Contemplaciones de papel José María Rodríguez Rodríguez Olaizola, S.J.
Capítulo 3. La Buena Noticia
3. El anuncio en la Sinagoga (Lc. 4, 14-30) Hoy es un día Hoy día es espe peci cial al en Na Naza zarret. et. No es co como mo otr otros sába sá bado dos. s. ura urant nte e toda toda la se sema mana na !a !abi !abido do rumo rumorres es,, pal alab abrras en "oz "oz ba# a#a a, not noticias cias co cont ntra radi dict ctor oria iass y una una creciente e$citaci%n e$citaci%n entre las gentes. &'a &'a a estar !oy Jes(s, el !i#o de José, en la Sinagoga) &* +ué es eso +ue dicen de +ue en otros lugares se !a con"ertido en un persona#e amo amoso so)) esd esde e !ace !ace me mese ses, s, cuand cuando o part parti% i% de la alde aldea, a, como uno más de los !i#os de esta tierra +ue se ec!an al camino, no !an cesado de llegar !istorias +ue !ablan de él+ue si ue adonde Juan autista, y Juan di#o a todos +ue él era "erdadero Hi#o de ios/ +ue si !a estado muc!o tiempo en el desierto sin comer/ +ue si cura a los enermos/ +ue si en otras sinagogas !a interpretado las 0scrituras como un "erdadero maestro/ +ue si la gente le sigue de un lugar a otro1 Muc!as personas se !an acercado a su casa para preguntarle a María/ pero ésta no parece saber más +ue ellos. Hay +uien dice +ue ya ayer lleg%, y +uien dice +ue es todo also, +ue "a de camino a Jerusalén para ser recibido por Herodes. 2emuel el #o"en está ner"ioso. Se alegra de pensar +ue tal "ez Jes(s esté esté de "uelta. "uelta. 0spera 0spera +ue, si si "uel"e, "uel"e, !aya sido sido para de#ar esa a"entura insensata. 3ue se +uede en la aldea, con los suyos/ +ue siga con el taller de su padre y ol"i ol"ide de es esos os sue4 sue4os os +ue +ue par parec ecen en +uem +uemar arle le.. &5or &5or +ué +ué no puede aceptar, como todos ellos !acen, +ue las cosas son lo +ue son y no "an a cambiar, al menos no las "an a cambiar cambiar ellos) ellos) 2emuel 2emuel tiene nostalg nostalgia ia del amigo amigo +ue se le !a ido. 6un+ue en realidad ya empez% a irse muc!o antes de ma marrc!ar c!ar de Na Naza zarret. et. 0mpe 0mpez% z% a irse irse cuan cuando do pasa pasaba ba 7
largas !oras meditando después de las lecciones en la Sinagoga. 0mpez% a irse cuando le preguntaba +ue si no sentía a "eces +ue ios tenía una "oluntad para él, a lo +ue 2emuel in"ariablemente respondía +ue ni le sentía, ni le in+uietaba, ni creía +ue mereciese la pena preocuparse por ello1 0mpez% a irse cuando no podía +uitarse de la cabeza los gritos de 8amar la leprosa, a la +ue ec!aron de la aldea cuando eran ni4os. 8odos la !abían ol"idado, menos él, +ue seguía recordándola después de tantos a4os/ y cuando empez% a !ablar de Juan autista, pero decía +ue el miedo al castigo no podía ser buen conse#ero 92emuel de#% de intentar comprender esas rases !ace muc!o:. 6!ora por las noc!es, cuando no puede dormir, se pregunta +ué !abrá "isto Jes(s1 y +ué !ará. Hace meses "ino a despedirse. ;&6 d%nde "as)<. ;&3ué "as a !acer)<. ;5ero &por +ué)<1 Muc!as preguntas, y ninguna respuesta. Si algo sabe 2emuel, es +ue Jes(s se marc!% por+ue ya no podía esperar más, pero sin tener muy claro +ué iba a !acer. 3ue se marc!% por+ue es un testarudo, se le !a metido en la cabeza +ue ios le pide algo, y !a ido a buscarlo. 0l "ie#o 2emuel, su padre, dice siempre +ue Jes(s "a acabar mal, +ue algunas de las cosas +ue se cuentan de él "an a molestar a los ariseos y +ue eso no puede traerle nada bueno. 5or eso, cuando llegan rumores de +ue está empezando a !acerse notar, sacude la cabeza con desaprobaci%n. * es por todo eso por lo +ue 2emuel el #o"en piensa !oy, con esperanza, +ue su amigo tal "ez se !a cansado de buscar y "uel"e para +uedarse. Ha ido temprano a la sinagoga. Si Jes(s !a "uelto, +uiere estar cerca. No es el (nico +ue !a tenido esa idea, y desde muy temprano se !a ido llenando el lugar. 0stán muc!os de los !ombres más importantes de Nazaret. =ncluso !ay otros de aldeas cercanas. astantes caras nue"as +ue no reconoce. >
?alta poco para la oraci%n. @n murmullo creciente uera parece se4alar la llegada de alguien. e golpe, el local se +ueda en silencio. 0n el umbral de la puerta !a aparecido Jes(s. 2emuel siente +ue el coraz%n le late un poco más aprisa al reconocer la silueta amiliar del amigo. ;6sí +ue !as "enido1<, piensa. 6lgunos cuc!ic!ean en "oz ba#a, con una ligera desilusi%n. 0s el mismo !ombre +ue conocen. &8al "ez esperaban +ue llegase con aspecto más noble, con ropa#es llamati"os o con un sé+uito notable) S%lo le acompa4an tres #%"enes, +ue por su aspecto no deben de ser más +ue agricultores o pescadores. &8anto ruido por este muc!ac!o) &2es !an enga4ado) Se sientan en un lugar discreto. 0l primer lector comienza a recitar un te$to de la 8ora!, pero 2emuel no consigue prestar atenci%n y lanza miradas subrepticias a su amigo, +ue parece concentrado. Auando llega el momento de la lectura proética, todos los o#os se "uel"en a Jes(s. Bl se le"anta y a"anza !acia el centro de la sinagoga. Auando se cruzan sus o#os, 2emuel ar+uea las ce#as, temeroso de romper el silencio con un saludo más audible, y Jes(s le responde del mismo modo. Se le "e ner"ioso. &8al "ez es por estar de nue"o en casa) 6+uí los !ombres no se "an a de#ar impresionar por su ama/ después de todo, le !an "isto crecer, desde +ue iba con su padre José cargando tablones por todo el pueblo. Se acerca a los rollos de la palabra y se4ala uno. 0l !ombre +ue está a cargo se lo da, y él lo despliega despacio, con calma. 0mpieza a leer, primero en un tono casi inaudible, y pronto con más Crmeza- ;0l espíritu de ios está sobre mí, por+ue me !a ungido, me !a en"iado para dar la buena noticia1<. 2emuel no se sorprende por la elecci%n de este pasa#e de la proecía de =saías. Muc!as "eces !an !ablado de él, y sabe D
+ue esa palabra le +uema a Jes(s, +ue se pregunta si esa liberaci%n !a de llegar, y cuándo, y c%mo, y a +uién1 2a lectura contin(a ;1para traer la liberaci%n a los oprimidos y anunciar el a4o de gracia del Se4or<. Jes(s se detiene. Recoge el rollo y se sienta. Mira a la asamblea. 2a reacci%n, por el momento, parece buena. Ha acertado con el te$to, se dice 2emuel. espués de todo, cada !ombre en esta aldea perdida se siente un poco uno de esos oprimidos, y la proecía de =saías siempre enciende en sus corazones gastados destellos de esperanza. Jes(s !a leído bien, como un "erdadero maestro. 6!ora !ay +ue "er +ué interpretaci%n !ace de la proecía. icen +ue en otras aldeas !a !ablado con gran aceptaci%n, pese a su ine$periencia1 !o" se cumple este día# , comienza Jes(s. * se lanza a
e$plicar +ue no deben esperar más tiempo, +ue no pueden "i"ir siempre pensando en un uturo +ue nunca llega, +ue la palabra de *a!"e! está dic!a para sus "idas. No para las de otras generaciones, y +ue *a!"e! no +uiere +ue sigan suriendo. Sigue en esa línea, e$presando una pasi%n y una con"icci%n +ue parecen contagiar al auditorio. 2emuel siente +ue cada palabra podría estar dirigida a él, y le sume en un torbellino de emociones. 2e parece una palabra nue"a. Siente +ue es su "ida lo +ue está describiendo Jes(s. Se descubre en una paz prounda. No es el (nico a +uien le ocurre esto. 6 medida +ue Jes(s !abla, el silencio se "a !aciendo más denso. No se oye ni respirar. 8odos los presentes están pendientes de su discurso. 6lgunos o#os se !umedecen y algunas cabezas se ec!an !acia delante, como para no perder una sola palabra. Aada uno de los oyentes parece sentir +ue Jes(s está !ablando de sus propias "idas, y lo +ue oyen les emociona, les tran+uiliza y les sana, todo a un tiempo. 2emuel respira tran+uilo. Auando Jes(s calla, se alzan algunas "oces de contento. ;6labado sea ios<1 6lguno E
murmura, incrédulo- ;&No es éste el !i#o de José) &%nde !a aprendido esto)<. @na "oz un poco más uerte e$clama con entusiasmo- ;Sí, Jes(s, a!ora es el tiempo de acabar con los enemigos de =srael, a!ora es el tiempo1<. 0sa declaraci%n estridente parece romper la calma anterior. Más "oces se ad!ieren a ese grito de "enganza. 0l entusiasmo se ti4e de uria !acia los romanos, !acia los samaritanos, !acia los impuros, !acia todos esos enemigos de *a!"e!1 0l ambiente cordial del rato anterior se !a des"anecido, y los semblantes serenos de !ace unos momentos se crispan por el rencor !acia los opresores. 2emuel "e la e$presi%n de Jes(s. 2o conoce demasiado bien como para no percibir una nube de tristeza +ue le atra"iesa el rostro. emasiadas "eces !an discutido sobre estas mismas cuestiones como para no saber +ué es el ;a!ora< +ue perciben sus paisanos. 2emuel sabe algo acerca de la duda +ue +uema a Jes(s. ;&* si el Mesías uese otra cosa, 2emuel) &* si para traer la sal"aci%n no tu"iese +ue !acer la guerra, sino con"encer a las gentes para +ue "i"an en paz) &* si !asta a!ora nuestros padres y sus padres y los padres de sus padres !an estado e+ui"ocados)<. Bsa es la gran duda de Jes(s. 2emuel lo sabe, por+ue muc!as "eces lo !an !ablado. 2emuel sabe +ue su amigo se pregunta si *a!"e! no será muy distinto de lo +ue sus gentes creen. * sabe +ue, si lo dice en alto, estos mismos +ue a!ora le aclaman le +uerrían matar. Jes(s "uel"e a !ablar. *a en otras ocasiones !a tenido esta sensaci%n. No lo entienden. 8al "ez es la "oluntad de ios +ue sea a+uí, en Nazaret, donde dé un nue"o paso. 8iene algo más +ue decir. * le#os de seguir alimentando el sentimiento de los suyos, su conCanza en las "ie#as proecías, su orgullo de ser el pueblo elegido, empieza a !ablarles de +ue ios sal"ará a todos, y ni si+uiera tiene +ue empezar por =srael. Aita a la "iuda de Sarepta, cita a F
Naamán el sirio1 todos e$tran#eros, pero todos bendecidos y preeridos por *a!"e!1 Sus palabras caen esta "ez como un #arro de agua ría sobre la enardecida asamblea. ;8raidor<, ;blasemo<, dice alguno. 0l entusiasmo anterior se !a con"ertido en ira. &A%mo puede éste, +ue se dice maestro, negar la superioridad del pueblo de =srael) No le de#an continuar. 2emuel "e con desaliento c%mo se cumplen sus peores temores. 8ambién "e en el rostro de Jes(s una mezcla de impotencia, Crmeza y con"icci%n1 2os !ombres se agolpan en torno a Jes(s y le empu#an para +ue salga de la sinagoga. 2emuel trata de acercarse, pero no lo consigue. Hay +uien grita +ue lo lle"en al acantilado y lo despe4en. 0l tumulto es grande. 2os tres #%"enes +ue llegaron con Jes(s se muestran dispuestos a !acer rente a sus atacantes, y esto parece renar a los más e$altados. Hay un momento de titubeo, de indecisi%n, y Jes(s apro"ec!a para ale#arse con los suyos. 2os más "iolentos parecen darse por satisec!os "iéndole marc!ar.
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