UNIVERSIDAD METROPOLITANA DE MONTERREY.
UNIDAD DE SALUD. FACULTAD DE PISCOLOGIA. MAESTRIA EN TERAPIA FAMILIAR 1C BOGARTH DANIEL LEMUS BUSTRAMANTE. MAT. 137381
“IDEAS PRINCIPALES DE SATIR.”
12/09/13
PSICOTERAPIA FAMILIAR CONJUNTA
El capítulo uno habla de la psicoterapia familiar. Dice que los psicoterapeutas familiares existen para aliviar el dolor de las familias. Llamaremos al individuo con síntomas “paciente identificado” o “PI”
La homeostasis familiar se da cuando todos los miembros de la familia procuran obtener un equilibrio en las relaciones. Siempre la relación conyugal influirá en el carácter de la homeostasis familiar, pues no cabe dudas de que la relación conyugal es el eje principal de todas las relaciones familiares.
La psicoterapia familiar surgió a raíz de que los terapeutas descubrieran que, al tratar de cambiar la forma de funcionar de un miembro de la familia, en realidad estaban tratando de cambiar la forma de funcionar de toda la familia.
El paciente ya era el miembro de la familia que estaba tratando de cambiar la forma de actuar de todos, de modo que cuando se le instaba urgentemente a que aumentara sus esfuerzos, solo se lograba que el paciente recibiera críticas más intensas de toda la familia, y esto hacia que el enfermo se sintiera más agobiado y menos capaz.
Los terapeutas también reconocieron que, de acuerdo con sus informes, el padre sentía que dar cuidados parentales era más el trabajo de la esposa que el suyo; por lo tanto, si el niño se comportaba en forma inapropiada, era a la madre a quien se debía ver.
Se ha notado repetidas veces de qué manera tan critica la relación conyugal afecta los cuidados parentales. Se descubrió que cuando los padres estaban cercanos emocionalmente, más atentos uno al otro de lo que cualquiera de los dos pudiera estar en el paciente, este mejoraba. Cuando cualquiera de los dos padres se ocupaba emocionalmente más del paciente que del cónyuge, el paciente inmediatamente mostraba regresión.
Los terapeutas familiares han encontrado que es mas fácil interesar al esposo en la psicoterapia familiar que en la individual.
La psicoterapia familiar parece tener sentido parar toda la familia. El esposo y la esposa dicen: “Por fin, estamos juntos y podemos llegar al fondo de esto” El capitulo dos nos habla de cómo influye la baja autoestimacion en la elección del compañero o companera. Creemos que una persona con baja autoestimacion tiene una gran sensación de ansiedad e inseguridad acerca de lla misma. Tiene grandes esperanzas acerca de lo que los demás pueden darle, pero también grandes temores. Por lo que su relación marital, en muchos casos, duplicara o será diametralmente opuesta a la relación que cada uno vio entre sus propios padres. El capitulo tres habla de las diferencias individuales y los desacuerdos de los conyuges. Cuando dos personas con baja autoestima se unes, cada uno siente que no tiene nada que dar; y si uno de los dos da, lo hace con gran descontento y con la sensación de que esta haciendo un gran sacrificio.
Hay una diferencia marcada en una pareja con buena autoestimacion y una con . pobre autoestimacion. Una pareja con buena autoestimacion, cada uno puede confiar en el otro, no ocurriendo asi con la de pobre autoestimacion. Otra diferencia es que cuando hay buena autoestimacion en los conyuges, cada uno ve las diferencias del otro como una oportunidad para crecer, en cambio cuando hay pobre autoestimacion, cada diferencia la ven como un problema en el otro.
Una pareja con pobre autoestimacion necesita aprender a afirmar sus propios pensamientos, deseos, sentimientos y conocimientos sin destruir, invadir u obstruir al otro; a fin de buscar juntos un resultado adecuado para cada situación.
Cuando hay pobre autoestima:
1. Cada uno trata de encubrir su desilusión 2. Cada uno trata de ganarse, proteger o dar el gusto al otro porque lo necesita para sobrevivir 3. Hagan lo que hagan, siempre se sienten desilucionados, martirizados y defraudados.
Mientras más encubierta e indirectamente se comuniquen dos personas, mas probable es que sean disfuncionales.
4.
El problema se complica cuando una pareja con pobre autoestima intenta tener unhijo, pues si les resulta difícil integrar el hecho de ser un individuo con ser un conyuge, les resulta igualmente difícil integrar el hecho de ser progenitores. El capítulo cuatro habla de las tensiones que afectan a la familia moderna • Una pareja contribuye a la continuidad de la raza produciendo y criando hijos. • La pareja debe cooperar económicamente • Transmitir cultura a los hijos por medio de las enseñanzas parentales • Ensenar al niño como comunicarse • Ensenarle cuando y como expresar emociones • Percibir cuando uno de los hijos ya no es un niño y debe tratarse co mo adulto • Preparar el terreno para que en una etapa final los hijos cuiden de ellos. En una cultura occidental predomina el concepto de que los hijos son una ventaja emocional, pues con ellos: Cumples con lo que la sociedad espera de ti Puedes alcanzar un sentimiento de perpetuidad Vuelves a gozar, a través de tus hijos, parte de tu propia vida pasada Tratas de corregir tus dolores y terrores pasados tratando de ayudar a tu hijo a evitarlo Notas cuan esencial eres para tu hijo Te sientes mas unido a tu conyuge No obstante, en los cuidados parentales, también hay problemas que pueden crear sentimientos conflictivos en los nuevos padres como son: Tal vez el hijo llego en un momento inesperado No estaban listos económicamente No estaban listos emocionalmente Quizás uno de los cónyuges se distrae con el bebe y descuida al otro La revolución industrial afecto profundamente a la familia moderna, pues alivio a
los conyuges de muchas cargas, pero también los sometió a muchas tensiones nuevas, como son: Hacer que el individuo se mida de acuerdo al salario que gana Que la mujer se sienta rebajada con solo cuidar los hijos y la casa, ya que con eso no se gana sueldo Separar a los padres de los abuelos
Las influencias intelectuales y sociales revolucionarias también afectaron la familia modrna al cuestionar las viejas suposiciones sobre normas y valores, como es el hecho de que antes el hombre se constituía el cabeza de la casa y la mujer era perteneciente al hogar. Actualmente hombre y mujer están confusos y reaccionan iguales a los nuevos ideales, y dudan respecto a las tareas y roles que debe desempeñar cada uno en la familia. El psicoanálisis también afecto los conceptos, ya que la teoría propuso apremiar a los padres para que dieran libertad al niño a fin de no danar su desarrollo físico. Con esta idea los padres se confundieron de si debían dar o no nalgadas a los hijos, si debían imponerle alguna restricción; y por consiguiente, la vida familiar llego a ser mas democrática, y se dio a los hijos de todoas las edasdes la posibilidad de opinar y decidir respecto a su edicuacion. Todas esas tendencias filosóficas y económicas produjeron en hombres y mujeres una sensación de confusión e inseguridad. La vida familiar de los hombres llego a estar tan apartada de su vida de trabajo, que pueded decirse que vivian en dos mundos diferentes. Los hijos varones, en especial, encontraban a un padre ausente, preocupado, cansado o vencido; y esa figura en cierta erea el modelo para la vida de los chicos. Algunas mujeres buscaron trabajo fuera del hogar y pusieron a los niños en guarderías. Después de dos guerras mundiales, hombres y mujeres se volvieron hacia la construcción de la familia: o La crianza de los hijos llego a ser para ambos un asunto de gran importancia o Hacer felices a los hijos llego a ser un tema importante o Dar a los hijos lo que los padres nunca tuvieron llego a ser una necesidad o El crecimiento, desarrollo y logros de los hijos llegaron a ser esenciales para los padres o La actitud del hijo hacia su padre podía aumentar o disminuir la autoestima del padre Como los conyuges siguieron encontrando que su relación era difícil y amenazadora decidieron vivir para el hijo, pero pidieron que el hijo también viviera para ellos, implementando en ellos el compromiso de hacer felices a sus padres. El capitulo cinco habla de la desilusión conyugal y sus consecuencias para el niño.
Todas las familias modernas sufren las tensiones y presiones de la sociedad moderna. La familia es la variable criticaque interviene entre la sociedad y el individuo. En algunos sectores donde abunda la delincuencia, hay posibilidad de que un niño salga delincuente; aunque hay también familias que viven en esos barrios y no producen delincuentes. Esto significa que cómo enseña un padre a un niño es tan importante como qué le enseña. Cabe destacar también que, como dos personas enseñan al niño, deben ponerse de acuerdo en los métodos de disciplinas que van a usar, para que el niño no vea contrariedad en ellos. Muchas veces los padres desean que el niño: quiera lo que ellos querían cuando eran jóvenes, y si los hijos no quieren la misma cosa, se descepcionan. piense y vea lo que ellos ven, y si no es asi se descepcionan. Consideran al niño como alguien a quien deben darle todo para compensar las privaciones que ellos sufrieron. Alguien que hara lo que ellos quieren Alguien que será bueno para ellos Ambos padres ven al niño como un: • Aliado posible contra el otro conyuge • Un mensajero posible a través del cual el esposo y la esposa se podrán comunicar • Un posible apaciguador del otro conyuge Los conyuges se pelean entre sí para obtener un lugar de preferencia en el niño. Si el niño toma partido por uno de los dos, corre el riesgo de perder al otro. Como el niño sabe que los necesita a ambos, le angustia tener que elegir a uno. Esta situación se agrava mas cuando uno de los progenitores incluye al niño en la relación conyugal formando asi un triangulo dañino en la relación. En este sentido es muy importante que el terapeuta observe como cada uno se comporta con el otro y con el hijo. Muchos padres, debido a su pobre autoestimacion, no se consideran de suficiente importancia para influir en el niño y dicen: “es que mi hijo nació asi”. Todos nos precipitamos a negar el efecto que tenemos sobre nuestros hijos y sobre otras personas que nos rodean, igual que titubeamos poco antes de culpar a otras personas. No es extraño que los padres se interesen mas en explicaciones de lo hereditario y lo químico que en los problemas emocioneales de su hijo; en ese caso, evaluar la responsabilidad de los progenitores sin asignarles culpa se vueve una parte desagradable, pero necesaria en el trabajo del psiquiatra. Todos hemos tenido la experiencia de recibir un mensaje de doble nivel o de
alguien que no dice las cosas con claridad. Un mensaje de doble nivel o discrepancia es toda interacción insatisfactoria, que con facilidad se puede resolver si la persona logra ser mas explicita. Una situación de doble nivel que ocurra con mucha frecuencia en una familia produce una situación que hemos denominado “doble vinculo”. Condiciones que deben presentarse para que un niño sufra la presión de “doble vinculo”. Es necesario que el niño este expuesto a mensajes de doble nivel en forma repetida y en un largo periodo Los mensajes deben provenir de personas a quienes el niño se debe Vienen de un hogar donde el niño no tiene el derecho de preguntar si siente confusión en algo, sino aceptar los mensajes conflictivos aunque sean imposibles de comprender Es muy común que el niño o PI (paciente identificado) convierta a sus padres en victimas, exigiéndoles atención extra o ganancias secundarias por medio a berrinches; manteniéndose aislado de la familia, o con huidas del hogar. También ocurre que la conducta del PI acentua el conflicto entre los conyuges y provoca que los varones obtengan atención extra de la madre, y las hembras del padre, acrecentando asi el triangulo familiar. En la mayoría de los casos los conyuges terminan culpándose entre si. La relación conyugal que requiere de un paciente identificado (PI) solo puede acarrear, en todos los aspectos, desilusión, destructividad y dolor para las tres personas involucradas. En lugar de un dar y recibir reciproco, hay exigencias y desafíos que conducen hacia un conflicto entre los conyuges, que divide a toda la familia y deja a los hijos desgarrándose entre afectos y lealtades conflictivas. No obstante, el PI es el que mas sufre. El PI internalia los conflictos conyugales a tal punto que se le hace difícil mantener mas adelante relaciones estables con su pareja. Continua repitiendo en su vida el drama familirar con su familia e incluso después de que sus padres hayan muerto. Esta cadena solo se rompe en terapia. El PI siente baja autoestimacion. Su etiqueta de “el malo diferente” o “el enfermo” solo refuerza su creencia de que no vale la pena. Y es que a el no se le ha preparado para hacerle frente al mundo fuera de la familia. El capitulo seis habla de lo que un niño necesita para tener autoestimacion. Aprendimos que necesita: o comodidad física o continuidad en la relación o necesita que una misma persona le prepare los alimentos y le hable
constantemente o que una misma voz y el mismo toque humano lo introduzca a la existencia y a la presencia de los otros o aprender como influir en las respuestas de otros o aprender a estructurar su concepto del mundo o tener un buen concepto de si mismo en dos areas: como una persona hábil y sexual un niño debe aprender a amoldarse a los requerimientos de la vida familiar, a equilibrar sus propias necesidades con las de los demás y adaptarse a las exigencias de la cultura. Los niños también integran una imagen de cómo es el padre por anécdotas y datos que reciben por parte de la madre, abuelo y abuela, entre otros. Cuando los padres no son capaces de validarse entre si como personas sexuales, tampoco pueden validar al niño como persona sexual. Si ellos de manera constante muestran a su hijo una persona dueña de si misma y sexual, y si exhiben ante él una relación hombre-mujer satisfactoria, el hijo adquiere autoestimación y se vuelve cada vez más independiente de ellos. Del capitulo siete pude aprender lo que es el triangulo familiar. En un triangulo familiar ocurre la siguiente dinámica: Cuando los padres del PI pelean, el chico teme que uno de ellos o ambos serán destruidos en el proceso. Ha aprendido que cuando los hace fijar sua atención en el, los padres dejan de pelear Existe una excesiva cercanía entre el padre y la hija, y la madre y el hijo, llamado en psicología “complejo de Edipo” El complejo de Edipo se convierte en “conflicto edipico” cuando el individuo no puede integrar una imagen apropiada de su propio sexo, con una imagen compatible del otro sexo. Que esto suceda o no, depende de si los padres manifiestan de manera clara, directa y especifica sus diferencias y su personalidad individuales. Los niños nacen en un mundo que impone tabús estricticos sobre ciertas expresiones y conducta respecto a la sexualidad. La prohibición más importante es el tabú de incesto, que se impone al niño para protegerlo y proteger la relación sexual adulta. Los niños aprenden que existe tabú del incesto cuando expresan sus sentimientos hacia el progenitor del sexo opuesto y reciben desaprobación, la cual a su vez produce culpa y miedo, y amenaza a la autoestimación del niño. Esto se complica cuando ambos padres lo refuerzan inconscientemente. Por ejemplo, a veces ocurre que el progenitor del mismo sexo interviene para separar al cónyuge del niño, pero al mismo tiempo lo menosprecia y se retira de el, provocando que el hijo
vuelva hacia donde su progenitor seductor. En cualquier triangulo, los tres miembros tienen miedo a ser excluidos. Y según Virginia Satir, no es posible que exista una relación de tres personas. Solo existen relaciones cambiantes entre dos, con un tercer miembro haciendo el papel de observador. En un triangulo familiar funcional los conyuges confían en su propia relación marital y por lo tanto son capaces de manejar, sin amenazas, los temores del niño de ser excluido y ocurre esta dinámica: • La madre es capaz de permitir al niño una relación afectiva con su padre • El padre es capaz de permitir al niño una relación afectiva con su madre • Ambos le señalan al niño con claridad que nunca podrá ser incluido en la relación de ambos conyuges En un triangulo familiar disfuncional los conyuges no confían en su propia relación marital. Los niños necesitan y anhelan una relación aceptada con cada uno de sus padres. A un hijo que se convierte en PI los padres le dan la carga de muchas otras cosas: Le hacen creer que el es el responsable de que sus padres se mantengan juntos Como el hijo no puede complacer a ambos padres y a si mismo a la vez, manifiesta conducta cada vez mas contradictorias y extravagantes Esas conductas malas, diferentes, locas o enfermas, hacen que los padres se unan con mas intensidad y enfoquen ambos su atención en el PI Cree que debe vivir para sus padres Aunque el no puede aliviar el dolor conyugal, los padres le permiten creer que si y que es esencial para la relación marital, recibiendo asi la carga de omnipotente. En el capitulo 13 habla sobre la importancia de los niños en la psicoterapia, la presencia de niños puede significar una anarquía, lo que es comlicado atraer su interés, tienen capacidad limitada en poner atención dificultando una integración a la sesión. Muchos terapeutas no prefieren integrar a los infantes, pero es necesario, aunque sea problemático, es una pieza clave, se debe realizar las preguntas necesarias a ello, si es necesario o trascendente la estancia o presencia del niño. En el capitulo 14.
El papel y la técnica del terapeuta: Los modelos. El papel de un terapeuta va a estar muy determinado, aparte de su personalidad, por el modelo teórico de su preferencia. Para Virginia Satir, la psicoterapia se puede basar en uno de los tres modelos siguientes: el médico, el del pecado y el del crecimiento. Ahora, no hay nada sagrado en una fórmula o modelo. Lo importante es la comprensión y el uso en el aquí y el ahora. El modelo médico: En esta tendencia se cree que la causa de la enfermedad está localizada en el paciente mismo y aquella desaparece si destruimos su origen dentro del enfermo. El modelo psicoanalítico es un ejemplo perfecto. La suposición básica es: “yo el terapeuta, no hago nada para estimularte, de modo que lo que sientas y