Lo Blanco y negro en la persuación y negociación.
Una de las situaciones que afectan a las personas de manera más frecuente e intensa, es la de tener problemas o conflictos interpersonales en el trabajo. Cuáles son los conflictos más frecuentes, que los causa y cómo prevenirlos y resolverlos? Compañeras y compañeros, sigamos leyendo: El ámbito laboral es uno de los más sensibles en la vida de las personas. Y hay razones de peso para que sea así, pues el trabajo se relaciona con el sustento económico, el talento personal y las metas. Pensemos que una persona pasa más tiempo en promedio, en su trabajo trabajo a lo largo de su vida. Así, pues, trabajar es un evento altamente significativo y cualquier situación que amenace nuestra productividad o nuestro bienestar emocional, puede desestabilizarnos. Un conflicto es una situación de desacuerdo que encuentra resistencia para su resolución. Conviene señalar que desacuerdo no significa conflicto, pues un desacuerdo es una diferencia de puntos de vista, y lo que lo convierte en conflicto es la rigidez en las posiciones, que impide convenir o armonizar. En el mundo organizacional pueden presentarse situaciones de conflicto entre personas o grupos, y éstas pueden expresarse de manera evidente o permanecer latentes y ocultas. Es necesario develar las tension es existentes y abordarlas. En mi experiencia en estos casi cuatro años de gestión en la cartera de Trabajo y Conflictos, las perspectivas de quienes están en el conflicto, se resumen en tres situaciones causales: a)Conflictos por abuso de poder, b)Conflictos por competitividad y c)Conflictos por incumplimiento de funciones o bajo rendimiento. En muchos casos se producen quejas de abusos de poder de los jefes o entre los mismos compñaros lo cual genera rebeldía y tensiones locales. Otras veces, el que varias personas persigan la misma meta puede hacerlos chocar. Y también se dan casos en que los jefes se quejan de empleados desmotivados, perezosos o incumplidos que no cumplen las asignaciones o impiden el logro de las metas metas en el tiempo o en la forma ya establecidos. Debe entenderse que no siempre las causas del
conflicto son evidentes o están visibles, por lo que aplica bien la frase de Daniel Goleman:”Los problemas están donde uno los ve”. Las personas quieren tener y conservar un trabajo, destacar en él y resolver su situación de calidad y/o productividad, y es necesario evitar confrontaciones y elegir la mejor manera de relacionarse que nos es precisamente la imposición. Es por eso que para su servidor como alternativas más positivas están la negociación y la persuasión. La negociación es un mecanismo en el que cada parte en conflicto cede algo, y la persuasión consiste en motivar a la contraparte para que quiera asumir nuestro punto de vista a pesar de las resistencias. Veamos algunas recomendaciones puntuales para prevenir y resolver los conflictos: 1.- Aceptar las diferencias: Tenemos que entender que las personas no son iguales y que no están obligadas a complacerle. 2.- Negociar acuerdos: Hay que buscar los puntos en común y pregúntar si puede ceder un punto para ganar en otro. 3.- Clarificar funciones: Definir claramente el alcance y los límites del rol o posición laboral. Así, nadie invadirá los espacios de acción de otros. 4.- Despersonalizar los hechos: No se debe tomar como algo personal las conductas de los demás. Cada quien hace lo que estima conveniente a sus propósitos. 5.-Documentar acuerdos: Todo por escrito: El trazo más débil de un lápiz es más fuete que cualquier memoria. Hay que plasmar lo que es importante por escrito. Tener evidencias es mejor que no tenerlas. 6.- Respetar roles y reglas: Se debe de respetar las jerarquías profesionales, pues quien tiene un rango algo hizo para obtenerlo. Conocer el lugar que nos corresponde es una clave para relacionarse con éxito. 7.- Responsabilizarse: Se debe abandonar toda posición de víctima y pregúntarse que es lo que uno está haciendo para generar o mantener esta situación. 8.- Regular la confianza: Hay que evitar los excesos de confianza. Amistad y trabajo deben tener compartimientos distintos para no confundir las cosas. Aprender del error: Si uno se equivoca, hay que admítirlo con humildad y esforzarze en no repetir los errores. 9.- Reducir el estrés: Es importante reducir el estrés pues bajo tensión reaccionamos y la percepción de las situaciones tiende a alterarse.
Busquemos el punto divertido o relajado del trabajo e incluyamoslo cada día. Compñaros, compañeras consideremos estás sugerencias, hay que ponerlas en práctica y quizás en corto tiempo notaremos una mejoría en nuestro estado de ánimo pero sobre todo en nuestras relaciones laborales.
Las Breves de Blanco y Negro