Apunte de Cátedra nro. 7: Principales corrientes teóricas de la Antropología
Apunte de Cátedra
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Principales corrientes teóricas de la Antropología Apunte de Cátedra [Se reproduce aquí lo sustancial de los capítulos homónimos publicados en Apertura a la la Antropología Antropología,, !!"# $%%&7%'
Introducción
(erem eremos os a co cont ntin inua uaci ción ón las má máss impor importa tant ntes es co corr rrien iente tess teór teóric icas as de la Antro Antropol pologí ogía a )* su inicia iniciall +uente +uente ilumin iluminist ista. a. -n princip principio, io, las clásic clásicas as,, en su ma*oría coetáneas * emergentes del proceso de colonialismo occidental, entre la segunda mitad del siglo / 0uego los mo1imientos posteriores, en su ma*oría contemporáneos * resultado de los procesos de descoloni2ación. 0ass repres 0a epresent entac acion iones es de la real realida idad d &ent &entre re ella ellass la cienc ciencia ia&& nunc nunca a son son desinteresadas ni neutrales respecto a intereses de 3poca * a la pu4a entre racion racionalid alidade adess acord acordes es con las contra contradic diccio ciones nes soc sociale iales. s. -sto -sto nos aparta aparta de entender tambi3n los debates teóricos como meras discusiones personales entre cientí5cos, * nos coloca ante la necesidad de desentra6ar los ecos de los que se hace cargo cada corriente de pensamiento * el porqu3 de su 1igencia * arraigo. ecordemos que la cuestión principal de la Antropología es la de la otredad cultural, construido como resultado del contraste de representaciones dentro de la e8pansión * dominio occidental * la necesidad de dar respuesta cientí5ca a los interrogantes de 3poca, básicamente sobre la di1ersidad de modos )culturas, en +unción de los intereses dominantes. Así, Así, al es esta tabl blec ecer er una una relac elació ión n de in9u in9uen enci cia a o dete deterrmina minaci ción ón de las las princi principal pales es +uer2as +uer2as eco económ nómico& ico&pol políti íticas cas que condic condiciona ionaro ron n e impuls impulsar aron on los intereses cientí5cos en general * al pensamiento antropológico en particular )e incluso hacen a la de5nición de su ob4eto, nos situamos, en principio, en la etapa mercantil del capitalismo inicial europeo, matri2 histórica desde la cual se reali2a el proceso de e8pansión colonial. A partir de aquí, esa ampliación cruenta de la apropiación por parte de las potencias colonialistas e imperialistas se acentuará durante las etapas del capitalismo industrial, luego 5nanciero multinacional * en la actual globali2ación. Cuál +ue el inter3s preponderante de la e8pansión mercantil de la etapa anterior al surgimiento de la Antropología; 0a ma*oría de los estudiosos hablan de
s>.. Aunq Aunque ue resu result lte e esquemá esquemátic tico, o, con estos estos propó propósit sitos os hegemó hegemónic nicos os poco poco podía podía import importar ar si los territorios por -uropa tu1ieran o no habitantes en su interior, * menos si 3stos eran o no humanos. Por eso, estudios del diario de 1ia4e de Cristóbal Cristóbal Colón se han entretenido entretenido en contar contar la centena centena de 1eces que mencionó la pala palabr bra a * la esca escasa sa ca cant ntid idad ad de oc ocas asio ione ness en que que se re5r re5rió ió a los los del lugar, sin di+erenciarlos ma*ormente del paisa4e, +rutos, bestias, colo co lore ress * sabo saborres que que esta estalla llaba ban n ante ante sus sus se sent ntid idos os.. Pod Podrí ríam amos os usar usar esta esta apare aparente nte imagen imagen de desint desinter3 er3ss por el otro, otro, en t3rminos humanos, para in+erir Antropología )cátedra Sabarots !$$
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cuál podía ser el inter3s que el mismo despertara en el pensamiento europeo dominante; ?abría un propósito principalmente cientí5co desarrollado a partir de esta 1isión; 1i sión; Podemos suponer que no, al menos en +orma directa. Sin embargo, el e8tra6amiento siempre estu1o latente, aun en las meras descri descripci pcione oness que natura naturali2 li2aba aban n la prese presenci ncia a humana humana en el > mundo mundo.. @uchas de esas preguntas iban a ser respondidas por las 4erarquías intelectuales de la iglesia cristiana * por los 5lóso+os de la ilustración, siglos más tarde. -l interr interroga ogante nte centra centrall iba a consis consistir tir en establ establece ecerr un ne8o ne8o entre entre eso esoss ser seres es nati1os de Am3rica * luego de Asia * +rica )que por estar en un +ueron llamados salvajes salvajes * la ci1ili2ación de -uropa$. Bcurría que el pensamiento iluminista )contrario al misticismo dominante de la -dad @edia entendió encontrar ese ne8o con el origen tambi3n por un 5n prác prácti tico co * de su 3poc 3poca, a, no por por la me mera ra inte intenc nció ión n de reco recons nstr trui uirr el pasa pasado do.. /nteresaba la re+orma del mundo +eudal&medie1al precapitalista de parte de una burguesía en ascenso que &por medio de la ciencia& debía indagar por las causas del mundo * su dinámica, sobre todo de su +uturo. 0as preguntas preguntas hechas desde el capital eran desa+íos a la ciencia, al ra2onamiento, a la posibilidad de que el hombre * *a no los oráculos * la pro1idencia dieran respuestas. 0a idea de progreso estaba 1inculada a esa 1isión de un +uturo signado por el desarrollo inagotable de una tecnología creciente, re1olucionaria * que a su 1e2 producía la necesidad de re+ormas sociales * conocimientos que estu1ieran acor ac ordes des co con n nue1a nue1ass nece necesi sida dades des de tran trans+ s+or ormac mació ión n del del mund mundo o ma mate teri rial al,, e incl inclus usi1e i1e de los los espí espírit ritus us )cul )cultu tura ra deci decimo moss ahor ahora a de la +uer2 +uer2a a de trab traba4 a4o o mediante la educación uni1ersal. Claro que a la 1e2 se generaban +uer2as conser1adoras. Pero lo principal es que el conte8to histórico impulsó interrogantes que el /luminismo haría que se plasmaran en las corrientes teóricas de las ciencias *a constituidas )aturales o en 1ías de hacerlo )entre )entre ellas la Antropología Antropología a partir de la consolidac consolidación ión de la @odernidad. -n el conocimiento sobre el otro, otro, como +undamentara ousseau, el hombre ci1ili2ado podía encontrar cla1es para su me4ora * respuestas a muchos de sus problemas problemas contemporáneos contemporáneos.. D esto se continuaría continuaría como e4e en el e1olucionism e1olucionismo o )* sus epígonos, en el mar8ismo * en e n general en las posiciones dial3cticas. -n el pasa4e pasa4e del capitalismo capitalismo mercantil mercantil al industrial, industrial, la pregunta pregunta principal se iría a corpori2ar en una necesidad de establecer con ma*or detalle el cómo del proceso de desen1ol1imiento de la ?umanidad hasta llegar a la ci1ili2ación. -se proceso lle1ó el nombre de evolución * la corriente de pensamiento acorde +ue precisamente el e1olucionismo. 0as teori2aciones se entornaron alrededor del empu4e * desarrollo de las ciencias naturales durante el siglo / * el 3n+asis puesto &de acuerdo con los distintos autores& en la relación entre la e1olución o progreso de la tecnología * de las instituciones. Pero en el sub*acente proceso real se situaba la e8plotación e8trema de la población de las colonias como mano de obra en estado de ser1idumbre, a la que tambi3n se in1olucraba en las
Parte de esta respuesta +ue considerarlos descendientes de la población de los orígenes, orígenes, que no había sido redimida, de acuerdo con los mitos de la 3poca. 0os s> ame americ ricano anoss +uero +ueron n 1istos 1istos,, entonc entonces, es, como como : ab& ab&orígenes. orígenes. 1
Antropología )cátedra Sabarots !$$
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cuál podía ser el inter3s que el mismo despertara en el pensamiento europeo dominante; ?abría un propósito principalmente cientí5co desarrollado a partir de esta 1isión; 1i sión; Podemos suponer que no, al menos en +orma directa. Sin embargo, el e8tra6amiento siempre estu1o latente, aun en las meras descri descripci pcione oness que natura naturali2 li2aba aban n la prese presenci ncia a humana humana en el > mundo mundo.. @uchas de esas preguntas iban a ser respondidas por las 4erarquías intelectuales de la iglesia cristiana * por los 5lóso+os de la ilustración, siglos más tarde. -l interr interroga ogante nte centra centrall iba a consis consistir tir en establ establece ecerr un ne8o ne8o entre entre eso esoss ser seres es nati1os de Am3rica * luego de Asia * +rica )que por estar en un +ueron llamados salvajes salvajes * la ci1ili2ación de -uropa$. Bcurría que el pensamiento iluminista )contrario al misticismo dominante de la -dad @edia entendió encontrar ese ne8o con el origen tambi3n por un 5n prác prácti tico co * de su 3poc 3poca, a, no por por la me mera ra inte intenc nció ión n de reco recons nstr trui uirr el pasa pasado do.. /nteresaba la re+orma del mundo +eudal&medie1al precapitalista de parte de una burguesía en ascenso que &por medio de la ciencia& debía indagar por las causas del mundo * su dinámica, sobre todo de su +uturo. 0as preguntas preguntas hechas desde el capital eran desa+íos a la ciencia, al ra2onamiento, a la posibilidad de que el hombre * *a no los oráculos * la pro1idencia dieran respuestas. 0a idea de progreso estaba 1inculada a esa 1isión de un +uturo signado por el desarrollo inagotable de una tecnología creciente, re1olucionaria * que a su 1e2 producía la necesidad de re+ormas sociales * conocimientos que estu1ieran acor ac ordes des co con n nue1a nue1ass nece necesi sida dades des de tran trans+ s+or ormac mació ión n del del mund mundo o ma mate teri rial al,, e incl inclus usi1e i1e de los los espí espírit ritus us )cul )cultu tura ra deci decimo moss ahor ahora a de la +uer2 +uer2a a de trab traba4 a4o o mediante la educación uni1ersal. Claro que a la 1e2 se generaban +uer2as conser1adoras. Pero lo principal es que el conte8to histórico impulsó interrogantes que el /luminismo haría que se plasmaran en las corrientes teóricas de las ciencias *a constituidas )aturales o en 1ías de hacerlo )entre )entre ellas la Antropología Antropología a partir de la consolidac consolidación ión de la @odernidad. -n el conocimiento sobre el otro, otro, como +undamentara ousseau, el hombre ci1ili2ado podía encontrar cla1es para su me4ora * respuestas a muchos de sus problemas problemas contemporáneos contemporáneos.. D esto se continuaría continuaría como e4e en el e1olucionism e1olucionismo o )* sus epígonos, en el mar8ismo * en e n general en las posiciones dial3cticas. -n el pasa4e pasa4e del capitalismo capitalismo mercantil mercantil al industrial, industrial, la pregunta pregunta principal se iría a corpori2ar en una necesidad de establecer con ma*or detalle el cómo del proceso de desen1ol1imiento de la ?umanidad hasta llegar a la ci1ili2ación. -se proceso lle1ó el nombre de evolución * la corriente de pensamiento acorde +ue precisamente el e1olucionismo. 0as teori2aciones se entornaron alrededor del empu4e * desarrollo de las ciencias naturales durante el siglo / * el 3n+asis puesto &de acuerdo con los distintos autores& en la relación entre la e1olución o progreso de la tecnología * de las instituciones. Pero en el sub*acente proceso real se situaba la e8plotación e8trema de la población de las colonias como mano de obra en estado de ser1idumbre, a la que tambi3n se in1olucraba en las
Parte de esta respuesta +ue considerarlos descendientes de la población de los orígenes, orígenes, que no había sido redimida, de acuerdo con los mitos de la 3poca. 0os s> ame americ ricano anoss +uero +ueron n 1istos 1istos,, entonc entonces, es, como como : ab& ab&orígenes. orígenes. 1
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especu especulac lacion iones es e1oluc e1olucion ionist istas as conser conser1ad 1adoras oras,, que hablab hablaban an de in+erio in+eriorida ridad d cultural o hasta racial, para 4usti5car su subordinación. A continuación se 1erá el detalle de los aportes * discusiones acerca del +uncionalis +uncionalismo mo * del estructura estructural&+unc l&+uncionalis ionalismo. mo. Podríamos Podríamos agregar agregar la pregunta pregunta acerca de si la asociación entre el inter3s del capitalismo industrial )*a en 1ías de trans+ormarse en 5nanciero, donde la colocación de manu+acturas * productos es el prop propós ósit ito o prep prepon onde dera rant nte, e, no nec neces esit itar aría ía del co cono noccimie imient nto o del del funcionamiento interno de las sociedades otras *, otras *, por ende, la necesidad de no ahon ahonda darr tant tanto o en sus sus remo remoto toss oríg orígen enes es o su e1olu e1oluci ción ón sino sino de su escu escuet eto o presente, concebido, por lo demás como a&histórico, estático * no cambiante, en armonía con 1alores inherentes a cada sociedad, tal como re2aba el relati1ismo cult cultur ural al reci reci3n 3n inau inaugu gura rado do por por +unc +uncion ional alis ista tass * part partic icula ularis rista tas. s. Ee ahí ahí lo descarnado de la propuesta de uno de los pilares de la antropología clásica: <...los intentos de reconstruir la historia de las culturas y de los pueblos ... no son del más mínimo valor práctico para las tareas tareas de la administración administración o de la educación educación de los indígenas... indígenas..... Lo que el admini administr strado adorr o educad educador or de pueblo puebloss depend dependien ientes tes nec eces esit ita a sobre obre todo todo es un co cono noci cimi mien ento to deta detalllado lado de la orga organi niza zaci ción ón so soci cial al de las las co cost stum umbr bres es y cree creenc ncia iass de los los indígenas y un entendimiento de sus signi!cados y funciones... > )adcliFe&GroHn )adcliFe&GroHn [$I%$' $I7J: $!". Podríamos establecer asociaciones similares entre el inter3s dominante de cada ca da 3poca 3poca de desa desarr rrol ollo lo del del ca capit pital alis ismo mo en e8pa e8pans nsió ión n co con n el rest resto o de las las corrientes corrientes del pensamiento pensamiento antropológic antropológico; o; Puede Puede res resultar ultar esto una a*uda para 1isuali2ar en con4unto las teorías clásicas; Suponiendo una respuesta positi1a, un e4ercicio puede consistir en recordar los 1ínculos entre, por e4emplo, el a+án de análisis estructuralista )a lo 031i& Strauss * la necesidad de introducirse en las lógicas o +ormas de clasi5car el mundo mundo propi propias as de cada cada cultur cultura a &inclu &incluida ida la occiden occidental tal&, &, median mediante te catego categoría ríass uni1ersales, en el conte8to de e8pansión imperialista, cuando el mismo en+oque del etnólogo +ranc3s rei1indica el relati1ismo, a la 1e2 que desde6a los criterios históricos que tratan de e8plicar los +enómenos de contraste entre lo salvaje * lo moderno. moderno. Del Iluminismo a los clásicos [K' Iluminismo
". #higlino Conocimiento y transformación social
-s en el siglo (/// * en Lrancia, en el conte8to que precede a la e1olución Lrancesa, cuando se despliega en toda su magnitud el mo1imiento iluminista. Mn Mn con4unto de pensadores que abre1an en la 5loso+ía racionalista del siglo (// )Eescartes, Spino2a * 0eibni2 entre otros situarán en el e l centro de sus re9e8iones la noci noción ón de a2ó a2ón, en ínt íntima ima rela elación ción con la crít crític ica a a toda oda +or +orma de conocimiento dogmático * al hombre como su4eto del acto de conocer, hacedor Antropología )cátedra Sabarots !$$
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de la historia * las instituciones sociales. Postularán por ende una 5loso+ía social * política que desborda los sistemas a8iomáticos de la 5loso+ía precedente * que ahonda en la crítica de las instituciones 1igentes: la monarquía absoluta, la 4erarquía eclesiástica, la censura a las +ormas de pensamiento * e8presión, instituciones que coartan la libertad de los hombres * el camino al conocimiento de la naturale2a, de la naturale2a humana * de la sociedad. <$l siglo de %ousseau de &oltaire es el territorio de gestación de las grandes apuestas del hombre moderno...en los talleres de los poetas de los pensadores de los primeros libre pensadores que produjo la modernidad se fueron forjando las palabras que alimentaron los sue'os las esperanzas las movilizaciones de millones de seres humanos....palabras tales como libertad igualdad equidad fraternidad autonomía ciudadano democracia> )Lorster$III: N. Para el iluminismo, la a2ón será camino * 5n. 0os m3todos racionales permitirán acceder a la 1erdad, una 1erdad despo4ada de todo contenido teológico * a=n ontológico. -l conocimiento tendrá un 1alor práctico * 3ste será ante todo el cuestionamiento del orden 1igente. Cuestionamiento que adquirirá distintos 3n+asis, desde la radicalidad del pensamiento de ousseau, para quien nue1as instituciones debían sustituir las e8istentes, a @ontesquieu, para quien era posible introducir re+ormas en las mismas. Pensamiento * tradición intelectual &la del /luminismo& que recorrerá la @odernidad * que podemos rastrear ho* en el seno de los procesos sociales que caracteri2an a la sociedad occidental actual. Cuáles +ueron las 1icisitudes de esta corriente de pensamiento; Cuál su importancia con relación al conocimiento cientí5co * al surgimiento de las ciencias sociales * de la Antropología; Cuál su legado; Ou3 podríamos rescatar ho* de aquellas utopías; Eistintos autores se6alan dos 1ertientes, en el marco de los acontecimientos post&re1olucionarios%, que se gestan en el siglo /. Mna es aquella que se e8presa en una 5loso+ía conser1adora, que a5rma las instituciones que consolidan el orden burgu3s, que se aboca a describir * normati2ar lo e8istente e incluso postula la 1uelta a un statu(quo anterior &el &, toda 1e2 que las nue1as instituciones, pudiesen atentar contra el equilibrio social. -sta tradición se entronca con la denominada 5loso+ía positi1a * positi1ismo N, modelo Sistemas meta+ísicos abstractos que caracteri2aron la 5loso+ía del siglo (//.
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os re+erimos al ad1enimiento del orden democrático&burgu3s, dimensión política del capitalismo industrial * al surgimiento de dos nue1as clases sociales: el proletariado * la burguesía. 3
0a 5loso+ía positi1a postula una noción de progreso que se asienta en el orden * el control social, propuesta que se corresponde con la concepción del sistema social como un todo integrado, libre de con9ictos * contradicciones. -l positi1ismo, como m3todo de aplicación al estudio de los +enómenos sociales, se limita básicamente al dominio de lo mani5esto, la obser1ación * descripción de lo obser1ado, la e8plicación * la pretensión de predictibilidad son e4es centrales de esta concepción, en su 1ersión más gen3rica. 4
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del conocimiento cientí5co que signa a las ciencias sociales durante este siglo * en gran medida en el siglo . 0a otra 1ertiente será una 5loso+ía progresista, dos de cu*as mani+estaciones son el socialismo utópico, tal como @ar8 denominó a pensadores como Saint Simon, * el mar8ismo, que se propone dar cuenta de las contradicciones del nue1o orden 1igente * postula por ende la idea de superación del mismo. 0a 5loso+ía dial3ctica será directri2 en el pensamiento mar8ista. [K' -n el pensamiento mar8ista los hechos dados, aquello que , constitu*e una 1erdad parcial, transitoria, su4eta a su negación, de modo que las relaciones entre los hombres * de los hombres con la naturale2a no se agotan en las +ormas en que se mani5estan, sino en la posibilidad de trascenderlas. etoma de modo general así el contenido crítico del iluminismo. Por el contrario, el positi1ismo considera al orden +áctico, a los hechos tal como se dan, en t3rminos de 1erdad. Ee las dos 5loso+ías mencionadas, será la positi1ista la que sostiene gran parte del desarrollo de las ciencias sociales * las teorías consensualistas que predominan en las mismas. -stas teorías conciben los sistemas sociales a partir del equilibrio * obser1an los cambios como procesos que atentan contra el orden social. Con posterioridad surgirán, en el campo mismo de estas ciencias, las teorías que conciben la dinámica social en t3rminos de totalidades históricas atra1esadas por contradicciones sociales. -stas nociones serán re&signi5cadas por la antropología contemporánea en los desarrollos críticos que se gestan desde la disciplina misma, de +rente a la ruptura del r3gimen colonial hacia mediados del siglo * que impactarán crucialmente en la Antropología que había surgido ba4o la impronta de la e8pansión colonial europea. Razón y progreso
0os pensadores del siglo (/// comparten, más allá de sus di+erencias, la fe en la ra2ón. <)ás que los pensadores de cualquier *poca anterior los hombres del +luminismo adherían !rmemente a la convicción de que la mente puede aprehender el universo y subordinarlo a las necesidades humanas )... ,tilizando los conceptos y las t*cnicas de las ciencias físicas emprendieron la tarea de crear un mundo nuevo basado en la razón y la verdad )... pero no la verdad como revelación tradición o autoridad sino aquella cuyos pilares gemelos serían la razón y la observación )... -i la ciencia había revelado la acción de las leyes naturales en el mundo físico quizá podían descubrirse leyes similares en el mundo social y cultural )eitlin $IQ": $%. Rodos los aspectos de la 1ida social &las instituciones políticas, religiosas, morales& serán anali2ados a tra13s de un en+oque en el que se intenta aunar los m3todos deducti1os e inducti1os, aquellos que pro1ienen del racionalismo * del empirismo &dos 1ertientes 5losó5cas que recogen del siglo anterior& * en este intento radica uno de los aportes del /luminismo al conocimiento cientí5co en su concepción moderna. -l estudio de las instituciones 1igentes arro4ará como resultado una 1isión crítica de las mismas. Conclu*en las más de las 1eces que son contrarias a la ra2ón, por tanto contrarias a la naturale2a humana * reclaman entonces un Antropología )cátedra Sabarots !$$
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cambio, sea la sustitución, sea la re+orma de las mismas. -sas instituciones, heredadas del medioe1o, oprimen a los hombres * les impiden la reali2ación de sus potencialidades. Será la ra2ón, el conocimiento racional antepuesto a las creencias irracionales, la 1ía que posibilitará el camino hacia la per+ectibilidad ilimitada del espíritu humano. a2ón * progreso se entrela2an: el progreso humano es posible mediante el a1ance de la ra2ón * la ra2ón se despliega en el progreso inde5nido de lo social&histórico. 0a con5an2a en la ra2ón otorga a este mo1imiento un 3n+asis optimista e ingenuo a su 1e2. 0os límites del conocimiento racional, del conocimiento cientí5co, del t3cnico * tecnológico, son de di1ersa índole. Por eso la historia de los siglos subsiguientes * en gran medida la crítica a la idea de progreso * e1olución social pro1eniente de las ciencias sociales &* especí5camente de la Antropología& relati1i2arán * hasta re+utarán estas ideas a la lu2 de los procesos históricos que harán mella en estas nociones. Iluminismo y Antropología
Eado que para los iluministas la ra2ón es uni1ersal, la humanidad encuentra su unicidad a partir de esa uni1ersalidad, que se e8presa de +orma particular en los distintos pueblos. -sta di1ersidad será el modo que adquiere la ra2ón seg=n el espacio geográ5co * tiempo histórico. Mni1ersalidad * particularidad serán algunos de los problemas en los que centra su atención la Antropología. -ntre ellos, las concepciones acerca de la di1ersidad cultural * +ísica de los pueblos que -uropa en su e8pansión colonialista. 0a mirada que predomina hacia los pueblos no occidentales durante el siglo (/// tendrá un carácter ben31olo * tolerante. Lundamentalmente es ousseau, a tra13s de la metá+ora del J, quien plasma esa mirada. -l es concebido como representante del hombre de origen, de lo aut3ntico *, dado que no ha sido corrompido por las instituciones que oprimen al hombre europeo, le es posible establecer relaciones armónicas con la naturale2a * con los otros hombres. Por ende, de 3l pueden e8traerse ense6an2as. -l hombre europeo, de acuerdo con esta postura, habría sido sal1a4e * habría e1olucionado hacia la ci1ili2ación. o obstante, en esta e1olución un orden social concreto, en este caso el absolutismo, puede de1enir inadecuado * contrario a la naturale2a del hombre por irracional. 0a metá+ora adquiere entonces un 1alor instrumental: el cuestionamiento a las instituciones 1igentes en la -uropa que precede a la e1olución Lrancesa. Mn siglo despu3s, otra será la imagen * la mirada predominante hacia los pueblos no occidentales. Serán 3stos los que deberán e8traer ense6an2as de los europeos, será -uropa quien representará la c=spide de la civilización * a ella deberán asimilarse los salvajes * bárbaros. 0a Antropología surge en el marco de esta concepción, la de una =nica e1olución histórica * una =nica cultura, a saber: la de Bccidente. Sin embargo, en las primeras d3cadas del siglo se operará un cambio crucial. Será el pasa4e a la concepción de pluralidad de culturas. -sta metá+ora remite a la comple4a noción de u como una condición hipot3tica, que puede, seg=n ousseau contribuir al conocimiento de la naturale2a real del hombre. 5
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El legado del iluminismo
<ay dos ilustraciones/ una profundamente reivindicable )K y que tiene que ver con los conceptos de autonomía emancipación con la relación compleja entre libertad e igualdad entre orden normativo como ley jurídica e igualdad material )... con la idea de un hombre que es capaz de dialogar críticamente con otro hombre que es capaz de construir la comunidad de habl hablan ante tess que que raci racion onal almen mente te pued pueden en lleg llegar ar a ente entend nders erse e )... podemos hablar entonces de una ilustración libertaria )... )... 0ero tambi* tambi*n n tenemos tenemos )... )... otra ilustración que va desplegando una racionalidad absorbente cuanti!cadora )... que va dominando dominando la natu natura rale leza za que que supo supone ne que que el homb hombre re es es esen enci cial alme ment nte e estruc estructur tura a racion racional al )... )... que en la construcción de modelos de raci racion onal aliz izac ació ión n )... !nal !naliz iza a devor devoran ando do las plur plural alida idade des s las las diferencias y al propio espíritu critico )... ,na ilustración que se convirtió en ideología de una sociedad imperial en ideología de la racionalización cientí!co(t*cnica del mundo.> mundo.> )Lorster $III: Q7 -ste -ste lega legado do res esul ulta ta co comp mple le4o 4o:: por por un lado lado,, los los idea ideale less de libe libert rtad ad,, autonomía, igualdad, equidad, +raternidad, * por otro estos mismos 1alores, pero debilitados * a=n negados por los desarrollos históricos concretos que Bccidente mism mismo o irá irá prod produc ucien iendo do en el mund mundo o de la mund mundia iali2 li2ac ación ión.. 0o 0oss idea ideales les que que impregnaron los mo1imientos sociales * políticos de utopía * pro*ecto durante dos siglos al menos, aparecen ho* 1aciados de pasión. Plantear una re&ilustración se sería ría de alg= alg=n n modo modo rei1i rei1ind ndic icar ar la idea idea de la auto autono nomía mía co como mo princ princip ipio io de rebeldía, dice Lorster, una 1ía de interpelación crítica al presente.
Evolucionismo el primer paradigma antropológico
)aría $lina &itello El paradigma! cientí"co del siglo #I#
-l paradigma es dado> )hun R., en rot2 $I"%: %N. Seg=n uhn, las ciencias no progresan siguiendo un proceso uni+orme por la aplicación de un hipot3tico m3todo cientí5co. Se 1eri5can, en cambio, dos +ases di+erentes de desarr desarrollo ollo cientí5c cientí5co. o. -n un primer primer moment momento, o, ha* un amplio amplio consen consenso so en la comunidad cientí5ca sobre cómo e8plotar los a1ances conseguidos en el pasado ante los problemas e8istentes, creándose así soluciones uni1ersales que uhn llamaba < paradigmas>. paradigmas>. -n un segundo momento, se buscan nue1as teorías * herramientas de in1estigación, con+orme las anteriores de4an de +uncionar con e5cacia. Si se demuestra que una teoría es superior a las e8istentes entonces es aceptada * se produce una . cientí!ca>. Rales Rales rupturas re1olucionarias traen traen consig consigo o un cambio cambio de concep conceptos tos cientí cientí5co 5cos, s, proble problemas mas,, sol soluci ucione oness * m3todos, es decir, nue1os paradigmas. 6
Antropología )cátedra Sabarots !$$
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-l inicio del siglo /, en el que surgirá la nue1a ciencia antropológica, encuentra a la sociedad europea con1ulsionada por los e+ectos trans+ormadores de los sucesos históricos ocurridos en los =ltimos a6os del siglo anterior. os re+erimos a la re1olución +rancesa, por un lado, * a la re1olución industrial, por el otr otro. Amba Ambass ma marrca carron el co comi mien en2o 2o de un proc proces eso o pro+ pro+un undo do en la es es+e +era ra económica, política * social de -uropa, que cambiaron radicalmente la +orma de 1ida de las sociedades europeas en principio * del resto del mundo despu3s. -l clero * la noble2a perdieron gran parte de sus pri1ilegios )tierras, títulos, cargos hereditarios, etc. * la burguesía, que *a había asumido el control económico, se a5rmaba políticamente en el nue1o orden social. 0oss grande 0o grandess cambio cambioss son sie siempr mpre e res resist istido idoss * combat combatido idoss por aquell aquellos os sectores cu*as prerrogati1as son 1ulneradas. Ee esta manera, nos encontramos que que en los los prim primer eros os a6os a6os de este este sigl siglo o /, /, las las anti antigu guas as clas clases es diri dirige gent ntes es intentarán 1ol1er * restaurar, 4unto con el principio de la legitimidad de sus pri1ilegios, el respeto a los poderes absolutos, así como tambi3n el sentido de la 4erarquía * de la autoridad que detentaban antes de la re1olución burguesa. -n este intento por recuperar un tiempo perdido, las clases dominantes re1estirán al pasado de signi5caciones idílicas * lo re1alori2arán a tra13s de las tradiciones. -ste mo1imiento encuentra tambi3n su e8presión e8presión en la producción producción intelectual * artística de la 3poca. Propone la recuperación de los 1alores nacionales * de las tradiciones populares, tomando el nombre de omanticismo. -sta mirada retrospecti1a tambi3n se re9e4a en la b=squeda antropológica. Será Será el punt punto o de part partida ida del del +olTl +olTlor ore, e, disc discip ipli lina na que que dent dentro ro del del mo1im mo1imien iento to romántico se ocupará de recuperar e incorporar al patrimonio cultural los 1alores nacionales * las costumbres populares a la historia de las modernas naciones europe europeas. as. Pe Pero ro estos estos =ltimo =ltimoss intent intentos os por sos sosten tener er los 1estig 1estigios ios del antigu antiguo o r3gimen quedarán barridos del escenario europeo por el empu4e de las nue1as +uer2as surgidas de la re1olución industrial. -n este siglo surgirá pu4ante una burguesía apo*ada en el soporte ideológico del liberalismo. Por otro lado, nacerá una clase traba4adora que mani+estará su conciencia de clase. 0o nue1o no es tanto la e8istencia de una clase obrera, sino que la misma toma conciencia simultáneamente de su miseria * de su +uer2a. -l resur resurgim gimien iento to rel religi igioso oso,, el conser conser1ad 1aduri urismo smo polític político o * el nacion nacionalis alismo mo romántico de las primeras d3cadas, retardaron pero no detu1ieron el surgimiento de las ciencias del hombre. A lo largo de este siglo los continuos a1ances en la +ísica, la química * la t3cnica aplicadas a la industria, el comercio * la guerra, trasmitier trasmitieron on con5an2a con5an2a en el progreso progreso * 4erarqui2ar 4erarqui2aron on el m3todo cientí5co. cientí5co. 0a ciencia ciencia decimonónica decimonónica sostenía sostenía una cosmo1isión cosmo1isión que in+ormaba sobre un mundo regular, ordenado * obser1able, con modi5caciones graduales en el tiempo * en el espacio, cu*os +enómenos * +uncionamiento se e8plicaban por la le* de la causalidad. -l positi1ismo, +undado por Augusto Comte, estableció una nue1a +orma de apro8imars apro8imarse e a los +enómenos +enómenos sociales: sociales: empírica, empírica, e8perimental e8perimental e inducti1a. inducti1a. Pero qu3 signi5caba positivo signi5caba positivo;; Comte decía que positi1o signi5caba lo real +rente a lo +antástico. 0o real real era lo dado por la l a e8periencia# tambi3n signi5caba lo =til +rente a lo ocioso, lo preciso +rente a lo inde5nido, lo constructi1o +rente a lo destructi1o *, por =ltimo, lo relati1o +rente a lo absoluto, *a que era conocimiento de los +enómenos * no de las esencias. Ee ahí que postuló que la mente humana debía Antropología )cátedra Sabarots !$$
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renun enunci ciar ar a todo todo em empe pe6o 6o por por co cono noce cerr la es esen enci cia a mism misma a de las las co cosa sass * conten contentar tarse se con la 1erdad 1erdad deri1ad deri1ada a de la obser1a obser1ació ción n * la e8perim e8periment entaci ación. ón. Planteaba la improcedencia de la especulación en torno al comportamiento del hombre, concebía a la Sociología como una ciencia natural a la que denominó +ísica social, en la cual se +undían todas las ciencias orgánicas e inorgánicas * que no podía reducirse a los principios de ninguna de ellas, en particular. particular. Como di4imos, la ciencia se apo*aba en una metodología general de tipo inducti1ista, para la cual los hechos singulares son conocidos por la obser1ación * la e8perimentación. Por 1ía inducti1a se pueden llegar a establecer le*es que no e8plican los +enómenos sino que describen las regularidades obser1ables en los mismos. 0a ciencia, para el positi1ismo, tiene un carácter instrumental# es 1aliosa porque sir1e a la t3cnica * a la industria. -n el marco de esta concepción, * con miras a comprender el auge de la e8plicación e1olucionista tanto en el ámbito de las ciencias de la naturale2a como en las del hombre, no podemos de4ar de mencionar a Charles EarHin * ?erbert Spencer. Spencer. Ambos +ueron in9uenciados por Rhomas @althus 7 a tra13s de su obra $nsayo $nsayo sobre 0oblación. 0oblación. -l mecanismo mediante el cual EarHin e8plicó la e1olución e1olución biológica biológica +ue la selección selección natural a tra13s de la lucha por la e1istencia * la supervivencia del más apto, apto, ambos conceptos +ueron elaborados por @althus en su e8plicación sobre el crecimiento de la población inglesa. Si bien la biología se encontraba ba4o las mismas in9uencias epistemológicas * socio&históricas generales que el resto del pensamiento del /, la publicación publicación de la obra de Charles Charles EarHin $l origen de las especies )$"JI especies )$"JI prod produ4o u4o una una 1erd 1erdad adera era re1o re1olu luci ción ón en el ám ámbi bito to de las las cienc ciencia iass natu natura rales les.. Constru*ó una teoría general de la e1olución biológica donde incluía a todos los seres ser es 1i1os, 1i1os, planta plantas, s, animale animaless * hombr hombres, es, irradi irradiand ando o consec consecuen uencia ciass en otros otros campos campos cientí5cos. cientí5cos. Eice 0e1i&Strau 0e1i&Strauss: ss: < de aquí en más ya no nos habremos de ver con construcciones !losó!cas como la teoría del progreso inde!nido del siglo 2&+++...> 2&+++...> o la degeneración de las ra2as de a6os más tarde. 0a idea de una e1oluc e1olución ión gradua graduall de las especi especies es 1i1ient 1i1ientes, es, a tra13s tra13s de inmens inmensos os períod períodos os geológicos permitía asimilarla a la historia de la especie humana. 0os restos asociados a herramientas de piedra *a no se interpretarán como testimonios de una 3poca antedilu1iana. Ahora eran pruebas de la lenta e1olución del pasado del hombre. D en la medida que esos utensilios prehistóricos se aseme4aban a los utili2ados por muchos grupos primiti1os contemporáneos, permitía encontrar en 3stos el pasado 1i1o de los di+erentes estadios progresi1os de la humanidad. Porr su parte Po parte Spence Spencer, r, contem contempor poráne áneame amente nte,, se encont encontrab raba a abocad abocado o a demostrar que el uni1erso era un esquema progresi1o * continuo de desarrollo, que abarcaba todos los +enómenos inorgánicos, orgánicos * superorgánicos. -s decir que todos las mani+estaciones eran producto de la e1olución. -n su obra tamb tambi3n i3n recu recurr rrió ió a las las idea ideass ma malt lthu husi sian anas as para para e8pl e8plic icar ar el progr progres eso o de la huma humani nida dad. d. -ste -ste auto autorr a5rm a5rmab aba a que que la luch lucha a por por la 1ida 1ida co cond nduc ucía ía a la disminución de los ineptos * a la super1i1encia de los aptos. Spencer +ue el que @althus, Rhomas )$7QQ&$"%N, economista ingl3s, pro+esor de -conomía Política * past pastor or prot protes esta tant nte. e. Su prin princi cipa pall estu estudi dio, o, +ue +ue el $ssay on the 0rinciples of 0opulation )$7I", 0opulation )$7I", trata el problema de la superpoblación desde un punto de 1ista 1ista pesimis pesimista. ta. Sosten Sostenía ía que los recur recursos sos se repr reprodu oducía cían n aritm3 aritm3tic ticamen amente, te, mientras que la población lo hacía de manera geom3trica. -ste desequilibrio produciría miseria * hambruna ine8orablemente. 7
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populari2ó el t3rmino e1olución * podemos decir que tambi3n le concedió su sentido más abarcati1o. Seg=n @ar1in ?arris la tendencia a la biologi2ación en el siglo / no tenía nada que 1er con el ma*or prestigio de las ciencias biológicas +rente a las ciencias sociales. o podía decirse que un campo imitara al otro, sino que tanto las ciencias biológicas como las ciencias sociales, dieron respuestas paralelas a necesidades ideológicas similares. <$l inter*s de los cientí!cos sociales por el progreso y la perfectibilidad hizo que el evolucionismo abrevara en la teoría biológica en tanto que el concepto de selección natural surgió del inter*s por encontrar un marco e1plicativo a las guerras y los con3ictos raciales nacionales y de clase> )?arris $II7: $$$. Eentro de las ciencias del hombre, la Antropología nació en el ámbito intelectual de estas proposiciones paradigmáticas * se nutrió de las mismas +uentes. $a Antropología y el evolucionismo
-l esquema e1oluti1o, que se con1irtió en matri2 principal de e8plicación de los +enómenos sociales, se mantu1o dentro de la tradición 5losó5ca del /luminismo. 0a secuencia e1oluti1a salvajismo, barbarie * civilización que e8plicaba el desarrollo de la ra2ón humana en las ideas de los 5lóso+os, +ue retomada por los antropólogos para e8plicar la e1olución de la cultura. Al igual que las ciencias naturales, * seg=n el e4emplo de 3stas, la Antropología con5ó en descubrir relaciones constantes entre los aspectos socioculturales, como lo hacían aquellas con los +enómenos de la naturale2a. -l aporte de la teoría de la e1olución biológica a la Antropología +ue certero, arro4ó lu2 sobre su ob4eto: el ?ombre. Como tal, pertenecía a la especie homo sapiens que, a di+erencia de las demás especies, encerraba una particularidad: el homo era un ser dual, tanto cuerpo como espíritu. Como cuerpo pertenecía al mundo de la naturale2a * en tanto espíritu pertenecía a otro mundo, el de la cultura. -l surgimiento de la Sociología * la Antropología en este siglo /, amplió la necesidad de conocer cientí5camente a aquellos otros hombres que la e8pansión capitalista introducía abruptamente en la historia occidental. -n los países europeos eran las masas de desocupados * asalariados que comen2aban a reclamar por me4ores condiciones de traba4o. -n las colonias de ultramar, eran otros hombres con anatomías * costumbres di+erentes que se oponían a condiciones de sometimiento * e8plotación colonial. 0a pregunta qui3nes son los otros; no era nue1a en el pensamiento europeo. 0a relación entre Bccidente * el resto del mundo había generado muchas respuestas en los siglos anteriores. Pero con la e8pansión sistemática de -uropa el encuentro con otros pueblos, con otras culturas, con modos de 1ida distintos a los no +ue ingenuo: la intencionalidad del colonialismo dominaba la relación. -ntonces, el asombro de4ó paso al desprecio por lo di+erente, * las respuestas *a no 1inieron de la religión o de la 5loso+ía, sino del m3todo cientí5co. 0a Antropología se constitu*ó como ciencia a 5nales del siglo / siendo su primera corriente de pensamiento el e1olucionismo. -sto signi5ca el Antropología )cátedra Sabarots !$$
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reconocimiento social de un nue1o campo de conocimiento * la constitución de una comunidad cientí5ca particular. 0os nue1os antropólogos tendrán que dar respuestas sobre esos otros hombres que se construirán cientí5camente no por lo que son, sino por lo que les +alta: los no&occidentales. $as ideas principales
0os principales representantes del e1olucionismo +ueron 0eHis @organ * -dHard R*lor. Considerados +undadores de la Antropología, se propusieron responder cientí5camente a 1arias preguntas: por qu3 las sociedades humanas eran tan di+erentes;, por qu3 algunos pueblos estaban tan atrasados; cómo se producían los cambios; -l conocimiento de otras +ormas de 1ida * la rápida trans+ormación de las mismas en el plano económico, político, social, etc. a consecuencia de la re1olución industrial, constitu*eron desa+íos teóricos para la incipiente teoría antropológica. 0os pensadores de la 3poca se en+rentaron por un lado a un mundo contemporáneo donde la di1ersidad cultural se hacía empíricamente constatable, * por otro, esas di+erentes +ormas de 1ida no eran estáticas ni inmutables, sino que podían cambiar * trans+ormarse al contacto con otras. Como +uente de re9e8ión antropológica estas sociedades demostraban, en 1irtud de las circunstancias socio&históricas, que el cambio social era inherente a ellas * por lo tanto se constituía en un interrogante a ser e8plicado. -l e1olucionismo como primera teoría cientí5ca contestó a la pregunta sobre las seme4an2as * di+erencias de los hombres a tra13s del concepto de progreso, e8plicando la historia como un proceso natural. ?asta ese momento la e8plicación sobre el ?ombre, había estado escindida. -n tanto cuerpo era ob4eto de la anatomía, la 5siología# en tanto espíritu pertenecía al campo de la 5loso+ía * la religión. -l e1olucionismo propuso entonces el estudio del ?ombre como una totalidad, donde cada una de sus partes podía entenderse ba4o el siguiente criterio: el hombre como especie era el resultado de la e1olución biológica, como el resto de los seres 1i1os. -ra un eslabón más en una cadena de organismos, pero un organismo que se completaba con un atributo particular: la cultura, que se desarrollaba a tra13s del tiempo en di+erentes grados de e1olución o progreso, la e1olución cultural. Si bien la concepción del hombre como un ser dual &biológico * cultural& no era nue1a, el gran aporte que en+rentaba las posturas teológicas * 5losó5cas 1igentes era, por un lado, la concepción del hombre como un animal *, por otro, la ase1eración de que su parte espiritual era la consecuencia de su parte natural.
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ciencias naturales )... 5inguno negará que las causas naturales y concretas determinan en gran medida la acción humana> )R*lor $I77:$Q&7. Ambas partes de la dualidad humana, la naturale2a * la cultura, eran entendidas por los e1olucionistas como una continuidad. Para R*lor la cultura comen2aba en el hombre cuando la naturale2a había concluido su obra. 0a cultura era el producto de las trans+ormaciones de la naturale2a en el tiempo. Pero se trataba de un producto radicalmente distinto de cualquier otro que la naturale2a hubiese generado en su e1olución. 0a cultura era un producto , dependiente de las propiedades de la mente humana. Por lo tanto, el estudio de la cultura podía reali2arse ba4o las mismas premisas que el ámbito natural. D la teoría e1olucionista partía de tres premisas sobre el hombre: la unidad psicobiológica de la especie humana: todos los hombres pertenecen a una sola especie, ?omo Sapiens, el hombre es un ser bidimensional: el hombre es al mismo tiempo un ser biológico * un ser cultural *, toda la humanidad desarrolla una sola cultura, con di+erencias de grado. -n e+ecto, el e1olucionismo concibe la e8istencia de una sola cultura. 0a cultura humana es una sola * los di1ersos pueblos o +ormas de 1ida conocidos, representan momentos, en una escala de progreso donde cada escalón en ascenso constitu*e un grado ma*or de cultura. 0a cultura humana pasa por di+erentes estadios de desarrollo que 1an de lo simple a lo comple4o. -n este sentido, la humanidad desde su origen * en su de1enir histórico 1a ascendiendo desde un estadio de simplicidad total a otros de comple4idad creciente. Rodas las sociedades se originaron con una cultura mu* primiti1a, sal1a4e, * llegaron a un estadio con una cultura más comple4a, más rica, más 1ariada. A medida que los hombres +ueron generando descubrimientos e in1entando elementos para hacer +rente al medio que los rodeaba, +ueron progresando. Por lo tanto el e1olucionismo postula una le* uni1ersal sobre el progreso humano * de esta manera e8plica las di+erencias * seme4an2as entre los hombres * la llamó ley del progreso universal. -sta le* es considerada impulsora del cambio. 0a idea de progreso que sub*ace a este ra2onamiento considera que el progreso humano es lineal porque e8iste un =nico camino posible a recorrer. Además, es acumulati1o, porque el conocimiento genera otros nue1os. -s ine1itable porque más tarde o más temprano ha* que transitarlo. D es unidireccional, porque tiende a anular las di+erencias. Rodos, hipot3ticamente, se dirigen hacia la misma meta. 0a idea de progreso del siglo (/// había sido el motor de la trans+ormación de la ra2ón humana. Mn siglo más tarde, en el marco del desarrollo cientí5co, estas ideas continuaron * se pro+undi2aron, con1irtiendo al progreso en una le* de la naturaleza. Así, la di1ersidad humana desplegada en el espacio * en el tiempo, representó el a1ance de la humanidad hacia una ma*or comple4idad. Eescribieron el a1ance en etapas, elaborando una 1isión coherente de los di+erentes estadios por los que transcurrió la cultura de la humanidad en su paso del sal1a4ismo a la barbarie * de la barbarie a la ci1ili2ación. -l progreso, que los e1olucionistas de5nían como natural e ine1itable, ponía en e1idencia que entre el hombre occidental * el primiti1o no e8istía nada que
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impidiera que 3stos =ltimos e1olucionaran hasta llegar a estadios superiores, tarde o temprano. -n esta teoría, las di+erencias culturales eran sólo cuestión de tiempo. Si consideramos que la cultura se trasmite por aprendi2a4e, el contacto entre pueblos con distintos grados de e1olución podía acelerar el proceso de e1olución cultural, e1itando de esta manera que los que se encontraban más aba4o en la escala, recorrieran todo el camino. Ee esta manera, la incipiente Antropología aparecería bendiciendo cientí5camente las trans+ormaciones que la e8pansión colonial imponía en las sociedades dominadas. 0a reconstrucción histórica que propuso el e1olucionismo abarcaba a la humanidad toda: históricamente, desde su origen hasta la actualidad * espacialmente, desde el norte al sur * del este al oeste del planeta. Sin embargo, se operaron algunas reducciones: no estudiaron todas las sociedades, sino solamente las no&occidentales * no se ocuparon de todos los aspectos de la cultura sino que dieron prioridad a algunos de ellos: las creencias en R*lor * las instituciones en @organ. El m%todo
0os datos para el estudio de la cultura procedían en general de dos +uentes: los conocimientos cada 1e2 más amplios sobre la prehistoria de -uropa, restablecida por la in1estigación arqueológica, * la creciente in+ormación merced a los 1ia4eros, +uncionarios * misioneros, acerca de las costumbres * creencias de los pueblos no occidentales. -stas circunstancias planteaban un intrigante problema: la relación de los con las grandes ci1ili2aciones de -uropa * Am3rica. 0as e8ca1aciones arqueológicas no re1elaban el status original de la ci1ili2ación, sino por el contrario, que la ci1ili2ación europea tenía sus +uentes en culturas seme4antes a la de los pueblos primiti1os contemporáneos. Ranto @organ como R*lor reunieron cantidad * 1ariedad de datos. Cómo organi2aron * sistemati2aron los datos culturales; 0o hicieron aplicando el m3todo comparati1o. Se propusieron llenar las lagunas e8istentes en los conocimientos disponibles de la historia uni1ersal. 0a base del m3todo era el supuesto de que los di+erentes sistemas socioculturales que podían obser1arse en el presente tenían cierto grado de seme4an2a con las di1ersas culturas desaparecidas. @ostraban como e4emplo que la 1ida de ciertas sociedades contemporáneas era seme4ante a lo que debería haber sido la 1ida durante el Paleolítico )piedra tallada. A otros grupos los asimilaban a la cultura típicamente neolítica )piedra pulida. @organ entendía esta prolongación del pasado en el presente: )@organ $I77: 7!&7$.
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0as di1ersas instituciones se ubicaban en una secuencia de progreso creciente. 0a construcción de ese orden era básicamente una operación lógica, deducti1a, cu*os supuestos implícitos eran: $. que las +ormas más simples son las más antiguas, . las más comple4as son las más modernas * %. las más simples originaron a las más comple4as. Eice R*lor: )R*lor $I77: $N&$N%. $e&is 'organ )$"$"&$""$
Ee origen norteamericano, este abogado con 1ocación antropológica e integrante de la 0iga de los /ndios /roqueses, es considerado por muchos como el de la Antropología. 0a relación que mantu1o con los algunas tribus indias de orteam3rica, +ue interesándolo sobre los sistemas de parentesco de las di+erentes grupos. Con el ob4eti1o de probar los orígenes asiáticos de los indios de Am3rica, preparó un cuestionario, el primero que se aplicó a los estudios de parentesco * lo hi2o di+undir por el mundo entero a tra13s de la Smithsonian /nstitution. -l resultado +ue la publicación del primer análisis cientí5co del parentesco en la antropología: -istemas de consanguinidad y a!nidad en la familia humana. Con1encido de la 1alide2 del m3todo comparati1o se propuso la tarea de comparar las instituciones sociales desde la antigUedad clásica con las de los pueblos primiti1os contemporáneos, buscando en 3stos la ra2ón de ser de aqu3llas. -n $"77 publicó La sociedad primitiva, donde mostraba el desarrollo de la humanidad a tra13s de los estadios sucesi1os del sal1a4ismo, la barbarie * la ci1ili2ación. -n este esquema e1oluti1o ordenó * clasi5có toda la di1ersidad de culturas. @organ sostenía que la humanidad había recorrido un =nico camino de progreso: había partido de una etapa primigenia, el sal1a4ismo, donde el hombre había tenido que in1entarlo todo. 0uego, con el surgimiento del sedentarismo había llegado a la barbarie * con la in1ención de la escritura +on3tica, al grado má8imo de desarrollo humano, la ci1ili2ación. Eistinguía dos lógicas e1oluti1as, la de los in1entos * descubrimientos * la de las instituciones. -n la primera, los hombres progresaban con la in1ención de elementos de ma*or e5cacia en el dominio sobre la naturale2a * la progresión era geom3trica, pues a medida que se in1entaban elementos nue1os, 3stos eran la base de los siguientes. Así primero los hombres in1entaron las herramientas de piedra, luego el arco * la 9echa, luego la ballesta, etc. Pero como el hombre es un ser social, su e1olución no podía e8plicarse solamente desde las cosas materiales, las instituciones estu1ieron presentes desde el principio en estado germinal. <7omaremos como base la e1tensa sucesión de invenciones y descubrimientos que jalonan el camino del progreso humano y fundamentalmente las instituciones dom*sticas que representan el desarrollo de ciertas ideas y sentimientos. -i remontamos las Antropología )cátedra Sabarots !$$
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distintas líneas del progreso hasta las edades primitivas del g*nero humano discriminando una de otra en el orden en que aparecieron (inventos y descubrimientos por un lado e instituciones por el otro( podemos comprender que los primeros mantienen entre sí una relación progresiva y las segundas una relación de desenvolvimiento. $n tanto que los inventos y descubrimientos se han relacionado más o menos directamente las instituciones se han desarrollado de acuerdo con unos pocos principios primarios de pensamiento> )@organ $I77: QQ. Mna de las instituciones de las que se ocupó +ue la +amilia. Sostenía que la e1olución de la +amilia había comen2ado en el sal1a4ismo in+erior ba4o la +orma del estado de promiscuidad se8ual entre los miembros de la horda primiti1a. 0uego e1olucionaba hacia la +amilia consanguínea )+orma hipot3tica de +amilia en el matrimonio de los hermanos * las hermanas en línea directa o colateral, luego la +amilia punal4a )sobre la base del matrimonio de 1arias hermanas con un grupo de hombres que no están necesariamente emparentados entre sí * 1ice1ersa, despu3s la sindiásmica o por pare4a )una +orma de transición entre el matrimonio de grupo * la monogamia. @ás tarde la +amilia patriarcal )podía en algunos casos ser poligínica &1arias mu4eres&, con origen en matrimonios colecti1os * por =ltimo la +amilia monógama en la ci1ili2ación moderna. -sta =ltima +orma de +amilia es, en este esquema e1oluti1o, el grado má8imo de desarrollo de la institución. A6os más tarde, in1estigaciones antropológicas de la 3poca clásica de nuestra disciplina, pondrían en duda la e8istencia de esta sucesión creada por @organ. Ee los tantos traba4os de campo lle1ados a cabo por antropólogos posteriores, resultaron numerosos los e4emplos etnográ5cos de +amilia monógama en sociedades cu*as características distaban de las que @organ hubiese ubicado en la Ci1ili2ación. Cabe destacar que para este autor la e1olución de la humanidad no se detendría en la ci1ili2ación, sino que 3sta era una 3poca transitoria que lle1aría, por la le* del progreso, al nacimiento de un estadio superior donde pre1alecieran +ormas más 4ustas e igualitarias de 1ida, ra2ón por la cual +ue tomado por Carlos @ar8 * Lederico -ngels como +uente del establecimiento de las bases de la sociedad comunista, tanto en el principio de la e1olución humana como en su pro*ección +utura. Ed&ard (ylor )$"%N&$I$7
Contemporáneo de @organ * representante destacado de la escuela e1olucionista en /nglaterra, +ue el primero en elaborar una de5nición de la cultura: )R*lor $I77: $N. Ee5ne a la cultura con ma*=sculas * en singular. -s la cultura de todos los hombres en tanto miembros de la especie humana. 0a cultura como atributo e8clusi1o de lo humano que se adquiere a tra13s del aprendi2a4e social. Para 3l la Antropología )cátedra Sabarots !$$
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Antropología es la ciencia de la cultura porque 3sta puede )R*lor $I77: $J. Sostiene que en gran medida el comportamiento humano obedece a causas naturales * concretas, por lo tanto todo lo que la cultura tiene de uni+ormidad entre los hombres debe atribuirse a causas uni+ormes. -l supuesto que habla sobre la unidad psicobiológica de la especie garanti2a que los hombres generen iguales respuestas ante las mismas condiciones. D todo lo que la cultura presenta de di1erso, debe considerarse como mani+estación de distintos grados de e1olución o desarrollo. Su esquema e1oluti1o sigue el mismo modelo de sal1a4ismo, barbarie * ci1ili2ación, sin subdi1isiones al estilo de @organ. Puso especial inter3s en demostrar la e1olución en el campo de la religión. 0a misma se habría originado en el animismo )creencia en que los ob4etos de la naturale2a tienen alma luego habrían surgido los sistemas politeístas )creencia en 1arias deidades * 5nalmente, en la ci1ili2ación aparece el monoteísmo )creencia en un solo dios, 1ersión culminante de la religiosidad humana. Considera a la ci1ili2ación como el momento má8imo del desarrollo cultural humano * al imperio británico su me4or e4emplo. R*lor elaboró el concepto de para e8plicar aquellos +enómenos culturales originados en 3pocas pasadas * que seguían 1igentes en la sociedad europea del siglo /. -s decir que se consideraba que no habían e1olucionado como se esperaba en consonancia con el resto de la cultura * los tiempos. -l autor las de5ne así: )R*lor $I77: $N. Como muestra de super1i1encias, cita una anciana traba4ando en un telar a mano, cu*o uso es de una 3poca anterior a la introducción de la . -l uso del arco * la 9echa en competencias deporti1as o los botones en las mangas de los sacos, constitu*en otros e4emplos. Re)e*iones "nales
-l e1olucionismo será criticado por las corrientes antropológicas del siglo . -l +uncionalismo, el particularismo histórico, el estructuralismo entre otros, se opondrán +uertemente a sus propuestas desde las nue1as perspecti1as. Mna crítica compartida es la que plantea que la reconstrucción histórica que elaboró el e1olucionismo es con4etural, *a que ese modelo que partía del sal1a4ismo hasta la ci1ili2ación, no encuentra correlato en la realidad. 0a di1ersidad de pueblos históricos * contemporáneos e8istentes son e4emplos de trans+ormaciones en distintas direcciones, de creaciones culturales independientes * tambi3n de intercambio * aprendi2a4e en momentos de contacto. 0a sucesión in1ariable de los estadios propuestos * la caracteri2ación de los mismos +ue ampliamente re+utada por las in1estigaciones de campo en el siglo . Sus críticos aseguran que otro punto d3bil es considerar que la Antropología )cátedra Sabarots !$$
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humanidad e1oluciona en bloque. -sto signi5ca pensar que en determinado momento histórico toda la tecnología, la religión, la organi2ación social, etc., eran simples * luego e1olucionaron en +orma con4unta. Para los e1olucionistas, la línea de progreso iba en ascenso desde etapas anteriores de simple2a hacia otras posteriores de ma*or comple4idad. Sin embargo, la manera en que constru*eron la e8plicación tu1o el camino in1erso, es decir partieron del presente * de su propia sociedad, la ci1ili2ación, * +ueron descartando los a1ances hasta llegar a la barbarie, * así sucesi1amente. -n palabras de @organ: )@organ $I77: "%. Ee lo que se deduce que su parámetro de análisis es la ci1ili2ación, por lo tanto los pueblos estudiados son sal1a4es o bárbaros con relación a todos los elementos materiales o instituciones que le +altan con relación a Bccidente. Por eso se ha criticado su etnocentrismo. -n cuanto a las contribuciones, podemos citar las siguientes: la cultura humana se con1irtió en ob4eto de estudio cientí5co. 0a elaboración de la primera de5nición de cultura permitió distinguirla del concepto biológico de ra2a. 0os e1olucionistas recopilaron una 1asta cantidad de datos culturales, * aunque la sistemati2ación de los mismos +ue criticada, sentaron las bases para el desarrollo de posteriores in1estigaciones sobre el terreno. 0as clasi5caciones de los sistemas de parentesco construidas por @organ * las terminologías aportadas por R*lor siguen siendo actuales por su importancia teórica. 0as implicancias teóricas de esta corriente estu1ieron presentes en los debates de la Antropología durante d3cadas. Si bien +ue superado metodológicamente con el ad1enimiento del traba4o de campo más sistemático * el relati1ismo cultural entre otros cuestionamientos, podemos decir que el e1olucionismo +ue mucho más que una corriente de pensamiento antropológica, +ue un paradigma que abarcó las teorías cientí5cas del siglo /. Ru1o tanta +uer2a e8plicati1a que +ue retomado con modi5caciones en el siglo * en la actualidad las corrientes neoe1olucionistas en Antropología tienen 1igencia en la e8plicación de la di1ersidad cultural. (eorías clásicas de la Antropología del siglo ## Introducción
). )ancusi Por su trascendencia en el desarrollo de la antropología del siglo , se e8pondrán a continuación las corrientes teóricas principales: el particularismo histórico, surgido en -stados Mnidos de orteam3rica a 5nes del siglo /, el +uncionalismo británico, iniciado a principios del siglo , * el estructural& +uncionalismo, para pasar luego al estructuralismo de Claude 031i&Strauss. 0as primeras nacieron como reacción al e1olucionismo, *a que impugnaron muchos Antropología )cátedra Sabarots !$$
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de sus supuestos# +undamentalmente mani+estaron la imposibilidad de e+ectuar grandes reconstrucciones * generali2aciones en abstracto. 0as culturas especí5cas debían ser estudiadas primero en sus conte8tos particulares * a tra13s de estos estudios sería posible llegar a descubrir le*es generales. Rambi3n desarrollaron traba4os de campo intensi1os * pusieron el acento en las t3cnicas de recolección de datos culturales. GronislaH @alinoHsTi +ue el primero en sistemati2ar la metodología por e8celencia de la Antropología: el traba4o de campo * la obser1ación participante en la introducción a su libro Los Argonautas del 0ací!co 8ccidental. -sta metodología +ue usada por los antropólogos clásicos que estudiaban sociedades peque6as, aisladas, ale4adas histórica * geográ5camente de Bccidente. -l in1estigador se instalaba en una aldea, reser1a o comunidad, anali2aba todos los aspectos de la cultura * a partir de ellos organi2aba una monogra+ía importante en la que creía re9e4ar la realidad de la cultura de toda la sociedad estudiada. Por otro lado el antropólogo había llegado a esas sociedades cuando los pueblos *a habían sido e8puestos a las in9uencias del e8plorador, el comerciante, el misionero * el administrador e8tran4eros. -ste proceso de cambio abrumador, la coloni2ación, que procedía de una sola realidad cultural, la sociedad occidental industriali2ada, hi2o que casi ninguna cultura del mundo hubiera podido ubicarse al margen de estos procesos. Sin embargo el ritmo * el impacto de la situación colonial +ueron 1ariables. Algunas culturas, como la de los indios de las llanuras de -stados Mnidos de orteam3rica, que se interponían en la e8pansión hacia el Beste, +ueron arrinconadas * trans+ormadas radicalmente. Btras, en cambio, ubicadas en lugares más remotos, continuaron manteniendo sus +ormas de 1ida tradicionales * sus estructuras sociales durante un tiempo más, a pesar de la in9uencia de la e8pansión capitalista. Eurante las primeras d3cadas del siglo , los antropólogos norteamericanos, en el marco del particularismo histórico, lle1aron a cabo sus in1estigaciones entre aborígenes cu*as culturas habían sido casi totalmente trans+ormadas, mientras que la antropología británica estudiaba grupos de +rica * Bceanía, cu*as culturas, aunque en proceso de cambio, no habían sido tan alteradas. -sta di+erencia se e8presa en la +orma de aborda4e por parte de las dos escuelas, los +uncionalistas suponían que era mu* parecida a la , mientras que el antropólogo norteamericano se sentía impulsado a recrear , mediante la recolección de narrati1as orales que permitirían reconstruir la historia particular del grupo )0lobera $IJ7: Q!. -l ob4eti1o principal del traba4o de campo era registrar esas +ormas de 1ida antes de que sus rasgos se perdieran, de ahí la tendencia a tratar a cada uno de los grupos sobre los que traba4aban como un sistema social aislado, cerrado, autosu5ciente * homog3neo. -se análisis ahistórico * sincrónico ocultaba que esas sociedades eran cada 1e2 más dependientes * subordinadas a un sistema económico, político * social mucho ma*or. Como se6ala 0eclerc:
Antropología )cátedra Sabarots !$$
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muestreos de prácticas e instituciones humanas en que lo diverso sería recogido con comprensión> )0eclerc $I7: "". -s decir que los antropólogos clásicos estaban dedicados a mostrar la gran di1ersidad de culturas e8istentes con una mirada relati1ista. -sta posición metodológica re+or2aba la 1isión de las como sistemas que +uncionaban en +orma autónoma de la totalidad histórica. Particularismo +istórico
). )ancusi Lran2 Goas )$"J"&$IN +ue la 5gura principal del llamado particularismo histórico, desarrollado en --MM. Su in9uencia * la de sus discípulos +ue indiscutible en la antropología norteamericana del siglo . Goas nació en Alemania. Allí se +ormó como geógra+o, matemático * +ísico. Al establecerse en los -stados Mnidos, orientó su atención hacia la antropología, desarrollando una intensa acti1idad como in1estigador, pro+esor, editor, con+erenciante, +undador * presidente de importantes asociaciones * re1istas especiali2adas. Sus discípulos de la Mni1ersidad de Columbia, donde ense6ó hasta $IN$, desarrollaron sus in1estigaciones en las principales uni1ersidades norteamericanas. [K' Para Goas, los ob4eti1os de nuestra ciencia eran de gran amplitud, nada menos que el estudio de la historia de la sociedad humana en su con4unto. 0os dos problemas +undamentales que debía resol1er eran )Goas $IQN:QI. Lue uno de los principales críticos de la trans+erencia del modelo biológico al mundo humano propia del pensamiento e1olucionista, para e8plicar el +uncionamiento de la sociedad. Así, la cultura singular de los e1olucionistas se con1irtió en en plural. Con esto se a5an2ó el concepto antropológico de cultura * se sentaron las bases del relati1ismo cultural. 0os e1olucionistas daban por hecho que los mismos +enómenos eran resultado siempre de id3nticas causas e intentaban, como 1imos, agrupar las di1ersas culturas en una serie de estadios 54os * ordenados. Da en $I$! Goas había desechado la posibilidad de encontrar uni+ormidades de desarrollo que a+ectaran a con4untos completos de instituciones, como proponían los e1olucionistas. -ncontramos en sus escritos la con1icción creciente, a partir de la prueba de los datos etnográ5cos recogidos por 3l * otros antropólogos, que la b=squeda de regularidades estaba condenada al +racaso. -n cambio subra*ó la probabilidad de que la presencia de instituciones similares por todo el mundo re9e4ara, algo inherente a la mente humana: <5o quiero implicar que no e1istan leyes generales de desarrollo. Antes al contrario el que se presenten analogía en regiones tan alejadas demuestra que el espíritu humano tiende a alcanzar los mismos resultados no solo cuando las circunstancias son similares sino tambi*n cuando son diversas> )Goas [$I$!', en ?arris $I"J: N. 0as in1enciones, el orden social, la 1ida intelectual * social podían tambi3n, seg=n Goas desarrollarse en +orma independiente: <ay pueblos como los Antropología )cátedra Sabarots !$$
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australianos cuya cultura material es absolutamente pobre pero que tienen una organización social enormemente compleja> )?arris $I"J: N. D otra de las cuestiones que abordó el particularismo histórico +ue la relación entre indi1iduo * sociedad. Aquí el inter3s se centró en la importancia del proceso de sociali2ación * el rol del lengua4e en la incorporación de pautas * 1alores de cada cultura, que se incorporan en +orma inconciente * tienen una +uerte carga emocional. Si bien Goas no +ormuló una teoría sistemática de la cultura, sus presupuestos básicos +ueron e8presados en toda su obra. Ee+endió una 1isión histórica, seg=n la cual todas las culturas estaban constituidas por comple4os de rasgos, producto de condiciones ambientales, +actores psicológicos * relaciones históricas. Vl * sus discípulos reali2aron estudios sobre la distribución espacial de mitos, cuentos populares, recopilaciones reali2adas en sus idiomas originales. -sta necesidad de in1estigaciones históricas particulares se apo*aba en la a5rmación de que cada cultura tiene una historia =nica. -n una etapa más a1an2ada de estas in1estigaciones podrían hacerse estudios comparati1os, que dieran cuenta de la di+erencia * seme4an2a de los sistemas socioculturales. o e8istía pues un =nico sentido de la historia a tra13s de cu*as etapas debían transitar todas las culturas como se6alaban los e1olucionistas. Cada cultura tiene una historia particular, *a que a=n lo adquirido por di+usión es adoptado * adquiere una nue1a signi5cación. 0os elementos tomados en pr3stamo son )Goas $IQN:"J. D )ídem.:I$. -s decir que cada cultura es un con4unto coherente de rasgos conductuales e ideacionales que se dieron tanto por di+usión como por creación independiente. Cada cultura es cualitati1amente di+erente e históricamente particular. Proponemos la lectura directa de Goas para e4empli5car estos conceptos: <$l arte de producir fuego por fricción de cocer los alimentos el uso de herramientas como el cuchillo el raspador o el taladro ilustran la universalidad de ciertos inventos )... $s muy general la creencia en una multiplicidad de mundos uno o más de uno que se e1tiende por sobre el nuestro otros por debajo del nuestro y el central el mundo del hombre. La idea de un alma humana bajo formas diversas es muy universal y un país de las almas muertas al que se llega despu*s de arriesgado viaje está por lo com4n situado hacia el oeste )... Analogías especialmente curiosas ocurren en regiones muy apartadas... el desarrollo de una elaborada astrología en el &iejo )undo y en el 5uevo> la utilización del cero en 6ucatán y en La +ndia> la de la cerbatana en Am*rica y en )alasia> las semejanzas en la t*cnica y dibujo de la fabricación de cestas en ?frica y Am*rica> la balanza en el 0er4 pre(espa'ol y en el &iejo )undo> el uso de juguetes ruidosos para asustar y alejar a los profanos de las ceremonias sagradas en Australia y -udam*rica ).... La causa com4n de estas semejanzas en la conducta del hombre pueden e1plicarse por dos teorías. @enómenos similares pueden ocurrir ya sea porque están históricamente relacionados o surgir independientemente a causa de la identidad de la estructura mental del hombre )... Las relaciones históricas pueden ser de Antropología )cátedra Sabarots !$$
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dos clases. 0ueden ser invenciones o ideas más antiguas que representan primitivas conquistas culturales perteneciente a un período previo a la dispersión general de la humanidad o puede ser debida a acontecimientos posteriores. La distribución universal de las realizaciones culturales sugiere la posibilidad de una gran antigedad. $sta teoría debería aplicarse sólo a rasgos que aparecen en el mundo entero y cuya gran antigedad puede ser demostrada por testimonios arqueológicos ).... 7ambi*n poseemos claros testimonios de la difusión de elementos culturales de tribu en tribu de pueblo en pueblo de continente en continente. 0uede probarse que ella e1istió siempre desde los primeros tiempos )... Buizá la mejor prueba de la transmisión est* contenida en el fol;lore de las tribus de todo el mundo. 5ada parece viajar tan rápido como los cuentos imaginativos. -abemos de ciertos cuentos complejos que de ning4n modo pudieron inventarse dos veces que son relatados por los bereberes de )arruecos por italianos rusos en las selvas de La +ndia en las alturas del 7íbet en las tundras siberianas ).... e esta observación se sigue que la cultura de cualquier tribu dada por primitiva que sea sólo puede e1plicarse cabalmente cuando tomamos en consideración su crecimiento interior así como los efectos de sus relaciones con las culturas de sus vecinos pró1imos y distantes> )Goas $IQN:$7&$7Q. 0a especi5cidad del ob4eto de estudio de las ciencias humanas o del espíritu implicaba un m3todo comprensi1o di+erente del de los cientí5cos naturales. Goas insistió en la necesidad de un cuidadoso e intensi1o estudio de primera mano, libre de todo pre4uicio, de cada cultura en particular. [K' ese imperati1o metodológico de entender las culturas [K', nos re+eríamos al principio de interpretación sub4eti1a, perspecti1a llamada , es decir tal como se presenta para el grupo. -l siguiente comentario de @argaret @ead, una de las principales discípulas de Goas, ilustra sobre la perspecti1a emic: <0ara alcanzar la profundidad de comprensión que *l e1igía )Goas era preciso sumergir el pensamiento propio en el del otro. $ra preciso aprender a pensar en los t*rminos del otro a ver el mundo a trav*s de los ojos del otro. $ra indispensable alcanzar el más íntimo conocimiento de los procesos de pensamiento de nuestros informantes lo que sólo se podía lograr a trav*s del trabajo intensivo durante un largo período de tiempo> )@ead [$IJI', en ?arris lI"J:7N. ?abía una 4usti5cación teórica para hacerlo, pero tambi3n una urgencia práctica: las culturas indias de --.MM. se estaban e8tinguiendo * era necesario redoblar es+uer2os para recoger el má8imo de datos que esas culturas pudieran proporcionar. o ol1idemos el a1ance, durante todo el siglo /, del -stado norteamericano hacia el Pací5co en pos de su , con el consiguiente despla2amiento, arrinconamientos * e8terminio de las culturas que encontraba a su paso. [K' Como el inter3s de Goas se dio en todos los campos de la Antropología, de hecho tambi3n +ueron mu* importantes sus contribuciones a la antropología +ísica. A partir de sus estudios sobre los cambios en el tipo +ísico de los hi4os de Antropología )cátedra Sabarots !$$
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inmigrantes nacidos en --MM con relación a sus padres nacidos en -uropa, cuestionó la opinión de quienes relacionaban capacidades mentales con determinados tipos +ísicos: )ossi lI"l: IN. Además, sus estudios comprobaron la imposibilidad de establecer cualquier correlación entre ra2a, lengua * cultura, lo que signi5có un a1ance en la re+utación cientí5ca de las ideologías racistas. Su postura anti&racista +ue siempre clara. -n $I%$, en pleno auge del na2ismo en Alemania, al recibir su doctorado honorario, escogió para su con+erencia el tema de ra2a * cultura. Su posición trascendió los ámbitos acad3micos * +ueron muchas sus declaraciones p=blicas a +a1or del respeto por las di+erencias. ,uncionalismo
). )ancusi $a "gura de 'alino&s-i
Rras la Primera Wuerra @undial el mundo colonial se ha consolidado * es relati1amente estable# se ha logrado a un duro costo la integración en el mercado mundial a tra13s de las di+erentes metrópolis. ?a* una necesidad de conser1ar la estabilidad a todo precio. 0a antropología +uncionalista, que nace en este período, *a no pretende e8plicar el desarrollo total de la humanidad ni construir grandes escalas de progreso. Da est3n interesados en la cultura )@alinoHsTi o en la estructura social )adcliFe GroHn, su análisis se centrará siempre en un pueblo en particular. 0a preocupación central de GronislaH @alinoHsTi es 1er cómo las sociedades estudiadas resuel1en a tra13s de la cultura sus necesidades básicas. Por eso planteó la necesidad del traba4o de campo como t3cnica antropológica +undamental# es decir, rele1ar in situ la +orma de 1ida del pueblo que se quiere estudiar * compartir esa +orma de 1ida mediante la obser1ación participante. 0os +uncionalistas ponen entre par3ntesis la situación histórica, 1en el colonialismo como un contacto cultural, como un encuentro entre dos culturas. o se toma en cuenta la situación de asimetría, la dimensión de e8plotación * 1iolencia. Sin embargo, @alinoHsTi logró con gran rigor cientí5co consolidar un saber antropológico, rele1ó * llegó a un entendimiento pro+undo acerca de +ormas de 1ida caratuladas, desde Bccidente, como incomprensibles, irracionales * hasta no lógicas. Lue de los primeros antropólogos en criticar duramente el etnocentrismo * sentar las bases del relati1ismo cultural. 0a racionalidad de una costumbre a4ena debe e1aluarse en +unción de los códigos de la cultura de que se trate * no mediante criterios de la cultura del obser1ador, tenidos erróneamente como uni1ersales. A @alinoHsTi * adcliFe GroHn, considerados los +undadores de la antropología social inglesa, les siguieron 1arias generaciones de antropólogos en todo el mundo, que orientaron sus in1estigaciones ba4o las premisas del +uncionalismo * tienen a=n ho* 1igencia. GronislaH @alinoHsTi )$""N &$IN Antropología )cátedra Sabarots !$$
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nació en Craco1ia )Polonia donde se doctoró en Liloso+ía, * se trasladó a 0eip2ig donde se di1ersi5caron sus intereses, *a que estudió Psicología e8perimental con Xundt e ?istoria económica con GYcher. -n $I$! en 0ondres, se doctoró en Antropología * +ue discípulo de algunos de los más importantes antropólogos e1olucionistas como Seligman. -n $I$% publicó su primer traba4o antropológico. Al estallar la Primera Wuerra @undial, @alinoHsTi estaba e8puesto a ser e8patriado, *a que era s=bdito del imperio austro&h=ngaro, pero se le permitió, como alternati1a, permanecer en las /slas Rrobiand. Lruto de esa permanencia +ue su libro Los Argonautas del 0ací!co 8ccidental, publicado en $I, obra clásica de la antropología +uncionalista. -n este traba4o se abocó al estudio del comercio ula". El concepto funcionalista de cultura
Para @alinoHsTi la cultura es un sistema comple4o en parte material * en parte conductual, pero tambi3n espiritual, cu*o 5n es +acilitar la super1i1encia del hombre en un medio hostil, el medio natural. -s a partir de la cultura, que el hombre intenta crear un segundo medio más +a1orable. Para 3l la cultura es el instrumento mediante el cual el hombre logra satis+acer sus necesidades I. Ranto la de5nición del e1olucionismo como la del +uncionalismo re+uer2an el carácter e8tra&somático de la cultura. @alinoHsTi se 1a a interesar por la +unción $! que cumple la cultura# es decir, la cultura como respuesta adaptati1a al medio ambiente, como el elemento que completa al hombre )ser biológico * ser social * cultural. -n su teoría la cultura se relaciona con la satis+acción de necesidades psicobiológicas indi1iduales: nutrición, reproducción, cuidados corporales, seguridad, rela4ación, mo1imiento * crecimiento. Para cada una de estas necesidades básicas todos los sistemas socioculturales han encontrado una respuesta cultural. -stas respuestas culturales determinan a su 1e2 necesidades derivadas que son de orden cultural. 0a necesidad de nutrición, por e4emplo, se satis+ace mediante el empleo de t3cnicas para conseguir alimentos * se corresponde con la necesidad deri1ada de instruir a los miembros del grupo en el uso * aplicación de esas t3cnicas. Como se 1e, las necesidades deri1adas sólo aparecen en el hombre. -stas necesidades para @alinoHsTi se di1iden en cuatro imperati1os culturales, cada uno de los cuales encuentra su respuesta en una de las grandes di1isiones o ula es un tipo de intercambio íntertribal alrededor de un amplio círculo cerrado de islas cercanas a la costa oriental de ue1a Wuinea. A tra13s de estas islas circulaban ob4etos rituales de gran 1alor para esas comunidades )collares * bra2aletes de concha. 8
Para esta concepción, las necesidades que satis+ace la cultura en una sociedad son indi1iduales, no sociales. 9
?. Spencer )$"!Z$I!% +ue el primero en utili2ar el t3rmino +unción para e8plicar la realidad social al hacer una analogía entre el indi1iduo * las c3lulas del organismo, ambos integrantes de un todo )la sociedad * el organismo que tienen la +unción de mantener la armonía de ese todo. Eespu3s el concepto seria desarrollado por -mile EurTheim. 10
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dimensiones de la cultura: economía, control social, organi2ación política * educación. -stas necesidades son tan importantes como las básicas * biológicas. Por otra parte, para los +uncionalistas, nada que pertene2ca a un sistema cultural * que perdure es una in1ención caprichosa o arbitraria. Rodo elemento cultural cumple una +unción. Para que se incorpore a un sistema cultural debe satis+acer una necesidad. Paradó4icamente, la satis+acción de las necesidades en los indi1iduos no se e+ect=a en +orma indi1idual sino por medio de acciones grupales. Para el logro de cualquier 5n los hombres deben organi2arse. Ee ahí que el concepto de organi2ación est3 directamente relacionado al de institución. 0as instituciones son unidades mínimas de organi2ación humana. -n ellas * a tra13s de ellas es donde se satis+acen las necesidades. Roda teoría de la cultura debía partir de las necesidades orgánicas del hombre * relacionarse con otras necesidades más comple4as de índole espiritual, económica * social. Proponemos la lectura de @alinoHsTi para clari5car estos conceptos: se obtiene y abandona de forma algo descuidada( pues un ejemplar suele tener muy poco valor económico(. 0ero el palo de cavar reluce ampliamente en el esquema económico de cualquier comunidad en que se utiliza así Antropología )cátedra Sabarots !$$
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como el folclore la mitología y las costumbres. ,n palo de id*ntica forma puede utilizarse en la misma cultura como palo para empujar una embarcación bastón para andar o arma rudimentaria. 0ero en cada uno de esos usos especí!cos el palo se incrusta en un conte1to cultural distinto> es decir se somete a distintos usos se envuelve en distintas ideas recibe un valor cultural distinto y por regla general se designa con nombres distintos. $n resumen cumple distintas funciones. Lo pertinente para el estudioso de la cultura es la diversidad de funciones y no la identidad de forma> )@alinoHsTi, en ahn $I7J: I$&I%. Aspectos teórico.metodológicos
-l antecedente +undamental para entender el +uncionalismo es la -scuela Sociológica Lrancesa desarrollada por -mile EurTheim )$"JI&$I$7. -n ella se concibe al sistema social +ormado por m=ltiples partes, cada una con una +unción especí5ca, en armonía una parte con otra )metá+ora organicista. @alinoHsTi, si bien se ale4a de EurTheim al dar ma*or rele1ancia al indi1iduo que a la sociedad, comparte la idea de totalidad * los principios de equilibrio, normati1idad e integración utili2ados para re+erirse a la cultura como ese todo integrado compuesto de partes interdependientes que tiende al equilibrio del sistema. 0os principios del +uncionalismo, el hecho de que deben ser in1estigados todos los rasgos de las culturas * que ha* que buscar las +ormas en que las estructuras * las instituciones de una sociedad se interrelacionan para +ormar un sistema, son básicos para una ciencia antropológica orientada teóricamente. -ste principio metodológico ha ser1ido a los +uncionalistas para elaborar una teoría sobre los procesos culturales * sobre cómo +uncionan las sociedades. -l +uncionalismo parte de una analogía con lo orgánico. 0os sistemas culturales son presentados como si +ueran organismos cu*as partes, además de estar relacionadas, contribu*en a la conser1ación, equilibrio * super1i1encia de la totalidad. 0a concepción +uncionalista en+ati2a la cohesión, el equilibrio * se mane4a con estos supuestos: Rodos los elementos de la cultura están relacionados entre sí: unidad +uncional de una sociedad. Rodos los elementos culturales cumplen una +unción: +uncionalismo uni1ersal. Cada elemento cultural cumple una +unción: principio de indispensabilidad. Alrededor de $I%!, @alinoHsTi inició sus in1estigaciones en el continente a+ricano. -n su etapa anterior de estudios, en @elanesia, había se6alado que cualquier intento de cambiar las condiciones de 1ida de las sociedades de peque6a escala era más negati1o que positi1o. Su actitud era crítica hacia la ci1ili2ación de las máquinas * la industriali2ación desen+renada. Sin embargo, en+rentado a la nue1a realidad a+ricana cambia de opinión * comien2a a interesarse por los +enómenos de cambio cultural * social, se6alando su uni1ersalidad. Bb1iamente es di+ícil imaginar una cultura que ha*a permanecido a lo largo de la historia sin contactos con otra. Cuando se re5ere a estos procesos en +rica se6ala la posibilidad de una entrega selecti1a de elementos culturales por parte de los europeos * una •
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adopción selecti1a por parte de los a+ricanos. Anali2a la aculturación )es decir el pasa4e de instituciones, prácticas * creencias de una cultura a otra como un aspecto del cambio cultural. 0o que no dice @alinoHsTi es que esos contactos entre culturas son en realidad choques entre la cultura coloni2adora occidental * la coloni2ada. -sta relación se da en t3rminos de poder * e8plotación de una cultura por parte de la otra. Al en+ati2ar la cohesión * el equilibrio, se concibe que las culturas que se estudian 1an a cambiar lenta * gradualmente. -n estos estudios sincrónicos no ha* lugar para las e8plicaciones causales, *a que para darlas hace +alta tener en cuenta la historia. 0os +uncionalistas se interesan por e8plicar el pero no el histórico. Así es que una de las principales críticas que ha recibido es haberse desarrollado en el conte8to histórico del colonialismo * del neocolonialismo * haberlo sosla*ado, constitu*3ndose en un análisis estático * ahistórico. -studiaron las sociedades coloni2adas de4ando de lado el análisis de la sociedad * la cultura de los administradores colonialistas# es decir que no se anali2ó la realidad total de las colonias. ?a* incluso quienes encuentran una relación directa entre la administración colonial británica * el desarrollo de la escuela +uncionalista. 0a relación no ha sido del todo clara ni uní1oca. Rodos los traba4os de campo se dieron en los dominios del imperio británico * muchos antropólogos presentaron a la Antropología como una ciencia que podía ser =til a los gobiernos coloniales. Por otro lado, la administración colonial +ue una +uente de 5nanciamiento importante en muchas in1estigaciones. Sin embargo tambi3n se dieron con9ictos * tensiones, *a que los administradores coloniales 1ieron, en muchos casos, a los antropólogos como los de+ensores de las culturas no occidentales. -l planteo que hace uper es importante: )uper $I7%: $NN&$NJ. -n e+ecto, a partir de @alinoHsTi se desarrolló la etnogra+ía moderna, apo*ada en una metodología rigurosa * precisa: el traba4o de campo antropológico. Estructural.funcionalismo
). )ancusi y ). $. &itello Radcli/e.0ro&n y la in)uencia de Dur-+eim
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Al+red eginald adcliFe&GroHn inauguró, dentro de la antropología social británica, una corriente reconocida en la historia de la disciplina como estructural(funcionalismo. ació en /nglaterra en $""$. Sus primeros traba4os los reali2ó en la /slas Andamán, en el Wol+o de Gengala, entre $I!Q * $I!", ba4o la in9uencia de su maestro X. ?. . i1ers en el marco de las ideas di+usionistas. Eesarrolló in1estigaciones etnológicas en Australia, en las /slas Ronga, en el Pací5co Sur. Posteriormente se trasladó a Sudá+rica, donde +ue nombrado pro+esor de Antropología Social en la Mni1ersidad de -l Cabo. -n $I se publicó su primera obra importante, Los isle'os de Andamán, donde e8puso sus ideas * m3todos antropológicos. -n $I%7 +ue nombrado al +rente de la primera cátedra de Antropología Social que se creó en B8+ord. Al declinar la hegemonía del +uncionalismo de @alinoHsTi, la antropología inglesa se 1io in9uenciada por la corriente estructural&+uncionalista, imponi3ndole a la antropología británica una dirección sociológica. A di+erencia de @alinoHsTi, cu*o inter3s principal era el estudio de la cultura, adcliFe&GroHn dirigió su atención al estudio de la sociedad. Su punto de partida +ue el análisis social desde la concepción durTheimiana, que presenta los +enómenos sociales como e8teriores a los indi1iduos. -stos hechos residen en . 0as maneras colecti1as de pensar o actuar tienen una realidad di+erente a la de los indi1iduos. Claro que el indi1iduo, en esta concepción, inter1iene en su g3nesis, pero para que e8ista un hecho social es preciso que muchos indi1iduos ha*an combinado su acción. Mn hecho social, por e4emplo un tab=, una ceremonia o un gesto de cortesía, se caracteri2a por su naturale2a e8terna con respecto al indi1iduo, por la coacción que e4erce sobre su comportamiento. o es posible comprender una costumbre alimenticia, un ritual de sacri5co, etc. en t3rminos del carácter psicológico del indi1iduo. 0a costumbre e8iste antes de que el indi1iduo na2ca * perdura despu3s de su muerte. -l con4unto de hechos sociales de los que se ocupa el cientí5co deben entenderse como constitu*endo un sistema *, de este modo, el signi5cado * el propósito de una costumbre sólo pueden ser entendidos re5ri3ndolos al con4unto total de los hechos sociales de la comunidad. -l +ranc3s -mile EurTheim consideraba tambi3n que debía abandonarse la b=squeda de los orígenes históricos, *a que la +unción de una institución debía encontrarse en su utilidad presente. Para 3l la sociedad constituía un orden moral, . 0a misma estaba +ormada por representaciones colecti1as, ideales, 1alores * sentimientos comunes a todos los indi1iduos de una sociedad * era impresa en cada indi1iduo a tra13s del proceso de sociali2ación. -sta precedía al indi1iduo, se le imponía, era e8terior a 3l * lo trascendía. 0le1aba a cabo la unidad * la cohesión de una sociedad. Seg=n EurTheim el orden social dependía del mantenimiento del sentimiento de solidaridad. Su sociología contribu*ó a la ciencia social con un m3todo cientí5co * la con1icción de que la 1ida en sociedad era ordenada * susceptible de un análisis riguroso. Estructura y función
Al igual que EurTheim, adcliFe&GroHn apeló con +recuencia a las analogías biológicas. /nterpretó a la sociedad como un organismo cu*os distintos elementos Antropología )cátedra Sabarots !$$
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constituti1os contribu*en todos a la 1ida del con4unto * se ocupó +undamentalmente del estudio de las relaciones sociales. 0os conceptos de ma*or trascendencia en su obra son los de estructura * función. Concibe a los +enómenos sociales como una clase di+erente de +enómenos naturales susceptibles de ser obser1ados empíricamente. D al antropólogo social le concierne, seg=n 3l, in1estigar las +ormas de asociación entre los seres humanos que generan esos +enómenos. -stas +ormas de asociación entre ellos ponen en e1idencia una comple4a red de relaciones sociales. Como consecuencia, de5ne a la estructura social como el con4unto de las relaciones sociales e8istentes en un momento dado, que 1inculan a determinados seres humanos entre sí. [K' 0a estructura social representa lo que el autor da en llamar la de la sociedad, es decir, si pensamos en un organismo comple4o como es el cuerpo humano, la estructura es la que tiene el papel de organi2ar el +uncionamiento de los órganos. Al concepto de función lo aseme4a a la <5siología> de la sociedad. Si consideramos cualquier parte del proceso 1ital, como la respiración, la digestión, etc., su función es la contribución que hace a la 1ida del organismo como un todo. Ral como el concepto es usado aquí indica una acti1idad * esta acti1idad tiene una +unción )íbid.: !N. Para el uso que da adcliFe&GroHn a la palabra +unción, la 1ida de un organismo se concibe como el funcionamiento de su estructura. @ediante la continuidad de este +uncionamiento se preser1a la continuidad de la estructura. Pasando de la 1ida orgánica a la social cómo podríamos re9e4ar esta argumentación; Si tomamos como e4emplo una tribu australiana, como las que estudió el autor, en sus t3rminos podemos reconocer la e8istencia de una estructura social. 0os indi1iduos, que representan las unidades esenciales, están conectados por una serie de5nida de relaciones sociales dentro de un todo integrado. D si bien los indi1iduos cambian por di1ersas ra2ones &migración, muerte, etc.& la estructura de la 1ida social se mantiene, contin=a, gracias a un proceso compuesto por las acti1idades e interacciones de los indi1iduos * de los grupos sociales en los que están organi2ados. Si la 1ida social de la comunidad se de5ne como el funcionamiento de la estructura social, la función de cualquier acti1idad social recurrente, como el castigo de un crimen o una ceremonia +uneraria, es mantener la continuidad estructural. -n esta teoría ambos conceptos, estructura * función, son interdependientes. adcliFe&GroHn recoge la de5nición de +unción de EurTheim, recha2ando las de5niciones de +unción que no se relacionen con la estructura social. Para el británico, la +unción tiene que 1er con la contribución que una institución hace al mantenimiento de la estructura social# mientras que en @alinoHsTi 3sta se relacionaba con la satis+acción de necesidades psicobiológicas indi1iduales. -l estructural +uncionalismo se interesa por el estudio de las sociedades entendi3ndolas como sistemas sociales totales que pueden ser descriptos a partir de tres aspectos di+erenciables: a. 0a estructura social, es decir los dispositi1os por los que se mantiene una 1ida social ordenada. b. -l aspecto ecológico, el modo en que el sistema se adapta a su entorno +ísico.
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c. -l aspecto cultural, los mecanismos por los que el indi1iduo adquiere )adcliFe&GroHn $IJ: $I%. -s importante se6alar que si bien distingue estos tres aspectos, en sus análisis da prioridad táctica * teórica a los +actores socio estructurales: )adcliFe&GroHn $IJ:$I7. [K' @ás que e8plicar el cambio social, su preocupación estu1o centrada en la continuidad de la estructura social. Sostenía que, si bien los miembros de la sociedad podían cambiar, la <+orma> de la estructura tendía a mantenerse. Por lo tanto, la suposición básica del estructural +uncionalismo era que los sistemas sociales se mantenían a sí mismos a tra13s de grandes períodos de tiempo, dado que las relaciones entre sus miembros mantenían un alto grado de cohesión * solidaridad. -l concepto durTheimiano de +ue utili2ado * ampliado por adcliFe&GroHn, con los t3rminos , * . A5rmaba, a di+erencia de @alinoHsTi * de la ma*or parte de los antropólogos norteamericanos de la 3poca: <5o se puede producir una ciencia de la cultura. -ólo se puede estudiar la cultura como una característica de una sistema social... si se estudia la cultura siempre se están estudiando los actos del comportamiento de un conjunto especí!co de personas que están vinculadas en una estructura social> ).&GroHn, cit. en uper op.cit.:7%. Sostenía que la sociedad necesita de alguna clase de estandari2ación de los comportamientos de sus miembros, * es aquí donde aparece la cultura, en las +ormas aprendidas de sentir, pensar * comportarse. -sta estandari2ación de las creencias * los sentimientos se mantienen 1i1os a tra13s de rituales * símbolos. -sta área de la 1ida social correspondería a lo que EurTheim llamaba . D no podía ser estudiada en +orma aislada como creía @alinoHsTi. -n los debates sobre cultura * sociedad, adcliFe&GroHn se inclinó decididamente hacia las posiciones sociológicas, donde la cultura no era otra cosa que la e8presión distinti1a de dicha estructura. El m%todo y los estudios so1re el parentesco
Potlach: institución de los indios de la costa noroeste de Am3rica del orte que consistía en la distribución de bienes abiertamente competiti1a, *a que comprometía a los participantes a superarse mediante regalos o repartos *o destrucción de ob4etos 1aliosos con el 5n de demostrar prestigio * humillar al oponente. 11
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-n el marco de esta concepción, el camino para alcan2ar el conocimiento de su ob4eto es el m*todo de análisis sociológico. Con este m3todo es posible la clasi5cación sistemática de cualquier clase de +enómenos sociales. -s necesario combinar el estudio intensi1o de sociedades particulares con la comparación de numerosas sociedades. 0a primera tarea consiste en aprender lo más posible de las 1ariedades de los sistemas estructurales. -stos datos requieren de las in1estigaciones de campo. A tra13s de la comparación se pueden obtener generali2aciones 1álidas sobre la naturale2a humana, es decir, características uni1ersales de todas las sociedades. Su ob4eti1o 5nal será +ormular generali2aciones, es decir le*es sociales. [K' adcliFe&GroHn desarrolló importantes in1estigaciones relacionadas con los sistemas de parentesco. -stos sistemas incluían la terminología de parentesco, los derechos * obligaciones entre parientes, los usos asociados con los roles concretos de parentesco * las creencias * prácticas relacionadas. Se concentró en sus in1estigaciones en dos aspectos: en los usos que gobiernan las relaciones entre parientes * en los t3rminos que se utili2an para dirigirse a los parientes * para re+erirse a sí mismos )ego. 0o planteado por el autor contrasta con la apro8imación clásica que presentaba a las terminologías de parentesco como +ormas +osili2adas pertenecientes a sistemas parentales desaparecidos. Para los e1olucionistas el hecho de que en algunas sociedades el t3rmino +uera utili2ado para nombrar a un gran n=mero de hombres, re9e4aba la e8istencia de un período anterior de promiscuidad se8ual, en el que no se podía estar seguro de quien era el padre del indi1iduo. Sus in1estigaciones demostraron que la terminología tenía sentido en t3rminos de los sistemas de parentesco contemporáneos. -stos eran sistemas de relaciones sociales moldeados por la2os de solidaridad social. -l análisis más interesante sobre estos principios aparece en su tratamiento sobre las relaciones 4ocosas -ntre los thonga de @o2ambique el ni6o es disciplinado * controlado por su padre *a que se trata de una sociedad patriarcal. -n contraste la madre es una 5gura amorosa * tolerante. 0os sentimientos que se e8perimentan por la madre se e8tienden al tío materno al que se trata como < madre varón>. 0a relación con el tío materno * el abuelo materno implica un trato rela4ado * burlesco en el que se dan todo tipo de ruptura de las con1enciones +undamentales que gobiernan el uso de la comida, las relaciones se8uales e incluso el tratamiento insultante que no se toleraría hacia otros parientes. adcliFe&GroHn replanteó el problema * o+reció una e8plicación sincrónica de ese rasgo cultural, anali2ando además la signi5cación estructural +uncionalista de la relación 4ocosa entre los thonga. 0os thonga patrilineales, en e+ecto, tenían una tendencia a e8tender a todos los miembros del lina4e de la madre, el tipo de conducta * de actitudes que caracteri2aban las relaciones del indi1iduo 1arón con su madre &a+ectuosas e indulgentes& * de la misma +orma las que establecía con su padre * el lina4e de su padre &distantes * respetuosas&. 0a relación con la madre era indulgente * se ampliaba al hermano de la madre, a quien se llamaba con el t3rmino malume &madre 1arón&. Por contraposición, si el padre e8igía • •
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respeto, la hermana del padre nanani &padre mu4er& era una 5gura a=n más distante. Para comprender los tipos generales de comportamiento asociados con el parentesco nuestro autor presenta dos pares de oposiciones: respeto+amiliaridad * burlae1itación. -l primero describe las relaciones entre miembros del mismo lina4e, mientras que el segundo ilustra las relaciones con miembros de otros lina4es que están 1inculados, por e4emplo a tra13s del matrimonio. -n este =ltimo caso la burla * la e1itación sir1en a un propósito similar, protegen la delicada relación entre personas que están unidas por la2os de alian2a. Para mantener el respeto mutuo entre dos personas relacionadas mediante la2os de alian2a, una alternati1a es sosla*ar el contacto a tra13s de la . <,na vez pregunt* a un indígena australiano por qu* tenía que evitar a su madre política y su respuesta fue/ porque ella es mi mejor amiga en el mundo> ella me ha dado mi esposa... $l mutuo respeto entre el hijo político y los padres políticos... evitan los con3ictos que pudieran presentarse a trav*s de la divergencia de intereses> )adcliFe GroHn $I7J: I. 0a segunda alternati1a consiste en relacionarse mediante la burla o <+alta de respeto>. -n este caso, cualquier hostilidad seria se pre1iene con una actitud bromista, pautada por las tradiciones culturales. Ranto sus estudios de campo en la islas Andamán cuanto su in1estigación entre los aborígenes australianos mostraron gran contraste con lo reali2ado por @alinoHsTi en las islas Rrobriand. Ral 1e2 por personalidad más que por rigor cientí5co, se reconoció incapa2 de sortear muchas de las di5cultades en el trato con los aborígenes * esto se re9e4ó en su obra, donde las normas, los rituales * los conceptos que elaboró sobre ellos están más presentes que los hombres * mu4eres de carne * hueso. Su me4or obra se ocupó del totemismo * del parentesco, es decir de casos concretos de organi2ación social. -stos habrían de con1ertirse en dos de los temas centrales del nue1o estructuralismo que se puso en boga despu3s de su muerte. Estructuralismo
". #higlino Estructuralismo y Antropología
Claude 031i&Strauss )$I!"& es quien introduce el estructuralismo en la antropología * en 1irtud de su obra no sólo es el e8ponente más importante de la antropología estructural sino un re+erente crucial del estructuralismo contemporáneo en general. Si bien su +ormación inicial es en 5loso+ía * derecho, hacia $I%J se traslada de Lrancia a Grasil, donde dirige la cátedra de sociología en la Mni1ersidad de San Pablo. -n ese período reali2a 1ia4es de estudio por el interior de Grasil, que lo conducirán a nue1as in1estigaciones. Se inicia así como etnólogo$. 031i&Strauss utili2a tanto el t3rmino etnología como antropología para re+erirse a la antropología social )en Lrancia lo usual es la palabra -tnología para el estudio general * comparati1o * -tnogra+ía para los análisis empíricos. 12
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?acia $IN$ 1uel1e a Lrancia * a raí2 de la ocupación alemana a su país, en pleno desarrollo de la Segunda Wuerra @undial se 1e obligado durante un tiempo a trasladarse a -stados Mnidos, * es en ue1a DorT donde cursa lingUística con . \aTobson. -stos cursos, 4unto al estudio de la obra de L. de Saussure * . Rrubet2To* orientarán su propuesta relati1a a los estudios antropológicos, propuesta que entra6a para algunos una re+orma metodológica en la disciplina, dada la incorporación de la lingUística como modelo re+erencial para el estudio de los +enómenos sociales. -n $INJ enuncia su propuesta en el ensa*o $l análisis estructural en lingística y en antropología * en $IJ" la plasma en una de sus obras más importantes: Antropología estructural. Ou3 se propone 031i&Strauss; Su intención es la de elaborar un sistema de modelos de in1estigación a partir del cual se puedan ordenar los +enómenos comple4os * aparentemente desarticulados de la cultura. 0a lingUística, a la que considera la ciencia por e8celencia entre todas las ciencias sociales, aportará de este modo el modelo teórico&metodológico para el análisis antropológico estructural. <e las palabras el lingista e1trae la realidad fon*tica del fonema> de este la realidad lógica de los elementos diferenciales. 6 cuando ha reconocido la presencia de los mismos fonemas o el empleo de los mismos pares de oposiciones en varias lenguas distintas )K es el mismo elemento el mismo fonema el que garantiza )K la identidad profunda de objetos empíricamente diferentes. 5o se trata de dos fenómenos diferentes sino de uno solo> )031i&Strauss $IJ": $ $%. D dado que las realidades culturales arraigan en estructuras ocultas, )pro+undas, sub*acentes de carácter inconsciente, )p.e. para el hablante de toda lengua la decodi5cación es automática, inconsciente, constitu*e una e8periencia 1i1encial el aborda4e de las mismas, deberá situarse en el ni1el de las relaciones constantes, recurrentes, universales, que atra1iesan la di1ersidad de los +enómenos culturales. -l estudio de estos +enómenos tendrá como e4e los sistemas de simboli2ación de los mismos a partir de modelos +ormales. Por modelos +ormales se entiende, desde esta perspecti1a, los repertorios de reglas * operaciones lógicas, que regulan las relaciones sociales, sean las relaciones de parentesco u otras re+eridas a distintas instancias de la organi2ación social. -l antropólogo sería un lector que debe desci+rar un comple4o mensa4e que se hace presente en su e8periencia en tanto in1estigador. <$ste m*todo de investigación Zdice 031i&Strauss& nos permite superar una gravísima y nociva di!cultad propia de las indagaciones sobre los fenómenos sociales. 7oda ciencia debe conducir a la objetivación de los fenómenos estudiados es decir debe presentar los resultados de la investigación en forma de objetos. 0ero las ciencias sociales operan con una materia equívoca caracterizada por una ineludible valencia subjetiva/ Dcómo es posible rescatar este signi!cado subjetivo de los
Lonema es un )XinicT $IQI:7", independientemente de su posición. 0os +onemas suelen coincidir con las letras de una lengua. 13
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fenómenos sociales una vez que se los ha reducido a la forma de objetos y cómo es posible reducir a objetos los fenómenos subjetivosE DCómo es posible conciliar la contradicción que e1iste entre las e1igencias de la investigación que apunta a la objetividad y la naturaleza subjetiva de los fenómenos que habrán de ser objetivados>. <$sta di!cultad sería insoluble puesto que las subjetividades )K no podrían compararse ni comunicarse entre sí( si la oposición entre el yo y el otro no pudiera superarse en un terreno que es justamente aquel en el cual lo objetivo y lo subjetivo se encuentran/ nos referimos al inconsciente>. $n efecto por una parte las leyes de la actividad inconsciente siempre están situadas fuera de la aprehensión subjetiva Gpodemos tomar conciencia de ellas como objetoH y por otra sin embargo son ellas las que determinan las modalidades de esta aprenhensión> )031i&Strauss, C.: /ntroducción a la obra de @arcel @auss en Rullio& Altan $IQI: N$. Se obser1a aquí la importancia que le asigna a la noción de inconsciente, en tanto categorías mentales que darían cuenta del entramado cultural que media entre el *o * el otro. -sta noción, en el sentido de naturaleza inconsciente de los fenómenos colectivos, di5ere de la conceptuali2ación de Lreud, más allá de que 031i&Strauss se remita al mismo $N, * se apro8ima a la noción de inconsciente colectivo en EurTheim, entre otros, * a la de Goas, de quien 031i&Strauss se reconoce tributario, am3n de otros. <-i )... la actividad inconsciente del espíritu consiste en imponer formas a un contenido y si estas formas son fundamentalmente las mismas para todos )K como lo muestra )... el estudio de la función simbólica tal como *sta se e1presa en el lenguaje es necesario y su!ciente alcanzar la estructura inconsciente que subyace en cada institución o cada costumbre para obtener un principio de interpretación valida para otras instituciones y otras costumbres a condición naturalmente de llevar lo bastante adelante el análisis> )031i&Strauss $IJ": . 0a antropología se de5ne entonces como el estudio de la di1ersidad cultural a partir de la a5rmación de la identidad de las operaciones lógicas, de las categorías mentales que organi2an la 1ida social. -n este sentido, aquello que caracteri2a a la sociedad occidental es la e8plicitación de un instrumento &la lógica& que toda sociedad despliega en su dinámica concreta. D toda cultura es esencialmente un sistema simbólico regido por operaciones lógicas )nominación, seriación, clasi5cación, e8plicación en el que los distintos sistemas se relacionan entre sí en orden a la integración del sistema total. Por e4emplo, los sistemas de parentesco son a su 1e2 sistemas de t3rminos &categorías reconocidas de parientes& * sistemas de comportamientos * actitudes considerados apropiados entre los miembros de las distintas categorías. Lreud postula una teoría del aparato psíquico seg=n la cual la instancia del inconsciente no se rige por principios lógicos, como la instancia conciente. -l modo de ser del inconsciente son las representaciones, pulsiones, a+ectos. Eirá Lreud: el inconsciente es deseo * solo deseo. -s, además, una teoría sobre la con+ormación del psiquismo en los su4etos, no e8trapolable a las instituciones. 14
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Para los antropólogos que lo anteceden, sean e1olucionistas o +uncionalistas, el contraste entre la comple4idad cultural * el ni1el t3cnico * económico de las sociedades no occidentales se e8plica como atraso o dis+uncionalidad. Lrente a esta tradición antropológica, condicionada por la idea de progreso de la sociedad industrial * la legitimación más o menos encubierta del colonialismo, 031i&Strauss elabora una crítica a la antropología clásica. o se trata &a5rma& de e1aluar a las sociedades por lo que les +alta para parecerse a &e1olucionismo& o por la enumeración de una lista de necesidades e instituciones +uncionales comunes a todas las sociedades, a partir de la cual se corre el riesgo de de5nir estas +unciones en t3rminos de 1alores de nuestra propia cultura &+uncionalismo&. Por el contrario, a5rma, es en el estudio de las culturas di+erentes donde Bccidente puede encontrar una me4or comprensión de sí. Si bien rescata, entre otras producciones, la postulación de R*lor acerca de principios racionales que estarían presentes en toda sociedad, cuestiona en+áticamente la idea de e1olución social que sostiene la antropología e1olucionista. D si bien 1alora la dimensión del traba4o etnográ5co en @alinoHsTi o la noción de estructura en adcliFe&GroHn, su crítica aquí no es menos contundente, dado que las +ormulaciones de estos antropólogos constitu*en para 031i&Strauss e4emplos de análisis inducti1os, descripti1os, centrados en el orden de los hechos *, de sesgo organicista, en los que prima la mera obser1ación de realidades culturales * la ausencia de interpretación en el orden de las signi!caciones ocultas de las mismas. 0a indagación =ltima de 031i&Strauss &bisagra )dado los cuestionamientos anteriormente mencionados entre la antropología clásica * las corrientes posteriores, que podrían enmarcarse en la antropología contemporánea& seg=n sus propias palabras es la cuestión de la universalidad de la naturale2a humana. Cuáles serían las 1ías que permitirían trascender la descripción * elaborar proposiciones generales aplicables a culturas mu* distintas; 0a 1ía por e8celencia será el análisis estructural, que abarca tanto la dimensión etnográ5ca )descripción de sociedades particulares como la etnológica )comparaciones * generali2aciones, no sobre la base de una b=squeda de identidad de la función a la que se arribaría tras la di1ersidad cultural, sino a partir de la a5rmación de una identidad en el plano de las categorías mentales no de +unciones, que los hombres aplican a di+erentes problemas que la 1ida en sociedad plantea. -ste en+oque postula así con nue1o 3n+asis la identidad del hombre * la di1ersidad de sus obras. [K' El modelo de análisis
-l modelo de análisis que propone 031i&Strauss, * que e4empli5ca con relación a la estructura de los mitos, supone una de5nición que 3l resume en el carácter de sentido de los mismos, que no depende de los elementos aislados que inter1ienen en su con+ormación, sino del modo en que estos se combinan. -l análisis estructural de los mitos radica, por tanto, en el estudio de las unidades constituti1as de los mismos. [K' -n el análisis estructural de los mitos, 031i&Strauss aplica los pasos del análisis estructural en general. A partir de los mitos rele1ados por la etnogra+ía, e8clu*e todo aquello que se 1incule con acontecimientos concretos * con las signi5caciones que los actores de las sociedades consideradas les otorgan. Antropología )cátedra Sabarots !$$
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-stablece así hipótesis acerca de las relaciones estructurales que con+orman los mitos, por ende de las categorías inconscientes que operan en la construcción de estos. Constru*e de esta +orma un modelo que contrasta con la realidad. Eicho modelo será 1álido en tanto d3 cuenta de todos los mitos considerados )por e4emplo, en torno a la oposición vidaImuerte. 0a construcción de estos modelos permite, seg=n 031i&Strauss, considerar todas las relaciones en el interior de un sistema mítico * entre unos * otros, de modo de alcan2ar la estructura elemental de los mismos. -l estudio de los mitos, en este caso, sin e8clusión del aborda4e de otros sistemas simbólicos, tales como los sistemas de parentesco, son la 1ía que le permite a 031i&Strauss sostener la tesis de +acultades constantes, de estructuras recurrentes en la dimensión de lo humano. Mna de importancia crucial en el surgimiento de la cultura, es la prohibición del incesto. -stas estructuras recurrentes, de carácter uni1ersal, no entra6an para 031i&Strauss un carácter innato *o biológico, así como tampoco un carácter arquetípico. o obstante, como toda teori2ación acerca de uni1ersales en la dimensión cultural, conlle1a interrogantes abiertos * de comple4a resolución. )031i&Strauss $IJ": $!. Consideraciones críticas
[K' 031i&Strauss, en los inicios de sus estudios antropológicos, parte del análisis etnográ5co de sociedades concretas [K'. o obstante, en +orma progresi1a, sus in1estigaciones e intereses de1ienen en un es+uer2o incansable de construcción de modelos +ormales lógico&matemáticos que arro4arán como consecuencia un 1aciamiento de la historia * de los su4etos, reempla2adas ambas dimensiones por estructuras +ormales. -s en este límite en que su propuesta se erige en un cienti5cismo que la antropología contemporánea, en sus tendencias críticas, cuestionará. Eel análisis de las signi5caciones sociales &que dan cuenta de los procesos materiales * simbólicos de las sociedades en su pra8is histórica& este in1estigador se desli2a a un pri1ilegio de en la b=squeda de la uni1ersalidad de las categorías mentales. Aunque 031i&Strauss ha dicho que , reduce todo el problema de la creciente desigualdad entre las sociedades a partir del colonialismo * la e8pansión del capitalismo, a una concepción que simpli5ca las contradicciones históricas. -sta concepción bien puede sinteti2arse en +ormulaciones generales tales como la idea de )0e1i&
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Strauss $IJ": $!. Ouedarán +uera de su teori2ación preguntas tales como: cuál es el carácter de esa lucha; * cuáles son esos nue1os ob4etos; 0a 1alide2 de su propuesta, los modelos a partir de los cuales se propone in1estigaciones 1aliosas, irá adquiriendo la cualidad de +ormulaciones abstractas. Ral como se6ala Rullio&Altan, la 1alide2 de la in1estigación cientí5ca debe situarse en la adecuación a los problemas que contribu*e a esclarecer * no en un 1alor hipot3tico de los modelos en sí. [K' -n otro orden, el intento de resigni5cación general de la noción de inconsciente a partir de su lectura de Lreud, * la homologación de inconsciente a universal, implican un +or2amiento de la teoría +reudiana dado que no todo aquello re+erido a inconsciente adquiere por esta cualidad el carácter de uni1ersal para todo el g3nero humano. -n esta apelación a la noción de inconsciente, 031i&Strauss intenta una teoría general, que como *a se ha se6alado, encubre su 1ersión meta+ísica de los +enómenos culturales * su denodado intento de alcance de objetividad a la manera de las ciencias naturales, que reclama 5nalmente para las ciencias sociales * en particular para la antropología. -l análisis estructural de1iene, entonces, de m3todo en meta+ísica. 0a estructura, dice 031i&Strauss, es un instrumento de análisis pero con4untamente limita el papel del análisis etnográ5co, dado que una 1e2 que la estructura ha sido no considera a la etnogra+ía como un instrumento heurístico, en el sentido de posibilidad de nue1os * +ructí+eros conocimientos. eser1a este espacio, en cambio, a la matemati2ación de los modelos +undados en la 1ertiente de la lingUística estructural. <)ediante un n4mero reducido de mitos provenientes de sociedades indígenas que nos servirán como laboratorio vamos a realizar una e1periencia cuyo alcance en caso de tener *1ito será general puesto que esperamos de ella que demuestre la e1istencia de una lógica de las cualidades sensibles que repase sus vías y que mani!este sus leyes> )031i&Strauss $IQ":$$. -n cuanto a las críticas especí5camente metodológicas, las mismas se centran en el hecho de que 031i&Strauss no e8plicita si5cientemente de qu3 manera es posible descubrir las estructuras sub*acentes, ni cómo operan las trans+ormaciones que 1ehiculi2an el pasa4e de un sistema simbólico a otro. Ee manera que su propuesta de análisis estructural no lograría plasmar sus propósitos. 0o propio de la Antropología, a=n de aquella que lo precede &* de manera general&, es la indagación del sentido de los +enómenos culturales por sobre la forma lógica de los mismos. -l propósito de 031i&Strauss es aqu3l que se orienta a des&ci+rar los mensa4es culturales e inter&culturales, lo cual supone la posibilidad de instituir un discurso com=n entre culturas di1ersas * por ende la de establecer nue1as +ormas de comunicación entre culturas di+erentes. Sin duda este propósito tiene una 1alide2 signi5cati1a, a condición de que 3ste se in1olucre en las problemáticas socio&históricas. o obstante, en la pol3mica * e8tensa obra de 031i&Srauss se encuentran m=ltiples aportaciones. Su inter3s por el papel crucial de los símbolos * los sistemas simbólicos en el comportamiento humano, así como su crítica al
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etnocentrismo * al racismo occidental, hacen de 3l un pensador 1alioso, quien considera a la Antropología una con1ersación del hombre con el hombre$J. $as corrientes clásicas conclusiones
). )ancusi y ). $. &itello 0as corrientes teóricas que hemos presentado con5guran el momento clásico de los estudios antropológicos. Si bien nuestro camino nos lle1ó a rele1ar di+erentes corrientes de pensamiento, queremos se6alar algunas características que comparten todas estas escuelas. -l mundo o+recía un gran laboratorio * la comparación entre las di+erentes sociedades * culturas permitiría aprender sobre la naturale2a del hombre, sobre sus posibilidades * limitaciones. -l estudio de pueblos ale4ados de Bccidente, de peque6a escala, re1elaría determinados procesos básicos con ma*or claridad * de5nición que los estudios que se pudieran hacer en sociedades comple4as. -l siglo / denotó un marcado inter3s por encontrar los orígenes de las instituciones sociales )la +amilia, el parentesco, el derecho, la propiedad pri1ada, etc. * los antropólogos e1olucionistas hallaron las respuestas en su teoría sobre las distintas etapas que toda la humanidad había recorrido hasta llegar a la ci1ili2ación. -s a partir de la in9uencia del pensamiento de EurTheim que en la antropología las causas históricas son puestas entre par3ntesis, * los antropólogos clásicos se abocan a rele1ar in situ, con rigor cientí5co * gran ni1el de detalle, todas las +ormas de e8istencia tal cual se presentaban ante sus o4os. 0a unidad de análisis, la peque6a comunidad nati1a, debía ser abordada anali2ando la totalidad de las relaciones sociales. -sta e8igencia de totalidad era especí5ca de la antropología dentro de las ciencias sociales * se 1inculaba con las particularidades de su ob4eto de estudio * con su metodología. @ientras para @alinoHsTi el concepto totali2ador era la cultura de un pueblo en particular, para adcli+e GroHn será la sociedad o la estructura social * para 031i&Strauss será la b=squeda de la estructura sub*acente. 0a +uer2a de los antropólogos del siglo residió en que sus generali2aciones se basaron en la obser1ación directa de los procesos de interacción social entre las poblaciones ob4eto de su estudio. -staban con1encidos, además, que el análisis de culturas distantes * mu* di+erentes a la propia reportaba una nue1a perspecti1a * garanti2aba una ob4eti1idad ma*or con respecto a la cultura estudiada# esto no se podría conseguir de otra manera. Eebemos se6alar tambi3n que la antropología no sólo aportó un conocimiento global * conte8tuali2ado de los modos de 1ida más di1ersos sino que al intentar combatir el etnocentrismo, aplicó el relati1ismo cultural. Con ello se buscó poner de mani5esto que cada práctica, noción, costumbre sólo tenía sentido en su propio conte8to cultural. -sta mirada representó una contribución )... para la antropología que es una conversación del hombre con el hombre todo es símbolo y signo que se a!rma como intermediario entre dos objetos> )031i& Strauss: $IJ" /. 15
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importantísima en la in1estigación social, pues relati1i2ó el lugar de la sociedad occidental como parámetro de análisis. 0a contrapartida +ue que la antropología presentó una 1isión atomi2ada de la di1ersidad, donde cada cultura se constitu*ó en una totalidad en sí misma. -l 3n+asis puesto en el análisis de la lógica interna de los sistemas sociales * culturales hi2o perder de 1ista su subordinación a las distintas potencias coloniales. D el lugar que los mismos ocupaban en un proceso histórico planetario. )Wuber $II$: N7. ecordemos que las sociedades abordadas por la antropología clásica integraban dominios coloniales europeos o eran parte de territorios que los --MM habían subordinado en su e8pansión. Por esta ra2ón los antropólogos clásicos describieron a estas sociedades como si estu1ieran más o menos aisladas * +uesen autosu5cientes, homog3neas e integradas.
'ovimientos teóricos posteriores A. #ravano (amos a 1er a continuación una serie de mo1imientos teóricos contemporáneos, que se ubican en contraste * debate con los postulados de las corrientes clásicas. $a antropología de la descolonización 2ccidentalización y crisis de la Antropología
0as teorías clásicas no de4an de ser contemporáneas, en la medida que actuali2an permanentemente debates * críticas, * no han sido totalmente si se las sigue discutiendo. 0as que e8pondremos a continuación no son las me4ores teorías por ser las =ltimas ni las que *a han eclipsado a las clásicas, sino sólo propuestas e in1estigaciones más recientes. uestra 3poca la situamos a partir de la bisagra histórica de los a6os Q! del siglo , de acuerdo con la coincidencia de los procesos de descoloni2ación * crisis del paradigma clásico de la Antropología. -l e4e de la trans+ormación social se iría a plantear crudamente a partir de los debates teóricos producidos alrededor de la d3cada del Q!, con los procesos de descoloni2ación de +rica * Asia, interpretados por los antropólogos británicos, +ranceses * a+ricanos, que inclu*en la crisis teórica * metodológica re9e4ada en los aportes de la -scuela de @anchester desde la teoría del con9icto, las mani+estaciones de la -scuela Lrancesa, la crisis de la antropología norteamericana, al calor de la in1asión a (ietnam, * el desarrollo de las 1ertientes del mar8ismo. Rodas coincidentes en la +ocali2ación de situaciones de cambio * sus 1inculaciones con la totalidad histórica. Rodas abordaron la crisis acerca de dónde terminaba * empe2aba el campo de análisis antropológico * cuál era su unidad, su recorte * su especí5co ni1el de abstracción teórica. <$l descubrimiento de la situación colonial del subdesarrollo socioeconómico del etnocidio etc. conmovieron en forma Antropología )cátedra Sabarots !$$
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profunda a la Antropología conduciendo por lo menos a una parte de los antropólogos a replantearse los objetivos signi!cado y sentido de su quehacer profesional )... ebe asumirse que la toma de conciencia de estos procesos no sólo afectó moral e ideológicamente a la Antropología sino que cuestionó sus resultados acad*micos dado que es a partir de este momento que los antropólogos y por supuesto otros cientí!cos sociales comenzaron a dudar sobre su propia producción no sólo en t*rminos de la legitimidad de sus interpretaciones teóricas sino en t*rminos de la información obtenida en el trabajo de campo> )@en3nde2 !!!:. 0os estudios antropológicos clásicos se habían desarrollado Z* ho* se siguen desarrollando, a=n con este mismo modelo& en países le4anos respecto a los llamados centrales, más propiamente dominantes. -n los primeros tiempos, se había constatado una ma*or coincidencia entre el ob4eto de estudio de la disciplina )la otredad cultural * el re+erente empírico: esos pueblos le4anos. Pero a medida que esos ámbitos +ueron occidentali2ándose, la Antropología tu1o que de4ar de lado ciertas maneras de concebir a las sociedades de esos países tal como dictaba el prototipo de la 1ida aldeana: aislada, homog3nea, integrada en sí misma, en equilibrio, autocontenida, estática, al estilo fol; . A la 1e2, los pueblos que ser1ían para construir el ob4eto de estudio de los antropólogos se dispersaron por todo el mundo, cambiando el paisa4e de las grandes metrópolis capitalistas. -l ob4eto de estudio se complicaba para esa mirada clásica que de5nía a la Antropología por un lado con un sentido amplio * totali2ador ) * a la 1e2 la reducía a ser la . -ste se planteó como uno de los dilemas cruciales de la antropología social * cultural, que pretendía abarcar la totalidad de la ?umanidad pero de4aba de lado las realidades más conspicuas del hombre contemporáneo. A mediados de los sesenta hasta se llegó a hablar de , por la de qu* estudiar. Rodo esto se pone en e1idencia con el proceso histórico global de mediados de siglo, de descoloni2ación * crisis. Antropología
en
o antropología
de
Mna 1ariante consistió en 1er de qu3 manera se iban modi5cando los estilos de 1ida propios * tradicionales de los pueblos coloni2ados, por el proceso de moderni2ación )urbani2ación * en algunos casos industriali2ación. Aquí es donde se planteó la dis*unti1a de pretender seguir encontrando en el ámbito moderno de las e8 colonias a aquellas comunidades que más se parecieran a las que tradicionalmente estudiaban los antropólogos. A esta opción teórica * empírica se la llamó hacer antropología , *a que intentaba encontrar su ob4eto en el ámbito moderno, comple4o, industrial, a las comunidades 3tnicas distintas, de migrantes, pobres, en suma: los Btros la @odernidad, por eso se sinteti2ó en la +rase , * el desa+ío +ue seguir concibiendo a esas comunidades como aisladas, internamente homog3neas * sin estar atra1esadas por los con9ictos de la sociedad donde se encontraban inmersas. -s una posición que parte de la base de que habría
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comunidades esencialmente antropológicas &como si +ueran cosas& * autónomas de los procesos históricos )de ahí su ahistoricidad. Eel otro lado, la opción era concebir a la sociedad en su con4unto como un ob4eto * la concentración urbana moderna como un ámbito nue1o o un re+erente empírico con el cual construir un nue1o ob4eto de estudio antropológico, que no se agotara en los grupos peque6os * considerados como auto&contenidos por la antropología clásica. -sta segunda alternati1a +ue bauti2ada $Q * consistió en tratar de apro1echar la rique2a metódica del en+oque antropológico para estudiar en +orma particular el +enómeno comple4o, moderno o urbano en la totalidad de sus mani+estaciones: cualquier sector social * cualquier aspecto o problema que se considerase. o trata de buscar un ob4eto como si +uera una cosa, )tal como se los llamó: , sino que considera a su ob4eto de conocimiento como una relación conceptual construida, como ho* en día sostienen la totalidad de las ciencias sociales$7. -n lugar de 1er lo que de por sí se considerara e8ótico )como cuando se estudiaba al * se lo pre&4u2gaba como en las antípodas de la propia cultura, en este en+oque se tratará de estudiar lo +amiliar, lo propio de la cultura del obser1ador, como si fuera e1ótico. -s lo que se dió en llamar e1otización de lo familiar )Ea @ata $I"%, Wuber $II$, osaldo $II$:NQ. /mplica recuperar, del aborda4e antropológico, aquello que hacía el antropólogo clásico: estudiar al otro como lo totalmente a4eno a la cultura del in1estigador. Pero ahora se trata de construir una otredad conceptual, que permita descentrarse * así poder 1isuali2ar ángulos, contradicciones e intersticios que de otra manera )sobre todo positi1ista * esencialista, al estilo de la antropología en no se podrían captar. -s una otredad construida porque se parte de la base que la otredad no e8iste en si, +uera del conte8to en el que se la constru*e como tal. D esto cabe para los estudios sobre las sociedades que más ocupan a los antropólogos )las e8tra6as a su propia cultura cuanto para los que tratan la sociedad propia del analista, acentuándose para los en+oques sobre las relaciones más abarcati1as. De lo 3ue permanece a lo 3ue cam1ia
Reóricamente, los caminos se bi+urcaban en tratar de 1er qu* se conservaba dentro de este proceso de cambio o estudiar el proceso de cambio como tal, es decir qu* cambiaba. Sin embargo, en ambas opciones se tomaban como dadas las realidades culturales tribales nati1as * al cambio se lo consideraba causado =nicamente desde Bccidente, lo que muchos catalogaron como 1isión ahistórica de esas asunciones teóricas. D esto es lo que entró en crisis. 0a parado4a de toda crisis es que ella misma muestra lo anterior como <1ie4o>, , * al mismo tiempo lo constitu*e como tal, lo identi5ca * lo describe, denunciándolo o impugnándolo. Así es que desde el seno de los procesos de lucha contra el colonialismo * comien2o de la descoloni2ación se que las teorías clásicas de la Antropología constituían un modelo que Seg=n Wuldin, )$I"J:7$, es una +rase de -ames ] Woode )$I77.
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(er Gourdieu, Chamboredon ] Passeron )$I"J:J$&"$.
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básicamente no tomaba la situación colonial como parte sistemati2ada de su ob4eto. Se pasa a hablar entonces de este modelo como $", * una de sus características cla1es es lo que se le critica: su ahistoricidad, entendida como el no tener en cuenta las relaciones contradictorias de poder que constituían el +undamento del entre el Bccidente que estudiaba * los no occidentales que eran estudiados. -sta era la ra2ón por la cual se trataba de registrar en +orma urgente )031i&Strauss $IQ":NI: lo que permanecía en un conte8to de cambio. -l proceso de descoloni2ación era de5nido desde la 1isión clásica como un +enómeno de < p*rdida> de las características originales de las sociedades que estudiaban los antropólogos, sobre todo cuando el nati1o de esas aldeas migraba a los centros urbanos a conchabarse en traba4os de industrias de e8tracción )e4. minería de diamantes, en el centro * sur de +rica o hasta en busca de 1ínculos sociales que en las ciudades encontraban ámbitos más propicios que las prescripciones de la 1ida en la aldea. -ste modelo partía de preconcebir a las sociedades tribales en equilibrio interno. ?acia 5nes de los cincuenta, los antropólogos +ranceses comen2aron a abocarse críticamente al estudio de situaciones de cambio como resultado de la situación colonial )que de5nió precisamente Weorges Galandier, tal como se cita en Chiriguini, dentro del debate sobre la en la Lrancia que e8plotaba un imperio de ultramar, habiendo sido una de las cunas irradiantes del pensamiento libertario de la @odernidad. -l conte8to histórico comen2aba a marcarse con las luchas por la liberación de los pueblos dominados. Galandier 1io cómo esos pueblos, antes de la irrupción de Bccidente en sus 1idas, no estaban en equilibrio ni en situaciones de integración, como lo preconcebía el modelo estructural&+uncionalista clásico, sino que en su interior se desencadenaban procesos de con9icto como en todo sistema social. A 3ste * otros estudiosos lo que les interesó +ue el desencadenamiento de situaciones de desa4uste producidas por las relaciones de antagonismo social * político en un terreno de heterogeneidad cultural en procesos de transición, que incluía tanto la coloni2ación como la creciente descoloni2ación que, particularmente en los territorios ocupados por los +ranceses * su estilo de gobierno directo, tu1o características cruentas * 1iolentísimas. Al 1irar el e4e de posicionamiento del antropólogo, cambia el +oco * necesariamente debe entrar a tener en cuenta otros aspectos, como el conte8to histórico, tal como se mostró )en el capítulo de Chiriguini que se6alaba \acques 0eclerc. Galandier acent=a entonces la necesidad de integrar los conocimientos de la economía * la política a los estudios de la cultura en boga en los a6os cincuenta )Galandier $IQQ:$$$ * +undamentalmente la perspecti1a histórica: la antropología clásica, que parte de estudiar la di1ersidad de las reali2aciones humanas, no tiene más en cuenta &dice& la incidencia de las situaciones, de las condiciones concretas e históricas de los sistemas sociales * culturales )op.cit.:$Q. Como ciencia originariamente historicista )de acuerdo con el (er el llamado , enunciado por el argentino -duardo @en3nde2 en $IQ", citado en 0ischetti $I"". 18
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paradigma e1olucionista, ho* )op.cit.:$$J. Se pro+undi2arán, de esta manera, los estudios de procesos de transición del sistema nativo, de lo que cambia en estas sociedades, dentro de la situación de con9icto central del colonialismo, lo que implica ob4eti1ar no sólo la cultura nati1a sino tambi3n . D con esta toma de posición el modelo del equilibrio entra en crisis tanto metodológica como teóricamente. 0o mismo ocurrirá en el seno de otra gran pro1eedora de estudios: la antropología británica. De la +omeostasis al con)icto
0a idea de una continua autorregulación, capa2 de lograr un equilibrio interno, que en los organismos 1i1os se denomina homeostasis, se había e8trapolado a las sociedades estudiadas por la Antropología * +ormaba el n=cleo teórico central del pensamiento estructural&+uncionalista de adcliFe&GroHn * +uncionalista de @alinoHsTi )?errán s+. Pero las 1ertiginosas trans+ormaciones de las colonias británicas, sobre todo en +rica Central, lo pusieron en crisis. -n +orma creciente se constataban los cambios en el modo de 1ida tribal a+ricano, caracteri2ado principalmente por las relaciones sociales primarias )cara a cara, típicas de la 1ida en aldea * de parentesco. Además, el e+ecto de los 9u4os migratorios a los centros poblados, impuestos por las relaciones coloniales dentro de la di1isión internacional del traba4o, hacía que emergiera &a la 1ista de los antropólogos& un conte8to donde con1i1ían obligadamente distintos grupos tribales. D esto tambi3n produ4o el cuestionamiento de las categorías de análisis. Aparecía, por un lado, la 1ida tribal como perdi*ndose *, por el otro, la 1ida en las ciudades como tribalizándose, pues los migrantes ponían de mani5esto sus di1ersas culturas &mediante 5estas, ceremonias, recetas, costumbres& en un conte8to nue1o. Mna de las muestras más sintomáticas de esta crisis del paradigma clásico es la se6ali2ación &por parte de Wod+re* Xilson, discípulo de @alinoHsTi& de la presencia dentro de estas ciudades de que mantenía, no obstante, parte de su 1ida cultural aldeana. -n un principio, se tu1ieron en cuenta los cambios en las identidades 3tnicas * a la 1e2 se obser1ó cómo, cuanto más se integraba un grupo a la 1ida urbana, ma*ormente rei1indicaba su cultura aldeana, con+ormando asociaciones ceremoniales * de a*uda mutua. 0uego se 1io que estos grupos asumían comportamientos que se distanciaban de los 1alores tribales tradicionales. 0os traba4adores de las minas, por e4emplo, ante un con9icto salarial de4aban un tanto de lado sus lealtades 3tnicas, para pasar a establecer 1ínculos de clase social. -s más, las autoridades coloniales, en un procedimiento típico del sistema de dominio indirecto, impulsaron que los mineros se organi2aran seg4n su propia cultura, por e4emplo, respetando a sus Conse4os de Ancianos. Vstos, por supuesto, no con+ormaban una generación acostumbrada a este tipo de con9ictos sindicales, por lo que sus conse4os tenían una orientación distinta a los argumentos netamente de clase de los 4ó1enes. 0os traba4adores no seguían los cursos de acción tradicionales e incluso terminaron, en algunos casos, acusando a sus propias autoridades
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tribales de conni1encia con el colonialismo. -s así cómo la 1ida tribal aparecía, entonces, como puesta en crisis, * los 1alores tradicionales como en decadencia. Algunos estudiosos consideraron que esto implicaba un de la 1ida tribal a la clase social, aunque, en realidad, los grupos indígenas nunca habían de4ado de estar insertos dentro de la estructura de clases del sistema mundial, seg=n los autores mar8istas. Pero además, se debió asumir que esta 1isión pro1enía tambi3n de una +alsa comparación entre las condiciones de 1ida de los a+ricanos en las ciudades * una 1ida tribal hipot*tica, aparentemente no contaminada * super1i1iente en las aldeas, es decir: se partía de dos estereotipos considerados como autónomos, el tribal * el no tribal o urbano. Porque, en realidad, los 1alores que se rei1indicaban como tribales en los nue1os escenarios no eran más que procesos de trans+ormación que implicaban posicionarse ante los con9ictos * no por el mero a+án de mantener las tradiciones culturales, aunque así lo esgrimieran ellos mismos. -l culturalismo clásico de5nía estos +enómenos como aculturaciones, partiendo de la base que el cambio pro1enía sólo del lado occidental * que las sociedades tribales eran estáticas. enneth 0ittle, al estudiar el renacer de las asociaciones 1oluntarias de a*uda mutua sobre la base de los la2os tribales * 3tnicos, conclu*ó que, en realidad, se rei1indicaban uniones tribales que en las aldeas nunca se habían dado, sólo que en la ciudad resultaban estrat3gicamente necesarias para sobre1i1ir. ?abía que considerarlas, por consiguiente, no como super1i1encias tradicionales, sino +ormas nuevas de organi2ación, que esgrimían su etnicidad como herramienta. (er los procesos de trans+ormación implicaba, entonces, obser1ar cómo estos grupos se organi2aban para sobrelle1ar las situaciones de con9icto *, además, cuestionar si la homeostasis en que se los suponía 1i1iendo tribalmente no era el resultado de una 1isión +alsa. Al darse estos debates en el seno de los estudios a+ricanistas de los antropólogos de la llamada -scuela de @anchester, del /nstituto hodes& 0i1ingstone, se abrió una perspecti1a que asumió como base no sólo una crítica a la 1isión clásica, sino la teoría del con3icto, con in9uencias mar8istas, que entendía que lo que había que estudiar era la situación de totalidad, que abarcaba tanto las sociedades nati1as cuanto tambi3n sus relaciones de asimetría * dominio de parte de la acción de los coloni2adores, inclu*endo, por supuesto, a los antropólogos * sus modelos. -l principal e8ponente +ue el suda+ricano por nacimiento * o8+ordiano por +ormación @a8 WluTman, que hi2o hincapi3 en englobar, dentro de los estudios antropológicos, a la , sin reducir la mirada a la sociedad nati1a, * aplicando una mirada histórica, que ponía el acento en los procesos de poder * con9icto interno * no de mero desarrollo de una cultura típica. ede5nió, entonces, actos que los antropólogos clásicos habían catalogado como <1engan2as de sangre> *, por lo tanto, signi5caban simples autorregulaciones del sistema, como contra el poder establecido. Consideró los rituales no sólo como e8presiones de cohesión * a5rmación de 1alores sino como una muestra de las luchas por imponer 1alores de parte de los grupos con intereses internos contrapuestos dentro de las sociedades. Su estudio del eino ul= demostró que, en todo caso, el equilibrio es el resultado de un estado de las oposiciones antagónicas de intereses * no una *u8taposición de 1alores culturales di1ersos. Cuando estudió los sistemas de Antropología )cátedra Sabarots !$$
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parentesco, incluso, los de5nió dentro de los t3rminos de la pu4a por el control social. 0a organi2ación del control social &a5rmó& es igual de complicada en las islas del @ar del Sur que en 0ondres. 0a cohesión social depende de las di1isiones * con9ictos dentro de las sociedades, en grupos opuestos que luego entrecru2an sus miembros mediante los la2os parentales. -8plica así la e8ogamia )alian2as matrimoniales entre miembros de distintos grupos, clanes o tribus por el principio de cooperación entre grupos opuestos * hostiles. -l matrimonio se representa simbólicamente como )WlucTman $IJQ. Parecería que, en toda sociedad, decía WlucTman, < los grupos tienen una tendencia inherente a segmentarse y a reunirse luego en alianzas transversales>, que los ritos * símbolos a*udan a establecer. ei1indica una nota característica del ob4eto antropológico de todas las 3pocas, a la que agrega una 1isión dial3ctica: es la mirada sobre la sociedad * los procesos desde dentro * no a partir de una posición de super&1isión e8terna, propia de otros ob4etos disciplinares. Por e4emplo, cuando estudia los sistemas de lealtades entre los príncipes 2ul=, sostiene que las guerras entre ellos sobre1ienen para preser1ar el sistema monárquico. Son del reino, dado que las +acciones luchaban para mantener la monarquía * no para eliminarla )op.cit., esto es: como contrarios en unidad. ue1amente, el e4e es puesto en el con9icto * no en la estabilidad, o &si se quiere& rede5niendo 3sta como el resultado de un estado del con9icto. Podemos discutir si la de WlucTman implicó &como se le atribu*e por algunos autores& una posición netamente mar8ista, *a que el en+oque de @ar8 radicó básicamente en poner el acento en la contradicción principal estructural del proceso social * en la e8plotación del traba4o a4eno * no tanto en su resultado en el sistema de control social o político. -sta =ltima es una categoría más típica del en+oque de los sociólogos clásicos como Weorge Simmel, para quien la integración estaría contenida en el con9icto, * @a8 Xeber, con su 3n+asis en el sistema de dominio más que en el de e8plotación. WlucTman, sin embargo, parece que no había leído a estos autores cuando reali2ó sus traba4os )uper $I7%:$7". -n esto consistía el intento de superar los dualismos de la perspecti1a clásica de la Antropología, debatida entre la polaridad modernoItradicional, civilizadoIprimitivo, urbanoIaldeano, * claseIetnía. 0a superación de los dualismos no es algo dado sino un debate actuali2ado, tal como 1imos tambi3n para el caso del culturalismo. 0o importante es 1er cómo se ampara en una preconcepción de las sociedades como integradas en su interior, en tanto la teoría del con9icto nos incenti1a a buscar cuáles son las contradicciones internas que motori2an esas sociedades * cómo son a su 1e2 atra1esadas por las contradicciones de la estructura social en la que están irremediablemente incluidas, lo que en el escenario en que nos situamos implica básicamente hablar de la situación de dominio colonial * neo&colonial $I. A esta re+erenciación con estudios de autores inspirados en una perspecti1a dial3ctica dentro mismo de las escuelas de potencias coloniales )como es el caso de Lrancia * Wran Greta6a, debemos agregar la crisis autocrítica producida para la misma 3poca )mediados de los sesenta por antropólogos norteamericanos, sobre todo a raí2 de la in1asión a (ietnam, re9e4ados sint3ticamente en el Current Anthropology de $IQ". -l hecho es que se ponen en cuestión pro*ectos como el Camelot, en los cuales no pocos antropólogos eran contratados directamente por el Pentágono * sus agencias para establecer control sobre la población ci1il de países del Rercer @undo. Mn especialista militar así espetaba en 19
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Como al mar8ismo, a esta corriente se le se6aló luego el riesgo que se podía correr al pretender abarcar estudios totales del sistema de dominio capitalista * mantener al mismo tiempo el 3n+asis en el estudio de sociedades discretas, circunscriptas * acotadas, al estilo clásico. Porque la primera opción implicaba un en+oque deducti1ista, que necesariamente partía de lo general para caracteri2ar las realidades particulares, lo que podía neutrali2ar la posibilidad de introducir nue1os conocimientos desde el estudio de cada caso en particular, que +ue la posición inducti1ista típica del m3todo de casos, inaugurado precisamente por la -scuela de @anchester. Aportes mar*istas
0a presencia de esta corriente de pensamiento * acción ha dependido, dentro de nuestra disciplina, de acontecimientos históricos * políticos qui2á mucho más notoriamente que otras. -l conte8to de necesidad de su 1igencia teórica sigue estando dado por los interrogantes acerca de los cambios en la ?istoria * los modos mediante los cuales los seres humanos se relacionan con ellos. D la concepción de esos cambios no de4a de estar urgida de lo que el mar8ismo ha le1antado como emblema desde sus +undadores: la necesidad de toma de partido * compromiso del in1estigador, del analista, del obser1ador acti1o de la realidad. Por eso, no es de e8tra6ar que entronque con la matri2 iluminista que colocaba al progreso humano como un e4e de los debates * de la acción del pensador. Carlos @ar8 * Lederico -ngels lle1aron este asunto a constituirse en una de sus notas distinti1as: los hombres han 1enido interpretando el mundo, pero de lo que se trata es de trans+ormarlo. D en esa trans+ormación, que no se desarrollará en +orma inercial ni natural, es la acción 1oluntaria, conciente * organi2ada de los hombres la que determinará su curso. Sólo que esos cambios no se desarrollarán +uera de relaciones estructurales que act=an con independencia de la conciencia que los hombres tengan de ellas. 0o que nos sit=a ante un desa+ío permanente, dentro del cual la ciencia, la 5loso+ía, el pensamiento humano, 4uega un rol determinado * determinante, instituido e institu*ente, protagónico * a la 1e2 guionizado por una ?istoria que los hombres deben indagar en su totalidad de e8presiones, espaciales * temporales, en pro+undidad * en sus contradicciones internas. -stas son las ra2ones por las cuales el mar8ismo no ha podido quedar a4eno al desarrollo teórico de la Antropología, a pesar de que en algunos ámbitos acad3micos ni siquiera +ue nombrado )menos leído por muchas d3cadas. Sin embargo, @ar8 * -ngels están relacionados con nuestra disciplina desde sus inicios. 0a obra de 0eHis @organ in9u*ó en @ar8 por su intento de 1er la historia de la ?umanidad como el resultado de la superación e1oluti1a de contradicciones, en t3rminos de una dial3ctica que incluía el desarrollo de +uer2as producti1as materiales * las relaciones que los hombres de cada momento establecían entre Railandia al eH DorT Rimes: )Gerreman $IQ": +s Anthropology aliveE# citado por WarbulsT* $I7: J. Antropología )cátedra Sabarots !$$
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sí en t3rminos de poder * mutua dependencia, no estando para nada despo4ado de la idea de progreso * trans+ormación. Pero @ar8 &si bien tomó como re+erentes históricos a todos los modos de producción& se ocupó centralmente de la realidad del capitalismo industrial * no de las sociedades a las que se abocaría la Antropología. Por eso su in9uencia en el pensamiento de los antropólogos consistió básicamente en la pro*ección de su m3todo de análisis, el materialismo histórico, cimentado en su perspecti1a dial3ctico&materialista. -n su modelo, un componente central es el papel 4ugado por la producción social como base )estructura para la comprensión del +enómeno humano, desde lo económico hasta lo cultural )super&estructura. <...los hombres &a5rmó @ar8& en la producción social que llevan a cabo entran en relaciones de!nidas que son indispensables e independientes de su voluntad> esas relaciones de producción corresponden a una etapa de!nida del desarrollo de sus fuerzas materiales de producción. La suma de esas relaciones de producción constituye la estructura económica de la sociedad es decir el fundamento real sobre el cual se erigen superestructuras legales y políticas y al cual corresponden formas de!nidas de conciencia social. $l modo de producción en la vida material determina el carácter general de los procesos sociales políticos y espirituales de la vida. 5o es la conciencia de los hombres la que determina su e1istencia sino al contrario su e1istencia la que determina su conciencia> )@ar8: Prólogo de la Contribución a la crítica de la $conomía 0olítica. 0uego, en t3rminos estrictamente metodológicos, @ar8 * -ngels proponían estudiar los +enómenos en sus aspectos más abstractos, generales * uni1ersales, tal como se presentaban ante la e1idencia del sentido dominante, para ir anali2ándolos en ni1eles cada 1e2 más concretos * singulares, desde los cuales 1ol1er a establecer generali2aciones, esta 1e2 sobre la base de la constatación real * las causas históricas, sub*acentes a los +enómenos. Pero no sobre la base de lo que los hombres se imaginan de sus propias condiciones de 1ida, sino de lo que determina esas imágenes. D esa determinación pro1endrá del mo1imiento de la base material de toda sociedad * su +orma de ordenarse, de estructurarse en cada momento histórico * modo de producción, en relación dial3ctica con las +ormas de representarse esa estructura mediante la conciencia, la ideología o lo que nosotros ho* incluimos en la cultura. Además, la relación entre base estructural material * +ormas de la conciencia social e institucional constitu*e, para @ar8, el e4e alrededor del cual gira el mo1imiento histórico real * total, incluidas las contradicciones de intereses principales de cada sociedad, lo que en el capitalismo sería básicamente la relación entre capital * traba4o, que determina las cuestiones emergentes en las representaciones ideológico&culturales, incluida la ciencia. <$sta concepción de la istoria consiste pues en e1poner el proceso real de producción partiendo para ello de la producción material de la vida inmediata y en concebir la forma del inter*s correspondiente a este modo de producción y engendrada por *l es decir la sociedad civil en sus diferentes fases como el Antropología )cátedra Sabarots !$$
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fundamento de toda la istoria presentándola en su acción y en cuanto $stado y e1plicando sobre la base de ella todos los diversos productos teóricos y formas de la conciencia de religión de !losofía moral etc. así como estudiando a partir de esas premisas su proceso de nacimiento ... permitirá e1poner las cosas en su totalidad> )@ar8 ] -ngels: La +deología Alemana# N!. Como puede in+erirse, la base de toda concepción de los con9ictos coloniales, que constitu*eron el conte8to de crisis de la antropología clásica, debía incluir necesariamente este tipo de e8plicaciones totales e históricas, tanto las contradicciones internas de las sociedades coloni2adas cuanto las de las potencias coloni2adoras industrial&capitalistas, que eran precisamente las sociedades a las que @ar8 * -ngels habían dirigido con ma*or pro+undidad su atención. Ee hecho, esta comprensión de los con9ictos como parte de una dial3ctica histórica concreta * a la 1e2 general &como el mar8ismo argumentó * demostró en la obra analítico&sint3tica de sus +undadores&, ponía en crisis el modelo de la mera como =nica 1ariable de ponderación del ob4eto antropológico, +undamentando epistemológica * 5losó5camente la denuncia de muchos estudiosos acerca del encubrimiento de procesos de dominio, desigualdad, e8plotación * dependencia. @ar8 resultaba ser &a más de un siglo de sus escritos principales& el <+antasma> que recorría estas constataciones, cada 1e2 más tangibles incluso para una disciplina que ma*ormente le había dado la espalda !. (amos a distribuir el conte8to de +ormulación de los aportes mar8istas en Antropología en $ la 1ertiente ocupada por los lineamientos macro&histórico& e1oluti1os, asociada a la llamada escuela de economía política * lo que se ha dado en llamar mar1ismo estructural, qui2á la 1isión más sint3tica, que mantiene ho* una 1igencia plena en sus intercambios con las corrientes interpretati1istas acerca de la práctica. $os estudios de evolución y desarrollo macro.social la teoría de la dependencia
-n e+ecto, de acuerdo con la norteamericana Sherr* Brtner, durante los a6os sesenta del siglo las con1ulsiones sociales despertaron en Bccidente grandes cuestionamientos acad3micos en todas las disciplinas * en Antropología tomó la +orma de denuncia de los la2os históricos con el colonialismo * el imperialismo. <0ero esto apenas ara'ó la super!cie &dice&/ el asunto se trasladó rápidamente a la cuestión más profunda de nuestros marcos teóricos y especialmente al grado en que los mismos incorporan y promueven los supuestos de la cultura occidental burguesa> )Brtner $I"Q. D , a5rma Brtner. -sto, a pesar de que había estado casi ausente de las teorías antropológicas más aceptadas, incluidos los ecólogos culturales, =nicos que se proclamaban en los Q!, que tampoco in1ocaban a @ar8. Curiosamente 031i&Strauss proclamaba haber sido in9uido por @ar8 * su modelo de por deba4o de la super5cie de los +enómenos 1isibles, para encontrar &como Lreud en otros aspectos& los elementos sub*acentes determinantes. 20
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Mna línea de desarrollo del mar8ismo en Antropología que podríamos llamar de reconstrucción histórico(evolutiva, con in9uencia ma*or en los estudios arqueológicos * etnográ5cos, es la que inclu*e la etnogra+ía so1i3tica * la obra de aislados autores británicos, +ranceses * norteamericanos. Su base estaba constituida por los escritos originales de @ar8 * -ngels, cu*o +oco +ue la reconstrucción de modos de producción pre&capitalistas, que hilaban desde la comunidad tribal )economía basada en la acti1idad primaria, e8tracti1a * con primeras +ormas de agricultura * domesticación, +orma de propiedad comunal, sin clases * sin -stado, los imperios mercantilistas escla1istas de la AntigUedad en el llamado (ie4o @undo )con -stado, al que luego se intercalaría el modo de producción asiático )representado por los imperios de Briente * en Am3rica se agregaron luego a incas, ma*as, a2tecas * chibchas, para continuar con los modos +eudal * capitalista. Si +uera preciso ponderar un principio metodológico rector de estas reconstrucciones, seguramente no encontraremos palabras más claras que las del propio -ngels, que así di+erenciaba el pensamiento materialista histórico del idealismo: de que en todas las sociedades que han des!lado por la istoria la distribución de los productos y la agrupación social de los hombres en clases y estamentos que lleva aparejada se halla presidida por lo que esa sociedad produce y por el modo como cambia sus productos. -eg4n eso las 4ltimas causas de todos los cambios sociales y de todas las revoluciones políticas no deben ir a buscarse a las cabezas de los hombres ni a la idea que ellos se forjen de la verdad eterna ni de la eterna justicia sino a las transformaciones operadas en el r*gimen de producción e intercambio> dicho en otros t*rminos han de ir a buscarse no a la !losofía sino a la economía de la *poca de que se trata.> ) Anti(hring. -l e4e del desarrollo histórico&e1oluti1o de las sociedades será la acumulación que, en determinado estadio, hará que sur4an las ci1ili2aciones antiguas, a partir de la apropiación del e8cedente de producción de alimentos por parte de clases que se constituirán en dominantes. Se producirá la concentración en palacios * aparecerán los g3rmenes de las primeras ciudades, com=nmente alrededor de centros ceremoniales. -l surgimiento de clases ociosas, incapaces de auto&sustentarse mediante la acti1idad producti1a directa *, por lo tanto, interesadas en e8plotar el traba4o de los productores directos )agricultores, pastores, artesanos, hi2o menester la institucionali2ación del dominio político )estado, militar )e43rcito e ideológico )religiones estatales. 0a acumulación apropiada de ese e8cedente por clases minoritarias * cada 1e2 más poderosas luego hi2o necesaria la e8pansión * la conquista. 0a arqueología )Childe siguió demostrando que las tesis engelsianas * morganianas se 1eri5caban, acerca de la realidad de hace J!!! a6os. 0a apropiación del e8cedente * la e8plotación del plus1alor, se podía pro*ectar como principio para e8plicar tambi3n las realidades contemporáneas capitalistas. -l conte8to de necesidad de e8plicar la e1olución humana en t3rminos de progreso, como superación de contradicciones en cada estadio histórico, hi2o que Antropología )cátedra Sabarots !$$
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el mar8ismo caracteri2ara procesos de e8plotación dentro de un desarrollo cuantitati1amente ma*or de las +uer2as producti1as como no sólo necesarios sino desde el punto de 1ista de la superación de las de modos de producción perimidos$. Así, la ciudad del capitalismo industrial, aun con sus posteriormente engrosados cordones de pobres a su alrededor, que componían los , no de4aban de ponderarse como escenarios propicios para la superación de las contradicciones entre el r3gimen +eudal absolutista, pre&moderno * autoritario, * los de la ciudad moderna, escenario de la democracia +ormal burguesa * el contrato como +orma 4urídica básica, del que el traba4o asalariado resultaba ser un e+ecto re1olucionario respecto al antiguo r3gimen. -l principio de superación de las contradicciones +ue el que más lle1ó a cabo esta 1ertiente reconstructi1ista mar8ista, de cu6o e1olucionista, 5el a la intención de dar respuesta al dilema rousseauniano del progreso, rei1indicado * concebido no como algo ine1itable sino sólo alcan2able con la lucha de contrarios )+eudal 1s. capitalista * capitalista 1s. socialista. Pero parte de esos dilemas del mundo moderno lo daba la constatación de que cuando más progresista podía aparecer el escenario capitalista )tanto de -uropa cuanto de sus colonias, más pobre2a se generaba en su derredor, porque &en aparente parado4a& los pobres huían del campo hacia los centros industriales pera constituir las partes más pobres, menos equipadas * menos , pletóricas de problemas, de esas metrópolis. 0os estudiosos mar8istas posteriores se dieron a la tarea de responder a estas perple4idades del mundo moderno, en debate con las tesis modernistas del subdesarrollo )surgidas a partir del 5n de la segunda posguerra del siglo , que suponían &tautológicamente& que el crecimiento de las metrópolis de los países del Rercer @undo se debía a las migraciones * que la presencia de los migrantes eran las de los problemas sociales crecientes, *a que no se a la 1ida moderna. 0a ciencia, desde esta perspecti1a, debía hacer es+uer2os por aportar a esta , de modo que ese estilo de 1ida, supuestamente transitorio, +uera 1encido por las +uer2as de la integración al mercado moderno de traba4o * de las instituciones. <7odos los progresos de la sociedad humana a partir del momento en que se remonta sobre la fase primitiva comienzan con el día en que el trabajo de la familia crea más productos de los que son necesarios para su sustento con el día en que una parte del trabajo puede invertirse no ya en producir simples medios de vida sino en crear medios de producción... $sta es la base de todo el progreso social político e intelectual.> )-ngels: Anti hring# !$. -ste progreso es concebido desde el mar8ismo en contraposición a los otros modos de producción, sobre la base de la libertad a la que necesariamente el hombre se dirige si logra romper los la2os que lo atan a la sociedad de clases. Por lo tanto, desde esta corriente de pensamiento se ponderó al capitalismo como más progresista en el parangón con la ser1idumbre * el escla1ismo pre1ios. -sto e8plica el anti etnocentrismo del propio @ar8, a=n rei1indicando el e1olucionismo: )@ar8: @ormaciones económicas precapitalistas# J". 21
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0a respuesta teórica pro1ino de la economía política * la teoría del desarrollo mundial, con la teoría de la dependencia, que contrarrestó así a los argumentos desarrollistas, hacia 5nes de la d3cada del sesenta. -n Antropología, e8plicaba las situaciones de pobre2a e8trema no como resultado de ser sociedades tradicionales, atrasadas o primiti1as, sino de estar en relaciones de dependencia de los centros de poder económico * político capitalista e imperialista. ue1amente, 1emos, el debate se situaba entre los modelos dualistas )modernotradicional, urbanorural * los en+oques dial3cticos: <...el subdesarrollo ... es el resultado necesario de cuatro siglos de desarrollo capitalista y de las contradicciones internas del propio capitalismo ... )de la e1propiación del superávit económico producido por los más y su apropiación por parte de los menos la polarización del sistema capitalista en un centro metropolitano y sus sat*lites perif*ricos )* por la continuidad de la estructura fundamental del sistema capitalista> )Wunder LranT $IQI:$. Así se de5nía la dependencia, causa de la pobre2a * asimetría social * económica de los países del llamado por ese entonces Rercer @undo )el Segundo lo constituían los países del bloque socialista. Sobre esta base los estudios antropológicos se ubicaron dentro de una escala de orden mundial, donde se hacía necesario ponderar aquellas relaciones de totalidad que los teóricos del con9icto )dentro de la -scuela de @anchester * de la escuela +rancesa de la des& coloni2ación habían +undamentado a partir de la crisis *a citada. Se desarrolla así una corriente mar8ista en teoría antropológica, a la que se bauti2ó escuela de economía política, que surgió primero en los -stados Mnidos * más tarde tambi3n en /nglaterra. Se inspiró principalmente en la teoría de la dependencia * los análisis socio&políticos sobre el sistema mundial * los países considerados subdesarrollados. Abarcaron sistemas regionales en gran escala * cuando reali2aron traba4os de campo en comunidades especí5cas sus in1estigaciones tomaron generalmente la +orma de estudios sobre los e+ectos de la penetración capitalista sobre esas sociedades, com=nmente campesinas. Sus limitaciones pro1endrán no tanto del se6alamiento de la dependencia como +undamento estructural para la e8plicación de los procesos históricos, sino respecto a la posibilidad de dar cuenta de la di1ersidad de opciones que los con4untos sociales constru*en para sobrelle1ar la opresión o condicionamientos del dominio mundial neo&colonial, por un lado, * de cómo se hace e1idente que la dependencia no solamente se e4erce desde el e8terior de los países del Rercer @undo sino tambi3n desde sus mismas estructuras internas capitalistas. Su m3rito ma*or +ue precisamente incluir a las culturas campesinas, que estudiaron en +orma intensa * concebidas dentro de sistemas de intercambio * dependencia económica más amplios * no como comunidades aisladas, lo que los colocó en la línea de rei1indicación de la dimensión histórica de los análisis antropológicos. Se les criticó, su 3n+asis en categorías económicas más que políticas, lo que les impidió dar cuenta de que las sociedades campesinas no sólo estaban por el imperialismo, sino que tambi3n desarrollaban
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alternati1as producti1as no capitalistas de importancia, de acuerdo con las decisiones de los actores en cada situación . El de1ate so1re la determinación estructural
-sto nos lle1a al debate sobre la preminencia de los sistemas o estructuras que rigen las acciones * conductas sociales, independientemente de la 1oluntad de los hombres, o si son las representaciones del mundo que se hacen los actores las que permiten producir los acontecimientos que 4alonan la historia humana. Mn debate que se 1iene alternando en el diálogo entre las distintas corrientes de pensamiento teórico * que es propio de todas las ciencias sociales. Algunos &en nuestra disciplina& lo han rotulado como la tensión entre estructura * cultura. /ndependientemente del sentido que se le d3 a ambos conceptos, e+ecti1amente uno apunta a un ordenamiento de componentes * el otro a una constelación de signi5cados. Porque tanto para la antropología británica )adcliFe&GroHn, @alinoHsTi cuanto para la +rancesa )031i&Strauss * el mar8ismo, implica pensar en un ordenamiento de algo, aunque sea de contenidos di1ersos. Pueden ser relaciones entre roles e indi1iduos )adcliFe& GroHn, 4erarquías de 1alores * reglas )@alinoHsTi, relaciones semánticas o lógicas )031i&Strauss o +uer2as * relaciones producti1as )@ar8. Pero el t3rmino apunta en todos los casos a un orden e8terno a las decisiones 1oluntarias o indi1iduales de los actores, que en todos los casos estarían )de acuerdo con estas corrientes de pensamiento determinados o condicionados, actuando de acuerdo con esas estructuras. -ste e4e de debate sobre la determinación estructural por un lado * las decisiones de los su4etos por el otro es crucial. -n Antropología se ha pro+undi2ado en los =ltimos tiempos, en el llamado mar1ismo estructural. -s lógico pensar que el concepto central de esta corriente, desarrollada principalmente en Lrancia e /nglaterra, +uera el de estructura, de5nida como el modelo )e8plicado en su lógica interna * la realidad que en cada 3poca histórica prepondera para desarrollar las +uer2as producti1as * las relaciones de producción, que determina el resto de las mani+estaciones humanas )normas,
0o mismo se dio respecto a la teoría de la dependencia aplicada a las grandes ciudades latinoamericanas. 0a e8istencia en ellas de una )seg=n el rótulo del argentino \os3 un de población, habitante de 1illas miseria, +ue e8plicada primero por la teoría de la moderni2ación, que sostenía que era un estado transitorio de los migrantes, que en un tiempo relati1o se a la 1ida en la ciudad. 0uego, dada la persistencia de estos sectores habitando estos asentamientos, marginados de los recursos * ser1icios de los centros urbanos, la teoría de la dependencia atribu*ó el +enómeno a los procesos estructurales que ataban a nuestros países &*, por ende, a sus ciudades& a los mandatos del imperialismo. Pero ninguna daba cuenta de )al decir de la chilena 0arissa 0omnit2 en estas relaciones de marginalidad * pobre2a. -l hiper&deducti1ismo de la teoría encontraba así su crisis, por lo que se hi2o necesario 1irar la mirada hacia los en+oques que tomaran en cuenta las acciones * representaciones de los actores )mediante traba4os de campo intensi1os, en +orma inducti1a tanto como sus determinaciones estructurales )Xalton $I"N# Wra1ano !!Q. 22
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+ormas de organi2arse, de pensar, lo que hemos 1isto que se dio en llamar la . Por qu3 se lo bauti2ó así en Antropología; -n parte para di+erenciarlo de la orientación hacia el establecimiento de secuencias e1oluti1as )que tu1o como epígono la escuela de economía política, con en+oques ma*ormente macro& abarcati1os. -l mar8ismo estructural continuó sosteniendo como unidad de análisis a las sociedades discretas, pero comprendidas en sus relaciones estructurales con las totalidades históricas en las que se hallaban inmersas. ?a* quien opina que, en realidad, en los setenta @ar8 +ue utili2ado para repensar los modelos teóricos e8istentes e instalar un aborda4e distinto al culturalismo con categorías como clase social )que los no mar8istas de5nían de acuerdo con el poder adquisiti1o, estructura )como 1imos reci3n, totalidad histórica )que los culturalistas de5nían como * principalmente el cuestionamiento, desde la crítica dial3ctica, a los propios supuestos ideológicos de la disciplina. Mno de los e8ponentes del mar8ismo estructural +ue @aurice Wodelier. Eesarrolló no sólo el típico traba4o de campo antropológico en sociedades concretas, sino que se sumó a la línea de abstracciones etnológicas )para seguir la terminología usada en Lrancia más amplias, con +ocali2ación en los sistemas económicos. Ee5nía a la Antropología como )Wodelier $IQ7:N&N%. -l mar8ismo estructural ubicó como determinantes de los comportamientos sociales * culturales no al ambiente natural *o la tecnología, sino especí5camente a las estructuras de relaciones socio&económicas. Sin e8cluir las condiciones ecológicas, 3stas +ueron subordinadas al análisis de la organi2ación social * política de la producción * la teoría de la ecología cultural +ue acusada de . Por otro lado, criticaban a los modelos +uncionalistas * estructuralistas mecanicistas, porque 3stos ele1aban al rango de categorías cientí5cas lo que no eran más que representaciones de los actores )la clásica perspecti1a del actor: símbolos, mitos, clasi5caciones, que en realidad representan sólo parcialmente la dial3ctica de las relaciones estructurales de cada sociedad. Sin embargo, esta corriente puso su atención en los +enómenos culturales. A di+erencia de los ecólogos, no desecharon las creencias * categorías nati1as como irrele1antes para las operaciones reales u ob4eti1as de la sociedad. Rampoco intentaron mostrar que esas creencias aparentemente irracionales )como la clásica prohibición de comer la carne de la 1aca sagrada en la /ndia, por e4emplo, que había estudiado ?arris tu1ieran +unciones adaptati1as. Para ellos, los sistemas de creencias eran ob4eti1aciones de la estructura social pro+unda * de las contradicciones de cada sociedad, * ocuparon un lugar central en sus análisis%. -specí5camente la cultura +ue considerada por ellos como parte de la -n esto, además de su per5l netamente antropológico, se 1io in9uenciada por la corriente de historiadores que tenían en cuenta la cultura, de las escuelas historiográ5cas inglesa * +rancesa )Rhompson, ?obsbaHm, ?oggart# 0e WoF, 23
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ideología, desde el punto de 1ista de su papel en la reproducción social: legitimando el orden social, mediati2ando contradicciones básicas * misti5cando las +uentes de la e8plotación * desigualdad de los sistemas sociales. Mna de las 1irtudes reconocidas del mar8ismo estructural +ue que en sus in1estigaciones inclu*eron las relaciones materiales * las representaciones ideológicas en su unidad de procesos reales, tanto sociales como económicos * políticos. -n tanto otros mar8istas en+ati2aban casi e8clusi1amente las relaciones de la organi2ación político&económica, los estructurales eran, despu3s de todo, &seg=n acent=a Brtner& antropólogos, entrenados para prestar atención al parentesco, la descendencia, el matrimonio, el intercambio, la organi2ación dom3stica, las creencias, los ritos, etc., e inclu*eron en consecuencia estos elementos en su consideración de las relaciones estructuralesN. 0a e4empli5cación de una aplicación de este en+oque, puede estar dada por el ensa*o en el que Wodelier sinteti2a sus conclusiones de e8tensos e intensos estudios sobre los Garu*a de ue1a Wuinea, como modelo de subordinacion económica, política * cultural de una sociedad a Bccidente. Eescribe Wodelier el proceso histórico 1i1ido por este grupo tribal, al que de5ne como )Wodelier $II!. Parte de la descripción de la estructura económica de los Garu*a )basada sobre la agricultura e8tensi1a por el sistema de ro2a * quema, algo de agricultura de riego, cría de cerdos, ca2a * comercio de sal, su tecnología )piedra, hueso, madera, su organi2ación social )grupos de parentesco * 1alores de su cultura )creencia en la animación de astros &sol, tierra, luna&, animales, espíritus de la sel1a * las ca1ernas * de los muertos, 4unto a la constatación de sus contradicciones * heterogeneidad internas )guerras interclánicas, sumisión +emenina * las relaciones de dependencia con el conte8to )intercambio de sal. /ntercala la mostración de la estructura con la cultura, tal como en +orma total se presentan al proceso histórico que articula * como lo recabó en campo. Se inclu*e 3l mismo en la descripción del proceso de occidentali2ación, le4os de naturali2arlo. /nclusi1e relata un episodio en el que el administrador colonial militar le requiere que le brinde in+ormación sobre líderes guerreros baru*a, a lo que 3l se niega en nombre del secreto pro+esional, lo que pone de relie1e el ud^, Eub*. Por su parte, -mmanuel Rerra*, en su obra $l mar1ismo ante las sociedades primitivas )Rerra* $I7$ inspirada en la perspecti1a estructural de 0ouis Althusser, rei1indica a e8ponentes de la -scuela de @anchester, como Peter Xorsle* * sus estudios sobre los mo1imientos mesiánicos * al mismo WlucTman. Se destaca asimismo la obra de Claude @eillassou8, en su análisis de la sociedad de lina4es * segmentarias )las clásicamente estudiadas por los antropólogos, con su 3n+asis en 1er los procesos producti1o&económicos como imbricados en unidad entre +uer2as producti1as * relaciones de producción en relación con las +ormas de cooperación, las relaciones de parentesco * las representaciones ideológico& culturales. 24
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compromiso del antropólogo con ciertos * elegidos actores. Su dimensión de la totalidad histórica, entonces, inclu*e su propia presencia en la construcción del ob4eto de estudio. Por eso destaca la relación de dominio occidental * subordinación política * cultural del grupo estudiado, dando cuenta asimismo del grupo dominante conquistador del pueblo Garu*a. Pero lo describe como un proceso dinámico, en el que distingue etapas * que produce cambios en la economía, las creencias * la cultura baru*a, hasta el e8tremo de mostrar cómo la propia identidad se constitu*e en muchos aspectos a tra13s del proceso de occidentali2ación mismo. o basta para Wodelier la 1eri5cación de que algunos hombres de la tribu +ueron en alg=n momento conchabados como traba4adores asalariados, o que en otro momento comen2aron a comerciar la carne de cerdo, que de ob4eto de don pasó a ser mercancía, sino que hace hincapi3 en las consecuencias de este proceso en el control de los baru*a sobre su propio destino: < los 9aruya ya no dominan la evolución de su propia sociedad> )op.cit.. Rampoco se con+orma Wodelier con constatar que el cristianismo importado por la conquista occidental produ4o , sino que este resultado emerge del dominio cultural * estructural, en los símbolos, las prácticas * la materialidad de la economía tribal. D la relación de imbricación entre estructura material, identidad 3tnica * cultura queda ponderada cuando se describe ese reclamo de rei1indicación de su propia cultura como modo de resistir al dominio neo&colonial: algunos baru*a habían hecho estudios * se habían con1ertido en policía, en+ermero, maestro# 1ol1ieron * notaron lo que consideraron una p3rdida de las costumbres ancestrales# uno de ellos llegó a proclamar que hacía +alta una +uer2a con la cual resistir a la 1ida de las ciudades, a la ausencia de traba4o o de dinero, que era necesario apo*arse mutuamente * &relata Wodelier& gritó: <7enemos que sacar nuestras fuerzas de nuestras costumbres apoyarnos sobre lo que los blancos llaman culture> )en idioma ingl3s. Se nos ocurre que la descripción reali2ada por Wodelier bien podría aprobar * superar un e1entual e8amen desde las corrientes teóricas interpretati1istas de la cultura * los símbolos, que 1eremos a continuación )* que plantean no pocas cuestiones de rico debate actual con el mar8ismo estructural. Btros de los e8ponentes del mar8ismo estructural +ueron criticados por haber reducido el concepto de cultura a lo ideológico *a que, de esta manera, acentuaban demasiado el e+ecto misti5cador * muchos de sus análisis terminaron mostrando cómo la cultura, sólo mantenía el statu quo, con lo que se seme4aron a los +uncionalistas que pretendían superar. Produ4eron, en suma, en su momento una =til re1ulsión en el uso de categorías de análisis que sólo habían sido tomadas desde posiciones mecanicistas, si bien a su en+oque le +altó una recomposición aun más dial3ctica, de modo de e8plicar cómo la cultura tambi3n es parte de la trans+ormación histórica, como testi5ca * describe densamente Wodelier. -n realidad, la cuestión de +ondo sigue siendo si la base de la determinación de los actos sociales humanos puede ser e8plicada +uera de la relación de totalidad estructural histórica uni1ersal *, a la 1e2, si puede comprend3rsela J 0a relación entre e8plicación * comprensión no es baladí, *a que implica una cuestión cla1e en las ciencias sociales )13ase ?intiTTa, \.# @acint*re, A.# Xinch, P. 25
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sosla*ando los sentidos que los actores en situaciones concretas dan a esas acciones * a su propia historia. Del interpretativismo sim1ólico a los estudios culturales
(eremos a continuación una apro8imación a lo que se da en llamar el paradigma interpretati1o, con componentes cruciales como la perspectiva del actor , con relación a los en+oques estructurales [K'. -l conte8to de necesidad del interpretati1ismo equi1ale al conte8to de crisis del estructuralismo * de los reduccionismos positi1istas )economicista, politicista o sociologista. -n las ciencias sociales en general, se plantea la necesidad de estudios sobre la conciencia social o, en t3rminos más amplios, en los modos como los hombres se representan el mundo, por d35cit de las posturas mar8istas ortodo8as, acentuadas con la caída del socialismo real * la de un +uturo re1olucionario que no +ue, entre los "! * los I!. -sto implicaba que los hombres no respondían ciegamente a la determinación de los sistemas * estructuras o bien a que la concepción que se tenía de estas estructuras * sistemas debía cambiarse. Eel modelo organicista o que analogi2aba el +uncionamiento de la sociedad con el de una máquina, se comen2ó a 1er más el drama, el 4uego, la indeterminación, el desorden, el caos, incluso dentro de estructuras * sistemas )Galandier $I"I. -sto en Antropología tendría importancia, dado que la disciplina había +ormado especialistas que, desde distintos modelos teóricos, compartían el per5l pro+esional de tener que encontrar, en alg=n punto de la construcción de sus ob4etos de estudio, a su4etos humanos, personas, actores, que podían o no responder a los mandatos de las determinaciones estructurales. 0a debilidad de los traba4os mar8istas sobre las representaciones, en relación dial3ctica con las estructuras, se constata a pesar del @ar8 que había ponderado a la cultura )aunque no la denominara así dentro de su tratamiento de la realidad socio&económica total * básicamente del proceso de producción. Como se6ala obert Mlin: )Mlin $II!:!$. Mlin redobla la postura: < Así el proceso de producción está permeado por ideas conceptos y supuestos culturales que no sólo corresponden como parte de la superestructura a la base productiva sino que por el contrario son esenciales para su constitución y signi!cado> )op.cit. !. [K' 0o que se 1eri5ca a partir de los ochenta no es sólo la ponderación de la necesidad de los estudios de órdenes simbólicos * de relectura de los estudios clásicos * de orientaciones hasta ese momento &desde ciertas corrientes de la descoloni2ación& 1istas como secundarias respecto a las grandes totalidades, ] otros $I"!. Antropología )cátedra Sabarots !$$
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sino la urgencia de la unidad de lo estructural&económico * lo simbólico, del sistema * las representaciones de los actores Q. -sto quiere decir que, tanto los estructuralistas materialistas se inclinaron a recuperar la dimensión simbólica cuanto que los etnógra+os simbolistas +ueron presionados para imbricar sus uni1ersos de estudio dentro de totalidades históricas que tu1ieran en cuenta las estructuras materiales, los sistemas de poder * las contradicciones económicas básicas de cada sociedad. [K' Mno de los casos de estudio más destacados +ue el de los mo1imientos mesiánicos, que tu1ieron un desencadenamiento nítidamente anti&opresi1o en numerosas partes, en los que 4ugaron un papel cla1e las representaciones mágicas que los pueblos emblemati2aban para sus <1ia4es> * luchas desiguales. -stos mo1imientos milenaristas simboli2aban las resistencias contra el colonialismo por medio de 1isiones shamánicas, por las que los pueblos se lan2aban a combates en los que en+rentaban a las balas con arco * 9echa, en el con1encimiento de que triun+arían por e+ecto de sus poderes mágicos, tomando de la cultura ancestral elementos míticos que le ser1ían de asidero. D en su gran ma*oría terminaron en masacres * genocidios, como el del Chaco argentino en los a6os 1einte. Oue algunos antropólogos se dedicaran a estudiarlos tambi3n se englobó en la corriente de estudios sobre los procesos de luchas anticoloniales. 0a pregunta que podemos hacer es por qu3, en determinado momento del desarrollo teórico de la Antropología, tienen auge en+oques que ponen el acento en la interpretación de las representaciones simbólicas más que otras categorías; Mna tendencia siempre emerge como resultado de un impulso anterior o como reacción a otras orientaciones. -s indiscutible, en este sentido, que los estudios sobre religiones * mitos, * su com=n reacción respecto a ciertos en+oques positi1istas que ponían e8clusi1o 3n+asis en lo económico, lo ambiental, lo tecnológico o lo político, coad*u1aron para el surgimiento especí5co del llamado interpretati1ismo. -l +oco de esta tendencia se 1a a poner en la interpretación de las mani+estaciones simbólicas de acuerdo con los sentidos * signi5cados que los actores dan a sus actos, con lo que entronca con la corriente de estudios *micos, inaugurados por el particularismo. D 1an a terminar &con una gama amplia de metodologías& e8plicando en general las brechas o di+erencias de sentido entre las distintas culturas, o sectores sociales dentro de las mismas culturas. (eremos a continuación algunas de las 1ersiones emblemáticas de la antropología de los símbolos. Interpretaciones de interpretaciones
Así presenta CliFord Weert2 la ponderación de la cultura: < 0or mucho que concentremos nuestra atención sobre los hechos supuestamente duros de la e1istencia social (qui*n posee los medios de producción qui*n tiene las armas los informes o los periódicos( los hechos supuestamente blandos de la e1istencia Kqu* piensa la gente de la vida humana cómo piensan que se debería vivir en qu* basan sus creencias qu* legitima el castigo en qu* se sustenta la esperanza( se agolparán para poner en duda las representaciones simples del deseo el poder el cálculo y el inter*s> )Weert2 $IIQ:J. 26
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Si nos atenemos a la de5nición antropológica de cultura se hace e1idente la presencia del componente simbólico. 0os antropólogos, por lo demás, han 1enido estudiando símbolos desde sus primeros estudios. Mna de esas muestras es La rama dorada, de Weorge Lra2er )$"I!, donde se aglutinan recopilaciones sobre magia * religión de los pueblos del mundo. -stos temas, tomando como datos los rituales * relatos míticos, +ueron materia prima analítica desde los postulados e1olucionistas * di+usionistas hasta los análisis estructuralistas * las interpretaciones de los antropólogos contemporáneos. 0a aparición, alrededor de los a6os 7!, de CliFord Weert2 * su planteamiento semiótico de la cultura amalgama distintas in9uencias desde el en+oque llamado hermen3utico )interpretador de te8tos del +ranc3s Paul icoeur, los estudios de casos simbólico&rituales de la escuela de @anchester * la teoría +enomenológica )aquella caracteri2ada por describir los +enómenos desde el interior de ellos. Para Weert2 las culturas serán te8tos que deben ser interpretados, pero sin intentar 1er las cosas como el nati1o, pues esto sería imposible epistemológicamente hablando, sino adquiriendo una posición intermedia en cada situación, para poder así apreciar en qu3 t3rminos la gente de un determinado lugar se 1e * se representa +rente a sí misma * +rente a los demás. 0a tarea que plantea es la de una traducción de te8tos le4anos culturas de Bccidente, destinada al conocimiento de la audiencia occidental * acad3mica. Su aporte teórico más importante +ue establecer que la cultura no es algo cerrado, sustancial, super&orgánico, de la gente, sino que está corpori2ada en símbolos p=blicos, tangibles, a tra13s de los cuales los miembros de una sociedad comunican su 1isión del mundo, sus orientaciones de 1alor * sus identidades. 0os hombres 1i1en en una cultura porque 1i1en interpretando permanentemente el mundo mediante interpretaciones de interpretaciones, mediante gui6os, acuerdos tácitos, pre4uicios * actitudes te6idas de contenido simbólico que transmiten mucho más que lo que dicen que trasmiten. 0a cultura es una urdimbre de símbolos * su análisis < ha de ser no una ciencia e1perimental en busca de leyes sino una ciencia interpretativa en busca de signi!caciones ... e1presiones sociales que son enigmáticas en la super!cie > )Weert2 $I"":! *, por lo tanto, deben ser continuamente descifradas. Para Weert2 1i1ir entre símbolos implica 1i1ir como despelle4ando continuamente una cebolla, nunca está la 1erdad absoluta al 5nal del recorrido porque siempre lo que ha* es símbolo, de símbolos, * sólo cabe la interpretación meta+órica de las culturas como si +ueran te8tos, que * no dicen, que de1elan * ocultan, en una densi!cación de signi5cados que el antropólogo sólo podrá a*udar a con1ertir en discurso comprensible mediante su propio discurso, mediante su propia re&te8tuali2ación. -n una ri6a de gallos )estudio clásico de Weert2 en Gali, ue1a Wuinea, por e4emplo, lo que se dirime es un sistema simbólico de poder, de 4erarquías, de 1alores sobre el machismo * las +ormas de la realidad cotidiana, puesta en acción por esos actores que participan del intrincado sistema de apuestas * del ritual de la ri6a en sí. -ste tratamiento de la cultura como )opuesta a la descripción !na, que da cuenta de la realidad ob4eti1a, e8terna a los actores, empalma con las más ambiciosas intenciones del post&modernismo relati1ista * por eso en parte se e8plica el 38ito de Weert2 +uera del ámbito acad3mico Antropología )cátedra Sabarots !$$
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antropológico. @ediante los símbolos, entonces, los pueblos, seg=n Weert2, dan sentido a sus 1idas, interpretándolas * re&interpretándolas como verdades para esa cultura. -l e4e de la antropología geert2iana ha sido la cuestión de cómo los símbolos con+orman las maneras en que los actores sociales 1en, sienten * piensan acerca del mundo o, en otras palabras, cómo los símbolos operan como vehículos de cultura * de estar en el mundo, de acuerdo con las creencias. 0o 1erosímil adquiere, de esta manera, más 1alor que los contenidos respecto a una 1erdad e8terna. Por eso se re+uer2a con 3l la necesidad de tener registro de la perspectiva del actor , como especi5cidad antropológica * el papel del antropólogo como registrador que adquiere autoridad )de ahí su +rase: , en la medida que es testigo de ese desen1ol1erse permanente de la cultura, mediante su , en el campo, como testigo de lo concreto * particular de ese hecho cultural, en una trama de signi5caciones superpuestas. D rompe Weert2 con la cosi5cación que reali2aba la antropología , cuando establece que : aunque analicen la 1ida en las aldeas, como entes +ísicos, sino como ámbitos de signi5cación para quienes las habitan. 0a cultura, para 3l, no es un sistema ordenado abstractamente que deri1a su lógica de ciertos principios estructurales ocultos, como pretende el estructuralismo de 0e1i&Strauss, o de símbolos especiales que pro1een las de su coherencia )como establecen las posturas homeostáticas. 0a lógica * las relaciones que se dan entre los elementos de una cultura se deri1an más bien de la organi2ación de la acción de esa gente interpretando sus situaciones para actuar coherentemente dentro de ellas. 0os actores no act=an de acuerdo con un conocimiento pre1io * la aplicación posterior de normas &como a5rma el modelo +uncionalista&, sino que al interpretar lo que hacen es inventar normas que terminan 4usti5cando * dando coherencia a sus acciones. Sin embargo, se le se6ala a Weert2 no haber desarrollado una teoría de la acción o de la práctica como tal, porque se con+ormó con deso1illar la made4a de esas densidades entendidas como )los símbolos que eran los que para 3l podían &en todo caso& estar determinados históricamente * daban lugar a los contenidos de las representaciones de la gente. Pero su pro*ección no +ue más que lo que 3l mismo llamó < efectos de discurso>, interpretación de interpretaciones..., en una de símbolo en símbolo, sin obligarse a preguntar por las contradicciones * una 1isión histórica, ni por la trascendencia de las trans+ormaciones reales, qui2á la ra2ón +undamental de que &independientemente de sus aportes metodológicos&, su perspecti1a ha*a abonado a la pro*ección de las posiciones post&modernas 7. $a selva de los sím1olos
os re+erimos al post&modernismo, en este caso, como el recha2o de la necesidad de tener en cuenta los llamados grandes relatos históricos, o 1isiones totalistas )cla1e de los grandes mo1imientos de pensamiento modernos, como el mar8ismo, en las que importan las raíces causales * determinantes de los procesos históricos * sus potencialidades de trans+ormación social. 27
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-l británico (ictor Rurner, in9uenciado por @a8 WlucTman, se distinguió al considerar a los símbolos no como 1ehículos analíticos de la cultura sino como lo que podrían llamarse operadores en el proceso social, cosas que, si se colocan 4untas en un cierto orden en ciertos conte8tos rituales, producen trans+ormaciones sociales. -s decir: el orden del ritual no solamente reproducía un orden establecido sino que lo trans+ormaba. Así, in1estigó cómo los símbolos en los rituales producen cambios en los actores, de un status a otro, resuel1en contradicciones sociales * concilian a los actores con las categorías * normas de la sociedad. -l estudio de los símbolos rituales lo encaraba Rurner por medio de la interpretación del actor )lo que dice acerca de lo que 3l mismo practica en el rito, el sentido operacional que se traduce en su propia acción )qu3 es lo que hace * el sentido posicional de un símbolo en relación con otros símbolos. -studiando a los ndembu, de hodesia )ho* imbabHe, Rurner distingue lo que llama la estructura semántica de los símbolos con que se pone en práctica el rito. )Rurner $I"!:J%. -l símbolo es la unidad mínima del rito, < una marca un mojón algo que conecta lo desconocido con lo conocido>, que se utili2a para re1elar o hacer 1isible un signi5cado. -l árbol musoli adquiere, por e4emplo, el 1alor de ser utili2ado para entramar las prácticas rituales: como elemento propiciador de la ca2a de antílopes, *a que 3stos se acercan a comer sus brotes * son atrapados, pero para el pueblo ndembu esto se produce porque el árbol , del mismo modo que propicia la +ertilidad de las mu4eres porque el árbol mismo es símbolo de , al decir de los ndembu. Rambi3n el árbol se usa para e8traer los malos sentimientos, logrando el ali1io de los pacientes que los albergan, así como se considera que pone al descubierto lo que es personal * pri1ado, en el rito de la con+esión p=blica alrededor del mismo árbol, relacionando la práctica con la salud * la +ertilidad +emenina. Asimismo, Rurner describe, desde la interpretación de sus entre1istados, el rito alrededor del árbol mudyi o árbol de la leche: cuando se le e8trae la corte2a segrega un láte8 lechoso, ra2ón por la cual es un símbolo de los pechos * de la leche# ellos interpretan entonces que el árbol signi5ca , equi1alente social de la relación principal entre los ndembu que es la descendencia por 1ía materna. -l árbol de la leche es el lugar de las madres * la blancura de la leche simboli2a el estado de pure2a de los que +ueron iniciados a la 1ida adulta deba4o del árbol, del aprendi2a4e * principalmente de aprender a ser madre. 0a multi1ocidad de signi5cados que aparecen en las entre1istas con los participantes de los rituales, se uni5ca cuando se los obser1a en la práctica ritual, *a que el símbolo es tratado como una unidad. Rurner concibe el rito como condensador de la cultura ndembu en una , *a que )op.cit.:JQ, básicamente en lo que llama )el árbol de la leche es uno de ellos * se plasma en una amplia < multivocidad y polisemia> )muchos signi5cados o 1oces de distintos actores en simultáneo. A la 1e2, < posibilita la representación económica de aspectos clave de la cultura y de las creencias>.
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0a consecuencia principal del tratamiento que Rurner da a las prácticas mediante símbolos es que , que a*udan a que los actores sobrelle1en situaciones de con9icto * oposición entre grupos, como el que se da en estas sociedades matrilineales con los 1arones. ormalmente los hombres lle1an a sus esposas a 1i1ir con ellos * entregan a sus hermanas a los hogares de sus maridos# pero el mandato de la descendencia dice que a todo hombre lo sucede el hi4o de su hermana )no sus propios hi4os, como en la sociedad occidental, cosa que los hombres no aceptan de buen grado. Por lo tanto, se da una tensión permanente entre los distintos hogares de residencia * , dice Rurner, apo*ado en la teoría del con9icto de su maestro WluTman. Mna de las +ormas de a+rontar * operar con estas contradicciones es precisamente el ritual. 0os antropólogos que siguieron el modelo de Rurner agregaron al campo de la antropología simbólica una dimensión importante que es la pragmática de los símbolos, el 1alor de su uso, los e+ectos que los símbolos tienen en el con4unto social, la cuestión de cómo los símbolos reali2an 1erdaderamente aquello que los antropólogos simbólicos sostienen que hacen: operar como +uer2as acti1as en el proceso social, lo que nos ale4a de las posiciones que 1en a los símbolos * los rituales como meros procedimientos para reproducir la cultura. $os dia1los del capitalismo
Con base en estos * otros autores se desarrolla, entre 5nes de los setenta * principios de los no1enta el autodenominado de la Antropología. Sus de+ensores * sistemati2adores más conspicuos son @arcus * Lischer * dos de los e4emplos más ilustrati1os son la obra de Paul Xillis * @ichael Raussig. Rambi3n, por supuesto, reconocen los antecedentes en la obra de los a+ricanistas de la descoloni2ación, tanto por su adhesión a la teoría del con9icto * a la corriente mar8ista de la economía política cuanto por su atención a la interpretación comprensi1a del hori2onte simbólico de la 1ida de los pueblos. -n realidad, se autode5ne el intento como tendiente a )@arcus ] Lischer:$%%. Xillis titula su traba4o Aprendiendo a trabajar , con un sentido amplio de lo que signi5ca la acción de traba4ar 4unto a la construcción de la identidad como traba4ador, de acuerdo con el lugar que la sociedad industrial )/nglaterra destina a los hi4os de los obreros, de manera que se reprodu2can como tales * se disciplinen no sólo social sino +undamentalmente en t3rminos de la adquisición de prácticas * representaciones características: que aprendan su cultura, la que les asigna el sistema * a su 1e2 ellos constru*en cotidianamente, como hi4os de obreros. 0os escenarios de este aprendi2a4e in+ormal son no sólo la escuela sino la calle *, luego, la +ábrica. -n la escuela es donde se para traba4ar * ser de clase obrera. -so, esgrime Xillis, en sí representa una contradicción, pues la educación uni1ersal dice propender a que su capacitación les posibilite su ascenso social. @ediante un registro etnográ5co sutil, pormenori2ado, que e8plora en el lengua4e cotidiano, en las prácticas, bromas * conductas regulares * contingentes, el antropólogo da cuenta de la sorprendente captación que estos Antropología )cátedra Sabarots !$$
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4ó1enes hacen de la oculta racionalidad del sistema capitalista. /ncluso, se muestra cómo el mo1imiento de al sistema autoritario de la escuela, mani+estado por la indisciplina, se con1ierte en sí mismo en el obstáculo para la mo1ilidad social ascendente, uno de cu*os indicadores es la deserción. -sa resistencia se con1ierte irónicamente en un componente básico de su propia reproducción como clase obrera. Podemos 1incular las escolares de hi4os de obreros ingleses )en la etnogra+ía de Xillis con la adoración al diablo de las representaciones simbólicas )cultura de los campesinos de los cordones andinos sudamericanos )en la etnogra+ía de Raussig, hilados por las relaciones estructurales capitalistas, unos en un conte8to central * otros en uno dependiente, pero capitalismo al 5n. Raussig estudia las creencias * ritos sobre el diablo en campesinos colombianos del 1alle del Cauca * mineros boli1ianos del esta6o, como reacciones a la integración de sus modos tradicionales de producción a un sistema capitalista monetario * de traba4o proletario asalariado. Se mani5esta una imagen indígena del proceso capitalista * al mercado como maligno. 0a creencia en sí es que el propietario que acumula dinero * ha contratado personal campesino sin tierra ha hecho un pacto secreto con el diablo * la tierra de donde pro1ienen sus ganancias está, en consecuencia, condenada a perder +ertilidad * el mismo due6o tendrá, tarde o temprano, una muerte mu* dolorosa si no reali2a el acuerdo. -sos pactos sólo tienen 1igencia en los lugares con las relaciones capitalistas * salariales desarrolladas, en 1ínculos con los centros mundiales de comercio. o ocurre lo mismo en las tierras que son propiedad de los campesinos que las traba4an. Algo similar ocurre con los mineros de esta6o, en Goli1ia, con el culto al 7ío de la mina. -l Río gobierna las rique2as minerales * es 1enerado p=blicamente. esultaría ser un mediador entre las relaciones precapitalistas * la e8plotación capitalista más reciente. equiere que se le o+renden llamas, se le hagan s=plicas, en suma: se le a cambio de mantener la prosperidad del *acimiento. /mplica una +orma de control e8terno al de los propios actores * sus componentes simbólicos pro1ienen de etapas coloniales, donde se lo representaba como inquisidor espa6ol. -n la actualidad su imagen es la de un gringo coHbo*. os hace recordar a la creencia 1igente a=n ho* en los ingenios tucumanos llamada $l @amiliar * que consiste en el pacto que reali2a con el diablo el due6o del ingenio, para cu*o cumplimiento debe cada tanto un traba4ador, que es de1orado por el monstruo que habita una cue1a o hasta una bodega de la 5nca. Eurante la dictadura 7Q&"%, era com=n que los tucumanos atribu*eran las desapariciones de traba4adores producidas por el -43rcito a $l @amiliar ... Así narra Raussig sus casos: <$n dos áreas rurales de Am*rica del -ur muy separadas entre sí a medida que los campesinos cultivadores pasan a ser asalariados sin tierras invocan al diablo como parte del proceso de mantener o incrementar la producción. -in embargo cuando se trata de campesinos que trabajan su tierra seg4n sus propias costumbres esto no sucede. $s solamente cuando se los proletariza que el diablo cobra tal trascendencia ... )ientras que la imaginería de ios o de los espíritus de la fertilidad de la Antropología )cátedra Sabarots !$$
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naturaleza dominan el rasgo distintivo del trabajo dentro del modo de producción campesino el diablo y el mal sazonan las metafísicas del modo de producción capitalista de estas dos regiones.> )Raussig $II%:%!. -s e1idente la no relación de correspondencia directa * literal de los signi5cados de la creencia con la situación estructural )asalariados sin tierra de estos actores. 0a hipótesis de Raussig establece que )op.cit.:%. eniega a continuación del concepto de +unción )utilitaria para ponderar el concepto de &tan caro a los en+oques hermen3utico&interpretati1os que re&introdu4o Weert2 en la Antropología reciente&: )op.cit.:%%. -ntonces, se hace Raussig la pregunta por el porqu*, además de por el cómo, tal cual nuestro se6alamiento acerca de las limitaciones del modelo de la antropología clásica +uncionalista. 0o hace desde una estrategia inducti1a * concreta * no desde el deducti1ismo del modelo macro de la economía política. Su pregunta apunta a la comprensi1idad del proceso * no a la e8plicación del =nicamente: )op.cit.:%N. -s más: Raussig parangona las e8plicaciones teóricas +uncionalistas con los propios principios 4usti5cati1os del capitalismo, que es el de la utilidad. Pero )op.cit.:%J. -ncuentra una seme4an2a entre lo que @ar8 llamó +etichismo de la mercancía )como proceso netamente cultural, al edi5carse en torno a metá+oras de la 1ida real * las creencias en el diablo: )op.cit.:J%. -l principio de esas representaciones del diablo tiene un signi5cado histórico, entonces: impugnar el sistema capitalista que quita el control de sus propias condiciones de traba4o a los campesinos. @ani5esta la con1i1encia de dos modos de producción, uno donde los campesinos sí e4ercen ese control * el diablo
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no necesita aparecer para cumplir ese papel * el otro, donde no controlan ni el material de traba4o ni la organi2ación del mismo. 0a creencia en el diablo no es, en consecuencia, una r3mora super1i1iente, como podría suponer el e1olucionismo romántico de un R*lor, ni un pr3stamo indígena &como dirían los di+usionistas&, ni una institución que cumple una +unción integrati1a )al estilo +uncionalista, sino un sentido histórico entroncado en las contradicciones * con9ictos de +ondo de esas sociedades. -sta producción se sigue inscribiendo en el contraste * debate de la matri2 entre modernidad * mundo tradicional como ob4eto clásico de la Antropología. Pero *a no desde las posiciones culturalistas homeostáticas * ahistóricas. epresenta la intención de e8plicar la brecha entre el hiper&desarrollo capitalista moderno * las sociedades , mediante la reno1ación de los en+oques históricos, totales, de economía política, desde la teoría de la dependencia, partiendo de los con9ictos internos de las sociedades * la contradicción principal del sistema de e8plotación mundial. Estudios culturales y antropología de la práctica
0legamos a la actualidad de un conte8to que parte no sólo de los interrogantes no respondidos desde los en+oques estructurales * comprensi1istas en +orma aislada sino de las preguntas no +ormuladas * de la emergencia de nue1os hechos. D, por lógica, se con9u*e en el de esos huecos desde aportes e8ternos. o es de e8tra6ar. -s una situación 1i1ida por el con4unto de las ciencias humanas. Por un lado, la crisis de los modelos * por el otro las hibrideces de un mundo multicultural, de +ronteras abiertas, de 9u4os de comunicación mundiali2ados * globali2ación de imágenes * acontecimientos. 0as estructuras * las representaciones se me2clan, los tiempos se aceleran. -l +uturo no es lo que era ni el pasado garanti2a 1ol1er. Surgen los -studios Culturales ", como una con9uencia de aportes desde m=ltiples disciplinas * con parado4as 1igentes, ricas * riesgosas. Ee los aportes +undacionales de sus pioneros es posible aprender a leer procesos históricos in3ditos * +ormas de análisis tambi3n in3ditas. o con+orman ho* un cuerpo de conocimientos sistemáticos ni teóricamente homog3neos, pero sí un mo1imiento con presencia intelectual indudable. o son solamente estudios de la cultura, del arte * las comunicaciones, sino de la realidad social, política e histórica entendidas como un proceso cultural. Son en+oques que toman de la perspecti1a antropológica la 1isión de la realidad como proceso cultural * el relati1ismo como e4e crítico# de la semiótica * el análisis de discurso la importancia de las tramas de signi5caciones# de la historia social la ponderación de lo colecti1o por sobre lo indi1idual, lo notorio * lo -duardo WrUner da como +echa * lugar de inicio la /nglaterra de $IJQ, coincidente con la crítica al stalinismo de parte de los intelectuales que +undaron la ue1a /2quierda * que ma*ormente eran críticos literarios e historiadores )a*mond Xilliams, Xilliam ?oggart, -dHard P. Rhompson, -ric ?obsbaHm, que tomaron como +uentes el pensamiento de Xalter Gen4amin, Antonio Wramsci * otros autores hasta ese momento no mu* tenidos en cuenta, a los que luego sumaron otros como @i4ail Ga4tin, 0udHig Xittgenstein, @ichel Loucault, \acques Eerrida )WrUner $II". 28
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Apunte de Cátedra nro. 7: Principales corrientes teóricas de la Antropología
institucional# del análisis literario la importancia de las representaciones * lo cualitati1o, * básicamente se proclaman como un desa+ío abierto desde el pensamiento no rígido hacia el análisis de la realidad concebida en t3rminos de procesos más 9e8ibles. [K' Pero la 9e8ibilidad llega a apartarse de aborda4es teóricos que tengan en cuenta lo estructural: el imperialismo, la dominación, el neocolonialismo. 0a teoría de la dependencia cede ante un modelo en el que pre1alece la idea de articulación * la circulación de 9u4os signi5cantes. Por eso los -studios Culturales con9u*en en parte con las perspecti1as post&modernas, a las que la globali2ación pareció, mu* pronto, brindar asidero para concepciones con acento en lo híbrido, lo líquido, lo <9u>, en suma: la li1iandad de las indeterminaciones. @uchos se traducen en banalidades tautológicas, sobre todo cuando no se re+erencian en estudios de campo sólidos. [K' Algunos representantes del interpretati1ismo * de los estudios culturales que e8ageran las respuestas teóricas de 1uelo de perdi2, porque las con+unden con la peque6a escala de los estudios empíricos * desprecian las grandes preguntas sobre la trans+ormación )cómo tomar el poder, cómo se tomó o e4erció el poder en casos concretos, abonan al desa+ío pendiente de la contribución cientí5ca a las estrategias populares. D esto está 1inculado estrechamente a la recuperación de la dimensión histórica, dada por los en+oques mar8istas pro*ectados hacia los estudios antropológicos. Algunos de estos debates pendientes son los que están dando pie a la necesaria unidad de los estudios interpretati1os * estructurales. Por eso tambi3n es preciso recuperar las mismas +uentes post&estructuralistas * conte8tualistas * los aportes de los primeros analistas de los -studios Culturales, a partir de la crítica al positi1ismo * en pos de la reconstrucción de los sentidos. -l t3rmino post&estructuralismo se suele utili2ar para se6alar posiciones de crítica a quienes e8plican las acciones humanas como e8clusi1o resultado del cumplimiento de reglas estructuradas, en desmedro de los conte8tos de signi5cación * dramas construidos, impro1isados * vividos por los actores. o es casual, entonces, que incluso e8poniendo sólo cuatro aportes de antropología comprensi1a o interpretati1ismo, ha*amos 1isto que plantean el +oco en la producción simbólico&cultural )sistemas de representación * prácticas rituales como reproducción * tambi3n postulan la concepción de las prácticas como operadores de procesos de trans+ormación. -l argentino )residente en @38ico -duardo @en3nde2 lo subra*a cuando a5rma que la actual hegemonía de la Antropología norteamericana en parte es e4ercida por la apropiación de pensadores europeos no antropólogos, principalmente la in9uencia de los teóricos de las prácticas, como el sociólogo +ranc3s Pierre Gourdieu * el reconocimiento de Ga4tin, Xilliams, Gen4amin * Wramsci. -sto les ha permitido a los norteamericanos ocuparse de la di1ersidad sorteando su empirismo clásico, pero a la 1e2 en no pocas ocasiones omitiendo la ponderación de las relaciones de desigualdad, subalternidad * hegemonía )@en3nde2 !!!. -s que aunque traten temáticamente problemas cruciales del mundo contemporáneo como la pobre2a, la marginalidad, la e8clusión, en conte8tos de multiculturalismo * segregación, secundari2an categorías mar8istas cla1es como la e8plotación * la lucha de clases.
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Apunte de Cátedra nro. 7: Principales corrientes teóricas de la Antropología Desafíos de la práctica antropológica
0e ha cabido a la Antropología, dada su +ocali2ación en la construcción de la otredad cultural, hacerse cargo )qui2á con ma*or presión que otras disciplinas de la necesidad de cuestionar las racionalidades sobre&entendidas como =nicas )etnocentrismo, desde su contrapartida relati1ista. -l conte8to de necesidad de ho* impulsa apelar a la )0lobera $I7J:%"N del antropólogo en su práctica, concebida como parte de la dial*ctica de la teoría como poder )Brtner $I"Q# Wra1ano $II. -n el +ondo, lo que se plantea es la construcción de la 1erdad cientí5ca dentro de un proceso dial3ctico donde parte de esa construcción sea tanto la cultura como verdad subjetiva )tal * cómo la de5nen los actores, cuanto la consecuente cuestión del registro objetivo de esos contenidos * +ormas culturales. -ste registro de la realidad siempre será el resultado del entrecruce entre la 1isión * práctica de los actores * la 1isión * re9e8i1idad práctica del obser1ador * su 1erdad analítica, como esgrime enato osaldo, actuali2ando el debate inaugurado por los pioneros Goas * @alinoHsTi. Pero teniendo en cuenta, como lo hace el norteamericano (incent Crapan2ano )$I"Q, la crítica al interpretati1ismo e8tremo que no ob4eti1a los procesos totales *, por ende, tambi3n pierde al nati1o en sus relaciones contradictorias con esos procesos. Eice Crapan2ano de la práctica antropológica: luego como el mago o el hermeneuta ermes mismo clari!ca la opacidad vuelve familiar lo e1ótico y da signi!cado a lo incomprensible decodi!ca el mensaje e interpreta> )Crapan2ano $I"Q. -sta cuestión de cómo testi5car, de cómo e8presar a un lector de la propia cultura del in1estigador los 1alores, sentimientos * 1i1encias de la cultura otra, que 3l in1estigó, ha sido tratada &entre otros& por osaldo con particular originalidad. 0a antropología clásica, al igual que el propio Weert2 &a5rma osaldo&, con su perspecti1a ob4eti1ista, de4aba de lado lo que no entraba dentro del orden * el sistema: lo irregular, lo e8cepcional, el con9icto o el cambio. Ee esto puede uno darse cuenta cuando alguien lo in1estiga: )osaldo $II$:JJ. Algo similar a lo que sentimos los latinoamericanos cuando leemos que se nos considera dentro de una cultura )el Antropología )cátedra Sabarots !$$
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Apunte de Cátedra nro. 7: Principales corrientes teóricas de la Antropología
con una costumbre particular que consiste en gobernar mediante los golpes de estado * el caudillismo: _-e asalta directamente la sede del poder previo asesinato o detención del presidente_ )0eHellen $I"J:"%. Casi dado como una receta cultural, mediante el uso del típico presente etnográ!coI. 0a es lo que precisamente plantean @arcus * Lischer, como +orma de en consonancia con el e8perimento de : )op.cit.:$NI. <$l desafío no es pues deshacerse del marco etnográ!co sincrónico sino aprovechar plenamente lo que hay de histórico en *l> )íd.:$J$. /ncluso, dicen, las representaciones del pasado de los propios actores, presenti2adas en sus procesos de deshistori2ación mítica, no de4an de representar una )íd.#$JJ, con lo cual la cultura no es una amalgama de representaciones ahistóricas, *a que &tal como postula Sahlins * demuestra el e4emplo 1isto de Raussig& asegura la persistencia pero al mismo tiempo la trans+ormación%!. -n el proceso de análisis, )?ammersl* ] AtTinson $IIN:$I$&$I. A la opción metodológica de cru2ar la inicial +amiliari2ación de lo e8ótico con la e8oti2ación de lo +amiliar, se le suma el desa+ío de la construcción teórica tambi3n a partir de estos entrecruces, en cu*o centro irremediablemente estarán el poder, las asimetrías * la lucha )como unidad de contrarios entre los unos * los otros. (er capítulos sobre teorías clásicas el tratamiento de la descripción etnográ5ca * sobre el traba4o de campo antropológico. 29
-n in1estigaciones concretas hemos dado cuenta de esta posición )Wra1ano $I"Q, $II$ * !!N. 30
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