LUISA JOSEIIINA HERNÁNDEZ \'¿ció en l¿ ciurl¿¿l le IIIé.ticr,, eu. t928. Hixo su¡ ¡rinerot crtt¿¿ior ¿n la Ercuela del nae:tr,, Luü G, Leóu. y obtuz,o el grado de Ma¿stra en Letras en la Fa¿ulta,l ,/.e Filosolía 1 Le-
Los frutos caíd,os PIEZA IiN 'fRl:S
ACTOS
tr¿s de la Unir)ersir¿od Liacional. -47aí cursó Teoría y Compotición Dr¿tnática con Rolalfo Usigli, a quien ahora sutituye en. esa cát.edra. IId al¡lenir/rt dos l¡eca¡ del C¿ttro Mexicano
y
una de la Fundación Roc|et'eller. Se dio a cr"m Agtardientc de caña, r'bra ?reniaia en el crrucur¡o de las Fie¡ta¡ de Primavera. Eu t951 r'btutto el priner prentio cu el cailcill¡o de teatro lel di¿rio El Nacional coil Botícx Modelo, pieza estrenarla en rg51 en la Sala del Seguro Social, Comt¡ tesis de su ntae¡trí¿ Vresentó Los frutos ctídos que sc ilclale en erre soluruen. Con,serva inédita¡ Los ducndcs, I;a llave del cielo 1 La corona dcl ángel, así d¿ E¡critore¡
coilocer en
rgsr
corTto u.na not,ela gu.e escril¡i.ó e?t
rg;5, El luglr
donde crcce
Irr ¡'erbr,
PERSONAJES
Donr Cr¡.r..r
M¡<;»r.r,¡s..r
Tie Pnou,r F¡nNrxoo FuNc¡sco
Ornns prlrrÁ¡ lr l¡ ..lgunlic»tc lt catia, prcsentadr t:l cl Concurso clc las Ficstas tle Prinravcrt de r95t. Los sor,lowdos, cstrenada en
r9í3 cn la Sala
Botica Modclo, estrenada cn r95+ e¡r Los
+o2
lrúos
lr
Chopin.
Sala del Seguro Socirl.
coidos, no estrenada aritr, quc se incluye en este volumen.
.\C'IO ]'RIMERO Es la ¡ala de una casa de prooincia. Al fondo, a la izquierda, uila ant?lia ?uerla que da al zagaán, ctpecie de pequeño recibirlor que ¡e comunica ?ar un larlo com la calle y por el atro con la sala y con el patio; patio lleno ,le lloret gue 4aedc terrc ?or ana L,entona enrejada d.esde l¿ sdla. A la izqaierdo, ?il¿rt.o qile da a las habitacioae¡ ,/e Dora, Magdalcnd y Fern¿ndo. A I.a dcrechar' ?ilertd ?ue l¿ a l¿ hal¡itación. de tía P¿lrrt¡ta, Los muebles soru ¿e ptja cr,u varillas negra¡. Drr¡ tt.esas de núrruol y dos retratos atttiguos, en louo café, cr,n tnrco dr,ru¿lo y muy desteñidot, gue Vresirleru la habitación y qrft ran lot del padre y la m.adre d.e Fcrnando, una herm.osa lámpma que eil su tiempo fuc para oelas y gue ahora se rsa sólo conto un adnrno, pues la habitación se alumbra con. tn foco 7ue cuelga ai¡lado. El su¿lo e¡ de mo¡aico¡ blancos ! n¿grar. +o3
S,,t
li¿: rle l¿ il,¡t-t¿t¿. 'l'o(¿l ¿ lt ¡utrl.t; ti
lL¡¡
trtt.
grrl
¡¿
le ll¿lt¿,/rrr ,le 1¡rr,nce. I'¿u¡¿. Se re?il.e. el goipe. Sde Dora prrr la izquie rla. E¡ ur¿ tnuclt¿cht le t 8 oíios, ,lelgalita, Dett¡areoe ?.,r 1., Pile, l,t qile ¿d dl '-.aguitt. seco,
Lts
errces s€
lleil lesle
Don,t.-¡Quó
all,í.
la
s¿la.
g¿.¡lo¿l"t;
,la un ¡ocrt
lt itt¡re;iitt l¿ ittenlurl. rutchita.)
I)on¡.-
Sióntcsc ustcd. Crrr,r.,r.---(§zri¿!,¡u.lo 1,,¡
p:rr.lc vcicstoriosi
tt:trdlú!./ ¡'lirJ:rr í¡ tic'utn ¡llí
csc
I)orr.t.-Sí. ( Par:d c,,rlt.) i-l)c p:rrtc dc quión I <¡uc lrr llr:g.rdo Cclil. Dox.r.-¡Ccliai ;trs ustcd la sciror¡ Ccli,,i ,'Lr rluc sc cs-
Cr:r.r,r.-l)íg:tlcs cribc corr l'¡lomitai
¿.{sí lc diccs I)on.,r.-I'ucs sí. Conro r.ro sc cus
Crr.r,r.-(Sazrrienl,,). Cr:r,ta.-¡ lrobrc tía
tú
rr
mi tí¡
I)¡lonra j
Prtl<¡m¡!
I)ox...r,-(tr-zrl.lir)rd, t:o,t gtuai ,le ir ¿ dr la u.oticia.) \i sc irn¡gin¡rr quc cst:i ustcd i¡(luí. Crcínros,luc il.;t a vctrir ¡xrr
N¡vi.l¡d
r, ¡hor¡. .
,
Crt,r,r.-Rcsulta quc nrc edelallté ocho tucscs. . . Don.,r.-,\quí siempre cstín h¡hl¡ntlo dc ustcd. Crr.¡¡.--:Síi ;Lcs dlrri gusto nr; llcgrdri ])o¡rr.---Scr:i una gr:ln sorprcs:I. Com<¡ cs ustcd la ú¡rica
r,'¡riir:... :l)rindc cst:í su cquipaje i Q¡.¡-¡ q.-1,111 I;r cstación.
40+
Cr'r,ra.-Es largo. DoRA.-\/oy a avisarlcs. ;chl quierda,) lis un. gr., ,o.pr.rr.
(
Dc:,:: .: :.-¡-:: :¿ .: j:-
-1
:r-r:1,
Magrl,tlena ?r,r l,¡ luerr.: /¿ .'.¿ i:;:,i¿,;;, ;t.i'i!; j: D.-:. De 5o añrr-,, tttttt g.,r¿¿, /t:tl: col ci¿ri¡ .';,::ii i¿:. .: ,,:, sienle que sus ftlabra: sou ien¿:i.t,/.J clir¿:. St t¿.::.i.. ¿: ie algorlón ¡ de ja t'cr l,rs ltr¿:,,¡. \',, lle:.; »te"i.¡: ,; (;.:; chdnclas.
E»tran en la sala. Cclia es uild nu.ier ,/e z7 años. Veslid¿ con ,lecenciar -ti» al¿rle-; de cr,?uelerí¿, tiene dffegl¿¿d (ott cicrlo {urfo I tliltl d lo nto./tt, \nár ¡or c,tsttuubre ?ile ?(»' i¿¡ert le agralor. Su ro.¡lro ¡in ¿¡l¡r etn,eiecirlo se n,e frabd(
i,¡lo,
usted
(Sale, Celia, al gre,/,;r:,,!.;,:c :.!?.:): luega se a?arld c.)rt ul.; -,,,tr!:: : tt ¿ ii.;:. Sr-': j---.
dcsca?
C¡.r,r,r.-,; Est,i¡r cn c¡s;r i I)onr.--:Con quién quicrc h:rblrrr: Cr:l.ra.--Con ellos, con todirs. I)on^.-1',,',' a ll¡m¡r a doir;r M:rgd.tl:n.t. ])rrsc ustrd ¡
I)on.r.- ¡\/ino
nluy bonito.
)
M¡r;o¡r,¡:N¡.-( Abriendo los Lrax,rs.) l,ert¡ Ccli¡. . . Cr.ut.-( Altrazánttola c.,il e?n()cióil.) Magdalcna. Mnr;uar,r:sl.-Hace tanto ticmpo quc no nos r.uí¡mo,s. ¿Cómo llegas asíl
Crr,re.-Tcnía
ganas
de veni¡. (La al,rma de
ru¿r...,..)
.{cab¡s de recordarmc tantas cosas. ¡Hace tanto tiempo que no scntía en forma tan clara el rccuerdo de mi padre ¡- el de mi casa...! ¡Y también cl recue¡do de como yo era! Meco¡r,r:Na.-Eras como Dorita. Muy delgada.
Crr.re.-Tod¡ría lo
sor'.
I"IAGDAr.ENA.-Sí, pcro. .
. ( Lo nlira con cuidado.) \'o
esto¡' hecha una vieja gorda.
Ctrrn.-Hay quc recordar quc han pasado diez años. , . Sierrprc tc quisc nrucho; tú mc hacías nis vcstidos. lll,rr;unr.rua.-Eras cómo mi hija. (Mira a Drrra 7ae la: cr,ntem?la souiente.) Como Dorita. (Pausa,) Lástima quc tuvimos que venirnos así, en unl forma tan.. . CELTA,-LoS plcitos dc familia son urla cosa trcmcrrda. l,In<;ulr-pNe.-¡Cómo cstá tu manr:ii CELTA.-Bien; en fin, pasándola. Macl¡at,r,Nl.- Vive contigo ?
¿
cr:r,re._sí. \f[-4¡;¡¡¡¡¡¡.-Prometiste que nos escribiríamos una tez al mes )' Iuego dcjrstc de haccrlo. Cr:l.rn.-[,uego cmpczaron
¡
succderme dern¡si¿drrs
cosas.
405
\1.,,<;o.,\l.E\A.-:-{ quién sc
parccen?
Cr:r.r¡.-N<¡ lo sé. Iil rnayor es morcllo, cl otro rubio r'. . . bucr-ro, los quiero mucho. ]laco.qL¿r¡r.-Iis natural quc no sc parczcan. Cxrt.+.-( Secu.) ¿Y Fernandol Ma<;»¡.r-rxr.-\'ienc dentro dc un momento.
Crrra.-¡Cómo estái M ac»ar-r: x a.-B ien. Donrr.-Dice el doctor que está muy Qp¡.¡¡.- Qué ticnc I
::':lé¡r
delicado.
,;
M¡.<;oal.¡s,t.-Nad¿ scrio. Fcrnando ha sido siernpre muy nc rv ioso.
Cr¡,re.-iCu;i¡rtr¡s M.,rr;»a¡,u
sn.-\/c
años llcr.as casada con
r.- -.{ r'cndc¡los? ]Iico¡lrrr.-Est;ín apoJillados. Ya no sirvcu. I)orita, vé ,, :::r Fcrn¡ndo ¡'a salió del baño ¡.dile quc está Celia ..r,. L- ,::tttr ¡,,nrisa a Celia, tale Drrra.) \t.coqLrrr.-Qué r.estido tan bonito. . . Cxut.-( Mirándose ca¡i cr.¡n curio:idal.) ¿Síi Dime, Crl.l
}Iac»¡lr:rn.- ( Curio:a.) iCómo cstrin tus hijosl ¡.-G r¡ndcs.
Cr.:r-r
fornu . .Cr:r.r.r.-(Eu i.. . :Y¡ no bcbci
é11
in ticinco.
Cc¡,r1.-Son rnuchos. Mnco¡r.eNa.-Para tí son muchos, porque tú. . , (Se arrclieure de lo r¡ue ibe a rlecir, Celia espera gue termhu la lrase
ut, ?oco a la defentit,a.) Tú, después de todo, cres muy joven. Cl:r.l¡.-Sí, pcro dcspués de todo. . . ;rcrdadl M,rco¡r-sN¡.-Y. , . ¿tc entiendcs con tu memá?
Cr.:r.r.{.-N¡tur¡lmcnte. (Pauta.) ¿Y tía Palomal NI:r(;DAr,FN^.-Muv vicja. ( En yoz nuis ba ja.) Insoportablc, ;sabcsi Si no fucia hcim,rnr dc tu abuelo. . . Cr:r.ra.- Quó i ¿
lVL,rcu¡r.r.:Ne.-Sería mís difícil ririr con clla. Ci.r.r¡.-Mi pedrc me dccía quc consen'ab¡ csta casa cn su podcr sólo para quc ella viviera aquí; dc otro modo, la hu'nie r'.r r cnJido llace nrucho ticmpo. \'1.q.c;uar-p"r¡.-Pero después llegamos nosotros. Car-ra.-Y ése era otro motir.o para no venderla. \f rc;n,qr,¡:ra.- (.lustif icándr':a.) \'arias r.eces hemos re-
.
e-i:
:-.::"-O!.
.c5
inetperalu pua Magrlaleaa.r)
-\Ir<;o,rr.uNr.-(Sr,bresaltaia.) Pttcs..
lo.
.
r1o.
lernln-
No muy
se-
Cr,r.ra.-¡Trabaja en algol \[r¡¡a¡.¡¡¡.-Claro. Si no, no tendríamos de qué vivir,
::.:l:je en cl banco. Cerra.-Qué bueno. ][a6¡¡¡6¡¿.-Ce1ia, no sé qué idca te has formado i::i::ndo. Cnr-ra.-¡Por quéi
de
\Irc;r¡.rr-¡:Ne.-Par¿ ser sinccra tc diré que tu madrc nunce , , h.r qucrido v tel vcz por clla scpas cosas. . . cxageradas.
Crr.r.q.-No. Mc ¡cuerdo bicn dc
j-
é1.
\Irc ».lr*r.-Adcmás, como Il caus¡ clc quc
:.:
c.rs¡
saliéranros
fue un disgusto que tuvicrou. . .
Crr-r.q.-Me
acuerdo de1 disgusto.
\[ 16¡¡¡,5¡¡.-No hav quc toular dcln¡si:rdo cn scrio :::r..-nloi cs un enfcrmo.
Cil,rr.-En
r.rr¡do los tcchos l' ll cocina quc cstaba cat'éndose.
Q¡.¡-¡a.-[5 nitnral, tallbién les cosrs en\¡ejeccn. \I qc»el,r¡¡¡.-l)ucs sí. D,rn.r.-.{ho¡e lell e I'cndcr cstos Dueblcs y a poncr
es Dorai
_ JI.rc».qr-E¡.r.+.-¡No lo sabes? Es nuest¡a hija adoptira. C:::ndo ilegamos rivía cerca de aquí y como ro padr. !s rn --::;:chito y no trabaja, no tenían ni qué comer. Es una fa=:.i: mul'grandc v la pobrc Dora r.enía a hacerme los rnani:.los r- como no tcncmos hijos. . .
eso csto'r'
a
dc ecucr.lc. cosa lo ¡ltcrr. ( Pdu:d.) f'ambién
\Jr.;D{r.} \.{.-Cualquicr :
otros
-
:
::.:b.l
j;ls, ; vcrdad i r.-Hacc vrrios
C:-l-r
...- -.
airr-¡s
quc trlbajo
cll ulla corupairía +o7
\I.,rco.qr,u.¡,r.-Dcsiic tu scgunclo mrtrimonio, hacc
tres
Pr¡.6r1a.-\1" lo puse para ir a la ficst¡. Crt¡t.-( In¡en:tnente.) '['cncnlr¡s qu:
¿ñ::s.
CEr.r-A.-Ii5
J¡d. |z[,16¡¡¡_p¡¿._¡y qué h¿ccs ¡llíi Ctr-r¡.-De todo un ¡roco. D,: cu:¡lquicr n1¡ncr:1, rnc trat.ul bicn y gano bastantc. N1¿\GD¡r,¡va.-;Y cuando ib¡s l tcne r cl niñoi Crr.ra.-Segu ía t,raba j endo. \Irc;r¡rr,Ení.r.-¡Qué barbaricfud! ¡Todo el ticrn¡roi CEr,rA.-¡v'Ie clicron un:r licencia dc uu r¡cs. \-cl
\4rc»rr.¡;Nr.-¡ Quó
Cl.;r,r¡.--No crc¡sr es suficientc, l\{.,rc»,r¡.1x.,r.-:Y ahorai No te esperíbamos hasta Nayidad.
Cur,r,r. l)cdí otr¿ liccrrcir. Mrc»a¡-rxr.-El caso es quc hor- -.c rccibc l)orita dc nlee stra ¡- hav una fiesta en la Universidad v un brrnquctc... . por cso hubicre sido mejor que linieras cn Navidad.
Q¡¡.¡¡.-; Q¡é dicesi M.4.co¡r-¡N¡.-(Turltala.) Pucs nada, es que
cntonccs
hubiéremos hccho un:r fiesta en la c¿sa v no hubiera sido Ct:1,r.,r. L,,'; cspcr;rró :r11uí.
tan...
M.l.co-qr.Es.A.-No, a Fcrnrndo lc encantarlí quc lcas
13i
noche,
C¡'LIA.-No importl, .:r.erdad tíal ,,tr,un.^.-¡C)ístc lo quc dijoi No Ic irlport:r. Cr:¡,r.r.-No lcs er isé porquc mc gustr Ilcgir dc
inrpror-i.o
no ruc¡lester ni obligarles a h¡ccr prcpareti\-os, Plr-ov¡.-Nada dc lo quc se luga por t; cs molcsti:r. Ercs 1o m;jor dc la frmilia. Mac»nr.ew.q.-I)icc cso porque lc mandas clincro todos Ios mescs.
P-rr,oN,r,q.-Lo digo porquc con el dincro mc nr¡nd:r un;r c.¡rte llcn¿ dc palabras amablcs, cn dondc lne prcgunte por nri ..ilud 1'por mis descos r. por.mi cstado dc :iniuro. CEr-rA.-No tiene importancie. \{i prdrc n¡: lo rcconendó expresamente: "No olyides a ru tí¿ Palorla; si la olviLis es corlo si me volr-icras la cspalda a rlí mismo.,' P.rroua.-(l lterala.) Era muy bucno, mc quería nrucho. (
nacl¡.
:::mpo cuc no mc cmrrcionaba así. \l rc;rr.rl,rrr,r.-I)ucs lc alcanz
::r t1 mc jor de sus resticlos,
rar hasta las docc dc la
',,»t0
Prr.orr.+.-(Iitgietlrt ilo tter a Celia.) Magda)cna... Crt;a.-( Ler',ut¡it,1r,¡e.) ¡Tía Paloma! PAr.o14^.-f-,1 brux,ínlola.) ¡Queridísima Cclia! ( Besár ,:,,1,:.) Cclit,Ia hijr dcl más querido dc mis sobrinos. (AVar:.ír7,,-¡e | ¿il touo r,! ?oca declantatorio.) Pero ¿qué es estol, :.,tué dcsco cs cstc dc tolnarnos por sorpresal Hace mucho :'.r
Per-orr..r.-(§ietnpre art.ifici,,sa.) F.stot .r ru .li.¡osicirin. J[,q¡;¡¡¡.5¡¡.-Si lc diccs eso, re te ¡]dr:i h¡trl:rnJo si» ¡-.r-
a
(Se nlre la puerti ¿le i¿ dereclttt I eiltrd tí¡ Palr¡n¿;75 ¿ñr'¡t ¿1e l¡tirr¡11¿ ¡rrrf tnld, r¿-¡til¿ le ,rcgro \- ilru t- dltd, ¿el4:tla ¡ tolar ía ,lerecha.)
:
h.il 1,u. )rrgo, tírr
Lr.lr;t
poco!
Dorita, cs qLlc... Ct:;t.-( Rien,i,,.) No cnticn,lo
Prlomr.
dc
-' ,
Se sienla ¿r un -tillón hacieldo ilil gert() t/e.¡e¡?er¿l¡,¡ .¡i. acabcu'a rle perlerlrr.)
ll:c;ool,t*..-Ahora las e'llorar. p11-61e1¡.-§e, Hc ll<¡rado dí¿r ¡- nocht dur¡ntc
:riros. Con
b:rst:r, :Cónro est:ín rus hijos, Óclir: C¡l¡¡.-Hermosos. Creciendo-
P.rlor,l.q.-,;Y tu ma¡idol CELTA,-Bien, cs un hombre mur- l¡ueno. \JAGDAT,ENA.-NIc alegro qo" \-cz rc h¡\.r s:rlido bicn. ¿rr,ro.-(Cr,n ut¿d ¡rttri;ila.) "ri. Sí, mul bien.
:'-
Prlorl 1.-¡-1 otro tuvo la culp¡ dc roJo;
\l'cD.\t,l\r.-Unlr ::--
cstrr r-cz
no hr-
:.r'rcti\'o para equit-ocarsc. cr-r_ra.-No lo había.
scgund¡ ctlr.riloc.:ciriit
..rí:i im¡crJo-
-..
Crr rr.-Sí. 409
P.+lour.-Si tc equivocar¡s dc nuer-o, a tu tía paloma le importaría nada. Aquí ticncs mis brazos para meccrte.
\i[.46¡4¡¡¡4.-No
P.r,r-ora,r.-(l Celia, iut,it,ínrtola.)
no
sca usted cursi.
CELTA,-A mí me encanta
saber que
Mec»ar-¡:N¡,-Iis que eila no quierc
quiere.
p¡¡,6¡aa.- ¡fraj istc fotograf í:rs de tus hijosl Cru,r.-Iistán cn mi ntalctx.
P¡¡¡¡a¡,-!'¡an se
Pxrece a su resPectivo PaPá.
Per-oua,-iQué vulgar crcs! Mo"oor,r,*o.-\¡ulgar ustcd quc escuchl dctr;ís de
hs
CEr-tA.-M,agdalena, vo te suplicería. . . |,{¡5p¡¡¡¡¡¡.-(Terablando I llettánlose el pañaelo a la aariz.) Es que no puedo dejar dc dccir las cosas, no puedo resistir, no sé qué mc pasa. . .
Per.ou,r.-(Cou dignidad ettuliala.) No cs vulgar escuchar cuando se escuchan cosas interesantes. Si ustedes no se pasaran el día hablando dc mí. . . Mrcoar-nNl.-¿Quiénes hablan de usted? P,rr-oua.-Fcrnando, tú y hasta Ia niña quc tienen recogida.
M¡corr.rNn.-No lc diga rccogid¡: dígale hija adoptir.a. PAr.oMA.-Y hasta la criada, ias pocas \¡eces que vicne a que le pagues lo que le debes.
l\f[¡6¡a¡¿¡¡,-¿Por qué quicre pelcar conmigo? Muchas veces le he dicho que yo no tcngo por qué discutir nada con usted.
cl dí¡ dicicndo que sov
insoportable.
Crr-¡1.-Pero
Cnr-ra,-¿No te pareccn bonitos los
mueblcs rntiguosi
apoli)lados. Ya
tc hc dicho quc
\rla¡;¡¡¡¡,¡¡4.-Estín
es-
apolillados.
Cr.ua.-(
Ri.e
n,k.
se
lc r-rn a subir
) iil-iir
Paloma
l)orit¡.
las polill;rs a
!
MAcDAr,r'NA.-No pucdc soportar a la pobrc niita.
I)AI.oMA.-Mc molesta
la
gcnte intcresad¡.
No
pucdo
i¡.
Ustcd
evitarlo.
\f[¡6p.4¡¡¡4.-Todos tcncmos neccsidad dc mismr. .
vir
.
C¡r-r.r.-Por far.or, Magdalcna. l\rt.46¡¡¡¡¡¡.-Es que es insoportable. PALoMA.-Scgunda vcz que se lo dices a
Cclia.
MAGDALENA.-Y no es usted sincera. ¿Por qué no salió
a saludarla cuando supo que era ellai Pllon.r.-iQué sería de mí, si fuera sinccral Mrcoer,¡Ne.-Vivi¡íamos todos nrís tranquilos. PALoMA.-Ustcdcs no pueden r.ivir tranquilos. Macoer-rNa.-Me gustaría quc me dijera por qué. Puoua.-Porque no ticnen la conciencia limpia.
\f46¡a¡¡¡a.-( A Celia.) Está tratando de darte a en-
tcndcr que cs nuestra r'íctinle.
PALoMA.-'l'c er¡uivocas, en mis cartas sicnrpre lc hc dicho que la víctima de ustcdes-es ella. \,{.46¡¡¡¡¡¡.-( AVurada,) Celia, por fer.or, no \-l\'as e pensal. .
tía.
P.\LoMA.-Y no quiercn discutir nada conmigo, sino que 1'o aceptc todo lo que se les ocur¡c. Han cstado comprando mucblcs nucvos )' rnetiendo Jos vicjos cn mi ¡ecámara. No rcngo lugar ni para novermc. \[.16¡¡¡¡¡¿¡.-§o es verdad. +ro
tíu
cluc sc vcu,l:¡r.r.
de mis padres.
P¡l.or¿¡.-Crces quc
PUertl¡s.
Par,or,ar.-(z{ Celia.) Se pasan
\¡crr
(Celia hace un rnr.txintiento ¡* Il[,rydalent l,t,letiene.)
hay alguien que me
M.qc»or-p¡¡1.-Dice quc son mul- distintos. Cad¡ uno
r-erloi
¿Quieres
Por acá.
,
CELTA.-No tengas cuidado. (Pausa.) Tía Prlor.n:r, :todar'ía toca usted la ma¡rdolinal Pr ¡,s¡a
¡.-§
[.
llAcD.4r.ENA.-A las trcs dc
l¡
mrñ¡n¡.
Peloun,-Estoy demasiado rieja. Yr no me
interesa
dc¡mir.
+tr
Macoar-rñr.-Supongo que
Parour.-No
sabrás
quc tanbién fumá.
cs verdad.
1lfacoer-r^*r.-Cigarros de hoja, que c1la rnisma prepara.
Cer,re.-¿Y qué tiene de malo esol Todo cl mundo funra.
Par-orral.-(Ob:tinada.) Es que no es r.e¡dad.
hacérselo su mujer.
M¡.curr,rNl.-Un día que entré en
su cuarto sin llamar escondió ei cigarro cncendido en su ropero 1'quemó url vestido. P,qr-oN¡q.-Entrar así es f¡lta de educación. Cnr-ra.-¿Dc manera que 'r-a usted a Ia fiesta, tía Palomal Par,olr¡,.-Creo que no, voy a aburrirme. Mrcn¡r-rNn.-Dijo que se había vestido para eso.
PALoMA.-Dije una mentira. Me vestí porque me di cttenta de que Celia estaba aquí.
Macp¡r-uNa.-(A Celia,) Tú sí r'as a la fiesta, Cnr.iA.-Claro, si tú quicres. P.qr-oua.-No quierc, te lo pregunta por otra
scparadas.
Cartt.-(Señalando a la izquierda y a la derecha.) Ellos viven allá, tú aquí, Se encuent¡an en la Plroua.-Nunca vengo a la sala.
sala.
Pu,on¡a.-Porque a ellos no les gusta y, para demostrármelo, me hacen groserías. Crlrl.-¿Es verdad eso, Magdalenal M¡c»ar-nNt.-No. Es que Fe¡nando. . . Par-oua.-(1rónica. ) ¿Qaé?. M¡.co¿r-rN¡..-(Rá4;da.) Fernando es muy delicado. parcce. vayas
(Palorna i:7 t
+t2
t
ie r,1a.
)
a creer.
¡No
la tnira cox tnucha ironía,
sé qué
!
Es.
asatna Dora
por
lo que tiene
es
siempre: vicios, flojera, maldad. .
Fe¡na¡rdoi
J¿
.
Crr-ra.-¡Tía! Par,ovra.-Son unos piratas que cstán robándo,te tu dinero. Riendo.
)
P.rr-on.+.-(teria. )
¡Piratas!
¿Te bttrlas?.
P.qr-or,rr.-Te lo hc escrito mil yeces. Era muv neces?ri.l tu presencia aquí.
CELTA.-\'ine a venderlo todo. Parov.r.-¿Ya se lo dijiste a Magdalenal CELTA.-No había razón, mi administrador es Fe¡nando. Plr-ol,r.+.- ¿También esta casal Crr,r¡.-Esta case vale mucho aho¡a. ¿No le gustaría a usted r-irir en una casita nueva, que buscaríamos ¡'que 1-o alquilaría para ustedi
P¡¡6¡u¡.-;l
Cnr-re.-¿Y por quél
Mac¡er-rN¿.-No
Cn¡-r¡.-:Qué
pa16¡a¡.-;para qué hablar de esoi Tiene lo mismo
CEr,rA.-Clero que no.
cosa.
carcomen el espíritu. Hay que perdonarse los pequeños defectos. ¡Pensar que hace diez años que sc ven todos los días! Maco¡.r-rw¿..-Es ella la que empieza.
Par-orra.-No vivimos juntas, vivimos
P¡loue.-No es eso; es que si se rasura solo se corta, no tit'ne pnlso. (Pa.uto.) Tie¡rc n-riedo a degollarse.
Cr:;d.-( ¿verdadl
Cel.rl.-Tía, 1'a que viven juntas, 1o mcnos que pueden hacer es vivir en paz. Esas discusiones en forma continua
CELTA.-Así
l)on¡..-Doña Magdalena. . . ya terminó ei señor Fe¡vr pucde usted tenir a rasu¡arlo. MrcnelriN.q.-(A Celia.) Con permiso. (Sale muy ác pr):a. ) Crr-ra,-¡Estos ho'mbrcs de provincia! Todo tiene que nando. Dice que
la
sll6sf
CEr,rA.-No sé. l'e¡nando trabaja, no necesita de mí.
Parou¡.-Gana quinientos
pesos.
C¡r-l¡..-Quinientos pesos. . . PALoMA,-Y se los gasta solo.
Cr:ua.-¿De qué viven Magdalena y Ia muchach:: P¿¡-oi'rr,-Magdalcna cose ajeno.. . pero, sob¡c :cj:r, ;lren de lo que te roban. Cpr-ra.-Necesariamente. Pero vo. . . estol- c.:::::i: l= :.:. me robe todo el ¡nundo. P..rr.ova.-¿T'odr¡ el mundoi Ce¡-r¡.-Me refería ¡ ellos. Es¡or' .¡so¡:i.: i; :::.L.:,:.r:
+¡i
t3nto. Es«)I.h¡¡ta de que otras gentcs cuiden a mis hijos y Jc que los cuidcn mal. Sicmpre están enfe¡mos.
P.rlolra.-Te r.cs rnal. Cansada r'. . , CELr¡.-Envejccida. Lo supo'rgo.
pero . Prr,ona.-¿Trabajas tantoi (Celia afirna.)
tlene su recompensa.
Prr-olt.q.-Leo, toco la mandolina' riego unas flores mi recáma¡a ¡' te escribo dc vcz cn cuando.
Crrr.r.-¡Qué lee ustedi Paloua.-La Histori¿ de Méilco, dc Zamacois. Tengtr todo
r-einte tomos,
Crr-r.t.-Son veinte
Crttt.-(Patts¿. Sin sonreír.) Sí.
PALoMA.-No
P-q¡,ova.-:Por qué te divorciesrc la priruera vez? Cr¡.¡.q.-Quién sebc. Ahora, ni r-o ¡nism¡ me lo explico bien. Era un hornbre rDu)- guepo. . . Quién sabc. , .
P.qr,ou¡.-Y
eres fcliz-.
CEr.¡n.-Sí. P.qloun.*Creo que vov a cambiarme dc ropa. Me dando calor.
está
_
Crue.-(Rienlo ruat,enrct.te.) :De modo quc no va usp.a¡6¡a¡.-;para quél Ninguno de ellos quiere qne val.a. Ni ¡'o quiero ir. Tan vieja como esto\'... ¿qué pucde im-
portarme una fiesta? CriLrA.-Así pasa. En una época hay emoción en todo lo que se hace, dice uno que está buscando su camino y desea encontrarlo, y io encuentra, y descubre que ¡-a lo único neccsario es marcha¡, marchar, narchar, romperse de ycz en cuando, componerse con mucho esfuerzo, 1. luego ma¡cha¡ de nuevo, viendo que todo es árido, todo repctido, todo igual. PALoMA.-I's verdad, pero no es Io peor. Lo peor viene cuando las personas más cercanas empiezan a irse y a morirsc, cnando una crce que no quiere a sus padrcs y eilos sc mueren, y cree quc no quiere a sus he¡manos y se mueren. . . r tanipoco se quicre una a sí misma, y no se muere. Cu;d,.-(Camb¡¿nlo de toao.) Debemos evitar estas conrersaciones. FIace mucho que no las tcngo con nadie y es absurdo caer en ellas. No sirve de nada hablar así. Tiempo
rc¡dido. conto siempre.)
ro que perder. Q¡¡¡.1.-,;[n qué pasa 4I+
usted el dí¿i
yo no tengo l.a tiem-
nada más.
sabía.
Cr:r.ra.-(lgif.a¿d.) Tia
paloma, hágame usted creer quc
hice bicn cn hlbcrrenido, quc este clirna es ¡econfortantc' Que lcs da un poco de alcgría tcncrmc aquí. Par-orrae,-¡Claro quc nos da alegría tcnerte aquí! Y r-er las fotografías dc tus hijos. ¿No trajiste una de tu esposoi Crr.re.-No. (Ríe un paco,) No se me ocurrió. Par,o¡,1.q.-P¿ra di'r-ertirte sería caPaz de ir al cine una t:rrde.
Cer-r¡.-lremos. Hace tiempo quc
ted a Ia fiestal
Prr-ou-\.-(Fingiia
que
tcngo cn
¡1o
vov al cine y tengo
gena5.
P¡r-ou.q.-Podemos ir hov. No nlc can'Ibio dc ropa. Crtre,.-(Riendo.) Eso es. (Eitáa de -pie las dc,;, una
f
rent.e a l¿
atra,)
Estatnos contentas, :r-erdadl
(Tía Paloma, qr't' úruica rer?uestl, se ¿cha sallozando en brazos de Celia, que la acrtge. Entra Dora, ol.egre; se ha puestrt oe¡Íido calar ¿e rard, ttn?lio, corl.), uil poco, t'idículo, perrt ella se t,e, !¡ sobre todo, se sienfe muy bor.ita.)
Done.-¿Ya
está llorando, Palomital
P.rroua.-(Rehaciéndose.) No seas in-rpertinente, niña. DoRA.-Vil1c a enseñarles mi vestido. Me 1o puse temprano, porque antes de la fiesta tan a rctratarnos. ¿Cómo me
leo,
scñora Celial
Ca¡-r¡.-Bonita. Pqr-oN{¡.-Sólo te falta engordar seis o siete kilos. I)oRA.-Pucs eso sí no tiene remedio. (A Celia.) \ vted quería decirle una cosa. ?edirle un fator.
Cal,r¡.-Dime. P-.rrou¡.-No hacc ni diéndote
dos horas que llcgaste ¡- r'a están
pi-
cosas.
Dona,-Dicen que su papá tenía aquí
muchos amigos.
+r5
C¡rrr.-Sí. Dona.-Quc lo qucrían mucho, .
. virir
a la capital. Cr r-ln.-Es rcrdad.
Dona.-Ellos
Don¡..-El
dc quc se fuera
se aco¡darín dc ustecl, si les dicc quién
Crr,r.l.-Supongo que ,
antes
casc es quc
a
es.
sí.
ror-a rccibirme r-todavía
trabaj o.
)1o tengo
PAr-oNrA,-Ya Ie ofrccieron ur.ro. Don-q,-Pero no sin'c. No quiero dar cl:¡ses el ur-r3 cscuc_ la. particular. Quicro trabajar cn cl gobierno porque si sc em_ pieza,joven I se trabaja mucho, h"y nr.".rro, r- después una Pensrcrn.
Crrre.-¿Dc
merlera quc
.r,e
quieres trabaj:rr muchol rccomendarme con uno de los viejos amigos dc su pap,í... corl el licenciado Rrrnos, para ser precisa, que cs el jefe dc la oficina dc educacir,¡n... CELTA.-No veo ningún inconveniente. Parou,q.-Esta niña siempre consigue lo quc qurerc. Donn.-Pero, Palomita, si sov macstr¿, :Éor (lue no v()v
Don.q.-Sí. Y si r.rstcd quisieri
a trabajari
Cpr-l¡.-Tienc
en cuando.
sí
sería quc no nrc dijcras nada.
quc no, porque tcngo que hablarle
veZ
Puour.-(,4 Celia.) F,s la de la casa que parece sentir necesidad de hablarmc. Csr-l¡.-Dimc una cosa, Dora. jpor qué no te ha reco_ mendado don Fernandoi Él cs herniano dc mi padre y me_ rece tantas consideraciones como
i'iuido aquí todo estc tiempo.
vo. Tal yez más, porque
Don.l.-Nadie lo toma en cuenta
ha
decirlo.
Prl.olt..r.-])or supucsto que se enoja, pero no vo\' I qu!Jarme atluí. .-\di«is, Celia. Que tengas una hcrmosrt enlr.rista. (§ale Palonta pcn' la derecha y desde a¡len.fro le le t^;¿
/ecir.) Pájaro enjaulado. Dona.-Creo que mc cquiloqué. \ cillrd lott
Fernau.do segui,to
ie
Magdalena. Celia se ?one en pie ¡ lo ¡türa cr¡tt utt¡ ctri":id,:d ansios¿. Fernaldr¡ e¡ un hombre ?áli¿o ?ero nr' lelryi'..' l,t la inpresián de que !il cttt'ile está infla,rnald. Parcc¿ /t¡b!;r .regurú ¿e sí y de su inteligencid; ru z)a% et itcisit'd, preci:s: su nirada prr,fuula. Comienza a escasearle el pelo y tient l-; c¿r¿ rasur¿ld. Vi¡te uu¿ canisa blatqtrísima ,,' ctrl)ll4 ileir;, uu pantalón de ca¡intir cldro I zo?dtas ruuy ltiet luslratl"s' \-: ?drece cc?dz .le ?er¿er
el ,lrrntinio ,/e sí.)
Q¡¡¡.a.-;Q¡é tal, Fcrnandoi F¡nNaxr>o.-Querida sob¡ina. . . n.r lJ lr,ai.-) La abraza delicalatnente, sobrianteute, C¡r,ra.-Creo quc no debía habcr llegaclo tan de impro (
. pues no sé ,rlur. tu",r. p..-
porque. .
lc succderí c-so. Don Fcrnando ", l:r:.n"U ( Tít P¡lr,»t,t !r,:e ¡¡¡j¡.o signilicatiyantente 1t a Celie.) +r6
esoi
Don.q.-No lc diga usted así, sc er-roja mucho.
á¡f¿ -'e al,re ¿e ?ar eil. ?dr
Palomal
pa¡-6¡a¡.-Io mejor
Cr:1,r..r.-jPor quc dice usted
P.rr,ou,r.-Iis ulla nancra mu¡' b<¡nita dc
(Carte a la ?uerfd de la ixquierda \ antet de que llegue.
rezón.
p¡1,6¡1¡.-psto.r. harta de que rne digas Palomita. Doxe.-( Alegr:e.) jY crimo quicrc que le diga i
DoRA.-Eso
Q¡¡.¡1.-;'l'i1 1o quie rcs? Dr,rxr.-/D¿ ruen,,ric,) Mucho, doña Nlagdllcir:. : :l ::.:" siJo -
FrRxasoo.-
( Settt,iulc,se.
)
Llegas a
tu
c;sa
+I'
C¡ur,-Fs rcrdad. I rrraNoo.-¿Cómo cstá tu familiai
tenía más horas dc dcscanso, con Lrtl solo hijo y sin obligaciones espccialcs para con nadie. Fens.rro<¡.-Pero ahora, a pesar dc las obligaciones y de lcs Ccs hijos, eres feliz.
CELTA.-Bien, muchas gracias. P6pN4N¡6.-:Tus hijosi
cEr.rA.-Bien.
P¡¡¡¡¡p6.-;Tu madrei Cr¡,r¡.-Con una salud cxtr¡ordinaria p¿rá su edad. f¡¡¡r¡¡¡¡6.-Gran mujer, tu madrc. óomo pocas.
cha ir-rteligencia, mncha actiridad. .
\I.rc»s¡-rNn.-Sí, me
trilu_
.
antes.
Estáru sentadar cerco, Magdalena
le acaricia la ntano.)
CELTA.-Es ve¡dad.
(
Crr-r¡.-Yo no lamento tencrlos. Es maravilloso llcgar
r-iolenta.
Doua.-( Atn,.ble. ) Sí, don Fcrnando. FrnN.qw»o.-Ese r-cstido tienc las mangas muy cortas, lVfag-
dalena.
l\z[¡6¡4¡¿¡¡.-Así sc usan. PBp¡¡¡¡6.-§o me gustan. Doxa.-( Mh.ándoselas,) Son muy bonitas. fp¡¡a¡¡6.-Lo que más rne alegra, Cciia, aparte de tc_ nerte aquí, es sabe¡ que de nuevo ticnes a tu familia consti_ tuída. CEr,ra.- -Desde hrce tres ¡ños, Fen¡¡¡N»o.-Me preocupaba pensar en sola
v con un hijo.
ti como una mu_
CFrLrA.-Vi\'ía con mi madre, p¡pa¡¡¡6.-No tiene importencia, en csc caso. La posi_ ción dc la rnujer sola es dudása. Los hombrcs qoe l" ctno_ ccn no saben quó clase dc mujer es hasta quc h tratan a fondo, l:r ponen a prueba. Celr-q.-Si eso pasó alguna r.cz, no me di cuenta. Frnr..rroo.-En tu situación es lo menos que podías haber .i:cho.
Ce¡-1.c.-No disinulaba intencionalmente. P¡p¡.q¡pe.- ¡Cómo rivíasl Cr.¡.r.r.--I'r:rbajando igual que rhora. Sólo quc entonccs
+r!
dijo
Mecu¡rr¡¡1.-Es muy
FERNANDo.-Es natural. La gentc se mucr.c por la vio_ lencia. Los que no son violentos, no ticnen fuerza para nada. Dora, ¿no tc.parecc que te vestiste un poco anticipadamente l
jer
1o
Frxs.cxoo.-Magdalena tiene tnuchos debercs quc cumplir, pero le han hecho falta los hijos. \I.cc»ar,rNa.-No me quejo, tcngo a Dorita. a
y saber que están allí. FrnxrNoo.- jQué clasc de persona cs tu marido? CnLrA.-Es un hombrc inteligente, ir-ttc¡csado en su Profcsión.,. crco que dcntro de algunos airos hará algo impor-
mi
casa
tantc cn clla. FsnN¿Nno.- iQué profesión tienel C¡r.ra.-Se dedica a 1a literatura, da clases, quicre ser fi' 1ólogo.
Fpr.NaNno.-Eso no da dinero. Crr-¡a,.-Cuando se estudia algo, no se pier-rsa en eso. M,qc¡er-rNa.-Se estudia por vocación, ¿verdad? FrnNrNoo.-La vocación es como la inspiración, o como l¡
neurastenia; demasiado circunstancial v provocada Para sobre' POnCrSe a otras cosas. Crlu.-Probablemente. Ha¡' que tomarla como un hecho' FrnN¡¡oo.-Pcnsando en ti, tarnbién he imaginado que tendrías otro problema. El de tu hijo mavor. Es difícil que sc enticnd¿ con tu segundo csposo; mie¡ttras mlís ticmpo pase,
difícil será. C¡r.¡¡.-Él sabc tratar ¿ los niños. Mi hijo lo adora. Mlcoar-¡:x¡.-Se pueclc qucrcr e uu niño como un hijo, aunque no lo sea. F¡¿¡rN¡Noo.-No lo creo así. CrlI¡.-Por lo menos, puede tr:rtárscle con cariño' F¡rN¡Noo,-Dota, haztnc el far-or dc traernc mis ciga::<¡s. No importa que txrdcs un Poco.
m;ís
p1.¡¡,r.-Con mucho gusto. (Sale.)
+t9
Fr:nN.qN»<¡.-De mancm quc, salr-ados todos lus problcn-ras posibles, tu vida es perfccta l por cso has dccidido tomartc estas tacacioncs cn compairía dc tu far¡ilia l cn la ticrra dondc nacieron tus alltepasados.
Ctr,r,r.-(§aria.
) Te
equivocas.
Fsnx¡N»o.-:No cs perfect¿ tu rid,r? Crlrn.--Crsi pcrfcct¡. Pcro no hc r-cnido dc t.acacioncs, cs un viaje de ncgocios. Hc reniclo ¡ notificarte algo. (Maglaleud ?oue las ilL¡ilús eil el h,,¡t|¡rr,
Fr.nsrsoo.-No tcngo cuentas quc drrtc. Q¡¡.¡.1.-;§e has sumado las ganarrci;rsi iO, sirnplerncnte,
nunc¿ l¡s huboi
. Frns.qN»o.-Sí las hubo, pero me hc scrvido dc cllas para mi sueldo de administrador. CrLl.c.-Para nr í es interesantc sabcrlo, porque supongo
cobrar
que para vender serí necesario irrfo¡mar dc cllas al comprador. :Cu:into calculas tú que sean las ganancias mensualcsl
Frnrnroo.-Tc he dicho que no llcro sumas exrctas. Cur.ra.-:Ni un cálculo gencrnli
le tu ntdrirlo.)
F¡nN¡N»<-r.-Magdalena, hacc dcrrrasi¡¡do c¡lor para abre-
I,I.,r<;nlr.rxn.-No pucdcs cxigirlc tarrto. FlinN,qrr¡o.-Sí puedc, pcro no Io tcrrgo.
zarsc. Además, mc arrugas l¡ caurisr¡, (-4 Celia,) Habla dc ulla rcz. No r¡uicro aprcsurrrtc, pcro tcngo quc ir al banco r' no me gustarír llcgar dcmasiado tarde. C¡:r-r,r.-Si prcfiercs quc sca después, con urrís crlma. . . I'rinN¡,Noo.-Prefiero que sca ahora. Cn¡,¡1,-\/engo a vcnderlo todo. Las dos huertrs y Ia casa.
F¡nNlN»o.-
( Pauta.
)
Ticnes dcrecho.
M¿.c»¡r,pNr.-(Mooiendo la cabeza.) ¡Cómo puede
ser!
¡6d6. Q5¡¡¡.-[5 FrnN¡,Nno.-Necesitas mucho el dincro, supongo.
C¡¡-r¡.-Neccsito quc produzca cl capital quc tengo 1' dcl
quc no percibo un solo centavo. FrRNr¡»o.-Espero quc erl cso no r.¡rl'a cnvuclto nir-rgún rcproche a rni labor dc administrador. Cer-rn.-No sé qué decirtc. No la conozco. Mnc»nr,uu..r,-Cclia, :qué cstris diciéndolc a Fcntandoi CELTA.-No esto¡' diciéndr¡lc nada. l'r:nxnr»o,-En cfccto, no hc sido un bucn administrador.
M..rcolr.rNl.--(l'r,niétlr,se F
crnendo
l¿s
nt
nrrs s¡rltre l¿
cara,) iAy,
F¡nNnN»o.-No hc sum¡do los sucldr¡s de los mozos, ni
l
vcntlcrlo
trldr¡?
Cr:r.rn.-Sí. \f,r<;oar-r:N.,r.-;También csta cesa en que viyimosi
Cr'¡.¡o.-¡o sé. No cstov complctentcntc decidid¡. Mar;olr.¡N¡.-Tu padrc nunca le hubicra hccho cso a Fcrnando; cre su hermano prcferido. CELTA.-Lo supongo, pero llcgado el caso. . . Fr:nxnxpo.-Tiene raz.ón Cclia; mi hcrmanó, llcgado el csso- . . M.c()DALENA.-Cr¡uro cuando tuvimos que vcnirnos, pcro !:o no lo dccidió él solo. Fuc tu madrc Ia que. . .
Cr:1,r..r.-Sí. Estov al tanto. JI.lco-ql.rNa.-Pcro no sabcs córno f ue. Quiérr srbc lo .:uc tc h¡brín cont¡do. C¡:r,r.q.-No nle lo contaron, 1o recucrdo.
::
M,rco.cI,cN.c.-¡Pcro no puedes hacernos eso! Estov scg.t-
dc quc tu madrc... Cclia, yo no tengo ganas de hablar ::r:.! .le clla ni dc n¡die. C¡l.rq.-Te aclero que n¡da h¿ tcnido que vcr con esto.
FrnxrN»o.-¿Lo decidistc
Cr:r.r.r.-;Iil riajcl
!
cl
dinero c¡uc sc gilsta en composturas, ni hc contado l¿s frut¡s ouc sc pudren cn cl suelo porquc cl viento lts tira antes Je ,¡ue ¡rr:tclurcn. Hc sido un ¡rósimo administr¡dor. Ctlr^.-¡o te hc pcdido cucntas. 420
II.,rr;u.{r,r.:Ne.-Iintonccs, jrrs
F¡.nx..rroo.-La
:::
rrípidamentc?
Sí. vcnta,
Cel.r^.-¡r unr idea
rnuy vicja, pero no quería hacerlo
cl ínimo dc vc¡rir, ni tenía tiempo. Ft-tr,rxlro.-:l)or quó dccidistc cl viajc tru rápitlameutcl Crrr.r.-Si estás penslndo gue fue por urgencia de diescritr¡ \, l1o rnc hacír
+2t
ncro, tc cquivocas. IJn¡ r,cnt¡ llera ticmpo ¡, yo 1o sé. Quise descansar, tomar unas vacaciones, habiar con otras gentes.
Mncue¡-e¡r.-Si no ticnes urgencia de dinero, ¡no vendas nadal
CELTA.-Es difícil complacertc. Mac»¡r-rN.r.-Puedo pedirtc por mí, ahora misuro.. . FrnxrN»o.-Voy a hacerte una súplica, Magdalena. Sal un rnomento y no vuelvas, hasta quc vo tc ilamc. No quiero que intervengás en esto. Se hará lo que decidarnos Celia y ¡'o. Ce
¡-ra,-No
quisiera ofenderla.
Meco¿r,uN.t.-(Saliendo ?or ld ?uert¿ ,/e la izquierda.)
Nunca me ofcndo. iQué catástrofc! iQué catástrofe! Frnxrxuo.-Por supuesto que picnsas darme un poder
p¡ra quc mc haga cargo dc todo.
cEr,rA._N0.
Fr:nNnr»o.-iVas
r
vcndcr tú mislnal
Crr-rr.-No creo. FrnN¡N»o.-Ni yo te lo aconscjaríar porlue
como tienes
quc volvcr pronto a tu casa te ofrecerían menos. FnnNaN»o.-Las mujeres con ma¡ido joven no deben dejarlo solo tanto ticmpo. Es peligroso. ¿Síl
FrnurNr¡o.-En una ausencia,
succdc cualquier cosa. Creo quc hasta un profcsor de literatura tendría tentaciones. No 1o dcjes solo. CrLr¿.-Es un consejo intcrcsautc.
F¡:nNrNoo.-Cuando la felicidad lle ga tarde a
nuestras
vidas, así, un poco dc segunda mano, es mejor cuidarla. Podría no hrbcr otra oportunidad. Ils difícil alcanzar un éxito como el tllvo en esc tcrreno; tuviste suerte.
C¡r,r,r.-Así
1o creo.
F¡:nxaNuo.-No cualquier honrbre se casa con una mujcr divcrcirdrr; 1'o, por mi ¡xrtc,,. Mc he quedado con una curiosidad. ¿Cómo reaccionó tu madre ante tu divorcio?
C¡r-rl.-Turo
CEr,rA,-^'\licnir:is txnto. r'olvamos adondc cstábamos. Mc
nrsgun!::s:..::b::. d:¡:: un pcdcr r Ío te dije que no. \I: Ci::-.:: :::::l:r:ciía reni.r r-o mi,.ma. \- estu\-e de acuerdo. F:nsr.ry1.-§;. C:I-ri.-T.:reo pen:aJo darle cl podcr a un tío dc mi =:i:.. [,e e<¡;bí al respecto v aceptó. Fens+-¡6.- ¡Cuándo hiciste esoi Cel¡.r.-Hace unos seis meses; no creo que se haya arre:entido.
Frns.rxoo.-Eso quiere de_cir que hace scis meses que toda gente piensa que sov un ladrtin. Fue un¿ gran imprudenct3 tul'a. Crr.rr.-Lc dijc t¡uc a caus¡ dc tu cstado de salud, no cu3ría molcstartc,
Frnx.qxoo.-(Agitado.) iQué
que soportarlo.
Fr:nx.qroo.-Hrbrá sido mlrv duro todo ese desprestigio r.rr:i u¡re pcrsona tan antallte de la rectitud. . .
sabes
riiuli
C¡rrl.-Poca
cELrA._Es verdad.
Crr.rr.-
Cr:;t.-(Pausa.) ¿T'e queda algur'¡a otra curiosidadl FrR\.\\Do.-\o sabrí:r dccírtelo.
tú de mi
estado de
Io que tía Paloma me ha escrito. Que molestan demasiado las cosas. . .
cosa,
:s:ás nervioso, quc
tc
Frnx.4.Nuo.-No tienes por qué creerla. Es una vieja. de más de setenta años difícilmcntc cstá en su :'.;icio. Es ella la que tiene una susceptibilidad tan repugnan:3, que apenas puede hablársele. La pobre Magdalena. . .
Urr nlujcr
CELTA.-Ya las he oído habiar.
FrnxnNoo.-Te
habrás dado cuenta de quc casi no está
r-:r su j uicio.
CEI-rA.-A mí no me pareció así. FrnxrN»o.-¡Pucde saberse qué cs lo quc te parcciól
a.t,o.-Que (Fernantlo
cstá en su juicio.
saca
el pañuelo y
la frente.) terrible. ., har. dírs así. Da se seca
fsp¡¡a¡¡6.-Hacc un c¿rlor .. (Celia lo mira tranquila.) ¿De manera :::js decidida a ponerme en ¡idículol -:::cha sed.
que
C¡Lr.c.-- jPor lo del podcr?
FrRslr¡uo.-I)c
eso se
tlrta,
ino?
423
Q¡¡¡.a.-f
s16y dccidida
a
no causartc ni una
molestia
más.
FrnNaNpo.-Es utra nancra mul' cxtrañ¡ de favorecermc.
Cru¡,-No
tengo otra.
FrnNlNoo.-Eres una muier tranquila. Estoy viendo tu fclicidacl no ha sido suerte solameutc. C¡:l,r¡.-Nacla ticnc quc rer un:l cosa con la otra.
FrnN¡N»o,-Te
pareces
a tu
que
r.nadre.
Cnr.rA.-Sol' su hija.
FrnNrNoo.-¡Cuándo vas i¡ 1-cr a tu panelltc Í Crir,¡.r.-Hor'.., o mañan¡. Fr,rNrNuo.-jN¡cla tc h¡rá c¡nrl¡iar de opinión clue
lulc \'¿'r'a. No dcbo
Ift:gar tardc,
CELTA.-No quicro pcrjudicarte. FrnNaNno.-(Con un rlejo de violencia.) No, ;r,erdadi (Se pone en
?ie,)
Hacc mucho calor.
Crr,ll.-¿Quicrcs
que llame a Magdalena para que te trai-
ga un veso de agua?
FBnNrNoo.-No quiero verla. (Celia lo tuira atertlanún-
te.) iQué?
¿Tengo algo dc particulari
cELrA._No. F¡xNn¡¡oo.-§ólo que estov lnu)- r'icjo para mi edad, bas-
tante calvo, y ¡ro veo bien.
Crue.-Tampoco )'o
r.co bicu.
F»nN¿N»o.-Soulos una famili¿ dc miopcs. (Llego hattt la puerta conto si 1a fuera a :alir.) I'crmítemc fclicitarte de nuc\-o.
Cu.r.r.-¡Pol
quóI
FrnN.,rN»o.-P<¡r todo. ,\hore vco r¡uc sabcs haccr bicn las
cosas.
CELTA.-No crcas, tardo demasiado cn dccidirtne a
ha-
ce¡las. E,s una Lístima.
!'¡p1.¡¡¡¡,6.-(Cerca de la ventana.) Afucra hay un irnposiblc.
lln
:rtx'hc v pas.rrse +2+
rnundo. Cr:r-r.r,__ ¡Cuál fue i
FrRs.cxoo.-Pensaba cn r,rn jucz. qrrc nrctía err la c,ircel a todos los que no podírn cohechrrlo. I'lso cs lo pcor: privar Je la libertad a alguien. C¡:¡.rr.-It)s difícil hrcer bucn uso dc la libe rt¡d. l'rnN¡N»o.-I,ln «rdo cilso, ss prcciso tenerle. Iis prcci*>. (Señalanlo a l.a rentana.) No hrr.v n¡d¡ ¡1,ís fco, r.r.r;is humillante que urla rcjt. (P..us,t,) Es dccir, sí hl: krs compirñcros de prisi
Crr-¡,r,-Vas :r llcgrrr t.rrclc. Fnrl.qs»o.-( -1n,irg,;nette.) Gr.rci¡s 1:or
i
cELrA._No. l'¡inN¡^-oo,-Iint<¡nccs scrá rnejor
en cuál es la peor de las infamirs que pucden hrccrsc cn el
sol
cstos lugarcs calurosos dcbcría
uno trabajrr dc
cl día durnricudo. (Pausa,)
Estaba pcnsarldg
rnelo;
rcconrentlár-
adiós.
crur._.{diós.
Fcrn¡ndt¡.
(Sale Fcrnando- lntn¿iidtarueilte a?(trec¿ la tírt Palo»ta.)
Prro»r.r.-¡Se fuei Crr,r.r.-¡Tía Palom¡l iQué mal rato Ic hc dacio! Perou,t,-(Iiger,:.) La l¡enganz.l es por 1o gcncral
un:r
baj eza.
Crr-r.r.-¿Por quién lo dicc P,rlori¡r,-Por mí.
trstcdi
(Celia ríe siu gcnas.)
Cr:l.re.-Sí, cs una bajcza, Peroure.-¡Me siento tan optimiste! ilis
tln difícil
te-
ner un sentimicnto y guardarlo con cl recato que merece! I'cor :oCer'ía si es un sentimiento ma1o. C¡¡-n.-No creo que usted lo terrga. P.llonr.-Te cquivocas. Desde niña, siempre que mc pceaban, mordía y pateaba hasta llegar a creer que l:r que habír ]::cho mís d:rño era 'r-o, v luego mc reíe. CEr,lA.-Eso es lo que hace l:r mavor partc de la gente. Plr.oNr-q,-Har. seres que rlacen pare scr m¿ltratados. Cla:D que se veng¡n fastidi¿ndo a los que no puedcn defenderse, iEro no por cso cs menos rcgocijlntc el hccho dc quc sufr:rr"r : su rcz. [stov contentr. 425
C¡lrl.-En contenta en esta (
este momento es ustcd Ia única que se siente casa.
lralia.
Entra Dora, rápidatnente.)
Doxi.,-(Alegre.)
¿Se
Cr¡-1..r.-La terdad es que es prcciosa.
fuc don
Fernando?
(Magdalena, gue viene ntuy agird¿a,)
M.qcolrnNr.-¡Se fue sin cigarros! P¡r-ou¡,.-Comprará unos erl ]a c¡lle. No te desesperes. Mrcoer,aN¡.-(\'endo y t'inienrlr, ?o¡'l¿ erceila.) No estoy desesperada. No esto)- desesperade. Dorita, ¿dónde están mi aguja y mi dedall tengo que arreglarte las mangas. Don¡..-Así están bien. M¡.c»lr-¡Nn.-Yo oíste 1o quc dijo don Fernando. Don¡,-Pues sí, pero. . .
Mlc¡er-¡l¡r.-No hay pero
que valga.
(Dora le da la aguja y el dedal que ettáru ¡obre la
me¡a.
Se ¡ienra a su lado,)
DoRA.-No me pique usted, doña Magdalena. iQuiere que le traiga sus anteojosl Meconr-rNl.-No. Veo muy bien. PALoMA.-En mis tiempos nunca usábamos la manga más ar¡iba del codo.
Mrc¡¡mNl.-Sus
tiempos ya pasaron.
Plr-ovrl.-¿Entonces para qué sc las componesl Déjala como está
y
se acabó.
Mrc»e¿rNr.-Usted sabe bien por qué. Porque soy una mujer que odia los pleitos. Detesto las situaciones violentas )' no me gusta tener discusiones con nadie. Crr-r¡.-Creo que estás nerviosa. Macoar.ru.-Tampoco suelo ponerme nerviosa.
Done.-¡Ay! M¡coar,rxr.-No te estás quieta. Pl¡,olrn.-Ercs la persona más irritable que he conocido. M.rco¡r,rNr.-La ir¡itable es usted. (A Celia.) Figúrate que se enfurecc cada vez que digo que voy a vender la lámPara.
+26
P.,rr-ow¡.-8.;r límpara es una obra de arte que trajeron mis padres dc su liaje dc lurra tlc micl, curndo f ucrotl ¡
\I.rco,rr-rN¿.-Vale un dineral, y adcmás tlo sin-c para n¡da. No prendc. Cr¡,¡1.-Eso podría arrcglarse. Mecolr-rNl.-Pcro h¡bría quc ponerle muchos focos 1'
Iuz, No
gastaríamos dcmasiad¿ tanto.
nos nlcanza
cl
ditrcro
para
Per-ou¡.-Hay un detalle quc has pasado por alto y es lo quc hav en csta casa, es de
quc la lámpara, conlo todo Celia.
M¡c»er-rrt.-(Paasa.) Tía
Paloma, vaya usted a su cuar-
tovacuésteseedonnir.
PAloMA,-Me roy, porque no mc gusta estar donde no sol' grata. Pero no voy a dormir, vamos al cinc estr tarde, :rerdad, Celia? CELTA,-De acuerdo. (Pausa mu1 mo,letra.)
MecpelrNl.-Ya
estís lista, Dora.
Done.-Ya me yoy a la fotografía, nadr m:ís quc primero me peinaré y me pondré polvo, ¿Mc qucdan bien cstos zaPstcs?
Mrcoer-rNa.-Un poco alto el tacón. Me d¿ la idea de que no puedes caminar bien. Don¡.-Sí puedo, y correr y todo lo que quicra. Bueno. (Sale Dora, por la izguierda. Dllas ¡e miran. Magdaletta :¿ ?one de pie.) M¡corr-rNl.-Antes de ir a la fiesta voy a terminar un ,'.siido de niña que me encargaron. (Va a buscarlo en algirt .tpr de l,t sala.) Ahora que no está Fernando. CE¡,r.,r.-:No sabe que coses ajeno? (Magdalena niega.)
D.bcría
saberlo.
\Iec¡er.rrl.-No va)'as ¡ decírselo. (Pausa. A lt l!orr.) ¡Av, Celia, no sé para qué viniste!
punto
427
Crl,¡¡.-Ya lo sal¡es. \,t.46¡¡¡1,¡.*¡.-I)cro
cs
(}rc lto cs Llosilrlc. Nadic pucde
tan cruel con los demás. Si \.elldes tus propiedades, nos moriremos de hamL.¡e. Cr¡,r¡.- Yo tralrajo para vivir. Si no rcndo lo nrío parl que nstedcs vir,:rn, scrír ct¡rno si trubajara pam ustedcs. Í la sola idea ¡esulta absu¡da. Adcnr:ís es algo ).a hccho; hace cu;rtro airos que trab:rjo, o sea quc trabajo.para ustcdes. Todos los esfue¡zos que he tenido quc heccr han sido parl ustedcs. Por ustedes estuve trabrja¡rdo hasta el último díi dc nli cmbarazo, por ustedcs ro t.:rgo ticmpo dc cducar a mis hijos. Mlcorr.¡:N,r.-Que te sostenga tu marido. C¡l¡e,-Íisos son asuntos paiticuleres míos, pero l.e quc ne lo has dicho, me das dcrecho a preguntarte por qué i ti no te sostiene el tu¡-o. Mac»¡r¡Na.-Esc no importa ;rhora, Celia, ¿no quieres ponerte un poco cn nuestro jug:rri Somos un prr de viejos, )'a cunrplimos los cincucntr. 'l'u padrc dedicó su juventud a darle a Fernando, que era su hernrano rncnor, las mejorcs cosas; pero no le dio una carrera, ni siquicra ur-r oficio. Crr-ra.-Tcngo entendido que Fernando cmpezó a estu-
diar
dos profesiones
;,
las abandonó.
Mncoer-nxl.-Por falta de energía de tu padre, que no supo acostumbrarlo al trabajo, Si no tcnía rrccesidades, ;córno
iba a querer trabajrri
Cr:r,¡e.-Nadic nacc con una vocación extraordinaria p¡ra el trabajo.
|¡r[¡6p¡¡¡¡¡.-Jú cres diferente. Desde rnuy joven aprendiste a conocer el valor del dine¡o y te ingeniaste para ganarIo. Tú eres ¡nís fuertc. CELTA.-No so/; r1o quiero ser más fue¡te. \r[¡6¡¡¡,8¡¡.-Es quc nosotros lo necesitamos tanto. No se hasta qué punto es una injusticia, ni sé nada. Sólo sé que tiene que haber dinero en una casa, l'enga de donde vinieie.
Cr:r.¡r.-No me
hagas esto, porque me obligas a represen-
tar cl papel del verdugo .y no me gusta; lo he hecho dém¡siad¡s vcces. No q¡iero se¡ Cclia la dura, Ia arbitraria, la que h:c. su voluntad, pasando por encima dc los deser¡s cle - su +2s
h quc diccn que ocasionó con un disgusto la muerte dc su p:rdre, la .1uc hacc lo c¡ue quicrc, cuando quicre. )'o rcnía para se r justa, ntcilirh, tranquila; para rt:claurar sin lio-
madrc, scr
1o (iuc crit rnío, r'¡11¡¡¡¿ u-re oblig.rs a hacci todo lo que t¡ucrí.r cr it;rr,
lenci¡
\I¡cu,rr.r,.¡r,r.-
jNo tc
inrportirrrí
nlde dc io que
vo
diga i
cr¡.1t._No.
M¡c»¡r,¡x.r.-:Ni quc llore, ni que supliquel
( Celia
niega. Magtlalena, soltan,/r, la cctstura.) \4ira, la tcrcl:rd quc sucedc en estx c:¡sa cs quc, . . (
r-le
lo
Eutra Dr,ra, tan arre.glada c()r/to ?ue¿e estnlo,,)
Don.t.-¡Qué tali ¡Córno
saldró cn
cl rctretoi Yo
crco
que bicn.
Mlco-qr,¡¡¡¡.-Dcmasiado polvo.
l)e¡a,-[¡¡¡6nccs los vcré a usted ¡- a don ]'crn¡ndo c¡r lr fiestr. (l Celia.) ;Y ustcdi ¡No vr? CFLIA.-No sé si mc dar:i ticmpo rlc clcscrns¡r un poco )'
de mend¡r a busc:rr mi cquipaje.
Dona.-Espero que lava. Hasta lucgo. (Sale Dorar 2or la ix,¡rier'ia, fr'u,/r,.) Crr-rn,-¿Qué es k> que ibas :r decirmcl Macoar,nu.-Nadr, l'a nada. I'engo mucha prisa. Vov e ir al banco x busc¡r e Fer¡rrndo. No mc frltr rnucho, dcspués de todo.
lr¡
(Magrlalena ilgue cosienio, Cclia, callrtda, uercirr¡a, EnDrtt'a ?or ¿arile ha salido.)
DoRA.-Scñora Celia, al salir mc cncontré con'urr seiror :u,: la busca, dice que se llalne I ¡¡ncisco Marín. Ceud..-(Muy descoucertada.) iQuiénl Don..\.-Francisco M¡rír-r. Ils trl ¡¡rucheclro eu:rpo r jo1'3n. dc I'erss muv gu'¡po.
\I.rcorr-liNl,-( A Celit.) jI¡r conoccs: Cr.t.tt.-(A Dora.) Dile que no esto\'. Don-l.-Ya le dije que
cstaba nstc.1.
429
Qp¡,1¡.-fl¡lsnces dile que r1o puedo recibirlo. l)onn.-(Salien,lo.) Lc diré r¡uc no pucde rccibirlo,
que
ruelva ¡nás tarde.
Crue,-(Quedo, pr1¡Iil¿ Dora ha salilo,) No, que
no
vuelra.
Mrcper.rxe.-iPor qué no quisiste vcrlol Cr.t-tt.-(Con agitacié,n.) Porque estoy cansada,
cansada
dc habla¡ tanto, de vir.ir tanto, del r.iajc, de habcr venido aquí, de habcr tenido que decirles todo eso, de tener que seguir adclante, de habcr necido. . , Mien.tra¡
Crlit
lt,¿1¡l¿
t; Maglalent colc,
\Irc».rlrx¡.-No
.I'EI,oN
AC-I'O SEGUNDO
El mistno día, al atardecer, La ercena vací,a, Poco después entra.u de la calle Dora y Magdalena. Dora, como en la mañana, Magdalena coru un aestido discrela.
¡visar.
M,rcolr,ax-q.-Pcro no fue a teníe ganas. Ar-er nre Io
diploma?
Dou.-No
ficsta
)' me consta
que
lo he visto tan in-
ron muchoi
hasta hubo un comen-
tario.
Dou.-¿Qué fuel
\t[¡6¡¡1-¡¡¡.-§0 ticnc importancia. Don.+.-Póngase conte¡lta, por favor. Este cs uno de los mejores días, v usted ni siquiera tiene garas de hablar.
se
lo dijo.
sc ponga usted así.
M¡c»a¡-ENl,-La culpa de todo la tiene Celia. Done.-No puede ser. Hace dos semanas pavó lo Mrc»rrpr.¡r.-¿Pues quién la tiene entoncesl
r
mismo'
I)oRA._Su enfennedad, Meco.qr-BN,\.-Si te casas, fíjate muy bien en que no
vaya
pasartc nada así.
Donn.-Sí.
Sólo que te acercaste demasiado a la
orilla del tabiado y sc tc vieron las piernas. l)oxl,.-( Riendo.) ¿Sí? ¡Qué gracioso! ¿Y se me vie-
+30
h
pocas \-cccs
lo mismo que vo. DoRA.-Pero si el médico lc dijo. . . M.rcu¡r-rur.-Hace nás de dos años que
habido
Mac»a¡,r:N¡.-Había mucha gentc. Dou.-¡Y qué tal me yeí¿ cuando pasé a recoger mi
\r[a6p6¡6¡¡.-Bastante, Creo que
dijo;
sin
tcresado en a]go.
en la cscucla.
l\rl¡6¡4¡¡¡¡¡.-Bien.
podíamos seguir en la calle sin don Fer-
nalldo. Esto)' preocupndísiDu. DoRA.-No cs la primera vez que sale del banco
Dor¿.-Se habrá encont¡ado con algún arnigo. M¡co.tr-nr.¡r.-Dc eso precisamente tengo miedo. De los amigos. Ninguno lo estima de veras; porque, si fuera así, no s3rían capaces de acompañarlo en las cosas que lo perjudican. Don¡.-Con seguridad qur: no ha pasado nada. M.qcoer-rur,-Mira, Dorita, no me hagas tonta, tú crees
ctta el
Doxt.-(Alegre.) Ls la fiesta más bonita que hr
M4co¡r-rsr.-(Deiándose caer eil ilnt ttece¿or.t ) ¿Córno \'o! i tcncr gan,rs dc hablar con todo lo quc llclo cncima? I)onr.-Tantos planes que teníamos pera ho)'. . .
Mrco¡r,¡Ne.-Vé a quitarte
cse vestido antes de que lo
manches con alguna cosa.
lle
Dou.-Quiero tenerlo siento mu¡' bien con
puesto aunque sea
un rato
más.
é1.
MacorlrNn.-Lo peor de todo son estas cspcr¡s, cn
que
runcn. sc sabc lo que va a pasar, Tráeme el rcstidito, por fa'.'or, estrí cn mi rccámara. Por 1o nenos no perdcré el tiempo.
(Dora.eale por la izguierda
¡
¡'Jot¿ulen,¿ se ntece, cada
:'¿= má¡ nervio¡a. Regresa Dora después de
ut. momento.) +3r