La Huelga de 1954 vista desde la Historia Critica
La huelga de 1954 fue el acontecimiento social más importante de la vida nacional durante el siglo XX. Se venía gestando desde años atrás un descontento por parte de los trabajadores hondureños, especialmente los que laboraban en los campos bananeros, los cuales eran objeto de explotación por parte de las compañías multinacionales. La United Fruit Company y la Standard Fruit Company eran quienes controlaban el negocio de banano en Honduras, poseían un gran capital y enormes hectáreas de tierra, las cuales en su mayoría les habían sido otorgadas por los gobiernos en turno en pago de diferentes favores. Estas compañías obtenían jugosas utilidades, sin embargo el pago a los trabajadores era sumamente bajo, además se encontraban exentas de impuestos fiscales y municipales para la importación de maquinaria, herramientas, ganado, semillas, luz eléctrica, entre otros. Para 1954 ya había en el país diferentes grupos de formación Marxista, eso ayudo a generar conciencia en muchos trabajadores, y más adelante muchos de ellos tuvieron participación en la formación y conducción de Comités de Huelga. Los diferentes grupos se formaban en la clandestinidad debido a las políticas de terror y represión puestas por los diferentes gobiernos, en especial el de Tiburcio Carias Andino y Juan Manuel Manuel Gálvez. Gálvez. El día 1 de mayo de dicho año se convocó a huelga en el Parque Ramón Rosa de El Progreso, iniciativa que fue impulsada por los obreros de la construcción debido a los atropellos de los cuales eran objeto y de la forma despótica de mando de las compañías transnacionales. Iniciativa que trascendió a las demás dependencias de las compañías, incluso a otras empresas, teniendo como resultado la suma en masa de los obreros.
Las condiciones para la generalización de la huelga estaban dadas, no se podía esperar más. Y así se tomó rápida y muy sabiamente la decisión de declarar la huelga general en toda la zona de la Tela Railroad Company. Las demandas esenciales por parte de los trabajadores fueron aumentos salariales, pago en efectivo y no en cupones, jornada de ocho horas, cancelación de despidos injustificados, asistencia médica, cese a los malos tratos y derecho a organización sindical. Para el 7 de mayo ya se habían concentrado en la ciudad de El Progreso una gran cantidad de personas, entre obreros, estudiantes, maestros, mujeres, gran parte del pueblo ya se había sumado. Durante este proceso se erigió una organización intachable por parte de los obreros, la cual transcendió sobre las autoridades municipales, se habían formado cinco comités de huelga, y esto dio paso a la formación del Comité de Huelga General, quien fuere el máximo órgano de representación obrera, ante las multinacionales y el Estado, y el responsable de elaborar el Pliego de Peticiones el cual fue de 30 puntos, de los cuales habían dos demandas centrales una económica y otra social, y en muchos de los cuales había coincidencia entre los diferentes comités. La huelga general fue objeto de represión por parte de los cuerpos de seguridad del estado, además, las negociaciones entre obreros y patronos fue objeto de sabotaje y dilatorias por parte de estos últimos. La cual concluyo el 9 de julio del mismo año, dejando resultados a corto, mediano y largo plazo, entre las conquistas logradas estuvieron el surgimiento del movimiento sindical masivo y legal, la aprobación por parte del Estado de la legislación laboral, la modificación de las normas y practica relaciones obrero-patronales, los avances en la modernización del Estado. Por consiguiente, a la Huelga General de Mayo de 1954 hay que valorarla no por sus resultados inmediatos, sino por su transcendencia en la vida nacional de ayer, de hoy y del futuro.
La Huelga de 1954 vista desde la Historia Oficial
La huelga bananera, ¿Impulso obrero o maniqueo comunista? A principio del siglo XX se introduce en nuestro país el cultivo de bananos, labor que desarrollaron las compañías Norteamericanas United Fruit Company y la Standard
Fruit
Company,
ambas
compañías
con
plantaciones
en
los
departamentos de Cortés, Yoro, Colón y Atlántida. Durante los primeros años de dicho siglo Honduras ocupó posiciones privilegiadas en la exportación de esta fruta, obteniendo así el reconocimiento de muchas naciones consumidoras. Se abasteció en su mayoría a los Estados Unidos de América, creando rutas marítimas de nuestro país hasta New Orleans y los diferentes puertos importantes, también estas compañías fueron generadoras de miles de empleos anuales. Los gobiernos de Manuel Bonilla, Tiburcio Carias Andino y Juan Manuel Gálvez, fieles promotores del desarrollo económico de Honduras, en especial el gobierno reformista del último en mención, otorgaron concesiones a las compañías fruteras con el fin de aumentar el desarrollo de la nación. Al mismo tiempo en que Honduras atravesaba su auge en el comercio del banano, Guatemala se encontraba una crisis política histórica, con la formación de grupos comunistas que provenían desde el gobierno de Jacobo Arbenz Guzmán, dichos grupos se infiltrarían en la clase obrera hondureña, que, sin meditarlo convocó a los obreros a huelga general, no midiendo las graves consecuencias que esta posteriormente iba a tener en la economía nacional. Dicha convocatoria fue hecha el 1 de mayo de 1954, después de varios días de negociación con las compañías, y la intransigencia por parte del sector obrero manipulado por miembros del Partido Comunista y el Partido Democrático Revolucionario Hondureño, la huelga llego a su fin el 9 de julio del mismo año.
