Meditación cuarta ¿Cuáles son los problemas que Descartes plantea -y a los que da solución- en esta meditación?
Temas Temas principales: nociones de lo verdadero verdadero y de lo falso, la justicación del error. En esta meditación Descartes se encarga de demostrar que Dios no es la causa de nuestros errores ni de nada malo. Se suscribe en el concepto tradicional de teodicea: si todo en el mundo es causado por Dios, omnipotente es decir, que puede todas las cosas! y bondadoso, "#or qu$ %ay mal en el mundo& 'unque Descartes %ace $nfasis m(s bien en su aspecto gnoseológico: "por qu$ formulamos juicios falsos& f alsos& ¿Cómo se ubica el planteo cartesiano de la cuarta meditación en función del desarrollo general de las Meditaciones metafísicas? metafísicas ?
En la primera meditación, aplica la primera regla del m$todo, aquella que nos da el criterio de verdad: no tenemos que aceptar nada de lo cual podamos dudar. dudar. En consecuencia, ofrece of rece los distintos argumentos de duda, a partir de los cuales pondr( en duda todo lo que $l cre)a, aquello que cre)a desde ni*o y lo que le legó la tradición. En la segunda meditación aparece el cogito, que le permite recuperar el primer conocimiento: el de su propia
e+istencia en tanto pensante. ste ser( el primer principio de su losof)a. Entonces, inicia una secuencia en la cual $l eval-a su propias ideas, y sin recurrir a nada e+terno, empiea a recuperar conocimientos /aquellos que %ab)a puesto en duda al principio0. El segundo conocimiento que recupera es el de la e+istencia de Dios. 1as pruebas de la e+istencia de Dios se encuentran en la tercera meditación /y otro en la quinta0. Descartes considera la idea que $l mismo tiene de Dios /innata0, y a partir de ello saca ciertas consideraciones tales como Dios es perfecto, omnipotente, etc. El problema que se plantea en la cuarta meditación es el siguiente: si $l sabe clara y distintamente que Dios e+iste, que es verdadero y bueno, "por qu$ cometemos juicios errados& ¿Cuál es el carácter ontológico que asigna a signa Descartes al error?
Descarta que provenga de Dios, ya que todo lo que es es causado por Dios, y por lo tanto es verdadero y real. El error no es algo, no tiene realidad, y por lo tanto no es producido ni por Dios ni por nada, ya que no %ay car(cter ontológico en el no!ser. ¿Por qué la facultad de la voluntad es la que nos ace saber que estamos ecos !a imagen y seme"an#a de Dios$? ¿%e puede formular alguna ob"eción a esta formulación?
El %ombre no produce verdades, $stas son creadas por Dios. Dios crea verdades, no sólo las asiente. Seg-n la interpretación de Sartre, el %ombre sólo es libre para asentir a las verdades que remiten a relaciones entre esencias ya pre!establecidas por Dios. En este sentido, el m(+imo grado de libertad, aquel que nos muestra que estamos %ec%os a imagen y semejana de Dios, es la libertad de no estar coaccionado e+ternamente. Se trata de una libertad para asentir a verdades pre!establecidas. ¿&n qué sentido el error es negación y en qué sentido el error es privación?
Descartes usa los conceptos de negación y privación seg-n su uso en la escuela. Siguiendo el sentido preciso que le llega de la tradición, $l primer t$rmino designa una carencia, a la falta de algo que no me es debido , a diferencia de la privación, que reere a una ausencia de algo que sí me es debido.
Si partimos de la consideración de Dios como causa, el error es negación: $l no est( obligado a darnos todas las perfecciones que nos faltan, y por tanto, no tiene el deber de crearnos de forma tal que no podamos equivocarnos. Es por esto mismo, que el error no es culpa de Dios. 2isto desde este primer punto de vista, es decir, desde Dios, el error es negación. Sin embargo, respecto a nosotros mismos, el error es privación: nosotros somos responsables del error, ya que tenemos que esforarnos para no emitir juicios falsos y tener concepciones claras y distintas. En ese sentido el error es responsabilidad nuestra, porque es producto de nuestra voluntad: las ideas pasan a ser falsas por acto de mi propia voluntad, al armar o negar cosas oscuras y confusas.
“De ese modo, entiendo que el error, en cuanto tal, no es nada real que dependa de Dios, sino sólo una privación o defecto, y, por tanto, que no me hace falta para errar un poder que Dios me haya dado especialmente, sino que yerro porque el poder que Dios me ha dado para discernir la verdad no es en mí innito. Sin embargo, esto no me satisface del todo; pues el error no es una pura negación, o sea, no es la simple privación o carencia de una perfección que no me compete, sino la falta de un conocimiento que de algn modo yo debería poseer. !, considerando la naturale"a de Dios, no me parece posible que me haya dado alguna facultad que sea imperfecta en su g#nero, es decir, que care"ca de alguna perfección que le sea propia; pues si es cierto que, cuanto m$s e%perto es el artíce, m$s perfectas y cumplidas son las obras que salen de sus manos, &qu# ser podremos imaginar, producido por ese supremo creador de todas las cosas, que no sea perfecto y acabado en todas sus partes' !, adem$s, no hay duda de que Dios pudo crearme de tal modo que yo no me equivocase nunca( &tendr# que concluir que es me)or para mí errar que no errar'*
Si las ideas viniesen de Dios ser)an perfectas y verdaderas. 1a cuestión de fondo es: "Dios pudo %abernos creado de forma tal que no nos equivoc(semos nunca& S), pero no lo %io /v$ase ppio. 33340. En relación con la moral del Discurso, para Descartes el error est( ligado al pecado porque el que juga bien, act-a bien. #or eso, en la cuarta meditación arma que al equivocarse se peca. ¿Cuáles son las dos facultades que concurren en la causa del error? ¿&n qué sentido el error es causado por la con"unción de ambas' y no de cada una por separado?
5i el entendimiento solo, ni la voluntad sola, pueden producir errores. El entendimiento sólo tiene ideas, pero tener ideas no signica pronunciarse respecto de ellas. 6uando interviene la voluntad y se pronuncia, aparece la posibilidad de emitir juicios erróneos. 1a voluntad, adem(s de querer y no querer, arma o niega. 1a posibilidad del error para Descartes est( dada por la conjunción de estas dos facultades, una de ellas nita el entendimiento! y la otra innita voluntad!, y no de la acción de cada una por separado.
¿Cuáles son las distintas argumentaciones por las cuales Descartes intenta "usti(car el eco de que' a pesar de que Dios pudo abernos creado de forma tal que no nos equivocásemos nunca' no lo a eco as)?
Se trata de argumentos de teodicea que buscan justicar el mal, en este caso del mal en su forma gnoseológica: el error. #rimer argumento: 1os nes de Dios son impenetrables para nosotros, nes a los cuales nosotros no podemos acceder. Ser)a incorrecto que nosotros quisi$semos averiguar por qu$ Dios %io lo que %io, ya que nosotros somos seres nitos y no podemos conocer todo lo que implica su innitud. Segundo argumento: 5o se tiene que considerar una sola cosa por separado cuando uno va a evaluar la perfección del todo. Es posible que la imperfección de una parte del conjunto este, de alguna manera, aportando a la perfección del todo /es decir, de la creación de Dios en su totalidad0. ¿Cuál es la "usti(cación cartesiana para eliminar la posibilidad de que Dios sea enga*ador? ¿Cuáles son las consecuencias de esto en función de la evaluación que ace Descartes de sus propias facultades?
Elimina la posibilidad de que Dios sea enga*ador: en efecto, el enga*o implica imperfección. En el fraude %ay imperfección. De esta forma, eliminó el argumento de duda que dio en la primera meditación. Es imposible que Dios nos %aya creado de forma tal que nos equivoquemos sistem(ticamente. ¿+ué dos tipos de libertad distingue Descartes?
#or un lado, el libre albedr)o , que es el grado m(+imo de libertad. Equivale a voluntad. Es lo que nos %ace emitir un juicio por el %ec%o de que lo conocemos con muc%a evidencia. 6uanta m(s evidencia %aya que nos %aga sentirnos obligados a emitir un juicio, mayor libertad en sentido propio tenemos. Estar irresistiblemente inclinado a pronunciar las verdades eternas creadas por Dios. El libre albedr)o es simplemente el no estar coaccionado por causas7agentes e+ternos a la %ora de emitir juicios o de obrar. /6r)tica de Sartre: estamos
determinado por las ideas eternas creadas por Dios0. Es el que se ejerce cuando uno se pronuncia sobre cosas que se conocen con claridad y distinción. #or otro lado, encontramos la libertad de indiferencia , es el grado menor de libertad. 6onsiste en no sentirse inclinado ni por una cosa ni por otra. 5o se encuentran mayores motivos para pronunciar ' que para pronunciar 8, o para %acer una cosa u otra. 5o estamos determinados a obrar de una manera u decir algo /opuesto al sentido com-n, en donde $sta forma de libertad pareciera ser la mayor0.
9uinta parte del D 'll) busca mostrar los frutos de su m$todo. ;ealia una comparación entre el ser %umano y el animal: Descartes sostiene una concepción mecanicista de los animales /act-an seg-n la lógica de
ace la transición de los conocimientos a priori /cómo conocer atributos de Dios, etc.0 %acia los conocimientos cient)cos. 1a metaf)sica es lo que permite obtener otros conocimientos en otros campos como la f)sica y la medicina. Se+ta parte del D Es posible establecer una relación entre los pasajes con connotación moral de $sta ?ta parte con los pasajes de la @ra parte. ;estrepo y otros int$rpretes %acen m(s %incapi$ entre las diferencias de enfoque entre ambas, %ablando de un cambio de tono casi total: va desde una cuestión m(s interna de la moral, del dominio del sujeto sobre s) mismo, de una moral cuyo sujeto es individual /ya que solo %abla de s) mismo0, %acia un enfoque muc%o m(s plural, donde el sujeto es la comunidad. Atras cuestión similares es: la -ltima de las m(+imas /referente a lo que Descartes eligió
seguir en su vida: el cree que puede aportar al bien com-n con su ocupación0 y la se+ta parte. Descartes se encarga de enfatiar cu(n importe es publicar los propios avances cient)cos: ser)a un gran pecado no darlos a publicidad, ya que estos conocimientos nos permitir)an llegar a un mayor grado de bienestar. l entiende que mantener ocultos los propios conocimientos es un gran pecado, ya que se privar)a al resto de sus posibles frutos. En este conte+to, se reere a cierta ley o deber que nos obliga a procurar el bien general de todos los %ombres en cuanto ello este en nuestro poder /Belemento de carga moral0. 'dem(s, se ocupa de justicar que, a pesar de estar diciendo todo esto, decide no publicar en vida. 4nversión de la imagen b)blica del C$nesis: comer del (rbol del conocimiento como un pecado. “+ero tan pronto como hube adquirido algunas nociones generales de la física y comen"ado a ponerlas a prueba en varias dicultades particulares, notando entonces cu$n le)os pueden llevarnos y cu$n diferentes son de los principios que se han usado hasta ahora, creí que conservarlas ocultas era grandísimo pecado, que infringía la ley que nos obliga a procurar el bien general de todos los hombres, en cuanto ello est# en nuestro poder. +ues esas nociones me han enseado que es posible llegar a conocimientos muy tiles para la vida, y que, en lugar de la losofía especulativa, enseada en las escuelas, es posible encontrar una pr$ctica, por medio de la cual, conociendo la fuer"a y las acciones del fuego, del agua, del aire, de los astros, de los cielos y de todos los dem$s cuerpos, que nos rodean, tan distintamente como conocemos los ocios varios de nuestros artesanos, podríamos aprovecharlas del mismo modo, en todos los usos a que sean propias, y de esa suerte hacernos como dueos y poseedores de la naturale"a. -o cual es muy de desear, no sólo por la invención de una innidad de articios que nos permitirían go"ar sin ningn traba)o de los frutos de la tierra y de todas las comodidades que hay en ella, sino tambi#n principalmente por la conservación de la salud, que es, sin duda, el primer bien y el fundamento de los otros bienes de esta vida, porque el espíritu mismo depende tanto del temperamento y de l a disposición de los órganos del cuerpo, que, si es posible encontrar algn medio para hacer que los
hombres sean comnmente m$s sabios y m$s h$biles que han sido hasta aquí, creo que es en la medicina en donde hay que buscarlo.*
Entiende el conocimiento como algo que nos permite dominar la naturalea, de obtener los frutos de la naturalea con poco trabajo, y cómo aquello que nos permite alcanar la conservación de la salud /el bien m(s importante0. En esta primera parte encontramos un car(cter moral del conocimiento, que %ace que sea un deber el utiliarlo para el bien general de los %ombres. 'dem(s, aparece una comparación con la losof)a de las escuelas: mientras que la losof)a escol(stica no tiene ning-n resultado en la pr(ctica, ya que es puramente especulativa, en cambio, la que $l propone resulta muy -til y trae buenos resultados para el com-n de los %ombres. Estos conocimientos de car(cter pr(cticos nos permitir)an %acernos due*os de la naturalea. Esto se lograr)a por la invención de articios y por la conservación de la salud /vista como cierta condición para que los %ombres sean m(s sabios0. (s adelante, se*ala la importancia del car(cter acumulativo de los saberes. >ace referencia a una comunidad de investigadores7cient)cos que van sumando saberes a lo que sus predecesores le legaron. 1o novedoso de $ste pasaje es el se*alamiento del car(cter progresivo del saber y la mención al trabajo en conjunto con los otros. Su m$todo es un buen m$todo porque permite obtener estos conocimientos tan -tiles para la comunidad.
"#or qu$ Dios no es e+tenso para Descartes& 1o e+tenso es divisible, y ser indivisible es una imperfección /v$ase ppio. 334440. Dios no es corpóreo. #rimera meditación: suspende el juicio incluso de cosas que le aparecen como claras y distintas, pero a partir de los argumentos pone en duda incluso esas ideas.