INTRODUCCIÓN Hoy en día, el lenguaje popular está lleno de falacias debido al poco conocimiento de lo que son estas.
Por otro otro lado lado alguna algunass person personas as las usan usan para para conven convencer cer,, confun confundir dir o conseguir algo, pero algunos o muchos de estos lo usan sin saber que están haciendo uso de las falacias, es por eso que buscamos conocer mas sobres estas formas de razonamiento ilógico.
Como principal problema en el presente trabajo de investigación es lograr el conocimiento de que son y cuales son los tipos de falacias que existen hoy en día.
Como objetivos para el presente trabajo tenemos que lograr el conocimiento amplio pero preciso de lo que son las falacias, identificar cuales son los tipos de falacias más comunes en tanto en la vida laboral como en la vida cotidiana.
La importancia de llegar a conocer e identificar lo que es una falacia radica en que una vez dominado este tema se puede poner en práctica tanto en la vida cotidiana como en la vida laboral
FALACIAS I. Defin finici ció ón: Son errores de razonamiento o en la argumentación. Para que un argumento sea considerado falacia, debe parecer correcto. Los argumentos que no engañan a nadie no son considerados falacias. Es decir, se reserva el término para aquellos argumentos que parecen correctos, pero que luego de un análisis cuidadoso resultan siendo incorrectos. De la manera en que los lógicos utilizan el término “falacia”, no designa a cualquier error o idea falsa, sino en errores típicos que surgen frecuentemente en el discurso ordinario y que tornan inválidos los argumentos en los cuales aparecen. Hay mucha muchass formas formas en las que puede puede equivoc equivocars arse e el razona razonamie miento nto,, muchos tipos de errores que se pueden cometer en argumento, cada falacia es un tipo de argumento incorrecto. En lógi lógica ca se acos acostu tumb mbra ra a rese reserva rvarr el term termin ino o “Fal “Falac acia ia”, ”, para para los los argumentos que, aun cuando son incorrectos, resultan persuasivos de manera psicológica. Algunos argumentos son incorrectos de forma tan obvia que no pueden convencer ni engañar a nadie; pero las falacias son peligrosas por que la mayoría de nosotros llegamos alguna vez a ser engañados por ellas.
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II. CLASIFICACIÓN 2.1. Formales Las falacias formales son razonamientos no válidos pero que a menudo se aceptan por su semejanza con formas válidas de razonamiento o inferencia. Se da un error que pasa inadvertido. Son aquellas que se cometen al elaborar un razonamiento, cuando no se cumplen las reglas lógicas de la deducción, que le dan validez. Estas son: Así, por ejemplo, a partir de dos premisas como "Si llueve, cojo el paraguas" y "Se da el caso que llueve", se puede concluir con validez formal que "Cojo el paraguas". Ahora bien, de las dos premisas: "Si llueve, cojo el paraguas" y "Cojo el paraguas", no puedo concluir con validez formal "Llueve": si he cogido el paraguas era porque lo llevaba a arreglar. Éste es un ejemplo de la falacia formal conocida como afirmación del consecuente.
2.1.1. Cuarto Término Se comete cuanto el término medio del silogismo es ambiguo, tiene doble significado; por lo cual el término medio se duplica. Todas las patas ponen huevos Todas las mesas tienen patas Todas las mesas ponen huevos
2.1.3. Mayor ilícito Cuando el termino mayor del silogismo tiene en la conclusión mayor extensión que la que tiene la premisa mayor. Todos los perros son mamíferos Ningún gato es perro Ningún gato es mamífero 3
2.1.4. Medio ilícito Cuando el termino medio no tiene en ninguna de las premisas cantidad universal. Todos los pinos son árboles Todos los eucaliptos son árboles Todos los eucaliptos son pinos
2.1.5. Menor ilícito Cuando el termino menor tiene en la conclusión mayor cantidad (cantidad universal) que en las premisas. Todos los hombres son seres racionales Todos los hombres son seres vivos Todos los seres vivos son seres racionales
2.1.6. Forzado o ilícito Cuando de dos premisas afirmativas, se infiere una conclusión negativa. Todo Chiclayano es peruano Algunos limeños son chiclayanos Ningún limeño es peruano
2.1.7. Falacia de las premisas exclusivas Cuando de dos premisas negativas se llega a una conclusión. Ningún futbolista es melancólico Algunos deportistas no son futbolistas Algunos deportistas no son melancólicos.
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2.1.8. Afirmación del consecuente Razonamiento que partiendo de un condicional (si p, entonces q) y dándose o afirmando el segundo o consecuente, se concluye p, que es el primero o el antecedente. Ejemplo: "Si llueve, cojo el paraguas; cojo el paraguas. Entonces, llueve". Esquema: [(p
q)
O esquema: q]
p
p q q ---------p
Es un argumento falaz que tiene semejanza con el argumento válido o regla de inferencia conocida como modus ponens o afirmación del antecedente: [(p
q)
p]
q
2.1.9. Negación del antecedente Razonamiento que partiendo de un condicional (si p, entonces q) y negando el primero, que es el antecedente, se concluye la negación q, que es el consecuente. Ejemplo: "Si llueve, cojo el paraguas; no llueve. Entonces, no cojo el paraguas". Esquema: [(p
q)
O esquema: ¬p ]
¬q
p q ¬p ---------¬q
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Es un argumento falaz que tiene semejanza con el argumento válido o regla de inferencia conocida como modus tollens o negación del consecuente: [(p
q)
2.1.10.
¬q]
¬p
Silogismo disyuntivo falaz
Razonamiento que partiendo de una disyunción y, como segunda premisa, se afirma uno de los dos componentes de la disyunción, se concluye la negación del otro componente. Ejemplo: "Te gusta la música o te gusta la lectura; te gusta la música. Entonces no te gusta la lectura". Esquema: [(p
q)
O esquema: p]
¬q
p q p ---------¬q
Es un argumento falaz que mantiene semejanza con el argumento válido o regla de inferencia conocida silogismo disyuntivo en lo que posada una disyunción es niega uno de los dos componente, lo cual implica que el otro es verdadero: [(p
q)
¬p ]
q
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3.1
FALACIAS NO FORMALES O DEL LENGUAJE COMÚN Son errores de razonamiento que se cometen por falta de atención en el tema o por la ambigüedad del uso del lenguaje. Estas falacias se clasifican a su vez en falacias de atingencia y falacias de ambigüedad Las falacias formales son razonamientos no válidos pero que a menudo se aceptan por su semejanza con formas válidas de razonamiento o inferencia. Se da un error que pasa inadvertido. Así, por ejemplo, a partir de dos premisas como "Si llueve, cojo el paraguas" y "Se da el caso que llueve", se puede concluir con validez formal que "Cojo el paraguas". Ahora bien, de las dos premisas: "Si llueve, cojo el paraguas" y "Cojo el paraguas", no puedo concluir con validez formal "Llueve": si he cogido el paraguas era porque lo llevaba a arreglar. Éste es un ejemplo de la falacia formal conocida como afirmación del consecuente.
1. FALACIAS DE ATINGENCIA O DE CONEXIÓN Cuando un argumento descansa en premisas que no son pertinentes para su conclusión, o, en otras palabras, cuando la conclusión a la que se llega no proviene de las premisas señaladas, pero se vuelven “convincentes”, porque debido a la multifuncionalidad y emotividad del lenguaje, se logra una conexión psicológica entre las premisas y la conclusión como válida a pesar de que no proviene de esas premisas.
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Este tipo de Falacias se divide en: a) Ignorato Elenchi. Ignorancia de Asunto. Conclusión Inatingente. Falacia de “eludir la cuestión”. Consiste en probar otra cosa diferente de la que se cuestiona. Tradicionalmente se la conocía como Ignoratio elenchi o elusión del asunto (del griego elencos, argumento). Es una de las más habituales Se comete cuando se demuestra la conclusión distinta del tema que está en discusión con la finalidad de desviar la atención del oponente y conseguir su aprobación. Ejemplo: Si el tema que está en discusión es la aprobación de alguna ley sobre la vivienda, y un legislador que está a favor de esta ley argumenta diciendo que “todos deben tener viviendas decentes”, se comete la falacia de conclusión inatingente, porque el argumento “todos deben tener viviendas decentes” no está implicando por la razón de ser de la ley.
b) Argumentum Ad Hominem (Argumento Contra El hombre) Se comete esta falacia cuando se ataca a la persona que hace la afirmación, en vez de refutar la verdad de su argumentación. Ejemplo: “La filosofía de Kant es falsa porque niega la realidad material, además, Kant fue un filósofo burgués, jorobado y media sólo 1.40m.” En este argumento en vez de refutar la filosofía de Kant, se ataca a la persona para desprestigiar su filosofía. Dentro de esta tenemos:
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b.1)
Ofensivo Se la comete cuando, en vez de tratar de
refutar la verdad de lo que se afirma, se ataca al hombre que hace la afirmación. No hay conexión lógica entre el enunciado que ataca al autor de una proposición y la proposición cuya verdad se pretende refutar. No se trata de disputar acerca de la verdad o falsedad de la proposición en cuestión, sino arrojar dudas acerca de la plausibilidad y/o de la consistencia de la persona que defiende esta proposición y contra la cual se argumenta “ad hominem“. La forma en que se puede persuadir a veces este razonamiento falaz es a través del proceso psicológico de la transferencia. Si puede provocarse una actitud de desaprobación hacia una persona, puede convertirse en desacuerdo con lo que esa persona expresa (pero esta conexión es sólo psicológica, no lógica) Ejemplo 1: “Ud. no tiene derecho a criticar mi trabajo porque es un corrupto”. Ejemplo 2: “Él no tiene derecho a reclamar nada por que es un vendedor de drogas.
b.2.)
Circunstancial
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La variedad circunstancial del argumento ad hominem corresponde cuando aprovechando la debilidad de las consecuencias derivadas de principios aceptados por el interlocutor, concluye atacando como inaceptables tales principios. Hay una relación entre las creencias de una persona y las circunstancias que la rodean. Los principios atacados como inaceptables, presentan la propiedad de ser tesis admitidas por quien se hace pasible de este argumento falaz; en virtud de lo expuesto, dicha falacia en modo circunstancial, también recibe el nombre de exconcessis. Ejemplo 1: “¿Paco dice que las condiciones de trabajo son peligrosas? ¡Que va a decir ese, si es un comunista” Ejemplo 2: Una persona imputa a un cazador ser un desalmado por cazar animales indefensos; y este le refuta el argumento recordándole al otro que su modo de subsistir incluye el sacrificio de animales, cuya carne consume.
c) Argumentum ad Ignorantiam (argumento por ignorancia) Se comete esta falacia cuando se sostiene que una proposición es verdadera porque no se ha demostrado su falsedad, o que es falsa porque no se ha demostrado su verdad. Ejemplo: “Todos tenemos que admitir que los malos espíritus existen porque no se ha demostrado su no existencia”
d) Argumentum Ad Misericordiam (Apelación A La piedad)
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Consiste en apelar a la piedad para lograr el asentimiento cuando se carece de argumentos. Trata de forzar al adversario jugando con su compasión (o la del público), no para complementar las razones de una opinión, sino para sustituirlas. Se comete esta falacia cuando se apela a la piedad o la clemencia para conseguir una conclusión. Ejemplo: El argumento de un estudiante que no ha presentado su tarea después de todos los plazos fijados; dice:”Señor profesor, en estos últimos días he tenido que soportar problemas familiares agobiantes. Mi madre enfermó y a diario tenía que llevarla al médico. A mis hermanitos menores sólo yo podía prestarles atención en casa. Por esa razón pido que una nueva fecha para que se recepcione mi trabajo, pienso que no se negará porque comprende Ud. Mi problema”. En este argumento, la conclusión que se desea obtener es conseguir una nueva fecha para la entrega de la tarea, despertando sentimientos de piedad o clemencia en el oponente. Otro
ejemplo
interesante
sobre
argumentum
ad
misericordian es el de aquel joven que había asesinado brutalmente a sus padres con un hacha y al ser juzgado y condenado con pruebas abrumadoras, pidió clemencia por ser huérfano.
e) Argumentum Ad Populum (Llamado al pueblo) 11
Se trata de una simple variedad de la falacia ad verecundiam. En ella el lugar de la autoridad reverenda lo ocupa la opinión más extendida, a la que se apela como si se tratara de la archi-esencia de la verdad.
Se basa en la supuesta autoridad del pueblo, de una mayoría o, simplemente del auditorio, para sostener la verdad de un argumento, como si la razón dependiera del número de los que la apoyan: no es posible que tantos se equivoquen, dicen. El recurso es evidentemente falaz, porque de lo que dicen muchos lo único seguro es que lo dicen muchos, y lo más probable es que se trate de un interés, un prejuicio o una pasión colectiva. Se comete esta falacia al dirigir un llamado emocional al pueblo con la finalidad de ganar su asentimiento popular para una conclusión, despertando las pasiones y el entusiasmo de la multitud. Las propagandas comerciales, entre otros, son ejemplos típicos de argumentum ad populum. Ejemplo: “XYZ, los jabones de fragancia exquisita son usados por nueve de cada diez estrellas del cine. Apúrese en adquirirlos”. Según este argumento, lo que pretende es vender los jabones XYZ basándose en que son usados por la mayoría de estrellas de cine. Es falaz porque la conclusión no está implicada por la premisa.
f) Argumentum Ad Verecundiam (Apelación a la autoridad) 12
Falacia en la que, para intimidar al adversario, se apela a una autoridad que no está bien visto discutir. Se comete cuando se busca asentimiento apelando a una autoridad, en cuestiones que no son de su especialidad. Ejemplo: “Los cánones religiosos son infalibles porque Einsten, fervientemente católico, también lo admitía”.
g) Non Causa Pro Causa (De No Causa Por Causa) O Causa Falsa Utilizamos el término genérico de Falacia de la falsa causa para referirnos a todos los errores en la argumentación causal. Cuando se toma como causa de un efecto, algo que no es causa real, sobre la base de una simple sucesión temporal y la ignorancia de la cusa real. Por ejemplo: “El día anterior a que cayeras enfermo con tifoidea, comiste queso seguro que esto te hizo mal” Esta es una falacia de este tipo, pues la tifoidea no se encuba en un día.
h) De Pregunta o cuestión compleja. Preguntas múltiples. Falacia por presuposición. Consiste en confundir varias preguntas en una. Su objeto es inducir al adversario a contestar globalmente con un sí o un no a sabiendas de que la respuesta no es posible sin distinguir cada una de las preguntas y proceder por partes. Se comete cuando se formula una pregunta que lleva implícita otra u otras preguntas, o se hace varias preguntas entrelazadas y se exige una respuesta única. 13
Por ejemplo: “Quiero que me ayudes explicándome la tarea y soplándome en el examen, ¿puedes?”. Se plantea la pregunta, se espera una sola respuesta, pero quien le responda tendrá que asumir que su respuesta debe ser afirmativa o negativa a dos asuntos o a dos interrogantes totalmente distintos.
i) De apelación a la fuerza. Ad baculum. Recurso a la fuerza. (También llamado Argumento as terroren, Apelación al miedo) La expresión ad baculum significa al bastón y se refiere al intento de apelar a la fuerza, en lugar de dar razones, para establecer una verdad o inducir una conducta. La denominación es irónica, puesto que no existe tal argumento: se reemplaza la razón por el miedo. Su empleo exige dos requisitos: carecer de argumentos y disfrutar de algún poder. Representa, con el insulto, la expresión extrema de la renuncia al uso de cualquier razonamiento. Se comete esta falacia cuando para provocar la aceptación de una conclusión se utilizan amenazas de fuerza, o de la fuerza. También, cuando se recurre a insultos o palabras amenazadoras para que la persona se sienta “obligada” a aceptar una conclusión. Por ejemplo: "Los incrédulos en el fondo saben que Dios existe. Si siguen rechazándolo y se rehúsan a aceptarlo, ya les llegará el castigo merecido cuando mueran y vayan al infierno por toda la eternidad."
j) Falacia del ACCIDENTE Se comete al confundir la esencia con el accidente, lo sustancial con lo adjetivo. 14
Incurre en ella.
Por ejemplo: quien juzga por las apariencias. “Cala sobre tu cabeza una peluca de miles de bucles, calza tus pies con coturnos de una vara de alto, que no por ello dejarás de ser lo que eres.” Como es sabido, el hábito no hace al monje y aunque la mona se vista de seda... Todo Esto viene a decir lo mismo: que las cosas tienen esencia y accidentes.
Esencia es la sustancia de una cosa, lo que no se puede suprimir sin alterar el concepto; lo inherente, lo necesario, y también lo universal, porque es en lo que coinciden todos los individuos
del
mismo
género.
Un
triángulo
es,
esencialmente, un polígono de tres lados. Como todos los conceptos, presenta un aire abstracto, fantasmal e invisible hasta que se reviste de accidentes: triángulo de tiza, de bronce, de flores, azul o verde, tieso o tumbado, isósceles o escaleno. Puede adoptar muchas presencias accidentales, pero lo común, lo inseparable, lo que se predica de todas es su esencia: un polígono de tres lados. Percibimos las cosas por sus accidentes y es preciso desnudarlas para conocerlas, para
descubrir su meollo, aquello
que
permanece bajo los cambios de apariencia: la sustancia, esto es, lo que sostiene los accidentes (del latín substare = estar debajo).
Accidente (del latín accidere = sobrevenir a) es lo que particulariza las cosas, lo añadido, lo sobrevenido. El accidente puede faltar, no es necesario para el concepto; es contingente, yuxtapuesto. Como ocurre con los triángulos,
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las notas variables de los individuos de una misma especie son accidentales. La Falacia del accidente se comete por tomar una propiedad accidental como esencial, lo que conduce a errores al generalizar y al definir: un triángulo es un polígono verde. Atribuimos como esencial a todos los individuos de una especie una cualidad que sólo conviene accidentalmente a algunos de ellos. Platón era filósofo, pero no por sus facultades dialécticas, como Hipócrates era médico, pero no por su elocuencia. También yo puedo ser filósofo y cojo al mismo tiempo, y sin embargo, no habíais de imitarme en la cojera para ser filósofos. EPÍCTETO.
k) Falacia de la COMPOSICIÓN Se produce cuando atribuimos a un conjunto cosas que solamente son ciertas en las partes. Venimos a decir: como todos los componentes son buenos (o malos), el conjunto ha de ser bueno (o malo). Ejemplo: Por fuerza se trata de una orquesta magnífica porque todos los profesores son extraordinarios. Los directores saben muy bien que no es así. Una cosa es inducir que todos los profesores son extraordinarios y otra, transformar esa conclusión en algo distinto: el todo, el conjunto, es extraordinario. Estamos ante una variedad de la Falacia de Conclusión desmesurada. No se pueden trasladar las virtudes de los individuos al conjunto (¡qué más quisiera el Real Madrid!). Lo que se predica de las partes no siempre puede predicarse del todo. Una buena colección de frases no hace un buen libro. Cosas que son ciertas separadas no tienen por qué serlo cuando aparecen unidas. La sal común, pese a que sus componentes, cloro y sodio, son tóxicos, es 16
indispensable para la vida. Los hermanos Álvarez Quintero eran brillantes cuando escribían juntos y mediocres si lo hacían por separado. A los hermanos Machado les ocurría lo contrario. “La Iglesia es la Iglesia de los pobres, luego la Iglesia es pobre. Ignoro por qué la salsa no es buena. Todos sus ingredientes son deliciosos. El equipo del River Plate tiene madre, porque todos sus jugadores la tienen. “
l) Falacias de FALSO DILEMA Se produce una falacia de falso dilema, de la misma forma que en todo argumento disyuntivo, cuando se emplean términos en disyuntiva que no son ciertos, exhaustivos o excluyentes. El argumento del dilema consta de: Una disyunción que recoge dos únicas opciones alternativas. Dos proposiciones condicionales que analizan las alternativas. Una conclusión común. AoB Si A, entonces C Si B, entonces C En consecuencia, los errores posibles son: 1. Puede ser falso el dilema porque sus términos: No son exhaustivos (incompletos; olvidan otras posibilidades). No son excluyentes (no son incompatibles; no hay que escoger).
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2. Pueden ser falsas las premisas condicionales y sus conclusiones.
2. FALACIAS DE AMBIGÜEDAD O DE CLARIDAD a) Equívoco Se comete esta falacia cuando se usa al interior de un razonamiento una misma palabra o frase, pero con sentido distinto. Por ejemplo: “Las cosas solo se aprecian cuando se pierden. Los cadáveres han perdido la vida. Por ello quien aprecia la vida es un cadáver.”
b) Énfasis Se comete cuando a lo largo del razonamiento se resalta una o más palabras que alteran el significado o sentido de toda la expresión. Por ejemplo: ¡TÚ ERES LADRÓN! Si comprueban el robo. c)
Anfibología.- Se produce esta falacia cuando se construye un razonamiento, a partir de premisas equívocas y ambiguas, no por el significado de sus palabras sino porque su construcción gramatical es tal que hace ambiguo el significado o el sentido de la proposición. Por ejemplo: “Roberto, ahí va Juan con su esposa”.
CONCLUSIONES:
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Después de desarrollar lo que son las falacias concluimos que las falacias con razonamientos incorrectos en la argumentación, pero para que un argumento sea considerado falacia, debe parecer correcto. Los argumentos que no engañan a nadie no son considerados falacias. Es decir, se reserva el término para aquellos argumentos que parecen correctos, pero que luego de un análisis cuidadoso resultan siendo incorrectos. Además existen varios tipos de falacias las cuales están divididas en falacias formales que son cuando se da un error que pasa de inadvertido y falacias no formales, las cuales son las más comunes, puesto que son muy usuales en la vida de la persona.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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