Test de integridad y honestidad (base teórica)

Pruebas de honestidad/integridad Las compañías utilizan diferentes pruebas para evaluar la honestidad e integridad de los alicantes y empleados.

Las empresas que usan estos test como un

mecanismo de muestreo para prevenir la contratación de empleados faltos de ética, para reducir la frecuencia de las mentiras y el robo en el trabajo, y para comunicar a los alicantes y empleados que esa deshonestidad no será tolerada.

Sin embargo, estos estos instrumentos tienen tienen limitaciones. Por ejemplo, las respuestas socialmente deseables son una preocupación, algunas preguntas pueden considerarse demasiado invasivas, insultantes y sin relación con el empleo.  Alguna veces, un “falso positivo” es generado (o una persona honesta es calificada como deshonesta), y los resultados del test pueden ser afectados por  factores demográficos individuales, como el género o la raza.

De forma incorrecta, muchas personas se refieren a este instrumento con el “detector de mentiras”, es un dispositivo que mide la sudoración en la piel, ritmo cardiaco y respiratorio.

La teoría detrás del polígrafo es que si una persona

responde una pregunta de forma incorrecta, la fisiología del cuerpo responderá revelando la falsedad a través de mecanismos gráficos que son parte del polígrafo. Como resultado de preocupaciones sobre la validez y confiabilidad del polígrafo, el Congreso de Estados Unidos aprobó una ley que prohíbe el uso de este instrumento en procesos de selección para empleos.

Sin embargo están

exentos de esa ley, industrias como las empresas de seguridad y farmacéuticas. La ley permite a los empleadores el uso del polígrafo en investigaciones internas de robo o pérdida de bienes, pero bajo la condicionante de que el examen poligráfico debe ser tomado voluntariamente, que el empleado no será despedido si se reúsa a participar y que podrá dar por finalizado el examen en cualquier  momento.