El criterio numerico – Sartori La distinción entre sistemas unipartidistas, unipartidistas, bipartidistas y multipartidistas multipartidistas es muy insuficiente. Una reacción es abandonar la base numero, a partir del supuesto de que la distinción tradicional entre los modelo modelos s bipart bipartidi idista sta y multip multipart artidi idista sta no ha acarre acarreado ado percep percepcio cione nes s lo basta bastante nte signif significa icativ tivas. as. La Palombara y einer proponen la siguiente tipolog!a cu"druple#
$deológicos hegemónicos Pragm"ticos hegemónicos $dologicos turnantes Pragm"ticos turnantes
El problema con este plan es que es muy general. %tra reacción consiste en de&ar que los datos determinen las clases, es decir, los diferentes racimos de sistemas de partidos. Una tercera reacción consiste en preguntarse si tiene alg'n sentido clasificar los sistemas de partidos. Sartori se plantea dos preguntas#
(ueremos decir que poco importa el numero de partidos que hay) (ueremos decir que nuestra clasificación no logra ordenar esos n'meros)
* la primera va a decir, decir, que si considera importante la cantidad de partidos que hay, hay, ya que indica una caracter!stica importante del sistema pol!tico# la medida en que el poder pol!tico esta fragmentado o no fragmentado. +on solo saber cuantos partidos eisten estamos alerta al numero de posibles corrientes de interaccion que intervienen. Slo&blom se-ala la relación entre la cantidad de partidos y las corrientes de interaccion de que de ellos devienen. Estas posibles corrientes de interaccion ocurren a multiples niveles, lo que indica es que cuanto mayor sea el numero de partidos, mayor ser" la comple&idad y probablemente la complicación del sistema. La verdadera cuestión que si importa es la de un criterio numrico de clasificación nos permite aprehender lo que import importa. a. /asta /asta ahora ahora,, la respu respuest esta a es claram clarament ente e que no. 0ing' 0ing'n n sistem sistema a de contar contar puede puede funcionar sin normas para contar. 0o es de etra-ar que el enfoque basado en el numero de partidos desemboque en la frustración. *ctualmente, nos hemos deshecho del criterio numero de clasificación clasificación antes de aprender a utili1arlo. /ay muchos motivos para dar otra oportunidad a este criterio. El numero de partidos es un elemento muy visible que establece divisorias naturales y que refle&a las condiciones del mundo real de la pol!tico. 0o olvidemos que los partidos son el coagulante de todas nuestras medidas. El numero de votos y de esca-os que cada partido obtiene en las elecciones es nuestra base de datos me&or y mas segura. Sartori propone empe1ar con las normas para contar y estudiar el 2ilometra&e que nos da una clasificación basada en el numero de partidos.
Normas para contar
El problema es# (ue partidos importan) El cuantos son tiene que ver con el que fuer1a t ienen. * falta de me&or solución, tratamos t ratamos de establecer un umbral por deba&o del cual no se hace caso de un partido. Si se establece el umbral puede llevar a omisiones graves y cuanto mas se reba&a el umbral mas son las posibilidades de incluir partidos sin importancia.
La importancia de un partido esta en función de la distribución relativa del poder y en función de la posición que ocupa en la dimensión i1quierda3derecha. i1quierda3derecha. Si el problema tiene solución, esta se halla en el establecimiento de las normas conforme a las cuales se ha de tener o no en cuenta a un partido. 4enemos que establecer un criterio de no importancia. La fuer1a de un partido es su fuer1a electoral. 5ientras se aplique el criterio numero, la base esta dada por esta medida. Sin embargo, los votos se traducen en esca-os y esto nos lleva a la fuer1a del partido parlamentario6 la fuer1a del partido parlamentario se indica por su porcenta&e de esca-os en la +amara 7a&a. +uanto mas sean los partidos, mas debemos preguntarnos acerca del potencion de gobierno, o las posibilidades de coalición de cada partido. La cuestión ahora es la de si se pede reali1ar un calculo realista las posibilidades de coalición de cada partido a base de su fuer1a. La respuesta es que no, pues este criterio nos llevar!a a estudiar todas las mayor!as numricas posibles, cuando lo que nos interesa son las coaliciónes viables. La norma para decidir cuando se debe o no contar a un partido es la siguiente#
8ebe tenerse en cuenta a un partido, por peque-o que sea, si se halla en posición de determinar a lo largo de un periodo de tiempo y en alg'n momento como minomo una de las posibles mayor!as gubernamentales.
Esta norma tiene una limitación, limitación, porque es solo aplicable a los partidos orientados hacia el gobierno y que son ideológicamente aceptables aceptables para los dem"s miembros de la coalición. 0uestro 0uestro criterio de no importanc importancia ia necesita necesita un compleme complemento nto residual. residual. Esto nos lleva lleva a formular formular una segunda norma auiliar para contar basada en la capacidad de intimidación.
Un partido cuenta como importante siempre que su eistencia afecta a la t"ctica de la competencia entre los partidos y en especial cuando altera la dirección de la competencia de los partidos orientados hacia el gobierno.
Podemos de&ar de contar a los partidos que no tienen# 9. Posib Posibili ilidad dades es de coali coalició ción n :. Posib Posibili ilidad dades es de chant chanta&e a&e 8ebemos contar a todos los partidos que tienen importancia gubernamental en la li1a en que se deciden las coaliciones o una importancia competitiva en la li1a de la oposición. *mbos criterios son son postdictivos, pues pues no tiene sentido sentido utili1arlos utili1arlos con car"cter predictivo. predictivo. En cuanto a la norma 9, esto significa que las coaliciones viables coinciden con los partidos que de hecho han participado en gobiernos de coalición y;o han dado a los gobiernos el apoyo que necesitaban para llegar al poder o para permanecer en el. Si pasamos a la norma :, la ob&eción podr!a ser que la dirección de la competencia no es cosa f"cil de evaluar. En la practica la idea del partido del chanta&e guarda relación sobre todo con la idea del partido anti sistema. Si mi norma trae a primer plano el partido del chanta&e de 8o
+omo norma general, la eistencia de poco partidos indica poca fragmentación. *l contar los partidos tambin podemos hallar su fuer1a. Eiste una distribución que se destaca como caso 'nico# aquella en que un partido cuenta el solo y durante mucho tiempo con la mayor!a absoluta, denominado como la clase de los sistemas de partido predominante. Un sistema de partido predominante puede ser resultado de un eceso de fragmentación de todos los dem"s partidos. Si nos salimos del terreno de los sistemas de partidos competitivos y pasamos al de los no competitivos, nos encon encontra trarem remos os con comuni comunidad dades es pol!ti pol!ticas cas con mas de un parti partido do en las cuale cuales s los parti partido dos s secundarios no se pueden de&ar meramente de lado como fachadas puras y siemple. Estos partidos secundarios y perifricos cuentan menos, tienen permiso y 'nicamente se les permite eistir como partidos subordinados. subordinados. Sartori califica a estos sistemas como hegemónicos. En la distinción entre pluralismo limitado y pluralismo etremo, la variable del numero de partidos pasa a ser secundaria y toma precedencia la variable de la ideolog!a.
Una cartografia en dos dimensiones
Una clasifica clasificación ción es una ordenaci ordenación ón basada basada en clases clases mutuamen mutuamente te ecluyen ecluyentes tes que se establece establecen n conforme al principio o al criterio elegido para esa clasificación. Una tipolog!a es una ordenación de atributos compuestos. El criterio numero puede rendir siete clases# 9. :. =. >. ?. @. A.
Parti artid do 'ni 'nic co Part Partid ido o hege hegemo moni nico co Part Partid ido o pred predom omin inan ante te 7ip 7iparti artidi dis sta Plur Plural alis ismo mo limi limita tado do Plur Plural alis ismo mo etr etrem emo o *tomi tomi1a 1aci ción ón
+on respecto a la clasificación triple tradicional, hay dos innovaciones innovaciones evidentes. En primer lugar, lugar, desgloso en tres categor!as el tradicional bloque unipartidistas y, en segundo lugar, el desgloso del tradicional bloque multipartidista. multipartidista. Por ultimo se encuentra la pauta atomi1ada. La fragmentación del sistema de partidos puede refle&ar una situación de segmentación o una situación de polari1ación, de distancia ideologica. Estamos perentoriamente obligados a pasar de la clasificación a la topolog!a y aplicar el criterio numrico utili1ando la ideolog!a como criterio. La distancia ideolog!a es el "mbito general del espectro ideologico de cualquier comunidad pol!tica dada y para denotar la intensidad ideolog!a, esto es, la temperatura o el afecto de un conteto ideologico dado. El concepto de distancia ideologica interviene en la aprehensión de los sistemas de mas de un partido, mientras que la idea de la intensidad intensidad ideologica es indispensable para la aprehensión de las comunidades unipartidistas. La clasificación modificada es resolver el problema que de&a intacto la clasificación numrica# el de cómo acabar con la segmentación. La solución se halla en verificar las comunidades pol!ticas segmentadas en contraste con la variable ideologica. ideologica. Si est"n est"n fragme fragmenta ntada das s pero pero no polari polari1ad 1adas, as, se atrib atribuir uir"n "n al tipo tipo de plura pluralis lismo mo mode moderad rado. o. Si est"n est"n fragmentadas y polari1adas, pertenecen al tipo de pluralismo polari1ado.
La calificación moderada difiere de la numrica con respecto a las clases del pluralismo limitado y etremo, a las que sustituyen los tipos de califico de pluralismo moderado moderado y polari1ado. El criterio numrico nos brinda es una indicación bastante buena de la dispersión del poder. En la situación actual el caso del unipartidismo esta claro, el poder pol!tico lo monopoli1a un solo partido, en el sentido preciso de que no se permite la eistencia de ning'n otro partido. Los sistemas bipartidistas no plantean ning'n problema dado que su configuración del poder es transprente. La configuración del poder del multipartidismo en general se puede detalles como sigue#
0o es probable que ning'n partido se acerque a una mayor!a absoluta La fuer1a relativa de los partidos se puede clasificar conforme a su relativa indispensabilidad para las coaliciones Su capacidad potencial de chanta&e.
Las estructuras de poder mencionado se pueden identificar como sigue#
5onopolio Berarqu!a +oncentración +oncentración unimodal +ontracion equilibrada Poca fragmentación fragmentación Cragmentación Cragmentación alta con polari1ación. polari1ación.
(ue es important importante e eactame eactamente) nte) +uando se clasifica clasifican n los sistemas de partidos partidos conforme al criterio criterio numero se clasifican conforme a su formato. Pero el formato no interesa sino en la medida en que afecta a la mec"nica. El formato es interesante en la medida en que contiene predisposiciones mec"nicas, en que contribuye a determinar un con&unto de propiedades funcionales del sistema de partidos, y de todo el sistema pol!tico como consecuencia. consecuencia.