JUEGO CIRCULAR
Es una Terapia Intensiva basada en la Relación para fortalecer y promover el avance en etapas del desarrollo donde el/la menor se ha detenido. El objetivo es que el niño/a muestre conductas interactivas espontáneas que tengan un propósito y sea intencional. La intervención se basa en la premisa en que todo niño puede ir avanzando en su desarrollo, siempre y cuando, goce la interacción con sus padres y de esta forma pueda aprender. El énfasis que se da en que el niño inicie la interacción y luego pueda responder a la interacción del otro independiente del nivel de complejidad de la comunicación, así, inicia círculos de comunicación, los mantiene y cierra. Regulación / Vinculación (0 – 9 meses)
Juego circular I
Atención, vinculación, vinculación, intimidad
Juego circular II
Comunicación de ida y vuelta
Ideas emocionales (2 – 3 años)
Juego circular III
Sentimientos e ideas
Pensamiento emocional (3 – 4 años)
Juego circular IV
Pensamiento lógico
Reciprocidad / Intencionalidad Comunic. gestual compleja (9 meses – 2 años)
JUEGO CIRCULAR I - Regulación: en el niño/a se espera observar interés en el mundo (mirar cuando le hablan y se le muestran objetos, que preste atención a sonidos). Importante observar que sea capaz de recuperarse del llanto cuando es consolado rápidamente. Ver si tolera y/o disfruta movimientos en el espacio (horizontales, verticales) o experiencias experiencias táctiles. - Vinculación: se espera observar que el niño/a responda con sonrisas y/o vocalizaciones a las expresiones faciales o voces de sus padres y que proteste ante frustraciones. Atención, Vinculación e Intimidad: el objetivo es que el niño logre estar atento, calmado y se establezca vinculación vinculación de placer mutuo. Se sugiere: Buscar un estado de alerta calmada: si esta excitado o irritable, calmarlo. Si esta somnoliento o aislado, energizarlo. Buscar placer mutuo: vincularse a él a través de las pequeñas cosas que le producen placer. Obtener la atención del niño a través de sus sentidos. No interrumpir interacciones que el niño quiere prolongar, hacerlas más complejas. Su perseverancia volverla interactiva. Interpretar lo que hace como con propósito e intencional (aunque parezca no hacer nada)
JUEGO CIRCULAR II - Reciprocidad/Intencionalidad: observar que el niño/a es capaz de interactuar con propósito (causa-efecto), de iniciar señales y de responder con propósito a las señales de otras personas (a través de sus sentidos, su sistema motor y sus emociones). Estableciendo un sentido de sí mismo. - Comunicación de Ida y Vuelta: se observa la habilidad de crear gestos complejos, de unir una serie de acciones y transformarlas en una secuencia intencional para resolver un problema o para comunicarse afectivamente. El menor comienza a desarrollar un sentido de sí mismo pre-verbal al ir organizando su conducta y emociones. El niño secuencia un número de gestos en conjunto y responde consistentemente a los gestos del cuidador, elabora secuencias de interacción que conllevan, trasmiten o dan a entender los temas emocionales básicos (cercanía, placer, displacer, tristeza, rabia, miedo).
El objetivo es estimular una creciente interacción, a través de una comunicación simple con interacciones animadas cara a cara y luego comunicación gestual compleja. Es importante jugar siempre cara a cara, proporcionar variedad de estimulación sensorial si así lo requiere. Una vez que se logra circularidad, aumentar su complejidad. Crearle problemas que "deshacer", sorprenderlo con variaciones sutiles de sus "rituales". Es importante recordar que se busca interacción no entretención.
JUEGO CIRCULAR III Ideas Emocionales: se observa la habilidad de crear ideas, aprendiendo a usar representaciones entrando al mundo de los "significados compartidos", así va empezando a desarrollar su capacidad representacional dándole sentido o significado a sus acciones o juegos, esta capacidad va complejizándose hacia una capacidad de elaborar representaciones donde empieza a crear una trama simbólica de 2 o más ideas, las cuales no necesitan estar conectadas lógicamente. Empieza a usar comunicación simbólica (palabras, dibujos) para trasmitir dos o más ideas simultáneamente que expresan emociones o deseos. El niño/a empieza a comunicar temas emocionales como: cercanía o dependencia, placer y humor, asertividad y exploración, cautela y conducta temerosa, agresividad y rabia, colocación de límites. Es importante estimularlo a expresar emociones e ideas, para lo cual hay que conectar nuestras palabras e ideas con las intenciones y deseos del niño.
Se sugiere: Realizar juegos donde se "pretenda" o se le dé sentido a lo que se hace Adoptar un personaje de la trama, involucrarse en la acción y hablarle a través del personaje a sus personajes.
Evitar comentar el juego desde afuera En vez de introducir nuevas actividades, agregar elementos simbólicos a la actividad que el niño/a está realizando. Disponer de juguetes relacionados con la vida cotidiana. Buscar oportunidades para simular actividades de la vida diaria. Aumentar sus experiencias reales. Introducciones graduales, gentiles, lúdicas. Cada variación va a generar resistencia, discomfort. No forzarlo. Puede no incorporar ese día el nuevo elemento pero lo hará otro día. Dele tiempo para organizar una respuesta antes de introducir más elementos nuevos. Incorpore palabras que conlleven emociones marcadas. Aumentar círculos de comunicación verbales. Negociaciones, llevar del "hacer al pensar".
JUEGO CIRCULAR IV Pensamiento Emocional: es la habilidad de crear puentes entre ideas para transformarlas en lógicas y basadas en la realidad. El niño/a comienza a expresar sus ideas a través del juego y con palabras a describir sus emociones (en vez de actuarlas) y a enlazar ideas para convertirlas en pensamiento original. Posteriormente irá uniendo lógicamente 3 o más ideas, incorporando nociones de causalidad, tiempo y espacio. La calidad del juego es más elaborada por la preferencia de juguetes y la trama enriquecida por preguntas de "¿cómo?, ¿por qué?, ¿cuándo?". Comienza a diferenciar gradualmente fantasía de realidad y a negociar con los tiempos. Se estimula al niño/a a conectar ideas y desarrollar una comprensión del mundo. El objetivo es mantener conversaciones "lógicas" de alrededor de 20 min., flexibles, interesantes y espontáneas.
Se sugiere: Practicar, mantener y aumentar diálogos cotidianos usando temas de interés del niño/a. Hacer preguntas abiertas, conectivas, explicativas y/o con compromiso emocional. Insistir en cierre de círculo respecto a un tema antes de cambiarlo. Hacerles ver cuando cambian de tema/actividad abruptamente, pidiendo que hile ambos eventos. Usar conflictos o desafíos para promover cierre de círculos lógicos. En el juego adoptar personajes complejos (de emociones o roles flexibles) Preguntas en torno a causa –efecto, a conceptos versus detalles, a conceptos de relaciones. No hacer preguntas de una respuesta correcta. No dar instrucciones, analizar los temas o situaciones con él. No resolverle los problemas anticipadamente. Proveer de experiencias de aprendizajes.
ALGUNAS INDICACIONES: a) Definir lugar y horario Identificar momentos del día en que los cuidadores pueden darse aproximadamente 20 minutos para jugar sin interrupciones (ej. Llamados de teléfono, cuidar a otros, cocinar, etc.) Asegurarse que es un buen momento para el niño (ej. no está cansado, hambriento, etc.) Identificar un lugar donde jugar que sea seguro, tranquilo, sin grandes distracciones, placentero. Anticipar posibles problemas y evitarlos para no colocar limites durante el juego.
b) Comenzar por seguir la iniciativa o interés del niño/a Preguntar al niño “a que quiere jugar” y observar su respuesta, su interés. La respuesta a esta pregunta, o el objeto o actividad de interés del niño/a constituyen el inicio de un círculo de comunicación. Seguir la iniciativa o interés del niño permite ver a qué nivel él o ella es capaz de interactuar. Permite al niño/a estar en control, sentirse seguro/a. Otorga al niño/a la oportunidad de tener la experiencia emocional de que su interés puede tener una repercusión en el otro.
c) Construir sobre el interés del niño El adulto extiende y expande en torno al interés del niño/a según la etapa en que muestra desenvolverse, ayudando a consolidarla. La elaboración del adulto permite a la vez introducir gradualmente nuevos desafíos para esta etapa y/o avanzar hacia la siguiente cuando ya está suficientemente consolidada
d) Construir siempre a partir de las etapas básicas hacia las más complejas Para cada una de las etapas preguntarse: ¿Está el niño (y el cuidador) alerta, calmado y atento? ¿Están ambos gozando la interacción? ¿El juego involucra algún tipo de diálogo o comunicación simple entre el adulto y el niño? ¿El juego involucra algún tipo de negociación o comunicación compleja en que el niño/a expresa sus deseos y/o emociones? Si el niño tiene capacidad simbólica, ¿qué ideas o emociones expresa a través del juego? ¿Logra el niño/a expresar estas ideas y/o emociones en forma lógica?
e) Dar rienda suelta a la creatividad y gozar Usar el humor, el absurdo, gozar la interacción. El niño aprenderá má s en estados afectivos intensos, bajo “tonalidad afectiva alta” Si la experiencia es placentera, la querrá repetir, pero si la experiencia es agotadora o atemorizante, la querrá evitar.