LOS SEÑORÍOS Y LA CONQUISTA ESPAÑOLA EN MI REGIÓN. RECINTOS CIVICO-RELIGIOSOS DEL PRECLASICO PUEBLA. TLALANCALECA: Habitado desde el 400 a.C. llegó a su máximo esplendor durante el protoclásico, cuando se edificaron varios edificios, con una orientación al oeste sobre una elevación volcánica. Los constructores aprovecharon las pendientes con fines defensivos. Se han localizado más de 24 estructuras piramidales, alrededor de 50 plataformas y varias habitaciones, de igual forma se identificó el empleo de cornisas, elemento arquitectónico de la región.
TEPATLAXCO: surge en 1 200 a.C. su periodo de mayor apogeo es entre el 600 a.C. y 300 d.C. para este periodo se construyeron plataformas, escalinatas y edificios sobre basamentos piramidales, tanto rectangulares como circulares en las orillas de las barrancas, para simular mayor altura aunque varios de los edificios si alcanzaron proporciones monumentales.
CHOLULA. *500 a.C. Primeros asentamientos humanos en Cholula. *Cholula: se encuentra a trece kilómetros al oeste de la ciudad de Puebla. Esta ciudad tiene lo que probablemente sea la pirámide más grande en Mesoamérica, aunque parte de la base de la estructura sea un cerro natural y la cantidad de construcción humana no es clara. Cholula es uno de los pocos ejemplos en Mesoamérica donde un centro ceremonial y comercial sobrevivió a los altibajos políticos y económicos de la historia prehispánica y colonial. *200 d.C. Parte más antigua de la pirámide de Cholula. *ca. 300 d.C. Apogeo de Cholula provocado por la caída de Teotihuacán ya que durante el periodo de la gran expansión teotihuacana, Cholula se mantuvo como centro de segunda importancia.
*700 d.C. Hasta este siglo la población parece haberse concentrado y crecido en torno de la gran pirámide que en ese tiempo era la mayor de Mesoamérica. Por razones desconocidas fue abandonada esta sección de la ciudad. También alrededor de este año Cholula fue conquistada por los olmecas-xicalancas.
*700 a 1519 d.C. La población cholulteca se estableció hacia el noreste del antiguo recinto, lugar donde los españoles la encontraron a su llegada. *800 al 1150 d.C. Un grupo llamado olmeca-xicalanca invadió y se instaló en la ciudad de Cholula. *1282 d.C. Los olmeca-xicalanca fueron expulsados por otros invasores; los tolteca-chichimeca. (El Atlas Cultural de México cita esta conquista en 1168).
YOHUALICHAN: Proviene de la lengua náhuatl y significa “lugar de la Noche”. Sus primeros habitantes hablaban totonaca, por lo que es muy probable que el nombre actual sea una traducción de otro más antiguo pero con el mismo significado. La zona es de particular interés debido a que sus vestigios comprueban la presencia dominante de grupos de la costa en esta región de la sierra; éstos debieron haber abandonado Yohualichan ante el avance de grupos belicosos del centro de México. El sitio fue de uso ceremonial y seguramente tuvo influencia sobre otros ya que se afirmo como punto de reunión para efectuar algún tipo de culto, aun después de su abandono que ocurrió, probablemente, durante los siglos XI o XII. No se tienen datos precisos al respecto, sin embargo, se infiere que la deserción del área fue paulatina. Este antiguo centro ceremonial ha sido llamado el “Pequeño Tajin” por su semejanza con la zona arqueológica veracruzana. Fundado a principios de la era cristiana por los totonacas, quienes terminaron abandonándolo hacia los siglos XI o XII debido a la llegada de grupos del Altiplano Central. Consta de 5 grandes edificios distribuidos en torno a una gran plaza que mira hacia al norte. En forma de piramidal se muestra una unidad estilística única, debido a los nichos, es decir, a los huecos cuadrangulares sobre los tableros, idénticos a los del Tajín. Algunos de estos edificios tienen hasta seis cuerpos de alto. Hay, además, un largo juego de pelota junto al que se encontró la tumba de un personaje prominente.
CANTONA El sitio abarca cerca de 12 kilómetros cuadrados; para su estudio se dividió en tres amplias unidades y se trabajó la parte sur, que es la mejor conservada; en ella se encuentra la Acrópolis (área donde se localizan las principales estructuras que dieron albergue a los poderes políticos, económicos y religiosos), resultando, por tanto, una buena muestra del asentamiento. De acuerdo con los trabajos, Cantona estaría ubicada cronológicamente entre los años 600 y 1000 de nuestra era. Su esplendor coincide con la caída de las principales urbes del horizonte Clásico (incluso se piensa que tuvo algo que ver con el derrumbe de Teotihuacan al obstruir el paso de productos de la costa al altiplano) y con la llegada de pueblos bélicos que pronto se apoderaron y dominaron México.
La conformación del sitio se integra por infinidad de patios de aproximadamente 50 x 40 metros, o aún mayores; en algunos de ellos se encontraron talleres de obsidiana y cantera, por lo que se deduce una clara división y especialización del trabajo de sus habitantes. Según García Cook, la población rural se asentaba en las áreas bajas, dejando las intermedias a la gente con rango social y, finalmente, en la parte superior, se ubicaban los templos, juegos de pelota y las viviendas de jefes y dirigentes.
Por otra parte, las evidencias señalan que los patios eran lugares de residencia de distintos grupos familiares que integraban la ciudad de Cantona; es tal la cantidad, que en el sector V se detectaron 620 patios y 997 montículos, incluyendo unidades habitacionales, adoratorios y pirámides. En su arquitectura está ausente el estuco como elemento decorativo, aunque posiblemente pudo usarse lodo para unir la roca volcánica, además de la técnica de colocar piedra sobre piedra (comúnmente llamada unión a hueso) que da forma a las bardas, callejones, plataformas y demás estructuras arqueológicas. Cantona se localiza al norte de la Cuenca de Oriental, entre los municipios de Tepeyahualco y Coyoaco, Puebla; viniendo del Distrito Federal por la autopista México-Orizaba, se llega a la caseta de Amozoc, se sigue la carretera federal que va de la ciudad de Puebla a Oriental, de esta población se toma la desviación a Tepeyahualco y de allí se sigue el camino que conduce hasta el sitio. El acceso por Veracruz puede ser tomando el camino que se encuentra en el extremo norte de la carretera federal Xalapa-Acatzingo, justo en donde termina este estado e inicia el de Puebla.
SANTO NOMBRE zona arqueológica "Santo Nombre" se encuentra en el municipio de Tlacotepec de Benito Juárez a 90 km. de la ciudad de Puebla y a 40 km. de la ciudad de Tehuacán. Tlacotepec es un lugar muy conocido por su feria en el mes de julio en honor al Señor del Calvario y se espera mayor turismo nacional y extranjero. Santo Nombre puede ser la ciudad más grande del Valle de Tehuacán y de la Mixteca poblana (en el México Antiguo). Desde este lugar se vislumbran las cumbres del Popocatépetl, el Pico de Orizaba y la Malinche y tiene una superficie de más de 51 hectáreas donde están emplazadas diversas estructuras monumentales de estilo teotihuacano, la mayor de ellas de 22 metros de alto y una base de 100 por 50 metros. La etnóloga Guadalupe Cuamatzi Cortés, encargada del proyecto, conjeturó que la zona arqueológica de Santo Nombre pudo haber abarcado en su esplendor dimensiones de entre 800 y mil hectáreas, que además de contar con un centro
ceremonial, contenía decenas de habitaciones, así como una cancha donde se llevaba a cabo el tradicional juego de pelota. Existen al menos 20 montículos, así como una piedra gigantesca donde al parecer estaba trazado un mapa del México prehispánico. Una pirámide de siete metros es lo que se logra tener ya a la vista, así como otro espacio al frente del sitio protegido que se denominó La Casa del Nahual; el primero es parte del centro ceremonial dedicado al cultor agrícola, el otro se considera una vivienda particular que tenía cercanía con la zona de mercadería. El lugar se encuentra cubierto por una vegetación espesa y es explorado por especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH)y se abrirá al público como zona arqueológica antes de 2012. Probablemente sus antiguos habitantes fueron los antecesores de los actuales grupos indígenas popolocas y se cree fue ocupado con distintas intensidades del 400 a.C., al 600-700 d.C. La zona presenta ciertas similitudes arquitectónicas con la antigua Teotihuacan: Los edificios de Santo Nombre revelan una imitación de las formas que prevalecían en Teotihuacan. Hay conjuntos de tres templos, como es el caso de la llamada Plaza Gran Altar, que imitan lo teotihuacano. A lo largo de la Calle de los Muertos de Teotihuacan existen 23 conjuntos de este tipo. La Plaza Gran Altar es una muestra de la influencia teotihuacana en la región sureste de Puebla, lo cual sugiere rutas de intercambio con otras regiones más lejanas, como la Costa del Golfo y Oaxaca'. en la zona se distribuyen 25 monumentos, una cancha de juego de pelota y cinco plazas, dos de ellas del tipo hundidas. su técnica arquitectónica es de talud-tablero, característica de Teotihuacan. La mayor parte de las edificaciones se hallan orientadas al poniente, en dirección al Popocatépetl. La Estructura Sur tiene 30 metros de frente y 7.0 metros de alto, que forma parte de la Plaza Gran Altar. El lugar quizá fue desocupado en el Clásico Tardío (600 d.C.) después de una gran ceremonia que implicó la incineración de maíz, frijol, calabaza, chile y otros alimentos, junto con cuentas de collar, vasijas, incensarios, sahumadores, conchas y caracoles marinos: se trata de una ofrenda al edificio, el que
seguramente es una representación de la montaña sagrada, del cerro de los mantenimientos en el que se encuentran los alimentos y las deidades de la agricultura'. Dentro de las conclusiones de los arqueólogos destaca que la última cultura que pobló la zona realizó modificaciones para “ir cerrando espacios, lo que significa que trataron de impedir que extraños tuvieran acceso a sus dominios”.
MANZANILLA La zona arqueológica de Manzanilla, o mejor dicho, el juego de pelota de Manzanilla, se encuentra ubicado sobre la carretera, que va a la junta auxiliar de la Resurección, en la colonia Noche Buena, de la ciudad de Puebla. Adquiere este nombre, por que muy cerca de este sitio, se encuentra también, la antigua hacienda de San Diego Manzanilla, la cual, funcionó desde la época colonial, hasta la revolución. Lo único que podemos apreciar al dia de hoy, es un juego de pelota; una estructura de forma rectangular, que se supone, estuvo cerrada totalmente; de aproximadamente 65 metros de largo por 15 de ancho, con taludes a ambos lados (influencia arquitectónica teotihuacana), y una escalinata para acceder al interior de la cancha. Se encuentra muy deteriorada, ya que los habitantes de esta colonia, a lo largo de muchos años han estado removiendo piedras. Se ha convertido en un centro de reunión para los colonos, incluso, a un lado se encuentran unas canchas de fut-bol, en donde todos los fines de semana organizan encuentros deportivos, lo cual es muy bueno. Es también un albergue nocturno de pandilleros, quienes se han dado a la tarea de grafitear los muros de la estructura, además de convertirlo en basurero, y espacio de usos múltiples, como lo demuestra el tipo de basura contenida en el milenario espacio. Según información contenida en un tríptico, elaborado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, Manzanilla tiene su origen en el preclásico, un poco antes de nuestra era, dadas las características arquitectónicas y el tipo de cerámica, y que para el siglo II, inició su etapa de expansión hasta cubrir un área de aproximadamente dos kilómetros cuadrados. Se mencionan dos secciones, en las que se agrupan diversos montículos, aunque actualmente, no se vea ninguno, ya que todo está construido, o en algunos casos en proceso de construcción. Suponen los especialistas, que estas secciones corresponden, una a la etapa de transición entre el preclásico superior y el clásico, y la otra al clásico tardío.