo eisten7
LD Ali&er-Kotger+ Mar)a ntonia. 6Hota de la traductora7 en #eualidades transgresoras: una antolog)a de estudios (ueer. Kafael M*rida Uim*ne' editor+ Jarcelona+ @caria+ 2002+ pg. 2E. rt)culo electrnico disponible en: http://culturitalia.uibN.ac.at/hispanotecagram[[1ticas/ Bram[[1tica[20espa[[J1ola/%o[20art[["culo[20neutro.htm
LE pps+ Jrad. 6Ketos+ riesgos+ pautas , promesas de la teor)a (ueer7+ Ke&ista @beroamericana+ nZ 22O+ &ol. EG+ !ni&ersit, of Pittsburgh+ Pittsburg+ 200T+ pg. T9E-920
LT rdoba+ "a&id+ 200O+ 65eor)a 3ueer: Kefleiones sobre seo+ seualidad e identidad. 4acia una politi'acin de la seualidad7 en "a&id rdoba+ Ua&ier #e' , Paco Cidarte editores+ 5eor)a 3ueer: pol)ticas bolleras+ maricas+ trans+ mesti'as. Madrid d. gal*s+ 200O+ pg. 21
L9 5orres auti&o+ Vimena+ 2010+ 6scritor Uuan Pablo #utherland replica al cardenal Jertone7 >ntre&ista?. "isponible en: http://www.u(bareditores.cl/files/racismo[205erra.pdf . Cisitado el O de Uunio de 2010.DD "iga 6(ueer7 con la lengua afuera: #obre las confusiones del debate latinoamericano
El feminismo no tiene, y no busca, un status. Diálogo CUDS con filósofa feminista Alejandra Castillo cudsds / abril 28, 2014
Compartimos esta entrevista realizada a la flósoa eminista Alejandra Castillo por parte de los activista CU! Cristian Cabello " #or$e %az& 'ste di(lo$o )e realizado l)e$o de la p)blicación del libro de Alejandra Nudos feministas: Política, Filosofía, Democracia ( *alinodia, 2011+ Arte eminista, pol%ticas de los est)dios de $nero, el stat)s del eminismo c-ileno son los tópicos tratados en este di(lo$o cr%tico& CUDS: A$radecemos m)c-o .)e nos concedas esta entrevista .)e tiene como motor
inda$ar an m(s en al$)nas de las reeiones "a incl)idas en t) reciente libro Nudos feministas: Política, Filosofía, Democracia p)blicado por *alinodia este ao 2011& 3a p)blicación de t) teto establece para nosotroscomo activistas de la disidencia se)al )n $esto pert)rbador por c)anto nos implica a ciertas pr(cticas " disc)rsos del eminismo, revisando )na -istoria 5incompleta, inconea " no lineal claro est(+ pero por otro lado nos -ace d)dar de cierta pertenencia a )na matriz se$)ra& As%, le"endo t) teto podr%amos decir .)e el eminismo prom)eve, por )n lado, )n alto tr(fco de activismos " teor%as para intervenir en las dicotom%as de la pol%tica moderna 5m)jer/madre, adentro/a)era, tecnolo$%a/nat)raleza, activismo/teor%a, -)mano/no -)mano, entre otras+6 pero, por otro lado, establece l%mites de desacoplamiento de toda f$)ra .)e se aleje del 7ser m)jer para poder avanzar& A-% nos $)star%a in$resar& 'n el an(lisis de los marcos, en la di)sa l%nea divisoria .)e marca como l%mite provisorio )na rontera& 9 con ello siempre )na ecl)sión& As%, si$)iendo la lect)ra de los l%mites, en t) ltimo ensa"o del libro denominado 7'l eminismo no es )n -)manismo se bordea la idea de lo 7inapropiable " lo 7impol%tico del eminismo :Cómo comprender a ciertas f$)ras de lo 7impol%tico como lo queer , lo cyborg, lo monstruoso en la delimitación de eso .)e llamamos 7eminismo, si estas f$)ras -ablan m(s desde los l%mites de la pol%tica m(s .)e de la pol%tica misma;
Alejandra Castillo:
modo, no -a" pol%tica sin l%mite& #)lia >risteva en Poderes de la perversión lo sealaba m)" bien bajo la si$)iente consi$na? 73o ab"ecto " la ab"ección son a.)% mis barreras& 'sbozos de c)lt)ra& 'l espacio de lo 7encomn se constit)"e precisamente, a-%, en ese l%mite donde se abre " cierra )n c)erpo& 'n otras palabras, siempre estamos en )na or$anización pol%tico esttica .)e $enera )n 7adentro del c)erpo bajo la ló$ica del reconocimiento " 7)n a)era .)e b)sca interr)mpir dic-o espacio de visibilidad " reconocimiento& @abr%a .)e aclarar, " en esto si$o a #ac.)es anciBre, .)e el c)erpo de lo pol%tico en tanto )n r$imen pol%tico esttico or$aniza " visibiliza ormas, tiempos, l)$ares " pr(cticas en el espacio de lo comn& *ensemos, por ejemplo, en el 7r$imen pol%tico rep)blicano&'ste r$imen se insta)ra en la letra " por la letra& 's en la reiteración del abecedario il)strado .)e se ir(n trenzando civismo, ed)cación " virt)d& 3a virt)d letrada de los -ombres " el sentimentalismo de las m)jeres, a no olvidar& 'ste modo rep)blicano de la pol%tica propiciar( la clave para la i$)aldad? la demopedia 5democracia peda$o$%a+& Como es sabido, la demopedia, en tanto, r$imen pol%tico esttico se enmarca en )n modo de prod)cción ind)strial6 se presenta como )n modelo de incl)sión $rad)al 5a la manera de la esc)ela+6 se or$aniza en jerar.)%as 5entre .)ienes saben " los .)e no saben+6 se estr)ct)ra bajo las seas de lo nacional estatal 5establece )n arc-ivo+6 el reclamo por incl)sión es enca)zado por los partidos pol%ticos6 " los c)erpos se viven/se entienden cerrados sobre s% mismos " son descritos bajo la met(ora de la dierencia de los seos& Como ven, el rep)blicanismo abre el espacio de lo pol%tico reconf$)rando la 7división de lo sensible, visibilizando a s)jetos .)e antes sólo eran tenidos como 7m)dos -abitantes de )n lejano pa%s del p)eblo& !i$nos de la apert)ra, sin d)da, pero, tambin, si$nos del cierre del c)erpo de lo pol%tico& Cla)s)ra de )n c)erpo .)e sin tardanza -ar( prolierar otros vi$orosos c)erpos en s)s m(r$enes& C)erpos .)e en la orilla, en el l%mite, en el etremo se tornar(n mltiples, desjerar.)izados, m(.)inas clibes, erotómanos& D(r$enes del c)aderno rep)blicano .)e en los socialismos )tópicos, en el anar.)ismo, en dada%smo, en el s)rrealismo " en el eminismo -ar(n prolierar )n a)era inorme, monstr)oso& 'stas mod)laciones " plie$)es entre apert)ra " cla)s)ra, entre lo ormado " lo inorme, entre a)era " adentro ad.)irir(n otro si$no a partir de mediados del si$lo EE& !obre la apert)ra " la cla)s)ra otra6 sobre )n c)erpo, otro c)erpo& Detamorosis del c)erpo de la pol%tica .)e en el sin)oso paso de la letra a la cira, como lo dir%a ele)ze, describir( otro r$imen pol%tico esttico? el democrático liberal 'ste r$imen c)"o c)erpo se entender( abierto, desnat)ralizado, manip)lable se metaorizar( bajo las palabras maestras de la intervención " el pereccionamiento& 'ste escenario se instala con la redefnición de la idea de democracia " la m)tación de la idea de -)manidad& 'stas redefniciones implicar(n, primero, la metamorosis de las democracias participativas/s)stantivas en democracias de procedimientos6 ", se$)ndo, la comprensión del propio c)erpo en tanto s)perfcie completamente ep)esta diseada bajo la directriz de )n códi$o& Apert)ra " cla)s)ra de )n c)erpo de la pol%tica
.)e se enmarca en la declaración de los derec-os -)manos6 se reprod)ce en e)$enesias liberales6 se epande teletecnoló$icamente6 se localiza en la llamada sociedad del conocimiento, del capital -)mano " de la ormación contin)a6 se $obierna bajo los dict(menes de las democracias elitistas6 " s)s c)erpos se a)tocomprenden abiertos, eibles " perectibles& 'ste es el l%mite 5adentro " a)era del c)erpo+ de la pol%tica contempor(nea& 's, a-%, en ese l%mite donde el eminismo -o" debe interr)mpir la ló$ica del reconocimiento instalada por las democracias liberales& 's, a-%, precisamente en ese l%mite donde deben prolierar otros c)erpos&
CUDS: Con respecto al recorrido del movimiento eminista en C-ile l)e$o de dictad)ra,
-ablas de lo .)e consideras )na 7pol%tica remedial del $nero, )na pol%tica .)e fnalmente termina tran.)ilizando cierta rebeld%a " pr(ctica polmica del eminismo& Ferifcas esta prdida de polemicidad eminista a travs de la creación del !'GAD " la instit)cionalización de los est)dios de $nero .)e como dices 7es otra orma de decir 7m)jer& :C)(l es t) dia$nóstico respecto de la prdida de irr)pción pol%tica " social de los est)dios de $nero en la academia; :Cómo )e .)e $nero devino sólo 7m)jer; Alejandra: @abr%a .)e -acer dos precisiones& 3a primera precisión tiene .)e ver con la
instit)cionalización del eminismo con la v)elta a la democracia en los aos noventa& 3a vinc)lación del eminismo " la democracia desde los primeros aos de los $obiernos de la Concertación al i$)al .)e el dios #ano tendr( dos rostros& Uno de a.)ellos rostros p)ede ser descrito con la si$)iente rase? 7)n c)arto propio en el 'stado& 'sta rase, cita de a.)ella otra de Fir$inia Hool, circ)ló bastante en los aos noventa en los $r)pos de m)jeres " con ella se b)scaba llamar la atención sobre la necesidad de in)ir en los $obiernos de la Concertación desde 7dentro, evitando as% el siempre cr%tico 7a)tonomismo eminista& esde esta ló$ica, es posible entender la creación del 7!'GAD " la act)al " desaort)nada campaa 7m(s m)jeres al poder& 'l otro rostro de esta instit)cionalización es la creación de los 7est)dios de $nero en el espacio de las )niversidades pblicas& 'n este sentido, -e a.)% mi se$)nda precisión, "o no dir%a .)e el 7$nero devino sólo m)jer sino .)e s) sello de inicio tiene .)e ver con la instit)cionalización de pr(cticas, saberes " poderes de las 7m)jeres& 'n )n j)e$o meton%mico, las m)jeres siempre son el $nero " el $nero se -ace m)jer 5de a-% .)e las pol%ticas de $nero parezcan r(pidamente evocar a 7pol%ticas para m)jeres+& :*or .) )e as% " no de otro modo; Una posible resp)esta a estas " otras c)estiones coneas, advertir%a .)e el eminismo en C-ile se constit)"e, esencialmente, a partir de )na apor%a de si$no rep)blicano/liberal? an)dar )na pol%tica pro$resista de la i$)aldad con )n disc)rso eminista maternal& 'sto implica ei$ir 7i$)aldad pero desde el -ec-o de ser 7m)jeresmadres& 'n otras palabras, el eminismo c-ileno, en s) traza m(s e!ciente, -ace s)"as las retóricas del c)idado " la dierencia maternal j)nto a las
retóricas de la incl)sión social& 'sta apor%a, " como toda apor%a irresol)ble, $enera 7estos c)artos propios en edifcios "a constr)idos& CUDS: 'n )n reciente teto t)"o 5p)blicado en el libro :I) es lo contempor(neo;
'diciones Jinis
cercan%a& 3a m)jer ei$e ser e-ibida, p)esta 7a)era& 'sto no deja de ser paradójico, si pensamos .)e las 7m)jeres son las $)ardianas de lo privado, m(s cercanas al disim)lo, a la discreción, .)e a la eposición& :Cómo conciliar, entonces, estos dos movimientos )no orientado -acia a)era 5la eposición+ " otro motivado -acia la interioridad en el c)erpo de la m)jer;
de ese interior 7ante los ojos de los dem(s& 'n esta l%nea, la m)jer, nos dice Nea)voir en $l segundo se&o, tiene .)e 7representarse a ella misma& 'n casa, ella est( dedicada a s)s oc)paciones6 lleva ropa encima, pero para recibir invitados, sin embar$o, se PvisteQ& 'ste 7vestirse tiene )n doble car(cter? est( destinado a maniestar la di$nidad social de la m)jer 5s) nivel de vida, s) ort)na, el medio al .)e pertenece+6 pero, al mismo tiempo manifesta el narcisismo emenino? es a la vez )n uniforme y un adorno& :Cómo escapar de esta interpelación objet)al/espec)lar de la mirada masc)lina sobre el c)erpo de las m)jeres; Una posible resp)esta es descreer de estas 7tecnolo$%as del "o .)e nos -ablan de 7)n objeto .)e se reconoce en otros objetos " soar con )n 7para%so de las m)jeres donde -abitan sin manc-a& =tra resp)esta es a.)ella elaborada por al$)nas artistas vis)ales .)ienes trabajan deconstr)ctivamente la relación m)jer/cosifcación& Una de las -erramientas en este trabajo vis)al es la eposición del c)erpo/objeto tal c)al ste -a sido narrado por la escrit)ra/mirada masc)lina& 9a en los aos sesenta, -a" varias artistas vis)ales .)e no sólo den)ncian la eposición " cosifcación del c)erpo emenino, sino .)e adem(s lo 7e-iben volviendo ambi$)as las relaciones entre s)jeto " objeto, entre lo dominante " lo dominado, entre lo activo " lo pasivo, entre lo masc)lino " lo emenino& As% lo -ace, por ejemplo, 9a"oi >)sama en s) perormance 'usamas Peep )*o+ or $ndless ove )*o+ 51KRR+ donde se e-ibe m)ltiplicada infnitamente en los espejos de )na sala .)e sim)la ser )n cabaret& 'lla tendida en el s)elo, sin recato al$)no, deja .)e s) mirada escape desprevenida )era de la escena, dejando en s) l)$ar, en s) vacio, la mirada de los otros& Mntensifcando este v%nc)lo entre cosifcación " e-ibición encontramos aos m(s tarde la perormance Post-Porn .odernist )*o+ 51KK2+ de Annie !prinSle& 'n sta, !prinSle se mast)rba con )n vibrador -asta lle$ar al or$asmo " l)e$o tras darse )na d)c-a, se introd)ce )n espc)lo en la va$ina e invita al pblico a contemplar el c)ello de s) tero& 'n esta perormance !prinSle eplicita la narración del 7objeto porno$r(fco 5.)e es ella misma+ para l)e$o desestabilizar la mirada vo"erista de los asistentes inst(ndolos a tomar parte de la perormance intercambiando, de este modo, la relación entre s)jeto " objeto& 'n )n $esto similar, 'lSe >r"st)eS en s) perormance )atisfaction 51KKR+ intenta desmitifcar el espacio id%lico de lo privado/amiliar de las m)jeres en lo .)e tiene .)e ver con el 7placer se)al& 'n )n espect(c)lo colectivo celebrado en la 'unst*alle de Fiena, >r"st)eS, con la normalidad de lo cotidiano, se dar( )n bao de tina para l)e$o mast)rbase con )n vibrador mientras es observada (vidamente por m(s de )na docena de espectadores& >r"st)eS, en )n $esto doble, primero 7desacraliza el c)erpo emenino volvindolo al terreno de las cosas com)nes, de las cosas visibles6 " se$)ndo, b)sca intervenir la mirada obscena .)e constit)"e a ese c)erpo interr)mpiendo el relato erótico/vo"erista del 7secreto placer de las m)jeres& G)evamente, a.)%, el c)erpo de la m)jer autoe&puesto, v)elto objeto, v)elto objeto porno$r(fco, pero a s) vez ras$ando el tamiz de la mirada .)e la constit)"e en ese objeto& CUDS: especto a la pre$)nta sobre los est)dios de $nero& !in embar$o, 7$nero a
dierencia de 7eminismo aparece act)almente como )n concepto con ma"or estat)s
5acadmico, pol%tico " c)lt)ral+& e -ec-o t -as dic-o .)e entre 7eminismo " 7$nero la l%nea divisora es pol%tica& Alejandra: 'l nico estatus del .)e $ozan los est)dios de $nero en C-ile es a.)el
.)e otor$a el domicilio 'statal& eten$(monos en a.)ella palabra con la .)e )stedes m)" bien describen el presti$io del $nero? 7estat)s& ecordemos, para empezar, .)e al$)nas palabras asociadas a estatus son, por ejemplo, stat)s .)o, estado, est(tico, estat)to& 'l status se reconoce en la identidad " avanza si$iloso tras los pasos de )na 7moral de estado civil& Una de s)s defniciones nos dice .)e el estatus es )n modo de or$anización basada en )n conj)nto de valores r%$idos, -abit)almente, asociados al nacimiento6 esto es, marcas .)e se nos .)edan en el c)erpo al nacer& :C)(les son a.)ellas marcas; Con cierta insistencia se nos repite .)e esas marcas son las de $nero " raza& esde esta perspectiva, bien podr%amos decir .)e el $nero en tanto estat)s remite al reconocimiento de la dierencia de los seos 5masc)lino " emenino+ " al reconocimiento de las dierencias raciales& 'ste es el status 'stas son las marcas de identidad .)e reconoce el 'stado en los c)erpos& 9 si los est)dios de $nero son )n 7c)arto propio dentro del domicilio del 'stado, entonces me s)r$en dos pre$)ntas? :C)(l es el estat)s de los est)dios de $nero;, :c)(l es el $nero de esos est)dios; !ea c)al sea la resp)esta a ambas pre$)ntas, -abremos de notar )n invariable? la identidad& I)iz(s, ste sea el precio .)e -a" .)e pa$ar por constr)ir 7c)artos propios en el 'stado& 's en este p)nto donde podr%amos trazar la l%nea divisoria entre eminismo " $nero6 esta división es, sin d)da, pol%tica& !i t)viese .)e defnir la pol%tica del eminismo dir%a .)e sta se ancla en )n 7conicto donde lo .)e est( en j)e$o es la l)c-a por el orden de lo visible& Una pol%tica como insta)ración de )n )niversal polmico .)e an)da la representación de la i$)aldad con el conicto de las clases sociales& 'n este, sentido, la pol%tica del eminismo b)sca alterar los modos en .)e los c)erpos son representados en el espacio de lo comn& 'sta 7alteración no va de la mano de )na pol%tica de la identidad& 'l eminismo no tiene, " no b)sca, )n status& 'sto me rec)erda a al$o escrito por Jo)ca)lt en la /rqueología del saber ? 7no me pre$)nten .)in so", ni me pidan .)e permanezca invariable? es )na moral de estado civil lo .)e ri$e n)estra doc)mentación& CUDS: Folviendo al tema m)jer, arte " porno$ra%a& 3o 7porno$r(fco como sobre
eposición disc)rsiva del c)erpo nomasc)lino parece constit)irse en )n elemento incómodo para toda pol%tica tradicional, m(s an para la pol%tica de corte eminista tradicional& 'l c)erpo de la m)jer se prote$e, se re$)arda, se tolera O-ablamos de esas pol%ticas de la tolerancia .)e 7conservan pol%ticamente los c)erpos " .)e desplazan lo 7conictivo .)e es propio de lo minoritario& *arece .)e esa incomodidad O.)e rescatas acertadamente en t) ltimo libro se olvida, est( perdida& #)stamente pareciera .)e )na alternativa es perderle el miedo " el respeto a los c)erpos, sobreeponerlos en s)s daos " no en s) protección " c)idado& :*odr%amos pensar .)e la f$)ra de la
7perra o las 7p)tas .)e salieron a protestar son f$)raciones de esta sobreeposición porno$r(fca; Alejandra: 'l c)erpo de la m)jer no sólo es oc)ltado sino .)e tambin siempre es
ep)esto& 's en esta doble ló$ica de oc)ltación " eposición donde debemos sit)ar la representación del c)erpo emenino& 3a propia etimolo$%a de la palabra 7porno$ra%a nos -abla de ello? porne nos remite a la palabra 7prostit)ta6 porneia a la palabra 7prostit)ción& 3a porno$ra%a, tra"endo a colación esos timos $rie$os, dice, entonces, de la escrit)ra sobre prostit)tas6 de la escrit)ra de las acciones asociadas a la prostit)ción& 's interesante destacar .)e all% "a podemos ver la conti$Tidad, el lazo .)e )ne lo emenino, el intercambio " la eposición& 9a desde esta lejana, pero posible etimolo$%a, se -abr%a )rdido el dos de la oc)ltación " la eposición de la representación del c)erpo de las m)jeres& 3a porno$ra%a, as%, narrar%a a dos voces la escrit)ra pblica de actos privados& e al$n modo, podr%amos decir .)e a la eposición le es cons)stancial el oc)ltamiento6 a ma"or eposición, ma"or es tambin la oc)ltación del c)erpo emenino& *recisamente, all%, reside el j)e$o de lo obsceno en traer a escena, a la l)z, lo .)e debiera estar oc)lto, en la osc)ridad& 'ntonces, claro tienen razón c)ando sealan .)e el c)erpo de la m)jer se 7prote$e, se res$)arda, se tolera6 pero, no debemos olvidar .)e tambin se 7epone& *ensemos, por ejemplo, en las 7casas de tolerancia, nombre .)e en el e)emismo eplicita a.)ella doble ló$ica de la oc)ltación " eposición .)e venimos conversando& :*or .) esta doble ló$ica .)e anima a la porno$ra%a incomoda a las eministas; 'n primer l)$ar, por.)e sólo es posible dic-a doble ló$ica pres)poniendo )na identidad fja, inm)table, en torno a eso .)e debe 7ser la m)jer6 dic-a identidad ser( entendida, precisamente, en los trminos de la oc)ltación " la eposición& 'n otras palabras, no -a" porno$ra%a sin cosifcación& @a" )n relato en las0istorias de @eródoto m)" epl%cito en este aspecto& 'ste pe.)eo c)ento seala .)e 7Canda)les estaba m)" enamorado de s) propia m)jer, ", locamente derretido, cre%a tener en s) m)jer con m)c-o a la m(s -ermosa de todas& !e -ab%a convencido de ello -asta tal p)nto .)e, teniendo adem(s )n ministro, i$es, -ijo de (scilo, .)e era s) avorito, a .)ien confaba los as)ntos importantes, le encarec%a m)c-%simo la belleza de s) m)jer& *ero estaba disp)esto .)e al cabo de poco a Canda)les las cosas le )eran mal, p)es dijo a i$es lo .)e si$)e? 7i$es, me parece .)e no me das crdito c)ando te -ablo de la belleza de mi m)jer, "a .)e los o%dos res)ltan ser para los -ombres m(s incrd)los .)e los ojos& < -as de modo .)e p)edas contemplarla desn)da& 3o .)e les dec%a, el secreto .)e constit)"e a la m)jer 7debe ser ep)esto6 de al$n modo, sólo eiste en la eposición de ese 7objeto .)e es ella misma& N)eno, volvamos a las incomodidades con la porno$ra%a& 'n se$)ndo l)$ar, la porno$ra%a incomoda a las eministas debido a esa )ndada sospec-a .)e dice .)e la violencia %sica .)e s)ren a diario las m)jeres est( asociada a ese ima$inario 7emenino cosifcado .)e la porno$ra%a porta& 'n este sentido, Cat-erine DacSinnon seala .)e la porno$ra%a metamorosea la violencia en 7seo& 'n este p)nto indica 7s)s $ritos se transorman en $ritos de placer6 la violación se transorma en satisacción6 la resistencia se transorma en afrmación& 3a violación es seo 5 1n )e&
and 2iolence+& Ante este escenario la pre$)nta .)e ronda es :c)(l es la mejor estrate$ia para alterar el rreo v%nc)lo .)e -a defnido a las m)jeres bajo los j)e$os de len$)aje de la cosifcación; Al menos dos resp)estas son posibles& Una de esas resp)estas se dice en las retóricas del derec-o " b)sca remediar a.)el 7dao desde el espacio de las le"es& =tra resp)esta, m(s bien centra s)s es)erzos en alterar el propio ima$inario .)e -a constit)ido a las m)jeres en s)jetos s)balternos? esto es, todo a.)el )niverso descrito bajo las seas de lo 7emenino& 'ste es el camino tomado por la artista vis)al $)atemalteca Dar%a #os alindo .)ien en s) perormance Perra 5200V+ eplicitar( la doble ló$ica de oc)ltamiento " eposición de la mirada porno$r(fca en el c)erpo de las m)jeres escribiendo con )n c)c-illo la palabra 7perra en s) m)slo& 'ste mismo $esto .)e b)sca desestabilizar el ima$inario de lo 7emenino tambin lo p)dimos ver en las protestas de m)jeres .)e marc-aban bajo las pancartas? 7todas somos p)tas& CUDS: !i bien el 7arte eminista desc)adra ciertos modelos de la representación de la
m)jer tanto en el espacio %ntimo, lo pblico " en la pol%tica misma, sobreponindose desobedientemente a )n si$no masc)lino, pareciera .)e sólo cierta 7eperimentalidad o 7peda$o$%a eminista realizada por m)jeres dar%a cierta posibilidad de -ablar de 7arte eminista& e -ec-o, Dart-a osler -abla .)e )na 7eminista .)e trabaje en el campo del 7arte no necesariamente -ace )n 7arte eminista& !e$n t) perspectiva, :I) -ace a al$)na obra denominarla 7arte eminista; Alejandra: Go esto" m)" se$)ra de comprender a .) se referen con 7peda$o$%a
eminista& *ara mi es simplemente )na contradicción en los trminos& 3a peda$o$%a es la orma de or$anizar )n m)ndo si$)iendo )na estr)ct)ra jer(r.)ica " piramidal entre los .)e saben " los .)e saben& 3a relación establecida entre los maestros 5los .)e saben+ " los disc%p)los 5los .)e no saben+ es de s)bordinación de los se$)ndos a los primeros&
partes " de los l)$ares, como lo seala anciBre, se )nda sobre )na división de los espacios, de los tiempos " de las oc)paciones .)e determinan la propia manera en .)e lo comn es entendido " visto& 3a pol%tica eminista en el arte b)scar%a alterar precisamente esa división de las partes, los l)$ares " las )nciones& CUDS: =tra vez volvamos al 7decirse eminista, la incomodidad de esta adscripción
pol%tica en el espacio pblico& !)cede .)e decirse eminista pblicamente siempre trae a ldicas con)siones? deender sólo a las m)jeres :Cómo prod)ces )na dierencia para prod)cir )n eminismo de lo mltiple; Alejandra: 'l eminismo es siempre )na pol%tica de " por la en)nciación& 'stablecer
)na pr(ctica espec%fca del eminismo implica siempre reconocer el conj)nto de disc)rsos .)e constit)"en a.)ella pr(ctica en )n conteto determinado& 3es do" el si$)iente ejemplo& 'n el conteto del $obierno de Dic-elle Nac-elet se presentó la eposiciónDel otro lado /rte contemporáneo de mu%eres en 4*ile 5200R+& 3a encar$ada de -acer la presentación del cat(lo$o de la eposición )e la .)e a la sazón era la ministra de c)lt)ra *a)lina Urr)tia& 'n esta presentación indicar( lo si$)iente? 7's claro .)e -o" vivimos )n Ptiempo de m)jeresQ en donde la rontera entre lo masc)lino " lo emenino -a tendido a dil)irse& 3a m)estra Del otro lado /rte contemporáneo de mu%eres en 4*ile, viene no sólo a ratifcar a.)ello sino a poner de manifesto la sin$)laridad, al mismo tiempo .)e la diversidad, de la mirada emenina en el campo de las artes vis)ales& 'vocando )na voz del eminismo c-ileno, Urr)tia nominar( al $obierno de Nac-elet como )n 7tiempo de m)jeres& 9, sin d)da, en )n sentido lo era& Una m)jer en la presidencia, m(s ministerios diri$idos por m)jeres " )n primer intento de establecer la paridad como norma de representación pol%tica& *ero en otro sentido, defnitivamente no lo era& #)lieta >irSWood a)tora de esa rase de 7tiempos de m)jeres, no se refere con ese sinta$ma sólo al -ec-o de 7m(s m)jeres& A propósito de la celebración del 'nc)entro eminista latinoamericano en 3ima 51K8X+, >irSWood llamar( 7tiempo de m)jeres a ese deseo de c)estionarlo todo 7rec-azando compromisos viscerales qua m)jeres& Urr)tia .)err( m(s bien destacar, contra los aanes eministas de >irSWood, simplemente la presencia de m)jeres qua m)jeres& 'n esta l%nea de reeión debemos entender a.)ello de la 7sin$)laridad de la mirada emenina en el campo de las artes vis)ales& *ara entender m(s cabalmente la tesis de 7sin$)laridad de la mirada emenina en las artes vis)ales, debemos concentrarnos en la si$)iente ne$ación de Urr)tia? 7la diversidad de obras presentes en n)estra m)estra, .)e incl)"e pint)ra, oto$ra%a, esc)lt)ra, instalaciones " videos, permitir( al pblico valorar la contemporaneidad " diversidad creativa de n)estras artes vis)ales, confrmar Ocontra lo .)e podr%a sospec-arse la a)sencia de )n disc)rso -e$emónico eminista, ", sobre todo, corroborar la relevancia de la presencia emenina en n)estro arte contempor(neo& Nien, :a .) se refere esta ne$ación;, :c)(l es el disc)rso eminista -e$emónico al .)e se debiese temer, .)iz(s, por do$m(tico; Con la ale$r%a inantil de Alicia volviendo del otro lado O" para tran.)ilidad de 4omunidad
.u%er or$anizadora de las mesas redondas de la eposición Urr)tia declarar(, sin embar$o, la a)sencia de dic-o disc)rso 7eminista -e$emónico en las obras seleccionadas para la m)estra&
contempor(neas .)e mencionas, act)almente pareciera .)e basta con .)e )na m)jer se pon$a bi$ote, se vista de -ombre o .)e )se )n dildo para c)estionar las estr)ct)ras del $nero& 'stas observaciones recientes las -emos esc)c-ado desde variados disc)rsos tradicionales del eminismo, sin embar$o, es cierto .)e )na lect)ra r(pida de N)tler " la militarización de *reciado prod)cen )na serie de 7pr(cticas de resistencia donde la pol%tica se)al deviene en mera tcnica, donde la trans$resión se v)elve espectac)larización& !abemos .)e .)iz(s no es )n tema .)e se te impli.)e, pero al menos :C)(l es t) sospec-a respecto de estas pr(cticas 7.)eer; Alejandra: Go -a" pr(cticas sin disc)rsos, no -a" c)erpos sin tcnica& Mncl)so a.)ellas
pr(cticas asociadas a los j)e$os de len$)aje de la 7identidad, de la 7interioridad " de
la 7intimidad ponen en acto )n conj)nto de tecnolo$%as del 7"o delimitadas por )n 7arc-ivo& Jo)ca)lt es m)" preciso en este p)nto? 7el arc-ivo es en primer l)$ar la le" de lo .)e p)ede ser dic-o, el sistema .)e ri$e la aparición de los en)nciados como acontecimientos sin$)lares 5a arqueología del saber +& 'ntonces me parece .)e ponerse bi$ote, vestirse de -ombre o )sar )n dildo no es solamente 7ponerse bi$ote, vestirse de -ombre o )sar )n dildo& !ino m(s bien, dic-as acciones b)scan eplicitar las re$las de en)nciación .)e ri$en el 7arc-ivo del c)erpo marcado por la met(ora de la dierencia de los seos& esde esta perspectiva, por tomar )n caso, c)ando la artista vis)al 3"nda Nen$lis p)blica en la revista /rtforum 51KL4+, )na oto$ra%a s)"a, en )na pose p)blicitariamente erótica, alterando s) c)erpo con )na 7prótesis 5)n dildo+ no es 7mera tcnica6 sino .)e b)sca c)estionar, primero, el sistema de la mirada .)e constit)"e el c)erpo emenino en el arte6 se$)ndo, criticar el modo en .)e el 7c)erpo de los propios artistas est( al servicio de la comercialización de s)s obras6 " por ltimo, eplicitar el orden de visibilidad e incl)sión .)e $enera el )tar )ystem del arte&
importante trabajo de trad)cción " p)blicación en la Colección Arc-ivos Jeministas, donde en $eneral no -a" nada tan anti$)o o de perfl patrimonial, sino escrit)ras eministas arries$adas e incl)so desconocidas en el campo nacional, .)e principalmente desde la floso%a, rompen con los estereotipos sobre lo .)e ser%a el eminismo? )n as)nto para m)jeres o sobre m)jeres& !in d)da, el -ec-o de p)blicar )n
teto eminista "a es $esto pol%tico& :C)(l es t) relación con estas p)blicaciones; :I) si$nifca para ti diri$ir esta colección; Alejandra: N)eno, me $)star%a responder a esta pre$)nta centr(ndome en el nombre
.)e lleva la colección .)e dirijo? 7Arc-ivo Jeminista& #)lieta >irSWood c)ando pensaba en el .)e ser%a s) primer libro $)staba llamarlo 7)n arc-ivador primitivo& De pareció interesante el $esto $enealó$ico contenido en )na pol%tica del nombre? reiterar, traer n)evamente a escena, s) 7arc-ivo donde poder consi$nar/conservar la memoria de la pr(ctica pol%tica de las m)jeres& Un arc-ivo como )na ar.)itect)ra de la memoria en el .)e p)diesen colisionar distintas voces, citas, tiempos " pr(cticas& Un arc*ivo feminista .)e en s) propia en)nciación, en la virt)alidad de s) instalación, comenzara intencionadamente a -oradar cierto orden instit)ido en )n pasado atado a los desi$nios de la le" paterna .)e como sabemos se narra ecl)"endo toda alteración6 en la fjeza de la )nidad identitaria6 " en la certeza de lo nat)ral& Un arc-ivo de citas abiertas en .)e la consi$nación de la -istoria del eminismo ser( paradójicamente -eterocrónica& Arc-ivo, citas " tiempos, colision(ndose entre s%, .)e en )n ejercicio iloc)tivo )tópico da c)erpo a )n )t)ro act)al .)e no eiste pero .)e, sin embar$o, es 7tomado como m(s real .)e lo real 5>irSWood+& .ás real que lo real as% .)iz(s me $)star%a nominar el trabajo editorial de la Colección Arc-ivo Jeminista& .ás real que lo real .)e en la insistencia en la voz 7real, en s) redoblamiento, en s) nasis s)plementario, parece advertirnos de la 7realidad, de cierto r$imen de visibilidad con el .)e se or$anizan ormas, tiempos, " )nciones en el espacio de lo comn " en el espacio de las pol%ticas de las m)jeres& .ás real que lo real tambin como )n nosaber inscrito en n)estro saber, )n real .)e amenaza con irr)mpir/interr)mpir la 7realidad&
Alejandra Castillo: “Para desbaratar la ley del contrato sexual es urgente que se legisle y se apruebe el aborto en Chile” La filósofa Alejandra Castillo es una de las más prolíficas voces del feminismo Chileno, autora de libros como Nudos feministas (Palinodia, 2!!" # $ulieta %ir&'ood Políticas del nombre propio (Palinodia, 2)", te*tos +ue interroan los imainarios del ser mujer # feminista en el conte*to de la historia Chilena Directora de la Colección Archivo Feinista de la editorial Palinodia! colección que se ha encargado de publicar y traducir en Chile a las "s iportantes voces de la teor#a $einista contepor"nea coo %elly &ichard! 'enevi(ve Fraisse! Catherine )alabou y 'ayatri *piva+, -n esta entrevista Alejandra conversa con Jorge
Día del Colectivo .niversitario de Disidencia *exual /C.D*0 y con !"stor Se#$l%eda de la revista de $iloso$#a -scrituras Aneconóicas sobre la
contingencia pol#tica en los teas del aborto! las candidaturas presidenciales! la continuidad del arte $einista pos1dictadura y el actual estado de los estudios de g2nero en Chile, !"stor Se#$l%eda &Escrituras Aneconómicas'( )e gustaría comenar #reguntando #or la manera en *ue insiste en tu trabajo el nombre de Julieta +ir-ood. ensando sobre todo en la im#ortancia *ue tiene a la /ora de #ensar una síntesis a#or"tica entre una #olítica de la identidad y una #olítica de la diferencia *ue enmarca la #osibilidad de #ensar una democracia #or %enir, justamente teniendo como condición la deconstrucción de la diferencia se0ual, en tanto 1origen im#ensado del #ensamiento contractual2 *ue determina la moderna di%isión entre es#acio #$blico y #ri%ado. 3En *u" medida los nudos #roblemáticos entre #olíticas afirmati%as y #olíticas negati%as se distancian a*uí del estructural conflicto liberal entre igualdad y libertad, y de las formas de com#ensación re#ublicanas4 A #artir de m$lti#les referencias en tus te0tos en donde com#arece la necesidad de #ensar el feminismo no sólo a #artir de los márgenes o la diseminación, sino en el coraón de la re#resentación #olítica, me #regunto en *u" sentido Julieta +ir-ood y lo *ue #one en juego no se restringe a conce#tos de feminismo y democracia dentro de estructuras soberanas, como /a sido leída dentro del marco canoniante de 5rinor 6ojo, donde se recurre a las #olíticas de la diferencia comoguetización en los márgenes, de lo *ue justamente Julieta +ir-ood estaría a resguardo, y donde la #olítica feminista #asa #or articular un carácter maternalista 1otro2, anclado a la 1diferencia concreta y material del cuer#o mujer2.
3-n qu2 sentido el $einiso escindido entre pol#ticas a$irativas y pol#ticas negativas se distancia del con$licto liberal entre libertad e igualdad y las $oras de copensación republicanas4 -ste problea parece ser lo central de tu pregunta, Abordar2 priero aquello de las pol#ticas a$irativas, Frente a este punto habr#a que se5alar que las pol#ticas $einistas de corte a$irativo tienden a describir su pol#tica en la lógica de los derechos, 36u2 iplica esto4 Principalente el cupliiento de la proesa de la libertad, -n este sentido! podr#a decirse que no
hay en las pol#ticas a$irativas $einistas un distanciaiento con el ideario pol#tico liberal! sino que el reclao de su cupliiento! de hacer e$ectivos sus presupuestos teóricos y pol#ticos para el caso de las ujeres, De igual odo! no hay un distanciaiento con el republicaniso sino la deanda de hacer e$ectivos sus presupuestos en torno a la igualdad, Al exigir igualdad en la libertad! penseos en el aborto por ejeplo! nos daos cuenta de que coo ujeres no podeos decidir libreente sobre nuestros propios cuerpos, -sta decisión es toada por un tercero /el estado! la iglesia! los hobres0, Ahora bien! por diversas ra7ones se puede decir que esta liitación de la libertad no es igual para todas las ujeres, 3-n qu2 sentido4 8as ujeres de sectores acoodados tienen "s $acilidades de reali7arse un aborto seguro en el sistea privado de salud /bajo la descripción cl#nica de “apendicitis”! por ejeplo0! ientras que las ujeres de sectores populares! que constituyen la inensa ayor#a de las ujeres! deben recurrir a pr"cticas abortivas inseguras con altas probabilidades de llegar a centros de urgencias debido a in$ecciones, -l encuentro del cuerpo de la ujer que ha decidido abortar con el sistea p9blico hospitalario tiene coo consecuencia la criinali7ación, 3-s esto justo4 Por supuesto que no! de ah#! que el aborto debe ser una cuestión de “derechos” haciendo e$ectivos los idearios liberales y republicanos en relación a la libertad y la igualdad, abi2n nos podr#aos preguntar si el derecho al aborto es siepre y sólo un asunto de justicia, )i respuesta ser#a no, -s tabi2n urgente elaborar otras $oras de narrar a las ujeres, -s necesario generar pol#ticas que no sólo reivindiquen los derechos sino que tabi2n alteren;trans$oren el signo “ujer” "s all" de la descripción articulada en la triada ujer! cuerpo! reproducción, -s en este sentido que las pol#ticas $einistas llaadas negativas o de la interrupción no deben ser descritas bajo la óptica de los derechos, -stas pol#ticas introducen "s bien un cortocircuito en la representación de lo “$eenino”, Desde esta otra perspectiva! s# habr#a un distanciaiento con los odos en que la teor#a liberal y republicana de la pol#tica ha descrito a las ujeres: descripción que se ha organi7ado principalente bajo las $iguras de la “$ailia sentiental” /ujer1cuidado0< del “contrato sexual” /ujer1prostitución0< y de la adre c#vica /ujer1adre0, 8as pol#ticas $einistas negativas cuestionan los odos en que la teor#a pol#tica tradicional ha descrito a las ujeres! subvierten las $iguras;et"$oras que dicen representarlas! as# coo denuncia coo ilusorios los logros que bajo la $icción de la incorporación se han reali7ado en su nobre,
Jorge Día &CUDS'( A #artir de este #aso del tiem#o desde la dictadura y /aci"ndonos #arte de las demandas estudiantiles en relación al acceso a la educación, nos gustaría #rofundiar en esa di%isión *ue t$ %es entre g"nero y feminismo en la #roducción de saberes y en la academia c/ilena. Una diferencia *ue es #olítica. En una antigua entre%ista, t$ afirmas *ue la relación del feminismo con la academia es siem#re conflicti%a &a diferencia de los estudios de g"nero', #ero aseguras *ue esta relación es táctica. 3Cuál será la reticencia *ue tiene la academia c/ilena a la incor#oración de teoría feminista contem#oránea en sus #rogramas de estudio, una academia *ue en nombre de las #olíticas del g"nero borra los conflictos y las críticas con res#ecto a las e#istemologías del conocimiento *ue el feminismo #retende4 ensemos #or ejem#lo en el Di#lomado en Estudios 7eministas &A6C8S' *ue t$ dirigías rograma *ue a#oyó los circuitos de disidencia se0ual de CUDS', y *ue era uno de los $nicos en C/ile, fue un #royecto *ue tu%o *ue cerrar. 3Cuál es esa di%isión #olítica táctica *ue diferencia a los estudios feministas con los estudios del g"nero4 3Cuál es entonces la táctica *ue t$ crees debiera e0tender el feminismo en la academia4
*in duda la di$erencia entre estudios de g2nero y $einiso es una di$erencia pol#tica, 8os estudios de g2nero "s que proponer una trans$oración de las jerarqu#as o iaginar otros estructuras y odos de producción de conociiento en el espacio universitario! proponen! por el contrario! la siple incorporación =la agregación= de aquellas;os que han estado al argen haciendo de dichos centros un lugar de reivindicación de identidad "s que un lugar de alteración de la anal#tica de la sexualidad que articula la producción de conociiento, Cabe destacar que esa incorporación se reali7a desde la seguridad inunitaria de un “centro” ipidiendo el contagio =la transisión de sus saberes;pr"cticas= al resto de las "reas! disciplinas! etc, As#! el cuerpo de la universidad se antiene salvo;sano, De igual odo! ocurre en las pol#ticas p9blicas, -s ah# donde con ayor claridad veos en qu2 sentido el g2nero se vuelve! por un lado! “pol#tica de identidad” y por otro! re$uer7o de un signo “ujer” tradicionalente descrito, -l $einiso! por el contrario! tal y coo yo lo entiendo! es el nobre de un pol#tica que no de$ine su pr"ctica en una counidad de pertenencia! no pretende ser
generador de instituciones, De ah# que su vinculación con el espacio universitario sea siepre “t"ctica” =una intervención=! un posicionaiento cr#tico que de ning9n odo pretende una incorporación seguritaria sino "s bien la alteración;trans$oración de los saberes organi7ados bajo las consignas de la originalidad! la unidad! la identidad y lo natural, -l $einiso iplica! por ello! un oviiento de cuestionaiento de la anera en que odernaente ha sido descrita la ujer bajo las $iguras que indicaba antes de la $ailia sentiental! el contrato sexual y la adre c#vica, -n consecuencia! podr#a decirse que en las intervenciones $einistas nunca estaos en presencia de un puro acto de agregación a$irativa, Por el contrario! el $einiso instaura una 7ona $ronteri7a! interedia! disyecta! trabajando a la ve7 interpretativaente sobre la pesada herencia y legado del pensaiento occidental y sobre su incesante re1elaboración, -l $einiso! en sua! se ejercita en a$irar negativaente su propia negatividad, J. D.( El día 9: de julio de este a;o &9<=>' se realió la #rimera y e0traordinariamente masi%a marc/a nacional #or el aborto *ue lle%aba #or título el hashtag %iral ?yoabortoel9:. Esta )arc/a @con%ocada #or organiaciones y colecti%os feministas y de disidencia se0ual@e0/ibió una est"tica *ue #romo%ía una forma más desafiante al cómo se aborda el tema del aborto #or el acti%ismo feminista de corte más tradicional, contra#oni"ndose con frases como 1yo <3 aborto” y la misma El derecho a no nacer de CUDS. a marc/a terminó en la irru#ción anár*uica de la Catedral de Santiago *ue desafío los modos ciudadanos de /acer #olítica. Si bien la mayoría de la o#inión #$blica denostó com#letamente el /ec/o, e0istieron %oces *ue llamaron a desdramatiar el acto &Diamela Eltit' #ero tambi"n e0istieron o#iniones como las del 6estaurador Alejandro 6ogai *uien en su columna Sobre la toma de la Catedral: El patrimonio despatrimonializado afirma *ue 1los actos /umanos tienen un carácter #atrimonial #or*ue corres#onden a manifestaciones culturales. B cuando los actos /umanos inter%ienen o interact$an con los monumentos, de alg$n modo le de%uel%en %ida y actualidad. 6eclaman una actualidad, en #os del bien com$n2 3u" #iensas de la relación est"tica entre feminismo y disidencia se0ual #ensando en las formas del cómo se /a abordado la #olítica del aborto en C/ile4
Aqu# hay varios teas! sin duda! todos relevantes: la archa por el aborto del >? de julio! la convocatoria y sus ebleas< la toa de la Catedral! el patrionio! la vida y los onuentos, *in ebargo! hay una ausencia: el cuerpo de las ujeres, )e concentrar2 en dicha ausencia, Cuando hablaos de aborto son dos las proble"ticas que se vuelven evidentes: el cuerpo de las ujeres y la libertad a decidir, 3De qu2 libertad! de qu2 decisión! de cu"l voluntad podeos hablar en un pa#s coo Chile en que el cuerpo de las ujeres parece! una y otra ve7! ser descrito desde un contrato que sólo puede ser un contrato sexual en que el consentiiento! no puede ser otra cosa! que consentir en el soetiiento4, De alg9n odo! bajo la lógica que ipone este contrato sexual sólo se consiente en la desigualdad, &esabios! sin duda! de un derecho arcaico que expropia el cuerpo de las ujeres trans$orando en ruido las palabras libertad! decisión y voluntad, Para ser nuestros cuerpos! para desbaratar la ley del contrato sexual es urgente que se legisle y se apruebe el aborto en Chile, 3Cu"l es el ejor odo4 -n este punto! yo dir#a que todas las $oras de lucha son necesarias, Alterar la pol#tica est2tica que relega a un alto porcentaje de las ujeres en Chile al espacio de la doesticidad y al ebara7o $or7ado reproduciendo una sociedad de clases iplica deterinación! iaginación pol#tica y entusiaso, 8a deterinación! por ejeplo! que tuvieron las ujeres $einistas $rancesas al $irar el ani$iesto de las @@ “Bo abort2” /E0< 8a iaginación pol#tica de &egina os2 'alindo en su per$orance No perdemos nada con nacer />GGG0 en la que es arrojada en una bolsa pl"stica a un caión de la basura y luego es depositada en un vertedero queriendo poner en evidencia la desigualdad social que hace que algunos cuerpos sipleente no iporten: ese el caso de las ujeres, B! sin duda! antener el entusiaso anticlerical exhibido en la archa nacional del >? de julio, J. D.( El arte debería /acerse cargo de los #roblemas de su tiem#o, dice la directora y teórica del teatro c/ileno atricia Art"s. A su %e t$ /as dic/o *ue el binarismo masculinofemenino es, #odríamos decir, lo constituyente de la escena del arte. Si analiamos el nudo entre situación y binarismo esto nos lle%a a #ensar en el arte feminista como e0#resión de un tiem#o. )e gustaría #reguntarte cómo %es el trabajo de artistas contem#oráneas c/ilenas y su %inculación con el feminismo luego de la concertación democrática, cómo se #ueden leer esas #rácticas luego de la democracia de los acuerdos.
8as pr"cticas art#sticas $einistas buscan cuestionar el signo de lo $eenino a trav2s de la transgresión! la denegación o la incorporación paródica, Hr "s all" del l#ite anteni2ndose en el l#ite! intentar sobrepasar el cuerpo en la insistencia de un cuerpo, Hnsistencia de su aterialidad coo en la per$orance -in Piel de ulia Antivilo en la que se va despojando de l"inas adheridas a su cuerpo con la inscripción “solo el aor libre nos har" libres”, 'esto paródico que reitera una vo7 venida de otro tiepo aunque con siilar violencia: “el trabajo nos hace libre”, -jercicio de iteración que precisaente en su reiteración posibilita un despla7aiento que nos hace ver! sin adornos! la violencia que se ejerce diariaente sobre el cuerpo de las ujeres bajo las retóricas del aor ro"ntico, 'esto! a su ve7! de desprendiiento de aquello que cubre a las ujeres coo si $uese su propia piel: el “aor”, -n este sentido! el arte $einista se desdobla entre lo que perturba y su alteración, Pol#tica del arte $einista que se instituye en un l#ite abyecto que hace visible la duplicidad de la aena7a y el recha7o, Foras! entonces! del arte $einista que buscan poner de ani$iesto lo real trau"tico coo en aquella otra per$orance de -li7abeth %eira! titulada .esalojo .niendo lo $r"gil y lo precario , -li7abeth %eiradespla7a el espacio $#sico del acto privado y cotidiano de dorir, -ste despla7aiento hace expl#cito dos teores: el iedo a la exposición del cuerpo de las ujeres en lugares y horarios no “apropiados”< y el iedo a ser desalojados y tener que vivir en la calle, -l prier teor! sin duda! norali7a y disciplina los cuerpos e instituye una distribución espec#$ica de lugares y horarios apropiados para uno y otro sexo, -l segundo teor explicita la estructura de clase de una sociedad coo la nuestra! en la que a pesar de los prósperos #ndices de creciiento acroeconóico =diariaente reportados por los edios de counicación! estos no logran traducirse en garant#as de derechos y protección social, -n este sentido! las pr"cticas art#sticas $einistas se desplegar"n siguiendo la lógica de la e*timit/ ! de lo otro "s #ntio =lo que parece venir de un adentro exorbitante /el iedo! la $ragilidad! la precariedad0, 8a esceni$icación de esta lógica de la extra5e7a de s# toar" las $iguras de la alteridad! de lo cadav2rico! de lo $eenino;aterno, -xcepcional en este gesto es el trabajo $otogr"$ico de Iaida 'on7"le7 os! penseos! por ejeplo! en su exposición 0ecu/rdame al morir con mi 1ltimo latido , Jay algo que incooda en las i"genes de Iaida 'on7"le7 y no es la teatrali7ación +itsch de escenas uy vistas del "lbu $ailiar /estapas de bauti7os! las prieras $otogra$#as de los reci2n nacidos! los padres
con sus ni5os peque5os en bra7os! etc,0< tapoco esa incoodidad se debe a que algunos de los protagonistas de estas i"genes sean principalente $etos con alg9n grado de de$oración, 8o que incooda es la contraposición de registros: la sacrali7ación de la vida a trav2s de la esceni$icación de la uerte< la actividad inerte< el ritual de la aternidad detenida en un latido ausente< un presente congelado en un $uera de tiepo< en $in! la uerte coo parodia de la vida, Je ah# la incoodidad, Kien podr#a ser dicho! y seguios en esto a &anci(re! que las i"genes de 0ecu/rdame al morir con mí 1ltimo latido de Iaida 'on7"le7 son i"genes pensativas en la edida que ponen en tensión varios odos de representación, -sto es! designar#an un estado indeterinado entre lo activo y lo pasivo! entre lo pensado y lo ipensado y entre el arte y el no1arte, Kien podr#aos decir! en este sentido! que el trabajo $otogr"$ico de Iaida 'on7"le7 pone en escena esbo7os de un signo de un no1objeto que o bien nos invade coo un s#ntoa o bien poseeos a trav2s de una noinación siepre $allida de $ascinación sublie /la uerte0, -n esta l#nea de cuestionaientos tabi2n se podr#a encionar la uy interesante obra de 'abriela &ivera, -n oll#'ood Confidential, o el asesinato .e Laci Petersen /Lideo! >GG0! Presentación personal /*erie $otogr"$ica! >GGM0 o 3estiario /serie $otogr"$ica! >G>0 se exponen en contigNidad dos reg#enes visuales que aparenteente! en principio! deber#an presentarse separados: el cuerpo $eenino y la carne, Aparenteente! repito! puesto que en oll#'ood Confidential, o el asesinato .e Laci Petersen 'abriela &ivera explicita ese rev2s del cuerpo que inevitableente soos a pesar de la belle7a y la juventud /vanitas0 y la ca#da que nos constituye /la uerte0, 8a carne tabi2n coo trans$iguración de lo $eenino! esto es lo que veos en la serie $otogr"$ica Presentación personal4 en lugar del autorretrato nos veos en$rentados a un “onstruo” en el sentido de lo iliitado! lo indeterinado, %o olvideos que los onstruos evocan la “desesura”, 8a desesura coo un paso "s all" de lo “per$ecto natural”, -l trabajo visual de 'abriela &ivera cuestiona los habituales descriptores de lo $eenino anudados en torno a las palabras de la naturalidad y la identidad, -n este sentido! cabe insistir! las pr"cticas art#sticas $einistas contepor"neas avan7an un paso "s all" en el cuestionaiento de las et"$oras que han descrito lo $eenino /aternidad! di$erencia! cuidado! atri70, Aquello que est" en juego en el arte contepor"neo es precisaente la utación del signo de lo “$eenino”, Ars dis#ecta! llaar#a a esta utación, Arte que en su quehacer parece instalarse en un
“no lugar”! "s all" de la distinción cuerpo;naturale7a, -n e$ecto! las pr"cticas de artistas coo las nobradas buscan detener en su producción la circulación de sentidos y signi$icados asociados a un cuerpo productivo! re1productivo! volviendo con ello borrosa la l#nea entre producción y producto! entre sujeto y objeto! entre acción y pasividad! entre exterior e interior, -ste otro arte disyecto esceni$ica cuerpos postgen2ricos! e7cla de aparatos y organisos que con insistencia deandan narrarse en $icciones no ed#picas, -s este gesto el que vuelve borrosa la l#nea entre lo asculino y lo $eenino! lo exterior y lo interior! lo p9blico y lo privado, De igual odo! la propia distinción entre arte y vida se h a visto desestabili7ada o interrupida de un odo in2dito por pr"cticas art#sticas coo las de la post1pornogra$#a, -n esta l#nea de cuestionaientos e parece $undaental volver a recordar el docuental 5i se*ualidad es una creación artística, de 8uc#a -ga5a, Al docuentar la escena barcelonesa post1porno! el docuental de 8ucia -ga5a traa en una isa iagen $einiso y pornogra$#a, -sta unión paradójica busca poner en tensión la pretendida plenitud y organicidad del cuerpo $eenino incorporando! para ello! paradójicaente! la injuria que portan las pr"cticas pornogr"$icas, *e retoa la injuria! el insulto para torcerlo! para desviarlo de su uso anterior y orientarlo hacia propósitos pol#ticos urgentes, Desde esta perspectiva! el post1porno inscribe un “entre dos” en donde la vo7 del orden patriarcal y la vo7 de la resistencia $einista se enla7an en una producción diagra"tica que contiene a la ve7 las arcas de la injuria y las arcas de la degradación, -ste enlace paradójico! iaginal! si quieres! esta iago disyecta coien7a as# a evocar y dislocar las di$erencias de un sentido co9n priario! de un orden de representación, -n este sentido! se equivoca pro$undaente Andrea Franulic en su entrevista “Cualquier cosa que diga postporno est" legitiando la pedo$ilia o el tr"$ico de ujeres”, -l post1porno! en lo que coparte con la per$orance! es una odalidad espec#$ica del poder que busca alterar los sentidos y signi$icados asociados a la aterialidad del cuerpo desde un despla7aiento! desde un des$ase in$inito entre signi$icantes, %o hay entonces un signi$icante que pueda ser radicalente representativo! pues todo signi$icante es el sitio de un “desconociiento”, 8o post1porno en tanto iterable incorporar#a siepre una alteración! una $alla! la apertura a la ultiplicidad,
-n $in! las pr"cticas art#sticas de esta Ars dis#ecta instalan en su producción un di$eriiento! un esp2culo! en el cual se proyectan y despla7an! en proxiidad y distancia! producciones de producciones! registros de registros, !. S.( Es interesante constatar, a #artir de la coincidencia entre los < a;os del gol#e y el marco de las elecciones, como la crisis de la democracia em#resarial c/ilena tiende a buscar resol%erse #or #arte de los blo*ues /egemónicos de la mano de dos figuras femeninas, *ue entre otras cosas, tienen como ona de contagio el encarnar la figura del 1adre2 en su condición de militar, junto con re#resentar la e0#resión y consolidación de la democracia cor#orati%a y elitista neoliberal. 7iguras femeninas *ue #or lo demás traducen la inclusión de la mujer en el es#acio de la #olítica re#resentación, a #artir de la inclusión del significante 1e0celencia2, como transición entre un conce#to re#ublicano o liberal de la democracia /acia uno de orden mercantil. Como lees el escenario de dis#utas *ue está en juego entre el carisma maternal de Fac/elet y la 1mano firme de mujer2 de )att/ei4 3u" ocurre a*uí en la relación inmanente entre democracia y diferencia se0ual4
8a relación entre ujer y pol#tica se instaura en un desorden coo lo llaa 'enevieve Fraisse: en el desorden! de lo que podr#a ser llaado! la pol#tica de lo “universal excluyente”, Forulación apor2tica que alude a la ve7 al telos inclusivista que ania al ideario republicano de la pol#tica pero tabi2n a su reverso silente! la exclusión, -s iportante hacer notar! que si bien lo propio del discurso republicano de la pol#tica ha sido la legitiación de un orden universal exclusivo! esto no quiere decir que las ujeres no hayan $orado parte de 2l, Consigneos que esta a$iración debe ser entendida de dos $oras: priero! uno de los concepto claves =y presupuesto= del republicaniso es la igualdad de todos en tanto ciudadanos en el espacio p9blico< sin ebargo! y segundo! la inc lusión que propicia para el caso de las ujeres es di$erenciada! esto es! bajo las retóricas de los sentiientos y del cuidado y en las $iguras de la aante;esposa y de la esposa;adre, Apor#a que ya para la teprana $echa de E se habr" convertido en una proble"tica herencia para las ujeres, -sto lo evidenciar"! por ejeplo! )ary Oollstonecra$t! quien! en el $undaental texto A 6indication of 0ihts of 7oman ajustando cuentas con una de las $uentes de la tradición republicana
oderna /ean acques &ousseau0 indicar" que: “se han esgriido in$inidad de arguentos ingeniosos para explicar y excusar la tiran#a del hobre y deostrar que los dos sexos! en su b9squeda de la virtud! deben tender a $orarse una personalidad totalente di$erente! o "s expl#citaente! a las ujeres no se les concede $uer7a su$iciente para adquirir eso que erece recibir el nobre de virtud /0 a las ujeres se les dice desde su in$ancia! y el ejeplo de su adre lo re$renda! que para conquistar la protección de un hobre no necesitan "s que un cierto conociiento de la debilidad! en otras palabras: astucia y un teperaento dócil! una aparente obediencia y un cuidado eticuloso en adoptar un coportaiento pueril, B ade"s! ser herosas! todo lo de"s sobra! al enos veinte a5os de su vida”, *i la rep9blica necesita de seres virtuosos! 3por qu2 a las ujeres sólo se les concede las virtudes y las artes de las seducción y el enga5o4 /principales aterias de la proped2utica de los sentiientos concedida por &ousseau a las ujeres0 8as ujeres son parte de la rep9blica! qu2 duda cabe! sin ebargo! su presencia es antecedida por los decires del sentiiento! del aor y del cuidado, Pero seaos justas! no olvideos que la pol#tica republicana! tal y coo la concibe &ousseau! intenta reediar una exclusión: la exclusión de las ujeres de lo p9blico, -sta es! sin duda! una puesta al d#a de la pol#tica, *in ebargo! y en contradicción con lo anterior! las ujeres habitaran lo social “sentientalente”, Q coo bien lo se5ala Oollstonecra$t! no sin un dejo de iron#a y pesar: las ujeres acudiendo al sentiiento en lugar de hacerlo a la ra7ón hacen que sus conductas sean “inestables y sus opiniones cabiantes! no tanto debido a un cabio de punto de vista sino a estados de "nio contradictorios /0 R6u2 desgraciado ha de ser ese individuo cuya educación sólo ha intentado in$laar sus pasionesS De tal odo! la participación de las ujeres en pol#tica responde a un a “inclusión apor2tica”, .na pol#tica reedial! una pol#tica del desorden que! sin ebargo! vestida con nuevos ropajes no hace sino reiterar el iso viejo arguento: la inclusión di$erenciada! vinculada a los decires de la “adre”, 8lao aqu# “decires de la adre” a toda construcción pol#tica y social que incluye a la ujer en la es$era p9blica siboli7ando la protección! el cuidado y los sentiientos, -sto es! aquellos eleentos vinculados a la reproducción o a la aternidad,
Deocracia elitista
Por deocracia elitista entendereos una particular $ora de coprender a la deocracia desprovista de uno de los eleentos que la describe: el pueblo, -sta sustracción del pueblo de la pol#tica deocr"tica no est" directaente asociada a $enóenos coo la “apat#a” o “desa$ección” ciudadana de los procesos de participación deocr"tica, De igual odo! tapoco se podr#a describir esta retirada del pueblo de la deocracia coo el resultado de una abigua y subterr"nea pr"ctica pol#tica de resistencia ante los gobiernos instituidos! pr"ctica que oscilar#a entre la rabia! la desobediencia! la descon$ian7a y la resignación, -stos $enóenos! que los an"lisis contepor"neos de la deocracia presentan coo la expresión social de un sentiiento de descon$ian7a generali7ada con las instituciones pol#ticas! si bien revelan el oento ipol#tico que caracteri7a a las deocracias actuales! en 9ltio t2rino expresan 9nicaente los l#ites de una anal#tica de la deocracia que observa en la p2rdida de legitiidad de las instituciones p9blicas la consecuencia necesaria de un orden disciplinario y punitivo caracteri7ado gen2ricaente coo “contra1deocracia” / contra8 d/macratie 0TU, Asiiso! no parece adecuada aquella hipótesis conservadora que! volviendo sobre la “cuestión jud#a”! observa en la deocracia el lugar de la iliitación de la sociedad oderna, -sta iliitación! que se describe inersa en el vocabulario del “proceso”! es en verdad la de la deocracia coo $ora social! en la cual el pueblo se identi$ica con la regla de la iliitación de usos /consuo! per$ección! eugenesia0 y nobres /no ya el pueblo! sino el notodo de la gente! la sociedad! los gobernados0, 8a retórica deocr"tica de las sociedades liberales! seg9n esta re$lexión! terinar#a por articular socialente los signi$icantes de la autono#a! la equidad y los derechos individuales! de odo de producir coo resultado un calce entre deocracia /entendida coo hoogenei7ación social0 y sociedad de consuo /entendida coo el lugar de la iliitación0, -ntre deocracia y consuo! en el entre1dos de deocracia y consuo! el individuo deocr"tico no jugar#a otro rol que el de ser el consuidor indi$erente de todo tipo de derechos y ercanc#asT>U, Por 9ltio! aquella otra variante o interpretación que buscar explicar la sustracción del pueblo de los asuntos p9blicos invocando el alestar de la deocracia! no parece del todo convincente, -ste alestar! cuyo principio es la pasividad! oscila entre la desilusión y el desenga5o, As#! por ejeplo! Carlo 'alli! insistiendo nuevaente en la relación deocracia;consuo! describe este alestar con la
deocracia del siguiente odo: “es coo si nos encontr"raos en un a especie de superercado de los derechos! y nos di2seos cuenta de que no existe la ercader#a /los derechos0! que ha sido sustituida por eslóganes que la publicitan y la proclaan coo ya presente< es "s no sólo $alta la satis$acción de los derechos! sino que es $recuente chocar con di$icultades! abusos! $rustraciones y arginaciones”T@U, Distinto a estas posturas que tienden a describir el problea de la deocracia contepor"nea desde un punto de vista subjetivo /descon$ian7a! individualiso! consuiso! alestar0! pienso que esta retirada del sujeto de la deocracia se debe a la puesta en archa de un concepto de deocracia en tanto lugar interedio de adinistración del capital nacional y de las inversiones internacionales, Coincidios con acques &anci(re que "s que hablar de un r2gien deocr"tico! las deocracias contepor"neas encubren la onipresencia de reg#enes olig"rquicosTU, -n este sentido! &anci(re indica: “tanto hoy coo ayer! lo que organi7a a las sociedades es el juego de las oligarqu#as, B no hay! estrictaente hablando! ning9n gobierno deocr"tico, 8os gobiernos son ejercidos siepre por la inor#a sobre la ayor#a”T?U, &anci(re est" en lo cierto en se5alar que la ley del n9ero no es lo que hace $uncionar al engranaje de un gobierno deocr"tico! esta tarea se con$#a en las sociedades odernas a un peque5o grupo, *in duda! siepre el “poder del pueblo” es heterotópico a la sociedad desigualitaria! es decir! nunca hay calce entre deocracia y representación, De hecho! en el ra7onaiento desarrollado por &anci(re en La haine de la democratie! la representación es de pleno derecho “una $ora olig"rquica”! la expresión de inor#as poseedoras de t#tulo para ocuparse de los asuntos counes, 8a declaración es absoluta! la $órula concluyente: nunca ha habido deocracia! solo heos conocido oligarqu#as, Frente a lo taxativo del enunciado! y atendiendo a lo que podr#a denoinarse su $uer7a descriptiva! cabr#a objetar la propia ahistoricidad de la $órula! su $alta de atención o inter2s por las ediaciones históricas y por las propias trans$oraciones que a$ectan al r2gien de la deocracia en la actualidad, *i bien es cierto! no puede haber calce entre el “poder del pueblo” y su representación en un r2gien deocr"tico! pues el poder del pueblo est" siepre "s ac" y "s all" de las $oras jur#dico1pol#ticas en las que 2ste se encarna! es necesario constatar que es el propio signi$icante “deocracia” el que ha ido incorporando! en su trans$oración! retóricas de ercado coo son la
excelencia! la copetencia y la apoliticidad, -sta incorporación supone una utación pro$unda de la deocracia! supone! in e*tremis! su propia cancelación o $in =de acuerdo a los relatos aestros en que se acostubró narrar la deocracia en la odernidad, A partir de esta l#nea de arguentación! sostendr2 en este ensayo que ha habido una trans$oración espec#$ica en la de$inición y pr"ctica de la idea de deocracia a partir de la segunda itad del siglo veinte, Kien podr#aos decir que esta trans$oración tiene que ver con el paso de la deocracia procediental a la deocracia elitista, 8a deocracia elitista explicita el v#nculo entre -stado! corporaciones y expertos en un contexto de declive de la idea de deocracia en tanto r2gien de igualdad, -ste despla7aiento del poder del pueblo por el poder de las 2lites se puede observar! en prier lugar! en el papel cada ve7 "s gravitante asuido por el ejecutivo en los actuales reg#enes presidenciales, A pesar de la iportancia cada ve7 ayor que este poder del -stado tiene en el estableciiento y desarrollo de las agendas gubernaentales! los iebros pertenecientes al ejecutivo no son elegidos directaente por la voluntad popular! sino que su elección responde a una decisión presidencial, 6ue la $oración predoinante de estos lidera7gos pol#ticos1t2cnicos provenga predoinanteente de las escuelas de Hngenier#a y de -cono#a y %egocios! no es "s que el #ndice de una trans$oración en curso de las biogra$#as pol#ticas /el relevo del “gobierno de pol#ticos” por el “gobierno de los expertos”0TMU, -n segundo lugar! y coo consecuencia de lo anterior! este despla7aiento hacia las elites econóicas se ha venido evidenciando en la entrega de cada ve7 ayor poder a expertos onetarios, -n este sentido! el historiador italiano 8uciano Can$ora advierte que las deocracias contepor"neas! noinadas tabi2n coo deocracias olig"rquicas! $avorecen “una v#a que privilegia el plebiscito peranente de los ercados undiales respecto al "s obvio e incopetente plebiscito de las urnas” TEU, *heldon Oolin! por su parte! ha de$inido coo “deocracia dirigida” a este v#nculo entre deocracia! epresa y ercado, Kajo esta noinación! los intereses del capital y los de la inversión econóica constituir"n el coando de dirección de las deocracias actuales! al iso tiepo que dicho coando se sustraer#a a todo control y supervisión deocr"tica, 8a deocracia aprehendida bajo estos signos es de$inida coo: a0 el espacio para la copetencia y la negociación< b0 la contención electoral< y c0 la provisión liitada de al$abeti7ación! de capacitación laboral y de lo
indispensable para una sociedad que est" bregando por sobrevivir en la econo#a global, -xplicitando el v#nculo entre deocracia y elite econóica! Oolin a$ira: “-l elitiso pol#tico uestra su a$inidad electiva con el capitaliso, Abos creen que los poderes de un cargo elevado! ya sea en el gobierno o en el undo epresarial! deben quedar reservados para quienes se los ganan por sus cualidades personales y talentos excepcionales =deostrados en condiciones suaente copetitivas= "s que para quienes llegan al poder en virtud de la aprobación popular, -n un undo per$ecto! a las elites pol#ticas se les con$iar#a el poder y se las recopensar#a con prestigio! a las 2lites capitalistas se las recopensar#a con poder y rique7a, Coo abas representan lo ejor! tienen! seg9n esta concepción! derecho al poder y a la recopensa”TVU, Desde esta perspectiva! la deocracia elitista abandona la retórica de orden republicano articulada al signi$icante de “virtud c#vica” para instalar una retórica de corte neoliberal descrita desde la idea de excelencia, 8a vinculación entre deocracia! elitiso y excelencia ipondr"! por un lado! un odo de hablar de lo pol#tico coloni7ado por retóricas venidas del capo epresarial< ientras que privilegiar"! por otro lado! una descripción;narración de la participación en pol#tica en tanto logros universitarias y;o pro$esionales, Desde esta de$inición! la deocracia corporativa har" de los votantes sujetos tan previsibles coo los consuidoresTU, Al igual que una epresa! la deocracia buscar" ser de$inida en tanto un espacio “apol#tico” y “estable” donde la $unción de los gobiernos ser" sipleente la de proveer respuestas “e$icaces” a una ciudadan#a bien disciplinada, 8a relación entre deocracia y epresa seguir" el odelo 'al8mart ! ironi7a Oolin: “para#so de precios bajos para los consuidores y per$ecto copleento econóico del s9per poder, A su anera es un poder invasivo! totali7ador! que se va a$ian7ando continuaente en una counidad local tras otra! destruyendo los negocios peque5os que no pueden copetir! iponi2ndoles a sus epleados salarios bajos! condiciones laborales duras! servicios de salud de$icitarios! y desalentando la sindicali7ación” TGU, 8a $orali7ación de la teor#a de la deocracia elitista =que tienen coo antecedente la teor#a social de Oeber y las teor#as elitistas de la pol#tica de )osca y ParetoTU= es de responsabilidad de oseph *chupeter! quien en el a5o > escribe Capitalism, -ocialism and .emocrac# , Ba el t#tulo del libro enarca lo que ser" entendido por deocracia: sistea de partidos pol#ticos epresariales que
brindan series surtidas y di$erentes de ercader#as pol#ticas /bienes0! de entre las cuales los votantes eligen una por ayor#a produciendo un gobierno estable que equilibra la o$erta y la deanda /no es casual el lenguaje! *chupeter era un especialista en odelos de ercado0, )"s en$"tico en esto! *chupeter aclarar" que: “la deocracia no signi$ica y no puede signi$icar que el pueblo gobierne realente en cualquier sentido ani$iesto de WpuebloX y WgobernarX, Deocracia signi$ica que el pueblo tiene la oportunidad de aceptar o recha7ar a las personas que pueden gobernarle Ahora bien! un aspecto de esto puede expresarse diciendo que la democracia es el obierno del político”T>U, Kajo esta de$inición la deocracia se entender" en tanto: /a0 pluralista! la sociedad en la que debe $uncionar contiene a sujetos de diversos intereses /consuidores y epresarios0< /b0 elitista! el papel principal en el proceso pol#tico es asignado a los grupos dirigentes que se escogen a s# isos< y /c0 es un odelo de equilibrio! esto es! el proceso deocr"tico es entendido en tanto un sistea que antiene el equilibrio entre la o$erta y la deanda de las ercader#as pol#ticas, 8enguaje h#brido entre pol#tica y ercado de las deocracias elitistas que en Chile bien podr#a ser gra$icado en el libro de -ugenio ironi! 0adiorafía de una derrota ( *antiago! .qbar -ditores! >GG0, -n un intento de proponer un odelo pol#tico alternativo a este de la deocracia elitista! el libro;ani$iesto 9l otro modelo .el orden neoliberal al r/imen de lo p1blico insistir"! sin ebargo! en antener el v#nculo entre -stado y epresa privada, -n este punto se indica: “.na epresa puraente p9blica corre el riesgo! hacia cainos que no eran los originales previstos, .na epresa ixta! con capital p9blico y privado! por el contrario! necesariaente ser" una epresa "s transparente donde los accionistas inoritarios! sean quienes sean! ejercer"n sus derechos con $uer7a, *e trata aqu# de usar la disciplina de ercado! a la que heos hecho re$erencia en reiteradas ocasiones! para ejorar la capacidad de acción del -stado”! 3%o es 2sta! sin ebargo! la conocida $órula de las pol#ticas neoliberales4 T@U, 8ejos de la retórica de los derechos y de la igualdad con la que habitualente se asocia a la deocracia! la deocracia elitista es un ecaniso para elegir y autori7ar gobiernos, 36ui2nes participan4: las 2lites /grupos auto1elegidos de pol#ticos0 organi7adas en partidos pol#ticos, al coo lo se5ala David Jeld! la deocracia elitista es “un arreglo institucional para llegar a decisiones pol#ticas = legislativas y adinistrativas= con$iriendo a ciertos individuos el poder de decidir
en todos los asuntos! coo consecuencia de su 2xito en la b9squeda del voto de las personas /0 lejos de ser una $ora de vida caracteri7ada por la proesa de la igualdad y de las ejores condiciones para el desarrollo huano Tla deocracia elitistaU es! sencillaente! el derecho periódico a escoger y autori7ar a un gobierno para que actuase en su nobre”TU, 8a deocracia! as# entendida! busca en 9ltio t2rino legitiar el resultado de las elecciones periódicas entre 2lites pol#ticas rivalesT?U, Ba para el a5o EG se hab#an hecho evidentes las di$icultades del odelo de la deocracia elitistaTMU, De acuerdo a C, K, )acpherson! el equilibrio que genera esta idea de deocracia es un “equilibrio en la desigualdad”! puesto que la supuesta “soberan#a del consuidor” es ilusoria, )acpherson invita a asuir radicalente la analog#a entre deocracia y ercado, Asuiendo esta analog#a! se podr#a decir que si el ercado pol#tico es lo bastante copetitivo para producir la o$erta y la distribución óptia de ercader#as pol#ticas /óptia en relación a la deanda0! lo que hace es registrar la deanda “e$ectiva”! es decir! las deandas que cuentan con una capacidad adquisitiva su$iciente para respaldarlas, Ahora bien! en el ercado econóico esto signi$ica sencillaente dinero, De igual odo! en el ercado pol#tico! la capacidad adquisitiva es en gran edida! aunque no exclusivaente! dineroTEU, -n este sentido! &onald DYor+in se5ala para el caso de la deocracia estadounidense: “sabeos que el dinero es la aldición de nuestra pol#tica, 8os candidatos y los partidos pol#ticos colectan suas enores para $inanciar sus di$erentes capa5as electorales! y esta pr"ctica corrope la pol#tica y el gobierno por uchas y per$ectaente identi$icables ra7ones, 8os pol#ticos dedican de una $ora grotesca "s es$uer7os a recaudar dinero que a re$lexionar sobre pol#tica o sobre principios, 8os partidos enriquecidos por las contribuciones de los grandes intereses $inancieros go7an de una enore ventaja en la batalla por los votos! y las nuevas y pobres organi7aciones pol#ticas se encuentran por esta sola ra7ón en una desventaja por lo co9n $atal, 8os grandes contribuyentes de las capa5as copran lo que de $ora eu$e#stica se denoina “acceso” a los cargos p9blicos< en realidad! lo que a enudo copran no es eraente acceso! sino tabi2n control”TVU, -n sociedades tan desiguales coo la nuestra! este odelo sólo reproducir#a la desigualdad, 8as distintas elites har#an circular entre ellas el prestigio! el poder y los bienes econóicos, -sta $ora de entender la pol#tica /que concentra en s#
ercado y poder pol#tico0 no solo desincentiva la participación! sino que ade"s genera apat#a, -n este sentido! )acpherson observa que “quienes por su educación y su ocupación experientan uchas "s di$icultades que otros para adquirir! doinar y sopesar la in$oración necesaria para una participación e$ectiva se hallan en clara desventaja: una hora de su tiepo consagrada a la participación pol#tica no tendr" tanto e$ecto coo una hora de uno de los otros, 8o saben! y por eso son ap"ticos, As#! la desigualdad econóica crea la apat#a pol#tica, 8a apat#a no es un dato independiente”TU, A propósito de la creciente apat#a pol#tica de las deocracias contepor"neas! cada ve7 son "s nuerosos los cr#ticos que advierten que el supuesto de baja participación de la deocracia elitista atenta contra el principio rector del pensaiento liberal: la idea de individuo, Hdenti$icando esta cr#tica al pensaiento liberal con la cr#tica de la deocracia! David Jeld ha observado recienteente que el ataque a la herencia cl"sica de la deocracia supone un ataque expl#cito a la idea isa del agente huano individual, *in duda! se trata de la noción de los seres huanos coo individuos! que pueden ser ciudadanos activos de su orden pol#tico y no eros sujetos de los $ines de otrosT>GU, Kajo este odelo! la acción pol#tica de los individuos queda reducida a la discusión privada y al ejercicio espor"dico del voto! dejando el resto a los “expertos” capaces de adoptar las dediciones t2cnicas correctas acerca de la organi7ación de los asuntos huanos, De este odo! la deocracia elitista no es tan sólo anti1liberal sino que tabi2n anti1deocr"tica, Por 9ltio! cabe destacar que el eleento “copetitivo” de las deocracias elitistas generar#a! contra lo que podr#a pensarse! un odelo “oligopolista” de deocracia: esto es! un odelo donde los pocos vendedores o proveedores de bienes pol#ticos! no necesitan responder! y no lo hacen! a las deandas de los coparadores! coo tendr#an que hacerlo en un sistea copetitivo: "s a9n! podr#an hasta cierto punto crear sus propias deandasT>U, Consciente de la gravedad de las cr#ticas! &obert Dahl ha buscado corregir en los 9ltios a5os algunos de los probleas que ha presentado el odelo de deocracia elitista incorporando la idea de pluralidad en el poder, Desde esta perspectiva! el an"lisis busca relevar los procesos que generan y que resultan de la cobinación de los es$uer7os individuales en grupos y en instituciones en copetencia por el poderT>>U, -l punto de partida de esta teor#a ep#rica de la deocracia es la constatación de la desigualdad, -xiste la desigualdad /educación! salud! renta!
rique7a! etc,0 y no todos los grupos tienen el iso acceso a todos los tipos de recursos! ni ucho enos recursos iguales, *in ebargo! casi todos los grupos tienen alguna ventaja que puede ser utili7ada para in$luir en el proceso deocr"tico, De ah#! la necesidad del consenso de las elites, ributario de un en$oque ep#rico y elitista de la deocracia! Dahl supone iposible la igualdad en cualquier sistea pol#tico deocr"tico de grandes proporciones! incluso llega a pensar que continuar sosteniendo dicha idea es sipleente $oentar el escepticiso contra la deocracia, *e ha observado que este realiso pol#tico si bien es aparenteente 9til a la hora de antener el equilibrio y el consenso! no lo es tanto a la hora de proover la igualdad, ZZZZZZ [ Doctora en Filoso$#a, Acad2ica .niversidad )etropolitana de Ciencias de la -ducación! .)C-, TU Pierre &osanvallon! La contre8d/mocratie La politi+ue a l:;e de la d/fiance! Paris! \ditions du *euil! >GGM, T>U ean1Claude )ilner! Les penchants criminels de l:9urope d/mocrati+ue! Paris! Lerdier! >GG@, T@U Carlo 'alli! “8a deocracia entre necesidad! contingencia y libertad”! 9l malestar de la democracia! Kuenos Aires! Fondo de Cultura -conóica! >G@! p, V>, TU A pesar de nuestra di$erencia! reconoceos que el arguento de &anci(re apunta "s bien al problea de la representación y al cortocircuito que la noción de “poder del pueblo” produce en el espacio de la pol#tica, acques &anci(re! La haine de la d/mocratie! Paris! 8a Fabrique \ditions! >GGG! p, V?, T?U Hb#d,! p,EM, TMU Para un estudio de esta trans$oración en Chile! v2ase! Alejandra Castillo! .emocracia, políticas de la presencia # paridad 9studio sobre participación política de mujeres en el ejecutivo (2<82!"! *antiago! Corporación Juanas -diciones! >G, TEU 8uciano Can$ora! “-l plebiscito de los ercados”! Crítica de la retórica democrática ! Karcelona! Cr#tica! >GG@! p, @, TVU *heldon Oolin! .emocrac# =nc 5anaed .emocrac# and the -pecter of =nverted >otalitarianism! Qx$ord! Princeton .niversity Press! >GGV p, >>V, TU Hb#d,! pp, ?E1?V,
TGU Hb#d,! p, , TU -s relevante indicar que la teor#a elitista de la pol#tica tal cual la desarrollan &obert )ichels! Oil$redo Pareto o 'aetano )osca dice relación con la e$icacia y la capacidad de persuasión de una inor#a activa /elites! vanguardias! etc,0 sobre la con$oración de un consenso electoral, As#! las ayor#as que se constituyen reg#enes representativos son el resultado del trabajo de una “elite” que busca crear un consenso, -n este sentido! la inor#a activa /la elite o la vanguardia0 es el v#nculo entre la pol#tica parlaentaria y la ayor#a /asa! pueblo! ciudadan#a! etc,0, Contrario a esto! lo que se propone aqu# es la desvinculación de la idea de deocracia de la de ovili7ación social, Para una aguda cr#tica de estas teor#as! v2ase! Peter Kachrach! >he >heor# of .emocratic 9litism A Criti+ue! Koston! KroYn Copany! ME, T>U oseph *chupeter! Capitalism, -ocialism and .emocrac# ! %eY Bor+! Jarper Kros,! ?G! pp, >M@1>M, T@U L2ase! Fernando Atria! 'uillero 8arra#n! os2 )iguel Kenavente! avier Couso! Al$redo oignant! 9l otro modelo .el orden neoliberal al r/imen de lo p1blico! *antiago de Chile! Debate! >G@! p, @>, TU David Jeld! 5odelos de la democracia! )adrid! Alian7a! >GGE! p, >GM, -l par2ntesis es #o, T?U Hb#d,! p, >GM, TMU Para una cr#tica de este odelo de deocracia! v2ase! Carole Patean! Participation and .emocratic >heor#! Cabridge! EG, TEU C, K, )acpherson! La democracia liberal # su /poca! )adrid! Alian7a! >GG@! p, , TVU &onald DYor+in! =s .emocrac# Possible ere? ! %eY Bor+! Princeton .niversity Press! >GGM! pp,M1M?, TU Hb#d,! p, ?, T>GU David Jeld! 5odelos de la democracia! op, cit,! p, >>, T>U Hb#d! p, >>?, T>>U &obert Dahl! Pol#arch#4 Participation and @pposition! %eY Jeaven! Bale .niverity Press! E,
De antagonisos! arte y $einiso: -ntrevista a Chantal )ou$$e La destacada filósofa chilena conversa con la politóloa bela, +uien estuvo recientemente en nuestro país invitada por Puerto de =deas Gas se;alado en 1or una #olítica de la identidad democrática2 *ue es #osible reformular y radicaliar el #royecto de la ilustración abandonando el marco racionalista y uni%ersalista de dic/o #royecto. En relación a ello, 3cuál es tu #ers#ecti%a en relación a los enfo*ues decoloniales latinoamericanos *ue no sólo cuestionan el marco racionalista y uni%ersalista sino *ue al #ro#io #royecto ilustrado4
Debo decir que soy uy cr#tica del decolonialiso de Oalter )ignolo o de -nrique Dussel porque! generalente! de$ienden una posición que yo llaar#a esencialista, -stoy de acuerdo con ellos en que históricaente hubo una articulación entre la odernidad y la colonialidad! lo que llaaos el paradiga decolonial, Pero i di$erencia es que uno puede pensar algunos eleentos de la odernidad! independienteente!del paradiga colonial! y por lo tanto no hay que recha7ar todo lo que est" en ese proyecto, )e parece que! de alguna anera! la tarea es desarticular esas dos cosas y pensar entonces una odernidad que no est2 ligada a ese paradiga colonial! ientras que ellos dicen que no! que la odernidad es necesariaente y $undaentalente sexista y racista, )e parece que eso teóricaente no se sostiene, 8nsistiendo desde ese %ector decolonial latinoamericano #odríamos #ensar en el te0to 1a /ybris del #unto cero2 de Santiago CastroH5óme donde se se;ala *ue lo *ue la modernidad colonial establece es un modo de entender la #roducción del conocimiento %inculada al uni%ersalismo y al racionalismo *ue t$ se;alas como elementos *ue #odrían ser obstaculiadores #ara #ensar lo #olítico /oy. CastroH5óme y otros #ensadores latinoamericanos se;alan *ue #recisamente es la #roducción de conocimiento la *ue reH#roduce el orden moderno colonial en la medida *ue reH#roduce una descri#ción de la ilustración %inculada al uni%ersalismo y al racionalismo.
engo uchos puntos de acuerdo en cuanto a la cr#tica, Pero yo creo! contrariaente a ellos! que es posible repensar y re$orular el proyecto oderno! independienteente no solo del aspecto colonial sino tabi2n del racionaliso y del universaliso! ientras que ellos quieren recha7arlo copletaente y consideran que toda critica que no rechace la odernidad “es una cr#tica egoc2ntrica del egocentriso”, %o s2 si es )ignolo o Dussel quien dice eso! pero es una posición de que ellos son los 9nicos realente radicales, -so no e gusta! porque hay que aprender ucho del pensaiento postcolonial para poder hacer cr#ticas! no hay que tratar de decir “tienes que abandonarlo”, -so tabi2n est" ligado a i perspectiva general que trata de desarticular y re1articular eleentos, Por ejeplo! el liberaliso y la deocracia son cosas que han sido articuladas históricaente en algunos contextos! pero no hay una relación absolutaente necesaria entre ellas, Jay unas articulaciones hegeónicas contingentes que uno siepre puede intervenir para tratar de reorgani7arlas, )e gustaría #reguntarte #or esto *ue se /a llamado giro /acia los derec/os, seg$n lo cual la democracia se describe en el es#acio de los derec/os /umanos, es#ecialmente, des#laando los ejes *ue articulan la democracia con la igualdad y la libertad. 3u" #roblema ad%iertes #ara la descri#ción #ostHmar0ista de lo #olítico en el giro contem#oráneo /acia los derec/os *ue describirán a las democracias en tanto democracias de los derec/os /umanos4
8a deocracia oderna es el odelo occidental y! en ese sentido! estoy de acuerdo con lo que dice un teórico postcolonial Dipesh Cha+rabarty: que la apropiación del t2rino “oderno”! coo lo de$ine Dussel! es propio del iperialiso europeo! porque al de$inir su $ora de deocracia coo “oderna” se da un privilegio respecto a todas las otras! que aparecen coo in$eriores, -n is trabajos previos he hablado ucho de “deocracia oderna” pero ahora e he dado cuenta de la $uer7a retórica de decir “oderno” y ahora trato de no utili7arlo y hablar "s bien de “odelo occidental”, -se odelo occidental es una articulación entre dos tradiciones uy distintas! la tradición liberal de los derechos de la ujer y del estado de derecho y la tradición deocr"tica! que es la tradición de igualdad! soberan#a del pueblo! coo lo ostraba uy bien un teórico y $ilóso$o canadiense )acPherson, -sas dos tradiciones son uy distintas! entonces han sido históricaente articuladas en el siglo ]H] cuando hubo una alian7a pol#tica entre
los liberales y los deócratas en contra del absolutiso, -ntonces )acpherson! en un libro uy peque5ito pero uy lindo! >he life and times of liberal democrac#! uestra cóo se estableció esa articulación y plantea que el liberaliso se ha deocrati7ado y la deocracia se ha liberali7ado, -l odelo occidental es la articulación de esas dos tradiciones! pero e parece iportante reconocer que no pueden ser conciliadas copletaente, Algunos autores dicen que hay una contradicción! otros dicen que no! que van necesariaente juntas, Bo no creo en ninguna de esas dos posiciones! pre$erir#a hablar de una tensión, -l problea es que hay dos principios! por una parte la libertad y por otra la igualdad! que se pueden reconciliar pero habr" siepre un valor que ser" principal y el otro subordinado, Joy! con la hegeon#a no desa$iada del neoliberaliso! es claraente la vertiente liberal la que ha toado la delantera, Por eso es que cuando uno habla de deocracia se re$iere a los derechos del hobre y a la soberan#a popular! pero en estos oentos se oye uy $recuenteente decir que son ideas obsoletas, 6ue los discursos de los partidos llaados ahora de centro i7quierda no h ablan "s de igualdad! sino de equidad o! peor todav#a! del gran valor que es ahora la libertad de escoger, 8a soberan#a popular ha sido eliinada! entonces quedan solaente los derechos liberales del hobre que de$ine la deocracia y yo pienso que eso es uy peligroso, Por eso estaos viviendo en sociedades que algunos llaan postdeocr"ticas! que todav#a pretenden ser deocr"ticas! pero es una ilusión porque hoy no hay posibilidad para los ciudadanos de toar decisiones, -st" uy claro! y hablo de los pa#ses europeos evidenteente! que no hay gran di$erencia entre lo que propone la centroderecha y la centroi7quierda, -llos coinciden en que debido a la globali7ación no hay posibilidad de poner en cuestión el odelo neoliberal! que es un destino que teneos que aceptar y que cuando viene un partido de centroi7quierda al poder no puede desa$iar ese odelo: lo 9nico que pueden hacer es adinistrarlo de una anera "s huana, Gablabas reci"n de )ac#/erson *uien sostiene *ue la democracia liberal se describiría desde la figura del indi%iduo #ro#ietario, no s" cuál es tu #ers#ecti%a a/í, 3/abría *ue cuestionar o no esa categoría de indi%iduo4
-sas estructuras producen un cierto tipo de sujetos, -l individuo liberal no es una cosa que existe as# no "s! est" creado por una cierta hegeon#a! producto de ciertos tipos de institución, -ntonces si uno va a tratar de desa$iar el odelo neoliberal o tratar de hacer lo que yo llaar#a una perspectiva contra1hegeónica tabi2n hay que desa$iar al individuo liberal tal coo est" concebido, -stos dos lados! el institucional y el de las $oras de subjetividad! van juntos y se crean juntos, Esta discusión de la democracia global, *ue algunos llaman cosmo#olita, se #uede abordar desde la #ers#ecti%a de los feminismos *ue tambi"n son uni%ersalistas. Conce#tos como los derec/os /umanos de las mujeres o los #rogramas de desarrollo /umano de las mujeres #arecen %ol%er al síntoma de la organiación democrática global 3Cuál es tu #ers#ecti%a frente a esos feminismos4
Bo soy uy cr#tica de la perspectiva cosopolita que pretende que hay un odelo de deocracia! que evidenteente es el occidental y que! seg9n se piensa! es el "s racional y "s avan7ado! en consecuencia todos los pa#ses del undo tienen que llegar a ser coo ellos, Jay que reconocer que una gran parte de la gente que de$iende eso no es de derecha! no! son bienintencionados progresistas! pero no se dan cuenta de que al pensar eso apoyan la hegeon#a occidental, Bo lo re$orulo al decir que hay uchas aneras de escribir el objetivo deocr"tico en distintas tradiciones! lo cual vale para A2rica 8atina, -l ideal del autogobierno de la soberan#a popular puede inscribirse en distintos contextos históricos y tradiciones! claro que ah# viene el problea sobre qu2 pasa con las tradiciones en las cuales las ujeres no son reconocidas de la isa anera coo el Hsla, &especto de eso yo cabi2 de posición! a partir de una $einista que ha pasado un a5o en el centro donde yo trabajo y con la que he tenido uchas discusiones, -lla es una ujer absolutaente $einista y absolutaente usulana practicante! se viste toda de blanco y e ha hecho entender que lo iportante para ellas! $einistas en -gipto! no es iponer el odelo europeo sino que luchar al interior de la proble"tica isl"ica, -lla insiste en que no hay nada intr#nsecaente sexista en el isla! "s bien! hay pr"cticas que llevan a la subordinación de las ujeres pero que tienen que ver con los pa#ses donde se ha desarrollado, %o vienen de la doctrina isa! sino de ciertas contingencias históricas y entonces ella! en tanto $einista! dice “yo no quiero recha7ar el Hsla! sino hacer una lucha hegeónica dentro de la cultura
isl"ica para que la gente llegue a entender y a crear nuevas $oras de subjetividad que peritan realente iaginar una igualdad”, Ade"s ella dice que no es algo utópico! que all" hay uchas $oras de $einiso isl"ico! entonces! cuando uno abandona la idea de que hay una sola anera de ser deócrata o una sola anera de ser $einista! entonces coprendes que la lucha pol#tica siepre tiene que partir de un contexto deterinado! de una tradición! y que no puede ser nunca la ipleentación de principios abstractos, %o veo por qu2 el $einiso tenga que ser tal coo ha sido de$inido en los espacios $ranceses o aericanos, -so ha sido un gran error de las $einistas que! cuando llegan a otros pa#ses! dicen “RAh noS .stedes coo $einistas tienen que hacer eso”, Ac" en A2rica latina tabi2n hay que pensar en una $ora espec#$ica! que no sea necesariaente tan distinta! pero nunca se debe apostar por la aplicación de un odelo iportado! eso es $undaental pol#ticaente, En el es#acio de las transformaciones #olíticas, en relación al feminismo en Am"rica atina, llama la atención *ue una de las formas de cuestionar el es#acio #olítico tiene *ue %er con una cor#oH#olítica, una cor#oralidad #uesta en escena desde la #erformance. 3Cómo la #erformance se #odría articular a esa forma de entender lo #olítico en tanto antagonismo y /egemonía4
-i uno va a hablar de cómo imainar una contra8heemonía en primer luar ha# +ue entender bien cómo funciona la heemonía en ese caso particular Por ejemplo, es evidente +ue la heemonía neoliberal opera en Chile de una forma distinta +ue como funciona en Arentina na veB +ue t1 lo entiendes se puede ver una performance para esa situación concreta Creo que a esto no se le puede dar una respuesta general, -so va a depender ucho del pa#s! la cultura! los contextos, Por eso si uno va a hablar de cóo iaginar una contra1hegeon#a en prier lugar hay que entender bien cóo $unciona la hegeon#a en ese caso particular, Por ejeplo! es evidente que la hegeon#a neoliberal opera en Chile de una $ora distinta que coo $unciona en Argentina, .na ve7 que t9 lo entiendes se puede ver una per$orance para esa situación concreta, Se #odría describir una es#ecie de característica de esta #erformance feminista o de las #rácticas de la disidencia se0ual *ue no buscan ser
/egemónicas, *ue no buscan establecerse como estrategias #olíticas #ara generar un orden de la articulación. En ese sentido lo *ue buscan es ser más bien un %ector #olítico interru#ti%o y no imaginar un es#acio de lo 1en com$n2, es decir, se establecen en el cuestionamiento del es#acio de la #olítica *ue ficciona ese 1en com$n2. En ese sentido te #reguntaba cómo se entiende una democracia agonística con este ti#o de #rácticas *ue son #olíticas y *ue buscan cuestionar el orden /egemónico dominante, #ero sin establecerse como una #ráctica /egemónica, #uesto *ue lo *ue tambi"n cuestionan es el orden de la uto#ía o la #romesa contenida en el es#acio de lo #olítico.
-n la lucha hegeónica hay dos lados! el lado de desarticulación y el lado de rearticulación! entonces ese aspecto al cual t9 haces re$erencia yo dir#a que es el aspecto de desarticulación! o de ruptura, -s un eleento iportante! claro! pero no quiere decir que sea su$iciente! es un oento de la lucha! pero no se puede uno liitar a eso! despu2s hay que saber cobinar y establecer una sinergia con otras $oras que van a aparecer, Por eso es que siepre cuando hablo de las pr"cticas art#sticas insisto ucho en que hay que tener una visión uy pluralista! estoy uy en desacuerdo con las perspectivas que dicen que por ejeplo para hacer realente pol#tico hay que hacer eso! o eso otro, Creo que hay 9ltiples $oras de participar en una lucha contra1hegeónica y que todas son iportantes! luego uno tiene que ver cu"les son las que convienen ejor en un contexto deterinado! y cu"les son pertinentes a tu personalidad y tus capacidades, -stoy uy en contra de la idea de verdad en la pol#tica! y ade"s para que un oviiento sea realente e$ica7 tiene que ultiplicar sus $oras, Para dar un ejeplo! todas las pr"cticas del activiso art#stico son pr"cticas art#sticas pero son $undaentalente activistas, Jay gente que cree que esa es la anera de hacerlo y que las pr"cticas art#sticas "s tradicionales son para la burgues#a, Bo no pienso eso! es iportante actuar en la ultiplicidad! ientras en "s lugares se act9e se va a tener "s e$ectos! por eso e niego a dar una sola indicación: ientras “"s” ejor ser" la lucha contra1 hegeónica y ejores sus resultados, Ioda%ía %inculada en el es#acio del arte y del feminismo, durante el siglo en Am"rica atina las #rácticas feministas se %inculan a una #ers#ecti%a liberal, #rinci#almente de inclusión a tra%"s de un discurso contradictorio( #or un lado, la conser%ación de cierta identidad
familiar y, #or otro, la descri#ción de las mujeres en el es#acio #$blico como #ortadoras de derec/os. ara comienos del siglo 8, sin embargo, se utilian otras formas #ara entender el feminismo como esa relación con las #erformances y las #rácticas artísticas, y una *ue es es#ecialmente #aradójica en el mismo sentido *ue se;alaba reci"n *ue no busca establecer un orden enHcom$n, son estas #rácticas feministas #ostH#ornográficas 3Cuál es tu relación frente a un feminismo *ue se describe desde el es#acio de la #ost #ornografía4
engo que decirte que soy copletaente ignorante, -s la priera ve7 que escucho hablar de post1pornogra$#a, *i eventualente lo que signi$ica eso es la recuperación de las pr"cticas pornogra$#as de una anera $einista! porque yo la palabra nunca la encontr2! hay bastantes pr"cticas de porno hecho por las ujeres 3a qu2 te re$ieres con postpornogra$#a4 Es una #ráctica feminista *ue se describe desde la cor#oralidad, no solo desde el discurso de los derec/os o de la inclusión. En ese sentido no busca ser un discurso de la inclusión, y #or otro lado asume ese orden de dominio.
3Pero cu"l es el objetivo! qu2 es lo que ellos piensan que pueden lograr a trav2s de eso4 -so es lo que e interesa saber 3es una deconstrucción4 rimero buscan e0#licitar el discurso de dominio *ue describe a las mujeres en el es#acio #$blico en tanto un cuer#o se0uado y, #or otro lado, asumir otras estrategias no solo descritas desde un feminismo de mujeres, en ese sentido, el conce#to feminismo se %a a %ol%er un conce#to m$lti#le donde /ay distintas #rácticas *ue no necesariamente se describen como una #olítica de las mujeres.
A priera vista! la condición es que no se plantee coo la cosa "xia, *on $oras de experientación que pueden ser interesantes! pero respecto a lo que dec#as al principio debo reconocer que no cono7co bien la evolución del $einiso latinoaericano! por ejeplo! lo que t9 dices que $ue durante toda una 2poca uy de derechos, K sea, su eficiencia estaba en la #olítica de los derec/os.
Depende cóo se sit9an! pero por ejeplo! a nivel de las pr"cticas art#sticas! en el caso europeo 2stas nunca se han planteado en t2rinos de esa cosa de derechos!
sino en la puesta en cuestión de esa idea de un $einiso esencialista, Pero no era un discurso liberal! todas las artistas a las cuales recuerdo se plantean as#: ostrar y ser claro en el car"cter discursivo de la $einidad, -n ese sentido! desde una perspectiva anti1esencialista han sido uy iportantes, -n A2rica 8atina 3hay ejeplos de esas pr"cticas art#sticas $einistas de ese estilo liberal4 Si entendemos las #rácticas artísticas como la e0#resión de las #rácticas de arte de las mujeres en el es#acio #$blico, sí. Gabitualmente no cuestionan el significante mujer. or ejem#lo a*uí en C/ile este feminismo maternal, *ue /a sido /egemónico, y es muy eficiente en incor#orar a las mujeres en el es#acio #$blico, #ero sin embargo es un feminismo en tanto com#lementación de un orden dual masculino y femenino y este $ltimo significante es descrito como femenino materno. Cuando se em#iea a cuestionar esa organiación es en los a;os L< o a comienos de los M<, se comiena a fracturar el orden del feminismo entendido como de 1mujeres2 y, a/í, em#iean a a#arecer otras categorías como un feminismo no esencialista *ue se %a a describir en categorías *ue no son necesariamente traducibles al es#acio de la #olítica re#resentacional. En ese sentido, se %inculan estas otras #rácticas artísticas feministas *ue más bien se #ueden describir como un lugar de cuestionamiento del significante mujer.
3B lo que t9 llaas post1pornogr"$ico es parte de eso4 Claro, en ese momento anti esencialista, #ero sin asumir el lugar de la eficiencia de lo #olítico, ni el es#acio de lo com$n, o un lugar al cual se debiese llegar, sino *ue es un momento de la interru#ción del orden de lo #olítico, *ue #odría ser descrito como 1im#olítico2 como formas #olíticas *ue no se describen como una #olítica en el orden de la re#resentación.
*i! bueno! t9 isa dices que esas cosas no hay que pensarlas en $unción de lo pol#tico, Jablo en el sentido "s general! e interesa ucho saber sobre eso porque soy realente ignorante, 9 e podr#as recoendar algo para leer! porque e interesar#a, Bo soy uy cr#tica de esas $oras de identi$icación! porque justaente la perspectiva que yo de$iendo de la hegeónica es una perspectiva de desidenti$icación para la re1identi$icación, %o creo que uno pueda hacer solo una