COLUMNA DE HIERRO Marco Tulio Cicerón se encontraba enfermo por lo que su médico le puso sobre el pecho el emplasto caliente, Marco al sentirlo tan caliente pregunto con voz de enojo, ¿Que era esa porquería? El Doctor le contesto que era grasa de buitre, lo cual estaba garantizada para aliviar toda inflamación. Marco Tulio al saber el precio de su remedio se preguntó lo que diría su esposa ya que era una señora muy ahorrativa y no le gustaba malgastar el dinero, Marco Tulio al explicar al doctor como era su esposa tosió fuertemente y el médico se sintió muy orgulloso al ver que la tos iba mejorando, Marco Tulio le dice al doctor qué muchas veces los pacientes se tenían que reponer rápidamente para no seguir soportando sus porquerías. Marco Tulio se encontraba en cama cuando su esposa Helvia empezaba a sentir los dolores del parto, Marco Tulio era un hombre muy miedoso por lo cual siempre se respaldaba bajo su enfermedad, el doctor que se encontraba por un lado de Marco Tulio le dijo que su esposa tenía dos horas con los dolores, que sería recomendable que el cómo su esposo estuviera a lado de su esposa, Marco le dijo a su papa también llamado Marco Tulio Cicerón que sería mejor que él estuviera a su lado que la ayudaría más su presencia, más tarde Marco Tulio se levantó de su cama y se dirigió a la habitación de Helvia, Marco Tulio se acercó diciéndole a su mujer me he levantado de mi lecho enfermo como estoy para estar a tu lado. Al llegar la hora del Nacimiento el día 31 Enero de 648 fundación de Roma se dieron cuenta que se trataba de un varón el cual se parecía a Marco Tulio dijo la señora Helvia que solo tenía sus ojos pero era el vivo retrato de su esposo, Lira expreso que se parecía a su ama Hervía que ella nunca se equivocaba y que ya habían sacrificado dos hecatombes con motivo del nacimiento del niño, Lira decía que había nacido un héroe y que los Judíos decían que estaban esperando a un héroe que estaba en sus profecías. Helvia al escuchar tantas tonterías dice que más bien parece un corderito nacido antes de tiempo, es un héroe dijo Lira cuando sea hombre habrá magníficos acontecimientos en Roma. Unos años más tarde el pequeño Marco Tulio dice que no es que su madre sea avariciosa sino que simplemente es ahorrativa como lo fueron todos los Helvis, el recordaba aquel día frió y la casa modesta en la que había nacido de la cual conservaba sus más dulces recuerdos. Después de la imposición del nombre y para evitar confundirse decidieron llamar al padre Marco Tulio, pasando hacer solamente Tulio, lo que ponía furioso al abuelo que replicaba que si con el nacimiento del nieto él se iba quedar sin nombre. El abuelo le dice a su hijo que son cosas de esa mujer que él era el que debería recibir el respeto y los honores que ya hasta los esclavos lo llamaban el viejo y que lo despreciaban hasta en su propia casa. Helvia decía que el abuelo no era razonable ya que él había sido quien decía que su nieto se llamaría Marco Tulio Cicerón, Helvia insistía en que era complicado tener tres
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varones con el mismo nombre, por lo que la señora Helvia expuso que él fuera el abuelo, su esposo Tulio y su hijo Marco. Helvia le dice a Tulio que su abuelo era más viejo y que tenía mejor genio y que eso se debía a que su madre siempre supo imponer su autoridad y que nunca había problemas, que su madre era alta y más fuerte, le dice que todo eso se tenía que hablar antes de casarse. Nadie parecía temerle a la temible Helvia o por lo menos no lo aparentaban. El abuelo habla a solas con su hijo y se muestra irónico referente a las mujeres, que él prefería una mujer que se encontrara en su sitio y que nunca interviniera en todos los asuntos que le concernían al hombre, el abuelo le dice a su hijo que para que quería una mujer que no tenía emociones, fuego ni pasiones que simplemente era una mujer estúpida, Marco en el fondo sabía que su esposa era todo lo contrario a lo que su padre decía, que era una mujer que no le temía a nada y que cumplía con todos sus deberes a la perfección. Marco pensaba que Helvia era como un animal el cual no se maravillaba de nada y esperaba que los hombres se comportaran bien en todo momento. La familia no vivían propiamente en Arpinúm pero gozaba con sus habitantes de la franquicia de Roma y que eran ciudadanos Romanos ya que el abuelo había nacido en un isla del río junto a Arpinúm y todos los demás de la familia decidieron ampliar la casa por lo que la señora Helvia lo tomo con calma, de pronto se empezaron a escuchar los martillazos y la vocecillas de los trabajadores, lo cual todos y cada uno de ellos comían y bebían de las frutas que tenían en la cocina, pero más tarde los trabajadores se empezaron a quejar de la calidad del vino después empezaron a murmurar que era una miseria de comida lo que le estaban dando, que la familia debería ser Plebeya y no Patricios como lo hacían creer a todo el mundo. Helvia por su parte contaba hasta la última rebanada de pan, al terminar la ampliación de la casa los trabajadores se habían dado cuenta de la existencia del viejo y que desde luego no podía verse con su nuera y juraron jamás volver a trabajar con esa familia, ya que no era de categoría sino más bien Plebeya. Helvia al escuchar que los trabajadores decían chismes de su familia corrió a contárselo al viejo, contestándole él que no se preocupara que era lógico que las personas inferiores a ellos se sintieran así, ya que no podían estar a su altura. Más tarde Tulio se retiró a su cabaña de campo para estar a solas y poder pensar, pero cuando su hijo marco estuvo en su segundo verano el retraído joven puso todas sus esperanzas en su retoño. El pequeño Marco aunque con muy poca edad ya poseía un formidable vocabulario y además tenía un don especial referente a la poesía y eso era gracias a su padre que se dedicó a enseñarle no con acento de niño si no con acento de todo un hombre culto, el pequeño escuchaba a su padre con una atención que parecía que el comprendía lo que su padre quería hacer de él. Helvia por su parte pensaba que el niño era frágil como su padre por lo que lo consentía igual que a su esposo. Marco grito a Tulio y el niño voltio a mirarlo para dedicarle una sonrisa realmente hermosa, Marco se encontraba con Lira en el campo por
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varones con el mismo nombre, por lo que la señora Helvia expuso que él fuera el abuelo, su esposo Tulio y su hijo Marco. Helvia le dice a Tulio que su abuelo era más viejo y que tenía mejor genio y que eso se debía a que su madre siempre supo imponer su autoridad y que nunca había problemas, que su madre era alta y más fuerte, le dice que todo eso se tenía que hablar antes de casarse. Nadie parecía temerle a la temible Helvia o por lo menos no lo aparentaban. El abuelo habla a solas con su hijo y se muestra irónico referente a las mujeres, que él prefería una mujer que se encontrara en su sitio y que nunca interviniera en todos los asuntos que le concernían al hombre, el abuelo le dice a su hijo que para que quería una mujer que no tenía emociones, fuego ni pasiones que simplemente era una mujer estúpida, Marco en el fondo sabía que su esposa era todo lo contrario a lo que su padre decía, que era una mujer que no le temía a nada y que cumplía con todos sus deberes a la perfección. Marco pensaba que Helvia era como un animal el cual no se maravillaba de nada y esperaba que los hombres se comportaran bien en todo momento. La familia no vivían propiamente en Arpinúm pero gozaba con sus habitantes de la franquicia de Roma y que eran ciudadanos Romanos ya que el abuelo había nacido en un isla del río junto a Arpinúm y todos los demás de la familia decidieron ampliar la casa por lo que la señora Helvia lo tomo con calma, de pronto se empezaron a escuchar los martillazos y la vocecillas de los trabajadores, lo cual todos y cada uno de ellos comían y bebían de las frutas que tenían en la cocina, pero más tarde los trabajadores se empezaron a quejar de la calidad del vino después empezaron a murmurar que era una miseria de comida lo que le estaban dando, que la familia debería ser Plebeya y no Patricios como lo hacían creer a todo el mundo. Helvia por su parte contaba hasta la última rebanada de pan, al terminar la ampliación de la casa los trabajadores se habían dado cuenta de la existencia del viejo y que desde luego no podía verse con su nuera y juraron jamás volver a trabajar con esa familia, ya que no era de categoría sino más bien Plebeya. Helvia al escuchar que los trabajadores decían chismes de su familia corrió a contárselo al viejo, contestándole él que no se preocupara que era lógico que las personas inferiores a ellos se sintieran así, ya que no podían estar a su altura. Más tarde Tulio se retiró a su cabaña de campo para estar a solas y poder pensar, pero cuando su hijo marco estuvo en su segundo verano el retraído joven puso todas sus esperanzas en su retoño. El pequeño Marco aunque con muy poca edad ya poseía un formidable vocabulario y además tenía un don especial referente a la poesía y eso era gracias a su padre que se dedicó a enseñarle no con acento de niño si no con acento de todo un hombre culto, el pequeño escuchaba a su padre con una atención que parecía que el comprendía lo que su padre quería hacer de él. Helvia por su parte pensaba que el niño era frágil como su padre por lo que lo consentía igual que a su esposo. Marco grito a Tulio y el niño voltio a mirarlo para dedicarle una sonrisa realmente hermosa, Marco se encontraba con Lira en el campo por
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lo que el señor Tulio le pidió a Lira que lo dejara a solas con su hijo y que ella se retirara a su casa con la señora Helvia pues la podría necesitar. Tulio sentó a Marco en sus piernas y beso su mejilla, el niño acaricio a su padre pues él era cariñoso de naturaleza Tulio se quedó viendo a su hijo pensando y se preguntó que si el también escaparía del mundo o se enfrentara a él. El chico perecía escuchar al padre con mucho interés, Tulio elevo la mirada al cielo y empezó a rezar, no para pedirle riqueza para su hijo si no para que fuera un hombre como lo eran los antiguos Romanos con una conducta justa, Tulio ofreció a su hijo a Dios, suplicando piedad para él y que lo cuidara de caer en el deshonor y la codicia y rezó como lo hacían antes sus antepasados y se sintió muy confortado después de hacerlo. Cuatro años después nació Quinto Tulio Cicerón, hermano de Marco, Helvia no había dado a luz con la facilidad que dio el primero, el viejo por su parte expreso que sería una niña, pues solo una mujer podría causar tantos problemas, doña Helvia a punto de desmayarse escucho cuando dijeron que había sido un niño, mucho más grande que Marco, más guapo y travieso su parecido era idéntico al de su madre, tenía sus mismos rasgos. El abuelo se encontraba desilusionado con Marco, por lo que puso todas sus esperanzas en Quinto Cicerón, Tulio se quedó observando a su hijo y se atemorizo con él, porque pensó que sería igual que su esposa Helvia, el abuelo orgulloso de su nuevo nieto le dice a Lira que por lo mínimo llegara hacer un cónsul ya que era digno de sus antepasados, pero Lira pensó todo lo contrario y no se impresiono. Mientras que Quinto con sus puños y sus piernas empezaba a juguetear en su cuna. Marco el hermano mayor lo admiraba y se empezó a encariñar con su hermanito, Quinto estiraba sus pequeños brazos para tratar de abrazar a Marco, al observarlo Tulio descubrió cuál era su hijo favorito y decidió que Marco tenía que recibir otro tipo de educación y no la que él le había dado, pero Marco era sensible al idioma y estaba aprendiendo el lenguaje de los esclavos a pesar de sus enseñanzas de su padre. Así que Tulio hizo un viaje para traer a su maestro que le había enseñado por Tulio y regresaron a la isla para enseñarle a Marco su hijo mayor. El abuelo y Helvia se sorprendieron al ver que Tulio había tomado una decisión sin consultar a otros, y el poeta Arquias al ver el sueldo que recibiría se asombró y se imaginó que adónde iba era lugar donde podría comprar libros caros. Pero se desilusiono de la isla de la isla pero se dio cuenta de que Marco tenía una enorme capacidad de asimilación por lo que le fue muy fácil encariñarse con su discípulo, por su parte tenía una hermosa esclava de ojos color azul, pelo rubio, con la intención de protegerse de la soledad, ella cuidaba de su amo se desvivía por complacerlo en todo y llego hacer la mejor amiga de Marcos ya que solo tenía 12 años, era más alta que Arquias, ya que él era delgado y bajo de estatura. Eunice admiraba a Helvia y quería imitarla por lo que pronto aprendió a tejer prendas de lana ya que Helvia adoraba la lana y el lino, Eunice llegó a triunfar y Marco
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pronto podría escribir de ella, aunque era una niña muy simple, analfabeta pero era encantadora. Marco asimilo rápidamente el Griego como si fuera su lengua nativa, el gran sentido de humor de Arquias ayudo para que él muchacho se inspirara, a los 6 años Marco ya escribía como un poeta, que Arquias consideraba un éxito para él, Arquias su poeta fue el primero que le hablo de la existencia de Dios a su pequeño discípulo. Al poeta le fastidiaba el cariño que existía entre los hermanitos, hermanitos, ya que no podía creer que un niño tan inteligente podía querer aun niño tan molesto como lo era Quinto, pero más tarde se dio cuenta que Marco le estaba enseñando el Griego a su hermanito, esto no hizo que Arquias se enterneciera si no que se preguntó cómo podría tener tanta paciencia para enseñarle Arquias nunca se sentaba a la mesa con la Familia ya que le disgustaba todas las comida, los malos olores etc. Arquias platicaba con Tulio de su famoso discípulo, por lo que Marco a los 7 años escribió su primera poesía y su poeta se sentía satisfecho por sus primeros pasos filosóficos. Marco siempre se ponían inquieto cuando escuchaba de algún ataque contra los Romanos. Marco le pregunto a su profesor que a que se refería la ley de Dios, Arquias se echó a reír yo no soy quien para contestar esa pregunta. A pesar de las las esperanzas esperanzas de Arquias Arquias Marco logro logro ser un gran poeta lírico lírico y pronto escribía prosas maravillosas, tenía una facilidad para leerla y con una seguridad enorme. Arquia acostumbrado acostumbrado a la ciudad, se puso triste al recibir la noticia de que la familia se trasladaría a Roma. Roma le disgustaba por que no podía consentir que fuera conquistado por los Romanos. Tal vez que una nación superior conquistara otra inferior era algo razonable pero lo anterior jamás. Arquias se dirige a reclamarle a Tuno, y se atreva alzarle la voz ya que Tulio nunca imponía autoridad alguna. Arquias le dice que ama a esa isla y que no quisiera alejarse de ella, Tulio respondiendo le dice que si se trasladaban a Roma era por causa de su salud, además mi padre cree que es algo excelente ya que de esa manera mi hijo Marco puede relacionarse con otros niños de nuestra categoría, como vez el niño no tiene más amigos que los hijos de los esclavos, pero Arquias tenía su propia opinión acerca de Roma ya que Roma era vulgar y se ha encargado de copiarle a Grecia. Arquias expresa que que no hay nada más deprimente deprimente como una mentalidad mentalidad mediocre que ha sido obligado a comprender conocimientos a pesar de su real capacidad. Como la señora Helvia ha sido para usted una bendición tenerla en su hogar ya que es una excelente matemática. Tulio le dice Arquias yo te prometo que volveremos muy seguidos a esta preciosa isla porque mi corazón se queda pesar de sus fríos inviernos, pasaremos las primaveras y los veranos en Arpinum. Arquias piensa piensa que es un buen buen hombre y que rara rara vez se encuentran personas así. Marco de 9 años al escuchar que se trasladaban a vivir a Roma se sintió emocionado y le dijo a Quinto su hermano de 5 años que irían al lugar donde han nacido
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sus padres, por lo que verían cosas hermosas, Quinto como se parecía a su madre no se impresionaba de nada y se oponía al cambio y le dice que a él le gusta aquí, y que si su padre se enfermaba era por su culpa, al abuelo no le gustará ir a una ciudad donde las calles están llenas de gente todo el día y toda la noche. Más tarde los niños empezaron a jugar con una pelota, Quinto le gritaba a Marco que tirara la pelota, Marco le respondió que estaba cansado y se sentó, Quinto corrió a su lado y se sentó enfrente de Marco y se tiro al césped, Quinto era muy guapo se parecía a la señora Helvia, era mejor que Marco referente al ejercicio, y trepaba a los árboles más rápido que Marco, cuando lanzaba la pelota era con fuerza y Quinto miro a su hermano y le confeso que el seria General de Roma y Marco le contesto que él sería Abogado y quizá hasta Cónsul. Quinto no sabía que era eso pero cada vez admiraba más a su hermano. Quinto le dijo a su hermano que él sería lo que se propusiera y que hay de quien se interponga en su camino, Marco se echó a reír, y le dijo que no hay nada más noble que la Ley porque gracias a ella distingue a los hombres de las bestias. Quinto no entendía nada y empezó a trepar a un árbol y retando a su hermano le dijo a que no me alcanzas, Marco acepto el reto y decidió subir al árbol, al momento en que logro estar arriba no se sostuvo bien y estuvo a punto de caerse, por lo que Quinto lo sostuvo con fuerza y lo ayudo a bajar sin que sufriera un rasguño, Marco le dijo a su hermano que era un Hércules y comenzó a recordar cómo había sido su infancia recordando cómo eran sus padre, su madre, su hermano y dijo que todo lo que tenía era maravilloso. Más tarde el abuelo encontró una casa muy grande y cómoda y con un precio muy modesto, la casa se encontraba en una zona que años anteriores vivía gente de categoría. Pero con el tiempo se han mudado a las orillas, lo cual no disgusto al abuelo, Tulio no estaba a gusto ya que le molestaba el olor y las calles tan ruidosas. Pero Tulio pensó que no debería ser egoísta ya que tenía que pensar en sus hijos lo cual tenían derecho de sobresalir y de poder compartir los dones que la vida les había dado. El verano había terminado y comenzaba el otoño, Tulio no se imaginaba una ciudad tan ruidosa como ésta y decidió salir al césped donde un niño lo miraba con tal atención y como a Tulio siempre lo intimidaban los niños excepto sus 2 hijos, Tulio cambio la mirada creyendo que el niño no lo observaría más, pero el niño llevado por la curiosidad se acercó a saludarlo con un voz penetrante, Tulio por su parte no podía entender que los niños saludaran a un adulto y se preguntó el tipo de educación que le habían dado. El niño comenzó hacer preguntas al cual a Tulio le disgustaba mucho, ya que decía que los niños de hoy en día eran muy exigentes, Tulio le pregunto que como se llamaba y que donde vivía. El niño le contesto que vivía a lado de su casa y que se llamaba Cayo Julio Cesar igual que su padre y su madre Aurelia, voy a la escuela de Pilón, ¿Usted tiene hijos? Le pregunto Julio y Tulio le respondió que tenía 2 uno de 9 años y otro de 5 años, Julio le dijo supongo que irán conmigo a la escuela, Julio le comento a Tulio que su mejor amigo tenía 11 años el cual llevaba en nombre de Lucio Sergio Catilinia es un Patricio
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más que mi familia y ustedes, Plebeyos, nosotros estamos arruinados y solo nos queda el apellido, pero pronto nos mudaremos de aquí le dijo Julio. Tulio se retiró del niño y entro a su casa justo cuando su padre estaba firmando el contrato de la casa y le dijo que no, que porque tendrían unos vecinos no muy agradables, uno de los agentes pregunto que eran los Cesar pero que eran una de las mejores familias de Roma. Tulio le dijo a su padre que esos niños no tenían ninguna educación y que sus hijos tendrían que relacionarse con ellos, el abuelo le contesto que no se preocupara que sus nietos han sido muy bien educados, Tulio como siempre tuvo que someterse a las decisiones de su padre, el abuelo le dijo a Tulio que si se habían mudado había sido por su salud, Tulio le dijo está bien además le empezaba a gustar la casa, por lo que los agentes le dijeron que el pagó debía hacerse en efectivo en el momento que se tomase la posesión, el abuelo dijo que su banco se encargaría de todo, el abuelo le dice a Tulio que hasta Helvia se pondría muy contenta. Pasando el tiempo la familia se instaló en aquella casa que para ellos había sido una ganga, todos empezaron acoplarse a su nuevo lugar de vida y comenzaron a realizar su vida y comenzaron a realizar su vida cotidiana, por lo que Marco empezó a ir a la escuela de Pilón con su amigo Julio, quien era su vecino, en la escuela se encontró a un muchacho que desde el momento en que se vieron ambos se odiaron y tal vez sería un odio para toda la vida, el muchacho se llamaba Lucio y era el más popular de la escuela. Era un tipo guapo, de una familia muy prestigiada hasta los niños de menor edad lo admiraban y respetaban. Por otra parte Marco con muy buena educación y un comportamiento excelente, los muchachos se burlaban de él, por ser un pueblerino, tal vez eran influenciados por Lucio, Julio en la escuela se portaba igual que los demás, se burlaba de Marco pero al regresar a sus casas, Julio aprovechaba y le enseñaba todos los lugares que tenía que conocer Marco. Al otro día ambos regresaron a clases y antes de entrar había una persona que vendía todo tipo de dulces por lo que Marco con dinero compraba y le invitaba a su amigo Julio, pero Lucio al ver tal amistad se acercó y le dijo a Julio que como era posible que aceptara un regalo de un Plebeyo. Lucio tomo del brazo a Julio y le tiro el pastelillo y encima le dio un puntapié, ha Julio no le había dolido el puntapié si no su pastelillo y Lucio enfurecido golpeaba cada vez más a Julio lo cual Marco lo detuvo y Lucio lo golpeó y lo aventó pegándole a la mala, Marco por su parte enfurecido le respondió de la misma manera que el otro lo había golpeado, por lo que gano Marco, y al ver los otros muchachos. Nadie intervino, pero en ese momento llegó Pilón exigiéndoles que le dijeran que es lo que estaba sucediendo y todos le respondieron que Marco había tenido la culpa de todo, Julio por su parte explicó todo, pero Pilón como estima a Lucio jaloneo a Marco y le llama la atención, lo castigo con fuertes latigazos. Marco cuando llego a su casa como todo un hombre no dijo nada, pero doña Aurelia la madre de Julio le aviso a doña Helvia, y en ese momento la señora Helvia mando llamar a Marco y al verle cuanto latigazo tenia lo empezó a curar y le dijo a Marco que no volvería a esa escuela, Marco le respondió que el volvería, que si no lo hiciese todos se burlarían de él y doña Helvia orgullosa de ser hijo no opuso resistencia.
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Mucho antes de que fuese la ceremonia en su honor, para ser todo un adolescente, Marco se sentía más desgraciado que nunca porque en la escuela habían ingresado dos nuevos alumnos que eran amigos de Lucio, el cual eran igual de insoportables ya que eran de un apellido muy reconocido, ellos se llamaban Cneio Pisón y Quinto Curio, eran encantadores, muy bien parecidos pero más altaneros que Lucio, ellos no tomaban en cuenta a Marco aunque se divertían mucho con él, ellos no pretendían ser los jefes de la escuela aunque todos los querían exceptuando a Marco que los odiaba desde un principio. Lucio por su parte se encargó de decirles a sus amigos que él era de los que se llamaban nuevos ricos y que era un luchador loco y sucio. Julio le dice a Marco que cuando el fuera grande hará que los consideren como idiotas, Julio le dice a Marco que Quinto tiene una prima huérfana con gran hermosura y que se va a casar con Lucio, y se llama Liba. Los muchachos insultaron a Marco y el no contesto la agresión y todos en la escuela pensaron que había ganado Marco, más tarde se encontró con un gran amigo de nombre Noé era más Patricio que todos ellos, tenía gran habilidad para hacer reír a cualquiera que estuviera deprimido, y conoció a Marco el cual desde el momento en que se conocieron se apreciaron y fueron muy grandes amigos. Noé era un chico guapo que su único defecto era tener unas orejas enormes, lo cual a él no le interesaba eso y él era feliz, su madre de Noé le puso unos sabrosos pastelillos en una cesta para el desayuno de la escuela, el cual le invito a Marco, y este al probarlos se sonrió y Noé le empezó a platicar diciéndole que él puede llegar hacer todo lo que se propusiera ya que tiene una enorme capacidad de convencimiento, que él podía hacer que Pilón su profesor se sintiera tanto y que lo lograría siempre lo estuvo animando para que siguiera adelante y no se diera tan fácilmente que aprovechara ese don. Marco le contesto que pronto le iban hacer la ceremonia de la adolescencia y le empezó a explicar lo que va a comer en su reunión, claro con un escaso vino, ya que su Madre primero dará el vino y después el corriente. Más tarde cuando iban terminado el invierno, ellos se regresaron a Arpinum, donde su padre sentía mucho frió y siempre se enfermaba, por otra parte Marco en la hermosa isla de su abuelo fue ahí donde conocido a una hermosa mujer, que lo había dejado deslumbrado, él pensó que como era posible que una mujer tan hermosa anduviera caminando tan sola sin compañía de nadie, Marco se fue acercando, sonrojado y hasta que por fin logro acercarse a ella le empezó a integrar contestando ella que se llamaba Livia Curio, Marco al escuchar tal apellido se quedó pensativo por que el recordaba ese apellido de algún lado, después que recordó, le pregunto eres prima de Curio, si le contesto, lo conoces y estoy prometida a Lucio Catalina, Marco al escuchar tal respuesta se asombró y le pregunto que si se iba a casar con ese ingerido, Livia le dijo que sí era un niño encantador y muy guapo, Marco no podía creer que Livia tenía esa opinión de aquel estúpido, Marco trato de hacerla comprender que no se casara, pero Livia se retiró de su isla y Marco solo se quedó viendo mientras ella corría a su isla para ver a sus familiares.
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Marco desde ese momento quedo enamorado. Por lo cual en su casa no pensaba en otra cosa que no fuera Livia aquella hermosa muchacha, su padre inmediatamente se dio cuenta que a Marco le pasaba algo, y se lo preguntaron pero él no quiso dar ninguna explicación, por lo que Quinto su hermano pequeño le dijo que lo que tenía es que estaba enamorado, Helvia al escuchar tal cosa, empezó a preocuparse por qué Marco no podía enamorarse de una esclava, estaba bien que las esclavas eran hermosas pero que su hijo no podía enamorarse. Por su parte el abuelo le dijo a Marco que era hora de que hablara acerca de Roma, por lo que le jurara que nunca se iba a olvidar de Roma y que iba a luchar por ella, su padre al igual que su abuelo se referían a la guerra que se aproximaba y que Marco no podía olvidarse de Roma por culpa de una mujer o por otra circunstancia, que siempre tenía que tener presente a Roma, que porque todo ciudadano Romano primero estaba su patriotismo, Marco por su parte se sentía triste porque aunque el fuera muchas veces a la isla donde se había encontrado a Livia ella nunca volvió hasta que un día por fin se la encontró y comenzaron a platicar, ella le dijo que siempre la andaba buscando y que nunca la encontró porque ella se escondía y él nunca se fijaba arriba de los árboles. Marco no podía negar que estaba enamorado y aunque Livia sintiera lo mismo por Marco no podía existir ninguna relación ya que ella estaba prometida a Lucio y no podía desobedecer a sus ascendientes, Livia de nuevo se fue sin decirle nada a Marco. Y le juro que no sería la última vez que se verían, Marco al regresar a su casa no sabía nada de ella, ya que no ponían atención a los problemas de su casa, por pensar tan solo en Livia, ya Quinto su hermano se daba cuenta de todo y le hizo ver a Marco que su padre estaba muy enfermo, Marco al darse cuenta que se estaba comportando muy egoísta porque solo pensaba en él, y que los problemas de su familia por primera vez no había tomado importancia, el sentía mucho remordimiento portal situación y cuando llego la hora de la cena, Marco no sabía cómo empezar a preguntar acerca de la salud de su padre y pregunto por la situación de Roma, contestándole su abuelo que apenas había hablado de eso el día de ayer, por lo que Quinto se le quedo observando a Marco y él le pregunto qué cuanto había avanzado la situación de ayer a hoy. Más tarde cuando Quinto y Marco se pusieron a platicar, Quinto se encontraba pescando, Marco acababa de venir de su encuentro con Livia y Quinto tan observador como siempre le pregunto a marco acerca de hermosa chica, Marco le dijo que si la había visto, él le respondió que sí que corriendo sola para el puente, por lo que Quinto le pregunto que si la quería, Marco no lo podía negar y contesto que sí, Quinto le dijo que se casara con ella y él le dijo que no era fácil pues estaba comprometida con Lucio Catilina, Quinto al escuchar tal cosa le recomendó que lo platicara con él abuelo, Marco le dijo que platicaría con su mamá ya que era más lista que los tres hombres juntos. Marco al llegar con su mama doña Helvia se encontraba rodeada de las esclavas, por lo que la señora les pidió que la dejaran a solas con su hijo, y Marco le pregunto que si conocía a la familia Curio y ella le contesto que un poco, pero cuál era la relación que tenía con ellos, Marco le empezó a contar todo y su mama le dijo que esa muchacha no le convenía que sería mejor que la olvidara, parra que no le causara ningún daño, Marco un
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poco molesto por lo que le había dicho su madre le dijo que él nunca se olvidaría de Livia y que no pensaba rendirse tan fácilmente, Helvia le dijo que Livia tenía miedo al amor, porque ella pensaba que si desobedecía a sus padres, los dioses la castigarían, Marco le dijo a su madre que si Livia se casaba con Lucio él moriría de pena, Helvia le dijo que dijera tonterías tú tienes un deber en este mundo y como todo ciudadano romano, primero está tu patria antes que nada. Marco le dijo que nunca olvidaría a Livia y su madre le dijo que no la olvidará pero que pensara en su futuro y en lo que su padre esperaría de él. La familia tuvo que regresar a la capital pues en Arpinúm corrían peligro por la guerra. Al llegar a la capital Marco quería buscar a Livia pero toda gente se estaba mudando a causa de la guerra y él no la podía encontrar con tanta gente en la calle, quien estaba enterado de todos los acontecimientos era Quinto quien llevaba todos los acontecimientos que ocurrían con las familias ricas, Marco por otra parte cuando se dio cuenta de que su padre estaba enfermo y él ni siquiera cuenta se había dado y decidió irse al pupitre de su padre y como su madre días antes le habían notificado que estaban sin dinero y que Marco no se podía ir a estudiar a Grecia como lo habían planeado, Marco al ver aquel viejo, aquel viejo con ojos hondos, sintió un gran remordimiento al ver en qué condiciones se encontraba y Tulio no hizo platica acerca de la guerra y el escaso dinero, parecía que él vivía en un mundo totalmente diferente y le dijo a Marco que él tenía que seguir estudiando hasta que llegara hacer un Abogado. Al paso del tiempo Marco se fue a su pupitre donde no puede conciliar el sueño y de pronto escucho unos quejidos que provenían de la habitación de su abuelo, Marco por primera vez había sentido la muerte cerca, ya que cuando entro al pupitre del abuelo tenia los dando vueltas y el asustado corrió a pedir ayuda. Marco estuvo recordando de pronto aquel hombre que habían matado por haber propuesto reformas que ayudaría a Roma y que los demás no lo habían aprobado precisamente porque no les convenían. Después de la muerte del abuelo Marco pasaba hacer el hombre de la casa, quien tenía qué hacerse responsable de los gastos y del cuidado de su madre, padre y hermano, por otra parte Marco a los 17 años que tenía debía saber qué hacer con el cadáver del abuelo y el solo tenía que salir adelante, porque la señora Helvia no pensaba darle consejos de nada, y era recomendable que Marco se volviera hombre. Marco confundido y sin saber que hacer decidió que su abuelo seria enterrado en el lugar que él más amaba que era Arpinúm y que ahorrarían más que antes, la señora Helvia aceptaba todo lo que decía Marco , más tarde Marco volvió a ver a su amada Livia acompañada de una mujer que era su tía, Marco se quedó viéndola y cuando por fin paso al lado suyo quiso hablar con ella y solo Livia pudo presentarlo como su amigo ya que no podía decir que lo amaba, Marco feliz de haber visto a su amada, se dirigió a la escuela donde supuestamente solo recibían gente de categoría, pero Marco era un excelente alumno, Marco al llegar a la escuela se encontró a sus peores enemigos que eran Lucio Guillermo Catilina y Julio Cesar Curio sus enemigos y al mirar a Marco lo empezaron a humillar y le hicieron burla, Lucio agrediendo a Marco lo reto a duelo y Marco aceptó dicho duelo y Marco enojado empezó a luchar furioso contra su enemigo que le había quitado la mujer
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de su vida, todos le gritaban a Lucio echándole porras y cuando ellos pensaban que Lucio había ganado, Marco furioso lo aventó y le puso la espada en la garganta penetrándoselo poco a poco para poder disfrutar de ese gran momento, pero en ese momento se le reflejaron los ojos de su amada Livia y no pudo matarlo todos se sorprendieron y se preguntaron el por qué no lo había matado. Más tarde fue su amigo le preguntó que a ella que había pasado y Marco le dijo que era al único que le contaría la verdad, por otro lado su madre le dijo que le contaría la verdad, por otro lado su madre le dijo que estaba orgulloso de él. Noé le dijo que con lo que había pasado él podría escribir un libreto. Años más tarde, cuando Marco tenía 21 años cumplidos se empezó a preparar para presentar por primera vez su caso ante el senado, Scaevola le dice a Marco que ahora las leyes no son justas sino al contrario lo único que quieren es conseguir dinero y que si sigue pensando así jamás va lograr a ser un buen abogado, Marco insistiendo en una ley justa le dice a Scaevola que el luchará. Scaevola al ver que su discípulo no había aprendido nada, y que de nada había servido tanto esfuerzo y empeño, por lo que Scaevola le quería hacer entender que la justicia no era como él pensaba, y le dijo que si lograba arrancarle lágrimas al senado habría conseguido el éxito y si no el no serviría para pelear. Por otro lado su amigo Noé fue obligado a casarse con Ezraben Samuel, Noé horrorizado al pensar que se casaría, corrió a platicarle a su amigo Marco contestándole el que no era tan mala idea. Más tarde cuando a Marco volvió a ver Noé después de dos meses Noé se encontraba un poco gordo pareciera que le había caído bien su matrimonio, Noé había regresado con muchos planes para sus obras en las cuales intervenía Marco, después Noé se encontraba triste porque su padre estaba en la cárcel a causa de deberles dinero a unos miembros del senado Marco le preguntaba que si no tenía ningún abogado Noé le respondió que su padre siempre le había dicho que un hombre honrado jamás tendría problemas con la justicia por lo cual no necesitaba de abogados, Scaevola después de escuchar la versión se burló de su padre pero tomo la decisión de ayudarlo y pensó que eso le podría servirle a Marco ya que era un caso muy similar al del cliente de Marco, a diferencia de que se trataba de un pobre granjero, cuando más tarde Martha se preparaba para su primer caso frente al senado, Noé le pidió que le mostrara como se iba a presentar Marco de pronto se transformó en otra persona que ambos espectadores se sorprendieron y Scaevola solo le dijo de qué manera tenía que ir vestido, por lo que Noé se ofreció a mandarle toda la ropa blanca que utilizaría junto con un cinturón de planta, un anillo y un pulsera con el fin de sorprender a los del senado, pero Marco llevaba presente que el hijo de un pobre pueblerino del cual se sentía honrado. Al llegarse el día todos estaban emocionados cuando Marcos se había cambiado con la ropa que le había mandado su amigo Noé, su madre se le quedo mirando y le dijo que estaba orgulloso de él, pero le pregunto que como iba llegar al tribunal caminando Marco le dijo que no tenía importancia que antes todos lo hacían. Después de un momento escucharon llegar una litera en donde venía su amigo Noé el cual le dijo que no iba a permitir que un súper abogado llegara caminando, Marco le dio un abrazo a su
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amigo y se dirigieron al tribunal donde quinto y su amigo Julio lo estaban esperando para aplaudir el éxito que obtendría, por lo que Julio le presto un vara que significaba la fuerza, al llegar al tribunal se encontraba una fila muy larga de abogados que estaban en espera, Marco era el cuarto y cuando por fin lo llamaron él se encontraba muy nervioso y en cuanto tomo valor una mirada muy fuerte hizo que se pusiera más nervioso ya que dentro del senado se encontraba Curio, y Marco recordó aquellos que eran sus enemigos, Marco después que vio los ojos de aquellas personas que se encontraban sujetas con cadenas como viles esclavos Marco los tomo de referencia y les dijo a los del jurado que observaran a esas pobres personas que iban a ser configuradas solo por el hecho de no pagar unos impuestos tan elevados como esos, no era causa de privarlos de su libertad que donde se encontraban las leyes justas que lo único que había era crueldad, que ya les habían quitado su tierras, todas sus propiedades y que todavía era insuficiente para cubrir tal deuda tenían que tomarlos como esclavos para cubrir lo restante de la deuda, Marco indignado se puso furioso y Curio al escuchar que Marco estaba blasfemando a la ley de Roma. Scaevola decía que Marco no saldría vivo después de lo que había dicho. Marco dijo que derogaran esa ley y pusieran una ley justa, Curio se levantó y quiso poner en contra de Marco a todos los del senado, pero otro empezó a aplaudir y de esa manera Marco obtuvo el éxito de su primer caso. El juez les dijo que estaban absueltos de todo y que le sustituyeran lo que le habían quitado, el señor agradecido con Marco le ofreció dos cabritos de los mejores que tenía Marco hizo que se las enviaran a la isla de Arpinum ya que esa era la isla preferida de Marco. Todos los de su familia contentos y Julio por su parte corrió a quitarle su vara de la fuerza que le había prestado. Quinto le dice a Marco que Julio era un excelente amigo, Marco le respondió que si eso fuera le hubiera regalado la vara, Marco le dijo a Noé que después le regresaría todo lo que le había prestado, Noé le dijo que lo tomara como un obsequio de agradecimiento por lo que había hecho por su padre. Al otro día Marco se encontraba tomando el sol en su isla preferida de Arpinum y recordó todos aquellos momentos que había pasado con su amada Livia, y cuando se hizo obscuro se retiró a su casa, pero decidió leer un poco en la biblioteca de su padre. De pronto escucho un ruido y unos hombres tapados de la cara , solo seles notaba la boca, y comenzaron a desvestir a Marco quitándole toda la ropa, hasta dejarlo desnudo, lo dirigieron al río para ahogarlo y aparentar que había sido un accidente, cuando Marco se sintió cansado dentro del agua, de dejo vencer por la corriente y dejo que el agua le conduciría ya que había pensado que no valdría la pena vivir, que toda su vida era un martirio, pero de pronto escuchó una voz que le decía que un Romano no se podía dar por vencido, que luchara por su vida, Marco al escuchar tal cosa oro como nunca lo había hecho y le dijo padre sostenme de tu mano y condúceme a mi hogar, más tarde Marco logro llegar a la orilla del río todo cansado, pero feliz.; cuando de pronto escucho que Athos y esclavos lo buscaban, Marco se dirigió a ellos y le dijo a Athos que lo querían matar, por lo que tenía que irse a la ciudad porque por que corría mucho peligro, Athos le dice a Marco que él no puede viajar en esas condiciones, Marco le dice que tenía que hacerlo y que mandara esclavos para que le trajeran ropa, comida y una bolsa de dinero que el guardaba en su cubículo y un caballo. Cuando los esclavos
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llegaron lo ayudaron a vestir y a montar el caballo, para que Marco siguiera el rumbo hacia Roma. Athos le dijo a Marco que le permitiera acompañarlo hasta la ciudad, Marco se negó y le dijo que era mejor que se quedara porque si no habría sospecha, y le pidió que siguiera manteniendo la mentira de que él había muerto. Marco en el camino le daba ánimos a su caballo ya que era un caballo muy viejo y cojo, Marco tenía temor de que lo robaran ya que no eran tiempos de cabalgar por las circunstancias de la guerra social, pero cuando Marco vio que iban en un carro unos compatriotas romanos él se sintió contento y les empezó a gritar y cuando por fin logro que lo que escucharan le dejo al señor Centurión que él era el abogado de Roma y que se llamaba Marco Tulio Cicerón y que era su familia de los Helvis y Cicerón, el Centurión con voz burlona en un principio humillaba al muchacho pero después de que Marco empezó a contarle la historia de su familia, le dijo que su abuelo había sido su capitán y que Scaevola era su mejor amigo. Marco al escuchar tal cosa se emocionó y Centurión lo invito a subir para llevarlo a Roma. Marco llegó a contarle todo a Scaevola y el sorprendido le dijo que si no se lo hubiera contado el pensaría que era una broma, Marco le dijo que el reconocería a quien quería matarlo por el anillo que llevaba puesto uno de esos matones. Scaevola le pregunto y le dijo que le describiera el anillo Marco le dijo que era de oro y que tenía una serpiente enredada Scaevola se quedó pensativo y le dijo que a quien había ofendido o que con que mujeres se había metido, Marco le contesto a todo que no y que el solo se metía con prostitutas, entonces se trata de un senador peligroso como los Curio. Scaevola decidió que Sirio un hombre negro, fuerte y rudo sería el guardaespaldas de Marco el cuan no se podía despegar ni un segundo de él, Marco al tomar su vida normal decidió trabajar en la abogacía y tomo un caso de un señor que trabajaba haciendo esculturas de oro y que el gobierno quería que todos sus esclavos trabajaran para ello, Scaevola le dijo a Marco que no aceptara tal caso ya que con el gobierno no se metiera, Marco le dijo que él ya había aceptado y que no se podía echar para atrás que el seguiría adelante. Samo el esclavo de su cliente tenía miedo de decir que lo habían sobornado para que trabajara con otro que estaba aleado con el gobierno. Marco le dijo que no tuviera miedo que no le pasaría nada y que lo ayudará para tal caso Casino dudaba que un abogado tan flaco como lo era Marco no tenía la capacidad para ayudarlo en tal circunstancia. Más tarde Marco recurrió en busca de su antiguo amigo Julio que se había casado con una hija de Cinna, a Julio le sorprendió la visita de Marco ya que él siempre había pensado que los de Cinna habían traicionado a Roma, Julio al casarse con la hija de Cinna gozaba de muchos lujos y Marco le decía que si era feliz con los lujos, Julio decía que Cinna lo había escogido para esposo de su hija Marco le pregunto que qué pensaba hacer cuando se le acabará tanto lujo, Julio cambiando de tema le dijo que le había sorprendido la visita y que quería saber a qué se debía Marco le empezó a contar la historia de los hombres que lo habían atacado, Julio sorprendido de eso que si era por eso que contaba con un guardaespaldas Marco le dijo que sí, y le informó del anillo que llevaba puesto uno de sus atacantes ya que era un anillo de oro enredado con dos serpientes Julio tenía mucho poder con Cinna y le sugirió que tal vez él lo podía ayudar con su caso. Julio le dice a Marco que porque era tan imprudente que no anduviera en las calles tan obscuras solo con un guardaespaldas, Marco al ver tanta amistad por parte de su amigo Julio no dejaba de sentir desconfianza ya que Julio se notaba inquieto y nervioso después de lo que él le
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había platicado, mientras Marcos se dirigía a su casa, Julio se encontraba haciendo una carta muy apresurado diciéndole que lo debería de hablar y que tenía que recordar que Marco estaba bajo su protección, Julio envió la carta con un esclavo y días después Casino fue al despacho de Marco en la casa de Scaevola gritando de gusto que llevaba en su mano una carta donde daba la orden de que Marco había ganado el caso, Marco sorprendido de tal resolución recurrió a su maestro Scaevola, el cual se sorprendió y pregunto a Marco que a quien más le había comentado ese caso Marco le dijo que a él y a Julio y a nadie más, Scaevola dijo que el juez que había dictado tal cosa era por órdenes de otra persona, Marco quería escribirle a Julio para informarle tal resolución pero cuando lo iba a hacer llego una carta a Julio donde le escribía el nombre del magistrado que necesitaba para su caso pero Marco decidió ir a buscarlo a su casa de nuevo y darle la noticia de su caso no tenía que ser presentado ante el magistrado por lo que él nunca se olvidaría de tal amabilidad. Julio sospechoso ante Marco hizo que se preocupara. En la ciudad corrían rumores de que Sila se acercaba a Roma, cosa que no le preocupaba a Marco y no le daba importancia, corrió a contárselo a Scaevola, ya que él le pregunto ¿que qué pensaría Julio de esos rumores?, si Sila llegaba a Roma Julio estaría en peligro, Marco fue a visitarlo pero Julio se encontraba ocupado, por lo que su esposa se presentó y elogió a Marco por ser amigo de Julio. Después Marco y Helvia se encontraban preocupados, ya que no sabían dónde se encontraba Quinto, Marco quería tranquilizarlos y le dijo que él estaba bien en Galia, paro Marco se sentía atemorizado por la muerte de su hermano y recurrió al templo de marte donde se encontró a su amada Livia, el cual era una muchacha que no tenía nada que ver con la mujer que había conocido hace tiempo ya que estaba acabada y Marco le pregunto que qué le había sucedido, le dijo Marco que Lucio podría regresar en cualquier momento, Livia le contesto que mejor hubiera muerto en donde andaba, Marco le propuso que se fuera con él y ella le respondió que no podía que porque a su hijo lo tenía bajo su custodia un tío ya que no lo podía ver y en ese momento escuchó llorar a su hijo y se retiró, Marco le había propuesto su protección ya que su madre tenía lugares donde ella podría esconderse. Después Marco fue a desayunar con Scaevola y otros abogados, donde Scaevola le dice a Marco que le habían heredado cien mil sestercios de oro y todos sus compañeros corrieron a felicitarlo. Scaevola le dijo que quería hablar con él y le expuso que Carbo el que había reemplazado a Cinna lo mandaría matar por el simple hecho de que él lo detestaba y que era bien correspondido, Marco le dijo que eso eran tonterías y le dijo que tal vez Julio podía estar relacionado con sus atacantes, Marcos se negaba a creer tal cosa y Scaevola le dijo que uno de sus amigos de Julio llevaba puesto el anillo, más tarde Sacevola fue asesinado por órdenes de Carbo quien lo destetaba hace tiempo y lo mismo pensaba hacer con Marco ya que representaba gran peligro para el, Scaevola le heredo todos sus libros y una parte de dinero de una cantidad de cincuenta mil sestercios, el sillón y todos sus libros, el hijo de Scaevola le dijo a Marco que no llorara que su padre sería vengado, todos se sentían horrorizados e indignados pero no asistieron al funeral por lo que Marco pronunció la oración del fúnebre. Marco dijo que no había que vengar a Scaevola sino a Roma, después de la muerte de Cinna Carbo fue el
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primero que reemplazo al cónsul, Julio se escondía en la casa de Carbo donde le dijo que Scaevola no debería de haber muerto que todos sabían que Carbo había sido quien lo mando matar no le importaba lo que dijera la plebe, después Julio le dijo a Marco que no le podía pasar nada. Carbo enojado le preguntó que si era su protector lo cual contesto que sí y que estaba protegido por la ley. Más tarde, Sila logro apoderarse de Roma donde Carbo fue asesinado y muy próximamente Julio ya que Sila tenía la lista de quienes se iban a morir, Pompeyo el amigo de Julio le prometió a su amigo que al él nunca le pasaría nada, y que Pompeyo se había cambiado con Sila ya que él había pertenecido al ejercito de Sila dentro del cual se encontraba también Lucio Catilina, mientras tanto Julio y su esposa se encontraban escondidos en una cabaña, Marco estaba preocupado porque no sabía nada de él y salió en su busca cubierto con una capa para que no lo reconociera, y por otro lado Julio que nunca tenía miedo de nada hizo lo mismo y se encontraban en la calle, Marco lo tomó de la muñeca y lo jaloneo. Por otro lado Lucio llevaba puesto el anillo de serpientes. Helvia recurrió al cubículo de Marco para desahogarse un poco por el miedo que tenía de que Quinto su hijo estuviera muerto. La señora Helvia, la mujer fuerte no resistió y soltó el llanto, Marco dejo que llorara en su pecho y el comenzó a llorar también, la señora le dijo que su primo Linio acababa de ser asesinado un hombre inocente que quería vivir honradamente y sin tener ningún problema con el gobierno. Marco le decía que si la mataba a todo el mundo que en la calle no hubiera un lugar donde hubiera un funeral. Más tarde cuando Marco se dirigía al tribunal a presentar un caso civil llegó un Centurión escoltado por varios elementos del ejército, Marcos se puso nervioso y les dijo y les dijo que lo hicieran pasar y que sirvieran bien, al entrar el Centurión le pidió a Cotta que se presente ante Marco y le dice que tiene ordenes de escoltarlo a la casa de Sila ya que estaba invitado a cenar; Marco le dijo que no podía ya que tenía un caso muy importante al cual no podía faltar, Marcos sorprendido de tal invitación le preguntó a Cotta que para que lo quería ver Cotta le dijo que no sabía que el solo recibía órdenes que tal vez era porque Scaevola era su amigo y le había platicado de su discípulo, Marco asombrado ya que Scaevola nunca se había metido en la política decidió ir a tal almuerzo, pero antes fue escoltado por Cotta y sus esclavos al tribunal, el cual su caso fue aprobado porque los senadores se asustaron y se encontraba atemorizados al ver con cuanto guardaespaldas había llegado, Marco al obtener su triunfo se dirigió a la casa de Sila, una casa hermosa por dentro y por fuera con muy pocos muebles pero bella. Cuando Sila salió a recibir a Marco empezó a conversar con este último preguntándole de su abuelo y de Scaevola, Marco era de las personas que le gustaba discutir típico de un abogado expreso Sila. Sila al ver a Cirio le pregunto que quien era, Marco le respondió que era su guardaespaldas, Sila asombrado de tal cosa expresa que él no sabía que los abogados tuvieran enemigos, o que tal vez si por lo sinvergüenza que era Sila le dio órdenes a Cotta de que llevara a Silo a la cocina a Cotta para que comiera; el cual él se retiraba en contra de su voluntad, y Sila le dijo que estaba esperando a su segundo huésped, Marco voltio la cabeza y se dio cuenta de que se trataba de su amigo Julio Cesar. Julio le dio un gran
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abrazo a su querido amigo y se soltaron ambos ante Sila para disfrutar del almuerzo, cuando Sila comentaba sobre la constitución y la República Marco asombrado de ver a Julio que era esposa de Cornelia hija de Cinna, Sila quería que Julio se divorciara pero Julio amaba a su esposa y no se pensaba divorciar Marco lo apoyo y expreso que dios el desconocido había dicho que solo se podían divorciar por adulterio y que ella no había cometido nada por lo que había que respetar al dios y no a los hombres, Sila al escuchar tales palabras se sintió contento al saber que quería a las leyes por dios y a las otras por lo que podía tener confianza en el más tarde le dijo a Marco que Quinto su hermano estaba viviendo en esa casa, Marco al escucharlo no sabía qué hacer, lo único que quería hacer es verlo, pero Sila le explicó a Marco que Quinto se encontraba entre la vida y la muerte que si no hubiera sido por Segio Catilina Quinto estuviera muerto, Marco al escuchar que su peor enemigo había sido quien había defendido a su hermano que ahora le debía la vida, pensó que si él había matado a Lucio, su hermano hubiera muerto también, Marco le reprochó a Sila por qué nunca le había mandado una carta, Sila le dijo que eso era imposible ya que si lo hubiera hecho estuvieran muertos todos sus familiares, más tarde Marco pidió que lo llevaran con su hermano, Julio lo ayudó y lo condujo a la caballería donde se encontraba su hermano que todavía se encontraba entre las puertas de la muerte, Marcos se sentía agradecido con todos sus compañeros de Quinto ya que lo que querían más que a un hermano, Sila más que un hijo y cuando por fin estuvo al lado de su hermano comenzó a llorar y le hablaba para asegurarse si lo reconocería y Quinto que parecía que estaba muerto le habló a su hermano, Marco se alegró de tal cosa y le dijo que lo llevaría con sus padres más tarde Marco volvió con Sila y le dijo que él no estaría tranquilo mientras sepa que Catilina vivía en la misma casa que su hermano, Sila se soltó a reír y le dijo que no se preocupara porque todos querían a Quinto y lo protegían que mejor fuera a darle la noticia a su madre. Cuando Marco y Julio se dirigían a la litera que llevaría a Marco observaron a Sergio y Aurelia que se estaban dando un beso apasionado y Julio le dijo que el amor era algo hermoso. Por su parte Pompeyo cambió la opinión acerca de Marco ya que le había agradado demasiado. Más tarde Marco le dio la noticia a su madre Helvia la señora se puso muy contenta, pero Marco no sabía cómo darle la noticia de su padre ya que una emoción tan grande podría ser fatal para su salud entonces decidieron decirle que habían recibido una carta de Quinto donde decía que pronto iba a volver. Marco se dirigió a su despacho cuando un pasante le informó que lo había ido a buscar una mujer y que tenía una voz de una muchacha, Marco al principio no le dio importancia pero su corazón le empezó a latir demasiado rápido y le pidió al pasante que le describiera la mujer, Marco pensó que se trataba de Livia y pensó que su sueño se había cumplido por fin ya que podía tener a Livia en sus brazos para siempre, Marcos se sentía tan contento que quería gritar, pero después él pensaba en irla a buscar pero decidió que no que porque sería arriesgado para ella, entonces Marco decidió escribir una carta a su amiga Aurelia para preguntarle por Livia pero en la contestación de dicha carta le decía que Livia hacía tiempo que se encontraba afuera de Roma y que ella nunca lo iría a buscar. Marco al enterarse de eso decidió que su vida era una porquería y que no tenía sentido vivir sin su amada Livia. Cuando Marcos se encontraba melancólico llegaron dos soldados los cuales se trataba de su amigo Julio y Lucio su peor enemigo Marco al ver a
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Lucio sintió un coraje enorme pero como le debía la vida de su hermano trato de ser amable ambos saludaron a Marco diciendo que era el sexto abogado al cual acudían, Marco asombrado de tal cosa le preguntó el motivo y Julio le preguntó a Marco que si había ido a visitarlo la esposa de Lucio, Marco sorprendido le dijo que Livia no se había aparecido en su despacho, Lucio le preguntó que si el la conocía Marco no supo que contestar y de pronto le dijo que si Livia lo hubiera ido a buscarlo que jamás le diría nada ya que todo eso era personal y que él no podía dar información de sus clientes, Lucio le dijo que ni porque le había salvado la vida a su hermano dejaba de ser mal agradecido, Marco furioso a punto de golpearlo Julio lo detuvo y le dijo que Livia había muerto hace tres días , ya que ella estaba loca, Marco le dijo que ella no podía estar loca, ya que cuando ella había visto por última vez la había notado normal, Julio le contesto que ella siempre había estado loca y que también temían que su hijo también, Marco furioso de escuchar eso, le grito a lucio. Que él se encargaría en esclarecer la muerte de Livia, Julio le aseguro que Lucio se encontraba en su casa junto con Sila en el momento que Livia y su hijo agonizaban, que ella primero había envenenado a su hijo y que como no le había alcanzado el veneno para ella, había decidido clavarse una daga, Marco no creía tal historia y amenazo a Lucio, el por su parte le dice a Julio que él era testigo calumnia tan grave, pero eso a Marco no le importaba y le juro que esa muerte la llevaría hasta los Tribunales. Tiempo después Marco recibo una carta de su antiguo amigo Noé quien le informaba que pronto estaría de regreso junto con su esposa y una hija preciosa que había tenido; Marco se encontraba en su isla de Arpimun entristecido por la muerte de su amada Livia. Noé se quedó platicando con la señora Helvia ya que le encantaba charlar con ella, más tarde salió a buscar a Marco que se encontraba a las orillas del río, Noé trato de convencerlo para que nadaran un poco, pero él se acordó de su atentado y decidió quedarse en la orilla del río y Noé tratando de hacerlo reír les dijo que ellos no servirían de escultura ya que con esos cuerpos sólo servirían para hacer reír a la gente, cuando por fin se dirigían a su casa quinto ya restablecido se alegró de que Marco volviera a hacer el mismo de antes y la señora Helvia agradecida con Noé de que Marco había vuelto a su casa, por otra parte Noé le hizo una propuesta de trabajo a Marco en la cual tenía que intervenir con una fuerte cantidad de sestercios para producir la obra de Roscio que él sabía que tendría mucho éxito en Roma. Marco al principio le parecía absurdo pero fue convencido y acepto por lo que se regresaron a la ciudad de Roma donde Marco y Noé decidieron emprender una nueva vida llena de éxitos, cuando por fin Roscio tuvo el éxito esperado Marco empezó a recibir un poco de lo que había invertido, las mujeres de Roma no escatimaban para los regalos, más tarde a Marco se le presento un señor llamado Servio que solicitaba de sus servicios ya que él había publicado un libro que no era adecuado para Roma y que Sila se sentía ofendida por lo que había quitada todas sus propiedades y que su apellido podía ser deshonrado, Marco decidió aceptar tal caso por lo que mando varias cartas para que lo respaldaran, Marco como siempre astuto que como iban a matar un hombre por decir la verdad acerca de Roma los que integraban el senado era Julio y su amigo Pompeyo Julio fue a visitar a Marco para tratar de convencerlo de que se alejara del caso y que no interviniera en ese asunto, Marco por su parte no aceptó y Quinto su hermano se había incorporado de nuevo al ejército, Julio le
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dijo a Marco que lo invitaba a cenar para discutir tal asunto. Marco y Julio se dirigieron a la casa de Sila, Marco en su litera y Julio montado en un caballo hermoso, al llegar a la casa de Sila el mismo salió a recibir a Marco agradeciéndole que hubiera aceptado a cenar a el Sila le informo que los únicos que cenarían era Julio, Pompeyo, Curio, Craso y Pisón ya que les gustaba la cena con poca gente más tarde prosiguieron a comer del banquete y a Marco le sorprendió que Lucio no se encontraba con ellos por lo que pregunto por él y todo los demás asombrados por esa pregunta, Sila le contesto que se encontraba en los brazos de una mujer hermosa, Marco le dijo que él pensaba que estaba de luto después de su asesinato de su esposa, Sila le dijo que no había sido un asesinato a lo cual respondió Julio que eso era una acusación grave, Marco le dijo que si era cierto que lo demandaran. Sila dijo que él pensaba que iba a hacer una cena en paz y cambiaron de tema, por lo que Marco le dijo que él se dormía temprano y que sí había ido a ese lugar era por otro lugar, y expuso que era por la defensa de Catón Servio un hombre acusado de tracción solo por el hecho de publicar un simple libro y que además se encontraba ciego. Sila trato de que Marco no siguiera con el caso y que dejara que lo castigara como debía ser pero Marco no aceptó y se retiró furioso a la casa de Sila y por otra parte todos los demás invitados decían maldiciones acerca de él y Sila lo único es que era de un hombre que podía morir hoy, mañana o en su destino. Más tarde se reunía con su antiguo tutor Arquias y su amigo Noé el cual le dieron consejos para que fuera enfrentar a Sila y salvarle de la deshonra a ese señor Marco le comentó a sus padres los cuales estaban orgullosos de él y su padre le dijo que no le salvara solo la deshonra sino también la vida, Noé le había dicho a Marco que el día del juicio fuera vestido de luto con ceniza en la frente y con un pañuelo para limpiarse las lágrimas que tendría que sacar. Después Julio y Lucio comentaban que Marco no se atrevería a poner en ridículo a Sila que lo quería como un hijo, Julio les dijo que Marco era de las personas que no le tenía miedo a nada ni a nadie y que él seguirá siendo se protegido para siempre y por fin cuando se llegó el día del juicio se reunieron todas las personas que estimaban a Marco porque creían en la justicia, Julio y Pompeyo pensaron que no habría gente pero al llegar se encontraron la sorpresa que no se podía pasar por la muchedumbre que había, porque Julio le pidió a dos esclavos que les abrieran el paso, y Pompeyo preguntaba por Sila al cual respondió Julio que sería mejor que no viniera y Pompeyo le dijo que eso no era posible ya que Marco rogado e implorado que asistiera, de pronto vieron que la gente habría paso para que la gente se introdujera Lucio Catilina, Sila Dictador de Roma, cuando por fin todos se encontraban en su lugar correspondiente y servio fue introducido, Sila pregunto por Marco el abogado y Marco contesto aquí estoy, cuando el entro vestido de luto todos los del senado se asustaron y Sila le dijo que porque venía vestido de esa manera, le respondió que por que iba a representar a su cliente que había cometido un delito el cual ignoraba. Sila le dio órdenes a Julio para que diera lecturas a los delitos por el cual Servio se le acusaba, Julio dio lectura y todos los del senado se encontraban felices porque Servio por que servio iba hacer castigado, pero Marco prosiguió y dijo que si iba hacer condenado por el solo hecho de publicar un Libro al cual decía que traicionaba a Roma, Marco les pregunto a todos en general que si en verdad conocían el contenido de tal libro todos respondieron que sí, entonces Marco les pidió que les dijeran de que trataba el párrafo
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que insultaba a Sila y todos se negaban hacerlo, por lo que Marco le pidió a Julio que diera lectura al libro, Julio volteaba a ver a Sila para recibir invitaciones y al no ver respuesta Julio prosiguió a dar lectura y Marco lo interrumpió y les dijo que en qué momento traicionaba u ofendía a Sila, si lo único que decía es que la antigua Roma era mejor que antes y que lo único que había ese pobre hombre era leer el pensamiento de los poetas y filósofos, y Marcos se dirigió a Sila y le preguntó que si existía una ley que castigara a todas las personas que leerán o expresaran todos sus sentimientos o que hicieran sus propias conclusiones, de pronto la muchedumbre alabando a Cicerón diciendo viva Cicerón, Sila furioso le pregunto a Marco que si él es responsable de que la gente estuviera gritando Marco le pregunto que si estaba ahí era porque querían ver como se hacía justicia. Más tarde cuando Sila finalizó la lectura del libro Marco les dijo que el acusaba a su cliente de tal delito y que pidió que fuera castigado severamente, pero explicó que era culpable de plagio y no de traición. Sila le pregunto a Julio que cual sería el castigo que tendría que recibir Julio le dijo que retiraran el libro de la venta y que pagara cien mil siestercios de oro. Sila respondió que Servio era culpable de plagio y que le devolviera su fortuna y sus tierras y que ante todo fuera puesto en libertad. Siervo le dijo que no se iría si su antiguo general y que solo se las daría a su espada, Sila bajo los escalonas y se acercó a Siervo besando sus mejillas y dándole un abrazo como compadeciéndolo y de esa manera Marco obtuvo el éxito en su carrera de abogado. Días después Marco se encontraba descansando, cuando recibió una carta de su amigo y a la vez enemigo, donde lo felicitaba por sus triunfos en los últimos casos que había tenido. Julio le dice a Marco que era todo un hombre y que necesitaba ser político, para poder desarrollarse más como abogado, también le recomendó que se casara, ¿Qué porque un hombre, no estaba completo sin una esposa?. Julio por su parte, le comentó que Sila, le había quitado el sacerdocio, porque se había rehusado a dejar a Cornelia, ya que había recordado, que Marco le había dicho que era, mejor que respetara la palabra de dios y no la de los hombres. Julio le dice a Marco, que había sentido mucho, la muerte de Sila en Puteolí, lástima que haya muerto en brazos de su última actriz, ya que trajo como consecuencia, que su nombre y recuerdo quedaran manchados. Pero Julio le pregunto a Marco ¿Qué le dijera cual fue la impresión que le había causado le pido su actual dictador?. Julio le dice en su carta, que espera que pronto se vuelvan a reunir, ya que lo quería como un hermano y que lo ha tenido como ejemplo de probidad, Marco después de leer la carta de su amigo julio, se sentía cansado y viejo, y eso que solo tenía 29 años, y lo peor es que no podía olvidar a Livia, ya habían pasado varios años desde la horrible muerte de Livia y que ella seguía permaneciendo en su pensamiento, como si nunca pasaran los años por ella, que seguía tan hermosa como siempre. Marco estando en la isla la recordaba más, que nunca, y no en Roma que fue donde allá vivió y murió. Un día Marco le dijo a su mamá, que él nunca se casaría, ya que no tenía nada que ofrecerle, porque todo lo ocupaba Livia. Marco todos los días, seguía
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recibiendo muchas felicitaciones por el éxito que había obtenido en el caso de Catón Servio y el Roscio, ya que también en este último se tuvo que enfrentar a Silia y culpar a Crisogono, un antiguo esclavo de Sila. Helvia a pesar de intentar casar a Marco, no pudo encontrar una mujer que fuera adecuada para su hijo, pero el que sí, se caso fue Quinto, su hijo menor, con Pompina hermana de Atico el editor de Marco, Quinto logró tener fama de un soldado, pero Pompina que una era una joven astuta e inteligente, logró conquistarlo rápidamente, y pronto se convirtió en el esposo romano, de los tiempos modernos. Marco recuerda lo que Porcio Catón dijo “Que los hombres gobernaban al mundo, pero a los hombres los
gobernaban las esposas, y a marco no le interesaba que lo gobernara ninguna mujer. Más tarde Marco recibió un colapso en su despacho y sus discípulos, lo llevaron a un canapé, donde llamaron al médico, y este les dijo, que no tenía esperanzas de que se salvara, al menos de que se fuera lejos de Roma y de su trabajo para que volviera a gozar de su tranquilidad, pasaban los días y Marco no se podía mover de su cama, por lo que el médico recomendó que se fuera a Grecia con el Dr. Apulo el cual curaría sus malestares, y que padecía reumatismo y que en su cuerpo se reflejaba el cansancio y el dolor de su alma. Quinto le dijo ¿Qué él lo acompañaría a Grecia? ya que había deseado ir a Grecia desde hace tiempo. Marco al escucharlo pensó, que lo que Quinto quería era alejarse de su esposa Pompina quien lo tenía muy hostigado. Más tarde cuando Marco y Quinto se dirigían a Grecia a la casa de Atico, el hermano de su esposa de Quinto, Marco se encontraba tan cansado que no tenía deseos de vivir y prefería morir, pero una noche antes de irse a Grecia, Marco soñó a su abuelo, donde lo regañaba y le dijo que si era un perro o Romano que se dejaba vencer tan rápido, que recordará todo lo que tenía que hacer en el mundo, y tuvo otro sueño donde aparecía su amada Livia, donde ella seguía permaneciendo tan bella, como antes, Marco le preguntó ¿Qué si ella lo había querido? y ¿Qué si alguna vez supo cuánto la amó, él?, Livia le contestó que sí, pero que dios, no había querido que se encontraran y fueran felices, ya que ella, sería un estorbo, en la vid a de Marco, y que rezara mucho al dios desconocido porque pudieran volverse a ver y no separarse jamás. Marco al despertar de tal sueño, se sintió más confortado y se dirigió a Grecia donde Atico los recibió, con los brazos abiertos los recibió, con los brazos abiertos y lo llevaron con el Dr. Apulo, donde lo curarían y que gracias a ese tratamiento que había recibido, Marco empezó a recuperarse y a no sentir esos dolores tan espantosos. Más tarde cuando más tiempo pasaba, Marco ya no sufría aquellos dolores terribles que se debían al reumatismo que padecía. Marco cuando empezó a recuperarse, le pregunto a Quinto ¿Qué quiénes serían esos atacantes? Quinto le dijo que no eran asaltantes, que iban justo a matarlo y que uno de los atacantes llevaba puesto el anillo de serpientes el cual, el Marco reconoció de inmediato, y decidió mandárselo a Julio, quien le hiciera el favor de entregarlo a su dueño,
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ya que él sabía de quien era, Marco le contó a Julio el segundo atentado que había tenido. Por otra parte Julio y Catilinia habían planeado matar a Marco ya que representaba mucho peligro para ellos, y que Lèpido por sí mismo, peor planeaban matar a Marco con veneno, pero después dijeron que no, porque eso era de mujeres, que lo tenían que planear como si fuera un accidente a Julio no le parecía que mataran a su amigo Marco y al enterarse de su atentado Julio corrió con sus amigos, Curio, Catilinia, Senón y Graso, para preguntarles ¿Quién de ellos había tratado de matar a su amigo? Que recordaran que Marco era su protegido y ¿Qué tenían prohibido meterse con él? Cuando Julio dejo el anillo sobre la mesa y se alejó por un momento, ya cuando volviera habían tomado el anillo y no supo quién, y les dijo que no intentaran nada contra Marco ¿por qué se las verían con él? Julio por otra parte le mando decir a Marco que no preocupara, que a él nunca le pasaría nada, ¿por qué él se encargaría de protegerlo? Pasando un tiempo el procónsul estaba muy enfadado porque Marco le había dicho sobre el atentado, y que pensaba que los atacantes habían sido Romanos, ya que Quinto los había enfrentado, y el como soldado reconocía como eran los romanos. El procónsul le dijo a Marco, que ¿por qué estaba ocultado el nombre de quién lo había atacado? Marco le respondió que algún día se encontrarían frente a frente y que arreglarían todo, el procónsul le dijo que entonces se trataba de una riña personal. Más tarde Marco recibió una carta de su mamá; donde le notificaba que el hijo de Quinto había muerto, ya que Pompinia le había dicho que aborto, y que en relación a sus negocios iban muy bien y que en la casa de Palatino había sido una ganga, con respecto a ellos se encontraban muy bien, pero que estaban ansiosos de volverlos a ver ya que eran dos años que estaban lejos de la familia. En ese mismo día a Marco ' lo fueron a visitar uno de los comerciantes que le había salvado la vida aquel día que fue atacado por segunda vez, Marco al escuchar tal cosa autorizo para que lo dejaran entrar y cuando lo tuvo de frente, lo abrazo y le dijo que esperaba que se pasara mucho tiempo para poder agradecerle todo lo que había hecho aquel día por ellos. Anotis le dijo que él no le debía nada, Marco le dijo que estaba a sus órdenes Anotis le respondió que había sido un privilegio poder ayudarle ya que él tenía ciertos conocimientos de medicina y que era comerciante por necesidad porque su fortuna y de todos los egipcios había pasado a manos de los flagidas y le comento que estando Marco inconsciente él lo había acompañado hasta su habitación en aquella posada cerca de corintio y que él lo había ayudado a desnudarse y que había visto que llevaba puesto un extraño objeto el cual era una fina cadena adornada con el sagrado halcón de horus. Marco se sacó de su túnica la arañada cruz de plata y le dijo que so lo había regalado un cliente egipcio y que significaba el signo de la divinidad que nacerá entre los hombres, ya que se había sacado de una tumba egipcia y que lo llevaba puesto como una
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promesa y señal de esperanza, ya que siempre estaba pensando en el mecías de los judíos. Anotis también le enseñó la divina madre con horus su divino hijo y le dice que abandonaron a egipcio para siempre, porque no soportaban a los tolomeos griegos que intestaron la sagrada tierra. Los libros santos de los judíos que el nacerá en Belem y que no hay ninguna leyenda que no tenga de que el divino aparecerá en la tierra y que llevaría el nombre de Manuel. Anotis le regaló su medalla a Marco diciéndole que lo había ido a visitar solo con el propósito de entregárselo. Marco durante el tiempo que permaneció en Grecia lo aprovecho estudiando en la escuela de Ptolomeo su voz recuperó su antiguo vigor y tomo lecciones de elocuencia y retórica del famoso cirio, Demetrio. Marco practico ejercicio para fortalecer su cuerpo para fortalecer su cuerpo impulsado cuando Quinto y Marco por fin volvieron a Roma, Quinto se alegró de estar de nuevo en su país ya que había pasado tres años lejos de Roma pero los cuales disfruto al máximo. Marco venía con el propósito de casarse con Terencia con la mujer que su madre había escogido como su esposa, ya que estaba en edad de contraer matrimonio. Quinto al escuchar esto quiso que marco se quitara esa idea loca que no se casara si no la quería, que cuando uno se casaba perdía su libertad y que era un error, que no lo hiciera. Julio por su parte también le hizo ver que no le convenía, que si era virgen pero que tenía unas manos muy grandes, que mejor buscara otra, a Marco no le interesaba nada de eso por lo que fueron a la casa de Terencia para presentarse pero cuando llegaron Marco vio a Fabia la hermana de Terencia, ya que su hermana era una hermosa joven y Marco no pudo evitar mirar tal belleza y al ver a Terencia se desilusionó ya que Fabia eran tan hermosa que sería más fácil enamorarse de ella. Julio al ver que Marco si se casaba corrió a platicarle a Lucio, ya que ellos no querían que se casara, porque Lucio quería enamorar a Fabia pero sabían que esas mujeres eran prohibidas y que quien se atreviera a deshonrarlo los mataría y a ellas las enterrarían vivas. Después de que se celebró el matrimonio todo fue tan rápido y tan íntimo que nadie se enteró de la boda y cuando finalizo la ceremonia y se despidieron los invitados, Marco no sabía que hacer ya que se la tenía que llevar al hecho nupcial, y la cargo hasta la habitación y ella lo ayudo para que no la sintiera tan pesada y cuando ambos estabas a solas Marco no quería entrar a la recamara puesto que sabía que Terencia lo estaba esperando, y cuando por fin Marco se decidió a entrar se dio cuenta que su esposa Terencia estaba dormida ni parecía que se acababan de casar, después Marcos quiso buscar sus labios y Terencia lo rechazó diciéndole que estaba cansada, pero Marco al ver que sus senos eran hermosos eso lo había excitado más pero Terencia se rehusó y le dijo que la dejara en paz Terencia sabía que tenía que responderle algún día. Pasando un tiempo Marco y Terencia tuvieron una hija llamada Tulia a quien Marco adoraba porque había venido a llenar su vida de felicidad, Marco no estaba seguro de que su esposa lo
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amara pero si de que le tenía afecto y por lo menos era su amiga. Julio para enterarse de Fabia y poder llevar noticias a Lucio le preguntaba a Marco sobre su cuñada a lo cual él le decía que los iba a visitar muy seguido. Lucio Catilina se encontraba preocupado porque Marco cada vez se metía más a la política y sabía que eso sería más peligroso para poder lograr sus fines ambiciosos. Julio le hacía ver que Marco era insignificante que no tenía de que preocuparse que mejor hablaran de Fabia ya que se corrían rumores de que ella se había desmayado en el templo de Venus y que tuvieron que llevarla en brazos sus hermanas Vestales, Julio le preguntó a Lucio que si él tenía que ver con lo sucedido a lo cual le contesto que no sabía nada. Por otro lado Terencia paseaba en toda su casa del Palatino, pero decidió entrar a la biblioteca donde se encontraba trabajando Marco su esposo, y no es que Marco fuera un marido chapado a la antigua, él no era del que decía que la mujer debía estar rodeada de esclavos y en compañía de su suegra pero al menos podía tocar la puerta antes de entrar, por lo que Marco le hizo ver que en ese momento se encontraba ocupado y que no le gustaba que lo interrumpieran cuando estaba escribiendo sus ensayos. Terencia se molestó y le dijo que ella no sabía escribir ni llevar casos a juicio pero si sabía la situación económica por la que estaba pasando ya que Marco debía más de 200 mil sestercios y otras deudas que tenía. Terencia le sugirió a Marco que a sus clientes les pidiera lo de sus honorarios, Marco le contesto que ella bien sabía que a los abogados no se les pagaba que solo se les permitía que les dieran regalos o los incluyeran en legados, Terencia le dijo que porque sus asuntos se trataban de divorcio, que estaba en contra de los divorcios, Marco le contesto que esta vez ellas tenían la razón. Terencia se puso celosa al ver que esas mujeres no le habían pagado y quiso insinuar que Marco les daba otra cosa. Terencia para cambiar de tema le hizo ver quienes cenarían con ellos en la reunión que había preparado ella misma ya que se trataba de puros abogados, por lo que ella le hizo la observación de que invitara gente que fuera importante y que le ayudará en la política, que tal era el caso de Craso, Pompeyo, Cesar y Catilina el reaccionó de una manera violenta ya que le dijo que ella sabía bien cuanto odiaba a Lucio. Más tarde Pompeyo y Julio fueron a visitar a Marco diciéndole que el íntimo amigo de Sila lo había invitado a cenar Marco les dijo que no asistiría porque ya conocía como eran las cenas de deprabadas en esa casa. Julio le recordó a Marco que se trataba de Craso y que sería bueno que fuera ya que tenía una carta de Sila que hablaba de Marco. Por lo cual Marco al escuchar eso quedo intrigado y acepto ir a la cena para leer esa carta Julio le dijo a Marco que se alegrara que también iban a estar presentes sus amigos Noé y Roscio el simpático actor. Después de eso Julio comenzó a platicar con Craso a cerca de Marco ya que ambos coincidían en que Marco representaba un peligro para ellos y tenían planeado engañarlo y hacerle creer que Craso amaba a Roma y que como Marco tenía mucha influencia con el pueblo y que Marco ignoraba eso lo iban a utilizar. Cuando Marco llego a la casa de Craso donde iba a ser la cena vio aquella casa tan bonita y tan grande que la comparó con la suya y dijo que era una cueva en comparación con esa. Pensó en lo mucho que podía ayudar al pueblo de Roma con toda la fortuna de Craso. Cuando por fin
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llegaron al comedor donde se encontraban todos los invitados dentro de los cuales estaban Craso, Pompeyo, Pizon, Roscio y Noé con una suculenta escena. Craso comenzó a platicar del poder donde quería ser creer a Marco que el quería el bienestar para Roma y que su casa estaba abierta para toda aquella persona que deseara platicar sus problemas, a los cuales se les daría una solución y que a las personas que no tenían para comer él les daba de su propio bolsillo y quienes no podían pagar sus impuestos el les pagaba todo. Marco pensó que tal vez era sincero, los que no creían nada era Noé y Roscio por lo que solo hacían muecas de lo que estaban diciendo. Después Marco se retiró de la casa de Craso y ellos se quedaron platicando diciendo que era mejor que Marco muriera pero como Julio lo tenía protegido no le podían hacer nada, y Craso comprendió que les sería más útil teniéndolo vivo como una máscara. Marco al llegar a su casa tenía muchas cartas que leer de todos los amigos que le escribían y de su esposa Terencia donde era la carta más extensa que solo hablaba de deudas, matemáticas y contabilidad ya que Marco se había alejado por un tiempo de Roma y de su esposa Terencia, Marco se encontraba viviendo en esos momentos viviendo en Silicia. Un mes antes de que Marco volviera a Roma recibió otra carta de su amada esposa donde le notificaba que su hermana Fabia se había suicidado a causa del pecado que había cometido y que el responsable de todo había sido Lucio Catilina porque él había provocado la deshonra de su adorada hermana por lo que Lucio había sido llevado ante los tribunales y que Julio había sido quien lo había defendido por lo que Lucio fue absuelto, ya que Aurelia había firmado que él no la había matado y todos la apoyaban, Marco al escuchar tal cosa se puso furioso y se fue a acostar a su cama pero no pudo dormir ya que la voz de Scaevola le decía a Marco que descubriera la verdad y de pronto se le reflejaron las cara e imágenes le Livia, Fabia y el hijo de Livia donde les decía que las vengara, Marco se levantó y juro que él las vengaría y que Lucio iba a pagar todo lo que había hecho. Craso se quedó viendo a Marco y le dijo que como abogado debería ser el último en prestar oído a los rumores que Catilina había salido libre porque no había prueba alguna que lo acusara, que hasta Aurelia su esposa había declarado a favor de Lucio y que él había jurado por los dioses que lo habían calumniado y que el nada más había visto a Fabia un par de veces, Craso le dijo a Marco que Lucio había demandado a sus calumniadores y que gracias a eso había ganado trescientos mil sestercios de oro. Marco al escuchar todo eso le dijo que él no estaba conforme y que él creía en las Vestales que habían ratificado contra Catilina, Craso le dijo que todos las reverenciaban y que además ambos sabían que la castidad producía humores en el cerebro, que además si el supiera que Lucio era culpable jamás declararía a favor de él, pero sin embargo tuvo que decir que Lucio iba a cenar con el esas noches cuando decían que él estaba con Fabia. Marco se levantó y encaro la mirada con la de Craso y le dijo que él sabía que Catilina era culpable, pero como le convenía que era para sus propios fines fue a declarar a su favor. Craso le dijo que no siempre fue malo irse la lengua y que tuviera cuidado con lo que decía, Marco dio media vuelta y se marchó dirigiéndose a casa de Cesar. Julio le
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dice a Marco que si él creía que sería capaz de declarar a favor de Lucio si no supiera que era inocente, Marco le dijo que no le creía por lo que se retiró muy molesto. Después de que Marco se retiró de la casa de Julio este mando llamar a Catilina para ponerlo sobre aviso de que tendrían problemas a causa de la relación que había tenido Lucio a Fabia, ya que Marco sabía que Lucio era culpable de todo y que no descansaría hasta descubrirlo. Lucio al escuchar tal cosa le dijo a Julio que tenía que morir y que la mejor manera es que lo hicieran parecer como que Terencia la amada esposa de Marco lo hubiera envenenado, Julio le dijo que esa era una maña de mujeres y que eso no sería lo adecuado ya que Marco era muy querido por Roma que sería mejor que Lucio se dedicara como todo un ciudadano romano y que se dedicara más a su esposa como si fuera un esposo ejemplar, para que de esa manera la gente no sospechara de él, que además si Marco muriera de algún accidente de ese tipo el que lo mataba moriría detrás de Marco ya que lo había jurado en nombre de Júpiter le dijo Julio a Lucio Catilina. Marco platicando con su madre le juro que el vengaría a Fabia, Marco nunca le hablaba de Livia a Terencia, por lo que ella se quedó pálida y se echó a llorar en brazos de Marco en donde él le dijo que necesitaba tiempo para poder vengar a su hermana. Terencia le dijo que eso era muy peligroso y que tenía miedo por él, Marco le aseguro que él no moriría hasta que lo decretara a Lucio como el hado Marco sabía que Catilina y el eran enemigos de toda la vida por lo que siempre llevaba una daga y no comía ni bebía antes de que lo hicieran sus compañeros de mesa y siempre de los mismos recipientes. Hablaba de Catilina con todo el mundo para poder enterarse de las ideas de este. La fama de Marco como abogado y orador crecía día a día en Roma y con la administración de Terencia su fortuna aumentaba. Cuando Marco renunció a Verres por sus expoliaciones y robos en Silicia así como por los actos de crueldad contra los romanos, el cariño del pueblo hacia marco fue aún más fuerte, y a petición de Julio fue nombrado Edil curul. Julio le dijo a Craso que honraran a Marco públicamente de modo que el pensara en que le tenían amor a la justicia, Pompeyo estaba de acuerdo y Lucio estaba furioso por lo que Marco acepto el nombramiento, Craso ya estaba cansado de las ambiciones de Catilina pero le temían el bajo mundo de Roma, además la crucifixión de miles de esclavos que se habían revelado con Espartaco, hizo que la plebe se sintiera inquieta y alarmada antes sus gobernantes ya que corrían el riesgo de ser reducidos a la esclavitud si contraían deudas. Marco no tuvo éxito en su intervención a favor de los esclavos condenados a lo cual nunca podrá olvidar el horrendo espectáculo esas cruces de las que dependían sangrantes frutos humanos. Terencia estaba por el momento satisfecha por el nombramiento de Marco, por tal razón Marco tuvo que ceder la mayor parte de su trabajo como abogado a sus demás pasantes y empleados por que sus deberes como edil curul no le dejaban tiempo para atenderlos. Más tarde cuando se presentaron los festivales religiosos Marco convenció a Noé y Roscio de que presentaran espectáculos en los circos ya que obtuvieron un éxito a lo cual a Marco le remordía la conciencia porque estaba explotando a sus mejores amigos y descubrió que le gustaba la política a la que él había llamado la ramera de la vida pública. Marco como siempre platicaba con su hija Tulia a la que después empezó a rezar para pedir por ella con el propósito de que la alejara de las
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ambiciones ya que temía por el futuro de Tulia y le rezaba al dios desconocido. A Craso como a los demás les convenía tener a Marco de su lado ya que de esa manera ellos podían lograr lo que se propusieran, pero Marco siempre había creído en la justicia. Más tarde Marco se vio con Noé y le dijo que si ya estaba juntando todo lo que se pudiese llevar, Noé le dijo que él se llevaba a su familia a Jerusalén ya que Roscio se había marchado a Alejandría. Noé le dijo a Marco que si quería un consejo se retirará de ciudad y se fuera a Arpinum. Marco se quedó pensando y le dijo que él no podía retirarse a la ciudad y que tenía que servir a su país, Marco le pidió a Noé que no lo abandonara y le dijo que una vida aceptada sin reflexión no merece la pena vivirla y recordó que Aristóteles decía que el hombre juicioso no da su vida a la ligera, pero que hay pocas cosas por las que merezca la pena vivir. Noé se daba cuenta que algo profundo se estaba agitando en Roma, algo enigmático. Terencia le dijo que le estaban saliendo muchas canas de tanto trabajar, Marco en un atardecer se sintió joven y muy viejo a la vez, se sentía cansado y fatigado pero a menudo se sentía aliviado cuando se decía a si mismo que vivía para la justicia abstracta y eterna y servir a dios cada vez que se acordara de él. Más tarde cuando Marco se encontraba en su despacho una voz le pregunto que por qué estaba tan serio, cuando Marco voltio se dio cuenta que se trataba de su amigo Julio el cual estrecho en sus brazos y le preguntó cuándo había vuelto de Hispania contestándole Julio que anoche. Marco llamo a unos esclavos para pedirles que le sirvieran un poco de vino, Marco le dijo que olvidaba que estaba de luto por la muerte de su esposa Cornelia, ya que había muerto mientras Julio se encontraba de pretor en Hispania, y repuso Marco que Julio estaba muy joven que los años no pasaban en él. Julio se quedó viendo a Marco las arrugas de cansancio que rodeaban sus ojos y le dijo que en Hispania se había encontrado a su hermano Quinto, Marco le contesto que ya lo sabía que Quinto se lo había dicho por carta. Julio le preguntó a Marco por su hija y él le dijo que ya tenía 14 años por lo que tenía que buscarle un buen marido Julio le dijo que él pensaba casarse con Pompeya ya que un hombre necesitaba de una compañera sobre todo cuando se estaban haciendo viejos. En ese momento entró Terencia al despacho y se sorprendió al ver a Julio por lo que se estrechó en sus brazos invitándolo a cenar, pero Julio le dijo que cenaría con Craso, Marco permanecía callado y eso enfurecía a Terencia, en ese momento Terencia odio a su esposo porque permanecía con la boca cerrada en vez de relacionarse con Julio que era poderoso y podía hacer que progresara mucho en la carrera de político. Terencia le dijo a Julio que sentía mucho la muerte de Cornelia y Marco le dijo que pronto estaría consolado ya que se cansaría con Pompeya. Marco cumpliendo su sueño estaba en su isla solo en pleno otoño dormía y comía, nadaba en las aguas y se divertía. Marco reflexionaba y decía que estaba loco y que se debía al preludio de la muerte ya que estaba derrotado y perdido. De Roma recibía miles de cartas a las cuales ni caso les hacía el recordaba a su amada Livia que rondaba por la isla y como había rondado muchos años para él estaba todavía viva.
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Más tarde recibió una carta de Terencia llena de amargura y le decía que Lucio Catilina acababa de ser nombrado pretor de Roma por órdenes de Craso y que ese cargo le respondía a él y no al seductor de su hermana y que si Marco estuviese presente jamás habría pasado tal cosa, Marco sentía que lo invadía una oleada de rabia de odio y emociones por lo que a la mañana siguiente Marco partió para Roma y mientras cabalgaba le parecía que Livia iba a su lado y le aguijoneaba mientras su velo de ella le azotaba en su rostro. Cuando Marco regreso a Roma se dirigió con Craso para oponerse al nombramiento de Catilina como pretor, Marco le dijo que no era posible que en Roma hubiera un asesino, un seductor como pretor. Craso le dijo que Catilina no era nada de eso, por lo que Marco le contesto que todos sabían que Catilina era un asesino y que si lo apoyaban era porque a ellos eso los beneficiaba, Craso le dijo enojado que Catilina era muy querida y que había satisfecho a mucha gente Marco le preguntó que a quienes había satisfecho, Julio le contesto que a la democracia, Marco le dijo que la conducta privada de un hombre no puede ser separada de la conducta publica a lo cual son las dos cara de una misma moneda. Pompeyo le dijo a Marco que se calmara que a Catilina no le habían encontrado culpable en ningún delito, Marco vio en los ojos de Pompeyo una amistad que él nunca había mostrado corresponderle. Marco declaro es verdad que Catilina ha sido declarado con Víctor y confeso de un delito sin embargo todos sabemos que es un criminal aunque no se le haya encontrado culpable de ningún crimen, Craso le dijo que no tenía pruebas de lo que estaba diciendo y que era un insolente por lo que no desafiara a la autoridad ya que era y un edil curul y como subordinado de él le podía pedir cuentas, Marco le dijo que lo estaba confundiendo con Catilina que él sería todo eso, Julio le dijo a Marco que le iban a contar toda la verdad. Julio se le quedo viendo a Craso mientras que Marco se sentía incómodo y les dijo que Catilina y él se iban a encontrar muy a menudo en los tribunales y que con tal de llevarle la contraria y aunque fuera una injusticia él iba a declarar todo lo contrario y que eso se iba a dar solo por odio que sentían uno al otro. Julio le dijo que eso no ocurriría ya que le habían advertido a Catilina que no violara las leyes ni la constitución, Marco le dijo, que ya había violado la constitución y las leyes tres veces, que dos traidores condenados fueron libertados por orden de él. Basándose en argucias a pesar de que su culpabilidad había quedado establecida. Julio le dijo que esos eran métodos que el mismo había utilizado en sus casos Marco le dijo que él los utilizaba con personas que eran inocentes, Julio le respondió que ninguna persona era libre o culpable hasta que un tribunal lo declarara, Marco les expuso que él se oponía a tal nombramiento, Craso molesto le contesto que tuviera cuidado y que no hiciera que le pusiera mucho interés que porque eso lo podía perjudicar. Marco le contesto a Craso que si el aceptaba que era el responsable del nombramiento de Catilina, por lo que Craso estuvo a punto de golpearlo si no hubiese sido por Julio que lo detuvo y le dijo a Marco que le explicarían todo Julio le empezó a contar que Catilina le había nombrado pretor para tratar de calmarlo ya que ellos le temían porque tenía muchos amigos poderosos como lo eran Curio y Pizon lo cual eran persona que se valían de toda porquería para conseguir todo lo que querían y por esa razón hacia lo que él les decía, pero que ya le habían advertido que no le concederían más de lo que habían hecho.
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Marco les dijo que tenía que haber un medio para liberarse de sus enemigos y que con la misma lentitud con que la república había reclinado debería ser restaurada, ya que tenían leyes que para él su país valían más que la seguridad, que la riqueza, la fama, aplausos u honores. Marco se levantó poco a poco y los miro uno por uno comentándoles que su razón le decía que le habían dicho la verdad y que hará todo lo posible para mejorarla, Marco se retiró diciéndole que no permitiera que Catilina se cruzara en su camino porque tenía una venganza pendiente con él y que algún día se encontraran pero el día lo eligiera él y no Lucio. Craso les comento que ya no lo necesitaban más y que lo dejaran que cayera, Julio pensó en asesinato, pero Craso le respondió que no ya que lo necesitaban más que nunca, ya que había escuchado rumores acerca de Catilina que podría llegar a formar un estruendo y que si Cicerón muere ese estruendo ciaría sobre ellos. Cuando Marco regresó a su casa triste y apesarado, se vio desagradablemente sorprendido al ver que Terencia lo estaba esperando, y le dijo que no estaba de humor para discusiones que estaba cansado. Terencia le comentó que lo había estado esperando para que le comentara que es lo que había logrado Marco le dijo que no había conseguido nada, Terencia le contesto que eso quería decir que había fracasado como abogado y como esposo contestándole el que tenía razón apagando la luz. Mucho tiempo Marco Tulio Cicerón, gozo de una relativa tranquilidad, que a veces le hacía sentirse inquieto, por lo que le decidió escribirle a Atico, diciéndole que estaba resignado o adormecido, que se estaba volviendo viejo. Marco pensó que había llegado a su última etapa del conocimiento, por lo que cree que no hay nada que merezca la pena luchar, que lo considerara como aquellas personas que lo único que esperaban era la muerte. Como Julio le había dicho que nunca se iba a encontrar con Sergio Catilina, que aunque ya tenía 40 años seguía siendo guapo, pero que estaba en un periodo deprimente, ya que hablaba puras incoherencias y que rara vez se encontraba en los tribunales, ya que tenía delegados que actuaban en su nombre, y como Catilina estaba acabando con su vida por sí solo. Marco comenzó a creer que Craso, Pisón, Julio y Pompeyo se estaban librando de un hombre peligroso, dándole un poder del que era incapaz de hacer buen uso. A veces a Marco se le ocurría el insidioso pensamiento, que en la República no volvería a ocurrir nada interesante, ya que todo estaba en paz y era prospero. Marco insensiblemente se dejó arrastrar por esta ola complacencia. Empezó a creer que era ridículo, que ningún hombre tratara de despertar el Alma de roma. Craso había tomado un camino intermedio, los veteranos decían que vivían buenos tiempos después de tantas catástrofes por fin había estabilidad. Noé se marcharía pronto a Jerusalén, él ya se había quedado calvo, pero era muy rico gracias a sus comedias, no le gustaba lo que presentía por lo que Roma ya no era un buen lugar, para un hombre de edad, Marco le contesto que no fuera absurdo. Me marcho a Jerusalén insistió Noè mirando a su amigo, le dijo Te ruego te retires a Arpinum Marco le contesto eso me lo aconsejaste hace un año y veme a un vivo paz. He oído hablar mucho de ti últimamente, con referencia a ese inteligente
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político, el joven Publio Clodio de sobre nombre Pulcher, le dijo Noé, ha también de tu relación con Clodia, aunque probablemente eso sean chismes. Ah exclamo Noé, observando a su amigo con disimulo y recordando los rumores que corrían acerca de las relaciones, entre Marco y la bella Clodia, tú crees los rumores de que Clodio acepto el soborno de Catilina y lo absolvió cuando este procesado por extorsión al final mandato. Noé se fijaba que Marco evitaba hablar de Clodia, Noé no lo condenaba en el fondo quería que Marco disfrutara su vida un poco. Todo el mundo sabía que Marco con su esposa en recamaras separadas, que ya no tenían ningún tipo de relación, ya que ella había perdido todo su atractivo. Marco le pregunto que si regresaría de Jerusalén, Noé le respondió que no pero que le escribiría todos los días, Marco le suplico que no le dijera que no volverían a verse, y que por favor no le avisara cuando seria el día de su partida, Noé al escuchar eso no quiso decirle que se iría al día siguiente. Cuando Noé se marchó, Marco continuo sentado en su jardín, pensando en la bella Clobia. Helvia aquella mujer tan prudente y sensata, jamás interfirió en los asuntos de la casa de Marco, ya que ella se encontraba satisfecha con la de Marco. Mientras que Catilina por su parte se estaba destruyendo así mismo, con la vida depravada que llevaba, ya había dejado de ser pretor, ahora Marco iba hacer el nuevo pretor de roma y pensaba en Clodia, mientras que se rumoreaba que ella había tomado aún chiquillo llamado Marco Antonio como su amante, cosa que marco no creía. Tulio cuando por fin podía ver a su hijo en la casa quería aprovechar el momento para platicar con su hijo Marco. Pero marco siempre se encontraba muy ocupado y tenía que ir a cenar con Clobia y se le hacía tarde para aquel encuentro. Julio le dijo a Marco que se trataba de algo importante, al cual marco ni caso hizo. Cuando Marco se encontraba en brazos de Clodia su madre había muerto y cuando el regreso en la madrugada vio que en su casa había luces y mucho movimiento, Marco pensó en su hija Tulia pero cuando entro vio que Terencia se encontraba llorando y fue entonces que Terencia le grito que mientras él estaba con su fulana su Madre había muerto. Marco entro a su casa y observo que Quinto y su hija Tulia lloraban, la niña le gritaba a su abuela, mientras que él no podía llorar, mucha gente asistió a darles el pésame, todos los Helvis y muchos más, ya que muchos la querían y la respetaban. Después de lo sucedido, marco le comento a su padre que sería mejor que se fuera a la casa de Quinto y su familia, ya que ahí podía estar mejor, Terencia al escuchar corrió y le reclamo a Marco diciendo, que como había corrido a su padre de la casa, Marco le contesto que él no había hecho eso, por lo que Terencia aprovechando el momento le dijo que ella no le iba a dar el divorcio, porque no privaría a su hija de su padre. Marco más tarde platicando con Quinto le menciono que muy pronto lo nombrarían cónsul de Roma. Quinto se quedó viendo a roma y le dijo que si no había oído los rumores, se dice que Catilina lo van a nombrar cónsul de roma, que nadie se podía oponer, puesto que tenía a la plebe en su puño. Cuando Craso, Julio, Pompeyo y los demás se encontraban cenando, Lucio les comento que quería ser cónsul de roma puesto que ya había esperado demasiado y que no había ido a la cena para que lo convencieran y lo apaciguaran, si no para exigirles su nombramiento como cónsul. Julio replico a lo que
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Catilina había dicho y le aconsejo que esperara un poco más, que no podían hacer nada por el momento. Catilina le dijo que el debería ser cónsul, todos habían escuchado esas palabras pero cada vez era más difícil calmar a Catilina, y le advirtió a Julio que el mataría a Cicerón sin consentimiento, ya que lo había soportado demasiado, y que si ellos no lo ayudaban a dar el golpe final lo daría el solo. Que ya no iba a esperar más tiempo y que comenzaría con matar a la garbanza del Cicerón. Ante las amenazas de Catilina aceptaron dar el último golpe con él y lograr obtener el poder, pero a Julio le fue muy difícil aceptar que mataran a marco. Por lo que habían acordado que su asesinato seria la primer semana de Jano, para poder matar a los nuevos del senado, que habían sido nombrados y de esa manera incluir a sus amigos, pero sabían que si Marco vivía el impediría su plan de nombrar a Lucio como cónsul de Roma. Clodia la amante de Marco sabía lo que estacan planeando y se lo comento a Clodio se hermano, por lo que él le recomendó que le avisara a marco sobre el complot que había encontrar de él, Clodio no podía ponerlo sobre aviso ya que estaba de por medio su vida, y decidió mandar una carta anónima informándole todo lo relacionado al complot. Cuando marco leyó la carta, tomo inmediatamente todas las medidas necesarias para proteger a sus familias y ordeno a sus esclavos que durmieran a fuera de las puertas de cada habitación, y mando llamar a su hermano Quinto, mientras que un sujeto misterioso llego cubierto con una capa, pidiéndole que dejara ver a Marco, este último autorizo que lo dejaran pasar, quitándole una daga que el poseía. Cuando marco vio que se trataba de Pompeyo, se sorprendió y más cuando le comento que su visita se trataba para darle una mala noticia y ponerlo sobre aviso en cuestión del complot que tenías entre manos para poder matarlo. Cuando Quinto llego a la casa de marco le pregunto a este que para hacerlo ir a esas horas de la madrugada tenía que tratarse de algo importante de algo grave, Marco le pregunto a Quinto que cuantos soldados tenia de confianza, Quinto le dijo que una Legión pero que solo 20 darían la vida por cualquiera de los 2, Marco le dijo que solo necesitaban unos 4 y 5 para que los escoltaran y comenzó a platicarle lo sucedido. Más tarde Quinto y Marco salieron a la casa de Julio Cesar para pedirle una explicación y confesara la verdad, cuando Aurelia y Pompeya vieron que habían llegado escoltados se preocuparon demasiado, ya que ellas pensaban que estaba ocurriendo algo grave o por lo menos que iba a suceder. Marco por su lado las saludo cariñosamente como siempre y les explico que lo único que quería era hablar con Julio y poder aclarar ciertas cosas. Cuando Marco le restregó en la cara de Julio, él puso una cara de asombro, pero a la vez se encontraba nervioso, Julio al leer la carta negó todo y aseguro que eso eran puras tonterías. Julio le dijo a Marco que la sería incapaz de algo así ya que lo quería como un hermano y que nunca ha intentado matarlo. Marco le contesto que eso no era verdad, que tanto Julio como Catilina, craso, Clodio estaban preparando su muerte para la primer semana de Jano. Marco le advirtió a Julio, que si no decía la verdad Quinto en ese
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momento lo podía matar y nadie podía reprocharle nada ya que era un soldado el cual tenía mucho poder, que craso y los demás. Quinto rogó a Dios para que no lo pusiera en prueba, Julio a pesar de todo lo negó diciéndole que no habría, ningún complot en su contra. Por otro lado Tulia se sentía traicionada por su padre ya que Terencia estaba embarazada, y Tulia no quería compartir a su padre con nadie. Marco a lo escuchar tal cosa le comento que ella siempre seria su reina y que nadie iba a remplazarle. Lucio por su parte alertando a todos los bribones y plebe, ya que se acercaba el día de matar a Cicerón, donde obtendrían el éxito que tanto estaban planeando. Cuando se alejó de la casa de julio y este último se dirigió con Pompeyo, Craso, y Catilina para decirles lo que marco le había dicho, y que Quinto le advirtió que si marco moría a los del senado, que habían sido elegidos, haría que el ejército se apoderada de roma, que no olvidara ni un segundo. Julio molesto les reprocho que si no hubiera sido por la impaciencia de Catilina y Craso no se hubieran metido en tal situación, que él le había dicho que era muy precipitado y que traería consecuencias graves Julio les dijo que uno de ellos había puesto al tanto del complot que tenían preparado y que los únicos que sabían todo eran ellos. Lucio furioso le grito a Julio, diciéndole que si él había sido, julio le contesto que no y todos los demás dijeron lo mismo, por tal circunstancia decidieron dejar pasar un tiempo para que se calmaran las cosas un poco, pero Lucio Catilina se levantó furioso de la silla advirtiéndoles que eso no podía ser porque él ya había preparado todo. Cuando Julio escucho tal cosa hubiera deseado envenenar el vino, para matarlo y así librarse de él, así como lo había hecho Lucio con Livia y su hijo. Pasando el tiempo Terencia dio a luz, cosa que a Marco no le emocionaba como el primer hijo, ya que Tulia había recibido todo su cariño y lleno toda su vida. Marco se encontraba sentado en el Jardín cuando el doctor se acercó y le dijo que era papa de un hermoso hijo, cuando Marco escucho tal cosa, se dirigió con su esposa tomando en sus brazos a su hijo y dándole un beso a su esposa. Por el pensamiento le pedía perdón a su hijo, porque no tenía nada que ofrecerle, que su padre tuvo más que ofrecerle. Cuando marco salía del Cubículo de Terencia se encontró con su hija Tulia, la cual se encontraba celosa y le pregunto que si seguía siendo la primera en su corazón, e! le contesto que sí, y él le pregunto que si el también, en ese momento se dieron cuenta que empezaron a llegar varios regalos para el nuevo miembro de la familia, en uno de los regalos venia el de Julio el cual era muy especial, marco pensó que eso significaba la reconciliación, ya que no se habían visto desde el enfrentamiento en la casa de Julio, también llego Pompeyo, Craso y todos los demás, Marco noto que cuando ellos se saludaron se habían notado muy extraños, como si hubiera un rencor que los separara. Platicando marco con julio este último le pregunto qué en que pensaba, respondiéndole que en el futuro de su hijo, ya que lo único que tenía que ofrecerle era un país lleno de conspiraciones, Julio le dijo que en que conspiraciones, Marco le contesto que en una similar a la que él había planeado en su contra. Cuando Marco y Terencia habían regresado de la isla, Terencia le dijo a Marco que Quinto le había hablado a la isla porque
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tal vez era urgente, Marco le contesto que no,, que si hubiera algún problema Quinto ya le hubiera avisado. Terencia le recomendó que fuera a ver a su padre, ya que durante su embarazo solo lo había visto dos veces, y le contesto que iría mañana, pero por la noche Quinto le hablo avisándole que su padre estaba en su lecho de muerte, Marco al escucharlo no lo podía creer ya que Tulio siempre se estaba muriendo y nunca pasaba de ahí. Cuando Marco llego a la casa de Quinto, todo le parecía extraño, como si no hubiera vivido nunca en ella. Quinto el rudo soldado fue quien recibió a Marco con lágrimas en los ojos, y Marco al observarlo se dio cuenta que su padre estaba muerto, subió al cubículo donde el paso su niñez, su adolecía y años de soltero, vio a su padre tirado en la cama, con un rostro demacrado, Marco toco aquella mano fría y la beso retirándose, después Quinto fue tras de él, para decirle que él nunca lo había Querido, Marco le respondió que todos tenían maneras de expresar se dolor. De pronto aquella casa a Marco le pareció familiar, puesto que recordó que era casa de la muerte. Noé su antiguo amigo le escribió desde Jerusalén para felicitarlo por el cargo que ocupaba en Roma, ya que Marco había sido nombrado cónsul de roma, y le recordaba , cuando marco no confiaba en la gente que ahora lo había elegido como cónsul de Roma. Y que si lo habían hecho era porque lo apreciaban mucho y que respecto a Catilina que no comprendía por qué le temía ahora ya que no era nada en Roma, Marco pensó que era mejor ver al enemigo de cerca de no verlo y saber que planea. Noé le platicaba en su carta que Marco quería casar a su hija Tulia con Pisón Frugi un patricio de excelente familia y le decía que lo comprendía ya que él había pasado por lo mismo por lo cual no quisiera que se casara y se fueran de su casa, que también se había enterado que el ambicioso de Julio había logrado ser el pontífice máximo y pretor a lo cual le agrado como también el que Julio se entusiasmara con Cayo Octaviano hijo de su hermana. A Marco como cónsul de Roma tenía un reemplazo que había quedado en segundo lugar el cual se llamaba Antonio, ambas congeniaban y planeaban la manera en cómo podían salvar a Roma y así levantar la república, por lo que los dos proponían soluciones y uno y otro las rechazaban ya que no les agradaban, una propuesta fue por Marco Antonio quien decía que subieran los impuestos y de esa manera poder cancelar la deuda pública, pero Marco no estuvo de acuerdo. Después pensaron en Catilina que había quedado en tercer lugar para cónsul y ellos no se explicaban que la gente le diera tanto voto. Por otro lado Terencia que estaba hinchada de vanidad por ser la primera dama de Roma y como toda su casa estaba llena de gente patricia donde se acercaban para platicarle acerca de los problemas que sufrían, a lo cual Terencia se las comunicaban a Marco pero este último no ponía la atención que ella esperaba y llego a pensar que Marco no le merecía lo que tenía que si no hubiera sido por ella el nunca habría triunfado, y se lo hizo saber a su hija para que nunca estuviera orgullosa de su padre, Tulia al escuchar tal cosa pensó que su madre estaba loca. Más tarde Lucio fue a buscar a Antonio para saludarlo y aprovechar el momento para ponerlo en contra de Marco el cónsul de Roma, diciéndole que Marco no tenía por qué ser cónsul de Roma ya que no había ganado honestamente, que ese puesto
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lo tenía que ocupar Antonio y que él el de colega y que a Marco lo desaparecieran que les servía de nada, ya que Marco odiaba a los pobres solo por el hecho de no tener trabajo y lo puso en su contra para convencerlo y de esa manera el pudiera obtener el poder que tanto ambicionaba. Craso, Clobio, Pompeyo y Julio recibieron la noticia por los espías que habían contratado informándole que Catilina había visitado a Marco Antonio ese día por lo que ellos concluyeron que había sido para proponerle el asesinato de Cicerón el nombre de Roma. Cuando ellos fueron en busca de Antonio para que les explicara la razón de la visita de Catilina Antonio un poco nervioso les contestó que le había ido a proponer un plan que tenía en contra de Cicerón. Craso al escuchar eso no encontraba una solución para poder proteger a Marco y que no pensara que otra conspiración. Craso le sugirió a Antonio como estaba planeado el complot contra Marco. Antonio le comenzó a explicar que el a las doce de la noche iría a buscar a Marco y como él era su colega no habría problema de que fuera escoltado y que le permitiera pasar con ellos por lo que entre los soldados iría Catilina y cuando por fin estuviera frente a Marco lo mataría, Julio le dijo a Antonio que después de que hubiera matado a Marco seguiría él. Craso le dijo que había llegado la hora de denunciar a Catilina y que el único que lo podía hacer era Marco. Más tarde Craso, Julio y Pompeyo se reunieron en la casa de Marco para informarle acerca del complot que tenía preparado Lucio para dar el golpe final. Antonio le dijo a Marco que ellos no estaban a allí por cuidar de él y mucho menos de Marco sino porque querían que Marco les protegiera de Lucio. Marco al escuchar tal cosa les dijo que Lucio era un traidor como lo eran todos ellos, que traicionaban a Roma por tener un poco de poder. Marco le dijo a Quinto que buscara a Lucio y lo hiciera llegar a los tribunales, todos los demás se sorprendieron y le preguntaron a Marco que si no le tenía miedo contestándole el que nunca vía tenido miedo a nada y mucho menos a Catilina que era un asqueroso cobarde. Cuando Lucio estaba pensando en su traición y conspiración se dio cuenta que su litera no se movía, por lo que recorrió la cortina y vio una legión entera alrededor de él, con sus espadas. Lucio volvió a recorrer la cortina aterrorizado por lo que fuera a suceder, se preguntaba quien lo pudo haber traicionado, nunca se imaginaba que había sido Marco Antonio, ya que él estaba convencido de que Antonio estaba de su parte y que los demás le tenían miedo, por lo que no se atreverían en traicionarlo. Cuando por fin llegaron a los tribunales Lucio cada vez sentía más temor por su vida y cuando vio a todos los del senado, nunca 'pensó que Antonio estuviera allí y mucho menos todos lo que creía que eran sus amigos, y cuando voltio vio a Marco el cónsul de Roma. Marco voltio a ver a Lucio diciéndole que se había dado la orden de que lo llevaran a los tribunales por traidor y conspirador contra Roma. Lucio al escuchar tal cosa negó todo y se burlaba de Marco diciéndole que le comprobara todo lo que estaba diciendo, Marco sabía que los únicos que podían declarar en su contra eran Craso, Pompeyo, Julio y Antonio, pero también tenía muy presente que ellos nunca iban hacer al cosa por el simple hecho que le tenía miedo. Marco con voz elocuente hizo que retumbara en todo el foro diciéndole a Lucio que le negara que él planeara la semana próxima, para que de esa manera se quedara como cónsul de Roma y poder quemarla y acabar con ella definitivamente. Lucio con voz
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burlona negó todo pero los del senado sabían que habían planeado todo por lo que Marco logro apaciguar a Lucio por algún tiempo y retardar la destrucción de Roma consiguiendo que Lucio fuera exiliado. Cuando Marco salía del foro se encontró frente a frente con Lucio y pensó en que la muerte de Livia y Fabia iban a ser vengadas tarde que temprano, cuando Marco llegó a la puerta escucho el griterío de la muchedumbre que decían viva Marco el héroe de Roma, Marco pensó que no había salvado a Roma sino que había retrasado la catástrofe final. Marco después de su primer discurso contra Catilina se encontraba acostado en su cama cuando de repente vio la sombra de su padre Tulio que le decía que se fuera de Roma porque su vida corría peligro de muerte y que como siempre los malos iban a triunfar, que no arriesgara la vida, Marco le contesto que el no podía abandonar a Roma que el verdadero romano daba la vida por salvar su patria. Marco después de recordar aquellas palabras que le había dicho su padre, sabía que corría más peligro que nunca pero eso no hizo que el se detuviera para poder matar y acabar con Catilina. Al paso de los días continuaba el juicio contra Catilina, Marco dio su segundo discurso a lo cual se presentaba muy seguro de lo que decía, después se presentó el tercer discurso en contra de Catilina en donde la gente pedía que Lucio Catilina fuera asesinado por traidor y por conspirar contra Roma y su patria, y cuando por fin se presentó el cuarto y último discurso se escuchaban rumores de que Catilina se presentaría en el templo de la concordia donde se llevaría a cabo dicho discurso y que lo que esperaban de el es que ordenaran la muerte de Catilina. Cuando Julio se encontraba en su casa su sirvienta le dijo que Lucio Catilina deseaba verlo, Julio muy atemorizado ordeno que lo hicieran pasar y cuando Catilina entro lo saludo de un modo burlón diciéndole que como estaba su amigo traidor, Julio se quedó viéndolo y le dijo que se fuera de Roma que corría mucho peligro estando en la ciudad, Lucio le dijo que él se presentaría en el templo y que llevaría un abogado para su defensa Julio sorprendido de tal cosa le pregunto quién sería ese abogado, Lucio con una sonrisa burlona le contesto que sería el quien lo iba defender del garbanzo de Marco, Julio se negó y Lucio lo amenazó diciendo que si él hablaba lo que sabía de julio y los demás ellos ciarían junto con él. Después de que Lucio se retiró hizo que un esclavo le avisara a Marco de lo que había dicho Lucio, Marco al enterarse dijo que Lucio deberá morir y cuando por fin se llegó el día esperado todos los del senado se encontraban presentes y Marco sentados frente a ellos y a su lado se encontraba Quinto su soldado leal y hermano del alma, Marco comenzó a dar su discurso cuando de repente señaló a Lucio el traidor de Roma con una voz elocuente que hizo retumbar dentro del templo. Lucio con el cinismo que tenía les dijo que él era inocente de todo lo que lo estaban acusando que no lo podía causar un garbanzo que no era nacido en Roma, les juro a los del senado que él amaba a su patria y que sería incapaz de conspirar contra Roma. Julio amenazado por Lucio tuvo que interferir por este. Después de que Lucio expuso su defensa y Marco las pruebas para acusar a Lucio, Julio les dijo a los señores del senado que la decisión era de ellos, cuando Marco hablo por última vez les comento a los del jurado que Roma estaba en sus manos pero mientras
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él hablaba Lucio aprovechó el momento para escaparse sin que nadie se diera cuenta, pero cuando Quinto se dio cuenta ya era demasiado tarde para poder retenerlo y el único que pudo impedir para que no se escapara fue Julio pero se mantuvo callado. Más tarde cuando Marco se encontraba firmando la autorización para ejecutar a los cómplices de Catilina se sentía muy mal ya que él no había hecho una cosa así y más porque sabía que la ejecución de estos iba hacer muy dolorosa. Puesto que los metían en un hoyo para que su muerte fuera poco a poco y sobre todo dolorosa, en ese momento Julio se presentó en la casa de Marco para pedirle una disculpa por lo ocurrido en la mañana, Marco le dijo que también debería ordenar su ejecución ya que era igual o peor que Catilina como también Pompeyo y Craso. Cuando Quinto se disponía ir al encuentro con Catilina Marco lo beso y lo abrazo diciéndole que lo quería mucho Quinto le dijo a Marco que si el moría sería porque estaba defendiendo a Roma y a su patria. De pronto Quinto y Lucio se encontraban ambos con sus ejércitos y estandartes, Quinto le rogaba a dios para que no tocara matar a Catilina ya que años atrás Lucio le había salvado la vida, mientras que Quinto rezaba Antonio el colega de Marco se retiró del combate. Cuando por fin se armó la masacre, Quinto solo clavaba la espada y la sacaba para volverla a clavar en el cuerpo de los soldados, y cuando por fin se había acabado todo Quinto vio que Lucio estaba rodeado de esclavos y lleno de sangre por lo que Quinto se acercó y vio que Lucio lo voltio a ver antes de morir, y Lucio le dijo aquellas palabras que le decía cuando eran compañeros adiós cachorro de oso Quinto al escuchar tales palabras se le llenaron los ojos de lágrimas porque Lucio había muerto, Quinto cubriéndolo con la bandera se retiró de ese lugar y regresó al lado de su hermano Marco este último le hizo ver a Quinto que él no reprochaba que le hubiera llorado a Lucio que él no hubiera querido eso pero era Catilina o Roma. Craso y Pompeyo se alegraron de que al menos habían visto el final de Lucio. Pero después de la muerte de Catilina la gente se enfureció y le echaron en cara a Marco que Catilina no debería ser muerto de esa manera que tenía derecho a ser juzgado ante un tribunal, Catilina antes de aparecerse en el templo de la concordia mando una carta donde le decía que atacaran, así que Pisón reunió un ejército de hispanos y marcharon a Roma, los hispanos eran de carácter sobrio, pero honestos soldados muy fieles a su gobernar romano, por lo que resulto muy extraño que asesinaran a Pisón y que fuera enterrado en el mismo lugar donde lo habían matado. Mientras que Quinto Curio apenas había pasado una semana de la muerte de Catilina y una mañana amaneció asesinado en su lecho. El historiador Salustio comentó que los habían matado a los que conspiraban con Catilina, había sido por la policía secreta de Cicerón ya que en una ocasión Marco Antonio le comentó a Marco que tuviera piedad y Marco le contestó furioso que él lo hacía por Roma y no por el espíritu de venganza. Marco temía que después de la muerte de Catilina las decenas de desarrapados se revelaran provocando el caos. En cuanto Manlio la misma mañana en que el ejército emprendió la marcha final se arrojó sobre su propia espada y fue enterrado en silencio. Publio Clodio y Julio fueron a quejarse con Craso diciéndole que Marco estaba perdiendo el juicio puesto que estaba deteniendo a todos los que conocieron a
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Catilina. La necesidad obliga hacer extrañas comparaciones dijo Clodio ya que el joven Marco Antonio su más grande admirador y sin embargo Mario condenó a su padre a muerte y ahora jura que se vengara de Cicerón por haber condenado a su padrastro Lentulo, marco sabía que el odio lo perseguía y Terencia con lágrimas en los ojos le decía a su esposo que la mujer de Lentulo estaba inconsolable y que muchos estaban en contra de el a lo que Marco le dijo que él lo había hecho por Roma, Marco pensaba divorciarse de Terencia ya que cada vez lo enfadaba con sus quejas y recriminaciones. Cicerón había salvado a roma y sin embargo la gente se encontraba en descontento ya que decían que se habían pasado, cosa por la cual Marco se quería irse lejos de Roma. Marco y Quinto se fueron a Arpinum para pasar unos días tranquilos Marco se sentía triste porque nunca volvió a ver a Livia y él le expresó a Quinto que sería muy feliz el día que dejara de ser cónsul, Quinto le dijo que aunque dejara de ser funcionario no estaría a salvo ya que se había hecho de muchos enemigos los cuales habían jurado vengarse. Marco a causa del descontento de la gente fue exiliado de Roma quitándole todo lo que le pertenecía incluso su casa del palatino, Marco en el juicio expuso su razón del porque se vio apresurado matar a Lucio ya que sino moría iba a acabar con Roma cosa que los del senado no creyeron y a Marco no le quedo de otra que irse lejos de Roma, marco cuando regreso a su casa Terencia solo le decía reclamaciones y lo culpaba del desastre y ruina de la familia, mientras que Tulia llorando le decía que no la abandonara que la llevara con él, Marco le dijo que tenía que quedarse con su esposo a Tulia no le importaba nada solo quería estar al lado de su padre, Quinto le dice a Marco que él no podía acompañarlo pues lo acusarían de traidor. Marco se alejó de Roma donde se encuentra a muchos amigos uno llamado Adoni quien era el que le traía todos los acontecimientos de Roma Marco en esos momentos deseaba morirse y ya no luchar mas pero se acordó que Noé su amigo le había dicho que el suicidio era como odio que sentía el hombre hacia dios. Mientras que Quinto hacia todo lo posible porque regresaran a su hermano a Roma con la ayuda de Pompeyo quien apreciaba a Marco, Quinto fue a visitar a Julio para reprocharle que no hubiera hecho nada para salvarlo a Marco quien hace años lo había defendido, Julio le dijo que el rezaba por su regreso y Terencia por su lado iba a visitar a sus parientes para pedirles que le ayudaran para que su esposo regresara, pero en el tiempo que Marco estuvo fuera de Roma su yerno murió en la lucha para que el pudiera regresar a Roma, Quinto había sido herido gravemente y estaba a punto de morir y cuando por fin lograron que Marco regresara de su destierro al cual había sido condenado, Tulia su hija lo fue a esperar a la puerta de la ciudad donde lo estrecho en su brazos, toda la gente lo aclamaba como un héroe, pero Marco notaba que a su hija le pasaba algo ya que se veía muy pálida y delgada, Tulia no quería preocupar a su padre en esos momentos pero más tarde se echó a llorar en sus brazos y le contó todo lo que había sucedido mientras él estaba lejos. Cuando por fin se fueron a descansar en el madrugada llegó un ejército con trompetas al cual pertenecía a Quinto quien iba a recibir a su hermano, pero cuando Marco se subió a su litera y toda la gente lo aclamaba por lo que en el recorrido se encontró a sus amigos Julio, Craso y Pompeyo quien le daban la bienvenida, lo llevaron al senado y toda la gente gritaba y aplaudía de alegría.
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Cuando Marco se dirigió a la casa de Atico, Marco corrió abrazar a su hermano Quinto y le dio un beso a su esposa Terencia. Más tarde se integró el Triunvirato integrado por Craso, Pompeyo, Julio, Clodio quienes ambicionaban el poder, Julio le dice a Marco que se uniera a ellos, Marco se negó, ya que él era de las personas que amaba a su patria y sabía que ellos querían conspirar contra Roma, Marco le dijo a Julio que se retirara que había tenido un sueño donde él iba a morir lleno de dagas clavadas en todo su cuerpo, Julio burlándose hizo una señal para cuidarse del mal de ojo. Quinto le dice Marco que ya viviera una vida tranquila que se olvidara de Roma y pensara en él, que dejara la política, pero Marco no reconocía ningún consejo y decía que no podía dejar que Roma desapareciera. Tiempo después Tulia le comento a su padre que quería casarse con Dolabella un joven patricio, Tulio al escuchar tal cosa se negó y le grito diciéndole que su madre le había dicho eso, Tulio le dijo que no que ella quería casarse ya que él amaba desde antes de que se casara con Pisón. Más tarde Tulia se casó y Marco estaba contento ya que veía que su hija era feliz, Marco ocupo un puesto vacante en el consejo de auguras el cual era muy bien remunerado, pero era para que Marco se alejara lejos de roma y ellos tuvieran el camino libre para sus fines. Julio le pidió a Marco que fuera a la colina y que le preguntara a los dioses sobre él, Marco y el magistrado se dirigieron al lugar, a media noche y observaron en el cielo que un joven estaba en un carro el cual se trataba de Julio con una bella mujer que Julio la tomaba y la llevaba a su lado, pero alrededor de ellos se encontraban negros cipreses, una bandada de cuervos, lechuzas y grajos, un enjambre de aves que en su pico llevaban dagas las cuales volaban alrededor de ellos y los mataron enterrándoselas en su cuerpo; Marco al ver tal cosa se desmayó y quedo inconsciente como si estuviera muerto. Más tarde cuando Marco vio a Julio y le contó lo sucedido Julio no hizo ningún caso. Craso por su parte fue asesinado sorpresivamente por órdenes de Julio y Pompeyo, todos ellos en su triunvirato querían el poder, Julio ambicionaba tanto el poder que no paraba por las advertencias de su amigo Marco. Luego Julia la hija de Cesar y de la esposa de Pompeyo había muerto a causa de fiebres y con ellos se había acabado el laso que unía y ligaba a ambos hombres. Tito Milon dijo a Cicerón que Clodio y los demás querían acabar con Roma, un día los hombres de Roma fueron atacados en la vía apía por los esbirros de Clodio y en la escaramuza que siguió Clodio resulto muerto. Luego Leah la esposa de Noé le escribía a Marco para darle el aviso de que Noé su amigo había muerto, Marco al escuchar la noticia se soltó a llorar y Terencia le pregunto el porqué del llanto a lo cual él le respondió que el mundo se acababa de llevar a un buen hombre Leah le dice a Marco que Noé había pensado en el hasta el último momento y que le había dicho Isaías no temas porque estoy contigo no desmayes porque soy tu dios, cuando cruces las aguas estaré contigo y los ríos no se desbordaran a tu paso cuando atravieses fuego no te quemaras, ni las llamas se inflamaran sobre ti porque yo, el señor tu dios sostengo tu mano derecha. Marco fue nombrado gobernador de la provincia de Cilicia en la costa meridional de Asia menor que incluía la cía de Chipre, Marco logro levantar las provincias ya que estaban en banca rota y las restauro. Celio un amigo y joven político romano era el que estaba enterado de los rumores que surgían en Roma, Marcos se unió al ejército de Pompeyo según porque iba a restaurar a Roma y no era ambicioso, pero Marco tuvo una recaída y Pompeyo le mando el mejor médico para que lo atendiera y lo curara, pero
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cuando Marco despertó del sedante que le habían puesto pregunto por Pompeyo ya que habían tenido un sueño donde Pompeyo resultaba muerto y Cesar triunfante. El doctor le comento a Marco que Julio y Pompeyo se enfrentarían en Tesalia, donde Julio se había retirado pero, que se volverían enfrentar por última vez cerca de Farsalia, donde Pompeyo se escapó a Egipto y fue muerto, Catón se suicidó para no ver el triunfo de los tiranos que acabarían con Roma, pasando los días Marco recibió una carta donde le decían que todos los que habían apoyado a Pompeyo no podían regresar a Roma, que eran ordenes de Julio, por lo que Quinto volvió interceder por Marco y le pidió que lo dejaran a regresar, como Julio siempre había apreciado a Marco lo permitió pero después Cesar y Cleopatra la hermana de Ptolomeo se unieron para destruir a su hermano y así lograr el poder ambos ambicionaban tanto , Marco al escuchar tal cosa se acordó de lo que había visto antes y temía de que sus sueños fueran reales. Más tarde Marco y Tulia se habían divorciado de sus respectivos cónyuges, ya que no los soportaban y se fueron a un lugar donde les sería más fácil olvidarse de roma Y de todo el mundo a un lugar llamado tascana. Marco tenía 61 años y su cuerpo ya era viejo y esquelético. Cicerón se casó con Publia una dama rica y joven a la que tenía bajo su tutela, por la que no había significado nada en su vida. Marco de pronto se quedó profundamente dormido, luego se halló en un reluciente jardín lleno de lirios y brillantes flores azules, luego vio de reojo a una joven que atravesaba corriendo el puente de mármol labrado en dirección a él, flotando en su cabeza un velo azul y llevando en su cuerpo encantador un vestido blanco, abrió los ojos y se dio cuenta que era Livia, dulce y con ojos de azul apasionado y una boca con una tonalidad de frambuesas bajo el sol, sus besos le supieron en sus labios a miel de jazmín. Marco le decía a Livia Amos mío he tenido un sueño terrible, soñó que estabas muerta y yo era un viejo canoso con el corazón quebrantado .Cariño le replico ella con la voz que él nunca había olvidado. Tranquilízate ya no falta mucho tiempo y el cielo está en movimiento, pronto podremos unir nuestras manos y esperar, a que hemos de esperar le pregunto el, estrechándola entre sus brazos, A dios le dijo ella y se fue borrando aquella imagen y no la pudo encontrar más. En lo Concerniente a Cicerón la desastrosa guerra civil había terminado. Catón le apremiaba para que ahora que Pompeyo estaba muerto el dirigiera la lucha contra cesar, los hijos de Pompeyo fueron a visitarlo y le sugirieron lo mismo, por lo que él se negó, pero sexto y Cneo Pompeyo se retiraron a Hispania para seguir la guerra contra Cesar. Marco después recibió una carta de Terencia dónde le decía que Tulia. Se hallaba en muy estado de salud. Dolabella el derrochador había gastado su dote, el joven Marco hijo que había sido orgullo y alegría de su madre daba muestras de inclinarse hacia la disipación. Las inversiones iban mal, ha tenido que vender muchos de sus esclavos valiosos. Cesar estaba en Egipto para destruir los restos de las legiones de Pompeyo, a las que se había unido el ejercito del joven faraón Cicerón había amado siempre a su sobrino, a pesar de la agresiva maldad de este, pues no en vano era miembro de su familia. En medio de tanta perplejidad y ansiedades, Quinto le escribió una carta en tono amargo,
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diciéndole que había iodo comentar en Roma que Cicerón le reprochaba a él sus dificultades, cuando estaba bien tranquilo u a salvo en Brundusium en donde nadie lo molesta gracias a la clemencia de Cesar, Cicerón pensó que en todo estaba involucrado su sobrino, lleno de tristeza y amargura volvió a caer enfermo, fue entonces cuando llego Tulia su hija para consolarlo. Marco al ver a su hija se dio cuenta que estaba muy mal de salud. Por lo que Marco le mando pedir a Atico que le vendiera muchos de sus objetos valiosos para mantener a su hija, pero Atico le mando una fuerte suma de dinero, diciéndole que correspondía a derechos de Autor de Cicerón ya que sus libros se habían vendido en grandes cantidades. Marco y Tulia se mostraban obstinados en abandonar Brundusium, ya que el clima no les sentaba bien para su salud. Los amigos de Cicerón lo mantenían al tanto de lo que ocurría en Roma y en sus cartas le aseguraban que Marco Antonio cumplía a raja tabla las leyes y edictos promulgados por Cesar y que por lo tanto podía regresar tranquilamente a Roma, pero Tulia cayó gravemente enferma pues el clima había podido con ella y sin importarle lo que a él le pudiera sucederle, decidió salvar la vida de su querida hija. Marco pensó regresar a Roma para llevar a Tulia con los mejores médicos y le pidió a Terencia que abandonara la casa del palatino, pues él le devolvería su lote aunque con eso se quedara arruinado, y cuando Marco hijo que había sido mimado por Terencia tendría que irse a estudiar a Tenas. Marco y Tulia regresaron a casa del palatino y se sintió más enferma pero nunca se quejaba de nada siempre estaba sonriente con su padre y lo atendía como un rey. Pero los doctores le habían dicho a Cicerón que Tulia se encontraba enferma de una enfermedad que no tenía cura, un día Tulia penetro bruscamente en la biblioteca de su padre, muy pálida y sin aliento, Tulia le pidió una disculpa a su padre porque sabía que a este no le gustaba que entrara a su biblioteca y le dijo que había visto un fantasma y que si no era un fantasma era la más misteriosa de las mujeres, Cicerón se levantó y se apresuró a poner un cubilete de vino en sus manos frágiles, enjuagando su sudorosa frente con un pañuelo. Cálmate le imploro el a lo mejor has visto una esclava de Arpinum, pero ella lo negó no era eso iba vestida de blanco y azul y era más joven que ella, su pelo era de color de las hojas de otoño, cruzo el puente y se paró junto a Tulia mirándola muy sería a Cicerón le comenzó a latir el corazón salvajemente y trato de tranquilizar a su hija preguntándole que si había hablado con ella, Tulia le dijo que no que se había quedado observando a la granja como si supiera que estuviera Cicerón y comenzó a cantar una canción suavemente olvidándose de Tulia, Cicerón sabía que se trataba de Livia pero no podía decirle eso a su hija. Cuando el frío se sentía más Cicerón se marchó a Roma con su hija Tulia en un coche cubierto, pero Tulia se sentía cada vez más desfallecida, Cicerón rezaba pero a la vez maldecía a los dioses que querían arrebatarle a su hija diciendo no me habéis quitado ya mi honor y mi reputación, mi salud y mis riquezas, no habéis destruido mi ciudad y degradado a mi pueblo es que tampoco vas a evitar dolores a mi hija Tulia. Al llegar a Roma Tulia fue llevada inmediatamente a su lecho, del cual no se levantaría jamás, su padre paso todo el tiempo con ella hasta que una noche ella se levantó y Tulia le grito
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padre mío, Cicerón se despertó sobresaltado y las lámparas parecieron dar una luz más viva, Tulia estaba de pie y a su lado sonriente y su rostro relucía de gozo, parecía disfrutar del fresco de la vida. Su vestido parecía flotar sobre el soplo de una suave brisa, se llevó las manos a su boca y las beso arrojando luego esos besos a su padre, después sin hacer el menor ruido corrió hacia la puerta, la obscuridad cayó sobre sus ojos. Marco sintió que lo sacudían por el hombro y vio sobre el los rostros de las jóvenes esclavas, sintió un sobresalto y miró al hecho; Tulia yacía en el inmóvil y muy pálida, se quedó mirando su rostro muerto pasaron los días y se dio cuenta que sus últimas fuerzas habían huido con el espíritu de su hija, Cicerón se dijo así mismo que la vida había acabado para él, cuando de pronto llego Julio Cesar triunfalmente a Roma después de haber derrotado a sus últimos enemigos en Munda. Julio fue a visitar a Marco junto con Marco Antonio y Marco Bruto su hijo no reconocido de Julio, este último abrazo a Marco y le decía mi querido y viejo amigo, cuanto tiempo hace desde que mis ojos tuvieron la delicia de verte por última vez, Marco quería quedarse en la isla y no regresar a Roma pero sabía que tenía deberes que cumplir en Roma y decidió partir para allá, pero Euníce le dijo a Marco que no se fuera que había tenido un sueño al cual lo soñaba muerto en un muro blanco. Cuando Marco estaba en su casa recibió a la visita inesperada de Marco Bruto, Cicerón sorprendido de tal visita esperó para que le comentará de que se trataba, Bruto le dice a Cicerón que él tenía entendido que Julio restauraría la república y Marco le contesto que eso esperaba de Cesar, Bruto le aconsejo a Bruto que denunciara a Julio, pero Marco le dijo que eso sería inútil, Bruto se levantó furioso y le dijo con reproche que no interfiriera entonces. A la mañana siguiente Calpurnia muy pálida y derramando lágrimas de angustia dijo a Julio Cesar no vayas hoy a la reunión del senado esta noche he tenido una horrible pesadilla y he soñado que te asesinaban, él sonrió y mirándola le dice cariño qué diferencia hay entre hoy y cualquier otro día además el pueblo de Roma está conmigo. Quinto había ido aquella mañana a la casa de Marco su hermano, Quinto mientras desayunaba se mostraba serio y pensativo cosa que era de extrañarse, Marco le preguntó que si le pasaba algo, contestándole el que se divorciaría de Pompinia. Quinto le dijo que lo acompañara al senado pero Marco le dijo que no tenía nada que hacer allí, Quinto le dice oirás algo que te gustara Cicerón le dijo que nada de lo que diga Julio le interesaba pero este vio la luminosa mañana de marzo y pensó que le haría bien tomar un poco de aire . Cuando Julio se volvió frente al senado vio a Marco en medio de muchas cabezas y le saludo con la mano cariñosamente, Julio penetro en el edificio y Marco le grito a este, no sabía porque el sol le había dado un vuelco y enseguida el sol le pareció pálido y frío. Él y Quinto no iba muy de tras de Julio así que tuvieron que detenerse cuando ante ellos hubo un poco de agitación y confusión y se oyeron algunas voces dementes ¿qué pasa? Le preguntó Cicerón a su hermana, pero Quinto miraba fijamente ante él y de repente puso una mano en el brazo de Marco, como sujetándolo, pero Marco se sacudió la mano de su hermano y avanzo ligeramente espera le grito Quinto, pero Marco no hizo caso y se abrió paso en medio de la muchedumbre, Cicerón llego al lugar que tanto le costó
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alcanzar Julio Cesar yacía sobre el suelo de mármol en donde se había cubierto el cuerpo con su manto sangrando por una docena de heridas, y muriéndose miraba fijamente a los que lo habían asesinado, pero sus ojos velados buscaron tan solo el rostro de uno y preguntó con un débil susurro tú también bruto hijo mío. Había caído desplomado al pie de la estatua de Pompeyo, Bruto grito así perecen los tiranos y alzó su sangrienta daga con un gesto exultaste. Cicerón cayó de rodillas ante el muerto y con un gesto delicado apartó el manto que medio ocultaba el rostro de la víctima, dejo de oír todo el ruido y parecía que ella y Julio volverían a hacer niños, después comenzó a llorar diciéndolo ni quisiste escuchar mi pequeño compañero de juego, alguien lo tomo del brazo y se lo llevo de allí como si fuera un niño. Después Marco Antonio se hizo cargo del mando de la ciudad y las legiones estaban a su favor. El testamento fue leído ante el pueblo en el foro por el propio Marco Antonio, Cesar dejaba todas sus propiedades a la otra orilla del Tiber como legado al pueblo y a cada ciudadano una suma de salarios equivalente a muchas semanas. Jamás sabremos quién mato a Julio Cesar dijo la gente. Antonio era el cónsul de Roma y todos sus actos fueron conciliatorios. Fue entonces cuando Antonio actuó con fría y serena decisión que después a distinguir ya en Cesar Augusto, Octavio tenía muy en cuenta todas las personas influyentes en Roma, mientras que Marco Antonio se hallaba atareado con las obligaciones del gobierno y consultaba a los senadores. Cicerón fue tan imprudente como tirano que trataba de subyugar a Roma, Cesar mereció la muerte pero estas palabras llegaron a oídos de Octavio y declaro que mostró es ese Cicerón y dijo que ordenaría la expulsión de Cicerón del senado pues decía que era un perro viejo, ciego con un solo diente. Cicerón escribió su segunda filípica donde en ella denunciaba a Marco Antonio de cobarde, embustero y como adicto a casi todos los vicios desaprobados por Roma, de pronto se formó el segundo triunvirato integrado por Octavio, Lépido. Octavio fue elegido cónsul, Marco se retiró a la ciudad de Astura situada en la bahía de Antium, Marco hijo estaba en Macedonia bajo la protección de Bruto uno de los asesinos de Cesar. Cicerón se encontraba cada vez más cansado y los esclavo que tenía decían que se moriría muy pronto, ya que Cicerón había dispuesto en su testamento que les daría su libertad cuando el muriera, preguntó el liberto lo matamos nosotros mismos pero no lo hicieron porque temían a la venganza de Quinto su hermano, el liberto era el filósofo al que Cicerón había conseguido la libertad en su juventud y lo había educado con el mayor afecto pagándole además un buen salario. Marco esperaba noticias de su hermano y de su sobrino para que todos se fueran a reunir con Marco hijo y poder estar a salvo, pero Marco había pensado mandarlos a ellos y el regresar a Roma para morir en su ciudad que tanto había luchado por ella, pero era lógico que no tuviera noticias de Quinto pues había caído en el poder de unos esbirros y murió asesinado por orden de Octavio que aunque no tenía nada en contra de Quinto era implacable en ejecutar. Quinto hijo aquel muchacho hipócrita y tortuoso se portó como bueno al final de su vida, había escondido a su padre por lo que lo sometieron a tortura para que revelara su escondrijo, pero él se resistió valientemente para evitarle más sufrimiento, el padre salió de donde estaba oculto y lo mataron en su último gesto de cariño con su hijo mientas agonizaban sobre los charcos de su propia sangre. Marco huye enseguida a Macedonia, el enfermo de Marco que estaba dormido escuchó aquellas palabras y se despertó con un sobresalto y miró en tomo suyo pero no vio más que los
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ruidos del viento, pero Marco pensó que los seres queridos lograban hablar a distancia para hacer una advertencia. Marco sabía que lo estaba previniendo y que tenía que ir a Macedonia lo más pronto posible. Filólogo convenció a Cicerón para que montara en un bote y bordeara la costa alrededor del cabo Cirello, hasta alcanzar el puerto de Gaeta donde podría tomar un barco que lo llevara Macedonia. Pero Marco se había sentido muy enfermo y filólogo que lo había acompañado de mala gana ayudó a su amo a meterse a la cama. Cicerón se quedó acostado en la cama y la larga obscuridad de la noche invernal cayó sobre él, estaba consciente del frío que sentía en los huesos y quedo dormido pero escuchó una voz que le decía no temas porque estoy contigo, no desmayes porque soy tu dios, Cicerón dejo de sentirse inquieto quedando dulcemente dormido. A la mañana siguiente se levantó y los esclavos se asombraron al ver la vivacidad de su expresión de su gesto decidido. AI otro día los esclavos lo llevaron y lo metieron a su litera y lo llevaron a orilla del mar pero mientras tanto llegaron los que habían sido enviados para asesinarlo, era herenjo, el Centurión y Popilio, el tribuno a los que Cicerón había defendido cuando fueron acusados del asesinato de su padre. Al llegar a la villa y encontrar las puertas cerradas las echaron abajo y como no lo encontraron los que estaba allí les dijeron que no sabía dónde se encontraba, pero el filólogo un esclavo emancipado de su hermano Quinto al que Cicerón había educado informó al tribuno que la litera que conducía a este iba de camino hacia al mar a través de un espeso bosque. Mientras que Herenio seguía el mismo recorrido por este Cicerón lo vio venir corriendo y ordenó a sus esclavos que soltaran la litera en el suelo. Entonces mesándose la barbilla con su mano izquierda como los solía hacer miró fijamente a sus perseguidores, su rostro estaba maliciento su cuerpo cubierto de polvo y sus cabellos despeinados. Todos sus presentes se cubrieron el rostro mientras que Herenio le daba muerte. Cicerón había asomado su cabeza fuera de la litera y Herenio se la corto, luego le cortó las manos tal y como se lo había ordenado Antonio. Este último se hallaba celebrando una asamblea para la elección de funcionarios públicos, al enterarse de la noticia y al ver la cabeza y las manos grito ahora ya podemos poner fin a nuestras proscripciones, mando que la cabeza y las manos fueran fijadas en la rostro donde hablaban los oradores, un horrible espectáculo que hizo estremecer a los Romanos al verlo creían que veían allí no el rostro de Cicerón, sino la imagen de la propia alma de la imagen de Marco Antonio. El mutilado cadáver de Cicerón fue apresuradamente enterrado en el mismo lugar donde fue asesinado. A filólogo le arrojaron el amuleto de Aurelia la madre de Julio Cesar, viendo este que era de oro y muy valioso lo beso, pero cuando le dieron la cruz de plata que le habían dado a Cicerón se estremeció de horror y lo arrojó con desprecio. Se dice que Fulvia la viuda de Clodio tuvo el refinamiento perverso de clavar un alfiler en la lengua de Cicerón, aquella lengua heroica que había defendido a Roma con tanta valentía y que se había esforzado en hablar de justicia, leyes, piedad, dios y patria. Su fantasmal rostro muerto se quedó mirando fijamente la ciudad a la que tanto había amado sin que sus ojos parpadearan, contemplaron todo lo que se había perdido hasta que la carne se desprendió de los huesos y solo se quedó el cráneo. Finalmente un soldado derribo el cráneo del poste y le dio una patada destrozando sus huesos.
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