Artefactos y márgenes de la filosofía Instrumentos y convivencias de la era presocrática Joaquín E. Meabe
Índice Advertencias …..................................................…….… 9 Abreviaturas ………….…………………….….................. 11 Tales, la criada y las aceitunas ..……………………...… 13 Anaximandro, el ápeiron y el monolito ………....... 19 Soplo divino ...…....................................................…… 25 Diógenes Laercio y la leyenda de Pitágoras ........... 29 Escenarios …….………................................................... 33 Esparta y las recomendaciones de Quilón .............. 37 Eunomía ........................................................................ 43 Cosmos y taxis ............................................................. 49 Sabios, ilustrados y filósofos ...................................... 55 El escudo de Aquiles y el tema de las dos ciudades ...................................................... 61 El tempus nosce de Pitaco ........................................... 67 El enigma de Bías ........................................................ 73 Las inconsecuencias de Periandro ........................... 81 Las cepas de Anacarsis Escita .................................... 93 La paradoja de Epiménides ..................................... 101 Misón y las bendiciones de la locura ..................... 107 Presciencia y preciencia ........................................... 115 El metrón de Cleóbulo ............................................. 121
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Dedico esta obra a la memoria de Oscar Portela 1950-2014 el gran poeta-filósofo a cuyo pedido escribí hace más de dos décadas estas notas para su ilustrado suplemento Arte y Pensamiento Corrientes, 31 de julio de 2014
Advertencia Estos ensayos edificados en los márgenes de la filosofía y que forman parte de una serie de trabajos publicados en el suplemento cultural del diario Época de Corrientes a instancias de su director, el sensible poeta Oscar Portela a quien nunca le han sido ajenos los problemas filosóficos, constituyen algo así como una búsqueda en el desván de la cultura de ciertas cosas olvidadas que pueden ayudarnos en una nueva etapa que todavía no sabemos muy bien a donde nos lleva. No hace falta decir lo que por cierto le deben a la estimulante obra de Jacques Derrida, de quien he tomado algo más que el título, y a las magistrales enseñanzas de Martin Heidegger, Leo Strauss, Eric Weil, Max Horkheimer, Theodor W. Adorno, Lon L. Fuller, Gilles Deleuze y Felix Guattari. Y, asimismo, tampoco debería omitir el silencioso estímulo que me ha proporcionado la lectura de los estudios de Ingemar Düring sobre Aristóteles y a las investigaciones de Ingram Bywater, Herman Diels, Walter Frank, Werner Jaeger, Rodolfo Mondolfo, Juan David García Bacca y Alfredo Llanos, sobre los presocráticos, Sócrates, Platón y, por cierto, el contenido de sus fuentes y testimonios que, en conjunto, hicieron posible en este descuidado nordeste argentino, verdadero cul de sac de Occidente, una silenciosa y fructífera compañía con el mundo clásico.
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En un ámbito cultural como el nuestro, tan escaso de ediciones críticas y versiones responsables de los textos griegos y latinos estas desordenadas reflexiones seguramente estarán pobladas de errores. A pesar de esos eventuales errores - que, desde ya, serán muchos para cualquier apasionado devoto de los estudios clásicos - he creído, no obstante, que valía la pena el intento de vincular con los orígenes la reflexión de los grandes temas inconclusos de este momento de clausura. En la mayoría de los casos esos temas remiten a olvidados fragmentos de los pensadores presocráticos en los que se conserva algo así como la matriz genética de los asuntos que quizás expresen lo crucial de la humanidad y lo que queda por afrontar en nuestro inmediato porvenir. Parafraseando a Martin Heidegger diría que en una época que cree haber consumado las posibilidades humanas y donde incluso se ha propuesto asilarse en la razón como si se tratara de un refugio al que, luego de ascender, el individuo se encierra arrojando con serena y firme despreocupación la escalera1, estos inconexos ensayos, aferrados a los desperdigados restos del gran naufragio de la cultura presocrática, constituyen una invitación inversa o, si se quiere, una suerte de tentación para escapar de aquel altillo y bajar al infierno del mundo real. Esta obra en realidad se asemeja a una suerte de máquina del tiempo que invita a recorrer algunas de las más intrincadas y fascinantes zonas de la geografía histórica del logos, asunto que de ordinario la razón instrumental -y por ende el ordenador o la inteligencia artificial y su Tactatus Logico-Philosophicus,§6.54: Er muss sozusagen die Leiter wegwerfen nachdem er auf ihr hinaufgestiegen ist.
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ingente catecismo de caja negra- no siempre es capaz de abordar debido, quizá, a otras urgencias que el actual frenesí civilizatorio impone atender. Al lector le cabe, por cierto, decidir si alcanzan o no a cumplir su audaz y desigual cometido. Corrientes, 15 de Diciembre de 1993
Abreviaturas DK: H. Diels – W. Kranz: Die Fragmente der Vorsokratiker. Berlín, I-III, 1989. (Se cita DK). DG: H. Diels:Doxographi Graeci. Berlín, 1958. (Se cita DG). DL: Dioegenis Laertii Vitae Philosophorum. Edición de Herbert S. Long, Oxford Clasical Texts. Oxford, 1964 (reimpresión de 1966). (Se cita DL)
