Marc Ferro - Cine e historia
El film, fuente y agente de la historia CINE ARG.
Hay muchas interferencias entre cine e historia, como en la conuencia de la historia que se va haciendo, en la historia entendida como relación de nuestro tiempo, como expli explicac cación ión del deveni devenirr de las socie sociedad dades. es. Y, ante ante todo, todo, como como agent agente e histó históric rico. o. Apareció en primer lugar como un instrumento del progreso cientíco. Hoy el cine ha conservado esta función inicial y la extendió a la medicina, tami!n usado desde un principio por la institución militar. "uando el cine se convirtió en arte, intervienen sus pioner pioneros os en la histor historia ia con con lms, lms, docume documenta ntales les o cción cción.. #an pron pronto to como como los dirigentes de una sociedad advirtieron cu$l podía ser la función que desempe%ar$ el cine, intentaron apropi$rselo y ponerlo a su servicio& las diferencias se sit'an aquí al nivel de las tomas de consciencia. (as autoridades desean la suordinación del cine. )sto no excluye que los cineastas deendan sus propias ideas. A su manera *ean +igo, en! en! "lair, "lair, (ouis (ouis -alle, -alle, Alain Alain esna esnais is y odar odard, d, todos todos ellos ellos en alguna algunas s de sus películas, demuestran una independencia con respecto a las corrientes ideológicas dominantes, creando y proponiendo una visión del mundo in!dita, que les es propia y que suscita una nueva toma de consciencia. )sta capacidad del cine no cesa de sorprender sorprender incluso a las iglesias me/or instaladas en sus certe0as dogm$ticas. dogm$ticas. (a nueva etapa se inicia con la multiplicación de las c$maras 1uper 2 mm3 el cine puede alcan0ar un mayor dinamismo en su tendencia a volverse el agente de una toma de consciencia social o cultural a condición de que la sociedad ya no sea 'nicamente un o/eto de an$lisis, un o/eto lmale por su peculiar valor de uen salva/e en enecio del militante4cameraman. Hoy la sociedad ya puede asumir sus propias responsailidades. )sta intervención del cine se e/erce por medio de un cierto n'mero de modos de acción que dan a la ora ecacia y operatividad. )l cine dispone de un uen n'mero de formas de expresión que no son una simple transcripción de la escritura literaria, sino que poseen una especicidad3 es lo que estudian los teóricos de la escritura cinematogr$ca. 1in emargo sería ilusorio imaginar que la pr$ctica de este lengua/e es, aunque inconscientemente, inconscientemente, inocente. (a utili0ación y la pr$ctica de formas de escritura especícas son armas de comate supedi supeditad tadas as,, a la socie sociedad dad que prod produce uce el lm, lm, a la socie sociedad dad que lo reci recie. e. (a reali0a reali0ación ción de un lm segrega segrega rivalidades, rivalidades, conictos conictos y luchas luchas de inuencia. inuencia. #ales #ales conictos conictos provoc provocan an enfrenta enfrentamient mientos os seg'n seg'n cu$l cu$l sea la socieda sociedad d vigente, vigente, entre entre el artista y el )stado, entre productor y los distriuidores, entre autor y el reali0ador, e igual ocurre con los diversos miemros del equipo, con los equipos entre sí, etc.
"omo todo producto cultural, cada película posee una historia, que es historia, con su trama de relaciones personales, su estatuto de o/etos y personas, en donde se regulan privilegios y fatigas, honores y /erarquías. #oda sociedad recie las im$genes en función de su propia cultura. )xige que los analicemos no solo a trav!s de civili0aciones distintas en su diacronía, sino tami!n en el seno de una misma cultura. #odo ello entra en /uego cuando se trata del modo que adoptan una gura de escritura o un estilo para seguir en activo o quedar anticuados. 5gual ocurre con el contenido y la signicación de una ora. )sta puede leerse con el contenido y la signicación de una ora. 6uede leerse de forma distinta incluso opuesta en dos momentos de su historia. )l camio de orientación puede funcionar a nivel de una sola de las sustancias de la película. (a capacidad energ!tica y social de la película, las formas de acción y las lecturas variales pueden coincidir, como por e/emplo en 7el 0orro de lenarvor8 película alemana de 9:;<, que estigmati0a el genocidio de los irlandeses a manos de los ingleses. 1i el ;< es antina0i, experimenta un cierto malestar, quiere ser crítico con la ideología explícita de la película, pero no por ello acepta la matan0a de irlandeses. +íctima de esta trampa, oserva como esta película cumplía, en 9:=>, una función exorcista. (os alemanes del => no pueden creerse culpales de crímenes que ellos denuncian, condenan y comaten. (a lectura histórica de la película, lectura cinematogr$ca de la historia& tales son los dos 'ltimos e/es que dee seguir quien se pregunte acerca de la relación entre cine e historia. (a lectura cinematogr$ca de la historia plantea al historiador el prolema de su propia lectura del pasado. (as experiencias de varios cineastas contempor$neos, tanto en la cción como en la no cción, demuestras como el cineasta historiador puede proporcionar a la sociedad una historia de la que hasta ahora se veía privada por la institución. (a lectura histórica y social de la película, iniciada en 9:<;, ha permitido alcan0ar 0onas no visiles del pasado de las sociedades& revelando, por e/emplo, las autocensuras y lapsus de una sociedad, de una creación artística, o tami!n el contenido social de la pr$ctica urocr$tica durante el stalinismo .