Con ferencia imp artida en di versa versass Univers U niversid idade adess de Bu enos A ire ir es, 4-6 septiemb septiemb re 2006 T raducción cas castellana tellana de Ó scar car Esquisa Esquisabel. T exto ora or al. Fecha del do cumento: 9 d e octubre 2006 U ltim a actua actualiza lización: ción: 13 de octubre 2006
¿Q ué es es el pra pr agm atism tism o y por po r qué es im p orta or tante? nte? N athan than H ouser ouser
(In stitute of A merican merican T hou ght, I ndiana ndiana U nivers niversity) ity)
Recibid mis saludos en nombre del Proyecto de Edición de Peirce en Indianapolis y de nuestro Instituto para el Pensamiento Americano . Es un gran placer para mí estar aquí el día de hoy con vosotros, participando de vuestra comunidad de investigación filosófica. Cuando lo podemos hacer, es bueno fundir nuestras comunidades de pensamiento más locales en una comunidad de investigación más amplia, la cual, según la creencia de Peirce, es necesari necesariaa para par a el el avance avance h acia la verd ad. O s ag agr adezco en careci carecidd am ente vuestra vuestra invitac in vitació iónn p ar a vis visitaro itaross hoy. ho y. M i di sertación ertación d e hoy tom ar á la form a de una un a serie de pr eguntas eguntas provocativas acerca del pragmatismo, dos de las cuales se encuentran conteni das en el título. M is preg pr egun untas tas son p rovoca ro vocativas tivas po r el hecho d e que no las respon responderé deré com pletam pletam ente sin sinoo que q ue las ofrec ofr eceré eré com o p rovocaciones rovocaciones para continuar pensando y debatiendo. Espero que lo que he de decir estimulará a algunos de vosotros a penetrar más profundamente dentro de esta temática, pues pienso que tiene mucho que ofrecer a los estudiantes de filo sofía. ofía. H abréis de ver ver que he de concentrarm concentrarm e pri ncipa ncip alm ente en en el pragmatismo de Peirce. ¿Q ué es el pragm pragm atis atism o?
T engo engo l a segur egur ida id ad de que q ue ni nguno d e vosotr vosotros os es lego lego acerca acerca de esta esta preg pr egunta, unta, pero, al m ism ism o tiem po, he h alla ll ado que aun aun p ara aquello aquello s filó sofo s que afirman ser pragmatistas no es fácil decir qué es el pragmatismo de un modo que satisfaga a todos y cada uno. Así pues, espero que no os importará si comienzo con una definición lexicográfica del pragmatismo. Dicho procedimiento nos dará lo que Peirce denomina un segundo grado iccionario ionario O nline de claridad de la aprehensión. De acuerdo con el D icc M erriam rriam -W ebste bster r , el pra pr agm atism tism o es "un m ovim iento ameri cano cano de fil osofía osofía
fund ado por C. S. Peirce Peirce y W illiam ill iam Ja Jam es y carac caracteriza terizado do por las las doctri nas de que el significado de las concepciones se debe buscar en sus repercus reper cusio iones nes pr ácticas, cticas, de qu e la funció n d el pens p ensaam iento es guiar ui ar la acción acción y de que la verdad se debe examinar preeminentemente por medio de las cons con secuencia ecuenci as prác pr áctiticas cas de l a creencia". creencia". Tenemos aquí un buen punto de partida. Encontramos tres elementos clave: (1) el significado está asociado a repercusiones prácticas; (2) la función del pensa pensam iento se concibe concib e com o una u na guía guía para la acción acción y (3) se se dice di ce que el examen de la verdad consiste en las consecuencias prácticas de la creencia. Por cierto, se trata de claves para la comprensión del pragmatismo en general. Pienso que es especialmente importante recordar que los pr agm atistas tistas or iginario s esta estaban ban atrapados en en u na ola ol a de naturalismo que l os indujo a otorgar un gran peso a la idea de que el pensamiento funciona como guía para la acción y que, como tal, conecta la experiencia pasada con las circunstancias presentes y con las expectativas futuras. Es fundamental que el pensamiento juegue un importante papel en la supervivencia humana. nglishh D ictiona ictionary ry para una ilustración histórica Si vamos al O xford E nglis importante del uso del término "pragmatismo", encontramos la famosa cita de 1898 tom ada de la introd in trod ucción pú bli ca que de la palabr palabraa hizo hi zo W illi il liaam Jam es: es: "L "L o pri p ri ncip al d el pr acticalismo cticalismo o prag p ragm m atism tism o, com o [ C. S. Peirce] Peirce] lo denom inó, inó , cua cuando ndo p or p rim era vez vez le oí enun enuncia ciarlrloo en Cam Cam brid br idgge [M ass ass.] en los primeros años de 1870, es la pista… siguiendo la cual… podemos segui eguirr nues n uestrtroo pr p r opio op io sendero send ero."." M e gusta gusta esta esta alu alussi ón d e Ja Jam es a m antenerse nt enerse en el pr opi o sendero. sendero. T al cosa cosa m uestra uestra que desde desde el com ienzo se se entendió que el pragmatismo tenía algo que ver con el hecho de que el pragmatismo tiene el prop ósito ósito o la función de guiar guiar el pensa pensam iento. Al considerar lo que el pragmatismo es, podéis ver que estoy privilegiando los primeros pragmatistas, Peirce y James, más que los pragmatistas más contemporáneos, como, por ejemplo, Rorty y Brandom. Concibo a este pragmatismo temprano, el movimiento filosófico que comenzó con el antiguo Club M eta etafísico físico de Cambr idge , como el pr agm atismo clásico clásico que aún hoy ho y guía guía a los lo s pragm pragm atistas tistas. N o todos tod os están están de acuerdo. Algunos piensan que la forma más vital del pragmatismo actual, algunas veces denominado "neopragmatismo", se deriva del activismo dem ocrático ocrático d e Richard Richard Ror ty m ás dir ecta ectam m ente que de las las preocupa pr eocupaciones ciones por la claridad del significado y la verdad que motivaron al pragmatismo clás clásico (cfr (cfr.. M ark B auerlein, T he Prag Pragm atic M ind , Duke Univ. Press 1997). Rorty mismo, no obstante, retrotrae su pragmatismo a James y, especialm especialm ente, a D ewey, ewey, pero d eses esestim tim a a Peir ce por haber tom to m ad o el camino equivocado. Así es que puede ser un poco engañoso sugerir, como quizás quizás he h echo, echo, q ue hubo unanim idad entre l os prim pr im eros pra pr agm atista tistass. M e veo obl iga igado a considera consider ar l a p regun regunta ta::
¿H ubo realm ente un p ragm ragm atis atism m o clásico? clásico?
En una ponencia que presenté hace tres años en el simposio anual sobre pragmatismo del Profesor Ibri, señalé que a menudo se piensa que hay dos variedades principales de pragmatismo, una de las cuales se deriva de Peirce, mientras que la otra proviene de James. Richard Robin, un estudioso de Peirce, se refiere a la variedad peirceana tratándolo como el pragmatismo "clásico" y sostiene que es la especie científica verdadera cuyas raíces se retrotraen a la filosofía griega. La consecuencia de la tesis de Robin parece ser que ninguna de las variedades del pragmatismo que caen dentro del campamento de James es seriamente científica o guarda una relación especialmente estrecha con el pensamiento clásico. Presumiblemente, en el cam cam po de Ja Jam es encontramos encontramo s a F. C. S. Schil Schil ler, con su H um anismo , y la línea lín ea de l os prag pr agm m atistas que qu e va de James, James, a tra tr avés de D ewey, a Ror Ro r ty. ¿Q uién se queda qued a en el cam cam po de Peir ce, asum iend o que q ue haya haya alal guien? ui en? Robin no lo dice, pero quizá podría ser la línea de pragmatistas, si es que todos ellos son pragmatistas, que va de Peirce, a través de C. I. Lewis y Q uine, a D avidson vidson y Putnam Putnam . T al p arece ser ser la conce concepción pción de H . O . Pragm atism tism s . M ounce, como Robin, se M ounce en su su libro T he T wo Prag se refiere refiere a esta tradición inspirada en Peirce denominándola "pragmatismo clásico". No obstante, deberíamos tener el cuidado de recordar que "pragmatismo clásico" clásico" (com o "filo fi lossofía am am erica eri cana na clási clási ca" ca", tal com o es usad usad a por M ax Fisc F ischh ) se refiere a menudo en general a lo que muchos denominan ahora pra pr agm atism tism o tem pra pr ano. no . Pienso Pienso qu e es la práctica práctica m ás com ún. M ounce, como Robin, contrasta el pragmatismo de Peirce con el que va de James y D ewey h asta llegar llegar a Rort Ro rty, y, al al tiem ti empo po que qu e deses desestim tim a este este "s "segu egu ndo nd o pragmatismo" considerándolo únicamente como "una variación del Positivis Positivism m o, una form a de Emp irism irism o extremo… en conflicto conflicto con el prim er Pragmatismo… en sus puntos esenciales (p. 231)." Podéis ver que si hubo algo que puede denominarse pragmatismo clásico, probablemente no fue nunca una doctrina única, universalmente aceptada con respecto a todos los detalles significativos. En una época tan temprana como 1908, Arthur O. Lovejoy identificó trece variedades de pragmatismo y sólo de Peirce se dice a menudo que ha sostenido dos variedades distintas de pragmatismo, aunque tal cosa está sometida a debate. No obstante, deberíamos recordar que es posible compartir creencias identificables en un cierto nivel de generalidad y vaguedad, aun cuando pueda haber desacuerdo si se va más a lo profundo. Así es que quizá podamos decir que realmente hubo un pragmatismo compartido, un pra pr agm atism tism o clásico. clásico. T al vez la defini ción lexicográfica lexicográfica que prop p rop orcioné orcio né al al comienzo se acerca a la expresión de esta concepción compartida. Repitamos la definición: "[El Pragmatismo es] un movimiento americano de filo sofía fundado po r C . S. S. Peirce y W ill iam Ja Jam es y carac caracteriza terizado do por po r l as
doctrinas de que el significado de las concepciones se debe buscar en sus repercus reper cusio iones nes pr ácticas, cticas, de qu e la funció n d el pens p ensaam iento es guiar ui ar la acción acción y de que la verdad se debe examinar preeminentemente por medio de las cons con secuencia ecuenci as prác pr áctiticas cas de l a creencia". creencia". Recordemos, sin embargo, que señalé que de acuerdo con Peirce la definición lexicográfica expresa sólo un segundo grado de claridad de la aprehensión. No obstante, Peirce es bien conocido por haber abogado por un grado de claridad más alto, un tercer grado, caracterizado por su famosa máxima pragmática: "Consideremos qué efectos, que puedan tener concebiblemente repercusiones prácticas, concebimos que tenga el objeto de nuestra concepción. Entonces, nuestra concepción de esos efectos es la totalidad de nuestra concepción del objeto". ¿Puede apl aplicá icárs rsele ele la m áxim a de Peirce Peir ce a él m ism ism o con el fin de da d arnos rn os el tercer grado de claridad acerca del pragmatismo tal como él lo concibió? Podr ía ser de ayuda ayuda un p oco de i nfor m ación del contexto. En una serie serie de artículos de 1868 y 1869, Peirce había presentado una "nueva plataforma para la filosofía" de la que esperaba que reemplazase la plataforma fundacionalista de Descartes. Entre las innovaciones revolucionarias de dicha serie se encontraba el argumento de Peirce de que todo pensamiento consiste en signos y que los signos son externos y públicos. Así, Peirce fue quizá el pri m er filósofo filósofo en aba abandon ndon ar lo que W illard illard V an O rm an Q uine denominó "la idea de idea" y en realizar lo que, hasta cierto punto, ahora denominamos "el giro lingüístico" (que para Peirce era el giro semiótico). En 1877 comenzó una nueva serie de artículos en lo que introdujo el pragmatismo y continuó desarrollando su nueva plataforma anticartesiana. Fixation of B elief elief " ("La fijación de En el primer artículo de dicha serie, " Fixation la creencia"), Peirce elaboró su punto de vista post-darwiniano, el cual ponía énfasis en el hecho de que somos seres naturales (organismos vivientes que interactúan) en un mundo cambiante y en el hecho de que nuestra capacidad para el pensam pensam iento es p arte de nuestro nuestro equi eq uipp am iento natural. n atural. D iscutía iscutía de qué modo surge la duda en la experiencia y genera la investigación orientada a llevar al pensamiento a un estado de reposo que denominó "creencia". Peirce identificó cuatro modos de la fijación de la creencia, de los cuales únicamente uno estaba basado en la interacción investigativa con los objetos reales de la creencia. creencia. U nicamente nicam ente este este cuar cuar to m étodo étod o era científi científico co y di gno de confianza a la larga. Peirce comenzó su segundo artículo de la serie, " H ow to M ake our I deas Cl ear ear " ("Como esclarecer nuestras ideas") con una consideración acerca de la importancia del pensar claramente y con un examen de la distinción car car tesiana tesiana entre las concepciones concepci ones clar clar as y oscur oscur as. T al com o h e indi in dica cado do,, Peirce creía que Descartes podía ser mejorado por la adición de un tercer nivel de claridad y que tal cosa implicaba la aplicación de la máxima
pragmática de Peirce. Presentamos aquí algunos de los pasos clave que Peirce emprendi emp rendi ó p ara argumentar argumentar a favor favor d el p ragm ragm atism tism o: 1. L a función fun ción o propó pr opóssito d el pensa pensam iento es prod pr oducir ucir l a creencia creencia.. 2. La creencia implica el establecimiento de una regla de acción (o hábito). 3. El "resultado final del pensar es el ejercicio de la volición, y de ella ya no form for m a parte el pensa pensam iento". iento". 4. El p rop ósito ósito d el pensa pensam iento es pr oducir odu cir h ábitos de acc acció ión, n, no actos indi in divid viduales uales,, sin sin o h ábitos bi tos o reglas reglas de acció acción. n. 5. Toda distinción real de pensamiento y, por tanto, toda distinción de significado ignif icado con siste en en una u na posible d iferencia iferen cia en la prá pr áctica. 6. Así, lo que algo significa tiene que ser entendido en términos de qué hábitos implica. Dicho de otro modo, podemos decir que "nuestra idea de una cosa cualquiera es nuestra idea de sus efectos sensibles", sin embargo, nótes nó tesee con cuid cu id ado estas estas tres tr es p equeña equeñ as p al abra abr as "nues nu estrtraa idea id ea d e". e". N uestra id ea de u na cosa cosa cual cual quier qu ieraa es es nuestr nuestraa idea id ea de sus sus efectos sens sensib ibles. les. Así, Peirce llegó finalmente a la máxima que he de repetir: "Consideremos qué efectos, que puedan tener concebiblemente repercusiones prácticas, concebimos que tenga el objeto de nuestra concepción. Entonces, nuestra concepción de esos efectos es la totalidad de nuestra nuestra concepción concepción del objeto". objeto". D ándo le la vuelta y sim sim plificándola, pl ificándola, podemos formularla de esta manera: nuestra entera concepción de un objeto cualqu cualqu iera es nuestr nuestraa con con cepción de to dos do s sus sus efectos efectos prá pr ácticos ctico s con concebibl cebibles es.. Esta máxima representa el tercero y más elevado grado de claridad de las ideas en la teoría peirceana de los tres niveles de claridad. Peirce acompañó su enunciado de esta máxima pragmática con un número de ejemplos de su aplicación. Una de las concepciones más dificultosas que examinó fue la concepción de la realidad. ¿Qué significa decir que algo es real? Consideremos esta cuestión brevemente abordando la concepción de lo real tal como lo hace Peirce a partir de los tres grados de claridad. El primer grado de claridad es el que tenemos cuando estamos fam fam ili ariza ri zados dos con con una concepció concepción. n. D e este este mo do, do , ¿cuá ¿cuáll sería sería un ejemp lo de un típico primer grado de claridad con respecto a la concepción de lo real? Nuestra familiaridad con el término, como "¿son reales estas flores?" o "H am let no era una p erson ersonaa real" o "D escubr escubr í que su su amo r no n o era real". real". Ordinariamente, no tendríamos dificultad en entender estas expresiones. Peirce Peir ce seña señaló ló que aun l os má m ás jóvenes entiend en esta esta concepción con cepción,, a menu do a una edad muy temprana. Cuando, por ejemplo, se le narra a un niño un cuento acerca de un monstruo que se come a las niñas y lo niños pequeños, una respuesta común es "pero, ¿no es real, no?" En un segundo grado de claridad, ¿qué significamos diciendo que algo es real? En este caso necesitamos una definición abstracta (del tipo de las del diccionario). Esto es más dificultoso. Una definición extraída del Random
H ouse ouse U nabri nabri dged dged D ictionary ictionary de
mi escritorio hogareño es la de que "lo real" es aquello que es "independiente de la experiencia en la medida en que se opone a [lo que es] fenoménico o aparente". En primer lugar, Peirce nos pide que consideremos qué significamos por una quimera o ficción y, siguiendo dicha discusión, sugiere que un buen segundo grado de comprensión de "lo real" es "aquella cosa cuyos caracteres son indep in dependi endientes entes de lo l o que qu e cualq cualquier uieraa pueda pensa pensar q ue di cha cosa cosa es" es". Consideremos ahora el tercer grado de claridad. ¿Cómo deberíamos buscar, desde el punto de vista de la máxima pragmática, este tercer nivel de significado de lo real? ¿Cuáles son los efectos que imaginamos o concebimos que las cosas reales tienen? Peirce sugiere que "el único efecto que las cosas reales tienen es causar la creencia". Por supuesto, algunas creencias son causadas por ficciones o falsedades, no por cosas reales, de modo que si queremos tener claridad acerca de la naturaleza de la realidad tenemos que identificar los efectos propios de la realidad. ¿Cuáles son los denom den om ina in ados do s "efectos "efectos propi pro pios" os"?? L as creencias creencias verd verdaadera der as. Peirce Peir ce concibe la l a "creencia "creencia verdadera" com o el resul resulta tado do d estinado estinado de la la investigación legítima, a saber, destinado en el sentido de que si tuviésemos mundo y tiempo suficientes, la alcanzaríamos. Próximo al final de este segundo artículo, escribe que "la opinión cuyo destino es ser finalmente aceptada por todos aquellos que investigan es lo que significamos por la verdad, y el objeto representado en esta opinión es lo real". Así, parece que el efecto principal que asociamos con la realidad, en el tercer nivel de claridad, consiste en que es lo que se resiste a las concepciones erróneas de ella y que, por tanto, fuerza a los investigadores serios a dirigirse hacia la verdad, en la medida en que usen el correcto método de investigación. Esta concepción de la verdad y la realidad se expresa poéticamente en un verso de un poema de W illi am Cull en Br yant, yant, cita citado do a menudo p or Peirce: Peirce: crushed to earth earth "¡Oprimida en la tierra, volverá a erigirse la verdad!" ["T ruth crushed shall rise again !"]. !"]. Q uizá esta esta afirm fir m ación d e W illiam il liam C ull en B ryant ryant os parezca parezca traída traída de los lo s pelos pel os,, pero es la con concepción cepción de Peir ce: su prag p ragm m atismo está está m arcado p or su creencia de que el significado nos guía a través de la experiencia hacia la verd verdaad. E sa idea de que qu e hay una realid realid ad que es independiente del m odo od o en que pensemos acerca de ella y que el modo en que el mundo es nos forzará, finalmente, si tenemos el suficiente tiempo, a superar nuestras concepciones erróneas acerca de ella, tiende a distinguir la filosofía pragmática de Peirce de otras variedades de pragmatismo. Este es uno de los modos en que podemos responder a la pregunta acerca de en qué consistiría la diferencia, si aceptamos el pragmatismo de Peirce en lugar del de algún otro, lo cual es un modo de pensar acerca del significado pragmático del pragmatismo en sí mismo. El pragmatismo contemporáneo, en particular las concepciones de
Richard Rorty y sus seguidores, parece ponerse muy impacientes con este realism realism o p eircea eir ceano no y la concepción de la l a verdad que se sigue igue de d e él. él. Pasem Pasem os aho ahorr a a otr a preg pr egunt untaa provocativa pr ovocativa:: ¿Pued en acas acasoo d iferentes personas personas cono conocer cer o creer la m ism ism a cosa? cosa?
Posiblemente, vuestro sentido común os sugiera que la respuesta a esta pregunta es obviamente "sí". Sin embargo, el asunto no es tan obvio para algunos pragm pragm atista tistass. U n m uy conocid o pra pr agm atista tista,, John John M cD erm ott, el editor edit or de las colecc col eccio iones nes de escrito escrito s de Josia Josiahh Royce R oyce y W illi il li am Jam es, es, sostiene que la respu respu esta esta de W illi il liaam Jam es a la pr egun egunta ta acerca acerca de cóm o dos do s pers per sonas on as pueden pu eden conocer con ocer l a m isma cosa cosa es "no pueden". pu eden". H asta donde don de lo puedo explicar, se piensa que esto es así porque dos personas diferentes no pueden jamás tener las mismas experiencias sensoriales presentes y son las experiencias sensoriales presentes las que James asocia con el significado. Sin embargo, Peirce insiste, a diferencia de muchos otros pragmatistas, que el pragmatismo no debería hacer consistir el significado en alguna acción o cosa presente ni en ninguna experiencia sensorial particular. Es verdad que Peirce dijo que "nuestra de idea de una cosa cualquiera es nuestra idea de sus efectos sensibles", pero lo que tenía en mente era la concepción de los efectos sensibles, que es general, y no algún efecto sensible presente, que es singular. ingular. M irem ir emos os nuevam nuevam ente el m odo en que Peirce Peirce culm ina su su m áxim a: "Entonces, nuestra concepción de esos efectos es la totalidad de nuestra concepción del objeto". El significado de una concepción es nuestra concepción concepci ón de sus sus efectos efectos concebibl concebi bles es.. El signifi cado cado es una un a con concepción cepción y, alal igual que una palabra, es general, aun cuando se encuentra crucialmente conectada con nuestra concepción de los efectos sensoriales. En parte porque algunos de los otros pragmatistas de la época de Peirce desistieron de compartir la concepción peirceana de que el significado es general, de que no se lo puede reducir a experiencias o eventos particulares presentes, Peirce sintió la necesidad de distinguir su concepción de la de los otros rebautiza rebautizand ndoo su doctrina do ctrina con el nom no m bre "prag "pragm aticism ticism o". Peirce dio un interesante ejemplo para ilustrar su argumento. Supóngase que dos hombres, uno sordo y el otro ciego, observan un asesin esin ato. E l so rdo rd o n o p uede tener sensa ensaciones cio nes auditi ud iti vas vas y el ciego ciego no pu ede tener sensa ensaciones cio nes visua visuales les.. O bviamente, bviam ente, el cieg ci egoo y el m ud o no n o serán serán ca c ap aces de compartir plenamente las creencias de que una amenaza de muerte ha sido seguida por el chasquido de una pistola y un grito mortal, o que un hombre con una pistola humeante miraba con satisfacción a otro hombre estrem estrem ecido ecido por el dol or y tendido tendid o en el suelo. Sin em barg bargo, o, Peirce sos sostiene tiene que ambos hombres pueden formar un juicio común o alcanzar la misma conclusión de que se cometió un asesinato. Aun cuando las impresiones
sensibles son radicalmente diferentes, el juicio resultante de ambos observadores puede ser el mismo, precisamente porque es general y alejado de los sentidos. Esto nos ayuda a recordar que Peirce sostenía que la función del juicio en la percepción percepción es reducir la multip mu ltiplilicida cidadd d e los sentidos sentidos a la unid ad d e la proposición. Esto concentrará la atención más en lo que el ciego y el sordo dicen acerca de sus experiencia que en lo que sus sensaciones puedan haber sido en sí mismas. Si se acepta que las creencias son proposicionales, es sólo una cuestión de lógica el que lo general esté implicado por lo particular. El que esta creencia más general pueda ser realmente compartida por ambos hombres, es posible porque no hay referencia a la experiencia de los sentidos. Parece ser relativamente no problemático que ambos hombres representen su creencia con las mismas palabras –"se ha cometido un asesinato"- y en el nivel expresado por esa proposición hay buenas razones para pensa pensar que signi signi fica la misma m isma cosa cosa para am am bos hom bres br es.. Sin embargo, hemos de tener cuidado aquí en no abandonar el punto fundamental del pragmatismo. Peirce era claro en su creencia de que “una proposición que no tiene relación alguna con la experiencia está desprovista de todo significado” (de "Immortality in the Light of Synechism". 1893: "Inmortalidad a la luz del sinechismo"). Así, cuando decimos que el sordo y el ciego pueden compartir una creencia común porque es general y no representativa de las diferentes experiencias sensoriales de las cuales emergió, tal creencia tiene que estar relacionada, sin embargo, con alguna experiencia futura posible que ambos hombres puedan compartir, como por ejemplo, la de que si se los interroga en un tribunal acerca de si han sido testigos de un asesinato, ambos hombres responderían "sí" o la de si se encontrasen solos en un cuarto junto con el asesino, ambos sentirían temor por po r su seg segurid ur idaad. ¿Es relevante el pragmatismo para toda experiencia y para todo tipo de vida?
Para W il li am Jam es y Joh Johnn D ewey ewey la respu respues esta ta pod ría ser ser "sí" "sí".. Pero p ara Peirce no lo es. Acabo de señalar que Peirce limitaba el pragmatismo a un método para determinar el significado de las "concepciones intelectuales", que son las concepciones generales. Si estudiáis la teoría semiótica de Peirce, descubriréis que hay muchos géneros de signos que no son intelectuales en ese ese sentid sentid o, por p or ejempl ejem pl o, sentim sentim ientos iento s e indicac ind icacio iones nes d e diversos géneros énero s. El pragmatismo no se ocupa de ese género de concepciones. Peirce no fue enteramente consistente en ese punto. En una época (en 1903) había proclamado que el pragmatismo era "un instrumento maravillosamente eficiente… de un señalado servicio en cada rama de la ciencia" y recomendaba el pragmatismo como algo ventajoso para la conducción de la
vida. No obstante, posteriormente llegó a pensar, como lo había hecho al com ienzo, que el pr agm atism tism o se ocupaba ocupaba princip pr incip alm ente de la clari claridad dad del pensamiento y de la seguridad del razonamiento, al tiempo que señaló que había que pagar un precio por la seguridad. De acuerdo con Peirce, el razonamiento involucra siempre una negociación entre la seguridad y la potencia creativa. Peirce comenzó a creer que el pragmatismo tiene las limitaciones que resultan de escoger la seguridad por sobre el pensamiento creativo y observó que "[el pragmatismo] no concede ni una simple sonrisa a la belleza, a la virtud moral o a la verdad abstracta, las únicas tres cosas que elevan a la humanidad por encima de la animalidad". Pienso que es interesante observar que en cierto modo los pioneros del arte moderno estuvieron motivados por un ideal que es casi el opuesto del que motivó a los pragmatistas. El famoso pintor de las primeras épocas del arte contemp con temp orá or áneo, K andin nd inssk y, es escribi cri bióó en 1911 191 1 acerca acerca de las nuevas pinturas cubistas de Picasso que las encontraba interesantes pero de algún modo "falsas" y que, a pesar de ello, se sentía complacido con [el cubismo] como un signo del enorme esfuerzo hacia el pensamiento inmaterial (Everdell, p . 310). L a meta de K andinsky, nd insky, as así com o l a de m uchos arti artisstas tas, era desconectar el arte de lo que los pragmatistas denominaban "las consecuencias consecuencias concebid con cebidaas". E s interesa interesante el hecho de que q ue fue precis pr ecisaam ente por esa época que Peirce comenzó a considerar las limitaciones del pra pr agm atism tism o y el m odo od o en qu e pod ría ser antitético antitético con la creatividad. creatividad. Pero no cometamos el error de suponer que debemos renunciar al pensamiento intelectual a favor de la creatividad. Obviamente, ambos son valiosos y necesitamos de ambos para tener éxito e incluso para sobrevivir. La cuestión es sólo si el pragmatismo es relevante para todos los géneros de actividad y concepción humanas y que Peirce llegó a pensar que no lo era. Pero esta es un área que aún requiere de mucho estudio y quizá alguno de vosotros pueda ayudar en este trabajo. L a pregunt preguntaa fina fin al que des d eseo eo cons con sid erar breve br evem m ente es la siguiente: siguiente: ¿Por qué es importante el pragmatismo?
A pesa pesar d e sus sus lim itaciones itaciones,, el pra pr agm atism tism o es im porta po rtante nte por m últipl úl tiples es razones. Sitúa el pensamiento humano en el orden natural de las cosas y le proporciona una trayectoria hacia delante, en lugar de la trayectoria hacia atrás, propia de las viejas epistemologías y de la filosofía analítica. El contenido de pensamiento ha de ser hallado en las experiencias anticipadas más que en las causas históricas. Se trata de una filosofía dinámica que puede incorporar la creatividad dentro de las actividades intelectuales, aun cuando el significado creativo no está sujeto estrictamente al análisis pragmático.
El pragmatismo relaciona el significado con la evidencia y es naturalmente compatible con una base inductiva para el conocimiento. En este respecto, el pragmatismo casi parece ser una extensión del método científico y nos produce la impresión de ser completamente moderno en el mejor sentido. Al convertir al cognoscente en algo central para la teoría del conocimiento y al denegar especiales privilegios a algún punto de vista particular, el pragmatismo casi parece ser posmoderno (como una muy simple ilustración de lo que significa para un cognoscente (o lector) ser algo central para el conocimiento, considérese el famoso caso del pato-conejo que un estudiante de Peirce, Joseph Jastrow, llevó a la atención del mundo filo sófico, con la ayuda ayuda de W ittgens ittgenstein). tein). Esta Esta figura por sí misma m isma no p uede decir si es la figura de un pato o de un conejo. Verla como un pato es interpretar la figura: verla bajo un concepto. Verla como un conejo también es mirarla teóricamente o bajo el concepto de conejo. Uno no puede ver esta esta figur figuraa com o un pato pato y como com o un conejo al al m ism ism o tiem po por que nuestro nuestro concepto de pato es totalmente distinto de nuestro concepto de conejo – aunque las figuras que vemos en ambos casos son idénticas. Esto ilustra cómo el significado debe ser de algún modo conectado al uso o a las consecuencias concebidas. Como el pragmatismo enlaza el significado y la justificación con la experiencia futura más que con las causas pasadas, deja abierta la posibilidad y la legitimidad de muy creativos métodos de investigación y descubrimiento. Es en este respecto que la abducción peirceana, su método de conjetura inform info rm ada o intuiti i ntuitiva va,, se se conecta conecta con con su pra pr agm atism tism o. L a legiti legitim m idad de una u na hipótesis no se deriva del lugar de donde provino la idea sino de lo que se puede pu ede hacer hacer con ell a y de sisi la experiencia futur fu turaa la sus sustenta tenta o no . Por tanto, el pragmatismo es importante, quizá importantísimo, porque las ideas tienen poder y el pragmatismo nos ayuda a comprender cómo puede pu ede ser ser esto esto p osib osible. le. D ejo esta esta observac observació iónn p ar a que qu e la ponderéis. pon deréis. El pragmatismo es importante por otra razón, una razón que es más bien sociológica y política. La filosofía en lengua inglesa ha sido dominada durante más de cincuenta años por lo que denominamos la tradición analítica nalíti ca (por supues up uesto, to, está está abi abierto erto al deba d ebate te pr ecisa ecisam ente qué q ué es la fil osof osofía ía analítica nalíti ca,, pero aquí d ejaré ejaré a un l ad o esta esta cuestió cuestión). n). H ay un pensam pensam iento general de que esta tradición filosófica que va de Frege, Russell y W ittgens ittgenstein tein a través través de Carnap Carnap y el M ovim iento de Ciencia U nifica nif icado do a Q uine, uin e, Sellars ellars,, Putnam y Rorty Ror ty es está declinando. D ebido en parte a l a promoción hecha por Rorty y Putnam, el pragmatismo, hasta cierto punto, ha renacido en las últimas dos décadas y se encuentra a punto para ser una corriente filosófica principal, listo para llenar el espacio que la filosofía analítica pueda dejar tras de ella. Esta concepción se expone clara y convin centemente centemen te en dos do s recientes libr li bros os de Joseph oseph M argolis rgoli s, Reinventing Reinventi ng Pragmatism y The Unraveling of Scientism. Juntos constituyen ambos libros
un fuerte argumento a favor de que "sencillamente, el problema más im por tante tante al al com ienzo del siglo iglo X X I " es es la "a "adecuación decuación o inadecuación inadecuación conceptual conceptual del 'naturalis 'naturalism m o' analít analítico" ico" y la contienda entre lo que M argol rgolis is denom den om ina in a los lo s natura natur ali zado zadores res y los lo s pr agm agm atistas tistas (2002, p. 3). H ay buenas razones p ar a p ensa ensar que qu e el prag p ragm m atism atism o, esp esp ecialm ecialm ente los lo s pr agm atismos tismo s de los lo s pr agm atistas tistas clásico clásicoss, ha h a de experi m entar entar una un a nueva vitalida vitalid ad en los l os año año s venideros y que, más aún, puede llegar a dominar la filosofía. Sea de ello lo que fuere, en cualqui er caso caso l os pr agm agm atistas tistas son son nuevam nuevam ente objeto de seri seri a considera consider ación y ya sólo ól o por p or esa esa r azón el p ragm ragm atismo es im portante. po rtante. Finalmente, el pragmatismo es importante porque ha sido y es todavía abor recido por filó sofo s de im porta po rtancia. ncia. Personalm Personalm ente, ente, creo que cuand cuandoo el pragmatismo es objeto de aborrecimiento, tal cosa ocurre usualmente porque se piensa incorrectamente que los pragmatistas favorecen ingenuamente ingenuamente lo útil por po r sobre lo verd verdaadero; no obsta obstante, nte, sea sea de ello lo que fuere, incluso el aborrecer algo es reconocer su importancia. M ucha uch as gracias gracias por po r vuestra am am able atenci atención ón..