Irrigación en México Volumen 1

IRRIGACION EN MEXICO

REVISTA MENSUAL ORGANO OFICIAL DE LA COMlSlON NACIONAL

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DE IRRlGAClON

OFICINAS;

E S Q U I N A B A L D E R A S Y A Y U N T A M I E N T O

SE REPARTE GRATIS ENTRE TECNICOS, AGRICULTORES

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Y COLONOS

REGISTRADO EN LA DlRECClON GENERAL DE CORREOS, COMO ARTICULO DE

TOMO l .

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M A Y O

1930

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CLASE.

 NUMERO  NUM ERO 1

Págs.

SECCION EDITORIAL  Nuestro  Nue stro Programa. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3 Dos Palabras a Técnicos y Colonos.. . . . . . . . . . . . . . . . . . .Ing. E. d e la PortJIa. 6 “Irrigación” es neologismo?. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7 o Boletín, Revista, Magazine Folleto?. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9 . . . . . . . . . . . . . . .. .. . . . . . . . . . Abriremos u n a Sección de Consultas. . . . . . . . . . . . . . .. 10 SECCION DE ESTUDIOS, CONSTRUCCIONES Y COLONIZACIQN Sistema de Riego del Valle del Mezquital. . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..,. . . . . . . . . . 11 Los Aprovechamientos hidroeléctricos e n los Proyectos de Irrigación. . . . . . . . . 22  H e r r e r a Zng. J .  He

y  La s s o .  In  Portil la. 27 El Problema de u n Canal irregular. . . . . . . . . . . . . . . . . . .  Ing.  d e la  Portilla. . g.  E .  de Algunos datos sobre Aguas Subterráneas y su aprovechamiento. . . . . . . . . . . . . 30  Dr .  Paul  Pa ul W a i t z .

SECCION EDUCATIVA Y DE DIVULGACIQN Antiguo Sistema d e Pesquería e n México. . . . . . . . . . . . . . .R. Quiroz Martínez.  M o n t i e l O l v e r a . Proyecto de plantación de Abacá en México.. . . . . . . . . . J n g . J .  Mo ej an dr o Bram Br amL;l L;la. a. La Granja Experimental e n Rodríguez,  N. L.. . . . . . . .Zng. Al ejan Paréntesis Literario.-Peri‘iles de T a x c o , . , .  M o n t e r d e y G. 1. . . . . . .F. Mo

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SECCION DE NOTICIAS Ley sobre Irrigación con Aguas Federales., . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Una Circular a los Sres. Gobernadores de los Estados.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  Notas  br  b r ev e s. , * , . . . . . . . . . . . . . . . .... . . . . . . . . . . . . . .. .. . . . . . . . .

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SECCION EXTRANJERA El riego en las grandes  pa  p a m p a s argentinas

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 N A C I O N A L DE IRRIGACION COMISION  NA Presidente de la Comisión: SR. GRAL. MANUEL PEREZ TREVIRO. Comisionado, Vocal Ejecutivo : ING, IGNACIO LQPEZ BANCALARI. Comisionado, Vocal Secretario : ING. LEOPOLDO VAZQUEZ.

O F I C I N A D E P U B L I C I D AD ROBERTO QUIROZ MARTINEZ, Director. ING. EDMUNDO DE LA PORTILLA, Jefe de Redacción. ISMAEL LOZANO, LOZANO, Administrador . Toda la correspondencia correspondencia deberá dirigirse al Administrado Administrador, r,

N IC I A la Comisión Nacional de Irrigación un nuevo 1 actividades con la publicación publicación

divulgación de su  pr og ram a, exp osi ció n de su s pro yec tos , ay ud a ge ne ra l a sus colonos y  pe rsi gu ien do un má s amp lio pro pós ito , a la incorporación de sus esfuerzos con la vida de nuestro país.

COLABORADORES Ing. Aguilera José 6. ,, Anaya y Lara Hornero. ,, Arteaga Luis. ,, Ballesteros Luis P. ,, Ballesteros Francisco. ,, Bancalari Manuel. ,, Brambila Alejandro. ,, Bustamante Octavio. Lic. Cabrera Luis. Ing,. Castelló Alfonso. ,, Coria Antonio. ,, Cuevas José A. ,, Corral Joaquín. ,, Chávez Eduardo. Lic. Chico Goerne Luis. Ing. Domínguez Norberto. ,, Dozal Portunato. ,, Gama Valentín. ,, García Julio. ,, Garcí a Lascuráin Angel. ,, García Manuel. ,, Gayo1 Roberto. ,, González López Pablo. Lic. González Roa Ferna ndo. Ing. González Pedro A. ,, Herrera y Lasso José.

Sr. Monterde y García Icazbalceta Francisco. Ing. Montiel Olvera Genaro. Genaro. ,, Monjes L. Ricardo. ,,  Noriega José L. ,, Oropeza Jesús. ,, Orozco Isidro 6. Lic. Ortiz Carlos. Ing. Pardo Manuel. ,, Perogordo Moisés. ,, Peimbert Angel. ,, Pérez Castro Lorenzo. Dr. Pruneda Alfonso. Ing. Quevedo Miguel A. de. ,, Roe1 Faustino. Rubio Enrique C. Ruiz Gonzalo. ,, Sánchez Higinio O;. Sánchez Pedro C. ,, Sánchez Mejorada, Javier. ,, Serrano Gustavo. ,, Toscano Ricardo. ,, Valdés Luis G. ,, Vázquez Jesús M. ,, Villaseñor Manuel. Dr. Waitz Paul.

aspect d su de este boletín mensual destinado a la

La Comisión ha sentido desde hace tiempo la necesidad de exponer todas sus actividades al análisis más libre y más abierto del elemento in teresado en los trabajos de la índole de los que le competen, y ha dicho siempre, cuando ha tenido algo que decir, cuál es la secuela técnica de sus  pro yec tos , el de sar rol lo ej ecu tiv o de los mismos, los  pr ob le ma s soc ial es que de sus actividades se derivan, ye en resumen, ha puesto hasta ahora general cuidado en documentar al público respecto de la marcha de sus obras ; esto hecho sin plan periódico f i j o y tocando alturas tecnicas, filosó ficas o sociológicas, a que no llega, en la generalidad de los casos, la ma sa lectora de nuestro país. Irrigación en México” responde a otro programa y se mueve a im  pul so de ot ro pro pós ito. T ra ta de red uci r si st em át ic am en te a prop orcio nes modestas, de exposición, sencilla y clara, los  pro ble mas de índ ole téc nica generalmente áridos e inaccesibles inaccesibles a una gran mayoría ; pr et en de por la diversificación de sus asuntos, iluminar diversos sectores de que pueden aprovecharse elementos distintos de nuestra sociedad : se impone, final mente , la obligación obligación de una periodicidad periodicidad sis temática, para dar al lector lector rei teradas oportunidades de consultar sus exposiciones y aprovechar sus ex  per ien cia s. Lb

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Las secciones en que ahora dividimos nuestro programa, vivirán constantemente en nuestra publicación respondiendo a un meditado estu-

LOS AUTORES SERAN LOS UNIC S RESPONSABLES DE SUS ARTICULOS.

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sugestión de tópicos, la indicación de  procedimient os o el sano consejo que  pueda mejor orientar nuestras actividades.  No tenemos reservada propiedad literaria de ninguna de nuestras pu  blicaciones, ni propiedad art íst ica de ninguno de nuestros trabajos gráficos nuestro propósito propósito es bien dist into: e s el de lograr lograr la máxima divulgación de esfuerzos oficiales en beneficio de la solución de un problema de vital interés nacional nacional y con esa divulgación, lograr lograr mayor i nteré s e n nuestros esfuerzos y mayor cooperación para realizarlos. Más todavía, queremos poner a disposición de toda la prensa de nuestro país todo el ar chivo gráfico de esta Comisión, facilitándole, con la oportunidad requeri da, y a su solicitud, originales de lso trabajos que vean luz en nuestro  periódico y que, cuidad osament e catalogado, c onservamos en el archivo de nuestra Comisión.

dio de sus alcances y sin excluir cualquier posterior perfeccionamiento que en las mismas pueda introducir la experiencia. A s í  una sección editorial tocará someramente la exposición exposición de programa programa de e sta Comisión Comisión o las líneas de  política genera l que anim an sus aetividades ; descripciones técnicas de nuestros proyectos en estudio O en ejecución desde todos los pun tos de vista e n que este complexo complexo problema pueda pueda contemplarse, vendrán en seguida; después, información de actividades semejantes en el extran je ro ; una import ante sección de eonsul tas al servicio del del público; una ex posición analítica lo más clara y accesible que nos sea dable alcanzar de nuestra legislación administrativa en materia de riqueza pública, para facilitar a nuestro lector el conocimiento de disposiciones legales o reglamentarias y capacitarlo para manejar por sí mismo ante las autoridades correspondie ntes, las licencias, permisos, concesiones concesiones o reconocimiento de de rechos en que pueda verse interesado, y, finalmente, aquellas amenidades o recreaciones que en la apasible tranquilidad del hogar agrícola, volverán amable la lectura de nuestro periódico, serán, podríamos decir, la arma dura de soporte de toda su arquitectura que habrá de lucir todas las be llas formas que le brinda el valioso concurso de colaboración que hemos allegado; pero no sólo se limita nuestro programa hacer de Irrigación en

El Estado ha puesto en marcha el mecanismo que habrá de desenvol ver la irrigación de nuestras tierras áridas, en todos aquellos problemas en que el esfuerzo privado está contenido, bien por magnitud de las inver . . .incertidumbre de los resultados ;  pero no quie re ni puede siones, bien  por desdeñar la iniciativa privada como nervio motor motor de sus esfuerzos, como organismo regulador de sus actividades y como censor atento al desenvolvimiento de sus principios.

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México’’ una revista de informaciones : desearíamos desearíamos ver enriquecidas sus columnas con con la discusión discusión seren a y docta docta de los vasto s problemas a nues tro cargo y el esfuerzo orientador de una opinión opinión pública que participe participe activamente en nuestras labores de Gobierno. Las Sociedades Científicas de México, las Instituciones de Ciencias Económicas y Sociales los los hombres hombres de estudio, todo aquel que en alguna forma se preocupe por el engrandecimiento de nuestra patria y tenga alguna idea que exponer para lograrlo, dentro de las actividades a que nues tro programa concreto se refiere, encontrará en nuestra publicación la más favorable acogida, acogida, sin más limitación que la qu e marque la magnitud de nuestra revista y la índole de lo s probl emas de que debe ocuparse. Las ideas expuestas bajo la responsabilidad de l o s autores y la forma literaria de que éllos las revistan, serán por completo ajenas a la censura de nuestra Oficina de Publicidad, que acogerá todas, liberalmente, para hacerlas vivir la vida de la propaganda y de la difusión difusión en la medid a que esté alcance. a su alcance.

Irrigación en México” saluda así cordialmente a todos los represen tativos de esta suma de esfuerzos, cuya integración produce la fuerza de iniciación y les  pide ren did ame nte ayudarl a e n la tarea impuesta a la Comisión de que es órgano oficial y que se reduce en síntesis: a trabajar con fe, con constancia y con seguridad en el triunfo, en la aplicación de todos sus entusiasmos, hasta justificar cumplidamente el lema que ampara ra nd nd ez ez a d e M é x i c o sus actividades: Por la G ra "

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Concurso especial que reclama, por su índole, exposición expresa, es que esperarnos de la  prensa info rmat iva de n uestr o país, b ien por l a re producción de artículos que teng an origen en nues tra Revist a, bien por la

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écnicos y constituye uye ya ya un lugar co S una verdad que, a fue rza de se r repetida, constit mún, que, para poner en explotación las inmensas comarcas del terri torio nacional que se encuentran eriazas, se impone la necesidad de cons truir obras de riego de mayor O menor cuantía. En nuestros nuestros climas climas templados d e la Mesa Central, así como como en nues tras zonas tropicales o costeñas, sólo  po r exce pción s e en cu en tr a un a ju st a correspondencia entre las alternativas de calor y de lluvia que requieren los fenómenos de la vegetación: de ahí tantas tierras de temporal y tan  p o cas de riego. Unicamente en ciertas regiones del Sur de la República, la urgencia de las irrigaciones no se hace sentir sino contadas veces, pues los campos son regados naturalmente. El resto del país exige obras artificiales de almacenamiento y distri  buc ión de las aguas, para toda clase de cultivos, a causa de la frecuencia y duración de las sequías y de la enorme evaporación que éstas producen. Para empapar el suelo durante los meses de las siembras, es preciso preciso construir canales que lleven sobre vastas extensiones, el agua derivada de co rrientes importantes y de régimen tal, que su mantenimiento mantenimiento es té aseguraasegurado durante la época de los riegos. Estos canales, asi c o m o l o s vasos de regularización regularización y reserva, y otras obras complementarias que les respectan, dependen, dependen, en su proyecto proyecto y cons trucción, ya sea de los Poderes Públicos, o de la la iniciat iniciativa iva particular; pero aún en el segundo caso, el Estado debe encargarse del control de la construcció trucciónn y de la explotación, explotación, por por razones d e utilidad general. Desgraciadamente, la Administración no ha llegado a estar en posi bil ida d de emprender los grandes trabajos de irrigación que reclaman nues tros campos y nos traerían abundancia y bienestar asegurados. Algo ha logrado, sin embargo, en este camino la Comisión Nacional de Irrigación; más en espera de contar con los créditos considerables que garantizarían la ejecución Integral de los  pro yec tos , s e pro si gue n, en lu gar es co nv en ie nt e mente elegidos, los estudios previos para elaborar, de manera metódica y científica, los futuros planes, y se recogen recogen los conocimientos prácticos para el cultivo racional de nuestros variados productos. Es conveniente desarraigar la  pre ocu pac ión , por des gra ci a ba st an te ge neralizada, de que la enseñanza superior agronómica excluye todo espíri tu práctico. El empirismo de nuestros campesinos suele llevar un exceso de 6

agua a terrenos poco permeables, o demasiado poca a los que fácilmente se filtran, Antes de trazar un canal y establecer su gasto, es  pre ci so es tu di ar , entre otras cosas, las propiedades físicas y sobre todo la permeabilidad den tro del perímetro regable regable.. Debem os, pues, congratularnos congratularnos de que el Su  pr em o Go bie rno , al oto rga r a la Comisión Nacional de Irrigación, las am  pl ia s atribuciones de que hoy disfruta, le confiera una orientación más definida y  prá cti ca, es ta bl ec ie nd o, ju nt o al Se rvi cio Hi dr áu li co , q ue con se r va técnico, que tiene a su cargo cargo . . s.u speculiares funciones, un nuevo servicio técnico, iniciar las obras más . indispensables de almacenamiento y conducción, así como secundar la iniciativa privada, y reunir todos los datos pertinentes  de irrigación del agua, sobre lo que un autor norteamericano llama el po de r  de princi o sea el caudal de agua necesario, por unidad de superficie, a los princi pa les cul tiv os de un paí s, as í com o el ár ea qu e se pue de re ga r con un volu men dado. En Alemania y Austria, lo mismo que en Estados Unidos, Francia e Italia, se ha adelantado mucho en este sentido. En el Boletín que hoy comienza a publicarse, se irán desarrollando los temas que dejamos esbozados y otros muchos de diversa índole, a fin de documentar a técnicos, campesinos y colonos, procurándoles un acopio de datos e informes de utilidad, y hacer más eficientes los esfuerzos del actual gobierno de la República, en bien de la agricultura nacional, Agregaremos que, como no se trata de una obra de especulación, nues tra Revista se re partirá gratuita mente, procurando procurando que llegue hast a los ú1timos rincones de la República, sobre todo a manos de los ingenieros y los agricultores, quienes, esperamos, encontrarán en estas páginas valiosas in dicaciones para ganarse la vida honrada y cómodamente, para desarrollar y mejorar s u fortuna o  pa ra cr ea rl a, y aun para pasar algunas horas de es  par cim ien to. Portilla. Ing. Edmu ndo de la Portilla.

IRRIGACIÓNes neologismo? A  pa la br a irr iga ci ón” , e n el se nt id o de riego, que aquí le damos, les un abominable neologismo, o  pu ede s er us ad a co rr ie nt em en te , si n mengua” ni “desdoro” del idioma? Española autorida d obligada obligada papa El Diccionario de la Rea l Academia Española ra dilucidar esta clase de dudas, no le concede concede más acepció acepciónn que una em-

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 plea da en Medi cina , a saber : La acción y efecto de dejar ca er poco a poco sobre la  part e enfe rma cualqu iera de los remedios oleosos, cocciones o líquidos . El mismo concepto de este vocablo se encuentra en todos los diccio narios de lengua castellana que hemos consultado. Igual criterio prevalece en los diccionarios Español-Francés y Español -Inglés (por ejemplo, los de Garnier y Bensley), donde  Irr ig at ion no se traduce por Irrigación, sino  por riego, regamiento o regadío. So n estas palabras, las que usan siempre los autores españoles. Entonces, ¿no es castizo el título de esta públicación, ni el de la Co misión a la que sirve de órgano periódico? iPero si este término ha sido adoptado en las diversas naciones de América, sin restricciones 0 Lo encontramos en las publicaciones técnicas de Chile, de Venezuela. La Argentina sostiene una Dirección Gener al “de ., Irrigacion , y aunque a veces se le denomina “ de Riegos”, nadi e rechaza el significado que a Irrigación le dan los franceses, los ingleses y los norteamericanos, en cuyas obras didácticas, po r manera preferente, nos informamos los ingenieros de la América Latina, desde los escaños de la Escuela y a través de toda nuestra práctica. Pero quien parece haber dicho Ea última palabra sobre el  part icul ar, es el escritor don Carlos Pereira, cuando escribe: Los académicos han discutido si en español puede aplicarse el verbo irrigar, con su correspondiente substantivo irrigación, tratándose de tierras. Debate menos que ocioso : ridículo. ¡De dónde vienen las dos voces? " Del latín, directamente. ¿Y en latín no se hace uso de los dos  para hablar del benefi cio que reciben las tierras por la acción del agua? Entonces, p o r qué en español han de tener una restricción arbitraria? iPor qué hemos de entregarlas a los médicos y a las enfermeras para su uso exclusivo? Los diccionarios latinos dan estos dos ejemplos : Aegyptum Ni lus irri “gat ; Nilus rigat Aegyptum. Uno es de Cicerón ; otro de Lucrecio. Lucrecio y Cicerón entendian algo de latín. Y  si no andaban del todo ext raviados, podemos seguir estas dos autoridades, digan lo que quieran los académicos”. Después de ésto, quienes insistan en esquivar una palabra tan ade cuada,  por respeto a la Academia que tarde o temprano acabará por ad mitirla, como lo ha hecho con multitud de términos técnicos que no eran fa-

miliares a los señores académicos , quienes prefieran una limpieza absoluta del idioma, a las ventajas y variedad de los sinónimos y al imperativo de la costumbre, están en s u derecho. Nosotros, sin sacrificar un ápice a nuestro culto por la  purez a del lenguaje, continuaremos empleando indistintamente las dicciones que expresen mejor nuestro pensamiento, porque queremos darnos a entender en el léxico usual, común y corriente. E. de la P.

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“El ingeniero  civ il  ti en e que tra tar con lo i m p r e v i s t o con esas fuer -

zas  de la  natur ale za que no est án suj et as  a cálculo, y sin embargo debe  predicar y  aún má s, calcul ar los efectos de  su  pr op io  p e l i g r o. .  no sólo  de be consi dera r  do que es, sino lo que pue de ser STEVENSON.

oletín, Revista, Magazine o

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 N  poco más sobre minuc ias gram atic ales .

El cuaderno que el lector tiene a la vista, e s un Boletín, una Revista, un Folleto -o un Magazin, como ahora se dice? Comencemos, como en el caso arriba tratado,  por recurrir a las autoridades en la materia, aunque, según Pascal, loi mejor para dilucidar una cuestión, no son frailes, sino razones. Los fra iles se rán aquí los consabidoe diccionarios,  No es un boletín porque, a decir de la Academia, boletín es un periódico noticiero, SEMANAL 8 DIARIO, de cortas dimensiones y redacción LIGERA, etc.” ; y  bolet ín oficial es un a especi e de GACETILLA donde s e insertan las disposiciones de las autoridades, como también las reales Órdenes, las señas de los prófugos, los precios de mercado y ot ras cosas” .  No es una Revista, porque esta palabra significa “la acción y el efecto de revistar, es decir, de recorrer revisando o inspeccionando detenidamente ; o de practicar la segunda vista o examen con más cuidado y diligencia. . . Hay revistas de comisario, de ropa, de armas, etc. Nada que se refiera de cerca ni de lejos a los impresos que nosotros y todo el mundo- denominamos Revistas ; ni tampoco a ciertas piezas de teatro.  No somos un Magazin o Magazine, porque este término ni siquiera existe en el Diccionario que venimos consultando. En otros, quiere desir Almacén de comercio.

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El folleto es un papel impreso que SIN SER PERIODICO, .circula, etc.-O un libro de pocas hojas en que se atacan doc trinas políticas o religiosas.-O un periódico al que, por des precio, se quiere ridiculizar. O una ga cetilla manuscrita. , . De manera que tampoco somos folleto.  Na da somos,  pu es ; per o el lo no no s im pe di rá pro cur ar qu e en es ta s  pá gin as , au nq ue no va yan es cr it as a la manera de Lope, los agricultores  pu ed an es pig ar alg uno s gé rm en es de conocimientos útiles. E. de la P.

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a de riego del Valle del

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EI obsequio que hacemos a usted, de esta publicación, tiene por objeto despertar su iniciativa, a fin de que, ensanchando sus propios intereses, contribuya usted al engrandeci miento de la riqueza pública.

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riremos

una Sección de Consultas

ESEANDO ayudar de la mejor manera posible, a los campesinos y co lonos que necesiten consejos de carácter técnico, ’teórico y  prá ct ico ,  pa ra fo me nt ar su s gr an ja s, de sd e el  pró xim o n úm er o es ta bl ec er em os en esta publicación, una Sección destina da a resolver las consultas que sobre cual quier aspecto de sus negocios se sirvan hacernos los interesados. Cómo hacer un embalse en determinadas condiciones ; cómo purgar las tierras, de substancias dañosas, por desecación ; cómo analizar las tierras y elegir el cultivo que les sea más adecuado; qué perspectivas ofrece tal o cual zona para este o aquel esquilmo; qué capital será preciso invertir  pa ra em pr en de r un a exp lot aci ón d e si em br a, de ga na de rí a, e tc . ; dónde obtener los créditos necesarios ; qué leyes protegen al labrador y qué tramitaeiones deben seguirse para obtener agua, simientes aperos, etc. H e ahí unos ejemplos de los mil que se ocurren, entre los variadísi m o s  pro ble ma s con qu e tie ne n qu e en fr en ta rs e lo s h om br es de ca mp o, y so  br e los qu e los  pe ri to s de la Co mi si ón Na ci ona l d e Irri gac ión po dr ía n pr e sentar las soluciones más satisfactorias. t

L a Ingeniería ha sido definida como “el arte de que un peso gane un rédito con el ma yar interés posible”. Otras autoridades la define n diciendo que es “el arte de hacer bien con un peso lo que un ignorante puede hacer con dos, según el uso común”.-TENGANSE PRESENTES ESTAS MAXIMAS AL EMPRENDER CUALQUIER OBRA DE RIEGO.

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UN  poco má s d e ci nc uen ta ki ló me tr os al No ro es te de la ci ud ad de Mé xic o, - se encuentra situado el Valle del Mezquita1 que comprende, dentro de su superficie,  pob laci ones ta n im po rt an te s com o Act ópan , Mix qui ahu ala , Ixm iqu ilp an y Tu la y un gran número de pequeños pueblos y rancherías. Toda la población se dedica por completo a la agricultura, estando el valle bastan te bien poblado para permitir un desarrollo ntensivo en esta rama de la riqueza pública, Las vías de comunicación del valle son numerosas y muy bien servidas: hacia el occidente está Ia vía troncal de México a Ciudad Juárez, que tiene su  pri nci pal es ta ción en Tula a la orilla del valle. El Ferrocarril del Desagüe del Valle de México atraviesa por el centro de la región, de norte a sur, llegando hasta la población de Mixquiahuala en donde pueden concentrarse con facilidad todos los productos agríco las para ser transportados direc tamente a la ciudad de México. E a línea troncal de México a Laredo atraviesa también de norte a sur la región, teniendo dentro del valle su estación de Teocalco que puede servir perfectamente para recolectar todos los productos de la tierra de la región occidental del valle. hacia el Es te corre de norte a sur el ramal de Pachuca a Ixmiquilpan, del Ferrocarril Mexicano, tocando l as impor  tantes poblaciones de Actópan e Ixmiquilpan; en el sentido de oriente a poniente está atravesado por el ramal de Tula a Pachuca, de los Ferrocarriles Nacionales de México, que sirve a la región sur del valle. Todos estos ferrocarriles tienen servicios diarios de trenes de pasajeros y carga, l o que hace que las comunicaciones con todo el país sean rápidas y efectivas. Esta situación tan ventajosa ha hecho que desde mucho tiempo atrás se desarrolle la agricultura con notable intensidad en la región. Anteriormente la parte oeste del valle estaba dividida en tres o cuatro haciendas de importancia, entre las cuales se encontraban Ulapa, Tlahuelilpa y Tlaxcoapan que  pos eía n cas i tod o el ter re no , per o d e 1915 a la fecha todas las rancherías y pueblos de la comarca han sido dotados ¿e ejidos y éstos a su vez se han repartido en pequeñas  par cel as en tr e los agr icu lto res de la región, lo que ha contribuído a una mejor utiliza ción de los recursos agrícolas. Todo este valle dorrna parte de la cuenca del río de Tula, estando surcado por varios ríos y arroyos de importancia, tributarios del río ya mencionado: además, las

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aguas negras de la ciudad de México qué se arrojan fuera del valle por medio del T Ú nel de Tequixquiac, descargan sobre el río Salado, aumentando el volumen de éste. Es ta abundancia de recursos hidráulicos ha contribuido también a desarrollar la agricultura. Desde la época en que se terminaron las obras de desagüe del valle, la Compañía de Luz y Fuerza de Pachuca obtuvo una concesión del Gobierno Federal para el aprovechamiento, tanto en riego como en fuerza motriz, de las aguas provenientes de dicho desagüe y construyó una red de canales que regaban principalmente los terrenos de Mixquiahuala y de Se pa y parte, aunque muy corta, de los de Actópan; además, aprovechó tres desniveles del terreno estableciendo sus  pl an ta s de Ju an dó , Ca ña da y El b a; esta última arrojaba sus desagües directamente al río de Tula a un nivel inferior a las zonas de riego. La superficie de terrenos que servía aproximadamente dicho sistema, era de diez mil hectáreas, pero en atención a que d urante el tiempo en que se tenía en operación la  pl an ta de El ba , un a gr an pa rt e del ag ua no pod ía se r ut ili za da e n irr ig ac ión , la zo na quedaba aún más reducida. Al hacerse la repartición de los ejidos, los nuevos propietarios que carecían de los recursos pecuniarios necesarios, se vieron obligados a exigir que toda el agua se dedica-

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Presa Requena.-Vista de conjunto hacia agu as arriba. Se ve el vertedor de deniasías, el enrocamiento y el Canal Schmeltz.

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ra a riego a fin de poder sembrar anualmente sus terrenos, única base que tenían para su subsistencia, y por lo mismo exigieron que dejara de usarse la  pla nta de Elba . Por otra parte, la Compañía de Luz, Fuerza y Ferrocarriles de Pachuca, construyó

las obras necesarias para aprovechar las aguas del río Tepeji. Consisten estas obras en dos presaü de almacenamiento situadas a niveles escalonados, siendo la superior la de Taxhimay en el Río de San Luis de las Peras, can capacidad de diez millones de me tros cúbicos, y la inferior la de Requena en el de Tepeji, que originalmente tenia trein ta y cinco millones de metros cúbicos de capacidad; de ésta última parte el canal conocido con el nombre de Requena, que se prolonga has ta un poco más al este de !a Hacienda del Mexe, y del que más adelante nos ocuparemos con detalle. Las dificultades surgidas entre los usuarios y la Compañía citada, en lo relativo al pago del agua que utilizaban en los riegos, orillaron a ésta a proponer al Gobierno Federal en venta su sistema completo de riego, habiéndose concertado l a operación a  princi pios del año de 1926 en la suma de setecientos cincuenta mil pesos. Las obras que adquirió el Gobierno por esta operación han estado desde enton c e s administradas directamente por la Comisión Nacional de Irrigación, habiéndose

obtenido una buena distribución del agua y terminado igualmente los conflictos con los usuarios, tanto por lo que respecta a la repartición de los riegos, como al pago de ellos. Respecto de la Pri mera Unidad de Riego es decir, el aprovechamiento de las aguas del río Salado,  pasó tam bié n a de pe nd er de la Comisión Nacional de Irrigación por un contrato de arrendamiento celebrado con la Compañía en condiciones excepcionalmente ventajosas para el Gobierno. Como todas las fuentes de abastecimiento provienen de la región suroeste del va -

Presa Requena.-Canal

Nuevo.

ll e es natural que esta parte sea la que quede mejor atendida y la que reciba mayor cantidad de agua para sus riegos, lo que ha motivado siempre protestas por parte de l o s interesados de la región oriental que creen que esa preferencia es injustificada. Como por otra parte los recursos hidráulicos de la región están muy lejos de haber sido completamente utilizados, la Comisión tiene en estudio la ampliación de su sistema para poder servir por completo los intereses de todo el valle con la debida eficacia, habiéndose ya emprendido el levantamiento topográfico detallado de toda la zona y estando actualmente en estudio la ampliación de los canales y la construcción de nuevos vasos que almacenen el agua torrencial.

DESCRIPCION DE LAS OBRA§ EXISTENTES. La presa de Taxhimay, situada como ya se dijo, sobre el río de San Luis de las Peras, tiene una capacidad de alma cenamiento de diez millones de metros cúbicos. El vaso está cerrado por una cortina de enrocamiento con un delantal impermeable de mampostería en el paramento mojado: se localizó la cortina a la entrada del cañón del Calabozo en terrenos de la Hacienda de Taxhimay, del Estado de México. El enrocamiento tiene un talud de uno por uno del lado seco, y de uno y medio por uno en el lado mojado; la altura aproximada de la cortina es de veintiocho metros contados desde la roca firme en la cimentación hasta la corona de la cortina; su longitud es de ciento veinte metros contando el ver-

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Pr esa Requena.-Vertedor de Ciernasías. Vista hacia aguas arriba durante su construcción.

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El Tajo.

-Salida del túnel de Tequixquiac.

tedor de demasías que está situado en el extremo sur y que tiene una longitud d e veinticinco metros. El fondo del vaso está formado por una capa de grava y arena, de tres metros de espesor, asentado sobre roca firme, lo que da una impermeabilidad completa al vaso. El forro de mampostería del lado mojado tiene un espesor de un metro en el pié del talud, y veinticinco centímetros en la corona. La anchura de la corona es de cuatro metros.

El objeto de esta presa es almacenar las avenidas del río de San Luis de las Peras, hacer que depositen en el vaso el material de acarreo y después pasar el agua, utilizando como canal de conducción el cauce del mismo río, a la presa Requena , cuando ésta tiene ya un nivel ínferior que le permite recibir aquel contingente. Como los terrenos del fondo del vaso son excelentes para la agricultura, se dejó a las haciendas que antiguamente los poseían, el derecho de aprovecharlos para las siembras de invierno, así es que se procura tener la presa vacía el día 15 de diciembre

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l de cada año y se vuelven a cerrar las compuertas para volver a almacenar el agua, el día primero de junio del siguiente año. PRESA REQUENA.-Está s i t u a d a e n el cauce del río de Tepeji, aproximadamente a tres kilómetros aguas arriba de su confluencia con el de Tula a la salida de la cañada d e Caltengo en el Estado de Hida lgo, La cortina está formada por un corazón impermeable d e mampostería, de forma celular, reforzado con barras de hierro corrugado colocadas en el centro de los muros y formando cuadros de cuarenta centímetros  por lad o. Agu as ab ajo d e es te mu ro , ha y u n en roc am ien to con ta lu d d e un o por uno y aguas arriba un terraplén con talud de dos y medio por uno. Ea capacidad que tenia la presa cuando fué adquirida por la Comisión, era de treinta y cinco millones de metros cú bicos, pero con posterioridad se levantaron tanto el um  br al de l ve rte do r de de ma sí as co mo la co ro na de la pre sa , ha st a ob te ne r un a cap aci dad de setenta millones de metros cúbicos, que actualmente tiene. A la salida de la presa las aguas caen directa mente al río para se r derivadas más abajo por el canal Requena. Ha y igualmente obligación de dar al canal Schm eltz un volumen de mil quinientos litros por segundo directamente a la salida de la presa, que vuelven también a caer al río para ser aprovechados en el canal Requena. CANAL DE DERIVACION DE TLAUTLA.-E1 río de Tlautla, que tiene su con fluencia con el río de Tula, aguas abajo del punto donde se le une a éste último el río

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 pr es a de Tla maco en el río Salado.

Presa de Tlaniaco en el río Salado.

-Derivación del agua para el Sistema de Juandó.

de Tepeji, tiene fuertes avenidas e n las épocas de lluvia; para aprovecharlas se pro yectó y empezó a construir un canal de derivación que pasando mediante un túnel por debajo de la Fábrica de Cementos "Cruz Azul" fuera a arrojar sus aguas al río de Tula en un punto situado frente a la  bo ca - toma del canal Requena. E sta derivación no está concluída y  por lo ta nt o no pu ed e ap ro ve ch ar se nin gún vol um en pr oc ed en te de l río de Tlautla en el Sistema de Riego Requena. ante s se dijo, este canal parte de la marge n derecha CANAL REQUENA.-Como del río de Tula en las cercanías de Estación Jaso del Ferrocarril Central; su capacidad era de cuatro metros cúbicos por segundo, pero dado el mal estado en que se encuentra, no alcanza actualmen te más de tre s y medio., Los terrenos que puede dominar dicho canal son todos los del poniente del Valle del Mezquital, que se describió al  pri nci pio de es te art ícu lo, per o ad em ás , en co mb ina ci ón con lo s de l Si st em a de Riego del Río Salado de que después se hablará, pueden llevarse las aguas a cualquier punto del valle. Todas las o bras anteriores constituían lo que se designaba como Sistema de Riego de Requena, y son las que, como antes se dijo, adquirió el Gobierno Federal por compra a la compañía concesionaria. Es te sistema casi nunca ha funcionado aisladamente, sino que lo ha hecho en com bin aci ón con el d e las ag ua s del Río Salado, que consisten esencialmente en las obras siguientes: presa de derivación d e Tlamaco veinte kilómetros abajo de la salida del túnel de Tequixquiac; un canal de conducción entre Tlamaco y Juandó, del cual se de-

- Derivación del ag ua pa ra el Sistema de Juandó.

19

18 t

rivan aguas para el riego de terrenos de los pueblos de Tlahuelilpa, Tlaxcoapan y Atitalaquia y d e los barrios cercanos a ellos. La  plan ta d e desa rr ollo d e energía de Juandó, de la cual sale un canal que conduce toda el agua a la planta de Cañada en donde vuelve a utilizarse para desarrollo de energía. A la salida de esta última plant a se subdivide en un sistema de canales que riegan los terrenos de Mixquiahuala, Tepa y Actópan, aproximadamente en superficies iguales en cada uno de estos pueblos.

El siste ma reseñado a grandes rasgos adolecía d e graves defectos qu e s e notaron al ponerlo en explotación: los principales eran los siguientes: la capacidad de la Presa Requena era muy reducida y hubo necesidad de ampliarla hasta su capacidad actual: se hizo esta obra arrojando tierra desde chalanes para que por s í misma se acomodara según su talud natural; del lado de aguas abajo se levantó el enrocamien to siguiendo la misma forma en que se encontraba el original, mas como no se  pudo arreglar el talud interior a mano, quedó éste en forma irregular y habrá necesidad de componerlo debidamente tan pronto como las necesidades del servicio permitan vaciar la presa. La torre de toma se levantó ha sta la altura necesaria para el nuevo almacenamiento, pero como e s indispensable una extracción mayor de líquido, se rá necesario modificar por completo el sistema de válvulas. La galería de salida formaba un doble conducto que permitía dar agua al canal de Shmeltz a un nivel superior y al río por la parte baja para se r derivada por e l cana l Req uena , pero debido a imperfeccio nes en la construcción s e destruyó la losa interme -

Planta hidroeléctrica de JuandÓ.-Conjunto.

20

dia y será necesario reconstruir la galería bajo un nuevo proyecto que permita satisfacer esas necesidades sin exponerse a nuevos riesgos. El vertedor de demasías no s e terminó completamente,  por lo que h a y necesidad d e completar la obra y darle las s egur idad es necesarias. El canal Requena se encuentra en muy malas condiciones en sus  primeros ki lóm e t r o s pues fué localizado en una l adera de  pendiente muy pronuncia da lo que h a determ inad o derr umb es y azolvamientos que la Comisión trata d e evitar con la excavación de un canal nuevo con otro trazo más apropiado.

El sistema de venta de agua es muy defectuoso, porque se carece de aparatos de med ida que pe rmitan hacerla por volumen y s e hace por hectárea-riego, lo que contribuye a un notable desperdicio del líquido: también se está tratando de eliminar ese grave defecto acondicionando debidamente las boca-tomas de los canales secundarios  para que puedan medirse lo s volúmenes que por el los s e de rive n. Se v a a continuar también la excavación del túne l del río de Tla utl a para contar con sus aguas en el Sis tema d e riego. Además de las obras anteriores que son indispensables para un buen funcionamiento, disponiendo la Comisión Nacional de Irrigación de todas las aguas de los ríos de Tepeji, Tula, Tlautla y Salado, aumentadas con el contingente de aguas negras del Valle de México, s e ha visto Ia nec esida d de hacer proyectos para la utilización com pleta de dichas aguas, ampliando considerablemente la zona de riego. De los proyectos que piensa desarrollar la Comisión e n este Si stem a de Riego, nos ocuparemos en un nú mero próximo.

21

Los Aprovec amientos roeléctricos en los Proyectos rrigación

c

LO QUE SIGNIFICAN EN EL FINANCIAMIENTO DE LAS OBRAS  P or  Jo sé

 HER RER A Y  LASSO,

 Ing eni er o

Civil 

características oro -hidrográficas predominantes en el país imponen, casi invaria bl em en te , la ne ce si da d d e co ns tru ir ob ra s d e alm ac en am ien to en la s pa rt es al ta s de las cuenc as y largos canales de conducción para dar servicio de riego a los valles de las altiplanicies. De ahí que resu lten muy dispendiosas las obras de irrigación de esta naturaleza, e inaccesibles para las posibilidades y Conveniencias del capital  pri vad o. El Estado, por conducto de la Comisión, aborda entonces lo que la iniciativa par ticular no puede o no quiere emprender, con cargo a un fondo específico, “Fondo de Irrigación”, constituido hast a ahora e xclusivamente con las asignaciones del Tesoro Ffiblico señaladas en el Presupuesto de Egresos. Es de advertirse que el Gobierno ha iniciado esa política a sabiendas de que no iba a emp render un negocio remunerativo, sino a Eacer sacrificios pecuniarios en ob sequio de conveniencias nacionales de alta trascendencia. La Ley de Irrigación determina que l a s sumas gastadas en la ejecución de las obras realizadas por cuenta del Gobierno Federal, le sean reembolsadas por los  pro pietarios o adquirentes de tierras beneficiadas por dichas obras, sea en efectivo o en te rrenos comprendidos dentro de la zona de riego. Pero la compensación así prevista y la consiguiente reconstrucción del “Fondo de Irrigación”, resulta a la postre casi im pra cti ca ble . La experiencia ya nos permite aprecia r que la mayor parte de los Proyectos cons truidos o en vías de terminarse resultan tan costosos, por la naturaleza misma de las obras realizadas, que la inversión no puede razonablemente hacerse gravitar en su totalidad sobre el área regada. Es decir, que el costo unitario que se obtiene derramando racionalmente el total sobre la extensión beneficiada, resulta excesivo, como q u e sobrepasa considerablemente al valor comercial de la hectárea de terrenos de riego. Valor que fija el precio extremo a q ue puede el Gobierno enajenar las tierras que reciba en compensación y conforme al cual también debe justipreciar las que los pro  pie tar io s re te ng an en los té rm in os d e l a Ley. Se impone, entonces, el condonar una buena parte d e la inversión h echa, considerándola como erogada a fondo perdido desde el punto de vista de su reembolso directo. La cantidad condonada será la que fuere necesaria para que la derram a del so  br an te no ha ga su bi r el pre cio de la ti er ra  m á s allá de su valor Comercial.

22

Y

Tepuxtepec.-Vista

de la presa hacia aguas arriba.

Así se ha procedido en el Proyecto “ Preside nte Calles”; se procederá en el del Río Salado: y con algunas atenuaciones  por ha be r re su lt ad o las ob ra s re la tiv am en te económicas en el del Río M a n t e . La enajenación y colonización de las áreas que pasan a poder de la Comisión y el pago de la parte proporcional del costo de las obras que corresponde hacer a los  pe qu eñ os pro pi eta rio s qu e ha n re te ni do sus  pr ed ios , de ma nd a un largo plazo, no inferior a 30 años. Lo que significa que el reembolso de la suma que se considera recobra ble muy inferior a la cantidad efectivamente invertida, como antes se hizo notarse verifica lentamente, e igual sucede en la reconstitución del Fondo. Además, es razonable suponer que por mucho tiempo buena parte del monto d e los reembolsos anuales tendrá que irse invirtiendo en beneficio de los mismos Sistemas de Riego de donde se colectan, pues no es de esperarse que los ingresos que produzca la venta del agua, en el proceso del desarrollo de la explotación, sean suficientes para atender a las erogaciones considerables que exigen el perfeccionamiento y ensanche de las obras materiales del Sistema y sobre todo, los ensayos e implantación definitiva de la colonización.  No es, por lo tanto, aventurado prever que en estas condiciones por largo tiem po la pol ític a de irrigación tendría que continuar recibiendo como su  pri nc ipa l so st én financiero las asignaciones anuales del Erario.

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-

-

Conviene pues, en beneficio de esa política, aligerar la partida presupuesta1 res pec tiv a, bu sca nd o fu en te s de in gr es os in me di at os qu e no gra vit en so br e el Er ar io ni sacrifiquen a los elementos colonizadores cuyo éxito es la finalidad principal d e la  pol ític a d e irriga ción . El capital privado puede aportar esa ayuda: pues si rehuye  pr es ta rl a en la may or pa rte de los negocios de irrigación, siempre considera atracti-

-

-

/

23

t

guna de las otras obras hidráulicas principales, o  bie n proporci onen los fond os nece sarios para que e) Gobierno las ejecute.

vas las inversiones para desarrollos hidroeléctricos. Afortunadamente no escasean oportunidades de estos desarrollos, vinculados a varios de nuest ros proyectos de riego por razón de las condiciones del medio geográfico y de los aprovechamientos mismos. La erección de los grandes vasos de almacenamiento constituidos por los altos diques que la técnica moderna permite ya construir  y los largos canales, que como antes dijimos son las características de nuestras grandes obras de riego, constituyen .. ocasiones propicias para generar fuerza hidroeléctrica con costos de establecimiento y operación notoriamente inferiores a los que resultan a las obras ejecutadas con el único objeto de producir energía; puesto que unos y otros se distribuyen, en proporción adecuada, entre la doble explotación. Argumento éste de gran peso para el capital interesado en negocios hidroeléctricos y  par a el públic o cli ente de la fut ura em pre sa, des eos o de obt ene r fue rza bar at a. Como que en efecto puede serlo, si se organiza la explotación considerando la fuerza como un sub-producto del negocio de rie-

-

ti

-

Esto es lo que se ha hecho para la Pres a d e Tepuxtepec, parcialmente construida, que es la primera unidad reguladora del Río Lerma. Idea semejante existe, aun no bien definida, para la erección del vaso de Corrales en la misma corriente, en las cercanías de La Piedad. Cada uno de estos aprovechamientos tiene potencialidad efectiva no inferior a 40,000 H.P. En el Proyecto del Río §alado  próximo a termi narse  podrán gen era rse has ta que se irán graduaimente reduciendo hasta la mitad cuando queden abiertae totalmente a la explotación, las 65,000 hectáreas regables del Proyecto. Se han hecho algunos prospectos económicos de este desarrollo. Alguna de la s sol uciones pro pue st as incl uye el propósito de que la Comi sión const ruya las pla nta s gene rado ras , y una sociedad mercantil int egrada por los principales industriales consumidores de energía de Monterrey mercado el más indicado para el caso instale a sus expensas las líneas de transmisión y las estaciones transformadoras.

-

15,000 H.P.

gos.

-

-

Confirmada la posibilidad técnica del aprovechamiento hidroeléctrico y calificad a s su importancia y viabilidad económicas a la que más adelante nos referiremostoca resolver si la Comisión realiza por su cuenta total o  parc ial ment e la s obr as e ins talaciones del caso o si acepta e! concurso de! capital privado para que realice en con ju nt o o en parte el desarrollo hidroeléctrico proyectado.

 No es aventurado asegurar que en cuatro o cinco de los Proyectos estudiados o en vías de serlo, podrán obtenerse alrededor de 150,000 H.P. efectivos, o sea el 40% de la capacidad total hidroeléctrica instal ada en el país a la fecha. Pa ra realizar esos desarrollos, suponiéndolos momentáneamente desvinculados de los propósitos de riego, se requeriría una inversión de 100 millones de pesos, sobre la base de que el costo medio de establecimiento de las centrales de ese carácter puede estimarse en $700.00 H. P., incluyendo líneas de transmisión. Pero esa inversión se reduciría tal vez a la mitad, o sean 50 millones, si, como es en realidad, parte del costo de los sistema s eléctricos deberá reportarlos el negocio de riegos.

-

Si lo , lo

-

se acepta esto último supuesto, que es el que consideramos en este artícu  proc ede nte es otor gar conc esi ón a emp res as priv adas par a que en camb io de l derecho temporal de explotar la fuerza generada, construyan el almacenamiento o al-

-

-

Los datos globales expuestos, revelan el importante contingente pecuniario que podrá obtener el Gobierno concesionando los futuros aprovechamientos hidroelkctricos, siempre y cuando las espectativas económicas para la venta de la energía por generarse sean, a juicio de los capitalistas interesados, suficientemente s erias, y resulten satisfactorias las posibilidades técnicas y fundadas las esperanzas de obtener un costc  bajo de esta blec imie nto.

c

En otros términos, habrá que presentar a los interesados no solamente el proyecto de obras debidamente estudiado desde el punto de vista de la ingeniería, sino tam bién la perspe ctiva , ta n complet a como se a dab le, de las condic iones gene ral es económicas de la zona de acción del negocio hidroeléctrico por establecerse y de las modificaciones que experimentarán al entrar en actividad la nueva empresa ministradora y al irse desarrollando. Las investigaciones sobre la capacidad del probable mercado de energía, abarcarán los siguientes puntos generales :

?' >-

a) La demanda actual de fuerza motriz;  b) La proporción de ésta ya cubierta por las plantas existentes; c)

Tepuxtepec.-Planta

hidroeléct rica en construcción.

24

El

inmediato probable crecimiento de la demanda actual, derivado de las facilidades y condiciones ventajosas que ofrezca el sistema ministrador en  proyect o :

25

El aumento probable de la demanda en un futuro menos cercano, que sobrevenga como consecuencia de la colonización de las tierras irrigables del Proyecto: del crecimiento de otros centros de población: de la apertura de fundos mineros, establecimiento de industrias nuevas, etc. Al  pr act ica r di ch as inv est iga cio nes , qu e en re su me n ti en de n a de te rm in ar la ca pa ci da d de l me rc ad o y por co nsi gu ien te el valor comercial del desarrollo en proyecto, se tendr á presente que por razón de la proximidad y sob re todo por las modalidades misma s que han de gobernar la producción y consumo de la energía, debe satisfacer ante todo las exigencias de fuerza dentro de la zona de acción del sistema de riego;  bi en se a con mot ivo d e la ope rac ión o ampliación del mismo sistema o  pa ra at en de r las necesidades domésticas e industriales de la zona colonizable. En efecto, en proyectos combinados de irrigación y fuerza motriz, la utilización primordial que a esta última se puede dar es la de elevar el agua tomándola de los ríos canales o  pozos  para be nef ici o de te rr en os alto s no do min ado s por el si st em a d e gra vedad. “La introducción del bombeo hidroeléctrico dice Leighton imparte elasticidad e n la operación de los sistema; de riego por gravedad y permite así distribuir el agua de acuerdo con el conjunto de los intereses preferentes de la c o m u n i d a d . . . Va resultando que es uno de los mejores agentes de coordinación de los dos servi cios”. La energía usada para bombeo duran te la estación de riegos puede en tonces emplearse en el resto del año en actividades manufactureras y servicios públicos ge nerales. En otra ocasión insistiremos sob re estos aspectos de la cuestión, que incluyen también el de la utilización de la energía en los trabajos de la granja, con todas las evidentes ventajas que esto reporta. Después d e estudiar la cuantía de la probable demanda de fuerza que representarán las actividades por crearse dentro del  pro yec to de rie go , ha br á qu e ex te nd er se si hay energía disponible a buscar nuevos centros de consumo tan próximos como sea posible de las plantas generadoras, prefiriendo, aún con sacrificios de la economía de la distancia, oportunidades serias de demanda como negocios mineros o fabriles ya establecidos. Las investigaciones económicas anotadas se extenderán también a las probables exigencias financieras del establecimiento inicial de la explotación, de SUS ensancha mientos progresivos y de la operación del negocio en sus etapas sucesivas. En este orden de apreciaciones es d e capital importancia de linear las modalidades que conduzcan a la coordinación de los servicios de riego y de generación de energía. Realizados estos estudios veremos si en nuestro caso se confirma la opinión bas tante generalizada en los E. U. A. de que “la combinación de proyectos de irrigación y fuerza motriz resulta frecuentemente ventajosa cuando se estima incierto el éxito comercial de cada proyecto aislado”. d)

-

-

-

-

El Problema de un Canal Irregular i,

SOLUCIQN DE UN CASO CONCRETO Por el Ingeniero Edmundo de

.

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-

-

México,

u

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c

D. F.,abril de 1930. V‘

En nuestro próximo número comenzaremos a publicar una serie de artículos, originales de nuestro Director, relativos a los elementos de riqueza agrícola e industrial de cada uno de los Estados de la República.

26

, -

UCEDE con frecuencia en nuestro país, que

los agricultores, sintiendo la nece sidad de conducir el agua a los campos de cultivo, llevan a cabo obras hidráulicas conforme a su  bu en cr it er io d e ho mb re s prá cti cos , pe ro no si em pr e de acuerdo con las inspiraciones de la ciencia. Así, no es raro encontrar presas con un exceso inaudito de resistencia o una falta absoluta de solidez y canales con taludes, con secciones, con trazos enteramente inadecuados a su objeto. La falta de una dirección técnica se hace sentir en gran número de obras de las haciendas de la República, y ésto resulta más lamentable, mientras mayor sea el provecho que habría podido alcanzarse bajo un plan mejor meditado. En otros casos, las condiciones topográficas son tales, que está justificado, por ejemplo, el obtener una caída menor de la posible, o dar al canal un trazado no rigurosamente geométrico. Muchas veces, la ventaja de una pendiente suave y uniforme no compensaría los crecidos gastos de la construcción, ni hay motivo para llevar la acequia más arriba de lo que reclaman las necesidad es que deben satisfacerse . Cada caso presenta un problema diferente, que hay que estudiar en todos sus detalles, antes de acometer una empresa, hacer una crítica o rendir un informe. Cualquiera que sea la causa de la irregularidad en los trabajos de Hidráulica en nuestros campos, lo cierto es que, el ingeniero, tiene que examinar los hechos consumados, y deducir los datos pertinentes al fin que se haya propuesto. En nu estra práctica, hemo s tenido oportunidad de estudiar el canal de Chara pen do, (Es ta do d e Mi ch oa cá n) , pra cti ca do en un a la de ra d e pó rfi do y  ba sa lto , a la margen izquierda del río Cupatitzio, en una extensión de dos kilómetros y medio. En la bocatoma no fue necesaria la construcción de un dique o una presa, pues la roca dura de la ribera defiende bien la entrada del canal, cuya plantilla queda 1 metro 50 centímetros abajo del nivel del río. El régimen del agua al penetrar en e l canal, se hace por m edio de un a com pu er ta de hi er ro , que mi de 3 metros de anchura, por 1 metro 25 centímetros de luz de entrada de agua, y sube 2 metros 50 centímetros arriba del nivel normal del río, con el objeto de que no entren las crecientes en el canal. Este, construido “en balcón”, con un muro de sostenimiento, de mampostería, ligeramente inclinado en su  paramento exterior, afecta diferentes anchuras en su trayecto, conservando una sección rectangular, y su  pe nd ien te es ta mb ié n var iab le. In du je ro n a es ta bl ec er con ele men tos cambiantes este conducto, las circunstancias especiales del terreno, pues habría sido extremadamente costoso manten er un a inclinación regular y, como decíamos arri ba, la ve nt aj a d e un a ca ída má s al ta, ni er a ne ce sa ri a, ni hab ría co mp en sa do los exorbitantes gastos de una línea suave y uniforme.

S

i

 PO RT IL LA

la

21

Para calcular la integral definida 1, construyamos la curva integral P1 P2 P3  por medi o de abs is as propo rcio nale s a los di fer ent es tr am os del cana l, y

El caso del movimiento variado que presenta este canal a causa de la diver sidad de sus pendientes y secciones, caso que, repetimos, se encuentra a cada momento en la República, hace bastante laborioso el cálculo respectivo. Indicaremos cómo hemos resuelto el problema, con la esperanza de que sea aprovechado este procedimiento por otros ingenieros que se vean en análogas circunstancias. Para fijar las ideas, hagamos uso 030, 031,

COZ,

033,

OJ53 036

(04,

xjl XG

y

O7

 Xz S ~3~

X4,

y

ordenadas iguales a 2 , cantidade s conocidas, pues en cada perfil se conocen el 03

area mojada

03

y el perímetro mojado X.

de las siguientes anotaciones:

= areas de las secciones transversales;

n

,r 

=  per íme tro s moj ados cor res pond ien tes ; lo, 11, 12, 13, 14, 15, 16 y 17 = langitudes de los diferentes tramos: y UO,Ui, Uz, Us, Uq, U5, U6 y U7 = velocidades medias de las secciones.

 xo , x i 9

P4 P6 P6 Pí

~7

Y

Las fórmulas del movimiento no uniforme en los canales, son de la forma que sigue :

y la que se deduce

f 210T (Este coeficiente vale de 1 a 1. 1).

Una nivelación en los extremos del canal, da z = 25. Por otra parte, tomando  para la int ens ida d de la pes ant ez a la la ti tud del luga r, el valor g = 9.78, determina do en México (la diferencia siendo insignificante), y adoptando para la conitante C el promedio de los valores correspondientes al caso de paredes rugosas, tomados de las tablas de Daries (que difieren ligeramente a los indicados en la Hidráulica de Merri-

Las demás notaciones son  bien conoc idas .

man), considerando que el radio medio es-

Formaremos una tabla con los valores de nuestro caso:

dio de la regla logarítmica, que hemos comprobado PO? el cálculo aritmético, al resultado final:

en las que

1 = 2-

total desarrollo);

1

de la anterior, a saber:

Tramos

03

z

ds (ds

representa l a longitud de los elementos que componen

= desnivel de la superficie libr e en los  punto s extr emos , y  M =

LO

1

1

X ~~

m.'

m.z

1

2.30

2

2.50 1.73

4.30 4.50

3 4 5

7

3.80

340 210

2.50 2.30

4.30

1.00

-

100

--

0.53

 ___-

E00 529 51 ~

1.54 ,,

1

3.00 ,, 9.00 ,, 0.20 1,

0.05 ,,

~

1

!

0.45 0.36

0.33 0.56 0.54

-___

24 25 23 22

21 25

24

El último tramo está constituido por un túnel, pero est e trabaja como canal abierto,  por lo que lo incluimos entre las demás partes del canal. 28

y tomando a

=

1, llegaremos por me-

De la mi sma manera podría calcularse el desnivel z entre dos secciones deter minadas, conociendo el gasto Q y un número cualquiera de  perf ile s tra nsv ers ale s.

0.70 %

~

X

Q = 2,510 litros.

Pendiente

1310

3.40 3.00 4.50

1.27

6

el

29

Algunos datos sobre aguas subterraneas y su aprovechamiento ~

t .l

 Po r el G e ó l o g o  de la Comisión,  PA UL W A I T Z . l

AS acumulaciones de agua's subterráneas pueden clasificarse en los tres grupos si guientes : l"-AGUAS FREATICAS o sean aquellas que circulan en terrenos de acarreo en mantos y corrientes a corta profundidad y que, por carecer de una capa impermeable superior, tienen una superficie libre y no están por lo tanto bajo presión hidrostática. 2o-AGUAS ARTESIANAS que se encuentran y circulan en mantos, capas y bolsas que están encerradas entre dos capas irnpermeabilizantes y están bajo presión hidros tática de tal manera - que, al llegar una perforación al estrato acuífero, el agua sube en ella a un nivel mayor del en que se encuentra en el estrato (aguas artesianas ascendentes) y puede has ta derram arse en la superficie del terreno (aguas artesianas brotantes).

3-En sierras calcáreas las aguas de las precipitaciones atmosféricas y en algu nos casos corrientes del sistema fluvial superficial se infiltran a través de diaclasas y grietas y forman en el interior de la sierra RIOS SUBTERRANEOS que corren en el fondo de cuevas y abras hasta que llegan a salir a la superficie donde Se incorporan de nuevo al sistema fluvial (fenómenos cársticos).

l

,

, l

giones, donde la horizontalidad de la superficie no ha permitido la construcción de canales, existen innumerables pozos de lo s cuales algunas veces se extrae el agua por me dio de bombas, pero en la mayoría por medio de guimbaletas cuyos balancines le dán al país un aspecto típico. En los últimos años el aprovechamiento d e aguas freáticas (en combinación con artesianas ascendentes pero no brotantes) ha tomado incremento, sobre todo en la región  Lag uner a de Torreón, donde actualmente se extraen del subsuelo, por medio de  bo mb as de gr an de di ám et ro , en or me s ca nt id ad es de agua que provienen de la infiltra ción de las aguas del Río Nazas en lo s depósitos de acarreo que forman el suelo de aquella región hasta profundidades muy grandes. A causa del origen de esas aguas freáticas en los alrededores de Torreón, es decir, en la zona donde el Río Nazas, al fi nal de su curso por la zona montañosa perteneciente a la Sierra Madre Oriental, desembota a la región abierta de la laguna, el manto acuífero es relativamente poco profundo pero buza rápidamente en dirección hacia el centro de la planicie, donde el agua ya no puede ser aprovechada por esta circunstancia. Uno de los proyectos que, respecto al aprovechamiento de aguas freáticas, actual mente está estudiando la Comisión Nacional de Irrigación, se refiere a las del Valle  d e  Ju ár ez a lo largo del Río Grande del Norte entre Ciudad Juárez y las últimas vegas del río' enfrente de Fort Quitman. Ea cantidad de aguas de la Presa del Elefante que rresponde, según el tratado respectivo, a México ni aproximadamente alcanza para e ego de aquellas extensas vegas y  por lo tanto será necesario recurrir al aprovechamiento de las aguas freáticas que existen ahí a una profundidad tan corta que en muchos lugares han causado el "ensalitramiento" o el "trasporo", es decir, la impregnación de las tierras con sales alcalinas.

Cierta semejanza con estos ríos subterráneos tienen en nuestras regiones volcáni cas las corri entes de agua que, alimentadas por las precipitaciones que caen sobre extensas acumulaciones lávicas (Malpaís, Pedregal), donde su infiltración es completa, vienen a nacer en los extremos inferiores de estas en forma de manantiales caudalosos.  A P R O V E C H A M IE N T O

De  A G U A S

FR EA TI CA S P A R A E L RIEGO.

En un país con extensas zonas semiárid as como lo es México, el aprovechamiento de aguas freáticas para el riego es naturalmente ya muy antiguo y ha sido empleado

en todas aquellas zonas donde el manto acuífero se encuentra a poca profundidad, el caudal de agua es considerable, las condiciones topográficas son favorables y la calidad de las tierras regables es  bue na . Ha st a la fecha no se han hecho captaciones en gran escala y sistemáticas, habiendo quedado restringido el aprovechamiento de esas aguas,  por lo gen era l, a la em pr es a par tic ula r. Ex is te n e n el paí s, en di fe re nt es pa rt es , ob ra s antiguas de esa clase que merecen nuestra admiración por su extensión y magnitu d, como por ejemplo los túneles y tajos ahora abandonados de la Hacienda del Peñasco y los tajos de la Hacienda de Pardo, ambas en el Estado de San Luis Potosí. En otra s re-

El nacimiento del Río Mante al  pié de la Sierra de la Cuchara.

30

31

'i

l

El segundo proyecto de importancia ha estado estudiando la Comisión en el  R í o Pilón entre Montemorelos y Gral. Terán en el Estado de Nuevo León donde se intenI

..

taba aprovechar el agua freática que circula en el subsuelo del cauce del río, para el riego de terrenos alrededor de la segunda de las poblaciones mencionadas. Como no se sabe ni se puede calcular la cantidad de agua subterránea disponible, es necesario determinar primeramente ésta por medio de investigaciones adecuadas para poder pro yectar después las obras de aprovechamiento. Hasta cierto grado podemos considerar como pertenecientes a este grupo también las aguas que se extraen del Valle de  Mé xi co  por e l C ana l d e D esa güe y que se aprove -

chan en el riego de vastas tierras af uera y al norte de 12 cuenca. Des de que se concluyeron estas obras del Desagüe en 1900, e! nivel de las aguas freáticas del Valle ha sufrido un abatimi ento considerable, lo que comprueba que han sido dre nad as por el ca nal profundo aludido. Aparte de las mencionadas existen aguas freáticas en muchas zonas de la Repú  blica per o el estudio de su aprovechamiento no ha pasndo todavía del estado de re conocimientos ligeros c o m o  por eje mpl o los caudales considerables que hay en el subsuelo de! Valle de T r i n c h e r a s en el Distrito de Altar, Son. En cambio, se están explotando aguas de est a natural eza ya con buen éxito en los abastecimientos de agua potable para grandes poblaciones como en Guadalajara, Jal.? y en Monterrey,

 N. L. APROVECHAMIENTO BE AGUAS ARTESANIAS

El aprovechamiento de aguas a: tesian as, aunque e s un procedimiento conocido en México desde hace muchos años, se ha desarrollado sobre todo a fines del siglo pa sado y en la primera decena del actual exclusivamente por la iniciativa de particu lares. Sin tomar en cuenta los muchos pozos artesianos de diámetro reducido que existen en los alrededores de la Capit al y que produce n agua para el riego de pequeños lotes de terreno, hay en la Hacienda de Chapingo cerca d e Texcoco, Méx., una serie de  perf orac ione s de has ta 60 cm. de diámetro de las cuales actualmente se pueden extraer por medio de bombas unos 500 1. p. s. disponibles para el riego. El man to artesiano se encuentra en esta zona a unos 30 m. de profundidad.

Por el lado americano se han hecho ya experiencias a este respecto en el Condado de Hudspeth abriendo perforaciones que atraviesan el manto acuífero, extrayéndose de ellas por medio de potentes bombas, grandes caudales de agua. Con este procedimiento se ha obtenido una cant idad suficiente de agua para riego de extensos terrenos y además el abatimiento del nivel freático con lo cual queda impedido el ascenso y el afloramiento de las sales nocivas. Con una red apropiada de  pozos se me ja nt es se proye cta poner bajo rie go ta mbi én los Valles de Juárez, Guadalupe y San Ignacio y sucesivamente las otras vegas más río abajo.

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De cantidades semeja ntes y mayores disponen varias fincas rústicas de l Ba en los alrededores de Celaya (en la Hacienda de Santa Rosa el manto artesiano se encuentra de 80 a 100 m. de profundidad), de Salamanca (Hacienda Sarabia, donde las bombas que extrsen el agua del manto artesiano descargan al fondo de ta jos que colectan también agua freática), ce rc ade León (Hacienda de Santa Ana del Conde 186 m. de profundidad), etc., etc. Caudales enormes de agua artesiana Lrotrntes producen los pozos célebres de las Haciendas de Gogorrón y Ventilla a l S de San Luis Potosí donde unas veinte perforaciones dan voluntariamente más de 1,503 1.  p. s. o sean más que 50 millones de metros cúbicos por año. E n el pozo más grande se encontraron dos mantos acuífero s uno a 160 y otro a 250 m. de profundidad, habiendo rendido el pozo al principio (antes que se perforaran nuevos en el alrededor) unos 400 1. p. s. En esos pozos y  j i o

Un “Guimbalete” en los alrededores de Guadalajara.

I

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APROVECHAMIENTO DE RIOS SUBTERRANEOS EN TERRENOS CARSTICOS Y

VOLCANICOS

En

terrenos agrietados la circulación de aguas sigue el fracturamiento de la roca y si esta es relativamente soluble como por ejemplo la caliza, s e forman canales, abras, bolsas y cuevas e n cuyo fondo el agua corre de la misma manera como ríos su perficiales. Condic iones de est a nat ura le za te nem os en la Repú blic a en la Sie rra Madre Oriental en casi toda su extensión donde encontramos en la bajada de la sierra hacia el plan de la costa y al pie de la cordillera lo s nacimientos caudalosos de estos ríos subterráneos. En la Sierra Hermosa ¿e Santa Rosa, a cuyo pie está situada la ciudad de Múzquiz existen a media altura de la serranía minas de  plomo y zinc a lo largo de una falla longitudinal. La explotación de las minas se dificultó mucho a causa de la fuerte cantidad de agua que circula en dicha fal la y para desaguar ésta de una manera económica se decidió de esto hace ya muchos años drenarla mediante un túnel que  per mit ier a la sal ida del agua al pla n má s bajo de Múzqu iz. Se con str uyó el túnel y al llegar a la fractura sobrevino tal cantidad de agua que el socavón quedaba com ple tam ent e lle no sin que el nive l en las mi nas ba ja ra nota blem ente . De sd e ent onc es está corriendo el río que sale del túnel y se aprovecha su agua en el riego de extensos terrenos alrededor de la ciudad de Múzquiz.

-

-

El único aprovechamiento de aguas de un río subterráneo que hasta la fecha ha ejecutado la Comisión Nacional de Irrigación es el del  Rí o  Ma nt e en Tamaulipas;  pero e n rea li dad por el mome nto no se tr at a aquí de la capta ción de un río subte rráneo sino solo del aprovechamiento del agua que voluntariamente sale en el naci miento del Mante. Sin embargo, se  pien sa es tud ia r el modo de aumentar el agua dis  ponibl e de es te resu rgim ien to, pu es se con sid era posi ble hacer lo re pre sa ndo la s agua s del Río Comandante con el objeto de obligarlas a reconocer al sistema del Mante en su tramo subterráneo.

Máquina perforadora trabajando en la Hacienda de Chapingo. obras para su aprovechamiento (excepción hecha de l a planta eléctrica, en la cual

se aprovechan las aguas para producir energía eléctrica) se han gastado m á s o me nos un millón de pesos. En la región de Torreón existe abajo del manto ¿e agua freática también una ca pa cau dal osa de agua art esi ana asc end ent e pero solo ha st a el niv el de agu a fre áti ca y existe n ya en el rumbo varias instalaciones de bombeo por medio de las c uales se extraen grandes cantidades de ambas aguas.

Fuera de la Sierra Madre Oriental donde existen ríos subterráneos que deben su origen al carácter cárstico de la cordillera formada por rocas calcáreas, contamos en la República con ríos subterráneos de menor importancia en regiones volcánicas donde la formación de enormes corrientes basálticas constituidas de un caos de  bloq ues y conocidas bajo los nombres de Pedregal o Malpaís, permiten la infiltración completa de las lluvias y de las otras precipitaciones atmosféricas. El agua de ellas reconoce al fondo impermeable y viene a resurgir en el extremo de las corrientes formando a veces manantiales de importancia, (en el Valle de México los nacimientos de  Nat ivi  ta s en Xochimilco aprovechadas para el abastecimie nto de la Capital con aguas pota bles, de las Fuentes Brotantes y de Peña Pobre son de este origen). Por el otro lado de la Sierra del Ajusco un regular número d e los manantiales que Forman los ríos del Estado de Morelos provienen tambi én de es ta fuent e y son aprovechadas en el riego sin que se hubieran hecho captaciones especiales de ellas.

Una zona importante de aguas artesianas se encuentra en valle alrededor ¿e la Estación  Pes que ira del Sur Pacífico al  Nor te de Hermosillo, Son., donde la presión artesiana es bastante grande para que el agua ¿e los pozos descargue directamente al tanque elevado del ferrocarril. En otras zonas de la República la existencia de agua artesiana es probable ( L l a  nos de Pue bla por ejemplo) pero en vist a de que las exploraciones de mantos profundos son sumamente costosas y que el éxito de estas investigaciones siempre es du doso, la iniciativa particular tiene su límite. E n todas las zonas de aguas artesianas mencionadas arriba, el manto acuí€ero

se ha encontrado en los depósitos lacustres y fluviales de cuencas más o menos cerrad a s y rellenadas desde el pleistocena, y todavía no se han hecho ningunas perforaciones para alumbrar agua artesiana de sinclinales formadas por sedimentos más an tiguos sin embargo de que es de suponerse que, sobre todo en las extensas zonas áridas del  N. de la Mesa Central se puede contar con aguas de este origen cuya localización y exploración en el futuro resultará de estudios geológicos regionales.

Los colonos de los terrenos regados a fuerza de tanto sacrificio, no obtendrán éxito en sus empresas, si trabajan empíricamente. Esta publicación les dará noticias y consejos de utilidad práctica.

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35

1

b

Antiguo sistema de pesquerh en México

l P

La descripción que los historiadores ha cen de los tolderíos de las caletas que se usaron por los pescadores de perlas en el Golfo de Cortés, es por demás pintoresca, aunque siempre con la característica de ser aquéllas, unas piraguas endebles e inconfortables que aumentaban la mísera condición de los infelices, expuestos a todas las calamidades.

E N

lativamente poco y de una manera astrosa y  primi tiva . Er a de ve r cómo y en qué piraguas miserables se aventuraban los costinos hacia alta mar cual si siguiesen el rastro invisible de los congrios  y las corvinas. Ejercían su industria sin más ape ros que los que ahora dos mil años EU  patrón S a n Pedro empleaba. Con la agra Más de la mitad de los vecinos de aque- vante de que en las horas dificiles de tormenta no estaba la mano de su salvador. lla población se consagraban a la explotación de la industria perlífera. La tempora- Cuando el esquife zozobraba no les quedada de la pesca empezaba en mayo y se  ba si no ent reg ars e al Des tin o  y  baj ar a las profundidades para ser pasto de los  prol onga ba ha st a el me s de novi embr e. Entonces se notaba un movimiento inusi - animales. Así desaparecieron centenares tado en la localidad; infinidad de embar- de pescadores nuestros. Dudamos que ha caciones de todas clases y modelos surca- ya en México, quiénsabe si en el mundo,  ba n la s tr anq uil as agu as del Ma r de Cor - trabajadores de más bajo nivel de vida que los pobres pescadores. Sus necesidades tés y tanto los muelles como los malecoestán reducidas al minimo tolerable por el nes y demás puntos de desembarque se veían cubiertos por incontable muchedum - ser humano. En aquellos tiempos que describimos,  br e que hor mig uea ba en todo s sen ti dos , los  bot es se reunían casi generalmente en yendo a embarcarse los unos y esperando grupos de veinte y salían ¿el puerto a me el retorno de los Luceadores l o s otros. dia noche, de modo que pudieran llegar a Lo s yacimi entos perlíferos, que se des los lechos de ostras 21 a m a n e c e r C u an do arrollan 2 lo largo de la península, desde verificaban su arribo, t o d o s disparaban un e l c a b o d e S a n L uc a s h a s t a M u l eg é , f u e cañonazo como s e ñ a l y comenzaba e l buron fraccionados en cuatro grupo s hacia ceo. Mientras el  buz o  ba ja ba estaban 1872, ordenándose que no fuera explotado atentos a la seña y jalaban la canasta de cada grupo, sino de tiempo en tiempo, cada ostras con la rapidez que  po dí an recoger dos añ os a efecto de prevenir la destruclas y finalmente jalaban al cansado buzo ción o el agotamiento en las pesquerías. que rara vez podía permanecer debajo del En California como en los demás puntos agua más de ochenta o noventa segundos, del continente de habla española, siendo aunque se sabe que algunos lograban resis tan abundantes las especies, se pescaba re- tir más tiempo.

tiempos pasados era deficientísimo el sistema de pesquería, pero muy es pec ia lme nte el de perla en aguas mexicanas. La ciudad de La Paz, B. C., que siem  pre ha sid o un centro principal ofreció constantemente un lugar de cita para todos aquellos bravos marinos que se aventuraban a la busca de la perla.

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Antes de que en aquel lugar se empleara el traj e de buzo, era costumbre d e los naturales untarse el cuerpo con aceite y  baj ar al fondo si n otr a cos a que un cordón, a1 que se ataba la canasta a la que se arro jab an la s ost ras. Aun hoy exi ste la misma costumbre entr e los buzos : pero el pez es pada, los tiburones, el pez-diablo, de diversas variedades. que abundan en las aguas del Golfo, hací an y hacen muy peligrosa esta costumbre.

Aun en la actualidad, observamos el mismo fenómeno, mejor dicho, la misma injusticia. Mien tras los propietarios y concesionarios obtienen pingües y a veces fa  bulo sas uti li dad es, no sólo en la pesca de la perla, sino en simples mariscos y pescado común, los trabajadores perciben muy exiguo salario, recompensa que no es si quiera comparable con los sufrimientos y riesgos que corren durante sus i a e n a s . A veces, cuando se recuerda el alto pre cio que alcanza en los restaurants de nuestras ciudades una  pil tra fa de hua chi nan go frito, llega uno a preguntarse si los pes-

cadores no serán unos avaros de marca mayor. ;Por qué un pescado de esos que el pescador apenas levanta a pulso, avaluado por la cotización de nuestro mercado, debe significar fuertes sumas. Y es entonces cuando nos decimos : 2 Efectivamente vale tan caro en la costa o abusan pesquero y pescador?  No nos damos cuenta que del dinero que el consumidor paga por el pescado apenas si una partícula miserable llega a manos del hombre y con infinitas penalidades, con frío y peligros mortales, lo ex trae del mar en temerarias jornadas nocturnas por el océano. El  preci o de ven ta en las ciu da des es alto porque consumidores hay mu chos y pescado hay muy poco. La produc ción está limitada por los industriales, por los comerciantes. Es a s í en casi todo el  país. El  pesc ador vive hip otec ado, con bo te y todo, ante el comerciante que le com  pra su  pesc a y en ocasiones le obliga a arrojar al agua parte de ella. El “trust” florece incontrolado en las playas mexicanas. Habrán calado estos detalles las gafas científicas de nuestros sociólogos y la frivolidad meditativa de nuestros jóvenes “bien”, asiduos parroquianos de los restaurants de primera, y aquellos magnates co diciosos que a toda costa exigen las perlas de mayor precio? Si tal hiciesen encontrarían el medio de tener ese cotidiano milagro de la multiplicación, no el de perlas y  peces si no el de los prec ios com rrc ial es.

1’ ~

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Si es usted colono, recorra estas páginas: quizá no le sean inútiles; y vaya coleccionan do los números que aparezcan en lo sucesivo, donde procuraremos aportarle muy variadas in dicaciones sobre el mejor aprovechamiento de su parcela. -

 3 7

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Proyecto de Plantación de Abacá en México P o r el Ingeniero Genaro  MO NTI EL

OLV ERA .

QUE ES EL ABACA

ABACA

es la planta que produce la fibra “manila”. Es un plátano y la fibra se extrae de los troncos. El fruto no es comestible. La  pl an ta es originaria de las ISlas Filipinas y en la actualidad, practicamente sólo ese  pa ís la  pr edu ee, Constituye una importantísima fue nte de riqueza, siendo el primer producto de ex  por tac ión . P or es ta raz ón el Se na do Fi lip ino ha pro hib ido la exp ort aci ón do hijuelos de abacá. La fibra de manila sirve para fabricar prin cipalmente los cables y cuerdas marinos, y es muy solicitada, porque es l a m á s r e s i st e n t e d e todas las fibras hasta hoy conocidas, y porque el agua del mar no la ataca, como sucede con l a s d e los ágaves o magueyes y el henequén,  por eje mpl o. Antes de emplearse el manila, se usaba el cáñamo para la cordelería marina, pero cuando aquél se conoció, vino rápidamente a menos és te. En la actualidad el manila no tiene rival.  Na tu ra lm en te qu e los compradores de esta fibra son los  pa íse s má s in du st ri al es o los que cuentan con una gran marina. Los  pr im er os son: Inglaterra y los Estados Unidos, viniendo después Francia, Alemania y el Japón. De ma nera que los mercados principales de la fibra son: Nueva York y Londres.

El comercio del manila asume importantísimas proporciones. Existe un gran movimiento marítimo por el transporte de más de un millón de pacas anuales que salen de Filipinas  por lo s pu er to s de Ma ni la y Davao, para Nueva Cortando los troncos en Filipinas. York y Londres. Pero siendo las distancias ma rítimas tan considerables, 8 y 10 mil millas aproximadamente la fibra adquie re ineludiblemente un costo elevado,

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Variedad Maguindanao.

Variedad Buñgulánon.

Por consiguiente, si alguna vez los  pa ís es tro pic ale s sit ua do s al s u r d e los Estados Unidos cultivan el abacá en tierras apropiadas que tengan la misma climatología que Filipinas, harán un bril1antisimo negocio y proporcionarán a los Esta dos Unidos la oportunidad de dominar el mercado de Londres.  No todas las tierras son ap ropiadas para es e cultivo; las empleadas para el  plá tano roatán, están mas cerca que otras para el objeto, puesto que el abacá tiene los mismos hábitos de vida que aquél, y exige similares condiciones climatérica s; pero hay unas zonas más favorables que otras, notándose esto aun dentro del mismo territorio filipino. El suscrito, Ingeniero Jenaro Montiel Olvera, Jefe de la Oficina de Fibras de la Secretaría de Industria, ha estado dos veces por largas temporadas en las Islas Filipinas estudiando detenidamente el cultivo, extracción y comercio del manila. Durante la segunda estancia, trajo una buena cantidad de hijuelos con la cual esta blec ió un a pla nta ció n en el Es ta do d e Ve rac ruz , qu e es tá da nd o ma gn ífi co s re su lt ad os .

De sus estudios y experimentaciones, se viene al conocimiento de que la zona geográfica más apropiada para el cultivo de l abacá, es una faja climatológica que corre a lo largo del Golfo de México desde un punto a la altura de Tampico 50 kilómetros tierra adentro del litoral, hasta Tabasco, y dentro de esa zona, en las tierras agronómicamente adecuadas.

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PROYECTO DE EXPLOTACION QUE PUEDE DESARROLLARSE EN LA ZONA  NORTE DE VERACWUZ.

Esta zona tiene además la excepcional ventaja de encontrarse a la menor distancia factible del mercado Los cultivos q ue s e hagan dentro de ella, serán pues excepcionalmente situados para triunfar de las competencias,

La superficie apropiada para la primera siembra es de cien  he ctá re as ,  plan tando hijuelos importados. Las superficies siguientes se cubren con rizomas de dos  bulbos que se obtendrán de la plantación inicial.

POR QUE EL CULTIVO DEL ABACA SERA EN MEXICB UN GRAN  NEGOCIO El abacá es un plátano de  5 a 10 metros de altura. Cada rizoma da nacimiento a 20 o 30 hijuelos que forman una cepa. Los tallos listos para la cosecha tienen en  prom edi o 6 metros y pesan 125 kilogramos. En las cepas que forman el tallo, hacia la cara externa, está la fibra contenida. Se acostumbra sembrar por hectárea, de 714 a 1,156  plant as que for ma n igua l número de cepas. A los 20 o 14 meses contados desde la siembra, los primeros tallos se encu entran en condiciones de ser cosechados. Cada cepa está constituida por una agrupación de 20 o 30 tallos en diversos estados de desarrollo. De estos, .se encuentra n buenos para el corte dos o tres. Cuando cada planta está en flor o  poco ant es, es la época apropiada para el corte. La cosecha se efect úa constantemente. Un  pl ant io dura en explotación hasta 50 años. En otras palabras: una cepa aguanta que se le est én cortando tallos es e largo  perí odo, aun que por lo general sólo se hace durante 25 años. Después de la siembra, el cultivo se reduce a 3 limpias anuales y a veces dos, cortando las yerbas de raíz. El rendimiento de fibra que se obtiene por hectárea, es de 2,500 kilogramos, pero en las mejores zonas filipinas que poseen tierras y climatologia similar a las de las Huaxtecas, la  pro ducción es mayor. La fibra se clasifica en Y0 grados diferontes. Las primeras clases se venden a un prec io que va de 21 a 30 centavos de dollar la libra de 453 gramos y las inferiores a 6. Puede establecerse un precio medio de 15 centavos para todo el producto obtenido de una plantación. La gran elasticidad que permite esa extensa clasificación, es favorable al productor. El rendimiento bruto obtenido por hectárea, es de poco más de $1,650.00 oro nacional, ha ciendo un cálculo conservador. Ha st ael presente no s e conccen plagas que ataquen al abacá. E1 único enemigo que tiene, es el viento huracanado, como el plátano. Para extraer la fibra, no se necesita ma quinaria costosa como para el henequén. Se usa una desfibradora de tipo portátil de valor redu cido, que construye el suscrito.

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n

La siembra de una superficie menor, demora la percepción de las ganancias en un volumen importante.  Nat ura lm ent e, la s erogac'ones aum ent an en una proporci ón favo rable porque a medida que la superficie asciende, el costo decrece.

EL  presu pues to del costo de un a plan taci ón de i OO hectáreas, est ará representada  por la s sig uie nte s par tid as :

PRIMER

AÑO.

 Eg re so s. a)

Costo de 100 hectáreas de tierra aproximadamente, a $200.00 la unidad. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Desmonte, quema, requema y siembra a $125. valor suele disminuir). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .... Cultivo a $10.00 la hectárea, el primer año. . . . . . . . . . Compra de 150,000 rizomas, viaje y fletes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Bodega, casa para administrador y  bar rac as par a tra baj ado res . . . . Herramientas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Compra de un tractor, 2 caballos con sillas. . . . . . . . . . .

-

 b)

c) d) e) f) g)

12,500.00 13,OOQ.OO

5,000.00

 _. __ Total.

. . . . . . . . . . . . . . . . . .$

-

55,150.00

SEGUNDO ANO.  Eg re so s. h) Cultivo a razón de $15.00 h e c t á r e a . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $ 1,500.00 ;)-Sueldo de un admini strad or, a $4.00. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1,460.00  j) Importe de una deslibradora , con motor, prensa para embalar y ., . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . camion. 2,950.00 k) Depreciación de aperos, animales y edificios. . . . . . . . . . . . . . . . . . 875.00

-

Total.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $ 6,785.00

TERCER ANO.  E gr es os , h) Cultivo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .$ ;)-Sueldo del administrador. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . k) Depreciación de aperos, animales, etc. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

-

Total.

Variedad Libretón.

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1,500.00 1,450.00 1,170.00

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $ 4,120.00

i

está calculado por el costo que hemos tenido en tierras de Veracruz, pero suele ser meno; cuando no tiene que efectua rse desmonte. Co sa igual debe advertirse para el cultivo. A  pa rti r de l cu ar to año , ha br á de datarse en los egresos, el costo del empaque a raztrn de 0.25 de centavo por kilo, lo cual dará para la  pro duc ció n tot al an ua l, la cif ra d e $625.00. Calculamos por exceso igualmente, una cuota de 2 centavos por kilogramo de fibra exportada, suponiendo que el fisco imponga la misma cuota por derechos de exportación que para el henequén, aunque pudiera conseguirse previamen te, que aplicara las cuotas señaladas a los ixtles, que son menores. En esa virtud, datamos la cantidad resultante o s e a n $5,000.00 anuales, que totalizados, hacen :

 In gr es os .

al precio medio de 15 cts. 250 toneladas de fibra de diversos grados de dollar libra.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $165,000.00  Re su me n  d e inversiones, en l o s 3  #ri mero s  años .

ler. año. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . año, . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3er. año . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

 2 9

.$ 55,150.00 6,785.00

4,120.00

66,655.00

~~

Utilidad

................

$ 98,345.00

A  pa rti r de l te rc er agio l os ing res os im po rt an la su ma ind ica da arr ib a y la calidad de la fibra y su rendimiento se conservan por 15 años en el mismo pié productivo. Se ha asignado al tercer año toda la cosecha correspondiente a e s e y a la parte del segundo, que prácticamente es d e 4 meses, por razones da  bu en or de na mi en to en e s t a datación. Pero prácticamente, los ingresos comienzan en al 2: citado año. El costo de las 180 hectáreas, es estimativo. El desmonte, quema, requema, etc.,

Egresos, ya, considerados.. . . . . . . . . .$ 4,120.00 Empaque. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 625.00 Derechos de exportación. . . . . . . . . . . 5,000.00 Ingresos

....................... Utiiidad líquida,

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$ 9,745.00 .$165,000.00

año. . . . $155,255.00

 No  pu ed e se r má s sig nif ica tiv o el re su lta -

v

1

do teórico de esta inversión, que es inigualable en el orden agrícola. La inversión inicial más importante, consiste en la cantidad que debe expensarse en la Una paca. de peso standard. compra, viaje y fletes de las rizomas en Filipinas. Aunque, como ya se dijo, la exportación está prohibida en las islas, el autor de este artículo, aprovechando sus relaciones, podría sacar las rizomas, haciendo manio  br as en Mi nd an ao par a Sa nd ak an (B or ne o) Ho ng Ko ng y Manzanillo. Finalmente, fíjes e la atención en la circunstancia, muy ventajosa, de que mientras con el plátano la pérdida es segura cuando por causas de fuerza mayor (muy frecuen tes en México) no se puede exportar la fr uta ; tratándose del abacá, este riesgo disminuye notablemente de importancia, porque puede embodeg arse indefinidamente hasta esperar mejor oportunidad o precios más redituables.

Si es usted ingeniero, confiamos en que le interesarán estas páginas, y si tiene usted algo útil qué divulgar, de sus conocimientos adquiridos en la práctica, con gusto se lo pu blic arem os. Clasificando

Separando la parte fibrosa de la pulposa.

-

la fibra,

-

l.

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l

9

43

!' Y

39

Estudio de las variedades más apropiadas, bien por sus rendimientos, precocidad, etc.

-

1

. _ Pos

el  In ge ni er o  Alejandro

 BR AM BI EA .

4*-Determinación de las épocas de siembra, coeficientes de riego, sistemas de cultivo, etc. %-Estudio de las causas que motivaron el fraca so de tale s o cuales plantas, re petic ión de expe rime ntos , empl eo de abonos, mejo rador es, etc . 69 7Q

Estudio de las plagas existentes en la región y manera de combatirlas. Investigaciónde los costos de cultivo en cada una de las plantas experimen tadas.

-

E

todos los Proyectos estudiados por la Comisión Nacional de Irrigación, probablemente es el del Río Salado el que se encilentra en la zona más árida del país, pues la  precipitación med ia en 25 años no es mayor de 25 centímetros ;(el año  pas ado f u é de 125 milímetros) ;  por cons igui ent e, la agri cult ura de temp oral es ent era men te imposi  ble y en cua nto a la de riego, casi no 5e conoce por no exis tir un2 s ola obra de irri gaci ón en todo el cauce del río. Los  pocos hab ita nte s de la región, ha n dirigi do todos sus esfuerzos al desarrollo de la ganaderia, que es la única riqueza explotada.

Est e programa inicial está muy lejos de ser, por sí solo, completo; máo P  pes ar de eso, requerirá varios años paia su total desarrollo. Posteriormente, y una vez termi nadas muchas partes de este programa, podrán iniciarse otros estudios más, de detalle, cono son la selección de semillas, creación de nuevas variedades, incluyendo investigaciones de genética de todo orden, est udios de problemas loca!es de suelos, rotacio nes, etc.

La  pri mer a preocup ación de la Comisióx  Nac ion al de Irri gaci ón ha sido la de estar en aptitild de contestar ecertndamente a la primera pregunta que hará todo colono que tenga cordura y sentido común:-";Qué es lo que ustedes me :consejan que siem bre en la s ti err as que voy a com pra r? " Afortunadamente, esta primera pregunta y otras muchas, han sido ya resueltas por la Granja Experimental, y creemos estar en aptitud de dar sanos consejos a todos aquellos agricultores de buena voluntad que quieran escucharnos, con la certeza de que su éxito pecuniario será indudable.

Existiendo algo más de medio millón de hectáreas incultas e n esa zona, se ignoran por consiguiente las posibilidades agrícolas de las tierras del Proyecto; s e desconocen también las épocas más propicias para la siembra, las variedades de semillas más adaptables, 103 cultivos mós adecuados, rendimientos , coeficientes de riego, costo de los desmontes, etc. §e imponía pues, la creación de una Granja Experimental, que bajo los auspicios de la ComisiónNacional de Irrigación, pudiera llenar estos huecos en beneficio de lo s futuros colonos, pa a evitarles pérdidas de consideración y a la vez, para servirles de guía en muchos detalles que la inic iativa privada no puede investigar por falt a de elementos técnicos y  pecuni arios. La Granja Experimental fué fundada por la-Comisión, hace dos años, y de entonces a la fecha, 5e ha hecho una serie ininterrumpida de experimentos, todos de gran utilidad e impo tancia para el futuro del Proyecto.

El  progr ama  d e trabajos d e una granja cstab1ecida. en una zona n o agrícola, tiene que ser forzosamente, muy extenso, ya que h a y que principiar sin tener un solo dato a . . la m a n o , o como se diría empleando una redunda ncia, "por el principio . E n e f e c t o en otros proyectos el " Presidente Calles" , de Aguascalientes, por ejemplo existe agricultura de temporal y de riego, desde hace más de 150 años y se conocen una multitud de detalles, reduciéndose el pzpel d e una Granja Experimental, a  bus ca r el me  jor ami ent o de los sis tem as de cultivo, empl eo de ab on os introdu cción de nuevas variedades, selección de las y2 conocid asetc. El  probl ema es , en un a pala bra, má s concreto.

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La extensión de nuestro programa en Don Martín, ha hecho pues, que tenga que desarrollarse de una manera lenta, metódica y  paulatina. Bosquejado a grandes rasgos,  puede divi dirs e as í: lo Clase de cultivos que pueden empre nderse en la región. 2--Selección de aquellos que por s u s rendimientos pueden ser costeables.

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?acato Sudán en completo crecimiento.-~ologYafía tcillada L-TI día antes el segundo corte.  Nót ese q¿le apenas sobyesale el jinete.

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ya se había observado al hacer los estudios de suelos: la falta de ácido fosfórico que se tradujo en pobres rendimientos de grano. Los experimentos han sido repetidos durante dos años, siempre con los mismos resultados. En el presente año, se inició una serie de estudios con abonos fosfatados y dentro de poco tiempo se podrá indicar la manera más económica de subsanar el mal.

A  pes ar de los bajo s ren dim ien tos de gran o, el gra n desa rrol lo del fol laj e, hac e que el cultivo del maíz sea muy remunerador  por este concepto. Se han experimentado diferentes variedades de maíz :  precoz, tar dío , ext ranj ero y nacional y se conocen cuáles de todas ellas dan mejores resultados.

El trigo y la avena se experimentaron también durante los dos años pasados, con resultados muy poco satisfactorios debido a la constitución de las tierras y al impropio sistema de dar los riegos, pero una vez dete rminado el mal, se ha conseguido un éxito en el presente año, según podrá juzgarse por las fotografías. Los trigales presentan un aspecto de lo más kalagador, e igual acontece con la avena. En el  ple sen te año, se experimentaron además, algunas variedades de cebada cervecera y los ensayos van por muy buen camino, permitiendo augurar un éxito completo.

Durazno de la Variedad “Best May”. Est e arbolito fué importado de Austin,  No ha sido atacado por el barrenador del tallo.

La alfalfa se experimentó desde el  primer año y los resultados han sido siempze  poco sat isfa ctor ios. Los ren dim ien tos son algo bajos y el estudio detenido hace atribuír a varias causas ese mal: falta de bacterias fijadoras de nitrógeno en el suelo; falta de ácido fosfórico, y por último, la presencia de una plaga fungosa, conocida con el nombre vulgar de “pudrición texana de la raíz” (Phimatotricum omnivorum), que aparece al poco tiempo de sembrada la planta y va extendiéndose rápidamente hasta atacar todo el  plantí o.

Tex.

Después de dos años de continuadas experimentaciones, se ha logrado encont rar varios cultivos al menos que serán un éxito seguro, tanto por su adaptabilidad, como  por sus rendimientos y facilidad de mercado. Entre ellos podemos citar el algodón, el zacate del Sudán, el Milo y el Keffir.

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El algodón se desarrolla de una manera en extremo halagadora y s u s rendimientos han sido superiores a los que se obtienen en nuestro mejor centro algodonero, La Laguna. En los experimentos hechos en la Granja, los rendimientos han sido de 309 kilos de algodón limpio por hectá rea, c omo promedio, habiendo varie dades que dieron hasta 422 kilos por hectárea.

El año  pasa do se hicieron experimentos con Nitragina y los resultados han sido muy satisfactorios, pues dos lotes sembrados, uno con la bacteria y otro sin inocular, permiten ver la notable diferencia que hay en su desarrollo.

El zacate del Su dán ha sido también un2 de las plantas que mejor se desarrolla y cuyos rendimientos hacen augurar un gran éxito pecuniario para el colono. Pueden d a r s e de 3 a 4  bue nos cort es en el año, co n un prome dio de 6 a 8 toneladas de heno  por hec tár ea. Si se tiene en cuenta que Monterrey y karedo son magníficos mercados, muy próximos, y que siempre están resintiendo escasez de forrajes, se verá la importancia que este cultivo puede tener en el futuro. A esto hay que agregar el  poco costo que tiene la producción y lo fácil del cultivo para cualquier colono, aun con pocos conocimientos agrícolas. Es también una de las plantas más resistentes a las plagas, heladas, vientos, etc. Igual cosa puede decirse del Sorgo, Milo y Keffir. Estas plantas se rán de las primeras que el agricultor tenga que sembrar para la alimentación de su ganado, por la gran escasez de forrajes. Los experimentos llevados a cabo con maíz, nos han permitido confirmar lo que

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Los abonos se están experimentando en este año.

Ejemplar de chavacano en perfecto estado. Alcanza actualinente (8 - 15 - 29), una altura de 1.80 mts.

La “pudrición texana de la raíz”, existe en todos los suelos del Proyecto en las plantas silvestres y de all; pasa a la alfalfa, por lo que es de aconsejarse que en los primeros dos años, no se siembre esta leguminosa. En

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1

PARENTESIS LITERARIO

(1

Perfiles de Taxco Por Francisco Monterde Garcia

 IC AZ BA LC ET A.

P

A N O R A M A. Lavado por la tormenta y barnizado por el sol que se levanta, el caserío de Taxco, a pesar de su vejez, parece nuevo. Es un anciano vigoroso que despierta temprano, dispuesto a trabajar con alegría, bajo el cielo que canta la estrofa de un himno. La población se ha transformado con el Ahora ya no es Toledo, < a cuál ciudad española podría compararse?. . . Ti e ne, tal vez, la sonrisa de un cromo anda luz; algún parentesco con las postales de Córdoba.

día.

Campo de cebada eervecera. Se ha desarrollado considerablemente y tendrá un rnagnífico mercado en Monterrey. ee

sas

año hicimos unas siembras en terrenos que habían sido previamente Sembrados con zacate del Sudán y se tiene la esperanza de que la plaga haya desaparecido. Al mismo tiempo que se han ido haciendo estos estudios, también se han determinado los coeficientes de riego, en una forma provisionel y hoy se están haciendo estudios más completos, para determinar el coeficiente óptimo de riego, en aquellos cultivos ya seleccionados.

Se o€r'ece a la vista un conjunto de caque  blanca s pared es, tej ados rojos

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2

También se han dete minado los costos de cultivo, desmonte de monte y la manera más apropiada de hacerlos.

en diferente clase

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Rincón de Taxco.

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En un próximo artículo se dará a conocer el programa que está desarrollando la Comisi ón en otra s fases del prob!ema agrícola, e íntimamente relacionadas con 10s cultivos.

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tire esta publicacih, aunque por el momento mejorar sus ni@goCiQS.

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interese: quizá más tarde lo aW __-_

Vista de Taxco.

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acuden, en rebaño, hacia el templo, y éste alza sus torres como las alas bruñidas de un ángel de bronce. Las flechas que envía el sol desde las almenas de la montaña, apenas oblícuas, se clavan en un solo lado de las casas y alargan sus sombras por el lado opuesto. Así alternan paredes pulidas, tejas lucientes y sombras contrastadas. Para poseer una ciudad, hay que contemplarla desde lo alto. Al ir  por s u s calles, formamos parte cle la población y es ella la que nos domina y absorbe. Las construcciones de Taxco no se apiñan ni confunden al ser observadas desde lejos. Las casas señoriales de la plaza con-

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l

servan la distancia respetuosa que las se  par a de l templ o, y los árbol es colocan an te él, en ofrenda, una verde corona que oculta la fealdad del kiosko central, moderno. De ese modo, Taxco se embellece más con la lejanía, como la música y las montañas. Del conjunto emergen, destacados, el templo con sus finas torres y el relicario de esmalte de su cúpula, revestida de azulejos policromos, y la casa de Borda, que indica. con su elevación, la categoría del  próc er min ero que la hizo const ruir . Más allá ondulan, en planos sucesivos, como en una decoración teatral, las colinas, los montes y las montañas distantes. Cada plano tiene un color diferente: las cumbres se  pintan de verde sombrío: las lejanías, de gris azu!ado. Sirviendo de fondo el paisaje, el tajo de peñas sonrosadas cae a plomo, como un telón. TWADICIQN Y LEYENDA. Taxco es el punto en que coinciden, arbitrariamente,

las vidas de estos dos hombres: Alarcón y Borda, alejados por la obra y por el tiempo, Sus figures se destacan sobre el mismo tapiz tramado con hilos de oro y seda la época colonial ; pero aquél surge casi al , . .  principio, y és te sólo alca nza el fi n. Alarcón fue de América a Europa en  busc a de reno mbre y allá vi6 lle gar SU último día. Borda vino de Europa a América, para luchar, enriquecerse y morir en estas tierras. Si no nació Alarcón en Taxco, tampoco Borda murió en él: a pesar de eso, la fama $e los dos alumbra al viejo real de minas: sus nombres andan juntos en la tradición oral, se encuentran a menudo en las leyendas locales. Los millones de pesos que amontonó José de la Borda, para perderlos repenti namente y volverlos a recobrar más tarde, han dado origen a consejas que lo acreditan no sólo de hombre caritativo, como el conde de Regla, sino espléndido, fastuoso.

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Panorama de Taxco. Se cuenta que el rico minero fue el alma de Taxco, el que se ocupó en darle esa unidad, esa armonía, que probablemen te se debió, sobre todo, a la intuición de quienes lo Construyeron, al lugar y al am bient e. Un día, se refiere, mientras edificaban el templo, ya erguidas hasta la mitad las torres, Borda subió a una de ellas para ver el panorama, y bajó disgustado por el mal aspecto que ofrecía la población, cuyas casas se hallaban techadas de diferen tes maneras. Poco tiempo después, los vecinos reci  bier on, como pres ent e de l poten tado , las tejas necesarias para techar de nuevo, de un modo uniforme, todas las casas. Borda, que hizo cubrir con barras de  plat a el suelo, en tr e su casa y la parroquia argentino enladrillado , cuando na ció su hijo, el futuro dueñio de los jardide Cuernavaca, pretendió también, se nes gún se dice, que las bóvedas del teniplo tuvieran, en vez de pintura, una gruesa

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Parroquia

de

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Taxco.

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capa de metal extraído del subsuelo de Taxco; pero las paredes no habrían sopor tado el peso excesivo, y a cambio de l a plat a d e sus minas, le dió el oro de los alterres. El sonoro apellido de Alarcón se re pite aún en Taxco por to das part es. S e habla de los antepasados del poeta; se ase gura que aquí rodó éste en la infancia; se enseña, en un muroI lo que resta de un soneto escrito en su honor. Además del distrito, llevan su nombre un hotel y un teatro en el que, para esta noche, se anuncia la representación de una obra popular mexicana : “Ea Llorona”, preferible a cualquier película de aventuras. Las damas de Taxco saben de memoria actos enteros de “Los  pech os privil egia dos”, de “Las paredes oyen”, de “La verdad sospechosa”. . . En los estrados se es cuchan con frecuencia los versos de Alarcón: labios femeninos subrayan sus finezas y cortesías. Taxco es el reflejo de Alarcón: ilustre, corcovado, castizo, cortés.

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somne que todavía ayer nos sonreía, con En segundo término, en el cuadro de la tradición, están los viajeros célebres, men - los ojos escondidos entre las arrugas?. . . Los deudos caras enrojecidas por el cionados por Peñafiel en la  primer a pági llanto de toda una noche llevan la caja en na del álbum que se conserva en la sahombros. cristía de la parroquia Húmboldt entre ellos y Moctezuma 11, a quien, según la Atrás vienen los músicos. Mientras leyenda enviaban como tributo ladrillos de uno de ellos rasca las cuerdas del contra tierra taxqueña, con el metal que los ar -  bajo, dos muchachos lo conducen horizon tífices aztecas transformaban en joyas im - talmente, como si también lo fueran a en  perial es. terrar.. . Hubo en Taxco una época en que se LA MUERTE. Remata una puerta la teral de la parroquia de Taxco un esque - sacaba a los difuntos en angarillas, vesti dos según el santo de su devoción, con el leto esculpido en la  piedr a, con real ismo rostro descubierto, y al paso del entierro, ingenuo, estilizado por el desconocimiento anatómico : esqueleto que recuerda los gra - siempre acompañado de música, estallaban  jubi los ament e los cohete s, como si todos  bado s de “La Danz a de la Muer te”. de celebraran el ascenso de un alma, en vez Holbein. de llorar la muerte de un pecador.. . Quizás esta puerta sólo se abría, en El espectáculo, tónico y optimista en otro tiempo, para dar paso a los cadáve este ambiente, resultaría grotesco si se res de los mineros que fallecían en las trasladara a una calle asfaltada de la ciutragedias silenciosas del Real. dad  más distante de aquí por su espíritu El esqueleto, sin brazos ya, parece su- escéptico que por el alejamiento mate gerir que el tiempo, aquí, se burla de la rial donde a esta hora corren tranvías y muerte, la torna inofensiva y débil, porque vehículos violentos, junto a edificios pre la vida concluye afilándose en un tenue suntuosos, llenos de gente que bosteza.. . hilo de senectud.. . El cortejo cruza entre la muchedumbre En plena mañana dominical, en medio que le abre paso, respetuosa, y mientras de la plaza que llena la algarabía de los los hombres se descubren ante el ataúd, mercaderes y ? o s compradores, irrumpen se va alejando, con su música alegre-conlos compases d e una música alegre, de una traste con las caras doloridas hacia el  pieza de baile. minúsculo cementerio que está allá, a la A  pesar de su alegría, esa música acom - salida de Taxco. Asciende por una calle. . . Baja por  paña un enti erro . Adelan te va la caja : ilu mina la tapa una corona de caléndulas ro - otra. . . Se pierde. Es la tradición.  jas.
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OFICIAL

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Ley sobre Irrigación con aguas Fe

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Tomada del Diario Oficial de la Federación, número 7 Tomo XXXIV. correspondien te al sábado 9 de enero de 1926.

Al

margen un sello que dice: Poder Ejecutivo Federal. Estados Unidos Mexicanos. México. Secretaría de Goberna ción.

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El C. Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, se ha servido dirigirme el siguiente Decreto :

PLUTARCO ELIAS CALLES,

Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, a s u s habitantes, sabed.

Que el H. Congreso de la Unión se ha servido dirigirme el siguiente Decreto :

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“El Congreso de los Estados Unidos Mexicanos, decreta : LEY SOBRE IRRIGACION CON AGUAS FEDERALES.

+.

extensión y cultivo, siempre que sean sus ceptibles de aprovechar ag uas de jurisdic ción federal.

LOS dueños de las propiedades referi das, quedan obligados en los términos de esta ley, a construir y conservar las obras hidráulicas que el Ejecutivo determine, conforme a las prescripciones de la misma. Articulo 39 Para promover y construir obras de irrigación en la República se crea un órgano administrativo que se denomi nará “Comisión Nacional de Irrigación”. La mencionada Comisión dependerá de la Secretaría de Agricultura y Fomento, y constará de tres miembros nombrados por el Presidente de la República, por conduc to de la propia Secretaría. Articulo 4’--La Comisión Nacional de Irrigación además de las atribuciones y los deberes que le imponga el reglamento de esta ley, tendrá los siguientes : 1. Estudiar las posibilidades de irriga ción del país y seleccionar, para su ejecu ción, las obras que reporten mayor benefi cio, desde los puntos de vista financiero o de11.los Formular intereses generales de larelativos,  Nació n. los proyectos

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Articulo 49-De conformida d con lo dis  puest o por el párraf o tercer o de l artícu lo 27 constitucional, la propiedad agrícola determinando, en cada caso, las zonas que  privada y los derechos de los usuarios de deberán irrigarse, las propiedades que en aguas ¿e jurisdicción federal, quedarán suellas queden comprendidas, la formación  jeto s a las modali dades que la pre sen te de los presupuestos de las obras proyecta ley establece para la construcción de obras das y la parte de su importe que deba re de irrigación y pago de las mismas, así como la conservación de ellas y la mejor  porta r cada finca, según las bas es que fije el reglamento de esta ley. distribución de las aguas aprovechables. 111. Comunicar cada proyecto aproba Artículo P- S e declara de utilidad pú  blica la irrigación de las  propi edades agrí - do a los interesados para que, dentro de colas privadas, cualesquiera que sean su un término que no exceda de tres meses,

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-- pre se nt en sus observaciones y manifiesten si están dispuestos a construir directamen te las obras. IV.-Publicar un extracto de cada proyecto para que, dentro del término de se senta días, se presenten a la Comisión las solicitudes y objeciones de los propietarios que no hubieren sido incluídos y que deseen serlo, y de los que se estimen perju dicados con la construcción de las obras  proy ect udas . V. Examinar las observaciones que se  pre se nt en y dec idi r la s modifi caci ones qu e hayan d e hacerse a cada proyecto, bajo el concepto de que sólo podrá excluirse una propiedad cuando se demuestre que dentro d e las condiciones previstas, no e s económicamente conveniente la irrigación de su5 tierras. VI. Observar las siguientes reglas en los casa5 de conformidad total o  parc ial ?e los  prop iet ari os afe cta dos.

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a). Recomendar a la Secretaría de Agricultura y Fomento, si la confo-midad es total, que otorgue al o a los interesados, la concesión respectiva, siempre que la solicitud para tal concesión sea presentada inmediatamente y que el o los concesiona rios . se. comprometan a sujetarse a las prescripciones de esta ley y de su reglamento, respecto a los  plazos de ejec ución de la s obras y del fraccionamiento de las tierras irrigadas.  b).-Aportar por el Gobi ern o Fe der al la parte del costo de ejecución del proyecto que corresponda a los inconformes, si dicha parte no excede del veinticinco por ciento del importe derramado de las obras, y dejar la ejecución de éstas, a los intere sados que hubieren manifestado su con formidad, siempre que, además de satisfacer las requisitos del sub - inciso (a), ga ranticen de modo satisfactorio para la Co misión, el buen uso de la parte con que ella contribuye. c).-Encargarse de la ejecución de las obras si la parte del costo de las mismas que toca a los inconformes excede del vein ticinco por ciento, en cuyo caso admitirá como asociados a los interesados confor mes, mediante la oportuna aportación del dinero con que deban ellos contribuir.

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Artículo 5" En todos los casos en que la Comisión se encargue de la ejecución de las obras o que contribuya con una parte de su costo, el Gobie-no Federal será compensado con una proporción de las tierras irrigadas. Esta compensación deberá repartirse entre los propietarios de dichas tierras, en forma tal, que 12 relación entre la superficie que pasa al dominio de la Federación y la que conserven los propietarios, sea igual a la que exista entre el cmto resultante de las obras por hectárea y el valor fiscal de las tierras, (por la misma unidad de superficie), tenían antes de la ejecución de las obras referidas, mas un tanto por ciento que en cada proyecto se fijará de manera que el propietario conserve tierras cuyo valor, ya irrigadas, sea igual al de la superficie total antes de que las obras se ejecuten.

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Artíc ulo @--En todo s lcs casos de inconformidad de los propietarios de tierras  para cont ribu ir prop orci onal ment e en la ejecución de las obras de irrigación, los poseedores o arrendatarios pcdrán sustituir a aquellos en el uso y cumplimiento de los derechos y obligaciones que les asigna el inciso V I del artículo 4" de esta ley, aportando las correspondientes sumas de dinero y recibiendo, en tierras irrigadas, com pens aci ones sim il are s a las que con fie re al Gobierno el artículo 5". Articulo P-Antes de proceder a verificar las obras, la Comisión fijará las proporciones que de la " zona de irrigación " corresponda a los propietarios, poseedores o arrendatarios, comunicándoles esta resolución para sus efectos. La inconformidad de los interesados, se decidirá a opción de ellos en la vía administrativa o en la judicial, en las que al mismo tiempo se resolverá la traslación de dominio a favor del Gobierno Federal o de quien lo sustituya en sus derechos. Elegida una de estas vías, no podrá intentarse la otra. En el caso de optarse por la vía judicial, el Juez resolverá sin recurso ulterior,  previ a audi enci a de los int ere sad os y en un término de prueba que no exceda de treinta días. (Continuará en el hróximo  nt ime ro ).

5

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na Circular a los §res. de los Estados

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ESEANDO la

Comisión Nacional de Irrigación reunir la mayor suma de datos posible sobre las obras de riego que convenga llevar a ca bo en l as div ers as re giones de la República , celebró una Jun ta en la que se acordó por unanimidad, dirigir circulares a las principales autoridades del  país, a fin de que, con el conocimiento que es de suponérseles de las ne cesidades de los territorios que gobiernan, se sirvan documentar a la ComB.. * sión con toda clase de informes sobre los  proyectos o inlciativas que parezcan viables y cuya ejecución pueda redundar en el fomento agrícola de cada comarca. Este acuerdo mereció la aprobación del señor Pr esident e de la República, y con tal motivo, se giraron circulares a 10s señores Gobernadores de los Estados, exitándolos a secundar al Ejecutivo Federal en sus propósitos. A continuación i nsertam os el text o de la invitación de referenci a, y en números siguientes de esta Revista daremos a conocer a nuestros lectores, las contestaciones que se sirvan dar a la circular y al cuestionario que la acompaña, los señores Gobernadores. Pero las gestiones de la Comisión en este sentido, no deben limitar se a la acción oficial. En todas las Entidades que integran nuestra unión  política, radic an ingenie ros que conocen de mane ra más o menos perfecta las cuencas, los recursos hidráulicos, la calidad de las tierras, la clase de cultivos, el régimen pluviométrico, etc., y de esos técnicos también espera la Comisión un acopio de datos que permita apreciar con la mayor exactitud  posible , la convenien cia de emp ren der estud ios más profundos y concretos y de erigir las construcciones que aporten algún beneficio a las zonas agrícolas y a los colonos. Por, supuesto que todos los datos que reciba la Comisión, serán discutidos científicamente y en los casos que se consideren practicables, se  procu rará ayuda r a las autoridades locales y a los particulares que les pres ten su contingente, con los medios de que se disponga, ya sea dirección técnica, instrumentos, maquinaria, datos hidrológicos, meteoroIó&cos, etc., o, en fin, de cualquier otra manera que contribuya a hacer mas eficiente el esfuerzo de los iniciadores : bie n ente ndi do que la Comisión no dispo ne de

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,

propósito de fijar de una manera precisa 10s heamient os generales de una política nacional de aprovechamientos hidráulicos, esta Cxnisi6n Nacional de Irrigación presentó a la consideración del C. Presidente de la República un programa regulador de sus actividades en los  próximos años, sirviéndose concederle su aprobación el propio Primer Magistrado, especialmente en el punto que se refiere a buscar una estricta coor dinación de los esfuerzos del Gobierno Federal y de las autoridades locaLes de los Estados y una sana colaboración del  primer o con relación a las otras para el efecto de lograr una acción conjunta más efectiva a  par ti r del  próximo ejercici o fiscal de 1931. Es en cumplimiento de tal proposito y de acuerdo semejante, por lo que tengo la satisfacción de dirigirme a usted, en su calidad de representante del Poder Ejecutivo de ese Estado, para darle a conocer el programa diseeitido y aprobado y las consecuencias que de tal programa espera la Comisión  Nacional de Irri gación , s i, como su pon e, ha d e contar con la  buena vo lunta d de usted para secundarlo. Al dictarse la Ley de Irrigación con aguas iederalles en enero de 1926 y establecerse el organismo encargado de aplicarla, se estableció el criterio de  busc ar, ant e todo, el beneficio del rieg o sob re aquellos terre nos ári dos y despoblados que, para su utilización agrícola reclamaban la ejecución de obras de tal magnitud que salían notoriamente de la esfera de la actividad  privad a. Ento nces se iniciaron las gr and es obra s a cargo de l G obie rno Federal que han venido absorbiendo toda la capacidad del presupuesto en el ramo y que han originado o que están a  punto de originar los gran des sistemas de riego “Presidente Calles”, río Mante y río Salado. Tales obras, empero , por su propia magnitud, han obligado a una concentrada atención $el Gobierno Federal en su ejecución y no le han permitido 13 atención de

OtPQS muchos problemas de rie go dist rib uído s por todo el te rri tor io nacional y que quizá con menores esfuerzos individualmente, pudieran crear, a  base de una acertada distribución, núcleos de bienestar colectivo más nu merosos y de más pronta y eficáz realización. Atendiendo a estas condiciones del problema, sin descuidar la ejecución de los grandes proyectos que en un futuro próximo habrán de transfor mar vastas zonas de nuestro territorio capacitándolas para una valiosa producción agrícola, es el propósito de la Comisión de Irrigación, aprobado, re pito, por el C. Presidente de la República, el procurar, durante el ejercicio discal de 1931 y siguientes, una mayor difusión de las obras de riego, multiplicaindolas en número y reduciéndolas en importancia, de manera de sa tisfacer las necesidades o intereses locales que reclamen inmediata atención y que habrán de traducirse en centros de actividad y de trabajo que Sumados, significarán un franco alivio de la situación económica general de nuestro país. Esta Comisión descansa en la seguridad de que tal programa merece rá la entusiasta aprobación de usted, como representante del Poder Ejecutivo de ese Estado, y acude por esto a buscar la colaboración de las auto ridades que usted representa en su realización, pidiendo al Gobierno de su digno desempeiío que se sirva someter antes del día  prime ro de octubre  próximo, un programa genera l de tra baj os de irrigación den tro de su Esta do, acompañado de los estudios técnicos prelsminares en que se funde y que consistan en trabajos un poco superiores a simples reconocimientos, sin llegar a la precisión de estudios definitivos. De igual manera le ruego se sirva manifestarme en qué condiciones el Gobierno del Estado, las autoridades Municipales o los intereses privados podrán colaborar en la ejecuciónde las obras, bien mediante aporta ciones en efectivo, bien por cooperación en labores personales o bien en aportación de útiles y materiales reclamados por los diversos trabajos. Al efecto adjunto se servirá usted encontrar cuestionario que encierra los  puntos de int erés para el Gobierno Federal en sus relaciones con el de esa entida d, cuestionario que deb erá ilus trarse con el mayor ni;mero de  planos, estim acione s y datos técnicos concu rren tes a la dedinación preci sa de 10s  proyectos de que se tr at e. Es el propósito de esta medida el de contar en tiempo oportuno con los datos fundamentales de las obras que habrán de iniciarse y emprender se en el año próximo, para poderlas incluir, de ser aprobadas, en la asignación correspondiente del presupuesto de la Comisión, a fin de dejarla capa-

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recursos ilimitados, ni prestará su apoyo sino a aquellas obras que cuenten con la de bida protección y elementos de los gobiernos locales. La Comisión Nacional de Irrigación hace, pues, un llamamiento for mal a todas las personas, oficiales o particulares, que puedan contribuir con algún conocimiento a la solución del  proble ma hidráulic o en el país , para que le envien el fruto de sus observaciones, en la inteligencia de que todo trabajo que sea presentado de buena fé, será debidamente tomado en consideración. La Circular dice así:

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citada económicamente para la atención de tales trabajos en las condiciones de  política gener al que seña la l a pre sen te circular. Este vasto programa de activi dades de la Comisión puede hacerse extensivo al aprovechamiento de aguas subterráneas a través de un Depar tamento de reciente creación en la Comisión de Irrigación que habrá de ocuparse, disponiendo del equipo adecuado, de la exploración y explotación de la riqueza hidrológica del subsuelo. Si ha llegado a conocimiento de ese Gobierno la posibilidad de explotar aguas subterráneas en condiciones fa vorables, pueden fundarse, sobre los estudios preliminares que tal depar tamento habrá de perfeccionar, trabajoe de organización de sistemas nacionales de riego, en los casos que la carencia de precipitaciones o corrientes superficiales imponga el aprovechamiento económico y racional de ta les recursos. Al comunicar a usted lo anterior, séame permitido encarecerle la in mediata atención a la presente circular unida a su personal y entusiasta esfuerzo en favor de la politica expuesta, de la que, con todo fundamento, debe esperarse un florecimiento definitivo para ese Estado y en su conjunto un paso seguro y firme en la estabilización de la producción nacional y en el consiguiente bienestar de la población que en ella finca su esperanza de liberación económica y general engrandecimiento. Reitero a usted con este motivo las seguridades de mi más atenta con sideración y  personal aprecio.

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IO.-¿Los terrenos que inunden las presas se utilizan actualmente para la agricultura o están baldíos? 11.-¿Se han hecho estudios técnicos, por algún ingeniero, de los proyectos anteriores? Si acaso es así, remítase una copia de ellos. 12.-¿Con qué materiales se cuenta cerca del lugar de la obra para ejecuta rla? (Tales co mo piedra, cal, cemento, arena, etc.). 13.-;Cuáleb son las vías de comunicación para poder llevar los materiales al lu gar de la presa? 14.-iQué obras de irrigación han sido pensadas por los vecinos de las poblaciones de ese Estado y que no hayan podido ejecut arse por ser demasiado costosas? 15. En caso de hacerse obras de irrigación ¿cuáles serían los centros de consu mo más cercanos para los productos agrícolas que se obtengan?

-

16.-¿Cuáles sería n las vías de comunicación para llegar a estos centros de consumo? l7.-¿Hay regiones que se inunde n periódicamente? 18.-¿Las aguas de qué río inundan las regiones mencionadas? 19.-Los arroyos que atrav iesa n esas zonas ;a qué ríos llevan sus aguas? 20.-¿Existen pantanos o lagunas de superficie considerable que puedan ser desecados? 21.-iCuáles son los ríos más cercanos B que pueda arrojarse el agua de esas lagunas ? 22.-¿A qué distancia están l os ríos de las lagunas o  pant anos ? 23.-¿Hay algún obstáculo en el terreno, que exija la perforación de túneles para el desagüe de las lagunas o  pan ta nos ? 24.Si se llega a desecar la región ¿cuáles serían los mercados más cercanos para los  produc tos agríc olas que se obt eng an?

El Director General, Ing. IGNACIQ LOPEZ BANCALARI. CQMISION  NACIONAL DE IRWIGACIQN Cuestionario anexo a la circuiar de 3%de marzo  de 1930, girada de l o s Estados.

a

los Gobernadores

1.-¿En años ordinarios, son suficie ntes los productos agrícolas para las necesidades de la población, o se tienen que llevar semillas de otros Estados? 2.-¿La escasez de productos es debida a agotamiento de la tierra, a falta de riego, a sobra de agua en el subsuelo o a deficiencia de las vías de comunicación dentro del Estado o con los vecinos? 3.-¿Cuáles riego? 4.-Cuáles de humedad en 5.-¿Hacia

son las zonas del Estado en que se pierden las cosechas por falta de

aI 'í

son las zonas del Est ado e n que se pierden las cosechas por exceso el suelo? qué ríos corren las aguas d e los arroyos que hay en esa zona?

6.-¿En cuáles de los ríos de esa Entidad se podrían hacer presas de a lmacena miento? ?. Indicar respecto d e cada presa los dat os que se tengan sobre su altura proba  ble y longi tud. &-Indicar qué volumen de agua, aproximada mente, podría almac enarse por medio de las presas. 9.-zLos terrenos que inunden las presas, son propiedad de la Nación o de propie dad particular?

I

25.--¿Cuáles serían los medios de comunicación para llegar a ellos? 26.-¿Hay regiones del Estado en donde se conozca la existencia de aguas sub terráneas ? 27.-¿Qué ingenieros las han explorado y a qué conclusiones lle garo n? 28.-En los pozos que se han perforado en la región ¿las aguas han subido sin necesidad de bombeo hasta la superficie o a qué profundidad ha habido necesidad de  bom bea rl as? 29.-Las agua s de los  pozos ordi nar ios ¿s on sal ada s o dulces? 3O.-¿Pueden esas aguas domin ar por su nivel a regiones que necesitan riegos,  bie n de nt ro de es e Est ado, o  pas ando a ot ro?

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59

58 J

3

31.-En caso de poder uti lizarse ¿cu ále s serí an los centros de consumo de los productos agrícolas que se obtengan? 32.-zCuáles serían los medios de comunicación para llegar a ellos? 33.-¿Cuáles son los cultivos que se acostumbran en ese Estado? 34.-¿Cuáles son sus rendimientos? %-Se han hecho algunas medidas ra el cultivo?

de

i

,-

las cantidades de agua que se necesitan pa-

El riego en las grandes  pampas argentinas'

%.-¿Qué

ingenie ros las practi caron? qué resultados llegaron? 38.-;Se ha medido la cantida d de agua que llevan los ríos de esa región en tiempo de secas y en tiempo de aguas? 39.-;Hay tierra s ociosas propias para el cultivo? ¿ Q u é clase de- cultivos podrían emprenderse en ellas?

37.-~A

DESCRIPCION DE LOS PRINCIPALES PROYECTOS DE OBRA§ HIDRAULICAS ACORDADAS POR EL GOBIERNO DE ARGENTINA PARA EFECTUAR EL RIEGO DE GRANDES EXTENSIONES DE TERRENOS  Po r  Rodolfo  E .  BALLESTEROS"

40.-¿Cuáles son los jornales que se pagan en la región? 41.-~Hay campesinos desocupados? 42.-En caso de empre nderse alguna obr a en el Estado, ¿qué cooperación podría dar el Gobierno de esa Entidad? 43.-~Qué

447-2 Qué

Esperando que nuestros lectores leerán con interés breves descripciones de las obras que en materia de regadío se llevan a cabo en otros países, nos permitimos repro ducir aquí un informe oficial sobre los trabajos de irrigación realizados en las inmensas llanuras de la Argentina, informe que acaba de aparecer en la importante Revista " In geniería Internacional ".

cooperación podría esperarse de las Autoridades Municipales? cooperación podría esperarse de los particulares?

-

A Argentina tiene en su vasta exten-

 Notas Breves Los agricultores, industriales y mine ros del Estado de Chihuahua, se muestran optimistas en virtud de que ha llegado mu cha agua a la presa de La Boquilla, lo cual hará que se inicien cuanto antes los tra baj os de l gran can al que es tá en proyecto, dando ocupación a algunos centenares de individuos.

-

Invitado por el Director de la Comisión  Nac ion al de Irri gac ión, el señ or Sec ret ario de Hacienda recorrió las márgenes del lago de Chapala, cuyas tierras en una grande extensión serán regadas por las aguas que contendrá la futura presa de "Comales ", en Piedad Cabadas. Igualmente visitó los lugares en que se hará el aprove chamiento de l a s aguas del río Lerma, así como la presa de Tepuxtepec, a petición de la Compañía de Fuerza del Sureste de México. Una vez en esta capital, el s u s o dicho funcionario estudiará la forma en que el Gobierno Federal cooperará al mayor desarrollo de los trabajos que se inicien.

En el curso de la  pre sen te se ma na se van a iniciar los trabajos de preparación de las tierras que se dedicarán al cultivo regadas por las aguas de la  pre sa de "D. Martín ", a fin de lo cual el C. Secretario de Agricultura y Fomento dió instrucciones para que se construyan los canales ne cesarios. El Gobierno del Estado de Coahuila, cooperando con la Comisión Nacional de Irrigación, se ha dirigido a las agru paci ones cam pesi nas hac iénd oles ver la conveniencia de que soliciten terrenos para colonizarlos, sie ndo las condiciones de pa go extremadamente ventajosas.

El C. Presidente de la República acaba de expedir un decreto declarando de utilidad pública la preparación para el cultivo con riego y la colonización de las tierras comprendidas en los sistemas que dependen de la Comisión Nacional de Irrigación, facultando a la misma para que tome las medidas conducentes al exacto cumpli miento del mismo decreto.

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sion, regiones en las cuales es indispensable el riego para obtener buenas cosechas. En algunas provincias los indios habían construído ya sistemas de canales antes del descubrimiento del país; en otras esta actividad se inició con la colonización española, pero el mayor desarrollo ha teni do lugar en los últimos cuarenta años. Ea Dirección General de Riegos dependiente del Ministerio de Obras Públicas de la  Nac ión tie ne a su cargo los trabajos de regadío, desagües y corrección de r í o s en la República. Estos trabajos pueden dividirse en tres clases: Mejoras de regadío existentes, obras nuevas, y estudios. Aquellas se lle van a cabo especialmente en las provincias del Oeste en ríos de escaso caudal y consisten en el revestimiento de canales, construcción de nuevas presas y embalses y (1) Preparado por orden del, Director ,General de Irrigación de la Argentina Ing. D i e g o F. Outes  po r el I n g Civil Rodolfo E. Ba1,lesteros, Inspector General de la Zona Sur de dicha repartición. * Ingeniero civil, Inspector General de la Zona Sur de las obras de riego en la zona sur.

61

sobre todo, la organización de la distribución, estableciendo una legislación unifor me en el aprovechamiento, pues muchos derechos de uso de agua que arrancaban de la época de !a dominación española dificultaban la distribución equitativa del

 Núcleo celul ar del dique de escollera de La Rioja

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espesor término medio: su altura máxima es de 22 metros. Su longitud en el coronamiento alcanza a 1,235 metros y el volúmen de la obra es de 720,000 metros cú  bicos. La descarga se hace por un tubo de hierro que cruza el dique dentro de un túnel de hormigón armado. Una torre de toma regula la alimentación desde aguas arriba y válvulas esclusas regulan la salida, aguas abajo.

Dique del  Neuqu én. Presa con 17 compuertas de 20  por 4 metros agua disponible en los ríos. Las obras nuevas comprenden la construcción de embalses,  pre sas y redes de distribución, y se han llevado a cabo en provincias y territo rios federales. Los estudios comprenden los necesarios para el proyecto de obras nuevas y la medición de caudales y cono cimiento de elementos hidrográficos en los ríos de la República para su aprovechamiento en el regadío. Superficies  de los Regadiosadministra Las superdos p or  el Gobierno Federal. ficies de los regadíos cuya administración hace actualmente el Gobierno Federal está indicada en el cuadro que sigue y dividida según provincias.

-

Provincias

Salta.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Jujuy.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Catamarca. . . . . . . . . . . . . . . . La Rioja . . . . . . . . . . . . . . . . . . San Luis. . . . . . . . . . . . . . . . . . Terr. Río Negro.. . . . . . . . . . . Terr. Neuquén. . . . . . . . . . . . .

Superficies en Servicio Hectáreas

Total . . . . . . . . . . . . . . . .

1.710 7.000 12.170

4.130 10.600 57.670 6.200

6rande s extensiones regadas existen en las provincias de Mendoza, San Juan y Córdoba administradas por los estados  provinc iale s que no se incluy en en el cuadro anterior. Descripción  d e algunas  obr as: Entre las obras nuevas proyectadas y construídas o en construcción por la Dirección Ge neral de Irrigación son de interés las siguientes :

El  pan tan o se al ime nta en los meses de verano y suple las deficiencias del río en los meses de invierno. La re¿ de canales alcanza unos 80 kilómet os de desarro llo, podrá servir un área de 15, 000hectá reas.

El dique tiene vertedero de seguridad fuera del cuerpo del mismo, pero por una mayor precaución s e ha previsto que e n ca: so9 excepcionales pueda pasar agua por encima d e la cresta. El volumen del pantano a la altura de la cresta del vertedero es de 12 millones de me tros cúbicos.

Dique del Potrero  de los  Fune s. P a r a la provisión de agua a la ciudad de San Luis y regadío de sus alrededores se ha  bía cons truí do en 1876 un dique de mam poster ía. La ampli ación de ambos ser vi cios y el aumento del rendimiento de la cuenca imbrifera mediante la desviación de un arroyo hacia ella, hizo necesario am pli ar la capa cida d del pant ano, que s e re-

Dique de Embalse de  La  Ri oja . Ida mejora y ampliación de regadío en los alrededores en la ciudad de Ea Rioja, capital de la provincia del mismo nombre, hizo  preve r la constr ucción de un dique en la quebrada de Los Sauces que se encuentra actualmente en ejecución. La obra tiene las características si guientes :

11,'

Presa en arco en Potrero de los Funes

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62

Dique en arco de hormigón armado de 33 metros de altura, espesor en la base 5,70 metros, espesor en la cresta 1,30 me tros, radio de! arco 2035 metros, longitud en el coronamiento 4035 metros, volumen de hormigón 2,230 metros cúbicos.

 Dique $e Embalse La Ciénega. Está situado en la provincia de Jujuy, la más septentrional de la República. Es un dique de embalse lateral al curso del río Perico que cierra una depresión o quebrada situada en la margen derecha del valle del mismo río y que se alimenta por un canal de 9 kilómetros de longitud, que arranca de una presa construída en El Tipal.

El embalse tiene una capacidad de 28 millones de metros cúbicos. El Dique es de tierra con taludes de aguas arriba, y aguas abajo protegidos con revestimientos de piedra sentada en seco, de un me tro de

99.480

solvió mediante la construcción de un dique nuevo, aguas abajo del antiguo, que tiene las siguientes características :

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i Dique de escollera de piedra suelta no alcanza a 560 millones de metros cúbi arroja desde transportadores aéreos y dis- cos a la altura de la cresta del vertedero. tribuída a mano en los taludes. Taludes La descarga se efectuará por medio de de 1 : 1 aguas arriba, de 1,5 : 1 aguas dos túneles, uno para la instalacibn hiabajo. Núcleo central impermeable de hor - droeléctrica de 10,000 caballos proyectada migón armado, celular para permitir su al pie del dique, y otro para el servicio del inspección. La a ltura del dique es de 43 riego y descarga normal del río, ambos exmetros sobre el nivel del lecho del río y el cavados en la ladera del río fuera del cuer núcleo penetra hasta la roca en una pro -  po del dique. fundidad de 23 metros, 10 que da para su  Diq ue del Neu qué n y Obras de  rieg o altura total 66 metros. El vertedero de  del  R; o  Neg ro Sube rio r. El valle del Río seguridad se ha excavado en la ladera de -  Negro , sit uad o en la part e sep ten tri ona l recha y su cresta está a 5 metros debajo de la Patagonia, presenta una superficie del coronamiento del dique pudiendo va - con unas 300,000 hectáreas regables. ciar hasta 1,400 metros cúbicos por se Como parte de un plan de corrección gundo. de crecidas y obras de regadío se  previó El volumen del pantano, a la altura la construcción de una presa de desviación d e l a c r e s ta del vertedero es de 21 millo - en el río  Neu qué n a tre int a kil óme tro s nes de metros cúbicos. aguas arriba del origen del río Negro, donLa descarga del caudal utilizado se ha - de se vuelca el otro afluente denominado Limay. ce mediante una torre con toma y túnel excavado en la ladera.

 Di qu e de  Emb als e W;o PZZ. Con el tri  ple propósit o de red uci r inund aci ones, creación de energia hidroeléctrica y apro vechamiento en el riego se encuentra en construcción un dique en el Río III,  provincia de Córdoba, de 'la ssiguientes ca racterísticas. Dique de escollera de piedra transpor tada con vagones, taludes de aguas arriba de 1,2 : 1 y aguas abajo 1,4 : 1, altura del dique sobre el nivel del lecho del río 50 metros, longitud en el coronamiento, 365 metros. Para hacer impermeable el dique se construyó un ataguía de hormigón armado en la cara aguas arriba de la escollera, del mismo tipo del construído en Dix River Dam en Estados Unidos; el vertedor d e seguridad se ha excavado en la ladera y su cresta está a 3,50 metros debajo del coro namiento del dique, el volumen del panta-

IRRIGACION EN MEXICO

El dique del Neuquén, permitiría el  go bier no del río en un punto en el cua l se derivarían los excesos de las crecidas a una enorme depresión lateral al valle del río, de 5,000 millones de metros cúbicos de capacidad y cuyo fondo se encuentra a 45 metros más - ba jo que el nivel de la cresta de la presa, asegurando la alimentach de un canal de regadío para servir un área de 55,000 hectáreas. La presa, constituida por 17 compuertas Stoney de 4 metros de altura y 20 metros de luz, tiene 12 compuertas construídas y 5 en construccion. El sistema de riego para las 55,000 hectáreas comprende un canal principal de 130 kilómetros de longitud y 700 kilómetros de red de cana les de distribución y secundarios. 45,000 hectáreas están a la fecha bajo cultivo y se estima en 7.500,OOO pesos argentinos el valor anual de las cosechas levantadas en el año de 1921-1928.

64

f

1

COMISION NACIONAL DE

IRRIGACION

GRAL. MANUEL PEREZ TREVIESO. Presidente de la Comisión: Comisionado, Vocal Ejecutivo : ING, IGNACIO LQPEZ BANCALARI. Comisionado, Vocal Secretario : ING. LEOPQLDQ VAZQUEZ. -

REVISTA MENSUAL ORGANO OFICIAL

DE LA COMISION

 NACIONAL

DE

IRRIGACION

OFICINAS:

OFICINA DE PUBLICIDAD

ESQUINA BALDERAS Y AYUNTAMIENTO

Director y Jefe de Redacción. ROBERTO QUIROZ MARTINEZ, Administrador. ISMAEL M. LOZANO, ING. FERNANDO BELTRAN Y PUGA, Agente Generál de Publicidad.

T E L E F O N O E R I C S S O N 3-41 -71

Toda la correspondencia deberá dirigirse al Administrador. COLABORADORES Ing. Aguilera José G . ,, Anda Manuel D.

Arteaga Luis. Ballesteros Luis P. Bancalari Manuel. Barocio Alberto. Brambila Alejandro. ,, Beltrán y Puga Fernando. ,, Bustamante Octavio. Lic. Cabrera Luis. Ing. Castelló Alfonso. ,, Coria Antonio. ~, Corral Joaquín. (, Cuevas José A. Chávez Eduardo. Lic. Chico Goerne Luis. Ing. Domínguez  Norbert o. ,, Dozal Fortunato. ,, Gama Valentín. García Julio. ,, García Lascuráin Angel. ,, García T. Fernando. ,, García Manuel. ,, Gayo1 Roberto. ~, González Pedro A. Lic. Gonzále z Roa Fe rnando. ~, 1.

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SUMARIO

Lic. Herrera y Easso José. León Alfredo D. ,, Monjes L. Ricardo. Sr. Monterde y García Icazbalceta

Págs

9,

La Política de Irrigación del Gobierno Federal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Francisco.

Ing. Noriega José S. . ,,

Uropeza

5

LONIZACION SECCION DE ESTUDIOS, CONSTRUCCIONES Y Deflec tor" de la  pr esa "Don Martín". . . . . 15 Proyecto del río Salado.-"Umbral

Jesús.

1

Olvera Montiel Genaro. Lic. Ortia Carlos. Ing. Peimbert Angel. ,, Perogordo Moisés. ,, Pérez Castro Lorenzo. Dr. Pruneda Alfonso. Ing. Quevedo Miguel A. de. ,, Ramírez Uiloa Carlos. Ramos Federico. Rodríguea Antonio. ,, Roe1 Paustino. ,, Sánchez Pedro C. ,, Sánchez Mejorada, Javier. ,, Santa Cruz Jr. Armando. ,, Saucedo Vicente. ,, Serrano Gustavo. ,, Toscano Ricardo: ,, Valdés Luis G. ,, Villaseñor Manuel. Dr. Waitz Paul. ~,

 In g.  Na nu el Banc ala r;.

Ligeros datos sobre las condiciones geológicas de algunas  pr es as . . . . . . . . . . . 19  Dr.  Paul Wa it z.

SECCION EDUCATIVA Y DE DIVULGACION

. .Ing.

Espirales de Transición  par a canales . . . . . . . . . Los usos científicos de las Cartas Agrológicas

Carlos Ramírez.

 .D r. Chas F. Shaw. (Tra2ucc;ón  del dng.  A .  Ro dr íg ue z) .

~1

ss

LOS AUTORES §ERAN LO§ UNICOS RESPONSABLES DE SUS ARTICULOS.

I

SECCION EDITORIAL

28 30

 .A lf re do d e Le ón , ir .  32 i Técnicos ! Técnicos ! . . . . . . . . . . . . . Casas  pa ra Colonos, . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Ing.  Ale jan dro Bra mb il a. 34 El Movimiento Cientifico.-La Asti onomi a. . . . . . . . . . . . Otto Von  Ld xn er . 38

SECCION ECONOMICA, COMERCIAL Y ESTADISTICA

-Sus Elementos de Riqaeza. . . . . . .

Aguascalientes.

 .R ob er to Quir ós Ma rt ín ez .

39

SECCION DE CONSULTAS Labores que desarrolla la Oficina de Organización de §istemas de Riego de la 52 Comisión Nacional de Irrigación.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . l

l

i Págs.

SECCION DE NOTICIAS Final idade s y funciones de la Oficina Federa! pa ra la Defensa Agrícola. Cam pañ a cont ra la lan go st a.. ................................................ 55

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1 ) .. . . . . . . . 59 . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . 61

Ley sobre Irrigación con aguas Federales. (Continúa del número  No tas brev es.

rrigación

SECCION EXTRANJERA Una presa de la India que está considerada como la mayor del Mundo. De “Engineering News -Record”. . . . . . . . . . . .Traducción de Dolores Garcia Bragg.

-

Grandes Obras de Riego en Chile..

......................................

ierno

’. 62

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N

el número de ”Excelsior” del 21 del próximo pasado abril aparece las zonas áridas en México” en el que comenta otro del señor Lic. Carlos Pere yra sob re el misma asunto. El señor Gamio recalca Ea creencia que, segGn él, está muy generalizada en los Estados Unidos de que presentan relativamente es casa importancia respecto al mejoramiento económico social, las dabrae de irrigación que se han efectuado en aq 1 pa ís” . Tr an sc ri be e n apo yo de su dicho un juicio critico del Dr. Ysaiah owman, quien califica de  pa ra do ja

SECCION BIBLIOGRAFICA Estudio de Climatología Comparada con Aplicaciones a la República Mexicana. Ing. PeJro C.Sánckez.

un artículo del Br. Manue l Garnio ‘‘La Irrigación de

66

LL

el  pr et en di do de sa rr ol lo de la s zo na s n o ex plo ta da s o áridas del mundo,  po r me di o de la magia de la %rrigacibn”y que si la ingeniería tuviera el  po de r de transformar los desiertos del mundo en productivos jardine s, sería preferible abandonar z onas de agricultura normal para dirigirse entusiastamente a cultivar los desiertos”. La Comisión Nacional de Irrigación, que tiene a su cargo la  polític a d e riegos del Gobierno Federal, no desea entablar polémicas, ni menos pro vocadas -como sería el caso  por argumentos impresionantes si se quie re  pa ra el grueso público, pero carentes de solidez, como que se apoyan en razonamientos incompletos y cifras y hechos mal interpretados. Sin embargo , por es ta ve z de se a la mi sm a Comis ión re ct ifi ca r alg uno s co nc ep to s con tenidos en el articulo de que se trata par a evitar que la opinión corriente ...  pr sh ij e pr eju ic ios que le impidan apreciar las proporciones  j u s t as y la tras cendencia de la  pol ític a de ir rig ac ió n qu e el Estado viene desarrollando a costa de grandes esfuerzos. LL

res% Pabellón

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RESENTAMOS

a nuestros lectores en la primera página una interesante fotogra fía de la presa de la Hacienda de Pabellón, en Aguascalientea; esta presa fue construida durante la época virreynal y se conserva todavía en muy buen estado, dan do excelentes servicios. Corno en la época en que fue construida no se conocían con exactitud los prin cipios de hidráulica que s e aplican actualmente al proyectar esas obras, el muro ado lece de defectos muy marcados, es más grueso de lo necesario en la  bas e y muy delgado en el coronamiento, además no s e proveyó a la presa de un derramadero amplio para dar salida a las aguas excedentes en las grandes avenidas del río, por lo que toda la presa funciona como vertedora y las aguas caen golpeando eetrepitosamente en los escalones de la mampostería. Estos defectos del proyecto están compen sados por la magnífica ejecución de la mampostería que junteada con cal ligeramente hidráulica, ha llegado a formar un verdadero monolito de toda la presa.

El

vaso de la presa es muy reducido y en la fotografía se puede ver lo cercano de los flancos de la montaña de la margen derecha del rio. Los terrenos que riega esta presa quedan comprendidos actualmente dentro del sistema de riego “Presidente Calles”, y por lo tanto sus aguas ya no son indispensa  bles para el riego de ellos.

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***

Las opiniones del Dr. Bowma n -que

parec e compartir el extendiéndolas a México respecto a las grandes enseñanzas experimen tales que en materia de irrigación por cuenta del Estado proporciona la

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nación vecina, lo llevan a la concIusón de que solamente han sido  beneficiados con las obras una pob1ación de 13’7,000 per sona s; siend o pue s evidente que la irrigación no resolverá el problem a d e exc eso de población de las zonas agrícolas normales ni el de carácter urbano”. El Dr. Gamio condena en seguida el hecho de que se ha dado preferencia a las obras gigantescas que según él son  para beneficio de unos cuantos ricos terratenientes, en vez de emprender trabajos de riego en pro vecho de medianos y  pequeños agri culto res. Entra después en consideración sobre algunas de las causas de nuestra precaria situacion agrícola, señalando -muy justificadamente- entr e otras, el atraso en la técnica de los cultivos y en los servicios del crédito rural que impiden el refaccionamiento de los agricultores. Estima que me jor ando los  procedim ientos, fomen tando la en señ anz a agrícola y establecien do colonias con elementos mexicanos repatriados de los Estados Unidos de América que cuentan con ciertos elementos propios de trabajo  producaria la agricultura mucho más que hoy, sin necesidad de acudir a irrigar las zonas áridas del país, empresas que serán de resultados problemáticos”.

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Ante todo es  pert inent e precisar numé ric amen te íos resultados alcanzados por el servicio de irrigación americano ( La población de los Estados áridos; con relaci cuando se promulgó la Ley de Irrigacióln, ha aumentado en más de 11 millones y excede de 250 millones de acres la superficie que entonces eran tierras de la nación y que ha pasado a ser propiedad privada. Hace 25 años sólo trans itaban en las pistas del Oeste Americano el carro cubier to que usaron como vehículo de transp orte los  busca dores de oro. Ahora hay 80,000 millas de carreteras pavimentadas con concreto y  petro liza das n a 5 millones el número de carros automóviles que existen en áridos. El agricultor que vive de s u s tierras regadas “gasta más dinero en llantas, gasolina y lub antes que lo que costaba la explotación de la mayor parte de las hacien s e n los  prim eros añ os que sigui eron a la expedición de la ley”. Los cultivos a su vez han experimentado cambios fundamentales. El algodón y la remolacha que no se explotaban hace diez a ñ o s ahora constituyen un renglón importantisirno en las cosechas. La técnica agricola en general ha mejorado grandemente y sólo tiene éxito la agricultura cientí~~

(1) Los datos siguientes en su mayor parte provienen del Dr. Elwood Mead, Comisio nado de Irrigación, publicados en su folleto “Federal Reclamation, What Should Include”.

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fica intensiva capaz de soportar las cuotas elevadas que significan lo s im  puest os, el servici o del agua y los costos de cultivo. El Servicio de Irriga c i ó n ha gastado más de 200 millones de dólares en construir y manejar . . De esta suma ha logrado recobrar algo más del 25% sin extors u s obras. sionar ni imponer gravámenes excesivos a sus colonias; pues como dice  Newell “el objeto de los iniciadores de la ley de irrigación fui el de hacer hombres, y nó dinero: y hacerlos creando oportunidades de formar peque ños hogares agrícolas, que se basten a si mi sm os , en las tierras públicas desocupadas. Los resultados obtenidos deben medirse  por el número de hogares . . de esa clase que se han constituido y no  po- los  provechos pecuniarios obtenidos”. El trabajo de ingeniería realizado representa más de 16,000 millas de canales y más de 100  pres as de almacenamiento y derivación. Incluye 106 túneles, mil y  pic o de millas de caminos y 12 plan tas generadoras de ener gía. Excede de medio millón la  población que vive sobre las 37,000 granjas regadas por las obras federales. El valor anual medio de las cosechas en los últimos años es de más d e 130 millones de dólares, de los cuales 80 corresponden a las tierras que dorman parte de la zona controlada por el Gobierno anexa a los Proyectos federales y 50 se obtuvieron de las obras de riego privadas abastecidas por 10s almacenamientos existentes en los mismos Proyectos. Uno de ellos, tomado al acaso, el de Rio Grande que comprende l o s Distritos de Irrigación de Elephant utte Y Condado de El  porciona datos muy int ere san te s. La sup erf ici e regad a y cu 1904 era de 39,136 acres, ascendia en 1928 a 139,500 acres. El valor de la cosecha recogi a en 1914 fué de Dls. 2.400,000, aumentando en el catad o a ñ o d e 1928 hasta 1s. 12.800,OOO. El cultivo del algodón iniciado en 1919 en una área de 1 4 acres, ocupaba en 1928 104,169 ac versiones hechas directamente con fines agricolas asciende a 41,557,008 de los cuales corresponden 14.840,0063 a construcciones de obras de riego. Como se vé esta s u m a casi queda cubierta con el valor de las cosechas recogidas en 1928. Los resultados

de la colonización en esos distritos pueden apreciarse

 por las siguientes cifras. E n 1914 las granjas o ranchos beneficiados por el riego eran 1,706,en tanto que en 1929 ascendían a 4,802, con  poblaci ones, respectivamente, de 7,700 y 24,980 habitantes. En ese mismo  período la po blación de los centros urbanos comprendidos en los Distritos subió de 81,300

a 148,780 habitantes. S e establecieron 32 nuevas escuelas, 10 bancos y 122 iglesias. Las experiencias reálizadas en la escala en que lo ha hecho el Gobier no Americano para procurar modificar ventajosamente las condiciones geográficas adversas, con las finalida des últimas de ensanchar la capacidad agrícola del país y formar grandes núcleos de nuevas poblaciones rurales, necesariamente han presentado y presentan serias dificultades, no tanto en el orden técnico cuanto en los aspectos social y económico que predominan en los  probl emas de colonización de la s t ier ras rega das. Pe ro esto no resta mérito al esfuerzo, ni disminuye la importancia de los resultados alcanzados, que c o m o lo muestran l o s datos anteriores, distan mucho de tener la exiguidad que les atribuye el señor Gamio.

el riego y la renta de ellas se han duplicado y  por consiguiente la riqueza de los agricultores. 4

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El

Gobierno Inglés en la India ha invertido 75 millones de libras en la construcción de obras de riego q ue benefician una extensión de  26 millones de acres, O sea el 1370 del ár ea total cultivable del país. Una gar te importante de estas obras e s t á clasificada como “de protección”; es decir, que se han construído a sabiendas de que financieramente serían incos. teables, pero que se reputaron urgentes para salvar al  país de las hamb ree  per;iódicas. En cambio, muchas otr as calif icadas de producti vas’’ dan intereses sobre la inversión del 10 al  23 70 en promedio. Per o por satisfactorios que sean estos resulta dos bajo el aspect o comercial, debe justificarse la política d e irrigación de la Indi a desde un punto de vista más elevado. E s dice uckley- un mana nti al de riq ueza y  prospe ridad para el pueblo”. Refi rié ndos e a lo s canales de Punjab considera el mismo autor que han traido consigo b i la expansión de los ferrocarri-

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les y el rápido aumento de sus ingresos; el mejoramiento de las comunicaciones ; el afianzamiento de la estabilidad financiera de la Provincia; las grandes exportaciones de la producción agrícola excedente y el alivio a los Distritos congestionados, gracias a la colonización de tierras públicas incultas . Es  bien conocida la actividad irr igad ora del mismo Gobierno en Egipto. Ahí no cobra cuotas directas por el derecho al uso del agua, que está incluido en el pago del impuesto sob re tierras. El aumento que ha experimentado ese impuesto y el del valor d e las tierras acusa los éxitos fin ancieros de la irrigación. Por una Inversión en obras de riego de 11 millones de libras ha aumentado el impuesto territorial en más de medio millón de libras. En un período de tres a ñ o s el valor de las tierras beneficiadas por ”

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 No es  posible continuar enu mer and o las activida des irr igad oras de otros países, por más que hay algunos como las del Norte de Italia y sur de España, ti erras clásicas de los riegos que nos proporcionan enseñan zas preciosas derivadas de una experiencia var ias veces cen tenaria. No son ciertamente consideraciones utópicas o sentimentales las que han llevado a los Estados Unidos y a Inglaterra  pueblos de innegable sentido  práctico a adoptar en la proporción que lo han hecho, una firme política de irrigación. Igual actitud toman todos los países cuyos territ orios incluyen grandes extensiones áridas, improductivas sin el riego artificial. Lo ha cen en la medida que les  perm ite n su s rec ursos, reser vándos e el Estado la construcción de las grandes obr as en las que es patente el interés nacional y que por su magnitud y costo salen fuer a de las posibilidades d e la iniciativa privada y no son atractivas para el inversionista particular. El esfuer zo de los gobiernos realizado en ese sentido, que no espera ni persigue  provechos direc tos, queda ampl iame nte compensado a la larga con los  beneficios indirectos que le representa la conquista de las zonas áridas. Aquí cabe referirnos al poder mágico que, según el Dr. Bowrnan, la opinión corriente atribuye a la irrigación. Cualquiera que reflexione en la subordinación irremediable en que está el hombre respecto al medio geo gráfico en que se mueve, comprenderá que es absurdo suponer que toda la ciencia humana pueda bastar para modificar radicalmente las condiciones naturales ambientes. “Nuestra actividad hace observar Brunhes está restringida en sus modos y efectos a esas condiciones, aunque en muchos casos parezca dominarlas”. Así  pues, la fertilización de las zonas áridas tiene por límite la cuantía de los recursos de agua que artificialmente pueden hacerse llegar hasta ellas. Ea conquista del desierto estriba en multiplicar y ensanchar los oasis por medio del riego, pero en torno de ellos el desierto seguirá reinando en soberano. Más aún, es bien sabido que si no se ha previsto un sistema eficaz de drenaje y los riegos se hacen inconsideradamente, las tierras cultivables se empobrecen y acaban por perderse totalmente para  $ 8 8 la agricultura.

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Que la irrigación es indispensable para mejorar y ensanchar la capa cidad agrícola del país es una verda d evidente. Las características climatéricas e hidrográficas de nuestra altiplanicie, donde tiene asiento la mayor

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 pa rt e de la población, exigen la captación de las crecientes y la consiguien te regularización del caudal de l o s ríos si se quiere aprovecharlos eficaz mente. Obras de esta naturaleza son muy dispendiosas y de problemáticos resultados financieros inmediatos. Dos razones para que el capital privado no intente abordarlas y sea el Estado quien las construya, y también las explote O  por lo menos imponga las modalidades convenientes a ha explotación. Esto último merece especial atención en nuestra política de riegos, da do que ha sido muy defectuoso el régimen d e la propiedad territorial en nuestro país. Ea irrigación debe irlo enmendando racionalmente y desde luego evitar a toda costa que se perpetiíe o consolide la viciosa concentra ción de la propiedad rústica. Las empresas irrigadoras privadas en nuestro país han sido un fracaso como negocios ministradores de agua, pero en cambio obtuvieron éxito en la especulación de las tierras regadas y en el . ejercicio más o menos licito d e la  pr ep on de ran ci a de hec ho qu e so br e los  pr op iet ari os ru ra le s de la region, les daba su  posi ción de di sp en sa do res del agua. El Estado,  por consiguiente, no debe emprender obras de riego por su cuenta ni favorecer la iniciativa privada ei la ejecución del programa d e rie go no incluye e l fraccionamiento forzoso del área regable y s u colonización y explotación cientificas. A eso tiende la ley respectiva que previene que el  pago de la pa rt e pro por cio nal del co st o de las obras que corresponde a los  pro pie tar io s de las tierras regables  po r virtud de las obras construídas por la Comisión Nacional de Irrigación, le sea reembolsado a éste bien sea en efectivo o en tierras de valor equivalente. Sobre la extensión regable que en esa forma pasa a ser propiedad del Gobierno Federal, la misma Comisión impone condiciones adecuadas pa ra la fácil y cómoda enajenación de las parcelas a los solicitantes de tierras  pa ra col oni zac ión . El  prec io un ita rio d e la ti er ra -que teó ric am en te ten dria que ser igual al valor que tenía antes de la construcción de las obras, márs el correspondiente al costo de é s t a s derramado en el total de la ex tensión beneficiada se determina en la  prá cti ca ba sá nd os e en el valor comercial que en la región tienen las tierras de calidad semejante. Al efecto, el Gobierno acepta condonar las diferencias entre este va lor y el teórico que resulta por derrama del costo de las obras, consideran do esa condonación como una erogación a fondo perdido en obsequio de conveniencias públicas. Más tarde esa pérdida resultará compensada con las ventajas indirectas que traerá consigo el beneficio de la irrigación. Dentro de la norma esencial de su s procedimientos respecto a la ena-

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 jen aci ón y colonización de las tierras regadas, la Comisión, desp ués de fijar así  pre cio s rac ion ale s a la s p ar ce la s, co nce de pla zos amp lio s pa ra el pag o -20 a 25 añ os con tipos reducidos de intereses sobre saldos insolutos (4 a 6%). Va más al l á emprende por su cuenta el desmonte y nivelación de los terrenos por enajenarse y construye los principales canales de distribución, de manera que el adquirente p ueda des de luego iniciar los cultivos, sin per der tiempo en labores preparatorias que le mermarian sus precarios recur... sos iniciales. Hace también los arreglos preliminares para organizar a sus futuros c o l o n o s en asociaciones de regantes y organismos cooperativos y  pl an te ar un pro gra ma d e fina ncia mien to de la exp lotac ión ag ric ola . Cu an do el costo convencional por la construcción de las obras se haya arnortizado, el Estado cederá a las Asociaciones el Sistem a de Riego del que serán las Gnicas administradoras y usufructuarias,

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ínOcioso resulta hacer notar que  pa ra que el colono obtenga éxito dice demostrativo del acierto de la política de riegos su selección debe eer muy cuidadosa ; no aceptando entre los solicitantee de t ierras eino aquellos q u e reunen los requisitos fásicos y morales y los recursos materiales del ca so. Desde hace d o s anos se ha venido haciendo así un estudio serio en estos respectos y se ha logrado separar algunos grupos que responden sa tisfactoriamente a las exigencias requeridas. Están integrados, preferente mente, por agricultores nacionales que se repatrian de los Estados Unidos. Buen número de ellos ya están instalados en el Proyecto del Rio Salado, en espera de que se abran las tierras a la explotación. Este procedimiento se ha adoptado especialmente para la colonización de Proyectos, c o m o el mencionado, ubicados en las zonas áridas de la fron tera Norte donde propiamente no hay verdadera población agrícola esta  ble cid a. El  pro ble ma no es exacta ment e el mismo en otras regiones d el  p aí s ; la Mesa Central en particular que tiene mucha mayor densidad de  po bla ció n ru ral y act ivi da des agr ico las bi en ar ra ig ad as , au nq ue at ra sa da s en su técnica. Es  por eje mp lo el caso del Sistema de Riego Presidente Calles” en Aguascalientes. Ahi, como en otros semejantes, las obras cons truidas van a permitir la evolución en breve plazo de la precaria agricul tura existente y la creación de un fuerte n úcleo de pequeños y medianos  pr op ie tar io s qu e ha st a ah or a ha bí an si do ap arc ero s o arrendatarios de las haciendas inmediatas al Proyecto. Muy pronto podrarn verse los resultados  prá cti cos de las obras realizadas. De las 10,000 hectáreas que constitu yen la superficie de la Primera Unidad que acaba de abrirse a la explota-

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ción, poco menos de la tercera parte, o sean las tierras que han pasado a la Comisión, están siendo fraccionadas y enajenadas a agricultores de la región en las condiciones fáciles antes delineadas. Aproximadamente 5,000 hectáreas han quedado en manos de los  pri mitivos propietarios que lo eran de la totalidad de la área regable antes de aplicarles el  plan de com pens aci ón por de rr am a de l cos to de obr asquienes se han apresurado a adaptar sus tierras al cultivo de riego para aprovechar el presente año agrícola. El estad o actual de las siembras permite asegurar considerables cosechas. E n dos o tres años la evolución agrícola del Estado de AguascaLentes quedará asegurada, a pesar de ser uno de los más pequeños en ex tensión y capacidad económica, Grandes cantidades de granos recogidos en las tierras del Sistema "Calles" se exportarán anualmente a los mercados del Norte del país con gran provecho para lo s intereses locales Los ingreS Q S del Gobierno, sobre todo aquellos cuyas fuentes son los impuestos predial y sobre ventas, se acrecerán en proporción. Vendrá también el au mento en la población y en el conjunto de actividades de la región, muy especialmente en los transportes.

rio Salado  próxi mo a terminarse y los de San Buenaventura, San Juan Conchos. Todos están ubicados en l a zona árida del Norte del  pa ís e incluyen la captación, regularización y aprovechamiento de corrientes d1 e e la cuenca del río Bravo. Las condiciones geográficas y climatéricas de e s a zona reclaman necesariamente la irrigación si se quiere estabilizar y ha cer fructuosa la vida agrícola. Pero no solamente esta s razones d e geografía económica han determinado la preferencia en favor de esto s P royec tos. Altas conveniencias nacionales aconsejan utilizar en beneficio propio del país la totalidad, si es posible, de la s aguas de la mencionada cuenca hidrográfica que discurren por nuestro territorio, sin detenernos por los es fuerzos de tiempo y dinero que requiera la construcción de las obras co rrespondientes. México tiene que proceder así en ejercicio de su sobera nía y usando de un derecho indiscutible. y

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*** Al  pla nte ar el Go bie rno s u polí tic a de rie gos , ha ce cu at ro añ os , n o le

 pa sa ba in ad ve rt id a la im po rt an ci a loc al que entr aña la eje cuc ión de ob ra s de mediana magnitud, emprendidas en diversos puntos del  pa ís  pa ra be neficio de tie rras agrícolas de extensión moderada. Reconocía también que la construcción de esas obras equivale a hacer más equitativa la distribución en todo el territorio de los fondos federales asignados para el ejerci cio de esa política. Pero la urgencia de abordar desde luego Proyectos que por su magnitud y ubicación se calificaron de interés general para el conjunto del pa ís obligó a dedicar a s u realización todos los recursos eco nómicos disponibles, aplazando por algún tiempo llevar a efecto la parte del  pro gra ma qu e s e re fi er e a ob ra s me di an as . En los  pr es en te s mo me nt os alg uno s de es os Pro yec tos es tá n te rm in a dos o en vías de serlo. Cubren una extensión irrigable de 100, 000 h e c t á reas aproximadamente, que se colonizará y explotará gradualmente. Los  pro gr es os alc anz ado s ya  pe rm it en a la Comisión abordar el otro aspecto de su politica constructiva, sin de scuid ar el ya iniciado. Al efecto, de acuer do con los Gobiernos de los Estados, cuyo consejo y colaboración se ha  ped ido ea reciente circular, se propone destinar, a  pa rt ir de l pr es en te a ñ o  bu en a pa rt e de l Fon do de irr iga ció n e n es tu di ar y realizar una serie de aprovechamientos con fines de riego de evidente inte rés local. Dentro d e estos mismos propósitos ha organ izado un Departamento Hidrológico que se ocupa de examinar las posibilidades y espectativas económicas del apro vechamiento de las aguas subterráneas, practicando exploraciones siste máticas y de conjunto, únicas bases racionales en trabajos de esta índole.

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Con variantes de detalle, todos estos resultados que se prevén para Aguascalientes, hay derecho a esperarlos en todos los Proyectos. E n las regiones francamente áridas, el beneficio de la irrigación resaltará más,  pue s co nv er ti rá por cion es de zon as desé rtica s y por con sig uie nte de so la da s, en cent ros poblados y prósperos, Pe ro en todos los casos, invariablemen te, por encima de esas ventajas de carácter utilitario surgirán las conquis tas real izadas en , el orden social : una clase campesina superior por SU  pre par aci ón téc nic a, con fia nza en si misma y  pe rs ev era nc ia en el tr ab aj o :  pro pi et ar ia de l su el o que cult iva y po r ello mi sm o el mejor sostén de la estabilidad económica nacional y de las instituciones. La politica seguida por la Comisión en el fraccionamiento, ocupacion y colonización de las tierras que han pasado o  pa sa rá n a su dom ini o, se rv ir á de norma y de estímulo a los grandes propietarios que aun conservan tie rras dentro de las zonas regables de los Proyectos, para que procedan en igual forma y favorezcan a su vez la constitución de la pequeña unidad agrícola. En Aguascalientes y en el río Salado algunos hacendados ya han  pla ne ad o fra cc ion arn ien tos qu e por ra zo ne s d e propi a con veni enc ia te nd rá n que realizar en las condiciones de extensión de las parcelas, plazos y  pre cios similares a los aceptados por la Comisión. Entre los Proyectos más costosos que ésta ha abordado están los del a ,

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Una última aclaración respecto a la posibili dad económica de algunos de 10s grandes Proyectos. Los de río Salado, San Juan, San Buenaventura, Conchos, río Yaqui, río Lerma (Corrales) incluyen posibilidades de desarrollos hidroeléctricos que exceden de 15O,OOO caballos, el 48% aproxi madamente de la capacidad total hidroeléctrica instaIada en el p a í s hasta la fecha. El valor comercial de esta posibilidad intrinsicamente muy im port ante , lo acentúa el hecho de que la generación de fuerza hidroeléctriea coordinada con el servicio de irrigación representa costos de establecimiento y de operación notoriamente inferiores a los que resultan en sist e mas construidos y manejados exclusivamente para uno u otro de esos fines. En el caso que nos ocupa esos costos deben distribuirse proporcio“ nalmente en el doble aprovechamiento.  Así  pues, ya sea que el Gobierno conceda l o s desarrollos hidroeléctricos a empresas privadas que se obliguen en cambio a construir a sus expensas parte de las obras ; que el mismo Gobierno realice las instalacio nes hidroeléctricas y venda en bloque la fuerza a compañías distribuidoras; Q  bien q ue las haga y explote por su cuenta, vendiendo directamente a los consumidores la energía sobrante despues de cubrir la demanda de los agricultores y demás habitantes de la zona irrigable, es evidente que las posibilidades comprobadas de aquellos desarrollos constituyen ehementas seguros de financiamiento de los Proyectos.

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Hemos intenta do exponer en térm inos generales los  propósitos y ten dencias que norman la politica general de riegos. Creemos haber demos trado que la Comisión Nacional de Irrigación, órgano del Estado  par a el ejercicio ale eea  política, no se cree dotada de  poder mágico para modidicar violentamente las condiciones precarias de la agricultura mexicana,, ni la e hasta hace  pocos años defectuos a organizacion de la  propi era posible y está realituvo carácter francamente deudal. zándolo, ensanchar centros agrícolas existentes y abrir nuevos en que im pere el régimen de la  pequeña propie dad y donde las tierras sean traba  jad as int ensi va y científicamente. Está  persua dida de que esa política es uno de los elementos esenciales de la economía nacional y un factor de excepcional eficacia en el proceso de la integraci ón de! alma mexicana, puesto que, como dice Buffon, despues de la familia nada hace amar más a la  pat ria que el campo que se cultiva LL

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“Umbral Deflec. artín”

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 Ing eni ero MA NU EL BA NC AL AR I.

A  protec ción

de l lecho de los ríos inmediatamente aguas abajo del pié de un vertedor de excedentes, para evitar los daños que puede producir la acción erosiva del agua que cae a grandes velocidades a1 saltar sobre la cresta del vertedor, ha dado lugar a importantes experimentos hidráulicos efectuados con el fin de determinar los tipos de estructuras que realicen la buscada protección con eficacia y economía.

El ingeniero alemán Rehbock hizo en el laboratorio de construcciones hidráulicas la Escuela de Karlsruhe interesantes ensayos y experimentos que lo condujeron a que l a destrucción de la energía del agua que cae l a s conclusiones fundamentales, a fuerte velocidad se produce por la formación de un remolino de eje horizontal que reduce la velocidad a su valor medio Correspondiente al escurrimiento tranquilo, pero que provoca una distribución de velocidades diferente a 12 normal, porque inmediatame nte abajo del remolino las velocidades superfici ales son menores que las del fondo, las cuales conservan así cierto poder de erosión superior al correspondiente a la velocidad normal, por lo cual, experimentando con modelos de diversas estructuras, trató de encontrar la  má s eficaz para producir y conservar el remolino superficial provocando a la vez la repartición normal de velocidades d e la corriente inmediatamente aguas abajo, desviando hacia la superficie las velocidades mayores y disminuyendo la velocidad en el fondo.

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Como resultado de numerosas experiencias con más de veinte diferentes tipos de estructuras que se supusieron adecuadas, el ingeniero Rehbock encontró c o m o m á s aficaz el tipo denominado “Umbral Dentado que consiste en un umbral de sección triangular de pequeña altura formado por un plano inclinado ascendente y otro des cendente de taludes muy tendidos, dividido en toda SU longitud por dientes que tienen su cara front al vertical y la posterior formada por un plano inclinado suaveme nte hacia aguas abajo prolongado por el plano descendente del umbral. Los dientes se elevan a una altura aproximadamente igual a la décima parte de la alt ura de la caída del agua cuyo régimen  s e trata de estabilizar y dejan entre ellos escotaduras de anchura igual al espesor transversal de los mismos. La acción del “Umbral Dentado” consiste en elevar la corriente de agua, divi-

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diéndola en filamentos de diferente dirección de los cuales los que pasan casi horizontalmente entre los dientes impiden que los que descienden después de brincar so bre és tos , ejerzan acción en el fondo, tend iendo a aume nt ar las velocidades su pe rf iciales en tanto que se forma un remolino horizontal al pie del umbral que provoca disminución d e la s velocidades en el fondo. En la planta Friedland, en Alemania, s e hizo una aplicación práctica del Umbral Dentado para una caída de 14 ms. Pre via ment e se hicieron ensayos con un modelo a escala de 1.40 que pusieron de manifiesto la eficacia de dicha estructura, porque la erosión en el fondo se redujo a casi la cua rta parte y s e concentró e n la parte media de l lecho d e l a corriente evitándose erosiones e n las márgenes donde pudieran ser dañadas las construcciones. En la obra definitiva pasó du rante 33 días una avenida de 265 met ros cúbicos por segundo como máximo, que vino a ccnfirmar los res ult ados que se esperaban por los obtenidos con los modelos a pequeña escala.

En

la presa de Bu11 Rum construida recientemente cerca de la ciudad de Portland, Qregón, las aguas sobrantes pasarán sobre un vertedor de 53 ms. de altura alcanzando una velocidad que se estima mayor de 30 ms. por sg. Para defender el  pie d e l a obra d e la acción erosiva de esa corriente de agua de fuerte velocidad, se construyó un umbral de tipo y funcionamiento algo diferentes al Umbral Dentado anter iorment e descrito, y que puede designarse con el nombre de “Um bral Defl ec tor ”, porque construido en el extremo de la plantilla horizontal desvía la corriente del agua elevándola en trayectorias parabólicas q ue alcanzan l a superficie aguas abajo a cierta distancia del umbral, el cual es de sección triangular di vidido en tramos alternados de igual anchura, cuyas caras frontales son planos inclinados ascendentes o rampas de pendientes de  2i/,  por 1 ; y 5  por 1 respectivamente, de manera que la corriente de agua que salte sobre el umbral quede dividida en filamentos’ que en su

Umbral deflector visto desde el extremo norte del vertedor. Presa Río Salado.

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Umbral deflector visto desde su extremo sur. Pr es a Río Salado. movimiento seguirán dos series alternadas de trayectorias parabólicas de distinto al cance y que caerán casi verticalmente en el cauce del río extendidas en una amplia SU perficie y a distancia del pie del umbral. El  principio en el cual s e basa la acción del Umbral Deflector es, pues, diferente 21 d e otras estructu ras anteriormente u sad as con el fin de defender de erosiones, porque en éstas la idea fundamental era destruir o ab sorber en la plantilla a1 pie del vertedor la energía del agua, en tanto que en la nueva forma propuesta, el agua se levanta en la plantilla y su energía queda destruida en parte en producir esa elevación y el resto en el cauce del río, en una zona extensa y distantedel pie de la construcción que se trata de defender.

El

Umbral Deflector de la piesa de BullRum es de 1.5 ms., de altura y fue aceptado después de una serie d e laboriosos experimentos descritos en los Proceedings of th e American Society of Civil Engineers , correspondientes al mes de marzo de 1928, hechos en un modelo a escala de un vigésimo que demostraron la eficacia del tipo de estructura estudiado. En estos experimentos dirigidos por los ingenieros D. C. Heuny y B. S . Morrow, se ensayaron cinco tipos distintos de umbrales, dos de los cuales fueron dentados, con dientes de caras frontales curvas que tienden a arrojar el agua hacia atrás, alterna dos con los deflectores, y que mostraron el inconveniente, con gastos considerables, de  producir un salto de gran elevación, y tres deflectores, uno de ellos de talud simple y los otros dos de taludes alternados de distinta pendiente. El  primero presentó el inconve niente de concentrar el ataque del agua al caer y los últimos fueron los que dieron me  jores result ados disipando la energía del agua en una zona distante del umbral. La pre-

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sa de Bu11 Rum es de reciente construcción y no se ha presentado aun la oportunidad de observar los resultados de su Umbral Deflector. En el caso de l vertedor de la presa de D on Martí n, en el cual la caída es d e 30 ms., se consideró que un tipo de estructura protectora contra las erosiones, como el Umbral Deflector de la presa de Bu11 Rum, e r a especialmente aplicable, porque e l lecho del río abajo de la presa está excavado en la formación resistente constituida  por capas superpuestas de roca caliza y aun en estiaje forma un estanque que hace las veces de colchón d e agua que amortiguará el efec to de la que salte sobre el um  bral, y aun e n e l caso de que la profundidad actual no fue ra suficiente, el ef ect o re sultante sería la profundización del lecho del río en la zona que abarque el agua al caer, a sufi ciente distancia del pie del umbral para que no haya peligro de dañar la obra. Las dimensiones generales del Umbral Deflector construido en la presa de Don Martín. pueden apreciarse en los  planos 1 y 2. La altura es de 1.98 ms. sobre el nivel de la plantilla y la cresta queda a un nivel casi igual al del agua en estiaje, ¿e ma nera que el umbral quedará casi siempre sumergido. La longitud es de 154 ms. dividido en tramos de 2 ms. con frentes inclinados 2.5  por 1; y 5  por 1 respectivamente. A todo lo largo tiene una galería semicircular para el paso del aire, comunicada con la atmósfera en ambos extremos del umbral, y que por conductos circulares regular mente espaciados, podrá suministrar aire debajo de la lámina de agua que salte, en caso de que esta tienda a producir un vacío. La construcción del umbral es fácil y económica. S u adopción en la presa de Don Martín evitó la necesidad de construir una presa secundaria de 5 ms. de altura que había sido propuesta para formar un colchón de agua protector, que destruyese l a energía y acción erosiva del agua que brincara sobre el vertedor, presa cuyo costo había sido estimado en $246,000.00. La construcción del Umbral Deflector comenzó en diciembre del año de 1929 y terminó en febrero de 1930. Después de su terminación no ha habido avenidas en el río Y  por este motivo no se ha podido observar el resultado que, para evitar ero siones, tendrá el Umbral Deflector en la presa de Don Martín.

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Ligeros datos sobre las condiciones geoló. gicas de algunas Yresas 4

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 Dr .  Paul

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VASO Y PRESA DE TEPUXTEPEC, MICH. vaso de la presa d e Tepuxtepec, coincide con el de u n antiguo lago en que s e abía transformado una porción de la cañada original del Lerma al quedar obstrui da por una serie d e efusiones basálticas que provenían d e fracturas d e orientación E-W en la región de Contepec. En esta depresión muy profunda, encerrada entre las sierras altas, rhyolíticas y andesíticas de formación terciaria, y las barreras basálticas más modernas, se depo sitaron: los materiales de acarreo y en suspe nsión que llevaba el Lerma, río cauda loso y muy cargado con substancias sólidas en sus avenidas: los productos de la des integración mecánica y descomposición química de las rocas de las sierras circunvecinas, arras trada s por la erosión: en ormes canti dades de arenas, polvos y cenizas arro  j ad as por la s erupciones de volcanes ce rca no s y lejanos, y transportados por los vientos; y, por fin, los carapachos silicosos de diatomeas que vivían en gran abundan-

Sal to de “El Remolino”, arr iba del sitio de la presa de Tepuxtepec, visto de frente.

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cas, sobre todo en la ladera derecha del cañón fueran satisfactorias. Exploraciones que s e hicieron con máquina exploradora de diaman te y con pozos a cielo abierto y túneles, dieron resultados mejores de lo que se esperaba. Con el objeto de convertir el sistema de energía que se obtendrá con la construc ción de la presa de Tepuxtepec, a un sistema de riego, se están estudiando varios va sos auxiliares, rio abajo, entre Tepuxtepec y Salvatierra. Los que mejores condiciones reunen para el objeto, son el vaso de Ziriteícuaro y el del rancho de solís, cerca de Acámbaro. En el primero la cortina quedaría situada en u na barranca angosta corta da en basalto, pero la construcción tendr ía que te ner u na altura muy considerable :v resultaría por esta razón y por el sistema de gravedad que debería aplicarse, costosa. En el rancho de Solís la presa quedaría sentada también en basalto: pero su altura sería menor y se podría construir s egún el sistem a de enrocamiento, por lo que sería  ba st an te eco nóm ica .

PROYECTO DEL CAÑBN DE LA CATEDRAL, DGQ. La cuenca de San Juan del Río, corresponde a una antigua depresión longitudinal situada entre las sierras altas de San Lucas y de Coneto en el Poniente y una ba rrera rocallosa de menor altura en el Este, que representa la estribación septentrional de la Sierra de Gamón. Todas esas sierra s estan form adas por rhyolitas terciarias, y sólo localmente se encuentran entre ellas intrusiones y pequeñas efusiones de rocas Fot. 2.-E1 cauce del río Lerma, aguas aba jo del Salto del Remolino ( a la deiecha). Donde se cierra la barranca quedó construida la presa de Tepuxtepec.

cia en aquel eno rme almacenamiento de ag ua. P osteriormente, y después que la de pre sió n qu ed ó re lle na da por comp leto con es os de pó sit os, el río pudo cor tar la ba rr er a  ba sá lti ca en pro fun do s ca ño ne s, (Fo tos .  Nos . 1, 2 y 3 ) , y a medida que se profundizaba su lecho en ella, fueron extraídas del vaso, grandes porciones de las capas superficiales de su relleno. En el proyecto de la presa de Tepuxtepec s e trata de restablecer las condiciones anteriores, es decir, las del tiempo en que todavía existía el lago, por medio de una cortina que intercepte el curso del Lerma en el principio de la barranca que este río ha cortado en el basalto de la antigua barrera. Tanto las condiciones topográficas d e l a barranca y del vaso, como las hidrográficas del - río, son magníficas en este proyecto, debiendo añadirse que la fuerte pendiente hidráulica de la barranca facilitará el aprovechamiento del agua para la producción de energía eléctrica y que las grandes extensiones de tierras cultivadas y cultivables, r í o abajo, recibirán protección contra las inundaciones y quedarán favorecidas con un sistema seguro y adecuado de riego. En cambio las condiciones geológicas del lugar donde s e proyecta construir la cortina, no son tan favorables, porque la cortina se tiene que construir en un tramo de la barranca donde ésta sigue una zona fracturada. Aunque no es de temerse que a lo largo de esta zona de dislocaciones antiguas, se efectúen de nuevo movimientos tectónicos y sísmicos, era d e dudarse que l a resistencia e impermeabilidad de las ro-

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Fot. 8. E1 Salto de la Joya, aguas abajo de la Presa de Tepuxtepec. En esta  poza descargará el vertedor de demasías.

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Fot. 4.--Castillos

de Menores en el vaso del Caííón de la Catedral, Dgo.

 bá sic as más modernas. La dirección de la cordillera es de SSE. a  NNW., y esta misma dirección sigue en general también el río de San Juan, excepto en el tramo donde franquea la barrera del Este, es decir, en la zona del Cañón de la Catedral, donde su curso local sigue alternando los dos sistemas de fracturam iento que s e presentan en la rhyolita y que corren aproximadamente EW., el uno y  NS. el otro. Antes de que el río encontrara esta salida, o mejor dicho, antes de que profundizara el cañón tortuoso, la depresión de San Juan del Río y sobre todo su  pa rte ba ja o sea la cuenca de los Menores, fue un lago que se rellenó poco a poco con los productos de erosión d e las sierras circunvecinas y de cuencas parciales tributarias. Restos de estos sedimentos lacustres forman los “Castillos de Menores”, (Foto.  NQ 4), testigos que s e han conservado, mientras que en lo demás el río y SUS afluentes, han abierto en el relleno cauces amplios y de un a profundidad que corresponde al nivel

N

h a s t a el cual el de San Juan ha cort a d o su lecho en la barrera rhyolítica, aguas abajo, en el Cañón de la Catedral. Este cañón (Fotos.  NQ5 y 6 ) , es una garganta de unos cuatro a ocho metro s de ancho, de unos ciento cincuenta de largo y de más o menos ochenta de alto, que sigue una de las fracturas del sistema  N.S. del que se habló arriba. Como se ve, la forma del cañón es ideal para la construcción de una cortina o de un simple tapón, pero no es así su constitución geológica. Correspondiendo la garganta a una fractura o grieta preexistente y entreabierta, es d e temerse que se prolongue és ta a mayo;. profundidad, aunque se nota en otras fracturas del mismo sistema, pero de menor importancia, la tendencia a estrecharse y cerrarse hacia abajo, en realidad se ha encontrado en perforaciones que se hicieron en el fondo del cañón, acarreo del río hasta más de setenta  pie s. Es ta s mi sm as exp lor aci one s han demostrado también que, como se sospechaba desde un principio, la rhyolita de esta barrera descansa sobre tobas estratificadas rhyoFot. 5.-Entrada al Caííón de Cated ral, Dgo. líticas, que se encuentran a la profundidad de unos setenta y cinco pies abajo del fondo d el cagón ; y por último, ex isten fracturas, aunque no entreabiertas, paralelas a la del cañón, aguas arriba de SU em  bo ca du ra , y es de temerse que será necesario cerrar éstas lo mismo que se tiene que hacerlo con la entreabierta del cañón. Por estas razones, la Comisión se vió obligada a abandonar el proyecto del Cañón de la Catedral, propiamente dicho, y fijó SU aten ción en otro estrechamiento aguas arriba, (Foto.  No 7 ) , donde las condiciones geológicas resultaron muy buenas, Pero como esta boquilla es bastante más abierta, el costo de la presa resultó demasiado grande para ser atractiva su construcción.

PROYECTO DE LA SAUCEDA, DGQ. En la parte su r de la depresión de Canatlán-Santa Lucía, situada entre la sierra rhyolítica de la Cacaria en el S.W. y la de igual naturaleza de l a Silla en el  N.E., se

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23

han efectuado en tiempos relativamente modernos, enormes efusiones de lavas basálticas que vinieron a obstruir la continuación del valle hacia el §.E., y que forman hoy día los extensos pedregales conocidos por los nombres de Breña y Mal País. Por estas e fusiones, el cauce del río de la Sauce da fue desviado hacia el W., y sus aguas fueron represadas por algún tiempo en la parte más baja de la Cañada de Carpintero, detrás de la barrera basáltica que se formó al topar las lengüetas del Mal País con los flancos de las lomas rhyolíticas del cerro del Aguila y de la Peña Blanca. El desagüe del pequeño lago se efectuó por la línea de contacto del basalto con la rhyolita, donde naturalme nte la barrera tenía la menor altura, y, obligado el río de la Sauceda a este trazo, principió a profundizar su lecho en él, encajonándose poco a  poco en la rhy oli ta de l re lie ve ant igu o. En la boquilla de la Peña Blanca. !Foto.  NP S), elegida para 12 cons trucción de la cortina, la rhyolita forma la ladera derecha, el fondo del río y la parte inferior del lado izquierdo del cañón, mientras que la parte superior de este lado está formada por el basalto. Aunque la rhyolita en la superficie de su antiguo relieve está desintegrada en gra ndes bloques, a corr ta profundidad se presenta en macizos compactos donde el fracturamiento de la roca es menos pronunciado y además resanado por substancias arcillosas producidas  por un a lig era alt era ció n de la roca. Así es que la cimentación de la cortina en la rhyolita, será factible sin peligro d e que no resista la construcción, o de que se efectúen fugas de agua por el subsuelo.  N o s e pr es en ta n ta n bu en as con diciones en el lado izquierdo, donde la desintegración pronunciada del  ba sal to d e las co rr ie nt es so br ep ue stas que formarán la orilla de la futura presa, hace temer que la im pe rme abi liz ac ión de l su bs ue lo del alero Norte de la cortina será más difícil. Fot. 6. En el inteyior del Cañón de Catedral, Dgo.

-

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Y’

Y

Fot. 7.-Primera

boquilla abajo de Menores y aguas arriba del Cañón de la Catedral.

PRESA DE DON MARTIN,  N. L. El río Salado, afluente del río Brav o del Norte, se forma por la unión del río §a lado de los Nadadores y del río Sabinas que provienen de la Sierra Madre Oriental. A unos diez kilómetros al este de la confluencia, se opcne a1 curso del río el anticlinal de una pequeña sierra orientada en dirección S. S. E. N.  N. W., que en conjunto se conoce con el nombre d e Sierra del Caracol, y que el río ha dividido en dos porciones atravesándola en cañada tran sversal bastante abierta, para continuar después su curso hacia Rodríguez, siguiendo el  pi é oriental de la sierra austral. La formación de esta cortadura a travé s de la sierra, se explica por la circunstancia de que, al igual que los cursos de otros ríos de la región, como por ejemplo el río Bravo del Norte, el del Salado es muy antiguo y existía ya antes de que se efectuara el plegamiento a que debe su origen el anticlinal de la Sierra del Caracol, y que además el levantamiento de esta pequeña cordillera ha sido tan lento que la erosión del río podía ir al paso con él,  pu es si no hu bi er a si do así , la s agu as del Sa la do hu bi er an encontrado, tanto en el norte como en el sur de la sierra, terrenos blandos donde con facilidad hubiese podido abrirse un cauce nuevo. El núcleo de la Sierra del Caracol está formado por un anticlinal de aleros poco inclinados, y con dirección de su e j e m á s o menos paralela a la de la cordillera; pero no coincide la línea de l eje precisamente con la línea de la cresta de la sierra, sino queda situada algo al poniente, de la última. Las capas que forman el anticlinal del núcleo de la sierra, pertenecen a la forma -

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ción de la caliza de Austin (Austin’s chalc), es decir, al santoniano inferior del cretácico superior, y se presentan en forma de bancos relativamente delgados de calizas, de color gris claro, con intercalaciones delgadas de pizarras arcillosas frecuentemente cargadas con substancias orgánicas (aceite mineral), y por tanto de color obscuro hasta negro. Encima de es tas calizas y en concordancia con ellas, descansan a ambos lados del núcleo del antic linal de la sierra, las margas de Taylor (Taylor’s Marl) del santoniano superior, qu e son l as que forman en primer término el subsuelo del fondo del vaso de la futura presa. Tanto hacia el oes te como hacia el este, pasan éstas a las potentes formaciones de las areniscas del campaniano y maestrichtiano. Todos estos sedimentos del cretácico superior, han sido afectados por los  plega mientos postcretáci cos y han sido desgas tados posterior mente por un2 erosión regional. Por último, en depresiones formadas por este desgaste, se han depositado en discordancia con las capas antiguas, acarreos fluviales y los endurecidos conglomerados de la formación de Reynosa, pertenecientes al pleistoceno, que hacia arriba pasan a de pósitos pulv eru len tos de men or consi sten cia.

A causa de la gran abertura que tiene la boquilla de la casa de Don Martí n (Pot.  No 9) no conviene construir aquí una presa de mampostería o concreto, y como el material que descansa sobre el conglomerado de Reynosa es adecuado y se encuentra cerca del lugar en abundancia, se optó construír una gran cortina de tierra con delantal protector de concreto en el lado mojado, embutido en las calizas de Austin del fondo. La cortina quedó localizada a unos cuatrocientos metros al  ponie nte de la pa rt e más angosta de la boquilla, en aquella zona del anticlinal donde las capas de éste

Fot. 9.

la línea más favorable para la presa -Brecha abierta paradetrazar “Don Martín”.

 princ ipia n a  buzar en direcc ión haci a el vas o,l o que dar á m ayor segur idad a l a const ruc ción aunque la longitud de ella result a algo mayor de la que tuviera si s e hubiera trazado en la parte más estrecha. Un punto de esencial importancia para la presa de Don Martín, es la construcción

de un vertedor de demasías de dimensiones epropiadas. En un  principio se  proyect ó construir est e vertedor en las lomas ba jas que, a unos veinte kilómetros de Don Martín, limitan e n el sur el vaso de la presa. Pero como todas estas lomas est án formadas  por las mar gas des moro nabl es de Tay lor, era de te mer se que cual quier a cor rie nte d e aguas que se estableciera en esta región, causara profundas excavaciones en ellas  po niendo en peligro el vertedor y con él la existencia de la presa. En la Sierr a del Caracol, formada en toda su extensión por roca calcárea resistente, por mala suerte no se encuentra ninguna incisión s uficienteme nte baja que pudiera servir para el objeto, y por lo tanto no hubo otro medio para solucionar el problema, que el de acondicicnar una parte de la cortina para que pueda servir de vertedor.

-___ Lector: Si cambia usted d e domicilio no deje de avisárnoslo, para seguir enviándole nuestra revista.

Fot. S.-Boquilla

de la Peña Blanca en el río de Saucedo, Dgo.

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27

'r

Espirales de Transición  para Canales P o r el Ing.

Carlos  RA MI RE Z ULLOA.

E N

ferrocarriles es universal el uso de curvas d e transición para conectar la tangente con la curva circular. Pero para caminos y especialmente para canales, no se ha hecho extensivo su uso, debido, sin duda,  a que su influencia es menos importante, pero de ningún modo despreciable.

~

curvatura aumenta un grado cada determinada distancia. La localización de una "espiral" es tan simple, como la d e una curva circular, siempre que se tengan tablas calculadas exprofeso. La tabla adjunta corresponde a la esEn el caso especial de canales, se ha  pir al tipo III, que aumenta un grado de curvatura cada 2.5 mts. de desarrollo. observado que a la entrada y salida de Con sólo la inspección de la tabla, un una curva circular hay erosiones, cuando ingeniero comprenderá el uso:  pero si n el terreno es flojo: en tanto que en la parembargo, se hará una explicación. te central de la curva, no existen. Los antiguos P. C. y P. T., (Principio Justamente en la entrada y salida de de Curva y Principio de Tangente), qued an la curv a es cuando hay un cambio brusco sustituídos por cuatro puntos : TS : SC : CS : en la aceleración de la masa d e agua, puesST: tangente espiral; espiral curva : curva to que en las tangentes es nula y en las espiral : y espiral tangente. curvas tiene un valor proporcional al cuaLa deflexión entre las tangentes se ha drado de la velocidad, y dirigida según el llamado 2y y es conocida. radio. Cuando se trata de usar curva circular A excepción del trabajo topográfico ex- de grado n, se deberán usar los valores de tra requerido, no existe objeción para usar las tablas hasta el punto n-l. curvas de transición en los canales, y sí Los puntos TS y ST se localizan como ventajas que se han observado en los  pro- en el caso de las curvas circulares, por su yectos donde se han empleado. " tangente " o sea la distancia al P. 1. (in Las curvas de transición deben usarse tersección de las tangentes). especialmente cuando : Esta distancia es Ts y se calcula por la .).-la veloc idad del agua es grand e. fórmula dada en la tabla, en que  A y  B son  b).-el ter ren o es flojo. los valores indicados en ella. c).-la curvatu ra es pequeña. La longitud de la " Tangente' para cur Entre las curvas de transició2, las que va circular de grado n, está calculada en cualquier libro o tabla para ferrocarriles. han predominado por su sencillez son las Una vez localizado el T.S.,se centra llamadas " espirales" , formadas por una allí el aparato, y los puntos de la espiral sucesión de arcos de circunferencia, cuya

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se localizan por su distancia al T.S., y su deflexión con la tangente. Ambos valores se dan en la tabla. El S.C.corresponderá al punto n-l. S e centra alli el aparato, s e visa el T.S., y se mide un ángulo p; entonces el anteo  jo estará en la dirección de la tangente a la curva circular, que se trazará en la for ma habitual. El ángulo central de esta curva, es 6 y su valor se indica en la tabla, en "Fórmulas " . Los valores X e Y se calcularon para localizar por abscisas y ordenadas, pero es t e método no es práctico.

El cálculo de los valores dados en la tabla, es laborioso, pero está bas ado en  propi edade s geom étr icas simpl es, cuya ex posición no est aría adec uada aquí. Se tienen calculados cuatro tipos espirales a saber: Tipo

1.

Variando 1"cada 0.50 mts.

-

11.111.1v.-

de

1,

9,

,, ,,

., ,.

,, 1.00 ,, 2.50 ,, ,. 4.00 ,, 1,

Los tipos 1, 11 y IV, se darán a cono cer en otros números de esta Revista.

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Tula, Hgo., 21 de mayo

de 1930.

LOS

USOS

científicos y  prácticos de las Cartas Agrológicas Por el  Dr . C h a s F. SNAW.

(Traducido  p o r el agrológicos son un inventaE"?rioestudios gráfico del total de recursos del los

suelo, y siendo el suelo la fuente de la cual, ya sea directa o indirectamente se deriva la riqueza agrícola, se deduce que los estudios agrológicos son básicos y fundamentales para la modificación o desarrollo agrícola de una región. La carta agrológica muestra la locali zación, forma y extensión de todos y cada uno de los tipos de suelos de extensión suficiente para ser levantados en el plano. La descripción de cada tipo de suelo con amplios detalles acerca del carácter de su  perf il, del horizonte superficial, el subsuelo y los horizontes del s ubstratu m, las condiciones de drenaje, topografía, origen y modo de formación del suelo y cualquier otro dato pertinente, aparecen en el informe que acompaña a los planos de suelos. El  pla no y el in fo rm e s e co mp lem en tan y constituyen el estudio agrológico de una región. Es  po r lo ta nt o, un inv en tar io com  plet o de lo s re cu rs os de l su el o de la reg ión estudiada. Es un hecho aceptado por mucho tiem po, qu e la s pl an ta s no cr ec en igu alm en te en toda la extensión de un campo, hacienda, municipio o Estado y que estas diferencias en desarrollo, se deben comunmente a diferencias en los suelos. Algunos suelos, sembrados con cierta planta, producirán grandes rendimientos de excelente calidad ; otros suelos sembrados con la misma planta, darán pequeños rendimientos de buena calidad, o quizá medianos ren dimientos, pero frutos de mala calidad, mientras que en otros suelos esta misma planta, no crecerá en lo absoluto.

Ing. Ant oni o  RODR IGUEZ .)

Stallings (1) ha demostrado en las ex tensas plantaciones de la Penney-Gwin Corporation, en la Florida Norte, que el migajón arenoso fino León, es un suelo  bu en o pa ra los cultivos de chile, cebolla, camote y bulbos, es un suelo pobre para  pa ta ta s ir la nd es as y en te ra me nt e in út il para los cultivos de la vid, fresas y frutales. La arena fina Blanton, es mala para las  pa ta ta s ir la nd es as , pe ro es un bu en su el o  pa ra fr ut al es y fr es as y ex ce len te pa ra el cultivo de la vid. Los tipos arena fina y migajón arenoso de la Serie Portsmouth, son buenos para la producción de patatas, maíz, chile y otras plantas y malos e inútiles  par a lo s cul tiv os de vid, frutales y fresas. En el Valle de Connecticut la calidad del tabaco varía grandemente con los diferentes suelos, aunque el rendimiento es casi el mismo. En Minnesota la variación e s l a " calidad para molienda " (milling quality) de trigo obtenido en diversos suelos, es lo suficientemente grande para que los molineros paguen un precio más alto  po r el trigo obtenido en el mejor suelo. La forma y calidad de la misma variedad de jitomate, son diferentes cuando dicha planta ha sido sembrada en diversos tipos d e suelos. Podrían darse innumerables ilustracio nes como las anteriores. El agrólogo examina cuidadosamente los suelos del área estudiada, por medio de  pe rf or ac io ne s con ba rr en o o excavaciones, determina la extensión de áreas de caracteres uniformes del suelo, y localiza los 1í(1) El  pr es en te ar tí cu lo fu e es cr it o  po r el P r o f . S h a w , e s p e c i a l m e n t e p a r a e l S e g u n d o Con g r e s o A g r o l ó g i c o . E n v i s t a de que dicho Con greso h a s i d o p o s p u e s t o , se  pu bl ic a es te ar tí cu lo  por e s t i m a r l o d e i n t e r é s .

mites o zonas de contacto con otros suelos de características diferentes. Con la deli mitación de los tipos, construye el plano de suelos. Cuando el trabajo es cuidadoso e inteligente, se encontrará que estos 1ímites de suelos coinciden con la localización de diferencias en el crecimiento de los cultivos. Los manchones de trigo o maíz en los que se observe mal desarrollo d e la planta en algunos campos, cornunmente coinciden en forma y extensión con las áreas de suelos diferentes del resto del campo. El conocimiento del sistema radicular de las plantas, de los elementos indispeilsables para la planta, de la cantidad de agua necesaria para su desarrollo, así como también el estudio de las condiciones del suelo y subsuelo del tipo, determinaría la probable adaptabilidad de un suelo para determinada planta. Si las plantas crecen en tipos de suelo que más completamente suplan sus necesidades, se deduce q ue los rendimientos serán mayores que los que se obtendrían cultivando la planta en cuestión, en un suelo menos apropiado. Es cierto que algunas plantas se cultivan con éxito en suelos de muy distinto carácter. En la mayoría de estos casos el agricultor ha modificado el suelo y lo ha vuelto más adecuado para dichas plantas,  po r me dio de l dr en aj e, fer tili zac ión o encalado de los terrenos. Esta labor comprende trabajo y gastos y puede resultar antieconómica. Algunos suelos tienen tales ca racterísticas, que no pueden ser adaptados los cultivos deseados, a pesar del esfuerzo y gastos que para dicha adaptación se ha gan. Si la planta o plantas que se desea cultivar pueden sembrarse en suelos más adecuados a dichas plantas, podrán obtenerse mejores rendimientos con menos costo y menos esfuerzo. En la playa Este de la bahía d e Chesa pe ak e, los ag ric ult or es cul tiv aro n ma íz po r muchos años, en los suelos franco y miga jó n ar en os o sa sa fr as . Los re nd im ie nt os eran bajos, y por consiguiente los agricul tores eran pobres. L a mayoría de ellos estaba cargada de deudas y esa región no  pr os pe ra ba . Al hacerse un estudio agroló gico de esta región, que determinó el carácter y extensión de los tipos de suelos, se encontró que estos suelos eran adecua-

dos para el cultivo de fresas, hortalizas y algunas frutas. Se experimentaron estos cultivos con tanto éxito, que muy pronto los agricultores sembraron fresas, hortalizas y frutales en lugar de maíz y trigo, logrando obtener mayor provecho de su tra baj o. La pla ya Es te , es ah or a pr ós pe ra y notable por sus granjas productivas y progresistas. Es te cambio puede atribuirse directamente al estudio agrológico, a la pu bli cac ión de lo s in for me s y ca rt as agr oló gicas y a las informaciones que éstas pro por cio nan ac er ca de la ad ap ta bi li da d d e estos suelos para determinados cultivos. Todos los productos agrícolas, ya sean  pl an ta s o animales, provienen directa, o indirectamente del suelo. Por tanto, el suelo es la materia prima con la cual trabaja el agricultor. Es  pu es lógi co, ur gi r la ne ces idad que existe de que esta materia prima el suelo sea estudiada cuidadosamente y se determinen sus  pr op ied ad es. Pa rt ic u larmente, es necesario que la extensión, localización y carácter de los diferentes ti pos, se an con ocid os. Lo an te ri or es especialmente necesario en regiones que se intente colonizar o en las que se t r a t e d e modificar el carácter de los s i s t e m a s d e cultivo. El fraccionamiento y la colonización de grandes extensiones y los planes para el desarrollo de regiones por medio de la irri gación, requieren una investigación com ple ta ace rca d e los su elo s qu e se trate de irrigar. Los suelos de las regiones árida? y semiáridas de la mayoría de las nacio nes, son de calidad muy variable y comunmente el agua de que puede disponerse  pa ra su riego, no es suficiente para regar todos los terrenos, y a menudo no basta ni para regar los  bue nos terrenos. El agua es una propiedad pública de gran valor. Si esta agua se utiliza en suelos de gran capacidad productiva, adecuados a cultivos de alto valor alimenticio, resultará que el agua es una riqueza de gran valor. Si en cambio, se usa para regar terrenos de mala calidad o de adaptabilidad muy restrin gida para los cultivos, resultará que esta riqueza se desperdicia resultando pequeños rendimientos para la comunidad y des ilusión y fracaso para los agricultores o colonos. Un acre - pie d e agu a, pu es ta en un

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-

-

 buen suel o, pued e ren dir una ren ta diez vista científico. Los tipos de suelos son enveces mayor que la que produciría si se tidades con reacción definida y uniformes usara en un suelo pobre. Serviría para ma- en su carácter. Las observaciones cientíyor número de gentes y animales, desarroficas, métodos de cultivo y fertilización, llaría más propiedades que pudieran gra- determinados por un estudio agrológico en varse con contribuciones, proporcionaría un lugar, son aplicables generalmente en mayor carga para los ferrocarriles y ma- todos los lugares en los que el tipo ocurre. yor demanda de productos de la industria El  plano de sue los exti ende , mat eri al y mercancías en general. mente, la efectividad de las investigacio Los planos de suelos son necesarios pa - nes científicas y ayuda al hombre de cienra hacer el mejor uso de los recursos hi - cia a diagnosticar las dificultades del agri dráulicos, y la localización de los proyec- cultor y a menudo a prescribir concienzu tos de riego, debiera regirse por la locali- damente los tratamientos a que dichas dización de los buenos terrenos. El fraccioficultades deban someterse. Los resulta namiento de grandes regiones y su transdos de la experimentación en un lugar, formación en granjas intensamente culti pue den apli cars e en toda la exte nsió n del vadas, deben ser precedidas por estudios tipo, y con pequeñas adaptaciones a la seagrológicos que determinen la localización rie de la cual es miembro dicho tipo. Los de los suelos buenos. Los campesinos  puede n obt ene r un exc ede nte de producto s  plan os de sue los ext ien den y mult ipl ican agrícolas, cuando trabajan con buenos sue- la utilidad de las investigaciones cientílos, mientras que si lo hacen con malos, ficas. Como el suelo es la base de la estructendrán que trabajar más y quizá sólo obtura agrícola, y como aun la misma estructener lo suficiente para el consumo de su tura de la civilización, dependen de la profamilia. Este excedente es el que hace el comercio y promueve el crecimiento y des - ducción agrícola, debe de estudiarse cuidaarrollo de la comunidad. Los estudios de dosamente tan fundamental materia. El estudio agrológico es la base lógica y funsuelos son la base sobre la cual deben damental en la que pueden basarse las in fundarse los planes para el desarrollo agrívestigaciones agrícolas, y a través del cual cola de una comunidad o de una nación. La necesidad de los estudios agrológi-  pue den apli cars e los resu lta dos de es os cos es también ingente desde el punto de estudios al arte de la Agricultura.

I 1

, /

Hay que agitar a la grey estudiantil: hay D e una serena observación, se desprende inmediatamente que la mayoría de los que desarrollar una amplia campaña de  pers uasi ón, hay que invi tarl es al campo, a agricultores que conviven en algún Siste ma de Riego, no conocen los métodos de convivir junto a las márgenes de nuestros cultivo, las formas mejores para utilizar riachuelos, junto a las faldas de nuestras el agua y los sistemas para impedir radi- montañas, . , hay que quitarles el fanatiscalmente los azotes de las plagas en SUS mo por las Escuelas Comerciales, por las sembradíos. Esto se debe a que carecemos  Norm ale s, por los Centros Preparatorios. Las obras de irrigación, reclaman indi de “expertos” o “prácticos” que puedan hacerse cargo, ventajosamente, de las viduos capacitados para el trabajo “científico” de la ti erra, hombres que sueñen siembras en los terrenos comprendidos dentro de los Sistemas de Riego. ?Ha y con la fut ura grandeza del país por el des que censurar por este motivo a los que só- envolvimiento de la Agricultura, pues deslo  por su bue na volun tad, o  por un ju st o afortunadamente todavía dependemos del deseo de mejoramiento se aventuran en extranjero. Las obras de irrigación, reclaman técnilas complicadas tareas de la tierra, para obtener como provecho de sus desvelos y cos para trabajar la tierra: seamos precaesfuerzos, solo cosechas malas y produc- vidos, preparemos a nuestra juventud, contos raquíticos? i No ! Sus actividades son venciéndola de que en el campo no tiene el principio de su experiencia futura; so - competidores; de que obtendrá pingües  bre sus  pérd ida s, sob re sus errores, ten - utilidades manejando los intereses del randrán mañana un provecho mejor que com - cho  2, de la hacienda X, etc. Fijemos nuestros ojos en las Escuelas  pe ns e los rev es es sufr ido s. Agricultura, en las Granjas ExperimenSi fuéramos a esperar el futuro de la de tales: déseles todo apoyo, hágaseles toda  pat ri a bajo es a form a román tic a, el res ul  propa ganda para su fortalecimiento, para tado sería desastroso; es preciso, bajo la anterior observación que puede aplicarse su ensanche, ya que de no ser así, al es tar concluído todo el programa de riego de no sólo a las tierras comprendidas dentro de los Qistema s de Riego, sino a las de la la Comisión Nacional, será preciso “im port ar” colonos , “ exper tos” que nos veqgan mayor parte de nuestro territorio, que se repare en la imperiosa necesidad que hay a ENSENAR COMO SE TRABAJA LA de preparar hombres capacitados para em- TIERRA.  Nec esi tam os técn icos y i pu ed e arende r la magna t area de transformar al la revolución prepararlos! Campamento Río Mante, Tamps., abril País, que se h a trazado el gobierno revo25 de 1930. lucionario.

Técnicos! iTécnicos! a

‘

 Pa r  Al fr ed o

A

Comisión Nacional de Irrigación que depende de la Secretaría de Agricultura y Fomento cuenta en su favor el ha  ber te rmi nad o cost osas obra s, como lo son entre otras las de las Presas del Mezquital, Calles y Mante, así como la de tra baja r act iva ment e en la conclu sión de otros Proyectos. Las presas terminadas, están bajo la inmediata vigilancia de las Gerencias de los Sistemas de Riego que en cada una

DE  LE ON ,

 jr.

de ellas tiene la misión de velar por la mejor distribución de las aguas. Frente al formidable esfuerzo que tales obras requieren, viene inmediatamente la  preg unt a : ¿ podrán se r tal es gastos ver daderamente benéficos al país; podrán ser utilizados completamente por nuestros agricultores? Y, como respuesta encontramos que sí son benéficas para la nación las costosas obras de irrigación, mas no podrán ser completamente utilizadas o comprendidas por nuestros agricultores.

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U ’

33

Casas  para C o l o n o s  P o r

el

Ing.

 Alejandro BRAMBIL A.

 NO

de los principales problemas que se presentará al colono al tomar posesión d e su lote den tro d e los Sistemas de Riego será la habitación para él y su familia. Ea Comisión Nacional de Irrigación tiene ante sí el mismo problema que puede plantearse en la siguiente forma:

U

;Conviene construir a cada colono una casa habitación y cobrar después en anuali dades el valor de la construcción? o s e deja al colono en libertad para construi r con sus  propios recursos una casa del tipo y categoría que mej or le acomode? La primera pregunta engloba una serie de cuestiones no menos interesantes porque afectará no sólo al colono en lo  particular sino el éxito del Proyecto si e s que s e lleg a a una resolución apresurada.

Hay que recordar que

el

colono no es un potentado y por consiguiente los recursos que lleve apenas si le bastarár. para hacer frente 2 sus necesidades y atender a los gastos que requiere el cultivo de su lote, por consiguiente cualquier cantidad extra que distraiga significa una pérdida notoria ya que puede orillarlo más tarde a caer en manos de usureros rapaces que le priven de las legítimas utilidades a que tiene de recho. Otra

de

las ventajas que tiene la primera solución es la de adoptar para el Pro-

Una casa en construcción.

34

Casa  pequeña con

cocina in de pe nd ie nt e y  pintada  por el. exterior.

yecto un tipo sta nda rd d e alojamiento obligán dose en cierto modo a los colonos a vivir en condiciones mejores de las que acostumbra el promedio de nuest ra clase rural.

De

adoptarse este sistema habrá que hacer un estudio cuidadoso de l as condiciones económicas en que v á a quedar el colono así como de su  probable ca pa ci da d de  pago a Iin de no sobrecargarlo e n forma ta l que se vea incapacitado para cumplir los compromisos que cont raiga con la Comisión. H a y que te ner presente que la agricultura está muy lejos de ser un  br illan te negocio y  por tant o el agricult or se vé siempr e muy apurado para hacer frent e a l as múltiples obligaciones de los  primeros diez años. Se cecesita pues elegir dos o tres tipos de casas cuyo valor deberá ser lo más reducido posible, aunque su apariencia dej e que desear al principio. Puede elegirse como material de construcción el adobe y el techo de  pa lma para las casas humildes o la teja para las de primera categoría. A semejanza de lo que se hace en los Proyectos de Australia y Nueva Zelanda puede también dejarse pendiente el decorado interior, el cual se hará paulatinamente en el curso de varios a ñ o s según vayan mejorando las condiciones económicas del agricultor. En muchos casos se acostumbra dejar las piezas s i n el enjarre y aplanado del interior y aún sin las puertas de comunicación.

Al hacer algunos estudios de las condiciones de vida de

los habitantes d e l a frontera, tuve oportunidad de estudiar detenidamente el sistema de construcciones que se sigue en la región y el cual juzgo excelente haciéndole algunas ligeras modificaciones par a adaptarlo al standard de vida que la Comisión pre tende imponer den tr o de sus Sistemas de Riego.

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El costo de estas habitaciones es extremadamente reducido y repartido en diez años resultaría en un insignificante recargo para el colono. En la Argentina se acostumbra dejar a los colonos en libertad para habitar en la for ma que crean más conveniente y los primeros años viven en simples chozas construídas en horma enteramente rústica. Con el curso de los años van construyendo después una habitación mejor y adecuada para SUS necesidades.

Este  proc edim ient o ti en e la ven taj a de no recargar al colono en sus compromisos durante los primeros años que son los más difíciles, pero en cambio presenta el inconveniente de que en nuestro medio no se conseguirá que los colonos lleguen a vivir en una horma medianamente humana por no ser en ellos una necesidad ingente. D e todos modos no hay que olvidar que muchas de nuestr as más importantes colonizaciones han hracasado por pretender que el colono viva en casas que son mucho más costosas de lo que sus utilidades pueden pagar. En el norte del  país s e acos tumb ra un tip o de ca sa s cuyo sis tem a de cons tru cci ón es excesivamente económico e ingenioso, n o dejando nada que desear en lo que a conhort se refiere.

i

Las casas constan en su mayoría de una habitación que tiene 3 x 6 metros PO: 2 metros de altura. Tienen una puerta, una ventana y una chimenea la cual al mismo tiempo que sirve de cocina caldea la pieza e n invierno. Par a la construcción se emplean morillos de mezquite de 4 a 5” de diámetro y ter minados en horqueta 3 en una pared y otros 3 en la opuesta. Después se construye un doble e nvarado usando r amas del gadas de mezquite. La distancia entre los dos envarados es aproximadamente de 10 centímetros y en esta forma se construyen las cuatro paredes de la casa. Después usando ramas de  5 6 6 centímetros de diámetro y 60 ó 70 de largo se colocan éstas horizontalmente unas encima de otras y en medio

T Casa ya. construída. Tipo  x á s seiicilio.

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de los dos envarados hasta cubrir así las cuatro paredes; por último se reviste de lo do int erio r y exteriormente y se aplana con una cuchara de albañil. De esta manera los muros quedan formando doble pared entre las cuales se encuentra una cámara de aire que es'muy aislante tanto para el calor como para el frío. Ya dijimos que los seis postes que forman la armadura de las paredes terminan con horqueta en la cual descansan dos largueros de 6 metros que servirán de sostén al techo. Este es de dos aguas y se acostumbra hacer de zacatón entretejido. La chimenea queda en la parte exterior de una de las paredes construída en la misma forma y revestida de lodo. El  piso es de ti erra . Como se ve, la construcción no puede ser más económica y reune las siguientes ventajas : Iq-Los muros aplanadas del interio r conservan un aspecto limpio e impi den la  procreación d e insectos facilitando la limpieza interior. sistema de dos pa:edes con un hueco o cámara de aire conserva la habita ción caliente e n tiempo de frío y fresca e n tiempo de calor. El techo de zacatón que tiene más d e 10 centímetros de espesar tiene también propiedades aislantes perfecta mente conocidas. 3Q-La construcción es sumamente económica y el colono que llegue puede hacer la por sí mismo utilizando mezquites qu e abundan en toda la región. En cuanto al zacatón se consigue en abundancia en l a part e oriental cerca de El Gallo.

20-El

Este tipo de construcciones puede ser modificado y mejorado pero siempre conser vando sus  par tes esenciales, de tal suerte que se puedan aconsejar como construccio nes para lcs futuros colonos que siempre llegan en condiciones precarias y no  pueden gastar en una casa de otro material, Las fotografías y dibujos adjuntos sirven para ilustrar mejor el sistema de construcciones.

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1

ovimiento Científico La Astronomía

-b-

Por Otto

YON  LE IX NE W.

IENTRAS

aumentaba el número de descomponer con su telescopio en astros, hombres que s e dedicaban al estudio supuso que eran aglomeraciones de matede todo lo que existe en la superficie de ria cósmica que despedían o reflejaban por nuestro planeta, se dedicaron otros al estu - su consistencia ténue, só.10 una débil luz: dio del firmamento cuyo secreto había des-  per o como no pudo aduci r prue bas en apoyo de su hipótesis y como muchas de estas cubierto el inmortal Newton con la ley de la gravitación universal, causa de los movi- nebulosas indisolubles se lograron luego descompone- . también en mundos de estremientos de todos los astros y cuerpos ceIcstes. Laplace, que nació en 1749 y mu- llas, su teoría del amontonamiento de ma rió en 1821. creó su grandioso sistema de teria cósmica en vía de condensarse en la formacián de !os cuerpos celestes y el estrellas fijas, encontró muchos adversamatemático Gauss  perfe cci onó los cálculos rios hasta que un descubrimiento importantísirno, muy posterior vino 2  proba r qu e de sus órbitas. Grandísima influencia tuvieron en es - muchas manchas nebulosas y planetarias eran realmente masas o nubes de matete ramo del saber humano los importantes ria gaseosa suspendidas en el espacio.  perfe cci onami ento s que se int rodu jer on en la construcción de los instrumentos, sien- También se le deben preciosas observa do el más notable la invención de los te- ciones de las estrellas dobles, entre las lescopios acromáticos. Las lentes antiguas cuales se encuentra la  polar. klámanse dobles porque aunque a sim tenían el inconveniente de descomponer la luz alrededor del foco en sus co1o;es  ple vist a sólo par ece n ast ros senc ill os colos demás, resultan sin embargo, obmo compocentes, lo que perjudicaba muchísimo a las imágenes d e los objetos. Newton servadas con telescopios poderosos, comcreía que era imposible subsanar este de-  pue st as en rea li dad de dos, tre s o más esfecto, pero los constructores Holl y Do- trellas. Un gran impulso recibieron las obser‘llond resolvieron respectivamente en 1737 y 1757 este problema, ccnstruyendo lentes vaciones astronómicas con los perfeccionacompuestas de dos clases diferentes de mientos que llevó a cabo Prauenhofer. el óptico más célebre de principios del siglo cristal4 XIX, nacido en 1787 en Straubing, de BaEl célebre astrónomo F. W. Herschell, viera y muerto en 1826 en Munich. Dénatural de Hannover, nacido en 1738, pero  be se ta mbi én a es te homb re nota ble, ot ro que pasó la mayor parte de su vida en In - descubrimiento que unos cuarenta años glaterra, fué el primer constructor de te- después hubo de adquirir una importancia lescopios gigantescos, con uno de los cua- asombrosa. Wollaston habia observado en les descubrió en 1781 el planeta Urano y 1802 que en los colores espectrales en que y cuatro años después Saturno. Descom- se descompone la luz solar, al través de  puso, mer ce d a sus instrumentos periec- un  pris ma, exis ten lí nea s osc ura s: Pr au en hof er volvió a descubrirlas independientecionados, muchas manchas nebulosas del m e n t e d e su  pred eces or, en 1814 y 1815 y firmamento en mundos de innumerables estrellas. En el año 1804, había descu- las estudió, por cuya razón se les ha dado  bier to ya 2,500 nebulosas. Las que no pudo el nombre de “líneas de Frauenhofer”.

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 Po r Roberto

c

QMO lo

ofrecimos en nuestro número anterior, iniciamos hoy la  public ación de una serie de trabajos, lacónicos y com  pend iad os par a dar a conoce r la s condic iones actuales de la República, ignoradas por la mayor parte del mundo, para que los hombres de negocios y nuestros lectores en general puedan en breve tiempo leerlos y obtengan de ellos una precisa idea de los actuales momentos y una concienzuda in formación de las posibilidades de negocios en el país.

SU  PO BL AC IO N.

lecen defectos físicos y mentales; PL-Ha blan leng ua nac;onal o esbaño7 44,528 hom bre s y 49,014 mujeres. E! resto de la  po blaci ón : alemán, inglés, francés, italiano,  jap onés , árob e, dina marqu és, hol andé s y chino; III.-El estado civil se clasifica en 21,011 hombres y 17,763 mujeres menores de edad; 10,298 hombres y 12,219 mujeres solteros; 18,028 hombres y 18,767 mujeree casados; 1,194 hombres y 6,576 mujeres viudos; 204 hombres y 612 mujeres divorciados; y 43 hombres y 13 m u j e r e s d e esta do ignorado; IV.-Propietarios de Lienes raices 8,817 mexicanos y 227 extranjeros; V.-Individuos que sabe n le er y escribir 18,322 hombres y 18,921 m u j e r e s ; analfabetos 19,CIO hombres y 24,021 mujeres, y VI. El credo religioso está ccnsiderado así: 106,400 catóíiccs; 391  brot est antes; 94 de otras religiones; 279 de religión desconocida; y 417 ninguna.

Encaminados pues, a tan noble fin,  princ ipi amos por des cri bir lo que es el Es tado de AguascaEientes, enti dad federat iva situada en la Mesa Central y de las más  pequ eña s. Su área apenas mide 7,692 kilómetros cuadrados : contiene una población de 132,492 habitantes, según el censo de  ANTROPBLOGP A  E  NL STQ WI A. 15 de mayo último. Sin embargo, en la clasificación no =os detenemos, por no co No s pare ce muy difíc il, cas i impo sibl e, nocer las cifras exactas de la concentración de datos en la Estadística Nacional. decir de donde, cuándo y cómo vinieron El censo de 1921, era como sigue: 107,581 los  pri mer cs pobl adore s de Aguas cal ienhabitantes, en que se contaban 8,675 hom- tes, y más, cuando juzgamos igualmente difícil que los partidarios del poligenismo  br es y 9,286 mujeres de raza indígena; 34,119 hombres y 37,018 mujeres de la y del monogenismo piiedan probar sus de ducciones, pues, hay que desconfiar de las mezclada; 8,567 hombres y 9,416 mujeres conclusiones de los arqueólogos, quienes de la blanca: 269 hombres y 167 mujeres de 12 extranjera, y 1 hombre y 3 mujeres  por regl a gene ral , son los far,áticos de la ciencia, en busca de lo desconocido, cuya de raza no clasi#icada. Este porcentaje que arroja Aguasca- gloria es descubrir algo nuevo y dar a luz lientes, ofrece otras particularidades muy teorías inéditas: así,  pues, bas ado s en lo impor tant es y son: 1.-Cuenta un prome - que afirma el Dr. E. Hamy sobre que pardio de 659 hombres y 328 mujeres que ado- ticularmente en México el hombre cuyos

-

3

QUIdsO§  MA RT IN EZ

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caracteres antropológicos aun indeterminados, fue contemporáneo d e los animales gigantescos, los que según las tradiciones indígenas, concluyeron por destruir los 01mecas, admitimos que en Aguascalienten los primeros pobladores tuvieron el mismo origen que en todos los pueblos náhoas,  pero si end o otro nue st ro obj et o, sólo no6 limitamos a decir que, ese territorio, pro ba ble me nte suf rió la domi naci ón de azteca6 y chichimecas, y la del régimen colonial en que formó parte de la provincia de Nueva Galicia, en 1791 de la Inten dencia de Zacatecas, y después de otraa vicisitudes vino a constituirse en Estado Libre y Soberano de conformidad con lo mandado por la Constitución de 1857, categoría que conserva desde entoncys, excepción hecha del tiempo en que figuró como Departamento, durante el efímero imperio. Calvillo, Gachupinesp Las Pilas, Ledesma, Peñuelas y la capital del Estado han sido testigos de grandes acontecimiento; especialmente guerreros, unas veces han sufrido las embestidas de imperialistas y traidores como Miramón, Chávez, Bazaine, Larrumbide, Cabero, Adame, Cobos, etc., etc., y la gentil defensa de los patriotas Ochoa, García de la Cadena, Avila, Cuéllar, Zermeño, Antillón, Salinas, González Ortega, Villalobos, Gallegos, Pérez, Alatorre, etc., etc., y durante la cruenta lucha de 1910 a 1915, Aguascalientes conoció de la suerte varia que tuvieron las armas re volucionarias, hasta culminar con la derrota definitiva infligida al guerrillero Villa  por el Ge ne ra l Alva ro Obre gón. Después de lo anterior, es de notarse que Aguascalientes es uno de los Estados que menos indígenas posee, lo cual se explica que fueron destruidos, en gran  part e, por lo s pri mer os colon izado res europeos ; las pestes contribuyeron durante la dominación a su destrucción; y las guerras que ha sostenido la nación, ya contra  pat enci as ext ran je ra s, ya con tra los  parti dos políticos nacionales, han sido causa también de la violenta despoblación. Por otra parte, los matrimonios precoces, la falta de higiene y la mala alimentación, han contribuido a su vez, allí, a la destruc ción de una raza tan digna de mejor suerte, y que podía prestar aup grandes servi -

cios si se dedicaran a mejorar sus condiciones de vida, a redimirla, en una palabra.

SU OROGRAFIA. Debido a su situación dentro de la Me-

sa Central, el Estado de Aguascalientes posee una región hermosa y fértil, cultivada casi en su totalidad y cuyas porciones occidental y central encuéntrame irrigadas  por vario s ríos y arro yos. La part e ori ent al debe su desarrollo a la laboriosidad de su  pobla ción agrícola . Es ta par te , así com o la del sureste están ocupadas por las extensas llanuras de Tecuán, algo escasas de aguas, pero que a pesar de esto, tienen ubicadas en su seno muchas haciendas y ranchos. El  perfi l lla no de Agua scal ient es, irrigado por el río del mismo ncmbre, ex tendiéndose hasta el noreste: el valle de San Jacinto, igualmente exuberante, ocu pa la par te sept ent rion al. Hacia el oeste, el terreno del Estado se halla bastante accidentado por los con trafuertes de la rama occidental de la Sierra Madre, uno de los cuales lo cruza de norte a sur, formando diversas serranías como la del Pabellón, al norte, que se liga a la que forma la Mesa de la Cruz, sirviendo de comunicación la Sierra de Gua jol otes . En tr e est e con tra fue rte y la llanu ra se desliza de norte a sudeste una corriente de cierta importancia, con varios afluentes, que vienen de Zacatecas y pasa a Jalisco, conociéndose al norte con el nombre de río de Chicalote y al sur con el de Aguascalientes. Al oeste de la Sierra de Pabellón, se desarrolla la que forma la Mesa de la Con goja, y al norte de la Mesa de la Cruz e s t á l a de los Pozos, dejando entre ésta y la de la Congoja una planicie que se  prolon ga al oes te y det erm ina la cue nca de los ríos de la Labor y de Calvillo, que corren: el primero de norte a sur y el se gundo de este a oeste. El río de Calvillo formado por todos los derrames que bajan  por la ver ti ent e occi dent al de la Si er ra de Guajolotes y por la meridional de la de la Cruz, corre siguiendo la dirección ya dicha hasta los terrenos de los ranchos de Ojo Caliente y la Panadera, donde se desvían hacia el sur para el oeste de CaJvillo y

Vista hacia aguas abajo del cañón donde se construyó la presa “Presidente Calles”. sigue adelante hasta internarse en Zacatecas. Sus  bell isi mas promi nenc ias , not abl es  por su altura sobre el nivel del mar, como la ¿e cerro de la Punt a de 1,998 m e t r o s ; de la Bufa, San Juan de 2,294 y Altamira en cuya base se encuentra el Pueblo; al noroeste el cerro del Organo, en la Sierra Fría, de 2,224 metros, en el sur de la Sierra de Asientos el cerro del Chiquihuite; al oeste, Cerro Gordo, de 2,362 m e t r o s ; El Pinal y el Ciénega y otros admirables como El Laurel, El Cabrito, El Picacho, Temazcal, La Campana, etc., puede decirse que complementan los valles hermosos de aquella región fertilísima, ri ca y  bella.

SU  HIDROGRAFI A Y  EL SISTEMA “PRESIDENTE CALLES”.

La irrigación de las porciones occidental y central del Estado, a causa de sus numerosos ríos y arroyos es espléndida;  per o en la pa rt e ori ent al las lluvi as y los  pozo s art esi ano s son la s únic as fue nte s de irrigación. El  princ ipal río llamado san Pe-

dro, Aguascalientes o río Grande, nace al sur de la cadena de montañas de Zacatecas, entra al Estado por el norte, y des  pu és de atravesarlo de norte a sur, pasa al Estado de Jalisco. LOSotros ríos prin cipales son: El Pabellón, Santiago, Marcinique, Chicalote, Labor, Texas, Calvillo y Tepezalilla. Cómpletan la hidrografía algunas pequeñas lagunas y ciénegas de poca consi deración que, con las diversas obras Ilevadas a cabo por la Comisión Nacional de Irrigación, el Estado contará con un magnífico sistema, como propiamente ya lo es el denominado “Presidente Calles”, el cual está localizado entre la ciudad de Aguascalientes y estación La Punta y se extiende por el norte, fuera de los límites de este Estado hasta San Pedro “Piedra Gorda”, Zacs. Para que nuestros lectores puedan darse cabal idea de la magnitud de la obra, cedemos la palabra al señor ingeniero Ig‘nacio López Bancalari que la describe así: ”. . .Ea altitud de la. zona irrigable en el Proyecto varía de 1,880 a 1.935 metros  so  bre el nivel del mar.

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P

El clima dentro de la zona del Provecto es el caracterí stico d e los va!les elevados de la Mes a Central, clasificado como clima templado. La temperatura sufre variaciones moderadas. En general la región es sana y las condiciones climatéricas davorables. La lluvia observada en la ciudad de Agu2scalientes durante un período de  36 años, mostró variaciones bastante conside rables; la mínima ha sido 83 mm. para el año más seco, y la máxima en el año más Iluvioso fué de 850 mm. La distribución de Ia lluvia durante el año es regular, casi un 80% de 12  prec ipi tac ión anu al ocurre en los meses de junio a septiembre. En primavera las lluvias scn 5.3% de la  preci pitac ión anual , y en invi erno son 6%,  pero en es ta esta ción son mu y irr egul are s: abiindantes en algunos años y sumamente escasas en otros. La topografía de la zona regable es  bas tan te var iad a. Los terrenos planos se extienden en el norte y noroeste. La pendiente de estos terrenos concurre hacia el rio de San Pedro que forma el desagüe central del  proyect o. Al noroeste el terreno es algo ondulado formando colinas cor tadas por los arroyos de Saucillo y de Rincón, afluentes del río Sa n Pedro. Ha cia el oeste el terreno es ondulado con  pend ien tes sua ves , lo mism o que haci a los otros rumbos del Proyecto. Dentro de la zona del mismo existen no menos de 33 centros de distintos tipos de poblaciones que tienen algo más de 9,000 habitantes. Los  puebl cs más importantes son: Rincón de Romos con 2,600 habitantes y Jesús María con 1,400. El  proye cto es tá atr ave sad o en un sen tido longjtudinal, por la vía de México a Ciudad Juárez de los Ferrocarriles Nacionales, desde la ciudad de Aguascalientes al sur del Proyecto, hasta la estación de La Punta cerca del límite norte. E n el trayecto están las estaciones de Chicalote, Las Animas, Pabellón y Rincón. En la estación de Chicalote entronca con la citada línea de Aguascalientes el ramal de San Luis a Tampico también de los Perrocarriles Nacionales. En la estación de Rincón conecta la pequeña línea ferrocarrilera de Tepezalá. La carretera de Aguascalientes a Za.

catecas atraviesa cl Proyecto en toda su extensión de sur a norte, y de allá se des  pre nde un rama¡ a Rincón de Romos. Ade más, hay los caminos necesarios para unir los diversos centros d e población dent ro de !a zona, con los caminos principales cita dos y las Estaciones de Ferrocarril.

-ElCANTIDAD DE AGUA DISPONIBLE.

r í o  podr á sumi nis tra r por prom edi o anualmente, e n el sitio más adecuado para la construcción de una presa de almacena miento. un volumen de 294.000,000 d e m e tros cúbicos, para lo cual se necesitará una cepecidad de almacenamiento de . .. . . . . 320.000,OOO de metros cúbicos. La cuenca de captación del río Santia go, tiene una superficie total de 658 kilómetros cuadrados, sobre la cual, después de numerosos estudios se convino en que  podr ía apli cars e un coeficiente medio de escurrimiento de 35 "/o, aplicable sclamen.. te a meses de m á s de 20 mm. de precip:tación. Basándose en los volúmenes anuales que podría auminietrar el rio, se hicieron numerosos estudios para determinar la capacidad conveniente del almacenamiento que evitará excesos o desperdicios de agua, llegando a la conclusión de que la capacidad conveniente del almacenamiento con  propósit os de regula rizac ión de la cor rie nte, sería 340.000,OQO de metros cúbicos.  Num er oso s est udi os se hicie ron de igual manera para estimar la  proba ble eva  poraci ón en el vasoI para deduc ir como coeficiente medio de evaporación la can tidad de 1,933 mm. anuales Que de be aplicarse sobre la superficie máxlma cubierta  por el alm ace nam ien to al empe zar la operación de éste. Las pérdidas por conducción solamente podrán valuarse con precisión a l estar en funcionamiento el sistema,  pezo por est udi os compa rati vos rea liz ado s con otrcs proyectos en condiciones seme ja nt es a! est udi ado , se conside ró una pér dida pro'sable de 40% del volumen deri vado, por concepto solamente de la conducción. Estudios análogos se hicieron para ¿eterminar la cantidad de agua necesaria  par a la producci ón de las cosec has, a fi n de  pod er cal cula r la supe rfic ie del Proy ect o, y tomando en cuenta los consumos totales y la distribución de éstos en los diversos

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Vista de

3.

conjunto desde el extremo izquierdo de la  pre sa ''Pr eside nte Call es " con las  pri mer as aguas almacenadas.

meses del año, se estimó la superficie que  pue de dep end er dir ect ame nte ¿el si st em a del río Santiago en 19,000 hectáreas para las que, y en las mejores condiciones de seguridad, se considera poder tener agua constante para riego todos los años. Como sistema auxiliar de provisión de aguas en la realización del Proyecto "Piesidente Calles", se ha contado también con los aportes del río Pabellón que forma los límite s occidentales de los Estados de Aguascalientes y Zacatecas y es afluente del río Santiago aguas abajo de! lugar escogido para la presa de almacenamiento. Como en el caso del propio río Santiago, se carece en río Pabellón de datos exactos respecto de sus  precip itac iones y escurrimientos, pero aplicando los mismos sistemas que en la corriente principal, podría derivarse la totalidad de las aguas del río Pabellón, comunicando éste con el vaso de la presa de almaceAamiento, mediante un túnel de capacidad de 15 metros

cíabicos por segundo y aportando así al pro pio vaso un volumen de 28,910 metros cú1 .  bicos. Todos est os dat os comb ina dos ha cen ver que la eiiciencia de la presa es solamente de un 84% de la cantidad de agua que recibe, conservándose sensiblemente constante en el caso de que sólo utilice las aguas del río de Santiago o en e%caso de que le agreguen los aportes del río Pabellón, ya que en este último caso la superficie de tierras servidas su biria de 13,150 hectáreas hasta 19,000 hc. que es la totalidad comprendida en el Proyecto. Estudios agrológicos muy detenidos fueron emprendidos antes de iniciar !os trabajos de construcción correspondientes, y dejaron clasificados los terrenos en cinco categorias : 14.-Comprende los terrenos de mejor calidad situados a lo largo de las vegas de los ríos. Tienen buen drenaje superficial y subterráneo: carecen de sali t r e ; su topografía es adecuada para la irri-

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,

gación ; su composición, tanto física como sentaba como serios inconvenientes, el de química, es favorable y han probado SU reclamar otra obra complementaria de de produc tivi dad en dive rsos culti vos inclu - rivación al terminar el mismo cañón al yendo los muy remuneradores de árboles  principi o de las tierras del valle, obra que frutales y hortalizas. 1-B. Está formado hubiera podido evitarse si se construyera . al término del cañón como fué en  por buen os ter ren os que han probad o su la presa  produc tivi dad y que son sdap tab les a di- un principio sug erid o; sin embargo, la comparación de presupuestos de los dos versos cultivos, diferentes de los de la clase 1 - A solamente en el espesor del sue- trabajos, dadas las difíciles condiciones de establecimiento de la presa, resolvieron lo que es menor del de éstos, aunque no inferior a 4.5 centímetros, pcr lo que se aceptar el primer sistema, es decir, consconsideró conveniente clasificarlos en una truir una presa de almacenamiento al prin subdivisión de la primera clase. Clase 2.- cipio del cañón y una presa de derivación Están constituidos por las tierras que en al final del mismo, como origen de los relación con las clases anteriores mues- canales principales de riego. tran alguna inferioridad en alguno de los Por las condiciones topográficas y geo factores que influyen en su calidad; prin- Iógicas, del sitio elegido para la construccipalmente han sido el poco espesor, la poción de la obra, se consideró que el tipo de ca eficiencia en dre naj e o las caracterís- construcción más adecuado para ésta desticas topográficas, los factores que han de - de los  punt os de vist a de est abi lid ad y terminado que los terrenos se consideren construcción era e! arco de radios varia de segunda clase. Clase 3.-Está formada  ble s, const ruído s de concret o, que for ma la  por te rre nos pedre gosos de difícil labran-  pa rt e cen tra l de la pres a cer rand o el caza, y  por te rre nos cuyo dre na je reque rirí a ñón del río y  prolongada a partir de la s obras costosas. Clase Son terrenos que orillas del mismo cañón por secciones de no deben ser regados, bien porque el te- gravedad en direcciones tangenciales al ar peta te afl ora en la supe rfi cie de topogra- co hasta encontrar en el terreno natural la fía accidentada, ensalitrada o que forman altura requerida para la corona de la presa. La sección de gravedad en el lado sur de cauces de corrientes intermitentes. El estudio del régimen del río condu- la presa, se continuó para el vertedor de  jo a l a concl usión , c omo dej o dicho, de que excedentes construído también de concreto, en forma de superficies curvas que fael aprovechamiento de las aguas requeria un almacenamiento de 340.000,OOO de me- cilitan el escurrimiento del agua y de lontros cúbicos. Se encontró sitio adecuado gitud suficiente para evitar en todo caso  para la const rucci ón del dique, en u n cañón que el agua salte por encima de la presa. Las dimensiones generales de la misma angosto y profundo por el que el río pasa del valle relativamente extenso de San s o n : 280 Mts. de longitud, de los cual es José de Gracia al valle de Aguascalientes, 101 Mts. pertenecen al arco central, 50 donde están situados los terrenos que de- Mts. al vertedor y 120 Mts. a las dos sec berá n beneficiarse con las obra s. Fué ele- ciones tangenciales de gravedad. La altura máxima sobre el lecho del río es 63 Nts. gido un punto a la entrada del cañón, dony d e 67 Mts. sobre la base de cimentade la capacidad que se consideró necesaria  podía obt ene rse con una pres a de 60 Mts. ción. El  perfi l de la presa es de líneas de altura sobre el lecho de la corriente y muy sencillas, y lo único que especialmente debe notarse, es la reducción notable que presentaba algunas condiciones favodel espesor que se obtuvo en la sección en rables para la construcción del dique, ya arco, en la que se suprimió toda la parte que éste podría hacerse con planta curva, material que tuviera que estar sujeto a escon notable economía de material y prefuerzos de tensión. sentando facilidades para la construcción El volumen total de concreto empleado del vertedor de excedentes de longitud conveniente, sin tener necesidad de una en esta obra fué de 46,000 Mts. cúbicos. El vertedor, como dejo dicho, tiene 59 excavación considerable en roca que hubiera sido demasiado costosa. La construc - Mts. de longitud, su cresta está 2-60 Mts. ción de la obra a la entrada del cañón pre - abajo de la corona de la presa y 3.60 Mts.

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w

- .

Pueblo de

San José

de Gracia inundado

 por las aguas de la  pres a “Presidente Calles”.

abajo de la  par te’ sup eri or del  para pet o, carga con la cual podrá dar un gasto de

700 Mts. cúbicos por segundo en números redondos, que es poco menos de cuatro veces el gasto de la creciente máxima ob-

válvula de compuerta y regulados por una válvula de aguja de tipo Johnson que per mitirá manejar el agua con completa se guridad y precisión. L a s dos tuberías laterales son de 1.68 de diámetro, están provistas ¿e válvulas de compuerta y tienen por objeto utili zarse para la producción de potencia en el caso de que el régimen de escurrimiento del río permita el uso del agua para ese  propósit o, si n int erfe rir con los rie gos que son el objeto principal de las obras. Todas estas válvulas están alojadas en cámaras construídas al pié de la  presa, agu as abaj o del La muro. derivación del agua para utilizarla

servada en el río. Las proporciones de concreto fueron variables para las secciones de gravedad y para la parte elástica del muro, utilizán dose mezclas de 1 x 2.2 x 4.4 en la sección arco, 1 x 3 x 6 en las secciones de gravedad. El cemento usado fué todo de las fá bri cas naci onale s “Tol teca ” e “Hidalgo” sujeto a las especificaciones normales Ae la Arnerican Society for Testing Materials. La presa está dotada, para la utilización del agua, de cuatro tuberías cuyas bocas en los riegos, fué una cuestión que originó quedan a una altura de 15 Mts. sobre el un estudio muy detenido por la ci rcunstanfondo del río protegidas por una fuerte cia especial de que el agua extraída de rejilla de fierro que impide la entrada de la presa desemboca en el fondo de una ba cuerpos flotantes. Las tuberías atraviesan rranca profunda y de laderas muy escar oblicuamente el cuerpo de la presa y des -  padas . embocan a una altura de 7 Mts. sobre el El nivel más conveniente para la derifondo del río. El concreto en la parte atra- vación se estudió tomando en cuenta la vesada por las tuberías, está fuertemente necesidad de localizar el canal principal reforzado con rieles colocados en líneas de conducción a una alt ura que domine su horizontales y verticales. ficiente extensión de terrenos por regar, Las dos tuberías centrales están dedi- incluya en la zona regada las mejores tie cadas al servicio de riego.‘ Son de 1.37 rras, procurando que sean factibles y eco Mts. de diámetro y están cerradas por una nómicas las obras de arte reclamadas por

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el mismo canal principal, especialmente el d e 3% Mts. de diámetro. Su  pe nd ie nt e e s cruzamiento con el río Pabellón y el paso 0.002, su gasto es de 13.4 m3. por segundo. a nivel superior del de su superficie, de 12 En toda su longitud el túnel fué perfora extensa laguna del Pabell’ on que es un va- do en roca sólida, en la que no hubo de so artificial de almacenamiento que la ha- rr um be s ni fi1traciones de agua. A la miscienda de este nombre ha utilizado pare m a salida del t ún el comienza el canal prinriego de sus tierras . Est e nivel adecuado cip al de conducción, cuyo tra zo y localiza  para e l orig en del ca na l, es aproximada- ción está a suficiente altura para dominar mente 30 Mts. más abajo que el nivel 21 las mejores tierras en el valle para cruzar que sale el agua de l a  presa d e almacena - todo el río Pabellón con las obras de rie miento, dejando entonces la  posibilidad de  go de este nombre en puntos adecuados. elegir distintos puntos en la  barranca del El canal sigue en general, una dirección río, para el establecimiento d e las obras de hacia el norte hasta cruzar el río de San derivación. Pedro a una distancia de 29 kilómetros de Cuatro sitios fueron estudiados para el la boca - toma y a partir de este cruzamienestablecimiento de esta obra, y al fin se to el canal se dirige hacia el su r hasta cruzar el río Chicalote. El trazo hasta este optó por construir una presa relativamente alta, en el sitio más bajo del cañón, y por la  punto tiene u n a lo ng it ud de 63 kilómetros,  pe rf or ac ió n d e un tú n el para la conducción y la localización fué hecha procurando obdel agua de esta presa a la parte alta de te ne r alineamientos rectos tan largos y curva5 de enlace tan amplias como f u é posilos terrenos por regar. En vista de las condiciones topográfi-  ble. La capacidad máxima del canal en cas y geológicas se propusieron diversos su  pr im er a sección dominando la  primera tipos de construcción de la presa: en arco unidad de riego es 13.3 m3. que se conside concreto, sección de gravedad construí- dera suficiente para abastecer la demanda da de mampostería de piedra con mortero máxima d e agua para 12 extensión que pode cal, sección con contrafuertes de mam- dr & ponerse bajo riego. Las dimensiones  po st er ía d e mortero de cal, y presa de ar - del canal para esta capacidad son 9 Mts. cos múltiples de concreto reforzado, apo- de anchura en la base, 1.62 de profundidad, lámina de agua y taludes lvz: la yados en pilares de mampostería de piedra con mortero d e cemento. La comparación  pendie nte es de 0.001: esa capacidad se de costos y la rapidea.de ejecución de la mantiene hasta el kilómetro 19 en el cruobra, decidieron el proyecto, aceptando la zamiento con el arroyo de Saucillc, y a  pr es a d e arcos múltiples que pu ed e se rv ir  partir de e s t e punto di sm in uy e a 9.4 m3. con una anchura en la  base del canal d e de vertedor en toda s u longitud en el caso de que haya excedentes de la presa de al- 7 M t s * y una lámina de agua d e 1% Mts. macenamiento. Varias sbias de arte ka sido necesario El volumen total de mampostería de construir a lo largo del canal principal, mecemento e n los contrafuertes f u é de 16,500 reciendo citarse por su importancia: 19Los sifones para el paso por debajo de los  m3.y el de concreto 5,430 m3, empleán ríos y arro yos importa nte s. 29-Alcantaridose en l a construcción si et e meses. Ea conducción del agua de la  presa de llas o  pasos superi ores del canal sobre los ar ro yo s pequ eños . 3°-LPepresas y boca-toderivación al valle donde están las tierras, s e encontró más factible y económica, se- mas para abastecer los canales secunda gún s e ha dicho, mediante un túnel atra- rios. 40--Desagües par a arro jar a la s covesando el cerro, que por un canal que lo rrientes naturales las aguas sobrantes. para el paso de caminos so br e rodee y que quedaría situado en su ma - 5°-Puentes en el ciu zam ien to yor parte e n una lade ra muy’pendiente y el can al y 6O-Puente acantilada. El túnel construído tiene su con el ferrocarril. La descripción de estas oLras indivi  boca d e e ntra da a la orilla de un pequeño arroyo de muy fuerte pendiente, que dualm ente, alargaría en €orma innecesaria desemboca un poco arriba de la presa de el presente trabajo, no presentando, por derivación. Su longitud es algo más de otra parte, características especiales de 1,300 Mts. y su sección es en herradura que merezca hacerse mención, si no es por

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Calle Morelos, Ciudad de Aguascalientes. lo que respecta a las grandes dimensiones de los sifones para los  pasos de l río de S a n Pedro, y del río Pabellón construídos to dos en concreto reforzado y  para la capa cidad máxima del canal en estas mismas secciones. Un sistema completo de canales secun darios, se deriva, mediante las boca - tomas adecuadas, del canal principal, y de éstos, al aprobarse en definitiva el plan de frac cionamiento, habrán de desprenderse los canales terciarios o zanjas regadoras para servicio de cada lote. Forma punto esencial en el programa de aprovechamiento de los terrenos en es te sistema, como en general, de todos los que ha estudiado la Comisión, el de procu rar la 1otificac;ón en forma tal, que cada  pa rc el a qu ed a se rv ida in divi dual ment e por un canal de riego y con acceso a un cami no público, y e n su caso a los canales de drenaje correspondientes. La superficie máxima que se consideró que debe reservarse a un sólo propietario, es hasta el momento de 150 hc., aun cuan do el lote típico en el fraccionamiento se considera que debe llevarse hasta el límite de 50 hc. Tr es d e estos lotes serán pro -

Lablemente la mayor superficie que se otorgue a un propietario individualmente. . . . que el sistema Dije en un principio comprendía la utilización de las aguas de la corriente del río Pabellón, y  para aprovecharlas debidamente s e ha iniciado l a construcción de un túnel de 2,950 Mts. de longitud, que podrá derivar un gasto hasta de 15 Mts. cúbicos  por segundo sobre una sección en forma de herradura de 3.4 Mts. de diámetro y con pendientes de 0.003 o sea corriendo el agua a una velocidad media de 1.75 centimetros por segundo. Ea toma en el río PabellOn se obtiene mediante una pequeña presa de derivación, y su desembocadura s e realiza sobre el río Blanco, afluente del río de Santiago, un  poco ag ua s arriba del siti o en que se ha construído la  pr es a de al ma ce na mi en to. Los aportes del río Pabellón permiten ampliar la superficie de irrigación en 5,500 hc. que unidas a las que dependen del río de Santiago, abren una zona de irrigación de 19,000 kc., dentro del sistema examinado. Muchas pequegas obras auxiliares han .. sido necesarias antes d e  poner en servicio este sistema, concediéndose especial aten -

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ción a los caminos o comunicaciones den tro del proyecto, que en muy breve plazo  podrá n pone rse a la disp osic ión de sus colonos bajo un plan racional de explotación. El costo actual de las obras hasta estos momentos es de $7.412,285.35, correspon diendo por tanto un costo unitario de. . . . $390.12  por hc. ; si n emba rgo, dese oso el Gobierno de  poner su obra en las condicio nes más favorables a disposición del co lono, ha aceptado afectar cada hectárea de terreno en el  proyect o, de sólo la suma de $260.00, con lo cual las tierras de este sis tema quedan en posibilidad de competir comercialmente con las que sujetas a riego existen en la comarca”.

SU CLIMATOLOGIA.

te Estado el consumo de agua de pozo es de uso casi general. El tipo de alimentación a que está su je ta la gen te pobre cons ist e en el at ole de maíz, frijol, habas, arvejones, chile, al gunas yerbas y tortillas de maíz. En un grado poco más elevado, sin dejar la esfera de la  pobre za, se ve que ent ran en la ali mentación la carne de cerdo, el café, la leche, el arroz y el pan. Hay que notar que los alimentos albuminoides, francamente tales, se toman por nuestro pueblo en muy  peq ueñ a cant idad . La cla se indí gena viv e  por lo regular al aire libre. Si la demás  pobla ción , amo nto nad a en habi tac ione s es trechas, húmedas y mal ventiladas, aumen tara la cantidad de sus alimentos, ya que no variaría la calidad, tendría por lo menos más fuerzas para resistir a es2 asfixia len ta de que nos habla Bouchardat.

Estando situado el Estado entre los  paralelos 219 38’ 03” y 229 27’ 06” y los meriSU  HI DRB LO GI A Y GEOLQGIA. dianos 101” 53’ 09” y 1030 00’ 51” al oeste del meridiano de Greenwich, fácil es com En el Estado existen también numero pre nde r cuá l es su climatología. La región fría de Aguascalientes há-  sos manantiales de aguas termales, cir cunstancia a la que debe el nombre de llase hacia el noreste, donde las sierras de Asientos y Tepezalá alcanzan una altu - Aguascnlientes. Los más notables son los r a d e 2,414 Mts. El resto del territorio de la capital, los de San Ramón (termales exceptuando una pequeña sección hacia el minerales-sulfurosos), los de San Nicolás suroeste que pertenece a la zona tórrida, de la Cantera (termales-minerales), de encuéntra se en la zona templada. Casi to- Ojo Caliente, de Sjo Calientillo, cerca d e das las regiones septentrionales y occiden- Calvillo, y los de Colonc, a corta distancia tales del Estado son montañosas por cru - de Rincón d e Romos. zarlas la Sierra Fría, mientras que por el Ea temperatura de las aguas de estos suroeste levanta sus  pena chos la Si err a manantiales varía entre los 30 y 40 grados del Laurel. centígrados.  No así en su constitución quí Las lluvias por lo general, principian mica que es en todos muy semejante y conen el mes de junio y se prolongan hasta siste en que abundan en sulfuro de sodio, mediados de octubre, siendo ligeras duran - sulfatos de sosa y cal, cloruro de sodio, te el invierno. carbonato de cal, magnesia, nitrato de  poEl  prome dio anu al de la preci pitac ión, tasa, ácidos carbónico y sulfuroso, con la e s d e 587.1 milímetros cúbicos. Las hela-  par tic ula rid ad de que un a vez que es ta s das se inician en noviembre y terminan en aguas se enfrían, adquieren las propieda enero. Los vientos dominantes soplan de des del agua potable y sirven para los usos oeste, noroeste y norte, alcanzando su comunes. mayor intensidad en los meses de diciemLos geólogos que h an estudiado aquella  br e a abril . En sum a, el cli ma es san o, zona, atribuyen a los veneros de las aguas  pue s las enf er med ade s son afec cion es in - tcrmales el mismo origen y una profundi testinales y fiebres intermitentes que rei- dad de 430 a 460 metros; a la vez que la nan . . casi lo mismo en el verano que en el constitución geológica del suelo la resumen invierno, pero que por lo general tienen su en tres formas: la que corresponde a las máximo al principio y fin de la estación de  pa rt es baja s, val le s y  plani cies, en que allluvias; son más frecuentes las enferme- ternan rocas de origen aluvial en capas y dades de los órganos respiratorios. En es-  banc os, toba s, trípol i, mar gas y arenas; la

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Plaza  prin cipa l de que se refiere a la metamórfica compuesta de masas hojosas, divididas en fragmentos  pris máti cos, y la de la s roca s erup tiva s, en que se agrupan los  pórfido s traq uít icos . Parece que en los terrenos de origen sedimentario que ocupan una gran extensión, se han encontrado mamíferos fosilizados, así como que los pórfidos cuarcíferos y el  bas alt o, domi nan en la s mont aña s de la s regiones occidental y noroeste, en tanto que en las del norte y noroeste, hay pizarras y calizas.

SUS  RE CU RS OS . Las industrias principales del Estado la agricultura, cría de ganado, comer cio y minería.  Ag rí co la : Casi toda su superficie está en cultivo, produciendo principalmente cerea les de todas clases, frutos variadísimos y  pla nta s legu mino sas. Ha y capac idad par a el favorable desarrollo de la almendra, al godón, limones, caña de azúcar, y otras  pla nta s tropic ales . .Siendo pequeño el territorio del Estado sus elementos naturales de riqueza son también pequerios; sin embargo, su agri cultura no es de escasa importancia, pues son

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Aguascalientes.

 para ell o s e pre sta n la fer til ida d de la mayor parte de su suelo, la introducción de maquinaria e implementos agrícolas y pro cedimientos modernos, apertura d e pozos artesianos, constante fo rm ac h de  bordos  para reco ger el agua en algu nos punto s donde es más escasa la lluvia, y las gran des obras hidráulicas para la mayor dis tribución de las aguas que ha emprendido la Comisión Nacional de Jrrigación y que en parte dejamos relatadas. Todo es to dará poderoso impulso a la cría de ganado que hace tiempo viene tomando proporcio nes dignas de mención, pues como dato curioso a este respecto debemos decir que ya en 1902 Aguascalientes llegó a sacrificar para el consumo público 6,821 cabezas de ganado mayor, 4,982 carneros, 7,037 cabras y 9,071 cerdos. Esta es una demostración de la riqueza agrícola del Estado, que cuenta con 27 clases de mamíferos, 58 de aves, 9 de reptiles, 4 de  peces y 74 de insectos, y en cuanto a su flora, posee 137 especies de árboles silvestres, 48 de frutales, variedad de uvas y 11 de plantas textiles, muchas de curtientes, oleaginosas, forrajeras, venenosas, aromáticas, gomas, resinas, legumbres, feculosas, gramíneas, 163 especies de mc-

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dicinales e innumerables bellísimas flores y arbustos para ornato. Ea riqueza de Aguascalientes estriba  prin cipa lme nte en la agricultura : esa rique za consiste en la variedad ¿e climas, en la fertilidad del suelo, en las vías de comuni. cación, en las condiciones admirables de ciertas regiones, para l a i n d u s t r i a p e p a ria. Pero es  prec iso conv ence r a nue str os agricultores de que hoy la industria agrí cola no es el arte burdo del gañán, que con el machete y la coa tala y siembra su rancho. Si, tal vez, no es todavía una cien cia en el sentido absoluto de la palabra, es  por lo. menos, el arte que mayor suma de . conocimientos científicos necesita emplear, yq de consiguiente, t iene q ~ es zlir de las manos empíricas e ignorantes para pasar a los cerebros bien nutridos que deLen dirigiyla; y a s í corno el abogado y el médico estudian e% derecho y la medicina antes de ejercer su  prof esi ón, los agricultores deben estudiar la agricultura.  Min er ía : Esta riqueza aumenta con el vasto proclucto de s u s minas, abundantes en oro, plata, plomo, estaño, zinc, fierro, magistral, cobre y mármc.1. Sin embargo,  puede dec ir se que la min erí a en Aguascalientes no ha sido explotada debido a que la industria minera estác $e hecho en manos de corporaciones privadas, como la American Srnelting and Refining Company”, Guggenheim Explotation Company”, la “Aguascalientes Metal Company” y otras, perc todas se comunican poco ‘con el  público. 1ndustr;cas varias: Muchas otras son las industrias del Estado, industrias en tre las que se desta can: fabriles y manufactureras de hilados y tejidos, calzado, loza, jabón, cigarros, cerillos  pastas alimenticias, almidón, harinas, etc. Son tam  bié n de gra n apro vech ami ento la apicu ltura y el gusano de seda, l o s derivados de la tuna, la vid y el maguey. Comercio: Como es natural a medida que las poblaciones del Estado crecen, el tráfico aumenta y todo augura un progreso rápido y estable. En efecto, todo el acervo de industrias hnce que el comercio tome cada día mayores proporciones. Si sus exportaciones en maíz y frijol, harina, magistral, ganado, frutas, maderas, p:? e1es, sebo, cuernos, etc., importan anualmente i‘

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varios millones de pesos, son mayores sus importaciones en combustibles, ropa . he .cha, telas, quincallería, drogas, municiones, libros, papel, productos químicos,  pe r fumería, armas, mueSles, ferretería, vinos, licores, sombreros, . . calzado, conservas, joyería, maquinaria, herramientas, carrua je s? etc.

COMUNICACIONES.

 No exageramos si decimos que Aguascalientes es uno de los Estados que disfrutan de mejores vías de ccmuiiicación. El sistema ferrocarrdero une casi todas las  pob2ac;oncs con el resto de la RepLbllca. La capital cuenta con un servicio de tranvías eléctricos. En general el Estado tiene magníficos caminos carreteros y de herradura que COnectan con las  princi pale s pobla cione s ve cinas ; un extenso y buen servicio telefónico de 550 kilómetros que explota empresa  part icu lar, y los que su min is tr a la Fe de ra ción en telégrafos y correos aun a pueblos insignificantes.

El Estanque, hermoso sitio de recreo en de elegante balaustrada de cantería, con lucidos pórticos. Su kiosco, amplía fuente y glorieta central, punto de donde parten en todas direcciones las calles que están limitadas por hileras de €resca arboleda y rica variedad d e flores. Completan el ornato de la ciudad, bellísimos monumentos  y obras de arte, mag níficos edificios y diez majestuosos tem plos del culto católico,

 ASPE CTO  PA NO RA MI CO . Para concluir cabe áecir que todas las  pobl aci ones de l Es ta do ofre cen mil enc an tos al turista; cada pueblo reune particularidades bellísimas o encierra en sus anales episodios interesantes, pero especialmente la capital es una de las más atractivas e importantes y en punto a salubridad, acaso no tenga antagonista en el país. Aquí los médicos no prosperan, sólo du rante las iiestas tutelares de San Marcos tienen algo que hacer; entonces acude la gente de todas partes y agotados los alojamientos, aquellas se hospedan en las calles y plazas, donde la intemperie hace SUS victimas. La ciudad es  mu y irregular pues sus calles son de 18 hasta 30 metros, sus c a s a s geqeralmente de un solo  piso, tod as de la rudeza y monotonía propias de las ciudades coloniales. Sin embargo, en los últimos eñcs s e moderniza rápidamente y contribuyen a su embellecimiento sus hermosos jardines  camo el de San Marcos por los cuatro lados

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CBNCLUSION. Tal es el Estado de Aguascalientes, disu vez se subdividen en tres ciudades, cinco pueblos,

vidido en 8 Municipios, que a

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la Ciudad de Aguascalientes.

treinta y tres congregaciones, tres aldeas, una colonia, cuarenta y una haciendas, trescientos cuarenta y cinco ranchos, nue ve minerales, dofi fundiciones, di ecisiete estaciones, dos estancias, que, por su clima y elementos de riqueza está invitando a 10s hombres de empresa Para que vayan allá a invertir sus capitales y su inteligen, Cia. Allí  bus car án lo que sea más adapta ble al medi o, proc uran do apro vec har los  produ ctos nat ura les , prin cipa lme nte aque llos que casi carecen de valor y que son susceptibles de una producción baratísima, teniendo en cuenta que el obrero aguascalense es buen trabajador, muy paciente, en quien el don de imitación es sorprendente y la habilidad incomparable,

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Todas estas labores previas se comenzarán a desarrollar un  poco a ntes de la fecha en que vaya a iniciarse la construcción, y durarán el tiempo que dure ésta.

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COLONIZACION.

Labores que desarrolla la Oficina de Organización de Sistemas de Riego de la Comisión  Nacional de Irrigación

A PARTIR

de este número, nos proponemos publicar varias instrucciones s obre la organización y labores de las distintas dependencias de la Comisión Nacional de Irrigación y al efecto, nuestros lectores pueden darse clara idea de la organización de Sistemas de Riego en las líneas siguientes: Esta Oficina se ocupa de hacer los estudios y resolver los  problemas que a conti nuación se expresan, con el objeto principal de que la organización de s istemas de riego, en completo desarrollo, sea la mejor, y que corresponda a los fines para que fue ron construídas las obras relativas, mejorando económica y moralmente las condicio nes individual es de cada colono y las generales d e la región en donde est é ubicado cada Sistema.

 ES TUD IOS PR EV IO S 1.CITUACION ORIGINA L:-Se estudia la situación general de la región y del individuo, antes de construirse las obras de irrigación, desde tres puntos de vista: de los recursos medios individuales y de la región en general, desde los  puntos de vist a agrícola, ganad ero, indus trial, etc,, tan to por lo que respecta a su potencialidad productora cGmo a los centros de consumo, posibilidades de exportación, vías de comunicación, derechos exis tentes de agua, etc.: tributos fiscales y demás gabelas, costo de la vida, etc.

 A.-Económico.-Investigación

B.

Socia?. Densidad de población, cult ura, higiene, costumbres, agrupaciones or ganizadas, etc.

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C.-Poi;tico.-Categoría política de los núcl eos de población y de la región en ge neral, jurisdicción de las autoridades locales y Iederales, etc.

IV.-PROPAGANDA Y CONVOCATORIA: Propaganda en el país y en el extran  jero por conducto de los Cóns ules de Méx ico , anunci ando las condiciones en que se admite la colonización y en qué va a trabajar el Sistema de Riego.

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V.CELECCION DE COLONOS. Registro, calificación y selección de los solici tantes de tierras : estudio acerca de la conveniencia de repatriar nacionales des eables que vengan a colonizar los terrenos de los Sistemas.

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VI.-ORGANIZACION AGRICOLA :-LDtificación de los terr enos beneficia dos con las obras, en parcelas individuales o familiares, proyecto y creación de poblados agrícolas, preparación de las tierras, construcción de caminos y demás vías de comunica ción, iniciativas para crear sociedades comerciales, industriales, de transporte, coope rativas para facilitar la explotación de las tierras, venta de los productos, fabricación de conservas, empaques, latería, etc. Estas labores se comenzarán a desarrollar antes d e que termine la construcción de las obras.

 FU NC IO NA MI EN TO . VIL-ADMINISTRACION DEL SISTEMA : Las Gerencias de cada Sistema de  pend en de la Ofici na de Organizac ión de Sis tema s de Riego, y se ocuparán de l mane  jo de canales y compuertas, distribución de agua para riegos, aceptación e instalación de colonos nuevos, organización y control admini strativos por lo que se refiere a perso nal de vigilancia, cobro del importe de los riegos, etc., etc.

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VII1.-ESTADISTICA:-P ecopilación de datos para conocer la historia y éxito de los trabajos y sugerir modificaciones para mejorar prácticamente la orgapización de ca da sistema: formación de gráficas y cuadros estadísticos de colonos instalados, condi ciones en que trabajan, canti dades de agua que se s uministr en para riegos, af oros en las corrientes, etc. Estas labores se comenzarán a desarrollar una vez terminada la construcción de las obras de irrigación.

 IN ST RU CC IO NE S.

AGUAS Y TIERRAS : Indemnizaciones y compensaciones de derechos de agua y propiedades de tierras q ue van a beneficiarse con las obras, concertando convenios con las autoridades y con los propietarios de tierras, reajus tando las titulaciones anteriores de derechos de aguas.

En cuanto a los trámites que debe seguir un peticionario que desee se lleven a cabo determinad as o bras para resolver algún probl ema de irrigación, a juicio de est e Depar  tamento, el interesado deberá dirigirse por escrito al C. Gobernador de la entidad fe derativa a que pertenezca el proyecto, con todos los ,datos y sugestiones que crea con venientes, para que si dicho funcionario  juz 2a viable el proyecto lo haga figurar den tro del programa de irrigació n'que el Ejecutivo Feder al y los gobiernos locales e stán dispuestos a desarrollar con amplio criterio de colaboración, según consta en la circu-

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11. POSIBILIDAD DE DESARROLLO :

Economía, capacidad y desarrollo posi  bles del Sis tem a : mejoramiento y desarrollo social, político, etc., etc.

111.-REAJUSTE DE

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lar que esta Comisión ha enviado a todos los Gobernadores y las contestaciones que de ellos se han recibido. Por lo que se refiere a los trámites que debe correr un intere sado que as pire a ser colono de un Sistema d e Riego en explotación, consisten en lo siguiente:

El  peti cion ario ele vará su solicitud proporcionando los datos que figuran en un cuestionario modelo que se proporciona en esta Oficina, por los cuales se deducen las con diciones económicas del interesado, su capacidad como agricultor y como homLre de trabajo, los gastos que necesitará cubrir para instularse e n el Sistema, etc., etc.; ron 10 cual se tendrán las bases suficientes para calificar al aspirante a colono y deducir des de luego si es aceptable o no. Una vez aceptado en principio, el Gerente del Sistema de Riego de que se trate completará los conocimientos que sean necesarios acerca de la personalidad y capacidad del interesado, y lo instalará, en su caso, dándole posesión del terreno correspondiente, una vez que se han cumplido las disposiciones que haya dictado especialmente el acuerdo presidencial que se haya expedido con este fin. La  propia Ger enc ia del Sistema vigilará el cumplimiento de las obligaci-ones del colono relacionadas con la Comisión Nacional de Irrigación.

Finalidades y funciones de ice Qficima Federal  para la Defensa Agrícola Campaña contra la langosta El recrudecimiento que experimentó la temible plaga de la langosta en los Estados d e l s u r e s t e de nuestra República a partir de 1923 y que en 1925 dió origen a la Jun ta Nacional Directora de la Campaña Con tra la Langosta, vino a demostrar palpable mente la necesidad de que el Gobierno Federal concediera especial atención al proLlema planteado no sólo por la citada pla ga de la langosta, sino, en conjunto, por to das las plagas y eniermedades agrícolas

que azotan a nuestro país y contra las cuales no s e había organizado ninguna cam  paña ver dad er ame nte efect iva y de carácter permanente. La experiencia adquirida durante los trabajos emprendidos contra la langosta, sirvió de base para formular el programa de acción que el Gobierno debería implantar y desarrollar en lo sucesivo, organizan do una nueva dependencia oficial encargada de estudiar, prevenir y combatir el sin<

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La langosta (Schistccerca paranensis Burni), el voraz aciidio que al presen tarse en el sureste de la República, constituyendo terrible plaga, motivó que el Gobier no Federal sintiera la necesidad de crear una Dependencia (la Oficina Federal para la Defensa Agrícola) encargada, permanentemente, de estudiar, prevenir y combatir el sinnúmero de plagas y enfermedades que atacan a las plantas de cultivo.

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número de  pla gas y en fe rm ed ad es qu e atacan a las plantas de cultivo. Atenta a estas razones, la Secretaría de Agricultura y Fomento, por Decreto del C. Presidente de la República estableció a  pa rti r de l 1Q d e e n e r o d e 1927 la Oficina Federal para la Defensa Agrícola, a seme  jan za de las instituciones obiciales que en otros países vienen funcionando desde hace algún tiempo. Por otra parte, nuestra República, como  paí s ex po rta do r e im po rt ad or d e div ers os  pro du cto s ag ríc ola s, s e en co ntr aba an te s frente a la obligación de observar las cuarentenas dictadas por gobiernos extranje ros contra mercancías de origen vegetal, sin tener el órgano encargado de este im  po rt an te tr ab aj o, lo que perjudicó de una manera considerable nuestras actividades comerciales. Faltaba también casi por com  plet o, la inv es tig ac ión cie ntí fic a de la s numerosísimas plagas y enfermedades peculiares a nuestra República obligándonos a recurrir a fuentes extranjeras para recopi lar datos sobre la Entomología y Micología aplicadas. Con el establecimiento de la Oficina Federal para la Defensa Agrí cola, México se ha puesto al nivel de otroe  pa íse s civ ili za do s qu e cu en t tiempo con semejantes or hoy día nuestro Gobierno puede dictar sus  pro pia s cu ar en te na s co ntr a la s pla gas de origen extranjero, y entrar en discusión

con otros países para levantar embargos contra la introducción de nuestros productos a otros mercados, basándose en sus  pr op ia s inv es tig ac ion es. El hecho de q u e nuestro país haya sido invitado por el Go bi er no de los Estados Unidos, representa do por su Departamento de Agricultura,  pa ra col abo ra r en el est ud io d e la "m os ca de l a fruta" , contribuyendo con la investigación científica de su  biol ogía , mo rfo logía y anatomía, indica claramente la confianza que han despertado en el extranjero las labores d e la Oficina Federal para la Defensa Agrícola. Las tendencias de esta Oficina son eminentemente sociales porque protegen al pequeño agricultor, que no es capaz de con tratar especialistas para estudiar y combatir las plagas, como lo hacen las grandes em pr es as .  No obstante que México es un país  po si tiv am en te agr íco la y cu en ta con ex te nsísimos terrenos capaces de producir todo lo que su  pob lac ión ne ce si ta pa ra su sostenimiento, se importan año  por añ o grandes cantidades de trigo, de maíz y otros víveres. Esto s e explica en parte por el  poc o re nd im ie nt o qu e da la ti er ra en Mé. xico, debido a los métodos anticuados para cultivarla; pero en primer lugar por los estragos que causan las plagas y enfermedades. El objeto de la Oficina Federal  pa ra fa De fe ns a Agrí cola es el de sa be r,  por me di o d e la inv es tig ac ión , de qu é pla -

Planta fumigadora establecida en Guadalajara, Jal.

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Introducción de un carro - caja del Ferrocarril Sud - Pacífico, en la planta fumigadora de Guadalajara, Jal.

ga se trata y cómo debe combatirse, y dar trabajos de esta Oficina se han distri a conocer al agricultor los métodos mo-  bu ido d e la ma ne ra si gu ie nt e: l).-Investigación científica de los agen dernos que debe seguir para aumentar la  pr od uc ció n y log rar un pro du cto san o qu e tes de las plagas y enfermedades agríno sólo satisfaga las exigencias de los colas, con respecto a su  posi ción si st em tconsumidores del país, sino que también tica, biología, fisiología, morfología, ana pu ed a co mp eti r en el me rca do ex tr an je ro . tomía y distribución geográfica en México Por las razones expuestas, las finalida - y en los  pa ís es de l ex tr an je ro , y fo rm ades soncretas que se persiguen son: Pro - ción de un registro de las plagas y enferteger nuestra riqueza agrícola de los gra - medades ya observadas en la República, ves perjuicios originados por el sinnúmero así como de un catálogo de las plagas y de  pl ag as y en fe rm ed ad es qu e at ac an a enfermedades existentes en el Continente las plantas de cultivo; contribuir a la in- Americano. 2).-Experimentación de todos los mé vestigación científica sobre dichos azotes de la agricultura y divulgar por todos los todos de combate contra las plagas y en medios posibles los conocimientos adqui - fermedades y elaboración de los insecticiridos para el combate eficaz y económico das y fungicidas más usados, para su discontra los mismos; impedir la propaga - tribuición entre los agricultores a  pre cio ción, dentro del país, de las plagas y en - de costo. 3).-Control químico y biológico de los fermedades ya existentes; así como la in troducción de otras nuevas procedentes insecticidas y fungicidas que se encuen del extranjero; fomentar entre los agri - tran en el comercio del  país , pa ra ev ita r cultores el espíritu de cooperación, orga- que los agricultores usen en sus labores nizando en toda la República Asociacio- de combate sustancias inferiores que no n e s de Defensa Agrícola y propugnar por dan buenos resultados. 4).-Investigación cientíiica de todos el desarrollo del intercambio agrícola internacional, procurando la derogación de los organismos de origen vegetal y animal que puedan servir en la lucha biológica las cuarentenas y restricciones impues t a s a los  pro du cto s agr íco las de Mé xi co (hongos, bacterias patógenas para insec tos, avispas y moscas parásitas, coleópte po r alg un os go bie rn os ext ran jer os . Para lograr los fines mencionados, los ros predactores) y su multiplicación arti-

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Ley sobre Irrigación

CQII

aguas Fe (Continúa del número 1).

ficial para distribuirlos sobre una base cooperativa, para reunir a todo el elemen comercial. to campesino contra las plagas y enferme5).-Establecimiento de zonas de con- dades agrícolas cuya importancia econó trol y zonas de defensa en México para mica haya sido reconocida. vigilar el cumplimiento de las cuarenteLas actividades de esta Oficina, confor nas interiores y evitar la propagación de me al plan de organización adoptado por las plagas de una región a otra. la misma s e encuentra n distribuidas %enQ).-Establecimiento de una inspección tre un Departamento de Investigación, un aduana1 de todos los productos agrícolas Departamento de Combate, un Departa que se importen al país para evitar la mento de Sanidad Agrícola, una Sección entrada de  pla gas y enf erm eda des ha st a de Publicidad y Propaganda y una Secahora no conocidas en México, y cumplir ción Administrativa. Dependen de la Oficon las cuarentenas establecidas contra cina sesenta Inspectores de Puertos y ciertos productos. Fronteras, y de  plaga s, qui ene s se enc ar 7 ) . 4 e r v i c i o d e c o ns u l ta s y servicio de gan, respectivamente, de vigilar en las divulgación por medio de una extensa co - Aduanas Marítimas y Fronterizas la en rrespondencia y de la publicación de fo - trada de productos agrícolas y de contro lletos sencillos sobre las plagas y enfer - lar en las zonas sujetas a cuarentena la medades de los principales cultivos y los entrada y salida de los  product os agríco medios de combatirlas así como la edición las afectados por las cuarentenas corresde láminas a colores sobre las mismas  podi ent es.  plaga s. De la labor realizada por cada una de 8) .-Organización de Juntas d e Defen- las Dependencias de esta Oficina, nos ocu sa en cada municipalidad sobre una base  par emo s en l as edic ione s s ubse cuen tes.

Artículo 89 En los casos de aprovechala ejecución de los proyectos aprobados. miento de las aguas, no sólo para fines de Los fondos en efectivo serán depositados irrigación, sino también para otros usos, en el Banco de México, S. A,, o en el Banco Nacional de Crédito Agrícola y Coloniel Ejecutivo determinará, de acuerdo con las circunstancias, la forma de obtener el zación, cuando éste se funde. reembolso correspondiente a tales aprove Artículo  43 . -La explotación de las chamientos. obras se sujetará a las siguientes prescripArticulo 90-Los ejidatarios y dueños ciones. de propiedades menores de ciento cincuen a). En el caso de que la Comisión las ta hectáreas, beneficiados con las obras de haya ejecutado, quedará a cargo de ésta su explotación hasta obtener el reembolso irrigación a que se refiere esta ley, conde los gastos de construcción que deban tribuirán para la construcción de dichas ser cubiertos en efectivo conforme esta obras, en la forma que fije el reglamentc. Artí culo dOP-Las ti er ras que el Gobier- ley, o haber hecho la enajeración de las tierras recibidas en compensación, debienno adquiera por la compensación que prescribe el artículo 5 0 de esta ley, serán ena- do cargarse en las cuotas respectivas la  je nad as , una ve z irr iga das , a los preci os  part e proporci onal de los gastos de admi que fije el Ejecutivo, tomando en cuenta nistración.  b).-Cuando se haya obte nido el ree mel costo de las obras de irrigación y en  bolso del gasto total, o cuando los propie  plazos no meno res de die z años. tarios hayan ejecutado directamente las Ea Comisión Nacional de Irrigación fi obras, se concederá la explotación a los  ja rá en cada proyec to la s supe rfic ies máxima y mínima que pueda adquirir cada in- usuarios, de acuerdo con lo que al efecto disponga el reglamento de esta ley. dividuo. En todo caso, el aprovechamiento de También podrá el Gobierno destinar las aguas se amparzrá con una concesión esas tierras al pago de las obras cuando éstas se construyan por medio de contrato, otorgada a los usuarios a que se refiere el en cuyo caso el contratista quedará obliga-  pár raf o ante rior , deb ien do modi fic ars e en do a fraccionarlas y enajenarlas en los tér- caso necesario las concesiones anteriores que impidan o dificulten la distribución de minos que convenga con el Ejecutivo. Artículo 11. Para los efectos de esta las aguas en 12 horma prevista en - el proyecto que haya servido de base para la ley,. se crea un “Fondo Nacional de Irriconstrucción de las obras. gación”, que es tará formado por: Artículo  Il.-Los terrenos baldíos y na .).-La sum a que para el objet o fije cionales susceptibles de Irrigarse, serán reanualmente el Presupuesto de Egresos. servados por el Ejecutivo y sólo se enaje  b).-Las ti err as que el Gobie rno Fed eral obtenga por virtud del procedimiento a narán una vez irrigados, en fracciones no mayores de ciento cincuenta hectáreas, cu que se refiere el artículo 5’, y los productos de la enajenación de esas tierras. de yo precio será recargado proporcionalmen te con el costo de las obras, y será amoracuerdo con el artículo 10. c).-Los dem ás productos que se ob- tizado en los plazos que fije e! Ejecutivo. La construcción de las obras, el frac tengan a consecuencia de obras de Irrigacionamiento de estas tierras y su mejoración que el Gobierno lleve a cabo. miento, podrán llevarse a cabo por medio Artículo 12.-El fondo a que se refiere el artículo 11, será administrado por la Co- de compañías contratistas, sujetándose a misión Nacional de Irrigación, y con cargo lo prevenido en esta ley. Articulo 45.-No se comprenden en la a él se cubrirán los gastos que demande

58

59

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i

r

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El

Insectario de la Oficina Federal para la Defensa Agrícola, situado en San Jacinto, D. F., donde se efectúan interesantes investigaciones científicas.

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 pr es en te le y la s ti er ra s de pro pie dad privada que, no siendo susceptibles de irriga ción con aguas de jurisdicción federal, lo sean, sin embargo, con las de jurisdicción de los Estados o con aguas que, de acuerdo con el artículo 21 de la Constitución, sean del dueño del suelo. Las modalidades que a tales propiedades se impongan en cuanto su irrigación, serán determinadas por los Estados. Articulo 16. Las obras de irrigación  pa ra ap ro ve ch ar ag ua s d e jur isd icc ió n de los Estados podrán llevarse a cabo por la Comisión, de acuerdo con las prescripcio nes de la presente ley, siempre que las le yes locales autoricen la celebración de los arreglos relativos. Artículo 17.-La prese nte ley na coarta el derecho de empresa a  pa rti cu lar es pa ra ejecutar obras de irrigación, de conformidad con lo dispuesto en la ley vigente de aprovechamiento de aguas de jurisdicción federal y en el artículo 4Q de esta ley. Las concesiones que al efecto otorgue la Secre taría de Agricultura y Fomento, oyendo  pr ev ia me nt e a la Com;s ;ón Na cio na l de Irrigación, no podrÉin contrariar las prescripciones de esta ley o las de su regla mento. Artículo 18.-E1 Ejecutivo Federal, po,r conducto de la Secretaría de Hacienda, fi  ja rá en el mes de enero de cada año, los materiales que en el arancel de importación no deberán causar esta clase de dere chos, por estar destinados a obras de irrigación. Artículo 19.-Las duda s que se susciten en la aplicación de la presente ley, serán resueltas por el Ejecutivo, el cual queda igualmente facultado para dictar todas las

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SEA USTED COLABORADOR

disposiciones complementarias y las que tiendan a1 eficaz cumplimiento de sus  pre ceptos. Artículo 20.-En la ejecución técnica y material de los trabajos que son conse cuencia de esta ley, serán empleados, de  pr ef er en ci a, u n oc he nta por cie nto de profesisnistas y trabajadores mexicanos.

 Notas w

TRANSITORIOS Articulo 19-Quedan modificados, en el sentido de esta ley los preceptos relativos

de la Ley de Aguas vigente que se opongan

a lo que en la presente se establece. Artícu lo %‘-Esta ley es tar á en vigor desde la fecha de su  pub licac ión. Pedro G. Rodríguez, D. P. E. del Valle, S. P. Lui s Torregrosa, D. S.-M. G. de Velasco, S. S. Rúbricas”. Por tanto, mando se imprima, publi que, circule y se le dé el debido cumpli miento. Dado en el Palacio del Poder Ejecuti vo Federal, en México, a los cuatro días del mes de enero de mil novecientos vein tiséis. P. Elias Calles. Rúbrica. El Secretario de Estado y del Despacho de Agri cultura y Fomento,  Luis L. León. Rúbrica. Al C. Ingeniero Adalberto Tejeda, Secretario de Estado y del Despacho de Go ber nac ión . Presente”. Lo que comunico a usted para su  pu bli cación y demás efectos. Sufragio Efecti vo.  No Reelección. México, 8 de enero de 1926.-El Secretario de Estado y del Des  pa ch o d e Go be rn aci ón ,  A . Tejeda.

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Al C . . . . . .

DE “ZRMIGACION EN MEXICO”.

A4yúdenos a darle gusto y denos su opinión, en forma condensada, acerca de todos aquellos asuntos sobre irrigación, agricultura, colonización, etc., que considere usted de inter& ¿$u6 seeci6n le agrada más de esta Revista? ¿Qué le disgusta de ella? ¿ Q u é secciones nuevas Be agradaria que le agregásemos? Seis opiniones sobre estos puntos que tenga a bien enviarnos, hallarán cariñosa acogida. Mándenos ahora mismo sus letras.

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I

-,

El Gobierno del Estado de Puebla, metro del sistema nacional de riegos núdando un ejemplo de alto civismo, ha sido mero dos, y atendiendo a las numerosas el primero en responder al llamamiento demandas recibidas en la Secretaría de hecho a todos los CC. Gobernadores por Agricultura y Fomento, para que se cola Comisión Nacional de Irrigación, mev mience a fraccionar aquella superficie y a diante su circular relativa por la cual los entregar las parcelas a los colonos que invitaba a cooperar con ella para llevar a llenen los requisitos, el C. Presidente de cabo el vasto programa de irrigación ini - la República, por acuerdo de 22 d e m a yo ciado por el Gobierno Federal. Al efecto, último, fijó las condiciones que normarán ha ordenado a las autoridades inferiores, las adjudicaciones que de aquellas se haque antes del primero de septiembre pró- gan, facultando a la Comisión Nacional de ximo, presenten un  pro gr am a gen era l de Irrigación para proceder a colonizarlas. Se irrigación dentro de sus respectivos muni- tiene el  pro pós ito de ha ce r qu e la s sie m.. cipios, acompañado de los estudios técni-  br as se  pri nci pie n en lo s pr ime ros me se s cos preliminares en que s e funden y que del año entrante. consisten en trabajos un poco superiores En su reciente viaje a la región de a simples reconocimientos, sin llegar a la El Mante, el señor General Calles encon pr ec isi ón de es tu di os cie ntí fic os. tró grandes progresos en las obras del sisLa Comisión Nacional de Irrigación, al - tema de riego b’Número dos”, río Sala do y tamente satisfecha por la loable actitud de  pre dic ien do un bri lla nt e por ven ir al Esaquel Gobierno, espera fundadamente que tado de  Nu ev o Le ón : le llam ó la ve rd ad e todos los demás de la República habrán ra “Tierra de promisión”. En efecto aque dado ya los pasos necesarios para la com- lla zona ya es agrícola por excelencia.  pl eta ej ec uc ió n d e dic ho pro gr am a. En la hacienda de San Carlos, Coah., Por acuerdo expedido con fecha 22 d e se harán obras de irrigación por valor de mayo próximo pasado, el C. Presidente de la República ordenó que en lo sucesivo los un millón de pesos para mejorar las condiciones que al presente imperan en dicha tres sistemas de riego que ha construido la Comisión Nacional de Irrigación, dejen finca,  a fin de que la colonización que allí de llevar los nombres que hasta entonces se  pr oy ect a s e lle ve a té rm in o en lo s me les había sido dados y los cuales serán  jo re s té rm in os . substituídos por números progresivos, según aquellas han quedado terminadas. Sin embargo, el sistema nacional de riego “Nú mero l”, será designado con el nombre de La Cámara de Comercio de Ciudad Juá“Presidente Calles” (Río Santiago, Aguas- rez, Chih., ha acudido a la Comisión Nacalientes) toda vez que a la iniciativa del cional de Irrigación para que ésta resuelva divisionario se debió la ejecución y fo- en definitiva el problema que encierra el mento de esas obras de irrigación en el riego del extenso Valle de Juárez. L a enor país . me cantidad de terreno que compone el citado valle, una vez que sea beneficiado con el agua, dará grandes rendimientos y  poComo un complemento de’ los trabajos drá equipararse en importancia a El Paso, iniciales llevados a cabo dentro del perí- Texas.

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na Presa de la 1 ia que está consi ( T o m a d o de “Engineering ialews-Record).

A  pre sa ‘‘LEloyd” d e Bha tga r, Bcmb ay, fué inaugurada oficialmente e1 año antepasado. Y aunque es notable por su gran volu men de mampoa:aría (mide 8,815 me tros cúbicos), es considerada en realidad de más irnpoytancla como parte integrante de

una serie de grandes proyectos, que ccmo una obra perfecta de construcción. Su gran tamaño se estima que no es sino el resultado de un magno esfuerzo Je ejecución y a que no tiene u n solo metro cúbico de albañilería que sea supérfluo. Tiene nada más lo necesario para constituir un depósito que guarda la relación debida entre su localieación, tamafio y costo, y la cantidad de agua que escurre de la cuenca aprovechada, con el área irrigable que d0mip.a y con el valor de las cosechas que serán levantadas.

Cuando en lcs años de 1883 y 1902 el hambre asoló la India, se proyectaran gran des obras que hueron llamadas de protecció5 y de ahi partió la idea de construir la  pre sa de que s e tra ta , así como la de Wilson y el proyecto del canal de Pravaia. U fueron tan eficaces los resultados de estas obras, que el espectro del hambre fué desterrado en lo absoluto y se han obtenido cosechas cuyos productos sobrepasan en mucho a las cantidades que cran empleadas en combatir aquélla. Para dar una idea de esos gastos, diremos que para combatir la sequía se erogaban tres “crores” de ru-

Presa

“LIoyd”

cerca de Bhatgar, Poona, India.

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,

Parte de la presa “Lloyd” en la India. Este grabado mnestra el extremo izquierdo de la presa, según el esquema anterior.

-

 pias, o sean veintidos millones de pesos aproximadamente y ahora se obtienen, por virtud d e las cosechas, como  sei s crores” o  poco má s o menos, cuarenta y cuatro millones ¿e pesos. I

6,

Tant o la situación como el carácter general de la presa, pueden ser juzgados por 10s datos siguientes: su longitud debía d e ser de 1,625 metros y su altura de 58 metros

sobre el nivel más bajo de los cimientos, con el fin de almacenar agua a una profundidad de 43.60 metros sobre la compuerta más  baj a. El vaso contendría 685 millones de metros cúbicos de agua, ocupando una cuenca de  33,131 hectáreas, El líquido queda almacenado en un lago artificial de 37 kilómetros cuadrados, con una  pro fund ida d de dieci ocho me tro s en su mayor parte. Su topografía hace que el terreno tenga una longitud de veintisiete kilómetros, siendo su  perí metr o de se te nt a y cuat ro kilómetros. Par a regular el nive l del agua, tiene ochenta y cinco compuertas, de las cuales cuarenta y cinco son automáticas. Aun cyando la energía eléctrica que  pu ed e ser des arr oll ada es de 1,200 H.P., todavía no es utilizada. Los dos canales principales del si stema Mira, que son alimentados por el vaso, miden 170 y 161 kms. de longitud, respectivamente y el área que puede ser beneficiada es de 33,751 hectáreas, de las cuales 8,175 serán regadas anualmente y  prod uci rá cosechas por valor de $23.800,000.00 aproximadamente. El costo total de la  presa fu e de $ 1 2 . 6 O 0 , O O O . O O y el de todo el proyecto de $41.400,00O.00. Los trabajos relativos fueron llevados a cabo paulatinamente por el cuidado que demandaban y quedaron terminados en quince años. Esta presa hizo inútil la antigua de Dehtgar, cuya corona está a un nivel dieciocho metros más bajo que la de la nueva.

Aunque el proyecto fue clasificado como de “protección”, además de l beneficio que reporta a la  poblac ión aseg urán dola con tra el ham bre , produ ce un in te ré s de cer ca de tres por ciento sobre el capital invertido. Como pueden ser de interés los datos referentes a la clase de cultivo que se ha L

63

dado a la zona irrigada y los del valor que representan las cosechas que han sido levantadas, diremos que el total que éstas arrojan es de $23.800,000.00, correspondiendo a la cañ a d e azúcar, que se estima en 780,000 toneladas, $14.000,000.00. Los cereales se estiman en 76,000 toneladas; el algodón en 1,890: y las nueces en 20,900 toneladas. Los árboles frutales ocupan una superficie de cuatrocientas cuarenta hectáreas. Tal es a grandes rasg os la presa que está considerada como la mayor del mundo, según la revista que al principio queda citada. Pe ro nosotros decimos que en nuestro territorio hay presas mucho mayores que la reseñada. La de Don Martín que aca ba d e se r te rm in ad a po r es ta Com isió n, tie ne u n a ca pa cid ad de 1,360.000,OOO de me. troc cúbicos, pudiendo regar una superficie ds 65,000 hectáreas. La de Ea Boquilla, en Chihuahua, que fue construida hace años por la Compañía Hidroeléctrica del Conchos, tiene una capacidad de 3,150.000,OOO usándose el agua para el desarrollo de energía eléctrica. La Comisión actualmente eetá excavando los canales necsarios para regar una superficie de 53,000 hectáreas.  Do lo re s

randes

“ i

GARCIA DE  BRAGG .

e

ile

 Nu ev a Yo rk (SIP A).-C hile , qu e ha de desempeñar análogos trabajos en Mé. sido siempre una de las más progresistas XICO. naciones de la América del Sur, ha venido Dicha compañía se encargará de la a ser considerada en los últimos años co- construcción de dos de las principales mo una de las más progzesivas del mun-  pr es as , do nd e se conservará el agua que do. Bajo la hábil dirección de su  pre si - se obtenga en la estación de lluvias, para dente, don Carlos Ibáñez del Campo, se regar con ella los campos durante la se ha expedido una nueva constitución, se quía. Los grandes viñedos y huertas de ha I econstruido la estructura financiera las provincias de kinares y Maule en las del país. se han llevado 2 cabo reformas cercanías de Cauquenes, Parral y Quirisociales y económicas, han surgido nue- hue, al nordeste de Concepción, estarán vas industrias, se han construído escuelas, surtidos de agua por una presa de barlo  ba nc os , ca rr et er as y fe rr oc ar ril es y se ha con pared central de hormigón, que almacomenzado la construcción de muchos cenará las aguas del río Bullileo, en el otros.  pu eb lo d e Ama rgo s, y cu ya s di me ns io ne s Una de las características que más lla- serán de 68 metros de alto por 230 de lar man la atención, de entre las que distin- go. Es a presa tendrá una torre de gobierguen a la pujante corriente de progreso no, de hormigón armado, de 70 metros de que actualmente se observa en Chile, lo altura y en la cual estarán las válvulas es el  pro pós ito de sacarle a la tierra todo el provecho posible, ensanchando al efec- que harán funcionar las compuertas ¿e to la red de canales de riego para con- conducto circular, de 4 metros de diámevertir en fértiles los terrenos antes esté - tro y 487 de largo, por donde saldrá el agua riles. Para hace r tales obra s ha contratado hacia los conales de riego. La construcción de la presa a que nos los servicios de la J. G. White Engineering Corporation, que con tanto éxito hubo venimos refiriendo requerirá aproximada-

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‘Y

mente un terraplén de 1.376,OOO metros cúbicos y su capacidad se rá de 48,600 acre piés de agua. Un aliviadero de hormigón recogerá las aguas que se desborden en la época de las avenidas, para desalojarlas después por medio de un canal de 18 metros de ancho y 548 de largo hacia un  pun to muy abajo de la presa. La presa más al norte estará situada en el pueblo de Huintil, provincia de Coquimbo, en el río Illapel, a unos 322 kilómetros al norte de Santiago. Esta región, aunque famosa por SU  pr od uc ció n mi ne ra - ti en e un a gr an POtencialidad agricola, hasta ahora restringida por la falta de lluvias. Según el proyecto respectivo, esta última presa será de  ba rro , con pa re d ce nt ra l

i’

65

de hormigón, de 44 metros de alto y 193 de largo, con un terraplén de 1.062.000 me tros cúbicos y una torre de gobierno de hormigón armado, de 9 metros de diámetro y 45 de altura: un conducto de desagüe, de hormigón armado, de 3 metros 60 centímetros de diámetro y 45 m e t r o s d e largo y un aliviadero con canal de desagüe, de 17 metros de ancho por 411 de largo. La capacidad de la presa será de 12,000 acrepiés de agua. Ya han comenzado las obras de los proyectos de que se trata, dirigidas por el Sr. L. H. Huntley, gerente de Construcción de la J. G. White Engineering Corporatión, y se espera que queden terminadas dentro del término de 40 meses.

TEMPERATURAS

atología Comparada con Aplica. exicana, por el

dr3 c.Sánchez,

L conocimie3to de los climas en las difeientes regiones de la República, ofrecr ee-

 pecial int eré s a toda s las personas que se dedican al cultivo de los campos. De s graciadamente, todavía € a l t a acopiar muchos datos de verdadero valor cientíhico sobr e el  parti cular , en gra ndes exten sione s de nues tro terr itor io, y estamos lejos de poder pre sentar atlas meteorológicos tan perfectos como los que editó Eiffel (el constructor de la famosa torre), cuando estuvo ni frente de aquel servicio,

La Dirección de Estudios Geográficos y Climatológicos, dependiente de la Secre taría de Agricultura y Fomento, ha editado un folleto, que tenemos a la vista, con curio sas e interesantes indicaciones sobre el problema de nuestros climas. Estos datos no dependen únicamente de la temperatura, como algunos creen, ni de la  precipita ción pluvial, como los clasificó Penck, aunque esta última clasidicación ofrez ca interés especial a los agricultores y a los ingenieros civiles, por sus relaciones con la hidrología y morfología.

El autor de la monografía que venimos glosando, e studi a los tipos principales de climas, a saber: calientes, templados sin estación €ría y desérticos calientes. Será interesante para los lectores de este Boletín, conocer algunos datos compa rativos sobre temperatura y lluvias en ciertas zonas de la República:

Media Bismarkburg (Sudán). . . . . . . . . . . . . 23. 8 Libreville (Gabón) . . . . . . . . . . . . . . . 24. 6 Tierra Blanca.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24. 9 C. del Carmen.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25. 9 26. 3 Salina Cruz. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Xilitla . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21. O . . . . . . . . . . 20. 1 Córdoba. . . . . . . . . Orizaba. . . . . . . . . . . . . . . . . . 18. 2

Puerto México . Teapa..

, ,

,,

Máxima 28. o

Mínima 21. 8

Lluvia anual 2984 mm.

21. 9 21. 8 25. O

3640 mm. 2032 mm.

...............

24. 9

27. 4

.........

25. 7 25. 4

29. 4

Macuspana. Tapachula.

.....

26. 7

2392 mm.

La tabla siguiente indica las temperaturas y  prec;p;tación, en los lugares típicos del clima sud anés y en varios puntos d e la, República, correspondientes al mismo clima:

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Mínima 24. 7 22. 7 20. 8 23. 3 24. 7 14. O 16. 7 15. 2

Lluvia anual 1390 mm. 2400 mm. 1886 mm. 1465 mm. 1100 mm. 2100 mm. 2117 mm. 2043 mrn.

Si se asciende a las sierras, tanto por la vertiente del Golfo, como por la del Pací fico, se empieza a gozar de un ambiente agradabilísimo , que domina toda la mese ta central hast a el Trópico de Cáncer. Este clima se encuentra asimismo en la  par te alta de Chiapas, donde se halla San Cristóbal. La temperatura

y la lluvia varían en este clima, como se ve en

la tabla adjunta: !

TEMPERATURAS C. de México.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . C. de Puebla.. . . .

C. d e L e ó n . . . . . . C. de Guadalajara.

.............

Media 15. 5

Máxima 18. 3 18. 8 23. 6 23. 6 22. 4 16. 8 21. 5 22. 3 16.

19.2

C. de Aguascalientes.. . . . . . .

C. de Zacatecas.. C. de San Luis Potosí. . . . C. de Burango.. . C. de San Cristóbal las Casas.

o

Mínima 12. 3 12. 7 14. 9 16. 1 13. 2 9. 5 12. 9 11. 1 12. 5

Lluvia anual 588 mm, 773 mm. 582 mm. 884 mm. 497 mm. 339 mm. 380 mm. 463 mrn. 945 mm.

La parte alta de la Sierra Madre Occidental tiene el clima de montaña, asemeján dose al tipo alpino. La tabla siguiente da clara idea de la variación de la temperatura y de la lluvia.

TEMPERATURAS

TEMPERATURAS Media . . . . . . 25. 1

Máxima 26. 3 25. 7 27. 6 28. 3 28. 3 24. O 23. 1 20. 8

Casas Grandes. . . . . . . . . . . . . . . . . . . C. Guerrero . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Temosichic. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . M[iñaca. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  Nam iqu ipa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . El Salto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Media 14. 7 14. 2 13. 7 13. O 14. 8 10. 5

.

Máxima 21. 23. 3 22. 5

o

20. 5 22. 5

15. 5

Mínima 7. 2 6. 4 7. 3

4. 5 5. 2 5. 5

Lluvia anual 685 mm. 333 mm. 490 mm. 480 mm. 420 mm. 700 mm.

Los climas desérticos calientes, según define el señor Ing. Sánchez, son una dege neración de los climas calientes y templados, debido principalmente a su alejamiento del mar y a la existencia de montañas que for man una barrera climatérica,

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Nos  pe rm it im os in se rt ar un os eje mp lo s de la temperatura y lluvia en el clima de “estepas”.

TEMPERATURAS Media Torreón.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Concordia. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . §altillo.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Monclova. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Galeana . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Sabinas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Laredo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Ures., . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Guaymas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

20. 8 21 .O 16. 9 19. 6 17. 5 22. O 23. 8 22. 3 24. 8

Máxima 27. 27. 21. 27. 21. 33. 32. 29. 30.

O

5 8 3 2 6 O

7 2

Lluvia anual 153 mm. 193 mm. 341 mm. 156 mm. 481 mm. 552 mm. 343 mm. 491 mm. 256 mm.

Mínima 14. 12. 12. 10. 13. 10. 13.

1

5

4 9 4 3 2 15. 4 18. O

El folleto a que nos referimos está ilustrado con varias láminas sentando las siguientes cartas :

B

colores, repre-

De isotermas anuales. máximas extremas. mínimas extremas. ,, insoyetas anuales, ,, frecuencia de lluvias anuales, (, humedad relativa anual. ,, régimen pluviométrico.

IRRIGACION EN MEXICO

3

I

11

Los colonos de las zonas agrícolas  paí s, ,“erían ir dormando sus  pe qu eñ as  bi bli ote cas , y en és ta s no de be rí a fa lt ar el es tu di o d e Cli mat olo gía es cri to po r el se ño r Sánchez y que ellos pueden adquirir sin dificultad en la Secreta ría de Agricultura y Fomento (calle de Tacuba número 7 ) . 1

68 3

CQMISION  NACIONAL DE IRRIGACION GRAL. MANUEL PEREZ TWEVIRQ. Presidente de la Comisión: Comisionado, Vocal Ejecutivo : ING. IGNACIO LOPEZ BANCALARI. Comisionado, Vocal Secretario : ING. LEOPQLDQ VAZQUEZ.

REVISTA MENSUAL ORGANO OFICIAL DE LA COMI SI ON  NACIONAL DE IRRIGACION

QFICINA DE PUBLICIDAD ROBERTO QUIROZ MARTINEZ, ISMAEL M. LOZANO, I oda

r”

OFICINAS:

Director y Jefe de Redacción. Administrador.

E S Q U I NA B A L D E R A S Y A Y U N T A M I E N T O TELEFONO ERICSCGN 2-41-77

la correspondencia deberá dirigirse al Administrador.

SE REPARTE GRATIS ENTRE TECNICOS, AGRICULTORES Y COLONOS REGISTRADO EN LA DlRECClON GENERAL DECOR REOS COMO ARTICULO DE

COLABORADORES Ing. Aguilera José G. ,* Anda Manuel D. ), Arteaga Luis. Ballesteros Luis P. ,, ,. Bancalari Manuel. ,, Barocio Alberto. Brambila Alejandro. ,, Beltrán y Puga Fernando. ,, Bustamante Octavio. Lic. Cabrera Luis. Ing. Castelló Alfonso. ,, Coria Antonio. (, Corral Joaquín. ,, Cuevas José A. ,, Chávez Eduardo. Lic. Chico Goerne Luis. Ing. Domínguez Norberto. ,, Dozal Fortunato. ,, Gama Valentín. García Julio. ,, García Lascuráin Angel. Sr. Garcia T. Fernando. Ing. García Manuel ,, Gayo1 Roberto. ,, González Pedro A. Lic. González Roa Fernando. Ing. Herrera y Lasso José. ,?

11

Sr. León Al€redo D. Ing. Medina Salvador. ,, Monjes E. Ricardo.  br. Mo nt er de y García ácazbalceta Francisco. Ing. Noriega José S. ,, Oropeza Jesús. Olvera Montiel Genaro. Lic. Qrtiz Carlos. Ing. Peimbert Angel. ,, Perogordo Moisés. Pérez Castro Lorenzo. Dr. Prun eda Alfonso. Ing. Quevedo Miguel A. de, ,, Ramírez Ulloa Carlos. ,, Ramos Federico. ,, Rodríguez Antonio. ,, Roe1 Faustino. Sánchez Pedro C. ,, Sánchez Mejorada, Javier. ,, Santa Cruz Jr. Armando. Saucedo Vicente. Serrano Gustavo. Toscano Ricardo. ,. Valdés Luis G. ,. Villaseñor. Manuel. Dr. Waitz Paul. Geó. Vivar Gonzalo. ,(

1!

J U L I O

DE MAYO DE 1930

1

1930

 NUM ERO

3

Págs.

SiECCHQN EDITORIAL

La Política de Irrigación

y l a s Autoridades

Locales,

. . - .. . . . . . . . . . . . . .

.

.

5

SECCIBN DE ESTUDIOS, CONSTRUCCIONES Y COLQNIZACION

,.

,?

1.

CLASE, EL 26

S U M A R I O

il

..

TOMO

2A.

Equipo y  pro cedi mie nto s us ad cs  pa ra la consiiucción de las obras del Sistema 7  Nac io nal d e Riego Núm ero 4 . . . . . . . . . . ~. . . . . . . . . . . ..Ing.  Man uel BancalF Algo sobre Aguas Artesianas y su Alumbramiento.. . . . . . . , .Dr.  Pau l Was’tz, 23 El Dominio de los Sistemas de Riego  po r el Gobierno, . .Fernando T. Garcia. 95 ~

Y

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i

Estudios sobre la  posi bili dad de cul ti var algu nas esp ecie s de  peces comestibles en la Presa “Calles”, Ags. . . , , . . . . . . . . . . , . . . . . , . . . . .  .Sa mue l Solis Sánchez. 28 La Capacidad Instalada de las Plantas Eléctricas Existentes en el País. . . . . . . . 34 Ing. Jo sé  Her rer a y  La ss o.

Costo de los Estudios Agrológicos. . , . . . . . , , . . . , . , . l a g .  A7eja ndro  Bra mL; la. . , .  Pro f.  J.  Bi Li an o C a r r a s í o . Las Aguas de Axocopan, Atlixco, Puebla.. Ea Agricultura Moderna. . . . . , . . . . . . . . , . . , , , . . . . ~.  ./? i)io nso E .  Br av o. ~

38

45 5Q

SECCIBN ECONOMICA, COMERCIAL Y ESTADISTICA

Baja Calibornia. Sus elementos de Riqueza., . . . . . . .Roberto QuirÓs  Ma rt jn ez .  52

LOS AUTORES §ERAN LOS UNICOS RESPONSABLES DE SUS ARTICULO§.

i i

Págs.

SECCION DE CONSULTAS Funciones de la Oficina

 NOTA§ BREVE§.

:

Estudios Económicos y Agronómicas.. . . . . . . . . .

. . . . . . . .. . ...... . . . . . .. .. ... . ... . , ,

, ,

, ,

66

b

. . . . . . . . . . . . . . . . . 67

SECCION EXTRANJERA Ley de Compraventa Agrícola y Actividades d e la Junta Federal Agrícola.. . . 69  Artur o H. IPyd e, Srio.  d e  Agri cult ura  de los Estados Unidos.

ALGUNOS JUICIO§

acerca de “Irrigación en México”.

. . . . .. ... ..

,

I ic.

. , . . . . . . . . . 79

A Comisión Nacional de Irrigación, preocupada, naturalmente,

Boquilla de los Corrales

LA

otografía de la portada representa la Boquilla de Los Corrales ubicada en el cauce del Río Lerma, lugar donde se proyecta construir la presa d e almacena miento necesaria para el aprovechamiento de las aguas de esta corriente en el riego de terrenos de los Valles de La Piedad, La Barca, Ocotlán y de la Ciénega de Cha  pala.

Este almacenamiento permitirá la instalación de una planta hidroeléctrica en la caída denominada “Peña del Zoró” aprovechando una altura de 99.14 metros y un gasto aproximado de  36 metros cúbicos por segundo para producir 36,000 H. P.

100,000 hectáreas ubica -

El  proye cto incluye la desec ación de iO,OOO hectáreas correspondientes a terrenos que en la actualidad están cubiertos por las aguas del Lago de Chapala y que queda rán libres al abatir su nivel.

 por conse guir tod o lo qu e est é a su alcance a fin de que las obras de aprovechamiento de las aguas para fines de irriga ción tengan el mejor éxito, y queriendo orientar con cierta  pre cisi ón la políti ca nac ion al de apr ov ech ami ent os h idr ául ico s, está trabajando en el sentido de crear una estricta coordinación de los esfuerzos del Gobierno Federal y de las autoridades locales de los Estados de la Repú blica, procurando u na acción conjunta de sana colaboración, que aportará, sin duda, los medios más eficaces para obtener resultados satisfactorios. En tal concepto y previa la aprobación del C. Presidente de la Repú  blica, la Com isió n como ya hemos informado a nuestros lectores s e dirigió recientemente a todos los Gobernadores de los Estados dándoles a conocer la intención que la anima y el criterio que se ha seguido desde que se promulgó la Ley de Irrigación de 1926, criterio que ha consistido, prin cipalmente, en construir y desarrollar activamente obras que traigan el  be neficio del riego sobre extensos terrenos áridos y despoblados, que no podrían explotarse agrícolamente sin la realización de obras cuya gran mag nitud e importancia las  pone al ma rg en de la actividad privada. Esas obras han ocupado la atención del Gobierno Federal y la capa cidad de su presupuesto en el ramo de irrigación, sin permitir que la aten ción se fijara hasta hoy en otros muchos problemas de riego, que tal vez con menores esfuerzos pudieran resolverse, creando con ello, siempre que se cuente con una acertada distribución, núcleos de  bie nes tar colec tivo más numerosos y de más pronta realización. Tiene, por eso, la Comisión Nacional de Irrigación el propósito de que, sin descuidar los grandes proyectos que actualmente se desarrollan y que transformarán vastas zopas de nuestro territorio, de  pro cura r may or difu sión de las obras de riego, aumentando su número aunque eean de menor importancia idivi&al, pero que convertirán r n w h ~ elugares en ceritros de

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-

La presa de Los Corrales se proyecta con una capacidad de 1,515 millones de me tros cúbicos mediante una cortina de 100 metros de longitud por 30 de altura máxima con un vertedor de demasías de 400 metros de largo y curva máxima de embalse con superficie de 32,000 hectáreas.

La extensión que podrá regarse es aproximadamente de das en los valles que antes se han citado.

La Política de Irrigación,y las Autoridades Locales

dr

..

5

actividad, que prosperarán seguramente, aliviando la situación económica general de nuestro pais. Se tiene la seguridad de que ese programa será aprobado y secundado obernadores de !os Eetados, de quienes se solkit6 el envío de u n  pr og ra ma de irrigación y estudios técnicos preliminares en que se funde, así C Q ~ T ~ Qla iniciación de la forma en que puedan colaborar dichos Gobier110sy las autoridades municipales o 10s intereses privados, ya se a mediante aportación en efectivo, cooperación en labores personales, Q aportacion de &les y materiales para 10s trabajos. Con objeto de contar oportunamente con ~ S Q Sdatos fundamentales y poder incluir las obras que han de ... iniciarse el  pr óx im o añ o, se remitió también a los Gobernadores un cuestionario en dende se procuró señalar los  pu nt os má s in te re sa nt es qu e deben indicar las autoridades locales, como e011 10s datos relativos a la sufkaencia o ansufkknc;a de las obras agrícolas en el Estado, las causas de inwificiencia, si es que las hay , las zonas en que las cosechas  se  pie r den  por $alta de rie , las aguas subterráneas o de crecientes _superb%ciales de que se  pu ed a  poner, clases de terrenos, estuclioe técnicos que s e hayan veribicado, proyectos o anteproyectos que existan, vías de comunicación con que se cuenta, centros de consumo probables, clases de cultivo  pr ef er en te s y  pos ;bl es, co nd ici one s ec on óm ka s de 10s  jo rn al er os y coo peración que podrá esperarse de las autoridades del Estado, de las munici pa le s y de 10s  pa rt ic ul ar es .

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La mayor parte de los Estados y Territorios de la RepGblica han mani{estado ya su conformidad y entusiasmo en colaborar para ha formación del  pr og ra ma y la ejecución de las obras, y en consecuencia hay fundamento  pa ra esperar que la acción conjunta que se desarrolle en esta forma, venga a resolver de una manera edieacisirna uno d e los más vitales pro bl em as nackmales,  pu est o que si durante el tiempo en que ha venido desarrollando actividades ía Federación en el ramo de irrigación se han logrado construir y desarrol!ar varios grandes e interesantes S s x e m a s de Riego c o m o son: el del río Sajado, eñr oahuila y Nuevo León; el  b b P r e sidente Calles”, en Aguascalientes : el ante, e n Tarnaulipas y el “Mez po st er io rm en te la construccihn de obras y el &sarro&&o; llo de sistemas de riego de menor magnitud, pero numerosos y disemi nados c5nven;enternente e n toda la República, vendrán a constituir la me  jor solución d e 10s  pr obl em as de irrigación en el pais, mejorando notable mente ia vida econ6m;ca nacional, e inf!uyendo,  por 10 tanto, de I T K ~ Q decisivo en shz  pro spe rid ad.

B

Equipo y  procedimientos usados  para la construcción de las obras del Sistema  Nacional de Por el  I n g .  Ma nuel

 BANCALARI.

AS obras en construcción en el fiistema Nacional de Riego N" 4 (río Salado, Estados de Coahuila y Nuevo León), consisten esencialmente : 19 de la  presa de almacena miento ll amada de Don Ma rt ín , fo rm ad a por un gran terraplén de carca de 1 Km. de longitud y 35 ms. de altura máxima, comprendiendo un volumen de terrac ería d e 1.250,OOO  m3, revestido en su talud de aguas arriba, por una losa continua de conc-eto reforzado que contiene un volumen de 16,000 m3 de material; 2' de un muro de sostenimiento en el extremo sur del teriaplén, de 35 ms. de altura y un volumen de concreto de 17,000 m3;  3 9 del vertedor de excedentes en prolongación de la presa, de una longitud de 243 ms. capaz de dar paso a avenidas de 6,000 m3 por segund o, construído de concreto y conteniendo 80,000 m3 de ese material; 4 9 d e la  presa auxiliar llamada El Diquer que cierra depresiones de nivel más Lajo que el del alrnacenamiento del agua, en las colinas que forman el vaso, dormada por un terraplén de 9 Kms. de largo, de 9 ms. de altura máxima, con un volumen de 650,000 m3 de terracería y un revestimiento, en su talud interior, de mampostería de piedra y mortero de cal, que tiene un volumen de 25,000 m3, y, 5 0 de los canales principales y secundarios de conducción y distribución de agua para el riego de 65,000 Hs. que quedarán fraccicnadas en lotes de 25 Hs. y los canales d e drena je para el escurrimiento d e las aguas sobrantes pluviales o  procedentes del riego. Camiamentos  de Construcc;ón.. Alé'jado el Proyecto de centros de población y requiriéndose para la construcción de la s obras principales un periodo de tiempo de tr es a cuatr o años, fué  preciso in stalar desde luego campamentos de construcción dotados de los servicios indispensables  para la re sidencia de empleados y operarios. El campamento principal quedó establecido e n la margen izquierda, del río Salado , al pie d e la p.esa de almacenamiento, en el lugar llamado Don Martín , ubicado en la Municipalidad de Juárez, del Estad o de Coahwila; Las dependencias principales de est e campamento' son : oficina de ingenieros

7

con un laboratorio anexo para ensaye de materiales de construcción: oficina de super intendencia y de contabilidad: oficina de toma de tiempo; oficina de los servicios generales del campamento : almacén para materiales, implementos y refacciones, talleres - mecánico, de herrería y de carpintería ampliamente instalados para poder efectuar todas las reparaciones que exigieran la maquinaria y equipo usado en la construcción: hospital para atender accidentados o enfermos; escuela con capacidad para 150 a 200 alumnos : habitaciones para familias de empleados : habitaciones colectivas para em ple ado s so lt er os : co me do r y coc ina ge ne ral es pa ra - servicios de éstos. En su mayor  pa rt e, las co ns tru cc io ne s del campamento son de tipo provisional, de madera, con excepción de unas pocas que quedarán paya resideficias de los empleados que se encarguen de la vigilancia y manejo de la presa. El campamento está dotado de un servicio de agua potable qué se toma del río a través de una masa filtrante de grava y arena, de donde se eleva por una bomba accionada por un mctor de 25 H. P. y a través de una tubería de 5” de diámetro, a un tanque distribuidor, de lámina de acero, situado en la parte alta de la loma en la que Be apoya la presa en su extremo norte. U n aparato clorinador purifica el agua en el momento en que entra a los cilindros de la bomba. De l a tubería principal se des pre nd en la s tu be rí as se cu nd ar ia s par a con duc ir el agua al campamento u  pa ra us ar se en la construcción de la presa. Las ag vas negras son conducidas por un sistema de al ba ña le s y at ar je as a un a fo sa sép tic a de don de sa le n pa ra ve rt er se e n el río aba jo del campamento. La energía eléctrica para mover la maquinaria de los talleres y  pa ra el al um br ad o del campamento es suministrada por un dinamo de 50 kilowatios accíonado por un mo tor de explosiones de dos cilindros en el que se emplea aceite Diese1 como combustible. Además del campamento principal en Don Martín, se estableció otro campamento en Camarón,  N. L., que es la estación de ferrocarril más cercana en la línea de Méxi co a Laredo, distante del  pr ime ro 66 Kms. y situado aproximadamente en la parte media del Proyecto. Un ter cer cam pamento de menor importancia, quedó establecido en el rancho de San Antonio a la orilla del río e intermedio entre los de Don Martín y Camarón. Este último camp amento s e utilizó especialmente para residencia de los in genieros ocupados en trabajos topográficos o en el trazo de los canales. El costo de instalación de los campamentos en números redondos fué de . . . . , . . . $400,000.00. Su valor actual aun no amortizado se estima en $60,000.00. En proporción al costo de las obras para las que han servido, el de los campamentos fué de 2%. Transhorte de materiales.

n

. .

Máquina conformadora - llenadora en la construcción del dique.

largo del proyecto y comunicando a éste con la vía del ferrocarril. E stá situada e n terreno de naturaleza y condiciones topográficas favorables, muy cercano al límite de los terrenos de riego y requirió pocas estructuras, todas ellas de escasa importancia. Su longitud, prolongada hasta la presa auxiliar o dique, es de 75 kilómetros. Su costo fué de $2iO,OOO.OO en números redondos. El equipo rodante para el transporte de materiales consiste en 22 camiones de 5 toneladas, 4 carros de remolque de 6 toneladas y uno d e 40 toneladas para el acarreo de maquinaria, equipo de construcción o materiales q ue no se pudieran llevar en los camiones. El servicio resultó satisfactorio con un costo para transporte de materiales de $0.20 tonelada-kilómetro incluyendo gasto s de administración y depreciación del equipo. El costo total de é s t e f u é d e $310,000.00 y su depreciación estimada hasta la fecha asciende a $280,000.00. En los camiones, la depreciación estimativa ha sido por férmino medio de $1.25  por ho ra de trabajo. dr

” .

Construcción de la hresa de tierra.

Camarón, la estación de ferrocarril más cercana a la presa, queda distante de és ta poco más de 66 kilómetros, por lo que e¡ transporte de materiales requirió un estudio cuidadoso, comparativo entre una vía férrea y un camino para tránsito de camiones, con el propósito de determ inar la forma más económica de transporte. Se consideró preferible el camino carretero como más económico, más adecuado para e¡ volumen d e materiales por trasportar y de utilidad no sólo temporal sino  pe rm an en te , po rque servirá como camino  pri nci pal pa ra la exp lota ció n agríeQ la, es ta nd o loc aliz ado a lo

La elección del sitio definitivo para construir la presa resultó de detenidas exploraciones topográficas y geológicas de la boquilla, relativamente ancha, que l a presa vino a cerrar. Las per€oraciones de explotación del subsuelo pusieron de manifiesto la existencia de una formación anticlinal de capa s de roca caliza de muy suave inclina ción, de espesores entre 0.30 y 0.90, intercaladas con material arcilloso apkarrado o con delgadas capa s yesosas. La existencia del anticlinal determinó principalmente la situación de la presa q ue fué colocada cerca del ápice, en el talud de aguas arriba y en dirección casi paralela ,al eje del anticlinal. Quedó asentada sobre terreno comple-

8

9

tamente limpio de raíces y materia vegetal, para lo cual se removió toda la capa su:  per fici al d e ti er ra af ec ta da por la veg eta ció n. El material para 12 construcción se tomi d e un lugar aproximadamente de 20 14s. de extensión, situado a 2 kilómetros de la presa, y en el cual, pozos de prueba hechos con el propósito de encontrar material adecuado, índicaron que existía de calidad excelente para el objeto, compuesto de una mezcla de grava de distintos tamaños y tierra, con s uficiente material fino para poder forma r una masa muy compacta e impermeable, de  pes o esp eci fic o igu al a 2 ton. por m3 cuando está apretada como se colocó en la presa. Ea excavación de este material se hizo con dos palas de vapor con cucharones de 21/2 yardas c úbicas, las cuales cargaban directam ente los Carlos de transporte, de 5 yardas cbáblcas de capacidad, de volteo lateral, dispuestos en ocho trenes de 12 ó 14 carros  jal ad os por loc om oto ras de pet ról eo , de 20 toneladas de peso, que corrían sobre vías formadas con rieles de 50 lbs.  por ya rd a y te nd id as en tre la s za nj as de pré sta mo d e donde se tomaba la tierra y el lugar donde se iba  €o rm an do la Inmediatamente que los carros eran descargados y el tre esabz para traer nuevo material, la vía era desalojada lateralmente por medio de tractores de 30 H. P., una distancia suficiente para permitir que la tierra descargada fuera extendida en ca p a s horizontales de 0.20 de espesor, operación que  se hacía con dos conformadoras ja ladas por sus respectivos tractores de 60 H.Pe espués de extendida la tierra, era suficientemente humedecida regándola con mangueras abastecidas por la tubería princi pal d e co nd uc ció n de ag ua in st al ad a a lo larg o y cerca del pie de la presa. Las capas de tierra ya humedecida eran perfectamente apisonadas, en cuya operación se em ple aro n 4 aplanadoras de 12 toneladas de  peso. Re pi ti en do es ta s op era cio nes de tra ns  po rt e y col oca ció n, se lleg ó a la alt ur a fi na l de la pr es a en un in ter va lo de tie mpo d e 22 mesés durante los cuales se colocó un volumen de 1.290,OOO m3 o sea aproximadamente un promedio de 2,000 m3 diarios. El costo unitario total de la terracería puede estimarse en $1.82  por m3q dividido como sigue:

. : . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. $ Costo directo,. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  Niv ela ció n. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Gastos indirectos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Administración e ingeniería en el campo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Administración general. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

1.18 0.25

0.09

0.16 0.14

S u m a . . . . . . . . . . . . . . . . ..$ 1.82

El valor total en números redondos del equipo usado en este trabajo fué de.. . . . . $800.000.00. Su depreciación estimativa al finalizar la obra era de $400,000.00. En pro porc ión, por es te con cep to re su lt a un co sto un ita ri o d e $032  por me tr o cúb ico de te rr acería, inclugdo ya en el costo total indicado arriba. El talud interior o de aguas arriba del terraplén e s t á recubierto por una losa de concreto armado, de espesor variable de 0.28 m. e n l a b a s é a 0.20 m. en la parte supe rior, cuyo pie queda lígado a un dentellón vertical, también de - concreto armddo, de

10

Construcción del vertedor de demasias.

0.50 rn. de espesor y que penetra a prohndidades varíables, hasta de 8 ms.? según la naturale za del subsuebo. En la base de este dentellón se hicieron perforaciones a to do lo largo del terraplén, distantes 3 ms. una de otra, de 9 ms. de profundidad, que sirvieron para hacer inyecciones de cemento a una presión de 90 libras por pulgada cuadrada. En su parte superior el revestimiento del talud se une a un parapeto vertical qne se levanta un metro arriba de la corona de la  pre sa. El concreto usado para es ta obra fué de proporciones 1:2.5.:5. El agregado se obtuvo triturando la roca caliza que constituye el elemento principal de la formación geológica en que descansa !a presa. A ese efecto se instalaron dos plantas quebradoras, una cerca del extremo norte y la otra e3 el extremo sur de la presa. La primera fué de tipo  po rt át il d e 120 toneladas de capacidad en 8 horas de trabajo. La segunda de carácter  pe rm an en te se de sc rib irá más adelante. El refuerzo del revestimiento consistió en varillas corrugadas de %" de diámetro espaciadas 0.30 en cada dirección. E n la construcción se siguió el siguiente orden: primeramente el dentellón, des  pu és el revestimiento del talud tiasta una altura aproximadamente 15 ms. abajo de la corona del terraplén, en seguida el  pa ra pe to y por últ im o la pa rt e da lta nte de l re ve st imiento. Para hacer la revoltura del concreto del dentellón se usó una mezcladora portátil de 1/2 yarda cúbica de capacidad que se fué instalando en distintos puntos, a medida que el trabajo avanzaba, a fin de evitar un transporte largo de! concreto, el cual era llevado en pequeñas vagonetas, de capacidad aproximada de 180 1s. condwidas a mano, y que montadas en dos grandes ruedas pueden girar hacia adelante sobre ell eje horizontal, vertiendo su contenido en la excavación hecha para formar el dentellón.

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El concreto para la parte baja del revestimiento se hizo en una mezcladora d e igual capacidad, situada en un punt ntral -donde el terreno presen ta una elevación cerca del pie del talud. El transporte se hizo en vagonetas de volteo lateral, de una yarda cúbica de capacidad, dispuestas formando trenes de dos a cuatro vagonetas jalados por locomotoras de gasolina de 14 H. P. que corrían en la vía que se estableció sobre el talud poco arriba de la zona que se tr ataba de revestir. Funcionaron dos de esos trenes de los cuales uno iba cargado en tanto que el otro regresaba vacío. Las vagonetas descargaban en canales de madera por las que escurría el concreto; establecidas parale lamente al ta lud del centro de las fajas, de 3 ms. de anchura, en que se dividió el revesthniento para su construcción, y las cuales se colocaban alterna tivamente. En est as condiciones la distancia mayor de transporte del concreto fué aproximadamente de 500 ms.

'.

El  par ape to se cons truyó en tra mos que pud ie ran se r colado s en una jor nada de trabajo de 8 horas, a cuyo efecto la mezcladora rodante de 1/2 yarda cúbica de capacidad f u é siendo colocada en puntos convenientes avanzando sobre la corona del terraplén, y conduciéndose el concreto en vagonetas de mano que por una pequeña rampa subían a l a plataforma, construida de madera, a la altura de la corona del parapeto, a lo largo del tramo que se trataba de colar, de donde vaciaban directamente a las formas. La parte superior del revestimiento s e construyó también en fajas alternadas de ms. de anchura aproximadamente, siguiendo la inclinacion del talud, limitadas por  planos ver tic ale s perpe ndic ular es al ej e de la pre sa. La mez cla dora para es te tra baj o se situó en el extremo norte de la presa y de allí se llevó el concreto en los trenes de vagonetas caminando sobre la vía que se estableció arriba del parapeto y que vaciaban en las canales de madera colocadas en el centro de cada faja y por las cuales el concreto escurría al lugar donde tenía que ser colocado. En est as condiciones, diariamente se colaban en una jornada de 8 horas, 70 m3 d e concreto.

3

Construcción del vertedor de demasías. Costos que incluyen gastos directos e indirectos, administración e ingeniería en el campo y administración general. Construcción del muro de sostenimiento.

Este muro de concreto reforzado sirve para sostener verticalmente el terraplén que forma la  presa en su unión con el vertedor de excedentes. Se desplanta sobre la roca $irme elevándose hasta la altura de la corona del terraplén, 35 ms. aproximadamente y comprende un volumen de concreto de 17,000 m3 en números redondos. Su construcción se dué haciendo a medida que iba elevándose el terraplén, empleado al efecto una mezcladora rodante de media yarda cúbica de capacidad y transportando el concreto en vagonetas de volteo lateral en forma semejante a la ya descrita. El costo uni tario por m3 fué como sigue.

Los costos unitarios por metro cúbico pueden considerarse como sigue :

Dentellón : Concreto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Formas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Refuerzo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

.$ 33.25 1.95 ..> 1.50

.*+

Suma. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .$ 36.70 Revestimiento del talud: Concreto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $ 45.57 0.96 Formas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17.62 Refuerzo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . c ,

D

..

Concreto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Formas. . . . . . . . . . ........... Refuerzo . . . . . . . . . . . . .

.$,

Suma..

......................

Parapeto : Concreto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Formas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . erzo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Suma. , .

. . , . , ,, , ,. , ,, , .

.$ 64.15

Suma.

........

. . . . . . . . . . . .$ 33.63 . . . . . . . . . . . . . . 4.60 ................

0.15

. . .$

38.38

Construcción del vertedor de excedentes.

. $ 43.85 31.65 .*, 9.65 .?,

. , , .$

85.15

El vertedor es de concreto, del tipo de construcción llamado de 'bpilares de cabeza redo nda' que por primera vez se construye en México y quizás en el mundo entero. En este tipo de construcción el material queda sujeto solamente a esfuerzos de com  pres ión con excepc ión de la losa que cu br e e l e spac io e ntr e l os pil ares en l a par te pos'

12

13

terior formando el cimacio por donde desciende el agua al brincar por el vertedor, lo sa que debe llevar el refuerzo de acero correspondiente a su apoyo en ambo3 extre mos. Sobre la cresta del vertedor está construido un  pue nte cuyo piso qued a al mis mo nivel que el de la corona de la presa, soportado por pilares distantes 9 ms. d e e j e a eje y que dejan entre s í claros de 7 ms. de anchura. El vertedor está dividido en dos tramos: el primero comprende 22 claros que desaguan directamente en el río; el segundo comprende cuatro claros que desembocan en un canal excavado en la roca en la ladera donde s e empotra la presa. Entre ambos tramos queda cerrado uno de los tramos del  pue nte en tr e dos pilar es. Al  pi e del vertedor se construyó un umbral de flector protector contra las erosiones que tiende a producir el agua al caer. La estruc tura toda comprende un volumen de 80.000 m3 de concreto en números redondos.

I

Para construirla se aprovechó el material debidamente escogido, prove niente de la excavación en roca necesaria para la apertura de la  par te extrema del vertedor y  para el camino donde desemboca el puente, material que era transportado en vagonetas de volteo lateral de una yarda cúbica de capacidad, empujadas a mano sobre vías temporales, o  por cam ione s de cinco toneladas, de cajas de volteo hacia atrás, a la planta de quebradoras que se instaló en el extremo sur del vertedor, a corta distancia del e j e d e la  presa chica aguas abajo y emfrente del tramo ciego del vertedor, a altura suficiente para recibir el concreto a nivel  poco más alto que el de la cresta.

Sistema de Riego No 4, río Salado. Coahuila y  Nuevo Le6i1. Vista de las coni puer tas radiales sobre el vertedor de demasías.

La  pla nta cons ist e de una quebr adora y una pulverizadora, de cono giratorio, que vierten el material tritura do en el extremo inferior de un elevador de cangilones que lo lleva a una altura de 25 ms. aproximadamente a un clasiiicador d e tamaños, cilíndrico y giratorio, que 10 pasa , seg ún SUS dimensiones, a ias tolvas de almacenamiento construidas directamente aba  jo del clasificador y de las cuales una central recibe el material fino o arena y dos laterales reciben el material grueso, pasando el sobrante

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Colado de la losa de revestimiento.

de mayores dimensiones a una canal que alimenta la máquina pulverizadora.

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Las

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ras, por medio de compuertas situadas en su  bas e, vacía n el mat eri al en ca ja s medidoras que directamente pueden verterlo a dos mezcladoras de concreto de una yarda cúbica de capacidad situadas inmediata mente abajo de dichas cajas. Toda esta planta está movida por un motor Diese1 de tipo llamado marino, de seis cilindros y de 240 H. P. Esta planta pudo bien suministrar 160 m3 de concreto en una jornada de 8 horas. El concreto suministrado por estas mezcladoras era transportado al lugar de su co!ocación en vagonetas de volteo late ral, de una yarda cúbica, empuja das a mano, que se movían sobre vías instaladas en puentes provisionales a altura suficiente para que las vagonetas vertieran su contenido en canales inclinadas con la  pen die nte necesaria para que el concreto escurriera a los moldes. Es te sistema de transporte se empleó para la construcción de la mayor parte del vertedor hasta el nivel de su cresta. P a r a el  puen te super ior, el concret o se tra nspo rtó en cami ones de una ton ela da, con caja que podía voltear hacia atrás y que lo conducía a  pequc ñas tol vas de d c n d e s e desprendían las canales inclinadas d e escurrirniento hacia los moldes, pasando los camiones el tramo en construcción, sobre un puente de tablones soportado por los  pies derechos de las cimbras. El concreto usado en las partes de la construcción suje tas a esfuerzos d e com-

 prens ión fu é en proporci ones de 1 : 2.5 : 5. En las partes con refuerzo de acero y sometidas a esfuerzos de flexión la proporción fué de l : 2 : 4. Los costos unitarios del concreto por metro cúbico resultaron como sigue:

En el vertedor: Concreto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Formas. . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . §urna. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . En el puente: Concreto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Formas:, . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Sume. . . . . . . . . . . . . . .

El costo

.$ 32.67 .,( 5.83 .9,

38.50

.$ 67.00 46.00 .$,

. . . . . .$113.00

del refuerzo no ha sido aún determinado.

Construcción  del dique.

El dique es un terraplén de 9 Kms. de largo y 9 ms. de altura máxima, construido en una part e del contorno del vaso de almacenamiento, con el fin de obtener el nivel necesario para la contención del agua, en esa parte baja que forma la línea de divi sión de las aguas e ntre la cuenca donde queda formado el vaso y la de un arroyo que viene a u nirse al río, aguas abajo de la boquilla, donde está construida la presa principal. El dique comprende un volumen de terracería de 650,000 m3 para cuya formación se tomó el material de una zanja de préstamo a lo largo del dique, del lado exterior de éste y separada de l pie del talud por una ancha banqueta. Esa zanja de préstamo se hizo de poca profundidad y de considerable anchura, porque la capa superficial del terreno suministró mejor material que las capas profundas, las cuales contienen gran cantidad de yeso, circunstancia que hizo que fueran consideradas menos adecuadas para la construcción.

Sistema  N. de Riego  No 4. Río Salado. Coahnila, Nuevo León. Vi sta del campamento desde una de las compuertas radiales.

elementos de trabajo encontrados en la localidad. El terraplén fué concluído en un  período d e 16 meses, de donde resulta un promedio aproximado de 1,400 m3 diariamente. El costo unitario resultante por metro cúbico de terracería fué el siguiente: Gastos directos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .$ 0.92 Gastos indirectos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .,, 0.07 Administración e ingeniería en el campo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ,, 0.12 . , ~0.10 4dministración general: . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .,, 0.13  Nive lac ión. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

La superficie del terreno donde quedó asentado el te rraplén se limpió perfectamente de tcda clase de residuos vegetales. La tierra para la construcción se extrajo con tres máquinas excavadoras-elevadoras de banda, movidas por sus respectivos tractores de 60 H. P., que cargaban los carros de transporte de 1% yardas cúbicas de capacidad que se vaciaban abriendo su fondo y jalados por mulas. Cada excavadora servía a un número de carros, variando de 8 a 12, según la distancia de acarreo, que variaba de 50 a 200 ms. Una vez que la tierra era depositada en montones al vaciar los carros, se extendía en capas horizontales de 0.20 de espesor, operación que se hizo con dos conformadoras accionadas por tractores de 30 H. P. Después de extendida, la tierra era regada con mangueras y apisonada con aplanadoras de 12 toneladas. El agua  par a el rieg o se obt ení a de una cañe ría de 3" tendida a lo largo y cerca del  pie del talud interior y que partía de un depósito de agua situado en la parte alta de la loma de donde parte el dique, y al cual se elevaba el agua del río por medio de una bom ba impe len te de tr es cil indro s movida por un mot or de 20 H. P. En algunos tramos del terraplén se emplearon escrepas, para avanzar con mayor rapidez y para emplear

El talud interior del terraplén que forma el dique, está revestido de mampostería de piedra unida con mortero de cal, de un grueso de 0.30. El material para esta obra se obtuvo abriendo canteras de extracción d e piedra cerca del extremo norte del dique a una distancia aproximada de medio kilómetro, donde la formación geológica consiste de capas superpuestas casi horizontales, de roca caliza dura y resistente, de es pesor es vari abl es y que se prest a para obt ene r de ell a con poco tra baj o bloques de forma bastante regular que facilitan su colocación. La piedra que resultaba de dimensiones pequeñas o de formas irregulares se aprovechaba para hace r la arena neces aria

16

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Total..

............................

.$ 1.34

 par a el mort ero , a cuyo efe cto fue ron ins tal ada s un a que bra dora y una pulve riz adora a corta distancia de la cantera. Cerca también, se abrió la cantera para extraer la pie dra de la que se obtuvo la cal, calcinándola en dos hornos cilíndricos de funcionamien to casi continuo, en los que se usó leña como combustible y que podían producir 18 to neladas de cal diariamente. El  product o obte nido de est os horno s fué una cal hid ráu lica que dió un buen mortero. Al  pie de los hornos se instaló el patio para apagar la cal y para hacer el mortero. La revoltura de éste se hizo usando una mezcladora ordina ria de hacer concreto, de media yarda cúbica de capacidad, que vertía el mortero en una pequeña tolva de almacenamiento de donde s e descargaba directa mente a los camiones que lo transportaban a la obra.

Excavación de canales. Se ha efectuado hasta la fecha la excavación del canal principal en una longitud de 45 Kms. comprendiendo un volumen de 3.300,OOO m3; la del sistema de canales d e drenaje con un volumen de 3.060,OOO m3, y la del sistema de canales de distribución con un volum en d e 2.050,OOO m3. En tot al u n volu men d e excav ación d e 8.410,OOO m3 de los cuales 700,000 fueron en material duro'que requirió el uso de explosivos para ser extraí do y consistió en s u mayor parte e n un conglomerado formado de cantos rodados duertemente cementados.

l

Los costos unitarios medios de los materiales, incluyendo todos los gastos, resul taron como sigue: piedra $3.10  por m3; are na $4.40  por m3; cal $19.00  por tone lada . Este último resultó bastante recargado por la depreciación de las instalaciones cuyo costo tuvo que repartirse en un número relativamente corto de toneladas; pero de to das maneras fué económico, porque de haberse adquirido fuera la cal, la estación de desembarque m ás próxima a la obra hubiera quedado distant e 75 Kms. y el costo del transporte hubiera ascendido a $15.00  por ton ela da. P a r a el transporte de la piedra y del mortero al lugar donde tenían que emplearse, y para el servicio de las instalaciones de producción de materia les, se emplearon en ge neral cuatro camiones de cinco toneladas y uno de una tonelada.

En general este equipo trabajó diariamente dos turnos de ocho horas cada uno. El rendimiento medio obtenido con las máquinas de 1% yardas cúbicas en la excavación de los canales principales y de drenaje fué de 400 m3 por turno y el de la máquina de 21/2 yardas, 600 m3.

Los costos unitarios resultantes por metro cúbico de excavación pueden expresarse como sigue: en el canal principal, $0.39. En los canales de drenaje, $0.30. E n l o s canales secundarios, $0.46. En resumen, el Sistema Nacional de Riego N q 4 (río Salado, Estados de Coahuila y Nuevo León), está en su cuarto año de construcción. Al finalizar éste, estarán practicamente terminadas las obras de almacenamiento, el canal principal, y los canales de dre naje en una longitud ccrrespondiente a la mitad aproximadamente de Ia extensión total del Proyecto y el sistema de canales de distribución para la primera unidad que tiene una extensión de 16,000 hectáreas. Se han utilizado instalaciones y equipo con un valor total de $3.800,000~00 que en el tiempo que han sido utilizados han tenido una depreciación estimativa de $2.600,000.00, aplicada al c osto de las obras. El equipo existente, con un valor estimativa de $1.200,000.00 sigue en parte usándose para la terminación de las obras y el que ya no s e necesita se comienza a enviar a otros Proyectos cuya construc... ción se inicia.

La mampostería puede considerarse dividida en dos clases : la del revestimiento  propi amen te dich o y la del dent ell ón en que s e apoya e n la bas e y que pene tra en el terreno al pie del talud a profundidades variables, en relación con la altura del terra  plén , exp res ada por la fór mul a  p=0. 8 v'H, en la cual H es la altura correspondiente del terraplén. Para construir esa mampostería se ocuparon de 30 a 50 albañiles que llegaron a hacer 100 m3 diarios, aunque en pzomedio, durante el período de 18 m e s e s que abarcó la obra, el avance diario fué de 50 m3 correspondiendo un poco menos de 2 m3 diarios por albañil. Los precios unitarios de la mamposteria por metro cúbico pueden estimarse como sigue : En

el

El equipo usado para las excavaciones d e canales consistió en 16 máquinas excavadoras de motor Diesel y cucharón de 1542 yardas cúbicas de capacidad y una de mayo res dimensiones, de motor Diesel- eléctrico, con cucharón de 2% yardas cúbicas, que se utilizó en 12s excavaciones más anchas y profundas.

revestimiento :

Costo directo.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Cargos indirectos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Administración e ingeniería en el campo.. . . . . . . . . . . . Administración general, . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Suma.

l

..

..............

En el dentellón: Costo directo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Cargos indirectos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Administración e ingeniería en el campo.. . . . . . . . . . Administración general. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

. . . . . . . . . . . . . .$ 16.75 . . . . . . . . . 1.29 ..... 1.80

. . . . . . . . . . . . . . 1.36 Suma. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .$ 21.20

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Algo Sobre Aguas Artesianas y su Alumbramiento  Po r el

 Dr .  Pa ul

WAITZ.

S creencia general, en nuestro país, que con la perforación de un “pozo artesiano” se puede solucionar en cualquier lugar la escaséz de agua, tan frecuente en las regiones áridas y semiáridas del centro y norte de la República. Esta opinión, completamente errónea, ha sido la causa de innumerables iracasos, del gasto inútil de incalculables sumas de dinero y de la desanimación de muchas personas sensatas que, por el mal resultado experimentado en cierta ocasión, caen ahora en el otro extremo y ya no quieren invertir dinero en obras de est a naturaleza, aún cuando conocedores de la materia aconsejen la apertura de un pozo profundo. La probabilidad de encontrar un manto de agua artesiana en el subsuelo, depende de la constitución de éste y de las condiciones climatológicas de sus alrededores cercanos o lejanos. Para poderse dar cuenta de la naturaleza del subsuelo del lugar, se ne cesitan amplios conocimientos especiales que sólo puede tener y adquirir un geólogo experto y concienzudo, quien es la única persona capacitada para hacer e l estudio de los fenómenos que se presentan en el terreno, y cuya interpretación correcta sir ve para dilucidar, hasta donde es posible, las condiciones geológicas que existen en la  profu ndid ad.

Prueba de bombeo en un pozo de la hacienda de Chapingo, Méx.-Foto.

Waitz.

Digo, hasta donde es posible, porque a causa de los cambios más o menos rápidos que experimentan a menudo las capas que constituyen el subsuelo, las propiedades que presentan éstas en la superficie, donde afloran a veces, no continúan hacia la  proi undl dad , por lo que también la circulación del agua varía en ella s paso a paso, sin que aún el más experto geólogo pueda siempre prever estos cambios o  pre cis ar la forma en que se efectúan. De esta manera no es de extrañarse que pozos localizados con todo cuidado, aprovechando toJos los datos que pueden proporcionar observaciones concienzudas y amplias, no den el resultado apetecido, sea que su rendimiento no sea tan grandel como se esperaba o sea que la calidad del líquido que producen, no satisfa ga los deseos puestos en la obra: por mala suerte tampoco los métodos modernos geofísicos, que para otros ramos de la geología práctica (cria deros de minerales, depósi tos de petróleo y estudio de perturbaciones tectónica s) han resultado ya de grar. utilidad, han podido ser aplicados y especializados para localizar agua artesiana o corrien tes subterráneas profundas. Precisameite por estas dificultades, de las cuales sólo el geólogo puede darse cuenta cabal, se puede decir que únicamente est e profesionista es el capacitado para opina? sobre las  proba bil idad es de enco ntra r en un a región nueva en la cual no existan toda vía perforaciones que hayan alumbrado aguas artesianas mantos de agua en la profundidad y sobre la posibilidad de que estas aguas sean aprovechadas con éxito, sea  para aba st ec er con agua potabl e un a pobla ció n (1) o  para apli carla en el ri ego ; pero

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Bombeo de un pozo artesiano en la hacienda de Chapingo, - Méx.-Foto.

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Waitz.

(1). La provisión de agua potable en las  pobla cione s, ha sido objeto de much as discu siones desde que se ha visto que enfermedades, como Ia fiebre tifoidea, el cólera, la disentería, etc., son causadas y  pro pag ada s por medi o del ag ua con tami nada con gér mene s pató genos. El agua de mantos artesianos es naturalmente pura y no tiene casi ningunos gérme-

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I--

no por eso debe considerarse aún al más ex  pe rt o y co nc ien zu do geó log o, com o un a per sona infalible, pues precisamente en una re gión nueva, inexplorada por perforaciones, las irregularidades desconocidas del subsuelo muchas veces pueden causar sorpresas desagradables, respecto a la productividad del o de 10s mantos artesianos previstos por el geólogo y encontrados en las perforaciones. La perforación de un pozo en busca de agua artesiana es cosa relativamente fácil y  ba ra ta , cu an do s e tr at a d e ma nt os su pe rfi ciales, es decir, de capas que se encuentran a profundidades que no pasan de unos 50 a 100 metros. Sin embargo, en depósitos de cantos rodados sueltos también a menores  pr of un di da de s, pu ed e tr op ez ar se con dif icu ltades muy serias que exijan gastos crecidos y pongan en peligro el éxito de la perfora ción. Perforaciones profundas siempre son de costo crecido, tanto porque se necesitan  pa ra su ejecución máquinas caras en su adquisición y en su manejo y personal adiestrado, como por el alto costo de la entubaciírn, por lo general necesaria para garantizar un buen éxito. El trabajo de  per for aci one s es, mientras m á s hondo, más expuesto a  per cances, y no es raro el caso en que se haya tenido que abandonar una perforación prof un d a , por habe:se quedado en el fondo una Prueba de bombeo de un pozo artesiano en la Avenida Chapultepec, D. F. Foto. Waitz. herramienta que no ha sido posible extraer o desviar a un lado, para poder seguir la profundización del pozo hasta encontrar el manto artesiano. Para el rendimiento de un  pozo es de cierta importancia, también, el diámetro con que entra la perforación al manto artesiano. §e comprende que de un pozo de 8” d e diámetro s e podrá extraer, siend o las otras condiciones de la perforación y del sub-

suelo iguales, más agua que de uno de 6”, y se procurará por lo tanto siempre llegar con un gran diámetro hasta el manto acuífero. P ero muchas veces esto se dificulta, sobre todo en pozos profundos, porque el perforista, por las condiciones del terreno, se ve obligado a reducir la perforación, lo que naturalmente no resulta en favor del éxito deseado. Si tomamos en consideración estas dificultades que se presentan en las perforaciones, el alto costo de ellas y cierta inseguridad siempre inherente en estos traba jos y e n su éxito final, vemos que conviene em prende r tales perforaciones, sólo cua ndo el dictamen de un geólogo experto y concienzudo, a quien se haya encargado el estudio de la cuestión, sea favorable y cuando no haya otro medio más seguro y m á s  ba ra to pa ra al um br ar ag ua de bu en a ca lid ad . En mi modo de ver  y creo que todos los geólogos e hidrólogos conscientes serán de la misma opinión debe recurrirse al alumbramiento de agua artesiana sólo en los . . casos siguientes :

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nes. Pero si esta agua al llegar a !a superficie del terreno, a causa de una entubación de fectuosa se mezcla con agua freática o supeificial contaminada, o si llega a tanques de a1rr.acenamiento en contacto con el aire y  polvo carg ados de microbios, esta ag ua art esi ana por su captación inadecuada resulta tan mala c o m ~cualquiera otra. El poder filtrante del terreno aluvial (si no se trata directamente de grava gruesa con intersticios completaniente abiertos) es en general muy grande y más eficaz que el de filtros artificiales, y  por est a raz ón en mu chos casos en regiones poco pobladas, ya las aguas freáticas que corren sólo a unos cuantos metros debajo de !a superficie por depósitos medianamente perineables, están en lo general suficientemente purificadas para poderlas tomar en consideración para el abastecimiento de  poblacion es, sie mpr e nat ura lme nte suje tánd olas a inv esti gaci ones rig uro sas y  prolo ngada s res  pect o a sus calidades químicas, bacteriológ icas e hidrológicas bajo dife rentes condiciones.

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Pozo artesiano derramado en una zanja. Jojutla, Mor. Foto. Waitz.

Pozo artesiano bro tante en la plaza principal de Jojutla, Mor. Foto. Waitz.

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co tiempo por los productos de la región abierta a la actividad industrial, o en el caso que el resultado fuera negativo ya bemos dicho que no somos inialibles se evitarán gastos futuros de nuevas exploraciones, quedando ya del dominio público la impo sibilidad de incorporar esta zona árida a las productivas del país.

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México, D.

F., 13 de

junio de 1930.

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EBE el Gobierno d e la Repúblic a intervenir en forma permanente el maPozo artesiano brotando en la plaza principal de Jojutla, Mor.

-Foto. Waitz.

19-Si, como por ejemplo en el Valle de México, el éxito de una perforación está completamente  ase gur ado , y que otros medios para la provisión de agua sean más costosos y el agua de otras fuentes por su mala calidad no sea adecuada para el objeto apetecido.

-

20-Si hay probabilidades de encontrar agua artesiana a una profundidad relati vamente corta, con el resultado que este modo de aprovisionamiento exige menores gastos que la captación y conducción de otras aguas superficiales o que la calidad de éstas sea mala. 39-En el caso de que no haya absolutamente ningún otro medio de obtener agua en una región, se debe recurrir a la perforación e n busca de aguas profundas sólo en el caso de que el dictamen del geólogo indique, por lo menos, la  g5os;b ;í;dad de encontrar agua en el su bsuelo. No so n nada raros los casos en que el geólogo con absoluta certeza puede declarar que las condiciones del subsuelo excluyan la posibilidad de encontrar agua aprovechable en él, y sería de calificarse como un despilfarro tonto, si se intentara alumbrar, por ejemplo, agua artesiaiia en ciertas zonas calcáreas o en rocas ígneas instrusivas. En cambio, en otras regiones carentes de agua, donde el geólogo, después de un estudio detenido y concienzudo, pueda demostrar que existen probabilidades de encontrar agua artesiana profunda, deberían hacerse exploraciones sistemáticas. E n caso de que las erogaciones que exijan tales obras sobrepasen los límites de lo que puede es pe ra rs e de la iniciativa particular, convendria ejecutarlas por el Gobierno con la segu ridad de que estas inversiones, si el resultado es favorable, son recompensadas en po-

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nejo de los sistemas de riego, o d e j a r su funcionamiento en manos de los colonos, cuando éstos se hallen capacitados para asumir su completo dominio? Nada puede aventurarse todavía a este respecto, ya que la irrigación en México apenas si empieza y no es tiempo todavía de afirmar qué es lo que conviene hacer a este respecto. Sin embargo,  por es ta r ya ab ie rt o a la colo niza ción el sistema d e riego “Presidente Calles” en el Estado de Aguascalientes y próximo a abrirse  par a fine s de este aiío- el del río §alado en Nuevo León y Coahuila, vamofi a ocuparnos d e este asunto, para lo cual es me nester que se analicen ciertos antecedentes. Las leyes d e México descienden en líne a recta de las antiguas leyes romanas. §egún éstas, relativas al uso del agua, que en su época n3 fueron sino la cristalización en un código escrito, de los primitivos usos y costumbres, el agua de las Corrientes fué de la propiedad común del pueblo, constituyéndose el Estado en guardián y adminis trador de aquella propiedad, D e conformidad con esas leyes, el Estado puede, y así lo ha hecho y lo hace, derivar el agua de las corrientes, hacer las obras necesarias para permitir su aprovechamiento y cargar cualquier suma que se estime justa por tal .. servicio. Testigos de ello son, por ejemplo, los acueductos de Roma y de otras ciuda des de Italia. Esta  pr áct ica ha si do ge ne ra lm en te se gu id a en tod os lo s pa íse s civi liza dos. Con siderando, en primer lugar, las más antiguas nacionee latinas: Italia, Francia y España, nos encontramos con que en todas ellas el Gobierno ha construido obras, y la nación, departamento, estado o ciudad, ha retenido por lo general la posesión del 6;stema, aun cuando delegue sus  pri vile gio s y facultades en otras personas o corporaciones, sí así lo juzga más conyeniente, y los cobros que se hacen por el agua suministrada, se efectúan al tipo más bajo posible, a fin de resacirse en parte de los gastos de administración del sistema. Este es el caso en las tres naciones citadas, y princi-

+ l

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Y.

 palm ente en Espa ña, de quien México tomó directamente sus leyes y costumbres para regular el USO del ag’ua. Como un ejemplo de la tendencia actual, citamos aquí parte de un informe oficial rendido el 8 de noviembre de 1928 al Departamento de Comercio de los Estados Unidos: “El Gobierno Italiano pondrá en vigor un amplio proyecto d e irrigación, que implica un gasto mínimo de Dls. 400.000,000, la mitad del cual será cubierto por el Gobierno y el resto dejado a los propietarios de tierras, por 30 años. S e estima que los trabajos requerirán el empleo de 200,000 hombres durante 44 años” (United States Daily, Nov. 9, 1928). Igual cosa sucede en los países de habla inglesa o naciones dominadas por ellos. En donde quiera que el Gobierno desarrolla directamente la irrigación, las cuotas y condiciones para el uso del agua se fijan por las autoridades oliciales. Eso ocurre en la India, Egipto y Australia, en donde el Gobierno ha construido grandes sistemas de riego. Por lo que hace a la India, oficialmente se ha estatuido que uno de los €actores importantes de compensación tomados en cuenta por el Gobierno Inglés para retener el dominio de los sistemas de riego, es la relativa seguridad contra la escasez, es decir, el hambre, ya que antes de que fuera desarrollada la irrigación, en varias ocasiones hubo necesidad de gastar grandes sumas de dinero en la alimentación de los habi tan t e s. Canadá presenta un notable ejemplo de colonización por medio del riego, fijándose a la renta del agua cuotas menores del costo en los grandes sistemas de irrigación en Alberta, los que, al ser construidos por el Canadian Pacific Railway Sistem, no pudieron convertirse en hechos reales sino hasta que el Gobierno aportó su ayuda y patrocinó la s obras.

En los Estados Unidos existen muchos precedentes de casos en que el Gobierno retiene permanentemente las partes vitales de los sistemas de riego o e! dominio tem po.-a1 de si st em as compl etos ha st a que llega un mom ent o en que los propiet arios de las tierras se encuentran capacitados para hacerse cargo de tales empresas. Esta es 12  prácti ca gene ral , seg ún la Ley de Irriga ción ame ric ana y sus dive rsas refor mas. Por lo que hac e a las cuotas, la intención del Gobierno americano es la de exigir únicamente los  pagos que los colonos ofrezcan que pueden hacer. Igual cosa pasa con las entidades menores de gobierno: la ciudad y el condado de Denver, Colorado, por ejemplo, posee y opera cierto número d e canales de riego en conexión con su servicio de agua para usos domésticos, y cobra a los agricultores l as cuotas fijadas por la citada Corporación, haciendo caso omiso de los gastos de adquisición y funcionamiento. En muchos casos, algunas otras sociedades hacen la misma cosa. Na turalmente , las empresas rara vez han producido lo suficiente para compensar los gastos de los proyectos de riego. Por regla general, aquellas han soportado iuertes  pérd ida s: per o no obst ant e, ha n sido la base li ber al para el establecimiento de prós pera s comu nid ade s agríco las. La colonizaci ón y pros per ida d de gra n parte de l Est ado de Utah, se debe a las prácticas simil ares que se han implantado para tal objeto, siendo incontables los casos en que, terrenos que costaron a los colonos alrededor de Dls. 100.00  por acre , val en aho ra Dls. 2,000.00.

l.

En México, por ejemplo, tenemos el caso del Sistema de Riego Núm. 1 (“Presidente Calles”), en que el valor de la hectárea de riego, con la ejecución de las obras, alcanza un promedio de $734.75 de costo, vendiéndose a los colonos en $300.00 la hectárea de tierra de  pri mer a clas e. En el Si st em a de Rie go Núm. 4, (río Salado, Coahuila y Nuevo León) ocurre igual cosa, pues la hectárea sacará un costo de cerca de $600.00 y se venderá, probablemente, en $250.00. ;Qué empresa privada podría hacer esto y dar un plazo de 25 años para el pago del terreno? Tan to en la vecina República del Nort e como en otros países, la política del Go bierno es dejar el dominio de 10s sistemas de riego en manos de los colonos cuan do éstos se consideran capacitados para ello y han llenado las condiciones fijadas de antemano. Cuando el Gobierno cree que los usuarios del agua son financieramente capaces, o de otro modo, que se hallan suficientemente preparados para asumir las responsabilidades que traen aparejados la operación y el mantenimiento de un sistema, es indudable que así se lleva a cabo. Conforme a las leye s de México, t anto las aguas como los terrenos baldíos se hallan bajo el dominio del Gobierno de la República, siendo el propósito de éste fo mentar el establecimiento d e comunidades agrícolas que den impulso al país. Par a llevar a cabo este programa, es indispensable que, al menos por ahora, el Gobierno ten ga el dominío sobre las obras de irrigación, dando a los colonos toda la ayuda y apoyo necesarios : éstos tendrán que ser cuidadosamente seleccionados, hasta donde sea  posible, ya que deb erá n ser vir de ejemplo a las comunidades que se vayan formando  poste rior mente . Ahora bien, es indudable que todo colono de un proyecto cstá deseoso de traba jar emp eño sa men te y esforzaree para que el éxito del sistema de riego sea completo, si aquél tiene u n interés individual en la propiedad. Por tanto, el plan adoptado por el Gobierno, vendiendo la tierra a menos del costo en un plazo de 25 años, que dá al colono un interés personal sobre la propiedad, tenderá a afianzar su fidelidad y a desarrollar el mayor esfuerzo porque el proyect o tenga éxito, toda vez que mucho del incentivo para el colono estriba en el hecho de que éste vé el fruto de sus afanes, ya que en un plazo más o menos largo el colono se convierte en propietario. En los E stados Unidos se encontraron algunos tropiezos para que el Gobierno asumiera el dominio de las obras de riego: pero las dificultades fueron vencidas y el Go bierno ame ric ano est á de acue rdo en tr an sf er ir a los colonos el dominio y oper aci ón de los sistemas de riega tan pronto como aquéllos estén capacitados para tomar a su cargo el dominio de las obras.  No obs ta nte que, se gún se aseg ura, ba jo !a admi nis tra ció n del Gobie rno los gas tos son más altos, la calidad del trabajo ejecuta do justifica cualquier erogación adicional que se haga. El hecho posterior de que, en caso de emergencia, el Gobierno Federal preste su apoyo al proyecto, dará lugar a que, naturalmente, los colonos sientan mayores seguridades. Como quiera que sea, los colonos de los diversos sistemas de riego de la Repú  blica de be n es ta r tran quil os, ya que el Gob ie rno mexi cano es tá empeñ ado en alc anz ar el mayor éxito en la colonización de los proyectos y dispuesto, por lo tanto, a aportar

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cualquiera ayuda en caso necesario, para que las comunidades agrícolas lleguen a alcanzar el mayor grado de prosperidad.

Al lograrse la realización completa de las esperanzas que el Gobierno ha fincado en los colonos de los proyectos cuya construcción ha podido llevar a cabo con sacrificios sin cuento y tesonero afán, se traducirá en beneficio general del país, pues será cada vez mayor el número de los que produzcan, no estando lejano el día en que, amén de llenar nuestras propias necesidades de consumo interior, haya margen suficiente  para expor tar el sob ran te de los producto s obte nido s en los si ste mas de riego. Qué mayor satisfacción para el Gobierno de la República ver así correspondidos s u s esfuerzos y qué mejor estímulo para los colonos compatriotas que, plenos de fe y de entu siasmo, aportaron el caudal $e sus energías, el acervo de sus conocimientos y un poco de numerario, en una empresa magna y patriótica que constituye uno de los principales factoies de la futura prosperidad de la Nación.

dio sobre la  posibilidad e cultivar algunas especies de  peces comesti. es e n k resa Calles, Ags. W

 Po r Samuel

SOLIS

SANCHEZ,

Jefe del Segundo Distrito Forestal.

QNDICIONES B 1O L O G ICAS. - Las observaciones

que lo mismo sucedió con otros habitantes acuáticos : insectos, pequeños moluscos y hechas principalmente en crustáceos, así como algas, organismos tolas aguas del vaso princi - dos estos que son necesarios para la vida  pal de la pres a “Pr es ide nte de los peces. Calles” los día s en que e! El examen microscópico aproximado. de . suscrito permaneció en di - las muestras de agua tomadas cerca de la cho lugar, demuestran que la vida animal y cortina, que es el lugar más profundo y vegetal acuática es muy escasa. Aunque  por cons ecu enc ia dond e el agua será má s sería necesario hacer observaciones más  per man ent e, aú n suponi endo que se extr aextensas y durante diferentes épocas del  je ra la mayor cantidad de la almacenada, año para dictaminar de manera segura este dieron resultados casi negativos en este asunto, los datos obtenidos nos dan una sent ido; ni insectos que tengan alguna utiidea de las posibilidades que puedan ofre- lidad se encontraron; las  plan tas acuá cer estas aguas para la vida de las espe- ticas y las algas no existen. Las aguas se cies que puedan adaptarse. encuentran enturbiadas por los productos Con ayuda ¿e una pequeña lancha se de descomposición de los vegetales terres hizo el recorrido 2n toda la extensión cu- tres que hueron cubiertos 21 ser inundados  bie rta por la s agua5, y los lan ces hech os los terrenos. con redes pequeñas proporcionaron muy Otras muestras fueron tomadas en las escasos ejemplares, no sólo de peces, sino  par te s menos prof unda s y cerca de las ori-

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 so de almacenamiento, cerca de las orillas

ilas en los lugares donde desembocan las

corrientes tributarias ; en estos lugares la vida acuática es más abundante debido a los organismos que arrastran las aguas en su trayecto. Como resultado de los diversos lances que se hicieron en estos sitios se obtuvieron varios peces, pero al examinarlos se vió que una sola especie es la común. Esta especie es conocida en los alrededores con el nombre vulgar de “boquín”, es el mismo ejemplar que existe en el lago de Xochimilco donde se le da el nombre de “mochipeto”; el nombre que se le da en la región de Aguascalientes se debe tal vez a que este pez abre y cierra la boca con mucha frecuencia; es una especie muy parecida a las pertenecientes al género Chirostoma (pescado blanco) pero no se ha  podido det erm in ar su nombre científico. Su tamaño varía entre 12 y 15 centímetros de longitud, pero suelen encontrarse individuos hasta de 20 centímetros, sobre todo en la época de lluvias lo que demuestra que este pez es arrastrado de lugares más altos situados en el curso de las corrien tes. Esto mismo fué corroborado por los nativos quienes al ser interrogados sobre el particular dijeron que esta especie es la más común, habiendo llegado a capturar ejemplares de 25 oentímetros. Los mismos nativos describen otra especie de peces que bien pudiera ser una variedad de trucha, la cual baja en las corrientes de las montañas; pero a pesar de haber buscado en las aguas no fué posible encontrar un solo ejemplar. Ea trucha gusta de aguas frías y claras y estas son las condiciones del río Blanco que es donde se ven. En los depósitos formados más abajo de la presa de almacenamiento, que tienen una prohundidad de  2-6 metros, se encon traron los mismos peces que en los sitios antes mencionados, pero el  promedio de su tamaño fué generalmente más chico que en aquellos. Se hallaron también varios ejemplares de pequeños “charales” de cuerpo blanco y transparente cuyo tamaño es de 3-4 centímetros, pero estos también eran escasos. En lances hechos con objeto de examinar la vida acuática (fitoplancton y zooplancton) que pueda s er de utilidad a los  pec es , se enc ontr aro n muy pocos eje m plar es e n los luga res profundos. En el va-

se encuentran algunas especies de diatomeas que en algunos sitios dan un color verde al agua por su abundancia; estos vegetales flotantes son de utilidad a los  peque ños alevi nos, sobre todo du ra nt e su  pri mera ed ad en que se ali ment an de ellos . Como antes quedó dicho, esta vida es más abundante cerca de los rios Blanco y Prieto, donde encontré unas dos espe cies de algas (Vauceria geminata y Vaucheria sp? ); las algas son las más impor tantes de las plantas acuáticas para la  piscicultura, sus tejidos están provistos de clorofila q ue descompone, media nte la influencia de la radiación solar, el ácido car  bónico de l medio, dej and o libr e oxíge no que es usado por los  pece s en su respiración. Además, entre estas plantas se des arrolla una abundante fauna de pequeños insectos, crustáceos y moluscos, que es tan importante en la alimentación de los peces. Estas mismas plantas son aprovechadas  por los pece s para depos ita r su hueva y los  peque ños alevi nos la s usa n como esc ondi te durante su  prim era edad. La exi ste nci a de las algas mencionadas hace esperar que se desarrollen y aumenten en estos lugares con lo cual se encontrarán más tarde me jor es condi cion es para la vida de los pece s. En los terrenos recientemente inundados y que antes fueron de cultivo, pertene cientes a la hacíenda de Paredes, la ve getación es abundante porque han sido siempre regados por el río Prieto tantas veces citado; aquí se encontraron varios ejemplare s de insectos, pequeños moluscoc y crustáceos. Los mosquitos son escasos, cuando menos no se encuentran en esta época, lo cual es bueno pues muchas veces sus larvas destruyen la freza. presa PRESA DE DERIVACIÓN.-La de derivación se encuentra situada a unos 454 kilómetros abajo de la presa de al macenamiento hacia el §. E. Sus condiciones generales son semejantes a las de aquella, tanto en la topografía y natu raleza de los terrenos que la forman como en las condiciones biológicas existentes. Su capacidad es de 9.000,QOO de metros cú  bicos que es una s 38 veces menor que la de almacenamiento. Su area es de 61 hectáreas. La profundidad de esta presa en el sitio donde está la cortina es de 40 me-

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U.

algunas veces son éstos tan abundantes que cubren toda la extensión del charco con el color blanco de su abdómen. En la actualidad el uso de estos “truenos es mucho menor que antes porque desde la construcción de la presa la auto ridad lo ha prohibido debido al peligro que significa para la misma p esa. Aún así no se ha desterrado completamente. Otras veces se suele usar el anzuelo, pero esto se hace principalmente por pasatiempo: este aparejo es tan rudimentario que algunas veces sólo cons ist e de un a1ambre con pun ta y curvado, hecho por ellos mismos; no usan plomo como contrapeso y le ponen como carnada aIgunas lombrices. En la cuerda que lo sujeta a la caña le atan un  peda zo de ma de ra que sirve como flot ador, y así l o arrojan al agua; el anzuelo se sumerge y cuando el pez muerde, el pedazo de madera es arrastrado o movido, sacán dolo rápidamente. De esta manera sólo se tienen peces pequeños y rara vez alguno grande.

tros hasta la corona. La topografía del fondo es irregular teniéndose en algunos lugares descensos fuertes. La profundidad media del agua es de 20 metros. Esta presa se encuentra llena y su nivel se mantiene siempre Ígual: aunque la cantidad de agua que se tome para el riego sea grande, la presa de almacenamiento abastecerá a esta cuyas compuertas se en cuentran a 40 metros sobre el lecho del río.

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CONDICIONES ECONOMICAS. En la región a que me vengo refiriendo, y en general en el Estado de Aguascalientes, los productos de  pesc a, com o al imento, so n casi desconocidos. E n la ciudad de Aguascalientes, sólo raramente se vende pescado; y esto sucede comunmente en la época de cuaresma, consumiéndose el pescado procedente principalmente de Tampico que, ccmo se sabe, se encuentra alejado. Hast a hoy los ríos y arroyos de la región no han proporcionado estos productos en cantidades que puedan ser tomadas en Las redes, ya sean de arrastre (chin cuenta. Los nativos, habitantes de los  pue  blos cerc anos a los mencionados ríos, han chorros), de mano o de otro modelo cual pract icado la pesc a de un modo bas ta nte quiera, son desconocidas, lo que demues tra que esta industria nunca ha tenido im rudimentario y sin darle ninguna importancia, puesto que no existen criaderos que  port anc ia en la región . En los pueblos vi se puedan tomar en cuenta. Desde luego sitados por el suscrito, no hubo un solo in se tiene el desconocimiento del uso de las dividuo que se sirviera de la pesca para su artes de pesca (redes, etc.) y cualquier subsistencia. medio de beneficio de estos productos, lo Los  produc tos que s e obt ien en por los cual se debe a que la cantidad de pesca- métodos antes descritos son consumidos do encontrada es tan pequeña que no ha  por los mis mos indi viduo s que no conocen llegado a llamarles la atención. otro medio de  prep arar los que asá ndolo s La pesca, si es que así puede llamarse directamente scbre el fuego. En general, a la captura de algunos ejemplares hecha la industria es, si no desconocida sí muy  por medio de lo que ell os lla man “tr ue- rudimentaria, pero como antes se ha dinos” y que no son otra cosa que los cohetes cho, esto se debe a que no existen espe de dinamita, cuyo uso es  pers egui do por la cies de importancia. ley. Buscan estos hombres, durante la temporada de lluvias, en que los  peces son más abundantes, un charco que no sea nÍ muy profundo ni muy extenso, y después de preparar el “trueno” que forman con cierta cantidad de dinamita, un  pedazo de trapo y un fulminante, lo amarran con venientemente, lo encienden y lo arrojan al fondo del charce, esperando tranquilamente a que explote para después solo recoger los  pes cad os que han sid o mue rto s o solamente atontados por la explosión;

CONCLUSIONES. Por los datos preinsertos se puede observar que las condiciones de vida existentes en las aguas de la presa Calles no son muy abundan tes en vegetación acuática y en organismos animales (que forman el alimento de los  pec es) , lo cual es debi do al poco tiemp o que tienen de existir dichos depósitos. La existencia de algunas especies de algas, insectos, etc., cerca de las entradas de las corrientes tributarias, demuestran que la vegetación se está desarrollando y que

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dentro de algún tiempo las condiciones serán más favorables. Los productos d e descomposición de l as  plan tas que qued aro n cubi ert as por la s aguas, no dejan de ser un inconveniente,  pu es enturbian las aguas y pueden ser per  judi cia les para alg unas especi es. El hecho de existir- algunas especies de  peces , aun que en can tid ad esc asa, demu es tra que l a vida de éstos no es imposible. Lo más recomendable en este caso, a  juici o del suscrito, es hacer la aclimata ción de algunas especies cuyo medio de vida se conforme más con las condiciones del lugar. No, es recomendable hacer des de luego la propagación por medio de la fertilización artificial de los huevos, pues  por se r la pri mer a vez que se emp ren den esos trabajos y por las condiciones exis tentes, su carácter es experimental. Buscando las especies que pueden ser aclimatadas, debemos tener en cuenta ciertas condiciones: 1Q que estas especies tengan condiciones de vida adaptabl es a las existentes, y 2” que sean de una calidad cuyo cultivo venga a beneficiar a la región. Dentro de l as especies existentes se de  ben bus ca r las ant eri ore s, sobr e todo dan do cuidado al segundo punto, pues si es cierto que existen algunas cuya aclimatación es más o menos factible, muchas de éstas no serían provechosas porque no son gustadas como alimento. De las especies de agua dulce más comunes, podemos citar las siguientes: la carpa (Cyprinus carpio) ; la trucha (Salmo irideus. Trutta vulgaris) ;  pesca do blanc o (Chirostoma estor) ; el bagre (Amiurus dugessi) y la lobina negra (Micropterus dolomieu, M. salmoides). La carpa, aunque de aclimatación tal vez posible, no es recomendable en este caso; esta especie vive en lugares de po co fondo y de carácter fangoso y poblado de plantas acuáticas que dan sombra: en la presa Calles existen lugares con esas características, pero como la carpa es un animal muy voraz, muchas veces llega a devorar a otros peces, lo que se ha observado en algunos lugares donde se ha he cho su aclimatación. La trucha, es una especie muy aprecia da como alimento y no es tan voraz como la carpa. La trucha alcanza a veces un

tamaño grande; el promedio es de 25 -30 centímetros, pero se pescan algunas que  pes an de 5-6 kilogramos. La trucha prefiere las aguas claras y casi siempre nada contra la corriente. Las aguas claras se pueden tener en la presa de derivación que es la más recomenda ble para hace r la acli matac ión de las es peci es qu e se eli jan. Cre ce est a esp eci e al  princi pio con bas tan te rapide z, ll ega ndo  pront o a medi r de 20-25 centímetros, pero después es más lento su crecimiento. Para el mejor éxito en el cultivo de e s t a especie, en la práctica se aconseja tener uno o más estanques de aclimatación en los que se tenga control y en los que se depositen los  pece s seg ún la s eda des . Se gún se ha observado la trucha necesita de 3-4 años para alcanzar su mayor desarrollo. Para el caso que nos ocupa se llevarían los pececillos de un año o  poco me nos de edad y bastaría con uno o dos estan ques pasando los peces a la presa cuando tuvieran dos años o  poco má s de eda d. El inconveniente que se  pre sen ta en esta especie tan apreciada es que si se colocan en un estanque chico individuos de varias edades, los grandes llegan a devorar a los chicos. Esto no sucede en estan ques grandes donde existe alimento abundante y mayor espacio. Como la trucha es de respiración acti va, su traslado presenta ciertas dificultades que tienen por causa principal la falta de aereación del agua, y por esto se usan aparatos especiales que tienden a suplir es ta s dificultades. Un aparato que ha dado  buen os res ult ado s en los Est ado s Uni dos es el siguiente: Está Constituido por un cilindro horizontal de lámina de hierro cuya parte su perior pue de abr ir se o cerrarse por medio de una tapa con bisagras. El cilindro tiene un largo variable de 60-130 centímetros. Se llena de agua hasta las dos terceras partes de su altura vertical y se introducen a él los  peces por una abe rtu ra sup eri or. A la parte inferior se adapta, por el interior, un doble fondo horadado por un gran número de agujeros pequeños, siendo lige ramente convexo en el centro, y forma en la pared inferior del cilindro un compartimiento destinado a alojar el aire que se inyecta con una bomba. La bomba se com-

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Vive el pescado blanco en la superfi pone de un a bola de caucho, huec a, de unos diez centímetros de diámetro, provis - cie del agua en los lugares en que está ta de dos abert uras diametralmente opues- más limpia. Su época de reproducción cotas. La bola est á colocada en una depre- mienza en febrero para terminar en mayo sión hemisférica practicada en la parte o a principios de junio. Los  pececill os de superior del cilindro que en parte la pre-  poco má s o menos un año son recomendaserva de los accidentes. Su abertura in -  bles  par a su aclimatación. Esta especie ferior comunica con el doble fondo por es muy delicada por ser de respiración acmedio de un tubo de goma adaptado a uno tiva como la trucha, por lo que hay que de los agujeros de la bola por una de S US tener mucho cuidado en su transporte coextremidades, y por la otra a un tubo de mo con aquella especie. Este pez alcanza zinc en la pared vertical del cilindro yen - un tamaño de 30-35 centímetros como prodo a parar a la parte interior de la cavidad medio. del doble fondo; el otro agujero de la bola Una de las especies más ampliamente de caucho se encuentra colocado en el vérdistribuídas en nuestras aguas dulces es tice. el bagre. Habi ta aguas un poco más cáliBasta comprimir la bola tapando el agu- das que las especies mencionadas, pero se le encuentra en Chapala y otros lagos don  je ro con el dedo para que el aire que contiene vaya hacia el fondo, de donde no de también viven algunas de aquéllas, y  pued e sal ir má s que por los aguj eri tos de es muy probable que las aguas que nos la parte superior; se esparce dentro del ocupan proporcionen lugar para su aclimaagua y sube hacia la superficie en forma tación. Se le encuentra en Nuevo León, d e innumerables burbujitas que en parte Guanajuato, Veracruz y Jalisco, pero es casi seguro que se trata de diferentes es con disueltas durante su trayecto y no  puede n da r lug ar a una agita ción dem asi a -  pec ies o variedades. El  bagre , es la especie que económicado violenta. En la part e exterior del cilindro y a la mitad de su altura se disponen mente tiene mayor importancia actualmen dos compartimientos destinados a recibir te en Chapala en donde los comerciantes hielo si se  juz ga nec esa rio su empleo para y pescadores llegan a preferirlo al pescado mantener fresca la temperatura del agua.  blan co. Vive en el f ondo y no se le encuenEl cilindro está suspendido como una tra a flor de agua sino cuando los indicuna en un bastidor sostenido por cuatro viduos son pequeños. Es muy resistente y  pie s lig era men te desi gual es. De est e mo- nada grandes tramcs con facilidad; resiste do puede imprimírseles un movimiento de mucho fuera del agua después de S U cap oscilación o de ligero balanceo que, a causa tura, lo que le hace muy apropiado para de la desigualdad de los pies, resulta au- su transporte a otros lugares para SU aclitomático el movimiento por las trepidacio- matación como en nuestro caso. Es muy nes del vehículo en que se haga el trans - voraz y se alimenta principalmente de ve  porte. El agua adquiere de esta manera getales, pero toma todo lo que encuentra; un movimiento análogo al que tienen las facilitando esto su  pesc a porque mue rde aguas corrientes, demasiado suave para que todo con facilidad. Hay la creencia geneaunque se golpeen los peces no se lastimen. ral de que es perjudicial a otras especies Cuando se transporten peces grandes de peces muy estimadas, tales como el s e tendrá cuidado de hacerlos ayunar unas  pes cad o blanc o del que se dice es su  prin 34 horas antes del viaje para evitar que cipal enemigo, pero se ha llegado a com enturbien las aguas con sus deyecciones.  pro bar que el bagre sólo ataca aquéllas Los ejemplares jóvenes de trucha pue - cuando no encuentra alimento; no escaden adquirirse entre los pescadores del seando éste, que como dije debe ser ve  pueblo de Ler ma , Edo. de Méxi co. getal, el bagre es inofensivo. Empieza a El  pes cad o blanc o, es un pez que se en - reproducirse en los últimos días del mes cuentra en los lagos de Pátzcuaro, Cira- de abril y termina e n junio, pudiéndose huen y Chapala, y es uno de los más impor- hacer su traslado cuando los  pececill os tienen poco menos de un año. tantes como comestibles.

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La lobina negra es uno de los  peces especiales para evitar hasta donde sea pomás apreciados como alimento en los Es- sible su muerte. tados Unidos y ya ha sido introducido a De cualquier modo, de iniciarse la acliMéxico con éxito: es un digno substituto matación de alguna especie, ésta tendrá de la trucha a la que se parece mucho res - el carácter de experimental, por las condi pecto al rég ime n de vida , con la ven taj a ciones existentes. Estos trabaios deben emde que es más resistente que aquélla. Es  pez ars e en la pre sa de deriva ción cuy a exuna especie americana que se adapta con tensión es menor y más fácilmente controfacilidad a las aguas en que se pone. Al- lables las operaciones, siendo mejores los canza una longitud de 12-14  pulg adas como, resultados que se obtengan: al mismo  promedio, pero a vece s se encuentran in- tiempo, el caudal de agua es aquí más dividuos hasta de 18  pulgada s. Empiez a a constante. ESTANQUE DE ACLIMATACI0N.reproducirse a mediados de mayo y sus lugares de desove son los fondos arenosos o Antes de trasladar los peces deberá construirse en lugar apropiado, que se escogerá con grava. en el terreno, un estanque de aclimatación, La5 esuecies antes citadas son las más recomendables y con las que comunmente económico, que de ponerse será doble, para colocar en el más pequeño los alevinos que se hace la repoblación en aguas dulces; de ellas son de preferirse la trucha, e l pesca- se lleven. El segundo año se trasladarán do  bla nco y la lob ina neg ra que so n espe- éstos (si se trata de truchas) al otro estanque y de aquí a la presa. Si s e t r a t a cies muy apreciadas y que de progresar de otras especies, un estanque será sufiúeneficiarán toda la región. Si el pescado ciente para colocar a los pequeños alevi blanco es escaso y su transporte preseny cuando éstos se hayan desarrollado ta mucha dificultad, puede experimentarse nos y puedan procurarse su alimentación, encon el  bag re que ta mbi én ofre ce vent aja s. tonces pasarán a la presa. Los  pec es par a la acl imat aci ón puede n Si no se construye el estanque de acliconseguirse entr e los Descadores del río matación, podrá buscar se un depósito naEerma o en Xochimilco, y la lobina negra, tural con agua corriente de la misma pre directamente del comisionado de pesca en s a donde puedan hacerse otros trabajos, Austin, Texas. E. U. A,, de donde los en -  per o en es te caso los resultados serán más vían debidamente empacados en depósitos  probl emát icos .

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La Capacidad Instalada de las Plantas Eléctricas Existentes en el País ESTADISTICA ELABORADA EN EL DEPARTAMENTO DE ESTUDIOS HIDROELECTRICOS DE LA COMISION NACIONAL DE IRRIGACION  Po r

e7  In g.  Jo sé

 HEWRB RA Y  LA SS O.

L  punt o de part ida lógico de los tra baj os enc amin ado s a det erm ina r el grado de viabilidad y probable valor económico de los desarrollos hidroeléctricos vinculados a algunos de nuestros proyectos de riego es, indudablemente, el conocimiento de las condiciones reales existentes en el  paí s res pec to a la producci ón de energía eléctrica, la cuantía clasificadas de esa producción y su distribución geográfico- polít ica. Es ta labor se ha realizado en las condiciones que adelante se mencionan y con resultados satisfactorios. Viene en seguida la apreciación de la demanda de energía en el conjunto del país que baste a satisfacer las necesidades presentes y las que surjan en un futuro inmediato como consecuencia del ensanchamiento de la vida industrial en ciertos aspectos y de las comodidades urbanas. Este estudio mucho más complejo también se ha emprendido, comenzando por investigar la capacidad del mercado d e energía constituido por las principales industrias consumidoras de fuerza motriz, como son la minero-metalúrgica y la de hilados y tejidos. Se trata d e determinar los consumos unitarios d e fuerza (por tonelada de mineral extraído, por kilogramos de producto manufacturado, etc.)

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En una pequeña obra que publicamos en 1927 (l), aparece una estadística detallada de las plantas hidro y termoeléctricas que operan en el país y venden energía, agrupadas por Estados, con expresión de SUS capacidades y tarifas. La documentación original se recopiló y concentró en la extinta Comisión Nacional de Fuerza Motriz. En otro capítulo del mismo libro se encuentra información semejante en su mayor  part e obt eni da en fue nte s privadas de las plantas eléctricas al servicio de la minería e industrias manufactureras.

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 Ni una ni otra estadística las consideramos entonces completas, por lo que hubo que estimar con cierto criterio conservador los valores correspondientes a deficiencias d e información. En las conclusiones consi gnadas al final de la obra se expresaba que la potencia eléctrica actual instalada en la República era de 526,000 caballos (387,OOO  M. W.), de los que 333,000 caballos correspondían a energía hidroeléctrica y 193,000 a la termoeléctrica. La estadística elaborada e n el Departamento, de la que hoy s e dá cuenta, incluye (1)

“La Fuerza Motriz en México”.

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los datos registrados hasta el próximo pasado mayo. La nueva documentación utilizada que complementa la que teníamos, fué recabada en el Departamento de Control de la Industria Eléctrica y de Fuerza Motriz, de la Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo. H e aquí el resumen correspondiente. Capacidad de las plantas hidroeléctric Capacidad de las plantas termoeléctri cas.

. . . .262,155 K.W. (356,000) caballos. . . . . , .200,177 M.W. (z72,OOO) ,,

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1,231 K.W. ( 2,000) . .463,563K.W. (630,000)

. . .. ,

Capacidad de las  pla nta s si n clasi fica r Cahacidad total instalada en el p a í s . . . . . . . . .

,,.caballos.

Los resultados no pueden ser más satisiactor;os, tanto por lo que atañe a la solidez y extensión de los datos en que descansan, como porque el valor que arrojan para la potencia instalada en el país indicio cierto del progreso de cualquier nación coloca a México, en ese respecto, en condiciones semejantes a las que se encontraban antes de la Guerra algunos países europeos de activa vida industrial.

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Si tomamos en cuenta que aun están pendientes de registro varias plantas y, so bre todo , que ha y imp ort ant es desa rrol los elé ctr icos en const rucci ón, podemos ase gurar que la  potenc ia ins tal ada exce de de 700,000 caballos. A reserva de ocuparnos posteriormente, más a fondo, de los resultados que comentamos, publicamos ahora dos cuadros, que forman parte de una serie de informaciones gráficas y numéricas del mismo carácter (1). México,

D.F., 27

de junio de

1930.

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(1) La Comisión Técnica de Programa de Acción de la Secretaría de Industria y Co mercio, encargada de estudiar 'en sus manifestaciones individuales y en sus efectos recípro cos los  princ ipale s fac tor es det ermi nan tes de la vida económic a del país, está interesada en la documentación a que nos hemos referido. L a considera como elemento de conociiniento indis pensable pa ra el estu dio de la industria eléctrica nacional. (Nota de H. L.).

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7

te posible recorrer con los automóviles toda la zona que se estudia y por lo tanto el transporte diario del personal es muy rápido y aun se puede utilizar el automóvil con su velocímetro para el levantamiento. No su cede lo mismo si la región carece de estos caminos o veredas y el transporte diario tiene que hacerse a caballo.

 Po r el bng.  AL EJ AN DR O  BRA MBI LA.

UCHAS  pe rso na s in te re sa da s en los levantamientos agrológicos que es tá haciendo 12 Comisión Nacional d e Irrigación, se han acercado frecuentemente con el deseo de saber cuál es el costo de u n estudio de esta índole, expresando al mismo tiempo sus temores de que un costo elevado impida su generalización hasta hacer posible su empleo, bien sea por empresas privadas o  po r ofi cin as pú bli ca s qu e au nq ue lo nece sitan, carecerían de los recursos necesarios para hacerlo. La Comisión  Na cio na l de Irr iga ci ón , por me di o de su Departamento Agronómico, ha seguido por norma el hacer estudios agrológicos previos a la construcción de cual quier proyecto de riego y por lo tanto, está en aptitud d e da r a cono|cer con toda exac titud los costos unitarios en diversos proyectos para que sirvan de guía a las personas o instituciones interesadas. Desde luego cabe advertir que a semejanza de los levantamientos topográficos, el costo de un estudio agrológico tiene que variar con multitud de circunstancias a sa be r: nú me ro d e he ct ár ea s qu e s e van a es tu di ar , na tu ra le za de l te rr en o, fac ilid ad d e las comunicaciones, exactitud del trabajo, etc. L a extensión de la zona por estudiar influye considerablemente en el costo por hectárea, pues hay gastos, corno transporte de  pe rs on al , au tom óv ile s e impedimenta que son lo mismo para un trabajo de 3,003 hectáreas que para otro de 20,000 y por consiguiente el Costo finalpor concepto de transportes aumentará considerablemente el cos to unitario tota!. La naturaleza del terreno modifica también sensiblemente el costo de los trabajos  pu es el re nd im ie nt o di ar io no es ig ua l; le va at am ie nt os en te rr en os ví rge ne s con mo n te d e mezquite o de huizache en donde hay que abrir brechas para el plaacheteo y el agrónomo avanza lentamente a pié por entre la maleza, son forzosamente más costo sos que los que se hacen en terrenos cultivados en donde abundan los callejones y caminos y el terreno puede reccrrerse en todos sentidos libremente. Lo mismo puede decirse de los terrenos quebrados en donde por razón natural abundan diversos tipos de tierra dent ro d e una pequeña superficie y hay que hacer a veces grandes rodeos para llegar a un punto determinado. Respecto de las vías de comunicación puede decirse lo mismo; hay lugares del  paí s en do nd e, a u n cuando nQ existen verdaderos caminos carreteros, es perfectamen-

La exactitud del trabajo es lógicamente otro de los factores más determinantes de su costo. En todo el levantamien to agrológico se supone que al agrónomo se le facilitan los  pla no s top ogr áfi cos de l te rr en o y por co ns igu ien te no te nd rá qu e ha ce r ningún trabajo topográfico. La exactitud de la Carta Agrológica queda sujeta pues, a la de los planos con que va a trabajar. Los levantamientos agrológicos han sido divididos en varias clases, según las necesidades y objeto a que se destinan.

Trabajos de gran exactitud en los que se dispone de planos acotados a la escala de 1 :5,000 y con suficientes puntos de referencia para localizarse fácilmente en el terreno. E n estos planos se estudian las series y tipos diferen tes que existen, limitándolos con la mayor exactitud posible. Esto s trabajos generalmente se hacen en los  pro yec tos cu ya co nst ruc ci ón ha si do ya ap ro ba da y se rv irá n para la loca liza ció n de los canales, estudio del fraccionamiento y valorización de l o s lotes. Estudios preliminares en los cuales se dan a conocer todas las series que existen en la zona y los tipos predominantes de cada serie incorporando los de  poca im po rtancia a los dominantes que más se les asemejen. Para estos trabajos se usan planos de 1 : 10,000 ó 1 : 20,000,  pr oc ur an do que te ng an el mayor número de datos que puedan servir como punto d e referencia, Estos estu dios se hacen generalmente con anterioridad a la aprobación de las obras de riego, y dado su carácter preliminar, excluyen aquellas pequeñas superficies incrustadas dentro de grandes cuerpos de diferente tipo. Trabajos de esta índole son muy ¿e recomendarse para las compañías fraccionadoras que deseen conocer la clase de tierras con que cuentan, la localización de los grandes cuerpos de  bu en a cal ida d y las pr op ie da de s agr íco las d e ca da tipo de tierra  para pr oy ec ta r el de sa rro llo de la col oni zac ión . Tamb ién so n d e re co me nd ar se es to s estudios para aquellos departamentos gubernamentales, bien sea de la Federación o de los Estados, que se ocupan del desarrollo de  pro yec tos d e col oniz ació n. Por último, la Comisión Nacional de Irrigación ha ensayado el levantamiento de  plan os d e clasificación en los cuales en vez de limitarse las series y los tipos de tierras, se hace la limitación por calidades, clasificando los suelos en primera, segund a, tercera y cuaita clase, según sus  po sib ili da de s ag ríc ola s. Es te si st em a es m ás co m pre nsi vo pa ra el púb lico pro fan o, au nq ue de menor utilidad para usos generales, y su economía hace que las empresas particulares que hasta hoy han ocupado los servicios de la Comisión Nacional de Irrigación, los  pr ef ie ra n a los anteriores. Interviniendo pues, tantas circunstancias y en forma tan variada, resulta punto menos que imposible pretender fijar con exactitud el costo de los trabajos agrológicos  pero sí es  pe rf ec ta me nt e fac tib le se lec cio na r di ve rso s tip os de tra ba jo s ya ef ec tu ad os , mencionando las condiciones especiales en que se hicieron para que el lector pueda compararlos con el caso particular que le interese.

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(Estudio

TRABAJOS DE GRAN EXACTITUD. agrológico  del Sistema  de  Ri eg o  Nú m. 4. $30Sa1a&o, Coahuila y  Nue vo Leó n).

El estudio se hizo en una zona muy plana de 65,000 hectáreas de superficie y cruzada con bastantes caminos y brechas para automóvil, de tal suerte que el transporte de la gente desde el campamento hasta el lugar de trabajo era bastante fácil. El monte se compone de huizache y mezquite de altura variable entre 1 y 3 metros,‘bastante tupido, dificultando el reconocimiento del terreno. S e identificaron 13 series con suelos diferentes. Esta gran cantidad de tipos que tuvieron que ser limi tados dificultó más el trabajo aumentando 6U costo. Se hizo un plano de suelos, otro de clasificación a la escala de 1 : 5,000 y reducciones a la escala de 1 : 50,000. A esto hay que aumentar el informe de suelos que complementa los planos respectivos. El costo de este trabajo fué de $0.6527  por hec tár ea.

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33 tipos de

Levantamiento Agrológico d e l  Rio Conchos, Chih. La zona estudiada abarcó 117,350 hectáreas de un terreno muy plano con bastantes caminos para automóvil, que permitieron el transporte fácil de la gente desde los campamentos hasta los lugares de trabajo. Un 15% de l o s terrenos se encuentra en cultivo y ésto facilitó su reconocimiento. El resto es monte formado por huizache y mezquite de altura variable entre 1 y 3 ms. Se identificaron 17 series y 59 tipos de suelos diferentes. El trabajo se hizo con plancheta y usando planos topográficos facilitados al Departamento Agronómico por el Departamento Técnico a la escala de 1 : 5,000. Posteriormente se hizo una reducción del  plan o a la es ca la de 1 : 40,000.

Monte en el Proyecto del río Conchos, Chih. En otros lugares la vegetación es más abundante y elevada.

También queda incluído dentro del costo el informe agrícola y económico de la zona estudiada y la descripción de cada uno de los tipos de suelos con SUS caracte rísticas  y  pro pie dad es agr íco las. El costo de este trabajo fué de $0.5094  por he ct ár ea . Estudio Agrológico de El Mante. La superficie estudiada abarcó en este proyecto 20,000 hectáreas, surcada por abundantes caminos que cruzan el proyecto en toda s direcciones. La topografía es entera mente plana y el monte es uno de los más difíciles, pues s e compone de hipazotillo, cedrón, ébano y otros árboles de gran corpulencia que dificultaron bastante la entrada de los agrónomos con las planchetas a pesar de habe r brechas cada kilómetro. Se identificaron 10 series y 16 tipos de suelos diferentes . Esta homogeneidad en las tierr as facilitó considerablemente el trabajo de plancheta, pues al reducirse el número de ti  pos s e re du ce ta mb ié n la lon git ud de los lí mi te s y por co nsi gu ien te es te fac tor con tribuye a disminuir el costo por hectárea. El costo de este trabajo fué de $0.6209  po r he ct ár ea . Proyecto “Presidente Calles”, Aguascalientes. Abarca este proyecto 11,488 hectáreas de un terreno con topografía bastante plana y el 90% del cual se encontraba abierto al cultivo de temporal y por lo tanto existían  ba sta nt es cam ino s y ve re da s ‘que fac ili tab an el transporte de la gente. Al mismo tiem po el ca mp o de sp ej ad o fac ili tó co ns id er ab le me nt e el tr ab aj o d e pla nc het a y reconocimiento de suelos. Se identificaron 5 series y 30 tipos diferentes de suelos entremez-

Tipo de monte bajo que predomina en el Sistema de Riego de río Salado, Coahuila,  Nuev o León. Nótese tambi én la ausen cia compl eta de elevacion es.

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i 2%

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"U  J 

clados irregularmente, de tal suerte que la operación de limitar cada uno de los tipos fué muy laboriosa. El costo de este trabajo fué de $1.0629  por he ct ár ea . Este trabajo fué uno de los más costosos por muchas circunstancias: fué el primer trabajo emprendido por la Comisión Nacional de Irrigación bajo la dirección de expertos americanos traídos del extranjero y a quienes hubo de pagar sueldos considerables. Por otra parte, la falta de preparación técnica de los elementos mexicanos que colaboraron, hizo que el trabajo se hiciera con lentitud. A ésto hay que agregar la corta extensión del  pro yec to (el más pequeño de todos), lo cual recarga considerablemente el costo por hectárea en lo que se refiere al transporte de automóviles y  pe r- ' sonal desde la ciudad de México hasta Aguascalientes.  Pr oy ec to  de

 La Palma, Tambs.

Este es un pequeño proyecto, 2,964 hectáreas, que forma parte del gran sistema de riego del río de Sa n Juan. La topografía es enter amente plana, el terreno estab a en cultivo de temporal y surcado por suficientes caminos para automóvil. El número de series identificadas fué de 4, con 8 tipos de suelos diferentes. Todas estas circunstancias influyeron muy favorablemente para disminuir el costo del levantamiento que fué de. $0.4775  por he ct ár ea . S e hizo además un estudio agrícola y económico de la zona y la descripción corres  pon die nte de cada uno de los tipos con sus propiedades agrícolas. Otra circunstancia favorable para disminuir el costo de este trabajo fué el hecho de que por una circunstancia casual los agrónomos encargados de dicho estudio se encontra ban tr ab aj an do en un proyecto cercano y por lo tanto no hubo que cargar gastos de trans#

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Texcaleras que abundan en el Estado de Morelos. El terreno es tan quebrado que ni los caballos pueden penetrar.

 po;te de au tom óvi les y  pe rso na l. D e no h ab er si do és to el tr ab aj o hu bi er a co sta do con siderablemente más. Si se hace un examen de los trabajos anteriormente mencionados, puede verse que de una manera general, el costo por hectárea está en razón inversa de la extensión su  per fic ial, si n qu e por es o de je n de influir l os otros factores ya mencionados.

ESTUDIOS PRELIMINARES

Monte característico del Proyecto Río Mante, Tamps.  Nótese la abunda ncia de ébano e hipazotillo en cantidad tal qne el reconocimiento de suelos a través de esta maleza es muy lento.

Estos estudios como ya se dijo anteriormente, se pueden hacer cuando se trata de investigar con bastante certeza las posibilidades agrícolas de una finca. Igualmen te son aplicables para servir de orientación a negociaciones bancarias de crédito agrícola, por que evitan las visitas de inspección cuando se trata de  pr és ta mo s o del financiamiento de determinadas empresas industriales agrícolas, tales como ingenios, casas empacadoras de frutas, etc. Los consejeros agrónomos del banco están en posibilidad de com pro bar de sd e su oficina y con auxilio de la Carta Agrológica y el informe respectivo la  po sib ili dad de l es ta bl ec im ien to de la empresa propuesta. Esta clase de Cartas Agrológicas es de reco mendarse , bien para la Comisión  Nacional Agraria o  pa ra la s loc ale s d e los Es ta do s, so br e tod o ah or a que s e es tán da nd o  paso s m uy ser ios pa ra pri nci pia r un a lab or ve rd ad er a d e ap ro ve ch rm ie nt o de ej id us y  para ha ce r ést o so br e un a ba se téc nic a e5 in di sp en sa bl e co nta r an te s qu e na da co n la Carta de Suelos que tiene que dar el conocimiento de las tierras. El año  pa sad o la Co mis ión Na cio na l de Irrigación, contando con la colaboracíón

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cional de Irrigación para una empresa particular colonizado - a en el Estado de Tamaulipas. La superficie estudiada fué de 268,968 hectáreas de un terreno extremadamente  plano y con bas ta nte s cami nos par a automóvi l.

de la Dirección General de Agricultura, hizo el levantamiento de la carta agrológica del Estado de Morelos y el estudio agrícola correspondiente. La superficie estudia da f u é d e 437,433 hectáreas de terreno quebrado, formado en su mayor parte por pequeñ o s valles y extens os lomeríos. Los automóviles sólo pudieron aprovecharse en lugares cercanos a las carreteras nacionales y la mayor parte del trabajo hubo de hacerse a caballo y a pié. Los planos usados fueron a la escala de 1 : 10,000 y 1 : 20,000, ha bién dose ide nti fic ado 19 series y 30 tipos de suelos diferentes. Desd e luego puede notarse que el número de tipos en este caso es menor con relación al número de series correspondiendo dos tipos para cada serie como promedio. En ésto radica principalmente la menor exactitud de trabajo, pues todos los tipos ligeros que en los tra  baj os de gra n exa cti tud se sep ara n, como aren as, mig ajo nes aren osos, miga jone s are nosos con grava, migajones arenosos gruesos, migajones arenosos finos, migajones . muy finos y migajones francos, quedan englobados en un solo tipo que se llama tipo ligero” de la serie H., evitándose por consiguiente el trabajo de limitación de cada uno de ellos. Lo mismo sucede con los tipos pesados y quedan englobados en un solo tipo. Por lo demás , la exactitud del tra bajo se lleva hasta donde lo permiten los planos topográficos. El costo del e studio agrológico del Estado de Morelos incluyendo la carta de suelos, el estudio agrícola y la descripción de cada una de las series y tipos fué de $0.07026  por hec tá rea , que es ext rema dame nte redu cid o si se tienen en cuenta los grandes servicios que prestará un trabajo de tal naturaleza.

En este caso particular la empresa se interesó en conocer únicamente la localización de las tierras de primera, segunda y tercer a clase y por lo tanto, aun cuando s e hizo la identificación de las series, éstas no fueron limitadas en el plano sino consignadas únicamente en el informe respectiyo. Por otra parte, la superficie estudi ada se caracterizó por la gran homogeneidad de sus suelos, facilitándose considerablemente la labor d e los agrónomos.

El costo total del trabaj o incluyendo un plano de clasificación de suelos (en tierras de primera, segunda, tercera y cuarta clase), un informe agrícola, otro socia l y económico y la descripción respectiva de cada una de las series encontradas, fué de $0.03129  por hec tár ea. Un trabajo de esta naturaleza es exageradamente económico y las compañías colonizadoras deben de considerarlo como un gasto indispensable si es que se desea hacer trabajo de colonización sobre una base científica. Ojalá y que los datos anteriores estimulen a los gobiernos locales o a algunas dependencias de la Federación y a las empresas particulares para emprender trabajos de esta naturale za que aparte del interés que en lo particular pueden tener para ellos, significan un paso más hacia el conocimiento exacto de la potencialidad agrícola de nuestro país.

PLANOS DE CLASIFICACION. Para finalizar, daremos aquí el costo de un trabajo realizado por la Comisión Na-

Las Aguas de Axocopan, Atlixco, P u e .  Po r J.  Bibiano

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Llanuras de la región norte del Estado de Tamaulipas en donde la Comisián Nacional de Irrigación hizo un plano de clasificación para una empresa particular colonizadora,

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1-

como en los espacios sideral es se presentan de lejos en lejos meteo ros luminosísímos para atesti guar la magnificencia de la creación : me teoros que el hombre contempla con arrobamiento, sin comprender ni explicar su existencia, porque para apreciarlas necesita que transcurra el tiempo, en razón de que su inteligencia no puede abarcar con una sola mirada o con una sola contemplación la grandiosidad de e s o s fenómenos; del mismo modo en la ciencia, de cuando en cuando se realizan he chos que, por su magnitud, abisman la inteligencia humana hasta el grado que no puede comprenderlos : hechos cuya trascendental influencia no estima el hombre desde luego, pues que no se pueden abarcar en un momento, ni se pueden apreciar en todo su conjunto, es preciso que el tiempo los aleje, los coloque a la distancia de la vista distinta intelectual, para que se perciban con toda claridad y puedan ser estimados en todo su valor.

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CARRASCQ.

Pero e n aquellos tiempos se tenía un conocimiento imperfecto acerca de las  pro  pied ades de los metales, lo cual dió lugar a que surgiera una idea singularísima bajo todos sus aspectos, y que esa idea preocupara tanto a los hombres cientfficos, que fué extendiéndose hast a llegar a ser dominante en el Asia y en el Egipto. §e creía que esos cuerpos eran susceptibles de convertirse en or o sometiéndolos a tratamientos especiales; que el plomo, el fierro, el cobre y demás met ales conocidos, eran bosquejos del oro, y que por esto fue - on denominados metales viles, medios metales o metales im perfec tos. Cad a qui en pose ía un proc edim ient o par ti cul ar para real iza r es a mar avi ll a, mas se i nventaron t antos, que se hizo necesario recogerlos, reunirlos, organizarlos, para formar una especie de doctrina que guiara a los  prác tic os en sus manipulaciones. De esta manera llegó a organizarse la Ciencia Hermétic a, ciencia que profesaron los filósofos de la Escuela de Alejandría, la cual tomó su nombre, según la creencia áraLe. del nombre de Hermes Trimegisto, quiea la inventó veinte siglos antes de Jesucristo.

Entre esos hechos hay uno grandioso hasta el infinito, no sólo porque tuvo el prestigio de dest ronar te orías arraigadas profundamente en el cerebro de los sabios, y  pre sentar a la verdad en su más espléndida pureza, sino porque completó la base sobre que debía desca nsar el grandioso edificio de la Química. Ese hecho fué el descubri miento de la naturaleza o composición química del agua. Que el agua era un elemento: tal fué la opinión admitida por la antigua ciencia,  pues la comp ren día en el núme ro de los que, seg ún la s teo ría s de ento nces , formaban todo lo existente en la Naturaleza. La filosofía de los tiempos de Aristóteles y Platón, había admitido que el agua, el aire, la tierra y el fuego, eran los únicos elemen tos que la naturaleza ponía en juego para formar los cuerpos: error muy natural, porque no nacía la ciencia verdadera, ni soñaba siquiera el hombre en seguir la vía ex  peri ment al par a lle gar a la adquis ició n de idea s pos iti vas res pec to de la composición y  propie dad de los cue rpo s; era nece sari o, por cons igui ent e, que las conc lusi ones que estaba obligado a deducir de la observación simple de los fenómenos que ante su vis ta producían los cuerpos tuvieran en  sí el carácter d e la época, esto es, debían carece: del sólido apoyo de la comprobación, porque no era posible que se fundaran los principios con esa certidumbre y generalidad con que hoy se establecen las leyes en las ciencias naturales. La idea de la simplicidad de la naturaleza del agua, ide a que nació en tiempos muy lejanos, que f ué transmiti da de siglo en siglo, pcr el hecho mismo de haber sub sistido tanto tiempo como verdadera, debió haber tomado un carácter tal de evidencia, que nadie se atrevía a pensar en que esa idea fuera falsa, y mucho menos cuando se inventaron teorías que la afirmaban, aunque indirectamente, pues además de que ca recían esas doctrinas del apoyo de la experiencia, se creaban con el fin de explicar he= chos cuyas causas no eran conocidas y  por tanto, er an tan fal sa s las teor ías como los casos para que e ran inventadas. Se necesitaba un genio que intuitivamente comprendiera, que adivinara, si se quiere los hechos, y que tuviera además el valor de  poner se enfrente de todos los sabios de su siglo para probarles experimenta lmente Ea falsedad de sus ideas. Ese genio fué Lavoisier, y uno de los hechos con que destronó las antiguas ideas fué el descubrimiento de la composición del agua.

Es  preci so, an te s de rel at ar la hist oria de es te des cub rim ien to grandi oso, conocer

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mediante los datos publicados por Sefort en su “Tratado de Química Hidrológica”, el estado de la ciencia en los momentos en que ese descubrimiento tuvo verificativo, pues así se puede apreciar en todo su esplendor. El conocimiento de los metales más comunes data de la época de las primeras sociedades. Todos los historiadores están conformes en que los  prim eros hech os por el hombre sobre la industria humana, se remontan a los tiempos de los indios, los cal.. deos, asirios, persas, chinos, etc., creyendo, por lo mismo, que las primeras industrias han debido nacer en el Asia. y no es admitida esta creencia sólamente por razón de que fueron las primeras sociedades civilizadas las que  pobla ron aquel las coma rcas , si no porque siendo esas regiones eminentemente ricas en minas metálicas, de las cua les muchas de ellas se hallaban a flcr de tierra, era preciso que los metales que en 12 naturaleza se presentan en el estado nativo, es decir, libres, como el cobre, el oro, la plata, fueran los primeros empleados en usos industriales.

Fueron ensanchándose los| conocimientos y en su desenvolvimiento nacieron teo rías hasta que se llegaron a concebir los dos ideales, los dos temas que han constituído los delirios del hombre en todos los  per iod os de su vida y de su historia: la adquisición de inmensas riquezas y la prolongación de la vida más allá de los límites que la Naturaleza le ha señalado. De esos delirios quizá han de haber emanado las teorías que apoyaron la creación de aquel empirismo, que con el transcurso de lo s si .. glos había de conquistar el sublime carácter d e ciencia, y de ciencia de las más im  portant es. Mas como en aquella época de absoluta ignorancia, las teorías relativas a la modificación de los metale s era n conocimientos exclusivos de los sacerdotes y de . Los filósofos, se ligaron a los misterios de la religión, y aun a las  princi pios de la s de m á s ciencias conocidas, quedando  por lo misnno prohibido, no sólo l a r e ve l ac i ón d e las mismas teorías, sino aun de los  proc edfmi ent os qu e hab ían de rea li zar las : los maestros estaban conminados con la pena de muerte si hacían alguna revelación; y hasta para comunicarse con los iniciados en esos misterios,  se valían del lenguaje sim bólico. -

§e sabí a únicemente que el fin de la Gran Obra o del Arte sagrado, corno s e de nominaba también el conjunto de procedfmientos conocidos, era el descubrimiento de la Piedra  filosof al o Mercurio  de l o s sa bi os y la preparación de la Panacea universal, que entre ambas cosas debían d e  proc urar la sal ud y la riqueza. Unos précticos decían que la piedra filosofa1 era el azufre, o el cinabrio (sulfuro de mercurio); otros, que era el arsénico, que tiene la  propi edad de blan quea r el co bre : otro s. que era el cadm io, que podía comu nic arl e un color amar ill o al propio me tal: en tesis general, la piedra filojofal era algo sobrenatural, que no podía ser asida sino en condiciones físic as extraordina rias :  per o fi rme me nte se creí a que esa sub st ancia debía producir el cambio de un vil metal o metal imperfecto, en metal perfecto u oro: se admitía además que una parte de esa substancia debía producir la conversión de diez mil  part es de un me ta l en oro. La pan ace a unive rsal , que daba el sec reto de curar todas las enfermedades y prolongar la vida, era para algunos una tintu - a mercur i a l y p a r a otros, tintura de oro y plata.

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Todas estas teorías fueron transmitidas hasta los alquimistas, químicos de la Edad Media, quienes profesaron necesariamente iguales creencias, iguales prácticas, los mismos procedimientos, pues gracias a las revelaciones que en sus obras hicieron los filósofos paganos de los primeros siglos de la Era Cristiana, pudieron conocerse los  princ ipios y aun las operaciones que con tanto empeño ocultaron los herméticos: no hubo más modificación que la originada por la época, pues por razón del oscurantismo que reinaba en las sociedades de Europa en esos tiempos, se creía en la influencia de sere s sobrena turales , en la influencia de los ángeles buenos buenos o malos, y el fenómeno químico o físico más sencillo se atribuía a un agente sobrenatural: la Física se llamaba Ciencia Ciencia oculta; la Química, Ciencia negra o  Alquimia. Las ideas de esa época llegaron hasta el delirio, pues para significar el poder de la Alquimia, Amato Lucitano aseguraba haber visto en el laboratorio de Julio Camilo, en un vaso, coloca do un hombre de una pulgada d e tamaño, que había sido formado por por medio de reacciones. Exceptuando a los griegos y a los árabes, toda la Europa estaba sumergida en una profunda barbarie, durante el período comprendido entre el noveno y trece siglos: los árabes abrazaron con entusiasmo las doctrinas místicas del Arte sagrado y de la Alquimia: Alquimia: aun publicaron muchas obras sobre el arte de transfor mar los metales convirtiéndolos en oro, y sobre la preparación preparación de la panacea universal: pero pero fijaron SU atención especialmente en la preparación de los medicamentos, procurando por esta razón grandes beneficios a la ciencia de hoy, hoy, que conserva muchas de l as fórmulas inventadas por aquellos sabios, y muchos de sus  proc edim ient os. Desde el siglo trece al diez y seis, la Alquimia se extendió en toda la Europa y fué cultivada con más entusia smo que nunca: durant e este período período de tiempo fu é cuando la historia de los metales se enriqueció en multitud de hechos: buscando la piedra filosofal, los alquimistas sometían los metales a cuantas pruebas les sugería el empeño convertirlos en oro, y esas pruebas eran practicadas con tal perseverancia, que muchos se prolongaban prolongaban años: d e este modo descubrieron los alquimistas la mayor parte de las propiedades de los metales, así como el mayor número de s u s combinaciones, cuyos datos recogió por fin la ciencia para engalanar con ellos las obras científicas que se han escrito en la actualidad para la enseñanza. Pero aun no se inte rpretaba n de un modo modo racional l os fenómenos que producían producían los metales al ser sometidos a las experiencias; ni existía teoría alguna que condujera

a aquellos químicos a la explicación de lo que se realizaba en cada caso: por el contrario, se inventaron algunas que fueron aceptadas universalmente : teorías que gozaron de un prestigio incontrastable, y cuya influenci a se convirtió convirtió en obstáculo que detenía al genio en su marcha ascendente. Una de las teorías que gozó gozó de más prestigio prestigio f ué la que St ahl emitió a principios principios del siglo pasado: se arraigó de tal modo que no pudo ser abandonada sino hasta la revolución que operó Lavoisier hace cien años. Stahl consideraba los metales, formados de cal o tierra metálica unida a una substancia elemental especialísima, semejante al eter de los físicos, a cuya substancia elem ental debían su combustibilidad: esa substancia la denominó flogisto; diferentes cantidades de este componente de tierra

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metálica y d e otro cuerpo que llamó  ti e rr a mineral, constituían la naturaleza de cada metal. metal. Di ó al acto acto d e la combustión combustión una importancia capitel, capitel, pues de ella hacía de pend  pe nder er t o d o s los lo s fe nó me no s qu í mi co s; por e s t a razó ra zón n co ns i de ra ba nece ne cesa sari ri o el f u e g o  p a r a qu e e s o s mi sm os fe nó me no s s e re al i za ra n: form fo rmó ó a s í u n cuerpo de doctrina que subordinara todos los hechos conocidos, contribuyendo de ese modo al mayor desenvolvimiento de la Química.

Todo cuerpo combustible contenía flogisto, según Stahl,

y la combustión se verificaba precisamente porque el flogisto se desprendía del cuerpo al arder: después de ese desprendimiento quedaron l o s cuerpos' incombustibles :  por e l cont co ntrar rario io,, s i e m p r e que los cuerpos absorbian, recobraban s u  po  p o d e r comb co mbus usti ti bl e. Ad Adem emás ás,, cuan cu ando do el flogisto se desprendía de los cuerpos, adquiría u n movimiento giratorio velocísimo, de donde nacían el calor y l a luz que caracterizaba el acto de la combustión; el calor y la luz eran, pues, propiedades del flogisto en movimiento.

Los metales que se calcinab calcinaban an cambiaban cambiaban de aspecto aspecto necesariamente; perdía perdían n

sus

 prop  pr opie ie dade da dess caracteristicas caracterist icas porque por que perd pe rdía ían n su flogisto, el cual formaba parte de s u naturaleza o d e su  propia  prop ia substancia, y recobraban su estado metálico cuando se les calentádolos olos con carbón, gra sas O aceites. La combustión combustión ¿e lo s restituía SU flogisto calentád vegetales era explicada en esta teoría diciendo que su flogisto se escapaba en la forma de aceite esencial, o quedaba mezclado en parte al carbón que producían, si n o ardía al contacto del aire. aire. Po r fin, toda propiedad de de los cuerpos, o todos los fenómenos que los mismos cuerpos producían en sus reacciones al combinarse o al descom  poner  po nerse, se, e r a n el re su l t ad o d e l a ause au senc ncia ia o  pr es en ci a d e l flogi fl ogi sto, st o, d e la fija fi jaci ción ón o separación de este cuerpo imaginario, que Stahl constituyó en agente universal. La simplicidad de esta teoría, por errónea que fuera, encantó a los químicos, pues la aceptaron y defend ieron con decidido decidido empeíío has ta el  punt  pu nto o d e que qu e algun al gunos os s e OPOnían a admitir la importancia que tenían los descubrimientos realizados por Lavoisier : re in o, pues pues,, esta teoría, sin contra contradic dicción ción algun algunaa durante much mucho o tiem tiempo po,, y i u é  b a s t a n t e p a r a la s expli exp licac cacio iones nes científicas e n el transcurso de medio siglo. Hasta mediados del siglo pasado no se había sometido el agua a experiencias s e rias y bi en dirigidas: para para que así s e hubier a obrado, obrado, er a preciso preciso que los alquimistas desecharan las preocupaciones que habian recibido como legado de los herméticos, . . . que se iniciara la aurora de la Química: efectivamente, hasta que los quimicos adop taron la experimentación para sus estud estudio ios, s, no pud pudie iero ron n tener f ru to en sus investi gaciones.  No se h a b í a sometido el agua a experiencias experiencias rigurosa rigurosas; s; su naturaleza había sido el tema de hipótesis hasta extravagantes y absurdas: existía u n dato únicamente, que los alquimistas habían consignado, que haciendo hervir el agua mucho tiempo e n u n aparato destilatorio d e vidrio vidrio,, abandonaba una mater ia tér rea : esto habían dad o a conocer los alquimistas, admitiendo, para explicar ese hecho, que el agua era sus ceptible d e convertirse en tierra, pues no podían comprender, ni mucho menos explicar de otro modo, el fenóme no que observaban en la destilación de l agua. agua. Eavoisier Eavoisier y Schecle probaron cada uno por su  pa rt e q u e e s a pr et en di da t i e r r a er a sili si licat cat o d e c a l cio que el agua tomaba del vidrio en que era destilada, y que tenía que abandonarlo  por efec ef ecto to d e su volatilización. Grande fué l a importancia que desde entonces adqui-

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rió la historia del agua, pues no solamente iba a ser revelada su naturaleza, sino que las experiencias a que debía someterse debían influír de un modo modo poder poderoso oso en el desarrollo desarrollo de la Química. Tal era el estado en que se hallaba la ciencia en esa época. c

Una vez que Mr. Hays tuvo la seguriLos  pri mer os est udi os d e sele cción y diferenciación de semillas los hizo Mr. dad de que su sistema da magníficos resultados, se dirigió a las legislaturas de Hays con zacate, pasto de los jardines; para esto sembró semillas de pasto, aisladas, los Estados para hacerles ver la necesidad de iniciar un movimiento en favor de la en montecillos de tierra a una distancia de un pie una de otr a; era la primera vez que agricultura científica, basada en la selecse ejecutaba esta operación. operación. De esta ma- ción de las semillas; el resultado de e s t a s gestiones fu é el establecimiento establecimiento de la asonera seleccionó las semillas que más y gestiones mejor se reprodujeron, y las usó como ciación de seleccionadores, de la cual fué secretario perpetuo Mr. Hays.  plant as pa dr e para la reprodu cción posteOtro movimiento de gran importancia, rior. Esta f u é la experiencia fundamental del sistema que se llamó centgener' pa- iniciado por el Subsecretario de Agricultura norteamericano, es la generalización del labra formada de centum y general, y que significa cien granos de una sola genera - estudio de la agricultura científica, y en este ramo es en el que se obtuvo mucho ción. El sistema consiste en sembrar cien de M r . H a y s . Su sueño sobre el particular granos de la misma generación en sitios fu é grandioso: confiado, como confiaba en apartados, de maner a de poderse dar cuen- el gran porvenir reservado a la agricultura todo el mundo, proyectó el establecita del modo y poder de generación de ca - en todo da una; se escogen escogen los que mejores resul- miento de escuelas de agricultura en todas tados dan, y se conservan para la selección  pa rt es ; de es as esc uel as sa le n ma es tr os a millares y a ellas asistirán los discípulos y purificación de la raza. Gracias a este sistema de selección, a millones, y una vez que todos sepan el valor de la agricultura y la facilidad de hase han podido establecer verdaderas instalaciones industriales, en las que se hace cer dinero por medio de ella, el mundo pola seIección de semillas y los trabajos ex- drá alimentar a un número de habitantes  per ime nta les . Na di e pred icó tant o coma dobla del que lo ocupa actualmente, sin Mr. Hays Hays la necesidad de emplear una grandes esfuerzos, y se habrán resuelto in gran cantidad de hombres y de dinero, finidad d e  prob lem as económi cos que preocupan seriamente a la humanidad en estos cuando se quiere obtener buen resultado momentos. en la selección de plantas o animales.

(Continuará).

ric Por

R. Willet M.

Mays, subsecretario de Agricultura del gabinete de los Estados Unidos, fué uno de los fun dadores de una gran es cuela de agricultura mo' derna, que está llamada a revolucionar esta rama de los conocimientos humanos, y fué además un gran organizador de 12 enseñanza de la agricultura. Durante la terrible guerra civil en los Estados Unidos, por los años de 1862, mientras que la mayoría del  país se hal la ba ent reg ado a los horrores de la guerra, algunos ciudadanos de los Estados del  Nor te tuvi eron la fel iz ide a de establecer escuelas, dedicadas a la educación de las vocaciones e inclinacion inclinaciones es d e c ad a indiviindividuo; uno de los resultados de esa idea fué el establecimiento de escuelas especiales de agricultura, en la mayoría de los Estados de la Unión, tanto en el norte como en el sur. Uno de los hijos mejor logrados de esas instituciones, que con el tiempo se convirtió en uno de los más animosos trabajadores en favor de la agricultura moderna fué el Subsecretario Willet M. Hays, a quien se deben muchas leyes sumamente benéficas en favor de la agricultu agricultura, ra, y de quien se obtuvo mucho en ese sentido. Los antecedentes y la vida política de Mr. Hays no dejan lugar a duda acerca de su vocación por la agricultura; nació en una finca de campo, la cual se vió en la necesidad de administrar y cuidar desde la edad de doce años, en compañía de su

Alfonso

E.  BRAVO .

hermano, par la muerte de su  padre. Ai mismo tiempo que estudiaba en una escue la de campo y en la estación experimental de agricultura agricultura de Iowa, cuidaba su  propia finca y observaba en ella las necesidades y dificultades del agricultor, buscando al mismo tiempo, la manera de subsanar unas y otras. La historia de su carrera es como sigue: un año, en la estación experimental de Io wa : un año como como director director de un periódico técnico de agricultura; cuatro años en la universidad de Minessota; dos años, en el colegio de agricultura de Dakota del norte; once  años , en la universidad de Minessota nuevamente, y cuatro años en el departamento de agricultura del gabinete americano. Por el año de 1889, Mr. Hays empren dió su tarea de mostrar a todo el mundo, que los granos se  pue den cruza r, como los animales, para obtener razas nuevas. Dos años antes, Mr. Hays había pro bad o qu e con sus  proc edim ien tos podía aumentar la producción de los granos de trigo en 10, 20 y 25  por cie nto, seg ún cla se. En pocos años se hicieron nuevas pruebas, que dieron muy buenos resultados, y quedó establecido un nuevo sistema de agricul tura, que reconoce la posibilidad de mejorar las clases de granos y poder de reproducción por el cruzamiento de razas. D e esta manera quedó desterrada para siem pre el emp iri smo de la agri cult ura, y los granos al ser sembrados, llevaban, con ellos, su  pedi gree res pect o a la  procede n cia, clase y tanto por ciento de  producción garantizada.

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Como tipos de las rocas metamórficas terreno que ocupa la Ba ja Cali forni a en sus distri-  pale ozoi cas enc uén tr ans e gnei sse s y micatos Norte y Sur, se distin-  piz arr as en la eleva ción cent ral de la Pe gue por la serie de fenó- nínsula; al igual que en la porción media, menos que precedieron a en el Municipio de Mulegé y en las ver tientes oriental y occidental abundan los su formación. esquistos, los conglomerados de arenis cas que contienen las especies fósiles, los GEOLOCIA yacimientos de cobre, etc., etc. Baja California está surcado de extreSegún los más autorizados estudios geológicos cuando el Continente aun esta- mo a extremo por una cordillera que corre  ba en ple na evoluci ón plutóni ca, aquell a más cercana a la costa oriental que a la occidental. El descenso hacia el lado del región peninsular, sufría una verdadera libración libración que levantaba o sumergía las  par- Golfo es extremadamente pronunciado, tes solidificadac, y así surgió la masa gra- mientras que para el lado del Pacífico va nítica que constituyó posteriormente el decreciendo en una sucesión de cerros má5 y más bajos.  próta sis de la mis ma. En general, su aspecto fisiográ fisiográfico fico es Siendo otro nuestro objeto, no nos detendremos a describir los  perí odos Cre ta - comunmente desolado y triste, por la aricico, Plioceno, Volcánico, Terciario y Cua- dez que predomina, tanto en la mayor par ternario, pues los lineamientos que se de- te de las alturas como en los extremos deduce n del cuadro cuadro geológico que correspon" siertos que a veces constituyen verdade ros páramos; aridez que se debe a la consde al Territorio, indican bastante sobre titución volcánica del terreno, que ea granlas rocas ígneas, intrusivas, post-cámbr;cas, efusivas terciarias y post-terciarias, des superficies sólo ha permitido el brote metamórficas metamórficas y sedime ntari as. L as prime- de una raquítica vegetación distribuída ras forman el eje principal del sistema irregularmente. Estas condiciones originan montañoso, sobre el cual se apoyan las las escasas lluvias y la carencia de manan rhyolitas, braquitas, braquitas, andesi tas, basaltos, tiales y corrientes de agua, pues las poetc., etc., que representan las rocas efusivas cas que existen pronto las evaporan las ocupaado grandes extensiones superficia - altas temperaturas o desaparecen por ab les en la parte meridional y en la vertien- sorción en las arenas. te del Pacifico. Las segundas están representadas por OROGRAFIA los granitos que además de considerarse como el basamento de la península, consComo se ve, la cadena de montañas de tituyen el principal de las serranías de Juála Península posee caracteres topográficos rez y San Pedro Martín. y geológicos dignos de mención, pues al

A tan vasto sistema montañoso se exlevantar el suelo como se deja dicho, forma una combinación de la Sierra Nevada,  plic a que la  pení nsul a posea grand es deen la 'Alta California y se inclina en su siertos como San Julián, El Berrendo, Co part e má s borea l so bre el lit oral del Pa - lorado, San Felipe, Maquata y el comprendido entre el eje principal y Sierra Santa cífico, para seguir después la dirección meridional, pasando a formar las costas Clara : dilatadas llanuras como la Berrencuda, Buenos Aires, Santa María, Llanos del Golfo, abruptas y cortadas por profunalgunos her del Principio y extensos valles algunos das quebraduras. mosísimos como el de Tijuana, Las Pal Así pues, mientras el litoral occidental ofrece en su topografía una uniformidad, mas, Guadalupe, El. Mancadero, La Trinidad, San Quintín, El Rosario, El Venado, monótona, el oriental presenta innumera  bles det al le s que l a hace n pint ores ca. Ade- Redondo, Vallecitos, Ensenada, San Jacinto, Camalú, El Cirio, etc., que carecen de más, como el descenso de los planos hacia agua absolutamente. el Océano es menos pronunciado pronunciado debido a su extensión, que el que tienen los de la  IRR IGA ClON co vertiente oriental, la mayoría de las corrientes fluviales pertenecen a las del Fa Por otra parte la suma escasez de llu cifico. vias, causa principal de la esterilidad geEl sistema orográfico de Baja Califor- neral del suelo y de la consiguiente liminia es por demas interesante. Desde su tarión del desarrollo agrícola de la peníniniciación en la frontera con el eje de la sula. ha dado lugar a aue se hava iniciaSierra Juárez continúa hacia el sur, ora do  por el gobie rno local , un vasto progr aformando una garganta por donde pasa ma de riego bajo la dirección técnica de el camino que une los  puer tos de Ense na - la Comisión Nacional de Irrigación. da y San Felipe, ora formando el nudo de Entre las diversas obras llevadas a caLa Encantada cuya cima alcanza 3,069 me-  b e debemos citar el Proyecto "Presa Rotros sobre el nivel del mar; ora siguiendo dríguez", aprovechando las aguas del río  par ale lam ent e al Golfo, toma los nombres Tijuana. Su almacenamiento H. M. 13.570; de sierra Santa Isabel, sierra Calamojué derivación L.P.s. área regable Ha.  2 O24 y San Luis, hasta ser interrumpida con el tipo Amburser, y dimensiones E-610 M.A. desierto de San Julián para conocerse des51.  pués como sie rra de San Borjas, cuyo ceLa Ambursen Dam Company, preparó rro de Cubay mide 2,787 metros y entra los planos referentes a los detalles de la al distrito Sur precisamente a la altura del cimentación en arco para el tramo del le lugar denominado sierra de Calmallí. cho del río, pero al hacer la revisión de En obvio de la brevedad cabe decir que ellos s e consideró conveniente modificarla. la península abunda en serranías secunHacia el sur había otro proyecto. darias entre las que se encuentran, La Eafue abandonado. abandonado. 'Trátase del que se inicio guna, San Eázaro y La Victoria que termi - en el cañón de Santo Domingo, cerca de na en el cabo de Sa n Lucas; y en el dis- Sa n Quintín, donde se pensó pensó construir una trito Norte la de Cucapah en Mexicali; represa grande para agua. la de El Mayor, la de Tinajas de la que La Comisión Nacional de Irrigación esse desprende una derivación que acaba en tudia diversos proyectos para cuando se la punta de San Felipe. lleven a cabo en la península trabajos dc cuando esos no sea n P O . En esta s mont montaña añass se distinguen las irrigación, a un cuando cumbres d e Cerro Colorado, Colorado, Las Abejas, su iniciativa ni queden bajo su excluAnchumá, Picachos, El Centinela, Cerro siva vigilancia: bástale saber que el riePrieto, El Borrego, La Encantada, Los Ami- go artificial de los campos y huertas, ca si no ha tomado ningún desarrollo todagos, Santo Tomás, Jaraguay, El Pedregoso, territorio. EfectivaEl Gato, etc., en el distrito boreal, y Santa vía en aquel extenso territorio. ranchos en l o s cuaClara, El Perdido, etc., en el austral en mente hav muy-  pocos los que existen cráteres volcánicos extin- les se riega una parte muy limitada de? lo se observa que En terreno. general guidos. Actualmente Cerro Prieto y La Lalos misioneros del siglo XVIII y XIX higuna producen erupciones lodosas.

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ORNIA

J Sus Elementos de

 Po r  Ro be rt o QUIROS  M AR T IN E Z .

E

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cieron uso muy amplio de la irrigación artificial, pues en algunos lugares de las an tiguas misiones como dice E. Bose y E. Wittich, se utilizan hoy todavía parte de las zanjas de los padres y en otros proba bl em en te se ha extendido algo el sistema de irrigación como en Santo Tomás, San Vicente, Vicente, Santo Domingo, Domingo, S an Fernando (en rnuy pequeña escala), El Rosario, San Bor ja y Sa n Regis. Otro lugar que dependia de una misión y que probablemente fue regado ya en tiempo de los padres, es la Viña, Viña, cerca cerca d e la ex-misión ex-misión de S an Miguelit litoo d el Descanso : actualmente actualmente se utilizan utilizan allí algunos manantiales poco considera  ble s pa ra el rie go , ob te ni én do se un res ultado muy halagador. En los alrededores en Ensenada se riegan casi exclusivamente huertas y no los campos. Un sistem a bien ideado  y económico de irrigación que les ha dado magníficos resultados, can grandes economías del precioso líquido. Algunos geólogos conociendo conociendo la pequeñ a  pro por ció n de ag ua e n la at mó sf er a, aconsejan represar el líquido y  pa ra ev ita r la rapida evaporación, opinan que esas re pr es as de be n se r su bt er rá ne as , esp eci al mente en el curso o medio de los arro yos como lo hacen con éxito en San Ber-

nardino, Alta California. Allí los tiros miden una abertura de 4  por 6  pies , con pro fundidad de 75  y 100  pi es ; los cu al es ad emados convenientemente conservan am plios intersticios y su fondo lo forman gruesas capas de grava, arena, etc. Y como el agua se emplea en lo general solamente para usos domésticos, es muy frecuente ver por todas partes de la  pe ni ns ula bo mb as con mo to re s d e vie nto cuya capacidad no es sudicientemente grande para dar agua de riego para te rrenos algo extensos, y como por otra parte el co mbustible también es muy escaso, escaso, o  ba st an te car o, no es mu y co ste ab le em  ple ar ei ag ua su bt er rá ne a pa ra rie go , pa ra lo cual s e necesitan bombas de mayor potencia y para éstas, maquinaria más  pode rosa. A eso s e debe quizás que las gobiernos de l o s distritos Norte Norte y Sur hayan cuídado d e distar medidas preventivas contra un uso excesivo y abusivo de agua en ciertas localidades, así c o m o que la C o m i s i ó n Necional  d a Irrigación al emprender trabajos de exploración y estudio para ejecutar for* males obras de riego, trata de demostrar que la vegetación y la tierra de alteración  pr od uc id a por el la sir ve n pa ra que el agua de lluvia penetre paulatinamente en el sue-

Presa Rodríguez.-Secci6n

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Pre sa Rodrígaez.-Aspecto Rodrígaez.-Aspecto general. de la cimentación en e! lecho del rio viendo de aguas arriba hacia aguas abajo en dirección nornial al eje de la  pre sa.

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del lecho del río y ladera oriental vista desde aguas abajo de Ia  presa en dirección sureste.

lo, evitando así la existencia de corrlentes torrenciales, torrenciales, y causando la de corrientes permanentes tanto superficiales, como subterráneas. Los agri cu l t or or e s d e la Península cuidan con e o de la protección de las a g u a y tambi én del mantenimiento  y lim  pia de los a g u a j e s y manantiales entendidos que estos son muy limitados limitados en el territorio: no ignoran que son de suma im po rta nc ia pa ra la ga na de rí a y pa ra la s vías de comunicación; sin em b ar . go, en muchos casos estos pozos y aguajes están aban donados y sucios o los aguajes han for mado una especie ¿e ciénaga volviéndose el agua muy salada  LITORALES

Debido a la s desviaciones de la cordillera centra centra!, !, los litora les presenta n dife rencias notables entre sí. La faja de terreno aluvial que corresponde al litoral del Pacífico afecta en general una uniformidad constante y a veces monótona, en donde las variantes consisten en las du nas, colinas de poca altura, y de trecho en trecho, las playas estan cortadas por

albuferas o lagunas marítimas, casi siem pr e de  poca pr of un di da d, pe ro algu nas d e  ba st an te su pe rfi cie . En contraposición la costa oriental so mayor longilongi bre el Golfo form ada en la mayor tud por acantilados, cuenta con escotaduras que constituyen constituyen puertos bien abrigados y seguros, y diversos detalles que la hacen pintoresca. El conjunto de ambos litorales, ¿esarrolla una longitud aproximada de 3,000 kilómetros y está salpicada de islas. Las  ba hí as pr inc ipa le s en la s qu e se en cu en tran puertos abiertos para el comercio ext r a n j e ro ro s o n : La P a z y Santa Rosalía, en el Golfo de California, y Ensenada en el Pacífico. Las otras que merecen mención son San Quintín, San Sebastián, Vizcaí Vizcaíno, no, San Pablo, San Roque, Asunción, Magdam lena, Ballenas, Pequeña y Almejas, en la costa occidental o del Pacífico; mientras q u e e n la costa oriental oriental se encuentran Sa n Felipe, San Luis, Remedios, Angeles, Anim mas, San Carlos, Concepción, San Nicolás, San Basilío, Ventana, Muertos, Palmas y S a n José. Las islas mayores tienen tam bi én sus  pu er to s y ba hí as com o si gu e: la isla de Angel $e $e la Guarda tiene el Puerto

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de Refugio y la bahia de Hombug; la isla de Carmen (153,07 kilómetros) tiene los  pue rto s de Lo bo s y Ba la nd ra y la s bah ía s de Salinas y Gavilanes; la isia de San José (216.45 kilómetros) tiene la bahía de Amortajada, y la isla de Cedros o Cerros (346.86 kilómetros) tiene la bahía del sur. Las demás islas en la costa del Pacífico que pertenecen a l a República son: Guadalupe (263.18 kilómetros), Todos Santos, San Martía (2.91 kilómetros) : San Jeró nimo, Sacramento (8.08 kilómetros) ; Tilde, Cedros, Natividad (8.60 kilómetros) : San Benito (5.79 kilómetros) : Asunción y las islas mayores de Magdalena (223.60 kilómetros) ; Santa Margarita (220 kilómetros) y Crecientes (18.39 kilómetros). Por el lado del Golfo encuéntranse Mont ague (46.99 kilómetros) y Goge (5.04 kilómetros); en la desembocadura del río Colorado, Gonzaga, las islas de San Luis, (3.19 kilómetros); la isla mayor de Angel de la Guarda (854.94 kilómetros) : las islas Me jia (3.44 kilómetros); San Marcos (32.13 kilómetros) : Carmen, Santa Catalina (42.11 kilómetros): San J o s é Espiritu Santo . . (111.95 kilómetros) ; Cerralvo (156.16 kilómetros) : Las Animas (6.15 kilómetros) :

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Coronado (7.93 kilómetros) : Danzante (5.21 kilómetros) : Partida (18.80 Kilómetro tros) : Link (1.01 kilómetros) ; Monserrat (19.84 kilómetros) : Pelícano (3.02 kilómetros) : Smith (8.21 kilómetros) ; Salsipuedes (2.05 kilómetros) ; San Francisco (7.86 kilómetros) ; San Pldefonso, (1.42 kilómetro) ; Sta. Inés 44.79 kilómetros) : S a n Lorenzo  NW. (4.25 kilómetros); San Loren zo SE. (39.45 kilómetros) ; San Pedro Mártir (1.33 kilómetro) : San Juan Nepomuceno (1.25 kilómetro): Santa Cruz (16.23 kilómetros) : Tortuga (6.91 kilómetros), y varias otras aunque entre todas ellas se distinguen Guadalupe y Cedros. Una por su aspecto fisiográfico, la cual presenta anfractuosidades en que contrastan las en hiestas e inaccesibles alturas, con profun das barrancas y desfiladeros; su gran meseta coronada de  bos que s, abu nda nd o cerca de las playas, frondosas y corpulentas  pa lm er as ; su vegetación escasa aunque lo suficiente para mantener los ganados ca  brí os qu e en es ta do sa lv aj e ahí pululan : la multitud de aves marinas que anidan en las concavidades de las rocas, y las manadas d e elefantes marinos que rada dia tienden a desaparecer por la pesca

Pre sa Rodrfguez.-Vías pa ra el tran sport e de concreto; entre ellas pueden verse los caballetes para soportar los cables de los cuales cuelgan los canalones (chutes).

inmoderada. La otra, por su cordillera muy Sin embargo, los arroyos de carácter escarpada y sus  pico s ele vad os, su vegeta -  pe rm an en te en la pen íns ula da n lug ar a la ción exuberante en cedros que forman Los- formación de los ríos Colorado (de voluques frondosísimos : sus manantiales de men caudaloso que aumenta considerableaguas potables y minerales, sus yacimien - mente cuando se verifican los deshielos en tos de oro,  plom o, mag ne si ta, cobr e, etc. las montañas que le dan su origen), San M a t í a s , Agua Dulce, Palma, San Luis, Ca  RED  FL UV IA L lamujué, Santa Isabel y Purificación, en la La gran mayoría d e todo el sistema flu -  pe ndi en te aca nti la da de l Go lfo : aquí co rr en vial de la península, según lo dejamos di- también los arroyos Palmas que vierten sus aguas en Laguna Salada, cuyo desagüe cho en otro lugar, debe considerarse como raquítico. La configuración topográfica y se une al arroyo y Agua Caliente. En cam orográfica, a s í como las escasas lluvias, ha -  bio en la vertiente del Pacífico corren los cen que propiamente no existan verdaderos arroyos Tijuana, Miji, Tecate, Cuadalupe, rios permanentes : pu ed e dec ir se que la red , San Antonio, Ensenada, Gallo, San Carlos, Santo Tomás, San Vicente, Sala las  ba rr an ca s y to rr en te s sólo conducen Animas, aguas llovedizas a las vertientes oriental do, Arroyo Seco, Santo Domingo, Valladares, §anta Clara, Alcatrás y San Pedro y occidental. Contribuyen en gran parte a esta pobre - (abundante en trucha de magnífica calidad za del precioso líquido, la mísma constitu- y donde se forman las importantes cascíón del fondo de las barrancas cuyos te - cadas La Grulla, El Caballo, cuyo aprovechamiento en desarrollo de fuerza motriz rrenos de aluvión muy porosos durante los más meses del año están secas y solamen - sería muy conveniente) : San Fernando, Cirio, Santa Catarina, Rosarito, San Julio te cuando el agua de los manantiales encuentra rocas impermeables, se forman de- Amargoso, San Borjas, San Javier, Trini pósi tos da nd o lug ar a cor ri ent es de corto dad, Salinito, Paraíso, San Bartolo, San curso, muchas de las cuales se pierden an- Raymundo. Salado, Colorado, Malva, Seco, Santa Rita y algunos otros que se  pie rtes de llegar al mar.

Pres a Rodríguez.-Vista general de la ladera poniente. De izquierda a derecha y del fondo hacia el frente: la  pla nta queb rador a, la s dos pl an tas mezcl adora s, la  bode ga pa ra el cemento, el taller mecánico, la planta de compresoras, y las torres  pa ra los cables.

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den antes de llegar al océano, debido a la absorción de sus aguas por las arenas por donde corzen o  po r alt a eva por aci ón qu e sufren.

 HIDROLOGIA Es  bien sa bi do qu e en la ali me nta ció n

Los manantiales aparecen como aguas que brotan de algunas de las diaclasas o en ciertos puntos del contacto de los te rrenos permeables de transporte con los terrenos impermeables. Entre esos ma nantiales cabe citar los del valle de La T r i n d a d , Los Pocitos, Jacumba, La Grulla, Las Palmas, La Suerte, San Borja, Real Castillo, Agua Caliente, Laguna Prie ta, Tijuana, El Alamo, El Onyx dond e existen aguas subterráneas ricas en cloruro de sodio, sal que proviene, probablemente. d e aguas del mar retenidas por las calizas de la región que fueron antes de su emer sión antiguos fondos submarinos. Estas aguas sulfurosas también tienen propieda des curativas y varía su temperatura, la q u e s u b e d e los 21' a los 4OQc. siendo la temperatura del aire, en el momento de la observación, de 189 C. y 16.5 C, En algunas islas hay manantiales de aguas mi nerales en que predominan las sales cu prí for as.

de las capas acuíferas subterráneas intervienen las lluvias, 12 condensación de la humedad del aire bajo forma de neblina o rocío y la nieve, que al fundirse produce agua en mayor o menor proporción según la cantidad de nieve que cae en cada localidad, variable con la altura sobre el nivel del mar, estación, etc., en Baja California, son más escasas en el Norte que en el centro y Sur, así pues, las neblinas y el rocío son más frecuentes en el Norte que en el resto de l territorio. Las observaciones pluviométricas practicadas e n Ensena da apenas arrojan una precipitación de 241 milímetros, en Sa n uintín 133 milímetros y así sucesivamente. En muchos lugares del territorio, el te CLIMA rreno es permeable, pero en los más las rocas se  pr es en ta n ag ri et ad as y aunque las P a r a las condiciones económicas de diaclasas que las atraviesan, no son  m u y una determinada región es de la mayor  pro fu nd as , sí las vuelven permeables y per - importancia su clima,  por se r el que in miten que se establezcan en ellas la cir - fluencia todos los actos del hombre, hasculación subterránea de las aguas. ta en detalles insignificantes; así  pu es, to-

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Presa Rodríguez.-La

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Pre sa Rodrígnez.-Avenida

de marzo 16.

misma avenida en otro lugar de la presa.

maremos como factorcs del clima en la ciones como efecto de las corrientes aé Baja California, la precipitación acuosa, la r e a s q u e se abaten e n el Océano. temperatura y la dirección y repartición Generalmente, en el noroeste el viento d e los vientos. es fuerte, seco y frío que se convierte mu Dicho clima, tiene las características chos días en temporal tempestuoso. que del que predomina en las regiones secas, varía en la columna termométrica hasta  pe ro por su  pos ici ón ge og rá fic a, es es en - d e 8 a 10 grados y en la  ba ro mé tr ic a au cialmente marino, cualidad que principia ment a conforme a la intensidad del viento, así que su acción puede considerarse más a manifestarse en las serranías, desde una altura de 400 metros, condición particula-  bi en com o de se ca nt e so br e la veg eta ció n y excitante nervioso y congestivo en el hom rísirna porque divide aquel territorio en dos zonas: la costera, en donde la aridez  bre. Propiamente no existe una temporada contribuye a que reine en casi todo tíemPO, un aire muy seco, con temperaturas de aguas segura, sino más bien participa elevadas, sobre todo en la vertiente del el territorio hasta cierto grado de escasas Golfo de Cortés, y la de las serranías, que lluvias, especialmente en el Sur, predomi con excepción de las alturas donde es nan las aguas en el verano como ocurre frío, generalmente es templado, lo cual se e n la mayor parte de las regiones su btroexplica fácilmente debido a que los vien -  pi ca le s de nu es tr o pa ís, es de cir , la pr etos van cargados de vapor de agua de los cipitación acuosa tiene lugar en los meses mares y qu e se verifica en esos terrenos de  ju ni o a se pt ie mb re lo qu e de pe nd e d e una verdadera irradiación nocturna que ha en esta parte los vientos del sur y cen mayor el estado higrométrico de i aire. sureste ocurren principalmente en estos meses, mientras que en el invierno prePor otra parte los vientos periódicos, soplan desd e noviembre a marzo; y los domina el viento del norte y noroeste. L OS monzones y  br is as du ra nt e el 'in vie rno con vientos del sur y suroeste de la  pa rte me dirección noroeste, y en el estío, del sur - ridional de la península, abarcan de v e z este. Sólo en el Pacifico sufren modifica- en cuando también parte de la región me-

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dia de la Baja California y en este caso tiles en muchos lugares, las de la playa y se producen lluvias más o menos abun - 1os depositos modernos de l mar producidantes en lo que comprende la parte cen- dos por la destrucción de las rocas de las tral y aun alcanzan al distrito Norte que antiguas costas, y las últimas, son de suelo entonces se conccen allí como lluvias de fértil en aquellos lugares donde la super invierno. ficie se compone de las margas y areniscas Si las brisas de mar son constantes e margosas o de sus  product os de descomintensas en el Golfo como en el Pacífico,  posici ón; son menos heraces, allí donde y los ciclones rara vez azotan a la Penín -  pre domi nan los conglomerados, y estériles sula, y a principios del mes de octubre se son, aquellas cuyo suelo está formado de inician fuertes temporales de efectos te-  pórfido, basa lto , etc . mibles en el Golfo, conocidos por “CordoAsí se explica que la vida vegetal conazo de San Francisco”, en cambio, el cie- mo la animal sea raquítica y escasa en el lo límpido de Baja California se cubre de territorio peninsular, bastará enumerar los  bru mas que re su lt an muy imp ort ant es para diversos productos para que el lector pue la vegetación, la cual a  pocos dí as de la da darse mejor idea: en l a s serranías se humedad brota cantidad de flores como encuentran ocote, enebro, encino, y otros ; malvas, prímuIas, etc. Pue de decirse que en terrenos húmedos: álamo, copa1, palo hasta una parte de la fauna depende de verde, palo blanco, zalate, mezquite y eulas brumas y el rocío. caliptos; en las planicies y llanuras: maguey, nopal, cardón, chaparro, uña de ga  FLORA Y FAUNA to, tolote, ocotillo, biznaga, pitaya, el “cirio” que se admira por su tamaño y forma  Flor a.  No obstante las condiciones es - ya que levanta su tallo cónico a veces has  peci ale s del sue lo de la Ba ja Cal ifor nia , ta una altura de quince metros, teniendo éste es muy utilizable en sus valles, llanos en su  ba se iin diá met ro de 30 a 40 centíde costa y mesas. Los primeros tienen metros en lo general un suelo de aluviones formaTambién se cultivan con gran aprovedos en parte por los mismos ríos, en par- chamíento entre los cereales : maiz, avena, te por e1 mar. En los segundos, las are- centeno, mijo africano y trigo; siendo el nas de los rnédanos, ciertamente poco fér- cultivo de éste en gran eecala, puede de -

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Canal

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Pres a Rodríguez.-Vista

irrigación en el Valle Imperial.

cirse que campos inmensos s e encusnfran  prin cipa lmen te ce rca de Ti ju an a y en las regiones más o menos cercanas a Ensenada: entre los árboles frutales, el olivo, no gal, albaricoque, durazno, higo, almendro, dátil, naranjo, limón y otros. Son de consideración los productos que se obtienen de la vid, plantas forrajeras. y distintas especies de legumbres, especialmente de las cucurbitáceas como San día, melón, etc., cuyo cultivo si se hiciese en mayor escala y de modo más cuidadoso,  prod uci ría pingü es uti lida des, si se tiene en cuenta que un acre (0.4 hectárea)  puede produ cir e n san día s de $150.00 a $400.00 : una de col de $80.00 a $150.00 ; de ejotes y chícharos, $200.00 a $250.00; de tomates, $250.00 a $800.00; de patatas. $120.OO a $250.00; de cebollas de $120.00 a $1,600, y chile de $1,000.00 a $1,800.00, y así sucesivamente. La caña de azúcar y demás frutos tro picales pue den cul tiv ars e con éxito en las secciones húmedas ; los viñedos reciben alguna atención. Ya el “Anuario Estadíctico” estimaba en 30 el número de haciendas en el territorio divididas como sigue:

de la part e inferior de la ladera oriental, viendo hacia el sureste.

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de

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caña de azúcar, 10; cereales, 13; maguey (mezcal), 1; ranchos ganaderos, 6. De 1901 a 1902, la producción agrícola del territorio según la estadística oficial, fue como sigue : cereales, $75,624.00 ;  produ ctos de la caña de azúcar, exceptuando el aguardiente, 1,641,000 kilogramos, valuados en $180,000.00 ; mescal, $8,350.00 : cáñamo, $3,000.00; vinos de uva, $11,64S.00; cortezas para curtiduria, $18,000.00 ; madera de mezquite, $251,340,00; caña de azúcar, $30,000.00. Solamente en bosques de propiedad  par tic ula r s e obtu vier on en 1927, en cor tezas curtientes 5.480,OOO Ks. con un valor de $2.288,172.00; en leña 4.168,OOO Ks. con un valor de $62,520.00; en damiana, 188,000 Ks. y de orégano, 42,000 Ks. con un valor de $10,500. Fauna. Ccmo consecuencia directa de la flora debemos mencionar la fauna te rrestre representada entre los mamíheros  por el puma , gato mont és, coyote, zorr o, zorrillo, perro, tejón, berrendo y borrego silvestres, venado, conejo, castor, burro salvaje, ardilla, etc.; entre las aves: el águila, gavilán, cuervo, zopilote, zenzontle,

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todo el distrito Norte hasta Calamahí, y que solamente en 1906  pr od ujo 5,697 kilogramos de cera y 10,000 kilogramos de miel. En 1926 se obtuvieron 4,531,571con un valor comercial de $1.152,069.00; en  per la $550,000.00 y en concha $69,351.00. Puede asegurarse que la rica fauna Je Baja California invita constantemente a sostener una sistemática caza y pescaque constituye para muchos de los h a b tit a n es de aquel territorio una profesión muy lu crativa, allí no ocurre lo que en otras regiones donde sólo se ejercitan aquellas a título de sport o lujo; idea completamente errónea, puesto que tiene una influencia fune sta porque a consecuencia de ella SE ha mostrado en muchos países una apatía y una indiferencia respecto a la conservación de los animales silvestres a tal grado, que estos han sido destruídos casi por completo.

tordo, etc., y las domésticas tan conocidas; entre las marinas la gaviota, pelícano, garzas en gran variedad : entre los reptiles, la víbora de cascabel, camaleón, lagartija, etc., y otras especies; en quelonios, el carey la tortuga de tierra; en batracios, la rana y el sapo: en peces, la trucha, lisa,  parg o, to tua ba , ti bu ró n, ti nt or er a, etc. , y la ballena, el lobo y elefante marinos, etc. : en miriápodos, cientopiés, y milpiés ; en arácnidos, la tarántula y alacrán: en anélidos, la lombriz y sanguijuela: en  mo luscos, el caracol, ostión, almeja, choriio, abulón, ostra perlera; en insectos son mu chas las especies y benéficos unos, perjudidales otros al hombre: son de citarse las colmenas qae se encuentran en gran des cantidades en todos los  pue blo s. Una de las especies, la indígena, bastante pequ eñ a y de color obscuro, otra (la apis mellifica var lingu stica ) con anillos amarillos en el abdomen, la cual abund

 PRODUCTOS MINERALES

A

Cirio o Cactus Gigante.

los grandes productos naturales que dejamos descritos, debemos agregar los minerales que constituyen importante ri queza de la peninsula, considerada como una de las zonas mineras más prominen tes del Continente. Y es que está situada en la zona de oro que atraviesa la costa del Pacífico desde Alaska al Cabo de San Lucas en la cual se encuentran las minas de oro más ricas del mundo.  No solamente es la península rica en cuarzo que contiene mucho oro, sino en minerales de toda clase incluyendo plata, cobre, jamesonita, azufre, arsénico, plomo, berthierita, hierro, magnesio, estaño, galena, antimonio, azogue y sal de  pi ed ra. Ad em ás co nti en e ri cos depósitos de  pi ed ras pr eci osa s: tu r quesas, rubíes, esmeraldas, ópalos, turmalinas, jacintos y yacimientos de cal, yeso, mármol y  po ta sa ; per o es oro, plata y co  bre lo q ue má s ab un da . Po r to da es ta extensa área se encue ntran estos minerales y a la fech a se h an exportado muchos millones a Europa y Estados Unidos. Hasta hace poco tiempo la explotación del cuarzo no se había llevado a cabo en grande escala, pero se nota ahora gran ani mación en este sentido. Hoy, por todo el territorio, la minería del cuarzo está en estado floreciente, y muchas de las gran-

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des minas están montadas con la más modern a maquinaria. La mina de cobre El Boleo, es una de l a s más  pr od uc tiv as d e las gr an de s minas de cobre en la América, y el metal, por su gran ley, toma  pr oc ed en cia so br e el  pro du cto de muchas de las más antiguas minas, tan ricas algunas, que han dado grandes ganancias aun trabajada s de la maner a más primitiva, sin maquinaria y sin conocimiento  prá ctic o, qu e no se po drí a cal cu lar su  pro duc to si se trabajasen con maquinaria moderna. El oro de este territorio aparece libre en las venas del cuarzo. La mayoría de estas minas se tra ba ja n po r me di o de  pozo s, y en muchas de ellas se ha alcanzado una profundidad considerable. Peritos competentes aseguran que a medida que  se hagan los trabajos subterráneos, se encontrarán ricos depósitos de metal. Santa Clara y Calamojué, Triuny Cacachilas, Santa Rosalía y iilegé, San Isidro y Laguna, Los Volcanes y Sa n Marcos, Sta. Mar garita y Cedros, Ojo de Liebre e Isla del Carmen son centros bien conocidos como productores de minerales; solamente E1 Boleo, en 1922, extrajo 14,300 toneladas de cobre, tanto que, en la producción total de este metal en la República, Baja California contribuyó con el 24.25%. Bien puede decirse que el as Sahuaro o Cactus Gigante.  pe cto mi ne ro de la pe ní ns ul a es en extremo halagüeño, y los capitalistas, lis- toda clase de artículos de que han menestos a reconocer esa riqueza, gastan inmen- t e r los habitantes peninsulares. Mexicali y La Paz. Tijuana, Ensenada, sas sumas en explotar las propiedades. Santa Rosalía, y San José del Cabo, son  INDUSTR IA Y COMERCIO los  pri nc ipa les ce nt ro s com erc ial es do nd e Aunque todavía no se conoce en sus se surten las demás poblaciones del terridetalles el censo verificado el 15 de mayo torio. Las salinas son un elemento importan ú timo lo cual nos impide precisar cuanto se relaciona con el comercio e industria te de riqueza, así como la pesca de ostra s de la Baja California, sí  po de mo s as en ta r  pe rl er as y tortugas de carey: industrias que aquellos no se desarrollan considera- q u e no obstante lo muy descuidadas rin  bl em en te de bi do a l a fa lta d e com uni cac io- den pingües ganancias a las compañías ex n e s y a la proximidad con los Estados Uni -  pl ot ad or as ex tr an je ra s, como lo pru eb a el dos que presta una fácil importación en hecho que japoneses y estadounidenses f o 

1 Q

II

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son los ccncesionarios : únicamente el go bi er no es el me no s ap ro ve ch ad o, pu es ape nas percibe ínfimas contribuciones. Los mismos trabajadores gozan de salarios mezquinos que no bastan a levantar su ni vel moral. Muy recomendables son sus molinos de trigo, productores de harina de suprema calidad y que en grandes cantidades se exporta a Sonora y Sinaloa; sus grandes cultives de algodón, especialmente en el Valle de Mexicali: sus carruajes, carros y guarniciones fabricados con materiales im  po rta do s : sus conservas alimenticias, especialmente de frutas: sus fábricas de hilados, teniendo como materia prima lana de  bo rre gos de la región misma: y la muy importante fábrica de aviones de cuyos talleres salió el “Baja California  NQ 2”, en que el coronel Roberto Fierro hizo por primera vez el viaje directo sin escalas de Mexicali a la capital de la República. Apa rato en que el mismo aviador realizó su triunfal vuelo por la América Indoespañola Entre las pequeñas industrias, son de citarse la ganadería, apicultura, avicultura, refinería, cantería, curtiduría, elaboración de objetos varios y curiosidades en que las conchas marinas y el abulón forman el mayor atractivo para los turistas y sin faltar otros talleres de oficios que cubren las necesidades de los habitantes de la península, el cultivo de la orchilla, empleada en la tintorería, y que crece profusamente en una zona comprendida entre los 23” y 22’ y 26 y 24Qlatitud norte de la costa occidental. COMUNICACIONES

Los camino s carreteros y calzadas para automóviles como medio de locomoción y transporte han tenido grande impulso en lo s ú l t i m o s a ñ os . Los caminos so n numeroso sy sirven para unir diferentes ranchos y campamentos de rancheros o trabajadores de los que se ocupan de reforzar los  bo rdo s o constru ir canales. Dichos terrenos atraviesan pesados arenales o son aprovechados en los terrenos quebrados y en las serranías. Las calzadas son magníficas como lo  pr ue ba el pi nt or es co as pe cto de la cu es ta de “Picachos” en el trayecto de Mexicali

a Tijuana. E1 sostenimiento de esta vía está considerado como uno de los más costosos de la República, por los continuaos deslaves que causan las lluvias. Sin embargo, reviste mayor importancia la proyectada carretera transpeninsular  por que se rá la pri nci pal pal anc a para el  pr og re so de am bo s di st ri to s, ya que a Ia vez que dará facilidades para que sus  productos puedan ser transportados económicamente, desarrollará la industria, abrirá la entrada al turismo yanqui que !levará sin duda grandes beneficios, aunque actualmente corren automóviles de un es tremo a otro, los viajes son costoso; y muy molestos debido no a la topologia del terreno, sino más bien a errorss de carácter técnico d e los constructores, errores que pronto desaparecerán dado el  pro pós ito q ue ha y d e ha ce r d e aq ue lla ví a una gran carretera que abrevie la comunicación interior de la península. Además de las comunicaciones terrestres, se aprovechan también algunos brazos del Delta, el río Haydy y el Pescadores,  pa ra tr an sp or ta rs e ha cie nd o uso d e pe qu eñ a s l a nc h as de gasolina de poco calado, debido a la falta de profundidad de las aguas en algunos tramos. Recientemente se ha pensado muy en serio sobre la construcción de una carretera que una la  pe ní nsu la con la Repúb lica por el Estado de Sonora, cruzando el río Colorado. En cuanto a otro género de camunicaciones, solamente el distrito Norte cuenta con Ferrocarriles : el “Sur Pacífico”, que cruza la parte norte de los municipios de Ensenada y Tecate : y e l “Inter-California” y “San Diego Arizana” que atraviesa una corta porción del municipio de Mexicali cuya ciudad quedará unida a Santa Isabel, Son., por el Ferrocarril Nacional de la Ba ja Ca li fo rn ia , q ue tie nd e a la con exió n con el Ferrocarril S ud Pacífico de México. La red telegráfica y la telefónica, de  pr op ied ad gu be rn ati va y pa rti cu lar , com unican todas las poblaciones del territorio, aumentando con ello su importancia. L a s estaciones radiotelegráficas ubicadas en Mexicali y La Paz cooperan a la transmisión aérea. La comunicación por mar entre los  pu ert os, es poco fr ec ue nt e y la ta rif a d e

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carga es sumamente alta. El servicio está millares de turistas de Los Angeles, San casi sin excepción en manos de la Compa- Diego y San Francisco, Cal.: la Escuela d e ñía Naviera del Pacífico que mantiene una la Colonia Progreso, donde tiene su asienlínea de vapores entre San Diego, Califor- to la Sociedad Cooperativa de ese nombre nia y Mazatlán: el servicio de esta línea lo y a la cual se debe la construcción de granhacen aisladamente vapores que tocan los des obras, el embellecimiento de la bahía  pue rto s pe ni ns ul ar es ca da 21 días: otros de Ensenada y el florecimiento agrícola, sólamente cuando se  pag a la ta rif a d e 10 industrial y comercial que todos admiran y toneladas y para tales embarcaderos co - aplauden puesto que a todos beneficia: la  br an un fl et e mu y ele va do . E n ge ne ral , es  bi bli ote ca pú bli ca y Pa lac io Mu ni ci pa l d e el tráfico de  bu qu es na cio na les con los Mexicali, y de modo particular, la amplia  pu ert os de Ba ja Ca lif orn ia, tod aví a muy Avenida Madero, luciendo su moderno  pequ eño, h as ta los úl tim os añ os pa rec e que alumbrado y su reciente pavimentación, es cuando se ha emprendido una campaña que la hacen digna de figurar entre las formal a fin de fomentar una comunica-  pr inc ipa les ciu da de s. Imposibilitados para ocupar mayor es ción frecuente entre los puertos y embar caderos por medio de  bu qu es pe qu eñ os y  pa cio en la des cri pc ión de la pe nín su la, no s más baratos, servicio que al mismo tiempo limitamos a decir que en ésta se ha ope pu Correo. ed e se r uti lil za do por el Ex pre ss y el rado una verdadera transformación, convirtiendo en bellas y modernas ciudades parajes solitarios : como Agua Caliente, lugar CQNCLUSIQN de intenso turismo, donde se ha construído un hotel que s e considera como el primero Teniendo en cuenta todo lo expuesto en la América Latina. en las páginas anteriores, llegamos al reTijuana y Mexicali rivalizan en confort sultado que el territorio de la Baja Cali- y hermosura con las ciudades de la fronfornia ha alcanzado notable progreso en tera estadounidense y los turistas que  por todos los órdenes de la vida social, comer-  pr im er a ve z vis ita n nu es tr o ter rit or io, ex cial, industrial, agrícola y cultural, etc.,  pe ri me nt an un a ag ra da bl e so rp res a, ya qu e etc., tanto que actualmente en el Distrito leyenda negra de México se desvanece Sur, son de notarse el impulso que han re - la como por encanto, y o sus ojos brilla una cibido la instrucción pública y las mejoras civilización comparable a la de ellos, de materiales de que son testimonio la Es- la que tan ufanos s e muestran. cuela Industrial y los trabajos del Represo Las obras materiales en el norte peen construcción en “El Salto” y los canales en Todos Santos, Comondú, La Purísi - ninsular se han sucedido, sin interrupción : los servicios públicos han sido mejorados ma, Mulegé, San Isidro y San Ignacio; la carretera de Canipolé y otros ramales: las cada vez más, hasta colocarse a envidiable grandes obras de higienización en Santa altura: la perforación de pozos artesianos, Rosalía, el embellecimiento de sus  pu eb los en cuya obra se ha utilizado la más moderentre los que se destacan Sa n Bartolo, San na maquinaria, ha conseguido hacer posible Antonio y especialmente La Paz por su la irrigación de las tierras en las que na hermosa avenida “Alvaro Obregón” y el cen hoy gallardos cañaverales, algodón, trigo, y otros muchos productos: la pavi ja rd ín “Mij ares”. En el distrito Norte, merecen mencio- mentación y el embellecimiento se ha exnarse el Banco Agrícola Peninsular, que tendido al campo, al taller, a la fábrica, tiene las más halagadoras perspectivas : el fomentando las cooperativas y estimulan Museo regional de Ensenada, el nuevo do poderosamente a todos los habitantes Hospital civil, que cuenta con los más mo- de Baja California, quienes patrióticamendernos adelantos de la ciencia; el Teatro te se preocupan por elevar el nivel intelecMunicipal de Mexicali: la Escuela Supe- tual y físico del pueblo contribuyendo con rior “Miguel F. Martínez”, d e Zaragoza, largueza a la fundación de escuelas moTijuana, que importó más de cien mil pe- delos, bibliotecas y campos deportivos. Tal es, a grandes rasgos, la Baja Calisos: el canódromo o galgódromo de Agua Caliente, centro deportivo \al que acuden fornia.

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E l estudio eccnómico social, comprende el estudio de la situación económico-social actual, potencialidad productora del proyecto, mercados cuyo desarrollo será posi -

Funciones de la Oficina de Estudios Económicos y Agronómicos

I' l

A Comisión Nacional de Irrigación, reconociendo la importancia de la selección rigurosa de los suelos, como preliminar del desarrollo de la irrigación, organizó una oficina de estudios agronómicos, encomendándole las labores que a continuación describimos.

 ble bu sc ar en el fu tu ro , in du st ria s agrícolas de porvenir, etc. Todos los trabajos agrológicos de campo son ayudados por el trabajo del laboratorio con que cuenta la oficina y que está perfectamente equipado para la resolución de diversos problemas agrícolas que continuamente se presentan al hacer el estudio de los suelos para la formación de ca rtas agrológicas. En dicho laboratorio se hacen los análisis de tierras, aguas, etc.

 EX PE RI ME NT AC IO N AG RI CO LA La Oficina de Estudios Agronómicos y Económicos, tiene a su cargo, diversos estudios de experimentación agrícola en granjas establecidas por la propia Comisión en algunos de los sistemas de riego. En estas granjas s e estudia el mejoramiento de los sistemas de cultivo de la región, la implantación de nuevos cultivos o variedades más  pr odu cti va s, de te rm in ac ió n d e coe fic ien tes de riego, experimentación con abonos y me jor ant es , et c. Po r últ imo , se  pie nsa dar a es ta s gr an ja s el ca rá ct er de "pos tas zo oté cnicas , adquiriendo ejemplares que sirvan de sementales para mejorar los ganados de los agricultores de la región. ,1

 ESTU DIO S PR EL IM IN AR ES El estudio agrícola económico preliminar de un proyecto, comprende : I-La clasificación preliminar de los terrenos que se pretende regar, desde el pun to de vista agrícola, formándose un plano de clasificación preliminar. 2"-E1 estudio agrícola preliminar de la región que comprende el estudio de cultivos actuales, métodos de cultivo, costos de los cultivos, maquinaria e implementos usados, etc. 3-El estudio económico social que comprende el examen de las condiciones actuales de la región, condiciones de vida, comunicaciones, carácter de la población, im  pu est os , me rc ad os ac tu al es y me rc ad os pos ibl es, etc .

 Notas Breves

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O N toda actividad se ha venido ha ciendo el desmonte de una zona que

 EST UDI OS DE TAL LAD OS

Si el reconocimiento preliminar demuestra que los terrenos irrigables son buenos y que el agua puede llevarse a dichas tierras, sin un costo que la ponga fuera de los límites razonables desde el  pun to de vist a ecó nom ico (es to últ imo es es tu di ad o por el Departamento Técnico) se  pro ce de al es tudi o agr on ómi co de tal lad o. Esta labor comprende el estudio de los suelos desde los puntos de vista edafológicos y agrícola, estudiándose sus composiciones físicas y químicas, su topogradía, su dre naje, si contiene o no sales dañinos, y su probable adaptabilidad a diversas plantas. Se forma así un plano de suelos. Cuando se ha terminado este estudio se procede a la ejecución de otro " pla no detall ado de cla sif ica ció n d e los suelos " en el cual éstos son divididos en cuatro o cinc: grupos de valor agrícola relativo. El estudio agrícola compre nde esencialmente los mismos puntos que el estudio agrícola preliminar, pero se hacci c o n todo detenimiento y cuidado, especialmente en lo relativo a cultivos que puec". 1 ser desarrollados en los terrenos que se pretende regar. 66

extensión de sesenta y cinco mil hectáreas será regada por las aguas que capta la presa de Don Martín, obras ya terminadas, así como el canal principal y sus laterales, el drenaje y los caminos, faltando tan solo algunos detalles del ornato de la magna obra hidráulica, La rapidez con que se han venido desarrollando los trabajos de preparación de las tierras irrigables,  pe rmi te as eg ur ar qu e pa ra fi ne s del  presente año, esas sesenta y cinco mil hec táreas estarán perfectamente preparadas  para la col oni zac ión qu e se hará de acuerdo con las recientes disposiciones dictadas  por el C. Presidente de la República. con

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.. .

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tados de Coahuila y  Nue vo Leó n), imp lica una intensa obra civilizadora en pro de los campesinos, pues tanto éstos como las  pe rs on as qu e ad qu ie ra n pa rce las pa ra dedicarse al cultivo de ellas, vivirán en casas dotadas de todas las comodidades compatibles con la vida del campo, perf ectamente higienizadas y mo dernizadas, acondicionándolas de tal manera que nuestros campesinos se rediman de las costumbres primitivas que privan todavía en tre los mismos. Además y  por lo qu e s e refiere a sistemas de trabajo, adquirirán un magnífico aprendizaje, pues en el cul tivo de las tierras se emplearán únicamen te instrumentos mcdernos.

Para evitar que se repita el desastre La colonización qu e será llevada a cabo ocasionado en la Vega de Meztitlán, Hgo., en los terrenos irrigables del Sistema Na -  po r la s in un da ci on es ha bi da s el añ o re tr ocional de Riego núm. 4 (Río Salado, Es-  pró xim o, se ha procedido con toda activi-

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dad a la ejecución del tajo que habrá de facilitar la salida de las aguas en lo sucesivo. Con tal motivo, los agricultores de la región han cobrado confianza y están sem  br an do tan to ce re al es com o árb ol es fru tales, También se dedicarán a la siembra de algodón, pues en los experimentos llevados a cabo durante el mismo año, se obtuvo un completo éxito, debido a la extraordinaria fertilidad de los terrenos que forman dicha Vega esperábase una abundante cosecha : pe ro la s in un da ci on es arr asaron los plantíos. Con la halagadora es pe ran za de qu e es as in un da ci on es no volverán con la construcción de que se hace mérito, las siembras en este año serán en mayor escala que antes, y se espera fundadamente que darán excelentes resultados.

o La Cámara d e Comercio d e Monterrey,  N. L., designó una comisión de sus miem bro s, qu e s e en ca rg ar á de estudiar la manera más práctica de ayudar a impulsar la colonización en los terrenos irrigados  por la pre sa de l Si st em a d e Rie go nú m. 4 (Don Martín), a cuyo fin realizaron una gira a fines del mes próximo pasado.

o

Los miembros del Congreso del Estado de Chihuahua, al tener conocimiento de la

última disposición dictada por el director de los trabajos de canalización del río Con chos, de que en lo sucesivo solamente pa garía a s u s obreros un peso diario, acu dieron a la Comisión Nacional de Irriga ción para que ésta interviniera a fin de que no fuera reducido el salario de un peso cincuenta centavos diarios que aquellos venían percibiendo. La Comisión, atenta, como siempre, a procurar aliviar la aflictiva situación de los elementos de trabajo de la región citada, por telégrafo se dirigió al mencionado director, suplicándole mantuviera el salario mínimo de un peso cincuenta centavos y que admitiera traba ja do re s e n el ma yo r nú me ro co mp ati ble con las necesidades del presupuesto de dichas obras.

o La Liga Socialista del Municipio de San Pedro, Coah., ha hecho del conoci miento de todos sus agremiados campesinos, las condiciones que han sido impues tas a los que deseen adquirir tierras para colonizar las de la región de Don Martín. Son numerosos los agricultores en peque ño que se han interesado en esa colonización y algunos de ellos, por sí o por medio de representantes han hecho viaje especial  para ex am in ar lo s te rre no s qu e s e of rec en , regresando satisfechos de su calidad y  pe rsp ec tiv as , por lo cual se cree que serán muchos los que vayan a dicha región.

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Ley de Compraventa Agrícola y Actividades de la Junta Federal Agrícola U

 Po r  Art uro  H .  Hy de , Secretario de Agricultura de los Estados Unidos.

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OCO después de la Guerra Mundial, la agricultura en los Estados Unidos se en contró en un estado de seria depresión. Esto se debió en parte a los rea  ju st es en la vid a mo de rna y Ia industria, que se venían desarro llando por muchos años. La inflación de  prec ios oc ur rid a du ra nt e e in me di at am en te después d e la guerra y la subsiguiente caída precipitosa de los  pre cio s, tra  jer on co ns igo gr an de s pé rd id as e in ten sificaron la debilidad de la situación de la agricultura. Los agricultores tenían que  paga r los  pr és ta mo s co ntr aíd os cu and o los valores estaban altos, con el producto d e los artículos vendidos a precios bajísimos. La industria pudo ajustar su  pro duc ción total a variadas circunstancias y a cambios en la demanda, debido principal mente a una organización superior, y el trabajo, por su  pa rt e, pud o ma nt en er sal a rios altos. En cambio, los  pre cio s d e los artículos que el agricultor necesitaba com  pra r no ba ja ba n al ni ve l p rop orc ion al d e los  prec ios qu e rec ibí a por sus  pro duc tos . La agricultura, careciendo de la acción unida, tanto en la producción como en la compra y venta de los  pro duc tos , no pud o, por lo tanto, recibir su  pa rt e en la pro spe rid ad nacional. Estos fueron algunos de los factores que contribuyeron a complicar el problema del agricultor. Gran parte de la dificultad estribaba en una superexpansión agrícola

y en la falta de esfuerzo unido entre los agricultores. An ualmente se producían muchas de las principales cosechas en cantidades excesivas, tan grandes algunas veces que hacían descender los precios a un nivel más bajo del que hubiera permitido a los  pro du cto res ob te ne r un a re mu ne ra ción justa. Por más de un siglo nuestra política agraria fué d e expansión territorial. Vastas extensiones de tierras públicas fueron concedidas para estimular los medios de transporte y otras mejoras internas, que unidas a las concesiones de tierra para cultivo, aumentaron considerablemente la  pro duc ció n agrí cola . El incremento en el valor de las tierras que habían sido transferid as a, propiedades privadas bajo nu estra libre y cómoda política de concesión, fué una de las más importantes, si no la  pr inc ipa l re co mp en sa al esfuer zo he ch o  po r los agricultores. Las contribuciones y otros impuestos fijos eran bajos comparados con los actuales y la desventaja de los  pr eci os ba jo s fu é ec lip sad a e n par te co n la  pr om es a d e au me nt o en el valor d e la s tierras. Est a promesa, que con frecuencia no tardaba en realizarse, fué una ayuda poderosa para la expansión agrícola. Otras fuerzas han estimulado la producción. La guerra puso bajo cultivo muchos millones de acres que se necesitaban  pa ra su mi ni st ra r vív ere s de emergencia. Los tipos de intereses, las contribuciones y otros gastos fijos han conseguido mantener muchas d e estas tierras e n producción. Los  pro gre so s cie ntí fico s, inc lus ive el me  jo ra mi en to d e va rie da de s de cultivos y ra -

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zas de ganado, también han contribuído a aumentar la producción. Este progreso no debe considerarse como perjudicial a la  prosper idad de los agricultores, al contra rio, debe mirarse como benéfico, siempre que el adelanto científico se emplee para reduci r el costo d e producción v no meramente para estimular el abastecimiento total. El objetivo principal de mejorar el cultivo, que es el de obtener mayores beneficios. puede alcanzarse tanto reduciendo el costo de producción como elevando los  preci os. Para reducir el costo se necesita un mayor rendimiento por acre, por medio del progreso científico, y una mayor producción por día de trabajo en el campo. Pero esto debe venir acompañado de una reducción en el área de cultivo, obtenida  por medi o d e una ret ira da ord ena da del cultivo de aquel las tierras que no producen beneficios. Par a ello se requiere una vigorosa política que incluya la repoblación forestal de gran parte de. .estas tierras que son muy pobres para cultivarse. Aunque bien es cierto que la organización moderna de la industria, el comercio v el trabaio en los Estados Unidos ha intensificado el  prob lem a de l culti vo de la tierra por algún tiempo, también ha mos trado el camino para alcanzar una mejora  per man ent e en la agr icu lt ura por medi o de la organización en grande escala que se obtiene con el esfuerzo unido a los agri cultores. Por espacio de ocho años los agriculto res de los Estados Unidos trataron de conseguir legislación que los ayudara a obtener “igualdad económica para la agricultura”. Ejercieron tal presión en sus demandas que la cuestión de la “ayuda a la agricultura” se convirtió en un punto de primordial imuortancia uara las elecciones  pres iden cia les de noviembre de 1928. Las  plat aform as de amb os part idos cont enía n cláusulas prometiendo acción legislativa en el problema agrícola. El Presidente Hoover, poco después de tomar posesión el 4 de marzo de 1929, convocó al Congreso a sesiones extraordinarias el 15 de abril. con el urouósito de ex*  pedir legi slaci ón par a ayu dar a la agric ultura. De sus deliberaciones se obtuvo la expedición de la ley denominada  Agr ic ul tural Mar ket in g  Ac t (Ley de Compraventa

Agrícola) que fué promulgada el 15 de  junio de 1929. Esta ley estipula el establecimiento de una Junta Federal Agrícola, con amplios poderes administrativos, y autoriza la creación de un fondo circulante de 500.000,000 de dólares para prestar ayuda financiera a las asociaciones couperativas agrícolas. A  pes ar de qu e la ju nt a tie ne facultades muy amplias, no tiene poderes  para obl iga r a un agri cult or o a cualquier organismo a hacer lo que no deseen. El  propósi to de la ley , es ayu dar , no apre miar . Los poderes de la junta sobre la organización, administración, y .plan de acción de las asociaciones cooperati vas se limita n en gran parte a estipular las condiciones que deben llenarse antes de que puedan obtener préstamos del fondo circulante. Los miembros que integran la Junta Federal Agrícola son nombrados por el Presidente y confirmados por el Senado. La junta actual se compone de los siguientes miembros : Alexander Legge, president e ; J. C. Stone, vicepresidente: C. C.Teague, Carl Williams, C.B. Denman, Charles S. Wilson, William F. Schilling, Samuel R. McKelvie y Arthur M. Hyde, Secretario d e Agricultura, miembro ex -oficio. En la  pri mer a reun ión de la ju nta , celebrada el 15 de julio de 1929, el Presiden te Hoover hizo las siguientes observaciones : “N O tengo manifestación prolija que hacer a la Junta Federal Agrícola, sobre sus deberes. La amplia autoridad y los es  plén dido s rec urso s puest os a vues tra dis  posición son bie n conocidos. Estoy profundamente impresionado con 12s responsabilidades que tenéis ante vos otros. Vuestro propósito fundamental debe ser determinar la causa y buscar la solución de una multitud de problemas agrícolas, entre ellos ajustar mejor la producción a las necesidades : crear instituciones comerciales permanentes para la compra, venta y dist ribución de productos agrícolas, l a s c u a l es , p os e íd a s y administradas por los agricultores, sean tan sabiamente for madas, vigorosamente fundadas y bien go  ber nada s, que real iza ndo econ omía s y pro  porci onand o est abi li dad s e des arr oll en más fuertes en los años venideros. Por medio de estos esfuerzos se podrá proporcionar al agricultor una oportunidad igual a la de

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Elevador de granos propiedad de una asociación cooperativa en el Estado de Kansas, E. U. A.

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las otras ind ustrias en nuestr o sistema económico. S é que no hay un solo agricultor consciente que no se dé cuenta que todo esto no puede realizarse con una varita mágica o de un día  para otr o. La s ver dad era s instituciones no se crean de esta manera. Si hemos de triunfar será vigorizando las bases Y las iniciativas que Ya tenemos &n organismos agrícolas Y construyendo firmemente sobre ellas, con la idea fija en la mente de que construimos no sólo para el  pres ente , si no para el próximo año y para la próxima década. Al seleccionar esta junta, he solicitado insinuaciones de un gran número de cooperativas agrícolas y otros organismos y vuestros nombres fueron los más encomen dados universal mente: vosotros sóis, en un sentido, los representantes de la agricultura organizada. Felicito a cada uno de vosotros  po r formar parte de u n g ru po t an

distinguido, y con vuestro nombramiento os confiero responsabilidad, autoridad y recursos que nunca han sido conferidos en el pasado por nuestro Gobierno para ayudar a industria alguna”. Con es ta s mani fest aci ones del Je fe Ej ecutivo de la  Na ci ón la ju nt a F e d e rA al g de la ley cola comenzó la  par a dar cumplimiento a la  polít ica general señalada  por el Congreso, en la sección I  pal abr as: de la ley, con las “Promover el comercio efectivo de los  produc tos ent re los Est ados y en el exterior, de manera de colocar la industria de la agricultura sobre bases de igualdad económica entre otras industrias”. Específicamente, la expresada política es la siguiente: “Proteger , gobernar y estabilizar las corrientes del comercio en lo s Estados y en el exterior en la compra, venta y distri-

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 buc ión de pr od uc to s ag ríc ola s y sus  productos derivados : (1) Reduciendo al mínimo la especulación. (2) Evitando el uso de métodos ineficaces y desperdiciadores de distribución. (3) Estimulando la organización de  pro du cto re s en aso cia cio ne s o corp orac io nes efectivas bajo su  pro pio dom ini o, par a así conseguir mayor unidad de esfuerzo en la compra y venta; y promoviendo el esta ble cim ien to y so st en im ie nt o de un sistema de mercado agrícola formad o por asociaciones cooperativas y otras agencias poseídas y controladas por los productores. (4) Ayudando a evitar y controlar los sobrantes de cualquier producto agrícola,  por me di o de la producción y distribución ordenadas, de manera de sostener merca dos domésticos ventajosos : evitando que estos sobrantes causen indebidas y excesivas fluctuaciones o depresiones en los precios de ese producto " . Despojándonos de la fraseología legal, los propósitos de la ley son: (1) ayudar a los productores a resolver el problema del sobrante, agrupándose para producir cosechas mejor equilibradas, que se ajusten en clase y volumen a la demanda efectiva: (2)  pro vee r me di os d e ma ne ja r los sob ran tes de la producción cuando éstos ocurran de manera de estabilizar los precios d e los  pro duc tos ag ríc ol as y en es ta fo rm a procu rar para los productores, por medio de una compra y venta ordenadas, la utilidad má xima por su cosecha en general; y (3)  permitir a los productores, por medio de una acción cooperativa, obtener una ganancia mayor reduciendo el costo de poner los  pro duc tos en el mercado evitando la especulación y desperdicios en el manejo de ellos. Estos objetivos no  pu ed en alc an zar se en un día. Pueden realizarse solamente  por me di o de lo s es fu er zo s pe rs is te nt es de los agricultores progresistas y sus líderes, cooperando con la junta en un programa de acción, que, aunque tendrá que estar  ba sa do ne ce sa ri am en te en la ley , de be se r lo suficientemente elástico para poder afrontar nuevas condiciones y permitir ha cer . uso . de las ventajas que da la experiencia. La Junta Federal Agrícola al comenzar

a ejecutar la vasta y difícil tarea que le ha sido asignada por el Congreso, está centralizando sus esfuerzos para mejorar los sis temas actuales de mercados de los agri cultores: (1) ayudando a los productores a organizarse en asociaciones cooperativas, (2) estimulando a estas asociaciones a unirse en distritos o unidades regionales de venta y (3) ayudando a estos organismos a desarrollar programas comerciales efectivos y a obtener ayuda financiera ven tajosa por medio de préstamos del fondo circulante. El Congreso, comprendiendo que sería impracticable para la junta negociar directa e individualmente con los productores, estipuló qu e ésta trata ría con ellos por conducto de organismos poseídos y controla dos por ellos. Aún más, el Congreso, com pr en di en do qu e de tiempo en tiempo serían necesarias algunas modificaciones a los  pro ce dim ien tos , oto rgó a la ju nt a amp lios  po de res pa ra tr at ar pr ob lem as exp res os y le requirió que informase anualmente al Congreso sobre la administración de la ley, y que hiciese recomendaciones para cualquier legislación que fuese necesaria para el mejor de sarrollo de la política adoptada. Las cooperativas de venta y la Junta Federal Agrícola se dieron cuenta desde el principio de qu e un solo plan de compra venta no sería suficiente para el manejo de toda clase de  pro duc tos . Es ne ces ari o desarrollar un  pla n se pa ra do par a ca da producto o  pa ra ca da gru po d e art ícu los qu e estén íntimamente relacionados. El Con g re so a u t o ri z ó a l a ju n t a a d e si g na r d e tiempo en tiempo como producto agrícola  para lo s fi ne s d e es ta le y: (1) cualquier clase o tipo de algún producto agrícola, que  por s er de un uso singular o requerir métodos de venta y distribución diferentes a los otros tipos y clases del mismo produc to requiera, a juicio de la junta, que se le trate como un producto distinto bajo esta ley; o (2) cada dos o más productos agrícolas que están tan íntimamente relacionados en uso o en procedimientos de venta y distribución que requieran, a juicio de la junta, que se les trate como un solo producto bajo esta ley " . De acuerdo con esta cláusula, la junta, hasta marzo de 1930, ha designado como

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Oficina de la Texas Farm Bureau Cotton Association en Dallas, Texas, E. U. A.  pro duc tos agr íco las los siguientes : algodón,  pro duc tos d e le ch er ía s, in clu siv e la lec he  pur a, cr em a, qu es o, le ch e co nd en sad a, mantequilla, helado, leche evaporada, leche pura en polvo y leche desnatada en  polvo, tr ig o, arro z, ga nad o, la na y mo ha ir (pelo de cabra de Angora), tabaco, aves y huevos ; semillas, inclusive alfalfa, trébol y otras; papas y granos grandes. Otros  pro duc tos o grupos de productos, sin duda, se irán añadiendo con el tiempo. Después que la junta hubo designado los productos ya enumerados, se dieron los  pas os ne ce sa ri os pa ra de sa rr ol la r sep ara da mente los planes de compraventa. E n tal forma se ha elaborado un  pla n pa ra gra nos, otro para lana y mohair, un tercero  para alg od ón , y un cu ar to pa ra los frijoles. Se está elaborando un quinto para el $anado. La junta opina que los agricultores pueden formar un sistema cooperativo de com pr ave nta , co n la ay ud a de l Go bi er no en el  perí odo de formación, que reduzca el costo de poner los artículos en el mercado y rinda al agricultor mayores entradas. Más aún, la junta cree que no es sólo  pos ible , si no ta mb ié n es en ci al par a pod er

alcanzar el éxito completo del plan que concretamente expresa esta ley, ajustar la  pro duc ció n a la de ma nd a efe ctiv a. E n ot ra s  pa la br as , e l pro bl ema de l exce so d eb e afrontarse no sólo comerciando con los so  br an te s cu an do oc ur re n, sin o ta mb ié n y  pr in ci pa lm en te ev ita nd o qu e se pr od uz can excesos gravosos. Un mercado ordena do no  pu ede ob te ne r re su lt ad os com ple tos si no está respaldado por una producción ordenada. La junta no tiene poderes para regular la extensión del terreno, la siembra, o el volumen de  pro duc ció n de l agr icu lto r, ni tampoco los tiene el gobierno mismo. El  po de r pa ra re gu la r la prod ucc ión d e ma ne ra de evitar excesos que rompan el nivel de los precios está solamente en manos del agricultor. Pero cada agricultor individualmente  pu ed e ha cer lo. Aun con información adecuada de los cambios probables en la ofert a y la demanda de algunos productos, tal como la que la Secretaría de Agricultura está procurando suministrar, el agricultor solo puede regular la producción de su  pro  pi a fin ca. Aun to do s los agricultores de un Estado no podrían hacerlo. Sus esfuer-

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zos, si no están relacionados con los de los agricultores de toda la nación, pueden resultar solamente en detrimento propio. De esto se desprende la importancia que tiene una organización lo bastante grande  par a pe rmi tir po ne r en vig or los re gla me ntos a un grado adecuado y esparcir, igualmente, las limitaciones y las ventajas de un programa para ajustar la producción. La acción unida a base de información segura es necesaria. Debía s er posible para los organismos generales de productos agrícolas, por medio de la acción de sus representantes,  p 1 a n e a r eficazmente un ajuste colectivo del volumen de la producción dentro de los límites de las deman das del mercado. La regulación del volumen no es, sin embargo, el único propósito de tal programa. Ea regulación de acuerdo con la clase y calidad de los pro ductos es también importante. Esto puede ser posible por medio de la acción uni da, no solo en el de 110 de un amplio  pr og ram a de pr od uc ci si no ta mb ié n por merced al cual sea posible recompensar individualmente al productor de acuerdo con la clase y calidad de su  pro duc to. Casi desde el comienzo de su existencia la junta ha estado trabajando con varias cooperativas agrícolas para establecer agencias centrales o nacíonales : " The Farmers' National Grain Corporation " , "The  Na ti on al Wo ol Ma rg et in g Cor por atio n " . "The American Cotton Cooperative Association",. y ::The National B ean M arketin g Association ,  pa ra gr an os , la na , alg od ón y frijoles, respectivamen te. S e han dado los  pas os de fin iti vo s pa ra or ga ni za r un a age ncia nacional de ventas similar para la ga nadería. Los productores d e arroz, tabaco, aves y huevos, semillas, manzanas, papas y  pro duc tos d e le ch er ía , ta mb ié n s e es tá n animando para que centralicen sus actividades en el mercado. Es la política de la junta requerir que todas las cooperativas locales, del Estado o regionales se afilien al organismo nacional como una condición para poder obtener  pr és ta mo s y otros beneficios de la ley. Por esto es necesario que los productores individuales se unan a una asociación co operativa para poder aprovecharse de las ventajas de esta ley, De manera de poder vender sus  pr od uc to s por me di o d e

un2 agencia central o nacional de ventas,  pos eíd a y go be rn ad a por los agricultores y reconocida por la Junta Feder al Agrícola, el agricultor tiene que unirse a una asociación cooperativa de venta y distribución  pro du cto s, loc al o regional, organizada acuerdo con las condiciones de la Ley Cap pe r -Volstead, aprobada el 18 de febrero de 1922. El agricultor tendrá que unirse con otros para organizar tal asociación, si no ha sido organizada ninguna de la localidad. En su trabajo de organización, los agricultores tienen en muchos Estados la ayuda de los colegios de agricultura, de los servicios de extensión de los departamentos de agricultura, de los departamentos de agricultura vocacionales y de otras agencias. Las principales d isposiciones de la mencionada ley, sobre las bases en las cuales los agricultores pueden formar una asociación con derecho a disfrutar en los beneficios de ella son: I.-Que los miembros o accionistas de ben s er pr od uc to re s agr íco las . 2-Que la asociación debe funcionar  para el mutuo beneficio de sus miembros. 3.-Que la asociación debe dedicarse al comercio interestadual. 4.-Que la asociación no hará más negocio con los que no son miembros que con los que lo son, y 5.-Que la asociación se ajustará a u n a d e las síguientes cláusulas: seguír el  prin cipi o es ta bl ec id o de u n vot o po r cad a miembro o limitar los dividendos sobre el capital social al 8  por cie nto . Reconociendo el hecho de que algunos  pro du cto s agr íco las no ha n sid o org ani za dos cooperativamente, la Ley de Compraventa Agrícola contiene la cláusula siguiente, que está designada para extender los  be ne fic ios d e el la a los cultivadores de  pro du cto s qu e es tá n en ví a de org ani zación, pero que todavía no han podido lle nar los requisitos que exige la Ley CapperVolstead : " Siempre que a juicio de la junta los  pr od uc to res de al gú n pr od uc to agr íco la no estén organizados en asociaciones cooperativas, en tal extensión que puedan hacer a tales asociaciones representantes del pro ducto, entonces los  pri vil egi os, as ist en cia y autoridad disponibles bajo esta ley o aso-

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Planta principal de las cremerías Land O'Lakes Inc., Minneapolis, Minnesota, E. U. A.

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ciaciones cooperativas, se harán extensivas a otras asociaciones y corporaciones, poseídas y gobernadas por los productores, organizadas y realmente dedicadas a la compra y venta del  pro du cto agrí col a ", (Sección 15) ( a ) . La junta estimó necesario hacer constar clara y categóricamente que ella no compra ni vende productos agrícolas de ninguna clase. Su labor es ayudar a los agricultores a establecer sus  prop ios org a nismos de compraventa, fortaleciendo las cooperativas de venta ya existentes y ayudando a formar otra s nuevas. La nueva ley estipula que la junta invitará a las cooperativas que comercien con cualquier producto agrícola, a que d e signen un comité consultivo de ese producto agrícola que represente a los agri cultores ante la junta en asuntos relacionados con el mismo. Se han nombrado ya cuatro comités consultivos que representan los siguientes productos : trigo, algodón,  pro du cto s d e le ch er ía , la na y mo ha ir. La ley también requiere que cada comité con sultivo conste de siete miembros, dos d e los cuales serán especialistas en el manejo del producto. Los miembros del comité no recibirán sueldo alguno pero se les  pa-

gará no más de 20 dólares diarios y los gastos cuando asistan a las reuniones del comité, convocadas por la junta, y cuando estén haciendo otro trabajo del comité, autorizado por la junta. La junta tiene poderes para prestar dinero del Gobierno a las asociaciones co operativas tomándolo de los 500.000,000 de dólares del fondo circulante autorizado  po r la ley. Al  prin cip io so la me nt e se des tinaron 150.000,OOO de dólares de e s t a cantidad, pero se van solicitando del Congreso cantidades adicionales a medida que se van necesitando, y recientemente se destinó la suma adicional de lOO.OOO,OOO de dólares, aumentando la asignación total a 250.000,OOO de dólares. Según lo es  pe cif ica la le y, se pu ed en ha ce r pr és ta mo s  pa ra los si gu ie nt es pro pó sito s a la s as ociaciones reconocidas : 1. Compra, venta y distribución eficaces de productos agrícolas y sus derivados alimenticios. 2. Construcción o adquisición p o r compra o arrendamiento de toda propiedad que facilite la preparación, manipulación, almacenaje y venta de productos agrícolas y sus derivados alimenticios.

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de asociaciones de liqui- cer préstamos a una asociación cooperativa 3.-Formación  para la compra de materiales agrícolas. dación. La junta presta dinero a los producto4. Aumento en el número de miem bros de la asociación cooperativa que so - res por conducto de las asociaciones coope rativas y no a ellos individualmente. licite el  pré sta mo, ens eña ndo co n es te fin La política definida de la junta es haa los productores del aitículo en el que comercia la asociación las ventajas que cer préstamos a organizaciones centrales ofrece la venta cooperativa de dicho ar - de compra y venta de un producto, poseí. dos y administrados por los productores. tículo. 5.-Permitir a la asociación cooperativa en lugar de  pres tar dine ro dir ect ame nte a que solicita el  prés tam o ade la nta r a sus las asociaciones locales. En la ausencia de estas asociaciones centrales o corpora,. miembros una proporción mucho mayor del  precio de ven ta de l artí culo ent reg ado que ciones, la junta ha adelantado dinero di rectamente a cooperativas capacitadas. la que pudieran obtener por medio de otras  No se harán préstamos a ninguna asofacilidades de crédito. A la junta le queda prohibido hacer ciación cooperativa a menos que a juicio de la junta el  prés tam o es té de acue rdo con cualquier préstamo que “tienda a aumenla política de la Ley de compraventa Agrítar indebidamente la producción de cualcola. La cooperat iva de venta que solicito quier artículo agrícola del cual ya se pro el préstamo debe tene r organización, admiduzca, por lo general, una cantidad que exnistración y un plan de acción en sus neceda los requisitos anuales del mercado”. gocios de tal naturaleza que ofrezca basExisten, además, las siguientes restric - tante seguridad. ciones especiales con respecto a los présTodos los préstamos hechos a las cotamos hechos para adquirir edificios que operativas se hacen a un tipo bajo de infaciliten la distribución de los productos : . . en ningún caso el tipo de inte“N O  podrá hac ers e pré sta mo alguno des - terés. rés será mayor del 4  por cien to anu al de tinado a la compra o arrendamiento de tala cantidad que se adeude”. Donde exisles edificios a menos que la junta se cer ten agencias nacionales o centrales, la Junciore de que el precio pagado por ellos ta Federal Agrícola les presta dinero, sees equitativo”. gún se ha dicho, y éstas a su vez pueden También: “No se hará préstamo algu-  prest arl e a las coope rati vas del dist rito o no para la construcción, compra o arren- locales a un tipo d e inter és un poco mayor damiento de dichos edificios o  propieda -  para cub rir los gas tos de la s operaci ones, des a menos que la junta encuentre que y para acumular un fondo de reserva con en ese lugar no existen otras facilidades que hacer frente a  posibl es pérdi das. Las disponibles y convenientes que puedan ganancias que obtengan las agencias cen proporci onar ta le s servi cios a la asocia ción trales también se destinarán a fondos de cooperativa a un precio razonable; y ade - reserva y  per ten ece rán a los miembros en más de la restricción anterior no podrá ha-  proporción y de acuerdo con el capital cerse préstamo alguno para la construc - invertido por cada uno. ción de tales edificios a menos que la ;un También se harán préstamos a corpota se cerciore de que no es  posible obteraciones estabilizadoras “para permitir a ner en venta o arrendamiento, a un precio estas corporaciones hacerse cargo de los equitativo, otros edificios existentes para sobrantes del producto.. . y para que pueesos fines”. dan afrontar los gastos de manejo al ha Una vez que un organismo le adeuda a cer las operaciones pertinentes”. la Junta Federal Agrícola, su administraBajo ciertas condiciones y a solicitud ción está sujeta a la aprobación de la ;undel comité consultivo en un producto, se ta y sus registros abiertos para su ins -  podrá orga niz ar un a soci edad estabi lizad o pección y exa men . En es to se bas a gran ra para cualquier producto agrícola incor part e de la aut ori dad efec tiva de la jun ta.  porada ba jo la le y del Est ado, sie ndo las  No hay autorización ninguna en la Ley asociaciones cooperativas los únicos duede Compraventa Agrícola que permita ha - ños del capital accionista. La ley define

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Asociación cooperativa de empaque de nara njas . La cooperación en el empaque es uno de los aspectos más importantes de las asociaciones cooperativas de venta que se encarga de distribuir frutas y leguinbres. las funciones de la sociedad estabilizadora como sigue: Cualqui era sociedad estabilizadora de un producto agrícola (1)  pue de ser vir de agencia para los accionistas o miembros, en la preparación, manejo, almacenaje y distribución por su cuenta, de cualquiera cantidad del  produc to agríco la o sus derivados alimenticios, y (2) con el propósito de manejar cualquier sobrante del producto en consonancia con la política que de be seg uir se en est os casos y des cri ta en la sección 1,  puede prepa rar, comprar, manejar, almacenar, distribuir y comerciar, excepto a cuenta de los accionistas o miem bros, cua lqu ier a can tid ad de l produc to agrícola o sus derivados alimenticios, aunque tales productos o derivados se hayan o no adquirido de los accionistas o miem br o s Hasta la fecha la Sociedad Estabilizadora de Granos es l a única’ en su clase. Se organizó para aliviar la situación del mercado de trigo.

”.

Para fomentar la estabilización agrícola deseable, la Junta Federal Agrícola divide sus esfuerzos en dos tipos diferentes de operaciones. El  prim ero puede lla marse operaciones normales. Todas las medidas que se tomen para aumentar la eficacia de las asociaciones cooperativas en cualquier producto, o  par a mej ora r su situación económica, para centralizar o relacionar entre sí sus actividades, de manera de hacer sus operaciones más efectivas, es en sí un proceso de estabilización. S e espera que a medida que pase el tiempo esta actividad pueda, en la mayoría de los casos, servir su  propósit o compl eto. El resultado, desde luego, dependerá en teramente del éxito que alcancen las cooperativas para transformarse en organismos grandes y bien dirigidos, que puedan manipular un tanto por ciento bastante elevado del producto para hacer sentir su influencia en el mercado. La segunda forma de estabilización  pue de llamarse operaciones extraordina-

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ambos factores en la libre operación de la rias o de emergencia, por las cualee se en tiende que en caso de existir un gran so - ley de la oferta y la demanda pueden ser  bra nte de un produ cto, la oper aci ón con- aproximados únicamente, es más que nasiste en comprar y sustraer del mercado tural que los precios, que son una expresión de la relación que existe entre ellos, una parte del mismo para aliviar la preestén también sujetos a cambios y variasión y conservarla hasta una fecha futura ciones que no pueden ser  pronost icados con la esperanza de conseguir una oporcon seguridad. tunidad más favorable para disponer de él. La Sociedad Estabilizadora de Granos con Librando a la agricultura de la influen sus oficinas generales en Chicago, Estado cia que ocasionan l os pánicos o alzas anor de Illinois, es un ejemplo del tipo de es- males, y si no se presenta un movimiento tabilización de emergencia. Esta corpora- de especulación indebida, las variaciones ción se organizó como a mediados de fe- de los precios ocurrirían dentro de los 1í bre ro de 1930, y se proveyó de un crédito mites normales de los cambios a que dan inicial de 1O.OO0,OOO de dólares. Está lugar las relaciones de la oferta y la decompuesta casi exclusivamente por coope- manda y que siempre afectan una cosecha rativas de granos aceptadas según la Ley como un todo. Est e es el objetivo racioCapper - Volstead, y el registro está abierto nal de la Junta Federal Agrícola. Sus re para tod as la s coop erat ivas de es ta cate - cursos s e pondrán e n actividad únicamente goría.  por cond uct o de los organ ism os, poseí dos Entre los objetivos de la Junta Federal y controlados por los agricultores, para estabilizar los movimientos de los precios Agrícola no figura la fijación de precios.  No. se intentará establecer ningún plan de dentro del amplio campo de las condiciones valorización. La inundaci ón de los merca- variantes de la oferta y la demanda, para dos extranjeros, con productos agrícolas de evitar tanto los ascensos bruscos como los descensos pronunciados en el gráfico de los Estados Unidos no se proyecta bajo la ley. S e diferencia de otras medida s pro- los precios. teccionistas propuestas en años recientes, El objetivo de la Junta Federal Agríen que no implica ni siquiera la posibili- cola, como ya se indicó anteriormente, es dad de deprimir los precios del mercado desarrollar en grande escala organismos mundial de ningún producto agrícola, o de agrícolas de compra, venta y distribución romper los mercados extranjeros en detri- y servicios en general. Estas entidades mento de los productores agrícolas de otros deberán ser poseídas y controladas por  paíse s, lo cual eve ntu al men te res ult arí a en agricultores. A la junta le corresponde la gran perjuicio para los agricultores mis- tarea de ayudarlos a crear tales institumos de los Estados Unidos. ciones pero no tiene en mientes ejercita: Está ya reconocido el hecho de que el una continua actitud paternal sobre ellos.  precio de un prod uct o se est abl ece por la Tan pronto como se suscriba o se gane el cantidad que hay en existencia y la deman- capital social de estos organismos, los agrida efectiva para el mismo. Pero la can- cultores que proporcionaron este capital tidad disponible de un producto es una ci-  por susc ripc ión o apoyo comercial serán fra que varía. Cambi a de año en año, aún dueños de ellos. Entonces esta s instituciomás, de mes en mes. No es posible me- nes serán tan independientes de la Junta dirla exactamente. Tampoco la demanda Federal o del Gobierno como lo es cualefectiva es siempre una cantidad matemá- quiera otra sociedad particular. El ideal tica. Varía con el nivel de los precios de es crear grandes instituciones independientes que rindan servicios benéficos a la otros productos, con la capacidad adquisiagricultura aun en el caso en que deje de tiva y con otros elementos que únicamente  pued en ser cal cul ados . E n vist a de que existir la Junta Federal Agrícola. -c

Algunos juicios acerca de “Irrigación en México “LA PRENSA” DE SAN ANTONIO, TEX., en carta particular se dirige a nos-’ otros, y juzga IRRIGACION EN MEXICO “de gran mérito por su contenido, que satisface una noble exigencia de nuestro  país, ya qu e por s u esp lén did a pres enta ción, de una nitidez que revela exquisito gusto artístico, es motivo de estímulo para nuestras artes gráficas”.

FIAT, DEL SALVADOR, C.

A,, tamdice que “IRRIGACION EN MEXICO viene con la pujanza propia de nuestra floreciente  patr ia, a su ma rs e a ot ras publi caci ones cuya aspiración máxima es el engrandeci miento de México, en el que están fijas las miradas de toda hispanoamérica, por que México, con su tesonero afán de  progreso, está dando una sabia lección a sus hermanas las Repúblicas del Sur”.  bién

en

ca rt a part icul ar

nos

de

la Comisión Nacional de Irrigación. La revista en cuestión reune un escogido y variado material informativo, una buena  pre sen ta ció n tipogr áfic a y u na secci ón mag nífica de artículos escogidos tratando so   br e la mate ria ”.

EL CORREO DE CHIHUAHUA. DIARIO VESPERTINO. “Hemos recibido el  pri mer núm er o d e l a r evi sta men sua l IRRI GACION EN MEXICO. Forma un cua-

LA  NATIONAL RAILWAYS OF MEXICO, DE LOS ANGELES, CAL.,  por

conducto del señor J. Alatorre, dice lo siguiente : “Antes que todo, séanos permitido felicitar a ustedes sinceramente por la excelencia, tanto en la forma, como en el fondo de su importante publicación IRRI GACION EN MEXICO, la cual patentiza de manera fehaciente los esfuerzos lauda ble s que s e vien en des arr oll and o bar, se gún reza su lema, la grandeza de  Mé xi co ”.

derno de 64  pági nas con magníf ico pape l, abundante material relativo a irrigación, colonización, pesca, secciones extranjera y literaria, planos y hermosos grabados, algunos de ellos en color. Está positivamente interesante”.

UNION Y TRABAJO. SEMANARIO DE ACCION SOCIAL DE COLIMA, COL. “IRRIGACION EN MEXICO

es revista de consulta que deben leer todos los agricultores y propietarios, porque su cuerpo de colaboradores está integrado por un numeroso grupo de profesionistas técni cos, perfectamente capacitados para resolver todos los  probl emas rel aci onado s con la irrigación y la agricultura”. .

.

EL  NOT IC IOS O, DE GUANAJUATO.

“Ha

llegado a nuestra mesa de redacción re vis ta la cua l V A N G U A R D I A , DIARIO DE IN- es de augurar un rotundo éxito toda vez FORMACION DE SAN LUIS POTOSI. que así nos hace esperar la inmejorable “IRRIGACION EN MEXICO es el nom-  pre sen ta ció n y el sel ect o núme ro de sus  br e de una nuev a re vis ta men sua l órga no colaboradores”.

79

el  pri mer núme ro de la ele gant e IRRIGACION EN MEXICO,  para

HERALDO DEL YAQUI, DE CIUDAD OBREGON, SON. “No ha sido sorpresa  para nosotros reci bir el prime r núme ro de IRRIGACION EN MEXICO que dirige el conocido periodista, señor Roberto Qu i rós Martínez, porque nuestro director en su reciente viaje a la Capital, pudo cono cer el amplio programa que desarrollará la importante revista en consonancia con la Comisión Nacional de Irrigación, de la que es órgano oficial.

Felicitamos al nuevo colega, deseándo le franco éxito”.

REDENCION, DE GUADALAJARA, JAL. “Llegó a nuestra mesa de redación IRRIGACION EN MEXICO,  bellís ima revista mensual de verdadera y  positiva divulgación científica. Saludamos cariñosamente al nuevo co lega y le deseamos una vida larga y  prós pe ra en beneficio de la  Nació n Mexicana”.

IRRIGACIQN EN MEXICO

.

80

.

. .

COMISION  NACIONAL DE IR IGACION Presidente de la Comisión:

GRAL.MANUEL PEREZ TREVIÑO.

Comisionado, Vocal Ejecutivo :

ING. IGNACIO LOPEZ BANCALARI. ING. LEOPOLDO VAZQUEZ.

Comisionado, Vocal Secretario :

REVISTA MENSUAL ORGANO OFICIAL DE LA COMI SI ON  NACIONAL DE IRRIGAClON

OFICIN A DE PUBLICIDAD

OFICINAS:

Director y Jefe de Redacción.

ROBERTO QUIROZ MARTINEZ,

E S Q U IN A B A L D E R A S Y A Y U N T A M I E N T O T E L E F O N O E R I C S S O N 2- 41-77

SE REPARTE GRATIS ENTRE TECNICOS, AGRICULTORES Y COLONOS \

COLABORADORES

Ing. Aguilera  jo s é G. Anda Manuel D. Arteaga Luis. Ballesteros Luis P. Bancalari Manuel. Barocio Alberto. ,, Brambila Alejandro. Beltrán y Puga Fernando. Bustainante Octavio. Lic. Cabrera Luis. Castelló Alfonso. ,, Coria Antonio. Corral Joaquín. ,, Cuevas José A. Chávez Eduardo. Lic. Chico Goerne Lui s. Ing. Domínguez Norberto. ,, Dozal Fortunato. ., Gama Va!entín. García Julio. García Lascuráin Angel. Sr. García T. Fernando. Ing. García Manuel ,, Gayo1 Roberto. -, González Pedro A. Lic. González Roa Fernando. Ing. Herrera y Lasso  jo sé . .?

(1

,?

Sr. León Aliredo D. Ing. Medina Salvador. ,, Monjes k. Ricardo. Sr. Monterde y García Icazbalceta Francisco. Ing.  Norieg a José S. ?,

1

REGISTRADO EN LA DlRECClON GENERAL DE CORREOS COMO ARTICULO DE

TOMOI.

AGOSTO

2A.

CLASE, EL 26 DEMAYO DE 1930

1930

SUMARIO

Oropeza Jesús.

Olvera Montiel Genaro. Lic. Ortiz Carlos. Ing, Peimbert Angel. ,, Perogordo Moisés. ,, Pérez Castro Lorenzo. Dr. Pruneda Alfonso. Ing. Quevedo Miguel A. de. ,* Ramírez Ulloa Carlos. (, Ramos Federico. ,- Rodríguez Antonio. *, Roe1 Faustino. (, Sánchez Pedro C. >, Sánchez Mejorada, Javier. ,. Santa Cruz Jr. Armando. Saucedo Vicente. Serrano Gustavo. *. Toscano Ricardo. ,. Valdés Luis 6 . Vil!aseñor Manuel. Dr. Waitz Paul. Geó. Vivar Gonzalo.

Págs.

Tq

19

11

SECCION EDITORIAL La labor del colono en los sistemas de riego. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

5

SECCION DE ESTUDIOS, CONSTRUCCIQNES Y COLONIZACIÓN El Sistema de Riego del Rí o Salado. . . . . . . . . . . . . . . . .Png.  Man uel  Bancalar i. Las obras hidráulicas en los afluentes del Río Consulado y su influencia sobre la hidrología del Valle. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  .. Dr . Pau? Waitz. Estudio sobre el desileme preliminar de la madera. ~. .Gasbar G o n z d e e S . Las fuerzas hidráulicas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Png. Jo sé  Herr era y  La ss o. Las aguas de Axocopan, Atlixco, Pue. (Continúa). . .Prof.  J. Bibiano Carrasco. ~

9

18 24

32 35

SECCION EDUCATIVA Y DE DIVULGACION Los  pr ec ur so re s de la ingeniería en Francia. . . . . . . . . . . . . . . . .$ames K. Finch (Versión del inglés  por  Dolores Garcia de  Bragg). 46

,?

LO§ AUTORES SERAN LO§ UNICOS RESPONSABLES DE §U§ ARTICULO§.

SECCION ECONQMICA, COMERCIAL Y ESTADISTICA Campeche. Sus elementos de riqueza. . . . . . . . . . . . .Roberto uirós  Ma rti nez . 53 Las Cuencas Midrográficas de México. . . . . . . .Lic.  Ra fa eí de Zayas Enriquez. 62

Págs.

SECCION DE CONSULTAS Ley Federal

de

Colonización..

.........................................

 NOTAS BREVES. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

74

76

PARENTESIS LITERARIO Una ascensión al Popocatépetl . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

 Alex ande r

Stelzmann . 78

La Labor del Colono en los Sistemas de Riego

 Nuestra Carátula

L OS

señores Arquitectos Carlos Tarditti y José López Moctezuma, fueron encargados por est a Comisión para formar el proyecto del monumento que erigirá en la

 presa de “Don Martín”, Sistema Nacional d e Riego número 4 (Río Salado, Coahuila y  Nuevo León) par a con memo rar la constru cción de dic ha obra. En la carátula de este número podrán encontrar los lectores una tricromía del proyecto presentado, en la cual se puede apreciar la belleza del conjunto, la pureza de las líneas y la grandiosidad del mismo. La altura de todo el monumento es de 9 mts. y el ancho del arco que forma es de 8.16 mts.. El arco forma una entrada monumental a la parte vertedora de la presa en el lugar en que terminan las terracerías del terra plén princi pal, y como puede verse en el grabado, en la parte alta lleva una franja de  bronce en don de apa rec e una cor rie nte de agua est il iza da sob re la cua l se ost ent a, en el frente del monumento, el escudo de 12”Comisión Nacional de Irrigación mientras que en la cara posterior l levará el escudo d e las arma s nacionales; toda la leyenda se hará en letras de Lronce de grandes dimensiones para que pueda ser leída desde el extremo de la presa.

L  pr og ra ma qu e el Go bi er no Me xi ca no es tá des arr ol lan do co n la ejecución de obras hidráulicas y la administración de sis temas de riego, tiende a resolver un problema económico de indole nacional, que influye directamente en beneficio de I!G’.-.--+laI colectividad, aumenta la riqueza del país y  po r consecuencia mejora la economia general de la Nación. Hay que tener esto muy presente para no involucrar lops conceptos y distinguir la colonización en los sistemas de riego, de la protección al individu o o grupo que necesite tierras.  r r

. l

l

La obra se proyecta e jecutar toda de concreto armado para que su arquitectura esté en consonancia con los métodos empleados en la construcción de la presa, que tam bién es tá hec ha de es te mat eri al. ~

P l

r *

,

-

El aprovechamiento científico de los elementos naturales para aumen tar la producció n agrícola, no se consigue únicamente con la ejecución d e las obras hidráulicas que hacen posible el manejo de las aguas de riego y de desagüe. Una vez terminadas estas obras hay que emprender un tra  ba jo bi en org an iza do de colo niza ción y explotación agrícola, en el que con tribuyen por partes iguales la dirección de los sistemas de riego y la la  bor de los colonos. Si alguno de estos factores no llena debidamente sus funciones el resultado tendrá que ser deficiente. El estado actual de nues tro  paí s con side rado de sd e los  pu nto s $e vista s o c i a l y  pol ítico hac e más difícil la concordancia de los esfuerzos directores y los de los intereses  pri vad os. Af or tu na da me nt e el Go bi er no act ual , aqu ila tan do la influencia de este fenómeno, está dispuesto, como lo  jus tif ica n los acuerdos presiden ciales respectivo s, a dejar temporalmente en segundo término las consideraciones financieras, por lo que respecta a las inversiones hechas en obra s de irrigación, y concede importancia capital a las facilidades que debe dar se a la acción privada para que su colaboración pueda llevar al éxito de seado el desarrollo incipiente de los sistem as de riego. E sta noble inten-

. ción, que forma importantísimo Capítulo del  pr og ram a de reconstrucción nacional, no dejará lugar a duda en cuanto a que la acción relativa a la colonización de tierras regables que desarrolla la Comisión  Na ci on al de Irrigacion, c o m o órgano ejecutivo de ese programa, será siempre dirigida con amplio criterio organizador, poniendo a disposición de los  par ticu lares bien intencion ados, sus elementos técnicos, s u apoyo y su consejo. Es de esperarse,  por otra parte, que todos lo s c o l o n o s conscientesde su papel social, trabajarán siempre teniendo presente que no es sólo su provecho  per so nal el re su lt ad o qu e se trata d e conseguir, s i n o uno más amplio: el  ben efic io de la colectividad.

LOSobjetos principales de la política actual, en materia de irrigación, s o n . el mejoramiento general de algunas regiones, que con el tiempo se traducirá en el de toda la nación ; el aumento de centros de  pro duc ció n : la elevación social y  política de las  pob lac ion es benefi ciadas con ob ra s d e riego: la conversión de regiones desérticas o no aprovechadas e n lugares llen o d~e vida y de acción con comunica ciones fáciles con lo s centros poblados más importantes; la creación de ciudades agrícolas, destruyendo en lo  po sib le las resistencias que existan para llegar hasta los centros principales de consumo y facilitando los transportes.  No se  bu sc a, rep ito , el  provecho individual solamente, por más que éste lo obtendrán aquellos colonos que desarrollen un buen trabajo y hagan debido USO de las facilidades que la Comisión Nacional de Irrigación les ofrece, puesto que prosperarán individualmente en razón directa de los elementos con que cuenten y la actividad y conocimientos que aport en a su trabajo; pero no debe esperarse que un sistema de riego  pu ed a res olv er el pr ob le ma de cientos de c o l o n o que no tengan ningunos recursos, ni conocimientos agrícolas elementales. Este problema queda a cargo de cada interesado. Cada parcela adquirida presenta amplios horizontes a su poseedor  pu es to que e n si contiene los dos elementos primordiales que constituyen la mejor,  por no decir la ú n i c a f ue nt e de  pro du cci ón con que cuenta la humanidad: tierra  férti l c o n agua ,  pe ro hay que convencerse, de una vez por todas, de que la bue na utilización de estos elementos depende del trabajo y dedicación del que lo s explote, el que debe darse cuenta de que esta fuente no e5 inagotable, puesto que no es manantial de riquezas del que  pu ed en es pe ra rs e su s pro du cto s cua l si fueran dones milagrosos. Es  pre ciso aportar a la tierra tres elementos: la semilla, el agua y el trabajo. ien poco por cierto,  pe ro de tal importancia, que en la calidad y combinación de esos tres factores reside el éxito de la empresa. De la manera

de por

adquirir buena semilla y agua no hay para qué hablar, pero nunca es demás insistir en lo que debe ser u n  bue n trabajo. El trabajo será muy productivo cuando sea apropiado activo y opor-

tuno.

Para que el trabajo sea apropiado se requiere que los procedimienque se apliquen estén sancionados por la técnica y la experiencia y ademá s que su desarrollo se verifique de acuerdo con un  pro gra ma de tra. bajo  pe rf ec ta me nt e me di ta do . Loa conocimientos agrícolas del traba jado r influyen mu y directamente en’ este capitulo, siendo necesario que el opera dor conozca la calidad y constitución de las tierras, la forma en que deben ser trabajadas, la clase de explotación que me jor convenga, la manera de atacar o mejor, de  pr ev en ir, las  pla gas qu e dañen a las  pl an tas y demás datos relativos a los centros de c o n s u m o empaque, transportes, etc. Es m u y de desearse que el c o l o n o no limite sus actividades a las la bores pu ra me nt e agr ico las , sino que COI1 amplitud de miras salga de esa esfera, un tanto reducida, para emprender operaciones que combinadas c o n la producción de la tierra vengan a formar nuevos elementos productores; demás explotaciones afines a la agricultura: la las  pequ eñas in du st ri as avicultura, 1a ganadería, la industria textil, la apicultura, la sericultura, etc., etc., son auxiliares poderosos del sostenimiento de los gastos y pro greso de cualquier negociacion agrícola. El trabaajo además de ser organizado se ha dicho que debe ser opor tuno y e s obvio que la semilla no germinará, la  pla nt a no se desarrollará convenientemente, ni la cosesha resultará lo debidamente abundante si las operaciones de siembra, riegos, beneficios, recolección, etc., no se hacen en el tiempo y formo deducidas prácticamente por los experimentos previamente ejecutados en el mismo clima y en la misma tierra. Afortunadamente en los sistemas de riego, la Comisión Nacional de Irrigación establece granjas de experimentación con este objeto, que funcionarán como oficinas consultivas, para auxiliar a los que no teniendo vastos conocimientos agrícolas quieran desarrollar una buena labor. Como es  pre cis o ev it ar qu e se incurra en lue errores que presentan las grandes  pro pie dad es y la explotación inicua de los braceros, la pr op ie da d individual t e n d r á que ser limitada, pero sin que caiga en el extremo c o n trario de que  por Ea  peque ñez d e la  pa rc el a s u s pro du cto s ap en as si  pu e dan cubrir las más imperiosas necesidades del  pr op iet ari o, con lo cual no 5e conseguira que su nivel moral y sus recursos mejoraran, ni se logra ria la evolución acorde del conjunto. Es indudable que, pa ra evi tar lo, catos

s

da aspirante a colono debe estudiar su personalidad y sus posibilidades, con todo detenimiento y  juicio, para calcular el máximo de extensión que  pueda tra baj ar, porqu e si por ambición ilusa p idie ra y obtuviera mayor área de la que puede atender con éxito, fracasará personalmente y no colabo rará con la armonía del sistema. En una palabra, el desarrollo agricola de un sistema de riego no v a a ser únicamente obra del Gobierno, por más que éste sea quien lo dirija y administre, cuando menos en sus  pri me ro s tiempos. Los  buen os result ados que se esperan dependerán casi exclusivamente de la voluntad de los colonos, de su actividad y esfuerzos personales, que unidos formarán un im  pulso efectivo de progr eso y de bienestar general. La labor que se ha echado a cuestas nuestro Gobierno será sin duda fecunda si la secundan el impulso personal y el entusiasmo de cada co lono. Es  precis o, p e s , s acudi r toda apat ía y aportar todos los elementos, conocimientos y esfuerzos que Sean posibles, para llegar al mejor éxito, y no con la idea de que el Gobierno va a ser un protector del colono, sino de que el mismo colono tiene la obligación fundamental de colaborar con el Gobierno, en la seguridad de que no sólo conseguirá s u propia mejoría, sino que habrá de enorgullecerse por haber contribuído a formar una patria mejor.

8

"r'

El Sistema  P o r el I n g. Manuel

 BANCALARI.

LOCALIZACION. Proyecto de irrigación del río Salado está situado en ambas márgenes del citado río, en los lindes de los Estado s d e Coahuila y Nuevo L e ó n comprendiendo terrenos que ser án regados en los dos Estados, en una extensión total de 65,000 hectáreas cuyo centro queda cerca de la estación Rodríguez del ferrocarril de México a Laredo, a una distancia aproximada de 70 kilómetros al suroeste de esta última población.

PLAN GENERAL DEL SISTEMA Consiste e n la formación d e un almacenamiento de las aguas torrenciales del río en un punto denominado Don Martín, situado aproximadamente a una distancia de 100 kilómetros al oeste de Laredo, almacenamiento de capacidad normal de 138,600 hectarea-metros que inunda una superficie de 19,600 hectáreas, producido por una presa que viene a cerrar la boquilla por donde el río pasa a través de una serranía de poca altura llamada Lomeríos de Caracol. Esta presa servirá también para derivar e! agua almacenada al canal principal del Sistema, el cual sigue en dirección general hacia el noroeste, divergiendo ligeramente del curso del río y pudiendo suministrar agua para riego desde s u origen hasta un  punto, distante 42 kilómetros d e la boca-toma, donde se bifurca en una rama oriental llamada Lateral de Camarón y en otra que sigue en dirección hacia el sur, para cruzar el río a une distancia de 313 kilometros y cont inua r en dirección general SSE. en una longitud de 120 kilómetros hasta terminar muy cerca del punto donde la carretera nacional de México a Laredo cruza con el rio Salado,

Vista genera! de la presa de almacenamiento.

9

La extensión de terrenos que quedarán bajo riego es de 30,000 hectáreas, en la margen izquierda o norte del río y de 35,000 hectáreas en la margen derecha. Primitivamente el Proyecto comprendía todo el terreno por regarse en 1a marg en izquierda; pero estudios detenidos de los suelos pusieron de manifiesto que los terrenos distantes del río tienen en grande s extensiones a poca profundidad subauelos formados por arcillas compactas m e z c 1a d as con yeso cristalizado muy impermeables,  por lo cual se prefirió excluirlos del Proyecto, incorporando en cam bio lo s te rr en os en la ma rg en de recha, lo cual aunque aumente un  poco el costo de las obras de dis tribución del agua, tendrá la ventaja de que los terrenos que se destinen a cultivos de riego sean de muy buena calidad.

t‘t 

ABASTECIMIENTO DE AGUA El agua disponible es la que se almacena en las avenidas del río Salado , formado por los ríos de Sabinas y Nadadores que se unen aguas arriba de la presa a una distancia aproximada de 8 kilómetros. La cuenca de captación del vaso de almacenamiento tiene aproximadamente 30,000 kilómetros cuadrados de superficie en la que la precipitación en su mayor parte es en forma de lluvias torrenciales irregulares que ocurren en el período comprendido entre junio y septiembre. Las medidas de los volúmenes de agua que han escurrido por el río y que  pu die ron ob te ne rs e, co mp re nd en dos períodos: uno de 1901 a 1912 Torre de la obra de Toma, nivel del agua a la elevación inclusive y el otro de 1923 a la fe de 247.08 metros. cha. De estos datos s e obtuvo que el volumen medio anual que el río suministra es de 82,000 hectárea - metros, que e n el su  pu est o de de st in ar e n la bo ca -to ma , par a el rieg o, el vo lu me n eq ui va le nt e a una lámina de agua de 1.25 metros de  pr of un di da d y d e qu e la s pé rd id as de conducción sean el 40% d e este volumen, permitirá suministrar a la extensión total de terrenos considerados de

10

Vista

general del dique “Presa Río Salado”.

riego en el Proyecto, el volumen de agua necesario para cubrirlos con una lámina de 0.75 de espesor, dotación que se ha considerado suficiente en vista de lo que ha sido observado en los sistemas de riego en el curso bajo del río Bravo, ex el ‘Valle Imperial y en el Proyecto Carlsbad en Nuevo México, cuyas condiciones climatológicas y agrícolas son comparables a la del Proyecto del rio Salado.

 IP CI ÓN  GENERAL  DE  LAS OBRAS

PRESA EN EL RIO SALADO Está formada de dos parte s: un terraplén d e tierra y grava de 985 m gitud y un v ertedor de exce dentes construído de concreto y d e 234 metros Las dimensiones ge nerales de l terraplén son como sigue : . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 985 metros. Longitud . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... 35 Altura máxima. . . . . . . . . . . . . . . . a3/:1 Talud aguas arriba.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Talud aguas abajo.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2:l Anchura de l a c o r o n a . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6 metros. Altura libre de la corona sobre el nivel normal de almacenamiento. . . . . . . . . . . . . ................... 4 q$

91

El talud de aguas arriba del terraplén está re vestido d e concreto construido como monolito y que en el  pié pe ne tr a ve rti ca lm en te a  pr of un di da de s va ria bl es de 1 a 8 m e tros atravesando las capas d e roca para asegurar la impermeabilidad en la cimentación. Este revestimiento tiene 0.28 de espesor en la base y 0.20 en la corona donde se un e a

un parapeto de 1.00 de altura. Su refuerzo es de varillas de acero redondas corrugadas de 0.02 de diámetro, espaciadas 0.30 en dos direcciones perpendiculares,

VERTEDOR DE EXCEDENTES Las características y dimensiones generales de esta estructura son las siguientes : Tipo de construcción: pilares de cabeza redonda. ............. Radio perpendicular al eje del ci Anchura de la cabeza . . . . . . . . . . ............. Espesor en el  plano de cont act abe zas . . . . . . . . Espesor de los pilares. . . . . . . . ............. Espesor de la losa que forma el cimacio. ............. Altura máxima. . . . . . . . . . . . Elevación de la corona sobre ma r. . . . . . . . . .  Nivel de la co rt in a. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  Nivel nor mal de al mac ena mi ent o.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . Elevación del  pa ra pe to .. . . . .................. Anchura del puente.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..  Núme ro de com pue rta s ra di al es .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Anchura de las compuertas radiales.. . . . . . . . . . . . . . . . . Altura de las Compuertas radiales., . . . . . . . . . . . . . . . . . Capacidad de descarga con el nivel d e agua a 263.8.. . . .

............

6.36 metros. 9-00

2.00 2.00 0.75 32.00 266.80 257.38

. .. .. .. .. 19

..

261&30

..

266.80

3*

5.00

-,

 26

7.62 metros. 4.42

..

6,000 m3 por sg.

La salida del agua sobre el vertedor está regulada por 22 compuertas radiales automáticas y 4 operadas por mecanismos. Las automáticas funcionarán admitiendo el

Canal  princi pal.

Puent e en el k ilómet ro 24. Carretera “Camaróii”.

o alcance el nivel normal de almacenamiento, por una entrada de 6” de diámetro, al fondo de un pozo donde penetra el contrapeso d e flotación suspendido de la compuerta que recibirá entonces un empuje vertical que lo hará perder un peso igual al del agua desalojada por el contrapeso sumergido, lo que provocará que ejerza su acción, para levantar la compuerta, el contrapeso exterior suspendido de los brazos que sobresalen del eje de giración de la compuerta una longitud de 4.90 metros. La admisión del agua a los  pozos es auto máti ca cu an do el niv el llega a la alt ura 261.8 m e tros y cuando deja de entrar, los pozos vacían automáticamente por orificios de  3” d e diámetro situados en el fondo del pozo. La admisión del agua puede también regularse  por peq ueñ as com pue rta s movi das a ma no colo cada s a la en tra da del orifici o por donde el agua penetra al llegar al nivel en que deben derramar las aguas excedentes.

COMPUERTAS DE DESFOGUE La presa está provista de cuatro compuertas d e desfogue, rectangulares de 1.22 x 0.98 metros operadas a mano por mecanismos de ruedas dentadas situada s en el interior del vertedor a la elevación 241.26 o sean 9 metros arriba del umbral de las com puer tas , cuy a eleva ción es 232.1 algo superior a la del nivel ordinario de la superficie del agua en el río, de mane ra de poder vaciar completamente el vaso de almacenamiento.

BOCA-TOMA El dique sin el parapeto.

12

Para regular la salida agua que se utilizará en los riegos, la presa está provista de dos series de compuertas rectangulares, de deslizamiento, de 3.05 de alto por 1.07

13

de ancho, compuesta cada serie de cuatro compuertas de emergencia y cuatro reguladoras. Los vástagos de las compuertas se prolongan verticalment e para s er operados  por meca nism os acci onados por mot ore s eléc trico s si tu ad os sobr e la plat aform a de operaciones sostenida por una torre a la elevación 265.8 metros que es la misma de la co rona de lla presa. Un puente de servicio formado por trabes armadas metálicas permite el paso de la presa a la plata forma de operación de las compuertas.

El agua, después de pasar por las compuertas, desemboca en dos conductos de con creto reforzado de forma elíptica de 5.00 de claro y 5.30 de altura qiie atraviesan per  pendi cula rment e la  pres a. La capa cida d de desc arga de l a Loca-t oma es algo mayor de 65 m3 por seg undo que es la dota ción máxi ma asig nada al cana l principal.

DIQUE El dique es una presa auxiliar que completa la altur a de almacenamiento en parte del contorno del vaso a una distancia aproximada de 8 kilómetros al sur de la presa  princi pal, donde exi st e una lí nea de divisi ón de agua s a nive l má s bajo que el norma l de almacenamiento. Consiste en un terraplén de 9 kilómetros de longitud cuyas carac terísticas son como sigue Altura máxima. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Talud interior. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . Talud exterior. ............ ....................... Anchura de la corona.. ............................. Revestimiento del talud interior: mampostería de  pied ra con mortero de cal, de 0.26 de espesor.

9 metros.

13/41

Canal secundario Represa y boca -tomas.

2 :1

6

metros.

Parapeto de piedra suelta acomodada a mano de 1 metro de altura sobre la corona. Elevación de la corona, la misma que la cipal : (265.89,

de

la presa prin-

CANAL PRINCIPAL Las dimensiones y características son las siguientes Anchura del fondo..

:

......

.........

18.3 metros. 3.23 metros.

.......................... . . . .................. . 63-36 m3 ,, +, El canal pasa por un vaso auxiliar de almacenamiento de 1,600 hectáreas-metros de Velocidad.

Capacidad.

~

capacidad, formado por la laguna de Salinillas que  podrá evi tar la  pérdi da de agua de l canal cuando haya suspensiones del riego.

CANALES SECUNDARIOS

Canal principal. Salida de Salinillas.

14

Una extensa red de canales secundarios de capacidad adecuada conducirá el agua  par a riego, d e manera que cada una de las parcelas de 25 hectáreas de superficie en que se dividirá la zona irrigable tenga una boca - toma propia, situada en el lugar más conve-

15

niente. Las estructuras de estos canales son de concreto reforzado y las compuertas de las boca-tomas de fierro fundido.

CANALES DE DRENAJE Los arroyos y thalwegs han sido regularizados en sección y pendiente y profundizados de 2 a 3 metros para utilizarlos para e1 escurrimiento de las aguas pluviales superficiales y para la recolección de las aguas sobrantes de infiltración, a fin de que los te rrenos d e riego s e manteng an en el grado d e hum eda d benéfico para los cultivos. So br e es tos ca na le s se han construído los  pu en te s ne cesarios para el paso d e los caminos, adoptando un tipo d e construcción d e piso de made ra soportado por pilotes también d e madera y que dejan amplios claros, porque las avenidas que correrán por los drenes son de volúmenes considerables e inciertos.

CAMINOS El Proyecto comprende la red de caminos necesarios para que las parcelas del fraccionamiento tengan acceso directo y  puedan co mu ni ca rse con l as estaciones de ferrocarril y con las carreteras que conducen a las poblaciones cercanas. Son estos caminos de anchura su ficien te para poder bordearlos con árbole s d e alineamiento. Los  principales están recubiertos con grava conformada y los secundarios simplemente conformados en tierra.

ADQUISICION DE TERRENOS

El

Proyecto está todo localizado en terrenos de propiedad particular. La Comisión  Nacional de Irr ig ac ió n está ul ti ma nd o la adquisición de esos terrenos, de conformidad con los  preceptos de las Leyes de Irrigación y de Colonización, para proceder al frac-

Canal secundario

Rep resa y caída.

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Dren principal. Puen te carretero, empilotado de cinco claros s obre el a rroyo de Camarón y carretera de Camarón a  Nuevo Laredo. cionamiento y colonización de ellos, formando granjas de pequeña extensión que se venderán a los agricultores en condiciones fáciles de  pago y a largo plazo.

CONSTRUCCION DE LAS OBRAS S e comenzó hace cerca de cuatro años, encargándose de ella la J. 6. White Engineering Corporation, con la que el Gobierno de México celebró un contrato para el estudio y construcción de obras de riego en diferentes partes d e la República, bajo la di rección de la Comisión Nacional de Irrigación. Esta corporación ha tenido como representantes en el Proyecto al superintende nte de construcción señor R. M. Conner y al ingeniero residente señor Andrew Weiss, bajo cuya dirección han trabajado los ingenieros, empleados y operarios ocupados en la construcción de las obras. L a supervisión técnica fué encom endad a por la Comisión su cesivame nte a los ingenieros Jesús Oropes a y Manuel Bancalari. En el tiempo transcurrido desde que se inició el trabajo, las obras han adelantado considerablemente. Las aguas de la presente estación de lluvias  podrá n ser y a captadas e n la p resa y aplicadas al riego de los terrenos cuya preparación agrícola se está ta mbién efectuando.

Vertedor de excedentes.

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as obras hidráulicas en los afluentes del río Consulado y su influencia sobre

la hidrología del Valle

 Po r  Paul

WAITZ.

 N su interesan te estudio del “Proyecto p ara la regularización y futura utilización de las aguas del río Consulado” (Publicaciones de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas, Cuarta Serie, Tomo 1, números 1 y 2, México, D. F. 1930)|el seño r Ingeniero Adolfo Orive Alva dice lo siguiente: “Las barrancas de San Joaquín y Tecam achalco, situadas en parte en el Distrito Fed eral y en parte e n el Estado de México, nacen en la serranía del Desierto de los Leones, D F., cerca de Cuajimalpa; se internan luego en el Estado d e Mé xico y vuelven a entrar al Distrito Federal en el lomerío de Chapultepec. Por la barranca de San Joaquín corre el río de ese nombre. La de Tecamachalco recibe la afluencia de la barranca de Dolores para formar el río de Los Morales; el cual unido al de San Joaquín fo rma el del Consulado”. “Ea Secretaría de Comunicaciones y Obr as Pública s persigue como objetivo inmediato la regularización del río del Co nsulado para: 1-Evitar el  pel igr o in mi ne nt e de in un da ci on es e n las col oni as de San Rafael, Sta. Julia y Sta. María, etc.” ‘2-Mejorar las condiciones de l desagüe del Valle de México, evitando que en el verano el Consulado aporte gastos considerables”. 3-Utilización de los terrenos ocupados actualmente por el Consulado, el cual se  podráa en tu ba r. “Una vez logrado ese fin de regularización dentro de algunos años en que el desarrollo de la ciudad lo exigiera, las obras que se hubieren construido se modificarían de manera que las aguas se utilicen para el abastecimiento de la ciudad, para fines agrícolas, etc. “Así  pue s, a l de sa rr ol la r el pro yec to de regularización se tendrá en cuenta que es tan sólo una etapa antes d e !a completa utilización de las aguas del Consulado”.

“PROYECTO DE REGULARIZACION” “La Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas ha emprendido tres clases de trabajos : “lO-La reforestación de las partes alta s de las cuencas de captación de los forma dores del río del Consulado (barrancas de Dolores, San Jcaquín y Tecamachalco)”. ‘2-La construcción de  pe qu eñ as pr es as de en ro ca mi en to e n los torrentes que for man las tres barrancas antes citadas”.

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Pre sa de San Joaquín. Apertura de la fosa par a el dentellón. En la ladera en el centro de la vista se ve el tepetate estratificado permeable. (Foto. Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas).

‘3-La construcción de  pr es as de re gu lar iza ció n en el curso de las barrancas”. Las presas de la barranca de Dolores y de la cañada de San Joaquín han quedado terminadas ya y la de la barranca de Tecamachalco está por concluirse. Además se h a n construido ya en el curso superior de los afluentes del río del Consulado, un gran nú mero de pequeñas presas y se han plantado en el área de captación de !a barranca de Dolores 200,000 árboles que e n una forma halagüeña h an prosperado. La finalidad de las obras hidráulicas aludidas es algo diferente de la que se persi gue en otras construcciones de captación, que tienen por objeto el almacenamiento de las aguas para su utilización regularizada, en la generación de energía eléctrica, en el riego y en la  pro vis ión de ag ua s par a po bl aci on es . El objeto principal de las obras em  pr en di da s po r la Se cr et ar ía de Comunicaciones y Obras Públicas en los afluentes del río del Consulado es, en cambio, el de retener temporalmente las crecientes de !as diferentes barrancas, para librar a la zona poniente de la capital de las inundaciones que año por año causa dicho río y para mejorar las condiciones del desagüe del valle evitando, como dice el señor Orive Alva, “que en el verano el ConsuIado aporte gastos considerables” a las obras que al fin del siglo pasado se construyeron para este objeto. Tomando en consideración esta finalidad de las presas de Dolores, S an Joaquín y Tecamachalco, no se  pu ed e co ns id er ar como u n de fe ct o las condiciones geológicas de

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sus vasos, E n cambio, si se trata ra de presas de almacenamiento, deberían considerarse como malas porque, a causa de que las tres están situadas en las lomas piemontesas de Chapultepec Santa Fe, constituídas en su totalidad por material tepetatoso de una permeabilida d bast ante grande, aumentada por intercalaciones muy porosas, las aguas retenid as por las cortinas impermeable s se filtrar án rápidamente en el fondo y en las paredes de los respectivos receptáculos. Esta pérdida de agua por filtración se ha podido observar en la presa de Dolores, que fue construída por el año de 1926 y que desde entonces h a recibido ya algunas crecientes considerabl es que llenaron e l vaso hasta arriba de la mitad de la altura de su cortina. Pero su nivel siempre bajó rápidamente a una cota muy inferior, en la que se sostiene después por mucho tiempo. Excepto una pequeña filtración que se  pre sen ta en la ma rg en izqu ier da de la bar ran ca al pie de la cortina, cuando el nivel del agua pasa de cierta altura, toda el agua se pierde en las laderas y en el subsuelo del vaso sin alimentar una corriente superficial. En la presa de San Joaquín, donde afloran en el fondo y en las l aderas capas relativamente perrneables (véase foto.), se producirá el mismo fenómeno, pero a causa de las precauciones que se han tenido al embutir el alma impermeabiliz ante de la construcción en la s laderas de la cañada, es de esperar se que no se efectuarán escurrimientos superficiales cerca de la cortina. En la presa

de

Tecamachalco actualmente en construcción, las filtraciones serán

Presa de San Joaquín ya casi terminada. (Foto. S ecretaría de Comunicaciones y Obras Públicas). menos notables debido a las condiciones más favorables del subsuelo, aunque tam  bié n en es te vaso se consumirá algo del agua almacenada, por filtración. En todos estos receptáculos la permeabilidad del fondo y de las paredes dismi nuirá naturalmente con el transcurso de los años, a causa del material de acarreo y en suspensión que ll evarán la s avenidas, impermeabilizando los vasos. Pe ro el azolve de éstos será dilatado porque las pequeñas presas que se han construido en el curso superior de las barrancas y la reforestación que se está llevando a cabo en las lomas tepetatosas, contribuirán de una manera eficaz en la retención de material de acarreo en el fondo de las cañadas y en las laderas, de tal manera que dentro de algunos años ya se notará una diferencia muy favorable tanto en el volumen de las crecientes, como en la carga de material sólido arrastrado por ellas. Como consecuen cia de este cambio l a impermeabilización de los vasos no será tan rápida como habrí a sido si no se hubieran hecho estas obras adicionales.

 No es  posi ble cal cula r, ni apro xima dame nte, la can tid ad de agu a que se per der á  por fil tra ción en es ta s pres as, pero las obs erv aci one s que hem os podido hac er a es te respecto en la de Dolores en los 4 años de s u existencia, nos indican que estas pér didas como se llamarían en presas de almacenamiento no son nada despreciables.

-

Presa de San Joaquín en plena actividad los trabajos. (Foto. Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas).

-

Precisamente en el área de alimentación de la presa mencionada, el resultado de las obras auxiliares ya casi concluídas, es perfecto, como pudo observarse en es tos últimos días. En las laderas y lomas que forman est a cuenca se han plantado

como ya se dijo arriba unos 200,000 árboles en cepas bastante grandes. En es tas oquedades artificiales del terreno y en las presas auxiliares del curso superior de las barrancas afluentes, se ha retenido y consumido todo el caudal de agua de los extraordinarios aguaceros d e la tarde y de la noche del día 1" de julio que descargaron formidables cantidades de agua en las presas de San Joaquín y Tecamachalco, por que sus áreas d e captación carecen todavía de obras de reforestación, y las peque= ñas presas auxiliares superiores no dieron cupo al agua que escurría tan rápidamen te de las lomas. En su descenso, estas aguas retenidas, al filtrarse irán acumulándose en las ca pas más permeable s' del subsuelo el que, con su inclinación hacia el fondo del de México, las conducirá en esta dirección aumentando el caudal de agua f superficial, y en parte, el de los mantos artesianos más profundos. También en las  peque ñas pres as de enrocamiento construídas en el cu rs o superior de las diferentes  bar ran cas, el agua ret eni da por est os obst áculo s se fi lt ra rá en cier ta proporción en el suelo y aunque, por un lado esta cantidad infiltrada s erá relativamente corta, por otro la mayor altura en que se verifica, resultará en beneficio de los mantos arte. sianos más  pro fun dos del valle. En genera!, en la parte poniente de la capital el agu a freáti ca no es aprovechada  porque, enco ntr ánd ose a un a prof undid ad muy corta, es de mala calid ad y est á conta minada, por lo que sólo se usa, aunque indebidamente, en el riego de pequeñas horta lizas en los suburbios de la ciudad. Los  pozos art esi anos en camb io son sum ame nte numerosos en la parte poniente de l a población y en las colonias de Santa Julia, San -

-

-

-I .

"

.

Presa de San Joaquín, el

2 de  jul io

de 1930. (Foto Waitz).

to Tomás, Popotla y Tacuba porque a estas zonas no llegan las aguas potables de Xochimilco con que se surte la mayor  pa rt e de la capital. Abundan en estas colonias los  pozos arte sia nos poco prof undos , d e 40 a 60 metros, mientras que los q u e e x t r a e r   agua de mantos artesianos inferiores s o n relativamente escasos y sólo existen en pun tos don de se necesita un a gr an cantidad de agua, como por ejemplo en la Cervecería Modelo, Sanatorio de la Beneficencia Española, Es cuela Indus tria l, en los diferentes Clubes deportivos cercanos al Bosque de Chapultepec, así como también en la colonia de Santo Tomás , que se abastece con agua potable que proviene de un pozo artesiano  profund o abi ert o por el Municipio de México. Las presas de San Joaquín y la de los Morales resultarán benéficas para el abastecimiento de agua artesiana para toda esta parte poniente de la ciudad y su efecto se notará, tanto e n la ligera elevación del nive piezométrico d e los pozos existentes, como en su mayor productividad.

Ea alimentación de mantos acuíferos subterráneos por medio de presas de captación, que desvían las aguas de los ríos a terrenos permeables, es un procedimiento aplicado ya desde hace tiempo en varias partes de Europa, Africa y América, sobre todo en los alrededores de Los Angeles donde se necesita recurrir a este procedimiento para conjurar serias diiicultades que se habían presentado ya e n extensas zonas regadas antes económicamente con aguas obtenidas de POZOS  brot ant es, esca sea ndo  pos teri orme nte el agua de es tas perfora ciones a medida qu e se abr ían nuevo s pozos y se principiaba a extraer de ellos el agua por medio de un bombeo forzado. 21

Presa de Dolores, el 2 de  julio de 1930. (Foto. Waitz),

En el caso de las obras de captación de aguas de los afluentes del río Consulado, que se llevan a cabo con el fin de evitar inundaciones de la capital y para aliviar el desagüe del Valle, se obtendrá como efecto inmediato un aumento en el caudal de las aguas artesianas y freáticas en el subsuelo de la capital, efecto benéfico que en este caso especial resulta s in costo alguno pero en otros muchos casos debe buscarse este efecto con obras hechas "ad hoc' pues todo esfuerzo que se haga para evitar que el agua de escurrimiento vaya a dar a los ríos y de ahí al mar, sin aprove chamiento alguno, resultará en un beneficio general de la región, desde los diversos  pun tos do vista climatológico, agrícola e industrial.

22

23

una intensa y variada coloración que tarda has ta que la madera acaba, y en el tanino,

Estudio So

 per o aún más en la resina, causa una violenta fermentación en sus celdillas.

esfleme Preliminar  P o r

LOS expertos made reros saben pe rfectame nte que almacenando la madera en for ma de caballetes a la intemperie y en tiempo de lluvias, después de 3 meses de alma cenaje y al cepillarla, resulta completamente limpia de toda mancha y resina. Est o se debe a que el agua de lluvia al caer, se infiltra constantemente en sus tejidos eliminando en esta forma, toda la savia que contiene.

Gasbar GONZALEZ S. '

Por es ta razón, basándose en la favorable acción que causa el agua sobre la madera, se ha empleado un sistema de desfleme e n los Estados Unidos de Norteamérica, con excelentes resultados. Se basa en la inmersió n de trozas dentro del agua, por un tiempo más o menos grande.

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AS

explotaciones forestiles en el país, habían estado, hasta hace pocos años, fuera de todo control del Gobierno Federal.

Con la creación de la Dirección Forestal y de Caza y Pesca, y más aún con la promulgación de su Ley respectiva, se ha iniciado una labor un tant o perf ecta; pero falta mucho que hacer todavía para determinar con alguna exactitud aproximada, la producción media anual de los montes. Si lo que respect a a la producción se ignore, con mucha más razón s e carece de disposiciones de carácter técnico que la propia Dirección Forestal debe de dar a COnocer, principalmente a los madereros, por desconocer las condiciones especiales de vegetación de las diversas especies forest ales que form an nuestros bcsques de climas y altitudes tan diversos. Como una de las principales causas que originan esta imposibilidad, es la carencia de personal, corresponde a los profesionistas forestales que trabajan en esferas particulares colaborar con la propia Dirección Forestal para la solución de diversos pro  ble mas d e car áct er téc nico y admi nist rat ivo.

I

l

.

l 1

SISTEMA DE DESFLEME DE LA MADERA POR INMERSION EN EL AGUA Consiste en la elección de un lugar eepecial donde se vaya a instalar algún ase rradero. Se debe de designar ya sea a las orillas de un lago o  bi en en el recodo de una ensenada donde en ambos casos, se tenga agua tranquila durante todo el año. También es propio elegirlo a las ribe ras de u n río de corriente muy moderada. Cuan do no existe ninguno de estos recursos naturales y si se trata de manufacturar madera fina y en corta escala, s e opta por ampliar el cauce de un arroyo y formar una  pre sa con un simple bordo de tierra (este caso es aconsejable cuando se tenga que manufacturar madera de encino que como sabe se sumerje hasta el fondo del agua,  por lo que el vaso no deberá de ser profundo).

Iniciando el objeto único del presente estudio, debo manifestar que la producción de madera en nuest ro país, por los múltiples aserraderos existent es se ha empleado en los diversos usos a que está destinada en la misma forma como sale de ellos, sin que se le haga ninguna preparación previa ni posterior, lo que trae en consecuencia que al remanufacturarla o  bie n emp lea rla dir ect ame nte en la obr a, apar ezca con múlt ipl es defectos originados principalmente por la fermentación de la materia orgánica que en forma de jugo propio o savia, contiene dentro de sus tejidos.

4

Por otra parte, es bien sabido que las densas masas arboladas que crecen en te rrenos humíferos y profundos, producen una madera de  pri mer a cal idad , p ero que dentro de sus tejidos lleva microscópicos micelios de hongos tomados del suelo por las raí ces. Como criptógamos tan rudimentarios que son, necesit an una insignificante canti dad de aire para poder vivir dentro de los mismos. Finalmente, la s especies hojosas y resinosas, contienen en su madera, como preservativos naturales, tanino las primeras y resina las segundas. El objeto de estos pre servativos como propiamente podemos llamarlos, es prolongar la duración y conservar la calidad de la madera en pie.

5 1

I

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&

Aun cuando serí a bien largo entrar en minuciosos detal les acerca de la anatomía

y fisiología de la madera viva; bástenos por ahora saber que todo cuerpo extraño a S U estructura propia al ser aserrada y expuesta a la intemperie, en los hongos origina

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T

Una de las partes básicas que intervienen para la designación del depósito de las trozas, es la superficie que deberá ocupar. Para su determinación, se deberá tener siempre en cuenta la capacidad del aserradero. El siguiente cuadro da una idea ¿e la relación que existe en sus diferentes partes. El caso que nos ocupa es un’ aserradero de 20,000’ de capacidad. Cuadro p ar a la determinación  de la superficie de las trozas. Capacidad e n p i e s 20,000 Diaria Mensual 600,000 Anual 7.300,OOO

Núm ero d e trozas.

Superficie. 551 M2 16,737 ,, 203,643 ,,

146 4,428 53.874

Para la determinación de la superficie del depósito, se tomó una troza tipo de de los pies de madera que en las fórmulas se emplean las iniciales “Bf” Board-Feet se obtuvo del promedio de las mismas que son: 28” x 14’ (0.70 x 5.40 metros), Para la determinación

-

-

Bf = 0.22D2-0.71D Bf = 0.62832D’-2D Bf = L[D2 + d2 + (D.d)] 12

--

igual a 552’ (Del Prof. Judson F. Ciark). igual a 504 (Del Daniel’s Universal Eog Ruler). 0.7854, igual a 575 (Del The Practica1 Lumberman by Bernard Brereton).

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1631’

3

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que todo, determinar la savia que contiene (he aquí una de las necesidades de dar a conocer una tabla de  pes os es pe cíf ico s de la s ma de ra s) . El contar con una buena tabla es un importante factor mas no es lo suficiente. L o s aspectos exteriores de las maderas son tan variados aún para aquellas que crecen en un mismo rodal, que no hay reglas para poder determinar el estado de saturación de agua que contienen. Sólo la práctica y la experiencia completas pueden dar una mejor determinación. Sin embargo, se sabe que generalmente para las coníferas hay que dar la mitad de tiem  po en de sf le me que pa ra la s ho jo sa s d e la s ma d er as co no cid as en la tec nol ogí a fo re s tal por “semi - duras’’ ‘(encino, fresno, etc.) Haciendo referencia a la Fig. No 1, el depósito con 6 divisiones corresponde al al macenaje de coníferas donde la madera debe permanecer en el agu a 3 meses, es decir, que cada com partimiento comprende u n período de aprovechamiento de 2 s e m a nas, Si se tratara de desflemar encino. el tiempo sería de 6 meses con período de aprovechamiento para cada compartimiento de un mes. Algunos madereros optan por reducir el tiempo de desfleme a la mitad. Aun cuando es un poco costosa la modificación de este sistema porque se necesita una tem  pe ra tu ra co ns ta nt e lo más elevada que sea posible. Para el efecto se procede así: Se instala una bomba que tome agua del centro y fondo del depósito para elevar la a cierta altura dentro de un horno donde se queman todos los desperdicios del aserradero. Ya caliente, por medio de un inyector s e vierte por los tres lados como lo marca la misma Fig. No 1. En esta forma se tiene el agua del depósito, caliente, a l menos una gruesa capa.  No importa que la que se encuentre al fondo permanezca

1631

-- 3 4 3 3

Las dos primeras fórmulas son para trozas de 4 y 12  pie s res pe cti va me nte . La tercera, ya tiene especificada su longitud. Como se ve, las tres fórmulas arrojan un promedio d e 543’ de madera que dedu ciendo un 50%  pa ra co nv ert irl a en as er ra da , nos da un resultado de 271’. Por lo tan to, la superficie que deberán ocupar las 53,974 trozas, se rá de 20 hectáreas en núme ros redondos; pero teniendo en cuenta el espacio que debe haber entre ellas para ha cilitar toda maniobra así como los  pas illo s d e ca rg a y descarga, se le agrega la mi tad, arrojando un total de 30 hectáreas. Para la construcción del depósito se emplea en primer lugar una serie de pilotes que se clavan en los ángulos de los compartimientos interiores por medio de un martillete. Los compartirnientos se marcan por medio de trozas a flote ligadas o unidas entre sí  por pe da zo s co rto s d e cad en a. En la Fíg. N” 1. aparece sólo el trazo de las divisiones. Una d e las partes imp ortantes al hacer la construcción del depósito, es la elec ción del número de compartimientos que debe llevar. C o m o en ellos s e va a almacenar la madera  par a IU desfleme, conviene, antes

Forma de apilar la madera para favorecer la circulación del aire.

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.DESECACION A LA INTEMPERIE

* P‘

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Grueso en pulgadas Gráfica que demuestra la relación que debe existir entre el grueso y la equidistancia de las maderas.

FIG. 3 1

fría. Este sistema sólo es propio para tratar maderas de coníferas y en general, todas aquellas que floten. Ya que he hablado del horno donde se queman tod os los desperdicios del aserra dero, séame permitido ser un poco amplio sobre el particular. Generalmente en nuestro país es desconocido, al m enos en los aserraderos de mediana y aun de mayor capacidad. Todos los desperdicios que producen, son en la generalidad de los casos, arrastrados por las aguas de un arroyo en las serranías de los cuales comunmente son instalados. Esta medida de limpia no basta para tener la  pl an ta y pati o d e al ma ce na je co ns ta nt em en te limp ios. Nu me ro so s as er ra de ro s qu e se visitan ofrecen el desagradable aspecto de un desaseo y desorganización completos. Los hornos de incineración de desperdicios son del todo indispensables para un aserradero de 20,000’ de capacidad mínima. Aun cuando sus dimensiones varían, se  pu ed en co ns tru ir desde 4 metros de diámetro por 6 de altura. El material que se em  ple a ge ne ra lm en te es lámina de  y*”;sin embargo se p uede reemplazar ventajosamen te este material en algu nas localidades por tabique de tamañ o standard. Cuando no se desee emplear para calentar agua del tanque de desfleme, se podrá construir simplemente a la mitad de su sección longitudinal debiendo quedar en este caso, la pared, del lado de la planta de manufactura. La forma comunmente aceptada de los hornos es la cilíndrica, El transporte de los desperdicios al horno, se hace por medio de una cadena cir culatoria que parte desde el piso de la planta hasta la parte superior del horno. A intervalos de 50 centímetros, tiene ti ras de madera de alguna altura y montadas so  br e sus eslabones. La parte inferior pasa tangencia1 al fondo de la cuneta donde corre la cadena. Las casas “Dodge Sales & Engineering de San Francisco, Cal., y “The Wheland Co.” de Chattanooga, Ten., son las que manufacturan esta clase de accesorios de. los aserraderos conocidos con el nombre de “conveyors”.

I

Como parte complementaria al desfleme de la madera, es la desecación de l a s maderas a la intemperie. A la desecación en nuestro país le dan tan poca o ninguna importancia, que la made ra la apilan en lugares co mpletamente inadecu ados para el caso. Asimismo la almacenan sin guardar ningunos principios básicos sobre venti lación. E n la Fig.  No 2, se d a un a idea de la form a de apilar la madera para favorecer toda circulación de aire. Se d eberá procurar an tes que todo que la circulación se ha ga en los dos sentidos como lo marcan las flechas d e la propia figura. La que corre en sentido transversal, no tiene importancia en la práctica para poder guardar una equi distancia uniforme, pues sólo basta con elegir lata s de madera d e un sólo grosor. La que se procura llevar con todo cuidado es la que corre en sentido vertical. Sólo en la  prá cti ca s e pu ed e da r u n a pe rf ec ta cir cul aci ón. Otro de los factores importantes que deben de intervenir para lograr que la ma dera, principalmente la que se tiende primero en la pila o tonga como se le llama en algunas partes, es que haya una altura suficiente del nivel del piso de ella. Esta pre caución hay q ue guardarla principalmente en los patios de almacenaje donde sean muy húmedos.

El tiempo qu e debe rá d e permanecer la mad era apilada en desecación a la intem  pe ri e va ría de acuerdo con su grosor. La madera impregnada de agua es más fácil de desecarse que cuando se encuentra conservando su jugo  pro pio . Ge ne ra lm en te es ac ep -

co.”,

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FIG. 4 Colocación de las tiras o latas y forma en que queda la  pila de mad era

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Se notará que en la parte izquierda de la propia Fig. N” 4, queda la disposición de extremos de las piezas en sentido inverso al lado derecho. Para evit ar que el agua llegue a  perju dicarl e, se opta por colocar tab las parad as des de el nivel de la pila hasta las 2/3  part es. La terc era part e res tan te, se cubr e por medio del alero que se forma al terminar de atrincherar la madera.

los

Colocados los tendidos de madera en la forma como se ha indicado, y llegada hasta determinada altura, se procede a formarl e una especie de techado con tablas de desperdicio o a sujetarl o con garfios como lo d emues tra la Fig.  No 5. Como parte auxiliar a todo movimiento en el patio de almacenaje de maderas, es la construcción de una especie de muell e que aparece en la propia figura. Nótes e la relación de ni vel entre él y la base de las pilas. La construcción de este muelle es de grandes ventajas principalmente cuando se tiene un aserradero de regular capacidad: 30,000’ de madera en adelante, Los carros, donde viene la madera de la planta, corren y se manejan en el muelle lo que permite !a fácil formación d e las pilas. Para mayor comodidad de los embarques, generalmente se tiene una vía de ferro carril al  pie del muel le a una distancia conveniente que permite el fácil manejo de la madera para cargar furgones y plataformas.

Manera de sujetar y almacenar las maderas.

En la Fig. N” 6, aparece, en proyección horizontal, la disposición de una doble se rie de pilas con muelles y vía. En “A”, tenemos las pilas de madera, en “B”, los mue lles y finalmente en “C”, la vía del ferrocarril.

tada la idea que a mayor grosor corresponde una mayor aereación, principalmente cuan do se trata de maderas semi - duras. Sin embargo, se ha llegado a construir una gráfica Fig.  NQ 3, que da una relación que debe de existir entre los grosores y la equidistancia e n pulgadas. Como lo demues tra, para piezas menores 1” de grosor, corresponde una equidistancia de 1”. es de cir, que éste debe rá de ser el ancho de la columna de aire. En la misma se nota que  para piezas de 7” de grosor en adelante, corresponde una equidistancia de 5”. Para lograr una perfecta circulación en sentido vertical, es preciso que la columna de aire quede completamente perpendicular al piso. Otro de los cuidados que se deben tener al apilar la madera, es procurar la  protección de sus extremos, principalmente cuando se encuentra la pila con un frente a las lluvias. En la práctica se acostumbra que a cad a tendido de piezas que se hace sobre la  pila, se ponga la tira de madera que guarda la altura entre ellas, salido una pulgada del tendido inferior, En esta forma cada una sirve de alero al tendido que se en cuentra abajo. La Fig.  No 4, da una idea clara de la colocación de las tiras o latas o forma como queda la pila.

Es de advertir la conveniencia de ocupar tiras o latas para las pilas de madera,  previ amente desf lema das. La no observ ancia de est e pequeñ o deta lle , origi na que la madera almacenada, se manche de tintes negruscos por el contacto que tiene con las !atas en sus lugares de apoyo.

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 A

L B

B

Proyección horizontal de una doble serie de  pilas con su muelle y vía.

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Confío en que s e puedan tomar del presente trabajo unos resultados provechosos,  pri nc ipa lme nte a lo qu e se refiere en primer término, a la formación o almacenaje de madera en los patios.  N o sólo ba st a vi si ta r la s pl an ta s de ma nu fa ct ur a en el pa ís pa ra da rs e cu en ta de l estado detestable e impropio como se almacena, sino que basta con visitar las múlti ples ma de re rí as qu e ex ist en en la ciu da d de Mé xi co qu e co mo las an te ri or es se en cuentran en condiciones detestables.

Las Fuerzas idráulicas  Po r José  HERRERA Y  LAS SO,

Ingeniero Civil. M é x i c o debe organizarse como un Estado m o d e r n o . . Son Pos técnicos l o s llamados a afrontar las graves cuestiones de nuestra in tegración nacional. , Toca perfeccionar aho ra la tecnica en la explotación de las rique zas naturales y procurar p o r las niedidas adecuadas, que ellas sirvan principal y fun damentalmente para el bienestar de nuestro pueblo”. ‘ (Palabras del señon Presidente de la Re pública, Ing. Pascua1 Ortiz Rubio, contenidas en el discurso inaugural üe su gobierno).

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1.-SU CONSERVACION.

E tiempo atrás comenzó a hacerse sentir

de  pr ef er en ci a en lo s paí ses industriales y densamente poblados la necesidad de revisar los recurs o s naturales disponibles, detener el despilfarro que de ellos se había hecho por imprevisión o lucro inmoderado y organizar en forma racional su aprovechamiento, Es decir, se  pla nte ó la pol ític a de con ser vación que corno dice R. H. Hess, “puede caracterizarse como una poeconómica social prudent e que dirige la administración previsora de los agen, lítica tes naturales de  pr od ucc ión y re st rin ge ra ci on al me nt e el co ns um o de los rec urs os fí sicos de la tier ra; y cuand o es posible, promueve su desarrollo para alcanzar dos fines : que la capacidad productiva se desarrolle y mantenga y que la herencia natural de la raza no se disminuya inconsiderablemente”. L a G u e r r a M u n d i a l q u e s o m et i ó a b e li g e ra n te s y n e ut r a le s a p ru e b as e x t r a o r dinarias de resistencia y que hubo de acarrear el desconcierto económico generalafirmó en la conciencia pública aquel sentimiento. Valores y  pro ce dim ien tos se ajustaron a una política definida de conservación, cuyo ejemplo comenzaron a adoptar los  paí se s nue vos , e n los que, si  bie n es cie rto que la cr is is eco nóm ica no re ve stí a la gra vedad que tuvo en los  pa ís es ind us tri ali za do s, re cl am ab a ta mb ié n ur ge nt em en te es a  polí tica. En ef ec to , el desperdicio y abuso de los recursos de la nación han sido pro-

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 po rc io na lm en te más rápidos e intensos en estos pueblos muchos de ellos verdaderas colonias de explotación bajo e l disfráz de pueblos soberanos que en los países viejos a la civilización moderna, en donde la solidez de las instituciones, la pericia de sus  po líticos y la concurrencia económica les permite tener una visión más exacta y previso ra de las conveniencias nacionales. En México experimentamos de rechazo las perturbaciones del equilibrio mundial,  pe ro he mo s su fr id o di re ct am en te la s oc as io na da s por nu es tr as ho nd as in qu ie tu de s in ternas y sentido el anhelo de lograr nuestra integración social y política y de organi zar la economía del país sobre normas más equitativas. Estas tendencias ha n inspira do reformas radicales en la legislación, Somo las realizadas en materia de minas, pe tróleo, aguas públicas y otras riquezas naturales.  No es tiempo todavía de calificar la  pon der aci ón y ac ier to de es as me di da s, qu e si son consecuencia directa de la ideolo gía que las informa, no siempre parecen responder a realidades económicas.  No nos ha sido pues del todo extraña la política de conservación; pero ha careci do de orientación precisa, coherencia y continuidad. El muy reciente Congreso de Planeación insistió sobre esas deficiencias. Subra yó la necesidad de hacer de la nación una unidad económica por el desarrollo gradual de un programa social consciente inspirado en razones éticas y aplicado tomando siem  pr e en cu en ta la s po sib ili da des efe cti va s, av al or ad as té cn ic am en te . El Ing. Sánchez Mejorada hizo surgir “la visión grandiosa de un México que explote SUS riquezas sin desperdicios; que use de su hacienda sin despilfarros.. . Pero hay más todavía y de muy particular significación en favor de las ideas ex  pu est as . Los conceptos del señor Presidente de la República, expresados en ocasión solemne y que sirven de epígrafe a estas líneas, recalcan la tesis que defendemos y la adoptan como uno d e los postulados de su  pr og ra ma de gobierno. Marca derrote ros definitivos a la futu ra acción administrativa e n relación con el aprovechamiento de los recursos naturales que son del pueblo y para el pueblo y señala el papel pre  po nd er an te qu e en e s e cam po de be as ig na rs e a l a téc nic a. En la exp osi ció n si nt ét ic a de su  pr og ra ma in si st e el alt o fun cio na rio so br e la ne ce sid ad in ge nt e de ed uc ar a l a s masas y orientar la cultura superior hacia el beneficio popular.

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Muy justificadamente antepone las conquistas rurales a los progresos en el orden económico que no pueden ser estables sin aquellas. En efecto, ya hace má s de cien años alguien dijo que la riqueza de un  paí s la co ns ti tu ye la ca pac ida d en su acep ción genérica y no los ricos. Opinión semejante sostiene List cuando asegura que “las naciones derivan su fuerza productiva de los recursos mentales y físicos de los indivi duos, de SUS condiciones e instituciones sociales, municipales y  pol ític as y de lo s re cursos natur ales colocados a sualcance”. El mejoramiento económico exije pues la coordinación eficaz de esos recursos, del capital que haya de ponerlos en movimiento y de la población en cuyo beneficio se aprovechan. Dentro de este orden de ideas, la acción económica no puede limitarse a crear valores y form ar ricos. Tiende de preferencia a desarrollar la capacidad colectiva y a adoptar medidas legales y administrativas que aseguren el u s o racional de las riquezas naturales del  paí s  pu est o,que conservar no implica abstenerse de usarlas  par a el  bi en es ta r de todos los habitantes.

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Esbozada así en s u s lineamientos generales la política de conservación, podemos ya abordar el tema particular de este ensayo: señalar los aspectos peculiares de esa  pol ític a ap lic ada al de sa rro llo de la s fu er za s h id rá ul ic as y a su utilización bajo la for ma usual de energía eléctrica. Entre el valioso acervo de las riquezas naturales de cualquier país, las fuerzas hidráulicas merecen un luga r prominente. Son fuentes de comodidades y bienestar general y de las actividades industriales todas. Su aprovechamiento tiene un aspecto so cial evidente por la liga inmediata y directa que lo une inseparablemente con los intereses de !a colectividad. Las fuerzas hidráulicas son de aquellos recursos naturales de los que se dice, desde el punto de vista de la conservación, que “cualquier uso es mejor que no hacer ninguno”. E n efecto, sólo empiezan a tener valor real determinadas fuerzas hidráulicas cuando dejan de tener carácter potencial para convertirse en una utilización efectiva. Es decir, los intereses populares respecto de esas fuerzas sólo se atienden si éstas se aprovechan; y puesto que el agua es un manantial de energía continua, “la con tribución de este recurso al bienestar público se mide por la diligencia y eficacia con que se desarrolla”. Más todavía, cuando hay oportunidad d e utilizar económicamente un a caída para distribuir energía a un precio razonable, abstenerse de ello merece calificarse como un desperdicio positivo. Est a regla g eneral debe, sin embargo, supeditarse a las indicaciones que proporciona una visión amplia de los intereses actuales y futuros vincu lados a la generación de fuerz a: de tal manera que no se emprendan desarrollos parciales para satisfacción d e necesidades inmediatas, s; con ellos puede comfirometerse fiara m á s tarde la completa uti1ización qu e de ma nd e el porve nir. Las fuerzas hidráulicas se distinguen fundamentalmente de las otras riquezas na turales por dos características p eculiares: Son recursos que no se agotan por el aprovechamiento que de ellos se hace: su aprovechamiento en sí mismo y la forma en que se realiza afectan directamente como antes decimos a las conveniencias populares y al progreso industrial del  país . La energía eléctrica ministrada profusamente a pre cios razonables, significa actualmente condiciones de vida higiénica y confortable, fa cilidades para l a vida colectiva: aparición de nuevas industrias y ensanche de las existentes. La vida urbana y aun la del hogar ya casi no pueden concebirse sin la electricidad. Para el agricultor tiene también alto valor: los trabajos de la granja se dulcifican y pueden industrializarse: se logra en la escala necesaria proveer de riego a las tierras por medio de bombas, así como adquirir fertilizantes baratos de origen elec tro-químico. La explotación hidroeléctrica, derivad a de las caídas, tiene también otros aspectos muy particulares. Apenas cuenta treinta años de vida computados desde la época en que se logró el transporte de la corriente a larga distancia y ya ha adquirido un desarrollo que la coloca en sitio prominente en el mundo industrial contemporá neo. En es e corto espacio d e tiempo y cada día incesan temente ha venido mejorando su técnica hast a e l punto de que no caben predicciones sobre los adelantos que en  bre ve s e rea lic en . Es muy posible que estemos en vísperas de que surjan descubrimientos y aplicaciones tal vez en los sistemas de acumulación y transmisión de la

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energía que revolucionen. totalmente l as instalacione s existentes y hagan, por l o tanto, inadaptables las bases jurídicas y prácticas administrativas que gobiernan actual mente la producción, distribución y consumo de la energía. El significado eminentemente popular de esa industria y el hecho de que su estruc tura íntima descansa sobre el aprovechamiento de las caídas de agua, que forman par te del patrimonio del Estado, nos lleva a considerarla como una actividad sui géner;s, que como tal ocup a un lugar aparte en el conjunto de la vida económica del país. Intereses muy superiores a la conveniencia privada imponen que se mantenga esta distinción. (*)

Las Aguas de Axocopan, Atlixco, Pue.  Po r el Prof. J. Bibiano CARRASCO.

(Continúa)

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los años de 76 a 77 del siglo pasado, Macqu er e n colaboración con Sigad -Lafond, estudiando la flama del aire inflamable (así se denomi naba el hidrógeno), que ardía desprendiéndose de una botella, observó que esa flama no producía humo; que si se  pro cu rab a pon erl a en con tacto con un cuerpo frío, un plato por ejemplo, se cubría éste alderredor del espacio tocado por la flama de multitud de gotitas seme ja nt es al ro cí o: con oci ó por fi n qu e er a agu a, qu ed an do mu y so rpr end ido al ver qu e en la combustión de ese cuerpo no se  pr od uj er a hu mo co mo en la s de má s co mb us tiones hasta entonces conocidas. Y no obstante su admiración por un caso tan extraor dinario, caso que le ofrecía la oportunidad de realizar uno de los más grandes descu  bri mi en tos , n o quis o, ni se pre ocu pó de investigar la causa: indudablemente que si se hubiera d etenido para inquirirla, habría sido conducido has ta la inmortalidad : se con tentó con señalar el hecho únicamente. Poco tiempo después de ese notable suceso, recibió Priestley una carta fechada en Birminghan el 18 de abril de 1781, en que Warltir i, químico inglés, le decía que  pre ocu pad o co n la du da de si sería o no pesante el calor, se le ocurrió quemar por medio de la electricidad algunos gases, colocándolos en un globo de cobre de capaci dad y peso conocidos, y que sometiendo una mezcla de hidrógeno y oxígeno a la acción de una descarga eléctrica, se depositaba agua sob re las paredes del vaso de vidrio, y vió, en efecto, la condensación del agua en las paredes del vaso. Admir ado profundamente de esos resultados, no pudo menos que comunicárselo a su amigo James Watt, quien le contestó con fecha 26 de abril de 1783, lo que sigue: “Cuáles son los resultad os de vuestra experiencia? Agua, luz y calor. ;No esta mos autorizados, por lo mismb, a deducir que el agua está compuesta de dos gases, uno (*)

Este artículo fué  publicado en “El Universal” en marzo último.

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hidrógeno y el otro oxígeno, privados de una parte de su calor latente o elemental: que el oxígeno es agua privada de su hidrógeno, pero unida al calor y a la luz latent e s ? Si la luz no es más que una modificación del calor, o una simple circunstancia de su modo de manifestación, o una parte componente del hidrógeno, el gas oxígeno será el agua privada de su hidrógeno, pero unido al calor latente”.  No es posible, al decir de Lefort, definir con más propiedad, con más rigor, la composición o naturaleza del agua, que como lo hizo Watt.

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Por otra parte: mientras Cavendish en Inglaterra, y Lavoisier en Francia se dedicaban a ese género de estudios, Monge, que entonces vivía en Meziéres, llegaba a idén ticos resultados, probando que el peso del agua obtenido por la combustión del hidrógeno y del oxígeno era poco más o menos igual al de los gases empleados. “Ignorábamos entonces, dijo Lavoisier, que Monge se ocupara del mismo estudio”: no tuvimos conocimiento de esta circunstancia sino después de algunos días, por una carta que di rigió a M. Vandermond, y que éste leyó a la Academia.

Priestley enseñó la carta de este físico a algunos sabios de Londres, y después la envió a §ir Joseph Banks, Presidente de la Sociedad Real, con el objeto de que fuera leída en una de las sesiones de esa corporación científica, pero no se le dió lectura sino hasta un año después: sin embargo, fue depositada en los archivos de la Socie dad, figurando en el 749 volumen de las “Transactions philosophiques”, con su verdadera fecha de 26 de abril de 1783, y señalada especialmente por el secretario de esa Sociedad.  No hay duda que este es un título de prioridad, que la historia de la Química jamás se atreverá a negar: pero del cual nunca ha hecho mérito, ni tenido en cuenta.

En la memoria que Lavoisier presentó a la Academia de Ciencias de París, a fines de 1783, existe otro párrafo que es necesario transcribir textualmente, porque los historiadores olvidando la parte considerable que a Watt corresponde en el descubrimiento de la naturaleza del agua, se ha atribuído falsamente el honor a Cavendish. “El 24 de junio de 1783 fue el día que hicimos esta experiencia M. Laplace y yo, en  pres encia de MM. Leroi, Vandermond, de muchos otros académicos y de M. Glagden, actual Secretario ¿e la Sociedad Real de Londres: este s eñor nos manifestó que M. Cavendish había ensayado ya en Londres, hacer arder aire inflamable en vasijas ce rradas, y que había obtenido una cantidad sensible de agua”.

Todas las experiencias que los sabios ingleses habían hecho, relativas al agua, fueron repetidas por Cavendish, seguramente impresionado por las observaciones de Warltiri y de Priestley, y muy probablemente conociendo ya la conclusión que Watt había deducido de los hechos. Así llegó el mismo Cave ndis h al punto q ue llegó Watt,  pero ase gur ando de un modo más positivo “que el ga s oxígeno era agua priv ada de flogisto, el gas hidrógeno agua saturada d e esa misma substancia hipotética: y en fin, que por la combinación recíproca de e stos dos gases, el agua reaparecía en s u estado primitivo”. Per o es importante considerar que est a conclusión de Cavendish no fue comunicada a la Sociedad Real de Londres, sino hasta el 15 de febrero de 1784, época en que todos los químicos y físicos sabían perfectamente que el hidrógeno ardiendo producía agua: más aún, cuando en Francia ya había probado Lavoisier que el agua era un cuerpo compuesto, Mientras Cavendish se dedicaba a investigaciones análog as a las q ue habían practicado Macquer, Warltiri, Priestley y Watt, por su  pa rt e los quími cos fra nces es trab a jaban impu lsa dos por el mis mo pensa mient o.

Por razón de que Lavoisier no habla de Watt, cuya carta a Priestley no se conocía evidentemente en Francia, se ha deducido la consecuencia, que cuando Lavoisier y Laplace participaron el resultado de sus trabajos a la Academia de Ciencias, Cavendish había fallado respecto de la composición del agua. Pero nada es menos cierto que esta aserción: se recordará, en efecto, que el 2 5 de junio de 1783 fue cuando Lavoisier y Laplace anunciaron a la Academia de Ciencias de París el resultado de su experiencia, e n tanto que la publicación de la memoria de Cavendish a la Sociedad Real de Londres fue hecha el 15 de febrero de 1784: y si es cierto que Lavoisier fue informado por Blagden, en presencia de testigos, que Cavendish había ensayado en Londres, quemar aire inflamable, y que así había obtenido un a cantidad bien sensible de agua, también lo es, que en tre esta reacción, que ya era conocida de todo el mundo, y la aseguración formal de que el agua es un compuesto de hidrógeno y oxí geno, hay un a distancia considerable. ¿Cómo se podría creer, además, que siendo La voisier tan minucioso en la historia de los hechos que estudiaba, tan exacto en todo cuanto escribía, hubiera llegado en compañía de Laplace, a indicar ante la Academia de Ciencias de París, con la sclemnidad que lo hizo, dándole a ese hecho todo el ca rácter de un descubrimiento, que “el agua no e s un  cuerpo si mb le ; es un compuesto  for mad o  por   pesos  f ij o s e invariables de aire inflamable y  aire vita l” si hubiera sa bido por Bla gde n que Cave ndi sh había for mado la mis ma concl usió n?

A consecuencia de estos trabajos, anunció Lavoisier, en una memoria leída en la Academia de Ciencias de París, a fines del año de 1783, que las primeras tentativas que habían hecho para descubrir la naturaleza del agua, databan de los años ¿e 76 a 77, es decir, al momento mismo en que Macquer observaba la producción del agua durante la combustión del hidrógeno en el aire: en esa memoria manifestó, además, que había conseguido producirla el 24 de junio de 1783, sintetizándola por medio de dos depósitos neumáticos diferentes, que suministraban hidrógeno uno y el otro oxígeno, en cantidades suficientes para que se pudiera s ostener la combustión mucho tiempo. Esta experiencia adquirió gran celebridad, porque al día s iguiente en la mañana, comunicaron Lavoisier y Laplace a la misma Academia de Ciencias, que el agua no es elemento, sino una combinación de aire inflamable y de aire vital (hidrógeno y oxígeno).

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Es verdad que en una adición que Blagden hizo con el consentimiento de Caven dish, se da a las experiencias practicadas por est e químico la fecha del estío de 1781,  pero es ve rd ad tam bié n que seg ún las inves tigac iones de Lord Brong han, est a adici ón es posterior a la llegada de la memoria de Lavoisier a Inglaterra: naturalmente se comprende que Blagden no tiene más mira que dar a Cavendish, su amigo, toda la hon ra del descubrimiento hecho por Watt, después de la confirmación de ese descubri miento realizado por Lavoisier. Seguramente que este juicio es grave: mas las conclu siones a que llegó Bronghan en el examen que con tanto cuidado y tan particular aten -

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ción hizo de la historia de este descubrimiento, son perfectamente fundadas. Estas son las conclusiones : “I-No hay pruebas de que otra persona antes que Wat t haya dado en documento escrito la teoría actual de la composición del agua”. ‘‘2-Que Wa tt establ eció esta teoría, por el año d e 1783, en términos más claros que como lo hizo Cavendish en su memoria a la Sociedad Real de Londres, presentada en febrero de 1784. Haciendo figurar el desprendimiento de calor latente en la composición del agua, Watt, ayudó eficazmente a la claridad de su concepción”.

drógeno tiene más afinidad por el oxígeno que por ningún otro cuerpo, no se podría intentar la acción de otro cuerpo sobre él para producir la descomposición del agua: es necesario por lo mismo, atacar el oxígeno”. Llevaron a la práctica su  pen sam ien to es to s do s quími cos, obl iga ndo al agua a cir cular por un cañón de fusil lleno de torneadura de hierro, calentándolo previamente en un hornillo de reverbero: la fijación del aire vital u oxígeno sobre el fierro y el des  pren dim ien to de l air e inf lam abl e o hidrógeno, permitieron a estos químicos confirmar  por el aná li sis es e esp lén di do des cubr imi ent o, y hal lar , ad em ás, qu e el agua est á com  pue st a de 85  part es, en peso, d e oxíg eno, y 15 pa rt es de hid róg eno ; núm ero s muy poco diferentes de los que se han fijado m á s tarde por medio de procedimientos muy  precisos .

3-Que no hay ni prueba, ni aserción alguna de donde se infiera que la teoría de Cavendish (Bla gden la llama conclusión), haya sido comunicada a Priestley antes de la época en que Watt hubiera consignado sus ideas, en su carta de 26 de abril de 1783: y que con mayor razón, en nada s e puede fundar la suposición, sobre todo, cuando se ha leído la carta de Watt , que este ingeniero haya aprendido algo relativo a la composición del agua, ya sea de Priestley, ya de cualquiera otra persona”.

Grande fue la influencia que en los anales de la ciencia tuvo el hecho, cuya histo ria se ha consignado: fue uno de los últimos que realizara Lavoisier en la célebre lucha que había emprendido para destruir aquella teoría de Stahl, que tanto tiempo ha bía sub yug ado el talento de los químicos. Efectivamente: después de recoger los datos que Bayen suministró en 1774 respecto de la pérdida de  peso del óxido rojo de mer curio, por efecto de su calcinación en vasija cerrada y sin adición de carbón: después de haber tomado nota de los trabajos de Sulzbah relativos al estudio de los metales, con el fin de conocer la verdad de lo que Stahl había establecido en su teoría, emprendió nue vamente el estudio de dichos cuerpos, llegando así a probar, que lejos de perder de su  peso por el acto de la calcinación, ese peso aume ntab a; que por lo mismo no e ra admisible aquella teoría: más aún, que los metales eran cuerpos simples.

“4-Que la teoría d e Wat t era conocida de los miembros de la Sociedad Real de Londres, mucho ant es que Cavendish hubiera consignado sus conclusiones por escrito, ocho meses antes de la presentac ión de est e químico a esa Sociedad. Aún se puede llegar a otra deducción de los hechos y pruebas de este juicio: que Watt fue el  pri mero que habló de la composición del agua, pues no existe prueba alguna de que haya habido persona que se hubiera anticipado a este químico en la emisión de esas ideas”. ‘‘5-Que, por último, la natural e invencible repugnancia que existáa para abandonar la doctrina del flogisto; la especie de timidez en contrariar esa teoría tan largo tiempo admitida, y tan profu ndamente arraigada, impidió a Wa tt y a Cavendish dar a su propia teoría todo el valor que tenía en sí, mientras que Lavoisier que había roto las cadenas que lo ligaban a las teorías antiguas; que había traspasado los límites marcados por las antiguas doctrinas, fue el primero que presentó la verdad en todo su esplendor”. Resumiendo se ve, que Watt concibió su teoría pocos días antes del mes de abril de 1783, y que dos meses después Lavoisier, ignorando aún la hipótesis emítida por Watt probó el primero en Francia que el agua era un compuesto definido de hidrógeno y oxígeno. En cuanto a la part e que a Cavendish concierne, se deduce de lo dicho, que este químico conocía ya la opinión de Wat t, y que no se hubiera decidido a aceptarla absolutam ente, s ino después de que Lavoisier la sancionó. Los nombres de Watt y Lavoisier deben ser los únicos que figuren en la historia del descubrimiento de la naturaleza química del agua. Una circunstancia faltaba para que el notable descubrimiento de la composición del agua tuviera el carácter científico de la época, y sin restricción fuera aceptada la conclusión de Lavoisier: que la síntesis que habia realizado este ilustre químico, fuera comprobada por el análisis: que fuera descompuesta el agua en sus elementos. Este fue el  prob lem a qu e emp ren die ron reso lve r en 1783 Lavoisier y Meusnier, fundándose en este razonamiento: “Si realmente el agua está compuesta de oxígeno y d e hi drógeno, se podría descomponer y obtener separadamente uno de estos elementos, sin  pre sen tar al ot ro un a sub st anc ia con la cua l ten ga más afinidad: supuesto que el hi-

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Posteriormente descubrió la composición del aire, fijando el carácter y propieda -

des de los cuerpos que lo componen: demostró que uno de ellos, el oxígeno, al cual llamó aire vital, desempeña un papel demasiado i mportante en la naturaleza, pues no sólo intervenía en los fenómenos que producían los metales al ser calentados, si no en las funciones de la vida orgánica, por ser el elemento encargado de verificar el fenómeno de la respiración de los animales. Por último, descubrió la composición del agua, y esto le permitió relacionar el fenómeno de l a combustión del hidrógeno con el de la fijación del oxigeno por los metales, al ser calcinados al contacto del aire, y formar su teoría sobre las oxidaciones, teoría que sirvió de base, como se dijo al  principi . o, al descubrimiento de las leyes de las combinaciones cuyo conjunto constituye el pedestal de la más grande y sublime de las ciencias.

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Seguramente que si se  bu sca un ejemplo de los cuerpos que mayor importancia tienen en la naturaleza, en razón de las funciones que tienen que desempeñar, no se  podrí a ha ll ar un o má s perf ecto que el agua. Hoy que la ciencia ha llegado a conocer las causas de muchos fenómenos, y a ex  plica r el pap el que de se mp eñ an los cuer pos qu e en esos fen óme nos int erv ien en: hoy que las teorías o las hipótesis en las ciencias naturales han perdido el carácter empí rico y aun gratuito que tenían en tiempos anteriores, pues para fundar alguna teoría  s e  bus ca el modo de comprobarla con hechos, aun cuando la teoría se refiera a fenó-

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menos cuya realización no se haya presenciado o conocido perfectamente: hoy, el hom  bre no puede menos que maravillarse al considerar la influencia que el agua tiene y ha tenido en todos los períodos de la vida del mundo. Que existe el agua en nuestro planeta desde que quedó constituído tal, no cabe duda: no solamente la teoría del enfriamiento de nuestro globo lo comprueba, sino una ley química descubierta por el eminente Lavoisier, dice de un modo evidente que por lo menos existían los elementos que forman la composición del agua y que en cier tos momentos esos elementos necesariamente debieron combinarse en cantidad bastante para que existiera en el mundo en la abundancia en que s e halla. Esa ley fue enunciada en la forma en que se nos ha transmitido, y es ésta: “En las combinacio nes o en las descomposiciones, nad a se pierde ni nad a s e crea”. Po r otra pa rt e Büchn er dice, y con razón, que la materia existe de toda eternida d; que ni se crea ni se destruye; que es eterna, como eterna e indestructible es la fuerza, pues q ue ésta, la fuerza , es propiedad de la mater ia: que lo único que pasa es que se transforman, que se cambian de un modo de ser, que sufr en me tamorf osis; pero que jamás se destruyen, que nunca se acaban o s e extinguen. Estas verdades, que están al alcance de todas las inteligencias medianamente ilustradas, han obligado a todos los sabios a da r un completo asentimiento a l a teoría qu e Ampere estableció  para ex plicar el modo de formación del mundo, en cuya teoría figura el agua como una de las fuerzas importantísimas que determinaron la consolidación de la costra terrestre. En esta teoría se asi ent a: que después d e haber pasado nuestr o globo por el  p e  ríodo del re inado del f u e g o , en que la temperatura elevadísima del mismo globo mantenía en estado gaseoso los metales, que hoy se conocen y señalan con el carácter de duros y aun de infusibles, a consecuencia del enfriamiento que constantemente se operaba por la irradiación del calor mismo de la tierra, el oxígeno y el hidrógeno llegaron a la temperatura propia para que se convinieran y produjeran el agua, que había de coadyuvar eficazme nte el propio enfriam iento, pues fo rm ad a y condensada por un mayor enfriamiento en las altas regiones de la atmósfera, caía en cascadas o en forma de lluvias torrenciales sobre esa grande hoguera que formaba el mundo; que era repe lida por la misma elevación de temperatura, y volviendo a caer después de un nuevo enfriamiento, y así en seguida hasta tomar posesión de la superficie de la tierra des  pués de haber producido el enfriamiento necesario para que los materiales que de bían formar l a costra sólida d e la tierra, afectaran el estado q u e hoy tienen. M a s no se limitó la acción del agua a producir e s te enfriamie nto y solidificación de las substancias con que inmediatamente se ponía en contacto, sino que obrando  por su naturaleza sobre es as mismas substancias, d ebí a cambiarlas d e composición  para qu e tomaran l a que hoy tienen: po rque no s e concibe d e otro modo cómo pud ie ran formarse esos cuerpos que en tal abundancia existen en nuestro suelo, en cuya composición figura el agua o uno de sus elementos: con prodigalidad se podrían citar ejemplos de estos casos, pues hay muchos en la naturaleza, pero bastará uno solo, y es este: la sílice, cuerpo que está formado por dos elementos, uno silicio y el otro oxígeno, esa combinación es abundantísima en la naturaleza y notable, como otras, por las múltiples formas que reviste; constituye, en combinación con el agua, el cuarzo

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hialino o cristal d e roca, con el cual s e forman artefactos de adornos muy estimados  por su hermosura y dureza; los diamantes de Tolfa, el topacio del Brasil, el rubí de Bohemia, el ametista: sin agua produce el ágata, la calcedonia, el heliotropo, la venturina, el ópalo, etc.; interminable sería la lista de estos ejemplos, pues innumerables son las difere ntes formas de la misma sílice, como la s que otros cuerpos presentan, ya en combinación con el agua o sin ella. Des de es as remo tísi mas fe cha s que la ciencia aú n no puede valorizar con certidumbre, desde entonces comenzó a desempeñar el papel que la naturaleza había asignado al agua, desde entonces figura con el carácter de  podero so agente, que la distingue en sus funciones. Desde ese interregno, el carácter de su influencia tuvo dos fases: la una mineralogía, la otra geología; en la primera, determinando la composición de los minerales : en la segunda, formando las capas de lo que se llama tierra; esto es, fijando la com posición química d e los cuerpos, cuyos materiales habían de colocarse del modo que hoy se ven constituyendo las capas geológicas. Pe ro aún no termina este trabajo, a  pes ar d e los mi ll on es de sigl os que los geólogos consideran que han transcurrido para la formación de esas capas, que son el objeto del estudio de la ciencia que profesan; a pesar de que la imaginación se pierde abismada de no poder estimar esa sucesión de siglos, incesantement e trabaj a en el perenne ca mbio de l a superficie de la tierra,  porque es una fuerza viva e incontrastable, por razón de que ¿e las propiedades físicas y químicas de este poderosísimo agente, se derivan esos constantes cambios de los te rrenos en que transita. P o r su modo de ser físico, por las propiedades físicas que le son peculiares, está obligada a circular eternamente en la atmósfera y en la superficie de la tierra, a subsistir en un movimiento perpetuo. La mayor cantidad de agua existente se halla 1-; quida, ocupando la  porción más gr an de d e la sup er fic ie d e la tierra: pero ta mb ié n es sólida, como se encuentra en las regiones frías del globo o en las altas montañas, en donde la temperatura es favorable para mantenerla en ese estado: además, es s u s ceptible de afectar el estado gaseoso o de vapor, como s e halla s iempre en la atmósfera. Así,  pues , de los mares y de todos los lugares donde se halla en grandes cantidades, se levanta en el estado de vapor que asciende a la atmósfera y la satura: si al canza regiones don de pierda el calor que la manti ene en el esta do de gas, se condens a y cae nuevamente a la tierra en forma de lluvia, o de granizo, si el enfri amient o fue mayor o de escarcha: si toca en un camino por el aire con las altas montañas y su enfriamiento es suficiente, se depositará allí constituyendo la nieve que se observa en los volcanes; de ese estado pasará por la acción del calor solar al líquido, y se desli zará sobre la tierra en forma de torrentes, cascadas, ríos o  penetrará a las profundidades de la tierra  par a surgir nu ev am en te a la superficie de ésta, formando los ríos tambi én, los ma nanti ales , pozos, lagos, lagunas, etc. P o r SUS  pr op ie dad es químicas es capaz el ag ua d e diso lver muchos cuerpos con que se  pone e n contacto, y a en la atm ósfe ra, ya e n la superficie o en las entrañas de la tierra, de manera que la acción química que tiene sobre los cuerpos por s í sola, o  por que alguno de los que disuelve le comunique la propiedad de disolver otros, que

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 pura no disu elve o disuelve en pequeña cantidad, origina que el agua en la naturaleza esté cargada de muchos de los cuerpos que toca al seguir su tránsito por el mundo. Estando, pues, el agua mineralizada por las substancias que disuelve, y siendo ca  paz de vola til izar se por cual quie ra eleva ción de te mpe ra tur a, es natural que deje como residuo en su evaporación aquellos cuerpos, que los abandone como sedimento: esto da una idea perfecta del modo de formación de muchos de los terrenos que ha  produci do, los cua le s s e conoc en con el nomb re de  te rr en os de se di me nto . Mas no es este el único modo de formación de los terrenos, pues tampoco es el único medio de que se vale el agua para transportar los cuerpos sólidos: su movimiento mismo es una fuerza viva que puede desarrollar otra: por esta razón en su curso sobre la tierra, al deslizarse sobre los fondos o lechos de los ríos, arrastra consigo grandes cantidades de materias sólidas, que no disuelve, sino que arrastra o empuja mecánicamente: así forma los  ter ren os d e  aluvi ón  o los  ter re nos de  acarreo . Pudiera creerse a  pri mer a vist a que est os dos mod os de acció n del agua, se ría n insuficientes para producir la s sorprendentes transformaciones que se dejan apuntadas,  per o bas tar án uno s eje mplo s para que se comp rend a la soberbia magnitud de esos efectos de la fuer za ti tánica del agua. Según Rennel, el Ganges lleva al mar ochocientos se senta mil ciento cuarenta y nueve metros cúbicos de tierra por hora, cuya cantidad forma apenas la bicentésima parte del volumen de esas aguas. El aluvión depo sitado por las aguas del  Nil o for ma la cie nto v eint eava pa rt e d e su volumen, y es igual a cinco mil sesenta y ocho metros cúbicos. El Mississip; deposita dos mil setecientos cuarenta y dos metros cúbicos de tierra por hora. El Hoang-ho o río Amarillo de China, acarrea, por término medio en un año, veintiún millones de metros cúbicos de lodo. El Danubio lleva consigo sesenta millones, y en las épocas de las inundaciones, la cantidad de materiales que acarrea es cuarenta veces más grande que en la estación de las sequías. Por otra parte, se dijo que antes que el agua disolviendo unos cuerpos, se apropia al gunos de que carece para disolver otros que en su estado de  purez a n o dis uel ve: por ej em  plo, no d isue lve el carbonato de calcio, sea cual sea la forma que é s t e  pre sen te en l a naturaleza: pero sí antes disuelve el gas carbónico del aire, o el que existe almacenado, porque allí en las profundidades de la tierra se produce: por donde circula el agua, disuelve el carbonato de calcio en cantidad proporcional al gas carbónico que tenga en disolución: surgiendo a la superficie de la tierra en esas condiciones, al ponerse en contacto con el aire, pierde el gas carbónico que lleva consigo, y por consecuencia el carbonato de calcio se precipita. De este modo se forman los depósitos que reciben el nombre de toba, calcárea incrustante o  tr ave rti no; así produce esos fenómenos de incrustación tan notables por sus formas, pues cuando esas aguas circulan sobre madera, la petrifican, como se dice en términos comunes, como petrifican los cuerpos que tocan: por esto es que se cubren de una capa caliza las conchas, las ramas de los árboles, los nidos de los  pája ros, o cualquiera otro cuerpo, tomando el carbonato de calcio que sobre ellos se deposita la forma misma del objeto que incrusta, y en muy poco tiempo adquieren esos cuerpos la apariencia de la piedra. Esta es la explicación del fenómeno que s e observa e n los conductos por donde circula el agua de los manantiales del rancho Colorado en la ciudad de Puebla, aun

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cuando l as incrustaciones que producen e sas aguas no s ean de la misma naturaleza, ni de la importancia que tienen lasque se realizan en los baños de Saint - Philippe, cerca de Radicofani, en Toscana: en la fuente de Saint-Alyre, en Clermont-Perrand: en los manantiales de Saint-Nectaire, en Gimeaux; en la fuente de Orcher y otras mil. Esta última fuente, que desciende en medio de rocas escarpadas y cae en cascadas sobre lo s  breñ ale s que se hall an aba jo, inc rus ta de sed im ent o cal cáre o la s pied ras, los musgos y las yerbas que nacen entre las h endedura s: la regularidad de estas petrificaciones, la situación de este manantial, que desciende de u na alt ura considerable entr e las rocas que caen sobre grandes pedruscos secos formados de greda, la hermosa vegetación de arbustos, de césped y musgos sobre una localidad seca y árida enteramen te, hacen de esta fuente enteramente un lugar de los más pintorescos de 12s cerca nías del Havre. La fuente de Saint-Alyre ha dejado depositar en el transcurso de los siglos tal ca ntidad d e calcárea, que ha formado una muralla de sete nta y ocho metros de longitud, y de poco más de seis metros de a ltura : y un puente de un efecto admi rable, que parece construido por la mano del hombre. Para concluir con estos ejemplos, que dan una idea de la potencia que posee el agua para transformar la superficie de la tierra, se puede considerar el modo de for  mación del alabastro, como se denomina el producto de la s petrificaciones que se  producen en las grutas, a través de cuyas bóvedas se infiltra el agua saturada de carbonato de calcio, bajo la Influencia del anhidrido carbónico: producciones que son tan estimadas para la construcción de objetos del lujo más exquisito. Al escurrir el agua y  perde r el gas carbónico, abandona el carbonato de calcio que por agregación llega a formar esa s sober bias columnatas, famosas en muchas grutas del mundo, en cuya lis ta figuran en el primer lugar 12s de Cacahuamilpa, en la República. Grandioso es en verdad el papel que desempeña el agua en la naturaleza; y más espléndido parece cuanto más se revela s u  pode r: por est a razón la s conqu ist as cie ntíf icas que el hom bre realiza, y que lo van acercando al conocimieno íntimo del mecanismo de la naturaleza, lo ponen en aptitud de maravillarse más, al contemplar la sublimidad de la creación. Los últimos conocimientos que ha alcanzado la ciencia, siguiendo el camino que señaló Lamarque a principios de este siglo, que ensanchó Darwin, entre otros. con la mayor suma de conocimientos que Haeckel recogió para formar la más bella de las clasi ficaciones en el más hermoso ramo del saber humano, la Historia Natural; esos co nocimientos no sólo han destruído las teorías que sirvieron de base a Cuvier para organizar su clasificación geológica, demostrando que no es el hombre a quien se deben referir las comparaciones de los diferentes organismos de la animalidad, sino la última expresión de las sucesivas metamorfosis de ellas : no solamente derrumbaron esas teo rías tan arraigadas en la ciencia, tan sabiamente organizadas, los trabajos de esos ilustres naturalistas, sino que han revelado el modo de generación del reino orgánico, y en ese modo juega el agua un papel más grandioso aún que el considerado hasta aquí.  No es, pues , min era l y geológica la influencia que el agua tiene en la fisico y químico que has ta, aquí se ha constituirla en uno de los principales

úni cam ent e, si así se puede expresar esta idea, naturaleza: no ha tenido solamente el carácter observado: tiene otro modo de acción que podría agentes de la vida. En efecto, después de haber-

se enseñoreado de la superficie de la tierra, y haber formado e sos grandes depósitos

han sufrido las transformaciones indispensables que los llevan a constituir la forma en que se resti tuyen a l a naturaleza, los materiales que se han organizado bajo la influencia de la vida para dar el ser al animal o al vegetal. Si no hay agua no hay fermentación pútrida, no hay putre facción: los cadáveres de los animales se momifican, como se secan los vegetales o sus órganos, esperando la presencia del agua para que al fin, cambiando de composición. vuelvan a su origen, es decir, a la naturaleza.

que se lla man mares algunos de los cuales no existen en razón de los cambios que ha sufrido el globo en su conformación geográfica, como existen otras que no existie ron en los tiempos antiguos, reinando, pues, el agua en el mundo, dió origen al reino orgánico: en su seno brotó la forma primitiva de los seres, que con el transcurso de los siglos había de llegar a vegetal o animal perfecto: en su seno apareció la Monera, que modificándose incesant emente según las condiciones de su existencia y de sus medios ambientes, pero siempre ascendiendo en su  perfe cci onami ento , hab ía de dar origen a las dos grandes ramas del Reino Orgánico, pasando sucesiva y necesariamente  por tod as las grad aci ones veg eta les o animales, para llegar hasta la última perfección de los tipos conocidos: desde la simple célula hasta el árbol más bien formado, o hasta el hombre. Sin necesidad de entrar en consideraciones aun más profundas, observando sólo lo más tangible, lo más común, se podría decir: sin el agua no hay vida: es el  principio de la organización vegetal y animal: existe en los alimentos que sirven para sostener el ejercicio normal de las funciones orgánicas ; no hay animal ni planta que no tenga necesidad del agua para que sus funciones fisiológicas se realicen; fácilmente se com pre nde que para des emp eñ ar el importante papel que jue ga en la economía orgánica, es preciso que los alimentos la contengan: por esto es que todos, absolutamente todos ellos, tienen que ser modificados por el agua: unos se disuelven en ella para  pen etr ar en la economía orgánica, otros solamente se reblandecen, esto es, son pene trados por ella: todos, en fin, son modificados: de este modo llega a formar parte de la construcción de los órganos: tal verdad ha sido revelada por el análisis, así se ha demostrado que todos los líquidos de la economía an imal y vegetal contienen como elemento principal de su composición el agua, y hasta tal punto, que se puede ase gurar que no hay substancia sólida o líquida en el organismo, en cuya naturaleza no se halle el agua en cantidad siempre fija, de manera que el organismo o el ser organizado retienen de este líquido la cantidad que necesita: la excedente, la expele por sus vías naturales, en cuya secreción expulsa los cuerpos que son nocivos a la econo mía orgánica. Además, nunca la germinación de una semill a se realiza sin el contacto y la acción del agua: desde el momento que comienza la existencia de una planta, el agua empieza a comunicarle su influencia bienhechora, suministrándole todos los elementos que necesita para su desarrollo y nutrición: el agua que s e introduce por las espongeolas de las raíces, lleva e n disolución, además de las substanci as minerales que la planta necesita para la formación de sus diferentes órganos, para SU desarrollo y el ejercicio normal de las funciones que éstos desempeñan, cierta cantidad de gas carbónico indispensable para su vida.

 No es preciso hacer patente la necesidad que los animales tienen de agua para vivir, porque no sólo todo el mundo la conoce sino que la siente a cada instante, por esa sensación que experimenta y que se llama s e d :  por lo mism o, para poder ter minar estas consideraciones, bastará fijarse sobre la Última influencia que el agua ejerce sobre cada uno de los seres organizados: para que éstos desaparezcan de la escena de la vida, para que se destruyan, necesitan agua: el animal después de la muerte, como el vegeta!, pierden los tejidos que forman los organismos, cuando esos tej idos

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(Continuará)

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Precursores de la Ingeniería en Francia

os

 Po r  Ja me s K. (Versión del inglés, de Dolores

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el transcurso del siglo

XVII y del XVIII, el pre dominio de la ingeniería lo tuvieron los franceses. Todos nosotros, es decir, el universo ent e r o, tenemos una gran deuda de grati tud hacia ellos. El mismo Smiles así lo comprende y en su “Vida de Ingenieros Británicos” refiere como Smeaton, el pri mero que se dió el título de ingeniero civil, estudió la lengua francesa y viajó  por toda Franci a, reconoc iendo que sus ingenieros eran los más adelantados, aun  para su época. También cuenta que el  joven Juan Renn ie sien do todavía es colar en Edimburgo, frecuentando la fá  brica de molinos de André s Meik les, estu diaba los cuatro volúmenes que componen “La Arquitectura Hidráulica”, publicada  por Belidor en Par ís , en el año de 1737, obra sorprendente que pone de manifiesto todo lo que se debe a los franceses en aquella ciencia. El  propio Smile s rela ta deta llad ament e las desastrosas condiciones en que se ha llaban los caminos carreteros en Inglate rra a fines del siglo XVIII, de los cuales se llegó a decir que no costaría más ha cerlos navegables, que si se destinaban a los viandantes!. . . En cambio, los france ses habían desarrollado sus sistemas de caminos sobre un plan perfectamente pre concebido y aun cuando al presente con frecuencia se mencionan los nombres de Telford y de McAdam, cabe hacer notar que el autor de los actuales caminos fue el francés Trésaguet.

 FI NC H.

GARCIA DE BRAGG).

A la caída del imperio occidental romano, unos 500 años después de la era cristiana, transcurrieron varios siglos que comunmente han sido llamados la edad del obscurantismo, precisamente a causa de la ignorancia que prevalecía; mas vino otra época en que hubo una marcada res tauración. Se construyeron muchos puen tes, atribuyéndolos en gran parte a una orden monástica (un mito probablemente), conocida por “Fratres Pontis”, o “Hermanos del Puente” . Per o como quiera que haya sido, la verdad es que los únicos cuer  pos organiz ados que podían constru irlos eran precisamente las órdenes monásticas. El  puebloentonces no era tenido en cuenta y la nobleza, como pasatiempo, se dedica  ba al art e de la guerra. Aun existen mu chos puentes famosos de aquellos tiempos, a lo largo de los más antiguos caminos ro manos; y algunos todavía pueden ser vibtos, aunque diseminados, en Inglaterra, Francia e Italia, que delatan desde luego la influencia de los primeros, si no es que son una copia de los mismos. Posteriormente, en los años de 1100 y 1200 floreció en Francia el orden gótico, nacido de la llamada era románica. La catedral gótica fue un triunfo de cons trucción así como de arte. Aquellos enor mes calados de piedra, todavía excitan nuestra admiración y despiertan un hondo sentimiento d e veneración por sus cons tructores, que tuvieron la singular des treza y osadía de cincelar arcos y columnas de tan ligeras proporciones y  pudieron equilibrar armadura contra armadura, ha-

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Puente de la Concordia, París. Construído en 1791. ciéndolas llegar hasta el techo entre frági- que militar, según la ocasión lo requería. Pero según parece, la aparición de la pól les sostenes. Mientras esto acontecía en Francia, los vora tuvo mucho que ver en esa pugna que italianos iban adquiriendo su grande y tem - vino a ser más evidente en la época del  prana reputa ción de se r los primero s inge - renacimiento. La casa fortaleza meramennieros hidráulicos. En efecto, Italia no te arquitectónica ya no  pud o resistir un tenía rival en lo que se refiere a canales ataque. Nuevos elementos, la  pólvora y el de irrigación y para transportes, si se ex- cañón vinieron a ser de importancia y  por ceptúa a los holandeses. Aun está a deba te tanto eran requeridos nuevos conocimien cuál de las dos naciones inventó la exclu- tos técnicos y construcciones de otra na sa de canales y nada hay tan obscuro y turaleza, más propios para la defensa. El difícil como decidirlo y ni aun se puede arquitecto tomó su nombre del griego y el afirmar cuál tuvo la  primaci a. ingeniero del latín, derivándola de la voz A la decadencia d e la era gótica eri ingeneator,  para designar al individuo que Francia, a causa de la guerra de cien años, inventó, gracias a su ingenio, las fortalezas el desarrollo continuó en Italia y llegó a militares de la edad media. su culminación durante el llamado renaci Simultáneamente a la declinación del miento, a fines del siglo XV y principios renacimiento italiano, Francia entró con del XVI,  baj o los auspicios de amos ta n Italia en sus guerras intestinas y los mo generosos como tuvieron las ciudades del narcas franceses llevaron de aquel país norte de aquel país. Entonces es cuando algunos expertos en el nuevo arte de la nos encontramos con los arquitectos-inge- ingeniería y también otros familiarizados nieros-civiles como Palladio, Fontana y con las obras de canales. De esta manera otros y con los arquitectos-ingenieros-mili- comenzó en Francia un nuevo movimiento tare s como Leonardo d e Vinci. T ambién de reconstrucción, teniendo como base la marca este período la primera pugna en - experiencia adquirida en las obras de es tre la ingeniería civil y la arquitectura, tilo gótico. Los talentos importados de  porque ante rior mente no había más que Italia contribuyeron grandemente para que un operario: el maestro de obras, o arki- los franceses se elevaran hasta ocupar el tekton en griego, que lo mismo era civil  prime r lugar en la ingeniería. lugar que l

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retuvieron cerca de trescientos años, casi hasta principios del siglo XVIII. La historia que se trata de narrar prin cipió con el canal de Crapone, el primero construído en Francia (1557-61) y termi nó debido a la revolución. Siguió la Gran Bretaña con su máquina de vapor inventa da por Watt (1781) y con la locomotora de Stephenson. La supremacía de los franceses durante esos trescientos años, aporta a la historia uno de sus  prin cip ale s ele men tos y cubre toda una época que a la vez fascina e interesa, siendo uno de los períodos más importantes en el desarrollo de la ingeniería. Probablemente la obra primera de ca  pital impo rta ncia fu e el can al ya menci onado. Sus aguas aún hoy día fertilizan la sección de Crau, al este de la desembocadura del Ródano, sección que es cono cida como el Saha ra de la Provenza. De igual importancia debe considerarse el ca nal de Briare, construído en 1638, que une los valles del Lcira y del Sena. Esta obra, que pasa por una eminencia del terreno, debe ser considerada la primera en su género. En este mis mo período que pertenece a la época de Luis XIV y de Richelieu, Métezeau, el “Real Arquitecto e In. geniero , construyó el primer rompeolas. Bajo el patrocinio de ese monarca so  brevin o una er a de oro par a la cons truc ción, El fastuoso Luis deseaba que su nombre figurase como complemento de las obras más grandiosas de su siglo. Colbert, su hábil ministro de hacienda, logró persuadirlo de que prestara su ayuda a Riquet, el recaudador de contribuciones convertido en ingeniero, que se sacrificó y sacrificó su fortuna en la magna obra de los tiempos modernos: el canal del Mediodía. D e 1666 a 1681, trabajó incesantemente en este canal que tiene una longitud de 254 kilómetros y más de cien compuertas y corre a través de toda la garganta de Francia, desde el norte con España, Burdeos, en el Atlántico, hasta Cette en el Mediterráneo. Este proyecto que comprende la construcción de un depósito de agua en una cima, fue, en su época, tan grandioso y atrevido como en la nuestra lo es la construcción del canal de Panamá. Preguntad a cualquier escolar francés  por sus grandes hombres y siempre inclui -

rá a Vauban. Hast a Voltaire, que no es muy conocido por su  prodiga lidad en sus elogios, llamó a aquel el “primero de los ciudadanos y el  pri mer o de los inge nier os” y se dice que Saint Simon inventó para el mismo el título de “patriota”. Vauban La sido considerado como el autor de la fortaleza y él mismo trazó las líneas de las que en las fronteras de Francia, su  pieron tod av ía res ist ir los at aqu es del ene migo durante la guerra mundial. Edificó Dunquerque y lo fortificó por medio de diques, siendo esta obra grandiosa la pri mera en su género, confinando la corriente del mar en una sección estrecha dando for ma a los canales que servirían para dar  pa so a los navíos de su rey. Est a era su obra  pred ile cta y muri ó, afo rtu nad ame nte , ant es de que Inglaterra obligara al monarca fran cés a demolerla, haciendo desaparecer ese monumento que fue un triunfo del genio y de la pericia de Vauban. Pero s u labor no se concretó a la cons trucción de esas grandiosas obras, pues observando que muchos ingenieros traba  jab an agr ega dos a var ios com and ant es mi litares, sin organización y pudiendo decir se que individualmente, creó en 1672 el Cuerpo de Ingenieros del ejército francés, despertando el sentimiento de lo que la unión significa, entre todos aquellos que anteriormente estaban aislados. Acostum  bró a es te cuer po a no busc ar ja más nin gún provecho personal y a tener siempre  pre sen te qu e la ing eni erí a es un trabajo de valor incalc ulable como servicio público y que al confiársele se le hace un ho nor, al cual debería corresponder con ab soluta fidelidad, buscando honesta e im par cia lme nte la mej or soluc ión de los pro ble mas que le s fu er an enco menda dos, se gún su leal saber y entender, teniendo siempre en cuenta las circunstancias económicas que encontraran. Su  bené fic a influencia aún perdura y la actuación de los ingenieros de la época presente, no es sino el eco de la tradición que Vauban nos legara con el notable ejemplo de su vida y de su obra. También bajo el reinado de Luis XIV fue construído en París el Puente Real  so  br e el S en a, para lo cual fue llamado Fran cisco Romain, monje holandés, en el año de 1685. Introdujo nuevos métodos de ci-

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El Puente Real sobre el Sena. París. Construído en 1685.

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mentación para los machonee. Como las está a l nivel de las paredes del desembarvías públicas habían sido trazadas de muy cadero. Se obtuvieron varias vías adicioatrás y las exigencias eran ya otras, se nales construyendo arcos extremadamente vino al convencimiento de la necesidad de  planos , con una eleva ción de 3.90 metros, midiendo el arco  36 metros. Esto originó contar con un mayor número de puentes, una reducción en la componente vertical lográndose mejores proyectos que trajeron  prác tic amen te la edificación de los de arco de los pilares, permitiendo machones más de piedra y la reforma en los sistemas altos y esbeltos. La presión en el riñón del arco es muy fuerte y Perronet empleó de cimentación. la piedra dura de Sallaincourt: el mismo E n 1761 fue organizado el famoso cuer po de “P ue nt es y Cal zada s”, sie ndo s u riñón es muy grueso y prácticamente ocu primer inge nier o Jacobo Gabriel, cuya obr a  pa tod o el espa cio ent re el intradós y el  princi pal es u n pue nte de un solo arco  piso. Los machones soportan todo el peso que cruza el Eoira en Blois. A Gabriel lo del puente y  par a afi rmar lo más se ancl asucedió Perronet, el gran constructor quien ron en las paredes del desembarcadero. Del nivel de las aguas bajas al del piso, ya había resuelto un problema que duranre algunos siglos había intrigado a mu- dos tercios de la superficie están calados, chos ingenieros. Los antiguos puentes ro- haciendo contraste con las antiguas obras manos eran obras sólidas e imponentes, romanas que tenían un mínimo del 40% con  pesa dos mac hone s qu e ofre cía n formi - o menos d e vía fluvial y como máximo el dable obstrucción al paso de las avenidas. 50%. Esta fue la última obra de Perronet, a Sus arcos, altos y de amplio centro, reque rían excesivas maniobras cuando la co- quien trataremos de describir aunque sea rriente era baja. Muchos de esos puen- someramente, por juzgarlo de interés : fites, prácticamente, no eran sino unas pre - guráoslo un anciano de más de ochenta sas con orificios para permitir el paso del años, sentado a la ventana de la casa que agua. El  pro ble ma, pues , cons ist ía en ob- habitaba a la orilla del Sena, dominando tener la mayor via fluvial posible: la me- la vista del puente. Chézy, el famoso aunor obstrucción para la corriente bajo un tor de la fórmula hidráulica que lleva su  pue nte plano y al nive l del piso, aprove - nombre, era su  braz o der ech o y el encarchando un solo arco. E n consecuencia la gado de la construcción bajo el ojo avizor obra más famosa de Perronet es sin du - del maestro. La obra, que fue el más leda el  puen te de 1a Concordia. Cruza el gítimo triunfo de la gloriosa carrera de Perronet, s e principió bajo el reinado de Sena en cinco tramos y su  piso supe rior

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Luis XVI, cuyo nombre debía de llevar; mas antes de concluirla, el infortunado rey había sido guillotinado. Esto no obs tante, fue terminada y muchas piedras arrancadas de la Bastilla sirvieron para el objeto. Perronet, antes de morir, tuvo el  placer de verl a ter min ada ta l como la contemplamos hoy día.  No hay qué olvidar que éste carecía de medios para computar las medidas de los arcos. Su  proyecto fue,  pues, un monu men to de ar te produc to de un genio constructor, más bien que de la ciencia. Mas no  por eso su obra deja de ser perfecta, grandiosa, y tan es así, que el ingeniero moderno, contando tan sólo con la materia prima, no  podrí a mej orar la ni menos aún superarla. Al referir el nuevo procedimiento de ci mentación para machones, hemos mencionado a Romain y no deb emos olvidar a La be yl e tam bié n fra ncé s qu e en 1739 fue llamado a Londres para construir el puen te de Westminster sobre el Támesis. De 1709 a 1823 este puente legendario estuvo al servicio público y hasta 1739 era el único con que contaba aquella populosa

urbe.  No habiendo entre los británicos conocidos especialistas en la materia, La beyle fu e lla mado. Colocó los cimientos de los machones sobre pilotes y los mismos machones en cajas sumergibles de lados desmontables. Perronet, por su  parte, generalmente aprovechaba una ataguía que desalojaba el agua; y excavando a. varios metros de profundidad, introducia los  pilo tes. De Voglie y de Cessart contemporáneos de aquellos, merecen igualmente que nos ocupemos de su  personal idad. El  pri mero f u e autor de veri os aparatos para cortar pilotes bajo del agua, lo cual, combinado con las cajas de Labeyle, significaban una grande economía en la construcción de los machones. De Cessart empleó enormes conos, o  bien caja s flotantes, cuando construyó el rompeolas de Cherburgo. A los ingleses Cochrane y Brunel se debe el uso del aire comprimido y las defensas de los cimientos profun dos; pero los franceses Romain, Labeyle de Voglie y otros, deben ser considerados los iniciadores, los creadores de los fundamentos de la práctica moderna.

El canal de Briare. (1638)

La máquina de Marly.

Como queda anotado, la expansión de se debe la invención de lo que actualmen los caminos carreteros en Francia comen- te se conoce como base  telfor d. Es verdad zó en época bien temprana: puede decirse que los métodos de ambos han sido subsque con Enrique . IV, quien llamó a Sully tituídos por el de McAdam que es más el “gran viajero Las antiguas vías ro- económico; pero el que merece toda la famanas, estimadas en un total de 19,200 ki - ma y puede considerársele autor de las carreteras modernas, es Trésaguet, cuyo lómetros, habían ido desapareciendo paso a  paso, has ta qu e el mis mo Sul ly se dió a nombre, por desgracia, es casi desconoreconstruirlas. Bajo Luis XIII estos tra- cido en esta época.  baj os sufr ier on algún ret ras o y el servic io En lo que se refiere a maquinaria y a quedó descentralizado, pasando su dominio instrumentos, también se hacen notar los nuevamente a depender del tesorero ge- franceses. Ramelli. el soldado autor, de neral. Reinando ya Luis XIV y debido sin origen italiano, publicó en 1588 su libro duda a la perspicaz visión de su hábil sobre aquella, bellamente ilustrado con ministro Colbert, fue restaurada la empre - hermosos grabados. Jacobo Besson publicó sa de Sully; pero volvió a decaer posterior - también un libro semejante casi al mismo m e n t e ; m as e n 1705 nació el “Sistema Na- tiempo. Estos libros, aun cuando descricional de Caminos de Francia”, que ha  ben inv ent os imp ort ant es, mucho s de ell os actuado hasta nuestros días.  ja má s fue ron pues tos en prác tic a: pero h ay Por lo que se refiere a “Puentes y Cal- otros, como las bombas, por ejemplo, que zadas”, en su organización sobresalen dos emplearon para elevar el agua de los arronombres ilustres : Perronet, su verdadero yos para surtir las fuentes públicas, hafundador y Trudaine que fue el director  bie ndo teni do gra nde acept ación. La lla desde 1748 a 1769; pero aun hay otro: mada Samaritana, famosa en París, que Trésaguet, notable como constructor de ca- sirvió para extraer agua del Sena hasta minos. Muchas obras importantes se le 1830, era una de las descritas por Ramelli. deben; pero la que le dió fama merecida, Pero la más grandiosa de todas, fue sin duda aquella denominada “bosque de hiefue el informe que presentó al congreso de Puentes y Calzadas, donde por vez pri- rro y de madera”; la máquina de Marly, mera se hizo la descripción del moderno construída para allegar agua a los jardines camino de piedra. Pare ce ‘obvio afirmar de Versalles en los tiempos del Rey Sol. Por lo que toca a la agrimensura, vieque a Trésaguet más bien que a Telford

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nen a la memoria los nombres de Pedro Vernier, inventor del aparato que s e usa actualmente en el tránsito y en otros instrumentos. El de Picard, autor de la agri mensura geodésica, etc. Tanto el primero, como el segundo, de la Hire y otros, inventaron instrumentos niveladores con an teojo. L a burbuja de aire para los niveles, era ya conocida: mas no se usaba mucho, empleándose otros ingeniosos medios para obtener una línea horizontal. También en la hidráulica se han distinguido los franceses. Enrique Pitot (16951771), es, a no dudarlo, uno de sus más notables precursores. Tuvo que sostener enormes luchas con los teóricos de su tiempo, objetando las laboriosas, pero erró neas teorías acerca de la distribución de la velocidad en las corrientes, que aquellos habían puesto en boga. Con el propósito de que tales corrientes fueran medidas, inventó el tubo que lleva su nombre (1732). Desde esta fecha los perfeccionamientos se hicieron gradualmente y en 1875, Chézy, a quien hemos conocido como el  brazo dere cho de Per ron et , propuso la notable generalización expresada en la fórmula que todavía se usa y que también lleva su nombre: V=C RS Después toda la atención se concentró en el valor C; y la obra del especialista en hidráulica, el contemporáneo Bazin, contribuyó notablemente a la solución de éste y de otros importantes problemas. En 1856, Darcy, nombre familiar a los ingenieros hidráulicos, publicó su obra sobre el abastecimiento de aguas a Dijón, su ciudad na tal; obra de gran importancia por lo que toca a la mayor amplitud dada a los conocimientos relativos a la circulación del agua en las tuberías. Los individuos citados en último térmi no, puede decirse que son casi contemporáneos de nosotros: y nuestro propósito ha sido más bien referirnos a los que fueron  pre cur sore s de la ing eni erí a - en Francia. Como pudiera surgir la pregunta de  por qué esa ciencia, en los albor es de! siglo XIX sufrió un eclipse, la respuesta que damos, es que el fenómeno se encuentra no sólo en el hecho de que los fundadores de la nueva era de la fuerza mecánica Watt y Stephenson fueron ingleses, sino también en las difíciles circunstancias eco-

nómicas -  porq ue atr ave só Francia después de la revolución y de las guerras napoleónicas; y, por último, en el cambio catetodos seguidos, aun en la La Academia de Ciencias fundada por Colbert en 1666 obtenía cada vez mayores progresos en la materia y en los años de 1800 a 1819, ocupaban lugar  promi nent e la Esc uel a de Pu en te s y Calza das y el Cuer po de Ingenie ros. Coulomb, de Prony y otros colegas, contribuyeron nota  ble ment e en el adelanto de las teorías matemáticas, en l a estructura y e n la maquinaria. Estas teorías después fueron ampliadas y perfeccionadas por el gran maestro escocés Rankine en su “Mecánica Aplicada”. Tales estudios eran esenciales  p o r  los cam bios que gra dua lme nte ib a suf rie ndo la ingeniería en su técnica, pues de mero arte se transformaba en una ciencia. Pero estos individuos, ante todo, eran teó ricos y favorecían más las matemáticas que las construcciones, encerradcs en un estrecho circulo que de ningún modo les  permi tía sa li rse de él y menos los anima ba para ded ic ar se a la construcción. Al fin la mera teoría decayó y las construc ciones quedaron en suspenso. E1 adelanto lo obtuvo Inglaterra y también lo obtuvieron algunos países d e América. Entre tanto, Francia tan solo construía unos cuantos canales, y no fue sino hasta Napoleón III que la moderna ingeni ería alcanzó unverdade ro progreso. Así fue como la supremacía de Francia pasó primero a la Gran Bretaña y después al nuevo continente, a través del Atlántico. Sin embargo, nunca se debe ol vidar que la ingeniería en Inglat erra tuvo  por base los ade lan tos alcan zados en Fra n cia en el siglo XVII y que los nuevos mé todos de matemáticas así como los racionales de dibujo, etc., nacieron también en Francia, y no importa que posteriormente hayan sido perfeccionados y ampliados por  profe siona les de ot ros paíse s, pues est o no les resta a aquellos el mérito a que son acreedores. Con toda seguridad todos los elementos que contribuyeron al progreso de la ingeniería, y que dejamcs someramente des critos, han sido más que suficientes para  just ifi car nu es tr a devoci ón hac ia aquell os grandes hombres de la Francia, que mere cen ser colocados en un lugar preeminente del Templo de la Fama.

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C .

C Elementos de Riqueza  Po r Ro be rt o QUIROS

DRsu área que sólo alcan za la cifra de 50,952 kilómetros cuadrados, el Estado de Campeche ocupa el décimo séptimo lugar, comparada la s u p e r f i c i e con la de las demáa Entidades. Campeche muy al contrario de lo que se le supone por su topografía monótona y sin interés, es un Estado importante en los ramos de agricultura e industria, cuyos  product os son de exc ele nte cal ida d muy estimados en los mercados extranjeros. Su  producci ón en los ram os enunc iado s  bas ta para ha ce r que el comercio de ex portac ión se a reg ula r y teng a vida , y lo sería mucho más si no tuviera que la mentarse, a más d e la falta d e braceros indispensables para el fomento de las fincas y la industria, la dificultad de comunicaciones. En efecto, la industria no puede consi derarse corno embrionaria en el Estado: allí agricultores e industriales frecuentemente han unido sus esfuerzos para re solver sus  prob lem as má s urge nte s, y así han podido recurrir a1 extranjero o al resto del país donde por el exceso de trabajado res o  por los ele men tos de vida, pue de conseguirse e! mayor número de éstos, y de ese modo año tras año, el Estado se ha visto visitado por nutridas partidas de bra ceros que han venido a traer su contingente a las fincas agrícolas o sus luces para  perfec cionar la s in dus tr ia s local es. Así es como han prosperado las grandes negociaciones de  pal o de tinte y ma-

 MA RT IN EZ .

deras preciosas, de aceites y resinas, de chicle y gomas, de henequén y caña de azúcar, de tabaco y algodón, de cereales y frutas, de curtientes y ganados, de salinas y pesca y sobre todo las constructoras de embarcaciones de poco tonelaje y las explotadoras de los feraces y grandes bosques: todo lo cual hace de Cam pech e un a coma rca ese nci alm ent e agrícola  por su situación y sus condiciones topo gráficas. La misma circunstancia ha contribuído  para qu e prosp eren las dem ás ind ust ria s, aún las pequeñas tan necesarias a la vida; todas, hasta hace muy poco, prácticamente habían permanecido como estacionarias o en período de iniciación. Así pues, en la capital de Campeche, están florecientes las casas empacadoras de mariscos. los aserraderos de madera; l as fábricas de ladrillos y tejas, de pastas alimenticias y galletas; las cordelerías movidas a mano y con fuerza motriz: las fábricas de hielo y cigarros, las casas confeccionadoras de ob jet os de concha y perla, y la del famos o vino de Marañón que en otro tiempo mereció honrosas distinci ones en las exposiciones de París, Atlanta, Chicago y San Luis; los molinos de maíz y fábricas de  jab ón y vel as ; la alf are ría y las fábri cas de sombreros de huano y jipijapa traba jad os con perfec ción y tej ido s con una fi nísima variedad de palma. Son muy parecidos a los de Panamá y duran muchísimo tiempo. Los naturales de Bekal los hacen s subterráneas: dicen que teria prima no pierda su ductilidad, por la temperatura exterior.

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Los regionales fabrican también obje tos domésticos de  bar ro cocidos , fil igra nas de oro y de plata y otros muchos objetos de carey. Otra especialidad de aquellos peninsulares son sus artículos de yute. Esta planta y el hule fueron ensayados con éxito favorable y hoy se cultivan con regular provecho, especialmente el segundo que se encuentra en los bosques vírgenes del Estado. También la uva encuentra un suelo fa vorable en esos terrenos. Del puerto de Ciudad del Carmen se exportan grandes cantidades de maderas finas, especialmente te cedro y caoba, cuyc valor sólo en 1907 fue de $1.600,000.00, además en el mismo año exportaron también unos $579,000.00 de chicle y más de $203,000.00 de palo de Campeche (Hermoseylum Campechanum). Hay que agregar a estos productos los de la palma del coco, de la semilla de la higuerilla, del ganado, del cacahuate, del carey, de las plumas de garzas, de los cueros de res, de las pieles de venado y de lagarto, etc.,  pudi éndo se dec ir por lo tanto, que ese puerto es de importancia. Se asegura que en la playa de esa isla desde la barra de Sa n Pedro hasta l a punta de Jicalango, e n la parte  N.O. se encuentran indicios de la existencia de pe tróleo. Otra especialidad de Campeche es el cazón (squalus carcharias) pequeño tiburón, del cual preparan platillos sabrosos. Los habitantes de Campeche, dándose cuenta del aislamiento en que vivían co mo lo prueba el hecho de que muy grandes capitales extranjeros habían afluído al Estado: empezaron por dar toda clase de garantías a los inmigrantes y a sus in versiones de capital: después dieron pre ferencia a los capitales dedicados a la in dustria en los ramos de más fácil explota ción o de mayor necesidad y consumo, todo por un  positi vo y patr ióti co des eo de hacer que el comercio de Campeche vuelva a adquirir su auge de pasados tiempos, en que llevó sus operaciones a Europa, Es tados Unidos y al resto de la República, cuando no existiendo el puerto de Progre so, el comercio de la ciudad de Campeche surtía por completo a la península de Yu catán, Chiapas y Tabasco, toda vez que el

 puerto del Car men daba sal ida a los  productos del sur de! Estado y de gran parte del último de los mencionados. En la actualidad, la importación extran  je ra se re duc e princ ipal ment e a arte fac tos de fierro, maquinaria, automóviles, me dicinas de patente, tejidos de lino, seda y lana, vinos, aceites, armas, bonetería, cristalería, orfebrería, mueblería, abarrotes y ferretería, etc., etc. : no mencionamos los otros productos locales que envía a los diversos Estados de la República y que igualmente importan muy fuertes sumas,  porque en cambi o rec ibe los artículos nacionales que no se producen en las tierras, fábricas y talleres campechanos; sin em  bargo, los rendimientos que solamente re ciben los puertos de Campeche y el Car men por concepto de derechos aduanales mensualmente, ascienden a una cantidad que fluctúa entre los $90,000.00 y . . . . . .

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$120,000.00.

El estable cimiento de sucursales bancarias comerciales y agrícolas ha venido a resolver el  probl ema que parec ía insolu  ble y a facilitar considerablemente la ex plotación de la minería que es una fuente de riqueza en los litorales del Estado, por su abundancia de salinas entre las que se anotan como principales las de Campeche y El Real. En la sierra Alta, existen yacimientos calcáreos, sílex, mármol y alabastro.

COMUNICACIONES Siendo plano en su mayor parte el suelo del Estado, abundan los caminos carre teros y solamente en ciertas regiones pantanosas o de terreno quebrado, se hace uso de veredas y de caminos de herradura. En la actualidad s e sigue con beneplácito general, un amplio programa de carre teras que faciliten el tráfico de automó viles, el cual cada día aumenta de manera considerable: una de ellas es la de Cam peche -Ler ma-Ch ampot 6n, que fue inau gu rada recientemente, programa que los cam pechanos ll eva n a cab o sab edo res que la falta de caminos cómodos para carros y de vías fluviales, fue causa de que la industria quedara en un estado incipiente y la agricultura tuviese poco desarrollo, pues desde el momento en que los gastos de

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Río San Francisco, aguas arriba. transporte eran crecidísimcs, ni los productos industriales ni los agrícolas podían so portarl os. Esta experiencia ha dado por resultado el fomento también de la magnífica red fluvial y las lagunas para hacer los trans  porte s de ma de ra y de  produc tos agríco las, o para facilitar comunicaciones entre los poblados ribereños. Quizás por esta circunstancia, es la naval, una de las industrias más antiguas y que con más constancia y provecho subsiste en Campeche. En los astillercs del  barri o de Sa n Rom án se construyen casi todas las embarcaciones de alijos que tra baj an en es e pue rt o y en el de Prog res o y que hzcen tráfi co de cabotaje entr e Celestún, Campeche, Champotón, Laguna, Frontera y San Juan Bautista. Algunos  buque s de may or porte ha n sal ido tam bié n de esos astilleros, así como el gran nú mero de lanchas o cayucos pescadores, cu yo objeto constituye otro ramo especial de industria, que daría muy pingües rendi mientos haciéndolo en mayor escala y ba jo hábil dirección. Como dato histórico hacemos constar que el primer bu que que llevó la bandera mexicana a los mares de

Europa fue construído en esos astilleros y  pert ene cie nte a la mat ríc ula de Campe che. El  pue rto de El Carmen es sumamente  pint oresc o y lleno de flores: la ciudad es  peque ña, si cuenta con poca población, esta tiene mucho movimiento y los habitantes son expansivos y cordiales. Esa ciudad merece ser citada como modelo por sus condiciones especiales y  progresistas. Pueblo tan industrioso como el que nos ocupa, natural era que tampoco descuidara el ramo de ferrocarriles, todo lo contrario, ha cuidado con esmero de ellos y al presente cuent a con vía férrea que une los municipios de Calkini, Hecelchacán, Tenabo y Campeche, unidos con la capital de Yucatán, los cuale s presta n valiosa ayuda a1 comercio de aquella región. En otros municipios existen pequeñas líneas  part icu lar es que se empl ean para el acarreo de los productos agrícolas. En 1906  por inic iat iva part icul ar se empezó la construcción d el ferrocarri l Campechano, S. A., de vía angosta que va de la ciudad de la capital a Bolonchenticul en sus límites con el Territorio de Quintana Roo en un trayecto aproximado de 180 kilómetros; vía

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de vital importancia, pues la gran canti dad de productos que suele extraerse del  par tid o in dic ad o, qu ed ar ía es ta nc ad a allí  por la falta co mp le ta (e n ti em po d e Iluvias) de caminos transitables, y por la ele vación de las  pre cio s de los fletes que es una consecuencia de lo anterior. Muchas fincasde campo tienen para su servicio vías férreas sistema Decauville que como la de "La Montañesa " en Champotón, están abiert as al servicio público y recorren ex tensiones hasta de cien kilómetros. En la ciudad d e Campeche hay tranvías urbanos que atraviesan la ciudad y barrios en todas direcciones, y otro en el Carmen que tiene una doble vía que va de uno al otro extremo de la  pob lac ión . Sin embargo, de lo que dejamos dicho, es una verdadera lástima que tantas riquezas como abun dan en e l Estado, queden improductivas sólo por las difíciles vías de comunicaciones y por la escasez de brazos, y es una lástima como antes dijimos porque los terrenos de Campeche son mucho más fértiles y ricos de tierra vegetal que los de Yucatán en general, tanto que la Comisión Nacional de Irrigación no obstante su amplio programa ha creido conven iente dar preferencia a otras

regiones que carecen de agua completamente. De ahí que el riego es desconocido en el Estado, aunque posible en algunos lugares donde resultaría poco costoso. . Hasta ahora parece que han principia do por abrir pozos artesianos convencidos d e su gran utilidad. Las líneas telegráficas y telefónicas y el servicio de correos completan las comunicaciones del Estado. Los  primeros un en todas las principales cabeceras y extienden su radio a las estaciones ferrocarrileras y  pue rto s, si en do la ofi cin a rad iot ele grá fic a de Campeche la  m á s importante; los se gundos, llevan s u red a las fincas rústicas ligándolas con las ciudades como Campe che, El Carmen, Champotón, Hecelchakán y otras poblaciones de segundo orden, en todas las cuales no faltan oficinas de correos de l Gobierno Federal.

LITORALE Otra de las condiciones que sin duda ha contribuído a ensanchar las comunicaciones del Estado, es su extenso litoral que tiene un desarrollo aproximado de 360 kilometros. el cual bañan las aguas del

Desembocadura del Río San Francisco.

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Lugar donde desemboca el Estero de San Francisco.

Golfo Mexicano, que forma la amplia Sonda Campeche, de aguas tranquilas en su escaso fondo. Con excepción de Campeche y Champotón donde las costas son el e vadas, las playas, en general, son bajas y arenosas, hasta presentar en algunos luga res intransitables pantanos que obligan a las embarcaciones de regular calado a permanecer a cierta distancia del puerto. El  per fil ex te ri or de la costa ofrece bellísimas perspectivas que admiran todos los navegantes que tocan en ella, en la cual se encuentran las puntas de Ximún en el canal que da entrada al estero de Celestún, Calín, Nitún, Bakú, Champetén, Sambulá, Maxtún (Grande y Chico), Xpicoi Los M o r r o s . S h ió , P u nt a S e n P u e r to Escondido, Xicalongo, Seiba, Sanil, las barras de P uerto Real, Principal, San Pedro y San Pablo; Puertos de cabotaje de Champotón, Seybaplaya y la Aguada: flu viales: de Palizada y Sabancuy: y de altu ra los de Carnpeche y el Carmen que se considera por sus condiciones físicas, co mo el mejor del Golfo debido a la abun dante vegetación de sus  pla yas , Respecto de las lagunas' debemos mcncionar de modo muy especial la de Tér-

minos, principal y quizás única que asi  pu ed a ll am ar se ; mi de un a exten sión d e 82 kilómetros de noroeste a sureste por 49 en su mayor anchura y tiene un fondo d e 12  pie s en la entrada de la barra hasta 32 y 4 pie s ing les es en el pu ert o mismo,  pu di en do at ra ca r a los muelles embarcaciones d e alto porte. Esta amplísima albufera, está constituida principalmente, por las islas del Carmen y la Aguada; es in dudablemente la más  be lla , en vir tud de los amplios estuarios d e los ríos que en ella desaguan, y las lagunas internas que f o r m a c om o l a s d e P o m , A st a ta y S a n Carlos. En cuanto a islas, Campeche tiene pocas, pero muy importantes por su agua dulce y pura: Ea Aguada tiene una área de 20 kilómetros; 12 del Carmen que alcan per fic ie de 150 kilómetros cuaiendo una longitud de 33 kiló metros y anchura que varía entre los 3,900 y 4,000 metros. En esta misma se encuentra la ciudad del mismo no m  br e y la s pe qu eñ as is la s de Pi ed ra , Ja in a, Aguada, Bermeja, Arenas, Arcas, Tridngulo y Alacranes. Tiene la  pa rti cul ari da d de ser una isla muy pintoresca, rica, de

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 produc tos muy var ia dos y de una floya y guna Jalaconolpoch, el cual atraviesa l a de fauna exuberante. Un trabajo inédito del Inonchac y desemboca en la bahía de Mala Dr. Campos, hablando de la fauna de la Pelea. Apenas si se encuentran algunos isla, cita una infinidad de gallináceas, co-  pequeños mana nti ale s. La zona del sur mo la gallina  de Gu;nea (númida meleacambia completamente : se distingue por gris), el Faisán de América (crasc gloví- su sistema fluvial y lacustre que la hace cera, etc., muchas variedades de zoófitos, fertilísima. Las corrientes principales son de crustáceos, ofidios, quelonios y pescael río Palizada, el Chumpan, cuyo curso dos. En la {lora menciona muchas varie- tiene 95 kilómetros, el Mamantel, (que dades de leguminosas, de cucurbitáceas y recorre una extensión de 98 kilómetros de árboles frutales: entre los últimos. va- atravesando bosques de maderas precio rias clases de zapotes y la palma de coco. s a s y tierras de labor y engrosado su cau De estas palmas hay en la isla unas dal con los afluentes que recoge a su  pa200,000, tcdas en producción. so desemboca en la laguna de Palas con Una de las plantas que se desarrollan una anchura de 250 metros), el Candela mejor en la isla es el limón del cual nadie ria, (es el más importante por el volumen hace caso, a pesar de que pudiera consti- de sus aguas, y su largo curso y su na tuir una óptima especulación. cimiento lo fijan los geógrafos en la Sie rra del Sur, Guatemala. En su desembccaHIDRBGWAFIA dura, alcanza una anchura de 150 metros), el Sabancuy (separado del mar por una El Estado de Campeche como todos los faja de tierra de poco más de un kilómetro, de la República, carece de un vasto sis- tiene una anchura de 300 metros), y en tema hidrográfico, como puede verse por tre las de menor caudal que propiamente sus dos zonas perfectamente caracteriza- son arroyos: el Chepe; el de las Piiías, el das, limitadas por el  paral elo 19. La del Marentes, el Chibojá Chico y Grande, el norte es totalmente árida y solamente la Lagartos, el de la Viuda, el Chumparto, el  bañ a el río Champo tón que nac e en la la - Monteras y el de Piachanché, el San Ge-

Carretera Campeche -Lerma. Lugar frente “Buenavista”. Tramo inaugurado 19 de enero de 1930. Longitud 1,250 metros. Mak - Adam getrolizado. ronimito y el Río Viejo. A excepción de sin embargo, las cuencas de los ríos que dejamos descritos y el suelo se levanta estos dos últimos, todos son navegables en la estación de lluvias y flotantes en la hacia estribaciones de la serranía iimítrofe seca, Es notable y muy pintoresco el río con Guatemala, aunque siempre dominan San Francisco que desemboca en el este - las planicies áridas donde sólo se encuen ro de ese nombre y cuyas ilustraciones tran los cenotes, esos ríos subterráneos que generalmente pierden sus aguas de  puede n ve rse en es tas mis mas páginas. Es muy notable también el manantial  bido a l as dif icu lta des propias del terreno. La Sierra Alta, situada en la región de agua potable en la población de Bolonchenticul, que brota precisamente en la norte, aparte de  si13  bell ísi mos pano rama s  profun da gru ta Xtacu mbil Xuna án, el cual se distingue entre otros lugares por estar tiene varios depósitos cuyo líquido oire- cruzada de hermosas barrancas cubiertas ce distintos aspectos y calorías, y en al- de vegetación, y siguiendo al noroeste va guno el curioso fenómeno de variar cons - a unirse con la Sierra de Maxcanú, en tantemente d e nivel, lo que hace suponer Yucat án. que existe allí una corriente subterránea.

GEQLQGIA

OROGRAFIA

Carretera Camgeche - Chenes. Lugar donde comienza la Carretera. Puente de San Francisco, sobre el camino real de “Kalá”,

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La situación de Campeche, comprendi da entre los 179 48’44” y 2” 47’08” de la titud norte y los 6” 38’ y 9” 4’ de longitud oeste del Meridiano de México, da clara idea de la topografía monótona en la ma, yor parte del Estado. Sus extensas llanuras, que poquísimas elevaciones del terreno ofrecen, demarcan

Los  perí bdos Pli oce no y Cuaternario como a todo el país dan la fisonomía del suel o de Campeche. La5 erupciones volcánicas suministran masas enormes de material volcánico y la activa denudación de abundantes sedimentos que se mezclan con él. Así como la mesa central casi se llena de numerosos lagos, en los de Campeche

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se desarrolla prodigiosamente ia vida vegetal y la d e los gigantescos vertebrados. En la mesa central la  base d e las cad enas montañosafi dirigdas hacia los océanofi se ensanchan, formando una faja alargada de sedimentos marinos : más tarde al despren derse Yucatán de las Antillas, Campeche forma parte de esa porción, en tanto que 10s grandes volcanes elevan sus vértices hasta la región de las nieves perpetuas. En suma, el Estado en sus municipios H ec el ch ak án , C a m p e c h e , H op el ch én y Champotón localizan el Terciario inferior, siendo l a roca dominante, las calizas con yeso y pedernal: en Hecelchekán también se encuentra del Plioceno una faja angosta de caliza blanca, roja y amarillenta, que en insignificante proporción contiene fósi les: en Charnpotón y el Carmen cerca de laguna de Términos, es de notarse a sim ple vi st a el ter ren o d e al cv ió n del período Cuaternayio, en que descansan aquellos . . . municipios.

CLIMATQLQGIA Rodeado por el mar en una gran extensión y teniendo pocos ríos y muchos lagos y  pa nt an os, la temperatura del Estado e s elevada y el clima insalubre en varias regiones, muy propicio a l  paludism o y otras enfermedades endémicas. Sin embargo, en los litorales suavizan el clima las brisas y terrales, y en el interior, las lluvias y el rocío. Contribuyen mucho también a modificar la climatología los vientos perZdicos que durante las 24 horas aumen:an o dis minuyen la temperatura extremosamente, que s e traducen muchas veces en chubascos molestísimos : aunque propiamente las lluvias se desatan en la parte sur ocupada  por las grandes bosque s y ríos, pues en el norte si son abundantes es debida al sistema orográfico que dejamos descrito, en tanto que en el centro y el occidente las precipitaciones escasean notablemente. Puede decirse que la  porcent ua l de la mortalidad en el Estado no es muy elevada, acaso porque n o hay muchos extran je ro s. Para que éstos puedan aclimatarse en esas costas, deben observar la más es crupulosa higiene, tom ar sólo agua hervida

y filtrada, pues los pocos manantiales que hay allí hacen que se beba agua llovediza, no hacer uso d e hielo que puede ser fa  br ic ad o con aguas impu ras , no queda r ex  pu es to s demasiado a los rayos del sol, es  pe ci al me nt e e n los  pr im er os ti em po s y abstenerse en general del abuso de los Iicores y de la vida desarreglada.

CQNCLUSION Conocidos en parte lcs grandes recur s o s naturales del Estado de Campeche y que bien constituyen un poderoso y constante incentivo para capitaies extranjeros y hombres de empresa deseoeos de obtener en poco tiempo remuneraciones satis factorias, cabe decir que los habitantes de esa entidad con su carácter eminentemen te hospitalario y franco, contribuyen al progreso.  No  parece sino q u e quieren seg-iir manteniendo el abolengo que los distingue desde cuando Campeche formaba comn un Estado independiente, del extenso reino de los Mayas. E n efecto, es e pueblo laborioso a fuerza de constancia, trabajo e inteligencia habíz alcanzado su mayor esplendor y desarrollo y no fue sino bajo el reinado de Totul Xiu después del descalabro sufrido por los c on quistadores en la Bahía de Champotón o Mala Pelea, cuando aquel pueblo traiciona do  po r sus  j ef es hu bo de someterse y consentir en que Francisco de Montejo el 4 de octubre de 1.540, fundara la ciudad de Campeche, sobre las ruinas de Ximpech, que dió origen, por corrupción, 21 nombre que actualmente llevan el Estado y su ca pital. Desde entonces, esta porción territorial h a venido participando las múltiples viscisitudes que ha sufrido el  país, pe ro si em  pre, sus hijos han demostrado un relevante patr;otismo y un credo lib era l en el  bu en sent id o del vocablo: que a la vez que han sabido sostener con celo su inde pendencia h a n defendido con val entía las instituciones de la República. De esto son mudos testigos el gran número de ca riones de fierro que aun se encontraban ha poco en frente de los zaguanes de los mejores edihicios particulares y de las ofi cinas péiblisas: é s t o s se veían en el suelo,

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casi enterrados con la boca ya inúti!9 abier ta en un gesto d e última y estéril amenaza; en las esquinas de las c d e s o tirados acá y acullá como máquinas inservibles. Si aquellos centenares de bocas de fuego hu bieran podido ha blar , habr ian contado au daces correrías de corsarios que en otros tiempos plagaban el Golfo de México, y desesperadas defensas que han formado le yendas cuyos orígenes hay que buscar trai; de aquellos muros y de aquellas almenas en ruinas que una vez fueron los 3aluartes de la ciudad. De la cultura de ese pueblo existen vestigios en Bolonchenticul, ante la admi ración universal, grandiosos moziunentos y obras d e arte de incalculable valor. En la ciudad del Carmen, en la playa desde la Barra de San Pedro hasta la Punta de Xicalango en la Parte  N.O. de la isla, se encuentran cuyos o cerritos artiiiciales qie encierran infinidad de objetos antiguos, demostrando así la existencia de una &udad indígena en esos lugares. De allí han extraído mil curiosidades, una de ellas, un gran pedazo de árbol enteramente petrificado. Campeche, donde todavia predomina la raza indígena pues cuenta en menor canti dad los individuos de la mestiza, lo que hace que los habitantes de raza blanca estén en muy inferior proporción, ha dado d e sus natales muchos intelectuales, pero casi todos han emigrado de aHi. Ese pue bl o de ja fá ci lme nt e s u hogar, y como muchos de sus hijos mejores gastan s u s ene:gías a favor de otros Estados, a ello se debe en parte esa apariencia de abandono, de inercia y de pereza que uno cree encontrar cuando llega por primera vez a esos lugares. Sin embargo, no faltan individuos amantes del progreso que por todos los medios lo fomentan, a lo que se debe que en la actualidad, la instrucción pública se encuentre en buenas condiciones y que en las mismas fincas de campo o factorías, se procura que estas presenten un aspecto  pintoresco y reu nan or de n, li mpieza y comodidad, tanto para los  propietarios como  para los colonos.  Las habitaciones de estos son verdaderas casitas ¿e ca,mpo con sus  pe rs ian as ve rd es , tod as est án pi nt ad as al fresco, todas tienen sus techos forrna-

dos d e tegas ecenaladas. H a y escuelas y talleres para que los niños aprendan algún oficio: amplias calzadas, y extensas superficies de terreno habitadas por centenares de peksonas han sido puestas en condiciones higiénicas emparejando todas las depresiones en donde el agua formaba an tes pantanos. Pu ed e decirse que varias  partes del Estado como Uayamón son pequeñas repúblicas democráticas, donde ios naturales disfrutan de todas las libertades, y donde ellos corresponden aportando to,-lo su concurso e iniciativa para que aquzllos centros sean de actividad y  progreso.

A esto se debe quizás que todas las  po-

 blaciones del Estado, especialmente Cam peche y el Ca rm en , han venido modernizándose cada vez hasta cambiar el aspecto

El Arbol del Pán, considerado el árbol del Egido, en la ciudad del Carmen, Camp. Plantado en 1919.

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feo que aquellas guardaban y sean hoy mejores s u s condiciones urbanas, sus  banquetas cómodas y regulares, sus calles aplanadas, pavimentadas y limpias y no  pocas con drenaje, agua potable y alumbrado eléctrico. Si testimonios de la arquitectura colonial son los notables edificios del Palacio de los Poderes, el Municipal, los templos

Parroquial, Santuario de San Román y San Juan de Dios, en los cuales se encuentran huellas del arte antiguo español, son d e citarse con elogio para los campechanos, la plaza principal, sus  jar di ne s y el mar , el mar, inmenso, hermoso, que puede considerarse el mayor atractivo para los ojos ávidos de contemplar la naturaleza en toda su magnitud y grandeza.

cas de México  Po r

A

 Ra fa el  de  ZA YA S EN RI QU EZ .

configuración del t erreno, la elevación de las montañas, la rapidez

de

las pendientes a ambos lados de la Mes a Central, impiden la reunión de grandes masas de agua, que, en curso moderado , rieguen extensas regiones y faciliten la navegación interior. En este respecto, México ha sido casi tan poco favorecido por la Naturaleza, como los países si tuados en l a par te occidental d e la América del Sur, en los que concurren idénticas circunstancias.

En las llanuras de la Mesa Central los ríos son de escasa importancia: algunos tienen agua sólo en la estación de lluvias. E n las vertientes oriental y occidental, las corrientes se desbordan e n rápidos torrentes o en impetuosas cascadas, que dan amenidad al paisaje, fertilidad al suelo, y brindan con poderosa fuerza motriz a la industria. Más lejos, unidas varias cor rientes, aprovechando los declives más suaves de las costas y sus llanos, form an cursos que se utilizan para l a navegación de embarcacio nes menores, generalmente. De ahi resulta la multitud de cuencas que llenan por todas partes del país de profundas bar rancas, que han sido, hasta hace poco, serio obstáculo para las comunicaciones rápidas y  bar ata s.  Z I N E A D E R EP AR T IC IO N D E LA S

 AG UA S

La línea general de repartición de las aguas en nuestro país, sigue una dirección general de  N. O. a S . E., casi paralela a la ccsta del Pacífico. Dicha lí nea arranca del Estado de Sonora, cerca de los 109 de longitud O. de México, y corre hacia el sur, inclinada al S. E., siguiendo la arista de la Sierra Madre y de la Tarahumara, que for ma parte de la  pri mer a, de ja nd o al pon ien te Babi spe y Bacerac, en Sonora; y al oriente. Ramos y San Miguel, en Chihuahua. Sigue en Durang o la misma dirección, corriendo casi paralela a su línea limítrofe del oeste, dando nacimiento a los ríos de Sinaloa, en su vertie nte occidental, y a los afluentes del Nazas en la oriental, hasta que llega a la llamada sierra d e Nombre de Dios, que corre de O. a E., al norte del  par ale lo 24, al sur de cuya línea nace el río del Mezquital. Has ta aquí coincide con el borde occidental de la Mesa. Vuelve a seguir su dirección hacia el S. E. en el Es-

62

tado de Zacatecas, dando nacimiento al río de las Nieves, por occidente, y a los tributarios del Bolaños por .la falda opuesta, por donde nacen también el Juchipila, el Verde, y todos los demás que son tributarios del Lerma, en Zacatecas, Aguascalientes y Guanajuato; cuyo último Estado lo atraviesa por su extremo del  N. E., dando naci miento, por el oriente, a los tributarios del Moctezuma. P asa al E. de la ciudad de Querétaro, PO: la arista principal de la sierra, hasta tomar 12 de Jilotepec y la de Ajusco, continuando en el Valle de México, por el semicírculo que forman sus montañas del sur : para volver al nort e, siguiendo si empre la misma línea, y en contracurva con tinuar por la limítrofe del  N. y  N. E. del Estado de Tlaxcala. Entra al de Puebla, pasando por Nopalucan y Tepeaca, aproximadamente, siguiendo la sierra entre Tehuacán y Acatlán, quedando de un lado las fuentes del Papaloaparn y del otro las del río de las Balsas. P ene tra en e l Estado de Qaxaca, continúa por 12 arista de la Sierra Ma dre del Sur, atravesando Chiapas y Guatemala. En Guatemala nace otra línea de división que corre de §. a  N., dividiendo las corrientes de la península de Yucatán, que son de escasa importancia. Esta es, a grande s rasgos la linea principal de división de las aguas del territo rio mexicano.

Al occidente de ella todos los thalwegs, o al menos la gran mayoría, están en dirección  N. E. a S . O.  No enc uen tr o má s excepción notable que la de los ríos Lerma y Mexca la; el curso general del primero es de este a oeste, inclinado al  N. O., y el del segundo también de este a oeste, hasta su confluencia con el del Marqués, POCO m á s o menos: desde donde se inclina al sur. En la  par te ori ent al de la línea, puede decirse que hay varios sistemas secunda rios. Los rios d e Chihuahua están encauzadcs de S . a N. : los de Coahuila y Nuevo León de O. a E. algo inclinados al  N. E.; los de Tamaulipas siguen un curso constan t e d e O. a E., algo inclinados al S . E. con excepción del Pánuco, cuyo thalweg va de S . O. a  N. E. Las pequeiías cuencas veracruzanas, nacidas de los derrames de l a Sierra Madre Oriental, están situadas de 8.a E.; y las grandes, que nacen en la Sierra Madr e del Sur, corren de sur a norte. La misma dirección tienen los ríos de Chiapas y Tabasco. Los rícs pequeños que nacen en la cordillera del Sur, en Oaxaca y Guerrero, forman un sistema especial. Todos ellos corren de  N. a S . H e aquí la clasificación de nuestros priqcipales ríos:

 Ríos .

 Es ta do s que riegan.

 Ex te ns ió n Pu nt os do nd e  de se mbocan. en leguas.

Bravo. , , . . . . . . .Chihuahua, Coahuila y Tamaulipas.. . . . . . . . .México, Michoacán, Guanajuato y Jalisco Lerma. , Balsas. , ~. . . . . .México, Michcacán y Guerrero.. . . . , . . . Yagui. , , , . . . . . .Sonora. . . .. ., . . . . . . . . . . . . . .. . . . . .Entre Sonora y Sinaloa. . . . . . . . . . . . . . . . Fuerte. , , Grijalva .Tabasco. ). ............. .. ...... Usumacinta .Tabasco. . . . . . . . .. . . .. .. . . . . . . e

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63

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548

Golho de México.

208

Océano Pacífico.

164 150 130 132 131

1,

Golfo de California. y,

$,

Golfo de México. 9,

99

,,

Estados

 Ríos.

. ..

que

riegan.

.... . . ... . . . . .. . . . . . . .. ..

Extensión  Pun tos donde desemen leguas. Locan.

. . . .TamauGpas. Pánuco ..... ... . ..... .. , . Mezquital. . . .Durango y Jalisco" .... . . . , . . .Sonora. * . . .. . . Ures.. .. .. . . . . . . . . . . . .. . Sinaloa . . . .S%naloa. ..* . . ... .. Papaloapam , .Veracruz. .... . Coatzacoalcos. . .veracruz . , . . ..... , . . ...... . . ..  Naz as , . . , .Durango. . ... . , . , . . . . ... . . . . . .Sonora . . . .. ........ . . Mayo. .... Culiacán. . ... . ... . . , .. . . . .. . . , . , . ,%aloa. a

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120

Golfo de México, Océano Pacifico, Golfo de California. ,, ,, Golfo de México.

115

100 100 87 87

9,

1,

Laguna de Parras. Golfo de California.

81 ?4 60

.i,

~,

CUENCA  DE L N O  BRAVO  DE L  NORT E EL RIQ BRAVO DEL  NORTE

es el de curso más largo de c uantos existen en México; pero no el de más importancia, aunque Santa María pretenda que "lo cuentan los geógrafos y viajeros entre los ríos de primera magnitud en toda esta América, y puede ponerse al lado del Mississippí por sus circunstancias y utilidades " . El Bravo nace e n las montañas Rocallosas, en el Estad o de Colorado (Estados Unidos) y corre hacia el sur hasta llegar a la frontera de Chihuahua, donde se inclina al sudeste, formando, hasta su desembocadura, en el Golfo de México, los límites entre esta nación y los Estados Unidos. Entre sus  princi pales ahlu ente s es tá el Pecó s, en territorio americano, y en el nuestro tiene :

EL CQNCHOS, que nace al. oriente de la sierra de Tarahumara, conociéndose en su alto curso con el nombre de río de Monoava. Sus  princ ipal es afl uent es son el Ba lleza, el Florido (formado por los ríos de la Concepción, Allende y Parral) el Satevó o Sant a Cruz, el Chuviscar y el Coyame, todos en territorio del Bravo, en e l Presidio del Norte. EL GRANDE O DE SAN FERNANDO, que nace en el Lomerío de Peyotes, en Coahuila, y recibe las aguas de muchos arroyos.

EL SALADO, que se une al Bravo en Tamaulipas. Este importante río tiene por afluentes: el Sabinas, que nace en la Sierra del Carmen. El río de Aura y el Nadadores, forman el de Monclova, en Coahuila, éste se une al Sa bka s en la frontera de  Nue vo León. El Sabinas Hidalgo que nace en el manantial inmediato a la población del mismo nombre, y recibe las aguas del Tlaxcala, que nace en Boca de Leones. EL SAN JUAN, que nace en Nuevo León, formándose de l as innumerables ver tientes de la extensa cañada de Santiago. Su  princi pal afl uen te es el Salinas o Capadero, que nace en Coahuila, formado por los ríos de Patos y del §altillo, y recibe las aguas del Topo o Pesquería Grande. Los demás afiuentes del San Juan so n: el &a mos, Pilón y Santa Catarina. Se une al Bravo cerca de Camargo. CUENCA DEL  PA NU CO

EL RIO DE CUAUTITLAN, llamado también del Desagüe el origen del río Pánuco.  Nac e en la Si err a de Mont e Alto. S e 64

y de Nochistongo, es une con el río Tep eji ,

que tiene el mismo origen, y forman a mbos el río de Tula, en el Estado de Hidalgo. Sus  princi pales afl uen te s son : el Tlax coapa n, Actop an, y Alf ajayuca. EL SAN JUAN se forma con los derrames de la presa de Huapango, en Arroyozarco, Estado de México; recibe varios arroyos, y se une al río de Tula en el Est ado de Querétaro, y corren unidos con el nombre de río Moctezuma, recibiendo en el Estado de San Luis Potosí, al norte de Tamazunchale, las aguas del Amajac, que nace en las montañas del Real del Monte, donde es conocido por río de "Omitlán" y del " Carmen" , teniendo un curso de 160 kilómetros. EL EXTQRAX, nace en las montañas de Vizarrón, en Querétaro, recibe el Tolimán y desagua en el Moctezurna también.

EN EL CANTON DE CHICONTEPEC, del Estado de Veracruz, nace el río de la Pastoría, que después se llama del Calabozo o de San Juan, y cuyos principales afluentes son el de los Hul es, que baja d e la si erra de Atlapexco; y el de San Pedro, que nace cerca de Huejutla, ambos puntos en el Estado de Hidalgo. Este es principal tributario del Moctezuma en el Estado de Veracruz. En los límites de este Estado con el de San Luis Potosí, se une el Moctezuma al Tamesín que nace en las montañas orientales del Valle de San Luis Potosí, con el nombre de río Verde; recibe por la márgen izquierda el tributo del Tampaón y del Valles; por la derecha el de Santa María y el Coy, y toma el nombre de Tamesín cerca de su confluencia con el Moctezuma, dando ambos nacimiento al Pánuco.

EL TAMESIN O GUAYALEJO nace en la vertiente oriental de la sierra de Jaumave, y corre casi de  N. O. a S, E. desembocando en el Pánuco frente a Tampico. Tiene por afluentes principales los ríos de Santa Bárbara, Aguacate, Meco, Naranjo y Me silla. EL CHICAYAN O TANCIOLOT nace en la sierra de Qcontepec, en el cantón Chi contepec, Estado de Veracruz, corre hacia el norte y desemboca también en el Pánuco, cerca del rancho del Aguacate. C U E N C A  DE L

 PA PA LO AP AM

La

 prim era regi ón hidr og,áf ica del paí s es, si n dud a algun a, la del Papai oápa m,  por se r la má s cau dal osa , la que cue nta con mayor núm ero de afl uent es naveg able s,  pudiendo las emb arc aci ones meno res rem onta rlo a gra n dis tan cia de la costa. Lo forman, principalmente, los ríos Qufotepec, Tonto, San Juan y Tesechoacán. EL QUIOTEPEC está formado por los ríos de Ixtlán y de las Vueltas, nacidos en la sierra de Oaxaca, y recibe las aguas del Chiltepec y de otros arroyos.

EL TONTO nace en el Cantón de Zongolica, Veracruz* y concluye en un punto Ha mado Manzanares, con el río Zoquitlán, que nace en el Estado de Puebla, y recibe en el de Qaxaca las aguas del Peyapa, el Tosapa, el Tilapa, y de otros arroyos, por la márgen derecha; y en el de Veracruz reciben por la izquierda las del Cosolapa, Chachicajapa, Amapa y otros. Confluye con el de las Vue ltas o Quiotepec, abajo de Tux tepec, formando allí el Papaloápam.

EL TESECHQACAN. C o n el nombre de río de Villalta, primero y de Moanso, después, nace en la serranía de Cuasimulco, Oaxaca, una corriente que recibe las aguas del Cajones y de otros arroyos y forma en el Estado de Veracruz el Tesechocán, que 65

se une al Papaloápam unas cuantas leguas arriba de Tlacotálpam. dos leguas de curso, y es navegable.

Tiene cincuenta y

EL SAN JUAN,

formado por los ríos Colorado y Trinídad. El Colorado nace en la sierra de Cuasimulco; recibe las aguas de Choapám, del arroyo Yolán, en Oaxaca; del Aguapa, Xolán, Xochopám, Tulapa, Tarahuitím y otros en el Estado de Veracruz. El Trinidad nace en l as ve rtie ntes de la sierra de Oaxaca, y confluye con el Colorado en la hacienda de San Felipe, Cantón de Acayucán (Veracruz). Su  principal tr ib ut ario es el Tuxtla Laurel, que se forma del desagüe de la laguna de Catemaco, y recibe el tri buto de los ríos de Santiago, San Andrés y Amápam.

El Sa n

Juan s e bifurca cerca de Santa Rosa, y el menos caudaloso de sus  brazos corre más al Or ien te con el nombre d e río de Sa n Agustín, y del Zapotal, en el que des embocan el arroyo Largo, el de Hueyápam y el arroyo de la Sierra y otros de menor importancia. El  brazo principal desem boca en el Papaloápam, frente a Tlacotálpam, y el menor, o sea el Sa n Agustín, va a la laguna d e Tequiapa, la que también se une al Papaloápam, en el lugar llamado “Conejo”. En dicha laguna desembocan asimismo el río de Tecolapa, conocido también con el nombre de Saltabarranca, que nace en las vertientes del volcán de Tuxtla.

EL RIQ DEL OBISPO

nace en Oaxaca, recibe las aguas de varios arroyos y des emboca en el Papaloápam, abajo de Cosamaloápam. Todas estas aguas desembocan en la albufera de Alvarado, donde también des aguan las lagunas de Tlaliscóyam, formado por el río Blanco, l a laguna de la Camaronera, y el río de Acula, desagüe de la laguna Salada. La albufe ra s e comunica con el Golfo de México por el río de Alvarado, que tiene un curso de algo más de dos mil me tros.

CUENCA DEL  RIQ  BLANCO EL RIO BLANCO

nace en las Cumbres de Acultzingo, Cantón de Orizaba, Estado de Veracruz, y recibe las aguas del río del Ingenio, que nace en el pueblo del mismo nombre; y las del Escamela y del arroyo de Aguacates y el Ojo de Agua, que nacen en el cerro de Escamela, y forman las preciosas cascadas de Rincón Grande, Barrio Nue vo y Tuxpango. El  principal af luen te del Blanco es el río de Or iz ab a, que nace en las montañ as de Texmalaca. Además afluyen a él, el Metla, el de San Juan del Río y el Sons o , nacidos en l a s vertientes del Pico de Orizaba, y otros muchos arroyos.

EL RIO LIMON.

Las lagunas Coraza, Larga, María Lisamba, Chálpam, Piedra y San Marcos, unidas entre sí  por canales na tu ra le s, están formadas por los arroyos lla mados Arroyo Hondo, San Manuel , Palmira, de los Pozos y otras corrientes. Todas es tas aguas se reunen para formar el río Limón que después aumenta su caudal con los des agües de las lagunas de Santecomapán, y Pajaritos. Desemboca en el Blanco, cerca de la laguna d e Tlaliscóyam.

CUENCA D E L CQATZACOALCOS. La cuenca del Coatzacoalcos constituye otra región hidrográfica de las más im  portantes del  país. Este río nace en el Estado de Chiapas, formándolo el de Chimala-

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 pa, el de Chimalapilla y otros, que al unirs e toman el nombre de río de Cort e; recibe las aguas del Almolonga, Citune, Pachín, Malatengo, Sarabia, Tortuguero, Jumuápam y Xaltepec; forma una parte de los linderos entre Oaxaca y Veracruz, y entra a éste último Estado, donde aumenta su caudal con los ríos Coachapa, Chuchijalpa, Uspana pa y otro s de me no r impor tanc ia, des embo can do en el Golfo de México.

CUENCA DEL GRlJALVA Y USUMACINTA

de Toluca nacen los ríos Almoloya, Coatepec de las Harinas e Ixtapa, y al confluir toman el nombre de Pilcaya. Después de breve curso, el Pilcaya se pierde bajo la inmensa mole de la m ontaña caliza de Cacahuamilpa, en el lugar llamado Chincanatlán, sigue un trayecto subterráne o de cuatro leguas, y resurg e cerca de la notable gruta de Cacahuamilpa; dividido en dos torrentes, los que, a poca distancia, vuelven a unir sus aguas, tomando entonces el nombre de Amacusac. Los  prin cipa les afl uen tes de es te río son el Cuautla, Xochitepec, Xiutepec, Tembembe y Coatlán.

Este hermoso río nace en la sierra de Chachumatanes, en Guatemala , y se conoce en Chiapas con el nombre de Mescalapa, y en Tabasco toma el de Grijalva, en memoria del navegante español Juan de Grijalva, que lo descubrió. Sus afluentes principales son los ríos de Chicomuselo, Blanco, Suluapa, Ocuilapa, e Ixtacomitán, que nacen en las montañas de Chiapas. El Teapa y el Tacotalpa, que confluyen y corren juntos más de cinco leguas antes d e desembocar al Grijalva, en Tabasco: el Puyacatengo y el Puscatán, que recibe las aguas del río del Salto o Tulijá, después que ha formado l a preciosa cascada de $an Pedro.

En el Estado de Guerrero recibe las aguas del Ajuchitlán, Jolotla, Tenango, Tlapa y del Mescala, que le da su nombre. Todos estos ríos nacen en la vertiente septen trional de la Cordillera; por la márgen derecha recibe el tributo del Cutzamala, Teloloápam, Cocula y Tepecoacuilco.

EL USUMACINTA nace cerca de Zacapulas, en Guatemala y lo forman la reunión de los ríos Negro y Blanco, curso de aguas impetuosas que tienen un descenso de 600 metros en 80 kilómetros,  J que ruedan vertiginosamente por el fondo de un inmenso valle en Guatemala. En México modera su ímpetu, y recibe las aguas del Chixoy, La Pasión y San Pedro. Se bifurca poco antes de llegar a Jonuta, Estado de Tabasco; uno de sus  braz os tom a el nom bre de río de Pal iza da, y va a des agu ar a la Lag una de Términos: el otro brazo, que conserva el nombre de Usurnacinta, se subdivide, poco más abajo, y va uno a descargar al Grijalva y otro directamente al Golfo de México, formando la Barra de San Pedro y San Pablo. Todas estas corrientes, que s e enlazan y se separan alternativamente, forman otra región de mucha importancia para el país.

Con el nombre de río de Zacatula se dirige hacia el surl formando los límites del Estado de Guerrero y del de Michoacán y antes de llegar a la hacienda de la Orilla, se divide en dos brazos, ccnservando el  princi pal el nom bre de Zac atul a, y el secu ndar io toma el de río de la Orilla, desembocando ambos en el Pacífico, a corta distancia uno del otro.

CUENCA DEL  RIO  D E LAS BA LS AS EL RIO DE LAS BALSAS, como casi todos los de México, ti ene diferent es nom  bre s, seg ún las loc ali dade s que atra vies a. Qui zá s l a úni ca cor rie nte imp ort ant e que sa le de esta regla es el río Bravo del Norte, que conserva el nombre en todo su largo curso. Puede considerarse como la fuente del río de las Balsas las Montañas de Tlaxco, Tlaxcala, donde nace el Zahuápam, que después de formar el Salto de Molino de Sa n Diego, se une al Atoyac, en el Estado de Puebla, y junto s corren bajo el nombre de Poblano. EL ATOYAC nace en la sierra de San Martín Texmelucan, de la Cordillera Occidental; recibe el río de Atlixco y se une al Zahuápam, como queda dicho, tomando el nombre de Poblano. Recibe después las aguas del Coetzála, formado por los ríos Atila, de Izúcar o Molinos; las de Acatlán y del Tlapaneco. Poco más abajo se le une el Mixteco, que nace en las montañas de Chicahuaxtla, Oaxaca, y está formado por los ríos de Huaj uápam, Tlaxiaco, Juxtlahuaca y Coicoyán. EL AMACUSAC se le une en el Estado de Morelos. En las vertientes del Nevado

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En el Estado de Michoacán se le une el río del Marqués, formado por los del Oro, Amatlán, Parácuaro, Urecho y algunos otros de menor importancia. El Pátzcuaro es conocido con el nombre d e Cupatitzio en el distrito de Uruápan, al sur de cuya cabecera forma la magnífica cascada de Tzaráracua.

CUENCA DEL LERMA Así como los ríos anteriores, éste es conocido con distintas denominaciones, pues se llama Lerma desde su nacimiento en las montañas, al S. E. de Toluca, hasta que entra en el Lago de Chapala; después se llama río de Guadalajara, formando en territorio de Jalisco el admirable Salto de Juanacatlán, y pasando al norte de la capital de ese Estado: y  por últ imo tom a el de río Gra nde o de Santiago Tololotlán, que conserva hasta su desembocadur a en el Pacífico, al norte del puerto de San Blas. Tiene como principales afluentes : En el Estado de México: el Cutzamala, formado por el río Malacatepec y Tecualoya. En el Estado de Guanajuato recibe el contingente del río de la Laja, que nace en las montañas de San Felipe, y al que afluyen los arroyos que descienden de la Sierra Gorda y de la de Guanajuato. Confluye con el Apasco, y después de un curso de 180 kilómetros, se une al Lerma. Además ent ran a este río las aguas del Irapuato, que nace en la sierra de Guanajuato, y las del Turbio, y su afluente el Gómez, que tiene un curso de 120 kilómetros.

Al norte de los Montes de García, en Zacatecas, nace el Jerez o Colotlán, y se dirige hacia el sur, recibiendo en su curso el río que procede de los mismos montes, en Susticacán, y riega el valle de Huejúcar, prosigue por el norte de Colotlán, aumenta su caudal con e l contingente del Tlaltenango, que nace al sur del Teul, en las vertientes de la Mesa Colorada y desemboca en el Bolaños. En el Estado de JaliscoI al salir del Lago de Chapala, recibe las aguas del Zula,

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que nace en el Cantón de Lagos: y después, sucesivamente, las del Verde y del Juchipila, que nacen en Aguascalientes y Zacatecas. Finalmente, en el Territorio de Tepic, s e le unen numerosos afluentes, siendo los más i mportantes el río de Bolaños, de que ya s e habló, y que nace al oriente de la sierra de Nayarit, corre casi de norte a sur, hasta unirse con el Jerez, que baja de Zacatecas : Apozolco, Huerta s, Cuainamota, Acatán, Zapotanito, Tepic y otros.

CUENCAS SECUNDARIAS Hay una multitud de cuencas secundarias, algunas de ellas de bastante importancia para que se les consigne en esta noticia. Proccderemos por Estados, conside rando aquellos en que desembocan los ríos.

TAMAULIPAS. El río del Potosí unido al Hualahuises en Nuevo León, forman el Conchos, que entra en la laguna Ma dre, y sale de allí para desembocar en el Golfo de México, por la barra del Tigre. LOSríos de Linares y Purificación nacen, como los anteriores, en la Sierra Madre, se unen a l ISarrilla, y juntos forman el Soto de la Marina .

guila, corriendo por el fondo de la profunda barranca de ese nombre, y toma después el de ''Río de los Pescados " . De los derrames del Cofre se forman varias corrientes, entre ellas el Pisquiapa, Suchiapa, Cuitlapa, Aguacatla y Teocelo, del Cantón de Coatepec, los que se van unien do, se  junt an a la s agua s del de los Pes cad os, for ma n el río de Jacomulco, en el Can tón de Huatusco, el que recibe el contingente del San ta María, del de Paso de Ovejas y de otras corri entes ; toma el nombre de río de la Antigua y desagua en el Golfo de México.

EL RIO DE MEDELLIN. Está formado por las aguas del Jamapa y del Cotaxtla. Jamapa nace en las vertientes del Pico de Orizaba, recibe las aguas de los ríos de las Puentes y Totolapa, en Huatusco. El río Cotaxtla está formado por el Coscomatepec, el que después de  pasa r por las cer can ías de la villa de su nombre, desapa rece bajo la tierra, corriendo así largo trecho, para reaparecer con el nombre de río de Cotaxtla, el que recibe las aguas del Atoyac, Chiquihuite, San Alejo, Seco, y Tum baca rret as, confl uyend o con el de Jamapa cerca de la desembocadura en el Golfo de México. El

el nombre de río de Túxpan, recibiendo por el norte al Buena Vista, que viene de la sierra de Ocontepec, al norte del Cantón de Chicontepec; y por el sur, al arroyo de Cañas, que nace en el mismo Cantón de Túxpan. Desemboca en el Golfo de México. Es navegable.

EL TANCOCHAPA o Tonalá, nace en el Estado de Chiapas y corre hacia el nor te, formando los límites de Veracruz con Tabasco. Recibe la s aguas de l Xocuapa, Zanapa, del Arroyo Grande y algunos más, de poca importancia, desembocando en el Gol fo de México,  p o r la barra de Tonalá. TABASCQ. Tiene multitud de barras, la mayor parte formadas por los ríos que  pert enec en a la cuenc a de l Gri jal va y del Usum aci nta .

El río de San Marcos o Cazones que nace en la sierra de H.aauchinango, en el Estado de Puebla, recibe las a guas de los arroyos Totolapan y Amatépam, y desemboca en el Golfo de México, formando la barra de Cazones. Pue de hacerse navegable a poca costa.

CAMPECHE. El río de CHAMPOTQN que nace en la laguna de Jatanopolch, y sale al Golfo de México; y otros ríos de menor importancia, que desaguan en la laguna de Términos. OAXACA. El río Tehuantepec que desemboca en la bahía de la Ventosa.

EL TECOLUTLA, llamado también de San Pedro y San Pablo, nace en la sierra de Huauchinango, recibe la s aguas del Azapan, del Apulco y de l Zempoala, que tiene el mismo origen. El  Nec axa , que nac e en la mis ma sie rra , fo rm a cer ca de Huau chi nang o un sorprendente salto de 160 metros, s e interna al Estado de Veracruz  y se une al anterior en el vértice del ángulo de los límites del sudoeste del Cantón de Papantla con el Estado de Puebla. Recibe las aguas d e varios arroyos y desemboca en el Golfo de México, en la barra de Tecolutla.

EL ATQYAC Q N O VERDE, que nace en Distrito de Oaxaca, riega los de Villa Alvarez, Ocotlán, Ejutla, Mihua tlán, Jupila y Jamiltepec ; recibe las aguas del Peñoles y de varios arroyos, y desemboca en el Pacífico.

EL  NAUTLA es navegable para embarcaciones menores.  Na ce de los derrames del cofre de Perote, con el nombre de Río Frío, recibe las aguas del de los Bobos, AIcececa, María de la Torre, del Estero de Torre Blanca, del Atzalán, Zomelahuacán, Quilates y Chapachaca, desembocando en el Golfo de México.

MICHOAGAN. Después de los ríos enumera dos al describir la cuenca de las Balsas, no hay ninguno de mención especial, pues el mayor de ellos, el Coalcomán, no pasa de un arroyo.

VERACRUZ. El río de Túxpan, el Vinasco que nace en la sierra de Huayacocotla, se une en PaIo Blanco, al Pantepec, que nace en el Estado de Puebla, y juntos toman

EL RIO DE ACTOPAN.  Nac e como cibe las aguas del Sedeño, Xoxocotla, y la

el ante rior , de los derrames del Cofre, y re Concepción. Desaparece en la tierra, y tras largo curso subterráneo, resurge y se une al de  Naoli nco, for mado por los de Esquil ón y Hoyos: y al Carneros y del Plan, desembocando en el Golfo, al sur de la Mancha, formando la Barra de Chachalacas.

EL RIQ DE LA ANTIGUA, En les vertigntgs $el Pico de Orisaba nSce el Chichi-

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GUERRERO. Muchos ríos que descienden por la verti ente aust ral de l a Sierra Madre y dese mbocan e n el Pacífico, existen en el Estado d e Guerrer o; pero son de escasa importancia, por lo que nos limitaremos a enumerar los principales, que son: Ixtapa, Coacuyul, Tecpan, Coyuca, Papagayo, Ayuda y Ometepec.

COLMA. El Coahuayana que forma parte d e los límites de este Est ado con el de Michoacán. Este. río está formado por los de Túxpan, de la Huerta, Pantla y otros menores, nacidos en las vertientes autrales de la Sierra Madre , en Jalisco. Desagua  por l a boca de Apiza, en el Pacífico.

EL ARMERIA que está formado por el Tuscacuesco, que nace en la serranía de Quilá, en Jaliscoi y por otros arroyos de la misma procedencia, al que se une el río de Colima, al s w de dicha capital, desembocando por lo  boca dq Pwcvales en el Pacífico.

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JALISCO. El río de  N. O.  par a volver a tor cer

Ameca, que nace en el Cantón de Tequila, corre hacia el su curso hacia el S. O. Recibe las aguas del Ahuacatlán y otros arroyos, y cerca de su desembocadura, que la efectGa en la ensenada del va lle de Banderas, toma el nombre de río Piginto. Forma el límite con el territorio de Tepic. El río de Sihuatlán, Chacala o Maravasco, que nace en las serranías de Autlán, forma parte de la línea divisoria entre Jalisco y Colima y desemboca en el puerto de  Navi dad, desp ués de un curso de sesenta millas. El río de la Purificación nace en los thalwegs de la sierra Cacoma, y desagua en el Pacífico. Pacífico. Su curso es de setenta y dos millas. El río de Tornatlán, que tiene igual procedencia, desemboca cerca de la Punta de Pérula. Su curso es de cincuenta y siete millas.

7'EPIC.-EL RIO DE SAN PEDRO Y SAN DIEGO O DEL MEZQUITAL. En las montañas del Mezquital, Durango, nace este río, cerca del que nace en Sombrerete y que siguiendo siguiendo distinto curso se le une más tarde en la sierra d e Nayarit, por Jesús María. EL TUNAL. Antiguamente llamado el Guadiana, n2ce en Durango, y se une al anterior cerca de N ombre de Dios, e ntrando juntos al Territorio d e Tepic, Tepic, donde donde re ciben varias corrientes que descienden del Nayarit, desembocando en la albufera de Mezcatitlán. Pueden citarse a demás el río de Acaponeta Acaponeta y el de Cañas , que forma forma el límite con Sinaloa. SINALOA. Todos los ríos de este Estado nacen en la Sierra Madre y siguen un O. curso casi regular de  N. E. a De éstos los más importantes son: el Fuerte, cuyo principal afluente es el Choix, que desemboca en el Golfo de California; el Sinaloa, que desagua en el mismo Golfo; el Culiacán, cuyo principal afluente es el Huamaya, que también va al Golfo: y los ríos del Presidio, Piaxtla, Elota, San Lorenzo y Mocorito, que desaguan en el Pacífico, con excepción del último, que desemboca en el Golfo. SONORA EL RIO COLORADO, que nace en los Estados Unidos y  per ten ece a México desde su confluencia con el Gila, desemboca en el Golfo Golfo de California, y forma los límites entre Sonora y la Baja Caliiornia.

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El Matapé, Matapé, San CHIHUAHUA.

José y de la Poza son de esca sa importancia.

Tampoco tienen gran importancia los ríos de Casas Grandes, Santa María y Patos que nacen en las vertientes orientales de la Sierra Madre, y des aguan respectivamente en las lagunas de Guzmán, de Santa María y de Patos, siguiendo un curso casi constante de sur a norte.

DURANGO.-EL  NAZAS, que nace al occ ide nte de la si err a de la Can del a, corre hacia el norte, hasta cerca del paralelo  26 ; se dirige hacia el este hasta llegar a San Bernardo, y vuelve hacia el sur por la vertiente oriental de la misma sierra en que nace, y la de Sa n Francisco: luego se inclina inclina otra vez hacia el norte y va a desembocar a la laguna de Mayrán, e n el Estado de Coahuila. Sus  princ ipal es afl uen tes so n: el Palomas o de Santiago Papasquiaro, que nace en Cerritos, recibe el Tepehuanes al norte de Papasquiaro, y se une al Nazas al sur de Tre s Vados. Vados. El San Juan, que nace en la sierra de San Francisco. EL AGUANAVAL. En los montes de García, Estado de Zacatecas, nace el río de las Nieves, conocido conocido también por río Grande. Corre hacia el norte, hasta el real de San Juan, poco más o menos, luego se inclin inclinaa al oeste hasta llegar a Picardías y tuerce bruscamente hacia el nordeste hasta su desembocadura en la laguna de Parras. En Pichihualtepec Pichihualtepec reci be las aguas procedentes procedentes de las lejanas serra nías de San Juan Juan d e Ahorcados al Novillos y Pico d e Teyras al  N. y prosigue desde allí con E., y de Novillos la denominación de Aguanaval.

HIDALGO. EL RIO DE METZTITLAN. Llamado también el Grande, nace en las montañas de Apulco, al  N. de Tulancingo, corre por el fondo de la espléndida Barranca Grande. Sus afluentes principales son el Guadalupe, San José, el de Regla y el Tulancingo. Tulancingo. Des agua en la laguna de su nombre. es que la Península Yucateca es pobre en ríos. Sin embargo, YUCATAN. en la parte del sur, o mejor dicho, del sudeste, hay corrientes que pueden mencionarse, tales como como e l río Mana tí que nace en la laguna de Ocom, Ocom, cerca de Tiosuco y desagua en la  bahí a ¿e la Ascen sión : el Sa n Jos é que nac e en la lagu na Beca lar y desagua en la bahía del Espíritu Santo, en la que también desemboca el río Hondo, que nace en Guatemala.

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EL YAQUI, que nace en la sierra de Tarahumara y es conocido en su alto curso  por río de Babi spe y de Bate pito . Sus  princ ipal es afl uen te s son : el Soyopa, Río Viejo, de Sahuaripa y Papigochic. Papigochic. Tiene un curso de kilómetros y desemboca en el Gol fo de California. EL MAYO, que también nace en la sierra de Tarahumara, recorre 350 kilómetros y desagua en la bahía de Santa Bárbara. Su  prin cipa l afl uent e es el Cedr os. EL SONORA.  Na ce en la sie rra de la Cana nea, rec orr e 335 kilómetros y se pier de en las arenas de la playa. Recibe las aguas del San Miguel u Horcasitas, en Hermosillo. al  N. E. del El río del ALTAR o de la ASUNCION nace en el O j o del Altar, Altar, se u ne al Magdalena o San Ignacio, forma el de la Asunción y también se pierde en las arenas de la playa.

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 prop ied ade s qu e est én explo administración directa en más de terrenos Útiles para de aprovechamiento. calificación de las circunstancias a que se refieren los subincisos anteriores, así como la declaración de que una pro pieda d privada o  pa rt e de ella queda  je ta a est a ley s e ha rá por la Sec ret arí a de Agricultura y Fomento con audiencia del interesado y previo un procedimiento administrativo que el reglamento determine, y en el cual el juicio de peritos, uno de los cuales deberá ser nombrado  por el propio int ere sa do. tadas

Tomada del Diario Oficial de la Federación, número 7. Tomo XXXVI, correspondiente al martes 11 de mayo de 1926.

Al margen un sello que dice: Poder

Ejecutivo Federal. Estados Unidos Mexi canos. México. Secretaria de Gobernación,

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--

El C. Presidente Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos, se ha servido dirigirme siguiente siguiente decreto : PLUTARCO ELIAS CALLES,

Presidente Constitucional de Estados Unidos Mexicanos a sus habitantes, sabed:

Que en uso de las facultades otorgadas otorgadas al Ejecutivo de mi cargo por el Decreto del Congreso, de de enero del corriente año, he tenido a bien expedir la siguiente:

LEY FEDERAL DE COLONIZACION Artículo conformidad con lo dis  pues to en el artí culo 27 de la Constitución Federal, se declara de utilidad pública la colonización de propiedades agrícolas pri vadas que se encuentren en las condiciones que esta ley determina. determina. Artículo materia de colonización : 1. Los terrenos de propiedad de la Nación y que ésta adquiera por aplicación de la Ley Federal de Irrigación o  por cualquier otro título. terrenos que adquiera para el

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efecto el Banco Nacional de Crédito Agrí cola. 111. Los terrenos de  propi edad parti cular en los términos de esta ley. Artículo los terrenos a que se refieren los incisos 1 y 11 del artículo an terior, los trabajos de colonización se em  por el Gobierno Federal, por el Banco Nacional de Crédito Agrícola y por empresarios o compañías colonizadoras,  bien ais la dame nte o  bie n en cola boraci ón. de acuerdo con lo que el reglamento de termine. En los terrenos a que se refiere el in ciso la colonización podrá llevarse a cabo por los propietarios, cuando se sometan voluntariamente a las prevenciones de esta ley y reglamentos. Artículo  propi edad es agríc olas  priv adas que dan suj et as a las prevenc io nes de la presente ley: 1. Cuando sus  propi eta rios lo solici ten y el Gobierno Federal autorice. 11. Cuando dentro de la región que abarque un  proye cto de colonización, no se encuentren terrenos de los comprendidos en los incisos 1 y 11 del artículo 2 de este artículo Se exceptúan de las prevencicprevencic -nes de este inciso:

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a) Las propiedades en las que se haga una debida explotación agrícola.  b) Las propiedades que constituyan una unidad agrícola industrial planeada llevada a cabo con la tecnología moderna,

Articulo del  plazo de 60 días a partir de la fecha en que se notifique la declaración a que se refiere el timo párrafo del artículo anterior, podrá el  propiet ario sol ici tar auto riza ción , suj et a a esta ley y a su reglamento, para colonizar por su cuenta o en combinación con el Gobierno Federal, con el Banco Nacional de Crédito Agrícola, o con una empresa  part icul ar. Articulo

el propietario no hace se le otorgue en el artículo anterior, el Ejecutivo Federal decreta rá la exprop expropiación iación de las tierras, en la extensión necesaria para los de colonización se persiguen y la indemnización se hará mediante la entrega al propietario de los abonos de pago que hagan los colonos hasta completar el valor que se fije a la cosa expropiada. En el caso de que el Banco Nacional de Crédito Agrícola proporcione las sumas necesarias para hacer el  pago de la indemniza ción a él se entregarán los abonos de los colonos.

zación de la Secretaría de Agricultura y Fomento para llevar a cabo la colonización, de Conformidad con las siguientes  bas es : autorización sólo podrá otorgarse para casos determinados en los que, de antemano haya fijación de los predios y aprobación por parte de la Secretaría de los proyectos de fraccionamiento y colonización, así como de los plazos que, con carácter de salvo casos fortuitos de fuerza mayor, sea necesario otorgar con el fin fin de realiza: realiza: el  proyecto. 11. Tos Tos solic itant es deberán compro bar su solvencia o caucionarla a juicio del Ejecutivo Federal, debiendo, además, de posit ar en efect ivo en el Banc o Naci onal de Crédito Agrícola, el del importe total de las obras que se lleven a cabo, debiendo ser vigiladas las inversiones por la Secretaría de Agricultura y Fomento.

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Cuando el solicitante sea el Banco Na cional de Crédito Agrícola, bastará com probar qu e exi ste autorización para el desembolso correspondiente.

uso de la franquicia que

empresas colonizadoras, el Banco Nacional de Crédito Agrícola o los  par tic ula res en los cas os a que es t a ley se refiere, deberán recabar autori-

111. Las demás que resulten ley o de su reglamento.

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de

esta

Articulo terrenos que deban ser colonizados, serán previamente acondicionados, mediante la construcción de caminos, obras de riego, cercos y, en ge neral, de toda clase de mejoras territoria les que garanticen una buena explotación económica, fraccionándose en lotes cuya explotación baste para el sostenimiento y mejoramiento económico de una familia campesina, de acuerdo con siguientes  bas es : 1. En terrenos d e riego 5 hectáreas como mínimo y 150 hectáreas como máximo.

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(Continuará).

tivada, ha aumentado el número de maquinaria así como el de personal, esperándose en transcurso del año actual todas esas tierras estén en posibilidad de ser de bida ment e col oniz adas .

Breves Con satisfacción hacemos del conocimiento de nuestros lectores los  progr esos alcanzados en el almacenamiento de aguas en la presa de Don Martín, del Estado de Coahuila.

tre los campesinos, muchos de los cuales se aprestan a solicitar parcelas en el fraccionamiento citado, que ofrece grandes  pers pect ivas par a el porveni r.

El 10

de abril del año actual, el agua almacenada apenas alcanzaba la cifra de 250,000 metros cúbicos: durante el mes de mayo se almacenaron de metros cúbicos: el mes de  juli o, el alm ace nam ien to llegó hasta metros cúbicos: y el 15 de  julio te ní a metros cúbicos. Este almacenamiento ya oportuno riego y en consecuencia el éxito de las labores agrícolas en el Sistema Nacional de Riego Núm. 4.

El aspecto del vaso con la cantidad de agua que al presente tiene, es muy atrayente, La extensión inundada a lo largo del río, o sea la cola de la presa, es de más de ocho kilómetros y el espectáculo que ofrece a la vista es grandioso.

 Nume roso s vecino s de la ciud ad de Monterrey,  N. L., que cuentan con elemen tos y son reconocidos como capaces, han elevado una solicitud a fin de que se les dé la primacía para colonizar los terrenos del Sistema de Riego Núm. 4.  pues se sa be que alg unos indi vidu os, checoe slovac os  prin cipa lmen te, pret end en se r los favorec i Si no hay dos en detrimento de algún obstáculo de fuerza, tal solicitud se rá resuelta favorablemente, considerándo se de estricta justicia justicia que nuestros cionales sean los que aprovechen preferen temente lo que puedan producir los mencionados terrenos, máxime cuando la Cons titución previene que, en igualdad de circunstancias, deben ser preferidos los me xicanos.

o La presidencia municipal de San Pedro de las Colonias, Coah., remitió a las organizaciones campesinas, instrucciones, soli citudes y cuestionarios referentes a la distribución de los terrenos de Don Martín, con el objeto de que todos los labriegos y agricultores en pequeño que se interesen en la adquisición de parcelas en la zona mencionada, llenen los cuestionarios solicitudes respectivos. Est a medida se debe al próximo fraccionamiento de dichos terrenos y ha causado notable regocijo

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A  part ir del  pre se nte mes van a act ivarse los trabajos de la preparación de las tierras del Sistema de Riego Núm. 4 (río Salado, Coahuila y Nuevo León), pues se desea que cuanto antes queden listas para dedicarlas a cultivos. cultivos. Hast a la fecha se han trabajado tres mil hectáreas; pero como los propósitos de la Comisión Nacional de Irrigación, son que toda la superficie que integra la primera unidad del S’ istema i stema de que se trata, pueda ser totalmente cul-

o

l

En la visita visita de inspección practicada en  julio últim o, al Si st ema de Riego “Pr esi dente Calles”, por el jefe del Departamento de Organización de dichos Sistemas, se encontró con que los trabajos de colonización han sido convenientemente hechos, esperándose esperándose magníficas cosechas. Entre los cultivos que han tenido excepcional éxito, se encuentran el del trigo, maíz, chile, etc., causando la natural sorpresa, por demás halagadora, que ninguno de los plantíos ha sido atacado por plaga alguna. El camino carretero que une el Sistema con Aguasca-

lientes, está prácticamente terminado, faltando tan solo de concluir un puente sobre el río Santiago.

o Para dar mayor impulso a las diversas obras de irrigación ejecutadas por la Comisión Nacional, el señor Secretario de Agricultura y Fomento está practicando una visita de inspección a los Sistemas 1, 2, 3, 4, 5 y 6 que comprenden la presa “Presidente Calles”, Aguascalientes río “Mante”, Tamaulipas río “Tula”, Hidal go río “Salado”. Coah uila y Nuevo León: río "Conchas", Chihuahua y río “San Carlos”, Coahuila, respectivamente. A su regreso a la capital, el propio alto funcionario celebrará acuerdo con el señor Presidente y el Vocal Ejecutivo de la Comisión Nacional de Irrigación para dictar las medidas conducentes.

eminencia que constituye el fondo del cráter, o s e a la  pa rt e super ior de la colu mna lava que llena la chimenea del volcán, sólido tapón o cierre que intercepta la comunicación del magma incandescente el aire atmosférico”. el tiempo tapón aumentó el volumen. Un alemán residente en Puebla, había bajado al fondo del cráter, cuando de improviso se  produjo una erupc ión. Sólo la dire cci ón favorable del viento le preservó de una ho rrorosa muerte por asfixia o combustión. Fué el último que se atrevió a entrar en el cráter. Yo llegué a la cima hacia las nueve y me quedé allí una hora entera. Un frío penetrante, intensificado aún más por un recio viento, m e hizo imposible prolongar estancia en este lugar. Cuando POCO después sobrevino una fuerte aunque  breve neva sca, que dar on ago tad as mi elasticidad y energía. energía. M e parecieron una eter nidad estos diez minutos de tormenta. Pasa resguardarme de ella entré dos metros en el cráter y me arrimé a la gélida roca. A1 emprender el descenso fuí testigo de dos ‘erupciones de peregrina belleza. Aunque había bajado ya 500 metros a lo menos, sentí la fuerte presión atmosférica originada por por la violenta emisión d e una nube que por su forma semejaba una coli-

Ascensión al Popocatepetl El

mayor volcán activo de la América Central.  Po r

MPR.ENDI

la ascensión sin m á s compañía que la de un guía y de un chico. Tras una caminata de cinco horas  por la s si nuo sa s sen das de  bosq ues que nos  par ecí an int erm ina ble s, lle gamos, hacia las seis de la tarde, al refugio de Tlamacas, Tlamacas, una choza prevista prevista para el primer descanso. descanso. Tambi én aquellos que vienen del otro lado, es decir de Puebla. tienen que hacer escala en Tlamacas, para emprender desde este punto de empalme la ascensión propiamente dicha. Por lo general se aprovecha para ella la estación seca, que temporalmente coincide con el invierno europeo. Yo  persona lmente comencé la subida el de noviemnoviem bre. A  pes ar de ll eva r un imp erm eab le, quedé calado hasta los huesos a causa de la lluvia torrencial que por la tarde cayó, una de esas lluvias que son tan típicas para los  país es tropic ales. Las altas sierras de México y la lluvia hermanan, bien. La selva tiene u n carácter tan pronunciadamente norteeuropeo que las  brum osi dade s de un tiempo lluvioso armonizan maravillosamente con este paisa  je , en que la fre cue nci a de los líquenes es lo único específicamente tropical. tropical. Al reanudar nuestra marcha, primero en mula y a pie después, nos saludó la in concebiblemente grandiosa belleza del agrietado Pico del Fraile, bañado por la luz del  plenil unio. El F r a i l e es un puesto avanzado de la cumbre, un monte que quie re ser tomado en serio y opone bastantes obstáculos al alpinista. E n más de una ocasión lo han escalado viajeros alemanes,

STELZMANN.

que por la belleza del panorama que desde allí se les ofreció se consideraron ricamente recompensados de las fatigas de la ascensión. Paciencia  per sev era nci a son los dos báculos que nos ayudan a alcanzar la meta, también en un monte como el Popocatepetl, cuyos flancos están cubiertos de rocalla y fina ceniza volcánica. El cansado viajero toma aliento a1 a los campos de nieve y hielo, cuyas estribaciones a mo do de lengüetas descienden por las faldas del soberbio cono. El frío ya no nos hace daño, porque un actídoto en la in tensa labor de la ascensión. E n serpentinas nos vamos acercando lentamente a la cima del pico. pico. Una tras otra se van deslizando las las horas: Algunas piedras piedras ruedan  por  pend ien te con un a veloc idad espa ntosa. Son los  proye cti les del crá ter , dispa rados por él como si fuesen otras tantas granadas. El más  peque ño de est os mensajeros del Averno bastaría para aplastar a los atrevidos invasores de aquellas regio nes vírgenes. vírgenes. L a caminata por por la nieve se verifica a la vista de la ciudad de México. Al cabo de tres horas nos encontramos súbitamente, casi sin sospecharlo, al bor de del insondable insondable cráter. Antes había aquí numerosas fumarolas; a mi entender las han destruido las fuerzas titánicas de la erupción. Verdad es que se percibía aún el tufo del gas sulfuroso: pero no he po dido descubrir las capas ígneas del globo. Según las mediciones de geólogos mexica nos, practicadas en 1895, el cráter tiene una profundidad de 205 metros. Waitz, un alemán, emprendió la arries gada  penosa excu rsió n alr ede dor de to do el cráter. Este sabio llama a la leve

flor. Las grises o  blan cuzc as ved eja s  bían y sub ía n, per sig uié ndos e atropellándose, una fontana gigantesca que se elevaba al alto cenit. Ambas veces duró duró este fenómeno 20 ó 25 segundos. Fué co mo si Huitzilopochtli, el dios de los terro res, quien, según las creencias de los indios, se retiró ante los nuevos dioses, españoles, buscando refugio en el cráter del volcán, asomara su cabeza amenazadora para ver si ya e ra llegada la hora de la venganza. Ea vista que gocé desde la cumbre del volcán una bendición de Dios. A la derecha e izquierda se vislumbraban los valles de México y de Puebla. A  pes ar de la distancia y altura en que me encontré, reconocí en el cuadrado blando, visto muy escorzado naturalmente, la disposición es calonada de la ciudad de Puebla, un plano de urbanización que es muy característico para las fundaciones españolas, Hasta en el organismo heterogéneo heterogéneo de México, una urbe de gigantescas dimensio nes, distingue la vista, favorecida por la  pureza y dia fani dad de la atmósfera, las verdes manchas manchas de los  parqu es y las relucientes superficies superficies de los lagos aledaños. Todos los edificios  pres ent an singu lar mente aplanados,  pie dra s cúbi cas

Campesino de Xalpatlaco, Atlixco,

7

frente al Popocatepetl.

Bosque de Santa Catal ina, Tochimilco, Tochimilco, Pue., al pie del Popocatepetl.

desparramadas al azar, comparables, en su nos de las constelaciones principales. Los totalidad, a una cantera de precioso már- volcanes mismos parecen pirámides desmol. Las otras ciuda des son, a esta dis- comunales, en que se posan, cual en un pe tancia, nada más que unos pequeños pundestal, los grandes luminares. tos blancos. blancos. I ngentes montes, aislados o Es muy raro que el viajero, cansado por dispuestos en cadenas, cierran el horizon- la larga ascensión, se vea retribuido por un te. Entre se destacan el Pico de Ori panor ama deli cioso. Yo sin embargo, tuve zaba, el padre de todos los montes mexiesta suerte, y  por es o me adhi ero a la canos, la desgarrada sierra de Malinchi, el Ixtaccihuatl, separado del Popocatepetl tan opinión corriente, que considera la contem sólo por un  paso, el mis mo por e! cual  plación de l pai saj e de sd e un sit io muy ele  place Hernán Cortés condujo su ejército a la an- vado como uno de los más res. En el Popocatepetl se eleva el alma tigua Tenochtitlán. Tenochtitlán. Por la elegancia de a lo ultraterreno, a lo cósmico, y en este curvas ofrece un aspecto maravilloso la morosa morosa sierra que se extiende por por e! lado estado de ánimo recibimos impresiones tan  pur as y fu er te s que no es posi ble imagi oriental de la meseta de México. Es la todavía. Este muralla escalada cada mañana por el Sol narse algo que las superara todavía. cuando el noble noble astro se presentaba a los arrebatado entusiasmo no se esfumó cuan ojos extasiados de s u s fanáticos adorado- do, sentado en mi petat e como en un tobores, los antiguos aztecas. templos pira- gán, bajo en cinco minutos el mismo largo midales llevaban en su  pla tafo rma, graba - trecho en cuya ascensión poco antes había empleado varias horas. dos en un enorme disco de metal, los

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IRRIGACION EN MEXIC

COMISION NACIONAL DE IR IGACION Presidente de la Comisión:

GRAL. MANUEL PEREZ TREVIÑO.

Comisionado, Vocal Ejecutivo : ING, IGNACIO LOPEZ BANCALARI. Comisionado, Vocal Secretario : ING.

LEOPOLDO VAZQUEZ.

REVISTA MENSUAL ORGANO OFICIAL DE LA COMISION NACIONAL DE IRRIGAClON

OFICINA DE PUBLICIDAD ROBERTO QUIROZ MARTINEZ,

OFICINAS: ESQUINA BALDERAS Y AYUNTAMIENTO

Director y Jefe de Redacción.

TELEFONO ERICSSON 2-41-77

SE REPARTE GRATIS ENTRE TECNICOS, AGRICULTORES

COLABORADORES

REGISTRADO EN LA DIRECCION GENERAL DE CORREOS COMO ARTIC ULO DE

SEPTIEMBRE

TOMO

Ing, Aguilera José G . Anda Manuel Arteaga Luis. Ballesteros Luis Bancalari Manuel. Barocio Alberto. Brambila Alejandro. Beltrán y Puga Fernando. Bustamante Octavio. Lic. Cabrera Luis. Ing. Castelló Alfonso.

Lic. Ing.

Sr. Ing. Lic. Ing.

Coria Antonio. Corral Joaquín. Cuevas José A. Chávez Eduardo. Chico Goerne Luis. Domínguez Norberto. Dozal Fortunato. Gama Valentín. García Julio. García Lascur áin Angel. García T. Fernando. García Manuel Gayol Roberto. González Pedro A. González Roa Fernando. Herrera y Lasso José.

Y COLONOS

CLASE, EL 26 DE MAYO DE 1930

1930

Sr. León Alfredo D. Ing. Medina Salvador. Monjes Ricardo. Monterde y García lcazbalceta Francisco. Ing. Noriega José Oropesa Jesús. Olvera Montiel Genaro. Lic. Ortia Carlos. Ing. Peimbert Angel. Perogordo Moisés. Pérez Castro Lorenzo. Dr. Pruned a Alfonso. Ing. Quevedo Miguel A. de. Ramírez Ulloa Carlos. Ramos Federico. Rodríguez Antonio. Roe1 Faustino. Sánchez Pedro C. Sánchez Mejorada, Javier. Santa Cruz Jr: Armando. Saucedo Vicente. Serrano Gustavo. Toscano Ricardo. Valdés Luis G. Villaseñor Manuel. Dr. Waitz Paul. Geó. Vivar Gonzalo.

LOS AUTORES SERAN LOS UNICOS RESPONSABLES DE SUS ARTICULOS.

Págs. SECCION EDITORIAL El contrato de aparcería agrícola en los Sistemas Nacionales de Riego. . . . . . . . 5

SECCION DE ESTUDIOS, CONSTRUCCIONES Y COEONIZACION Estudio crítico de hidrodinámica. .....................  Ing .  Ro be rt o Gayol. Proyecto de Irrigación del río Conchos, en el Estado de Chihuahua.. . . . . . . . . 39 (Colaboración  de l  Dpto. Técnico). El Proyecto “Valle de Juárez”, en el Estado de Chihuahua.. . I n g .  Luis  Arteaga . 42 . . , 52 La capacidad instalada de las plantas eléctricas existentes en el País,  In g.  Jo sé  Her rer a

y  Las so.

CECCION EDUCATIVA Y DE DIVULGACION Anotaciones sobre Hidrología. . . . . . . . . . . . . . ..Ing. Mo is és  Pe ro go rd o y  Las so. 63 Posibilidades del cultivo del algodón en los terrenos del Sistema de Irrigación del río Salado, . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .Ing.  Ma nu el Bancalari. 68 SECCION ECQNOMICA, COMERCIAL Y ESTADISTICA Coahuila. Sus elementos de riqueza. . . . . . . . . . . . . . .R ob er to

Quirós

 Na rt ín ez . 70

SECCIQN DE NOTICIAS. Oficial. Acuerdo Presidencial autorizando los contratos de Aparcería Agrícola

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y Promesa de v e n t a , .

...

............................................

Ley Federal de Colonización (Concluye) ..................................

86 89

Págs.

SECCION DE CONSULTAS Consulta sobre el rio Omiltemi, Zumpango, Gro..

.........................

DE  NUESTRO CAN JE .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . SECCION EXTRANJERA Construcción y Equipo de la Presa Coolidge., . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . (Versión del inglés por  Dol ore s García de  Bra gg) .

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ontrato de  parceria Sistemas Nacionales UBLICAMOS en este número? en nuestra sección destinada a

 Nuestra Carátula RESENTAMOS

en nuestra carátula un grabado en el cual aparece la cimbra de acero que se usó  par a colar el conc ret o en el revestimiento del túnel de fuerza de Tepuxtepec. Este trabajo fué ejecutado por la Compañía de Fuerza del Suroeste de México, mediante un contrato con la Comisión Nacional de Irrigación para ejecutar  por su cuenta la  pre sa de almacenamiento, teniendo como compensación el aprovechamiento de la energía que pueda desarrollarse durante el período marcado en el contrato que  par a aprov echa mien to del agua, con la Sec ret arí a de Agricultura y Fomento.

Al hacer la excavación del túnel s e encontró que el terreno natural en determina-

lo que hubo necesidad de hacer el revestimiento de concreto en toda la longitud del túnel. Se coló primeramente una  plant illa ha st a la alt ura d e la doble vía que se vé en el grabado. E sta vía sirvió tanto  para el paso de la s car ret il las que aca rre aba n el esc ombr o de 12 sección de avance del túnel, como para que sobre los dos rieles exteriores corriera la cimbra del túnel  par a lle varl a ade lan te. dos lugares estaba agrietado y ofrecía poca resistencia, por

La cimbra es toda de acero, estando articulada en la parte superior, y en el gra bad o se puede n apr eci ar fác il ment e los gat os l ate ral es con los cua les se coloca ba en la  posic ión exac ta que de bí a ten er. En la parte baj a se ven también las cuñas que la mantenían en su  posición una vez que se había ajustado en ella. Un  poco

hacia at rá s s e enc ont rab an los tambores mezcladores para el concreto, los cuales se vaciaban una manguera alambrada de hule conectada en un lugar ad -hoc en l a cimbra, uso  par a expe ler el concre to, de aire comprimido a varias atmósferas de  presi ón. De es ta ma ner a se obtuvo un acabado perfecto en el revestimiento, que dió completa seguridad a la obra.

,

Y

informaciones oficiales, el importantísimo acuerdo presiden cial que faculta a la Comisión Nacional de Irrigación para que, en auxilio de los colonos, celebre contratos de aparcería agrícola con promesa de venta durante los tres primeros años de explotación de la tierra, aligerando los esfuerzos del colono en el momeny  pe rm it ie nd o l a a plic aci ón de sus economías a un to de s u establecimiento eficaz y pronto cultivo de su parcela. Hemos considerado, sin embargo, importante, dedicar esta sección a la  par te exp osi tiv a del men cio nad o proy ecto , qu e pu ed e, con má s cla rid ad,  pre se nt ar los  pro pós ito s de la Com isi ón al for mu la rlo y d a r u n a ilus tración a nuestros lectores respecto a antecedentes que lo motivan, a los  pro ced imi ent os pe ns ado s pa ra rea liz arl o y, fundamentalmente, a las muy satisfactorias conclusiones que Comisión espera de su aplicación in mediata. La exposición de que hablamos, presentada en de  por nuestro Comisionado Ejecutivo Ing. Ignacio López Bancalari, dice lo siguiente : tal vez la Una de las  prin cip ales que han presen tado en aplicación los diversos acuerdos presidenciales que a Comisión para enajena r tierras dentro de Siste mas Nacionales de Riego, radica en la exigencia de que el colono deba cubrir, en el momento de firmar contrato respectivo, 5% en efectivo del lote que ad quiera o invertir en éste mejoras permanentes que equivalgan al de ese valor. En efecto, gran  pr es un tos col ono s, de agrupaciones de ca rácter cooperativo, de agricultores deseosos cle aportar su contingente de

trabajo al desarrollo de los Sistemas de Riego y que la Comisión tiene calificados desde todos puntos de vista, como deseable s" en sus Proyectos, se han dirigido a la misma Comisión solicitando se les exima por ahora del pago del en vista de los grandes de establecimiento que están obligados a erogar, aplazando el cobro de tal suma para cuando la pri mera cosecha les elementos derivados de la explotación agrícola, que  permi tan el cumplimie nto de t al obli gación. Es indudable que la sola razón de carácter económico funda y  justifica la unánime demanda de los interesados en este sentido: las inversiones indispensables, en efecto, para trasladarse del lugar de su residencia hasta el sitio de s u nueva explotación; construcción de u n nuevo hogar muy modesto que se le suponga; la necesaria preparación agrícola de las tierras y el esfuerzo para acotarlas y limitarlas unidos a los gastos directos de cultivo (semilla, aperos, abonos su caso, etc.) y, mente, a un fondo de subsistencia durante el tiempo que cosecha, son, sumados, un conjunto de ecónomicos generalmente, por no en todos casos, se salen de capacidad financiera de los  presu ntos colonos de nues tro s Sis tem as que, no hay que no están concebidos en beneficio de capitalistas. otro punto de vista puede asegurarse que el éxito de Sistemas Nacionales de Riego radica en consecuencias de carácter inaplazable :  prime ra, hacer los ent rar en inmed iata producción, y segunda hacer que esta producción beneficie al mayor número. Cualquier esfue rzo, por tanto, que la Comisión Nacional de Irrigación  pueda real izar para facil itar el acceso del colono a tierra, librándolo de crecidas exigencias en ese preciso momento, descuidar el cumplimiento los propósitos antes enunciados, habrá de forzosamente, en el mejor éxíto de las labores de riego y en el may or resultado económíco social de  progr esist a política de irrigación empr endi da  por nuestro Gobierno. A este propósito tiende la iniciativa de que hago materia en la  pres ent e exposición. hay, en agricultura mexicana, un procedimiento de explotación generalizado que el que deriva del contrato de aparcería agricola que, cualesquiera que sean sus defectos, cuando se trata de cubrir con un partido aleatorio un exagerado arrendamiento de la tierra, puede depurarse, puede perfeccionarse, si un criterio más sano y aventajado hace del aparcero no un mero arrendatario, sino un futuro propietario de la tierra cosechas En el caso de una determinada proporción paga

Sistemas de Riego del Estado, parece existir, por otra parte, un inelu dible deber moral del Gobierno, de asociar la suerte y resultados de sus  proyectos al may or o menor éxito de sus colonos, ya que encier ra una enor me injusticia imponer al colono obligaciones ineludibles e inaplazables cualesquiera que sean los resultados efectivos que de su trabajo agrícola pueda esperar. Parece entonces justificado, que al mejor éxito en las labores del colono responda una mayor facilidad y eficacia en  pagos que Comisión debe recibir, y a mayores o fracasos del colono se asocie automáticamente un legítimo aplazamiento o reducción en el cumplimiento de las obligaciones de sus contratos. Es indudable que la sociedad derivada de un contrato de aparcería entre el Est ado y un colono cualquiera, es una sociedad pudiéramos decir equilibrada, en que toda la fuerza y toda la autoridad están de un lado y to da la y disciplina deben existir en el otro. El colono se verá continuamente fiscalizado en sus operaciones por la Administración del sistema; intervenido en la recolección de sus cosechas y  por mucho que regla mentos imperativos lo impongan en una asociación que a la larga habrá de resultarle molesta y que aleje el programa de explotación de los Sistemas de Riego, de crear hombres libres económicamente y que, dentro de esa sana libertad, manejen a su conveniencia los destinos de su parcela, Por eso, quizá, no fuera de recomendarse un contrato de aparcería agrícola como un contrato definitivo, hasta la final adjudicación del terre no, pero sí indudablemente, en transitoria dará una posibilidad ex perimenta l fácil y clara , dura nte el plazo recla mado por la debi da orientación del colono, que, en tales términos, habrá de llegar a la tierra con mayores facilidades y habrá de recoger de esta misma los elementos necesarios  para el cu mplim iento de su s inmedi atas obligacio nes. Por otra parte, merced a un pequeñísimo esfuerzo de la Comisión, si se le compara con lo invertido en la realización de las obras un almacén semillas seleccionadas, a cargo de la Gerencia del Sistema, podrá sumi nistrar, con una obligación inmediata de reintegro, semillas de carácter uniforme q u e aseguren, hasta donde las condiciones del terreno lo permi tan, una cosecha homogénea, de mejor rendimiento sin duda alguna que la que habrá de obtenerse si diversas semillas hubieran de cultivarse libremente en la extensión abierta. Además, disponiendo la Comisión de elementos mecánicos destinados a labores de cultivo, muy bien podrá llevar su actividad hasta facilitar a los colonos tractores y útiles labranza que, dentro de determinada extensión superficial realizarán, en beneficio un grupo, labores de cultivo carácter que cada uno de

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ellos, aisladamente, se vería en difíciles condiciones para realizar con efi cacia. En resumen: la Comisión Nacional de Irrigación se encuentra en los Sistemas abiertos al cultivo, en condiciones especiales en estos momentos del colono en  pa ra red uci r a u n absoluto momento a la tierra, dándole ésta y el agua de riego, la semilla y los aperos de labranza, para cobrarlos en las proporciones que después indico, en el momento en que el colono recoja su cosecha, en modera das a través un contrato d e aparcería agrícola celebrado te con los colonos en los términos generales que paso a exponer. Antes, en que no va a el producto del el mero arrendamiento de la tierra; va a ser tomado como parte de  pag o de l lo te qu e e n el pro pio co nt ra to de aparcería agrícola y el cumplimiento de una condición, se promete en ven ta al aparcero. cho en otras palabras : éste adquirirá el derecho de volverse propietario de la tierra en estos momentos, y al recibirla con una cierto, y pasará a ser deudor del Gobierno  po r  pr e cio de cosa venta  pr om et e Estado. Las condiciones con trato, entonces, serían las siguientes : l"-Contratos de aparce ría agrícola y de venta por tres años agrícolas a  par tir d e la fecha de su celebración. colono entregará : de a). Si sólo recibe la tierra con derecho al agua, de riego, el cosecha bruta. además recibe la semilla el también se le facilitan aperos de labranza el esta participación recogida por la Comisión, descontará ésta en todos los casos la cuota riego en los términos que después s e indican, y además, en su caso, el valor efectivo de la semilla suministrada. En el caso de suministro de aperos un del producto bruto se apli cará al arrendamiento anual de los mismos. Hechos tales descuentos el resto, en efectivo, de la participación, se abonará al valor del lote materia del contrato. colono queda obligado a cubrir con la suma de sus entregas de tres años, el 10% del valor total del lote, abandonando el mismo como de sertor de la Colonia si sus aportaciones en los tres años de aparcería no alcanzan a cubrir ese este caso al valor original lote será deducido el importe de las entregas del primitivo  pa ra ofre cerl o co n es e cast igo a un se -

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solicitante, a su vez, dispondrá de tres de en contrato del todo análogo al celebrado con el primero. El valor del agua de riego será computado aplicando una cuota mixta compuesta de un d e $5.00 por he ct ár ea de te rr en o y de la cantidad que resulte por la aplicación por ahora, de centavos por mi llar de metros cúbicos usados efectivamente en el terreno. Esta cuota será destinada a cubrir los gastos administrativos del Sistema y la conserva ción y mejoramiento de las obras mismas, y al  pa sa r, en términos a  pro pie dad de la ley el Sistema usuarios, constituirá el fondo ad ministrativo con que ellos cuiden en su operación y conservación. el contrato de aparcería, la cuota de agua, comprendien do el mínimum y el volumen consumo, será cubierta en efectivo al  pre cio de tarifa, y el saldo del valor de la tierra, es decir, cuando más el del valor del lote, en veinte anualidades vencidas con causa del anual de interés. los efectos de la s disposiciones la Comisión  Na cional de Irrigación se obligará a entregar como mínimo un volumen de metros cúbicos por hectárea de terreno de riego, kilos semilla de algodón por la misma superficie, 25 de semilla de maíz, 50 de semilla de trigo y de cebada y las cantidades que se convengan en otros cultivos especiales. Como equipo facilitará un tractor caballos  por cad a l ote de 50 hectáreas, con un juego de arados y una rastra de dis cos o rejas. colono se obliga a su vez, a cultivar, por lo menos, el del lote que recibe en aparcería, y a trabajar la tierra a uso de buen labrador,  bajo la dir ecc ión y enseñanza técnicas de la Granja Experimental del Pro yecto. los contratos individuales de aparcería agrícola a que se refieren las presentes bases, un número cualquiera de agricultores, en los términos de ley, podrá constituir s ociedades cooperativas de  produ cción que, solidariamente responsables del cumplimiento de las obligaciones de s u s miembros, serán tratados corno personas  pa ra los efe cto s de los contratos correspondientes, dentro de la reglamentación especial que  pa ra es te ca so ha br á de aprobar la Comisión Nacional de Irrigación. en todo su vigor y fuerza todas demás disposiciones de los acuerdos presidenciales relativos, que solo habrán de si se aprueban las bases anteriores, en los términos del proyec to de acuerdo presidencial que al preeente estudio acompaño como anexo

el  proy ect o esp e así  pr es en to ba jo el ane xo nú me ro cífico de contrato con los  pa ra mu tu a de los intereses de éstos y de generales encomendados a la Comisión. -

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Réstame, para terminar, hacer especial mención de que en el contrato de aparcería agrícola, de ordinario impuesto  po r los terratenientes, el  par tido recogido por éstos, es, por regla general, de un tercio d e la cosecha si sólo la tierra (muchas veces de temporal), y de un si facilitan al  jun to con aq ué lla , la se mi lla y l os ú ti le s de la bra nz a y es to , re  pito, so la me nt e pa ra cub ri r el arrendamiento de la tierra, de cuya accesión se encuentra indefinidamente alejado el aparcero. se considera enton ces la  pr op ue st a y s e at ie nd e a la efe cti va tra nsl aci ón de domi nio que comparte, se comprenderá el esfuerzo máximo exigido a nuestros colonos, de rendir un de su cosecha  pa rt e de pag o de tierra. en el caso más gravoso  por es ta s bas es, vo lve rá exc epc ion alm ent e atractiva la colonización de los Si stema s y fundará sobre ést os el establecimiento de una efectiva población agrícola que busque independencia y libe ración económica en el trabajo efectivo de las vastas extensiones fecunda das con nuestros Sistemas. Esto, considerar que un inmediato alivio de la situación productiva de nuestro territorio habrá de dejarse sentir en bre vísimo término,  por solo ese concepto la situación económica general de nuestro país,  pa rti cu la rm en te la an gu st ios a sit uac ión de nuestra agricultura. De merecer la superior aprobación del Presidente de la República el programa expuesto, muy respetuosamente pido de usted Secretario. se sirva recoger la firma de nuestro Primer Magistrado en el acuerdo pre sidencial que anexo, y concediéndole su personal refrendo, autorice a esta Comisión a  pone rlo en desde luego, para trabajos de esta  ble cim ien to de los colonos en las tierras de que la Comisión dispone en  peri odo de explotación y  pro los Sistemas de Riego que han entrado testo  a usted, con mi atención, las mejores seguridades de mi considera ción y respeto más distinguidos" . Habremos de volver sobre este interesante tema en próximos ros, pa ra in for ma r a nu es tr os le ct ore s de los resultados que tenga en la prác la aplicación de estos nuevos procedimientos, que se comprende des de s u sola significan el máximo esfuerzo de la Comisión pa ra acercar la tierra al colono, en  ben efi cio de la inmediata y segura  pro ducción nacional.

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studio Crítico Presentado a

idrodinámica

Sociedad de Ingenieros y Arquitectos

México

 P o r e7   Ingenier o Roberto

GAYOL.

 NTRE los numerosos problemas que fue preciso resolver, al proyectar las obras de saneamiento y desagüe de la ciudad de México, tuvo es pe cia l importancia, el de fijar cuál era el diámetro económico de los conductos de fierro que debían distribuir el agua para lavar las  p u e s la g ra n longitud que tendrían dichos conductos imponía la necesidad de reducir al mínimo el costo de las unidades, para no in currir en un gasto exag erado y por otra parte, era preciso el agua  por me dio de máquinas de vapor, 2 fin de que llegara con cierta presión a los extremos más lejanos de los tubos y este trabajo exigía un gasto constante que aumenta o disminu ye en razón inversa de la quinta potencia del diámetro de los conductos y fue indis  pensable buscar un límite en el que ni el costo de la instalación del sistema, ni el gasto de  bombeo fueran excesivos. En vano busqué algún estudio semejante, que pudiera servirme de guía al no encontrarlo, emprendí el que consta en un cuaderno impreso en 1896, y ahora me re fiero a dicho estudio, porque él fue la causa y origen de l a desconfianza que me ins piran las fórmulas de hidrodinámica que los ingenieros tenemos que usar, cada vez que se presenta un problema en el que ent ra como factor dominante, el volumen de agua que pasa por ríos, canales o tubos, en condiciones que suelen ser muy complexas y variadas. En efecto en las  páginas 9 y 10 del citado cuaderno, hi ce constar las opiniones de dos autoridades reconocidas e n asuntos d e hidráulica, una, la de Monsieur Fl amant que dice: cuestión de fi ja r con exactitud l a de carga en los tubos, es m uy  plexa y no est á resuelta”. . . “Lo que s e debe busca r, es una fórmul a, tan sencilla como sea posible, y que esté de acuerdo con el mayar número de observaciones, en el limite práctico, para tubos de conducción ordinarios y de rugosidad media”. cantidad de agua que puede pasar por los tubos no se determi na con exactitud:

 pero que con un a velo cida d may or, es abs urdo adm it ir el movim ient o rect ilí neo y las velocidades críticas son tan pequeñas, que en todos los quedan fuera de los limites de las aplicaciones prácticas de la ingeniería.

las condiciones de la superficie interior, modifican mucho la capacidad de descarga”. falta de datos experimentales”. “30 Porque no se conocen bien las leyes del escurrimiento”.

Cuando la velocidad del agua es mayor que la crí tica, las moléculas del líquido siguen trayectorias en espirales de eje vertical que forman remolinos perfectamente visibles, o  bien si gue n tra yec tos heli coid ale s cuyos ej es son lí nea s casi para lel as a la  pend ien te gener al de los condu ctos y que son perceptibles por los cuerpos que aparecen y se sumergen en períodos de tiempo regulares, también por ligeras ondulaciones que rizan la superficie líquida,. siguiendo línea s que convergen hacia el eje medio y general de la corriente en los canales.

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Pasaron ya treinta y cuatro años desde que transcribí las citadas opiniones, y en este largo período de tiempo, que fue de una actividad de investigación que no tuvo precedente en la historia de la humanidad, la hidrodinámica preocupó hondamente a los s abios investigadores, debido a que sólo dos de sus aplicaciones.: la irrigación y la producción de la energía, son factores que modifican radicalmente la vida eccnómica de las naciones. Interesantísimos y muy variados son los experimentos que han hecho ingenieros más distinguidos del numeroso grupo que se ocupa la hidráulica en general,  pero el res ult ado prác tic o no corr espon dió a la fina lid ad qu e se tr at ab a de alcan zar,  pues la experi encia con fir ma ca da vez, que e n el movim ient o del agua que cam bia de lugar, intervienen factores cuya influencia irregular no sigue leyes Lien que se puedan traducir a expresiones algebraicas de aplicación general. Esta dificultad surgió des de e l momento mismo en que s e trató de medir los volúmenes de líquido que pasaban por canales y ríos, allá, en los comienzos de la in vestigación científica de los fenómenos de la Naturaleza, pues hace más de 300 años que Galileo con su genial perspicacia, percibió el hecho y declaró: mucho mejor y con más exactitud se pueden conocer las leyes que rigen los movimientos de los  pla net as y los  períodos de las est rel las , que las que se re fi er en a l os rí os y a los mares”. En 1750 la Academia de Ciencias de Berlín, ofreció un premio a quien resolviera el problema de establecer la relación que existe ent re la velocidad me dia con que se mueve el agua en un canal o río y la pendiente y la sección transversal de dichos con ductos. Con este motivo el gran matemático francés D’Alembert, declaró que él no tenía la potencia de análisis, ni la paciencia, ni el valor que se necesitaba para resolver en PO COS años el problema. gran matemático, el suizo Euler, que a la sazón era profesor en la Acade mia de Berlín, trató de resolver el problema, que las moléculas del agua en movimiento siguen estrictamente líneas rectas. Esta suposición es la que entraña el error capital en que se fundan todas l a s fórmulas que se han empleado y que aun hoy se utilizan, para determinar la velocidad de la sección transmedia de las corrientes de agua, en función de la pendiente versal de los conductos, error que consiste en atribuir al líquido una propiedad que no tiene, lo cual se puede comprobar, por medio de experimentos tan elementa les como son los de mezclar serrín de madera o  polvo de ámba r al agu a que pasa por cana les  per fec tam ent e lisos o  por tub os de vidrio. Así lo hizo en Berlín en 1869 el profesor Hagen, quien por su labor científica, merece que se le tenga como uno de los lectuales más prominentes que se ha ocupado de la Ingeniería Civil. Tambi én el profesor inglés Osborne Reynolds en 1883, demostró el hecho de que en el movimiento del agua en tubos, hay una velocidad que llamó critica, abajo de la cual s e puede admit ir que las moléculas del líquido se desalojan siguiendo líneas rec-

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La observación de los cuerpos flotantes ligeros, arrastrados por una corriente de tubos, los fi agua que pasa por tubos transparentes, demuestra que en el caso de lamentos líquidos tampoco son rectos, tan pronto como la velocidad es mayor que la crítica.

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El efecto del movimiento según líneas en espiral o helicoidales, disminuye la velocidad lineal de la masa de agua en conjunto, no sólo porque alarga el trayecto que entre dos puntos distantes tienen que recorrer moléculas del líquido, sino por el efecto de los choques producidos contra  pared es de l conduc to, y tam bié n de unas moléculas contra otras que siguen trayectorias convergentes en el caso de movimientos helicoideles, o  bie n s u s direcciones son diametralmente opuestas, como pasa en los remolinos en los que la mitad de la masa afectada por ellos se mueve contra la direc ción general de la corriente. La dificultad o más bien dicho, la imposibilidad de medir y reducir a números concretos el valor de los efectos que en velocidad produce l a irregularidad de la corriente, cuyos elementos no siguen líneas rectas, ha hecho que observadores que han establecido fórmulas para calcular la velocidad del agua, prescindan de la causa fundamental que motiva la incoherencia de los resultados que se  por la ex perime ntaci ón di rec ta , supo nen que son rec tos los filamentos liquidos, atribuyendo a la viscosidad, adeherencia y rozamiento, las diferencias en resultados que debieran concordar, y acuden al método de mínimos cuadrados o al de logaritmos homólogos,  para est abl ece r al fin fórm ula s empíricas, puesto que ellas tienen uno o coeficientes cuya magnitud se f ija, no por elementos de valor perfectamente definida, sino por la de acuerdo con el criterio de quien aplica una fórmula, cualquiera que sea, de las que se utilizan para el caso. En los 180 años que han pasado des de que la Academia de Ciencias de Berlín ofreció  premio a que antes aludí, varios observadores han reconocido la grande que para disminuir la velocidad de l agua, tienen los remolinos circulares, helioidales y otros irregulares que retardan el avance uniforme de las partículas del quido. Los observadores a que me refiero son más de cien, que han escrito en francés, inglés y alemán sobre hidrodinámica, y sólo uno: Dupuit, en la edición de 1865 de sus “Estudios theoriques et sur le mouvement des eaux courants”, habla d e un modo franco y claro de la fa se de la cuestión de que me ocupo. Los demás, si acaso

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citan, se refieren a ella tímidamente y establecen sus fórmulas fundados en suposi ciones inexactas, Weisbach por ejemplo supone que: variaciones de velocídad del agua en una sección de la corriente, tiene por causa la viscosidad del agua y su adherencia a las paredes del tubo’. en esto, desarrolla una teoría que tal vez puede aplicarse a mieles o alquitranes de gran viscosidad pero de ninguna manera a los líquidos que tienen la flui dez del agua. Weisbach acepta que en los tubos ásperos se forman remolinos y dice: Pero nosotros admitimos siempre a continuación, que la superficie interior de los tubos es perfectamente lisa y por lo mismo, no necesitamos ocuparnos de las irregularidades que haya en la superficie interior de dichos tubos”. De aquí se infiere que la investigación de Weisbach en este caso, es una lucubra ción puramen te teórica, por la sencilla razón de que, en la práctica, no existían conductos  pe rfe ct am en te lis os . Las experiencias modernas demuestran, además, que aun en los tubos de mate rial más liso, el vidrio por ejemplo, se producen remolinos y corrientes helicoidales tan pronto como pasa por ellos una corriente de agua con velocidad muy poco mayor que la pequeña velocidad crítica de que hice ya mención; por esto las perturbaciones del movimiento rectilíneo, cuyas leyes son desconocidas en lo absoluto, tienen una influencia dominante y son de mayor importancia que las consideraciones relativas a la cohesión, adherencia y rozamiento y a las variaciones de velocidad en los diversos  pu nto s de un a sec ció n tra ns ve rs al . La mayoría de los autores de fórmulas para determinar la velocidad de las corrientes de agua, aceptan a priori como buena, una ecuación que algebraicamente define la relación entre la velocidad, la pendiente y la sección del conducto y limitan sus investigaciones a fijar el o los valores de u n o o más coeficientes que se supone que serán constantes, pero aun admitiendo que la ecuación primitiva se funde en buenos razonamientos, tienen como base simples suposiciones y por esto, los escritores notables e imparciales como el francés Flamant, el americano Merri man y el alemán Ritter no vacilan en calificar todas las fórmulas a que me refiero como meramente empíricas. La ecuación monomia d e Chézy, s e fund a en el supuesto de que el agua se mueve en los conductores de manera que sus elementos se desalojan en líneas rectas, mientras que la de Girard, cuyo segundo miembro es un binomio, fue deducida por consi deraciones basadas en los experimentos de Coulomb, para determinar las resistencias que opone el agua al movimiento de los cuerpos que se desalojan sobre ella o dentro de ella, suponiendo que analogía entre estoc casos y el de que el cuerpo, el tu bo, está fijo y sea el agua la que se mueve. Así lo expresa Girard en las “Memorias del Instituto de Francia” de 1813, 1814 y 1815. Después de Chézy y Girard , la mayoría de los escritores que han pretendido establecer nuevas fórmulas para determinar la velocidad media de las corrientes de

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agua, tomaron como base una de las dos fórmulas citadas, limitando su trabajo a investigar cuáles son leyes qüe rigen la variación de uno o de los dos coeficientes que contienen dichas fórmulas; pero cualesquiera que sean los valores de dichos eficientes, ellos no podrán hacer que una fó rmula empírica, se convierta en la expresión de una ley natural. Otros escritores como Hagen y Unwin, aceptan a la vez q ue las fórmulas son empíricas y que es vano el esfuerzo fijar cuál es la ley de variación de coe ficientes, por lo que ac udiendo al método d e los mínimos cuadrados, intentaron esta ble cer ot ra s fó rm ul as qu e a la po st re no , re su lt ar on me jo re s qu e las ya con oci das . las A  pes ar de todos estos trabajos, es poco lo avanzado para definir cuáles leyes que rigen el movimiento del agua en muy variadas circunstancias que comprend e n : d e s d e t ub o s d e de diámetro, hasta las medidas del Amazonas y el Mis sissippi, pero las experimentos sobre toda clase de conductos, aun en condiciones que son idénticas en apariencia, dan resultados tan discordantes que escapan a todo intento de reducirlos a una expresión algebraica de aplicación general, no digo en el concepto lato de esta frase, sino en el de eliminar muchas variables, reduciendo éstas a una medida geométrica elemental, pues la experiencia demuestra que aun en canales nuevos, lisos, no se realiza el supuesto de que las moléculas del agua se mueve n siguiendo líneas rectas, y enteramente de acuerdo con los principios elem entales de la mecánica. Desde luego, en la práctica no hay conductos para llevar el agua que conserven  por tie mp o in de fi ni do sus  pri mit iv as con dic ion es y por lo mismo, no deben ser éstas, las que se tomen como  bas e  pa ra fi ja r la ca pac ida d no rm al de ellos, así es que las observaciones q u e se han practicado e n conductcs nue vos y lisos, sirven sólo para confirmar el hecho de que, aun en conductos que satisfacen estas condiciones, el movimiento del agua es tan irregular, que las características de dicho movimiento no se sujetan a leyes y fórmulas comunes. Un ejemplo notable que confirma este hecho, es el siguiente: El acueducto de Sudbury que surte de agua a Boston y el d e Croton que surte a  Nu ev a York, fu er on co nst rui do s pr ác ti ca me nt e ba jo la mi sm a dir ecc ión téc nic a, int erviniendo en esto ingenieros de reputación mundial, como los señores Fteley y Stears; SU S condiciones son las mismas exactamente, se emplearon los mismos materiales, idénticos métodos de construcción y ésta se a cabo emprendiendo la de Croton, inmediatamente después de la del Sudbury, por cuya razón en este se hicieron para determinar su capacidad, medidas y experimentos que se  pu ed en to ma r com o u n modelo de exactitud y precisión y que sirviercn de base para establecer una fórmula que permitiera calcular la capacidad de otro acueducto semejante y se aplicó al de Croton, con el resultado de que, al medir la capacidad del acueducto de’Croton, por este no pasó sino del volumen que se esperaba de acuerdo con la fórmula que se dedujo de las experiencias del Sudbury. Es ya muy grande el número de fórmulas que hoy se proponen para resolver el arduo problema de calcular con exactitud cuál el volumen de agua que pasa en diversas condiciones por conductos de forma y naturaleza muy variados y sería difícil, monótono y de ninguna utilidad práctica, presentarlas todas en un trabajo de tan

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0.00035

0.00045

 pro me dio

0.00040

1. v

a condiciones medias y que entonces, el valor de c es  pr ác tic am en te co ns ta nt e pa ra determinadas condiciones de aspereza. Admiten que hay ya varias fórmulas “exponenciales” pero que su uso es muy limitado  po r las dificultades que su aplicación presenta, dificultad que salvan Haze n y Williams, por medio de una regla de cálculo de construcción especial.

1.80

1. v 1.96 1.25

f

Hazen y Williams discuten el valor del exponente de s, utilizando diez y siete experiencias hechas en tubos muy y desechando, “muchos otros datos, los valores de c demuestran que tubos no estaban

v

Es decir: con esto siguieron el ejemplo de Weisbac h, que no es recomendable. Al discutir los exponentes de y los autores a que m e refiero, dan mucha impor -

las cifras numéricas variables de la tercera, son realmente el promedio de l a s an á(23 logas en las dos primeras, pero se presenta como sigue:

tancia a la viscosidad del agua, propiedad inmaterial e indeterm inada del líquido, porque nadie la ha medido; de las diez y siete experiencias ya citadas para fijar el valor del exponente de s, doce fueron hechas en tubos de y Om.20 de diámetro; en las otras cinco: los tubos tenían los diámetros de 0.28, 0.30, 0.40 y re pi tié nd os e el dos veces. Afirman que el exponente varía de 0.50 a 0.58 y admiten, sin demostrarlo, que es  bu en o el exponente de 0.54 que aparece en fórmula.

 2 0.00068

 pro me dio

0.00050

v 1.85

aquí como se ve, el  pr om ed io en tr e 40 y 68 es 50 y e n t r e 1.75 y 2.00 es todo lo cual no lo  pu ed e to ma r en se ri o, ni ng un a per son a qu e me di te un  poco ac er ca del origen de las fórmulas y de los inconvenientes graves que para sus investigaciones  pu ed e ten er, tan ta in co he re nc ia y ta nt a va gu ed ad que no se  pr es en ta con ot ro fu nd a mento, que el d e un maestro de autoridad muy discutible. Hazen y Williams presentan su fórmula como sigue: 0.63

discuten a continuación la fórmula de Chézy, diciendo que c es un factor que se apro xima a ser constante, pero cuyo valor depende de la aspereza del tubo, del radio me dio y de la pendiente, por cuya razón las variaciones de e son considerables y dificul tan la aplicación de la fórmula: de aquí se infiere que, en definitiva, no sabemos si los autores aceptan, que el valor de c es casi constante o muy variable. Respecto de la fórmula de Kutter, dicen Hazen y Williams que sus exponentes son menores que los verdaderos y que aumentando su valor para que concuerden con los hechos, las variaciones del coeficiente c serían menores; agregan que se encontraran exponentes que concordaran con los hechos el valor de c dependería solo de la asp ereza y c se ría constante, lo cual no es posible, porque influye también el diámetro de los tubos la pendiente en que están colocados; sin embargo, a la conclusión de qa e se pueden elegir exponentes que satisfagan

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.

En la discusión del exponente de r, Hazen y Williams, combinan en forma muy confusa, un diagrama en escala logarítmica con una tabla en la que detallan algunos datos relativos a 38 experiencias; entre esos datos no consta cuál es el exponente que a cada una corresponde y no dan explicación alguna acerca de cómo fijaron los valores de2 coeficiente c que consignan en la tabla; suponen que conviene utilizar los resultados que corresponden a tubos muy lisos de todos los diámetros, sin tomar en cuenta el material de que están construídos. Afirman que el valor de c, comun mente no varía mucho con la velocidad, pero este comunmente, significa que hay casos en que sí va - ía mucho con la velocidad, y para hacer comparables los resultados, forman su diagrama de los obtenidos con velocidades que varían de 3 a 3.5  pi es, af irm an do qu e no es bu en a la pr áct ica qu e seguido otros autores de fórmulas, que toman como base la velocidad de un pie segundo, porque es ta velocidad e s mu y inferior a la que el agua adquiere en los  prá cti cos de la uti liz aci ón d el líq uid o, y ta mb ié n po rq ue en la s pe qu eñ as vel oci dad es agua tiene más influencia que con las velocidades má s usadas en la viscosidad la práctica. Sería de poco interés y de ninguna utilidad hacer un estudio crítico de las con sideraciones que en su libro consignan Williams y Hazen, pues no hay en esas consideraciones, nada que convenza de que ellos mismos quedar on convencidos de que sus exponentes son la última palabra en la resolución técnica del problema de que nos ve nimos ocupando, pues así lo confiesan en la categórica declaración en que dicen: “Desde el punto de vista práctico el coeficiente que se use en la fórmula en cualquiera aplicación de ella, es mucho más importante que los exponentes”, y como los coeficientes que Williams y Hazen proponen, varían desde 80 a 140, queda un campo muy vasto en donde desaparece en lo absoluto la influencia de los exponentes.

Por otra parte, !a tabla que detalla las 38 experiencias que los citados autores analizan, es notable por la incongruencia d e !as cifras que ella constan. En efecto, la experiencia número 1, corresponde a un tubo de de diámetro y la número 2 a otro de  pero los dos ti ene n el mi sm o coe fic ien te: ex peri enci as núme ros y se refieren a tubos de de diámetro y les y resulta el mismo coeficiente: 144; las experiencias y 38 corresponden a tubos de y 4m.41 respectivamente, es decir, que el segundo tenía un diámetro ciento se tenta veces mayor que el primero. Además, el pequeño fue u n tubo d e plcmo y ma yor un túnel de mampostería, sin embargo, para los dos s e obtiene el mismo coeficiente: todo lo cual desacredita ese método de investigación, que conduce a tales ab surdos. Conviene hacer notar que los resultados tan discordantes que se acaban de anotar, fueron obtenidos utilizando un pequeño número de experimentos, cuyos resultados eran comparables, pues est a selección previa el conjunto de todas las experi encias conocidas para determinar la velocidad de las corrientes de agua, es un caos de resultados contradictorios que no permite llegar a ninguna conclusión.  Nin guna de las fór mul as des cri ta s, se a tipo que ha resultado satisfactoria; ninguna representa en general la relación que liga entre s í la velocidad con la  pen die nte y la secc ión, par a los caso s espe cia les a que supone aplicable; dichas fórmulas pueden representar algunos casos, pero la repetición de las experiencias demues tra que ninguna fórmula permite prever las discrepancias que la experimentación directa revela. En medio de una multitud de tanteos fracasados, la primitiva fórmula de Chézy, subsiste sin perder su crédito, por su modestia, sus  pocas pre te nsi one s y como la má s convincente al analizar los resultados prácticos de las inútiles complicaciones que se han introducido en ella, en el vano intento de sujetar el movimiento los líquidos a los principios elementales de la mecánica, siendo así que dicho movimiento está com  plic ado, que no ha si do posi ble no medir, que ni siquiera percibir las c a u s a s que lo  per tur ban , no es cuando estas causas por su magnitud son fácilmente apreciables a la vista. Como es natural, en estas condiciones los coeficientes de la fórmula de Chézy de  ben vari ar dent ro de los límites muy amplios, en sus aplicaciones a la gran variedad de casos, en que los ingenieros tienen que investigar cuáles son la s condiciones e n que deben conducir dete rminades masas d e agua. La fórmula de Kutter da el medio, si no exacto, aproximado por lo menos para estimar el valor de los coeficientes y sólo la práctica y la experiencia personal del ingeniero, puede suplir la indiscutible deficiencia de las fórmulas de hidrodinámica, siendo imposible en este caso, mucho más que en alguno otro, suplir criterío práctico por el estudio teórico de la cuestión, puesto que par2 dicho estudio solo se dispone de fórmulas empíricas fundadas en suposiciones cuya inexactitud está plenamente com proba da, y que no con cue rda n en gen era l con los res ult ado s de la expe rime ntac ión directa, razones todas por las que es  prec iso int roduc ir en dic has fór mul as, coefi cien tes que varían dentro de lími tes que desc onciertan y que no están sujetos a reglas  per fec tam ent e def ini das , porqu e tamp oco lo están las causas que determinan las irregu-

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laridades que en !a práctica se observan en las corrientes de la materia fluída, y estas irregularidades son tan grandes, que ha sido imposible descubrir !as leyes a que están sujetas. Estos conceptos y opiniones son, como todo lo que este pequeño trabajo expresa, conceptos y opiniones de autoridades competentes, no mías, porque no abrigo la tonta  pret ensi ón de se r aut ori dad en la mat eri a.

 No supongo que los ingenieros experimentados, encue ntren nada nuevo en todo lo anterior, pero sí creo que a los jóvenes que comienzan a ejercer  profe sión, les conviene tomar nota de que los exponentes fraccionarios distintos de 0.5 en las fórmulas de hidráulica, no son de perfección y exactitud en dichas fórmu las , son ellos, simple s modificaciones novedosas, que no solo no corrigen, pero que ni siquiera atenúen los defectos capitales d e la fórmula de Chézy y de todas las demás, que admiten que los líquidos s e mueven de acuerdo con los  princi pios ele men tal es de la mecánica, sin tomar en cuenta los movimientos en espiral y helicoidales, porque no es  posibl e hacerl o. dicho que conviene llamar la atención de los jóvenes ingenieros, acerca de que las fórmulas de hidráulica con exponentes distintos de no son más exactas que cualquiera otra, porque esas fórmulas impresionan la imaginación de personas de  poca expe rien cia que , juz gan do con cri teri o más teó ric o que práct ico, supon en que un autor que cambia el exponente 0.5  por 0.64, como ejemplo, debe haber hecho estudios y experimentos que le permitiero3 aproximar el valor del exponente a la segun da y a veces a la tercera decimal, lo cual dista mucho de ser una verdad, como lo  puse ya de man ifi est o. En fechas recientes he notado que entre los jóvenes de la presente generación, está muy en boga el librito de hidráulica de King, quien, siguiendo el ejemplo de otros muchos autores, tiene su fórmula particular y ccmo por circunstancias especia les llegó a mis manos un informe oficial que describe el estudio de caso práctico, en el que se aplicaron las fórmulas de King y de Haz en y Williams, hago a continuación el análisis de  par a dem ost rar los hec hos : el  prim ero que las cita das fórmulas condujeron a resultados inexactos. el segundo, que con fórmula ele mental de Chézy, aplicación, se obtienen l as mismas cifras numéricas que con las otras fórmulas con sus exponentes de dos cifras decimales, de molesta aplicación práctica. Emprendo dicho estudio, para demostrar con un ejemplo el descuido con que ahora se  pre se nta r opinion es que deb en serv ir de fundamento para trabajos de consecuencias trascendentales y a fin de que los ingenieros jóvenes no lo imiten, voy a poner manifiesto los error es que contiene; hay en el informe varias tablas que detallan en números concretos, las conclusiones del autor y dichas tablas son el te ma principal de mi estudio, que se refiere a fórmulas principalmente. La tabla número que se inserta a continuación es copia d e la primera que se encuentra en el informe que analizo. Desde luego llama la atención, que en un país en el que el idioma oficia1 es el cas tellano y en donde para las la ley impone el uso del sistema métrico, un ingeniero mexicano presente a las autoridades un i forme, en lenguaje Y medidas

2  2 

mezclando el inglés en lo que aquí puede y debe hacerse de acuerdo con lo ley prescribe. encabezado de la tabla dice que e st a se ref iere a un acueducto formado por de fierro colocados en una pendiente uniforme de 0.0003, lo cual es inexacto,  porque cifras qu e se anotan como pérdidas de cargas en la columna son la s que obtienen usando la fórmula de King, cuando los tubos están colocados a nivel, y no en pendiente de 0.0003 ni en alguna otra. En la columna que lleva 12s iniciales (horse power) o sea caballos de  potencia, dice que éstos son los efectivos, lo cual tampoco es verdad, porque las cifras anotadas en esa columna son los caballos d e potencia que teóricamen te serían indis pensable s pa ra vencer la ocasionada por la pérdida de carga, pues si como el texto del informe dice, su autor aceptó qu e el coeficiente d e rendimiento d e la bom ba y el motor, hubiera de ser de 0.75, los números anotados en la columna H.P., de  berían s e r un mayores, para indicar de hecho caballos de potencia efectivos. Otro error en la misma columna es: que las cifras que hay en ella, no san en realidad H.P. o  horse sino caballos de energía métricos, pues representan unidades de 75 kilogrametros por segundo y no de 33000 libras-pies por minuto, Las seis columnas de la tabla que están bajo el encabezado de " costo en millares de contienen cifras con las que se ha pretendido resolver cuál es la solución económica del problema, en el en que se acepte la idea de dar presión agua, el objeto de reducir el diámetro de tubos y disminuir así el costo de la instalación del acueducto. Acepto que fueron correctos los precios de los tubos en la época en que la ta bla s e formó, y como ese dato no está sujeto a reglas sino que depende de las condi ciones del me rcado, no h ay que h ace r consideración alguna técnica, respecto de la primera d e las seis columnas a que me vengo refiriendo. Lo relativo a las bombas s í merece consideración y estudio que voy a presentar, como fundamento de lo que tengo que decir acerca d e este detalle. La s bombas centrífugas, que son las únicas que hoy se mover grandes m asa s de agua con energía eléctrica, está n proporcionadas d e mane ra que la s piezas de que se componen, pueden resistir esfuerzos qu e varían dentro de límites muy amplios, por lo que las bombas destinadas a elevar el agua veinte o veinticinco metros, no son mucho más pesadas ni mayores que las que se destinan a elevar el quido sólo cinco metros; tal vez los ejes, las chumaceras y algún detalle de los que soportan el esfuerzo del motor, se tienen que modificar un poco, pero en general, todas las piezas sujetas a una presión estática, no se modifican sino cuando aumenta mucho la can tida d de en ergía q ue a la bomba se tie ne que aplicar. En el caso 2 que la tabla se refiere, vemos que las pérdidas de carga que con las  bombas s e trata de vencer, varían de 0.30 m. a 1.70 m. por kilómetro y como el estudio refiere a un acueducto de kilómetros, en él la presión inicial tendría que variar de 3 m. a 17 m. y la bomba dispuesta para la presión máxima, no sería mucho más  pe sada y resistente que la indispensable para la mínima presión siendo necesario mo dificar nada mas la potencia del motor, es decir, que el costo de la bomba sería una que tendría que dividir número de kilómetros para definir cuál es

23

su costo por kilómetro, mientras que el costo del motor sí se modificaría, creciendo  pr op or cio na lme nte a la pé rd id a d e ca rga oc as ion ad a por la di sm in uc ió n de l di ám et ro del tubo. Para dar una idea de la importancia que pueden tene r los cambios en la potencia de los motores eléctricos aplicables a l a s  bo mb as, in se rt o a continuación los siguientes datos prácticos. De acuerdo con las estimaciones de una casa especialista, un motor ca bal los , qu e - dé revoluciones por minuto y que tenga un r eductor de velocidad de a 250 revoluciones por minuto, vale $3,250 pesos, es decir: $21.60  por cab all o. Un motor de 500 caballos, que marche también a 875 revoluciones por minuto, vale $6,200 pesos, es decir: $12.40  por cab all o. Tengo también a la vista unos presupuestos, de la famosa casa de Gwynne, que ha fabricado la maquinaria grande que para bombear agua existe e n el mundo, y que está instalada en Egipto; casa que fabricó también las bombas que hace cuarenta años instalé yo en San Lázaro, y que después de tanto tiempo y mucho abandono, siguen prestando sus servicios, sin haber necesitado reparación alguna. El  pri me r pr es up ue st o lo pe dí yo hace poco más de un año, para completar la instalación d e San Lázaro se refiere a tres bombas que debían elevar siete y medio metros cúbicos por segundo, a 4.6 m. de altura. y el de tres motores de 225 caEl  prec io d e las tr es bo mb as , se rí a de  bal los o sea 675 caballos, sería de es decir que el  pre cio de l co nj un to :  bo mb as y motores, resulta a $74.00  por cab all o y el de los motores nada más, a $29.6  por cab all o. El otro presupuesto de la misma casa, es por dos bombas que elevaran, cada una, 1,200 litros por segundo, con presión hidrostática de 11 metros; en este caso no está separado el precio de los motores, sólo da el del conjunto que es d e $26,000.00 y como  par a pro duc ir el efecto indicado, se necesitan 470 caballos, resulta un precio de $55.00  por ca ba llo de en erg ía po r mo to re s y  bo mb as. Estos datos prácticos y recientes, me autorizan para afirmar que es inadmisible el precio de $1,500.00  po r ca ba llo d e en er gí a, que el aut or d e l a tab la at ri bu ye al pre cio de la planta para bombear el agua y cuando en el caso de la tabla que analizo, se trata de encontrar el  pr ec io por ki ló me tr o de un ac ue du ct o d e kilóme tros de longitud, es absurdo atribuir a cada kilómetro el costo total de la planta de  bo mb as ; pue s si se quiere tomar en cuenta el costo de las máquinas, lo que debe hacerse es: dividir por el número de kilómetros el costo de la planta de bombeo y el cociente es 10 que a un kilómetro corresponde, porque de seguir el método que la ta bla ind ica , re su lt a qu e pa ra el ca so de tu bo s de sólo la planta de bombas costa ría medio millón de pesos, lo cual es absurdo, como lo demuestran los datos de costo que antes consigné. En una investigación del género de la que me ocupa, el costo de la planta de bom beo po r kil óm etr o, es m u y pe qu eñ o, co mp ar ad o con la s cif ras a que llegan el costo de tubos y capital que se a capaz de producir como interés el costo de bombear el agua; por otra parte, solo con apreciaciones mas o menos bien fundadas, se puede resolver si conviene invertir la gran cantidad de dinero que exige la condición de que

agua llegue por simple gravedad o si conviene darle cierta presión, para reducir diámetro de los tubos y disminuir así el costo original de la obra. límites dentro de los cuales pueden variar las apreciaciones son tan grandes, comparado con ellas, resulta el costo de las bombas, pero se quiere to mar en cuenta, no es correcto el sistema cargar el costo total a las cifras que ex  pre sa n ga sto s por ki ló me tr o y tampoco es correcto suponer que las bombas cuestan a razón de $1,500.00 por caballo de potencia. En la cuarta y séptima columnas del grupo que d e la tabla vengo analizando, el autor suma el precio de los tubos, el de las bombas y el costo  de bombeo durante un año, a los precios de $0.05 y 0.10 centavos por millar d e metros cúbicos elevado a un metro y establece a  pr ior i, em pí ric am en te , q u e !a ci fr a me no r en tr e di ch as su ma s, es la que corresponde al diámetro económico del tubo que se debe colocar. Antes de discutir esta conclusión voy a desarrollar el sencillísimo estudio analí tico del problema, que sustituye al absoluto empirismo de la tabla cuyos errcres aca  bo de po ne r de ma ni fi es to .

24

25

, Cuando estudié el caso de la distribución del agua para la var las atarjeae, llegué yo aceptar la fórmula de Chézy. con el coeficiente de a la conclusión de que 0.00032, que Fitzgerald determinó en el acueducto de Sudbury, para el caso en que el agua produzca incrustaciones en el interior de los tubos, pero como está probado que el ag ua que hay q ue entubar en el caso q ue me ocupa, no produce incrustaciones, se  pu ed e apl ica r la fó rm ul a

0.000268

-

en la que es la pérdida de carga por metro lineal, velocidad con que pasa el el radio medio. agua en los tubos y Si en esta fórmula se sustituyen los valores de y d e en función del volumen de agua y del diámetro de los tubos queda en la forma que sigue:

-

(2)

La energía que se consuma para forzar el volumen un metro de tubo, es: E (3) sustituyendo en esta el valor de

Q de agua, para que pase por

y multiplicando por 1,000  pa ra ob te ne r el con sum o

de energía por kilómetro de tubo, resulta:

E

1.74

D5

-

(4)

En ciertos casos la Compañía de Luz y ha contratado elevar a un metro de altura, mil metros cúbicos de agua por $0.05, así es que, Q metros cúbicos a  J metro de altura costarían, llamando g el gasto:

6.6, son la representación grá En el diagrama número las curvas fica de las fórmulas (11) y (12) en los tres casos que vengo considerando. Los precios de los tubos, son los que contiene la tabla número 1 y por el diagrama se ve que entre un metro y un treinta centímetros, dichos precios están sentados por u na línea r ect a inclinada s obr e el eje de la y ecuación es: y

0.63

aume nta n en una proporción u n poco mayor, según la arriba de 1.30 m., los línea de puntos y rayas, debido al aumento en el costo d e las juntas. Además de las curvas hay en el diagrama unas líneas quebradas: de  bo mb ear e l agua co ntie ne  R.R y construídas con los datos que para el la tabla número  pe ro mult ip li ca do por PO,  para qu e represente e1 capi tal anual produzca el gasto d e bombeo, d e acu erd o ccn e! método que yo seguí al estable cer las fórmulas (11) y  p ue s sólo de esa manera son direct amente ccmparables los diagramas. La irregularidad de las líneas y E, el empirismo de las cifras que contiene la tabla número 1. En el extremo derecho del diagrama número hay unas A’, truídas tomando como abscisas, la suma del costo del bombeo y del dc do los diámetros las ordenadas; estas curvas en sus abscisas es el diámetro con el que s e obtiene la menor suma de los dos elementos considerados, 1, se suma que en el de tomé la tabla como la que da la solución económica del  prob lema , lo cu al e s inexacto. Cuando se tienen construídas las curvas  A, y no es necesario hacer las su mas del costo de bombeo y de los tubos y construir en seguida las curvas A’, y  pue s bastará trazar la s tangentes que formen con el eje d e les X, el suplemento del ángulo que con el mismo eje forma la línea que representa el costo de los tubos; los puntos de tangencia T,corresponden a los diámetros que dan la como se puede comprobar en el diagrama. El diagrama número fu e tomado de! inf orme que m e sugirió el presente estudio, y es una copia azul de que obra en dicho informe; las curvas de este diagrama son las análogas a las A’, B’ y C’ del diagrama número La sinuosidad de las curvas en el diagrama número 2, es otro hecho que ma la inexactitud de los datos de la tabla número que s u autor utilizó para trazar dichas curvas y son ellas prueba elocuente del descuido del mismo autor. La s curvas A, B y del diagrama número  pr oporcionan un me di o rápido, senci llo y exacto, para definir cuál es la solución conveniente, de acuerdo con las circunstancias del caso, relativas a la cantidad de dinero disponible para la ejecución de las obras: si el dinero es abundante conviene aceptar los tubos de mayor diámetro si el dinero escasea  por e sto co nvie ne hacer una que corresponden a los puntos instalación barata se pueden aceptar los diámetros que corresponden a los  puntos y  pa ra co ndic io ne s medias los pun tos Por lo que antecede se percibe que es indeterminado el problema de fijar exac tamente cuál es el diámetro de tubos que conviene establecer, porque hay dos

28

rrectas, ellas las consecuencias prácticas que se derivan, de los cálculos basados en dichas suposiciones incarrectas. En cuanto a las consideraciones relativas a la máxi ma descarga de los tubos, cuando la altura del agua es de 0.93 del diámetro, no tiene objeto en el informe y de  bió hab ers e supri mido, porque a rengl ón seg uid o de  pre sen tad o, el aut or de muestra que no se debe fundar en esas consideraciones ninguna reducción del diámetro de los tubos, sino que debe aceptarse el diámetro mayor. Por otra parte, eso que por un tubo pasa mayor cantidad de agua, cuando ella ocupa solo 0.93 de la altura del diámetro es únicamente una lucubración teórica impuesta, porque las fórmulas empíricas que se utilizan para calcular la velocidad del agua, entra como el radio medio y este tiene un valor máximo, cuando h  pei o es ta luc ubra ció n, es una de la s varias que no se confirman, cuando prácticamente se miden los volúmenes de agua que con distintas fracciones del diámetro como altura, pasan por los tubos. Tres ingenieros, Scobey, Wamser y Wilcox, independientes entre s í , demostraron ya que la práctica y la teoría no están de acuerdo en que máxima descarga por un tubo se cuando la altura de l agua es de 0.93 del diámetro. Ahora voy a poner de manifiesto la inutilidad de complicar la fórmula original de Chézy :

cambiando el exponente 0.5  por otr os en los que aparecen dos y aun tres decimales, demostrando que con el cambio sólo se consigue hacer más molestas las aplicaciones, sin que dos o tres decimales de los nuevos exponentes, signifiquen un adelanto que garantice la de que con ellos se obtienen. Como fundamento y origen de mis actuales ideas, acerca de las fórmulas que se al movimiento de agua en los tubos, me permito recordar aquí, un hecho que describí en el estudio que hice de los tubos de distribución del agua para lavar atar jea, ? estu dio que como an te s dij e, fue imp res o en

11 y 12 de este impreso, consta ese hecho que ahora voy a deEn las páginas tallar un poco más. Por el año de 1889, trató de instalar dos tubos de lámina de fierro, que deconducir 2,190 l i t r os d e agua  por seg undo , par a prove er a la ciu dad de Newa rk, dió  New Jers ey, E. a esos tubos se m. de diámetro y cada uno tiene 34 kilómetros de longitud: además para e! servicio de alta presión, hay un ramal de m. de diámetro y 8 kilómetros d e longitud En aquella época, sólo en California se habían construido acue ductos con tubos de lámina de fierro remachadas, debido que e! extremo Oeste de Estados Unidos carecía de fundiciones, y los tubos de fierro fundido llevados del Este, por s u gran  peso, res ult aba n su ma me nt e caro s. Hubo, sin embargo, excepción en el Este, en Rochester, se terminó a  princi pios de 1876. la instalación de un tubo de lámina remac hada, que tenía 0.91 m. de diámetro y en el informe a nual del Ingeniero en Jehe Mr. Geo. W. Rahter, en de enero de se publicó el dato de que pasaban por el tubo 35,200 metros cúbi-

32

cos

en 24 horas,

lo que para las condiciones en que estaba

 produ cia un a

descarga que resultaba mayor que la que se obtenía en tubos d e fierro fundido nuevos y en condiciones semejantes. En la determinación del diámetro del acueducto de Newark, intervinieron dos ingenieros de fama mundial, uno fue Mr. Knichling, cuyos numerosos escritos sobre hi dráulica llenan muchas páginas de las Memorias de la Sociedad de Ingenieros Civiles Americanos y el otro, Mr. Clemens Hersch el, em inente i ngeniero que inventó el Medidor de Venturi, invención que basta para inmortalizar en los anales de ciencia el nombre de su autor. En aquella época, no sino muy pocos datos e informes, acerca de la capacidad de descarga de los tubos de fierro de gran diámetro en general, pero especial mente de los tubos de lámina remachados, y Mr. Knichling empleó la fórmula de Lam  pe, cuyos res ult ados coin cidí an con los obtenidos en los tubos de ochester, en  puest o de que daba pas o a metros cúbicos por día, cifra inexacta, porque des pué s se comprobó que no pasaban sina metros cúbicos en veinticuatro horas. Mr. Herschel utilizó los datos que publicó en su obra d e Hidráulica, el ingeniero Hamilton Smith, y que según este, se fundaban en experimentos hechos en los tubos remachados que se habían inst alado en California. La fórmula de Smith la encontró en los Anales de la Sociedad de Ingenieros Civiles Americanos y no es sino la fórmula de Chézy, con el coehiciente de c 0.182, es decir, que la  pér di da de car ga por mil uni dad es de lon git ud se det erm ina por la fór mula

0.182

-

En la época en que yo estudié sistema de lavado de las atarjeas de la ciudad de México, recibí ta mbién otro número de los anales de la Soc. de Ings. Civ. Amer., en el que venían descritas las experiencias y los resultados que obtuvo Mr. Desmond Fitzgerald, al estudiar la capacidad de descarga de dos tubos de 1.22 de diámetro que están colocados en un tramo del acueducto de Sudbury, que surte a Boston de agua  potabl e.

El señor Fitzgerald encontró que el coeficiente de la fórmula debía s er dando ella como sigue

0.268,

que-

J Cuando en 1892 se  pas ar el agua fueron sorprendidos por hecho de que: litros por segundo, para los cuales se da más 1,480 litros en la unidad de relación entre

por el acue duct o de Newark, los inge nier os en vea de que por los tubos pasaran los había proyectado el acueducto, pasaron natiempo.

los coeficientes de Smith y de Fitzgerald es de 182 = 0.58. 268

33

de las dos cantidades de agua, la que pasa y la que se trató de que pasara por el acueducto de  Newa rk es:

TABLA

,

Comparación de los resultados que obtienen, aplicando varias fórmulas, para in vestigar cuál la pérdida de carga que resulta, cuando  por tub os de dis tin tos diámetros, 1,500 litros de agua.

1480 = 0.68. 2190 esta coincidencia me ha inspirado gran confianza en el coeficiente con que Fitzgerald aplicó la fórmula de Chézy,  por cuya razó n lo vengo usando desde  para los casos  prác tic os que se me ha n pre sen ta do; es posib le que para tu bos nuevo s y sol dado s que hay ahora en el mercado, diámetros resulten un poco mayores de lo que sería estrictamente necesario, pero es preciso recordar, que las fórmulas elementales que se utilizan siempre, no toman en cuenta los muchos cambios de dirección que los acueductos de gran longitud presentan en todos casos, ni tampoco que con el tiempo reduce la capacidad de descarga de los tubos: unas veces porque se altera, la superficie en contacto con el agua, otras porque se concresiones, se desarrollan vegetaciones o  bien s e produ cen algu nos depós itos sed ime nta rio s. todo esto, no conviene usar coeficientes demasiado grandes en la fórmula

 pues tal es coefi cie ntes ind uce n a err ore s de muy ser ias conse cuenc ias, debi do a que con dichos coeficientes el cálculo da mayores o  pér dida s de car ga menores, que las que prácticamente se  puede n obte ner. En otro lugar inseito tabla número 4, en la que hago constar las pérdidas de carga que se obtienen, aplicando las fórmulas de King, de Hamilton Smith, de Pitzgerald y de Kutter, en caso de que trate de conducir 1,500 litros de agua por se gundo, en tubos de los diámetros especificados en la tabla número 1.

i

 Pi es .

 Me tr os .

1.14

5.670 4.099

1.79 1.25

1.30 1.37 1.45 1.47

2.261 1.813 1.318 1.193

0.69 0.55

Los

números consignados en la tabla número 4, demuestran que la fórmula de King empleada por el autor del informe que analizo, da pérdidas de carga menores, que fórmula de Hamilton que produjo tan desast rosos resultados, cuando fue utilizada para determina r e! diámetro de los tubos del acueducto de Newark. La fórmula de Chézy con el coeficiente de Fitzgerald, produce resultados muy semejantes 2 de la fórmula de Kutt er, cuando los valores de C en ésta, s e determinan con un coeficiente de aspereza: hecho que se  perci be al exa min ar la Tab la núm er o 4, es: que por medio de la sencillísima fórmula:

J

R

sin tablas auxiliares y sin más trabajo que hacer algunas operaciones de aritmética elemental, se obtienen los mismos resultados prácticos que con la aparatosa fórmula ¿e King. Exactamente lo mismo pasa con l a fórmula de Williams y Hazen y para demostrarlo, voy a utilizar la tabla número que viene inserta en la página 18 y que el autor del informe que analizo, utilizó para determinar por tanteo, cuál es el diámetro del tubo que colocado en pendiente de 0.0003,  puede dar pas o a 1,500 litros de agua  por segun do.

34

4.

0.40

0.36 0.33

1.72 1.28 0.93

1.94

1.36 0.99 0.73

0.52

0.80

0.40 0.36 0.33

0.42

0.38 0.35

2’80 2.00 1.40

60 60

0.80 0.60 0.56 0.51

62

2.00 1.50 1.10 0.80

64 64

0.50

61

64

Para formar dicha tabla número 3, su autor calculó las velocidades con que pasa el agua por tubos de distintos diámetros, de acuerdo con la fórmula de Williams y Hazen; dicha tabla no indica cuales son las velocidades calculadas, pero e s muy fácil deducirlas y yo las hago constar en la tabla inserta número 5, que confirma la inuti lidad de complicar con exponentes de dos cifras decimales, la primitiva fórmula de Chézy, esta, con el coeficiente c reproduce exactamente los resultados que se obtienen con la muy molesta y  pre trn cio sa fór mul a de Hazen y Will iams . --

-

y no (1) El coeficiente K, de la fórmula de King para este casa es la cifra como aparece en tabla que obra en el informe, por esto la  pér did a de carga resulta un  poco mayor. ( 2 ) Coma en la fórmula de, Kutt er el valor del coeficiente es función del radio medio,  preciso anot ar los coeficientes que corresponden a cada diámetro, y fueron calculados para un coeficiente de aspereza 0.011.

 35

 preso volumen correspondiente a 1768 de las “Memoires presents par divers Se vants Etragers”, traduc ido en 1800 en el “Nicholson’s Journal”. En este trabajo demuestra Chózy, los errores a que daban lugar los instrumentos que para nivelar se uti lizaban entonces y especialmente la plomada, por grande que fuese la finura del hilo que en ella se empleara, y describe después la manera de construir el nivel de bur buja de aire, de ese ins tr ume nto peque ño e n sí,  pero inm ens o por los servicios que ha prestado y que inde finidamente seguirá prestando a la ciencia del ingeniero todas sus aplicaciones, puesto que sin él, sería imposible alcanzar el grado de rapidez y exactitud que se obtiene con el nivel de burbuja de aire, adaptado a los instrumen tos con que se ej ecutan l as me didas de precisión de toda especie: longitudes, ángulos o diferencias de nivel, y yo estimo que, cualquiera de las dos ideas: l a fórmula de hidráulica o la invención del nivel de burbuja de aire, han sido de consecuencias tras cendentales, no solo  par a el ade lan to de la cien cia , sino par a faci lit ar el  progre so ma terial que aumenta el  bie nes ta r de los  pueb los ; por esto cre o que el aut or de la s dos ideas, merece que se le considere como un hombre de inspiración genial, benefactor de la especie humana  y , sin embargo, sus contemporáneos lo tuvieron en tan poca cosa. que hay en su historia hechos patéticos que son verdaderamente conmovedores.

Así,  por un tr aba jo de se is mes es , en  pago

de

el

Canal de Borgoña, Chézy recibió

honorarios ciento veintiséis francos.

tarde, vivía de una pequeña pensión como ingeniero retirado de Puentes y Calzadas, retiro que en la época de la Revolución se le pagaba en moneda de tan pocc valor, que en 1795 tuvo que vender la crin del colchón en que dormía, para el pago de sus alimentos, y esto sucedió cuando é! tenía 78 años de edad. y en 1829, en el Instituto de Francia, Le y Prony elogiaron los tra En  bajo s de Chézy, pero a mi ent end er no ta nt o como él lo merece, pues yo estimo que es acreedor a la gratitud, al respeto y consideración de los ingenieros de todo mun do, y por esto, al recordar su nombre en el seno de nuestra Asociación, propongo que ella, como testimonio ¿el reconocimiento de los méritos del modesto y gran ingenie ro Antoine Chézy, se honre 2 sí misma, colocando su efigie en el salón de sesi ones, para que los ingenieros mexicanos, rindamos a su memoria un homenaje de considera ción y de respeto.

royecto de Irr  en el (Colaboración

A Comisión Nacional de Irrigación ha tenido en estudio el importante pro yecto de aprovechar en riego y en generación de energía eléctrica, aguas del río Conchos y de sus afluentes, los rios San Pedro y Florido, del Estado de Chihuahua. La extensa zona que se trata de regar es tá comprendida el rio Conchos al e ste, el río Chuvíscar al norte, las sierras de Bachimba y Rosales al oeste y el pueblo de La Cruz al sur; abarca una superficie de 225,000 hectáreas, de 110 kilómetros de largo, por anchos variables entre 18 y 29 kilómetros y e s t á atravesada por e! antiguo Central Mexicano, en su tramo comprendido entre las ciudades de Camargo y Chihuahua, que es una condición muy favorable d e comunicación con los  prin cipa les ce ntr os. de consumo. El clima de esta zona es excelente para el desarrollo de toda clase de siembras, una vez puesta bajo riego. En la actualidad, la Compañía Agrícola y de Fuerza Eléctrica del Conchos, A., almacena los aguas del río Conchos en sus  pre sas de La Boquill a de las Babisas y La Colina las usa como fuerza en sus  pla nta s hid roe léc tri cas si tua das al pie de es ta s  presa s. La primera presa cierra el vaso llamado Lago Toronto con capacidad de 315,000 segunda, situada a 12 km. abajo de la primera, sólo tiene por objeto crear una caída de 12 metros. La planta hidroeléctrica de la Boquilla produce en promedio 17,810 K. W. y de La Colina 3,750 K. W.

H. M. y la

Varios reconocimientos y estudios s e han hecho para ver manera de aprove char debidamente las aguas del río Conchos y de sus afluentes con el menor costo  posi ble de const rucc ión y de explotación del sistema. En el año de 1919, e! Den-

Boquilla de La Rofietilla, río Conchos, Chih., vista aguas abajo.

38

Técnico).

Río Conchos, Chih. Cañón de La Rosetilla. Vista tomada desde la Boquilla,

aguas

arriba.

 jamín R. Enríquez, por cuenta del Gobierno del Estado de Chihuahua, formó un proyecto de aprovechamiento de las aguas de ríos Conchos y San Pedro, que no ha sido adoptado por la Comisión Nacional de Irrigación, por costoso,  por que el  pri me r tr amo d e 56 del canal principal es enteramente muerto, es decir, que hasta esta distancia 2  par tir d e l a bo ca-t oma d e este canal, em pieza n las tierras regay por haberse puesto en explotación, con posterioridad 2 la formación del proyecto, la planta de que queda situ ada abajo d e la boca - torna del canal proyectado. En 1928 el Ing. Emilio Droniman estudió un proyecto. por cuenta cuyas carac terísticas principales consisten en desprender de una presa de almacenamiento en el cañon de La Rosetilla, situado a 100 abajo de L a Boquilla, un canal principal de riego por cad a marg en de l río Conchos, y en u sa r parte de aguas almacenadas, fuerza para el desarrollo de energía eléctrica. Es te proyecto tampoco ha sido aceptado por la Comisión Nacional de Irrigación, principalmente porque una gran parte d e las tierras de mejor calidad no quedan dominadas  por dichos canales que resultan 2 acotaciones de más bajas que las del canal Enríquez.

El  proyecto Fi she r ad opta do por la Comisión Nacion al de Irrigación, según el cual se propone llevar 2 cabo las obras de aprovechamiento en riego y en fuerza, de aguas de ríos Conchos, San Pedro y Florido, consiste: en una presa de derivación en el río Conchos, a kilómetros abajo de la d e La Colina; un canal principal de riego que empieza en esta presa, por la margen izquierda, cruza el río San Ped  - o

Río Conchos, Chih.-Cañón

de La Rosetilla en su  par te media.

Río Conchos, Chih.-Cañón

de la  boquilla de

Rosetilla,

vista

aguas

arriba.

diante un sifón y termina en el río Chuví scar ; una presa d e derivación en el río San Pedro, abajo de dicho sifón: un canal principal de riego  p arte de esta pr esa , por la margen izquierda y sigue paralelo al canal alto anterior: una presa de almacena miento en la boquilla d e Villalva del río S a n Pedro, otra en  boquilla d e Las Vírgenes del mismo río, que formará el lago Delicias, a K. abajo de la anterior y una tercera, en el cañón de La Rosetilla, sobre el río Conchos, a 100 K., como ya se dijo, abajo de la Boquilla de Babisas; una  pres a para fue rz a en Puerto de Pintas que es atravesada por el  primer canal en el kilómetro  por último, cuatro pl an tas hidroelé ctricas, una al pie de cada una de las expresadas presas de almacenamiento y de la Puerto d e Pintas.

El

canal principal que parte del Conchos se ha proyectado con una capacidad inicial de 40 que gradualmente se reduce hasta llegar al río San Pedro, en donde  part e del agua qu e con du ce pasa por e! sifón otro lado de esta corriente, para seguir por el canal alto y el resto se descargará en el rio San Pedro para derivarla por  pr i me r can al es el canal bajo, cuyo gasto inicial será de 13 El desarrollo de Kms., y el del segundo de Kms.

La  pr es a 123,000

de Villalva s e construirá de arcos múltiples, de de altura máxima y de capacidad y la de las Vírgenes será de igual tipo, de 45 en su mayor altura y con capacidad para 34,000 La  planta de Villalva desarrollará 6,000 y la de Las Vírgenes 6,000 la de Puerto de Pintas 1,200 K. W. La s aguas desfog adas por la se gund a plant a se rán derivadas por la  presa del río San Pedro, hacia el canal d e riego. extensión regable con este plan ascenderá a 53,000 hectáreas de tierras, que  podrán s e r cultivadas cereales, hortalizas, árboles frutales, algodón, caña de azúcar, alfalfa, camote, cacahuate, remolacha, etc. El costo del proyecto por hec tá rea reg ada será, abonado lo que corresponde a! aprovechamiento en fuerza, $427.00 y sin hacer este abono $511.00. La presa y planta hidroeléctrica de Rosetilla están actualmente en de construcción por la Compañía Agrícola y de Fuerza Eléctrica del Conchos quien, para ello, Obtuvo un a concesión de ,la Sec ret arí a de Agricultura y Fo mento. altura máxima

41

ACTUALES DEL VALLE  Pro bl ema Ge ner al de l Mej or am ie nto del

Valle  de

Juá rez .

En la actualidad, condiciones del riego en todo valle son absolutamente distintas. El “U, S. Reclamation Service”, organización oficial del Gobierno Norteamericano que tiene a su cargo el establecimiento de sistema s de riego, construyó en terrenos del estado de Nuevo México, con el propósito de regularizar el escurrimiento total del río Grande para fines de riego,  pre sa de l El efa nt e (Elepha nt. Butte Dam), que tiene la enorme capacidad de metros cúbicos. Esta prosa, concluida en el año d e 1915, es la base de un extenso siste ma de riega, e! "Río Gran de Irrigation Project” que da servicio a m á s d e hectáreas de terrenos de los Estados de  Nue vo México y Texas. El Valle del Paso, que es una de las unidades de riego del “Río Grande Project”, se encuentra en pleno florecimiento agrícola; cuenta un amplio sistema de canales de riego, utilizados en el  be nef ici o de má s de hectáreas, (el elemento principal del sistema, “Canal Franklin” aprovecha para su bocatoma la antigua presa ¿e derivación mexicana), con un completo sistema de canales de drenaje, Lien conservados continuamente mejorados ; con un abundantísirno abastecimiento hidráulico y con magníficos caminos y vías férreas. El Valle de Juárez,, por el contrario, encuentra en condiciones verdaderamente precarias, que son las determinantes de las deplorables condiciones de la región. SUS zonas de riego distan mucho de constituir un sistema: las obras de derivación, conducción y distribución son complet amente provisionales e ineficaces el abasteci-

El Río Bravo del  Nort e a la altura de El Sauzal. Al fondo, del lado izquierdo, se ve la sección del “Canal”, que fué destruída  po r el mismo río.

miento hidráulico regular, base del servicio de riego, es absolutamente deficiente en volumen y en su régimen, existiendo canales con derivaciones completamente eventuales qúe abastecen a más de la mitad de la superficie cultivada; a pesar d e antigüedad del riego en el valle, no se tiene el más simple elemento de drenaje, por lo cual el ensalitramiento ha inutilizado más de hectáreas de la superficie total irrigable, extendiéndose y acentuándose contínuamente ; los terrenos están expues tos a inundaciones, que sufr en frecuente mente, por desbord amientos del río Bravo o de sus afluentes torrenciales; apenas se intenta construir caminos, etc., todos esos distintos problemas parciales se encuentran íntimamente ligados entre sí,  por lo que el problema general de utilizar los elementos de que se dispone para establecer en el Valle un verdadero sistema de riego, es sumamente complejo. Vamos a estudiar someramente los  prin cip ales pr ob le ma s pa rci ale s y a tratar de definir las bases de las soluciones correspondientes ; empezaremos por el problema del abastecimiento hidráulico, que es uno de los de más urgente resolución.

ABASTECIMIENTO HIDRAULICO DEL VALLE DE JUAREZ El Convenio Internacional de  21  de  ser vic io

Tramo inicial de la acequia madre, de Ciudad Juárez, Chih. Al fondo, la ciudad de El Paso, Tex.

44

como  bas e del m a y o  d e  rieg o de7 Valle d e Juárez

La base del abastecimiento hidráulico del Valle de Juárez es el convenio internacional de 21 de mayo de 1906, que tuvo por objeto resolver las dificultades de ca rácter internacional suscitadas con motivo del uso excesivo de aguas de la cuenca

superior del río en el riego de terrenos de los Estados de Colorado y Nuevo México, ... serio perjuicio de los agricultores mexicanos del Valle, cuyas continuas quejas dieron lugar a una reclamación del Gobierno mexicano ante el norteamericano. Re conocido plenamente el daño causado, se llegó, después de largas gestiones, a la firma del convenio mencionado, en virtud del cual los Estados Unidos se obligaron a entregar a México para serv go, y sin costo, un volumen anual de 60,000 acres aguas del almacenamiento del Elefante (Elephant o del río, en el punto donde se encuentran ahora las obras  prin cipal es de la Acequia Ma dr e, conocida con el nombr e de Viejo Can al Mexic ano, arriba de Ciudad Juárez, México.. . , es decir, la derivación d e las aguas hacia el valle no seguiría haciéndose por las bocatomas de los antiguos canales en uso, sino solo  por la boca toma del can al má s alt o; res pec to a 12 forma de la entrega, se haría de acuerdo con la siguiente tabla : V o l ú m e n e s acres p i e s m e t r o s cúbicos.

 Me se s.

............. ............. Marzo. . . . . . . . . . . . . . .

Abril . . . . . . . . . . . . . . . . Mayo. . . . . . . . . . . . . . . . Junio. . . . . . . . . . . . . . . . . Julio. . . . . . . . . . . . . . . . . Agosto. . . . . . . . . . . . . . . Septiembre. Octubre. . . . . . . . . . . . . .  Novie mbre. . . . . . . . . . . . Diciembre. . . . . . . . . . . .

..........

Su

m

2

.......

0.00

O

Enero.

Febrero o.

P orcentaje  de volumen anual.

2 ,090

1.82

5,460 12,000 12,000 12,000

9.10

8,180 4,375

20.05

20.00 20.00 P0'090.240

2.28

3,270 540 O

666,100 O

1.82 0.90 O

60

Obras de toma del canal Franklin. Tramo inicial del canal. Antigua presa de derivación actualniente usada para el mismo canal y la acequia madre. Agustín, Guadalupe, San Ignacio) insuficiente para la extensión cultivada veinte años antes, y notoriamente insuficiente para el  benefic io de todos los terrenos irrigables del valle. 20-Hizo necesar ia la construcción de obra s especiales para a la quia Madre, utilizada hasta entonces como canal de riego de la división del Valle, en el canal principal de conducción de las aguas para el riego de todo el valle mexicano, extensa unidad colocada en las condiciones topográficas desventajosas. Entre las obras que se ejecutaron con ese propósito. se encuentra el "'Canal de Unión" , de 26.0 kilómetros de longitud, que debería ligar a la Acequia Mad re con canales principales de riego de las divisiones inferiores (Guadalupe, San Ignacio). Est e canal duró en servicio muy poco tiempo, pues cruza terrenos arenosos sujetos a la erosión de las aguas de crecientes del río Bravo, y en un solo año fue completamente destruído en un tramo de  má s de kilómetros de longitud.

En el convenio se expresó que, en consideración al abastecimiento concedido, Mé xico retiraría todas sus reclamaciones por perjuicios que pudieran causars e a agricultores mexicanos en el Valle por derivaciones de aguas del río Grande por ciuda danos norteamericanos. El convenio de  pud o res olv er las dif icul tad es ext erio res a qu e s e h a h echo re ferenci a, y que dieron lugar a las reclamac iones del Gobierno Mexicano pero significó para el riego de los terrenos del Valle de Juárez hechos de gran importancia, que han determinado su estancamiento y han dado lugar a continuas dificultades interiores.

L a reconstrucción del tramo del canal destruído requiere una inversión considera ble, pues deb iend o exca vars e en lomer íos are nos os se rá forzos o rev est irl o: su conservación será igualmente costosa por la necesidad de defenderlo contra la acción erosiva de las aguas del Bravo.

19-Restringió muy sens iblem ente la cantidad de agua que se utilizaba en el be neficio de los terreno s regados, pues el volumen concedido, que se consideró como el que usaba en los años inmediatamente anteriores a la celebración del convenio, resultó muy reducido para esas mismas necesidades consecuencia de la supresión de las derivaciones inferiores. inmediatas a las zonas de riego correspondientes (San

3"-Además del reduci do valor absolut o del volumen de aguas que el convenio concede a México, las entregas mensuales, o la ley del abastecimiento que establece el mismo convenio, está en el desacuerdo más absoluto con la ley de la demanda para riego, es decir, con las necesidades de riego de los cultivos en el valle. entregas mensuales que se establecen en el tratado darían lugar, en la zona de riego que pu -

47

diera servirse con la dotación total de 7,400 hectáreas - metros a serios déficits en algunos meses; el servicio normal de riego estaría  pues limitado  po r las entregas co rrespondientes a los meses d e la demanda máxima, perdiéndose los excedentes ¿e los meses de sobrantes, y haciendo más intensa,  por consiguiente, la deficiencia en vo lumen del abastecimiento hidráulico que fija el convenio. La siguiente tabla y gráfica anexa muestran l a relación existente entre el régimen de las entregas y el de la demanda  p a r a riego, estimado este último  por los  principales agricultores del valle.

 M E S E S

 R ég i m e n

convenio de 1906 (en tanto ciento del volumen total anual).

riego en e7 V a de  Juárez. (Datos  previos)

Enero. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Marzo.

 d e la

Ley de abastecimient o q u e establece el

0.00 1.82

.................. ...................

demanda

1.03 1.09

8.00

Abril. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

20.00 20.00

.................... Junio, . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Julio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Agosto. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Septiembre. . . . . . . . . . . . . . . . Mayo.

13.63 7.28

Octubre. . . . . . . . . . . . . . . . . .  Noviembre. . . . . . . . . . . . . . . . Diciembre. . . . . . . . . . . . . . . . .

0.90 0.00

10.00 14.00 14.00 14.00 12.00 6.00

3.00 2.00 100.00

La destrucción del “Canal de Unión” ha dado  po r resultado que la totalidad de los volúmenes derivados hacia la Acequia Madre, con frecuencia superiores a los que el tratado de s e aplique al riego de terrenos de la  pr im er a División del va Sauzal; esta sección se encuentra,  pues, ampliamente abastecida  par a rielle, hasta go, más  bien regada en exceso, sobre todo en los últimos años en que el miento progresivo de las tierras ha reducido de manera continua l a superficie culti vada: los excedentes de los volúmenes derivados sobre los utilizados son descargados sobre el río Bravo en distintos  puntos, entre Ciudad Juárez y el Sauaal. Las divisiones inferiores del Valle se riegan principalmente mediante derivaciones directas del río Bravo, que han podido servir de base, como lo indicaremos adelante,  para u n verdadero sistema de riego,  por lo que es de suma urgencia regularizar el abastecimiento hidráulico.

48

\

 .

59-REGULARIZACION

DEL ABASTECIMIENTO HIDRAULICO DEL VALLE DE JUAREZ  Prog rama  de  tra baj os

El  programa

de tra baj os corr espo ndie ntes de be por lo tan to cont ener los puntos

siguientes : a) Organización del servicio de riego en el Valle para obtener la más juiciosa aplicación de los volúmenes de que se dispone. Medidas de carácter urgente y eje cución de las obras absolutamente necesarias para evitar un uso abusivo o irracional de las aguas, y  para redu cir al mínimo las pér did as; control de los vol úmen es sobran tes para su aprovechamiento en las zonas más bajas.

Es absolutamente necesario que el servicio de riego en el Valle quede a cargo de la Comisión Nacional de Irrigación, pues la ejecución de su  progr ama gene ral de mejoramiento requiere el conocimiento m ás amplio de las condiciones actuales del ser  vicio de riego, de las posibilidades efectivas de aprovechamiento de los elementos de que se dispone, etc.  b) Reconstrucción del canal principal de conducción del Valle, o más concretamente, descarga de aguas de la primera División, sobre el canal principal de riego de las divisiones inferiores. Ya se ha hecho notar que la reconstrucción del “Canal de Unión” es difícil y costosa; el problema quedaría res uelto e n la mejor forma’ si, en relación con el pro yectado encauzamiento del río Bravo dent ro del Valle, fuere posible suprimir las curvas entrantes del río frente al Sauzal. Esta modificación, que forma parte del  proyecto de enca uzam ient o del río, haría inne cesa ria la cons trucci ón del “Can al de Unión” y permitiría establecer en la depresión del terreno que ocupan los meandros  por supr imir, un pequeño vaso regul ador de las aportacio nes de la prim era Divis ión del Valle sobre las inferiores. c) Aumento del volumen de agua procedente de la presa del Elefante, estable cido por el Convenio de adoptando además un nuevo régimen de abastecimiento que corresponda mejor al régimen de la demanda. Este aumento, que según informes que tenemos, ha sido recomendado por la Sec ción Americana de la Comisión Internacional a su Gobierno, hará posible un aprove chamiento de las aguas más eficiente que el actual, asegurando una justa relación en tre los volúmenes concedidos y las tierras que deben beneficiarse. d) Aprovechamiento del volumen de las aguas internacionales que escurren por el cauce del río, entre Ciudad Juárez y Fort Quitman, q ue correspondan a México. Las derivaciones s erán de c arácter eventual, principalmente duran te las crecientes del río: podrán hacerse por las distintas bocatomas existentes entre Ciudad Juárez y Banderas. Debe tenerse en cuenta que las aguas a que se hace referencia, son físicamente ajenas a las aguas del río Grande, almacenadas en 12 pres a del Elef ante , que se dis tribuyeron entre México y los Estados Unidos en los términos del Convenio de esto es, 60,000 acres pies para nuestro país y el resto, sin limitación, para Estados Unidos esas aguas son aportaciones e ventuales de las cuencas hidrográficas mexicana

50

norteamericana, que afluyen al río aguas abajo de la presa; desagües o drenajes de zonas de riego: aguas de retorno, y aun excedentes del almacenamiento del Elefan te necesariamente debe darse salida por el río, cuyo cauce es el único dren de vasta zona de captación situada abajo de la  presa . En el tratado de no se expresa una sola palabra respecto a esos escurrimientos eventuales: por el contrario, durante las gestiones relacionadas con la celebración mismo convenio, se declaró expresame nte por las au torid ades nor teamerican as,  probable ccr rie nte del río ent re Ciud ad Juáre z Fort Quitman, después de construída la presa del Elefante, no  pequeña sin o ti mb ié n muy irreg ular y valor para la agricultura, por lo cual misma corriente no fue tomada en conside ración. Aforos directos en Fort Quitman han dado, contra lo que se suponía, un importan te escurrimiento medio anual de metros cúbicos, formado parcialmente por contingentes mexicanos, y que está sujet o a distribución. La parte que pueda corres  ponde r a México en un reparto equitativo de ese volumen, aún en condiciones even tuales del escurrimiento, aliviará el problema del abastecimiento hidráulico de las tierras inferiores del Valle de Juárez. e) Utilización, median te su almacenamiento, de aguas de los arroyos torrenciales afluentes del río Bravo, por su margen derecha. El aprovechamiento de estas aguas requiere la construcción de pequeños vasos de almacenamiento; es perfectamente factible para arroyos como el de la Boquilla, que desemboca al Valle cerca de la  población de Guadal upe, y cuyas avenid as dan luga r a frecuentes inundaciones en extensas zonas. Este sistema de regularización deberá aplicarse para utilizar los sobrantes de riego, que actualmente se  pier den: y  para utili zar las agua s del escu rrim ient o eventu al del río Bravo, que s e hizo referencia en el punto anterior d). f ) Aprovechzmiento de aguas de drenaje de las unidades superiores, ya se trate de drenes abiertos, o de d renaje por bombeo, de pozos. Como las aguas procedentes de los drenajes son las más ricas en sales alcalinas,  proba blemen te no se rá n utili zables dir ecta ment e para riego , sien do indis pensa ble di luirlas con aguas puras, o regar accidentalmente zonas exentas de sales y perfec tamente drenadas.

69 TRABAJOS ACTUALES

-

La resolución de los puntos a, b, e, que no envuelven cuestiones de carácter internacional, se estudia actualmente por el Proyecto Valle de Juárez; los trabajos que se llevan a cabo consisten esencialmente en la recopilación de datos topográficos. hidrométricos, meteorológicos, de hidrología subterránea, agrológicos y de carác ter económico, que puede n servir de base para la formación d e los distinto s proyec tos que concurrirán a la resolución d el problema del abastecimie nto hidráulico del Valle. Es de desearse que, en relación con esa labor fuere posible resolver los  proble mas que comprenden los puntos  b, c, d (el punto “b” en lo que se refiere a la supre sión urgente de las curvas del cauce actual del río Bravo que atacan a los lomeríos

51

arenosos del Sauzal), pues en este caso podrá formarse con la mayor amplitud, el  plan de desa rrol lo agríco la del Valle de Juárez que corresponda a s u s antecedentes históricos sobre el parti cular, y a l a brillante perspectiva que ofrece.

 plan tas, que es el número de las registradas hasta mayo del presente año. Estos datos globales se descomponen como sigue: 179  plan tas Hidr oel éct ric as, con capa cida d conj unta de 262,155 K. W. (356,000 ca-

En un nuevo artículo se trata rá de otro de los problemas fundamentales del Va lle: el drenaje; detallando las condiciones actuales del  probl ema, el progra ma de tra  bajo por des arr oll ar y los trabajos hechos.

 ballos)-56.55% del gra n tot al inst ala do.  plan tas Ter moel éct ric as, con capa cida d conj unta Lallos)-43.318% de l gra n tot al.

"

La Capacidad Instalada de las Plantas Eléctricas Existentes en País ESTADISTICA ELABORADA EN EL DEPARTAMENTO DE ESTUDIOS HIDROELECTRICOS DE EA COMISION  NACIONAL DE IRRICACION  Po r  Jo sé

 HER RER A Y  LA SS O,

Ingeniero

Civil.

14  plan tas sin cla sif ica r, con capa cida d conju nta de 1,231 K.

-

W.

(2,000 caballos)

-0.27% del gran total.

A su vez las plantas Hidroeléctricas se'clasifican, según el servicio a que se desti nan, en la forma siguiente: 115  plan tas para Servi cio Públi co, con capaci dad gran total. 45  plan tas para Ser vic io

de 239,649 K.

del

K.

del gran

3,779 K.

del gran

con capacidad de 18,127

total.

19  plan tas para Servicios

 Mixtos con capacidad de

total. Las Termoeléctricas, también desde agrupan así:

el  punto

de vis ta de la cla se de servic io, se

256  plan tas para Servi cio Públi co, con capac idad de 102,220 gran total.

el número tres de est a revist a uublicamos dos c uadros gráficos que resumen los datos obtenidos sobre la capacidad total de las plantas eléctricas instaladas el país, su ubicación por Estados y clasificadas  por el ori gen de la ener gía y la cla se de ser vic io a que est án des tin adas. En la nota explicativa que los acompañó se expuso brevemente el  proceso y fin ali dade s del tra baj o est adís tic o, rec alc ánd ose que, si  bien los datos registrados arrojan una capacidad total de 463,563 K. W. (630,000 caballos),  prob abl eme nte la potenci a ins tal ada exce de en rea li dad de caballos, si se toma en cuenta los sistemas eléctricos que están construyéndose y que proximamente entrarán en operación y aquellos individualmente de escasa cuantía que aún no tenemos registrados o sobre los cuales las informaciones son deficientes. Entre los que están por terminarse basta citar como confirmación de lo anterior, el sistema de Te puxtepe c, que a fin es del pre sen te año ya est ará en apti tud de gene rar 30,000 caballos.

-

/

de 200,177 K. W. (272,000 ca -

K. W . - 22.05%

del

 plan tas para Ser vic io Pri vado , con capac idad de 61,449

K.

del gran

 plan tas para Ser vic ios  Mi xt os , con capacidad de 36,318

K.

del gran

total. total.  plan tas para Ser vic io Igno rado , con capacidad de

K.

del gran total.

Respecto a las 14  pla nta s si n cate gorí a def ini da en cua nto al ori gen de la ener gía, se distribuyen como sigue:  plan tas para ser vic io públic o, con capa cida d de 241 K. 2  plan tas para ser vic io privado , con capa cida d de 770 K. 2  pla nta s para ser vic io mixt o, con capa cida d de 95 K. K. 3  plan tas para ser vic io ignor ado, con capac idad de

del gran total.

Las plantas destinadas Servicio Público, (venta de energía) sea cual fuere la fuente original de la fuerza, ascienden a 378, con capacidad conjunta de 342,110 K. W. que equivale al del gran total instalado.

Para presentar completo el resumen de la estadística, reproducimos en este número las dos gráficas (Hoja A  NQ2 y Hoja 2) a que antes nos referimos. Pu blica mos ta mbi én los datos numéricos con los cuales se formaron, ordenados en tres 1, Hoja cuadros más (Hoja A 1- a).  NQ y Hoja

Para el Servicio Privado de las negociaciones mineras, agrícolas, industriales, etc., existen instaladas 142  plan tas, propi edad de la s mis mas negoc iaci ones, que en con jun to tie nen 80,946 K. W . de capacidad, que equivale al 17.47% del gran total.

Sin entrar en un análisis detallado de la información que comentamos sólo justificado cuando vaya a utilizado con fines concretos llamamos la atención sobre los datos numéricos más salientes de la estadística:

Existen 58  plant as que dan Servi cio  Mi xt o; es decir, las utiliza directamente el  propiet ario en sus negocios industrial es propios y vende la energía excedente para ser vicio público. Su capacidad conjunta es de 40,192 K. del total.

-

-

Como en la nota precedente se expresó, la capacidad total eléctrica instalada en asc ien de a 453,563 K. W. Representa la suma do las capacidades individuales

el  país

52

Por último, tenemos registradas  pla nta s que rep res ent an 315 gran total, que se ignora qué clase de servicio

53

K. W., 0.07% del

  0  '  0   2

examinamos la ubicación de las plantas y sus capacidades en los diversos Es tados de la República, vemos que Puebla ocupa un lugar  pre fere nte , como que la ca  pacidad instala da es de 119,472 K. W., es decir el del gran total instalado en todo el  paí s. Se debe esta situación excepcional a que en dicha entidad federativa se en  pl an ta s hidroeléctricas de Necaxa y Tepexic de 99,000 K. W. Al Estado do Puebla le siguen en importancia, el Estado de Durango, el Distrito Federal y los Esta dos de Chihuahua, Veracruz, México, Jalisco y Coahuila, con capacidades instaladas respectivas y  po rc en ta je s correspondientes respecto al gran total de 39,674 K. W.W. 39,480 K. 33,060 33,042 21,399 K. 21,255 20,582 Vienen en seguida, enumerados  po r su capacidad decreciente, los Estados de Mi : Nue choacán, 19,814 K. del gran total: Tamaulipas 19,523 K. vo León, 19,177 K. Zacatecas, 15,230 K.W. Sonora, 16,611 Las entidades federativas restantes tienen 3.29% Hidalgo, 14,589 K. capacidades instaladas de escasa cuantía, variable entre 4,000 y 300 K. W. El Territorio de Quintana Roo apenas cuenta con una  planta de 20 K. W. El lugar  pro min en te que respecto a capacidad instalada tienen los Estados ramente mencionados, se debe, como en el de Puebla, a la existencia en  jurisd icción de sistemas o  plan tas indiv iduale s de imgort ancia. Así tenemos en el Estado de Durango la  pl an ta termoeléctrica de Franke, recién instalada, de 27,000 K. en el Dis que forma par trito Federal la de Nonoalco, también termoeléctrica, de 90,000 K. te del sistema de la Compañía Mexicana de Luz y Fuerza Motriz. Veracruz cuenta con el importante sistema hidroeléctrico de Tuxpango de 21,000 K. W.: Chihuahua el del Conchos, del mismo carácter, de K. W. En el Estado de México hay una gran planta hidroeléctrica, la de La Alameda, de 9,000 K. W. En Jalisco se encuentran las  pla nt as de la Compañía Eléctrica de Chapala, de 19,000 K. W. Las negociaciones carboníferas del Estado de Coahuila tienen plantas de energía K. W.  propias con capacidad conjunta de más de Dentro del territorio del Estado de Michoacán están las  principales planta s genecon radoras de los sistemas hidroeléctricos de la Guanajuato y Michoacán Power 15,000 K. W. La planta termoeléctrica que sirve al  pu er to de Tampico y zonas vecinas, de. . . . 18,800 K. de la capacidad registrada  par a el Estado de representa más del Tarnaulipas. En  Nu ev o León hay numerosas  planta s terrn oeléct ricas,  pe ro la más im  port ant e es la de la Compañía de Tranvías, Luz y Fuerza Motriz de Monterrey, de 11,000 K. w. Las  pl an ta s de energía termoeléctrica al servicio de las compañías mineras de co bre Ea Canane a y la Moctezuma, en el Estado de Sonora, tienen 15,000 K. W. de ca pacidad. En Zacatec as, la negociación minera Mexican Corporation, en Fresnillo, cuenEn el Estado de Hidalgo las plan ta con una  planta term oelé ctri ca de 11,000 K. tas hidroeléctricas de la compañía de Transmisión Eléctrica de Potencia y otras que forman un sistema  parcia l la Compañía Mexicana de L uz y Fuerza Motriz, tienen capacidades reunidas de cerca de 11,000 K. W. -

-

Cabe advertir que el emplazamiento de las plantas en los diversos Es tados d e la República no revela - especialmente si se ref iere a sistemas hidroeléctricos de importancia - la distribución geográfica de los mercados de la energía generada, pues frecuentem ente los centros principales de consumo de la fuerza están muy alejados de los lugares en que se genera. Así vemos que el Estado de Guanajuato, que ocupa el vigésimo lugar en cuanto a capacidad instalada es, sin embargo, la más importante zona de consumo de la fuerza producida en los sistemas hidroeléctricos establecidos en el vecino Estado de Michoacán. El Estado de Puebla, a su vez, sólo consume una mínima parte de la energía de los sistemas de Necaxa y Tepexic, ubicados en su  ju ris dic ción y cuyos centros de consumo principales son la ciudad de México y la zona minera de Pachuca. Al terminar nuestros estudios sobre la cuantía probable de la energía eléctrica efectivamente generada en el  país , in te nt ar em os de te rm in ar la di st rib uc ió n geo grá fic a del consumo (1).

(1) A título de información, añadiremos que los datos estadísticos recabados, que han servido de base para la exposición -resumen que hoy publicamos, forman una COplOSsi documentatación, compuesta de 72 cuadros. Las plantas y sistemas individuales aparecen agrupadas por Estados e incluyen los siguientes datos: número de orden; nombre de la empresa; ubicación de la planta; clasificación (hidro o termoeléctrica); clase de servicio (público, privado o mix t o ) ; clase de corriente; capacidad instalada; voltaje en la planta; frecuencia (ciclos por se gundo); resumen de las tarifas, para alumbrado y fuerza motriz; y notas diversas.

62

notaciones sobre

idrología

 Po r el  I n g .  Mo is és ,

... . . .

Y  LA SS Q.

en el sentido más amplio la palabra. es la ciencia que estudia el agua en todas sus manifestaciones y estados: los fenómenos producidos por ésta, sea que se encuentre en la atmósfera, en la superficie del suela o en depósitos y corrientes subt erráneas: así como sus relaciones con la vida y d esarrollo d e la s agrupaciones humanas. Concebida en esos la hidrología es la base racional de la irrigación; y en consecuencia, la solución de cualquier problema de riego supone necesariamente un estudio previo y minucioso de las condiciones hidrológicas locales. Muchos desastres en obras hidráulicas se deben principalmente a la falta de cuidadosas investigaciones de ese género. Por lo tanto, no creo inoportuno apuntar algunas ideas generales sobre tan im  po rta nt e asu nto , qu e es pe ro se rv ir án , al me no s, pa ra de sp er ta r el in te ré s d e aq uel las  pe rso na s ve rd ad er am en te pr ep ar ad as en es a cie nci a y an im ar la s pa ra qu e a su vez den a conocer sus ideas y experiencia propias: que de gran utilidad para el des arrollo ulterior y aplicación práctica de los métodos hidrológicos, puco extendidos has ta ahora en México. fenómenos y leyes de todas las ciencias están tan entremezclados unos con otros, que bien se puede decir que quien ha adquirido conocimientos completos sobre alguna de ellas, posee ilustración general en las demá s que le son afines. En el estudio de la hidrología, si ha de hacerse con provecho, se requieren conocimientos serios de meteorolgía, geografía, geología, fisiografía, bosques, agricultura y, sobre to do, d e hidráulica. La hidrología estudia de una manera especial los fenómenos hidro-meteorológicos que gobiernan las precipitaciones y escurrimientos de las aguas y determinan las se quías e inundaciones ; estudia tamb ién las modificaciones del escurrimiento producidas  por la eva por aci ón e influenciadas por los accidentes topográficos, constitución del sue lo, factores atmosféricos y latitud de la región. Compara l as variaciones de escurrimiento de localidades situadas en condiciones idénticas de precipitación, pero de ca racterísticas físicas diferente s y viceversa, de lugares semejantes por sus condiciones físicas, pero cuyas precipitaciones difieren discute los cambios producidos en el currimiento por las modificaciones : tales como la construcción de presas, desmontes o reforestaciones, cultivos, etc.

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La hidrología incluye el estudio de la hidrografía y fisiografía en lo que respecta a la circulación superficial d e las corrientes de agua y las condiciones físicas que las modifican. Abarca también la hidro-geología, o sea la ciencia de las aguas subterráneas y de las leyes que las rigen, lo que supone preparación sólida en geología para poder inter pretar los hechos en co nt rad os en la naturaleza y las posibilidades ac uí fe ra s de ciertos tipos de terrenos.

Y  por

último, es tu di a el ag ua como un ag en te geológico de transformación, que., si ha producido tremendas catástrofes, ha y es el agente primordial de vida y civilización.

El

estudio de las precipitaciones, así como el de las corrientes de agua superficia les y subte rráne as, nos lleva al convencimiento de que unas y otras obedecen a leyes definidas, d e cuya exacta determinación depend e la resolución acertada de los problemas hidrológicos. La circulación de las aguas superficiales es el resultado de la acción combinada de diversos factores, que e s indispensable conocer si s e quiere ej ercer dominio sobre dichas aguas y conjurar o atenuar las sequías e inundaciones periódicas que ocurren dentro de un ciclo determinado.

LOS  primitivos pobladores, como desconocían las leyes que go bi er na n

 precip itaciones y corrientes, busca ban los lugar es má s adecuados para el establecimiento d e S U S moradas y campos de cultivo: procuraban estacionarse en sitios natur almente abundan tes en medios de vida y facilidades de transporte marítimo y fluvial. Estas ten dencias y la circunstancia de que las tierras carecen de valor, hicieron que se poblaran de  preferencia la s ri be ra s y las costas. Sin embargo, cuando sobrevenía una inundación u otros perjuicios naturales, lí an abando nar los lugares elegidos en busca d e tierr as más hospitalarias. Así surgieron los núcleos de  población e n comarcas donde no ha bí a sequías, ni ir ru pc io ne s d e agua desastrosas, dotadas de clima agradable y de condiciones de vida menos duras y comunicaciones expeditas hacia otr os centros. Con el desarr ollo de l a navegación, los  poblados s e multiplicaron en los pu nt os accesibles d e las costas y suf ic ien te ment e abrigados. Estos lugares s e encuentran en la desembocadura de grandes ríos, don de sus  bocas fo rm an vías naturales apropiadas para el emba rq ue y desemb arque; bi en  protegidas contra los vientos y provis tos d e ag ua dulce en abundancia: y e n do nd e la vía fluvial les permita remontarse interior y transportar los productos naturales de las riberas a la parte alta de la cuenca, Muchas poblaciones de nuestro país tienen este origen: Puerto México a orillas del río Coatzacoalcos; Alvarado en San Juan, Veracruz entre las  bocas del ríos Pescados, Jamapa y Colaxtla; Tuxpan, orillas del río del mismo nombre: Tampico, en la desembocadura del Pánuco; Soto Marina en el río del mismo nombre: Salina Cr uz en la desembocadura de l río Tehuant epec, etc., etc. En los Estados Unidos  pr im er os pobladores s e ex ten di er on Mississippi, el Ohio, y en sus límites con Ganadá, por el San Lorenzo y los Grandes Lagos, donde nacieron ciudades importantes; así como a orillas del Hudson donde se formó la de Nueva York.

ducentes. Débese además considerar los  punto s de vist a leg ale s que pres ent a el to y apreciar la cuantía de los derechos adquiridos. Se requiere también hacer estudios de las expectativas económicas del proyecto que se trata de ejecutar, para que éste pueda calificarse de una buena inversión.

De

una manera general puede decirse que el éxito de un proyecto d e irrigación depende no solamente de un buen programa de conjunto, sino del estudio perfecto de cada una de las partes que lo componen. Y en el caso que tratarnos, una de las partes esenciales de un proyecto hidráuIico la constituyen los estudios hidrológicos preliminares. Muchos fracasos más o menos importantes, tienen por causa determinante las deficiencias de las investigaciones hidrológicas.

Y es de lamenta rse q ue tales fracasos se procure mantenerlos ocultos, porque constituirían la mejor enseñanza para el ingeniero. La determinación de las causas que provocan un desastre ilustran más que todos los textos juntos, que por lo general solo indican las condiciones ideales que presiden al desarrollo de un proyecto. Muchos de los fenómenos fundamentales que deben considerarse en la solución los proble mas de hidrología ocurren en condiciones excesi vamente variabl es, por lo que se refiere a cantidad, intensidad y tiempo. Por ejemplo: a  pri mer a vist a par ece que la lluvia media en una misma región, no difiere gran cosa de un año al otro, en cantidad y distribución, siendo así que se ha que en catorce años la precipitación ha disminuido, para una misma localidad, en cerca de 98 centímetros, siendo aún más fuertes las variaciones mensuales.

de

Los cambios de régimen en las corrientes superficiales son todavía más notables que los de las lluvias de los cuales dependen. Todo esto ha conducido a la creencia vulgar de que los fenómenos meteorológicos son tan complicados y variables que no es posible descubrir la ley que los rige. Sin embargo, la continua observación demuestra que las variaciones son Ilimitadas y que la liga que existe entre los diversos fenómenos hidrológicos y meteorológicos, puede determinarse con la seguridad suficiente para poder prever las condiciones más desfavorables en l as que puede verse someti do un proyecto, en un momento dado.

Con frecuencia el ingeniero tiene que sacar conclusiones de datos incompletos, en cuyo caso se ve obligado a estimar condiciones que prevalecen en localidades semejantes, por su situación geográfica, topográfica y meteorológica. Esto  puede condu cir a errores, pues no hay dos regiones que tengan las mismas características, por lo cual hay que tomar un factor de seguridad adecuado para desarrollar cada proyecto.

Al tomar en consideración esta clase de  problema s, ha y qu e reco noce r el hec ho de que los  principios gen era le s fre cue nte men te es tán suj eto s a grandes variaciones y aun a excepciones marcadas, especialmente cuando se refieren al. complicado asunto de la meteorología. Es  por lo tanto esencial, consideoar todas las circunstancias que prevalecen en una localidad para estar seguros de que un principio general no va afectado en determinada y que los resultados que de éste se deriven a sean los previstos. Natura lment e las mejores conclusiones se obtienen del estudio de los datos observados durante largos períodos de tiempo.  Nue st ros conoc imie ntos act ual es sobr e

los fenómenos hidrológicos son muy limita-

e incompletos, no obstante‘ que los avances en las demá s ciencias naturales han

gigantescos en las Las observaciones

centurias. la precipitación atmosférica han sido hechas en unos

cuantos casos aislados, sin que s e haya seguido, ni aún en la misma vieja Europa, un estudio sistemático sino hasta los últimos años. En el siglo XIX se instalaron algunas estaciones meteorológicas en los Estados Unidos; pero a pesar de que ahora se cuenta con unas 5,000, dependientes del “Weat her Bureau” crganizado desde e l año de 1891, este número resulta aun insuficiente para poder obtener los datos necesarios pa ra la solución de los importantes problemas hidrológicos. En nuestro país son alrededor de 500 las estaciones termopluviométricas; sola mente en ! a s capitales y ciudades de importancia, donde existen colegi  por los gobiern os loc ale s, hay obser vato rios meteoro lógico s. Por lo tanto, cuando hay necesidad de usar como base del estudio observaciones pluviométricas t omadas por largos períodos de tiempo, se conocimientos sean s umament e limitados si se tiene en cuenta la reciente fe cha de la instalación de estas estaciones y el escaso número de ellas. Si tomamos el asunto del aforo de las corrientes superficiales, la cosa resulta más desfavorable. La medición gasto de una corriente presenta más dificultades que las mediciones pluvicmétricas, y no tres casos donde se tengan estas mediciones continuas por un período de años. Ea misma deficiencia que se observa en nuestras investigaciones geológicas so bre la s agua s sub te rr áne as hac e impos ibl e deduc ir concl usion es de ella s. métodos suministran e n la actualidad rápidos procedimientos para determinarlas, pero para esto sería necesaria la inversión de fuertes cantidades de dinero y la coopera ción de elementos conocedores y especializados en el asunto. Ya la Comisión Nacional de Irrigación, en su afán coastante ser órgano de a utilidad en la reconstrucción del país, estudiando detenidamente el punto y es probable que antes de que termine el año, cuente con una oficina bien prepa rada para emprender sistematizar e sta clase de estudios, que constituyen la de la agricultura del porvenir. Resumiendo, podriamos decir que el objeto de la hidrología es primeramente un conocimiento, exacto posible, de la extensión y límite s de los diversos fenómenos hidrológicos en relación con las dilerentes condiciones físicas que prevale cen en localidad, a sí como para investigar los límites geográficos dent ro de los cuales estos fenómenos pueden producirse con ciertas modificaciones, a fin de deducir, hasta donde sea posible, las leyes que ayuden a la determinación de los factores pro ducidos por otras causas físicas encontradas. Así  pues, es te est udio compr ende : Primero el estudio de los caracteres fisiográficos, geológicos y topográficos de la tierra; los factores que los han producido y los modifican, así como sus relaciones hidrológicas. Segundo: el estudio más detallado de estas condiciones físicas y los factores que afectan región donde se van a desarrollar obras hidráulicas, con el objeto de apli car leyes generales de ciencia introduciendo las modificaciones requeridas  por las condiciones físicas locales.

67

Oficina de Correos, Plaza

y Palacio. Piedras Negras, Coah.

en bien de la bres e r un recuerdo histórico. se libró la célebre batalla de Angostura” contra vedad. el ejército invasor yanqui, es e sitio fue tes tigo de una de las pocas victorias obtenidas por nuestro ejército nacional. esta sucesión de serranías paralelamente le vantan las que se conocen por el nombre A causa de la gran superficie del Estade Zapatinamé, La Encarnación y Colora rios que la rieda: entre las se encuentra el her- do y d e la escasez de gan, toda su extensión s e ha conside rado mo so valle d e Saltillo. estéril. Esto e s cierto de una manera Entre las otras serranías del suroeste, general, pues en muchos lugares sólo se noroeste, oeste y centro se distinguen por encuentran depósitos naturales de ! a s lluricos minerales y  po r hermosos va - vias: pero  por otra parte hay secciones exlles, los de Parras, Sobaco, Catarina, San trem ada men te fértiles corno la d e “La LaIsidro, San Marcos, Alamo, Santa Rosa y guna”, perfectamente irrigada por los ríos Hundido.  Nazas y Aguanaval. L a s principales coTambié n existen en San Juan de Sabi- rrientes de aguas son: el río Bravo o río nas lomeríos aislados como los de Olguín, Grande, que forman la línea con San Antonio y P e y o t e s ; e a H i d a l g o las Texas; nace en el Estado de Colorado, Es prolongaciones d e C e ja M a d r e y otros mu- tados Unidos, en tr a al territorio mexi cano chos lomeríos en el oeste y noreste del cerca de Ciudad Juárez o Paso del Norte Estado: en límites con Durango, las sie - y después de seguir un curso de más de rras del Tlahualilo, del Rey, Mojada, etc., 8,000 kilómetros recibiendo muchos tribucon Chihuahua de Concordia, Moreno, tarios, desemboca finalmente en el Golfo etc., y la de San Vicente cercana a la d e d e México. Síguele en importancia el SaBoquillas. Completan relación los ceque forma el límite oriental en tre r r o s del Huérfano, del Mosco, y otros mu- los municipios de Monclova y Río Grande.

a

5AN

TERRENOS O&

CLASE

en el punto en que atraviesa los terrenos. calculado obras el costo derra y por  por Hectárea llegará a suma

Río San Antonio “Las Cabras”. General Cepeda, Coah. cordillera de colinas que cierra el vaso hacia el sur; tiene una serie de gargant a s  baj as que hubo nec esi dad de cerrar  para obt ene r el almacenemiento. Se hizo esta obra por medio de un terraplén de 9,300 metros de largo con altura máxima de 8.80 metros con taludes semejantes a los de la presa principal, pero revestido el lado del agua con mampostería de cal común. La capacidad total del almacenamiento del vaso es de de metros cú bicos, volum en que se juzgó nec esa rio par a  poder obt ene r el domin io comp let o sobr e las aguas de la corriente. Con es te volumen puede regarse un2 extensión de 65,000 hectáreas. El canal principal riego parte del extremo norte de 12  pres a, ti ene una capacidad 65,000 litros por segundo, su an chura en la  planti lla es de metros y mina de agua de 3.23. La longitud total del canal principal será de 180 kilómetros, de los cuales se ya excavados De ese punto en la sección cana1 disminuye por separarse ahí el  principal de los canales secundarios de riego, di: 25,000 litros por secuya capacidad gundo.

Los terrenos que van a irrigarse son de calidad inmejorable y se prestan perfectamente al cultivo algodón, de la alfalfa y en general al de todos los cereales que necesitan un clima caliente y seco. Con el objeto de que todos los terrenos que  proyect o se an de la mej or calidad, se ha levantado el plano de una superficie de 200,000 hectáreas, de las cuales se han escogido las 65,000 que se regarán, dejando el resto que son tierras de inferior calidad, para agostadero. La zona de irrigación se ha dividido en cinco distritos, que irán sucesivamente con objeto de no excavar canales ni hacer obras auxiliares más que en zonas que inmediatamente puedan des arrollarse, con lo cual se evitará fuerte capital invertido  provecho inmediato. La  prime ra zona que se desa rrol lar á, una extensión de hectáreas y es la más inmediata a las - vías actual de comunicación general la troncal de los Ferrocarriles Nacionales México y Laredo y la carretera que se está construyendo entre estas dos ciudades, la. cual ya se encuentra en excelentes

en donde se le conoce como el Salado. Pasada esta confluencia aumenta su municipio de el río Nadadores en Juárez. recibe río Monclova en la sierra de Bocatoche, y continúa recibiendo el tributo de otros tes en conjunto hacen del río . Salado . coa pri nci pal vía fluvial

Comisión  Nac ion al de Irrigación .distribuído profusamente un interesante “Estudio Agrícola del Sistema Nacontinuamos enumeran cional Riego núm. 4 Río Salado (Coahuila  Nuevo León)” ob ra de corrientes que fertilizan e! Estado señores Miguel Yépez Solórzano Alejandro ]Bram bría que cit ar río Patos que nace en "Irrigación México" sierr a del Ladrillal, el Saltillo, ocupándose detenidamente  por Salinas los cuales con ailuentea de datos nuestro activo colaborador riegan ñor Ingeniero Manuel Bancalari ambos Saltillo completan la importante transcripción que Otra honra estas líneas, nos consideramos rele- guen d que vados de describir cuanto s e relaciona con o! mencionado río Sabina s que según unes? gina por torna origen en los  pequ eños arro yos de y Santa Ana en la sierra e Los Cojos  poco se extingue por su nombre Santa Rosa al  N.E. de Múzquiz y otros, en  bsorcíó n y ración antes de llegar 12s fuentes de Sabinas de la sierra del de a laguna Carmen; recibe las aguas de arroyos de La Bavia, del Pino, San Juan, Fortrín, del Otros dos ríos de gran importancia, que Mulato y otros y toma el nombre de Ala- naciendo fuera del Estado s e tributan y exmos; sigue y recibe las aguas del Santa tinguen en las cuencas cerradas de la riAna para entrar al Estado de Nuevo León, quísima región agrícola, llamada de la La-

Panor ama del río Bravo. Puente Villa, Acuña Coah. .

-

Manteo y arrastre del carbón. Cloete, Sabinas, Coah. guna, el profesor Rafael Casco, los describe así: “Dichas corrientes son los ríos  Naz as v Aguanava l. El  prim ero nac e en la Sie rra Ma dr e, municipio de Guanaceví del Estado de Durango y aunque su extensión no está perfecta mente definida, se cree recorre aproximadarnente 600 kilómetros, hasta su te minación en la laguna I de Mavrán. Después de pasar dicho río por la ciudad de Lerdo, Dgo., toca al Estado al occidente de Torreón, formando límite natural entre és te y Durango en un trayecto apro ximadamente de 23 kilómetros; sigue la dirección noreste, inclinándose a poco hacia el este. hasta encontrar la laguna de Mayrán. Pero no se crea que el cauce de esta importante arteria siempre ha sido el que se describe, pues según documentos oficiales, antes del año de el río Nazas no entraba a Coahuila, sino que a la altura d e Torreón, seguía la dirección al norte hasta desembocar en la laguna de Tlahualilo. Este fenómeno de desviación, se debió a la gran cantidad de arenas que arrastraba desde su alto y medio curso, que en gran parte fue depositándose en terrenos planos, al grado de interrumpirlo,

arrojando sus aguas en de sus grandes avenidas, dentro del territorio de Coahuila ; circunstancia benéfica en alto grado, para las regiones que cruza y que de año en año viene abonando Su radio de con el acarreo de ricos fertilización es aún más grande, cuanto que amplia extensión de !a superficie lagunera con inclinación angular hace que el caudal del río se numerosos canales, muchos formados al más d e las corrientes, y  por obras de ingeniería, que se demuestran en  presa s de donde arrancan dichos canales; obras que según su ubicación, se superiores e inferiores contándose entre las primeras, la presa de Santa Margarita, can el canal del mismo nombre; la de San Fernando, con canales de esta denominación, San Antonio, del Municipio y Tlahualilo; la de Santa Rosa. con el canal de Eavín; la de Calabazas, que origina los canales de San Ramón, Relámpago, Sacramento y §anta ote, que cuenta con los Concepción y del Coyote. A los inferiores corresponden: la presa del Cuije con el canal del mismo nombre; la

de Cuadalupe, que mantiene los canales de Bilbao. Santa Teresa - Santa Lucía. Concordia, Tajo Unidos y San Lorenzo; el canal de Ea Trasquila, presa de San Pedro, con las derivaciones de los canales Benavides. Bolívar. San Isidro v Guadaluae: la de La Colonia, de don de parten los canales de San Marcos, Zaragoza y Uucatán; y otras más obras hidráulicas. aue según las necesidades que requieren los extensos sembr adíos, especialmente de algodón, vienen construyéndose. El sobrante del inmenso volumen de agua que arrastra el río Nazas en sus grandes crecientes, se absorbe en el suelo permeable, que antes ocupaba la laguna de Mayrán, cuyos terrenos muy laborables  producen magnífi cas cosecha s. En general, sus avenidas principian desde el mes de  julio Y duran hasta fines de octubre. Por desgracia, ni las épocas en que aumentan volumen, ni éste, son constantes; habiendo años que las aguas escasean y otros, que son muy abundantes: perjudicándose en uno y otro las distintas siembras. Se tendrá una idea de esta interesantísima arteria fluvial, sabiendo que en algunos años, su volumen ha sobrepasado la cifra de dos mil millones de metros cúbicos de líquido. El otro río llamado Aguanaval. nace en el municipio de Fresnillo del Estado de Zacatecas ; atraviesa el Estado de Durango en terrenos ¿el municipio de San Juan d e Guadalupe, y sirve de límite entre éste y el de Coahuila, en un largo trayecto, a  partir de la hacienda del Zacate, internándo se a territorio coahuilense, entr e las sierras de las . y el cerro del Ejército, .. Noas con una dirección del s u r e s t e al  para segui r haci a el es te , has ta la lla nura de Viesca, en donde muere. Muy  pocos afl uen tes ac rec ent an est e río, dentro de Coahuila; sin embargo, presta también valioso auxilio a la agricultura. El río Nazas, riega los municipios de Torreón y San Pedro de las Colonias; e! Aguanaval, los de Matamoros y Viesca”. H e aquí por qué el señor ingeniero Ig nacio López Bancalari en la memoria de que hicimos referencia con muy buen jui . . El régimen toríencial de tocio dijo: das o de la mayoría de las corrientes principales en nuestro territorio, impone pues,

.

como principio fundamental en la ejecucfón de cualquier aprovechamiento hidráu lico, los trabajos de regularización 0 de almacenamiento, ya que en aquellas mismas corrientes ni siquiera puede contarse de un año para otro con un régimen seme ja ct e que sólo lle ga a r epet irs e en períodos  bas tan te má s amplios , en los qu e la observación sí ha demostrado la repetición cíclica del fenómeno de las avenidas. La corriente más estudiada de nuestro territorio, desde este punto de vista, el río  Naz as, pre sent a un ciclo bien defi nido y que comprende un período de cinco años: dos escasos, dos abundantes y uno más en que se acentúa la escasez o se acentúa la abundancia, en términos fuera de lo nor mal en uno y otro sentido. Las demás co rrientes más o menos obedecen a una se mejante ley de  peri odici dad, no en tod as  perf ect ame nte def ini da; pero sí observada en la gran mayoría. La obra de regularización (tomada esta palabra en su más am plio sent ido téc nic o) es, por tan to, indis  pensa ble en la ejec ución de cual quie r plan de aprovechamiento hidráulico en nuestro territorio. Séame permitido advertir que hablo solamente en términos generales tomando el fenómeno en su mayor amplitud y sin des cender a problemas concretos, ya que hay entre éstos, casos excepcionales de abastecimiento mediante manantiales de régimen más o menos permanente o algunas otras especies de explotaciones hidráulicas que se separan francamente de la regla  pero que justamente por tener características de excepción no puede servir de base para la definición en conjunto del problema de que vengo a ocuparme. Las obras de regularización, por su índole misma, son por razón natural, las que originan presupuestos más elevados e inversiones más cuantiosas, estando por otra  part e des ti nad as al benef ici o de exte nsiones muy vastas de terreno, no siempre del mismo propietario y por estas caracterís ticas especiales se han salido siempre de la esfera de la actividad privada. Pero no es esto sólo; la misma actividad privada, que no persigue la ejecución de estos trabajos, sino con una mira lucrativa o de provecho inmediato, no podría pensar en la inversión de tan fuertes capitales destinados a la

aquel que la fecunda con su trabajo y vive  prospe ra con su  producto . Ind e  pend ien tem ent e de es te aspe cto de  biene sno derrama en un gran dadanos, aquel, multiplicando las fuentes de de igual manera

a causas diversas que me obligan a volver aunque sea someramente a la descripción orohi drogr áfic a que he pre sent ado al principio de este trabajo. En efecto, las tierras de las vertientes generalmente con

sólo representan una mín

los  productos que de

rraman en !a colectividad, para el mutuo  bene fici o d e sus habitantes; los nuevos im pues tos terr itor iale s bas ado s en ter ren os cción, los impuestos cau-

Muelle y fábrica de La Esmeralda, Sierra Mojada,

Coah.

ejecución de obras de riego, sino mediante gran propietario o empresario de riego, era una condicional protección legislativa que el único llamado a disfrutar de las amparara tales explotaciones, que consoli de la naturaleza, al amparo de las dara la concentración del régi men d e pro- concesiones otorgadas por el Poder Pú  pie dad en muy pocas y en resumen  blico. que causara para el empresario un benefi De allí que el Estado Mexicano comcio inmediato, con perjuicio de los  pren die ra cla ramen te que tal es obr as, desses y d e las condiciones de desenvolvimien- tinadas al mejor aprovechamiento agrícola to de la comunidad. Por otra parte, en fla- de las aguas de nuestros ríos, no deberían grante contradiccfón tal sistema, con el dejarse bajo la dirección o el patrimonio  propósit o de los Gobie rnos que se han su - de los grandes capitalistas o de las emprecedido en el poder desde el año de sas privadas de riego, sino que deberían en que nuestro país sufrió el sacudimiento ser francamente función del estado, para revolucionario que encabezó el an que éste las emprender y lista Francisco Madero y que han pug - no con mira de lucro inmediato ni de renado desde entonces por dar a la gran embolso directo de su capital, sino con el mayoría de los habitantes de nuestro te-  má s elevado y más  patr ióti co propósit o rritorio la misma oportunidad para disfru invertir fondos públicos en el beneficio tarlo que en regímenes anteriores, se rede una gran mayoría. servó solamente a una clase capitalista. En En efecto, el Estado empresario de un resumen, la índole misma de los trabajos, sistema de riego, no puede considerarlo sifundados en una fuerte inversión de capital no dentro de clasificación general de los y realizados con mira de lucro inmediato, servicios asegurando a un numeroso grupo no podría tener, no tuvo de hecho,. en los de beneficiarios de sus obras, los elemen pocos casos que pudié ramos exa min ar en tos para resolver su vida económica, y es estos momentos, finalidad que con - tableciendo centros fijos de  poblaci ón fun solidar un régimen latifundista, en que, el dados en el arraigo a la tierra de todo

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industrias que nazca agrícolas, !a multipl  port es y de las tran en general, y en resumen, la ción aue significa, socia lmente cons iderada y muy especialmente vista desde el as pecto económic o, la cre aci ón de un cent ro  product or qu e sust itu ya que antes fue ra una región poco menos que de sierta, for man una red complexa nuevas activida des que por muy distintas vías puedan reintegrar al tesoro público lo que de éste se haya tomado para la ejecución de las obras de riego. Este ha sido, me siento orgulloso de declararlo, el elevado criterio con el cual el Gobierno mexicano ha emprendido valero samente, la ejecución de obras públicas de riego para beneficio de la colectividad y fundo mi orgullo en pensa r que no ha habido detrás de tales actividades ninguna mira comercial o de lucro, sino el programa desinteresado, generoso, impersonaI y altamente patriótico, de llevar a nuestra masa campesina un bienestar que le era to talmente desconocido dentro del régimen un tanto feudal de nuestra propiedad rústica heredada de la colonia, poco o nada modificada por el transcurso de los años hasta el sacudimiento social de 1910.

***

Es

oportuno hacer notar que interés del Estado en ejecución, de las obras  públi cas de riego, se ha concentrado general en terrenos de la altiplanicie,

es  produc tos corre sponde n moderados. Sobre la mesa omo dan los grandes centros campesina, agricultores pre5 labores del campo, los de población que asegura n ado a los productos, y fise teien las vías de comunica para dar sal ida a la de los campos. P or toa * la atención del Gobierno se ha concentrado, fundamentalmente en  probl emas deri vado s de l mej or aprove chamiento de la mesa central, ahí donde sus esfuerzos pueden traducirse en más extenso beneficio donde tiene líneas de aplicación más definidas y concretas. Es claro, si se atiende a la brevísima ex perienc ia que en la mat eri a vamos adquiriendo, que se ha trcpezado con infinidad de escollos y muy tenaces contratiempos; que en la lucha entre unos y otros se ha  brán comet ido inn ume rab le s errores :  pero es indudable también que el principio se ha salvado, que la organización está en marcha y que una voluntad tenaz y perseverante, habrá de traducirse en muy saludable experiencia de nuestras obras futuras con un éxito inesperado en labor emprendida.

La labor del Estado en la ejecución de obras de riego, es claro, que se hubiera simplificado extraordinariamente por lo menos en que se refiere a la condición de las zonas de irrigación, si  pudi era n seguirse cualquiera de estos dos procedi mientos : Primero, concretar el beneficio de estas obras a terrenos de propiedad nacional. Segundo, disponer de canti dad suficiente, en efectivo, para adquirir toda la zona de irrigación al precio que pudiera

la parte proporcional de tierras que con su obra benefició. El  princi pio, repi to, por muy novedoso que se le considere, descan sa en una base de estricta justicia y ha dejar libre la iniciativa del poder público en la solución de este interesante problema para la vida nacional. Re pito, que consi deram os los esfu erz os del gobierno, en momentos, todavía en su sección experimental, por eso encarecidamente pido que no se tome la exposicibn de nuestras como una vana osten tación de competencia.’’

 FL OR A

Panorama de Saltillo, Coah. venderse en su condición actual de seca no, antes de emprender la ejecución de las obras. Uno y otro procedimiento desgraciadamente son inaplicables en nuestro caso, el primero, porque la mayoría de los te rrenos nacionales han sido enajenados en actualidad y los que conserva de su  pie dad el gobierno, s e encu ent ran o en muy distintas de centros poblados o de l a red de comunicaciones en regiones despobladas y el segundo, porque empezando las erogaciones del gobierno por invertir gruesas sumas en la adquisición de tierras, la necesidad de los desembolsos  para la ejec ució n de las obr as hubi era salido, sin duda alguna, del límite de las  posibi lida des del Esta do. Ea  por est o qu e la labor de nuestro Gobierno se dirigió a  bene fic iar ti err as de propie dad parti cula r, imponiéndoles las condiciones que señala la ley. En efecto, nuestra Ley Nacional de Irri gación, quiso atacar el problema en una forma radical y novedosa, estableciendo  principio gener al, la obligac ión de l  propie tari o de sujetar a riego sus tierras en todos los casos en que el riego con

aguas federales fuese posible, o de sustituir al propietario por el gobierno en el caso de que aquel no pudiera o no quisie ra aceptar obligación impuesta. Entonces el propietario de un terreno de se cano, debería entregar al gobierno como compensación de las obras ejecutadas, una extensión superficial de tierras que equivaliese al costo total de las obras, derramado por hectáreas, reservando para sí, en condición de tierras irrigadas, solamen te el resto de su  propi edad. Sob re las tie rras recogidas por el gobierno, un vasto  plan de frac ciona mient o y colonización fu e  previ sto por la ley y es materia de estudio en estos momentos. (1). El riego, por este concepto ha pasado de la categoría de un derecho del  propieta rio a una obligación impuesta por los inel  propieta tereses de la colectividad: rio la cumple, el Gobierno Federal lo ayu da a satisfacerla; si el propietario no pue de o no quiere cumplirla, el gobierno la realiza en su nombre y se reintegra con (1) Esta Ley ya está en vigor y resuelve todos los  probl emas pre vis tos por el aut or de la exposición.

 FA UN A

La gran extensión del territorio y la escasez de población sido causa de que no se estudie debidamente la flora del Estado. Sin embargo, algunos escritores lo dividen en cuatro zonas diferentes: la que comprende desde el norte al este quedando inclinadas la serranía del Carmen, la cuenca del río Bravo, y el curso inferior del Sabinas hasta la sierra de la Gloria, incluyendo la región de los arroyos Nadadores y Candela, la que abarca el centro y resto del oriente, hasta la margen iz -

Vista general del

quierda del río Patos en su curso inferior; la demarcada por la parte occidental del Estado y la que ocupa la faja horizontal que comprende los municipios de Saltillo, General Cepeda, Parras y Viesca. Las cuatro grandes zonas tienen una vegetación particular cuya descripción sería  prolij o e nume rar. Bás ta nos decir que la flora coahuilense comprende más de sesenta variedades de árboles propios de las re giones templadas y frías y cincuenta pertenecientes a las tierras calientes. Las  princip ales fr ut as pasan de cuar ent a variedades, distinguiéndose entre estas las uvas blancas y negras, propias para la fa  bricac . ión . . de vinos, alcoholes y pasas. El municipio de Parras es especialmente re nombrado en este respecto. L OS otros tos son peras, manzanas, duraznos, etc. El número de plantas textiles se estima en el de las taninas en 13, el de granos oleaginosos en el de plantas tintóreas en el de plantas forrajeras en 13, gomas y resinas  plant as medic inales 70, y más de variedades de plantas de ornato llamadas así  por s u s flores y hermoso follaje. Lo que dijimos de la flora, bien podía-

Mineral Rosita, Sabinac, Coah.

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.?

casez de lluvias, que restaba caudal a las avenidas de los ríos y quedaban por lo mismo, sin preparación extensas regiones al godoneras, no obstante que éstas en 1921  produj eron al Est ado kilograkilogramos de mos de semilla y algodón en pluma.

 PRODUCTOS

La Vega. San Pedro, Coah. mos repetir respecto de la fauna en la En- de las principales especies vegetales. de tidad que estudiamos, la cual no es debida- germinación espontánea unos, y otros, que mente conocida por la abundancia de sus han venido aclimatándose de sde lejanos animales, que viven en los valles y mon- tiempos, con los cuidados en las siembras, tañas que allí existen, siendo por lo mis - que año tras año, verifican los activos e inmo bien adquirida la fama de Coahuila, dustriosos habitantes, obteniéndose en las que pregona su riqueza en toda clase de 357 haciendas y ranchos, y aun en parcaza y de ganados magníficos, con espe - celas de menor significación magníficas cocialidad el caballar, ovino y caprino: pu - sechas de trigo, maíz, cebada, frijol, gardiendo admirarse en la región norte, ma-  banzo, camot e, papa, chi le diversas es nadas de caballos salvajes, de cíbolo, be-  pec ie s; de toda clas e de verduras, etc., perrendo y otras reses, además de existir ro especialmente como también queda dicho, los inmensos sembrados de algodón, criaderos en donde la ganadería se fomenta y selecciona. Larga tendría que ser son motivo de la selección especial de los  pue s, la nome ncl atur a de la s dis ti nta s es- factores principales que influyen en la  peci es por lo que únicamente consigna- minación de la semilla, desarrollo de la mos el número de los mamíferos que suma  plan ta y su inflorescencia, los cuales son: 40, el de las aves, unas 74, entre los peces terrenos apropiados, agua suficiente y prose encuentran el dorado, bagre, róbalo, filaxis especial para prevenir cualquiera sardina, anguila y otros: infinidad de in- de las plagas parasitarias que por desgra sectos , batracios, miriápodos, pólipos, polí- cia, en muchas épocas, han ocasionado una  pero s, y en los desiertos, multitud de rep- destrucción total de esta inmensa fuente tiles  peligro sísimos que alg unos de ell os de riqueza. Así se explica la decidida incausan la muerte. tervención de la Comisión Nacional d e Al tratar de estas dos riquezas natura- Irrigación para establecer a la mayor breles que brotan abundantemente en las dis - vedad, grandes obras de riego que contintas zonas del Estado, dimos ya una idea  jur en para sie mpre la ame naz a de la

a2

 MI NE RA LE S

En el ramo de minería, Coahuila está llamado a un importante papel en favor del desarrollo de la riqueza na cional, pues su suelo contiene valiosos yacimientos de oro, plata, fierro, zinc, plomo, cobre, bromuros, sulfuros, sulfatos, carbonatos, óxidos, sesquióxidos, hidróxidos, hidrosulfatos, níquel, azufre, yeso, turba de  buena calid ad, ópalo, gros ular ita , pórfido,  basal to, sal inas , m antos pet rol ífe ros (en la zona orientada de norte a sur) y los más importantes sitios carboníferos del  país. Es cierto que hasta hoy no se ha hecho Coahuila, una explotación del carbón de piedra en la escala en que podría o de  bier a hace rse, pero ta mbi én lo es , que la abundancia del petróleo en los últimos años, hizo que prácticamente se suspendieran las minas de carbón en el  país y hasta ahora, es cuando empieza a despertar un creciente interés por desarrollar en el Estado, una explotación d e trascendencia. Ta l vez los coahuilenses tienen en cuenta que allá por 1903 a 1912 solamente la mina “Las Esper anzas” en la municipalidad de Múzquiz anualmente produjo como término medio más de de toneladas y 70,000 de coke, y que la producción de carbón en el Estado producía anuales. unos En muchos puntos de la Entidad tam bién exist en yaci mient os de mármol de distintas coloraciones y clases entre los que debemos mencionar a los de las sierras de Zapatinamé, de la Paila, Ohuichila, Las Norias, Providencia, Jimulco e n Torreón y otras. Onix, brocatel y serpentina son las clases más notables.

COMERCIO Los cuantiosos elementos que dejamos enunciados hacen de Coahuila una de secciones más prósperas de la República,

los que aumentan necesariamente la magnífica red ferrocarrilera que l e proporciona facilidades para el transporte de los productos del Estado. El comercio de exportación de minerales y carbón se hace principalmente con los Estados Unidos, aprovechando las distintas vías férreas y las magníficas carret eras, con que ya cuenta, mismas que sirven  para conducir har in a a Nuevo León, ma nufacturas de algodón a Zacatecas, Jalis co, Durango, México y Monterrey; sal, ga nado, lana y pieles a distinta partes del  país y a Te xa s; algodón en greña , uvas, cereales, etc., a Estados colindantes ixtle y sus varias manufacturas a los Es tados Unidos. El comercio del Estado está en manos de norteamericanos, españoles, alemanes y franceses. Los mercados principales son Torreón, Ciudad Juárez, Piedras Negras, Saltillo, Sa n Pedro, Sier ra Mojada, Monclova, Parras y Viesca. Para darse mejor idea de su importancia mercial cabe citar el “Boletín de Estadística Fiscal” de 1901 a 1902, el cual consigna como valor de tráfico comercial de Piedras Negras en aquel período, la suma de  por concepto de taciones y de las exportaciones: aun más, durante los primeros seis meses del siguiente año fiscal, las importaciones y exportaciones llegaron a . . , . y respectivamente. Así  pues , toma ndo como bas e los anuales que producía el comercio coahuilense por aquella Aduana,  podemos deducir que actualmente ha crecido de modo considerable y que hipérbole es de los ramos más acreditados dentro y fuera de la República. -

 IN DU ST RI AS . En cuanto a rama, puede decirse que Coahuila aprovecha todas las producciones que brinda su rico suelo, tanto en el orden mineral como en el vegetal. Solo faltan empresas con fuertes capitales que vengan a él y acometan un giro tan impor tante. Bien está que no han faltado hom bres empr ende dore s abri endo pozos arte sianos o viaductos para la irrigación de los ríos que cruzan aquellos inmensos plan tios; que extienden la  plant ació n de árbo-

!

Taileres y oficinas

les

campamento en la  presa “Don Martín” cuando estaban los trabajos en plena actividad.

de todas clases y el cultivo de los pe queños bosques que allí existen, etc., etc.,  per o, es nece sar io, rep eti mos, fu er te s capi tales y hombres de iniciativa y constancia en el trabajo para hacer de aquella Enti dad un emporio de riqueza. Y esto se impone más, si tomamos en cuenta que las numerosas industrias extractivas y laborables que allí existen está n representadas por la minería, cuyos  pri nci pale s dato s que dan espe ciái cado s al tratarse de las producciones respectivas;  por la fab ril , que cada dí a to ma may or incremento, en factorías de hilados y teji dos de lana, algodón y de fibras textiles, especialmente del ixtle; la muy hermosa y de fama tanto en el país como en el extranjero, del tejido finísimo de mantas, tilm a s , o sarapes llamados de Saltillo, porque desde la época colonial, allí tuvo su asiento, siendo sus  pri mor dial es maq uin ari as, humildes y rudimentarios telares. Fábricas de caucho extraído del árbol guayule: innumerables molinos de caña de azúcar, nixtamal sea maíz cocido: de trigo y de semillas oleaginosas f ábricas especiales

 para el benef icio de l alg odó n: fáb ri cas des tiladoras de diversos alcoholes y licores: de pastas y de pequeñas industrias de to dos aquellos artículos necesarios a la indumentaria y alimentación de los habitantes del Estado: fábricas de puros y cigarros. Y  por últi mo, la s ind ust ri as gana dera y agrícola: aquélla que después de su frir serios trastornos por los acontecimientos políticos que por largos años han con movido a la República, vuelve a tomar incremento: y ésta o sea la agrícola, que aprovecha todos los cultivos, así como el corte de madera de construcción, ebanistería y combustible, y el aprovechamiento de secreciones resinosas y de otras especies que varios vegetales producen. Hay que hacer especial mención de las muchas fundiciones, haciendas de beneficio de diversos minerales, plantas de energía eléctrica y talleres mecánicos, en tre los que descuellan los de Torreón, que pertenecen a los numerosos ferroca rriles, que prestan valiosa ayuda a todas estas industrias y al activo comercio del Estado.

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te y el río Sabinas ofrecen a la admiración V I A S DE  N . del viajero? uno, su mérito mecánico y el Conocido cuanto dejamos descrito so- otro, el bello aspecto y calidad de sus aguas, así como por la hermosa vegetación  bre la imuo rta nci a in du st ri al , min era , agríde sus riberas, cubiertas de álamos, ciprecola y comercial del Estado, justificado está el desarrollo que ha dado a sus vías de ses, sabinos y otros gigantescos árboles ora de Sabinas a Durango, s e recrea viscomunicación, tanto que no exageramos al ta del viajero ante aquella vía que se desdecir que la red ferrocarrilera coahuilense liza por una serie de mesas y valles, ya an es la meior de la República. Para darse gostísimos, ya anchos hasta de cuarenta una idea aproximada bastará decir que lo cruzan en zona sur ferrocarril “Salti-’ kilómetros: allí las montañas que los cir110 a Torreón”, el de “Torreón a Monte- cundan, sólo difieren de las que comunmente se encuent ran en México, excepto rrey”, el de “Torreón a Tlahualilo”: el de las del sur y oeste, en que no tienen árbo“México a El Paso”, el de “Torreón a Mon terrey y Piedras Negras”, el de “México a les: todas indican por su caprichosa y ace rada forma que esta región estuvo en un Laredo”, el de “Saltillo a Reata” v ‘“he tiempo sometida a grandes terremotos  poMazapil Copper y en la zona oriencas vistas más bellas pueden encontrarse, tal y noreste, lo es por el conocido en otra que las d e estas montañas 21 amanecer o a época por “Internacional Mexicano”, el la puesta del sol. “Mexicano del Norte” y otros muchos raCoahuila cuenta además, con un esmales, algunos de propiedad particular, pero todos en conjunto, tienen un desarrollo  plénd ido serv icio car ret ero , posta l, tele grá fico telefónico, aéreo y radiográfico que de 2,500 kilómetros, que toda clafacilitan grandemente las comunicacione~ se de comodidad al viajero. Unas veces cruzan hermosos puentes de hierro co - y transacciones de sus 1,368 localidades, siendo mayor su utilidad, porque ambas mo en el río Bravo; otras transportan al vías se internan a las Entidades colindanturista a gran velocidad hacia Piedras Netes. gras sobre una de las vías meior construíH e aquí cuanto hemos podido mal das en América: otras pasan por lugares  pint oresc os como río Esc ond ido , d ot ado por  perg eñar , tra zado a gra nde s rasgos, del Esla naturaleza de fertilidad exuberante y tado de Coahuila, constreñidos al estrecho espacio de que disponemos. Si como lo esagua inagotable: ora asciende por el lomerío de Peyotes para bajar al valle de Sa-  peramos fu nda da man te , sus inteligentes  bin as ta n product ivo en su subsuelo como habitantes unen sus esfuerzos en una ac a 17 kilómetros de la ción común, Coahuila muy pronto rivaliza en la superficie, Estación se encuentran las célebres minas rá con los más adelantados y  pro gres ist as de carbón y hornos de coke; ora el puenEstados de la República.

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Se faculta a la Comisión Nacional de Irrigación para celebrar, en repre sentación del Gobierno Federal, con los solicitantes de tierras comprendi das en los Sistemas Nacionales de Riego, contratos de aparcería agrícola y  pr om esa de venta, con a las siguientes bases: relaciones en tre la Comisión y el colono duran te los tres prime ros años de vigencia del convenio, se regirán como relaciones entre propietario y aparcero agrícola,

colono, como aparcero, entregará a nualmen te a la Comisión : recibe la tierra con derecho al agua de riego, el veinte por ciento de su cosecha bruta. además recibe la semilla, el veinticinco por ciento. también se le facilitan aperos de labranza, el treinta por ciento. 3% Deesta part icipación recogida  por la Comisión, descontará ésta en todos los casos la cuota de riego en términos que después se indican y, además, en s u caso, el valor efectivo de la semilla suministrada. En el caso de suminist ro de aperos , un cinco por ciento del producto bru to se aplicará al arrendamiento anual de los mismos. Hechos tales descuentos, el resto en efectivo de la  par tic ipa ció n s e abo nará al valor del lote materia del contrato. Comisión prometerá vender al colono el lote dado en aparcería, colosi durante los tres años de vigencia d el contrato respectivo, el no cubrió, mediante entreg a de cosechas, una can tidad que, hechas las de ducciones procedentes, equivalga al diez por ciento del valor del propio lote, la deberá computársele como anticipo de dicho precio el resto del va lor de la  par cel a deberá cubrirse en veinte anualidades. Si las aportaciones del colono duran te los tres año s de vigencia del con trato de aparcería, no alcanzan a cubrir'el diez  por ci en to de l v alo r de l l ot e, deberá abandonarlo corno desertor de la colonia, en cuyo caso al valor ori ginal la parcela se deducirá el importe de las entregas del primitivo colo no, para ofrecerlo con ese castigo a un segundo solicitante, quien a su vez dispondrá de  be ne fic io s d eri va do s d e un co ntr ato e n tod o aná log o que fué celebrado con desertor. valor del agu a de riego será computado aplicando una cuota mix ta, compuesta un mínimo fijo de cinco pesos por hectárea d e riego y de la cantidad que resulte por la aplicación de cincuenta centavos por millar d e metros cúbicos usados efectivamente en el terreno. Esta cuota será destina da a cubrir los gastos administrativos Sistema y la conservación y mejoramiento de las obras mismas, y al pasar en los términos de la Ley el Siste ma todo a propiedad de los usuarios, constituirá el fondo administrativo con que ellos cuiden de la operación y conservación del Sistema. cuota de ag ua correspond iente, de acuerdo con las bases que fija el inciso anterior, será cubierta en especie, conforme lo establece el inciso de este acuerdo, durante la vigencia del contrato de aparceria extinguido el término de tres años a que dicho convenio se suje ta, la referida cuota de agua, comprendido el mínimo y volumen de consumo, será cubierta en

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OFICIAL Acuerdo Presidencial Autorizando los Contratos de Aparcería Agrícola y Promesa de Venta Al margen, un sello con las armas nacionales, que dic e: "Estados Uni dos Mexicanos. Presidencia de la República ".

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AGRICULTURA

A

FOM

Comisión Nacional de Irrigación. En atención al interés que encierra e3 inmediato aprovechamiento de tierras puestas en cultivo por la Comisión Nacional de Irrigación, y

CONSIDERANDO: I.-L gran importancia que en vuelve dar el máximo de facilidades a los colonos de los Sistemas Nacio nales de Riego durante  pr im er os añ os d e la explotación agrícola  pro pós ito d e el ev ar la prod ucci ón nac ion al me di an te cultivo intensivo d e las nuevas tierras abiertas al riego por las obras del Estado, y 111. La posibilidad d e aplicar los elementos de q ue actua lmente dispo ne l a Comisión Nacional de Irrigación al programa de una inmediata opera ción agrícola de las tierras, en uso de facultades que me conceden los artículos 10, y de la Ley de Irrigación con aguas federales de fecha 4 d e enero de 1926, he tenido a  bi en di cta r el siguiente

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ACUERDO.

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efectivo al precio de tarifa y

el saldo del valor de la tierra, es decir, cuando

Ley Federal de Colonización

más el noventa por ciento del valor del lote, en veinte anualidad es vencidas con causa del cuatro por ciento anuai de intereses. los efectos de las disposiciones anteriores, la Comisión  Nacio nal de Irrigación se obligará a entregar como mínimo un volumen de metros cúbicos por hectárea de terreno de riego, 35 kilos de semilla de al kilos d e se godón por la misma superficie, 25 kilos de semilla de maíz, milla de trigo y 65 kilos de semilla de cebada y las cantidades convenidas ó en otros cultivos especiales. Como equipo, facilitará un tractor de ca ballos para cada lote de cincu enta hect área s, con un j uego de arad os y una rastra de discos o rejas, colono Beberá obligarse, a s u vez, a cultivar por menos el cin cuenta por ciento del lote que recibe en aparcería y a trabajar la tierra al uso de buen labrador, bajo la dirección y enseñanza técnicas de granja experimental del Proyecto. celebrados los contratos individuales de aparcería agrícola, agricultores que los suscribieron, de acuerdo con la Ley, integraren coopera tivas de producción, la Comisión las considerará como personas físicas para el efecto de exigir el cumplimiento de las obligaciones contraídas a virtud de los convenios otorgados por sus miembros, en los términos la reglamentación especial que para este caso expedirá la propia Comisión. disposiciones de este acuerdo no son aplicables al caso de los antiguos propietarios de tierras comprendidas en los S istemas Nacionales de Riego; sus relaciones con la Comisión se regirán, lisa y llanamente, por los acuerdos presidenciales expedidos con anterioridad para cada Sistema  Nacional de Riego, en relación con los convenios que con ca haya celebrado la Comisión. ll'--Quedan sub sist ente s las disposi ciones que cont ienen los acuerdos  presi denci ales números 82 y 291, de fechas 20 de marzo y 22 de últimos, respectivamente, en cuanto no se opongan a las que este acuerdo ge neral consigna. Dado en el Palacio del Poder Ejecutivo Federal, en México, a los cuatro días del mes de septiembre de mil novecientos treinta.

El Presidente

Constitucional de los Estados Unidos Mexicanos. (Firmado),  Pascua1 Qrtiz  Ru bi o.

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El

Secretario de Agricultura y Fomento. (Firmado),  Manuel  Pé re z Treviño.

(Concluye). en trabajos agrícolas, mayor de edad, no y de buena conducta.

11. En terrenos de temporal que aprovechen una precipitación pluvial abundante, 15 hectáreas como mínimo y 250 hectáreas como máximo.

-

Y

Tratándose de extranjeros, esta com  probación de be rá hac ers e a sati sfac ción del cónsul que tenga que visar los pasa  portes.

111. En terreno s de temporal de otras clases 20 hectáreas como mínimo y 500 hectáreas como máximo.

-

11. Demostrar que se tie nen tos para los trabajos del primer año agrícola, o crédito para conseguirlos.

-

terreno de agostadero 50 hectáreas como mínimo y 5,000 hectáreas como máximo.

Los colonos extranjeros deberán depositar en el Banco Nacional de Crédito Agrícola la s u m a d e  por fami lia, pudiendo disponer de esa  para los gastos de cultivo y sostenimiento de la familia, a partir del principio de trabajos.

Artículo colonización se a cabo con elementos nacionales y extran  jeros.

El reglamento determinará la ción de extranjeros que puedan estable cerse en cada colonia. La adquisición de tierras por colonos extranjeros, se sujetará a lo dispuesto en la Ley Orgánica del inciso 1 del artículo  27 constitucional y a reglamento. Articulo %O. Tendrán prefere ncia para ser admi tidos .como c olonos, en el orden de la enumeración: a) Los aparceros o arrendatarios del  predio que se colonice.

-

 b) Los agricultores avecindados en la localidad. c) Los agricultore s expatr iados que deseen volver al  país . d) Los agricultores en general. e) Los particulares no agricultores. e

Artículo reglamento fijará las condiciones que deban llenarse para ser admitido como colono y entre ellas figurarán las siguientes: 1. Para ser colono preferido, deberá acreditarse ser agricultor con experiencia

-

sa -

111. Comprometerse a pagar el del valor del lote al levantarse la primera cosecha y comprometerse asimismo a cu brir el sal do en anu ali dad es que se fij en de acuerdo con el reglamento. La falta de pago de las anualidades, dará derecho a prorrogar por un todos los vencimientos, si se debe a  pér dida de cosechas por causas no imputables al colono. En cualquier otro caso, la falta de pago de dos anualidades, será moti vo para rescindir el contrato, recuperar la  parcel a por la admi nis tra ció n de la colonia, adjudicándola a nuevo colono y de volver al solicitante el de lo que hu biere quedando a beneficio de la colonia el restante y el aumento de valor que hayan tenido las tierras, todo de acuerdo con lo q ue di sponga el regla mento. a pagar desde el  prime r año la s cuo tas para los gast os

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-

. inferiores y pedir que se restablezcan los servicios en la forma original”. Esperamos que el ejemplo del señor Rendón sea imitado por nuestros lectores deseosos de aportar a la Comisión Nacional de Irrigación, datos que puedan enriquecer el estudio hidrográfico del país.

cretaría de Agricultura y Fome nto la encargada d e la policía, vigilancia y reglamentación de los cauces de los ríos declarados de propiedad nacional, y por lo mismo es ante oficina en dond e se deben hacer las gestiones necesarias para demos trar los perjuicios causados a los usuarios’

De  Nuestro “PLAN DE IRRIGACION EN  LA  RE  L C A La Comisión Nacional de Irrigación es tá por desarrollar, en toda la República, un amplio plan de trabajos para mejorar las condiciones de las tierras en los sitios donde sea posible hacerlo, debiendo abarcar el programa general trazado, todo el actual  perí odo gub ern ame nta l. Tenemos conocimiento de que el President e de la República desea que los sistemas de irrigación> que se est ablezcan en lo futuro, estén comprendidos dentro de aquellas entidades donde se ha observado que 12s lluvias no llegan todos los años con la misma regularidad que en otras partes del país. Para ello aprovechará la cooperación de los gobernadores de los Estados, a fin de lograr una acción conjunta y más efectiva, a partir del año entrante. La Comisión Nacional de Irrigación acor enviar al respecto una dó hace pocos circular a todos los gobiernos de los Estados, solicitando datos acerca de las zonas más adecuadas para el establecimiento de nuevos sistemas de irrigación, ya sea apro vechando las aguas de los ríos o las que corren en el subsuelo, ya que en la actua lidad se cuenta con equipos para la foración de pozos.

EA IRRIGACION EN EL ESTADO  DE COAHU ILA

De San Pedro de las Colonias, Coahuila, se nos comunica que una fuerte empresa de El Paso, Texas, está vivamente intere-

sada en invertir en aquel municipio una considerable suma, con objeto de llevar a cabo la perforación de varios artesianos, en terrenos comprendidos entre las haciendas “Santo Niño y “El Pilar”, pues en este lugar, después de realizar una rie de estudios y experimentos, los ingede la compañía consiguieron locali bar cor rie nte s su bt er rá ne as de en or me volumen considerándose que su aprovecha miento será de incalculable importancia  par a el fut uro econó mico de la coma rca . Al contarse con agua suficiente en virtud de la perforación de  pozos, se asegurarán los cultivos en grandes extensiones de tierras de labranza, estabilizándose las cosechas y la riqueza agrícola del munici pio de Sa n Ped ro, qu e es  bas ta nt e apr eciable, especialmente por lo que hace a las siembras de algodón.

“El Economista”

de la

de México.

“LABOR QUE FAVORECE E L PROGRE SO  DE NUE ST RA AGR IC ULT URA “Los colonos de los terrenos regados a fuerza de tanto sacrificio no obtendrán éxito en sus empresas, si trabajan empíricamente”. Esta es una de las muy acertadas recomendaciones que hace la Revista “Irrigación en México-’’ órgano la Comisión  Naci ona l de Irr igaci ón. La aludida publicación es realmente una obra de consulta puesta a disposición de todas aquellas personas que se interesan  por el adel ant o de nu es tr a prod ucció n agrí cola. El director de ella es el señor Ro-

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Quirós Martínez; y colaboran cono cidos hombres de ciencia, lo cual por sí solo es Suficiente para comprender la gran utilidad de la aludida obra de consulta, que no por estar escrita por los Quirós Martínez, Domínguez, Quevedos, Gamas, Garcías, Gayoles, Olveras, Icazbalcetas y muchos otros connotados profesionales mexicanos, queda fuera del alcance del agricultor ¿e mediana instrucción, ya que uno de los fines de la Revista es dar noticias y consejos de utilidad práctica, que pro pug nan porq ue el colono ab an do ne los métodos empíricos y adopte las prácticas modernas para que con todo éxito haga de su empresa una eficiente corriente de ingresos que lo coloquen en un nivel económico mucho mejor del que s e encontraría siguiendo los anticuados sistemas de explotación agrícola. “ L a  Prensa” de San Antonio, Texas.

“UNA OBRA PARA NUESTROS  AGR ICU LTO RES

. . . La revista “Irrigación en México” no sólo satisface una de muchas necesidades de los agricultores que se hallan establecidos en nuestro país, sino que por su índole aportará al MEXICO DE datos precisos, respecto a las fases que ofrece nuestra agricultura en las distintas zonas, lo cual será de gran importancia  par a tod os aquel los com pat rio tas qu e i nte n ten ir a formar colonias en la República. Por otra parte, la revista de que s e trata, edemás de la gran diversidad de artículos y estudios que contiene, está impresa con nitidez y con sólo hojear un ejemplar de dicha publicación se siente uno impulsado a leerla. Para terminar este breve comentario incluímos unos cuantos párrafos contenidos en la Revista “Irrigación en México” que sintéticamente explican su5 tendencias : es usted colono, recorra estas  pági nas: quizá no le sean inútiles y vaya coleccionando los números que aparezcan en lo sucesivo, donde procuraremos aportarle muy variadas indicaciones sobre el mejor aprovechamiento de su  par cel a”. “Si es usted ingeniero, en que le interesará n estas páginas, y si tiene usted algo útil que divulgar, de sus conoci-

mientos adquiridos en la práctica, con gusto se los publicaremos”. “El obsequio que hacemos a usted de es ta publición, tien e por objeto despertar su iniciativa a fin de que, ensanchando sus  propio s in te re se s, cont rib uya us te d al engrandecimiento de la riqueza pública”. Deseamos larga vida a la nueva Revista “Irrigación en México” y ojalá que los agricultores mexicanos que se en nuestro país y los que radican en el extran jero , apr ove chen ven taj osa men te eso s ser . . vicios, que realmente son dignos de elogio. “La de Los Angeles, Cal.

“LA  PR ES A  DE L YAQUI

. . Tenemos conocimiesto de que las  pre sas eri gid as rec ien tem ent e en dis tin tos lugares de la Nación, tales como la del Mante y la de Don Martín, de menor im port anci a que la que aquí  pie nsa lle var a cabo, han transformado a regiones anti guamente eriazas en feraces campos que dan nacimiento a nuevas ciudades y permiten el establecimiento de miles de agricultores mexicanos repatriados en los Estados Unidos y centenares europeos.  Na da men os hac e un a sem an a sal ier on de la metrópoli rumbo a Nuevo León, quinientos tractoristas contratados por el Go  bie rno Fe de ra l a fin de roturar las inmen sas llanuras que regará la presa de Don Martín, terminada en 1929 y que costó al rededor de veinte millones de Desos a la Federación, sin incluir el valor de los predios de los hacendados. En cambio de ciertas concesiones de regadío, los terratenientes de aquella zona fraccionaron miles de hectáreas destinadas a la colonización de familias mexicanas vueltas de ca. Desp ués de la primera cosecha, es seguro que la zona irrigada se convertirá en granero de cereales, en un emporio de ri queza. La política hidráulica es el complemento  par a res olv er in te gr al men te el pro ble ma agrario. Cad a presa que se construye si@ nifica un paso  m á s en la senda de la reconstrucción y de la felicidad de la Patria. “Heraldo  de l Yaqui” de Ciudad Obregón, Son.

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T ’Y

resa Cooli

ucción

(Tomado de “Professional Engineer”)

ON la solemne inaugura -

ción que hizo el ex-presidente Coolidge e l día 4 de marzo de 1930, de la presa que lleva su n o m h e , e n Arizona. E. U. W.. a cristalizarse los sueños de los colonos del valle Flcrence-Casa Grande y de los indios Pimas. Of icialmente las o b r a s s e iniciaron al expedirse por el Congreso una ley autorizando su ejecución con un gasto de dólares los trabajos dieron comienzo en 1927 concluyeron en 1929 con la instalación de los aparatos hidroeléctricos. Esta presa, desde varios puntos de vista, es única en su género. En efecto: es la primera del tipo de cúpulas múltiples que ha sido construida. Ocupa el segundo lugar después de la grandiosa “Roosevelt"  por lo que toca a la cantidad de agua que almacena. E stá situad a en el río Gila a 14 y kilómetros abajo su confluencia con el San Carlos y suministra el precioso líquido para irrigar 40,500 hectáreas en su mayoría pertenecientes a los indios. dentalmente desarrolla energía eléctrica en cantidad apreciable. capacidad de almacenamiento es de cerca de 1,480 millones de metros cúbicos. La corriente media anual del Gila se ha 493 millones de metros cúbiestimado cos, por lo cual son necesarios tres años y medio para  por com ple to el vaso; sin embargo, en varias ocasiones hubiera  podi do lle na rse en un sol o año . La presa está formada por tres cúpulas con el trasdós hacia aguas arriba, por dos contrafuertes, dos torres de admisión, dos

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vertedores de demasías y corre a lo largo de su corona una calzada de 6.10 mts. de ancho. Como puede verse en la ilustración que ofrecemos, las cúpulas tienen el aspecto de enormes cascarones de huevo. La cúpula central está completa, otras dos rematan en laderas rocallosas del cauce del río. Tienen las cúpulas 54.86 mts. de claro por mts. de altura y el espesor de la mampostería es de 1.22 mts. en la parte alta y de 6.40 mts. en !a  pa rte  baj a. La lon git ud tot al inc luy en do lo s vertedores es de 280.42 mts. Para resistir los esfuerzos de tensión se empleó acero reforzado en toda la estructura. Se dejaron  ju nt as d e dila tac ión ún ic am en te en los contrafuertes; los cambios de longitud pueden leerse directamente en una escala  por que se ins tal ó un me di do r de re si ste ncia eléctrica dentro de la estructura de concreto. Ea planta hidroeléctrica y la estación están alojadas abajo de la cúpula central. En la galería de conmutadores situada arriba y atrás de la casa de fuerza, se instalaron aparatos de control remoto  par a lo s in te rru pt or es de ace ite , pa ra la s válvulas hidráulicas y  pa ra la s com pu ert as. Dos tuberías que se gobiernan desde las torres de toma, dentro del vaso d e la  pre sa, su mi ni st ra n el líq ui do a la pla nta . torres de toma tienen sus lumbreras de entrada a una altura de 19.51 mts.; a esta cota el volumen de agua almacenado es de metros cúbicos; con un almacenamiento menor no se puede generar energía eléctrica. Las turbinas son dos, de reacción, de tipo vertical, con capacidad cada una de caballos y proyectadas para una

La “Presa Coolidge”, recientemente inaugurada y que forma parte del grandioso Proyecto de San Carlos, hará productivas miles de hectáreas de tierras vírgenes en el Valle Florence Casa Grande. variable de 42.67 a mts. Todo el equipo eléctrico fue suministrado la Westinghouse Electrical and Manufactur-

ing Co. y lo constituyen dos generadores verticales ; transformadores de corriente y transformadores para las estaciones se-

IRRIGACION EN MEXhCO

Mujeres apaches con sus hijos y con cajas de mercaderías, que con frecuencia se dejan ver en las cercanías de la “Presa Coolidge”. cundariss interruptores de circuito  para rrayos: acumuladores ccn su juego de motores generadores; de acero galvanizado para los conmutadores: relevadores : transformadores para instrumentos y aparatos de seguridad. generadores, turbinas, interruptores, etc., se vi gilan y controlan desde la planta principal. Todos los tableros fueron construidos de acero.  L a s características de los dinamos son: con un factor de  pote ncia de 62 voltios, trifásicos de ciclos y tienen conectado un excitador de corriente direc t a d e 60 voltios. Estos mismos geerradores alime ntan a las barras colectoras y éstas a su vez a los trznsformadores. Cuatro líneas de transmisión trifásicas salen d e los interruptores hacia las torres, en la parte alta

de la planta, de allí una línea va a Bylas, otra a Rice y dos a Hyden, Arizona, a una distancia de 32 kilómetros de la presa, en donde la Nevada Consolidated Copper Co. utiliza parte de la corriente. Los aparatos de la subestación están  protegi dos por par arra yos autom áti cos. La s líneas de transmisión han sido aisladas con exceso, precaución que se tomó por las frecuentes tempestades que acompañadas de rayos se desatan durante el verano: el aislamiento de las líneas va disminuyendo gradualmente hasta llegar a una distancia aproximada de un kilómetro de las estaciones en donde se usó ya el aislamiento normal. La operación de la planta eléctrica está a cargo de un ingeniero auxiliado por tres operadores, tres ayudante:, un electricista y un mecánico.

La Comisión Nacional de Irrigacibn dedica el  presente número a Convención Nacional de  Ingenieros. octubre de 1930.  México,

.

SECCION ECONQMICA, COMERCIAL Y ESTADISTICA Colim Colima.a.- Sus Sus elementos elementos de riqueza. . . . . . . . . . . . . . .  Ro  .Ro be rt o SECCION DE  NOTICI AS  Notas de la Gra nja Exper iment al del Sistema  Nacional de Riego “Pr esi dent e Calles”, Aguascalientes. ......................... .Ing.  Ale jan dr o  Brambi la. DE  NUESTRO CAN JE. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ....................... 84 SECCION BIBLIOGRAFICA

ingenieros

La importancia de los ensayos en gran escala  pa ra as construcciones hidráuliastronáutica. El ala el avión sin cola.--Machones y ca  bles  pa ra el  puen te sobre el Hudson.--Fabricación de cables de treinta y seis  pulgadas  pa ra el  pu en te de Fort L e e . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 86  NUESTRA CARATULA.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 89

-

Comisi sión ón Nacional de Irrigación Irrigación dedica el prese nte A Comi de revista “IRRIGAGION EN MEXICO” a la VIII

SECCION EXTRANJERA obras de irrigación en el Egipto.-Presa de A s w a n . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . (Versión del inglés  por  Dol or es Garcia  de

,

O

-

-

Proyecto de “Don Martín”. Sección vertedora en construcción y  pl an ta mezcl ador a de concret o.

Co n -

vención Nacional de Ingenieros, que se reunirá en la ciudad de Durango durante el mes actual, como un homenaje a las ac. os. tividades de la ingeniería en nuestro - - pa ís , d e l as qu e h ab rem de recoger,  pr on to tarde, frutos de  bi en es ta r, de engrandeci miento, de consolidación nacional, y que, en aspecto inicial de envolvimiento,  br in da n ya realidades muy halagadoras. Debemos a nuestros lectores, empero, una explicación tal dedica toria y creemos que ella se justifica ampliamente si,  br ev ed ad que nuestra limitación limitación espacio impone, comparamos la historia de una organización privada, en que concurren las actividades de nuestros ingecon la nieros de esta institución institución o ficial que aprovecha ta les actividades. Una y otra, lejos ser organizaciones paralelas que cubran faja, diversas en gran plano de s u s acciones concurrentes que se confunden en vértice lejano, pero preciso, claro y definido que la,  pa ra hombres de  bu en a vol unt ad, el orto de un México mejor, gran de en sus recursos, venturoso en su vida, progresista progresista en s u relaciones el resto la humanidad. y respetado en El año de  por pr im er a vez en el eje rcic io las profesiones clásicamente llamadas liberales, se reunía en la ciudad de México la  pr im er a Convención Nacional de Ingenieros, en que, un grupo tal actividad pro fesional, separándose de los  pro gra mas rig uro sa me nte aca dém ico s de eminarios, se dedicó 2 estudiar los  pr obl em as Congresos, Ateneos

ingeniero-hombre, tanto en lo que podríamos llamar su vida interna, como en lo que se refiere a las relaciones sociales de su vida profesional. ¿Qué papel corresponde en nuestra sociedad, en toda sociedad huma na, al ingeniero? He aquí en breve síntesis el problema. problema. ¿Con qué elemen tos se cuenta para resolverio dignamente? ¿Qué e s lo que deb e pedir y qué lo que debe dar el ingeniero a la sociedad que lo ocupa? qué or ganizaciones? qué obligaciones para compade qué límites? ñeros, subalternos, empleados, servidores, etc. y con qué otras  pa ra la so ciedad en general y para la  pa tri a mi sm a, en una má s am pl ia vis ión su destino? Tal programa, novedoso y  por ello mi sm o de sc on ce rta nt e pa ra mu cho s, se desentendió de rigorismos matemáticos hizo a un ‘lado ‘lado audacias de téc nica o elegantes empirismos de observación  pero fu é i mp on ié nd os e, em pe ro, hasta tomar al ingeniero en  pl en a act ivi dad pro fesi ona l, má s lim ita da mente, en plena actividad mexicana de la profesión. Y fué materia de meditados análisis en las diversas siete convenciones sucesivas, de Monterrey, de Guadalajara, de Torreón, de Puebla, de Gu dad Juárez, hasta culminar en la de M éxico, el año próximo pasado, en que abrió nuevos horizontes a la Unión Panamericana de Ingenieros. En ellas se fundaron bases firmes para la organización confederada de los inge nieros se dictaron reglas reglas de moralidad profesional profesional se establecieron arance les para la determinación de honorarios se  prec isa ron de re ch os y deberes de tal ejercicio, y, en esfuerzo de mayor alcance, se sugirieron a nuestros Gobiernos nuevas líneas de actividad, nuevos programas engrandesimiento, en los que, quizá, prendió sus raíces la organizacióin oficial que representamos, La irrigación y los caminos hilo y trama que tejen los  pro ble ma s de  pro duc ció n y dis tri bu ció n de la riqueza , apasionando en efecto las medi taciones de los técnicos, prepararon el espíritu público hacia el advenimiento de una nueva era de actividades actividades en ambas ramas de la ingeniería, ingeniería, y d e ahí, a través de un espíritu fuerte y  pr og res is ta , s urg ier on , com o fi rm e pre n da de engrandecimiento futuro, las Comisiones Nacionales de Irrigación y de Caminos. S u recorrido en estos cuatro años vida experimental, es familiar pa ra todos. Por lo que se refiere a nuestras actividades, esta publicación se ha empeñado en divulgarlas: pero cualesquiera que puedan ser los aspec tos del momento, una cosa está ganada: la organi organizac zación ión está e n marcha y un alto ideal marca la meta de sus destinos.

En marcha está, igualmente, esa conjunción de voluntades que forma la médula de las Convenciones de Ingenieros, un venturoso timbre de orgullo , que debe afirmar la  pla nta , acl ara r la del futuro, ensan char el pecho en un rebosante entusiasmo y con entera confianza en el por venir, apretar las huestes a los lados de nuestro Presidente - Ingeniero, que con el penacho en alto marcha firme y seguro hacia el México grande, que cuaja cuaja ya sus destinos en molde de su vigoroso espíritu. Me ahí  po r q ué , ci ert os de que .caminamos hacia el ideal, he mos dedicado nuestra edición a los hombres de buena voluntad, que, cons cientes de su misión, habrán de acompañarle, firmemente, en la conquista de la Patria futura.

-

-

--

7

Contadores.

Su

omisión  Nacional de Irrigación y conocidos son los móviles de carácter social que impulsaron al Go bie rno Me xi ca no par a fu nd ar la C misión Nacional de Irrigación; y se empiezan a palpar los beneficios que nuestros campesinos y agricul tores han recibido con el aprovechamiento de las obras de riego que el Estado, en su afán de llenar los anhelos del pueblo, ha construído para que se aprovechen como cualquiera otro servicio público. Ea ejecución y rápida de las obras, exigió que la dirección de ellas se con fiar a a personal numeroso de reconacida competencia competencia técnica y administrativa, aun cuando fuera en parte de nacionalidad extranjera; debido a esto, se inició el desdel programa de irrigación con los ingenieros y constructores White en  pe ro tod os los  pro yec tos y los trabajos de é s t o s siempre han sido estudiados y supervisados por ingenieros mexicanos escogídos entre los mejores expertos en trabajos de esta índole y la Comisión, antes de aprobarlos, los ha sujetado a una revisión que efectúa directamente por medio de sus vocales. Además, la Comisión se ha preocupado porque en en las obras obras predomine en núme ro el ingeniero mexicano para que adquiera la experiencia práctica que al convertirlo en un experto de igual o de superior calidad que la del ingeniero extranjero, le  perm i ta ocupar los más eleyados puestos en la dirección y administración de las obras de riego. Respecto al  per son al ob re ro esp eci ali sta en el ma ne jo de la s má qu in as mo de rn as que deben emplearse en estas obras, la Comisión ha seguido las mismas tendencias y logrado perfeccionar a muchos obreros nacionales que en la actualidad ocupan los  pu es to s d e sus similares extranjeros, La historia historia del personal extranjero que ha intervenido en las obras de riego, se consigna en los cuadros siguientes : Ings.

Contratados en .. Contratados en 1927.. . . Contratados en 1928. , . .

2 1

7 2 2

4

11

Sumas. . . . . . . . . . . . Separados en 1929. . . . . Separados en 1930. . . . .

3

Sumas. . . . . . . . . . . .

5

3

..

1

servicio en 1930. . . . . . .

4

1

4

8

en en en en

4

9

1

2

1926. . . . 1927. . . . 1928.. . . 1930.. . .

Sumas. . . . . . . . . . . . Separados en 1928.. . . . Separados en 1929. . . . . Separados en 1930.. . . .

4 5 3

6

1 7

1

2

...........

2

2

.....

4

Sumas.

S o Lre sta nte s.

1 2

1 1

En servicio en 1930. . , .

1

1

8

8 4

2  de  Pa la s,

 2

Contratados en 1926.. . . Contratados en 1927.. . . Contratados en 1928.. . .

Sumas.

55

3 36 2

4

1

...........

En servicio en 1930.

5

...........

1

RESUMEN Contratados Contratados Contratados Contratados

en en en en

41

41 14

GENERAL

1926. . . . 1927. . . . 1928. . . . 1929. . . .

Suma. . . . . . . . . . . . Separados en 1928. . . . . Separados en 1929. . . . . Separados en 1930.. . . .

2 34 19

4

Sumas. . . . . . . . . . . .

Separados en 1928. , . , . Separados en 1929. . . . . Separados en 1930. . . . .

23 50

28

1

102

4 4

73

73

En servicio en 1 9 3 0 . . . . . . . . . . . . . . . .

29

Suma.

8

1 4

Contratados Contratados Contratados Contratados

...........

A medida que ha sido

el extranjero, se han venido llenando con personal mexicano hasta lograr en el año de 1930, que ingenieros mexi-

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canos dirijan las obras de los Sistemas de Riego número 2 en Mezquital, Hidalgo, nú mero 6 en el río San Diego, Coahuila, y en las obras de resecación de la laguna de Metztitlán, Hidago. En el año de 1930, la Comisión ha tornado particular interés en que todos los es tudios técnicos para para la formación de los Proyectos de riego que en el futuro se desarrollarán se encomienden a ingenieros mexicanos y así ha logrado que en los Proyectos de: río Lerma, Acámbaro, Gto., Cienega de Chapala, Jalisco, río Grande de Morelia, Michoacán, río de Sa n Juan, Nuevo León, río río de Santa Gertrudi s, Tamaulipas, San Buenaventura, Chihuahua, Trujillo y Excamé, Zacatecas, estén siendo elaborados  por ing eni ero s mexica nos. Por último, en el Sistema de Riego “Presidente Calles” y en el Sistema de Riego número 3, río Mante, Tamaulipas, los gerentes y sus ayudantes son ingenieros mexicanos. El análisis de los cuadros e informes anteriores permite llegar a las conclusiones siguientes : El ingeniero mexicano ha tomado parte activa y de la mayor importancia en los  proyect os y en las obr as de irr iga ció n;

El

ingeniero mexicano ha predominado en número sobre sus similares extranje-

ros La substitución de ingenieros extranjeros por ingenieros mexicanos es una reali dad; y El ingeniero mexicano puede decirse que ya dirije las obras que está ejecutando la Comisión Nacional de Irrigación. Entre el personal extranjero se han distinguido los ingenieros : como ingeniero en jefe ¿e la sociedad White formó y revisó todos los proyectos ejecuta dos por ella; y en la actualidad ocupa el puesto puesto de Jefe del Servicio de Aguas de la ciudad de Los Angeles, Cal. ingeniero en jefe d e la Sociedad Sociedad White. Hinds.-Bajo Hinds.-Bajo cuya direcc ión se proyectaron y ejecuta ron las obras principale s del Sistema de Riego “Presidente Calles”. Weiss.-Quien uien ha proyectado proyectado y dirigido dirigido las obras principal principales es del Sist ema de  A . Weiss.-Q Riego núm, 4 en el río Salado, Coah.

F.  E .

Hardy.-Residente ente encargado de la terminación de la presa y del túnel de PaF. Hardy.-Resid  bcll ón, Ags., quien ti ene 42 años de servicios en obras de ingeniería en México. Ch. P. Williams.Williams.-Inge Ingeniero niero resi dent e de la Comisión en los tra bajo s de construc C. ción de la presa Rodríguez en Tijuana,  M. King. Que ejecutó con el carácter de superintendente de construcción las obras del Sistema de Riego núm. 3 en el río Mante, Tamps., y con el mismo puesto ha pasado al Sistema de Riego número 5 en el río Conchos, Chih.

-

Así como estos nombres quedar án grabados en los anales de la Comisión, así tam  bién s e gra bar án tod os los de nue str os inge nie ros mexi canos que se dis tin gan en todo aquello que tienda a trabajar:

“POR

LA

GRANDEZA DE M E X I C O ”

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Compuertas Compuertas Automática s de la Presa Don artín Sistema de Riego Co1aboración Co1aboración del Departamento

Técni co.

 N

el número anterior aparece una fotografía fotografía de la parte vertedora de la presa de “Don Martín” en el Sistema Nacional de Riego número (río Salado, Coahuila y Nuevo León). Esta parte de la presa forma el extremo sur de ella apoyándose en el cerro del Caracol: está formada  por compuertas de las cuales 22 son automáticas y el resto se mueve a mano: son de tipo radial y están separadas po porr machones de concreto armado de 1.50 metros aproximadamente de espesor. espesor. Sobre todo el vertedor corre una banqueta de 6.00 metros de ancho, que sirve como puente de maniobras para cuando sea necesario mover las compuertas a mano por alguna descompostura qiie sufran. Respecto del estudio técnico de las compuertas, el Ing. Bunger de la casa J. G. White, que construyó la presa por encargo de la Comisión Nacional de Irrigación, ha rendido el siguiente informe : “La presa de Don Martín está construída en el cauce del río Salado en el Estado de Coahuila, cerca de la línea divisoria de este Estado con el de Nuevo León; su cuenca de captación es de 42,000 kilómetros cuadrados de superficie, montañosa en su  par te alt a y más o menos quebrada en su  par te baj a: est á cub ie rta de esc asa vemezquites. getación de arbustos y malezas, especialmente mezquites. “Las mayores crecientes ha n alcanzado la cifra de 140,000 140,000 pies cúbicos por segundo (aproximadamente 4,000 metros cúbicos por segundo). La presa está constituída constituída por un dique de tierra con vertedor de de masías d e 6,

concreto, capaz de un gasto de 233,000 233,000 pies cúbicos por segundo 6,600 metros cúbicos por segundo).

(aproxima damente

“La Comisión Nacional de Irrigación deseando no subordinar la seguridad de la  pres a a las conti ngenci as orig ina das por empl ead os descu idado s o de escasas aptitudes, consideró necesaria la instalación de compuertas automáticas que llenen las condicondiciones siguientes : “a) Las compuertas compuertas deben abrirse precisamente ante s de que el agua en el vaso

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alcance un nivel mayor al que previamente se a fin de evitar que rebase la  par te más baj a de la obra mue rt a. Las compuertas deben  pre cis ame nte cuan do el agu a haya alca nzad o otro nivel prefijado, a fin de  pér did as de agua inne cesa rias . E n t r e las  posici ones d e abierta” y “cerrada”, las compuertas permitirán un gasto igual al caudal de la creciente que esté entrando en el vaso. d) Para reducir al mínimo los efectos erosivos en los cimientos, cada compuerta deb e dejar pasar la parte proporcional q ue le corresponda en la creciente. “e) El control será tan simple y efectivo como sea posible pudiendo gobernarse a mano en casos de emergencia. Aunque con la instalación de compuertas de tambor se hubieran satisfecho las tres primeras condiciones, cuando menos teóricamente, fueron desechadas debido a alto costo y delicado mecanismo. La descompostura de un tambor haria que cayera  por su  propio peso haci éndo se su ma me nt e difí cil, si no imposible, volverlo a levantar hasta que el vaso de la presa bajara de nivel y ya no escurriera agua por las com pue rta s, cir cuns tanc ia des ven taj osa en la pr esa de Don Mar tí n, en la qu e la pa rt e cipal del almacenamiento se hace en la lámina de 4.42 metros de altura de la com pu er ta siendo necesario este almacenamiento para prevenir los años secos. La descom post ura del tam bor , sign ifi carí a pues, la pér did a de uno o varios años de cosecha. Además, debiendo permanecer las compuertas d e tambor bajadas por uno o más años, el excesivo calor y los vientos de la región resecarían los cierres de goma permitiendo el depósito de arena en ellos, temiéndose que l a s compuertas en esas mala s condiciones, al ser levantadas en casos necesarios se quedarían abiertas, Todavía más, la naturaleza química del agua del río Salado. determinó desecharlas; las sales que tiene el agua en solución ocasionarían la rápida oxidación de las piezas de hierro y acero que quedan en contacto con ella y afectarían seriamente las delicadas piezas del mecanismo de vertedor construído con contra las compuertas de tambor. Por último, la forma fuertes de cabeza redonda no se  pre sta a la inst alac ión de tale s com pue rta s. “

Desechadas las compuertas de tambor, se encontró que las q u e satisfacían requisitos señalados por la Comisión Nacional de Irrigación, eran las de tipo radiai de abanico, con contrapeso, accionadas automáticamente los detalles constructivos de ellas se muestran en las láminas 1, 11, 111 y IV, habiéndose instalado  26 de 7.50 metros de ancho por 4.42 metros de alto, fijadas en estribos de 1.38 metros de espesor, de las cuales 4 no son automáticas. El trabajo de fierro fue ejecutado por la “Lakeside Bridge and Steel Co.” curva de descarga calculada, se encuentra en la lámina V,  pud ien do ver se en ella los gastos de cada compuerta correspondientes a diversas cargas, así máximos almacenamientos que una avenida de  pie s cúbic os por seg und o pro duciría, tanto en el caso en que todas las compuertas se encontraren abiertas, como en el que estuvieran 22, funcionando otras no autcmáticas, como vertedores. Los niveles máximos alcanzados serían metros y metros respectivamente o sea 2.84 metros y 3.40 metros altos que el nivel normal de almacenamiento. “El funcionamiento de las compuertas se muestra en la lámina VI, El agua de la

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4

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 pre sa pasa por el tub o de 0.305 metros (1) cuando alcanza el nivel del vertedor (2) cae por el tubo de 0.152 m e t r o s (4)  pa ra depo sit ars e en el pozo ent ra ndo por su  par te inferior con el objeto de evitar remolinos y mantener las partes de metal. La toma de la tubería de 0.305 metros está protegida por rejilla y está colocada hacia aguas arriba d e la compuerta para evitar cualquier efecto de vacío. “La cresta del vertedor (2) está al nivel del almacenamiento normal y cualquier sobre - elevación de éste, producirá un escurrimiento hacia  pozos, el cual pue de regularse por medio de las compuertas (3).  pozos de esta compuerta están comunicados entre sí  por tubo s de 0.152 mey se descargan por medio de orificios de 0.076 metros ( 6 ) . contrapex 1,220 x 2.134 metros producen una fuersos de concreto o “flotadores” (7) de za de flotación de 453 kilogramos por cada metros de inmersión. “En el curso de las siguientes líneas se designarán estos contrapesos con el nom br e de “flo tado res” para dis tin gui rlo s d e los cont rapes os que des can san en los braz os de compuertas, no obstan te que no son propiamente flotadores. tros

t

“Los “flotadores” se encuentran suspendidos con cables de acero de 0.0158 metros de las esquinas superiores de las compuertas por medio de pernos prisioner o s ; (8) una polea guía (9) hace vertical el movimiento del “flotador” cualquiera que sea la posición de la compuerta. compuertas son radiale s para eliminar en lo posible la resistencia ocasionada  por la pres ión del agua y giran sobre las chumaceras (13) lográndose disminuir las resistencias a la fricción con el uso de baleros de acero “Timken”. el mecanismo queda equilibrado par medio del (14) que consiste

,

Foto

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 juzga r la efi cac ia de las compuertas, se hicieron pruebas con una de ellas, cierre; se modificaron los contrapesos durante las cuales se ensayaron dos tipos estudiar la sumersión de los “flotadores” y la compuerta fue probada, resistiendo  presión hidrá ulic a de l alm ace nami ento , y si n dicha carga . C o m o la presa no se llenaba aún y llenará sino hasta fines de noviembre, la presión hidráulica fue obtenida por medio de un represo construído frente a la compuerta, el cual se llenó por medio de una bomba, con agua tomada de u n tanque cercano a la compuerta probada. El agua para abastecer los pozos de los “flotadores” se obtuvo también por bombeo, resultando el abastecimiento algo irregular y diferente a las condiciones en que realmente van a funcionar las compuertas, pero no obstante esta circunstancia el estudio de las diferentes profundidades de sumersión de los “flotadores” en relación a las diversas aberturas de la compuerta, da una exacta idea de cómo funcionarán en las condiciones normales. Durante estas pruebas y debido al deficiente aprovisionamiento, el agua no se dejó correr libremente por los orificios de desfogue de los pozos, sino que éstos se mantuvieron cerra dos con llaves que luego permiti eron desfogarlos solamente en las pruebas 5 y 6 el agua escurrió libremente.

2. Foto en un gran bloque de concreto y otros pequeños bloques del mismo ma teria l que ha cen posible variar las cargas según las necesidades de cada compuerta; estos contra pesos est án susp endi dos de los brazo s por medio de abraz adera s qu e perm ite n el mo vimiento de rotación de los contrapesos evitando tensiones secundarias, lo que facilitó el cálculo de los momentos. En las fotografías 1 y 2 se observa el contrapeso en dos  posicio nes.  principi o aplica do p ara el func iona mie nto de las compu rt as Arquímedes, el peso de la compuerta, el de los flotadores mas las fricciones quedan equilibrados por los contrapesos que  bra zos ; el agua a  poz o s , los flotadores quedan s rgidos produciendo desequilibrio de fuerzas que obliga a la compuerta a ascender levantando los flotadores fuera del agua lo suficiente  para que el equilibrio se restablezca. Las compuertas están provistas además de un mecanismo auxiliar para levantar las, consistente en cadenas ligadas (15) a las mismas, por el lado inferior de la losa del puente y de - suficiente largo para poderlas tender sobre las ruedas dentadas de los malacates, los que están accionados por motores y montados en plataformas que corren sobre la vía instalada en el piso del puente, siendo en número de dos. Los enchufes para la conexión de los motores se encuentran colocados a lternadamente en los estribos del puente. la lámina V I I aparece un estudio de los momentos desarrollados durante el funcionamiento de las compuertas, habiéndose tomado como centros de momentos los ejes de las chumaceras. Omiti mos consideraciones sobre este estudio por explicarse  por sí solo.

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“Mientras s e preparaba la compuerta para las pruebas ocurrió un incidente muy interesante que puso de manifiesto que las compuertas de este tipo no “cabecean”, es decir, que no ejecutan movimientos de balanceo para equilibrarse. Aconteció que ha  biéndo se colocado cuña s d e mad era ent re l a compuer ta y los est rib os, cuando se trató de levantarla inyectando agua a los pozos, debido a la fricción de las cuñas, la compuerta no se movió a pesar de que los flotadores se encontraban totalment e sumergidos, y habiendo golpeado la compuerta con una barreta a fin de aflojar las cuñas, ésta de pronto se abrió hasta 2.44 metros, muy rápidamente al principio y después lentamente hasta concluir su carrera sin ocurrir golpe alguno al final, sin producirse ba lanceos u oscilaciones, lo que probó que los flotadores, tan luego como estuvieron fue ra del agua, actuaron como frenos hidráulicos con fuerza creciente hasta que se detu vo el movimiento, Puede  pues, que aún en condi cione s ext rem as como las anotadas, las compuertas no “cabecean” ni golpean. relación teórica entre la altura de la superficie del agua en la presa, el escurrimiento por los vertedores y la descarga a través de los orificios de 0.076 metros se encuentra en la lámina VIII. ella se ve que para que el agua alcance la profundidad de 1.14 metros en los  pozos, no obst ant e que el escu rri mien to de los orificios sea el correspondiente a la carga de 1.14 metros, es necesaria una lámina de 0.067 metros sobre la cresta del vertedor y de 0.079 metros en el vaso sobre el almacenamiento normal, pues 0.012 metros se  pierd en por fricci ón en los tubos. Para cuando la compuerta se abra completamente, la carga sobre los orificios tendrá que ser 5.63 metros y el gasto será de 31.14 litros  por segund o, para lo cua l es nece sar ia un a lámi na de 0.121 metros sobre el verte dor y 0.213 metros de almacenamiento sobre el nivel normal, es decir la compuerta estará a punto de abrirse cuando el nivel alcance en el vaso 0.079 metros sobre el nivel normal, y estará abierta completamente cuando el nivel sea mayor de 0.213 metros sobre ese mismo nivel normal.  prue bas hech as fue ron en número de seis y se detallan en seguida:

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T PRUEBA NUMERO 1 “Esta prueba se hizo en las condiciones que siguen:  pensó te ne r un bue n cie rre coloca ndo una man gue ra de 2” tipo  pes ado para vapor en contact o con la plac a infe rio r de la compue rta, sos ten ién dola prensada por medio de estopa retacada en el espacio que quedó entre la manguera y el ángulo. Pres ión hidráulica.-La corresp ondiente a 3.04 metros de agua en el represo. Contrapesos 11,393 kilogramos. una bomba de 4” se echó agua en uno de los pozos, los que se llenaron tan rápidamente que la compuerta se abrió y en menos de 20 segundos el agua del  preso se escur rió. “Las lecturas hechas en el medidor y en el “flotador” que la compuer ta se abría con 1.32 metros de sumersión del “flotador”, habiéndose abierto la com pue rta has ta 0.063 metros en veinte segundos sin tendencia a “cabecear”.  prime r movimiento fue de 0.0127 metros aproximadamente y luego se abrió con un movimiento constante hasta los metros. “En seguida con una bomba de 2” se continuó inyectando agua a los  pozos has ta abrir la compuerta 1.82 metros, no habiéndose notado tampoco ninguna tendencia a “cabecear” en ninguna posición de la compue ta. “Debido a lo  brusc o en que s e efe ctu ó el movim ient o, no se comprobó si el agua había alcanzado igual nivel e n los dos pozos; además por motivo de la velocidad y de la pequeña área de los  pozos, s e produj o un ole aj e de 15 centímetros a 20 centímetros y no obstante ello la conipuerta se abrió sin tendencia a regresar cuando se dejó de inyectar agua. “Luego. la compuerta fue ba jada vac iando los pozos por medio d e la llave de registrándose l a profundidad del agua y el descendimiento de la compuerta como pue de verse en la tabla 1.  No se hici eron má s pru eba s usa ndo es te disposi tivo de cie rre pue s fue evi dent e que no impedía el paso del agua, y además la forma curva de la manguera y  peso, hacían que se desprendiera fácilmente de la compuerta.

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manteniendo esta posición cuando se le quitó el peso, S in embargo, cuando los flotadores se sumergieron, la esquina de la derecha de la compuerta volvió a  posición original, es decir, volvió a l adearse dejando escapar el agua del represo. En la fotografía 4 se ve escurrió el agua. “El  primer movimi ento ocurrió est ando lo s flot adore s sum erg ido s 1.372 metros. La  profund idad de inme rsi ón del flotador para levantar la compuerta Íue de 1,481 metros. alturas de la compuerta hacia agua s arriba, las alturas de los flotadores y la  profundidad de sumers ión, est án reg is tra das en la tabl a II. “En esta prueba como en la anteripr compuerta se abrió muy despacio y continuó subiendo sin ninguna tendencia a balancearse no obstante que el movimiento no fue uniforme.

PRUEBA NUMERO

“Esta pruebo fue hecha en las condiciones de la prueba 2  pero sin  presión hidráulica contra la compuerta.  profun didad en qu e se enco ntra ban sumer gidos los flotadores cuando la com  puert a s e abrió fu e obs erv ada con cuida do pa ra ver qué efec to produc ía el agua contra el cierre. La compuerta comenzó a subir con los flotadores sumergidos 1.431 metros, hubo  presi ón en es decir, la misma, profundidad que en la prueba ante rior, cuan do el cierre, lo que indica que en compuertas d e este modelo la  pres ión del agua - no incrementa la fricción del cierre. Existen varias razones para ello, siendo la principal su construcción.  banda emple ada pa ra hace r el ci er re es sum ame nte du ra y má s aún cuan do está doblada en tan corto espacio como se ve en el croquis, teniendo una fuerte fricción inicial en esas condiciones. Además, debido a un error que se cometió cuando fueron colocadas las planchas del muro de esta compuerta, las extremidades de los cierres desc ansaron contra l a superficie áspe ra del concreto en lugar de descansar en la superficie de las  plan chas de hie rro, aume nta ndo tamb ién la fric ción,

PRUEBA  NUMERO  2  pru eba se hizo en la s condi cion es sigu ien tes : Cierra. Se usó una banda de 5” de ancho marca United States Rubber colocada como indica el diagrama número 1. Pres ión hidráulica.-La corresp ondiente a 3.35 metros de agua en el represo. Contrapeso de 11,393 kilogramos.

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“La compuerta fue abierta 0.457 metros habiéndose tomado lecturas cada 15 segundos tanto en el flotador como en la compuerta, no habiéndose levantado pareja, el ángulo de la derecha quedó metros más alto que el izquierdo. Para corregir esto, fue colocado un peso en el ángulo más alto habiéndose levantado la compuerta una pulgada aproximadamente, cayendo luego repentinamente, lo que originó una fuerza de torción en la compuerta que permaneció luego nivelada y en contacto con el

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Diagrama

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tabla contiene estos datos y en ella puede verse que el escurrimiento del agua del represo no alteró la profundidad de sumersión necesaria para mover la compuerta. “En la fotografía número 5 se ve la salida del agua.

PRUEBA  NUMERO 5

Foto  Nq 4.

“Cuando hubo presión de agua como en la prueba anterior, la presión hizo que la  ba nd a to ma ra un a fo rm a má s ci rcu la r y el contacto se verificó con la plancha d e fierro, donde el coeficiente de fricción es menor. También la humedad de l a superficie hizo menor la fricción en la prueba anterior. “N O obstante el aumento de fricción, la compuerta abrió con la misma profundidad d e los flotadores.

“Esta prueba fue lleva da a cabo sin presión hidráulica contra la compuerta; el cier r e y el contrapeso en las condiciones de la prueba anterior nú mero 4. “La compuerta se abrió completamente y después se bajó quitando los tapones d e los tubos de escape de los  pozos y dejando al agua salir libremente por ellos; los resultados d e esta prueba, mientra s subió y bajó la compuerta, se muestran en la ta  bl a IV  pu die ndo sa ca rs e la si gu ien te co ncl us ión : “La profundidad de sumersión de flotadores fue la misma que en la  pr ue ba anterior, lo que mostró que ningún efecto produce la presión del agua en los cierres. “Las lecturas que se tomaron al descen der la compuerta no son muy precisas, debido a que habiéndose caído en el pozo tubo y habiendo quedado atravesado, impidió el descenso del flotador, deteniendo por un tiempo el movimiento de un lado de la compuerta. Cuando el tubo se dobló, la compuerta cayó rápidamente dete niéndose en una posición inclinada, pues faltaban 0.15 metros de un lado y 0.10 metros del otro para descansar; ésto ocasionó que la compuerta se apretara contra sus rodillos y el flotador se acuñó contra el  poz o, ori gin and o ra ya du ra s de 6 mm. en los lados de él. Para remediar estas malas condiciones se inyectó nuevamente agua en el  pozo ob te ni én do se que se aflojara el “flotador” y la compuerta se levantó sin dificultad. Difícilmente puede presentars e un a situación más adversa para el funcionamiento de la compuerta y el flotador y sin embargo, tan luego como el pozo tuvo agua

PRUEBA  NUMERO 4 Esta prueba se hizo en las condiciones siguientes: “1” Cierre. Se usó el mismo que l a s  pr ue ba s 2 y 3. Presión hidráulica. La correspondiente a la altura de la compuerta 4.42 me-

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tros.

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Contrapesos de 12,009 kilogramos. “Como la profundidad de 1.48 metros sumersión encontrada en las anteriores  pr ue ba s par ec ió muy alt a, en es ta pr ue ba s e au me nt ó el con tra pe so con kilogramos, este contrapeso adicional fue colocado para disminuir la profundidad de sumarsión en 0.33 metros, la profundidad calculada fue de 1.15 metros y la experiencia, según puede verse en la tabla indicó una profundidad de 1.16 metros que concuerda bastante con el dato calculado. “La compuerta fue abierta aproximadamente 0.457 metros tomado lecturas cada 15 segundos y anotando también la relación entre la abertura de la compuerta del lado del almacenamiento, la elevación del flotador y la profundidad de sumersión. La

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Foto

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 provechamiento de las Aguas unto de vista Legal Por

Lic. Gustavo

un orden de conocimientos usuales, es conveniente poi su grado de relación tan estrecha como tiene, el uso que está haciendo la Comisión  Naci onal de Irr igac ión, con las ob ra s qu e lleva emp ren did as, y los di versos proyectos que estudia de las aguas de que se sirve, para  por uno s mo men to s, en con sid era r el te ma legal qu e ha existido y existe con relación a ellas, considerando el sólo propósito de una mera divu1gación. Para realizar este propósito, es conveniente, fijar algunos conceptos esenciales, y comenzar reseñar lo que ha sido, tanto el inte rés público como el inter és privado, con relación al uso y aprovechamiento de las aguas, los que informaron las nociones d e propiedad y de dominio, para concluir con ostent ar los de derecho, que asist en a l a Comisión de Irrigación, e n la benéfica tarea que se tiene im pu es ta .

 N

!

Para explicarlo, debemos leyes antiguas, hoy en completo desuso; pero, este estudio, tiene en sí una peculiaridad, porque viene desapartado, de la fuente neral de derechos, que son comunes a las demás materias, las cuales tienen como raíz de origen el Derecho Romano. El Derecho Romano, venida su decadencia hacia el Side 12 era vulgar, dejó principios inmutables que fueron seguidos .  por los códigos glo godos,  por los que pasó la Edad Media, y cuyos principios, conserva bá rb ar os de dos en diversas materias de nuevos ordena mientos de derecho, quedaron fijos a pesar del Renacimiento, hasta venirse a i n t e g r a r e n el Código del Consulado Francés, vulgarmente Código de Napoleón. De e sas materias, tenemos aún principios son los de la prescripción adquisitiva, y los d e la accesión. El concepto de la prescripción adquisitiva, consiste en llegar a tener la propiedad de una cosa, la sola posesión de ella, al través del tiempo, mediante requisitos determinados, que hoy figuran en nuestras leyes substantivas. El concepto de la accesión, es la adquisición de la propiedad de u na cosa, por la sola razón de ser dueño de otra de mayor o consideración, con la cual la primera estuviera ligada en for  ma accesoria; por ella se ha tenido como dueño de las arboledas, quien es dueño del terreno superficial, y de la misma manera las aguas estancadas y movedizas que hu  bi er a en la her eda d, al igu al que los an ima le s no apropiados que se encontraren. indudable, que tos de derecho y sobre ción por accesión; pero só el Derecho Romano, zón histórica.

desde antaño, las aguas han sido objeto de apropiación, objelas cuales caben la adquisición por prescripción, y l a adquisiesto, que es re gla general en otros pueblos, por los cuales pa no lo es de una manera absoluta, en nuestro país, por una ra -

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La razón histórica es esta : el descubrimiento del Nuevo Mundo, y establecimiento colonial en estas regiones de América.

El suceso trascendental, de haber buscado el camino marítimo de la Indi a, navegan por el Occ ide nte , produj o cons ecue ncia s mu y supe rior es a las que le supusieron los actores mismos del suceso; y si ya estamos muy familiarizados a hablar de la  Nue va Esp aña , y conocem os hi stó ric ame nte el sucedido, lo que nos falta, es aca ba r por int erp ret arl o. La int erp ret aci ón sólo la podem os ten er, conoc iendo la ley ,  por ser si emp re la ley el espe jo que ref le ja la s cos tum bre s de un tiempo. Si a eso añadimos un mejor conocimiento de lo que era en el Siglo XVI la idea del derecho  públi co del Estado, ccnocemos el manantial de donde esto procede, y hallamos cosas que chocan definitivamente con nuestra actual manera de ser. do

Con la formación de las grandes nacionalidades, concluye el período de la Edad Medi a, y principia el Renacimiento, con una corriente, que al tiempo que es una regresión al pasado de Roma, es también una ruta nueva de orientaciones, tanto en el  pen sam ien to como en el art e, como en los conce ptos de l d erec ho. Las post rim erí as del Siglo XV, que vieron el so rprendente hallazgo del Nuevo Mundo, tuvieron que sentirlo naturalmente, con la interpretación propia de su tiempo. En aquel tiempo, el Pontificado de Roma tenía una triple corona llamada la Tiara San Silvestre, que resumía el símbolo de las máximas potestades celestiales y tem  poral es, y la sola que pret endí a ava sal lar a la s te st as coron adas . Ya no er a la lu cha de los varones y de los nobles contra el poder real; afirmado este, el triunfo sobre el realismo, era el triunfo sobre los demás, y se iba consumando el  propósit o de la Iglesia Universal, bajo una forma estable, de organización sistematizada. Resul tas d e aquello, era el considerar al Pontífice como la expresión más alta de la potestad, y a quien se debía de ocurrir, tanto como mediador en la codicia, como definidor en los conocimientos de lo que escapaba al saber humano, por su razón Teológica, la primera y la preferente de todas las ciencias.

de

a Casti lla y el oriente al Portugal, conforme a la mencionada bula, y cuyo arreglo realizaban un año después o sea a mediados del año de 1494. La bula en cuestión, constituyó un manantial de derechos, pues daba en propiedad la corona de Castilla todas las islas y la tierra firme, encontrada y por encontrar. Cuando se es dueño de una dilatada extensión de tierras, y no se  pued e de em pres a propia aprov echa r sus  produc tos, se ha ocurrido al sistema de ponerla en manos de otro, para que la trabaje y  part ici pe de los beneficios al propietario; pero, para ha cer regular o  per mane nte es a posici ón, se ha cedido en beneficio del trabajador, de dos maneras, tanto por garantizarle la duración en la posesión, y extenderle los actos de l dominio hast a la casi propiedad, como reduciendo a lo ínfimo la participación del dueño en los  benefic ios. Esta relación de dos personas, en lo tocante a l a posesión de un inmueble, la formó el Derecho Romano, en lo que hoy se conoce con el nombre de “censo de enfiteusis”; cuando el Estado repartió los terrenos conquistados del Imperio, entre sus milicias. Pudier on los Reyes Católicos, beneficiarios de esta enormidad territorial que fue e ncontrada y conquistada tiempo después, haber poseído S U  propi edad de es a ma ner a; pero por la mag nit ud de las cosa s, la acum ulac ión de personas, todas en aptitud y deseo de tener derechos, y s obre todo, a que se formaba implícitamente un agrupamiento sedentario de hombres, que formaban una sociedad, no hubo más remedio, sino ceder parcialmente en forma de propiedades en vez de censos,  pues la propi edad privada es la ba se o el asiento de todas las sociedades, y resulta  ba que era la única mane ra de poseer den tro del orden natural, ese enorme título de propiedad derivado de la bula.

 No es de sorp rend er, que los rey es Fer nan do e Isa bel , al recibi r a Coló n en Ba rcelona, al regreso de su  pri mer via je, pusi era n des de lueg o b ajo el pat rona to del Po ntificado, la obra, que ellos consideraran muy propia, de haber ministrado l a expedición marítima, presentándola particula rmente como una obra pastoral de obtene r nuevos adictos al cristianismo, y exte nder y dilatar los dominios de la tierra, a la raza de la Cruz, sobre la de los infieles.

Para poder hacer el manejo del goce de lo concedido, y de estabilizarlo o arraigarlo, hubo de hacerse una corporación de administradores, que de otra manera reyes mismcs ni hubieran tenido tiempo, ni capacidades para acometerlo, originándose de esta manera, el llamado Consejo de Indias, que tuvo asiento perpetuo en Sevilla. Para lo político, el sistema permanente adoptado, fue el del virreinato, y en la persona del virrey, se delegaron gran parte de las funciones administrativas propias del conse  jo. Con el tra nsc urso del tie mpo, se acr ece ntó la auto rida d del vir rey , con det ri men to del consejo, hasta venirse a formar un estado de cosas que hoy fácilmente entendemos+ si decimos que el virrey era el ejecutivo, y el consejo de Indias el legislativo, cuyo cuerpo quedó reducido a esa función legislativa y consultiva de la persona del soberano. A su vez, el virrey derramaba parte de sus funciones, en jueces, en fiscales, en visitadores, y en una larga y complicada cadena de funcionarios.

Como con anterioridad al viaje de Colón los portugueses ya habían vencido el te rror de los mares desconocidos, y habían venido encontrando los l itorales africanos, traficando con los naturales, y comerciando con la especiería de la India, el Papa  Nic olá s V les había concedido en forma de monopolio, el comercio exclusivo con la India, mediante una bula del año de 1454;y al poner los reyes de Casti lla y Aragón,  ba jo su  pat rona to nuev as tie rra s de otr os rum bos , el papa Alej andro VI dispuso una  bul a de 3 de mayo de 1493, en la cual dividía el mundo hasta entonces conocido, en dos  part es de las cua les da ba a Cas til la y a Port ugal , poses ione s a u no y ot ro lad o de una línea imaginaria meridiana, tra zada a cuatrocientas leguas de mar, al poniente de las Islas Azores, lo cual motivó un arreglo entre ambas coronas, quedando el occi -

Por esa vía, el virrey, obrando en nombre del rey, era quien desmembraba parcialmente la propiedad, formando las pequeñas, que sacaba del todo pertenecientes a su amo. La serie de disposiciones dictadas por los reyes beneficiarios de la bula alejandrina, y las de sus sucesores en la corona de Castilla, manejadas  por el cons ejo de Sevilla, formaron un cuerpo d e leyes, conocido con el nombre de Recopilación de In dias, cuyo cuerpo legal, tuvo vida en México, hasta los tiempos de la Guerra de Reforma. De e sa Recopilación o Código de Indias, vamos a citar con transcripción, algunas de sus leyes, que se relacionan con lo que llevo expuesto de la fuente de derechos de la propiedad, y su  paso a mano de los particulares.

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“Por donación de la Santa Sede Apostólica, y otros justos y legitimos títulos, SOde las Indias Occidentales, Islas y Tierra Firme del Mar Océano, descubiertas y  por des cubr ir, y es tá n inc orpo rada s en nue st ra Rea l Cor ona de Cast ill a”. (Ley 1, del Título 1, del Libro 111). “Si en lo ya descubierto de las Indias, hubiere algunos sitios y comarcas tan buenos, que convenga fundar pablaciones y algunas personas se aplicaran a hacer asiento y vecindad en ellos, para que con más voluntad y utilidad lo puedan hacer, los Virreyes y Presidentes LE§ DEN EN  NUESTRO  NOMBRE tierras, solares y aguas, conforme a la disposición de la tierra, con que no s ea perjuicio de tercero, y sea por el tiempo que fuere nuestra voluntad”. (Ley 4, del Título XII del Libro I V ) .

entre los  bien es naci onale s y los del real patrimonio, era una distinción consig nada en toda la legislación española, y por eso los autores para explicar el carácter  jurí dico del rea l patrim onio, que no pert ene cía ni a los bie nes públi cos, ni absol utamente a los privados enseñan que  bie nes del rey consti tuían una espe cie de mayorazgo a favor de los herederos de la Corona (Gutiérrez Fernández. Códigos Funda-

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mentales). La corona de Castilla, en virtud de ese dominio no eminente, sino directo y de vinculación que tenía. en todo el territorio conquistado, podía enajenar, donar y repar tir los terrenos y aguas de la Nueva España sin las limitaciones que el Derecho Públi co Español ponía al ejercicio de la  pote sta d re al de la metrópol i. “El  princi pio fund a mental, dice el doctor Mora, de la legislación española en cuanto a propiedad territo rial en México, era que nadie podía poseer legalmente, sino a virtud de una concesión  prim iti va de la corona”. En virtud de este principio enunciado en l as leyes del título XII, Libro de la Recopilación d e Indias y muy especialmente de la Ley XIV, los Vi rreyes y otras autoridades delegadas por los reyes, otorgaron concesiones de tierras y aguas a los particulares, a los conquistadores, a los indios, y son innumerables y cidísimas por los que están familiarizados con los títulos antiguos de dominio, las llamadas “mercedes” de tierra y aguas de donde tienen su origen las actuales propiedad e s d e los  part icul ares . De lo anterior concluimos, en que, al efectuarse la ocupación del Nuevo Mundo,  por la s arma s de Cast ill a, y por mini ste rio d e una decl arac ión Pont ifi cia , toda s la s tie rras, todas las aguas, todos los bienes inmuebles en general, que inte graban est os territorios, cayeron bajo el dominio privado de! rey y de sus herederos en la corona. Consiguientemente, no pudo hacerse distingos entre bienes públicos y privados, porque siendo todos propiedad personal de la corona, todos eran privados. E s t a e s u n a de las primeras y  princ ipal es moda lid ade s, inh ere nt es al derecho de  propi edad en Méxi co; que con si ste en que , dur ant e toda la época colonia!, no ha bie ndo el suj et o de derechos llamado Estado, sino una vasta extensión territorial de propiedad, y dominio político de una persona, los conceptos hoy tan en uso, que ha cen el distingo de los  bien es públi cos del domin io del Est ado, del de los  bie nes privados de los  part icul ares , fue ran del todo desc onoci dos. Hemos dicho, que la función peculiar del Ccnsejo de Indias, era legislativa, y como tal, al venirse formando la Recopilación de las Leyes de Indias, esos Mayordomos, consideraron nuestro actual territorio, desde el punto de vista de su utilidad, como un bien “rnercedable” y estimada con el criterio legalista, que informaba la pro pie dad ter rit ori al de la pení nsula Ibér ica , o sean con esos criterios venidos del Derecho Romano, considerando el agua como accesorio de la t ierra. Por es o vemos en toda la Recopilación de las Leyes de Indias, que no s e estable ce diferencia alguna, entre las tierras y las aguas, para el efecto de su titulación, a tal grado, que ni en las Leyes ni en las titulaciones o mercedes concedidas, se encuentra separado el donar tierras simplemente, sino siempre unido al hecho de mercedarlas junto con las aguas;

“Habiendo de repartir las tierras aguas abrevaderos y pastos entre los que fueren a poblar, los Virreyes o Gobernadores que de  Nos tuvieren facultad, HAGAN EL REPARTIMIENTO.. . y a los indios se les dejen sus tierras, heredades y pastos, de forma que non les falte lo necesario, y t engan todo el alivio y descanso posible el sustento de sus casas y familias”. (Ley 5, del Título XII del Libro IV). que si se  pre se nta re peti ción pidi endo sol are s o tierras. . . y si la petición fuere sobre repartimiento de aguas y tierras para ingenios, se presenten ante el Virrey o P r e s i d e n t e . . . (Ley 8, del Título XII del Libro IV). De esta mane ra, debemos notar, que se hizo desde luego, un distingo de propie dades, entre la propiedad de la tierra, y la propiedad de las aguas, sin que se diera el caso de suponer a esta una accesión de la primera: y notamos también, que la propiedad de la tierra, y la propiedad de las aguas, unas y otras se adquirieron de la misma manera, o sea mediante donaciones reales, hechas por manos de los virreyes, o de Lernedores autorizados exprofesamente para hacerlo. Uno de los  jur ist as mexi canos , cons agra dos en est as mate rias , y qu e ha sid o citado como autoridad en otras ocasiones, dice a su vez haciendo citas de comentaris tas y del doctor Mora, lo que sigue:

“La  base fun dam ent al de la legi sla ción de Indi as resp ecto a la  prop ied ad in mu eb le del t erritorio conquistado fue, no que el Esta do tenía simplemente el dominio te que correspondiera al común de todos los hombres las aguas de ríos y lagos; la  base de la legisl ación colonial er a otra . El territorio conquistado pertenecía no a la nación españcla, nó era parte int egrante de España, ERA PROPIEDAD DE EA CORONA; diferencia fácilmente explicable, bajo el imperio de una constitución que dis tinguía entre el tesoro y  bien es de la Naci ón, y el tes oro y del rey designados con el nombre de  patrimonio. Es ta dist inci ón que no desa pare ció sin o des pués de  promul gada la Const ituc ión de 2 de mayo de 1812 (habla de la Constitución Es pañola en Cádi z), es tá expl íci tam ent e for mul ada en la Ley la,Título 1, Libro 11 d e l a Recopilación de Ind ias: y refi riéndose a ellas el doctor Mora nos dice: (México y sus Revoluciones) “que en lo relativo a América, mientras estuvo dependiente de España, fu e máxima fundamental de la legislación española, que todos los dominios adquiridos en virtud de la conquista pertenecian no a la Nación conquistadora, sino exclusivament e a la corona. La de Alejandro que fue como el título primitivo en que España fundaba sus derechos DONO EXCLUSIVAMENTE a Fernando e Isabel y a sus DESCENDIENTES todas las regiones descubiertas y por descubrir”. La

y es cosa cierta, que en la descripción que hacen algunos títulos coloniales, se consigna el hecho, de no seguirse mesurando y deslindando más tierras, porque no había agua con que mercedarlas.

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Esto nos dice, que con chamiento de las aguas, al soriamente al otr o: y por lo  pecto a la pro pied ad de las

un criterio limitadamente agrícola, se estimó el aprovegrado que como hemos visto, un concepto entrañab a accetanto, nunca hubo cuerpo de doctrina especial, con resaguas.

La Región del Valsequillo en el Estado de Puebla

y la Oficina de Exploraciones y Aprovecha. miento Aguas Subterráneas  Po r el Zng. Vicente

ahora bien, como según el mism o ingeniero pueden llevarse, derivados del r ío Atoyac, litros por segundo al Valsequillo, en los meses de junio a noviembre, toman do como coeficiente de riego 0.5 litros por segundo y por hectárea, que es reducido, pe ro que estima será bastante, resulta que sólo podrán regarse unas 30,000 hectáreas, que significan poco menos de la décima parte de la cantidad total regable.

e-

En vista de estos resultados y como en la región del Valsequillo, hay porciones ricas en humus, de notable espesor, 40 metros en San Gerónimo y 23 a metros en los demás valles, y por lo tanto particularmente adecuadas para los cultivos, pues al gunas tierras del Valsequillo Bajo producen hasta 400  por 1, se rindió un informe  bas ado en los dat os con sign ados en los exp edi ent es resp ectiv os. Este informe, que en la parte referente a aguas subterráneas s e apoya en estupor el señ or In g. Pe dr o Gon zále z, en la región de “Las Lagunas”, en la altiplanicie de llanos de S a n J u a n , El Salado y Chalchicomula, y en el trabajo del señor Heriberto Camacho, sobre las aguas subterráneas del Valle de Tecamachalco, fue redactado con el objeto de obtener utilidad, lo más  pro nto posi ble, de los es tudios ya existentes, pues es seguro que podrían emprenderse otros en lugares más alejados, como los referentes  a la zona en las cercanías del cerro de L a Malinche,  per o con est o sólo se log rar ía, como re su lt ad o inm edi ato, au me nt ar el archivo del Valsequillo sin llegar a algo efectivo.

dios  pra cti cado s

GALVEZ.

varias partes de la República Mexicana no se cuenta con recursos de agua de escurrimiento superficial, o si se tienen, éstos no suministran la cantidad que sería indispensable para llenar satisfact oriamente los servicios de irrigación, dado que, como muchas veces sucede, la extensión de las tierras regables no está en relación con los abastecimien. tos acuíferos que pudieran obtenerse de las aguas superfici ales, aun cuando el coeficiente de riego que se estime conveniente sea el mínimo. En estos casos hay que recurrir a otros medios, pues no es que ciertas zonas  poco fav ore cid as con los recu rso s men cio nad os, se enc uen tre n en cond ici ones de contener agu as subter ráneas, en ca ntidad es cuyo aprovechamiento .venga a remediar las necesidades, muchas veces apremiantes, que existen, o también para cubrir la defi ciencia de los métodos d e irrigación empleando las corr ientes ‘superficiales.

El informe del señor Ing, Pedro González, indica el empleo de las aguas freáticas y las posibles ascendentes, que circulan subterráneamente abajo del suelo de la región de Lagunas”, en la altiplanicie que se conoce con los nombres de llanos de San Juan, El Salado, Quecholac y Chalchicomula; manifiesta que esas aguas son abundantes, porque la precipitación e s de a 1,500 milímetros anuales, y la zona de infiltración bastante grande, porque la constituye casi toda la región, de maner a que casi toda el agua proveniente d e las lluvias se convierte en subterrán ea, excepción de una parte que se pierde por evaporación. Estando el nivel medio del valle donde s e encuentran las lagunas, a 2,340 metros sobre el nivel del mar, y el de Quecholac de Tecamachalco, que puede estimarse como una d e las partes más altas del Valsequillo Alto, a 2,250 metros, según el es tudio del señor Camacho, se comprende que es factible llevar las aguas de una cuenca a otra. Par a llevar a ef ecto este procedimiento, el Ing. González propone se practi quen los trabajos topográficos necesarios a fin de localizar las obras de captación, que  pro vis iona lme nte ha ce con sist ir en tr es taj os, un a gal erí a y un tú ne l; ést e  pa ra atravesar hacia el Puente de los Mecos, la sierra que se extiende por San Marcos y los cerros de Macuilan y Chiconoquiahuitl, y que dará salida a las aguas en el valle de Quecholac de Tecamachalco.

Como ejemplo de las condiciones poco favorables en que se encu entran algunas  porci ones de la Repú bli ca, men cio nar emo s l a regi ón de Valse quil lo, del Estado de Puebla, que ha ocupado la atención de varios escritores cuyos informes tienden al apro vechamiento de algunos recursos acuíf eros, para la irrigación de aquellos terrenos. De estos informes los pertenecientes a los señores Luis Urbina, Francisco Millán, Enriqu e Barón Obregón, Ing. Gutiérrez, Juan Hernández, J. Conrado Arenas, Ing. Guillermo Rode e Ing. Domingo Diez, tratan de resolver el problema del Valsequillo  por de las aguas del río Atoyac, derivándolas en el cañón del Diablo o abajo de la confluencia de ese río con la Barranca de La Trasquila; y sólo dos, el del Ing. Pedro González y el del señor Heriberto Camacho, indican para resolver el asun to, el aprovechamiento de las aguas subterráneas. Según datos tomados del trabajo del señor Ing. Domingo Diez, de septiembre de 1926, la superficie regable en aquella extensión, dividida en Valsequillo Alto y Bajo e integrada por los valles de Tecamachalco, Atoyatempan, Tlacotepec y Sa n Gerónimo, es de unas 328,000 hectáreas distribuídas d e la siguiente : 140,000 hectáreas  para Teca rna chal co, 38,000 hectáreas para Atoyantempan y 150,000 par a S an Ger óni mo;

Este proyecto preliminar es interesante, pero como dará lugar a operaciones costosas, dada la situación de las cuencas que será necesario comunicar, es conveniente completar el estudio a fin de obtener datos sobre lo siguiente: cantidad aproximada de agua contenida en los receptáculos subterráneos, de la región de Las Lagunas; cantidad aproximada de agua que con las obras preliminares proyectadas o su ción, podrá obtenerse ya en el Valsequillo; y costo probable de las obras. Par a

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-+-

a estos resul tados habrá que practicar pozos de exploración que, alcanzando los receptáculos acuíferos sub terráneos, pe rmitan someterlos a bombeos de prueba y llegar así a una conclusión sobre la capacidad acuífera de esos receptáculos: hacer un estudio geológico más detallado, de preferencia en la sierra que se extiende de Sa n Marcos a los cerros de Macuilan y Chiconoquiahuitl y los levantamientos topográficos necesa rios. Del informe del señor Camacho referente a las aguas subterráneas del Valle de Tecamachalco, lo más interesante es: la relación que hace de la existencia de un manto acuífero considerable y de cau dal in agotable, en el valle de Quecholac de Tecamachalco las emergencias acuíferas de San Bartolo Coscomaya, Chichipico, Atitlahuey y el Ahuehuete Gr ande ; y las obras que propone en Atitlahuey y el Ahuehuet e Grande.

La formación de sifones artificiales que recomienda, entre Toluquilla y la Hacienda de Santa Inés, casi no tienen probabilidades de éxito, pero es de estimarse que  pu ed en se r su bs ti tu íd os por una re d de tajos y socavones, en el valle de Quecholac de Tecamachalco, que ext rayendo las aguas del manto acuífero inagotable, según el señor Camacho, las conduzca a un canal colector que las lleve a regar las tierras del lle de Tecamachalco. El canal, en caso posible, es de iniciarse tornando como base la depresión del Salado, y continuarlo pasando entre el cerro Colorado y el del Monumento: la falta de datos, pues el informe casi no consigna alturas, no nos permite explicar con más extensión el trazo probable, pero e s de considerarse practicable teniendo en cuenta que el valle de Quecholac de Tecamachalco, según el informe, se e ncuentra a 2,250 y el del Valsequillo a 2,007 metros sobre el nivel del mar; por otra parte, esto será decidido por los trabajos de nivelación que será indispensable ejecutar. Por la descripción de la emergencia acuífera de San Bartolo Coscomaya, en el contacto de las tobas andesíticas con las calizas, es  pro bab le que no se a má s qu e el re su ltado de las aguas freáticas del valle de Q uecholac de Tecamachalco, que emergen a favor de ese contacto. En tal caso éste es un buen lugar para colar un socavón sobre el contacto y galerías que partiendo de esa obra, sigan la capa de arena colocada entre las tobas volcánicas y las tobas calizas, pero respetando el bajo de la capa, a f i n d e extraer las aguas de ese manto acuífero y reunirlas en el socavón. Parecen prudentes las galerías que se recomiendan para cortar las diaclasas acuífera s en Atitlahuey y el Ahuehuete Grande, siendo de pensarse que otro tanto pueda hacerse en Chichipico, y en ambos casos combinar estas galerías con cruceros sobre las vías acuíferas, teniendo cuidado de no destruir el fondo impermeable que impide descenso de las aguas. En el informe de que estamos tratando, se consigna la existencia de aguas brotantes en Acatzingo y Tepeyahualco; si eso es cierto, se hace necesario estudiar la zona respectiva, pues si hay aguas brotantes en Acatzingo, que se halla a un nivel superior y en el mismo valle que Tecamachalco, no vemos la razón para que en este último lulo que sobre el  par ti cul ar expo ne el señor Camagar suceda lo contrario, no cho. El sistema de canal colector con red de galerías, tajos y socavones, que estimaconveniente que los sifones del señor Camacho, es de esperarse que mos como

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datos para juzgar de la circulación subterránea en las aguas, pues mientras el mencionado señor manifiesta que esa circulación se verifica de las vertientes SW. del Pico de Orizaba para Quecholac de Tecamachalco, por los conductos supercapilares de la formación en el valle de Chalchicomula y  po r la s di ac las as qu e div ide n la ba rr er a de Coscomaya. que separa a los valles de Chalchicomula y Quecholac de Tecamachalco, otros, como el señor Palacios, opinan q ue las aguas d escienden subterrán eamente desde las faldas de La Malinche, opinión que no es improbable, si se tiene en cuenta que, según el distinguido geólogo señor Aguilera, el valle de Tecamachalco, al que pertenece el de Quecholac de Tecamachalco, se inicia al pie de los contrafuertes de La Malinche, por el rumbo de Amozoc. L a aclaración de es te asunto de utilidad para el  pro yec to de fu tu ro s t ra ba jo s, pu es en el caso de que las aguas circulen atravesan do la  ba rr er a d e Cos com aya , pod ría mo di fi ca rs e el  pro yec to de l se ño r ing en ier o Go nzá lez, captando las aguas directamente en las diaclasas, practicando obras, sobre ellas, el  pape l del túnel q ue por el Puente de Los Mecos, indique vendrían a ca el Ing. González: teniendo este procedimiento la ventaja de sacar provecho desde luego de las obras, pues se utilizarían inmediatamente las aguas que produjeran las dia clasas, no obstante que con este procedimiento se restaría importancia al receptáculo acuíf ero de Quecholac 'de Tecamachalco, almacenante y regulador. Fundándose en lo expuesto y considerando que para resolver, aunque sea en parte, el  pro ble ma de la irr iga ció n en el Valsequillo, de los dos procedimientos indicados referentes a las aguas subterráneas de la región de " Las Lagunas " y Chalchicomula, y del Valle de Quecholac de Tecamachalco, las de éste último requieren menos costo  pa ra se r ob ten id as , se rin dió el informe antes mencionado, cuyas conclusiones en lo referente al aprovechamiento de aguas subterráneas, son las siguientes : la extensión de terreno regable en el Valsequillo, los procedimientos que tienden al empleo de las aguas del río Atoyac y al de las aguas subterráneas, no se excluyen, sino que se completan, pues hay extensión donde utilizarse.

el estudio del ingeniero Pedro González, para conocer la cantidad aproximada de agua contenida en los receptáculos subterráneos, de la región de Las Lagunas: cantidad aproximada de agua que podrá obtenerse ya en el Valsequillo; y costo probable de las obras, ya sea que se admitan las que propone, o las que resulten de su modificación. 3% Ratificaro rectificar el estudio del señor Heriberto Camacho, comenzando por  pr ac tic ar so nd eo s co nv en ie nt em en te ele gi do s, a f in d e con oce r el ma nto acu ífe ro d e Q ue cholac.

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que resulte cierto que el manto acuífero de Quecholac, es  ba st an te extenso e inagotable en su contenido de aguas, como se asienta en el informe del señor Camacho, substituir los sifones artificiales que recomienda, por un canal colec tor y una red de tajos y socavones, que extrayendo el agua del manto acuífero la lleven al valle de Tecamachalco. estudio de la emergencia acuífera de San Bartolo Coscomaya, colar un socavón que descubra la capa arenosa donde se supone que están almacenadas las a g u a s , y, en caso d e q u e verifique, con galerías esa

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aptitud de dominar las dificultades de la busca de aguas subterráneas, y producen informes recargados de terminología científica, tomada en libros mal interpretados precisamente por su falta de base para comprenderlos, y que  pue den des lum bra r a los que no se encuentran al tanto de los principios en que se apoya la Hidrología Subterránea.

capa, con las precauciones debidas, den salida a las aguas que deberán reuni rse en ese socavón. convenientes las galerías que se recomiendan en Atitlahuey y el Ahuehuete Grande, siendo probable pueda hacerse otro tanto en Chichipico. se llevan a cabo, bueno s erá combinarlas con cruceros sobre las vías acuíferas, ‘que se cuidará no destruyan el fondo impermeable que impide el descenso de las aguas.

La Oficina de Exploraciones y Aprovechamiento de Aguas Subterráneas deberá,  pues, conta r con hidrólog os cons cie nte s de sus responsabilidades, porque la resolución de  proble mas que ser án some tid os a su competencia así lo exige.

la posibilidad de que haya aguas brotantes en Tecamachalco, pues si acaso es exacto que las hay en Acatzingo, no se ve la razón para que suceda lo contrario en esa zona, siendo que Acatzingo se encuentra a un nivel más alto y en el mismo valle que Tecamachalco. sistema de canal colector con tajos y socavones, en el valle de Quecholac, es  probab le acla re el modo de circ ulac ión d e la s aguas en el subsu elo, y por consi -

guiente facilite proyectos futuros que tiendan a modificar algunos ya propuestos, como el. del señor ingeniero González.

Tamauli

Y Resolver parte del problema del Valsequillo, por medio de las aguas del valle Quecholac, que resultarán las más económicas; después por las de la región de “Las Lagunas”; y en caso necesario emprender nuevos estudios por otras zonas.

de

-

El

estudio y la resolución de los problemas de que se trata en

el

transformación que efectuarán las Obras de Riego

caso concreto

del Valsequillo y en otros muchos que, sin duda, se presentarán a medida que se

va-

 Ing eni ero José S.  NORIEG A.

yan explorando las diversas regiones de nuestro territorio, será posible con los ele mentos que en un futuro próximo contará la Ccmisión Nacional de Irrigación, la que, teniendo en cuenta la importancia que el aprovechamiento de l as aguas sub terrán eas  pue de signi fica r par a el país, ha dec idi do cre ar una oficina de Explo raci ones y Aprovechamiento de Aguas Subterráneas, la que vendrá a llenar una necesidad impuesta por las condiciones especiales en que se hallan ciertos lugares, y que completará los servicios de utilidad general que están a cargo de la Comisión Nacional de Irrigacion.

Como los fines de la nueva dependencia, significan llevar a la práctica los resul tados de los estudios que se ejecuten, y no simplemente aumentar archivos con informes que por su aplicación remota resultan de poca utilidad, y la ejecución de trabajos que se aconsejen, requiere la erogación gastos que a veces resultan elevados, se hace necesario integrar el personal que labore en esa oficina, con ele mentos idóneos, reconocidos por su competencia y  prepa raci ón, o que sean capaces de adquirir, sin gran sacrificio de tiempo, debido a las bases en que se apoya instruc ción, los conocimientos necesarios para poder enfrentarse con  probl emas del res orte de la Hidrología Subterránea; es indudable que para estos fines los más capacitados son los ingenie - os d e minas, pues a la amplia instrucción que reciben en las escuelas universitarias, se el hecho particular de que al hacer su carrera se les enseña un curso especial de geología, lo que no suce de en las demás profesiones. Y aquí sí es de gran interés la selección del personal que actuará, pues es de urgencia que los hidrólogos empleados por la Comisión Nacional de Irrigación, no pertenezcan a las categorías en que clasifica a los buscadores de agua el ingeniero y geólogo René D’Andrimont,  producció n Ciencia Hidrológica” enviada a la Asociación de Ingenie ros de la Escuela de Lieja, cuidándose sobre todo de aquellos que estiman estar en

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PRINCIPIOS

<-

Y-

de e ste siglo no se notaba gran diferencia entre las dos riberas del bajo río Bravo; tanto la margen tejana tamauli peca, est aba n muy poco pobla das y los hnbi tan tes de ambas fronteras llevaban esa vida seminómada caract erist ica de los lugares primitivos donde la agricultura no es la principal ocupación: la ganadería y el con trabando constituían las dos principales fuentes de vida y como consecuencia los  pinto resc os mora dore s se conve rtía n gene ral ment e en vaqu ero s cont rab andistas “rangers” o rurales. Tal vez el lado mexicano estaba entonces ligeramente más poblado, debido a que en la época llamada “de los algodones”, nuestras ciudades fronterizas y en particular Matamoros, habían progresado grandemente. Provino ésto de que estando bloqueados los puertos del sur de la Unión Americana durante la guerra civil, toda la exportación del algodón se hacía a través de la frontera mexicana, produciéndose una gran actividad a lo largo de nuestra línea divisoria. Varias de !as fortunas de esta región y de Monterrey se formaron en esos agitados años. La población en los dos lados del río era mexicana de origen. Pero el avance arrollador del progreso llegó por fin al extrem o sur de los Estados Unidos. Los hom  bres de negocios del norte coi npre ndie ron las posib ili dades de terrenos casi abandonados hasta entonces y compraron a precios muy reducidos las “porciones” que desde la época colonial habían sido repartidas a los pobladores. Estas “porciones” son largas fajas de terrenos con escaso frente al río Bravo y dos o cuatro leguas de fondo. En la orilla del río instalaron plantas de  bomba s y tra jer on colonos del norte, a los

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que vendieron las tierras muchas veces más caras de como ellos las habían adquirido. El costo de  bo mb ea r el agu a por me di o d e la ma qu in ar ia qu e ent on ce s s e us ab a, re su ltaba alto y la mayor parte de las p rimeras empresas d e riego, así como los prime ros colonos fracasaron. Pero el optimismo de nuestros vecinos es muy grande y la corriente de inmigración del norte no cesó: se disimulaban los fracasos y se emprendían nuevos negocios de fraccionamiento y colonización. Vino la gran guerra que elevó los precios de los productos agrícolas y la vacilante situación de los nuevos colonos se afianzó. La maquinaria antigua, que usaba leña como combustible, fue sustituida por motores Diessel de gran eficiencia o  por mo to re s elé ctr ico s qu e rec ibe n en erg ía d e una gran planta central donde el combustible es gas natural. En esta planta se em  pl ea n mo de rn as tu rb in as de vapor para generar la electricidad. Así han surgido pue bl os don de ya no pr ed om in an los mexicanos, sino que están compuestos de descendientes de las razas del norte de Europa, transplantados por más o menos tiempo a Estados Unidos. Recuerdo que en 1910 oí decir a un americano que a lo largo del río Bravo se formaría un a gran ciudad que se extendería desd e el Golfo de México hasta cien kilómetros hacia el poniente. Estas palabras entonces hacian !a impresión de una es tupenda fanfarronada: pero en la actualidad más parece una profesía que está a punto de De Brownsville a Mission hay una distancia de ciento dos kilómetros que una magnífica carretera permite recorrer en poco tiempo. Todo el trayecto está lleno de  pue blo s y ciu da de s fu nd ad os ca si to do s e n los últimos veinticinco años y pletóricos de vida y movimiento. La distancia entre éstos disminuye rápidamente, pues a lo largo de la calzada se construyen casas y granjas, siendo difícil saber dónde ter mina un  pue blo y dó nd e prin cipia el sig ui en te . S e aca bó el de si er to que an ti gu am en te

Margen

Lugar adecuado para instalar una planta de bombas en el Bravo. San Francisco, Tams.

separaba al pueblo americano del nuestro y que alguno de nuestros estadistas consideraba conveniente a nuestros intereses. Mientras tanto sucedía en nuestra frontera?  No habían faltado intentos de desarrollar las hermosas tierras de nuestros valles, pero éstos habían fracasado. Tam bién e n Mé xic o ha bía qu ien es co mp re nd ie ra n lo que podría  por me di o de obras de ingeniería. M edio millón de hec táreas d e fertilísimas tierras que se extienden entre Camargo y Matamoros están a la vista de todos. llueve aquí lo suficiente, no falta agua para' irrigación a las corrientes. El San Juan descarga anualmente ochocientos millones de metros cúbicos en el Bravo, el Santa Gertrudis cuarenta millones. El Bravo mismo lleva un caudal d e cerca de cinco mil millones de metros cúbicos antes de su confluencia con el San Juan, de cuyo volumen cerca de las tres cuartas partes procede de a fluentes mexicanos.  No  pu ed e sa be rs e qu é vo lumen se aprovechará en la parte alta de las corrientes, ni cómo se dividirán estas aguas internacionales entre México y Estados Unidos  pe ro las ci rc un st an ci as ind ican que la mayor parte de esos volúmenes de agua se emplearán en fertilizar los terrenos comprendidos entre Camargo y Matamoros, donde existe el mayor cuerpo de  bu en as tie rra s de l  N.E. de México. Excelentes carreteras pueden aquí construirse con  poco co sto y u n pu ert o en el Go lf o es fa ct ib le . Al norte de Tamaulipas, entre los ríos Bravo y Conchos, existe un latifundio llamado Sauteña" . Los  pro pie tar ios ha bí an in te nt ad o de sd e 1909 llevar a la práctica grandes proyectos de riego y colonización. El  pro pós ito er a uti liza r ag ua s de los ríos Bravo, San Juan y Conchos; pero tal vez que semejantes proyec-

del Bravo en San Francisco, Tams. Luga r seleccionado  par a insta lar plant a de  bombas.

&a

tos eran demasiado vastos para un a sola empresa, se decidió traspasar una parte del enorme latifundio a una compañía que se llamó " De Río Bravo " . E sta negociación llegó a iniciar 12s obras de riego: adquirió maquinaria y excavó algunos canales: pe ro la revolución de 1913 suspendió toda clase de trabajos de construcción y éstos nunca se han reanudado, aunque muy recient emente s e habla de revivir proyectos antiguos con algunas modificaciones.

Así  pue s, mi en tr as la fro nte ra am er ic an a ha sufrido una maravillosa transforma ción, 12 nuestra más bien ha retrocedido. El contrabando continúa igual, más o  per o la gan ade rí a, la otr a imp or tan te fu en te de vida , es tá muy decaí da. H a una industria nueva, pero de tal índole que no podemos sentirnos muy satisfechos de ello. M e refiero a la venta de bebidas embriagantes para satisfacer 12 sed de los americanos que en su  propio país no pu ed en ob te ne r vinos.

Es  jus to ta mb ié n men cio nar que en lo s últ im os cinco años , se han ven ido abr ien do considerables extensiones de tierra a l cultivo del algodón. Estos terrenos se siembran de temporal y están expuestas las cosechas a pérdidas por falta de lluvia oportuna.  per o a pesa r de todo , la bon dad de los te rr en os ha ce cos teab les est as si em br as ale ato rias y en el  pre sen te año se espera una cosecha casi igual a la que se obtuvo en la famosa zona lagunera. Podemos imaginar que nu estra front era es un dique que contiene difícilment e el avance de la prosperidad, la riqueza, la colonización y el bienestar. hacer para que esa invasión benéfica no se detenga en la frontera y que al derramarse por nues tro territor io produzca el mayor bien a nuestr a patria ? más urgente es, sin duda alguna, cuidar la irrigación de estas extensas zonas mediante el racional aprovechamiento de las corrientes mexicanas, afluentes del

Plaza Hidalgo. Reynosa, Tams.

de carácter internacional sobre el propio cauce del Bravo, marcan el mejor procedimiento para aprovechar esta riqueza internacional, a cuyo uso, como dejamos dicho, puede atribuirse fundamentalmente el  port entoso desarrollo de la margen americana de!  bajo río , Po r otr a pa rt e e! único gén ero de aprovechamiento practicable en el Brav o por ahora, es e! que han usado los americanos: riego por medio de bombas. Estudi os acerca de esta clase de derivación de agua se han iniciado recien tement e esperándose así resultados más inmediatos. río Bravo, en tanto tratados de división

Ea eficiencia de los motores modernos permite a las plantas  bom bas com peti r con otros métodos de riego. El  ba jo costo d e las ins tal acio nes y la com odi dad y abu ndancia de combustible son las dos ventajas del sistema. Mientras no se contó con  má s combustible que la leña la superioridad de las bombas era dudosa: pero el petróleo y el gas natural que se producen en cercanos, permiten el abaratamiento de 12 energía eléctrica y su  producción en gr an de esc ala .  No es  sol o  posib le la in sta lac ión de var ias pla nta s in dep end ien tes un as de otr as, sino que también es de recomendarse la instalación de una gran planta central que suministre energía eléctrica a lo largo del valle, principalmente para la irrigacion, pero a la vez para alumbrado y para u s o s industriales. Aquí cabe citar la posibilidad de  prod ucir esa ene rg ía elé ctr ica por med io de caídas provocadas en los ríos Bravo y San Juan.

Labor de algodón de secano.

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Camargo, Tanis.

También hay fundadas esperanzas de encontrar petróleo y gas natural en lugares cercanos a estos valles. Los estudios que hace la Comisión Nacional de Irrigación, tienden a encontrar la

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maner a m ás económica de resolver los varios problemas que de una maner a muy bre ve hemos esbozado. Haber citado el penoso contraste que existe entre las dos fronteras, da cierto aire de pesimismo a este artículo. Lejos de ser pesimista, tengo gran fe en el  po rve nir d e esta región y ahora hablaré de algunas circunstancias que puedan favorecer nuestra frontera más de lo que lo ha sido la americana. Allá las empresas de riego han procedido con fines mercantilistas y sin coordin a r los esfuerzos de unas con otras. Es to tiene su s ventajas, puesto que la acción individual movida por el interés, es muy eficaz: pero también tiene sus inconvenientes. La falta de coordinación ha hecho costosa y poco científica la irrigación. Mu chos canales se han construido a lo largo de las líneas de las propiedades en vez de seguir el trazo que la topografía seña la, Algunas obras se han duplicado innecesariamente. En nuestro caso, la acción del Gobierno, puede coordinar mejor los intere ses d e todos: puede hacer un estudio de conjunto de los  pro ble ma s y res olv erl os si n las mitaciones que necesariamente tiene una empresa privada por muy poderosa que sea. Se necesitará seguramente mucho esfuerzo y  pe rs is te nc ia ; pero el éxito es po sib le y el objeto que se persigue vale la pena. En mi ánimo no hay la menor duda de que los  pro  bl em as téc nic os se rá n ata ca do s y re su el to s en la fo rm a m i s con ven ien te, y qu e ent onces tendremos derecho a esperar también nosotros el surgimiento de una ciudad que se extienda de Camargo a Matamoros, grande, limpia y próspera, núcleo de am pl ísi ma zon a de rie go, con bu en as co mu ni ca cio ne s y con las ventajas que a todas partes lleva la energía eléctrica abundante y  ba ra ta .

Proyecto de rectificación del río Bravo en el Valle de Juárez, El Paso  Ar ma nd o

SANTACRUZ,  Jr.,

Ingeniero Civil, E.  N.

OMO resultado de los estudios hechos durante los últimos ocho

años

 por ing eni ero s mex ica nos y ame ric an os de la Com isió n In te rn ac io na l d e Límites entre México y los Estados Unidos, de Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas de México y de la Secretaría del Interior de Estados Unidos, se ha llegado a formular un proyecto detallado por los ingenieros de ambos países para un plan internacional de obras de defe nsa contra inundaciones del río Bravo en el valle de Juárez-El Paso, co nsistente en un proyecto d e rectificación y canalización del río. Este proyecto acab a de ser  pr es en tad o po r la Com isi ón In te rn ac io na l d e Lím ite s a la con sid era ció n d e lo s gob ier nos de los dos países.

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El  pe rso na l que h a tom ad o pa rt e e n lo s es tu di os de es te pr ob le ma y en la pre  par aci ón de l pro yec to, por pa rte d e Mé xi co , lo fo rm an los se ño re s in ge ni er os Gu st av o Serrano, Comisionado Mexican o de Limites: Salvador Arroyo, Jefe de la Comisión de Obras de Defensa del río Bravo: Joaquín C. Bustamante, Juan D. Hernández y Rafael Fernández MacGregor, Ingenieros de la Comisión de Límites, y el suscrito como Ingeniero Consultor Mexicano de la misma Comisión. Por parte de Estados Unidos han intervenido los señores ingenieros M. Lawson, actualmente Comisionado Americano de Límites y anteriormente Encargado d e las Obras de Defensa del río Bravo; Ainsworth, Ingeniero Consultor, y Crawford Kerr, Ingeniero Ayudante de la Comisión de Limites, y Fiock, Superintendente del Sistema Federal de Irrigación "Río Grande " . SINOPSIS. Se propone disminuir de manera considerable el gasto de inundación en el valle de Juárez - El Paso, construyendo al efecto una presa de retención de avenidas, con un vaso de metros cúbicos de capacidad en "caballo", y confinar este gasto de crecientes a través del valle de Juárez - El Pas o 'en un cauce artificial por medio de la construcción de diques paralelos. El cauce artificial en proyecto seguirá y rectificará, 1 de la línea divide manera general, el cauce actual del río desde el monumento soria terrestre hasta el cañón de Cajoncitos abajo de Fort Quitman, y quedará loca lizado de manera de segregar la misma área de cada uno de los dos países. Las principales características técnicas de este proyecto son : la reducción d e la longitud del río de 247 kms. a 141 kms.; la formación de un cauce de crecientes de  por seg ., me di an te la co nst ru cci ón 180 m. de ancho con capacidad para 314 mts. de diques paralelos: el incremento de la pendiente del río de 0.00035 a La formación de los diques requiere la colocación de metros cúbicos de tierra, siendo su altura media de 2.25 m. La formación d el cauce artificial exige la excavación de metros cúbicos de tierra. Para e l derecho de vía de este cauce son necesarias hectáreas en México y 1,650 hectáreas en Estados Unidos. La localización proyectada para el cauce rectificado corta hectáreas de Mé xico y también 1,400 hectáreas de Estados Unidos. El costo del proyecto, incluyendo la  pre sa de "Cab allo ", es aproximadamente de Dls. Este proyecto suprimirá la amenaza de inundaciones en el valle de Juárez-El Paso, tanto en México como en Estados Unidos, evitará cambios de cauce y segregación de terrenos de un país a otro, permitirá el rescate para el cultivo de muchas tierras ba jas y pa nt an os as , y fac ili tar á la eje cuc ión d e ob ra s de rie go y d e dr en aj e.

CONDICIONES ACTUALES. El río Bravo o Grande forma, en general, el límite internacional entre México y

los Estados Unidos desde el monumento 1 al cañón de Cajoncitos, abajo de Fort Quitman en el valle de Juárez-El Paso: es corriente divagante cuyos cambios de cauce segregan terrenos de un país al otro. El área total de terrenos en las vegas, tanto en México como en Estados Unidos, entre Juárez-El Paso y el cañón de Cajoncitos es de 66,000 hectáreas, de las cuales

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38,400 están en Estados Unidos y 27,600 en México. El valor en que se estiman las

ciudades de Juárez-El Paso y valles, incluyendo las obras de riego, de drenaje y caminos, excede de Dls. acarrea actualmente el A  pe sar de qu e la cant ida d tot al de sed im en to que al río Bravo en este valle, es sólo sólo un tanto por ciento pequeño del que acarrea ba ante s construcción de la presa del E lefante, la carencia carencia de fuertes crecientes crecientes ¿e carácde la construcción ter erosivo, ha determinado el depósito de sedimentos en el cauce del río, a un grado tal, que las avenidas producidas por las lluvias, en las cuencas de los arroyos que desembocan en el río entre la presa del Elefante y Juárez-El Juárez-El Paso, constituyen una amenaza para ambas ciudades, así como para las mejoras y terrenos en ambas márgenes. erosión erosión y arr astre de los sedimento s acumulados actualmente en el cauce vagante del río, es posible solamente por grandes crecientes de carácter destructivo. Tanto la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas de México, como la ciuy el condado de El Paso, Texas, han gastado en unos cuantos años, de  par a pro teg er con tra inu nda cio nes las ciudades de Juárez - El P aso y sus respectivos valles. Estas obras d e protección consisten en su mayor parte en diques construídos siguiendo las márgenes del cauce divagante, los cuales deben ser continuamente reforzados y reparados como consecuencia del ascenso del cauce del río; siendo necesario adoptar un  pro gra ma de tr ab aj os coor dinad o y eficaz a fi n de log rar una protección efectiva y permanente.

dad

EXPBSICION DETALLADA. río Bravo o Grande es una corriente sedimentaria y por lo tanto sobre-eleva continuamente su lecho, que da lugar a que en épocas de creciente cambie de cauce pasando a localizaciones más bajas, donde vuelve a sobre - elevar proceso. Esta fase de cambios del cauce ha s u lecho, repitiéndose indefin idamente es te proceso. sido en gran par te prevenida a través del valle de Juárez-El Juárez-El Paso , por la construcción de obras artificiales como terraplenes de ferrocarriles y caminos, bordos de canales de riego y drenaje y, en últimos diques de  prot ecció n con tra inu ndac ion es. E n estas circunstancias el lecho del río ha continuad o sobre sobre-ele -elevánd vándose ose.. La presa del Elefan te terminada terminada en el año de 1916, al llenar su objeto, que consiste en asegurar una dotación permanente para el riego de terrenos durante los años de poca precipitación, almacena las crecientes que, antes de su construcción, pasaban río abajo. El efecto de est as creci entes era socavar el cauce del río, arrast rando parte de los azolves azolves y depo sitando otra parte sobre los terrenos adyacentes al desbordarse la corriente. L a caren cia de fuertes crecientes erosivas después de la terminación de la presa del Elefante, marcó el cambio del régimen de la corriente en el valle de Juárez - El Pasa. A  pes ar de que las grandes avenidas se almacenan en el vaso del Elefante, anualmente ocu rren crecientes más pequeñas que provienen de la cuenca tributaria del río entre el Elefante y Juárez-El Juárez-El Paso. Estas últimas crecientes se presentan presentan durante la estación estación de lluvias, en los meses de agosto y septiem bre; son repentinas y de poca duración y pasarían a través de l valle sin causar daños si no fuese por la posición elevada del cauce del río con respecto a los terrenos adyacentes. Al salir por primera vez de la presa del Elefante u na corriente corriente de agua limpia se

inició una socavación restringida del cauce del río inmediatamente abajo de la presa. agua limpia arrastró consigo las partículas más finas de arena y sedimento. Este efecto se ha hecho sentir aproximadamente hasta 64 kilómetros abajo de la presa del Elefante, y quizás hubiera hasta Juárez-El Paso y socavado el río a través de este valle, si no fuese por el incremento anual de arena, grava y sedimento descargaen el rio por los numerosos arroyos que desembocan en el tram o de su recorrido entre el Elefante y Juárez - El Paso. Quizá hubiese sido posible el acarreo de este in cremento de arena, no existiese la necesidad de derivar para riego una parte del gasto de estiaje. Aguas arriba de Paso se hacen tres derivaciones, en cada una de las presas de Percha, Leasburg y Mesilla.  prin cipa les deri vaci one s en el vall e de Juárez - El Paso se hacen: en la Presa Internacional, para regar terrenos en ambos países; y en las boca-tomes de los canales Riverside y Tornillo para completar el riego de terrenos en territario americano. En las obras de toma de los canales, en cada una de esta s derivaciones, derivaciones, se usan dispositivos para desarenarlas y limp iarlas, volviéndose al río una gran parte de la arena y limo depositados en ellas, a la vez que un volumen considerable ¿e agua se deriva para riego de terrenos. Este proceso co ntinuamente devuelve arena al lecho del río y disminuye continuamente el gasto de estiaje, y por lo tanto, la capacidad de transporte de la corriente.

El

PRESA Y VASO DE CABALLO. Ea superficie no controlada del río entre El i a n t e y Juárez - El Paso, tiene aproximadamente 20,700 kilómetros cuadrados. Una gran  par te de es ta áre a la forman cuencas cerradas que carecen de sali da directa al río Bravo. De los kilómetros cuadrado s que aproximadamente son tribu tributar tarios ios directos del río, 3,100 quedan arriba del lugar denominado Caballo y el escurrimiento de esta última área podría controlarse por  pre sa que s e con str uye ra allí.

-

Ea boquilla de “Caballo” “Caballo” e stá en el río Grande , en el condado Sierra, del Estado de  Nuev o Méxi co, apr oxi mad ame nte a kms. abajo de la presa del Elefante. ingenieros de la oficina del “Reclama “Reclamatión tión”” dependiente del Dep artame nto d el I nterio r de Estados Unidos, han hecho estudi os d e la presa y del vaso vaso de Caballo, tanto en la  pa rt e topográfica, cua nto en la d e cimentación y efectos de las distintas capacidades de almacenamiento sobre el régimen régimen de la corriente y el costo costo de las estructuras.

DEMASIAS DE LA PRESA DEL ELEFANTE. La misma oficina del “Reclamation” ha hecho estudios sobre el caudal del río Grande y los efectos del riego sobre el almacenamiento del Elefante, y como resultado de estos estudios que abarcan un ciclo de más de se ha llegado a la conclusión conclusión de que el g asto máximo de masías de la presa del Elefante no excederá de metros cúbicos por segundo, y que este máximo puede ocurrir cada 30 años, sin que el período de 1915 a en que ha operado la presa, haya habido demasías. Sin embargo, y para mayor seguri dad, se ha supuesto un gasto máximo probable de demasías de la presa del Elefante de 170 metros cúbicos por segundo.

-

GASTO PROBABLE DE CRECIENTES: FRENTE A JUAREZ EL PASO. Las crecientes qu e han pasado fre nte a Juárez-Y1 Juárez-Y1 Pas o después de la construcción de la  pr esa del Ele fa nte , ha n pro ven ido de pre cipi taci one s en la cuen ca tr ib ut ar ia del río Grande entre el Elefante y Juárez-El Pa so, que se han sumado a la dotación dotación para rie-

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go que proviene del vaso del Elefante. Est as cre cientes hubiera n sido mayores si el receptáculo se hubiera encontrado lleno y el agua estuviera derramándose por el ver  tedor de demasías. La mayor creciente frente a Juárez -El Paso, después de la construcción de la pre sa del Elefante, se presentó el de septiembre de 1925, habiendo alcanzado un gasto máximo de 382 metros cúbicos cúbicos por segundo. Esta creciente fue el resultado resultado de fuerte s  preci pitaci ones en la región de “Black entre el Elefante y Leasburg, que lle garon al río cuando éste llevaba un gasto de 57 metros cúbicos por segundo que ha  bí an salid o d e la pres a del Elefan te. Si al llegar esta creciente hubiese estado pasando  por el v erte dor de dema sías de la pre sa un gast o de 170 metros cúbicos por segundo, la creciente frente a Juárez - El Paso habría llegado a un máximo de 510 metros cúbi cos por segundo. en la época de esta creciente hubieran existido la presa y el vaso de Caballo, y si a la vez hubiesen estado derramando los 170 metros cúbicos por se gundo de demasías de la  presa de l Elef ante , el aviso previo de lluvias sob re los arro yos tributarios habría permitid permitido o cerrar las compuertas compuertas de Caballo Caballo antes antes de que la cre cre ciente de los arroyos llegara al río Grande; lo que habría permitido reducir el máxi mo de creciente en Juárez -El Paso hasta un gasto gasto entre 283 y 314 metros cúbicos por segundo. Como el vaso de Caballo controlará la mitad del área directamen te tributa ria del río Grande abajo del Elefante, al retener temporalmente el volumen de dema sía s de dicha presa del Elefante, reducirá casi a la mitad el máximo máximo de crecientes frente a Juárez- El Paso.

DRENAJE ABAJO DE JUAREZ EL PASO. - Inmediatamente arriba de Ciudad Juárez desemboca en el río el arroyo Colorado, y aunque su gasto máximo puede cal cularse en metros cúbicos por segundo, la duración de sus avenidas es muy corta, y para prever la ocurrencia de ellas simultáneamente con una creciente del río Bravo, se ha dado una sobre -elevación a la corona de los los bordos. bordos. En igual forma se han tomado en cuenta la s aportaciones que en creciente pue da n traer algunos otros pequeños arro yos que desembocan en el río río Bravo abajo de J u á r e z - El Paso, teniendo cuidado de localizar el nuevo cauce del río a cierta distan cia de las desembocaduras de estos arroyos para permitir en cierto modo el depósito de detritus. PENDIENTE§ DEL RIO BRAVO. La distancia entre la presa del Elefante y Juárez -El Paso es de cerca de 241 a lo largo del río, mientras que la distancia  por el eje de los valle s es de 193 Inmediatamente abajo de la  pre sa, el río pa sa por un cañón de 24 de longitud con una pendiente que varía entr e 0.00037 y 0.00090; recorre después el valle de Palomas, con un desarrollo de 21 y una pen diente de sigue por un cañón de en el que está situada la boquilla de Caballo, y  pas a al valle de Rincón, en el que la pendi ente es de 0.00074 en los prime ros 11 y de 0.00064 en los últimos El río atraviesa en seguida el cañón Selden de 11 de long itud con un a p endiente media de 0.0006 0.00064, 4, y llega a la presa de Leasburg, situada en la  part e alta de l vall e de Mesil la. Des de la  pre sa Lea sbu rg hasta la de Mesilla, el río tiene de longitud con una pendiente pendiente de 0.00073. Des de la presa de Mesilla hasta el puente de Canutillo la longitud del río es de 45

-

DE

.

.

.

... .

con una pendiente de 0.00070 y desde el puente de Canutillo hasta la  presa Int ern a cional, la longitud es de 30 y la pendiente de 0.00048. Como se ha dicho antes, el efecto de la salida de agua clara de la presa del Elefante ha sido el de socavar socavar el lecho del río en la región inmediat amente abajo de l a pre sa, y azolvarlo en el valle de Juárez - El Paso. Debe existir forzosamente un un tramo del río en e l que e sta s dos acciones se equilibren, y en el que, por lo tanto, no no se verifique ni socavación ni azolve. azolve. E stas condiciones existen en la parte baja del valle de Mesilla, según lo demuestra el estudio de !as secciones del río. La longitud aproximada del cauce del río entre Juárez - El Paso y el cañón de Ca  joncit os es de mientras que la distancia medida a lo largo del eje del valle es de 137 krns.  pendie nte del río es apro xima dame nte de 0.00034, en tanto que la  pendi ente del valle es de 0.00061, Por lo tanto se ve que se endereza el alineamien to del río, puede obtenerse una pendiente aproximada de 0.00061. Esta pendiente es mayor que la del tramo entre el puente de Canutillo y la  pres a Inter nacion al que es de 0.00048, y menor que el tramo superior del valle de Mesilla que es de 0.00070. Ahora  bien , si con una pendiente de 0.00048 el río está en equilibrio en el tramo inferior del valle de Mesilla, puesto que no hay socavón ni azolve, debe darse al río mayor pen diente en el valle de Juárez - El Paso para llegar a alcanzar el mismo estado de equili  brio, ya que la canti dad de agua que es cur re norma lment e se redu ce mucho en la pre sa Internacional.

PROYECTO.

A

de aumentar la pendiente pendiente del río en el valle de Juárez Juárez - El Paso de 0.00034 a y acelerar la velocidad de la corriente de modo que ésta pueda acarrear el azolve que ha determinado el ascenso rápido del fondo del río, río, tan marcado desde la construcción de la  pres a del Elef ante , se  proyec ta modificar el río, ender ezándol o en lo general, siguiendo el cauce actual en donde sea posible, y cortando las vueltas cuan do sea necesario a fin de disminuir la longitud. A cada lado del cauce nuevo y a los lados del cauce actual de! de! río en donde se siga éste, se construirán construirán diques diques de altura su ficiente y a distancia conveniente para permitir el paso de las avenidas. cauce así forma do se conservará siempre libre de yerba s y obstrucciones que pudieren r etar dar el escurrimiento. Al hacer al trazo se ha atendido como principio fundamental a igua lar las áreas que se segreguen artificialmente a fin de que la extensión total que se corte de un país sea igual a la que se corte del otro.

El trazo hecho de acuerdo con este principio da lugar a que las zonas de derecho de vía que debe adquirir cada nación sean prácticamente iguales en extensión. En términos generales, e l cauce artif icial proyectado consistirá de un cauce de es tiaje de dimensiones y capacidad capacidad semej antes a las del actual lecho lecho meno menorr del río, y de un cauce ma yor limitado en ambos lados por diques distantes como metros uno de otro. Estos diques tendrán un ancho en corona bastante para permitir el tráfico para de inspección y reparación. El trazo se ha hecho procurando, en lo posible, no cruzar terrenos cultivados o con mejo ras ; pero en algunos algunos lugares ésto ha sido imprac ticable debido a las sinuosidades del río.  proyecto de acort amient o del rí o por cor tes artif icial es es fact ible porque el

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=

tomará de zanjas de  pr és ta mo interrumpidas del lado del río de los diques, sin que se requiera doble traspaleo del material.

OBRAS DIVERSAS. En el  pre su pue sto se han hecho figurar partidas destinadas a modificaciones de las obras existentes a inmediaciones de Juárez-El Paso, a cam  bios en los canales y en los drenes y modificaciones en los  pue nte s. Además, teniendo en cuenta que los efectos del aumento de pendiente del cauce del río no  pued en decirse de antemano, y que  pudiera n ocurrir socavaciones y considerando también que debe derivarse agua  pa ra riego en determinados lugares, se ha hecho figurar en el  pr esupuesto una  partida dest inada a la construcción de estructuras que  permita n controlar la  pendient e. Por lo  pro nt o  proye cta la construcción inmediata de tres o cuatro estructuras de control en aquellos lugares en que sea necesario derivar agua  pa ra rie se construirán si así lo exigen las necesidades. go: las

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PROYECTO DE RECTIFICACION DEL CAUCE DEL RIO BRAVO ENTRE JUAREZ EL PASO Y EL CANON DE QUITMANN. PRESUPUESTO PARA UN CAUCE ARTIFICIAL DE METROS CUBICOS SEGUNDO. DERECHO S DE VIA. 1,650 hectárea s a Dls. 50.00.. . . . . . . . . . . . . . . . . .

REPARTO D E COSTOS. Uno de los  problema s que ocupó mayor atención, f u e el de repartir equitativamente el costo de las obras, y  pa ra ello, en lugar de que cada  pa ís  pagara las que se construyeran en SU lado, se  pe ns ó sería razonable que se asignara una cantidad en  pr o  po rci ón de los valores de las tierras y mejoras existentes en cada región. Des pués de avalúos cuidadosos llevados a cabo  po r ambos Gobiernos y de discutir las diferentes maneras de repartir los costos de las obras, se ha recomendado que el 88% lo  pa guen los Estados Unidos y el 12% México, que es la prcporción en que se estiman los  benefic ios que ambas  par tes obtendrán de las obras. Como se calcula que el  pr oye ct o costará  poco más de Dls. y, como  po r ot ra pa rt e, se  pro pon e que cada  pa ís vía del nuevo cauce y las porciones q u e deberán adquiera y  pague los derech os ... canjearse, resulta que la cantidad que habrá de distribuirse a  pr or ra ta es de ...... en números redondos, de los cuales México tendría que  pagar Ahora bien, como la construcción de 600,000.00 y Estados Unidos, las obras se estima que durará de cuatro a cinco años, será necesario  por  pa rt e de Mé xico hacer figurar en sus  pr es up ue st os anuales una cantidad de $250,000.00 a . . . . . . $300,000.00 O.  N., canti dades que una vez invertidas quedarán sobradamente compen sadas con los  beneficios de diversa s índol es que se espera obtener.

52

82,500.00

 Es ta do s Unidos.

1,650 hectárea s a

412,500.00

200.00. . . . . . . . . . . . . . . . . .

AREAS SEGREGADAS. México

1.400 hectáreas a

COSTO SIN LA PRESA DE CABALLO. Según los datos disponibles, el gasto máximo de creciente frente a Juárez -El Paso  podrí a alcanz ar metros cúbicos  por segundo, sin la  pr es a de Caballo, y con esta  pr es a 314. Al hacer los estudios del  pr oy ec to  pa ra un cauce de 576 metros cúbicos  po r segundo, se la necesidad de aumentar la distancia entre diques en la  pa rt e alta del valle y aumentar la anchura ¿el fondo del cauce menor y la altura de los diques en la  pa rt e inferior del valle. Estos aumentos implicarían un costo excedente como de sobre el costo correspondiente al cauce  pa ra 514 metros cúbicos de que se optó por combinar la construcción del cauce de menor capaci capacidad,  po r dad con la  pr es a de Caballo, obteniéndose así una economía de Dls. 250,000.00 en el costo de las obras, además de otras ventajas, como mejor control del agua, menor extensión perdida en cauce, etc.

DOLARES.

 M éxic o

40.00.. . . . . . . . . . . . . . . . .

1,400 hectárea s a Dls. 150.00.. . . . . . . . . . . . . . . . .

56,000.00 210,000.00

266,000.00

TERRACERIAS. mts. cúbs. excavación a Dls. mts. cúbs. en diques a Dls.

.........

........

657,000.00 1.236.600.00

DESMONTE DEL DERECHO D E VIA. .................... 2,400 hectáreas a

150,000.00

VARIOS. Trabajos arriba  de l corte  de Córdova.

México. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Estados Unidos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

25,000.00 100,000.00

MODIFICACIONES EN LAS OBRAS DE RIEGO. México . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Estados Unidos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Estructuras  pa ra controlar la pendiente. . . . . . . . . . . . . Puentes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

150,000.00 300,000.00

Sub - Total . . . . . . . . . . . . . . . . . . Gastos de administración e imprevistos, 20% del sub -total.

1.325.000.00 809,400.00

TOTAL.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . PRESA EN CABALLO. Vaso con capacidad de

metros cúbicos.

............

GRAN TOTAL. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

61106,500.00

 NOTA. Los valores unitarios menores de los terrenos segregados, en comparación los que figuran  pa ra el derecho de vía,  proviene n de que se ha supuesto que  pue de recobrarse una  parte del valor de los terrenos segregados  por venta de los mismos después de hechas las obras. con

-

53

Por

bng  Ju li o  RIQUELME

OMO es  bien

sabi do, la entom ologí a se ocupa del est udio de los insectos y, la entomología aplicada a l a agricultura trata de los insectos nocivos a las plantas de cultivo y de otros que prestan verdadera utilidad porque destruyen a los perjudiciales. estos últimos insectos mófagos.

Esta ciencia, rama de la zoología es importante y útil porque tiende a evitar muchas pérdidas y no pocas molestias y económicos a los agricultores. S e desprende de lo anterior que los servicios generalmente denominados de Defensa Agrícola, hoy establecidos en casi todos los países, entre ellos México, ofrecen a la agric ultura emi nentes beneficios l ibrando a las  plan tas en pie o a las cosechas y

Plantío de algodón invadido por la “oruga lanuda” (Estigmene acroea, Foto. Dpto. Agronómico.

Drury) .

ductos almacenados, ataque no sólo de los insectos sino también de otros muchos  pará sit os. En México, hace treinta años comenzó esa labor de investigación de los insectos nocivos a la agricultura y la lucha contra los mismos y otras plagas de los campos, la Comisión de Parasitología Agrícola y hoy la continúa la Oficina Federal para la Defensa Agrícola.

El  progra ma de est a últi ma ins tit uci ón es en esen cia algo vari abl e al de la primera, siendo más vasto y, por tanto, más capacitado para superar los trabajos de aquélla en un radio de acción superior: la tendencia y finalidad es sin embargo la defender a la agricultura de las plagas y enfermedades que tanto la ab ruman y perjudican.

A este esfuerzo debe corresponder ahora la acción social de los agricultores, agru  pándo se en cooperat ivas o en junt as de defensa regionales encargadas de la ejecución de los medios de lucha de un modo simultáneo y en conjunto, pues sólo en esta forma los cultivos de una región se librarán del ataque de sus enemigos. Par a darnos cuenta de lo que son capaces los insectos y de lo que significa su  propagac ión en un campo de cult ivo bas ta rá cit ar un ejempl o int ere san te y convinc ente.

Larva

u oruga de Arctido (Estigmene aeraea, Dru ry), comiendo una hoja de algodón.

-

Foto. Dpto. Agronómico.

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“Cincuenta parejas d e pulgones, entregados sin obstáculos a su fuerza de multipli cación, serían sufici entes para ha cer desaparecer toda la vegetación de un país en una sola estación del año”. De esta aserci ón del abate Provancher, un autor francés dedu ce que las pérdidas debidas a los daños causados anualmente por los insectos en Fran cia, se eleven a más de cien millones  de ftancos.

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Manchón circular de alfalfa muerta por el Texas Root Rot, enfermedad cau sada por el hongo (Phymatotricum Omnivorum Duggar). Aunque no siem  pre, el área afectada comunmente un anillo circular como puede apreciarse en la presente fotografía. La línea de puntos marca de las  plan tas vivas. Trompillo (Solanum aelaeagnifolium, Cav.), planta silvestre que alberga al gusano lanudo del algodón y de la alfalfa Estigmene acroea, Drury) . Foto. Dpto. Agronómico.

-

El monto de cien millones de francos de daños es algo muy serio para la econo mía de cualquier país y un verdadero desastre financiero para el que no tiene gran des recursos naturales. Uno de los colaboradores del Scientific  Mon thl y, de Nueva York, el Prof. DeLong, de la Universidad del Estado de Ohio, estima por su  part e en 10% menos el rendi miento de los productos agrícolas a causa de los insectos nocivos, y considera mo derada su apreciación cuando calcula en  do s  bil lone s d e dól ar es las pérdidas a que dan lugar cada año en la Unión Americana. Un detalle le parece demostrar la impor tancia ¿e esos perjuicios: la ministración el año pasado de  di ez mill ones d e dól are s  par a la lucha contra uno solo de los insectos que ataca al algodón, llamado el “barre nador del maíz”, porque también ataca a esta planta.

A ese detalle podemos nosotros agregar otro: la ministración que el Gobierno de los Estados Unidos de cinco  mil lone s  de  dól are s,

igualmente hiexclusivamente  par a combati r la “mosca de la fruta del Mediterráneo”, e n el Estado d e Florida, en donde súbitamente apareció hace un año este nocivo parásito capaz de arruinar la in dustria frutera en una comarca y aun en un país entero. Según informes que tene mos, además de esa gruesa suma, para combatir a este pernicioso insecto, ha sido ne cesario destruir propiedades de los cultivadores de citrus en Florida, valuadas en . . . de dólares ! zo

Esas fuertes cantidades de dinero erogadas  por año para comb atir a las mencionadas y a otras diversas especies, unidas a las  pérdid as tambié n anu ale s

Otra fotografía que ilustra un lugar atacado par el Phymatotricum Omnivorum. Las flechas indican manchones similares en el mismo alfalfar, Foto. Dpto. Agronómico.

El Desarrollo de Pequeños Proyectos  para Riego Por el  Ing .

CARLQS  RAMIREZ ULLQA.

 N

el editorial de julio de “Irrigación en México”, se indicó la intención del Gobierno de emprender por conducto de la Comisión Nacional de Irrigación, proyectos para riego en gran número, pero abarcando peque ñas áreas cada uno, sin perjuicio de continuar los grandes proyectos existentes y algunos otros d e importancia especial. Sin duda este plan se verá coronado por el éxito económico,

Es ya bien sabido que un gobierno no  persi gue obt ene r dire cta ment e un réd it o capital que invierte en obras para riego. Sin embargo, ese rédito se debe pagar en algo más que palabras de optimismo, Se paga, en efecto, con dinero y sus consecuencias; lo recibe primero el agricultor, luego las empresas de transportes, después el comerciante y finalmente los consumidores. Alfalfa atacada  por el “Chauixtle” (Uromyces 2,  plant a atacad a; 3,  plant a muy atacada.

Schr.)  planta sa na; Agronómico. -Foto. Dpto. : 1,

sionadas por los insectos en los campos d e cultivo, mientras se logra contener su  propagación o se consigue su exterminio, hace que el monto de los daños se eleven a cifras enormes. Por eso es que actualmente las organizaciones agrícolas, industriales y cientificas de

los Estados Unidos, buscan en todas partes entomólogos experimentados para emla lucha contra los insectos nocivos. N unca como ahora, en efecto, los ento-

mólogos han tenido tal demanda. Debemos convencernos d e la importancia de los estudios entomológicos, porque finalidad es la salvación de las diversas cosechas de que el hombre se aprovecha trabajar y subsistir, y no tenemos por qué hacer notar que en la caza y estudio de las mariposas y otros insectos, no hay que ver sólo una diversión de niños, sino algo más elevado en el orden espiritual y moyal: la protección de la humanidad entera.

El

gobierno a su vez recibe de todos ellos tributos, cuyo conjunto, si se pudiera sería bien mayor que el rédito de una inversión habitual, siempre y cuan do el proyecto haya sido elegido con tino. Tres partes globales se podrían hacer en un  plan para zonas de riego: 1. Elección del proyecto 2. Ejecución 3.-Explotación.

-

-

el directo control del técnico y no presenta dificultad, segundo punto está Si no hay técnicos en casa con la experiencia adecuada, vendrán de fuera y se concretarán a seguir el postulado de la ingeniería entera: obtener el mejor resultado perseguido con el menor costo.

El

El tercer punto es lo que se persigue al emprender una obra. El éxito depende de las facilidades de crédito, d e mercado, de complejos fenómenos sociales, etc., etc.,  pero es tá contr olado en mane ra princ ipal por el punt o 1. En cualquier arroyo se puede construír una cortina de presa y en cualquier terreno un canal: pero hay ríos y hay zonas donde se deben construír. En Estados Unidos de América, ha sido propuesto (Economic Survey certain irrigation projects 1929, Bureau of Reclamation), que la aprobación de nuevos proyectos debe basarse no solamente en su capacidad en cuanto a cantidad de agua se re, ni en la  posibil idad de alm ace nami ent os, dre naj e y detal les. const ruct ivos sin o en : Un cuidadoso estudio y clasificación de las tierras, La capacidad de producción y venta de los cultivos. El costo de preparar las tie rras y d e construír granjas y edificios al costo mínimo.  Na da má s int eli gent e que aprove char , si n costo, la experi encia de otros .

1)

2) 3)

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59

Haciendo a lado consideraciones de índole internacional y características puramente constructivas, un proyecto será tanto mejor cuanto mayor número de las condiciones satisfaga :

de Tlaltenango, de Puebla

erales

Obras hidráuli cas de poco costo por hect área regada, aprovechando en l o posible aguas permanentes que no requieran almacenamientos. Posibilidad de escalonar la construcción, aumentándose a medida que zación avance.

coloni Por

 Ra fa el E. OROPEZA.

Buena calidad de la tierra. Producción de cultivos de  precio alt o, mer cad o para ell os y vía s de comuni caci ón  para su exportación a otras zonas. Ubicación cerca agrícolas.

de

centros poblados, especialmente

UBICACION

si ya se dedican a explotacio-

Los  pequeñ os proyect os, que la Comis ión Nacio nal de Irrigación desea principiar, los que mayor elasticidad tienen para adaptarse a muchas de las anteriores condiciones. Muy especialmente, pueden colonizarse con rapidez por gente con experiencia agrí cola y que conoce cuales son los mejores cultivos de la región.

Pueden encontrarse proyectos que no requieran grandes almacenamientos, pues no son raras las corrientes Permanentes pequeñas. Los  proyectos se puede n dise mina r en todo el país. Finalmente, si algún cultivo baja de  precio por espe cula cione s, mucha s vece s de carácter mundial, o si  por plagas o mal tiempo alguno de los proyectos es afectado, el  país no resiente un grave perjuicio como pasa en las grandes extensiones agrícolas concentradas, que generalmente se dedican al monocultivo adecuado para la región y que muchas veces no pueden resarcirse de un fracaso en varios años  poste riore s.

Si es que el gobierno, descuidar obras importantes que tienen condiciones es  pec ial es, lle va con tin o el plan de des arr oll ar proyectos pequeños, es de creerse que habrá tenido uno de sus mejores aciertos.

”-

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Y  DA TO S VARIOS

valioso diamante se pultado por muc hos siglos en las entrañas de la tierra, los manantiales del agua mineral de Tlaltenan go, .Puebla, habían . . necido ignorados en el fondo d e une barranca profunda, durante mu chos siglos también, yéndose a confundir sus aguas con las del río de Zempoala que, unido a otros y serpenteando entre las diversas sinuosidades del terreno de los Estados de Puebla y Veracruz, van a for mar el de Tecolutla que vierte aguas en el Golfo.  No fue sino hasta hace de tros cuando los habitantes comarcanos em pezar on a dar se cuen ta de la s virt udes curativas de esa agua y, desde entonces, el lugar aquel ha sido frecuentado por merosas personas que van a buscar en esas fuentes el alivio de sus males. Posteriormente o sea cuando en nuestro país co menzó a hacerse extensivo el uso de las aguas minerales, no se sabe a quién le ocurriría poner a prueba, para ser tomada, esta agua mineral: habiendo sido muy satisfactorio el éxito obtenido porque, en la actualidad, de Huauchinango, Necaxa, Zacatlán y otros lugares más lejanos, se va a traer el agua en botellones, y los médicos que la conocen recomiendan su  para vari as enf erm eda des del est ómag o, el hígado, los riñones y otros órganos t ant e Con la explotación de esta maravillosa fuente de riqueza, una vez acondicionado el camino y construido magnífico balhoy aislada neario en los manantiales,  población de Chic oncuau tla , cab ece ra del

Municipio de igual nombre al que pertenece el  pueblo de Tla lte nang o, se rá visitada por multitud de personas que irán en  busca de salu d a ese bal near io, cuya s excelentes aguas minerales sobresalen entre las de su especie debido a la gran canti dad de radio - actividad que contienen, según lo expresa el análisis que damos a conocer más adelante. El Municipio de Chiconcuautla anteriormente formó parte integrante del Distrito de Huauchinango, hoy Municipio también, al que sólo en lo hacendario y lo judicial  pert enec e act ualme nte el de Chiconcuautla. Huauchinango, pintoresca y simpática ciudad de la sierra Norte de Puebla, ha sido conocida por infinidad de personas que han visitado las grandiosas obras hidráulicas de Necaxa, población ésta que  se halla al norte de los manantiales de Tlaltenango, a una distancia de 18 kilómetros, aproximadamente. Las grandes obras emprendidas para aprovechar las riquezas naturales de una región, atraen hacia los inmediatos centros de población, corrientes considerables de hombres de negccios y turistas que, en grado no despreciable, contribuyen a acrecentar el movimiento comercial y, por ende, a mejorar las condiciones económicas de s u s habitantes.

 A N A L Z S I S El

último análisis del agua mineral natural de Tlaltenango, practicado el 2 de mayo de  por el emi nen te químico, maestro de maestros, desaparecido últimamente, profesor don José Donaciano Morales, es como sigue: “Agua límpida, incolora, inodora, efervescente, de sabor salino, con y por sus caracteres entera-

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 RA BI O - AC TI VI DA D El  propio químic o don José Donaciano Morales hizo una explicación acerca de lo que es la radio-actividad e n las agua s minerales que la contienen, expresándose en los términos siguientes : "En contestación de su atenta de hoy en la que me expresa deseo de que haga algunas explicacio nes relativas a la radio-actividad que encontré hace tiempo en agua de Tlaltenango Est ado de Puebla, al hacer su estudio y análisis que se sirvió encomendarme, debo manifestarle que esa propiedad en las aguas las hace muy estimadas para los efectos de consumo y aplicaciones terapéuticas, puesto que la radio-actividad en el organismo vivo modificando enérgicamente la nutrición al. E n las aguas minerales puede presentarse la radio-actividad principalmente bajo la de, emanacián resultando del desprendi miento 12 energía radio -activa de las rocas y capas radíferas por donde veneros atraviesan y queda en las aguas por un tiempo más o menos largo durante el

Vista  parcial de Huauchinang o, Pue. mente comparable a la de Vosgos, Bourbone, Francia. Composición química: sobre saturada, efervescente. Un litro

libre.

ácido carbónico

gramos. Fosfato de calcio.. . . . . . . . . . . . . . . . 0.003 s u lf a to d e c al c i o. . . . . . . . . . . . . . . . . Sulfato de magnesio . . . . . . . . . . . . . 0.185 Bicarbonato de sodio. . . . . . . . . . . . . Cloruro de sodio. . . . . . . . . . . . . . . . . Sílice. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0.016 Oxido férrico. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 0.002 Alúmina. ....................... Materia orgánica no azoada.. . . . . . Total substancias disueltas.

...

 3.776

esta agua, al lado del cloruro de sodio, se descubren indicios de cloruros de  pota sio y de lit io, así como el fier ro va acompañado de indicios de manganeso, no hay nitratos ni nitritos, no hay signo al guno de contaminación, con aguas super -

ficiales. La temperatura de esta agua en el manantial demuestra su origen  profun do, su radio-actividad hace nota ble en tr e las aguas minerales medicinales. Según los datos recogidos en s u s aplicaciones medicinales, durant e 20 años que va de estarse usando, su acción principal es la de un colagogo, con ligera acción laxante, favorable para combatir el estreñimiento y para regularizar los procesos digestivos de todo el aparato gastro- intestinal. Con el uso de esta agua se han curado muchos padecimientos originados por tiasis hepática, así como favoreciendo la eliminación del ácido úrico, los consecuti vos a la retención del ácido úrico y las  pert urba cio nes rena les de ese orige n. De  pref ere nci a deb e tom ars e sobr e sat ura da de ácido carbónico (gaseosa) pero esto no implica que siempre sea favorable su uso aun sin e sa sobresaturación, en cuyo caso suele observarse en las vasijas que contienen el agua, no sobresaturada, depósitos salinos calcáreos que no modifican, al separarse, sus  propi edade s medicinales" . Morales.

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cual son utilizadas con ventaja en sus aplicaciones terapéuticas ;  per o aun agot ada s de la emanación con que brotan, conser van siempre propiedades especiales res  pecto a sus componentes que ofrecen actividades especiales semejantes a las que toman los cuerpos en su estado naciente, Las aguas radio-activas han dado benéficos resultados en las enfermedades reumatismales y en las inflamaciones crónicas ; esas aguas favorecen el metabolismo vital, hacen más activas las oxidaciones internas  bajo su influjo disminuye la producción del ácido úrico en los artríticos, las células mucosas reciben de las aguas radíferas un  poderoso est ímul o para su  prol ifer aci ón y funcionamiento por lo que los componentes minerales de las aguas radio-activas  pasa n má s fáci lmen te a ej erc er su acción general en el organismo y como el agua de Tlaltenango es comparable a la de Con trexecville, Vosgos, Bourbone, Francia, de  be esp era rse de su uso los mismos buenos resultados que aquellas ofrecen. De todos modos mi opinión es que esas aguas deben ocupar un lugar muy prominente entre las

Pozo formado  po r uno de los

manantiales de agua mineral.

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que ofrece la hidrología nacional. Lo indicado, creo que bastará para hacer muy im por ta nte su uso terapéutico”.

USOS TERAPEUTICOS Y SUPER-

CALIDAD

El doctor don Neftalí Rodríguez, ha escrito lo que sigue con relación a esta agua mineral: “El agua mineral de Tlaltenan por su composic ión químic a y su rad io actividad perfectamente comprobada, constituye un excelente recurso para el tratamiento de gran número de enfermedades. Esta agua sulfatada - cálcica es semejante a las de Contrexecville y de Vittel, de origen francés; pero la mayor cantidad de sulfato de calcio que contiene (gramos 2.280  por li tro ) y su intensa radio-actividad, la hacen superior a las extranjeras, cuales pierden esta última propiedad, o disminuye cuando menos, con el transcur so del tiempo necesario para traerlas de las lejanas fuentes de donde proceden. “La  prin cipa l indi cac ión que ofrec e el agua mineral d e Tlaltenango, por la gran cantidad de sulfato de calcio que contiene, la constituye l a litiasis ácida renal, enfermedad que se caracteriza por la presencia de cálculos de ácido úrico en el riñón. Es ta agua, tcmada en ayunas, diariamente, Roca salitrosa al lado de los manantiales. determina un aumento considerable de la Abajo el río Zempoala. orina que lava las vías urinarias y arrastra las arenillas y los cálculos, descongestionando e! riñón y volviéndolo a la normali- llas mucosas y mejoran el funcionamiento de los tejidos. Las gastritis agudas, sobre dad. Esta acción electiva de las aguas fatadas - cálcicas está reforzada en el agua todo las motivadas por la ingestión de alde Tlalt enango por la radio- actividad, pro - cohol, las dispepsias, ya sea por exceso o  pi eda d que, es bien sabido, estimula  por def ect o de jugo gástri co, se modif ican la nutrición del organismo, activando las favorablemente, lo mismo que los trastornos originados por la falta de un buen oxidaciones, y disminuye la producción de ácido úrico. Estas cualidades la hacen, funcionamiento de las paredes estomacaigualmente, muy recomendable en la gota, les. Las personas que padecen de estreñilos cálculos hepáticos, ciertas formas de miento encuentran en el agua de Tlaltereumatismo y en todas aquellas enferme- nango, un buen auxiliar para el tratamiendades que se deben a retardos de nutri- to de sus molestias. ción. Es empleada sin ningún inconveniente “El agua mineral de Tlaltenango ejerce como agua de mesa, no sólo por la s persouna influencia favorable en los padecinas que habitan lugares donde el agua no mientos del estómago, por su alcalinidad, reune las condiciones necesarias para ser  por l a  proporci ón de anhi drid o car - tomada, sino también por aquellas perso  bóni co que ti en e en diso luci ón y muy es - nas que tienen a su alcance buena agua  pec ial ment e por  propi edade s rad íf era s  pota ble en las cual es es útil para estimular que estimulan la regeneración de las celdila digestión”.

Como queda definido, es muy importan te el papel que desempeña la radio-activi dad en las aguas minerales que la contienen. Y habiendo tocado en suerte al agua de Tlaltenango poseer abundante mente esta propiedad, al grado de hacerla notable entre las aguas minerales medicinales de todo el mundo, si como se afir ma, excelente cualidad llega a  per der s e o  po r lo menos a disminuir con el trans curso del tiempo, claro está que para los habitantes de la y especialmente para los de la Capital que por o  por prescr ipción médi ca hay an de tom arl a, es también una fortuna tener a s u alcance esta excelente agua mineral cuyas propie dades radio -activas conserva íntegramente  por proce der de una fue nte que se hall a situada a kilómetros, aproximadamen te, de la ciudad de México.

SUGESTIONES VARIAS

Y

Empresas como la que va a traer el agua mineral de Tlaltenango a esta Capital, son las que el  país nece sit a en gran núm er o obtener el mejoramiento de su situación económica. El capital podrá ser exclusivamente mexicano, podrá ser extraniero en su totalidad, o sumarse uno y otro  para la forma ción de gra ndes o  peq ueñ as compañías que extraigan del subsuelo las materias que la industria necesita o  bien que, de acuerdo con las condiciones climatéricas de las diversas regiones y  piocedimientos de la técnica moderna, hagan que la tierra produzca en abundancia los frutos y cereales que consumimos der adquisitivo de los individuos t a r á a s í en grado superlativo y las industrias y el comercio, del estado anémico en que ahora se hallan, pasarán a vida llena de actividades y de Así y sólo así se conseguirá que no haya gentes sin trabajo y que nuestros compa triotas no tengan que abandonar el país para a otras tierras en busca de ocupación. y solamente así se obtendrá cl abaratamiento del costo de la vida y que nuestra balanza comercial, por medio da las exportaciones, se equilibre en lo absoluto.

Manantial núm. 3 con canal que aguas a l río Zernpoala. empresas que dispongan de poco ca  pit al, pero que explot en art ícu los de alt a calidad, como el agua mineral de Tlalte nango cuyo consumo puede se r de consideración especialmente en las ciudades poen que abundan los enfermos del estómago y otros órganos a consecuencia de la vida sedentaria que muchísimas personas deben hacer las gestiones  prec isa s par a que por condu cto de cónsules respectivos, por ejemplo, se busque en los países que más convenga, el contingente de casas ya establecidas o el de individuos que con el carácter de represena tantes hagan contratos y aun aquellas empresas para encargarse de la  propa ganda y dist ribu ción de su s produ ctos en zonas det erminadas.

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COLIMA Sus Elementos

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de Riqueza Por  Rob ert o Quirós  MA RT IM EZ .

SITUACION

POBLACION  RA ZAS

con el Estado de Michoacán de Ocampo sirviendo de límite el r í o Tuxpan o Coahuayana desde el puente del Naranjo a la  boel Estado cuya tierra ca de Apiza. Por el surest e y la otra parte rida no es sino una especie del este colinda con Jalisco por el río de de paraíso terrenal donde Tuxpan, desde e l puente del Naranjo a Ea la naturaleza volcó el  barr anca del “Mu ert o” en el  pue nte de fora de sus más preciosos Eriza, y por el este y sur, a partir de la dones, como si hubiera que- desembocadura del río Maravasco y , rido que fuera ese territo- nando en la boca de Apiza, con las su muestr ario de lo más bello y útil iestuosas y rimbombantes ondas del Océaque encierra en sus tres reinos. no que por una ironía llama Pacífico, Colima hállase situado entre los 189 -41’ -  pues que ha sid o sie mpre de una agit aci ón y los de latitud norte y los enorme y estruendosa, que desde tiempo y de longitud oes- inmemorial casi no deja pasar año sin pot e del meridiano de Greenwich, y se halla ner en sus costas una escena de dolor y limitado al norte y parte del oriente por de tragedia. la barranca llamada del “Muerto”, desde Siendo Colima uno de los E s t a d o s m i s su  princip io, has ta la s fal das del volcán de  peque ños de la Repúbli ca, pues ape nas alcanza una superficie de 5,205 kilómetros fuego; sigue después la línea divisoria por cuadrados, se explica que ocupe también la barranca del arroyo de “La Lumbre”, atraviesa el cerro de Juluapan y llega a la el trigésimo lugar en cuanto a su  poblaconfluencia de unos listones ondulantes de ción suma 60,845 habitantes, de los  pl at a: los río s de Mar ava sco y Sa n Jua n cuales son 29,417 varones y 31,428 mujede Almoloyan en su desagüe en el Océano res, de los que en su gran mayoría son Pacífico, cerca de Navidad. Por el oeste mexicanos de raza mezclada, siendo los y norte confina con el Estado de Jalisco, extranjeros en muy insignificante proporsiendo la expresada barranca del “Muerto” ción, como lo es igualmente exigua en la divisoria desde sus comienzos has- cuanto a individuos con defectos físicos y ta el  punto deno mina do Eri za; puede de- mentales, cirse que en toda esa zona enormes masas Colima se distingue por el cruzamiento de zafiro cortan bruscamente el horizonte. de sus razas, lo cual hace suponer que en muy poco tiempo se habrá extinguido Por otra parte del sur y sureste confina

Plaza

la Constituci ón, Colima.

finitivamente la indígena, y es que el agru  pami ent o de los pueblos, la car act erí sti ca fundamental que diferencía las razas, es el idioma nativo y que perdura a través de los siglos, hasta que la asimilación con  pueblos más fu er te s o más cultos, princi pia por perv ert irl es su idioma, pa ra des  pués exti nguir lo por completo, cu and o las costumbres se han adaptado, y el cruza miento se ha verificado en una mayoría. Este fenómeno sociológico queda com  probad o con la cas i extinc ión del idioma náhuatl o azteca, pues la población habla la lengua nacional (español), y está un tanto familiarizada con el alemán, árabe, chino, francés, inglés, italiano y japonés; idiomas que han llevado individuos de esas nacionalidades.

SUELO Y C L I M A En cuanto a habitabilidad, Estado  puede jus tif ica r la vieja , pero ex ac ta definición de Geografía, toda vez que a  pesar de la enorme variabilidad de condiciones climatéricas, se pueden establecer

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dos zonas  princi pales de fis onom ía dis tin ta como atinadamente lo dice don Miguel Galindo: la occidental que comprende los declives cercanos al mar, de atmósfera húmeda, fecundidad lujuriosa, aspecto pin toresco y calor sofocante : ple na zona tórri da. La oriental es templada, el calor minuye sucesivamente a medida que se aleja uno de la anterior. La atmósfera es seca; los veranos quemantes, el am bie nte polvoso, y las pobla cion es ta mbi én  polvosas. La fama que ha disfrutado el clima de Colima por lo insalubre, es del todo infun dada, pues si bien el paludismo bajo sus variadas formas es la enfermedad reinante en todas las poblaciones del Estado, embargo. desde que quedaron suprimidas en lo general las siembras de arroz y pará, las condiciones sanitarias ha n mejorado no tablemente, al extremo que la cifra de la mortalidad desde la época de esa supre sión, es relativamente en comparación con la de años anteriores. En efecto, la diferencia de altitudes hace que Colima casi no conozca el fenómeno de las heladas intensas y que a lo largo

de todo el litoral. las temperaturas se amengüen por las brisas de mar y tierra, que soplan alternativamente desde la sa lida y  pues ta de l sol. El rocío es otro elemento un tanto modificador y benéfico para la vegetación, especialmente donde las lluvias escasean. Los vientos, contribuyen considerablemente a transformar el clima: en el otoño e invierno se  pre sen tan acom paña dos d e fuertes temporales; en tanto que en las regiones montañosas y en los valles varían durante el día, según la temperatura. Para fijar mejor las condiciones climatéricas cabe decir que en un  pro medi o de tres años en algunas regiones fueron como sigue: en Cuauhtémoc la temperatura má y mínima de y la xima fue de  prec ipi taci ón med ia anu al en de en Colima y Manzanillo en un  pro med io de 4 años respectivamente la temperatura extrema fue de y la mínima de y la precipitación de y 99.47, y el viento dominante y su velocidad media en metros por segundo NE-1.9 y W-4.7. Esta diversidad de climas, hace variar evidentemente, las relaciones del terreno

con el trabajo del hombre. En la templada  por eje mplo , la veget ación dis min uye y el calor decrece, y el hombre tiene más aptitud para el trabajo; el frío estimula el músculo, y la naturaleza menos fecunda y más hostil, impone con mayor imperio la necesidad de trabaja;. Lo contrario sucede en la zona tórrida y húmeda: la vegetación es abundante lo mismo de cereales que de árboles frutales, y la fecundidad se extiende al reino animal. hombre parti cipa también de la fecundidad de la natu raleza, y adquiere un rápido desarrollo. P e r o si  por un a par te hay su ma fac ili dad  para sat isf ace r necesidades de la vida,  por la prod igali dad de la naturaleza, en cambio el calor constante y elevado, la hu medad que dificulta la transpiración, la atmósfera haciendo presión de catorce toneladas sobre el individuo, dan por resultado una cierta lasitud corporal, una pereza ma terial e indolencia intelectual para toda empresa que signifique grandes esfuerzos, y hay propensión a la vida muelle y tranquila. Si n embargo, las altas temperaturas irritan la sangre y producen no escasa inclinación a los actos de violencia; pero en cambio la fecundidad de la naturaleza

Palacio Municipal y Jardín. Ciudad de

ha originado una elevada honradez en lo relativo a la propiedad, un respeto absoluto a lo

Y

Parque y  por tal es de la plaza princ ipal.

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,

del Estado. afec El aspecto ta por su figura la forma poligonal. se me  jan te a la de un tri ángu lo can dos d e el que limita por el norte con Ja lisco, y el otro con el Océano casi de mayor longitud, que el correspondien te a la línea divisoria occidental. La to  pogr afía es anál oga a la que ti en en ca munmente los Estados de la vertiente del y así, la Sierra Madre occidental, con sus múltiples estribaciones, entre las que se cuenta la Sierra Nevada y el volcán de origina planos que poco a  poco se aba ten , has ta conf undirse con el mar. En general la topografía es una planicie inclinada, pero en particular surcada de arrugas, en su mayoría que forman las cuencas de los numerosos arroyos que fecundan sus la mayor la que forma lecho  pos,

Colima.

al río de Armería que como vicetrix del ángulo menor, atraviesa to do el E stado hasta terminar en la Boca de Pascuales. Este río como el Tuxpan, el Naranjo y el Coahuayana, en el norte, sur y sureste, hasta la Boca de Apiza, y el Piticajo y el Chacala o Maravasco hacia el sureste has ta el puerto de Navidad se desprenden a un lado y otro de los volcanes, simulando enormes y azules aletas o  bra zos gig ante scos en actitud de abrazar el territorio del Estado, donde los gigantes de zafiro, el de cabeza cana y el que a veces usa su de lava, parece que están señalando su propiedad que al sureste recorta la inquietud infatigable y sonora del Pacífico, que forma el tercer lado del triángulo celes. Dentro del área tan pequeña del Estado no sólo se distinguen los caracteres de grandes territorios, enhiestas montañas con barrancas y precipicios que fascinan  por su hermosura y profundidad, valles y llanuras en que la vista se extasía con pa noramas atrayentes, donde, como es natural, pone su nota de plata el vasto y voluminoso sistema hidrográfico la magnifi-

cencia del Océano que baña un extenso toral, rico en detalles atractivos, y un cli ma variado, a cuyas variaciones corresponden variacicnes en la exuberante vegeta ción, en el trabajo y en la vida, sino tam bié n ex ten sa s se rr an ía s y ele vad os ce rr os que la  br ev ed ad de nu es tr o tra ba jo no no s  pe rm it e es tu di ar de te ni da me nt e la hip sometría de todo el sistema orográfico, por lo tanto, nos limitamos a citar aquellos que más se distinguen por su altura sobre el nivel del mar: o San Diego de 2,146 metros, notable en la leyenda popu lar como lugar estratégico para los bando leros que sorprendían las conductas de di nero e n los tiempos de las revoluciones heróicas; La Noria, de 2,019: Ixtlahuaca de 1,914; Piscila, 1,826; Las Bufas, 1,768; El Centinela, 1,743; Rincón de Almoloya, . , El Mamey, 1,502 y Jumapan, 1,493. Además de estas prominencias no debe mos omitir las de los cerros de Carrillo, Comala. Coquima tlán, La Viga, Gran de y Alto, Los Gallos, Chanimilla, Los Libros,  Na hu ac , Me co , La s Cu ev as , El Barrigón, Rincón, Colorado, La Tabasquera, Tamala, Sacasillas, Chamila, San José, El PilonciEl Toro, La Ganga, San Jerónimo, Te  pe jil ot e, Sa n B ue na ve nt ur a, El Diablo, Pie dra Gorda, El Chino, Escorpión, Cascalote, el del Peón, a cuyo pie existe el célebre Ojo de Mar, por las propiedades especiales de sus aguas, El Tecolapa, Caleras, Mon te Cristo, Tepostitlán y Alcusagüe y otras muchas de menor importancia aunque en tre son  pri nc ipa lís imo s el volc án de Colima y el nevado del mismo nombre, con un2 altura respectivamente de 3,800 y 4,300 metros. A todo esto debemos agregar aquellos  pin tor esc os lu ga re s, es as reg ion es na tu ra les en las que el relieve del suelo, el clima y las producciones se nos referimos al valle de Colima, una de las más extensas regiones naturales que desciende en caprichosas ondulaciones de norte a sur,  pro lon ga ndo la fal da de lo s vol can es ha st a encontrar los cerros de Coquimatlán, Jala, Piscila, Volcancillos y Copales ; limitado al oriente por el río del Naranjo y al occidente, 12 serranía del Astillero y el cerro de Juluapan. Este valle es sumamente notable por cuanto a que formando parte de la vertien-

te occidental de la Sierra Madre, tiene cuatro salid as; la del río del  Na ra njo , la cue nca del Salado; el amplio conducto por donde el río Armería se precipita a la región salinera y la depresión del Maravasco, hasta descen der en declive pronunciado en  bu sc a d e la pla ya are nos a fo rm an do planicies ondonadas, donde asientan los pueLlos, pastan los ganados o  pr os pe ra n los sembradíos, fingiendo llanuras movedizas de esmeralda, y barrancos por donde encauzan las agugs pluviales formando arro yos de corriente precipitada y peligrosa. GEOLOGlA

Si orográficamente Colima es muy im po rt an te, má s lo es en cuanto a la formación de su suelo en 12 que entran rocas de origen ígneo, sedimentario o metamórfico, siendo en esta última clase, en muy insignificantes cantidades. A esa circunstancia se deben en grandes extensiones y considerable proporción granitos, dioritas, diabasas, andesitas, y ryholitas, en Sierra de Piscila, Valle del Periquíllo, cerro del Vigía, margenes del río Salado, Las Trancas, en Ixtlahuaca, Sierra Santa Rita, en Arroyo Arenas, en Peñón San Pedro y formando el macizo  pri nci pal del vol cán de Co lim a; e n ta nt o que, casi todo el resto del suelo colimense abunda en formaciones sedimentarias, estando caracterizadas por Scholenbzchia del inflata como los alrededores de Colima; por los  pis os Ten oma nia no, Neo coTuroniano y Senoniano, en el que dominan los rudistas y de gran tamaño, como en Paso del Río en la margen izquier da del río Armería. En cuanto a las rocas cretácicas de calizas, brechas calizas y pizarras arcillosas es tán represen tadas las eminencias que hemos citado o  peq ueñ as coli nas , alg un as ve ce s se  pr es en ta n lec hos del gad os alt ern an do con capas gruesas de yeso. que forman un con ju nto de masas considerables de estructura bandeada; otras ocupan el fondo de las cuencas o valles, o han quedado como  jir on es ad he rid os a las fa ld as de las serra nías, o se mezclan con algo de carbonato de calcio, o tienen la apariencia de areniscas, pero que sirven de base a las verdaderas pizarras arcillosas.

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Puente de Zaragoza, Colima.  br ec ha s cal izas en cu én tr an se cub ier tas  por piz arr as arc ill osa s un as ve ce s y otras entremezcladas con fragmentos de rocas volcánicas, andesita s principalmente, o cubiertas con un conglomerado terciario, en estratificación concordante. De esta s rocas y otras variedades aparecen en extensiones superficiales, rellenando valles contenidos macizos calcáreos, o atrave sados por estos macizos que surgen como arrecifes, o como jirones que han quedado en las faldas montañosas. Ea brevedad con que exponemos la cons titución geológica del Estado impídenos entrar en otros detalles así como del sistema de grandes fallas y grietas a cuyo largo se verificaron levantamientos y hundimientos, o a través de las líneas de menor resistencia por esas fallas se verificaron las emisiones de rocas neas terciarias como pueden observarse en los ríos Salado, Armeria, Coahuayana y al norte de la laguna de Cuyutlán hasta el Espinazo del Diablo, en la barranca del Palmar, el cerro de Tecolapa, etc., etc., donde las calizas están quebradas en blo-

ques grandes, pequeños, hundidos, levantaque complican dos, dislocados e la topografía en grandes accidentes.

 L I T O R A L Mucho contribuyen también a dar importancia al extenso litoral de Colima la pintoresca bahía de San Telmo (donde la iluminación marítima se hace por medio de un fanal de dos destellos blancos con alcance luminoso de 25 millas, colocado a 69 metros sobre el nivel de las aguas), formada en la desembocadura del río Coa huayana; las playas bajas y sin detalle que siguen hasta el río Armería; la faja de terreno que continúa hasta las playas de Cuyutlán y Punta de Campos, donde la ilu minación de las costas se verifica con un fanal de un destello, con alcance de millas encontrándose a la altura de 109 metros; el istmo que se forma en sierra Santa Rita; el hermoso puerto de Manzanillo, donde existe un rompeolas, un fanal de luz  bla nca con dos ocu lta cio nes , y alc anc e de 19 millas; la albufera de Cuyutlán, los

grandes depósitos de sal tan  po r su  pu re za ; 12s  bahías d e Salagua l a s d e Santiago separadas por la Punta de 12 Au diencia, la Ensenada de Higueras, la Punt a d e San Francisco y 12 Barra d e Navidad.

 ISLAS Y  ARRECIFES

Si los 160 kilómetros que mide todo aquel perfil desde Boca de Apiza hasta el río d e Cihuatlán, Chacala o Maravasco, es  por d emás at ra ct iv o y sugerente, todo s u frente ofrece bellísimas perspectivas que extasían a quien tiene la fortuna de contemplarlas, y si es cierto que son pocos los arrecifes e islas, éstas convidan a pasar allí horas deliciosas en una constante ob servación y  provechoso estudio ya que l a conversación con el mar no deja de producir grandes enseñanzas. la primera visita que nos causa una impresión poco  porque l a hallamo s monótona, agreste, árida, pero la inusitada grandeza del espectáculo a nos hace sentir, por nuestra debilidad y  pequeñez. El  pecho de li ca do que respira b a de nt ro d e u na ma la ha bi ta ci ón y s e encuentra anchurosa

cuarto universo, expuesto al sol y al viento, todo se transforma. Pues bien, a la entrada de la bahía de Manzanillo se elevan majestuosos los cayos llamados de los Frailes, y al ncroeste del puerto de aquel nombre, aquel conjunto de islas e islotes conocidos con el nombre de Revillagigedo.  pr im er as so n Socorro y Cl arión con superficie de 149 y 28 kilómetros res pe ct iv am en te ; ambas de constitución volcánica donde dominan las rocas basálticas que forman costas inaccesibles. Ea primera alcanza alturas hasta de 1,667 me pe rm it ie nd o su observación a una distancia de 32 kilómetros cuando el te está despejado; y la segunda acantilados costeros  picos d e 390, 335, 303 y 279 metros, aunque la topografia de las dos es demasiado abrupta, denuncian magníficas condiciones de habitabilidad sus depósitos de agua potable y fauna y flora. islotes son: San Benedicto y Roca Partida que por su absoluta carencia de detalles no me detengo a describir; pues el primero apenas si alcanza una altura de y posee costas escarpadas y

Puente y río de Colima.

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?

45'

e

-/-- A 

Puerto

de Manzanillo, Colima.

arr eci fes peligrosos casi siempr e cubiertos  por la s aguas.

Aunque al hablar de la situación, clima y orografía de Colirna he tocado incidentalmente de su sistema hidrográfico, ten dré que hacerlo con más amplitud atento a que este es de tanta importancia por el número de sus ríos y el volumen de sus aguas, que no por conocidos ya impiden hablar de esas vías fluviales no repartidas en toda la extensión del Estado, quizá de bido a l a corta superf icie del mi sm o, pues las  principales s e en cu en tra n en las regio nes central y oriental obedeciendo tal vez las fallas geológicas que sirven de cauces a las corrientes. río Armería nace en Jalisco? entra a Colima y toca los municipios de Comala, Villa Alvarez, Coquimatlán y Tecomán, recibiendo en ese trayecto afluentes del Colima y Comala, y los subafluentes de los arroyos Suchitlán, Platanarillo, Fresnal, Cuatas, Pereira, Manrique y Carriza-

lillo; que lo hacen navegable hasta 23 ki-

lómetros de su desembocadura al Océano. El río Colima desde su nacimiento .e n. las . f aldas del volcán, reccrre los municipios de Cuauhtémoc, Villa Alvarez y Colima y tributa sus aguas al Armería. río Salado, se distingue por su largo curso, pues, arrancando de las faldas del volcán forma en su reccrrido ensanchamientos y lagunas donde abundan los caimanes. Cruza los municipios de Cuauhtémoc, Colima e Ixtlahuacán, y después de correr dentro de una Y hermosa  ba rr an ca y re cibir los afluentes del Tra piche, Es tan ci a, Cardona, §an Joaquín y Hondo confunde sus aguas con el Coahua yana, nacimiento está en Mazamitla, y del que he tratado suficientemente en su  papel d e li mítr ofe con Jali sco y Mi ch oa cán. En los 155 kilómetros de recorrido tortuoso baña los municipios de Cuauhté moc, Colima e Ixtlahuacán y recibe por afluentes al río Salado, el Torito y los arroyos Astillero y Zarco. Maravasco. llamado también Piticajo, de aguas tranquilas, toca al Estado por el

occidente, recibe el caudal de los ríos Ca- ese hermoso  baln eari o, por vía de espa rci cao y San José y los subafluentes del Oro, miento o en  busca de sal ud. de los Hernández, Las Truchas, etc., y riega los municipios Minatitlán y Manzani F L O R A 110  pa ra des emb oca r en 12 Barra de Nala bondad de El Estado de Colima. vidad. tierras, en su mayor parte laborables, Completan el vasto sistema hidrográfico, las lagunas Canoa, Palo Verde, de l es esencialmente agrícola, y por sus espe Mezcal, del Qbispo, Cuatas, de Pas- s o s montes  bien somb rea das bar ranc as, tores. La Joya, de Gaculata, San Pedrito, favorece el desarrollo de la ganadería, que del Calabazo de aguas profundas y pota -  jun ta men te con el de la agri cult ura, forma  bl es: d e Alcoza güe ric a en abun dant es pe- la  bas e fund ame nta l de su riqueza. Aunárices, además presentan sus alrededores las que existen algunas zonas escuetas más bellas muestras de reinos vegetal das, éstas son muy cortas, pues en general, arroyos. las vegas que riegan los ríos y y animal: pero de ellas, ninguna como la de Cuyutlán o de Los Caimanes, que  produc en con gra n vigor y profusió n. Des¿e tiempos muy atrás son explotadas en tiene kilómet- os de longitud, anchura sumamente variable, lagunetas secunda- gran escala las fincas agrícolas, ent-e las rias y canales estrechos que permiten las que ya se distinguían, las de Jicotlán, La comunicaciones y sirven para llevar sus Estancia, El Rosario, Guadalupe, Llano Tapacha, Chiapa, aguas hasta cerca de la desembocadura del Grande, Miraflores, Bella Vista, La Huerta, Albarradita, La río Armería. Magdalena, Paso del Alcaraces, Los Río, Es esa región una de las más ricas y Colonos, Cuastecomatlán, San Joaquín,  poé tic as de Colirn a, pue s extiende det r á s de las pequeñas serranías, cambiando Cualapa, Pastores, etc. San Antonio, Quesería y Nogueras eran famosas por su constantemente el relieve de su suelo y así, desde 12 movediza playa a duna que fuerte producción en azúcar y alcohol. terrenos en Estado que producen la limita, al palmar que le al. bosc aje de arbustos pequeños de ramazones retor - tres cosechas anuales, debido a las  bra s de regadí o que se emp rend en en los cidas y abundantes, y a los claros en que el suelo se encuentra saturado de sal de meses de enero y febrero. Es una lástima que la flora colimense no donde es extraída, por procedimientos re lativamente primitivos, constituyen un as - esté bien estudiada, pues parece que no se han emprendido reconocimientos cientí pect o enc ant ado r; má s aún, el montí culo ficos especiales para clasificar la variedad de tierra en cuya cima s e abre el depósito de la tierra salitrosa que atravesará el de árboles y plantas que enriquecen aquel ;  pero seg ún suelo observaciones meraagua; la covacha inferior en que recibe la solución saturada, era en que extiende mente empíricas de los labradores y cam pesi nos, se produc en abu nda nte men te proy son regados los montículos de sal quísima: las palmeras sollozantes encanto  pios par a eba nis ter ia y construcción: aguacachile, álamo, anolina, pirul, amate, zumade la vista y descanso apacible en las vantes siestas las riberas exuberantes, los tito, anacahuite, caoba, cedro, ébano, manglares y otras plantas de la región tro - no, guayacán, lináloe, liquidambar, moral, naranjo, nogal, pino, etc., etc.; plantas  fru  pical ofre cen sus frutos refrescantes e n la tales: aguacate, anona, ubalama, camote, sombra de su selva a los labradores y paseantes, o  bie n como producto de exporta - caña de. castilla, cidra, ciruelo, chico-zapoción al comerciante, más en todo caso, la te, chirimoyo, chayote, dátil, granada, jícama, lima, limón, mamey, mango, melón, sal, ese sodio de potasio de blancura im pec abl e que allí se obtiene, forma la prin-  papayo, piña, pláta no, sandí a, tam ari ndo,  plan tas text ile s: algodón arbor es cipal riqueza, en tanto que la atractiva etc.,  play a de Cuy utl án ofr ec e sus baños sal u - cente. alfalfa, cáñamo, carapacho, izote , ledables, de ese modo año por año, milla - chuguilla, linaza, maguey, escobetilla, maletc.; plantas curtientes: aile, arrar e s de  pers onas de to das par tes acude n a va,

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El muelle del  puer to de Manzanillo. cuéramo, cascalote, guayabo, nanche, taray, timbe,  plan tas oleaginosas: ca cahuate, calabaza, chía, chicalote, higuerilla, palma christi, mostaza, añil, azafrancillo, palo del Brasil, chachamol, huizache, mangle cuya corteza tratada con sales de cobre y fierro produce color moreno o apizarrado, y otras  plan tas for raj era s: acahua!, capomo, grama, lampotillo, trébol , etc.  pla nta s venenosas: candelilla, zumate, colorín, hongos, etc.  plan tas aromát;cas: anís, cedrón, clavo de especia, copal, hinojo, laurel, mej orana, poleo, romero, tomillo, etc.  plan tas gomer as: palo mul at o, nopal, tragacanto, etc.  plan tas  reminosas: copalchi, árbol del hule, guayacán, etc.; multitud de  pla nta s medi cina les  y de or nato, tan apreciadas por sus flores. El café que se cosecha en las fincas del Estado es de excelente calidad. El coquito de aceite que se produce en los g - andes  pal mar es de las hac ien das de Mir afl ore s, Colono y Culata, constituye otro elemen to de riqueza por el alto precio que generalmente alcanza. Otro venero para el Estado lo forman

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las maderas de construcción y ebanistería, que no se explotan como debiera por de capítales invertídos en ese lucrativo ne gocio. Es tal la variedad de maderas preciosas en los montes y bosques de Colirna q u e sólo esperan manos hábiles y expertas  pa ra dar a c onocer la s ri queza s que en ell os se encierran. Las frutas tropicales que allí se produ cen, tales como el coco, el plátano, la naranja, la pitaya y las variedades que quedan citadas, se exportan en muy pequeña escala debido a la ausencia de capitales destinados a este género de explotaciones. El yute, la tronadora, el güinar, el ra mié, la pita, dar lucrativa inversión a los capitales improductivos. Ténga se en cuenta que solamente en maíz se ob tienen anualmente seiscientos hectólitros: tres millones de kilogramos de arroz y diez mil hectólitros de frijol. Aún más, las haciendas azucareras producían 211á por a anualmente por término me dio un millón, doscientos mil kilogramos de azúcar y 150,000 litros de alcohol,

 F A U N A Como la anterior, es también ricamente variada, haciéndose desde hace algún tiem po un regular tráfico. Una ligera reseña dará clara idea de las especies que pululan en la tierra, el aire y las aguas. E n t r e los  ma mí fe ro s: leopardo, lobo, onza, ratón, monos, tigre, tejón, ardilla, conejo, coyote,  jab alí , vena do, zorr a, etc.; ganados:  bov ino, caba lla r, capr ino , lan ar, porcino , asnal.  Av es : águila, alondra, ánsar, aura,  buh o, cala ndr ia, clar ín, codor niz, cot orr a, chachalaca, garza, grulla, cuervo, guacamaya, jilguero, mirlo, urraca, etc., y todas las variedades de aves de corral en las que se cuentan especiec finísimas, importadas:  repti les  boa, cenc uat l, beju qui lla , cai mán , coralillo, escorpión. lagarto, salamanquesa, tortuga, cascabel, etc. batracios rana, sa he ce s: mantarraya, roncador,  po,  bal ote , sar din a, tib uró n, tin tor era , rób alo ,  bobo , angui la, etc. ; i n s e c t o s : de los que se conocen muchísimos o inofensivos,  per o los más verdaderas plagas toda vía más perjudiciales al hombre y a las y otros in sementeras que el mismo convenientes propios de la costa y la  playa . De los miriápodos, crustáceos, arácni -

dos, moluscos, anillados, r adiados, pólipos, e infusorios, ni me ocupo, dado que son abundantísimos, aunque sólo alcanzan buen  precio el coral y las esponj as.

 M I N E R I A Este ramo en el Estado empieza a ser explotado con buen éxito por varios extran jer os y mexi cano s que ha n den unc iad o algunos yacimientos de azufre, alumbre, fatos de  potas io y fie rr o en la s ser ra ní as de la Noria y Piscila; de plomo y cobre en Juluapán; de plata e n Manzanillo y Vi lla Alvarez; d e finas canteras en la Joya, Comalá y las Cuatas; de cal, mármol, fie rro y yeso en Minatitlán, donde también existen criaderos de contacto formados entre dioritas y calizas, afectando a veces formas lenticulares y otras irregularidades con potencia hasta de 35 metros. El mineral dominante de su relleno, es un a de gran pureza; aunque algunas veces se encuentra la magnetita. En la región occidental del Estado, donde los cerros y las montañas son más abruptos, es donde se ha descubierto ma yor número de criaderos minerales, no obstante que cordillera que atraviesa

Salinas de Colima.

El volcán de Colima visto desde el Nevado de Colinia (puerto de los Colimotes) en marzo de 1909 después de una temporada de calma relativa de de 30 años. El cráter del volcán está coinpletainente lleno de lava y escoriosa f ría. (Foto. Waitz).

esa zona no ha sido bien explorada. Es de cre erse por los datos ciertos y verídicos que los metales de cobre y oro abundan allí, a juzgar por la configuración gráfica de esa región y los hallazgos de  pie dra s rec ogid as por var ios ind ivi duos qu e han penetrado en las gargantas de la serranía. El número de minas denunciadas h a s t a 1906 era de 116. Sin embargo, la riqueza que encierran las entrañas del territorio colimense necesitan capital para su explotación, de ahí que actualmente sea la sal marina el producto que ofrece mayores rendimientos, y su excelente calidad la hace es estimada y como las salinas están esta blec idas en casi tod as las playas del lit oral, especialmente en Cuyutlán, constituyen una fuente inagotable y la más considera bl e riq ueza par a el Esta do.

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COMERCIO Este ramo no ha adquirido tampoco todo el auge y desarrollo que debiera tener, en virtud de carecer de suficientes vías de comunicación.  pro duct os na tu ra les los industriales que se elaboran en el Estado son exportados por el  pue rt o de Ma nzanillo. Hay en la ciudad de Colima y Manzani-

llo algunas tiendas de cierta importancia

de Iencería y abarrotes. Existen ademá s establecimientos de mercería y ferretería. Todas esas casas comerciales realizan buenos negocios con sólo el consumo interioi y las poblaciones circunvecinas. A esa se debe que sus importaciones anualmente su men cantidades fabulosas y exportacionrs a diferentes partes de la República, solamente en el primer semestre de 1924 as cendieron en kilogramos a de

maíz; 478,300 de arroz, 141,390 de azúcar y 188,140 de piloncillo.

 I N D U S T R I A Esta rama manufacturera es bastante mitada por las mismas razones que diji mos del comercio; no obstante posee en la actualidad numerosas máquinas que transforman las materias en artefactos de abundante consumo. Las industrias más lucrativas son la pecuaria, la salinera, la fabril y otra de que subsisten multitud de familias, y es tejido y trenzado de  palma para som  bre ros , cuya oper ació n s e eje cut a a man o  por las per son as que se dedi can a esa ocu pación. En materia de artes y oficios, cuenta el Estado con numerosos talleres donde se ejecctan varios trabajos artefactos que

Este

obtendrian alto precio en el extranjero si fuera permitido a los artesanos y obreros contar con capital seguro para dar ensanche y perfección a sus manufacturas y entregarlas al consumo. Se ejecutan en el Estado trabajos de aguja, que han llamado la atención en el extranjero han sido  pre mia dos en var ias exposiciones y obras de platería, carpintería y talabartería del mejor gusto, que son bien remuneradas,  prin cipa lmen te por los mer cad os de troamérica. H ay además, fundiciones de donde salen varias manufacturas aca  bad as qu e se ven den a  buen os precio s. también dignas de mención, sus fá  bric as de  jabó n, agua s gas eosa s, pas tas , aceitss, licores, puros, cigarros, loza, cal zado otras muchas que bastante contri buye n a dar ocnpa ción a mill ares de  bra zos que laboran en conjunto por la prosperidad de Cclima.

“Volcán de Fuego” visto desde el Nevado de Coliina en febrero de 1913 de la formidable explosión de lava que alcanzó una distancia de 150 metros el fenómeno se re de su cráter, quedó éste en forma dentada. gistraro n emisiones de “nubes ardientes” parecidas a las que causaron tan terribles destrucciones en la erupción de Monte Peleé en Martinica. (Foto. Waitz).

V I A S  DE COMUNICACION res actos de caridad; que la instrucción  públ ica preoc upe de modo esp eci alí sim o a Estas han mejorado muchísimo en los los ciudadanos como lo prueba el fuerte últimos tiempos : férreas, telegráficas, te-  por cen taj e que arro jó el últ imo censo de lefónicas, marítimas, carreteras y caminos Colima respecto de sus individuos que sade herrad ura ligan y comunican todas las  be n leer y escr ibir y el nú me ro de es tu  pobl acio nes más imp ort ant es del Es ta do y diantes aspirantes a título profesional que el  puer to de Manz anil lo, faci litá ndo las con sea un hecho el buen sistema rentístico acel resto de la República y los  puer tos nor- tual pues sin extorsionar introducido te e hispanoamericanos del Pacífico. notables progresos en la hacienda pública ; kilómetros que el ferro- que el reciente revalúo catastral haya reLos sultado de beneficio sobre los 13,913 edi carril “Irapuato, Guadalajara, Colima y Manzanillo”, perteneciente a las Líneas ficios que existen en el Estado, entre los que se cuentan 170 de mampostería, 831  Nac ion ale s, bene fici an con sid era ble men te de ladrillo, 3,975 de madera, 6,781 de adomunicipics de Cuauhtémoc, Colirna, 324 de embarro, 1,832 de otros ma be, Coquimatlán, Tecomán y Manzanillo. Pue teriales; de los cuales 11,925 son de prode decirse que esa vía y las nuevas carredel Gobierno Fedeteras vinieron a resolver un problema de  pie dad ral, del Estado, del municipio, 36 vitalidad para el Estado, pues ha tenido la Beneficencia; de todos estos, 342 de  par a Col ima sob erbi os impu lsos de procorresponden a extranjeros, en fin, que la greso, hasta haberse modificado las costumbres haciéndose más cultas ; desarro- salubridad y la higiene hayan operado una llar las industrias, penetrar las comodida- transformación notable en toda la Entidad, des de vehículos, variado la in- y de embellecimiento en la capital y otras dumentaria, acabando con la monotonía de  pobl acio nes princ ipales ; todo lo cual unido la  poblac ión, pue s dia ria men te fo rm an a sus  bell ezas nat ura les , no  pare ce sin o q u e el cielo volcó aquel rincón lujurioenorme grito los silbatos de las máquinas, el ánfora de su s más  prec ioso s don es, fábricas y automóviles dando un nuevo aspecto y una gran animación a la ciudad;  poni éndo la en las últi mas ond ula cio nes del manto d e esmeralda de los volcanes  a se han transformado multiplicadas, las es orillas del océano resonante que besa con cuelas y bibliotecas modificando las ideas, espumas la crla de su traje, y perfumando desapareciendo la primitiva ingenuidad y su ambiente con las emanaciones de sus desbro zando la unidad que daba fuerza a selvas tropicales e iluminando sus  pai saj es la colectividad étnica; puede decirse d e encanto indefinible con el puro rosicler la montaña misma que había podido sus sus energías como un tesoro guar- de sus auroras y el rutilante fulgor crepúsculos. dado entre los riscos y a la sombra del  bos caj e mué st ra se compla cient e par a qu e  No obstante lo que dejamos descrito. la vayan a explotar sus entrañas los hombres Comisión Naci onal de Irrig ación  pro vist os de la cien cia y anim ados de  pro - ya, exploreciones y estudios geológicos pagreso. ra determinar hasta  pu ede der la ejecución de un buen proyecto de irrigación que complete la riqueza natural del Estado de Colima, y más, cuando Así se explica que Colima haya entrado existe un proyecto del ingeniero Marcel Valentín para irrigar el valle de Colima, definitivamente en una era de franco moconsistente en la introducción de las aguas dernismo; que de mejoras materiales del río Tuxpan a una zona de 50,000 hec pro cure n cad a vez los hoy labor iosos határeas en la región oriental.  bi ta nt es ; que la lu z y fu erz a elé ctr ica se lleven por todas partes como los más efiSegún opinión del ingeniero Lepe, el caces auxiliares del hombre; que el ferro-  proye cto de referencia, es de verdadera carril conduzca allí flamantes maquinarias importancia económica toda vez que las importadas del extranjero ; que sus estable- aguas del río Tuxpan se tomarían cerca de cimientos de beneficencia realicen la estación de Tonilita; su gran canal ter-

minaría al noroeste de la ciudad de C o l i - drado siendo el promedio del país 7  por superficie; la cruza el ferrocarril de ma y dominaría terrenos de fácil riego de Guadalajara a Manzanillo, cuyo puerto es las haciendas y ejidos de: La Estancia, Al bar rad a, Bue nav ist a, Alpuyeq ue, Acat itá n,  por aho ra el mej or de nues tra cos ta del Cardona. Mezcales, Piscila, Pueblo Viejo, Pacífico; el clima semitropical y la altura metros sobre el nivel del mar, lo Ticuicitán, El Zarco, San Emigdio, Texi- de más favorable para la agricultura. nastla, Corralitos, Trapichillos, Tepames y un gran número de pequeñas propiedades Con las aguas de que se dispone se re de la zona que se cita. garían 5,400 hectólitros de sembradura de El costo de la obra sería de cuatro mi- arroz en el período de lluvias y 5,700 de maíz en las secas, cuya producción tendría llones de pesos. comprendiendo la derivaun valor no menor de ocho millones de pe ción d e las aguas del río, un gran canal sos anuales, beneficiando además de los un tanque de regularización y una planta hidroeléctrica auxiliar de 3,000 habitantes de la zona irrigada, al comercio Colima, a los Ferrocarriles Nacionales La zona que se irrigaría tiene en la ac- y a los fiscos Federal y del Estado ". He aquí demostrada la necesaria inter tualidad otras i mportantes ventajas, tierras vención de 12 Comisión Nacional de Irridespejadas monte; es muy poblada y gación, en el Estado de Colima. laborante, 78 habitantes por kilómetro cua-

 Notas de la Granja Experimental del Sistema  Nacio, nal de Riego “Presidente Calles”, Aguascalientes e?  I n g .

Aspecto del chilar.

 ALEJANDRO

El maíz de la derecha está abonado con abono completo y el de la izquierda sin abono.  Nótes e la dif eren cia de desarr ollo .

terioridad, fue posible poner en práctica in mediata una serie de experimentos que tendría que responder a los problemas agrícolas encontrados durante el estudio. Hoy, desp ués de cinco meses de trabajo, la Granja está en posibilidad de dar conse jos  prá cti co s a los ag ric ul to res sobre los experimentos llevados a cabo. Puede decirse con satisfacción, que las dos Granjas que hasta la fecha ha esta bl eci do la Co mi sió n Na cio na l de Irr ig aci ón , responden perfectamente a las necesidades y objetos con que fueron creadas y el de este éxito se debe indiscutiblemente a la existencia de una orientación definida desde un principio y que con las ligeras variaciones naturales aconsejadas  por la prá ct ic a, s e ha n seg ui do in def ect i bl em en te . E n el Sistema de Riego Presidente Calles se  pud o ap re ci ar de sd e un prin cipi o la existencia de ciertos problemas agríco!as y económicos cuya resolución es indis pe ns ab le par a el mejor éxito de la colonización en. síntesis, debería estudiarse des.. de un principio la rotación racional de los

cultivos y el empleo de abonos químicos  pa ra con seg ui r el mejoramiento de las tierras que han estado sembradas por muchísimos años con maíz, planta bastante agotante. Por otra parte había que buscar nuevos cultivos más remuneradores para  pe rm it ir al col ono el cu mp li mi en to d e sus obligaciones con la Comisión. El  pr im er pu nt o, te ní a qu e re so lv er se ex  pe ri me nt al me nt e ha cie nd o una se ri e de estudios con diferentes clases de abono, nitrogenados, fosfatados y potásicos, solos o en proporciones variables. E sta experimentación llevada a cabo usando el maíz como testigo ha dado los resultados apetecidos y pone a la Comisión en posibilidad de aconsejar con certeza cuáles son los abonos necesarios para el desarrollo de las  pl an ta s as í com o la s pro por cio nes e n que deberán usarse. Se ha llegado al convencimiento de que las tierras de los proyectos necesitan principalmente del fósforo, y del nitrógeno y tienen en cambio suficiente potasio para las necesidades de las plantas. S e usó  pr inc ip al me nt e el ma íz po r se r esta una de las plantas que requieren los

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tres elementos fertilizantes que se agre- no tropezara con dificultades en !a venta gan en forma de abono al suelo, pero inde - de sus cosechas.  pe nd ie nt em en te s e hi ci ero n ex pe ri me nt os Para tal fin, se estudiaron los siguientes con otras plantas de cultivo para poder en - cultivos: el chile, el garbanzo, el lino, el contrar la proporción óptima de abono que camote, el cacahuate, la fresa, la alfalfa debería agregarse. y las hortalizas. Por otra parte y con reherencia al seAun cuando las cosechas no han sido legundo punto se ha puesto en evidencia vantadas, estamos en posibilidad de aseque, el cultivo de maíz de riego es en lo gurar con certeza que, puede cultivarse general, poco aceptable en la mayor parte con un gran éxito el cacahuate, cuyo prode las tierras del Sistema, debido a los es- ducto se vende fácilmente, sea como cocasos rendimientos que se obtienen al mestible o  para la in du st ri a de l ace i poc o val or de l gr ano , lo que se traduce en te que es muy apreciado en el mercauna entrada exigua para el colono, que es do y alcanza precios muy aceptables. El insuficiente para permitirle atender a sus cacahuate mismo vendido como tal, se co necesidades y cumplir al mismo tiempo los tiza entre catorce y quince centavos el compromisos que contrae con la Comi - en época de cosecha, de tal suerte que es sión. Desechado pues este cultivo, se hizo fácil obtener una entrada bruta de ciento necesario estudiar experimentalmente una diez a ciento veinte pesos por hectárea, o gran variedad de plantas que fueran adap- sea el doble de lo que se obtiene cultivantables a los suelos y clima de la región; do el maíz, y requiriendo menos gastos q u e sus rendimientos y el valor de la co-  pa ra el cul ti vo. secha fuera lo suficientemente elevado paEl chile es otra de las plantas que ha ra  pro duc ir un bu en in gre so al colon o y  po r  pro duc id o gr an de s re nd im ie nt os en las ti eúltimo que hubiera un mercado aceptable rras del Sistem a y aun cuando la cosecha tanto en Aguascalientes como en el r e s t o no puede asemejarse a las que s e levantan de que el agricultor en tierras de primera calidad (terrenos de de la República a

Casa para empleados.

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vega) es sin embargo bastante para producir entradas brutas considerables al colono. Debemos advertir que la experimentación se hizo e n algo más de una hectárea de superficie y aplicando abonos químicos, pues hay que prescindir del empleo del estiércol por carecerse absolutamente de él en los alrededores. A  pes ar de eso , la planta respondió perfectamente a la apli cación del abono con los resultados ya dichos. La fresa es otra de las plantas con las que se ha obtenido un éxito muy halagador y desde el primer momento demostró su adaptabilidad en las tierras del Sistema, desarrollándose y reproduciéndose en forma verdaderamente asombrosa. La variedad escogida fue un fresón de hermosa apariencia, muy dulce y aromático, y los

“IRRIGACION EN MEXICO”

frutos cosechados hasta ahora, han sido de calidad insuperable y mejor que la fresa escogida que llega a esta capital. La Gran ja ti ene en la actu ali dad más de  plan tas, li sta s par a ser rep art ida s en tr e los colonos, a fin de fomentar su cultivo y ex plotac ión. Con igual éxito se han sembrado el garbanzo y el lino, pero todavía no es posible augurar respecto a los rendimientos,  pues fa lt a algún tiempo para poder reco ger la cosecha, La alfalfa en cambio, no se desarrolló satisfactoriamente a pesar de que fue sem bra da a su debido tiempo y previa aplicación de estiércol o abonos minerales; se hace necesario experimentar nuevamente con diversas variedades que se sembrarán este mes como siembra de otoño.

e  Nuestro Canie “IRRIGACION E N MEXICO” Así

las siguientes secciones : Editorial- Estudios, construcciones y colonización educa tiva y de divulgación, noticias extranjeras. Los  pueblos que quie ran rec ibi rla pue den dirigirse a la Comisión Nacional de Irrigación. Esquina Balderas y Ayunta miento, México,

se titula una Revista mensual que

ha lanzado a la circulación la Comisión  Nac iona l de Irri gaci ón, La nueva Revista es de suma utilidad  para los agricultores especialmente mar ca la imprescindible necesidad del riego; trae artículos amenos e instructivos y su información gráfica es amplia y oportuna. Cuenta además con un escogido cuerpo de redacción formado por talentosos intelectuales y escritores consagrados. Agradecemos debidamente el envío que nos hiciera del primer número de ‘‘Irrigación e n México” y ya ordenamos el can je respe cti vo”. “El  Arte ’ de Veracruz.

“IRRIGACION E N MEXICO” este título hemos recibido con gusto una Revista sobre la materia, órgano de la Comisión Nacional de Irrigación y que por su contenido puede asegurarse que viene a llenar una verdadera necesi dad nacional. El nuevo magazine tendrá

“Ixtahuac” de Puebla.

APRECIABLE CANJE  Nos remitido por colega IRRIGACION EN MEXICO, interesante revista mensual ilustra da que se publica en la capital de la República y de cual tendremos el gusto de reproducir algunos artículos en nuestros números posteriores. Bastante interesante es el material de dicha revista, adornando sus páginas precio sas láminas en tricromía y numerosas fo tografías de las grandes obras de irriga ción que efectúa el Gobierno. Recome n damos a nuestros lectores y sobre todo a los hombres de negocios esta magnifica  public ación. “Regional” de Los Mochis, Sin.

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“IRRIGACION EN MEXICO es una re vista que mensualmente lanza a la publicidad un tomo que consta de noventa “La revista mensual que con este nomseis  pági nas impr esa s en pap el “couc hé”,  br e est á publi cand o la Comisi ón Nac ion al de Irrigación es un exponente perfecto de ilustrada con un sinnúmero de fotografías diagramas de los distintos Sistemas de y la  patr ióti ca y at ina da lab or de dic ha CoRiego que actualmente están terminados, misión,  por ter mina rse y en proyect o en la Rep úHe ahí un organismo oficial que induda bli ca Mexic ana. En él col abor an má s de  ble ment e, por su  buen a direc ción, par ec e cincuenta plumas autorisadisimas de ingeestar alejado de la política que anula tannieros, médicos, abogados, geólogos, etc. tos esfuerzos y causa tantos derroches en cincuenta plumas que pertenecen a otros otras instituciones oficiales. He ahí una tantos sabios que desinteresadamente cola comisión oficial en cuyos trabajos se nota  bor an por el engra ndec imie nto de Méxi co,  patr ioti smo, efici encia , acti vidad, vol unt ad  pue s en tod os sus artículos persiguen el fode hacer patria. mento de la agricultura, ramo que históricamente será la salvación definitiva de la A L 6 0 RARO ! COSA BUENA !”. economía nacional y que fue el ideal más “El Agricultor Mexicano”, Juárez, grandioso de la Revolución, cristalizado por Chih. el hombre único, el general don Plutarco Elías Calles, que en los Sistemas de Riego del Mante, Don Martín y Presidente CaLA REVISTA “IRRIGACION EN MEXI- lles, imprimió con caracteres indelebles su obra, su genio y su revolucionarismo sin  NO ES UN MAGAZINE tacha. IWRIGACION EN MEXICO, como dela neceE s una verdadera obra que cíamos al principio de estas line as, no es e l sidad de la República, la educación de los magazine vulgar de información, sino la agricultores. obra cumbre que en sus elegantes columEs verdaderamente satisfactorio para nas imparte la instrucción necesaria a los campesinos que necesitan la tierra mexicanosotros tener el gusto de dar a conocer a nuestros lectores la importancia que encie - na, es la obra de los desvelos y sacrificios de los colaboradores de la Comisión Nacioa históricamente un producto genuinament e revolucionario, pues toca a nos - nal de Irrigación que no cejan ni un momento en el deseo de dar a mexicanos otros opinar sobre la magnífica revista dichosa, ideal, mensual IRRIGACIBN EN MEXICO, ór - la verdadera patria, sus hijos con su esfuerzo y abnegagano de la Comisión Naciona l de Irrigación . el campo de labranza y en el camEl director literario de "Irrigación en  po deenbatalla, han logrado hacerla fuerte México”, señor Roberto Quiros Martínez, económicamente, con la agricultura. se ha servido enviarnos una atenta carta, Tendríase mucho qué decir sobre este  pidi éndono s nue st ra opinión acerca de la citada revista, de la cual se ha servido a la tema, pero que estas breves líneas sirvan de  pálido refl ejo de nues tra opinión de lo vez estarnos enviando el canje respectivo que es, lo que vale la grandiosa labor que con toda oportunidad,,petición a la cual acestá en México la Comisión Nacedemos gustosos y sin adulación ninguna, cional de Irrigación, por medio de su órga por lo que en brev es fr as es ext ern are mos nuestra humilde opinión de lo que es y lo no IRRICACIBN EN MEXICO”. “Acción”.  Aguascalientes, Ags. que vale la mencionada publicación,

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La importancia de los ensayos en gran escala para las construcciones hidráulicas,  por el ingeniero irchrner, Munich (Investigación y Progreso, Revista sua?.  Jul io y agosto Madrid, Zurbano 32).

Baviera, el cual tiene 250 metros d e largo, 2.50 metros de ancho y 2 metros de  profundidad, y por el cual se  pu ed en ha ce r pasar hasta cuatro metros cúbicos por setesis sostenida en el ar- gundo. En dicha estación se ha empezado ya a tículo referido consiste en trabajar en el estudio de varios problemas, que al tratarse de la cons - entre ellos el de averiguar hasta qué punto trucción de ciertas obras  pod rá re em pl az ar se en los ca na le s el re h i d r á u l i c a s n o s i e m p r e vestimiento del hormigón empleado hasta  pu ed e te ne rs e la seg uri - la fecha, por el enlucido de asfalto, prodad de que llenarán su objeto si construcción se ha basado úni- ductos alquitranados y similares, que resultan más sencillos y económicos que aquel. camente en cálculos, pues, según el autor citado, aun no son suficientemente conoci - Fácil es comprender la considerable ecodas las leyes de la Hidrodinámica: por lo nomía que resultaría si las referidas ex mismo, no puede tenerse una seguridad  pe rie nc ias da n bu en os re su lta do s. Indudablemente tales de experiabsoluta en las fórmulas empleadas. mentación han de resultar algo costosas: Se necesita, por consiguiente, acudir ade-  pe ro poc o sig nif ica ría el din ero in ve rt id o más al empleo de la experimentación en en ellas si de esa manera se evitan gasmodelos adecuados y, gracias a este sis- tos mayores al construir las obras en gran tema, se ha logrado en muchas ocasiones de escala. obtener buenos resultados y evitarse posteriores gastos imprevistos y aun ulteriores decepciones.  LA AS T RO NA UT IC A Sin embargo, aun estas experiencias o (Con motivo  de un artículo en ensayos para dar buenos resultados, nece “La  Na tu re ” d e  de  jul io  de sitan hacerse en modelos adecuados y es to no siempre es  po sib le cu an do dic hos el muy antiguo y acreditado periómodelos son muy pequeños, pues entonces científico  Na tu re ” he mo s en no se reproducen fielmente las condicio- contrado un artículo sumamente interesan nes naturales. te por tratar uno de esos temas que entu De allí la conveniencia de valerse de ex- siasman desde que ese formidable hombre  pe ri en ci as o ensayos hechos en grande es- de imaginación que se llamó Julio Verne, cala. Con tal objeto se construyen esta - se ocupó en ellos, guiado por ese senti ciones experimentales de grandes dimen- miento intuitivo de los clarividentes, que siones. El autor cita como ejemplo un ca - les hace anticiparse a su época y entrever nal para ensayos en la estación técnica de como sueños fantásticos ciertas invencioobras hidráulicas del lago de Walchen en nes que más tarde se han realizado.

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 Nos referimos ahora a una de esas fantasías llamada “Viaje a la Luna”, publicada hace  má s de cincuenta años y estu diada hoy de una manera científica por un sabio francés Robert Esnault Pelterie, con el nombre de Astronáutica”, que dió a esos estudios otro sabio Rosny. En un hermoso artículo ampliamente ilustrado con interesantes dibujos, publicado en la revista científica mencionada, se estudia la posibilidad de mandar u n pro yectil a la luna, con viajeros en el interior, como en el ideado por Julio Verne y que hiciera el viaje de ida y vuelta en solo cuatro días, que es si no nos engañan nues tros recuerdos, poco más o menos el mis mo asignado por Julio Verne a su fantás tico viaje. Sólo que en este estudio se toman bases científicas de ideadas por el famoso novelista francés. En efecto. Se demuestra la imposibilidad de emplear un cañón para lanzar el proyectil, pues ade más de que las dimensiones de dicho ñón deberían ser tales que lo harian de imposible construcción, la formidable velo cidad inicial provocaría la muerte instan tánea de los viajeros contenidos en el  proyectil, y el roce de dicho proyectil con la atmósfera produciría una enorme elevación de temperatura. El autor calcula lo que él llama ve locidad de liberación”, es decir, la necesaria para vencer la atracción terrestre y lanzar el  pro yec til a los espacios interplanetarios y la calcula en 11,180 metros por segundo: la cual sería imposible de obtener por ningún cañón, por enorme que fue ra, dentro de los  pr oc ed im ien tos actu ales de construcción. Para lograr esa enorme velocidad y al mismo tiempo para llegar a ella menre, a fin de impedir la enorme elevación de temperatura que resultaría del rozamiento del proyectil con la atmósfera, si se le lanzara desde luego a esa velocidad. el autor del artículo referido substituye al  pro yec til lan za do por un ca ñó n, el pr oy ec til lanzado en forma de un cohete, cuya ve locidad puede graduarse desde el interior de él y cuya propulsión s e obtiene por medio de la combinación del oxígeno el hidrógeno, que se llevan al esta do quido en recipientes por separado y que

 pu ed en em pl ea rs e en la ca nt id ad qu e se a necesaria. En el dibujo respectivo se describen menorizadamente las diversas partes que componen dicho cohete y la manera de manejarlo. Los estudios del autor llegan hasta pre tender demostrar la posibilidad de hacer regresar el cohete a la tierra, después de haber girado alrededor de la luna. Aun cuando este artículo, bastante ex tenso y ampliamente ilustrado, no parezca  por de pronto mas que como una fantasía de un hombre de ciencia, vale, sin em  ba rgo , la pe na de se r con oci do por la s teo rías científicas que expone y por las ideas algo novedosas que manifiesta acerca de la luna y sobre la propulsión de los proyec tiles para lograr grandes velocidades,

 EL AL A HA BI TA BL E Y  E L AV IO N SIN COLA. ( “ L a  Na tu re ”

de agosto de 1930)

el viaje a la luna a que se refiere el artículo anterior no pasa de ser hasta ahora mas que una fantasía científica; en cambio, los estudios relativos construcción de aeroplanos sí están dentro de la rea lidad y cada día se hacen en ellos enormes  pro gre sos . Po r ta l mot ivo cr ee mo s di gn o de mención un artículo de  Na tu re ” re lativo a los estudios emprendidos y las ex  pe rie nc ias re ali za da s pa ra la co ns tru cc ió n ¿e un avión cuyas alas puedan utilizarse  pa ra alo jar de nt ro d e ella s lo s mo to res , los  pa sa je ro s y la carga. Le dedica a este asunto la revista refe rida un artículo muy largo, con muchas ilustraciones y con numerosos datos numéricos y del cual apenas podemos ex tractar aquí lo más esencial. Dicho avión, según el estudio referido lleva solamente una ala habitable que encierra los motores  pro pu lso res , los ga bin et es d e pa sa je ro s, los departamentos de equipajes, el combusti bl e, etc. Un a de la s pr inc ipa les ve nt aj as de esta disposición reside en la disminución de las resistencias al avance que re sulta de la supresión del fuselaje.

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 No cabrían en una simple nota bibliográfica todas las consideraciones que se hacen en el artículo referido, por lo q u e nos limitamos a decir que los constructor e s de este nuevo avión sostienen que tendría gran estabilidad, que sería posible darle un radio de acción mucho mayor que el de los aviones actuales que daría muy  bu en os re su lta do s co mo avi ón ve rd ad er a mente comercial para transportar pesos considerables a grandes distancias en poco tiempo.

mismo, me - ece la atención de los ingenieros del mundo entero. explica así que las revistas científicas de los Estados Unidos estén dedicando varios articulos a esta notable obra de ingeniería, los cuales merecen 4er conocidos  por lo s in ge nie ros mex ica nos , pu es mu ch o tendremos que aprender en tales lecturas. P o r lo mismo, mencionarnos en seguida otro artículo interesante aún relativo al mismo asunto, aunque éste último se re= fiere especialmente a los cables que se usarán en dicho puente.

FABRICA CION DE CABLES  DE TRE TA Y SEIS PULGADAS  PA RA  E L FORT LEE. PUENTE

 MA CH ON ES Y CABLES PARA  EL  PU EN TE SOBRE  EL  HU DS ON ,

(Engineering News

(Revista: Engineering and Contracting.Publicación mensual. Chicago,

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Record. Avenue

Graw  36

th

ABIDO es que el tráfico entre Nueva

York y Nueva Jersey, a través del Hudson, es sumamente intenso y aumenta  prod igiosa mente de dí a en día .  No  ba st an do para las comunicaciones el empleo de las embarcaciones, se acudió a las vías sub-fluviales, mereciendo especial mención el famoso túnel Holland debajo del Hudson, considerado en los Estados Unidos, con sobrada razón, como la octava maravilla. Pues bien, en los momentos actuales se está construyendo otra obra no menos maravillosa; esta es la de un  pu en te colgante entre Fort Washington, Y., y Port Lee, En el número d e la revista arriba citada aparece un interesantísimo artículo con numerosas ilustraciones en el cual describen con bastantes detalles los procedimientos que se están siguiendo  pa ra co ns tr ui r lo s do s gr an de s ma ch on es que servirán de apoyo a los cables del  pu en te ; as í co mo los detalles relativos a dichos cables. Se que tratándose de una obra que, por sus colosales dimensiones, es excepcional, los procedimientos técni cos empleados para realizarla y los pro bl em as a que di ch a rea liz ac ión es tá da nd o lugar, son también excepcionales y, por lo 88

L artículo citado es muy extenso y con tiene numerosas ilustraciones ; así es que aun extracto muy ligero de él, saldría de los límites de esta sección de nuestra revista, por lo cual nos vamos a limi tar a citar cuantos datos numéricos que por sí sólos nos eximen de hacer muchos comentarios. El tramo central del puente, es decir entre ambos machones tendrá una longitud d e 3,500  pies , si en do pr ác tic am en te el do ble cu an do me no s de l de cualquiera otro  pu en te. La s to rr es de ace ro qu e so st en drán cuatro cables de treinta y seis  pu lg ad as se elevarán a más de seiscientos  pie s so br e el ni ve l de l ag ua ex ce di en do en altura a los más altos edificios de los Unidos. S e empleará en este puente una cantidad de alambre superior a la suma de los que contienen los siete puentes de suspensión que le siguen. El alambre contenido en los cuatro cables de treinta y seis pulgadas pesa 28,400 toneladas. S e estima el costo de este puente colosal en de dólares.  pro yec to y erección del puente está  ba jo la dir ec ció n de O. inge niero en jefe del puerto de Nueva York, colaborando bajo su dirección otros grandes ingenieros y casas contratistas de los Estados Unidos.

 Nuestra Carátula .-

ARA  pod er tra ba ja r en seco en la construcción de la presa d e Tepuxtepec que ha tenido a su cargo la Compañia de Fuerza del Suroeste, de acuerdo con un contrato existente entre ella y la Comisión Nacional de Irrigación, se tuvo necesidad de perforar un túnel en la margen derecha del río Lerma por el que se derivan las aguas de la co rriente, mediante una presa auxiliar establecida inmediatamente aguas abajo de la boca de dicho túnel. Terminada la construcción de la presa de Tepuxte pec , es te tú ne l se rv ir á pa ra ha ce r ex tr ac ci on es de ag ua del va so in de pe nd ie nt em en te de la toma establecida para la planta hidroeléctrica, lo que permitirá abastecer las necesidades de los riegos en el caso de reparaciones en el túnel de fuerza, en dicha  pla nt a o en cualquiera de sus obras auxiliares. Tamb ién se utilizará el túnel de deri vación para ayudar al vertedor d e d emasías cuando se registren avenidas de gran im po rta nc ia qu e as í lo ameriten, metros cúbicos por segundo, su lonLa capacidad calculada para este túnel e s de gitud de 280 metros con pendiente de uno al millar y su sección es circular desde su  bo ca tom a ha st a lo s pri me ro s 170 metros con diámetro de 4.20 metros, continuando después en sección de herradura con altura y ancho máximos d e 5.50 metros. En

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  a

!

as Obras de Irrigación

el Egipto

Presa de Aswan  Po r  E .  BA BB IT T. (Versión del inglés por Dolores García de Bragg).

Sistema de Tepuxtepec. Desagüe del túnel de desviación en su máximo de descarga el 28 de septiembre de 1928. la bocatoma se ha establecido una válvula cilíndrica compensada que permitirá gobernar las salidas del agua por el túnel. Entre la válvula y la galería existe un codo me tálico de con diámetro de 3 metros y radio en el eje de 5 met os y después un cono d e transición para llegar al diámetro de que antes se ha indicado. A la salida del túnel y para evirar que el agua regrese por el cauce del río hasta el lugar de la cortina, se construyó una presa o de concreto que servirá de protección. En nuestra carátula está mostrado un aspecto d e la salida del túnel con la descarga máxima de agua registrada durante la construcción de la cortina, a la derecha del grabado el dique de  pro tec ció n. En 12  pri me ra de las láminas que se muestran en esta página se ve la entrada túnel siendo aparente la boca de la rama vertical del codo de con diámetro de metros a que antes se hace Por este lugar se dió paso al agua del río después de haber destruído el bordo que lo impedía, mediante explosivos según puede verse en las láminas 2 y 3. Actualmente encuentra ya instalada la válvula cilíndrica sobre la boca - toma del túnel que muestran las láminas mencionadas y está construída la torre necesaria para su maniobra.

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es bien sabido, la irri- didad tenía 128  pie s y al ma ce na ba 264  bigación en el Egipto llones de galones de agua, tituye la base primordial La corriente del Nilo arrastra gran cande la vida de su  pobla ción. tidad de sedimentos que aumentan extraUna de las más ordinariamente su riqueza : mas el depósites tareas de su gobierno, to que de los mismos se formaba, era mo es la conservación v fun- tivo de preocupación por lo que afectaba a cionamiento de las obras relativas. Sin el la capacidad del vaso. Para disminuirlos de la  be ne fic io d e aqu élla , d e se decidió mantener una corriente contilas tierras de cultivo serían inútiles y nua cerca del fondo, descargándola por las el Nilo, la región entera sería un desier- compuertas en 12  pa rt e ba ja . Co n el fi n to. De aquí proviene la frase familiar da de obtener una área suficiente para las que: Egipto es el Nilo ". aberturas de las compuertas, la presa no Pues bien: la presa de Aswan es la  m á s  pu do se r co nst ru ída en la pa rt e má s es tr eimportante de todas las obras allí cons- cha del río. De esto resultó su actual lotruidas, siendo la que recoge el agua y calización y su gran longitud. Los gastos la conserva para el estiaje. Ea función adicionales que demandó su construcción de las demás obras de irrigación consiste  por es te mot ivo , que da ron pl en am en te  justificados como lo demuestran los resultaen distribuir el agua que pasa por la presa y elevar el nivel del río con el fin de ha- dos de un concienzudo estudio recién tercerla llegar hasta la parte más remota de minado, que revela que en el vaso de caplas tierras de cultivo. En la tabla que publi- tación no existen sedimentos. Al estar camos al final de este trabajo, damos a co- construyendo la presa, se comprobó que su toda nocer una lista de las obras llevadas a ca- altura era insuficiente para  bo en dic ha regi ón. el agua que se necesitaba para la irriga La construcción de la primera presa e n ción; y con el deseo de evitar la inundaAswan fue terminada en 1902, habiendo ción del templo do Filae, se había limitado una vez tersacado un costo total de quince millones la altura del embalse: de dólares. La elevación de la banqueta minada, pronto se comprendió el incalcua lo largo de la corona, alcanzaba 357.52 lable valor que representaba el mayor vo  pi es sob re el  plan o d e com par aci ón y te ní a lumen que  pu die ra se r al ma ce na do y po r un  pe ral tam ien to pa ra el ol ea je de 9  pi es tanto era indispensable vencer la oposición 10  pu lga da s. Su longitud era de 6,500  pi es . a que se elevara la cortina, lo cual aforLa cota de la superficie cuando el vaso es - tunadame nte se logró. En consecuencia, taba lleno, era 347.68. Su mayor profun- se elevó ha stz la acotación 373.92 en la

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rona y la obra muerta fue reducida a 3  pie s  pul gad as, en vi rt ud de qu e la exp eriencia demostró que la acción del oleaje no era considerable, debido a las islas que contiene el depósito y a la poca fuerza relativa de los vientos. Los trabajos fueron terminados en 1912, aumentando el volumen de almacenamiento a 663.3  bil lon es de galones de agua. teniendo la cola de la presa 185 de longitud. Los planos fueron hechos por Sir Benjamín Baker. Los métodos que empleó fueron tan ingeniosos y de tan buenos resultados, previendo al mismo tiempo una segunda elevación de la cortina, que sus detalles merecen ser conocidos del público. En efecto: al levantar la cortina se procuró alterar lo menos posible la estructura original de la presa. L a unión fue hecha insertando varillas de hierro forjado en de  pi es de vrofundidad hechas a lo largo de la mampostería (nueva y antigua) en el paramento de aguas abajo. La mampostería nueva tiene un espesor de  pies  pul gad as, con un talud de  pu lg ad as ver ti cal por 1 horizontal que es el mismo del paramento antiguo, estando sostenida las varillas a corta altura arriba del enrás de la primitiva estructura. un cierto espacio entre ambas, sin llenado en dos años para permitir el asentamiento, movimiento v consolidación de la obra. Este espacio fue dividido en tramos de 23  pies a todo lo largo, con claves formadas por piedras salientes de configuración prismática con el extremo más ancho encajando en las ca  ja s he ch as en la con st ruc ció n ant ig ua, La s  ju nt as de esas cajas eran de minio puro  par a pe rm it ir el movimiento de las piedras sin que aquéllas se rompieran. En los muros nuevos se deiaron unos agujeros que sirvieran para el drenaje, a 15 pie s de separación, verticales y con tres perfo raciones cada uno para que durante los dos años de vrueba sirvieran vara observar las filtraciones y también para facili tar la introducción de lechada que s e pen só inyectar después. Dos tubos de hierro forjado de  pul gad as fu ero n col oca dos en posición vertical uno de - - en compartimientos. Una vez transcurridos esos dos años, el hueco s e llenó con chada, por medio de unas mangueras de

goma que se introdujeron en los tubos. Se llenaron los compartimientos gradualmente usando solo la lechada necesaria para llenar en un día uno solo de ellos, entre dos filas de agujeros. Después de terminar las inyecciones, la porción adicional vertical de la presa, que es de mampostería, fue colocada sin más precaución que la de pi car el plano de contacto entre la nueva estructura y 12 antigua. Los resultados fue ron completamente satisfactorios, sin ha  be rs e ex pe ri me nt ad o ni ngú n con tra ti em po, funcionando la presa si siempre hu bi er a for ma do un todo homogéneo. Una comisión internacional designada  por el gob ier no egip cio y compuesta por E. Cooper, norteamericano, W. nie, inglés y E. Grüner, suizo, fue la encargada para discutir los planes para una segunda elevación de la cortina. L a primera reunión la efectuó la comisión en Aswan en noviembre de 1928  pa ra tr at ar lo siguiente : sin ningún peligro, almacenarse agua a la cota de es el proyecto mejor de todos los presentados? Si la comisión considera que ninguno, queda facultada para reco mendar el que le  par ezc a m ás co nve ni ent e. 3.-¿Hasta qué punto puede modificarse la presa para permitir el desarrollo de energía eléctrica? La comisión en el informe que poste riormente rindió, por vía de s e r efirió a los puntos anteriores en la siguiente forma. a) Nuestra opinión es que la presa de Aswan tal como se halla actualmente, representa un trabajo supremo de ingenie ría y  por su carácter es monumental. La admiración que nos causa nos obliga a  pen sar si sus constructores fueron inspirados  por el he ch o de qu e al con str ui rla , lo efe ctuaban en una tierra famosa en todo el orbe por lo grandioso de sus ros monumentos.  Nos hallamos hondamente impresionados no sólo  por aq ue ll a in superable concepción, sino también por la excelencia de la mano de obra.  b) Estamos bien compenetrados del hecho de que la vida, salud  bi en es ta r d e un gran número de individuos depen de más que nunca de la seguridad que ofrezca la presa en lo futuro.

C)

Estamos perfectamente conscientes

de la grave responsabilidad asumida tan-

to  por ingenieros como por el gobier no, al acometer la idea de aumentar la carga de la presa, cuya obra de albañilería s e ha mantenido en tan perfecto estado durante muchos años. Opinamos que no debe intentarse ninguna obra, si antes no se toman en consideración los párrafos a,  b y c de este informe. También somos de opinión que la elevación de la cortina no se lleve a cabo no se demuestra sin dejar lugar a duda, ;ue su influencia sobre la actual estructura no  per jud ici al en lo abs olu to. P or tampoco debe adoptarse plan alguno si  pr ev ia me nt e no es cu id ad os am en te analizado, por lo que hace a sus  pr ob ab le s efectos sobr e la obra de albañilería exist e n t e y su completa eficacia en todas las condiciones futuras. En otras palabras : el  pl an que se adopte será d e tal carácter que su efecto físico sobre el monolito existente y su funcionamiento como obra nueva,  pu ed an se r cal cul ado s y pre vis tos con to da exactitud. Los principios sobre los cuales la comisión basó sus consideraciones al examinar los  pro yec tos que le fue ron pr es en ta do s, son como sigu e: 19-La determ inaci ón de todo s los esfuerzos. 29-Que los camb ios de temperatura no deberían ejercer ninguna influencia sobre la mampostería. La porción que se añada librará a la existente tanto como sea posible de los esfuer zos que provengan de los cambios de tem  pe ra tu ra en la cara ag ua s ab aj o de la pr esa. los esfuerzos que sobrevengan después de la elevación, serán calculados muy abajo de lo que aconseja la práctica moderna sobre conservación de obras.  ju nt as de exp ans ión se pro yec tarán para prevenir la formación de grietas que puedan ser originadas por cambios de temperatura. 69 La obra primitiva de albanilería debe rá quedar como está, alte rándola lo  me no s  pos ibl e. 79 La belleza arquitectónica no desentonará de la exis tente, sino antes bien, deberá mejorarla. L a comisión estimó que sin riesgo algu no podría aumentarse la altura de la cor t i n a unos 30  pies , ba sa nd o sus conclusiones d e la manera siguiente: 1. La roca donde descansa la estructu-

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ra es capaz de sustentar un peso mayor. obra de mampostería d e la primera estructura así como la de la segunda ha sido bien ejecutada y la comisión no tiene objeción que hacer a este respecto.  No existe ningún signo de separación entre ambas, por lo cual se les debe estimar como un monolito. 4. Las g rietas observadas no son de tal naturaleza que puedan afectar la estabilidad de la obra.  pi e de la pr es a se en cu en tr a bi en pro teg ido contra las erosiones mediante los delantales que existen.  Ni ngu no de los proyectos presentados fue considerado como satisfactorio, por lo cual la comisión hizo el suyo propio, aprovechando algunos detalles de aquéllos, siendo la característica de éste, la erección de contrafuertes entre las aberturas de los canales de las compuertas, a 23  pi es de distancia. A la cota de 287, que es la elevación del umbral de las compuertas, los contrafuertes tendrán  pie s de es  pe so r en dir ecc ión no rma l al fr en te de la  pr es a, y 14.5 de ancho, paralelos al mismo frente. El  pa ra me nt o de ag ua s ab aj o ti ene un talud de 1.14 vertical a 1 horizontal, descansando sobre el antiguo, cuyo talud es de 1.5  por 1. Terminan los contrafuertes a la cota de 372.28 en cuyo punto tendrán un espesor de 3.3  pi es por 4.10 d e ancho. De la cota 372.28 hasta la corona de la nueva obra, unos falsos contrafuertes sos tenidos por el cuerpo de la segunda elevación de la cortina prolongarán los lineamientos arquitectónicos de los verdaderos, dejando abierto un espacio de una pulga da de ancho entre ambos, para evitar la transmisión de esfuerzos. Estos contra~fuertes serán construídos de concreto re forzado con el frente de sillar. no mando parte integral d e la presa, sino que solo aumentarán su resistencia en razón de su  peso qu e des can sa en la car a d e aguas abajo. A la cota de 287 se unirán a la antigua estructura. De esta cota a la de 348.04, descansarán deslizándose sobre una plancha d e fierro forjado no oxidable ni lubricado, de  pul gad as de espesor. Abajo de esas planchas y en una faja de de  pul gad a ald err edo r de la es tr uc tu ra, el enrás antiguo será alisado, dejando esas planchas libres en s u s asientos para

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facilitar el movimiento de contrafuertes en todas direcciones. A esa cota que es la del enrás de las planchas de hierro, los contrafuertes no estarán en contacto con la presa, sino que quedarán volados. La parte nueva de mampostería ciclópea, con cara de sillar tanto aguas arriba como aguas abajo, teniendo los  blo ques de piedra 32.2  pi es de al tu ra ; 29.3 de espesor y 23 de longitud a lo largo del e j e de la presa, con juntas entre ellos a la mitad de las compuertas. Algunas de esas juntas se dejarán abiertas como juntas de dilatación, asegurando la impermea bi li da d com pl eta de estructura por me dio de una junta de asfalto blando, colocada entre el concreto y la mampostería del revestimiento de la cara de aguas arri  ba de l a pre sa. Para concluir, la comisión expresó que con tal proyecto la elevación de que se trata ofrecía seguridades completas para almacenar agua a 12 cota de 403.44. E s t á calculado dejar subir un almacenamiento de  bi ll one s de gal on es o sean . . . . de acre pies a la expresada cota y la cola tendrá 230 millas de longitud a

lo largo del río, llegando hasta Wadi Hal en l a frontera con el Sudán. Los  ban cos de l río están tan empinados en el sitio que ocupa la presa, que su longitud no puede ser aumentada sino muy ligeramente. Deberá ser construída una nueva esclusa su extremo oriental para salvar este nuevo escalón, siendo necesarias en total cinco esclusas para subir toda la altura. Además del aume nto de altura de la presa y la construcción de la nueva esclusa, todas las compuertas serán reconstruídas y reforzadas. La comisión ccncluyó estimando que la elevación en los términos expuestos, representaba el límite de la seguridad, no debiendo intentarse . un nuevo aumento de elevación. El costo estimativo de los trabajos es de de dólares, habiendo sido presupuestos otros diez millones para la ex pro pia ció n de te rre no s y  par a in de mn iz ar los daños que posiblemente se originen. Se espera terminar las obras en 1932; pero las revisiones y adiciones que tal vez se ofrezcan, probablemente retardarán su completa terminación hasta el año de 1933.

Presa Presa Presa Presa Presa Presa Presa

Ubi caci ón.

Fecha  de su te rm ina ci ón.

millas abajo de Kartum.. contención de Sennar .. . . . . . . . . . . . A s w a n . . ........................ millas arriba del Cairo.. . contención de Esna.. . . . . . . . . . . . . 490 ... Nag Hamadi.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . ... ... Assuit., ........................ 250 abajo ... de D e l t a . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15 d e Zifta.. ..........................

de de de de de

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evista INDICE GENERAL AÑO 1. VOLUMEN 1.  NUMEROS DEL 1 AL 6 .

OBRAS DE IRRICACION EN EL  NILO.  No mb re.

IGACION EN MEXICO

1925 1912

1909 1930 1902 1890 1903

 NUMERO

1

Págs. Artículo iniciala técn “Nuestro  palabras ic os y colonos.. . .. .. .. . . . . . . . . . Dos “Irrigación” es neologismo?. . . . . . . . . .

...........

3

¿Boletín, Revista, Magazine o F o l l e t o ? . Abriremos una sección de consultas. . . . . Sistema de riego del valle del Mezquita1

aprovechamientos hidroeléctricos de irrigación. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Los d e u n canal ir re g u l ar .. . . . . El  problema Algunos dato s sob re aguas subterráneas

y su aprovechamiento.

Antiguo sistema de  pesquería en M é x i c o . , . . . 36 ............................. ........................... Proyecto de plantación de abacá en M éxi co. . . . . . 38 . . . . . . . . . . . . 44 . . . . . . . . . . . . . . . La granja experimental de  N. E.. . . . . Pa rén tes is literario. “Perfiles de Tax co” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .................... Ley sobre irrigación con aguas federales .................. circular los señores gobernadores  N o tas b r ev e s.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..................... riego en las grandes pampas argentinas.. . . . . .

 p olí tica d e irrigación d el gobiern o federal.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Proyecto del río Salado. “Umbral deflector de la presa de Don Martín” Ligeros datos sobre las condiciones geológicas de algunas presas. . . . . . . . . . . . . . . . Espirales de transición para canales.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . cartas agrológicas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . usos científicos de Técnicos Técnicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ......... . . . . . . . . . . . . . . . . Casas para colonos.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ............... El movimiento científico. La Astronomía. Aguascalientes. Sus elementos de riqueza. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Labores que desarrolla la oficina de organización de Sistemas de Riego de l a Comisión Nacional de Irrigación. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Finalidades y funciones de la Oficina Fed eral para la Deie ns a Agrícola. Campañ a contra la langosta.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Le y sobre irrigación con aguas fed erales. (Continúa) . . . . . . . . . . . . . . .  N o t a s b re v e s .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .................................. Una presa d e la India que está considerada como la mayor del mu nd o. , . . . . . . . . . . G r a n d e s obras de riego en Chile. Estudio de climatología comparada. . con . . . . .ap1;caciones . . . . . . . . . . . .a. . . . República . . . . . . . . . .M . . exicana. . . . . . . . . ... . ,

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 NUMERO 3

Coahuila. Sus elementos de riqueza. . . . . . . . . . . .............................. Acuerdo presidencial autorizando los contratos de aparceria agrícola y promesa de venta.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Ley federal de colonización (concluye). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Consulta sobre el río Omiltemi, Zumpango, Gro . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . De nuestro canje . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . Construcción y equipo de la presa Coolidge.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Págs.

La política de irrigación y las autoridades locales ............................ Equipo y procedimientos usados para la construcción del Sistema Nacional de Rie go número 4.. . . . . . . . . . . . . . . . . . ................................... Algo sobre aguas artesianas y su alumbramiento. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . El dominio de los sistemas de riego por el gobierno.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Estudios sobre la posibilidad de cultivar algun as especies de peces e n la  pr es a “Presidente Calles”, Aguascalientes.. ................................ La capacidad instalada de las plantas eléctricas existentes en el  país .......... Costo de los estudios agrológicos.. .................... Las aguas de Axocopan, Atlixco, Puebla. ............................ La agricultura moderna.. ........................... ... Baja California. elementos de riqueza.. ...................... Funciores de la Oficina de Estudios Económicos y Agronómicos.  No ta s br ev es ., . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . .. . . . Ley de compraventa agrícola y actividades de la Junta Federal Agrícola de los Es .............. tados Unidos de América.. ................ ,.,.,, ,,. .,, Algunos juicios acerca de “Irrigación en México’

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 NUMERO 6 La VIII Convención Nacional de Ingenieros. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Ea Comisión Nacional de Irrigación y el ingeniero mexicano.. . . . . . . . . . . . . . . . . . Compuertas automáticas de la presa de Don M artín, Sistema de Riego núm. 4... . El apiovechamiento de las aguas desde el  pun to de vi sta le ga l. . . . . . . . . . . . . . . . . . La región del Valsequillo en el Estado de Puebla y la Oficina d e Exploraci ones y ........................ Aprovechamiento de Aguas Subterráneas. . ........................ El futuro de la región norte de Tamaulipas. . . . Proyecto de rectificación del rio Bravo en el valle de Juárez-El Pas o. . . . . . . . . . . . La entomología y agricultura.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . El desarrollo de pequeños proyectos para riego.. ............................. Las aguas minerales de Tlaltenango, Estado de Puebla. ...................... Colima. Sus elementos de riqueza.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  N ot as de la gra nj a exp eri me nta l de l Si st em a Na cio nal de Riego “Presidente Calles” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. ........................ ...................... De nuestro canje.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La importancia de los ensayos en gran escala  pa ra construcciones hidráulicas. La astronáutica. El ala habit able y el avión sin cola.-Machones y cables  par a el  pu ent e so br e el Hudson .-Fabri cación de ca bl es de tr ei nt a y seis pul......................... gadas para el puente de Fort ... ...  Nu es tr a ca rá tu la . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . obras de irrigación en el Egipto. Presa de Aswan.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

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 NUMERO 4 La labor del colono en los sistemas de riego. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . El Sistema de Riego del río Salado., . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Las obras hidráulicas de los afluentes del río Consulado y su influencia sobre la ........................... hidrología del Valle.. ................... Estudio sobre el desfleme preliminar de la made ra.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Las fuerzas hidráulicas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Las aguas de Axocopan, Atlixco, Puebla. (Continúa) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Los  pr ec ur so re s de la ingeniería en Francia.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Campeche. Sus elementos de riqueza. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ................. Las cuenca s hidrográficas de México.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Ley federal de colonización.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .  No ta s br ev es .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Una ascensión al Popocatépetl.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

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Estudio crítico de hidrodinámica., . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Proyecto de irrigación del río Conchos, en el Estad o de Chihuahua.. . . . . . . . . . . . . El Proyecto “Valle de Juárea” en el Estado de Chihuahua.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . La capacidad instalada de las plantas eléctricas existentes en el país (parte . Anotaciones sobre hidrología.. ................................................ Posibilidades del cultivo del algodón en los terrenos del Sistema de Irrigación del río Salado., , , , , . . . , . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

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ICE CLASIFICADO POR ASUNTOS.

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SECCION EDITORIAL

 NUMERO 5 El contrato de aparcería agrícola en los Sistemas de Ri ego.. ....................

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Artículo inicial “Nuestro Programa”. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Dos  pa la br as a técnicos y colonos.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ;“Irrigación” es neologismo?. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ,Boletín, Revista, Magazine o Folleto?. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Abriremos una sección de consultas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La política de irrigación del Gobierno Federal.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La política de irrigación y las autoridades locales. ...................... Ea labor del colono en !os sistemas de riego.. ...........................

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contrato de aparcería agrícola en los Sistemas Nacionales de Riego. . . . . La VI11 Convención Nacional de Ingenieros.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . La Comisión Nacional de Irrigación y el ingeniero mexicano. . . . . . . . . . . . .

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..... Sistema de riego del valle del Mezquital. . . . .... Los aprovechamientos hidroeléctricos en los proyectos de irrigación, por el

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Ing. José Herrera y Lasso.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Los problemas de un canal Irregular, por el Ing. Edmun

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Algunos datos sobre aguas subterráneas y su aprovechamiento, por el Dr.

Ligeros datos so bre las condiciones geológicas de algunas presas, por el Dr. Paul Waitz. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . Equipo y  proc edim ient os usad os par a la con str ucc ión de las obr as del Sistema de Riego núm. 4,  por el Ing. Ma nu el Ban cal ari . . . . . . . . . . . . . . . . Algo sobre las aguas artesianas y su alumbramiento, por el Dr. Paul Waitz El dominio de los sistemas de riego por el Gobierno, por Fernando T. García

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Estudio sobre la posibilidad de cultivar algunas especies de peces en la  pr es a “Pr esi den te Call es”, Aguas cali ente s, por Sa mu el Solís Sánchez. . . La capacidad instalada de las plantas eléctricas existentes en el país, por el Ing. José Herrera y Lasso.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . de Riego del río Salado,  por el Ing. Manuel Bancalari.. . . . . . . . . Las obras hidráulicas en los ailuentes del río Consulado y su influencia  br e l a hidro logía del Valle , por el Dr. Pa ul Wai tz. . . . . . . . . . . . . . . . . . . Estudio sobre el desfleme preliminar de la madera, por Gaspar González S. Las fuerzas hidráulicas, por el Ing. José Herrera y Lasso.. . . . . . . . . . . . . . . Estudio crítico de hidrodinámica, por el Ing. Roberto Gayol.. . . . . . . . . . . . . Proyecto de irrigación del río Conchos, en el Estado de Chihuahua. Cola  bor aci ón del Dep art ame nt o Téc nic o. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . El  proy ecto “Val le de Juá rez ”, en el Estado de Chihuahua, por el Ing. Luis ............................... Arteaga., ....................

El Sistema

La capacidad instalada de las plantas el Ing. José ctricas  pa ís , Herrera y Lasso (parte ... .............................. Compuertas automáticas de la presa artín. Sistema de riego núm. 4. Colaboración del Departamento Técnico. ........................... El aprovechamiento de las aguas desde el punto de vista legal, por el Lic. Gustavo Domínguez. . . . . . . . . ................................ La región del Valsequillo en el Estado de Puebla y la nes y Aprovechami ento de Aguas Subterráneas, por ,

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Antiguo sistema de pesquería en México, por Roberto Quirós Martínez.. . . Proyecto de plantación de abacá en México, por el Ing. J. Montiel Olvera. . La granja experimental en  por el Ing. Alejandro M.  N. Brambila . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Paréntesis literario. “Perfiles de Taxco”, por Monterde y García Icaz bal cet a. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

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Espirales de transición canales, por el Ing. Carlos Ramírez Ulloa.. . . . Shaw. . . . Los usos científicos de las cartas agrológicas, por el Dr. Chas ..... Técnicos Técnicos  por Alfre do Ga rc ía de León, Casas para colonos, por el Ing. Alejandro M. Brambila. El movimiento científico. La Astronomía, por Otto von Leixner Costo de los estudios agrológicos, por el Ing. Alejandro M. Bram Las aguas de Axocopan, Atlixco, Puebla, por el Bibiano Carrasco.. . E. B r a v o . . . . . . . . . . . La agricultura moderna, por Las aguas de Axocopan, Atlixco, Puebla, (Continúa), por e .................... Carrasco.. .............................. Los  prec urso res de la inge nier ía en Fra nci a, por J Versión del inglés por Dolores García de ....... Anotaciones sobre hidrología, por el Ing. Moisés Perogordo y Laso Posibilidades del cultivo del algodón en los terre ción del río Salado, por el Ing. Manuel Bancalari.

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La entomología y la agricultura, por el Ing. Julio Riquelme I nda El desarrollo de pequeños proyectos para riego, por el Carlos Ulloa. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Las aguas minerales de Tlaltenango, Estad o de Puebla, por Rafael

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contra la langosta.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Ley sobre irrigación con aguas federales.  No ta s b re ve s. . ............................. ....................  No ta s b rev es. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Algunos juicios sobre “Irrigación en México”. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ....  No ta s b re ves .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

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SECCIQN DE  NOTICIAS

..... Ley sobre irrigación con aguas fede rales .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Una circular a los señores Gobernadores de los Estados, . . . . . . . . . . . . . . . .

 No ta s b rev es. . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . Finalidades y funciones de la Oficina Federal p ara la Defensa Agrícola. Gam-

Ing, Vicente Gál-

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Oro-

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Exploracio-

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futuro de la región nort e de Tamaulipas, por el Ing. José S.  No ri eg a. . , Proyecto d e rectificación del río Bravo en el valle de Juárez-El Paso, por el Ing. Armando Santacruz, jr.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

SECCION EDUCATIVA Y DE DIVULGACIQN

SECCION DE ESTUDIOS, CONSTRUCCIONES Y COLONIZACIQN

Paul Waitz.. . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . Proyecto del río Salado. Umbral deflector d e la presa de D. Martín, por el Ing. Manuel Bancalari.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

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