24 de Septiembre de 1812 Batalla de Tucumán
Programa del Acto:
IN TRODUCC I IO N N O
E N N TRADA
IZ IE N N TO M I E A M
M N NO N IO N N AL H I M AC I O
I SCURSO D I SCURSO
N D E NI E T E LA BA N E RA E C E E R EM O R E TI RO RO D E RA D E R EM O NI AS
IRG G E N E N GLOSAS A LA V I R
IN IZ IO N N F IN AL IZ AC I O
E LA BA N E RA E C E E R EM O N D E NI D E RA D E R EM O NI AS
N D E E LA BA N E RA D E RA
E N N T IN O ARG E
IN TRODUCC IO N
Mañana 24 de septiembre se celebran 198 años de la Batalla de Tucumán, en donde se enfrentaron el ejército de los realistas y el ejército de los patriotas. El primero era más numeroso, con mejor armamento y formado por militares de carrera. El segundo era inferior en armamento y número ya que estaba constituido con paisanos con poco conocimiento en el manejo de las armas. Sin embargo, fueron ellos, los patriotas dirigidos por el General Manuel Belgrano que bajo la protección y el amparo de la Virgen de la Merced, triunfaron en el Campo de las Carreras e impidieron el avance de los realistas. Hoy el eco glorioso de esa victoria resuena en nuestro recuerdo y gratitud.
E N TRADA
D E LA BA N D E RA D E C E RE M O NI AS
Ella simboliza la Patria y sus triunfos, la grandeza de una Nación Libre, que quiere transitar orgullosamente el camino de paz y democracia por el que tantos lucharon. ¡Oh Gloriosa Bandera, bendecida por los bellos colores del blanco inmaculado y del celeste cielo! Hace su entrada triunfal portada por: Abanderado: Escoltas: La recibimos con un fuerte aplauso .
IZ N TO A M IE
D E LA BA N D E RA
A continuación, invitamos a a proceder al izamiento de la bandera. En silencio, giramos mirando hacia el mástil.
N N AL H I M NO AC IO
ARG E N T IN O
Himno Nacional Argentino, que tus versos sean fórmula heroica que nazca del alma de los argentinos. Por un pasado de gloria y un presente de tolerancia y un futuro Venturoso, cantemos con fervor sus estrofas.
D I SCURSO Para conmemorar esta fecha, palabras alusivas a cargo de
R E TI RO D E LA BA N D E RA D E C E R EM O NI AS Nuestra bandera, símbolo de soberanía y gloria presidió esta celebración como protectora de nuestro destino de nación libre. Despedimos con un respetuoso aplauso a la Bandera de ceremonias.
G E N GLOSAS A LA V IR
Los grandes actos de los hombres, aquellos que conforman la historia de los pueblos, no pueden realizarse sin la intervención de Dios. En esta, nuestra gesta heroica del 24 de septiembre de 1812, fue la presencia de María nuestra Madre, bajo la advocación de la Virgen de la Merced, la que hizo posible este importante triunfo. Como en el pasado ayudaste a nuestros patriotas, hoy te pedimos que ilumines a nuestros gobernantes para que busquen los caminos de justicia, paz, equidad, y el bien común de nuestro pueblo Por ello todos juntos rezamos la oración a Nuestra Señora de la Merced Generala del Ejército Argentino A ti recurrimos, oh Virgen Generala de nuestros Ejércitos, para implorar tu maternal protección sobre esta Patria Argentina. Te recordamos que aquí se alzó el altar donde se glorificó a Jesús Eucarístico ante el mundo entero; que nuestra bandera se izo en la presencia augusta de tu divino Hijo; que los colores nacionales cruzan sobre tu pecho cual blasón de Generala del Ejér cito Argentino Por todo esto te pedimos que protejas a nuestra Patria erigida según los designios divinos y que del uno al otro confín sepan los pueblos honrarla que al postrarnos ante tu imagen de Virgen Generala resuene esta unánime aclamación: ¡Tú eres la gloria de nuestra Patria. Tú eres la honra de nuestro pueblo! ¡Tú la Generala de nuestro Ejército! Virgen y Señora Nuestra de la Merced, a ti suplicamos que nos alcances la verdadera libertad de los hijos de Dios y nos hagas libres de cualquier esclavit ud, de modo que experimentemos en nosotros la alegría de salvación. Amén
N F IN AL IZ AC IO
Con este sencillo pero sincero homenaje damos por finalizado el acto.
PALABRAS ALUS I VAS
Mañana se celebrará otro aniversario del triunfo patriota en Tucumán, que constituye para los argentinos y muy especialmente para los tucumanos, la oportunidad para rendir homenaje a quienes en los albores de la nacionalidad, dieron ejemplo a las generaciones venideras de dignidad moral y sacrificio heroico para salvar los desti nos de la Patria Naciente. De cómo fue y cómo se resolvió la batalla en el Campo de las Carreras son hechos que con seguridad muy pocos tucumanos ignoran. El triunfo obtenido bajo la protección de Nuestra Señora de la Merced, consagrada por Belgrano Virgen Generala del Ejército, coronó el gesto heroico de un pueblo y un ejército empeñados en salvar la libertad y la soberanía nacional. Esta conmemoración obliga a una nueva toma de conciencia acerca de cómo debemos proceder los argentinos cuando los destinos de la patria lo requieran. La unión de todos y la voluntad colectiva de ofrecer bienes en aras del porvenir de la nación y su grandeza son imperativos morales que no deben ser desoídos y que, en estos momentos, vuelven a tener la plena vigencia que tuvieron aquel 24 de septiembre de 1812, cuando el pueblo tucumano con una profunda religiosidad y amor a la patria no dudó un instante en apoyar desinteresadamente, con dinero y hombres, al ejército de Belgrano y poner toda su confianza en la Virgen para triunf ar. Los desafíos de nuestro tiempo nos exhortan a imitar la fe y la esperanza de aquellos hombres y mujeres, para así llegar a una realización personal y comunitaria en el camino hacia una patria nueva con hijos capaces de soñar con ideales nobles.