Reflexiones de un artista marcial desencantado...Descripción completa
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Rune Quest - Nuevas Habilidades y Desarrollo Marcial
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MANUAL DE RAZONAMIENTO JURÍDICO - MARCIAL RUBIO (PDF )
MARCIAL
EPIGRAMAS II
TRADUCCIÓN Y NOTAS DE
JUAN FERNÁNDEZ VALVERDE Y
ANTONIO RAMÍREZ DE VEROER
h BIBLIOTECA BÁSICA GREDOS
BIBLI OTECA BÁSICA OREOOS
O EDITORIAL CREDOS. S. A. Sánchez Pacheco, 8S, Madrid, 2001 A. Ramírez de Vetger ha traducidod Libro VII, y J. Fernández Valvode los Libros VHI-XJV. Quedan rigurosamente prohibidas, bajo Las sanciones establecidas por la ley, la reproducción tota) o parciil de esta obra por cualquier medio o procedimiento, asi como su distribución mediante alquiler o préstamo público sinla autorización escrita de los titularesdel copyright.
Diteflo: Bmgalla
ISBN 84-249-2548-3. Obra completa. ISBN 84-249.2550*5. Tomo II. Depósito Legal: B. 18811-2001. Impresión y encuademación: CAYFOSA'QUEBECOft. Industria Orifica Santa Peipétua de la Mogoda (Barcelona). Impresoen EspaAa - Printed in Spain.
LIBRO VIP
I A LA CORAZA DE DOMICIANO Recibe la coraza de m ero2de la belígera Minerva. a quien teme la ira misma de la cabellera de Medusa. Mientras ¿ su no ejerza, César, po drí llamarse c oraza: cuando se asiente en tu sagrado pecho, será una égida.
2 A LA CORAZA DE DOMICIANO Coraza de nuestro emperado r inaccesible a las saetas ¿ármalas y más fiel que el escudo gético de Marte.
i Sobre el libro Vil, léate a a QaUn. kt. fVc/. Hartiaiü Epigramma»* hbtr VII: Comentarlo/Itoiógtco, Sevilla, 1996 (tetU doctoral inèditi) 3 Pue llevada por Domici»*» en ta «xpedición contra lo* lármata»cm «I «ito 92 d. C.; cf. XIV 179; K m . I. pág. 422;S h . Bauy. II. pág 74.
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que, segura incluso a los golpes de un dardo etolio >, han fabricado las peiuftas resbaladizas de innumerables jabalíes: Feliz con tu suerte tú. a ¿)u»en se permitirá tocar el sagrado y calentarle e) espíritu degrandes nuestrotriunf dios. os Vepecho de acompañan te y coa merece sin da to y devuelve al emperador, pero pronto , a ta toga de p alm as4.
3 A tWTlUANO, UN POETA MALO » ¿Por quéque no no te envío. Ponliliano, mis libros? Para me envíes. Pontiliano, los tuyos.
4 LA PALIDEZ DE OPIANO Al encontrarse, Cástrico. de mal color*, a escribir versos empezó Opiano.
> El de Meleagro.quien mató al jabalí de Caltdón;cf. XIII 93,1.Ubro i r tos Espectáculos,14, I; Fwédlawo, pág. 474; Kca, I. pág. 423; S. Bwirrr, H, pég. 74.
4 El general te revestía en tu desfile triunfal con una toga de púrpura y oro (toga pkta) sobre una tánica tprdada coa hojas de palma (fuñica palmatú), cf. F i ta á h w . pég. 474; Kfft, L p*g- 423; S. Bauy. II. p4g. 73. * Léase V 73.
* La palidez en proverbialmente el color propio de los poetas; cf . Horacio, Epístoias.I 19. 17*11; tasto. 124.
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5 AL EMPERADOR DOMIClANO. PARA QUE REORESE A ROMA Si «tiendes, César, el deseo dd pueblo y de los senadores y los goces verdaderos de la toga latina. devuelve al dios7 ante los deseos que lo reclaman: Roma tiente envidia de su enemigo, aunque lleguen muchos laureles1. Aquel ve mis cerca al seAor de las (ierres y el bárbaro siente terror al tiempo que disfruta con tu rostro.
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NOTICIAS SOBRE EL REGRESO DE DOMIClANO* ¿Es que de regreso junto a nosotros de las costas hiperbóreas el César ya se dispone a marchar por los caminos ausonios? No existe fuente fidedigna, pero todas las voces apuntan a ello: ' te creo, sueles, Fama, decir la verdad. Los despachos victoriosos atestiguan alegrías públicas, los dardos de Marte verdean con sus puntas laureadas. De nuevo, ;v|va!, Roma aclama tus grandes triunfos e invicto, César, resuenas en tu ciudad. Pero, para que sea miyor la confianza en la alegría, ven ya tú en persona como mensajero del triunfo sármaia.
’ El emperador regroó en enero del ftAo 93; cfIsaac , I. pág 266. * Setal inequívoca de tnunfo». * El epigranu es una especie de ciato irmaía! en honor de Donucianoami re greso de sus campaAas contra los sármaus
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EPIGRAMAS
7 AL EMPERADOR DOMIC1ANO, SOBRE BL AMOR Y AÑORANZA DEL PUEBLO ROMANO POR SU AUSENCIA
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Aunque la O u inverna) y la ruda Feuce10 y el Histro caliente por las pisadas de las pezuAas y el Rin. doblegado ya tres veces en sus malvados cuernos, te retengan domeñando kx reinos de pérfidos pueblos. soberano regidor del mundo y padre del orbe: no puedes, con lodo, alejarle de nuestros deseos. Allí con los ojos y el cora zón estamos, César, y hasta tal punto ocupas tú solo la mente de todos, que la misma multitud del Circo Máximo no sabe si corre el Paserino o el Tigris■*.
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EL REGRESO DEL EMPERADOR Ahora alegres, co mo nunca, para mí, ahora divertios, musas:
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la tierra odrisia dios.de la gente: Tú victorioso el primero,dediciembre, haces regresa realidadnuestro los deseos ya se puede decir con voz potente «viene». ¡Sé feliz coo tu suerte! Podrías no ceder ante Jano, si nos dieras las alegrías que nos dará aquél El soldado con la corona tri unfal,J se divertirá con chi stes festivos, cuando te escolte entre los corceles engalanados con laurel. Séate permitido también a ti, César, escuchar chanzas y versos ligeros, si el triunfo mismo gusta de burlas <>. * Ilia sttuada ea la detcmbocadura del Danubio; cf VII M, 3. >i Funoaot cabalk» de camera; cf. XII 36.12; Isaac. 1,266 'I Sob«« devrhpctones triunfales en poeslas.cf. K Galbaky. «The Triumph Theme in the Augustan Elegy*. V/Umer5fwn. a. s.. 3 (1969). 75-107. " Cf.14,3-4.
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LOS SESENTA DE CASQUEUO Al inteligente: cumplir Casquelio se hizo■«.un hombre ¿cuándosesenta se haráaAos, elocuente?
10 CONTRA OLO. CRITICÓN Por el culo da Eros, Lino la mama: ¿Olo. qué te importo lo que hagan éste o aquél con sn propio cuerpo? »» Por cien mil folla Matón: ¿Olo, qué (e importa? Por eso no tú, sino Matón será pobre. Hasta el amanecer come Señorío: ¿Olo, qué te va a ti. cuando tú puedes roncar toda la noche? Setecientos a Tito debe Lupo: ¿Olo, qué te importa? No des o prestes un duro a Lupo. Disimulas lo que te incumbe. Olo. y lo que más conviene a tus intereses: debes tu toga; esto es lo que te importa, Oto. nadie te presta ya un duro: también esto. Tu mujer es adúltera: esto te incumbe, Olo; tu hija mayor ya pide la dote: también esto. Podía decir quince veces lo que te incumbe. pero lo que hagas, me importa, Olo. un bledo.
** L o enti endo atf si C asq u ero ha l ardado sestm a iA m en ser un homb re de
Inteligencia normal {utgenicsitt), ¿cuánto puede urdar en llegar a estar dotado de elocuencia (diiertus). para lo que te necesita mucho más tiempo? i» a . III 16 . 3 ; S. Bmixy, II, ptfg. 8 1 . a . Ga uIm. Comentarlo. pági 133 135 .
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11 A PUDENTE. QUE HABÍA PEDIDO AL POETA EP10RAMAS MANUSCRITOS Me obligas. Pudente, a corregir mis libros coa mi propia pluma y mi propia mano *♦. ¡Oh cuánto me apruebas y me amas tú, que quieres tener mis tonterías en versión srcinal!
12 A FAUSTINO. LA INOCENCIA DESUSSOBRE ESCRITOS17
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Que mi señor. Faustino, me lea con frente serena y acoja mis bromas con el oído habitual, pues mis páginas ni siquiera hieren a quienes odia con razón y a mí no me agrada la fama a costa de la vergüenza ajena. ¿De qué sirve que algunos deseen que parezcan míos. si algunos dardos se impregnan de sangre de Licambes y bajo mi nombre vomita veneno de víbora quien dtcc q ue no so poru los rayos de Febo y la l uz? Mis juegos son inocentes: sabes esto bien: lo juro por el genio de la poderosa Fama y el rebato de Castalia, por tus oídos, que para mí se asemejan a una gran divinidad, lector libre de la envidia inhumana.
* Y. por u m o . el onginal uene mucho más valor. 11 CT I 25. Uas« a OalAx.Comentario.. pági. I4B-I50. 11 Se contaba q«e Lfcambes tuvo que tu tentote para no tener que aguantar lai crfckas mordacesdel poeta griegoArquftoco.cí. Km. I. págs 428-429.
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13 LICORIS. NEGRA » Al oír la mor ena L ico m que el marfil de los dientes vie jos se blanqueaban con los soles de Tlbur. se vino a las colinas de Hércules. ¡Qué poder tiene el aire de ta alia Tfvolit En poco tiempo volvió negra.
14 SOBRE SU AMADA QUE LLORA LA MUERTE DE UN JOVEN Una terrible desgracia le ha ocurrido. Aulo *. a mi amada: ha perdido a su diversión y su carifto. no como el que lloró la amada del tierno Catulo. Lesbia, huérfana de las gracias de su pajaritoJ1; ni como el que lloró Jántide. camada por mi Estela. cuya negra paloma vuela en el Elíseo 3. Mi vida no es cautivada por naderías ni por esos amores tales pérdidas conmueven el pecho mi duefta: ha ni perdido a un esclavo que contaba docede aflos, cuya polla todavía no alcanzaba el pie y medio.
w Cf. IV62. Léase • OaíAk.Comentario..,,pigs 160*161. *> Cf. 131. Léate • Catvío. til. y A. Ramiuz dc Vitoca. Catmíc Poesías,Madrid’ 19 94 , pág
139.
» Léate I 7.
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EPIGRAMAS
15 A AR01N0»
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¿Quién joven quebuido se yergue límpidas aguasesdeeste Jantis? ¿Ha Hila sjunio * de asulasdueña náyade ? jOh qué bien que se rínda culto al Tlrintio u en ese bosque y que guarde tan cerca aguas u n amorosas! Puedes administrar seguro, Argino, esta fuente: nada harán las ninfas: cuídate de que el dios lo quiera *. 16 A RÉGULO. A QUIEN LE PIDE GRACIOSAMENTE DINERO En casa no hay dinero. Sólo me queda. Régulo J\ vender tus regalos: ¿me los compras? 17 A LA BIBLIOTECA DE JULIO MARCIAL Biblioteca de un campo refinado a , desde donde el lector ve la vecina ciudad, ** El epigrama está dedica do a una estatua de un esclavo de ( nombre Argino. como el favorito de Agamenón), probablemente de Hítela, situada en loi jardines de Estela. La estatua, dtce Marcial, estarágura te de las mano« de laa ninfas, pero no da las da Hércules, quien ya lavo una aventura con el joven Hilas; ef. PwnaAxce*. pág. 4t0; K a, I. págt 432-433. * Amado por Hércules, fue ahogado por una ninfaenamorada; cf V 48,5; IX 65.14; sobre «1 müo de Hilas y Hércules, léase a Paortacio, I 20. » Hércvles. * Se sobreentiende «raptar»,como hizo Hércules con Hilas; cf. Couaso, pág. 272. «Cf.112. * Cf la detenpción en IV 64
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ti entre versos más sagrado* algún lugar hubiere para la lasciva Taifa, podrías colocar en el anaquel más bajo estos siete libros que te enviamos
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anotados por la pluma de su autor: esta corrección les da valor. Pero tú, exquisita, que por éste pe queto obsequio * serás conocida por todo el orbe * . protege esta prenda de mi corazón, biblioteca de Julio Marcial.
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18 CONTRA GALA. HERMOSA PERO TONTA Si tienes una cara, de la que ni una mujer podría hablar11, si ninguna mancha hay en tu cuerpo. ¿por qué te extrañas de que tan pocos folladores te deseen y vuelvan otra ve /? Tu defect o. Gala, no es peq ueto. Cuantas veces me inicié en la faena y nos meneamos con tas ingles pegadas, el coAo no calla, tú eres la que callas. Losmedioses hicieran que hablaras tú y ca llara aquél: fastidia la gamilidad de tu cofto. Preferiría que te peyeras: que esto, dice Símaco ” , no perjudica y es cosa esa que mueve a risa a la vez. ¿Quién puede reírse de los ruidos de un coto loco? Cuando suena éste, ¿qué polla y cabeza no se vienen abajo? Di al menos algo y mete ruido al son de tu coto gritón, y si eres tan m uda, aprende a hab lar aunque sea por allí. * La poesíaque le dedica Marcial. * Sigo la ¡merpretació« textual de Mimo, seguida por Fucoulmki, págs. e n t e t i d t s f t m n o m i . 481-482; S.Bajuy se resigna a colocar unas » Esto es. decir nadaen contra. » Cf. VI 70.6.
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19 FRAGMENTO DB LA NAVE ARGOS »
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El fue trozo de lamadera quequilla consideras leflodesconocido. vil e inútil, éste primera de un mar A la que no pudieron romper en otro tiempo ni lai ruinas cianeas * ni la furia más tris te del mar escítico la vencieron los siglos: pero aunque haya cedido a los años, la pequeAa tablilla es más sagrada que la nave intacta.
26 CONTRA SANTRA, GLOTÓN Y AVARO
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Nada hay más miserable o glotón que Santra. Cuando invitado corre a una cena formal, con la que soAÓ tantos días y noches, tres veces pide criadillas de jabalí, cuatro veces lomo, y los dos muslos de la liebre y las dos paletillas, y no se ruboriza por perjurar sobre un tordo si porbocados arrebatar pálidos de las ostras. Con delos pastel untafilamentos una sucia servilleta; allí también se colocan uvas ollares * y unos pocos granos de granada y la piel desa gradable de una vulva ” hueca u Elcp ifn maesuneco dcCAnio . IV Ladedicaciònde exvotoi idiote* tie ne pwoeòm c i ca U Antotogia G m gc (cf. VII 69,70, 236). * Las Siopiégades a laestenda del Bótforo. P o m o Eaxioo. * B Se conservata«» ea oliai de barro cociòo; cf.Caio«, D* n nutkm VII 2; Punk» i l Vaio, Hiuoria naturai XIV 29;Colimbla, D* agriculturo XII 45; Piani A nc o, pé g. 483. 17 La vulva decerdt era un piato exquisUo; cf. Homcio,EpùtoUs I 15,41; Plmo a. Vauo, Hiuoria noterai XI 84.
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y un higo en almíba r y una seta lacia. * Per» cuando ya la servilleta se rompe por los mil h urten, CNComk en su tibio bolsillo costillas rofdas y una tórtola mutilada tras devorar la cabeza. Y no considera vergonzoso recoger con diestra larga las sobras y lo que incluso los perros dejaron. Pero no le ba>ta a su gula el botín de comida; llena a sus pies una jarra de vino con agua. Cuando esto lletó a casa por doscientas escaleras y se encerró angustiado en su buhardilla con cerrojos aquel glotón, las vende ai día siguiente.
21 CUMPLEAÑOS DE LUCANO « Éste es el día que. testigo de un gran nacimiento, dio a Lucano para el pueblo y para ti. Pola *. ¡Ay. Nerón, cruel y por ninguna otra muerte más odiado, esto al menos no se te debió haber permitido!
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MISMO TEMA Vuelve el día men>orable por el importante nacimiento del vate de Apolo: tropel de Aónidas *, sed propicias a Jos sacrificios. Esto ha merecido al haberte dado, Lucano. a la tierra, para que m ezclaras el Betis con el agua de Ca stalia11. UdJ¿ el Grmrthlku tm Lm ani aé Potia*
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23 A FEBO SOBRE LO MISMO Febo, ven. pero eraselcuando en personadeentregabas al tonante de como la guerra segundolúplectro43 la lira latina ¿Qué te puedo suplicar por un día tan grande? Que tú. Pola, honres habiiualmente a tu marido y él sienta que le honras.
24 CONTRA UN MALEDICENTE. QUE INTENTABA ENFRENTAR A MARCIAL CON JUVENAL
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Al internar enfrentarme a mi querido Juvenal, ¿qué no te atreverás a decir, pérfida lengua? Con tus mentiras criminales Orestes habría odiado a Pílades y el amor de Pirítoo se habría alejado de Teseo; t ú podrías separar a los hermanos sicilianos a los atridas **, nombre más famoso, y al linaje de Leda*>. Por tus méritos y tales audacias pido esto para ti: que hagas, lengua, lo que. creo, haces
25 CONTRA UN POETA MALO Si sólo escribes siempre epigramas modosos y más cándidos que la piel de albayalde. ** Oespnés de Virgilio, cornoen VII 27.2 *> Anflnomo y A**p*o, cf. EsnuaO*. VI 269.Aut. Grìega, III 17; Saio Itàli co. XIV 197; S. B mley . II. pég.95, ** Agamenón y Menelao. w CAstory Pòh» ** Deeir improperio» y obécenidade*.
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y no hay en ellos ni una pizca de sal ni una gota de hiel amarga, ¡encima. Insensato, quiere« que los kan! No agrada la comida misma defraudada del cbomto de vinagre ni es agradable el rostro al que le faltan hoyuelos. Dale al niflo manzanas dulces e higos insípidos: que a mí me sabe bien el higo de Qufos, el que sabe picar«?.
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26 ENVÍA AL ESCAZONTE A APOLINAR « Reúnete, escazonie *, con mi querido Apolinar y si no tiene nada que hacer —no seas pesado—, le darás este p resente, cualquiera que s ea su valor, y del que él forma alguna pane: que sus simpáticos oídos se empapen de estos versos. Si ves que te recibe con buen talante. pídele que te apoye con su conocida influencia. Conoces con qué amor arde por mis bagatelas: ni yo mismo puedo amane más. ’ Si deseas estar seguro contra los malvados, reúnete, cscazonte. con mi querido Apolinar.
27 UN JABALI QUE LE HABlA ENVIADO DEXTRO El jabalí devastador de las bellotas etmscas y engordado ya con muchas encinas, famoso después de la fiera etolia
47 Como desea tambiénG otao . XVI4-11. * Uise IV g6 Cf. Oa i An . págf 244-255. * Cf. 196 * El jabaH matadopor Mekagro: cf Uhm 4e h i Etptoócuk» 15.1.
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• quien mi querido Dextro atravesó con brillante dardo, yace en mi hogar como botín envidiado. Que los penales se impregnen alegres de húmedo vapor y la cocina festiva arda con madera de monte. Pero mi cocinero consumirá un gran montón de pimienta y añadirá falemo con salsa de reserva. Vuelve junto a tu dueño, mi fuego no te abarca. ruina de jabalí: necesito comer más barato.
28 A FUSCO
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Que crezca tu bosqu e de Diana en Tíbur y que tu bosque a menudo talado vuelva a crecer con rapidez, y tu aceite Fusco, no ceda ante las prensas de Tartesos y den buen mosto tus barriles sin medida; que los foros ** te admiren, que te alabe el palacio imperial, y muchas palma s cultiven las dos puertas de tu c asa SJ; cuando a mitad de diciembre un pequeño descanso te llegue, juzga, pero con oído seguro, las bromas que lees. «¿Te gusta saber la verdad? Eso es difícil». Pero tú puedes. Fusco, decirme loque quieres que se te diga
si Palas seemplea mesonímkam cMe por el olivo; ef. Ovtoto. Htroidas IX 44; Amorts II 16. 8; TrUtimIV 3,4; FmujlAnmr, pág. 487. « Habfe tres; Rcmamm, tultí y Aujuti; cf. S. Bauy, II. pág. 98. u Señal de que habían conseguido el ¿silo en las cortes de justicia; cf. Juvtnal. VII117; Ksa. I. pág. 442; S. Bajuy. II, pág 98 >* Es decir, la verdad o lo que quiera oír.
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29 AL JOVEN TÉST1L0 Téstilo, dulce tormento de Víc tor Voconio” , el joven más famoso del mundo entero, que le amen hermoso incluso (ras cortarte el cabello y que ninguna chica agrade a tu querido poeta: por un tiempo aparta los doctos libros de tu seAor. mientras leo m is pequeños po emas a tu querido Víctor. También Mecenas, cuando Marón cantaba a Alexis **, conocía sin embargo a la morena Melems de Marco*’.
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30 CONTRA CELIA, PUTA Te entregas a los paitos, te entregas a los germanos, te entregas. Celia, a los dacios, y no desprecias el lecho de los cilicios y de los capadocios; el follador de Menfís navega en tu busca desde la ciudad de Faros y también el negro indio desde las rojas aguas y no haces ascos a los miembros de los judíos
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circuncidados ni se te escapa el alano en caballo sarmático. ¿Cómo te las arreglas para que, siendo una joven romana, no te guste ninguna polla romana?
» Cf. XI 78. » Cf. V 16.12. Cf. Itpist. 39 Es decir, elmar Rojo. que se referí a tambiéna las aguas qve rodeaban a U penfnutla arábiga.
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31 A RÉGULO. A QUIEN DICE QUE LE ENVÍA HUEVOS COMPRADOS EN EL MERCADO
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¿Aves de un ruidoso corral, huevo« de tus mad itt, higos amarillos de Qufos a medio calentar, tosca cría de quejosa cabrita, aceitunas ya desiguales por los fríos y legumbres blancas por las escarchas heladas, erees que se le enWan desde mi campo? ¡Ay cómo le equivocas. Régulo, de m edio a medio! Nada produce mi campo excepto a mí. Cuanto le envían el granjero o el aparcero de Umbría o el campo marcado por el tercer mojón o los etniscos o los túscukn, eso nace para raí en toda la Subura **.
32 A ATICO
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Ático, que haces vivir los nombres de una familia elocuente y no dejas que guarde silencio una casa de abolengo, a ti le acompaña el piadoso tropel de la cecropia Minerva, a li te ama ei sosiego retirado, a ti todos los sabios. A otros jóvenes, en cambio, los adiestra un entrenador de oreja cortada y un sórdido masajista rapiAa sin merecerlo sus riquezas. No la pelota, no el balón, no la bola*0 te preparan para las termas o el golpe embotado de una espada desnuda, ni tiendes tus arqueados brazos en el dúctil ceroma, no arrebatas errantes pelotas polvorientas. ** Mareta! lieae que comprv h» productostn el mercado; cf. X 94. S; K e x . I, pág 444 * a. IV 19,S-6.
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sino que tan sólo co rres cerca de la« nivea* ondas de la Virgen o donde el toro se encela por el amor sidonto Jugar a las variadas artes, para las que sirven toda clase de terreno*, cuando se puede correr, es pereza.
33 CONTRA CINNA Si tu toga está más sucia que el cieno y en cambio tu calzado está más blanco. Cinna, que las primeras nieves, ¿por qué. imbécil, echas hacia abajo el manto y lo extiendes sobre los pies? Recoge. Cinna. la toga, que d esaparece41 el calzado.
34 A SEVERO. SOBRE LOS BAÑOS DE CARINO ¿Cómo puede ser. Severo**, que el hombre más malo de todos. Carino, haya hecho una cosa bien, me preguntas? Lo diré, pero rápido. ¿Qué hay peor que Nerón? ¿Qué hay mejor que las termas de Nerón? No falta al punto, helo aquí, quien de los malvados hable así con su boca nauseabunda: «¿Qué? ¿td prefier es las le mus de Nerón a tantos regalos de nuestro seftor y dios?» Lo prefiero a los baños de un manca64.
El acueductoAqua VIrgo. Con el «amor udonio» se refiere a Europa •i Porque note ve. ii lo ocultas con la loga; cf. S. Bajuy. «Concetta» t n i Exp lan aü ofiip tg . 290; S. Bauy, II. pág. 109. « Cf II 6. ** Cf. S.B a i u y . III, p*g. 318
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35 CONTRA UNA MATRONA FINGIDAMENTE IMPÚDICA « Un esclavo con sos paites ceAkUs por negro taparrabos está de pie, cada vez que le recreas (oda en agua caliente. Mi esclavo, en cambio, para callar de mí. Lecania, tiene un peso ju d io * § flor d* P*L pero contigo se haAan jóvenes y viejos desnudos; ¿•cas o sólo es auténtica la polla de tu esclavo? ¿Es que vas, señora, en pos de apartados femeninos y apartado te bañas, coñ o, en tu propia agua **?
3« A ESTELA. A QUIEN PIDE VESTIMENTA Cuando mi tosca finca se negaba a soportar las lluvias y el húmedo cielo y nadaba en medio de las aguas invernales, me !legaron como regalo enviado por (i muchas tejas, que pudieran desviar tos aguaceros repentinos. Terrible, mira, suena diciembre.con el zumbido del bóreas: ¿cubres. Esleía41, la finca, no cubres a) campesino49?
u Ataque contra el fingido pudor de algunas mujeres; M ase XI 75. * Es decir, un miembroviril circuncidado. *’ Jodiendo a »olasooomi esclavo. «* Sobre Esleía, cf.! 7. «• Es deck. ¿cómo no le replas vestidos?
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37 ACÁSTRICO ¿Conoces, Cá strtco *, la seflal mortífera del cuestor? Merece la pena aprender la nueva señal de muerte cuantas veces te tonara la nariz rociada por el frío, había ordenad o que fuera señal mortal de cortar la yugular. De tu odiosa nariz colgaba un moco asqueroso. cuando el cruel diciembre soplaba coa húmeda garganta: sus colegas le sujetaron las manos: ¿a qué mis preguntas? el desgraci ado no podo. Cá strk o, limpiarse la nariz.
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38 POLI FEMO Y ESO LA Eres tan grande y de tal condición. Polifemo, esclavo de nuestro querido Severo, que incluso el ciclope mismo te asombraría de ü; pero Escila no es menos: que si unieras los fieros monstruos de los dos, ca da cual sería la pes adilla del otro.
39 CELIO. QUE FINGÍA TENER GOTA Al decir que ya no aguantaba y soportaba los diversos recorridos, el paseo de la mañana, la altanería y el saludo a los poderoso«. Celio empezó a fingir que lenía g ou Al querer hacerla demasiado verdadera. untándose y vendándose tus pies sanos
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» Cf. VI43. La se • O AUN. pág. 334. ’> El lu to dtcc ifuta. Con la letra griega th (de ihaiuuot/o*) m vetaba ta pena de muerte contra un acusado, de aWnigrmm el thtiade Piase. IV 13.
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y caminando con paso trabajo »o, —¡evinió puede la solicitud y el arle del dolor!— Celio dejó do fing ir que tenía gota.
40 €PÍTAFK> A LA MUERTE DEL PADRE DE CLAUDIO ETRUSCO » Aquí yace aquel anciano conocido en el palacio August o tns soportar con ánimo no humilde a los dos dioses7J. La piedad de sus hijos k > unid con lu sombras sagr adas de 5
esposa: los dos vivendeenlaeilozanía bosquededelsuElíseo. Ellasumurió antes privada juventud: éste vivid casi dieciocho olimpíadasM. Pero quienquiera que viera. Etrusco, tus lágrimas, creería que los aAos $e habían apresurado para quitártelo.
41 A SEMPRONIO TUCA » Te crees, Serepronio Tuca, que eres ciudadano del mundo: las cosas del mundo. Sempronio. son tanto malas como buenas. 77 Léase Estacio,SJvoj III 3(Cotuciatio ad Claudium Itruscum^y G. Lagu n a . Etíádc: Sih+i ///, Sevilla, 1992, págs. 2 42-256. Se refiere, en realidad, a las dos caras de Domiciano, considerado como un dio«: la cara airada y al cara agradable, pues Claudio Etrusco fue desterrado y per donadopor Do«iciano. cf. VI 83; S Bml íy , II. pág. III. u Noventa atos. pues Marcial solía contabilizar una olimpíada cada cinco aAos; cf. IV 45.4. ” La interpretación se remonta a Tumebu» (cf. Con aso, pág. 284>, quien en tendió ¡cómicascotno mundanasen el cernido socrático de «ciudadano del mun do* (M. CiciaúN.Tkuuioñas V 106). mientras kásmtca (mundana) significa aco sas del mundo» y producto» de Cotmo. el perfumista; ef. B a eS. ¿ y . «Corree Uom and Explanaron». •. pág 2SI; S. Binar. II. pág. III.
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42 A CÁSTR1CO * Si alguien desea rivalizar contigo en regí los, que te atreva éste también, Cárnico, con versos Yo soy débil en ambas cosas y dispuesto a que me superen: por eso me agrada el suefto y el descanso profundo. ¿Que por qué te he dedicado versos tan malos preguntas? ¿Crees que nadie ha dado ñutas a Akfnoo ” ?
43 CONTRA CINNA* Lo primero es que me prestes, si algo. Cinna, te pido; después de eso viene que rápidamente, Cinna, niegues. Quiero a) que presta; n o odio, Cinna, al que niega: pero tú ni prestas ni rápidamente. Cinna. niegas.
44 A OVIDIO. SOBRE LA ESTATUA DE MAXIMO CESONtO* Aquel amigo tuyo es. Ovidio este Cesonio Máximo •*. cuyo rostro todavía conserva la cera viviente. * Cf. VI43. U n e a O a l An , pági. 359-560 » Famoso por sus frutal«; cf. VUI6S. I; X 94.2; XIII3?. * a. VI20. ™ Léase también el epigrama sig uiente. * Este Ovidio es QuintoOvidio, amigoy vecinoda Marcial; cf. I IOS. I; Vil 93. 3; X44; Ku. I. pág. 453;S. B*aav. II. pág. 113. "i Amigo de Séneca (cf. Conos a Lueilio LXXXVll 2), que le acompasó al A U exilio, cuando el emperador Claudio desterré a Séneca; cf. TAcvro. XV 71; PamtANMs. pág* 495*496; S Ba«*y, II. pág 113. m
m
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S
EPIGRAMAS
A éste lo condenó Nerón: pero (ó te »traviste a condenar a Nerón y a seguir el destino del prófugo, no el tuyo: por el mar de Escila acompañaste a un gran exiliado, tú que hacía poco no habías querido acompañar a un cónsul. los nombres te confían a mis páginas para seguir viviendo y te me permite sobrevivir a mis cenizas, la multitud presente y la futura oirá esto: que tú para aquél fuisie lo que aquél para su querido Séneca.
Si
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45 AL MISMO. SOBRE LA MISMA ESTATUA «
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Poderoso amigo del elocuente Séneca, cercano o más importante que su querido S ere no,}, éste es el famoso Máximo, a quien en numerosas páginas saluda la letra propicia M Tú qoe has seguido a éste por las aguas sicilianas, Ovidio, a quien no debe silenciar ninguna lengua, has despre ciado lft ira de n uestro so berano enfurecido. Que la antigüedad admire a su querido Pílades, quien acompañó al desterrado de su madre ¿Quién podría comparar los peligros de loe dos? Acompañaste a un desterrado de Nerón.
u Léase el epigramaanterior u Amigo de Séneca; cf. VIII B1; Txcno,Anales XIII 13. » La 5 d* taUtem tí Cf. VI II, |»2. Ortttet fue desuñado por su madre Clitemnastra trai el asesinato de Agamenta
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46 A PRISCO. PARA QUE NO LE ENVÍE REGALOS CON VERSOS Cuando quieres recomendarme tu regalo con un poema y deseas hablar más cultamente que la boca de Homero, me atormentas tanto a mí como a ti durante muchos días y tu querida Talía •*, Prisco, calla sobre mí*T. A los ricos podrás enviar versos y elegías sonoras: a los pobres dales regalos prosaicos.
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47 A UCIMO SURA: ALEGRÍA POR SU RECUPERACIÓN DE UNA GRAVE ENFERMEDAD « Licinio Sura**, el más célebre de entre los hombres sabios. cuya lengua arcaica nos ha devuelto a los severos abuelos, te devuelven — ¡ay, qué gran regalo de los hados!— a nosotros cuando casi habías degustado las aguas del Le te. Nuestros habían ya el ya miedo y resignada nuestravotos triste/a, y porperdido las lágrimas incluso habías lloraba terminado: no soportó la envidia el que reina en el callado Averno y él mismo devolvi ó al Destino los hilos arrebatados. Pues sabes cuántas lamentaciones de la gente ha suscitado tu falsa muerte y disfrutas de tu propia posteridad.
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M La musa del epigrama, cf. IV 8, 12. ■? Es decir no me viene lainspiración M El epigrama es unato tttk t. compotictÓA genérica en la que el pocu se ale* gra y da las gracias por la curación de Ucinio Suca de una enfermedad grave: cf. (Taiio}. IV 4 (■ til 10): HoaACto, O d a t II l7:Ov«>io.A m o r tt I I 13;Estaoo.5i/m*. I 4; Camns ( C tit e r tc C o m p o u n o * . pégv 73y 133*157). *♦ Cf. I 49, 40.
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EPIGRAMAS
Vive como tí te hubieran quitado U vida y disfruta de los goc es huidizos: la vida devuelta no pierda día alguno *.
48 A ANNK). DE QUIEN CONDENA SUS CENAS AMBULANTES Al tener casi trescientas mesas. Anmo tiene sirvientes por mesas: pasan corriendo los platos y vuelan las fuentes. Tened para vosotros tales banquetes, ricos: me molestan la cenas ambulantes.
49 A SEVERO. A QUIEN LE ENVÍA REGALOS DESDE SU FINCA Te envié un pequeño regalilo de mi finca de las afueras: huevos para tu hambre y frota. Severo, para tu gula.
50 A LA FUENTE DEJANTIS *' Fuente de tu dueAa. con que se alegra Jantis la reina del lugar, gloria y delicia de una mansión ilustre, si tu onlla está adornada de tantos niveos sirvientes y tus aguas brillan con ua coro de Ganímedes, * Liase a V. CasvotAU «El tópico del carpe diem en lu tarai latinas*. Edttcúnán abttrta 112(Aspectos dtdócikos de Latin4), Zaragoza,1994, pégs 223-268 * Cf. VI47 y Vil 15. S« trau de una écfrasit descriptiva.
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¿qué hace el Alcida consagrado en ese bosque? ¿por qué el dios ocupa una cue va u n cerca de ti? ¿Es que observa los amores conocióos de lis ninfas, para que no arrebaten a muchos Hilas al mismo tiempo?
51 A ÙRBICO« Si te avergüenza. Ùrbico, comprar mis bagatelas. pero con todo te gusta conocer mis versos lascivos, busca a Pompeyo Aucto —tal vez incluso lo conozcas— ; está sentado a ia entrada del templo de Marte Vengador**: empapado de derecho y pulido por el uso vario de la toga. no es éste un lector mfo. Ùrbico, sino un libro. Retiene y tararea mis libros ausentes de tal manera que no se le escapa ninguna letra de mis páginas: en definitiva, si quisiera, podría pasar por haberlos escrito. pero él prefiere favorecer a mi fama. Puedes molestarle a partir de las tres »pues antes no estará lo bastante libre— y los dos lomaréis una cena frugal; él leerá, tú bebe; aunque no quieras, él recitará: y cuando digas «ya es suficiente*, él leerá.
52 A AUCTO. PO R LEER SUS EPIORAMAS ACÉLERE Es agradable que leas. Aucto, mis libros a Célere*4, si es que también gusta. Aucto. a Célere lo que lees. ♦» Cf. XI SS. Léate aGa U m. pági 403-405. *> Situado en el Foro de Auguuo ** Propretor en Hispa/ua.
EPKJRAMAS
Él ha gobernado a mis pueblos, l oi celtas e iberos y oo hubo lealtad mayor en nuestro mundo. Un respeto tanto mayor me turba y no estimo sus oídos com o los de un oyente, sino como los de un juez. 53 CONTRA UMBRO. DE CUYOS REGALOS SE RÍE” Me enviaste en las Saturnales. Umbro, todos los regalos que te proporcionaron los cinco días: doce y sieteuna mondadientes; lestrípticos acompañaron esponja, una servilleta, una copa, media medida de habas con una cesta de olivas del Piceno y una cámara negra de mosto de Laletam i; también llegaron pequeños higos de Siria con ciruelas pasas y un tarro cargado con el peso de higos de Libia. Creo que apenas Uegaron a treinta sestercios todos los regalos que trajeron ocho enormes esclavos sirios. ¿Mucho mejor hubiera sido que un esclavo sin esfuerzo alguno me hubiera traído cinco libras de plata! 54 CONTRA NASIDIENO. QUE LE MOLESTABA CON SUS SUEÑOS Siempre por la mañana me cuentas sueños sólo sobre mí, para que conmuevan e inquieten mi espíritu. Ya la vendimia del año anterior y también la de este año ha tocado fondo, mientras una hechicera me conjura tus noches*6 « Léase XII t i * Cf. XI49.74; Pfconncio, IV ); O v n a Amorrs! 9.
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He consumido pastelea sagrados y montones de incienso; disminuyeron mis rebaños, mientras continuamente w sacrifica urui cordera; no me quedan cerdos, ni aves de corra!, ni huevos: o quédate en vela o duerme. Nasidieno, para tí.
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55 CONTRA CRESTO. ASQUEROSO Si a nadie correspondes. Cresto. en los regalos, no me los envíes ni remitAs. creeré que eres bastante generoso.
Pero si se los devuelves a Apkio. a Lupo, a Galo, a T kio y a Cesw. no mamarás mi polla —que es honrada y humilde—. sino la que vino de U incendiada Jerusalén*’, condenada hace poco a pagar tributo " .
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56 A RAB1RK). ARQUrTCCTO ILUSTRE Los astros del cielo concebiste en tu piadosa mente, Rabino. al construir con maravilloso arte el palacio Parrasio Si se dispone a ofrece r un temp lo digno del Jú pite r* • de Fu las , Pisa mi pedirá estas manos a nuestro Tocante.
w Probable alusión a la sexua lidad * Cf. So*tomo, XII 2. de k» judío*. Domtctanc * Alusión »1 palacio de Oomkiaoo, coasinndo por Rabirio; se terminó«■ «I aAo 92 d. C : cf VII99.3; VIH 36.3; IX 12. í; XII IS. 1;Fmcocanou . pág 501 '« La estatua de Zeei en Olimpia mi Situada en « 1 ÉJlde(Orccia).
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EFIORAMAS
57 AQUILA CONSIGUIÓ EL CENSO ECUESTRE Gabtnia transformó a Aquiia de Pólux en Cisión había sido •un buen boxeador», ahon será «tin caballero- <<*2 .
58 A GALA, QUE QUIERE CASARSE CON UN HOMBRE DE VERDAD Ya te has casado, Gala, con seis o siete maricas, cuando te gustan dem asiado el pelo y la barba pei nada. Después, tras probar la hombría y que sus miembros parecidos a un cuero mojado no se empinan ni obligados por tu mano cansada, 5 abandonas k» tálamos afeminados y a tu marido marica, y de nuevo caes continuamente en lechos similares. Busca a alguno que siempre hable de los Curios y de los Fabios. con pelo en el pecho y fiero con dura rusticidad: k> encontrarás; pero también la turba severa5Wtiene mancas: difícil es. Gala, casarse con un hombre de verdad.
Marcial aplica uo veno homérico (Ufada,til 237) a una situación obscena: Gabinia ha logradoque Aquiia se coavie na de un macho pasivo (unboxeador acti* «cacha*», sipfx «boxeador* wgiereenEsellasonido «nalgai»)deenJ. macho que puede vo cabalgar sobre GabUvia. posibleapygé interpretación N. Adams, The latín Sexuét \bcobuiarytpég. 166, a. 3. También sería posible entender que Oabima ha hecho caballeroa Aquiia dándoleel dinero necesario; con ello lo ha convertidoen un domador de caballo« y asi pude/ cabalgar sobre OaMnia; cf. Coutao. pág. 291; 5. Bauy. 11. pág. 124. mi Ea decir, loa filósofos; cf.IX 27 y 47; S.B a h « y , II. pág 125.
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CECIUANO. OLOTÓN No cena, Tito, sin A p r o m i querido Ceciliano: Ceciliano tiene un helio convidado.
«0 A JÚPITER Guía venerable del palacio de Ta rpeya,w* asiquien, el emperador, cada cusalvado tí le acosa con votosconsideramos pera ellos Tonantc. y te pide que le des to que los dioses podéis, no me tomes por soberbio, si no le pido, Júpiter, nada para mí en mi súplica. Por el César deb o pedirte: por mí debo pedir al César.
61 AL EMPERADOR DOMICIANO
Se había apoderado de la ciudad entera el buhonero temerario y ningún dintel se mantuvo en sus propios límites. Has ordenado l* . Germánico, que crecieran los peque to s barrios y lo que ames había lido una senda, se convirtió en una avenida S. Balley (II, pég. 125) propone iré» posible« lifm fcaóoi para si** Apro: •u n jabalí (en el menú)* y «tta un jabalí (como huésped)», este áW«sinim Apro*. roo. elegido por Marcial. con temido bumorfuteo. Alutttn ti templo de Júpiter en el Capitolio. Dom kiano promul gó un edicto en ei a to 92 d. C. p an impedir que t a ce* mercianiet invadieran \v> calle»; cf. P**«A*utn, pág. 504.
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EPIGRAMAS
No hay ninguna pilastra rodeada de botellas encadenadas ni se obliga al pretor a ir en medio del barro, ni una navaja se saca-ciegamente en medio de un gran gentío ni negra freiduría ocupa toda la calle. Barbero, tabernero, cocinero o carnicero respetan sus propios umbrales: ahora es Roma, antes era una gran tienda.
62 CONTRA HAMILO. ASQUEROSO •#»
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Con las puertas de par en par atraviesas a adultos, Hamilo, y quieres qu e te sorprendan, cu ando k> haces, para que no cuenten nada los libertos, los esclavos de tu padre y un di ente funesto por su hipócrit a garrulería. Quien da testimonio de que no le dan por el culo, Hamilo, a menudo hace lo que hace sin testigo,0*.
63 SIUO. PRIMERO ABOGADO Y DESPUÉS POETA
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Tú que lees los volümenes imperecederos del inmortal Silio y cus versos digno s de la toga latina, ¿crees que al vate sólo gustaron los retiros de Pieria y las guirnaldas báquicas de la cabellera aonia?1,0 No tocó el oficio sagrado del cotumado Marón ames de cum plir con la obra del gran Ciceró n
Léase VI 3* Cf.Oa U n . p4ft 464-465. Tritìi tieot el doble ttntido de «letugo» y de «letifculo«. m Cf. IV 14 Cf. Gaia*, pégi 469-471. "* Et deck, la poesia «i Se dedKó «Me» a la «bogada, comoCicerón
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Todavía a éste te admiro la pesada lanza "3 de k» cemúnvinn. de éste hablan muchos dientes con palabra« de agradecimiento Después de gobernar el gran ato coo las doce fascesn) quiensus fueartos sagrado por liberar mundo.y a Feto entregó de emérito a lasalmusas y ahora en lugar de su foro frecuenta el Helicón
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64 CONTRA CÍNAMO"« Tú que habías sido el barbero mis conocido en toda la ciudad y después te convertiste en caballero por regalo de tu duefta m . te dirigiste i las ciudades de Sicilia y los reinos del Etna, Cínamo, huyendo de las duras leyes del toro **•. ¿Con qué artimaña soportarás ahora inOtil atas nulos? ¿qué significa ese descanso desgraciado y fugitivo? No rétor, no gramático o maestro de escuela, no filósofo cínico, no estoico tú puedes ser. ni vender tu voz y los aplausos en los teatros sicilianos; lo que te queda. Cínamo. es ser otra vez barbero.
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65 CONTRA OARGU.IANO Un pleito te consume después de dedicarte los fríos de veinte inviernos. Gargiliano, ante tres tribunales a la i» El signode la Corte de losCenWnvtroi Sitio fue cónsul en el ato 61. «jando muñó Nerón 1« a VI 17; Omá n , p*gs 4SOHS2 o Debió de haberte dado los 400 000 teueick» que se nccesHabaa pan per tenecer a la clase de lo* cabellen»; cf.Izaac . I. pág 269 <*+ Pan evitar u m mvtuigackVi judicial sobre m posiciónsocial; cf Kca. I. p4g 467.
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EPIGRAMAS
vez. {Ay desgraciado y loco! ¿Platea veinte Ato« cualquiera a quien k pueden, Gargiliano, ganar?
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LABIENO. HEREDERO Fabio dejó a Labieno de heredero universal: sin embargo. Labtcno dice que había merecido m is
67 CONTRA FILENIS. LESBIANA
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Da por culo a los chavales la lesbiana Fi lenis y más furiosa que un marido empalmado (aladra a once chavalas por día. Arremangada juega tambtén a la pelota1,1 y se pone amarilla de polvo y las haltera s pesadasl>f
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para atletas hace coa músculo y embarrada de lagirar hedionda palestra fácil, se somete a los golpes del monitor untado de aceite. Y no come ni se reclina antes de vomitar siete chatos de vino; a ellos piensa que puede volver, cuando ha com ido dieciséis albóndigas. Después de todo esto, cuando se pone cachonda, no la mama —esto k> cree poco vinl—,
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sioo que devora por completo el sexo de chavalas 119 Segaramenic porque los regalos de Labteno (o su sumisión sexual) a Fabio haMaa valido más que la faertneia que racMó; cf.S. Bajuy , II. pág. 131. '*• Cf. IV 19.6. y V» 32,10. •» Sobre petas, cf. XIV 49 y Jro i«a l . VI 421 u >» Cf II6L 2. y Cajvlo. LXXX 6
UB RO VI!
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Los dioses te concedan una mentalidad. Filcnis. adaptada a li, que c rees viril lamer cortos.
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A RUTO. PARA QUE NO RECOMIENDE SUS EPIGRAMAS A SU SUEGRO No recomiendes, Instancio R ufo ,JI. mis Camenas, te k> mego, a tu suegro: quizás le gusta la poesía sería. Pero si también él admite los libros lascivos, entonces se los leeré incluso a Cutio y a F abrici oi n ,
69 AL POETA CANIO SOBRE TEÓFILA Ésta es la famosa Teófila que te prometí. Canio, cuyos pechos es tin impregnados de la dote de Cécrope. A ésta con razón la solicitaría el jardín de Atenas del ilustre anciano y no menos querría que fuera suya la banda de los estoico«. Viviré cualquier obra que metas por esos oídos su saber es tan poco femenino y tan poco popular. Tu querida Pantenis 174 no va ya muy por delante de aquella, aunque sea bien conocida al coro de las piérídes. Su composición de versos la alabaría la amadora Safo: más casta fue ésta y no más docta fue aquélla.
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111 Amijo de Marcili, cf. Vili SO. 21 y 83. I; »e identifica lambténcon el procónuil de la Bética de XII 98.3; Fumanuc*. ptf. 506 Cf. I 24, 3. lJ) Deb* de irtfarse de Epicuro 124 Poetisa desconoodi de ia època
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EPIGRAMAS
70 CONTRA HLENIS IM Ftlenis, lesbiana de las mismas lesbianas, con razón, a la que follas, llamas amiga
71 FAMILIA CON ALMORRANAS
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Almorranas tiene la esposa, almorranas también el marido. la hija tiene almorranas, el yerno y el nieto, y oí el administrador ni el granjero de la asquerosa úlcera están libres ni el rígido boyero ni siquiera el labrador. Si almorranas tienen por igual jóvenes y viejos, es de extrañar que só lo el campo no tenga almorranas .
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A PAULO. DEFENSOR DE SUS EPIGRAMAS
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Que te sea venturoso, Paulo, diciembre y no te traigan trípticos inútiles y peque fias servilletas ni ligeras medias libras de incienso, sino que un acusado importante o un amigo poderoso te traiga fuentes y copas de sus antepasados; o k> que más te gusta y arrebata: vencer a Novio y a Publio encerrados
us Léase Vil 67. El términoamkú es ambiguo para una mujer a) amiga, b) amante, como sería para uahom bre: cf. S. B a u y , II, 135. Cf. 165; O a l An , págs. 518-519.
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con su t peones y solda dos de cris tal •»; que el juicio favorable del público embadurnado le conceda la palma de entre los atleta« ungidos y no alabe mis las izquierdas de Polibio. Si algún malvado dijera que los míos son versos que están impregnados de negro veneno, asísteme con tu voz de abogado y grila cuanto puedas, pero sin parar: «no escnbió ésos mi Marcial*.
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73 A MAXIMO. QUE TIENE VARIAS CASAS Tienes una casa en las Es quiliu , tienes una casa en la colina de Diana129 y el barrio Patricio cobija un techo tuyo; a un lado divisas el templo de la viuda Cibeles *J*. al otro el de Vesia, por una parte al Júpiter nuevo, por otra al viejo,K. Di me dónde puedo reunirme contigo, dime en qué sitio puedo buscarte: quien vive en todas parles, Máximo, no vive en ninguna.
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Marcial etti «ludiendo al juego de me va coaocido como ludWj kunukubrum o «juego de ta ladrones». Se jugaba ea ua tablero dividido en casillas con fn chas (cúlatli) que se distinguíanpor el color Se enfrentaban do» jugadores para ú apoderan« de la« piezas de su adversario, como se tratara de una batalla Léate el comentario de GuA», pig. 327. *** En el Aventino. Al pie del Esqmlino, 1)1 Por li muerte de Aiis;cf C a m o . LXIII. i M El primero en el Capitolio, el segundo ea el Quirinal.
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EHORAMAS
74 A MERCURIO Honra Cilene,u y de! una cielo,dorada elocuente parade quien reverdece v a rservidor. a d e serpiente retorcida: que no te falte abundancia de hunos lascivo», ya desees a la de Pifos o ya ardas por Ganfmedes; 5 que las idus *** de tu madre se adornen de sagrado follaje y tu viejo abuelo ** sienta la presión de una pequefta carga. Siempre la fecunda Norbana con su esposo Carpo honre este dia. en el que se uoieron p or primera vez en matrimonio. Que aquí un piadoso sacerdote de la Sabiduría ofrezca sus to
propios dones, que aquí le invoque con incienso, fiel también él a Jú[piter. 75 CONTRA UNA VIEJA FEA Quieres que te folien gratis, cuando eres fea y vieja: asunto más que ridiculo: quieres da r y quieres no dar ■*. 76 A FILOMUSO, BUFÓN Porque los poderosos te disputan en banquetes, paseos, teatros. IU MontaAa de Arcadia, doode nació Mercurio. portaba toi dtote« *** El Decaduceo mayo» Cf. U 9 y III 90. Léan aCuAn. p«f $51. D an tiene dos sentido»', dar y entregarte, cf. X 75. 14; S. Bahjy. 11. P*t 139
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y contigo, cada ve< que caes por allí. les gusta que los lleven y les gusta bailarse; no seas demasiado vanidoso: agradas. Filomuso, no enamoras.
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77 CONTRA TUCA. AVARO Exiges que te regale, Tuca, mis libros; ni hablar: lo que quieres es ven derlos, no leerlos.
78 CONTRA PÁPILO, KRUGAL CONSIGO MISMO Y ESPLÉNDIDO CON LOS DEMÁS Aunque se te sirva cola de pescado saxetano '* y, si cenas bien, un hervido de habas con aceite, tú envías ub res de cerda, jabalí, liebre, se os, ostras, mújoles: ni tienes seso. Pipilo, ni gusto.
79 A SEVERO He bebido hace poco vino de cónsul ¿Pregunta s qué aftejo y generoso? Embotellado por un cónsul antiguo: pero el mismo que lo servía era. Severo cónsul. ,N Procedente deAlimiftécar. Es decir, vino de marca, que eran reconocidos por dnombre del cónsul dri ato que te inscribía en la etiqveu. '«« a . II 6, X
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EPIGRAMAS
80 A FAUSTINO, PARA QUE KNVÍR SUS LIBROS A MARCELINO
s
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Dado que U paz romana ya calma a los nórdicos odrisios y se han silenciado las tétricas trompetas, podrás. Faustino, enviar este libro a Marcelino|4*: ya tiene él tiempo libre para mis páginas, ya para mis bromas, Pero si quieres recomendarle el pequeño regalo de tu amigo, que un esclavo le lleve mis versos, no como el que. saciado de leche de una vaca gética, juega en el río helado con una rueda sarmática. sino el efebo rosado de un comerciante de Mitilcne o un lacedemonio todavía no azocado por orden de su madre Pero a ti se te enviará un esclavo del cautivo Histro|4S. que pueda apacentar las ovejas de Tívoli.
81 A LAUSO. SOBRE UN BUEN UBRO '«♦ •Hay treinta epigramas malos en todo el libro»: si hay otros tantos buenos. Lau&o, es un buen libro.
EiUba es las campaAa*
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82 MENÓFILO.CIRCUNCISO At que penesola de se Menófilo lo viste 147 tan grande. basta para tod osun» losfíbula comediantes. Yo creía — pues nos lavamos juntos muchas veces— que éste preocupado miraba. Flaco, por su voz. Mientras se entrena en medio de la palestra rodeado de 5 espectadores, se le cayó al desg raciado ta fíbula: era ci rcunciso,4>.
83 eutr
Ap e l o . b a r
b e r o lento
Mientras el barbero Eutrápelo|M recorre la cara de Luperco y rasura sus mejillas, le salió otra barba.
84 AL LIBRO. QUE ENVÍA A CECILIO SEGUNDO Mientras sé delinea mi retrato para Cecilio Segundo y cobra vida el cuadro pintado por mano diestra.
w Consistíaen un anillo de metal que se prendí» en el prepucio para evitar la erección; cf Celso . VII 23,2; Ma *c u u XI75; Kav . pig. 229. ,4* Et decir, un judío. ■4* Cf. VIII 52; P T- Edtn. «Problemt ia Manial (III)». Mnrimosymr 43 (1990). 163 4; OaUN, págv 579-581 '*> La graciadel epigramartixk en que el nombre griegotturdpdo* significa «dicstm. ágil*, todo k> contrario de lo que hacía F.tnripekv i*i Parece que no se trata de Plintoel Joven, uno dd Segundo de V 80.7; cf FaoiNANOU. pigv 515-516.
EPtORAMAS
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ve. Hbro. a la Pcuce133 gética y al Histro■» postrado: estos lugares, domeñados sus pueblos, los gobierna él. Darás a mi querido compaflero un regalo pequeAo pero dulce: en mis versos habrá un rostro más auténtico: éste vivirá sin ser destruido por ninguna desgracia, por ningún a to. cuando perezca la obra de Apeles.
as A SABELO. POETA INSULSO Que no escribes sin sal algunas estrofas, que bien haces. Sábelo, unos pocos dísticos, lo alabo. pero no lo admiro: es fácil escribir bien epigramas, pero es difícil escribir un libro.
86 CONTRA SEXTO. AVARO
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Se al banquete de tuSexto. cumpleaños, pesemea invitaba que no era amigo tuyo. ¿Qué ha sucedido, pregunto, qué ha sucedido de pronto, después de tantas muestras de amistad, después de tantos ato s, para que se me haya olvidado a mf, tu viejo compaftero? Pero sé la razón. No te ha llegado de mi paite ninguna Libra de pura plau hispana ni una toga ligera ni mantos sin estrenar No es espómsla aquella con la que se hace negocios;
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alimentas Estást>4. a punto de decirme: regalos. «que se Sexto, azote anomiamigos. secretario» '« Cí. Vil 7.1. •» E l Danu bi o
i** Por haberse olvidado de oo aombre EJi-ocútoren el esclavo encargado de diunbwr las ¡evitaciones;cf. Ki*. I. pág 482; S. Bauzy. 1,pág. 147.
LIBRO v n
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87 ANIMALES FAVORITOS Si si miCanto querido se alegre un Itnce orejón, ,MFlaco di^frula con uncon sombrío etíope, si Publio arde por el amor de una pequefta perritaIJ4. si Cronio se enamora de un ccrcopilcco igual a ól. si un pernicioso icneumón w agrada a Mario. si a (i te agrada una urraca saludadora, si tG ad ila t se pega al cuello de una gélida serpiente. si Telesila dedicó una tumba a un ruiseftor: ¿por qué no puede enamorarse el rostro lisonjero de líbicas, igual a Cupido. quien ve que estos monstruos agradan a sus se flores?
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LOS MBROS DEL POETA SE LEEN EN VIENNE Se dice que mis libritos. si es cierta la fama, se cuentan entre las delicias de la hermosa Vtenne. Me leen allí todos los mayores, maduros y jóvenes, y la casta doncella en presencia de su adusto esposo. Esto preferiría yo a que canten mis versos quienes beben el Nilo desde su misma fuente; a que mi querido Thjo me colme de oro hispano. a que el Htbla y el Himeta alimenten a mis abejas. Significo por tanto algo y no m e dejo llevar por el regalo de una lengua lisonjera: te crcesé, pienso, ya a ti, Lauso
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Poeta d* Gadev.cf. III 20 Cf. 1 109. El cercopueco del v. 4 era un mono negro enerado v en Tebai i” Animal cuadnlpedo de srcenegipcio;cf. Eliano . VI Jg. Habfa condenado d hbro deepigramasde Marcial; cf. VII g|; Km. I. pég. 4S3.
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EPIGRAMAS
89 A LA ROSA QUE ENVlA A APOLINAR
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Ve, rosa feliz, y con suaves guirnaldas cifte el cabello de mi querido Apolinar >**; tú acuérdate de entretejerlos blancos, pero deniro de un tiempo: que Venus te ame siempre.
90 A CRÉTICO: EL LIBRO DESIGUAL ES EL BUENO '« Matón se jacú de que yo he logrado un libro des igual: si es verdad, Matón está alabando mis versos. Cal vino y Umb ro escriben libros equilibrados iguales: un libro igual es. Crético, el que es malo.
91 A JUVENAL De mi campo, elocuente Juve nil w , te envío, mira por dónde, nueces de lai Saturnales. Las restantes frotas se las dio a chicas lujuriosas la polla lujuriosa del dios guardián >*>.
»» cr. iv S6. y. « Cf. VII8I.Léa»ca GAiAH.págt .6l64l7. •*» Cf VII24. L •u Prispo.
UBICO VII
49
92 CONTRA BACARA QUE NO CUMPLÍA SUS PROMESAS «Sidkes necesitaras algo, sabes que noenme tienes dos y trei veces. Bácara. un losolo día. que pedir*, El adusto Segundo *** me reclama con voz mandona: lo oyes y no sabes. Bácara. lo que necesito. El alquiler se me reclama delante de ti con claridad y en público: lo oyes y no sabes. Bácara, k> que necesito. Me quejo de tener un mamo frió y raído: lo oyes y no sabes. Bácara. lo que necesito. Lo que necesito es que te quedes mudo por una súbita estrella, para que no puedas decir. Bácara. «si necesitas algo».
s
10
93 A LA CIUDAD DE NARNIA. PARA QUE NO RETENGA MÁS A QUINTO Namia. a la que rodea un blanco rio de corriente sulfurosa, apenas accesible por dos montañas, ¿por qué te gusta quit arme tan a menudo a mi querido Quinto y retenerlo durante largas temporadas? ¿Por qué me destruyes la razón de mi finca de Nomento, que tenía valor gracias a ese vecino? Pero piensa ya en mí y no abuses. N amia, de Quitwo: si así. que se te permita disfrutar siempre de tu puente.
'*> a . II44.7.
3
EPIGRAMAS
94 PÁP1L0. MALOLIÜNTL *** lira un perfum e que ha poco contenía un peque ik) tarro:
95 1« CONTRA I-INO. BESADOR INOPORTUNO
Es invierno y domina el frío diciembre, tú sin embargo te atreves con un bes o de nieve a retener a todos los que encuentras por aquí y por allí y a besar. Uno. a toda Roma. ¿Qué cosa más grave y terrible podrías hacer golpeado y azotado? Con este frió no me besará ni mi mujer ni mi inexperta hija con sus labios seductores. Pero más dulce y elegante eres til« de cuyas narices de perro cuelga un lívido carámbano y la barba está tiesa, como la que el esquilador Cfl icc corta a un chivo cinifio con unas tijeras c orvas. Prefiero toparme con cien lamecoAos y temo menos a un galo recién castrado ***. Por tanto, si tienes seso y vergüenza, le ruego. U no . retrases los besos invernales para el mes de abril.
'** Cf III 17. '« Cí. XI98 Léase a Oaian , pift 632433. '* a. IUSLJwnai. VIII 176; Ku.l. pág 489
LIBRO VII
SI
96 EPITAFIO AL NIÑO ÚRBICO Enterrado aquí estoy yo. el desconsuelo Baso, el ni&o Úrbico. a quien la poderosa Roma dio prestigiodey renombre. Seis meses me faltaban para los tres primeros artos, cuando las tétricas diosas rompieron funestamente los hilos. ¿De qué la belleza, de qué la lengua, de qué me sirvió la edad?IM. Derrama lagrimas, quien lees esto, sobre mi tumba: que no vaya, si no es más viejo que Néstor, a las aguas leteas, aquel que desees que te sobreviva.
•
3
97 A SU LIBRO. QUK ENVÍA A CESIO SABINO Si conoces bien a Ce&io, Itbriio. honra sabina de la montañosa Umbría, compatriota de mi querido Aulo Pudente '•*, tú le entregarás estos versos incluso si está ocupado. Aunque le acosen y agobien mil preocupaciones. con todo tendrá tiempo libre para mis versos. Pues me quiere aquel y me lee después de los nobles libros de Tumo ■*. ¡Oh qué nombre te está reservado! ¡Qué gloria! ¡Cuántos admiradores! De ti hablarán los hanquetes. de ti el foro, las mansiones, las encrucijadas, los pórticos. las tiendas: se te enviará a uno solo, todo s te leerán. i”
5
10
L a s Parcai
Tópico funerario delguié prvfuit?, frecuente en las lamcmacionet poéti* cas; cf.. p. e . Hojudo.Od*s I 28. 4 (muerte de Aiqmias), Ovio», Amorrs II 6, 17-20 (muertede un papagayo); II9, I 15-16 (muerte de Tíbulo) i" Cf. I 31. Cf. XI 10.
EPIGRAMAS
98 A CASTOR. COMPRADOR DE TODO Compras. Cástor, lodo: así sucederá que vendas lodo. 99 A CRISPINO, A QUIEN RUEGA QUE RECOMIENDE SU LIBRO A DOMICIANO Ojalá veas siempre. Crispino IT‘, tranquilo a! Tonanic,TÍ y Roma no le quiera menos que tu querida Mentís. Si mis versos se leen en el palacio Parraste173 —pues suelen disfrutar del oído sagrado de César— , atrévete, como cándido lector, a hablarle de mf: •algo ofrece ese a nuestra época y no es demasiado inferior a Marso y al docto Catulo»: eso es suficiente, lo demás lo dejo pa ra el dios mismo.
a . vm4»
ÍXMHcitflo, equipando a Júpiter. En el Palatino.
LIBRO Vili
VAl.RRIO MARCIAL AL EMPERADOR DOMICIANO CÉSAR AUGUSTO GERMANICO DACICO * Cieno es, SeAor, que todos mis librilos, a los que tú has dado fama, es decir, vida, se encomiendan a ü; y, según creo, por eso serán leídos. Sin embargo, éste, que se intitula el octavo de mi obra, aprovecha más a menudo la oportunidad de expresarle su devoción. Y así, hu bo de ser ela borado con menos ingeniosidad, cuyo lugar habían ocupado los asuntos a tratar: a los cuales, ciert o es. he intentado darles variedad entremezclando de vez en cuando alguna jocosidad, no fuera a ser que todos los venoc derramaran sobre tu celestial modestia sus alabanzas, las cuales podrían más fácilmente fatigarte a ti que hartarme a m f. Por otra parte, aunque in cluso por las personas más circunspectas y de la mejor condición se han escrito epigramas en un tono tal que parecen haber adoptado el desver gonzado lenguaje de los mimosJ, yo. sin embargo, no les he permitido a los de este libro expresarse tan crudamente como suelen. Dado que una pane de él —no sólo la mayor sino también la mejor >— está ligada a la 1 Sólo doa libros más, el II y «I XII. confieren cartas de dedicatoria. En ésta (k>a bastante claro su propèsilo de alaban» y encomio al emperador Domiciano. * Cf. II41,15 u. y III16 * Haua veintidós epigramas de eue hbco están dedicados • Domiciaao y a «a obras.
54
EPIGRAMAS
majestad de tu sagrado nombre, téngase presente que no sin haberse ex piado mediante una purificación religiosa se debe uno acercar a los tem plos ♦. Para que los que me van a leer sepan que yo he de observar cito, en el mismo umbral de mi librílo me ha parecido bien proclamarlo con 4in brevísim o epigrama.
1 A SU UBRO. PARA QUE APRENDA EXPRESIONES Y ASUNTOS PUDOROSOS * Libro que estás a punto de entrar en el laurífero* hogar de mi Señor, aprende a hablar más recatadamente con boca pudoro sa. Apártale. Venus desnuda; este no es tu librito7: ven tú jun to a mí, tú . Palas Cesariana *.
« Alusión a la deificacióndel emperador(Kat, 0, pág. 3). * Epigrama proemial en el quede^a claro el tono del libro. * Por la corona de laurel que. legd» Suctomo (Domictano6, I), ofreció Domiciifto Júpiter a m triunfo loa támataa en atoa; la fronter a del Danubioa en mayoCapítol!no del 92. aln cabo de unacontra expedickto de ocho el emperador regresó a Roma en enero del 93. La mayoría de k» epigramas dedicados a Domlciaoo en cate libro hace« referencia a esta circunstancia. 7 Ea efecto, k» epigrama*procaces están aus entes deeste libro; comp. con XI
..
2 8
* Por ter Minervala diosa tutelar del emperador, cf. IX 3,10.
LIBRO VII!
55
2
A JANO. MARAVILLADO AL VER A DOMKTANO TRAS VENCER A LOS SÁRMATAS Jano, el progenitor y podre de lot fo to s ♦. cuando hace poco vio al vencedor del Histro w. conside ró que no tenía bastante con tantos rostros11 y anheló disponer de más ojos: y hablándole con «odas sus lenguas a la ve?. al señor de las tierras y dios dei universo w le prometió una vejez cuádruple que la del de Piloslf. Te pedimos, padre Jano. que añadas también la tuya.
*
3 A LA MUSA. POR QUIEN SE IMAGINA ANIMADO A SEGUIR ESCRIBIENDO EPIGRAMAS ■« •Cinco eran bastantes: seis o siete libritos son ya demasiados: ¿ por qué te divie ne, musa, seguir jugando ? Tengamos la humildad de poner un final; nada más puede ya la fama añadirme: mi libro va de mano en mano por todas partes; * Según algunas leyendas. Jano habría tenido que ver con el ongen de Roma; los «fasto*» eran unto el calendario de días laborable* y festivo* como la» btu* de cargos públicos, triunfos y sacerdotes, y se guardaban en el templo de Jano. » EJ Danubio; cf. VIII 1.1a. Marcial llene aquí en meate. como aporta Seiy» a i tfr/f. A. XII 19$. um Imagen de Jano coa cuatro caras ea vez de las dos habituales; ef. X 2S. 6 (PtUEDUNOtl. pág. 2). » A Domiclano. Cf.IV 1,3 n. i* Epigrama literario enel que Marcial, ras i atete libro* y consciente de su fama, cree que puede poner fin a su obra; la musa lo convence de que siga y de que no te dedique ni a la tragedia ni a laépica; cf. I 107.
56
EPIGRAMAS
5 y cuando l is piedras de M ésa la15 yazgan ro us en tu emplazamiento y cuando tos grandiosos mármoles de Ucino >* sean polvo, a mí. sin embargo, me seguirán leyendo en voz alta, y una enormidad de llevará consigo cuando mis poemas a su lugarasídelasrcen». Había yo acabado me respondió novena de las {extranjeros hermanas 10 que lenía el peto y el vestido perdidos de perfume: •¿E s que eres capaz tú, desagrade cido, de dejar las dulces frusler ías? Dime, ¿qué otra cosa mejor harás en tu holgazanería? ¿o es que te divierte convertir tu vena cómica en obras trágic as o vocear crueles guerras en ritmos cadenciosos IS para que le explique con voz engolada un engreído maestro y te odie la adolescente ya crecidica y el niAo de buena familia ■•? Que escriban eso tos harto respetables y tos harto circunspectos, a quienes el candil contempla en su mezquindad a mitad de la noche. Mas tti salpica tus encantadores libritos de salero romano: 20 que la vida reconozca y lea su propia forma de ser **. Se te permite que parezca que canias con un grácil caramillo, con tal de que tu caramillo supere a las trompetas de muchos».
Marco Valerio Mésala Corvino, el patrono de TUxilo. que reconstruyó la Vía Latina; aquí puede referirsea ai turaba (Kia. IL p. 5). * Prisionero galo, favorecido por César (que le dio la libertad) y Augusto (que lo nombró gobernador de la Oalia). cuya nimba en laVía Sallarla era famosa por su magnificencia (ízaac , II 2, p4g. 328) i* Debe de referirse a Ta ita, la musa de losepigramas (cf.IV 8.12;Fíídcan oca. pig- 3), aunque iradtctonaJmeMc la novena muta era Urania. '• Cf. ID 69,6-7.
» a x 4. i
LIBRO Vili
57
4 AL CÉSAR ÜOMICIANO, POR CUYO REORESO AFIR MA QUE LOS DIOSES Y LOS HOMBRES DAN GRACIAS»
¡Bravo! ¡Qué enorme h ervidero de gente» hace y cumple promesas por su caudillo en los aliares latinos! No son estos gozos. Germánico, exclusivos de los hombres, sino que —a mi entender— k» propios dioses ofrecen ahora sacrificios.
5 A MACRO, DESPILFARRADOR
Con tanto regalar. Micro, tus anillos a las jovcncius, his acabado. Macro. por no tener anillos *».
6
CONTRA EUCT O. QUE PRESUME DE SUS COPA S
Nada hay más detestable que las antiguallas del vejete Eucto —prefiero los chatos moldeados con barro saguntinoH—, cuando, parlanchín, relata el rancio abolengo de su plata y con su perorata hace que se piquen los vinos:
*
Racriiocon motivo de1« voton m tum oipoiio («I 3 de enero), ea la que ta
y los sacerdotes de todo el impeno Hacían promesas sotemnet por cargos el bien públicos de) cmpecador (Hueouu«**. pági. 4-3). >' El decir, has perdido tu coodkkta de caballero(cf. Jwckal. XI, 43); eiüu oñHÍontm (el derechoa llevar un aoilk> de oro) lo tenía* loa leñadores, caballeros y cargos públicos (K u. II. pág 7). Sobre la «Mdktfn de caballero. c(. VII64. 2 * » Sobre su calidad,cf. IV 46. 14-16.
58
FPKMAMAS
9 «listos vasos p ertenecieron a la mesa de Laomcdontc: a fin de hacerse con ellos Apolo levantó las murallas con su lira Con esta cráter* et feroz R eco24 entabló combate concopa los de lápiias: obra ves abollada por ladellucha. Esta doblelapie estálavalorada en virtud longevo Néstor: 10 el brillo de la paloma se debe al roce del pulgar del de Pilos Esta es la tembl adera en la que el Eicid a * ordenó que se les preparara a sus amigos un vino más abundante y de más solera. En esta pátera la hermosísima Dido le ofreció el brindis a Bilias cuando se dio la cena en honor del héroe frigio* IS Una vez que hayas adm irado mucho la primitiva orfebrería, en los cubiletes de Prfamo te beberás a Astianacie ».
7 CONTRA CINNA. PICAPLEITOS DE
HABLA PARSI MONIOSA »
¿Esto es defender pleitos, esto es. Cinna, decir con elocu encia: decir. Cinna. nue>e palabras en diez horas? Pero hace un momento has pedido a grandes voces cuatro clepsidras 30 ¿Oh. cuánto puedes estar callado. Ctnn a!
21 lutomcdome fue nuo de k» pnmerc» reyet de Troy a, y. »egOn la leyenda, obhgó a Apolo y Poúdán a conitruér las muralla* de la ciudad. x El verdadero nombre de uno de ta centauro« 35 En una tumba de Micenas teencontré ana muyparecida, con una pakuna es culpida en rebeveen cada asa: cf Howrjto,i liada. X!. 633(I7aac. II 2. p á g 255) » Aquíle»; cf. Huuuu. Moda. XI. 202. 21 C f. Vana». E n e id a . I. 723*740, donde se relata, además, la mecánica del brtadu * (Ktt, II, pá|. 9). So Al nieto de Príamo, por tanto, beberás vino» jóvenes bre la técnka del final del epigrama, cf. 162.6 n. » Cf 197 n. » Cf. VI 35.1 n
LIBRO Vili
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8
A JANO, SOBR E EL REGRESO DEL CÉSAR > '
Aunque des inicio. Jano, a los efímeros aAos ’* y con tu rostro renueves los largm siglo*, (y) a ti el primero te nieguen los piadosos inciensos, te saluden las pro le veneren la púrpura venturosa, todos los gobernan tes. (mesas, tú. sin embargo, prefieres lo que le ha acontecido a la ciudad latina: 5 contemplar en tu mes. Jano, el regre so de nuestro dios».
9 A QUINTO. PAR A QUE A CEPTE LA MITAD DE LO QU E LE DEBEN Y NO L O PIERD A T O D O *
Hace poco Hilas, legaAoso. quería p agane a ti. Quinto, tres cuartas porte»; tuerto, quiere darte ia mitad. Acéptalo cuanto antes; fugaz es la ocasión de l benefìcio: si se queda ciego, nada te pagará Hilas.
10
•
SOBRE BASO. QUE HABÍA COMPRADO UNAS ROPAS Y NO LAS HABIA PAGADO »
Biso ha comprado por diez mil sestercios unas ca pas lirias del mejor color. Ha hecho buen negocio. «¿Tan bien ha comprado?«, dices. Mejor aún: no ha pagado. i' En enero de 93; cf, Vili 1.1 n. u Por el mci de enero (lanuanus, en laifn). llamado así por él M Dofnklano « Cf. 175 n « Cf.175 n
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EPIGRAMAS 11
AL CÉSAR DOMIC1ANO. A SU REGRESO A ROMA DESDE EL NORTE *
El Rin ya sabe que tti ha« llegado a lu ciudad, pues también él oye las voces de tu gente: incluso a los pueblos sarmáticos y al Hisiro y a los gctas los ha aterrorizado el propio griterío de la reciente alegría. 5 Mientras un prolongado alborozo te reverencia en el bendito circo, nadie ha a dvenido que ya se han celebrado cuatro carreras de caball os. A ningún caudillo —ni siquiera a (i, César— amó Roma de esta manera: tampoco a ti puede ya amarte más. aunque ella misma quisiera.
12 A PRISCO. SOBRE UNA ESPOS A RICA »
¿Por qué no quiero casarme con una rica. me preguntáis? No quiero ser la esposa de mi esposa. La seto ra, Prisco, debe ser inferior a su marido: es la única forma de que lleguen a ser iguales la mujer y el hombre
* w * oca* *
Cí. VIH 1.1 n Por la pm en cia del emper ador (Izaac. II 2. pág. 255). Cf. X I23: Juv enil. VI, 460: «No hay na da más i nsoport able que una mujer Cf. X « .
1JBRO VIII
61
13 A OARGIUANO, VENDEDOR FALAZ
Se decía que era imbécil: lo compré por veinte mil seuercios. Devuélveme el dinero. Gargiliano: e s lisio * U CONTRA UN AMIGO DESALMADO«
Para evitar que lus plañías cilicias4* teman —descoloridas— al invierno y una brisa demasiado helada abrase sus tiernos brotes, unas vidrieras que dan a los notos invernales dejan pasar netos los rayos de sol e intacta la luz del día. A mí. en cambio, se me da un cuchitril cerrado por una ventana desca en el que ni el propio bóreas querría pasar la noche. |balada. ¿Así. desalmado, invitas a pasar unos días a un viejo amigo? Estaré entonces mejor com o huésped de un matojo de los tuyos. 15 A DOMICIANO. SOBRE EL TRIUNFO QUE REPORTÓ A JÚPI TER CAPITOL INO EN LA G l’ERRA SARM ÁTÍCA 4'
Mientras se pone en cuenta la nueva gloria de la guerra panonia44 y mientras todos los altares ofrecen sacrificios por el regreso de Júpiter, í--------------) « A k » lomo« te los t enía en cas a como curi osida des; cf. I II 12. 24; X II9 3 .3 (K m . II. pé|. 12) 41 Epigr ama de turu ciu ra bip am u en el que
se compara la utuac*ófl de la»
pfaniu del am igo que lo ha invitado a w casa con la saya propia. Para el mHmo tema.cf. VIII 68 4> El aza frán, que los romanos importaban sobre lodotde Córico, en Cibcia. cf. III63, 2
(I zaac
. I I 2. pá g. 256)
41 Cf. VIII I. I n. * * Slrmaia. por etiensión
62
EPIGRAMAS
incensaciones dedica el pueblo, dedican los caballeros agradecidos, dediy un tercer congiar io enriquece a las tribus latinas 4). (ca el senado 3 Roma tendrá en mente también estos triunfos silenciados, esertoreconocimiento poren tu el pazinquebrantable no será el menor Loycie et que * confias afecto de los tuyos para la principal virtud de un emperador es conocer a los suyos, [contigo;
16 CONTRA CIPERO. QU E DE PANADERO SE HABÍA CONVERTIDO EN PICAPLE ITOS«
Cipero, que habías sido panadero largo tiempo, ahora defiendes pleitos y pretendes ganar doscientos mil sestercios por año: pero lo dilapidas y pides prestado continuamente. Del panadero. Cipero, no te libras: 5 no sólo haces pan sino que también haces harina **.
17 A SEXTO. PORQUE, AL PERDER EL PLEITO. LE D EBE MAS QUE SI LO HUBI ERA GANADO
Defendí, Sexto, tu pleito, estipulando una minuta de dos mil sestercios. Que me hayas enviado mil monedas, ¿qué significa?
* Segó* S ittok ® {Domklaño. 4. 5),en (res ocasiones distribuyó Domictano crtür el pueblomi congiano de trescientosk Merck» por cabeza.
* Cf. S- B a
u y
.
«Corrtctio«...». pág. 219.
« Sobre la crít ica a k» abogado s, cf 197.
* Apañe de una eipresfa proverbial (dilapidas lo que ganas: cf. Izaac . II 2. Pág 236). que remite a las pretensiones de un nuevo rico, la clave del epigrama podría estar en la Incompetencia de Cipero corno «bogado, lo que explicaría tam* biéti el epigrama siguiente.
1.18 *0 VI H
63
argumentaste*. dice», «y por tu culpa se ha p erdido el pleito*. Tanto má«¡ me debes, Sexto, pues me puse colorado**.
mNo Us
18 A CERRINIO RARO ES EL AMIGO Q l/E ESTÉ DISP UESTO A PLEGA RSE ANT E EL TA LE N TO »
Si dieras a conocer al público tus epigramas. Cemnio. tú mismo podría« ser leído u nto como yo o más: pero hay en li una consideración un grande hacia tu viejo amigo que má* grata (e resulta mi fama que la luya Tampoco Marón estiló los poema« del calibré* Flaco»*. aunque sabía mejorar los ritmos pindiñeos, y ante Variose plegó en la gloría de la escena romana. aunque podía expresar una mayor emoción con la voz de la tragedia Mis de un amigo te regalará oro. riquezas y fincas: raro será el que esté dispuesto a plegarse ante el talento.
5
10
* U exp Jtcadón de I/ am * (II 2. pág. 256) es que tos hechos eran tan vergon zosos que mejor hubiera »ido callar, pero también podfta ser que el abogado era u n incompet ente que te puv> colorado por su propia tor pe /a (cf. el epigrama ante rior). * La ettru ctu ra es com o sigue: v v. 1-4: presentació n del asun to. 5*8: com pa ración elogiosa con Virgilio; vv. 9-10: moraleja final. #l PuWio Virgilio Marón y Quia to H oracio Flaco, nacido é ue en Venosa (Ca labria . en Apulia). 52 Vano Rufo, poeta y tragediógrafo. amigo de Virgil io. Mecenas y Horacio, y uno de los editores de la E n e id a
64
RPfGRAMAS
19 SOBRE CISNA. POBRE DE VERDAD Pobre quiere parecer Cinna; y pobre es w.
20
A VARO. SOBRE SUS HIPOTÉTICOS VERSOS « Aunque cada día compongas doscientos versos. Varo, no recitas ninguno. No eres listo, y lo eres.
21 AL LUCÍFERO. SOBRE EL REGRESO DEL CÉSAR 55 Fósforo, devuelve ya la taz: ¿por qué retardas nuestro alboroto? Coa César a punto de llegar. Fósforo, devuelve ya la luz. Roma lo demand«. ¿Es que te traen los remisos canos del calmo Boyerp, porque vienes en un fuego demasiado lento M? S Podías quitar a Cftaro** del astro de Leda: el propio Cástor te cederá ahora su caballo. ¿Por qué retienes ai impaciente titán? Janto y Etón exigen ya el freno, la bondadosa madre de Memnón vela. Sin embargo, las estrellas, morosas, no se retiran ante el brillo del aJba 10 y la luna desea ver al caudillo ausonio.
« * « * «
a . XI 32,8 * Cf.l 63 n. Cf. VIII1 .1 *. Ea la constelación del Boyero; cf. IV 3.6 r . a . IV 23.6 n.
UB RO Vi li
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Ven ya. César, aunque sea de noche: a los astros les seré posible estar y al pueblo, con iullegada, no le faltar* la luz. (presentes
22
CONTRA GÁLICO. DE QUIEN(MCE QUE KO LO ENGAÑA * Me convidas a un jabalí, me sirves. Gálico, un cerdo. Soy un híbrido ** si me la pegas. Gálico.
23
A RÚSTICO: DEBE CASTIGARSE A CUALQUIER CRIADO CUANDO NO CUMPLE SU OBLIGACIÓN“ re parezco que soy demasiado cruel y glotón porque, Rústico, golpeo al cocinero a causa de la cena. Si esta razón para azotarlo te parece liviana, ¿por cuál razón pretendes, entonces, que el cocinero reciba una paliza?
24
AL CÉSAR DOMICIANO. A QUIEN HUMILDEMENTE PIDE DINERO*' Si acaso te pido algo en mi modesto y menudo librito —con tal de que mi escrito no sea insolente— . concédemelo. f ------------« Cf. 143 n * Se considerabaque k* hJbrtdot, que propiamente eran el reuittado del ere* re de una cerda y ua jabalí (cf. Punto. Historia Natural. VIII 213; «a «cerdaH». ttftta la temtlnolofía de 61 Burgo de Otma). leaían poco seso(Km. U. pág. 19) « a III 13; M. *' F.pigrama votivo; cf. 1III a.
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5
EPIGRAMAS
Y ti no me lo concediera», César, p ermite que se te suplique: a Júpiter nunca le ofenden las incensaciones y los megos. El que esculpe rostros sagrados de oro o mármol no los hace dioses: los hace el que les suplica. 25
CONTRA OPIANO, ENFERMO PERENNE Sólo una vez, Opiano. me has visto muy enfermo: más veces te veré yo M.
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AL CÉSAR DOMICIANO. SOBRE LOS TIGRES QUE HABÍA EXHIBIDO EN LA ARENA No a tantos tigres temió en los labrantíos orientales el ladrón de la región del Ganges que huye lívido en un caballo hircano cuantos tu amada Roma. Germánico, ha visto recientemente*5: y no ha podido llevar la cuenta de sus deleites. 5 Tu arena. César, supera a los triunfos eritreos y a los recursos y riquezas del dios venced or: pues cuando conducía a los prisioneros indos detrás de sus carros triunfales, Baco se contentaba con una pareja de tigres H
•* Cfcf.$110 Bajuy , •Cootcttom ...». págs 281-282. Sobre los captadores de he rencias. u Sobre los espectáculos queofrecía el emperador, cf. Svbtonio, Demida ño, 4. Referencia al conejo tnuaíaJ de Baco tras conquistar la India («éntreos» dd cf. 3 alude a lai tierras adyacentes al océano índico, por Éritras. una ciudad de la India).
LIBRO VIH
67
27 A CAURO. SOBRE LOS REGALOS DE LOS CAPTADORES DE HERENCIAS Quien a ti. neo y anciano Cauro, le hace regalos, si eres lisio y te das cuenta, te está dicie ndo esto: «Muérete*.
28 SOBRE UNA TOCA QUE LE REGALA PARTEN»« Dime. toga —gozoso regalo que me ha hecho un amigo elocu ente— . ¿de qué rebaAo querrías ser prez y gala? ¿Para ti floreció la hierb a pullesa de Palanto el de Leda**. con la que ei Galcso d e aguas cal%bre$is sacia los cultiv os? ¿o el tartesio criador de la cab&Aa ibera. el Betis. te baftó también a ti en una oveja hesperia? ¿o tu lana contó los muchos brazos del Timavo *7, del que. respet uoso, bebió Cflaro “ con su boca astrí fera? Ni te convino perder tu color con el tinte de Amiclas ** ni Mileto era digna de tus vellones.
*
K>
*> Marcial alaba sobremanera h m toga que le regala Pane«», comparando «tu a una mii excelencias (lana, púrpura, blancura) con sus mejores referencia*, para acabar prefiriéndola a iodo; el remate es iróuco: m i caffe no esiari a la altura deesa toga. Cf. IX 49 ** La ciudad de Tárenlo, famosa por su lana, fundada por Falaato. un esparta no. pordeltanto; al casarse coa 3Ttadáreo. fue reina de Laccdemo*ii. lacedemonio Sobre el Qakto versoLeda, »¿guíeme. cf. II45. n. « Cf. IV 25.5 n * Cf. IV 25,6 a M La púrpurade Esparta. Amiclas en una ciudad de aquella región deOréela (cf IX 10). S n >.
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EPIGRAMAS
Til superas a los lirios y a las alheftas que adn no se han anublado y al marfil que emblanquece en el monte Ttburtino70; ante ti &e inclinarán el cisne espartano y las palomas pafias. 1$
90
se inclinará la perla extraída de los bajíos critreos71: pero aunque estos presente s sean émulos de las nieves recién caídas, no son más radiantes que su Parwnio7*. Yo no preferiría los tejidos coloridos de la soberbia Babilonia, que se matizan por la aguja de Semíramis «j no me quedaría más atónito ante el oro de Atamante si me regalaras. Frixo, el animal eolio H ¡Ay. cuántas risas provocará mi capa al ser vista al lado de esta toga palatina?5!
29 SOBRE LOS DÍSTICOS * El que escribe dísticos pretende, a mi entender, agradar con la brevedad. ¿En qué aprovecha la brevedad« dime, si se ha convertido en un libro?
* a . IV 62; VII 13.1.2. t i a . VIH 26.8 n El que le ha regalado la toga (cf. IV 45, 2). El adjetivo anterior hace refe* rencia a laetimología gr>ega de su nombre: «blancuravirginal* K ( u, II, pág 21). 7> Legendaria reina deBabilonia, ciudadfamosa por sus bordados H El vellocinode oro (cf. VI 3,6). Afamante era el padre de Frix o y quiso sa crificarlo a Zeus, pero éste le envió un camero alado con vellocino de oro. que lo salvó. » Alusión al cargode Partewo (cf, IV43. 2). Ksa ti l pág. 22) cree que esto* dos éltimos versos son «na indirecta para que le envíe una capa en consonancia » Cf.l HOn l
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30 SOBRE EL ESPECTÁCULO DE ESCÉVOLA. QUE QUEMA SU MANO EN EL FUEGO DE LOS SACRIFICIOS * El espectáculo de la Arena cesárea que ahora se contempla alcanzó el mayor renombre en tiempos de Bruto. ¿Estás viendo cómo contie ne a las llamas y goza con el dolor ) y se impone poderosa la mano sobre el fuego estupefacto! Asiste ¿I a su propio espectáculo y sabe apreciar la gloriosa s muerte de su derecha: se alimenta ésta de la ceremo nia entera Y si, en contra de su voluntad, no le hubieran sustraído el dolor, dispuesta ! (estaba su izquierda a meterse con ma>or vesania en las ascuas mortecinas. Da pena saber —despué s de tal hazaña— en qué delinquió ante s: \ me basta con haber conocido esa nun o que he visto. lo
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31 CONTRA DENTÓN. QUE LE PIDE A DOMICIANO LOS DERECHOS DE LOS TRES HIJOS7*
Con ninguna finura estás reconociendo sobre lí mismo. Dentón, algo que (se me escapa, cuando, tras tomar esposa, pides los derechos paternos. Pero deja ya de marear a nuestro Seftor con tus esc ritos de súplica y regresa desde Roma a tu patna, aunque sea tarde: pues mientras tú —habiendo dejado sola a tu mujer lejos y durante largo 5 buscas tres hijos, te vas a encontrar con cuatro. (tiempo—
” Espectáculo basado en la histona deMticto Eicévoia;cf 121. * Cf. FteotAMKft, pág- 16. »Cr.ll91.6n.
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EPIGRAMAS
32 SOBRE LA PALOMA DE ARETULA » Deslizándose por el aire ciliado, una tierna paloma se abatió hasta el m ismo regazo de Aretula, que estaba sentada. Habría sido un capricho del azar de no haber permanecido inadvenidu y no haber querido emprender la tonda que tenía libre. 3 Si es justo que d cariño de una hermana albergue las mejore s esperanzas y si los rezos pueden conmover al SeAor del mundo *it este ave te llega quizás, desde las costas sardas, como mensajera de un desterrado porque tu hermano está a punto de regresar.
33 A PAULO. SOBRE UN PLATO UGERlSlMO. AL QUE COMPARA CON COSAS LfGERlSIMAS » De tu corona de pretor**, Paulo, m e envías una hoja y prete ndes que ésta reciba el nombre de plato. Hace poco tu tramoya*4 había sido completamente revestida con una a la que disolvió el desvaído reguero de rojo azafrán ü .
(membrana así.
* Epigrama de estructurabipartita,en cuya primerapanem narre una especie de prodigio y en la segunda «a interpretación; es de suponer que Aretula tenía un hermano desterrado, al que Domiciano ha perdonado. *< Dornkiano; cfasunto 14,2. y e&tmcturi. cf XI 18. *¿ A Sobre el mismo *’ El pretor, con una corona de oro untenida sobre su cabc/j por un esclavo, iba al freaie del cortejoque abría losJuegos Apolinares (Fattims^ua. pág. 17). M Cf. Eiprciócuias2, 2 n. B Las gradas y el escenario del teatro te rociaban de agua mezclada con aza (Km . pig. 83). frán. pot s« refrescante olor
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,0 . más bien, por la uña de un taimado criado fue despegada 3 una hojuela, que creo que procede de una pata de tu cama? Puede ella sentir a lo lejos el vuelo de un mosquito y ser transportada por el ata de una minúscula mariposa; volotea suspendida en el humo de un pequeño candil y se rompe sí la salpica el vino —incluso al ser vertido con cuidado— . to Con un tegumento así se recubre el dátil de las calendas de laño que el cliente miserable ofrece junto con unos mezquinos céntimos*4. Menos livianas crecen las cofocasias de sutil fibra. más grávidos se agostan los lirios bajo el sol excesivo; ni la errática araña deambula por una tela tan tenue. is ni el gusano de seda que pende en el aire teje un profocto tan etéreo. Más compactos permanecen los polvos en la cara de la vieja Fabula. más compacta se ahueca la burbuja del agua agitada; Con más energía no sólo la redecilla protege a los cabellos rizados sino que la pomada batava tiñe las guedejas latinas **. 20 Con una telilla así se reviste el pollo en el huevo de Leda **. , gasas Msemejantes se ponen en la frente alunada. ¿Qué tienes tú que ver con un plato, cuando puedes enviarme una cuchara, i cuando puedes enviarme incluso un sacacaracolcs. •»estoy hablando de cosas demasiado grandes —, cuando puedes enviarme 23 [una concha de caracol, cuando, en fin, Paulo, puedes no enviarme nada?
r r
f ------------«* Cf XIII 27 ” Cf. XIV 26, 2 n. ** Unhuevo de oca; l¿da. transformad« en oca. tmentó escapar de Jápitcr. lpero ètte, transformado «n cisne. la poteyó: de esa unió« nacieron Cáitor. Pòli». tCIfcemesira y Helena. " Cf 1129.9«.
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EPIGRAMAS
34 CONTRA UN JACTANCIOSO Dices que (»ene« una obra de plau auténtica de Mis Lo que se ha hecho sin tu colaboración, ¿es más auténtico?91
35 CONTRA UNOS CÓNYUGES PÉSIMOS« Puesto que sois semejantes e idénticos en vuestra forma de vida —la peor de las esposas, el peor de ios maridos—, me sorprende que no os llevéis bien.
36 AL CÉSAR DOMICIANO. CUYO MAONÍRCO PALACIO ALABA« Ríete. César, de las regias maravillas de tas pirámides; la exótica Menfts se calla ya sus obras de oriente **:
Anuft» y famoso ptaiero gnego. contemporlneo de Fiólas, que grabó la» figuras del escudo de Atenea Prómacot en la Acrópolis de Atenas (Km. II. pigi 26 y 472)
** Se traía, al parecer,de un anticuario alque Marcial acusade fabricar él mi«mo los articulo« que pone aventa la Quuis no es el autor de c u obra, per o — inu nda Marcial— en ese caso debe de ser de otro falsificado» (L¿aac. II 2. p4g. 2)8. FaooiAMXft. pAg 19). « Cf. VIII 43. " Epigrama con esquema de •priamel»; cf. I 61 a. Se trata aquí edl palacio que coountyó Rabino;cf. Vil Jó M Comp coa Esptnácufot 1,1.
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¿t qué parte del palacio Pirasto ** equivalen los logros del Marcdtide *? El día no ve nada m is brillante en todo el mundo . Se creería que las siete colinas se han acumulado una sobre otra. s el Osa ha alzado al tesálico Pelio a menos altura*7; entra en el firmamento de tal forma que. oculto entre resplandecientes su pináculo despejado truena sobre las nubes inferiores [astros, y se sacia de la secreta luminosidad de Febo antes de que Circe vea el rostro nacie nte de su pa dre*. 10 Con todo. Augusto, ésta que con su cúspide toca las estrellas es una casa del tamaño del cielo, pero es más pequeña que su Señor.
37 CONTRA POUCARMO. QUE PRETENDÍA SER CONSIDERADO GENEROSO ** Por devolverte a Cayetano los pagarés. Policarmo, ¿crees acaso que le has dado cien mil sestercios? «Me los debía», dices. Quédate con los pagarés. Policarmo, y préstale a Cayetano dos mil sestercios.
« Cf. Vil 56.2 a. « 61 Maredudees el lago que se encuentrajumo a Alejaftdrfa; por extcutón. Egipto, es dcelr. las pirámides. * Dos montaña» de Tesalia que loa Gigantes uaieroa pan ¡mentar llegar al cielo durante la Oigantoroaquia (cf. VIII71. I n.); umbtta »e atribuye a loe Alda* (cf. R ía . 1982. das m E lvira pég. 58); cf. umbiéa Votoajo,A.Geórgicas I 281 Miiotogía CUska, Madrid. " Circe es la hija del sol (Febo); aquí equivale a'Clrceyos. ciudad del Lado (cf. X 30.8) de la que se decíaque era la primen en recibir loa rayos dal sol (Kaa, II. pág 29; cf. V 1,3 n.). " Cf. 175 a.
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EPIGRAMAS
3* A MÉUOR ES GENEROSO DE VERDA D EL QUE ENTREGA ALGO A LOS MUERTOS »■>
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Quien, con inquebrantable carifto. otorga los bienes de la generosidad al que lo* ha de apreciar, quizás se lo gane o espere reciprocidad: mas, si alguien se empefta en seguir dándoselos a) recuerdo de su nombre iras la muerte y el cntieno, ¿qué busca sino aplacar su dolor? Es diferente ser bueno y querer parecerlo. Es mu con popuii, Mélior.ado quecelo los por otorgas tú, quien, un extrem las ceremonias, no permites que muera el nombre de Bleso. que ya descansó en paz, y como, sin reparar en gastos, de tus espléndidas arcas le pagas al cumplidor y cariAoso gremio de los escribas para que se conmemore el día de su nacimiento, tú mismo celebras un homenaje a Bleso. Este homenaje tuyo durará mientras tengas vida. subsistirá también después que te hayas convertido en polvo.
39 A DOM1CIANO. ALABANDO SU PALACIO 1« Para dar cabida a los festines de la mesa palatina y a los manjares divinos, no había antes un lugar: aquí es digno apurar ei néctar sagrad o, Germánico, y las copas preparadas por
la
mano de Ganímedes.
Marco Alabo MéHor. p a ra honrar anualmente el lucimiento de mi malogra do «n*go Bleso. crea una fundación —CeUegkm cuüontm d u i natoticku Bfoeii—. la dota coa un capital y la pone en mum de lo» escribas paraque la gestionen ( Fw t M n. pág. 20; Km. II. págs. 30-31; Izaac, II2, pág. 25$) »* Cf. Vil56 y VIII 36
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Te ruego que, m is tarde, aceptes ser el invitado del Tooant e: mas si tú, Júpiter, tienes prisa, ven en persona.
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40 A PRIAPO. A QUIEN AMENAZA CON EL FUEGO SI NO PROTEGE SU BOSQUE »« Guardián no de un jardín ni de una viAa lo/ana sino de un nüo bosque, Priapo. del que n aciste y puedes volver a nace r. te exho rto a que alejes tas manos rapac es y preserves la arboleda para el hogar de l dueño: &i fal tara és ta, t am bié n tú s erá s lefta.
>
41 A FAUSTINO. SOBRE ATENAGORAS. QUE POR LAS SATURNALES NO LE HABÍA ENVIADO NADA AL POETA Mi «Atenágoras. desconsolado, h a del enviado que acostum bra a en* iarnoanos mediados meslos delregalos in vie rn oIW*. Si A tenigo ras está desconsolado. Faustino, lo comprobaré: a m í sí que A tenágoras me ha dejado des consolado.
** Pntpo ct* el dio» protectorde las fincas; cf. VI 16:49. »» Cf. IV 8« ** A mediado« de diciembre, cuando las fkfr ta« Saninules, ea las que\c diento hjcUn regalo« a un paüinus.
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EPIGRAMAS
42 A MATÓN. QUE BUSCA LAS MESAS DE LOS RICOS Si una espórtula *•* más generosa no te ha engatusado, como suele suceder, en donde los ríeos, podrás baAarte. Matón, cien veces a mi costa
43 CONTRA FABIO Y CRESTILA. ENTERRADORES DE MUCHOS CÓNYUGES 107 Fab io en tierra a sus mujeres, Cre stila a su s m arido s ><*, y u no y otro agitan la antorcha funeraria sobre el lecho nupci al. Une. Venu s, a los vencedo res: a ellos los ag uardará el final de que la misma Libilina109 se Heve a los dos.
44 A TÍTULO. PARA QUE CEDA A LO NATURAL Y NO LES DEJE ABUNDANTES BIENES A LOS DESAGRADECIDOS HEREDEROS •>« Titul o, le lo aconsejo: v ive; para esto siemp re es tarde; aunque hubieras empezado en edad escol ar, es tarde . Mas tú , pobre Titulo, ni en la vejez vives,
*« a. 159•
** Porque o» cuadrante en el precio de onbafto y cien it cantidad fija de un a etpúnuU (Kit. II, pAg 32); cf. I 59.1 n. w* Cf. Vlll 35 w Cf IX 15. Una mi uní muerte; Ltbiüaa era U diosa romana de k» muenos '# Tema del
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lino que pisoteas todos lo* umbrales para dar los buenos días y de mañana ya estás sudando, empapado por los besos de la ciudad Ml, 5 y por los (res foros a (roehe y mo che, por delan te de todas l as estatus* y del templo de M art e1,1 y det coloso de A ugu sto iw [ecuest res vas corriendo todos los días de siete a diez Rapiña. «parta, roba, posee: tendrás que dejarlo. Qu e tus soberbias arcas am arilleen repletas de oro. to que venzan cien pagarés en las calenda*: tu heredero jurará q ue no le has dejado nada. y cuando estés de cuerpo present e sobre un fére tro o u na losa . mientras tu lecho fúnebre crece atiborrado de papiros •'*. el desve rgonz ado be&ará a tus llorosos eun ucos ; i) y tu desconsolado hijo, quieras o no quieras. dormiri esa primera noche con tu favorito.
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A FLACO. SOBRE 6L REGRESO DE TERENCIO PRISCO '»> Desd e las costas del Fina. Flaco , m e es devuelto Terenci o Prisco: que una piedra lactescente señale este día »■»;
»'» Cf. XI98. ■'J El Foro Romano, el Jubo y el de Augusto(cf. FuuiAwt*«. p4| 301íCf. VII 31.4 n tu Se refiere a la colosal ettaiua ecuestrede Domtcianoen el viejo Foro(cf. ’uaoLANDt*. pág 23) Descripción Cf. X97. de la vida habitual del cítente. Marcial le etcnbe a Flaco, que etU en Chipre, sobre el regreso de to otro migo —y protector— Terencio Prisco (a quien dirige la caita que encaben el Itb (II). y desea que también él regrese. "• Cf. XII 34. 5-7.
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EPIGRAMAS
corra y refulja al ser enturbiada poco a poco por el lino un infora menguada por cien consulados ¿Cuándo le locac á a mi m esa una noche tan espléndida? ¿cuándo me corresponderá bullir con un vino tan merecido? Cuando la citerea >* Chipre te me devuelva* Flaco, se prod ucirá esa razón tan buena para mi frenes í.
46 AL JOVEN ESCLAVO CESTO Cuán grande es tu bondad, oíro tanto lo es la excelencia de tu belleza, joven Cesto , más casto que el virtu oso H ipó lito ,M. Desearía Diana que nadaras con ella, y te ensenaríal2J; preferiría Cibeles tenerle a ti en vez de al em ascula do frigio i*4; 3 tú p odrías ser el sucesor en el lecho de G anímedes, pero , im perturb able, sólo beso s le darías a tu señor. IAfortunada la novia que tra storne a un prom eti do u n inex pert o y la p rimera m uchac ha que te haga hom bre lü !
■** El vino viejo criaba madres y menguaba por la porosidad de lasjarras en las que se conservaba; de ahí que hubiera que filtrarlo, en este caso coa un lien to de líao (Ua a c . II 2, pág 259). Sobre el brindis por lapersona amada, cf I 71«. • Chipre era el lugarde nacimiento de Vmu» B a i l e *. •Correctkms...*. pág. 292. **■ Cf. Cf. XI XI 91,6 103.yS. 122 Hipólito rechazó las proposiciones amorosas de se madrast ra Fedra. i» Diana era la d*ou de la castidad(fea. II. pág 35). Aüs, que se castró al volverse loco por intervención de Cibeles; cf. V 41,2. •» Cf. XI 39,16
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47 COSTRA UNO QUE SF. AFEITA A LO LOCO Tienes una parte de tus mejillas recortada, otra parte la tienes afeitada, otra paite, dep ilada. ¿Quién puede pensar que se tr aca de una sola ca b eu*
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SOBRF. IA CAPA DE CRISPINO. ROBADA POR ALGÚN LADRÓN C risp irá no sabe a quién le ha podido d ar su capa li ria, mientras s e cam biaba de rop a y se po nía la tog a. Quienquiera que k> tengas, devuelve, por favor, a sus hombros esc regalo no te lo pide Crispino . sino la cap a (que es suyo: N o sirve cualquiera para llev ar una prenda rebosan te de púrp ura 5 ni este color cuadra sino co n la e leganci a. Si te agrada l a rapiAa y el a n e b ló de una gana ncia inde bida, coge la toga para que puedas pasar mis desapercibido.
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AL CÉSAR DOMIUANO. SOBRE SUS BANQUETES Cuán grandioso se cuenta que fue el festín del triunfo de loa gigantes y cuán g randiosa fue p ara todas las divinidades aquella noche, en la que el buen padre se sentó entre la generalidad de los dioses, y les estuvo permitido a los faunos »*• pedir vino a Júpiter.
* ------------i* Chipi no era un dandi cuya capa de púipura era muy conocida ta Roma; cf. J uvinal . I, 27 (K ia , II, pág 36).
>>* Cf. VIII 71. 1n. •a C f IX61 , U n
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EPIGRAMAS
9 otro tamo lo ton los banquetes que celebran tus victori as. Cés ar; nuestra ak g rta alboroza a los propios dios es. Com en contigo todos los caball eros y el pueblo y los senadores y Roma compane manjares celestiales con su caudillo Tú que nos prom eti ste cosas grandes, ¡cuánto mayo res nos las ha s dado! 10 Se nos prom etió una espó rtula u * se nos ha da do una cen a en toda (regla'»
50(51) SOBRE UN PLATO MAGNIFICAMENTE TRABAJADO QUE LE REGALAN A RUFOl}| ¿Qu é esfuerzo hay tras este plato? ¿el del diestro M is o el de M irón? ¿es ésta la mano de M én tor lM o la t uya, Poiicli to? m N o se oscurece ennegre cid a por hum o alg uno ni aborrece su textura ensom brecida los fuegos que la ens ayan; i M eno s irradian los ám ba res autén ticos q ue su rub io meta l >>* y su plata pura supe ra al niveo marfi l. El trabajo no desmerece a la m ate ria: asf completa su círcul o la luna cuando, llena, brill a con toda su luz .
>» Cf 159. *» Swqmo, Domiciato, 7 ,1; «Abolió la distribución de cestasde víveres al poebto y restableció la cosmrobfe de ofrecer comidas en loda regla» (trad. de M B assou t* Clmkkt). í» Epigrama con do* partes ctararttentediferenciadas; descripción del regala coa comparasiones mitológicas(w. 1*16)e invitación a beber(17-26), en esta úl tima aparecen algunos motivos recurrentes: bnndis por la persona amada(vv. 17la* 20; cf. I 71 n.), cita frustrada (v. 25;ibtéeml cf. invitación a ahogar en vino penas da amor (vv. 25*26; cf. I 106 ».). '» C f. 11140(41), ln. i» Famoso escultor del s. va. C. Cf. S. B ajut , •Corrtcltoeipégs 282-243.
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Sobre sal e el macho cabrío engalanado con el vell ocin o eolio del téta no 10 Frixo: su hermana preferiría haber sido llevada por éste el esquilador del C ín ife 1,6 no lo habría m ancill ado y a ti. L*coM \ te gustaría que paciera en tu vid. Bl lom o del animal lo oprime un A m or áureo con do s al as; desde su tierna boca resuena una flauta de Palas, así el delfín, deleitánd ose con Aríon de M etim na IM. 13 transport ó su no si lenciosa carga por calmado s m ares Que me lle ne el espléndido regalo con un néctar en consonancia no una mano de la servidumbre del am o. sino la tuya. Cesto Cesto, gala de mi mesa, prepara el Setia me pare ce que el propio nifto, qu e el prop io mach o cab río tienen sed. 20 Marquen el núm ero de mis copas las let ras de Istancio R u fo i41: en efecto, él me ha hecho tan gran regalo. Si viene Telet usa y me trae los gozos prom eti dos, me reser varé para mi am ada con tus cuatro letras. Rufo; sí anda indecisa, entretendré la espe ra con tus otras siete; si defrau da a su 25 para ahogar las penas m e las beb eré todas. (enam orado.
Cf VII! 2g. 20 n. Hele, la hermana de Prixo. acompiAó a éue en aquella circunstancia. ’* Río y región de Libia, famosa por «1 pelo de su* cabras (cf. FasoiANoea. pág. 521). 1)7 Epklesis de Baco; «Elque relaja» ih
Poeta iba y mdsko de U isla de Lobos (Metimna es una ciudaddai de barco esta illa) que.IM cuando a ser robado duraate ua viaje por mar. se arrojó después de tocar su arpa; un delfín que lo haMi escuchado to transportó a tierra i» Cf. VIII 46. '* Cf VI S6, I n '«« Cf. I 71. I *.
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EPIGRAMAS
51 sobre
Asp er
o , enamorado
d e u n a muchacha
A LA OUE NUNCA VIO •« Áspero « d o n a una que es guapa de verdad, pe ro é\ e s ciego. Habida cuer na de esio, más de lo que ve am a Áspero.
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A CEDICIANO. SOBRE UN JOVEN BARBERO'«
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Un jov en barbe ro, p ero d e una dest re?.a tal com o no lo fue ni el Tálam o de Neró n, '**, sobre quien recayeron las barbas de los Drusos se k> prrsté. Cediciano. a Rufo. que me lo pidió una vez para que le arreglara la cara. M ientras l e atusa una y otra vez los pelos a instancias suyas — con el control del espejo com o guía de la mano— y le enluce la piel y le hace un detallado repaso en sus ya recortados cabellos. el barbero me ha vuelto con barba.
i** Sobre d mismo lema. cí. III IS; cf. también S.Bmusv , «Coneciion»...*, PM 283. *** El lema de los ba rbero*era recurrente es el mundoantiguo;v.. p. cj,.Lm* uo. A.f XI 191; enM a k i m .. III 74; VU. 64; 83; XI 58.5 u : 84. y el ep*iaf»od e Panta^ato en VI 52 (Kay. pá|. 242). 141 Claudio y Nerón
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53(55) AL CÉSAR DOMICIANO. SOBRE UN LEÓN QUE EXHIBIÓ EN LA ARENA Cuán impórteme fragor se escucha por las quebradas masillas cada vez que la selva enloquece con innúmeros leones, cuando, lívido, el pasto r hace regresar hasta los aduares púnicos a los aturdidos toros y al ganado desconcertado, otro lanío terror ha resonado hace poco en la arena ausonia.. ¿Quién no creería que se trataba de una manada? Era uno solo, pero ante cuyos dictados temblarían incluso los propios leones. a quien la Numidia salpicada de mármol entregaría la corona. ¡Oh. qué grandorada prestancia, dignidad derramó porsesuerizó! cuello la sombra de suqué falcada melena cuando ¡qué bien le sentaron a su amplio pecho los grandes venablos y qué grandes gozos reportó con su brava muerte! ¿de dónde. Libia, tan venturoso timbre de gloria a tus selvas? ¿acaso procedía aquél del yugo de Cibeles **? ¿o, más bien. Germánico, desde la estrella hercúlea147 te envió esta fiera tu herm ano o tu propio padre “ *?
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54(53) CONTRA CATU1.A' RARA ES LA CONJUNCIÓN DE HERMOSURA Y HONRADEZ 1a más hermosa de las que fueron o de las que son. pero ta m is inaccesible de las que fueron o de las que son,
Sobre k» eipeciáoilo« del emperador, cf. Scrrcwio. Domtaano 4. n* A Cibele« ic la representabaen un carro tirado por leones ’4T La constelación de Leo,llamada así per el Icón de Nemea. al que maió Hércuk» (Humum m, pá| 32). '** Tilo y Vetpa&iMo. que habían »idodeificado*. w Reminiscencia de Catvio , 49. refoaada por el sombre de la protagonista (FunUNt**. pág. 30).
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¡ay, Católa, cóm o me g u» uría q ue te hic iera* meaos her mosa o m enos hon rada!,w
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A FLACO EN ESTAÉPOCA NO HA Y POETAS ILUSTRES PORQIJB DE NADIE RECIBEN RECOMPENSA POR SUS DESVELOS >’> Como la época de los antepasados se pliega ante nuestro tiempo y Rom a se ha engrandecido jun to con su caudil lo, te sorprendes de que falte el tal ento del divino Marón • y de que nadie haga resonar la s guerras con tm poderosa trompeta. 5 Que hay a Mecenas: no falt arán. Flaco. Marones e incluso tus campo s te proporciona rán un Virg ilio. Sus fanegas colindantes a la desgraci ada C remona había perdido Títiro y, angusti ado. Uora ba por el desti erro de sus ov e ja s■»: se rió el caba llero etrusco y apartó la daAina 10 pob reza y orden ó que se m archara con rápida huida . «Ten m edios y conviértete en el may or de los poeta s; puedes ni incluso am ar a mi Alexis u*», dijo. Asistía éste herm osísimo a la mesa de su seftor escanciando el oscuro falem o con su m ano de mármol. 13 y ofrecía las copas ya probadas con unos labios de rosa que podrían enajenar *** al propio Júpiter. Abandonaron al fascinado cantor la lozana Calatea y una Testflide con sus rojas mejillas requemadas por las mieses
»» Cf. I 57 a. i» Cf. I 107 il •»3 Cf. V mnuo . ÉglogasI.
'*> Mecenas, cf. Paotuao. IV 8. I. Cf.V 16.12 a . y VI68.6 a. »» a . IX 25. ** Calatea yTestflideaparece«en lai irei primerasÉglogasde Virgilio.
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al punto im aginó a Italia y «las ha/afta* y el héroe» quien poco anee* habla llorado al Mosquito154 con trabajosa y loica voz. 20 ¿Para qué voy a citar a los Varios y a los M a ro s y a los nombres de to s enriquecióos, cuya enum eración sería un enorm e trabajo? (poe tas ¿Seré, entonces, un Virgilio, si me ofreces los regalos de un M cccnas? No seré un Vir gilio:, seré un M ar so ’*.
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AL CÉSAR DOMICIANO: NO ES AMADO POR CAUSA DE LOS RECALOS. SINO LOS REGALOS POR CAUSA DE ÉL Por m uchas veces que repartas gr andes d on ativ os ,é0. que estés dispuesto (a darlos mayores —vencedor de caudillos, vencedor incluso de tí mismo—, serás querido por el pueblo, César, no a causa de los regalos: el pueblo, César, ama los regalos a causa de ti.
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SOBRE EL DESDENTADO PICENTE Los tres dientes que tenía los escupió de un solo golpe Pícent e mientras est aba sentado jun to a su propta tumba; y reunió en un pliegue de su toga los últimos pedazos de su fláccida boca y los enterró echándoles tierra encima. Su herede ro ya no tie ne que recoger en su mom ento las cenizas del dif unto: 5 Pícent e ya ha cu m plido este deber consigo m ismo.
•5’ LasOeórgtcaíy la Eneida de Virgilio, cuyas primeras palabras reproduce, t» Obra juvenil de Virgilio ■** Es decir, un mal poetaépico, cf. 2| aac, II 2, pág« 260-261. t*> Cf. SiTTOM O,Domkiano 4,5. Cf I 19 a.
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EPIGRAMAS
58 CONTRA ARTEM1DORO, EMBUTIDO EN SUS CAPAS C om o tus capas son tan gruesas , A rtemidoro. tendría t octo el dere cho a llamarte S ay ag u és ,M.
59 CONTRA UN LADRÓN TUERTO ¿Ob servas a ¿se al que
S
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le bast a un solo ojo, bajo
cuy a desvergonz ada frente se abre un agu jero le gaAoso? No men osp recies a ese tío. no hay nada m is ladrón que él; no fue t an picara la m ano de A u tól ico *•*. Si lo invitas, acuérd ate de vigil arlo con a tenci ón: se le va entonces la cab eza y, aunque tuert o, ve el doble. Los criados, nerviosos, pierden copas y cucharillas y una colección de serv ill etas se oculta en su aco gedor seno: y oo desconoce el h u ru r las capas que se caen del braz o y mu chas veces se m archa cub ierto con dos m antos; y, r edomado, no ti ene em pacho en robar te a un adormecido escl avo de la casa s u lámpara, aunqu e esté encendida. Si no h a capturado nada, entonces , con consum ada astuci a, embauca a su esc lavo y le sustrae sus propias sandalias
Softfrá, ea iMfn, que establece un juego de palabra» tagmm con o coa Us premias de abrigo procedeste» de la tona del rio Sigari», en Frigia
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60 CONTRA CLAUDIA. Dfi CUYA ELEVADA ESTATURA SE RlR Podrías ser un «lia como el Coloso de l Palatino si le hiciera*. Claudia, dos cuartas mis baja.
61 CONTRA EL ENVIDIOSO CARINO Carino tiene envidia, revienta, rabia, grita ynobusca ramassoy altas de donde colgarse: ya porque recitado y lefdo a lo largo y ancho del mundo ni porque adornado con cilindros y aceite de cedro >+’ soy difundido por lodos los pueblos que señorea Roma. sino porque tengo una finca de verano al pie de la ciudad y no me traslado allí en muías de alquiler, como antes. ¿Qué le voy a desear, oh Severo, a un envidioso? Esto anhelo: que tenga muías y una heredad cerca de Roma**f
62 SOBRE PICENTE. POETA INCAPAZ Pícenle escribe epigramas en el revés del papel y se lamenta de que lo* compone con k» dioses de revés.
■*> Cí. Eipfctócuhf 2.1. Cf. I 113 n. >*’ Cf. 166. II a '** YvtAo eso. Carino es un nuevo rico prcten cfcoto: cf IV 39; XI $9.
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63 SOBRE AULO. ENAMORADO DE LOS MUCHACHOS Aulo am a a Tésti lo pero se derrit e en igual medida por Alexi s, y a ho ra qu izás am a a m i Ja cin to ***. Ve aho ra y p lantéal e si te gustan su s correspondien tes poetas, ya que rai querido A ulo am a los capri chos de los poe tas.
64 CONTRA CUTO. QUE CELEBRABA SU CUMPLEAÑOS VARIAS VECES AL AftO PARA RECIBIR REGALOS DE SUS AMIGOS Co n tal de pedir y exigir un regalo, Clilo. naces och o veces en un m ismo año y, creo, só lo a tres o cu atro calendas no las tienes por cum pleaños tuyos. 5 Por más qu e tu cara sea m ás li sa que los cantos rodados de una playa reseca, que sea t u cabeller a más negra que una m ora pachucha, que superes con la bl andura esiremecedora de tu cuerpo a la s plumas o a una m asa de lec he reci én cua jad*, 10 y q ue la turgencia te abulte un as tet illas com o las que una jov en en flor conserva para su m arido, tú, Clito, me pareces ya un viejo: pues, ¿quié n puede cre er que fueron tantísim os los cumpleaños de Príam o o de Néstor ■*? 13 Ten de una vez vergüenza y pon fín a tu rapacidad. Y si nos sigues tomando el pelo y haber nacido una sola vez
** Téstlk> era el favorito de M xo«io Víctor (cf. V il 29), Alexis debía de ser lo de otro poeta contemporá neo (S B uu v, app.) « a . U 64.3 a.
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en un m ismo a to no (e es ya sufi cien te. (e voy a considerar. CTito. como que no has nacido ni una sola ve*
65 A DOMICIANO. SOBRE EL TEMPLO DE LA FORTUNA Y EL ARCO TRI UNFAL QUE OR DENÓ LEVANTAR Aq uí, dond e el refulgen te templo de la Fo rtuna R é d u x i r r a d i a su luz por doqui er, exist ía poco ha una explanada dic ho sa ,n : aquí, em bellecido por el polvo de la gu en a árti ca, se detuvo el C ésar esparciendo desde su rostro un espléndido fulgor; aquí, con k » cabellos ceñidos de laur el y vesti da de blanco. 5 Rom a saludó a su cau dillo con vítores y apl ausos. Da fe también de la gran signifi cación de l lugar un seg undo regalo: se alza —consagrado por el triunfo sobre los pueblos domeñados— aquí dos carros cuentan con vari os elefa ntes: [un arco; él mi smo, de o r o s e ba sta co n su s inme ns os yu gos. to Esta puerta. Germánico, está a la altura de tus triunfos: esta entrada le cuadra tener a la ciudad de Marte .
,1< Considerar a alguien como no nacido era una frase proverbial pan expre sar que esa persona era ua don nadie (Kta. II. pág. 49). ■72 La que favorece el regreso de toa viajero«. Elemplo t fue construido por Domkiano al regreso de una de sas expediciones y completado y adornado en 93. tras la expedición contra tuero« y üjmaai(U aac. II I, pég. 25). i» CT. Espectáculos 2n. Una estatua de oro del emperador se hallaba ea cada cuadriga ( A colan Dea. pig.
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SOBRE El. CONSULADO DE SILIO
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Ofreced, com eáis, a Augusto piadosas inc ensaciones y victimas por vuestro querido Silio. He aquí que César, primera y única salvación del mundo, ordena que vuelvan las doce fasces —su hijo es cónsul— y que con la noble vara resuene la casa casulia del poeta. En su alegría aún le queda algo por desear: la púrpura feliz y un tercer cónsul >*. honoresysagrados concedieron elAunque senadotales a Pompeyo César a se su los yern o'” —cuyos nombres dignificó tres veces el pacífico Jano»**—. Silio prefiere llevar así la cuen ta de sus diversos co nsulados.
67 CONTRA CEC1LIANO. QUE HABÍA LLEOADO A CENAR ANTES DE TIEMPO'" El esclavo no te anuncia aún que son las diez de la maftana. y tú me llegit ya como invitado. Ceciliano, a pesar de que i” Este epigrama w ot para fechar coa exactitud la fecha de publicación de este hbro, Lucio Silio Deciano, el hijo roa>or de Silio Uáltco, fue elegido cónsul el I de septiembre del 94 '* Silio Itálico había sido cónsul en 68 (cf. VII63); Marcial desea que tu se gundo hijo. Severo, sea también cónsul, pero moriría poco después (cf. IX 86); PniUMANOtt. pág 38; Ku. II. pig SI Agripa, casado conla hija de Augusto. ™ Cf. VIII 2 .1 a. Epigrama sobre la manía de cenar en casa ajena (cf. I 27); para una actua ción contraría de CectHano. cf. I 30.
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la* nueve, desgañifadas. ha>an acabado Je vu\pender 1 m vistas y Ib arena came a las fieras de loi juego* de Ftura *». Corre, vamos, Calixto, y haz volver • los criado» incluso sin lavante; que se ancglcn tos lecho*: siéntate, Ceciliano Pides agua caliente: aún no me ha llegado la fría l,‘; la cocina cercada. con el fogón todavía vacio, está gélida Ven mejor por la moAana; mas. ¿por qué le harían esperar las diez? A desayunar llegas tarde. Ceciliano.
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A ESTELO, CUYA FINCA PREFIERE A 1.OS AMENISIMOS JARDINES DE AlXtNOO El que ha contemp lado los verge les del rey de Coc cira ,n preferirá. Entelo, el terreno de lu mansión. A fin de que el invierno envidioso no abrase los brillantes racimos y el frío glacial no eche a perder k» dones de Baco, tus vides crcccn protegidas por un cristal transparente ' 3 y la uva. afortunado, está a cubierto y no queda, sin embargo, oculta: así se ve un cuerpo de mujer a través de vestido« de seda. asf se cuentan las piedrecitas en el agua cristalina. ¿Qué no ha querido permitir la naturaleza • la inteligencia? El invierno estéril recibe la orden de producir una cosecha oíoóal
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■■ Sobre io romano de la época, cf.IV S: sobre lot juego*ea húAor de la dicta Flora,elcf horar I eptu. '»» El agua caliente ervía s para mezclarla con el sin*; Marcial no el nta agua •comente en tu casa (cf. IX 18*. Sobre el minino aumto. cf.VIII 14. >•* Akínou. cf. VII42.6 a
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69 CONTRA VACERRA. QUE SÓLO ALABABA A POETAS MUERTOS lu Admiras, Vacara, sóloa los poetas antiguos y no alabas más que a los que están muertos. Te pido. Vacerra. que me perdone*: para caene en gracia no merece la pena morir.
70 SOBRE NERVA, POETA EXCELSO PERO QUE. POR MODESTIA. NO QUIERE TENERSE POR TAL Tan grande como su serenidad es la elocuencia del comedido Nerva pero la modestia le reprime el brío y el talento. Aunque es capaz de apurar la sagrada fuente del P e r m e s o d e un largo trago, ha preferido tener una sed pudorosa contentándose con ceñir su frente pieria con una humilde 5 corooa y no dar pábulo a su fama. Pero, a pesar de lodo, quien tiene presentes los poemas del culto Nerón sabe que aquél es el Tibulo de nuestro tiempo
71 CONTRA POSTUMIANO: LOS REGALOS ANTERIORES HAN DE SER SUPERADOS POR LOS POSTERIORES '« Por el invierno, un plato de cuatro libras de plata me enviaste hace diez años, Postumiano; •mcr
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»•* Cf. V 28.4b . Se trata del futuro emperador. Cf. 176.12 n. Estaba consagrada a las musas <*T Se decía que Nerón había Uam ado a Nerva «su Tibulo (Km, II, pág, 35). IM Sota aterto y kn regalos en general, cf. Kay. pág. 283.
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nlcmras esperaba mi« —pues kw regalos deben mantener el tono o ser mayores—, me llegó uno de dos. m is o menos: íl tercer y cuarto aAo trajeron bailante menos; 5 en el quinto fue de una libra, claro que de Scptkio ■**; ín el sexto afio bajé a un platill o de ocho onzas d e peso; en el siguiente se me dio media libra escasa en una copita; •l octavo me envió una cuchara de menos de un sexto; el noveno me (rajo a duras penas un sacacaracoles más liviano que 10 21 décimo aflo ya no tiene qué enviarme: (una aguja, vuelve a las cuatro libras, Postumiano.
72 A SU LIBRO. AL QUE REGALA A SU AMIGO ARCANO QUE REGRESA A NARBONA ,91 Aún no adornado con la púrpura ni pulido por el ispero mordisco de la reseca piedra póme¿ m . te das prisa, librito. en seguir a Arcano, a quien ya la hermosísima Narbona. la Narbona Paterna del culto Vocieno ’+3.
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le exige reintegrarse por un año a sus obügaciooes oficiales; tienes que pedirlo con ruegos idénticos: te tocarán en suerte ese lugar y este amigo. ¡Cómo me gustaría convertirme en mi librito!
I------------,M Era una plata de nferior i calidad. IW Se trataba de una cachar* acabada en punu Un sentimiento ■« Cf. 166. Un. muy parecido se expresaen XI80 (ef.K . pág. 236). U actual Narbonne, cuyo nombre comp leto era Colonia iuüa Paterna Nar* K>Mareta, capitalentonces dela Galia Nartoonense (Kaa. II.pig. 56), patria de focicno. poeta y amigo de MiroaJ, donde Arcano tiene que ejercer el gobierno (fcnklpíl
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A ISTANC10: EL AMOR AGUZA El. TALENTO
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Inane io —no hay otro m is puro de corazón que él ni superior en diáfana sencillez—, si quieres darle a mi Tilia brío y aliento y pretendes poemas imperecederos, dame algo que amar. Cintia le hizo poeta, sensual Propercio; la bella Ltcoris era la inspiración de Galo; la hermosa Némesis es el predicamento del armonioso Tibulo; Lesbia fue tu musa, cuho Catulo: ni los peligros ni Mantua me rechazarían como poeta si una Cocina. si un Alexis tuviera yo '**.
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CONTRA UN MAL MÉDICO'» Ahora eres gladiador: antes habías sido oculista. Hiciste co mo médico k> que haces co mo gladiador
'♦* Epigrama literario »obre la ratón de la poesía. ne el que Marcial itlackuu loe poetas más f«motos de Roma con tus respectivos amores. i9i Loa peligro habitaban el Samnio. al B. de Roma, donde había nacido Ovidio, concretamente en Sulmona; Mantua «ra el lugar de naclmteMo de Vtrgi bo. Este último veno recuerda al ttkiino de la segunda égtoga de Virgilio.
cr I30n.
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75 SOBRE UN GALO LfNGONO QUE. AL CAER EN TIERRA DESPUÉS DE TROPEZAR. FUE LLEVADO A SU CASA EN UNA GALGA POR LOS SEPULTUREROS Cuando volvía a su alojamiento de alquiler ya avanzada la noche un língono que acababa de dejar la calle Cubierta y la Flaminia,f7. tropezó con el dedo gordo del pie. se dislocó el tobillo y quedó tendido en el suelo cuan largo era. ¿Qué podía hacer el galo, de qué manera podía moverse? El corpulento seAor tenía un solo cscUvtio. Un canijo que a penas si p odía sostener el más pequeño candil:
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una casualidad lo socorrió ytrasladaban ayudó en sueldesgracia. Cuatro esclavos herrados cadáver de un cualquiera m , uno de los miles a los que acoge la pira comtin; 10 el endeble acompañante les ruega a aquéllos con voz apagada que lleven el cuerpo sin sentido adonde les venga bien: se cambia la carga y el enorme fardo es levantado a hombros encajado en una estrecha galga. A mí me parece. Lucano. que este es el único de entre muchos 13 al que se le puede decir con razón «galo: eres hombre muerto*
•*» Cf. III5,6 n. i* El texlo di« «marcado*» (con el enigma, cf. X 36.6. y XII61.111. porw pertenencia »1 Estado. los pobre» eran enterrado» de noche por esclavo* péNieot, que los llevaban en una galga a la fosa común del Etqwlino (lz¿uc, II. pig. 30). do*», cf S m CovAtataus. Tr uno 4i la íe * i& ca st t' SobreU traducción «herra Uana,s.v. «clavo»: «De la palabra esclavo se formó la cifra de una S y ua clavo; la quat se suele poner en una y otra metida a lo» esclavos, especialmente ti son fcfilivoi. que llaman herrarlos,ypor Imprimirles aquellas ktfas coa hierro» ardien do; cf. lainbtén s.v. «esclavo* «herrar*. '» Cf. II 81.2 n. y VII 77.9 ti 500 Con estas palabra» provocaba en las luchas de gladiadores «I reciario al irmillón. que llevaba un casco gato y que. como el protagonista del epigrama, tatú vivo (cf S Baiijv. «Cooections...». pjgs. 282-213)
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oAl igo,
a quien e l poet a, en brom a, d em u estra QUE ES MAL ABOG AD O* 1
«Din* U verdad, Marco, dímela, por favor; no hay nada que me agrade mis escuchar». Así —no sólo cuando lees en público tus libritos sino cada vez que alegas en defensa de un cliente— me ruegas. Gálico, y me suplicas siempre. Me resulta duro negarte lo que pides. Escucha, entonces, lo que es más verdadero que la verdad: no te agrada. Gálico, e scuchar la verdad.
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A SU AMIGO LIBERO. PARA QUE CEDA AL NATURAL Libero, el más agradable capricho de tus amigos. Libero, merecedor de vi vir entre rosas perennes, si eres sabio, que brille siempre tu cabellera con amomo asi rio y ciAan tu cabeza guirnaldas floridas; 5 que las diáfanas copas de cristal se ennegrezcan con aAoso Tatemo y se abrase tu blando lecho con una cautivadora pasión . A quien ha vivido así —incluso si falleció en la plenitud de la edad le ha resultado la vida más duradera de lo que le fue concedida
** Ptra uo tem* parecido, cf V 63. ** Cf. X 23. 74
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78 SOBRE LOS JUEGOS QUE OFRECIÓ ESTELA PARA CELEBRAR EL TRIUNFO DE DOMIC1ANO Los juegos que hubiera d eseado c omo tuyo» la v»clona de Flegra **. tos que el desfile índico hubiera deseado como luyo *. L ieo3* . k» ha ofrecido Estela ** para celebrar el tnunfo hiperbóreo ** —¡qué decoro! ¿qué civismo!—, y pierna que son poca eos*. No fe bastan el Hermo*** deslucido por el oro * que lo enturbia y el Tajo que resuena en tierras hesperias. Cada día tiene su propio regalo; no sólo la cuerda de los obsequios » • do de funcionar sino que un bolín heterogéneo cae sobre la gente: [deja vienen las fichas lujuriosas en animales lluvias inespera das. ulo. oraora generosos vales adjudican**los del espectác io oni se alegra el ave de ocupar la seguridad de un rega/o y en ausencia —para que no sea despedazada— ie loca en suerte su poseedor»4. ¿Para qué hablar de los carros y de los treinta premios de sus victorias. que no siempre suelen dar uno y otro cónsul? Pero todo esto. César, es superado por el inmenso honor i$ de que lu triunfo te tiene a li de espectador.
La Gigantomaquia. guerra de k» Gigantes contra Jüptfer y demás dimes, luvo lugar en los campo» de Flegra. e*te es. Palene. U más occidental de las tres península« CafcfdiCBt. al NE de Grecia W cr.VIII 26. 8 n. * Cf. I 7. I n El triunfo contra k»»innata» Segün SttTUNio.Pamtciúm»6. I. el empe rador «te limitó a ofrecer u«a corona de laurel a Júpiter Capítol uto» ^** Río Lidia,deenlaAlia Menor. regalos para que los cogiera la gente. cf. J Unade cuerda que colgaban F Kiuux. «Wha( wat the íum
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79 CONTRA FABULA. QUE SE PRETENDE BELLA
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las amigas sonvejestorios. vejestorios oTodas adefesios o más que feastienes que los A tu vera las llevas y las traes de compaña por banquetes, pórticos y teatros. Así resultas atractiva, Fabula. así joven.
80 A DOMIC1ANO. QUE AL REINSTAURAR EL PUGILATO RECUPERÓ LA SENCILLEZ DE LOS ANTIGUOS Nos devuelves las maravillas de los benditos antepasados y no permites. César, que mueran las épocas pretéritas, cuando se recuperan las viejas costumbres de la arena latina y el valor combate a b razo partido z h . s Así. bajo tu amparo, se les preserva el hooor a los primitivos templos y bajo ua Júpiter un adorado la cabafta2,2 mantiene su aureola; así, mientras fundas lo nuevo, restauras. Augusto, lo antiguo: a ti se te debe lo que hay y lo que hubo.
211 Cí Slttomo. r> o m k¡ < m o . 4. I. 3,2 La supue sta retkfcftd a de Ró mulo ea el Palatino, que era moy reve renciada (R ulóla ***«. p i| 47).
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81 CONTRA GELIA. QUE QCERlA A SUS JOYAS MÁS QUE A SU VIDA Ni por tos ritos mistéricos de la Dindimene*” ni por e) buey Je la novilla de) Nik> J*4 ni. en fin, por ningún dios ni diosa jura Gelia, sino por sus perlas. Las abraza. 1« coima de besos. las llama hermanos, las llama hermanas, las ama con más pasión que a sus dos hijos. SÍ por una desgracia se viera la pobre privada de ellas, dice ni una bota. ¡Ay. que qué no bienviviría nos vendría ahora, Papmano. la mano de Anneo Sereno*'5?
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82 A DOMICIANO. A QUIEN ALABA POR FAVORECER A LOS HUMILDES POETAS Porque, mientras e l gentío te entrega quejosos memoriales w , Augusto, también nosotros entregamos a nuestro Señor peq ueta s poemas.
21* De Cibeles,llamada asípor el santuario que poseía en el monte Dfodimo. en Frigia ><4 El buey Apis, que eprrcsmta r a Osiris. y us esposa Isis< representada con » ana novilla (Kf*. 11. pág Mí VII 45, 2 n !
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